POEMAS TODOISTAS

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POEMAS TODOISTAS. (Tomás Todo) ENTRE-VISTA: Pregunté aquella mañana, en medio del silencio: ¿Señor es usted “Palenquero de San Basilio”? Me miró, algo tembloroso, sudaba un poco, y dio al aire la siguiente respuesta: No Señor, mi nombre es Álvaro Puentes. REPORTE: Hoy sentado en mi oficina te pienso en medio del registro del reporte de este día. Te pienso, como al certificado no entregado. Te deseo, como la certificación positiva de quien contribuye a la verdad. Te necesito, como la valoración al reporte. Te siento, como el calor de mi oficina. Mientras tanto te escribo. Te entrevisto. Te reporto. Te valoro y al final del día te certifico de manera positiva. VALORACIÓN: Un camino que no conduce hacia ninguna parte.

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POEMAS TODOISTAS.

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Page 1: POEMAS TODOISTAS

POEMAS TODOISTAS. (Tomás Todo)

ENTRE-VISTA:

Pregunté aquella mañana, en medio del silencio:

¿Señor es usted “Palenquero de San Basilio”?

Me miró, algo tembloroso, sudaba un poco, y dio al aire la siguiente respuesta:

No Señor, mi nombre es Álvaro Puentes.

REPORTE:

Hoy

sentado en mi oficina

te pienso en medio del registro

del reporte de este día.Te pienso, como al certificado no entregado.

Te deseo, como la certificación positiva de quien contribuye a la verdad.

Te necesito, como la valoración al reporte.

Te siento, como el calor de mi oficina.

Mientras tanto te escribo.

Te entrevisto.

Te reporto.

Te valoro y al final del día te certifico de manera positiva.

VALORACIÓN:

Un camino que no conduce hacia ninguna parte.

Un cadáver en medio del camino.

Una mano empuñando un arma.

Un silencio.

Una voz que muere, mientras una persona se está alejando dejando atrás un río de sangre.

Page 2: POEMAS TODOISTAS

La insensibilidad de un país que ignora intencionalmente a sus muertos.

Un mundo que se desangra.

Un Hombre corre para empezar a olvidar que ha tenido que matar hace un segundo a su mejor amigo acusado de pertenecer al bando contrario.

Un ave canta el celebré himno fúnebre al cadáver recién abandonado por el hombre que corre entre el olvido y la culpa.

Una grabadora recoge la voz de la confesión seis años después.

Y yo en medio de mi insensible dolor, lanzo un hasta siempre al cadáver abandonado hace seis años en aquel lugar.

CONCEPTO: (a mi novia)

Te espero, en medio de la noche,

Cuando no creo que vengas.

Mientras tanto el búho nocturno

Me acompaña.

Ahora cuando somos dos,

en medio del contexto general de nuestra participación, te siento.

Te pienso, mientras rememoro los hechos conocidos por ti,

aquella tarde de nuestra despedida.

Sabes:

es triste que nuestro amor sea de aquellos construidos al margen de la Ley.

SUBSANACIÓN:

Ahora que mueres entre mis brazos,

Rozas levemente mis cabellos.

Mis lágrimas caen sobre tu rostro moribundo,

Mientras me despides con un beso.

La sangre de tu cuerpo cae hacia el sueño inmortal.

Page 3: POEMAS TODOISTAS

Amor, no fue mi culpa,

Simplemente jugamos a querernos.

Tú jugabas a ser la ley,

Mientras yo hacía mi papel de asesino.

Amor no fue mi culpa.

Pensé que el arma estaba descargada.

Ahora me dejas sólo.

Con mi alma ensangrentada.

Amor,

Amor,

Despierta.

MUNDIAL:

He estado en este día recorriendo varias calles de esta inhóspita ciudad.

He ido al cine, a los bares, a los restaurantes, a los centros comerciales.

He visto deambular personas vestidas con camisetas amarillas, rojas y blancas.

He visto hombres, mujeres, niños, niñas, gritar en medio de una euforia colectiva.

He visto en sus rostros sonrisas, lágrimas y algunos otros bastante inexpresivos.

Al final de la tarde, regreso a mi cuarto,

cierro la puerta que me une con el mundo exterior,

para anhelar en medio del silencio, que algún día no muy lejano,

podamos celebrar como país, algo más que ganar un partido en un mundial.

MI VIDA: 

El camino que conduce hacia el sendero de la vida, ha de llevarnos de manera irremediable al único suceso irreversible: "La muerte".

Page 4: POEMAS TODOISTAS

Esta auténtica mujer, vencerá a la vida de una forma u otra en cualquier momento. Mientras ello ocurre, repaso en mi mente mis primeras y más dolorosas derrotas, padecidas ante mujeres parecidas a la muerte. He de reconocer que a estas mujeres a quienes de una u otra forma quise, les construí un altar propio de este mundo, es decir un lugar pagano de solitaria adoración. Postrado ante su altar, terminé derrotado, como la vida ante la muerte misma. Diría en este caso, que terminé vencido ante la tentación de existir, exaltado en el reino del olvido, acosado por el error de vivir, auspiciado por el momento eterno de morir. Me dejé partir aquella tarde sin resentimiento alguno. Decidí entonces que a lo mejor, era preferible dejar mis pálidas letras, a aquellos a quienes consideré en algún momento mis amigos; dejar mi olvido nunca editado, a aquellos a quienes nunca pude odiar en debida forma, para que con mis libros realicen aquellos una enorme hoguera, gigantesca como su odio visceral hacia mí. A mi padre y mi madre los perdoné al día siguiente de haber nacido su craso error cometido, de traerme a este mundo de inhóspito de sentidos. A la chica de mis sueños que nunca llegó, le dejé mi peor pesadilla. A los críticos de mi vida, les dejé mis huesos para que hiciesen con ellos lo que dictaminara su innoble conciencia o para que actuando de acuerdo a su incomprensible consideración, dejen algo en mi memoria. A mí mismo me dejo partir hacia el ataúd, último vehículo de mi viaje en el sueño inmotivado de no existir más.

UN ASESINO:

Sí un asesino.

No menos que aquellos que a hurtadillas anhelan el espacio sombrío de su oficina para negociar en Wall Street, la muerte por inanición de miles de millones de personas.

De su mano sólo murió uno, igual eso ante los ojos norteamericanos no lo hace menos que un asesino. Su mirada dejará de existir. Su perdón aún no llega. Esperemos que Jesús o Judas se apiaden de su alma. No fue un asesino como todos los demás, sintió miedo de morir justo un segundo antes de que el último líquido del veneno letal llegara a su corazón. No lo conocí, no lo necesito hacer. Quizá solo me basta saber que será un humano como todos los que mueren y pronto moriremos. Sus pequeñas manchas en la piel son la huella de su arrepentimiento. Su mirada se despide de nosotros, como recordándonos que una injusticia jamás debe ser sancionada con otra justicia. Al final del camino, murió sólo, lleno de amor por la vida y de nostalgia por abandonar la cárcel en donde estuvo recluido por tantos años. Sus pocos amigos, la calle en la que nació, el abrazo de su padre y la sonrisa de sus hijas serán el último recuerdo que le acompañe. La justicia se ha pronunciado. La ciega mujer de espada fuerte y hermosas piernas nos enseña que según su criterio femenino, jamás quedará violación alguna cometida contra ella sin sancionar, así esta sea de un hombre loco de amor por ella. Te despido con estas breves palabras. Con un abrazo letal y con la nostalgia de no haberme podido despedir de ti.