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Narrativas de ficcion y realidades

Cuando Mario Vargas Llosa era anunciado por la Academia Sueca como el Premio Nobel de Literatura 2010, en la Republica Dominicana la celebracion se hizo en un viaje por el tiempo infinito de la lectura (de izquierdas, de dictaduras, de amores, de glorias.. . de hiperrealidades ...) Un tiempo que el escritor peruano record6 como "la edad de filosofar" cuando fue condecorado por el Gobierno dominicano con la Orden Heraldica de Cristobal Colon, grado Gran Cruz Placa de Plata. De aquel primer -y osado- encuentro de 1915, el considerado primer Nobel dominicano guarda en su memoria un recorrido por las entrafias de una tierra que timidamente tenia libertad. A1 volverse presente y viviendo una decada despues de la llegada del siglo XXI,

Vargas Llosa saluda la metamorfosis dominicana de la "mas cruel de las dictaduras" a la "adopcion de una cultura democratica que ha reforzado sus instituciones". Hemos trascrito su discurso es en esta edicion de Global, palabras improvisadas que, sin embargo, desnudaron ese vinculo entrafiable entre el autor de La fiesta del Chivo y esta tierra. Palabras que motivaron a1 presidente Leone1 Fernandez a revelar esa pasion lectora que se encuno en Villa Juana y se mantiene vigente, con nortes como Vargas Llosa, de acuerdo a sus declaraciones durante la condecoracion del Nobel. Y, claro esta, es un bibliofilo como el ministro de Cultura, Jose Rafael Lantigua, quien acufia la expresion: "Mario Vargas Llosa es el primer Nobel dominicano". Lantigua se declara "vargallosiano", y lo demuestra con un analisis de las novelas del escritor que marcaron epocas, tiempos, narrativas. Esta triada de vinculaciones con la ficcion da pie a la narrativa real del uso de la Internet. Wikileaks aparece para motivar preguntas, respuestas y debates. kEs esto periodismo?. . . kEs esto etico? . . . CY las fuentes? Los interrogantes 10s responden dos periodistas, Maria Isabel Soldevila y Sully Saneaux, junto con el filosofo David ~ lva r ez . Sin dudas, el portal de Julian Assange, tal como sefiala Soldevila, es una alerta sobre 10s procesos transparentes de 10s gobiernos del continente. El contenido de la tripleta enlaza con una mirada tenaz que hace el premio Nacional de Periodismo 2010, Rafael Molina Morillo, a una profesion que ama y, por amarla, no oculta un declive progresivo proveniente de la falta de credibilidad, en parte de 10s periodistas, quienes no han logrado adaptar la narrativa de 10s que no tienen voz. Desde 10s tribunales hispanoamericanos tambien se escucha la voz de quienes apoderados de la jurisprudencia alemana que juzgo a 10s nazis que cometieron el Holocausto, pasan factura a 10s crimenes cometidos bajo la dictadura, el terrorism0 o paramilitarismo. En este caso se narra la justicia, desde las perspectivas de Francisco Mufioz Conde y Hector Olasolo. En esta Global, que corresponde a1 numero 38, las ficciones y realidades, sin dudas, quedan narradas.

Carlos Dore Cabral

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I CONTENIDO U -----------------------------------------------------------------------------.

Mi vida ha estado enredada con la Republica Dominicana Mario Vaqgas Llosa El premio Nobel de Literatura 2010 relata sus vivenclas en la Republica Dorninicana tras ser condecorado por el Gobierno con la Orden Heraldica de Cristobal Colon, grado Gran Cruz Placa de Plata, en el Palacio Nacional.

Un testimonio de gratitud

Mario Vargas Llosa marc6 a toda una generacibn a traves de las novelas que comenzaron a llegar a la Repdblica Dominicana justo a1 final de la dlctadura de Rafael Leonidas Trujillo La admlracion por el escrltor trasciende la lrteratura y se vincula con su renovado pensamlento politico.

El vinculo entrafiable de Mario Vargas Llosa con la Republica Dominicana Jose Rafael Lantigua Mario Vargas Llosa ha sido el escrltor de renombre universal que con mas frecuencia se ha referido a la Repdblica Dornlnicana y qulen con mas fuerza y coherencia ha defendido la democracla dominicana. El premio Nobel de Literatura 2010 es, sin duda, el primer Nobel dommicano.

Entrevista a: Rafael Molina Morillo Iban Campo El abogado Rafael Mollna Morillo, Premio Nacional de Periodismo 2010, revela que la vocacion en esta profesion es cada vez mas ausente. "Veo casos de personas que llegan a 10s medios para enrlquecerse, extorsionar o buscar ventaja para lograr algo afiadido". Mas de cinco decadas de profesion avalan las aseveraciones que hace sin ningun trpo de duda y con firmeza

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El medio ambiente en la Constitucion Dominicana C6cile Castaing de Grull6n La Constitucion de la Republica Dorninicana contiene por primera vez varias disposlciones consagradas a la proteccion de 10s recursos naturales.

Italia: la partidocracia a1 timon de un pais a la deriva Marco Coscione A principios de 10s ochenta, Enrico Berlinguer subrayaba fuertemente el tema central de la llarnada "cuestion moral" en Italla A 29 afios de aquella advertencia, la democracia itallana todavia "corre el rlesgo de ahogarse en un pantano"

Los dominicanos frente a la sociedad del consumo Serafino de la Cruz ~ lvarez El consumismo poco a poco se convierte en un rasgo que define la sociedad. De hecho, "cornprar" en centros comerciales o por Internet ya forma parte de la vida de una gran cantidad de ciudadanos.

Una mirada joven a la justicia y democracia en la Republica Dominicana Emil Chireno El poder y la influencia que ha adquirido la rarna judicial no tiene precedente alguno en la historia de la democracia. En reiteradas ocasiones, gran parte de las mentes mas lucidas dedicadas a1 estudio del poder han acogido con beneplacito una creciente judicializacion de la politics.

Informe Especial La aplicacion del concept0 de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder en Hispanoamerica Francisco Mufioz Conde y Hector Olasolo La tesis desarrollada por Claus Roxin, en 1963, para juzgar a todo el aparato nazi que ejecuto el Holocausto se ha cornprobado con 10s juicios de las dictaduras y paramilitarismo en America Latina

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Wikileaks y la revelation de inforGci6n clasificaok .. / sobre las guerras de Irak y Afganistan, ademas b L

cuarto de rnillon de cables del Departamento de Estado, han despertado en el mundo de 10s medi& . , ie cornunicacion las mas encontradas reacciones, cLo 4.1

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-01aboracion entre clnco rnedios emblematicos de :?;;!;;.I , * . & *

la prensa tradicional a un nuevo modelo que saque m?:: ::. lr .,b ;

de su depresion creatlva y financiers a 10s medios ri :: y

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Mi vida ha estado enredada con la Republica Dominicana El premio Nobel de Literatura 2010 relata sus vivencias en la Republica Dominicana tras ser condecorado por el Gobierno con la Orden Heraldica de Cristobal Colon, grado Gran Cruz Placa de Plata, en el Palacio National.

e he sentido dominicano por el afec- to, por la gratitud que tengo por este pais, por el Caribe, por el ca-

riiio que siento por tantos dominicanos. Ya ten- go, pues, tres nacionalidades, la mia, la del pais donde naci, el Perli; la espaiiola, que vino a enri- quecer mi nacionalidad peruana, y ahora la do- minicana, que viene a enriquecer la espaiiola y la peruana.

He llegado a una edad, 74 aiios, en la que se puede filosofar un poco sobre el destino humano, sobre esa geografia que esta detrAs de la histo- ria de todos 10s individuos en la que intervienen mliltiples factores, per0 acaso, principalmente, el azar. A mi, el azar, hace 36 aiios me trajo a la Re- publics Dominicana por primera vez para hacer un documental patrocinado por la radiodifusora francesa; un documental que queria ser turistico, cultural, politico, lo que me llev6 a recorrer todo el pais y conocer muchos dominicanos, escuchar de ellos ankcdotas de la historia. Algo deb% pasar durante esa semana en la que estuve trabajando, porque en mi memoria quedaron revoloteando

muchas imhgenes y una necesidad que fue cre- ciendo con 10s dias, con 10s meses, de volver.

Efectivamente, el azar volvi6 otra vez a orga- nizarme la vida para que retornara a la Republi- ca Dominicana en 1975. Estuve casi ocho meses con motivo de la filmaci6n de una pelicula ba- sada en una de mis novelas. Fueron ocho meses importantisimos en mi vida, puedo decir que la marcaron de una manera sustancial.

Durante esa 6poca hice amigos entraiiables, que siguen sitndolo, que han repercutido extraor- dinariamente y que ademas se lanzaron en una de las aventuras mas ricas que he tenido como escritor de ficciones. Escuchk tantas antcdotas, tantas historias, tantos hechos inverosimiles, in- creibles, sobre 10s 31 aiios de la era de Trujillo, que senti, como me ha ocurrido unas cuantas veces en la vida, la urgencia, la necesidad pe- rentoria, de fantasear una novela a partir de esa fascinante y por supuesto, atroz y terrible expe- riencia que padecieron 10s dominicanos.

Fue un libro muy dificil de escribir y, a1 mismo tiempo, una aventura fascinante. Fui entrando en

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Fotos: Efe

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las entraiias de un fen6meno que han padecido practicamente todos 10s paises latinoamericanos, el de la dictadura, el autoritarismo, el de la fuerza bruta convertida en poder.

Todos 10s pueblos han sufrido dictaduras, per0 ninguna con tanta atrocidad, tanta cruel- dad y tambiCn con tanto espiritu de resistencia y heroism0 como el dominicano. Esa es la historia que quise plasmar en LaJiesta del Chivo, una de las novelas que ha sido una de las mayores satisfac- ciones que he tenido en la vida como escritor, por todas las dificultades que he tenido que vencer para escribirla, per0 tambiCn por la extraordina- ria generosidad de tantos dominicanos sin la cual jamiis hubiera podido terminar esta historia.

En la novela La 8esta del Chivo, Vargas Llosa narra la historia del dictador Rafael Leonidas Trujillo.

Sin la ayuda de gente como Jost Israel Cuello y Lourdes Camilo de Cuello, Soledad ~ l v a r e z y Bernardo Vega, y tantos otros que facilitaron el trabajo proporcioniindome libros, documentos, recortes de peri6dicos, y sobre todo sus testimo- nios personales; unos testimonies maravillosos a travts de 10s cuales se podia revivir dia a dia, mi- nuto a minuto, lo que significaron estos 31 aiios para la Rephblica Dominicana, para Amtrica, para la historia de la universalidad politica. Este no es un libro de antologia histbrica, es un libro sobre el presente, sabre el futuro, sobre lo que no debe volver a ocurrir en nuestras tierras.

Desde entonces, mi vida ha estado enredada con la Rephblica Dominicana donde he vuelto

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Cuando Vargas Llosa public6 La fiesta del Chivo la critica ratific6 el "innegable talento como narrador".

una y otra vez por distintas razones. Cada vez he visto con alegria la satisfacci6n profunda, perso- nal, c6mo este pais iba derrotando ese pasado de violencia, de injusticia y de horror, c6mo iba for- taleciendo sus instituciones democriiticas, c6mo iba prosperando econ6micamente, c6mo la Re- p~blica Dominicana de hoy en dia estii verdade- ramente a afios luz de la Repitblica Dominicana que yo conoci hace 36 afios.

La adopcion de la cultura democratica Este pais, y con alegria lo digo, es uno de 10s pocos ejemplos que tenemos todavia en Amkrica Latina de c6mo adoptando la cultura democrii- tica, reforzando las instituciones, aprovechando el ejemplo de 10s paises que han sabido derrotar a la pobreza y progresar, se puede ir venciendo a1 subdesarrollo creando una clase media cre- ciente que ve estabilidad y seguridad en las insti- tuciones. Todo eso ha venido ocurriendo en este pais, que ya no solo yo siento como mio, tam- biCn mi familia.

Esa familia tribal, casi biblica, que es la mia, ya no solo viene a la Repitblica Dominicana, la invade. Pero es una invasibn carifiosa, cor-

dial, afectuosa de mis dependientes que sC que a1 igual que en mi caso seguiriin sosteniendo cada vez mhs en casa, como es mi casa. Porque esa es otra de las grandes virtudes dominicanas que admiro, ese sentido proverbial de la hospi- talidad, esa manera tan generosa de abrir 10s brazos a quien pisa su suelo, su playa, su diversa geografia, y hacerlo sentir no un forastero, sin0 uno miis del lugar.

El primer contacto Mi primer contacto con la Repitblica Dominica- na fue a travCs de uno de 10s grandes hombres que ha producido la inteligencia y la cultura en AmCrica Latina, don Pedro Henriquez Ureiia. Lo descubri cuando era un estudiante universi- tario en Lima, porque uno de mis maestros era un devoto lector suyo y C1 nos enseii6 a leer sus ensayos y aprender lo que significa la cultura, una manera de romper con todos 10s provincianismos, con todas las orejeras, con todos 10s prejuicios, y una manera de llegar a sentir lo que es ser verda- deramente un ciudadano del mundo.

Eso es lo que fue ese dominicano universal de esa generacibn de grandes hombres renacen- tistas que nacieron en AmCrica Latina, a1 mismo

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Vargas Llosa afirma que "conoci6 las entraiias de la Republica Dominicana" durante la filmacion de una de sus peliculas en 1978

tiempo que Francisco Garcia Calderbn y Alfon- so Reyes, continuadores de un Sarmiento. Esos latinoamericanos, pese a ser de Amtrica Latina en su tiempo una regibn empobrecida del mundo, fueron sin embargo grandes creadores, grandes pensadores, capaces de traer el mundo del pen- samiento, del arte y la cultura a nuestra regibn y tambitn de volcar lo mejor que tenia nuestra regibn para el resto del mundo.

Pedro Henriquez Urefia fue mi primer con- tac t~ , mi mejor contacto, con la Reptiblica Do- minicana. Por todos esos aiios es uno de esos autores que de tanto en tanto vuelvo, porque en sus pkginas creo que todo latinoamericano des- cubre lo mucho que nos une y tambitn la peque- fiez, para no hablar de la idiotez, de todo aquello

que a veces nos separa y nos destruye. Creo que ahora que recibo el reconocimiento de la Orden HerAldica de Cristbbal Colbn Grado de Gran Cruz Placa de Plata tan generoso es el momento de recordar a un hombre como Pedro Henriquez Ureiia. Otra demostracibn que con el esfuerzo, que con la voluntad, se pueden superar todas las limitaciones y alcanzar el mejor nivel.

Extracto de las palabras del escritor peruano durante el

act0 de imposicibn de la Orden Herildica de Cristbbal

Colbn Grado Gran Cruz Placa de Plata, en el Palacio

Nacional, el 28 de diciembre de 20 10.

Mario Vargas Llosa es el premio Nobel de Litera-

tura 2010.

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grandes ideas I la base de un

g a g

I

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Un testirnonio de gratitud El premio Nobel de Literatura 2010, el escritor peruano Mario Vargas Llosa, escogio un tema dominicano para universalizarlo y darle presencia a la Rephblica Dominicana, no solo en el mundo de las letras, sino en el mundo de la curiosidad universal.

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s de profundo orgullo que Mario Vargas fue La casa verde, porque hasta entonces teniamos Llosa haya sido reconocido como Pre- una experiencia de lectura lineal. Leiamos mas mio Nobel de Literatura y que nosotros, bien 10s autores del siglo XIX, a 10s cliisicos de la

en la RepGblica Dominicana, lo hayamos sentido literatura, a Le6n Tolstoi, a Fi6dor Dostoievski. como un premio nuestro, porque es el premio de Leiamos a Victor Hugo. toda AmCrica Latina y el premio de todos 10s que Por tanto, a1 encontrarnos con La casa verde fue en el mundo hablan la lengua espafiola. la primera vez que entendimos 10s planos tempo-

Por su supuesto, es un galard6n que, interpre- rales y espaciales, la complejidad de una novela tando el sentir de 10s intelectuales dominicanos, moderna. se esperaba desde hace dos decadas. Cada afio, Y seguiamos con Conuersacidn en la Catedral. a la hora de reconocerse a 10s premios Nobel, es- Aquello que le pas6 a Perit, aquello de Zavalita.. . thbamos atentos en el pais a si salia el nombre de Voy a obviar 10s detalles de la palabra exacta y Mario Vargas Llosa. De manera que ha llegado en fin llegamos a la novela Lajesta del Chivo, de con retraso, pero ha sido un act0 de reparaci6n Repitblica Dominicana, que sin duda alguna se y de justicia. present6 como un acontecimiento. Mucha gente

El nivel de influencia intelectual que Vargas en buena parte del mundo me confundio creyen- Llosa ha tenido en la Repitblica Dominicana tie- do que yo era el autor, porque preguntaban tan ne gCnesis en que hace 37 afios empezaron a cir- continuamente acerca de Lajesta del Chivo, 2quC cular sus libros. Entonces yo vivia en mi barrio hay de verdad en esto?, 2qut hay de mentira?, de Villa Juana, un sector de clase media baja. 2quC le parecih? Pienso que contribuy6 a darle Alli circulaba un folleto de un diiilogo del Premio visibilidad y notoriedad a la Republica Domini- Nobel con Gabriel Garcia Mhrquez en la Univer- cana a nivel mundial. sidad de San Marcos, Lima, sobre la nueva na- Es un testimonio de gratitud que tenemos rrativa en AmCrica Latina. para el escritor Mario Vargas Llosa, porque es-

cogi6 un tema dominicano para

I I universalizarlo y darle presencia a

ES un testimodo de gratitud que la Repitblica Dorninicana, no so10 en el mundo de las letras, sino en el

tenem0s para el es~ritor Mario mundo de la curiosidad universal.

Vargas L ~ u s ~ , POrqUe escogi6 Un Mi novela preferida del autor es PA. rr una de las menos mencionadas, de

tema dominicano. I

las menos referidas. Es La historia de Mayta. Se trata del caso de un lider trotskista peruano llamado Alejan-

Ese texto fue sumamente revelador para 10s dro Mayta, que estaba participando en las luchas j6venes de la Cpoca, porque fue como descifrar de las izquierdas peruanas de Amkrica Latina de c6mo se construye una novela, fue como penetrar aquella Cpoca y fue quedandose en soledad, fue en donde estii la capacidad para crear la estructu- quedhndose solitario y a1 final se descubre una ra de las cosas. Ahi descubrimos cosas fabulosas: vida personal un tanto nebulosa. Y de verdad que c6mo se elaboran las ficciones, c6mo se constru- (la novela) retrataba de alguna forma a muchos yen las novelas y c6mo evolucionaba la novela personajes de la izquierda de 10s aiios sesenta y de latinoamericana de la kpoca, la novela del boom 10s afios setenta. latinoamericano.

Fue a partir de entonces cuando comenzamos Entre la literatura y el arte a leer Losjefes, Los cachorrosy La ciudady los perros, Pero, si bien sentimos una profunda admiracibn, que, debo confesar, a 10s 18 afios resultaban difi- un amplio reconocimiento a la labor de ficci6n de ciles de entender.. . Una novela compleja como lo Vargas Llosa, hay otras facetas suyas que nos han

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permitido ver en su persona lo que es la configu- raci6n del intelectual por antonomasia. Porque no es solamente es el escritor capaz de producir obras de arte, sino que es un te6rico y un estudio- so de la literatura y del arte.

Por consiguiente, ya no solamente era leer L a casa verde, sino L a historia secreta de una novela para entender cbmo se construy6 L a casa verde. Y na- turalmente tambitn era ver a travts de Historia de un deicidio cuales son las influencias personales y las influencias intelectuales que un aspirante a escritor recibe y puede utilizar en la creaci6n de su obra.

Me pareci6 que la idea central, el argument0 central que elabora en L a historia de un deicidio es que el artista, por encima de todo, siempre es un rebelde y que tiene que matar a Dios porque no acepta la realidad tal cual. Es la rebeldia contra la realidad para construir su propio mundo. Por tanto, el artista siempre como un rebelde, el artis- ta siempre como un disidente, el artista siempre como un inconforme, como alguien insatisfecho con su mundo real que necesita construir la rea- lidad ficticia. Pero no lo puede hacer solo por si mismo, sino que es el fruto de muchas influencias.

Recibiendo todas estas influencias personales, de la vida cotidiana, de la familia, del entorno, de la historia y las lecturas que el escritor va te- niendo para crear su propia realidad ficticia con relaci6n a la realidad real.

Por supuesto, una vez preguntt a Vargas Llo- sa, cuando sinti6 que iba a ser escritor, y me con- test6 que fue a1 aprender a leer, que

briel Garcia Marquez, que nos va contando en- tonces sus influencias intelectuales, que empieza con Julio Verne, con Alejandro Dumas, y sigue con Victor Hugo, 10s autores del siglo XIX, per0 ya de manera mas moderna (esth) el descubri- miento de William Faulkner; el encuentro con 10s autores franceses: Eugkne Ionesco, Samuel Beckett, Jean-Paul Sartre, Albert Camus, An- drt Malraux, y c6mo influyen hasta el punto de que Vargas Llosa va a vivir a Francia durante un tiempo para ser parte de esa cultura francesa que se va creando.

Es por consiguiente esa mezcla de lo clhsico, de lo moderno, de las propias experiencias per- sonales que fueron creando a este gran escritor y gran te6rico de la literatura y el arte que es Var- gas Llosa.

No solamente hemos disfrutado de esa obra de ficci6n que ha creado, de ese universo que ha creado, sino que hemos aprendido mucho de sus reflexiones te6ricas acerca de la literatura.

De la izquierda a1 liberalism0 Tambitn he prestado mucha atenci6n a la evo- luci6n de su pensamiento filosbfico, politico e ideolbgico, porque sabemos que venia de una tra- dicibn de izquierda de la que fueron parte todos 10s j6venes de este pais y de Amtrica Latina en algGn momento, porque todos hicimos de la lucha contra la dictadura, contra la opresibn, contra la arbitrariedad y contra la humillaci6n y el atrope- 110, la causa fundamental de nuestras vidas.

el hecho de haber aprendido a leer I I fue como una magia, fue como un I

despertar porque a partir de ahi se Mi novela preferida de Vargas - -

sumergi6 en un mundo de fanta- Llosa es una de las menos sia y de cuentos. Me sorprendib que justamente empezando su discurso , mencionadas: La historia de Mayta. I de aceptaci6n del Premio Nobel, en I I Suecia, empez6 por recordar que el descubrimiento de la lectura fue el acontecimien- Entendiamos que la lucha contra la dictadu- to mas fascinante, impresionante y de mayor im- ra nos llevaba a la revoluci6n y la revoluci6n fue portancia en su vida. la gran utopia, el gran suefio que toda una ge-

En ese discurso de la Academia Sueca esta neraci6n estuvo buscando en Amkrica Latina y contada L a historia de un deicidio per0 en su caso; en todas partes del mundo. El Premio Nobel lo en el Ensayo de un deicida esta (la historia) de Ga- asumib en esos ttrminos, per0 por circunstan-

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El escritor firma el libro de honor durante la presentacihn de la exposicihn "Mario Vargas Llosa, la libertad y la vida", en el Instituto Cervantes de Estocolmo.

cias del desarrollo de 10s acontecimientos histb- ricos hizo una transicibn hacia una concepcibn mhs liberal y occidental, y en su discurso de Suecia donde esthn sus influencias intelectuales en ese terreno, en Jean-Fran~ois Revel, que ya venia usted citando en mhltiples ocasiones en Contra uientoy marea, en 10s articulos de El Pais y en muchas publicaciones.

De manera que nos ha abierto horizontes en diversos campos, de diversas maneras y nos hace entender exactamente el trabajo riguroso, la dis- ciplina intelectual que se requiere para cristalizar el sueiio, la aspiraci6n de ser un intelectual influ- yente en su kpoca, en su tiempo.

Leykndole se percata que el autor tenia profun- da admiraci6n por Sartre y por Camus y quizis queria ser como ellos. Hoy 10s j6venes latinoameri- canos quieren ser como Mario Vargas Llosa.

Nos sentimos profundamente enaltecidos, honrados, de que el escritor adoptara a la Reph- blica Dominicana como su tercera patria. Leyen- do ese discurso de Suecia, veiamos que eran tres

las menciones a nuestro pais. A1 tener una vivien- da en Juan Dolio sabemos que ha fijado domicilio en el pais. Para tener la garantia de que habri una sucesibn en el tiempo tambikn nos ha hon- rado con la presencia de sus hijos y de sus nietos. Entonces reciben la antorcha de la dominicani- dad de parte de Mario Vargas Llosa.

Los dominicanos no podiamos esperar tan- tos regalos. Lo mhs que podemos decirle es que nos sentimos profundamente orgullosos de usted, profundamente honrados de que el escritor pueda compartir con nosotros la nacionalidad de la pa- tria grande de AmCrica Latina.

Nota: Este texto fue tornado de las palabras del presi-

dente Leonel Fernfindez durante el act0 de condecora-

cibn con la Orden HerAldica de Cristbbal Colbn en el

Grado Gran Cruz Placa de Plata a Mario Vargas Llosa,

Premio Nobel de Literatura 2010.

Leonel Fernandez es presidente de la Repdblica

Dominicana.

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Jose Rafael Lantigua

El vinculo entrafiable de Mario Vargas Llosa

Dorninicana Ha sido el escritor de renombre universal que con mas frecuencia se ha referido a1 pais y quien con mas fuerza y coherencia ha defendido la democracia dominicana. Ha visitado en innumerables ocasiones nuestro territorio y acaba de establecer residencia temporal en esta nacion. El premio Nobel de Literatura 2010 es, sin duda, el primer Nobel dominicano.

ace 35 aiios, de pie, en la iiltima fila de la sala de Casa de Teatro -para en- tonces reciCn fundada-, abarrotada de

piiblico, asistiamos entusiasmados a la que, de seguro, fue la primera presentacibn publica en nuestro pais de Mario Vargas Llosa.

El escritor habia llegado a Santo Domingo para la filmacibn de una pelicula basada en su novela Pantaledn y las visitadoras, y acept6 comen- tar sus obras con aquel piiblico que miraba -y ese era mi caso, sin duda- atento, y con muy parti- cular devocibn, al autor de textos que ya habian sido consumidos con la voracidad lectora que provocaba el denominado boom de escritores la- tinoamericanos, en pleno despegue hacia el reco- nocimiento.

Mario Vargas Llosa era, como lo siguib siendo desputs con mayor fortaleza, uno de esos dioses mayores que todos leiamos con particular frui- cibn, y cuyos libros iban pasando de mano en mano con delectaci6n insuperable.

Ya habian sido objeto de lectura compartida La ciudady 10s perros, La casa verde y Pantaleo'n y las

visitadoras. Y se habia colado un poco tarde en al- guna libreria, y en pocos ejemplares, el conjunto de cuentos que databa de 1958, Losj@s, que con pr6logo de Jost Maria Castellet fue consumido con avidez por 10s lectores de aquella kpoca. Bas- taban empero las tres obras primeras para saber que esthbamos frente a un resurgir glorioso de las letras latinoamericanas, y en presencia de una de las voces que comenzaba a forjar su nombre y su trayectoria utilizando recursos novedosos en la prhctica narrativa.

Ya hacia poco m2is de un decenio desde que Vargas Llosa habia sorprendido a propios y ex- traiios, a sus conciudadanos y a 10s de fuera, a1 ganar en 1962 el Premio Biblioteca Breve por La ciudady 10s perros, justo cuando nuestro pais vivia dias aciagos a causa de las vicisitudes surgidas a raiz de la decapitaci6n de la tirania trujillista.

No habia llegado a nuestras manos aiin -y hablo de las manos y de 10s ojos de 10s lectores vargallosianos que comenzaban a multiplicarse, inclusive estableciendo parangones y creando ac- tivas diatribas literarias La orgia perpetua, aquel

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ensayo de fulminante inteligencia descriptiva y auscultadora de 10s atributos de genialidad inte- lectual de Gustave Flaubert.

Y llegarian mAs tarde tambidn 10s otros tex- tos que terminaron por hacer de 61, desde enton- ces, uno de nuestros autores imprescindibles: La tia Julia y el escribidor, Conuersacio'n en la catedral, La guerra del jin del mundo, y un texto que modific6 pareceres y contrapuso ideas en el conocimiento sacudidor y vigoroso de la historia del trotskista Alejandro Mayta, esa Historia de Mayta que ha sido uno de 10s libros de Mario Vargas Llosa miis apreciados -lo sabemos desde hace tiempo- del presidente Leone1 FernAndez.

Cercano a la realidad dominicana Despuds de aquel 1975 en Casa de Teatro, la his- toria de la literatura latinoamericana fue conoci- da y vista de otro mod0 gracias a aquel contact0 directo, por primera vez, con uno de 10s grandes de esa historia, Mario Vargas Llosa.

Lo que no pudimos apreciar entonces era que, a partir de aquel momento inolvidable para mu- chos de 10s que hemos sido por decenios sus lecto- res consecuentes e invariables, Mario Vargas Llosa estableceria una comunicaci6n directa y una pre- sencia constante con la realidad dominicana.

Vendrian El hablador, Lituma en 10s Andes, ;QuiLn matd a Palomino Molero?, Elogia de la madrastra, Los

cuadernos de don Rigoberto, Elparaiso en la otra esquina, y ese trabajo memorioso que lo elev6 a la cumbre desputs de 10s sinsabores de la politica, Elpez en

el agua, donde acabb de reconfirmarse la calidad extraordinaria de su prosa en uno de 10s libros biisicos de su amplia bibliografia.

Con Elpez en el agua culminaba una faceta im- portante de su trayectoria humana, desmontaba 10s demonios que sacudieron su vida en un Perh que luego se llenaria de ignominias, y pudo en- tonces Mario Vargas Llosa dedicar -como aspi- raba en 10s finales de esa obra- "todo mi tiempo y mi energia a escribir, algo para lo que -toco madera- confio ser menos inepto que para la in- deseable (pero imprescindible) politica".

Para 10s nuestros, fue Lajiesta del Chivo, publica- da hace justamente diez aiios, la nota culminante de esa presencia y de esa comunicaci6n directa de Mario Vargas Llosa con el pais dominicano.

Me toc6 junto a Bernardo Vega y Andrts L. Mateo hacer la presentaci6n de esta obra gracias a 10s empeiios de 10s mecenas del vargallosia- nismo dominicano: JosC Israel Cuello y Lourdes Camilo de Cuello. Alli pudimos vivir la emoci6n de reencontrarnos con Mario Vargas Llosa, esta vez en la escritura y lectura de la que, a nuestro juicio, es la novela fundamental de la era de Tru- jillo, la que mejor traduce su atmbfera de vileza, dolo, abyecci6n y muerte. La que mejor transfiere

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a las generaciones de hoy y de mafiana la reali- dad de esa tpoca sombria y sin parangbn, hasta entonces, en Latinoamtrica.

Un enamorado eterno Podriamos afirmar que solo con Lajesta del Chivo, Mario Vargas Llosa se convirtib, como bien su- giere Jesus Feris Iglesias en el articulo que public6 el diario Hoy el 28 de diciembre de 2010, en un escritor de la realidad dominicana, merecedor al- gun dia del derecho a ostentar con orgullo nues- tra nacionalidad.

Pero no ha sido solamente La jiesta del Chivo la que permite considerar a Mario Vargas Llo- sa como un permanente enamorado de nuestra historia, de nuestra gente y de nuestra realidad democratica.

Ha sido el escritor de renombre universal que con mas frecuencia se ha referido a la Repiiblica Dominicana en sus entrafiables articulos para el diario El Pais. El que con mas fuerza y coheren- cia ha defendido la democracia dominicana en su for0 de opini6n que llega a miles de personas de todo el mundo. Ha visitado en innumerables ocasiones nuestro territorio y acaba de establecer residencia temporal en el pais, donde tambitn re- side su hijo Gonzalo.

Y por si fuera poco, en el discurso pronun- ciado en la Academia de Estocolmo, a1 recibir el Premio Nobel de Literatura el 10 de diciembre de 2010, se refiri6 en dos ocasiones a la Repiiblica Dominicana. Primero, para destacar su desarro- 110 democrhtico y colocarnos en la lista de 10s pai- ses donde la democracia hace su andadura con firmeza y voluntad. Segundo, para sefialar que este es uno de 10s paises donde se siente siempre como en su propia casa.

Finalmente, ha sido esta ciudad de Santo Do- m i n g ~ , primada de Amtrica, donde se acaba de celebrar el haber sido durante el 2010 Capi- tal Americana de la Cultura, la primera que, a travts de nuestro Gobierno, rinde tributo de ad- miracibn, carifio y respeto a Mario Vargas Llosa luego de haber recibido la mixima presea de las letras universales en Suecia.

Con la venia del seiior presidente, que estoy seguro comparte mi apreciaci6n, afirmo que el de

Mario Vargas Llosa es con toda seguridad el pri- mer premio Nobel de Literatura de la Repiiblica Dominicana.

Hace 35 afios, don Mario, asistiamos impre- sionados a conocerlo en aquella memorable vela- da en Casa de Teatro. Siete lustros despub, y diez aiios mis tarde de Lajesta del Chivo, usted recibe el inmenso honor que le otorga la Academia Sueca del Premio Nobel de Literatura por su gran obra literaria y por su firme defensa de 10s valores de la democracia, de la libertad y del derecho inalie- nable a1 disentimiento, expresados con vehemente coherencia y valentia en todos sus escritos.

El Gobierno de la Republica Dominicana, por intermedio de mi persona, tributa a usted el mas calido de 10s reconocimientos a1 otorgarle una de nuestras mas altas distinciones oficiales, la Or- den Herildica de Crist6bal Colon en el Grado de Gran Cruz Placa de Plata, que le entrega el jefe del Estado.

Recibalo usted como prueba de gratitud por su vinculaci6n permanente con la dominicani- dad, como manifestacihn sensible y profunda de afecto y devoci6n por su obra narrativa, ensayis- tica y teatral, y como testimonio del pais cultural dominicano por todo lo que usted ha significado para la literatura producida en nuestra lengua.

Nota: Texto extraido de las palabras del ministro de Cul-

tura de la RepGblica Dominicana en el act0 de imposi-

cibn de la Orclen Herkldica de Cristbbal C0l6t1 Grado

Gran Cruz Placa de Plata a Mario Vargas Llosa, premio

Nobel de Literatura 2010. Palacio Nacional, 28 de di-

ciembre de 2010.

Jose Rafael Lantigua e s nativo d e Moca (Republi-

ca Dominicana), donde fue fundador y directivo d e

diversas entidades culturales y grupos literarios; se

traslado en la decada d e 10s setenta a Santo Domin-

go. En la capital, ejercio el periodismo y s e graduo

d e licenciado en Ciencias d e la Educacion en la Uni-

versidad Nacional Pedro Henriquez Urefia. Durante

20 afios dirigio el principal suplemento literario del

diarismo dominicano, "Biblioteca", constituyendose

en el principal promotor nacional e internacional del

libro d e autor dominicano. En la actualidad e s minis-

tro d e Cultura.

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k'otos: Carlos Keyes

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afael Molina Morillo re- cibi6 a finales del pasado aiio el galard6n que lo

reconoce como Premio Nacional de Periodismo. En su despacho del diario El Dia, peri6dico gratuito que dirige en la actualidad, habla con parsimonia y a veces con la mi- rada perdida, como queriendo pen- sar respuestas que ya le salen con la mayor naturalidad. Tantos aiios de profesi6n le facilitan las asevera- ciones, que hace sin ningun tip0 de duda y con firmeza.

cQu6 supone haber recibido el Premio Nacional de Periodis- mo? Se siente una satisfacci6n muy grande. Es algo que a todo perio- dista le hace sentir bien. Implica un compromiso porque ya resulta miis dificil apartarse de 10s principios y las normas que uno lleva consigo, algo que, por fortuna, no me repre- senta ninghn esfuerzo.

2Llega tarde? No creo que 10s premios lleguen tarde. Siempre hay muchos perio- distas que lo merecen y haberlo ob- tenido es una distinci6n especial.

El periodismo que ha ejercido ha ido cambiando, evolucio- nando.. . El periodismo a lo largo de mis aiios de profesi6n se ha ido enrique- ciendo. Ha estado muy influencia- do por las tecnologias, cada Cpoca con la suya, per0 su ejercicio, en esencia, sigue siendo igual. La fi- nalidad es la misma y sigue some- tido a obstkculos que proceden de 10s mismos sectores. Recuerdo el plomo y la linotipia, y he vivido toda la evoluci6n con la tecnologia.

No creo que esto nuevo suplante a nada. Se ha enriquecido la manera de llegar a1 conocimiento. Aunque si nos obliga a tener una mayor agi- lidad y habilidades aiiadidas debi- do a que la velocidad de acceso a la informaci6n ha traido consigo una mayor competencia para ser el pri- mero en darla a conocer.

2La aceleracion a la que llevan las nuevas tecnologias ha pro- vocado mas errores en 10s me- dios de comunicacion? Se cometen 10s mismos errores que antes, solo que m6s r6pidamente. El error siempre estii a1 acecho, sin importar la tpoca. Por eso hay que ser indulgente con 10s gazapos, si bien es cierto que en ocasiones se producen fallos conceptuales que afectan mks. Es parte de la natura- leza del trabajo.

interna de 10s medios de comuni- cacibn. Nosotros vivimos denun- cikndola, per0 tambitn existe en nuestro medio.

2QuC recetas se pueden usar contra esto ultimo? No le veo fin, per0 debe haber una lucha constante para que prevalez- can las normas y principios Cticos de la profesi6n por encima de todo. Y eso se consigue solamente con un ejercicio honesto del periodismo.

Una de las excusas que se sue- le poner para justificar esa co- rrupci6n en la profesion es la de 10s bajos salarios. Los salarios que se perciben no deben ser excusa. Es verdad que son bajos o muy bajos, y deberian ser mejores. Eso ayudaria a evitar tentaciones, per0 por eso no se de-

I

He estado en presencia de muchas cosas impresionantes, como cuando 10s tanques norteamericanos entraron en 1965.

Mencionaba 10s obstaculos. ~ L o s de hace unos aiios eran mas faciles de superar que 10s de ahora? Ahora son diferentes porque cada tpoca tiene sus elementos, per0 siempre son efectivos. Los de carkc- ter politico y de represi6n durante gobiernos dictatoriales eran difi- ciles de superar. Ahora hay otros, como la delincuencia, o 10s invisi- bles, de poderes fkcticos. Incluso 10s que se derivan de la corrupci6n

beria incurrir en una falta de ttica o corrupci6n profesional. El factor vocaci6n tiene mucho que ver en este ejercicio honesto. El periodista sabe en qut mundo entra y con qut condiciones. Lo toma o lo deja sin importar el salario.

2Hay crisis de vocacion en el periodismo? Si. Es un elemento cada vez m h ausente en 10s medios de comuni- caci6n. Veo casos de personas que

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llegan a 10s medios para enrique- cerse, extorsionar o buscar ventaja para lograr algo afiadido.

ade em as de una crisis fi- nanciera, hay una crisis pro- fesional en 10s medios de comunicacion y se cuestiona su credibilidad? Cuando se cuestiona la credibilidad de un medio o de un periodista es porque se ha dado motivo para que se dude de la honestidad. La credibi- lidad no es algo que se escribe en un cbdigo y ya se posee, o se impone o se fabrica de un dia para otro, sino

na a buscar mas all& de 10s medios. Se va convirtiendo hasta en perio- dista porque busca informacibn e investiga por su cuenta, sin que eso suponga un desmedro para la profesibn, sino una posibilidad de enriquecimiento porque habr& que tomar medidas para estar a la altu- ra de un public0 m&s preparado y exigente.

~Existe el periodismo ciuda- dano? Si, creo que existe. No es una profesibn reservada para un pe- riodista o un graduado, sino una

I Lo de Wikileaks ha pasado por la misma raz6n que tomaron la Bastilla en su dia... las cosas suceden en su mornento.

que es el resultado de un trabajo res- ponsable, se adquiere con el tiempo a partir de hechos constatables.

~Quk nivel de credibilidad Cree que tienen 10s medios de comunicacion dominicanos hoy en dia? No me atrevo a dar porcentajes.

ti en en menos que antes? Es cierto que antes a 10s medios se les veia con mayor credibilidad. Recuerdo que antes se decia que algo era verdad porque estaba es- crito en tal o cual peribdico. Quiz& en niveles mas cultos de la pobla- cibn no sea asi y se ponen en duda ciertas cosas que se dan a conocer en 10s medios. Eso lleva a la perso-

condicibn humana que puedes ele- gir seguir con dedicacibn y voca- cibn. Y si la vocacibn no existe y solo se trabaja de manera tkcnica, tarde o temprano cae.

~Profesibn sacrificada? Exige sacrificios, per0 no debemos autoconvertirnos en hkroes. Esta profesibn tiene sus riesgos y sus pe- ligros, como 10s tienen otras, y uno la elige sabiendo cuAles son. Vienen en el paquete. No debemos tratar de presentarnos como hkroes.

:Hay gente que Cree que el pe- riodista es un privilegiado? Quiza si es cierto que se nos ve como privilegiados por el acceso que tenemos a ciertas personas, a

ciertos lugares, a ciertos momen- tos.. ., per0 debemos evitar que se nos vea asi. Como suelo decir, el periodista se puede sentar en pri- mera fila en el teatro, per0 no debe subir a1 escenario.

~Ahora suben demasiado? Es cierto que muchos periodistas opinan mas que informan, y el pu- blico debe saber distinguir eso. Y creo que en el fondo lo distingue.

Ni mi verdad ni tu verdad, sino la verdad. ~Quk piensa de eso? Es dificil aceptar que hay "la ver- dad". Cada uno tiene la suya, per0 hay algunas que son m&s aceptadas y se consideran "esa verdad" que buscan 10s periodistas. Por eso es peligroso pensar que la verdad de uno debe ser la de todos.

~Cual ha sido su momento de mayor satisfaccion profesio- n al? No hay duda de que 10s reconoci- mientos producen grandes satisfac- ciones. Como el que me acaban de otorgar. 0 cuando ocupk el cargo de presidente de la Sociedad Inte- ramericana de Prensa (SIP). Y son reconocimientos no buscados, eso es lo importante. Uno no ha traba- jado en funcibn de obtenerlos. Aho- ra bien, hay otras satisfacciones, como ver que el trabajo que se hace alrededor de algo no esth bien y se logra corregir. No se trata de enten- derlo como un triunfo, sino como una satisfaccibn, sin recompensa, por el trabajo que uno Cree bien he- cho, por el deber cumplido.

~Alguna vez penso en dejar el periodismo?

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vo, de investigacibn. Y asi va salien- do gran niimero de egresados que no han pensado en ser periodistas.

No por haber tenido una crisis pro- fesional, per0 si una vez pens6 que me habia retirado por ahogamiento econbmico. Cuando tenia El Na- cional, Ahora y otras publicaciones, hub0 una 6poca de miis gastos que ingresos y vendi mis intereses a la familia Corripio. Penst que podia retirarme a leer, a escribir libros.. . Y estuve dos o tres afios en el servi- cio diplomiitico. Pero, a mi regreso, me senti llamado de nuevo por la vocacibn. No pienso retirarme. No sabria quC hacer.

~Ese seria su consejo para un estudiante de periodismo de ho y? No se les puede pedir esto a otros, per0 si se lo podria aconsejar.

Hablando de estudiantes de periodismo, ;deben mejorar las universidades su forma- cion a 10s periodistas? Las escuelas son titiles y dejan ense- fianza, per0 no practica. El ejerci- cio en si es el que curte. Trabajar en la calle, hacer reporterismo.. . Noto que hay bastante colaboraci6n en- tre 10s medios y las universidades, pero se hace de manera caprichosa. Deberia haber programas bien ar- mados. Y me preocupa que en las escuelas que funcionan en el pais el niimero de estudiantes sea cada vez miis elevado. Muchos piensan en ejercer las relaciones piiblicas o en tener presencia en televisibn en pro- gramas de variedades, pero pocos piensan en el periodismo informati-

~Wikileaks quiere decir que 10s medios han dejado de bus- car informacibn? No me parece. Lo de Wikileaks ha pasado ahora por la misma raz6n que tomaron la Bastilla en su dia, por ejemplo. Las cosas suceden en un momento. Y esto que ha pasado lo que hace es enriquecer. Todo lo que facilite acceso a determinadas informaciones debe ser bien visto. Mientras mayor sea el flujo de in- formacibn, mejor. Lo que si es mas dificil hoy en dia es que un impreso d6 primicias.

;QuC informacibn le gustaria ver un dia en 10s medios de co- municacibn? Que desaparecen 10s politicos, la delincuencia, la corrupcibn y que la gente vive de manera normal y feliz.

;Cual ha sido la noticia que mas le ha impactado en su ca- rrera? En lo personal, cuando dinamitaron las instalaciones de la revista Ahora por intolerancia frente a la b6squeda de la verdad. En lo profesional, la de 10s atentados de las Torres Gemelas es de las que mas me ha impactado. Lo hizo hasta llegar a acongojarme. Pero he estado en presencia de mu- chas cosas impresionantes y decep- cionantes, como cuando 10s tanques de las tropas de Estados Unidos en- traron por la Independencia en 1965 y pasaron frente a mi casa. Fue duro tener que ver y aceptar aquello.

Iban Carnpo es periodista, director

de Comunicacion de Funglode.

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Wikileaks en tres actos Las revelaciones dejan a1 desnudo las actuaciones diplomiiticas de Estados Unidos,

: ponen en juego 10s principios fundarnentales del periodismo y traen a escena a un nuevo idol~. El portal de Julian Assange cambia las perspectivas de lo que se entendia corno inforrnacion y coloca frente a1 espejo de la transparencia a todos 10s gobiernos del mundo. Estas son las conclusiones a las que llegan Sully Saneaux, Maria Isabel Soldevila y David ~ lvarez .

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Sully Saneaux 1

- Fotos :

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a tentaci6n de celebrar las revelaciones hechas por Wikileaks ha sido

demasiado grande para no ser uti- lizada por muchos que siempre se imaginan lo peor cuando de Esta- dos Unidos se trata. Es un reflejo condicionado por la historia, pues nadie se invent6 la participacibn norteamericana en golpes de Esta- do, crimenes politicos y el respaldo tradicional dado a gobiernos viola- dores de todos 10s derechos a travts del mundo en desarrollo.

El mundo ha cambiado, pese a las apariencias, en sentido positivo. Asi, un reciente anAlisis del sema- nario britknico The Economist titu- laba "La democracia, felizmente, se convierte en rutina", refiriCndo- se a AmCrica Latina y el Caribe. Esta tendencia incluye aun a aque- 110s gobiernos cuyas relaciones con Estados Unidos no son fAciles, sin que eso signifique que haya peligro inminente de una invasi6n militar norteamericana o un intento de golpe militar inspirado por el Pen- tAgono, como fue tan comun en el pasado reciente. Pero por 10s cables obtenemos la espectacular reve- lacibn de que 10s hltimos dos go- biernos de Estados Unidos dieron instrucciones a sus diplomaticos instiindoles a espiar a sus colegas de otros paises y hasta a1 secretario ge- neral de la ONU.

Independientemente de lo no- vedoso que pueda ser para algunas personas que algun gobierno se li- bre a ese ejercicio (cambian las for- mas, per0 es raro el que no lo hace), desde que 10s Estados existen, una de sus tareas ha sido y seguirA sien- do la de obtener informaci6n de unos y otros, incluso de 10s propios amigos. El estilo puede variar per0

la prktica estA totalmente genera- lizada. Asi, las exclamaciones de indignaci6n ante las revelaciones solo son vAlidas cuando las profie- ren quienes no tienen o han teni- do experiencia en el manejo de 10s asuntos de un Estado.

A estas alturas, el nombre Wi- kileaks implica dos cosas: la difu- si6n de cables gubernamentales norteamericanos y la personalidad de su fundador, JuliAn Assange, un anarquista australiano sin partido que, segun se ha dicho, ha profesa- do toda su vida una desconfianza permanente frente a 10s gobiernos.

A1 crear Wikileaks, Assange, cuyas citas personales han distor- sionado el objetivo inicial de la pu- blicacibn de 10s cables, a lo mejor ni se imaginaba el alcance que tendria su cometido, aunque en nuestros cibernkticos dias 10s talentos como el suyo disponen de todo el espacio sideral y lo utilizan con Cxito.

v6 a que lo propusieran hasta para el Premio N6bel de la Paz. Su tra- bajo a favor de 10s pobres del mun- do no lo coloca, sin embargo, por encima de lo humano. Tampoco se le ocurre a nadie establecer una re- laci6n directa entre las debilidades del sacerdote y su formidable apos- tolado social ni mucho menos, por defenderle, condonar el hecho de que se le acusa.

Una experiencia religiosa Assange, por su parte, se ha con- vertido en el gran sacerdote de una nueva religi6n que goza de gran aceptaci6n: desenmascarar las perfidias pasadas y presentes de Estados Unidos. Por eso, atacar a Assange es confrontar esa religi6n y quienes lo hacen son modernos herejes. En esa categoria entran las dos mujeres que, segun las le- yes suecas, consideran haber sido violadas por Assange. Sus nombres

I Wikileaks implica la difusi6n de cables gubernamentales estadounidenses y la personalidad de su fundador.

Fransois Houtart, llamado el "Papa rojo" y considerado el padre del movimiento contra la globaliza- ci6n y del Foro Social Mundial de Porto Alegre, admiti6 hace poco que "se propas6" con un primito de ocho afios hace muchisimo tiempo. Houtart tiene merecidas credencia- les de activista social, de hombre de la iglesia y de 10s movimientos po- pulares. Su prestigio en esa Area lle-

han sido publicados y sus casos han sido convertidos en burla y escarnio hasta por las personalidades que en principio deben ser ajenas a tales comportamientos, llhmense Fidel Castro o el cineasta norteamerica- no Michael Moore.

Pero, por encima de ese caso, que corresponde a 10s tribuna- les, estA Wikileaks y la conmoci6n que ha creado a1 demostrar que la

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Wikileaks public0 15,000 documentos secretos sobre las acciones del ejercito estadounidense en la guerra de Afganistan.

vulnerabilidad no es privativa de 10s miis dtbiles. Es que las guerras estadounidenses en Irak y Afganis- tfin, el hecho de que la gran poten- cia conserve sus prerrogativas mfis a116 del fin de 10s bloques y de que, como admiten sus principales di- rigentes, es una "nacibn indispen- sable", alimenta un permanente estado de irritaci6n universal hacia Estados Unidos.

Porque una cosa es que 10s es- tadounidenses hayan ganado cier- tamente la Guerra Fria, y otra es que se lo recuerden a la gente cada vez que se abren las paginas de un peribdico. Ni siquiera altera esa percepci6n el hecho de que un

afroamericano sea su presidente; t l cae bien, su pais no. Esa percepcibn popular es la pizca de sazbn que po- dia faltarle a 10s cables de Wikileaks.

Sin embargo, una de las cuestio- nes planteadas por las revelaciones de Wikileaks es hasta qut punto a la gente realmente le interesa glo- balmente saber lo que piensan o se proponen hacer 10s dirigentes poli- ticos del mundo. Esto quizfis expli- que que en alghn momento las miis sabrosas revelaciones tenian que ver miis con caracteristicas perso- nales que con decisiones politicas. Lo poco que realmente se ha dado a conocer en ese fimbito era ya de dominio o suposicibn de muchos

informadores que es a quienes si in- teresa en primer lugar todo lo que es noticia.

Naturalmente, no tiene el mis- mo efecto que un columnista diga que a un jefe de Estado le interesa tener un avibn parecido a1 del pre- sidente de Estados Unidos, o que a otro le gusta mucho el alcohol, a que esa informacibn aparezca como resultado de un secret0 re- velado. En buena medida en eso probablemente es que radica la es- pectacularidad de las famosas "re- velaciones", pese a la apasionada defensa que sobre su sustanciosa calidad hacen 10s medios de pren- sa favorecidos con la primicia.

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Por lo demas, cuando un diplo- m a t i c ~ norteamericano informa a su Gobierno que en tal pais algun funcionario se libra a actos de co- rrupcibn, a menos que pueda pro- barlo, lo que es poco probable, de lo que se trata es de rumores, de percepcibn popular, per0 no de he- chos. Eso ha caracterizado hasta ahora a numerosas de las famosas revelaciones. Pero, no quiere decir que carezca de interts la posibili- dad de que en un momento dado se revelen secretos que si afecten la vida de la gente. Nada mas hay que imaginarse lo util que habria sido que se revelara con tiempo que en Irak no habia armas de destruccibn masiva.

Obama y el futuro Pero si 10s estadounidenses, presu- mibles victimas de Wikileaks, hu- biesen estado realmente interesados en que 10s cables conocidos no se publicaran, sin duda que 10s ha- brian realmente protegido. Como todo el mundo se debe imaginar, esos no son 10s secretos que podrian poner en dificultad a Estados Uni- dos; 10s de esa categoria si estan bien protegidos.

De todas maneras, para el fu- turo, la administracibn Obama ha ordenado que las agencias gu- bernamentales creen mecanismos para detectar "conductas anorma- les" en empleados potencialmente descontentos y capaces, en su eno- jo, de ayudar a Wikileaks u otros a revelar secretos gubernamentales. Asi se va cayendo en un mundo de tipo kafiiano en el que un gesto o una mirada, un mohin o una ex- presibn, pueden ser interpretados como expresibn de una "traicibn en proceso".

Hay que entenderlo como una expresibn de relativa impotencia frente a la posible masificacibn del fenbmeno del "whistleblower" (in- formador), generalmente alentado cuando se trata de denunciar irre- gularidades. Como todo depende de quien lo ve, las revelaciones de Wikileaks pueden entrar perfecta- mente dentro de ese marco.

Pese a que la difusibn de 10s cables en principio estaba destina- da a crear dificultades a Estados Unidos, a quien mas han puesto en problemas es a quienes se dedi- caban a hacerles comentarios a 10s diplomaticos estadounidenses, pen- sando que ellos iban a conservar la confidencia. Quedan igualmente ma1 parados 10s gobiernos que, se- gun 10s cables, aceptaron imposi- ciones norteamericanas, y culpar a Estados Unidos por esa conduc- ta es pecar de ingenuidad. Eso no quiere decir que a las autoridades estadounidenses les importa un co- mino si se publican o no sus conver- saciones con extranjeros; de hecho,

la cabeza fria, ha sido claro y pre- ciso: "Los gobiernos que se relacio- nan con 10s Estados Unidos lo hacen porque les interesa. No porque les agradamos o les merecemos con- fianza, ni porque piensen que noso- tros sabemos guardar secretos".

Desde esa 6ptica ;de verdad eran imprudentes todos esos fun- cionarios que conversaban con di- plomaticos norteamericanos? ;Y quC pasaba con estos, no hablaban y solo se limitaban a escuchar? Lo mas probable es que para obtener confidencias ellos a su vez tenian que "soltar algo". ;CuAnto solta- ban? Por el momento eso no se sabe porque a Assange hasta ahora solo le han interesado 10s "secretos" nor- teamericanos.

Entretanto, ;cuAntas transac- ciones diplomaticas o comerciales se han perdido por culpa de las revelaciones de Wikileaks? ;CuAn- tas personas han sido victimas de represalias por su familiaridad con 10s diplomaticos norteamericanos? Uno no lo sabe exactamente, per0

I I Hay algunas verdades irrefutables en torno a las revelaeiones del portal Wikileaks.

hasta estan tomando medidas para proteger a algunas de esas personas de posibles represalias, per0 franca- mente, dada su reputacibn, era de esperar que 10s diplomaticos esta- dounidenses fueran un poco mas entrometidos.

En cuanto a 10s Estados Unidos, el ministro de Defensa norteameri- cano, Robert Gates, manteniendo

hasta ahora, aparte de molestias y situaciones embarazosas, y pese a 10s vaticinios de altos representan- tes del poder, no se ha producido nada mayor. A1 menos en lo que se refiere a 10s cables diplomaticos, la mayoria de 10s cuales no han sido todavia publicados en 10s medios.

Hay algo que no se debe olvi- dar y es que las relaciones entre

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10s paises y gobiernos se estable- cen, no en el reino Utopia, sino en el mundo real, sobre la base de acuerdos phblicos y quizas las mas de las veces muy privados. Ya 10s bolcheviques, en su momento y a1 calor de la efervescencia de la Re- voluci6n rusa, decretaron trans- parencia total en el manejo de las relaciones diplomaticas, per0 rapi- damente renunciaron a la misma pues no estaban solos en el mun- do y, ademiis, se enfrentaban a1 siguiente dilema: 2c6mo salvar la cara frente a la opini6n phblica (es decir, la prensa) en determinadas situaciones? Por ejemplo, la firma de la Paz de Brest, mediante la cual el joven estado revoluciona- rio, pese a las proclamas pGblicas, cedi6 a la imperialista Alemania 10s territorios de Ucrania, Bielo- rrusia y 10s paises bilticos, ademas de cien toneladas de oro, 2c6mo explicarlo?

Hay algunas verdades irrefuta- b l e ~ en torno a las revelaciones de Wikileaks. La primera es que para las personas mas o menos infor- madas (generalmente en el mundo de la prensa), 10s famosos cables secretos contienen lo que ya sa- bian o suponian. Los cables no hi- cieron mas que confirmar. La otra verdad es que a1 ciudadano comGn no es que le interesen demasiado esos "secretos". Entran en contac- to con estos gracias a 10s medios que, como se ha visto, tambiCn 10s presentan selectivamente. Una vez conocidos esos "secretos", cqut hacer con ellos? Esto nos lleva a1 punto de si realmente es el derecho a saber o el derecho a informar que es- tan en juego cuando se recurre a todos 10s medios, legitimos o no, para en principio acallar a Wiki-

leaks, per0 en realidad para mo- derar 10s impetus informativos de 10s medios tradicionales de pren- sa. Es que Wikileaks, por muchos cables que revele, no puede tener el alcance del New York Times, Le Monde o El Pais.

Con excepcibn de 10s intere- sados, nadie sabe exactamente el tipo de relaci6n establecido entre Wikileaks y 10s cinco importantes peri6dicos comisionados para pu-

porque le han dedicado demasia- do espacio a las acusaciones suecas contra 61. Assange constata asi que sus adversarios tienen tanta capaci- dad como t l y Wikileaks para ocu- par 10s espacios. A tal punto que a estas alturas compiten tanto 10s no muy sustanciosos cables secretos con el proceso que puede incluir el envio de Assange a 10s Estados Unidos a responder no se sabe bien por quC delito.

I Wikileaks no puede tener el alcance del New York Times, Le Monde o El Pats.

blicar 10s cables. Aunque quiz& no hub0 ninguno, porque se trata de una relaci6n sumamente ventajosa para ambos, Wikileaks y esos pe- ri6dicos. El primero provee una abundante materia prima prove- niente quizi, como teme la ad- ministraci6n norteamericana, de empleados enojados o con proble- mas de conciencia. Pero para un diario de un pais donde las leyes tienen vigencia, es practicamente imposible difundir tales cosas sin que sea reproduciendo lo que al- guien ya publicb. Esa es la utilidad inapreciable de Wikileaks.

Nadie puede imponer a esos diarios (que operan en sociedades democriiticas) sus propias reglas, ni 10s medios van a dejar de seguir cumpliendo con su misi6n informa- tiva y a1 tiempo comercial. Eso ha traido como consecuencia dos que- jas de Assange, primero, por la ma- nera en que esos medios han estado difundiendo 10s cables y, segundo,

Una tercera verdad es que Wi- kileaks ya tiene vida propia, no im- porta lo que pase con Assange (un "adivino" mexicano predijo que no le pasara nada). Una vez aceptada esa verdad, se supone que 10s go- biernos manejaran sus asuntos con mayor discrecibn, en la practica y en la informaci6n. De esa manera Wikileaks jugarh un papelpreuentivo de futuros desastres politicos mili- tares como 10s que en el siglo XX,

y en lo que va del actual, han sido tan costosos. A menos que esos de- seos no se queden encerrados en el reino de utopia.

Sully Saneaux es periodista y estu-

dio relaciones internacionales.

Prensa consultada New Ybrk Times, Le Monde, El Pais, De? SFie-

gel, The Guardian, A1 Javera, Haaretz, LA Jour/L'Orient, Christian Science iWonitol; The

Washington Post, Le Nouuel Observateur y la

prensa regional.

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El periodismo 250,000 cables ciespues La avalancha de informacion arroajada por Wikileaks y la masiva colaboracion entre cinco grandes de la prensa mundial cambian para siempre el panorama de la comunicacion.

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ikileaks no es periodis- mo, 20 lo es? La dis- cusibn esta planteada

e implica que 10s medios tradicio- nales reconozcan una ptrdida de poder, la necesidad de intermedia- rios, y su nuevo papel en la comu- nicaci6n. Wikileaks no constituye algo completamente nuevo, per0 lo cambia todo.

Antecedentes sobran de filtra- ciones de informaciones y docu- mentos clasificados. Ahi estan Los papeles del Pentdgono, que expusie- ron, mediante la publicaci6n en el New York Times y luego en cinco libros, cientos de documentos se- cretos que mostraban "las mentiras de la administracibn de Lyndon Johnson sobre la Guerra de Viet- nam" (Apple Jr., 1996), y ahi esta Watergate, el emblematico caso en que 10s periodistas Bob Woodward y Carl Bernstein, guiados por una fuente de alto nivel del FBI, devela- ron secretos que culminaron con la renuncia de la presidencia de Esta- dos Unidos de Richard Nixon.

Pero en la cultura de American Idol q u e busca desesperadamente htroes y villanos, 10s enlata, pro- duce en masa y difunde en nanose- gundos gracias a las tecnologias de comunicaci6n-, la medihtica, con- trovertida y hasta sensual imagen de Julian Assange, el hombre de la revelacibn de mas de un cuarto de millon de cables diplomaticos estadounidenses y de miles de re- portes militares sobre las guerras

de Irak y Afganistan, ha sacudido con tal severidad a1 mundo que, a comienzos de febrero de este 201 1, el buscador de Internet Google re- gistraba alrededor de 52,700,000

documentos que contenian la pala- bra "Wikileaks".

El sitio web salt6 a la fama, a1 menos en Estados Unidos, el 5 de abril de 2010, cuando colgb un vi- deo militar clasificado en el que mostraba "el asesinato indiscrimi- nado de mas de una docena de per- sonas en el suburbio iraqui Nuevo Bagdad, incluidos dos empleados del area de noticias de Reuters" (Assange, 2010). En el ataque dos niiios resultaron gravemente he- ridos. Detalles sobre las muertes, ocurridas en 2007, y el video final- mente publicado por Wikileaks ha- bian sido solicitados por Reuters sin Cxito mediante el Freedom of In- formation Act (FOIA, la ley de libre acceso a la informacibn de Estados

como cuando "gargantas profun- das" carraspean secretos de Estado) se dio justo en un momento en que la prensa escrita pasa por una de sus mayores crisis de identidad y de finanzas, y plantea nuevas perspec- tivas para el periodismo en la era de Internet, 10s telkfonos inteligen- tes y las tabletas.

Mientras un intelectual de iz- quierda como el norteamericano Noam Chomsky, uno de 10s edi- tores del quinto volumen de Los papeles del Pentdgono, calificaba en noviembre de 2010 el trabajo de Wikileaks como "una forma legi- tima del periodismo" y anticipaba que se tomarian medidas severas

El sitio web salt6 a la fama, a1 menos en Estados Unidos, el 5 de abril de 2010.

Unidos) durante tres aiios. Repor- tb Wikileaks o, lo que es lo mismo, Assange, descrito por periodistas de The New York Times como un perso- naje "inteligente y culto, extrema- damente habil con la tecnologia, per0 arrogante, hipersensible, cons- pirador y extraiiamente crtdulo". (Keller, 20 1 1).

La alianza del portal de Julian Assange con cinco buques insignia de la prensa mundial -The Guardian, El Pais, Le Monde, Der Spiegel y The New a r k Times- para revelar el con- tenido de unos 250,000 cables de la diplomacia estadounidense y otros documentos militares clasificados sobre las guerras de Irak y Afganis- tan (pocas veces esta tan asegurada la morbosa curiosidad del p~blico

para bloquearlo (Hax, 2010), el premio Nobel de Literatura 2010, Mario Vargas Llosa, en el otro ex- tremo del espectro politico, lo des- calificb en su columna de E l Pais: "El seiior Julian Assange, mas que un gran luchador libertario es un exitoso entertainer o animador, el Oprah Winfrey de la informacibn" (Vargas Llosa, 201 1).

Vista del Angulo que se prefie- ra, la publicacion de 10s documen- tos del Departamento de Estado ha elevado a Wikileaks y a Assange a niveles de celebridad hollywooden- se, con prisi6n y escandalo sexual incluido. Pero tambitn ha colocado en aprietos a la organization, que depende de donaciones y de promo- cibn a travCs de las redes sociales.

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En su articulo Siete pensamientos sobre Wikileaks, el profesor de De- recho la Universidad de Harvard y ex procurador general asistente para la oficina de consejeria legal del Departamento de Justicia de 10s Estados Unidos durante la ad- ministraci6n de George Bush hijo, Jack Goldsmith, consider6 que Assange ha sido "exageradamente vilipendiado", teniendo en cuenta que, segun jurisprudencia creada en el caso de Lospapeles del Pentdgono "la responsabilidad de estas reve- laciones recae firmemente sobre la institucibn encargada de mante- nerlas secretas: el Poder Ejecutivo" (Goldsmith, 2010).

Estados Unidos no la ha tenido facil a la hora de mantener su poli- tics de defensa de la libertad en In- ternet en paises como China y a la vez protestar enfaticamente contra Wikileaks. "Estamos preocupados por la determinacihn de algunos gobiernos de censurar y silenciar a individuos, y restringir el libre flu- jo de informacibn", dijo el vocero del Departamento de Estado, P.J. Crowley nueve dias despuks del destape de 10s 250,000 cables de Wikileaks (Rogin, 2010).

Practicamente a1 mismo tiempo en que estas declaraciones se emi- tian, presiones atribuidas a1 Gobier- no de Estados Unidos llevaron a compafiias que manejaban 10s ser- vicios de donaciones de Wikileaks, como PayPal, Visa y Mastercard y a Amazon, que hospedaba el sitio web, a romper con Assange y su organizacihn. Los "contraataques" contra 10s sitios de esas empresas no se hicieron esperar. Mientras crecian las tensiones, "espejos" de Wikileaks se multiplicaban y la in- formaci6n seguia emergiendo.

"La estrategia actual de pre- sionar a intermediarios (PayPal, Mastercard, Amazon, varios ser- vicios de nombre de dominios, en- tre otros.) para que dejen de hacer negocios con Wikileaks va a tener un efecto marginal en su capacidad para recaudar fondos" (Goldsmith, 2010). No impedirii, sin embargo, que todo termine en Internet. En la era de las redes, y esa es la primera lecci6n que surge de la saga Wiki- leaks, resulta imposible bloquear la informaci6n.

Todo comenzo con un periodista Su nombre es Nick Davis y, aunque no tiene la fama de Assange, es el responsable indirect0 de la cola- boraci6n sin precedentes entre The Guardian, The New York Times y Der Spiegel, en un primer momento, y El Paisy Le Monde mas adelante.

Davis, reporter0 de The Guardian, intrigado por la historia de un "gar- ganta profunda" armado de un dis- co compact0 de Lady Gaga lleno de secretos de Estado y un australiano dotado para la informatics que huia

Y Davis tenia raz6n. Unos 300 millones de palabras fueron pro- cesadas por un equipo compuesto por reporteros, editores, abogados y especialistas en tecnologia de The Guardian y The New Yirk Times, se- gun contb el propio director de The Guardian, Alan Rusbridger, durante una conferencia sobre la colabora- cibn con Wikileaks celebrada en la Universidad de Columbia (Colum- bia University, 201 1).

;El resultado? Un tsunami me- diatico y temblores en todas las es- tructuras diplomaticas del mundo.

Medio en broma, medio en se- rio, el director ejecutivo de TheNew York Times se pregunt6 si habria te- nido la "generosidad" de Rusbrid- ger de haber entrado en contact0 primero con 10s cables de Wikileaks (Columbia University, 201 I).

Pero no era precisamente des- prendimiento lo que llev6 a1 direc- tor de The Guardian a buscar una alianza trasatlantica. Rusbridger queria ayuda en el inmenso traba- jo, buscaba garantizar la publica- ci6n con mas de una plataforma tecnolbgica trabajando el tema si-

I I Los cables son un llamado para paises en 10s que la transparencia sigue en paiiales.

I I

por el mundo con un tesoro de in- formacibn, contact6 a Assange y lo convenci6 de que "en vez de tirar crudo en Internet todo eso, traba- jara con medios tradicionales para, primero, lograr mas impacto, y tam- biCn para dar sentido a la informa- ci6nn (Columbia University, 201 l).

multiineamente, per0 sobre todo "busc~bamos la protecci6n en las leyes de prensa, mas robustas en Estados Unidos que en Inglate- rra" (Columbia University, 201 1) y evitar que la publication fuera de- tenida por un impediment0 guber- namental.

32 GLOBAL

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Wikileaks filtro 92.000 documentos a 10s diarios New York Times y The Guardian, y a1 semanario aleman Der Spiegel.

Una amenaza de censura previa o de "detencibn de las prensas" (o de 10s sitios web) era menos proble- mhtica para The New York Times, victorioso en 10s aiios setenta en el caso de Lospapeles del Pentdgono, que sent6 un precedente juridico. El 30 de junio de 1971, la Suprema Corte de Justicia de 10s Estados Unidos, con un voto de seis a tres, levant6 una restriccibn gubernamental de publicaci6n de aquellas filtracio- nes, luego de la salida de tres arti- culos en The flew York Times (Apple Jr., 1996).

"Esa victoria envalenton6 a 10s medios de comunicacibn, y el con- tenido de Los papeles del Pentdgono garantizb, a1 menos para la gene- racibn de periodistas directamente involucrados, que cada palabra del Gobierno fuera sometida a un es- crutinio esckptico (y con demasiada frecuencia cinico). La administra-

ci6n de Nixon respondi6 creando la unidad de 10s 'plomeros' (asi llama- dos porque debian lidiar con 'fugas' como las de 10s papeles del Penti- gono). Ese paso llevb a1 esckndalo de Watergate y finalmente a la re- nuncia de Nixon" (Apple Jr., 1996).

La vigencia de 10s medios tradicionales La otra inquietud de Rusbridger, director de The Guardian, y muy po- siblemente la que llev6 a Assange a acercarse a un medio tradicional en primer lugar, era potenciar a1 maxim0 el impact0 de la publica- ci6n de 10s cables y 10s informes mi- litares de Irak y Afganistan.

Bien podia Wikileaks, que habia ganado fama con el video del asesi- nato del equipo de Reuters, colgar sus cables en la web y Assange evi- tar las complicaciones que le trajo la "convivencia" con medios tradi-

cionales, a1 punto de que ya esta en el ciberespacio el libro electrbnico "Secretes abiertos: Wikileaks, la guerray la diplomacia norteamericana: Cobertura completa y expandida de The New York Times'', poco halagiieiio para con el australiano.

En su obra Comunicacio'n y poder, Manuel Castells arroja luz sobre las razones que aiin hacen vigentes a 10s medios masivos, aunque some- tidos a una nueva dinarnica que 10s obliga a reinventarse: "Lo que lle- ga a Internet puede llegar a1 mun- do entero. No obstante, este filtro mantiene un considerable poder de conectar en red porque la comuni- cacibn mas socializada se procesa todavia a travks de 10s medios, y 10s sitios web de informaci6n mks populares son 10s de 10s principa- les medios por la importancia que se concede a la marca como fuente del mensaje. Ademas, el control de

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10s gobiernos sobre Internet y el in- tento de las empresas de cerrar las redes de telecomunicaciones en sus 'cotos privados' demuestran que 10s filtros siguen manteniendo el po- der de conectar en red" (Castells, 2009).

;Imports mucho lo que cinco grandes medios de comunicacibn y un portal web digan a la hora de formarse una opini6n o de tomar partido por una causa o rechazar- la? ~Tiene Wikileaks miis o menos seguidores o detractores (en pro- porcibn) luego de la alianza con 10s medios masivos? ;Hay miis gente a favor o en contra del estilo de diplo- macia estadounidense o de sus tiic- ticas de guerra?

Castells plantea que la informa- ci6n "por si misma no altera las ac- titudes a no ser que exista un nivel extraordinario de disonancia cog- nitiva. Esto es debido a que las per- sonas seleccionan la informaci6n de acuerdo con sus marcos cognitivos" (Castells, 2009). Es decir, lleviindo- lo a1 maniqueismo miis absoluto, quien en Estados Unidos estt por la guerra o por el Tea Party siempre sintonizara Fox News y despreciarii CNN Y viceversa.

para que sirven 10s rnedios? Mas alla de la arrogancia Wikileaks ha venido a confirmar lo que ya sospechiibamos: la nueva funci6n del periodismo y sobre todo de 10s periodicos y las grandes or- ganizaciones de noticias es dar con- texto, verificar, certificar y traducir para el pitblico las jergas militares, diplomiiticas, cientificas y de toda indole. Pero ;no era esa siempre la idea? Las prisas por competir a1 menor costo, dar la idtima primi-

Los informes filtrados por la plgina web Wikileaks aseguran que desde la invasion estadounidense de Irak, en 2003, han perecido 70.000 civiles.

cia y estar en todas partes, todo el tiempo, pueden haber opacado la misi6n del oficio que llena las bu- tacas de las escuelas de periodismo.

Cambia el "ecosistema" de medios, cambian 10s tiempos de procesamiento de datos, per0 el pe- riodismo sigue siendo periodismo.

"Resulta evidente que 10s me- dios tradicionales van perdiendo poder y control sobre el monopolio de la informacibn, a1 tiempo que 10s individuos conectados a las re- des ganan poder y control sobre la informaci6n. Ya no solo lo tenemos 10s tradicionales medios de masa, sino que ahora tambiCn contamos con una masa de medios, confor- mada por todos nosotros", dijo en noviembre Rosental Calmon Al- ves, director del Centro Knight de Periodismo para las AmCricas, du- rante la conferencia El&turo del pe- riodismo en el context0 actual de cambio de modelo econdmico de 10s medios y de nuevas audiencias y recursos tecnolbgicos

(Ciitedra UNESCO de Comunica- ci6n, Democracia y Gobernabili- dad con sede en la PUCMM, 2010).

Para distanciarse de Wikileaks y mantener su "superioridad", 10s medios se han empefiado en mos- trar sus grandes esfuerzos Cticos para preservar vidas y evitar perju- dicar la "seguridad nacional".

The New Yirk Times ha subrayado una y otra vez su independencia de Assange, a1 punto que se rehusb a enlazar a Wikileaks a su portal por- que alli se mantuvieron nombres de personas cuya mencibn, entendia el diario, podia ser letal. The New York Times, ha explicado su director eje- cutivo Bill Keller, nunca consider6 a Assange como un colaborador, sin0 como una fuente (Keller, 201 l), (Columbia University, 20 1 1).

Keller lleg6 a decir durante una conferencia en Columbia Universi- ty que le preocupaba que The New York Times fuera visto como "un peri6dico de izquierda" (y no como

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uno "imparcial") a1 haber sido invi- tado junto a The Guardian, Der S'ie- ,gel, El Paisy Le Monde (Columbia University, 201 1).

El valor de 10s cables diploma- ticos de Wikileaks, para el director de El Pais, Javier Moreno, reside en que revelan "de forma exhaustiva, como seguramente no habia su- cedido jam&, hasta qui: grado las clases politicas en las democracias avanzadas de Occidente han estado engaiiando a sus ciudadanos" (Mo- reno, 2010).

Moreno afirm6, durante un de- bate organizado en Madrid, que el carnbio de panorama mediiitico es innegable y, agregamos, necesario.

Wikileaks, las filtraciones y la masiva colaboraci6n entre medios, periodistas y especialistas de dis- tintas ramas de la comunicacibn, la informatica y el derecho, ha de- vuelto la esperanza en que existe un papel para 10s medios de comu- nicacibn en la era de Internet.

Los cables son un llamado para paises como la Republica Domi- nicana en 10s que la transparencia sigue en paiiales y donde instancias como el Congreso, la Junta Central Electoral, el catastro, las aduanas, el Banco Central o la Tesoreria Na- cional -todas de vital importancia para la ciudadania y la democra- cia-sacaron malas notas en lo que a cumplimiento con la ley de libre acceso se refiere.

Sea cual sea la agenda de Julian Assange, y sea cual sea el resulta- do -que de hecho es escaso- de la publicaci6n de las informaciones clasificadas ha quedado establecido que, aun en el tiempo del usuario- autor, el periodismo y 10s periodis- tas siguen siendo necesarios.. . per0

necesitan despertar.

Maria Isabel Soldevila es gradua-

da d e Periodismo en la UAsD (2002)

con maestria en la Columbia Univer-

sity, NY. Fue becaria Fulbright, Maria

Moors Cabot y d e Taiwan (2004). Tie-

ne estudios avanzados d e Lengua y

Civilizacion Francesa en La Sorbona,

Paris (2005) y un certificado e n Busi-

ness Management d e la New York Uni-

versity (2008). Es jefa d e Redaccion

del Listin Diario. Dirigio la Escuela d e

Comunicacion d e la PUCMM (2006-

2008) donde e s docente y dirige la

Catedra UNESCO d e Comunicacion,

Democracia y Gobernabilidad. Cofun-

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la era de Internet: Ctica, retos e inno-

vacion". Citedra Unesco de Comuni-

cation, Democracia y Gobernabilidad

con sede en la PUCMM. "Conferencia:

El futuro del periodismo en el contex-

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a ttica, allende sus dife- rentes corrientes de pen- samiento, siempre es el

esfuerz~ racional de pensar y orien- tar la conducta de las personas, en cuanto individuos y en cuanto so- ciedades. Apoyhndonos en la ttica kantiana, que es el referente miis relevante hacia la etapa actual de la reflexibn del tema, se impone el considerar a todo ser humano como un fin y no como un medio, es decir que frente a cualquier ser huma- no el calculo de una actuaci6n ha de considerarlo como un absoluto, nunca "utilizarlo" para el logro de otros objetivos. Este fundamento de la Ctica es motivo de la mayor parte de las criticas que se le formulan a las actuaciones de 10s Estados, 10s gobiernos y organizaciones.

La valoracibn Ctica de la ac- tuaci6n de todo tipo de organiza- ci6n esta determinada por el bien comGn que persigue. En el caso de 10s Estados, tema que esta en el nucleo del problema que tratamos, la valoraci6n Ctica de sus actua- ciones, tanto para sus ciudadanos como para 10s ciudadanos de otros Estados, se determina por el bien c o m h que persigue. La forma con- creta que hoy tenemos de explicarlo son 10s derechos humanos, que en cuanto fundamento de las Naciones Unidas sirven como referente Ctico para explicar y evaluar la actuacibn de 10s Estados miembros.

NO obstante la definici6n clara de estos principios, para todo el mundo es evidente que en el orde- namiento mundial de 10s Estados priman mhs a menudo 10s intere- ses particulares de determinados Estados por su poderio econ6mico 0 militar, y que esos intereses ni siquiera estan en funcibn del bien

comfin de 10s ciudadanos de tal o cual Estado, sino de 10s intereses de grupos econbmicos o politicos. Los motivos te6ricos fundacionales de dicha dicotomia se pueden en- contrar en dos autores del comien- zo de la modernidad, por un lado Francisco de Vitoria, y su Derecho de gentes, y por otro lado Maquia- velo y su texto Elprinc$e. Mientras Vitoria establece como criterio de evaluacibn ttica de un Estado el bienestar de 10s individuos, si- guiendo la tradici6n tomista, para Maquiavelo la valoraci6n de un Estado depende del txito de su Gobierno de mantenerse en el po- der sin importar el bienestar de 10s ciudadanos. En el caso de Vitoria, el estimulo de su reflexi6n provie- ne del serm6n de Montesinos del segundo doming0 de adviento de 151 1 en defensa de 10s aborigenes de esta isla y que este aiio cumple su quinto centenario.

diversos grados de actuaciones en funci6n de conservar y ampliar el poder de cada Estado en particu- lar, sin que la integridad de 10s seres humanos sea un obsthculo para em- prender acciones militares, politicas o econ6micas. Basta como ejemplo la reciente confesi6n del presidente Bush hijo en su obra Decision points indicando que autoriz6 torturar a prisioneros en poder de Estados Unidos. Es entre esos dos polos que se debate la discusi6n ttica en torno a las acciones de 10s Estados.

2Existe alguna modalidad de gobierno que pueda servir como referente Ctico para refrendar las acciones de un Estado? Si, existe, la democracia. Entendiendo que la democracia abarca un conjunto de modelos diversos y experiencias hist6ricas diferenciadas, es menester definirla en sus valores fundamenta- les: es democr6tico el rtgimen que procura la mayor participaci6n de

aExiste alguna modalidad de C gobierno que pueda servir como referente Ctico para refrendar las acciones de un Estado?

Las relaciones entre Estados a1 comenzar el siglo XXI siguen ten- sas en el plano ttico entre estos dos polos. Por una parte la demanda de que sus acciones tengan como nor- te la promoci6n de la dignidad y bienestar de todos sus ciudadanos, como de todo ser humano, a la luz de 10s derechos humanos en la tra- dici6n iniciada por Vitoria. Por otra parte, una tradici6n que defiende

todos 10s ciudadanos en 10s asuntos publicos, en el marco de una cons- tituci6n refrendada por la mayoria absoluta, respetuosa de 10s derechos humanos y promotora de la paz en la diversidad. Es en ese context0 que un Estado puede ser conside- rado humanamente digno de ser respetado y que sus decisiones obli- guen en conciencia a todos 10s ciu- dadanos y ciudadanas.

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"No hay informaci6n perfecta per0 a1 final tenemos la verdad", dijo Assange.

;Qu& es Wikileaks? Es una organi- zacibn sin fines de lucro que centra su actividad en la gestibn de una phgina Web abierta a la publica- cibn de informacibn confidencial de gobiernos que sea de inter& pii- blico. Su cara miis visible es Julian Assange, y comenzb a operar desde finales de 2006. El servidor oficial de Wikileaks se encuentra en Sue- cia. A pesar de que el portal tuvo mucha prensa por la revelacibn de casi 400,000 informes de la diplo- macia estadounidense a1 finalizar el 2010, utilizando a varios peribdicos de impacto mundial, tiene entre sus antecedentes el desvelamiento de documentos relativos a la guerra en Irak y Afganisthn, incluidos videos de asesinatos y violacibn de dere- chos humanos cometidos por las tropas de Estados Unidos.

Cuando se escriben estas lineas, un banquero suizo llamado Rudolf

Elmer le entregb en un act0 piiblico a Assange informacibn sobre cuen- tas bancarias que son usadas para evasibn fiscal, lo cual promete en el futuro cercano la publicacibn de parte de esa informacibn.

La filosofia de fondo de Wiki- leaks es que 10s ciudadanos tienen derecho a conocer informes con- fidenciales de gobiernos -y ahora de bancos- que representen viola- ciones de 10s derechos de 10s ciuda- danos. Por lo expresado en diversos momentos por 10s peribdicos que han publicado esos informes y Wi- kileaks, no toda la informaci6n ob- tenida representa una violacibn de 10s derechos de 10s individuos y, por tanto, no amerita ser publicada.

Junto con estos casos es menes- ter destacar que a Assange se le ha tratado de inculpar en casos de vio- lacibn de mujeres sin mucho Cxito hasta el momento. Para quienes

respaldan la accibn de Wikileaks, estas acusaciones pretenden daiiar la imagen de Assange y el impacto de las recientes revelaciones sobre la diplomacia de Estados Unidos. Por otra parte, la publicacibn del video del 12 de julio de 2007 don- de un helicbptero norteamericano abatia a varios individuos sin pre- via agresibn, casi como en un juego de video, llev6 a1 Penthgono a abrir una investigacibn sobre el caso, aiiadiendo a esta reaccibn decenas de disculpas a diversos gobiernos de parte de Estados Unidos por las valoraciones expresadas por sus di- plomhticos respecto a gobiernos y personalidades de dichas naciones.

La legalidad de Wikileaks y 10s peribdicos para publicar esas in- formaciones consideradas como confidenciales por 10s gobiernos -y ahora 10s bancos- es motivo de una acalorada discusibn, per0 has-

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ta el momento mhs se ha destaca- do la ilegalidad de muchas de las acciones militares denunciadas e informaciones de 10s diplomAticos norteamericanos (considerado por varios gobiernos como espionaje). Mi prop6sito en este breve ensayo no es valorar la legalidad o ilegali- dad, sino la eticidad de las acciones de Wikileaks y de 10s peri6dicos que lo han publicado.

Infor maciiin El derecho a la informaci6n es uno de 10s pilares de toda democracia, y esth basado en el articulo 19 de la Declaraci6n de las Naciones Uni- das del 10 de diciembre de 1948, que afirma: "Todo individuo tiene derecho a la libertad de opini6n y de expresibn; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y re- cibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitacibn de fronteras, por cualquier medio de expresi6n". Tal articulo ha sido mu- chas veces cuestionado apelando a razones que tienen que ver con "la seguridad del Estado", pretendien- do una extensi6n del articulo 12 que afirma que: "Nadie serk objeto de injerencias arbitrarias en su vida privada, su familia, su domicilio o su correspondencia, ni de ataques a su honra o a su reputaci6n. Toda persona tiene derecho a la protec- ci6n de la ley contra tales injeren- cias o ataques". Pero el articulo 12 se restringe a la vida privada de 10s individuos, lo cual no incluye 10s asuntos phblicos que ataiien a1 Esta- do, 10s gobiernos y las instituciones de carkcter phblico.

Los limites entre la informaci6n que es relevante para el inter& ph- blico y aquella informaci6n cuya

divulgaci6n no violenta ninghn de- recho fundamental del ser humano per0 afecta la seguridad de un Es- tad0 no son fhciles de delinear. El primer problema es que usualmente se trata de informaci6n bajo el con- trol de quienes administran el Es- tado. En gran medida frente a ese problema se destaca precisamen- te en Estados Unidos la Primera Enmienda a su Constitucibn, que afirma: "El Congreso no harh ley alguna con respecto a la adopci6n de una religi6n o prohibiendo el li- bre ejercicio de dichas actividades; o que coarte la libertad de expre- si6n o de la prensa, o el derecho del pueblo para reunirse pacifica- mente, y para solicitar a1 gobierno

son delegaciones del pueblo. Por lo regular, las mediaciones con- cretas para que dicho derecho sea ejercido plenamente se le piden a la prensa y en algunos casos a orga- nizaciones de la sociedad civil que asumen como vocaci6n el derecho a la informacibn. El caso Wikileaks reiine ambas caracteristicas; su originalidad estriba en su carhcter global y en el uso de las nuevas tec- nologias de la informaci6n. Assan- ge no es ciudadano norteamericano y su base de apoyo se encuentra en Europa, concretamente en Suecia, donde un partido politico minorita- rio llamado Partido Pirata de Sue- cia (Piratpartiet) le ha servido de respaldo. Cineastas como Michael

I I No es posible que la democracia de la potencia econ6mica mais grande del planeta sea servida en base a rumores y chismes.

I I

la reparaci6n de agravios"; funda- mento de una rica tradici6n en la que 10s ciudadanos, y la prensa en particular, tienen reconocidos el derecho de reclamar a1 Estado el ejercicio de la libertad de difundir y compartir informaci6n y, en deter- minados casos, exigir de sus gober- nantes explicaciones sobre hechos y acciones que se consideran lesivos a 10s derechos de 10s ciudadanos y ciudadanas.

No es posible una democracia real sin que 10s ciudadanos puedan conocer y difundir informaci6n sobre las acciones del Estado y el Gobierno, cuyo poder y recursos

Moore y Kean Loach han apoyado moral y financieramente la defensa de Assange y la prensa que ha ser- vido de canal a la divulgacibn de 10s documentos -El Pais, The New Tork Times, Spiegel, The Guardian y Le Monde- pasan tambikn a ocupar la primera linea de defensa del de- recho de Wikileaks a existir y di- vulgar la informaci6n confidencial obtenida.

Critexio ktico Luego de una primera oleada de reacciones criticas del Departamen- to de Estado de Estados Unidos y gran cantidad de voceros politicos

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del ala republicana, especialmen- te la secta del Tea Party, pidiendo la "cabeza" de Assange, las aguas del escindalo parecen t m a r nivel y 1as revelaciones muestran rnucho de chisme y comentarios chabaca- nos de parte de 10s representantes norteamericanos en 10s diferentes paises. Es importante identificar la direcciljn de la inGormaubn hasta ahora publicada, son apreciaciones de l a delegaciones diplomhticas para el Departamento de Estado, no a la inversa, Esto es importante por- que no compromete phblicamente politicas nol-teamerkanas y en casi mdos 10s casos la administraci6n estadouniden~ puede alegar perfec- tamente que son imumos parciales que reciben y que en casi todos 10s casos no generan acciones concretas de pare de Estados Unidos.

Wikileaks en particular y los peribdicos que estkn publicanda las filtraciones reconocen que mu- chos de 10s documentos no serkn divulgados porque comprometen la seguridad de 10s Estados o afec- ta objetivamente la honra de indi- viduos. Esta postura expicita del portal le ha grauljeado comentarios negativos de sectores mucho mks radicales que estarian interesados en informaciones mis comprome- tedoras. Es importante destacar en esta postura un criterio ktico que discrimina entre informaci6n canfidencial a la que legitimamen- te debe tener derecho el phblico e informaciones que claramente comprometerian la seguridad de los Estados involucrados y serfa pro- piamente una accibn politica con el propbsito de generar un balance de poder difermte a1 actual.

Sobre el profesionalismo de mu- chos de 10s agentes diplomhticos

Esta es h p6gina del portal de informaclcjn Wikileaka que pmica docnmentos filtrados sobre la inva&n de Irak y la guerra en Atganistan.

pende una evaluaci6n negativa, que segumente provocarii variaciones en su formacibn corno inf7ormantes dentro de la estructura burocrhica del Departamento de Estado de Es- tados Unidos. No es posible que la democracia de la potencia econlj- mica y militar mOs grande del pla- neta sea servida en base a rumores, prejuicios y chismes, algo mb pro- pio de dictaduras tercermundistas. Se impone una ktica en la articu- lacibn de las fuentes de inteligen- cia para 10s Estados democrh~icos, basada en el respeto de sus inter- locutores locales y centrada en 10s temas centrales de 10s intereses del pais que representan.

Cosbda Un factor que le es propio a Wi- kileaks es el context0 de las nue- vas tecnolog5as de la informacibn, tanto en la abtencibn de la infor- macibn corno en su divulgaciljn. Assange no es un agente secret0

con gabardina entrando en 10s archivos secretos deJ s6tano dc un edifido de Washington, eso es cosa del pasado. El Internet hoy es un tejido que conecta todo el planeta, desde el hogar humilde de un barrio de San Juan de la Maguana hasta el Pentitgono, y para evitar que un usuario desde wna conexiljn residencial no acce- da a informacibn confidential se inventan cada dia nuevas formas de bloqueo electrbnico, barreras (firewalls1 y complejos sistemas de passwords. Mhs que soldados que defiendan archivos, hay se deman- dan artilugios desarrollados pos mentes privilegiadas. Casos hay por decenas de j6venea que utili- zando su creatividad e ingenio ban desmontado estos sistemas y pene- trado en sistemas de bases de datos sensibles, software balistico y fon- dos bancarios, muchas veces por pura diversibn y para demostrar su inteligencia.

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Normar tticamente la capaci- dad para superar las defensas de esos sistemas electr6nicos resulta en cierta manera ingenuo debido a que implicaria detener el desarrollo de nuevas alternativas. Es posible y deseable que un profesional del area siga normas tticas que lo lle- ven a no intentar acceder a infor- macibn confidencial a pesar de que pueda, per0 el desarrollo de nue- "0s softwares y herramientas de la Web muchas veces se incuba entre chicos y chicas que todavia no han ido a la universidad. Facebook es un buen ejemplo, sin implicaciones como las expuestas anteriores, de que la creatividad en el uso de las nuevas tecnologias tiene mas poten- cia1 entre j6venes que entre adultos.

El acceso a la informacion en la Web resulta hoy una cuesti6n com- pleja y ha llevado a situaciones an- tes inimaginables. Un buen ejemplo estii en la carta de Benedicto XVI

del 10 de marzo de 2009 que expli- ca que la decisi6n tomada de levan- tar la excomuni6n a cuatro obispos del grupo fundado por el arzobispo Lefebvre no tom6 en cuenta que uno de ellos, Richard Williamson, defendia posturas que negaban el holocausto y postulaba el racismo contra 10s judios. El papa, a1 des- cubrir esa situaci6n ampliamen- te divulgada en la web, afirmaba que: "Me han dicho que seguir con atenci6n las noticias accesibles por Internet habria dado la posibilidad de conocer tempestivamente el pro- blema. De ello saco la lecci6n de que, en el futuro, en la Santa Sede deberemos prestar mas atenci6n a esta fuente de noticias".

Las declaraciones del santo padre no han cambiado radical- mente el inter& por el Internet

de laicos, sacerdotes, religiosos y obispos; 10s que ya navegaban lo siguen haciendo, 10s que no, dudo mucho que lo hagan. La brecha generacional sigue siendo un va- lladar definido, tanto en la Iglesia como fuera de ella. No obstante, este 24 de enero de 2011 en oca- si6n de la 45 Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, Be- nedicto XVI promueve incluso la participacihn en las redes sociales. "Deseo invitar a 10s cristianos a unirse con confianza y creatividad responsable a la red de relaciones que la era digital ha hecho posible, no simplemente para satisfacer el deseo de estar presentes, sino por- que esta red es parte integrante de la vida humana."

El acento puesto en el tema gano relevancia mundial cuando en esa misma ultima semana de enero comenz6 la crisis en Egipto y el Gobierno de dicho pais tom6 entre otras medidas la desconexi6n del servicio de Internet, a1 que se acusaba de haber sido la herra- mienta de comunicaci6n que moti- v6 y ayud6 a coordinar las acciones de protestas. Cuando el presidente de Estados Unidos solicit6 publi- camente a1 Gobierno de Egipto el respeto a la poblacibn lanzada a la calle en protestas, indicaba, entre otros aspectos, la reconexi6n del servicio de Internet en dicho pais. Esta solicitud del presidente Barack Obama conlleva muchos matices que en su momento servirhn para defender las posturas de Wikileaks y 10s peri6dicos que han divulgado 10s famosos secretos diplomAticos.

El acceso a la informaci6n que promueve la Web no puede ser pen- sado y evaluado, ni siquiera en el plano ttico, con 10s mismos estan-

dares previos a su existencia. Cada usuario de la web es potencialmen- te generador de informaciones, sin juzgar previamente su veracidad, pertinencia o sesgo personal, y el cumulo de informaciones que hoy se difunden es inabarcable por nin- gun Estado, organizaci6n y mucho menos individuo particular. Que la informaci6n obtenida por Wiki- leaks haya sido divulgada a travts de grandes peribdicos brinda varios filtros de control allende la institu- cibn que 10s obtuvo y divulga en primer momento. En el seno de un tema tan complejo, ese elemento brinda una ventaja ttica en cuanto a la busqueda del bien comun en su divulgaci6n.

Concli El caso Wikileaks en cuanto proble- ma Ctico hunde sus raices en pro- blemas clasicos como la naturaleza del Estado y su derecho a contro- lar o no el acceso a la informacihn por parte de 10s ciudadanos. En el meollo de este problema es necesa- rio ponderar la democracia como modelo ttico de las relaciones en- tre el Estado y 10s ciudadanos. Pero con la divulgacihn de Wikileaks se abren nuevas fronteras en el debate acerca de la eticidad de la obten- ci6n de la informaci6n y su divul- gaci6n en la web. Precisamente por lo novedoso del escenario y la globalizacihn del escenario, debera ser motivo de nuevas reflexiones en torno a1 uso de la web y la propie- dad de la informaci6n que se trans- mite por ella.

David ~ l v a r e z Martin es filosofo,

decano de Ciencias y Humanidades

d e la Pontificia Universidad Catolica

Madre y Maestra (PUCMM) .

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Cecile Castaing de -

9 u l

Dominicana

Frente a 10s problemas y retos ambientales del siglo XXI, comenzo a nivel internacional un proceso de constitucionalizacion del derecho a1 medio ambiente, tambien reconocido como el derecho a un ambiente sano. La Constitution de la Republics Dominicana, que entro en vigor el 26 de enero de 2010, contiene por primera vez varias disposiciones consagradas a la proteccion de 10s recursos naturales y conservacion del patrimonio cultural, historico, artistic0 y arqueologico. Para asegurar la conservacion, la Carta Magna eleva a1 nivel constitucional el derecho de todo ciudadano a un ambiente sano.

Ilustraciones : Adel;

,A\ a Y/-

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a nueva Constituci6n de la Repiiblica En este sentido, nuestra ley sustantiva asegura Dominicana, promulgada a principios la protecci6n del medio ambiente en varios ar- de 2010, consagra la protecci6n del me- ticulos y bajo diferentes perspectivas. Es impor-

dio ambiente a nivel constitucional. La Carta tante destacar que la Asamblea Constituyente no Magna anterior no hacia referencia a la protec- se limit6 a constitucionalizar la proteccibn del ci6n del ambiente de manera expresa, solamente medio ambiente, tambikn reconoci6 a todos el reconocia como obligacibn del Estado: la inviola- derecho a un ambiente sano como derecho fun- bilidad de la vida, el mejoramiento de la alimen- damental. A 10s fines de asegurar el respeto de tacibn, 10s servicios sanitarios y las condiciones este nuevo derecho fundamental, la Carta Magna higiknicas, procurar 10s medios para la preven- ofrece varios mecanismos que estudiaremos mAs ci6n y el tratamiento de las enfermedades end& adelante. micas y de toda otra indole.'

La consagraci6n a nivel constitucional del de- Reconocimiento constitucional del recho a un ambiente sano en la Repiiblica Domi- derecho a un ambiente sano nicana sigue el proceso de constitucionalizaci6n Varios articulos de la Carta Magna estAn dedi- de este que empez6 a partir de 1972, con la adop- cados a la protecci6n del ambiente, en particular ci6n de la Declaracibn de Estocolmo sobre el el capitulo titulado "De 10s Recursos Naturales", Medio Ambiente Humane,* la cual reconoce el que precisa cu4les son 10s recursos naturales ob- derecho fundamental a un ambiente de calidad jet0 de esta proteccibn y delimita su explotacibn por primera vez3 a1 declarar que "el hombre tiene y aprovechamiento. La voluntad de precisi6n que el derecho fundamental a la libertad, la igualdad refleja el texto constitucional en lo que compren- y el disfrute de condiciones de vida adecuadas de la protecci6n del medio ambiente es esencial en un medio de calidad tal que le permita llevar para dar eficacia a1 derecho que consagra. una vida digna y gozar de bienestar, y tiene la so- Muchas constituciones que reconocen el de- lemne obligaci6n de proteger y mejorar el medio recho a un ambiente sano carecen de eficacia para las generaciones presentes y futuras". por la imprecisi6n y falta de definici6n de las

A partir de esta fecha, varios paises adoptaron disposiciones que consagran este de re~ho .~ Sin en sus constituciones nuevos articulos que hacen embargo, debemos puntualizar que el texto cons- directamente referencia a1 am- - -

biente.4 La Constituci6n espaiiola adoptada en 1978 reconoce el de- Serii deber del Defensor del Pueblo recho de todos a disfrutar de un ambiente adecuado para el desa- rrollo de la persona, asi como el deber de con~ervarlo.~

La constitucionalizaci6n de la

y del Tribunal Constitutional asegurar la efectividad de este nuevo derecho.

protecci6n del medio ambiente es 1 una etapa fundamental para re- forzar su efectividad a travks de la potenciaci6n titucional no da una definici6n concreta de lo de las normas ambientales en el orden juridico; que es un ambiente sano, es decir, cuAles son 10s este mecanismo permite remediar la ineficacia criterios que nos permiten considerar sano el me- del derecho ambiental internacional, el cual ca- dio ambiente; este aspect0 deberA ser subsanado rece de mecanismos jurisdiccionales para garan- por la jurisprudencia. tizar su aplicaci6r1, y afirmar la primacia de las Este capitulo define 10s recursos hidricos y normas ambientales inscritas en la Constituci6n las Areas protegidas como patrimonio nacional sobre otras normas que le son inferiores en la je- inalienable, inembargable e imprescriptible. Es- rarquia del orden juridico, por ejemplo, la ley.6 tablece que el consumo humano de agua tiene

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prioridad sobre cualquier otro uso, y el Estado debe promover la elaboraci6n e implementaci6n de politicas efectivas para la protecci6n de 10s recursos hidricos. El texto constitucional com- promete a 10s poderes publicos a ofrecer una pro- tecci6n especial a las cuencas altas de 10s rios y las zonas de biodiver~idad,~ y afirma que 10s rios, lagos, lagunas, playas y costas nacionales perte- necen a1 dominio publico, son de libre acceso, observkndose siempre el respeto a1 derecho de propiedad p r i ~ a d a . ~

Es importante observar que pueden surgir conflictos de intereses relativos a 10s derechos de propiedad de 10s terrenos pr6ximos a las playas de zonas de inter& turistico, per0 la Constituci6n precisa que la ley deberk regular las condiciones, formas y servidumbres en que 10s particulares acceden a1 disfmte o gestibn de las Areas antes mencionadas. Entonces, en caso de violaci6n del carActer inalienable de las costas y playas por la ley o por cualquier otro tip0 de norma, se podrA

solicitar a1 Tribunal Constitutional que decida sobre la constitucionalidad de la norma en cues- tibn, a 10s fines de conciliar el derecho de disfrute de las playas con el derecho de propiedad priva- da; esta alta jurisdicci6n tambikn podrh tener un papel fundamental como mecanismo de garantia del derecho a1 medio ambiente, como lo veremos mks adelante.

Como se mencion6 anteriormente, el aporte principal en materia ambiental del nuevo texto constitucional de la Repiiblica Dominicana es la afirmaci6n de un derecho subjetivo1° a un ambien- te sano." Dicho derecho fue enunciado por prime- ra vez en la Rephblica Dominicana por el articulo 6 de la Ley 64-00,'2 ley marco del 25 de julio del 2000 sobre el medio ambiente y 10s recursos natu- rales.13 Para reconocer a 10s individuos un derecho subjetivo a1 medio ambiente, este debe ser admiti- do como bien juridico. Por bien juridico se entien- de el bien que estA protegido por ser considerado digno de protecci6n juridica.

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El reconocimiento del medio ambiente como bien juridico protegido fue introducido en el de- recho dominicano por la Ley 64-00, la cual es- tablece que 10s recursos naturales "constituyen bienes comunes, no susceptibles de apropiaci6n por parte de 10s particulares y cuya conservaci6n recae sobre todos y cada uno de 10s ciudadanos que habitan la Repliblica",14 consagrado ademhs por el articulo 14 de la Constituci6n: "Los recur- sos naturales no renovables que se encuentren en el territorio y en 10s espacios

difusos.17 Toda persona tiene derecho, tanto de mod0 individual como colectivo, a1 uso y goce sostenible de 10s recursos naturales, a habitar en un ambiente sano, ecol6gicamente equilibra- do y adecuado para el desarrollo y conservaci6n de las distintas formas de vida, del paisaje y de la naturaleza.18 No es solamente el derecho a un ambiente sano que esth consagrado en el texto constitucional, es tambikn un derecho a la con- servacion de la naturaleza y del paisaje.

- - I - . _ maritimos bajo jurisdicci6n na- 1, f cional, 10s recursos genkticos, la biodiversidad v el es~ectro ra- dioeltctrico son patrimonio de la - - . . .. Nacion".

Lorenzo Ptrez Conejo lo ilus- tra de la forma siguiente: "El bien :FP= L juridico ambiente puede ser el ob-

- - - - - - - jet0 de situaciones juridico-subje- tivas, esto es, derechos subjetivos o intereses legitimos de 10s sujetos destinatarios del disfrute de esta realidad biofisica y/o ecol6gi- ca protegida legalmente, de ahi que en tCrminos gentricos a tal posici6n juridica se le denomine derecho a1 disfrute de un ambiente adecuado, de- recho al disfrute de 10s bienes ambientales o, mAs abreviadamente derecho a1 ambiente". En defi- nitiva, el derecho a1 ambiente, como lo conclu- ye este autor, se puede definir como la situaci6n juridico-subjetiva de la que son titulares todas las personas y que tiene por objeto el bien juridico ambiente.15

El Estado dominicano debe garantizar a sus habitantes la efectividad del derecho a1 ambiente en base a1 reconocimiento a nivel constitucional de 10s derechos e intereses colectivos y difusos en materia de protecci6n del medio ambiente. Cae tambikn bajo esta protecci6n la conservacibn del equilibrio ecolbgico, de la fauna y la flora, y la con- servaci6n del patrimonio cultural, histbrico, ur- banistico, artistico, arquitect6nico y arqueol6gico como lo seiiala el articulo 66 de la Constit~ci6n.'~

A diferencia de otras constituciones, la Car- ta Magna dominicana no se limita a enunciar un derecho a1 ambiente sano, sino que define el objeto de proteccibn de 10s intereses colectivos y

Sin embargo, el texto constitucional no da la definici6n de 10s ttrminos "intereses colectivos y difusos". El articulo 16 de la Ley General de Medio Ambiente y Recursos Naturales define el interks colectivo como el que corresponde a co- lectividades o grupos de personas, y el inter& difuso como aquel que estA diseminado en una colectividad, correspondiente a cada uno de sus miembros, y que no emana de titulos de propie- dad, derechos o acciones concretas.

Las caracteristicas del interks difuso son su as- pecto colectivo y su formaci6n que surge a1 mar- gen de todo reconocimiento formal. Se convierte en interks colectivo desde el momento en que el ordenamiento juridico reconoce la existencia de un interks difuso y establece sus condiciones for- males. En la Rep~blica Dominicana, el interts difuso en materia ambiental ha sido consagrado formalmente como interks cole~tivo'~ por la ley.20

El reconocimiento, en la Constitucibn, de 10s derechos e intereses colectivos y difusos en ma- teria ambiental ofrece a 10s individuos un instru- mento para asegurar su derecho fundamental a1 medio ambiente y crea una obligaci6n constitu- cional a1 Estado de reconocerlo. Entonces, el ar- ticulo 67 de la Carta Magna crea obligaciones y

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deberes estatales de prevencibn y conservacibn de 10s recursos naturales, dentro de 10s cuales estii la promocibn en el sector pitblico y privado del uso de tecnologias y energias alternativas no con- taminantes. Los derechos fundamentales vincu- lan a todos 10s poderes pitblicos, 10s cuales deben garantizar su efectividad en 10s tCrminos esta- blecidos por la Constitucibn y la ley.21 Ademiis, se prohibe explicitamente la introduccibn, desa- rrollo, produccibn, tenencia, comercializacibn, transporte, almacenamiento y uso de armas qui- micas, biolbgicas y nucleares y de agroquimicos vedados internacionalmente, ademiis de residuos nucleares, desechos tbxicos y peligrosos.

Los poderes pitblicos prevendriin y controla- r6n 10s factores de deterioro ambiental, impon- drhn las sanciones legales, la responsabilidad objetiva por daiios causados a1 medio ambiente

y a 10s recursos naturales y exigiriin su repara- cibn. Asimismo, cooperariin con otras naciones en la proteccibn de 10s ecosistemas a lo largo de la frontera maritima y t e r r e ~ t r e , ~ ~ y en 10s con- tratos que el Estado celebre o en 10s permisos que se otorguen que involucren el uso y explotacibn de 10s recursos naturales, se considerarii incluida la obligacibn de conservar el equilibrio ecolbgi- co, el acceso a la tecnologia y su transferencia, asi como de restablecer el ambiente a su estado natural, si resulta alterado. Ahora bien, el Estado tiene deberes en materia de proteccibn de 10s re- cursos naturales y conservacibn de un ambiente sano, per0 tambiCn todas las personas de manera general, como lo indica el articulo 75 de la nueva Constitucibn dominicana.

Los derechos fundamentales reconocidos por la Carta Magna determinan la existencia de un orden de responsabilidad juridica y moral, que obliga la conducta de todos en respetar y cumplir con las disposiciones constitucionales y las leyes;23 en caso de inobservancia de 10s deberes de pro- teccibn ambiental o de las leyes y normas ambien- tales, se podrii requerir a1 Estado o a las personas privadas que cumplan con sus obligaciones en base a este articulo.

E o g ~ ~ ~ ~ ~ a r r W b ~ c l e P derecho a mn ambfextta sarra Antes de estudiar 10s mecanismos constitucio- nales de garantia del derecho fundamental a un ambiente sano, tenemos que observar que 10s derechos fundamentales reconocidos por la Car- ta Magna determinan la existencia de un orden de responsabilidad juridica y moral, el cual fue histbricamente el derecho que se invocaba para justificar la proteccibn del medio ambiente antes que se reconociera el derecho a1 ambiente sano. La Declaracibn de Estocolmo de 1972 fue la pri- mera en enunciar el derecho a1 medio ambiente y lo asocia claramente a la dignidad humana y la calidad de ~ i d a . ~ ~

Tal es el caso de la sentencia del Tribunal Eu- ropeo de 10s Derechos Humanos, Lbpez Ostra contra Espaiia, en la cual se condenb a1 Gobierno espaiiol por violacibn de derechos humanos, en razbn de la contaminacibn del ambiente. Claudia

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Gutitrrez Bedoya iildica que el Tribunal Euro- peo reconoce la injerencia en la dignidad de las personas en su vida privada y familiar, como consecuencia de la contarninacion ambiental, y estima violado el articulo 8 de la Convencibn ELI- ropea de 10s Derechos H ~ m a n o s . ' ~

El texto coi~stitucioilal asocia directamente 10s

conceptos de dignidad humana a1 derecho a1 am- bieiite sano. El Estado domiilicailo debe asegurar

el rapeto de la digiiidad de las peryonas y orga- nizar la proteccion real ). efectiva de 10s derechos fundamentales que le son inherentes, como el dere- cho a1 medio ambiente.'" Otros derechos esthn di-

rectainelite a\ociiidos al derecho al ambiente sa11o: El derecho a la vivienda, se reconoce a toda

persoiia el derecho a ulia vivienda digna con ser- vicios biisico~.'~

El derecho a la salud, en virtud del cual el

Estado debe velar por el acceso a1 agua potable, el mejorainiento de la alimentacion, de 10s servi- cios sanitarios, de las coiidiciones liigiCnicas, del saneainieiito ambiental, asi como procurar 10s

medios para la prevention y tratamiento de todas las ei~fermedades.~~

Los derechos a la educacibn y a la cultura,

segfiii 10s cuales las autoridades deben dcfinir po- liticas para promover e incentivar la investigacion y la innovacibn que fdvorezcan el desarrollo sos-

tenihle, el bienestar humano y la conservacibii del medio ambiente,'" ~7 tambitn garantizar la pro-

tecci6n y restauraci6n del patrimonio cultural de la Nacibn. A la lcctura de la Ley 64-00" y del

articulo 64 de la Constitucion, entendemos que se incluye a 10s hienes ambientales en la nocion

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de patrimonio cultural, porque ese articulo hace referencia a 10s bienes del patrimonio cultural subacuatico.

El derecho a1 trabajo enunciado por el arti- culo 62 de la Constitucibn obliga a 10s empleado- res a garantizar a sus trabajadores las condiciones de seguridad, salubridad, higiene y ambiente ade- cuados.

Se debe mencionar el derecho a la informa- cibn. Toda persona tiene derecho a la informa- cibn, y este derecho comprende: investigar, recibir y difundir informacibn de todo tipo, de caracter publico, por cualquier m e d i ~ . ~ l Las autoridades esthn comprometidas constitucionalmente de aho- ra en adelante a proveer las informaciones solici- tadas por 10s ciudadanos.

El rango constitucional refuerza esta obliga- cibn que existe en la Republica Dominicana des- de la entrada en vigor de la Ley General de Libre Acceso a la Informacibn Publica, No. 200-04. Este derecho fundamental permitira a 10s ciuda- danos participar de manera activa en 10s proyec- tos que puedan tener un impact0 sobre el medio ambiente, exigiendo el acceso a las informaciones publicas que lo conciernan.

La Constitucibn de 2010 pone a disposici6n de 10s ciudadanos mecanismos jurisdiccionales para asegurar el respeto de sus derechos. Hasta la entrada en vigor de la Ley 437-06,32 la accibn de amparo en la Republica Dominicana era objeto de un reconocimiento j ~ r i s ~ r u d e n c i a l ; ~ ~ ahora, el articulo 72 de la Carta Magna la de- fine como la accibn que permite a toda persona reclamar ante 10s tribunales, por si o por quien actue en su nombre, la proteccibn inmediata de sus derechos fundamentales, cuando resul- ten vulnerados o amenazados por la accibn o la omisibn de una autoridad publics o particulares, para garantizar 10s derechos e intereses colecti- vos y d i f u ~ o s . ~ ~

Justamente, se observa que "la teoria clAsica del derecho subjetivo faculta a cada individuo a ejercer un conjunto de acciones tendentes a ob- tener la tutela efectiva de sus prerrogativas indi- viduales, es este derecho de accionar en justicia lo que impregna a la norma juridica subjetiva de caracter coercitivo, como forma de hacer efecti-

vas tales prerrogativas, y evitar que las mismas se conviertan en declaraciones formales de de- r e ~ h o " . ~ ~

Es importante recordar que, en ausencia de un derecho a un ambiente sano reconocido constitucionalmente, 10s recursos de amparo en materia ambiental en la Republica Dominicana estaban fundamentados sobre el derecho a la vida reconocido por el articulo 8 de la constitucibn pasada.36 El articulo 66 de la Carta Magna, que reconoce el derecho fundamental a un ambiente sano, se podrh invocar directamente como funda- mento de una accibn de amparo.

Otra herramienta que esta a disposicibn de 10s ciudadanos es el control de constitucionalidad. El texto constitucional crea una nueva jurisdiccibn, el Tribunal constitucional, que tiene por fun- cibn garantizar la supremacia de la nueva Cons- titucibn, la defensa del orden constitucional y la proteccibn de 10s derechos fundamentales. Sus decisiones son definitivas e irrevocables y cons- tituyen precedentes vinculantes para 10s poderes publicos y todos 10s brganos del E ~ t a d o . ~ ~

Cualquier persona con intereses legitimos y juridicamente protegidos, como 10s derechos e intereses colectivos y difusos a un ambiente sano enunciado por el articulo 66 de la Constitucibn, puede solicitar directamente la inconstitucionali- dad en contra de las leyes, decretos, reglamentos, resoluciones y ordenanzas que violan 10s mencio- nados i n t e r e ~ e s . ~ ~

Como lo mencionamos anteriormente, sera competencia del Tribunal constitucional conci- liar 10s conflictos que puedan surgir entre 10s de- rechos e intereses econbmicos como el derecho a la propiedad, o la libertad de empresa, con el derecho a1 ambiente sano. Como derecho funda- mental, este derecho deberia ser considerado de igual rango que las otras libertades fundamen- tales. 39

Los poderes piiblicos interpretan y aplican las normas relativas a 10s derechos fundamentales y sus garantias en el sentido mas favorable a la per- sona titular de 10s mismos y, en caso de conflict0 entre derechos fundamentales, deberan armoni- zar 10s bienes e intereses protegidos por la Cons- t i t ~ c i b n . ~ ~

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Asi lo observa Francisco Delgado Piqueras, "crecimiento econbmico y proteccibn del ambien- te no se conciben hoy como fines antagbnicos o excluyentes, sino como objetivos que deben com- paginarse para procurar la calidad de la vida. Por tanto, la consecucibn de un medio ambiente propicio para el desarrollo de la persona es una vertiente parcial de ese 'macroconcepto' que es la calidad de la vida, en el que tambitn se incluye, necesariamente, el desarrollo econbmico. Ambos son bienes constitucionales, ninguno de 10s cuales prevalece a priori, sino que se limitan reciproca- mente, y sera el legislador ordinario el que, en cada caso, establezca las modulaciones de uno y de o t r ~ " . ~ ~

Ademas, 10s ciudadanos pueden utilizar el control difuso de la constitucionalidad de las leyes como mecanismo de proteccibn de sus d e r e c h o ~ . ~ ~ Los jueces tienen la facultad de declarar la in- constitucionalidad de una ley y su aplicacion du- rante un proceso judicial si una parte lo solicita, y en virtud del criterio jurisprudencial se admite que la norma contraria a la Constitucibn puede ser inaplicada de o f i ~ i o . ~ ~ ES decir que las leyes que violen la Constitucibn o que de una manera u otra sean contrarias a sus normas, principios o valores, son nulas y no pueden ser aplicadas por 10s jueces, quienes deben darle prioridad a la nue- va Carta Magna.44 Entonces, durante un proceso judicial, el interesado podra invocar la inconsti- tucionalidad de la ley que viola su derecho a1 am- biente sano, a 10s fines de obtener su inaplicacibn.

La defensoria del pueblo Para terminar, debemos mencionar la funcibn esencial que podra tener el Defensor del Pueblo en caso de violacibn de 10s derechos fundamenta- les y de 10s intereses colectivos y difusos estableci- dos en la Constitucibn de 2010, por funcionarios u brganos del E ~ t a d o . ~ ~

La figura juridica del defensor proviene del mo- d e l ~ escandinavo del "ombudsman", nombrado por el Parlamento, por un period0 determinado, independiente, a1 que pueden acceder directa- mente 10s administrados o que actha de oficio, con misiones de investigacibn sobre toda negligencia o violacibn de la ley por la Admini~traci6n.4~

Durante el siglo XX, la institucibn de defen- soria se extendib a 10s otros paises de Europa y a partir del modelo del constitucionalismo espaiiol de 1978 se implement6 en Latinoamtrica, desa- rrollando su funci6n de defensa de 10s derechos h ~ m a n o s . ~ ' El Defensor del Pueblo en Espafia tiene varias competencias, ademas de investigar 10s actos o decisiones tomadas por la Adminis- tracibn publica, puede presentar recursos de amparo y de inconstitucionalidad ante el Tribu- nal Constitucional.

En la Republica Dominicana, la Ley 19-01, que crea el Defensor del Pueblo, prevt finicamen- te una funcibn de investigacibn, pero presumimos que en virtud de 10s articulos de la Constitucibn de 2010, esta institucibn podra presentar recursos de amparo para asegurar a1 ciudadano que lo so- licita, su derecho a un ambiente sano.

El articulo 72 de la Constituci6n de la Rep& blica Dominicana estipula que toda persona tiene derecho a una accibn de amparo para reclamar ante 10s tribunales la proteccibn de sus derechos fundamentales, por si o por quien actue en su nombre, entonces lo podria hacer el Defensor del Pueblo. En efecto, el articulo 191 del texto consti- tucional como el articulo 2 de la Ley 19-01, espe- cifican que la funcibn esencial es salvaguardar 10s derechos fundamentales, 10s intereses colectivos y difusos establecidos por la Constitucibn y las leyes en caso de violacibn por un 6rgano de la Admi- nistraci6n.

Una decisibn de la Corte Constitucional co- lombiana permite ilustrar la importancia del pa- pel del Defensor del Pueblo en materia ambiental: A iniciativa del Defensor del Pueblo colombiano, una accibn por inconstitucionalidad permiti6 que se cumplieran las normas ambientales. La senten- cia de la Corte Constitucional, del 12 de septiem- bre de 1996 declarb inconstitucional un decreto que permitia a las autoridades prescindir de la exigencia de un diagn6stico ambiental estableci- do por ley.48

La nueva Constitucibn de la Republica Do- minicana ofrece las herramientas necesarias y suficientes para garantizar el derecho a un am- biente sano, derecho que consagra. SerA deber del Defensor del Pueblo y del Tribunal Consti-

SO GLOBAL

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tucional asegurar la efectividad de este nuevo derecho, asi como enunciar la definicion del am- biente sano.

Cecile Castaing de Grullon e s licenciada en De-

recho d e la Universidad Paris I1 Panteon Assas (Fran-

cia), y titular d e un master en Derecho Ambiental

d e la Universidad Robert Schuman d e Estrasburgo

(Francia); ejerce en la firma de abogados Gonzalez

Nina y Asociados.

Notas Articulo 8 indice 1 y 17 de la Constitucibn de 1994 de

la Republica Dominicana.

La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio

Ambiente Humano (Estocolmo, 16 de junio de 1972) fue

la primera ocasi6n en la cual fue reconocido internacio-

nalmente el derecho a un ambiente sano como derecho

fundamental.

"rincipio 1 de la Declaraci6n de Estocolmo sobre el

Medio Anlbiente Humano, 1972.

Los primeros paises que integraron disposiciones sobre

el medio ambiente en su Consiitucicin fueron Grecia,

Portugal y Espafia. Tambibn podenlos citar paises del

Este de Europa, como Hungria y Polonia.

' Articulo 45 de la Constitucibn espafiola adoptada en

1978.

"arb6 Vanessa, "Le droit de l'environnement en droit

constitutionnel con1parC: contribution .?t l'ktude des effets

de la constitutionnalisation", Actes du VIIe Congr6s

fran~ais de droit constitutionnel, AFDC, Paris, 25-27 de

septiembre de 2008, pp. 5, 6 y 12.

Barbi: Vanessa, "Le droit de l'environnement en droit

constitutionnel comparb: contribution i 1'Ctude des effets

de la constitutionnalisation", Actes du VIIe Congrks

fran~ais de droit constitutionnel, AFDG Paris, 25-27 de

septiembre de 2008, p. 3.

El articulo 15 de la Constitucion entiende por zonas de

biocliversidad las que son endkmica, nativa y migratoria.

"1 articulo 15 de la Constituci6n de la Republica Do-

minicana.

l o Derecho subjetivo: es la prerrogativa perteneciente a

una persona y que le permite exigir el respeto de una

situaci6n de la que ella se aprovecha. Definicibn del Eta-

bulariojuddico, de Henri Capitant.

" Se denomina derecho sul~jetivo a 10s intereses juridicos

individuales que el ordenamiento juridic0 protege y tute-

la, en este caso es el derecho a un ambiente sano que esti

constitucionalmente protegido.

'"1 articulo 6 de la Ley 64-00 dispone que "La libertad

de 10s ciudadanos en el uso de 10s recursos naturales se

hasa en el derecho de toda persona a disfrutar de un me-

dio ambiente sano".

l 3 El articulo 3 de la ley 64-00 dispone que "10s recursos

naturales y el medio ambiente son patrimonio comkn de

la nacion y un elernento esencial para el desarrollo del

pais".

'' Citacion de Wendy Martinez Mejia, de su articulo "In-

tereses difusos y colectivos en el derecho penal ambien-

tal", p. 8.

'"brez Conejo Lorenzo, 1.a dejensajudicial de lo.? intereses

ambientales, Lex Nova, Valladolid, 2002, pp. 103-104.

I%rticulo 66 de la Constituci6n de la Repitblica Domi-

nicana.

l 7 Barbb, Vanessa, "Le droit de l'environnement en droit

constitutionnel cornpark: contribution i 1'i:tude des effets

de la constitutionnalisation", Actes du VIIe Congrks

fran~ais cle droit constitutionnel, AFDC, Paris, 25-27 de

septiembre de 2008, p. 9.

lH Articulo 67 de la Constituci611 de la Rephblica Domi-

nicana.

'"Iartinez Mejia Wendy, Moreno Santa, Noboa Zeida,

Padilla Frinette, Rodriguez Herminia, Rodriguez Peralta

Sonya, Demchopenal del medio ambient?, Escuela Nacional de

la Judicatura, Santo Domingo, 2002, p. 193.

" Ley General de Medio Ambiente y Recursos Natura-

les, No.64-00.

21 Articulo 68 de la Constituci6n de la Repitblica Domi-

nicana.

22 Articulo 67 de la Constituci6n de la Repitblica Domi-

nicana.

" Articulo 75 de la Constituci6n de la Republica Domi-

nicana.

24 Principio 1 de la Declaraci6n de Estocolmo sobre el

Medio Arnbiente Humano, 1972.

2"laudia I. Gutibrrez Bedoya, El derecho a1 medio ambienb

adecuado como derecho humano, Centro Editorial Universidad

del Rosario, Bogota, 2006, p. 1 13.

2%rticulo~ 5, 8 y 38 de la Constituci6n de la Repitblica

Dominicana.

'7 Articulo 59 de la Constituci6n de la RepGblica Domi-

nicana.

28 Articulo 61 de la Constitucion de la Republica Domi-

nicana.

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Compartir una responsabilidad nacional

y servir activamente en el campo educativo

nos permite proteger nuestra esencia

y nos garantiza

ver a la familia dominicana crecer.

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Italia:

Marco Coscione

la partidocracia a1 tirnon de un pais a la deriva A principios de 10s ochenta, Enrico Berlinguer, en aquel entonces secretario del Partido Comunista Italiano, subrayaba fuertemente el tema central de la llamada "cuestion moral" en Italia: la ocupacion del Estado y todas sus instituciones por parte de 10s partidos. A 29 aiios de aquella advertencia, la situacion no ha cambiado y la democracia italiana todavia "corre el riesgo de ahogarse en un pantano".

n julio de 1981, en una entrevista de Eu- genio Scalfari para el peri6dico La Re- pubblica, Enrico Berlinguer, uno de 10s

mejores politicos italianos y en aquel entonces se- cretario del Partido Comunista Italiano, lanzaba algunos mensajes claves que 29 aiios despuCs to- davia resultan muy actuales: "Los partidos de hoy son sobre todo mhquinas de poder y clientelares: escaso o mistificado conocimiento de la vida y de 10s problemas de la sociedad y de la gente; ideas, ideales, programas, sentimientos y pasi6n civiles nulos. Gestionan 10s mhs contradictorios y diferen- tes intereses, sin ninguna relaci6n con las necesida- des humanas y sin perseguir el bien comhn".'

Sus estructuras organizativas son la prueba de la abismal distancia con el pueblo, "son federacio- nes de facciones, cada una con su jefe y subjefe". Pero lo m h problematico es que "han ocupado el Estado y todas sus instituciones, empezando por el Gobierno. Han ocupados las entidades locales, 10s bancos, las empresas p6blicas, 10s institutos culturales, 10s hospitales, las universidades, la te- levisi6n pliblica y 10s grandes peri6dicosM.

Entonces, todas las acciones que 10s politicos de cualquier nivel estan llamados a llevar a cab0 responden a la 16gica y a 10s intereses del partido. Del resto, ;a quiCn puede representar un diputa- do que hace mas de veinte afios esth sentado en el Parlamento? ;Puede representar a 10s ciudadanos que lo han votado o estarii simplemente represen- tando 10s intereses del partido y 10s suyos? Son las dudas que surgen esponthneas cuando un atento y activo ciudadano empieza a cuestionarse el sis- tema en el cual vive, se educa, trabaja, paga 10s impuestos y a1 final, se espera, recibe una digna pensi6n por una vida de trabajo.

Son las preguntas que cuestionan este tip0 de democracia que en realidad se esth convirtiendo en una partidocracia, donde si hay suerte el bi- polarismo todavia no se ha transformado en un verdadero bipartidismo, o donde la b6squeda del centro, o sea de un continuismo sin proyecto de futuro, es lo mas habitual. Seguia Berlinguer: "La cuestibn moral no termina encontrando, de- nunciando y encarcelando a 10s ladrones y 10s co- rruptos de las altas esferas de la politica y de la

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m -- I Fotos: Efe

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administracihn. Cuesti6n moral, en la Italia de hoy, significa sobre todo la ocupaci6n del Estado por parte de 10s partidos y de sus facciones, signi- fica una concepci6n de la politica y de 10s mttodos de gobierno de estos partidos que simplemente te- nemos que superar y abandonar. La cuestibn mo- ral es el centro del problema italiano ... si seguimos asi, en Italia la democracia corre el riesgo de achi- carse y no de ampliarse y desarrollarse ... corre el riesgo de ahogarse en un pantano".

Palabras fuertes con las cuales Berlinguer ata- caba 10s demhs partidos, per0 a1 mismo tiempo creia en la fuerza renovadora de su partido. Sin embargo, la historia italiana nos ha demostrado que cualquier partido, fuera de centro, derecha o "izquierda", ha jugado las mismas cartas, alejhn- dose cotidianamente de 10s intereses de sus ciuda- danos. Yo naturalmente lo veo desde una visi6n personal, de un joven que hace seis aiios no vive en Italia, per0 que desde afuera logra quiz& en- tender mhs de lo que desde adentro es, a veces, mPs complicado entender.

2Es solo un caso que Italia sea el pais con la poblaci6n mPs vieja del mundo, donde la natali- dad es casi nula, donde las posibilidades para 10s j6venes son muy pocas y las que hay son siempre a tiempo determinado, precarias e inestables? 2Es solo un caso que miles y miles de j6venes italianos busquen en el extranjero lo que no encuentran en Italia y que, una vez 7

ya hace algunos aiios se estaba hablando de cri- sis: econ6mica, institucional, politica. En fin, un caos. Se cerraba la dCcada de 10s noventa, 10s aiios de Mani Pulite y Tangentopoli y de la entra- da en politica del magnate Silvio Berlusconi. Pero hoy en dia la situaci6n no ha cambiado mucho: 60 gobiernos en 54 aiios, una gobernabilidad que ninghn pais latinoamericano envidiaria. Y la cosa mPs ridicula es que el hnico gobierno que ha terminado la legislatura sin caer antes ha sido uno de 10s gobiernos de Berlusconi.

Italia en el espejo de America Latina NingQn pais de Amtrica Latina tampoco envi- diaria 10s niveles de la economia informal ita- liana, que se estima llega a1 35-40°/o del PIB, o 10s niveles de corrupci6n, que poco se alejan de 10s latinoamericanos: de acuerdo con el indice de Percepci6n de la Corrupci6n 2009 de Trans- parency International,* una medici6n de la co- rrupci6n del sector pitblico nacional, Italia se encuentra en el lugar 63 (de 180 paises considera- dos), desputs de Turquia y antes de Arabia Saudi- ta, con un indice del4,3.

La escala de valores pasa del 0 (percepci6n de alta corrupcibn) a1 10 (percepcibn de bajos ni- veles de corrupci6n). Como tampoco 10s niveles

vista el propi0 pais desde afuera, ten- I

La cast, de los partidos no propone ' gan muy pocas ganas de volver? 2Es solo un caso que estos jbvenes esttn ~ 0 1 ~ ~ i o n e s j 10s que proponen son obligados a vivir "una vida de pro- yectos", y no "un proyecto de vida"?

10s ciudadanos. Es un problema serio, mPs serio I 1

de lo que puede ser esta actual "cri- sis" econbmica. Del resto, se puede decir que en de libertad de prensa: seghn el Informe 2009 de Italia estamos en crisis por lo menos hace quince Freedom House3 (por cierto bastante discutible), o veinte aiios, y 10s miedos de 10s espaiioles por la Italia se encuentra en el lugar 73, entre Israel y actual crisis, a nosotros italianos nos hacen reir. Tonga, y es considerado un pais donde la libertad "iSi supieran lo que vivimos 10s italianos hace de prensa es parcial, como la mayoria de 10s pai- aiios y aiios!", repito a mis colegas espaiioles, in- ses latinoamericanos. crtdulos de lo que puede significar estar en crisis En 1970, Danilo Dolci habl6 desde Radio Li- desde cuando se tienen 10s minimos conocimien- bera, la primera radio libre de Italia, entonces tos para leer e intentar analizar el Be1 Paese. Re- "ilegal". Era el 25 de marzo, fecha en la cual, en cuerdo que cuando empect la carrera, en 1999, 2010, Michele Santoro, periodista televisivo de

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El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, e s parte y lider de un sistema que se presenta como una partidocracia. I

RAI 3 y presentador del programa de debate po- litico "Anno Zero", lo recuerda en su programa, excepcionalmente en vivo desde la plataforma web del peribdico La Repubblica$ llamado por la ocasi6n "Raiperunanotte". El Gobierno decidi6 -ese dia- abolir durante un mes todas las trans- misiones televisivas de caricter politico en la tele- visi6n pGblica (RAI), para calmar las aguas ("para que el amor gane a1 odio") antes de las eleccio- nes regionales. Es casi inutil repetir por qut real- mente el gobierno de Silvio Berlusconi quisiera y pueda, por decreto, vetar estos tipos de transmi- siones, donde no solamente se informa sobre las malas gestiones, las irregularidades y maldades de 10s politicos de turno (de derecha como de iz- quierda), sino tambitn donde sobreviven 10s Gni- cos espacios de periodismo investigativo que a h mantiene la televisi6n italiana.

Danilo Dolci, hace cuarenta afios lanzaba un S.0.s.: "Sicilianos, italianos, hombres de todo el

mundo, jescuchad!: estin tratando de hacer un delito de enorme gravedad, absurdo: estin dejan- do morir a una poblaci6n entera ... S.0.S. Italia, el dptimo de 10s paises industriales del mundo, no es capaz de garantizar un techo dlido y una oportunidad de vida a una parte de su pueblo". Se estaba refiriendo a las victimas del terremo- to que en 1968 golpe6 10s valles Belice, Carboi y Jato, en Sicilia. Pero estas palabras podriamos utilizarlas hoy en cualquier contexto.

Michele Santoro, hoy, lanza otro S.0.S. a to- dos 10s que aGn defienden una libre informaci6n en un Estado libre. Danilo Dolci, naturalmente, fue arrestado porque transmitia ilegalmente des- de una estacibn pirata. ;Quk pasar6 con Santoro y otros periodistas comprometidos con el deber de informar y el derecho a ser informados? ;No seri este mes sin debates politicos solo una prueba para algo de verdad mis profundo? Cuando Ber- lusconi empez6 a transmitir ilegalmente en toda

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Italia, nadie lo arrest6, todo lo contrario: el Parla- mento, de noche y casi en secreto, san6 esta "pe- queiia" irregularidad. 2Por quC? iQuiz&s porque detrhs tenia una base parlamentaria que pronto se convertirh en su partido? 2Es posible que en la Italia de hoy tambiCn la informaci6n siga siendo lotizada y en mano de 10s partidos?

fias &Ithas das dikadas SegGn el Informe Italia 2010 del Istituto di Studi Politici e Economici e Sociali (E~rispes),~ la Ita- lia de 10s hltimos veinte aiios es como "una zona de obras poblada por una multitud de belicosos arquitectos que no logran ponerse de acuerdo porque, en realidad, no tienen ningGn verdadero inter& en que las obras empiecen y terminen. Es- tos son de hecho 10s hijos y 10s dueiios de la transi- ci6n infinita, interesados en el mantenimiento del statu quo, m&s que en una perspectiva de futuro".

Es triste leer una declaraci6n de este tipo, per0 lamentablemente es el panorama a1 cual 10s italianos asistimos todos 10s dias. Si consideramos 10s bancos como unos de 10s mayores "dueiios" de esta transici6n infinita, son interesantes 10s datos elaborados en el informe: el 45.7% de 10s que re- cibieron un crtdito en 10s Gltimos tres afios estima que las tasas de interCs aplicadas por 10s bancos son demasiado altas; el 86.1% de 10s entrevistados piensa que el sistema bancario italiano no pueda (o pueda muy poco) hacerse cargo de 10s proble- mas y de las necesidades de las familias; el 88.8% est& muy convencido y bastante convencido de que 10s bancos conceden crCditos solo a 10s que ya tienen bienes; el 84.1% de 10s entrevistados con- sidera avaros 10s bancos, por no decir usureros; solo un 14.8% considera positiva la calidad de 10s servicios ofrecidos por 10s bancos; el 71.5% com- parte la afirmaci6n de que 10s bancos dan crt- ditos a 10s potentes a pesar de las garantias que estos puedan ofrecer. ;Podemos considerar entre estos potentes las altas esferas de la politica y las maquinarias de partido? Naturalmente si, en 1981 durante la entrevista a Berlinguer, asi como hoy en dia.

El tema de 10s bancos es s610 un ejemplo de una crisis que es estructural: "Han entrado en crisis el modelo politico-institucional que ha

El 13 de febrero de 2010 un grupo de italianos protest0 por la corrupcion descubierta en el gobierno de Silvio Berlusconi.

gobernado el pais despuCs de 1945 y simultii- neamente el modelo de desarrollo econ6mico- productivo sobre el cual construimos nuestras fortunas en el mismo periodo", prosigue el in- forme. El 45.5% de 10s italianos no confia en 10s partidos, otro 42.4% confia poco; el 35.8% no confia en 10s sindicatos, el 40,9O/0 confia muy po- cos en ellos.

En 2008, de 10s 30 paises de la OECD, Ita- lia ocupaba el lugar 23 en cuanto a salario net0 promedio (21,374 uSD an~a les ) ,~ superando solo a Portugal (19,150 uSD), la RepGblica Checa (14,540), Turquia (13,849), Polonia (13,010), Es- lovaquia (11,716), Hungria (10,332) y MCxico (9,716). Los que m&s han sufrido el aumento de precios, sobre todo despuCs de la moneda Gnica europea, 10s recortes o la estabilidad de 10s sa- larios son sobre todo 10s trabajadores de la clase media. Esta, que siempre ha sido el motor de la economia italiana, ahora esti constantemente a1 borde, a punto de pasar la linea de pobreza: lle-

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gar a fin de mes se ha hecho mucho mhs dificil, 10s esthndares cualitativos y cuantitativos de vida se han contraido notablemente, tener hijos es algo que inevitablemente hay que costear, inestabili- dad y precariedad son las dos caracteristicas mis evidente de mi generaci6n.

Los j6venes italianos estudiaron y empeza- ron a "trabajar" en esta Italia: la Italia que vive del pasado y no se proyecta en el futuro, un pais que ha perdido su potencial turistico porque si- gue manteniendo los mismos servicios de hace treinta afios (pero subiendo 10s precios), la Italia que deja de exportar por el mundo como siempre habia hecho porque la creatividad de sus peque- has y medianas empresas ya no puede competir con el sistema de consumo mundial que premia a 10s omni-productores baratos como China; la Italia que obliga 10s cerebros a producir y crear desde otros paises; un pais que deja de invertir en educacibn e investigacibn, que deja de cooperar a nivel internacional, que poco a poco recibe rnhs inmigrantes per0 donde todavia un africano, un asihtico o un latinoamericano dificilmente viene considerado como ciudadano italiano, con todos sus derechos.

Es la tragedia de 10s partidos italianos que, como ya decia Berlinguer a principios de 1980, han copado el Estado, haciendo del bien publico un bien privado en mano de la casta de sus poli- ticos. Y mientras en el parlamento se aprueban decenas de leyes para salvar a1 primer ministro, en la fhbrica Fiat de Termini Imerese (Sicilia), 18 obreros pasan las frias noches del invierno euro- peo acampando en el techo del establecimiento. Dieciocho obreros despedidos por la empresa des- puCs de 20 6 25 aiios de trabajo, mientras sus fa- milias se quedan afuera de la fhbrica y bloquean el paso de 10s camiones que traen las piezas que alimentan la cadena de montaje.

A1 tiempo que 10s abogados del primer mi- nistro, ahora naturalmente diputados del Parla- mento, inventan nuevas escapatorias legales para blindar detrhs de un escudo un sistema en reali- dad atrincherado, mamhs de 50 b 55 aiios pier- den sus trabajos a tiempo indeterminado y tienen que volver a casa de 10s padres. Si, no es broma, a casa de 10s padres y vivir con la pensi6n de Cstos o con 10s ahorros de la hija de 25 afios que apena logra encontrar un trabajillo (en negro natural- mente) para pagarse 10s estudios y mantenerse ...

Mientras, 10s empresarios trasla- - 1 1

I aan sus empresas a1 exwanjero, en

I El Movimiento 5 Estrellas algGn pais del este de Europa, por ejemplo, simplemente para ganar

recolect6 350,000 %mas en s610 miis

das dias. Un ciudadano "normal" debe

1 trabajar entre 35 y 40 afios para recibir ilna nensihn i d i~amns unnq

Pero sobre todo se criaron en la "era Berlus- con?', con todas sus consecuencias. En la era Ber- lusconi no se hace nada mas que hablar de 61, se vota por 61 o se vota en contra de 61; se comen- tan sus declaraciones y 10s noticieros compiten a quien entrevista a mas politicos de saco y corbata que responden a las declaraciones del Cavaliere. Hay que hacerle oposici6n a Cl y nada rnhs, sin embargo a la misma "oposici6n" le conviene que Berlusconi siga existiendo, porque en realidad carece de un verdadero programa politico alter- nativo, de un proyecto de conjunto para un pais priicticamente a la deriva.

- 1 - \ c3 --- - -

1,500 euros mensuales si es buena), mientras que a un parlamentario le bastan cinco aiios, una legislatura, para asegurarse una pen- si6n (quizhs es mejor llamarlo sueldo a vida) de 3,000 euros o mhs: "Es una distancia entre pais real y esta institucihn [el Parlamento] que hay que reducir, que hay que evitar. Nadie podria aceptar nunca que haya personas que por haber sido par- lamentarios un dia (tenemos tres) y por este dia reciben un vitalicio de mas de 3,000 euros. Nadie podria aceptar nunca que haya parlamentarios que han estado aqui 68 dias, dimitieron por in- compatibilidad y reciben igualmente un vitalicio de rnhs de 3,000 euros men~uales".~

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Nadie se atreve a comentarlo, a hablar abier- tamente y en profundidad de estos temas, en nombre del optimism0 y de la futura "supera- cibn" de la crisis, y el Estado se queda mirando. 'TItalia e' una Repubblica fondata sul lavoro': dice el primer articulo de la Constitucibn Italiana: Italia es una rephblica fundada en el trabajo. Natural- mente, no se especifica quC trabajo y en quC con- diciones. Hoy en dia necesitariamos hacerlo.

En las democracias, si un tribunal empieza un juicio a un politico es muy probable que el politico deje el cargo y reciba una pena; en Ita- lia el juicio se cambia: es el politico que ataca la magistratura acusandola de tramar un complot en contra de cierta facci6n politica o de cierto partido, o simplemente en su contra. Los roles se invierten y 10s poderes naturalmente ya no que- dan independientes.

En las democracias, cuando un periodista de investigacibn bien informado descubre redes clientelares entre politicos y mafiosos, actos de co- rrupci6n o lavado de dinero, el politico tiene por lo menos el buen gusto de salir del escenario para que se sepa lo menos posible de sus intrigas y deja el cargo; en Italia, el politico se querella contra el periodista, empezando asi un juicio en contra de sus supuestas "calumnias". El pobre periodis- ta, pobre econbmicamente, casi nunca podra so- portar los tiempos y los gastos de un juicio de este tipo, per0 sobre todo por 10s tiempos y 10s recursos de la Justicia italiana, este juicio nunca se celebra- rh y caeri tranquilamente en prescripcibn.

Como muchos otros, como el juicio que vio el primer ministro y un diputado investigados por ser 10s autores "intelectuales" de dos asesinatos, a 10s dos magistrados anti-mafia mas importan- tes que el pais haya tenido nunca, 10s que miis se acercaron a demostrar las tramas entre el Estado y la mafia, o, mejor dicho, la existencia de 10s dos estados paralelos que nunca dejaran de mezclarse y reciclarse.

La dernocratizacion de 10s partidos Cuando 10s extranjeros piensan en la mafia, piensan en la pelicula Elpadrino, per0 se olvidan de que en Italia la mafia es mucho mas: la mafia es la construccibn del puente sobre el estrecho

de Messina, la mafia es la basura en las calles de Napoles, la mafia es la isla siciliana entera vo- tando por Berlusconi, la mafia son 10s arreglos y 10s juegos de partido que no cambian las cosas y dejan en las mismas manos de siempre el futuro del pais.

Y pensar que bastaria poco para empezar a democratizar el sistema de partidos: impedir que se renueven las inmunidades a parlamentarios o altos cargos institucionales (2Acaso 10s politicos no son ciudadanos como 10s demas? 2Acaso la ley no es igual para todos?); limitar a dos legislatu- ras el period0 de permanencia de 10s politicos en las asambleas de cualquier nivel representativo (cuanto mas tiempo una persona se queda en las altas esferas de la politica mas posibilidades hay de que se corrompa y que ligue sus intereses per- sonales con 10s favores politicos).

Cambiar el sistema de nominaci6n de 10s candidatos en las elecciones: actualmente 10s partidos definen a 10s candidatos y el ciudadano simplemente pone un equis donde el partido; el ciudadano casi nunca conoce a1 candidato, y el candidato muchas veces no conoce el territorio en el cual sera candidato; eso significa concreta- mente que trabajara muy poco por el territorio donde recibira sus votos, y simplemente trabajara para el Partido, faltando entonces cualquier com- promiso con la ciudadania que 61, en teoria, esta llamado a representar.

Se debe impedir que aquellos condenados de- finitivamente en cualquier grado de juicio pue- dan cubrir cargos legislativos (~c6mo es posible que 10s mismos que hacen las leyes desputs las violen y sigan legislando?) o tambiCn cargos po- liticos de representacihn de la ciudadania (si 10s ciudadanos fueran realmente informados sobre las actividades legales e ilegales de ciertos candi- datos, iestamos seguros que 10s votarian?); poner un limite de edad (surgen muchas dudas de que un politico de 70 afios pueda pensar en el futuro del pais) y favorecer la rotaci6n de 10s cargos en el interior del mismo partido (representar a 10s ciu- dadanos y asumir cargos publicos deberia ser casi un deber de cada ciudadano hacia su comunidad; el compromiso, de esta manera, se asume como responsabilidad hacia la colectividad y no hacia

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el partido; ademhs, se lucharia en contra de 10s "jefe" y "subjefe" de partido de 10s cuales hablaba

justamente Berlinguer), y a un nivel mas general, favorecer la implementation del refertndum re- vocatorio para todos 10s cargos de representacibn

(estamos demasiado acostumbrados a las prome- sas de campaiia que nunca se mantienen, ienton- ces por qui: cierto politicos deberian seguir en el cargo?). Finalmente, evitar la posibilidad de man- tener mas cargos a1 mismo tiempo y legislar con-

tra 10s diversos conflictos de intereses que tocan sobre todo politica y economia ...

En fin, se podrian dar muchos otros ejemplos de medidas que 10s partidos, internamente, po- drian tomar para democratizarse, para rejuvene- cer, mirar hacia el futuro proponiendo un nuevo

proyecto de pais, a1 paso con 10s tiempos que como podemos ver todos 10s dias han cambiado enormemente desde la inmediata postguerra y la

Asamblea Constituyente. Un movimiento ciudadano italiano llamado

Movimiento 5 Estrellas present6 hace mas de dos

afios un proyecto de ley popular que.consideraba tres de estos puntos: maximo dos legislaturas por representante, "Parlamento limpio", o sea, va-

ciado de 10s varios condenados que actualmente "sobreviven" a cuesta de 10s contribuyentes, can-

didatos elegidos desde abajo y no desde arriba. Fueron recolectadas 350,000 firmas en s610

dos dias. Un partido necesitaria meses para jun- tarlas. Sin embargo, esta ley popular yace en 10s

cajones del Parlamento. ;Par qut? Es evidente, es una ley que responde a la voluntad de 10s ciuda- danos y no a 10s intereses de 10s partidos. ;Per0 10s partidos no deberian representar 10s intereses

de 10s ciudadanos? Y si no 10s representan, iqut intereses representan? 2De quitnes son 10s intere-

ses que representan? 2Hasta d6nde llegaremos? 2Seremos capaces

de salir de la tormenta? Para eso la casta de 10s partidos no esta proponiendo soluciones; 10s que

las esthn proponiendo son 10s ciudadanos, 10s mismos que, abandonados por las instituciones y por un Estado ausentes, tienen que reinventarse la vida a 10s 50 afios, sin trabajo, quizas un dia sin pensibn, viviendo el dia a dia y sin poder pen-

sar mucho en el futuro.

Marco Coscione es investigador social, licenciado

en Ciencias Internacionales y Diplomaticas por la Uni-

versidad de Genova, master oficial en "America La-

tins Contemporanea y sus relaciones con la UE: una

cooperacion estrategica" (Universidad de Alcala e

Instituto Universitario de Investigacion Ortega y Gas-

set, Madrid) y varias experiencias de estudio y traba-

jo en Europa (Italia, Alemania y Espafia) y en America

Latina (Cuba, Chile, Peru, El Salvador, Republics Do-

minicana) .

Notas ' Traducci6n propia a1 cspafiol. Todo el texto de la

entrevista eii italiano sc puede leer en la sipicntc

pigilia web: <http://\~1~~v.nicgachip.info/modules.

php?naine=Sections&op=~~ie~~~article&artid=487 7>. "/Case <l~ttp://w~mvtrans~~arcnq~org/policy~rcsearcli/

sun:ey~n&ces/cpi/2009/cpi-2009-table>.

' VPase <l~~ttp://w?.li.freedonihouse.org/template.

cfin?pagc=25 1 &ycar=2009>.

' "Raiprrunanotte" 1.1a sido un especticulo sin

precedentes: en total 10 millones de accesos a1 sitio web

niontado en la plataforma de IiepubblicaT\i 400,000

computadoras collectadas durailte las casi tres horas

de iransmisi611; otros sitios como Corriere tv, Skytg24,

Rainews24, Current, YouUeni, han transiiiitido lo

mismo; 200 ciudades italianas liabiail organizados

la proyeccihn a trav-6~ de pantallas gigantes en las

niayores plazas publicas; el programs 11a logrado

el 13% de audiencia solo a travts de Internet. En

Twitter, la red social mas importante a nil-el mundial,

dos fwi-on 10s eveiitos mas seguidos cn ese momento:

la reforma sanitaria impulsada por Obama en Estados

Uilidos y "Raiperunarlotte".

" Traducci6n propia a1 espafiol. El texto del Informe

ell italialio se puede consultar on-line: <http://

www.eurispesitalia.it/iudex.php?o~~iion=c:om-co

nteilt&view=article&id= 1095:rapporio-italia-

20 1 O&catid=47:rapporto-italia&Iternid=222>.

" Eurispes, Informe Italia 2010, pag. 43.

' Parte de la intervenci6n en la Cimara de Diputados

(21 de septiembre de 2010) del diputaclo Antonio

Borghesi, del partido Italia dei Valori, Gnico partido

(de la actual legislatura) opuesto a mantener este

sistema tail injusto e inicuo. Vdase <http://wvw.

antonioborghesi.it/iildex.php?option=com-content&

task=view&id=3 14&Itemid= 1 >.

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Los dorninicanos frente a la - sociedad del

I El consumismo poco a poco se convierte en un rasgo que define la sociedad dominicana de este y 10s proximos afios. De hecho, "comprar" en centros comerciales o por Internet ya forma parte de la vida de una gran cantidad de dominicanos.

Page 65: No.38

n 10s ultimos aiios la sociedad actual es victima del consumo. Esta situaci6n es la que explica el desarrollo de una sociologia

del consurno. Es que hoy no s610 se confiere impor- tancia a lo producido, sino tambikn a lo consumi- do. Se reconoce que hay un cambio social y que pasamos de una orientaci6n productiva a una con- sumista. Salir de compras se ha convertido en unas de las prhcticas sociales mas importante de la vida cotidiana. A 10s dominicanos, esta realidad no les resulta ajena, pues esta practica se ha convertido en uno de sus pasatiempos favoritos.

En la dtcada pasada 10s dominicanos.fueron testigos de la llegada de grandes centros comer- ciales. Ademas del increment0 de la publicidad comercial que incita a las personas a consumir. Los bienes que adquirimos dejaron de ser funcio- nales y se convirtieron en seiias de identidad y es- tilo de vida. De pronto las marcas forman parte de nuestro dia a dia. Ante esto, debemos pregun- tarnos si como consumidores somos duefios de nuestros actos o rehenes.

Hoy la sociedad dominicana esta invadida por marcas reconocidas a nivel internacional. Son las marcas y no 10s productos 10s que tienen impor- tancia para la gente. Por esto, el consumidor no

Desde el a50 1998 a1 2008 se importaron 735,601 vehiculos.

tenemos Fisher Price y Bebe Crece para niiios, Levis y Nikes para adolescentes y Nine West para mujeres ... Las marcas pagan grandes cantidades de dinero a gente famosa para promocionarse.

El propio mercado de las marcas se encuentra organizado por logotipos e imagen. En la Repcbli- ca Dominicana, muchas marcas tienen sus propias tiendas. El pasado aiio, se inaugur6 Blue Mall en Santo Domingo. Por primera vez en el pais estan representadas marcas como Louis Vuitton, Geox, Via Uno, Albert Hern, Armani Exchange A/X, Carolina Herrera y Salvatore Ferragamo. La in- versi6n para la construcci6n de Blue Mall, que asciende a unos 98 millones de dhlares, ha sido hecha por el grupo empresarial venezolano Veluti. Este proyecto esth concebido como un centro co- mercial de marcas internacionales exclusivas.

Sus promotores lo definen como "un lugar di- sefiado para experimentar un paseo de compra ideal, lleno de comodidades y seguridad". El sis- tema de seguridad sienta un precedente en AmC- rica Latina, ya que desde cualquier punto del parqueo hasta cubrir totalmente 10s cuatro pisos de tienda hay una vigilancia permanente.

Otros centros comerciales de gran impor- tancia existen en el pais: grandes edificaciones

como Acr6polis, Malec6n Cen-

7 ter y Novo Centro, asi como las supertiendas Jumbo, Multicentro

quiere una hamburguesa, sino un McDonalds; no quieren una ropa interior, sino Calvin Klein; y si de llamada se trata, no quiere un Alcatel, sino un Blackberry.

La Repiiblica Dominicana esta dominada por las marcas internacionales mhs conocidas: Mc- Donald~, Toyota, Honda, Calvin Klein, Shell, Coca Cola, Carrefour, Sony, Burger King, etcC- tera. El fen6meno de las marcas se fundamenta en la promoci6n comercial: la tasa de crecimien- to del gasto en publicidad global supera a la del crecimiento de la economia mundial en un tercio (Klein, 2000: 9,ll). Esto lleva a la generacibn de nuevos mercados para un public0 exclusivo. Asi

La Sirena, Plaza Lama y Carre- four. Todos estos establecimien- tos cuentan con diversos negocios en su interior que motivan a1 visi-

tante a consumir. A esto se suma las grandes compras que se reali-

zan en nuestro pais por Internet. Si de compras on- line se trata tenemos las mas famosas paginas como Amazon, Macy's, Ebay, Sears, JCPenney, etc.

El aumento del credito bancario Todo esto viene acompaiiado de las grandes faci- lidades de crkdito que existen en el pais. El dinero plastico es el principal elemento que esta moti- vando el aumento del consumo. Hoy tenemos una mayor masificaci6n de las tarjetas de crtdito, con su respectivo extra crkdito incluido, que per- mite extender aun mas 10s plazos de pagos.

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De eharros y cr6didit.o~ 70,960 884.73 86,446 1,297.13 Total general 1,365,926 16,646.30 1,484,942 19,817.98

' Valores hasta junio de 2010. Fuento: Infome &I dr;$ampr?Ro d d siaemil financiero

Se puede estimar ck acuerd~ a mtos datos que en el pailn existfa en 2010 un millBn y medio de climtes eon tarjetar; de cr&to. Esm mumn uw veinte millones de pesos a1 ago, Unm 19 eiltidades emiten tarjetas de c~6dito pessonales.

El consumismo poco a poeo sse eonvierte en un r a s p que define la sociadad dominicana de 10s pr&imoa alias. De haho, "comprar" en cen- tros comemiales o por Internet ya foxsma parte de 1% vida de m a Bran mntidad de do- minicanas.

La obsosibn por entrar a1 kun- I do de las marcas lleva a lo8 can- sumidores a autoren~uwrse al escoger un producto, porque 8610 quiepen emprar algo que sea "de marca exdusiva", Esta imposibilita qae otror; productos de igual cali- dad se posicionen en el mercado, y obliga a 10s empre~arios a redzar alianzas estratCgicas y fusianes con el fin de abarcar la mayor cantidad dc servicios, Ante esto apasean 108 h~l&r?gs y tad0 lo que permits re- gular 10s mrcados de productos. Adcmhs de optimizar las inver- siones bajo la modalidad del t o d ~

incluido. Desde luego, esto trae consigo el pago de salarios bajos, mas horas de trabajos para 10s empleados, condiciones no adecuadas de trabajo y evitar la sindicalizacihn. Todo esto para ofre- cer una diversidad de productos a 10s clientes para consumir.

Asi tenemos: productos de belleza, deportivos, juegos de ordenadores, electr6nicos; nueva forma de salir a comer, desde comida rhpida, elegantes

DE MOTOR 1999 - 2008

Fuente Dlrecc16n General de Aduanas

64 GLOBAL

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restaurantes, nuevos cines. Y si de vacaciones se trata, tenemos: 10s complejos turisticos de lujo de Bavaro y Punta Cana, asi como 10s cruceros por el Caribe o Europa. Nuestra identidad y lo que somos se esta formando por lo que compramos y lo que hacemos.

Otro rengl6n que ha crecido en el sector fi- nancier~ dominicano son 10s prtstamos para el consurno. Esto va asociado a la cantidad de di- nero disponible en 10s bancos desputs de haber superado la crisis del2003. La cartera de crtditos de 10s bancos ha crecido en el sistema financiero. Con todas las ofertas de consurno, las personas siguen prefiriendo la inversibn a corto plazo. Esto refleja la visibn de 10s dominicanos de no pensar en el futuro.

Como se observa, 10s crtditos personales y a1 consumo han tenido un crecimiento sostenido desde 2007. Muchos de estos prtstamos estan de- dicados a la compra de vehiculos mediante la ce- lebracibn de ferias. Unas de las particularidades de estos prtstamos es que 10s clientes nunca ven el dinero, este se gestiona a travts de transacciones con papeles. Usted va a una feria, adquiere un vehiculo y firma muchos papeles, incluyendo el de entrega voluntaria del vehiculo en caso de no cumplir con el pago del prtstamo. En una feria usted acepta o no las condiciones de 10s bancos y 10s concesionarios de autom6viles, incluyendo la variacibn de la tasa de interts mas adelante.

En 10s ultimos afios se ha incrementado el par- que vehicular del pais. Sobre todo el de vehicu- 10s de alto consurno. El Estado con su vocaci6n fiscalista contribuye cada dia a esta situaci6n: te- ner una Hummer o un carro utilitario de poco consumo es igual si de pagar placa se trata. Los impuestos que se pagan incentivan el uso de este tip0 de transporte.

En paises desarrollados, la gente debe pagar el precio por el tip0 de vehiculo que posee. Cla- ro que el sistema de transporte es bueno, y esta manejado con altos niveles de profesionalidad. El uso de vehiculo de alto consumo ha incidido a su vez en el incremento del consumo de combusti- ble. De acuerdo con la Direccibn de Hidrocar- buros del Ministerio de Industria y Comercio, en 10s ultimos afios hay un incremento del consurno.

Por ejemplo, de 2006 a1 2008, en el pais se con- sumieron a travts de las compafiias distribuidoras 13,923,883.9 millones de barriles. Esta cantidad solo incluye gasolina regular y premium. Las compafiias distribuidoras fueron: Credigas, Dip- sa, Esso, Isla, Shell, Sunix y Texaco.

Unos de las causas mas evidentes de ese au- mento es la importaci6n de vehiculos. Los ulti- mos 10 afios son testigos de esta situacibn. Las estadisticas de la Direccibn General de Aduanas asi lo evidencian (ver grafico).

Desde el afio 1998 a1 2008 se importaron 735,601 vehiculos. Las marcas principales son: Toyota, Honda, Mitsubishi, Daihatsu y las de lujo Lexus, Jaguar, Mercedes Benz y Hummer. Estos se han traducido lbgicamente en un incremento de la importaci6n de hidrocarburos. Por "suerte", el pais cuenta con el mecanismo de Petrocaribe para el pago a largo plazo de 10s combustibles a Venezuela.

El debate sobre la sociedad del consumo La sociedad de consumo esta presente cada dia, no sblo en el consumo de bienes sino tambitn de servicios, con el agravante de que se da en un es- tadio del proceso de industrializacibn que acorta la vida de 10s productos y 10s convierte en poco tiempo en obsoletos, porque cada dia el continuo desarrollo de la tecnologia 10s sustituye por otros mas avanzados o de mejor calidad. Cada nuevo product0 supera a1 anterior.

En este sentido, la adquisicibn constante de bienes de consumo que otorgan "confort" condu- ce a que 10s objetos aceleran su ciclo de vida en la medida que avanza el tiempo. Por esto, lo que antes era sinbnimo de prestigio, porque eran ob- jetos que duran toda la vida, hoy ha dado paso a un sistema donde 10s objetos son casi desechables.

Hoy existen intensos debates sobre el tema del consumismo. Para el fil6sofo y sociblogo francts Jean Baudrillard (1968), bajo la dimensibn econb- mica del consumo subyacen factores intrinsecos del individuo que estan combinados con impe- rativos sociales, por lo que el acadtmico francts plantea que se trata de un fenbmeno que depende cada vez mas del deseo que de la necesidad.

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El sociblogo inglCs Robert Borock recalca que el consumo es una prhctica social que surge con la sociedad moderna. Su funcibn principal es pro- porcionar a1 individuo formas de distinguirse de otros grupos de distinto nivel social.

Jeremy Seabrook (1996) ve una aceleracibn del consumo desde 1945. Entiende que este destru- ye las culturas tradicionales y la solidaridad. Una cultura "repleta de dinero" promueve la auto- gratificacibn y, cuando el mercado domina, pro- duce una especie de nivelacibn que destruye las diferencias entre personas y comunidades.

Seabrook considera que este fenbmeno merma la creatividad y genera un materialism0 ofensivo. Ademhs que se destruyen las relaciones interper- sonales de barrio a medida que la gente deja de hacer la compra en la tienda de la esquina y se dirige a un gran centro comercial. Este fenbmeno lo vemos en el pais a diario. Los grandes estable- cimientos han adoptado una politica de expan- dirse hacia la periferia del Gran Santo Domingo y el Distrito Nacional. Por esto, ya no resulta extraiio encontrarnos con sucursales de diversas tiendas, supermercados y ferreterias cerca de 10s barrios populares.

Otros entienden que la sociedad del consu- mo ha significado un avance. Se Cree que, lejos de ir en detriment0 de la cultura, el consumismo ha sido un gran punto de apoyo para su exten- sibn y generalizacibn, en el entendido de que hoy disponemos de todo tipo de productos en el mer- cado. Lo que se infiere de esta postura es que la sociedad del consumo no ha homogeneizado la cultura, sin0 que, antes bien, ha contribuido a di- versificarla y ha otorgado al consumidor un ma- yor control sobre su vida.

Sin embargo, no todo el mundo disfruta de igual poder adquisitivo. Por esto, la sociedad de consumo es fuente de desigualdades importantes. El sociblogo Veblen advirtib sobre esto a1 iden- tificar el consumo de ostentacibn. Para Veblen existen varios mecanismos contemporhneos que fomentan la exclusibn social. Estos son: el dine- ro, 10s medios de transporte para trasladarse a centros comerciales, pues promueve la exclusibn espacial, y un tercero es la informacibn y el co- nocimiento. Estos son tres elementos necesarios

para incorporarse de forma efectiva a las pautas de consumo modernas.

Serafino de la Cruz ~ l v a r e z es licenciado en Socio- logia por la Universidad Aut6noma de Santo Domingo (UASD). Especialidad en Mercadotecnia. Master en Ciencias Politicas para el Desarrollo, de la Universi- dad de Salamanca-Espafia, Docente de la Escuela de Sociologia de la UASD. Coordinador de la unidad de Gobierno Local del OPD y encargado de la Agenda del Poder Ejecutivo en la Direccion de Informacion, Analisis y Programacion Estrategica (DIAPE) , Presi- dencia de la Republica.

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66 GLOBAL

Page 69: No.38
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Una mirada joven a la justicia y democracia en la Repiiblica Dorninicana El poder y la influencia que ha adquirido la rama judicial no tiene precedente alguno en la historia de la democracia. En reiteradas ocasiones, gran parte de las mentes mhs lucidas dedicadas a1 estudio del poder han acogido con beneplacito una creciente judicializacion de la politica.

1 poder es uno de 10s fen6menos mas es- tudiados por todas las ramas del saber. Ha jugado un papel absolutamente de-

terminante en todos 10s senderos que ha tomado la historia de la civilizacibn. Materia de sabios y barbaros, el poder, a1 igual que otras cosas de la naturaleza, ha sido el impulsor de las mas gran- des revoluciones per0 igual ha sido el destructor de grandes ilusiones.

Como cualquier elemento del universo ma- terial, el poder responde a una Mgica utilitaria y dualista en la que su detentador puede usar- lo tanto para construir como para destruir. Es cuando nuestra organizaci6n social se torna miis compleja que nos vemos en la necesidad de bus- car formas de legitimarlo y controlarlo, por esto concluimos en el sistema de gobierno imperante en nuestros dias: la democracia.

No obstante, un real Estado democratic0 de derecho necesita dividir el ejercicio del poder y crear 10s mecanismos que regulen su relaci6n con 10s gobernados, que en Gltima instancia con su voluntad legitiman la existencia del Estado de-

mocrAtico. Por esto, 10s gobernados han apoyado la creaci6n de limites a1 poder del Estado siempre procurando tutelar apropiadamente las garantias individuales.

Los jueces nos dieron una herramienta que presagiaron seria la respuesta mas institutional que el poder podia darle a1 poder, una herra- mienta que 10s convertiria en guardianes de nues- tra voluntad: el control de la constitucionalidad. La facultad de constreiiir a todos 10s poderes p~blicos a1 respeto de un determinado nhmero de disposiciones que protegen a la sociedad del ejercicio arbitrario del poder parece ser una gran idea. Y de hecho lo es.

Sin embargo, cuando empezamos a renunciar a la participaci6n que nos da una democracia en el ejercicio del poder y otorgamos facultades extraordinarias a un poder sobre otro, las cosas tienden a complicarse. De hecho, la 16gica misma de un Estado constitucional responde a la idea de que el poder absoluto por naturaleza corrompe: es mucho mas deseable y seguro contar con un poder limitado. Hoy el crecimiento del interven-

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y If-

[lustraciones: Yoel Bordas

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cionismo judicial en todas las Areas de la vida hu- mana responde a ese deseo de poner un dique de contention a1 ejercicio del poder.

No olvidemos nunca que la esencia de nues- tro sistema de gobierno reside en la apelaci6n que hace a la voluntad de sus gobernados: una vez se actha en contra de la voluntad popular expresada en nuestras leyes emanadas democriiticamente, necesariamente nace una fuerte tensi6n entre la figura del control constitucional y nuestra volun- tad popular.

Lo anterior adquiere una extrema relevancia para la democracia dominicana: con el nacimien- to del nuevo Tribunal constitucional hemos dado un gran paso en nuestra consolidaci6n institucio- nal, que se puede ver amenazada, si no contamos con reglas de juego claras. Son muchos 10s casos de rebeliones de 10s guardianes, y si la sociedad dominicana no abre 10s ojos, en nombre de la independencia judicial quizA mafiana nuestros jueces terminen cercenando nuestras libertades individuales.

Apuntes sobre el control de la constitucionalidad La Constituci6n es un mecanismo de regula- ci6n y organizaci6n de 10s poderes phblicos y sus atribuciones. No es s610 un texto juridic0 o una obra normativa, sino tambitn expresi6n de una situaci6n cultural, instrumento de auto represen- tacibn del pueblo, espejo de su patrimonio cultu- ral y fundamento de sus esperanzas.' En nuestros dias, no es un secret0 que el alcance de 10s textos constitucionales se encuentra en una progresiva expansi6n y cada vez son mAs 10s ambitos de la sociedad que caen bajo el dominio constitucional.

Esa concepci6n amplia de Constituci6n no tendria fuerza normativa alguna sin un sistema de justicia constitucional, es decir, un control operado por un 6rgano independiente de las fuer- zas politicas llamado a resolver las controversias entre las autoridades supremas del ordenamiento y, sobre todo, a revisar que tambitn 10s poderes ejercitados por las asambleas parlamentarias (le- yes) se encuentren conformes a la Con~tituci6n.~

Histhricamente, la instituci6n del control ha buscado restringir el alcance del debate politico

entendiendo que este es inestable y puede conlle- var a resultados no deseados. En virtud de ello, algunos sistemas constitucionales han visto el control constitucional como el mecanismo idbneo para constitucionalizar la politica y corregir fallas predecibles del Ejecutivo y el Legislativo con mi- ras a reducir la divergencia entre las politicas ph- blicas adoptadas y las que se adoptarian en una democracia representativa pera ante.^

En raz6n de lo anterior, la instituci6n del con- trol de la constitucionalidad ha sido defendida por unos y vilipendiada por otros: algunos afir- man que representa la usurpacibn mAs grande a la voluntad de las mayorias mientras otros afir- man que es el mecanismo perfecto para garan- tizar el respeto a dicha voluntad contenida en la Constituci6n. Incluso algunos doctrinarios ha- blan del gobierno de losjueces por ser kstos quienes tienen la hltima palabra en el ejercicio del control constit~cional.~

Sobre su funcion y legitirnacion El control constitucional, dentro de un sistema democrAtico, tiene como funci6n principal el con- trol del poder. Poder, en palabras de Lowenstein, es una relaci6n socio-psicol6gica basada en un afecto reciproco entre 10s que detentan y ejercen el poder y aquellos a 10s que va d i r i g i d ~ . ~ Dicho "afecto" es una condici6n indispensable en cual- quier definici6n de poder y en un sistema demo- crAtico representativo no solo se demuestra en las urnas, sino en la participaci6n civica activa de la ciudadania en el ejercicio del poder publico. Por esto, la pertenencia que sienta el ciudadano con aquellos que lo gobiernan es un elemento funda- mental en la legitimaci6n del poder.

Sin embargo, la cuesti6n de la legitimidad del poder y la norma es una que encuentra antaghi- camente a 10s polit6logos y a 10s juristas. Para ilu- minar este enfrentamiento, Bobbio nos recuerda que la teoria politica no puede dejar de tomar en consideraci6n el poder nulo, independientemen- te de 10s llamados principios de legitimidad, ni la teoria juridica puede dejar de tomar en con- sideraci6n el sistema normativo en su conjunto, independientemente del aparato de fuerza predis- puesto para su a~ tuac ibn .~

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La cuesti6n de quie'n regula el poder y de cuan legitima es dicha regulaci6n es el punto de ten- si6n entre la democracia y la justicia que aborda- remos posteriormente. El control constitucional no necesariamente representa un mecanismo regulador legitimo del poder: para muchos no es ejercido como reafirmaci6n del deseo popular contenido en la Constituci6n (elemento legitima- dor del sistema democratico) sino rnhs bien es una atribucibn autocratica que reduce el alcance de la democracia.

Hist6ricamente existen dos corrientes que buscan legitimar doctrinalmente la existencia del control constitucional. Una de las teorias es la planteada por el cClebre jurista austriaco Hans Kelsen, padre del Tribunal constitucional aus- triaco, y otra es la otorgada por 10s textos rnhs influyentes en la estructuraci6n del andamiaje institucional del Estado norteamericano: 10s tex- tos del federalista en 10s cuales '10s padres fun- dadores' de Estados Unidos explican, con un lenguaje inteligible, por qut se debe tener un Po- der Judicial independiente de las demas ramas del Estado y por quC dicho poder puede controlar 10s actos del Ejecutivo y el Legislativo.

a travts de grupos que representan intereses di- versos y comparten el p ~ d e r . ~ Dicho consenso es el que nuestros representantes estan llamados a lograr y aun rnhs importante: el que nuestros jue- ces estan llamados a respetar.

Tanto el consenso como la "voluntad del so- berano" "contenida" en la Constituci6n no es ni se acaba en el texto: rnhs alla del texto, en aguas oscuras donde la doctrina todavia navega a la de- riva, hay mucho contenido. Tan difusa es la zona gris que separa el texto de su amplio contenido que 10s conflictos y la tensi6n entre el juez y el legislador es inevitable.

No olvidemos que en un Estado democrhtico la jurisprudencia constitucional no surge en el proceso de formaci6n de la voluntad politica; no puede, por esto, sustituir a1 derecho surgido en el proceso legislativo democrhtico y no esth de- mocrhticamente legitimada en la misma medida que el derecho adoptado por el legislativo (Hes- se, 2005, pag. 158) 2Por qut vamos a las urnas electorales? ;No sera porque queremos elegir a nuestros representantes que son, por mandato constitucional, quienes estan llamados a plasmar nuestra voluntad en las leyes?

Por esto, el principio democriitico

I obliga a considerar a1 6rgano repre-

Hace menos de 15 aiios una justicia dominicana independiente y transparente era inimaginable.

' sentativo del pueblo; esto es, a1 legis- lador, como hnico poder constituido capaz de realizar normativamente la Constituci6n, es decir, con atri-

, buciones para completar mediante I normas juridicas las atribuciones

Sin embargo, mas que adentrarnos en el de- sarrollo doctrinal que legitim6 la existencia del control constitucional en Europa y en 10s Estados Unidos, se hace necesario estudiar su relacibn con el principio democrhtico, paraguas bajo el cual se protegen 10s canales de creaci6n del con- sejo popular. De hecho, es menester recordar que aGn con la crisis que atraviesa, la democracia es el Gnico sistema que nos permite lograr un con- senso fundamental sobre 10s valores politicos ge- nerales (igualdad, procedimientos democraticos) que a su vez nos permiten legitimar las disposi- ciones politicas y el ordenamiento en su conjunto

que el constituyente dej6 inacabadas, para rellenar, mediante la ley, las lagunas que en la Constituci6n existan; para optar en suma, de acuerdo con las ideas que obtengan el apoyo ma- yoritario del pueblo, por las politicas legislativas que el constituyente dej6 perfectamente abier- tas.* De ahi que resulte implausible concebir a1 juez como un policy maker; si bien se acepta que puede existir cierta divergencia entre las politicas publicas adoptadas por nuestros representantes y la voluntad popular, esto no significa que 10s tri- bunales estCn llamados a reducir esa brecha, mas bien es un problema que tiene su meollo en la es- tructuraci6n de 10s mecanismos de participacihn

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evaluaciones populares (a1 tener estabilidad en elegido peribdicamente por el electorado ni por sus cargos, y estar libres asi del direct0 escrutinio sufragio universal.13 publico) pueden prevalecer en Gltima instancia Una segunda raz6n es la rigidez de la Cons- sobre la voluntad popular?11 En la respuesta a titucibn: resulta extremadamente dificil para el esta complicada pregunta es donde se encuentra Legislativo neutralizar (a travts de una reforma el problema contra-mayoritario: en una demo- constitucional) las decisiones de 10s jueces cons- cracia, el derecho legislativo es por su naturaleza titucionales invalidando una ley debido a que la mayoritario y contra-mayoritaria la invalidacibn Constitucibn tiene un mecanismo de mayorias de las leyes por jueces constitucionales que no agravadas para su modificacibn. Esto es igual en son designados por el electorado ni responsables nuestro ordenamiento porque no contamos con ante 61.l2 ningun mecanismo constitutional que permita

A nuestro juicio, nuestras leyes representan 10s a1 Legislativo refrendar con alguna mayoria las valores de nuestra sociedad, lo que entendemos es disposiciones emanadas del Tribunal Constitu- permisible, reprochable o las ideas que debemos cional. fomentar. ;No se supone que el Poder Legislati- Aunado a lo anterior, por igual es fundamento vo y Ejecutivo (elegidos popularmente) estiin en a la objecibn la controvertibilidad interpretati- mejores condiciones que el Poder Judicial para va de la Constitucibn. No podemos olvidar que decirnos cuales son 10s valores que nos identifican las normas juridicas no son independientes del como dominicanos? proceso de interpretacibn: no son preexistentes

En virtud de esto, desde que Bickel public6 sin0 que asumen significado precisamente a tra- The least dangerous branch, en 1962, una amplia vks del proceso de interpretacibn, donde el juez cantidad de doctrinarios han estudiado el pro- juega, naturalmente, un papel muy importante. blema contra-mayoritario. Este problema puede Sin embargo, aunque se admita que el juez, a1 agravarse en la Republics Dominicana: con la re- fallar en materia constitucional, no puede mas ciente creacibn de una jurisdicci6n constitucional que crear derecho, no se debe olvidar que esa

creatividad estzi, o debe estar, siem- pre subordinada a las orientaciones

I Ni la Constituei6n ni nadie puede de las instituciones representativas.l4 Habiendo visto muy someramente

impedir qUe un juez tenga su 10s fundamentos de la objeci6n con- tra-mayoritaria cabe preguntarse: inclinaci6n politics.

, ;C6m0 reducir la posible tensibn en- I

especializada, la posible tensibn entre la justicia constitucional y la politica puede aumentar por lo que el problema contra-mayoritario adquiere una fuerte relevancia para la democracia dominicana.

Dando contenido a la extraordinaria obra de Bickel, Ferreres Comella establece tres cau- sas que dan fundamento a la poderosa objecibn contra-mayoritaria. La primera es la menor le- gitimidad democratica de origen del juez consti- tucional: no olvidemos que las leyes que hay que enjuiciar provienen de un legislativo elegido pe- ribdicamente por el electorado, por sufragio uni- versal. El juez constitucional, en cambio, no es

I 1 tre justicia y democracia en la Rep& blica Dominicana?

A pesar de que la historia constitucional del juez dominicano nos ha dado muchos tragos amargos, por igual hay muchos avances y retos por enfrentar. Para nadie es un secret0 que la re- forma judicial dominicana de 1997 significb un hito en el desarrollo de una sana y correcta admi- nistracibn de justicia.

Sin embargo, el alcance de esta reforma judi- cial en muchos puntos sensibles no fue suficiente, y ello aGn habiendo nuestra patria pasado por dos reformas constitucionales desde que aquella ocurrib. Con aspectos criticables, las recientes re- formas de nuestra Carta Magna (2002, 2010) sin

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duda alguna plantean muchos retos para la con- solidacibn de la democracia dominicana.

De hecho, seria irresponsable desconocer que nuestra hltima modificacibn constitucional trajo consigo muchos elementos positives, no obstante, las reformas del texto, sin cambios en nuestras habituales prhcticas institucionales, tendriin un efecto reducido en el mejoramiento de la demo- cracia dominicana. Es nuestro deseo ver que, tan- to las instituciones como nuestro ordenamiento, crezcan y se fortalezcan a igual ritmo.

Concretamente, para reducir la posible ten- sibn entre justicia y democracia, las medidas adoptadas deben democratizar el proceso de seleccibn de 10s jueces del Tribunal Constitucio- nal dominicano mediante la implementacibn de audiencias phblicas previas a su designacibn (a1 estilo norteamericano) y la creacibn de un rCgi- men de incompatibilidades. En relaci6n a las audiencias, por ser 10s jueces del Tribunal Cons- titucional elegidos directamente por el Consejo Nacional de la Magistratura (CNM), cualquier mecanismo de participacibn ptiblica debe darse dentro del consejo. En razbn de lo anterior, cuan- do se realice la modificacibn de la ley orghnica de nuestro nuevo CNM, seria deseable incluir en el apartado relativo a las audiencias, una dispo- sicibn en la que se reconozca su carhcter total- mente phblico y alguna disposicibn que exija un cierto mecanismo de interpelacibn de 10s candi- datos a jueces constitucionales.

Una modificacibn como la propuesta daria un carhcter democrhtico de formalidad sin preceden- tes en la historia constitucional dominicana: 10s ojos de la poblacibn y 10s medios tendrian un ac- ceso privilegiado dentro del proceso de seleccibn de nuestros mhs altos jerarcas judiciales. Asimis- mo, de esta forma se garantizaria la participacibn del pueblo en el proceso de confirmacibn de 10s jueces a1 igual que se ejerce un cierto control poli- tico previo de la funcibn jurisdiccional por lo que se incrementa un poco la legitimidad democrhtica de 10s jueces que resulten nombrados.

Respecto del rCgimen de incompatibilidades, este nos ayudaria a garantizar que la labor del juez constitucional no est6 afectada por otras fun- ciones que puedan producir conflict0 de intereses,

faltas de probidad u opacidad en el ejercicio de sus funciones.15 Por esto 10s candidatos a jueces debe- rian tener vedada la afiliaci6n a cualquier partido politico, porque eso tiene un efecto importante en la percepcibn ciudadana de la justicia (que como anteriormente vimos, ha decaido en muchas situa- ciones y es muy frhgil en momentos donde nace nuestro nuevo Tribunal constitucional). El fin de esta previsibn es garantizar la apariencia de im- parcialidad del juzgador: obviamente, ni la Cons- titucibn ni nadie puede impedir que un juez tenga su inclinacibn politica, per0 si puede evitar la ex- presibn publica de esa ideologia.16

En conclusibn, no debemos abandonar repen- tinamente todos 10s logros en materia de indepen- dencia de la justicia que la naciente democracia de nuestro pais ha logrado. Hace menos de 15 aiios, una justicia dominicana independiente y transparente era simplemente inimaginable y el afirmar que el poder que tienen en la actualidad nuestros jueces les permite trabajar a favor de un pais mhs justo es algo que nos llena de orgullo.

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Sin embargo, tenemos que ser muy cuidadosos y mantener 10s ojos abiertos: una de las cualidades mhs importantes de una democracia es el escru- tinio popular de 10s asuntos phblicos; mientras mas discreci6n se le otorga a1 poder, miis amplias podrhn ser sus arbitrariedades. Tan inaceptable es que esos Ilamados a vigilar el poder sucumban ante 61, como es que lo utilicen para asaltar la democracia.

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Especial

La anlicacion del * con6epto de autoria mediata a traves de . I 8 .

aparatos organizados de poder en f ~ i d I I I .

::; *--A -

Hlspanoamerica La tesis desarrollada por Claus Roxin, en 1963, para juz- gar a todo el aparato nazi que ejecuto el Holocausto se ha comprobado con 10s juicios a las Juntas Militares ar- gentinas, 10s casos de 10s peruanos Abimael Guzman y - Alberto Fujimori, asi como 10s lideres politicos colom- bianos vinculados a1 paramilitarismo. En definitiva, estas jurisprudencias recurren a1 concept0 de autoria mediata para fundamentar la condena de 10s lideres politicos y co- mandantes militares de alto rango como autores de 10s crimenes cometidos por miembros subordinados de s s organizaciones. h i

1. Ietro*cdQar z, : El 9 de diclembre de 1985, la Camara Nacional de Apelaciones en : ,

lo Crim~nal y Correctional Federal con asiento en la Capital Federal '- de Buenos Aires pronuncio la sentencia1 en el denominado Juicio a :-

.I. I ' las Juntas. En esta se conden6 a 10s cornandantes de las tres Juntas '., Militares que presidieron la dictadura militar gobernante en Argen- ' -

* Los coautores agradecen a Veronica Yamamoto, Lourie Taramin, Enr~que Carnero Aojo y Diana Contreras por la contribution en la bfisqueda de legisla- cion, jurisprudencla y doctrina, Fallos de la Corte Suprema, volumen 29,r-11, pp. 36-1657. El texto de este fallo y

el. de b Corte Suprema argentina refendo en la sigulente nota pueden verse en ~http.llwww.derechos.orgJnizkorlarg/causa13~. ime@uP

kt*& . . -

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tina desde el afio 1976 hasta 1983 (cada Junta estaba compuesta por 10s comandantes generales del Ejercito, de la Armada y de la Fuer- za Aerea). Aunque ninguno de 10s integrantes de estas tres Juntas Militares habia perpetrado materialmente secuestros, torturas ni homicidio alguno, la Camara Federal 10s encontro responsables pe- nalmente como autores mediatos por 10s crimenes que habian co- metido 10s miembros de las fuerzas militares que comandaban Esta sentencia fue la primera decision judicial en la que se aplico la tesis desarrollada por Claus Roxin en 1963 acerca de la autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder.

Luego del juicio alas Juntas, en numerosos casos, tanto en el ambi- to nacional como internacional, se ha aplicado el concepto de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder, incluyendo, en- tre otros, el caso del Muro de Berlin, varios hechos relativos a crime- nes cometidos durante el period0 del regimen militar argentino de 1916-1983, el caso contra el general Manuel Contreras, en Chile; el juicio contra el ex senador nacional ~ l v a r o Alfonso Garcia Romero, en Colombia, en Peru, 10s casos contra el lider de Sendero Luminoso, Abimael Guzman, y el ex presidente Alberto Fujimori; asi como 10s de Milomir Staki , Radoslav Branin, Momcilo KrajiSnik, Milan Marti y Fatmir Limaj y otros celebrados ante el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY). El caso contra Protais Zigiranyirazo ante el Tribunal Penal Internacional para Ruanda (TPIR) y 10s casos contra Jean Pierre Bemba, Germain Katanga y Mathieu Ngudjolo Chui, Omar A1 Bashir y Abu Garda ante la Corte Penal Internacional (CPI).

Dada la creciente aplicacion par parte de 10s tribunales de justi- cia (en particular, en 10s ultimos diez afios) del concepto de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder, analizaremos como la jurisprudencia en Argentina, Chile, Colombia, Peru, Espafia y Uruguay ha recurrido a este concepto para fundamentar la con- dena de 10s lideres politicos y comandantes militares de alto rango como autores de 10s crimenes cometidos por miembros subordina- dos de sus organiza~iones.~

2. La aplicacion del concepto de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder por la jurisprudencia de 10s tribunales de justicia en Latinoamerica y Espaiia El concepto de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder, en la epoca de su primera exposicion en 1963 por Claus Roxin, encontro en principio cierta renuencia en 10s tribunales de justicia de America Latina y Espafia, principalmente debido a tres razones. En primer lugar, la ausencia de una referencia especifica a la idea de autoria mediata a traves de aparatos organizados de

2 Para un andlisis exhaustivo del origen y aplicacihn d e esta nacu5n en derecho penal internacional, vBase H . Olksola, The C~immnal Responsab~hty of PolificaJ and M~litary Leaders as Principals to International Crimes, Hart Publishers, Londres, 2009, capitulos 3 y 5 (de ahora en adelante citado como Olasolo Criminal Responsabillty)

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poder en aquellos pocos codigos penales nacionales que expresa- mente preveian el concepto general de autoria mediata.

En segundo lugar, la creencia extendida de que el ambito de aplicacion de esta especie de responsabilidad por autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder se limitaba a supuestos en que 10s superiores utilizaban a agentes inocentes que carecian de completa responsabilidad penal en la perpetracion de 10s crimenes3 En ese sentido, en 10s casos de crimenes materialmente perpetra- dos por subordinados en cumplimiento de ordenes impartidas por sus superiores en el contexto de estructuras organizadas de poder, 10s subordinados no son meros agentes inocentes, sino plenamente responsables desde el punto de vista penal par su libre decision de cometer 10s crimenes. Para esta postura, por tanto, la responsabili- dad penal de 10s superiores que imparten la orden de cometer 10s crimenes no podria equivaler a la ejecucion misma pues carecen del dominio sobre esos crimenes (10s superiores no pueden nunca estar seguros sobre si sus decisiones seran realmente cumplidas por sus subordinados). Como consecuencia, de acuerdo con el enfoque tradi- cional de la jurisprudencia latinoamericana y espaiiola, en el contexto descrito por Roxin debia ser aplicada una clase de responsabilidad diferente a la autoria -utilizandose usualmente la instigacion o induc- cion debido a que 10s superiores que dan las ordenes, una vez que han convencido a sus subordinados de cometer 10s crimenes, no tie- nen nmguna participacion mas durante la ejecucion.

En tercer lugar, la circunstancia de que la aplicacion del con- cepto de autoria mediata no cambia la gravedad de la pena a ser impuesta a superiores debido a que en la mayoria de 10s codigos penales latinoamericanos (camo Argentina, Chile, Peru, Colombia o Uruguay), asi como en el Codigo penal espafiol, se preve un mar- co penal similar para las distintas formas de autoria, asi como para ciertas modalidades de participacion como la induccion y la compli- cidad necesaria (asistencia material sin la cual el crimen no podria haberse perpetrado) .

Sin embargo, con el paso del tiempo, 10s tribunales de justicia de America Latina y Espaiia cada vez con mayor frecuencia se han dado cuenta de que el planteamiento tradicional no reflejaba ade- cuadamente la naturaleza de la contribucion de 10s superiores a 10s crimenes (planeando y dominando 10s medios a traves de 10s cuales la actividad criminal es llevada a cabo), porque 10s relega a un rol secundario que no se corresponde con su real envergadura. Como consecuencia, en la ultima decada ha surgido la discusion de si la responsabilidad penal de las autoridades politicas y militares de alto rango en la jerarquia de la maguinaria estatal podria ser abarca- da de manera mas adecuada por figuras juridicas como la autoria mediata por el dominio de la voluntad en virtud de maquinarias o

3 Vease 10s m3tiples casos de aplicacib del concepto de autoria medliata en esta clase de situaciones referidas por H OlBsolo y A I, Pirrez Cepeda, "The

Notron of Control over the Cnme and its Application by the ICTY in the Staki Case", en 415 Intemabonal Cnm~nal Law Revlew 4 (2004), 485.

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estructuras de poder organizadas, o como la coautoria basada en el dominio funcional del hecho -de acuerdo a esta ultima figura juridi- ca, cuando una pluralidad de personas participan en la comis~on de un delito s e g b una division de tareas para la ejecucion de un plan comun, aquellas personas que comparten el domin~o sobre su co- mision como resultado de las funciones esenciales a ellos asignadas (de no cumplirse con esa funcion, el plan fracasaria) se consideran coautores (autores del delito)?

Ademas, dado que el concepto de autoria mediata se basa en el dominio del superior sobre la voluntad de sus subordinados en virtud del control de la organizacion, mientras que el concepto de coautoria requiere un dominio compartido entre 10s superiores y 10s subordinados, ha surgido tambien el problema de cual de estas dos figuras juridicas debe ser aplicada a las autoridades politicas y mili- tares de alto rango en la jerarquia de la organizacion, que planearon campaiias sistematicas y extendidas de criminalidad e impartieron ordenes a sus inferiores para su ejecucion.

Los partidarios de la tesis de la autoria mediata ponen de relieve que cuando 10s crimenes son cometidos a traves de aparatos orga- nizados de poder, 10s superiores e inferiores en verdad no concier- tan ninqin plan comun, ni comparten el dominio en la ejecucion de 10s delitos deb~do a que la organizacion posee su propia autonomia y 10s subordinados meramente ejecutan o implementan automatica- mente las ordenes de sus s~per iores .~ En cambio, 10s partidarios de la tesis de la coautoria enfatizan 'que 10s superiores no ejercen en verdad un cornpleto dominio sobre la perpetration de 10s delitos debido a que la decision final sobre la comision descansa siempre en aquellos subordinados que libremente y con conocimiento optan por unirse a1 plan de sus superiores mediante el cumplimiento de sus ordenes. Como consecuencia, 10s superiores comparten con sus subordinados el dominio sobre la ejecucion de 10s delitos, particu- larmente cuando su participation continua durante la ejecucion de las ordenes criminales6

Como se vera en esta section, la doctrina latinoamericana y la espaiiola se mantienen divididas en este tema.

Argentina La sentencia del 9 de diciembre de 1985 de la C h a r a Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional Federal con asiento en la Capital Federal Buenos Aires, condenatoria de 10s miembros de las

4 Vease a1 respecto la Decision de Confirrnaclon de 10s Cargos, ICC-01104- OLIO@, Sala de Cuestlongs Preliminares I, 29 de enero de 2007, parrs. 342, 347 (de aqui en adelante Caso Lubanga, Decision de Confirmation de 10s Cargos); Caso Katanga y Ngudjolo, Decisibn de Confirmacl6n de 10s Cargos, ICC-01104-01/01-711, Sala de Cuestiones Preliminares I, 30 de septiembre de

2008, piins. 515-525 (de aqui en adelante Caso Katanga y Ngudjolo, Decls~bn de Confimaoion de 10s Cargos). 5 Vbase 10s a u t o ~ a c~tados par Olasolo y Wres Cepeda (nota 61, pp. 485,486.

6 Vease 10s amores cltados por Olasolo y Perez Cepeda (nota 6), pp, 494 y ss.

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Juntas Militares que presidieron la dictadura militar argentina de 1916 a 1983, marc6 un hito en tanto aplico por primera vez el concept0 de autoria mediata a travbs de aparatos organizados de poder. De acuer- do con la Camara Federal de Buenos Aires, a partir del derrocamien- to de las autoridades constitucionales y la toma del poder en 1976, las Juntas Militares concibieron e implementaron una estrategia global con el objetivo de luchar contra la subversion mediante el estable- cimiento de una compleja red de centros de detention clandestina, donde 10s secuestrados fueron sometidos a interrogatorio y tortura.

El pais estaba dividido en numerosas zonas militares, dentro de las cuales 10s jefes regionales recibieron completa autonomia sobre las operaciones clandestinas. En cada zona, 10s oficiales intermedios en la cadena de mando de las tres fuerzas armadas cooperaban en el secuestro de subversivos sospechosos. En el punto mas Algido de la carnpaa contra la subversion, la Carte Suprema, cuyos miem- bros habian sido designados por 10s militares en el poder, insto re- petidamente a 10s comandantes militares a esclarecer el destino de las personas desaparecidas en una accion colectiva de 400 peticio- nes de habeas corpus. A pesar de 10s muchos civiles que habian sido secuestrados, torturados y asesinados (de acuerdo a fuentes oficiales, hub0 en total alrededor de 18,000 victimas, y s e g h otras fuentes, dicha cifra podria incrementarse hasta las 30,000), ninguna persona fue procesada penalmente de mod0 satisfactorio ni por 10s tribunales de justicia militares ni por 10s civiles. Ademas, el Gobier- no militar de aquel entonces nego constantemente que dichos cri- menes hubieran tenido nunca lugar.

A la vista de estas circunstancias, la Camara Federal de Buenos Aires en la sentencia en la que se ocupo por primera vez de estos hechos, una vez terminada la dictadura, afirmo que la determina- ci6n de quien habia perpetrado realmente 10s delitos no era lo mas importante. En efecto, de acuerdo con esta sentencia, 10s ejecutores materiales no conformaban en verdad cuadros tan significativos, dado que estos cumplieron un rol secundario en la perpetration de 10s crimenes, puesto que el sujeto de atras que controlaba el sistema dominaba la voluntad de esos hombres que eran parte de la organi- zacion. Como el dominio de 10s comandantes militares condenados en esta sentencia era absoluto (si un subordinado rehusaba obede- cer, era reemplazado automaticamente por otro que cumpliera con las directivas), el plan concebido por 10s comandantes rnilitares con- denados no podria haber fracasado por la voluntad de 10s ejecuto- res materiales del delito, quienes simplemente cumplian una funcion menor dentro de una maquinaria gigantesca. Ademas, dado que 10s comandantes militares de las tres Juntas siempre conservaron el poder de decision de detener la ejecucion de 10s crimenes que estaban siendo cometidos, solo cuando lo estimaron necesario, inte- rrumpieron repentinamente las operaciones irregulares y anuncia- ron a la poblacion que "la guerra habia terminado". A partir de ese momento, se suspendieron 10s secuestros, las desapariciones y las torturas. Para la Camara Federal, este era un caso en que el instru- mento operado por el hombre de atras era la organizacibn misma,

Infarme Especial

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que este manipulaba a su discretion, una organization compuesta por hombres intercambiables. De esta manera, el dominio no era tanto sobre la voluntad especifica sino sobre una voluntad indeter- minada. Sin importar quien resultara ser el oficial subordinado, 10s actos criminales hubieran tenido lugar de todos modos.

La sentencia de la Camara Federal que aplico la tesis de la auto- ria mediata a traves de aparatos organizados de poder en el juicio a las Juntas fue, sin embargo, revocada por la Corte Suprema de Justicia argentina, en una decision dividida dictada el 20 de diciem- bre de 1986.1 De acuerdo con el voto mayoritario, en virtud de la circunstancia de que 10s miembros de las Juntas Militares no inter- vinieron en la ejecuci6n de 10s crimenes, el punto de partida en el analisis de la intervencion delictiva debi6 haber sido la concepcion de la autoria que en aquel momento era mantenida por la jurispru- dencia argentina. Esta concepcion era el enfoque de la teoria formal objetiva, s e g b la cual 10s autores de un delito son solo aquellos su- jetos que fisicamente realizan 10s elementos objetivos del delito.

Desde el punto de vista del voto mayoritario de esta sentencia, de acuerdo con la teoria formal objetiva la conclusion a la que debe- ria haberse llegado era que aquellos sujetos que elaboran el plan, preparan, dirigen, organizan, instigan o, de cualquier otra forma, contribuyen a la cornision del delito sin tomar parte fisicamente en su ejecucion no pueden ser considerados autores. Por otra parte, se resalto en ese voto que esa conclusion acerca de la intervencion de- lictiva no significaba ni la falta de responsabilidad penal de 10s men- cionados sujetos ni la imposition de una pena menor, puesto que el articulo 45 del Codigo penal argentino, similar en esto a otros codigos penales latinoamericanos y al espaiiol, preveia igual san- cibn penal para autores, instigadores y complices necesarios. Como resultado, la sentencia de la Corte Suprema de Justicia argentina, por voto de la mayoria, revoco la sentencia de la Camara Federal que consider6 a 10s nueve comandantes de las Juntas Militares ar- gentinas como autores mediatos; y en su lugar 10s conden6 como complices necesarios, lo que no tuvo incidencia en el monto total de la pena que se les impuso, ya que esta figura era castigada con igual pena que la autoria propiamente dicha.

Luego del juicio a las Juntas, la jurisprudencia argentina ha ido abandonando progresivamente la teoria formal objetiva para definir la autoria penal responsable, y ha adoptado la teoria basada en el dominio del h e ~ h o . ~ En este nuevo contexto, y en particular desde la sentencia del 18 de mayo de 2001 en el caso Etchecolatz de la Corte Suprema de Justicia argentina (que confirm6 la sentencia del Tribunal Oral Federal de La Plata, de septiembre de 2006) 10s tribu- nales de justicia argentinos han aplicado nuevamente la concepcion

7 Sentencia del 20 de dlciembre de 1986 de la Corte Suprema de Justicla argentina, pp. 1701 y ss. 8 Vease E. Malarino, "El caso argentino", e n Imputacibn de crimenes de 10s subordinados a1 dirigente: Un estudio cornparado, K . Arnbos (ed,) , Temis, 2008,

pp. 59 y ss

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de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder para fundar la condena de funcionarios militares que integraban 10s mas altos eslabones del Ejercito entre 1976 y 1983.9

Un buen ejemplo de esta nueva tendencia es la sentencia del Tri- bunal Oral Federal n." 1 de Cordoba del 24/1/2008, en la que Lu- ciano Benjamin Menendez (ex jefe comandante del Tercer Cuerpo del Ejercito desde 1975 a 1919), Hermes Oscar Rodriguez (ex jefe del Batallon de Inteligencia n." 14 que operaba bajo el comando de Menendez) y seis ejecutores materiales (incluyendo el ex jefe del Grupo Especial de Operaciones P03, que estaba balo las ordenes directas de Rodriguez, y cinco de sus subordinados) fueron conde- nados por secuestro, tortura y homicidio de numerosos civiles en cumplimiento de la campafia antisubversiva lanzada por las Juntas Militares argentinas en 1916. Segun el Tribunal Oral Federal de CQ~- doba, la implementacibn de la campafia global antisubversion se ca- racterizo por la amplia discrecion de que gozaban 10s comandantes de Operaciones Zonales (como Menendez) para organizar la repre- sion en 10s territorios bajo su comando, asi como 10s comandantes subordinados de Operaciones Zonales (como Rodriguez y 10s otros seis acusados) para identificar a las victimas. No obstante, todos 10s acusados cumplieron un rol en la ejecucion de la campafia, Menen- dez y Rodriguez contribuyeron a la comision de 10s crimenes de una forma sustancialmente diferente a 10s otros seis acusados. Mientras Menendez y Rodriguez aseguraron un control estricto sobre las uni- dades bajo su mando, dieron ordenes e instrucciones para poner en marcha la campafia antisubversiva dentro de su esfera de auto- ridad, crearon las condiciones necesarias para la ejecucion efectiva de esas 6rdenes y supervisaron 10s resultados de la actividad de sus subordinados, 10s otros seis acusados identificaron conjuntamente a las victimas y detuvieron, torturaron y asesinaron en cumplimiento d e las ordenes impartidas por Menendez y Rodriguez. En conse- cuencia, Menendez y Rodriguez fueron condenados como coautores mediates, y 10s otros seis acusados fueron condenados como coauto- res directos de 10s crimenes cometidos.

Sin embargo, la tendencia creciente en la jurisprudencia argen- tina hacia la aplicaclon del concept0 de autoria rnediata a traves de aparatos organizados de poder no ha sido seguida ~nvariablemente. Por ejemplo, la sentencia del 12/8/2009 del Tribunal Oral Federal de San Martin en el caso Floreal Avellaneda aplicb la figura juridica de coautoria basada en el dominio funcional (en lugar de la autoria mediata a travks de aparatos organizados de poder) para conde- nar a Santiago Omar Riveros (ex jefe del Comando de Instituciones Militares, bajo cuyo control operacional se encontraba la estacion

, v,maG, ",,as, la sentencla del Trlbunal Oral Crlminal Federal de La

Plata en el caso Von Wernlch del 1/11/2007, la sentencia del Tribunal Oral

Criminal Federal n " 1 de Cbrdoba del24/1/2008 en el caso contra Menendez

Luciano Benjamin, Rodriguez Hermes Oscar y otros, y la sentencla del Trlbunal

Oral Crlminal Federal de Tucuman del 4/9/2008 en el caso Senador Vargas

Aignasse.

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de policia Villa Martelli y la Escuela de Infanteria Campo de Mayo), Osvaldo Jorge Garcia (ex director de la Escuela de Infanteria Cam- po de Mayo), Exequiel Verplaetsen (ex jefe del ~ r e a de Inteligencia de la Escuela de Infanteria Campo de Mayo) y otros tres subordina- dos que estuvieron materialmente involucrados en la cornision de 10s crimenes. Todos resultaron condenados por la detencion ilegal y tortura de Iris Avellaneda y su hijo Floreal Avellaneda de 15 afios, y por la posterior desaparicion de este ultimo.

En este caso pueden observarse varias similitudes con el de Lu- ciano Benjamin Menendez y otros. En ambos casos, lideres milita- res de elevado rango, comandantes militares de rango intermedio y ejecutores materiales fueron condenados por tipos de crimenes similares perpetrados en el context0 de la campafia global antisub- versiva planeada en 1916 por las Juntas Militares argentinas para eliminar a sus oponentes politicos. Ademas, en ambos casos, la con- cepcion de la autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder fue expresamente acogida en relacion con 10s miembros de las mencionadas Juntas.

Sin embargo, dado que el Tribunal Oral Federal de San Mar- tin, en el caso Floreal Avellaneda, limit6 la aplicacion del concept0 de autoria mediata a 10s miembros de las Juntas Militares, apoyan- dose en la circunstancia de que eran 10s h icos altos comandantes militares cuya contribucion (disefio de la campafia global y puesta en marcha de las Fuerzas Armadas argentinas para implementar- la) no tuvo lugar en el estadio de ejecucion de 10s crimenes, marc6 una diferencia fundamental. Segun el Tribunal Oral Federal de San Martin, 10s otros comandantes militares (comandantes operaciona- les zonales, comandantes de area, comandantes de unidad) parti- ciparon en la ejecucion de la campafia antisubversiva mediante 1) la adaptation de tal campafia a las especiales circunstancias de sus zonas y areas de responsabilidad; y 2) el disefio de las operaciones especificas a traves de las cuales esa campafia iba a ser llevada a cabo. De tal modo, estos ultimos poseian autonomia para decidir la manera en que debian proceder sus subordinados en lo relati- vo a la detencion, la tortura y la desaparicion forzada de sus opo- nentes politicos. Como resultado, para el Tribunal Oral Federal de San Martin, la participation de Riveros, Garcia y Verplaetsen en 10s crimenes (10s jefes de 10s centros de detencion donde 10s crimenes tuvieron lugar) respondio a una esencial division de funciones en- tre ellos y aquellos subordinados que materialmente ejecutaron 10s delitos, comportamientos estos que integraban un plan comun acer- ca del que todos ellos actuaban de acuerdo para la ejecucion de la campafia global antisubversiva.

Chile La conception de la autoria mediata a traves de aparatos orga- nizados de poder fue aplicada en Chile por primera vez el 12 de noviembre de 1993, en la sentencia de primera instancia de un juz- gad0 de instruccion en el caso contra el general Jose Manuel Con- treras (ex jefe de la agencia de inteligencia chilena bajo el regimen

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de Pinochet, conocida como DINA -Direction de Inteligencia Nacio- nal-) y su jefe de operaciones (coronel Espinoza). Ambos fueron condenados por el homicidio de Orlando Letelier (ministro de Asun- tos Exteriores de Salvador Allende), quien se encontraba exiliado en Washington DC, donde era miembro del Instituto de Estudios Po- liticos y cumplia un rol clave en promover la oposicion internacional contra el regimen de Pinochet.

Segljn la sentencia, Contreras, que tenia control total sobre la DINA (que fue militarizada en 1974) fue quien tom6 la decision de asesinar a Letelier, y coloco a su jefe de operaciones, coronel Espi- noza, a cargo de la adopcion de las medidas que fueran necesarias a efectos de crear las con&ciones indispensables para perpetrar el homicidio (incluyendo la puesta en marcha de actividades de espio- naje durante varios meses). Finalmente, el sefior Townley, un agente de facto de la DINA, fue puesto a cargo de la mision de asesinar a la victima y enviado a Estados Unidos, donde cumplio con su cometido haciendo estallar una bomba colocada en el automovil de Letelier, el 21 de septiembre de 1976.

Esta sentencia se ocup6 finalmente de la cuestion de si, a la luz de 10s articulos 14, 15 y 16 del Codigo Penal chileno de 1874, Con- treras y Espinoza debian ser considerados autores o participes en el homicidio de Letelier. En este sentido, es precis0 destacar que, segun el articulo 15, se considera autores a todos aquellos que 1) to- man parte en la ejecucion del hecho directa e inmediatamente, sea impidiendo o procurando impedir que s e evite; 2) inducen a una tercera persona a cometer el delito; o actuando de comun acuerdo, 3) facilitan 10s medios para la comision del delito o estan presentes mientras el hecho esta siendo ejecutado.

S e g h la sentencia, para determinar si Townley actub cum- pliendo ordenes impartidas por otro, o con base en un act0 d e instigacion o un acuerdo, era necesario tomar en consideraci6n 10s siguientes factores: 1) Townley fomaba parte d e la estructura militar jerarquica de la DINA coma consecuencia de su situacih como agente de facto; 2) Townley y su farnilia vivian bajo la protec- cion y control de la DINA; y 3) Townley habia desarrollado un solido sentimiento de lealtad hacia la DINA. Como resultado, incluso en el caso de que Townley no pudiera haber sido obligado legalmente a cumplir con la orden de asesinar a Letelier, la fuerte autoridad e influencia que el director de la DINA ejercia sobre Townley lo co- loco en una situacion en la que inevitablemente debia ejecutar el asesinato. Ademas, como se subraya en la sentencia, la existen- cia de un acuerdo hubiera requerido una deliberation con un ni- vel de libertad e independencia mas elevado que el que Townley disponia luego de recibir la orden de asesinar a Letelier. Por otra parte, para aplicar la figura juridica de la instigacion, se hubiera requerido un act0 de persuasion sin la naturaleza coercitiva que en efecto tuvo la orden de asesinar recibida por Townley, a traves del director de la DINA y del jefe de operaciones de esa agencia estatal. Como consecuencia, en la sentencia se resalto que 10s he- chos juzgados ponian de relieve el tip0 de dominio de la voluntad

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de 10s subordinados que era caracteristico del que disponian 10s agentes superiores en la cadena de mando de estructuras organi- zadas de poder. En estas organizaciones, 10s superiores utilizan su poder para impartir ordenes y asegurarse de su cumplimiento mediante la fungibilidad de 10s ejecutores. Esta circunstancia hace casi imposible cualquier resistencia u oposicion a la ejecucion de las ordenes de 10s superiores.

A la luz de lo mencionado anteriormente, dada la proximidad jerarquica entre el director de la DINA y el jefe de su personal, asi como la falta de alg6n otro elemento que evidenciase que el coronel Espinoza dependia del coronel Contreras, la sentencia conden6 a ambos como coautores mediatos, por haberse puesto de acuerdo en la utilization de sus subordinados en la DINA a fin de asegurarse del asesinato de Orlando Letelier.

Algunos juristas chilenos han criticado esta decision, en especial porque se apartaba, sin buenos argumentos, de la jurisprudencia chilena anterior a 1983, seg6n la cual el concepto de autoria mediata resultaba solo aplicable en aquellos supuestos donde 10s ejecutores materiales no eran responsables penalmente. Para estos autores, cuando, como ocurria en el presente caso, el nivel de determination por un superior no equivalia a subyugar la voluntad del ejecutor material, solo podian aplicarse las figuras juridicas de la instiga- cion o la complicidad necesaria, supuestos para 10s cuales el Co- dig0 penal chileno de 1814 preveia igual pena que para 10s autores (mediatos) .lo De esta manera, aun si Contreras y Espinoza hubieran sido condenados como instigador (Contreras) y complice primario (Espinoza), de todos modos su injusticia hubiera sido castigada ade- cuadamente. En opinion de estos autores, el concepto de autoria me- diata a traves de aparatos organizados de poder solo alcanzb alglin grado de aceptacion en la jurisprudencia chilena aiios despues," como lo refleja la decision de la Corte Suprema chilena del 21 de septiembre de 2001, a1 acoger el pedido de extradicion peruano en relaci6n a1 ex presidente Alberto Fujimori. En esa ddcision, la Corte Suprema chilena se refirio expresamente a la posibilidad de aplica- cion de la figura juridica de la autoria mediata a traves de aparatos orsanizados de poder.12

10 J. L. Guzman, "El caso chileno", en Imputacldn d e crimenes de 10s

subordmados a1 dirlgente: Un estud~o comparado, K. Ambos (ed.), Temis, 2008, pp. 77-82.

11 Ibidem. Vease tambien P. L~fschitz, ccUCometer" y "hacer cometer" desarrollo y signification actual de la noci6n de autoria mediata", en Homenaje a1 Dr. Marino Barbero Santos. "In memoriam", Universidad Castilla La Mancha, 2001, vol. I, p. 1272

12 Vease, en particular, 10s argumentos legales n." 94 y 95 d e la sentencia.

Para un comentario sobre esta sentencia, vease R. Lled6 Vasquez, en Anuar~o de Derechos Humanos, 2008, pp 114 y ss

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Colombia Las sentencias pronunciadas en 10s casos MachucaLa ael i/3/2001, Yam~d Amat14 del8/8/2001 y Gabarra15 del 12/9/2001 fueron las pri- meras tres decisiones judiciales en las que la Sala de Casacion Pe- nal de la Corte Suprema colombiana aludi6 al concepto de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder No obstante, el maximo tribunal de justicia de Colombia no aplico la figura juridica de la autoria mediata en ninguno de estos casos, sino que juzgo que concurria en 10s tres supuestos la responsabilidad por coautoria. De ese modo, el tribunal mantuvo su tradicional enfoque en lo tocante a la distincion entre 10s conceptos de instigacion (determination o autoria intelectual), autoria mediata y coautoria (autoria material im- propia), figuras todas a las que el articulo 23 del Codigo Penal co- lombiano de 1980 y 10s articulos 28 y 29 del nuevo C6digo penal colombiano de 2000 atribuyen igual pena.

Segun el enfoque tradicional de la Corte Suprema colombiana, 10s instigadores son aquellas personas que, a traves de induccron, mandato, instigacion, consejo, coercion, orden, acuerdo o cualquier otro medio viable, se aseguran la comision del delito mediante otra persona que es penaImente responsable como autor direct0 del he- cho punible. Por consiguiente, el concepto de instigacion requiere un tip0 de comunicacion entre el instigador y el ejecutor material que permite a este ultimo decidir, incluso si se trata de una situa- ci6n precaria, si en efecto llevara a cab0 el delito propuesto por el instigador. La decision final acerca de la ejecucion no es tomada por el instigador, sino por 10s ejecutores materiales. La distincion entre la instigacion y la autoria mediata reside en que esta ultima requie- re que 10s ejecutores materiales no esten en posicion de decidir si cometen o no el hecho, dado que: 1) sus roles como ejecutores ma- teriales han sido impuestos por el autor mediato y 2) no son ente- ramenfe conscientes de la real dimension de sus roles. Finalmente, el concepto de coautoria requiere que una pluralidad de personas, actuando de manera concertada, ejecute un plan criminal comun segdn el principio de division de funciones. Sin embargo, no es im- prescindible para su configuraci6n que 10s coautores hayan presta- do su conformidad a un acuerdo previo. En este contexto, mientras se demuestre que el sujeto contribuyo con su aporte durante la fase de ejecucion del delito, se convierte automat~camente en coautor, sin perjuicio de la relevancia de su colaboracion; no hay necesidad de que esa contribucion sea de naturaleza esencial.16

Un buen ejemplo de la aplicacion de este concepto amplio de coautoria esta dado por el caso Machuca. Los hechos juzgados tu-

16 Vease C. Lkpez Diaz, "El caso cob&1ano", en Imputacidn de cximenes de 10s subordinadas a1 dirgente. Un estucl~o comparada, K, hmbos (ed 3, Ternis, 2008, pp 169-115.

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el area de Segovia-Antioquia. Con el fin de perjudicar la economia y la infraestructura de petroleo de Colombia, varios miembros de la Cornpafiia Cimarron del Ejbrcito Nacional de Llberacion hicieron explotar una bomba en el oleoducto Cusiana-Covefias, provocan- do su destruccion y el derrame de una considerable cantidad de petroleo. Dado que la explosion tuvo lugar en un cerro, el petroleo derramado descendi6 por las laderas del cerro a la localidad de Machuca, destsuyendo numerosas viviendas y provocando la muer- te de mas de cien pobladores. Aunque la Fiscalia no pudo identificar a 10s ejecutores materiales del ataque, acus6 a 10s siete miembros del Comando Central del Ejercito Nacional de Liberacidn, asi corno a 10s tres comandantes de la Compaiiia Cimarron que operaba en el area en la que se produjeron 10s hechos.

La sentencia pronunciada por la Corte Suprema colornbiana, de fecha 1/3/2007, condeno a todos 10s acusados corno coautores del delito. Mediante esa condena, el rnaximo tribunal de justicia colombiano -apoyado en informes de 10s servicios de inteligencia del Ejercito colombiano y otras agencias de seguridad que descri- bieron en detalle la organizacion interna del Ejercito Nacional de Liberacion y el area de responsabilidad de la Compafiia Cimarron- cancluyo que 10s responsables de la tragedia de Machuca pertene- cian a una organizacion criminal jerarquica que actuaba fuera de la ley. Dentro de la estructura jerarquica de dicha organizacion, 10s miembros del Comando Central del Ejercito Nacional de Liberacion estaban a cargo de disefiar y promocionar la politica global de des- baratamiento, mediante violencia, del suministro d e petroleo que iba desde Caiio Lim6n hasta Estados Unidos. Las unidades que ope- raban en ese ambito, corno la Cornpaiiia Cimarrtm, po3eian amplia autonornia para planificar esas operaciones especificas, a traves de las cuales esa politica global de desbaratamiento iba a ser puesta en marcha, El Comando Central retenia el poder de sancionar a 10s eje- cutores materiales que incurrian en errares en la fase de ejecucion de la mencionada politica global,

Para la Corte Suprema colombiana, 10s ejlecutores materiales de la Compaiiia Cimarron decidieron libremente y con conocimiento llevar adelante el ataque, corno una manera de contribuir a la puesta en marcha de la campafia global de desbaratamiento del suminis- tro de petroleo en Colombia. Las actividades que llevaron a cabo para cumplir su cornetido fueron ejecutadas a1 rnargen de sus con- vicciones ideologicas y no corno resultado de haber sido victimas de engaiio ni instrurnentalizados por el Comando Central, pues ni el Comando Central tenia el dominio sobre su voluntad ni eran meras herrarnientas del Comando Central. Como consecuencia, en este contexto, no fue posible recurrir a1 concept0 de autoria me- diata, Por otra parte, la figura juridica de instigacion no resultaba aplicable debido a que este no era solo un caso en el que 10s de- litos eran cometidos en cumplimiento de ordenes impartidas por agentes superiores en la cadena de mando. Por el contrario, para la Corte Suprema colornbiana, este fue un supuesto donde una plura- lidad de personas, actuando libremente y compartiendo la politica

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global de desbaratarniento del suministro de petroleo disefiada por el Comando Central, colaboraron en la cornision de 10s delitos de una manera coordinada y de acuerdo con el principio de division de funciones. Como corolario, 10s miembros del Comando Central, 10s comandantes de la Compafiia Cirnarron y 10s ejecutores materiales cpe atacaron el oleoducto en las cercanias de Machuca fueron todos considerados coautores en la medida en que formaron parte de la misma empresa criminal conjunta

La renuencia de la Corte Suprema colombiana en aplicar el con- cepto de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder ha sido parcialmente superada en la sentencia del23 de febrero de 2010, pronunciada en el caso contra el ex senador nacional Alvaro Alfonso Garcia Romero, cofundador del grupo paramilitar conocido como Frente Heroes de 10s Montes de Maria ("el grupo paramili- tar"). De acuerdo con la sentencia de la Corte Suprema colombiana, este grupo paramilitar era una estructura organizada de poder que operaba en el departamento de Sucre (a1 norte de Colombia). Po- seia una solida jerarquia vertical. Sus comandantes de mas alto ran- go disefiaron las operaciones especificas a desarrollar, y un arnplio numero de subordinados (su nurnero ascendio pronto a cientos) las llevo a cabo.

Las instrucciones impartidas por 10s comandantes de mas alto rango del grupo resultaban bastante detalladas, y la discreciona- lidad para ponerlas en rnarcha por parte de 10s comandantes des- plegados en el terreno y 10s rniembros del grupo de bajo rango fue muy limitada (rnucho rnenor que en algunas organizaciones de gue- rrilla como el Ejercito de Liberacion Nacional referido antes), Las nurnerosas reuniones y las continuas comunicaciones via radial y telefonica entabladas entre 10s comandantes de mas alto rango del grupo y sus comandantes desplegados en el terreno permitieron a 10s primeros mantener un estricto dominio y control sobre el desa- rrollo de las operaciones del grupo.

La estrategia final del grupo paramilitar se proponia asegurar el control militar del territorio en que operaban. Su cometido con- sistia en brindar proteccion a hombres de negocios y comerciantes de ganado en las areas donde ellos operaban, a cambia de obtener apoyo financiero, eliminar a cualquier persona que consideraran que cooperaba con la guerrilla, y usurpar el territorio abandonado por 10s numerosos pobladores que dejaron el area a causa de la pre- sencia del grupo paramilitar. En un estadio poster-ior, esta estrategia del grupo paramilitar se extendio a otros territorios, con el fin de conseguir el control de 10s gobiernos local y regional en las zonas en las que el grupo actuaba Para obtener este proposito, esta agru- pacion brindaba apoyo a sus candidatos en las elecciones locales y regionales.

La masacre de Macayepo fue una operacion realizada por varios cientos de miembros del grupo paramilitary consistio en el multiple homicidio que tuvo lugar entre el 9 y el 16 de octubre de 2000 en varios pueblos de la region Carmen de Bolivar (incluyendo Maca- yepo), asi como en el desplazamiento masivo de su poblacion. De

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acuerdo a la sentencia de la Corte Suprema colombiana, Garcia Ro- mero fue condenado como autor mediato de la masacre con base en 10s siguientes argumentos: 1) Garcia Romero tenia el control sobre el grupo paramilitar (que compartia con 10s comandantes militares de alto rango); 2) la masacre fue una actividad regular del grupo paramilitar que Garcia Romero cofundo, apoyo y aconsejo; y 3) el nombrado contribuyo a1 "exito" de la operacion asegurandose de que 10s batallones antiguerrilla de la Primera Brigada de Infanteria Naval fueran apartados por el comandante de la Brigada para asi evitar cualquier posible interferencia con 10s homicidios y el despla- zamiento masivo.

Sin embargo, conviene destacar que en esa sentencia del23 de febrero de 2010, la Corte Suprema colombiana condeno a Garcia Romero como instigador (y no como autor mediato) por ordenar el homicidio de Georgina Narvaez. Segun el maximo tribunal, Garcia Romero ordeno a miembros del grupo paramilitar asesinar a Geor- gina Narvhez el dia 21 de octubre de 1991, luego de que concluyera que, en virtud de 10s pobres resultados electorales obtenidos por "su candidato" (Morris Taboada), este solo podria convertirse en gobernador del departamento de Sucre si 10s votantes de la ciudad de San Onofre eran recontados, para lo que Georgina Narvaez (la mujer que habia tomado nota de 10s votos en el primer escruhnA tenia que ser asesinada, I B U F

Es precis0 seiialar que, a diferencia del homicidio de Georgina Narvaez, en el que Garcia Romero dio la orden de asesinar, en la masacre de Macayepo no se comprobo que Garcia Romero hubie- ra participado en el disefio de la operacibn (fue informado sobre la operacion por un asistente suyo de confianza, Joaquin Garcia, el dia anterior a su inicio) ni en su puesta en marcha (su contribution consistio en desplegar su influencia con el comandante de la Pri- mera Brigada de Infanteria Naval para evitar la interrupcion de la operacion por el Ejercito colombiano), Como resultado, puede verse que el enjuiciamiento de Garcia Romero por la Corte Suprema co- lombiana como instigador del homicidio de Georgina Narvaez se apoya en su enfoque tradiclonal del concept0 de instigacion, segun el cual tal figura es aplicable siempre que el acusado impulse a una persona que es plenamente responsable a cometer un delito sin in- tervenir durante su ejecucion. Sin embargo, este es precisamente el tipo de situacion que la figura de la autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder esta destinada a cubrir: cuando 10s agentes superiores utilizan la estructura de poder que dirigen para asegurar la comision de 10s delitos.

Asimismo, conforme la sentencia de la Corte Suprema colombia- na, la circunstancia de que Garcia Romero contribuyera durante la ejecucion de la operacion en el pueblo de Macayepo y las zonas aledaiias (evitando cualquier desbaratamiento de la operacion por parte del Ejercito colombiano), descartaba la aplicacion del concep- to de instigacion con relacion a su responsabilidad por la masacre de Macayepo. Solo entonces parece el tribunal colombiano haber- se decidido por la aplicacibn, por primera vez en su historia, del

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concepto de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder, en lugar del concepto de coautoria. Sin embargo, dicha apli- cacion se produjo en un caso donde el acusado, un politico nacional con mucha influencia en la pertinente area, 1) no dominaba com- pletamente a1 grupo paramilitar, puesto que compartia el dominio con sus comandantes militares; 2) no intervino en el disefio de la operacion; y 3) no parecia haber contribuido a su puesta en mar- cha. No parecen ser estas las circunstancias mas adecuadas para la aplicacion de la figura de autoria mediata a traves de estructuras organizadas de poder.

Pemi e La primera ocasion en la que 10s tribunales peruanos aplicaron el concepto de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder fue en la sentencia del 13 de octubre de 2006,17 pronunciada por la Sala Penal Nacional, que luego fue confirmada por la Sala Pe- nal de la Corte Suprema peruana en la sentencia del 14 de diciem- bre de 2001.1Tstas dos decisiones judiciales fueron dictadas en el proceso seguido contra Abimael Guzman, fundador y lider de la or- ganizacion guerrillera maoista Sendero Luminoso, y contra algunos de sus mas proximos colaboradores (su esposa Elena Iparraguirre, Laura Zambrano y Maria Pantoja) por la masacre de 69 campesinos, incluyendo 18 niiios, 11 mujeres y varios ancianos en la ciudad de Lucanamarca y sus alrededores, el dia 3 de abr~l de 1983.

Segun la Sala Penal Nacional, la direccion del Comite Perma- nente y el Comite Central de Sendero Luminoso tenian el control final sobre la forma en que la organizacion se conducia y poseian el poder y la autoridad de adoptar las medidas disciplinarias que creyeran necesarias en caso de incumplimiento de las instrucciones por 10s comites intermedios y las unidades zonales Sus miembros presidian las reuniones celebradas con 10s comites intermedios, 10s cuales mantenian a su vez contacto con las unidades zonales. Ope- raciones como las que tuvieron lugar en el area de Lucanamarca fueron solo emprendidas como consecuencia de la ejecucion de or- denes que reflejaban las decisiones tomadas por la direccion del Comite Permanente y 10s acuerdos concertados en el Comite Cen- tral Por lo tanto, era competencia de la direcdon del Comite Perma- nente y del Comite Central la toma de decisiones sobre las acciones especificas a adoptar en las areas locales y la deterrninacion de cuando, d6nde y contra quien esas operaciones debian llevarse a cabo.

Las ordenes fueron transmitidas por 10s miembros de la direc- cion del Comite Permanente y el Comite Central a 10s puntos de contacto en 10s comites intermedios, cuya funci6n consistia en el planeamiento de la logistics de la operacion. Posteriormente, 10s

17 Sentencla de la Sala Penal Nacional de Peru del 13 de octubre de 2006, caso

n o 560-03.

18 Sentencla de la Corte Suprema de Peru dell4 de dlciernbre de 2007, caso

n " 5385-200

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comites interme&os transmitieron instrucciones detalladas a las unidades desplegadas en el terreno sobre cbmo ejecutar las opera- ciones. En su funcion de presidente de la direction del Comite Per- manente, el Comite Central y el Buro Politico de Sendero Luminoso, Guzman tenia el dominio de la organizacion. Como consecuencia, fue condenado como autor mediato.

En la aplicacion del concepto de autoria mediata a traves de apa- ratos organizados de poder, la Sala Penal Nacional y la Corte Supre- ma de Justicia peruanas dejaron sentado que la definition de autor contenida en el articulo 100 del C6digo penal peruano de 1924 ("10s que tomaren parte en la ejecucion del delito") no excluia per se tal concepto. Ademas, la Corte Suprema puso de relieve que el men- cionado concepto habia sido acogido por el articulo 23 del nuevo Codigo penal de 1991, que define a 10s autores incluyendo a "aque- llos que cometen el delito de manera individual, a traves de otro o junto con otros".

La defensa de Guzman reclamo que el concepto de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder no podia ser aplicado, debido a que Sendero Luminoso no conformaba una or- ganizacion patrocinada por el Estado, y por tanto, sus miembros no tenian un deber de cumplir con las 6rdenes de la autoridad de Sen- d e r ~ Luminoso. Dicha circunstancia, a su mod0 de ver, impedia el traslado de responsabilidad hacia 10s eslabones mas altos en la je- rarquia de mando de la organizacion, Sin embargo, tanto la Sala Pe- nal Nacional como la Corte Suprema sefialaron que la aplicacion del concepto de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder nunca estuvo limitada a organizaciones subvencionadas por el Estado. Asi, para el propio Claus Roxin, tal concepto es principal- mente adecuado para todas las situaciones en que la organizacibn pertinente actfia fuera del orden legal.

Otro argument0 de la defensa de Guzman contra la aplicacion de la autoria mediata a1 caso se vinculo a la falta de verificacion del re- quisito de fungibilidad de 10s ejecutores materiales, dado que en el caso de Sendero Luminoso no se demostro que estos fueran miem- bros intercambiables. Para la defensa de Gusmhn, no cualquiera que haya revestido la calidad de miemrbro de Sendero Luminoso poseia las "habilidades necesarias" para asesinar con machete y hacha mediante las acciones de tajear bebes, mujeres y ancianos, tal como sucedio en Lucanamarca. En este contexto, el requisite de fungibilidad no dependia de cuhtos individuos se habian conver- tido en miembros formales de la organizacion, sino en cuantos de ellos poselan 10s conocimientos necesarios y la experiencia para ejecutar las operaciones en Lucanamarca. Dado que habia un es- caso nurnero de "miembros especializados" en Sendero Luminoso que pudiera realizar este tipo de acciones, la defensa mantuvo que Guzmhn carecia del dominio de 10s hilos de la organizacion, y que tarnpoco dominaba la voluntad de 10s ejecutores materiales de la masacre.

La Sala Penal Nacional rechaz6 10s argumentos de la defensa por- que, s e w sus magistrados, el dominio que Guzman ejercia sobre

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la voluntad de 10s ejecutores materiales no se basaba en la fungibi- lidad de 10s miembros de Sendero Luminoso. En efecto, las razones que pudieron conducir 10s discurpos originarios acerca de rehusar conformidad con las ordenes de 10s superiores pudieron, en princi- pio, tambikn ser compartidas por 10s otros miembros de la organi- zacion. En consecuencia, para la Sala Penal Nacional, la fungibilidad de 10s miembros de la organizacion solo aumentaba la probabilidad de que las 6rdenes fueran ejecutadas; no aseguraba la conformidad automatica con las brdenes. Desde el punto de vista de la Sala Pe- nal Nacional, era la actitud favorable de 10s ejecutores materiales de cumplir con las 6rdenes ilegales impartidas por 10s superiores, y no su naturaleza intercambiable, lo que proporcionaba el dominio de 10s superiores sobre la organizacion. En este contexto, se inscriben 10s primeros discursos iniciales acerca de que, ante el rechazo en el cumplimiento de las ordenes de 10s superiores, otros miembros de la organizacion 10s reemplazarian para llevarlas a cabo, debi- do a que muchos de sus miembros mostraban una actitud favorable hacia la ejecucion de dichas ordenes. Por tanto, mientras la fungi- bilidad de 10s ejecutores dentro de la organizacion solo aumentaba la probabilidad de que se terminase actuando de conformidad con lo ordenado por 10s superiores, el dominio que ejercian estos ulti- mos sobre la organizacion se basaba en la actitud favorable de sus miembros para el cumplimiento de sus ordenes. En consecuencia, segun la Sala Penal Nacional, el requisito clave para la aplicacion del concept0 de autoria mediata por estructuras organizadas de po- der es la existencia de este tipo de actitud entre 10s miembros de la organizacion pertinente. Requisito este que s e juzgo cumplido en el caso de Sendero Luminoso, puesto que sus miembros se encon- traban motivados ideologicamente, evidenciaban un elevado nivel de educacion politica y militar, y compartian una vision comun del Estado y la sociedad en general. En estas circunstancias, Guzman se aseguro de la comision de la masacre de Lucanamarca mediante la utilizacion de la estructura jerarquica de Sendero Luminoso, be- neficiandose de la buena disposicibn de sus miernbros para seguir las ordenes impartidas por su lider.

La Corte Suprema peruana discrepo en su anaisis del caso de la interpretacion de la Sala Penal Nacional, en el sentido de que esta subrayo que el dominio del superior sobre la organizacion esta- ba basado en su estructura jerarquica y en la fungibilidad de sus miembros. En consecuencia, para la Corte Suprema peruana, la na- turaleza fungible de 10s miembros de la organizacibn es un reque- rimiento clave en la figura juridica de autoria mediata. No obstante, a1 analizar la fungibilidad de 10s miembros de Sendero Luminoso, el maximo tribunal peruano se centro en la fungibilidad sucesiva de sus miembros, destacando que si un miembro de Sendero Lumino- so no cumplia con una orden impartida por la direction del Comite Permanente, otro miembro lo reemplazaria en ese cometido. Esto fue lo que, para la Corte Suprema, ocurrid con la orden de asesinar a Felipe Santiago Salaverry, quien fue ejecutado luego de seis inten- tos. El problema que plantea este enfoque esta dado por el hecho

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de que la mayoria de las organizaciones alcanzan un criterio de "fungibilidad sucesiva", lo cual se explica mediante la circunstancia de que siempre que uno de sus miembros se niegue a cumplir con una orden de un superior, invariablemente habra otro que pueda intentar ejecutarlo en un estadio posterior. Como consecuencia, este enfoque priva a1 "criterio de fungibilidad de algun valor como ele- mento que permita distinguir entre 10s casos en que 10s superiores poseen un dominio real sobre sus organizaciones y aquellos otros casos en que ellos no detentan tal dominio.lg

En su voto particular, el magistrado de la Corte Suprema de Jus- ticia peruana, Villa Stein, subrayo que el concepto de autoria me- diata a traves de aparatos organizados de poder no era aplicable a1 caso de Sendero Luminoso, fundamentado su opinion en las si- guientes razones: 1) Sendero Luminoso era una organizacion con un alto nivel de centralization y una rigida jerarquia consistente en una pequefia direccion del Comite PermanenteIComitB Central y numerosas unidades que operaban en el terreno de manera in- dependiente las unas de las otras (relacion horizontal); y 2) todos 10s miembros de la organizacion compartian una vision ideologica comun del Estado y la sociedad y actuaban segun una estrategia comun para obtener sus metas politicas. En estas circunstancias, se- gun el juez Villa Stein, ningun miembro de Sendero Luminoso tenia el dominio sobre las actividades criminales de la organizacion. Tal dominio era compartido por todos 10s miembros, quienes actuaban de una manera coordinada de acuerdo con el principio de division de funciones entre aquellos que planeaban las operaciones en la di- reccion del Comite Permanente y el Comite Central y aquellos otros que las llevaban a efecto materialmente en el terreno. Por esta ra- zon, en la opinion del juez Villa Stein, era preferible la aplicacion del concepto de coautoria basada en el dominio conjunto sobre la masacre de Lucanamarca.

A1 comentar el voto particular del juez, algunos juristas peruanos han sefialado que el fenomeno referido por el magistrado (el domi- nio colectivo sobre las actividades criminales de la organizacion por todos sus miembros, en la medida en que todos ellos compartian el mismo objetivo politico de dafiar la estructura social existente) justifica, en ultima instancia, la aplicacion de la figura de coautoria con relacion a1 crimen de pertenencia a una organizacion criminal.20 Sin embargo, estos autores rechazan la aplicacion del concepto de coautoria en lo referido a las operaciones especificas llevadas a cab0 por la organizacion pertinente, puesto que, en 10s supuestos de coautoria, la fase de ejecucion comienza simultAneamente para todos 10s coautores. Esto significaria que la fase de ejecuckjn co- menzaria con la expedicion de la orden por el superior consistente en llevar 3 cab0 la operacion, y 10s miembros de bajo rango de la

19 A la misma conclusibn llega I. me in^, "El caso peruano", en Imputaadn de crimenes de 10s subordinados a1 d~rigente: Un estudro cornparado, K. Ambos

(ed.), Temis, 2008, p. 144 (de ahora en adelante, Meini). 20 Meini, cit., nota 38, p. 146.

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organizacibn serian responsables por la tentativa, incluso si ellos se negaran a cumplir con la orden.zl

Con posteriorldad a1 caso Abimael Guzman, el concepto de au- toria mediata a traves de estructuras organizadas de poder ha sido aplicado por la Sala Especial de la Corte Suprema de Peni el 1 de abril de 2009, en la sentencia de condena a Alberto Fujimori por, entre otros, varios delitos contra la vida y detenciones ilegales per- petrados por grupos militares, paramilitares y organizaciones ci- viles con estructura de fuerzas policiales de seguridad, durante el lapso de su presidencia en el Gobierno del Peru entre 1991 y 2001.n De acuerdo con la sentencia de la Sala Penal Especial, el referido concepto era perfectamente compatible con el articulo 23 del Co- dig0 penal peruano de 1991 y resultaba aplicable al caso Fujimori, en razon de que se cumplian 10s tres requisitos exigidos: 1) la exis- tencia de una estructura organizada de poder controlada por el ex presidente Alberto Fujimori, la cual se hallaba jerarquicamente or- ganizada; 2) 10s ejecutores materiales eran miembros subordinados de tal estructura de poder y eran intercambiables; y 3) la estructura de poder controlada por Alberto Fujimori actuaba fuera de la ley (tanto desde el punto de vista del derecho nacional como del inter- national). La Corte Suprema de Justicia peruana, en su sentencia del 3 de junio de 2010, confirm6 el pronunciamiento de la Sala Penal Especial.

Los tribunales de justicia espafioles, si bien en ocasiones han remiti- do expresamente en sus sentencias a 10s argumentos que apoyan el concepto de autoria mediata a traves de estructuras organizadas de poder, han preferido basar sistematicamente sus decisiones en las figuras de la induccibn o instigacion y complicidad o cooperacibn n e c e ~ a r i a , ~ ~ figuras que tanto en el Cbdigo penal de 1913 como en el de 1995 tienen asignado el mismo marco penal que la autoria pro- piamente dicha, y, por tanto, que la autoria mediata.

Luego de la muerte del dictador espafiol Francisco Franco en el afio 1915, en Espafia ha habido solo un pufiado de casos donde 10s delitos pudieron haber sido cometidos a traves de estructuras organizadas de poder. Asi, en relacion con el intento de golpe de Estado de 23 de febrero de 1981, la Sala Penal del Tribunal Supremo Espafiol, en sentencia del22 de abril de 1983, consider0 que no era

21 Ibidem.

22 Sentencla de la Sala Penal Especlal de la G a t e Suprema del PerCl del 7

de abril d e 2009 en el expediente n o AV 18-2001 con respecto a 10s casos

Bamos Altos, La Cantuta y Sotanos del SIE Esta sentencla estb di-ponible

en Eh slguiente sit10 web: <http //wwwpj.gob.pe/CorteSuprema/spe/index. asp?opcion=de~alle~noticia&codigo=10409 >

23 Vkase, por ejemplo, la sentencia del Tribunal Superlor Espafiol del 2 d e

jul~o de 2004 (caso del atentado a1 supermercado Hipercor), del 1 de octubre

de 2004 Ccaso Scilingo) y deel 17 de julio de 2008 (caso del atentado a la Estaclon

Atocha)

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aplicable la figura de autoria mediata a traves de la utilizaclon de aparatos organizados de poder, debido a que tal concepto no era suficientemente conocido por la jurisprudencia espafiola en 10s co- mienzos de la decada de 1980.

Por otro lado, en ese tiempo, el Codigo Penal espafiol y el Cbdigo de Justicia Militar contenian varias disposiciones que se ocupaban especificamente de la responsabilidad penal de 10s comandantes militares implicados en un golpe de Estado.

En el denominado Caso Marey, juzgado por el Tribunal Supremo espaiiol, en sentencia de 28 julio de 1998, el ex ministro de Inte- rior y otros altos funcionarios de su ministerio fueron considerados responsables por el secuestro de un supuesto miembro de la or- ganizacion terrorista ETA. En este caso, la razon para no recurrir a la figura de la autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder result6 ser la consideracion del Tribunal Supremo espafiol de que el delito imputado (el secuestro de un supuesto miembro de ETA, Segundo Marey) h e un act0 aislado, y, por tanto, no habia teni- do lugar en el contexto de una actividad ilegal sistematica llevada a cab0 a traves de grupos que operaban a1 margen de la ley desde la organizacion misma del Estado.

Los tribunales de justicia espafioles pudieron haber recurrido a la figura de la autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder en 10s procesos seguidos contra individuos que supues- tamente ocupaban altos cargos en 10s eslabones de la organizacion terrorista ETA, por crimenes cometidos por sus subordinados dentro de la organizacion. No obstante, aunque s e puede observar la in- fluencia de tal concepto en 10s argumentos legales utilizados para justificar las condenas por induccion y complicidad necesaria, 10s tribunales de justicia espaiioles no lo han aplicado expresamente n u n ~ a . ~ ~

Finalmente, la decision del 10 de diciembre de 1998, de proce- sar a1 general Augusto Pinochet, dictada por el juez de ihstruccion espaiiol Baltasar Garzon, resulta otro ejemplo de este modelo, En esa decision se imput6 al general Pinochet por crimenes de lesa humanidad, tortura y genocidio perpetrados por el aparato estatal chileno durante su reqmen autoritario. Aunque 10s argumentos alli contenidos e s t h claramente vinculados a1 concepto de autoria me- diata a traves de aparatos organizados de poder, tal figura juridica no aparece expresamente mencionada en la decision judicial.

- - .

24 Vkase la sentencia del 2 de julio de 2004 y la del22 de febrero de 2001

del Tzibunal Supremo Espaiiol. Sewn Mufioz C o d e ("Problemas de autoria

y participacion en el derecho penal ecconbmico, a ~cbmo lrnputar a titu40

de autores a las personas que, sin realizar acclones ejecutivas, deciden

la real~acion de un delito en el Arnb~to de la delincuenaia economica

empresarial?", Revista Penal 2002, pp. 14 y ss.), es posible tambikn aplicar el

concepto de autoria mediata a travbs de aparam organizados &I poder a 10s

lidenis de orgamzaciones terrorxstas y cornandantes de secaiones terroristas,

sin perjuicio del carkcter nacional (ETA) o international (A1 Qaeda) de Ia

organizacibn.

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U=~-Y La sentencia del Y cle IeDrerO de 2010 del Tribunal Penal de Uruguay n." 12"ondeno a Juan Maria Bordaberry Arocena, ex presidente de Uruguay desde 1912 a 1976, como 1) autor direct0 del delito de ata- que contra el orden constitucional (la firma de Bordaberry fue nece- saria para promulgar el Decreto n." 4641913 del21 de junio de 1913 mediante el cual el Parlamento fue disuelto); y 2) coautor de nueve hechos de desaparicion forzada de personas y dos homicidlos por razones politicas.

Segun el Tribunal, Bordaberry no poseia el dominio efectivo so- bre las operaciones represivas ejecutadas por las Fuerzas Armadas uruguayas entre 1973 y 1976 (period0 durante el cual alrededor de una quincuagesima parte de 10s ciudadanos uruguayos fueron de- tenidos o interrogados, convirtiendo a Uruguay en el pais latmoa- mericano con mayor porcentaje de detenciones politicas de aquel entonces) debido a que desde el 9 de febrero de 1913 en adelante las Fuerzas Armadas uruguayas asumieron unilateralmente la lucha contra la subversion, y Bordaberry no tuvo influencia en su disefio o implernentacion.

Los medios (detenciones prolongadas y tortura, seguidas por desaparicion forzada y homicidio), a traves de 10s cuales la campa- fia antisubversiva se ejecuto, fueron decididos por las Fuerzas Ar- madas uruguayas, no por Bordaberry. Como resultado, el Tribunal no discutio en su sentencia si el concept0 de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder podia ser aplicado.

El Tribunal se centro, en cambio, en la figura de coautoria, puesto que Bordaberry apoyo las politicas represivas de las Fuer- zas Armadas uruguayas, a partir de la circunstancia probada de que estas filtimas buscaban obtener un objetivo que era comparti- do por Bordaberry, por 10s comandantes de mas alto rango de las Fuerzas Armadas, y por 10s autores directos de 10s crimenes; este objetivo no era otro que la persecucion y eliminacion de 10s gru- pos politicos considerados peligrosos para la seguridad nacional. Por lo que respecta a Bordaberry, este no solo no cumplio con su deber de adoptar las medidas necesarias para prevenir y detener la comision de delitos, de solicitar su investigacion y de presentar las correspondientes denuncias penales en las instituciones judi- ciales competentes (como presidente de la Republics de Uruguay tenia autoridad suficiente para adoptar esas medidas a traves de sus ministros), sino que, por el contrario, apoyo la campafia global antisubversiva De hecho, segun la sentencia del Tribunal Penal de Uruguay, las politicas represivas disefiadas e implementadas por las Fuerzas Armadas no podrian haber sido llevadas a cab0

25 Caso n.O IUE 1-60812003

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durante aquellos afios sin el apoyo del entonces presidente de la Republica de Uri

3. Conclusi6n En el momento en que Roxin definio el concepto de autoria media- ta a traves de aparatos organizados de poder por primera vez, en 1963, el autor tenia en mente un capitulo de la historia de siglo xX particularmente infortunado y unico: el Holocausto y la red de cam- pos de concentration y exterminio construidos por 10s nazis. En la cumbre de la organizacion nazi s'e encontraban Adolf Hitler y Hein- rich Himmler.

Sin embargo, el funcionamiento efectivo de la maquinaria nazi requirio la acci6n coordinada de miles de miembros adicionales, quienes, de acuerdo con la estricta cadena de mando, operaban en diferentes niveles de la organizacion nazi. El concepto de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder pus0 en cues- tion fuertemente aquellos intentos por describir la responsabilidad penal de lideres politicos y militares del regimen nazi, asi como la de 10s superiores en la escala de mando intermedia de dicha orga- nizacion, como meros accesorios de 10s crimenes cometidos en la ejecucion de la infame Solution Final.

A pesar de la inicial renuencia de la jurisprudencia nacional e internacional a recurrir a1 concepto de autoria mediata a traves de aparatos organizados de poder, la situacibn ha camblado a traves del tiempo. Este es el resultado de la creciente perception de que la aplicacion a este tip0 de casos de las figuras juridicas de responsa- bilidad accesoria de la participaclon, como la instigacion (o induc- cion) y la cooperacion necesaria (o complicidad necesaria), aunque ciertamente no tenga ninguna repercusion en la pena finalmente aplicable, relega a 10s superiores a un papel secundario que no se corresponde realmente con su relevancia real.

Aunque 10s tribunales de justicia de America Latina y Espafia se mantienen, hasta cierto punto, divididos sobre si en este tip0 de ca- sos se ha de recurrir a1 concepto de autoria mediata a traves de apa- ratos organizados de poder o a1 concepto de coautoria por dominio funcional, 10s supuestos analizados en el presente articulo muestran como el concepto de autoria mediata se ha convertido hoy en dia en una figura juridica bdsica para la definicion de la responsabilidad penal de altos lideres politicos y comandantes militares que utilizan las organizaciones que dirigen para asegurar la cornision de crime- nes internacionales. & 26 Con cita de Welzel y Baclgalupo, el Tribunal resalto que la aplicacih del

concepto de coautoria requiere que la contribuclon del acusado 1) tenga lugar

durante la fase de ejecuc16n del delito; y 2) sea esencial debido a que, sln ella,

el delrto no podria haberse cometido Solo sl estos requisltos s e curnplen,

puede afirmarse que el acusado ejercia un codominlo (compartido con 10s

otros coautores) sobre la comisibn del delito y, por tanto, decidio avanzar en su

conclus~bn.

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Francisco Muiioz Conde es catedratico de Derecho Penal en la Univer- sidad Pablo de Olavide de Sevilla. Doctor honoris causa por la Universidad Autonoma de Asunclon (Paraguay), Lusiadas de Lisboa, Universidad Cato- lica de Porto Alegre (Brasil), Universidad de Castilla La Mancha (Espafia) y Universidad de Guanajuato (Mexico), asi como profesor honorario de las universidades Externado de Bogota (Colombia), de Lima (Peru) y Gua- najuato (Mexico). Es autor de mas de 30 libros y 200 articulos y capitulos de obras colectlvas.

Hector Olasolo Alonso es catedratico de Derecho Penal Internacional y director de la Clinica Juridica sobre Conflicto Armado, Derechos Humanos y Justicia Internacional de la Universidad de Utrecht Letrado de la Corte Penal Internacional(2004-2010); miembro de la Fiscalia del Tribunal Penal para la ex Yugoslavia (2002-2004) y miembro de la Delegaci6n Espafiola en la Comision Preparatorla de la Corte Penal Internacional(1999-2002). Entre sus mas recientes publicaciones destaca la siguiente monografia: Estud~os de Derecho Penal Internacional, Instituto Nacional de las Ciencias Penales de Mexico (Inacipe), 2010.

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GLOBAL

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Un analisis de co volucion

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