Business Mail Mayo 2014 Especial TLC con EE.UU.

Patrocinadores Platino

Mayo 2014 Edición Nº105

Segundo aniversariodel TLC con

Estados Unidos

PresidenteMartín CarrizosaPrieto & Carrizosa Primer VicepresidenteBernardo NoreñaCitibank Colombia Segundo VicepresidenteRamiro EscobarACESCO TesoreroAlan HailsPricewaterhouse Coopers Consejero jurídicoMariana PossePosse Herrera & Ruiz Director ejecutivoCamilo Reyes Rodríguez

Subdirectora ejecutivaAnne McKinney

Revisor FiscalAlfonso Escobar B.BDO Audit AGE S.A.

ComitéEjecutivo

Tabla deContenido

Comunicaciones AmCham Colombia

Tel (571) 587 78 28 Ext. 121 / (316) 482 73 [email protected]

Calle 98 No. 22-64 Of. 1209www.amchamcolombia.com.co

Edición general: Angélica VillamarínComunicaciones AmCham Colombia

Diseñado por: 980DesignStudioAngélica María Vélez [email protected]

Impreso por: ESCALA [email protected]

Pg. 1 Editorial

Pg. 2 Especial TLC

Los tratados de Libre Comercio

20 meses de vigencia del Tratado de Libre Comercio entre Colombia y Estados Unidos Mayo 2012 - Diciembre 2013

Cómo sacar provecho del acuerdo comercial entre Colombia y Estados Unidos

TLC con Estados Unidos: el juego de muchos campeones

Cuellos de botella para mejor desempeño del TLC con Estados Unidos: del dicho al hecho hay aún mucho trecho

La exportación de servicios y el TLC con Estados Unidos

Nuevas exportadoras colombianas

Incentivos para atraer inversión extranjera a Colombia

Pg. 18 Seccionales AmCham

Bolívar, el departamento más exportador de la región Caribe

Panorama comercial del Valle del Cauca: dos años del TLC Colombia - Estados Unidos

Pg. 20 Afiliados AmCham

Prietocarrizosa gana el premio a la firma pro-bono del año

Chevron y el Colegio Baylor de Medecina del Hospital de Niños de Texas se unen para contribuir a mejorar las condiciones de salud en La Guajira

1AmCham Colombia / Business Mail Edición 105

Editorial

Con frecuencia se cree que la razón de ser de los Tratados de Libre Comercio es simplemente el aumento de las exportaciones. Tal concepto simplifica equivocadamente un instrumento mucho más integral y complejo. Los TLC incluyen, entre otras cosas, importaciones, inversiones y la creación o evolución de una institucionalidad para la competitividad.

Sin eludir la preocupación por la caída de las exportaciones a Estados Unidos durante el año pasado, que en gran medida se explica con la caída en las exportaciones minero-energéticas, quiero referirme a algunos efectos positivos del acuerdo comercial: diversificación, inversión e institucionalización.

En cuanto a la diversificación hay que recordar que durante los primeros dos años de vigencia del tratado, Colombia exportó a Estados Unidos aproximadamente 350 productos nuevos de todos los sectores productivos como hormonas, transformadores, niveladoras, pilas, agua mineral y gasificada, barcos de pesca, instrumentos musicales de cuerda y pulpa de remolacha. En ese mismo periodo, más de 1600 empresas exportaron por primera vez al mercado estadounidense. En un periodo muy corto de apenas 24 meses, Colombia diversificó sus exportaciones en cuanto a tipo de producto y destino.

Por otro lado, Colombia ha logrado durante los últimos diez años un impresionante aumento es sus niveles de Inversión Extranjera Directa al pasar de 2134 millones de dólares en el 2002

a 16870 millones en el 2013. De estos, Estados Unidos aportó el 17%, es decir 2.266 millones de dólares. El incremento respecto del año anterior fue del 17.6%. De igual manera, es muy importante señalar que durante 2012 y 2013 Colombia invirtió en Estados Unidos 483.1 millones de dólares. Hasta hace poco tiempo era impensable que las empresas colombianas se sintieran suficientemente sólidas y competitivas como para penetrar el mercado americano.

El mismo tratado crea una institucionalidad para regir el comercio e inversión bilateral, lo que proporciona permanencia a las preferencias arancelarias que beneficiaban a Colombia bajo el ATPDEA. Además, el acuerdo ha incentivado un proceso de reformas e inversiones indispensables para hacer a nuestro país más atractivo y competitivo. Finalmente se están haciendo inversiones en infraestructura y reformas institucionales vitales como las del ICA y el Estatuto Aduanero. Me valgo de la oportunidad para reiterar el pedido que hiciera el Doctor Bernardo Noreña, Presidente de la 59 Asamblea General Ordinaria de nuestra Cámara, cuando le pidió al gobierno revisar los mecanismos para la facilitación y el estímulo al comercio, tales como el Plan Vallejo y las zonas francas, y la conveniencia de que estos estén bajo la entidad fiscalizadora.

Los efectos del TLC se verán a mediano y largo plazo; estos son tratados que tienen una vocación de permanencia, sin embargo ya se vislumbran efectos muy positivos. Creemos que lo que hay que hacer es perseverar.

Por: CAMILO REYES RODRÍGUEZDirector Ejecutivo

Cámara de Comercio Colombo Americana

Foto por:Diego Santacruz / EL TIEMPO

Dos años del TLC con EE.UU: diversificación,

inversión e institucionalización

2 AmCham Colombia / Business Mail Edición 105

Por: Jorge Humberto Botero*Presidente de Fasecolda

Los Tratados deLibre Comercio

Con desconcierto, diversos observadores se preguntan por qué los TLC no están produciendo los efectos que se anunciaron cuando estaban en negociación. La razón pareciera asistirles si se analizan las cifras que registran la caída de las exportaciones y la consecuente ampliación de la brecha en la balanza comercial. Sin embargo, ese es un razonamiento erróneo y prematuro. En primer lugar, porque un buen análisis de cualquier fenómeno económico requiere de una visión del entorno. En segundo lugar, porque hay decisiones de política económica que no tienen efectos instantáneos.

Con relación al entorno, se debe tener en cuenta que la economía mundial vivió una situación de estancamiento después de la crisis mundial de 2008-09, que se prolongó hasta 2013. Este bajo crecimiento fue ocasionado por la crisis de la deuda soberana de la zona euro y

la débil reactivación de la economía de Estados Unidos; adicionalmente, en los dos últimos años se desaceleraron las principales economías emergentes.

El resultado fue la reducción del crecimiento del comercio mundial

y l a c a í d a d e l o s p re c i o s internacionales de los bienes

básicos. Si a estos hechos se suman las presiones a la apreciación de las monedas que enfrentaron muchos países como consecuencia de las políticas monetarias expansivas de las economías desarrolladas, tendremos un

cuadro en el que cabía esperar menos exportaciones y más

importaciones.

Los TLC son medidas de política económica que producen efectos positivos

a mediano plazo, a condición de que se adopten de medidas complementarias para mejorar la competitividad del país y la productividad de sus

Especial TLC

*Ministro de Comercio, Industria y Turismo entre 2003 y 2007. Principal negociador del TLC entre Colombia y Estados Unidos.

Los TLC son medidas de política

económica que producen efectos positivos a mediano

plazo, a condición de que se adopten de medidas

complementarias para mejorar la competitividad del país y la productividad de sus

sectores transables internacionalmente


sectores transables internacionalmente. Si bien hay efectos de corto plazo, estos se derivan de la ventaja relativa que surge para los bienes que obtienen desgravación inmediata; aquellos que ya tienen presencia en el mercado del socio comercial y que antes pagaban un arancel diferente a cero.

Pero los mayores efectos toman años porque responden a cambios en la asignación de recursos en la economía desde las actividades menos eficientes hacia las más eficientes. Además, en el caso de economías en desarrollo como Colombia, es necesaria la superación de diversos retrasos en áreas como la infraestructura, la formación de capital humano y la reducción del impacto negativo de la regulación sobre los costos de producción de las empresas, entre otros.

A la luz de las experiencias de otros países que entraron en la negociación de TLC antes que Colombia, se pueden evidenciar los dos aspectos señalados. En el caso de Chile, como consecuencia de la crisis mundial sus exportaciones a Estados Unidos cayeron en 27.4% entre 2008 y 2009; en el de México la contracción fue del 18.2% en el mismo periodo. Pero entre 2003 y 2013 las exportaciones chilenas al mercado estadounidense se multiplicaron por 2.8 y las mexicanas entre 1994 y 2013 por 5.7.

Hay un elemento adicional que es preciso tener en cuenta en el análisis no solo de los TLC sino en general del comercio internacional: ellos no se hacen con el objetivo de lograr un superávit comercial; esos fueron postulados de alguna doctrina económica que quedó revaluada hace varios siglos. La realidad de hoy es que los

países exportan bienes y servicios por dos razones básicas: crecer más y para poder importar. Y los TLC buscan aprovechar esos potenciales que brinda el comercio internacional mediante la eliminación de las barreras artificiales con los socios de mayor interés. En general se acepta que el comercio internacional puede ser una fuente de crecimiento porque induce una mejor asignación de recursos, la apropiación de tecnologías foráneas y, en consecuencia, el aumento de la productividad.

Hay otro aspecto por el que los TLC son de interés para una economía como Colombia. La estabilidad en las reglas de juego que establecen los acuerdos da señales a los inversionistas, que se reflejan en aumento de la inversión no solo de empresarios nacionales sino también de extranjeros. Esto lo comprueba la experiencia de Chile y de México, pero también la de Colombia: en los años recientes hemos registrado crecientes montos de Inversión Extranjera Directa (IED), especialmente desde naciones con las que tenemos TLC. En 2013, los países con mayores aportes a la IED llegada a Colombia tuvieron altas tasas de crecimiento; es el caso de Estados Unidos (18.5% anual), Suiza (197%), España (60.1%) y Francia (79.4%), entre otros.

Los argumentos expuestos muestran por qué no se puede hacer una descalificación simplista y apresurada de los tratados de libre comercio que llevan poco tiempo de vigencia y se han instrumentado en una coyuntura adversa de la economía mundial. Por fortuna, diversos indicadores permiten prever una recuperación gradual desde finales de 2013.

Especial TLC

AmCham Colombia / Business Mail Edición 105


Evaluar los impactos que el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos ha tenido en la economía colombiana es una tarea con muchas limitaciones, principalmente por su poco tiempo desde su entrada en vigencia. No obstante, un análisis de los resultados alcanzados luego de 20 meses de vigencia del Acuerdo arroja aspectos interesantes sobre la relación comercial entre ambos países.

Colombia sigue registrando una balanza comercial superavitaria con este país, que en términos FOB suma US$ 7.125 millones. Esto es destacable en un período donde las importaciones de Estados Unidos del mundo disminuyeron, su economía registró un bajo crecimiento. En el marco del TLC, las importaciones colombianas de productos americanos crecieron en un poco más del 27%. Esto era previsible teniendo en cuenta que Estados Unidos está aprovechando su nuevo acceso preferencial al mercado colombiano.

Cosa distinta pasa con buena parte de la oferta exportable colombiana, que ya tenía acceso preferencial por las ventajas que ofrecía la Ley de Preferencias Arancelarias Andinas –ATPDEA-; razón por la cual la entrada en vigencia del Acuerdo no tenía por qué tener un impacto inmediato

tan significativo. En este sentido, uno de los beneficios perseguidos con el TLC fue consolidar las condiciones preferenciales para la oferta exportable colombiana, pues la mencionada ley de preferencias tenía vigencia limitada.

Exportaciones diversificadas

En los 20 meses de vigencia del TLC, las exportaciones colombianas sumaron US$ 32.2 mil millones, cifra inferior en un 3.4% a la alcanzada en el periodo mayo 2010 – diciembre 2011. Este decrecimiento se deriva de factores como el descenso de los precios en el mercado internacional de productos relevantes para la oferta exportadora colombiana como el carbón, el níquel, el café y las flores.

No obstante, las exportaciones industriales y agroindustriales crecieron 2.4%. Es más, las agroindustriales, sector en el que el país tienen un enorme potencial, presentaron un crecimiento de 6.9%. Algunos productos con un destacado buen comportamiento exportador son el banano (+7.9%), los filetes de pescado y el pescado fresco o refrigerado (+29.9% y +78.7%), la pimienta (+51.5%), la harina de cereales (+24.6%) y las plantas y semillas (+5.4%).

Por: Claudia Candela, Viceministra de Comercio Exterior

20 meses de vigencia del Tratado de Libre Comercio entre Colombia y Estados Unidos Mayo 2012 - Diciembre 2013

Especial TLC



En el sector industrial resaltan las exportaciones de transformadores eléctricos con US$ 9.6 millones (+798%), turborreactores con US$ 31.3 millones (+105%), puertas y ventanas de aluminio y sus partes con US$ 54.3 millones (+154%), preparaciones capilares con US$$ 7.9 millones (+279%) y vidrio laminado, insulado y templado con US$ 42 millones (+80%), entre otros.

Importaciones para la competitividad

En relación con las importaciones realizadas por Colombia de Estados Unidos entre mayo de 2012 y diciembre de 2013, éstas incrementaron cerca del 27.1% y sumaron US$ 26.2 mil millones de dólares en valor CIF.

De estas importaciones, más del 90% son bienes de capital, materias primas y bienes intermedios y el 80.7% de ellas son bienes no producidos en Colombia. Esto destaca la calidad de esas importaciones y el bajo nivel de competencia que en términos globales le genera a la producción colombiana.

De tal modo, es de resaltar que el TLC con Estados Unidos es un proveedor de materias primas a mejores precios, lo que a su vez incrementa la posibilidad de exportar y lograr acceso a nuevos mercados y consumidores. El hecho de que el aparato productivo colombiano tenga mejor acceso a la adquisición de maquinaria y equipo importados de Estados Unidos por la eliminación de los aranceles debe tener un efecto positivo en su competitividad tanto en el sector industrial como en el agropecuario.

También se observa que en el caso de productos como el trigo, los aceites, los automóviles y los tejidos, las importaciones desde Estados Unidos han crecido pero no se ha presentado un incremento proporcional en el total de las importaciones del resto del mundo, lo que evidenciaría que hay una sustitución de proveedores.

Así mismo, hay importaciones en el sector agropecuario y en el agroindustrial que se destacan por su dinamismo en el periodo. Si bien las

importaciones de productos como el arroz, el maíz blanco, el pollo y los quesos han incrementado, lo hacen dentro de los niveles previstos en el Acuerdo por los contingentes establecidos, pero sin representar parte sustancial del consumo nacional.

Aprovechamiento colombiano del acuerdo

Finalmente, y como elemento significativo, Colombia es el cuarto país en el mundo con más exportaciones a Estados Unidos con un margen preferencial, después de Canadá, México y Corea del Sur. Otro de los resultados que vale la pena resaltar es el dinamismo de productos como quesos, bebidas lácteas, azúcar, cortinas, ropa de cama, tapetes, y pañales, que no tenían preferencias arancelarias con el ATPDEA y que cuentan con ellas gracias al TLC. Este grupo de productos incrementó sus exportaciones en un 64% .

Añadido a esto, es de resaltar que el acuerdo es más que comercio de bienes: ha tenido un impacto positivo en materia de inversión nacional y extranjera en Colombia y colombiana en Estados Unidos, así como en el comercio de servicios. Durante los 20 meses de su vigencia, los flujos de inversión estadounidenses sumaron US$ 2.261 millones, que representan un incremento del 17.6% frente al período anterior.

Todos estos resultados, analizados en el muy corto tiempo de vigencia del acuerdo, lo que nos muestran son mensajes de optimismo sobre el presente y futuro de nuestra relación comercial con uno de los mercados más importantes del mundo. Ello sin desconocer que existen importantes tareas pendientes que cuando se lleven a cabo mejorarán los impactos positivos del acuerdo en el corto, mediano y largo plazo.

Este Acuerdo de Promoción Comercial se ha convertido en una manera de generar oportunidades equitativamente tanto para los empresarios como para los consumidores. En sus 20 meses de vigencia no hay evidencias que se esté afectando negativamente la economía colombiana.

Especial TLC


Especial TLC

El TLC con Estados Unidos en cifras

Exportaciones

Importaciones

-3.1% productos mineros energéticos

+6.9% productos agroindustriales

-8.6% productos agropecuarios

+1% productos industriales

350 nuevos productos

fueron exportados a EE.UU.

75% manufacturas

12,5% agroindustriales

12,5% prendas de vestir

1609 empresas exportaron

por primera vez a EE.UU.

40% del total de empresas exportadoras al país

75,9% manufactureras

12,9% prendas de vestir

10,2% agroindustriales

1% servicios y editorial

61.1% son industriales

3.26% son agroindustriales

4.27% son agropecuarias

90% son bienes de capital, materias primas y bienes intermedios: 80.7% de ellas son bienes no producidos en Colombia

53.6% son materias primas y bienes intermedios

39% son bienes de capital y materiales de construcción

7.3% son bienes de consumo


Mucho se ha dicho y escrito sobe el Acuerdo Comercial suscrito entre Colombia y Estados Unidos. Aún hoy, a punto de cumplirse dos años desde su entrada en vigor, algunos continúan debatiendo sobre la conveniencia de esta negociación.

Nos parece que insistir en ese debate es estéril. El país tomó una decisión que fue ampliamente discutida en su momento, como pocas en la historia, y el acuerdo pasó todos los trámites constitucionales y legales para su puesta en vigor. Más bien, la atención debe enfocarse en cómo sacar el mayor provecho de las oportunidades derivadas de un tratado con la principal economía del mundo.

El tamaño mismo de la economía estadounidense ofrece una inmensa oportunidad. De acuerdo con datos de la Oficina de Estudios Económicos del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, el PIB de Estados Unidos para el año 2012 fue de USD 15.68 billones; cerca de la tercera parte del PIB mundial. En el mismo año, el PIB per cápita fue de USD 49922.

El acuerdo con Estados Unidos representa la posibilidad de tener acceso al mercado más grande

del mundo. Según el U.S. Census Bureau, ese país cuenta con una población aproximada de 317 millones de habitantes. Y los estadounidenses son grandes importadores de productos de todas las latitudes. En el año 2012, ese país importó del mundo bienes por valor de USD 2.3 billones de dólares; muchos de esos bienes se producen en Colombia y podrían suplir una parte sustancial de dicha demanda.

Pero este mercado no sólo es el más grande del mundo sino que establece, en buena medida, las tendencias del mercado global y tiene una demanda altamente sofisticada. Así, los productos que posicione Colombia entre los consumidores estadounidenses habrán logrado entrar en un mercado sofisticado y competitivo. Esto preparará a nuestros exportadores y facilitará su ingreso a otros mercados desarrollados.

Además, varios ejercicios comprueban que las canastas exportadoras de Colombia y Estados Unidos ni son similares ni compiten entre sí. Esto significa que nuestras economías tienen estructuras

Por: Eduardo Muñoz Gómez, Director del Centro de Aprovechamiento de Acuerdos Comerciales

Cómo sacar provecho del acuerdo comercial entre Colombia y

Estados Unidos

Especial TLC


Foto: Felipe Ariza - SIG

Presidentes de Colombia y Estados Unidos, Juan Manuel Santos y Barack Obama

productivas diferentes y, por tanto, surgen oportunidades de complementación y de una mayor integración que beneficie a ambas.

Dicho lo anterior, no es suficiente haber negociado el acuerdo comercial: el desafío es lograr su adecuado aprovechamiento incluyendo la eliminación de obstáculos que dificultan la exportación, para que los empresarios encuentren una vía expedita hacia este mercado. En ese contexto, se creó el Centro de Aprovechamiento de Acuerdos Comerciales y su antecesora, la Oficina de Aprovechamiento del Acuerdo con Estados Unidos, con el propósito de identificar los productos con mayor potencial exportador por región y los cuellos de botella que enfrentan y generar planes de acción para resolverlos.

En una primera etapa fueron identificados 424 productos con potencial para aprovechar el acuerdo con Estados Unidos. Asociada a ellos se evidenció la existencia de múltiples barreras, clasificadas, en términos generales, bajo cuatro campos:

Regulatorio, Capital Humano, Infraestructura e Institucional.

El CAAC ha revisado y actualizado las barreras identificadas y comenzado a realizar acciones para su eliminación. De hecho, ya se ha actuado sobre varios obstáculos con iniciativas como. seminarios de socialización de oportunidades, un seminario sobre la nueva Ley de Inocuidad de Estados Unidos en asocio con AmCham Colombia, un seminario sobre etiquetado de productos de exportación, seminarios sobre el mecanismo de escaso abasto en confecciones, gestiones ante la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN) y varios ministerios, proyectos para aprovechar el capítulo de compras públicas del tratado, el proyecto de Formación de Formadores, la propuesta para un Inventario Nacional de Laboratorios y avances en la Hoja de Ruta de Internacionalización de Carne de Bovino, entre otros. Es claro que el proceso de preparación es largo, pero si lo hacemos bien podremos obtener buenos frutos de este importante acuerdo.

Especial TLC


Es un honor poder contribuir de nuevo con el Business Mail de AmCham Colombia, como lo ha sido servir como el Consejero Comercial de la Embajada de Estados Unidos en los últimos tres años. Espero poder contribuir una vez más a esta publicación y seguir siendo parte de un gran equipo que se esfuerza por aumentar el comercio entre Colombia y Estados Unidos.

Todos los años me reúno y asesoro a cientos de empresas de Colombia y de Estados Unidos en temas de comercio bilateral y, más concretamente, sobre cómo realizar efectivamente negocios en Colombia. Desde esta perspectiva, me gustaría referirme a los TLC en el ámbito más amplio de lo que son y lo que pueden ser no sólo para las empresas, sino también para los consumidores.

Estados Unidos tiene tratados de libre comercio vigentes con sólo 20 países. Colombia, por lo tanto, forma parte de un grupo muy selecto de naciones socias. Como tal, las empresas colombianas tienen el mayor acceso posible a un mercado de más de 300 millones de consumidores, a un nivel que solamente tienen las compañías de otros 19 países en el mundo. Este acceso no sólo acelera el tiempo

de ingreso al mercado estadounidense, sino que también reduce el costo de la entrada. Estas son ventajas competitivas que las empresas colombianas tienen sobre la mayoría de sus competidores globales. Las industrias y empresas nacionales que han sacado provecho de dichas ventajas son demasiado numerosas para enunciarlas. Sin embargo, de acuerdo con Proexport, 1609 empresas exportaron sus productos o servicios a Estados Unidos por primera vez a partir de la puesta en vigencia del TLC. Un ejemplo de esta incursión en los negocios en Estados Unidos es el de Conalvías, que a principios de este año obtuvo su décimo contrato, por valor de 35 millones de dólares, para la construcción y rehabilitación de carreteras en el sur de la Florida. Por otro lado, existen otros contextos de nuevas relaciones comerciales para aquellas empresas que probablemente no tienen los recursos para investigar y comercializar sus productos por su cuenta en el mercado de Estados Unidos: Proexport trae compradores extranjeros a Colombia y con este propósito ha organizado 50 eventos de networking. Así, a mediados de febrero de este año trajo a Bogotá 1202 compradores extranjeros procedentes

Por: Cameron Werker, Consejero Comercial de la Embajada de Estados Unidos en Colombia

TLC con Estados Unidos: el juego de muchos campeones

Especial TLC



de 58 países, 280 de los cuales eran de Estados Unidos, con el propósito específico de comprar bienes y servicios colombianos. En ese encuentro, se organizaron más de 18 mil citas para las 2535 empresas colombianas de 22 departamentos de Colombia presentes. Honestamente, puedo decir que fue una de las mayores iniciativas de promoción de exportaciones que jamás haya visto.

De este lado, la Embajada ha estado involucrada en la organización de 25 misiones comerciales a Colombia, desde el 15 de mayo de 2012. El evento número 25 ha sido denominado Trade Winds The Americas, que reunió en Bogotá a cerca de 150 empresarios de Estados Unidos para aprender sobre el mercado colombiano y reunirse con potenciales socios en el país. Nos asociamos con AmCham Colombia con el fin de ofrecer reuniones de negocios a 43 de las empresas visitantes, lo que resulta en cerca de 200 encuentros. Con todo esto es para expresarles que, si bien todavía hace falta una gran cantidad de trabajo para lograr el éxito comercial, tanto a nivel nacional como internacional, los gobiernos de Colombia y Estados Unidos no sólo han sentado las bases más ventajosas para hacer negocios de mutuo beneficio, sino que ambos tienen programas y actividades para posicionar sus empresas a un nivel en el que se puedan beneficiar del TLC.

Teniendo en cuenta que el campeonato por la Copa Mundial de fútbol de este año inicia a comienzos de junio, permítanme usar una analogía del deporte para ilustrar mi mensaje general. El equipo nacional

de Colombia, con recursos tanto externos como internos, ha hecho todo lo que está a su alcance para lograr su legítimo lugar entre los 32 equipos que competirán por la Copa del Mundo. De igual forma, Colombia, utilizando todas sus herramientas económicas y políticas, logró criterios comerciales de igualdad con Estados Unidos para convertirse en uno de los 20 países con los que tiene un acuerdo de libre comercio. No hay mayor signo de igualdad, desde una perspectiva comercial, que ser un miembro de este selecto grupo.

A medida que las esperanzas y los sueños de 48 millones de fanáticos del fútbol colombiano descansan sobre los hombros de la selección colombiana, el equipo tendrá que confiar sólo en su propia habilidad y destreza futbolística para avanzar en este campeonato. Depende de ellos hasta dónde van a avanzar. Del mismo modo, ahora que el TLC ha sentado las bases para las empresas colombianas, depende de ellas aprovechar los beneficios inherentes al acuerdo. Sin embargo, a diferencia de la selección colombiana que, aparte de las oraciones y los aplausos de los aficionados, será exitosa o fracasará en función a su capacidad para vencer a la competencia, las empresas colombianas cuentan con recursos innumerables del sector público y privado para ayudarles a ganar. La competencia es fuerte, ya sea en el terreno de juego o en los mercados. Algunos ganarán y algunos perderán, pero a diferencia del futbol en dónde sólo puede haber un campeón, aquí las empresas pueden ser ganadores ilimitados en el marco del TLC.

Especial TLC



Los resultados del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos parecieran aún distantes de ser los esperados. Las cifras de comercio con ese país no muestran variaciones significativas fácilmente atribuibles a un acuerdo que ya está por cumplir los dos años de firmado, particularmente en el crecimiento de las exportaciones colombianas hacia el mercado americano. Adicionalmente, se aseguraba que la complementariedad de las economías de Colombia y Estados unidos traería un crecimiento de las importaciones y las mismas fluirían de manera mucho más ágil desde la perspectiva aduanera, pues, entre varios otros capítulos, el acuerdo contiene uno de facilitación del comercio que promueve prácticas que permitirían un paso mucho más expedito de las mercancías por las aduanas.

Lo cierto es que a pesar de los varios años que duró el proceso de negociación, firma y ratificación del tratado, el país no se preparó en debida forma.

Ni lo hizo el sector privado, ni lo hizo el sector gubernamental. Y por tanto es que vemos que la velocidad de implementación y aprovechamiento del acuerdo va a un paso mucho más lento del deseado por todos los que promulgamos el libre comercio e hicimos parte activa en el apoyo del TLC.

En días pasados, la Viceministra de Comercio, Claudia Candela, compartía con ejecutivos de empresas americanas cifras que dan cuenta de actividad comercial de exportadores colombianos amparados bajo el TLC. Señalaba que más de 1600 empresas entraron al mercado americano por cuenta del TLC y que 350 productos hicieron lo propio durante los primeros veinte meses del tratado. Evidentemente el valor de las transacciones asociadas a tales cifras de exportadores y productos aun no influye significativamente dentro de la balanza comercial y por tanto, apenas estaríamos empezando a

Por: Camilo Angarita, Managing Director Colombia de UPS y Presidente del Comité de Comercio Exterior de AmCham Colombia

Cuellos de botella para un mejor desempeño del TLC con

Estados Unidos: del dicho al hecho hay aún mucho trecho

Especial TLC



vislumbrar lo que el tratado puede representar para el sector productivo y/o exportador colombiano.

Las cifras presentadas por la Viceministra no son desalentadoras ni mucho menos, y en realidad dan muestra de que el sector privado en el país apenas está abriendo los ojos, informándose debidamente y en general haciendo la tarea que le corresponde para tomar provecho de las ventajas que el tratado le ofrece. No tengo certeza de si esta lenta reacción tiene que ver con esa costumbre nuestra de dejar las cosas para última hora, si se trató de un escenario difícil relacionado con una situación económica regular en Estados Unidos o si ha faltado acompañamiento del gobierno para ayudar al empresario promedio colombiano a entender y capitalizar la oportunidad. O cualquier otra razón no mencionada; pero sí creo que en este aspecto la responsabilidad cae mucho más en hombros del empresariado colombiano y la diligencia que ha puesto en desarrollar oportunidades bajo la sombrilla del TLC, incluso cuando ha estado disponible informacion de cientos de productos que tienen claras oportunidades con los consumidores estadounidenses.

Por otro lado, específicamente en las importaciones desde Estados Unidos, quien pareciera no haber encontrado forma de hacer algunas de las tareas que le correspondían ha sido el Gobierno Nacional. La muy valerosa lucha contra la corrupción, siempre respaldada por esa inmensa mayoría de colombianos de bien, pareciera haber copado la agenda y dejado a los temas de facilitación de comercio relegados a un segundo, si no tercer plano. Todos estamos llamados a pararnos del lado de los valientes funcionarios que están decididos a

enfrentar las mafias asociadas al contrabando y al lavado de activos, pero a su vez a levantar la mano y alertar a esas mismas autoridades de los posibles incumplimientos de los compromisos consignados en el tratado.

Es así como recientemente y con ocasión de la publicación del último proyecto del estatuto aduanero, desde el Comité de Comercio Exterior de AmCham Colombia estamos buscando colaborar con la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN), la Embajada de Estados Unidos, el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo y asociaciones con intereses afines, a fin de asegurar que el capítulo de facilitación del comercio sea aplicado: es decir, que pase de la teoría a la práctica y se cierre definitivamente la brecha entre lo dicho y lo hecho. Por ejemplo, el desaduanamiento o nacionalización de mercancías en 48 horas está lejos siquiera de ser el promedio y eso lo vivimos todos los que estamos en la práctica del comercio exterior.

Lastimosamente, no podemos decir que la última versión publicada del borrador del que sería el nuevo estatuto aduanero sea una herramienta que cumpla el objetivo de adecuar la normatividad de aduanas en Colombia para cumplir a cabalidad los compromisos adquiridos mediante el TLC, ni tampoco que desde el aspecto reglamentario o procedimental , e incluso tecnológico, nuestras autoridades estén preparadas para dar cumplimiento a tales compromisos.

En conclusión, nuestros empresarios y nuestras autoridades tienen que acelerar el paso y hacer lo que les corresponde a fin de que el tratado traiga los resultados esperados.

Especial TLC

Las cifras presentadas por

la Viceministra no son desalentadoras ni mucho menos, y en realidad dan muestra de que

el sector privado en el país apenas está abriendo los ojos, informándose debidamente y en general haciendo

la tarea que le corresponde para tomar provecho de las ventajas

que el tratado le ofrece


El Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos (TLC) establece disposiciones para la compra y venta de servicios entre ambas naciones. Específicamente, el acuerdo dedica un capítulo a los servicios transfronterizos, en el que pretende promover y facilitar la exportación de servicios colombianos mediante el desplazamiento físico del prestador o del consumidor o sin necesidad del mismo. La importancia de incluir los servicios transfronterizos en la facilitación de comercio con Estados Unidos expresada en el TLC radica en que se benefician tanto empresas como personas naturales y en que el comercio de servicios no dependería del domicilio local del prestador en el mercado de destino.

De acuerdo con el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, los sectores con mayor potencial de aprovechamiento en materia de servicios en el marco del tratado son la consultoría, la telemedicina, los call centers, la traducción en línea, los servicios de procesamiento de datos, los servicios de informática y otros relacionados con software, las telecomunicaciones y los servicios de diseño, entre otros. El acuerdo también se refiere a los servicios financieros.

El sector de los servicios ha demostrado ser uno de los componentes de la oferta exportadora colombiana con más retos en términos de su desarrollo y despegue bajo el TLC. Adolfo Amador

Andrade, Presidente de la consultora empresarial Whimex, que se desempeña en el sector económico de exportación de servicios, explica que ésta “en términos globales, está relacionada con los flujos de comercio y la promoción productos de un país hacia otro. La exportación de servicios no está en las normas de comercio armonizadas a nivel mundial, de modo que no había un arancel en Colombia o Estados Unidos”.

De tal modo, es claro que los beneficios de la exportación de servicios no radican en la eliminación de aranceles sino en la creación de condiciones de negocio favorables para la consolidación de una oferta robusta de servicios colombianos en el mercado estadounidense. En el tema, Amador afirma que el aprovechamiento del marco de estabilidad de un tratado de libre comercio tiene que ver más con la capacidad de los proveedores de servicios nacionales de satisfacer una demanda específica y con factores macro en el contexto colombiano: “¿Puede Colombia competir en bienes y servicios? Siempre y cuando se cumplan otras condiciones como tecnología, salarios comparativamente más favorables para los empleadores y una tasa de cambio que no genere factores como pérdida de competitividad en la fuerza laboral”, señala.

De acuerdo con Juan David Barbosa, asociado de Posse Herrera Ruiz en temas de planeación

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La exportación de servicios y el TLC con Estados

UnidosPor: Comunicaciones AmCham Colombia

Consultoría Telemedicina

Call Centers

Traducción en línea

Procesamiento de datos

Servicios de informática

Software

Serviciosde diseño

Telecomunicaciones



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tributaria, impuestos y comercio exterior, y vicepresidente del Comité de Comercio Exterior de AmCham Colombia, la prestación de servicios americanos en Colombia ha sido mayor que la nacional en Estados Unidos porque ese país tiene una oferta fuerte y consolidada. En su concepto, aunque Colombia se ha quedado rezagada en aspectos claves incluidos en el TLC como el reconocimiento de títulos profesionales locales en el mercado estadounidense, se están haciendo esfuerzos a nivel de gobierno para poner el reflector sobre los proveedores colombianos.

“El trabajo con Proexport en promoción de servicios está bien encaminado; hay que vincular a las universidades y construir un plan de divulgación enfocado en la exportación de servicios para encontrar a todos los agentes que tengan las mejores oportunidades para exportar”, asegura Barbosa. En esta labor de mercadeo, las embajadas colombiana y estadounidense jugarían un papel clave, así como las misiones comerciales empresariales entre ambos países.

Competitividad del sector servicios en Colombia

Hoy en día existe un consenso alrededor de la problemática de la exportación de servicios en el marco del TLC: la competitividad de los proveedores debe ser desarrollada. En la perspectiva de Adolfo Amador, “mientras en bienes el problema central son los costos logísticos, en servicios el factor conocimiento es muy importante; legal, de mercadeo, de promoción, de investigación de áreas, de conocimiento científico. Si tengo esas ventajas puedo vender el conocimiento, de lo contrario no tengo cómo”.

Es de resaltar, sin embargo, que la competitividad de los prestadores de servicios colombianos no solo se relaciona con sus capacidades técnicas sino con factores del contexto nacional, como el régimen tributario. De acuerdo con Amador, “para que la exportación de servicios sea exenta del IVA, el comprador del servicio no puede beneficiarse del mismo en Colombia. Eso eso significa que yo no puedo prestarle un servicio a una empresa de Estados Unidos aquí para que aproveche el mercado colombiano sin que tenga que pagar el impuesto”. Esto puede ser visto como un limitante en la exportación de servicios, ya que en general pocos países establecen en sus normas el cobro de impuesto sobre el valor agregado en materia de prestación de servicios.

US$10.730.738

a nivel mundial

US$1.009.105a Estados Unidos

El sector de servicios también

evidencia que el Tratado de Libre

Comercio con Estados Unidos no

puede verse como una fórmula mágica

que dará resultados inmediatos o

por sí sola. La competitividad de los

prestadores de servicio es tanto o

más crítica que la de los productores

de bienes a la hora de sacar provecho

efectivo del acuerdo y de la apertura

del mercado estadounidense.

El TLC no hace negocios por sí mismo

Exportación de servicioscolombianos en 2013

Valores FOB


El TLC con Estados Unidos establece reglas de juego pares y permanentes para los agentes económicos colombianos y americanos, que contemplan la reducción de aranceles en las operaciones de exportación e importación como una forma de facilitación del comercio. No obstante, para las empresas nacionales la exportación efectiva de productos a Estados Unidos no tiene que ver solo con los aranceles, sino también con el cumplimiento de requerimientos planteados en miras de satisfacer al consumidor americano.

Para las Pymes colombianas, aspectos técnicos como el etiquetado y las certificaciones sanitarias y de calidad representan una barrera comercial distinta a una tarifa arancelaria. La existencia de estos obstáculos fueron el punto de partida de un programa de la Universidad Nacional Abierta y a Distancia (UNAD), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Fondo Multilateral de Inversiones (FOMID), enfocado en atender las necesidades específicas y demandas de dichas empresas para superar los requerimientos no arancelarios del TLC y poder aprovechar así el libre comercio con Estados Unidos.

Durante cinco años, el programa UNAD BID FOMIN guió a 190 Pymes en el país en materia de reglamentos técnicos, medidas sanitarias y fitosanitarias, embalaje, transporte, inocuidad e higiene de sus mercancías. Así mismo, cofinanció el mejoramiento de estas empresas y contribuyó a su llegada directa a clientes en Estados Unidos mediante ruedas de negocios o misiones comerciales exploratorias.

A través de la iniciativa, dichas compañías perfeccionaron sus productos y procesos de elaboración para convertir su potencial exportador en una realidad posicionándose como proveedoras para el consumidor estadounidense. Un ejemplo de ello es Trout Co, una exportadora de trucha arcoíris considerada por Proexport como una de las cinco empresas más exitosas que han exportado a Estados Unidos en el marco del TLC. Trout Co, que se vinculó al programa gracias a una presentación del programa realizada por AmCham Colombia en 2012, pasó de no exportar sus productos a Estados Unidos a venderlos allí por valor de 900 mil dólares en 2011.

Nuevas exportadoras colombianas

Los incentivos especializados de comercio exterior pueden hacer la diferencia a la hora de exportar

efectivamente a Estados Unidos

Especial TLC


Reglamentos técnicos

Medidassanitarias y fitosanitarias

Embalaje

Transporte

Inocuidad e higiene de mercancías

Por: Comunicaciones AmCham Colombia


La Inversión Extranjera Directa (IED) es un objetivo fundamental para las economías en desarrollo dado que fomenta procesos de transferencia de nuevas tecnologías y conocimientos y promueve la formación de capital humano, lo que incrementa la productividad de la economía local. Estos efectos positivos han incentivado el aumento de los flujos de IED a nivel mundial, principalmente en Latinoamérica.

En este escenario se refleja la tendencia creciente en Colombia de avanzar hacia la creación de incentivos públicos y p r i v a d o s p a r a atraer el ingreso de capital de compañías extranjeras a través de convenios, acuerdos comerciales y políticas c o m o A c u e r d o s I n t e r n a c i o n a l e s d e Inversión, ya sea en el marco de Tratados de Libre Comercio o de Acuerdos para la Promoción y Protección Recíproca de Inversiones (APPRI), que garantizan reciprocidad y protección además de ofrecer condiciones favorables para el acceso a nuevos mercados.

Así mismo, Colombia está gestionando otras vías para la facilitación del comercio como los Acuerdos de Doble Tributación (ADT), que ofrecen la posibilidad de aminorar o suprimir la

doble tributación entre naciones que desarrollan conjuntamente actividades comerciales.

De acuerdo al índice de competitividad 2013-2014 del Foro Económico Mundial (FEM) y a la clasificación global Doing Business 2014 del Banco Mundial, Colombia es un país atractivo para

canalizar inversión extranjera. El índice de competitividad resalta el subíndice

de factores que mejoran la eficiencia, en el cual se analiza

la eficacia del mercado de bienes, el desarrollo

del mercado financiero y el avance de las políticas implantadas p a r a m e j o r a r l a educación superior y capacitación; pilares en donde Colombia se encuentra bien posicionada a nivel

de Latinoamérica. Pese a que la calificación

general de dicho índice ubica al país en el puesto

6 9 e n t r e 1 4 8 n a c i o n e s analizadas, los indicadores de

innovación y sofisticación y el entorno macroeconómico avalan el buen momento por

el que atraviesa el país.

Así mismo, Doing Business 2014 asegura que la apertura de un negocio en Colombia es más ágil y menos costosa que en el resto de la región. En el país son nueve los procedimientos para registrar un nuevo negocio. Este trámite toma aproximadamente 15 días frente a los 36.1 días del promedio de

Por: Paola Andrea Calderón, Directora del Centro de Comercio e Inversión de AmCham Colombia

Colombia busca posicionarse como un destino atractivo para la inversión extranjera directa

Incentivos para atraer inversión extranjera a Colombia

Especial TLC

Colombia es parte de la Agencia Multilateral

de Garantía de Inversiones, que busca proteger el crecimiento

económico de los países en desarrollo, acabar con la pobreza y aumentar la

calidad de vida de las personas a través del impulso a la inversión extranjera en dichos

países. También pertenece al Centro Internacional de Arreglo de Diferencias

Relativas a Inversiones, que facilita la conciliación y el arbitraje de controversias en inversiones

internacionales


Latinoamérica y cuesta un 7.5% del valor de la propiedad en contraste con el 33.1% de la zona.

La seguridad para invertir en Colombia se ve reflejada en las estimaciones de las principales calificadoras de riesgo: Standard and Poor’s S&P, Moody’s y Fitch le han otorgado al país el escalafón de grado de inversión. En 2013, S&P le otorgó la calificación BBB; la más alta en la historia del país. De acuerdo con esta apreciación, Colombia ha logrado la moderación del costo de endeudamiento, refleja condiciones macroeconómicas favorables para los inversionistas, como un crecimiento económico estable con baja inflación y una capacidad para enfrentar crisis externas, y evidencia mejores condiciones de seguridad.

Otro elemento importante en el atractivo colombiano para la IED es el registro de propiedades, en el cual el inversionista extranjero puede analizar la facilidad para asegurar un derecho de propiedad. Dicho registro en Colombia consta de siete procedimientos que toman aproximadamente trece días, frente a los 65 días promedio en Latinoamérica. El costo también presenta una ventaja significativa en el proceso al ser en promedio el 2% del valor de la propiedad.

Por último, el Doing Business clasifica al país de sexto en cuanto a protección de los inversores, concediéndole calificaciones de ocho puntos en adelante en una escala de uno a diez para los índices de grado de transparencia en las transacciones, de responsabilidad de los directores por contratar en beneficio propio y de facilidad para juicios de accionistas por mala conducta.

En Colombia existen incentivos adicionales como las Zonas Francas, que se encuentran entre las más competitivas de Latinoamérica por su moderna infraestructura orientada a la innovación, calidad del servicio y aseguramiento de control. Éstas atraen la generación de negocios a través de la exención de tributos aduaneros y la posibilidad de integrarse al mercado nacional.

Gracias en gran parte a factores como estos, Colombia ha logrado mantener un ritmo sostenido de crecimiento económico con niveles récord de inversión extranjera e incrementos sustanciales en sus flujos de comercio con el resto del mundo. Para 2012 logró posicionarse en el lugar número 18 dentro de las 20 economías más receptoras de IED a nivel internacional. En el ranking para Latinoamérica se ubicó como cuarta con un promedio de 15 billones de dólares, precedida con un por Brasil, las Islas Vírgenes Británicas y Chile y seguida por México, Argentina y Perú.

En el 2013, el 46% del total de la inversión proveniente del exterior se destinó especialmente a la industria petrolera, minas y canteras dado que el principal atractivo que conserva el país y la región es su riqueza en petróleo, metales y minerales. El restante corresponde a manufacturas (16%), transportes y almacenamiento (10%), comercio, restaurantes y hoteles (10%), servicios financieros (10%) y otros (8%). Estados Unidos como principal socio comercial ha conservado una participación dominante en el total de la inversión que llega al país. Para el 2013, junto a Panamá, Suiza, Inglaterra, España y Bermudas, fue el mayor proveedor de flujos de inversión en Colombia.

- Biblioteca Virtual de tratados, Ministerio de Relaciones Exteriores.- Calificación Colombia, Standard and Poor’s. - Catálogo de series estadísticas publicadas en la página web del Banco de la Republica. - International Centre for Settlement of Investment Disputes, World Bank Group. - Multilateral Investment Guarantee Agency, World Bank Group.

Especial TLC

FUENTES

$ £¥ €


Por: AmCham Cartagena

Al cumplirse dos años desde que entró en vigor el TLC con Estados Unidos, Cartagena y Bolívar han jugado un papel fundamental en la dinámica comercial de este importante tratado. Tanto así que para el año 2013, Bolívar se consolidó como el departamento que más exporta en la región Caribe. Además, mostró un gran crecimiento al pasar del quinto lugar en 2012 al segundo en 2013 a nivel nacional con un aumento del 6,1% y una participación del 6,4% del total exportado por el país.

Las exportaciones del Bolívar fueron de 3.581 millones de dólares y las importaciones de 2.696 millones. Esto representa una balanza comercial favorable para el departamento, por valor de 885 millones de dólares.

Aunque el fuerte continúa siendo los productos derivados de la industria petroquímica, las exportaciones no tradicionales de Bolívar a Estados Unidos, aumentaron en un 105% en los primeros 18 meses de vigencia del tratado.

Gracias a la privilegiada ubicación geográfica de Cartagena, el puerto de la ciudad se consolida como el mejor del Caribe; galardón que le ha sido otorgado por seis años consecutivos por la Caribbean Shipping Association y el más importante de Colombia.

Estas cifras representan un buen balance de los dos años de entrada en vigencia del tratado. Sin embargo, se espera que cada día se abran nuevas oportunidades de negocio para la población del departamento que contribuyan con el desarrollo de la región Caribe. AmCham Cartagena, como parte de la estrategia de aprovechamiento de los tratados de libre comercio y con el interés compartido de fortalecer la competitividad de las empresas, ha trabajado con Proexport, la ANDI, BASC, la Cámara de Comercio de Cartagena y el programa Invest in Cartagena, entre otros gremios de la ciudad, quienes reconocen la importante labor de la asociación como gestora de oportunidades comerciales para el TLC.

Bolívar, el departamento más exportador de la

región Caribe

Seccionales AmCham


Seccionales AmCham

El departamento cuenta con varios productos particularmente atractivos para el consumidor americano. Es el caso de las frutas tropicales y procesadas, que durante 2013 alcanzaron exportaciones a Estados Unidos por valor de US $279.983 de dólares. La región presenta atractivas oportunidades de exportación en varias frutas, al ser su mayor productor a nivel nacional: cítricos (25.4% de la producción nacional), banano (34.4%), uva (86.8%) y papaya (33.8%). Así mismo, puede explorar su potencial exportador de lulo y piña, al ser la segunda mayor fuente de dichos alimentos en el país. Añadido a esto, el Valle del Cauca cuenta con un total de 884.168 hectáreas aptas para aprovechamiento del uso de suelo, de las cuales el 15% (132.284 hectáreas) tiene uso agrícola, lo que hace que supere el porcentaje de registro nacional, de acuerdo con el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo.

En el sector de confitería y galletería, el departamento es fuerte en la producción de azúcar, mieles y derivados e integra además a otras industrias como la de confitería. En 2013 se registraron exportaciones hacia Estados Unidos por US$295,8 millones y un crecimiento neto de US$43,6 millones (17,3%). Los principales productos exportados fueron bombones, caramelos, confites y pastillas sin cacao, otros artículos de confitería sin cacao, otros chocolates y demás preparaciones alimenticias con cacao.

Las exportaciones a Estados Unidos de confecciones del Valle durante 2012 correspondieron a US$ 37 millones: un 12,74% de las exportaciones colombianas al país. Algunos productos potenciales para posicionar en el mercado americano con los suéteres de lana, el algodón, las fibras artificiales y sintéticas, los jeans, los pantalones para mujer y el calzado y sus partes.

Por: María Alejandra Arévalo, Subdirectora de Investigaciones y Coordinadora del Trade Center de AmCham Suroccidente

Panorama comercial del Valle del Cauca:

dos años del TLC Colombia – Estados

Unidos


(Miles US FOB $)

Principales productos exportados por el Valle del Cauca a Estados Unidos enero – junio 2012-2013

Productos 2012 2013 Crecimiento %Cafés 7998 8439 5,5Suéteres 3203 5682 77,4Bolsos de mano 3385 4168 23,1Vestidos de baño 301 2758 817,8Ají y demás 406 2212 444,6

Fuente: DANE

En 2013, las exportaciones del Valle del Cauca alcanzaron los US$ 1.931 millones de dólares (valor FOB) entre los meses de enero y noviembre, de las cuales US$ 277.7 miles de dólares tuvieron como destino Estados Unidos, país que junto con Ecuador y Venezuela concentró el 47,4% del total de ventas externas del departamento, de acuerdo con cifras del DANE. Durante dicho periodo, el Valle reportó un repunte en la producción de frutas y café y una reactivación del sector azucarero.

Las importaciones del departamento alcanzaron los US$ 4.391 millones de dólares (valor CIF), de las cuales US $353.7 miles de dólares provinieron de Estados Unidos en el primer semestre de 2013.


Afiliados AmCham

Prietocarrizosa recibió el mayor galardón otorgado por la Fundación Probono, una organización que busca facilitar el acceso a la justicia a las personas y comunidades de escasos recursos económicos, garantizándoles la prestación de una asesoría jurídica de alta calidad. El compromiso de prietocarrizosa con las causas apoyadas por la fundación y su dedicación y calidad en la prestación de servicios legales fueron las razones para recibir el premio a la firma probono del año.

“Para nosotros es motivo de orgullo recibir este premio, porque ser un buen ciudadano hace parte de nuestra filosofía y de nuestra razón de ser. Esto sólo evidencia que todos nuestros abogados están comprometidos con esta filosofía y apoyar

las causas pro-bono hace parte de su sentido de trabajo. Seguiremos comprometidos con ayudar a las personas y comunidades de escasos recursos que necesiten asesoría legal, y nuestra meta en el 2014 es aumentar el número de horas que cada abogado dedica a estos casos”, afirma Claudia Barrero, socia de prietocarrizosa.

Los criterios para escoger a la firma pro-bono del año incluyen la aplicación de medidas concretas para promover el trabajo pro-bono, contar con una estructura dentro de la firma que permita llevar ese tipo de casos y dedicar la mayor cantidad de horas por al año a dicha labor. Las otras firmas nominadas al premio eran Brigard & Urrutia, Gómez Pinzón Zuleta, Lloreda Camacho & Co y PriasCadavid.

Chevron y el Colegio Baylor de Medicina del Hospital de Niños de Texas han confirmado un convenio valorado en 1.5 millones de dólares destinado al mejoramiento de las condiciones de salud en La Guajira, una de las zonas del país con mayores índices de mortalidad materna e infantil. Esta iniciativa es parte de una asociación público – privada entre Chevron, el gobierno de Colombia, el departamento de La Guajira, las secretarías de salud departamentales y municipales de Manaure y Riohacha y el Colegio Baylor de Medicina del Hospital de Niños de Texas.

“Este acuerdo permitirá proporcionar apoyo pediátrico y en salud materno infantil a comunidades vulnerables, al t iempo que contribuirá que el personal médico local fortalezca su experiencia profesional”, dijo Ali Moshiri, Presidente de Chevron para África y Latinoamérica,

quien también agregó que “valoramos la oportunidad de ayudar a mejorar la vida de los niños y sus familias en las áreas donde operamos, contribuyendo de esta forma a ofrecer un futuro mejor para las comunidades”.

El programa, denominado Salud y Autosuficiencia Indígenas en La Guajira – SAIL, está diseñado para complementar y fortalecer el sistema de salud existente en ese departamento y contribuir a la mitigación de sus altas tasas de mortalidad materno infantil. Profesionales médicos del Hospital de Niños de Texas trabajarán directamente en La Guajira en estrecha colaboración con profesionales locales en clínicas y hospitales de la región, abordando así las necesidades pediátricas de la zona a través de atención directa a los pacientes y el desarrollo de actividades de capacitación al personal médico local.

gana el premio a la firma pro-bono del año

Chevron y el Colegio Baylor de Medicina del Hospital de Niños de Texas se unen para

contribuir a mejorar las condiciones de salud en La Guajira

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Business Mail Mayo 2014 Especial TLC con EE.UU.

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