CULTURAS DEL MUNDO:LOS SAMIS.

Por Rodrigo Trasobares Zarzosa, 6ºA.

1.- INTRODUCCIÓN.

2.- ORÍGENES.

3.- TERRITORIO.

4.- TRADICIONES Y COSTUMBRES.

5.- GASTRONOMÍA.

6.- RELIGIÓN.

7.- CURIOSIDADES.

8.- CONCLUSIÓN Y OPINIÓN.

9.- BIBLIOGRAFÍA Y FUENTES.

Bandera Sami.

1.- INTRODUCCIÓN.

Los Samis, o pueblo Lapón o Saami, son un pueblo nómada o

seminómada, que al principio vivían de la caza, mayor y menor, de la pesca

y de la recolección de frutos silvestres: bayas, arándanos, hierbas y raíces

comestibles, etc. No fue hasta el siglo XVI, más o menos, que empezaron a

dedicarse al pastoreo de los renos, viajando con ellos de una zona de pastos

a otra, o migrando en las épocas más frías.

Su nombre, Saami en su lengua, significa: “gente que está unida”.

Habitan en Laponia, una región del norte de Europa que comprende

el norte de Suecia, Noruega, Finlandia y el noreste de la península rusa de

Kola.

En la actualidad, el pueblo Sami está compuesto por unas 80.000

personas, y casi ninguno de sus miembros vive de forma totalmente

tradicional, como lo hacían sus antepasados hace apenas un siglo, aunque

son muy celosos de la preservación y mantenimiento de su modo de vida y

costumbres.

Los Samis hablan el Lapón, que está emparentado con las lenguas de

procedencia ugrofinesas, de Europa Oriental y Septentrional, como pueden

ser el finés, el húngaro y el estonio. Existen tres variedades lingüísticas del

Lapón: el oriental, el central y el meridional. El Lapón central, a su vez, se

divide en el del Norte, en el Pite y el Lule.

Los samis, dependiendo de en qué regiones vivan, también hablan

ruso, sueco, noruego o finés.

Mapa de Laponia.

2.- ORÍGENES.

Hace 10.000 años, durante la última glaciación, se empezó a

desplazar la capa de hielo que cubría Escandinavia, el Norte de Alemania y

Noroeste de Rusia. A esa región, comenzaron a llegar, y a establecerse,

pueblos que se dedicaban a la recolección y a la caza, llamados por la

abundancia de recursos que allí encontraron: caza, pesca, hierba y frutos

silvestres.

Se han encontrado restos arqueológicos, de más de 2.000 años de

antigüedad, que emparentan a los pueblos allí establecidos en la Edad de

Piedra, con los Samis actuales.

Desarrollaron un estilo de vida seminómada, marcado por los

cambios de estación y por las posibilidades de cazar y pescar, procurando

no agotar los recursos que les proporcionaba la naturaleza.

Cabaña tradicional o Lavvu.

El número de componentes de estos grupos familiares dependía de

los recursos que pudieran encontrar, por lo que no debían ser grupos muy

numerosos de más de 3 o 4 familias.

Familia Sami.

A partir del siglo XVI, el estilo de vida de los antiguos Samis

empieza a cambiar, al reducirse los recursos naturales a los que pueden

acceder, al limitarse las zonas en las que pueden asentar sus campamentos,

debido al desarrollo y ampliación de los reinos y países que componen lo

que hoy conocemos como Laponia. Es entonces, a principios de este siglo,

que los Samis empiezan a domesticar y a pastorear los rebaños de renos.

En la segunda mitad del siglo XVIII, los distintos países nórdicos,

intentaron asimilar a las poblaciones Samis que habitaban en aquellas

tierras, intentando que olvidaran sus costumbres y su modo de vida

nómada, abandonando sus prácticas de pastoreo de sus amados renos y se

establecieran como agricultores sedentarios. Se prohibió la enseñanza del

Lapón en las escuelas Sami, y la evangelización cristiana, protestante y

ortodoxa rusa, les hizo abandonar sus ancestrales prácticas religiosas.

Lo que se buscaba, en definitiva, era la apropiación de las tierras en

las que habitaban los Samis, para así poder explotar los recursos que

ofrecían, por lo que eran un estorbo. Fue por esta presión que algunos de

los

aspectos más importantes o significativos de la cultura y tradición

Sami se fueron modificando, hasta llegar casi a desaparecer.

A partir de la Segunda Guerra Mundial, se produjo un cambio casi

definitivo en la vida Sami y en su modo de subsistencia, por la aparición de

la economía de mercado, que cambió el modo de subsistencia tradicional:

aparecieron cooperativas y se mercantilizó la explotación de los recursos

del reno; los pequeños rebaños familiares se sustituyeron por otros mucho

más grandes, para satisfacer las necesidades de los mercados; llegaron las

motos de nieve, las avionetas y helicópteros; las casas prefabricadas, que

sustituyeron a sus viejas cabañas o Lavvu y la utilización de ropas y

calzados modernos; las medicinas, hospitales, medios de comunicación y

todo aquello que proporciona el progreso, supuso un amplio aumento

demográfico de la población Sami.

Casa Sami en la

actualidad.

En la actualidad, los Samis van recuperando, en la medida de lo

posible, su modo de vida tradicional, pastoreando sus renos, aunque

adaptando a su modo de vida las ventajas que una sociedad moderna puede

aportar.

3.- TERRITORIO.

Los Samis viven en Laponia, una región del norte de Europa, que

ocupa parte de lo que hoy es Noruega, Suecia, Finlandia y parte de Rusia,

sobre todo en la península de Kola.

Mapa de dialectos Sami.

En esta región los Samis hablan un idioma propio, el Lapón, dividido

en tres dialectos distintos, aunque se hablan más dependiendo de las zonas,

como se explica en la fotografía. También hablan sueco, noruego o finés.

4.- TRADICIONES Y COSTUMBRES.

Los Samis, tradicionalmente, vivían de la caza, de la pesca, la

recolección y, posteriormente, la ganadería y la agricultura.

Eran un pueblo nómada o seminómada, que vivieron muchos siglos

pastoreando sus rebaños de renos.

Son un pueblo muy aclimatado al entorno tan duro en el que viven, y

soportan perfectamente las temperaturas extremas de aquellas tierras.

Vivían en una chozas o cabañas temporales, que montaban y

desmontaban al moverse de un lugar a otro.

Las chozas Sami, tanto en la forma como en la manera en que se

montan, son muy parecidas a los Tippis de las tribus indias de las llanuras

americanas.

Los Samis solían vivir en grupos compuestos por entre 3 y 6

familias, y pastoreaban un rebaño que podía superar los 6.000 renos. En

verano viajaban hacia la costa, para evitar los mosquitos, que atormentan a

los renos.

Han de vigilar constantemente para evitar los ataques de los

depredadores: águilas reales, que se llevan a las crías, linces, osos y, sobre

todo, los wolverines o glotones, carnívoros de tamaño medio, pero muy

agresivos y territoriales. No se les llama glotones por nada, su voracidad es

terrible. Para cuidar sus rebaños tienen una raza de perros autóctona

llamados “pastor lapón”, muy inteligentes y fieles.

Wolverine.

Pastor Lapón.

Saben mantener encendidas las ascuas, envolviéndolas en barro, para

luego prender sus fuegos, utilizando tiras de abedul seco.

Interior de un Lavvu.

Durante muchos siglos han vivido de los renos y de ellos lo

aprovechan todo: la piel se usa para fabricar sus chozas y para la

confección de sus ropas; la carne que consumen fresca, salada o ahumada;

los tendones con los que tejen cuerdas y los cuernos para fabricar

herramientas o juguetes.

Sus trajes típicos se llaman Kolts, y los hacen de colores chillones y

muy llamativos, para que así destaquen fácilmente en la nieve.

Cuando, tras la dura jornada de trabajo, se reunían junto al fuego y

cantaban sus canciones tradicionales o Yoiks, que evocan tiempos y

costumbres ancestrales.

5.- GASTRONOMÍA.

La gastronomía Sami está basada en la caza, el pescado, productos

del mar, hierbas, frutos silvestres y son amantes de las setas, de las que

conocen y consumen infinidad de variedades.

Suova de reno.

Algunos de sus platos más típicos son: arenques marinados con

cebollas y pimientos; platos de setas y bayas silvestres; empanadillas

rellenas de carne, pescado o frutas silvestres, cuando se preparan como

postre; el guiso tradicional de reno, o Suova (suova, en Sami, significa

ahumado), que en cada zona se prepara de una manera distinta, y que se

compone de reno

salado y ahumado, cocinado con setas y verduras, y siempre viene

acompañado de un puré de patatas, arroz, arándanos rojos y pepinillos

agridulces; el pescado preferido es el salmón, que se cocina directamente

en el fuego, sobre una tabla de madera, aunque también se consume

ahumado; el postre más conocido es el pan de queso y son muy famosos

sus dulces tradicionales.

6.- RELIGIÓN.

Al principio su religión estaba basada en creencias Chamanistas. El

Chamanismo son creencias y prácticas tradicionales que sostienen que son

capaces de diagnosticar y curar los sufrimientos del ser humano y acabar

con lo que provoca ese sufrimiento, contactando con el mundo de los

espíritus.

Chamán.

A partir del siglo de XVII, con la evangelización, fueron cambiando

a la religión cristiana, sobre todo protestante, y, en menor medida, ortodoxa

rusa.

7.- CURIOSIDADES.

El pueblo de Papa Noel está situado en el Círculo Polar Ártico, a 8

kilómetros de Rovaniemi, capital de la Laponia finesa.

El que Papa Noel viaje siempre acompañado de renos, se debe a una

campaña comercial ideada en 1926 para introducir la carne de reno en

Estados Unidos. Ese año, para darle más publicidad, se creó un desfile en

Macy´s, que se popularizó tanto que se repitió años tras año, hasta nuestros

días.

En la película Frozen, uno de los personajes es Sami: Kristoff.

Tienen un himno propio: La canción de la Familia Sami.

Laponia es un lugar privilegiado para poder contemplar la aurora

boreal, que es un fenómeno natural en forma de brillo en el cielo nocturno

y que se da en el hemisferio norte. Cuando se da en el hemisferio sur, se la

conoce como aurora austral. Puede aparecer en otros lugares del mundo,

durante breves periodos, aunque es bastante extraño que ocurra.

A los Samis no les gusta que les llamen lapones, es casi un término

despectivo.

Los Samis tienen más de cien nombres para referirse a la nieve.

Tienen un parlamento propio y para su construcción se inspiraron en

la forma de un Lavvu tradicional. Se encuentra en Karasjok, Noruega, y fue

abierto en 1989. Actúa con una institución que representa y protege a los

indígenas Samis.

8.- CONCLUSIÓN Y OPINIÓN.

Los Samis son un pueblo que ama profundamente la naturaleza, con

la que se sienten conectados.

Son parte del entorno en el que viven, sin intentar modificarlo a su

antojo, tomando sólo aquello que necesitan para vivir, cuidando aquello de

lo que viven.

Aunque vivan de los renos, los cuidan y protegen, como los renos les

cuidan a ellos, proporcionándoles todo lo que necesitan para vivir.

Me ha gustado mucho hacer este trabajo y me ha encantado todo lo

que he aprendido sobre este pueblo maravilloso. Había visto algunos

documentales sobre ellos, a mis padres y a mí nos encanta ver

documentales, pero no creía que fuera a ser tan bonito estudiar sobre ellos.

9.- BIBLIOGRAFÍA.

Wikipedia y un documental que me grabó mi padre sobre los renos,

en el que hablaban de los pastores de renos: el pueblo Sami.