Boletín Nº253

Pablo Tato Casariego: “el camino por recuperar la identidad suele ser difícil de transitar”

El Programa Educación y Memoria del Ministerio de Educación porteño convocó a Pablo Tato Casariego, nieto restituído,a participar de las II Jornadas Nacionales “Formando docentes, ampliando derechos” en el Instituto Superior de Profesorado

“Dr. Joaquín V. González”, para debatir acerca del derecho a la identidad y la construcción de memoria.

El Instituto Superior de Profesorado “Dr. Joaquín V. González” y el Programa Educación y Memoria del Ministerio de Educación porteño,aunaron esfuerzos para organizar una jornada enmarcada en la convocatoria realizada a estudiantes y docentes de Institutos deFormación Docente por el Instituto Nacional de Formación Docente (INFD), del Ministerio de Educación de la Nación, a participar de las IIJornadas Nacionales “Formando docentes, ampliando derechos”, a través de propuestas de intervención educativa en derechos. En estaoportunidad, se llevó a cabo un panel que contó con la presencia del coordinador del programa, Prof. Claudio Altamirano y el nietorestituido Pablo Tato Casariego, para brindar su testimonio de vida y debatir acerca del derecho a la identidad.

Los objetivos de esta propuesta se centraron en la necesidad de promover la formación crítica de los estudiantes en temáticasrelacionadas a los derechos humanos y pedagogía de la memoria vinculada a su rol ético­político en el marco del proceso deprofundización de la democracia; visibilizar la ampliación de derechos, reconociendo voces y experiencias locales y concientizar a losfuturos docentes sobre su rol en la construcción de una memoria activa y sobre la importancia de la escuela como espacio de ampliaciónde derechos. Las propuestas contaron con el apoyo técnico del área de Derechos Humanos y Pedagogía de la Memoria, del área dePolíticas estudiantiles, y en el auditorio se instalaron producciones realizadas por estudiantes de diferentes escuelas secundariasrelacionadas con las temáticas abordadas.

La Prof. Irene Scheiner dio inicio a la jornada agradeciendo la presencia, introduciendo a los panelistas y comentando la importancia deestas jornadas que se llevan a cabo en forma simultánea en todo el país. A continuación, Claudio Altamirano expresó: “Para nosotros esmuy importante la realización de este tipo de encuentros, enmarcados en este mes en el cual se conmemora el Día Nacional del Derechoa la Identidad, como otra forma de recuperar nuestro pasado reciente en la voz de sus protagonistas, y recrear junto a ustedes, futurosdocentes, la magnitud de lo que se genera cuando las Abuelas, las Madres y los Nietos se acercan a los alumnos/as a compartir suhistoria de vida. Esperamos que esto renueve el compromiso con una educación que sea realmente transformadora y plasme en susprácticas una pedagogía de la memoria que permita a nuestros alumnos pensar nuestra historia desde un lugar crítico. Pablo va a dar sutestimonio y luego intercambiaremos preguntas”.

El encuentro prosiguió con el relato de Pablo Tato Casariego: “Mi experiencia en primera persona tal vez les sirva a ustedes como futurosdocentes para poder pensar y dimensionar lo que implica en la vida diaria la importancia de la identidad, de la memoria y de la búsquedade la verdad”. A continuación, comenzó a narrar los hechos que vulneraron su identidad: “Nací en el año 77’, no sé exactamente la fechapero entre agosto y septiembre. Mi apropiador era un médico militar en Campo de Mayo, y yo nací en el CCD El Campito que eran dosgalpones acondicionados para tener a los detenidos: Mis padres biológicos eran militantes políticos y ambos fueron secuestrados cuandomi mamá contaba con cinco meses de embarazo. Me ubicaron en esa familia recién nacido, en una época en la que la complicidad de lossectores civiles y eclesiásticos era necesaria para sostener estas apropiaciones. No supe nada de mi verdadera identidad hasta el año85’, que cae una denuncia a la casa de las Abuelas acerca de un médico militar que se había apropiado de un chico, eso nos llevó amudarnos a Paraguay ese mismo año, pero nos localiza Interpol y ahí me dicen que soy adoptado, que soy hijo de desaparecidos aunqueno se sabía de quién”.

El testimonio de Pablo continúa con el relato de los días viviendo en Paraguay, ya sabiendo sus orígenes pero negándose a dar lamuestra que confirmase su filiación, por lo difícil de aceptar esta situación y el rechazo a conocer esa parte de su vida. Tras muchosacercamientos con familiares de otros detenidos­desaparecidos, su muestra de ADN confirmó que era hijo de Norma Tato y JorgeCasariego, y con esto se abrió una nueva realidad: la de comenzar a conocer a su familia biológica y al de aproximarse a Abuelas paracomenzar a aceptar su identidad. “La apropiación no sólo tiene que ver con el apellido, sino con todo el sufrimiento por no dejarme serquien yo hubiese sido”.

Actualmente Pablo trabaja en la CONADI (Comisión Nacional del Derecho a la Identidad), quienes junto al Banco Nacional de DatosGenéticos y al Equipo Argentino de Antropología Forense se han convertido en referencia mundial por la calidad, eficiencia y rigurosidadde su trabajo.

A continuación, a través de las intervenciones de docentes y alumnos/as presentes, se debatió acerca de la importancia de poderconstruir a partir de las memorias individuales la memoria colectiva y que esto en las escuelas debe ser el producto de un trabajointerdisciplinario, dado que son contenidos transversales que corresponden a todos los docentes desde sus respectivas áreas abordar.

Rescatamos las palabras de un estudiante, quien manifestó: “Agradezco este relato que me lleva a pensar en situaciones que si no lasescucho me sería muy difícil pensarlas. Creo que este es el modo de construir memoria colectiva. Agradezco esta posibilidad de pensar ysentir nuestra historia”.

Para cerrar la jornada, Claudio Altamirano agradeció a todos los presentes, especialmente a Pablo, quién “poniendo en palabras su dolor,nos ayuda a reflexionar acerca de la memoria, la verdad, los derechos y nos invita a pensar en qué clase de docentes queremos ser y quétipo de saberes queremos construir con nuestros alumnos”.

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Identidad, tal vez sea el concepto que mejor represente al mes de octubre, permitiéndonos recorrer todas las identidades, todas laspertenencias: la identidad primaria, la de pertenecer al seno de una familia, la de compartir lazos de sangre indisolubles, en el mes de lamadre; la identidad como país, cuando recordamos que hace 32 años nuestro pueblo volvía a manifestarse en la urnas y comenzar así ainscribir una nueva etapa en su historia: la de una nación que debía aprender a comprometerse con la democracia. Y finalmente laidentidad de toda una América Latina que debe reconstruirse una y otra vez, reponiéndose de colonizadores e imperios, de deudas ydictaduras, de desapariciones y pérdidas. Y sin embargo siempre trazando las líneas que nos unen, líneas de una esperanza creciente enel poder de una región ancestral y nueva a la vez, con toda la diversidad cultural que le vino desde su origen y la comunión de saberseuna.