Tejido muscular

A pesar de que los huesos forman el sistema de armazón del cuerpo, no pueden moverse por sí solos para ello necesitan de la contracción y relajación alternada de los músculos. El tejido muscular está formando por células que poseen la capacidad de contraerse, denominadas miocitos. Es un tejido abundante y en los seres humanos compone un poco menos de la mitad de toda su masa, entre el 40 y 50 %.

Existen tres tipos de tejidos musculares, que difieren principalmente en las características de sus células y en su ubicación. Estos son el músculo esquelético, el liso y el cardiaco. Los detallaremos a continuación.

El tejido muscular tiene la capacidad de excitarse y responder a una serie de estímulos, como cambios de presión, calor, luz, entre otros. Este tejido se encarga del movimiento de los organismos como ya explicamos entre otras funciones. Los músculos se caracterizan por sus propiedades de excitabilidad, contractilidad, extensibilidad y elasticidad.

Los músculos están compuestos por casi un 80% de agua, la cual cumple un papel vital en la contracción y provee de un medio adecuado para los iones inorgánicos y compuestos orgánicos presentes en el tejido. Está conformado por distintas proteínas contráctiles: actina, miosina y tropomiosina.

El tejido muscular tiene cuatro funciones principales:

Producir movimiento: caminar, correr, masticar, sonreír. Estabilizar la posición corporal: las contracciones del tejido muscular

permiten mantener la posición corporal. Almacenar y movilizar sustancias del organismo: por ej, la contracción

de los esfínteres del musculo liso impiden el vaciamiento de sustancias de los órganos huecos como el estómago o la vejiga.

Producción de calor: al contraerse el tejido muscular genera calor y esto ayuda a mantener la temperatura normal del organismo.

Dijimos que el tejido muscular tiene cuatro principales características:

Excitabilidad eléctrica: es decir responde a estímulos generando potenciales de acción que pueden viajar por la membrana de los miocitos, por impulso propio y por estimulo de los neurotransmisores.

Contractibilidad: es la capacidad de contraerse enérgicamente ante el estímulo y provocar la tensión del mismo. El musculo se tensa firmemente y provoca el movimiento.

Extensibilidad: es la capacidad de estirarse sin dañarse, esto es posible gracias a la flexibilidad de sus células.

Elasticidad: es la capacidad de volver al estado original luego de contraerse y/o estirarse.

Tono muscular:El tono muscular es un estado de contracción, que se manifiesta permanentemente. Siendo que se produce contracción, tanto activa como pasiva y continua de lo que son los músculos. Así es como los músculos se encuentran en estado de reposo y aun así se contraen rítmicamente para mantener la tonicidad de los mismos.

Cuando dormimos el Tono Muscular procede a reducirse, esto se debe a la relajación. Pero vuelve a incrementarse al momento de la vigilia.

Con la finalidad de que los músculos sean capaces. De regular y de mantener su estado de reposo. Se hace necesaria la participación, del denominado reflejo miotático, además de las diversas unidades motoras. Luego para el estado de contracción es igualmente necesaria la participación, de los impulsos nerviosos inconscientes.

Por ejemplo, si se produce un tirón, provocado por un esfuerzo brusco en ese momento se produce el incremento de la tensión muscular. Esto ocurre de forma automática. A fin de que el cuerpo, proceda a mantener su equilibrio y como una manera de protegerse, ante la presencia del peligro, opera con un reflejo miotático que es una especie de mecanismo de defensa del propio organismo para evitar lesiones.

Existen como ya vimos tres tipos de tejido muscular el músculo esquelético, el músculo liso y el músculo cardiaco. A continuación, veremos los detalles de cada uno:

Músculo esqueléticoTambién recibe el nombre de músculo estriado o voluntario, porque estas estructuras pueden ser movilizadas de manera consciente por la persona. Cada uno de los músculos esqueléticos es un órgano compuesto por cientos de células denominadas fibras musculares. Las células son multinucleadas y se arreglan de manera longitudinal a veces muy largas dependiendo del musculo que forman.

El músculo esquelético participa en los movimientos corporales. Cada músculo está unido directamente a dos o más huesos por medio de tejido conectivo. Cuando el músculo se contrae, los huesos se mueven alrededor de la articulación que los mantiene unidos.

Las tres proteínas contráctiles que tienen las células del tejido muscular como ya vimos son la actina, la miosina y la tropomiosina. Entre las tres, la proteína más abundante es la miosina y se encuentra en los filamentos primarios. La actina es encontrada en los filamentos secundarios y la tropomiosina en las bandas I.

El tejido conectivo rodea al tejido muscular protegiéndolo. La fascia es una delgada capa de tejido conectivo que sostiene y rodea a los músculos y a otros

órganos. La fascia superficial es tejido conectivo areolar y adiposo que rodea al musculo y lo separa de la piel. Provee de una via de ingreso de vasos sanguíneos y linfáticos, además de una capa adiposa de triglicéridos que protege al musculo de traumatismos y reduce la perdida de calor. La fascia profunda es tejido conectivo denso que mantiene junto a los grupos de músculos similares, permite el libre movimiento de los músculos, rellena los espacios libres y provee sitio para nervios y vasos sanguíneos y linfáticos. Desde esta fascia profunda se extienden tres capas de tejido conectivo para proteger y fortalecer el musculo. La más externa se denomina EPIMISIO, envuelve al musculo completo, PERIMISIO que rodea grupos de entre 10 y 100 fibras musculares separándolos en haces llamados fascículos y por último en ENDOMISIO que es una fina capa de tejido conectivo areolar que separa cada fibra muscular dentro del fascículo.

Estas tres fascias pueden extenderse más allá del musculo para formar un TENDON, que es una especie de cordón de tejido conectivo que fijan el musculo al periostio del hueso. Ej: tendón de Aquiles que fija el musculo comúnmente llamado gemelo al hueso calcáneo.

Cuando este TENDON se extiende como una capa ancha y fina se denomina APONEUROSIS es el caso del musculo occipitofrontal en la superficie del cráneo.

Músculo liso

El segundo tipo de tejido muscular es el músculo liso, caracterizado por carecer de estrías y por ser involuntario. Es un músculo que está constituido por células de forma alargada y que poseen solo un núcleo ovalado, organizadas en varias capas. El musculo liso es controlado por el sistema vagal y se contrae espontánea y lentamente, bajo el efecto de dos proteínas, la miosina y la actina. La contracción del músculo liso es mucho más lenta que la del esquelético, pero más prolongada. Este tipo de musculo se encuentra formando parte de las paredes de los órganos internos como el tracto digestivo, el tracto respiratorio, la vejiga urinaria, las venas, las arterias, entre otros órganos.

Como podemos imaginarnos, nosotros no somos capaces de mover nuestro intestino o de contraer nuestras venas de manera voluntaria como la hacemos con nuestras extremidades. Mucho menos hacer que el esófago lleve lo que acabamos de tragar hasta nuestro estómago. Podemos mover un brazo, pero no modular los movimientos intestinales, por ello es que el músculo liso de nuestras vísceras y de nuestros órganos huecos es involuntario.

Músculo cardiacoEl músculo cardiaco se encuentra de manera exclusiva en el corazón. Está compuesto de fibras multinucleadas estriadas, que recuerdan en varios aspectos al músculo esquelético. Las fibras se encuentran en una modalidad in situ, pero no se fusionan unas con otras.

A diferencia del músculo esquelético, el cardiaco genera ATP de manera aeróbica y utiliza ácidos grasos para la generación del mismo (y no glucosa).

Este musculo está especializado en responder a estímulos de manera rítmica, para hacer latir al corazón. Al igual que el músculo liso, está inervado por el sistema autónomo, por lo cual es un músculo involuntario.

Estructuralmente, el músculo cardíaco, también conocido como miocardio, tiene una apariencia estriada debido al arreglo de las cifras que permiten las contracciones musculares. El miocardio es un músculo muy aeróbico y depende enormemente de un suministro ininterrumpido de sangre para enviar oxígeno al músculo del corazón, las células del músculo cardíaco tienen propiedades únicas que le permiten funcionar como un sistema distintivo. Estas células del miocardio, llamadas cardiomiocitos, tienen la característica de la automaticidad, conductividad, contractilidad y excitabilidad. Las primeras dos características son únicas del músculo cardíaco, mientras que las últimas dos son comunes para los otros tipos musculares.

El musculo cardiaco permanece contraído de 10 a 15 veces más que el musculo esquelético, el tejido muscular cardiaco se contrae por la estimulación de sus propias fibras autoexcitables.