49-El Lab Oratorio Del Ajedrecista

8/4/2019 49-El Lab Oratorio Del Ajedrecista

1/75

COLECC!ON

E S C A Q U E S

A . S u e t i nl a b a r a t a r i a

d e la j - d r e c i s t a

C O L E C C I O N E S C A Q U E S


2/75

A . SUETINEL LA BORA TORIOD EL A JE DREC IS TAAlexis Suetin representa uno delos mas firmes pilares sobre losque se sustenta 1 2 1 ya legendariasupremacfa sovietica en el ambitodel ajedrez. A su faceta como ju-gador, en donde ha alcanzado lacategorfa de Gran Maestro, ha uni-do la labor de instructor en las di-ferentes escuelas en donde los prin-cipiantes pueden desarrollar condi-ciones y aptitudes. Todo ella Ie havalldo el prestigio de que hoy gozaen todo e[ mundo. Paralelamente,Suetin ha sabido plasmar su expe-rlencla en dlferentes obras hastalagrar constitulr toda una teortaencamlnada a la formaci6n, en suvert iende mas s6Jida, del Jugadorde ajedrez.

EL LABORATORIO DEL A JEDRECISTA

En esta obra no se analiza especffi-camente nlnguno de los momentoscrltlcos que pueden tener lugar encualquier momento de la partida.Su objetlvo es englobar una ingen-te cantldad de temas a fin de otor-gar al lector los mas arnpllos ca-minos de perfeccionamlento. Deesta forma aparecen anal Isis deposlciones, metamorfosis de lasaperturas. temas relativos al sacrl-f lcio, materializaci6n de las venta-[as, estudios sabre posiciones atra-sadas. etc .. en un ingente, peromagistralmente estructurado, mo-saico de extremas posibilldades.Cublerte de Geest/Hoverst8d


3/75

A . SU ETIN

E L LABORATORIODEL

AJEDREC IST A

ED IC IONES MARTINEZ ROCA , S . A.BARCELONA


4/75

Titulo original: Laboratoria schajmatistaTraducci6n del ruso per Agustin PuigRevisi6n tecnica de Jose Luis Brasero

INDICE

Pro logo 7FORMAS Y MEDIOS DE PERFECCIONAMIENTO 9Alfa y omega del razonamiento en ajedrez 9La cornblnaclon y el calculo 16l.Por que tienen desculdos los maestros? 20Metodos de adiestramiento de 1a vision combinatoria 24EI valor recfproco de las plezas 27EI sacrificio por la posicion 32EI anallsls de las posiciones tfplcas 36EI rnetodo de valorar la posici6n 47La metamorfosis de la posicion 53La materiallzaclon de la ventaja 59La elecci6n de los movimientos 67EI anallsls de las partidas aplazadas 76LA TEORIA DE LAS APERTURAS Y LOS MEDIOSDE PERFECCIONAMIENTO 85Principlos fundamentales de la apertura 85Las aperturas cerradas y las ablertas 91Consejos practlcos 98EI desarrollo de la teorfa de las aperturas 100La relaci6n entre la apertura y el medio juego 107

(C ) 1974, Ediciones Martinez Roca, S. A .Gran Via, 774,7. - Barcelona -13I SBN : 8 4- 27 0- 02 52 -1Deposito Legal: B . 1 41 85 -1 98 0GrMieas Diamante, Zamora, 83, Barcelona - 18Impreso en Espana - Printed in Spain

EL LABORATORIO PARTICULAREI estudio de las partidas propiasEI estudio de la literatura y de las partidas

de los maestrosForrnacldn del repertorio de aperturas

118119125137


5/75

PROLOGO

Esta obra tiene por objeto poner de manifiesto los elementoscon que el ajedrecista, cualquiera que sea su categoria, debetrabajar para perfeccionarse; pues aun el mejor data do de ta-lento no podra desarrollarlo arm6nicamente sin una preparaci6norient ada y justa. En el ajedrez, como en la music a, es necesarioun trabajo sistematico y rninucioso para alcanzar un alto nivelartfstico, La labor de perfeccionamiento de un ajedrecista de ca-tegoria superior es compleja y heterogenea, Varios componentesde la preparaci6n estan estrechamente ligados can la practica.De ellos se habla en los dos primeros capftulos, que tratan sabreel perfeccionamiento en la apertura y en el media juego.

En e1 capitulo tercero se analizan algunos aspectos del ejer-cicio individual que, aunque acaso no esten tan relacionados conlos problemas practices, son imprescindibles en el desarrollo delajedrecista; desarrollo que puede asegurar s610la adecuada y con-veniente combinaci6n del juego practice con el ejercicio analftico:10 primero debe ser el punto principal de referenda en 1a eiecu-ci6n de 10 segundo.

A este respecto quisiera hacer unas advertencias a todos aque-110sque creen poder aprender a jugar guiados s610 de los librosy a quienes les espantan las derrotas:

[No ternais perder una partida!rTened confianza en vosotros mismosl[No huyais de las cornbinaciones ni de las entregas de ma-

terial!7


6/75

El legado de Reti casa aquf perfectamente:Antes de optar por el [uego de posici6n es necesario apren-

der a combinar. Esto tal vez os baga perder varias partidas; peroos ensefiara a jugar al ajedrez.s

Perfeccionarse significa ir solucionando los problemas que vanplanteandose y que no hay que buscar en el ajedrez, por cuantose presentan a cada paso al [ugador, Par elio, el medio de resol-verlos y el discurso del pensamiento del ajedrecista son dos temasen que nos ocuparemos seguidamente.

Aunque en rasgos generales, los tres capftulos de este libroabarcan una serle de problemas, que forman el contenido deltrabajo del ajedrecista en su laboratorio artfstico.

FORMAS Y MEDIOS DE PERFECCIONAMIENTOAHa y omega del razonamiento en ajedrez

De acuerdo con nuestro prop6sito intentaremos primero de-finir los componentes de laexpresi6n erazonamiento en aje-drez: expresi6n que, por 10 de-mas, es sobradamente conocida:valoraci6n de la posici6n ycalculo de variantes.Empecemos par analizar el

siguiente caso practice.En el campeonato por equi-

pas de la U.R.S.S., celebrado enRiga el aiio 1968, los j6venesajedrecistas Karpov y Mikliaievaplazaron su partida, perte-neciente al encuentro decisi-vo por el primer puesto entrelos conjuntos Burevestnik yTSKA.Karpov, componente del

TSKA, se fue con buen estadode animo a casa. Realmente, la

8

posici6n de Mikliaiev inspira se-rios temores.

Diagrama num. 1

Esta posici6n invita a efec-tuar el movimiento 43. C3C!;de ese modo, los peones negrosestaran amenazados.La reanudaci6n de la partida

9


7/75

revel6 la excelente tecnica delas blancas; por 10 cual las ne-gras pronto hubieron de acep-tar 10 inevitable, y la resistenciaque opusieron no hizo sino pro-longar materialmente la par-tida:

43. D2C44. DXP DxD45. TxD TST46. TIA T8A47. C2R!Esta maniobra -del caballo es

decisiva, pues facilitara ocuparel escaque 5A en el momen tooportuno.

47. T8T48. C4D RIC49. C5A! T3T50. R2A!El rey blanco participa deci-

didamente en el juego.50.51. R3R52. pxA53. R4D54. A2R!55. AxPT

A3CAXCT7TT8TT7T

La superioridad de las blan-cas es decisiva, ya que las ne-10

gras no podran impedir el avan-ce de sus peones.

Las negras se rindieron.Desde luego, las blancas hi-

cieron valer su ventaja. Perovolvamos a 1a posici6n inicial ,y veamos 10 que podia habersucedido.La posicion de las negras no

es tan vulnerable como parecea primera vista, ni realmenteestan condenadas a una derro-ta lenta. Pues el dispositive delas blanc as tiene bastantes pun-tos debiles: sus peones puedenser atacados; ademas, debencontar can la posibilidad de queaquellas contraataquen en elflanco de rey, por cuanto sutorre esta situada en la septi-ma horizontal. Si la dama ne-gra hubiese entrado en juego,el contraataque habria side realy efectivo.EI lector objetara:Estas consideraciones gene-

rales estan bien; pero, despuesde 43. C3C, Lc6mo rechazar laamenaza 44. DXP+?Con todo, las negras tienenposibiIidades de hacer contra-juego, mediante 43... , T6TI;de ese modo, atacan inmediata-mente el eslab6n mas vulnera-ble de la cadena de peonesblancos; a saber: el pun to 3AD.Si las blanc as retiran la dama

para defender dicho punto con

55.56. T4A57. R4R58. P6A59. R5A!

T7TRT7D+T6DTxPA

Este movimiento es un ins-tructivo ejemplo de realizaci6n:el rey blanco penetra en el dis-positive de las negras, y tomaactivamente parte en este ata-que irrechazable.

59. T6R60. TIA C2D61. TIC+ RIA62. TITD T4R+63. R6C TIR64. T7T TID65. T7AICon este movimiento, las

blancas neutralizan todo inten-to de contraataque adversario,mediante el avance del pe6nAD.

65. RIC66. R5C RIT67. A6C RIC68. P5T RIT69. P6T P6A70. TXP TIAR71. P7A.

el movimiento 44. D2D, las ne-gras activaran sus fuerzas pormedia de 44. . .. , D2C!, amena-zando con tomar la iniciativa,La variante principal se pro-

duce despues de 44. D XP +,DXD; 45. TXD, A2D!.Esto representa la primera

sutileza tactica, Es menos cla-ro jugar 45... , TXP, pues si-gue 46. R2Al.Las blancas prosiguen 46.

T6T +, porque antes de tamarel pe6n 3D han de lograr queel rey negro vaya al pun to lCRo al 2CR, donde sera atacadopor el caballo.46. . .. , RIC; 47, TXPD,

TXP; 48. CXP, T8A!; 49.C6A+, R2A!.Aqui se produce un intere-

sante momento tactico: en elcaso de 49.... , R2C; 50. CXA,TXA+; 51. R2A, P6A; 52-C XC, P7A, no es convenienteel movimiento logico 53. C3D?,debido al inesperado contragol-pe combinatorio 53.... , T7D+,tras 10 cual se vera claro quelas blancas pierden (54. R3R,TxC+1 0 54. RIR, TxC, yestas no pueden defenderse dela amenaza T8D+ y P8A=D).ASI y todo, la variante 49. . ..,R2C no es satisfactoria, pueslas blancas pueden jugar 53.

11


8/75

T6AD!, P8A=D; 54. TXD,T X Tj 55. R3R, Y el final serfadesesperanzador para las ne-gras.50. CXA, TXA+; 51. R2A,

R2R!..Estos movimientos son forza-

dos y han sido calculados conprecisi6n (este analisis se debea los grandes maestros E. Ge-ller y S. Fiihrmann).52. T6R +, R XC; 53. R2RH.Y son la s blancas las que han

de procurar salvarse. No con-viene 53. T xC, pues sigue 53.... , P6A!, y el pe6n negro setransforma en dama.53. ... , T5Dj 54. T X C, P6A;

55. P6D, can 10 cua! se logranlas tablas.Esto demuestra que antes de

adentrarse en la posiei6n deladversario es necesario eombi-nar e1 calculo concreto de lasvariantes valorando la posicion(peones y puntas vulnerables,actividad de las piezas, etce-tera).La posici6n de las negras era

defendible, y no par los ar-tificios fortuitos, producto dela imaginaci6n del ajedrecista,sino por los diversos recursosdefensivos y de eontraataqueque entrafia la posicion de laspiezas. En el caso que nos ocu-12

pa, el contrajuego de las negraspudo haber consistido en 1aacertada posici6n de su torre yen e1 avance del pe6n AD, y laposici6n de 3U caballo en elpunto 4R era un importantefactor defensive. Justamente,estos faetores objetivos de laposici6n se han mantenido conclaridad en el analisis que he-mos hecho.Este caso patentiza, sobre

todo, 1a importancia que tieneun diagnostico correeto, ba-sado en una minuciosa valera-ci6n de la posicion; ademas,pone de manifiesto que 1a sim-ple 16gica no habrfa sido sufi-ciente para haeer tal diagnos-tico,En las situaciones complica-

das es importante intuit las su-tilezas que entrafia la posici6n,10 eua1 no hizo el que jugabalas negras, Pues s610 el fino sen-tido para intuirlas pudo haberdado a las negras la posibilidadde hallar la maniobra 43. . .. ,T6T! Y luego, haber desenreda-do paulatinamente la madeja delas variantes que hemos vista.El fino sentido de la posici6n

no tiene caracter rnfstico, sinoque se logra por Ia practica, ye) grado de su desarrollo evi-deneia la capacidad del ejedre-

cista. No es fortuito, por ejem-plo, el heche de que la exce-1ente intuiei6n que tuvo Capa-blanca respecto de la posici6nfuese muy notoria.Pero esto no quiere decir que

la valoraei6n haya de ser auto-matica ni que asegure siempreel hallazgo de los mejores mo-vimientos. Pues a veees ocurreque el ajedrecista intuye per-fectamente el eontenido de 1aposicion, mas no cuenta conciertas menudenciase de lasvariantes concretas. En tal caso,las consecuencias son fatales ypueden presentarse antes queeualquier otro error en la valo-raci6n de la posici6n.He aquf un ejemplo que nosofrece una partida Kupreichik -Tahl (Sochi, 1970).

Diagrarna num. 2

El ataque de las blancas casino compens a el caballo que hanentregado. Las negras advirtie-ron pronto esta eircunstancia,luego su valoraci6n fue acerta-da. Pero en 10 tactico ereyeronque su plan defensivo era massimple de 10 que fue realmente.Las ocultas amenazas de las

blaneas no se deben subestimar.Por 10 tanto, puede que el con-trasaerificio 22.... , D3Cl? fue-se el medio mas eficaz para SO!-tearlas. En caso de 23. A XD,A X A, las negras dispondrfande Ia seria amenaza 24.... , C5C,a la 24.... , A xC Y 25.... ,C4D, 10 eual les ofrecerfa bue-nas perspectivas.La partida prosigui6 as!:22.23. T3C

D2CC4A?

Este es el momento esencialde 1a eontienda. La posici6nesta tan saturada de motivoseombinatorios concretos que suvaloraci6n parece quedar rele-gada a segundo termino, Al me-ditar sobre su vigesimo segun-do movimiento, las negras sedispusieron a proseguir 23. . .. ,A3C; pero, analizando mas decerca 1a posici6n, se les figur6esta fantasmag6rica variante:

13


9/75

24. T7Rl, AxC; 25. AxPC,AxA+; 26. RIT, RIT; 27.AXPA!, C5R?; 28. DXP+!!,R X D; 29. A8C+! y 30.T7T mate!Esta circunstancia influy6 en

la opcion por el rnovimiento 23.... ,C4A?, que produjo la catas-trofe de las negras. Con todo,convenfa haber hecho 23. ... ,A3C, can la condicion de noproseguir 27.... , C5R? sino 27.... , C5C!, para responder a 28.A6C can 28. ..., T2AR!; 29.TxT, CXD; 30. TXP+, RIC;31. A4R +, RIA; 32. A X D,T X P, Y las negras ganaban lapartida.Despues de 23. ..., C4A1,

Kupreichik realize con eficaciasu ataque:

24. CxC PXC25. P5A! PxA26. PxP3C PAXP27. AxPC RIT28. DXT+ CIC29. A5A! TIC30 . TSR D2AR3 1 . T3T!!

Y las negras se rindieron.El presente ejemplo indica la

existencia de muchas posicio-nes, cuyo principal eje de va-loraciones no es el calculo delos faetores de la posicion sino14

el arte de calcular anticipada-mente las variantes y la visi6ncombinatoria.Por 10 tanto, el pensamiento

del ajedrecista consta de doscomponentes fundamentales: elcalculo de las variantes y la va-loraci6n de la posicion, los cua-les determioan el contenido deljuego, es decir, la estrategia yla tactica,El plan, 0 metoda de orien-

taci6n hacia un objetivo deter-minado y que se cine a las ideasde los momentos tactic as de laposicion, se asienta en la basede la estrategia.Se conocen muchos planes es-

trategicos tfpicos, Pero en labase de la estrategia, todos ellosse apoyan en el ataque 0 enla defensa. El notable investiga-dor ajedrecista aleman Guiller-rno Steinitz formu16 los princi-pios de estos importantfsimosprocedimientos estrategicos, quetodavfa estan en vigor.Antes de formularlos, anali-

z6 detenidamente las partidasde Morphy, EI estudio de es-tas partidas y de otros materia-les, aparte sus propias observa-ciones y su practica, 10 llevarona la conclusion de que la parti-da de ajedrez esta sujeta a cier-tas leyes,

EI ataque puede llevarse ferlizrnente a termino si el atacan-te tiene mejor posicion.Por 10 comun, esta' ventaja

posicional se logra con la acu-mu1aci6n consecutiva de 'Venta-jas, a1 parecer pequefias e in-significantes. Aquel que tieneventaja -dice Steinitz- estaobligado a atacar si no quiereperderla.Atiende particularmente al

estudio de los principios de ladefensa. Somete a un analisiscrftico las partidas de sus con-temporaneos, y saca la conclu-si6n de que los brill antes ata-ques y combinaciones de losmaestros de aquel entonees tu-vieron por 10 general exito, de-bide a la poca eficaz defensade sus contrincantes, y por nohaber investigado suficiente-mente los principios defensivos.Considera que el principio

fundamental de 1a defensa es laeconomia de los medics defen-sivos. Todo aquel que se ve for-zado a defenderse debe cederalga, pero hacerlo comedida-mente.Tambien analiza aquellas po-

siciones en que las posibilida-des de ambos eontendientes sonmas 0 menos iguales y en quesucede la lucha de maniobras

para acumular pequefias venta-jas: la de la pareja de alfiles,la posesi6n de una columnaabierta, los puntos debiles enel campo del adversario, lospeones vulnerables, y asi suce-sivamente.Notamos que su teorfa sefunda en el logro de pequeiias

y prolongadas ventajas; por eso,no abarca la desacertada posi-cion de las piezas 0 1a poca mo-vilidad de las mismas en un mo-mento dado y que se puedesubsanar en los proximos movi-mientos. En cambio, considerala vulnerabilidad de la estruc-tura de peones, por cuanto sue-Ie ser prolongada y diffcil desubsanar. Los peones doblados,retrasados y ais1ados son vulne-rables, par 10 que necesitan laprotecei6n de las piezas, 10 euallimita prolongadamente la ac-ci6n de estas,Y asf, su teorfa se funda en

la tesis de que el verdadero re-sultado de una partida 10 de-termina la lucha posicional.Segun ella, el plan se apoya

en la valoraci6n de la posicion,es decir, en el calculo de lasparticularidades de la misma,En una partida, el plan de [ue-go viene a ser el punto de orien-tacion, al eual el ajedrecista se

1 5


10/75

cine de acuerdo con las condi-ciones de la contienda. EI planvaria segun varian las condicio-nes." EI plan acompaiia constan-temente la partida de ajedrez,desde el principio hasta el fi-nal. como si iluminase su cur-so. El plan se haee impercep-tible cuando la tactica, segun-do componente de la partida,representa el pape1 principal enla misma.La tactica tiene en considera-

ci6n las propiedades combati-va s de las piezas y de los peo-nes y sus particularidades. Lasideas estraregicas propuestas sellevan a la practica con ayudade los procedimientos tacticosusados en las operaciones. Lalucha tactica es el contenidodel calculo de las variantes.La base de las operaciones

tactic as es la amenaza. Las arne-nazas pueden tener diversos ca-racteres.El procedimiento tactico mas

poderoso y efectivo es la com-binaci6n, que esta estrechamen-te unida con el sacrificio dematerial. (Advertimos que losautores de manuales de ajedrezconsideran a menudo como si-n6nimos los conceptos tacti-ca, combinaclon, sacrifi-cio, celada, etcetera. La cuales perfectamente admisible en1 .1 practica, pues, aunque tienesu mas clara expresi6n en lascombinaciones, la tactic a abar-ca todas las acciones en el ta-blero de ajedrez, desde elele-mento mas simple, la jugada,hasta las operaciones mas for-zadas y heterogeneas.)

Korchnoi PetersonXXXII Campeonato de

la U.R.S.S.(1965)

Diazrama oom. 3

Por el ataque sacrificaron lasblancas una pieza, y con unabella combinaci6n culminanahora la lucha:

La combinaci6n y el calculoLas partes componentes de

la combinaci6n se repiten con-tinuarnente; par ella, saber com-binar depende no 8610 de lasdotes intelectuales, sino tam-bien de un aprendizaje apropia-do para este fin.

16

Las combinaciones, incIusolas mas simples, constan de va-rios elementos, relacionados or-ganlcamente unos can otros.La siguiente partida es sufi-

cientemente ilustrativa.

1. D7C+ RIR2. DxA+!!En este movimiento consiste

la idea combinatoria de lasblancas, 0 sea Ia atracci6n.Atraen al rey negro a su ca-

silla 2R y realizan a 1 propiotiempo la idea de eliminar ladefensa del mismo:

2 .3. T7C+4. C6A! mate

RXDRIR

En esta combinaci6n es facilver tanto la idea clara como losmotives y el tema de la mig-rna. Los motives (esto es , lascircunstancias que facilitan rea-lizar la combinacion y que danmotive a buscarla) fueron la si-tuacion, mala y l imitada, delrey negro y el debilitamiento delas casillas 2CR y 2AR de lasnegras, Despues de 1. D7C+,las blancas obligan al rey ad-versario a entrar en una zonapeUgrosa; pero el escaque crfti-co 3AR esta defendido par ela lf il 2 R. De ahi procede la idea:eliminar la defensa y a la vezatraer al rey a su casilla 2R, 10que da a las blancas un tiempodecisive para atacar y dar mate.Conviene atender a la circuns-tancia de que la desacertadadisposici6n de las piezas negras,esto es, de la torre ID y del ca-ballo lAR, tambien son un rna-tivo combinatoric.EI tema de la combinaci6n es

naturalmente la posici6n de latorre y del caballo blancos quepermite aprovechar la limitadasituaci6n del rey negro, paraatacarle y darIe mate.

17


11/75

El siguiente ejemplo ilustra laidea de atracci6n.

Diagrama num. 4

Se logra dar mate al rey conlas siguientes y reiteradas atrac-clones:

1. A6D+2. T7C+!

TxAAxT

Aquf se ha atrafdo al alfil.

3. C2A+ CxCEn este caso se ha atrafdo

a1 caballo.

Osnos JuchtJnannVolgogrado, 1969

2. '" A6RI

Diagrama num. 5Y tuvieron que rendirse, por-

que a 3. A XT sucede 3.... ,DxT+.El ajedrecista con cierta prac-

tica en combinar crea las pre-misas para el desarrollo de lavision combinatoria y de la ca-pacidad para el calculo concre-to. Empieza a comprender laacci6n reciproca y arm6nica delas piezas: los detalles de lasrelaciones reciprocas que lepermiten barruntar oportuna-mente la existencia de una com-binaci6n y dar con ella.

Can su ultimo movimiento(P5CR), las negras crearon unaamenaza inmediata en el fIan-co de rey. Ante la apurada si-tuaci6n, las blancas tratan deenturbiar las aguas,

Zaitzev BronsteinMoscii, 1968

Diagrama num. 61. P4A AxPA

El bando blanco ya can t6can esta respuesta, teniendo encuenta la siguiente continua-ci6n:

4. T5C! mate. 2. ASRMuchas bellas combinaciones Tras ella, parece que las blan-

se basan en la lIamada idea de cas ganan calidad; mas van acobertura. Veamos una. conocer el error:18

Esta posicion esta saturadade posibilidades combinatorias,y su principal metoda de anali-sis debe ser el calculo concretode las variantes.LC6mo deben continuar las

negras7 No les conviene, porejemplo, jugar 16. . .. , .P X P1,porque sucederia 17. A4A,D x P; 18. A xP+, C2D; 19.TID, D4C; 20. P4A, D5T; 21.TIC 0 IS. . .. , T2D; 19. TID,D4C; 20. C4RI, y el ataque delas blancas serfa contundente.Si el contenido de la posici6n

se analiza detenidamente, severa que las negras puedeu re-chazar las amenazas y organi-zar un interesante contraataque.

16.17. T4T

T5D!

En el caso de 17. D3C,DSR+; 18. R2T, C5C+!!; 19.P X C, P4T!, ganarian las ne-gras.De todos modos, las blancas

no pueden evitar la derrota.17. D8R+18. CIA TxA!19. TxT DXA20. P4CD D4C21. C3R PARxP22. P5C pxp

19


12/75

Korchnoi Portisch Aqui pierden una pieza.Bevenrijk, 1968

15. PTXP DXCDiagrama num. 7 16. P3C DxPD17. D4C A3AIS. A3T C2R19. T4R D3R

23. P6T PxP Las blanc as abandonaron.24. D6A+ RID Volviendo a la posicion eriti-25. T3A P5A ca, advertimos que los motivos26. CxP D8A+ de esta complicada combinaci6n27. R2T D5A+ de las negras fueron el debili-28. RIC pxC tamiento tactico de la primera29. TxP D3D horizontal y la debilidad del a l-

fil lAD, la circunstancia de ga-El result ado de la lucha ya nar un importante tiempo para

esta decidido. situar la torre negra en la quin-ta horizontal (ataque contra el

30. D7C C2D alii! 4AD) Y la posihilidad de31. P3AD D8D+ atacar al rey.32. R2T A3D+ Otra de las posibilidades de33. P4A RlR esta combinaci6n es dar mate34. T4D DSAR en la columna TR.35. R3C TIAR Y sus principales ideas fue-36. D6A AxP+ ron la distracci6n, eI doble gol-37. R4T P4C+ pe y la atracci6n (variante 18.3S. RST C3A+ ... , C5C+: 19. P X C, P4TRI).39. R6T P5C+

El gran maestro Korchnoiesta considerado como un tacti-co notable .En esta posici6n puede decir-

se que la lucha esta en su co-mienzo, y las blancas tienenmejores perspectivas; conti-nuando sirnplemente 13. D2R y,despues, C3R, sacarfan ventajaen la lucha por la posicion, de-bido al dominio de los puntos5AR y 5D.Pero tienen un descuido inex-

plicable. No prosiguieron 13.D2R sino 13. C5D11. Evidente-mente, no advirtieron 1a coati-nuaci6n:

LPor que tienen descaldos los maestros1Ya se ha dicho que 1a aten-

ci6n elemental, 0 sea 1a habi-lidad para ver los peligros in-minen tes, es el principio de 1adestreza tactica del ajedrecista.Sin embargo, Lpor que cometenerrores increfules los ajedrecis-

tas, incluso los m a s destacados7A modo de ejemplo veamosunos casos sorprendentes.En la practica, los descuidos

de los maestros y grandes maes-troses un fen6meno regular,aunque poco frecuente.

1 3 .14. PxA

AxeP6C

20

Las negras mantuvieron suventaja material y la materia-lizaron pronto y con fortuna.La practica ensefia que el nu~

mero de descuidos irreparablesaumenta considerablemente enel fragor de la lucha y en lascomplicadas situaciones del me-dia juego, donde la limitaci6nde tiempo para pensar ocasionatoda suerte de alucinaciones.

Zaitzev GellerRiga, 1968

Diagrama nUm. 8

2 1


13/75

Cautivadas por su plan ofen-si'Vofalto de realidad en el fIan-co de rey, las blancas prosiguie-ron imprudentemente:

20. P4AR1

Lo oportuno era reconocersus escasas posibilidades y pro-seguir 20. P X PRo Sin duda, ad-virtieron que las complicacio-nes redundarian en favor deellas si sucedfa 20. . .. , PC XP;21. DXP, PRXPD; 22. AXP!o 20 ... , PRXPAj 21. AxP,P4C; 22. A X PC, P X A1; 23.DXP+.Pero no advirtieron una po-sibilidad ...Se prosiguio:20. PCxP21. DxP PxPA22. AXP P4C!Las negras han atrafdo a la

dama blanca de la diagonal1AD-7TR.

23. P5R C3C4D24. D3A CxA25. PXC pxpEl bando negro rechaz6 las

simples amenazas de su adver-sarlo e hizo real y efectiva suventaja.22

Veamos otro ejemplo de lapractica del destacado granmaestro Geller. Pero aquf re-presenta otro papel.

25. TXD26. TxP

CxDCXT

En surna, las blancas se que-daron con una pieza de meno sen la fase final. Pero 1a aven-tura no termin6 aqui: por suparte las negras cometieron al -gunos errores elementales y ce -dieron la ventaja. Por 10 que lapartida finalize en tablas.Para citar un ejemplo retros-

pectivo, veamos el tragico des-cuido que tuvo Chigorin en ladecisiva partida con Steinitz,valedera para el campeonato delmundo de 1892.

Geller MatulovicSkopje, 1968

Diagrama num. 9

Diagrama num. 10

En esta posicion se prosigui6:22. P5D23. PXP11En este lugar procedia haber

jugado 23. CXP, CXC; 24.TXT+, TX~ ~. px~ &ese modo, el juego se equilibra-ba. Mas las blancas perderanahora una pieza. Esta posicion se produjo al

trigesimo primer movimiento.Las blaneas llevan la ventaja deun caballo por un pe6n de me-

23.24. TxT

TxC!CXP

nos. La suerte de la partida pa-recta estar eohada, pues la vic-toria se lograba simplementecon 32. T X PC, por cuanto a 32.... , T xC habrfa sucedido 33.P XT, T XA; 34. P7R, AIR;35. TIAD, Ya 32... , T X PD se-guirfa 33. C4A.Pero la partida prosigui6 asf:32. A4C11Semejante descuido no tiene

explicacion, y menos teniendoen cuenta que el alfil defendi6el pe6n 2TR en el transcurso desiete movimientos. Aquf se damate en dos [ugadas,

32. TxP+Las b1ancas se rindieron.De esta manera, Chigorin aca-

so perdi6 uno de los puntosmas valiosos a 10 largo de sucarrera ajedrecista.

L Cual es la causa de los des-cuidos?Hay infinidad de ellas: la dis-

tracci6n innata del sujeto: elcaracter inquieto 0 la excesivaconfianza en "S1mismo; la vi-si6n combinatorla insuficiente:la lenta adaptaci6n al contenidode la lucha, y as! sucesivamente.Sabido es que los ajedrecis-

23


14/75

tas que tienen mas descuidosson aquellos que aprendieron ajugar relativamente tarde, inde-pendientemente de su talento ycapacidad de juego, Para citarun ejemplo observamos que aje-drecistas de nota, como Chigo-rin y Rubinstein, cometieronerrores inconcebibles. En cam-bio, Capablanca aprendi6 a [u-gar a los cuatro afios de edad,y casi no tuvo descuidos en eltranscurso de su activldad aje-drecista.

A la pregunta de par que setienen descuidos se puede con-testar con est a otra pregunta:Lpor que son inevitables losproductos defectuosos en todarama de la producci6n?En el pensamiento creador,

los descuidos del ajedrecista

vienen a ser el producto defec-tuoso del trabajo de su imagi-naci6n. Los maestros, aun losmas experimentados, son antetodo personas, y las debilidadesson propias de la especie hu-mana.Si la lucha discurre en condi-

ciones de falta de tiempo parapensar, el sistema nervioso sealtera y ocasiona, a veces, unesfuerzo excesivo y quebranta-miento. Es natural que los des-cuidos se suelan tener en losmomentos mas importantes deljuego.La unica forma, de evitarlos

es el ejercicio diario y bienorientado, la observancia de unregimen deportivo severo y elfortalecimiento del sistema ner-vioso.

de la partida hay que ealcularvariantes mentalmente y en 'untiempo limitado. Por eso, con-viene ejercitarse en el analisisespeculativo, procurando hacerel calculo con rapidez y exac-titud. Ademas, en dicho analisises necesario pulir la tactica cal-culatoria, mediante la fijaci6nde las posiciones mas impor-tantes que sirven de pun to departida y que van presentando-se en el transcurso del calculo,el cual se debe ampliar todo 10que se pueda.La capacidad humana para

elegir un optima mimero de va-riantes que tengan valor prac-tico y calcularlo es 10 que dis-tingue al hombre de la maquinacalculadora, Esta cualidad seperfecciona igualmente en elproceso del analisis.Aparte del analisis de parti-

das, tambien conviene solucio-nar especulativamente proble-mas y estudios can ayuda delos diagramas; sohre todo, esimportante la soluci6n de estu-dios porque contienen general-mente un complejo de proble-mas tacticos, y su analisis estitil para el estudio de los fina-les de partida,Veamos un ejemplo, cuya

autor es A. P. Guliaiev.

Metodos de adiestramtento de la visi6n combinatoria

En su perfeccionamiento, losajedrecistas j6venes deben aten-der principalmente al desarrollode sus aptitudes para pensarconcretamente. Lo eual se refie-re, sobre todo, a la visi6n com-binatoria y al arte de calcularlas variantes. Estas dos cualida-des dependen mueho de un ejer-cicio bien orientado, y su de-24

sarrollo se logra can el trabajoanalitico; para esto, se han deelegir aquellas posiciones queesten saturadas de posihilidadescombinatorias.Pero tengase presente que el

metodo de ejercicio analfticocan ayuda de las manes no essuficiente para el ajedrecistapractice. Pues en el trancurso

Diagram nam. 11

Esta posicion es artificiosa;en ella ganan las blancas, cuyaventaja material es considera-ble. A pesar de 10 cual han detornar medidas energicas anteel peligro de que las negrastransformen sus peones 7C y7T en dama.

1. C3RDiriase que este movimiento

despeja la situaci6n, por cuan-to impide la conversion de lospeones citados, Pues a 1. ... ,P8C=D sucede 2.A5D+, D7C;3 CxD, pXC; 4. T4T!, Y as!sucesivamente, A las negrastarnpoco les da tiernpo de trans-formar su pe6n 7T, porque a 1.. . 0 ' R8C puede seguir 2. C4C,P8T=D; 3. T7RI, y las negras

25


15/75

no pueden defenderse del mate.Sin embargo, todo esto es

ilusorio. Los acontecimientosprincipales se desarrollan enuna defensa mas eficaz:

1. P3A!2. Ale P4D3. T7TD!

La torre se propane trasla-darse a la primera horizontal,para tamar parte en el ataquecan que se dara mate.Can todo, la solucion del pro-

blema no esta a la vuelta dela esquina, El hallazgo de lassiguientes partes de este estudiorequiere una vision combinato-ria bastante desarrollada.

3 .4. TIT!

PSC=D

Se ve claro que los movimien-tos de las negras van a ser for-zados. Desde luego, no se pue-de hacer 4. ..., DXC, debido a5. A4R! mate.Se dirfa que la lucha esta de-

cidida; pero las negras tienenun ingenioso recurso:

4 . P4ClAhara, todas las piezas ata-

2 6

cantes, la terre, el alfil y el ca-ballo, han de permanecer inm6-viles en sus posiciones respec-tivas. {Mas tienen una pieza li-bre, el rey! La victoria se al-canza con el movimiento:

caracterfsticos que se observendurante el analisis.Hay un largo trecho desde

que se aprende a solucionarproblemas y estudios y a com-prender las combinaciones delos maestros hasta que uno pue-de realizar sus propias cornbi-naciones. Y no s610 se trata dedesarrollar 1a capacidad paracombinar, sino tambien para

5. R2T!Los ultimos movimientos re-

present an un curiosa tiroteocon igualdad de oportunidades.

5 .6. A2A+7. AIDS. A2R+

D7A+D8CD7A+DSC

dirigir la partida por un cauceestrategico determinado. Para10 cual el ajedrecista ha de sa-ber sen t ir la posici6n. Es nece-sario aprender a valorar conprecision y objetividad las posi-ciones que van presentandosedurante el [uego y el analisisposterior.Precisamente vamos a hablar

de ello.

El valor reciproco de las piezasLos ajedrecistas empiezan su

aprendizaje can 1a escala de va-lores correlativos de las piezas.Ya en las primeras lecciones, e1aficionado sabe que el pe6n esla unidad de medida en dichaescala. La pieza menor, sea ca-ballo a alfil, vale 3 unidades;la torre, 4,5; la dama 9, y elrey se halla en una situaci6nespecial, por cuanto es diffciltraducir su valor en cifras enla apertura y en el medio juego.Pero en el final, donde rara vezse halla en trance de mate y esuna pieza activa, su equivalen-te numerico es 5 unidades.En la practica, el ajedrecista

pronto saca la consecuencia deque la escala de valores gene-ralmente admitida es bastante

Ahara va a producirse el de-senlace.

9. A3AI mate.Todos los metodos de ejerci-

cios del razonamiento concretoque hemos enurnerado son muyimportantes, aunque auxiliares.Porque el maestro principal hade ser la practica. Las leccionesde tactica hay que tomarlas enel proceso de la partida y en elconsecuente analisis de 1a mis-rna. Al jugar y analizar unapartida, es util anotar las va-riantes, calculadas en 1 8 1 trans-curso del juego, y los errores

convencional y extensiva. Contodo, no se puede prescindir deella por ser el primero y casimas importante punta de orien-tacion.Queremos atraer la atencion

del lector a ciertos problemasreferentes al valor real de laspiezas.El caballo y el aIm

L Cual de estas piezas es masfuerte?Esta cuesti6n ha preocupado

siempre a los ajedrecistas de to. .das las categorfas.En cualquier manual se pue-

de leer que cada una de estasdos piezas equivale a tres peo-nes.

2 7


16/75

Pero si se profundiza en lafuerza correlativa de cada unade elIas, no sera diffcll descu-brir una serie de detalles quenos autorizara para decir quetal equivalencia es inexacta.Los alfiles son muy podero-

50S en sus acciones de largo al-cance.

Sacharov ChierepkovXXXVI Campeonato de

la U.R.S.S . (1969)Diagrama nam. 12

Los alfiles blancos hacen unpapel decisive en la realizaci6ndel ataque.

3S. AXP+!36. TXT37. T4T+.

RxAAXT

28

Y las negras abandonaron por-que a 37. ..., RIC sigue 38.T8T+, RXT; 39. D6T+ y 40.DxP! mate.Al propio tiempo hay muchas

posiciones, en que los caballostienen una potencia colosal.Esto ocurre particularmentecuando la contienda se desarro-lla a corta distancia, EI saIto deestas piezas es tan peligrosocomo inesperado.A este respecto veamos un

caso aleccionador.

ll. P4AD1A 10 que sucedio el inespe-

rado salto de caballo:12. C6A!Ahora se ve que no convie-

ne responder con 12. ... , D X D,porque sigue 13. TXD, A2C (0A2D); 14. CSDI, Y no se puede14. ..., AX C, debido a 15.C7A+, RIA; 16. CxT.

12. D2D13. CXPRl!Kholmov Keres

XXVI Campeonato dela U.R.S.S. (1959)

Este caballo hace maravillas.Seguro que en la vasta colec-cion de combinaciones hay po-cas de ellas en que un caballomanifieste un poder tan des-tructor.

Diagrama num. 13

1 3 . RxeTampoco es meier 13. ...,D XC, pues sigue 14. CSD, a 10

eual no se puede responder con14... , D2D, porque sucede 15.AXC y 16. C6A+, y las ne-gras pier den la dama.

14. AxC15. D3A16. C5D+!

AxAA2CRRID

El bando negro no advirti6el peligro y jug6:

17. TDID Ale18. D3CD!La potencia del caballo hace

que las negras no puedan evi-tar una perdida de material con-siderable.

18. A3AD19. cxe PXc20. DXPAR AXPR21. TxD+ AxT22. TxA.Y las negras no tardaron en

rendirse.Entonces, lque pieza es masfuerte, el aifil 0 el caballo?Depende del caracter de la

posicion. Los alfiles tienen ungran poder en posiciones abier-tas; por el contrario, los caba-llos son muy fuertes en la lu-cha a corta distancia y en po-siciones cerradas.Queremos seiialar algunas

condiciones complementariasque ha establecido la practica yque se deben tomar en consi-deraci6n al valorar el poder re-cfproco del alfil y del caballo.

1) La potencia del alfil a lar-ga distancia se pone de mani-fiesto cuando el juego se de-sarrolla en los dos fiancos y enla fase final de la partida.

2 9


17/75

Diagrama r m m . 14

2) La importancia del caba-llo aumenta en las posicionescerradas en que las cadenas depeones no tienen movilidad; so-bre todo, cuando el alfil du-plica la acci6n de sus peones,es decir, cuando se ve forzadoa limitar su movilidad a la desus peones; por 10 tanto, es in-ferior al caballo en este caso.

Diagrama ntim. 15

30

En el curso de la historia delajedrez ha habido dos tenden-cias entre los grandes maestros:unos han preferido jugar can losalfiles y otros can los caba-llos. El notable ajedrecista rusoM. I.Chigorin fue partidario delos caballos hasta el pun t o deformar una serie de sistemas deapertura, can ellos. En cambia,sus competidores, Steinitz yTarrasch, prefirieron los alfiles,Entre los contemporaneos tam-bien hay diferencia de opinio-nes: B. Spassky y M. Tahl pre-fieren los alfiles, y T. Petros ianse muestra partidario de los ca-ballos.

Chechelian KachaievCam peonato de juveniles de la

Uni6n Sovietica, 19691 . P4R P3R2 . P4D P4D3 . C2D C3AR4. P5R CR2D5 . P4AR P4AD6 . P3A C3AD7 . CD3A D3C8 . C2R

Tras estos conocidos movi-mientos de la defensa frances a,e! bando negro no prosigui6 de-sarrollando Ia apertura median-te 8.... , P xP Y 9... , A5C+,sino que hizo la siguiente ma-niobra can el caballo:Los cambios acertadosy desacertados

Hayen dia, el cambio de pie-zas es un importante metodade juego de posiciones. A lapregunta: LEn que consiste latan pregonada ventaja de la pa-reja de alfiles? J) un destacadogran maestro contest6: Estaventaja es real y efeetiva euan-do la situacion aconseja cam-biar uno de los alfiles propiospor un caballo del contrin-cante.Veamos un caso instructive

perteneciente a 1a practica delos ajedrecistas j6venes.

8 .9. P3CR

P4TRC2R'?

Eso no se puede considerarde decisi6n sin un plan concre-to. Las negras quieren situarcste caballo en 1a easilla 4AR,para reforzar el fIanco de reyy proseguir luego C2D-1C-3AD,P3CR, A2CR Y 0-0-0, levantan-do asi un basti6n seguro, IPeroel tiempo es muy valioso en elajedrezl El conocido maestroS. Belavenets llama al ajedrez( tragedia de un tiempo,

En el caso que nos ocupa esprecisamente Ia falta de tiempo10 que malogra el plan de lasnegras.

10. A3T P3C11. 0-0 C4A

Diagrama ntim. 1 6

12. AxC!Este cambia es oportuno y

tiene par objeto abrir el centro.12.13. P4A!

PCxA

Esta idea es excelente. Apro-vechando La desacertada posi-cion de las piezas negras y elretraso en su desarrollo lasblancas empiezanuna fuerteofens iva en el centro.

31


18/75

13. '" PAxP.A 13. ..., PD x P sucede 14.

P5D!, Y a 14. "J PXP sigueIS. D x P!; asf, la iniciativa delas blancas serfa contund.ente.

14. PxP A4ATras haber empezado a ope-

rar en el c entro, las blancas te-nfan que haber contado con lavariante 14. ..., P6D +; IS .C2-4D, A4A; 16. AlR, y aSI su-cesivamente. No se debe o1vidarnunca e1 Lado tactico de cual-quier plan.

15. C2 xPEste cambio es totalmente

desacertado, porque los esca-ques negros de las negras care-ceran de defensa.

16. CxA PXP17. A3R C4A

18. cscrEste movimiento causara a

las negras Laperdida de una pie-za. Se puede afirmar que la con-tienda ha terminado.

18. P5T19. AXC D3CR20. DxP PxP21. TDID pxP+22. RIT A3R23. DxPAqui, el bando negro depuso

las armas.[Lo que va de un cambio aotro!Se deben cambiar solamente

aquellas piezas del contrincan-te que ocupan posiciones impor-tantes, y se ha de tener cuida-do en no cambiar las piezaspropias que puedan ser necesa-rias y iitiles para una situaci6ndada.

EI sacrificio por la posici6nEI juego de posiciones no se

debe contraponer con el tacti-co. La entrega de material pue-de correr pareja no s610 con 10combinatorie. Con frecuencia,uno de los bandos se decide a32

sacrificar material, para hacer-se con la iniciativa 0 sacar otrasventajas de 1a posicion, auncuando no se puedan prever lasconsecuencias de tal sacrificio.

Griinfeld SpielmannSopron, 1934

Diagrama ntim. 17

12. P4R!1Esto es el principio de una

admirable combinaci6n. Obser-vernos que la continuaci6n 12.... , C3A es apropiada para pro-scguir el juego posicional. AItom ar su parad6jica decision,las negras intentaron aprove-char el ventajoso desarrollo desus piezas.

Tal decision entrafia dificul-tudes cuando la posicion es ce-rrada; can todo, decidieron pa-sar, a1 juego abierto a costa deirnportantes perdidas materia-les.

13. PAXP CxP!2. - LABDRATORIO DBL AJl!DRBCISTA

De esa manera, se entregaIimpiamente una pieza, Conesta combinaci6n se intenta queel rey blanco permanezca en elcentro. Las blancas han de acep-tar la citaci6n al desaffo; si no,a 14. A2R podrfa suceder 14.... , C5A!

14. r-xc P5DLa combinaci6n del bando

negro es intuitiva. Lo cual prue-ba 1a observaci6n hecha por suautor, el gran maestro Spiel-mann: La [ustificacion de laentrega de este caballo no sepuede demostrar analfticamen-teo En una partida por corres-pondencia, dicha entrega quizasea impugnable; pero casi siem-pre da buen resultado cuandouno lucha sentado a1 tablero yha de cefiirse a ia iimitaci6nde tiempo para pensar,Luego prosigue diciendo: Si

a cada entrega de material seIe exigiese una justificaci6n, de-mostrada incondicional y analf-ticamente, habrfa que borrar to-dos los elementos que constitu-yen el riesgo en el juego delajedrez y admitir s610 los ima-ginarios, es decir, aquellos queno se pueden considerar comosacrificios.

33


19/75

15. CID AXPR16. P4R AxPR17. C2A A4D18. D3TR D2R19. A2R?Convenfa haber jugado 19.

RID y, en el caso de 19.... ,A x PTD, 20. A4AD, mante-niendo asf Ia capacidad defen-siva de la posici6n. Ahora, elbando negro tiene medios parainiciar un ataque arrollador.

19. ... P6DI

Esto se llama sacrificio libe-rador, segun la terminologfausada por Spiellmann.Despues de 20. C XP, TRIR,

no serfa oportuno proseguir 21.001, pues sucederfa 21. ...,A5D +!, recuperando la pieza.

20. exp TRIR21. RIA AxPCD!22. TIR D3A+23. C2A ASD24. D3CR T5R!Esta maniobra es contunden-

te: a 25. A3D sucederfa 25. . .. ,T5C!.

25. P4TR34

En el caso de 25. D3AR, laeontinuaci6n 25.... , TXAl; 26.Ox T, A5A! decidiria el resul-tado de Ia partida.25.26. A5CD27. AxT28. D5C

TDIRTxT+T6R!

Despues de 28. D8C +, R2C;29. A4C, A4A!; 30. A X A,D8T +, se da mate a las blan-cas en poeas jugadas.28. TXA+29. RXT DxC+30. RID AXPC31. TIR A6A+32. A2R A6A!33. AxA DxA+34. R2A AxTY las blancas se rindieron.El sacrificio de material pOI

la posici6n suele ir acompafiadode otro problema estrategico:esto es: el caracter de la luchade piezas distintas, Par ejem-plo: la dama contra una torrey una pieza menor; la torre con-tra una pieza menor y un pe6n,etcetera.La perdida de material, oca-

sionada par la entrega del mis-rna, exige una compensaci6n.

Fs irnprescindible disponer acti-v.uncnte las piezas, para lograrla iniciativa. Si esto se cons i-guo, la contienda suele tener uncaracter tactico muy contun-d en tc y complejo en l a v al era -cion del contenido de la posi-ci{m.

Najdorf RagozinEstocolmo, 1948Diagrama num. 18

Ante el peligro de ex P+ yDXC, se dirfa que las blancaspueden sostener prolongada-mente la iniciativa. Esto haceq lle sea mas interesante el brus-co cambia que las negras pro-mueven can el sacrificio de laduma por la posicion,

1 7 . . . . CxP!

18. C6A+Las blancas han de aceptar

este sacrificio; si no, se queda-fan sin el pe6n.

18.19. TxD20. A2D

CXCTRxT

La correlaci6n de fuerzas fa-vorece un poco a las blancas.Pero importa mas el heche deque las negras tienen la inicia-tiva, y que sus piezas acttiancoordinadamen te.

20. ... C5R21. A3R C3D22. TIAD C4A23. A4AR A4D24. A4A AXA25. TxA P4R26 . MC?Durante los movimientos pre-

cedentes, las blancas han teni-do mas dificultades que las ne-gras en el desarrollo del juego.Tal vez ella sea la causa de quehayan cometido esta impreci-si6n esencial. La uuica proba-bilidad de empatar radicaba en11 continuacion 26. T XC!,PXT; 27. AXP; de ese modo,se podrfa restituir el material

3 5


20/75

ganado y simplificar la posici6n. La ventaja del bando negroes conc1uyente. Se da la curio-

26. T8D+ sa circunstancia de que la dama21. R2T P3TR blanca no ha podido abandonar28. TIA T2D su posici6n en el transcurso de29. A3R P5R veintitin movimientos.30. CIR Tl~ID La prolongada iniciativa y el31. MA A4R+ ataque insistente compensan el32. P3CR T7D sacrificio de material y consti-33. T2A AxP+ tuyen un legitime e interesan-34. R2C A4R te procedimiento estrategico,35. RIA TxT Esto prueba que el sacrifi-36. exT T8D+ oio antedicho represente un pa-37. R2R T8CD pel tan importante en la estra-38. P4C T7Cr tegia moderna,

en la radioactividad de estemetodo ... D

El desarrollo del modo derazonar sobre la posici6n se 10 -gra con ayuda del analisis deins posiciones tipicas que estanIorrnadas de cadenas de peonescaracterfsticas. A modo deejcrn plo veamos unos casos deatuque mutuo de peones en losflancos,Lasker y Capablanca reco-

mcndaron insistentemente estaclase de ejercicios,En su libro E l sentido co-

mun en el ajedrez, Lasker ana-liza la siguiente posicion pro-pia de la defensa francesa.I ancilisis de las posleioaes tipicas

Hay much os problemas refe-rentes a la posicion en los cua-les el ajedrecista debe perfec-cionarse. Por eso, conviene pre-cisar el objeto de cada uno deellos, con el fin de no desorien-tarse. Es aconsejable analizar-los uno par uno y no de unavez.Uno do e los metodos primor-

diales consiste en el analisis delas posiciones tfpicas,En su libra aC6mo he llega-

do a gran maestro, Nimzovichdice: EI examen simultaneo deposiciones, diferen tes por sucontenido, confunde las ideas,36

mientras que el estudio con-cienzudo de un solo tipo de po-siciones eleva los conocimien-tos de las mismas. Si tri, esti-made lector, analizas con la de-bida intensidad posiciones deuna clase determinada, la Hneacentral ante un ataque par elfianco, pongamos por caso, nome extrafiara que tengas unaidea mas clara de los finalesde partida. EI proceso analfti-co de cualquier posici6n tfpicaamplfa no s610 los conocimien-tos de tal posici6n en particu-lar sino tambien los de todaposicion en general. Yo creo

Diagrama l1um. 19

Esta situaci6n es peculiar ytcnsa: las blancas atacan porcl flanco del rey, mientras las

negras operan en el de damay en el centro.Veamos las variantes que

ofrecen mayor interest1) 11.... , CXA+; 12. pxC,

C3C; 13. P4D, ASC; 14. TICR,D2A; 15. A2D, C5Aj 16. P3T,CXAj 17 . CXC, Y el juego delas blancas es mejor,2) ll. ...J C3C; 12. P3T,

CXA+i 13. PXC, AlD; 14.P4C, A2R; 15. C4D!; a S 1 , elbando blanco refuerza su bas-ti6n en el centro y continuaatacando par el flanco de rey.3) 11. . .. , D3C; 12. P x P,

CXA+i 13. PXC, TXP; 14.C x PI, tras 10 cual las blancasdeben ganar,Lasker 10 resume asf: Para

tener maestria en el trato canel material ajedrecista, aconse-jarfamos al aficionado ejercitar-se frecuentemente en ensayosque tengan cierto grado de pro-babilidad y 16gica. De ese modo,enriquecera sus impresiones, in-tuira mejor las posibil idades yla plasticidad de 1a situaci6n yllegara a ser, si no artista, almenos entendido en el manejodel delicado material ajedre-cista.

37


21/75

EI pe6n m6vi1 en eI centroVeamos un ejemplo del arte

creador de Capablanca.Marshall CapablancaCompetici6n individual, 1911

Diagrama nam. 20

Las blancas tienen superiori-dad de peones en el flanco derey, y las negras en el de dama.Y asf, el objetivo de cada ban-da esta bien definido: sacarprovecho de dicha superioridaden cada uno de los flancos ci-tados.El desarrollo de los aconte-

cimientos es muy instructivo.16. TRIA?Esto es un error de princi-

38

pia. Lo procedente era el acti-vo plan 16. P4R, 17. D3R Y 18.P4A, can objeto de buscar po-sibilidades reales y efectivas eneste flanco.

30. A3A pXP31. A2R P6C32. T2D T8AD33. AID T6C34. PxP P7C35. TXP TXA

16. TDIC17. D4R D2A18. T3A P4CD!19. P3TD P5A20. A3A TRID21. TID TXT+22. AxT TID

Y las negras materializaronxu ventaja.Veamos ahara un caso opues-

to que pone de relieve la fuer-za real de un pe6n m6vil encl centro.

El banda negro ha tornadola iniciativa, L C6mo se explicael empeoramiento de la situa-ci6n de las blancas sin habercometido ningtin error?Tal empeoramiento se debe

a su plan err6neo 0, par me-jor decir, a la falta de un planconcreto. En cambia, las negrasoperan con la maxima precisi6nestrategica. Sus acciones en elflanco de dama estan orienta-das hacia un objetivo determi-nado.

Alekhine BogoljubovBudapest, 1921

Diagrama num. 21

23. A3A P3C24. D6A P6A!25. D4R D4R26. AXD DXD27. R2C T8D+28. T2A P4TD29. PxP P5C

Aquf se produjo una situa-cion analoga a la anterior; perola acertada disposicion de laspiezas blancas lleva consigo lascondiciones para una ofens iva

en el centro y en el flanco derey. En cambio, la superioridadcuantitativa de las negras en elfianco de dama es poco impor-tante, y el avance de sus peo-nes debilitara todavfa mas suposici6n.

20. P3TR!Este movimiento defiende la

casilla 4C y facilita el avancede los peones AR y R.

20.21. T2D22. DxT23. P4A

P4ATXTP5AP3C

Vemos que, en el caso de23. "1 D4A +, las blancas po-dian haber respondido con 24.D4D, proponiendo as! el cam-bio de damas, 10 que les ase-guraba una ventaja notable enla fase final de la partida.24. D4D25. P4CRI

TIAD

Prosigue el avance de lospeones blancos en el flanco derey. A las negras les va a serdificil defenderse de los movi-mientos 26. P5A 0 26. P5R y,luego, P5A.

39


22/75

25. AXP26. PXA CXPC27. R2C P4TR28. C5D D5T29. TITR DID30. AIDLas negras se rindieron.Hemos visto dos casos total-

mente opuestos: en el primerotriunfa la ofens iva en el flancode rey; y en el segundo adquie-re el pe6n blanco m6vil una po-tencia real en el centro,En posiciones as f se debe

pres tar atencion al centro. E Ibando que tiene un peon cen-tral, sea el de R 0 el de AR,trata de utilizarlo para organ i-zar una ofensiva. Y el otro ban-da procura inmovilizar el cen-tro de su adversario si la ofen-siva por el flanco no le reportaventajas reales y efectivas.El centro de peones puede

debilitarse y quebrantarse cuan-do no tiene apoyo de las pie-zas,La siguiente partida ilustra

10 dicho.Bronstein Evans

Moscii, 19551. P4D2. P4AD

C3ARP3R

40

3 . C3AR P4D4. C3A P3A5. P3R CD2D6 . A3D Me7. P3TD A4T8. D2A 0-09 . 0-0 A2A10. A2D PXP!n . AXP P4R12. A2T P3TR13. TOlR TIR14. pxp cxp15. CxC TxC16. P4A? A4A17. P4R

Las negras demostraron queel centro de las blancas no erasolido, y 10 destruyeron a gol-pes yean energfa,

17. A3C+18. RIT TXPI19. eXT Cxc20. Txe AxT21. DXA DXA.

piezas ejerzan presion en elcentro.Keres Lipnitski

XIX campeonato de la U.R.S.S.(1951)

Diagrama Hum. 22

El peon central 4R reducela acci6n de las piezas negras,mientras las de las blancas ac-nian coordinadamente,

16. ... C3CEn suma, las negras logra-ron una ventaja decisiva.Esta tfpica posicion contiene

muchas sutilezas estrategicas,10 mismo que todo problemaestrategico complejo.EI siguiente ejemplo es ca -

racteristico; en 6 1 se sacrificael pe6n central, para que las

Habfa peligro de 17 P4A! y18. P5R.

17. TDID D2R18. P3CR!Este movimiento representa

el momento caracterfstico: las

blancas entregan el pe6n 4R,con objeto de abrir el juego porel centro. Y las negras tienenque aceptar el reto, si quierenhuir el peligro que suponeeldominio espacial despues de 19.A2e v. luego, P4A.

18.19. AlA20. A2C21. exP!

expP4ARC4R

AI 'paso que se destruye elbastion de las negras en el cen-tro, aumenta considerablemen-te la iniciativa de las blancas.21. Axe22. CXC C2A23. D3e TDIC24. A2D DlR25. DXD TxD26. exA PxC27. ASDI

El bando blanco tuvo ven-taj a en la posicion.En este caso, la lucha se de-

sarro1l6en el centro. Las pie-zas negras carecieron de apo-yo, y fueron reducidas a posi-ciones aiin mas desfavorables.

41


23/75

El pe6n aislado en el centroA modo de ejemplo veamos

los metodos de lucha usados enaquellas posiciones, donde elpe6n central 4D esta aislado,sea el de las blancas 0el delas negras,Este pe6n representa simul-taneamen te la fuerza y la de-bilidad, pues facilita por unlade la posesi6n de espacio yla libertad de manlobra, y re-quiere por otro la defensa desus piezas. El bando que 10 tie-ne intenta atacar por el flanco,particularmente por el de rey,o abrir el [uego, 10 cual se con-sigue con frecuencia adelantan-do dicho pe6n a la casilla SD .

Y el bando que esta a la de-fensiva procura neutralizar lainiciativa de su adversario; paralograrlo es necesario cambiarlas piezas contrarias que se ha-ilen en accion. Otro procedi-miento defensivo importanteconsiste en oeupar un puntodebit situado delante del pe6ny ejercer luego presion sobreeste,Es posible que Steinitz ela-

borase por primer a vez dichoprocedimiento defensivo (veaseel diagram a ntim. 23).Es curioso ver c6mo neutra-

42

liza Steinitz los intent os ofen-sivos de las blancas y a la vezrealiza con precision su planprincipal consistente en parali-zar el centro.

Las negras refuerzan paulati- 25. TXP cxCnarnente la posici6n de sus pie- 26. TxC TxTzas, apuntando a las casillas crf- 27. AXT D7Rticas 4D y SD . 28. P3T P3TR

29. A4AD D6A19. D2D D3T 30. D3R D8D+

3 1 . R2T A3ADZuckertort SteinitzMatch individual, 1886 Esta precision tactica es ne-cesaria: las negras conjuran el

pcligro del salta del caballo a50.iagrama num. 23

20. A5C C4A21. P4CR1

Tengase presente que estapartida se juga haee easi unsiglo, Sin duda, Zuckertort noadvierte el peligro y, por 10mismo, va empeorando su po-sicion. Esto prueba que lasideas estrategicas de Steinitzcran una novedad en aqueltiempo.La ofens iva de los peones

blancos es aventurada, La pro-cedente era pasar a la defensi-va , prosiguiendo 21. Ax C,AXA; 22. C4R, A2e; 23. TXT,TXT; de ese modo, las blan-cas rnejoraban su juego.

I S . . . . P3CR!Sin inmutarse por la debili-

taci6n del flanco de su rey, lasnegras levantan un baluarte enla diagonal 2TR~8CD. Fijemo-nos en el importante papel querepresenta el alfil de casillas ne-gras a 1 defenderlas eficazmente. 21.

22. CXC23. C5D24 . DXT

CXPD!P4RTXTPXC

16. D2R AlA17. TRID AlC18. A2T C2RI

La situacion de las blancasvuelve a ser precaria; el fiancode su rey se ha debilitado irre-mediablemente, y va a ser elobjeto del contraataque de lasnegras.

32. A7R33. P4A

A4R+I

No convenia 33. D XA, por-que las blancas perdian la damadespues de 33.... , D8TR +; 34.R3C, D7C+; 35. R4T, DXP.+.De todas formas, el final es for-zado.

33 .34. DXA35. R3C36. R4T

AXPA+!D8T+D8C+D8R+.

Las blancas se rindieron.Desde que se jug6 esta par-

tida, primer jal6n en la bisto-ria en la evoluci6n del pensa-miento ajedrecista, los metodosde lucha, tanto ofensivos comodefensivos, se han perfecciona-

43


24/75

do considerablemente. La prac-tica ha mostrado que la inicia-tiva de las blancas puede sermuy peligrosa cuando el mime-1'0 de piezas es considerable y,10 que no es menos importante,su aocion conjunta esta biencoordinada.Alia por la tercera decada,

M. Botvinnik fue uno de losprimeros que analiza detenida-mente los recursos ofensivos delas blancas, Sefialamos que el[uego con el peon central ais-lado fue uno de los principa-les procedimientos estrategicosque Botvinnik us6 posterior-mente.He aquf uno de sus prime-

ros ensayos en este sentido.Botvinnik Batuiev

Leningrado, 1931Diagrama num. 24

44

1 . P4D P4D2. P4AD pxp3 . C3AR C3AR4 . P3R P3R5 . AxP P4A6 . 0-0 P3TD7 . D2R PXP Se admite que estos movi-S . pxP A2R mientos de desarrollo se hacen

45

17. P3A! 22. C6D A1T23. TIRI

No era conveniente prose-guir 17. cxr, TXC; 18. DXP,por suceder 18. . 0 0 ' CMD!Con este movimiento, las

blancas han reforzado su esca-que 4R y a la vez han neutra-liz ado las amenazas de las ne-gras en la diagonal 1TD-8TRde las mismas. Aqui, el bandonegro deberfa optar por la con-tinuaci6n 17. ..0' C2-4D; 18_C4R, TIA; 18. TXT, AXT, lacual equilibra mas 0 menos el[uego: pero cornete un graveerror:

Las blancas atacan de nuevolos puntos 2R y 2AR del ban-do negro, el cual no tiene re-cursos defensives.

23.24 . cxr25. DxC2

P3CDXC

Las negras se rindieron.EI pe6n blanco 4D ha sido

una importante base de apoyopara el ataque de sus piezas.Como se ha dicho, la iniciati-va de las blancas esta ligadacon la ruptura del centro enmuchos casas; ruptura que seefecnia con el movimientoP5D.EI siguiente ejemplo es ca-

racterfstico.

17.18. C xP!19. DxP

TIA1TXCDlA

Lo esencial de la combina-ci6n de las b1ancas estriba enque 1a variante 19. . 0 0 ' C2-4D;20. CXC, Cx C ya no servi-ria de nada, debido a 21. A xC,A XA; 22. TXT, y aquellasganan.

Boleslavsky KotovZurich, 1'953

20. C4R21. TxT

TxTC3-4D

Habfa peligro de 22. D X T+,D XDj 23. A X D, R x A; 24.C6D+, con ventaja decisiva.

9. C3ATras esta serie de movimien-

tos del gambito de dama acep-tado, las negras cometieron unerror a 1 jugar prematuramente:

9. " 0 P4CD1porque subestimaron la podero-sa amenaza tactica P5D ILas blancas aprovecharon las

ventajas de su posicion, combi-nando las amenazas concretascon la movilizaci6n posteriorde sus piezas.

10. A3e A2e11. MC 0-012. TRIR!

Diagrama oom. 25


25/75

por consideraciones generales.Pero, en el caso que nos ocu-pa, las blancas parten, sabretodo, de las exigencias conere-tas de 1a posicion.Por ello, no hicieron el mo-

vimiento de desarrollo 12.TDID, a pesar de ser tan fuer-te y logico como el 12. TRIR,pues el calculo concreto de-muestra que a las blancas noles reporta ninguna ventaja res-ponder a 12. . .., C3A can 13.P5D, par causa de la continua-cion 13.... , CXP; 14. AxC (014. CXC, AXAI), PXA; 15.TXP, D2A!Por 10 tanto, el movimiento

12. TRIR es necesario paraapoyar el avance de rupturaP5D!

12. C3A13. TDIDAhora se ve claro que se ha

de responder a 13. . .., C5CDcan 14. P5DI, pues las negraspierden una pieza si toman estepeon.

13. C4TD

46

14. P5DI15. pxp16. PxC17. C4D

CXAD3CPXP

El metodo de valorar la posici6nEs costumbre valorar la po-

sicion partiendo de los indicioscsuiticos exteriores de la mis-r n a : la correlaci6n material delas fuerzas, los facto res de laposicion, la situaci6n de los dosreyes, la estructura del centro,los puntas debiles y solidos ylos peones, las columnas y dia-gonales abiertas, etcetera, etce-tera.Esto sirve de base para la

valoracion principal y dinami-ca de la posici6n. La valera-cion dinamica siempre va acom-pafiada del calculo concreto, enel cual las posibilidades mu-tuas se miden en perspectiva,y es el tinico medio de descu-brir las ocultas posibilidadesde la posicion.En los tratados sabre el me-

dio juego se explica mas deta-lladamente los procedimientosconsecutivos, 0 etapas, de lavaloracion de posiciones.Por ejemplo, en su libro uB I

medio iuego, Romanovski in-dica las siguientes etapas en lavaloracion de la posicion:

1) Calculo de la correlaci6nmaterial de. fuerzas.2) Calculo de los Iactores de

la posici6n.

y las negras pierden un pe6n.La continuaci6n 13... , TIR

es el tinico medio de defender-se del movimiento de rupturaP5D, porque el juego se equili-bra despues de 14. PSD, P X P;15. CXP, CXC; 16. AXe,AxA; 17. DXT+, DxD; 18.TXD+, TxT; 19. CXA, CID;con igualdad.Por ella, las blanc as hubie-

sen tenido que modificar suplan principal despues de 13.... , TIR Y proseguir 14. CSR!,creando as! el peligro de unataque de piezas can el movi-miento 15. C XPIEsto les daba la posibilidad

de sostener Ia ventaja sacadaen la apertura y les brindababuenas perspectivas de ataquecontra el rey, aun cuando lasnegras prosiguiesen 14. . .. ,CXCI (14.... , CXP? es des-ventajoso, pues sigue 15. D3R,A4Ai 16. D3C!); 15. P X C,C2D; 16. A4AR, D2A; 17. AlA.

3) Calculo de los principiosfundamentales de la estrategiay de la tactica en una situa-cion dada.4) Estudio de los motivoscombinatorios.Sin duda, la division del pro-

ceso de valoraci6n en dichasetapas es condicional; no obs-tante 10 justo es valorar deacuerdo con un metodo deter-minado, contando sin faltatanto los factores materiales yde posicion como los motivoscombinatorios. Solo la posesionde un metoda asi nos permitelibrarnos de toda decision im-pulsiva cuando los movimien-tos se eligen por motivos for-tuitos.Es claro que hay muchas po-

siciones cuya valoraci6n no esdiffcil. Unas se miden facilmen-te con el apoyo de las consi-deraciones generales de la po-sici6n; por el contrario, otrasrequieren un procedimientoanalft ico exhaustive; par ejem-plor la posicion de un estudio.Pero 10 frecuente es que la po-sicion en el tablero no se pue-da resolver can el calculo con-creto ni con la valoraci6n ge-neral. En tales situaciones com-

47


26/75

plicadas representan un papelimportante no 5610 los factoresconstantes, sino tambien losdinamicos e inconstantes; porejemplo: la coordinaci6n de lasfuerzas combativas y su dispo-sidon en un momenta dado.En la valoraci6n de estas posi-ciones suelen tener irnportan-cia las particularidades inhe-rentes a cada una de elias. Estose puede ver en la partida Ku-preichik - Tahl (vease el diagra-ma Dum. 2).

L. Szabo SigurjonssonReykjavik. 1968Diagrama mono 26

Empecemos por la valoraci6nestatica,En esta posicion, las fuerzas

48

estan materialmente equilibra-das. Casi no se han producidocambios. La disposici6n de lospeones parece favorecer a lasblancas, cuya cadena del flan-co del reyes muy flexible; porotra parte. su fuerza consisteen tener un pe6n libre en elcentro. Por el contrario, en e1terreno de las negras se mani-fiesta la debilitaci6n de los peo-nes. Los dos blancos 3TD y4CD son suficientes para dete-ner los tres negros. Inspira cui-dado el peon negro 3AD, parestar retrasado y, aparentemen-te, inmovilizado.

lC6mo estan dispuestas laspiezas de cada banda?Si se considera condicional-

mente el tiempo que ha inver-tido cada uno de ellas , enton-ees las negras tienen cierta su-perioridad en el desarrollo desus piezas, por euanto han in-vertido 14 tiempos, al paso quelas blancas han invertido solo12. Sin embargo, es poco pro-bable que esta circunstanciasea esencial, dado que la posi-ci6n es mas bien cerrada.Pero veamos mas atenta-

mente el caracter de la dispo-sici6n de las fuerzas y, antetodo, el problema de la segu-ridad de ambos reyes: aun

cuando la posici6n de estas dospiezas no tiene puntos vulne-rables, el rey blanco experimen-ta la presion que las piezasncgras ejercen sobre el; encarnbio, al negro no Ie ocurreesto. Las piezas negras apun-tan claramente a la posiciondel enroque de las blancas.Con todo, si se valora lige-

rarnente Ia posicion, puede pa-recer que la de las blancas esbastante s6lida, pues el alfil decasillas blancas del banda ne-gro carece de movilidad, y albando blanco le basta jugar 22.C5A, para que se paraliee laactividad de su adversario.Pero Ie toea mover a este,y un analisis mas dinamico yprofundo de la posicion nosmuestra que la situaci6n no esni mucho rnenos favorable ala s blancas, Ademas, las negrasdisponen de un procedimientocombinatorio forzado y queconsiste en aprovechar las ven-rajas dinamicas contenidas ensu posici6n. Por eso, el lectordebe polarizar su atencion enla falta de armenia que mani-fiesta la posici6n de las piezasblancas, es decir, la acci6n deunas estorba la de las otras.Esta realidad justifica el ines-perado y sensacional movimien-

to de ruptura que efecnian lasnegras:

21. P4A!!Este bello saerificio tiene por

objeto dar movilidad al alfil decasillas blancas.Los acontecimientos evolu-cionan necesaria e ineludible-mente.

22. cxP23. pxT

TXC!C6A+!

[Otra sorpresal Si 24. PX C,1a respuesta 24. . 0 0 ' D6T! deci-dirfa la contienda.

24. AxC25. C2R

AXA

Esto es el tinico medio de-fensivo para evitar la derrotainmediata, En caso de 25. P XA,se ganarfa prosiguiendo 25. . .. ,D6T!; 26. P4A, C5C. Convieneprestar atenci6n a 1a importan-cia que tiene haber dado movi-lidad al alfil negro 2eD.

25.26. C3C

C5R

A 26. AlA pudo haber suce-dido 26 ... , C4C, tras 10 eual

49


27/75

habrfa sido dificil sortear el pe-ligro 27.... , D6TI!26. cxA27. PXA CXP+28. R2C D3A29. P4R CXT+30. TxC AXC31. PTxA T4R32. TID TXPAVuelve a reinar la calma. La

posici6n se ba simplificado mu-cho; pero la situaci6n de lasblancas no ha experimentadomejorfa, Las negras ganan f a -cilmente este final de piezasmayores, por tener un pe6n demas y una ventaja considera-ble en la posicion,

33. T8D+ R2T34. D2R P4A35. T4D T5A[Con esta elegante decision,

el [uego pasa a un final de peo-nes.

36. TxT DxT37. DxD PXD38. R3A P4C!39. pxp P4TR!40. R4R P6A.

EI banda blanco se rindi6.Perfeccionar el sentido de la

50

posicion es m~y importante ysirve para saber utilizar los ele-mentos estrategicos,El juego practice requiere

con frecuencia modificar rapi-damente el plan, pues este de-pende de c6mo opere el con-trincante. En tales casos, nosuele haber tiempo para dete-nerse en las particularidadesestrategicas: 10 fundamental esel desarrollo dinamico de lacontienda, y la valoracion queparte de las consideracionesgenerales sobre la posici6n nohace mas que reforzar el calcu-10 .A este respecto nos deten-dremos en ciertos momentos

de una de mis partidas.Suetin Polugaevsky

XXXIV torn eo de la U.R.S.S.(1967)

Aqui mueven las negras.Posiblemente haya llegado el

momento decisive de la lucbaestrategica, Creo que esto pue-den conocerlo s610 los que jue-gan. Y naturalmente es muyimportante el analisis de posi-ciones asi, pues facilita com-prender la partida y estudiarlas particularidades del modode razonar.La iniciativa es el elemento

principal en el juego tenso ycon igualdad de oportunidades.Por ello, me tuvo preocupadola entrega de calidad por la po-sici6n: 23. . .., C X P!?j 24.c xc, TXCj 25. AXT, TxA.Despues de 26. P5A, AlA; 27.P6C, se bubiese enzarzado unalucha tensa, en la cual las blan-cas sacaban ventaja, a pesar deq lie las negras se reanimasennotablemente.

Estas prosiguieron:Diagrama Hum. 2723. AlATras esto, las blanc as tienen

la iniciativa, y las posibilida-des de las negras son extrema-damente tacticas.

24. P5A25. P5T26. P6T!

P4RA3AP3C

27 . PxP PTxP28. P4C C5A29. A3D AIR30. C3C T4-2C31. AlA T2T32. C2C cxc33. DxC C3C34. A3R T2-1T35. C5T C5T36. TXC!Con el sacrificio de la cali-

dad, las blancas inician un ata-que peligroso contra el pun-to 2AR.

36. AxT37. A4AD AIR38. D2AR TID39. A6C D2D40. AxT TXA41. D4T TIAEn este lugar se suspendi6 la

partida, y las negras anotaronsu ultimo movimiento. Ya encasa, analice sobre todo la fasefinal de la partida que pudohaberse producido despues de41. . .. , D2T+; 42. D2A,DXD+j 43. R XD, A2R. Pro-siguiendo 44. TICR, TIA; 45.T3C, A4C; 46. MD, las blan-cas mantenfan la ventaja.IC6mo me reproche el haber-

me precipitado; sobre todo por-51


28/75

que eI movimiento 41. D4T fuehecho despues de haberse cum-plido eI tiempo! Por 10 tanto,no era diffcil dar con la fuertecontinuacion 41 . D3R.Es utH reprocharse tales omi-

siones; mas no se debe perm i-tir que el enfado que nos cau-san influya en el analisis ni enel desarrollo posterior de lapartida,Despues, el juego se apart6

de mis analisis y fue improvi-sado: con todo, dichos analisisme permitieron profundizar enlas particularidades de la po-sicion. Esta circunstancia influ-y6 posiblemente en la precisionde las operaciones tacticas delas blancas.

42. T3A! DID43. A5D A2R44. D2A D2D45. D3C T2A46. C4A D5T47. D2A AXPAqui, el bando blanco gana

forzosamen teoEsta partida contuvo muchas

sutilezas combinatorias y va-riantes concretas. Quiza no seaconveniente enumerarlas todas;pero S 1 con viene anotar loscalculos concretes,' tanto los52

propios como los del contrin-cante, por grande que sea elmimero de ellos,En este libro me limito a

analizar el movimiento 47. ...,D8D+J porque daba a las ne-gras la posibilidad de empatar,a 1 decir de mi contrincante Po-lugaevsky.Pero las variantes muestran

que dicha valoraci6n es inexac-tao Veamoslo: 48. R2e, D8AD;49. TXP, DXP+; 50. RIA,D8A+; 51. R2R, D7A+; 52.C2D, A4C+; 53_ R3A, D8D+;54. RlC, D5C+; 55. D3C,DXD+; 56. RXD, AST+; 57.R XA, TxT; 58. P7T+, ga-nando,Volviendo a la partida, ad-

vierto que tal valoracion pue-de impugnarla solamente 1a va-riante que sucedio en ella.

raccion que experimenta el aje-drccista.Estos minutos de satisfac-

cion son poco frecuentes, peromuy valiosos, par cuanto se al-canzan con mucho esfuerzo yill precio de busquedas y dedudas,

50.51. DXP+52. D7C+53. P7T54. R2C

D5TRIAR2RD8D+

Y las negras se rindieron.

La metamorfosis de la posicidnEn el proceso de la lucha

por las ideas tacticas y los pla-nes, las situaciones varian cons-tantemente en la partida deajedrez. Ademas de las varia-ciorres pequefias y poco impor-tantes que cada movimientoproduce en la posicion, la par-tida tiene algunos mementosimportantes y condicionados,los cuales son principalmentelas fases de transicion entrela s diversas etapas (la aperturay el media juego, este y el fi-nal), diversas combinaciones,operaciones de cambio, ataquesintensos, etcetera, etcetera.Tales cam bios no son for-

tuitos, sino que derivan orga-nicamente del contenido de lalucha.La partida de ajedrez consti-

tuye un proceso iinico cuyasetapas estan unidas organics-

48. CxPD49. CxA50. D6C!

A5ADXC

Mientras calculaba las va-riantes en el ultimo momento,dada la falta de tiempo, y antesde jugar 48. CXPD, advert! laposibilidad de atacar simulta-neamente los puntos 2AD y3C R de las negras y experimen-te aquella extraordinaria satis-

mente, si bien cada una de elIastiene valor independiente y so -luciona sus diversos problemas.Bay partidas en que las

transformaciones de los- facto-res materiales y de posicion su-ceden, unica y exclusivamente,de acuerdo can el contenido es-rrategico de la lucha.Veamoslo en la siguiente par-

tida.Smirnov Makarichev

Campeonato de juveniles de laV.R.S.S., 1969

1. P4D2. P4R3. P5R4. A3D5. P3AD6. P4AR

P3RP4DD2D?!P3CDC2R

Hubiese side mejor prose-53


29/75

guir 6. D4C 0 6. C3A, para nolimitar la accion del alfil decasillas negras y procurar ha-cerse con la iniciativa.

6 . A3T7 . A2A P3C8 . e2R P4T9 . P4TD AxC10. DxA P4T11. P4CR1Esto es un error desde eI

punto de vista de la posicion,que causara un serio debilita-rniento en el dispositivo de peo-nes. La actividad de las blan-cas en el Ilanco de rey no espeligrosa.

U. pxP12. DxP C4A1 3 . C3T DID14 . Axe PCxA15. D3A D5T+16. D2A C3A17. A3R O~O~O18. R2D Axe!Este cambio es oportuno,

pues las blancas tendran queluchar con su poco activo alfilcontra el poderoso caballo ne-gro; ademas, han debilitado elfIanco de dama. Esta circuns-tancia decide, de antemano y54

estrategicamente, el resultadode la contienda.

19. PXA20. TDICR21. D3A22. A2A23. P4T24. R3D25. T5C26. TXT27. A3C28. P5T29. A4T30. A6A31. R2D32. D3e33. R3D34. R3R

C2RC3CD2RDXPD7T+T4TTDITTxTT2TC2RC3AD5A+DxPTD7T+C5C+C7A+

38. DXP+39. R3C D6R+40. R2T D7A+41. R3T D6A+42. R2T D7A+43. R3T C6R!Las blancas abandonaron.Pero el contenido estrategi-

co de una partida no siempresc rcfleja con tanta claridad enIas variaciones de la posici6ncomo se ha reflejado en estapartida.Liberson Suetin

Moscti, 1968Dlagrama num. 28

D5AR2CDXPA

La movilidad del caballo ne-gro es extraordinaria. A pesarde haber ocupado un punto im-portante, el alfil blanco estaalejado del sector principal dela contienda,

35. R3A36. R2A37. D8C38. DxTAhara va a empezar un ata-

que decisivo. El rey blanco nopodra salir de 1a red de mate.

El centro y el flanco de damaforman el sector, donde se hadesarroUado un juego totalmen-tc posicional y sin ningun co-lorido combinatorio.

Mas veamos la evoluci6n delos acontecimientos.

30. C5D30. TIC hubiese sido mejor.

Ahora, las piezas negras utili-zaran 1a columna TD, para ac-tuar con diligencia y eficacia.

30. T5Tl31. TIC T6T32. C3R A2D33. A3TEl banda blanco no observa

las casi inadvertidas variacio-nes de Ia posici6n. Debia haberintentado simplificar el [uego,prosiguiendo 33. T3D.

3 3 _34. AlA

A3R

Con la continuaci6nAXA, PXAj 35. T3D, elgo se hubiese estabilizado.

34.[ue-

34. ... D2TLa idea tactic a de esta astu-

ta maniobra se revelara dentrode tres movimientos. Por elmomento tiene solo vises dereforzar la presi6n en la colum-na TD.

5 5


30/75

35. T3D TIA 38. AID PXP36. D2D T7T 39. Pxp A5A37. A2R? 40. cxA TXC

41. T3A+ R2R!Diagrama num. 29 La amenaza del banda blan-

Par muy extrafio que parez-ca, este inofensivo movimien-to es un error grave. Porquelas negras asestaran un golpeinesperado en el fljmco de rey,donde se desarrollan los aeon-tecimientos principales,

37. ... P4A!Es facil ver que 38. P X Pt

A xP; 39. C xA no conviene,pues sigue 39. . .. , D7A +; 30.R3T, Tl xP. y las negras ga-nan. Las blancas tienen queaceptar el importante debilita-miento de la estructura de suspeones.56

Esto es 10 menos complica-do.

co es ilusoria. Y el negro va ademostrar que tiene recursossuficientes para emprender unataque arrollador.

51. TXD T8CD52. T3AD TxP53. T7A+ R3R54. T7TR P4D55. TXP P5D56. P4C P6D57. P5C T5AR

42. D5D43. DXPC

Y el bando blanco se rindio,Al estudiar los procedimien-

tos estrategicos que hacen quela partida de ajedrez progrese,conviene siernpre recordar quela tactica introduce frecuente-mente correctivos muy impor-tantes en el transcurso de lamisma. ILa tactica aparta mu-chas veces a los jugadores desus principales ideas estrate-gicas.

C3AT5xP+!

EI ataque ha empezado.

44. AxT45. R3T TxA+DITLa contundente amenaza 46.

... , DIA + se puede conjurarsolamente con perdidas mate-riales.

46. T xc r-xr47. DIA DXP48. TIA T7R

Kavalek BronsteinAmsterdam, 1968

Esta partida tuvo un prolon-gado y exclusivo caracter posi-donal.a amenaza persiste. Lasblancas tienen que defenderse

de 49. . .., P4A 0 de 49. . .. ,P4T. I . P4R P3R2. P4D P4D

3. C3AD A5C4. PSR P3CD5. P3TD AlA

49. T3A50. D3A

TSRDXD

6 . P4A C2R7 . C3A D2DS . A3R CD3A

Lo procedente era proseguir8.... , A3T.

9 . A2A A2C10. A3D O~O~O1 1 . P4CD! P3A12. C2R RIC1 3 . P3A P3TR14. P4TR! P4TRIS. CIA C4A16. C3C C3T17. P4T e5C18. PST C2R19. D2D CIA20. O~O P4AR

Diagrama num. 30

Luego de haberse cerrado eljuego en el centro y en el flan-

57


31/75

co de rey, podrfa decirse quela superioridad de las blancases notable y duradera, pues es-trategicamente dominan la si-tuaci6n y su ruptura del cen-tro ha de ser, tarde 0 temprano,concluyente; pero en la prac-tica la cosa ya no es tan facil.Posiblemente es err6neo el

siguiente movimiento prepara-torio de las blancas, pues te-nfan que haber atacado inme-diatamente con 21. C5A!, sa-crificando una pieza.

21. TRIC P4CD!

Las negras aprovechan estacircunstancia para cerrar el jue-go en el fIanco de dama. Psi-co16gicamente, a las blancasles va a ser diffcil conformarsecan unas tab las. Esto sera lacausa de los verdaderamentesorprendentes cambios.

22. P6T A3A23. C5A DIR24. CSC A2D25. T5T P3A26. P4A1Tratando por todos los me-

dios de hacer saltar la fortifi-cacion del adversario, las blan-cas optan por el [uego combi-58

natorio can entrega de mate-rial. Aqui Ta estrategia cedeante la tactics, y el juego tomaun caracter puramente calcula-torio.Pronto se vera que la opci6n

de las blancas fue una equivo-cacion,

37. TXP+38. TXA39. T7R+40. T6R+

R2TTIAD!RxPR4C.

Las blancas abandonaron.La metaformosis de los fac-

26. PDxP27. AxP PxA38. C7C CXA29. DxC A2R30. P5C pXP31. cxr AxP!

tores de la posici6n se iniciaen cuanto ha empezado la aper-tura.Acerca de ella continuamos

hablando en el siguiente sub-capitulo,

La materializaci6n de la ventajaEI problema de la realizaci6n

de 1a ventaja es muy extenso yuno de los mas importantes enlos procedirnientos que se si-guen en el juego.Al comienzo de la partida esfrecuente que haya momentos

favorables a la materializacioninmediata de las ventajas obte-nidas.Tales momentos suelen ser

diffciles de advertir y, par 10mismo, requieren un estrictosentido combinatorio.

De esta manera, se impugnael proposito de las blancas, queno previeron este contragolpeen sus calculos sino el movi-miento 31. "'; A X C, el cualles hubiese facilitado iniciarun fuerte ataque, despues deT5xP y D3A.

32. DxANo les convenfa 32. D3A, por Lowenfisch Tartakovercuanto hubiese sucedido 32.... , Karlsbad, 1911A3AD!

1. P4R P4R32 . AxC! 2. C3AR C3AD33. cxT DxC 3 . A5C CR2R34. T5TXP+ C3C 4 . C3A P3CR35. DxD+ TxD 5 . P4D A2e36. TXC+ PxT 6 . A5C P3A7 . A3R P3TD

8 . A4T P4CD9 . A3C P3D10. C5D! C4T1 1 . PxP PDXP12. A6T! RIA

Diagrama nurn. 31

Las blancas prosiguieron deacuerdo con las consideracio-nes generales:

13. A3R59


32/75

Y las negras igualaron pau-latinamente el juego despues de

1 3 .14. PTxC15. PXC

CXAcxCR2A

LLlevan las blancas ventajaen la apertura 0 no?La respuesta debe darla una

soluci6n combinatoria. No sepuede jugar 13. CXPAR?, por-que sucede 13... , DXD+; 14.T XD, AxA. Y, sin embargo,hay la decisiva continuaci6n13. C6C!, tras la cual las negrassufren perdidas materiales.La ventaja en el desarrollo yactividad de las piezas no siem-pre es realizable, aun cuandosea evidente e indiscutible.Veamoslo en una caracterfs-

tica variante del gambito dedama:

1 . P4D P4D2. P4AD P3R3 . C3AD C3AR4. A5C A2R5. P3R 0-06 . C3A CD207 . TIA P3A8 . A3D pxp9 . AxP C4010. AxA oxAll. 0-0 cxC

60

12. TXC P4R1 3 . 02A Pxp14. PXP C3A15. TIR D3D16. C5C

Diagrama num. 32

Se estima que este movimien-to reporta ventaja a las blan-cas. Realmente, la situaci6n delas negras empeora despues de

16. A5C17. T3CR A4TIS. T3TR A3C?19. DxA!! PTxD20. AxP+! TxA21. T8T+ RxT22. CxT+

Desde luego, el mimero deproblemas concretos en ordena Ia realizacion de la ventajaaumenta considerablemente enel medio juego y en el final.En las posiciones complejas yequilibradas tal realizaci6n esel problema fundamental y masgeneralizado en la estrategiaajedrecista. Mas de la mitad dela teorfa de los finales estudiadiversos aspectos de este pro-blema general.Veamos algunas cuestiones

referentes a la realizaci6n de laventaja en el medio juego.La estrategia moderna rela-

ciona a menudo la realizacionde la ventaja can los cambios,bruscos y dinamicos, de unasventajas en otras.

Y 23. CXD.Pero el maestro O. Moiseiev

descubrio que, despues de 18.T3TR, Las negras tienen la ex-celente jugada de espera 18.... ,D5C!, con Ia cual saean la damadel campo minado 3D y ata-can la torre. Tras esto, pucdenjugar 19... , A3e.

(Ver diagrama num. 32.)Analisis posteriores han de-

mostrado que dicha variante esfavorable a las negras y que labella combinaci6n de las blan-cas no es mas que una astutacelada.

La siguiente partida ilustra10 dicho,Keres Smyslov

La Raya, 1948I . P4AD C3AR2 . C3AR P3eR3. C3AD P3A4. P3R P4D5 . P4D A2C6 . pxp exp7 . A4A 0- 08 . O~O P3C?

La continuaci6n S... , C3C,seguida de e(l C)2D y P4R, eramas fuerte, pues con ella se po-dia intentar ejercer presi6n enel centro.

9 . 03C CxC10. PXC A3TDH. A3T AXA12. DxA TIR1 3 . P4R P4CD14. D3e C2D15. P4A TIC16. TOlD D4TLas blancas tienen una supe-

rioridad notable en el centro.Y las negras han preparado consus riltimos movimientos elavance P4AD; este plan pare-ce haberles salido bien, pues las

61


33/75

blanc as no pueden mantener SUcentro de peones. Hay peligrode que ocurra 17. ... , P XP; sisucede 17. pXP, se proseguira17.... , T X P y, despues, P4AD.Sin embargo, las blancas dispo-nen de un interesante medio demantener 1a ventaja sacada enla apertura; como ignoran elcontrajuego de las negras en elcentro, emprenden un ataqueenergico por el flanco de rey.

17. PSA!Este contundente movirruen-

to requirio un calculo muy am-plio. La valoracion del plan delas blancas depende de si estasconsideran el avance de estepe6n como un signo negativoen su posicion.

17.18. A2C

P5C

18. AlA era mas preciso;pero es diffcil tener en cuentatodas las consecuencias que pu-diera traer la retirada del alfil.

18.19. e5C!20. P4A21. P5A

P4RT2RPxPDCXP?

Esto es un grave error. Con-62

venia haber proseguido 21. ... ,D XPAl, Y el juego de las ne-gras hubiese sido satisfactorio.

imprecisa, variante del gambi-to Schar-Henig,

I. P4D P4D2. P4AD P3R3. C3AD P4AD4. PxPD PXPD?S. DxP C3AD6. DID PxP7. OxP A208 . C3A C3A9 . DID A4AD10. P3R D2R1 1 . A2R 0-0-012. 0-0 P4CR?

22. D3TR P4TR23. P6A A3T24. PxT AxC25. D3AR! P3A26. AXP C2D27. P4TR.Y las negras abandonaron.En este caso, la ventaja de

las blancas en el centro setransformo en ataque decisivocontra el rey.A veces ocurre que se cede

transitoriamente la iniciativa aladversario, tras haber consegui-do alguna ventaja.Para fijar las ideas, vamos a

explicarnos de otra forma: siel contrincante entrega mate-rial, para hacerse con la inicia-tiva, conviene las mas de las ve-ces restitufrselo, pero can lacondicion de mantener firme-mente la iniciativa.Comprobemos 10 dicho en los

siguientes ejemplos.

Ha llegado el irnportante mo-mento de pasar al media jue-go. Los siguientes movimientosde las blancas revelan que es-tas no advierten el riesgo quevan a correr: par ello, estandispuestas a mantener el peonque llevan de ventaja. iEstosera la causa de que los aeon-tecimientos les sean adversos!

(Ver diagrama num. 33.)13. D2A? P5C14. C2D

Schultz RubzovGori, 1969

Era mejor continuar 14. C4D.

Las negras optaron por lacontundente, aunque un poco

14.15. P3TD16. P4C

RICT1ADA3C

Diagrama num. 33

No convenia proseguir 16.AXPR; 17. PXA, DXP+; 18.RIT, CSD, par suceder 19.C(2D)4R!

17. C4A A2A18. A2C C4R19. C2D P4TR20. TRID PST21. CIA P6C!22. PTxP PxP23. cxP C3-SC24. CSD DST25. A3D CxALa iniciativa de las negras se

ha convertido en un ataque de-cisivo. Las blancas carecen demedias defensivos.

26. cxA27. AxT

C6XP2ATxA

63


34/75

El blanco se rindi6.Bste cometi6 un error estra-

tegico: tenia que haber resti-tuido oportunamente el mate-rial y emprender la ofensivapar el flanco de dama; s610 asihubiese podido impugnar losarriesgados planes de la negras.Veamos ahora la siguiente

partida, cuyos doce primerosmovimientos son iguales a losde la precedente.

Suetin KrutijinMinsk, 1964

El plan de las blancas con-sisti6 en restituir el peon cen-tral:

13. A2DObservernos que tambien era

factible 13. P4CD!; de esemodo, se devolvia el pe6n y seabrfan pronto las columnas delflanco de dama.

1 3 .14. C4D!15. ASC

P5CP4TR

De pronto, se descubre quelas blancas crean peligro en elflanco de dama, y van roman-do la iniciativa.64

15. RIC16. Axe PXA17. TIA A3D18. D4T D4R19. P4A PXP a. p.20. CXP D2R21. P4R C5C22. P5R!

Diagrama nam. 34

He aqui el contragolpe; conla entrega de este pe6n, lasblancas desarrollan una fuerteofens iva.

22. cxr23. C4R! P3A24. A3R CXC+25. TxC A5CR26. TxPAR A4R27. T6xP TRIC28. T6--4A AlA29. C5A T3C30. T4R T4D31. D3C+ A2e32. CxA DxC33. T4CD.

la iniciativa en el flanco de rey,de modo que el rey contrariose ve privado de su enroque.As! y todo, las primeras mues-tran que su poderoso centro depeones es un factor esencial enla lucha por 1a iniciativa.

18. 03A D2R19. P4A P3A20. pxP pxP21. CXP D2D22. P3C D4C23. D2R! D4T+24. RIA DXP

Las negras se rindieron.Portisch Spassky

Moscii, 1967(VeT diagrama num. 34.)Con las siguientes maniobras,

las blancas toman el peon ne-gro 5A. Pero las negras tienen

El bando negro se ha resar-cido de la perdida del pe6n, sibien Ia iniciativa pasa totalmen-te al blanco.

25. R2C T2A. 3. - L ABORA 'OORIO DE L . um> RE C lS T A

26. T2A!27. TRIAD

TDIAR

Si se hubiese producido laamenaza 27. . .. , TXC; 28.PXT, TXP, las blancas la ha-brian neutralizado con la res-puesta 29. T8A +!

27.28. D4C29. P6R!

P3TRD5T

Con este movimiento se pasaa la contraofensiva. Las negrasse yen forzadas a entregar lacalidad. Portisch encauz6 lapartida y logro pronto la vic-toria.El problema de la restituci6n

de material para hacerse con lainiciativa se plantea con fre-cuencia en las partidas que em-piezan can el ataque Marshall.Hayen dia, la iniciativa es

muy importante como factorestrategico y como rnedio derealizar la ventaja.No es circunstancial el he-

cho de que la sobreestimacionen la valoracion este sornetidaa cierta clase de posiciones.Nos referimos a aquellas queparecen estables, pero son pa-sivas.

65


35/75

Filip Korchnoixrx- Olimp{ada, 1970Diagrama num. 3S

Nos encontramos ante unaposicion estatica, y nada pareceindicar que vaya a producirseuna crisis. Mas las negras tie-nen la inciativa en el flanco derey; iniciativa que esta determi-nada por la posesion del esca-que 6AR. Desde luego, las blan-cas tenian que haber atacadoel caballo negro, mediante 24.D2R, y, si sucedia 24 ... , C xP,proseguir 25. P3A, D X PC; 26.DXC, DXD+; 27. RXD,T x P; esto les allanaba e1 cami-no. que las hubiese llevado a1empate.Al desaprovechar esta opor-

tunidad, se encontraron en unasituaci6n desesperanzadora.66

dente, si bien las negras ha- 34. TxT PXTbrian abierto una columna en 3S. TITD PSCel flanco de rey par medio de 36. P4C PST3S ... , PST, para que sus torrespenetrasen en la retaguardia Asf se cierra la salida deladversaria. rey blanco.

ante esta eircunstancia, las ne- dales.gras decidieron forzar los aeon-tecimientos.

24. cxc25. RIC

DXC+T4R!

De ese mode, se desvia laatenci6n de las fuerzas blancasa defender su peon SD.

26. P4TD P4TR 32.33. R2T R2AP4CLa coyuntura es apropiada

para empezar el tlpico ataquede peones.

A la continuacion 33. .. .,R3A se hubiese respondido

49-El Lab Oratorio Del Ajedrecista

Documents

Transcript of 49-El Lab Oratorio Del Ajedrecista