Jim: Zits nació en el porche de una cabaña de Sedona,en Arizona, en abril de 1996. Ya en aquella primeranoche en la que Jerry y yo nos sentamos para comentary bocetar los personajes, quedó claro que Jeremy y sumadre estarían en el centro de todas las situaciones.

Jerry: Aunque se hayan creado, descartado, reformado orenacido personajes, el tema central de este cómic hapermanecido inalterable. Los adolescentes te vuelven loco.

Jim: He criado a dos hijos por mi cuenta y hace cincoaños me encontré formando una nueva familia, con treshijastros más... ¡y todos pasaron la adolescencia a la vez!Aparqué mi mesa de dibujo en nuestra sala de estar,como historietista incrustado, y empecé a escribir lo queveía y oía. Jerry y yo vivimos en distintas partes del paíspero hablamos a diario. No sé cómo lo hace, perointerpreta mis notas de campo, las mezcla con altas dosisde su propia magia y las convierte en oro.

Jerry: De todos los temas que exploramos en Zits, la relaciónentre «Jeremy y mamá» es la que más disfruto guionizando.

Escucho sus voces con mayor claridad que el resto de lospersonajes. El complejo tira y afloja mental y emocional entre una

madre y su hijo es, hasta el momento, una fuente inagotable de humor.Desde la mitosis celular hasta tener que sortear zapatillas de deportegitante tiradas en el salón, nos encontramos con un complejo vínculode amor, tenso, explosivo e innegable, que se disfruta mejor con una

saludable dosis de perspectiva y buen humor. En cierto modo, loúnico que hacemos es dejar claro a nuestros lectores que

no están solos. Si sirve de algo, no hay de qué. Disfrutaddel libro.

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¡He vuelto!

¿va todo bien?

He dicHo:“He vuelto”.

¡gracias al cielo! ¡me estabaemPezando a Preguntar sisería caPaz de sobrevivir!

¡el aisla-miento!

¡el sufri-miento! ¡la soledad!

He Pasado Hambre, y cuando noHe Podido averiguar la manera

de abrir el frigorífico meHa entrado el Pánico. ¡Ha

faltado Po-co Para queme bebiera

mi ProPiaorina!

¡Ha sidoHorrible!

¡Heaguantado graciasa la fe!

Por una vezagradeceríavolver a casa

sin que me acri-billaran con

sarcasmos.

ni que fueratan sencillo...

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¿quÉ demonios...? si quieres Husmear en la HabitaciÓnde tu HiJo adolescente, es meJorque no deJes Huellas dactilares.

¿“reglas deldecoro”? es la idea de mi

madre Para aliviarParte de la tensiÓn

que eXiste entrenosotros.

Jo, tío.

¿quÉ talva?

muy bien.

Hace unasemana que no

Hablamos.

cuidado, mamá, esos susPirostan Profundos Pueden

Provocarte una Hernia,¿recuerdas?

de HecHo,son los Platosde la semana

Pasada.

¡gracias! mi vidaresulta mucHo

más sencilla cuandono tengo que

estarte siemPreencima, como

la semanaPasada.

¡Has Puesto enel fregadero losPlatos sucios detu HabitaciÓn!

¡Jeremy!

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en todo el rato que Heestado Hablando con tu

abuela, que te mandabesos, Por cierto, entodo este rato no HadeJado de Picarme eldedo gordo del Pie.

entonces...

...me He acordado de quea tu tía lizzie le PasÓ

eXactamente lo mismo y,vaya, Hablando de Pies,tus zaPatillas están que

dan Pena. Podríamosacercarnos a la zaPa-tería y... ¡anda! ¡se me

Ha Pasado el cruce!

Jerry: Creo que algunas de las ideas másacertadas que hemos tenido contienenmalabarismos visuales que el cómic sabeejecutar mejor que cualquier otramanifestación artística. Un dibujo comoel de la página siguiente te introduce en elinterior de la cabeza de Jeremy (y de sumadre también, supongo) más rápido ymejor que diez páginas de diálogo.

15

¿Por quÉ no señalizarán meJor las callesen esta ciudad? bueno, tambiÉn tengo Parte de

culPa, suPongo, aunque si no me Picara tantoel dedo gordo seguro que

no me Habría Pasado.

claro, que tu Padrediría que es Porque Hablo

demasiado mientrasconduzco.

Por cierto,me Ha dicHo

que te recuer-de que...