SEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMI ... 11.pdf · de la ESO el 18 de...

Nº 117 de Agosto de 2001

SAN CAYETANO

CIUDAD RODRIGO

SEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIO

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SSSS UUUU MMMM AAAA RRRR IIII OOOOEEditorial ..........................................................................4

CCarta de nuestro Obispo. .............................................5

LLa vida día a día. ............................................................6

IImpresiones con nombre y apellidos. ..........................9

IInstantáneas inolvidables. ...........................................13

CCrónica de la Peregrinación a Santiago. ...................15

NNuestro Seminario Diocesano. ..................................20

CComunidad educativa del Seminario. .......................24


DEPOSITO LEGAL: S. 153 - 1991LLETRA S.L. Avda. Conde de Foxá, nº 89 • Tel. y Fax: 923 48 12 68 • 37500 Ciudad Rodrigo

4 SEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIO

CCAAMMIINNAA MMÁÁSS AALLLLÁÁ

Un mes después de acabar-se el curso académico 2000/01, elseminario menor ha peregrinado aSantiago de Compostela entre losdías 25 al 31 de julio. Con esta acti-vidad, que sirve de puente entre uncurso y otro, se dan por terminadaslas tareas del seminario hasta elcurso próximo; atrás han quedadolas convivencias para el ingreso delos nuevos candidatos al seminario(14 al 18 de julio); los resultadosacadémicos en el mes de junio; eldía del monaguillo en el mes demayo; la ordenación del diáconoJosé Juan Domínguez Martín el 18de marzo y celebración del día delseminario; las confirmaciones de 3ºde la ESO el 18 de febrero; el rega-lo de la ordenación sacerdotal deldiácono Víctor Manuel Sevillano

Vicente, un regalo en la víspera delos Reyes Magos y clausura delJubileo; atrás quedó el primer tri-mestre del curso con el día de lafamilia; la clausura de la Exposi-ción: Jesucristo, Imágenes del Mis-terio; la celebración del I Congresode Historia de la Diócesis y, con talmotivo, la visita a nuestro seminariodel Nuncio Apostólico de su Santi-dad el Papa; en fin, atrás quedanmuchas instantáneas, y junto aellas, la vida diaria de convivenciaque se amasa de pequeñas alegríasy tristezas, sin embargo marcan eltono de una familia en crecimientoy en constante cambio. Esta familiagrande: educadores, profesores,trabajadores, seminaristas, padres,ect.. sigue teniendo un corazóninquieto, y quiere ir más allá en sucompromiso cristiano y vocacional.El Camino de Santiago nos hapuesto en la pista de esta renova-ción: dejando las redes y a su padreZebedeo, le siguiguieron... ojaláque durante el curso próximomaduren tanto las semillas, quefructifiquen entrando en el semina-rio mayor, ojalá siga habiendo jóve-nes que le digan a Jesús: ¡en tupalabra, podemos¡

EL SEMINARIO

Editorial

EELL SSEEMMIINNAARRIIOO,,CCOORRAAZZOONN DDEE LLAA DDIIOOCCEESSIISS

Queridos diocesanos:

La frase que resume el mensaje del DIA DEL

SEMINARIO de este año, puede parecer exage-

rada. Sin embargo no lo es para quienes somos

conscientes de lo que es el Seminario. El Semi-

nario es mucho más que un edificio venerable,

aunque éste es necesario como sede de la

comunidad educativa, cristiana y

sacerdotal que mora en él.

Por eso importa mucho cuidar

el edificio del Seminario, para que

sus instalaciones estén a la altura

de su función. En los últimos años

la Diócesis y nuestro Seminario han

hecho una considerable inversión

en recuperar espacios, mejorar

capillas, acondicionar salas de

estudio, dormitorios, habitaciones

individuales, renovar la calefacción,

etc. Cualquier sacrificio es peque-

ño en comparación con los bienes

que reporta el Seminario.

Pero el Seminario representa además el futu-

ro de la Iglesia diocesana, dada la dependencia

de ésta respecto del ministerio sacerdotal. Esto

es fácil de entender: si no hay Seminario, nos

quedaremos sin sacerdotes; si no hay sacerdotes

no hay Eucaristía, y si no hay Eucaristía no hay

Iglesia.

La Diócesis entera ha de amar el Seminario y

preocuparse por todo lo que le concierne. Antes

he dicho que el Seminario es una comunidad

educativa, cristiana y sacerdotal. Efectivamente

está compuesta por un pequeño grupo de

sacerdotes, formadores y profesores, con los

que colaboran varios seglares en tareas de ense-

ñanza, mantenimiento, cocina y limpieza, sin

olvidar a los padres y a los párrocos de los semi-

naristas. Yo mismo procuro seguir día a día la

marcha del Seminario. Y en el centro de esta

comunidad están los seminaristas, objeto de la

dedicación, los trabajos y los desvelos de todos.

Este año, como el pasado, el Señor nos con-

cede el regalo de un nuevo presbítero: José

Juan Domínguez Martín. Con él son tres los

sacerdotes ordenados en el arco de doce

meses: Gabriel Ángel el 19 de

marzo de 2.000, Víctor el 5 de

enero de 2.001, y ahora José Juan,

el 18 de marzo. A ellos se une

Antonio, ordenado también por mí

el 14 de diciembre de 1.997. Los

cuatro son el fruto principal de la

perseverancia de nuestro Semina-

rio en su tarea primordial, siguien-

do fielmente las orientaciones de

la Iglesia. Una perseverancia y una

fidelidad que vienen de lejos y que

han forjado una tradición y una

solera.

Por todo esto os pido a todos que sigáis

amando al Seminario, que os intereséis por él,

que le prestéis todo tipo de ayuda, espiritual,

moral y económica. Rezad por las vocaciones,

reflexionad sobre la importancia del presbítero

en la comunidad cristiana y sed generosos con

la posible llamada del Señor. Hago esta petición

sobre todo a los niños y a los jóvenes. Porque

ser sacerdote es una de las formas más comple-

tas de realización personal que existen. Y de

estar cerca de Jesucristo. Con mi saludo y ben-

dición.

+ Julián, obispo de Ciudad Rodrigo

CCaarrttaa ddee nnuueessttrroo OObbiissppoo

5SEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIOSEMINARIO

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CCRRÓÓNNIICCAA DDEELL CCUURRSSOO ((II))

Nosotros, los tres alumnos dePrimero de Bachillerato, os vamos acontar, más o menos, lo que ha sidohasta ahora la crónica del curso.

Empezamos el curso el 18 deSeptiembre con la Misa de bienvenida.Llegado el domingo comenzamos unanueva experiencia: ir a visitar a losancianos de las residencias de CiudadRodrigo. Esta tarea se realiza duranteslos fines de semana que estamos en elSeminario. Cuando vamos a ver a losancianos le animamos y así le alegra-mos un poco el comienzo de semana.

Transcurriendo casi un mes,tuvimos los Ejercicios Espirituales: lospequeños en el campamento de Cári-tas; los mayores en el Zarzoso. El día 28de octubre, hicimos un viaje a Astorgapara ver “Las edades del hombre” ,que este año llevaban por título “Encru-cijadas”.

El día 24 de Noviembre cele-bramos la fiesta de S. Cayetano, patrónde nuestro Seminario. El día 25 fuimos a

Candelario, a la nieve, aunque tuvimosla mala suerte de que no hubo, por loque nos terminamos yendo a Bejar.Después de esta excursión empezaronlos exámenes. Al acabarlos llegaron lospreparativos para el Día de la Familia.Se celebró el día 22 de Diciembre: tuvi-mos la Santa Misa presidida por nuestroobispo, después se llevó a cabo unapequeña obra de teatro y, por último, lacomida, con la que acabó este día de lafamilia y, a su vez, el primer trimestre.

Sigamos en el segundo trimes-tre, que lo empezamos con una alegríapara este seminario y para toda la dió-cesis, ya que el 5 de Enero del 2001 seordenó de sacerdote el diácono VíctorSevillano.

Unos días después, el 8 deEnero, comenzamos las clases de lasegunda evaluación. Pocos días des-pués, exactamente el día 20 celebra-mos al patrono de Ciudad Rodrigo, SanSebastián. Este mismo día por la tardenos fuimos a Puerto Seguro a ver unaespecie de museo de piedra, realizadopor el sacerdote de esa parroquia.

Seis días después, el 26, estre-namos la furgoneta nueva, que fue


LLaa vviiddaa ddííaa aa ddííaa


comprada gracias a una ayuda de laFundación Rascob de USA y de undonativo que dejó D. Juan LópezSimón, antiguo rector del seminario.Este mismo día el grupo de teatro”Nuestro Seminario” representó la obra“Plantando semillas en un corazón”escrita por nuestro rector y representa-da para todos los formadores y rectoresde España, que estaban reunidos en laCasa de las Esclavas de Cristo Rey en laC/Arturo Soria de Madrid. Al díasiguiente los del grupo de teatro fueronal parque de atracciones. Después decomer se hizo el camino de vuelta.

Lo último que ha sucedido hasido la inauguración de la restauraciónde las capillas. La capilla de los peque-ños fue reinaugurada el 8 de febreropor nuestro obispo Mons. D. JuliánLópez. La capilla de los mayores está yaa punto. Con esto y un bizcocho nosdespedimos de vosotros.

1º de Bachillerato

CCRRÓÓNNIICCAA DDEELL CCUURRSSOO ((IIII))

Entrado el mes de marzo todo fueronpreparativos para el día del seminario.En esta ocasión había un acontecimien-to singular: se oorrddeennaabbaa ssaacceerrddootteennuueessttrroo ddiiááccoonnoo JJoosséé JJuuaann DDoommíínngguueezzMMaarrttíínn, esto fue el 18 de marzo. Al díasiguiente nos presidió su primera misaen la capilla mayor del Seminario. Ense-guida llegaron los exámenes de la 2ªevaluación y las vacaciones de SemanaSanta.Ya de vuelta de vacaciones, comenza-mos con ilusión el tercer trimestre. Dosprofesores: el vicario general, D. Nicolás

Martín, y un formador, Juan Carlos Ber-nardos, se marcharon a Roma para reali-zar un curso de formación. Se hicieronunos reajustes de horas de clase y vinoJosé Hermógenes, antiguo alumno delseminario, que continuó ya hasta finalde curso. Enseguida llega mayo y con éluna excursión a Madrid el mismo día 1:visitamos el Museo de Cera y el Parquede Atracciones.EEll 55 ddee mmaayyoo,, ppoorr llaa ttaarrddee,, RRoobbeerrttooVVeeggaass PPrriimmeerroo,, rreecciibbee eell mmiinniisstteerriioo ddeeaaccóólliittoo durante la celebración eucarísti-ca que tiene lugar en la capilla mayordel Seminario.El 26 de mayo con el lema Plantandosemillas en el Siglo Nuevo se organizael XIII ENCUENTRO DIOCESANO DEMANAGUILLOS: acogida, talleres, misaen la catedral con nuestro obispo, comi-da en el río, juego, teatro y despedida.El 9 de junio, con los aires ya del final de


curso, llega la fiesta de todos los sacer-dotes de la diócesis, en ella participó lacomunidad del seminario; hubo dosfotos def a m i l i a :los sacer-d o t e sque cele-b r a b a ns u sbodas deplata conel obispoy los nue-vos pres-b í t e r o sq u en u e s t r oo b i s p oha orde-nado ene s t o saños; sinduda sondos fotospara el recuerdo.Entre tanto, el mes avanzaba y tuvolugar la entrega de medallas de losdeportes practicados durante el cursoen los juegos escolares. Como vienesiendo habitual, el seminario siempresobresale en algún deporte: los mejoresen ping-pong, en futbito juvenil y encross; incluso hubo reconocimientoespecial para alguno de nuestros com-pañeros en otras disciplinas deportivas.La útima semana del curso fue muymovida: los últimos exámenes, los pre-parativos del final de curso y la estanciade varios obispos españoles y portu-gueses en nuestro seminario. Esteencuentro tuvo lugar con motivo de unareunión entre las Comisiones de Doctri-na de la Fe de ambos países. Asistieron

el obispo de Bilbao, presidente de lacomisión española y el arzobispo deBraga, presidente de la portuguesa. El

día 22 juniopor lam a ñ a n afinalizaronlas clases yese mismodía a partirde las 11.30h. comen-zaron lasvacacionesde todoslos semina-ristas. Porla tarde, losprofesorest u v i e r o nuna larga yl a b o r i o s asesión deevaluación.Pero el

curso aún no había terminado: llaa ccoonnvvii--vveenncciiaa de los nuevos desde el 14 al 18de julio y el CCaammiinnoo ddee SSaannttiiaaggoo entreel 25 y 31 de julio erán un magníficoremate del curso y un eslabón para elnuevo. De la convivencia podemos decirque participaron 18 nuevos, de lo cualesingresarán en el seminario con seguri-dad 6 y 2 a la residencia o internado.Del camino de Santiago tenemos unacrónica completa para recordar tan inte-resante aventura.

.

Juan Carlos Sánchez Gómez


LLAA RREEFFOORRMMAA DDEE LLAASS CCAAPPIILLLLAASS

Durante el curso 2000-2001 hemos teni-do unas reformas muy importantes.¿Cuáles? En las capillas pequeñas sehan hecho las modificaciones que hací-an falta. La reforma en las capillas haconsistido en pintarlas, poner nuevascosas: el adorno de madera en el pres-biterio, una base para poner el atril, etc.La capilla de los mayores va a ser la queanteriormente era la del internado. Y laque en otros años era la de los mayoresva a ser un salón, como fue al comienzode la construcción del seminario.. Esasson las reformas.

Álvaro Herreras Rodolfo 4º E.S.O.

VVIISSIITTAA DDEELL NNUUNNCCIIOO AAPPOOSSTTÓÓLLIICCOO

El pasado año estuvo en Ciudad Rodri-go y en el Seminario el Nuncio Apostóli-co del Papa. Estuvo un buen rato connosotros los seminaristas. Nos habló desu vida y cómo tenía que hacer la labordel Papa, que era hacer sus veces aquíen España. Al día siguiente el Sr. Nun-cio, Mons. Manuel Monteiro de Castro,portugués, presidió la Misa en la SantaIglesia Catedral para inaugurar el Con-greso de historia de la Diócesis. Ese díase interrumpieron las clases de la maña-na.

Jesús Ramos Sánchez 3º E.S.O.

IImmpprreessiioonneess ccoonn nnoommbbrreess yy aappeelllliiddooss


MMII PPRRIIMMEERR AAÑÑOO EENN EELL SSEEMMIINNAARRIIOO

Hola. Me llamo Francisco Mayordomo ysoy de Barruecopardo. Vine aquí porqueme gustó mucho el día del monaguillo.Luego me animaron a venir a las convi-vencias y, definitivamente, me conven-cieron para que viniera al seminario.Dije que “sí”.

Francisco Mayordomo San Juan 6º De primaria

VVIISSIITTAA AA LLAA EEXXPPOOSSIICCIIÓÓNNJJEESSUUCCRRIISSTTOO,, IIMMÁÁGGEENNEESS DDEELL MMIISSTTEERRIIOO

Es la exposición que ha habido en Ciu-dad Rodrigo en el año 2000: en el Jubi-leo. Duró desde el 12 de agosto hasta el19 de noviembre y la llegaron a visitarmas de 20.000 personas.En la exposición había todo tipo decosas religiosas. Había cuadros de lospueblos de alrededor, de Vírgenes, Cris-tos, etc. También estaban los Cristosmás famosos de la diócesis. Había cáli-ces, vinajeras, campanas, y cómo no, loque se pone el obispo de Ciudad Rodri-go en las celebraciones. Lo que más megustó y recuerdo es esto que se pone elobispo.Fue en la iglesia de S. Agustín,os lo ha contado uno que lleva estenombre.

Agustín Ramos Hernández1º E.S.O.

¿¿CCÓÓMMOO VVIINNEE AALL SSEEMMIINNAARRIIOO??

¡Hola¡. Me llamo Oscar y soy de Sauce-lle. Un día, estando en catequesis, elsacerdote de mi pueblo nos dijo a mí y

a otros dos compañeros que si quería-mos venir al Seminario, el día del mona-guillo y nos decidimos a venir. Despuésnos vinieron a decir que si queríamosvenir a las convivencias y contestamosque sí, pero al final solo vine yo y me lopasé muy bien. Después de unos díasme dijeron que si quería venir al semi-nario, yo les dije que me lo pensaría,pero mis padres me dijeron que sí, queviniera... y aquí estoy. Al principio eraalgo duro, pero ya me he acostumbra-do a la vida del seminario.

Oscar Barahona Muriel6º de Primaria

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EELL AARRTTÍÍCCUULLOODDEE UUNN BBAACCHHIILLLLEERR

EELL SSEEMMIINNAARRIIOO EENN DDOOSS AACCOONNTTEE--CCIIMMIIEENNTTOOSS NNOO CCOONNSSUUMMAADDOOSS

Los cursos, los encuentros, o cualquierotro hecho o acontecimietno importan-te para un grupo de personas o para lamisma sociedad se inauguran y clausu-ran, pero no siempre se consuman.

El pasado año la Iglesia celebróel gran jubileo del bimilenario del naci-miento de Jesucristo. Además, y como

jubileo particular, celebramos el cin-cuentenario de la normalización en lasucesión episcopal en nuesta sede civi-tatense. Ante ello la diócesis, aparte delas clebraciones religosas y litúrgicas,hizo una apuesta por la cultura pararecordar de dónde venimos, con todo loque ello supone, y como medio con elque evanelizar, y organizó ciclos de con-frencias, una magna exposición y un bri-llante congreso sobre su historia.

Se mi pide ahora que hable demi expreiencia en la Exposición, a unaño vista, y en el congreso. Cómo norecordar ahora todo lo vivido en laexposición bajo la atenta mirada de sus



imágenes. Qué dirían estas imágenes sipudiesen hablar. Recordarían las frasesdichas ante ellas por las personas quelas cotemplaban, las comparacionesque se hacían sobre ellas, al guardiaque pasa corriendo buscando un móvilque ha empezado a sonar, los gruposguiados, los ánimos y consejos que sedieron en aguellas salas ( si la imagende Crisito atado a la columna de L. deMorales pudiese hablar)...

Y al decir “Jesucristo. Imágenesdel Misterio” se me vienen a la cabezamuchos recuerdos, hechos, momentos,personas, las mismas piezas de la expo-sición,... difíciles de borrar de la memo-ria, que viví a lo largo del pasado veranoy que son todos ellos verrdaderas “imá-genes del Misterio”. El papel de los tresseminaristas que participamos en laexposición fue el de recibir y atender enla puerta a la gente que la visitaba(28.496 fue el número total de visitantesque acogió en los cien días que etuvoabierta) vigilar las salas de la muestra,estar pendiente para que nada fatase ytodo estuviese en su sitio, preparar eldossier de prensa y atender de unmodo especial a la persanas importan-tes y a los medios de comunicación quese acercaban hasta la iglesia de S. Agus-tín, todo ello en colaboración con elresto de personas que allí trabajamos..

En el Congreso de historia de ladiócesis la labor fue prácticamente lamima. Varios seminaristas, junto conotras persanas, formamos parte delcomité logístico y de protocolo del con-greso y nos encargamos de la secreta-ría, de atender a las personas que en él

participaron, a los medios de comunica-ción social y de tener todo casi milime-trado para que el programa se desarro-llase según lo previsto.

Estoy particularmente alegre yorgulloso de haber participado en doshechos, tan relevantes para la historiade la diócesis y sin paragangón en la dela ciudad, que quedarán escritos conletras de oro en el libro de honor deldevenir de sus días y de sus horas. Con-fío, además, en que ambos sigan dandofrutos y que los veamos dentro delmemor tiempo posible porque, si bienun día se inauguraron y otro se clausura-ron, todavía no se han consumado

ROBERTO VEGAS PRIMERO 5º de Teología.


IInnssttaannttáánneeaass iinnoollvviiddaabblleess

Ordenación Sacerdotal de Victor Manuel Sevillano Vicente

5 de enero de 2001

Ordenación Sacerdotal de José Juan Domínguez Martín

18 de marzo de 2001


Bodas de OroSacerdotales

conMons. Julián López

en el Claustrodel Seminario

9 de junio de 2001

Ante las gradas de laCatedral de Santiago

se hace un compromiso:“Dentro de 7 años los

que del grupo actual seanseminaristas mayores,

irán a Jerusalem”31 de julio de 2001

Mons. Julián López,con los 4 últimos sacer-dotes ordenados por él

en estos tres años.D. Tomás Muñoz

D. Juan Carlos Sánchezy Roberto Vegas

(Seminarista mayor)9 de junio de 2001


LLEEMMAA::““CCAAMMIINNAA MMÁÁSS AALLLLÁÁ””..

La peregrinación a Santiago hasido la última actividad del curso escolar´00-´01. Desde los primeros pasos de supreparación la proyectamos como bro-che de oro del curso ya finalizado ycomo avanzadilla del siguiente. Nohemos querido que fuera una actividadsin más, sino un momento fuerte deencuentro interpersonal, con la figuradel Apóstol Santiago como ejemplo aimitar en nuestro seguimiento de Jesús.

El lema inspirador ha sido“Camina más allá”. El más allá se referíaal futuro, pero arrancando del presente.Nos propusimos ir más allá en la com-prensión y vivencia de nuestra vocación,, en el campo de la oración, de la frater-nidad, del trabajo-estudio, ir más allá dela manera como la gente vive habitual-mente la fiesta, el tiempo libre, la vaca-ción. Cada tema de estos los desarrollá-bamos por la mañana antes de iniciar elcamino, de forma que sirvieran depunto de referencia para la reflexiónpersonal y conjunta, y con vistas a orien-tar los pasos de la superación a la quecada uno éramos llamados de cara alresto del verano y al próximo curso.

El camino lo iniciamos el día 25de julio a las 10´00 h en el SeminarioDiocesano. Desde aquí partimos los que

formamos parte de la zona cercana aCiudad Rodrigo. Nos acompañaban,además de Alberto Dávila, formador delInternado San Cayetano, María del Car-men Sánchez Gómez, hermana de JuanCarlos Sánchez, María Antonia, Claudiay Sonia, tres amigas suyas venidasdesde Bélgica para hacer el camino connosotros; los padres de José Manuel ,Ludi, madre de Richi, Isabel, madre deJavi Ramos (los recogimos en Martín deYeltes) y Toni, antiguo alumno del Inter-nado que nos ayudó como monitorjunto a Alberto. En la Fuente de sanEsteban y en Salamanca recogimos alresto de componentes de la peregrina-ción. Los padres de los seminaristas han

CCrróónniiccaa ddee llaa PPeerreeggrriinnaacciióónn aa SSaannttiiaaggooPPEERREEGGRRIINNAACCIIÓÓNN AA SSAANNTTIIAAGGOO DDEE CCOOMMPPOOSSTTEELLAA..BBRREEVVEE CCRRÓÓNNIICCAA DDEE 112233 KKMM DDEE CCAAMMIINNOO


hecho un trabajo impagable, llevando lafurgoneta como coche-escoba y hacien-do las comidas, amén de su compañía yapoyo en todo momento. Sin su entregahubiéramos estado mancos.

Astorga nos acogió soleada yrisueña. Allí repusimos fuerzas, descan-samos, tuvimos la primera reunión sobreel sentido del camino y la vocaciónsacerdotal y celebramos la Eucaristía en

la Catedral, precisamente en el día deSantiago. Cuando ya atardecía llegamosa Sarria, al colegio de la Asunción.Cenamos antes de que oscureciese,jugamos un poco y todos juntos, enasamblea, nos propusimos metas parael camino e hicimos propósitos en vozalta. El “non plus ultra” de las columnasde Hércules, quedó ya hace siglos,desde Carlos V, transformado en “plusultra” a raíz del descubrimiento deAmérica. “Plus ultra”, “más allá”, fue lameta que a todos se nos propuso comodesafío apasionante.

En este plan, y tras la exposición

del tema sobre “El trabajo y el estudio”por parte de Alberto Dávila, sellamoscredenciales e iniciamos la cuenta atrásde 123 km que nos llevarían a los piesde Santiago. En Ferreiros de Lugo comi-mos este primer día. Fue una marchadura: primera etapa, subidas, bajadas,repechos... Un buen entrenamientopara la caminata de la tarde con la quellegaríamos a Portomarín, ciudad de

nueva construcción, cuya bella Iglesiarománica fue trasladada piedra a piedrapara no ser tapada por el reculaje delpantano. La primera etapa estaba feliz-mente cubierta. Mari Carmen nos delei-tó con su experiencia sobre el duro tra-bajo que desarrolla en Bruxelas, abrién-donos el apetito para ir más allá, siendosanamente inconformistas. Alberto cerróla jornada en la reunión final que revisóel día y rescató sus notas más sobresa-lientes.

En la mañana del 27 de julio, ytras los rezos matutinos y la primera reu-nión inicial sobre la oración, partimos


hacia Ligonde, meta volante paracomer y dormir la siesta. Aquí tuvimosla suerte de conocer a Mari Paz,la hos-pitalaria (persona que en el Alberguede peregrinos les recibe y atiende),madre de un seminarista de 1º de Teo-logía: quedamos cautivados por su sen-cillez y por la profundidad de su fe.Cuando caía la tarde arribamos a Palasde Rei. Cientos de jóvenes llenaban elcamping y las calles de la ciudad pre-parándose para varios conciertos derock. El sacerdote de Palas –comotodos los demás del camino- nos aco-gió calurosamente y nos ayudó en laCelebración Penitencial. Eigual que siempre ter-minamos el díareunidos enasamblea, revi-sando lo quehabíamos vistoa propósito dela oración y loque más noshabía llegadode las expe-riencias delc a m i n o .Mediada lareunión acogi-mos a Pierre,músico belga que seunía a nosotros. Esimposible recoger todo loque se dijo y vivió en el camino;cada cual podría escribir su propiaexperiencia. Aquí sólo transcribimostelegráficamente lo más fundamental.Con el rumor de fondo de los jóvenes,pasamos la noche en Palas de Rei.

Palas – Arzúa fue la terceraetapa del camino en la que superamos

casi treinta km. Empezábamos a bajar aSantiago. El tema de la fraternidadadornó y dirigió nuestras andanzas.Mellide, en la mitad del trayecto, aco-gió y repuso nuestros cuerpos cansa-dos. Compartimos comida con unperegrino que iba a caballo hasta San-tiago. “Nuestras madres” estuvieroncomo siempre geniales: al llegar aMellide vimos preparada la mesa enplan banquete de boda. El arroz y elpollo nos supieron a gloria bendita.Arzúa fue testigo de nuestro merecidodescanso tras compartir las experien-

cias de la jornada. Amanecido el Domin-

go y tras del ritual diariode oración, desayuno,

exposición deltema, celebra-

mos la Eucaris-tía con la

comunidadp a r r o -q u i a l :ameniza-mos la

c e l e b r a -ción y ayu-

damos así alpárroco que

tenía ese díavarias Misas más.

De camino a Ferreirosde A Coruña se perdió

Fran, adelantándose varios kiló-metros al resto de compañeros. Noshabíamos detenido para ver parir a unavaca, acontecimiento éste jamás vistopara la inmensa mayoría de nosotros.Toni, veterinario en ciernes, no pudoevitar la tentación de ayudar a los due-ños del animal. Al final quedaron agra-

El humilde asnoentona sus rebuznos

al paso de los peregrinos


decidos y al ternero le pusieron pornombre “Cayetano” en recuerdo nues-tro. La pérdida de Fran duró poco tiem-po y juntos pudimos compartir con ale-gría comida y siesta. El polideportivode Arca fue nuestro lugar de descansonocturno, compartido con más de 100jóvenes madrileños.

Esa noche dormimos deprisa ypoco. A las 5 de la mañana Basilio tocóa diana, y sólo una hora después está-bamos ya en camino. 20 km más y avis-taríamos Santiago. Llegar supuso ungozo inmenso: ese momento de la lle-gada sería reconocido por muchosseminaristas en la asamblea final, comolo más destacable del camino andado.Estuvimos en la Misa del peregrino delas 12´00 h., los presbíteros concelebra-mos leyendo el Evangelio y haciendouna petición. El canónigo que presidióla celebración nos mencionó en varias

ocasiones y pidió por las vocaciones.Dimos el abrazo al antiguo pescadorde Galilea que siguió a Jesús y nos fui-mos a comer y a descansar un poco.Varios se perdieron, pero la maravillade la telefonía móvil propició el reen-cuentro cuando terminábamos decomer. El seminario menor nos abriólas puertas para que pudiésemos pasaresa tarde y noche: supuso una gransatisfacción tener una habitación paracada uno, colchón incluido. A la maña-na siguiente Benja se quedó dormido,sin duda por lo desacostumbrado delcamino a tener excesivas comodidades.Estábamos muy cansados pero radian-tes de alegría. La plaza del Obradoirofue testigo de nuestro gozo y del buenhacer teatral de seminaristas y monito-res. Todos teníamos ya la “Composte-la” en la mano: ella acreditaba la ver-dad del camino hecho. La vuelta al


seminario para cenar y dormir fue uncontinuo canto por el común repertoriomusical. Juan Carlos nos habló de lavocación.

La vacación fue el último temasobre el que reflexionamos el 31 dejulio. Por la noche estaríamos en nues-tras casas y debíamos programar lascosas a hacer para no perder misera-blemente el tiempo. En el camino deS a n t i a g oh a b í a m o sido másallá, muchomás allá den o s o t r o sm i s m o s ,¿cómo lle-var eso a lavida? Laplaya deBaiona, enVigo, nosa c o g i ón u b l a d a .Pero todosnos pusimos el bañador y nos lanzamosal mar. ¿Qué se iba a interponer a unosseminaristas que habían recorrido 123km en apenas 5 días? La comida de esedía se hizo esperar para que fuésemosaún más allá de nuestra hambre. Nadieprotestó. Por fin vimos aparecer nues-tra furgoneta: se había ido a la Coruñaequivocada de camino. En la reuniónfinal, y desde que llegamos a la playa,nos acompañó Clodomiro, presbíteroamigo de Juan Carlos. En esa asambleatodos hablamos dando la impresiónmás notable que teníamos del caminoandado. Todos hicimos propósitos quefueran más allá de egoísmos y comodi-dades. Alguien sugirió que Jesús

seguía llamando ahora, junto al Atlánti-co, donde estábamos realizando nues-tra reunión. Santiago dijo que sí alSeñor y nosotros habíamos ido a suspies 2000 años después, siguiendo lashuellas de infinidad de peregrinos.Sería maravilloso que ahora tambiénnosotros dijésemos que sí al SeñorJesús: el mundo entero nos grita quequiere tener la verdadera alegría, esa

que nacede dentro.¿Le dire-mos queno? Decirque sí es irmás allá yes abrirc a m i n o si n m e n s o sen el surcode la vida.

Alas 23´15 hn u e s t r aSalamanca

querida nos oyó cantar. Sólo mediahora más tarde La Fuente de San Este-ban recibió al grupo de la Ribera y alre-dedores. Eran las 12´30 h cuando fran-queamos la muralla de Miróbriga. Sus-piramos de alegría por el feliz términodel viaje. Dimos gracias de corazón alSeñor. Había merecido la pena. El másallá del camino empezaba ahora paracada quién. Y ahí estamos. Nada seopondrá a que demos lo mejor denosotros mismos. Jesús nos quiere ayu-dar en ese empeño.

PRUDENCIO MANCHADO VICENTE

Una vez plantada la semilla,sólo basta con regarla,sonreírle cada amanecery cada noche acariciarla.

Yo tuve un sueño de chiquitoy el corazón se me agitaba,

la ilusión de ser apóstolera fuergo en mis entrañas.Ha crecido aquel proyecto

como crece el alba,como crece un niñode ligeras alas.

Y es que el pecho llevo ya tan seducido,

que sólo al decirle sí se calma.

Juan Carlos Sánchez G.

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