Revista de Historia Naval Nº18. Año 1987

download Revista de Historia Naval Nº18. Año 1987

of 94

Transcript of Revista de Historia Naval Nº18. Año 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    1/94

    REVIST

    bE

    HISTORI N V L

    Ao V 1987

    INSTITUTO DE HISTORI Y CULTUR N V L RM D ESP OL

    Nm. 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    2/94

    INSTITUTO DE HISTORIA Y CULTURA NAVALARMADA ESPAOLA

    REVISTADE

    HISTORIA NAVAL

    Ao V 1987 Nm. 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    3/94

    REVISTA DE H1STORIA NAVAL

    CONSEJORECTOR:. -

    Director del Instituto de1listoriay CulturaNaval, D. Federico Fer

    nando Bordej y Morencos. contralmirante.VicepresidenteyDirector: Jefedel Departamento de Historia y Director del Museo Naval,

    D.Ricardo CerezoMartnez. capitnde navo.

    Vocales: -Secretario General del Instituto de Historia y Cultura Naval. D.Antonio Mc irs Bahamonde.capit nde novio.

    Redaccin: D.Mara Vign Tabor. Lda. en Biologa. D.M. dci Pilar San PoAladrn, Lda. en Filosofa y Letras. D. Beln Rivera Novo. Lda. enGeografa e Historia, y D. Lola Higueras Rodrguez, Lda. en Filosofa y Letras.D. Hugo ODonell y Duque de Estrada, capitn de Infantera de Marina, Ldo. en Derecho.

    Administracin: D.Jos Luis Pando Villarroya, teniente coronel de Intendencia de laArmada, y D. Paloma Moreno de Alborn Calvo.

    DIRECCIN Y ADMINISTRACIN:

    Museo Naval Montalbn, 2.28014 Madrid (Espaa).

    IMPRIME:

    Servicio de Publicaciones de la Armada.

    Publicacin trimestral: tercer trimestre 1987.Precio del ejemplar suelto:550ptas.

    Suscripcin anual:Espaa y Portugal: 2.000 ptas.Resto del mundo: 20$USA.

    Depsito legal: M.16.854-1983.ISSN-0212-467XNIPO :098-87-041-3Printed in Spain.

    CUBIERtA:

    Del libroRegimiento de Navegacin,por Pedro Medina. Sevilla,1563.

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    4/94

    SUMARIO

    La derrota del primer viaje de Coln,por Ricardo Cerezo Martnez. 5

    La isla del Descubrimiento. San Salvador, Guanahan o Saman?,por Roberto Barreiro-Meiro15

    Le redressement de la Marine franaise pendant ientre-deux-guerres,por Philippe Masson27

    Pedro Alberni y los primeros experimentos de agricultura cientfica

    en la costa Noroeste del Pacfico,por Donaid C. Cutter41Las casas de Reyna y del Sacramento: Primeros establecimientos de la

    Real Compaa de Guardias Marinas en la Real Isla de Len,porLuis Francisco Martnez Montiel57

    Organizacin de la Armada durante el reinado de Felipe V. Diferencias y semejanzas con la britnica,por Angel Guirao de Vierna. 73

    Documento87

    Noticias generales91

    Recensiones 95

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    5/94

    La direccin de estaREVISTA no se hace responsable de las opiniones expresadaspor los autores en sus artculos.

    La reproduccin y la traduccin, parcial o ntegra, de los textos e ilustraciones debeser previamente solicitada por escrito a la direccin de laREVISTA.

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    6/94

    LA DERROTA DEL PRIMERVIAJE DE COLON

    Ricardo CEREZO MARTINEZDirector del Museo Naval

    Introduccin.

    Cuando Cristbal Colnemprendi su aventura de llegar a oriente navegando hacia occidente, las tcnicas de navegacin vigentes las de finales de

    la Edad Media le ofrecan dos mtodo para determinar la situacin en lamar: el que proporcionaba elpunto de fantasa yel delpunto de escuadra.Aqul, en correspondencia con la navegacin exclusiva por rumbo y distancia, es decir, con datos estimados, el ltimo utilizando el clculo de la latitudmediante la altura de la Polar o del Sol al medioda como elementocorrector de la situacin estimada.

    Para echar el punto, sea el de fantasa o el de escuadra, era necesario disponer de cartas de marear; provistas de escala de latitudes en el caso de querer utilizar el punto de escuadra, sin necesidad de disponer de esta escala si elnavegante se vala del punto de fantasa. Sin embargo, el clculo de la posicin mediante la estima no exclua el que los marinos se valieran de la latitudsin necesidad de plasmarla sobre la carta con objeto de mantenerse navegando sobre un paralelo o dirigir la nave hacia el este o el oeste para efectuaruna recalada en un lugar de latitud conocida. En determinadas circunstancias, el conocimiento de la latitud de algn lugar representado en una cartaarrumbada esdecir, no provista de escala de latitudes era til para hallarla de otro punto en el que se haba calculado la latitud, obtenida por observacin astronmica mediante una simple adicin o resta.

    Para calcular la posicin en la mar y representarla sobre una carta nutica

    era menester: Disponer de cartas de marear, sin o con escala de latitudes, segn el

    mtodo que se utilizara. Conocer el rumbo mediante la aguja magntica. Conocer la distancia navegada. Conocer la latitud si se empleaba el mtodo de escuadra.

    Pero el manejo de estos elementos a finales de la Edad Media nose debe

    enjuiciar con los criterios de exactitud actuales, cuando existen cartas, agujasde marear mecnicas o magnticas compensadas, correderas e insrumentos de observacin astronmica que proporcionan lecturas de una granprecisin en las aplicaciones respectivas. Entonces, la distancia se calculaba

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    7/94

    R. CEREZO MARTNEZ

    a ojo, conforme al criterio del piloto o maestre quesaba cunto andaba sunave en unas determinadas condiciones de mar, viento, carga y estado de limpieza de la obra viva del casco; y como era peligroso apreciar por menos la distancia navegada, porque se poda tropezar inopinadamente con la costa, seacostumbraba a calcularlapor ms.

    La determinacin de la distancia navegada era en todo caso aleatoria,toda vez que en la velocidad del buque influan las corrientes, conocidas enlos mares donde se practicaba la navegacin desde tiempo inmemorial, perono en el ocano, al menos en la primera poca de los descubrimientos, demodo que el error por esta causa no poda ser tenido en cuenta; y si se detectaba alguna corriente, como sucedi el 13 de septiembre a bordo de las navesde Coln segn se dice en elDiariode la navegacin, no exista posibilidad de determinar con exactitud sus efectos, por lo que la correccin que sepudo aplicar era a todas luces arbitraria.

    El abatimiento de la nave a causa del viento introduca tambin errores enel rumbo, que se corregan muy groseramente a pesar de que existan procedimientos de navegacin como era el de latoleta de marteloio,cuya aplicacin permita determinar la posicin de la nave excluidos los efectos delabatimiento, al menos enteora.

    Los rumbos en las agujas de marear se medan por cuartas una cuartatiene 11,25grados, y aunque se muestren ejemplos de brjulas provistas de

    rosas divididas en grados en la poca medieval, no cabe pensar que, aparte delas imperfecciones de construccin de aquellos tiempos, los timoneles pudieran gobernar las naves mediante lecturas de precisin inferior a media cuarta.

    En las agujas magnticas influa como en la actualidad la declinacinmagntica propia de cada lugar, pero como este fenmeno era desconocidono se aplicaba a los rumbos la correccin correspondiente; a lo ms que se llegaba entonces era a arreglar la aguja con hierros, de modo que la flor de lismarcara una direccin lo ms prxima posible al norte, lo cual poda serbueno en un rea restringida de la mar, pero totalmente contraproducente enotras zonas donde los efectos del arreglo y de la declinacin magntica sesumaban en vez de compensarse. El concepto devariacin magntica,manejado entonces por los navegantes hispanos aunque actualmente el trminovariacin signifiquedeclinacinen algunos pases, no es equiparable aeste ltimo, dado que se le achacaba un valor fijo propio de la imperfeccinde las agujas; un valor que, desde antiguo, se consideraba de sentido nordeste. Precisamente fue Coln quien comprob por vez primera el 13 de septiembre que lavariacinpoda ser tambin de direccin noroeste.

    Para obtener un valor fiable del rumbo verdadero indicado por las agujasmagnticas se ha de saber tambin cul es el valor del desvo propio de cadauna de ellas, con objeto de combinarlo aritmticamente con el de la declinacin magntica para obtener la correccin total de la aguja en cuestin. Losefectos del desvo de aguja eran desconocidos a finales de la Edad Media y nose tendrn en cuenta como dato corrector hasta finales del siglo xvi y no concarcter de general uso por parte de los navegantes.

    6 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    8/94

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    9/94

    R. CEREZO MARTINEZ

    La observacin a bordo de alturas de astros estrella Polar y Sol,mediante la ballestilla y el cuadrante, faltos de visores de aumento y afectadopor el movimiento de balance y cabezada causados por la mar, estaba infludde grandes errores. La latitud obtenida era, en todo caso, aproximada. Porotra parte, la falta de reglas, de transportadores graduados y de medios defijacin grfica lpices no permita trazar como hoy una posicin ntidsobre la carta. Basta leer la descripcin que a mediados del siglo xvi haceMartn Corts en suBreve compendio de la esferapara hallar la situacinsobre la carta valindose de dos compases, trasladados sobre ella, uno segnel rumbo, el otro paralelamente a la latitud hasta donde se juntan las puntasde ambos compases, para darse cuenta de que la exactitud demandada entonces no se puede calibrar con criterios actuales. Por otra parte, si se observan

    las cartas de marear que han llegado hasta nosotros podr verse que por razones de tamao de las cartas y de apreciacin de distancias en las escalas noexiste posibilidad de obtener una situacin dentro de unos mrgenes de erroaceptables para un clculo de precisin.

    La nutica, en el Diariode Coln.

    Segn la informacin que se puede obtener del primer viaje, Coln sevali de una carta para seguir la derrota de sus naves, pero no sabemos qu

    clase de carta era quiz la de Toscanelli-ni cules fueron los datos manejados por l y sus pilotos. Suponemos que se valdran principalmente de laestima para mantenerse navegando al oeste, corrigiendo la derrota gobernando a rumbos de una o ms cuartas al norte o al sur con ese propsito. Enel Diario de navegacin no se encuentra noticia alguna de que se utilizara lalatitud para obtener una posicin en la mar.

    El 17 de septiembre se alude a quetomaron el norte los pilotosy hallaronque las agujas noruesteaban una gran cuarta, lo cual hace pensar que la navegacin al oeste se diriga manteniendo por el travs de estribor la marcacinde la Polar; y el 25 del mismo mes precisamente en las fechas en que laderrota de las naves muestra varios cambios de rumbo en elDiario serecoge el hecho de que el Almirante, tras recuperar por medio de una gua uncarta que le envi tres das antes, comenza cartear en ella con su pilotoymarineros. Cartear significa valerse de la carta para conocer la posicin yhabida cuenta que tanto los pilotos como Coln saban hallar la latitudmediante la observacin astronmica, se puede asegurar que as lo hicieronen esta ocasin, como lo demuestra el hecho de que al cabo de varios das denavegacin a rumbos distintos del oeste, lo reemprendan en la misma latituden la que lo abandonaron das antes.

    El que no se cite expresamente un hecho tan habitual como es el de observar los astros durante todo el viaje no debe interpretarseen nuestra opinin como un acto irrealizado sino omitido por rutinario. En los relatos dviajes posteriores se cita en diversas ocasiones la determinacin de la latitudmediante la observacin astronmica cuando se desea destacar expresamente

    8

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    10/94

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    11/94

    R. CEREZO MARTNEZ

    a los grados de cielo respectivos correspondan56millas y 2/3, 66 millas y2/3,y 70 millas.

    Pero la adopcin de uno y otro mdulo no significaba que la medida de lasmillasy de las leguas fuera en cada caso la parte alcuota obtenida al dividir el grado de cielo en tantas o cuantas partes segn el mdulo adoptado, conlo cual resultara que la longitud de las millas sera distinta en cada caso, sinoque haba quiencrea que un grado contena56millas y 2/3, mientras otrosopinaban que eran 66 millas y2 3 y unos terceros estaban convencidos de queen cada grado caban 70 millas. Pero las millas empleadas por todos y cadauno de los navegantes y cosmgrafos eran las romanas. Coln crea vivir enun mundo ms pequeo del que realmente era y si esta idea incide en el valornumrico de su mdulo, ello no implica que utilizara en la prctica de la nu

    tica medidas distintas de las que empleaban los dems hombres de mar.Para comprobar lo dicho anteriormente basta trazar en la carta de Juan dela Cosa la derrota seguida por Coln en su primer viaje, con los rumbos y distancias extrados delDiario y se ver como expresa la figura aqu incluidaque no presenta gran error en distancia respecto del lugar de recalada, a pesarde que el autor de la carta utiliz el mdulo de 70 millas por grado para construirla y no el de 14 y 2/3 de Coln.

    Confusin pareja parecen sufrir algunos historiadores cuando tratan dereducir las distancias navegadas en latitudes distintas a las correspondientes

    a los grados del Ecuador o lnea equinoccial.Respecto al manejo de los rumbos expresados en elDiariopor parte de loshistoriadores que trataron de reconstruir la ruta colombina, la cuestin no esmuy diferente a la de las distancias. Todos los que trazan la derrota que creenque sigui Coln, le aplican correcciones para que acabe en el lugar que pretenden, teniendo en cuenta corrientes que Coln y sus pilotos no apreciaban, dado que navegaban por regiones ocenicas totalmente desconocidasy efectos de declinacin magntica que tambin les eran ignorados.

    Para corregir los efectos de este fenmeno magntico en los rumbos, loshistoriadores se valen de la carta magntica teorizada por Bemmelen parael ao1500,pero sta no refleja los gradientes reales de las isgonas magnticas, como puede deducirse de su comparacin con los datos que facilita elAlmirante: una lnea agnica 100 leguas 320 millas nuticas a ponientede las Azores en el primer viaje y observacin en el tercero de otro gradientenulo con un acusad cambio de orientacin de las agujas en un lugar a unas90 leguas 288 millas nuticas al noroeste de la isla Margarita.

    Tampoco las isgonas de Bemmelen reflejan los efectos magnticos queproporcionan las cartas de Juan de la Cosa ao 1500 y de Pedro Reinelc. 1504; en aqulla, el ngulo queforma el eje de las grandes Antillas conel Ecuador, alterado a causa de las lecturas magnticas utilizadas para situarlos lugares geogrficos, denota un ngulo de 11grados para valor medio de ladeclinacin magntica; y en la carta de Reinel, los 22,5 grados de inclinacinde la pequea escala de medidas trazada junto a Terranova, manifiesta elvalor de la declinacin en aquellos parajes.

    10 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    12/94

    LA )ERROTA L)LLIR/MER VIAJE I)E COLON

    Ao I)87

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    13/94

    R. CEREZo MARTNEZ

    De todo lo dicho anteriormente se deduce que, aparte de los errorescometidos por algunos autores al manejar las distancias y los rumbos delDiario, no existe en ste informacin para obtener una respuestacuantitativa dela derrota seguida por el Almirante, suficientemente exacta para determinael lugar de la recalada, sea en la isla de Guanahan u otra cualquiera. dadque:

    Las distancias calculadas por los distintos pilotos son diferentes, comose ve en los cmputos efectuados el 1 de octubre; y en el supuesto dque existiera coincidencia entre ellas, habra de tenerse en cuenta quse calculaban a ojo.

    Las distancias no estn expresadas conforme a un criterio de registrometiculoso, lo cual les resta validez para un ulterior tratamiento riguroso.

    No se sabe qu correcciones aplicaron para compensar los efectos dlas corrientes, aunque en una ocasin el 13 de septiembre, a la alturde las Azores se haga referencia a este efecto.

    Se desconoce si las agujas de las naves llevaban aceros para corregir lvariacin nordeste, que era la nica conocida entonces en Europa.

    Se ignora el desvo propio de cada aguja. No se sabe si Coln y sus pilotos aplicaron alguna correccin para com

    pensar los efectos de lavariacin magntica;y, por supuesto, no corrigieron el desvo de las agujas.

    Vista la imperfeccin informativa que proporciona elDiario, tanto comola imprecisin de los medios y procedimientos utilizados para obtener la poscin en la mar, cabe preguntarse qu posibilidades se tienen hoy de reproducir, con la exactitud discriminatoria que exige la determinacin de llegadaun lugar concreto, la derrota seguida por Coln en 1492; y a qu conduce utlizar hoy instrumentos de clculos precisos cual son los ordenadores pa

    tratar con toda meticulosidad unos datos que carecen de la fiabilidad necesria para proporcionar un resultado fidedigno.

    Conclusiones.

    Los mtodos cuantitativos son de antiguo auxiliares valiosos para el historiador, siempre que la interpretacin y manejo de los datos puestos a su dispsicin cumplan dos requisitos fundamentales: que expresen con aceptablexactitud, para los fines especficos que se utilicen, los fenmenos, valores clculos a los que estn referidos datos en su poca; que sean correctamentinterpretados por quien los utiliza.

    En el caso que nos ocupa, los rumbos y las distancias contenidos en elDiario de Coln transcrito por Bartolom de Las Casas no cumplen las condcin de exactitud que es menester para determinar con precisin el lugar dllegada de Coln a la primera isla descubierta, toda vez que no se puede

    12 1

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    14/94

    LA DERROTA DEL PRIMER VIAJE DE COLON

    transformar en los que corresponderan a los rumbos y distancias verdaderossusceptibles de ser situados en una carta. En cuanto a su interpretacin, el historiador no puede tratar esos datos con los criterios de precisin que hoy se

    exigen a los elementos manejados en la navegacin de estima, dado que en supoca fueron expresados conforme a propsitos que no eran el de registroexacto para una posterior reconstruccin de la ruta, como actualmente seexige.

    Lo anterior no quiere decir que hayan de desecharse los intentos de reproduccin de la derrota que sigui el Almirante de la Mar Ocano en 1492(5),pero entiendo que no puede aceptarse mientras los datos que se conozcansean los delDiarioms all del terreno de la hiptesis o como complementoa la investigacin histrica de base cualitativa que es, por el momento, la fuentems fidedigna que disponemos para abordar tan apasionante problema.

    (5) Sobre este tema puede verse la revistaTerrae Incognitae.Volumen XV. 1983.

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    15/94

    LA ISLADEL DESCUBRIMIENTO:

    SAN SALVADOR,GUANAHANI O SAMANA?

    Roberto BARREIRO-MEIRO

    As como no hay nacin, ciudad ni aldea europea que no se crea la cunade Coln, no hay isla de las Lucayas e incluso fuera de ellas que no tenga su

    defensor como isla del Descubrimiento.Hace unos meses los corresponsales espaoles de prensa, tanto en Washington como en Nueva York, informaron a sus agencias y peridicos de unms sensacionalista que sensacional trabajo realizado por dos historiadores yun extenso grupo de colaboradores de gran categora y publicado en la magnfica revista de laNational Geographic Societycon gran profusin de planos ypreciosas fotografas. Este grupo de investigadores, despus de cinco aos deintensos estudios con ayuda de ordenadores especiales, llegan a demostrar, oal menos as lo creen, que la isla del Descubrimiento, la denominada porColn San Salvador,no esGuanahan, sinoCayo Saman,prximo a ella.

    Esta teora la sostuvo en 1882el capitn de navo Gustavus V. Fox y desdentonces est ya superada.

    Al no poder realizar.una rplica a-un trabajo cientfico conocido solamente por una informacin periodstica, se esper la llegada de la revista, ala que el Museo Naval est suscrito, para tener conocimiento directo del trabajo. Pocos das despus, se presentaron inesperadamente en este Museo losdos autores principales del trabajo: los Srs. Don Luis Marden, que domina elcastellano perfectamente y es autor de la derrota de Coln desde la isla deGomera hasta las islas Lucayas, y D. Joseph Judge, que desarrolla la navegacin entre estas islas, tomando aCayo Samancomo la del Descubrimiento.

    Durante dos horas nos presentaron su trabajo, la entrevista no se prolong ms porque tenan que salir hacia el Archivo de Indias de Sevilla, prometiendo continuar tan amena exposicin a su regreso. Nos obsequiaron conejemplares de la revista, que an no haba llegado a Espaa, y carpetillas conesplndidos mapas, planos con las derrotas y fotografas. Por nuestra partenos consideramos obligados a contestar a sus teoras despus de su estudio.

    Realizada una primera lectura del trabajo quedamos desconcertados,como nos quedaramos si en una gua documental de Segovia no figurase elAcueducto o si en una de Egipto no se citasen las Pirmides. Cmo es posible que en un trabajo tan extenso no se nombre ni una sola vez la carta de Juande la Cosa, primer y mximo monumento cartogrfico del Descubrimiento?

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    16/94

    R. BARREIRO-MEIRO

    Hemos consultado esta duda con los autores y nos contestaron que se trataba de un trabajo informativo y por ello no citaban fuentes?,lo respetamos.

    Juan de la Cosa acompa a Coln en su primer viaje como maestre de lanao capitanaSanta Mara,por ser su dueo; en el segundo iba comomaestrode hacer cartas de marear;as lo declar en el acta de Juan Prez de Luna en1494. Segn Las Casas estaba considerado como el piloto ms hbil de sutiempo. Tambin naveg por las islas Luyacas al regresar a Espaa de su viajede 1499-1500con Hojeda.

    Coln, en su Diario (as se denomina al extracto que hizo el Padre LasCasas del original o de una copia, mandado realizar por los Reyes Catlicosen Barcelona) relata los nombres que pona a las islas conforme las descubray tambin el que les daban los indios; por primera vez aparece en el Diario lavoz Indios, aqu podra ser atribuido a Las Casas, sin embargo, lo repitevarias veces ms, diciendo:son palabras del Almirante.As, una isla que loslucayos llamabanGuanahan,Coln la denominSan Salvadory aSaometole puso el nombre de Isabela.

    El Sr. Judge termina su trabajo diciendoquiz laprueba infalible vendrasolamente con el descubrimiento del Diario y carta (de navegar) originales deColn. Pero hasta que llegue ese da, tenemos que concluir que es imposibleexplicar los hechos de que disponemos de ninguna otra forma. La solucin almisterio es Samana Cay.

    Al Sr. Judge debemos indicarle que existe un documento tan importantecomo el Diario de Coln original o una carta de navegar del mismo; ese documento es la Carta de Juan de la Cosa, donde encontramos dos islas con sustopnimos Guanahany Saman;al ser dos islas distintasSamanno puedeser Guanahany como Coln en su Diario nos dice que llamSan Salvadorala isla que los nativos llamabanGuanahan, Samanno puede serSan Salvador la isla del Descubrimiento.

    La carta de Juan de la Cosa destroza y destroz todas las teoras sobre laisla que unos y otros historiadores consideran del Descubrimiento. La primera eliminada fue la de D. Martn Fernndez de Navarrete, quien, igual quetodos, realiz la derrota o navegacin de Coln de Espaa al Caribe, pero porhacer caso a un marino que haba navegado por aquellos mares para corregirla carta de las Antillas, forz la derrota para recalar en losCaycos,la isla delDescubrimiento para Navarrete. Muy pocos aos antes de su muerte, conocila carta de Juan de la Cosa, recientemente descubierta por Humboldt en1832, y dndose cuenta de su error dej una nota para que fuera publicada enla siguiente edicin de susViajes,donde reconoca que Juan Bautista Muozestaba en lo cierto al identificar aWatlingcomo isla del Descubrimiento y nolos Caycos,como el crey en un principio. Pobre Don Martn Cierto queMuoz, en 1793, sin explicacin alguna, y como por inspiracin divina, dijoque la isla que Coln llamSan Salvadorera Watling,pero hay que tener encuenta los vericuetos por donde llev las tres carabelas de Coln desdeWatlinga Cuba.

    Sigamos analizando los distintos puntos del trabajo de nuestros amigos

    16 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    17/94

    LA ISLA DEL DESCUBRIMIENTO: SAN SALVADOR, GUA NA HA NI O SAMANA?

    Judge y Marden. Felicitamos al Sr. Marden por la profundidad y sinceridadde su trabajo. En el mismo nos dice que ha tenido que repetir varias veces losclculos. Aplicando las singladuras de Coln, la primera vez recal en Miami

    (Florida). Ay las leguas de Coln Haciendo un tanto por ciento de descuento en estas leguas recal enWatling.Luego, interviniendo algn que otroordenador, volvi a recalar nuevamente en Watling. Despus de nuevascorrecciones por mil fenmenos nuticos y empleando dos calculadoras denavegacin Tamayaobtuvo el punto de recalada ansiado: 10 millas al nordeste deCayo Saman,es decir, la isla les apareci por el sur.

    Pero hay un dato interesante y casi desconocido, pues nunca lo hemosvisto citado; no aparece ene Diario, ni en Las Casas, ni en Hernando Coln,aunque s nos lo proporciona un cronista de Indias, y por qu lo haba deinventar, que trat, si no a todos, s a la mayora de los que intervinieron enel Descubrimiento. Gonzalo Fernndez de OviedoPrimer Cronista delNuevo Mundo,en suHistoria General y natural de las Indias, islas y TierraFirme del Mar Ocano,escrita hasta 1535 e impresa en Madrid en 1851, en eltomo 1, pg. 24, al describir el primer viaje colorbino nos dice:se vido la islaque los indios llaman Guanahan de la parte de la Tramontana o Norte.Estosupone otro punto negativo para reconocer aSamancomo laGuanahanoSan Salvadordel Descubrimiento.

    El da 13 de octubre, nos dice Coln al descubrir la isla deGuanahana laque llamSan Salvador; esta isla es bien grande y muy llana y de rboles muy

    verdes y muchas aguas y una laguna en medio muy grande.Su hijo Hernando en laHistoria del Almirante Don Cristbal Colnen elcaptulo XXIII dice:vieron que era una isla de 15 leguas de larga, llana sinmontes, llena de rboles muy verdes y de buensimas aguas con una granlaguna en medio.

    Presentamos las islasGuanahanyCayo Samantal como el Sr. Judge ilustra el trabajo. Nosdice Coln en su Diariola disposicin de Guanahan: esta islaes bien grande y muy llanay derboles muy verdes y muchas aguas y una laguna en medio muy grande.Puede existir algunaduda sobre cul de las dos es la isla del Descubrimiento?

    Ao 1987 17

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    18/94

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    19/94

    LA ISLA DEL DESCUBRIMIENTO: SAN SALVADOR, GUANAHANJ O SAMANA?

    los de la otra dicen ver doce o trece. Imaginaciones nada ms, pues no podaver ms que una isla o dos y hacia la mayor se dirigi Coln.

    El da 15 de octubre escribe en el Diario:y como la islafuese ms lejos de

    cinco leguas, antes ser siete, y la marea me detuvo, sera medio da cuando llegu a la dicha isla. Y hall que aquella haz que es de la parte de la isla de SanSalvador se corre Norte Sury han en ella cinco leguas. Yla otra que yo seguse corra Leste Oueste, y han en ella ms de diez leguas: cargu las velas porandar todo aquel da hasta la noche; porque an no poda haber andado alcabo de aquel oueste, a la cual puse nombre la isla de Santa Mara de la Concepcin.

    Partiendo deWatling,como isla deSan Salvadoro Guanahan,con rumbosudueste o sudoeste se encuentra la islaCayo Ramque tiene una costa norte-sur de5millas aproximadamente, no de5 leguas, y esta costa mira a la isla deWatling, y la costa que corre este oeste, que fue la que sigui Coln, seextiende 10 millas, y desde sta se ve una isla grande al oeste.

    Cambiando las leguas por millas, vemos que las dimensiones que paraestas islas nos da el derrotero de las Antillas del ao 1890parecen sacadas delDiario. Watlingo San Salvadorque rene las mayores probabilidades de serla primera tierra que pis Coln en el Nuevo Mundo,se tiende 12 millas deNorte a Sur, con 5 a 7 de ancho(...) encierra multitud de lagunas(...).Teniendo en cuenta que las millas de Coln son ligeramente ms pequeasque las nuticas, se debe admitir que las 15que nos dan Hernando y Las Casas

    son las 12 millas nuticas del derrotero.Cayo Rumtiene 9,5 millas de longitud este a oeste,5 millas de ancho ensu extremidad, dimensiones que coinciden con la segunda isla que descubriColn y que denominSanta Mara de la Concepcin.

    Fox nos da en su trabajo un dato que Judge no cita:Que en la derrota deSaman no hayms que tres discrepancias. En la tercera isla dos leguas, tienen que ser dos millas. En la cuarta isla, doce leguas tienen que ser doce millas.La demora entre las islas terceray cuartaes exactamente como la cartamuestra,ni concuerda con los nmeros gobernados.Salvando este ltimo punto que noentendemos, quiz por su traduccin, nos parece interesante el cambio deleguas por millas. Admitiendo, como Fox, ese cambio en la segunda isla,vemos que cinco millas en la costa norte-sur y que adems mira aSan Salvadory las diez millas este-oeste slo se dan en la islaCayo Rum,por tanto, esta esla segunda isla, la que denominSanta Mara de la Concepcin.Lo confirmala distancia que separa ambas islas: el da 15 no dicey como la islafuese msde cinco leguas, antes sersiete,viendo la separacin entre ambas se ve que lasdimensiones de la isla no pueden ser leguas sino millas.

    Si la misma navegacin la llevamos a cabo partiendo deSaman,comoSanSalvador, y llevando rumbo casi sur y no sudueste, como dice el Diario, las

    carabelas llegaran al extremo de una isla que quieren que seaSanta Mara dela Concepcin,en realidad son dos: parte deAcklinsy parte deCrookedyentre ambas no renen las condiciones del Diario, ni tienen costa de cincomillas que corra norte-sur y que mire aSan Salvador-Saman,ni la costa este

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    20/94

    R. BARREIRO-MEIR O

    Desde la primera isla, Coln, con rumbo sudueste, va a la segunda que est a7 leguas, quetiene una costa que corre norte-sur de 5 leguas y otra que se extiende este-oeste. Esta fue la qul sigui 10leguas.

    En este grfico se ven claramente los errores de distancias del Diario o de la transcripcinSi la separacin entre la primera y la segunda isla, es de siete leguas, la costa norte-sur no pued

    ser de cinco leguas, sino de cinco millas y lo mismo de la este-oeste que sera de diez millas conforme las dimensiones de un derrotero actual.La tercera isla, Coln la llamoFernandinay la describi como grandsima. As se le puede

    calificar viniendo de una isla pequea comoCayo Rum,pero no si se procede deSaometoquees mayor que laFernandina.Por tanto,Saometono puede ser la segunda isla como quieren lospartidarios de queSaman sea la isla del Descubrimiento. No ofrece ninguna duda que lasegunda isla esCayo Rumy la primera tiene que serGuanahan-San SalvadorhoyWatling.

    20 Nm. 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    21/94

    LA ISLA DEL DESCUBRIMiENTO: SAN SALVADOR, GUANAHANI O SA MA NA?

    oeste que sigui Coln tiene 10millas sino ms de 30. Ms an, Coln nos diceque desde la isla que llamSanta Mara de la Concepcinvio al oeste otra islagrande a la que llamFernandina;en cambio, como veremos despus, desdela Fernandinano vioCrooked-Acklins, Nuestra Seora de la Concepcinparalos partidarios deSaman, y a pesar que haca dos das que haban venido deall, para encontrarCrookedtuvo que realizar un despliegue de las tres carabelas, utilizamos este trmino para no extendernos hablando deuna nao y doscarabelas. Hay que tener mucha fe enSamanpara creer en este suceso onavegacin.

    Estando enFernandina,Coln escribe el 17 de octubre:A medio da partde la poblacin adonde yo estaba surgido y adonde tom agua para ir a rodearesta isla Fernandina,y el viento era Sudueste y Sur; y como mi voluntad fuesede seguir esta costa de esta isla adonde yo estabaal Sueste, porque as corre todaNornorueste y Sursueste, y que crea llevar el dicho camino de Sur y Sueste,porque aquella parte todos estos indios que traigo y otro de quien hube seasen esta parte del Sur a la isla que ellos llaman Samoet a donde es el oro; yMartn Alonso Pinzn, capitn de la carabela Pinta, en la cual yo mand tresde estos indios, vino a m y me dijo que uno de ellos muy certificadamente lehaba dado a entender que por la parte del Nornorueste muy ms presto arrodiara la isla; yo vi que el viento no me ayudaba por el caminoqueyo quera

    75 .- IS

    FERNANDINA.

    743O 74.czC7

    Is. CAYOSMANA23

    . isSAOMETO

    Vamos a aceptar por un momento que la islaSaometosea la segunda isla descrita por Colna la que llamSantaMara de la Concepciny que est compuesta por las islasAcklins, Crookedy Fortuna.Coln nos dice que desde la segunda isla vio la tercera a la que llamFernandina,desde ningn punto deSaometose ve la tercera islaFernandina.Por ello,Saometono puede serla segunda isla,Santa Mara de la Concepcin.

    Sigamos aceptando queSaometosea la segunda isla. Navegando con rumbo este-oeste,como dice el Diario, llegara al extremo sur de laFernandina;con un rumbo este-oeste slose llega desdeCayo Rum, la verdadera segunda isla llamada por ColnSanta Mara de la -Concepcin.

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    22/94

    R. BARREIRO-MEIRO

    llevar, y era bueno por el otro; di la vela al Nornorueste, y cuando fue a cercadel cabo de la isla, a dos leguas hall un maravilloso puerto con una boca, aunque dos bocas se le puede decirporque tiene un isleo en medio y son ambasnuyangostas y dentro muy ancho(...) y despus todos estos indios tornaron a decirque esta isla era ms pequea que no la de Saomet. Y que sera bien volver atrspor ser en ella ms presto.

    Hemos querido presentar extensamente lo que nos cuenta de este da,porque nos aclara varios puntos de inters para la investigacin de estas islasColn nos dice que desdeSanta Mara de la Concepcinnaveg al oeste ylleg a un puerto de la isla que llamFernandina.Este puerto segn el capitnde laPinta, Martn Alonso Pinzn, estaba prximo al extremo norte de laFernandina. SiSanta Mara de la ConcepcinfueseCrooked-Acklinscomo quieren los partidarios deSaman, navegando con rumbo oeste llegaran a unpunto o puerto situado en la costa sur de laFernandina.Esta navegacin noconcuerda con el Diario. Por tanto,Santa Mara de la Concepcintiene queser Cayo Rumy noCrooked-Acklins.Adems ese da nos dice que los indiosafirmaban que laFernandinaera ms pequea queSaomety los nativos sereferan al conjunto de las trs islas:Crooked, Acklins y Fortuna.

    Para nosotros elfiniquitode esta teora deSamannos lo da el Diario elviernes 19 de octubre, encontrndose Coln en el extremo sur de laFernandina quiere ir aSaometo,de donde haba venido el da anterior, segn los par

    tidarios deSaman.Veamos el despliegue estratgico para dar con ella:Enamaneciendo levant las anclas y envi la carabela Pinta al Este Sueste, y lacarabela Nia al Sur Sueste, y yo con la nao fui al Sueste, y dado orden quellevasen aquella vuelta hasta el medioda, y despus, que ambas se mudasen lasderrotas y se recogiesen para mi. Y luego, antes que andsemos tres horasvimos una isla al Leste sobre la cual descargamos.Y llegamos a ella todos tresnavos antes de medioda a lapunta del norte, a donde hace un isleo y una restinga de piedra fuera del; la cual anombraron estos hombres de San Salvador que yo traigo la isla de Saomete ala cual puse nombre La Isabela (1).El viento era Norte, y quedaba dicho isleo en derrota de la isla Fernandina,de donde yo haba partido Leste Oeste.

    Segn la derrota de Fox-Judge, Coln haba llegado a laFernandinaihacados das procedente deSaomet-Crooked,para ellosSanta Mara de la Concepcin. Cmo es posible que para regresar a la misma isla tuviera que hacerun despliegue estratgico con las tres carabelas? El Diario nos dice que desdSanta Mara de la Concepcinvio al oeste la islaFernandina.Cmo desdeesta isla para verCrookedtuvieron que navegar tres horas? Hay que reconocer que la nica isla que rene las condiciones del Diario como islaSantaMara de la Concepcines Cayo Rum,lo que nos confirma comoSan Salvador-Guanahan la actual islaWatling.

    (1) Ene manuscrito estn las letras cruzadas y se puede leerIsabela,y as debe ser porqueen otro lugar afirma que el nombre lo puso en homenaje a a Reina Isabel.

    22 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    23/94

    LA ISLADELDESCUBRIMIENTO: SAN SALVADOR, GUANAHAN O SAMANA

    Carta conocidacon el nombre de Egerton, Ms. 2.803 del British Museum de Londres, en laque aparecenZainena, GuanaanyGuanina, Zainenase puede identificar sin duda conSamanpor el mismo nombre y por su situacin relativa respecto aGuanaanyGuanina.Guanaan esla Guanahande la carta de Juan de la Cosa yGuaninaes la isla delGatoactual.

    En esta carta aparece por primera vez esta isla. Juan de la Cosa no la vio, por lo que no larepresent. Una vez ms vemos cartogrficamente queSamanes una isla distinta deGuanahany esta es a la que Coln denominSan Salvador,por tanto, la isla del Descubrimiento.

    La carta de Juan de la Cosa nos demuestra grficamente queSamannoes Guanahan (-San Salvador.Los puntos anteriormente expuestos: dimensiones, aguas, navegacin entre islas, etc., nos llevan a la misma conclusin.

    Existe otra carta (2), interesantsima por su fecha, ca. 1510, en la que aparecen las dos islas:Sa,nancon el topnimoZamenay a su noroesteGuanahan y el resto de las Lucayas; lo que nos confirma que siGuanahanes laisla que Coln denominSan Salvador, Saman, Zamenao Maniguanopuede ser la isla del Descubrimiento. La misma conclusin a la que nos llev

    la carta de Juan de la Cosa.(2) Carta general de Amrica, conocida por el nombie de Egerton, Ms. 2.803, British

    Museum, Londres, reproducida enmago Mundi,tomo XI.

    EGERTONc.1510.

    Ao 1987 23

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    24/94

    R. BARRE1RO-A EIRO

    s.CAT

    WATUNG 24

    k Is.SAMANA230

    MAYUANA 22CAlCOS

    ls.TtJRC0Ss.PAELO1

    jIS.SILVER 2t200

    190

    fUERTORICOEn 1967el Consejo Superior de Investigaciones Cientficas nos public un

    pequeo trabajo tituladoGuanahan de Ponce de Lean.Cremos y seguimoscreyendo que la relacin del viaje de Juan Ponce a la Florida en1513,dadapor Herrera (3), nos demostraba, sin proponrselo, porque su mta era llegaa Bemin, la fuente milagrosa de la juventud cul era la verdaderaGuanahan-San Salvadorde Coln. Herrera escribe:Sali de la isla(Puerto Rico)jueves en la tarde a tres de marzo, partiendo del puerto de San German. Fueal Aguada, para tomar allsu derrota. La noche siguiente sali a la mar, alNorueste, quarta del Norte, y anduvieron los navos ocho leguas de singladurahasta que sali el sol.

    Fueron navegando, hasta el martes a ocho de dicho, llegaron a surgir a losBaxos de Babueca a una isla que dicen el Viejo, que est en veinte y dosgrados y medio. Otro da surgieron en una isleta de los Lucayos dicha Cay-cas. Luego surgieron en otra dicha Yaguna en veinticuatro grados. A lasonce del mismo llegaron a otra isla, dicha Amaguayo y all estuvieron alreparo; pasaron a la dicha Manegua que est en veinticuatro grados y medio.A los catorce llegaron a Guanahan, que est en veinte y cinco grados y cua

    3) Antonio de Herrera:Historia General.Dec. la, lib. IX,cap. X.

    24 Nm. 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    25/94

    LA ISLA DEL DESCUBRIMIENTO. SAN SALVADOR, GUANAHANI O SAMANA?

    renta minutos, donde aderezaron un navo para atravesar el Golfo de Barlovento de las islas de los Lucayos. Esta isla Guanahan fue laprimera que descubri elAlmirante don Cristbal Coln y adonde en el primer viaje sali a tierra

    y la llam San Salvador.Para poder identificar la isla que cita Juan Ponce vamos a trazar su derrotasobre una carta moderna. Para ello tendremos en cuenta la diferencia degrado y medio que hay entre las latitudes verdaderas y las de Ponce: surgi enlos Bajos de Babuecaen 22 30, cuando su latitud verdadera es de 21. ParaManegua nos da2430y aGuanahanla sita en 25040. Restando el gradoy medio obtenemosManeguaen 23, que es la latitud deSamany Guanahanen 24, que es su verdadera latitud a la que llamSan Salvador.

    Al sudueste, casi al oeste deGuanahan, aparece una isla pequea, sinnombre, igual que en la carta de Juan de la Cosa que tiene que serCayo Rum,la Santa Mara de la Concepcinde Coln. Al oeste de ella aparece una islagrande con el nombre deYumai,lo mismo que en la carta de Juan de la Cosay al suroeste deYumai-FernandinaapareceSaometoo Isabela.

    La carta de Tormo (4) est considerada como el primer Padrn Real quelleg a nuestros das y se le da la fecha de 1522-1523, se atribuye a Nuo Garca de Toreno. En ella figuraManiguao Maneguaque tiene que serSaman,porque al noreste de ella apareceGuanahany al noroeste de ellaGuanina.Esta distribucin de las Lucayas parece sacada de la carta de Juan de la Cosa,como no era menos que as ocurriese siendo un Padrn Real. Juan de la Cosa

    era primer piloto antes de la fundacin de la Casa de la Contratacin.Segn este planisferio, como ya antes haba demostrado Juan de la Cosaen su carta, la islaGuanahanno puede ser ni laTurcani losCaycosni Maryguna niSaman.Las teoras de Giss, P. Verhoog, Vernhagen, Fox, etc., quedan eliminadas.Guanahan tiene que ser una isla situada al noroeste deSaman4, Manegua, Maniguao Zamenay a poco ms de un grado de latitud:

    Esta era nuestra conclusin en el trabajoGuanahan de Ponce de Lende1967.

    Para seguir con el trabajo de los seores Luis Marden y Joseph Judge diremos que no hemos tratado el viaje desde laIsabela-Saometohasta Cuba yotras pequeas dudas que presenta el Diario, porque creemos que no modifican las conclusiones expuestas y no haramos ms que extendernos a base derepeticiones.

    (4) Este planisferio se conoce por este nombre, porque se encuentra en la Biblioteca Realde Turn.

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    26/94

    R. BARREIRO-MERO

    CARTADE TORINO,1523.

    Presentamos la carta de las Antillas del primer Padrn Real que lleg a nuestros das. Aparecen las islasManigua, Guanahan, Yuma y Sometocasi igual que la carta de Juan de la Cosa;por su disposicin relativaManiguatiene que serSaman, isla distinta deGuanahan.

    26 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    27/94

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    28/94

    P. MASSON

    une arme deffectifs imposante elle nglige ses forces maritimes, au mprisdes enseignements du conflit. Le parlement, lopinion semblent fort bienadmettre pour la France un rle de second plan.

    La marine franaiseen 1919.

    Bien des raisons expliquent ce repli, qui nest pas sans rappeler celui de1871, malgr une conjoncture fort diffrente.

    Tout danger de conflit extrieur a disparu. Toutes les grandes puissancesmaritimes, Grande-Bretagne, Etats-Unis, Japon, Italie, se retrouvent dans lecamp des vainqueurs et, en principe, rien ne doit les opposer dans un avenirprvisible. LItalie, dont les ambitions pourraient heurter les intrts franaisen Mditerrane, se dbat, pour le moment, dans les pires difficuits financires et conomiques et apparait hors dtat dentreprendre un effort man-time srieux. Quant la marine allemande, rduite 108.000tonnes de btiments arms et 36.000 tonnes de navires de rserve, elle ne constitue plus unemenace.

    En France, les milieux politiques, lopinion ont, de notables exceptionsprs, mal compris le rle de la mer dans le conflit et, sans ngliger lagestedesmarins terre ou bord de leurs btiments, restent convaincus que lissue de

    la guerre na pu se jouer que sur les champs de bataille du Nord-Est. Lesproccupations restent dordre continental et on shypnotise sur les garanties imposer lAilemagne. Par ailleurs, les difficults financires, dettes deguerre, reconstruction, paraissent inconciliables ayee une politique de redressement maritime.

    Enfin, la plus grande incertitude semble rgner sur lavenir des flottes decombat. La passivit dont les escadres ont fait preuve, pendant quatre ans,aboutit une condamnation. Lavion, le sous-marin paraissent sonner le glasdes cuirasses et, en rgle gnrale, de tous les grands btiments. On ne saisitpas bien le rle dunefleet in beeinget on sattache surtout aux exploits descroiseurs aliemands, voire mme desU-Boote.La condamnation du navire deligne bnficie dailleurs de lappui de voix autorises. Dans un ouvrageretentissant, publi en 1922, le commandant Castek prconise un croiseur de10 15.000 tonnes, rapide, puissamment arm, dot de moteurs diesel pourbnficier dun large rayon daction. Ce btiment annonce lescuirasss depoche aliemands. Quant lAmiral Guepratte, ji met son immense prestigeen jeu devant le Parlemnt pour rclamer la construction dune flotte decroiseurs submersibles.

    Les tentatives de dsarmement psent encore sur lavenir maritime de laFrance. A Washington, la Grande-Bretagne, qui vient de rompre son allianceavec le Japon et qui renQn toute rivalit ayee la puissance navale amricaine, tente dimposer aux marines secondaires une limitation draconinne deleur tonnage en navires de ligne et en btiments lgers. Le 15 dcembre 1922,la France se voit ainsi attribuer la parit avec lItalie, en ce qui concerne les

    28 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    29/94

    LE REDRESSEMENT DE LA MARINE FRANAJSE PENDANT...

    cuirasss et les porte-avions. Ce nest que dextrme justesse quelle russitconserversa libert en matire de navires lgers et de sous-marins.

    Enfin, la marine franaise sort profondment traumatise de la guerre et

    traverse une crise morale srieuse. Pourtant, en 1914, lenthousiasme desmarins ne le cdait en rien lardeur des soldats de larme de terre. Etatsmajors et quipages brlaient den dcoudre et attendaient avec impatiencelexplication dcisive. Malheureusement, la bataille tant attendue najamaiseu lieu, en raison de la passivit autrichienne et de lentre en guerre de lItahe. Les grands btiments se sont done morfondus dans linaction, cloitrsdans des rades inconfortables, derrire des estacades ou des filets dacier.Cette inaction devait provoquer amertume, dcouragement et constituer unedes causes de la crise dindiscipline du printemps de 1919,et contribuer uneimportante vague de dmissions.

    Toutes ces incertitudes provoquent un amenuisement rapide des forcesnavales franaises.Le jour de lArmistice, la flotte comprenait encore 652.000 tonnes en ser

    vice et 129.000 tonnes en construction, en thorie du moins, les arsenauxayant depuis le dbut de la guerre consacr toute leur activit au profit delArme. Deux ans plus tard, les condamnations et larrt de la plupart desconstructions rduisent respectivement ces chiffres 486.000 et 25.000 tonnes. Une note de lEtat-Major Gnral constate alors que les btiments,ayant une relle valeur militaire, se rduisent 7 cuirasss, 3 croiseurs lgers,

    un contre-torpilleur, 20 torpilleurs et 25 sous-marins. Quant la loi navale de1912, elle est purement et simplement abandonri. 11nest pas sans intrt derappeler que cette vritableChartede la marine prvoyait: 28 cuirasss, 20croiseurs, 52 torpihleurs de haute mer et 94 sous-marins.

    Un calcul bien simple permet alors de constater, quen labsence de toutrenouvellement, la flotte aura compltement disparu en 1934. De 1914 1922, la France na, en effet construit que 28.000 tonnes de petits btiments,alors que lItalie en lanait 70.000, le Japon 465.000, dont 8 navires de higneet 12 croiseurs, les Etats-Unis 873.000 dont 13 cuirasss et 7 croiseurs et laGrande-Bretagne 1.174.000 tonnes, dont 11 navires de ligne, 6 porte-avionset 53 croiseurs.Cependant, la priode derecueillementva prendre fin vers 1922. Lesmihieux politiques, lopinion, sinquitent des diffrences franco-itahiens dansles Balkans, dautant plus que lItalie entreprend la construction de btimentslgers qui risquent de constituer un danger pour nos communications enMditerrane. La confrence de Washington contribue galement ce rveil.La parit ayee lItahie est considre comme une humiliation. Laccord de1922 ne tient aucun compte des responsabilits franaises dans lAtlantique etde ltendue dun empire colonial infiniment plus vaste que celui de lItalie.

    Daihleurs, larme apporte un renfort inattendu la thse dun redressementmaritime. Dans lhypothse dun conflit, elle considere comme indispensablela participation des troupes dAfrique du Nord la dfense de la mtropole,ce qui suppose la maitrise de la Mditerrane occidentale. Enfin, la cause de

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    30/94

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    31/94

    LE REDRESSEMENTDE LA MARINE FRANAISE PENDANT..

    A une poque, ou le programme de rnovation est encore peine bauch, la dernire hypothse nest gure mentionne que pour mmoire. Ltatmajor estimant queles dfenses quentrainerait la ralisation mat rielle int

    grale du programme ncessitpar le3e cas nepeuvent pas supporter lexamen.Mais, quelques anns plus tard, ayee la mise en route du programme, latroisime hypothse est beaucoup plus srieusement envisage. Dans une lettre secrte adresse en 1929 au Gnral Serigny, Secrtaire Gnral du Conseil de Dfense Nationale, Georges Leygues crit:La marine, daccord avecla guerre, est dans lobligation de prvoir lapossibilit dun conflit avec lItalieassocie lAllemagne, en tenant compte, dans une certaine mesure, de lincertitude ot nous sommes de lattitude quadopterait lEspagne.Quant t lventualit dun conflit avec les trois grandes puissances maritimes, Etats-Unis,Grande Bretagne, Japon, on yerra quelle ntait pas compltement carte,en 1922 du moins.

    Compte tenu de ces considrations, le Ministre de la Marine Georges Leygues dpose ds le 13 janvier 1920leprojet de Loi 171qui propose la mise enchantier de 6 croiseurs lgers de 5.200 T. arms de 8 canons de 140 et de 12contre torpilleurs de 1.800 2.000 tonnes. Mais, ce programme est presqueaussitt remani et renforc par le nouveau chef dtat-major de la Marine, leVice-Amiral Salaun. Le tonnage des croiseurs devra atteindre au moins 8.000tonnes et leur armement comprendre 8 pices de 155 mm. Ces btiments doivent pouvoir rpliquer aux nouveaux croiseurs de 6.000 tonnes que lAlle

    magne sera bientt autorise construire, en remplacement de ses naviresanciens. Quant aux contre-torpilleurs, ils devront dplacer au moins 2.000tonnes de manire surclasser les btiments italieris de la mme atgorie. Lechef dtat-major estime encore indispensable de disposer dune douzaine detorpilleurs de 1.550 tonnes pour assurer la protection du corps de bataille.Enfin, sil se rsigne arrter la construction des 5 cuirasss de la classeNormandie, il demande quun de ces btiments soit transform en porte-avions.Douze sous-marins seront encore mis en chantier, ports 36 par la Commission de la Chambre.

    II ne sagit, en fait, que dun programme dattente, detransitiondestinremettre en tat de marche les arsenaux qui ont pratiquement cess touteconstruction neuve depuis huit ans et pallier les insuffisances les plus criantes de la marine franaise. Avec sept cuirass relativement rcents, ltatmajor se juge en mesure de faire face aux ciqdreadnoughtsitaliens ou auxvieux cuirasss allemands. Mais, it est indispensable de contrer les futursraiders allemands et de rtablir lquilibre en Mditerrane o lItalie va bienttopposer 10 contre-torpilleurs modernes un seul franais.

    Cependant, compte tenu de la dsorganisation des chantiers et des contraintes financires, le programme de 1921 est divis en deux tranches. La

    premire est vote le l9juin 1921par la Chambre. Elle comporte 3 croiseurs,6 contre-torpilleurs, 12 sous-marins et la transformation duBearnen porteavions. Mais, il faut attendre le 18 avril 1922 pour obtenir le vote dfinitifduSnat. En ralit, le retard est surtout imputable au gouvernement, au prise

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    32/94

    P. MASSON

    avec de difficiles problmes financiers. Quant la seconde tranche, elle estprvue pour 1924.

    Cest au cours de cette difficile gestation que ltat-major gnral achvela mise au point dunStatut Navalqui doit assurer la France la flotte indispensable dans levntualit dun conflit avec lAllemagne ou lItalie.

    Au cours du premier semestre 1923, quatre projets de loi sont dposs surle bureau de la Chambre par le Ministre de la Marine Raiberti.

    un projet sur la constitution, larmement et les stocks de guerre de laflotte franaise de haute mer (8 mars 1923),

    un projet sur lorganisation de la Dfense des frontires maritimes (27mars 1923),

    un projet concernant la constitution dapprovisionnements en combustibles liquides (22 mai 1923), un projet sur lorganisation de lAronautique maritime (25 mai 1923).

    Ces projets, nayant pu tre rapports en temps utile, ne sont pas vots. LeGouvernement en profite alors pour les remplacer par quatre autres la finde 1923et au dbut de lanne suivante, qui napportent que des retouches dedtail.

    Contrairement ce qui stait pass avec la Loi Navale du 30 mars 1912,le projet de Status naval de 1924ne prcise pas le nombre dunits jug ncessaire dans chaque catgorie, mais fixe seulement le tonnage global de chacunedes grandes catgories. Cest ainsi que daprs larticle1er du premier projetde loi, la flotte doit comporter:

    177.800 tonnes de navires de ligne.60.960 tonnes de porte-avions.

    360.000 tonnes de btiments lgers,65.000 tonnes de sous-marins.

    La flotte doit comporter, en outre, un certain nombre de btiments spciaux: un navire-atelier, 2 mouilleurs de mines, deux ravitailleurs de sousmarins, deux transports dhydravions, deux mouilleurs de filets...

    11 convient daileurs dajouter, quaprs les dpts des nouveaux projets deloi, le Gouvernement acceptera, sur les observations des commissions, deporter le tonnage des btiments lgers 390.000 tonnes et celui des sousmarins 96.000 tonnes. Ainsi, on arrive un total de 724.600 tonnes, au lieude 880.000 tonnes, si la loi de mars 1912 navait pas t suspendue de 19141922.

    En outre, larticle 3 du projet de statut fixe la dure maximum dexistencedes diverses catgories de btiments: 20 ans pour les navires de ligne et porteavions, 17 ans pour les croiseurs, 15 ans pour les torpilleurs, 12 ans pour lessous-marins. Enfin, larticle 10 prcise que la constitution de la flotte dehaute-mer doit tre ralise par tranches successives, chacune faisant lobjetdun projet de loi spcial.

    32 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    33/94

    LE REDRESSEMENT DE LA MARINE FRANAISE PENDANT..

    Le Statut se prsente donc comme un ensemble complet, impratif,devant assurer lavenir de la Marine pour 20 ans. En ce qui concerne les catgories de btiments, lEtat-Major ne peut que sen tenir, pour les navires deligne et les porte-avions, aux accords de Washington...

    Contingence limite dailleurs, puisque les tudes menes rue Royalemontrent que le cuirass nest plus au premier rang des proccupations et quele porte-avions ne peut tre encore quun btiment exprimental. En outre,la Marine renonce la sduction dune flotte compose uniquement de sousmarins, comme certains et non des moindres, le lui conseillaient.

    A cet gard, une note de ltat-major adresse au Ministre constitue unenette mise en garde contrecertaines illusions.Danger de recourir la guerresous-marine outrance.Toute question dhumanit et dhonneur mise part(...) lemploi de procds aussi barbares dchatnerait invitablement con tre laFrance de nouveaux ennemis.Les sous-marins risqueraient dtre bloqusdans les ports par des mines, des filets, de ne pouvoir attaquer les convois,devant Iampleur des moyens descorte. Enfin, le sous-marin est inapte ladfense des convois. Les btiments de surface restent indispensables pour laprotection des communications avec lAfrique du Nord. On peut, en somme,constater que dans la guerre au commerce, ltat-major croit davantage laction des croiseurs rapides qu celle des sous-marins.

    Cependant, cette note prsente surtout lintrt de montrer commentltat-major entend employer ses forces, en cas de conflit. On y trouve une destrs rares allusions lventualit dune guerre avec la Grande-Bretagne, lesEtats-Unis ou le Japon. Dans cette hypothse, cest le sous-marin qui joueraitle rle prpondrant.Notre flotte sous-marine, bien quelle doive tre prte toute ventualit, est surtout detrmine par la condition doprer prs de nosctes mtropolitaines et coloniales ou de constituer une menace srieuse contrele commerce ennemi, dans lventualit dun conflit avec une des trois grandespuissances navales.

    Mais, le gros de leffort de la future flotte concerne naturellement lAllemagne et lItalie, ou les deux la fois.Contre lAllemagne dont la flotte deavenir estfixe et qui, avec ses croiseurs, pourrait apporter le plus grand trouble dans nos communications et dans nos colonies maritimes, le plan doprations fixe le nombre dunits ncessairespour assurer le blocus de ses ctes ayeedes sous-marins soutenus par une escadre de ligne clairepar des croiseurs etdes torpilleurs, en mme temps quun nombre suffisantde croiseurspourpoursuivre les croiseurs aliemands dans les ocans, tche impossible avec des torpilleurs et des sous-marins.

    Notre politique navale en Mditerrane nous conduit avoir une escadre aumoins gale celle de lItalie et diminuer unpeu le nombre de croiseurs calculs dans le plan doprations prcdent, pour avoir un nombre plus grand decontre-torpilleurs particulirement efficaces en Mditerrane.

    Le but du Statut Naval est donc de donner la France une flotte galecelles de lAllemagne et de lItalie runies, avec une lgre marge de supriorit, que certaines tudes fixent 100.000 tonnes.

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    34/94

    P. MASSON

    Un accord tacite.Le Statut Navalde 1924ne devait pas avoir le destin de la loi de 1912. Ii ne

    fut pas vot par le Parlement et la Marine dut se contenter detranchesannuelles tojours alatoires etarrachesau Pariement, suivant lexpression consacre.

    On nc peut naturellement que sinterroger sur les raisons de cet chec quia oblig la Marine livrer, en principe, une bataille annuelle pour assurer sonexistence. Cependant, force est de constater que les quatre projets de loiessentiels du statut ont bien t rapports par les Commissions de la.Chambre, mais cest le gouvernement qui, contrairement une lgende tenace, najamais insist pour les faire venir en discussion. Dans ses souvenir, le Vice

    Amiral Salaun insiste fortement sur ce point.Le Gouvernement redoutait-il un veto des Chambres et nc tenait-il pasmettre son existence en jeu? 11est de fait que le Parlement reste attach auprincipe de lannalit budgtaire et il peut redouter les servitudes dun statunaval impratif, clautant plus quune charte de cette nature aurait pu fairecole et susciter les jalousies dautres dpartements. En ralit, on peut constater que les gouvernements de lpoque nourrissent autant et sinon plus decraintes de ce genre. Lallergie des Assembles lgard de la constructiondes navires de ligne constitue peut-tre un motif plus srieux. Sur tous lebancs, les adversaires de lacible torpille,desaristocrates, des mastodontes,des victimes impi.dssantesnc manquent pas. Leur inquitude apparait dautant plus forte que ds 1923, la Marine a la possibilit de remplacer le cuirassFrance disparu accidentellement en baie de Quiberon et que le trait de Washington nous donne le droit de mettre sur cale trois navires de ligne entre 192et 1931.

    Cependant, il faut bien constater quaprs 1924, les Chambres nontjamais fait de difficults pour voter les tranches annuelles et que le Parlemende lentredeux-guerres na pas brill sur le plan de lorthodoxie financire. Lprincipal responsable de la mise en cocon du Statut reste bien le gouvernement.Parmi les documents chapps au naufrage des archives, une lettre permepeut tre de donner une interprtation et dinvoquer la fois des motifs financiers et diplomatiques. Sadressant le 22 octobre 1922 son collgue de lMarine, le Ministre des Finances, de Lasteyrie, crivait au sujet du projet dStatut:

    Le cot actuel des ralisations serait denviron 7.400 millions, ,naisenescomptant la baisse des prix (sic), ou le fixe 6 rnilliards, soit une annuit de300 millions pendant vingt ans.

    Jai lhonneur de vousfaire connatre queje nepuis donner, enprincipe, unavis favorable ladoption de ce projet.It nc para it gure dsirable des engagerpour vingt ans dansun pro gramme

    de constructions navales un moment ouestparticulirement difficile defairedes prvisions, mme courte chance, sur les ncessitespolitiques, les progrs de la technique, les conditions conomiques et notamment sur les prix.

    34 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    35/94

    LE REDRESSEMENT DE LA MARINE FRANAISE PENDANT...

    Non seulement ladoption dun tel projet entranerait pendant 20 ans descharges budgtairesfort lourdes, mais suivant deprs le vote duprogramme debtiments lgers arrt par la loi du 18 avril 1922, ji serait de nature, en raison

    des interprtations quii recevrait ltranger, compromettre nos effortspourrsoudre la question des rparations et des dettes interallies dont ljntrt estcapital pour iavenir du pays.

    Le dernier argument ne manque pas de poids. En rclamant Washington350.000 tonnes de navires de ligne, la dlgation franaise avait provoqu unefcheuse impression, mme sil ne sagissait que dune question de principe.La presse anglo-saxonne avait aussitt pos la question de savoir comment laFrance entendait concilier le fardeau des dettes et celui darmements aussidispendieux.

    En tout cas, si lon veut la preuve de lintervention prpondrante desFinances et de la solidarit gouvernementale, ji suffit de constater que lesdeux propositions contenues dans la lettre de Lasteyrie ont finalement tretenues. Sen tenir dabord un programme rduit, limit dans le temps,celui qui apparait dajlleurs dans larticle 32 du projet de statut. Enfin, renoncer toutetrancheimportante en 1923, tant donn que la Marine na pu utiliser quune partie des crdjts accords par la loi du 18 avril 1922.

    Cependant, il serait faux de condure que le gouvernement a essay denterrer compltement le projet de Statut Naval. Jusquen 1934, le Statutajoule rle de guide deplan indicatif etdans lensemble, le gouvernement sest

    efforc den obtenir la ralisation dans le cadre de lannaljt budgtaire.Comme le souligne lAmiral Salaun, le gouvernement et le Parlement ontdonn unaccord taciteau statut et cest sur les projets de loi de 1924 que laMarine sest constamment appuyetant pour ltablissement de ses budgetsannuels que pour ceiui des tranches successives de constructions neuves.

    La ralisation du programme.

    Dailleurs, les grandes tapesde ce que lon continuera appeler leProgramme le montre nettement. Sur ce point, deux priodes sont considrer.

    Jusquen 1928, lexception de la tranche 1923 baptiseloi de dfense desctes et rduite 9 sous-marins de petite croisire, la Marine bnficie danne en anne de dotations rgulires. 31.000 tonnes en 1924, 48.600 en 1925,42.000 en 1926, 33.000 en 1927. A ce rythme, leStatutsexcute ponctuellement et mme, II faut bien le souligner, avec une certaine avance. La ralisation progressive et rgulire des 390.000 tonnes de btiment lgers et des96.000 tonnes de sous-marins exigeait la mise en chantier annuelle de 32.374

    tonnes exactement. Or, de 1922 1927, le tonnage moyen des tranches successives a t de 33.958, soit un excdent de 1.584 tonnes. Au cours de cettepriode, on ne peut que souligner, comme le fera lAmiral Salaun,laccordparfait qui a rgne entre la Marine et les milieux politiques.

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    36/94

    P. MASSON

    Cette progression rgulire assure ds lors le redressement cherch. Avec8 croiseurs, dont5 lourds, la Marine franaise se trouve en mesure de rpondre aux 7 croiseurs lgers aliemands de remplacement (classe Nrnberg) etaux nouveaux croiseurs lourds italiens de la classeTrento.Avec 18contre-torpilleurs, elle surclasse en nombre et en qualit, les btiments italiens du mmetype. Elle dispose ou sapprte disposer encore de 26 torpilleurs et de 50sous-marins. Enfin, la Marine sapprte galement armer un porte-avions etun transport daviation.

    Par comparaison la prcdente, la priode 1928-1954se place sous lesigne des hsitations et un retard notable se manifeste sur Iexcution du programme.

    Pour commencer, une tranche insignifiante en 1928, 2.258 tonnes, mais un

    rythme en apparence normal les annes suivantes: 35.800 en 1929, 42.600 en1930, 46.600 en 1931, 37.500 en 1932... Aucune tranche en 1933 et 31.800tonnes en 1934. Deux annes devacances navales,suivant lexpression desrapporteurs, suffisent dj expliquer un retard sensible, dans la ralisationdu programme des btiments lgers et des sous-marins. Retard aggravencore par le fait que les tranches 1931 et 1934renferment les deux navires deligne Dunkerqueet Strasbourg.A la fin de 1932, on pouvait constater que lalgre avance de 1927 se traduisait par un dficit de 17.000 tonnes concernantles navires lgers et atteignant prs de 50. 000 tonnes en 1934.

    Cest une fois de plus la politique du gouvernement et non lattitude duParlement qui permet dexpliquer ces coups de frein donns la ralisation duprogramme.

    Pour des raisons de politique intrieure, compression des dpenses, leGouvernement attend novembre 1928 pour dposer un projet de loi qui nepourra donc tre vot au cours de la lgislature et constituera intentionnellement la tranche 1929. Enfin, en 1933, ce sont les contrecoups de la crise conomique mondiale qui incitent le gouvernement taler les constructionsnavales.

    Toutefois, les hsitations de la Marine ne sont pas, non plus, trangresces retards ou plutt ont favoris, dans une certaine mesure, les freinagesapports par le gouvernement. A deux reprises, lEtat-major gnral sesttrouv devant un problme dlicat.

    En 1928,lAllemagne annonce la mise en chantier de son premier cuirassde remplacement leDeutschland.Le futur cuirass de pocheest beaucoupplus rapide que nos navires de ligne en service et par son artillerie dclasse noscroiseurs lourds de 10.000 tonnes. En fait, ds 1927,la Marine a estim ncessaire de rpliquer par un btiment de ligne qui aurait d figurer dans la loi de1926. Mais, la rue Royale va hsiter pendant trois ans sur les caractristiquesde ce navire et ces hsitations ont jou leur rle dans la disparition presquecomplte de la tranche 1928.

    II nest videmment pas question de lancer un 35.000 tonnes. Dans lecadre du tonnage accord Washington, la France ne disposerait que de5btiments, en remplacement de son corps de bataille. Les premires tudes

    36 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    37/94

    LE REDRESSEMENTDE LA MARINE FRANAISE PENDANT...

    sorientent donc sur uncroiseur de combatde 17.700 tonnes qui offriraitlavantage de permettre la mise en chantier de 10 de ces btiments partir de1927. Mais, finalement, on aboutit en 1931, un navire de27.500tonnes.

    Cote mal taille, diront certains. En fait, lEtat-Major a voulu un btiment double fin: capable de utter victorieusement contre leDeutschlandet ses successeurs, tout en tant suceptible dagir vigoureusement en Mditerrane.Par ailleurs, la veille de la confrence de Londres, la mise en chantier duncroiseur de bataille de ce dp acement pouvait encourager la Grande-Bretagne substituer le tonnage de 25.000 tonnes celui de 35.000.

    Au mme moment, se pose la question de la refonte du programme desbtiments lgers. Depuis 1927, lItalie entreprend la construction de croiseursde 5.000 tonnes du typeCondottieriqui posent, un degr infrieur, lesmmes problmes que le nouveau navire de ligne aliemand. Par leur vitesse,ces btiments dclassent nos croiseurs de 8.000 ou de 10.000t. etleur armement savre trs suprieur celui de nos contre-torpilleurs de 2.400 tonnes.Aprs de longues hsitations, la Marine se dcidera, partir de 1931, suspendre ou du moins ralentir considrablement la construction de contre-torpilleurs et concentrer ses efforts sur des croiseurs de 2me classe de 7.500tonnes. Dans la mesure o les sources permettent de le constater, ces hsitations ont favoris la politique de freinage du gouvernement.

    En dpit de ces atermoiements dus la conjonction politique et aux difficults inhrentes toute politique navale, les rsultats nenrestent pas moins

    satisfaisants. De 1922 1934, les mises en chantiers dpassent les 33.700 tonnes par an. Ce rythme peut tre considr comme honorable, mme si la ralisation intgrale duprogranme aurait d conduire des tranches de 40 000tonnes. Sur le plan des constructions, la France se place alors au deuximerang dans le monde,juste derrire le Japon. Le Statut de 1924, avort sur planstrictement juridique, a eu finalement, un meilleur sort que la fameuse loi demars 1912, dont la dure dexistence avait peinedpass deux ans.

    Bilan et enseignements.Dans cet effort de rnovation, lEtat-Major Gnral a eu le mrite de pr

    senter des plans clairs, cohrents,ralisablessur le plan financier et industrie ,ce qui ntait pas toujours le cas de ceux davant-guerre. Ces programmes fonds sur des tudes so ides,ralistessaccompagnaient dune argumentationconvaincante gard des mi ieux po itiques. Par ai eurs, la prsentation duStatut lui-mme a constitu un lment de succs. En fixant le tonnage globalde chacune des grandes catgories, lEtat-Major disposait dune grande

    libert de manoeuvre. Cette souplesse apparait bien au cours des trois grandes tapes de la ralisation du programme. En 1922, leffort porte sur les croiseurs Idgers, les contre-torpi leurs, les torpil eurs et les sous-marins, sansoublier un porte-avions. De1924 1929 accentestmis sur les croiseurs

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    38/94

    P. MASSON

    lourds et les contre-torpilleurs. La Marine cherche alors se prmunir essentieliement contre lItalie,t un moment o le problme de IAllemagne paraitprovisoirement rgl. A partir de 1930, la priorit est accorde la reconstitution dun corp de bataille, la construction de croiseurs lgers et de torpiIle urs.

    Quant au Pariement,una pas constitu le monument dincomprhensionet de mauvaise volont que lon a tendance reprsenterquelquefois. Certes,il na manifest aucun empressement?t voter les crdits duDunkerque. Levote a t obtenu par surprise, au cours dune sance de nuit. A vrai dire,indpendamment dune question de principe, la Chambre estimait quun tonnage de 27.000 tait prohibitif pour sopposer un btiment rput de 10.000tonnes. Tout en souhaitant tre libr dun statut naval, cest--dire dun carcan lgislatif, considr comme une atteinte ses droits, le Pariement a toujours vot, sans difficult, les bis programmes qui lui ont t prsents de1922 1934. Les Chambres ont mme donn au Dpartement de bons conseils, sinquitant ainsi, non sans raison, delenttement de la Marine construire des contre-torpilleurs de 2.500 3.000 tonnes, alors que IItalie se lanait dans des croiseurs rapides de 5 000 tonnes.

    En 1929, le rapporteur du budget stonnait que nous soyions les seulsconstruire cesb2timents hybrides... que ne saurait justifier lunique privilgedes record de vitessefragiles et phmres, qualit insuffisante au point de vue

    de lutilisation militaire.Enfin de compte, cest le gouvernement ou plutt les gouvernements quont jou le rle dterminant dans la ralisation du programme. lis se sontefforcs de suivre le plan de marche propos par leStatut, tout en tenantcompte des exigences de la politique gnrale. Problme des dettes intrallies dans limmdiat aprs-guerre et dont on a tendance ngliger limportance. Questions financires, toujours lancinantes et aussi linterminable problme du dsarmement marqu par le protocole de Genve, la commissionprparatoire du dsarmement, la confrence tripartite de Genve de 1927, l

    compromis naval franco-britannique de 1928, le pacte Briand-Kellog, la confrence de Londres de 1930, le projet daccord naval franco-italien de 1931la confrence gnrale du dsarmement...

    On a eu dailleurs tendance exagrer les servitudes que les traits deWashington (1922) et de Londres (1930) ont impos la Marine franaiseCertes, Washington, la France avait subi une blessure damour propre, maielle avait conserv sa libert daction en ce qui concerne les btiments lgeret le trait offrait lavantage de bloquer la croissance des grandes marines. Lseule contrainte concernait donc les navires de ligne et les porte-avions, btments que ni lEtat-Major, ni les milieux politiques ne considraient alorcomme prioritaires. Maigr tout, Washington nous laissait la possibilit dremplacer trois cuirasss en 1927, 1929, 1931. A Londres, nous avions prilengagement de ne construire aucun navire de ligne entre 1931et 1936. Maiavec la perte de laFrance, la Marine gardait la possibilit de construire encoretrois cuirasss.

    38 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    39/94

    LE REDRESSEMENTDE LA MARINE FRANAISE PENDANT...

    On a pu soutenir que la France stait sentie moralement tenue de respecter les limites que les trois grandes marines staient imposes en ce qui con-cerne les caractristiques des navires lgers. Cest pourquoi elle auraitrenonc au croiseur lourd, et ralenti la construction de contre-torpilleurs deplus de 1.800 tonnes. En ralit, ce sont des exigences essentiellement stratgiques qui ont amen 1Etat-Major, comme on la vu, sorienter vers les croiseurs de 2me classe et les torpilleurs.

    Que lespritdes traits ait influ sur la politique navale franaise, cest probable, mais, le gouvernement a t amen tenir compte bien davantage delatmosphre gnrale, ne de confrence de dsarmement rptition,mame si lesprit du Covenant de Genve a abouti un checretentissant.Cette proccupation a pu jouer un rle dans les interruptions du programmeconstates en 1928 et 1933.

    La ralisation du Statut a finalement repos sur un triple accord de volont, mettant en jeu lEtat-Major Gnral, le Parlement et le Gouvernement.En 1928, le rapporteur du budget devait souligner cette troite cooprationmaintenue maigr une instabilit ministrielle chronique. Dix-huit personnalits diffrentes ayant, en effet, occup les fonctions de Ministres de la Marine: Ces projets devaient constituer le Statut Naval de la France. lis ne purenttre vots(...). Mais sils nontpas obtenu, dans leur ensemble, la sanction duPariement, jis sexcutent par le vote de crdits annuels ou de tranches annuellesavec une rgularit qui tmoigne dun rel esprit de suite.

    Alors que les bis peine votes sont remplaces par dautres qui, leurtour, sont emportes par lefbot des vnements, les projets de 1923, qui nontpas reu de sanction lgislative, demeurent comme la charte de la Marine. Personne n enconteste les principes. Les programmes qu jisont tablis sexcutentpar tranches annuelies et depuis 1923, ils ont rencontr, sous cetteforme, ladhsion continue etpresque unanime du Pariement.

    Si leffort du pays pour refaire la Marine sest droul avec une rgularitetune mthode qui ont dpass les espoirs les plus optimistes, cest quil a t,depuis lepremier jour, clair, dirig etsoutenu par une doctrine qui sestimpose lopinion publique, au Gouvernement et au Parlement.

    II convient de le rappeler, pour rendre lajustice qui leur est due, tous ceuxqui ont travaill ltablir, comme ibest juste de rendre hommage aux Ministresuccessifs qui lont applique, avec un esprit de suite remarquable, durant lecourse de trois lgislatures(...).

    Satisfecit en grande partiejustifi, qui donne du systme parlementaire delEntre Deux Guerres une image un peu diffrente du clich habituel. Apprciation qui offre encore lavantage de souligner limportance dterminante dela rigueur de la doctrine et de la conception.

    De cet effort coordonn est donc ne la flotte en service en 1939. Certes,il navait pas t possible dobtenir une nette supriorit sur les marines italienne et allemande runies. Le rapport des forces restait alatoire, comme lemontre le tableau ci-aprs, indiquant les navires en service ou en chantier.

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    40/94

    P. MASSON

    Navires de ligne

    France Italie Allemagne Total

    (29

    rcents)4 3 7

    Croiseurs de 10.000t 7 7 7Croiseurs lgers 11 10 5 15Contre-torpilleurs 32 15 15

    Torpilleurs 39 33 12 45Sous-marins 80 50 50

    Le Marine de 1939 nen constituait pas moins un remarquable instrumentde combat. Le rsultat obtenu doit dailleurs faire rflchir sur une des exigences fondamentales dune marine moderne: le facteur-temps. Qn ne peutrop souligner le fait que la Marine de 1939-1940a exig prs de 15 annedeffort pour sa formation et quelle a t cree dans un climat rsolumendfavorable ?t tout effort naval srieux, marqu par la dtente internationales, les illusions du dsarmement, les contraintes financires. On peut pres

    que tirer une loi de cette constatation: la marine dune guerrei venir se dveloppe dans la priode de dtente qui suit un grand conflit et non dans lpriode de tension qui en prcde un autre.

    Leffort naval des annes 1930-1939illustre cet aphorisme. Le vritableprogramme fond sur la renaissance dune flotte lgre, sachve en 1934. Apartir de cette date, la Marine connait une situation beaucoup plus favorableLa tension internationale, marque par la mise en chantier des 35.000 tonneitaliens, par le rarmement de lAllemagne, la cration de lAxe, met fin.toute restriction financire, au moment o lchec de la seconde confrencde Londres en 1936 a rendu leur libert aux puissance navales. A partir d1934, le montant moyen des tranches atteint 53.000 tonnes et, elle seule, ltranche 1938-38bis dpasse 157.000 tonnes. Toute une flotte nouvelle est econstruction, mais son achvement nest prvu que pour le l. janvier 1943

    40 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    41/94

    PEDRO ALBERNIY LOSPRIMEROSEXPERIMENTOSDE AGRICULTURA

    CIENTIFICAEN LA COSTAOROESTEDEL PACIFICO

    Donaid C. CUTIERUniversidad de St. Marys

    Texas (Estados Unidos)

    Entre las figuras que jugaron un importante papel en la ocupacin delextenso imperio colonial espaol, una resulta particularmente interesante:Pedro Alberni, capitn de la primera compaa de los Voluntarios de Catalua, que serva en la guarnicin del establecimiento espaol de San Lorenzo deNutka, en versin inglesa Nootka, el puesto espaol ms avanzado en el nortede la costa pacfica de Norteamrica, ocupado por los espaoles desde 1789hasta 1794. Este establecimieto se perdi debido a una cuestin diplomticacon Inglaterra, que se llam en la pocala Cuestin de Nutkay que presagipara Espaa no slo la prdida del dominio exclusivo del Pacfico, sino tambin la del imperio colonial.

    Durante la breve vida del establecimiento de San Lorenzo de Nutka, tambin llamado Santa Cruz, los espaoles colocaron una batera en la isla de SanMiguel y, bajo sus caones, un poblado bien abastecido, considerando la grandistancia que haba desde la base de apoyo espaol, San Blas, a 1.800 millas,en la costa mexicana de Nayarit (1). A este establecimiento, construido en elpueblo indio nutqueo de Yuquot y fundado para prevenir una posible ocupacin extranjera del territorio considerado como de dominio exclusivo porEspaa, fue asignado el capitn Pedro Alberni como comandante del destacamento militar, bajo las rdenes del teniente de navo Francisco Eliza (2).

    En Nutka, la guarnicin fronteriza de la futura colonizacin intent el primer experimento agrcola y cientfico en la costa noroeste de Amrica, dadoque los nativos estaban poco interesados en tales esfuerzos.

    (1) Michael Thurman:TheNaval Depariment of San Blas: New Spains BastionforAltaCalifornia and Nootka, 1767-1798.(Glendale, C. A., 1967). Es un estudio fundamental sobreel papel del Departamento de San Blas en la expansin espaola en la costa noroeste. Es tambin notable el trabajo de Enrique Crdenas de la Pea:San Blas de Nayarit(Mxico, D. F.1968, 2v.)

    (2) El comandante Francisco de Eliza y Rebenga era hijo de Rafael de Eliza y Andigal yde Catalina Rebenga y Bizera. Haba nacido en Puerto de Santa Mara y se alist como guardia-marina en diciembre de 1772, a la edad de 15 aos.Compaas de Guardiasmarinas, Cdizenel Museo Naval ms. 1.073.

    Ao 1987 41

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    42/94

    D. C. CUTTER

    Sin duda, estas actividades agrcolas de la pequea guarnicin espaolaestaban motivadas por la posibilidad de una ocupacin a gran escala del territorio. El protagonismo de estos esfuerzos corresponde a Alberni, mximaautoridad militar, aunque animado en todo momento por el comandante delestablecimiento, Eliza, que tena inters en el desarrollo agrcola de laregin. El comandante de Marina era un entusiasta de las ideas de Alberni,que en nada desmiente el carctergeneral desu provincia(3). Este astuto cataln, veterano de la guerra de Portugal y endurecido en las luchas con losindios bajo los soles ardientes de Sonora y en las regiones tropicales de laNueva Espaa, fue el que implant unos mtodos de horticultura e irrigacinque asombraron a los indios, complacieron a los espaoles, admiraron a losextranjeros y, finalmente, granjearon para Alberni el grado de teniente coro

    nel (4).La hoja de servicios de este oficial cataln no recoge ninguna vinculacinanterior con estas tareas. Era hijo de Jaime de Alberni y de Josefa Texedor,de origen noble (5); naci en 1747, en la zona agrcola de Tortosa. Segn lacostumbre militar de entonces, a la edad de quince aos era cadete de lasegunda compaa de Infantera Ligera de Catalua, donde sirvi casi cincoaos (6). En este mismo ao de 1762, dos compaas de Catalua fueronenviadas como refuerzos militares a la guerra contra los portugueses. Albernise alist para esta accin. En mayo de 1767 se uni a la primera compaa devoluntarios catalanes. Cada compaa contaba con 80 individuos, entre oficiales y soldados; el nombre de Pedro Alberni estuvo pronto en la lista de laprimera compaa como subteniente (7) y en esta misma unidad transcurrieron sus treinta y cinco aos de servicio hasta que le sobrevino la muerte enCalifornia.

    El nombramiento de Jos de Glvez como visitador de la Nueva Espaasupuso un reforzamiento de la frontera norte del virreinato, y a este fin fuerontrasladadas desde Espaa las compaas de voluntarios catalanes que sirvieron en Nayarit, Sonora, Sinaloa, la Baja y Alta California y Nutka.

    (3) Joseph Mariano Mozio Surez de Figueroa:Noticias de Nutkaeditado por AlbertoM. Cerreo (Mxico, D. F., 1913), pg. 63.

    En 1970Iris Wilson Engstrand prepar una cuidada edicin en ingls con abundante bibliografa: Noticias de Nutka: An account of Nootka Sound in 1792 by Jos Mariano Mozio publicado por la Universidad de Washington Press in Seattle.

    (4) La mayor parte de los datos personales de Alberni proceden delResumen de Servicios, manuscrito que uni a una carta que escribi a Miguel Joseph de Aranza, San Francisco,1 de agosto 1798 y que se encuentra en el Archivo General de Indias, Audiencia de Mxico,legajo 1.446.

    (5) Hubert H. Bancroft:History of California, (7v., SanFrancisco, 1884-1890),y. 2, pg.5.

    (6) Alberni:Resumen de servicios,cit.(7) Estado Militar de Espaa, enKalendario, Manual y Gua de Forasteros en Madrid(1792), pg. 38. Indica la fecha de formacin en 1762. Por.el contrario, el Conde de Revillagigedo, Virrey de Nueva Espaa, seala la fecha en 1767, que coincide con la entrada de Alberni eindudablemente con la salida de las compaas para Amrica. La segunda fecha se encuentraen la Coleccin Revillagigedo, ms. 37y. tomo XVII, doc. 1.095 bis.

    42 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    43/94

    PEDRO ALBERNIYLOS PRIMEROS EXPERIMENTOS..

    Un destacamento de la segunda compaa de voluntarios catalanes, bajoel mando de Pedro Fages, tuvo un elevado protagonismo en la expedicinterrestre para la ocupacin de la Alta California en 1769. Domingo Elizondo

    utiliz ambas compaas en su larga lucha contra los indios seris de Sonora;Alberni cuenta en su historialque hizo 26 salidas a campaa(8) en los treintay ocho meses que dur la lucha contra los indios. Durante este perodo particip tambin en cuatro ataques al reducto de los indios en Cerro Prieto, lo quesupuso el apaciguamiento de las tribus seris, pimas y ppagos (9). Por estasexperiencias guerreras no se podra calificar a Alberni como partidario de losindios ni como agricultor. En los siete aos siguientes sirvi, siendo ya capitn, como comandante de la provincia de Nayarit, cuya capital, Tepic, era elcentro logstico de la expansin espaola en la costa pacfica de Norteamrica(10).En este puesto lleg a ser popular entre los misioneros y los indios y dejla provincia en perfect orden; no tan perfectas fueron sus relaciones con elpresidente de la Audiencia de Guadalajara, que se quej de que Albernidejara la jurisdiccin sin despedirse de su superior inmediato.

    Su siguiente destino fue de comandante y gobernador militar del fuerte deNutka, cargo en el que sirvi durante treinta y cinco meses y donde fue ascendido a teniente coronel por sus servicios. En esta fecha, los catalanes habandisminuido notablemente en la composicin de las compaas de voluntarios,como indica el siguiente informe sobre la regin de origen de las compaasde catalanes:

    PRIMERA COMPAIA8 catalanes.5 de Castilla la Vieja.7 andaluces.2 valencianos.1 de Extremadura, Galicia, Piairionte y Navarra, respectivamente.

    42 de Nueva Espaa.Total: 72.

    SEGUNDA COMPAIA

    9 catalanes.13 andaluces.3 de Castilla, Valencia y Extremadura, respectivamente.2 gallegos.1 de Murcia y otro de Len.

    37 americanos.Total: 72 (11).

    8) Theodore H. Hittell:History of California4v., San Francisco,1885-1897),y. 1,pgina609.

    9) Alberni:Resumen de Servicios,cit. 10) Alberni:Resumen de Servicios,cit. 11) PedroAlberni:Compaa Franca de Voluntarios de Catalua, Puerto de San Lorenzo

    Ao 1987

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    44/94

    D. C. CLITTER

    Estado Militar de Espaa, 1790(Servicio Histrico Militar, 1-25).

    rJnt2znt77aL9 I/7WV J7

    44 Nm. 18

  • 8/13/2019 Revista de Historia Naval N18. Ao 1987

    45/94

    PEDRO ALBERNIYLOS PRIMEROS EXPERIMENTOS...

    A pesar de que el porcentaje de catalanes era del 12 por 100 y el de peninsulares del45 por 100, el uniforme tradicional se mantuvo. Consista encasaca ancha, calzn azul, chupa, buelta y collarn amarillo, con portesuelaazul, botn blanco(12). Este uniforme no slo era favorecedor, sino tambinrepresentativo de la poca (13).

    Una vez en Nutka, con un destacamento de 31 soldados, Alberni estableci una guardia de un cabo y4 soldados en la batera de San Miguel; el mismonmero de hombres se asign a la custodia del buque insignia y otro retnigual en el establecimiento de Yuquot (14). Las actividades de Alberni no selimitaron al mando de la tropa sino que dot a su establecimiento de edificios,almacenes y diversas construcciones alineadas en la Cala de los Amigos (actualmente Friendly Cove). Alberni no era partidario de mantener a sus hombres ociosos cuando servan en la frontera, as puesladiestr a su tropa en elcultivo de las ortalizas: l excav pozos yform acueductos. El cri alguna cantidad de aves y hubiera sido capaz de defender del hambre a toda la tripulacincon sus contnuos arbitrios (15).El oficial cataln lleg a ser tambin un excelente diplomtico, no a altos niveles, sino en la convivencia diaria. A los visitantes extranjeros se les haca la boca agua con sus productos de la huerta, susbien cuidadas aves de corral y sus frutos silvestres; la hostilidad ante la presencia espaola debi reducirse, ya quehan proporcionado alivio y regalo amuchsimos navegantes(16). Ms significativa fue su destreza en las relaciones con los indios de Nutka, habitantes de la regin cuyas tierras a la orilla delmar haban usurpado los espaoles a su llegada.Cuando Alberni lleg a la isla de Nutka, las relaciones con los nutkeosestaban muy deterioradas a causa de que Esteban Jos Martnez, el anteriorcomandante, era el responsable de la muerte por disparo de un jefe principalde la tribu; el nombre de este oficial de Marina era anatema para los indgenas. El jefe principal, Maquina, temeroso por este incidente, evita visitar el

    de Nuca, 23 de agosto de 1790,ms. Museo Naval, California Costa NO de Amrica (vol. 330),doc. 27.

    Alberni: Resumen de Servicios,cit.(12) El dibujo del uniforme de soldado del cuerpo de Voluntarios de Catalua est tomado

    del Estado Militar de Espa, que manifiesta la divisa de todos los Regimientos de Ynfanteria,Cavalleria y Ejrcito de 5. M. C. regulados por su orden de antiguedad, y ao de su creacin sobreel cultisimo reglamento de este ao de 1790,ms. del Museo