EN EL

PRINCIPI

OJosé María

ValverdeSara Navarro

Alba Pérez2º HS1.

EL AUTOR

o Nació en Valencia de Alcántara

(Cáceres) el 1926. Murió en

Barcelona el 1996.

o Poeta, ensayista, profesor.

Doctorado en Filosofía y Letras.

o Lector en la Universidad de

Roma.

o Catedrático en la Universidad de

Barcelona. En 1965 presenta su

dimisión.

o Asesor editorial para El Planeta

en Canadá y EEUU.

o Vuelve a España despues de la

muerte de Franco (1977).

o Compromiso político, simpatía

por el movimiento sandinista en

Nicaragua y muy cercano al PCE.

Teología de la Liberación.

OBRAo Empieza a escribir en la adolescencia

y colabora en revistas (Garcilaso).

o 1945: Primer libro “Hombre de Dios”.

Muy personal, en busca de Dios de

manera impaciente y pesimista.

o 1945: La Espera. Poemario.

Influencias de Machado, Neruda, etc.

Poesía cercana a la cotidianeidad.

o 1954: Versos del domingo. Seres

anónimos entre la multitud,

superación del miedo a la realidad.

o 1959: Voces y acompañamientos para

San Mateo. El Evangelio es vivido

como un consuelo en medio de la

rutina, pesimista.

o 1970: Años inciertos. Poemas breves

dónde pide justicia.

José María Valverde, Vicente Aleixandre,

Leopoldo Panero

CONTEXTOo Dictadura de Primo de Rivera 1923-1930: Apoyo del Rey

Alfonso XIII.

o Segunda república (1931-1939): 1931: Izquierdas. 1933:

Derechas. 1935: Frente Popular.

o Guerra Civil (1936- 1939): Entre Republicanos y

Nacionales.

o Dictadura franquista ( 1939-1975): Iniciada con la victoria

del Bloque Nacional.

ANALISIS FORMALDe pronto arranca la memoria,

sin fondos de origen perdido;

muy niño viéndome una tarde

en el espejo de un armario

con doble luz enajenada

por el iris de sus biseles,

decidí que aquello lo había

de recordar, y lo aferré,

y desde ahí empieza mi

mundo,

con un piso destartalado,

las vagas personas mayores

y los miedos en el pasillo.

VOCABULARIO

o Enajenada: Que ha

perdido la razón de una

manera permanente o

transitoria.

o Biseles: Corte

oblicuo en el borde o en

la extremidad de una

lámina o plancha

o Destartalado: Sin

orden

Años y años pasaron luego

y al mirar atrás, allá estaba

la escena en que, hombrecito

audaz,

desembarqué en mí,

conquistándome.

Hasta que un día, bruscamente,

vi que esa estampa inaugural

no se fundó porque una tarde

se hizo mágica en un espejo,

sino por un toque, más leve,

pero que era todo mi ser:

el haberme puesto a mí mismo

en el espejo del lenguaje

doblando sobre sí el hablar,

diciéndome que lo diría,

para siempre vuelto palabra,

mía y ya extraña, aquel momento.

VOCABULARIO

o Audaz: Osado,

atrevido.

o Estampa:

Reproducción de un

dibujo, pintura,

fotografía.

Pero cuando lo comprendí

era ya mayor, hombre de libros,

y acaso fue porque en alguno

leí la gran perogrullada:

que no hay más mente que el

lenguaje,

y pensamos solo al hablar,

y no queda más mundo vivo

tras las tierras de la palabra.

Hasta entonces, niño y muchacho,

creí que hablar era un juguete,

algo añadido, una herramienta,

un ropaje sobre las cosas,

un caballo con que correr

por el mundo, terrible y rico,

o un estorbo en que se aludía

a lo lejos, a ideas vagas:

ahora, de pronto, lo era todo,

igual que el ser de carne y hueso,

nuestra ración de realidad,

el mismo ser hombre, poco o mucho.

VOCABULARIO

o Perogrullada:

Verdad o certeza sabida

por todos que no hace

falta decir.

o Ropaje: Conjunto

de ropas.

o Estorbo: Persona o

cosa que molesta.

ANALISIS FORMAL

De pronto arranca la memoria,

sin fondos de origen perdido;

muy niño viéndome una tarde

en el espejo de un armario

con doble luz enajenada

por el iris de sus biseles,

decidí que aquello lo había

de recordar, y lo aferré,

y desde ahí empieza mi

mundo,

con un piso destartalado,

las vagas personas mayores

y los miedos en el pasillo.

ESTRUCTURA

Rima libre y de arte

mayor. Octosílabo.

Tema: Palabra

considerada como

esencia de la

naturaleza del

hombre.

FIGURAS

RETÓRICAS Personificación

Encabalgamientos

Metáforas

ANALISIS FORMAL

Años y años pasaron luego

y al mirar atrás, allá estaba

la escena en que, hombrecito

audaz,

desembarqué en mí,

conquistándome.

Hasta que un día, bruscamente,

vi que esa estampa inaugural

no se fundó porque una tarde

se hizo mágica en un espejo,

sino por un toque, más leve,

pero que era todo mi ser:

el haberme puesto a mí mismo

en el espejo del lenguaje

doblando sobre sí el hablar,

diciéndome que lo diría,

para siempre vuelto palabra,

mía y ya extraña, aquel momento.

Metáfora

Parado

ja

ANALISIS FORMAL

Pero cuando lo comprendí

era ya mayor, hombre de libros,

y acaso fue porque en alguno

leí la gran perogrullada:

que no hay más mente que el

lenguaje,

y pensamos solo al hablar,

y no queda más mundo vivo

tras las tierras de la palabra.

Hasta entonces, niño y muchacho,

creí que hablar era un juguete,

algo añadido, una herramienta,

un ropaje sobre las cosas,

un caballo con que correr

por el mundo, terrible y rico,

o un estorbo en que se aludía

a lo lejos, a ideas vagas:

ahora, de pronto, lo era todo,

igual que el ser de carne y hueso,

nuestra ración de realidad,

el mismo ser hombre, poco o mucho.

Metonímia

Hipérbole

Símil

PROSIFICACIÓNo En su poema “En el principio”, José María Valverde medita sobre la esencia

del lenguaje en relación con la memoria y el pensamiento.

o Su reflexión parte de un hecho de su infancia que quedó grabado para

siempre en su memoria. Se trata de una imagen en la que aparece él de

niño mirándose en el espejo de un armario. Una imagen que es devuelta de

manera múltiple a causa del reflejo de la luz en el espejo. Para el autor,

ésta representa el inicio del autoconocimiento. El momento en el que su

memoria empezará a recordar la que será su vida y le permitirá empezar a

tener conciencia de si mismo. Es el momento en que sus pensamientos

empiezan a tener forma de lenguaje, forma de palabras. En su madurez el

autor se da cuenta de que la importancia del momento no se encuentra en

el hecho en sí, en el hecho de poder recordar esa imagen, sino de que en

ese instante, fue capaz de transmitirse a si mismo lo que pensaba y sentir a

través de la palabra, es decir, memoria y lenguaje al fin se conectaron. Esto

hizo que su memoria se activara y su personalidad se pudiera comenzar a

definir. 

“Nulla aesthetica sine

ethica. Ergo, apaga y

vámonos”

“No hay estética sin ética. Luego

que apaga y vámonos”.