Circular 947-Madre Yvonne Reungoat

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Circular 947

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Circular 9

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El asombro de la llamada

Estamos en la reunión plenaria del Consejo General para concluir el sexenio 2008-2014 y en nosotras hay sentimientos de alegría, de gratitud, de incertidumbre, de compromiso y disponibilidad. Sobre todo hay asombro por todo lo que Dios ha obrado en nosotras, en el Instituto, en la Iglesia y en el mundo más allá de la contradicción que a menudo acompaña la existencia.

InstitutoIglesia

Mundo

Nos sentimos interpretadas por el Magníficat de María y a su voz unimos la nuestra con toda la Comunidad, en alabanza al Señor por el amor y la alegría que hemos experimentado juntas, las que hemos sido llamadas a testimoniar hoy la fuerza profética del “espíritu salesiano” vivido en Valdocco y Mornés por nuestros Fundadores. Este “espíritu” ha caracterizado el sexenio reforzando en nosotras la certeza que Dios es Amor y que solo lo que cuenta es el Amor.

Acogemos la herencia de un largo recorrido marcado por la novedad del Espíritu Santo, que finaliza con la consigna: “Ser hoy con los jóvenes casa que evangeliza”

Llamadas a la conversión del

amor

Se trata de ser llamadas a realizar nuestra existencia como memoria viviente de Jesús, a reavivar el “Da mihi animas cetera tolle” y a dar respuesta a la consigna: “A ti te las confío”, a ser con los jóvenes signo y expresión del Amor preventivo de Dios, a creer que nuestra misión es más fecunda cuando vivimos en comunión como Comunidad Educativa y juntas testimoniamos el Amor preventivo.

El estar llamadas a ser memoria viviente de Jesús ha marcado nuestros pasos en compañía de María que ha renovado también para nosotras esta invitación: He aquí tu campo, y ha dilatado nuestro corazón para una acción apostólica portadora de esperanza. Con Ella y en comunión con todas ustedes elevamos nuestro Magníficat:

Magníficat por la llamada a encontrar la fascinación del encuentro personal con Jesús, dejándonos implicar en su pasión por el Reino

Magníficat por la audacia misionera que caracteriza el rostro de muchas Comunidades, por cada Hermana que cuida de los jóvenes, especialmente de los más pobres, que asume vitalmente la espiritualidad educativa de D. Bosco y M. Mazzarello, que bebe en las fuentes carismáticas del Amor preventivo vivido con el estilo alegre y exigente del Sistema Preventivo.

Magníficat por las Hermanas que dejan sus seguridades para estar con los jóvenes, participan su tiempo, abren su corazón y la casa, los hacen protagonistas del propio crecimiento, capaces de abrirse a Dios, fuente de Amor auténtico que potencia la entrega. Magníficat por las Hermanas que anuncian a Jesús y acompañan a los jóvenes al encuentro vital con Él.

Magníficat por las nuevas vocaciones que el Señor ha enviado al Instituto. Por las FMA que han respondido con generosidad a la llamada del Señor a ser misioneras Ad Gentes, por las Provincias que han aceptado su partida y por las Comunidades que las han acogido.

Magníficat por las Comunidades que se forman y trabajan juntas, que consolidan la mentalidad de red y valoran la riqueza de la internacionalidad, que asumen el criterio ético de la sobriedad y la autodelimitación de las necesidades como alternativa evangélica al consumismo.

Magníficat por las Comunidades que dan respuesta a la llamada de la movilidad humana privilegiando la educación y la formación, sobre todo de niños, mujeres, jóvenes, migrantes y promueven el diálogo intercultural e interreligioso.

Recorramos el camino de tensión al Amor que siempre tiene necesidad de ser purificado por la misericordia del Padre. Somos conscientes que no siempre Jesús es el centro de nuestra vida y de la misión. No siempre somos transparencia de su Amor para que los jóvenes sientan que son amados por Dios.

No siempre sabemos asumir y participar en la misión educativa con corresponsabilidad pero estamos seguras que el Señor realiza su Proyecto a través de nuestra fragilidad, cuando hay espacio para que Él pueda habitar.

Miramos con esperanza el futuro, seguras que María, verdadera superiora del Instituto, continuará sosteniendo el camino y abriendo el corazón de cada una a las nuevas llamadas, que exigen una continua y real conversión pastoral y misionera.

Llamadas a acoger la novedad del Espíritu Santo

El sexenio que está para terminar, evidencia en el escenario mundial, grandes transformaciones que marcan el rostro de estos primeros años del tercer milenio.

Grandes

cambios

Siglo XXI

Agradecemos el don de la presencia del Espíritu Santo que continuamente obra en nuestra historia a pesar de los múltiples conflictos, las tensiones entre culturas y pueblos, la crisis económicas, la violencia, el flujo migratorio y las varias calamidades naturales. Son escenarios que a menudo conducen, sobre todo a los jóvenes a una visión oscura del tiempo en que vivimos .

Sin embargo, en el tejido a menudo oscuro de nuestra época, encontramos los signos de la vitalidad del Espíritu, quien continúa suscitando gérmenes de bien en la Iglesia, en el Instituto, en el mundo y sosteniendo un florecer de propuestas e iniciativas que hacen más bella esta Tierra. “No nos dejemos robar la esperanza”, repitámoslo en sintonía con el Papa Francisco.

Nos sentimos en sintonía con el entusiasmo de los creyentes y no creyentes de todo el mundo, por los acontecimientos que han marcado el camino reciente de la Iglesia, por la opción de gran libertad y humildad de Benedicto XVI y por la elección del Papa Francisco.

Las palabras y gestos del nuevo Pontífice están alimentando una renovada conciencia evangélica de la misión del pueblo de Dios. De su Magisterio, como FMA acogemos las indicaciones de un nuevo recorrido de conversión al Amor que nos ofrece continuidad en el camino que hemos realizado en el sexenio. Estamos invitadas a una conversión pastoral que conduce a colocarnos en un “estado permanente de misión” y que pide a cada Comunidad un compromiso de conversión tal, que “no dejemos las cosas como están”.

Agradecemos al Espíritu porque nos damos cuenta que el tema del CGXXIII encuentra luz y apoyo en las orientaciones del Papa Francisco. También nosotras soñamos “una opción misionera capaz de transformar todas las cosas, porque las costumbres, los estilos, los horarios, el lenguaje y cada estructura serán un canal adecuado para la evangelización del mundo actual, más que por el instinto de conservación”.

Creando con y para los jóvenes, ambientes donde las relaciones de calidad sean un estilo de vida y donde puedan dar respuestas generosas a las llamadas que Dios les hace. Una opción que nos haga capaces de ser, con ellos, misioneros en las calles del mundo.

Miramos como un tiempo de novedad del Espíritu Santo la celebración del CGXXIII con la certeza de que no solo, las 194 FMA reunidas en Roma del 8 de septiembre al 15 de noviembre sino que, cada FMA está empeñada en acompañar de cerca su recorrido, conscientes de que el CG XXIII - con modalidades diferentes - nos implica personalmente.

Contemplamos también la presencia fecunda del Espíritu Santo en el tiempo de preparación al acontecimiento carismático del Bicentenario del nacimiento de nuestro Fundador D. Bosco. El entonces Rector Mayor D. Pascual Chávez en la Carta de inauguración del trienio, dice que “el camino y el tema del año del Bicentenario, coherente con los años de preparación, se referirá a: “Misión de D. Bosco con y para los jóvenes”.

Esperaba así una celebración que nos llevara a concentrarnos en el camino de renovación espiritual y pastoral que se tendrá que recorrer como Congregación, como Familia Salesiana y MJS.

El nuevo Rector Mayor, D. Ángel Fernández, anticipando el tema de la Strenna 2015 – “Como D. Bosco, con los jóvenes y para los jóvenes” – confirma esta línea de renovación y de conversión.

Nosotras FMA estamos invitadas a vivir este acontecimiento como posibilidad de una fuerte renovación en el entusiasmo vocacional; como acción de gracias por el gran don del “carisma salesiano” para la salvación de la juventud de todo tiempo y de todo contexto cultural; de esperanza en el futuro.

Agradecemos la propuesta del Rector Mayor asumida para la celebración bicentenaria, nos acerca en modo sorprendente al tema del CGXXIII.

El acontecimiento capitular será una significativa oportunidad para evaluar y potenciar nuestra fidelidad a D. Bosco, para reflexionar si estamos realizando, a nivel personal y comunitario, su “sueño” y para interrogarnos cómo podemos hacer resplandecer hoy aquel “Monumento vivo de gratitud a la Auxiliadora” que él ideó al fundar el Instituto.

Llamadas con los jóvenes a anunciar a

Jesús

Los encuentros con tantos jóvenes a lo largo de estos seis años y el escuchar su historia, manifiestan la sed de Dios presente en el corazón de cada uno de ellos, aunque no siempre la expresan.Hoy, agradeciendo lo que hemos vivido, estamos disponibles a arar con ellos en su nuevo campo. Además de una pastoral para los jóvenes, queremos potenciar una pastoral con los jóvenes saliendo juntos al encuentro de tantos otros que están esperando el Evangelio

Son los jóvenes los que nos llevarán hacia los lugares de una humanidad que tiene necesidad de Jesucristo, ayudándonos a desacomodar y a superar los muros que nos distancian de la realidad.

Como Instituto, en vísperas de la celebración de un nuevo CG, nos disponemos a generar vida creyendo en las continuas llamadas del Espíritu, escuchándolo y testimoniando con los jóvenes la belleza de la Vida Religiosa.

Estamos convencidas que nuestra vida dada en abundancia es la primera forma de evangelización. También estamos felices para acoger con nosotras por tres días, durante el CG, jóvenes y adultos para reflexionar, orar y responder juntos a los desafíos de hoy.

Ser hoy con los jóvenes casa que evangeliza

María Auxiliadora, como en Valdocco y Mornés, continúa

abriendo caminos y acompañando los discípulos

misioneros de su Hijo. A Ella le pedimos que

continúe “paseando por nuestras Casas” y nos

ayude a humanizar nuestras relaciones.

Le pedimos, especialmente, que lo haga

en la sede del CG XXIII

Nos damos cita, en la oración y en la comunión, para celebrar las fiestas salesianas del 5 de agosto, para renovar la gratitud de ser parte viva de la Familia querida por María, el 16 de agosto, para la solemne apertura del Bicentenario del nacimiento de D. Bosco.

Será nuestro Fundador con Madre Mazzarello, quienes acompañen el recorrido de todo el año, en particular el tiempo capitular y post-capitular.

La Madre y Hermanas del Consejo

Castelgandolfo, 16 de julio de 2014