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Jueves 23 de octubre de 2014 Cheka |  5 i’ Valle Riestra y Bibiana Melzi nos to capaz de enfrentarse a todo tabú  se llama amor. culino, nin o ni mor amor. ¿Casarnos? Sí, pero no fuera, queremos hacerlo en nuestro país; y en la lucha de ese derecho que nos corres- ponde estamos”. ELLAS Bibiana se reconoce les- biana; ‘Pachi’, bisexual. Bibiana salió alguna vez con un chico, pero no la pasó bien. A ‘Pachi’ le gustan los hombres, formaron parte de su historia afectiva, pero siente que su más grande afecto, que su amor más intenso, lo vivió con Bibiana. Bibiana la reconoce como el amor de su vida. Compartieron cotidia- nidad y casa durante ocho años. Luego, dolorosamente, se separaron. Son dos muje- res de carácter, pero nunca perdieron contacto. Después de haber estado cinco años separadas –y salir con otras personas–, hace dos meses decidieron retomar su rela- ción. Todavía no viven jun- tas. Bibiana dice que siem- pre fue muy deportista, muy atlética, un tanto tosca y masculina en sus gestos. “No me gustan los vestidos, pero sí el pelo largo y los tacos. Pero no creo en los roles ‘masculinos’ o ‘feme- ninos’. Yo soy una mujer a la que le gustan las mujeres. Tan simple como eso”. “El hogar tradicional, ese tipo familia Ingalls, donde hay papá y mamá e hijitos, es lo menos tradicional que existe. El 50% de los niños peruanos no vive con sus padres”, agrega ‘Pachi’. “Nosotros luchamos con- tra todo estereotipo, contra la hipocresía y la represión. Dentro de los homosexua- les, hay buenas y malas personas, librepensadores y homofóbicos, racistas y clasistas. Ser parte de una minoría no te hace especial. Por eso, si algo reclamamos es igualdad”, agregan. Y es verdad. ¿Cuál es la gran diferencia entre un homosexual y un hetero- sexual? Un acto íntimo, pri- vado: el sexo. ¿Por qué quien desea hacer el amor con una persona de su mismo sexo debe ser discrimi nado? ¿Por qué no se le reconoce dere- chos que, supuestamente, todos tenemos solo por el hecho de haber nacido? “En el Perú, los homo- sexuales vivimos algo peor que la discriminación: somos invisibles. Para las leyes peruanas, simple- mente no existimos. No hay ninguna norma, de ningún rango –salvo una ordenanza municipal dada por Susana Villarán–, que considere nuestra situa- ción. No se sabe cuántos somos, qué necesidades tenemos, qué sentimos. Para el INEI y su censo, simpleme nte no ex isti- mos: un absurdo total. Es más, tenemos un Poder Judicial homofóbico, que vincula prácticas delic- tivas con la condición homosexual. En térmi- nos legales, el Perú vive en el medioevo”. POR LA LIBERTAD “¿Por qué han decidido dar la cara, manifestar su condición de homo- sexuales en una socie- dad que discrimina?”, les preguntamos a Julio y a Óscar. “Porque, mos- trando nuestro amor, luchamos por la liber- tad, y porque no pode- mos caminar por la calle encerrados en una jaula llamada prejuicio” , res- ponden. Sí, su lucha debe ser la nuestra, porque es una pelea por la libertad. “En el Perú, los homosexuales vivimos algo peor que la discriminación: simplemente somos invisibles para la ley.  VIDA COTIDIANA. Pachi’ y Bibiana son pareja otra vez. Estuvieron separadas cinco años.  LIBERTAD CÉSAR FAJARDO

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  • Jueves 23 de octubre de 2014 Cheka | 5

    chi Valle Riestra y Bibiana Melzi nos iento capaz de enfrentarse a todo tabse se llama amor.

    asculino, ni femenino ni

    : amor

    amor. Casarnos? S, pero no fuera, queremos hacerlo en nuestro pas; y en la lucha de ese derecho que nos corres-ponde estamos.

    ELLASBibiana se reconoce les-biana; Pachi, bisexual. Bibiana sali alguna vez con un chico, pero no la pas bien. A Pachi le gustan los hombres, formaron parte de su historia afectiva, pero siente que su ms grande afecto, que su amor ms intenso, lo vivi con Bibiana. Bibiana la reconoce como el amor de su vida.

    Compartieron cotidia-nidad y casa durante ocho aos. Luego, dolorosamente, se separaron. Son dos muje-res de carcter, pero nunca perdieron contacto. Despus de haber estado cinco aos separadas y salir con otras personas, hace dos meses decidieron retomar su rela-cin. Todava no viven jun-tas.

    Bibiana dice que siem-pre fue muy deportista,

    muy atltica, un tanto tosca y masculina en sus gestos. No me gustan los vestidos, pero s el pelo largo y los tacos. Pero no creo en los roles masculinos o feme-ninos. Yo soy una mujer a la que le gustan las mujeres. Tan simple como eso.

    El hogar tradicional, ese tipo familia Ingalls, donde hay pap y mam e hijitos, es lo menos tradicional que existe. El 50% de los nios peruanos no vive con sus padres, agrega Pachi.

    Nosotros luchamos con-tra todo estereotipo, contra la hipocresa y la represin. Dentro de los homosexua-les, hay buenas y malas personas, librepensadores y homofbicos, racistas y clasistas. Ser parte de una minora no te hace especial. Por eso, si algo reclamamos es igualdad, agregan.

    Y es verdad. Cul es la gran diferencia entre un homosexual y un hetero-sexual? Un acto ntimo, pri-vado: el sexo. Por qu quien desea hacer el amor con una persona de su mismo sexo debe ser discriminado? Por qu no se le reconoce dere-chos que, supuestamente, todos tenemos solo por el hecho de haber nacido?

    En el Per, los homo-sexuales vivimos algo peor que la discriminacin: somos invisibles. Para las leyes peruanas, simple-mente no existimos. No hay ninguna norma, de ningn rango salvo una ordenanza municipal dada por Susana Villarn, que

    considere nuestra situa-cin. No se sabe cuntos somos, qu necesidades tenemos, qu sentimos. Para el INEI y su censo, simplemente no existi-mos: un absurdo total. Es ms, tenemos un Poder Judicial homofbico, que vincula prcticas delic-tivas con la condicin homosexual. En trmi-nos legales, el Per vive en el medioevo.

    POR LA LIBERTADPor qu han decidido dar la cara, manifestar su condicin de homo-sexuales en una socie-dad que discrimina?, les preguntamos a Julio y a scar. Porque, mos-trando nuestro amor, luchamos por la liber-tad, y porque no pode-mos caminar por la calle encerrados en una jaula llamada prejuicio, res-ponden.

    S, su lucha debe ser la nuestra, porque es una pelea por la libertad.

    En el Per, los homosexuales vivimos algo peor que la

    discriminacin: simplemente

    somos invisibles para la ley.

    VIDA COTIDIANA. Pachi y Bibiana son

    pareja otra vez. Estuvieron

    separadas cinco aos.AD Y LIBERTAD

    CSAR FAJARDO