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ISSN 0864-0572 Agosto 2007 No.454 © Precio: 80 ctvos La voz de los universitarios cubanos Noel Nicola siempre Comunicar en la red Cafés literarios Noel Nicola siempre Comunicar en la red Cafés literarios Noel Nicola siempre Comunicar en la red Cafés literarios Noel Nicola siempre Comunicar en la red Cafés literarios Noel Nicola siempre Comunicar en la red Cafés literarios

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ISSN 0864-0572 Agosto 2007 No.454 © Precio: 80 ctvos La voz de los universitarios cubanos

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nuestrocredo

Directora

Los estudiantes universitarios —lo mismo en la Argentinade la Reforma de Córdoba que en el París de mayo del68— siempre fueron vanguardias a la hora de conquistarderechos estudiantiles y sociales, o combatir tiranos;constantemente se han ido delante aunque no siemprese comprendiera que luchar por la «libertad» —como unaentelequia de la retórica—, nunca ha servido de mucho.Por qué un grupo de universitarios venezolanos optaronpor «defender» la democracia —contra un presidenteconstitucional— usando como estandarte un ejemplo delibertad de expresión bastante poco ortodoxa como hasido la televisora RCTV.¿Ingenuidad? Algunos sí, porque creyeron —y cayeron— en

la trampa mediática. ¿Apoliticismo?, es improbable que unode cada diez «protestantes» se lo crea y puedan dormir pen-sando que cumplieron sus deberes. ¿Habría sinceros? Natu-ralmente, y otorgando el beneficio de la duda, supongamosfueron los delanteros del conjunto. No estaban defendiendosolamente posiciones de clase y su futura inserción en lasociedad oligárquica; están —desde ya— en el «mercadeo»de líderes en ciernes, porque el instrumento de poder porexcelencia de la oposición era mediático —lo había sido y lova a ser por un buen tiempo.Todos, por una u otra vía de la manipulación, han sido solo

peones de una estrategia corporativa.En Venezuela, el 80 por ciento de los canales de televi-

sión abierta y de emisoras de radio pertenecen al sector

privado; la televisión por cable y satélite, está controlada

mayormente por empresas privadas. A la división corpo-

rativa empresarial pertenecen 118 periódicos nacionales

y regionales. La «hegemonía mediática», no está precisa-

mente en manos de quienes propugnan el socialismo del

siglo XXI.La libertad de prensa es en realidad libertad de empresa y

esta es la carta de triunfo del neoliberalismo a pulso.El Gobierno bolivariano en virtud del Artículo 156 de la

Constitución venezolana así como de la Ley Orgánica de

Telecomunicaciones —que dan al Gobierno el poder de

regular el acceso a este espacio— decidió no renovar el

contrato con el canal RCTV y otorgar así el espacio libe-

rado —por definición limitado— a otro canal con el fin de

democratizar los medios. RCTV no «ha dejado de emi-

tir», es decir no ha sido cerrada y seguirá haciéndolo vía

cable o satélite.¿Por qué RCTV?, entre otros motivos porque ha dado

muestras de poco sentido de la responsabilidad social an-

tes, durante y después del muy fracasado golpe contra

Hugo Chávez, hace ahora cinco años. ¿Por qué un lustro

después no se renueva el permiso? Porque el Gobierno

esperó pacientemente el vencimiento —aguantó el bom-

bardeo sería más exacto—, para ofrecer una alternativa,

con el canal social TVES.¿Era inocente RCTV? El escritor venezolano Luis Britto lo

sintetizó así: «predicó insistentemente una guerra civil de

la que debía surgir un “gobierno de transición”; divulgó

llamamientos a la sublevación militar; interfirió y cortó las

transmisiones oficiales; difundió la falsa noticia de la re-

nuncia del Presidente electo; firmó el acta constitutiva de la

dictadura de Carmona; pactó con éste la entrega del órga-

no de control de las telecomunicaciones, exhortó a delatar

a los derrocados y participó en un apagón mediático de 72

horas para ocultar la resistencia popular».Por menos que eso —señaló tiempo después el periódico

norteamericano Houston Chronicle— en Estados Unidos

no hubieran durado más que unos minutos.Tan cierto fue todo que el entonces gerente de produc-

ción de RCTV, Andrés Izarra, opuesto al golpe de Estado,

dimitió inmediatamente para no convertirse en cómplice, y

testimonió ante la Asamblea Nacional, haber recibido ór-

denes de no transmitir «ninguna información sobre Chávez,

sus seguidores, ministros o cualquier otra persona que

pudiera estar relacionada con él». La orden —formal— fue

del director y dueño de RCTV, Marcel Granier.No contento con lo hecho, RCTV dedicó más de dos me-

ses a transmitir exclusivamente «llamados al derrocamien-

to del gobierno democrático, a la desobediencia tributaria

y al sabotaje de la industria petrolera».Pero el currículo de RCTV es más antiguo: según recono-

cen medios de prensa, fue cerrada varios días, en 1976,

por difusión de noticias falsas; en 1980, fue lacrada durante

36 horas por «sensacionalismo»; una vez más «se fue del

aire», en 1981, por «difusión de programas pornográficos»

y fue condenada en 1984 por ridiculizar al presidente de la

República.Ningún demonio levantó la voz entonces. Y ahora en

cambio…

Demonios desatadosEl demonio desatado se fue más allá de los límites vene-zolanos. Reporteros Sin Fronteras (RSF) estuvo entre losmás combativos críticos de la decisión, y dio a conocer un«megainforme» plagado de «nano-ideas», con el increíbletítulo de Cierre de Radio Caracas Televisión: la consolida-ción de una hegemonía mediática. Sin embargo, por irse,se fue lo mismo al Parlamento brasileño que al emporiomediático español PRISA; pero antes —con la percepciónde saber de una brecha— se metió en varios campus uni-versitarios sobre todo en centros privados, en otros deprofesión católica y en algunas públicas.«Queremos democracia» y «RCTV es social», salieron alas calles a gritar unos cuantos universitarios.Venezuela tiene una fuerte red de universidades e insti-tutos —privados y públicos— entre los cuales se destacanla Simón Bolívar (USB), la de Los Andes (ULA), la Centralde Venezuela, la Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA),la de Zulia (LUZ); la de Carabobo —pública, ubicada en Va-lencia—, la Católica Andrés Bello (UCAB), la Gran Mariscalde Ayacucho —privada, ubicada en Barcelona—, la Univer-sidad Nacional Experimental Politécnica Antonio José deSucre y la Universidad Nueva Esparta (UNE), por solo citaralgunas de las más conocidas.El campus de batalla no era mínimo.Entonces surgió la idea de realizar un foro con el estu-diantado universitario que quisiera ir el jueves 7 de junio ala sede de la Asamblea Nacional de Venezuela, a debatirconceptos y cuestionar decisiones. La televisión nacionalse preparó para llevar a todo el país lo que se suponía iba aser esgrima verbal de alta escuela.Uno de los líderes de la protesta —Douglas Barrios, es-tudiante del octavo semestre de Economía de la Univer-sidad Metropolitana de Caracas—, subió a la tribuna conuna camiseta roja1 superpuesta por encima de susindumentarias, y con un discurso escrito que dejaría ató-nitos a tirios y troyanos —y del que olvidaría la últimaparte: ¿Y qué dijo?: entre otras demandas «Exigimos quese garantice el derecho a elegir (...) porque es una deci-sión que debe recaer en el individuo y no en el Estado ni elGobierno. Una vida sin elecciones sería una existenciarobótica y unipolar. Soñamos con ser tomados en cuentasin tener que estar —y con un ademán se quitó la camise-ta—…uniformados. Nos retiramos. Por ahora». Una dama escribiría luego en El Correo del Caroní online, haberse sentido orgullosa e impresionada escuchan-do al estudiante: «Cada palabra fue pronunciada con unamusicalidad y un ritmo, propio de quien está familiarizadocon el mejor uso de nuestro idioma. El tono y la intensidadde su voz fue siempre agradable para el oyente. No hubogritos sino leves oscilaciones, para enfatizar los elementosmás sustantivos de su discurso, que por si lo anterior hu-biese sido poco, fue breve y preciso». Otra persona firmaba en el influyente El Universal online las siguientes perlas del periodismo de opinión: «Loque sí tenemos que destacar es que el discurso de los

Hace un año nos sorprendió la noti-cia de la repentina enfermedad deFidel. Se mezclaron el miedo y la es-peranza, como suele suceder en lasmejores familias ante el malestar dealguien especial.

La proclama con su firma recorrió elmundo a través de los grandes mediosde comunicación y de otros alternativos.

Los amigos de todas partes tejieronde inmediato una red solidaria, quisie-ron saber qué pasaba dentro de Cubay desearle una rápida recuperación alComandante. Los enemigos hicieron lode siempre: salieron a las calles a vo-ciferar ante las cámaras televisivas sufrustración. Según ellos «A la Cuba deCastro le quedaban horas».

De esa fecha acá se han divulgadonuevas reflexiones de Fidel, eviden-cias de que esta ha sido una treguafecunda. El pueblo cubano también seha sobrepuesto a los pronósticos máspesimistas. El desafío de proseguir elproyecto socialista sin la conduccióndirecta de su máximo líder, se empren-dió en común, con debates intensos yesfuerzos cotidianos, coninsatisfacciones y un millón de anhe-los irrenunciables.

Los universitarios, reparadores desueños por naturaleza, han puesto la par-ticipación social en el centro de su vidaestudiantil y de su propio tiempo libre.No conformes miran con preocupacióna los que aplican la fórmula simplista delsálvese quien pueda, o que apuestanpor la banalidad que imponen ciertas«modas y modos de conducirse». Y aúnmás, alertan: «hay que evitar el contagiopor desaliento ajeno».

Alma MaterAlma MaterAlma MaterAlma MaterAlma Mater sugiere en medio del ca-lor de agosto repasar el escenario vir-tual, ese otro campo de batalla y devida que hemos de conquistar con lasmismas buenas intenciones que nosalientan a seguir andando.

universitarios no oficialistas fue impecable, no llegó a cinco

cuartillas en Times New Roman 12. Dijo que los estudiantes

no eran socialistas, sino seres sociales». «No somos

neoliberales somos seres libres. Los estudiantes no hace-

mos oposición, nosotros hacemos proposición»… «Este

hecho convierte en histórico el día, pues desde el podium

de oradores Douglas Barrios emite el primer discurso opo-

sitor en cadena nacional(…)

Lo cierto es que al joven se le había visto repetidamente

en las calles de Caracas en el bando de la oposición, pro-

testando contra la no renovación del permiso a la casa

televisora: «La juventud está hoy en la calle —había decla-

rado entonces— y no estamos luchando por los intereses

de un grupo empresarial o por los intereses internaciona-

les». Sin embargo, el diario español El País admitía el 9 de

julio que RCTV —al quedarse ahora solo por cable y satéli-

te— perderá el ochenta por ciento de los 136,8 millones de

euros de publicidad que tenía contratada cuando transmi-

tía en el espacio radioeléctrico. La afirmación del estudian-

te no parece muy creíble.2

Y también, a decir verdad, pasiones propias de jóvenes

hubo, desatadas ya de antemano, y no fueron solo

chavistas. El estudiante bolivariano Robert Serra, uno de

los estudiantes que sí se quedó para el debate en la Asam-

blea Nacional, fue abucheado y agredido por un grupo de la

Universidad Católica Andrés Bello. Héctor Rodríguez, tam-

bién estudiante bolivariano, tuvo experiencia similar en la

Universidad de Carabobo: «Mi intervención, decidieron ter-

minarla con bombas lacrimógenas, disparos y agresiones.

Hicieron que se perdiera una oportunidad hermosa de dis-

cutir y debatir las ideas, en función de las visiones de país

que tenemos cada sector».

Para el miércoles 27 de junio, estudiantes de varias uni-

versidades privadas, anunciaron, «la madre de las concen-

traciones», —según varios diarios—, a realizarse en el

Stadium Universitario, en el que dicen con orgullo los ve-

nezolanos «para que se vea gente tienen que entrar a las

gradas y el terreno, no menos de 10 mil personas». Esta

vez la omisión fue por defecto.

El campus de batalla había tenido en el ínterin mo-mentos de grave tensión. Distintos medios de prensa online recogían noticias como estas «A un encuentro en elteatro de un colegio religioso de Altamira, presidida porel Cardenal Castillo Lara y el Alcalde López de Chacao,asistieron centenares de jóvenes de colegios católicos,bajo estrictas medidas de seguridad y confidencialidad.En esa oportunidad el Cardenal Castillo Lara, pronuncióun discurso vehemente, reclamando a los jóvenes asis-tentes que se movilizaran en contra del Gobierno y seconvirtieran en la vanguardia de la lucha contra la dicta-dura del Presidente Chávez »… «Estudiantes bolivarianosde la Universidad de Táchira descubrieron y denunciaronpúblicamente la presencia de material como cauchos,lanzacohetes, casquillos de bombas lacrimógenas, gaso-lina y botellas para la fabricación de bombas molotov,escondidos en las oficinas administrativas de esa uni-versidad cuya sede queda muy cerca del estadio PuebloNuevo, uno de los escenarios para la Copa América Ve-nezuela 2007».

El Gobierno venezolano, urgido de dar la batalla entre losmás necesitados, no ha sumado todavía al conjunto univer-sitario nacional a la nueva formulación del socialismo delsiglo XXI.

La alharaca en torno a RCTV avisa que vendrán otrosconflictos del mismo pelaje. La popular Universidad SimónRodríguez, empieza a llenar espacio pero aún su influenciay organización es dispersa y sin capacidad de convocatoriapara este tipo de enfrentamiento.

Tal vez la mejor interpretación del conflicto la diera uningeniero egresado de la Universidad Central de Venezue-la, al valorar el hecho de que las universidades no hanmarchado a la par con la vida que está planteando el cam-bio en Venezuela: «¿Por qué no se han vinculado ni siquierahoy en día, con la misión Barrio Adentro, por ejemplo? seme ocurre inventar la “Misión Ingeniería Adentro”, para vin-cular a mi universidad con las reales necesidades de nues-tro pueblo. Igualmente inventaría la “Misión Odontologíaadentro”, “Misión Trabajo Social Adentro”, “Misión Psicolo-gía Adentro” y paremos de contar…».

1Así como los colores blanco y verde fueron usados por miembros delos dos partidos tradicionales venezolanos, los chavistas, promotores delsocialismo de siglo XXI llevan, naturalmente, el rojo.

2Según se afirma «los símbolos que utilizan y las consignas que cantanson similares a los planes difundidos por una organización radicada enMiami, conocida como Orvex, que copia los modelos de acciones de lasmás radicales agrupaciones anticomunistas de esa ciudad. El estudian-te de la universidad privada resaltó que el grupo que representa man-tendrá la bandera del canal de Marcel Granier hasta que la desapareci-da señal vuelva a su «legítima frecuencia».

Por J

orge

Sar

iol

RecibimientoEran sus primeros días en la capital. Aca-

baba de ingresar a la Universidad de lasCiencias Informáticas (UCI). Por vez prime-ra tenía todo el tiempo del mundo parainteractuar con la computadora, y no que-ría perderse nada. Navegó por la intranet,examinando todas sus secciones. Sin pro-ponérselo fue a dar con un vínculo que atra-jo su atención. Anunciaba la existencia deun «Foro». ¿De qué se trataría, estaría rela-cionado con el Foro Romano? Decidió ex-plorarlo y no pudo contener su asombro.Había decenas de personas como él senta-das frente a sus computadoras, discutien-do sobre temáticas diversas. ¡Al fin, comu-nicación! —se dijo, con el ánimo del náufra-go que encuentra tierra firme. Justo lo quenecesitaba para embriagar su soledad denovato. Escogió el tema que le era más afíny publicó un mensaje, que fue rápidamenterespondido. Le resultó esperanzador que enuna universidad tan grande y variada exis-tieran personas que compartieran sus inte-reses sobre el asunto. Ya no se sentía solo.

Vecinos de foroExperiencias como esta son frecuentes

cuando las personas se relacionan por pri-mera vez con la Red. En el medio digital, ypotenciado por el desarrollo de las NuevasTecnologías de la Información y la Comuni-cación (NTIC) han comenzado a aflorar lascomunidades virtuales, entendidas comoagregaciones de individuos que encuentranen el ciberespacio la posibilidad deinteractuar, movidos por inclinaciones encomún. Uno de los principales investigado-res del fenómeno, Howard Rheingold, lasha definido como «agrupaciones socialesque emergen de la Red cuando suficientespersonas sostienen discusiones públicas degran duración con suficiente sentimientohumano como para formar webs de rela-ciones personales en el ciberespacio».1

Cuando habla de «sentimiento humano»,el autor no exagera. La mayor parte de lasprácticas que tienen lugar en las comunida-des virtuales potencian la colaboración yfraternidad entre sus integrantes. Yunior Ar-mando Hernández Andrade, estudiante dela UCI, comenta su experiencia en variasde las comunidades que existen en ese cen-tro educacional: «Hay una compenetraciónque está en el aire, inherente, si a alguien lehace falta algo y lo dice de repente, todo elmundo va a ayudarlo». Para él, la principalutilidad que le reporta participar en lasinteracciones sociales que ocurren en la Redradica en el trueque de conocimientos so-bre disímiles temas, docentes o no, lo que

le permite contrastar sus posicionescon las del resto de los integrantesdel grupo.

A pesar de interactuar en un me-dio diferente, tecnológicamente

hablando, los individuos siguen siendo suje-tos sociales, y manifiestan los rasgos de supersonalidad en los enlaces que realizan consus comunidades virtuales. Por ello puedenpresentarse comportamientos hostiles,como el troll, que se produce cuando un par-ticipante se introduce en los debates deun grupo para crear controversia entresus miembros, interrumpiendo las discu-siones. El spam es igualmente considera-do un comportamiento negativo, pues cons-tituyen mensajes no deseados, inoportunos,que afectan el curso de los intercambios.

El contexto cubano: la UCILas comunidades virtuales se forman en

el medio digital, empleando los canales dela llamada CMC (Comunicación Mediada porComputadora). Sobresalen en la formaciónde asociaciones virtuales los foros de de-bate, los chats y las listas de distribución.De ahí que para el desarrollo de este tipode grupos se requiere, inevitablemente, lapresencia de una infraestructura tecnoló-gica que soporte el envío de mensajes através de la Red.

El acceso a internet en Cuba se produjocon un desfasaje en comparación con lospaíses primermundistas, debido a las limi-taciones económicas que imponen a la Islalas potencias hegemónicas. A partir de 1996,en que interactuamos directamente con laRed, se ha ampliado considerablemente elnúmero de usuarios de internet, priorizandolas universidades y centros de enseñanza,las instituciones investigativas y otros or-ganismos de interés. La UCI se halla entreesas prioridades, constituyendo la de ma-yor desarrollo teleinformático del país. Porello no es fortuito el desarrollo de numero-sas comunidades virtuales, que tributan a lapreparación docente y el esparcimiento desus estudiantes y profesores.

En la Casa de Altos Estudios se han creadovarios foros de discusión, y entre los másvisitados están los de las Comunidades deDesarrollo. A partir de estos, estudiantes yprofesores intercambian sobre temáticasasociadas a su perfil profesional como los

diferentes lenguajes de programación, el di-seño web y el software libre. También es muypopular el Inter–Foro, en el que se discutesobre asuntos diversos asociados a la pro-ducción audiovisual, que incluyen lasTeleclases que se producen en el centro, asícomo series y películas de factura nacional yextranjera.

Agrupaciones ¿virtuales?Las interacciones que ocurren en las co-

munidades virtuales, independientemen-te de la naturaleza del tema tratado, con-tribuyen al intercambio y la difusión deconocimientos entre los integrantes. Losdebates pueden ser de programación enC++, 2 o sobre el personaje más gustadode la saga El señor de los anillos, pero entodos se transmiten matrices que contri-buyen al enriquecimiento cultural ycognoscitivo de los participantes.

Cuando los miembros del colectivo al-canzan un elevado nivel de implicación enestas prácticas suele suceder que deman-den encuentros en el espacio físico, quepara muchos es considerado «el real». Coneste objetivo, varias comunidades virtualesde la UCI, como las de Software Libre, Pro-gramación en C++ y la de amantes de laliteratura de Tolkien, por citar unos ejem-plos, desplazan fuera del ciberespacio susintercambios.

El reto de inter-cambiar en elciberespacio

La interacción en la Red impone a sususuarios la necesidad de desarrollar estra-tegias para identificarse y expresarse. Ello

Por Maylin Medina Rodríguez

se debe a la carencia de indicadoresextraverbales como los gestos y las inflexionesde la voz, así como a la ausencia de referentesvisuales, que caracterizan a la ComunicaciónMediada por Computadora.

En aras de satisfacer estos vacíos, losmiembros de las comunidades virtualesemplean una serie de indicadores en su iden-tificación. Entre los más usados están elapodo, que equivaldría al nombre del parti-cipante; el avatar, que constituye una ima-gen de aproximadamente 100 x 100 píxeles;y la firma, que puede ser texto o imagen, yse inserta de manera automática en cadamensaje del participante.

En materia de lenguaje, las interaccionesen la Red han dado lugar a numerosas mo-dificaciones de palabras para transmitiremociones a través del tecleado. Por ejem-plo, es frecuente la exageración de sonidos(holaaaaaaa) para aportar sentimiento almensaje transmitido. Por otra parte, se hadifundido considerablemente el uso de losemoticones, que reflejan expresiones facia-les a partir de combinaciones de caracte-res y, como su nombre lo indica, constitu-yen íconos de emoción.

DespedidaEstá a punto de graduarse. Los cinco años

se le fueron volando. Entre las clases, lasactividades de la UCI (que son muchas) ylas comunidades virtuales, aprovechó almáximo su tiempo. Se siente satisfecho.Pero le duele tener que dejar atrás a lasamistades, sobre todo a aquellos que cono-ció en los foros, y que luego se hicieron susmejores amigos, sus alter ego. Respira pro-fundo, y se consuela. La vida tiene que se-guir su curso. Sé que nos encontraremospronto, en alguna comunidad virtual… sedice, y sonríe seguro de la certeza de su pro-fecía. Sabe que nunca más estará solo.

1Rheingold, H. (1993) The Virtual Community:Homesteading on the electronic frontier. Consultado el12 de diciembre de 2006, en: http://www.rheingold.com/vc/book/

2Lenguaje de programación que abarca la progra-mación estructurada, genérica y orientada a objetos.

Comunidades virtuales en la UCI

DE TODOUN POCO

Por Alain Gutiérrez

el parquede los cabezones

Texto y foto: RodolfoRomero Reyes, estu-diante de Periodismo

Fortuna escatológicaLa suerte es loca y cualquiera va al baño. Claro esta vez

la sorpresa fue muy agradable. Según las noticias, variossobres con dinero y una pequeña nota exhortando a quienlos viera hacer buenas acciones fueron encontrados enlos últimos días en algunos baños públicos de Japón. Nue-ve sobres, cada uno con unos 10 mil yuanes, unos 78 CUC,fueron hallados en los baños masculinos del municipio deKawaguchi, al norte de Tokio. Al parecer son los hombreslos más necesitados de hacer buenas acciones. En los so-bres había también copias de una carta anónima escrita amano en japonés que afirmaba: «sepan sacar fruto de laherencia de 10 mil yuanes aquí contenidos, para instruirsu crecimiento personal». «Por favor, comprométanse conun corazón generoso en cualquier tipo de buena acción.Que tengan serenidad», añadía la misiva. Las autoridadesdesconocen si ha habido muchos más sobres depositadosen otras partes del país y cuya existencia no ha sido de-clarada por afortunados usuarios desconocidos. Sin em-bargo, en la mejor de las tradiciones japonesas, otros usua-rios que se encontraron los agradables sobres, los entre-garon en las comisarías niponas. El valor del contenido detodos los recuperados asciende al equivalente a unos 2mil 080 CUC. El dinero no ha sido reclamado hasta el mo-mento. Tampoco nadie lo ha desgraciado con el «apuro».

BarbanenéLos de mi edad de seguro recuerdan a los Barbapapás.

Ahora resulta que de verdad ha nacido uno de esa familia.Muchos indonesios se desplazaron hasta una pequeña lo-calidad de la isla de Celebes para ver a un bebé de sexomasculino que nació con una barba bien visible.«La gente quiere ver con sus propios ojos a este niño ex-traño nacido con una barba gris de tres centímetros», dijoLongly Djanggola, jefe del distrito de Parigi Moutong, en laprovincia central de Sulawesi. El diario The Jakarta Postpublicó una foto del recién nacido, bautizado Rasya. «Espe-ro que, cuando crezca, mi hijo desvele un talento secreto»,declaró su madre, de 16 años. Lo que al parecer no daráabasto con las maquinitas de afeitar.

Deporte de alto riezgoEscuchen muchachos que este deporte gustará bastan-

te. En Sao Paulo, Brasil, la práctica de mantener relacionessexuales al aire libre en exhibiciones para curiosos que secitan por internet se ha extendido. El Departamento deCaptura de la Policía brasileña (Decap), intenta detener alos infractores en flagrante delito. La policía informó que comenzó las investigaciones des-pués de encontrar a una pareja desnuda en un automóvilen el barrio residencial Chacara Santo Antonio, al sur de laciudad, que seguramente se aprontaba para mantener re-laciones sexuales en público. «Creemos que estaban yen-do a una de esas exhibiciones. El desafío es tener una rela-ción sexual delante de decenas de personas y despuéshuir en coche. Es una cuestión de emoción», explicó el di-rector de la Decap, comisario Aldo Galiano Junior. ¿Emo-cionante, verdad? La práctica se conoce como dogging,que viene de dog, perro, en inglés, porque los curiosos semantienen en acecho como los canes para ver la exhibi-ción sexual. Las reuniones se realizan en plazas, calles,estacionamientos y hasta en cines al aire libre y se pactanen sitios de la red. En Brasil hay centenas de comunidadesde practicantes de dogging .

Esta manera de divertirse surgió en el Reino Unido, don-de las comunidades de practicantes tienen actualmentemás de 20 mil adeptos. La principal preocupación de lasautoridades es sanitaria, pues la mayoría tiene relacionessin preservativos, y los participantes se exponen a con-traer enfermedades de transmisión sexual. ¿Se imaginanhacer una cola de tres días para un «concierto» de su favo-rita o favorito?

Ausente de su casa hace más de tres meses, en el momen-to de su desaparición este joven anunció que saldría a«resolver un problemita de la tesis». Desde entonces sedesconocía su paradero. Algunos lo habían visto rondan-do por las cercanías de la Escuela de Formación de Maes-tros Emergentes del Cotorro, otros por el trabajo de su pri-ma gestionando unas hojas; pero la fuente más confiablenos informó que pernoctaba en casa de su novia Lili dondeen una computadora hacía los últimos arreglos de la inves-tigación. Alma MaterAlma MaterAlma MaterAlma MaterAlma Mater siguió su pista y finalmente lo encon-tró. Estas fueron las primeras palabras que pronunció:

Wilfredo«Al fin terminé, ya puedo ir a jugar canchas». Además de

jugar canchas, ¿qué otra cosa haces en tu tiempo libre? Leomucho, generalmente cualquier cosa que me caiga en lasmanos. Tal vez en un futuro deba ser un poco más selectivoen mis lecturas. ¿Qué música prefieres? Escucho de todoun poco: Buena Fe, Silvio, la buena salsa cubana y hasta unreguetón. En los momentos en los que necesito relajarmeprefiero sintonizar la 94.10. ¿Bailas? Por supuesto, bailo detodo, hasta un vals (después de la entrevista su novia nosconfesó que en la pista se da tremendas perdidas). ¿Qué tehan dejado sucesos como el Festival Mundial de la Juven-tud y los estudiantes, la Tercera Cumbre de los pueblos enArgentina o ir a Playa Girón en bicicleta? Los eventos in-ternacionales siempre te dan la posibilidad de comparar tu

realidad con la de otros países. Además de las amistadesque se hacen y los lugares que se visitan uno reafirmamucho sus convicciones. Por otra parte, las experienciascomo la de Girón han sido inigualables; el sacrificio, el tra-bajo que se pasó, fue como vivir los años de la manigua ode la Sierra, aunque solo por dos días. Resume en unapalabra las enseñanzas por donde has transitado. La Lenin:amigos; el curso de Formación de Maestros Emergentes:sacrificio; la SUM (Sede Universitaria Municipal): aprendi-zaje. Y bien que demostró esos saberes hasta los minutosfinales de la carrera. Wilfredo acaba de graduarse en Psi-cología con título de oro y fue el mejor egresado de la SUMen La Habana Vieja. Ahora ¿cómo te imaginas como psicó-logo? En realidad pienso seguir ejerciendo como maestro.La psicología me ha dado muchas herramientas para ejer-cer mi profesión educativa. El aula es como un taller dondellevo a la práctica los conocimientos que he adquirido enestos seis años. Pienso seguir allí. Ser psicólogo y maestroson dos profesiones que han formado mi espíritu humanis-ta y me han permitido comprender mi realidad y la de lasociedad. Planes inmediatos… Superarme, empezar undoctorado curricular, estudiar idiomas, lograr que mi noviame comprenda un poco más, subir el Pico Turquino… ¡Ah!,y bajarlo también, por supuesto. ¿Qué consideras que nosfalta a los jóvenes de este tiempo? Debemos trazarnosmetas altas de manera que permita superarnos másy nunca pensar en beneficios personales; piensoque esa pudiera ser una receta. Creo que no debe-mos seguir diciendo que necesitamos hombrescomo Fidel o como el Che, lo que nos toca es hacercosas que nos lleven a ser como ellos.

Ilustraciones: Joseph

El Bello periodismo Por Randy Saborit Mora

«Ninguna muerte es buena, pero si me dieran a escoger, no dudaría en queme diera un infarto de risa, o que me llevaran ante un pelotón de fusilamiento

y me dispararan carcajadas al corazón».....

Confieso que las primeras clases de Periodismo las recibí an-tes de entrar a la Facultad de Comunicación de la Universidad deLa Habana (UH). Pudiera decirse que fue un curso por encuen-tros. Todos los sábados era la cita. Por solo veinte centavos reci-bía una lección impagable. Manuel González Bello (1949-2002)era el maestro a distancia. Él buscaba sus crónicas en la calle, lasmoldeaba en la redacción, y las enviaba a vivir entre la gente.

Desde que choqué con la primera Crónica del Sábado no pudedejar de leerlas. Por aquellos años de preuniversitario no recibíaJuventud Rebelde en la casa. Sin embargo, lo perseguía por to-dos los estanquillos. Llegué a levantarme temprano para compe-tir con los abuelos de la cuadra. Un reto, pero valía la pena.

Para suerte de los lectores, aquellas columnas sabatinas no soloson un conjunto de papeles amarillentos y «empolillados» que repo-san en una gaveta o archivo. También existe un libro que recogealgunas de todas las publicadas entre junio de 1999 y noviembre de2001 en el mencionado diario juvenil. Con una sonrisa de EdicionesMecenas de Cienfuegos reúne unas cincuenta clases al natural decubanía y periodismo. Bello, alumno aventajado de H. Zumbado,aprendió a «reflexionar», es decir a «tirar a dar con una sonrisa».Cada crónica es una fotografía sobre un país de carne y hueso.

Con humor de altos quilates y elegante ironía, cada crónica dafe de inteligencia e ingenio. Manolo sabía cómo sugerir y hacerpensar. De «sociolismos», «paradogmatismos», propiedad«privaestatal», «trabajadores por cuenta impropia», y otros tér-minos que ruborizarían cualquier geométrico pensar, hablan es-tas 156 páginas escritas con pasión quijotesca.

Estamos ante un texto de Geometría. No de la Geometría deTales o Pitágoras. Sino de la Geometría nuestra de cada día don-de la cuadratura cerebral impide ver los distintos ángulos desolución. Levantar su columna durante poco más de dos años ledio muchos palos… periodísticos, además.

Cuando lean a Bello pensarán que escribía como por arte demagia. Pero condimentar cada crónica tenía su truco, su oficio:«Sí, porque la gente (…) imagina que levantar una columnita esfácil. Y hasta estás conversando en un grupo y te dicen: “Ay, com-padre, escríbenos una croniquita ahí para entretenernos”», es-cribió en Tema el 2 de septiembre del 2000.

«Todo periodismo debe transmitir una carga humana, aunque sehable de hierros o de roca (...) Pero yo creo que lo más difícil en elperiodismo es la crónica; requiere de una cultura de gigantes, de unasensibilidad innata, de una visión muy amplia del mundo, de un ojoobservador muy especial, de una inteligencia para entender lo que seve...», confesó en entrevista a la Dra. Miriam Rodríguez Betancourt.

Manolo tenía gracia para cronicar. «Lindo verbo ese: cronicar.Porque significa contar, dejar testimonio, exponer costumbres, yesencias. Es como narrar la vida pequeña; esa que es tan inmen-sa», apuntó en Turbados del 17 de marzo del 2001.

Si por casualidad logras emocionarte, reírte o asombrarte conla sustancia de este libro es porque Bello estudiaba la vida que sepaseaba por las calles: «...Caminar por las calles (...) Enseña másque un tratado de sociología, informa más que un noticiero, aler-ta más que un parte meteorológico…

«Quien no camina por las calles se desayuna que la verdadque él suponía tiene una arruga en el ombligo, con que su reali-dad tiene celulitis en los muslos, con que sus pensamientos tie-nen los senos caídos. Caminar por las calles, qué escuela». Asírefirió el 30 de septiembre de 2000 en Calles.

El desconocido historiador, filósofo y sociólogo, Dr. ManuelGonzález Bello descansa en paz. En vida le quitó la paz a muchos,pero no le hizo la guerra a nadie. El Doctor Honoris Causa de La RealUniversidad de la Vida confesó poco antes de abandonar el reino deeste mundo que renunciaba a todo título rimbombante. Solo queríaser recordado como un periodista humano. Con una sonrisa.

de Manolo

Es mejor volver atrás que perderse en el camino

Rodolfo Tamayo Castellanos

ÚLTIMA CENA

Ahora los que mojan el panhablarán de los presagiosla albahaca recién cortadael hábito la memoria sus impurezas

Quién invocará la suerte de mis huesosy los pondrá sobre la mesapara hacer silenciopara que no vea el ojo avizory celebre a sus dioses

Asisto a esos sacrificiosfinjo disfrutar la comida la compañíano darme cuenta del cuchillo bajo el mantel

Ahora vienenno quiero ver como me injuriany me cortan las manos.

Intento olvidar las palabrassu voraz permanencia

Yo quería vivir más allá de estas crecidas(quise ser salvado)

Ellos se han idohuyeron de las visionesde la vigiliadel cuerpo olvidadobajo la única luz de un dios irreal.

Ilustración: Damián Valdés Dilla

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¿Quiénleponeelcascabelal

«Sabemos lo que somos, pero no lo que podemos llegar a ser»William Shakespere

tintaañeja

ACAMPADAS

Ya que nos vamos a poner nostálgicos,a evocar bellos momentos de la niñez, merecuerdo ahora, con diez u once años, des-pierto por primera vez a las dos de la ma-drugada, por primera vez acostado bajoel cielo estrellado, no en una cama, sinosobre una sábana puesta sobre la hierba,a unos kilómetros de mi casa, en plenocampo, rodeado de mis compañeros deaula que hacían cuentos de aparecidos ycriminales mientras los maestros manda-ban a callar, a dormir, a estarse quieto.Yo miraba las estrellas y no podía pegarun ojo; no por la emoción de asistir a eseespectáculo inefable que es un cielo sinnubes, de noche, lejos de las luces de laciudad; ni siquiera por miedo al fantas-ma de la muchacha que se había ahoga-do en el río hacía unos cuantos años, allícerca, y que aparecía por las madruga-das a llorar sus penas de muerta virgen;no, no podía dormir de pura incomodi-dad, por el cansancio, por el calor, porlos mosquitos, por el ulular de sabe Diosque bicho campestre, por los sudores acu-mulados después de una caminata de unoscuantos kilómetros, por el olor a humode fogata que se había impregnado a laropa, por la hierba húmeda, por las hor-migas que me subían pierna arriba, enfin, por esa sensación de vulnerabilidadque me provocaba estar lejos de mi mamá,por la humillación de ver lo bien que lapasaban mis amigos, lo bien que se lasarreglaban con sus mochilas y sus hama-cas, lo contentos que estaban por aquellanoche de libertad. Mientras que yo, niñotonto que se emocionaba leyendo aventu-ras de Tom Sawyer, no alcanzaba a dis-frutar mi primera aventura, mi propiaaventura, pues estaba demasiado preocu-pado porque al otro día había que hacernudos de exploradores, complicadísimosnudos para amarrar no sé que cosas, nu-dos que te explicaban en un manual condibujos que a mí, que ni siquiera sabíaamarrarme bien los zapatos, me parecíanininteligibles. Al final, por supuesto, elsueño me venció, y dos o tres horas des-pués el guía base estaba halándome lasábana, para que me levantara, para quetomara el desayuno –un desayuno malí-simo-, para que, medio dormido, hicierafila con los demás frente a los restos hu-meantes de la fogata, para que gritára-mos el lema, a todo pulmón y para decir-nos que ya estaba bien, que regresába-mos, que venía una guagua a buscarnospara que no tuviéramos que dar esa ca-minata de nuevo, que no habría compe-tencia de nudos ni nada por el estilo, quenos fijáramos bien si no se nos habíaquedado nada, no fuera a ser que dejá-ramos regada una sábana, o unpozuelo, o cualquier otra cosa enmedio del campo mojado.

Por Yuris Nórido

Encuentros Por Leonardo Chico Pimentel, estu-

diante de la Universidad de La Habana

Sigo siendo esa parte de mí que no recuerdo, bajoesta piedra solo se escucha el sonido de los pasos y sesiente la frialdad de la niebla. Solo me resta el lápiz, lascuartillas mojadas en el lodo del otoño, los amigos en-terrados en la playa, junto al cocotero seco. El pesimis-mo de la soledad va llenando mi vientre y aún quedohambriento.

Sé que el mundo no es solo una sombra, y de ese algomás allá de la mañana quedo soñando, colgado. Yo hesido de esos que han fabricado un idioma con los desva-ríos de un trago y dormido con los noctámbulos la nochede los encuentros.

En esa noche nadie se esconde, nadie tropieza con laspiedras ni las lanza, mis diez generaciones se me unen ycreo ser gusano inteligente, gusano filosófico. Los chi-cos preguntan por las mentiras para robarlas, los mayo-res, comentan por lo bajo mi locura y me cantan en unaestrofa sin sentido: ellos creen que alguna vez no fuigusano, ni mi piedra fue una simple piedra. Los mayo-res no saben que hay un tiempo de crecer a la cordura,que para enloquecer también hay un tiempo, solo quenadie recuerda a que hora es.

He aprendido a reconocerme piedra adentro, en luga-res insospechados construí los planos de la alegría y seperdieron. De arrastrarme tengo conchas rojas, incura-ble artritis, pero sigo persistente aquí donde ni Diomedessoñó, analizando cada estrofa de la vida como el críticoque encarna el poeta frustrado. Sé que me voy gastan-do como un cigarro y los míos se me alimentan, peroseguiré aquí, andando a mi lado en el minuto del miedo,buscándome; aunque sigo siendo esa parte de mí queno recuerdo, y de ti, por si un día lo descubres.

Bajo la égida de Alma MaterAlma MaterAlma MaterAlma MaterAlma Mater, en el año 85de la revista, la Casa Editora Abril, ávida deexaminar el impacto producido en las rutinaseditoriales —de publicación, de creación decontenidos y manejo de información— porlas Tecnologías de la Información y la Comu-nicación (TICs), convocó a sus trabajadorespara considerar el asunto.

«Quiero afirmar mi alegría porque, median-te tales ejercicios de introspección, se verifi-can estos intercambios entre profesionalesque buscamos autorreconocernos», dijo la li-cenciada en Comunicación Social y másteren Ciencias de la Comunicación por la Uni-versidad de La Habana (UH) Milena Recio,panelista invitada, ante los editores,informáticos, redactores, web másteres, co-rrectores, fotógrafos, diseñadores, bibliote-carios, realizadores, directivos y representan-tes de todas las áreas de la editorial que, in-teresados en las transformaciones que vie-nen sucediéndose en esta esfera producti-va, acudieron a la cita: «El interés mostradopor ustedes, denota sus deseos de aprender,pero, además, su sensibilidad ante lasdisyuntivas que el momento presente le trazaa nuestras profesiones.»

Milena Recio, periodista de Prensa Latina,editora del sitio web Visiones Alternativas(www.visionesalternativas.com) y profesorade la Facultad de Comunicación de la UH, nofue la única invitada. También participó en elpanel la especialista en información LiviaReyes, profesora de la misma Facultad y di-rectora del Centro de Información para la Pren-sa (CIP). «Lo más importante es que este en-cuentro se convierta en eso, en un intercam-bio», había dicho Livia en los inicios de la ex-posición; «en todo caso habría que ponderarqué tan verdaderas serían las soluciones quea veces uno tiene previstas: este tema es tanrico, que resulta aconsejable abordarlo des-de una perspectiva transdisciplinaria».

En efecto, si alguna propiedad fuese con-sustancial al estudio de los tajos abiertos enlas rutinas editoriales tradicionales por lastecnologías de punta, sería lainterdisciplinaridad. Quien pretenda precisar,por ejemplo, qué está ocurriendo hoy con losflujos productivos, indague si el mundo delperiodismo futuro será el de una gran redac-ción digital, inquiera sobre el ocaso de la re-dacción tradicional, demande si asistiremosa una simbiosis entre ambas, o se pregunte sila llegada de la tal redacción acaso no esta-ría matizada por la posesión de mayor o me-nor número de medios técnicos, tendrá quevérselas con las relaciones que en el campoeditorial vienen estableciéndose entre dife-rentes disciplinas.

Comenzamos la difusión del tema, volviendo,¡con los aperos de la entrevista!, sobre el verbode Milena Recio, estudiosa de los modos del

periodismo nacional en relación con lascapacidades y oportunidades que lebrindan a la profesión los nuevosentornos digitales.

Quien tenga una computadora dispone detodos los conocimientos publicados. (...)

(...) Una parte importante del problema estaríaresuelta tecnológicamente, la otra hay que cultivarlasin descanso o de lo contrario se impondrán losinstintos más primarios.

Fidel Castro Ruz17 de julio del 2007

Privilegio de invenciónUsted habló de la disyuntiva en que nos

encontramos con respecto al potencial quele brindan las TICs a las rutinas editoriales—nos dirigimos a la profesora-periodista.

Esta es una premisa básica, un leitmotiv.Siempre digo que una cosa es ser objeto yotra cosa es ser sujeto del cambio para pro-piciar (siendo sujeto) que este ocurra a lamedida de nuestros deseos y necesidades.Es un dilema frente al que debemos asumiruna de dos opciones: dejar que la vida nostransforme como ella lo entienda, o tomarla iniciativa de cambiar nosotros, con un pro-pósito preciso, con intencionalidad.

Porque está claro que el cambio viene, omejor, ¡qué ya está aquí!

Estamos ante una especie de «Crónicade un cambio anunciado». Las TICs vinieronpara producir una serie sucesiva de trans-formaciones en los procesos productivoseditoriales y, en general, en la calidad de lacomunicación social que establecemos porredes digitales. El cambio es inevitable, esun hecho consumado: la cuestión es quelogremos insertarnos en él del modo másconveniente a nuestras opciones o posi-bilidades. En resumen, se trata de planifi-car el cambio y evitar que este un día nossorprenda.

¡Menuda época nos ha tocado vivir!Esa es otra premisa, derivada de aque-

lla: somos testigos privilegiados de unaépoca maravillosa; los avances de la cien-cia y la técnica de los últimos 50 ó 60 añosimpactaron de manera notable todas lasesferas de vida en todas las sociedadeshumanas, independiente de sus fases dedesarrollo, a una velocidad cada vez másacelerada. La calidad y rumbo de estos«impactos» no son idénticos en todos losambientes y culturas, sin embargo, de-bemos intentar alejarnos de la sensaciónde vértigo inicial que podrían producir-nos, sensación que con toda naturalidadresulta del hecho de que contradicen oremueven lo establecido. Debemos pro-mover la idea de que, como sociedadesy como individuos, seamos capaces decapturar sobre todo el sentido positivode estos cambios y sintamos el privilegioque nos ha tocado. Así podremos actuarconscientemente sobre ellos, en todas lasesferas y desde todos los roles.

El fin de una eraSomos testigos, estamos viviéndolas,

nadie tiene que contárnoslas, de una seriede micro y macro transformaciones, degrandes y pequeños formatos.

Y ahí surge la tercera premisa de estahistoria, la posibilidad de ser testigos acti-vos del proceso de cambios, convencidos

de que gozamos del privilegio de la crea-ción, de que en el despliegue de nuestraactividad, asistidos por un espíritu creativo,podríamos reinventarlo todo: a propósitode las aplicaciones de las TICs en la esferaparticular de la producción editorial, no hasido dicha, aún falta mucho para poder pro-nunciarla, la última palabra. Las TICs, valeinsistir, nos han dotado de un terreno fértilpara, siempre que lo intentemos, provo-car una verdadera revolución en el ámbi-to de la comunicación pública.

¿Significa que en el mundo de hoy nadiepodría erigirse en el absoluto conocedor de loque sería con toda seguridad una redaccióndigital?

Creo que todavía nadie puede definir ro-tundamente qué cosa es una redaccióndigital o cómo funciona. La respuesta na-cerá de la práctica, y de la intención deexperimentar; esta será la brújula en elmodelado de las mejores soluciones: lasadecuadas a los problemas formuladospor quienes se propongan objetivos edito-riales para publicaciones digitales.

Por ende, tampoco hallaríamos un canon,un tipo de redacción digital que pudiera sertomado como base por la generalidad de losredactores, editores y diseñadores, ¿o sí?

Hay experiencias «exitosas», tanto enlas redacciones de grandes medios de co-municación, de alcance regional o global,como en proyectos de periodismo alter-nativo más locales pero igual importantes.Sin embargo, no creo que ya pudiésemoshablar de tal canon, entre otras razonesporque, repito, nunca las formas específi-cas de trabajar y producir contenidos –pe-riodísticos y no periodísticos– para redesdigitales, habían sido tan recreadas comohoy. No necesariamente hay que imitar.Hay que crear. Quien estudie la historiadel periodismo cubano desde principios delsiglo XX, identificará con claridad cómo lasredacciones de los periódicos más influi-dos por el antiguo patrón español, fueronmudándose hacia la pauta norteamerica-na, y no porque en Cuba fuésemos espe-cialmente imitadores, que también lo fui-mos. En el mundo entero se verificó la mis-ma conversión. El periodismo estadouni-dense de fines del siglo XIX y principiosdel XX; el modelo de Hearts y de Pulitzer[William Randolph Hearts (1863-1951) yJoseph Pulitzer (1847-1911)], terminó porestandarizar asuntos tan disímiles comoel formato, el número de planas, el modode diseñarlas, las formas narrativas, el es-tilo y, lo más importante, la «noticiabilidad»,atributo característico de un hecho real quele permite convertirse en noticia. Con eltiempo, y bajo múltiples influencias, tam-bién en París, Londres o Berlín surgie-ron verdaderos newspapers, al más

COMUNICADORES SIGLCOMUNICADORES SIGLCOMUNICADORES SIGLCOMUNICADORES SIGLCOMUNICADORES SIGLO XXIO XXIO XXIO XXIO XXI

puro estilo neoyorquino. Es una historialarga la de la implantación del «periodis-mo moderno», sus episodios se ubican endiferentes latitudes, pero el canon del pe-riodismo norteamericano se transformó enel canon de aquel; lo que podía o debía serperiodístico correría por aquella canal; yatodo estaba dicho y hecho: solo había queimitar.

El comunicador digital¿Adónde quiere l legar con esta

consideración?A responder la pregunta de arriba con

una idea que quizás sea controvertida, perode la que estoy segura: las TICs, y en parti-cular ese fabuloso prodigio que es Internet,posibilitan, cada día con más profundidad,la erosión del monopolio de la voz; se estáproduciendo un fenómeno de socializaciónde la capacidad de decir, expresar, interpre-tar y relatar el mundo de muchas maneras,hecho que traerá vastas consecuencias cul-turales. Es estimulante que empiecen amostrar fisuras los férreos límites que an-tes imponían la especialización técnica yprofesional, el alto costo de las tecnologías,o, más aún, el verdadero apartheid creadopor la concentración monopolista de losmedios de comunicación en manos de unospocos. Internet, y en general las redesdigitales, nos han provisto de una platafor-ma para comenzar a burlar esos límites.Frente a Hearts o Pulitzer, ayer, y Murdoch,Turner, Berlusconi, la Ley Patriótica o cual-quier otra forma de censura política o eco-nómica, hoy, comienza a desarrollarse unacapa cada vez más habilidosa e inteligentede personas –sean o no profesionales de lacomunicación– que toman la palabra, se de-jan ver, se hacen escuchar y contribuyen allogro de un mayor equilibrio comunicacionalen nuestro mundo.

Se democratizó la autoridad, el do-minio sobre las formas de reproducirinformación.

El hecho tecnológico trae consecuenciasimportantes, como por ejemplo, la posibili-dad de que cualquiera de nosotros puedaconvertirse en editor de contenidos. Podríadecirse que si en el siglo XX no quedó otra

Por Hilario Rosete Silva Foto: Abel Ernesto

alternativa que imitar el canon norteame-ricano, en el siglo XXI cubano, burundés ochino, pertrechados por estas tecnologías,podremos recrear y reproducir informa-ción de forma cada vez más cercana a nues-tros modos y urgencias específicas de co-municación.

Llegados a este punto, ¿de qué definiciónde redacción digital estaríamos hablando?

Redacción digital es la manera más sinté-tica que tenemos para hablar de nuestrasrutinas de trabajo. Buena parte de las discu-siones que deberíamos sostener buscaríanprecisar cómo organizarnos, qué rol desem-peñaría cada cual, quién deberá primerohacer qué cosa, y en qué orden le seguiríanlos otros. Pero no creo que la secuencia deltrabajo, su organización fáctica, sea lo másimportante. El surgimiento y estructuraciónde la redacción digital como modelo produc-tivo entraña transformaciones en algo tan omás primordial que las rutinas de trabajo: laideología profesional, la mentalidad del pe-riodista o comunicador digital, el conjunto deideas o modos de pensar que lo distinguen.

Psicología de un personajeEl periodista o comunicador digital, ten-

dría valores culturales, maneras de traba-jar y hacer particulares.

Hablemos, por ejemplo, del tiempo ylos estilos de trabajo. Con Internet eltiempo se ha vuelto tan elástico que casidesaparecieron sus límites. El que ahoranos interesa es un tiempo no solo local,sino global. Las tecnologías tradiciona-les de la radio, la televisión y la impren-ta, determinaron la «tiranía del cierre»como algo consustancial a los procesosde trabajo asociados a ellas. Tanto es así,que una de las mayores virtudes de unperiodista es su rapidez y disciplina fren-te a la hora del cierre. Hay que saber «en-tregar» a tiempo el material porque existeuna hora tope para salir al aire o imprimir. Asu vez, el público o los lectores están espe-rando, ¡siempre a la misma hora!, nuestrosmensajes. Es por eso que a esta activi-dad se le llama periodismo, porque esperiódica, cumple ciclos estables. Perocon Internet todo cambió: cuando publi-camos una información a medianoche en

La Habana, Madrid está empezando avivir el nuevo día, se halla en la franjahoraria matutina de mayor consumo denoticias. Así que ya no podemos confor-marnos con la vieja idea del «cierre».Se acabó. Internet es perpetua, comotambién debe serlo nuestra disposicióna comunicarnos en varios idiomas, conun horizonte global.

Otro gran cambio se verificaría en la ideaque tenemos acerca de ese público o deesos lectores.

Preferiría decir, de los «usuarios» de nues-tros mensajes. Si bien el número de perso-nas conectadas a Internet en el planeta norebasa el 10 ó 15 por ciento de la poblaciónmundial, constituyen varios cientos de millo-nes de usuarios, cada vez más selectivos,habilidosos, inteligentes y listos para juzgarpor sí mismos la calidad de la información a laque acceden. La revista Time decidió que elpersonaje del año 2006 eran los usuarios deInternet. ¿Qué significa? Más allá de la bana-lidad intrínseca en la espectacularidad de estetipo de anuncios, es importante pensar en

cómo los usuarios vienen modificándo(se). Y nosolo se modifican a sí mismos, también cambianla expectativa que los comunicadores tendría-mos de ellos. Un usuario de Internet entrenado oexperto, es capaz de buscar, seleccionar, filtrar yorganizar información utilizando tanto directo-rios, buscadores o meta buscadores, seangeneralistas o temáticos, como otro gran núme-ro de herramientas, fáciles de emplear, que hoyestán al alcance de todos. Esto significa queemergen usuarios que desechan o bien lo queno les interesa o bien lo que consideran repetiti-vo o de baja calidad.

«Durar» o «estar» en Internet¿Qué pasaría si los comunicadores nos

quedásemos a la zaga de esas habilidades?Necesitamos aprender de y con los usua-

rios. Hay buenos ejemplos de cómo ellosgestionan su información de un modo cadavez más eficaz. Y no es que no necesitenayuda de los profesionales. Todo lo contra-rio. Creo que nos necesitan más que nunca.Nos necesitan más que nunca porque antela «infoxicación» (con letra efe) se requie-ren especialistas-semáforos, y porque engeneral los relatos sobre la realidad siguensiendo celosamente monocordes, tenden-ciosos y sesgados. Así que también es pre-ciso estimular a los usuarios para que seancapaces de romper la hegemonía cultural eideológica que oprime a la mayoría de loshabitantes de este mundo; dominación quehoy se ejerce, de manera fundamental, através de los medios de comunicación tra-dicionales. Pero hay que comenzar a verel filón colaborativo de esta relación conlos usuarios. Está variando aquel habitualpanorama que definía a los públicos comoconsumidores pasivos.

El gran salto no residiría en que un perio-dista dejase la máquina de escribir parasentarse frente a una PC.

El verdadero cambio no está supedita-do a tener a nuestro alcance una nuevainfraestructura, una moderna dotacióntecnológica. La real transformación –yesta es otra premisa–, siempre se da enla cultura profesional, y acá podríamosasociarla con las respuestas a un grupode interrogantes: en calidad de periodis-tas digitales ¿cómo nos vemos?, ¿con cuá-les objetivos generamos y difundimoscontenidos?, ¿con qué fines provocamos aotros?, ¿cómo, por qué y para qué dispone-mos de la capacidad de comunicarnos?

¿Usted se refiere a una «vocación decomunicación»?

Los proyectos que nacen de cara a Internetdeben poder distinguir entre «durar» enInternet –en el sentido de mantener un espa-cio de manera pacífica e irrelevante– y «es-tar» en Internet –desarrollando, y aprovechan-do, la carga de innovación y pasión que ellaexige–. Las motivaciones, los objetivos, laintencionalidad, serán nuestro punto de par-tida. De esa vocación de comunicación parti-rán todas las preguntas, y hacia ella tributa-rán todas las acciones. Tenemos algoque decir, tenemos la necesidad pro-fesional y humana de hacerlo, y elgusto de ayudar a otros a saber y aconocer. Con todo esto basta.

fotorreportaje

Agosto se convierte en la razón del descanso ansiado. Las opciones nunca sonsuficientes, pero aún así siempre hay lugar para el esparcimiento y la recrea-ción. Algunos prefieren visitar amigos, ir a conciertos o simplemente entregarsea las caricias de Neptuno en una furtiva huida del calor imperante. Otros, sinmás, dan rienda suelta a la realización de sus hobbies favoritos.

Por Abel Ernesto

VORÁGINE

Hace poco sostuve una interesante con-versación con una amiga, psicóloga deprofesión. Nuestro diálogo versó sobre elcomportamiento tan dialéctico que tienela moda en los jóvenes. Hablamos decomo a diario somos testigos y somete-mos a crítica, favorable o no, los violentoscambios en la manera de llevar los cabe-llos, el vestir, el uso de prendas y hasta lade buscar recreación.

Especialmente nos hicimosdueños del tema del tatuaje, que,aunque algunos no compartanmi idea, también se ha converti-do en moda y de un tiempo a lafecha ha ganado una notablepreferencia.

Es en los cazadores primitivosdonde se vio por primera vez eltatuaje. Su antecedente más le-jano es la cicatriz como huella de un hechoque quiere ser recordado (la caza de unanimal, una batalla).

El hombre marcó sobre su piel los atribu-tos que lo identificaban, por lo que encon-tramos en el tatuaje el más viejo ancestrode los escudos nobiliarios. Con el surgimien-to de la propiedad privada, comenzaron amarcarse los animales, armas e instrumen-tos, para dejar claro el derecho sobre ellos.En Oceanía se usó hasta para distinguir auna soltera lista para el matrimonio, de unacasada.

Las personas sancionadas por la ley acos-tumbran a tatuarse con elementos rudimen-tarios. Las distintas inscripciones y figurasusadas por algunos de los que han perma-necido en la cárcel son de temas amorosos,religiosos o de venganza, que responden auna concepción machista de la sociedad.

Los marineros han servido de puenteentre los continentes, su influencia ha sido

clave en el uso de este adorno. A principios del pasado si-

glo aparecen los tatuajes eje-cutados en colores, con tintasde origen animal y mineral. Enla actualidad existen pegatinasusadas como tatuajes. En va-rios países es común el oficiode tatuar: hay revistas espe-cializadas, industrias con mar-cas registradas e, incluso, mu-

seos dedicados a este gusto estético porlas cicatrices y los tatuajes, lo cual no quie-re decir que el tatuado sea siempre vistocon buenos ojos; hay quienes no le dan ca-tegoría de arte a esta práctica antiquísima.

Sobre este controvertido tema que per-manece en la naturaleza humana se pue-den escuchar múltiples opiniones: se argu-menta que es una forma de expresar ideas,conceptos sobre la vida, y consideran inte-resante llevar consigo una imagen que essolo suya, artístico el hecho de grabar unaexpresión gráfica que utilice como soporte

La moda del tatuaje

Paisajecon lío

su propia piel; pero también existe el crite-rio que anatematiza su uso como marginaly despreciable.

La piel, ese imprescindible tegumentoque protege el cuerpo, puede ser dañadacon esta moda que obstaculiza la labor delos poros; por otra parte, las agujas conque se realizan (si no son estériles) pue-den ser portadoras de bacterias y viruscomo el VIH-SIDA.

Además ¡No olvidemos que las modaspasan!

Por Sandy López González

El 7 de agosto de 2005 fallecía en La Ha-bana el trovador Noel Nicola uno de los pro-tagonistas, junto a Silvio y Pablo, del partode la Nueva Trova, movimiento que lo dio aconocer en toda la Isla y buena parte delmundo.

A dos años de su muerte y a tono con elpasado Cubadisco 2007 en el que se le rin-dió homenaje, quizá no todos losvertientinos recuerdan la antológica can-ción que, además de mencionar a ese te-rruño y sus tradiciones, nos presenta unamujer singular: la imaginaria María del Car-men, aquella que, al decir del texto «la en-volvían los ruidos del tandem inglés del cen-tral», en franca alusión al ingenio azucareroPanamá.

La pieza, escrita a finales de los años 70,surge durante la estancia de Noel Nicola enVertientes, Camagüey, como parte de la Co-lumna Juvenil del Centenario, momento enque se le describía como «hombre delgado,sonriente y enjuto, muy lejos del prototipode machetero ideal».

Por aquellos días, cuando «junto a la literadescansaba la guitarra y bajo la débil colcho-neta, versos y apuntes», el trovador frecuen-taba la casa de calle «A», entre segunda ytercera, donde residía la muchacha que, al pa-recer, lo inspiró entre descargas y tertulias.

Esta dirección o punto de referencia secontrapone un tanto a las preguntas del co-lega Amado del Pino: «¿ sería en la humildey melancólica estación de trenes de Vertien-tes donde la peculiar sonrisa del joven Noelse dio de frente con el personalísimo andaro con los súbitos de María del Carmen?»

«¿Caminarían juntos el largo paseo queva desde la cuna de los trenes hasta eltandem inglés del central?»

Quizás. Responde este periodista, quientuvo referencias de Carmen María ReynosoGallegos, otrora estudiante de IngenieríaQuímica, máxima sospechosa de lasestrofas del texto, el más escuchado deNicola e indispensable en el cancionerotrovadoresco cubano.

Kalía, como se le conoce a la joven, seopone por su mera existencia a la trampaque subyace en el título de la composición(«Para una imaginaria María del Carmen»)y su amistad con el autor, los encuentrosreiterados, nos permiten especular sobreel origen del texto.

Lo cierto es que, como la Yolanda de Pa-blo Milanés, la Gretel de Carlos Varela, ola Lucía de Joan Manuel Serrat, la no tanimaginaria inspiradora nos acerca a la piely el andar de una musa de carne y hueso,cuya gracia y magnetismo cautivaron alpoeta.

Con esta canción imprescindible recor-damos hoy a Noel Nicola Reyes, una delas figuras a las que se dedicó la recientefiesta del Disco Cubano (Cubadisco 2007),juglar de alas enormes, autonombrado«trovador sin suerte» y que SilvioRodríguez lo definiera como «fundamen-tal desconocido, rica sustancia por reve-lar y hombre amado de pétalos pintadoscomo dientes».

Mientras usted lee estas letras, la imagi-naria María del Carmen puede, ahora mis-mo, estar atravesando el parque mientrastodos los ojos le halan el vestido. Ojalá yeste periodista pudiera tropezarse con ellapara, de alguna manera amarla, tal ycomo hubiera querido el mismísimoNoel Nicola Reyes.

De pétalos pintados como dientes

Por Luis Enrique Perdomo SilvaFoto: Tomada de Internet

Foto: Abel Ernesto

Amigosdel Alma

Alma Joven, el taller para mirar a fon-do nuestro Periodismo, continúa. Sus se-siones motivadoras fueron el 21 y 22 dejunio, pero su imprescindible extensiónestá siendo desde que periodistas comoYosvani Albelo, de Matanzas, decidierondarle cauce en su territorio. De allá nos exi-gen fraternalmente las memorias del even-to para sustentar a partir de ellas, otras mi-radas. Pronto estarán, al igual que la posibi-lidad de descargar en nuestra web —comosolicita Luis Arzúa, de la Universidad de LaHabana— ediciones anteriores de la revis-ta. Por cierto, Luis, estamos enviando víaemail detalles de la última actualización decada número. Ya que atiendes divulgación,dile a todos los fans que pueden recibir estaprimicia con solo escribirnos a:[email protected]. De segurolos muchachos de la Universidad deOriente se suman, pues por allá persis-ten dificultades para obtener la versiónimpresa. Nuestros amigos de la tierramás caliente de Cuba piden además unamayor presencia de su región en estaspáginas. Los puentes permanecen ten-didos; así que hágannos llegar cuandoquieran trabajos, anhelos, sospechas,dudas. Estudiantes de Periodismo, Filo-logía, Socioculturales y todo aquel quetenga vocación por la letra impresa don-de nace el sol de la Isla, mande las palo-mas digitales hasta la Editora Abril. Us-tedes pueden y la voz añeja de los uni-versitarios lo necesita. ¿Escuchó, profeRafael Pérez? Ese interesante artículoque prepara sobre la metodología de laenseñanza, no lo deje únicamente en lasede municipal Jesús Menéndez de LasTunas. A todos los que hemos estado eno frente a un aula, nos ayudará mucho. Yya que nos quedan pocas líneas, saque-mos a la luz unas cuantas felicitaciones,que durante estos meses se han acumu-lado alegrías. Sí, Yansulier, ahora te toca,pues a tu premio en el Alma Joven unis-te un «5» en la tesis de Licenciatura enPeriodismo. Enhorabuena. Y ya sabes:esperamos tus artículos cienfuegueros.Igual de exitoso fue el ejercicio de gra-duación de Glenn y Richard, dos estudian-tes del ISDi que laboraron en una pro-puesta de rediseño de Alma Mater. Estedúo de nombre inglés encauzó las pre-ocupaciones de todos por seguir movien-do palabras, ideas e imagen en funciónde lo que preocupa y ocupa en las uni-versidades cubanas. Ah, pero el más jo-ven de los felicitados es Hilario Rosete,nuestro periodista, que ha cumplido 10años, por quinta vez. Para celebrarlos,este apasionado de la prensa, se instalóen el podio de premiaciones en el con-curso periodístico 26 de Julio. Te segui-mos leyendo, Hilario.

Desde el planeta B-612

Uno tiene que seguir siendo quien es, y alejar-se, como de la sombra de la mata de guao, de quie-nes pretenden cambiarte. Vivir intensamente esvivir. Hay otras vidas, pero no son vidas revolucio-narias.

[Guillermo Cabrera Álvarez]

Por El farolero

Los biocombustibles son ponderadoscomo una solución viable para reducir lasemisiones de gases causantes del efectoinvernadero, fenómeno innegable, verdadincómoda, que el presidente George W.Bush trató durante mucho tiempo de ta-par con un dedo, pero argumentada deforma magistral por el ex vicepresidenteAl Gore en un documental que merecióun premio Oscar.

Las palabras etanol, bioetanol,gasohol, posiblemente sean las más men-cionadas por los medios de comunicacióndel mundo. El bioetanol es un productoque se obtiene a partir de sacarosa, al-midón o sustancias con alto contenido decelulosa. Traduzcamos, caña de azúcar,remolacha o melazas, en el primer caso,maíz en el segundo, o madera y residuosagrícolas en el tercero.

Esa sustancia es vista como una alterna-tiva energética por el rápido agotamientode los combustibles fósiles y una opción másamigable con el medio ambiente.

Pero, ¿será el alcohol una soluciónecológica, o por el contrario, un remediopeor que la enfermedad?

Investigadores de la Universidad deStanford sugirieron esa última posibilidaden un estudio llamado «Efectos del Etanol(E85) contra vehículos de gasolina sobre elcáncer y la mortalidad en los Estados Uni-dos» difundido en la revista científicaEnviromental Science and Technology. Su autor principal Mark Z. Jacobson, seña-ló que hasta ahora no se había evaluado elriesgo potencial de desarrollar cáncer y lasconsecuencias ambientales, de las emisio-nes de autos que trabajan con una mezclade gasolina y etanol.

Bajo su mando, un equipo de expertosrealizó un modelo de pronóstico, global yurbano, de la contaminación del aire, com-binado con datos poblacionales actuales yfuturos de los efectos en la salud pública: laincidencia de cáncer, mortalidad y hospita-lización en los Estados Unidos y la ciudadde Los Ángeles, en particular.

Encontraron que la combustión de E85(etanol en un 85 por ciento y gasolina en un15 por ciento) puede aumentar en un nuevepor ciento, la mortalidad, la hospitalización,y el asma, relacionado con un aumento enlos niveles de ozono estratosférico en LosÁngeles y el noreste del país, compensadoscon parciales reducciones en el sureste.

En el resto del territorio norteamericano,la incidencia de daños sería de un cuatropor ciento en comparación con la combus-tión solo de gasolina.

El etanol como aditivo de la gasolina tam-bién se vinculó con un incremento en elambiente del nitrato de Peroxyacetyl (PAN),pero se estimó que el riesgo de cáncer poresa sustancia inorgánica es bajo.

Sin embargo, debido a la incertidumbreen las regulaciones de emisiones futuraspor la combustión de etanol, Jacobson pien-sa que la probabilidad de que sea mejoradala calidad del aire por el uso del E85, es pocaen comparación con las emisiones de losvehículos que utilizan gasolina.

La mayor combustión de etanolpuede dar lugar a una escala glo-bal mayor de acumulación deacetaldehído que las emisiones di-rectas, subraya el estudio.

Riesgoso «Nuestros resultados muestran que unaalta mezcla de etanol plantea un riesgoigual o mayor para la salud pública que lagasolina, que ya causa un daño significati-vo», expresó Jacobson. El equipo de Stanford, pone de esa formaen duda la creencia generalizada de que elalcohol constituye una opción favorable ala salud humana y al medio ambiente. Paraello se basó en un modelo computarizadoque compara a Estados Unidos en dos cir-cunstancias diferentes.

Una recrea la actual, autos que funcio-nan en su gran mayoría con gasolina. Laotra, como rodarán en ese país en el 2020,época en que se prevé funcionen con E85.

Las conclusiones de los investigadoressorprenden. Predicen que en el segundo caso,lejos de disminuir la contaminación del aire,aumentarían las concentraciones de ozonotroposférico, uno de los principales compo-nentes del smog.

El aumento de los niveles de ozono malose observa ya en Colombia donde se utilizacada vez más el etanol como aditivo de lagasolina, declaró Héctor García Lozada, ex-perto en Ingeniería Ambiental y Salud Públi-ca de la Universidad Nacional de Colombia.

«En Bogotá, desde que se inició hace unaño el uso de alcohol carburante (o etanol)en la gasolina, se han incrementado dra-máticamente los niveles de ozono en elaire», indicó.

«Y en una atmósfera en la que coexistan pro-blemas de material particulado y ozono, sepotencializa el riesgo para la salud», añadió. Para simular la calidad del aire en los distintosescenarios, tuvieron en cuenta factores comola temperatura, luz solar y nubosidad. Según los científicos, si todos los vehícu-los trabajaran con etanol, 200 estadouni-denses más morirían cada año y 120 de esosdecesos por enfermedades respiratoriasocurrirían en la ciudad de Los Ángeles.

Masa vegetal+fermentación+destilación=etanol

El proceso tecnológico para produciretanol es muy antiguo, fermentaciónanaeróbica de los azúcares con levadurasen agua y posterior destilación, pero se haperfeccionado con el desarrollo de labiotecnología e informática.

Desde finales del siglo XX la producciónde alcohol para su empleo en vehículos au-tomotores entró en auge, particularmente

l.q.q.d.

Por Juliett Morales García

en Brasil, donde la empresa alemanaVolkswagen comenzó a fabricar unVWBettle de dos puertas o escarabajo, conmotor adaptable para consumir alcohol enlugar de la gasolina regular.

El gigante sudamericano, con destileríasinstaladas en sus centrales azucareras, fa-brica etanol a partir de biomasa con lo quehan logrado un combustible renovable. Latecnología brasileña obtiene ese subproductodirectamente de la planta moledora, en lu-gar del proceso clásico de fermentación demieles finales.

Aún más complejo es el proceso paraobtener el alcohol del maíz, porque necesi-ta primero ser hidrolizado para transfor-marlo en azúcares, método empleado enlos Estados Unidos. Como materia prima se emplea el exce-dente de maíz que el Departamento deAgricultura de ese país, mantiene fueradel mercado mundial de alimentos paraque los precios no declinen.

Eso condenaría a la muerte prematurapor hambre y sed a más de tres mil millo-nes de humanos, reflexionó el Presidentecubano Fidel Castro, a raíz de la reunión deBush con fabricantes norteamericanos deautomóviles.

Los periódicos estadounidenses TheEconomist, The New York Times y ForeingAffairs, están de acuerdo con el líder cubano.

Habría que preguntarse entonces, si conlos posibles riesgos a la salud y el incre-mento de los precios de alimentos básicospara la población mundial, el etanol seríaun remedio peor que la enfermedad.

De pronto las opciones de distracción no están en loslugares esperados. La juventud añora espacios acordescon sus casi nulos ingresos monetarios. Muchos bares, ca-feterías, discotecas, villas turísticas y otras empresas re-creativas, siguen cobrando en pesos convertibles, mien-tras las ofertas —y aspecto y ambiente—, de las que re-caudan en pesos cubanos, bien permanecen deprimidas obien continúan siendo impropias para los débiles bolsillosjuveniles.

En consecuencia, la dirección de la UJC en la provincia deCiudad de La Habana, junto con el gobierno provincial, em-prendieron, una vez más, hará cuestión de dos años, un pro-yecto destinado a reanimar varios centros gastronómicos,mayormente de la calle 23 capitalina, y a generar sanoesparcimiento, pero considerando la economía de los másjóvenes.

Entre otros aspectos, la génesis del plan retomaría el ritodel café, no solo entendido como casa pública donde sesirve esa bebida, sino como peña y tertulia, espacio cultu-ral o zona de juntura entre artistas, intelectuales y hom-bres de a pie. Así renacieron aquí los cafés literarios: con laapertura del G-Café, a fines de 2005, en la esquina de G y23, en el Vedado.

¿Una cafetería sin café?A la zaga de este, abrirían varios establecimientos de su

tipo en la ciudad, todos con afluencia de jóvenes ávidos deleer el libro deseado, escuchar la música preferida, fuesetrova, jazz o rock ligero, y sobre todo, de poder invitar a unamigo a un café: ¡los precios se lo permitirían!

La idea de relanzar los cafés literarios apostaba enton-ces a una alternativa, a un uso diferente, enriquecedor parala cultura y el espíritu, de la recreación y el tiempo libre, enun ambiente que, por su frescor o informalidad, resultaríasugestivo.

Las empresas Malecón, Campismo Popular, Doña Yulla, yGastronomía y Comercio de Plaza de la Revolución, brinda-rían su apoyo financiero para subsidiar las ofertasgastronómicas, y el Instituto Cubano del Libro, a través desu Centro Provincial, proveería los libros y revistas quegarantizarían las ventas y los préstamos. Esta misma insti-tución contribuiría con doilys, portavasos, dibujos de pinto-res cubanos y fotos y textos de premios nacionales de lite-ratura, a la creación de la imagen corporativa. Con esabuena voluntad, arrancaron los cafés.

La calidad del servicio y el trato eran aceptables, se res-piraba aquel ambiente sano, informal, y los clientes esta-ban satisfechos, pero, ¡siempre los peros!, con la prácticade cada día, la idea comenzó a desvirtuarse, de primerainstancia por G-Café, el establecimiento insignia, el mejorubicado en la geografía urbana.

Primero se perdieron los doilys de las mesas, y luego elHavana Club de los mojitos; el stock de libros de préstamono ha sido renovado; a los consumidores, máxime a loslectores, se les recorta cada vez más el tiempo de estanciaen el café; y a menudo se torna imposible poder «libar elnéctar negro» en horas de la noche, negligencia que seríacomparable, por ejemplo, con el hecho de que se vendie-ran rositas de maíz en un cine que no exhibe películas...

¡Cultura sí, lucro no!Al inicio, con el ánimo de averiguar «las causas de las

cosas», centramos el estudio en los problemas de G-Café,quizás por su índole de «buque madre», para hacerlos con-trastar con la supuesta «altura» de otros «locales tipo»,como son La Rampa (Pabellón Cuba) y 23 y 12. Despuéscomprendimos que los juicios no podían guardar relaciónsolo con nuestra manera propia de pensar o sentir las ex-periencias vividas en una instalación: igual debían referir-se al trabajo en sí mismo de cada una y a las vivencias queotros habrían tenido allí.

Cualquier asiduo de los cafés que lea estas líneas, coteja-rá sus experiencias y las nuestras. Uno se atreverá a afir-mar que en G-Café, además de los altos precios, se adop-tan medidas represivas. «Hay que mantenerse consumien-do, aún cuando afuera no haya nadie esperando». Para eldependiente, el cliente solo tiene una opción: o se mantie-ne consumiendo, gastando a mares, o abandona el local...Otro señalará que La Rampa empezó bien, pero los sumi-nistros empezaron a escasear, y de pronto cierra más tem-prano... Un tercero hasta ponderará las bondades de 23 y12, pero lo acusará de pequeñito, incapaz de dar entrada atanta gente... Lo que le pudo suceder a este consumidor enun local, le sucedió a aquel en otra de las casas.

La realidad que permanecería inalterable, sería la delconcepto de café literario, idea que para Nancy Velásquez,encargada de la venta de libros en 23 y 12, designa a unasinstalaciones que brindan un servicio distinto, diferente,donde la juventud puede lo mismo «aumentar sus conoci-mientos leyendo un libro, que reunirse o tomar un café». Latrabajadora tiene claro que «la esencia del proyecto essobre todo cultural, no lucrativa».

Rectificar en públicoAhí radica el intríngulis de las deformaciones de la con-

cepción inicial. Ya en G-Café, ya en La Rampa, ya en 23 y12, cada vez que se privilegie el consumo gastronómico endetrimento de aquel uso enaltecedor, para la cultura y elespíritu, de la recreación y el tiempo libre, cada vez que seenrarezca el ambiente de informalidad, se estará come-tiendo un desatino.

Cuando escribíamos este trabajo la nómina de G-Caféreunía a 21 trabajadores, con salarios comprendidos en-tre 225 y 300 pesos, y una pauta de recaudación fijada en6 mil pesos diarios por su Empresa de Gastronomía y Co-mercio. El incumplimiento del plan impediría que a losempleados pudiera estimulárseles, el día del cobro, conun por ciento extra, por consiguiente los dependientestrabajan a como dé lugar para cumplir la norma, aún acosta de advertirle al cliente, esté leyendo un libro u ho-jeando una revista, que deberá abandonar el café si no semantiene consumiendo. Es una paradoja que el plan deganancias de G-Café en el año 2006 se cumpliera al 128por ciento: «Con un plan de 2 millones 396 mil 214 pesos,se alcanzó una cifra real superior a los 3 millones», dijoDavid Cuevas, subdirector de la empresa. A buenentendedor con pocas palabras basta: encima de que des-virtúan la naturaleza del proyecto, las regulaciones deltiempo de consumo serían injustificadas incluso para quienlas mirase desde una óptica mercantilista.

Alguien nos informó que, a tenor de las dificultades,G-Café cerraría sus puertas durante julio y agosto de2007 para someterse a una remodelación. En el fondonos alegramos de que hasta ahora esto no hubiese su-cedido. Cerrar, en vacaciones, un servicio que, por suesencia, se granjeó la simpatía del joven, vendría a serlo mismo que botar el sofá.

Justamente con esto queríamos terminar. A pesar de losdoilys y Havana Clubs perdidos, a pesar de los libros queno se renuevan, a pesar del tiempo —de estancia— que seles recorta a los consumidores, a pesar, incluso, de los altosprecios, y hasta de la mismísima falta del café, el proyectotiene aceptación: defiende un espacio informal, consustan-cial al joven, que bien no es común en su medio o bien no sehalla a su alcance, y que el muchacho necesita para vivir yrelacionarse, para escuchar y ser escuchado, para compar-tir con los demás.

El supuesto desconocimiento de los propósitos del caféliterario, los mismos que animaran a sus autores intelec-tuales a relanzar el proyecto, no es excusa para que malfuncionen. Sus trabajadores, en especial los administrati-vos, asumirían la responsabilidad si se apartasen de la ruta.Estas instalaciones no merecen contagiarse con cierta en-fermedad accidental transitoria, que ataca al mismo tiem-po, en una zona determinada, a un gran número de esta-blecimientos: la mentalidad del no servicio. No se concibeque una epidemia de este tipo pueda seguir «cobrandovidas» en un sistema de esencia humanista.

Por los estudiantes de Periodismo:Estay Martínez, Dayán García,Yasiel Cancio, Abel Oliveras.Tutor: Hilario Rosete Silva

El Gran Maestro cubano LeinierDomínguez implantó el pasado juliouna nueva marca de puntuación paraun ajedrecista nacional. La lista publi-cada por la Federación Internacional dela disciplina lo ubicó con 2680 puntosELO, dos unidades más que en la pa-sada edición de abril del 2007.

Tal desempeño lo mantuvo en ellugar 33 del planeta, al tiempo que si-gue comandando a los trebejistas deLatinoamérica. Llama la aten-ción que existe desde hace yavarios meses —el ranking seactualiza cada tres— poco cambio enla punta de vanguardia, con el indioViswanathan Anand en la cima (2792),seguido por el campeón del orbe, elruso Vladimir Kramnik (2769), el búl-garo Vesselin Topalov (2768) y elucraniano Vasily Ivanchuk (2762).

Por cierto, este último, doble mo-narca de los torneos Capablanca inmemoriam —el más longevo deAmérica y el más importante deCuba— dio un salto espectacular alsumar 33 puntos en el segundo tri-mestre del año, como para re-afirmar sus reales aspiracio-nes de ser algún día el núme-ro uno del planeta.

Sin embargo, el sueñode Leinier Domínguez estácada vez más cerca de ha-cerse realidad: romper la barrera de2700 unidades ELO. Su actuación enel fuerte torneo AeroSvit, en Ucrania,en junio no se incluyó en el rankingmundial publicado el primer día delmes siguiente.

De ahí que los diez puntos obtenidos enese certamen europeo —jugó para el 50por ciento del rendimiento al terminar con4,5 puntos de nueve posibles— serán su-mados a Leinier para la lista de octubre,en la que debe arribar a los 2690 unida-

des, apenas a un paso de su sueñomejor en el mundo de las 64 casillas.

«No es una meta imposible alcanzaro sobrepasar los 2700. Para esa cifra

Cada día máscerca de su sueño

Por Joel García

Leinier Domínguez:

solo debo seguir jugando como lo estoyhaciendo ahora, con mucha confianza,

preparación y sin regalar nada a misrivales», confesó el trebejista haba-

nero a la prensa con su acostumbradasencillez al regresar de Ucrania, lidque calificó como la más fuerte queha jugado en su carrera deportiva.Envuelto otra vez en uno de sus me-

jores años competitivos —en el 2004consiguió un quinto puesto en el cam-

peonato mundial de la FIDE—Leinier no quiso lanzar vatici-nios acerca de cuándo logra-

rá esa ansiada barrera que lo ubicaría,sin discusión, entre los 15 mejores deluniverso ajedrecístico, pero sí aseguróque aprovechará el mínimo de errorde sus contrarios en los torneos a queasista.

A sus 25 años parece haber con-quistado lo que a otros les ha tomadoaños, una vida entera en conseguir.Con 15 obtuvo su primer norma deGM y a los 17 la definitiva. Ha sidocampeón nacional de la Isla en tres

ocasiones (2002-2003 y 2006),submonarca del planeta (catego-

ría sub 18 en el 2000).Además, es recordista na-

cional en simultáneas (enfren-tó a 150 rivales), titular en cer-támenes europeos y como sifuera poco, quinto lugar en el

campeonato mundial de Trípoli en el 2004,la mejor actuación de un cubano en estasjustas desde el título de José RaúlCapablanca en las primeras décadas delsiglo XX.

¿En qué está basada tu invulnerabili-dad en Güines?, le pregunté atrevida-mente un día.

«Allí lo tengo todo. Es un pedacito detierra indescriptible. Tengo a mi familia,las amistades y al ajedrez en perfectaunión. Me llevo bien y entreno con todoslos ajedrecistas jóvenes de Güines. Es unagran cantera para este deporte y en loque modestamente contribuya mi presen-cia, allí me encontrarán siempre».

Codiciado tanto por las adolescentes —que lo encuen-tran más sexy que al inglés David Beckham— como por losamantes del fútbol, el portugués Cristiano Ronaldo sobre-sale entre los íconos del momento en el más universal delos deportes.

Los grandes clubes del Viejo Continente sueñan con él,pero el viejo Sir Alex Ferguson, su entrenador en elManchester United, se niega a ceder a su portentoso vo-lante, que vale su peso ?—y más— en oro.

El dueño del «ManU», el estadounidense Malcolm Glazer,lo sabe bien y pretende vendérselo al FC Barcelona o alReal Madrid, adonde quería irse Cristiano tras su broncacon el inglés Wayne Rooney durante el Mundial.

Sin embargo, al técnico madridista Fabio Capello solo leinteresa reforzar su línea defensiva, y desaprovechó laoportunidad de conseguir casi gratis al astro luso.

De haber recalado en la capital española, el once meren-gue hubiera sumado otra estrella a su constelación de«galácticos», formada por estrellas como Luis Figo, ZinedineZidane, Ronaldo, Beckham o Robinho. La colección de piropos referidos al internacional portu-gués aumentan, encabezados por los del alucinadoFerguson, quien aseveró que su pupilo «hace cosas de otroplaneta. Su actuación es de otro mundo». Para el ex goleador inglés Gary Lineker, «Ronaldo es jo-ven, tiene 22 años y estará entre los futbolistas mejores detodos los tiempos. Lo tiene todo. Su técnica es enorme, sutalento sublime y tiene capacidad para maniobrar a unagran velocidad». En tanto, Carlos Queiroz, otrora entrenador del RealMadrid, admitió que jamás había encontrado un jugadorcon tanta calidad... «Tiene armonía, fantasía, velocidad ytécnica».

Roy Keane, su compañero en el Manchester lo considera«un artista», mientras otro jugador del United, el defensorinternacional Rio Ferdinand, cree que «nadie ha hecho laclase de fútbol que él ha practicado, ni nadie ha emociona-do tanto».

Ojalá, por su propio bien, que Cristiano Ronaldo Viadodos Santos Aveiro sepa manejar la fama y las lesiones lorespeten, para que el mundo siga disfrutando de su talentofuera de serie.

Por Carlos E. Morales

EL SALTO DEL CABALLO

CURIOSIDADES

SOPA DE LETRAS

¿QUIÉN ES?

Por Alejandro Delgado Castro

PROBLEMA MATEMÁTICO

RESPUESTAS

La España de Rodrigo Díaz de Vivar, sitio convulso hacia donde convergieron losesfuerzos de las dos religiones que dominaban al Occidente en puja continua por lasuperioridad, no existe siquiera en cuanto a unidad geográfica o lingüística. Descen-dientes de los restos y despojos del reino visigodo, los nuevos señoríos y reinos de lapenínsula van forjando, en una dura lucha entre sí y con sus vecinos musulmanes, lanacionalidad que luego será proyectada con fuerza impresionante aunque no admira-ble, sobre el resto de la Europa y el Nuevo Mundo, una vez haya concluido el procesoque le dio forma. Te proponemos encontrar aquí los nombres de siete de aquellosterritorios españoles que fueron cuna y sostén sucesivo de la Reconquista, aún cuandono coincidieran en el tiempo como unidades políticas.

El rey ha prestado oído a las malas artes de la envidia y lleno tal vez de secreto gozoconcede, mediante asaz diploma y proclama, que el conocido como Campeador entre susvasallos de este reino deCastilla, Ruy Díaz, señor consolar en Vivar, cerca de Burgos,ha de abandonar sus dominiosen nueve días, sin que, bajopena de confiscación y cegue-ra, le preste auxilio alguno, in-genuo o siervo, entre sus súbditos. Cantará luego el trovador:«Mio Çid Ruy Diaz por Burgos entraba,En su compaña, sesaenta pendones;exienlo ver mugieres y varones:Burgueses y burguesas por las finiestras sonPlorando de los ojos, ¡tanto habian el dolor!De las sus bocas todos decian una razon:

Destrozados los ejércitos visigodos en la batalla deGuadalete, apenas un puñado de años basta a los musul-manes para apoderarse de casi toda la Península, excep-ción hecha de las montañosas e inhóspitas regiones del norteasturiano. Nace así el dominio de ocho siglos del Islam sobre laantigua Hispania, que, menguado y sangrante, tarda en morir losuficiente para dar a conocer una de las civilizaciones más brillantes,dentro de sus limitaciones, que conoció la Europa Occidental que tantohubo después de vanagloriarse de la suya. Al-Andalus, llamaron los morosal territorio y al espíritu que acogía, que tomó las formas maravillosas de laGiralda sevillana, de la mezquita de Córdoba, la Aljafería de Zaragoza, la imperdo-nable visión de la Alhambra, donde, a juzgar por un visitante posterior (…)jueganentre los arabescos y las fuentes de agua buena, los ritmos imprescindibles con losque las huríes mantienen el movimiento infinito de sus caderas en el paraíso del Profe-ta. «… Al-Andalus es, cómo no, la tierra de los vándalos, pero es también la tierrafutura de los que alguna vez vivirán en ciudades regidas por un al-caid o alcalde, quetrocarán la s- latina de saponem por la j- arábiga en el jabón, los súbditos de la granpotencia cuyas naves conducirán los emir-altah, o almirantes, hacia el descubrimientode mundos nuevos en que serán seducidos por el alcohol de los rones de la caña deazúcar salida de los almacenes o el alcaloide destructivo extraído de la planta deltabaco».

En la sociedad del antiguo califato de Córdoba, solo algunos individuos usaban tur-bante. Estos estaban siempre vinculados al tema religioso, y como tal eran sacralizadoscomo prenda de vestir. A algunos individuos, sin embargo, les era permitido el uso deturbantes, y se paseaban por las calles desde Sevilla hasta Zaragoza tocados con unosturbantes de hermoso color verde. Estos eran los sayyid, los descendientes de Mahomay solo ellos podían llevar ese color entre la abigarrada muestrade una calle andaluza cualquiera. Dice el libro sagrado de losmusulmanes: «En verdad, en la creación de los cielos y de latierra, en la sucesión alternativa de los días y de las noches, enlos buques que bogan a través del mar para llevar a los hombrescosas útiles, en esa agua que Dios hace descender del cielo y conla cual da la vida a la tierra muerta poco antes, y donde ha dise-minado animales de todas las especies, en las variaciones de losvientos y en las nubes dedicadas al servicio entre el cielo y latierra, en todo esto hay advertencias para todos los que tieneninteligencia». Alcorán, Sura II, Vers. 159.

¿Cuántos cuadrados distintos puedes contar en el dibujo deljoven sayyid con turbante?

Observa atentamente las advertencias. ¡El problema no es tan fácil como podríaparecer!

El personaje del pasado número fue Benjamín Franklin,importante científico y político estadounidense. Franklin fue

precursor de lo que hoy conocemos como los lentes bifocales.Inventó el pararrayos. Se convirtió en el único padre y fundador

en firmar los cinco documentos que establecen la IndependenciaEstadounidense: La Declaración de Independencia, El Tratado de Con-

cordia y Comercio con Francia, El Trata-do de la Alianza con Francia, El Tratado de

Paz con Gran Bretaña y La Constitución de losEstados Unidos de América.Ahora traemos la imagen de un edificio símbolo

de Valencia, la ciudad que el Cid conquistó a los mo-ros y que lleva en su construcción, a pesar de su estilogótico, las huellas imborrables de la influencia árabeen España.

Sopa de letras: Asturias, León, Castilla, Portugal, Aragón,Navarra, Catalunya.

Salto del caballo: «Oh Dios, que buen vasallo, si hobiesebuen senior! »

Problema matemático: 11 cuadrados.

A veces ocurre que nombres propios dan origen a unafamilia de palabras. Ahí te va un ejemplo, aunque si miras atu alrededor hallarás muchos más.

Si has visto la película El jorobado de Notre Dame, recor-darás lo que son las gárgolas. Existen varias versiones acerca del origen de estapalabra. Según una de ellas, gárgola y gárgara proceden de gargouille, que significa«gaznate, garganta». Un antiguo mito francés del siglo XVII, cuenta que un dragónsalió del río Sena y, en vez de lanzar fuego, echaba agua y así inundaba los pueblosde los alrededores de París, hasta que, enfrentado y domado por el obispo deRouen, fue muerto y quemado. Antes le cortaron la cabeza y la colocaron en elfrente de una casa. Muchos edificios antiguos están adornados con figuras decriaturas que dan miedo y que, generalmente, tienen un tubo para verter elagua: se les llama gárgolas en recuerdo de Gargouille.

(Enviado por María Luisa García Moreno)Como me gusta hablar

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