NO HAY QUE ESPERAR EL TREN,

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-pago de cuotas por inscrip- ción y raciones . -estados de cuenta y balanc e -sancione s Funcionamiento del comedo r Todas las socias de l comedor están obligadas a participar en forma rotativa . Se organizan turnos de tra- bajo para las tareas que ha y que desempeñar : Compra d e víveres y hacer el menú ; co- cinar ; reparto de raciones ; limpieza y registro del me - nú y del gasto diario . Los turnos y tareas s e distribuyen de acuerdo al nú - mero de socias y días qu e el comedor . da servicio . Problemas que se presenta n La organización de u n comedor no es fácil . Suele n presentarse numerosos pro- blemas, pero ninguno imposi- ble de enfrentar . Algunos de los proble- mas más comunes en est e tipo de experiencias son : *En el hogar : -la incomprensión y oposi- ción del esposo a la parti- cipación de la mujer en la s actividades del comedor . *En las relaciones internas : -generalmente, hay un gru- po de socias que no cumple n con sus obligaciones y e l trabajo se recarga en las so- cias que cumplen responsa- blemente . s compras y, cocina . . -actitudes autoritarias d e la directiva . -problemas personales entr e las socias . *En el local y los recursos : -un local inadecuado pued e ser causa de accidentes o de fallas en el servicio . *En la economía : -cuando algunas socias tie- nen dificultades económica s y se atrasan en el pago d e sus raciones . *En la salud y en la educa- ción : -enfermedad de alguna soci a o sus familiares . -si las socias tienen niño s pequeños, o descuida su ate n ción para ir al comedor o se lo lleva con peligro d e algún accidente . *En la comunidad : -cuando el comedor est á comenzando, muchas veces , los vecinos hacen críticas , algunos se oponen y otro s hacen burlas. Hay que estar clara s que éstos y otros problema s que puedan presentarse tie- nen fácil solución si las so- cias están unidas, participa n activamente y hay democra- cia en toma de decisiones . Beneficios que se pueden lo- grar participado en estas expe- riencias dicen que : * se logra mejorar l a alimen-tación de las familias, y a que comprando juntas con - siguen mejores precios y pue- den mejorar la cantidad y calidad de los alimentos . * como las socias ya no tie- nen que cocinar todos lo s días tienen más tiempo libr e * aprenden a planificar jun- tas actividades que contribu- yen al bienestar común . * logran seguridad y confian- za en sí mismas y aprende n a valorar la solidaridad . * se valora el trabajo de co- cinar . * mejoran las relaciones fa- miliares . * se ayuda a las socias cuan - do tienen problemas econó- micos o familiares . * logran capacitarse por me - dio de cursos, charlas, so- bre organización, salud, alfa- betización, la familia y otro s Así pues, es una expe- riencia que además de se r una respuesta concreta y co- munitaria a la crisis econó- mica, es un medio de orga- nización que ayuda a la mu- jer a comunicarse, a refle- xionar, a participar, a deci- dir y a trabajar en grupo . Aprende a valorarse com o persona con iguales derecho s y a defenderlos . Las mujeres que ha n 14

Transcript of NO HAY QUE ESPERAR EL TREN,

-pago de cuotas por inscrip-ción y raciones.-estados de cuenta y balanc e-sanciones

Funcionamiento del comedor

Todas las socias de lcomedor están obligadas aparticipar en forma rotativa .Se organizan turnos de tra-bajo para las tareas que ha yque desempeñar: Compra devíveres y hacer el menú; co-cinar; reparto de raciones ;limpieza y registro del me -

nú y del gasto diario .Los turnos y tareas se

distribuyen de acuerdo al nú-mero de socias y días que

el comedor . da servicio.

Problemas que se presentan

La organización de uncomedor no es fácil . Suelenpresentarse numerosos pro-blemas, pero ninguno imposi-ble de enfrentar .

Algunos de los proble-mas más comunes en estetipo de experiencias son :

*En el hogar :-la incomprensión y oposi-

ción del esposo a la parti-cipación de la mujer en la sactividades del comedor.*En las relaciones internas :-generalmente, hay un gru-

po de socias que no cumple ncon sus obligaciones y eltrabajo se recarga en las so-cias que cumplen responsa-blemente .

s compras y, cocina . .

-actitudes autoritarias dela directiva.-problemas personales entr e

las socias .*En el local y los recursos :-un local inadecuado puede

ser causa de accidentes ode fallas en el servicio .*En la economía :-cuando algunas socias tie-

nen dificultades económica sy se atrasan en el pago desus raciones .*En la salud y en la educa-

ción :-enfermedad de alguna soci a

o sus familiares .-si las socias tienen niño s

pequeños, o descuida su ate n

ción para ir al comedor ose lo lleva con peligro dealgún accidente.*En la comunidad :-cuando el comedor está

comenzando, muchas veces ,los vecinos hacen críticas,algunos se oponen y otroshacen burlas.

Hay que estar clarasque éstos y otros problema sque puedan presentarse tie-nen fácil solución si las so-cias están unidas, participa nactivamente y hay democra-cia en lá toma de decisiones .

Beneficios que se pueden lo-grar

participado en estas expe-riencias dicen que :* se logra mejorar l a alimen-tación

de las familias, yaque comprando juntas con -siguen mejores precios y pue-den mejorar la cantidad ycalidad de los alimentos .* como las socias ya no tie-nen que cocinar todos lo sdías tienen más tiempo libre* aprenden a planificar jun-tas actividades que contribu-yen al bienestar común .

* logran seguridad y confian-za en sí mismas y aprendena valorar la solidaridad .* se valora el trabajo de co-cinar.* mejoran las relaciones fa-miliares .* se ayuda a las socias cuan -do tienen problemas econó-micos o familiares.* logran capacitarse por me-dio de cursos, charlas, so-bre organización, salud, alfa-betización, la familia y otro s

Así pues, es una expe-riencia que además de se runa respuesta concreta y co-munitaria a la crisis econó-mica, es un medio de orga-nización que ayuda a la mu-jer a comunicarse, a refle-xionar, a participar, a deci-dir y a trabajar en grupo .Aprende a valorarse com opersona con iguales derecho sy a defenderlos.Las mujeres que han

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NO HAY QUE ESPERAR EL TREN ,

HAY QUE HACER

QUE EL TREN LLEGUE_Nelva Reyes_

Clara González de Berhinger, nace e n1900 en Remedios, Provincia de Chiriquí ,maestra, más tarde abogada. Fundadora de lPartido Feminista Nacional, incansable lu-chadora por los derechos de la mujer, e in-cluso hoy a los 85 años de edad nos dice :"quiero volver a comenzar, a despertar l aconciencia de la mujer" . Fue la primeraJuez del Tribunal Tutelar de Menores. Es-cribió varios libros, entre ellos mencionamos"A los 25 años del Instituto Nacional% sutesis de graduación: "La Mujer ante el De-recho Panameño" y "La Instrucción Cívicaen las Escuelas Secundarias de Panamá" .

Entrevista a Clara González de Berhinger

Para conseguir ]os derechos hubo que luchar

"Siempre la participación de la mujerha sido un poco objetada por los hombres ,por la competencia natural, pero en Panam áno fue tan dura la lucha . Pero para conse-guir los derechos legalmente, sí hubo qu eluchar, para eso se estableció primero e lgrupo feminista "Renovación" y después for-mamos el Partido Nacional Feminista, co npersonería jurídica y todo, para que pudie-ra participar en comicios . Pero no pudimosparticipar, porque a pesar de que la Consti-tución nunca hizo distinción entre el hombr ey la mujer, en cuanto a los derechos ciuda-danos de todas maneras hubo discriminació ny se interpretó que la Constitución decíaciudadanos para referirse a los hombres na-da más. Las mujeres decíamos que se refe-ría a los dos y hubo que luchar para quese reconociera de una manera explícita .

La mujer no podía ser tutora ni ejercer l apatria potestad

"E1 Partido Feminista tenía un progra-ma de 20 puntos, que se referían en primerlugar a los derechos ciudadanos de la mu-jer, después a los derechos del niño y e ngeneral, a la familia. El programa fue mu ycomentado por la prensa extranjera, porqu edecían que era muy completo y así fuimo sluchando, algunas veces el partido tenía cin-co adherentes, otras, doscientas. En el inte-

rior era muy difícil por la distancia, perosiempre hubo en algunos lugares dependen-cias del Partido Feminista. Siempre se hiz oalgo y se consiguieron, por ejemplo, en 192 5reformas civiles. Porque había varias inca-pacidades: la mujer no podía ser tutora, si -no cuando era abuela; no podía ejercer l apatria potestad al igual que el hombre, aú ncuando la Constitución de 1904 hacía dife-rencia, pero de todas maneras se entendí aque no incluía a la mujer, hasta la Consti-tución de 1946 cuando entró todo. Con unaley que reformó el Código Civil y el Códi-go Judicial, incluimos todas las reforma sreferentes a la mujer y eso se consiguió ,pero no el voto .

La mujer tampoco podía ser testigo ni abo-gada

"Entre las actividades, la recolecciónde firmas por nuestros derechos era cadarato. La membresía del partido era mu ymo-vible ya que unas mujeres querían ser fe-meninas, pero no feministas. Algunas creíanque ser feministas era ser marimacha. Detodas maneras siempre se consiguió lo quequeríamos, lo más difícil eran las reforma sciviles y esas se consiguieron. La patria po-testad, la tutela, el ser testigo en los tes-tamentos; la mujer no podía ser testigo, n itampoco podía ejercer la profesión de abo-gada, hubo una ley especial para eso . Lamujer tenía que ejercer la abogacía por in-termedio de hombres, pero no de una mane-ra abierta .

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Así financiamos el Partido Feminista

Algunas veces las personas contribuíancon algo, personas que eran feministas ypodían, pero no querían aparecer abierta -mente apoyaban dando algún dinero par apagar el local y esas cosas. Además tenía-mos una cuota de cincuenta centavos, quealgunas pagaban y otras no, pero siempreentraba algo para financiar el local, yo, po rejemplo, todos los gastos me los financi é

de mi sueldecito .

Iba de casa en casa y hablaba en los patios

Resulta que entre las mujeres del Par-tido Feminista había muchas mujeres anal-fabetas, que respondieron más fácilmente .Yo iba de casa en casa y hablaba en lospatios y entonces ellas se adherían, muchasde ellas eran muy ignorantes y analfabetas .Luego, con un grupo de maestras, establecíla Escuela de Cultura Femenina, estuv ofuncionando siete años, me tuve que ir par aEstados Unidos y quedó Sara Sotillo de di-

rectora. Más tarde, el gobierno negó el lo-

cal, que era el Hospital viejo del Santo To-más, ahí cogimos unos salones pero despuésnos dijeron que lo iban a tumbar, lo cua l

fue mentira. El Sr. Newman era Inspector

General y no era simpatizante, les quit óel local, pero el Partido Feminista siguióhasta lo último .

En el Partido Feminista, algunas participa -ban 'bajo cuerda '

"Realizábamos conferencias por toda spartes, sobre el feminismo y los derechosde la mujer, para despertar la concienci afemenina, ya que muchas de ellas se queda-ban pasmadas al saber que podían hacer ta lo cual cosa y que la Constitución se lo s

permitía, pero que parecía que no tenía n

ninguna posibilidad . Eso fue haciendo con-

ciencia, muchas no pertenecían al PartidoFeminista pero simpatizaban y a veces has-ta contribuían, otras no querían aparece rporque sus maridos no querían y entonces

lo hacían 'bajo cuerda' . Pero si hubo una

membresía bastante grande, también la hub oen el interior. En Las Tablas, teníamos bue-nas líderes: la Sra. Norberta de Tejada, Ma -ría González, María de jesús Díaz; en Co-lón, teníamos una buena célula, en Santia-go, tuvimos una señora muy activa, la Sra .de Pinilla; en Los Santos, muchas señorita s16

participaron en el Partido Feminista; enChitré, tuvimos las Juliao; en Chiriqui, fuedonde menos tuvimos como yo no podía i rhasta allá, después con la Srita. MaríaOlimpia de Obaldia tuvimos contacto y pu -dimos establecer allá una buena célula ; enBocas del Toro, a pesar de que no teníamosa nadie, se formó un grupo, que como n otenían mucha orientación había que estarla smotivando por cartas .

La revista 'Orientación Feminista '

Teníamos una revista que se llamaba'Orientación

Feminista',

salieron cinco

nú-

meros,

a

partir

de

1923 . En

esta

revistaparticipamos

las

dirigentes del Partido Fe-minista .

Había

indiferencia

y burla,

muchosmaridos se oponían, pero hubo mujeres muyluchadoras

como

Lida

de Crespo,

Pastorade

Sousa,

Linda

Smart, Felicia

Santizo,Carmen Yánez y muchas más que trabaja -mos en la revista mientras luchábamos por

nuestros derechos .

Los liberales se oponían a nuestra lucha

Los liberales, cosa rara, eran opuestosal voto de la mujer y los conservadore seran los partidarios, basados en aquella cos ade que la mujer es el instrumento de loscuras. Por consiguiente, los conservadore sapoyaban el voto femenino, porque los libe-rales decían que temían el voto de la muje rporque quienes iban a aprovecharse eran lo scuras y los conservadores están con ellosy los curas van a conseguir todo con lasmujeres y van a meter la religión en toda s

partes. Así es que nosotras teníamos má spartidarios conservadores que liberales a lprincipio. Allí el líder de todo eso fue Al-fredo Alemán, él se pasó noches enteraspara conseguir el voto . Teníamos una horaen la noche en la radio donde hablábamo ssobre los derechos de la mujer .

Llenábamos las graderías de la Asamblea

Víctor Navas fue el que presentó l aley del voto de la mujer, era del Partid oRenovador, al que pertenecí también. Al

final no hubo tantos oponentes como al pri ncipio, en 1923. Como era una cosa nueva ,siempre las innovaciones traen oposición yobjeciones. Pero como ya estaba en Améri-ca el movimiento por el voto, servía de

ejemplo que en algunos países las mujere svotaban, pero no en muchos, de todas ma-neras eso nos servía .

Nosotras llenábamos las graderías, to -das las mujeres íbamos a la Asamblea ,aplaudiendo a quienes se manifestaban d eacuerdo y silbando y abucheando a los quese oponían.

El proceso de nuestra lucha

Primero fue el grupo 'Renovación', porque había un grupo de hombres que se lla-mó 'Renovación Social', cuyo líder era Car-los Sucre . Era un grupo progresista y dis-puesto a conseguir reformas para Panamá .Entonces nosotras formamos el grupo femi-nista 'Renovación', casi paralelo, y con es ocomenzamos . Después, como la Constitució ndecía que para constituir un partido políti-co tenía que haber una convención, enton-ces yo fui hasta donde me lo permitiero nmis realitos . Así, de pueblo en pueblo, d eciudad en ciudad, adonde pude, para esta-blecer células del Partido Feminista y ha-cer luego la Convención y estar dentro dela ley como partido político . Por eso fueque entonces, después de haber tenido va-rios centros, se pudo hacer un Congreso Fe-minista, elegimos de Presidenta a LindaSmart, de Colón, una mujer muy competen -te .

Entonces, por medio de esa conven-ción, se fundó el Partido Feminista, com-pletamente legal, ya que hubo delegados deLos Santos, Las Tablas, Colón y otros luga-res, lo suficiente como para llamarse Con-vención Nacional . El primer Congreso Femi-nista Nacional .

El arma principal fue la burla

El Partido Feminista fue un verdader opartido político, no pudimos hacer muchoporque verdaderamente no teníamos ambien-te. Las mujeres eran flojas al no resisti rla burla. El arma principal fue la burla . Seburlaban, nos decían: 'arriba las faldas yabajo los pantalones' . ¡Qué inmoralidad másgrande que pudo verse! El Partido Feminis-ta era de la gente pobre, por eso más bienera de las mujeres del pueblo casi todas ,con pocas excepciones como Elida de Cres-po que siempre fue muy fiel .

Surge la Union Nacional de Mujeres

Después, el Partido Nacional Feminista

se convirtió en la Unión Nacional de Muje-res, porque así tenía menos resistencia . Er ael Partido Nacional Feminista, pero co nnuevos elementos y con nuevo nombre, hub omás confianza, diríamos .

CLARA GONZÁLEZ DE BEHRINGE R

La emancipación no es el voto, sino el se rlibre e independiente

"La verdadera emancipación de la mu-jer no está en que a uno le den el voto .Sino que la mujer se sienta un ser libre eindependiente y ahí está la cuestión . Había-mos conseguido lo más difícil pero la otr aparte, la transformación de la mujer, er ala que más nos interesaba . Que la mujerse sintiera ciudadana, que ellas se sintiera ncon el derecho de decir que somos igualesa los hombres (expresa sonriente) ¡Ave Ma-ría purísima!, algunas le tenían miedo a l aiglesia, porque creían que los curas no que -rían.

Estoy viendo que hay que volver a comen -zar la lucha

Yo digo que otra vez estamos comen-zando, veo que las mujeres no desempeña nninguna función importante. Vea usted e lgabinete ¿cuántas mujeres tiene el gabine-te? ¿cuántas mujeres hay en el gobierno,en posiciones verdaderamente importante sy de dirección?. Así es que tenemos quevolver a comenzar la lucha del feminismo,

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como si estuviéramos en 1922. Eso es loque yo estoy viendo ahora . Yo creo que de-bemos volver a tener militancia, si, habla-mos ganado bastante, se ha perdido por de-sidia. Porque unas cuantas tienen la suert ede tener buenos puestos, ellas están encan-tadas y no saben que las demás necesita ny que no es asunto de personas, sino e sasunto de principios .

En ninguna parte se consider averdaderamente a la mujer, cuando le danuna cosa es porque tiene relaciones perso-nales con el fulano y no por su cualida dde mujer. Ahora mismo estoy viendo qu eestamos en un momento completamente re-tardatario en cuanto a la participación dela mujer en la vida pública . Y que la mujerno se interesa tampoco. Porque unas sonmaestras, otras profesoras, como si eso fue -se suficiente. La participación ciudadan aes una cosa más amplia que el ejercer unaprofesión y ganar plata para sí misma y ya .Yo creo que hay que comenzar la lucha fe-minista, la lucha por los derechos de l amujer y su participación completa . No heencontrado un gobierno que reconozca qu ela mujer es un ser con iguales derechos queel hombre .

La participación ciudadan a

es una cosa más ampli a

que el ejercer una profesión

y ganar plata para si misma .

Lo que cada una ha tenido, ha sid ocon el sudor de su frente . Fíjese, yo, puestopúblico no he tenido ninguno verdaderamen-te importante, sólo el de juez de Menore sy eso porque yo me lo trabajé . En EstadosUnidos estudié toda la cuestión de los me-nores y a mi regreso con Víctor Navas yotras gentes metimos en la Asamblea l odel Tribunal Tutelar de Menores, si no n ieso. Yo no he encontrado un gobierno ver-daderamente progresista en el sentido d ereconocer que la mujer es un ser con lo smismos derechos que el hombre . La mujer

preparada vale tanto como un hombre pre-parado; no estoy diciendo, por ejemplo, queuna mujer no preparada sea igual a u nhombre preparado, como no es igual unhombre ignorante a un hombre preparado .Pero eso que de todas maneras los hom-bres son los que tienen la ventaja y la smujeres nada. . Que las que consiguen alg oes por su influencia personal, por sus rela-ciones personales con el poderoso, nadamás. Y ¿qué hay de las demás que tam-bién valen?

No hay que esperar el tren, hay que hace rque el tren llegu e

"Yo digo siempre que la mujer se pa-rece a una persona que está esperando e nel andén al tren, esperando a que llegu ey el tren no llega y no puede hacer nad aporque el tren no ha llegado . Hay que ha-cer que el tren llegue.

Las mujeres están muy convencidasque no necesitan nada, pero es que hay u ngrupo de mujeres que por su posición per-sonal, social, por sus relaciones políticascon los poderosos lo tienen todo, pero nose acuerdan del montón de mujeres que es-tán sufriendo, toda la cantidad de mujere ssolteras que están luchando con los hijos ,los hombres las abandonan y ellas sigue nluchando sin aflojar. Esas mujeres nadie la svoltea a ver .

Cuando yo hablaba de estas cosas enaquel tiempo, las 'señoras de Catedral', queyo las llamaba así (equivalente hoy a lo sbarrios del Cangrejo, Altos del Golf, Paiti-lla), decían que lo que yo estaba procla-mando era el amor libre . Las pobres no sa-bían ni qué era el amor libre . Decían queyo hacía reuniones de sirvientas y les decía'no sean tontas, ustedes son unas explota -das por las patronas ; las patronas les robana ustedes su trabajo y no les pagan másque una miserable suma, róbenle lo qu epuedan, vénguense de ellas' ¡Qué cosa másfalsa! Yo hacía reuniones para todas, peroasí le decían las 'señoras de Catedral' a lArzobispo Arrieta.

Yo decía que tenía a todas las seño-ronas de Catedral (donde estaba concentra-da toda la burguesía en ese entonces) com oenemigas mías y decía que me la teníanvelada, ya que cómo se les había ocurridolevantarme falsos, puesto que yo no les de -cía a las mujeres que robaran, sí les decíacómo reclamar sus derechos '

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MUJERES ASALARIADAS

Hemos recibido dos artículos sobre estetema, por considerar que se complementan,pero plantean aspectos diferentes, decidimosincluir los dos en "Mujeres, Adelante% par aque tengamos oportunidad de ampliar nuestr ainformación sobre el trabajo remunerado delas mujeres en Panamá .

OCUPACION DE LA MUJER EN PANAMA

Dilia Reyes_

Las mujeres panameñas, como toda slas mujeres del mundo, están ligadas a unaactividad, sea ésta a nivel doméstico o re-

munerado . Es por ello, que si bien puede ha-cerse una clasificación de la ocupación dela mujer, no es menos cierto que ésta n opuede excluir el trabajo doméstico (no remu-nerado) y de quienes venden su cuerpo para

percibir ingresos. Ambas no se reflejan e nlas estadísticas ocupacionales, la primer aporque es una condición, no una ocupació n

y la segunda porque su caracterización nopermite presentar estadísticas .

Al referirnos a la ocupación esquema-tizada, encontramos que en Panamá la pobla-ción mayor de 10 años de edad comprende:

1,317,855 personas, de las cuales el 50 .4%

(663,665) son hombres y el 49 .6% (654,190)

son mujeres. De esta población mayor de 10años de edad en la República de Panamá ,encontramos que: 500,672 personas estánocupadas en alguna actividad específica, delo que se desprende que el 73% (366,538) so n

hombres; mientras que el 27% (134,134) so nmujeres, obsérvese la marcada diferencia en

términos de población ocupada por sexo . (1 )Al analizar estos datos en función de l

área y ocupación de esta población, encon-tramos como, de manera significativa, se

agrupan las mujeres en algunas ramas de ac-tividad, tales como: empleados de oficina yocupaciones afines, agrupando el 66 .8% de l

total de las personas afiliadas en esta ocupa-ción; en la categoría de trabajadores en ser-

vicios personales y en ocupaciones afines ,las mujeres suman el 54 .7;6 de la misma;en la categoría de profesionales técnicos y

personas en ocupaciones afines, concentra n

el 52%. Por otra parte observamos que e ncategorías como Gerentes, Administradores

y funcionarios de categorías directivas, sot orepresentan el 18 .9% de este total .

Las tres categorías inicialmente señala-das nos permiten indicar hacia qué rama deactividad se orienta la ocupación de la muje rpanameña.

Es importante observar hacia donde seorienta la ocupación específica de la muje ren Panamá, en lo que podemos señalar l osiguiente: existen 79 clasificaciones de ocu-paciones en las que actualmente está incor-porada la mujer panameña, de las cuales se-ñalamos las cinco más relevantes :

Ocupación

Número Porc .

1. Cocineros, sirvientes ycriados del servici o

doméstico .

24,759 18.4 %

2. Secretarias, mecanógra -fos, taquígrafos y afines 19,934 14.9 %

3. Profesores y maestros

15,548 11 .6 %4. Dependientes de tiendas

y vendedores ambulantes

9,269 6.9 %5. Otros empleados de ofi -

cina y ocupaciones afines 7,252 5 .4 %

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Las cifras anteriores nos muestran qu elas cinco clasificaciones mencionadas agru-pan el 57 .2 % de las mujeres ocupadas enla República .

A lo anterior hay que añadir que lamujer panameña se ha incorporado en e lmercado de trabajo a diversas ocupaciones,por lo que vale señalar que hoy por hoy e nPanamá hay mujeres trabajando como: piloto,mecánico de vuelo y navegante de aviación ;cazadores tramperos y ocupaciones afines ;fontaneros, montadores de tuberías, soldado-res y montadores de estructuras metálicas ,obreros y jornaleros en minas y carreteras ,son éstas entre otras ocupaciones que po rsus características siempre fueron propia sde los hombres; sin embargo, hoy las estadís-ticas nos muestran cómo la mujer ante lanecesidad de desarrollar una actividad qu ele permita una remuneración económica, s eha ido incorporando a las diferentes activida-des posibles que brinda el mercado de traba -jo .

TRABAJADORAS DE 'CUELLO ROSADO'

Carmen Quintero

En la medida en que se ha avanzadoen la mecanización del trabajo se ha produ-cido una mayor segregación de los empleos

de acuerdo al sexo, y el salario de la muje rha tendido a ser más bajo que el del hom-bre, fenómeno que se inicia a finales del si-glo XIX. El uso de maquinarias amplió la di -visión del trabajo, simplificó y rutinizó la stareas, demandando una mayor cantidad detrabajadores no calificados lo cual ha sidoasociado con el empleo de mujeres . De estamanera, desde el punto de vista del obrerocalificado desplazado por la mecanización ,la feminización de la fuerza de trabajo sig-nifica la devaluación de su trabajo .

El trabajo de oficina se reorganiza conla invención de la máquina de escribir, de lteléfono y con el aumento del 'papeleo' alincrementarse la población urbana y expan-dirse las manufacturas y el comercio. Comoresultado, el trabajo de oficina se separa de ltrabajo administrativo y de la jerarquía deascenso dentro de la empresa . Así, en lamedida en que se crea el rol de la secreta-ria los hombres se desplazan a posiciones devendedores, publicistas o administrativos. L amecanización del trabajo de copiar con e luso de la máquina de escribir y la mecaniza-ción de las comunicaciones con el uso de lteléfono creó nuevos empleos que manteníana la mujer dentro del mercado de trabajopero segregada del hombre .

Estereotipos culturales contribuyero na mantener esta situación . Se decía que lasmujeres escribían a máquina con la mism a'belleza' como si tocaran piano; que dadala habilidad de las mujeres para saludar e nforma agradable a la gente y su toleranci apara la repetición las hacía ideales com ooperadoras de teléfonos.

Estos empleos eran designados para mu-jeres solteras de 18 a 25 años aproximada -mente. Los patrones generalmente requería nque las mujeres abandonaran sus puesto scuando se casaban, dándole a estos empleo sun carácter temporal, lo cual limitaba susposibilidades de ascenso . Por otra parte ,también se asumía que las mujeres jóvenesno tenían familia a quien mantener, más aú nque éstas eran sostenidas por su familia .

Hasta ahora nuestra atención se haconcentrado en la entrada de la mujer e nel mercado de trabajo anteriormente contro-lado por el hombre. Es común discutir com ola distinción entre el trabajo manual y no -manual cada día se hace menos dramátic acon la introducción de maquinarias en la ofi-cina, pero en cambio se ha observado poco

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la distinción entre lo que podríamos llamaro describir como el empleo de 'cuello rosa -do' y el empleo en los mercados masculinos .

Los empleos más 'rosados' para 198 0son: empleadas domésticas, secretarias, maes-tras, dependientas/vendedoras, oficinistas ymodistas (ver cuadro anterior) .

¿Qué tienen en común estas ocupacio-nes? En general, podemos decir que son ocu-paciones que no requieren educación forma lni educación universitaria . ¿Cómo estas mu-jeres entran en estas ocupaciones? Algunosresponden que se trata de una consecuenci ade la socialización, pero en realidad tienemás que ver con las formas de contratación .Es en este tipo de ocupaciones que las muje-res, en especial la mujer proletaria, tienenuna mayor opción de ser contratadas . Estasson posiciones con pocas posibilidades d eascenso, que no demandan calificación profe-sional y que pueden existir al margen de l alegislación laboral .

La actividad fundamental de la mujera nivel de fuerza de trabajo, se centra, an-tes que nada, en el sector servicios, pudién-dose destacar su distribución nacional, en re-lación al hombre, como sigue :

Ocupación

total hombres mujeresServicios perso -nales

96,927 42,901

54,02 6Oficinistas

64,875 19,741

45,134Vendedores

43,484 25,532

16,952Gerentes

24,938 19,851

5,087

(Fuente: Estadísticas del Trabajo, 1982, p.37) .

Estos datos recalcan que la mujer anivel de la división del trabajo siempre e subicada con mayor facilidad en actividadesque representan, en alguna medida, una ex-tensión directa o indirecta de su actividadcotidiana central. Es decir, tareas domésti-cas, labores relativas a su sensibilidad ma-ternal o tareas de apoyo. La falta de traba-jo, de conocimientos legales respecto a sucondición y su no organización sindical laslleva a mantenerse como trabajadoras tempo-rales sin seguridad social .

En Panamá, es sobre la mujer sobrequien recae toda la responsabilidad del cui-dado de los hijos. Así, cuando la mujer bus -ca obtener un ingreso económico fuera de lhogar, la carencia de centros especializadoscomo guarderías o jardines infantiles, la con -

ducen a dejar a sus niños solos o al cuidad ovoluntario de amigas .

En lo que respecta a la remuneració ndel trabajo femenino, se mantiene un trat odiscriminatorio. Estas diferencias en la remu-neración entre el hombre y la mujer se danen la remuneración desigual frente a la eje-cución de una misma actividad laboral . Pue-de observarse que la mediana de salario se-manal presenta una marcada diferencia en-tre el hombre y la mujer :

Mediana de salario

1976 1977 1978 1979 1982

Area Metro-politana

44.7

44.8 44.3

47 .9 65 . 8

Hombres

48.8

47.8 48.5

52 .4 68 . 6Mujeres

37.8

38 .6 36.4

40 .4 57 . 7Fuente: Estadísticas del trabajo, 1982 p.

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Para terminar, cabe anotar que dentrode las ocupaciones de 'cuello-rosado' existe nactividades marginales o denigrantes, com oes el caso de la prostitución. Las mujeresprostitutas portan licencias especiales conlas que se reglamenta y legitima su activi-dad. Así, el Estado al institucionalizar y or-ganizar de esta manera este sector de muje-res no hace otra cosa que demostrar el va-lor que ellas, en tanto sujetos sociales, lemerecen: las mujeres pueden representar ob-jetos de cambio, mercancías.

(1) Estadísticas Relativas a la Mujer y la Ju-ventud. Contraloría General de la Repú-blica. Dirección de Estadística y Censo .1985 .

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algo para pensar

1986: UN AÑO POR LA PAZJaneth V

¿Por qué será que esa Paz de la qu enos hablan los periódicos, en la que se in-vierten miles de dólares para que nosotrosmecánicamente la cantemos, no es la pa zque las mayorías queremos?. Hay algo quenos avisa que no seamos ingenuos, que n oconfiemos. Que sí, se escribe igual, tres le -tras nada más, pero no es la misma.

Cada día se invierten más millones e narmamentos y conocemos de las cumbres po rla paz que se realizan entre las grandes po-tencias, el control de armas nucleares, l ano agresión . ¿Quiénes pagan estos mensaje sque llegan hasta los corazones de los másinsensibles? Los poderosos señores que invier-ten dinero poi' la paz ¿quieren la misma pa zque nosotros? .

El Sr. presidente de los Estados Unidoses uno de los grandes promotores de la "paz "los datos nos demuestran cómo él la impuls adesenfrenadamente:

Un avión bombardero nuclear represent a75 hospitales con 100 camas cada uno, unmisil internacional representa alimentaciónpara 50 millones de niños que mueren d ehambre. Si pudiéramos usar sólo el valor d e15 días de gastos militares mundiales se pro-veerían alimentos para 300 millones d e perso-nas durante 40 años. Cada 24 horas la huma-nidad gasta más de mil millones de dólaresen armamentos. En el mismo lapso un milló nde niños mueren de hambre (Especial Mujer

otros se impone con bayonetas, con bombasde fragmentación, napalm y cohetes. Su pazpara nosotras significa muerte, amenaza, in-tervención. Su "paz" atenta contra nuestralibertad. Su "paz" para nosotras, tiene olor22

Vallarino

a dictadura, a regímenes militares, a tortu-ra, a miedo. Esa es la paz del Sr . Reagan ,la que hace que cada día, gracias a las impósiciones del FMI, más niños mueran de ham-bre, menos mujeres reciban atención adecua -da en el período de embarazo, que familiasenteras vivan en condiciones infrahumanas ,que los despidos sean masivos y los salariosmás bajos. ASI NO PUEDE_ HABER PAZ .

1986 es declarado por las Naciones Uni-das, Año Internacional por la Paz. ¿Cómoluchamos las mujeres por esa paz? . Aquí enPanamá, el año de 1947 es fecha importantepara recordar: 10,000 mujeres marcharon opo-niéndose firmemente al Tratado Filós-Hinesdonde se acordaba la instalación de 136 base smilitares en suelo panameño.

Pasan los años y en 1977 se firman lo sTratados Carter-Torrijos, que lesionan profun-damente nuestra soberanía, que son puert aabierta para la militarización de nuestro te-rritorio por tropas extranjeras cuando lo 'co nsidere necesario . . . ", las mujeres no podemosenterrar la historia . Gracias a esos Tratadosse mantienen 14 bases militares (hoy llama-dos sitios_ de defensa), que se utilizan paraentrenar, organizar, agredir y dirigir los ba-ños de sangre de los pueblos centroamerica-nos. No es fácil hablar de paz cuando vemoscrecer, a nivel nacional, un ejército que cad adía consume más del presupuesto general ,descuidándose la salud, vivienda y educación .,Unas Fuerzas de Defensa que para 1986 s e¡les asignan 10 millones más a los tantos qu eya gastan. El papel de este ejército, repri-mir al pueblo, prepararse diariamente para

¡¡cooperar en la política intervencionista d e¡los Estados Unidos y ser brazo armado par aejecutarla en cualquier país del área .

Con esta realidad tan dura, las mujeresipanameñas seguimos luchando todos los días ,con nuestras acciones más simples: salud pa-ra nuestros niños, techo digno, trabajo bienpagado, cuando caminamos juntas contra e l

f alto costo de vida, por elecciones limpiasy libertades democráticas, por justicia .

Debemos continuar, junto a otros millo-nes de hombres y mujeres, que desea n profun-da y sinceramente un mundo en Paz.

9T ADELANTE

Es interesante anotar que en su epílo-go, la doctora Rosa María Britton nos haceanotaciones muy interesantes sobre la llama-da liberación femenina y las múltiples acep-ciones que la sociedad le ha dado, de allíque anotemos como cita textual algunas desus consideraciones :

"Habiendo sido testigo presencial de lallamada revolución sexual en sus primerasfases, allá por los años sesenta cuando junt ocon las protestas en contra de la guerra deVietnam, las mujeres liberadas quemaban "brassieres" en las esquinas de las calles d eWashington y Nueva York y hacían demostra-ciones en contra de los concursos de belleza ,que en sus palabras 'bestializaban' a las mu-jeres, he sido testigo también de las conse-cuencias de esta liberación".

Es importante anotar que, haciendoeco de algunas de las palabras de la docto-

ra Britton, considero que la verdadera revo-lución sexual es la educación, el respeto mu-tuo entre los sexos, la llamada planificaciónfamiliar, el compartir las labores del hogary el acercamiento de las parejas hacia l acomprensión de hacer la lucha por la conse-cución de una sociedad que les brinde igual -dad de oportunidades a todos los seres huma-nos sin distinción de sexos ni razas, que l asociedad le brinde a la mujer el sitial qu ese merece como la gestora de las nuevas ge-neraciones .

La mujer necesita que se le eduque n opara ser un "sex-simbol" como lo anuncia nlas revistas que promueven la frivolidad e nel sexo femenino, sino para ser realment eagentes de cambio que llenen su papel acabalidad y sepan gobernar a su cuerpo co nla propiedad que caracteriza al ser conscien-te de su rol en la sociedad que le ha toca -do vivir .

é de la verdad es SENCILLO.,lenguaje- SENECA

Necesitamos Medios de Comunicación que nos informen, que sean un medio de par-ticipación, de educación y orientación .

En un mundo donde la mentira es moneda corriente, Miguel Antonio Bernal ha he -cho de la verdad su bandera.

r~

AlternativaJO

en Radio MundialDe lunes a viernes de 12:15

a

1 :15

p .m.

Jueves: 1 :00 a 1 :15 p.m. Mujeres, Adelante a cargo de Nelva Reyes .Viernes: 12:45 a 1 :15 p.m. Senderos de Liberación a cargo de la Dra. AuraEmérita Guerra de Villalaz .

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