Suplemento infantil del diario EL TIEMPO. Premio...

4
Suplemento infantil del diario EL TIEMPO. Premio Nacional de Periodismo 1990 Miércoles 29 de febrero de 2012 - Año 23 - No. 1.204 L A J I R A F A R A F A E L A La jirafa Rafaela usa gafas de su abuela porque desde allá arribota no ve ni hache ni jota. Creyó que un enorme pino era un jirafo muy fino que le iba a hacer la corte; ¡vaya corte! Que un erizo con un año era una esponja de baño y se lavó en bañador; ¡qué dolor! Que la serpiente Consuelo era un lazo para el pelo y la llevó en la cabeza; ¡qué belleza! Que un avestruz con sombrero era un hermoso florero y lo colocó de adorno; ¡qué trastorno! Y que era Alejo el Cangrejo un despertador muy viejo que atrasaba con frecuencia; ¡qué paciencia! La jirafa Rafaela usa gafas de su abuela porque desde allá arribota no ve ni hache ni jota. Carmen Gil, española, en su libro: “Unos animales muy originales” Un padre intenta vestir a su hijita: -A ver, ¿dónde mete tu madre las medias? –Le dice mientras revisa las gavetas. -¡Ahí!- contesta la niña señalando sus pies. “Enseñen a los niños a ser preguntones para que pidiendo el por qué de lo que se les mande hacer, se acostumbren a obedecer a la razón; no a la autoridad como los limitados, no a la costumbre como los estúpidos”. Simón Rodríguez

Transcript of Suplemento infantil del diario EL TIEMPO. Premio...

Suplemento infantil del diario EL TIEMPO. Premio Nacional de Periodismo 1990Miércoles 29 de febrero de 2012 - Año 23 - No. 1.204

LA J

IRAF

A RA

FAEL

A

La jirafa Rafaelausa gafas de su abuela

porque desde allá arribotano ve ni hache ni jota.

Creyó que un enorme pino

era un jirafo muy finoque le iba a hacer la corte;

¡vaya corte!

Que un erizo con un añoera una esponja de baño

y se lavó en bañador;¡qué dolor!

Que la serpiente Consuelo

era un lazo para el peloy la llevó en la cabeza;

¡qué belleza!

Que un avestruz con sombreroera un hermoso floreroy lo colocó de adorno;

¡qué trastorno!

Y que era Alejo el Cangrejoun despertador muy viejo

que atrasaba con frecuencia;¡qué paciencia!

La jirafa Rafaela

usa gafas de su abuelaporque desde allá arribota

no ve ni hache ni jota.

Carmen Gil, española,en su libro: “Unos animales muy originales”

Un padre intenta vestir a su hijita:-A ver, ¿dónde mete tu madre las medias? –Le dice mientras revisa las gavetas.-¡Ahí!- contesta la niña señalando sus pies.

“Enseñen a los niños a ser preguntones para que pidiendo el por

qué de lo que se les mande hacer, se acostumbren a obedecer a la razón; no a la autoridad como los

limitados, no a la costumbre como los estúpidos”.

Simón Rodríguez

2 Miércoles 29 de febrero de 2012

Ciencias

Los pájaros cantan por dos ra-zones principales: para marcar su territorio y para buscar compañera. Los etólogos (expertos en el estudio del comportamiento y de la conducta animal) dicen que las vocalizaciones en los pájaros son de 2 tipos: gritos y cantos. Los primeros son señales breves emitidas tanto por el macho como por la hembra. Pueden darse en los vuelos, cuando aparece un depredador, en la alimentación de las crías, etc. En cambio, los cantos generalmente sólo los emite el macho. Todas las aves emiten gritos, pero sólo las oscinas (aves cantoras) poseen cantos.

El ruiseñor, el mirlo, la alondra, el zorzal, el canario y la tángara escar-lata son algunos de los pájaros que mejor fama tienen como cantores. En Venezuela destacan por su canto: el turpial, el jilguero, el azulejo y el cardenalito, este último declarado en peligro de extinción.

¿Qué te han enseñado sobre Simón Rodríguez?

Chuíto y Jacinta van a la escuela

José Narváez11 años6º grado

DylanSalas11 años6º grado

Asdrúbal Marcano11 años6º grado

Chuíto y Jacinta van a la escuela

“El burrito y la tuna” nos cuenta la historia de un hombre que se adentra en la Guajira con su burro. Pero cuando llega la noche el hombre abandona al animal, por el miedo a enfrentarse al temible espíritu Wanuluu. Ramón Paz Ipuana fue profesor y defensor de los derechos y tradiciones del pueblo guajiro. Para niños y niñas desde los 6 años de edad.

Letras a Bordo

¿Por qué cantan los pájaros?

“EL BURRITO Y LA TUNA”

Autor: Ramón Paz IpuanaEdiciones Ekaré

yer se conmemoró la muerte de un personaje ilustre, de alguien que fue amante de las letras, pedagogo, propa-gador de ideas progresistas y, además,

tutor del Libertador Simón Bolívar. El 28 de febrero de 1854 falleció en Perú

Simón Rodríguez, uno de los intelectuales hispanoamericanos más importantes de finales del siglo XVIII y mediados del siglo XIX. Este venezolano, que vio la luz en Caracas, fue un gran pensador y filósofo, apasionado viajero y, de acuerdo con la Enciclo-pedia Hispánica, tuvo que llegar hasta el punto de cambiar su nombre al de Samuel Robinson, en Jamaica, por temor a ser arrestado o asesinado, ya que había participado en movimientos contra los realistas.

Caballito de Mar habló con Amaya Echenique, profesora de Ciencias Sociales de la Unidad Educativa “Doña Menca de León”, quien co-mentó que los aportes educativos de Simón Rodríguez, fueron muchísimos. Entre ellos mencionó:

La calidad de la enseñanza en torno al desarrollo personal del individuo.

La capacidad de comprender y analizar a la sociedad en donde uno vive.

El desarrollo comunitario inspirado en principios y valores, como la igual-dad, la equidad y la libertad.

La educación diversificada (en aquel tiempo, la escuela nocturna era sólo para los adultos).

El establecimiento de escuelas con comedores.

SIMÓN RODRÍGUEZ:Ficha clave en la educación venezolana

Texto: Aisamar Figuera

A

“Él fue un gran maestro y viajero que participó en muchas actividades importantes de la historia ve-nezolana. Fue profesor en el Cabildo de Caracas y, además, educó al Libertador Simón Bolívar”.

“Fue un gran profesor exiliado de Venezuela por apoyar el lema ‘Maestro pagado, en buena sala y con un buen salario’. Se encargó de educar al Libertador Simón Bolívar”.

“Nació en Caracas el 28 de octubre de 1769. Es uno de los intelectuales americanos más recordados de la his-toria. Se cambió el nombre en Jamaica cuando lo expul-saron de Venezuela. Viajó mucho, factor que lo colmó de cultura. Murió en Perú, el 28 de febrero de 1854”.

Visitamos la UE Abajo Cadenas y un grupo de amigos respondieron nuestra pregunta:

3Entrelas Algas

¿Qué te han enseñado sobre Simón Rodríguez?

Chuíto y Jacinta van a la escuela

CarlaVercesi11 años6º grado

NeidimarRojas11 años6º grado

Daniela Gallardo11 años6º grado

Chuíto y Jacinta van a la escuela

LA LAGARTIJAQuieta, en el tronco de un árbol.Cazadora, siempre activa.A una mosca está acechando,la taimada lagartija.

¡Zap! ¡Qué certera puntería!Con su lengua capturóla zigzagueante vecinaque confiada se acercó.

Andrés Díaz Marrero

Sobre nuestro cuerpo…Las personas son aproximada-

mente 1 centímetro más altas por las mañanas que por las tardes. Esto se debe a que los discos car-tilaginosos de la columna vertebral se van comprimiendo con el peso corporal durante el día. Cuando estamos acostados, estos discos se aflojan; mientras es de día y hace-mos actividades, se comprimen.

Palabras “palíndromos”

Los palíndromos (del griego “pa-lin dromein”: volver a ir hacia atrás) son unas curiosas palabras, números o frases que se leen igual si lo ha-cemos de izquierda a derecha, o de derecha a izquierda. Si se trata de un número se llama capicúa. Algunos ejemplos: Ana, arepera, ananá, oso, radar, reconocer, rotor, salas, seres, somos, sometemos, acurruca, azuza, kayak, orejero, rodador.

SIMÓN RODRÍGUEZ:Ficha clave en la educación venezolana

“Él nació el 28 de octubre de 1769. Fue maestro del Libertador, se casó con María de los Santos, fue expulsado de Venezuela y se cambió el nom-bre a Samuel Robinson”.

“Nació en Caracas. Sus padres fueron el sacer-dote Alejandro Carreño y María Rodríguez. Viajó a muchos países. Fue maestro de Simón Bolívar y murió el 28 de febrero de 1854”.

“Simón Rodríguez fue quien se encargó de la educación de Simón Bolívar, luego de que éste se fugara de la casa de su tutor. Rodríguez se casó en 1793 con María de los Santos Ronco, y murió en Perú”.

Visitamos la UE Abajo Cadenas y un grupo de amigos respondieron nuestra pregunta:

“Enseñar es hacer comprender. Es emplear el entendimiento. No hacer trabajar la memoria”.

“Enseñen y tendrán quien sepa, eduquen y tendrán quien haga”.

“Al que no sabe, cualquiera lo engaña. Al que no tiene, cualquie-ra lo compra”.

“Nadie hace bien lo que no sabe, por consiguiente, nunca se hará República con gente ignorante, sea cual fuere el plan que se adopte”.

Recordemos que la educación es la base de nuestra formación. ¡Mientras más preparados estemos, más oportunidades se nos

presentarán!

Pensamientos del maestro

4

Félix Oreagmail.com

Miércoles 29 de febrero de 2012

Una estrella de mar nos cuenta

TRES CUENTOS DE ARMANDO JOSÉ SEQUERA

CUESTA ABAJO NUEVO DE VERDAD ¿DÓNDE ESTUDIA PICASSO?En el colegio de Teresa llevaron como

invitado a un cuentacuentos. Uno de los cuentos que éste contó se refería a un paseo en bicicleta y, para hacerlo más real, le pidió a todos los niños que se acostaran en el piso, con las piernas al aire, y pedalearan con áni-mo. Como el cuento era muy largo, la mayoría de los niños se cansó, pero el cuentacuentos les pidió que siguieran pedaleando. Sólo Teresa bajó las piernas y dejó de moverlas.

—Hey, niña, ¿por qué no estás pedaleando? –Le preguntó el cuentacuentos–. Todavía no hemos terminado el paseo.

—Yo sé –respondió mi hermana–, pero es que ahora voy en bajada.

Cuando nació el bebé de Marta, la amiga de mamá, fuimos a la clínica a conocerlo. Pu-dimos verlo a través de una vidriera, dentro de una cuna transparente, dormido. Sólo tenía puesto un pañal y, alrededor de su cuna, había una luz encendida. Del dedo pulgar de su pie derecho colgaba una etiqueta. Viéndola, Teresa comentó:

—De verdad es nuevo: todavía no le han quitado el precio.

Un día en que Teresa, que entonces estudiaba segundo grado, salió de su salón de clases para el baño, tropezó en el pasillo con una maestra que llevaba una fotocopia de un dibujo hecho por Pablo Picasso.

Cuando mi hermana vio el dibujo, preguntó: – ¿Quién pintó eso?—Pablo Picasso –le respondió la maestra.— ¡Guao! –exclamó Teresa con asombro,

llevándose las manos a la boca. ¿Y en qué grado estudia él?