Los escritores españoles del Realismo rechazan el estricto determinismo biológico del Naturalismo francés que ve el hombre como un ser marcado por el entorno social y por la herencia biológica, reivindicando la importancia del libre albedrío.

Juan Valera (1824-1905) Nació en Córdoba, fue un hombre culto y refinado, estudió Filosofía y Derecho en Granada, tuvo funciones en varias embajadas, y ingresó en la Real Academia de la Lengua. Según Valera la novela debe reflejar como debería ser la vida. Su finalidad es la belleza en el estilo, en el lenguaje fluido y elegante que acuerda los rasgos precedentes. Los ambientes en sus novelas son realistas, con personajes verosímiles, especialmente aquellos femeninos en los que predominan los conflictos amorosos y lo sentimientos. Su obra cumbre es Pepita Jiménez 1874, en forma epistolar trata el amor del seminarista Luis Vargas por Pepita Jiménez que confesa a través de la letras que escribe a su tío, que permite le matrimonio de los jóvenes.

Emilia Pardo Bazán (1851-1921) Profesora, periodista, critica literaria nació en La Coruña de familia noble y liberal, viajo mucho en su vida, conoció a Zola con el que estuvo en contraste por la idea del Naturalismo francés en Una cuestión palpitante (1883), y a Hugo. Participo en numerosas tertulias culturales, fue la primera mujer a presidir la Sección de Literatura del Ateneo de Madrid (1906), y también la primera a ocupar una cátedra universitaria, y sobre todo emprendió una campaña por los derechos de las mujeres. Su obra cumbre es Los Pazos de Ulloa (1886), en la que muestra su enlace con la Galicia, el personaje de esta no el es Julián un sacerdote que se encarga de la administración y de la educación de Perucho hijo de un marqués y de su criada Sabel. Siguiendo el consejo del sacerdote se casa con su prima Nucha con la que tendrá una niña. Al enfermar de su mujer y ante l falta de un heredo varón reanuda las relaciones con Sabel mientras Nucha es acusada de adulterio por parte de su marido, y Julián se marcha de casa. Perucho vive a casa del marques como un señorito y su hermanastra como una sirvienta.

Benito Pérez Galdós (1843-1920) Figura cumbre del siglo XIX, nació en las actuales Canarias, se trasladó a Madrid para realizar sus estudios de Derecho, pero muy pronto abandonó para dedicarse a la literatura. Viajó a París donde conoció a Balzac e descubrió a los grande novelistas realistas. Participó activamente en la vida política y cultural de España, ocupo el primer cargo en el Partido Liberal, luego en el Partido Republicano. Fue miembro de la Real Academia Española, e también fue en 1912 candidato al premio Nobel de Literatura. Tuvo amor por la historia, creando a través de Episodios Nacionales (visión de la España del siglo XIX, desde la Guerra de Independencia 1873-1874 hasta destronamiento de Isabel II ) un nuevo tipo de novel histórica que destaca por el esfuerzo de documentación y por el propósito de objetividad, utilizando como fuentes la tradición oral (típica del Medioevo) los recuerdos, los documentos escritos como publicaciones, las mapas topográficas y los textos históricos. Su interés por la política lo llevo a publicar Novelas de Tesis, novel de tipo ideológica que critica los progresistas en el enfrentamiento con los tradicionalistas (así mismo Galdós). Ataca también la intolerancia política y religiosa (defiende la religión) , origen del fanatismo y de la infelicidad humana. Como escritor realista considera a la novela, como género más apropiado para reflejar la realidad, es la imagen de la vida que reproduce los caracteres humanos, las pasiones, la debilidades, todo lo que constituye el hombre espiritual y físico, todo lo que nos rodea: pero sin olvidar que en la novela debe existir un fiel de balanza entre exactitud y belleza de la reproducción. Galdós profundiza en la psicología humana, por eso su técnica de descripción es muy estudiada, él cría un amor por el cotidiano, una profunda sensibilidad por la condición humana, que le permite de realizar al mejor el profil psicológico de los personajes: vivos, dotados de increíble humanidad, que despiertan ternura y comprensión en el lector por sus condiciones: con su asombrosa capacidad de descripción que

acerca a la de los escritores realistas europeos, recrea también el ambiente bohemio de Madrid reflejadlo con exactitud a través de las calles, cafés, los barrios. Los personajes pertenecen a todas las clases sociales burgueses, nobles en decadencia, o arruinados, clérigos,mendigos y se pueden dos guiar gracias al lenguaje que evidencia una grandísima variedad de registro, sobretodo destaca el Jerga, el slang, lenguaje cotidiano, popular: su empleo preferencial en sus novelas le procuró muchas críticas por el uso del "vulgar". En sus últimos años, como muchos escritores, se inclina hacia los problemas morales y espirituales, a través del análisis de los personajes de este género de novela habla también de roo lemas como la corrupción. El estilo en sus novelas es rico, tiene el predominó del narro tour omnisciente, y interviene opinando e influenciando al lector con comentarios.

Sin duda, la novela más conocida de Galdós es Fortunata y Jacinta (1886-7) una historia que se desarrolla en los años 1865-1876, tiene como personaje principal el típico Don Juan, Juanito hijo de la aristocrática familia Santa Cruz, que se enamora de Fortunata una joven de origen humilde, pero tiene que terminar su romance con ella, porque la madre decide de casar Juan con Jacinta, su sobrina. Fortunata conoce a Maxi Rubín con el que se casa. Tiempo después, Juan y Fortunata se vuelven a encontrar y reanudan sus relaciones de las que nace un niño, mientras Jacinta no logra a quedarse embarazada llega a conocer a Fortunata que comparte sus condiciones, su sufrimientos: la joven humilde por piedad Antes de morir por una grave enfermedad entrega el hijo a Jacinta para darle una posibilidad de rescate y de felicidad.

Repaso: El Don Juan Este personaje nace en el 1600 con Tirso de Molina. Don Juan suele ser un hombre de origen noble, esta caracterizado por una conciencia impura dedicada a conquistar a las mujeres con el engaño, por eso es traidor, falso mentiroso, pues que abandona a sus "conquistas" para conseguir otras nuevas. Un día llega de matar al padre de una de sus amantes, Don Gonzalo el comendador de Calatrava, invita el difunto(estatua del sepulcro "el convidado de piedra" a cenar, que cobra vida y pregunta al joven de comer en la capilla: aquí tras la cena el convidado de piedra toma la mano del Don Juan y lo conduce al infierno. El Don Juan no logra ni a salvar su alma ni a redimir sus pecados, aunque el pensaba de tener mucho tiempo para arrepentirse de sus pecados y injusticias.