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MINISTERIO DE AGRICULTURA. __SECCION DE PUBLICACIONES, PRENSA Y PROPAGANDA -

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_Vllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllpllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllllll'

= Instrucciones para dar mayor valor a-- las lanas mejorando el esquileo =

DIVULGADORAS =AfVO XXXIV M A R 7 O, 1 9 4 2 2.° SERIE. N.° 10 =

HOJAS

Yor CARLOS I,uis D>; CuENCn. __

VETERINARIO

(Del Institufo de Biología Animal)

No debe hacerse csta operacirln: al terminar el esquilco ^le una ovcja sesuelen mrter entre su lana los ^lesput^tes y las partes bajas muy car^^ldas^le elcrcmentos y tierra; csto hace fermentar y desvalorizarse enorme-

mente a 1^I lanu. Esas ^orciones debcn am^ntonarsc separadas.

^?1 esquileo, tal como se realiza ^eu la mayor parte de las co-

marcas de España, es causa cle una gran d^eprecia-

ción de iiuestras lanas. Es hreciso, al colnenzar una

campaiia de fomento de ]a I^r^ulu^ción lanera, iniciarla =

IIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIOIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIi-F,tas Ho1ns se relrtitrn gratis a qllicn ]as pida a la Sección dePublicaciones, Prensa y Propaganda, del Mini;+terio de Agricultura.

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dando consejos a los ganaderos y a los prácticos sobre esta operación fun-

damental en la recogida de la lana.

Es indudable, por el contrazio, que el esquileo, realizado en buenas con-

diciones, aumenta el rendimiento, la calidad y la limpieza del praducto y,

por ende, su valor comercial.

Muchos ganaderos han tenido la aspiración de mejorar su ganado em-

pleando reproductores seleccionados. Ello significa una iniciativa valiosa,

porque los buenos reproductores son :^^ejoradores inestimables de las ra-

zas, pero aun cuando se empleen los mejores reproductores ^del mundo,

si no se esquila bien, la lana valdrá poco comercialmente.

Para que la industria textil pueda justipreciar bien las lanas, es pre-

ciso presentar un producto limpio, en el que puedan separarse perfecta-

mente las diversas calidades ; en el que pueda hacerse el "claseo", es de-

cir, cíasificar la lana de una misma partida e incluso la de un mismo ve-

llón en porciones de finura uniforme. Si a la industria se le entregan ve-

llones sucios, apelotonados, en los que el claseo es difícil por haberse

r_onfundido la lana de ,la espalda con la del vientre y las patas e, incluso,

con la suciedad de última hora, la industria continuará pagando mal.

Nue.stro objetivo es que no haya necesidad de importar ]anas finas

porque las poseemos, aun ^cuando hoy no las podamos aprovechar porque

el esquileo se hace ^nal. De aquí que para lograr el máximo rendimient®

de nuestro magnífico ganado lanar, comencemos por el esquileo, come

operación fundainental a los fines de nuestro propósito.

ANTES DEL ESQUILEOLos cuidados que deben prodigarse al ganado antes del esquileo han

cle tender a la mejora de la calidad y del rendimiento. Deben desterrar-

se determinadas prácticas que perjudican a la economía nacional. El gz-

nadero es tainbién un perjudicado por ellas, puesto que al presentar un

producto sucio y defectuoso, obtiene poco precio por él, ya que no puede

ser destinada su lana a tejidos de alto valor.

Pongamos un ejemplo: una oveja, al ser equilada, dió un vellón de

dos kilos de peso; como el esquileo fué descuidado, el vellón estaba muy

sucio y al lavarlo a fondo sólo dió 60o gramos de lana limpia (un 30

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por ioo de rendimiento). Si esta oveja hubiese sido esquilada en buenas

concíiciones y con limpieza, el rendimiento en ]avado a fondo podría ha-

ber subido al 35 ó 4o por ioo. Dados los actuales procedimientos para e]

establecimicnto del precio en las lanas, todo ganadero sabe que hubiera

sido beneficiado al estimársele un rendimiento más elevado.

Yor otra parte, si ]a oveja está mal esquilada, cs cliEícil hacer un

claseo en el vellón, porque toda la lana va mezclada. En los vellones la

lanl buena cle la espalda se mezcla con los cahos cíel vientre y de las patas,

muchos ĉle ellos manchadeb con estiércol y orina, que "queman" la lana, le

dan mal aspecto y la hacen fennentar. Tocío esto predispone en contra del

ganadero y su lana es m-tl pagada, porque, acíemás de ]a cíifieultad cíel cla-

seo, se carcla y se peiua mal y la filatura que se obtiene es irregular y

basta, con pelos gruesos y finos mezclados. Así, con un kilo de lana lavad^

a fondo sólo ^e obtieneu a]o sumo zo ó 3o mil metros de hilo.

Pero si la oveja se esquila bien, el vellón, estirado y unido, como in-

dican los dibujos de este folleto, permite diferenciar muy bien todas sus

zonas y cíc cllas puecle entresacarse la lana según su finura, formando

lotes o clases ; además, se podrán separar las barrigas y la lana de añi-

nos, de peor calidad, y también los cabos quemados por las deyecciones.

Los vellvnes, bien enrollados, presentan un buen aspecto para el compra-

dor, quien inmediatamente los adquiere a buen precio, porque de ]os lotes

o clases más groseras obtendrá 20 ó 3o mil metros por kilo, de las clases

medianas, 35 ó 4o mil, y de las más finas 45^ 50 ó incluso 7o mil metros

por kilo dc lana limpia.

Estamos convencidos de que, trabajando así, se podrán obtener clases

en nuestros merinos que no envidien en nada a las procedentes de me-

rinos extranjeros (Australia, EI Cabo) descendientes de ]os nuestros, y

con las que se obtienen incluso 80.00o metros de hilo por kilo de lana.

Debemos terminar o disminuir por el momento la importación de estas

lanas y sustituirlas por lanas nuestras. Desde luego, pagando éstas a su

debido precio. ^

Nuestra campaña debe tender a que el valor de la lana sea establecido

por ]os metros de hilo que d^e ella se puecian sacar (es cíecir, por su calidad

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y finura), relegando a un segundo término el rendimiento en lavado a

fondo, como fijador del precio de la lana.

INSTRUCCIONES.

1.° Los animales no deben permane^cer ni caminar durante dos o tres

semanas antes del esquileo en sue'.o con barro, arenoso o cíe tierra muy

suelta.

2.° Los animales que padezcan sarna o roña deben estar apartados

r^ib. 2.

b^ig. 3. Fig. 4.Fases del defectuoso enrollamiento de vellones usado actualmente por nuestros

ganaderos. IFigs. i, 2, 3 y 4).

de los sanos. El esquileo se debe realizar por separado, sin mezclar nunca

los vellones procedentes de sanos o enfermos.

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3.° En la t-^rde que precede al día del esquileo, deben encerran5e en

rediles próximos al local de la operación los animales que van a ser es-

quilados en cíicho día, para que descansen durante la noche.

Cuando se presuma que va a helar o llover durante la noche, debe

dejarse bajo techado a las primeras cabezas que se esquilen al día siguien-

te, si no liay sitio para todas ; así estas cabezas primeras estarán secas, y

las demás, que han pasado la noche al aire libre, tienen tiempo de secarse

mientras se esquilan las otras.

4.° Debe hacerse una separación sencilla de los animales que van a

esquilarse, de la manera siguiente :

a) Ovejas y borras de vellón blanco o negro, sin manchas de otro

color.

b) Carneros y borros, como las anteriores.

c) Borregos y borregas.

d) Castrados. ^

I,os animales blancos o negros con manchas negras o b]ancas, o cas-

tañas, o con algttnos pelos de color distinto al generál de la capa, deben

ser esquilados aparte^ y sus vellones. no deben mezclarse con los ante-

riores.

FORMA DE REALIZAR EL ESQUILEO

1.° Local. '

a) No debe esquilarse en el suelo. Debe improvisarse, con tablas,

una tarima o estrado grancle, p-^ra esquilar sobre ella. Si no se pudiera

hacer, debe recurrirse a un piso de piedra o cantos bien barrido, o, sólo

en ú'timo caso, a un local con suelo de tierra bien seca y apisonada.

El esquileo en el strelo perjudica a las lanas finas, porque disminuye

el rencíimiento en el lavado a fondo y perjudica el brillo de la lana.

Deben tenerse en el local todos los utensilios, no olvidando las esco-

bas necesarias para barrrer continuamente los excrementos y los detritus

que pudieran caer de los vellones.

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2 ° Cuidados con'los animales.

d) No debe esquilarse con la lana humedecida por la Iluvia, la he-

lada ó el rocio; cuando los animales no estén secos, debe esperarse a que

el sol haya secado los vellones.

Fig. 5.

Fig. ^.

Fig. 6.

Fig. 8.

Fases de un enrollamiento perfecto de ^los vellones: 5. El vellón extendido, con lacara de la carne para abajo y la de la lana para arriba; uno de los ;lados se hadoblado sobre e1 vellón, y sobresale la lana del cuello como un cordón. 6. Elobrero ha enrollado el vellón y está haciendo el cordón del cuello para atarlo.q. El rollo se va rodeando por e] cordón dél cuello. 8. El vellón está ya enrollado

y atado por el cordón.

-^-

b) Cuando se sujete a los animales, deben separarse de su lana to-

dos los cuerpos extraños groseros que contenga, naturalmente, dentro

de las posibilidades prácticas, sin tener la pretensión de limpiar comple-

tamente el vellón.

c) Debe despuntarse a tijera aquellas porciones del velión que ha-

a e

Esquema indicando e.l procedimiento de enrollamiento de vellones por el procedi-miento australiano modificado en Portugal. El vellón se extiende sobre una mesa]impia, con la cara del corce (la de la carne) para abajo, y la de la lana paraarriba. Se doblan las partes de los lados o costados del vellón, como se indicaen (a) y(b), de modo que queda un cilindro en cuya parte interior se encuentrala cara de la ^lana (c). Hecho esto, se retuerce la parte de] vellón correspondienteal pesĉuczo, de modo que se liaga un cordón resistente (d), y se enrolla el cilindrodesde la parte posterior hacia 1á anterior, acabando por atarlo con el cordón delpescuezo. El vellón así enrollado no se mancha y puede abrirse perfectamente enla fábrica para hacer el claseo. (De un folleto portugués, original del Dr. Mario

C. Morais.)

yan sido marcadas con pez, anilinas, alquitrán o cualquier otra tinta, así

como las marcas gordas de cal.

Nunca debe comenzarse el esquileo sin ha^cer esto, pues dichas sus-

tancias desvalorizan mucho la lana.

Los despuntes se irán acumulatido en un montón.

Del^e ^a'^est^er•nrnrse par corsvi,j^l^cto el uso ^e l^n p^ez y iríe^mcís colaranates per-

-S-

judiciales ahora uu•cnd^as, y sustituírse p^ar los ^re^arad^os clue tatiarcare y

q_ue luego rlesr^j^arecen can el lcauado. Esto es IMPOKT^^INTISINIO.

^t) Luego se esquilará primeramente aquella porción del vellón mu^•

cargada de cascarrias y barro y también las partes que estén quemadas

por la orina, que se reconocen por su color chamuscado.

Estas porciones, junto con las anteriores, deberían ser esquiladas en

un local aparte ; cuando así no pudiera hacerse, se barrerá continuamente

Fi^. to.-I3uen almacén dc lanas.

el local del esquileo para evitar que la suciedad manche la parte buena

de los vellones.

También se amontonarán jtmtas todas estas partes sucias.

e) Después se esquila la lana de la cabeza, patas, barriga, si están

muy sucias y llenas de garras, y la parte inferior del cuello cuando tenga

muclio pelo muerto o garra.

Si hubiera otra parte del cuerpo con lana de esta clase, se esquilará

también junto con la anterior. Estas porciones, formadas ya por lana de

algún valor, se amontonan por separado todas juntas, con la designación

de "aparte-s" (barrigas, cabezas y patas), también llamadas "caídas".

f) La parte restasit^e• ^clel 2^elló^ac .r,e esyuildrá en. u^s^a sola pie^za, •es-

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forzándose cl esquilador por mantenerlo lo más unido pasible. No debe

comenzarse el csquileo por la espalda, porque así quedarí,tn desunidas

las partes más valiosas del vellón (véanse las fotografías adjuntas).

Por el contrario, el esquileo debe comenzar por la garganta, seguir

por el vientrc, continuar esquilando uno de los lados y terminar en el lado

opuesto.

,q) Cuando se hayan esquilado todos los animales de un solo color

y se proceda al esquileo de los m^trtchados, deben esquilarse primero las

rnanchas para que las fihras de colores diferentes no queden mezcladas.

Fig. ir.-^^Imacéu de lanas defectuoso.

Ia) Debe cFvit^zrs^e qu,e los esquilr^ttor^s "repasE^nc" la lcmaa, es ^decir,

q^{^e ha^gaiiz ^los cnrt^es en el ^sn^o si.ti,o, por no baber conseguido cortar

bien al rapc la primera vcz, o para dejar dibujos en el cuerpo del animal

csquilado.

I^sta pr^icti^c^i es abso'utamente ruinoca, y todo ^esquilador que la em-

plee debería ser eliminado acto seguido.

Cuando por cualquier causa el esquilador no haya conseguido hacer

un corte bien al rape, debe dejar ese pedazo así y^uu^nca repasar con un

nuevo cortc. I?stas porciones de uno a dos centítnetros tlue se cortan en

- IO =

el repaso representan una pura pérdida, mientras que quedando en el

cuerpo del animal, aunque haga feo, pueden ser aprovechadas en el año

siguiente.

Este punto es de VERDADERA IMPORTANCIA.

DESPUES DEL ESQUILEO

1.° Enrollamiento del ve^lón.

Esquilado el vellón en ]as condiciones señaladas y con el debido cui-

dado para obtener una sola piezz, conviene después, especialmente en

las lanas merinas finas, que pueden dar buen rendimiento, quitarle los

cuerpos extrañes más groseros y enrollarlo cuidadosamente, no apretando

demasiado plra que quede elástico. •

El enrollamiento, para hacerlo en buenas condiciones, debe practi-

carse encima de una mesa o banquc^ta ancha, retiran•do toda porción con

pelo muerto o garras o cón excrementos.

El enrollamiento se viene haciendo •defectuoslmente, como lo indican

las fotos i a 4.

De esta manera quedaba un paquete mezclado, en el que no podía ha-

cerse el claseo en las fábricas.

EI enrollamiento (y esto es IMPORTANTISIMO) debe hacerse ta1

como lo indican los dibujos y las fotografías acíjuntas. De este modo que-

da un vellón enrollado como en las figuras 5 a 8 y el dibujo de la figura 9.

2.° Almocenamiento de los vellones.

Deben almacenarse con cuidado en un local con blstante luz, seco,

ventilado, sin corrientes de aire y en pilas de r,zo a 2 metros de altura.

• Estas pilas deben colocarse sobre tarimas hecllas con travesaños co-

locados directamente sobre el suelo (fig. ro).

A falta de estaŝ tarimas, pueden asentarse las pilas en suelos secos,

preferiblemente pavimentos impermeables. '

Si el almacén fuera demasiado calient^e y e.ccesible al polvo y las po-

lillas, deben cubrirse las pilas de modo que la cubierta no asiente direc-

- II -

tamente sobre la superficie de la lana, sino que deje un espacio de zo a 30

•centímetros para que circule el aire.

Estos cuidados, que parecen exagerados, son indispensables para evi-

,tar las fermentaciones, ataques de parásitas, etc., que desvalorizan total-

mente a las lanas de mejor clase.

Finalmente, al hacer las pilas, deben amontonarse por segarado los

vellones de carneros y borros de un mismo color, los de las ovejas y

borras, los de pelo de diferentes colores, los de apartes y los de despuntes

y cascarrias.

Los ganaderos que siguieran rigurosamente las instrucciones dadas,

presentarán a la venta sus lanas en óptimas condiciones, y conseguirán

un mayor rendimiento en el lavado a fondo.

Esta primera medida, cuya realización será encomendada en varias

provincias a Brigadas técnicas que darán instrucciones a los ganaderos

y cuya función se extenderá gradualmente a otras zonas productoras,

debe ser también aconsejada por los Veterinarios Municipales y seguida

por los ganaderos cuidadosos y amantes de sus rebaños para completar-

se, en campañas sucesivas, con las demás medidas proyectadas para la

anejora de la producción lanera nacional.

BANOS ANTISÁRNICOS.

La sarna ha determinado en los últimos tiempos grandes pérdidas en

r^uestra producción lanar. Grande es en ello la culpa de nuestros gana-

deros, pues la "roña" es una enfermedad parasitaria perfectamente previ-

sible mediante el empleo del baño antisárnico.

Actualmente existen ya en el comercio productos eficaces. Se impone,

Z^or tanto, bañar a las ovejas después del esquileo, inmediatam•ente des-

liués si es posible, siempre que las ^condiciones del tiempo lo permitan.

Después del baño se debe s•ecar a las ovejas si hace Erío o dejarlas al so!.

^Cuando la infestación sea muy grande, debe repetirse el baño a los

quince días del primero. Sólo así podremos remediar ^esta elevada pér-

dida que en los últimos años ba perjudicado enormemente a nuestra ga-

nadería lanar.

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MARCADO DE LAS OVEJAS.

Kepetidas disposiciones oficiales han ordenado que el marcado de las.

ovejas se realice con sustancias que no perjudiquen a]a lana. Estas sus-

tancias deben reunir ]os dos requisitos siguientes :

r. Resistir a la lluvia sin dest^eñirse ni desaparecer.

^. Poderse lavar con los procedimientos industriales en los lavade-

ros, de tal modo que la lana lavada quede sin color.

En tiempos su^cesivos, estas medidas legales habrán de hacerse cada

vez más severas, de tal modo que las lanas sufrirán una fuerte deprecia-

ción ei ]as ovejas fueron marcadas con pez, cal, anilinas u otras sustan-

cias prohibidas. Recomendamos, pues; a los ganaderos, en bien suyo, el

empleo de sustancias para el marcado que reúnan los requisitos legales.

NOTA.-Algunas de las fotografias y dibujos que fi^;uran en la presente publi-cación nos han sido facilitados por la Dirección General de los Ser^ictos Pecuariosde Portn7al, a la que agradecemos públicamente su gentileza.

CEAFICA3 UCUIIQA - MEI.ENDEZ VALDES, 7- MADRID ^