Sufrimiento Fetal

12
30 capítulo 463 Sufrimiento (disestrés) fetal Marco de referencia Sólo unos cuantos años después de que Laënnec, en 1806, inventara el estetoscopio, Kargaradec, en Ingla- terra, figuró como el pionero de la auscultación fetal al señalar que “los latidos fetales ocurren 143 a 148 ve- ces por minuto, y el pulso de la paciente es de sólo 72 veces”. En 1883, Kennedy publicó el libro Observacio- nes sobre la auscultación obstétrica, el cual fue moti- vo de debate al haber señalado una frecuencia normal de 100 a 180, lo que no era compartido por la mayoría de sus colegas. Sin haber utilizado el término sufri- miento, Cummings en 1875 fue el primero en llamar la atención con la siguiente observación: “Cuando los ruidos fetales que han sido normales se transforman en sonidos rápidos y débiles que apenas pueden reco- nocerse, lo mismo que cuando son lentos, débiles o irregulares debido a una presión cerebral, la vida del feto está en peligro.” Definición La definición de mayor aceptación para sufrimiento fetal (disestrés fetal) surgió de la escuela uruguaya de fisiología obstétrica, la cual marcó un hito en la obs- tetricia al señalar con fundamento científico las bases de la fisiología obstétrica y el sustrato físico y bio- químico de la hipoxia fetal; Caldeyro definió el sufri- miento fetal (o disestrés fetal, véase explicación en el inciso de Frecuencia) como un síndrome causado por disminución de los intercambios metabólicos entre el feto y la madre. Una mejor aproximación para la comprensión del problema consiste en abarcar el sufrimiento fe- tal en tres enfoques interrelacionados; a saber: clí- nico, basado en sus manifestaciones de alteración de la frecuencia cardiaca fetal y la presencia o no de meconio; biofísico, que considera las características de los trazos cardiotocográficos, y bioquímico, que evalúa las condiciones de hipoxemia, hipercapnia y acidosis mixta. Según su cronología, se han considerado dos tipos de sufrimiento fetal. El crónico, correspondiente a los casos de disfunción placentaria que se manifiesta con repercusión sobre el crecimiento y desarrollo fetales, y el agudo, que por definición se presenta en forma más o menos súbita y durante el trabajo de parto. En algunas publicaciones del decenio de 1980 se hizo mención de una variedad denominada sufrimiento fetal crónico agudizado; en ésta se resaltó la existen- cia de casos en los que, durante las últimas semanas de la gestación, había ocurrido deterioro de la salud fetal debido a disfunción placentaria, y en el trabajo de parto, por acción de las contracciones uterinas, se manifestaba sufrimiento fetal agudo. Después, con la mayor profundización del cono- cimiento, esta entidad recibió la denominación de “baja reserva fetal”, porque durante el trabajo de par- to, al ocurrir aumento de la presión intramiometrial como consecuencia de las contracciones uterinas,

description

Sufrimiento Fetal

Transcript of Sufrimiento Fetal

  • 30captulo

    463

    Sufrimiento (disestrs) fetal

    Marco de referenciaV

    Slo unos cuantos aos despus de que Lannec, en

    1806, inventara el estetoscopio, Kargaradec, en Ingla-

    terra, figur como el pionero de la auscultacin fetal

    al sealar que los latidos fetales ocurren 143 a 148 ve-

    ces por minuto, y el pulso de la paciente es de slo 72

    veces. En 1883, Kennedy public el libro Observacio-

    nes sobre la auscultacin obsttrica, el cual fue moti-

    vo de debate al haber sealado una frecuencia normal

    de 100 a 180, lo que no era compartido por la mayora

    de sus colegas. Sin haber utilizado el trmino sufri-

    miento, Cummings en 1875 fue el primero en llamar

    la atencin con la siguiente observacin: Cuando los

    ruidos fetales que han sido normales se transforman

    en sonidos rpidos y dbiles que apenas pueden reco-

    nocerse, lo mismo que cuando son lentos, dbiles o

    irregulares debido a una presin cerebral, la vida del

    feto est en peligro.

    Denicin

    La definicin de mayor aceptacin para sufrimiento

    fetal (disestrs fetal) surgi de la escuela uruguaya de

    fisiologa obsttrica, la cual marc un hito en la obs-

    tetricia al sealar con fundamento cientfico las bases

    de la fisiologa obsttrica y el sustrato fsico y bio-

    qumico de la hipoxia fetal; Caldeyro defini el sufri-

    miento fetal (o disestrs fetal, vase explicacin en el

    inciso de Frecuencia) como un sndrome causado por

    disminucin de los intercambios metablicos entre el

    feto y la madre.

    Una mejor aproximacin para la comprensin

    del problema consiste en abarcar el sufrimiento fe-

    tal en tres enfoques interrelacionados; a saber: cl-

    nico, basado en sus manifestaciones de alteracin

    de la frecuencia cardiaca fetal y la presencia o no de

    meconio; biofsico, que considera las caractersticas

    de los trazos cardiotocogrficos, y bioqumico, que

    evala las condiciones de hipoxemia, hipercapnia y

    acidosis mixta.

    Segn su cronologa, se han considerado dos tipos

    de sufrimiento fetal. El crnico, correspondiente a los

    casos de disfuncin placentaria que se manifiesta con

    repercusin sobre el crecimiento y desarrollo fetales,

    y el agudo, que por definicin se presenta en forma

    ms o menos sbita y durante el trabajo de parto. En

    algunas publicaciones del decenio de 1980 se hizo

    mencin de una variedad denominada sufrimiento

    fetal crnico agudizado; en sta se resalt la existen-

    cia de casos en los que, durante las ltimas semanas

    de la gestacin, haba ocurrido deterioro de la salud

    fetal debido a disfuncin placentaria, y en el trabajo

    de parto, por accin de las contracciones uterinas, se

    manifestaba sufrimiento fetal agudo.

    Despus, con la mayor profundizacin del cono-

    cimiento, esta entidad recibi la denominacin de

    baja reserva fetal, porque durante el trabajo de par-

    to, al ocurrir aumento de la presin intramiometrial

    como consecuencia de las contracciones uterinas,

  • Mdulo 7 Resolucin obsttrica464

    de los fetos masculinos, en comparacin con los fe-

    meninos, segn datos encontrados en un grupo de 2 439 primigrvidas de bajo riesgo; hubo una propor-cin 40% mayor en la frecuencia de operacin ce-srea y una ocurrencia 64% mayor de disestrs fetal cuando el feto era masculino. Lo anterior se explica en la hiptesis de que la maduracin simpaticosupra-rrenal es ms rpida en los fetos femeninos, lo que les permite una mayor secrecin de catecol aminas como respuesta a la hipoxia intermitente del trabajo de parto, y con ello una adaptacin adecuada que les protege del disestrs fetal.

    Etiologa

    Para mantener un equilibrio adecuado bajo condicio-nes normales, el intercambio maternofetal depende de cuatro circunstancias interrelacionadas (vase fig. 30-01).

    De la alteracin de cualesquiera de estas circuns-tancias, sea de manera individual o combinada, sur-gen las posibilidades etiolgicas del disestrs fetal; en la figura 30-02 se muestra una clasificacin por factor, pero es importante resaltar que en la prctica de la obstetricia clnica es comn encontrar imbrica-dos dos o ms de estos factores y sus elementos. En este grupo debe considerarse, adems, un conjunto de circunstancias etiolgicas consideradas yatrogni-cas: taquisistolia e hipertona por uso de oxitcicos y efectos secundarios indeseables de frmacos y proce-dimientos analgsicos y anestsicos.

    Fisiopatologa

    La disminucin de aporte de oxgeno al feto es el tras-fondo en la fisiopatogenia del disestrs fetal, lo cual determina la puesta en prctica de una serie de meca-nismos compensatorios en reas metablicas, neuro-endocrinas y cardiocirculatorias. stas explican, por un lado, las manifestaciones clnicas de la complica-cin, y por otro, las consecuencias deletreas para el feto. Los aspectos relevantes se muestran en la

    el gradiente de presin que favorece el intercambio circulatorio del espacio intervelloso proveniente de las arterias espirales es superado, y por lo tanto se interrumpe en forma transitoria. Durante dicho lap-so el feto utiliza el reservorio de dicho espacio para su intercambio gaseoso. Cuando ste es adecuado, no presenta cambio homeosttico alguno. En caso contrario, es decir, cuando la reserva en el referido espacio es insuficiente, durante la contraccin uteri-na y poco despus de terminada, el feto muestra alte-raciones por tener periodos intermitentes de hipoxia e hipercapnia.

    La literatura en ingls utiliza el trmino fetal dis-tress para referirse a dicha entidad; en espaol, desde la escuela uruguaya ya citada, se ha venido utilizando como sufrimiento fetal; sin embargo, la palabra su-frimiento, en su acepcin de diccionario, significa: padecimiento, dolor, pena, y as es interpretada por la gestante que la escucha durante su atencin. Sin embargo, en clnica se utiliza ms el trmino di-sestrs. Navarro, en su Diccionario crtico de dudas ingls-espaol de medicina, de McGraw-Hill Inter-americana, dice que el trmino disestrs, a pesar de ser un anglicismo, est tan difundido en espaol que muy pocos revisores se atreven a corregirlo en los textos de publicacin. Por ello el autor propone el uso de disestrs fetal para esta entidad.

    Frecuencia

    La frecuencia con que se presenta disestrs fetal es difcil de establecer, ya que en primer lugar el mar-co de referencia para su diagnstico vara de una publicacin a otra; en segundo lugar, los elementos utilizados para la confirmacin tambin varan, y en tercero, los tipos de poblacin obsttrica estudiados no son equiparables. Por ello, las cifras fluctan des-de un mnimo de 1.5% hasta un mximo de 22.8%; en poblaciones obsttricas de bajo riesgo se mencionan cifras cercanas a 6%.

    Un hecho interesante es la mayor labilidad, y por tanto mayor proclividad al disestrs fetal por parte

  • Captulo 30 Sufrimiento (disestrs) fetal 465

    4. Transporte sanguneo fetoplacentario adecuado

    1. Aporte sanguneo uteroplvico

    2. Aporte sanguneo y llenado del espacio intervelloso

    3. Funcin adecuada de la membrana placentaria

    Fig. 30-01. Condiciones normales de intercambio maternofetal.

    Fig. 30-02. Factores y elementos etiolgicos del disestrs fetal.

    Factor (alteracin) Elementos

    r "QPSUFTBOHVOFPVUFSPQMWJDP r )JQPUFOTJOBSUFSJBMNBUFSOBr &TUBEPEFDIPRVFr 1SFFDMBNQTJBFDMBNQTJBr "OFNJBBHVEBPDSOJDBBHVEJ[BEB

    r "QPSUFTBOHVOFPZMMFOBEPEFMFTQBDJPJOUFSWFMMPTP

    r %FTQSFOEJNJFOUPEFQMBDFOUBr )FNPSSBHJBQPSQMBDFOUBQSFWJBr 5BRVJTJTUPMJBIJQFSUPOBVUFSJOBFTQPOUOFBPZBUSHFOB

    PBNCBT

    r "MUFSBDJOEFMJOUFSDBNCJPFOMBNFNCSBOBQMBDFOUBSJB

    r %JTGVODJOQMBDFOUBSJBQSJNBSJBPTFDVOEBSJB

    r 5SBOTQPSUFTBOHVOFPGFUPQMBDFOUBSJPBOPSNBM

    r "MUFSBDJPOFTEFMDPSEOVNCJMJDBMGVOJDVMBSFT

    #SFWFEBESFBMPBQBSFOUF -BUFSPDPNQSFTJO 1SPDCJUP 1SPMBQTP /VEPTWFSEBEFSPTr &OGFSNFEBEFTPUSBTUPSOPTGFUBMFTDBVTBMFTEFVOQFSGJMCJPGTJDPBOPSNBM

  • Mdulo 7 Resolucin obsttrica466

    nueve veces mayor de glucosa, se obtiene la energa

    necesaria, originando un incremento de cidos no

    voltiles como el lctico y el pirvico, y por tanto una

    acidosis metablica. El mismo fenmeno fisiopatog-

    nico propicia hipoglucemia con una baja de las reser-

    vas de glucgeno.

    Como respuesta a la hipoxia, el sistema nervioso

    autnomo pone en movimiento una serie de meca-

    nismos compensatorios, de manera que en una pri-

    mera fase el simptico es estimulado; en consecuen-

    cia, ocurre taquicardia. A mayor hipoxia y menor pH,

    la respuesta de estmulo proviene del parasimptico

    o vago, con lo que sobreviene bradicardia.

    La conjuncin de hipoxemia, acidosis mixta, hi-

    poglucemia y disminucin hstica de las reservas de

    glucgeno repercute en todos los rganos y tejidos

    fetales; hay manifestacin acentuada en pulmones,

    encfalo y corazn.

    A nivel pulmonar se observa marcada vasoconstric-

    cin, la cual con frecuencia perdura en el neonato, de

    figura 30-03. En fecha reciente se inform que las

    muestras de sangre del cordn umbilical obtenidas

    con la finalidad de extraer clulas madre, en casos de

    disestrs fetal, contenan mayor cantidad de estas clu-

    las que en aquellos casos en que no se presenta hipoxia

    fetal, lo que se ha interpretado como una respuesta

    de la mdula sea fetal ante la hipoxemia.

    La hipoxia intermitente propia del trabajo de par-

    to determina una hipoxemia fetal; se considera de ni-

    vel crtico cuando la presin parcial se establece en-

    tre 18 y 20 mmHg; de manera concomitante ocurre

    disminucin de la transferencia de CO2 del feto a la

    madre, lo que ocasiona hipercapnia y con ello ac-

    mulo de cido carbnico, con desvo del equilibrio

    acidobsico desencadenante de una acidosis respira-

    toria o gaseosa.

    Por otro lado, la disminucin de oxgeno como

    elemento indispensable en la va metablica aerobia

    del ciclo de Krebs pone en marcha la va alterna de

    la gluclisis anaerobia, de la cual, con un consumo

    2*.#+#+#+#++#-.+-

    #)(0#+-'#3'

    #)(0 4#(+3'#( #(,#,!,(,

    #)(0#"5,-#

    %.3%#,#,

    '+3#pH

    %.(!'3%#,#, 4#(%-#(

    #)(!%. #(,#,&-3%##,-+#.#3'

    %#+.%#3'

    ("5,-#()+(!+,#/(

    2,((',-+##3'',.#'#+,)#+-(+#'('-%

    ,((',-+##3'$ .'#(','1#&-#,.+-%.%+

    #)+&(-#%#%$#3', 5'-+'%

    ('#(

    6

    Fig. 30-03. 'JTJPQBUPHFOJBEFMEJTFTUSTGFUBM

  • Captulo 30 Sufrimiento (disestrs) fetal 467

    oblig a los Institutos Nacionales de Salud en Esta-

    dos Unidos y al Colegio Americano de Obstetricia y

    Ginecologa (ACOG) a establecer, por consenso de

    expertos, que en ausencia de factores y elementos

    de alto riesgo identificables, el trabajo de parto de un

    embarazo de bajo riesgo debe ser vigilado mediante

    auscultacin fetal peridica.

    La auscultacin fetal peridica incluye por defini-

    cin la documentacin escrita en el partograma de la

    frecuencia cardiaca fetal cada 15 min durante el pri-

    mer periodo del trabajo de parto y cada 5 min duran-

    te el segundo periodo, lo cual se realiza durante 30

    s y 30 s, respectivamente, despus de la finalizacin

    clnica de una contraccin uterina.

    La monitorizacin electrnica externa con regis-

    tro cardiotocogrfico tiene indicacin en embarazos

    de alto riesgo o cuando clnicamente ocurren alte-

    raciones de la frecuencia cardiaca fetal. El resultado

    de un registro debe evaluarse como un elemento ms

    para la toma de decisiones y no como el nico.

    La evaluacin se establece en tres niveles: clnico,

    bioelctrico y bioqumico; para cada uno existen l-

    mites de normalidad y anormalidad.

    Nivel clnico

    En la auscultacin, convencional o con Doppler,

    existen dos tipos de alteracin: taquicardia y bradi-

    cardia, cuyos lmites y clasificacin de grado fueron

    establecidos hace varios decenios por Quilligan (va-

    se fig. 30-4).

    La taquicardia aislada no necesariamente es signo

    de hipoxia; al presentarse deben descartarse otras

    situaciones clnicas, como fiebre o hipertiroidismo

    materno y aplicacin reciente de simpaticomim-

    ticos.

    Lo mismo es vlido para la bradicardia transitoria,

    conocida como desaceleracin, que puede guardar

    relacin con un estmulo vagal originado en la com-

    presin de la cabeza fetal, y que en general aparece en

    fases avanzadas del trabajo de parto. Los patrones que

    se pueden encontrar en la auscultacin fetal bajo ca-

    ah que el producto obtenido despus de una crisis de

    disestrs fetal tenga como complicacin un sndrome

    de insuficiencia respiratoria.

    En el sistema nervioso central ocurre tambin una

    intensa vasoconstriccin, aunada a disminucin de las

    funciones enzimticas en general, cuya persistencia

    origina lesiones irreversibles causadas por muerte ce-

    lular, conocida como encefalopata hipoxicoisqumi-

    ca. A nivel cardiaco, la disminucin de glucgeno al

    interior de la fibra miocrdica, junto con la hipoxia y

    acidosis, explica la ocurrencia de arritmias, que de per-

    sistir y profundizar son causales de la muerte fetal.

    En la prctica cotidiana de la clnica obsttrica es

    comn no encontrar una correlacin directa entre el

    grado y la duracin de disestrs fetal y su repercusin

    inmediata, mediata y tarda.

    La explicacin est en la condicin fetal preexis-

    tente y en la vulnerabilidad y labilidad individual

    determinada por factores mltiples, como edad ges-

    tacional, sexo, momento del trabajo de parto en que

    se presenta, y el tino y acierto para su resolucin.

    Panorama clnicoV

    Las manifestaciones clnicas fundamentales del dises-

    trs fetal se refieren a las alteraciones de la frecuen-

    cia cardiaca, la presencia de meconio en el lquido

    amnitico y las modificaciones del equilibrio acido-

    bsico.

    Frecuencia cardiaca

    As como en 1833 la publicacin de Kennedy sobre

    la auscultacin fetal fue motivo de debate al sealar la

    frecuencia normal del latido fetal, hoy sigue siendo

    campo de controversia la manera en que debe regis-

    trarse dicho signo vital del feto.

    La incorporacin en la prctica clnica del ultra-

    sonido Doppler y del registro cardiotocogrfico ex-

    terno, y sobre todo las mltiples querellas judiciales

    en relacin con la ocurrencia no detectada, o insufi-

    cientemente documentada, de disestrs fetal agudo,

  • Mdulo 7 Resolucin obsttrica468

    qumicos de hipoxia, no significa por s sola que haya

    disestrs fetal.

    Nivel bioelctrico

    La nomenclatura y los criterios de interpretacin

    de los trazos generados por la cardiotocografa, se

    muestran en las figuras 30-05 y 30-06. Las caracters-

    ticas son tan amplias que grupos de expertos propo-

    nen clasificar los registros en tres categorias: normal,

    estrs fetal y disestrs fetal.

    Nivel bioqumico

    En 1961, Saling introdujo en la investigacin clnica

    obsttrica la determinacin de pH fetal en una muestra

    obtenida del cuero cabelludo, una vez rotas las mem-

    branas y en casos de presentacin ceflica; el mtodo

    en poco tiempo cay en desuso por su baja sensibili-

    dad y especificidad. A la luz de nuevas tecnologas, en

    la actualidad se mencionan procedimientos encami-

    nados a la determinacin continua de pH, equilibrio

    acidobsico y concentracin de oxgeno fetales. Se

    trata de procedimientos aplicables a la investigacin

    clnica en este momento.

    sos de disestrs fetal se mencionan, clasifican e inter-

    pretan de manera semejante a los correspondientes al

    registro cardiotocogrfico.

    En cuanto a otros parmetros, como la frecuencia

    cardiaca irregular, un tanto por extrapolacin de los

    hallazgos en el registro elctrico continuo, se mencio-

    nan desaceleraciones, arritmias y disminucin de la

    variabilidad. Respecto a ellos se han intentado diver-

    sos procedimientos clnicos, cuya puesta en prctica

    resulta a menudo inaplicable o errnea, al depender

    de la apreciacin personal, el entrenamiento especfi-

    co en tal procedimiento propedutico y la seguridad

    de que la cuenta en lapsos muy cortos se ajuste a la

    cronologa real. Las variables intraobservador e inter-

    observador son importantes, y por ello inconsisten-

    tes para establecer una clasificacin y recomendar su

    aplicacin clnica.

    El otro elemento clnico integrante de las manifes-

    taciones del disestrs fetal es la presencia de meconio

    en lquido amnitico; su importancia radica en que

    al encontrar meconio en anlisis retrospectivo, se

    informa mortalidad perinatal de 5 a 8%, casi cuatro

    veces mayor a la de la poblacin general. La presencia

    simple de meconio, sin signos auscultatorios o bio-

    Bradicardia intensa

    La

    tid

    os

    po

    r m

    inu

    to

    200

    180

    160

    Taquicardia moderada

    Taquicardia intensa

    Normal

    Bradicardia moderada

    Taquicardia leve

    120

    100

    Fig. 30-04. 5JQPTZHSBEPTEFBMUFSBDJOEFMBGSFDVFODJBDBSEJBDBGFUBM

  • Captulo 30 Sufrimiento (disestrs) fetal 469

    Programa teraputicoV

    En la figura 30-07 se presenta en forma simplificada

    un diagrama de flujo que muestra las acciones reco-

    mendadas para el tratamiento del disestrs fetal. Es

    importante enfatizar que si bien la complicacin es

    una urgencia, como tal debe resolverse sin apresura-

    miento.

    Como medida general se recomienda colocar a la

    gestante en trabajo de parto y con disestrs fetal en

    decbito lateral izquierdo, con objeto de mejorar la

    circulacin uteroplvica al evitar el efecto de hipo-

    tensin materna, que en decbito dorsal se origina

    por compresin de la vena cava; asimismo, adminis-

    trar 3 a 4 L por minuto de oxgeno mediante puntas

    TEMPRANA

    Compresin ceflica

    TARDA

    Disfuncin placentaria

    VARIABLE

    Compresin del cordn

    TRAZO UNIFORME 120

    LATIDO FETAL

    100

    COMIENZO TEMPRANO COMIENZO TEMPRANO COMIENZO TEMPRANO

    CONTRACCIN UTERINA

    TRAZO UNIFORME 180

    LATIDO FETAL

    100

    60CU

    0

    50CU

    0

    COMIENZO TARDO COMIENZO TARDO

    1 MIN

    180 LATIDO

    FETAL 100

    TRAZO VARIABLE

    50CU

    0

    COMIENZO VARIABLE COMIENZO VARIABLE

    CONTRACCIN UTERINA

    Fig. 30-06.3FHJTUSPEFUJQPT de desaceleracin.

    Fig. 30-05. $BSBDUFSTUJDBTQSJODJQBMFTZQBUSPOFTEFMSFHJTUSPDBSEJPUPDPHSDP

    -OFBCBTBM7BSJBCJMJEBEBDPSUPQMB[P7BSJBCJMJEBEEFMBSHPQMB[P"DFMFSBDJPOFT

    %FTBDFMFSBDJPOFT1BUSPOFTEFSFHJTUSP

    120 a 160/min

    0TDJMBDJPOFTEFBQPSBSSJCBZBCBKPEFMBCBTBM"NQMJUVEEFBMBUJEPTZGSFDVFODJBEFBNJO3FMBDJPOBEBTDPOMPTNPWJNJFOUPTGFUBMFTPDPNPGFONFOPDPNQFOTBUPSJPEFVOBCSBEJDBSEJB&OSFMBDJODPODPOUSBDDJOUFNQSBOBUBSEBZWBSJBCMF5QJDP5BRVJDSEJDP#SBEJDSEJDP

  • Mdulo 7 Resolucin obsttrica470

    tanto mdicos como paramdicos, por lo que en 1998

    el Comit de Opinin sobre la Prctica Obsttrica del

    Colegio Americano de Obstetricia y Ginecologa pu-

    blic que el trmino sufrimiento fetal (fetal distress)

    es impreciso e inespecfico, con la sugerencia de re-

    emplazarlo por estado fetal no confiable (nonreas-

    suring fetal status).

    En la misma publicacin se hace nfasis para que

    el trmino asfixia al nacimiento deba contemplar no

    slo una calificacin de Apgar de 6 o menor, sino la

    presencia demostrada de acidosis e hipoxemia; la de-

    nominada encefalopata hipoxicoisqumica requiere

    para su diagnstico la presencia de acidosis metab-

    lica o mixta grave con un pH menor de 7 en muestra

    de sangre arterial del cordn umbilical, una califica-

    cin de Apgar de 3 o menos al minuto y que persista

    despus de 5 min con evidencia neonatal de secuelas

    neurolgicas.

    Se ha tratado de establecer listados clnicos en el

    inicio del trabajo de parto, que a manera de marca-

    dores tempranos permitan reconocer casos en que

    nasales o mascarilla. El efecto benfico de esta inter-

    vencin es controvertido; revisiones sistemticas re-

    fieren que no hay alguno, e informes de investigacin

    clnica con casos seleccionados sealan que mejora el

    estado de oxigenacin del feto; ante la disyuntiva es

    recomendable su uso.

    El uso de uteroinhibidores del tipo de los betami-

    mticos, con el fin de inhibir la contractilidad uterina

    y mejorar la irrigacin uteroplacentaria, ha manifesta-

    do buenos resultados cuando la causa del sufrimiento

    fetal es una taquisistolia con hipertona uterina o sin

    ella. Las medidas recomendadas tienen como objeti-

    vo permitir la recuperacin de la homeostasis del feto

    antes de su nacimiento. En forma parecida a lo ante-

    rior, en ausencia de taquisistolia e hipertona uterinas,

    la uteroinhibicin en revisiones sistemticas muestra

    que no tiene efecto.

    ProspectivaV

    El disestrs fetal como entidad clnica sigue siendo mo-

    tivo de controversia y debate en diferentes mbitos,

    "* *'"

    *

    #($

    #($#&

    #

    "

    "#

    # %"

    )!( "#"

    !#

    Fig. 30-07. %JBHSBNBEFVKPQBSBFMNBOFKPEFMEJTFTUSTGFUBM

  • Captulo 30 Sufrimiento (disestrs) fetal 471

    evento inesperado e imprevisible, lo que obliga a una

    vigilancia estrecha del trabajo de parto en todos los

    casos, nica manera de detectar el problema y actuar

    en consecuencia.

    la probabilidad de presentacin del problema sea

    mayor; los hasta ahora referidos tienen baja sensibi-

    lidad y especificidad. En general, el disestrs fetal en

    casos de riesgo obsttrico bajo se cataloga como un

    Fuentes de informacin

    "MSFWJD;%FWBOF%(ZUF(.-$POUJOVPVTDBSEJPUPDPHSBQIZ$5( BT B GPSN PG FMFDUSPOJD GFUBMNPOJUPSJOH &'. GPSGFUBM BTTFTTNFOUEVSJOH MBCPVS Co-chrane Pregnancy and Childbirth Group Cochrane Databa-

    se of Systematic Reviews #BLLFS1$,VSWFS1)+,VJL%+7BO(FJKO)1et al&MFWBUFEVUF

    SJOFBDUJWJUZJODSFBTFTUIFSJTLPGGFUBMBDJEPTJTBUCJSUIAm J Obstet GynecolFF

    #FLFEBN%+&OHFMTCFM4.PM#8+#VJUFOEJKL4&7BOEFS1BMEF#SVJO,.BMFQSFEPNJOBODFJOGFUBMEJTUSFTTEVSJOHMBCPS Am J Obstet Gynecol

    #MJY&0JBO1-BCPSBENJTTJPOUFTUBOBTTFTTNFOUPGUIFUFTUTWBMVF BT TDSFFOJOH GPS GFUBM EJTUSFTT JO MBCPSActa Obstet Gynecol Scand

    $IBVIBO 4 .BHBOO & 4DPUU +3 4DBSEP +" )FOESJY /$ et al. $FTBSFBO EFMJWFSZ GPS GFUBM EJTUSFTT SBUF BOE SJTL GBDUPST Obstet Gynecol Survey

    %FMMJOHFS&)#PFIN')$SBOF.&MFDUSPOJDGFUBMIFBSUSBUFNPOJUPSJOHFBSMZOFPOBUBMPVUDPNFTBTTPDJBUFEXJUIOPSNBMSBUF GFUBM TUSFTT BOE GFUBM EJTUSFTTAm J Obstet Gynecol 1BSU

    &BTU$&4NZUI3 -FBEFS-3-FP3)FOTIBMM/&et al. VibroBDPVTUJD TUJNVMBUJPO GPS GFUBM BTTFTTNFOU JO MBCPVS JO UIFQSFTFODFPGBOPOSFBTTVSJOHGFUBMIFBSU SBUFUSBDF Cochrane Pregnancy and Childbirth Group Cochrane Database of Systematic Reviews

    'BXPMF#)PGNFZS(+.BUFSOBMPYZHFOBENJOJTUSBUJPOGPSGFUBMdistress. Cochrane Pregnancy and Child birth Group Cochrane Database of Systematic Re-

    views(IPTI(4(VENVOETTPO4/VDIBMDPSEJOQPTUUFSNQSFHOBO

    DZSFMBUJPOTIJQUPTVTQFDUFEJOUSBQBSUVNGFUBMEJTUSFTTJOEJDBUJOHPQFSBUJWFJOUFSWFOUJPOJ Perinatal Medicine 2008;

    )BZEPO.-(PSFOCFSH%./BHFPUUF.1$IBNTBSZ.3VNOFZ1+et al5IFFGGFDUPGNBUFSOBMPYZHFOBENJOJTUSBUJPOPOGFUBMQVMTFPYJNFUSZEVSJOHMBCPSJOGFUVTFTXJUIOPOSFBTTVSJOHGFUBMIFBSUSBUFQBUUFSOTAm J Obstet Gynecol

    )PGNFZS(+,VMJFS30QFSBUJWFWFSTVTDPOTFSWBUJWFNBOBHFNFOUGPSGFUBMEJTUSFTTJOMBCPVSCochrane Pregnancy and Childbirth Group Cochrane Database of

    Systematic Reviews )PGNFZS(+,VMJFS31JSBDFUBNGPSGFUBMEJTUSFTTJOMBCPVSCochrane Pregnancy and Childbirth Group Cochrane Database of Systematic Reviews

    )PGNFZS (+ ,VMJFS 3 5PDPMZTJT GPS QSFWFOUJOH GFUBM EJTUSFTT JOTFDPOE TUBHF PG MBCPVS Cochrane Pregnancy and Childbirth Group Cochrane Database of

    Systematic Reviews ,FOOFEZ&0CTFSWBUJPOTPOPCTUFUSJDBVTDVMUBUJPODublin: Hod-

    ges and Smith,VMJFS3)PGNFZS(+5PDPMZUJDTGPSTVTQFDUFEJOUSBQBSUVNGFUBM

    EJTUSFTT Cochrane Pregnancy and Childbirth Group Cochrane Database of Systematic Re-

    views-JUUMF8+ 0O UIF JOVFODF PG BCOPSNBM QBSUVSJUJPO EJGDVMU MB

    CPVSTQSFNBUVSFCJSUIBOEBTQIZYJBOFPOBUPSVNPOUIFNFOUBMBOEQIZTJDBMDPOEJUJPOPGUIFDIJMEFTQFDJBMMZJOSFlation to deformities. Trans Obstet Soc Lond

    .BOFHPME ( .FZFS.POBSE 4 5JDIFMMJ " 1BVMJ % )PM[HSFWF8 $FTBSFBO TFDUJPO EVF UP GFUBM EJTUSFTT JODSFBTFT UIFOVNCFSPGTUFNDFMMT JOVNCJMJDBMDPSECMPPE Transfusion

    /FJMTPO +1 'FUBM FMFDUSPDBSEJPHSBN &$( GPS GFUBM NPOJUPSJOHEVSJOH MBCPVS Cochrane Pregnancy and Childbirth Group Cochrane Database of Systematic

    Reviews

  • Mdulo 7 Resolucin obsttrica472

    8JCFSH*U[FM & -JQQPOFS $ )FSCTU " 1SFCFOTFO % )BOTTPO "et al%FUFSNJOBUJPOPGQ)PS MBDUBUF JOGFUBMTDBMQCMPPEJONBOBHFNFOUPGJOUSBQBSUVNGFUBMEJTUSFTTSBOEPNJ[FEDPOUSPMMFENVMUJDFOUSFUSJBMBMJ.

    5IBDLFS4#4USPVQ%$IBOH.$POUJOVPVTFMFDUSPOJDIFBSUSBUFNPOJUPSJOH GPS GFUBMBTTFTTNFOUEVSJOH MBCPS Cochrane Pregnancy and Childbirth Group Cochra-ne Database of Systematic Reviews

    Seccin de evaluacin

    30.01 &MEJTFTUSTGFUBMFTNTGSFDVFOUFFOGFUPTNBTDVMJOPTRVFFOGFNFOJOPT 'BMTP 7FSEBEFSP

    $PSSFMBDJPOBSMBTDPMVNOBTJ[RVJFSEBZEFSFDIBSFGFSFOUFTBFMFNFOUPTFUJPMHJDPTEFMEJTFTUSTGFUBMZBMGBDUPSBMRVFDBEBVOPEFFMMPTDPSSFTQPOEF30.02 %JBCFUFTNFMMJUVT30.03 1SPMBQTPEFDPSEOVNCJMJDBM30.04 5BRVJTJTUPMJBVUFSJOB30.05 )JQPUFOTJOBSUFSJBMNBUFSOB30.06 /FGSPQBUBMQJDB30.07 %FTQSFOEJNJFOUPQSFNBUVSPEFQMBDFOUB30.08 #SFWFEBEBQBSFOUFEFDPSEOVNCJMJDBM30.09 )JQFSUPOBVUFSJOB30.10 "OFNJBNBUFSOB

    B "QPSUFTBOHVOFPVUFSPQMWJDPC "QPSUFTBOHVOFPZMMFOBEPEFMFTQBDJPJOUFSWFMMPTPD *OUFSDBNCJPFOMBNFNCSBOBQMBDFOUBSJBE 5SBOTQPSUFTBOHVOFPGFUPQMBDFOUBSJP

    $PSSFMBDJPOBSMBTDPMVNOBTJ[RVJFSEBZEFSFDIBSFGFSFOUFTBDPNQPOFOUFTCJPRVNJDPTGFUBMFTZTVDPOEJDJOEFBVNFOUPEJTNJOVDJOPOPNPEJDBDJOFOMBTJPQBUPHFOJBEFMEJTFTUSTGFUBM30.11 DJEPDBSCOJDP30.12 Q)30.13 (MVDMJTJTBOBFSPCJB30.14 (MVDFNJB30.15 3FTFSWBEFHMVDHFOP30.16 Q$0

    2

    30.17 Q02

    30.18 DJEPMDUJDP

    B "VNFOUBEPC %JTNJOVJEPD 4JONPEJDBDJO

    30.19 -BQSFTFODJBEFUBRVJDBSEJBGFUBMBJTMBEBFTTJHOPEFEJTFTUSTGFUBM 'BMTP 7FSEBEFSP

    30.20 -BNPSUBMJEBEQFSJOBUBMFTNBZPSFODBTPTEFQSFTFODJBEFNFDPOJPFOGPSNBDPNQBSBUJWBDPOHSVQPTFORVFFTUFFMFNFOUPOPFTUQSFTFOUF 'BMTP 7FSEBEFSP

    30.21 -BTEFTBDFMFSBDJPOFTWBSJBCMFTFOFM SFHJTUSPFMDUSJDPEF MB GSFDVFODJBDBSEJBDBGFUBMHVBSEBOSFMBDJODPODPNQSFTJPOFTEFMDPSEOVNCJMJDBM 'BMTP 7FSEBEFSP

    30.22 -PTCFUBNJNUJDPTFOFMUSBUBNJFOUPEFMEJTFTUSTGFUBMFTUODPOUSBJOEJDBEPT 'BMTP 7FSEBEFSP

  • Captulo 30 Sufrimiento (disestrs) fetal 473

    30.23 4PODPNQPOFOUFTEFMBBTYJBBMOBDJNJFOUPMPTTJHVJFOUFTFMFNFOUPTexcepto

    B "QHBSEFPNFOPSC Q)FOTBOHSFBSUFSJBMVNCJMJDBMEFPNFOPSD "DJEPTJTNFUBCMJDBE "MDBMPTJTHBTFPTBF "DJEPTJTSFTQJSBUPSJB

    30.24 4PODPNQPOFOUFTEFMBFODFGBMPQBUBIJQYJDBOFPOBUBMMPTTJHVJFOUFTexcepto

    B Q)JHVBMPNFOPSBC "QHBSEFBMNJOVUPPNFOPSD $POWVMTJPOFTE $PNBOFVSPMHJDP

    30.25 %VSBOUFFMQSJNFSQFSJPEPEFMUSBCBKPEFQBSUPMBGSFDVFODJBDBSEJBDBGFUBMEFCFSFHJTUSBSTFDBEBNJO 'BMTP 7FSEBEFSP

    30.26 &TFMOPNCSFQSPQVFTUPQPSFM$PMFHJP"NFSJDBOPEF0CTUFUSJDJBZ(JOFDPMPHBQBSBFMEJTFTUSTGFUBM

    B &TUBEPGFUBMOPDPOBCMFC %JTUPOBGFUBMD &TUBEPOPTBUJTGBDUPSJPE )JQPYJBGFUBMUSBOTJUPSJB

    30.27 &ODBTPTEFEJTFTUSTGFUBMMBTDMVMBTNBESFFOTBOHSFEFDPSEOVNCJMJDBMEJTNJOVZFO 'BMTP 7FSEBEFSP

    30.28 -BVUFSPJOIJCJDJOFTUJOEJDBEBFOUPEPTMPTDBTPTEFEJTFTUSTGFUBM 'BMTP 7FSEBEFSP

    30.29 -PTNBSDBEPSFTDMOJDPTEFSJFTHPEFEJTFTUSTGFUBMUJFOFOCBKBTFOTJCJMJEBEZFTQFDJDJEBE 'BMTP 7FSEBEFSP

    30.30 4POMBTUSFTDBUFHPSBTQSPQVFTUBTQBSBMBDMBTJDBDJOQSDUJDBEFVOSFHJTUSPEFGSFDVFODJBDBSEJBDBGFUBMFOFMUSBCBKPEFQBSUPMBTTJHVJFOUFTexcepto

    B /PSNBM D %JTFTUSTGFUBMC &TUSTGFUBM E "UQJDP

    Respuestas de la evaluacin del captulo 30

    30.01: V,FMEJTFTUSTGFUBMFTNTGSFDVFOUFFOGFUPTNBTDVMJOPTRVFFOMPTGFNFOJOPT

    30.02: C,MBEJBCFUFTNFMMJUVTFTFMFNFOUPEFMGBDUPSEFEJTGVODJOQMBDFOUBSJBZBMUFSBFMJOUFSDBNCJPEFNFNCSBOB

    30.03: D,FMQSPMBQTPEFDPSEOVNCJMJDBMBMUFSBCSVTDBNFOUFFMBQPSUFTBOHVOFPGFUPQMBDFOUBSJP

    30.04: B,MBUBRVJTJTUPMJBVUFSJOBBMUFSBFMBQPSUFTBOHVOFPBMFTQBDJPJOUFSWFMMPTP

    30.05: A,MBIJQFSUFOTJOBSUFSJBMNBUFSOBBMUFSBFMBQPSUFTBOHVOFPVUFSPQMWJDP

    30.06: C,MBOFGSPQBUBMQJDBFTFMFNFOUPEFMGBDUPSEFEJTGVODJOQMBDFOUBSJBZBMUFSBFMJOUFSDBNCJPEFNFNCSBOB

  • Mdulo 7 Resolucin obsttrica474

    30.21: V,MBTEFTBDFMFSBDJPOFTWBSJBCMFTFOFMSFHJTUSPFMDUSJDPEFMBGSFDVFODJBDBSEJBDBGFUBMHVBSEBOSFMBDJODPODPNQSFTJPOFTEFMDPSEOVNCJMJDBM

    30.22: F, los betamimticos en el tratamiento del disestrs fetal

    FTUOJOEJDBEPTDVBOEPMBDBVTBFTVOBIJQFSUPOBPVOBUBRVJTJTUPMJBVUFSJOB

    30.23: D,MBBMDBMPTJTHBTFPTBOPFTDPNQPOFOUFEFMEJTFTUSTfetal.

    30.24: B,FM"QHBSEFPNFOPSEFCFQFSEVSBSEFTQVT de 5 min.

    30.25: V,MBGSFDVFODJBDBSEJBDBGFUBMEFCFBVTDVMUBSTFDBEB NJOEVSBOUFFMQSJNFSQFSJPEPEFMUSBCBKPEFQBSUP

    30.26: A,FTUBEPGFUBMOPDPOBCMFFTFMOPNCSFQSPQVFTUP QPSFM$PMFHJP"NFSJDBOPEF0CTUFUSJDJBZ(JOFDPMPHBQBSBFMEJTFTUSTGFUBM

    30.27: F,FODBTPTEFEJTFTUSTGFUBMMBTDMVMBTNBESFFOTBOHSFEFDPSEOVNCJMJDBMBVNFOUBO

    30.28: F,MBVUFSPJOIJCJDJOFTUJOEJDBEBTMPDVBOEPMBDBVTBEFMEJTFTUSTGFUBMFTUBRVJTJTUPMJBIJQFSUPOBVUFSJOBPambas.

    30.29: V,MPTNBSDBEPSFTDMOJDPTEFSJFTHPEFEJTFTUSTGFUBMUJFOFOCBKBTFOTJCJMJEBEZFTQFDJDJEBE

    30.30: D,FMDBMJDBUJWPBUQJDPOPTFVTBQBSBDMBTJDBSFO MBQSDUJDBVOSFHJTUSPEFMBGSFDVFODJBDBSEJBDBGFUBM FOFMUSBCBKPEFQBSUP

    30.07: B,FMEFTQSFOEJNJFOUPQSFNBUVSPEFQMBDFOUB BMUFSBFMBQPSUFTBOHVOFPBMFTQBDJP JOUFSWFMMPTP

    30.08: D,MBCSFWFEBEBQBSFOUFEFMDPSEOVNCJMJDBM DJSDVMBSFTBMUFSBFMBQPSUFTBOHVOFP GFUPQMBDFOUBSJP

    30.09: B,MBIJQFSUPOBVUFSJOBBMUFSBFMBQPSUFTBOHVOFPBMFTQBDJPJOUFSWFMMPTP

    30.10: A,MBBOFNJBNBUFSOBBMUFSBFMBQPSUFTBOHVOFP VUFSPQMWJDP

    30.11: A, FMDJEPDBSCOJDPFTUBVNFOUBEP30.12: B,FMQ)FTUEJTNJOVJEP30.13: A,MBHMVDMJTJTBOBFSPCJBFTUEJTNJOVJEB30.14: B, MBHMVDFNJBFTUEJTNJOVJEB30.15: B,MBSFTFSWBEFHMVDHFOPFTUEJTNJOVJEB30.16: A,MBQ$0

    2FTUBVNFOUBEB

    30.17: B,MBQ02FTUEJTNJOVJEB

    30.18: A,FMDJEPMDUJDPFTUBVNFOUBEP30.19: F,MBUBRVJDBSEJBGFUBMBJTMBEBQVFEFPDVSSJSFO

    QSFTFODJBEFFCSFNBUFSOBIJQFSUJSPJEJTNPVTP EFTJNQBUJDPNJNUJDPT

    30.20: V,MBNPSUBMJEBEQFSJOBUBMFTEFBFODBTPTEFQSFTFODJBEFNFDPOJP