Revista de la Asociación de Jubilados y Pensionados de la Caja de Previsión Social para Abogados de la Provincia de Buenos Aires

Año XXIV - Nº 88 - Abril de 2016

REFLEJOS

Dr. Juan Carlos Curone

Dr. Luis Alberto Silveira

Dr. Raúl Piscicelli

Dr. Ricardo H. Cucchi Lagrava

Dr. Mario Carlos Maggi

Dr. Sebastián Victorino Arias

Dra. Teresa Beatríz Goñi

Dra. Edith Perla Vinocur

Dr. Henry Omar Cirelli

Dr. Juan Torraca

Presidente

Vicepresidente 1º

Vicepresidente 2º

Vicepresidente 3º

Secretario General

Prosecretario General

Secretaria de Actas

Prosecretaria de Actas

Tesorero

Protesorero

Vocales Titulares

Vocales Suplentes

Revisores de Cuentas Titulares

Revisores de Cuentas Suplentes

Tribunal de Honor Titulares

Consultores del Consejo

Asociación de Jubilados y Pensionados de la Caja de Previsión Social para Abogados de la Provincia de Buenos Aires

Consejo Directivo 2015 - 2017

SUBCOMISIONES

BAHÍA BLANCA

DOLORES

JUNÍN

LOMAS DE ZAMORA

MAR DEL PLATA

MERCEDES

MORÓN

PERGAMINO

SAN MARTÍN

REPRESENTANTECAPITAL

STEMPELS, Hugo

GANUZA, Rubén Juan

RICCIOTTI, Augusto

URIARTE, José Daniel

DE BENEDETTO, Dardo

GALLEGO ABAD, Antonio

GINI, Olga Beatriz

RICARDES, Máximo

TROGLIO, Rubén

MÁRQUEZ, Carlos

SANTILLI, Carlos Alberto

MALANO, Evaristo

VETRANO, Derlis

CORTESE, Humberto

ZAJAC, Ana María

VILLEGAS, Adrián

PERALTA, Beatriz

MOSCA, Carlos Miguel A.

VOLPI, Norma Lucía

GONZÁLEZ, Jorge Omar

VES LOSADA, Carlos

DELEGADOS DE LA ASOCIACIÓN

Dr. José María CrusetDr. Norberto Oscar VieraDr. Armando Jesús SierraltaDra. Eily Levry Grassano Dr. Eduardo Alberto Santos

Dr. Hugo José Stempels Dr. Hugo Néstor PeruginiDr. Daniel Alberto Dicasolo Dr. Francisco E. García ApaolazaDr. Jorge Luis Pomposiello

Dr. Julio Jaime EfrónDra. Angélica Carmen BracutoDr. René Mario Salles

Dr. Dardo Luis De Benedetto Dr. Guillermo Almagro

Tribunal de Honor Suplentes

Dr. Héctor Mario NúñezDr. Ricardo Emilio RodríguezDr. Oscar Alberto Lombardo

Dr. Horacio Juan CampodónicoDr. Raúl Osvaldo Tomatti

Dr. Enrique Bernardo AinchilDr. Rubén Héctor ChimentiDr. Carlos Ves Losada

Subcomisión de Deportes de la Tercera EdadCoordinador: Dr. Jorge Luis PomposielloSubcomisión de DiscapacidadCoordinador: Dr. Carlos Ves LosadaSubcomisión de Eventos SocialesCoordinadora: Dra. Angélica Carmen BracutoSubcomisión de LegislaciónCoordinadores: Dr. Luis Alberto Silveira, Dr. Juan Carlos Curone, Dr. Eduardo Santos, Dr. Enrique Ainchil, Dr. Rubén ChimentiSubcomisión de PublicacionesDr. Mario Carlos MaggiSubcomisión de TurismoCoordinadores: Dr. Luis Alberto Pacheco, Dr. Guillermo Almagro, Dr. Raúl TomattiSubcomisión de Vínculos Institucionales y DelegacionesCoordinador: Dr. Ricardo Horacio Cucchi Lagrava

REFLEJOSPROPIETARIO

Revista editada por la Asociación de Jubilados y Pensionados de la Caja de Previsión Social para

Abogados de la Provincia de Buenos Aires, Calle 13 Nº 831/33 6º piso B (1900) La Plata, teléfono

(0221) 422-8199 / 439-3- 939 internos 681, 682, 683, 684. Horario de atención: lunes a viernes de 9 a 14 horas

e-mail: abogadosjubilados@hotmail.comwww.abogadosjubilados.org.ar

STAFF

DIRECTORDr. Mario Carlos Maggi

SUBDIRECTORADra. Marta Raquel Pupilli

Revista de distribución gratuita entre Jubilados y Pensionados de la Caja de Previsión Social para Abogados de la Provincia de Buenos Aires.Esta Revista llega a los distintos poderes del Estado, Universidad, bibliotecas y otra entidades de bien público.

Dirección Nacional del Derecho de Autor, Expte. Nº 882627 – Form. Nº 20407Prohibida su reproducción.

La Asociación de Jubilados y Pensionados de la Caja de Previsión Social para Abogados de la Provincia de Buenos Aires aclara que todos los artículos y colaboraciones de cualquier índole, publicados en las páginas de esta Revista con la firma de sus respectivos autores, no reflejan necesariamente el pensamiento de la Asociación y el contenido de dichas publicaciones es exclusiva responsabilidad de sus autores.

DISEÑO:Carlos Luchetticsluchetti@hotmail.com

PREIMPRESIÓN e IMPRESIÓN:La Stampa Impresores SRLconsultas@lastampaimpresores.com.ar

SUMARIO

Nuestra Portada

Nuevos Socios

Editorial

ACTIVIDAD INSTITUCIONAL

Obituarios

Aumento de Haberes

Aumento Adicional por Edad

Concurso permanente Literario y Científico Júridico

Reunión de Camaradería

SECCIÓN CULTURAL

Artemisia Gentileschi

Las mujeres y el proceso de la Independencia

¿Una profesión segura?

Una conmovedora historia

Enrique VIII

¿Coincidencia o Realidad?

Giordano Bruno

A propósito del Cura Brochero

A treinta años de la muerte de Jorge Luis Borges

Dr. Alberto Alberti

La inventiva de los Colegas

Episodios vinculados con la Revolución de Mayo

Poemas

Turismo

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Aumento Asignación por Cónyuge

Mensajes de nuestros Afiliados 14

Como seguramente nuest ros lectores habrán adivinado, la imagen de tapa corresponde a la muy bella ciudad de Colonia del Sacramento, en la Banda Oriental del Río de La Plata.Elegimos una puesta de sol que preanuncia el otoño que se ave-cina, tomada desde la ribera de esa histórica ciudad.Esa evocación nos remite obliga-damente a aquella avanzada portuguesa, ubicada no por azar, en un lugar altamente estratégico del Río de la Plata, durante el período colonial.Colonia del Sacramento fue fun-dada en el mes de enero de 1680 por el entonces maestre de campo y embajador de Río de Janeiro don Manuel de Lobo. Era sin duda un enclave comercial de precipua importancia, situado nada menos que en los accesos a los ríos Pa-raná y Uruguay, de manera que España no podía permanecer indiferenteMucho tiempo antes, en 1494, españoles y portugueses habían firmado el famoso Tratado de Tordesillas, por el que se repar-tieron el mundo conocido. Ante las enormes dificultades para trazar las coordenadas que delimitaba el tratado, siguieron innumerables conflictos entre las dos naciones peninsulares. Los portugueses pretendían que el Río de Solís se constituyera en el límite sud de esa división.Prontamente, las tropas coman-dadas por el Gobernador y Ca-pitán General don José de Garro, se destacaron para rechazar la invasión lusitana. El asentamiento fue recuperado en el mismo año de 1680 para la corona española.

Manuel de Lobo fue apresado y enviado a Buenos Aires, donde murió muchos años después.Desde luego la situación entre las dos potencias en modo alguno quedó consolidada, de manera que Colonia pasó nuevamente a la esfera portuguesa, y tras nume-rosos avatares, en los que no es del caso abundar, quedó definitiva-mente en poder de España. Cuanto menos Colonia pasó de mano cuatro veces, para cada estado contendiente. En 1825, cuando los 33 Orientales iniciaron la liberación del ahora Uruguay, Colonia pasó a formar parte definitivamente de ese estado cisplatino.Pero no es nuestro propósito desarrollar, ni siquiera sumaria-mente, las alternativas de la his-toria que enmarcaron el destino de la pequeña urbe ribereña. Nuestro propósito no es otro que detenernos en esa magníf ica ciudad, atravesada prioritaria-mente por el genio urbanístico lusitano.

Nuestra PORTADA

Una somera recorrida por el barrio histórico pone de relieve los as-pectos arquitectónicos más rele-vantes. Existen construcciones asentadas en barro, con techos de tejas, en calles dispuestas en forma de damero con arreglo a los lineamientos seguidos por los portugueses. Las construcciones con ladrillo a la vista responden, por el contrario, a la herencia española.Pero, más allá de españoles y lusitanos, el barrio histórico en-cierra un encanto peculiar. Las calles empedradas, los frentes de las construcciones, afortunada-mente no vandalizadas como es de rigor en la otra banda del Rio de La Plata, ofrecen a quien las re-corre un paisaje mágico. En los atardeceres, los faroles encen-didos con luz mortecina, destacan los perfiles de los edificios y el hechizo del antiguo empedrado de las callejuelas.Colonia nos convoca incesante-mente, porque es también parte de la historia común con el pueblo oriental.Nos permite también, conectarnos con un mundo extin-guido que aún pervive en la vecina orilla, y que quizá perdure en algunas ciudades de nuestro interior argentino. El trato es cordial, la gente: amable. No existe la premura desasosegada que nos compele a la esclavitud de los horarios. En un ámbito recoleto el silencio se impone, y nos aleja del estrépito deletéreo y malsano de las grandes urbes. Colonia nos autoriza a regodearnos sin culpa, con el murmullo de las olas que mueren en la ribera, y con la sin-fonía del follaje atravesado por el viento.

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ÁLVAREZ ECHAGÜE, Raúl ÁngelBIOCCA, Alfredo PedroDI PEGO, María CristinaDÍAZ, Ana María EugeniaERMACORA, Claudia MarinaETCHEVERRY, Lucía RosaEYRAS, Juan Carlos FAZIO, Marta EncinaFRIGUGLIETTI, Oscar AlbertoGARASCIO, Juan José ManuelGARCÍA, Nydia BeatrizGLANCSZPIGEL, IsidoroGOITIA, Carlos AlbertoGOLBERG, Rosa ElisaGÓMEZ, Ulises Omar

JUSTO, LíaLOZANO, CelinaMAGGIORE, Nora EtelMARTINI, Oscar Alberto (h) O'HIGGINS, Silvia Marta PALLA, Carlos Oscar JuanPAZ MIRANDA, Victoria Eugenia del Carmen ROJO, Guillermo TadeoROSELLO, Aída NidiaSAFFORES, Carlos AlbertoSALOMONI, Nélida InésSCHIAPPACASSE, Miguel ÁngelSCHUR, RobertoVIVIANO HIDALGO, Enrique Andrés

Página WebInformación permanente a nuestros asociados

Nuestra Revista se edita cada cuatro meses y se distribuye por correo, por lo cual las noticias sobre actos culturales, conferencias, excursiones, informaciones útiles y de otras actividades que se publican en la misma, no llegan siempre a tiempo a nuestros asociados.Reiteramos que puede realizar las consultas en nuestra página Web www.abogadosjubilados.org.ar puesto que incorporamos, en forma continua y permanente, las noticias de las actividades de nuestra Asociación, incluso nuestra Revista REFLEJOS en el momento de remitirla a la imprenta.

Recordamos a nuestros asociados que deberán presentar el certificado de supervivencia durante los meses de mayo y noviembre.

Presentación del certificadoSUPERVIVENCIA

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Señores Asociados:

Consolidada una nueva etapa en la conducción y protagonismo de nuestra Asociación, queremos resignificar un concepto, que si bien siempre estuvo presente como norte en el ejercicio de las responsa-bilidades asumidas por quienes nos precedieron, ahora adquiere una enfática connotación. Nos refe-rimos a la austeridad.Somos conscientes que mantener en funciona-miento pleno e inclaudicable a la entidad que nos agrupa, requiere no solo del esfuerzo y la vocación de servicio de las autoridades electas. Es necesario, además, contar con los recursos suficientes para solventar el mantenimiento de nuestra sede, liquidar salarios, afrontar expensas, pagar impuestos y afrontar, en suma, las pesadas erogaciones que requiere la publicación de REFLEJOS.Tuvimos, hace poco tiempo atrás, la penuria de transitar por un período de estrechez económica, que gracias al esfuerzo mancomunado de nuestros socios, pudo ser revertido.Para ello fue necesario incrementar los montos de las cuotas sociales, luego de arduas discusiones e inter-cambio de ideas.No se nos escapa el nivel frustrante de los haberes previsionales, que liquida la Caja de Previsión Social a los colegas jubilados y pensionados, como tam-bién, que cualquier descuento, que se materialice sobre tales montos exiguos, claramente se proyecta en el nivel de vida.Por tales razones, proseguimos incansablemente enarbolando nuestra bandera de combate: “haberes dignos para jubilados y pensionados”,que sosten-dremos enhiesta en el frente de batalla. No obstante, como se dijo más arriba, hemos implantado en nuestra casa, algunas medidas de contención de gastos, que responden a pautas de “austeridad republicana”.No se trata de meros gestos, ni de declamaciones retóricas. En nuestra tarea cotidiana en la sede de la Asociación, procuramos que todas aquellas eroga-ciones imprescindibles para sobrellevar con relativo confort nuestra labor diaria, aunque pequeñas en su costo unitario, puedan ser afrontadas con el peculio particular de los miembros de la Comisión Directiva, sin desmedro del capital social.La circunstancia fortuita que nos puso transitoria-mente al frente de la Asociación de Jubilados y Pen-sionados de la Caja de Previsión Social para Aboga-dos, entraña mayores obligaciones, dedicación y esfuerzo. Ello, bueno es señalarlo, constituye un honor para quienes lo asumen. La retribución solo puede ser de carácter moral, y fundamentalmente se satisface solo a través del cumplimiento de las

mandas estatuarias.Llevar adelante ese objetivo, con tenacidad y perse-verancia, constituye la estrella polar que nos guía. Las luchas y los esfuerzos que ello demanda, consti-tuye nuestra generosa compensación.Hemos implementado la feliz idea de saludar episto-larmente, a todos y a cada uno de los integrantes de esta Asociación, con motivo de su cumpleaños. Realmente es gratificante recibir las innumerables esquelas de agradecimiento emanadas de sus desti-natarios.En los tiempos que corren, donde se relativizan los valores morales, se han perdido las reglas de convi-vencia y decoro.La consideración por el prójimo, ha sido aniquilada. Parece que las cosas materiales, y fundamentalmente su posesión y disfrute, han adquirido una preponderancia excluyente. La sen-cilla tarea que hemos implementado, de remitir un saludo afectuoso a nuestros consocios, se nutre y compensa con holgura al recibir respuestas car-gadas de sensibilidad, que nos transportan deleito-samente a un mundo donde la espiritualidad todavía no ha perecido. Los que transitamos esta etapa de la vida, quizá porque provenimos y hemos conocido una Argen-tina dotada de valores, acorde con la visión y los objetivos de nuestros “padres fundadores”, apre-ciamos aquellos procederes imbuidos de honorabili-dad. Tal vez los lejanos ideales que nos inspiraron, corran peligro de naufragio. Pero el salvataje debería implementarse con prontitud, porque de otro modo los perderemos irremediablemente. En otro orden, como lo hemos volcados en edito-riales anteriores, la Asociación participa y colabora de manera decisiva con el Ateneo de Formación Profesional para abogados que organiza el Colegio departamental. Se trata de otra tarea asumida, que tampoco tiene otra recompensa que la que dimana de la vocación de servicio y de la satisfacción del deber cumplido. Otra cuestión de señalada impor-tancia, lo constituye el beneplácito y el sincero agra-decimiento de los colegas que concurren diaria-mente a plantear sus inquietudes de orden profesio-nal; pero ello será en otra ocasión, motivo de comen-tario.Por otra parte, seguimos con las ediciones de REFLEJOS, de acuerdo con las modalidades conoci-das, con el propósito de divulgar a nuestros colegas jubilados y pensionados, las tareas institucionales que cumple nuestro Organismo. Procuramos tam-bién, abrir un ámbito de interés cultural –que anhe-lamos pueda ser compartido- que nos permita con-validar, una vez más, que los productos del espíritu humano, artísticos y científicos, son en definitiva los que perdurarán por sobre nuestra finitud.

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Fallecimiento del Dr. Ricardo Gustavo Creimer

El pasado 10 de diciembre de 2015 murió en la ciudad de La Plata, nuestro asociado doctor Ricardo Gus-tavo Creimer. Había participado el año anterior, en el último certamen literario organizado por la Aso-ciación de Jubilados y pensionados de la Caja de Previsión Social para Abogados, obteniendo un merecido galardón por los quilates de su producción literaria. El último número correspondiente a REFLEJOS n° 87 contó con el enorme privilegio de publicar un cuento de su autoría.Fue hijo de una gran poetisa platense, Matilde Alba Swan, fallecida el 13 de septiembre de 2000, quien sobresalió por su fina sensibilidad poética y las dis-tintas temáticas de innegable sentido social abor-dadas por su pluma. Ricardo heredó las dotes litera-rias de su madre, destacándose en el género narra-tivo, y quizá, por haber compartido la misma voca-ción que se progenitora, se convirtió en custodio privilegiado de la obra literaria de Matilde.Lo recordamos como un hombre sensible y afec-tuoso, capaz de transmitir sus sentimientos con austera dignidad. Sabemos que fue defensor de la escuela pública, y en particular del turno nocturno del Colegio Nacional de La Plata, donde cursó sus estudios secundarios. Fue un apasionado jugador de ajedrez, amante del tango y el lunfardo. Vivió ro-deado del afecto de su compañera, sus hijos y nietos, en los que encontró un cálido soporte, particular-mente cuando la enfermedad que lo aquejaba co-menzó a menguar sus fuerzas físicas.Lamentamos su pérdida irreparable, aunque nos queda el consuelade su obra, que perdurará a través del tiempo, y el recuerdo de su integridad y hombría de bien.

Obituarios

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AUMENTO ASIGNACIÓN POR CÓNYUGEFEBRERO DE 2016

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AUMENTO DE HABERESFEBRERO DE 2016

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AUMENTO ADICIONAL POR EDADFEBRERO DE 2016

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Institucional

CONCURSO PERMANENTE

LITERARIO Y CIENTÍFICO JURÍDICO

Durante el año en curso, el Consejo Directivo ha dis-puesto, en cumplimiento de la manda estatutaria, realizar el Concurso al que alude el epígrafe.De manera general, recordamos que las obras a pre-sentar deberán ser inéditas. De manera general, re-cordamos que podrán participar con obras no publi-cadas con anterioridad en los siguientes géneros: poesía, narrativa y ensayo jurídico.No puede marginarse del análisis que los recursos con que cuenta la Asociación de Jubilados y Pensio-nados de la Caja de Previsión para Abogados son li-

mitados y correlativamente, las erogaciones que deben afrontarse son muchas.Sin perjuicio de haber asumido que los ingresos deben ser administrados con austeridad republi-cana, el Consejo Directivo estima que esa circuns-tancia no debe perjudicar la convocatoria al Con-curso Permanente Literario y Científico Jurídico y que debe llevarse adelante. De manera entonces que, con arreglo a dichos pará-metros, publicamos el reglamento al que deberá ajus-tarse el Concurso.

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Institucional

El pasado 18 de diciembre de 2015, y tal como lo hemos hecho en anteriores oportunidades, nos reu-nimos en el restaurante “El Retiro” sito en la Av. 44 esq. 157 de La Plata, para despedir el año.Para nuestra satisfacción, contamos con la presencia de numerosos afiliados, como también con la grata visita de una buena parte de los delegados de la Aso-ciación de Jubilados y Pensionados del interior de la provincia, quienes participaron de la reunión.El evento transcurrió signado por la franca camara-dería, instaurada desde añejo en el seno de nuestra gran familia. Realmente destacamos las relaciones de cordialidad y afecto que imperan en el ámbito de la Asociación.

En ese marco, escuchamos atentamente las cálidas palabras del Presidente Doctor Juan Carlos Curone, quien destacó, una vez más, los aspectos solidarios que constituyen la verdadera razón de ser de la Aso-ciación de Jubilados y Pensionados de la Caja de Previsión Social para Abogados.Tras referirse a los valores que todos compartimos sin resquebrajaduras, propuso un sentido brindis para que la nuestra Institución pueda seguir ofre-ciendo un contexto de contención y apoyo a las nece-sidades de los afiliados. En su discurso el Dr. Curone hizo votos para que 2016, fuera en definitiva, un año propicio para la concreción de nuestras aspiraciones tan legítimas, y tantas veces postergadas.

REUNIÓN DE CAMARADERÍA

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Institucional

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Institucional

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En el número anterior de REFLEJOS puntualizamos que asumíamos la tarea de enviar salutaciones a nuestros asociados con motivo de sus cumpleaños. Decíamos que nos producía una satisfacción muy profunda recibir los mensajes de agradecimiento de ese sencillo recordatorio.A fuer de ser sinceros rescatamos con orgullo la actitud de nuestros colegas. Somos conscientes que todos nosotros transitamos una etapa de la vida que no es precisamente un “lecho de rosas”. Si hipotéticamente enumeráramos el cúmulo de adversidades que debemos soportar, comenzaríamos, sin duda, por los montos que percibimos en concepto haber jubilatorio. Materia esta que constituye un motivo de honda preocupación por parte de nuestra Entidad, y que incansablemente procuramos revertir. No obstante, nuestros asociados han encontrado un momento para expresar sus nobles vivencias y emociones. Rescatamos entonces la cortesía y deferencia que han demostrado nuestros consocios, aspecto que nos remite a una circunstancia histórica, donde privaban la hidalguía, la caballerosidad, y desde luego, la confraternidad entre los abogados. Esas pautas de conducta que aprendimos de nuestros mayores, no han sido olvidadas. De modo que, advertir que una misiva de felicitación ha permitido reflotarlas una vez más, nos enorgullece de pertenecer, y haber pertenecido, a un mundo de valores.Solamente y por azar, hacemos referencia a unas pocas notas recibidas.EL Dr. Rolando E. Pina nos cuenta que el saludo recibido transmite sinceridad y afecto. Agrega que en su propia filosofía, los elogios y la soledad son dos cargas existenciales que se transforman en Fraternidad y Emulación.El Dr. Luis M. Laborde, agradece la salutación recibida, como también el ofrecimiento de apoyo. La Dra. Beatriz Molla nos relata que fue una agradable sorpresa recibir el saludo. Nos recuerda que pasó un hermoso día con su familia y amigos. También felicita a la Asociación por la actividad

Institucional

que desarrolla en defensa de los derechos de los asociados.El Dr. Miguel J. Elías agradece los saludos recibidos y puntualiza que nada más grato y reconfortante que sentirse acompañado en un momento tan especial.La Dra. Graciela A. del R. Mendoza Peña, nos agradece por el recuerdo y puntualiza que se complace de ser socia de nuestra Institución. Nos felicita, también, por la labor que realiza la Asociación y por la estupenda revista REFLEJOS.Entre otras, los Dres. Gabriel del Castillo Pomes, Rubén A. Calcaterra, Pedro E. Ciallella, nos han hecho llegar la correspondencia que reproducimos a continuación.

MENSAJES DE NUESTROS AFILIADOS

Institucional

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El Consejo Directivo de la Asociación de Jubilados y Pensionados de la Caja de Previsión Social para Abogados de la Provincia de Buenos Aires ha resuelto, en cumplimiento de su finalidad Estatutaria y en orden a la jerarquización cultural puesta en sus objetivos, que la instrumentación del “Concurso Permanente Literario y Científico Jurídico” tendrá carácter de Capítulo Trienal, el que en cada caso llevará el nombre de los Presidentes del Consejo Directivo que se han venido sucediendo desde la creación de la Asociación. El mismo se regirá por el siguiente.

REGLAMENTO

ARTÍCULO 1º: Podrán intervenir en el Concurso los abogados de la Provincia de Buenos Aires, los jubilados y pensionados de la Caja de Previsión Social para Abogados de la Provincia de Buenos Aires, los miembros del Poder Judicial con título de abogado de igual jurisdicción, en actividad o jubilados y, en todos los supuestos sus respectivos cónyuges, ascendientes y descendientes.ARTÍCULO 2º: Las obras que se presenten deberán ser inéditas y no participar simultáneamente de otro concurso o certamen, bajo pena de exclusión. El tema es libre y cada concursante podrá presentar hasta tres trabajos en cada uno de los géneros en competencia, con un seudónimo diferente para cada trabajo.ARTÍCULO 3º: Se instituyen concursos y premios en los siguientes géneros:* POESÍA Premio “Asociación de Jubilados y Pensionados de la Caja de Previsión Social para Abogados de la Provincia de Buenos Aires”Extensión: no menor de catorce líneas o versos ni mayor de cuarenta.* NARRATIVA Premio “Caja de Previsión Social para Abogados de la Provincia de Buenos Aires”Extensión: no menor de dos carillas tipo oficio a dos espacios ni mayor de cinco.* ENSAYO JURÍDICO Premio “Colegio de Abogados Departamento Judicial La Plata”Extensión: no menor de cinco carillas tipo oficio a dos espacios ni mayor de treinta.ARTÍCULO 4º: Los premios de este Concurso para cada rubro consistirán: Primer Premio: una estatuilla de bronce, Segundo y Tercer Premio y Primera y Segunda Mención serán premiados de acuerdo a lo que disponga la Asociación organizadora. ARTÍCULO 5º: Los trabajos deberán ser escritos en idioma nacional y presentados en tres ejemplares en un sobre en cuyo exterior deberá inscribirse:a- género en el que se presenta el concursanteb- título de la obrac- seudónimo que adopta el autor.Se presentará por separado un sobre cerrado en cuyo interior deberá constar:d- nombre y apellido del autore- tipo y número de documento de identidadf- domicilio y teléfonog- fotocopia del título de Abogado o número de jubilado o pensionadoh- los miembros del Poder Judicial en actividad deberán presentar constancia de su función y los en pasividad constancia de jubilación y/o pensión.En el exterior de este sobre deberá constar:i- género en el que se presenta el concursantej- título de la obrak- seudónimo que adopta el autor.ARTÍCULO 6º: El Jurado estará integrado por miembros designados por la Asociación. La decisión de dicho Jurado no podrá ser objeto de impugnación.ARTÍCULO 7º: El lugar de presentación de las obras será la sede de la Asociación, 13 nº 831 6º piso (1900) La Plata, de 9 a 14 hs., teléfono (0221) 422-8199.ARTÍCULO 8º: El plazo de presentación de las obras vencerá el día 29 de julio del cte. año. Para las obras remitidas por correo se considerará la fecha que conste en el matasello o timbre postal. Estos plazos podrán ser prorrogados.ARTÍCULO 9º: Las obras deberán ser presentadas escritas a máquina o computadora -de acuerdo con el artículo 3º- y ser perfectamente legibles, en caso contrario serán rechazadas, como así también las que permitan la identificación del autor. Asimismo, los autores deberán adjuntar un CD con copia de la o las obras presentadas.ARTÍCULO 10º: El plazo para expedirse los jurados vencerá el 30 de septiembre de 2016 y podrán discernir Primero, Segundo y Tercer Premio. Cuando a criterio de los mismos otros trabajos merezcan ser distinguidos, la Asociación podrá discernir 1º y 2º Mención.ARTÍCULO 11º: Los autores galardonados con los premios instituidos, de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 4º, recibirán sus distinciones en acto público.ARTÍCULO 12º: En el mismo acto, la Asociación de Jubilados y Pensionados de la Caja de Previsión Social para Abogados de la Provincia de Buenos Aires distinguirá a los miembros del Jurado.ARTÍCULO 13º: La Asociación fijará la fecha y el lugar de entrega de los premios.ARTÍCULO 14º: Los trabajos presentados no serán devueltos.ARTÍCULO 15º: Cualquier situación no prevista será resuelta por la Entidad Organizadora en forma definitiva e irrecurrible.

CONCURSO PERMANENTE LITERARIO Y CIENTÍFICO JURÍDICO

Capítulo 2016

Dr. Roberto Benchetrit Medina

SECCIÓN CULTURAL

Susana y los viejos -1610- Clección Schönborn (Pommersfelden)

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ARTEMISIA GENTILESCHI

Para una mujer a comienzos del siglo XVII, ser pintora era una elección inusual y difícil, pero no excepcional. Las mujeres no tenían, en general, la posibilidad de estudiar anatomía o dibujar del natural, puesto que no era aceptable que una señora viera cuerpos desnudos.Así, en razón de las imposiciones sociales de la época, las mujeres estaban ausentes de la pintura en el Renacimiento italiano.A pesar de ello, se puede decir que a finales del XVI y comienzos del XVII, varias pintoras tuvieron carreras exitosas, entre ellas Artemisia Lomi Gentileschi, nacida en Roma el 8 de julio de 1593. Fue la hija mayor del pintor Orazio Gentileschi, uno de los grandes represen-tantes de la escuela romana de Caravaggio. Artemisia aprendió dibujo, cómo empastar los colores y dar bri-llantez a los cuadros. Dado que el estilo de su padre, en aquellos tiempos, se remitía explícitamente al arte de Caravaggio, también Artemisia en sus primeros pasos empleó ese estilo, destacándose en sus cuadros el límpido rigor del dibujo y una fuerte acentuación dra-mática. La primera obra firmada por Artemisia fue Susana y los viejos (1610).

La violencia.El acceso a la enseñanza de las academias profesionales de Bellas Artes era exclusivamente masculino, y por tanto le estaba prohibido; así fue que su padre le dio un preceptor privado, Agostino Tassi, con quien estaba trabajando en aquel tiempo en la decoración de las bóvedas de Casino della Rose dentro del Palacio Pallavicini Rospigliosi en Roma.Tassi acosó sexualmente a la joven durante algún tiempo hasta que, finalmente, la violó, cuando tenía 17 años. Por la humillación y el temor a ser condenada, ella continúa la relación con Tassi, quien le promete casarse con ella, soportando los requerimientos sexuales del pintor, que se caracterizaban por la violencia. En la Roma del Siglo XVII una mujer soltera que no fuera virgen era considerada "mercancía dañada" y la única forma de reparar el daño era que el agresor se casara con la víctima. La promesa de matrimonio nunca se cum-plió, debido a que él ya estaba casado; incluso, Tassi tenía antecedentes penales por el intento de homicidio de su esposa y de incesto por tener relaciones sexuales con su cuñada, lo cual en esos tiempos era considerado delito, hechos estos que eran desconocidos por Artemisia.

Cuando Orazio finalmente conoció el abuso, lo de-nunció ante el tribunal papal. Pero la demanda no se basó en la defensa del honor de su hija, sino en el detri-mento sufrido, ya que se ve afectado a título personal grave y considerablemente, por lo que el presentante solicitó al juez que se ocupara de esa afrenta tan cruel, para evitar la ruina ulterior de sus otros hijos. Artemisia vio entonces cómo la frustración y el dolor por el trauma de la violación, pasaron a segundo plano. El proceso legal, que fue una pública humillación para ella, se prolongó por 7 meses. Varios fueron los careos que se produjeron entre Artemisia y Tassi, quien con otros amigos pintores, atacaron la reputación de la artista declarándola promiscua. En ese período, la víctima pasó a ser juzgada e incluso torturada. En el interroga-torio se le sometió al sibilli , método de tortura que consistía en amarrar los dedos con una cuerda, la cual se apretada a medida que se formulaban las preguntas, además se la sometió a vergonzosos exámenes gineco-lógicos, para constatar si el desfloramiento era de re-ciente data o si ella tenía una vida sexual activa. Tassi fue condenado a prisión, castigo que no cumplió en su totalidad.Durante el período del juicio, Artemisia inicia su serie de pinturas cuyo tema central era el personaje bíblico de Judit, la heroína que libera a su pueblo del enemigo persa. Judit degollando a Holofernes (1612, Museo di Capodimonte, Napoles), es una de las más dramáticas y brutales versiones de este pasaje bíblico. Basada en la famosa pintura de Caravaggio, la versión de Artemisia va más allá del realismo,muestra fuerza y crudeza, reflejando la frustración y desprecio hacia los hombres que la humillaron y denigraron. Terminado el juicio, Orazio Gentileschi dispone que su hija se case con un pintor y mercader florentino de nombre Pietro Antonio di Vicenzo. La boda se realiza el 29 de noviembre de 1612 y la pareja se traslada a Florencia, donde Artemisia puede dedicarse completa-mente a la pintura, ya que su esposo se encontraba en una posición acomodada y en los primeros años le brinda su apoyo. Es Pietro di Vicenzo, quien le enseña a leer y escribir, privilegio que le había sido negado por su condición de mujer. Con el acceso a la lectura, estudia y le imprime su propia interpretación a lo los personajes históricos y bíblicos que serían los temas centrales de sus obras.Su primera hija, Prudenza, nace en 1614

UNA ARTISTA INDEPENDIENTE

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En FlorenciaArtemisia disfrutó en Florencia de un gran éxito. Fue la primera mujer en ingresar en la Accademia di Arte del Disegno de Florencia. Mantuvo buenas relaciones con los artistas más respetados de su tiempo, y conquistó los favores y la protección de personas influyentes. Tuvo una buena relación con Galileo Galilei con quien se mantuvo en contacto epistolar durante largo tiempo, mucho más allá de su periodo florentino.Buonarroti el joven (1568-1646, sobrino del gran Miguel Ángel), empeñado en construir la Casa Buonarroti para celebrar la memoria de su ilustre antecesor, encargó a Artemisia la ejecución de una tela destinada a decorar el techo de la galería de pinturas. La pintura en cuestión representa una alegoría del «talento natural», represen-tada en forma de una joven mujer desnuda que sostiene una brújula. Se cree que la atractiva figura femenina tenía los rasgos de la propia Artemisia, que –según las

informaciones de la época- fue una mujer de extraordi-nario atractivo. Su éxito y la fascinación que emanaba de su figura, alimentaron, a lo largo de toda su existen-cia, rumores sobre su vida privada.Se ha considerado que durante este periodo florentino Artemisia también pintó "La conversión de la Magdalena" y "Judith y su doncella", hoy en el Palacio Pitti. También una segunda versión de "Judith decapi-tando a Holofernes", hoy en los Uffizi. Esta "Judith y Holofernes" o "Degollación de Holofernes" está consi-derada su obra maestra. Ella pone sus mismos rasgos en el rostro de Judit, atribuyendo a Holofernes los de Tassi. La oscuridad de esta obra, la frialdad con que Judith decapita a Holofernes, impresionan por la violencia de la escena que representa. La pintura ha sido interpre-tada como un deseo de venganza por la violencia que ella había sufrido

Judit decapitando a Holofernes 1613-1620- Galleria degli Uffizi - Florencia

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Otra vez en RomaSeparada de su marido, Artemisia volvió a Roma en el mismo año en que su padre Orazio dejó la ciudad y se trasladó a Génova. Hay versiones que sostienen que ella siguió a su padre, pero otras que permaneció en Roma, como mujer independiente, intentando encontrar una casa y criar a sus hijas. Además de Prudenzia, tuvo otra hija natural, probablemente nacida en 1627. Los estilos pictóricos en Roma a principios del siglo XVII eran diversos, coexistiendo la tendencia más clásica, con el estilo Barroco. Artemisia demostró tener la sensibilidad justa para tomar las novedades artísticas en la Roma de entonces, meta obligada de artistas de toda Europa. Por su reputación y excelencia, Artemisia entró a formar parte de la Accademia dei Desiosi. Sin embargo, Roma no fue tan lucrativa como ella espe-raba ya que no se le encargaban trabajos importantes. Es probable que, en consecuencia, entre 1627 y 1630 se trasladara a Venecia, en busca de encomiendas más lucrativas.

NápolesEn 1630 Artemisia se trasladó a Nápoles, una ciudad rica con talleres y amantes de arte, en busca de nuevas y más lucrativas oportunidades laborales. Permaneció en Nápoles durante el resto de su carrera con la excepción de su breve estancia en Londres y algún otro viaje. Nápoles representó para Artemisia una especie de segunda patria. Es en esta ciudad cuando por primera vez, Artemisia empezó a trabajar en cuadros para una catedral, dedicados a San Gennaro nell'anfiteatro di Pozzuoli (San Jenaro en el anfiteatro de Pozzuoli). En Nápoles Artemisia demuestra su capacidad de reno-varse según los gustos artísticos de su tiempo y de manejar diferentes temas, Artemisia fue llamada a Inglaterra por Carlos I, de modo que en 1638 se reunió con su padre en Londres, donde Orazio era pintor de la corte. El padre y la hija estaban una vez más trabajando juntos, aunque Orazio murió repentinamente, en 1639. Artemisia tuvo que cumplir sus encargos después de la muerte de su padre, No se sabe mucho de sus movimientos posteriores. Se cree que partió definitivamente a Nápoles en 1642 donde pasó el resto de su vida. Se pensó que Artemisia había muerto en 1653. Hay evidencias que muestran que aún aceptaba encargos en 1654, aunque dependía cada vez más de su asistente, Onofrio Palumbo. Por lo tanto, puede especularse con su muerte en la devastadora plaga que asoló Nápoles en 1656 y virtualmente barrió a toda una generación de artistas napolitanos.Su tumba se encontraba en la iglesia de San Juan de los Florentinos de Nápoles, que fue destruida durante la Segunda Guerra Mundial. Después de su muerte fue prácticamente olvidada.Artemisia Gentileschi integra la pléyade de los primeros pintores barrocos, imponiéndose por su arte en una época en la que las mujeres pintoras no eran aceptadas fácilmente. Pintó sobre temas que en ese momento eran considerados inadecuados para el espíritu femenino. Luchó con determinación contra los prejuicios expre-sados en contra de las mujeres pintoras y consiguió ingresar en el círculo de los pintores más respetados de su época, abarcando una gama de géneros pictóricos amplia y variada. Artemisia Gentileschi, fue la primera mujer en pintar motivos o escenas religiosas, la primera mujer en ser

admitida en la Academia de Arte de Florencia (1616), la primera mujer en ganarse la vida a través de la pintura, la primera y única mujer en adoptar el Caravaggismo y, lo más importante, una de las grandes artistas del Barroco Italiano.

Greta S. Godino.

Fuentes:www.wikipedia.org

www.mujerespintoras.Blogspot.com https://dialnet.unirioja.es/6852-6936-1-PB.PDF

Allegoría dell'inclinazione - Casa Buonarroti - Florencia

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En mis años escolares estudié la historia del país, en la que, curiosa-mente, pocas eran las mujeres de las que se daba noticia. El colorido relato de las maestras describía los acontecimientos del 25 de mayo de 1810 en los que sus protagonistas eran hombres valientes y enérgicos inspirados en los principios de "li-bertad, igualdad y fraternidad".Sin embargo, fueron muchas las mujeres que participaron de la lucha por la independencia de nuestro país e influyeron con sus acciones y opiniones.

Durante las invasiones inglesas de 1806 y 1807 fueron las criollas -amas de casa humildes o de la alta sociedad- las que organizaron y participaron activamente en la re-sistencia de la ciudad y su defensa de los invasores. Un acccionar des-tacado llevó a cabo Manuela Pe-draza en las invasiones inglesas de 1806; allí la "tucumanesa" como la llamaban, combatió para defender la ciudad de Buenos Aires junto a su marido, quien murió en sus brazos y al que vengó alzando su fusil contra el inglés que lo mató. Más tarde fue condecorada por su desempeño.En el movimiento revolucionario que culminó en el 25 de mayo de 1810, participaron mujeres que luego colaboraron con la defensa de la patria en las luchas por la inde-pendencia entre las que podemos mencionar: Mariquita Sánchez de

Thompson, Flora Azcuénaga, Ana Riglos. En las tertulias que organizaban las damas de las familias notables de la sociedad porteña fue donde se gestó la Revolución. Los salones de Mariquita Sánchez de Thompson o Flora Azcuénaga, los saraos de Ana Riglos, fueron los ámbitos donde se discutían las nuevas ideas que lle-gaban al Virreinato del Río de la Plata y que daban sustento ideoló-gico al movimiento. Por otra parte, Casilda Igarzábal, esposa de Nicolás Rodríguez Peña, el 18 de mayo de 1810, acudió a la casa de Cornelio Saavedra a la ca-beza de un grupo de señoras para convencerlo de que se sumara al movimiento, invitándolo a ir a su

quinta en la que Juan José Castelli, Manuel Belgrano y otros rebeldes estaban conspirando contra Cisne-ros. Saavedra dejó sus dudas de lado y aceptó ir. La estrategia para el Cabildo Abierto del 22 de mayo se planeó allí.Pero no fueron únicamente mujeres de la clase alta las que participaron. También otras, anónimas y de sec-tores populares hicieron su aporte para la concreción de los aconteci-mientos de 1810. Pertenecientes a todas las clases sociales, ellas tuvieron un papel de gran importancia para la obtención de recursos y elementos, prestando su casa para reuniones y hasta ha-ciendo tareas de espionaje y correo.Sin embargo, nadie las convocó para el Cabildo Abierto del 22, cuando se depuso al virrey Cisne-ros. Y el histórico día 25 se apiñaron con los soldados patricios y los ve-cinos que se habían reunido frente al Cabildo.Una vez estallada la revolución de Mayo, el primer hombre en trabajar para emancipar y promover al sexo femenino a través de la educación, fue Manuel Belgrano a quien ade-más, le gustaban demasiado las mujeres, y ellas reconocían su capa-cidad de seducciónLas damas contribuyeron emo-cional y materialmente con la Revo-lución. Sus donaciones permitieron crear y mantener a los ejércitos for-mados para llevar al interior la pro-

LAS MUJERES Y EL PROCESO DE LA INDEPENDENCIA

Un protagonismo político y económico del que poco se sabe.

Mariquita Sánchez de Thompson

Cultural

teles enemigos. La salteña Juana Moro de López convenció a Juan José Campero, marqués de Yavi, para que desertara de las fuerzas realistas y se sumara a los revolu-cionarios.

Madres, esposas, novias, vecinas solteras, hijas y hermanas, de toda clase social, todas ellas contribu-yeron con el corte y la confección o con el fusil, la oración y el discurso, a la creación de este país y abrieron el camino para la participación polí-tica de las mujeres argentinas en su formación y desarrollo.

puesta de la Junta. Algunas do-naron tierras o armas, dinero o jo-yas, mientras que otras tejieron las banderas y confeccionaron casacas y pantalones para la lucha.Paralelamente, tanto en la capital como en el interior, aquéllas esta-blecieron un eficaz sistema de es-pionaje desde las ventanas de su casa, o en las caminatas inocentes de paseo, donde podían anticipar movimientos del enemigo y luego informar a los patriotas por medio de chasqui. También contaban con la complicidad de la red de fami-liares y amistades.

Cuando el Primer Gobierno Patrio convocó, el 7 de junio de 1810, a los vecinos de Buenos Aires para con-currir a la casa del vocal Miguel de Azcuénaga, donde se recibían las donaciones para el equipamiento del ejército, las mujeres de las prin-cipales familias, y también las de las clases más humildes y hasta las esclavas acudieron al llamado.En 1812, los españoles preparon una contraofensiva desde Montevideo, el Triunvirato promovió una sus-cripción pública para costear las armas que había comprado a los Estados Unidos. Las señoras de Buenos Aires se reunieron en la casa de la familia Escalada, y cons-tituyeron la Sociedad Patriótica para organizar la ayuda femenina.Mientras tanto, en el norte, contri-buían en la guerra en forma más directa. Algunas tomaban las ar-mas, otras acompañaban al ejército y otras formaban parte de una red de espías, encargadas de transmitir

información a los jefes militares, aun a riesgo de sus vidas. Entre las primeras se destaca Juana Azurduy de Padilla, quien reunió una fuerza de amazonas que causó serios perjuicios a los españoles. Durante la guerra, perdió a sus cuatro hijos y a su esposo. Las auto-ridades de Buenos Aires le confi-rieron el grado de teniente coronel y el mismo general Manuel Belgrano le regaló la espada que empuñaba en las batallas. También destacó, en el norte argen-tino, Magdalena Güemes, Macacha, hermana del prócer salteño Martín Miguel de Güemes. Fue brillante en la batalla y en el campo diplomá-tico.Menos conocidas son las “bombe-ras”, como se denominaba a las que recababan información en cuar-

Victoria E. Martínez

Ana Riglos Casilda IgarzábalJuana Azurduy

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Cultural

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Confesamos que no hemos llevado a cabo una indaga-ción minuciosa, de modo que nuestros lectores, podrán enmendar nuestras conclusiones.Nos referimos puntualmente a la profesión de las ar-mas, y en particular a los jefes y generales de los ejérci-tos. En definitiva, aquellos que dirigen y diseñan la es-trategia del combate.En las guerras del siglo XX, no cabe duda que el genera-lato no combatía a la par de sus subordinados. Alejados del campo de batalla, con planos y mapas a la vista, in-numerables asistentes y a través de comunicaciones ra-diales, enviaban órdenes que inexorablemente debían cumplir los soldados.En ese contexto, pocos han sido los que han muerto en combate, porque, alejados del fragor de la batalla, su situación era de relativa seguridad. Muy diversa era la suerte de soldados y civiles, que perecían indiscrimina-damente.

EN LA ANTIGÜEDAD.Si nos remontamos a la Ilíada, advertimos que Aquiles (el de los pies ligeros, como lo caracteriza Homero) lu-chaba en primera línea, con ventaja y arrojo inaudito. Era hijo de una Diosa y de un mortal, y por ese motivo no pudo sustraerse a la finitud de los humanos. Murió en la toma de Troya.Alejandro de Macedonia, asumía el combate con teme-ridad, y sus múltiples heridas ganadas en la batalla, de-mostraban que no eludía el combate.El famoso Pirro, rey de Epiro, honraban con arrojo a los dioses de la guerra.Pero a medida que la edad heroica tocaba a su fin, la acti-tud de los jefes y generales comenzaba a diferenciarse de aquellos antecedentes. Era necesario que diseñaran la estrategia del combate, prever sus vicisitudes y dis-poner aquellas acciones que durante la batalla, debían

asumir los refuerzos y auxiliares.En realidad no conocemos con minuciosidad cuál era la actitud de los generales durante la contienda, porque los autores antiguos se han limitado, además de indivi-dualizar a los comandantes, a describir sumariamente las alternativas del combate.Pero, más allá de nuestras conjeturas y de las presuncio-nes que parecen verosímiles, no ha existido una des-cripción pormenorizada del papel de jefes y generales en el campo de batalla.No obstante, quien nos presenta un cuadro real de la situación fue Onesandro, en el siglo I d.C. Describe un estilo de mando que persistió durante muchos siglos, y que fue en realidad, una característica propia de los je-fes militares de Roma antigua.Desde esa perspectiva, el general se encontraba junto a sus subordinados en el campo de batalla para dirigir la lucha e insuflar ánimo a los soldados. Transmitía tam-bién, con su presencia, que vigilaba las tropas y que los actos de valentía serían largamente recompensados. Por el contrario el desánimo y la cobardía, castigados severamente.Como nos recuerda Onesandro: “….El deber de todo general consiste en cabalgar entre las filas de sus sol-dados, presentándose ante los que hallan en peligro, alabar a los valientes, amenazar a los cobardes, ani-mar a los perezosos, llenar los huecos, trasladar una unidad si es necesario, llevar ayuda a los exhaustos, anticiparse a las crisis, al momento y a las consecuen-cias….”.Planteamos entonces el interrogante del epígrafe, natu-ralmente sin dar una respuesta conclusiva. No obstante, entendemos que la de comandante, al menos en nuestra realidad contemporánea, es una profesión segura.

Mario Maggi

¿Una Profesión

Segura?

Cultural

Cultural

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Transcurría el año 1760, unían sus corazones en el Alto Perú, el ga-llardo cacique de 18 años José Ga-briel Condorcanqui (luego Túpac Amaru II), mestizo, de ascenden-cia criolla e inca y Micaela Basti-da, 15 años, tez bronceada, cabe-llos ondulados, temperamento férreo, conocida como “Micaela, la zamba”, procedía de africano e indígena.José Gabriel trabajaba transpor-tando mercaderías entre diversas ciudades del Perú. Nada vatici-naba que encabezaría el mayor movimiento independentista en América del Sur. Túpac Amaru tenía gran prestigio y valimiento entre los aborígenes; reaccionó contra el desvirtuado sistema de

Una conmovedora historia

“repartimento”, por el cual, se obligaba a comprar a precios exor-bitantes mercaderías, que los nati-vos no necesitaban.Él, se convirtió en el líder de los mismos; y, Micaela, junto a otras mujeres, se encargaron de difun-dir las nuevas ideas, para corregir las injusticias que estaban vivien-do, convirtiéndose en pro de mo-vimientos renovadores.Luego de tres años de inútiles re-clamos, comienza la insurrec-ción, llegando triunfante cerca del Cuzco. Micaela, lo impulsaba a tomar la ciudad sagrada. Él es-peró por temor que en la con-tienda fuera saqueada y destrui-da. Después de vacilaciones que le hizo perder tiempo y muchas

traiciones, la rebelión fue sofoca-da.El 18 de mayo de 1781, habiendo presenciado la ejecución de su hijo Hipólito; víctima de horrores inenarrables, fueron muertos, pri-mera ella y a continuación él. Úni-camente la muerte los pudo sepa-rar.Quisiera hacer una pequeña aco-tación, en esta gesta intervinieron y murieron muchas mujeres, que pagaron con su vida, la defensa de sus ideales; sin embargo, pocas veces se las ha mencionado como partícipes de esta hazaña.

Marta Raquel Pupilli de Novello

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ara nosotros, que nos encontramos alejados en el

Ptiempo y la distancia de la Inglaterra del siglo XVI, no nos causa pudor reconocer nuestra igno-

rancia, la que procuraremos enmendar parcialmente. En esa tarea, intentaremos traer a colación, en gruesas pinceladas, algunos de los acontecimientos acaecidos en la primera mitad de ese siglo.A pesar de esa confesión, junto con nuestros lecto-res, tenemos presente la figura de Enrique VIII, sus amores desgraciados y su poderosa imagen de mo-narca absoluto. Los diversos episodios que jalonaron su reinado, han sido volcados reiteradamente en la cinematografía y seguramente también lo serán en el futuro, porque las pasiones humanas siempre han sido motivo de ávido e inagotable interés. Historia familiarSu padre, Enrique VII había destinado al solio real, a su primogénito Arturo. Por ese entonces el rey proclamaba con orgullo sus orígenes celtas, extremo que de alguna manera lo emparentaba con la leyenda del rey Arturo, que de acuerdo con la profecía del mago Merlin, era inminente el retorno de un rey descendiente de la antigua raza.La prematura muerte de Arturo (1502) cuyo solo nombre evocaba glorias pasadas, desbarató el proyecto paterno, pero como Enrique VII tenía otro hijo llamado con su propio nombre, pudo asegurar a través de su segundogénito la continuidad dinástica de los Tudor.Aclaramos que Arturo había sido preferido por

decisión de su padre para asumir las funciones rea-les, para lo cual recibió una educación esmerada. Acorde con las altas funciones a las que estaba lla-mado a desempeñar. En cambio, el futuro rey Enrique VIII fue educado con arreglo a otras pautas, en realidad, como como un verdadero gentilhombre del Renacimiento. Sin duda fue favorecido por la naturaleza, que lo dotó de una estatura elevada, y con la musculatura de un verdadero atleta. Según las armaduras que se han conservado, Enrique VIII orillaba los 2m. dealtura. En su juventud entrenaba para la guerra y la caza, practicaba con intensidad la esgrima, el tiro con arco, y en general, el manejo de todas las armas, entonces existentes.

Los casamientos del reyCatalina de Aragón, que a la postre fue la primera esposa de Enrique VIII, había sido en realidad desti-nada al joven Arturo. Y tanto fue así que el casa-miento del heredero de la corona se celebró en la Catedral de San Pablo en la ciudad de Londres, el 14-11-1501. Arturo era un joven enfermizo y débil, tal vez impúber, que falleció a los cuatro meses luego de la boda, sin que el matrimonio se hubiera consu-mado.

Ana BolenaDejamos aclarado que por la índole de este artículo, soslayamos el matrimonio de Enrique con Catalina

Enrique VIIIUn rey por accidente

Cultural

de Aragón, y desde luego las vicisitudes de esa boda, como las consecuencias que trajo el cisma con la Iglesia romana. Trataremos de focalizarnos en Ana Bolena, quizá por las circunstancias que la llevaron al cadalso y porque su historia trágica ha despertado intensa e inagotable curiosidad.Nacida en 1501, Ana representó para rey el ideal de mujer. Dotada de una belleza poco ortodoxa, con grandes ojos negros, boca grande, tez mate. En síntesis, tenía una apariencia más española que Catalina de Aragón. Cabe acotar que por ese entonces exis-tían en Inglaterra muchas preven-ciones en torno al color de la piel de Catalina, particularmente por su origen mediterráneo. Final-mente cuando su apariencia fue develada, quedó absolutamente en claro que tenía la piel blanca, cabellos rubios rojizos y ojos verde grises.En 1533 el rey se casó en secreto con Ana, sin romper el vínculo marital con Catalina.Empero en 1536, la primera con-sor te del monarca fa l le ció. Enrique VIII celebró estrepitosa-mente el acontecimiento con banquetes y bailes. Ana había sido madre de Isabel (7-9-1533) y el rey profundamente decepcio-nado por el nacimiento de una niña, no ocultó su enojo y su mal humor.Ana Bolena, en lugar de dejar que se extinguiera el enojo de su poderoso cónyuge, se mostró exigente, burlona, a veces sarcás-tica y siempre combativa, con lo que exacerbó la animadversión que comenzaba a sentir el mo-narca. Expresaba con vehemencia sus celos por las aventuras amo-rosas de Enrique, en especial con Jane Seymour.El rey, paradigma del absolutismo real, que no soportaba de nin-guna forma de desobediencia o resistencia, menos toleraba la conducta de Ana. No admitía sus recriminaciones, como tampoco sus gestos intempestivos. Confe-saba a sus allegados que se había casado con una arpía, y que su

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28 REFLEJOS 8828 REFLEJOS 88

vida conyugal era un verdadero infierno. Sin duda los esposos tenían temperamentos semejantes, pero-como Enrique tenía el poder, los duros enfrenta-mientos colocaban a Ana en clara desventaja.En ese contexto el rey, hastiado de las continuas reyertas, y diluido el amor que alguna vez los unió, decidió en su fuero íntimo poner fin a esa relación. Pero, atención, no se trataba de un divorcio como los actuales donde la mayor disputa concierne, casi exclusivamente, al reparto de los bienes del matri-monio. Finiquitar la relación con el rey, podía tener consecuencias funestas para la parte más débil. Para ello, Enrique VIII nombró una comisión secreta (1536) para investigar la conducta de la reina, y de-tectar algún comportamiento inapropiado como para incriminarla.La comisión encontró lo que el rey buscaba con ansie-dad: Adulterio e Incesto. Varios gentilhombres fueron encarcelados con la imputación de haber mantenido relaciones prohibidas con la reina, entre los cuales se encontraba Jorge Bolena, hermano de Ana.Un acontecimiento inesperado contribuyó a formar opinión definitiva en el monarca. El 1° de marzo de ese año, durante las festividades que se celebraban en Greenwich, el rey observó que su esposa dejaba caer un pañuelo en dirección a un joven caballero, que acababa de destacarse en los torneos. Con esos elementos de prueba, convencido de la inconducta de Ana, la hizo arrestar y enviar a la ominosa Torre de Londres.Poco se sabe del proceso de Ana Bolena y de sus presuntos cómplices, porque las investigaciones y los interrogatorios fueron conducidos en secreto, de modo que solo se conocen de manera indirecta.Se supone que amenazados y/o sometidos a insu-frible torturas, los encartados reconocieron haber mantenido relaciones prohibidas con la reina. Por su lado, Jorge Bolena siempre negó el incesto imputado.Pero el testimonio de Lady Rochford resultó dele-téreo para la infortunada consorte. En efecto, pre-

sionada para relatar cuanto sabía, la dama de com-pañía de la reina no se privó de suministrar los deta-lles más íntimos y escabrosos de las conversaciones de la reina.Ana se refería a su marido en forma despectiva y sarcástica, burlándose de su vestimenta y de sus caprichos. Además, dio rienda suelta a su frustración conyugal. Según parece, el rey cumplía penosa-mente sus deberes conyugales, por cierto muy ale-jados de su apariencia de virilidad arrolladora. En suma, sin abundar en otros pormenores que todos imaginamos, lo cierto es que para la infortunada consorte, Enrique VIII se convirtió en un compañero de lecho más molesto e insoportable, que conside-rado y voluptuoso. Como era de esperarse, cuando transmitieron al rey aquellas palabras, montó en cólera irrefrenable. Su intimidad había sido revelada públicamente y sus honor ridiculizado.El proceso, rendidas las pruebas obtenidas, fue conducido con extrema rapidez. Se desarrolló con público, en la gran Sala de la Torre de Londres.Oído el veredicto, nadie puso en tela de juicio el tenor de las condenas. Las primeras ejecuciones tuvieron lugar el 17 de mayo siempre en el recinto de la Torre. Respecto de Ana Bolena, fue primeramente condenada a ser quemada viva, pero por la gracia de su soberano se le conmutó la pena.Para la reina se hizo venir a un verdugo que cumplía sus funciones en Calais. Tenía la habilidad de cortar una cabeza con un solo golpe de espada. Según se refiere los honorarios alcanzaron la suma de 24 libras, y se le liquidaron los viáticos. El 18 de mayo de 1536 tuvo lugar su ejecución.A los restantes condenados se los decapitó con hacha. Muchas veces era necesario repetir la sanguinaria operación, para alcanzar el resultado perseguido.

Mario Maggi

Cultural

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¿COINCIDENCIA O REALIDAD?

Cultural

Abraham Lincoln fue electo en el Congreso en 1846.

John F. Kennedy fue electo en el Congreso in 1946.

Abraham Lincoln fue electo Presidente en 1860.

John F. Kennedy fue electo Presidente en 1960.

A los dos particularmente les interesaban los derechos civiles

. Las dos esposas de ellos

perdieron sus hijos cuando vivían en la Casa Blanca.

Los dos presidentes fueron asesinados por disparos el día

Viernes.

Los dos presidentes fueron disparados en la cabeza.

No es esto extraño?

El apellido de la secretaria de Lincoln era Kennedy.

El apellido de la secretaria de Kennedy era Lincoln.

Los dos fueron asesinados por gente del Sur de los Estados

Unidos...

Al morir los dos, fueron sucedidos por sureños de

nombre Johnson.

Andrew Johnson, quien tomó el puesto de Lincoln, nació en

1808. Lyndon B.Johnson, quien tomó el puesto de Kennedy, nació en

1908.

John Wilkes Booth, quien asesinó a Lincoln, nació en 1839.

Lee Harvey Oswald, quien asesinó a Kennedy,nació en1939.

Los dos asesinos tenían 3 nombres compuestos de 15

letras.

Ahora agarrate bien de tu asiento...

Lincoln recibió un disparo mortal en un teatro llamado

'Ford'.

Kennedy recibió un disparo mortal en un coche de nombre '

Lincoln ' hecho por la 'Ford'.

Lincoln fue asesinado en un teatro y el asesino huyó a

esconderse en un almacén.A Kennedy le dispararon desde

un almacén y su asesino se escondió en un teatro...

Los dos asesinos fueron asesinados antes de celebrarle

juicio...

Y aquí esta lo tremendo...

Una semana antes de que asesinaran a Lincoln, él estaba

en Monroe , Maryland. Una semana antes de que

asesinaran a Kennedy, él estuvo con Marilyn Monroe.

Qué extraño es todo esto,

no?

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El 17 de febrero pasado se cum-plieron 416 años desde que Gior-dano Bruno fue quemado vivo en “Campo deiFiori”, en el corazón de Roma. Fue el resultado de haber sido condenado por hereje, por el Tribunal de la Inquisición, que lo encontró culpable, y como era de rigor en la época, lo sometió a tan bárbaro suplicio. Nacido Filippo Bruno, fue filó-sofo, científico, erudito y astró-nomo. Vió la luz en Nola, cerca de Nápoles, en 1548, y culminó su vida, como llevamos dicho, acu-sado de herejía.En su primera juventud estudió humanidades en Nápoles, y a los 16 años de edad entró a la Orden de los Dominicos. Por ese en-

tonces cambió su nombre de pila por el Giordano.Desde su ingreso al clero regular, comenzó a padecer diversos cuestionamientos derivados de su espíritu autónomo y rebelde. Se negaba a aceptar las imágenes de los santos, pero como llevaba siempre consigo un crucifijo, pudo sortear tales inconvenientes. En 1572 se ordenó como sacerdote.Poco duró su obediencia a la Orden, de modo que decidió aban-donarla. Prontamente fue exco-mulgado, porque sus actitudes alimentaban la sospecha de here-jía. Decidió entonces recorrer Europa. Recordamos que fue invitado por Enrique VIII de Ingla-terra para impartir sus enseñanzas en la Universidad de Oxford. En sus viajes pasó por Marburgo, Wittenberg, Praga, Frankfort y finalmente recaló en Venecia.Precisamente por invitación de Giovanni Mocenigo, noble vene-ciano, Bruno volvió a Italia y se radicó en la Serenísima. Allí fue protegido por el ilustre veneciano que lo convocó para le transmi-tiera sus teorías. Al poco tiempo, disconforme con las enseñanzas de Giordano, Mocenigo lo de-nunció a la Inquisición. Logró que lo trasladaran a Roma bajo los mismos cargos, donde fue encar-celado en el Palacio del Santo

Oficio, extremo que presagiaba su trágico final.Giordano Bruno se enf rentó contra el clero de su época, que sin duda era obtuso y renuente a considerar críticamente sus ideas. En ese contexto, la imposición de las sanciones que se avizoraban, se tornaron inevitables. Giordano fue condenado por el Santo Oficio por sostener puntos de vista diver-gentes con el dogma católico.Por esos crímenes contra la fe y la religión, y ponderando que no se retractó de sus teorías, fue conde-nado a ser quemado vivo en la hoguera; sanción que fue ejecu-tada el 17 de febrero de 1600.En lo pertinente la sentencia decía: “….fallamos atento los autos y méritos del dicho proceso, que declaramos al dicho Giordano Bruno de haber incurrido en sentencia de excomunión mayor, por la culpa de hereje, fautor, instigador e irrepento a ser que-mado en la hoguera, y sus cenizas esparcidas para que de él no quede noticia…”Se recuerda aún la frase que dejó a sus jueces: “…Tembláis más vosotros al anunciar esta sen-tencia que yo al recibirla…”La infame manda fue cumplida en la plaza conocida como “Campo dei Fiori”, al sur de la Piazza Na-

GIORDANO GIORDANO GIORDANO

BRUNOBRUNOBRUNO

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vona.Originariamente ese ámbito, conformaba un espacio o campo florido, circunstancia que re-cuerda su actual denominación. Recién a mediados del siglo XV fue pavimentada como parte de un proyecto más amplio de remo-delación. En ese lugar, se cum-plían las ejecuciones públicas.Sobre un lateral de la plaza se yergue una estatua misteriosa de un hombre encapuchado, cuya mirada de reproche se dirige hacia el Vaticano, obra del escultor Ettore Ferrari y que data de 1877.

Ideas de Giordano Bruno.Sostuvo que la teoría del sistema planetario geocéntrico era falsa. Es decir, la tierra como centro del universo. Fue Bruno quien divulgó por Europa la postura renovadora copernicana que situaba al sol como centro del sistema planeta-rio.Entendía que el universo era infi-nito, poblado de infinitos soles, muchos de los cuales podrían tener planetas.En síntesis, se reconoce que la visión que tuvo Giordano Bruno del universo, es la que más se acerca a las concepciones actua-les. En efecto, nadie duda en la actualidad que el sol es el centro de nuestro sistema y que la tierra

como los restantes planetas, giran en derredor. Tampoco se pone en tela de juicio que en el universo se encuentran innumerables soles. Solo el prejuicio, la ciega sujeción dogmática a un esquema conge-lado, y la crueldad innata de los hombres, impulsaron al suplicio de un pensador egregio, que tuvo la osadía de introducir nuevos elementos para la comprensión del mundo.

El Martillo de los Herejes.De ese modo fue conocido Fran-cisco Belarmino, Cardenal de la Compañía de Jesús, que fue encar-gado de dirigir, entre otros, los procesos inquisitoriales contra Giordano Bruno y Galileo Galilei.En 1598 asume el proceso seguido contra Bruno, que culminó como sabemos con su supl icio en Campo deiFiori. Acotamos que al condenado se le aplicó, en el mo-mento de llevarse a efecto la sen-tencia, una prensa sobre su lengua para evitar que hablara.Respecto de Galileo Galilei, es pert inente puntualizar que el Tribunal del Santo Oficio realizó alrededor de 1616, un análisis de la teoría heliocéntrica de Nicolás Copérnico, que por entonces comenzaban a difundirse por toda Europa. Fundado en algunos pasajes de la Biblia se concluyó

que si bien esa teoría no era heré-tica en sí misma, se contraponía a las sagradas escrituras, y era filo-sóficamente falsa.Belarmino, que además era amigo de Galileo, fue enviado para que le hiciera reconocer que sus teorías sobre el sistema solar no consti-tuían una verdad absoluta, sino una mera hipótesis. Con ese artilu-gio, Galileo pudo evitar el suplicio de la hoguera.Belarmino nació en Montepul-ciano (Estados Pontif icios) en 1542 y murió en Roma en 1621. Entre otras funciones religiosas cumplidas,fue Cardenal Presbítero de Santa PráxedesLa basílica (Santa Pressede en italiano), construida en homenaje de la santa, está ubicada en Roma, muy cerca de Santa María la Ma-yor. Como dato curioso, adver-timos que guarda como reliquia, el pilar donde habría sido flagelado Jesús de Nazaret. El segmento de la columna desportillada, fue llevado a Roma por Elena, madre del emperador Constantino.Finalmente señalamos que Belar-mino, el Martillo de los Herejes, fue beatificado y canonizado en 1930.

Mario Maggi

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El conocido periodista Alfredo Leuco publicó una nota referente a la entonces inminente

santificación del sacerdote beatificado. A la fecha, esa diligencia se encuentra cumplida,

por lo que ilustre cordobés ya forma parte del santoral católico.

En aquella oportunidad destaca la figura y la importancia del cura Brochero. Nos recuerda

que había nacido en Villa Santa Rosa del Río Primero y entre otros aspectos relevantes de

su rica personalidad,señalaba :…“En ese lugar nació quien será el primer santo totalmente

argentino…..Brochero cursó en la universidad de San Carlos, junto a Miguel Juárez

Celman quien después sería presidente de nuestro país…..El cura Brochero es una bandera

de lo mejor de los argentinos. De los que tienen o no tienen fe….El cura Brochero era una

pastor con olor a ovejas. Decía que la vida de los muertos está en el recuerdo de los

vivos”.

El periodista nos recuerda que la semblanza trazada por su pluma, parte desde su

condición de agnóstico, extremo que no le impide valorar la figura del ahora santo. Elogia

también a Jorge Bergoglio, puntualizando que cree en la dimensión humana de ambos:

“Hoy uno es Papa y el otro será Santo. Sigo sin ser creyente pero creo que con personas

como ellos, el mundo tiene cura”.

Nota de la Dirección. Agradecemos la deferencia que tuvo uno de nuestros asociados más

caracterizados, en enviarnos la nota completa del Alfredo Leuco, de la cual transcribimos

solo algunos pocos párrafos.

A PROPÓSITO DEL

CURA BROCHERO

Cultural

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orge Francisco Isidoro Luis Borges Acevedo, nació J en Buenos Aires en 1899 y murió en Ginebra (Suiza) el 14 de junio de 1986. Hasta su primera juventud

permaneció y estudió en Ginebra y luego, vivió breve-mente en España. Radicado en nuestro país sufrió en la década del treinta una herida en la cabeza, a causa de la cual comenzó a perder la vista.Sus posiciones políticas evolucionaron a partir de pos-turas izquierdistas, hasta culminar en un liberalismo escéptico. Desde esa perspectiva criticó a todos los gobiernos autoritarios. Recordamos que fue acremente censurado por permanecer en el país durante las dicta-duras militares de los años setenta, pero corresponde señalar que nunca apoyó las Juntas Militares.Paradójicamente, y no sin razón, con la restauración democrática se volvió aún más escéptico.En su vasta producción literaria Borges creó un mundo fantástico y metafísico. Quizá por esa razón, la lectura de sus obras no es fácil, en orden a los elementos simbó-licos incorporados.Respecto de su producción literaria el propio autor, nos dijo: … “No soy ni un pensador ni un moralista, sino sencillamente un hombre de letras que refleja en sus escritos su propia confusión y el respetado sistema de confusiones que es la filosofía, en forma de literatura.”Resulta curioso que en torno a la figura de Jorge Luis Borges, existan disputas de corte político que obligada-mente soslayan del análisis la riqueza inconmensurable de sus obras. Nos guste o no la figura del literato, es-tamos convencidos que Borges fue un emergente de lo mejor de la sociedad argentina, cuando nuestro país era aún reconocido en el mundo por el nivel y universa-lidad de sus intelectuales.Seguramente no nos equivo-caremos si sugerimos a nuestros lectores, que el mejor homenaje que podemos hacerle, no es otro que el de releer sus obras.

A Treinta años de la Muerte

de Jorge Luis Borges

Cultural

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Hacemos un pequeño espacio para referirnos a un médico, que fue el primer investigador en materia de localizaciones cere-brales, con anterioridad a las llevadas a cabo por el renom-brado Profesor Cushing de Nueva York.El Dr. Alberti (1855-1913) fue el primer Director del Hospital y Asilo San Felipe, de la localidad de San Nicolás de los Arroyos; permaneció en ese cargo desde 1884 a 1895. De acuerdo a la obra “Historia del Hospital y Asilo San Felipe de San Nicolás de los Arroyos”, del historiador G. Santiago Chervo, publicada en 1994, el Doctor Alberti percibía por el desempeño de sus fun-ciones la cantidad de $ 50,00 mensuales de la moneda co-

DR. ALBERTO ALBERTI

Cultural

rriente, que se distinguía de esa forma, de los pesos oro.El recuerdo del Doctor Alberto Alberti tiene para mí, una signifi-cación muy especial, ya que tuve el honor de desempeñarme como Director del mismo Hospital donde el mencionado profesional realizara sus invest igaciones sobre las funciones cerebrales, labor investigativa que fue reco-nocida hace pocos años, por la Sociedad de Neurología de los Estados Unidos de Norte Amé-rica, al señalarlo como el verda-dero iniciador de las investiga-ciones en esta materia.

La investigación.El Doctor Alberti investigó las funciones cerebrales, a través de “gomas sifilíticas”, y fue quien

primero lo hizo en la historia de la medicina.Cabe recordar que: La plaga de la sífilis en aquél entonces (era pre-antibiótica) era un martirio sin solución. Todas las áreas de la anatomía humana eran afectadas en mayor o menor grado. Y entre las mujeres, más aún, debido a que las lesiones primarias, secun-darias y terciarias cursaban sin evidencias notables, hasta llegar a las cuaternarias, con dos formas de pres entaciones indepen-dientes y/o sucesivas. Una de las presentaciones eran las “gomas”, la otra, tenebrosa también, la “parálisis general progresiva” (las “gomas sifilíticas” las descri-bimos como ulceraciones en cual-quier zona de la anatomía).Las lesiones, que en los hombres

Ref: a) G. Santiago Chervo: “Hospital y Asilo San Felipe .Pma. parte. Pgs 136/137 San Nicolás de los Arroyos l994 b) Dres. Mario F. Crocco y Norberto C.Contreras “La semana médica” Bs. As. n° 5378 T.168 n° 9 Abril 1986 pág. 223.Nota de Dirección: El Dr. Alberto Alberti nació en Aldeno, en la región del Alto Adige –norte de Italia- en 1855. Su obra fue plagiada por el inescrupuloso ayudante del investigador, hasta que finalmente la situación fue debidamente esclarecida y el Doctor Alberti, desagraviado.

eran evidentes, fueron tratadas con medicación agresiva, que aparejaba muchos inconve-nientes para los enfermos. Prácti-camente todas las medicaciones eran mercuriales, o en algunos casos, sales derivadas. No así en las mujeres, dado que las etapas primaria, secundaria y terciaria cursaban con muy pocos sínto-mas, que se suponían inespecífi-cos, y que por supuestos no eran tratadas.Alberti realizó en el Hospital y Asilo San Felipe el primer mapeo cerebral en el mundo. Durante ocho meses Alberti, mapeó con electricidad las diversas localiza-ciones de las funciones cerebrales en una paciente afectada por sífilis, contando para ello con su explícito consentimiento. Los resultados obtenidos habrían de beneficiar a innumerables pa-cientes neurológicos en todo el mundo

Tomás A. Harman

Médico.

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Cultural

Debo confesar, que siento una particular inclinación por las largas caminatas urbanas. Ello me permite detenerme en los matices diferenciales, en especial, cuando el acaso me lleva a recorrer las distintas ciudades del interior de nuestro país. Los estilos arquitectónicos, los hábitos urbanos de sus pobladores, el modo de conducir vehículos etc. Todo es motivo de señalado interés. Me complace contemplar los espacios públicos, el arbolado de calles y plazas, el cuidado del mobiliario urbano y la estética paisajista de los parques.Sin otras preocupaciones que las gastronómicas, incentivadas por el descubrimiento de un excelente restaurante sirio-libanés, deambulaba con atención flotante por una muy cuidada capital del oeste cuyano. Sin proponérmelo, recorría distraídamente una zona de estudios jurídicos. No pude evitar redoblar mi atención en el contorno, y detecté los variados frentes de los inmuebles afectados al ejercicio profesional.Como es habitual en estos casos, se anunciaba, a través de las inscripciones en lustradas chapas de bronce, las especialidades que abordaban sus titulares y los nombres de los abogados más representativos, tal vez los dueños del buffet, y el de los colegas asociados.Todo ello, debo reconocer, en un marco de solemnidad austera, propia de los estudios tradicionales. Casi de rondón me asaltó una profunda nostalgia por el ejercicio activo de tan noble actividad y el deseo, irrealizable por cierto, de incursionar nuevamente en las lides tribunalicias.Inmerso en tales ensoñaciones, y continuando con la caminata emprendida, advierto de soslayo, una importante placa marmórea, adosada al lado de la puerta de ingreso de un importante estudio jurídico.Me llamó la atención, porque a diferencia de lo que se verifica v.g. en nuestra ciudad de La Plata, el referido estudio ostentaba un nombre de fantasía. Fue un descubrimiento infrecuente, atento que en estas latitudes no solo no se acostumbra a emplear

nominaciones ingeniosas, sino que además, podrían estar en tela de juicio.Ahora bien, el buffet de los colegas se llamaba “Estudio Jurídico San Expedito”. Nada más visualizar tal denominación, y un cúmulo de representaciones e ideas asociadas, me asaltaron inesperadamente.Comencé por preocuparme y a temer profundamente por la suerte de los restantes colegas de aquel barrio abogadil, que ni siquiera tuvieron imaginación suficiente para intitular sus estudios jurídicos con alguna invocación ingeniosa. De otro modo, nunca quedarían rezagados, como supuse, en la ardua tarea de capturar clientes.San Expedito me parecía un imán imbatible. Recordaba por acaso, a los jubilados que peregrinan con paciencia franciscana, que se cumplan las sentencias del caso “Badaro”. En los operarios despedidos que aguardan con ansiedad la finalización de los interminables litigios del fuero laboral, en los trámites sucesorios, donde los enconados litigios entre los causahabientes, los retardan “sine die”.Pero, a diferencia, con la invocación de tan poderoso valedor, sin temor a equivocarme concluí, que todos los trámites asumidos por aquel estudio, transitarían carriles velocísimos, y resolverse con prontitud. Nunca más la burocracia retardataria podría meter baza.Nunca más, tramitaciones demoradas, tampoco contrariedades judiciales inesperadas y al acecho, porque el numen invocado es también el abogado de las causas perdidas.Seguí mi camino y advertí en los rostros apesadumbrados de los abogados y sus clientes, que se filtraban por los cristales enturbiados de las ventanas de los estudios, preocupaciones profundas. Entonces me di cuenta, que el competidor más favorecido por el hado, resultaba inalcanzable.

M.C.M.

LA INVENTIVA DE LOS

COLEGAS

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os meses que se avecinan son Lpropicio s pa ra r e co rda r algunos aspectos anecdó-

ticos relacionados con la gesta independentista. Recordemos que el próximo 9 de Julio del año en curso, se cumplen doscientos años de la Declaración de la Independen-cia; pero esta vez, nos detendremos en los primeros días del mes de diciembre de 1810. Poco tiempo después de producida la revolución de mayo, el secretario de la Primera Junta, don Mariano Moreno, publicó en la Gaceta de Buenos Aires el recordado Decreto de Supresión de Honores.

Supresión de Honores.Consta de un extenso encabeza-miento y de dieciséis artículos. Sucintamente determina que los funcionarios de la Junta deben tener un trato igualitario, de modo que se suprimen priv ilegios, escoltas, boatos, ceremonias en definitiva, que fueron heredadas del proto-colo virreinal.Pero, los artículos 8° y 9° son parti-cularmente severos y esclarece-dores de una situación conflictiva que desde luego precede a su publi-cación y que desembocó en el enfrentamiento ent re Cornelio

Saavedra y Mariano Moreno. En síntesis se prohíbe: “… todo brin-dis, vivas o aclamaciones públicas en favor de individuos particulares de la Junta, porque si estos son justos vivirán en el corazón de los ciudadanos”. Se aclara también que toda persona que cometa tales delitos será desterrada por seis años. Luego, acomete contra las esposas de los funcionarios, las que no recibirán ningún honor especial. Finalmente determina que queda concluido todo ceremonial de la Iglesia con las autoridades civiles:.. “estas no concurren al templo a

recibir inciensos sino a tributar al Ser Supremo…”.

Antecedentes.Con fecha 2 de Diciembre de 1810 llega a Buenos Aires el capitán Roque Tollo, cubierto de polvo y con su caballo casi exánime, pro-ducto de una larga cabalgata. El oficial venía del Alto Perú a mar-chas forzadas, para anunciar a las autoridades de la Primera Junta, la victoria de Suipacha. Se dirige al Fuerte y entrega al don Cornelio Saavedra la bandera arrebatada al enemigo derrotado.El Presidente de la Junta, sin perder un instante, tomando en sus manos la enseña, sale al balcón y levantán-dola en alto la exhibe ante el pueblo reunido en la plaza. El júbilo es indes cr ipt ible, esp ecia lmente porque refuerza la idea del triunfo revolucionario. Se suceden los festejos y el Cabildo es iluminado durante tres noches.Por ese motivo, los Oficiales del Cuerpo de Patricios resuelven dar una cena para festejar la victoria de las armas. Especialmente invitado fue don Cornelio Saavedra y su esposa doña Saturnina Otárola y Ribero.Mariano Moreno se presenta en el

Episodios vinculados con la Revolución de Mayo

Cultural

cuartel para asistir a la cena de homenaje, pero, aparentemente, el centinela que controlaba el acceso no lo reconoce y le niega la entrada.Moreno, sumamente enojado se vuelve a su domicilio, y allí recibe el informe de un evento sucedido en la f ies t a, que decididamente lo impulsa a redactar el famoso decreto. Claramente representa un desafío al Presidente de la Junta.

Versión de Cornelio Saavedra.En sus Memorias, Cornelio Saa-vedra narra el episodio desencade-nante de la reacción del Secretario de la Junta.“….la oficialidad de Patricios….dio una lucida función en su cuartel; fui convidado a ella con mi familia, y uno de los concurrentes cargado de vino y licores hizo varios brindis en que me aplaudía dándome el título de Emperador, Rey etc. En una de las fuentes del ramillete de dulces, había una corona de azú-car: uno de los oficiales obsequió con ella a mi mujer y esta la pasó a mí. Un jovencito que escribía en la Secretaría de Moreno refirió este hecho a su protector, pero válgame Dios ¡qué importancia, que bulto, se dio a esta bobada! Se propaló

intentándose aquella reunión para coronarme yo de Monarca de América….”

El famoso Decreto.Al día siguiente del sarao, Moreno eleva a consideración de la Junta el texto proyectado. Se trata en rea-lidad de un ataque al Presidente, eligiendo como excusa el brindis en honor de Saavedra. Este, sin formular objeción alguna estampa su firma al pie del decreto.

La Junta Grande.De a lguna manera, el hecho

narrado preanuncia la derrota final de Moreno. Fue el Deán Funes, en representación de sus compañeros del interior, quien plantea que se reconozca el derecho de los repre-sentantes de las provincias a parti-cipar el gobierno.Se oponen Juan José Paso y Mariano Moreno. Este últ imo declama que está dispuesto a acatar lo que resuelva la mayoría, puntua-lizando seguidamente que renuncia al cargo.Incorporados los diputados de las provincias a la Junta, se decide i nme d iat a ment e r e cha z a r la renuncia elevada por el Secretario de Gobierno.Moreno, en efecto, mantiene sus funciones, pero su preponderancia está terminada. No obstante, elige alejarse del gobierno y solicita ser designado enviado de la Junta, ante el Gobierno británico. El 24 de diciembre se le otorga la represen-tación requerida y al poco tiempo se embarca en la fragata inglesa La Fama.Como sabemos, muere durante la travesía el 4 de marzo de 1811; los hados adversos le impidieron cum-plir sus propósitos.

Mario Maggi

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Cultural

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PoemasCUAN CUAN ANCHO Y PROFUNDO ES NUESTRO MUNDOCUAN POCO ES LO QUE SABEMOS DEL ÉLCUAN CIERTO RESULTA”SÓLO SÉ QUE NADA SÉ”CUAN POBRE EL CONOCIMIENTO DEL SER

PASAMOS TODA NUESTRA VIDA Y TERMINASIN CONOCER EL PLANETA QUE HABITAMOSINCLUSO DE NUESTRA HERMOSA ARGENTINA,VIAJANDO AL EXTERIOR NOS ENCONTRAMOS

SIN SABER MAS NADA DEL ETERNO CAMINANTE QUE RECORRE TODOS LOS CAMINOS SIN CESARPARA NO LLEGAR JAMAS A NINGUNA PARTENI PODER RETORNAR A SU PRIMER LUGAR .-

Conque - Con que - Con qué

Conque = consecuencia: Estudió mucho, conque aprobará.-“así que” : Conque vamos a Europa.-Con que = Con el cual: Este es el auto con que se hará el viajeCon qué = Se ignora con qué lo hará o ¿Con qué lo hará?

Apartamento = apartamiento = departamento.-

“Apretada síntesis” - “apretada” está demás.-

Curiosidades de nuestro idioma

CONFIANZA

Historias que van y vienen, las escuché en el estudio,de quienes en consulta iban.En el living de mi casa,con café y una ginebra,o en la cocina soleadacon mate amargo y caliente,de amigos desconsoladosque en mí apoyo buscaban.Alguna vez fui acertaday encontré una solución,otras veces escuchélo que en confianza decían yen un abrazo apretadoconsolé algún corazón.

Victoria E. Martínez

HÉCTOR MARIO NÚÑEZ

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TurismoAsociación Colonia de Vacaciones del Personal del Banco de la Provincia de Buenos Aires

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