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. JELITO. 15 F R ibli A_' sociedadAño 15, n? 22, 2006. Buenos Aires anta e, epu rca Argentma ;;..;..;;...;..;...;,;,.;.~'--

Revista de Ciencias Sociales

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ELITOsociedad

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~c~~\:. M\ (o Condiciones de las ceremonias exitosas de degradación" 1

Harold Garfinkel ••University ofCalifomia, Los Ángeles

Cualquier trabajo comunicacional entre per- espera que una persona haga o haya hechosonas en el que la identidad pública de un (en términos de Parsons', sus "performan-actor es transformada en algo observado ces"), sino a lo que el grupo supone que soncomo inferior en el esquema local de tipos las bases o razones fundamentales de susociales será llamado "ceremonia de degra- comportamiento".dación de esta tus". Algunas restricciones de Las bases sobre las cuales un participanteesta definición pueden incrementar su utili- logra lo que para él es una comprensión ade-dad. Las identidades a las que se refiere de- cuada de porqué el u otro actuó como lo hizoben ser identidades "totales". Esto es, estas no son tratadas por él de una manera utilitaria.identidades deben hacer referencia a las per-v En cambio,Jo acertado de una imputación essonas como tipos "motivacionales" más que decidido por el participante de acuerdo concomo tipos "couductuales'", no a lo que se estándares de "preferencia" socialmente vá-

, Publicado originalmente en American Journal alSociology, Vol. 61, Issue 5 (Mar., 1956), pp. 420-424.•• Traducido por Mariano Hernán Gutiérrez (Uni-versidad de Buenos Aires).I Reconocimientos y agradecimientos a Ervin

Goffman del Nacional Institute 01' Mental Hcalth,Bethesda, Maryland, y a Sheldon Messinger, inte-grante prcdoctoral del Social Seieneie RcscarchCouncil, University 01' California, Los Ángeles, porcriticas y sugerencias editoriales.

, Estos términos son tomados de Schutz, Alfred:"Common Sense and Scicntific Interpretation 01'Human Aetion", en Philosophy 011" Phenonieno-logical Research, Vol. XIV, N" 1, septiembre, 1953 .) Parsons, Talcouy Shils, Edward: "Valucs, Moti-ves, and Systcms 01' Aetion", en Parsons y Shils(Eds.): Toward a General Theory 01' Aetion.Cambridgc, Harvard University Press, 1951., Cf. las obras de Kenneth Burke, particularmentePermanence and Ch ange (Calif, Hcrmcs Publi-eations, 1954) y A Grammar of Motives (Ncw York, I

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11(, H"",IJ Gurfinke!

lidos e institucionalmente 'reconi~n~ados-:-Con referencia a estos cstándares, él hace'las distinciones cruciales entre apariencia yrealidad, verdad y falsedad, trivialidad e im-portancia, accidente y esencia, coincidenciay causa. Tomados en su conjunto, los funda-mentos así como las conductas que estosfundamentos hacen explicable como la con-ducta del otro, constituyen la identidad deuna persona. En su conjunto, constituyen alotro como un "objeto social". Las ceremo-nias de degradación aquí discutidas son aque-llas relacionadas con la alteración de las iden-tidades totales.

Se propone que sólo en las sociedades queestán completamente desmoralizadas, será unobservador incapaz. de encontrar estas cere-monias, puesto que sólo en la anomia totalfaltan las condiciones para las ceremoniasde degradación. Max Scheler' sostenía queno hay sociedad que no provea en los mis-mos lineamientos de su organización las con-diciones suficientes para inducir a la vergüen-za. Será tratado aquí como un axioma que no.hay sociedad cuya estructura social no pro-

Las ceremonias de degradación caen en elámbito de la sociología de la indignaciónmoral. La indignación moral es un afecto.Hablando groseramente, es una instancia deuna clase de sentimientos propios de la ma-yor o menor organización de f01111asen lasque se desarrollan los seres humanos mien-tras viven sus vidas en compañía de los otros.La vergüenza, la culpa y el aburrimiento son

s Hays Williams, Riehard: "Schcllcr 's Contributionsto the Soeiology of AfTeetive Aetion with SpeeialAtcntion to the Problem of Sharnc", en Philosopjly' ..

vea, en sus esquemas de rutina, 'las condi-ciones para la degradación de identidad. Asícomo las condiciones estructurales de la ver-güenza son universales para toda sociedadpor el mero hecho de estar organizadas, tam-bién las condiciones de degradación de sta-tus son universales para toda sociedad. Eneste esquema de trabajo la pregunta críticano es si la degradación de estatus ocurre opuede OCUlTiren una 'sociedad dada. En sulugar, la pregunta es: tomando como puntode partida cualquier estado de organizaciónde una sociedad ¿qué programa de tácticascomunicativas hará el trabajo de la degrada-ción de estatus?

En primer lugar, dos preguntas deberán serrespondidas, almenas tentativamente: ¿a quénos estamos refiriendo conductualmentecuando proponemos que el producto de untrabajo exitoso de degradación es un cam-bio en la identidad total?, y ¿cómo conce-bir que el trabajo de la degradación de es-tatus se ha logrado, o ha asumido las con-diciones de su éxito?

instancias de estos afectos de la mayor im-portancia.

Cualquier afecto tiene un paradigma decomportamiento. El de la vergüenza se en-cuentra en el retraerse y cubrir la parte delcuerpo que define socialmente la aparienciapública prominentemente, en nuestra socie-dad, los ojos y la cara. El paradigma de lavergüenza se encuentra en frases que deno-

and Phenomenological Research, Vol. 11, N11 3, mar-zo, 1942.

Condiciones de las ceremonias cxitosas de ucgr..lu'lCiún 117

tan el retiro de sí mismode la vista pública, e·s~·mejánza con las ceremonias de investidura ydecir, el retI:o de la mirada del otro pública- elevación. Cómo la ceremonia puede unir amente identificado: "Podría hundirme en el las personas y la colectividad lo veremossuelo; quería correr)' esconderme; quería cuando tratemos las condiciones exitosas deque me trague la tierra ". El sentimiento de la denuncia. Nuestra pregunta inmediata con-culpa encuentra su paradigma en el compor- cierne al significado de la destrucción ritual.tamrento abnegado, el disgusto con uno mis- En la afirmación de que la indignación mo-mo, el r~chazo al contacto, o,el retiro de él, la ral trae la destrucción ritual de la personaexpulsión corporal o simbólica del cuerpo denunciada, destrucción debe ser entendidoextraño como cuando tosemos, soplamos, literalmente. La transformación de la identi-'tenemos arcadas, vomitamos, ~~cupimos, etc. dad es la destrucción de un objeto social y

El paradigma de la indignación moral es la de la constitución de otro. La transformacióndenuncia pública. Condenamos públicamen- no implica la sustitución de una identidadte: :'Uamo a =: los hombres a que sean por otra, con las partes de la identidad viejatestigos de que el no es como parece, sino vagando como sobrantes de un nuevo en-de otra forma,;v esencialmente", de una es- samblaje, no en mayor medida que la mujerpecte inferior . que vemos en la tienda y resulta ser un mani-

Los afectos sociales tienen varias funcio- quí tiene en sí las posibilidades de una mujer.nes tanto para a persona como para la colee- No es que el viejo objeto haya sido reacondi-ti~idad. Una función prominente de la ver- cionado, sino más bien que ha sido reempla-guenza para la persona es la de preservar el zado por otro. Uno declara: "Ahora veo, erae~o de futuros ataques, retirándolo por com- de la otra forma desde el primer momento" ..pleto del contacto con el exterior. Para la co- El trabajo de la denuncia reformula el carác-lec~~vidad,la vergüenza es un "individualiza- ter objetivo del otro percibido: la otra personador . ~ada uno expenmenta la vergüenza en se convierte, a los ojos de sus condenadores,su debido momento. literalmente, en una persona nueva y diferen-

La indign~ción moral sirve para efectivizar te. No es que nuevos atributos se atribuyenla destrucclOn.ntual de la persona denuncia- al viejo "núcleo". No se lo cambia, sino que

'"da, A diferencia ,de.la vergüenza, que no une se lo reconstituye. La identidad anterior a lo.a las personas, la indignación moral puede sumo, persiste como mera apariencia. En elreforzar la solidaridad del grupo, En el merca- cálculo social de las representaciones y prue-do,y en la política la ceremonia de degrada- bas de la realidad, la anterior identidad se pre-cron puede ser tomada como una forma se- senta como accidental; la nueva identidad escular de comunión. Estructuralmente, una la "realidad básica". Lo que él es ahora es loceremonia de degradación guarda fuerte se- que, "después de todo", siempre fue".

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do parecía ser y lo que se puede ver ahora que escuando el nuevo esquema motivacional es tomadocomo cstándar, y (2) un re-examen y una rcdcfini-eión de los orígenes del denunciado. Sobre la rele-vancia sociológica de la relación entre lo que eon-cierne a la esencia y lo que concierne al origen véaseparticularmente Burke, Kcnucth: A Gra~,mar ofMotives, ob. cit.

, El hombre por cuyas manos el vecino ha sufrido lamuerte se convierte en un "asesino", La personaque pasa información al enemigo es "cscncialmcn-le", "en primer lugar", "finalmente", "originalmen-te", un informante.7 Dos temas sobresalen comúnmente en la retóricade la denuncia: (1) la ironía entre lo que el denuncia-

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I I ~ Harold Garfiukcl

La denuncia pública opera esta transfor-mación de la esencia sustituyendo otro es-quema motivacional socialmente validado poraquel previamente usado para nombrar y or-denar las performances del denunciado. Esen referencia a este sustituido esquemamotivacional socialmente validado como fun-damento esencial, esto es, como principios

¿Cómo puede uno hacer una buena denun-cia"?

Para ser exitosa, la denuncia debe redefinirlas situaciones de aquellos que son testigosdel trabajo de denuncia. El denunciante, laparte a ser denunciada (llamémoslo el "au-tor'"" y lo que se le imputa al autor (llarnémos-le el "evento") deben ser transformados enla forma que sigue":

1{ Aunque las construcciones C0l110 "sustancialmcntcalgo" ° "esencialmente algo" -han desaparecido deldominio de los discursos científicos, estas construc-ciones tienen lugares privilegiados en las teorías de

motivos, personas y conductas que se emplean paramanejar las cuestiones ,de la vida cotidiana. Existenrazones para justificar la hipótesis de que estas cons-trucciones se pueden perder en la terminología de

una "teoría de los motivos" de un grupo sólo si sesuspende la relevancia de teorías socialmente saneionadas para los problemas prácticos. Esto puedeocurrir cuando las relaciones intcrpcrsonalcs son

triviales (como durante el. juego) o, más interesante,bajo una severa desmoralización de un sistema deactividades. En estos estados organizacionalcs la fre-cuencia de las degradaciones de cstatus es baja.'1 Como el artículo es corto, se corre el riesgo de quecomo resultado de excluir ciertas consideracioneslos temas parezcan tratados dc forma exagerada.Seria deseable, por ejemplo, tomar cn cuenta lamultitud de objeciones que pueden ser encontradascontra la falsa denuncia; los derechos a denunciar; clreparto diferencial de estos derechos, asi como delas maneras en que un reclamo, una vez hecho valer,

primordiales, que estas pcrformances, pre-sente, pasado y previsiones a futuro, debenser propia y necesariamente entendidas deacuerdo con los testigos'. A través del traba-jo interpretativo que obedece a esta regla lapersona denunciada se convierte, a los ojosde los testigos, en una persona diferente.

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l. Tanto el evento como el autor deben serremovidos del ámbito de lo cotidiano y serpresentados como fuera de lo ordinario.

2. Tanto el evento como el autor deben serubicados dentro de un esquema de preferen-cias que muestre las siguientes propiedades:

A, Las preferencias no deben ser por elevento A sobre el evento B, sino por el even-to del tipo A, sobre el evento del tipo B. La

puede convertirse en un interés creado y verse vin-culado a las luchas por ventajas politicas o econó-micas. Aún más, hay cuestiones que giran en tomo ala arena adecuada para la denuncia, Por ejemplo, ennuestra sociedad el consejo tribal ha caído en unlugar de importancia secundaria; entre los legos ladenuncia ha cedido lugar frente a la queja a las auto-ridades.'" En el original, pcrpctrator, categoría aplicable alautor o responsable de un delito o conduela rcproba-ble. Siempre que se Ica "autor" corresponde al ingléspcrpctrator (N. del T).11 Éstos son los efectos para los que están diseñadaslas tácticas eomunicativas del denunciante. Puestode otra manera, en la medida en que las tácticas deldenunciante logren rcordenar las definiciones de si-tuación de los testigos en pcrformanccs dcnunciato-rias, el denunciante habrá tenido éxito en operar latrunsformación de la identidad pública de su víctima.La lista de condiciones de cste electo degradante sonlas determinantes de esta operación. Visto desde elesquema de un proyecto perseguido racionalmente,hay medios adecuados. Uno debería escoger sus tácti-cas por su eficiencia en lograr estos efectos,

Condiciones de las ceremonias exitosas de degradación 119

misma tipología debe ser lograda para cl au-tor. Evento y autor deben ser definidos comoinstancias de una uniformidad, y deben sertratados como una uniformidad a lo largo detodo el trabajo de denuncia. El carácter únicoy excepcional del evento y el autor debe 'per-derse. Asimismo, cualquier sentido del acci-dente, coincidencia, indetenninismo o azar, oacontecimiento monetario no debe ser mera-mente minimizado. En su forma ideal, estasevaluaciones deben ser inconcebibles; almenos deben ser convertidas en falsas.

B. Los testigos deben apreciar las caracte-rísticas de la persona y el evento tipificadosrefiriendo el tipo a una contraparte dialécti-ca. En su forma ideal, los testigos no debenser capaces de observar los rasgos de la per-sona denunciada sin referencia a lacontraconcepción, tal como lo profano de unacontecimiento, de un deseo, o de un rasgode carácter se clarifica en relación a su opues-to, lo sagrado. Los rasgos de un asesino des-quiciado invierten los de un ciudadano pací-fico. Las confesiones de los "rojos'"? debenser leídas frente a cada uno de los significa-dos del patriotismo. Hay muchos contrastesdisponibles, cualquiera que se agregue datestimonio de esta guerra total de todos con-tra todos; y encontrará una gran variedad deesquemas para operar un "familiar", "natu-ral", "apropiado" ordenamiento de motivos,cualidades, y otros eventos.

De tales contrastes se debe aprender lo si-guiente. Si la denuncia ha de hacer efecto, elesquema no debe ser uno en que el testigoesté habilitado a elegir su preferencia. Sinoque las alternativas deben ser tales que la

I~ En el original. rcds. Hace referencia al mote que sele colocaba a los comunistas en la era del'McCarthysmo, cuando cl artículo fue escrito (N. delT.).

preferencia sea un requisito moral. Las cues-tiones deben estar arregladas de tal formaque la validez de su elección, su justifica-ción, se sustenta en el hecho de que él lahace!'. El esquema de alternativas debe sertal que coloque constricciones sobre su se- .lección "por un propósito". La denunciaciónno tendrá éxito si el testigo es libre de eva-luar más allá del hecho de que él hace la elec-ción basado en la evidencia de que se habráelegido la alternativa correcta, como, por ejem-plo, probando empíricamente las consecuen-cias de su elección. Las alternativas debenser tales que, en "elegir", él de por sentado ymás allá de cualquier duda que no elegir sólosignificaría preferir el opuesto.

3. El denunciante debe identificarse al tes-tigo de tal forma que durante la denunciaciónno sea tomado como una parte privada, sinocomo una persona públicamente conocida.

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No debe presentarse como actuando deacuerdo con sus experiencias únicas y per-sonales. Sino que debe ser tomado como ac-tuando en su faz de figura pública, apoyan-do en experiencias comunes mantenidas yverificadas. Debe actuar como un participan-te de buena fe de las relaciones tribales a lasque los testigos suscriben. Lo que dice nodebe ser visto como verdad para él solo, nisiquiera en el sentido de que pueden ser vis-tas por el denunciante y el testigo como co-sas en las que pueden ponerse de acuerdo.En ningún caso, salvo en el sentido más iró-nico, puede invocarse el convencionalismoverdad-para-un-hombre-razonable. Lo que eldenunciante dice debe ser tenido por el testi-go como cierto sobre las bases de una meta-

1.\ Cf. Batcson, Gregory y Ruesch, Jurgen:Cornmunication: The Social Matrix of Psychiatry.New York, W. W. Norton and Co., 1951, pp. 212-227.

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Condiciones 1..11.;: las ceremonias cxitcsas de degradación 121120 Harold Garnl1kci

den conseguir degradación en una escala li-mitada. Comparativamente, pocas personasentran simultáneamente en esta forma de co-municación, pocos se benefician de ella, y elhecho de la participación no da al testigo una

. definición estandarizada del otro, más allá delgrupo o escena particular donde acontece.

Los dispositivos para provocar la degra-dación varían en características y efectivi-dad de acuerdo con la organización y opera-ción del sistema de acciones en el que ocu-rren. En nuestra sociedad la arena de ladegradación cuyo producto, la personaredefinida, goza de la mayor capacidad detransferencia entre grupos, ha sido racionali-zada, al menos en lo que hace a las medidasinstitucionales para lIevarla a cabo. Las cor-tes y sus oficiales tienen algo así como unmonopolio sobre tales ceremonias, y allí sehan transformado en una rutina ocupacio-nal. Esto debe ser contrastado con la degra-dación como obligación tribal o real, llevadaa cabo por aquellos que, a diferencia de nues-tros degradadores profesionales en los tri-bunales, adquieren tinto el derecho como laobligación de trabarse en ella al ser ellos mis-mos las partes afectadas o cercanos a laspartes afectadas.

Los factores condicionantes de la efectivi-dad de las tácticas de degradación están pro-vistos por la organización y operación delsistema de acciones en el que la degradaciónocurre. Por ejemplo, las reglas temporales res-

pecto de l-as"conversaciones" seriales o re-cíprocas han de tener mucho que ver con laclase de tácticas que preferiblemente unodebe usar. Las tácticas recomendables paraun acusado que puede responder a los car-gos tan pronto como son formulados con-trastan con aquellas recomendables para elque tiene que esperar para responder la de-nuncia. El contacto cara a cara es una situa-ción diferente de aquella en la que la denun-cia y la respuesta se producen en la radio oen los periódicos. Si la denuncia debe cum-plirse en una sola ocasión o si debe ser for-mulada en una secuencia de "intentos", losfactores como preparativos y movimientosterritoriales de personas en la escena de ladenuncia, el número de personas involucra-das como acusados, degradadores y testi-gos, las invocaciones de estatus de los con-tendientes, las asignaciones de prestigio ypoder entre los participantes, todo ello influ-ye en el resultado.

Brevemente, los factores que condicionanel éxito del trabajo de degradación son aque-llos que señalamos cuando concebimos laacción de un número de personas como go-bemadas por el grupo, Sólo han sido men-cionadas algunas de las variables estructu-rales más obvias que podríamos esperar quesirvan para predecir las características de lastácticas comunicativas denunciatorias. Ellasnos dicen no sólo cómo construir una de-nuncia efectiva sino como volverla inútil.

7. No sólo debe el denunciante tomar dis-tancia de la persona denunciada, sino quetambién los testigos deben ser llevados aexperimentar esa distancia de él.

8. Finalmente, la persona denunciada debeser separada.ritualmente del lugar del ordenlegitimo, esto implica que debe ser definidocomo estando en un lugar opuesto a él. Debeser colocado "afuera", debe hacérselo un"extraño?".

Éstas son las condiciones que deben sercumplidas para una denuncia exitosa. Si es-tán ausentes, la denuncia caerá. Sin importaren qué situación entra el denunciante, paratener éxito en degradar al otro, es necesarioincorporar estas características".

No todas las ceremonias de degradaciónson llevadas 'conforme a medidas pública-mente prescriptas y públicamente validadas.Las riñas que buscan la degradación deloponente a través del agravio personal pue-

fisica socialmente empleada 'en la que los tes-tigos asumen que testigos y denunciante sonen esencia iguales".

4. El denunciante debe hacer visible y so-bresaliente la dignidad de los valoressuprapersonales de la tribu, y su denunciadebe ser formulada en nombre de estos.

5. El denunciante debe conseguir ser in-vestido con el derecho a hablar en el nombrede estos valores supremos. El éxito de la de-nuncia se verá socavado si, por su autori-dad para denunciar, el denunciante invocael interés personal que puede haber adquiri-do en virtud del mal hecho a él o a otro. Pre-feriblemente, debe usar el mal que ha sufridocomo miembro de la tribu para invocar laautoridad de hablar en nombre de estos va-lores supremos.

6. El denunciante debe conseguir ser defi-nido por las victimas como un portador deestos valores.

testigo de forma tal que las Ss muestren las propie-dades especi ficas.6. La "racionalidad" de las tácticas del denunciante,esto es, su adecuación como medios para efectuar elcomplejo de transformaciones necesarias paracfcctivizar la transformación de identidad, obedecea la regla de que las propiedades organizacionalcs yoperacional es de la red comunieativa (el sistemasocial) determinan el tamaño de la discrepancia en-tre el efecto buscado y el efecto producido por eltrabajo comunicativo. Puesta de otra manera, lacuestión no es el origen temporal de la situación,sino siempre, y únicamente, cómo ésta es alterada alo largo del tiempo. Se sugiere que la definición de lasituación en el tiempo 2 es una función de la defini-ción en el tiempo l. siendo que esta función consis-te en el trabajo comunicativo concebido como uncomplejo de operaciones en la que la situación alte-rada en el tiempo 1 es la situación en el tiempo 2.En términos de estrategia, la función consiste en elprograma de procedimientos que un denunciante debeseguir para provocar el cambio de estado SI a estadoS,. En este artículo S,¡ es tratado como un estadoindeterminado.

" No es que para los miembros de buena fe éstas seanlas bases con las cuales estamos de acuerdo, sinosobre las que somos iguales, consustanciales, lo mis-mo de origen.ts En el original, strangc (N. del T.)." Ninguno de Íos posibles problemas de las condicio-nes comuuicativas ti orgauizacionalcs de efectividadhan sido tratados aquí de forma sistemática. Sinembargo, el problema de las tácticas comunícativasen las ceremonias de degradación está colocado bajola luz de concepciones relacionadas sistemáticamen-te. Estas concepciones pueden ser enumeradas enlas siguientes afirmaciones:1. La definición de la situación de los testigos (parafacilitar la exposición utilizaremos la letra S) siem-pre implica una calificación temporal.2. La S del t, es una función de la S en el Ir Estafunción es dcscripta como un operador que trans-forma el S en el Ir

3. El operador es concebido como trabajo comuni-cativo.4. Para una dcuunciación cxitosa, se requiere que elS en el 1

Imuestre propiedades especificas.

5. El trabajo del denunciante es alterar las Ss del