Pedro martínez.

José María Olayo olayo.blogspot.com

Lecciones que da la vida. 61(en situaciones de discapacidad)

Pedro MartínezEl derecho a una

muerte digna

http://www.olayo.blogspot.com/


Pedro Martínez era un chico joven, activo y activista, con la cabeza muy bien amueblada, con todo un futuro prometedor por delante, amante de la naturaleza y de los suyos, también de su perro; había sido un poco de todo, buen estudiante que llegó a obtener el título de técnico de laboratorio y trabajador como albañil, camarero, o de lo que surgiera en cada momento ...



… siempre con el control de su propia vida, apurando hasta el final cada etapa y episodio, durmiendo en casas de campo, en un banco o en el talego; participó en la okupación del túnel de Casas Viejas, en 2007, que terminó con un desalojo por parte dela policía ...



“No se trata de morir con dignidad. Se trata de vivir con dignidad hasta

el final, llevando el control de lo que se hace”.

Pedro Martínez



… hasta que le diagnosticaron una ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica) ... una enfermedad que paraliza primero las extremidades y después se expande al tórax paralizando los músculos implicados en tareas tan esenciales como respirar o tragar; una enfermedad para la que no existe un tratamiento y cuya esperanza de vida apenas alcanza unos pocos años desde el diagnóstico ...



… en España unas 4.000 personas padecen ELA y cada año se les diagnostica la enfermedad a unas 900 personas; sin causa conocida, afecta casi siempre a gente joven y los primeros síntomas son dolores musculares y calambres ...



“Es lo malo de esta enfermedad. Es como una cárcel

cada vez más estrecha. No puedes ni pegar un golpe en la mesa y salir corriendo

cuando te desesperas”.

Pedro Martínez



Pedro nació en Teruel hace algo más de 30 años y hasta el final de su vida ha luchado contra su enfermedad con valentía y deterrminación, al lado de Lola, de sus amigos y de su perro, hasta lograr una sedación terminal para poner fin a un sufrimiento que, por dignidad personal, ya no merecía la pena afrontar.



Hasta llegar a ese punto y final en su vida, Pedro perdió la movilidad y funcionalidad en sus brazos y piernas; para fumar, un amigo le había construido un soporte a partir de un perchero en el que su novia Lola sujeta el pitillo que otro amigo acaba de liar ...



… colocado a la altura de su cabeza, solo tiene que acercar la boca para dar una calada y así disfrutar como le gusta del humo que desprende; como todos los días, tumbado en el sofá porque las piernas ya no le sostienen, pasa las horas viendo la tele, o escuchando lo que le lee un amigo o conversando con Lola, su novia ...



… que es la que se encarga de todo, darle de comer, asearle, ayudarle cuando se atraganta, hacer de traductora cuando no se le entiende lo que dice; procurar, en definitiva, que su vida sea lo más llevadera y agradable posible y, también, mantener la temperatura ambiente un poco alta porque Pedro siempre tiene frío.



“Cuando ya no puedes valerte por ti mismo, no es

una vida digna”.

Pedro Martínez



En los últimos momentos de su enfermedad, Pedro lo tiene ya muy claro: quiere que le seden, y así acabar con tantos días interminables de angustia y sufrimiento que no conducían a nada; él que se definía como un “antitodo”, entiende que ya lo que tiene por delante es solo una agonía de un par de meses como mucho, siempre con el riesgo de asfixiarse, de ahogarse …



… una perspectiva nada deseable ni para él ni para los seres queridos que le rodean a cada momento, por eso quiere estar seguro de que va a vivir con dignidad hasta el último suspiro.



“No quiero morir ahogado. Ya me ha pasado varias veces

que la comida se me ha ido hacia los pulmones”.

Pedro Martínez



En los últimos días, Pedro comunicó al servicio de paliativos del hospital Virgen Macarena de Sevilla que no quería ir más al hospital, ni que le sondaran ni le pusieran un respirador, ¿Para qué? ¿Para durar tres meses en vez de dos? Lo que él quería es acabar tranquilo y dejar de sufrir de una vez ...



… fue entonces cuando decidió ponerse en contacto con la Asociación “Derecho a Morir Dignamente”, a sabiendas de que ahí sí iba a encontrar el apoyo que andaba buscando ...



… sabía que era el último trayecto vital, su última lucha: reivindicar la eutanasia legal, o, al menos, que se despenalizara el suicidio asistido; a falta de que la legislación le amparase, decidió ir lo más lejos posible, exigiendo poner fin a su sufrimiento.



Como si de una boda se tratara, dos días antes de morir, Pedro organizó una fiesta a la que asistieron 80 personas, entre familiares y amigos, todas ellas personas muy queridas por él y de las que recibía el apoyo incondicional en su última decisión ...



… un encuentro muy emotivo y festivo antes de la visita de los médicos de la asociación DMD en días posteriores, que valoraron su estado de sufrimiento que él consideraba ya intolerable, y dado que no existía otra alternativa y con el consentimiento de Pedro, procedieron a sedarle ...



… por fin Pedro, 34 años después de comenzar su andadura vital, logró salir de lo que consideraba una cárcel, la sedación terminal le proporcionó aquella libertad tan deseada que la legislación española, tan obsoleta como injusta, le hurtaba.



“Quiero reivindicar que, al menos, se despenalice

el suicidio asistido”.

Pedro Martínez



Buen viaje, Pedro, nos dejas tu lección y tu entereza, tu determinación y valentíapor conquistar la libertad.



“Cuando todo se acabe, que me incineren y me entierren bajo un nogal.

Imagínate un mundo donde en vez de cementerios hubiera bosques.

Así, por lo menos, una vez muerto podré servir de abono y

ayudar a luchar contra la deforestación”.

Pedro Martínez



“Mi epitafio? ‘Muerte al Estado y viva la anarquía ”.

Pedro Martínez



Comunicado de prensa. Madrid, 22 de diciembre de 2011

En relación con la muerte en su domicilio de Pedro, enfermo de Esclerosis Lateral Amiotrófica, publicada hoy por el diario El País ...

http://www.eutanasia.ws/_documentos/Comunicados/20111222%20En%20relación%20con%20la%20muerte%20de%20Pedro%20en%20su%20domicilio.pdf


http://www.eutanasia.ws/_documentos/Comunicados/20111222%20En%20relaci%C3%B3n%20con%20la%20muerte%20de%20Pedro%20en%20su%20domicilio.pdf


1. La ley 41/2002 de autonomía del paciente establece como principios básicos “La dignidad de la persona humana, el respeto a la autonomía de su voluntad y a su intimidad; el derecho del paciente a decidir libremente entre las opciones clínicas disponibles y a negarse al tratamiento; y la obligación de todo profesional que interviene en la actividad asistencial al respeto de las decisiones adoptadas libre y voluntariamente por el paciente” (art. 2).



2. Tal y como han legislado Andalucía, Aragón y Navarra, y de acuerdo con la ley reguladora de los derechos de la persona ante el final de la vida, actualmente en fase de tramitación parlamentaria, “todas las personas que se encuentren en el proceso final de su vida tienen derecho a los cuidados necesarios para evitar el dolor y el sufrimiento (art. 4), lo que incluye,[…], la sedación, aunque ello implique un acortamiento de la vida […] para reducir su consciencia, con el fin de aliviar adecuadamente su sufrimiento o síntomas refractarios al tratamiento específico” (art. 11).



3. La sedación paliativa (dormir al paciente hasta que, a consecuencia de una enfermedad terminal, acontece su fallecimiento) es un tratamiento para aliviar el sufrimiento refractario (que no responde a ninguna otra medida). La sedación no sólo es un imperativo moral para el profesional cuando el paciente se encuentra en proceso de agonía, sino también un derecho de los enfermos terminales. Su justificación no depende de que la muerte sea inminente (agonía), sino de la voluntad del paciente de no seguir padeciendo un sufrimiento intolerable.



4. A pesar del marco legislativo, todavía los ciudadanos se encuentran con profesionales que dificultan el ejercicio de sus derechos. Negar la sedación paliativa a un paciente terminal porque no se encuentra en agonía es una falta de respeto a su autonomía y una crueldad injustificable.



5. Los poderes públicos tienen la obligación de garantizar el libre ejercicio de sus derechos a los ciudadanos. Por ello urgimos al nuevo Parlamento que culmine la aprobación del proyecto de ley presentado en el Congreso y que se arbitren las medidas para su cumplimiento evitando a las personas un trato desigual en el proceso de muerte según la Comunidad Autónoma en que residan.



6. Nuestra sociedad democrática se fundamenta en la libertad individual. La vida es un derecho, no una obligación. Los ciudadanos no estamos dispuestos a admitir que la autonomía de nuestra voluntad se vea limitada por la falta de sensibilidad de responsables políticos a los que parece no importarles el sufrimiento de los pacientes al final de su vida. La AFDMD reitera sus compromisos con la sociedad tanto en la defensa del derecho a morir con dignidad, como en la atención en el marco de la legalidad, de aquellos socios que no encuentren una respuesta satisfactoria dentro del sistema público de salud.



¿QUIÉNES SOMOS?

DMD es una asociación sin ánimo de lucro, registrada en el Ministerio del Interior con los siguientes fines:

- Promover el derecho de toda persona a disponer con libertad de su cuerpo y de su vida, y a elegir libre y legalmente el momento y los medios para finalizarla.

- Defender, de modo especial, el derecho de los enfermos terminales e irreversibles a morir sin sufrimientos, si este es su deseo expreso.

http://www.eutanasia.ws/quienes_somos.html


http://www.eutanasia.ws/quienes_somos.html


http://sociedad.elpais.com/sociedad/2011/12/21/actualidad/1324491408_088893.html


http://sociedad.elpais.com/sociedad/2011/12/21/actualidad/1324491408_088893.html


Enhorabuena Pedro, espero y deseo que tu gesto sirva para que esta sociedad hipócrita que se cree tan avanzada deje por fin de lado los fundamentalismos de asociaciones religiosas fascistas que atentan contra la dignidad de la vida. Sé que has encontrado la paz. Enhorabuena Pedro, estés donde estés.

http://matteomaggini.blogspot.com.es/2011/12/pedro-martinez-el-derecho-una-muerte.html


http://matteomaggini.blogspot.com.es/2011/12/pedro-martinez-el-derecho-una-muerte.html

Pedro martínez.

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