comunicación humana

47
Periodismo digital Leslie Alejandra Hurtado Olvera 246869 9-02-14

Transcript of comunicación humana

Periodismo digital

Leslie Alejandra Hurtado Olvera

246869

9-02-14

La imprenta

La imprenta es un método

mecánico de reproducción

de textos e imágenes sobre

papel o materiales similares,

que consiste en aplicar una

tinta, generalmente oleosa,

sobre unas piezas metálicas

(tipos) para transferirla al

papel por presión.

Sutra del Diamante, hallado en la cueva de Dunhuang (China). Es el documento impreso de fecha conocida

más antiguo que se conserva. Fue realizado el 11 de mayo del año 868.1

En Europa, muchas personas y poblaciones pretendieron ser parte de este arte; aunque las opiniones apuntan a

que fue el alemán Johannes Gutenberg, por las ideas que tenía y la iniciativa de unirse a un equipo de

impresores, lo que lo apoya como el inventor de la tipografía.

La Biblia de Gutenberg, su mayor

trabajo

Hasta 1450 y aun en años posteriores, los

libros se difundían en copias manuscritas

por escritores, muchos de

los cuales eran monjes y frailes dedicados

exclusivamente al rezo y a la réplica de

ejemplares por encargo del

propio clero o de reyes y nobles.

En la Alta Edad Media se utilizaba la

xilografía en Europa para publicar

panfletos publicitarios o políticos,

etiquetas, y trabajos de pocas hojas;

para ello se trabajaba el texto en hueco

sobre una tablilla de madera,

incluyendo los dibujos —un duro trabajo

de artesanía—. Una vez confeccionada,

se acoplaba a una mesa de

trabajo, también de madera, y se

impregnaban de tinta negra, azul o roja

(sólo existían esos colores). Después

se aplicaba el papel y con rodillo se

fijaba la tinta.

En este entorno, Gutenberg apostó a que era

capaz de hacer a la vez una copia de la Biblia

en menos de la

mitad del tiempo de lo que tardaba en copiar

una el más rápido de todos los monjes copistas

del mundo

cristiano y que éstas no se diferenciarían en

absoluto de las manuscritas por ellos.

Tras dos años de trabajo, Gutenberg volvió a

quedarse sin dinero. Estaba cerca de acabar las

150 Biblias que

se había propuesto, pero Johann Fust no quiso

ampliarle el crédito y dio por vencidos los

anteriores,

quedándose con el negocio y poniendo al frente a

su sobrino, ducho ya en las artes de la nueva

impresión

como socio-aprendiz de Gutenberg

La Biblia de Gutenberg no fue simplemente el

primer libro impreso, sino que, además, fue el

más perfecto. Su

imagen no difiere en absoluto de un

manuscrito. El mimo, el detalle y el cuidado

con que fue hecho, sólo su

inventor pudo habérselo otorgado.

Gutenberg, en su labor de impresor, creó su famoso incunable Catholicon, de Juan Balbu de Janna. Pocos

años después, imprimió hojas por ambas caras y calendarios para el año 1448. Además, junto a su amigo Fust

editaron algunos libritos y bulas de indulgencia y en particular, aquel monumento de la imprenta primitiva, la

Biblia de las 42 líneas, en dos tomos de doble folio, de 324 y 319 páginas respectivamente, con espacios en

blanco para después pintar a mano las letras capitulares, las alegorías y viñetas que ilustrarían coloridamente

cada una de las páginas de la Biblia.

La imprenta se conoce en América una vez

concluida la conquista española. En 1539 el

impresor Juan Cromberger monta una filial de

su imprenta de Sevilla en Ciudad de México en

un local de Juan de

Zumárraga. Esta filial estará a cargo de Juan

Pablos, que comienza su labor de impresión

ese mismo año

Así inició la más grande repercusión de la

imprenta en la cultura de la humanidad. La

palabra escrita ahora

podía llegar a cualquier rincón, la gente podía

tener acceso a más libros y comenzar a

preocuparse por enseñar

a leer a sus hijos. Las ideas cruzaban las

fronteras y el arte de la tipografía fue el medio

de difundirlas

Libros, incunables, ediciones ilustradas con

grabados de madera: la mejora de las técnicas

y materiales de

imprenta llevaron durante cuatro siglos las

palabras por todo el mundo. El arte tipográfico

evolucionó y llegó

a crear obras maestras en la formación y

estructuras de libros y ediciones especiales

impresas

El telégrafo eléctrico, o más comúnmente sólo

'telégrafo', reemplazó a los sistemas de

transmisión de señales ópticas de semáforos,

como los diseñados por Claude Chappe para el

ejército francés, y Friedrich Clemens Gerke

para el ejército prusiano, convirtiéndose así en

la primera forma de comunicación eléctrica.

En 1746 el científico y religioso francés Jean Antoine Nollet, reunió aproximadamente a doscientos monjes

en un círculo de alrededor de una milla (1,6 km) de circunferencia, conectándolos entre sí con trozos de

alambre de hierro. Nollet luego descargó una batería de botellas de Leyden a través de la cadena humana y

observó que cada uno reaccionaba en forma prácticamente simultánea a la descarga eléctrica, demostrando así

que la velocidad de propagación de electricidad era muy alta.

En 1821, el matemático y físico francés André-Marie Ampère sugirió un sistema telegráfico a base de un

conjunto de galvanómetros, uno por cada carácter transmitido, con el cual afirmó haber experimentado con

éxito. Pero en 1824, su colega británico Peter Barlow dijo que tal sistema solo podía trabajar hasta una

distancia aproximada de alrededor de 200 pies (61 m) y que, por lo tanto, era impráctico.

El 21 de octubre de 1832, Schilling logró una

transmisión a corta distancia de señales entre

dos telégrafos en

diferentes habitaciones de su apartamento. En

1836 el gobierno británico intentó comprar el

diseño, pero

Schilling aceptó la propuesta del zar Nicolás I

de Rusia

Al otro lado del Atlántico, en 1836, el

científico estadounidense David Alter, inventó

el primer telégrafo

eléctrico americano conocido, en Elderton,

Pensilvania, un año antes del telégrafo Morse.

Alter demostró el

dispositivo a testigos, pero nunca convirtió la

idea en un sistema práctico

Se cuenta que la idea del telégrafo se le

ocurrió al pintor estadounidense Samuel Morse

un día de 1836, que

venía de regreso a su país desde el continente

europeo al escuchar casualmente una

conversación entre

pasajeros del barco sobre electromagnetismo

Surgió así otro código que puede considerarse

binario, pues de la idea inicial se pasó a

considerar un carácter

formado por tres elementos: punto, raya y

espacio.

Con la ayuda de placas de contacto y un lápiz

especial, que era dirigido por electricidad, las

señales podían ser

transmitidas por alambres de calidad pobre.

El telégrafo de Morse-Vail se difundió

rápidamente en las dos décadas siguientes.

Morse no acreditó a Vail

por los potentes electroimanes utilizados en su

telégrafo.

El primer telégrafo eléctrico comercial fue co-desarrollado por los inventores británicos William Fothergill

Cooke y Charles Wheatstone quienes presentaron una solicitud de patente en mayo de 1837, la cual se les

concedió el 12 de junio de 1837. Este dispositivo fue exitosamente demostrado 13 días después entre las

estaciones de Euston y Camden Town en Londres.

En 1855, el físico y músico británico David

Edward Hughes creó y patentó el primer

sistema de impresión

para telegrafía. En realidad, Hughes solo

buscaba crear una impresora que transcribiera

las notas musicales

mientras tocaba una pieza.

El telégrafo de Hughes superaba al telégrafo

Morse en velocidad pues, permitía transmitir

hasta 60 palabras

por minuto, frente a las 25 del sistema Morse.

Además, en su sistema utilizaba un código

perforado, pero que

permitía imprimir con caracteres normales, no

siendo necesaria una traducción posterior.

El Ingeniero Telegráfico francés Émile Baudot mientras trabajaba como operador en la Administración de

Correos y Telégrafos, unió los conocimientos que tenía del telégrafo de Hughes con los de una máquina de

multiplexación creada en 1871 por Bernard Meyer y la codificación de 5 bits de Gauss y Weber para

Este dispositivo era una versión electromecánica del

acceso múltiple por división de tiempo.

En el extremo de recepción, otro distribuidor

similar estaba conectado a varias impresoras,

que imprimían las

letras, números y signos del alfabeto

correspondientes en tiras de papel, que luego

se cortaban y pegaban en

una hoja de papel.

Una de las desventajas de este sistema está en

que el operador tenía debía pulsar

las teclas en el momento preciso, a un ritmo

aproximado de dos veces por segundo. El

distribuidor diseñado

por Baudot mantenía una velocidad de giro

aproximada de 120 vueltas por minuto y en

cada vuelta daba una

señal indicando que se podían pulsar las teclas.

Cuando en la estación emisora se cierra el interruptor, comúnmente llamado manipulador, circula una

corriente desde la batería eléctrica hasta la línea y el electroimán, lo que hace que sea atraída una pieza

metálica terminada en un punzón que presiona una tira de papel, que se desplaza mediante unos rodillos de

arrastre, movidos por un mecanismo de relojería, sobre un cilindro impregnado de tinta, de tal forma que,

según la duración de la pulsación del interruptor, se traducirá en la impresión de un punto o una raya en la tira

de papel.

Posteriores mejoras de los dispositivos

emisores y transmisores han permitido la

transmisión de mensajes de

forma más rápida, sin necesidad de recurrir a

un manipulador y a la traducción manual del

código, así como el

envío simultáneo de más de una transmisión

por la misma línea.

La necesidad de codificar el texto en puntos y

rayas para transmitirlo y descodificarlo antes

de escribir el

telegrama llevó al desarrollo de otros tipos de

telegrafía que realizaran estas tareas de forma

automática. El

telégrafo de Hughes se basa en dos ruedas que

contienen todos los símbolos o caracteres que

se pueden

transmitir y giran, sincronizadas, a la misma

velocidad

La velocidad de transmisión era inferior a la

del sistema

Morse, y dependía del radiotelegrafista, ya que

uno experimentado era capaz de enviar varios

caracteres en un

giro de la rueda.

El teléfono es un dispositivo de

telecomunicación diseñado para transmitir

señales acústicas por medio de

señales eléctricas a distancia

Historia de su invención

Alrededor del año 1857 Antonio Meucci construyó un teléfono para conectar su oficina con su dormitorio,

ubicado en el segundo piso, debido al reumatismo de su esposa.1 Sin embargo carecía del dinero suficiente

para patentar su invento, por lo que lo presentó a una empresa (Western Union, quienes promocionaron el

«invento» de Graham Bell) que no le prestó atención, pero que, tampoco le devolvió los materiales.

Evolución del teléfono y su utilización

Desde su concepción original se han ido

introduciendo mejoras sucesivas, tanto en el

propio aparato

telefónico como en los métodos y sistemas de

explotación de la red.

En lo que se refiere al propio aparato telefónico, se pueden señalar varias cosas:

• La introducción del micrófono de carbón, que aumentaba de forma considerable la potencia emitida,

y por tanto el alcance máximo de la comunicación.

• El dispositivo antilocal Luink, para evitar la perturbación en la audición causada por el ruido

ambiente del local donde está instalado el teléfono.

• La marcación por pulsos mediante el denominado disco de marcar.

La telefonía fija o convencional, que es aquella que hace referencia a las líneas y equipos que se

encargan de la comunicación entre terminales telefónicos no portables, y generalmente enlazados

entre ellos o con la central por medio de conductores metálicos.

• La central telefónica de conmutación manual para la interconexión mediante la intervención de un

operador/a de distintos teléfonos (Harlond), creando de esta forma un primer modelo de red.

Primeramente fueron las centrales manuales de Batería local (teléfonos alimentados por pilas o

baterías) y posteriormente fueron las centrales manuales de Batería central (teléfonos alimentados

desde la central).

La telefonía móvil o celular, que posibilita la transmisión inalámbrica de voz y datos, pudiendo ser esto a

alta velocidad en los nuevos equipos de tercera generación.

La telefonía móvil, también llamada telefonía celular, básicamente está formada por dos grandes partes: una

red de comunicaciones (o red de telefonía móvil) y los terminales (o teléfonos móviles) que permiten el

acceso a dicha red.

Evolución de los teléfonos móviles desde 1995 hasta

2001.

El teléfono celular es un dispositivo inalámbrico

electrónico para acceder y utilizar los servicios de la

red de

telefonía celular o móvil. Se denomina celular en la

mayoría de países latinoamericanos debido a que el

servicio funciona mediante una red de celdas, donde

cada antena repetidora de señal es una célula. La

denominación "teléfono móvil" se usa con mayor

frecuencia en España.

La primera red comercial automática fue la de NTT de Japón en 1974 y seguido por la NMT, que funcionaba

en simultáneo en Suecia, Dinamarca, Noruega y Finlandia en 1981 usando teléfonos de Ericsson y Mobira (el ancestro de Nokia). Arabia Saudita también usaba la NMT y la puso en operación un mes antes que los países

nórdicos. El primer antecedente respecto al teléfono celular en Estados Unidos es de la compañía Motorola,

con su modelo DynaTAC 8000X

Luego tenemos la red de telefonía móvil

digital, aquí ya la comunicación se lleva a cabo

mediante

señales digitales, esto nos permite optimizar el

aprovechamiento de las bandas de

radiofrecuencia como la

calidad de la transmisión de las señales.

La comunicación telefónica es posible gracias a

la interconexión entre centrales móviles y

públicas. Según las

bandas o frecuencias en las que opera el

celular, podrá funcionar en una parte u otra

del mundo.

En su operación, el teléfono celular establece

comunicación con una estación base y, a

medida que se traslada,

los sistemas computacionales que administran

la red van transmitiendo la llamada a la

siguiente estación base de forma transparente

para el usuario.

La evolución del teléfono celular ha permitido

disminuir su tamaño y peso, desde el Motorola

DynaTAC, el

primer teléfono móvil en 1983 que pesaba 800

gramos, a los actuales más compactos y con

mayores

prestaciones de servicio

El avance de la tecnología ha hecho que estos aparatos incorporen funciones que no hace mucho parecían

futuristas, como juegos, reproducción de música MP3 y otros formatos, correo electrónico, SMS, agenda

electrónica PDA, fotografía digital y video digital, video llamada, navegación por Internet, GPS, y hasta

Televisión digital. Las compañías de telefonía ya están pensando nuevas aplicaciones para este pequeño

aparato que nos acompaña a todas partes.

Con la aparición de la telefonía móvil digital,

fue posible acceder a páginas de Internet

especialmente

diseñadas para móviles, conocido como

tecnología WAP.

Las primeras conexiones se efectuaban

mediante una llamada telefónica a un número

del operador a través de

la cual se transmitían los datos de manera

similar a como lo haría un módem de PC.

La mayoría de los mensajes que se

intercambian por este medio, no se basan en la

voz, sino en la escritura. En

lugar de hablar al micrófono, cada vez más

usuarios —sobre todo jóvenes— recurren al

teclado para enviarse

mensajes de texto. Sin embargo, dado que hay

que introducir los caracteres en el terminal, ha

surgido un

lenguaje en el que se abrevian las palabras

valiéndose de letras, símbolos y números

El lenguaje SMS, consiste en acortar palabras,

sustituir algunas de ellas por simple simbología

o evitar ciertas

preposiciones, utilizar los fonemas y demás. La

principal causa es que el SMS individual se limita

a 160

caracteres, si se sobrepasa ese límite, el

mensaje individual pasa a ser múltiple,

lógicamente multiplicándose

el coste del envío. Por esa razón se procura

reducir el número de caracteres, para que de un

modo entendible,

entre más texto o bien cueste menos.

Un teléfono inteligente (smartphone en inglés) es

un teléfono móvil construido sobre una plataforma

informática móvil, con una mayor capacidad de

almacenar datos y realizar actividades semejantes

a una mini

computadora y conectividad que un teléfono móvil

convencional. El término «inteligente» hace

referencia a la

capacidad de usarse como un ordenador de

bolsillo, llegando incluso a remplazar a un

ordenador personal en

algunos casos.