2 El Kerigma Para Evangelizar c

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1a. Proclamación Kerigmática EL AMOR DE DIOS PADRE:

Dios te ama como Padre amoroso y desde siempre

ha pensado en ti, porque es eterno su amor.

¿Has pensado alguna vez cuánto significas para Dios y por qué se preocupa por

ti?

DIOS ES PADRE Y FUENTE DE TODO Y DE TODOS; como

Padre siempre está pendiente de ti, de cada aspecto de tu

ser:

hasta de cada cabello de tu cabeza... más que a los lirios del campo... más que a las aves del cielo...hasta en el más

pequeño detalle te cuida y te protege.

Te acepta incondicionalmente,

como tú eres, sin importar tu condición,

raza, color, figura, riqueza ó pobreza culto o ignorante, así te ama y te acepta porque eres

suyo,

Él te ha creado eres hechura de sus

manos, su imagen y semejanza Y COMO CREADOR TIENE UN

PLAN DE AMOR PARA TI Y PARA TODOS SUS

HIJOS.

¿Conoces cuál es el proyecto que

desde siempre ha tenido tu Padre Dios contigo?

¿Sabes qué es lo que desea Dios

para ti?

"ÉL QUIERE QUE TODOS LOS

HOMBRES SE SALVEN Y

LLEGUEN AL CONOCIMIENTO DE LA VERDAD".

DESEA QUE LOGRES LA

PLENITUD Y LA FELICIDAD

desde este mundo y definitivamente en la eternidad

QUE TE REALICES EN TODO CÓMO

PERSONA, en tu cuerpo en tu alma en tu mente y en

tu espíritu.

Él lo ha creado todo por ti y para ti, pues eres su creatura mas amada; eres

precioso a sus ojos y él se recrea en ti.

El te dice:"No temas, te he llamado por tu nombré, eres mío; eres valioso a mis ojos,

eres estimado, y yo te amo. Por eso, no temas, yo estoy contigo" (Is. 43, 1-5). En él vivimos, nos movemos y

existimos.

Es verdad, ¡Dios te ama! El no tiene en cuenta tus fallas, él no tiene en cuenta tus especulaciones,

ÉL NO TIENE EN CUENTA TU OLVIDO.

El te ama sencilla y llanamente porque El es

amor sin límite y te dice: Yo te amo, sé que aún no eres bueno, pero te amo, yo sé

que muchas veces no haces el bien, pero te amo, yo sé

que muchas veces me olvidas, pero te amo y

MI AMOR POR TÍ ES MÁS GRANDE QUE TU

OLVIDO DE MÍ...MI DEBILIDAD ES AMARTE

Y TE LO REPITO EN CADA COSA DE LA

CREACIÓN.

El sabe con claridad quienes somos;

"y COMO UN PADRE ES TIERNO CON SUS HIJOS,

ASÍ SIENTE EL SEÑOR TERNURA CON

NOSOTROS PORQUE ÉL CONOCE NUESTRA

MASA, SE ACUERDA QUE SOMOS de barro" (sal

103)

DESDE SIEMPRE PENSÓ EN NOSOTROS como lo

más grande en su creación; nos puso en su

obra como administradores de

todo, para que gozáramos de ella y

fuéramos felices.

Nuestra relación con Él es personal,

directa e incambiable, con

nombre propio y en mi historia articular.

Salido de sus manos, ÉL NOS

HABÍA DESTINADO A LA COMUNIÓN CON

ÉL.

Todo era y debería seguir en armonía y orden, en salud

corporal y mental, en armonía entre el hombre y el

mundo, siendo nosotros beneficiarios de lo creado, todo lo puso bajo nuestros

pies.

Desde el principio nos invitó a una relación de amor con él y entre nosotros, que AL SER HIJOS DEL MISMO

PADRE, SOMOS HERMANOS UNOS DE

OTROS.

Si sólo dejáramos penetrar Todas estas verdades ahora en

nuestro corazón...eso bastaría para tocarnos

profundamente y transformarnos.

¿Puedes aceptar esta realidad y esta verdad en tu corazón y en tu

vida?¿QUÉ TE IMPIDE

EXPERIMENTAR ESTE AMOR DE DIOS?

PREGUNTAS PARA EL DIÁLOGO

¿has experimentado el amor

de dios en tu vida?

¿quién es dios para

ti?

¿crees que eres

importante para tu dios?

¿crees que tu dios se preocupa por ti?

¿cuál es la imagen que has tenido de dios; qué imagen

de dios te han dado tus padres, tu familia, tus

maestros?

¿esa imagen ha cambiado

ahora, a partir del tema?

¿cómo es la relación con tus padres?

¿Crees que puedas aceptar

a Dios como Padre en tu

corazón y en tu vida? sí o no,

¿por qué?

¿Qué te impide

experimentar este amor

de Dios?

ORACIÓN DE ABANDONO

Padre, me pongo en tus manos; haz de mí

lo que quieras,sea lo que sea, te doy

las gracias.

Estoy dispuesto a todo, todo lo

acepto, con tal que tu voluntad

se cumpla en míy en todas tus

criaturas.

No deseo nada más, Padre.

Te confío mi alma, te la doy con todo el amor de que soy

capaz, porque te amo y necesito darme,

ponerme en tus manos sin medida,

con una infinita confianza, porque tú eres mi Padre.(C. de Foucauld)

2a. proclamación Kerigmática

LAS CONSECUENCIAS

DEL PECADO

Existe algo que impide

experimentar plenamente el

amor del Padre...

EL PECADO. "y la paga del pecado

es la muerte

(Rm 6,23) El pecado nos ha separado

de Dios.

Por el pecado SE LEVANTÓ UN MURO DE SEPARACIÓN(se rompió la relación)

ENTRE DIOS Y NOSOTROS.

"Por un hombre solo, entró el pecado en el

mundo y por el pecado la muerte y así la muerte

alcanzó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron…"

(Rm 5,12)

"todos pecaron y están privados de la gloria de Dios (Rm 3,23)

Tú mismo puedes ver LAS

CONSECUENCIAS DEL PECADO en el

hombre, puedes constatar incluso en tu

vida que:

• La persona está enferma en su cuerpo en su

alma en su mente y en su

espíritu

• El hombre en pecado es incapaz

de relacionarse adecuadamente

para amar y servir

• La sociedad está

corrompida, Es injusta y

violenta.

"El mundo entero quedó bajo el poder del maligno"

(1 Jn 5,19)

Como consecuencia del mal que entro

en el hombre por el pecado, murió la confianza en el

corazón humano

y así el pecado es el abuso de la

libertad que nos dio el Padre, para amarlo y amarnos

entre sí.

El hombre rechazó el plan, se alejó de su Padre, desconfió de él y se vendió a los idolos, se hizo

esclavo, quiso hacer su propio plan.

Por el maligno llega la seducción del poder,

del placer y del tener, el mundo se llenó del espíritu de la mentira

y el hombre, la humanidad engañada,

pretendiendo hacerse feliz se dejó

deslumbrar, y así abandonó a Dios,

quedó separado del amor del Padre,

sujeto a la esclavitud del

odio, el temor, la angustia, la

enfermedad, lejos de la luz de Dios,

Tú y yo, nacimos en medio de

esta generación en pecado, unos

más, unos menos,

seguimos las corrientes del mundo y en medio de tu

situación quizá pienses que…

Eres "de carne, vendido al poder del pecado" y digas que,

"Realmente mi proceder no lo

comprendo; pues no hago lo que quiero,

sino que hago lo que aborrezco.

Y...en realidad ya no soy yo Quien

obra, sino el pecado que

habita en mí.

Pues bien sé yo que nada bueno habita en

mí, es decir en mi carne, pues tengo a

mi alcance hacer el bien, pero no el

realizarlo,

puesto que no hago el bien que quiero

sino que obro el mal que no

quiero.

Y, si hago lo que no quiero, no

soy yo quien lo obra, sino el pecado que

habita en mí."

Quizá sigues buscando a

tientas y en las sombras, esa luz que le dé rumbo

a tu vida...

Pero cada día has “dejado que se levante más ese

muro que te separa de Dios y

te divide por dentro”

Por esa oscuridad del pecado, entro en el

mundo dominado por la mentira, esa falsa imagen de un Dios castigador y juez

injusto

que no perdona ni lo más

pequeño que hagas y así "has dejado enfriar tu

primer amor"

Tal vez buscas salidas que resultan aparentes, parciales,

superficiales, provisionales o

totalmente falsas;

en el ocultismo, la superstición el esoterismo, las

corrientes de nueva espiritualidad, en el

sexo, la droga, el alcohol…

y tú, como la humanidad entera

sigues buscando a tientas la felicidad

que se había perdido por la

ambición,

quieres encontrar salida y no has logrado saltar ese muro que te

divide y así experimentas la

frustración, el rechazo, la soledad, la

incomprensión,

te estás dando cuenta que tú solo no puedes

salir de tu iniquidad.

Y aunque “el pago

del pecado es la

muerte”,

"Dios nos ofrece como regalo la

vida eterna, por medio de Cristo Jesús nuestro

Señor“ (Rm 6,23)

"donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia en virtud de la justicia para vida

eterna por Jesucristo nuestro Señor"

(Rm 5,21)

SÓLO DIOS TIENE LA SOLUCIÓN.En esta segunda Proclamación, puede ambientarse de un modo muy sobrio, en las carteleras de ambientación se hará alusión a

símbolos del pecado (las cadenas, la serpiente, la noche,

etc.)Después de compartir la Predica, se procede a dar respuesta con

una dinámica simbólica, invitando a los participantes a

tratar de "dibujar su pecado": Se les reparte papel y lápices

pidiéndoles que plasmen con una gráfica, aquello que los separa

de Dios y los está haciendo sentir mal.

Luego ponemos una vasija en el centro de la casa, en la que se puedan echar y quemar los dibujos de los participantes. Invitamos a

concluir con una oración de súplica al Señor para que nos libere y nos cambie (podría ser la llamada

oración del pobre, reconociendo

(reconociendo mi culpa... u otra relacionada).

IMPORTANTE TRABAJAR EN ESTE INSTANTE CON LA PELÍCULA DE LA VIDA.

3a. Proclamaci

ón KerigmáticaLA BUENA

NUEVA:

La salvación ya está dada en Jesús. Sólo Dios tiene la solución al pecado y a todas sus consecuencias. Ya la ha dado. La única

verdadera, la única radical, la única definitiva,

la única integral»

Por Jesús y en Jesús el Padre nos ha dado ya

la salvación."No hay otro nombre por el cual podamos encontrar salvación"

(Hech 4,12).

Su nombre mismo significa salvación

de Dios: "Le pondrás por

nombre: Jesús, porque él salvará al

pueblo de sus pecados (Mt 1,21)

Tanto amó Dios al mundo que dio a su único hijo, para que todo el que crea en él no perezca, sino

que tenga vida eterna.

Porque Dios no envió a su Hijo al

mundo para condenarlo, sino

para que el mundo encuentre salvación por medio de EL"

(Jn 3,16-17)

"En Él, por su sangre, hemos sido

redimidos, en Él nuestras faltas han

sido perdonadas por la riqueza de su

gracia (Ef. 1,17)

Por su cruz nos ha salvado y por su resurrección nos ha ganado

Vida Nueva.

Su muerte en la cruz y su sangre derramada son el precio de nuestra

redención, justificación y

salvación.

Él ha dicho: "Yo he venido para que tengan vida y la

tengan en abundancia"

(Jn 10,10)

"La prueba de que Dios nos ama es

que Cristo, siendo nosotros aún

pecadores, murió por nosotros.

Cuando éramos enemigos, fuimos reconciliados con

Dios por la muerte de su Hijo" (Rm 5, 8-10)

"Dios, rico en misericordia, por el

grande amor con que nos amó, estando

muertos a causa de nuestros delitos, nos vivificó juntamente

con Cristo

- por gracia habéis sido salvados - y

con él nos resucitó y nos

hizo sentar en los cielos en Cristo

Jesús,

a fin de mostrar en los siglos venideros la

sobreabundante riqueza de su gracia, por su bondad para

con nosotros en Cristo Jesús." (Rm 2,

4-6)

En el muro de separación, una puerta ha sido abierta. Él es

quien dice: "Yo soy la puerta; si

uno entra por mí, estará a salvo;

entrará y saldrá…"

"Porque Él es nuestra paz: ..., derribando el

muro que los separaba, la

enemistad, anulando en su carne la ley de

los mandamientos con sus preceptos

para crear en sí mismo,..., un solo Hombre Nuevo,

haciendo la paz y reconciliar con Dios...

en un solo Cuerpo, por medio de la cruz.

Vino a anunciar la paz: paz a vosotros que

estabais lejos y paz a los que

estaban cerca.

Pues por Él, unos y otros

tenemos acceso al Padre en un

mismo Espíritu" (Ef. 2,14-18)

En el abismo que nos separaba del

Padre Dios, un puente se nos ha

dado:

es Jesús que en el árbol de la cruz, nos ha

dado Vida Nueva;

solos no podríamos pasar

el abismo, ni saltar el muro

que nos dividía,

pero en Él, se ha cumplido la promesa

de la redención,

se ha dado la reconciliación entre Dios y

los hombres;

se ha inaugurado el tiempo de la

salvación.

Ya desde la Encamación, Dios se

ha allegado a los hombres en

Jesucristo Hijo del Padre, uniendo el cielo con la tierra,

pues Él es Dios con Nosotros y así se ha instaurado el reino definitivo de Dios sobre toda

la creación.

(EL KERIGMA APOSTÓLICO)

Jesús, es el Mesías esperado, el

Señor y Salvador,

ha muerto en la cruz por ti canceló

la deuda del pecado, derramó su

sangre para limpiarte del mal y fue el precio de tu

rescate:

se ofreció como Cordero

inmaculado, como sacrificio de reparación

por ti.

Ahí mismo en su cruz ha sido

clavado tu hombre viejo y este

hombre viejo ha muerto con él en la

cruz:

allí te reconcilió con Dios y selló la nueva alianza con el Padre;

venció la muerte y resucitó para que

tuvieras nueva vida y rescatar así a toda la

humanidad que estaba esclava del

pecado y de la muerte,

fue traspasado por la lanza de un

soldado y de su costado abierto,

brotó la sangre de la salvación y el

agua del Espíritu,

derramado como fruto de la

glorificación y de su señorío

sobre la muerte.

Nosotros "hemos muerto con Cristo, creemos que también tendremos vida

con él. Por tanto considérense muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús"

(Rm 6.8-11)

No te relato simples hechos pasados; te anuncio la salvación

realizada y consumada en

Jesucristo,

"este es el mensaje de la fe que

proclamamos: si crees en tu corazón que está vivo, y confiesas con tus labios que Él es el

Señor, encontrarás salvación" (Rm 10, 9)

Es nuestro misterio pascual, el sacramento de

nuestra fe el signo sagrado de

nuestra redención.

• Ha muerto en la cruz: murió por ti y por mí,

por toda la humanidad en

pecado.

• Ha resucitado: para hacernos renacer a una

esperanza nueva, para devolver el

sentido a nuestras vidas.

Nos ha dado su Espíritu para que

tengamos, vida nueva, vida en

abundancia, vida eterna.

Esta es la BUENA NUEVA DE LA SALVACIÓN,

salvación de todo hombre, salvación

de todo el hombre.

Esta gran noticia de la salvación ha sido

proclamada para que crea mos en ella y hagamos nuestra

la salvación.

La humanidad que caminaba en tinieblas, ha visto una

gran luz.

Este es el día de gracia, el

día de la salvación pues

"cuando se cumplió el

tiempo envió Dios a su Hijo

nacido de mujer,

nacido bajo la ley para

rescatar a los que estaban bajo la ley

haz tuya la salvación. Dios

se ha allegado a los hombres, vuélvete tú a

Dios,

Para que juntos podamos decir:

!JESÚS SALVADOR DE

LOS HOMBRES… SÁLVANOS!

"El vino a los suyos y los suyos no lo

recibieron, pero a los que le recibieron, les dio el poder ser hijos

de Dios“ (Jn 1, 11-12)

HAZ TUYA LA SALVACIÓN

¡TU LA PUEDES TENER

AHORA!

TE INVITO A TENER UN

ENCUENTRO PERSONAL,

VIVÓ, DE OJOS ABIERTOS Y CORAZÓN

PALPITANTE CON EL SEÑOR RESUCITADO.

Dice el Señor: "si me buscan de todo

corazón, me dejaré encontré de

ustedes (Jr. 29,12)

Jesús te dice: "Mira que estoy a la puerta y llamo, si alguno

oye mi voz y me abre la puerta, entraré' (Ap. 3, 20)

Para concluir esta proclamación, podemos, hacer

una oración de estilo "filocalia" (invocación de

Jesucristo como hijo de Dios vivo para que tenga

compasión de nosotros)

Dice el Señor: "si me buscan de todo corazón,

me dejaré encontrar de

ustedes (Jr. 29,12)

Jesús te dice: "Mira que estoy a la

puerta y llamo, si alguno oye mi voz y me abre la puerta,

entraré' (Ap. 3, 20)

Para concluir esta proclamación, podemos,

hacer una oración de estilo "filocalia"

(invocación de Jesucristo como hijo de Dios vivo

para que tenga compasión de nosotros)

• El predicador invita a los participantes, a

ponerse en actitud de oración e invocación.

• Los motiva para que se pongan en las manos de Jesucristo, suplicando al Señor, que llegue a sus

vidas; pidiendo que les dé la Salvación que anhelan.

• Puede recitarse lentamente, la oración del

plegable "Ven Señor Jesús"

Ven, Señor Jesús: Necesito tu salvación. Me reconozco pecador

ante ti y me arrepiento. Te Abro la puerta de mi corazón

y de mi vida.

Te acepto personalmente como

mi Salvador. Concédeme

experimentar tu amor, tu salvación, tu

liberación:

dame tu vida en abundancia, límpiame,

purifícame, libérame,

renuévame.

Entra en mi corazón y en mi vida y llénala de ti. Haz de mí lo que quieres que

sea.

Espíritu Santo, cámbiame el

corazón y hazme experimentar un nuevo nacimiento

para una vida nueva.

María mi buena madre, que como Jesús

reciba yo vida de tu seno maternal.

• Luego puede seguirse una breve oración dirigida, en la que se irá citando el pasaje del ciego

de Jericó (Lc 18,35) sin necesidad de proclamar la lectura, se irá

mencionando el pasaje, enfatizando la expresión de

aquel hombre al lado del camino: "Jesús Hijo de David ten

compasión de mí" orientando a los participantes, para que se apropien de la frase y hagan

suya esta súplica del ciego. No es necesario extenderse ni

explicar nada, sólo dirigimos una oración para que los oyentes

hagan la filocalia (invocación del nombre de

Jesús).

DESPUÉS DE ACOGER A

CRISTO EN TU VIDA

¿QUÉ HAY QUE HACER?

Permanecer en Jesús y crecer en

El. Reavivar el don

del Espíritu Santo.

Redescubrir tu iglesia, conocerla, y

mantenerte fiel.Integrarte a tu Parroquia para

comenzar a vivir en comunidad.

Integrarte a tu Parroquia para

comenzar a vivir en comunidad.

Leer y meditar diariamente la

palabra de Dios.

Redescubrir los Sacramentos, su

sentido y su gracia.Acudir a la

reconciliación y volver a dar gracias a Dios

en la Eucaristía.

Ir a dar testimonio de lo que el señor

está haciendo en tu vida.

MOSTRAR A TODOS QUE JESUCRISTO TE

ESTÁ SALVANDO.

4a. Proclamación Kerigmática

CONVERSIÓN:Conviértete de todo lo que te separa de Dios

"hay una voz que clama en tu interior, como un profeta en el desierto":

"conviértanse, porque el Reino de los Cielos está

cerca" (Mt 4,17.)

"ha llegado el tiempo oportuno y esperado: ¡el

Reino de Dios ya está aquí; !conviértanse y

crean en la Buena Nueva¡" (Mc 1,5)Conversión es la

exigencia para entrar bajo el reinado de Dios. Para entrar en su reino.

La conversión incluye:

•Cambio interior: hecho por Dios y en: referencia a él. Un cambio total desde el arrepentimiento y la transformación del corazón.

•Cambio exterior:

transformación de vida, de actitudes y obras, con

proyección y compromiso con los demás.

•Renunciar a todo pecado, alejar de nuestra vida todo

resentimiento y rencor; renunciar a las obras de Satanás y abandonar los ídolos que nos

someten y esclavizan.•Entregarse a Dios. Reconocer a Jesucristo como único Señor y

Salvador,

Porque "si reconocemos

nuestros pecados, fiel y justo es Él para perdonarnos los

pecados y purificarnos de toda Iniquidad"

(Jn 1,8-9)

Reconoce tus pecados, vuélvete a Dios, confiésate pecador ante Él, y pídele perdón. Vuelve tus ojos al

salvador en la cruz: allí encontrarás luz, alivio,

consuelo y Salvación para ahora mis mo. Porque desde

Jesucristo, se ha inaugurado el día de gracia del Señor, hoy es el día de

la salvación, hoy y siempre, porque ya está dada la solución para tu vida en

Cristo Jesús Nuestro Señor.

•Sólo el Espíritu Santo, con su luz puede darnos conciencia de pecado:

de otra manera, todo se reduce a un mero

sentimiento de culpa, o a un simple repaso de

tu lista de fallas: la conversión es la obra que realiza el Espíritu

Santo en tu vida y en tu historia. Necesitamos un corazón nuevo para

volver a Dios.

Después de reconocerte pecador. ¡Arrepiéntete!, pues el reconocimiento

de nuestro pecado, produce el

arrepentimiento. El arrepentimiento es la

respuesta de tu vida a la propuesta de la

salvación, el arrepentimiento te hará

decir: "sí, me levantaré, volveré junto a mi

Padre"

Porque cuando se ha descubierto la

condición de pecador, se siente el dolor que produce el pecado y la

rabia de vivir en tinieblas y engañado por el príncipe de la

mentira que es Satanás. Esto hace

detestar el pecado y nos motiva al retorno, a volver a la casa del

Padre.

•Reconocer nuestro pecado nos hace

sentir dolor y tristeza de haber lastimado y ofendido a nuestro

Padre amoroso, pero nos es una tristeza como la del mun do,

que produce muerte, sino una tristeza que

conduce a la conversión y al

cambio del corazón.

•Luego vendrá el rechazo a las obras de las tinieblas, Renunciar a Satanás y a todos sus engaños y obras como

la adivinación, magia, hechicería, espiritismo, control mental. Y

también abandonar los ídolos de este mundo, todo aquello que pretende

ocupar el lugar que sólo Dios merece en tu vida y en tu historia; como "la

ambición del dinero que es una idolatría" (Col 3,5), el ídolo del

sexualismo, el engañoso ídolo del placer, que conduce al hombre a ser

esclavo de toda clase de desviaciones, libertinajes, sometidos a las pasiones de la carne, o el ídolo del tener, expresado en la esclavitud

del consumismo la vaciedad, la vanidad, la egolatría. Renunciemos a todo esto para abandonar al hombre

viejo con sus obras, y dar paso al Hombre Nuevo según Cristo Jesús.

Entonces, necesitamos reconocer y confesar, confesar nuestros pecados ante Dios:

"Confiesen, pues, mutuamente sus pecados y oren los unos por

los otros, para que sean curados." (St 5,16). Porque "si decimos: 'no tenemos pecado', nos engañamos y la verdad no

está en nosotros. Si reconocemos nuestros pecados,

fiel y justo es Él para perdonarnos los pecados y

purificamos de toda injusticia. Si decimos: 'no hemos pecado',

le hacemos mentiroso y su palabra no está en nosotros“ (1

Jn 1,8-10).

Esto lo decimos para invitarte a la conversión, a que nos

alejemos del pecado, pero si aún vivimos en el pecado:

"tenemos a uno que abogue ante el Padre: a Jesucristo, el

justó. El es víctima de propiciación por nuestros pecados, no solo por los

nuestros, sino también por los del mundo entero." (1Jn 2, 1-2)

Te estamos predicando todo esto, como una invitación a que nos convirtamos y volvamos a Dios, haciendo obras dignas de

conversión (cf. Hech 26,20)

Necesitamos confesar y abandonar nuestra condición de pecadores pues “el que

confiesa y abandona, obtendrá piedad (Pr 28, 13)

es la reparación y la reconciliación; para restaurar

la unión de amor con Dios, reparar los daños causados y

reconciliarnos con el hermano. Para esto te

invitamos a reconciliarte con el Señor, a recibir su perdón,

en el signo sagrado de la reconciliación que te ofrece la

Iglesia por medio de sus ministros.

Debemos volvernos a Dios, ponernos en sus manos, reconocer y confesar a

Jesucristo como nuestro Señor y Salvador;

entregarle todo lo que somos y tenemos,

entregarle nuestros anhelos y proyectos, encomendar nuestras

preocupaciones en aquél que tiene el poder para

llevarlas a cabo, entregarle nuestros sentimientos,

emociones, deseos.-CONVIÉRTETE YCREE EN EL

EVANGELIO-

Para esta cuarta proclamación, sugerimos esta "dinámica

penitencial que incluye signos y ritos del Ritual de Iniciación

Cristiana de Adultos.•Después de hacer la

proclamación invitamos a entonar el "Señor ten piedad"

•Se proclama el Salmo 50, si es posible, que lo haga un cantor o

salmista.•Luego podemos citar frases de las parábolas de la misericordia

de Lucas 15, pero no es necesario proclamar todo el

evangelio sino hacer mención y traer al momento, algunas

partes e ideas claves del texto.

Vgr. "En verdad les digo que en el cielo habrá más alegría por un pecador que se convierta,

que por noventa y nueva justos que no necesitan

convertirse"(Lc 15,7)"Les aseguro que del mismo

modo se llenarán de alegría los ángeles de Dios por un pecador

que se convierta“ (Lc 15, 10)"Pero tenemos que alegramos y

hacer fiesta porque este hermano tuyo estaba muerto y

ha vuelto a la vida, estaba perdido y ha sido encontrado"

(Lc 15, 32)

•Podemos continuar con unas súplicas de perdón a las que respondemos con el estribillo "Sí, me levantaré, volveré junto a mi Padre." (si es posible hacerlo cantado) o bien "perdón, Señor, perdón":

*Por NO amarte sobre todas las cosas y dejarme dominar por el orgullo y la soberbia.*Por ser frío y altanero, por mi orgullo y vanagloria.*Por mi perversidad y rebeldía contra Ti, por mi ingratitud y desamor.*Por el odio que dejo crecer y la maldad que dejo habitar en mí.

Por dejarme llevar de la rivalidad y la envidia.*Porque vivo el engaño y

uso la difamación y la mentira.*Por toda injuria,

fornicación e impureza.*Por todo desenfreno y

perversión sexual o lujuria, por toda gula y embriaguez.*Por toda insensatez y

desorden, por toda división y Chisme.*Por toda mi maldad y

arrogancia.

Luego todos aclamamos diciendo. "¡gracias

Señor por tu perdón; “un corazón arrepentido y

humillado, tú no lo desprecias!”

Te estamos predicando todo esto, como una invitación a que nos

convirtamos y volvamos a Dios, haciendo obras

dignas de conversión (cf. Hech 26,20)

Luego podríamos proponer a los participantes, cinco formas de penitencia como una respuesta a esta proclamación.1. La confesión sacramental 2. Perdonar las ofensas del prójimo, (reconciliarme con un hermano que me haya ofendido)3. La oración piadosa (suplicando al Señor su perdón)4. La limosna: hacer una ofrenda generosa a algún hermano necesitado.5. La humildad, doblegar el orgullo propio: Hacer ayuno.

(Para iluminar un poco esta propuesta de los cinco caminos

de penitencia, el predicador, puede leer el texto de la homilía

de san Juan Crisóstomo de la Liturgia de las Horas del martes

de la XXI Ord.)

Se sugiere que aquellos que deseen asumir como compromiso uno de los signos penitenciales, lleven una de las tarjetas de co lor, con las indicaciones para

realizar la penitencia, según el mo delo que ofrecemos a

continuación y que cada equipo debe pre parar con anticipación:

CONFESIÓNDESEO ACERCARME AL SACERDOTE Y RECIBIR DEL SEÑOR

LA RECONCILIACIÓN Y LA ABSOLUCIÓN SACRAMENTAL.

RECONCILIACIÓN

DESEO EXPRESAR MI PERDÓN A ALGUIEN QUE ME HAYA

OFENDIDO O A ALGUIEN A QUIEN YO HAYA HECHO ALGUNA

OFENSA

ORACIÓN

ME COMPROMETO A HACER UN TIEMPO FUERTE

DE ORACIÓN, PARA PEDIR PERDÓN AL SEÑOR

POR MIS MUCHAS FALLAS.

AYUNO

COMO SIGNO DE PENITENCIA ME COMPROMETO A HACER

UN DÍA DE AYUNO.

(Puede ofrecerse una o dos de las comidas del día, y comer algo liviano)

LIMOSNA

COMO UN SIGNO DE DESPRENDIMIENTO Y PENITENCIA

DESEO HACER UNA OFRENDA GENEROSA A

ALGUNA PERSONA NECESITADA,

BIEN SEA EN MERCADO, ROPA O DINERO.

5a. Proclamación KerigmáticaNACER DE NUEVO:

NECESITAS NACER DE NUEVONo basta estar bautizado. Para hacernos plenamente cristianos debemos desarrollar la semilla

sembrada por el Espíritu Santo en el bautismo; necesitamos: Aceptar a Jesús

como único Señor, con sincera conversión del corazón, por una

adhesión personal a Cristo.Ábrete a la obra del Espíritu de Dios en

tu vida. Invócalo, déjalo actuar en tu vida y en tu historia, para que empiece

en ti una Vida nueva según el Padre Dios lo ha querido en Cristo Jesús su

Hijo, Nuestro Señor y Salvador. El espíritu Santo es el Señor y Dador de

vida.

Decídete por Jesucristo, ábrele tu corazón y ponte en sus manos; recibe el regalo de la salvación y

acoge la Buena noticia de su Reino.

En verdad te digo que es necesario nacer de nuevo: "porque el que no nazca de

lo alto, no puede ver el Reino de Dios. (Jn 3,3)Y tú me dirás: "¿cómo

puede uno nacer siendo ya viejo? ¿Puede acaso entrar otra vez en el vientre de su

madre y nacer" (Jn 3,4)

Ante esto Jesús te dice: "En verdad en verdad te digo: el que no nazca de

Agua y de Espíritu no puede entrar en el Reino de Dios. Lo nacido de la carne es carne; lo nacido

del Espíritu es espíritu" (Jn 3, 5-6)

Es el Espíritu Santo, el que procede del Padre y

del Hijo; el que nos vivifica y produce en

nosotros el nuevo nacimiento para una vida nueva. "No te

asombres de que te haya dicho: tienes que

nacer de lo alto. El viento sopla donde

quiere, y oyes su voz, pero no sabes de dónde viene ni a dónde va". (Jn

3, 8)

Como cristianos ya iniciados, hemos

recibido plenamente esa semilla de la vida nueva en el Bautismo,

la confirmación y la Eucaristía. Es pues el momento de que esta

semilla comience a germinar, empiece a brotar y así llegará a

dar su fruto.

¡DEBEMOS ACTUAR Y RENOVARNOS AHORA!

Cuando éramos pequeños, fuimos bautizados en la fe de la Iglesia; nuestros padres y padrinos nos

prestaron sus labios para confesar, sus pies para caminar, su corazón

para creer. pero ahora, somos cada uno de nosotros, adultos en la mente y en el cuerpo, los que

debemos dirigirnos con nuestros propios labios para confesar, con

nuestros propios pies para caminar, con nuestro propio

corazón para creer en Jesucristo, que nos hará llegar a la edad

adulta en el Espíritu y ser, Hombres Nuevos, según el plan del

Padre amoroso que nos ha destinado a la salvación.

El Espíritu Santo de Dios, actuará en nosotros para

vivificarnos, nos hará reconocer pecadores. Nos hará reconocer al

Salvador; Y juntando al pecador con el Salvador, hará surgir la salvación y llegará la Vida Nueva que tanto anhelamos y que hasta hoy hemos buscado, quizá por caminos desviados.

"Los que hemos muerto al pecado ¿cómo seguir

viviendo en él? ¿O es que ignoran ustedes que

cuantos fuimos bautizados en Cristo Jesús, fuimos

bautizados en su muerte? Fuimos, pues, con él

sepultados por el bautismo en la muerte, a fin de que,

al igual que Cristo fue resucitado de entre los

muer tos por la gloria del Padre, así también nosotros

vivamos una vida nueva.

Porque si nos hemos hecho una misma cosa con él por una muerte semejante a la suya,

también lo seremos por una resurrección

semejante; sabiendo que nuestro hombre viejo fue crucificado con él, a fin de que fuera destruido este

cuerpo de pecado y dejáramos de ser esclavos

del pecado. Pues el que está muerto, queda libre

de pecado.

Sí hemos muerto con Crista creemos que también

viviremos con él, sabiendo que Cristo, una vez

resucitado de entre los muertos, ya no muere más, y

que la muerte ya no tiene señorío sobre él. Su muerte fue un morir al pecado, de una vez para siempre; más

su vida es un vivir para Dios. Así también ustedes,

considérense como muertos al pecado y vivos para Dios

en Cristo Jesús.

Esta proclamación la concluimos haciendo la secuencia al

Espíritu Santo, pidiendo al Señor la

fuerza de su Espíritu:ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO

Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el Cielo.

Padre amoroso del pobre; Don, en tus dones espléndido; Luz que penetras las almas; Fuente del mayor consuelo.

Ven, dulce Huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo,

tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego,

gozo que enjugas las lágrimas y reconforta en los duelos.

Entra hasta el fondo del alma, divina luz, y enriquécenos.

Mira el vacío del hombre Si Tú le faltas por dentro; mira el poder del pecado cuando no

envías tu aliento.Riega la tierra en sequía, sana el corazón enfermo, lava las

manchas, infunde calor de vida en el hielo, doma el espíritu

indómito, guía el que tuerce él sendero.

Reparte tus siete dones según la fe de tus siervos.

Por tu bondad y tu gracia dale al esfuerzo su mérito; salva al que busca salvarse y danos tu

gozo eterno.Amén ¡Aleluya!

184

SEÑORIO DE JESÚS

ANUNCIO

EL DON DEL ES PÍRITU

LA PROMESA DEL PADRE

EXPRESIÓN DE LA RESPUESTA

LITURGIA DE CONSAGRACIÓN

NUEVO PENTECOSTÉS

ESQUEMAS DE LOS TEMAS DEL 2° BLOQUE

1 2

3

6

4

5

ES PARA TÍ,AHORA

INVITACIÓN

RENOVACIÓNDE LA

CONFIRMACIÓN

SEGUNDAPARTE

EVALUACIONEL SEÑORÍO DE CRISTO

1. SENSIBILIZACIÓN:

JEFE, SEÑOR, PRESIDENTE,

REY. EMPERADOR,

CAPITÁN.

2. COMPARTIR:Preguntamos a los presentes, ¿Qué

significan estas palabras y cuándo las usamos?• Hech 2, 36; Flp. 2, 9-

11; Zac 9, 9; Mt 21, 5; Jn 12, 13;

3. ILUMINACIÓN:El título Kyrios o Señor, en un ambiente Judío,

sólo era atribuido a Dios directamente. Después

de su resurrección y exaltación, Jesús recibe

"el Nombre que está sobre todo nombre":

Kyrios -Adonai- el Señor, que alude únicamente a

Yahveh.

El Nuevo testamento da como título propio a

Jesucristo el Nombre de Señor "Si confiesas con u boca que Jesús es Señor,

tendrás salvación (Rm 10,9) "pero nadie puede decir:

¡Jesús es Señor!, sino con el Espíritu Santo" (1 Cor.

12,3). Rey Señor no es un simple título; significa Jefe,

centro, cabeza, punto de referencia y convergencia,

principio y fin, alfa y omega.

Hay una pregunta de fondo para esta catequesis:

¿ES JESÚS TÚ SEÑOR?Tenemos que decir, que muchos

han encontrado a Jesús, han experimentado el nuevo

nacimiento y tienen vida nueva. Jesús es su salvador, pero es necesario que sea también su

Señor.

Jesús, para muchos, ya está dentro de su vida, ya lo han aceptado y lo conocen; pero

no es el centro, no es el Señor. Hacer a Jesús, Señor y centro de nuestra vida, es la manera concreta de amar a Dios sobre

todas las cosas y vivir el reinado de Dios en espíritu y verdad. Sólo el Espíritu Santo

nos hace capaces de reconocer y proclamar a Jesús como Señor; y sólo el Espíritu

de Dios hará que esto vaya siendo más y más real y efectivo en nuestra vida.

¿CÓMO HACER A JESÚS EL SEÑOR DE

TU VIDA?• Primero debes conocerlo como

Señor, reconocer su Señorío. Aceptarlo por la fe y desde

una sincera conversión del

corazón.

• Después de haberlo aceptado debes

reconocer que es Dios, que él es el centro y el Jefe, el

camino, la verdad y la vida; reconocer que él

es la clave de la historia y de la realización del

hombre, el único salvador de la

sociedad y del mundo.

• Debes luego aceptarlo como

Tu Señor, acogerlo en tu corazón y en tu

vida, invitándolo expresamente a

que sea el centro de tu

vida.

• Luego debes confesar con tus labios, consagrar y rendir cada

área de tu persona y de tu existencia a su señorío; es entregar las llaves de cada

apartado de tu persona y de tu vida y llegar así a decir con el

apóstol Pablo: "Ninguno de nosotros vive para sí mismo; como tampoco muere nadie

para sí mismo. Si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así que,

ya vivamos ya muramos, del Señor somos. Porque Cristo murió y volvió a la vida para

eso, para ser Señor de muertos y vivos."

(Rm 14, 7-9).

Para que Jesús sea más y más el Señor de nuestra

existencia no basta haber renacido

sacramentalmente una vez por el agua del bautismo,

ni haberlo aceptado inicialmente en un acto explícito y consciente

como el Señor. Es necesario dar muerte al

pecado y al egoísmo todos los días y permitir que Él

sea de hecho, el centro de todo, en un proceso que

es obra del Espíritu.

Con respecto a tu vida: ¿Cómo se encuentra el Señor Jesús, está fuera, rechazado o está en el

centro de tu vida?

Yo

Yo

Yo

ELSEÑORÍO DE

JESÚS

4. CELEBRACIÓN DE LA PALABRA:

Para iniciar hacemos la oración

de la mañana, haciendo una

pausa donde se dice: "te reconozco

como mí Salvador".

Ven, Señor Jesús: Necesito tu salvación. Me reconozco pecador ante ti y me arrepiento. Te Abro la puerta de mi corazón y de mi vida. Te acepto personalmente como mi Salvador. Concédeme

experimentar tu amor, tu salvación, tu liberación: dame tu vida en abundancia, límpiame,

purifícame, libérame, renuévame. Entra en mi corazón y en mi

vida y llénala de ti. Haz de mí lo que quieres que sea. Espíritu Santo, cámbiame el corazón y hazme experimentar un nuevo

nacimiento para una vida nueva. María mi buena madre, que como Jesús reciba yo vida de tu seno

maternal.

200

SEÑORIO DE JESÚS–Objetivo

Se pretende que la persona de Jesús, aceptada como Salvador, sea ahora reconocida y aceptada como Señor.

Hacer descubrir qué significa hacer a Jesús Señor.

Invitarlos a que lo hagan su Señor.

201

–Reglas prácticasEn este tema ya no se trata solamente de dejar de hacer lo malo y hacer lo bueno, sino que de entre eso bueno, debemos tratar de descubrir y hacer lo que Él quiere.

Esto no quiere decir que debemos dejar nuestro trabajo o nuestra familia, para hacer cosas religiosas, sino lo que Él quiera.

Lo importante no es tanto qué vamos a hacer, sino si soy capaz de aceptar lo que Él quisiera darme.

202

Explicar cómo sería el hacer a Jesús Señor en las diferentes áreas de la vida.Señor de mi tiempo.Señor de mi trabajo y de mi descanso.Señor de mi dinero (como uso de el).Señor de mis relaciones interpersonales.Señor de mi salud y de mi enfermedad.Señor de mi vida y de mi muerte

203

Yo

Yo

Yo

204

Esquema de continuidadJesús es el Señor.Es su título propio en el Nuevo Testamento.

Ser Señor, significa ser principio y fin, etc.

Es Jesús tu Señor, ilustrar con los tres círculos.

¿Qué significaría el que lo sea?

Sólo el Espíritu Santo nos permite reconocerlo como Señor.

205

¿Cómo hacer a Jesús Señor?Hay varios pasos: reconocerlo, aceptarlo, invitarlo, consagrar rindiendo cada área de nuestra vida.

Es una consagración total, nada debe quedar sin entregar.

Momento de entrega–Hay un momento inicial de entrega, explicitado conscientemente.

–Hacerlo, de hecho es una tarea de toda la vida.

–La consagración al Señorío de Jesús se hará en una liturgia especial, en donde cada uno de los participantes rendirá cada área de su vida a Jesús el Señor.