GRACIA SOBRE GRACIA

Juan 1:16 Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia.

El mundo en el que vivimos nos prepara para recibir lo que merecemos, todos los sistemas de

una u otra forma abogan por esta postura. Un nio que se porta bien merece un dulce, un joven

que se esfuerza en el estudio merece una beca, un buen hombre merece una buena mujer, un

ladrn merece la crcel, un violador y asesino merece para muchos la muerte.

Pensar que a alguien que ha sido malo reciba un gran regalo puede causar retorcijones en el

estmago. El ser humano tiene formas para medir la magnitud de las acciones y as poderlas

calificar segn su criterio, entonces unos son ms merecedores de algo que otro. Unos merecen

mejores cosas porque se han portado mejor y otros merecen mayor castigo por haberse portado

peor.

La justicia segn el hombre es darle a cada quien lo que merece y no podra haber justicia si de

repente alguien que es culpable queda libre de culpa y adems de eso se le concede otro regalo

valioso.

En un pas con gran ausencia de justicia como el nuestro esto es fcil de comprender.

Sin embargo cuando hablamos de justicia con relacin a Dios siempre seremos sorprendidos. Dios

es Santo y el hombre pecador.

Uno de los escritores bblicos sobresalientes en una exposicin magistral en la carta a los Romanos

captulos 1-3 muestra como el hombre es culpable a los ojos de Dios. Entre otras cosas el apstol

Pablo confronta la realidad de tres grupos de personas.

1. Los que viendo la grandeza de la creacin deciden negar al creador y son conducidos por

su mismo desenfreno a toda forma de idolatra desembocando en toda clase de maldad.

Rom 1:21 Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazn fue entenebrecido. 22 Profesando ser sabios, se hicieron necios,

2. Los que promueven la moral y buscan con ello tranquilizar sus conciencias ignorando

que ningn nivel moral del hombre alcanza el estndar de la justicia y santidad de Dios.

Rom 2:1 Por lo cual eres inexcusable, oh hombre, quienquiera que seas t que juzgas; pues en lo que juzgas a otro, te condenas a ti mismo; porque t que juzgas haces lo mismo. 3. Los religiosos que pretenden que el conocimiento o las prcticas religiosas abren un

camino hacia Dios.

Rom 2:21 T, pues, que enseas a otro, no te enseas a ti mismo? T que predicas que no se ha de hurtar, hurtas? 22 T que dices que no se ha de adulterar, adulteras? T que abominas de los dolos, cometes sacrilegio? 23 T que te jactas de la ley, con infraccin de la ley deshonras a Dios?

Luego en el captulo tres el apstol en una sentencia resume:

Rom 3:10 Como est escrito: No hay justo, ni aun uno; Y aade: Rom 3:11 No hay quien entienda, No hay quien busque a Dios. 12 Todos se desviaron, a

una se hicieron intiles; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. El ser humano est incapacitado para merecer la atencin de Dios o para obrar la voluntad de

Dios, el ser humano est en la arena movediza de una naturaleza pecaminosa y entre ms intente

salir sea por la razn, la moral o la religin o cualquier otro medio que se invente siempre se

hundir ms y ms.

El hombre esta corrupto, sin capacidad para entender mediante sus propios medios la naturaleza

y carcter de Dios, incapacitado para abrirse brecha y escapar del deterioro moral que lo asedia,

est inhabilitado para realizar algo loable a los ojos del Seor; no hay justo, ni siquiera uno; todos,

absolutamente todos estn en la misma condicin

La soberbia del ser humano lo lleva a compararse con otros para no verse tan mal, pero todos

estn desviados! No hay uno que haga el bien! De manera que la condicin universal es la

perdicin, el hombre esta desligado de Dios y avanza a la destruccin eterna.

El hombre es un perfecto pecador que tendr que rendir cuenta al perfecto Santo. No hay forma

de salir bien librado, no hay forma de argumentarse merecedor de su favor. La creacin, la

conciencia, la ley y el evangelio atestiguan su culpabilidad.

Lo sorprendente es que ante la inminencia de la ejecucin de la pena aparece el Salvador. Su

nombre: Jesucristo, su equipaje la gracia. El apstol Pablo lo escribe as:

Rom 3:23 por cuanto todos pecaron, y estn destituidos de la gloria de Dios, Rom 3:24 siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redencin que es

en Cristo Jess, Rom 3:25 a quien Dios puso como propiciacin por medio de la fe en su sangre, para

manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados,

Rom 3:26 con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que l sea el justo, y

el que justifica al que es de la fe de Jess.

El panorama cambia de muerte a vida, de ser injustos a ser justificados, de estar destituidos de la

gloria de Dios a ser puestos dentro de ella, de ser esclavo vendido al pecado a ser sacado del

mercado y trado a la libertad.

Que hizo la diferencia? Cmo puede alguien condenado ser absuelto de repente? Cmo

escapar de una muerte merecida?

La respuesta es una sola palabra Gracia!

Juan, en el evangelio que escribi dice:

Juan 1:16 Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia. Gracia se podra definir como el otorgamiento del supremo bien a alguien que es opuestamente

merecedor de algo mnimamente bueno.

El supremo bien es Jesucristo, l es la expresin de la gracia y viene a ser la gracia misma y el

opuesto es el pecador que no merece sino castigo pero que por una decisin tomada por Dios en

la eternidad y la revelacin de Cristo en los postreros tiempos, recibe el preciado bien.

La justicia de Dios con relacin a la redencin humana se fundamenta en la gracia. Dios padre

vierte la ira causada por el pecado del hombre en su hijo Jesucristo al ponerlo como propiciacin

en la cruz. El hijo como recipiente de la ira encierra el poder del pecado llevndolo cautivo en su

cuerpo y mediante el poder de su resurreccin lo destruye para que toda persona en l tenga la

virtud de justicia tanto en lo legal como en la experiencia de vida diaria. El que era pecador no solo

es declarado justo sino que tiene el poder para vivir como tal.

El justo pagando por el pecador, esto es gracia, el justo ocupando el lugar del condenado, esto es

gracia.

Gracia es la generosidad de Dios que traspasa los lmites del pensamiento humano.

Un Rey de gracia

En la antigedad algunos reyes solan visitar las aldeas con la intensin de tener cierta cercana

con sus sbditos, no era comn esto por parte de los monarcas de tal forma que sus visitas eran

tomadas como una muestra del favor (gracia) del rey. El rey llegaba a la aldea o pequeo pueblo y

pasaba a travs de un sendero o calle preparado especialmente para l. Es un honor ser visitado

por el que era considerado dueo del reino, El cruzaba y saludaba a sus sbditos desde su

pomposo carruaje y ellos se sentan privilegiados del favor de su visita. Algo as era suficiente

para ellos, que ms se puede pedir dira alguno el rey nos ha visitado!; pero en ocasiones algo

inusual suceda, el rey no solo los visitaba y saludaba desde cierta distancia sino que al pasar por el

sendero o calle se bajaba de su carruaje con su opulento atuendo y empezaba a darle la mano a

los de aquel lugar. Esto era recibir una porcin doble de su favor, gracia sobre gracia.

Jess no solo vino a la tierra, El Rey de los siglos tendi la mano, abrazo la humanidad

representndola en la cruz. Gracia sobre gracia, esta gracia que tomamos de su plenitud, gracia

inagotable, gracia que ahora opera en la iglesia que es la plenitud de aquel que todo lo llena por

completo.

Pablo tambin se qued corto de palabras

Rom 5:17 Pues si por la transgresin de uno solo rein la muerte, mucho ms reinarn en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia.

La gracia que el experiment no era escasa, era abundante. Los regalos de los hombres siempre

tendrn un lmite, la gracia de Dios no. Este don junto con el don de la justicia hacan a Pablo

reinar en vida, esto es, tener la certeza de la salvacin donde la muerte ya no puede operar, donde

el pecado no puede dominar, donde la condenacin ya no puede acusar.

Reinar en vida por la gracia abundante implica tambin estar bajo el gobierno de Cristo para

poder vivir en la autoridad delegada y as mantener la victoria en cualquier circunstancia.

Qu bueno que lo que experiment Pablo es una experiencia disponible para todos los que hemos

recibido en Cristo la abundancia de la gracia.

Esta abundante gracia nos ha cambiado: 1 de naturaleza, 2. de dueo, 3.de posicin, 4.de ruta y 5.

De destino.

1. ramos tinieblas y ahora somos luz.

Efe 5:8 Porque en otro tiempo erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Seor; andad como hijos de luz

2. ramos de Satans y ahora somos de Cristo.

Juan 8:44 Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queris

hacer

Juan 8:34 Jess les respondi: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. 35 Y el esclavo no queda en la casa para siempre; el hijo s queda para siempre. 36 As que, si el Hijo os libertare, seris verdaderamente libres.

Rom 6:14 Porque el pecado no se enseorear de vosotros; pues no estis bajo la ley, sino

bajo la gracia.

3. Estbamos derrotados y ahora somos supervencedores.

Efe 2:12 En aquel tiempo estabais sin Cristo, alejados de la ciudadana de Israel y ajenos a los pactos de la promesa, sin esperanza y sin Dios en el mundo. 13 Pero ahora en Cristo Jess, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habis sido hechos cercanos por la sangre de Cristo.

Rom 8:37 Antes, en todas estas cosas somos ms que vencedores por medio de aquel que

nos am. 38 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ngeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, 39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podr separar del amor de Dios, que es en Cristo Jess Seor nuestro.

4. Seguamos un camino de vanidad y ahora tenemos el camino de fruto eterno.

Efe 2:2 en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al prncipe de la potestad del aire, el espritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, Efe 2:3 entre los cuales tambin todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y ramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los dems. Juan 14:4 Y sabis a dnde voy, y sabis el camino6 Jess le dijo: Yo soy el

camino, Rom 6:22 Ms ahora que habis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios,

tenis por vuestro fruto la santificacin, y como fin, la vida eterna. 5. Llevbamos destino de muerte y ahora tenemos vida eterna.

Mat 7:13. porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdicin, y muchos son los que entran por ella;

Flp 3:13 Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrs, y extendindome a lo que est delante, Flp 3:14 prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jess

Flp 3:20 Mas nuestra ciudadana est en los cielos, de donde tambin esperamos al Salvador, al Seor Jesucristo;

El evangelio de la gracia, que por cierto fue el nico que predico Jess, hace resplandecer en un

mundo oscuro la bondad de Dios. El hombre no puede hacer nada para merecer el favor divino,

Dios lo otorga en Cristo gratuitamente.

As que si eres hijo de Dios, si eres nacido de nuevo, eres recipiente de la gracia, un recipiente que

se ha de desbordar con el abundante suministro de Cristo. No la tomes en vano, no la

menosprecies, una forma de menospreciar la gracia es permanecer en una ignorancia consentida

acerca de lo que ella es. Cristo se revela al hombre para que este le exprese pero no se puede

expresar lo que no se conoce. El rey no solo vino sino que te salvo y te llevo hasta su trono, te

sent junto con El para reinar. Frente a la inigualable manifestacin de su bondad no queda ms

que vivir para el que muri y resucito. En cuanto ms se comprenda de la gracia ser forjado el

corazn en humildad, en dependencia absoluta porque la gracia clama desde lo ntimo de nuestro

ser que as como nada hay en nosotros que hubiera atrado a Dios, tambin nos recuerda que

nada hay que nos pueda separar de l. Un da estaremos frente a Cristo, un da le veremos cara a

cara, el rostro vivo de la gracia nos har resplandecer con su fulgor y tal vez se nos permita

conservar el recuerdo que en una fra cruz poso el ms hermoso regalo del Padre para el mundo,

Jesucristo gracia sobre gracia!.

Juan 1:16 Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia.

Si no tienes la certeza de la salvacin, sino has nacido de nuevo, son solo las palabras de Cristo

que producen fe para acceder a la gracia. Cristo tiene el poder para liberarte de los razonamientos

necios, de crear tu propia moral y de seguir siendo un vaco religioso. El sigue abriendo los ojos de

los ciegos y los odos de los sordos, El seguir de una u otra forma llamando tu atencin, el

tambin muri y resucito por ti. Quiz no seas de los que le cierran la puerta cuando se ha querido

revelar a tu vida, quiz no sea de los que habiendo odo su voz pretenden no haberla odo nunca,

quiz no seas de los que llegan hasta el fondo para s creer entonces en la voz que llama, quiz no

finjas creer que conoces como vivir cuando no tienes respuestas a lo que realmente es importante

en la vida, quiz no sigas corriendo de ti mismo ocultndote en disfraces para ignorar el dolor.

Solo en Cristo hay salvacin. El destruyo el poder del pecado para que todo aquel que El crea no

se pierda sino que tenga vida eterna.

Una vida que desde ahora puedes disfrutar.

Juan 1:16 Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia.