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LA CIUDAD SUBMARINA

- Emma Cuesta Blas

Mi corazn va muy deprisa, tanto que parece que se me va a salir; hoy estoy muy

nerviosa, pero sper contenta, porque es un da muy especial. He quedado con mis

amigos Mara y Alberto, para pasar la tarde en la playa, lejos de libros y deberes, y es

que, casualmente, este ao todos veraneamos en el mismo lugar. No quiero que se me

olvide nada: la tabla, crema, gafas de bucear, palas, merienda y algo de dinerillo para

chuches.

S, creo que est todo.

Pero, cunto falta para las cinco? Parece que el reloj se ha parado, con las ganas

que tengo!

Vuelvo a mi habitacin y me tumbo en la cama. Espero impaciente que sea la hora

y mientras imagino mil historias que nos podran suceder; y la verdad... No andaba yo

muy desencaminada.

Five oclock! Por fin! Es la hora; a lo lejos les veo andar, echamos a correr los

tres y nos damos un gran abrazo. Jugamos, remos, pescamos,... Queramos hacer

tantas cosas! Es como si quisiramos hacer todo esa tarde.

Despus de merendar alquilamos una barca de pedales. Nos metimos hacia dentro

del mar y llegamos a la isla que se ve desde la playa. Era nuestro sueo! Atamos la

barca, el agua all era cristalina; apeteca baarse. Nadamos y nadamos, buceamos y

buceamos; y sin darnos cuenta llegamos a un sitio muy especial, tanto que no nos

podamos creer lo que estbamos viendo. En medio de nuestro juego y siguiendo a

Alberto, que a su vez segua a un pez que jugueteaba con nosotros, llegamos a ese

extrao lugar; y digo extrao porque no sabamos nada de l, nunca habamos odo

hablar a nadie de l.

Nuestra sorpresa fue tremenda, ya que intentando coger a un pez en medio del mar

y buceando tras l, nos encontramos con...

- Una ciudad, una ciudad submarina! Habis visto lo mismo que yo?

- S Emma, pero es muy raro.- Deca Alberto.- Cmo va a haber aqu debajo

una ciudad?

- Tengo miedo.- Gritaba Mara.- Vmonos!

- No tengas miedo, vamos a pensar.- Deca Alberto.

- Es verdad, no nos vamos a ir sin saber qu hay ah abajo.- Repliqu.

- Est bien, pero vamos los tres juntos y no nos separaremos por nada del

mundo, me lo prometis?

- Prometido!

2

Nos sumergimos y, si he de decir la verdad, yo tambin senta un poco de miedo;

tena, como dice mi abuela, un nudo en el estmago. Pero me poda la curiosidad y las

ganas de aventura.

Lo que all haba era alucinante, era una ciudad maravillosa; con calles, edificios,

parques,... Tena de todo menos una cosa: gente.

Era raro, pero s, all no haba nadie. Sin embargo, todo estaba en perfecto estado.

Segn pasaban los minutos fuimos perdiendo el miedo y acabamos nadando por sus

calles como si la conociramos de siempre. Empezaba a oscurecer y ya haba poca luz,

as que decidimos volver a la playa y juramos no decir nada a nadie (y menos a nuestros

padres), para poder volver otro da.

Cogimos la barca y dimos pedales tan rpido del subidn que tenamos, que en

un santiamn estbamos en la playa. Nos despedimos con un abrazo, un guio y

juntamos nuestros dedos meiques en seal del juramento que habamos hecho.

Estaba agotada de tanto nadar y de tantas emociones, pero no me poda dormir; y

es que dara lo que fuera por saber el misterio de esa ciudad submarina. Sera el

encantamiento de algn brujo o el hechizo de alguien muy malvado con grandes

poderes?... No, yo ya soy mayor para creer en esas cosas, o eso creo.

Al final me qued dormida, aunque creo que no par de soar con nuestra ciudad.

Ya de da estaba deseando que fuera la hora de volver all.

Cuando llegamos, Alberto se dio cuenta de que podamos respirar debajo del

agua. Al da siguiente tambin podamos hablar bajo el agua; cada vez podamos hacer

ms cosas, eso s, siempre nos acompaaba y nos guiaba el mismo pez, al que nosotros

cariosamente llamamos Teri, de la palabras inglesa mysterious. Tambin nos dimos

cuenta de que l nos entenda y nosotros a l. Esa tarde fuimos especialmente felices!

Tenamos tantas preguntas que hacerle... Qu ciudad era? Qu haca ah? Dnde

estaba la gente? Qu haba pasado?

Teri nos dijo que eso lo tenamos que averiguar nosotros, que l estaba all solo

con unos erizos, una familia de esponjas, unas caracolas y unos caballitos de mar. Esa

noche al llegar a casa, cada uno busc informacin en internet. En una pgina encontr

que se crea que haba una magnfica ciudad submarina llamada Burbuja del

Cantbrico, de la que los marineros contaban historias increbles, y de las sirenas que

all vivan.

Pero no poda ser, porque Ganda est en el Mediterrneo... De repente, una

pgina me llev a otra y sta a su vez a otra y, como por arte de magia, me encontr con

una que explicaba que un terremoto hizo que todo el mar se moviera y las corrientes la

arrastraran hasta donde ahora est.

No me lo poda creer, es la ciudad Burbuja!

3

Al da siguiente se lo cont a mis amigos y a Teri, quien reuni a los animales que

se haban ido all a vivir y a la sirena Aleta, la ltima en llegar (era muy divertida, alegre

y cariosa; y contaba unas historias increbles).

Lo organizamos todo, fue elegido rey un caballito de mar llamado Aguador, por el

buen corazn que tena.

Llegaba el fin de las vacaciones y tenamos que despedirnos de nuestros nuevos

amigos. Alberto, Mara y yo nos veramos de nuevo en el colegio en septiembre.

Haba sido un verano maravilloso y lleno de recuerdos, y aunque tristes, ya

estbamos deseando que llegara el siguiente para reencontrarnos con nuestros amigos y

seguir descubriendo Burbuja.

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LA CAJA DE LOS DESEOS

- Elsa Hernndez Daz

rase una vez una nia tan pobre que no tena nada, ni siquiera un juguete para

poder jugar. Su mayor ilusin era ir a Disneyland Pars, pero no poda porque sus padres

no tenan dinero para hacer ese viaje tan caro.

Un da, mientras la nia paseaba por el parque de su barrio vio que detrs de un

arbusto haba una caja misteriosa de muchos colores; tena algo escrito: La caja de los

deseos. La nia sinti curiosidad, cogi la caja y se la llev a su casa. La escondi

debajo de la cama para que no la vieran sus padres, pero no se atrevi a abrirla porque le

daba un poco de miedo. Se fue a dormir.

Cuando se despert comprob que estaba en Disneyland porque el hada mgica

de los sueos la haba visitado por la noche y su sueo se cumpli; la nia estaba muy

muy contenta.

A la maana siguiente escuch un sonido bastante fuerte que la despert, pegando

un salto de la cama, entonces fue cuando se dio cuenta de que todo haba sido un sueo

y en realidad no haba ido a Disneyland.

Se puso muy triste y empez a llorar bajito para que sus padres no la oyeran,

porque ella no quera que se preocuparan. Pero de repente, oy un ruido debajo de la

cama, la nia se asom y vio que la caja se ilumin y se abri sola. Al principio se

asust, pero luego se volvi a asomar y escuch una vocecilla que deca: Nia no

llores, soy el hada de la caja de los deseos y estoy aqu para cumplir los tuyos!

Entonces la nia le dijo que ella deseaba ir a Disneyland. El hada dijo que le

concedera el deseo, pero que antes tena que ayudar a otros nios ms pobres que ella.

Pasaron unas cuantas semanas, pero cuando la nia cumpli su promesa, el sueo

de ir a Disneyland se hizo realidad.

Y colorn colorado, esta historia se ha acabado

5

LA NUEVA ARMA DEL IMPERIO

- Ivn Varela Snchez

PRLOGO

Los planetas de la galaxia deben escoger su bando, ser en el separatista o en el

que ayudar a los jedai a proteger la Repblica? Slo un grupo sobrevivir a esta guerra.

El vencedor controlar la galaxia entera y regenerar la paz o el terror.

ANEXO

-.Los jedi.-

Anakin Skay Walker

El padawan de Obi-Wan Kenobi. Es un gran caballero jedai.

Impulsivo y atrevido. Tiene una maestra impresionante de la

Fuerza. Pero, verdaderamente conseguir que el Consejo Jedai le

haga caso?

Ahsoka Tano

Joven padawan enviada a Anakin por Yoda para que

aprenda cmo controlar la fuerza y manejar el sable. Es muy

amable y siempre ayuda a los dems.

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Obi-Wan Kenobi

El maestro de Anakin. Valiente y precavido. Si

alguien est en peligro l siempre sabe lo que hay que hacer.

Entrenado por Yoda; es el gran amigo de muchos jedis; y

tiene un par de cuentas pendientes con Grivus.

Yoda

Gran maestro de muchos jedis. Es sabio y siempre

sabe cmo ganar una batalla. Nunca est nervioso y tiene

un gran dominio sobre la Fuerza.

-.Los Sith / Separatistas.-

Asajj Ventress

La mayor enemiga de Anakin. Es

arrogante y envidiosa. Su maestro es el Conde

Dooku.

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Darth Sidius

Es el grande entre los Sith, su ejrcito de

droides siempre est preparado. Adems, se sabe

que se esconde bajo el rostro del Senador Palpatin.

El General Grievous

Droide mandado por el Conde

Dooku para eliminar a Asoka Tano y

conquistar el universo. Est equipado

con cuatro sables y dos brazos capaces

de desplegarse y transformarse en

cuatro.

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BATALLA INTERGALCTICA

- Ahsoka, tengo una misin para ti.- Dijo Anakin por el reproductor

hologrfico.- Tienes que ir a inspeccionar el Sector 7 de Yavin Cuatro.

Creemos que Grievous ha mandado a una flota de droides a conquistar el

planeta.

- No te preocupes, ir inmediatamente.- Contest Ahsoka.

Haca 16 horas que Anakin le haba pedido que fuese a la flota de Obi Wan a

comunicarle lo sucedido en el Twilight. Estaba nerviosa, era su primera misin! Pero

deba tener paciencia.

***

Obi Wan esperaba desde haca rato noticias de Anakin y no las haba recibido

todava, estaba muy intrigado; de repente se le encendi el reproductor hologrfico.

- Hola Obi, perdn por el retraso.- Dijo la voz de Anakin.- En la nave todo va

bien, excepto por la baja en la municin.

- Cmo que baja en la municin? Qu ha pasado Anakin?- Pregunt furioso

Obi Wan.

- Un caza de Grievous. He mandado a Ahsoka a perseguirlo.

- En ese caso esperaremos a que llegue a informacin.- Dijo Obi Wan.- Ojal

Ahsoka est bien.

Ahsoka lleg a Yavin Cuatro y busc a las tropas de Grievous. De pronto se

encontr con cuatro droides enemigos; as que empez a ir con ms sigilo, intentando

no levantar ruido.

Tuvo la suerte de encontrarse con un droide muerto, y su chip de informacin!

Ahsoka descodific el chip y descubri que Grievous estaba a unos treinta y seis pasos

de ah; as que se puso en marcha hacia el campamento.

Ahsoka se escondi tras una roca y escuch la conversacin de Grievous con

Darth Sidius:

- Mi general.- Dijo Grievous con una voz metlica.- ya estn sus rdenes

cumplidas.

- Asajj Ventress persigue a los jedi?

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- S.

- Y t ests conquistando Yavin Cuatro?

- S, estoy en ello, dentro de nada los jedi caern y los Sith nos alzaremos.

- Ja, ja, ja, ja!- Rieron los dos a la vez.

Ahsoka se qued pasmada, no daba crdito a lo que oa. Tena que avisar al resto,

pero de repente...

- Aqu no sobrevivir ninguna escoria jedi.- Dijo un droide.

- Aaaaaaaaaaaah!- Se alarm Ahsoka.

Unas horas despus...

- Qu... Qu es lo que est pasando?- Se pregunt Ahsoka sorprendida.

Le haba pillado un droide, se haba desmallado y no recordaba nada ms. Ahora

se encontraba en un lugar poco iluminado con Grievous.

- Habla!- Dijo ste demasiado fuerte.- Dnde se esconden los jedi?

- No s de qu me hablas.

- Vamos, no te hagas la tonta. Dnde estn?

- Quines?

- Te matar como no digas nada!... Nos volveremos a ver dentro de poco.

*** - Obi, Obi, Obi!- Gritaba Anakin.- Dnde ests?, he recibido un mensaje de

Ahsoka.

- En serio? Ponlo, ponlo.- Dijo Obi-Wan nervioso.

Chicos... Grievous intenta conquistar Yavin Cuatro... Daos prisa... Asajj

Ventress os persigue.... Aaaaaah. Dijo la voz de Ahsoka.

- Hay que ir a ayudarla.- Dijo Anakin.

- Estoy contigo,- dijo Obi- pero antes avisemos a Yoda de la amenaza en Yavin

Cuatro.

Entonces los dos avisaron a los pilotos, encendieron los escudos, avisaron a Yoda

y... Se prepararon para la guerra.

***

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Yoda estaba preparado, poda luchar contra muchos droides, pero no por mucho

tiempo. Ya le faltaba poco, haba recorrido media base, tena mucha informacin, pero

no contaba con que Grievous estuviera ah.

Le haba tendido una trampa!

Estaba colgado del techo esperndole. Ahora todo iba en favor del mal.

Yoda estaba en el suelo, y su sable muy lejos, pero cuando Grievous intent

matarlo, ste us el poder de la Fuerza para atraer su sable y defenderse de una muerte

segura.

La batalla estaba muy reida, Grievous daba sablazos derechos, Yoda los

esquivaba y le lanzaba barriles explosivos. Grievous los esquiv tambin y atac de

nuevo. Yoda decidi huir y encontrar a Ahsoka, era ms importante; adems sin ella

estara todo perdido.

Mientras tanto, Asajj Ventress esperaba a los jedi, saba que ganara porque

contaban con una nueva arma secreta...

*** Yoda corra, corra y corra; pero no encontr a Ahsoka, as que decidi rendirse,

pero en ese momento la chica apareci de la nada.

- Yoda! Y tu nave? Hay que irse, rpido! No tenemos mucho tiempo, una

bomba va a destruir la mitad de la nave.

- Rpido, debemos correr entonces, tenemos que llegar!

Yoda dirigi a Ahsoka hacia el angar y tres segundos despus de la explosin la

nave despeg camino a Yavin Cuatro.

Haba una gran batalla espacial. Disparos, naves, explosiones, bombas,...

Anakin y Obi se haban separado. Obi-Wan iba hacia el puente de mando mientras

Anakin buscaba a Asajj Ventress.

Obi tena que llegar al puesto de mando y redirigir la nave hacia una muerte

segura. El problema es que haba muchos droides.

- Por fin llegas jedi.- Dijo Asajj Ventress.

- No ganaris.- Dijo Anakin.- Conocemos vuestra estrategia.

- Pues no sobreviviris.

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Un gran combate comenz; los sables empezaron a chocar unos contra otros, era

un combate muy reido. De repente, Asajj Ventress lanz todas las naves de escape y

destruy los elevadores de la nave.

- Todos vosotros moriris sepultados bajo las naves.

*** Obi... Coloca una gran bomba... Tenemos que huir... Esto va a estrellarse.

Son por el interlocutor.

Obi-Wan sali corriendo hacia el hangar 9 y descubri que Anakin ya haba

huido, as que cogi su Spider (moto) y se fue.

- Menos mal que he encontrado la nueva nave, as podr destruir la nave de los

jedi.- Dijo Asajj Ventress.

El arma secreta era una nave que poda hacerse invisible. El crucero espacial

estaba perdido. Hubo una gran explosin y Asajj Ventress desapareci con su nueva

nave.

Yavin Cuatro haba sido salvado. Todo haba terminado. Yoda, Ahsoka, Obi y

Anakin hicieron una fiesta en Kassik con los wookies.

FIN

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DESAPARECIDA EN COMBATE

- ngela Ruz de Pascual

Te imaginas ir al ejrcito hacindote pasar pos una chica mayor de 18 aos? Pues

este es el caso de Lucy McKlange (Alcal de Henares, Madrid, Espaa).

*** Corra el ao 2.096 y Alcal segua en guerra. Haban transcurrido ya seis aos

desde que llegaron las tribus Ritgua. sta tribu haba sido totalmente desconocida hasta

ese momento. Todos esos aos haba permanecido oculta, preparando el ataque ms

mortfero de la historia; empezando por Alcal.

Normal? Por supuesto... Os lo explicar.

Alcal, Alcal, Alcal... Una ciudad que no sufre daos y que est en perfecto

estado. Con gente alegre y divertida. El lugar perfecto para el ataque perfecto.

Bueno, al grano.

Lucy tena sed de venganza, ya que su padre fue asesinado por el mismsimo jefe

de la tribu invasora. Un da, la chica se escap de casa para alistarse en el ejrcito.

No estoy muy enterada de esta parte de la historia, pero lo que s es que el general

nada ms verla se extra al ver su joven rostro, pero la acept.

Un da la mandaron a realizar una misin de bombardeo en helicptero, y claro,

como ella no saba pilotarlo se estrell en una de las islas enemigas. Al principio fue

una esclava rebelde, pero cuando el prncipe de la tribu la conoci se enamor de ella.

Cuando la chica se enter de que ste le iba a pedir matrimonio, huy. Se hizo su propio

barco y viaj; y hasta que no pasaron dos aos no lleg de nuevo a su ciudad.

A su vuelta aprendi a manejar todo tipo de vehculos, armas,... Y se hizo sobre

todo muy pero que muy inteligente. Ya estaba lista para apuntarse a la ltima y ms

importante misin de todas.

El prncipe era un ser arrogante y por eso, al ver tal amenaza, en vez de ayudar a

su pueblo, huy. El ltimo combate se acercaba... Y lleg...

El ejrcito destruy todas las islas Ritgua del mundo y marcharon victoriosos.

Dicen que una familia Ritgua qued viva, pero yo creo que es solo un mito inventado.

Ahora, todos los aos celebramos el aniversario de la fecha en la que vencimos a

esa tribu tan horrible. En todos los aniversarios se rumorea que el prncipe vaga por las

salas de las celebraciones llorando por la derrota. Pero esa es otra historia que no

contar...

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AVENTURAS A LO GRANDE

- Mara Sastre Daz

Todo empez una soleada tarde, Marina y su mejor amiga Lucy haban quedado

en la casa de sta para hacer un proyecto. El trabajo tena que tratar acerca de una

profesin, cualquiera, ellas eligieron la que ms les gustaba: astronauta. Aunque llegar a

esa conclusin no fue fcil:

- Cul, cul, cul?- Dijo Marina.

- Necesitamos una idea cuanto antes, exponemos pasado maana!- Dijo Lucy.

- Ya lo tengo: Profesor!- Exclam Marina con un chasquido de dedos.

- No, est muy visto, necesitamos una profesin original.- Despus de mucho

tiempo se le ocurri-: Astronauta!!!... Claro! Cmo no se me haba

ocurrido antes?

- Porque yo soy el cerebro de este grupo.- Dijo Marina.

Despus de esta conversacin se pasaron horas, horas y an ms horas viendo

vdeos sobre ellos y sacando informacin de Wikipedia, cuando...

- Oye Lucy.- Dijo Marina (por si algn despistadillo no lo sabe).

- S?

- Vas a decir que estoy loca...

- Ests loca.

- Djame acabar!- Exclam.- Vas a decir que estoy loca, pero estoy pensando

que quiz haya vida en otros planetas. Me explico, a lo mejor ellos, los

extraterrestres, no necesiten agua para vivir, no?

- Claro! Me pregunto cmo no se me ha ocurrido a m.

- Ya te lo he dicho antes: yo soy el cerebro de este grupo.

Seguidamente fueron a una biblioteca.

- Aqu estn todos los libros de astronautas, hay muchos.- Dijo Marina

- Los vamos a mirar todos?

- Nos seas perezosa, Lucy.

- Vaaaaaale....

Despus de unas largas horas...

- Ya hemos ledo todos los libros de astronautas que hay en la biblioteca y

afirman lo contrario, lo vuelvo a leer por si acaso: los astronautas han

registrado todos los planetas y en ninguno, a parte de la Tierra, hay agua; lo

cual demuestra que el nuestro es el nico planeta con vida.- Explic Lucy.

- Bien, pues yo demostrar lo contrario, atenta a mi plan: maana a las 07:15h

los astronautas irn con su cohete al espacio para yo que s qu. Pues bien, lo

que vamos a hacer es robarles su cohete.

- Cmo!?

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- Se lo robaremos mientras se preparan para subir y bam! Adis cohete. Todo

esto mientras nuestros padres piensan que vamos a pasar el fin de semana una

en la casa de la otra; ya que el viaje durar mnimo dos das, vale?

- Est bien, pero cundo se te ha ocurrido todo esto?

- En tu casa.

- Ah vale, genial!

Al da siguiente, esto es lo que le dijeron a sus padres:

- Pap, mam, me voy a casa de Marina/Lucy el fin de semana entero para

terminar el trabajo de las profesiones.

- Cundo te vas?

- No s, sobre las 07:15h.

- Prtate bien.

- Vale, gracias.

- De nada hija, psalo bien.

Cuando partieron las dos estaban emocionadsimas, y es normal porque quin no

lo estara con un plan as? Una vez estuvo el cohete ya robado, Marina se encarg de los

mandos y Lucy de divisar los peligros.

- Cuidado con esas rocas, Marina!

- Gracias!- Respondi.- Pero ahora agrrate fuerte que voy a frenar, ya hemos

llegado. Qu te parece este planeta para aterrizar?

- Cul, el azul, el dorado o el rosa?

- El azul.

- Es muy bonito!

- Bien, aterrizaremos.

- Vale!

Cuando se bajaron del cohete lo vieron todo ms de cerca: el planeta era azul, con

muchas flores y arbustos de colores; por no hablar del clima, que no era ni muy fro ni

muy caliente, el planeta estaba a la temperatura ideal.

- Eh Lucy, ven aqu, mira esto.

- Guau, es precioso!

- Lo s.

- Eh, algo se esconde tras esos arbustos.

- S, parece una especie de puerta.

- Abrmosla.

- Impresionante, aqu vive un pueblo entero!

- Y que lo digas.

Las casas eran muy coloridas, con muchas flores pero, haba gente dentro de

aquellas casas, es decir, habra vida en ese planeta?

Pues claro! Sino... Qu clase de cuento sera este? Uno muy aburrido.

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- Llamemos a una casa, Lucy.- Propuso Marina.

Ding, dong!

- S?- Un extrao ser abri la puerta.- Pero qu tipo de blirps sois vosotras?

- Qu es un blirp? Nosotras somos humanos, de la Tierra.

- La Tierra?

- S, ya sabe, el famoso planeta azul que tiene agua.

- Ah, es verdad! Blirps es como nos llamamos los habitantes de este planeta.

Despus de charlar, blirp dijo:

- Queris entrar a tomar algo?

- No podemos, tenemos prisa, pero gracias.

- Ya os vais?

- S, adis, encantadas de conocerte.

Cuanto llegaron a casa, se lo contaron todo a sus padres:

- Pap, mam, los extraterrestres existen!

- Cmo?

- Como lo oyes, no me crees?

- No es que no te crea hija, es que...

- Que s, que los vi.

- Ests segura de que no lo has soado?

- NO!

Dicho esto, sus padres se extraaron mucho y estuvieron yendo durante una semana al

psiclogo con Marina, le examinaron su coeficiente intelectual, pero ellos no le

encontraron nada raro, todo era normal. Despus de esa horrible semana, Marina habl

por fin con Lucy:

- Estoy harta de tener que ir al psiclogo, si no me pasa nada!

- Tengo una idea! Y si volvemos al planeta y hacemos fotos?

- Pero si tenemos el e-mail de blirp!

- Es verdad, se me haba olvidado

Este es el e-mail que le enviaron: Querido Blirp, necesitamos una foto de tus

amigos, nadie nos cree cuando decimos que hay vida en vuestro planeta. Besos, Marina

y Lucy.

Y esto fue lo que Blirp contest: Queridas humanas, lo siento pero no voy a

poder mandaros ninguna foto de m o mis amigos.

Al leerlo dijeron:

- Jope.

- No lo entiendes, Lucy?

- No, el qu?

- Te lo explico: no quiere que los humanos les descubran porque no podran

descansar. Tenemos que aguantarnos y no decir nada, pero merece la pena.

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TU TURNO

- Beatriz Corts Ampuero

Me llamo Teresa; y tena diecisis aos cuando todo empez y el mundo dej de

ser normal.

La dependienta de la tienda en la que me encontraba en esos momentos con mi

amiga Mara no dejaba de mirarnos; hasta que nos dijo: tomad esto y escondeos; no

salgis nunca de casa.

- Qu?- Pregunt Mara.- Est loca, seora.

- Dnde est?- Dije yo, al ver que haba desaparecido.

- Por qu nos ha dado estos pendientes?

- Son muy chulos, me los pondr.

- Yo no me los pondra, y s estn encantados?- Dijo Mara.

- De todas maneras ya es demasiado tarde, me los pondr maana.

- Ahora vamos a mi casa, maana iremos al spa, necesitas un buen masaje.

Saliendo de la tienda omos un ruido extrao, nunca antes lo habamos escuchado,

pero pasamos de l; pensamos que fue una alucinacin (fuimos estpidas al pensar que

lo era, luego los errores se pagan).

Entrando en mi casa nos asustamos mucho, vimos a un hombre encapuchado y

meditando delante de una vela; todas las luces estaban apagadas.

As que entramos por la puerta trasera, subimos las escaleras corriendo y nos

encerramos dentro de mi cuarto. Ms tarde empezamos a susurrar sobre todo lo que

habamos visto, odo,... Y en seguida nos dormimos.

A la maana siguiente nos despertamos a las 06:30h, pensamos que todo habra

sido una pesadilla hasta que dirig mi mirada hacia los pendientes y dije:

- No ha sido una pesadilla!- Pas un minuto de suspense.- Es real.

- Qu?- Pregunt Mara.- No puede ser.

- Yo pensaba que era uno de esos sueos en los que cuando ests cerca de una

persona se llega a soar lo mismo; es algo inexplicable, pero ocurre.- Dije yo,

mientras bajbamos las escaleras.

Vimos que la vela que el encapuchado haba estado utilizando la noche anterior

estaba ya apagada, igual que el resto de las luces; omos un ruido extrao, como el que

habamos escuchado anteriormente, al salir de la tienda de aquella extraa mujer; y nos

volvimos locas buscando por toda la casa el origen de dicho sonido... Hasta que Mara

grit que escuchaba voces en su cabeza!

De repente se volvi loca, cogi una tubera y me golpe la cabeza; as que ca

inconsciente.

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A la maana siguiente empec a abrir los ojos, viendo una luz radiante como la

nieve; lo malo es que estaba en el hospital y tena una venda sobre la cabeza. Al instante

empec a ver a aquel hombre encapuchado con una foto en la mano; tena una sonrisa

reluciente y malvola, pero... Quin era?

- Teresa?- Pregunt Mara.

- Mara, el hombre encapuchado, lo he visto.

- Dnde? Aqu no hay nadie. Creo que sigues con el golpe en la cabeza.

- Por qu me diste con una tubera?

- Lo siento, de verdad, sabes que nunca te hara dao; pero perd la cabeza, no

era yo misma. No s qu me pas.

- Tranquila, te creo.- Dijo Teresa.- El hombre encapuchado sujetaba una foto, y

en ella apareca una chica morena. Y me suena de algo, pero no s de qu.

- Bueno, cuando te recuperes iremos a la biblioteca.

Una semana ms tarde fuimos a la biblioteca y all buscamos informacin sobre la chica

de la foto. Encontramos una cosa muy interesante, adems de que aquella chica se

pareca un montn a m, haba muerto ese mismo da haca tres aos; casualmente el da

de mi cumpleaos.

- Puede que te hayas confundido con esta chica, Teresa.- Dijo Mara.- Puede

que simplemente sea la novia de ese hombre.

- Y si no es humano?- Pregunt yo.

- Es imposible que no sea humano porque est aqu en la Tierra.

- Es verdad, en qu estara yo pensando?

- S, definitivamente sigues con un buen golpe en la cabeza.- Dijo Mara

- Qu voy a tener un golpe? Si ya he pasado dos semanas en el hospital.

Y de repente...

- Shhhhhh!

Aquel sonido provena de la biliotecaria, una seora mayor, de pelo blanco,

gafas y muchas arrugas y verrugas.

Al cabo de una hora nos fuimos y no es que hubiramos encontrado gran cosa,

adems de aquella imagen claro.

Pas mucho tiempo y seguamos sin saber nada. Hasta que un da descubrimos

que al final ese seor encapuchado era un simple vagabundo... O no?

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MATILDE Y COCO EN EL MUNDO DE NATURFLOR

- Alejandra Buceta Campa

Despus de un buen rato de pesca, de vuelta a casa; Matilde, la eriza, y Coco, el

dragn, escucharon un grito que casi les rompi el tmpano:

- Socorro, ayuda! Me va a merendar, por favor!

Fueron a ver lo que era y vieron a una serpiente que quera comerse a un

hombrecito. Coco dijo:

- Se parece a un personaje de la peli Epic, que mola pirindola.

- Bueno s, s, pero me vais a rescatar? Que estoy esperando, eh?

Entonces le rescataron y le hicieron unas cuantas preguntas.

- De dnde vienes? Nosotros de una parte de la isla de los dragones.- Dijo

Matilde.

- Me preguntis a m?- Dijo el hombrecito, quien llevaba una armadura hecha

de hojas.

- S, claro! Te preguntamos a ti; eres muy chiquitn, qu monada!- Explic

Coco.

- Eh! Primero, no soy ni mono ni chiquitn; y segundo, no os dir de dnde

vengo.- Se rio.

- Vale, chiquitn.

- Qu no soy chiquitn!

- Confiesa!- Grit Matilde.- O le digo a Coco que llame a Susi, una amiga suya

que es una serpiente come bichos; y seguramente coma hombrecitos tambin.

- Vale, vale.- Respondi asustado.- Os llevar.

Entonces el hombrecito les llev hasta un lugar llamado Naturflor, un mundo tan

pequeo como l. Coco y Matilde se quedaron boquiabiertos. Sus habitantes eran ranas,

flores, bichos y hombres que iban vestidos como el hombrecito al que acababan de

conocer.

Haba colibrs, los cuales servan como transporte; y adems de todo eso, la reina

de este pequeo mundo tena poderes, poda mover las plantas, los troncos y cambiar el

clima.

Pero no todo era perfecto; los buenos hombrecitos tenan unos enemigos terribles:

los Lingos Oscuros; quienes eran ratas o bichos feos y raros que queran destruir el

bosque y apoderarse de l. Siempre buscaban escusas para entrar en guerra, y aunque

siempre perdieran las batallas, juraban da tras da matar a la reina y gobernar Naturflor.

Como la reina quera proteger el bosque cre un ejrcito de hombres hoja. Coco y

Matilde se quedaron alucinados al verlos trabajar; as que se unieron a algunas clases de

entrenamiento y les crearon sus propios trajes de combate, qu chulos eran! Lo nico

que no pudieron hacer fue volar encima de los colibrs, ya que eran demasiado grandes;

pero como Coco era un dragn llevaba a Matilde volando, molaba mogolln.

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Despus de un buen rato de entrenamiento, Matilde y Coco quedaron muy

cansados. De repente los padres de Coco llamaron a su hijo a su amiga, puesto que ya

era muy tarde. Se despidieron de los hombres hojas y se fueron a casa.

Despus de cenar se fueron a la cama y Matilde dijo:

- Oye, maana volveremos a Naturflor?

- S, por supuesto; pero tengo mucho sueo, as que vmonos a dormir.-

Respondi Coco.

A la maana siguiente se despertaron, desayunaron y corriendo hasta Naturflor.

Cuando llegaron estaba todo destrozado; preguntaron qu haba pasado y result

ser que los Lingos Oscuros haban invadido su pequeo mundo; y la reina, asustada,

huy a esconderse para que no la mataran y el bosque pudiera seguir vivo.

- Y qu pasa si no hay reina?- Pregunt Matilde.

- Que le damos el capullo mgico a alguien para que ocupe su lugar.-

Respondi un hombre hoja.- Por cierto, antes de huir la reina os dej esto.

- El capullo mgico!- Exclam Coco.- Y una carta, vamos a leerla!

Result ser que la reina quera que ellos fueras los herederos al trono en su

ausencia. Al coger el capullo se hicieron pequeos, del tamao de los hombres hoja, y

les ensearon un poco cmo ser reyes. Matilde estaba tan nerviosa que no paraba ni un

segundo.

Les ensearon a manejar la naturaleza, a conocer la poblacin y a hacerse ropa

con hojas (aunque esto a Coco no se le daba nada bien). Despus de todas las lecciones,

Matilde se puso a jugar con nias flores y las plantas, se lo pasaron genial saltando de

seta en seta y aprendiendo ms de las plantas.

Pero de repente... Los Lingos Oscuros atacaron de nuevo! Naturflor estaba en

peligro; pero Matilde y Coco fueron capaces de derrotarlos.

Cuando la reina se enter de lo ocurrido, volvi y todo volvi a la normalidad.

Celebraron su victoria por todo lo alto, con un festn y fuegos artificiales.

Al da siguiente Matilde y Coco eran ya grandes otra vez. Pero no se fueron de

Naturflor sin antes prometer volver para visitarles.

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LA PRINCESA LAURA

- Raquel de Lope Carretero

Laura era una princesa que viva en un palacio rodeado de flores multicolores. Lo

primero que haca cuando se levantaba cada maana era lavarse la cara, vestirse y bajar

al jardn a recoger flores; le encantaba adornar su peinado con margaritas blancas y

amarillas. Seguidamente se diriga a la cocina a preparar su desayuno, porque aunque

Laura fuera una princesa y en su castillo hubiera criados, a ella no le gustaba que la

sirvieran.

- Princesa Laura, qu bonito peinado llevas!- Exclam Ana, una de las

criadas.- Y qu bien huelen las flores!

- Gracias.- Dijo con una gran sonrisa, mientras se despeda de ella dndole un

beso en la mejilla.

- Ten cuidado por el camino hacia la escuela.- Advirti Ana.

Laura sali rpidamente, ya se le estaba haciendo tarde y tena examen de

matemticas a primera hora. A la princesa tambin le gustaba ir al colegio, no quera

que los profesores fueran al castillo. Atraves sus jardines lo ms rpido que pudo y se

dirigi a la parada de autobs, ya que tampoco quera que ningn chfer le llevara hasta

las puertas de la escuela. Le gustaba sentirse como una nia corriente.

Lleg el bus, Laura espero su turno para subir. El camino se hizo corto porque

como era el cumpleaos del conductor fueron cantando todo el rato.

Abrieron las puertas del colegio y todos los nios comenzaron a entrar, al igual

que Laura. sta estaba nerviosa, haba estudiado mucho y quera sacar muy buena nota.

Su padre, el rey, le haba prometido dejarla ir al cine con sus amigos de clase en tal

caso.

Entr en el aula con el pie derecho y se dirigi a su pupitre; pero cuan fue su

sorpresa al descubrir que en su cajonera no estaban sus cosas. En su lugar haba una

escalera que pareca no tener fin.

- Chicos, abrid vuestras cajoneras!- Grit Laura nerviosa.

Todos la miraron extraados, pero lo hicieron y una exclamacin general invadi

la clase.

- Oh, cmo puede ser? Dnde estn nuestras cosas?- Se lament Irene, una

compaera.

- A dnde llevaran estas escaleras? Estarn nuestras cosas abajo? Podramos

investigar.- Propuso Ivn, otro chico de la clase.

- Ni hablar!- Cort Irene.- Tenemos que avisar a los profesores, esto es muy

raro. Cmo han llegado estas escaleras a nuestras cajoneras? Yo no me atrevo

a bajar.

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- Estoy de acuerdo con Irene.- Aadi Laura, la princesa.- No sabemos qu nos

podemos encontrar. Informemos a los profes y ellos decidirn, votamos lo

que hacer?

Y as lo hicieron; y por mayora decidieron informar a los profesores.

Bajaran por aquellas escaleras?

CONTINUAR...

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UNA CENICIENTA EN NUEVA YORK

- Sergio Buitrago Prez

rase una vez en la ciudad de Nueva York, una joven llamada Cenicienta; la cual

despus de fallecer su madre se qued muy triste. Despus de lo ocurrido su padre se

comprometi con otra mujer, pero al poco tiempo tambin muri.

La madrastra de Cenicienta la utilizaba de criada y siempre tena que limpiarle

todo a sus dos hijas: Griselda y Anastasia.

Un gran da lleg una invitacin para acudir a la fiesta que organizaba el actor

ms famoso de toda Nueva York.

Cenicienta le pregunt a su madrastra si poda asistir, y sta le dijo que s.

Cenicienta se puso sus mejores galas, en las cuales se gast todo el dinero que llevaba

ahorrando desde que era pequea.

Al salir de su casa, se dio cuenta de que Griselda y Anastasia al verla empezaron a

rerse; y su madrastra dijo:

- De qu te has disfrazado? T slo vas a la fiesta para hacer el ponche. El taxi

ya est aqu y a ti no te da tiempo a cambiarte, as que tendrs que ir

caminando t sola ms tarde.

Por suerte, de camino a la fiesta, Cenicienta se encontr con la hermana del

famoso actor que celebraba la fiesta. sta iba en una lujosa limusina y le pregunt:

- Quieres subir? Voy a la fiesta.

- Claro! Gracias.

Dentro de la limusina la chica le dio un traje de camarera mucho ms bonito del

que llevaba; con la C de Cenicienta bordada a un lado.

Al llegar a la fiesta, el famoso actor se enamor de ella nada ms verla. Al

terminar de servir el ponche, Cenicienta se fue porque eran ya las doce en punto y tena

que coger el autobs para volver a su casa. Y al bajar las escaleras se le cay la receta

del ponche. El actor, al ver el trocito de papel en el suelo, lo cogi y se lo guard.

Para encontrar a su amada, se le ocurri ir de casa en casa por toda la ciudad hasta

que alguna mujer le hiciera el ponche perfecto.

Lleg el momento en el que el actor lleg a las puertas de la casa de Cenicienta, y

su madrastra al verle desde la ventana, mand a Cenicienta limpiar todas las

habitaciones.

Mientras tanto, Griselda y Anastasia intentaron hacer el poche, pero no pudieron,

a una le sali demasiado dulce y a otra le sali demasiado salado.

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Cenicienta, en cuanto termin de limpiar toda la casa se present en el saln y el

actor la reconoci al segundo. Ella se prest a hacer el ponche y le sali igual que en la

fiesta.

El cantante qued sorprendido y le pidi matrimonio sin pensrselo dos veces.

Pero ella dijo:

- No me voy a casar contigo por el simple hecho de que seas famoso, no te

conozco. Pero s me ofreces un trabajo fuera de esta casa, lo aceptar.

Y as acaba la supuesta historia de Cenicienta.

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LA MALETA Y LA LLAVE MISTERIOSA

- Mario Morales Hernndez

rase una vez un nio, quien un da iba de camino a casa de su abuela. Al llegar le

pregunt:

- Abuela, tienes algo para jugar?

- S, tengo una maleta.

- Una maleta? Pero qu tipo de juguete es ese?

- S, una maleta.

- Bueno, me valdr.- Dijo el nio.- Tampoco tengo nada ms para jugar.

Su abuela le ense el sitio donde guardaba dicho objeto.

- Ah est!

- Y qu hace?- Pregunt el nio.

- Pues... Hace lo que t quieras que haga.

- Bien!

El nio le dijo a la maleta:

- Haz todas las tareas de la casa!- Cosas que la verdad le haba mandado hacer

su abuela.

Ms tarde le pidi que se convirtiera en lpiz para hacer sus deberes, que

recogiera sus juguetes y al llegar a casa, que jugara con su perro.

- Eh, hijo.- Le dijo su madre.- Son imaginaciones mas, o una maleta est

jugando con el perro?

- No te preocupes mam, todo esto es un sueo!

- Ah, bueno me voy, pero cundo me despierto?- Pregunt.

- Pues no lo s,... Lo que s s es que va a ser ms tarde.

- Cuando me despierte tengo que hacer la cena.

- Buena suerte con ello, mam!

La madre abandon la casa.

- Bueno, y ahora qu le mando a la maleta? Ah, ya s: Riega todas las flores

de mi jardn, maleta!

Pero cuando se fue a dar la vuelta para decrselo, la maleta ya no estaba.

Este cuento demuestra que no hay que tratar mal las cosas; hay que tratarlas con

cario. Pero os preguntaris: Cmo desapareci? Por qu? Pues resulta que la abuela

descubri una llave y tambin un lugar donde esconder la maleta; y esta es una historia

que nunca, y digo nunca, contar.

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EL UNICORNIO DE ORO

- Clara Galindo Fras

Haba una vez, en un pequeo mundo donde habitaban unicornios y elfos, una

batalla constante contra sus rivales: los Smolks, los cuales eran unos malvados

monstruos que queran cazar a todos los unicornios para que as la reina Smolk realizar

sus hechizos para volverse ms joven; pero los elfos siempre que podan se lo impedan.

Un da, tras varias semanas de intentos de caza fallidos, la reina Smolk se senta

ms mayor que nunca. En sus oscuras horas de meditacin se le ocurri quemar entero

el bosque en el que los unicornios vivan; de esta masacre slo qued vivo un rbol

moribundo.

Los unicornios eran seres muy fuertes, pero cuando el hambre se hizo

insostenible, stos acudieron a la reina de los elfos en busca de ayuda. As, dicha reina

seal a una hembra unicornio que estaba embarazada. Tras pocas semanas de espera

sta dio a luz a un beb unicornio con un cuerno de oro.

Inmediatamente, se le pidi al pequeo ser pasar por todo el terreno quemado, y

conforme daba pasos, la tierra a su alrededor floreca de nuevo. Milagro, estaban

salvados! Pero la reina Smolk no estaba dispuesta a asumir su derrota.

En un descabellado y ltimo intento por permanecer joven, la reina Smolk atrap

al unicornio de oro; pero antes de que sta pudiera completar su hechizo, los elfos se

vieron forzados a utilizar su mayor obra destructiva: La Trontus. En cuanto el arma

llev a cabo cada pice de su poder, todos y cada uno de los Smolks, incluida su reina,

murieron.

Se celebr una fiesta en la que todos disfrutaron; y el unicornio de oro fue feliz.

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UN FANTASMA Y UN SUEO

- Luis Leal Gmez

Era s una vez un fantasma que se llamaba Moshmy. Un da, nuestro amigo

fantasmal tuvo un sueo; en l soaba con conocer a los que eran sus mayores hroes:

los transformers (sobre todo a Aironjai).

Cuando llegaba la fecha favorita de Moshmy: Halloween, ste nunca sala a la

calle a pedir caramelos como fantasma. Siempre, todos los aos, se disfrazaba de alguno

de sus transformers favoritos: Megatron, Octimus Prime, etc.

l deseaba con todas sus fuerzas convertirse en robot, se haba cansado de ser un

triste fantasma vagando por las calles con el nico propsito de asustar a la gente. Y Ya

sabes lo que dicen: Ten cuidado con lo que deseas, ya que cualquier da puede hacerse realidad.

Pues bien, esto es lo que le pas a Moshmy, de tanto desearlo, de pedir todas las

noches antes de irse a dormir el convertirse en robot, Una maana se despert con un brazo de hierro! Siendo as oficialmente un Autobot; sali ese da a la calle con el

propsito de hacer grandes cosas y hacer el bien, para as ayudar a todo el mundo.

Pero no tard en averiguar que aunque tuviera un brazo de hierro, no se poda

llegar a transformar del todo en nada. Y empez a echar de menos la sencillez de su

anterior existencia. Por lo que decidi dejar de ser un Autobot y volver a ser un

fantasma, pero esta vez un FELIZ fantasma!

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UN DIBUJO FAMILIAR

- Manuela Sanabria Moral

Mara se acababa de mudar a Alicante, el cual es un sitio con playa y vistas

preciosas; pero Mara quera volver a su antigua ciudad. En Alicante no tena amigos, ni

estaba en el colegio en el que haba estudiado toda la vida; era todo muy aburrido. En

cambio, su madre pareca contenta de vivir all.

Una tarde, Mara no saba qu hacer, y cuando su madre la vio sentada en las

escaleras sin hacer nada, la propuso ayudarla a meter las cajas de la mudanza en la casa.

En una de las ocasiones cogi una caja que tena una curiosa foto: en ella apareca una

joven y bella mujer con un precioso colgante al cuello, ste llamaba mucho la atencin

por lo grande que era. Pero por mucho que le gustara la foto no la sac de la caja, la

dej dentro por si era de su madre.

Aun as a la hora de la cena, la curiosidad se hizo mayor y Mara pregunt a sus

padres si saban algo de la misteriosa foto. El padre, muy a su pesar, dijo que s; y la

madre en seguida le cort diciendo que era un simple recorte de revista que le haba

gustado y haba enmarcado.

Al acabar de cenar se fueron a dar una vuelta para conocer el vecindario.

Acabaron en el paseo martimo y su madre centr la conversacin en lo maravilloso que

sera poder nadar con los peces que a lo lejos se vean.

Al llegar a su casa, la misteriosa foto estaba encima de su cama; pero como sus

padres le haban dicho que no era nada especial y ella estaba muy cansada, no le dio

importancia.

Al anochecer Mara vio que su habitacin estaba inundada, agua sala de las

paredes y se encontr con un ser submarino que le hablaba; dicho ser tena la mitad del

cuerpo de un pez y la otra mitad de ser humano, una sirena! Lo ms extrao de todo era

que Mara tambin poda hablar y respirar bajo el agua; la cual ya llegaba por el techo

del cuarto. Observ con detenimiento a la sirena y era igual que la mujer de aquella

foto. Le dijo que se llamaba Melody y la propuso acompaarla a su mundo, Mara sin

pensarlo dos veces dijo que s.

La chica le pregunt a la sirena que por qu haba ido a buscarla y sta respondi:

- Hace ya unos cuantos aos, en tu fiesta de cumpleaos, al cumplir cinco, una de las camareras le ech agua encima a Alba, mi gemela, quien sin saber cmo

se convirti en sirena como yo. La gente empez a gritar y a decir

monstruosidad de ella. As que nos mudamos a una ciudad bajo el mar; donde

ella tuvo una hija antes de morir...

- Entonces me ests diciendo que yo...? - S, eres ese beb. Yo soy tu ta.- Dijo.- Eres la heredera al trono de Submar,

pero para ello tendrs que derrotar a Barbie.

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Melody y Mara llegaron a Submar y fueron a ver a Aladino, quien le dira cmo

derrotar a Barbie. ste le dijo que tendra que llevar a Barbie al lado ms oscuro de unas

montaas submarinas llamadas Montaas Transformizas.

As lo hizo, en cuanto Barbie roz un poco la piedra de esas mgicas montaas

fue derrotada. Y de la explosin que se produjo sali el colgante que portaba Melody en

la foto. Ahora es tuyo, le dijo sta.

Al da siguiente, cuando se despert no se crea nada, se pens que haba sido un

simple sueo; pero al ir a lavarse los dientes vio el colgante en su cuello. Confusa corri

hasta su madre para contarle la historia y ella le dijo que todo era cierto. As que a raz

de lo ocurrido acordaron visitar Submar todos los das.

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EL PERRO FIEL

- Alberto Fernndez

rase una vez un perro llamado Toby, y su dueo Ramn, que tena diez aos.

Un da Ramn se cay jugando al ftbol y Toby ladraba a la mam de Ramn,

llamada Mara, para que le abriera la puerta. La mam le abri la puerta para que fuera

donde estaba Ramn. Mara no saba nada as que sigui a Toby para ver qu pasaba.

Entonces cuando llegaron vio que Ramn se haba hecho dao en la pierna y no poda

andar.

Avis al padre, Alberto, para que fuera en el coche y le llevara al hospital. All le

revisaron la pierna y el tobillo. Se haba hecho un esguince.

- Le pondremos muletas.- Dijo el doctor.- No podr subir ni bajar escaleras, as que incluso en el colegio tendr que coger el ascensor. En casa, para que suba

y baje las escaleras le cogis las muletas y que se agarre a la barandilla para

andar a la pata coja.

Y as, Ramn y Toby vivieron muchos ms aos, (pero Ramn se recuper a las

pocas semanas, eh?)

Colorn colorado este cuento se ha acabado!

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DEDICATORIAS

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DEDICATORIAS

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