Preseminario - Propuesta

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Universidad Sergio Arboleda Escuela de Filosofía y Humanidades Preseminario Profesora: Mónica Calero Manzano Miguel Ángel Zambrano Zambrano. Bogotá, D.C., 13 de abril de 2015 ELECCIÓN Y JUSTIFICACIÓN DE LA PROPUESTA Área del problema: El amor. Tema General: La dificultad de amar del hombre. Subtema: El egoísmo fuente principal de la dificultad de amar. Tema específico: La dificultad de amar del hombre, a causa del egoísmo. Título provisional: La dificultad de amar del hombre y su incidencia en el medio social desde la perspectiva de Josef Pieper. Justificación: La presente justificación versa sobre la dificultad de amar que se da en el hombre, causa en la mayoría de veces por un amor propio, esto es, un amor desordenado solo pensando en sí mismo y en su comodidad. En primer lugar procedo a definir según Josef Pieper el término amor desde su significado del latín y del griego: Latín: Tiene media docena de palabras para designar el amor. 1. Amor: Es el acento sobre el cual se carga la entonación es precisamente el de sentirse arrebatado y el de ser un incendio que se cebe hasta en lo corporal. 2. Caritas: Por aquello que estamos dispuestos a pagar un alto precio, y de manera especial con Dios. 3. Pietas: Esencia del amor que hoy no es considerado como natural. (piedad) 4. Dilectio: Es indispensable para expresar la calidad personal y espiritual del amor humano. (dilección) 1

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Universidad Sergio ArboledaEscuela de Filosofa y HumanidadesPreseminarioProfesora: Mnica Calero Manzano Miguel ngel Zambrano Zambrano.Bogot, D.C., 13 de abril de 2015

ELECCIN Y JUSTIFICACIN DE LA PROPUESTA rea del problema: El amor. Tema General: La dificultad de amar del hombre. Subtema:El egosmo fuente principal de la dificultad de amar. Tema especfico: La dificultad de amar del hombre, a causa del egosmo. Ttulo provisional:La dificultad de amar del hombre y su incidencia en el medio social desde la perspectiva de Josef Pieper. Justificacin:La presente justificacin versa sobre la dificultad de amar que se da en el hombre, causa en la mayora de veces por un amor propio, esto es, un amor desordenado solo pensando en s mismo y en su comodidad. En primer lugar procedo a definir segn Josef Pieper el trmino amor desde su significado del latn y del griego:Latn:Tiene media docena de palabras para designar el amor.1. Amor: Es el acento sobre el cual se carga la entonacin es precisamente el de sentirse arrebatado y el de ser un incendio que se cebe hasta en lo corporal.2. Caritas: Por aquello que estamos dispuestos a pagar un alto precio, y de manera especial con Dios.3. Pietas: Esencia del amor que hoy no es considerado como natural. (piedad)4. Dilectio: Es indispensable para expresar la calidad personal y espiritual del amor humano. (dileccin)5. Affectio: Pone de manifiesto un nuevo elemento significativo del amor. El amor es, y quiz ms que nada, algo que nos sobreviene.6. Studium: Inclinacin amorosa, es decir, la voluntad de servicio o de estar a disposicin de alguien.Santo Toms dice que la palabra amor abarca tanto lo sensual como lo anmico, lo espiritual como lo sobrenatural.San Agustn afirma que cuando se emplean las palabras amor, dileccin y caridad, se dice, en el fondo, lo mismo.Griego:1. Eros () : Ansia de poseer, esto es, un amor de naturaleza egocntrica y poseedora.Palabra de origen griego.2. Phila: Amor de Amistad, es decir, un sentimiento de solidaridad, no slo entre amigos, sino tambin entre casados, compatriotas y entre todas las personas de las que se predica.3. gape (): Ansia de darse, puesto en otros trminos, es una concepcin original y bsica del cristianismo. Es un amor desinteresado y desprendido casi en un sentido absoluto, el amor que se da, en lugar de imponerse , y que no quiere ganar la vida, sino que se arriesga para perderla.Ahora paso a explicar brevemente el concepto de amor propio. El amor propio recto, ordenado es el que nos indica que debemos amarnos, desearnos el bien, s, tenemos que amarnos nosotros mismos, porque la aspiracin y la tendencia a la felicidad estn inscritas en nuestra naturaleza. Se puede desear para uno mismo los bienes naturales: talento, ciencia, integridad. Podemos amar tambin nuestro cuerpo, velar por su salud y hermosura, pero a condicin siempre de que la principal solicitud sea por el alma, por adquirir las virtudes y por conseguir que nos dirija hacia nuestro telos. Pero como hay un amor propio ordenado, tambin encontramos en nuestros das un amor as mismo desordenado, este amor nos lo encontramos en todos los caminos y todos los senderos, da tras da y hora tras hora, bajo mil formas diversas. Este amor as mismo desordenado es la fuerza que mueve el mundo. Todos procuran sus intereses, dice san Pablo, todos van a lo suyo, todos buscan su provecho: por lo tanto somos unos egostas. Este desorden en el amor hace al hombre incapaz de amar, ya que es la raz secreta y profunda de los males que hacen a las personas continuamente infelices, por otro lado, es la madre fecunda de todos los grandes crmenes de la humanidad, de las injusticias que claman venganza al cielo y de las que, la historia es rica en ejemplos; de opresiones, de las faltas de caridad con el prjimo, de las enemistades y guerras, de la destruccin de nuestra felicidad y la de los dems (Baur, 1946, pp. 107, 108). Lo que deseo demostrar es la falta de amor que se da en el hombre por cuestin de su egosmo, de una manera muy atroz que en la mayora de veces llega al punto de destruir al otro, y hasta acabar con su vida. Pues el motivo de esta propuesta de investigacin gira alrededor de los problemas que vivimos actualmente, por ejemplo, la indiferencia hacia el sufrimiento de los dems (un da en la esquina de la Sergio un muchacho, yo le calculo unos veinte aos, este joven se encontraba en silla de ruedas y tena un problema para pasar la calle se haba quedado preso en unos baches, el intentaba salir de ah pero no poda, a su lado pasaban personas elegantes de saco y corbata, de seguro profesionales, estudiantes de la Sergio, pero nadie le ayudaba o por lo menos no le preguntaban si necesitaba ayuda, claro como no haba una cmara de televisin ah, pues nadie le tomaba importancia, y eso hace pensar que somos indiferentes mientras a m no me pase, que pena con l)[footnoteRef:1],por otro lado, el odio que de una u otra manera se manifiesta en la mayora de las sociedades del mundo, por ejemplo, la persecucin de cristianos en medio Oriente por este grupo terrorista islmico, los problemas de seguridad, etc.; ante estas situaciones en el hombre se denota esa dificultad de amar de darse a los dems sin importar lo que fuese. [1: Comentario personal.]

Objetivo provisional:Lo que busco con esta propuesta de investigacin es que tomemos conciencia de esa gran capacidad de amarnos a nosotros mismos, como a los dems pero de una manera en cual se tenga como centro el bien comn y no los propios intereses que manchan esa capacidad de amar. Esta frase nos ayudara mucho a pensar: El amor es el regalo esencial, en el sentido de que es el darse total del amante al amado: quien se guarda, quien no se da, no est amando, y por lo tanto no se cumple como amante, no es capaz de realizar la actividad ms alta para los seres que piensan y quieren. (Stork, 1998, p. 63) Tipo de investigacin:Cuantitativa y cualitativa.

Posibles colaboradores:Dra. Liliana Irizar Docente de la Facultad de Filosofa y HumanidadesDr. Javier Gonzlez Docente de la Facultad de Filosofa y Humanidades

Bibliografa provisional:Lucas, R. (2008). Horizonte Vertical. Sentido y significado de la persona humana. Madrid: BAC. pp 280; 282. Lucas, R. (2008). El Hombre espritu encarnado. Compendio de Antropologa Filosfica. Salamanca: Ediciones Sgueme. pp 184; 185, 241; 248. De Aquino, T. (1959). Suma Teolgica. Tomo I. Madrid: BAC. pp 726; 738.De Aquino, T. (1954). Suma Teolgica. Tomo IV. Madrid: BAC. pp 718; 731.De Aquino, T. (2001). Comentario a la tica de Nicmaco de Aristteles. Pamplona: EUNSA. pp 449; 465.Pieper, J. (1976). Las virtudes fundamentales. Madrid. Ediciones Rialp, S. A. pp 414; 551. Ypez & Aranguren. (1998). Fundamentos de Antropologa. Un ideal de la excelencia humana. Pamplona: EUNSA. pp 140; 156. Clive, L. (2006). Los cuatro amores. Nerw York: Ediciones Rayo. pp 129; 155. Benedicto XVI. Deus Caritas Est. Roma: 25 de diciembre 2005. Recuperado de http://www.vatican.va/phome_sp.htm Espinal Juliana. Nietzsche y Proust: El amor como expresin de la voluntad de poder. Pontificia Universidad Javeriana. Recuperado http://www.javeriana.edu.co/cuadrantephi/sumario/articulos37.htm

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