Boletin MG, marzo 2014

28
marzo2014 2 Editorial/ La familia 13 Desde México/ Ordenación diaconal en el Seminario Mayor 19 cfp/ La Dirección de Evangelización y la formación permanente Publicación de información y reflexión misionera. Año 17. Número 185. Japón • Corea • Kenia • Hong Kong • Perú • Angola • Guatemala • Brasil • Cuba • Mozambique

description

Boletín MG febrero 2014 El Boletín MG es una publicación mensual de información y reflexión misionera producida desde noviembre de 1998 por el Departamento de Comunicación de la Dirección de Promoción de Misioneros de Guadalupe, AR.

Transcript of Boletin MG, marzo 2014

marzo2014• 2 Editorial/ La familia• 13 Desde México/ Ordenación diaconal en el Seminario Mayor• 19 cfp/ La Dirección de Evangelización y la formación permanente

Publicación de información y reflexión misionera.Año 17. Número 185.

Japón • Corea • Kenia • Hong Kong • Perú • Angola • Guatemala • Brasil • Cuba • Mozambique

Año 17. Núm. 185.

Marzo de 2014

Índice

El Boletín mg es una publicación mensual de in-formación y reflexión misionera producida desde noviembre de 1998 por el Departamento deComunicación de la Dirección de Promociónde Misioneros de Guadalupe ar. Cantera 29,Col. Tlalpan, Del. Tlalpan, cp 14000, México, df.Tel. (01 55) 5573 2500 ext. 168. [email protected]

En portada / Padres mg y Misioneros Laicos Asociados reunidos después de la primera Celebración Eucarística del P. José Roberto Cruz P., mg, en la capilla de la casa de los Mi-sioneros de Guadalupe en Jecua, Mozambique.

1 AgendaMarzo

2 EditorialLa familiaP. José Alejandro Molina L., mg

4 Inspiración vocacionalNo me dejesÓscar Jesús Cornelio O., alumno del Cisemi

7 Desde las MisionesNoticias desde Corea. Febrero P. Corazón López S., mgNoticias desde Kenia. Eneroy febreroP. Ricardo Gómez F., mg

11 Desde MéxicoEl Club de Niños mg estuvopresente en la xvi coniamÁrea de Producción EditorialOrdenación diaconal en elSeminario MayorÁrea de Producción Editorial

15 Misioneros Laicos AsociadosEn el Premla atendemos el llamado al servicioAlumnas del curso Preparación paraMisioneros Laicos Asociados

17 Centro de Orientación VocacionalLa parábola vocacionalP. Santiago Rodríguez S., mg

19 Comisión de Formación PermanenteLa Dirección de Evangelización y la formaciónpermanenteP. Juan José Á. Luna E., mg

22 Club de Niños mgEl reflejo de servir al SeñorDiana Elisa Reyes H., auxiliar administrativa del Club de Niños mg

24 Museo mgCaballitos de TotoraFernando Peral S., curador del Museo mg

Busca edicionesanteriores del

Boletín mg

Consejo General

P. Juan José Á. Luna E., mgSuperior General

P. Raúl Ibarra H., mgVicario General

P. Fernando Montes L., mgSegundo Consejero

P. Raúl Nava T., mgTercer Consejero

P. Salvador Rojas V., mg Cuarto Consejero

Boletín mg

Coordinación generalLic. Sergio Augusto Martínez S.

Revisión y corrección de textosLic. Sandra Minerva Delgadillo R.

Diseño editorialLic. María Elizabeth Barajas P.

Enlace administrativoAntonia Hidalgo L.

ImpresiónMultiprint

Agenda del mesEventos

Instituto de Santa María de Guadalupe para las Misiones Extranjeras

Los Misioneros de Guadalupe somos una sociedad de vida apostólica, formada por sacerdotes seculares mexicanos que consagramos nuestra vida a la Misión ad gentes.

Veneramos como Patrona a Santa María de Guadalupe, Patrona de México y modelo en nuestro trabajo de evangelización.

Nuestra tarea es llevar y predicar el Evangelio ad gentes, es decir, a los pueblos no cristianos, para extender el Reino de Dios e implantar la Iglesia donde aún no ha sido establecida, poniendo especial empeño en la promo-ción y formación de agentes de evangelización y del clero local.

Miércoles de Cenizaxxii aniversario del fallecimiento del P. Hesiquio Rentería M., mgxvi aniversario del fallecimiento del P. José Álvarez H., mgSan José, esposo de la Santísima Virgen Maríaccviii aniversario del natalicio de Benito Juárezxx aniversario del fallecimiento del P. José Luis López V., mg

Miércoles 5Jueves 6Jueves 6

Miércoles 19Viernes 21

Domingo 23

2

EditorialLa familia

P. José Alejandro Molina Lara, mg

Le pregunté a doña Clara, nuestra coci-nera: “Oiga, ¿qué es la familia?”. Ella me respondió: “ ‘Mmmm’, no sé”. Entonces le pregunté dónde estaba su familia. Ella me respondió rápido que estaba en casa. Por último le cuestioné: “¿Qué personas están en casa?”. Ella contestó con la siguiente enumeración: “Mi papá, mis hermanos y

hermanas, mis hijos”. En Mozambique la unión y la fuerza están en la familia y en la comunidad.

Hay dos dichos que nos sirven para ejem-plificar lo anterior. Uno dice así: “Manga nyumba pawekha towera kudya wekha, mulando ungadza unafuna nkhobswe”,

Mozambique

marzo2014

3

cuya traducción es ‘Construye la casa fuera para comer solo, pero cuando surja un problema vas a querer un defensor’; el otro dice: “M’mudzi ndi n’thanga mwa ng’ombe”, y se traduce como ‘Dentro de la aldea es como dentro del corral de las vacas’.

La comunidad se entiende como el gru-po de familias que viven cerca; la familia, como aquellas personas unidas por lazos de sangre o tradición, que pueden vivir o no en la misma comunidad.

Lo anterior significa que en una comu-nidad hay varias familias, y en cada una de las segundas existe un jefe y muchas otras personas, hombres y mujeres, con una responsabilidad específica. Estosúltimos pueden o no estar cerca —por lo regular lo están— y están listos paraunirse al jefe de familia en cualquier situa-ción o realizar lo que él pida.

La poligamia es culturalmente permitida y, muchas veces, motivada; sin embargo,eso no va en detrimento de la familia tradicional en África. Podríamos ahora hablar del respeto a las mujeres y de lo que nos pide Dios, pero eso es otro tema, que nos llevaría mucho tiempo y páginas.

Lo que quiero compartir es el hecho de que en África la familia se constituye por un jefe —generalmente un hombre—, al que se unen personas mediante lazos sanguíneos (papá, hermanos, tíos pater-nos, hijos, sobrinos) o tradicionales (la pareja). Ser el primogénito conlleva una mejor posición dentro de la familia, pero también un compromiso más grande: ser el tío paterno mayor implica tanto más cercanía como respeto de los sobrinos; ser el primer hijo —por lo general de la primera mujer—, más responsabilidad.

La familia es el núcleo de la comunidad africana. El lazo familiar es tan fuerte

que todos tienen que presentarse cuan-do alguien muere. Si no pueden en ese momento, lo harán después. No pueden dejar de presentar su respeto ante aquel que murió.

Dos características de las que nos pode-mos contagiar de la familia africana, y que además debemos alabar, es la unidad y el apoyo. Hay otras que quizá no nos agra-den, pero si recordamos que cuando es-tamos dentro del corral (la familia) todo es más fácil y mejor, caminaremos con alegría a pesar de los problemas.z

4

Inspiración vocacional

Nací el 18 de enero de 1994 en el pueblo San Carlos, en Macuspana, Tab. Ese día mi madre había acompañado a una tía al hospital, y decidió pasar a revisión. Ahí le dieron la noticia de que estaba a punto de nacer. Mis padres son Rafael Cornelio Cas-tillo y Lorenza del Carmen Ortiz Montero; él es obrero y ella ayudaba en la crianza de puercos y en la venta de animales.

Desde chico aprendí a cuidar las pocas va-cas que teníamos en el rancho. Junto con mi madre y Susana, mi hermana mayor, me levantaba bien temprano a ordeñar-las. Convivíamos muy poco con mi padre, pues trabajaba hasta muy tarde y sólo podía estar con nosotros los domingos; en cambio, mi madre nos daba todo y nos apoyaba en las dificultades. Así crecimos

No me dejes

Óscar Jesús Cornelio Ortiz, alumno del Cisemi

marzo2014

5

Susana, Tila y yo; siempre nos apoyába-mos y nuestra fe se cimentaba con fuerza.

Cuando tenía cuatro años bebí completo un vaso de cloro que confundí con agua. Ese día un primo había dejado en la mesa el cloro que había llevado a mi mamá. Yo tenía sed, y me acerqué a mi madre para pedirle agua, pero como estaba ocupada me mandó con mi hermana. Vi el vaso so-bre la mesa y me lo tomé todo. Un minuto después estaba en el suelo; lo último que escuché fue a mi mamá gritando.

Me llevaron a un lugar llamado El Bayo, que es por donde pasan los carros. Ahí mi madre se encontró con el Padre que ese día iba a nuestra comunidad a celebrar Misa. El sacerdote me bendijo y le dijo a mi mamá que me entregara a Dios. En ese instante mi mamá le dijo a Dios que me daba a su servicio, pero que no me dejara morir. En el hospital me hicieron un lava-do intestinal.

De esos angustiosos momentos recuerdo que escuché orar a mi madre y que vi a un hombre joven en cuyo pecho nacía un co-razón rodeado de luz. Me recuperé, pero mi estómago quedó muy dañado. Sobre-vivir sería difícil: pasé un año comiendo exclusivamente manzanas rojas con cás-cara, para que se regenerara mi estóma-go, y su jugo.

Cuando estudiaba tercero de primaria mis papás decidieron irse del rancho, pero como ya no me aceptaron en otra escuela me quedé a vivir con mis abuelos, Eneida y Manuel, hasta que acabó el ciclo escolar. Me enamoré de ellos, pero tuve que irme con mis padres. Nuestra nueva casa era un lugar pequeño, y no teníamos camas; dormíamos en colchonetas que poníamos en el suelo y ahí mismo comíamos.

En ese tiempo sentí un deseo enorme por servir a la iglesia. Fui monaguillo por seis años. Todavía recuerdo la primera Misa

6

en la que serví: estaba tan nervioso que el Padre me regañó porque no podía leer con mi temblorina. Luego, a los 12 años, Inés, una amiga, me vendió una ficha para el retiro de Pascua para adolescentes, y casi no entro por mi edad. La experiencia fue muy fuerte: Dios me mostró un nuevo rostro en los que sufren y me enamoré de la forma en que se predicaba con testi-monio de vida. Desde ese momento me volví parte del equipo de pascua de ado-lescentes.

Mi familia y yo nos mudábamos constante-mente. Vivimos muy humildemente, pues hubo días en los que no tuvimos qué co-mer. Mi padre se ausentaba con frecuencia por su trabajo, y a mí me hacía mucha fal-ta. Me sentía solo, pero acompañado pormi ángel de la guarda y de la oración que mimadre me había enseñado a rezar.

Estaba a punto de terminar la secundaria, y me nacían ganas de hacer algo más por la humanidad. Era el momento para de-cidir qué seguía. Se me ocurrió ingresar al Seminario Menor Diocesano de Ta-basco. Le pedí orientación a mi párroco, el cura Marcos, quien me aconsejó que lo reflexionara. Decidí entonces estudiar el bachillerato y, si aún lo deseaba, entrar luego al seminario. Así fue como cursé la carrera de Técnico en Enfermería General en el conalep.

Por esa época acepté la coordinación de la pascua de adolescentes —la escuela y laIglesia llenaban mi vida— y papá se había ganado una plaza en el Instituto Tecno-lógico Superior de Macuspana, lo que le permitía pasar más tiempo con nosotros. Por entonces inicié un proceso vocacional en el seminario diocesano, a donde asistía cada mes. Para poder concluir mis estu-dios en el conalep debí hacer un año de servicio social, y eso me alejó un tiempo de la iglesia, pero cuando Dios nos llama también nos sigue.

Me invitaron nuevamente a los acompa-ñamientos vocacionales. Así fue como asistí al preseminario de adviento, don-de conocí al Padre Carlos Lomelí Franco, quien influyó en el crecimiento de mi vo-cación. Después de eso les comuniqué a mis padres mi decisión de ir al seminario. Fue cuando mi madre me contó la historia de cuando tomé cloro, y al final me dijo: “Yo no puedo impedir lo que Dios estápidiendo”. Desde ese día mi vida fue transformándose.

Luego, un día, recibí un mensaje de Iván, un amigo del preseminario, quien me decía que había conocido el Seminario de Misioneros de Guadalupe. El nombre llamó mi atención, así que empecé a in-vestigar, pues aún recordaba la promesa que había hecho a María de Guadalupe cuando estaba en la secundaria y sentí la chispa vocacional: “María, alimenta mi vocación. Te prometo hacer una Misa los primeros días de mi ordenación en tu ca-sita en el Tepeyac”. Cuando Iván me in-vitó con los Misioneros de Guadalupe me llené de alegría, pues era el camino que quería seguir. Así fue que asistí al cov, donde el llamado rápidamente absorbió mi vida.

Actualmente soy un feliz alumno del Cur-so Introductorio al Seminario de Misiones (Cisemi), donde 23 hermanos comparti-mos la misma aventura.z

7

Desde las MisionesNoticias desde Corea

Febrero

P. Corazón López Sánchez, mg

Corea

Mandamos un saludo cordial a todos us-tedes, hermanos de comunidad. Estas fueron las actividades de febrero.

Domingo 2. En la Parroquia Internacional de Seúl se celebró el día de la Candelaria con el levantamiento del Niño Jesús. ElP. Juan Francisco Torres I., mg, y fieles de esa iglesia tuvieron una linda conviven-cia y un intercambio de regalos después de Misa.

Viernes 7 y sábado 8. En la casa de retiro de los dominicos, el P. Juan Francisco To-rres I., mg, junto con sacerdotes jesuitas yprofesores tuvieron una consulta-evalua-ción sobre los planes pastorales de los próximos años.

Domingo 9. Los Padres mg Ignacio de la Garza Evia U. y Juan Francisco Torres I. recibieron en la casa de Hapjeong-dong a un grupo de ocho misioneros coreanos,

marzo2014

8

y el campamento Han Maum tuvieron un retiro espiritual con los líderes de los gru-pos de la pastoral universitaria.

Martes 18. En la Universidad de Sogang hubo varias Celebraciones Eucarísticas de graduación.

Jueves 20. El P. Juan Francisco TorresI., mg, y sacerdotes jesuitas, por primera vez en cincuenta años de existencia de la Universidad Sogang, oficiaron una Misa en la celebración de apertura e ingreso de las actividades académicas. A esa Eucaris-tía asistieron cerca de dos mil personas, de las cuales aproximadamente 10% son católicas. Fue una ceremonia y experien-cia maravillosa.

Jueves 20. El P. Juan Francisco TorresI., mg, tuvo un encuentro con el grupo de la Legión de María de la Universidad So-gang en la casa de Hapjeong-dong. Los asistentes, en su mayoría son empleados de esa casa de estudios, recibieron una plática, rezaron el Rosario misionero y participaron en una Misa. Fue un tiempo muy bonito de oración y para compartir entre todos.

Domingo 23. En la Universidad Sogang, el P. Juan Francisco Torres I., mg, presidió la Misa de graduación. A la Eucaristía asis-tieron todos los católicos que egresaron en 2014.z

quienes fueron enviados a diferentes par-tes de Latinoamérica y África. Se tuvo una reflexión de la vida misionera y se rezó el Rosario misionero.

Martes 11. El P. Juan Francisco TorresI., mg, y el equipo de pastoral universitaria se reunieron para realizar la planeación de ese grupo de trabajo en la Universidad Sogang.

Viernes 14. En la Parroquia de Chayang Dong se tuvo la Misa de graduación de 25 niños que terminaron el kínder.

Del viernes 14 al domingo 16. En la Dióce-sis de Huiyongbu, el P. Juan Francisco To-rres I., mg, junto con sacerdotes jesuitas,el equipo de pastoral de la casa de ejercicios

9

Desde las MisionesNoticias desde Kenia

Enero y febrero

P. Ricardo Gómez Fregoso, mg

Enero

Viernes 3. El P. Filiberto Serrano C., mg, se incorporó a Kainuk, en Turkana. Con un equipo de tres sacerdotes se pretende atender parte del territorio de la parro-quia vecina que se encuentra al norte y apoyar en la formación de catequistas en el Centro Pastoral de Katilu.

Domingo 5. El P. Juan José Cortes C., mg, regresa de sus vacaciones en la patria y seincorpora de inmediato a su trabajo evangelizador en la Parroquia de Nues-tra Señora de Guadalupe, en Nairobi. El P. Alejandro González C., mg, regresó de sus vacaciones en la patria y se fue a Tanzania a tomar un curso de kiswahili.

Sábado 11. El P. Francisco Gerardo Her-nández O., mg, Rector del Seminario de Misiones visitó el Centro de Formación de África en Nairobi. Con esa reunión se concluyó la estancia del P. Francisco a las Misiones de Kenia y Mozambique.

Jueves 16 y viernes17. Se reunieron los participantes de todas las estaciones mi-sioneras y los consejos de la iglesia para intentar establecer las bases del plan pas-toral de la Parroquia de Kainuk para los próximos tres o cinco años. Lo facilita el P. Joseph Okpala, Coordinador Pastoral de la Diócesis.

Lunes 20. La doctora Betty de la Cruz terminó su experiencia misionera en el

Kenia

10

Hospital de Lenkisem, donde estuvo por tres meses como parte de un intercam-bio. La doctora Betty también ayudó los fines de semana en la visitación a las co-munidades y en la preparación para los Bautismos de Navidad. ¡Gracias por tu alegría y testimonio misionero!

Martes 21 y miércoles 22. En Turkana, tu-vimos el tercer taller sobre cómo mane-jar el conflicto social en el contexto de los enfrentamientos entre las tribus turkana y pokot. Participaron en este seminario representantes de cinco parroquias: dos del área turkana y tres del área pokot. Esta actividad fue coordinada por elCentro para la resolución de conflictos Shalom. También asistieron a este taller los Padres mg Javier González M. y Filiber-to Serrano C., de la Parroquia de Kainuk.

Febrero

Sábado 1. En la zona de Kalemorok, principal estación misionera de Kainuk (que pertenecía a la parroquia de Ka-tilu), se inició la atención pastoral. Los padres se hospedan el fin de semana en una pequeña casa de ese pueblo y visi-tan las comunidades cercanas a la zona.

Martes 4. El P. Ricardo Gómez F., mg, asistió a la Reunión Nacional de Justicia y Paz como miembro del Comité Ejecutivo.

Miércoles 5 y jueves 6. Cada año la Con-ferencia Episcopal de Kenia organiza una campaña de Cuaresma con fuerte énfasis social. El tema de este año fue “¿Kenia,

cómo podemos ser uno?”. En cada una de las diócesis hubo un taller, el cual ayudó a los sacerdotes y laicos de cada comu-nidad parroquial a que sacaran adelante compromisos significativos relacionados con la reflexión de este año.

Sábado 8. La Parroquia de Nuestra Seño-ra de Guadalupe, en Nairobi, celebró con 24 bautizos y un matrimonio la fiesta de la Capellanía de Santa Josephine Bakhita, que se encuentra en el barrio de Kibera.

Del martes 11 al viernes 14. Esta semana la dedicamos a nuestra reunión comuni-taria para evaluar las actividades de 2013 y planear las de 2014. Este año es especial por la preparación del x Capítulo General y por el l aniversario de la Misión de Ke-nia, así como por la reunión de la Asam-blea de África en Mozambique.

Domingo 16. La Parroquia de Nuestra Se-ñora de Guadalupe celebró la fiesta de la Capellanía de Nuestra Señora de Lourdes, la cual está en proceso para convertirse en parroquia, a la que pertenecerá buena parte del barrio de Kibera.

Viernes 20 y sábado 21. Luego de dos ta-lleres organizados en Kainuk por el CentroShalom para nuestra comunidad parro-quial, estos días tuvimos el último del programa. La idea de estos talleres fue entender el enfrentamiento constante de la comunidad pokot, grupo étnico vecino a los turkana, para llevarlo hacia derrote-ros de paz.z

11

Desde MéxicoEl Club de Niños mg estuvopresente en la xvi coniam

Área de Producción Editorial

México

En el Parque Alameda de la ciudad de To-luca, Estado de México, se llevó a cabo el xvi Congreso Nacional de la Infancia y Adolescencia Misionera (coniam) del 30 de enero al 2 de febrero de 2014. Este año el objetivo fue “Fascinar a los niños y ado-lescentes de México en el conocimiento y seguimiento de Jesucristo para que se-ducidos por Él se conviertan en discípulos misioneros ante un mundo secularizado y pluricultural”1.

Por ello, con el objetivo de representar dignamente al Instituto de Santa María deGuadalupe para las Misiones Extranjeras, el equipo de trabajo del Club de Niños mg se trasladó a esa hermosa ciudad para compartir con más de 35 000 personas que asistieron a este evento qué es el ca-risma y la labor ad gentes, así como para anunciarles y contagiarles el espíritu de Jesucristo, quien los invita a ir más alláde sí mismos.

1 Obras Misionales Pontificio Episcopales de México, A.R., Libro de trabajo para el xvi Congreso Nacional de la Infancia y Adoles-cencia Misionera, México, 2013, pág. 16.

marzo2014

12

El día de la inauguración de este evento, el jueves 30 de enero, asistieron Mons. Francisco Javier Chavolla Ramos, Obispo de Toluca; Mons. Óscar Roberto Domín-guez Couttolenc, mg, Obispo de Ecate-pec; Mons. Juan Odilón Martínez García, Obispo de Atlacomulco; Mons. Gilberto Valbuena Sánchez, Obispo Emérito de Co-lima; así como el presbítero Daniel MillánGómez, Director Diocesano de Misionesde Toluca, y el licenciado Raymundo Edgar Martínez Carbajal, Secretario de Educación del Estado de México. También estuvieron presentes los presidentes municipales de Almoloya de Juárez, Tenango del Valle, Zi-nacantepec, Ocoyoacac, Almoloya del Río, Rayón y Calimaya.

Durante su intervención, Mons. Chavolla dijo que la Diócesis de Toluca estaba muy ansiosa por abrir sus puertas para com-partir con todos los asistentes el mejor de los regalos: la fe, de la cual, añadió, los niños y adolescentes de México son el fu-turo. También dijo que el xvi coniam es la ilusión que permite compartir la fe en Cristo con los más vulnerables. Después dio la bienvenida a los presentes y reiteró que el mejor regalo para las familias de México es la fe. A continuación dio por inaugurado el evento.

Ese mismo día el Cardenal Norberto Rivera Carrera, Arzobispo de México, presidió la Celebración Eucarística inaugural. En su homilía el Cardenal Rivera citó al Vicario de Cristo: “Los niños y los adolescentes evan-gelizan a otros niños y adolescentes. En efecto, la obra de la infancia misionera constituye, lo dice el Papa Francisco, ‘una verdadera red de solidaridad humana y espiritual entre los niños de los antiguos y nuevos continentes’ ”.

Al siguiente día, viernes 31 de enero, el equipo de trabajo del Club de Niños mg, rodeados de la naturaleza del lugar, co-menzó a brindar atención e información sobre el carisma del Instituto y los bene-

ficios de formar parte del club. También invitó a los pequeños y a los adolescentes a que hicieran conciencia sobre el com-promiso misionero que adquirieron cuan-do fueron bautizados y a que colaboraran con la Misión ad gentes. Además ofrecie-ron algunos suvenires, entre ellos playe-ras, gorras, rosarios misioneros y videos institucionales.

El viernes 31 se dieron pláticas sobre los siguientes cinco temas: “El fascinante encuentro con Jesucristo”, “Seguir a Je-sucristo como discípulos misioneros”, “San José, papá misionero”, “La Misión en un mundo pluricultural y secularizado” y “Nuestra Señora de Guadalupe, estrella de la evangelización”. Este día también hubo animaciones en distintas horas; además, en las diferentes parroquias de la Diócesis de Toluca se celebraron Misas especiales con motivo del xvi coniam.

El sábado 1 de febrero se dieron tres plá-ticas más, “La iam y la Misión ad gentes”, “Todos somos misioneros” y “La pastoral misionera en nuestra diócesis y parro-quias”. Igual que el viernes, también hubo animaciones a lo largo del día; además de algunos testimonios misioneros, un concierto didáctico y el rezo del Rosariomisionero. Para finalizar las actividades de este día, Mons. Christophe Pierre, Nuncio Apostólico en México, presidió una Cele-bración Eucarística.

Al día siguiente los niños y adolescentes junto con sus papás participaron en la marcha misionera. Para dar por concluido el xvi coniam, Mons. Carlos Aguiar Retes, Arzobispo de Tlalnepantla y Presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano, celebró una Eucaristía.

El Club de Niños mg agradece la opor-tunidad de un espacio en el xvi coniam, donde pudo compartir el espíritu de Mi-sioneros de Guadalupe con los niños y adolescentes de México.z

13

Acompañado por familiares, amigos y la comunidad de Misioneros de Guadalupe, el seminarista José María Luna Juárez reci-bió el Sacramento del Orden, en el grado de diácono, de manos de Mons. Raúl Gó-mez González, Obispo de Tenancingo, el sábado 1 de febrero en una Celebración Eucarística que se llevó a cabo en la Capi-lla central del Seminario de Misiones en la ciudad de México.

La Eucaristía fue presidida por Mons. Raúl y concelebrada por el P. Juan José Á.Luna E., mg, Superior General del Instituto, quienes fueron auxiliados por el diácono

Juan Arcos Soto. En esta ocasión especial los seminaristas Rafael González Guzmán y Ezequiel Reyes Alejandro fueron moni-tor y lector de la primera lectura respec-tivamente.

El diácono Juan leyó el Evangelio (Mt 20, 25-28), el cual nos recordó que aquel que quiera ser grande debe servirnos: “así como el Hijo del Hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y dar la vida por la redención de todos”. A continuación José María fue presentado por el P. Francisco Gerardo Hernández O.,

Desde MéxicoOrdenación diaconal en el Seminario Mayor

Área de Producción Editorial

marzo2014

14

Rector del Seminario, como candidato al diaconado ante Mons. Raúl, quien pregun-tó si el seminarista era digno de recibir ese grado, a lo que el Padre Francisco respon-dió de forma afirmativa. Después del rito de elección del candida-to, durante la homilía, Mons. Raúl expresó que se sentía alegre por presidir esa Cele-bración Eucarística tan significativa para la Iglesia y para el Instituto; además aña-dió que para él es motivo de gozo ser ins-trumento del don precioso que José María estaba por recibir, pues es un obsequiode Dios que no se repite a diario. También le señaló a José María que su proceder debe seguir el ejemplo de Jesús.

Posteriormente José María realizó su pro-mesa como elegido, en la que se com-prometió a vivir el celibato, se consagró al servicio de la Iglesia y aceptó vivir el misterio de la fe. Luego se acostó boca abajo para que el coro condujera la ora-ción litánica, con la cual la familia, amigos y comunidad mg imploramos insistente-mente por la intercesión de los santos para que Dios derramara su gracia sobre el escogido.

Después, José María, ayudado por elP. José Antonio Morales C., mg, portó la estola cruzada al pecho y se vistió por primera vez con la dalmática, propia de las celebraciones solemnes. A continua-ción Mons. Raúl impuso sus manos sobre José María para consagrarlo al Orden diaconal y al servicio del altar; además le

entregó el libro de los Evangelios y le dio un saludo de paz.

Luego de recibir el Sacramento del Or-den, en el grado de diácono, José María asistió en el altar durante la consagración del pan y del vino, igual que en el rito de la comunión.

Para finalizar la Celebración Eucarística, Mons. Raúl agradeció a los Padres Juan José y Raúl Ibarra H., mg, Vicario General del Instituto, así como a la comunidad de Misioneros de Guadalupe por la invita-ción. Además señaló que se debe conti-nuar sembrando la semilla vocacional de vida consagrada, pues, recordó, que es una necesidad de la Iglesia.

Por su parte, el Superior General del Ins-tituto dio las gracias a Mons. Raúl por su cercanía a la Institución; también felicitó a la familia de José María y a los formadores, de quienes dijo que su esfuerzo dio frutos.

Los Misioneros de Guadalupe felicitamos al diácono José María Luna Juárez por ha-ber avanzado en su preparación espiritual. ¡Felicidades! Que Dios llene tu camino de bendiciones, José María.

SemblanzaJosé María Luna Juárez nació en Córdoba, Veracruz, el 24 de mayo de 1977. Ingresó al Seminario de Misiones el 12 de julio de 2008. Recibió los ministerios de Lectora-do y Acolitado el 23 de enero de 2010 en Tilapa, Estado de México.z

15

Misioneros Laicos AsociadosEn el Premla atendemos el llamado al servicio

Alumnas del curso Preparaciónpara Misioneros Laicos Asociados

La Misión es un servicio que debiéramos realizar todos los bautizados. Quienes ahora formamos parte del curso Prepa-ración para Misioneros Laicos Asociados (Premla) hemos atendido a ese llamado.

Somos cuatro personas las que pertene-cemos a la generación 2014, y durante esta etapa estamos sirviendo al Señor a través de las actividades cotidianas y las comisiones en las que se sustenta nuestra formación.

Mi nombre es Laura Isela Granados Gar-duño, y soy originaria de San Juan del Río, Qro. Ahora me encuentro en este proceso, en el que todos los días convi-ven distintas emociones, las cuales no se desprenden de la compañía de Dios, quien siempre ilumina este camino.

Ninguna de nosotras somos las mismas: hay una antes y otra después del Premla. Para nosotras vivir al servicio del Señor en todo lo que hacemos es parte de nuestro sentir ahora; es el compromiso que con amor y alegría asumimos en cada activi-dad, como a continuación comparten mis hermanas.

En comunidadMi nombre es Areli Velázquez Flores, y soy originaria de Toluca, Edo. de Méx. Vivir esta experiencia de formación junto con mis tres compañeras y caminar juntas en busca de un sólo objetivo, que es fortale-cer nuestra vocación misionera ad gentes, implica una apertura en todos los sentidos.

Convivir día a día en fraternidad, adaptarse a nuevas formas de pensar y ser, modificar

marzo2014

16

reflexiones, donarse con caridad al otro, poner al servicio nuestras capacidades y dones para enriquecer la comunidad; todo eso son palabras sencillas de enu-merar, pues llevarlas a la práctica es una actividad que requiere amor, fe y servicio. Amor como el que se vivía en las prime-ras comunidades, fe como la que sostenía a cada uno de los discípulos y servicio como aquella actividad en la que vemos en el otro al prójimo. No es fácil vivir en comunidad, pero todo es posible cuando se ve y se vive desde la mirada de Jesús.

En estos meses de estancia comunitaria en el Premla he podido compartir mi expe-riencia de fe entre mis hermanas y, a su vez, he podido enriquecer mi persona a través de cada una de ellas. Servirles a mis com-pañeras desde cada una de las comisiones —estudio, mantenimiento, cocina o espi-ritualidad— es mi forma de dedicarme al Señor. En este momento de mi formacióncumplo cada actividad con responsabilidad y siempre intento dar lo mejor.

En el estudioMi nombre es Margarita Yazmín Huerta Herrejón. Sé que cuando el Señor hace un llamado y obtiene una respuesta positiva, nos preguntamos qué fue lo que vio en nosotros y por qué nos escogió. Comen-zamos a ver mucho más claro nuestros defectos. Pero el Señor no sólo atrae ha-cia Él y ya, sino que prepara a su escogido en todos los sentidos: social, comunitaria, física e intelectualmente.

En esta etapa, como bien lo dice el nom-bre, nos preparamos y adquirimos herra-mientas para la Misión. No es fácil: nos estresamos por tener que cumplir con va-rias actividades; en ocasiones, olvidamos hacer las tareas, o nos falta tiempo para adentrarnos en el tema. Entonces desea-mos un momento para olvidarnos por completo del estudio, pero el Señor, preo-cupado por cada una de nosotros, nos

enamora día a día, con lo que despierta nuestra inquietud de seguirlo y, a la vez, nos abre panoramas y nos confronta.

Cada uno de los cursos, temas y talleres han dejado una marca, un anhelo de per-manecer con Dios y hacer algo que nos permita encontrarnos. Para ello debemos cumplir con las tareas no por responsa-bilidad, sino por conocimiento, para des-pués compartir lo que aprendimos en el lugar al que el Señor nos envíe. En el apostoladoMi experiencia ha sido extraordinaria. Soy Angelina Nava López, y soy originaria de Jalisco. Ahora me encuentro haciendo mi apostolado en la comunidad El Olivo, en Ixmiquilpan, Hgo., que pertenece a la Pa-rroquia de San Nicolás de Tolentino, de la Diócesis de Tula, donde hacemos nuestro apostolado en la capilla dedicada a Jesús, el Buen Pastor.

Han sido muchos retos los que hemos teni-do que vencer en tan poco tiempo, y nada me ha fortalecido más que el amor a Jesús. Ha sido una grata experiencia de seis me-ses. Aún tengo la oportunidad de convivir con la gente de El Olivo, quienes nos reci-ben con alegría, pues nos ven como una esperanza. La misma esperanza que ellos me dan para continuar con confianza mi labor en la comunidad, pues cada puerta que me abrieron, la de sus hogares y de sus vidas, cada problema y cada alegría me hi-cieron ver la presencia de Dios.

Jesús, el Buen Pastor siempre acompaña a la comunidad en sus altibajos: verlos reunidos en cada celebración de la Misa o platicando con ellos me permite darme cuenta de que la gente sigue unida a Cris-to como hermanos. Estas personas me han hecho ver que viven de la esperanza en Dios, de su compasión y de la fe en Él, la cual me han compartido.z

17

Centro de Orientación VocacionalLa parábola vocacional

P. Santiago Rodríguez Serrano, mg

Es interesante conocer la pedagogía que utilizó Jesús para anunciar el Reino de los Cielos a sus seguidores. En los Evange-lios podemos descubrir entre los oyen-tes que seguían la predicación de Jesús a gente versada en las leyes del Antiguo Testamento, como sacerdotes, fariseoso saduceos, y también a publicanos, sama-ritanos, enfermos y endemoniados, quie-nes eran discriminados. La predicación de Jesús era para todos, y por eso empleó las parábolas, puesto que Él quería que su men-saje fuera comprendido por cualquiera.

Hay una gran variedad de este tipo de na-rraciones en los Evangelios, y las que más llaman mi atención son las que utiliza Je-sús para comparar el Reino de los Cielos. Por ejemplo, en Marcos (4, 26-34), Jesús menciona dos parábolas en las que equi-para el Reino de Dios con una semilla que es arrojada a la tierra para que germine y se convierta en una planta que da frutos.

Dentro de la Iglesia, la pastoral vocacio-nal es compleja y exigente debido a los desafíos que presenta la sociedad actual

marzo 2014

18

a la juventud. En este mundo, considerar la vida consagrada o el sacerdocio como una opción es cada vez menos atrayente para los jóvenes, pues muchos de ellos viven más preocupados por su futuro aca-démico, económico, tecnológico y social, y hacen de lado la voz del Señor, quienlos llama para convertirse en discípulos misioneros.

Por ello la pastoral vocacional es una necesidad urgente para la Iglesia. Es im-portante que todos nos demos cuenta de esta emergencia y que dejemos de pen-sar que esta pastoral no presenta ningún desafío, al contrario, es una acción evan-gelizadora que abarca diferentes ámbitos sociales. Los promotores vocacionales acu-den a parroquias, escuelas, familias y gru-pos juveniles, con el deseo de anunciar el Evangelio y la invitación que Jesús hace para que nos convirtamos en sus discípu-los, para que nos apropiemos de su Palabra y nos atrevamos a dejar que ese llamado llegue a lo profundo de nuestro corazón y lo sacuda, y nos entreguemos así por com-pleto a su Misión.

Un agente de pastoral vocacional debe ser paciente, y su trabajo debe estar en sintonía con las parábolas que Jesús usó cuando anunció el Reino de los Cielos. El proceso de una vocación es como el rela-to de la semilla: primero se siembra una inquietud por iniciar una trasformación,luego llega la germinación con las primerasorientaciones en un centro vocacional, después aparecen los brotes de una pequeñaplanta cuyo futuro puede ser convertirse en un árbol que dé abundantes frutos.

Cuando hago la comparación anterior y me refiero a la parábola vocacional es para invitarlos a que tomemos conciencia de que esta pastoral es tarea de todos. De la misma manera que conocemos y en-tendemos las parábolas de los Evangelios y sembramos la Palabra de Dios tanto en las Misiones como en los lugares de tra-bajo, también es igual de importante que todos compartamos la parábola de la vo-cación y nos comprometamos a sembrar su semilla dondequiera que estemos.

Esta semilla es sembrada por medio de nuestro testimonio de vida, con el cual manifestamos la alegría de nuestra voca-ción y la respuesta afirmativa al llamado del Señor. Gracias a ese testimonio tenemospresencia misionera y disfrutamos cada oportunidad de cercanía con los fieles, con quienes compartimos la alegría de servir al Señor; también con él enseña-mos a vivir el Evangelio de una manera comprometida, convertimos en acción nuestra predicación y oramos y vivimos unidos a Dios, que nos llama a seguirlo en todo momento.

Atrevámonos a ser parte de la parábola vocacional. Sembremos su semilla en to-dos los terrenos que recorremos y dejemosque Dios haga germinar esas semillas en los corazones de muchos jóvenes, quie-nes pueden dar frutos abundantes para la Iglesia y la Misión.z

19

Comisión de Formación PermanenteLa Dirección de Evangelización

y la formación permanente

P. Juan José Ángel Luna Erreguerena, mg

Desde la Dirección de Evangelización, y habiendo tenido la hermosa experiencia de visitar todas las Misiones y casas del Instituto, quisiera mencionar lo que veo importante para la formación permanen-te de los miembros de esta institución.

1.En cuanto al quehacer

Normalmente, los Misioneros de Guada-lupe somos muy trabajadores, pero creo que nuestro esfuerzo daría más frutos si hiciéramos planes con objetivos claros que guíen todas las actividades de cada Misión o casa. No es lo mismo programar

o calendarizar (que en general se hace). Se trata de encontrar un objetivo, con-gruente con nuestro carisma, que oriente todas nuestras acciones. Algunos sí lo ha-cen, y así van construyendo poco a poco lo que el Señor espera de nuestras activi-dades. Con planes claros podemos encon-trar el sentido a todo lo que hacemos. ¿Paraqué estoy haciendo esto con este grupo, en esta parroquia, en este ámbito priori-tario escogido?

Otro aspecto importante es el trabajo en equipo. Se ha comprobado que entre algu-nos miembros es difícil compartir materiales,

marzo2014

20

subsidios o experiencias. Pretendemos, a veces, comenzar de cero. Nos es difícil colaborar con otros o dejar que otros co-laboren con nosotros.

Otro aspecto sobre el que aún nos falta profundizar se refiere a la forma de hacer Misión, es decir, el método de nuestra acción evangelizadora; nosotros hemos escogido el guadalupano, como prioridad en este sexenio1. ¿Qué hemos hecho en ese sentido? Hay muchos esfuerzos que todavía no hemos compartido con todas las Misiones y casas.

2.En cuanto al ser

Quisiera mencionar que en este proce-so de crecimiento de cada Misionero de Guadalupe y de cada comunidad del Insti-tuto (llámese Misión o casa) aún hay mu-cho en qué crecer. Jesucristo nos enseña que las intenciones, las motivaciones, son muy importantes. ¿Por qué hacemos ora-ción? ¿Por qué damos limosna? ¿Por qué ayunamos? (Cfr. Mt 6, 1ss).

2.1 Personalmente Hay que crecer en la conciencia y en la vivencia personal de lo que implica ser discípulos de Jesucristo; reafirmar nuestro Bautismo a través del encuentro vivo con Jesucristo, como camino de vida. Ese en-cuentro, esa experiencia de ser salvados por Él, nos debe mover a amarlo siempre más. ¿Estamos cautivados, enamorados de Jesucristo? ¿El encuentro con Él nos lleva a la fe y a la vida como discípulos misioneros suyos? Sin convicciones que nazcan de esa aproximación viva con el Señor, no hay for-ma de ser misioneros. Esto implica la pri-mera opción: escojo vivir como Jesucristo y no como el mundo (discipulado contra mundanidad). ¿Dónde encontramos a Jesucristo? ¿Qué lugar ocupa nuestro en-cuentro personal, diario, con el Señor? ¿Es

la oración la luz de toda nuestra acción? Consagrados al Señor desde el Bautismo ymás, desde la ordenación sacerdotal, ¿hemosencontrado en Él el camino de vida queanunciamos a todos los pueblos para que enÉl tengan vida abundante?

¿Estamos convencidos de que hemos en-contrado al Salvador de la humanidad, a aquel que responde a las necesidades más profundas de todas las personas? ¿Nace de ahí nuestra alegría y el deseo de com-partirlo con todos?

¿Qué nos impulsa, motiva, alienta y da sen-tido a nuestra acción personal y comunita-ria? Recordemos lo que dice la exhortación apostólica Evangelii Gaudium: “Una evan-gelización con espíritu es muy diferente de un conjunto de tareas vividas como una obligación pesada que simplemente se to-lera, o se sobrelleva como algo que contra-dice las propias inclinaciones y deseos”2. Traigamos también a nuestra memoria el soneto No me mueve, mi Dios, para que-rerte, que después se convirtió en oración. ¿Qué nos mueve para querer al Señor y la Misión que nos encomienda?

2.2 Como comunidadesEste es un punto crucial. La Misión no es de individuos; ésta tiene una Iglesia a su servicio, y en ella la Misión cuenta con Misioneros de Guadalupe para la evange-lización de los no cristianos, con especial empeño en la promoción y formación de iglesias misioneras ad gentes.

Como Instituto, ¿estamos convencidos de la importancia de la aportación de cada uno a la Misión? ¿Nos alegra saber que otros Misioneros de Guadalupe, con una formación diferente y otras cualidades y perspectivas, son miembros del Instituto, al cual yo también pertenezco y al que debo aportar lo propio? ¿Nos sentimos

1 Cfr. Conclusión 2.3.4 del ix Capítulo General. Conclusiones, Mandatos y Recomendaciones, pág. 64. 2 Papa Francisco, Evangelii Guadium, núm. 261.

marzo2014

21

felices de formar parte de este Instituto y ponemos todo nuestro ser en la realizaciónde nuestra común tarea? ¿Realmente nosinteresan los demás miembros del Insti-tuto? ¿Qué hacemos por los Padres mg que son mayores?, ¿por la formación de los jóvenes que el Señor ha llamado y que están en nuestros seminarios? ¿Qué hacemos por la promoción vocacional?, ¿o por incentivar la dimensión misionera de nuestras respectivas diócesis? ¿Qué actitudes tenemos ante los Padres y lai-cos asociados?; ¿se sienten atraídos por la Misión y nuestro trato los acerca más, es decir, los motiva a la asociación?

Nuestra vida, como sociedad a la que nos unimos para llevar el Evangelio a todos los pueblos, ¿es testimonio de la existen-cia nueva que hemos encontrado en Je-sucristo, es decir, del amor de unos a los otros como Jesús nos ha amado?

¿Amamos tanto a los pueblos a los que so-mos enviados, que somos capaces de dar nuestra vida para que ellos encuentren a Jesucristo como camino de vida? ¿El tiem-po nos parece poco para cumplir nues-tra tarea? ¿Amamos, como Dios, a toda la humanidad, especialmente a los más

necesitados, a los más pobres, a los más indefensos, a los excluidos, que necesitan conocer a Jesucristo?

Finalmente, como dice el Papa Francisco:

“Jesús mismo es el modelo de esta op-ción evangelizadora que nos introduce en el corazón del pueblo. ¡Qué bien nos hace mirarlo cercano a todos! [...] La entrega de Jesús en la cruz no es más que la culminación de ese estilo que marcó toda su existencia. Cautivados por este modelo, deseamos integrar-nos a fondo en la sociedad, comparti-mos la vida con todos, escuchamos sus inquietudes, colaboramos material y espiritualmente con ellos en sus ne-cesidades, nos alegramos con los que están alegres, lloramos con los que llo-ran y nos comprometemos en la cons-trucción de un mundo nuevo, codo a codo con los demás. Pero no por obli-gación, no como un peso que nos des-gasta, sino como una opción personal que nos llena de alegría y nos otorga identidad”3.

Misioneros de Guadalupe: hemos encon-trado al Señor de la vida y estamos ale-gres. Él nos llama a compartir esa Buena Noticia con todo el mundo. ¡Ánimo, Él está con nosotros!z

3 Ibídem, núm. 269.

Club de Niños mg

Cada una de las visitas que hace el Club de Niños mg, ya sea a Guadalajara, Queréta-ro, San Luis Potosí, Toluca, entre otros lu-gares, es una experiencia enriquecedora para quienes nos dedicamos a esa labor, pues somos distintos y nuestros entornos y

circunstancias son diferentes, pero eso es lo que nos permite disfrutar, compartir y nutrir nuestra tarea.

Por su parte, los niños, dentro de la diná-mica del grupo, crean sus propias ideas y

22

El reflejo de servir al Señor

Diana Elisa Reyes Hernández,auxiliar administrativa del Club de Niños mg

“Para ejercer una influencia benéfica entre los niños,es indispensable participar de sus alegrías”.

(San Juan Bosco)

23

se generan expectativas de las activida-des que van realizando en los encuentros misioneros. Cada uno de ellos tiene la ta-rea de acercar a más niños, y así expandir la evangelización en todos los rincones que estén a su alcance (la casa y la escue-la) para que de esa manera den a conocer el trabajo que realizan los Misioneros de Guadalupe.

El objetivo del Club de Niños mg requiereempeño y dedicación, ya que sólo asípodemos lograr que los niños sientan el amor de Dios y su Palabra, pues de esa manera ellos invitarán a otros pequeños a que conozcan al Todopoderoso.

Para tener una idea más clara de lo que estamos hablando, expondré algunos de los comentarios que los niños nos dan cuando les pedimos su punto de vista sobre las actividades que realizan en los encuentros misioneros. Lo valioso de ese cuestionario no fueron sólo sus respues-tas, sino también que los niños pudieron opinar y participar.

José es originario del Distrito Federal, y él nos comentó: “Me gusta jugar con mi amigo Carlitos en la escuela en donde estudio. Una de las cosas que realizo es ayudar a la gente platicándoles acerca del Club de Niños mg. Lo que más me gusta del Club de Niños mg son los encuentros misioneros donde nos ponen a bailar. Mi personaje favorito es Akira1; me gusta su forma de ser, su cultura y su vestimenta. Me gusta ser misionero porque me gusta ayudar a los demás y seguir a Dios en los lugares que frecuento. Quiero expandir la paz a través de mis familiares y amigos”.

Otro miembro del Club de Niños mg es Jo-sué, de Durango. Él nos dice: “Lo que más me gusta hacer es jugar con mis amigos, pero también rezar todos los días para dar gracias a Dios por un día más de vida.

Las cosas buenas que realizo es invitar a los niños a que hagan lo mismo mediantesus posibilidades, ya que es muy bonito ayudar a otros niños que lo necesitan. Me encanta la revista Almas, que la recibo cada mes, y estoy muy al pendiente de que me llegue mes con mes. Me gusta compartir mis juguetes, y las cosas que ya no utilizo las regalo”.

Esos y otros testimonios nos permiten ver que estamos realizando nuestra labor con buenos resultados para los niños, puesellos son el futuro del mundo, el cual puedeser diferente a lo que hoy conocemos. En el Club de Niños mg ayudamos en la forma-ción de pequeños llenos de fe y amor. Así pues, nosotros somos el reflejo de lo que significa servir a Dios en esta gran labor deevangelización.z

marzo2014

1 Personaje del Club de Niños mg que representa al continente asiático.

24

Un caballito de totora es una embarcación primitiva milenaria que se ha fabricado desde la época preínca. Para elaborarlose utilizan tallos y hojas de la planta que le da su nombre, la totora.

Los incas utilizaban el caballito de totora como medio de transporte, pero funda-mentalmente era usado para la pesca; en él recorrían los litorales y las zonas lacus-tres en busca de alimento.

El nombre original de esta embarcación es wachakes, que significa ‘ojo de agua’. La palabra proviene del muchik, lengua hablada por los mochicas. Debido a la peculiar posición que adoptaban los pes-cadores al utilizarla, pues parecía que montaban un caballo, los españoles la lla-maron como ahora la conocemos.

La forma de los caballitos de totora no ha variado con el tiempo, pues continúa te-niendo la misma estructura aerodinámica diseñada para romper olas. La técnica de

fabricación se ha transmitido de genera-ción en generación hasta nuestros días.

Para elaborar un caballito de totora deben cortarse los tallos de la planta y ponerse a remojar en agua para que se vuelvan flexibles. Luego es necesario secarlos al sol. Posteriormente se arman dos cuer-pos curvos que después se atan juntos con sogas hechas de totora.

En la actualidad, el caballito de totora continúa usándose para la pesca; también en eventos deportivos y como artesanía decorativa.

El Instituto Nacional de Cultura de Perú declaró patrimonio cultural de la nación a los caballitos de totora porque son una expresión de la cultura de las comunida-des asentadas en el litoral del norte del país y porque contribuyen a la identidad regional y nacional.z

Museo mg

Caballitos de Totora

Fernando Peral Salcido, curador del Museo mg

ACI Prensa @aciprensa#PapaFrancisco pide alentar la participación de #laicos dentro de la Iglesia. bit.ly/1m0Ik1k

CEM @IglesiaMexico “Que esté en ti la raíz del amor, porque de esta raíz no puede salir nada que no sea el bien”. San Agustín.

Hermanas Carmelitas @h_carmelitasscj La vida religiosa es un modo de vida organizado deliberadamente para consagrarse a la búsqueda humana de Dios que se nos revela en Jesús.

Basílica Guadalupe @INBGuadalupeHoy la @INBGuadalupe da inicio a sus actividades en Twitter.

Sigue a Misioneros de Guadalupe en la cuenta

@misionerosmg

Bendición de sotanaMéxico

Alumnos del Curso Introductorio al Semi-nario de Misiones recibieron la Bendición de sotana de manos de Mons. Crispín Ojeda Márquez, Obispo de Colima, en una Celebración Eucarística oficiada el sábado 2 de noviembre de 2013 en la Capilla cen-tral del Seminario Menor de Misioneros de Guadalupe.

Producciones mgVideo

Papa Francisco @Pontifex_esPidamos por los seminaristas, para que, oyendo la voz del Señor, la sigan con decisión y alegría.

Apostoladode la oración

Intención universal:Los derechos de la mujer.

Para que en todas las culturas se respeten los derechos y la dignidad de las mujeres.

Intención por la evangelización:Las vocaciones.

Para que numerosos jóvenes acojan la invitación del Señor a consagrar su vida al anuncio del Evangelio.

Misioneros de GuadalupeCantera 29, Col. Tlalpan, Del. Tlalpan, cp 14000, México, df.

[email protected] - [email protected]. (01 55) 5573 2500 - www.mg.org.mx - www.comunicacion.mg.org.mx