Una Vision Socio-cultural de Las Prácticas Agropecuarias

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UNA VISION SOCIO-CULTURAL DE LAS PRÁCTICAS AGROPECUARIAS TRADICIONALES EN LAS COMUNIDADES CAMPESINAS EN LA DE TUNDAMA-SUGAMUXI, DEPARTAMENTO DE BOYACA Rosa E. Pérez Peña * Médico Veterinario UNAL Junio de 2002 INTRODUCCION El trabajo con comunidades rurales, campesinas o indígenas, requiere conocer la dinámica social de estas y las respuestas frente a alternativas tecnológicas propuestas. En éste contexto debe tenerse en cuenta las formas culturales en que dichas comunidades se relacionan con la religión, con el mundo, con el medio ambiente, y entre ellos mismos, Conocer esté tipo de relaciones facilita establecer un estilo de comunicación que ayuda en la labor del profesional agropecuario, asistente técnico de campo. * Médico Veterinario, UNAL, 1989; Formación en extensión rural y trabajo con comunidades campesinas e indígenas desde 1988; Comunicación Social Comunitaria UNAD. Actualmente ejercicio profesional particular.

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El trabajo con comunidades rurales, campesinas o indígenas, requiere conocer la dinámica social de estas y las respuestas frente a alternativas tecnológicas propuestas. En éste contexto debe tenerse en cuenta las formas culturales en que dichas comunidades se relacionan con la religión, con el mundo, con el medio ambiente, y entre ellos mismos, Conocer esté tipo de relaciones facilita establecer un estilo de comunicación que ayuda en la labor del profesional agropecuario, asistente técnico de campo.

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UNA VISION SOCIO-CULTURAL DE LAS PRÁCTICAS AGROPECUARIAS

TRADICIONALES EN LAS COMUNIDADES CAMPESINAS EN LA DE

TUNDAMA-SUGAMUXI, DEPARTAMENTO DE BOYACA

Rosa E. Pérez Peña*

Médico Veterinario UNAL

Junio de 2002

INTRODUCCION

El trabajo con comunidades rurales, campesinas o indígenas, requiere conocer la

dinámica social de estas y las respuestas frente a alternativas tecnológicas

propuestas. En éste contexto debe tenerse en cuenta las formas culturales en que

dichas comunidades se relacionan con la religión, con el mundo, con el medio

ambiente, y entre ellos mismos, Conocer esté tipo de relaciones facilita establecer

un estilo de comunicación que ayuda en la labor del profesional agropecuario,

asistente técnico de campo.

* Médico Veterinario, UNAL, 1989; Formación en extensión rural y trabajo con comunidades campesinas e

indígenas desde 1988; Comunicación Social Comunitaria UNAD. Actualmente ejercicio profesional

particular.

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Las comunidades campesinas de la región del Sugamuxi como cualquier otra

comunidad, han creado su propio patrimonio cultural con oficios y actividades

económicas propias de la región, los modos de vida, las tradiciones, las artes,

las comidas y bebidas y su historia oral revelan la forma como ella ha

buscado expresarse a través del tiempo.

La región esta conformada por municipios muy pequeños que se dedican a la

producción netamente agropecuaria, las diferencias culturales dentro del grupo

no son marcadas, no existen grandes diferencias económicas, sociales,

políticas, religiosas, o educacionales. Por lo que se puede hablar de la

existencia de una "representatividad cultural" o personalidad local, expresada

en la forma de ser de cada uno de los individuos del grupo y divulgada a través

de la forma de actuar grupal.

Ignorar esta forma de actuar de la comunidad rural local impide un abordaje

crítico de sus sistemas de producción cargados de expresiones culturales,

más aun considerando que estos responden a la influencia de factores de tipo

histórico, político e intelectual al igual que muchas otras expresiones culturales

que allí han perdurado en el tiempo.

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Este estudio se hizo considerando de manera integral archivos históricos de

notarias, parroquias, documentos escritos por otros autores y un invaluable

aporte oral conseguido a través del trabajo de campo en la zona.

ANTECEDENTES HISTORICOS

El campesino de la región, al igual que el campesino de muchas otras

regiones, también se ha visto afectado por el modelo "desarrollista" lo que ha

fortalecido el carácter de "clandestinidad" para ciertas prácticas ancestrales en

proceso de producción agropecuario, limitando su estudio y dejando de lado el

potencial que encierran en todos los aspectos.

Para entender la dinámica del proceso que ha conducido a esta situación es

necesario abordarlo históricamente. Vemos como las diferencias empiezan a

darse en la época de la conquista, cuando se presenta un desplazamiento de

la cultura aborigen existente en la zona que sume muchas de estas

expresiones en la clandestinidad y éste proceso continua en la época de la

conquista cuando se da un tipo de comunicación oral unilateral por

cognoscitiva bilateral.

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Al ser obligados los indígenas a aprender un nuevo idioma, una nueva religión

y un nuevo tipo de explotación económica, dejan de lado lo suyo lo que en el

momento fue obstáculo para la transmisión de los conocimientos propios a las

generaciones siguientes por medio de la tradición oral.

Luego al crearse instituciones como los resguardos indígenas, se permite la

asociación de individuos de cultura homogénea hecho que facilita la

conservación y transmisión de estos conocimientos tradicionales, aunque ya

con rasgos europeos. Toman entonces un carácter de conocimientos

"clandestinos" al estar al margen de los permitidos por el régimen dominante.

Se encuentran algunos escritos que se conservan en parroquias, juzgados

municipales, notarias, en ellos se pueden palpar el tipo de relaciones

establecidas entre españoles, indígenas y misioneros, relaciones de tipo

vertical donde lo religioso prácticamente rige la vida y con base en ella se juzga

cualquier acto de la comunidad.

Mirando algunas características del proceso económico antes de la conquista

existe evidencia del consumo de artículos suntuarios lo que permite concebir el

mercadeo con pueblos vecinos de algunos excedentes que les permitían

adquirir productos que no se encontraban en la región. Se presume la

existencia de un trabajo individual con apropiación personal de los productos,

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aunque se pueden hallar signos de formas temporales de trabajo comunitarios

para la satisfacción de necesidades comunes, como las sementeras de guerra.

El mercadeo en la actualidad se realiza bajo el mismo sistema, el excedente de

producción se comercia con los pueblos vecinos. El campesino acostumbra a

desplazarse de su vereda con sus productos a los centros de comercio una

vez realizada la transacción de sus productos se dispone a adquirir lo que el no

produce , como arroz, panela y vestuario.

No se puede afirmar que los indígenas allí establecidos hubiesen tenido

propiedad privada de la tierra, pero se puede deducir a través de crónicas

escritas donde se describe la forma en que se heredaban los bienes raíces, ya

que los muebles y tesoros eran enterrados con ellos. Esta forma de tenencia

de la tierra se ve reforzada en tiempos de la colonia cuando en los resguardos

son entregadas parcelas a familias indígenas para su explotación económica,

con apropiación personal del producto.

Algunos aun conservan como único titulo de propiedad los títulos de tradición

entregados en el siglo XVIII. Los linderos siguen siendo arboles, piedras,

quebradas y las disputas por terrenos son tan frecuentes como en la época

antigua. En las veredas existen sectores donde predomina a través de la

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historia un apellido, constituyéndose en una evidencia más que muestra como

estas tierras han pasado de generación en generación, por tradición.

Por lo tanto observando las características actuales del tipo de explotación, de

la forma de realizar el mercadeo y de la tenencia de la tierra, podemos afirmar

que la tradición es algo muy importante para ellos y ha logrado mantenerse a

pasar de la aplicación de diferentes modelos de Desarrollo por parte de las

instituciones que allí han laborado.

PRACTICAS AGROPECUARIAS TRADICIONALES DE LA REGION

En lo que a las prácticas agropecuarias se refiere la tradición también es muy

evidente como en las demás practicas sociales que allí se desarrollan,

cotidianamente. Se notan rasgos ancestrales en la preparación de los

alimentos, en la forma de la construcción de las viviendas rurales, las formas

de comerciar a través del trueque a nivel veredal y del vecindario, la existencia

de algunos elementos como los molinos de piedra y telares tradicionales.

La vereda es la base politico-administrativa. En ella sus habitantes comparten

el mismo clima, la misma vegetación, allí se encuentran determinadas materias

primas, que permiten el establecimiento de un sistema de producción

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homogéneo, con aplicación de técnicas con características comunes, lo que

permite hablar de una "identidad productiva."

Esta "identidad productiva" también se da en la utilización de algunas prácticas

como la utilización del arado de chuzo, tirado por bueyes para la preparación

del terreno; La preservación de la semilla de la región, la cual se almacena en

lo alto ya sea colgada en racimos o en el altillo; La siembra manual que permite

la reunión de la familia y aun de vecinos al utilizar la mano de obra disponible y

compartida - la mano prestada -.

Los insumos agrícolas utilizados son mínimos entre ellos están, el estiércol del

ganado que se ha dejado amontonado por el tiempo necesario para que lograr

su descomposición se aplica directamente con la semilla; Los insumos

químicos no están al alcance de la mayoría, por lo que su uso sobre todo en

cultivos como el trigo, el maíz la cebada, no es corriente. Las épocas de

siembra y recolección de los productos se realizan en las localidades por la

misma época y tiene mucho que ver mucho con las épocas de lluvias y las

fases de la luna.

En la parte pecuaria las condiciones no varían mucho, el ordeño se hace

manual y generalmente intervienen en ella las mujeres de la casa; los

animales pastan en potreros muy divididos debido al microfundio existente por

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lo que el sistema utilizado es "al lazo", es decir se amarran de una estaca y se

les deja de una cuerda, de más o menos 2-3 metros, para que se muevan

alrededor de esta, cuando el pasto que esta al alcance es consumido se

mueve la estaca para otro sitio. Este sistema requiere de una relación estrecha

entre el hombre y el animal; por que se necesita estar pendiente del animal

para suministrarle agua y comida; se puede considerar una gran ventaja

porque llegan a conocer muy bien a sus animales y cualquier cambio en su

actitud por pequeño que sea, es detectado inmediatamente.

Le administran sal mineralizada como único suplemento nutricional, la sanidad

se reduce a controlar parásitos internos y externos; hay que anotar que solo se

realizan en las épocas en que estos aumentan como en cambios climáticos de

lluvias y veranos y viceversa.

La leche que se recolecta es vendida a carros que recorren la región y su

transformación en subproductos no es corriente, generalmente los quesos

caseros se hacen para auto consumo. Las zonas bajas y planas son las mas

utilizadas para la explotación pecuaria, mientras las zonas de laderas se

emplean en la agricultura, hecho que ha favorecido la presentación de un

proceso de erosión rápido.

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Las demás especies pecuarias como porcinos, ovinos, conejos y aves son

generalmente para auto consumo y su producción se hace de forma artesanal,

es decir sin ninguna medida técnica, generalmente sueltos por la finca. Para la

construcción de las conejeras y los nidales se utiliza madera y los sitios

predilectos para ello, son debajo de los arboles o muy cerca de la vivienda.

El acercamiento entre veredas de un mismo municipio se da de una forma

esporádica, cuando se forman grupos para trabajar en actividades que tienen

como fin un bien común, como bazares, funerales, construcción de acueductos,

apertura de caminos, electrificación. Pero estos grupos se disuelven

rápidamente una vez se a logrado el objetivo.

Las formas de explicación magico-religiosas para los fenómenos naturales, se

mantienen, la sabiduría popular sigue viva en el uso de las plantas medicinales

para el tratamiento de algunas enfermedades, su aplicación se hace tanto de

forma local como general preparando infusiones o emplastos de acción local;

la orinoterapia no les es desconocida. Los agricultores siguen atentos a las

fases de la luna para realizar la siembra de las sementeras, para cortar la

madera, para la castración de los animales e incluso para la reproducción, ya

que el sexo de la nueva cría se rige por ellas.

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Siguen siendo productores y consumidores de maíz y papa, con los que

preparan la mayoría de sus alimentos, aunque también incluyen otros

productos como trigo, cebada, hibias, frijoles, arveja, ahuyama, calabaza y

carnes de cerdo, cordero y bovino principalmente. El huso o rueca es un

instrumento muy frecuente por constituirse en otra fuente de ingresos familiares

al igual que los telares que mantienen su forma tradicional y se construyen

rústicamente de madera que se produce en la región y sirven para continuar el

proceso de utilización de los subproductos de los ovinos, muy frecuentes en

estas zonas rurales.

Esa presencia de lo tradicional puede palparse aun mas en lo cultural a través

de la producción y la reproducción de coplas, en donde se hace alusión a

situaciones de la vida cotidiana . Los santos también se veneran como en los

tiempos de la conquista, las fiestas tradicionales a los patrones locales son una

muestra de ello; el culto a los muertos es tan importante como lo fue en la

época de los funerales chibchas; la música sigue siendo característica a pesar

de que los instrumentos hayan variado y la radio reemplace los grupos

musicales o veredales.

Las relaciones con el mundo no las asumen como propias, se reducen a

satisfacer las necesidades básicas primarias consideradas en este espacio

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como semejantes, lo que hace que se de una especie de "territorialidad" de los

problemas.

Tomemos algunas características generales que se encuentran con respecto al

carácter del campesino de la región; desconfiado, sumiso, expresivo, con calor

humano, egocéntrico, terco, individualista, con algo de resentimiento. Estos

rasgos pueden responder a factores historicos-culturales, por que ya en la

época de la colonia las personas que se dedicaban a las labores del campo

eran consideradas como de "inferior categoría" dentro de la jerarquización

social establecida y dominante por lo que éste tipo de trabajo era

encomendado a indígenas; presentándose una "desvalorización social" de las

labores rurales, actitud que ha permanecido e influye en la forma como ellos

enfrentan un medio que podría considerarse hostil.

HACIA UNA NUEVA ACTITUD

A través de toda la descripción histórica y cultural de la comunidad de la región

hemos mencionado algunas características que podrían pasar desapercibidas

pero una vez conocidas se convierten en elementos valiosos para desarrollar el

trabajo de validación de practicas agropecuarias tradicionales.

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Estos factores mencionados son: La representatividad cultural del grupo

visualizada en la actividad cotidiana de cada uno de los individuos (baja

variabilidad dentro del grupo); la identidad productiva dada por las condiciones

medioambientales (homogénea disponibilidad de recursos naturales);

territorialidad de la problemática (fácil identificación de los problemas si se

logra la identificación de sus necesidades básicas) y por ultimo el carácter del

campesino que permite conocer el tipo de actividades que se pueden

desarrollar en la región. Conocidos estos factores es más fácil definir una

región y hallar las metodológicas y tecnologías que se encuentren en unidad

de sentido con el medio.

Pero en lugar de considerar todas estas características como algo negativo por

la baja productividad en términos económicos que denotan, podemos decir que

se encuentran a las puertas de una de las mejores producciones a nivel

internacional, si se considera la calidad de los productos que allí se tienen

desde el punto de vista biológico, que es que rige las nuevas normas a nivel

mundial .

Continuar con los procesos de tecnificación basados en el establecimiento de

producciones mantenidas artificialmente mediante la aplicación de

innumerables insumos químicos, la introducción de semillas que exigen un

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mayor desgaste del suelo y la adquisición de ejemplares animales de difícil

manejo por parte del productor sería un grave error.

En razón a lo anterior podemos deducir las posibilidades que tiene un

profesional asistente técnico agropecuario frente a una comunidad campesina

con estas características si la aborda de forma critica, es decir considerando

los fenómenos socioculturales estudiados, el contexto, el medio ecológico

donde se desarrollan, aplican y se les da sentido a las prácticas agropecuarias.

Una manera incorrecta de afrontar las características socioculturales de la

región, explica el por que persisten a través del tiempo las practicas

tradicionales con una baja “tecnificación”, a pesar de innumerables esfuerzos

para realizar la transferencia de nuevas tecnologías. La implantación de

paquetes tecnológicos que no tienen unidad de sentido con estas prácticas

tradicionales, impide que sus habitantes encuentren la utilidad que puedan

tener en un momento determinado dentro del proceso de desarrollo regional.

Por esto el trabajo de campo de los asistentes técnicos agropecuarios, no

puede basarse en la intención de transformar las técnicas que comprenden el

sistema productivo establecido, sino la de cambiar la visión de ellas que se

tiene a nivel institucional procurando un conocimiento e interpretación del

sistema desde un contexto sociocultural. Se debe continuar con una búsqueda

de espacios que permitan construir metodologías que se adapten a la

idiosincrasia de los individuos de la localidad buscando factores comunes que

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también se puedan observar a nivel regional y permitan valorar la acción

transformadora desde un contexto más amplio.

No se puede suponer que conociendo las tendencias históricas de los procesos

productivos nacionales se puedan aplicar en lo local, sobre todo con

comunidades tradicionalistas. Generalmente el transcurrir histórico de una

localidad es más lento que el ritmo de los centros económicos cercanos; sin

embargo, decir que son sistemas de producción rezagados y/ o estáticos es un

error, ellos responden a su propia dinámica que tiene como base satisfacer sus

necesidades básicas primarias.

Esta diferencia es una gran ventaja, al tener un ritmo de transcurrir de los

hechos más lento, cualquier otro suceso o práctica innovadora que allí logre

establecerse a largo plazo perdurara en el tiempo.

El respeto a la diferencia cultural que se da a comunidades indígenas y

afroamericanas podría también aplicarse al caso de las comunidades

campesinas tradicionales, tomando sus saberes como un recurso fundamental

y no como un obstáculo a vencer. Vista de esta forma crítica la cultura de la

región es una cultura dinámica, cambiante, que construye signos y les da

lógica propia, un ¨ pueblo de indios ¨ que conserva sus usos, costumbres y

agüeros y no un pueblo que se niega a cambiar por que sí.

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Optar por nuevas alternativas innovadoras o por alternativas tradicionales no

quiere decir que se las deba tratar como tendencias opuestas, porque optar por

una no significa que se deba rechazar de plano la otra, la mayoría de las veces

las unas enriquecen a las otras, las complementan o las continúan.

No juzgar, sino entender porque se dan estas diferencias, permitiendo el

surgimiento de nuevos saberes, de nuevos actores, para construir desde el

presente una nueva visión de las prácticas agropecuarias tradicionales, podría

constituirse en la actitud que hace falta por parte de los profesionales

asistentes técnicos al nivel de campo para que las tecnologías innovadoras

perduren en estas comunidades.

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BIBLIOGRAFIA

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