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LA ESENCIA DEL CRISTIANISMO La pregunta por la «esencia del cristianismo» ha sido contestada de modos muy di- versos. Se ha dicho que lo esencial del cristianismo es que en él la personalidad indivi- dual avanza al centro de la conciencia religiosa; se ha afirmado asimismo que la esen- cia del cristianismo radica en que en él Dios se revela como Padre, quedando el creyente situado frente a Él directa e inmediatamente; también se ha sostenido que lo peculiar del cristianismo es ser una religión que eleva el amor al prójimo a la categoría de valor fundamental. Esta enumeración podría prolongarse todavía, hasta llegar a aquellas teorías que tratan de presentar al cristianismo como la religión perfecta en absoluto, tan- to por ser la más acorde con los postulados de la razón, como por ser la que contiene la doctrina ética más pura y la que en mayor grado coincide con las exigencias de la naturaleza. De todas estas respuestas no hay ninguna que dé en el blanco. De un lado, porque todas ellas angostan la amplia totalidad de la realidad cristiana, reduciéndola a uno so- lo de sus momentos, al que, por una u otra razón, se estima como el más importante o decisivo. Para percatarse de la insuficiencia de todas estas respuestas, basta considerar el hecho de que casi siempre es posible oponer a cada una de ellas otra respuesta con- traria, igualmente sostenible e igualmente unilateral. […] Pero las respuestas mencionadas al principio son, además, falsas —y aquí radica lo decisivo—, porque se hallan formuladas en forma de proposiciones abstractas, subsu- miendo su «objeto» bajo conceptos generales. […] Lo propiamente cristiano no puede deducirse de presupuestos terrenos, ni puede de- terminarse por medio de categorías naturales, porque de esta suerte se anula lo esen- cial en él. Si se quiere aprehender esto último, hay que hacerlo partiendo de su propio ámbito. Hay que preguntar directamente a lo cristiano y recibir de él la respuesta; solo así se perfilará su esencia como algo propio y no soluble en el resto. […] El cristianismo no es, en último término, ni una doctrina de la verdad ni una interpre- tación de la vida. Es esto también, pero nada de ello constituye su esencia nuclear. Editorial Casals • Material imprimible y fotocopiable Romano Guardini (1885-1968) sigue siendo, hoy en día, un autor sugerente, un revulsivo que permite pensar y comprender qué es lo característico del cristianismo. Su famoso ensayo La esencia del cristianismo se publicó en 1929 y sigue teniendo una gran vigencia. En esta pequeña obra, el teólogo se plantea qué es lo peculiar y propio del cristianismo, y qué lo diferencia de las otras religiones. Guardini recorre las respuestas ofrecidas en este sentido: una interpretación de la vida, una doctrina o moral, un nuevo valor dado a la persona, el reconocimiento de la paternidad de Dios, el amor al prójimo, etc. Pero establece que estas respuestas, aun siendo en parte verdaderas, no constituyen toda la verdad o la esencia del cristianismo. El cristianismo se define por un hecho: la persona histórica de Jesús de Nazaret, de modo que, en esencia, cristianismo y Jesús coinciden. En ninguna otra religión ocurre lo mismo. PRESENTACIÓN

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  • LA ESENCIA DEL CRISTIANISMO

    La pregunta por la esencia del cristianismo ha sido contestada de modos muy di-versos. Se ha dicho que lo esencial del cristianismo es que en l la personalidad indivi-dual avanza al centro de la conciencia religiosa; se ha afirmado asimismo que la esen-cia del cristianismo radica en que en l Dios se revela como Padre, quedando el creyentesituado frente a l directa e inmediatamente; tambin se ha sostenido que lo peculiardel cristianismo es ser una religin que eleva el amor al prjimo a la categora de valorfundamental. Esta enumeracin podra prolongarse todava, hasta llegar a aquellas teoras que tratan de presentar al cristianismo como la religin perfecta en absoluto, tan-to por ser la ms acorde con los postulados de la razn, como por ser la que contienela doctrina tica ms pura y la que en mayor grado coincide con las exigencias de lanaturaleza.

    De todas estas respuestas no hay ninguna que d en el blanco. De un lado, porquetodas ellas angostan la amplia totalidad de la realidad cristiana, reducindola a uno so-lo de sus momentos, al que, por una u otra razn, se estima como el ms importante odecisivo. Para percatarse de la insuficiencia de todas estas respuestas, basta considerarel hecho de que casi siempre es posible oponer a cada una de ellas otra respuesta con-traria, igualmente sostenible e igualmente unilateral. []

    Pero las respuestas mencionadas al principio son, adems, falsas y aqu radica lodecisivo, porque se hallan formuladas en forma de proposiciones abstractas, subsu-miendo su objeto bajo conceptos generales. []

    Lo propiamente cristiano no puede deducirse de presupuestos terrenos, ni puede de-terminarse por medio de categoras naturales, porque de esta suerte se anula lo esen-cial en l. Si se quiere aprehender esto ltimo, hay que hacerlo partiendo de su propiombito. Hay que preguntar directamente a lo cristiano y recibir de l la respuesta; soloas se perfilar su esencia como algo propio y no soluble en el resto. []

    El cristianismo no es, en ltimo trmino, ni una doctrina de la verdad ni una interpre-tacin de la vida. Es esto tambin, pero nada de ello constituye su esencia nuclear.

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    Romano Guardini (1885-1968) sigue siendo,hoy en da, un autor sugerente, un revulsivoque permite pensar y comprender qu es locaracterstico del cristianismo. Su famosoensayo La esencia del cristianismo se publicen 1929 y sigue teniendo una gran vigencia. En esta pequea obra, el telogo se planteaqu es lo peculiar y propio del cristianismo, yqu lo diferencia de las otras religiones.Guardini recorre las respuestas ofrecidas eneste sentido: una interpretacin de la vida, una

    doctrina o moral, un nuevo valor dado a lapersona, el reconocimiento de la paternidad deDios, el amor al prjimo, etc. Pero estableceque estas respuestas, aun siendo en parteverdaderas, no constituyen toda la verdad o laesencia del cristianismo.

    El cristianismo se define por un hecho: lapersona histrica de Jess de Nazaret, de modoque, en esencia, cristianismo y Jess coinciden.En ninguna otra religin ocurre lo mismo.

    PRESENTACIN

  • Su esencia est constituida por Jess de Nazaret, por su existencia, su obra y su desti-no concretos; es decir, por su personalidad histrica. [] La doctrina cristiana afirma,en efecto, que por la humanizacin del Hijo de Dios, por su Muerte y su Resurreccin,por el misterio de la fe y de la gracia, toda la Creacin se ha visto exhortada a aban-donar su aparente concrecin objetiva y a situarse, como bajo una norma decisiva, ba-jo la determinacin de una realidad personal, a saber: bajo la persona de Jesucristo.Ello constituye, desde el punto de vista lgico, una paradoja, ya que parece hacer pro-blemtica la misma realidad concreta de la persona. Incluso el sentimiento personal serebela contra ello. Someterse, en efecto, a una ley general cierta bien natural, mentalo moral no es difcil para el hombre, el cual siente que al hacerlo as contina siendol mismo, e incluso que el reconocimiento de una ley semejante puede convertirse enuna accin personal. A la pretensin, en cambio, de reconocer a otra persona comoLey suprema de toda la esfera religiosa y, por tanto, de la propia existencia, el hombrereacciona en sentido violentamente negativo. []

    La exposicin precedente podra ampliarse y profundizarse an ms; pero basta,sin embargo, para fundamentar la nica respuesta posible a la pregunta por la esen-cia del cristianismo. Esta respuesta reza: no hay ninguna determinacin abstracta deesta esencia. No hay ninguna doctrina, ninguna estructura fundamental de valores ti-cos, ninguna actitud religiosa ni ningn orden vital que pueda separarse de la perso-na de Cristo y del que, despus, pueda decirse que es cristiano. Lo cristiano es l mis-mo, lo que a travs de l llega al hombre y la relacin que a travs de l puede mantenerel hombre con Dios.

    Romano Guardini, La esencia del cristianismo, Cristiandad, Madrid, 1984, pgs. 15-17, 19-21 y 103.

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    PREGUNTAS-GUA1. Cul es, segn el texto, la esencia del cristianismo?2. El cristianismo es un hecho o una doctrina?