Quebranto y gozo

Sara Sanz

Tus labios y mi boca

La senda azul de tus labios

desliza estrellas de besos,

aumentando los excesos

de los apetitos sabios.

Nos fundimos como arrabios

en olas del movimiento.

Ya lejos del pensamiento,

y en huellas de la locura,

mi boca es la travesura

que se desboca en tu aliento.

Amor sublime

Cálido abrazo donde me mezo,

roble firme, tallo fresco.

Dulce sueño donde amanezco,

porte amable y principesco.

Espasmo trémulo ¡Qué delicia!

Amor sublime, que propicia,

la lágrima, el pétalo y la caricia.

Soneto con encanto

Al crear un soneto con encanto

basta quedar absorta en tu cariño,

portar el entusiasmo igual que un niño

para que suene bello como un canto.

Pensaré las palabras y entretanto,

formaré con tus gracias un aliño,

crearé un desenlace con un guiño,

igual que hace la flor al amaranto.

Tratar de condensar tanta delicia

es afán, ciertamente, merecido

que no siempre al final te hace justicia.

En suma es un propósito atrevido

que requiere mayúscula pericia,

y del que airosa espero haber salido.

Soneto triste

Mi espíritu zozobra en amargura.

Sus calles grises, víctimas desiertas,

son los vestigios de ilusiones muertas

por tu partida trágica y oscura.

Mi vida se partió como cesura.

La soledad, reina de penas ciertas,

me velará en las noches más despiertas.

Las estrellas serán mi sepultura.

Los días serán náufragos del viento

ahogando dolor y sufrimiento

en arena de olvido prisionera.

La costumbre de ser apasionado,

de tu recuerdo, noble enamorado,

será siempre mi patria y mi bandera.

Mendigo

Banco en el parque

amanece de nuevo

soledad de escarcha

manos desnudas

gelidez en los huesos

hueco en el hambre

tumba de sueños,

la esperanza perdida

grita en silencio

Estaciones

Pájaros trinan

ya despiertan las flores

es primavera

La luz estalla

rebosante de frutos

viene el verano

Duerme el estío

tapiza de amarillo

pincel de otoño.

Abriga el alma

talla un manto de nieve

el frío invierno.

Ovillejo

¿Para mis males la cura?

dulzura

¿Cuál ha sido mi suerte?

quererte

¿Y la cosa más querida?

tu vida

Aunque me sienta vencida

la esperanza es mi fortuna,

concluye que ha sido una

dulzura quererte en vida.

Navegar

Celebremos la vida y la muerte.

Naveguemos juntos, tu, yo y el cielo.

Dejémonos llevar por el viento,

las olas del amor y el miedo.

Déjate inundar por mi ternura.

Naufraga en mis brazos

y resucita mi cuerpo.

Derrite con tus ansias mi hielo.

Quema tus velas en mi fuego.

Amarra mi amor con la fuerza de tu deseo.

Amor

Abre el corazón

para sentir intenso,

cierra los ojos

No digas nada

deja que hablen las manos

...dímelo todo

Derroche, pasión

magia, vida y dolor

que viene el amor!

Pasión

Toma mi mar cariño mío,

escala montañas de suspiros.

Doma a la yegua estremecida

con el vaivén de tu latido.

Dame la lava enfebrecida,

que yo calmaré tus delirios.

Después, la paz de nuestro abrazo,

será nube de cielo dormido.

Si tú..

Si tú estás cerca,

gaviota en tus manos

tejiendo esperanzas,

alma despierta.

Si tú estás lejos,

corazón perdido,

luna rota,

sueños muertos.

Si tú estás cerca,

savia que brota,

árbol frondoso,

fruta abierta.

Si tú estás lejos,

sonrisa de mueca,

felicidad fingida,

arena y desierto.

Vino el amor

De repente aparece en el camino;

los poros van repletos de esperanza;

los vinos brindan cantos de confianza,

es un golpe de suerte y es divino.

Pirueta caprichosa del destino,

armonía de luz Cupido lanza,

todos juntos celebran con la danza,

es un sueño, un inquieto torbellino.

Tronó mi corazón otro latido.

Vino el amor, mudando las camisas;

dando sentido a todo lo vivido.

Brotaron manantiales de sonrisas;

soplaron al hastío nuevas brisas;

quedaron penas negras en olvido.

Quebranto y gozo

Iba deambulando aquella noche;

la fría carretera me llevaba.

Preámbulo de fuego y de derroche,

tu mirada prendía y me arrastraba.

Tomamos el más próspero camino;

supimos del amor inesperado;

juntamos corazón, alma y destino;

y el quebranto por gozo fue trocado.

Acróstico amor

Amor que derriba las fronteras.

Mensajero del corazón apasionado.

Orfebre en sentimientos engarzado.

Rey de los afectos humanos.

Arquitecto de una vida deliciosa.

Motor de artesanía cincelada.

Órbita celeste de alas livianas.

Relámpago azul en noche estrellada.

Amigo de pasiones ardientes.

Mesías de angustias dolientes

Óvolo en destellos brillantes.

Rocío entre sábanas delirantes.

Sara Sanz ©