Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa...

481

Transcript of Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa...

Page 1: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme
Page 2: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ÍNDICE

SinopsisPortadillaDedicatoriaCapítulo1Capítulo2Capítulo3Capítulo4Capítulo5Capítulo6Capítulo7Capítulo8Capítulo9Capítulo10Capítulo11Capítulo12Capítulo13Capítulo14Capítulo15Capítulo16Capítulo17Capítulo18Capítulo19Capítulo20Capítulo21Capítulo22Capítulo23Capítulo24Capítulo25Capítulo26Capítulo27Capítulo28

Page 3: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Capítulo29Capítulo30Capítulo31Capítulo32Capítulo33Capítulo34Capítulo35Capítulo36AgradecimientosBiografíaReferenciasdelascancionesCréditos¡Encuentraaquítupróximalectura!

Page 4: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

GraciasporadquiriresteeBook

VisitaPlanetadelibros.comydescubreuna

nuevaformadedisfrutardelalectura

¡Regístrateyaccedeacontenidosexclusivos!

PrimeroscapítulosFragmentosdepróximaspublicaciones

ClubsdelecturaconlosautoresConcursos,sorteosypromocionesParticipaenpresentacionesdelibros

Compartetuopiniónenlafichadellibroyennuestrasredessociales:

Page 5: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ExploraDescubreComparte

Page 6: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

SINOPSIS

MellamoValentinaysoydeLaRioja.CrecíentreviñedosymimundoeralabodegayVíctor.

Imagino que te preguntarás quién es Víctor, y yo podría responderte muchas cosas, demasiadas,

supongo,asíquemejoroptopordecirtequeélfuetodo.

Recuerdoquedepequeñasoñabaconquealgúndía trabajaríamosjuntosenlabodega,bueno,esoy

muchascosasmás,perolossueñoscambianylosmíoslohicieronparallevarmelejosdeesteterruñoy,por

supuesto,lejosdeVíctor.

Yahoraestoyaquídenuevo,encasa,enmipequeñotrocitodemundo,pensandoqueélnoestaríay

resultaque,contratodopronóstico,meencuentrofrenteafrenteconelúnicohombrequeprovocóenmí

milesdeemociones.

¿Quéhaceélaquí?¿Noestabadeviaje?¿Quépuedohacer?Supongoquelaopciónmáslógicasería

largarme, pero también podría quedarme y sostenerle la mirada, arriesgándome a que mi mundo se

desmoroneyqueelfuegoqueundíasentíregreseconfuerza.

Déjamequeteinviteaunacopadevino,pontecómod@yadéntrateenelprimervolumendelabilogía

«Milesdeemociones».DISFRUTA,VIBRA,SIENTE…ARDE.

Page 7: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

AnaForner

MILESDEEMOCIONESCONTUNOMBRE

Page 8: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Dedicadoamishijos,PaulayVíctor.Ojalásiempresepáiscuántoosquiero

Víctor,queríastulibro,¿verdad?Aquílotienes,cariño.

Page 9: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CasaSeñorialenlabodegaTorredeOña,cuyapropiedadesdelabodegaTorredeOña,S.A.pertenecientealgrupobodegueroLaRiojaAlta,S.A.

Page 10: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO1

Llegoacasaconlasprimeraslucesdelalbay,mientrasmipadresehacecargodel equipaje, detengo mi mirada en los dos altos cipreses que, a modo desoldados curtidos en cientos de batallas en forma de tormenta, se encuentranflanqueandolaentrada,comoprotegiéndoladefuturasamenazas,aunque,porelcontrario, parecen darte la bienvenida meciendo sus ramas si eres del bandoaliado; eso pienso deslizandomimirada hacia la enorme casona de piedra desilleríaconsusdoceventanasdemaderayelgranbalcónqueseencuentrajustoencima de la puerta que da acceso a la vivienda…, ese balcón en el que, depequeña,mesentíaenloaltodelmundo,rememoroconunasonrisacargadadeañoranza.

Aquí, entre viñedos, olivos, castaños y encinas, di mis primeros pasos,recuerdodirigiendomimiradalentamentehaciaelextensopaisajequemerodea.

Aquíaprendíacorrer,airenbici,amontaracaballoeinclusoavendimiar.En este pequeño trocito delmundo, que amis ojos infantiles era un universoentero, conocí el dolor de lamuerte, pero también descubrí que la vida podíabrillarintensamentecuandoalguienenciendeesaluzentumirada.Aquídejédeserunaniñavivarachaconcoletasparaconvertirmeenlamujerquesoyahora,yaquíestoydenuevo,enlafincayenlosviñedosdemifamilia…enLaRioja,enmicasayenmihogar.

Sigoamipadrealinteriordelacasay,duranteunossegundos,bajoelmarcodelapuertaprincipal,observolasvigasdemaderadeltecho;elsuelodebarrococido en el que aprendí a andar; el mueble de la entrada, herencia de misabuelos, repleto de fotografías nuestras inmortalizando momentos felices, y

Page 11: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

sonríoacordándomedecadaunodeellosmientraslasuaveluzdelamanecersefiltra entre las cortinas, dándome la bienvenida, como esos cipreses,abrazándome a su manera, y respiro profundamente la sensación de estar encasa;esasensaciónquetereconfortayquetehacesentirenpaz,encalmayasalvodetodo.

—Quéganasteníadetenerteaquídenuevo,hija.Además,hasvenidoenunadelasépocasmásbonitasdelaño—medicemipadrerodeandomicuerpoconunodesusbrazos,yapoyomicabezaensuhombro,cerrandolosojosduranteunossegundos,absorbiendocadaunodelosmaticesdesuvoz.

Siemprehepensadoquehayvocesquesoncapacesdetransportartealugaresconcretos, voces que consiguen que te detengas simplemente para escuchar loquetenganquedecirteyquetienenlaexperienciadelavidaencadaunodesusmaticesy,lademipadre,esunadeellas,puescadavezquelaoigo,estédondeesté,mialmavuelveaestemismolugar,alviñedo,alremontadodelvino,alastrasiegasconlaluzdelavelailuminandoesevasoenbuscadeposos,alolordelcalao,alsabordelafrutamadura,alavendimiayasusexplicaciones,puessuvozeslavozdequienhadedicadosuvidaenteraaunarte,alartedehacervino,yestambiénlavozdelsaberydequienhavividomultituddevidasenunasola.

—Y en la demás trabajo también, ¿verdad? ¿Ya habéis empezado con lavendimia?—lepregunto.

—Todavíanosfaltandossemanasmásomenos.¿Tequedarasparahacerlaconnosotros?

—Nolosé;yasabesque,conmitrabajo,avecesesdifícilhacerplanes.—Eso es porque no has elegido el oficio correcto —me replica,

arrancándomeunasonrisa,yabrolosojosparamirardirectamentealossuyos.—Eltrabajocorrectoseríaeldeenóloga,¿noesasí?—¿Vescomotúsolitahasllegadoalaconclusiónacertada?Llevaselvinoen

lasangre,hija;estoformapartedeti,aunquerenieguesdeello.—Pero ¿a quién tenemos aquí? —oigo la voz de Casi, y sonrío más

abiertamente cuando la veo salir de la cocina con su vestido de flores, suszapatosnegrosysupelocortoyrizado,comosiempre,puesmiCasinocambiapormuchosañosquepasen.

—¿Quéhacesyadespierta,Casilda?—inquiero,zafándomedelbrazodemipadreparacorrerhaciaellaydarleunenormeabrazodeoso.

Page 12: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¡Ay,nomeaprietestantoquemedesmontas!—mepide,haciéndomereír—. ¡Desde las cinco ymedia que estoy de pie!Amedida quemehago vieja,menos duermo; cualquier día seré yo la que despierte al gallo de las narices.¿Tienes hambre?, ¿estás cansada?Ayer fui a comprar ese té pijo que tanto tegusta, ¿te preparo una taza?Aunque no sé para qué te pregunto, vas a comeralgosíosí;anda,vamosalacocina.

—Noespijo—medefiendo,siguiéndolasindejardesonreír—.Papá,¿nosacompañas?

—Llevolasmaletasatuhabitaciónyvoyenunminuto.Vetomándoteesetépijo—mesueltaguiñándomeunojo.

—¡Noloes!—insisto,guiñándoleelmíoyvolviéndomeparaseguiraCasi.—Porsupuestoqueloes.Untéquesabeacarameloyaunmontóndecosas

más tiene que serlo a la fuerza—se reafirma ésta, poniendo el agua a hervir,mientrasmesientoenunodelostaburetesquerodeanlaisla.

—Cuántotiemposinestaraquísentada—musitoobservandoelpaisajequesevislumbraatravésdelasventanas.

—Vergüenzatendríaquedarte.¿Cuántohacequenovienes?—Ni lo sé —susurro encogiéndome de hombros, experimentando la

agradablesensacióndesentirmequeridayarropada—.Meencantaestacocina,siempremehagustado—prosigo,admirandolosazulejosbiseladosblancosencontrasteconlamaderaoscuradelosmueblesylasvigasdeltecho.

—Tupadre quería reformarla, ya sabes, hacerlamásmoderna y funcional,comoél dice. ¡Menudachorrada!—mecuentamezclando lamiel con el aguacaliente—.Imaginadóndelomandé,¡vamos,quemicocinanolatocaniDios!Yoquieroesto,unacocinadecampo,rústica,comoyo,unacocina,¡cocina!—continúa, con ese genio tan suyo, sirviéndome el té con unas galletas—.Esascocinasquesellevanahorade…¿cómoes?,¿indurión?

—Inducción—le aclara mi padre entrando en la estancia—. ¿A ti qué teparece,hija?Encimadequepiensoenella,yunpocomásymemandaadondemejornotedigo—añade,haciéndomereírconganas.

Comoechabaestodemenos,estarencasa,lasconversacionesenlacocina,la complicidad con mi padre y la compañía de Casi, esta mujer que llegó anuestro hogar cuando yo era un bebé para ayudar en las tareas domésticas yterminóconvirtiéndoseenunapartefundamentaldelafamilia.

Page 13: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¡Eso!¡Inducción!Paraelcaso,¡quedeesonada!Yoquierounacocinaagas, de las de toda la vida, y una campana extractora comoésta, biengrande;esascampanasescondidasquesubencuandopulsasunbotón…¡no,no,no!—continúa hablando, negando con la cabeza—. ¡No me la colarán a mí! Lascampanasextractorastienenquesercomolos…bueno,yasabes,biengrandesypotentes,amíquenomedigan…

—¡Casi!—exclamoescandalizada, con las sonoras carcajadasdemipadredefondo.

—¡Yojo,quenolocritico!—prosiguesudiscurso,ylesonríoamipadre,pues ambos sabemos que, cuando coge carrerilla, no hay quien la detenga—.Queyasabéisqueyonuncacriticonada,¡Diosmelibre!Perosíopino,esosí,queparaesosomospersonaslibres,paraopinarydebatir.¿Túquédices,hija?—mepregunta,apoyándoseenlaencimera.

—Puesesomismo,que tienes razón—musitoocultandomi sonrisa tras latazade té, dándole a continuaciónun sorboy saboreando lamezclademielycaramelo.

Deberíarenunciaralamielyacostumbrarmeatomarlosinnada,pero…«yalo haré», me digo postergándolo, como siempre, pegándole otro sorbo ysintiendoelsabordulzóndeslizarsepormigarganta.

—¿Quieresalgomásparacomeroconestasgalletasyatienespara todoeldía?—plantea,pinchándome.

—¡Casi!¡Perositengomássueñoqueotracosa!Nosécómopuedoseguirconlosojosabiertos,conlocansadaqueestoy.

—Túsiempreconuncuentouotro.¿Sepuedesaberquécomescuandoestásporahí?

—Loquetienesquehacerlealaniñaesunbuenplatodecocidocontocino,morcilla,carneyverdura,queestáflacacomounacaña—intervienemipadre,poniendomásleñaalfuego.

—Eseplatoespuragrasa,papá;yo,conunapechugaalaplancha,voybien.—Deeso tienes cara,depechugaa laplancha. ¡Pero si eresun saquitode

huesos! De verdad, debo de ser un bicho raro o tonta de remate, porque noentiendoestamodadehoyendíadequererestar tandelgadas.Cuandoyoerajoven, las modelos tenían pechos, caderas y un buen trasero, y, en lugar dedesfilar caminando como cabras y con cara de indio cabreado, se deslizaban

Page 14: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

sutilmenteporlapasarela.—¿Sutilmente?Qué refinada te has vuelto,Casi—memeto con ella entre

risas.—A ver qué te crees, ¿que porque me pase el día rodeada de vides y

animales no voy a saber hablar? ¡Que aquí una es muy fina, aunque no loparezca!

—Buenoyotambiénsoyfinayteaseguroquenocaminocomosifueraunacabra—ledigo,sonriéndoleamipadre,quememiraconorgullo.

—Amí no vengas a venderme lamoto, que he idomuchas veces a vertedesfilar y parece que en cualquier momento vayas a soltarle un sopapo alprimero que se atreva amirarte. ¿Es necesario que pongáis esa cara de lecheagria?—me replica con aplomo—. ¡Y haz el favor de comerte esas galletas!Pedro,estahijatuyamefrustra,deverdad.¡Aver!Dimequéquierescomerhoyyniseteocurramencionarunapechugaalaplancha,quesoycapazdesacarunadelcongeladorydarteconellaentodalacabeza.

—¿Comer? Casilda demis amores, lo que voy a hacer es dormir durantehoras;dehecho,mevoyalacamaya.

—Deesonada,¡nipensarlo!¡Pedro,dialgo,hombre!¡Queestaniñanitienecarne ni tiene na! Luego te quejas, pero, si cuando hay que hablar, te callas,comoestáshaciendoahora,pues laniñacogealasyvamása la suyaque lospatos del estanque… Si es que todos los hombres sois iguales, puñetas. MiTomás, que enpazdescanse, hacía lomismoconmiSandra.Si es quemehepasadolavidabregandoconunosyconotros—bufa,cogiendocarrerillaensudiscurso,ymiroamipadrepidiéndoleayuda.

—Déjala,mujer,¿novesquenopuedeconsualma?Anda,veaacostarte—meproponemipadrealfin,yvocalizoun«gracias»enormemientrasmelevantoysalgodisparadadelacocinaantesdequeCasipuedaañadiralgomás,aunquealmarcharmelaoigodefondoseguirrefunfuñandoconmipadrepormifaltadeapetito.

Llegoamihabitacióny,trascerrarlapuertasuavemente,meapoyoenella,observandolaestancia.Lacamadehierroforjado,conlasguirnaldasquecolguéhaceunaeternidad;lasmesitasdenoche,demaderaoscura,conlaslamparitasenformadeflor;lacolchaverdeyloscojinesblancos,ajuegoconlascortinas;eltocadorconelespejoovaladoylafotografíaquedescansasobreél,unafoto

Page 15: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

quenos tomómipadre en el viñedo amimadre, amihermanaAlanay amícuandoyotendríaunosdosañitos;enellaestoyenbrazosdemimadremientrasmihermana,desumano, le saca la lenguaamipadre.Sonrío,acercándomeaellaparacogerla.

Cuánto tiempo ha pasado desde entonces… Tanto que me cuestareconocermeenlaniñitadelafotografía,piensoacariciandolacarasonrientedemimadre.

—Ojalá pudiera tenerte conmigo ahora, mamá; ojalá fuera capaz derememorarelsonidodetuvoz,eltactodetumanoolacoloniaqueutilizabas,parapoderolerlayrecuperarrecuerdos…Ojaláfuerastúquienmeriñerapornocomer,comohaceCasi,yojalánotehubierasidotanpronto—musitopegandolafotografíaamipecho,paraluegodescorrerlascortinasyabrirlaventanadeparenpar,viendocómoelsolcomienzasuascensohastaelcielo,hastaeselugardonde de pequeña me decían que estaba mi madre y donde yo hubiera idovolandosihubiesepodido.

Con la añoranza abriéndose paso en forma de lágrimas, contemplo estastierrasquepertenecieronamisabuelosyanteriormenteamisbisabuelos;estastierrasquenosabennadadedesfiles, fiestasy,enocasiones, falsassonrisas,yquehanvistounsinfíndeamaneceresyatardeceresmanteniéndosefértilesañotrasaño,dandocontinuidadallegadodemifamilia,allegadodelosDomínguez.

Sindespegar la fotodemipecho, inspiro la frescabrisadel amanecer, esaquetraeconsigolosaromasdemiinfancia,esosaromasquehacenmásvívidosyrealesmisrecuerdos,ysientocómomilesdeemocionesaleteanenmiinteriorcomoloharíaunamariposadecientosdecolores…

Lamuertedemimadrecuandoyotodavíaeraunacría;eldolor,larabiaylaimpotencia que sentí y que, aunque enmenor intensidad, nunca he dejado deexperimentar.Recuerdolaslágrimas,esasquenosacompañabanaAlanayamídía y noche, y los intentos infructuosos deCasi, de nuestro abueloEnrique y,más tarde, de Víctor por consolarnos. Recuerdo cómo mi hermana y yocorríamoshacialosviñedosparaescondernoscadavezquenecesitábamosestarasolas,yelolordelatierraydelasvidesentremezcladoconelsaborsaladodenuestrollanto.Recuerdoquesiempreeranuestroabueloquiennosencontraba…

Lo recuerdo sentadoenel sueloconnosotrasencimadeél, el tactode susmanoscallosasalsecarnoslaslágrimas,suspalabrasdeconsuelo,susbesosen

Page 16: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

nuestrafrente,elcalorquedesprendíasucuerpoyquetantomereconfortaba,yel olor a tabaco negro y a la colonia Brummel que emanaba de su camisa.Recuerdocómohundíamirostromojadoporelllantoensupechomientrasconmis bracitos abrazaba a ese abuelo que a mis ojos infantiles era un serinvencible…y,conesosrecuerdos,sientocómomialmavuelaaesosdías…Elambientepesadoqueserespirabaencasa,casiahogándote;lamiradaperdidademipadremientras intentabaasimilarquenuncamásveríaamimadre;elcalorsofocantequeapenasnosdejabarespirary lasensacióndequererdespertardeesapesadillayvolarhaciaesecielodondemedecíanque sehabía idomamá.Rememoro todo eso sintiendo cómo el nudo se forma en mi garganta hastadolerme, e inspiro profundamente en un intento por serenar mi corazón,perdiendomimiradaporestastierrasquemevieroncrecer,soñar,reírytambiénsufrir…y,con losrecuerdos, llegaelsuyo,eldeese jovenque llegóundíaalviñedoparacambiarsuviday,sinpretenderlo,tambiénlamía…

—¿Quéhacesahíescondida?—mepreguntómirándomeconternura.—No quiero que el abuelo me encuentre —le respondí con mi vocecilla

infantil,secandomislágrimas.—¿Quieres quememarche?—inquirió, sacandounpañuelode subolsillo

paralimpiarmirostrosucioporlatierrayelllanto.—¿Quién eres? —indagué con curiosidad mientras observaba cómo se

sentabaamilado.—MellamoVíctoryempecéayeratrabajarenlabodega,¿ytú?—Valentina—susurré,admirandoelcolorverdedesusojos,quemerecordó

aldemiplastilina.—Puesencantandodeconocerte,Valentina.¿Tegustaríasermiamiga?Apartirdeesedíameconvertíenalgomásqueensuamiga,casidiríaque

meconvertíensusombra,pues,alládondeéliba,ibayo.Enmicabeza,Víctorera el regalo que mi madre me había enviado desde el cielo para suplir suausenciay,sinsabercómo,seconvirtióenelhermanoquenuncatuve.

Loacribillabaapreguntas,lecontabatodaslaschorradasquemesucedíanenel colegio, le hablaba de mis amigas, me colaba en su casa a la primera decambio, lo ayudaba en los viñedos…Sinceramente, creoque, desdeque abríalosojoshastaqueloscerraba,nomedespegabadesulado…

—¿Quéeshacerelamor,Víctor?—lepreguntéunatardedeveranomientras

Page 17: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

estábamosenelporchedesucasa,decorandolaparraconguirnaldas.Creoque,poraquelentonces,yotendríaunosnueveodiezaños,porloque

éltendríaveintiunooveintidós.Recuerdoqueesatemporadamehabíadadopordecorarlo todo con guirnaldas, así que su parra no iba a librarse y él, comosiempre,accedióencantado,másquedispuestoacomplacerme.

—¿Cóóóómo?¿Dedóndetehassacadoeso,Val?—MelomencionómiamigaAdriantesde irnosdelcolegio,perose lohe

preguntadoapapáymehadichoquehacerelamorescomohacervino,quesenecesita tiempo, amor y paciencia, y Casi me ha dicho que es como hacercocido,quesenecesitantodoslosingredientesparaqueelcaldosalgaespesoycon sustancia, pero eso no es lo queme contóAdriana—ledije arrugando elceño,viendocómosurostrosetornabarojopormomentos.

—Sois muy pequeñas para hablar de eso —me reprendió, dándome laespaldaysiguiendoconlalabordecolocarlasguirnaldas.

—¿Túsabesloqueeseso,Vic?—lepregunté,empleandolaabreviaturadesunombreconlaquesolíallamarlo,decididaaconseguirunarespuestaquemedejarasatisfecha,puespornadadelmundoibaapermitirquemiamigasupieramásqueyo.

—Algosé.¿Quésabestú?—mecontestóalgoperdido,oesocaptéyoenesemomento.Ahora,conlaperspectivaquetedanlosaños,tengoclaroqueeneseinstanteestabamuertodevergüenza.

—Adriana dice que, cuando dos personas van a hacer el amor, el hombretienequeponersupalitoenelagujerodelamujer.Quéasco,¿no?Siesoesasí,yocreoquevoyahacermemonjaymiamigaAdridicequetambién—afirméconvencida—.¿Túhashechoeso?—planteéconinocencia,poniendomimejorcaraderepugnanciamientrassurostropasabadelcolorrojoalgranate intenso—. No te preocupes si no lo sabes; si al final no me hago monja, yo te loexplicaré cuando lo tengamás claro. He intentado que Alaname lo aclarara,peromi hermana sólo sabe dibujar vestidos y nome hace caso. Suerte que tetengoati,¿verdad?Bueno,tútambiéntienessuertedetenermeamí,¿aquesí,Vic?

—Aquesí—merespondió,sonriéndomeydándomeuntoqueconundedoenlanariz…

—¡Subeelvolumen!Megustamuchoesacanción—continúorememorando,

Page 18: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

dando un salto en el tiempo, sonriendo y sin darme cuenta de que lo estoyhaciendo.

Estábamosendiciembre.AlanayyohabíamosregresadodelinternadoparapasarlasvacacionesdeNavidadconlafamiliayyo,comosiempre,corríhaciasucasaencuantopuseunpieenelviñedo.Creoqueentoncestendríaunosdoceotreceaños.

—¿Conocesesacanción?—mepreguntó,divertido.—Puesclaro.Además,misamigasyyonoshemosinventadounbailemuy

chulo,¿quieresverlo?—Por supuesto —afirmó, y se apoyó en la pared cruzándose de brazos

mientrasyoempezabaconelbailecito.¡Dios, todavíameacuerdodetodoslospasos!

—¿Tehagustado?¿Quieresqueteenseñe?—lepropusecuandofinalizólacanción.

—¿Quiéntehaenseñadoabailarasí?—inquiriófrunciendoelceño.—Las niñas mayores. ¿Sabes que algunas ya salen con chicos? —añadí,

repantigándomeenelsofádesusalón.—¿Ytúsabesqueestáscreciendodemasiadorápido?¿Porquénotequedas

pequeñita todo el rato?—replicó, acercándose amí y poniéndose de cuclillasparapodermirarmealosojos.

—Porque, si me quedo pequeñita todo el rato, será muy aburrido —lecontesté,sintenermuyclaroaquéveníaesodequemequedarasiempreigual,con lasganasque teníayodecrecerparapoderhacer lasmismascosaschulasquehacíanlasniñasmayores,comoyolasllamaba…

Qué sencillo era todo entonces, pienso inspirandoprofundamente el olor atierra entremezclado con el de la fruta madura. A nadie le extrañaba vernosjuntosatodashorasynadieloviovenir,nisiquieraéloyomisma…y,undía,empecéafijarmeenlosmúsculosdesusbrazosycomencéapensarenéldeunaforma distinta.Mis roces ya no eran inocentes ni accidentales, y apareció esasensación que experimentaba cada vez que estaba con él, esa necesidadacucianteporsaberquésentiríasilobesaraosinuestrapielsetocara.Apartirdeesemomento,micuerpoempezóaarderdeunamaneraquemeimpedíadormire inclusocomer,conunfuegoquese iniciabaenmivientreyseexpandíaportodomicuerpo,dedentrohaciafuera…Comosideunmecanismodedefensase

Page 19: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

tratara,mimente bloquea el recuerdo de esa noche antes de queme hiera denuevo.

—Suficiente—masculloendureciendoelrostroycerrandolaventanadelamismaformaenquecierroelpasoamisrecuerdos.

Trasdejarlafotografíadenuevosobreeltocador,sustituyomiropaporunsencillopijamadepuntoy,conélpuesto,medirijoalbaño,dondemelavolosdientes concienzudamente. Una vez lista,me acuesto en la cama demi niñezmientras los brazos de Morfeo comienzan a mecerme y caigo rendida en unsueñoprofundo.

Despiertocasialastresdelatardey,trasdeshacerelequipajeydarmeunalargaducha,mevistoconmisviejosvaquerosyunasencillacamisetay,casiahurtadillas,paraqueCasinomeoigaymeobligueacomer,salgodecasadirectaalascaballerizas,alasquellegodandounlargopaseo.

—¡Hola,Trueno!Cuántotiemposinverte,guapetón,¿Cómoestámicaballopreferido?—musito frotandomimejilla contra la suya—.Sí, ya lo sé, sé quéhacemuchoquenomeves,peroyasabescómoesmi trabajo…HeestadoenGrecia haciendo un shooting para una importante firma de ropa; tendrías quehabermevisto,Trueno,fuemuyguay—lecuentomientrasvoyensillándolo—.Ytú,¿quétal?¿Tehansacadoacorrerúltimamente?Seguroquenotanrápidocomo te gusta —prosigo, sonriendo, mientras el animal relincha encantando,sabiendolacarreraquetenemospordelante—.Venga,campeón,vamosaestirarlaspatas—leindicoyasobreél,espoleándolo.

Corremos como si nos fuera la vida en ello, con la cordillera Cantábricadándonos abrigo, protegiéndonos de los vientos del norte, y los viñedos y latierra,fértilenocasiones,yermaenotras,vigilandonuestrospasos,ylohacemosconlacompañíadelsilencio…Esesilencioquetantoañorocuandoestoyfuerayque sólo aquí soy capaz de escuchar, pienso mientras atravesamos laderasondulantessalpicadasdematorrales,encinasycastañoscuandolosviñedos lescedeneserarohonor,sintiendoellatirdelatierra,ellatirdelacontinuidadyellatirdelavidafluyendoportodaspartes.Espoleodenuevoalanimal,llevándoloallímite,corriendohaciaesedíaqueestandistintoaldelasciudadesenlasquesuelo estar, pues, aquí, el ruido del tráfico es sustituido por el silencio de lasvides,yelsolpuedeiluminarlatierrasinquehayaningúnrascacielosqueseloimpida…ydisfrutodelmomentomientraselvientoazotamirostroyesabolade

Page 20: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

fuegollamadasolbesaconsusrayoscadarincóndeestastierras.Con la respiración acelerada, voy aminorando la velocidad paulatinamente

hastaconvertirnuestraarriesgadacarreraalgalopeenunsimpletrotey,llenandomiinteriordepaz,dirijoalcaballohacialasbodegas,admirandoelpaisajequeantes, en mi locura, me había perdido, absorbiendo cada detalle e inspirandoprofundamente la cálida brisa delmes de septiembre, esa que trae consigo elaromadelafrutamaduraydelatierra,estatierraqueformapartedemíydemiesencia.

Cabalgandomi queridamontura, recuerdo a ese abuelo que fue una partefundamentaldemivida.Lovisualizosentadoamilado,fumándoseuncigarro.

¡Dios,todavíameacuerdodeeseolorfuertequeseimpregnabaensuropayen lamía!, ese cigarroque iba conél a todaspartes, consumiéndoseentre susdedosoensuslabioscuandoestabatrabajando…Recuerdocómomemolestabaeseolor,perocómocallabaporquenohabíanadamásmaravillosoqueestarasulado…Recuerdosusmanos,grandes, callosasyásperas; sucaray susbrazos,siemprellenosdearañazospornotenercuidado…Recuerdosusonrisaycómolegustabacuidaraloscaballosyatodoslosanimales…Lorecuerdosentadoenun taburete mirando a las gallinas o a los conejos, como si fuera lo másfascinantedelmundo,ylorecuerdotambiéntrajinandoentre losviñedos,puesnosabíaestarsequietouninstante.Aunqueahorayanoestéamilado,continúaestandopresenteenmí,puesnohayunsolodíaenquenolorecuerde.

—Vaya—musito para mí con una triste sonrisa, negando con la cabeza,deteniendoaTruenofrentealporchedelacasadeVíctor,percatándomedequemisubconscientemehatraicionado,absortacomoestabaenmispensamientos.

A lomos de mi corcel, observo su casa, esa que se encuentra en nuestrastierras y quemi padre le «cedió» en su día y, de nuevo, los recuerdos llegan,arrasando con todo; nuestras charlas a la sombra de la parra, nuestras risasporquesí,nuestroscómodossilencios,lasmuchísimasvecesquemedormíensusofá…

—Vamos, Trueno, aquí no tenemos nada que hacer —mascullo consequedad, espoleando al animal, que, obedeciendo mi orden, inicia el galopehasta llegar a la entrada de la bodega, donde espero encontrar a mi padre—.Quédateaquí,¿vale?Vuelvoenseguida—musitoatandolasriendasenlaramadeunárbolycontemplandolaslíneasdevidesextenderseinfinitashastadonde

Page 21: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mivistaabarca,comosideunmarondulantesetratara.—¡Holaaaaaa!—saludoamiamigaAdriana,que trabajaen la tiendade la

bodegadesdehaceunosmeses,encuantolaveo.—Pero¿quéhaces aquí?—mepregunta saliendode lapequeña recepción,

queseencuentraintegradaenlatienda,paradarmeunfuerteabrazo—.Tía,nosabíaquevenías.

—Hasidotodounpocoimprovisado;hellegadohaceapenasunashoras—lecuento, dándole un beso al aire aMarta, otra de las chicas que trabajan en latiendayqueestáhablandoporteléfono—.¿Quétaltodoporaquí?

—Puescomosiempre,yasabes…El teléfonosindejardesonarentodoeldía,haciendolasvisitasguiadas,atendiendoenlatienda…Vamos,lotípico.¿Ytú?¿Teapuntasahacerunaoprefieresunvinito?Porcierto,noveascómosemedaestodelasvisitasguiadas,hastadurmiendopodríaexplicártelotododecaboarabo;vamos,quemeloestoycreyendotantoquecualquierdíamemontoyounabodegaymepongoahacervino—medicebromeando.

—Quién te ha visto y quién te ve,maja, ¡con la vergüenza que te daba alprincipio!—lerecuerdoconcomplicidad.

—Y que lo digas, eso de hablarle a tanta gente me tenía aterrada, pero,bueno, a todo se acostumbra una y al final es siempre lomismo, parezco unlorito—replicaentrerisas.

—Cualquierdíameapuntoauna,avercómolohaces—ledigo,riendoconella—.Oye,¿hasvistoamipadreporaquí?

—Hasalidohaceunrato,peronosabríadecirteadóndehaido.—Bueno,pues,silovesotravez,dilequemellamealmóvil,¿vale?Ytúy

yotenemosquequedar,nena,quetengomuchascosasquecontarte.—Cuandoquieras, aquíme tienes, que entre el curroymis estudios tengo

unavidasocialnula.Miabuelasalemásqueyo,telojuro.—¿Cómoestá?—¿Ella?Mejorqueyo;dehecho,parecequenoshayamosintercambiadolos

papelesyseayolajubilada,perojubiladadepacotilla,notecreas,porque,entreunascosasyotras,nodoyabasto—mecuentaponiendolosojosenblanco—.Perdona,tengoquedejarte,quetengoaungrupoesperando…¿Teapuntasalavisitaoqué?

—Otrodía…Teconcedounpocomásdemargenparaquesigaspracticando,

Page 22: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

no sea queme apunte ahora y te salgamal y tenga que despedirte—bromeo,guiñándole un ojo y soltando una carcajada cuando me muestra,disimuladamente,sudedocorazón.

Salgodelabodegatodavíaconlasonrisainstaladaenelrostroy,alomosdelcaballo,voyrecorriendolasfilasdevidesque,interminables,parecenabarcarlotodo…yentoncesloveo,a¡¡¡él!!!,aVíctor,ysientocómomimundotrastabillahastacasihacermeperderelequilibrio.

Está hablando por teléfono, caminando hacia mí con la mirada gacha, ysiento cómo mi cuerpo tiembla, cómo mi corazón se detiene durante unoseternossegundosycómosoyincapazdealejarmimiradadesucuerpo.Tienelosprimerosbotonesdelacamisadesabrochadosypuedoverelvelloqueasomadesu pecho y, con esa visión, mi vientre se contrae suavemente al recordar lasmuchísimasvecesquelovisincamisayconlapielperladaporelsudor.Desupecho,mimiradaviajahasta losmúsculosdesusbrazos,ceñidosahorapor lafina tela de la camisa que lleva remangada hasta los codos, y de ahí hasta suvientre, donde la tela que no roza su piel asoma insolente por encima de lacinturilladesusvaqueros,esosquetocanloqueyo,enelpasado, tantasvecesdeseé tocar…y,antesdequealcesumiradaypuedaverme,espoleoaTruenoparasalircuantoantesdesucampodevisión.

—¡Valentina!—oigosuvoz,roncayoscura,llamándome,peronodetengoalanimal;alcontrario,loespoleohastallevarloallímitecomoantes,casivolandohacialascaballerizas.

«¿Qué hace aquí? —me pregunto, emprendiendo una precipitada carrera,sintiendo cómo todomi cuerpo tiembla por la añoranza y los recuerdos—.SesuponíaqueestabaenSegovia,lohabíaconfirmadoconAlanay,encambio,estáaquí,estáaquí,estáaquí,estáaquí…»Micabezareproduceesafraseenbuclemientras siento la respiraciónagitadadel animal enconsonancia con lamíay,cuando llegamos a las caballerizas, creo que los dos necesitamos un buenrespiro.

Bajode lamontura sintiendomicuerpo temblary, apoyando lasmanosenmis rodillas, inspiro profundamente, llenando mis pulmones de aire ynecesitandoencontrarelpuntodeequilibrioqueheperdidocuandolohevisto.

—¿Te has vuelto loca?—bramaVíctor entrando en las caballerizas, ymeincorporo, sorprendida y con la respiración todavía hecha un caos. ¿Me ha

Page 23: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

seguido?—.Pero¿a tiqué tepasa?—mepreguntacon lafuria instaladaensumirada,acercándoseamí—.¿Nohayentucontratodemodeloningunacláusulaqueteimpidaromperteelcuello?

Tres años, tres largos años desde la última vez que nos vimos; tres añosimaginandoqué lediríasi lo tuviera frenteamíy,ahoraque lo tengodelante,soyincapazdearticularpalabraoinclusomoverme.

—¿Quéhacesaquí?—musitocuandoconsigoreaccionar,dándomelavueltaparadesensillaraTrueno,sintiendoquememuevoacámaralenta.

—¿Por qué has huido cuandome has visto? ¿Por qué?—me plantea conseriedad, sin contestar ami pregunta, cogiéndome del brazo y obligándome agirarme.

—Porqueno tengonadaquedecirte—mascullo, sintiendoquemi alma sequiebra,soltándomedeuntirónparaseguiratendiendoalcaballo.

—Encambio,yocreoquetenemosmuchascosasquedecirnos—merebate,clavando su imponente mirada sobre mi cuerpomientras yo continúo conmilabordeatenderalanimal.

—Yaestáslisto,campeón.Descansa,telohasganado—ledigoconcariñoalcaballo,necesitadadevolcarmiatenciónenalgoquenoseaély,sobretodo,quemicorazóndejedelatirmeenlagarganta—.Tengoqueirme—susurrogirandosobremistalones,paraempezarasalirdelrecinto,sintiendocómomipechosellenademilesdeemocionesdistintas.

—Esta vez no—masculla con voz ronca, cogiendo mi brazo de nuevo ydeteniéndome.

—Suéltame, Víctor —le exijo con todo esto que llena mi pechopresionándomehastadolerme—.Telodigoenserio,notengonadaquedecirtenitampocoquieroquetúlohagas;déjalocomoestá,¿vale?Eslomejor.

—Yunamierda—farfulla,ypercibocómolapieldemibrazo,esaporciónquerodeasumano,empiezaaquemarmeconsutacto,conesefuegoquesentíhaceañosyquenuncahadejadodearderdentrodemí—.Míramea losojos;mírame—meordenaentredientes,atrapandofinalmentemimiradaconlasuyay,duranteunossegundos,mepierdoenella,enesosojosdeunverdeimposiblequehansidomiscompañerosdeviajedurantetodoestetiempo.

Maldita sea, está más guapo que antes, mucho más hombre y cientos devecesmásatractivo.

Page 24: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Y, aunqueme gustaría no hacerlo, finalmenteme rindo amis deseosmásíntimos posando mi mirada en su pelo, oscuro y algo rizado, cepillado haciaatrás,completamenteseguradeque,sienterraramisdedosenél,seríasuaveyespeso; en su ceño fruncido, ese que permanece perenne en su rostro; en subarba recortada, esa queme picaría sin lugar a dudas si me besara, y en suslabios,esosqueduranteañosansiéprobar…ysientocómo,esoquemeenvolvíacadavezqueestabajuntoaél,regresaconmásfuerza,conmásviolenciayconmásintensidad.

—Suéltame —musito, sintiendo cómo las manos me hormiguean por lanecesidaddetocarloyenterrarmisdedosensucabello.

—No —sisea obcecado, intensificando su agarre y provocando pequeñasdescargas eléctricas por todo mi cuerpo—. No quiero que te marches, Val;hablemos,porfavor.

—Suéltame—mascullodenuevo,liberándomeysaliendofinalmentedelascaballerizas, clavandomi mirada en las montañas, que, majestuosas, se alzanfrenteamí.

—Novoyadejarte enpazhastaquevolvamosa ser losque fuimos—mediceentonoamenazante,ymevuelvoparaencararlo.

—Noimportaquiénesfuimos,importaquiénessomosahorayquiénestáennuestravidayquiénno,yteaseguroquetúhaceañosquedejastedeestarenlamía—leespetoconfrialdad,sintiendocómomialmasequejaconcadaunademispalabras.

—¿Quiereshuir?Hazlo,venga,huyeyvete;evítamecomollevashaciendodurante estos años, pero, al menos, no te mientas a ti misma. Sabesperfectamente que nunca he dejado de estar en tu vida y que tenemos unaconversaciónpendiente—merecalca,conlaobstinacióninstaladaensumirada.

—Fuiste tú quien huyó y se largó antes de que yo lo hiciera —susurro,perdiéndomeenlasladerasondulantesdesumirada—,nomelorecriminesamíahora.

Antesdequepuedarebatirmispalabras,echoaandarconlaimagendesurostroydesucuerpograbadaafuegoenmisretinas.

Nadahacambiado;noimportaquenolohayavistoenaños,noimportaquemehayaobligadoanopensarenél,noimportanadadeloquehehechohastaestemomento…porquemicuerpocontinúa reaccionandoal suyode lamisma

Page 25: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

forma. ¡Maldita sea! Creía que, con los años, este fuego desaparecería, perosigue ardiendo dentro de mí con la misma intensidad que antes. ¿De qué haservido, entonces, queme fuera? Decidí convertirme enmodelo para salir deaquí,paravermundo,paraconocerotrasculturasysí, tambiénparaconoceraotros hombres, pero, sobre todo,me fui de aquí porquenecesitaba ampliarmiuniversoparaqueéldesaparecieradelmío…yalfinalnohaservidodenada.

Y,ahora,¿quévoyahacer?Estáaquí,tancercayalaveztanlejosdemí.Despuésde tresañossinvernos, finalmentehemosvueltoacoincidirenel

mismo terruño, aunque en viñedos distintos, unos viñedos que nunca podránunificarseenunosolo,porquelosseparandemasiadascosas…

Page 26: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO2

Caminoduranteloqueamímepareceunaeternidadatravésdelastierrasdemifamilia, pues no me apetece regresar a casa ni encontrarme con nadie, y,finalmente,cansada,mesientoa lasombradeunaencinacon laañoranzayeldeseolatiendoconmásfuerzaquenuncadentrodemí.

***

—Creíaquenoestabasencasa—ledije,admirandosutorsodesnudo.Llevabalatoallaanudadaentornoasucinturayrecuerdoquelomiréllena

decuriosidad,conlacuriosidadqueteproducenlashormonasdelaadolescenciaaplenorendimiento.

—Meestabaduchando.Pasa,ahorasalgo—mecontestóguiñándomeunojoy dándome un toquecillo en la nariz con el dedo, tal y como acostumbraba ahacer,yrecuerdoquelesonreímientrassentíacómoesoquellenabamipecholohacíaconmásfuerza.

—¿Vasa salir?—lepregunté, apoyadaen lapared,viendo lapuertade suhabitaciónentreabiertaeintentandoatisbaralgoatravésdeella.

—Hequedadoconunaamiga—merespondió,saliendofinalmenteconlosvaquerospuestosylacamisaabierta.

—Yesaamiga,¿estunovia?—inquirícuriosa,acercándomeaél.—Digamosqueesunaamigaespecial.—¿Tan especial como yo? —planteé celosa, empezando a abrochársela,

rozandoconmisdedossupechoapropósito.—Diferente—mecontestó,yporprimeravezlosentíincómodoamilado…

Page 27: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

***

Cierro los ojos intentando alejar esos recuerdos demimente, avergonzadapormicomportamientoposteriory,sí,tambiénunpoquitoconéste,e,incómodaconmigomismayconmipasado,melevantofinalmenteparadirigirme,estavezsí,haciamicasa,ylohagoconlacompañíadelasuaveluzdefinalesdelatardeacariciandomicuerpo,comoqueriendodarleunpocodeconsuelo;conladesuvoz,oscuraycavernosa,resonandonítidaenmicabeza;conelolordesucoloniaydesujabónrevoloteando,muyamipesar,todavíaenmisfosasnasales,ycontodoestoquellenamipechocolmándoloconunpocomásdefuerzaqueantes.

—Casi,¿sabessiharegresadopapá?—lepreguntoentrandoenlacocinaporlapuertatraseramientrasellabuscaalgoenlaalacena,maldiciendoporlobajosobrealgoquenoconsigoentender.

—Estáensudespacho—merespondesindejarderebuscaryderenegar.—Vale…Gracias…Me voy, ¿me oyes?—demando, empezando a sonreír

mientras ella continúa refunfuñando sobre la harina que se supone que dejó yqueahorayanoestáensusitio.

Durante el breve trayectode la cocina al despachodemipadre, la sonrisaquesehabíadibujadoenmirostroseborraporcompletomientrasmeestrujolacabezapensandoencómovoyadecírseloparaquenosecabreedemasiadoy,entonces,denuevoél,copandotodosmispensamientos.

Sitodofueracomoantes,aquienselohubieracontadoprimerohubiesesidoaVíctor.Estoyseguradeque,antesdehablarconmipadre,habríaidoasucasa,me habría sentado en los escalones de su porche con las filas de videsextendiéndose interminables frente a mí y con la parra dándonos cobijo, lehabría pedido consejo a pesar de haber tomado ya la decisión. Lo habríaescuchadoyluego,comoélsolíadecirme,habríahecholoquemehubieradadolagana…perotodocambióentrenosotrosy,ahora,aélseríaalaúltimapersonaalaquelecontaríamisplanes;dehecho,casiprefieroquenolossepa…Puedequeseasimplementeparamolestarlooparaintrigarlo,yoquésé,nomeapetecehurgareneso…,simplementequierodejarlo fuera,excluirlodemivida,comollevohaciendodesdehacetresaños.

—¿Papá? —Abro la puerta de su despacho sin molestarme en llamar y,entonces,mimiradaquedaatrapadapor la suya,denuevo,y,denuevo, siento

Page 28: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

cómomicuerpoymividasetambaleanhastacasihacermeperderelequilibrio—.¿Quéhacesaquí,Víctor?—musitoarisca,aferrandoconfuerzaelpomodelapuerta.

—¿Así es cómo saludas a un amigo?—mepreguntami padre, claramentemolesto.

—Losiento,papá;esperabaencontrartesolo—farfullo, sintiendocómomicorazóntiemblaycómotodaslascélulasdemicuerpovibrandeformadistinta—. Además, Víctor y yo ya nos hemos saludado antes en las caballerizas,¿verdad?—medirijoaél,forzandounasonrisa.

—Asíes—merespondeescueto.—Oye,Víctor,¿porquénotequedasacenarydescorchamosunabotellade

esevinotanespecial?VaavenirmihijaAlanaconesechicoquelasigueatodaspartesyporfintenemosamipequeñaencasadenuevo.

—¿Ese chico? —planteo, riendo abiertamente—. ¡Papá, es su novio!¿Todavíaestásasí?Dejadehacereltonto,¿quieres?

—Perdona,hija,peroamínomelohanpresentadocomotal:silepreguntasatuhermana,essolamentesuamigoy,simepreguntasamí,eselmoscónquelarondaalládondeellava.

—Oye,papá,vasasersimpáticoconJoséyvasatomárteloenseriodeunavez;tienesprohibidollamarlo«esechico»ocualquierapodoqueseteocurraenesemomento—ledigocondecisión,entrandofinalmenteeneldespacho,másque dispuesta a sacar las uñas pormi hermana—.Alana lo quiere, aunque lollame«amigo»,yéllaquiereaella.¿Quémáspuedespedir?Alfinal,esoesloqueimporta,quesequieranyquesecuiden.

—Loqueimportaeslafamiliaydarleacadaunoelpuestoquesemerece.Tu hermana lo llama «mi amigo», no lo llama «mi pareja» ni me lo hapresentadocomotal,yélhacelomismocontuhermana,asíque,paramí,eselsinvergüenzaque se beneficia ami hija…ynomevengas conmodernidades,queteveovenir.

—Osdejoasolas.Yahablaremos,Pedro—seexcusaVíctor,intentandosalirdelaestancia.

—¡Tútequedas!—leordenamosalavezmipadreyyo,ydirijomimiradaalfrente,confundida.

«¿Por qué le he pedido que se quede?», me pregunto frunciendo el ceño,

Page 29: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

intentandoentenderelmotivoporelquelohehecho.—¿Quéopinastú,hijo?¿NomedirásquecoincidesconValentina?—Totalmente, Pedro. Sime lo permites, creo que te has quedado un poco

antiguoeneseaspecto—leresponde,aliándoseconmigo.—Escuchadmelosdos,sobre todotú,Valentina:siquieresque terespeten,

primero tienes que hacerte respetar tú. Tu hermana se fue a vivir con elcantamañanasesecasialdíasiguientedeconocerlo,sinnisiquieramolestarseenpresentármelo. No soy antiguo, soy padre, y, cuando tú estés en mi lugar, loentenderás.

—Papá,llevanjuntoscasiunañoy…—¡Casiunaño!¡Yavestú!Mira,hija,cuandollevenunavida,entoncesya

hablaremos.Tegusteono,paramícontinúasiendoelmoscónquenodejaderondaratuhermana—insisteconvencido,ybufoalavezquepongolosojosenblanco—.Quenomeentereyodequetúhaceslomismoqueella.

—¿Por qué? Si Alana lo hace, ¿por qué no he de poder hacerlo yo? —planteoasombrada.

—Porque le cortaré los huevos al capullo que te ronde sin miconsentimiento, ¿lo tienes claro?—me suelta con su vozarrón llenando cadarincón de este despacho, levantándose de su silla y apoyando lasmanos en lamesa.

SientolamiradadeVíctorquemándomeenlaespalday,aunasí,aprovechoparadejarlascosasbienclarasahoraqueacabodellegar,paraevitarmefuturosproblemas.

—Mira, papá, tengodiecinueve añosy soy independiente económicamentedesdelosdieciséis.Tequiero,ymucho,peronovoyatraerteamisliguesacasaparaquelesdeselconsentimiento—leaseguroconseriedad.

—¿Tusligues?¿Quéliguestienestú?—brama,yalzoelmentón.—Seterminó,papá;noheregresadoacasaparadiscutircontigo—mascullo

enfadada,dándomelavueltaysaliendodeallí,sinmolestarmeenmiraraVíctor,dandounsonoroportazo.

Cuandollegoamihabitación,cierroconotroportazo,sipodercreerque,sinllevarnisiquieraundíaencasa,yaestédiscutiendoconmipadre.

—Lamanoizquierdanoeslotuyo,¿verdad?—mepreguntaVíctorentrandoenmicuartocomosinada,ymedoymediavuelta,sorprendida.

Page 30: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Perdona?¿Sepuedesaberquéhacesaquí?Vete,sólomefaltastúahora—siseoyendohacialapuerta,queabrodeparenparparaqueselarguedeunavez.

—Cumploórdenesdetupadre,asíquehazelfavordecerrar.Nomeapetecehacerpartícipeatodalacasadeloquetengoquedecirte.

—Sí,hombre,yquepiensequeestamoshaciendoalgoqueélconsiderequenoescorrecto;mejorladejoabierta.Oye,¿porquénonoshacesunfavoryledicesqueyahashabladoconmigo? Invéntatequeal finheentradoen razónyque le traeré a todosmis ligues para que les lea la cartilla antes de que osenrozarme—añado,negándomeaponérselofácil.

—Nopiensometermeeneso,aunquetupadremelopida.—Entonces,¿quéhacesaquí?¿Estásdesobedeciéndolo?Uyyy,queatrevido

tehasvuelto—masculloconsarcasmo,arrancándoleunasonrisa.—Tu padre entrará en razón con el tiempo. Te hiciste modelo y terminó

aceptándolo,asíqueestonoesnadacomparadoconeso…Tendríasquehaberleoídoesosdías—mecuentasindejardesonreír,sentándoseeneltaburetedemitocadoryemanandomasculinidadyfuerzaportodoslosporosdesupiel;tengoquevolvermehacialaventanaparanomirarlomásdelacuenta—.Sinoledioun infarto cuando vio ese reportaje tuyo desnuda, con el perro y las joyas deCartier,yanoselodaránunca.

—¡Perosinoseveíanada!—medefiendo,volviéndomeyencarándoloconorgullo.

—Esereportajenosehacesoloytúestabasdesnuda;teaseguroqueesofuesuficiente motivo como para que montara en cólera. Si no oíste sus berridosdesde Madrid fue porque el viento no soplaba en esa dirección —sueltaguiñándomeunojo,ytengoquefrenarmemuchísimoparanosonreír.

—No hizo falta el viento, perdí la cuenta de las veces queme llamó porteléfono para prohibirme que siguiera trabajando como modelo —le explico,sintiendocómoesaconexiónconélregresadenuevo.

—Escúchame,Val:enestosmomentoselproblema lo tienenAlanayJosé;déjalos a ellos que lo resuelvan con tu padre y aprende a no retarlocontinuamente.

—Conlobienquemelopaso—mascullocruzándomedebrazos,haciéndolosonreírmásabiertamente.

Page 31: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿No te das cuenta?—me pregunta poniéndose serio de repente—. ¿Deverdadtodavíanoloentiendes?

—¿Quétengoqueentender?—demando,poniéndomealadefensiva.—Quenopodíaser—afirma,conlaintensidadcargandosuvozysumirada

—.Meconoces,Valentina,creoquemásquenadie,ysabesloquesignificótupadreenmivida.Sisoyquiensoyytengotodoloquetengoesgraciasaél.Sino hubiera sido por Pedro, posiblemente habría terminado en la cárcel, en elmejordeloscasos,oasaberdónde,enelpeordeellos.

—Esonuncasesabe.Además,lehaspagadotuvidaamipadreconcreces.Si nuestro vino es tan reconocido es gracias a tu esfuerzo; no creo que debascontinuardándoleexplicaciones—sentencioconsequedad.

—Nosetratadedarexplicaciones,setrataderespetarlocomolorespetaríasi fuerami padre. Joder, tenías dieciséis años, ¿de verdadme creías capaz dehacerlo?—mepregunta,levantándosedeltabureteyacercándoseamí.Lomirosintiendoqueesanoche llegaparaquedarseentrenosotros—.Además,aunqueno lo entiendas, paramí siempre serás esa niñita que encontré llorando en elviñedo.

—Yano soyesaniñita,Víctor, haceañosquedejéde serlo. ¿Porquéeresincapazdevermecomolamujerquesoyahora?—inquiero,encarándolo.

—Porqueparamícontinúassiendounacría.—¡Genial! Si ya me has dicho todo lo que tenías que decirme, puedes

largarte—mascullodirigiéndomehacialapuerta,deseandoperderlodevista.—Val—sisea,cogiéndomedelbrazoyfrenandomiavance.Mevuelvoparaenfrentarloapesardequesientocómolapieldemibrazo

meardedondeél está tocandoy, aunque los recuerdosde esanocheestán tanpresentes comomi enfado,me acerco un pocomás a su cuerpo, atrapando sumiradacon lamíay sintiendocómomipecho se llenadenuevoconmilesdeemociones mientras todo se vuelve demasiado eléctrico y demasiado vivo anuestroalrededor.

—¿Quién se estámintiendo ahora? ¿Quién?—susurro en un hilo de voz,viendo cómo sumirada se oscurece pormomentos—. Deberías pensarlo, ¿nocrees?—murmuro,soltándomefinalmenteapesardemisdeseosdehacerjustoloquemeprometínovolverahacer—.Necesitoducharme;vete,porfavor—lepido,yendohastalapuertayaferrandoelpomoconfuerza.

Page 32: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Quéesloquequieres,Valentina?—preguntaposandosumanosobrelamía,cerrándolayhaciendoquememuevaconél.

—Quiero que seas sincero contigo mismo, sólo eso. Quiero que me veascomolamujerquesoyahorayquedejesdepensarenmipadredeunavez,parapensarexclusivamenteenloquedeseas.Hazlo,piénsalo—musitoenunhilodevoz.

—Ya lo he hecho y la respuesta continúa siendo la misma —sisea entredientes.

—¿De verdad? Entonces, si te beso, no sentirás nada, ¿cierto?—susurroacercándomemás a él, regresando conmis palabras a ese pasado que enterréhaceañosypisoteandotodasesaspromesasquemehiceamímisma.

Sientomispechosrozarsucuerpo;surespiracióntrabajosamezclarseconlamía; el calor que emana de su piel fusionándose con elmío;mis deseos,máslatentesquenunca,entremezclándoseconlossuyos,yestasensación,quehastaahorasólocreíaquemeafectabaamí,traspasarsuférreocontroldeunamanerafulminante.

—Valentina,déjaloestar—murmuraconvozronca,conlamiradafijaenmiboca.

—Demuéstramelo,Vic;demuéstramequeerescapazdemantenertefríositebeso—susurroencendida.

—Nosetratademantenersefrío,setratadequetodoestonoesnormal—masculla enterrando sus dedos enmi pelo, apoyando su frente sobre lamía yencendiendomultituddefuegosenmiinteriorconesesimplegesto.

—La normalidad la damos nosotros —le rebato, con la respiraciónentrecortada,sintiendolasuyaacariciarmislabiosyelambientecargarsedeunaelectricidad imposible de ignorar—. Olvida quiénes fuimos y mira quiénessomosahora—susurroborrandodeunplumazoestostresañosenlosquehemosestadoseparados.

—¡Suficiente! —farfulla enfadado, alejándose de mí, y lo observopercibiendo cómo la electricidad que nos envolvía y el sinfín de sentimientosque aleteaban en mi pecho desaparecen y, en su lugar, llega de nuevo ladecepción.

—Vete,Víctor—exijocondureza,siendoyoquienloechaestavez—.Oye,trabajas en la bodega, formas parte de ella ymi padre te trata como si fueras

Page 33: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

partedelafamilia;mientrasestemosrodeadosdegente,tratémonoscomoenelpasado,perosóloeso.Noquierovolveravertesinoesestrictamentenecesario.

—Val…—Val,¡¿qué?!—lepreguntoalzandolavoz—.Mira,estoycansadadetodo

esto—le confieso en un susurro,maldiciéndome por haber roto las promesasquemehice en el pasado—.No teníaquehabertedejado entrar, nomehagasecharte.

—Yamehasechado—mascullaarisco.—Túlohicisteantes—musito,enlazandomimiradaconlasuya.Incapaz de sostenérmela y de rebatirme nada, abandona mi habitación,

dejandounvacíoenormeenellayenmiinterior.Mesientoenlacamaexperimentandocómoesevacío,esequeélhadejado,

sellenadeañoranza,tristezaeimpotencia,comosisetrataradeunavasijallenadedemasiadascosastristes.Yotambiénlovicrecer,yotambiénlovicomounhermano cuando era pequeña… pero crecí y empecé a verlo con los ojos dequiendescubreunmundoenteroysólodeseaadentrarseenél;empecéaverloconlosojosdeldeseoydelanhelo,yviesosmismossentimientosreflejarseenlos suyos, como los he visto ahora… «Entonces, ¿por qué no nos da unaoportunidad? ¿Por qué no se olvida de mi padre, de su deuda y de quiénesfuimospara,simplemente,vernosahora?—meplanteodesolada,yendohacialaduchayempezandoadesnudarme—.Yyo,¿porquésoyincapazdeolvidarloydeseguirconmivida?¿Porquéestedeseomepersigueconstantemente,añotrasaño,negándoseadesaparecer?»

Cierro los ojos mientras el agua caliente se desliza suavemente por micuerpo,arrastrandoconellaelpolvo,quemilocacarrerahahechoadheriramipiel, y las lágrimas provenientes de mi alma, lágrimas que convierten ladecepción y la tristeza que emana de mi corazón en algo tangible, pues, denuevo,sientoquehesalidodesucasasinnecesidaddehaberentradoenella.

Me visto con un sencillo vestido blanco, unas sandalias planas y unospendientesétnicos,preguntándomesivolveréaverloono,puesmipadrelohainvitadoacenar,y,sinsabersiserécapazdefingirdelantedetodamifamiliaesanormalidadqueestáaaños luzdenosotros,meobligoaborrar la tristezay ladecepcióndemirostroparacubrirloconesamáscaradeindiferenciaqueutilizoamenudoenmi trabajo, antesdeaccederal comedordeverano, situadoenel

Page 34: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

patiotraserodelacasa.—¿Noha llegadonadie todavía?—lepregunto,extrañada,amipadre,que

se encuentra sentado solo, presidiendo lamesa, fumándoseunpuroy conunacopadevinotintofrenteaél.

—Tuhermanamehallamadoparadecirmequeseretrasaránmediahora,yCasiestáenlacocinaterminandodehacerlacena—merespondeconseriedadcon esa voz, cargada de matices, llenado todo el patio y, de repente, sientomuchísimapenaalverlotansolo.

—¿YVíctor?—musitoprudente,acercándomeaél.—Ha declinado la invitación—me responde, y siento cómo, por enésima

vez,ladecepciónseinstalaenmipecho.Pero¿quéesperaba?Alfinyalcabo,estáhaciendoloquelehepedido…,pero,entonces,¿porquémedueletanto?

—Siéntate a mi lado, hija; quiero hablar contigo sin que te enfades y tepongashechaunafuria—mepide,sacándomedemispensamientos.

—Lamentohabermeenfadadoantes,papá—meanticipoaél,sentándomeasu ladoycogiendounadesusmanos,queacunoentre lasmías—,pero tienesqueentenderqueyanosomosunasniñas,quelostiemposcambianyquenoesmaloirconellos.

—Y tú tienes que entender que yo soy vuestro padre y, por desgracia,también vuestra madre, y me debéis un respeto. Entiendo que los tiemposcambian,peroparaabrazarelfuturohayquerespetarelpasado,yvosotrasnolohacéis. Tú te has hecho modelo y olvidas los valores que te inculcamos depequeña,ytuhermanavivesuvidacomosinotuvierafamilia,yeso,hija,duele.

»Vosotras venís aquí siempre que os place y siempre os encontráis laspuertas abiertas de par en par, pero nunca os preguntáis si yo necesito verosantes.

Tomáisvuestrasdecisionesamparándoosenquesoismujeresindependienteseconómicamente,perolaeconomíanoloestodoenestavida;tambiénestánlafamilia,losvalores,elamoryelrespeto,ynitúnituhermanatenéisencuentanadadeesoyyosientoquehe fracasadoenmipapeldepadre—meconfiesaconseriedad,ysientocómo,denuevoaunquedeformadistinta,lapenapresionamialma.

—Papá,lohashechomuybiencomopadre;nuncatesientasasí,porquenoescierto,yséquetienesrazónenmuchascosas,peroentiendequenosotrasno

Page 35: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

loveamoscomotú.Mitrabajoconsisteenserunaperchayvenderloquellevopuestoenesemomento,peronoporelloolvidolosvaloresquemeinculcaste.

—Hasposadodesnudavariasveces,¿puedesdecirmequéestásvendiendoenesemomento?—merebate,decepcionado—.¿Asíescómorespetaslosvaloresqueteinculcamos?¿Deverdadnecesitasquitartelaropaparaquetetenganencuenta? En ese caso,más te valdría haberte quedado trabajando aquí, aunquefueraenelcampo.

—Papá,noeseso…Además,nuncasemehavistonada.—Entonces,¿creesquedeberíasentirmeorgullosoporquenuncasetehaya

vistonada?—Exacto, papá… Deberías sentirte muy orgulloso de que una firma tan

importantecomoCartiermeeligieraentrecientosdemodelosparaposarconsusjoyas y de que el fotógrafo Stefan Helberg, uno de los más prestigiosos delplaneta,meseleccionara,posteriormente,entremilesdemodelosparahacerotroreportajeque,porcierto,fuetodounéxito.Aunquenoloentiendas,sí,deberíassentirteorgulloso,porqueyoloestoy,ymucho—lerespondo,dolida.

—Pues,aunquenoloentiendas,noloestoy.Noestoyorgullosodeveramihijadesnuda,lleveonollevejoyasdeCartier,ymenosaúndeverlaencuerosenlas páginas centrales de una revista de máxima tirada. Tú eres ValentinaDomínguez,laheredera,juntocontuhermana,detodoesto…ynosólodelosviñedosylabodega,ereslaherederadellegadoquecorreportusvenas.Nomehables de orgullo cuando tú olvidas el tuyo —masculla mirando al frente,obcecado.

—Sientoqueloveasasí,papá—musitosecandomislágrimas—,peroesmitrabajoynovoya renunciar a él ahoraque estoy empezandoa conseguirmissueños.

—Puescuidabientussueñosparaquenoterminendañándote.—¿Tanto te he decepcionado? —le pregunto con dolor, empezando a

levantarme,puesnecesitoalejarmedeél.—No te vayas—me pide con la voz cargada de sentimiento, posando su

mano sobre lamía—; no te vayas, hija…Escúchame, sé que estás trabajandoduroyquedesdemuyjovenhasluchandoporhacerrealidadesossueñosdelosquetantohablas,peroentiendequeyonomesientaorgullosodeciertosaspectosde tu vida. Sólo te pido que no olvides quién eres cuando vayas a aceptar un

Page 36: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

trabajo,queentiendasque tusdecisionesmarcarán tuvidapara siempreyqueseasresponsableconellas,porqueluegonopodráscambiartupasado.

Equivócate,perosóloparaaprender.Entiendequeelrespetoloestodoyquelafamiliaperdurasólosimantenemoslasraícesarraigadasalatierra,comolascepas.Vivetuvida,peronolavivaspensandoexclusivamenteenti,porquenoestás sola…, estamos nosotros, están tus antepasados y estarán tusdescendientes.Séresponsabledetusactosparaqueelpasadonopuedaregresarnunca para abofetearte —musita para luego guardar silencio durante unosminutos,meditandosuspalabrasydejandoquecalenenmí.

»Lajuventudesatrevida—prosigue—,imprudentee impulsiva,ycreequepuede con la vida sin pensar que la vida es larga y se toma su tiempo parahacerte tropezarenesehoyoque túsolocavaste; sémás listaqueellayno locabes nunca para no tropezar jamás en él—me dice aferrandomi mano confuerza,conlaexperienciadesuvidallenandosumirada.

—Vale, papá, lo tendré en cuenta —susurro abrazándolo con fuerza,sabiendoquetengomuchascosasenlasquepensar.

—Esoespero,portubien—medicemientrasyoguardosilencio.—Papá,tengoquecontarteunacosay,porfavor,necesitoquemeapoyesen

esto—leruegoenunhilodevoz,conscientedequenohabráunmomentomejorqueéste.

—¿Quésucede?—mepregunta,frunciendoelceño.—Antes te he dicho que estaban empezando a cumplirse mis sueños,

¿verdad? —me arranco, y asiente en silencio mientras siento mi corazónempezara latirmeenlagarganta—.Vale…Bueno…Ahíva…—ledigoantesdesoltartodoelairedegolpe—.Haceunassemanas,unosscoutersvinieronamiagenciaenbuscadenewfaces,nuevascaras—leaclaro,atropelladamente—.ElcasoesquelesgustéymepropusieroniraNuevaYork.Heaceptado,papá.

—Vaya,estosíquenomeloesperaba—meconfiesaconvozneutra.—Esunagranoportunidadparamí.Allí al finpodré cumplirmi sueñode

convertirmeenunatopmodel.Esahoraonunca.—¿Yquépretendesquetediga?Porloqueveo,hastomadoyatudecisión;

sigueconella,entonces.—Paramíes importantequelaapruebes—musitocogiendosumanoentre

lasmías,acariciandosupielcurtidaporeltrabajoenelcampo.

Page 37: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—HaceunosdíasestabasenGrecia.Vivescomolosnómadas,sinarraigarteanadanianadie.Túmismaacabasdedecirquetutrabajoconsisteenserunapercha;porlotanto,sólotequedanlosvalores…Nolospierdasporelcaminoytendrásmiaprobación.VivasenNuevaYorkoenMadrid,queellosseantuguíay,tufamilia,esasraícesquenopermitesquetomenfuerza.

—Papá,vosotroslosoistodoparamí.—Pues demuéstralo —me pide con rotundidad—. Recuerda quién eras

cuandocorreteabasporaquíyrecuerdaquiénessujetarontumanocadavezquecaíasytelastimabas;recuérdaloparanoperderteenesavidaquetantotegusta.

—TehavenidobienqueAlanay José se retrasasen, ¿eh? Joder, papá,meestáshaciendosentirque lohago todomal,ynoesasí—replico,secandomislágrimasdenuevo.

—Sinofueraasí,noestaríasllorandoaquísentada.Laslágrimassonsóloelrecordatorio de que algo no funciona como debería; piensa qué es y ponleremedioantesdequeseademasiadotarde.

—Las lágrimas también pueden ser sinónimo de impotencia. Soyresponsable,papá,y,aunqueesciertoquevivocomolosnómadas,noolvidomisraícesnimilegado;dehecho,voyaempezaraestudiarlacarreradeenología—leconfiesofinalmente.

—¿Cómo?—mepregunta,sorprendido.—Siempremehagustadoesto,puedequeseaporque formabapartedemí

inclusoantesdequeyonacieraoporquemeloinculcasteiselabueloytúdesdequefuiunacría,peromifuturomáslejanonoeslamoda,sinolabodega.Quieroseguircontulegado,papá,peronoahora.

—Perohija,sideverdadestotegusta,olvídatedeNuevaYorkyquédateamilado;déjametransmitirtetodoloqueséytrabajacodoconcodoconVíctorparallevarnuestrosvinosatodaslaspartesdelmundo—mepideentusiasmado,y,duranteunossegundos,meimaginotrabajandoconVíctor,viéndoloadiario,compartiendo comidas y eventos con él, y siento como si me pellizcaran elcorazón.

—DeesoyaseencargaVíctorynadiemejorqueélparahacerlo.Papá,noprecipitemoslascosasydejemosquetodosigasucurso,sinpresionesdeningúntipo.Amímegustamuchomividaenestosmomentos…Quierodesfilarparalos más grandes y quiero seguir posando para los principales fotógrafos de

Page 38: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

moda; quiero que el apellidoDomínguez no se asocie solamente al vino, sinotambiénaunrostro,almío.Antesderegresarparaquedarme,quierocumplirmisueño de ser la mejor top model de todos los tiempos y eso sólo puedoconseguirloenNuevaYork.

—Como quieras…Al menos sé que no está todo perdido, con eso tengosuficientedemomento—sueltaconalivio.

—Papá,aunquenofueraaestudiarenología,mividanoestaríaperdida—lerecrimino.

—¿YtuamistadconVíctor?¿Vasadecirmequetampocosehaperdido?—mepreguntaclavandosumiradaenlamía,sinpermitirmeliberarmedeella—.Mira,hija,noséquésucedióentrevosotros,peropasasteisdeseruñaycarneaalejarospocoapocoelunodelotrohastallegaraperdertodoelcontacto.

Siempre pensé que algún día vendrías a contármelo y por eso decidí nopresionarte, pero el tiempo ha pasado y tú no has venido, y quiero saber quéocurrióparaqueélhoynoestéaquísentado.

—Si no está aquí sentado es cosa suya, no mía—replico con tristeza—.Supongo que crecí y que la distancia fue motivo suficiente como para quenuestraamistadseenfriara.

—Lascosasnoseenfríansinosoplamospreviamente.—Pruebaadejarunplatodesopahirviendosobrelamesaytómalapasada

unahora;pormuycalientequeestéalinicio,teaseguroquepasadoesetiemposehabráenfriadosinnecesidaddequesoples.

—EsoesporquenotieneuncalientaplatoscomoDiosmandadebajo.Tantola amistad como el amor se mantienen con constancia, manteniendo elcalientaplatos siempre encendido para que no llegue elmomento en el que telleves la cucharaa labocay te encuentres con la comida fría.Teaseguroqueluego,aunquelacalientes,yanoestáigualdebuena.Nopierdasamistadesporel camino por nomantener tu calientaplatos encendido. Te lo he dicho antes,hija, lasraíces losontodo;permitequelas tuyasarraiguenyarrastrenconsigolasdelaspersonasquefueronysonunapartefundamentaldetuvida.

—Buenconsejo,papá,lotendréencuenta.Detodasformas,notepreocupes,yo estoy bien, más que bien, y él también, que es lo importante —musitodeseandodejardehablardeesetema.

Page 39: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme
Page 40: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO3

—Pero ¿a quién tenemos aquí? Si es la famosísima supermodelo ValentinaDomínguez—oigo laalegrevozdemihermanaymevuelvoparaverla llegarcorriendohaciamí.

—¡Quenocorras! ¡Que tevas adarun tortazo!—legritaCasi, quevieneacompañadadeJosé,amboscargadosconlacena—.¡Siempreigual,estasniñas!¡Corriendoatodaspartes!Muchodiseñoymuchamodaysinmodales.Loqueyo te diga,Pedro: donde esté lamujer de antes, que se quite la de ahora, queparecentodascaballosdesbocados.Dejaaquílafuente,hijo—leindicaaJosé,quelamiradivertido.

—¡Tía,quépasadaelreportajedeCartier!¡Estabasguapísima!¡Noparecíastú!—mediceAlanasindejardedarmebesos.

—¡Hombre,muchasgracias!¡Tenhermanasparaesto!¡Ysuéltame,quemeahogas! —exclamo riendo, a pesar de que ese reportaje ha provocado mislágrimasunosminutosatrás.

—¡Teaguantas!¡Quéganasteníadeverte,pequeñaja!—Perosisoymásaltaquetú,¡taponcitodebotella!—lerespondo,haciendo

a un lado la conversación que acabo demantener conmi padre y queme hatocadoelalma.

—¿Taponcito de botella? Más bien perfume del bueno, no como tú, queparecesunabotelladecoloniadelitro—merebate,pinchándomeysoltándomeparadirigirseapapá—.¿Cómoestámipadrefavorito?—lepreguntacolgándosedesucuello—.Tengomilcosasquecontaros—nosanunciallenadeentusiasmo.

—Comosituvierasotropadre—leresponde,abrazándola.

Page 41: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Cómoestás,Valentina?—sedirigeamíJosé,dándomeunpardebesos.—¡Genial!¿Ytú,cuñado?—inquiero,haciendoespecialénfasisenlaúltima

palabra para que mi padre lo capte de una vez—. Espero que hayas traídocontigoesaguitarratuyaparaambientarlacena,quetengoganasdemarcarmeunbailecito.

—Laguitarravaconélatodaspartes,poresonotepreocupes—seanticipamihermana,sentándosealladodemipadre.

—Pedro, buenas noches. ¿Qué tal estás? —le pregunta «mi cuñado»,tendiéndolelamanoquegraciasaDiosmipadreacepta.

—Pues aquí sigo, viendo cómo vuestra amistad perdura —masculla sinpodercallarse.

—¡Papáááááá!—sequejaAlana—.No lehagascaso, José.Ven, siéntateamilado.

—Contentometienes—farfullamipadre,dandoluegounsorboalacopadevino—.Creíaquenoseríascapazderecordarelcaminoacasa.

—Papá,heestadomuyliada.—Yono,yomepasoeldíasentadoalasombra.—Hoylotenemosguerrillero,hermanita—laadvierto,guiñándoleunojoa

mipadre,quemesonríeyledevuelvolasonrisa.—Estehombreonollegaosepasa—intervieneCasi.—Vamos a tenerlaaaaa… lo veo venirrrrrr —canturrea la recién llegada,

sirviéndoseunacopadevino.—Oye,Alana,¿porquénonoscuentastodoloqueteníasquecontarnos?—

ledemando,intentandoaligerarelambiente.—Eso,hija,cuéntanoslo,queestoyhastaelmoñodeoírhablardevino—me

secundaCasi,empezandoaservirlacena.—Hetomadounadecisión—noscomunicaconvehemencia.—Casarte—pronunciami padre, provocando que José se atragante con el

vinoqueestababebiendo.—¡Papá!—protestaellamientrasyomeríoconganas.—¿Quépasa?¿Notepareceunabuenadecisión?Asísabríacómollamara

este chico, queno esnimiyernoni tampoco tupareja, pero, en cambio, vivecontigo.

—Somosmásqueamigos,Pedro,ypuedes llamarme José—leaclara éste

Page 42: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

sonriendo,haciendohonorasusantapaciencia.—Papá,yaestábien,¿quieres?—lepidemihermana.—Eso, dejémoslo estar, que por hoy ya he tenido suficiente—acepta mi

padre—.Chico, ¿te gusta este vino?—le plantea a José, y pongo los ojos enblanco.¡Dios,quéganastienedeponérselodifícilalpobre!

—Muy bueno, Pedro. Éste no lo había probado nunca o, al menos, no lorecuerdo.

—Si lo hubieras probado, lo recordarías, te lo aseguro —sentencia él,orgullosocomounpavoreal—.Vamos,hacedlacata—nospide,recostándoseensusillaypaseandosumiradaportodosnosotros.

Cojomicopay,trasagitarlasuavemente,llevominarizaella,cerrandolosojosypermitiendoquesusmaticesinundenmisfosasnasales,sintiendoelpicordelasespeciasinicialmenteyeldelafrescuradelbalsámicodespués.

—Roble francés… Es un vino con muchísima fuerza, muy intenso ybalsámico…Lasespeciasestánmuypresentes,perodeunaformasuave,comounapimienta rosaoblanca juntoconelclavo, lacanelay lanuezmoscada—musito absorbiendo todos losmatices antes de llevarme la copa a los labios yretenerloenlaboca,dondelopaseopormisencíasantesdetragarlo,sintiendode nuevo las especias que antes había percibido en la nariz, notando lainconfundiblesensacióndelostaninosyfrenándomeparanollevarmilenguaalasencíasparaeliminarla—.Detragolargo,conmuchatextura,esmuycremosoymuy envolvente…La uva negra estámuy presente, junto con el regaliz depalo.Esunatempranillo,sinduda…

—¿Quémás?—meinterrogamipadre,volcandotodasuatenciónenloqueestoydiciendo.

—Tienemuchocuerpoyesmuyfrescoymuyintenso,tantoennarizcomoen boca. Los taninos son muy expresivos, pero no de manera negativa; alcontrario,estánmuyequilibradosy…¿barricanueva?—inquiero,saboreándolodenuevo—.Estábuenísimo,papá,ytienetodoloquemegustaenunvino.Esunvinoquepidemás,que tepide seguirbebiéndolo. ¿Esnuevo?Yo tampocorecuerdohaberloprobadonunca.

—¿Recuerdascuandotefuiste?Eseañosalióelmirtoenelcampo;yasabesloraroqueesqueesosucedaytambiénque,cuandoésteaparece,significaquevamos a tener una buena añada, algo que nos confirmó posteriormente el

Page 43: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ConsejoReguladorcuandolacalificócomoexcelente.Conesavendimianacióeste vino. En ese momento, Joaquín, nuestro enólogo, y yo llevábamos añoshaciendopruebasycoupages,¿teacuerdas?—mepreguntayasiento—.Puesdeesas pruebas y coupages nació este vino, tu vino, porque se llama como tú,ValentinaDomínguez—meconfiesaconorgullo—.Tuhermanatieneyaelsuyoyhallegadolahoradequetútengaseltuyo.Poresoestevinoesunreflejodeti…Losbalsámicosquetanbienhasdetectadoreflejantujuventudytufrescura,yelrobleylatempranilloledanesepuntoelegantequevacontigo.Reflejatuesencia y tu yomás íntimo, lo que perdurará cuando la juventud dé paso a lamadurez…y,aunqueconesta luznosésipodrásapreciarlo, la lágrimaqueseformacuando agitas el vinono es transparente, sinoque tiene color, como tú,hija…,túestásllenadecoloryestevinoestufielreflejo.

—¡Hala, qué bonito, papá! —exclama Alana, entusiasmada, mientras yosientocómolaemociónmeimpidehablar.

Siempre había deseado que un vino llevara mi nombre; era uno de esosdeseosquesólocompartesconciertaspersonas,enmicaso,Víctor;unodeesosdeseosquenoteatrevesaformularenvozaltaportemoranomerecerloyunodeesosdeseosque,cuandosehacenrealidad,sobrepasantodastusexpectativas.

—Víctor me lo propuso cuando te marchaste—me confirma mi padre, ysiento cómo otra vezmi pecho se llena demiles de sentimientos—y, aunqueteníamis reservas, él insistió e insistió…, ya sabes lo convincente que puedellegar a ser, y al final accedí. Esa vendimia y la posterior crianza, en barricanueva de roble, como bien has detectado, se hicieron pensando en lo quequeríamos conseguir, y Víctor estuvo trabajando incansable con Joaquín yconmigoconlosbatonnagesquelepracticamosestandoencrianza;deahí,esalágrima con color. Queríamos que este vino reflejara a la Valentina másauténtica,¿creesquelohemosconseguido?—mepreguntamipadremirándomecon ternura y, de nuevo, seco las lágrimas que han empezado a fluir fruto dedemasiadossentimientos.

—Lo habéis conseguido, papá. Muchas gracias por este regalo, que es elmejordelmundo—musitolevantándomeparaabrazarlo,todavíaasimilandoquefue Víctor quien insistió para que tuviera mi vino, algo que yo tanto habíadeseado,yquelohicieradespuésdeesanoche.

—Espero que, en el futuro, tú crees mi vino —me susurra al oído,

Page 44: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

provocandoqueelnudodemigargantameduelahastaloindeciblealtragar.—Teloprometo,papá;teprometoquecrearéelmejorvinodelmundoyque

llevará tu nombre, como tú has hecho con nosotras—murmuro sólo para él,intensificandoelabrazo.

—Esechicovalemillones;sóloesperoqueno lopilleuna lagartaynos loestropee —oigo cómo dice Casi y, por enésima vez, miles de sentimientosaparecenparaestrujarmialma.

—Venga, brindemos por mi hija y por el vino que llevará su nombre—proponemi padre, levantándose y rodeandomi cuerpo con uno de sus brazosmientrasqueconlaotramanosostienesucopadevino—.Porlafamiliayporlacontinuidad—prosigue, alzando su copamientras todos lo imitamos—;por lasangrequecorrepornuestrasvenas,rojacomoestevino.Portodosvosotros,miorgullo,mifuerzaymilegado,yporti,hijamía.Nuncaolvidesloquehemoshabladoyllevanuestroapellidoportodoelplanetaconfuerzaycongarra.PorValentina Domínguez —suelta con rotundidad, acercándome a su cuerpo ybrindandoprimeroconmigopara,seguidamente,unirsucopaa lade todos losdemás, y lo imito sin dejar de llorar mientras oigo cómo todos corean minombre.

—Menuda nochecita me estás dando, papá —murmuro sonriendo entrelágrimas.

—Eldíaquetetengaaquíconmigo,seréelhombremásfelizdelmundo—mesusurraconsuvoz,llenadematices,llenandomialma—.Cumpletussueñosyregresaprontoacasa;losviñedosyyoestaremosesperándote.

—Loharé,papá—leprometo,abrazándolodenuevo.—Venga,yaestábien,queaestepasoterminaremostodosllorandoylacena

se enfría, toda la tarde guisando para nada—mascullaCasi, sacando ese bríosuyoqueutilizacuandoquiereocultarsussentimientos—.Hala,todosacenar—noscasi ordena, ymiro sonriendo ami padre, queme sostiene lamirada conorgullo.

—He pensado que, aprovechando que estás aquí, podríamos hacer lapresentacióndelvinoanuestrosprincipalesclientesyamigosviticultores.

—Pero, papá, sólo voy a estar un par de semanas y tenéis que empezar aorganizar la vendimia; es demasiado precipitado, no creo que os dé tiempo aprepararla.

Page 45: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Osdé?—mepreguntasonriendo—.Másbientedé.—¿A mí? ¿Quieres que la prepare yo? —planteo asombrada—. Estás de

broma,¿no?—Nuncahehabladomásenserio.Estuvino,Valentina,asíquenadiemejor

quetúparapresentarlo.—Peropapá,escúchame—replicoconseriedad,intentandohacerloentraren

razón—:Yonotrabajoenlabodega,noconozcoalosclientes,nitampocoalosviticultoresquetrabajanconvosotros;nosénadadenada…Puedequemedejealgúnclientepotencialyosarruineunaventaimportantísima.¿Notedascuentadequenosoylapersonaapropiada?

—De lo que me doy cuenta es de que ha llegado el momento de que teinvolucres y de que aprendas. Además, tienes la suerte de poder contar conVíctor.Pregúntaleaéltodastusdudas;elchicohaestadoentodoelprocesodecreacióndeestevino.¡No!¡Mejor,aún!Preparadlajuntos,asímatasdospájarosdeun tiro:porunaparteaprendesautilizarelcalientaplatosy,porotra, tienesuna oportunidad de oro para conocer un poco la bodega y a sus clientes. Tevendrábienparatusplanesdefuturo,¿noteparece?—inquieremientrassientoquetodocomienzaadarmevueltasdemasiadorápido.

¿Quierequepreparelapresentación…conél?¡¡¿Conél?!!—Papá, de verdad, no creo que sea una buena idea… —intercede mi

hermana,cruzandounamiradapreocupadaconmigo.—En cambio, yo opino que es una demismejores ideas.Dos semanas es

tiempomásquesuficienteparaprepararlayahoraeselmomentoperfecto,justoantes de la vendimia, cuando los racimos maduros impregnan el aire con suaroma y cuando la brisa de finales de septiembre comienza a refrescar elambiente.Estevinoempezóconlavendimiaylopresentaremosjustoantesdeella.

—Alana no presentó su vino —recuerdo recomponiéndome, más quedispuestaanegarmetodoloquepuedaaestasoberanaestupidez.

—Porqueatuhermananuncalehainteresadoestemundo.Dilequetehagauna cata, venga, díselo…Lomáximoqueva a ser capazde comentar es si legustaono.

—Esoesverdad,noentiendocómopuedeshaberdetectadoqueerabarricanuevaylodelregalizytodoesoquehassoltado.Francamente,paramílacata

Page 46: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

deunvinose resumeenpésimo,malo,bueno,buenísimoosuperior—afirma,encogiéndosedehombros.

—Noparecesdelafamilia;hasta«tuamigo»hacelascatasmejorquetú—lariñemipadreconcariño.

—Bueno,nosabréhacercatas,perovoyaconvertirmeenunadelasmejoresdiseñadoras del panorama actual. ¿Queréis saber mis planes?—nos preguntaentusiasmadamientrasyopermanezcomudayparalizada.

Élinsistióparaquetuvieramivino,éltrabajóensucreaciónyconélvoyatenerquecolaborarparapresentarlo…,justocuandolehedichoquenoquierovolveraverlo…

Durante la cena, Alana nos habla de sus nuevos proyectos mientras yomantengolamiradafijaenmicena,quefinalmentesehaenfriado.Amisoídosllegan distorsionados sus proyectos de crear su propia colección de ropamientrassoyincapazdedejardepensarenél,enestevinoyenlasdossemanasquemeesperan.

—¿Quiereshacerelfavordecomer?Dejademirarlacomidacomosifueraahablarteencualquiermomentoyllévatelaalabocadeunavez—meriñeCasialavezquesientomisnerviosatodogasarrasandocontodo.

—Casi,déjame,¿quieres?Notengohambre,másbientengonáuseas.Papá,losiento,peronopuedohacerlo—afirmo,enfrentándolo.

—Claro que puedes, llevas esto en la sangre y una intuición quemuchosquisieran para sí; sólo tienes que ver la cata que has hecho, sin duda hasheredadolanarizdetuabuelo—meelogiaconorgullomientrasAlanaempiezaahablarconJoséyconCasi—.Tuabuelotambiéneracapazdedetectarmaticesquealrestonospasabandesapercibidos;siguetuintuición,disfrutadeestasdossemanas conociendomás a fondo estemundo que en el futuro será el tuyo yrecupera esa amistad que perdiste en el camino—me aconseja con cariño, yasientosabiendoquemicorazónpendedeunhilo.Unhiloquesujetaél.

Terminamos de cenar, o más bien terminan ellos, porque yo no heconseguidoprobarbocado,y, traselcaféy lacharlaposterior,mihermanamehaceungestoconlacabezaindicándomelapuerta.

—Voyalbaño,¿meacompañas,hermanita?—mepregunta,levantándose.—Claro—musitosaliendodelmutismoenelquemehallosumidadesdeque

mipadrehatenidosufabulosaidea.

Page 47: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Quéganasteníadehablarcontigoasolas—mediceunavezdentrodelacasa—.Estáaquí…CreíaqueestabaenSegovia, te lo juro,peroha regresadoantes—meconfiesacomosiestuvierarevelándomeunaltosecretodeEstado—.Tehellamadoantesalmóvil,peronomelohascogido.

—Nome he enterado. De todasmaneras, no importa, ya lo he visto—lerespondoentresusurrosmientrasnosdirigimosalservicio.

—¿Y?—planteaimpaciente.—Quetepodíashaberinformadomejor,maja.Llegoasaberqueestabaaquí

ynoaparezco;porsifuerapoco,miraquémarrónmehacaídoencima.—Ya lo séy lo siento.Casimehabíadichoquenoestaba,yyomisma lo

confirméconpapá…peronoséporqué lechesha regresadoantes, sesuponíaqueteníaparatodounmes—mecuentaapurada.

—Ya,puesmiraquébienvamosapasarlolosdosjuntitos—sueltoagobiada,cerrandolapuertadelbaño.

—Perocuéntamequeha sucedidocuando lohasvisto. ¿Qué lehasdicho?¿Quétehadicho?¿Qué…?

—Para—leordenoconautoridad.—Vale,paro,¡perocontéstame!—insiste,impaciente.—¿Qué quieres que te diga? Aunque me moleste, y mucho, continúa

gustándomeigualqueantes;tejuroquemehatembladotodocuandolohevisto.—Estáguapo,¿eh?Joder,tieneunamiradabajabragasquetemueres.—Túayúdame…Venga,ponmásleñaalfuego—laamonestodemalagana,

sentándomeenelbordedelabañera.—Eslaverdad:estáguapísimoytieneesavozde…nenaaaaaa…Noquiero

niimaginármelollamándome«nena»ymirándomeconesosojosquemetienenloca; en serio, te juro queme quito las bragas y se las entrego en ofrenda—suelta,arrancándomeunacarcajada.

—VoyacontárseloaJoséencuantopueda—bromeoriendo—.YhablandodeJosé,bueno,no…,vamosconlomío,quetienemástelaquelotuyo.

—Sí,eso,vamosconlotuyo—mediceansiosa—.¿Quétehadicho?¿Quélehasdicho?

—Lehedejadoclaroquenoquierosabernadadeélyquenoquierovolveraverlo—leexplicomientrasellaabrelabocaexageradamente.

—¿Yporquéquerríashacersemejanteestupidez?

Page 48: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Porquecontinúaviéndomecomounacría,porqueestoyhartadeesadeudaquecreequetieneconnuestropadreyporqueestoymásquehartadeseryolainsistente.

—Bueno,laverdadesquefuistemuyfuerte;hayquetenerunpardeovariosparahacerloquehiciste.

—Yniasífuecapazdevermecomolamujerquesoy.Paso,tía…Pormuchoquemeguste,voyatratarlocomoauntrabajadormásdelabodegay,encuantohagalapresentación,melargoaNuevaYork.

—¿Selohasdichoyaapapá?—Sí.¡Noveasloquehadadodesílamediahoraqueoshabéisretrasado!—¿Yeso?—mepregunta,yrápidamentelapongoenantecedentes.—Bueno, lo de los desnudos tenía que soltártelo; estaba muy cabreado,

Valentina.QueríairabuscarteaMadridparatraertedelaorejaalviñedo,asíquehazelfavorypiénsatelobienantesdehacerotroolovasamatardeundisgustoantesdequepuedastomarleelrelevo—meconfiesamientrassalimosdelbaño.

—Vengaya,tampocoseríaparatanto.—¿Queno?ConeldeCartier,Víctor tuvoqueestarhorashablandoconél

paraquesetranquilizarayentraraenrazón,¡noveascómosepuso!—¿Cómolosabes?—meintereso,deteniéndome.—PorquemelocontóCasi,básicamenteseleescapómientrasmirábamosla

revistay,aunqueluegointentócallarse,fuitirandodelacuerdahastaqueacabócontándomelotodoconpelosyseñales…Oye,¿puedodecirteunacosasinqueteenfades?

—Por supuesto que sí, sabes que puedes decirme lo que quieras—aceptofrunciendoelceño.

—EnparteentiendoaVíctor,élsiemprehacuidadodeti.Teconociócuandoerasunamocosayteaguantólaschorradasqueniyomismateaguantaba;debedeserraroparaélverteahoradeotraforma.

—Puesyoloveoysinningúnesfuerzo,laverdad—objetocruzándomedebrazos.

—Yyo,peroigualparaélesdistinto…ypapátienemuchoquevereneso.—Yalosé.Enfin,que,comoeslodesiempre,paso.Ojaláestasdossemanas

transcurranrapiditoypuedalargarmecuantoantesalaGranManzanaparadarleunbuenmordisco—ledigo,guiñándoleunojoantesdereunirnosconelresto.

Page 49: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CuandoAlanay José semarchan,medespidodemipadreydeCasi, quecontinúan charlando, para dirigirme ami habitación; sin embargo, una vez enella,medoycuentadequeestoydemasiadonerviosayansiosacomoparapoderdormir,porloque,siguiendounimpulso,salgodecasaparaencaminarmealasuya.

Haylunallenay,conlaluzplateadadesusrayos,quesefiltransuavementeatravésdelasramasdelosárboles,yconlacompañíadelamultituddeestrellasquedecoranelfirmamentoenfilomispasoshaciaesesenderoqueenelpasadorecorrí infinidad de veces. Mientras lo hago, intento vaciar mi mente y micorazóndelosmilesdesentimientosquepueblanmipecho,casiabarrotándolo,llenandomispulmones con la fraganciademis recuerdos, que es transportadaporlafrescabrisadelanoche,colmandomiinteriordelapazquesóloencuentroen estas tierras. Trato de hallar la calma que tanto necesito para aferrarla confuerzaynodejarlaircuandolotengafrenteamí.

Detengo mis pasos en cuanto llego a su porche trasero, dejando lasinterminablesfilasdevidesdetrásdemíy,duranteunossegundos,contemplolaslucesdelasguirnaldasencendidas,esasguirnaldasquecolgamosjuntos,ysientocómolosrecuerdoslleganconmásfuerzadelaquemegustaríaparallenarmipecho con un poquito más de demasiadas cosas. Suspiro bajito mientrasdesciendolentamentelamiradahastalahamacadondeélestáacostado,conunbrazo debajo de la cabeza y el otro colgando con una cerveza en lamano, ysientocómoestoquellenamipechopresionamásymásfuerteyquemicorazóncomienzaalatirdeprisa.

Vavestidoúnicamenteconunosvaquerosrasgadosyeslomássexyquehevistoenmivida,yporDios,juroquellevotresañosviendohombressexissinparar.

Page 50: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO4

—¿Víctor?—preguntointentandoquemivozsuenelomásfirmeposible.Veo cómo se incorpora en apenas un segundo y cómo la sorpresa se

vislumbra en su cara. Lo saludo con la mano, sin moverme un centímetro,esperandoaserinvitadayobligándomeamirarsólosurostro,sólosurostro.

—¿Qué haces aquí? —me plantea dejando la cerveza en el suelo,levantándoseyacercándosealosescalones,ymeencojodehombros,sintiendocómo los latidos de mi corazón incrementan su ritmo hasta casi llegar a migarganta, donde retumbanmultiplicándose pormil, como si fueran un eco detodoloquesiento…,unoquevuelveunayotravezpararecordarmeque todosiguetanvivocomoantes.

—Supongo que tengo que hablar contigo y, cuando antes me lo quite deencima,mejor.¿Puedopasar?—inquiero,obligándomedenuevoanodesviarmimiradadesurostro.

—Qué pregunta, sabes que siempre puedes pasar —me responde conseriedad,ysuboelprimerescalón,elsegundoyeltercerohastaquedarfrenteaél.

—¿Quierestomaralgo?—mepropone,sosteniéndomelamirada.—Acabode cenar, sóloquierohablar contigo—musito enunhilodevoz,

sentándomeenelúltimoescalón,dándolelaespaldaaesapuertaporlaquesalíllorandohacetresaños,yviendocómosesientaamilado—.Todavíatieneslasguirnaldas puestas—musito perdiendomimirada en las filas de vides que seextiendeninfinitasfrenteanosotros,esasqueesperoquemedevuelvanlacalmaqueloslatidosdemicorazónseestánllevandoconsigo.

Page 51: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Creías que las habría quitado?—indaga, y me encojo nuevamente dehombros sin contestar a supregunta,pues, aveces, cuando tienes tantas cosasquedecir,esmejorcallarapermitirqueunasfrasessolapenlasotrasyalfinalnopoderexplicartecorrectamente.

—¿Quésucede,Valentina?—quieresaber,yabsorbolosmaticesdesuvoz:oscura,ronca,fuerte,sexy,enocasionesacerada,cavernosa,profunda…

Definitivamente debo de tener un problema con las voces de los hombres,sobretodoconlasuya,porquepodríaescucharladurantehorasyhorasysiempreencontraríaalgonuevoyatrayenteenella.

—Supongo que demasiadas cosas —murmuro observando el sinfín deestrellas que, desde el firmamento, parecen contemplarnos en silencio—. Estanochehemosprobadomivino—susurrovolviéndomehaciaélyperdiéndomeensumirada—.Eraselúnicoquesabíalailusiónquemehacíatenerunvinoyahora lo tengo y creo que es gracias a ti —murmuro—, y también me heenteradodeque,denuevograciasati,mipadrenofueabuscarmeaMadridparatraermedelaorejacuandohiceelreportajeparaCartier—prosigo,consiguiendoqueunadiscreta sonrisa asomeen su rostrocubierto ahorapor las sombras—.¿Tengoquesabermáscosas,Víctor?

—Supongoque,silashay,yairásenterándote,comohashechoconéstas—musita enigmático, dirigiendo sumirada al frente, donde estabaposada lamíaantes,yguardamossilencioduranteunosminutos.

—Mi padre quiere presentar el vino antes de quememarche—le cuento,sintiendo cómo la suave brisa de principios de otoño envuelve mi cuerpo,moviendomifaldaasuantojo.

—¿Cuándotevas?—seinteresa,yabsorbosusmatices:durayacerada.Sindudaestáfrunciendoelceñoymevuelvoparacomprobarlo.

—Endos semanas—susurro captando su gesto ceñudo, sintiendo cómo elanheloregresaconfuerza.

—¿Y?—mepregunta,girándoseparamirarme.—Quiere que lo presente yo —musito pasando mi dedo por su ceño,

dejándome llevar por los recuerdos, alisándoselo y percibiendo cómo todo sucuerposetensaalsentirelcontactodemipielsobrelasuya.

»Lo siento, supongo que cuesta desprenderse de las viejas costumbres—susurroavergonzada,retirandorápidamentemidedodesurostro,levantándome

Page 52: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

y bajando los escalones, pues necesito alejarme de él—. También quiere queprepareyolapresentación…—anunciofinalmente,guardandomismanosenlosbolsillos y volviéndome paramirar su rostro—…contigo; quiere que estemosjuntosenesto—añadofijándomeensurostro,completamenteinexpresivo—.

De verdad que he intentado disuadirlo, pero ya sabes lo tozudo que escuandocreeque tiene razónenalgo.Siquieres intentarlo tú,adelante,es todotuyo—ledigo casi atropelladamente,maldiciendo amipadreporponermeenestasituación.

—Notengoningúnproblemaenprepararesapresentacióncontigo,Valentina—afirmaposandosumiradasobrelamíayconsiguiendoquemicorazónpierdaunlatido.

—Pero, si lo hacemos, tendremos que vernos todos los días —farfullofrunciendoestavezyoelceño.

Casi conteniendo la respiración, veo cómo se levanta, baja los escaloneshasta llegarhastadondeestoyyposasudedoíndicesobremiceño,alisándolocomoanteshehechoyoconelsuyo,ycontengounsuspiro,sintiendocómomicorazónsedetieneymiinteriortiembla.

—Haycostumbresqueesmejorquenosepierdan—musitaacariciándomelo—,yestapresentaciónesimportante,asíquesupongoquepodemosintentarlo,¿quéopinas?—mepreguntaconseriedad,retirandoeldedofinalmente.

—Pero…—Intentemos ser amigos, Val; podemos serlo, lo fuimos durante años…

Olvidemosloquesucedióesanocheyrecuperemosloqueperdimos—mepidecolocandosusmanossobremishombros,conlaintensidadllenandosumirada,esamiradaqueescapazdehacermeperderelequilibrio.

Sin contestarle, me libero de sus ojos y de sus manos para empezar aalejarmedeélydetodasestasemocionesqueinvadenmipechocuandolotengocerca, unas emociones que no sé cómo gestionar y que son un popurrí dedemasiadascosas.

—Nos vemos mañana—respondo con sequedad, encaminando mis pasoshaciaesesenderoqueconectasucasaconlamía.

—¡Espera!—megritaentrandoensucasa,ymevuelvohaciaelsonidodesuvoz;veolapuertaentreabierta,esaquesiempreestuvoabiertaparamí—.Noquiero que regreses sola—comenta saliendo de nuevo mientras, sin dejar de

Page 53: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

avanzar, sepasaunacamisetapor lacabezahastacubrir sucuerpoydirijomimirada al frente, sintiendo mis deseos arañar mi alma sin compasión—; teacompaño.

—Nohace falta, puedo ir sola—mascullo tirante, sintiendo laurgenciadetomardistanciaconél,casinecesitandoecharacorrerparaaligerarestapresiónquemeimpiderespirarconnormalidad.

—Estás loca si creesquevoyadejarque tevayas sola enplenanoche—replicaempezandoaandar.

—He llegado sola y te aseguro que puedomarcharme también delmismomodo. Vete, no hace falta que me acompañes —le pido sin moverme,consiguiendoquesedetenga.

—No pienso discutir contigo; voy a acompañarte y punto —afirma conseriedad, echando a andar de nuevo, y niego con la cabeza, sabiendo loobstinadoquepuedellegaraser.

Caminamos en silencio, en un pesado, incómodo y tenso silencio quemeproduceganasdegritar, pues siento cómo,de sumano, llegan todas las cosasquenosdiríamossipudiésemos.

—¿Recuerdaslaprimeravezqueteacompañéacasa?—plantearompiendoelmutismo finalmente, y siento que los recuerdos regresan para abrazarnos yreconfortarnos…oparaherirnoshastahacernossangrar.

—Noqueríavolverymecargastesobretuhombro—musitodeteniendomimirada en la piscina de la finca, iluminada ahora por las luces que la rodean,retrocediendoatravésdelosrecuerdoshastallegaraesedía.

—Todavíapuedooír tuvocecitadiciéndomequenoquerías ir,quequeríasbañarteenlapiscina.

—Ynostirastealosdosvestidosenella,haciéndomellorar.—Erasunalloronamalcriada—recuerdahaciéndomesonreír.—¡Me había entrado agua en la nariz!—me defiendo, sintiendo cómo la

tensiónquenos envolvía se disuelve con los recuerdos—.Casi queríamatarteporhabermetiradovestida.

—Casiqueríamatarmeporque leestábamosmojandoel suelode lacocina—merebatesonriendoabiertamente,conlasmanosguardadasenlosbolsillos.

—Decía que eras una mala influencia y nunca quería que fuera a jugarcontigo—leconfieso,devolviéndolefinalmentelasonrisa,viendoenélaljoven

Page 54: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

quefuehaceaños.—Suertequeluegoconseguímetérmelaenelbolsillo—afirma,guiñándome

un ojo y provocando quemi interior tiemble con fuerza y, creo que por purasupervivencia,echoaandardenuevo,sumiéndomeenesesilenciopesadoqueparecenoquererabandonarnos.

—¿Tehagustadoelvino?—demanda,rompiéndolo,yotravezabsorbosusmatices:seriedad,preocupación…¿anhelo?

—Mucho—musito,y,duranteunossegundos,estoytentadadecontarlequehedecididoestudiarlacarreradeenologíaytodosmisplanesdefuturo,pero,sinsaber por qué, me mantengo en silencio, guardándolos para mí—. Hemosllegado,graciasporacompañarme—leagradezcodeteniendomispasoscuandotengo la enorme casona frente a mí, mientras mantengo mis manos en losbolsillos, cerrándolas con fuerza, supongo que para no tocar lo que no mepertenece—.Nosvemosmañana…,¿a lasnueve?—lepregunto,volviéndomehaciaélyfrunciendoelceñosinpercatarmedeello.

—Estásdevacaciones,nohace faltaquemadrugues sinoquieres…Total,tampocoestantotrabajo—merespondemirandomigesto,ylodesfrunzoantesdequepuedahacerloélconsudedo.

—No me importa madrugar y, cuanto antes esté lista la presentación ypodamos presentar el vino, mejor —susurro perdiéndome otra vez en laintensidaddesumirada,deseandocorrerbienlejosparapoderalejarmedeella.

—Acabasde llegaryya estásdeseando largarte—masculla con sequedad,alejando sumirada de lamía y anclando sus pulgares en los bolsillos de susvaqueros.

—Noeseso—susurro,incapazdeexplicarleloquesiento.—¿Y qué es? —me rebate con dureza, enfrentándome con la mirada y

frunciendosuceño;cierromismanosconmásfuerza.—Nada…Hastamañana,Víctor—farfullodándomelavueltaparaentraren

micasa,sabiendoqueese«nada»encierrademasiadosmiedos.Miedo a sentir más, miedo a su amistad, miedo a acostumbrarme a sus

sonrisas,miedoamisrecuerdos,miedoalosrecuerdosquecrearemosjuntosymiedo a seguir con mi vida una vez que me aleje de la suya. Miedo, enmayúsculas,aquetodoestoquellenamipechocuandoélestácercadesaparezcaparadejarmevacíao,loqueespeor,hastadejarmeelalmahechaañicos.

Page 55: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Esanoche sueñoconél, conmis recuerdos filtrándosey entremezclándoseconlasimágenesquemisubconscientevacreandoenmicabezaasuantojo…yenellasmeveoconmisdoscoletasymisonrisatraviesa;loveoaélestudiandoen el porche trasero mientras yo coloreo la libreta que me regaló paramantenerme entretenida;me veo demodelo, sonriéndole a la cámara, veo susojos, sus brazos al alzarme, y siento el anhelo presionando mi pecho… yentonces,atravésdeunabrumaespesa,meveocorriendoyllorando,loveoaélsiguiéndomeygritandominombre,yunsollozoescapademigargantacuandola pena es demasiado intensa como para seguir manteniéndola presa en mipecho.

Abrolosojoscuandounsollozo,másaltoqueelanterior,rompeelsilenciodelanoche,despertándome,y,aunqueséquedeberíadejardellorar,nopuedo,pueslapenaquesientoestanintensaqueprecisosacarlafuera,necesitoliberartodasestasemocionesque,dealgunaforma,semantienenpresasenmipecho,añotrasaño,acumulandolágrimasqueyanodeberíanestarahípresentesyquevuelvenafluircomoelaguadeunríoquenuncaseseca.

Unavezmás calmada,me levantode la camaparadirigirmea la ventana,donde espero que la visión de un nuevo día logre apaciguar mi alma, peroentoncesveoalolejossucasay,denuevo,sientocómo,todoestoquellenamipecho,lollenaunpocomás.

Sinpoderalejarlodemispensamientos,mevistoconunosvaquerososcurosyuna camisetade seda color crema, dejandomi largamelenaoscura suelta y,tras maquillarme suavemente y ponerme otra vez los pendientes étnicos quellevabaanoche,bajoalacocina,necesitandourgentementemitépijoparapoderhacerfrentealdíaquetengopordelante.

—¿Qué haces aquí? —le pregunto con un hilo de voz, sintiendo que micorazónsaledisparadoalavelocidaddelaluzdesdeel tóraxhastallegaramigarganta,dondedecidequedarseparabombearconfuerzaycasiahogarmeconsuslatidos.

Estásentadoenunode los taburetesquerodean la isla, tomándoseuncafémientrasCasi trajinapor laestancia,y lomirosintiendocómo,denuevo, todotiembladentrodemí.

Vavestidoconunosvaquerososcuros como losmíosyunacamisablancaremangada hasta los codos, y trago saliva con dificultad, obligándome a

Page 56: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

moverme,aunqueseaincapazderecordarcómosehaceeso.—Hevenidoarecogerte—meinformacomosinada,llevándoselatazade

caféaloslabios,ypaseomimiradaporlacocinaconlaincomodidadabriéndosepaso.

—Deja de remolonear y siéntate a desayunar de una vez —me ordenaCasilda,dejandounatazadetéasuladoyunplatoconunpardetostadas;miromidesayunocomosifueraundinosauriodispuestoacomermeamí.

—Oye,Casi…—empiezoadecir,pues,traselsueñodeestanoche,nomesientopreparadaparasentarmetancercadeél.

—De oye Casi, ¡nada! Ayer no comiste y tampoco cenaste, así que vas adesayunarcomoquemellamoCasildaMartínezdelaNuez.Ocomesotemetoyolastostadasporlaboca,túdecides—exclama,fulminándomeconlamirada.

Claudicoyfinalmentemesientoasulado,inspirandosufragancia,ajabónycolonia,quellegahastamisfosasnasalesparatorturarme.

—¿Llevassincomerdesdeeldesayunodeayer?—mepreguntacondureza,fulminándomeéltambiénconlosojos,ylomiroalzandoelmentón.

—Yeldesayunofueunvasodeesetépijoquetantolegustayunaspocasgalletas,notecreasquesecomióunavaca…Asídeflacaestá.¡Niña,quealoshombres lesgusta tocarcarne,nohuesos!—prosigue,ymemetola tostadadelleno en la boca, deseando morirme, literalmente. ¿Por qué será incapaz dequedarsecalladaestamujer?—.¿Quédicestú,hijo?¿Verdadquetengorazón?¿Aqueatiloquetegustaestenerdondeagarrarte?—continúaconsuverborrea,ysientodeseosdeestrangularla.

—Cadaunotienesuspreferencias,Casi—lerespondey,denuevoabsorbolosmaticesdesuvoz:¡¡sexy!!,oscuray,denuevo,¡¡sexy,sexy,sexy!!

—No hacía falta que vinieras, podría haber ido dando un paseo—musitodándomelavueltayviendosuplatovacío.

«Seguro que Casi también le ha hecho tostadas para desayunar», piensomientras una idea comienza amaterializarse enmi cabeza y, sin detenerme apensarla demasiado, y dejándome llevar por la costumbre, cojo la que no hemordidoparadepositarlaensuplato,comotantasveceshiceenelpasado,antesumiradadivertida,ylearrugolanariz,provocándoleunaperfectasonrisaensuperfectorostro.

—Vas a comer—susurra con voz ronca cerca de mi oreja, cogiéndola y

Page 57: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

devolviéndomela sin contemplaciones, sin ser consciente del fuego que haencendidoenmiinteriorelsonidodesuvoztancercademipiel.

—¿Qué cuchicheáis, vosotros dos?—nos pregunta Casilda volviéndose yobservando mi plato mientras yo todavía siento ese fuego quemándome pordentro—.¿Todavíaestásasí?—añadeponiendolosbrazosenjarras—.Ay,hijamía,loquedaríaporpoderpasartemihambreyquetúmepasaraslatuya,¡conlohambrientaqueestoyyosiempre!—exclamaapoyándoseenelmármoldelaisla,mirandomistostadas—.Endossegundosmelascomíayo…¿Quédigoendos segundos?, conmedio tendríamásque suficiente, en lospies tengoyamidesayuno.En fin,mevoycon lomío.Hijo,nopermitasquese levantedeesetaburetehastaquenosehayacomidohastaelplato—leordenaaVíctor,quelamirasonriendomientrasyolamiroconhartura.

¡Dios!, con lo feliz y tranquila que era mi vida, ¿para qué he tenido quevolver?

—Termina, se está haciendo tarde—me apremiaVíctor, apoyando uno desusantebrazosenlaislamientrasyoacabodebebermeelté.

—Lista,yapodemosirnos—ledigolevantándome,cogiendoelplatoconlastostadasytirándolasalcubodelabasurasincontemplaciones.

—Y eso lo has hecho ahora que Casi no está. ¿Qué pasa, que no habíaovarios suficientes comoparahacerlodelantede ella?—meplanteadivertido,cruzándose de brazos, y tengo que hacer un esfuerzo megatitánico para nodeslizarmimiradaporsupecho,porlosmúsculosdesusbrazos,porsuspiernas,porsu…Mejornolopienso.

—Casiescomounamoscacojoneraylacomidaessuformadetorturarme—mascullotiñendotodosmisdeseosdefrialdad,decididaaprotegermeyanodejarlo entrar enmi vida otra vez—.Vámonos—añado cogiendomi bolso ysaliendodecasasinesperarlo.

VeounJeepnegroaparcadoenelparkingy,aunquedoyporhechoqueeselsuyo,megirohaciaélparacerciorarmey,justoentonces,mequedopetrificada.

«¡Malditaseacienmilvecesseguidas!Estonoesjusto»,melamento.Noesjustoqueestétanbueno,noesjustoquenopuedalibrarmedeélniensueñosynoesjustoque,cadavezquelovea,sólopienseentirármelo,mientrasqueél,posiblemente, en lo único que piensa es en comprarme una muñeca. No,definitivamentenoesjusto.

Page 58: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

«¡Mierda! ¿Por qué he tenido que regresar?», me pregunto de nuevo,frustrada.

—Vamos,notequedesahíparada—meindicapasandopormilado,dejandouna estela de su fragancia revoloteando a mi alrededor, y absorbo elinconfundibleolordelamaderadesándaloydecedrodesucolonia.

Subo a su vehículo, en el que su fragancia es más intensa todavía, y porenésimavezmaldigomiideaderegresar.

—Mañananohacefaltaquevengas—masculloconsequedad,sintiendoquetodoestomedesborda.

—Voyavenirtodoslosdías—merebateconlamismaacritudconlaqueyoleestoyhablando,dándolealcontacto.

—SiquieresqueCasitecebe,pormínohayproblema;igualhastamedejaunpocoenpaz—replicodemalasmanerasmientrasobservocómoconduceymivientresecontraesuavemente.

—Comey tedejaráenpaz—contraatacacondurezay,aunquesuenemuyloco,quemehableenesetonotoscomepone,ymucho,pero,vamosaver,¿aquiénpretendoengañar?Hastaconuntutúrosayunostaconesmepondría.

Durante el resto del trayecto, nos mantenemos en silencio y, mientras elpaisajedemiinfanciapasafrenteamisojos,piensoennuestropasado,cuandoéramos capaces de enlazar una conversación con otra durante horas, cuandonuestrasrisasibanconnosotrosalládondenosotrosfuéramos,cuandotodoestoque llenamipecho todavíanohabíaaparecido…,cuando todoera tansencillocomorespirar.

Cuandollegamosalabodega,nosalgodisparadadeltodoterrenoperocasiy,sinmolestarmeenesperarlo,encaminomispasoshacialatienda,dondeAdriyMartaestáncolgadasdel teléfonoy lasotraschicasesperana losclientesparaempezarconlasvisitasprogramadas.

—Finalmente,¿vienesacontratarunavisitaguiadaoaquedarconmigoparasacarmedeestavidadejubiladadepacotillaenlaquevivo?—mepreguntamiamiga,cubriendoelauricularconunamano,y lamirosonriendo,ahorasíconganas.

—Mejoraún,vengoacurraraquí—lecontesto,sintiendosupotentemiradaenmiespalda.

—Buenosdías,señorÁlvarez—losaludaAdriana,casicuadrándose.

Page 59: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Buenos días—le respondeVíctor con sequedad—.Valentina, vamos—meordena,echandoaandar,ylosigonosinantesguiñarleunojoamiamiga.

—Teprohíbo que te tomes el café sinmí—le advierto, volviéndomeparasonreírleantesdeaccederalascensorquenos llevaráalprimerpiso,dondeseencuentranlasoficinasdelabodega.

—Perositúnotomascafé—merebateAdrimientrassuteléfonocomienzaasonardenuevo.

—Peroyasabesquesíquecotilleo—lecontestoantesdeentrarenél.—Eres la dueña de todo esto, compórtate, ¿quieres?—me riñeVíctor una

vezsecierranlaspuertas,ylomirosorprendida.—¿Perdona? —le pregunto sonriendo, flipada—. ¿Desde cuándo te has

vueltotanestirado?—No has venido aquí a cotillear, Valentina, has venido a preparar una

presentación, no lo olvides —masculla acercándose tanto a mí que siento lacalidezdesualientorozarmislabios.

—Y tú no olvides con quién estás hablando—le respondomirándolo conaltivez, negándome a darle ni una maldita explicación—. ¿Dónde está midespacho?—leformulocuandollegamosalprimerpiso.

—Enelmío,no tienesni ideadenaday, si tengoqueayudarte,nopiensoperder mi tiempo yendo de aquí para allá, ni tampoco voy a permitir que túpierdas el tuyo y ya puestos aproveches para cotillear con el personal de laempresa—expone,entrandoenélmientraslosigosindarcrédito.

—¿Acasopagastúsunómina?—Sí. Así es—me asegura. Va hasta su silla, se sienta y clava su intensa

miradaverdeenlamía.—Y yo creyendo que eso lo hacían desde el departamento de recursos

humanos—replicoconsarcasmo,sentándomeenlasillaquehayfrentealasuya—. Entonces, ¿te dedicas ahora a hacer las transferencias bancarias de lacompañía?Tehanbajadodecategoría,Víctor—prosigo,deseandohumillarlo.

—Creo que deberías hablar con tu padre —suelta con sequedad—. Meparecequetenéisunaconversaciónpendiente.

—Atitetengodelante;dímelotú,estáclaroquelosabes—siseofrunciendoelceño,poniéndomeenalerta.

—Como quieras —me responde, recostándose en su asiento—. Soy

Page 60: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

accionista de la bodega, concretamente tengo el cuarenta por ciento —meconfiesa,consiguiendoqueenmudezcaduranteunoslargossegundos.

—¿Cómo?—musitoexperimentandocómounsentimientodeposesiónsobretodo esto se abre paso dentro de mí, arrasando con cualquier pensamientocoherentequepudieratener—.¿Ypuedosabercómotehicisteconesecuarentaporciento?—leplanteoconfuria.

—Yonomehiceconnada,denuevoestássacandoconclusioneserróneas—siseaconfrialdad.

—Cuandomefuideaquíhacetresaños, labodegaera íntegramentedemifamilia,yahoratútienesuncuarentaporcierto;unpocomásytehacescontodo—continúo, cegada por la rabia, y capto cómo su mirada se torna oscura ypeligrosaycómotodosucuerposetensa.

—Ahítienestudespacho—meindicacondesprecio,señalandoconungestode la cabeza una mesa circular que deduzco que debe de utilizar para susreuniones—.Desdeesteportátilpuedesaccederalacontabilidaddelaempresa.

Revisa el volumen de ventas por cliente y, según sus saldos, seleccionaquiénesdebenveniralapresentaciónyquiénesno.Eresladueñadelsesentaporciento,¿verdad?Demuéstralo—meretacondureza, sabiendodesobraquenotengo ni idea de contabilidad—. En este listado están incluidos todos losviticultores que trabajan con nosotros y, en este otro, cadenas hoteleras yrestaurantesqueesperocaptaralgúndía;siconsiguesquevenganeintroduzcannuestrosvinosensuscartas, tecederémicuarentaporciento—añadeconvozacerada.

—Vaya, imbécil y estirado…, pues sí que has cambiado, ¿no?—le espetoconrabia,recostándomeenlasillaydeseandoherirlocontodasmisfuerzas.

—Vaya,prepotenteeinjusta…Nosoyelúnicoquelohahecho—merebate,imponiéndomeconeltonoutilizado—.Lapresentacióntendrálugarelsábado6de octubre —masculla mirando su calendario—. Ocúpate de contratar elcatering,de las flores, de la música y de hablar con Iker, el responsable decomunicación,paraquelaprensavengaacubrirelevento.Piensaenquépartede labodega tegustaría llevaracaboeleventoe infórmamecuando lo tengasclaro.¡Ah!,otracosa:estaríabienquedesdemarketingprepararanunvídeoenelquequedarareflejadoelprocesodecreacióndeunvino,eltuyoenestecaso,desde que comienza la vendimia hasta que se embotella y almacena; sé que

Page 61: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

tienenmaterialdesobra,asíquenocreoque lescuestemuchomontarlo—meindicaarisco,conlairatodavíadominandosumirada.

—¿Y túno tienes intencióndehacer nada?Creía que esto era cosade losdos.

—Mitrabajoconsisteensupervisareltuyo.—Vaya,puesmenudaayudatengocontigo,entonces—lerespondoconrabia

contenida—.¿Algomás?—Sí, que no pierdas el tiempo cotilleando con nadie —masculla con el

mismocabreoqueenestosmomentossientoyo—.Aquí tienes lasclavesparapoderaccederalacontabilidad—prosigue,tendiéndomelas,yselascojodeuntirónpara,seguidamente,levantarmedemalasformas.

Cojoelordenadoryloslistadosymeencaminohacia«midespacho»,dondelodejotodoencimadelamesapara,casialsegundoysinmolestarmeenmirarloodecirlenada,salirenbuscademipadre,alqueencuentroensudespacho.

Page 62: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO5

—Papá, ¿tienesunosminutos?—lepregunto, deseandoquemeaclare estodeunavezportodas.

—Hombre,¡michica!Alfintetengoporaquí.¿Yaestáslistaparaempezar?—inquiererodeandosumesaparadarmeunbesoenlamejilla.—¿EsciertoqueVíctoreseldueñodelcuarentaporcientodelasacciones

de la bodega?—suelto a bocajarro, y lo veo sonreírme—. ¿Por qué sonríes?Papá,¿esciertoono?—insistoalzandolavoz.

—Por loqueveo,yahas comenzadoautilizar el calientaplatos—mediceconunatranquilidadpasmosa,dirigiéndosehaciasusilladenuevo.

—Papá,éstenoeselmomento.¿Esciertoono?—repito lacuestiónentredientes,contodomicuerpoentensión.

—Es cierto —afirma, desprendiendo una tranquilidad que a mí, en estosinstantes,mefalta.

—Pero¿porqué?—indago,temiendoqueVíctorsehayaaprovechadodelaconfianza y el cariño que le profesa mi padre para hacerse con una parteimportantedelaempresa.

—Tranquilízate, ¿quieres? Siéntate, te aseguro que todo tiene unaexplicación—medice;obedezco,sentándomefrenteaél.

—Yapuedeserbuena,papá—farfulloentredientes.—Cuando tú te fuiste hace tres años, estábamos en pleno proceso de

remodelacióndelabodega.Yasabesquenosehizoparaaumentarlaproduccióndevino,sinoparamejorarloyhacerlodemayorcalidad.Esainversiónteníauncostemuy elevado, piensa que una sola de lasmáquinas ya valía unmillón y

Page 63: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

medio de euros, por lo que tuve que pedir un préstamo al banco, que nosconcedieronsinproblemas—comienzasurelatoconvozpausada—.Lascuotasalasqueteníamosquehacerfrenteeranconsiderables,peroelnegocioibamuybienypodíamosasumirlassinproblemaalguno,peroentoncesllególacrisis,lasventasbajaronenpicado,tuvimosvariosclientesqueentraronensuspensióndepagosynosdejaronimportantesdeudasquetuvimosqueafrontarjuntoconlosproblemasconlosquenosencontramosconlaremodelación,quecasiduplicósucosteinicial,ymeviconaguaalcuello.

—Papá, no sabía nada… ¿Cómo nome lo contaste?—inquiero, sintiendocómounsudorfríorecorremicuerpo.

—¿Paraqué iba ahacerlo?Tú estabas enMadrid, estudiandoy trabajandocomomodelo,y,aunquehubiesesquerido,nohubieraspodidohacernada.¿Quésentidoteníaquetepreocuparasporalgoquenoestabaatualcancesolucionar?

Al principio fuimos tirando y asumiendo las cuotas, pero con el tiempodescapitalicé el negocio y empecé a tener problemas. El banco no quisoampliarmeelpréstamonitampocoalargarmeelperíododepagoparareducirelmontante de las cuotas, y un día, cuando creía que estaba todo perdido, llegóVíctor con un cheque en blanco; simplemente se ofreció a cubrir la deuda acambiodenada.

—¿Cómo?—musitosintiendocómoelsueloseabrebajomispies—.Pero¿dedóndeibaasacaréltantodinero?—formuloenunhilodevoz.

—Víctoresuncerebritoparalasfinanzas,hija;essuhobby…unhobbyque,porcierto,lehareportadomuchísimodinero.

—¡Venga ya, papá! Pero si vive en la casa de los viñedos —le indico,tiñendomivozdedesprecio.

—Unacasaquesehaofrecidomilvecesacomprarmeyquenoquieroquemenosprecies,porqueenellaviviótambiéntufamilia;túmismapasastepartedetu infancia y de tu juventud en ella cuando erais amigos—me recuerda conaspereza,poniéndomeenmisitio.

—Y, entonces, ¿qué hace trabajando aquí si gana tanto dinero con lasfinanzas?—lepregunto,recelosa.

—El caso es que esto le gusta tanto como amí; para él, la bodega es suseguridadytambiénsuhogar.Sonsusraícessinserlo.

—¿Ytediosudinero?—musitosindarcrédito.

Page 64: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Sinintereses,sinplazosdeentregaysincondiciones—puntualiza,conelorgullodominandotodoslosmaticesdesuvoz.

—Ytú,acambio,ledisteelcuarentaporciento.—Noalprincipio,perosíconeltiempo.Nituhermananitúqueríaissaber

nadadetodoestoy,alvenderleelcuarentaporciento,cancelabaladeudaqueteníaconélymeasegurabadequeestenegocionomoriríaconmigo.Víctorvelaporéldelamismaformaenquelohagoyoysehapreocupadodesuexpansióncasidesdeelprimermomento.Hoy,viéndoloenperspectiva,medoycuentadequetomélamejordecisiónposible.

—Pero,papá,¿cómonomecontasteestoayer?—lereprendo,hundiendolosdedosenmipelo,sintiendocómolavergüenzaseabrepasoenmiinterior.

—Porquenoeraelmomentoyporquenohabíaprisa.—¿Hayalgomásquetengaquesaber?¡Joder,queestoyporbeatificarlo!—Hay un contrato privado queVíctorme obligó a redactar—me explica

abriendounodeloscajonesdesudespachoysacandounacarpetaquemetiende—,dondequedaespecificadoquesusaccionespasaránalafamiliasitúnoestásdeacuerdoconqueélformepartedeestenegocio.

—¿Cómo?—susurroabriendolacarpetayleyéndoloporencimaconmanostemblorosas.

—Fuesucondiciónparaaceptaresecuarentaporciento:todoslosmiembrosdelafamiliadebíamosestardeacuerdo.Tuhermananopusoimpedimentosytúno estabas aquí ni tenías la edad adecuadaparadecidir nada, así que supongoquehallegadoelmomentodequelohagas—meinforma,presionándome,ymelevantodelasilla,dirigiéndomehacialaventana.

—¿Ysidigoqueno?¿Ysinoestoydeacuerdoconqueformepartedetodoesto?—planteo,volviéndomeparaencararlo.

—Élsiempreformarápartedetodoesto, tegusteationo,porque,aunquenololleveenlasangrecomotú,lollevaenelcorazón—alegaconseriedad—.Sinembargo,sinoestásdeacuerdo,lasaccionespasarándenuevoalafamiliay,aunque esto no forma parte del trato que hicimos, le devolveremos hasta elúltimocéntimo,interesesincluidos,digaloquediga—sentenciaconfirmeza.

—Joder… —mascullo—. Papá, tenía derecho a saber todo esto en elmomentoenquesehizo,comolosupoAlana,oalmenosantesdeponerunpieaquíenlabodega—lerecriminoenfadada.

Page 65: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Cuandosucedió,túerasdemasiadojoven;dehecho,todavíaloeresy,aunasí,entumanoestá.¿Quédecides?Élúnicoquetienederechoasaberquévaaserdesudineroesélyeselúnicoquenohapreguntadonada.

—Yonotengoquecontradecirningunadecisióntuya—susurroenunhilodevoz,volviendomimiradahacialaventana—.Meparecequealguiensemereceunadisculpa—musitosujetandolacarpetaconfuerzaentremisdedos.

Salgo del despacho de mi padre sintiendo que todo esto me supera,maldiciendo la brillante idea que tuve de regresar ymaldiciendo en bucle lasvacacionesque«sesuponía»queibaadisfrutar.

Tragando con dificultad, llego de nuevo hasta nuestro despacho y, trasinspirar profundamente como unas mil veces y desear abrirme la frente acabezazos contra esta maldita puerta otras mil veces más, consigo abrirlafinalmente. Está sentado a su mesa, con cuatro ordenadores frente a él,completamente concentrado en su labor. Cierro la puerta con suavidad y mecoloco frente a él, mientras su atención continúa puesta en dos de las cuatropantallas,ymepreguntocómopuederetenerlainformacióndeambas.

—¿Puedesmirarme,porfavor?—lepidoconafabilidad,manteniéndomedepie.

—¿Quéquieres,Valentina?—mepregunta con dureza, alzando finalmentesumiradahastaposarlasobrelamía.

—Disculparme.Estáclaroqueanocheno losabía todo—ledigohaciendomenciónalaconversaciónquemantuvimosensuporche—.Podríashabérmeloexplicado,¿noteparece?

—Nomecorrespondíaamíhacerlo—replicaconsequedad,recostándoseensusilla.

—Puestampocoesquehayastenidoningúninconvenienteencontarmelodetu cuarenta por ciento.Yapuestos, podrías haberme contado toda la historia ynoshubiéramosevitadomalentendidos—lerecriminoenunsusurro.

—Y,yapuestos,podríashaberteenteradoprimerode«todalahistoria»antesdejuzgarmeatuantojo.¿Telohaexplicadotupadre?

—Sí,acabadehacerlo—musitoperdiéndomeensumirada,sintiendocómolagargantasemecierra.

—¿Y?—mepreguntafrunciendoelceño,cruzándosedebrazos.Lomiroqueriendodecirleunsinfíndecosas…queriendodecirlecuántolo

Page 66: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

admiro, que he sido una idiota de remate, que mi padre y la bodega tienenmuchísimasuertedepodercontarconélyqueyomismalatuvealtenerloamilado mientras crecía…, pero, por alguna extraña razón que desconozco, nopuedo hacerlo, no puedo decirle nada. Puede que sea porque, cuando sientestanto,simplementelaspalabrassequedanatascadasentugarganta,yaquenadadeloquedigasserásuficienteparareflejarloquerealmentepiensasysientes.

Porello,sosteniéndolelamirada,cojoelcontratoylorompofrenteaél.—Nohaynadaquedecir—susurrosintiendoquetodoestoquesientopreso

enmi interior se libera en formade lágrimas—.Lo sientomucho—murmurofinalmente, dejando los pedazos sobre la mesa—. Siento haberte juzgadoerróneamenteytodoloquehedichoantes.

Atravésdelaslágrimas,veocómoselevanta,cómorodealamesaycómo,casi al segundo, sus brazos rodean mi cuerpo, y correspondo a su abrazoapoyandomirostroensupecho,cerrandolosojosydejandoquelasensacióndeestarencasameenvuelva.Percibosufuerza,elcalordesucuerpoysufraganciacolarse a través demi nariz y siento cómo todo desaparece, para permitirnosvolverasersólonosotros,VíctoryValentina,V.yV.,y,conlosojoscerrados,retrocedoaesa tardeen sucasa, cuando, frentea lachimenea, jugábamosunapartidadeScrabble…

***

—¿Sabescuálesmiletrapreferida?—lepregunté,empezandoasonreír.

—¿Cuál?—meformuló,arrugandoelceñomientrasconstruíasupalabra.—LaW—le respondí, sonriendo abiertamente y pasando mi dedo por él

paraalisarlo.—¿LaW?—susurródespistado, construyendo supalabra sinpercatarsede

quelaWeralaunióndenuestrasiniciales…

***

—Teestoymojandolacamisa—leadviertoabriendolosojos,volviendoalarealidaddeestedespacho.

—Notepreocupes,yasesecará—musitaapretándomemásasucuerpo—.

Page 67: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Oye, no llores, ¿vale? No lo sabías y supongo que has tenido una reacciónnormal.

—Dejadeser tanperfecto,¿quieres?—masculloaferrándomeasuabrazo,negándomeasoltarlo.

—No soy perfecto,Val—murmura depositando un beso enmi pelo y, sinpercatarme, comienzo a acariciar su espalda, dibujando pequeños círculos conlosdedos,ydenuevosientocómomilesdesentimientosllenanmipecho,tantosque me es imposible detectarlos todos y cierro los ojos, sintiendo su cuerpoencajandoperfectoconelmío.

—¿Comenzamosdenuevo?—mesugieresinsoltarme.—Desdequeheregresado,hasidotodoundesastre—balbuceo.—Pues ha llegado elmomento de que eso cambie—afirma con seriedad,

alejándomesuavementedesucuerpo,ysientocómoelmíoprotesta—.Tequieroenmi vida,Val, comouna amiga y comouna parte demí a la que no quieroponernombre—mediceconlamiradacargadadeintensidad,yselasostengosabiendodeantemanoquenadadeestoacabarábien—.Quieroquevengasamicasa como hacías antes, porque sí, porque no necesitas ninguna excusa parahacerloyporquenoseteocurrenadamejorquehacer—prosigue,sujetándomeconfuerza—.Teechodemenos,llevotresmalditosañosechándotedemenos,yahoraestásaquí.Durantedossemanas,vasaestaraquíy,aunqueseaunegoístaporpedirte esto, quiero recuperar loqueperdimos—masculla impidiendoquemimiradasesueltedelasuya,yasiento,asumiendoelriesgoqueestoyapuntodecorrer.

—Sólosimeayudasconlacontabilidad—suelto,haciéndolesonreír.—Joder,cómoteheechadodemenos—meconfiesaabrazándomedenuevo

y cierro los ojos, inspirando profundamente y llenando mis pulmones de sufraganciaydeél,incapazdeconfesarleque,pormuchoqueélmehayaañorado,sin duda yo lo he hechomás—.Vamos a ver esa contabilidad—mepropone,soltándome y guiñándome un ojo, y le arrugo la nariz, provocándole unacarcajada.

Durantelasiguientehora,mehaceuncursoaceleradodecómosacarlistadosporventasydecómocomprobarlossaldos,ademásdeindicarmeelcontactoencadaempresa.

—¿Losconocesatodos?—planteoconadmiración.

Page 68: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Esmitrabajo,Val.Soyyoquiencoordinalaredcomercialyquiensuelevisitaralosprincipalesclientes.

—Te gusta esto, ¿verdad? —le pregunto, recostándome en mi silla,admirandoalhombrequetengofrenteamí.

—Estome sacóde la calle; bueno, tu padre, concretamente.A él y a todoestoledeboquiensoyahora.

—Creo que has pagado tu deuda con creces —le recuerdo de nuevo,perdiéndome en su mirada, en esa mirada limpia y cristalina que en estosinstantesmerecuerdatantoaunlagodeaguastranquilas.

—Cuandose tratadetuvida,haydeudasquenuncasesaldan,pormuchostalonesenblancoquehagas.

—Noestoydeacuerdo—musito,sosteniéndolelamirada.—Siguetú,tengotrabajo—medice,liberándomedeellatrasunossegundos

en los que he sentido que hasta nuestra respiración se detenía, demasiadoabsortoscomoestábamoselunoenelotro.

Mesumerjoenmitrabajoy,duranteunashoras,mecentroenseleccionaralos clientes que vendrán a la presentación mientras una parte de mí estápendientedecadaunodesusgestos;desuvozcuandohablaporteléfono;delaformaenqueserecuestaenlasillacuandoestárelajado;encómosucuerposetensacuandomiralaspantallasdesusportátiles;encómosemesaelcabellosinpercatarse, o en cómo frunce ese ceño que tantas veces le alisé conmi dedoíndiceenelpasado.

—Estoy empezando a ver doble—musito, levantándomeyyendohasta sumesa—.Necesitounté,¿sabesdóndepuedoencontrarlo?—lepregunto,apesardequelosédesobra,apoyandolaspalmasdemismanosensumesaycaptandosuatenciónalinstante.

—Hombre, lo tendríasmás fácil sinecesitarasunacopadevino,perocreoque podré ayudarte. Eso sí, no te aseguro que sea tan pijo como el queacostumbrasabeber—medicedivertido,recostándoseensusilla,ymeobligoanodeslizarmimiradaporsucuerpo.

—Rojo,verdeyalosumonegro,deesosquevendenenlossupermercados¿verdad?—sueltoarrugándolelanariz.

—Eres demasiado exigente con el té, Val —me rebate, levantándose, yadmirolafluidezdesusmovimientos.

Page 69: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Bueno,atitampocotegustaelcaféhechodecualquiermanera—replicosonriendo,recordandocómolegustaba:corto,cargadoysinazúcar.

—Cierto—merespondesaliendodesudespacho,ylosigo—.Supongoqueyotambiénsoyuntíoexigente—añadeconvozoscura,ysientoquemivientresecontraeanteesaúltimaafirmación…

«¿Lo será también en el sexo?»,me preguntomordiendomi labio inferiorconfuerza.

Enelascensor,nosmantenemosenuncómodosilencioy,cuandopasamospor la tienda, saludo ami amiga y a varios empleados con los quemantengociertaamistadmientrasélprosiguesucaminohacialacafeteríasinesperarme.

—Vaya,alfinhasllegado;yaestabaempezandoapensarqueibasaquedarteacotillearcontodos—comentacuandomesientoasuladoenlabarra.

—Contigo esperándome, no creo; ya lo haré en otromomento—le indicoguiñándole un ojo y provocándole una carcajada—. ¿Tenéis té negro? —medirijoalcamarero.

—Sóloverde—meresponde,ypongolosojosenblanco.—Cuántavariedad,Dios—protestohaciendounamueca—.Puesvenga,que

seaverde. ¿Tenéismiel?—añado, y observo cómoniega con la cabeza—. ¿Yazúcar de caña? —prosigo, viendo de reojo cómo Víctor me mira divertidomientras el camarero continúa negando con la cabeza—. ¿Sólo blanco? Puesnada,sinazúcar.Esperoquetengáis tazasdeporcelana—mascullodisgustada,temiendoqueme losirvanconel típicovasitodecristal—.Oye,¿aquiénhayqueponerunareclamación?—lepreguntoaVíctorcruzandolaspiernassobreeltaburete.

—Val, sólo teha faltadopedirleunmasaje. ¿Deverdadnecesitas todo esopara tomarte un té? —me susurra, inclinándose ligeramente hacia mí, y merevuelvoincómodaenmiasiento,sintiendocómotodosestossentimientosquellenanmipechoalzanelvuelohastallegaramigarganta.

—Sólolehepedidounpocomiel,niquelehubierapedidolacolmenaentera—lerebato,consiguiendoquesuelteunacarcajadasexy,roncayoscura.

«Malditaseadoscientasmilvecesseguidas.¿Deverdadesnecesarioquesurisa suene así?»,me pregunto frustrada, deslizandomimirada por la cafeteríaparaevitarcomérmeloentero.«Mierda,esdemasiadoguapo,demasiadoperfectoydemasiadotodo»,piensocondisgusto,comprobandoquenosoylaúnicamujer

Page 70: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

queestádeseandocomérseloentero…joder,¡quédescaraditassontodasaquí!—¿Qué?—meplanteatraspedirsucaféy,sóloentonces,mepercatodemi

gesto.—Nada—mascullo,pendientedecómounachicaseacercaaél.—Hola,señorÁlvarez—losaludamelosa,guiñándoleunojo,yenarcotanto

la ceja que creo que me llega hasta al pelo, cruza mi cabeza y terminallegándomealanuca.

—SeñoritaLópez—lerespondeseco,sexyy…«¡Ay, Dios mío! ¡Que se la está tirando!», deduzco gracias a ese instinto

femeninoquenuncafalla.—Tengo los informes que me solicitó —prosigue con la voz más dulce

todavía,ysientodeseosdedespedirlaenestemismoinstante.—Llévelosamidespacho—leordena,acercándoselatazaaloslabios,ylos

miroaambosdestilandorabiaportodoslosporosdemicuerpo.—Luegomepasaré.Hastaluego,señorÁlvarez.«Yamíquemepartaunrayo»,piensorabiosa.—¿Yo no puedo cotillear, pero tú sí que puedes tirarte al personal?Vaya,

Víctor,meparecequenoerestanperfectocomocreía—leespeto,fulminándoloconlamirada.

—¿Cómo?—mepreguntafrunciendoelceño.—Yahoraescuandomedicesquenotelaestástirando,¿verdad?—añado

confrialdad,cruzándomedebrazos—.Creíaqueteníasmásclase.—Loqueyohagaenmi tiempo libreyconquién lohaga,no te incumbe,

Val;notepases—mecontestacondureza.—Tienesrazón,peronoolvideshacerlo,comobienhasdicho,entutiempo

libre—matizoconfirmeza,levantándomedeltaburete—.Comovuelvaaveraesa señorita comportándose de forma inadecuada, la despido en el acto —sentenciosinsaberquiénmierdases,deseandoquenoseaotrasociadelaquenotengaconstanciaytenerquetragarmemispalabras.

—Esperoqueesaprofesionalidadtelaapliquesatitambiénynotengaquevolverallamartelaatención—replicacontodosucuerpoentensión—.Manu,¡cóbrate! —le pide con sequedad al camarero—. ¿Piensas terminarte el té opodemosirnosya?

Sin contestarle y conmultitud de palabras quemándome en la punta de la

Page 71: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

lengua,medoymediavueltaparasalirdelacafeteríaconlacabezabienalta.¡Imbécil!Mevuelcoenmitrabajo,intentandonovolveracruzarunapalabraconélsi

noesestrictamentenecesario,y,cuandollamanalapuerta,mevuelvoparaverentrar a la señorita López, con su vestido ajustado y sus tacones de muchoscentímetros.

—Hola de nuevo—susurra mirándolo con coquetería, y enarco una ceja,cruzándomedebrazos—.Letraigolosinformesquequería.

—Muchasgracias—lerespondeconvozneutra,mirándomearisco—.Puedeirse.

—Hasta luego, señor Álvarez —se despide en un susurro cargado depromesas,ylamirocondesprecio.

—¿No tienes trabajo que hacer? —me pregunta con frialdad cuando laseñoritaLópezcierralapuertasuavemente.

—¿Ytú?—Tantoquepodríadormiraquí siquisiera.¿Quieresque tepaseunpoco?

Puede que así, cuando llamen a la puerta, no pierdas el tiempo cruzándote debrazoscomosinotuvierasnadamejorquehacer.

—Simplemente compruebo cómo trabajan mis empleados; te aseguro queesonoesperdereltiempo—replicosintiendocómoestoquellenamipecholohaceconmásfuerzatodavía,pueshastadiscutiendoloencuentrosexyarabiar.

—Teaseguroquetusempleadostrabajanmuybien,aunquemeasombraestapreocupaciónrepentinacuandodentrodedossemanastelargarásyestopasaráalúltimolugarentulistadeprioridades—merebate,recostándoseensusillay,de nuevo, tengo que obligarme a no deslizarmimirada por losmúsculos queciñensucamisa.

Niegoconlacabeza,todavíaconlosbrazoscruzados,negándomearebelarlemisplanesyaclararlequeestoesmifuturotantocomoloeselsuyo.

—¿Por qué te asombras si no sabes nada de mi vida? —le preguntofinalmente.

—Si no sé nada de tu vida es porque tú decidiste que así fuera —merecuerda,con lavozcargadademilesdematices—.Porque te fuisteyporquedurantetresañosmehasestadoevitandoatodacosta.

—Túte fuisteantesdequeyo lohiciera,aunqueestuvierasaquí—susurro

Page 72: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

cargandolamíademilesdematicesmás.—Lo sé—me responde con seriedad—, y sé que es difícil recuperar tres

añosendossemanas.Séquetútienestuvidacomoyotengolamíayquehaytemas que no están resueltos entre nosotros, pero quiero intentarlo sin que temosqueesconmigocadavezquedescubraspartesdemividaquenotegustan.

—Loúnicoquenomegustaeslahipocresía,Víctor;lootroestematuyo—mascullo comprobando la hora en mi reloj—. Nos vemos luego, me largo acomer—musitolevantándome.

—¿Hasquedadoconalguien?—inquieresinquitarmelamiradadeencima.—Esonoesasuntosuyo,señorÁlvarez—lerespondoconretintín,cogiendo

mibolso.—Porsupuestoqueloes;quierocomprobarqueesciertoquecomes—me

contradiceconunasonrisa, levantándoseél también—,ysólopuedohacerlosialmorzamosjuntos.

—Deesonada;llevocontigodesdequeheabiertolosojos,memerezcounrespiro —me quejo, sabiendo que realmente llevo con él desde antes decerrarlos.

—Nopienso discutirmás contigo,Val; almenos, durante lo que queda dedía.

Vamos, han abierto un restaurante en Casalarreina donde hacen unasensaladasquetecaesdeespaldaydondeestoyconvencidodequehabrámielyté de ese que tanto te chifla—me asegura, posando su mano en mi espalda,guiándomehastalasalidadeldespacho.

—Sabes que la dieta de una modelo no consiste solamente en ensaladas,¿verdad?Además,creoqueesmejorquecadaunotengasuespaci…—empiezoarebatirlo.

—Suficiente, Val; suficiente —masculla clavando sus dedos en mi piel,apresándolayhaciéndolasuya,dondeelcalordesumanotraspasalafinatelademiblusa.

—¿Ysihequedadoconalguien?—lepreguntovolviéndomeycolocándomesinquererdemasiadocercadeélunavezestamosenelascensor.

—Puesloanulasyquedasparaotrodía—merespondeconvozronca,posandosumiradaenmislabios.

Page 73: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—No recordaba lo pesado que podías llegar a ser—susurro en un hilo devoz, posando la mía sobre los suyos, creando una eternidad electrizante enapenasunospocossegundos.

—Y yo no recordaba lo terca que podías llegar a ser tú —mascullarompiendonuestrosilenciounossegundosantesdequeseabranlaspuertasdelascensor.

Con sumano de nuevo enmi espalda, salgo del cubículo en dirección alparking, sintiendo cómo todo esto que llenami pecho comienza a aletear conmás fuerza si eso es posible y suspiro bajito, acelerandomis pasos, pues unaparte demí sólo desea echar a correr para alejarse de él y, otra, la kamikaze,mataríaparaquenuncaquitaraesamanodemiespalda.

—Por tu culpa no voy a poder cotillear —protesto accediendo a sutodoterreno,necesitandoromperesteambienteelectrizantequemetienealbordedelcolapso.

Loveoentrarydarlealcontactoysuspirosuavemente.«Malditaseatrescientasmilvecesseguidas.»—Lo que quieras saber, puedes preguntármelo a mí —me rebate,

volviéndoseparaclavarsupotentemiradasobrelamía,ysientoquemiinteriorseestremececonfuerza.

—¿Y también voy a poder cotillear sobre ti? —le pregunto, de repentedivertida,sintiendocómoestasensaciónquemeenvolvíaenelpasado,cadavezqueestabaconél,regresapara,metemo,quedarse.

—Sólo si yo puedo hacerlo sobre ti—replica sosteniéndome lamirada, ysiento que todo se torna un poquito más brillante, como si, hasta ahora, lohubieravistoentonosapagados.

—¿Quéquieressaberdemí?—planteoextrañada.—Demasiadas cosas —masculla con sequedad, incorporándose a la

carretera.—Unapreguntatúyunayo—lepropongofinalmente,recordandounjuego

quenosinventamoshaceaños,enelcualunoteníaquehacerunapreguntayelotrodebíaresponderlaconsinceridad.

—Empiezatú—mepidesinmirarme,conlaatenciónpuestaenlacalzada.—¿LaseñoritaLópezestupareja?—suelto,yendodirectaalgrano.—¿Enserioibasacotillearsobremíconlaschicasdelatienda?—demanda,

Page 74: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

entredivertidoyasombrado.—Sólo con Adriana, y porque es mi amiga, no soy tan indiscreta —

puntualizo arrugando la nariz mientras él niega con la cabeza, intentando nosonreír—.¿Quépensabas?,¿queibaapreguntarleporeltiempo?—añado,yveocómo esa sonrisa que estaba frenando comienza a dibujarse en su rostro—.Venga,responde.

—No,noesmipareja—mecontesta,estavezconseriedad.—Perotelatiras—insisto.—Noestuturno,eselmío—meaclara,ysonríoestavezyo.—¿Quéquieressaber?—Quierolaverdad,Valentina,recuerdalasnormasdeljuego.—Ufff,quémiedomedascuandoempleasesetono—ledigodirigiendomi

miradahacia laventanayempezandoaarrepentirmedehaberlepropuestoestejuego.

—¿Porquétefuisteyporquémehasevitadodurantetresaños?—Esosondospreguntas,elijeuna.—¡Mierda!,losabía.—¿Porqué te fuiste?—De reojo, captoque sucuerpo,de repente, está en

tensión.—Creoqueesevidente.—Paramínoloes.—Porque no quería verte —le confieso, manteniendo la mirada en los

viñedos, que, pintados con la paleta de colores de principios de otoño, pasanvelocesporlaventana—.Pasodejugarmás.

—Deesonada,tetoca—meincita,aferrandoelvolanteconfuerza.—Tehedichoquenoquierojugarmás—insisto.—Pero,encambio,tienesintencióndecotillearsobremíconunadenuestras

empleadas.Pregunta—meordena,yguardosilencioduranteunosminutos.—¿Porquétefuiste?—susurrosinatrevermeamirarlo.—Noescierto,nuncamemarchedeaquí—afirmaconseriedad.—Sí que lo hiciste. Puede que estuvieras aquí, pero te alejaste de mí…

desaparecistedemivida,yesoescomositehubiesesido—lerecrimino.—Porque no me perdonaba haberte hecho daño —me confiesa tras unos

minutosdesilencio.—Te toca—murmuro, sintiendo cómo los recuerdos de esa noche llenan

Page 75: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

cadaunodelosrinconesdeestevehículo.—¿Porquémehasevitadodurantetresaños?—Nolohehecho—lemientodescaradamente.—Estasincumpliendolasnormas—merebatesinmirarme.—Sinohemoscoincidido,hasidoporcasualidad.Túviajasmuchoyestás

pocotiempoporaquí.—Continúasincumpliéndolas—insisteconladurezacargandocadaunode

losmaticesdesuvoz.—¡Porqueno soportabaverte!—le revelo, alzando lavoz, sintiendocómo

meahogoconlosrecuerdos.—Ahoraestásconmigo,¿tandifícilteresulta?—No te toca a ti —le recuerdo, sintiendo mi garganta empezar a

martillearmeconloslatidosdeldolor.—No me importa —farfulla pegando un frenazo en el arcén, y uno mi

miradaalasuya,quedestilafrustraciónyunsinfíndecosasmás.—Ahoraerestúelqueestáincumpliendolasreglasdeljuego.—Olvídatedeljuegoycontéstame.¿Tandifícilteresultaestaramilado?—

meplantea,yjuraríaquehayelmismodolorquesientoyoensupregunta.—Essoportable—respondoconseriedad,sinpodersoltarmedesumirada.—Soportable—masculla,agachandolacabezaynegandoconella.—Soportableesmejorqueinsoportable,dateporsatisfecho.—¡¡¡Yunamierda!!!¡Noesesoloquequiero!—exclama,alzandolacabeza

yclavandosuimpresionantemiradaverdesobrelamía.—¿Qué esperabas, Víctor? Al menos lo estoy intentando —me defiendo

alzandolavoz,tanfrustradacomoloestáél—.Arranca—lepido,dirigiendomimiradahacialaventana.

—Joder,Val—rezongaenunsusurro.Duranteelrestodelviajenosmantenemosensilencio,cadaunosumidoen

suspensamientos.

Page 76: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO6

—Hemosllegado—meanunciaaparcandofrenteaunedificiodepiedraconunaenormepuerta demadera de doble hoja, y lo sigo en silencio cuando sale delcoche,denuevosintiendoquemividapendedeunhilo,unhiloquesujetaél.

Nossentamosjuntoalaventanaycojolacartaquemetiendeelcamarero,necesitandocentrarmiatenciónenalgoqueno llevesunombre.Sinembargo,aunqueestoy leyendodetenidamentecada letracomosimividadependieradeello, lapura realidadesquemicerebroes incapazdeprocesarnadade loqueaquípone.

—¿Qué vas a comer? —le pregunto, deseando romper este incómodosilenciodeunavez.

—Solomillo a la brasa. ¿Y tú? —me contesta mientras yo siento miestómagorevolverse…Carneroja,¡puaj!

—Unaensalada—farfullofinalmente.—Creíaqueladietadelasmodelosconsistíaenalgomásqueenensaladas

—merecuerdaconseriedad.—Yasíes—lerespondoforzandounasonrisa.—Relájate,¿vale?—mepidefijandosuintensamiradaverdesobrelamíay,

sinsaberporqué,piensoenqueelverdeesmicolorfavorito.—Eso o tirarme por un puente—mascullo haciéndole unamueca—.Oye,

¿deverdadnecesitasconducirmediahoraparacomeraquí?¿Quépasa?,¿queenPáganosnohayningúnrestaurantedetugusto?

—A lo mejor quería estar un rato a solas contigo sin que nadie nosinterrumpiera.

Page 77: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Seguroqueeseso—musitoobservandolaoriginaldecoracióndellocal.—Cuéntametuvida,Val—mepide,centrandotodasuatenciónenmí,yme

revuelvoinquietaenmiasiento.—Cuéntametúlatuya—replico,cruzándomedebrazos.—Lamíanoesnadainteresante,telogarantizo—afirmaimitandomigesto,

ycaptocómolateladesucamisasetensaentornoasusmúsculos.—Te tiras a la señorita López, por supuesto que es interesante —suelto

sarcástica.—¿Te interesa la señorita López?—me pregunta con una sonrisa canalla,

haciéndomesonreír.—LaseñoritaLópezmeimportaunbledo,teloaseguro.—Noesminovia,Val—asevera,estavezconseriedad—.Esascosasnovan

conmigo.—¿Elqué?¿Tenerpareja?—Exacto—confirmamirándomefijamente,yarrugomiceño.—¿Por qué? —quiero saber, desfrunciéndolo al percatarme de que está

mirándolomientrassuenadefondoThesea,deHaevn.—Siestuviéramos jugando,estaríasdescalificada: trespreguntasenapenas

unossegundos.—Porsuertenoestamosjugando;contesta.—Porque tengounasnormasquenopienso incumpliryporquenomevan

lascomplicaciones…ylasmujeressiempretermináiscomplicándolotodo.—Yo soy una cría, nome incluyas en ese lote—meburlo, arrugándole la

nariz.—Eres menos cría de lo que me gustaría —me confiesa, mirándome

fijamente.—Nomepuedocreerloqueacabodeoír.¿Deverdadestásviéndomecomo

unamujer? ¡Oh,Diosmío!—exclamo teatralmente—. ¡Deberíamos pedir unabotelladechampagneparacelebrarlo!

—Déjatedetonterías,¿quieres?—mepide,frunciendoestavezélsuceño—.Yahemoshabladosuficientedemí,tetoca.

—Víctor, no me has contado nada, sólo me has dicho que te tiras a laseñoritaLópezyquenoestupareja.¡Cielosanto!Esperoquenuncalohayáishechosobrelamesaqueestoyutilizandoyo—añado,cayendoenlacuentade

Page 78: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

repenteyestremeciéndome.—Tranquila, que sólo me la he tirado sobre la mía —apostilla con una

sonrisalobuna,yabrodesmesuradamentelaboca.—Por favor, no te cortes, sigue contándome los detalles —mascullo

finalmente.—¡Escoña,Val!—sueltacarcajeándose.—Quéimbécileres—susurrofulminándoloconlamirada.—Laculpaestuyaporcreerme—merecriminasindejardesonreír—.Creía

que te había quedado claro que en el currome limito a trabajar—me aclara,haciéndoleunaseñalalcamareroconunamanoparaqueseacerqueatomarnosnota—.Cuéntame tus deseos, tus sueños…—mepide una vez que estamos asolasdenuevo,ysonríonegandoconlacabeza.

»¿Qué? —me pregunta, recostándose en la silla, cruzando de nuevo losbrazossobresupecho.

—Noteinteresan—afirmosindejardesonreír.—Discrepo;meinteresatodoloquevengadeti.—Discrepo; la respuesta correcta debería ser que te interesa todo lo que

vengadelaseñoritaLópez—locorrijo,sosteniéndolelamirada.—Nomeobliguesacontestarte,¿quieres?—mepideconsusojoscargados

demilesdeemocionesalasque,comolasdemipecho,noséponernombre—.Meencantacuandoarrugaslanariz—meconfiesaconternura,ydenuevoniegoconlacabeza,sonriendo.

—¿Y tus deseos? ¿Cuáles son?—musito, anhelando, yo también, saberlotodosobreél.

—Podría decirte que no te interesan, como has hecho tú conmigo —mecontestaconunamediasonrisa.

—Pero no vas a hacerlo, porque no eres como yo, ¿verdad? —ratifico,apoyando loscodossobre lamesayacunandomi rostrocon laspalmasde lasmanos.

—Chica lista —me responde, apoyando los suyos también en ella einclinándose ligeramente haciamí—.Los tuyos, quiero que vivas todo lo quedeseesviviryqueseastanfelizcomopuedasymuchomás.

—Notienesniideadecuálessonmissueñosoquéesloquedeseovivir—musitoconunhilodevoz,ansiandogritarlequemiprincipalsueñoesélyque

Page 79: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

todoloquedeseovivirmelocargaríadeunplumazosipudieratenerloconmigo.—Entonces,supongoquemevaelriesgo—medicebromeando,sindejarde

mirarme—.Quierovertefeliz,Val;sóloquieroeso.—Ya—susurro,guardandosilencioalveralcamareroacercarseconnuestra

comida,ymiromiensaladacuandoladepositafrenteamí.—Se supone que es inofensiva —comenta socarrón, acompañando el

comentarioconunasonrisa—.¿Qué teocurrecon lacomida?No te recordabadándoteatracones,perotampocotaninapetente.

—Supongoqueestasvacacionesnoestánsiendocomolas imaginabaymehanquitadoelapetito.

—¿Y cómo las imaginabas? Come—me ordena, empezando a dar buenacuentadesucomida,yloimitosindemasiadasganas.

—¿Laverdad?—lepreguntoyasiente—.Sinti…ytodoeldíaenlapiscina,tomandoelsolobañándome.

—Elaguaestáhelada, te loaseguro—megarantiza,omitiendocomentarioalgunosobremisprimeraspalabras.

—Nohe tenido la suertedepodercomprobarlo—mascullo llevándomeuntrozodetomatealaboca,yveocómounamediasonrisaseperfilaensurostro.

—¿Porquésonríes?—Por nada. Come, se está haciendo tarde —me indica negando con la

cabeza—.Dime qué ideas tienes para la presentación—me pide, borrando lasonrisadesurostro.

Duranteelrestodelalmuerzo,lehablodeloqueheidopensandoy,alfin,entreideasmíasycomentariossuyos,comienzoarelajarme.

El trayecto de regreso a la bodega lo hacemos en un cómodo silenciomientrasyo,recostadaenelasiento,contemplolaslíneasinterminablesdevidesqueseextiendenfrenteanosotrosdecorandoelpaisajeconsuincreíblepaletadecolores,quevadesdeelverdealrojodelashojashastaelmoradocasinegrodelasuvasmaduras.

—Tenemoslavendimiaalavueltadelaesquina—susurromásparamíqueparaél.

—¿Tequedarás?—mepreguntaconseriedad.—Esodependedecuándoempiece.Mevoyel8deoctubre—murmuro,y

ambosguardamossilencio…,unsilencioquepesademasiado.

Page 80: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

El resto de la tarde lo paso centrada enmi labor mientras Víctor hace lopropio con la suya y, aunque intento ser lo más profesional posible, haymomentos en los quemedetengo, sobre todo cuandohabla por teléfono, parasimplemente escuchar la cadencia de su voz y absorber susmatices, esos quevarían según con quién esté hablando, reteniéndolos en mi memoria para,cuandoestédemasiadolejosdeél,podercerrarlosojosyreproducirlosenmisrecuerdos.

—Suficienteporhoy.¿Tequedamucho?—No, yo también he terminado —le confirmo, sintiendo mis músculos

agarrotados—.Vámonos—ledigotrascerrarelportátilycogermibolso.Llegamos a la tienda, vacía ahora e iluminada tenuemente, y lo miro

sonriendo.—Vaya,alfinaltehassalidoconlatuyaynohecotilleadonadadenada—le

indico,dandomediavueltaparahacerlefrente—.Dehecho,nohesalidodetudespachoentodoeldía—mequejo,frunciendosuavementeelceño.

—Nuestro despacho—matiza, y me guiña un ojo—, y no es cierto, hascotilleadoconmigoyhemossalidoatomareltéyacomer—merebateconsuvozoscura,sexyyronca,queprovocaquetodoestoquellenamipechoalceelvuelo,comosidemilesdemariposasdebrillantescoloressetratara.

—Cierto,peronohevisitadolabodega…Sabescómomeencantaelprocesodela trasiegaovercómohacenlasbarricas…,esoes loquemásmegusta—musitorecordandoeloloramaderayfuego—,ynohevistonada,sólonúmeros—protestohaciendounamueca.

—Sitequedarasmásdedossemanas,podríasver todoelprocesodesdeelprincipio —replica con voz ronca, posando su mirada sobre mis labios—.Vamos,tengounasorpresaparati—meanuncia,empezandoasonreír,ysonríoamivez.

—Meencantanlassorpresas.¿Quées?—Sitelodijera,yanoseríaunasorpresa.Vamos—merespondeenigmático,

pasandofrenteamí,directoasucoche,ylosigosindudar.—Estamosyendoamicasa—comentodesconcertadaalvercómo tomael

desvío.—Noexactamente—contestacambiandoelrumbohacialasuya.—¿Vamosatucasa?—inquierosintiendocómolosnerviostomanelcontrol

Page 81: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

demicuerpo.—Noexactamente—merepitemientrascambialamúsicadelaradioporla

desuUSB.— Diamonds, de Hard Rain London…, música remember —murmuro

recostándome en el asiento—. Cuánto tiempo sin escucharla —susurro,omitiendoquedejédehacerloporquemerecordabademasiadoaél.

—Pensabaqueyanorecordaríaseltítulooelgrupo—exclamasorprendido.—Creo queme hiciste una experta en lamateria—musito evadiéndome a

mis recuerdos, en los que él está presente en todos—. Me encantaba estacanción.

—¿Enpasado?—mepreguntaconlamiradapuestaalfrente.—Yenpresente—leconfirmoconunhilodevoz,sintiendocómolosmiles

de emociones que llenanmi pecho lo llenan un pocomásmientras él aparcafrentealapiscina—.Quémono,mehastraídoalapiscinaparaquevealoqueme estoy perdiendo —bromeo bajando del todoterreno, acercándome a laenormepiscina que conecta las dos viviendasmientras él deja la puerta de suvehículoabiertaylamúsicapuesta.

—Noexactamente—repitelafrasedeantes,guiñándomeunojo,ylomiro.—Creoquevoyaempezaracontarlasvecesenlasquemehasrespondido

con un «no exactamente»—declaro, viendo cómo se acerca hastamí con unbrillodistintoensumiradayunasonrisacanalladibujadaensurostro—.¿Porquémemirasasí?—musitodesconfiada,retrocediendounpaso.

—¿Recuerdas cuando antes te he dicho que quiero que vivas todo lo quedeseesvivir?—mepreguntafinalmentealestarfrenteamí.

—Sí—susurro,completamenteperdida.—Pues ha llegado el momento de que vivas una de esas cosas—afirma,

cogiéndomeenbrazos,ygrito,conscientedeloquevaahacer.—¡Idiota! ¡Ni se te ocurra! ¡Víctor, que vamos vestidos! —chillo

aferrándomeasucuelloyescondiendomirostroensuanchopechomientrasél,cogiendocarrerilla,nostiraaambosalapiscina—.¡Imbécil!Nomepuedocreerquehayashechoesto—vociferocuandoemergemosalasuperficie,consusrisasdefondo—.Mierda,estáhelada.¡Eresunidiota,Vic!—lededico,acercándomeaélparaahogarlo.

Posandomismanossobresushombros,losumerjomientrasnotocómoancla

Page 82: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

las suyas en mi cintura y me arrastra con él hasta el fondo y, durante unosminutos, volvemos a ser de nuevo Vic y Val, volvemos a reír con ganas sinimportarnosnadayvolvemosaserlosquefuimosenelpasado.

—¡Unatregua,porfavor!—lepidoentrerisas,escabulléndomedeentresusbrazos y yendo hasta la parte de la piscina donde no cubre—.Ya he tragadosuficienteaguaporhoy—ledigosindejardereírmientrasélseacercaamíyyo, enlazando mis brazos en torno a su cuello, observo las gotitas de aguadeslizarseporsurostro.

—¿Noqueríasbañarteenlapiscina?—mepreguntaconvozronca,posandosusmanosenmicintura,pordebajodelateladelacamisetaqueflotaentornoami cuerpo, mientras yo, dejándome llevar, rodeo la suya con mis piernas,soltándomedesucuelloparadejarquemicuerpofloteenestaaguacristalinayhelada,testigomudodeestemomento.

—Tú lo has dicho, bañarme, no ahogarme —replico sintiendo cómo susmanossedeslizansuavementepormicuerpohastallegardenuevoalfinaldemicintura, donde la apresa con firmeza mientras mi pelo flota alrededor de mirostroy,duranteunosinstantes,detengomimiradaenestecieloinmensoquelodomina todo desde las alturas—. Terra Titanic, de Peter Schilling —musitocuandoempiezaasonaresacanción,ydesvíomimiradadelcielohastasusojos,micieloenlatierra.

Eltactodesusmanosenmicintura,lafuerzaconlaqueapresamipiel,estacanción que tantas veces escuché junto a él, su mirada cargada de miles deemocionesy la electricidad arrolladoraque siento anuestro alrededor sacudenmiinteriory,antesdepoderdecirohacernada,sientocómomeatraehastasucuerpo,haciendoquerecuperemiposicióninicial,yllevomismanosasucuello,pegándomelascivamenteasucuerpo,queparecereclamarelmíoconexigencia,yunomimiradaalasuya,oscurecidaahoracomounmarembravecido.

—Teprometoqueesto,enmicabeza,eraunabuenaidea—susurraconsurostrotancercadelmíoquesientosualientoacariciarmislabios,mientrassusmanosseanclanposesivasenmicintura,quemándomeconsutacto.

—Hasidounabuenaidea—musitoacariciandosucuellomientrassupielseadueñadelamía,pegándomemásasucuerpo,yentierromisdedosensupelomojado,tirandodeél,exigiéndoleensilenciocomoélestáexigiendoconmigo.

—Nolotengotanclaro—murmuraconvozronca,encendiendocientosde

Page 83: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

fuegosenmiinterior.—Vic—farfullo pegando mi frente a la suya, con su respiración densa e

irregular entremezclándose con lamíamientras una de susmanos comienza aascenderpormiespaldahastallegaraminuca,dondepresionaparaacercarmemásasurostro.

—Val —susurra con voz ronca, y me estremezco con todo lo que estoysintiendo, anhelando con todas mis fuerzas ese beso que he tenido vetadodurante tantosaños…pero, antesdequenuestros labios lleguena rozarse,mevuelvoaloírelsonidodeunmotoracercándose.

Mealejadesucuerpocomosiderepenteelmíoquemarayambosdirigimosnuestramiradahaciaelcaminoporelqueseacercaunvehículo.Mipadre.

—¿Recordandoviejos tiempos?—nospreguntasonriendo,unavezseapeadel coche, y le devuelvo la sonrisa a pesar de los miles de emociones quesacudenmiinterior.

—Eso parece —musito, manteniéndome prudencialmente alejada de él ysintiéndolo, a pesar de todo, tan cerca demí como lo tenía hace apenas unosinstantes.

—Tuhijaqueríabañarse—lerespondeconsequedad,saliendodelapiscina,ycontemplocómoelaguasedeslizaporsucuerpo,pegandosuropaempapadaasu piel, provocando que el fuego que ardía en mi cuerpo rebrote hastaconvertirseenalgosalvajeimposibledecontrolar.

—Eso parece —nos dice, mirándonos satisfecho—. Por lo que veo, hasempezadoausarelcalientaplatos,Valentina—prosigue,y,muertadevergüenzaporestartanexcitadadelantedemipadre,mesumerjoenelaguahelada.

—¿Hasvistoelresultadodelosúltimosmuestreos?—oigocómomipadrelepreguntaaVíctor,cuandoemerjodenuevoalasuperficie.

—Sí,me loshaenviadoJoaquín—leconfirma,yendohastaelcasetón,dedondesaleconunpardetoallas.

—¿Yquéopinas?—lepreguntaconseriedad,apoyadoenlabarandillaquebordealapiscina.

—Que yo adelantaría la vendimia una semana —le responde,desprendiéndosedelacamisayprovocándomeunmicroinfarto.Mesumerjodenuevo,necesitandoqueelaguafríaapaguedeunavezportodaselincendioenelqueestásumidomicuerpo.

Page 84: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—…seremosentonces losprimerosenvendimiar—oigodecir amipadrecuandosalgootravezalasuperficie,ylomirodereojo;tieneeltorsodesnudoylosvaquerosempapados.

«¡Diosmío,Jesucristo!»—Puesseámoslo,entonces.Siesperamosdemasiado,nosarriesgamosaque

laconcentracióndeazucares seademasiadoelevada—lecontestaconesavoztremendamentesexyqueescapazdesacudirmiinteriorconfuerzayque,juntoconlavisióndesuimponentecuerpoempapado,esmásquesuficienteparaqueestefuegoquesientoardiendoenmiinteriorseavivehastasaliralexteriorportodoslosporosdemipiel.

—Tienesrazón—lecontestamipadre,calibrandotodaslasopciones—.Heestadoestatardeentodoslosviñedos,comprobandolauvaconJoaquín,ytantolamaduracióndelapielcomoladelapepitaestánensumomentoóptimo.

—¿Yelalcoholpotencialyelniveldeazúcar?—leplanteaVíctorsecandosupelo,yobservolosmúsculosdesusbrazos,susabdominalesmarcadosyesetriángulotanbiendefinidoqueterminadentrodesusvaqueros.

«¡Virgensanta!»—Perfectos, justoenlosnivelesquedebenestar—lerespondemipadre,y

detectolapreocupaciónensuvoz,comotodoslosañoscuandovaacomenzarlavendimia—.VoyareunirmemañanaconJoaquínaprimerahora,¿estaráslibre?Porquequieroqueestéspresente—leplanteamientrasoptoporsaliralfindelapiscina, siendo plenamente consciente de que tengo los pezones duros comopiedras y de que la blusa se está pegando a mi cuerpo de una maneracompletamente indecente, aunque, si he de ser sincera, tampoco es que meimportedemasiadosideesaformaconsigoquedejedevermecomounacríayquepierdaelmalditocontroldeunavez.

Decidida a conseguirlo, y a pesar de tener ami padre delante, deslizo laspalmasdemismanospormipeloparaeliminarelaguasobrantey,antesufaltaderespuesta,enlazomimiradaconlasuya,paralizándomeantelaintensidadquedesprende.

—Toma, sécate —me dice, acercándose a mí con esa voz ronca, sexy yoscura que tengo grabada a fuego en mi memoria, tendiéndome una toalla ydemorando su atención enmí durante unos segundos queyo siento eternos—.Hasta las once estoy libre, luego tengo una reunión importante; nos vemos

Page 85: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mañana—lerespondeamipadreentredientes,yendohastasuJeep.—¿Cenas con nosotros esta noche? Voy a hacer una barbacoa —le grita

papá.—Otrodía,Pedro.Yahe comidocarney, además, hequedadoestanoche;

gracias de todas maneras—le contesta sin volverse, y lo miro frunciendo elceño,preguntándomeconquiénhabráquedado…SeguroqueconlaestupendaseñoritaLópez,aliasZapatosdetacóndemuchoscentímetros.

—Vámonosacasa,papá;estoyhelada—masculloechandoaandarhaciasucochemientrasobservodereojocómosuvehículosealejaporelcaminoquelollevaráhastasucasa.

—Laculpaes tuyaporbañartevestida.Quehicierasesodepequeñapodíaentenderlo,hija,peroaestasedades…—merecriminadándolealcontacto—.Yaverás cuandoCasi te vea llenarle el suelo de agua—me advierte divertido, yguardosilenciomuertadefrío,decelosydemilcosasmás—.¿Hashabladoconél sobre el tema de las acciones?—me pregunta, obligándome a salir de mimutismo.

—Por supuesto —musito aferrando la toalla con fuerza, con mis dientesempezandoacastañetear.

—¿Yquélehasdicho?—indaga,encendiendolacalefacción.—Lomismoquetehabíadichoati,quenotengonadaquedecir—leindico

con los celos abriéndose paso y casi impidiéndome respirar—. He roto elcontrato,asíquesupongoqueyaestáhecho:Víctortieneelcuarentaporcientodelabodega.

—Bravo,hija,hashecholocorrecto—mealabamientrasguardosilencio,ylasensacióndesusmanosapresandomipiel,ladesucuerpopegadoalmío,lademismanosenterradasensupelomojadoyladesuslabioscasirozandolosmíos regresan con fuerza para hacerme arder de nuevo de todas las formasposibles,apesardeloscelosquearañanmialma.

Durante la cena, soy incapaz de alejarlo de mi cabeza, preguntándomeconstantemente si estará conella, si estaránacostándose, si estarábesándolaoapresándolaentresusbrazoscomoestatardehahechoconmigo,recordandosucuerpoperfectoyesemomentoelectrizanteenlapiscinaquenuncasabrécómohubieraterminadosimipadrenonoshubieseinterrumpido.

Esa noche duermo inquieta, despertándome continuamente, sintiendo ese

Page 86: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

fuegoqueenelpasadomeconsumíaregresarparahacerardermicuerpo,viendosusojosenlaoscuridaddemihabitaciónyreproduciendoelsonidodesuvozatravés demis recuerdos y, cuando suena la alarma del despertador, estoymáscansadaqueantesdehabermeacostado.

Mevistodecididaahacer sombraa la señoritaLópezZapatosde tacóndemuchos centímetros, conunvestido ajustadoverde oliva y unos tacones colornude de más centímetros todavía, dispuesta a demostrarle que hace muchotiempoquedejedeserunaniñay,unavezlista,medirijoalacocinacardíacaperdida, esperando encontrarlo en ella, tal y como sucedió ayer, pero, cuandollego, a la única persona que veo es a Casilda, y me siento en el taburete,claramentedecepcionada.

—Qué guapa te has puesto hoy —me dice con cariño, sonriéndome ymirándomedearribaabajo.

—Gracias, Casi—musito, preguntándome si la señorita López todavía loestarámanteniendoocupadoyensombreciendomigestosinpercatarme.

—¿Yesacara?Notehabrásresfriadoconelbañitodeayer,¿verdad?Porquesólo te faltaba eso para quitarte el hambre —comenta empezando a cogercarrerilla, y lamiro armándome de paciencia—.Yame lo contó tu padre, ya,suerte tuviste de que no te vi, porque, si no, me hubieras oído —prosiguemientraspongolosojosenblanco—.Sí,hija,sí,túponesacara,comosinoteviera, aunque ya sabes que me da igual; no te creas que, porque me pongascaritasdeadolescentemalcriada,voyacallarme…

—¿Adolescentemalcriada?Venga, ya,Casi.Además, te lo limpié todo—masculloviendocómoterminadeprepararmité.

—Quenoempiece,dice,seráposi…—Buenosdías.—Él…y,alsegundo,micorazónsaliendodisparadohasta

llegar ami garganta y estas emociones que llenanmi pecho alzando el vueloparaalojarseenelmismolugarenelquelatemicorazón.

Me vuelvo hacia él cuando se sienta ami lado y, en el instante en el quenuestrasmiradasseencuentran,sientocómomivientresecontraeconsuavidadycómotodosevuelvedemasiadoelectrizanteybrillanteanuestroalrededor.

—Buenos días —susurro, dirigiendo mi mirada al frente, con el deseoarrasandocadacélulademicuerpo.

—Yahallegadoelotroendiscordia.Tú,eladulto,elquesesuponequetiene

Page 87: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

quetenerlacabezaensusitio,vasyhaceslasmismastonteríasqueella.—Casi,¿meestás riñendo?—lepreguntacarcajeándosemientrasyosiento

cómotodoestoquenosenvuelvelohaceunpoquitomás.—Túríete,quegracianinguna.Comoseresfríelaniña,verástú.¡Miraqué

carahace!—loregaña,dejandoeltéyunplatoconfrutacortadafrenteamí,ysientodeseosdellevarlaalapiscinayseryolaquelaahogueenella.

—Cuánto te echaba demenos, Casi—mascullo entre dientes, evitando sumirada.

—Losé,hija,losé—merespondesinpillarmiironía.—¿Tú tambiénquieres fruta,hijo?—lepregunta,dejandouna tazadecafé

frenteaél.—No,gracias,Casi;conelcaféestábien.—Buenos días, familia —nos saluda mi padre entrando en la cocina, y

farfulloun«buenosdías»quenosésilellegaalosoídosdetanbajitoquelohedichoporculpadeestosmalditosnervios.

—¡Québarbacoateperdisteanoche,Víctor!Regadaconelvinodemihijayconesanochetanespecialquenoshizo.Tendríasquehaberestado.

—Teníaplanes,papá—intercedoporél,sintiendolosceloscolarseatravésdemispalabras.

—Y esos planes, ¿tenían nombre demujer?—le preguntaCasi, y lamirooptandopordejarlaconvida,almenoshastaqueselosonsaquetodo—.Quenoesquemeimporteniquieracotillear,porsupuesto,yasabesqueyonosoydecotilleos,peroalfinalunasecansadeescucharsiemprehablardelomismo,queenestacasanosehabladeotracosaquenoseanuvas,yahora,cuandoempecéisconlavendimia,notequieronicontar…

—Porsupuestoquetendríanombredemujer,Casi,¿quépreguntashaces?—intercedeestavezmipadre,apoyándoseenlabarra.

—¿Tienesnovia,hijo?—inquiere,encantadadelavida,preparandoelcafédemipadre.

—No,Casi,yonotengonovias—afirma,yperciboeltonodivertidodesuvoz.

—Esverdad,ahorasellaman«amigas»,¿cierto?—prosigue,guiñándoleunojo,ybufo.

—Noséquéproblematenéislosjóvenesdehoyendíaconllamaralascosas

Page 88: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

porsunombre—matizamipadre,cogiendoelcaféqueCasiletiende.—Niyo,Pedro,aunque,claro,ennuestraépocalascosaserandistintas.Atu

edad—sedirigeamí,señalándomeconeldedo—,mecaséyoconmiTomás,que en paz descanse, y ocho meses después ya teníamos a mi Sandra connosotros. En el pueblo sacaron cuentas y todo, para ver si me había casadoencinta—noscuentacomoquienexplicaungransecreto.

—¿Ylohiciste,Casi?¿Tuvisterelacionessinhaberpasadoporelaltar?—lepreguntosonriendoconpicardía—.Nomelopuedocreer,CasildaMartínezdelaNuez—prosigo,yoigosusexycarcajadadefondo.

—Por supuesto que no; antes no éramos tan desvergonzadas como lo soisahorayllegábamosalmatrimoniopurasydecentes…Bueno,notodas,siemprehabía alguna despendolada que iba de adelantada por la vida, pero, por reglageneral, todas estábamos más tontas que hechas a propósito.Mi madre ni sedignóexplicarmecómosehacía.

—Cómosehacía,¿elqué?—lachincho,intentandonocarcajearme.—¡Elquévaaser!¡Comosinolosupieras!Quesoistodasunasdescaradas

—masculla,haciéndomereírfinalmente—.Llegoahablardeestodelantedemipadrecomoestáshaciendotúahoraymedaunguantazoquemedejalosdientesenelsuelo.Descaradas,quesoistodasunasdescaradas.

—¡Perosihassacado túel tema,Casi!—replico,con lacarcajada roncayoscuradeVíctordefondo,ysientocómomiinteriorsecaldeaconesesonido.

—¡Yahoratendréyolaculpa!—¿Vescomoesmejorhablardeviñedos,Casi?Asínosevitamosoírloque

noqueremosoír—intervienemipadre—.Valentina,¿tevienes?—mepregunta,ymaldigopordentro.

—No te preocupes, Pedro, ya la llevo yo—se adelanta Víctor por mí, ysientoquetodoestoquellenamipechocomienzaarevolotearenmiinteriorconmásfuerza.

—Sí,mejor, así se termina el desayuno, ¿verdad, hija? ¿Prefieres la fruta?Queayeryavilastostadasenelcubodelabasura.¡Vergüenzatendríaquedarte,conelhambrequehayenelmundo!—meriñe.

—Casi,noteenfades—lepidomirándolaconcariño.—Quenomeenfade,dice.Unaguerratendríasquehaberpasado.Hastalas

ratastecomerías,loqueyotediga.Vamosaver,¿notedejéyoatideencargado

Page 89: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

paraquedesayunara?—sedirigeaVíctor,ymevuelvoparamirarlo,sonriendosinpoderevitarlo—.Menudosaliadosmebusco,andaque…Tienesprohibidolevantarte de esa silla hasta que no te comas la fruta—me ordena, y lamiroborrandomisonrisadelrostro.

—Casilda, tengodiecinueveaños,¿quieresdejarde tratarmecomosi fueraunacría?

—Ya ves tú, dice que tiene diecinueve como si tuviera cuarenta…Anda,anda,callaycome—memanda,saliendodelacocinaconesebríotansuyoquelaacompañadesdequeabrelosojoshastaqueloscierra.

—Es imposible aburrirse con Casi, ¿verdad? —comenta, y asiento sinmirarlo,sintiendocómolatensióncomienzaaabrirsepasoentrenosotros.

—¿Quieresunpocodefruta?—lepreguntosinsaberquédecirle,girándomehaciaélyacercándoleelplato.

Asombrada, lo veo coger mi tenedor, pinchar sobre un trozo de pera yllevárseloalabocacomosinada.

—Uno tú y uno yo, venga—me propone, provocando que mi vientre secontraigahastadolermemientras lomiromasticar—.Hoynopodremoscomerjuntos, tengo una reunión con los responsables de una importante cadenahoteleraqueesperocaptarcomoclientes—mecuentacomosinadaalavezquepinchauntrozodepiña.

—Vaya,¡quépena!,alfinalpodrécotillearsobreticonganas—lerespondoarrugándolelanariz

—Abrelaboca—meordenaconseriedad,ysientocómomiinteriorselicuamientrasélmeteelpedazodefrutaenmiboca.

Y,¡Dios!,séqueesunachorrada,peronosemeocurrenadamássexyquecompartir el tenedor con él… Bueno, sí, en realidad se me ocurren miles decosas,peroningunadeellasestáamialcance,asíque,demomento,estoentradirectoeneltoptendelascosassexisquepuedohacerconVíctor.

—Con la boca llena no se puede cotillear —matiza con voz oscura,retornandosumiradaalplato,yveocómopinchauntrozodemanzana,quesemeteenlasuya.

—Pues,entonces,tendréquetragardeprisa—musitoposandomimiradaensuslabios,sintiendocómomicentroempiezaapalpitardedeseo.

—Para volver a llenártela, supongo—prosigue,metiéndome otro trozo de

Page 90: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

fruta,queatrapoentremis labiosmientraséldeslizael tenedorporelloshastaretirarlofinalmentedemiboca.

—Por supuesto —musito sintiendo el calor empezar a consumirme pordentromientraselplatocomienzaavaciarsey,discretamente,deslizolamiradapor su cuerpo. Lleva los primeros botones de la camisa desabrochados y lasmangasremangadasalaalturadeloscodos,yjurosolemnementequenuncaenmividahevistounhombremássexyqueél.

—¿Quéquisodecirtupadreayerconlosdelcalientaplatos?—mepreguntaconseriedad,obligándomeacentrarmedeunavez,ocasi,porquenopuedodejardepensarquequierosereltenedorqueenestosmomentostocasuslabios.

—Nada,yasabes,cosassuyas—mascullovaciandomispulmonesdegolpe,dirigiendomimiradaal frenteparadejardepensarenestaschorradas,porque,vamosaver,¿quiénensusanojuicioquerríaquererconvertirseenuntenedor,pudiendoconvertirseensusslips?Puesesomismo.

—¿Estás dándome largas? —me plantea, devolviéndome a la realidad—.Abrelaboca—meordenaimpaciente,ymevuelvoparahacerlo,atrapandomimiradaconlasuyamientrasponeotrotrozodefrutaenmibocaysientocómolanecesidadportocarloyporbesarlocreceapasosagigantadosdentrodemí.

—Muylisto—susurro,sintiendomicentroempapado.—Val —masculla, y niego con la cabeza, sabiendo que no voy a poder

librarme.—Mi padre cree que nuestra amistad se enfrió porque no utilicé un

calientaplatos.Vámonos,creoquehoyCasipuededarseporsatisfecha—replicolevantándome, deseando alejarme de él y dejar de sentirme como una olla apresión.

—Sinuestraamistadseenfriónofuesóloportuculpa—afirmasujetándomeconfirmezaporlacinturaparaimpedirquemealejedeél.

Sientoelcalorenvolviéndonos,lafuerzadesumirada,elanhelotirandodenosotroshastaahogarnosmientrascreamosenunsegundounaeternidadenteradesentimientos,depalabrasquenonosatrevemosaverbalizaryde reprochesque evitamos pronunciar por miedo a estropear lo que estamos intentandorecuperar.

—Vas a llegar tarde a la reunión, vamos —digo en un hilo de voz,alejándomedeélapesardemisdeseos.

Page 91: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme
Page 92: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO7

Durante el trayecto nosmantenemos en un tenso silenciomientras la canciónYoey,deConcreteBlonde,nosrecuerdaquiénesfuimosytodoloqueperdimosesa noche, aunque puede que quizá lo perdiéramosmucho antes, sólo que, enmediodenuestraceguera,fuimosincapacesdedarnoscuenta.

Cuando llegamos a la bodega, me afano en salir de su todoterreno, puesnecesito poner un poco de distancia con él. Tras saludar a mi amiga, meencaminohacianuestrodespacho,parasumergirmeenestatareaquemeresultatantediosayaburrida,sobretodocuandoélnoestápresente.Alasonce,conlamitad de las llamadas realizadas, me dirijo a la cafetería; allí encuentro aAdrianatomándoseuncaféymeacercoaella,ávidadeinformación.

—¡Holaaaaaa! Contigo quería yo hablar. ¡Manu! ¡Un té verde!—le pido,sentándomefrenteaella.

—Oye,¿conquiénestáVíctor?Ymiracondisimulo,porfavor…Estánjustodetrásde ti.Fíjateenelmorenoque lleva lacamisaoscurayrezapormíparaque esté soltero —me suelta mientras yo me vuelvo y abro los ojosdesmesuradamente,sinpoderdarcrédito.

—Nopuedeser…Noesposible—susurrolevantándomedelasilla,incapazdealejarmimiradadeél—.¿Quéhaceaquí?—mepreguntorodeandolamesayacercándomeaVíctor,queestáacompañadoporunhombrequenoconozcoyporél,puesnecesitocerciorarmedequenoestoyviendovisiones—.¿Marco?—musito, observando cómo la sorpresa inicial de su rostro es sustituidapor unaampliasonrisay,dejándomellevarpor todoloquesumerapresenciaremueveenmiinterior,meechoensusbrazos.

Page 93: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

»¡Diosmío,Marco!—Amore!Pero¿quéhacesaquí?—inquiere,tansorprendidocomoloestoy

yo,abrazándomeconfuerza.—Esa pregunta debería hacértela yo a ti, ¿no crees? ¡Qué alegría verte de

nuevo! —exclamo, acunando su rostro con las manos y contemplándolodetenidamente.

Supelonegro, sus largaspestañas rodeando susojosprofundos, comodospozossinfondo,susonrisacanalla,tanélytalycomolorecordaba.

—Estásigualquesiempre—murmurosonriendo.—Encambio,túestásmejor.¿Cuántotiempohacequenonosvemos?—me

plantea,totalmentevolcadoenmícomoyoloestoyenél.—¿Unaño?—digo,perdiéndomeensumirada.—Más bien una vida —responde sonriéndome con cariño mientras el

carraspeodealguiennosdevuelvealarealidad.—Lo siento—se disculpa conVíctor y con el otro hombre en nombre de

ambos—.Alessandro,tepresentoaValentina;amore,tepresentoaunodemissocios—meindicamientrasyo,dereojo,adviertolamiradaasesinadeVíctor.

—Encantada,Alessandro—musitoincómoda,tendiéndolelamanomientrasladeMarcocontinúaaferrandomicintura.

—Nomehascontestadoquéhacesaquí—insisteMarco,captandotodamiatencióndenuevo.

—Estosviñedospertenecenamifamiliayestoytrabajandoaquíduranteunpar de semanas. Madre mía, tengo tantas cosas que contarte… —murmuro,olvidandoalrestoparasimplementeverloaél.

—¿Valentina?—oigosuvozaceradaymevuelvohaciaesesonidoalquemicuerporeaccionainstintivamente.

—Perdona,Víctor,supongoquemehedejadollevarporlaemoción.Marcofuemiparejaduranteun tiempoynoesperabaencontrarloaquí. ¿Él es la citaqueteníasalasonce?—lepreguntoatandocabos,paraveracontinuacióncómoasienteconlacabeza.

»Marco, no hay discusión posible, tienes que incluir nuestros vinos envuestracarta—leordeno,volviéndomehaciaél,creyendoquelairadeVíctoresdebidaaquehe interrumpido la reuniónoaque,posiblemente,noestáyendocomo imaginaba—.Te aseguro que no vas a encontrar en todaLaRioja unos

Page 94: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

vinosmejoresquelosnuestros.¿Víctoroshamostradoyalabodega?—indago,tomandoelcontroldelasituaciónsinproponérmelo.

—Íbamos a tomarnosun café primero—meaclara éste entre dientes, y lomirodenuevo,sorprendida.

—Acompáñanos,amore—meinvitaMarco.Asientosentándomeasuladoylesonríocuandocogemimano,queselleva

aloslabios,tangalantecomosiempre,tanMarco.—Entonces,¿eráispareja?—nospreguntaVíctor,sentándosefrenteamíy

cruzándosedebrazos.Percibolatensióndesucuerpoylairaquedesprendesumirada.

Lo miro sintiéndome de pronto dividida entre dos formas de querercompletamentedistintas,puesaélloquierodeunamaneraalaquenoséponernombreyMarcofueelhombreconelqueperdílavirginidadyelquemeayudó,de alguna manera, a olvidar lo que sentía por Víctor cuando todo se torciódemasiado.

—Así es y, si no fuera por el trabajo de Valentina, posiblemente todavíaestaríamosjuntos—leaseguraconvencido,sinsoltarme.

—¿Ycómoosconocisteis?—se interesa, con lamandíbulaapretada, tantoquetemoquevayaapartírselaencualquiermomento,yloobservoasombrada.

¿Quélepasa?—Valentina fue la modelo que seleccionamos para hacer el anuncio de

nuestra cadena hotelera —empieza a relatarle Marco—. En él, llegabanavegandoconmibarcoalhotelquetenemosenellagoComo,¿lorecuerdas?¿Recuerdascómoelnavíoatracabaenelmuelleytúsubíasporlaescalinatademármol con ese vestido blanco? Parecías una diosa griega. Estabas bellísima,rotundayperfecta,yamímevolvistelocoesedíaytodoslosquelesiguieron—meconfiesa,llevandodenuevomimanoasuslabiosydepositandootrobesoenella.

—LaDolceVita—rememoro,pasandodeVíctorydejándomellevarporlosrecuerdos.

—Ylofueduranteunaño,enelquecasiconseguíquesequedaraavivirenItaliaparasiempre.

—Quépenaqueno lo consiguieras,Marco—secundaAlessandro, y captolospuñosapretadosdeVíctor.

Page 95: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Osapetececonocerlabodegaynuestrosviñedos?—propongo,dándoleunapatadaaVíctorpordebajodelamesa.

—Por supuesto—aceptaMarco, y le sonrío con ganas, sintiendo que, dealgunamanera,conéltambiénestoyencasa.

—Dadnosunossegundosynosreuniremosconvosotrosen la tienda—lespido,deseandoaclararciertospuntosconVíctorantesdeiniciarelrecorrido.

—Notardes,amore.—No —musito y, cuando desaparecen por la puerta de la cafetería, lo

enfrento conmiles de sentimientos bullendo dentro demí—. ¿Se puede saberquémierdastepasa?—siseoentredientes,inclinándomehaciaélparanohaceranadiepartícipedenuestraconversación.

—No sé de quémierdasme hablas, amore—masculla imitando aMarco,acercándoseamíydestilandoiraportodoslosporosdesupiel.

—Porsupuestoquelosabes:llevasfulminándomeconlamiradadesdequemehasvistoacercarmeavosotros.Suéltalo,Víctor,sabesqueloestásdeseando.

—¿Cuántosañostieneesehombre,Valentina?¿Cincuenta?¿Notepareceunpocomayorparati?—mevomitamirándomecondesprecio.

—¿Y qué tiene que ver eso con la reunión? —replico sorprendida,completamenteperdida.

—Contesta—siseamuertoderabia.—Cuarentaydos,aunqueesoesalgoqueatinoteimporta,nitampocoes

relevanteparavenderleelvino.—Porsupuestoquemeimportayesrelevante.¿Quéedadtenías túcuando

estuvisteconél?—prosigue,apretandolamandíbula.—Continúasinimportarte—farfulloenfadada.—Contéstame—insiste,fulminándomeconlamirada.—¿Por qué habría de hacerlo? ¿Acaso me cuentas tú algo sobre tu vida?

Además,¿quémás teda?Esmivida,Víctor;no tienesderechoaopinarsobreella.

—Noestoydeacuerdoytampocopiensomovermedeaquínidejarquetúlohagas hasta que me contestes, ¿te vale como respuesta? —me asegura, tancabreadoquetemoquepuedaecharportierralaventa.

—Nopuedesimpedirquememarche.Dejadehacerelidiotaycompórtatede una puñetera vez; creía que esta venta era importante —le ordeno,

Page 96: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

levantándome y apoyando las palmas de mis manos sobre la mesa, deseandozarandearlo.

—Nometientes,Valentina;tegarantizoquenotienesniideadeloquesoycapazdehacer—mascullaconlafrialdadtiñendocadaunadesuspalabras.

—Ese año cumplía los dieciocho, ¿podemos seguir con la reunión? —lepreguntoempezandoatemblarporlarabia.

—Osea,queseacostócontigocuandotútodavíaerasunamenor—sisea,ylomiroqueriendoabofetearlo.

—Eres un imbécil, ¿lo sabías? —le espeto incorporándome, cerrando lasmanosconfuerzaparanohacerlo—.Porsinolosabes,hayquiennoledatantaimportancia a esode la edad, yomismano se la doy.Te aseguroquenonotédiferencia alguna entre tener los diecisiete y los dieciocho. Vamos, nos estánesperando—concluyo,dirigiendomispasoshacialasalidadelacafetería.

—Meestánesperando—mecorrige,dándomealcance.—Te equivocas si crees que vas a dejarme fuera —siseo volviéndome y

haciéndole frente, felicitándomementalmente por haberme puesto este vestidocon estos taconazos—. Y te garantizo que ahora sí que tenemos unaconversación pendiente —le indico sosteniéndole la mirada, empleando elmismotonosecoyoscoqueestáempleandoélconmigo.

—Encambio,yoyanotengonadamásqueañadir—mascullaentredientes,cogiéndomedelbrazoyconsiguiendoquemipielardaconsucontacto.

—Nometoques—cuchicheosoltándomeyechandoaandarhacialatienda,dondenosestánesperando—.¿Dóndevasallevarlosacomer?Supongoquealcomedor principal de la bodega —le digo con frialdad, dándolo por hecho,haciendoreferenciaaunodeloscomedoresprivadosdelasinstalaciones,donde,previareserva,ysiempreconunmínimodegente,servimoscomidasmaridadasconnuestrovino.

—Somos tres, por supuesto que no voy a llevarlos allí —replica entredientes.

—Cuatro—locorrijo,volviéndomeparaencararlo,sosteniéndolelamirada—.Tienesrazón,mejorllamaaCasiydilequeiremosacomeracasa,que

prepareloqueleparezca,peroqueseesmere,ydíseloamipadretambién,paraqueseunaalalmuerzo—leordeno,retándoloconlamirada.

—Nosoytusecretariayvamosacomerenunrestaurante—merebatecasi

Page 97: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

entregruñidos.—A ver si te enteras de una vez—musito, decidida a no ceder en esto,

deteniéndomeyobligándoloaélahacerlo—:Marcoescomodemifamiliaynovoyallevarloacomeraunrestaurante;vaaveniramicasaytúvasaaceptarloporquequieresquelevendamoselvino,¿verdad?—lepreguntoentredientesy,sin esperar respuesta por su parte, retomomi camino hacia donde ambos nosestánaguardando.

»Sientoel retraso, teníamosunos temasurgentesque tratar.¿Vamos?—lespregunto,cogiéndomedelbrazoquemetiendeMarcoysintiendolamiradadeVíctorclavadaenmiespalda.

Empezamos el recorrido por la bodega, llevándolos primero a la toneleríaparamostrarlescómohacemosnuestraspropiasbarricas,algobastante inusual,puespocasbodegaslatienen.

—LasparcelasderoblesonpropiedaddelEstadofrancésy,cuandolassacanasubasta,todoslosqueestamosinteresadosvamosallíparapujarporellas.DeFrancianosllegalamaderaenformadetablonesy,trassecarlosdurantecuatroaños,paraeliminarlosexcesivosaromasvegetales,lleganalatonelería,dondese elaboran las duelas que formarán las barricas—les cuento, obligándome arelajarme y a disfrutar de este recorrido que tanto añoraba, del brazo de estehombrequetantosignificóparamíenelpasado—.Todaslasbarricastienenlamismacapacidad,perono todasellas tienenelmismonúmerodeduelas,puespuedenvariarentreveintiochoy treintaydos,¿verdad,Víctor?—lepregunto,deseandorelajarelambientequesientoexcesivamentetensoentreambos.

—Así es —me responde sosteniéndome la mirada y, ante mi silencio,prosigue—.Estas duelas no están unidas por clavos o remaches; lo único quehacequelabarricaseaestancaeslapresiónobtenidaconeldobladoporcalor—lesexplicaconseriedad,creandodistanciacontodosycubriendosurostroconesamáscaradeinexpresividadquerecuerdotanbien.

—Primero se preforma la barrica sujetando las duelas por un aro o fleje yestaespeciede«tiendadeindio»—continúo,tomándoleelrelevo,mirándoloyrecordandolasmuchísimasvecesque,depequeña,jugabaaescondermeenellas,detectando cómo mi recuerdo viaja hasta él para resquebrajar levemente esamáscaraquetantoaborrezco—.Comodecía,estaespeciedetiendadeindioseponeencimadelaprimerachimenea,dondelallamadelfuegodacaloralacara

Page 98: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

internadelabarrica,consiguiendoquelasduelasseanmásflexibles.—Lasduelassemojanporfueraparaevitarqueseresquebrajen—interviene

Víctor,alzandolavoz,pueselruidodelatoneleríahaempezadoaserbastanteelevadoy,conesesonidoentremezclándoseconeldesuvoz,guardosilencio,rememorandolasmuchísimasvecesque,sentadaenunrincón,observabacómo,graciasalasirga,lasduelasibandoblándosehastadarlelaformapanzudaalabarrica—…Enestaúltimachimeneasellevaráacaboeltostadodelamadera.

Tenemosvariostiposdetostado…—siguesusexplicacionesmientrasyoloobservo,recordandoyañorandoesosdíasdemiinfancia.

—Sigamosconelrecorrido—musitoechandoaandarunavezhaterminadocon su exposición, necesitando hacer a un lado esos recuerdos que, en estosmomentos,notieneningúnsentidorefrescarniañorar—.Estamosenelpatiodevendimia,dondeloscamionesquellegandelcampohacenlaprimeraparada.

¡Quépenaquenohayamosempezadotodavía,oshubieraencantadovertodoelproceso!—comento,llevándolosalasaladefermentaciones.

—Enestaprimerasaladecatorcetinasderoblefrancés,decatorcemilkiloscada una, se realizará la primera fermentación, la alcohólica, que consiste entransformar la glucosa y el azúcar de los granos de la uva en alcohol —lescuentaVíctor,y lomiroconatención,escuchandosusexplicaciones,unasquenohatenidoqueaprendercomounlorito,comosíhahechomiamiga,puesélempezódesdeceroaquíenlabodega,haciendoelremontado,sacandolaspielesunavezsevaciabala tina, limpiándolaposteriormenteysubiendopocoapocodecategoríaconempeñoytesón—…Duranteesteproceso,seliberadióxidodecarbonoquehacequetantolaspielescomolaspepitassubanalapartesuperiordeldepósito,creandounacapaalaquellamamossombreroyoriginándonosunproblema,porquenecesitamosqueestétodoencontacto,puesesapartesólidaeslaquenosaportaráelcolor,laestructuraylosaromasdelvino.

—Y, entonces, ¿cómo bajáis ese sombrero? —nos pregunta Marco coninterés.

—Conlaoperacióndelremontado—lecontestay,enmisrecuerdos,loveoarriba del depósito haciéndola y amí, sentada en el suelo, esperándolo, y conellosviajoaesosdíasquepreferiríanorecordar…

***

Page 99: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Valentina,venconelabuelo;dejaaVíctortrabajartranquilo.—No, abu, yomequedoaquí—le respondí, tozuda apesardequenome

gustabanadaeltufoquehacíaenlasala,provenientedelaliberacióndeldióxidodecarbono.

—¡Pero si aquí te aburrirás! Ven conmigo, vamos a darle de comer a loscaballos.

—No,abu,aVíctornolequedamuchoymehaprometidohacermetortitasconazúcar.

—Vete,Val,yatebuscoluego—medijodesdeloaltodelatina.—No,prefieroesperarte—repliqué…

***

Incómodacon loquemis recuerdosmeestánhaciendo sentir,meobligo arelegarlosaunladoyregresaramipresente,unpresenteenelqueesechicoquefueyanoestáyenelque,ensulugar,hayunhombrehechoasímismoabasedemuchoesfuerzo,unesfuerzodelqueyofuitestigo.

—…esunatécnicaqueconsisteentomarelmostodelaparteinferiordelosdepósitosparaverterloenlapartesuperior,comosiloducháramos;deesemodoconseguimosunamejorhomogenizacióndellíquido,delafermentaciónydelaextracciónde loscomponentesde lauva…—oigocómolesexplicay,duranteunescasosegundo,tengolacertezadequeélhaviajadoconmigoaesatardedehacedemasiadosaños…

—Vamos, sigamos —prosigo, con esa incomodidad acompañándome,aferrandoelbrazodeMarcoparaseguirconlavisitaporlabodega.

Durantenuestrorecorrido,seuneanosotrosmipadrey,cuandollegamosalproceso de la trasiega, guardo silencio, permitiendo que sea él quien expliqueestetraspasoartesanalquetengograbadoalaluzdeunavelaenmimemoria.

—En las barricas maduran nuestros sueños y nuestras esperanzas —comienzaconesavozcargadade seguridady sabiduríaquevienedadaconelpasode losaños—y,cadacuatromeses,nuestroscaldossondespertadosparalas perceptivas trasiegas, un oficio que es puro arte y que es heredado, enmuchos casos, de padres a hijos, los trasegadores —continúa con orgullo,deteniendo sumirada en las barricas—.Los trasegadores pasan el vino de lasbarricasaotrasnuevasuotrastotalmentelimpiasparafavorecerlaevolucióndel

Page 100: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

vino y la limpieza natural de los sedimentos, y lo hacen de una maneratradicional,paraevitarqueseagiteexcesivamente—lesexplicamientrasyo,sinpretenderlo,meevadodenuevoamisrecuerdosyamiinfancia…

***

—¿Te gustaría ser trasegador? —le pregunté mientras contemplábamoscómounodeellosponíaunpocodevinoenunvasodecristalparacomprobar,alaluzdelavela,sielvinollevabapososoestabaturbio.

—No, peromegusta ver cómo lo hacen—me respondió, ymevolví paraobservarlo—.¿Yati?¿Quétegustaríaser,Val?

—Tunovia—lerespondísindudarlouninstante,sorprendiéndolo.—Eresmuypequeñaparaserminovia—replicó,dándomealavezuntoque

enlanariz—.Además,yonoquierotenernovias.—Y,entonces,¿quéserésinosoytunovia?—planteéfrunciendoelceño.—Mitodo—merespondió,alisándolo.—¿Yquées«mitodo»?—lepregunté,curiosa.—Todoloquenoseránadiemás…

***

—… el trasegador pone un poco de vino en un vaso de cristal paracomprobaralaluzdeunavelaelbrilloylatransparenciadelvinoysiéstellevaposo—oigocómo lescuentamipadremientrasunomimiradaa la suya;memiradeunamaneraquenoentiendo.

—¿De cada una de las barricas? —inquiere Alessandro, claramenteinteresado,mientrasyolesostengolamirada.

—Asíes,unaauna,comodebeser—musitaconorgullo—.Lalabordelostrasegadores nunca finaliza, porque, cuando terminan con todas las barricas,tienenqueempezardenuevo.Sigamos,vamosahacerunacataenramayluegocataremos elmismo vino una vez terminado el período de crianza en botella;veréisquédiferentepuedellegaraser.

Durantelacata,enelcalaoyelrestodelrecorrido,memantengoensilencio,interviniendoencontadasocasionesydejandoquemipadreoVíctorrealicenlaspertinentesexplicacionesy,unavezlodamosporfinalizado,nosdirigimoshacia

Page 101: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

losviñedos,dondeseguimosconlavisitay,aunquemeesfuerzoporevitarlo,ladiscusiónquehemosmantenidoenlacafeteríayelestarjuntosenestoslugaresquenosvieroncrecercreaundesasosiegoenmídifícildeignorar.

—Estásmuycallada,amore—mediceMarco, sacándomedemimutismo,cuandollegamosaunodelosviñedos,mientrasmipadrehablaconAlessandrocomosiloconocieradetodalavida.

—Valentina —lo corrijo entre susurros, viendo mi tacón completamenteestancado en la tierra—.Nome llamesamore delante demi padre—le pido,acercándomeasuorejayaferrándomeasubrazoparamantenerelequilibrio.

«Buendíaheelegidoparaponermetaconazos»,piensocondisgusto.—¿Quieresquetelleveenbrazos?—meproponedivertido.—Conquemeprestesuno,serámásquesuficiente—respondosonriendo.—¿Porquénopuedollamarteamore?—mepregunta,ysientocomosime

acariciaraconlamirada.—Haycosasquemipadrenoentendería—leindicoentresusurros—,ynole

digastampocoquefuimosparejayquevivimosjuntosenItalia.—Amore…—Marco—musito,haciéndoleunamueca—,hazlopormí.—Sólosicenasconmigoestanoche—mepidejustoenelmismoinstanteen

el que Víctor está pasando por nuestro lado y cierro los ojos, maldiciendo elmomento.»Amore…—insiste.

—Claroquecenarécontigo.Vamos—ledigoincómoda,buscandoaVíctorconlamiradaysintiendocómoestoquellenamipechopresionaconunpoquitomásdefuerza.

Cuandollegamosacasa,tantomipadrecomoAlessandroyMarcolohacenconversando animadamente,mientras queVíctor y yo nosmantenemos en unsegundoplano,limitándonosaobservarnosensilencio,ysientocómosuenfado,elmíoytodoloquenosenvuelvecreauntupidotapizdesentimientosdifícildetraspasar.

—Entonces, ¿vivís en Italia? —se interesa mi padre, una vez estamosacomodadosentornoalamesa.

—Yo,enRoma,peroMarcoviveen la regióndeApulia, enun trulli—lecontestaAlessandromientrasCasicomienzaaservirlacomida.

—¿Quéesuntrulli?—lepreguntaconcuriosidadmipadremientrasyoevito

Page 102: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

enlazarmimiradaconladeVíctor.—Un trulli es una antigua construcción que se remonta a la EdadMedia,

realizadaconmurosdemamposteríadepiedraensecoyrematadaconunagrancubiertacónica—explicaMarco—.Los trullis son lugaresmágicos,yaqueenellossienteselnexoentrelaenergíaquehayfueradelosmurosylanaturalezaqueterodea.Teaseguroque,cuandollevasañosviajandoporelmundo,llegaunmomento en el que necesitas echar raíces o reencontrarte con las tuyas, y yoconseguíesoenAlberobello—comenta,ydeantemanoséquesehaganadoamipadreconesode«reencontrarseconlasraíces».

—¿Ytú tambiénvivisteensu trulli?—mepreguntaVíctor, fulminándomeconlamirada,ylomirohaciendolopropio,puesséqueestapreguntatieneunclaroobjetivoyéseesquemipadresepaquevivíenItaliaconél.

—Nunca lohice,pero laverdadesnomehubiera importado—lecontestocon fingida despreocupación, a pesar de que no hay nada que deseemás quedarleunabuenapatadapordebajodelamesaquelodejeconlosojosdelrevés.

—¿Yporquéibamihijaavivirensutrulli?—inquieremipadre,frunciendoelceño.

—Nolosé,aunquepuedequeValentinapuedacontestarteaesacuestión—le responde y, sin querer frenarme, le doy una buena patada por debajo de lamesa.

—No imaginoaValentinaviviendoenun trulli—respondeMarcopormí,echándome un cable omiles de ellosmientrasVíctor y yo nos sostenemos lamirada con la rabia instalada en ella—, pero, si alguna vez decides hacerlo,estaréencantadodetenertecomovecina—prosigue,guiñándomeunojo.

—Peronodecidashacerloahora,porqueMarcosemarchaaviviraNuevaYork en unos días —interviene Alessandro, desviando la conversación sinpretenderlo.

—¡Hombre!¡Comotú!ValentinatambiénsemarchaaviviraNuevaYorkenunpardesemanas—lescuentamipadre,ysientocómolarabia,lairaymilesde emociones más hacen todavía más tupido ese tapiz de sentimientos quehemoscreadohaceunosinstantes.

—¿NomedigasquevasavivirenlaGranManzana?—exclamaMarco,sinpoderocultarsuemoción.

—Telocontaréestanochedurantelacena—lerespondoapropósito,conla

Page 103: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

firmeintencióndemolestaraVíctor.—¿Vaisacenarjuntos?—nospreguntamipadre,asombrado.—Marcomehainvitadoyheaceptado—leconfirmoalzandoelmentóny,

conmispalabras, sientoque estoy rompiendoalgoque, depor sí, ya eramuyfrágil.

—Así podréis recordar viejos tiempos, ¿verdad?—insiste Víctor, y niegocon la cabeza, con ladecepción integrándoseenese tapizde sentimientosquecadavezesmásoscuro.

—Cierto…Note lohabíacontado,papá,peroconozcoaMarcodesdequehaceunosañoshiceunanuncioparasucadenahotelera.

—¿Nomedigas?—nospreguntaél,yporeltonoempleadointuyoqueestáempezandoaatarcabosymirocondesprecioaVíctormientrasoigoqueMarcolecuentacómorodamoseseanuncioquefuetanimportanteparamicarrera.

—Habíamosperdidoelcontactoyhoy,graciasaVíctor,lohemosretomado,¿verdad, Víctor?—le pregunto deseando herirlo, sin saber que al hacerlomehieroamítambién.

—Verdad—mascullaentredientes—;alfinalelmundoesmáspequeñodeloquepareceytodoterminasaliendoalaluz,¿noesasí,Valentina?

—Así es… ¡Ah!, por cierto, recuérdame que le pida los informes a laseñoritaLópez—musitosonriéndoledulcementemientrasMarcoleconfirmaamipadrequetantoAlessandrocomoélhandecididoincorporarnuestrosvinosasucarta,aligerandoelambienteque,derepente,sientoquepesademasiado.

Pasoelrestodelalmuerzoenalertay,cuandomipadrelodaporfinalizado,vacíotodoelairedemispulmones,deseandoencararaVíctorcuantoantes.

—¿Te parece bien que te recoja a las nueve?—me proponeMarco, y denuevosientocomosisuvozacariciaramipiely,alavez,reconfortaramialma—.Creo que tenemosmuchas cosas de las que hablar—prosigue, bajando eltonoparanohacerpartícipesalrestodelospresentes.

—Perfecto, nos vemos entonces a las nueve —le confirmo, asintiendo yomitiendo decir nada más al respecto—. Hasta luego, Alessandro. Me alegrahaberteconocidoyesperoverteporRomasivoyalgúndía.

—Estaréencantado—meindica,sonriéndome—.Graciasporestedía,mehagustadomuchovisitarvuestrabodega.

—Marco—lonombraconsequedadVíctor,tendiéndolelamano.

Page 104: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Víctor—le respondeéste, sosteniéndole lamirada,y,no séporqué,merecuerdandosgallosdepeleaapuntodeenzarzarseenunalucha.

—Víctor,mevoycontigoalabodega—leindicomientraséstesedespidedeAlessandro—. Papá, nos vemos allí—añado, dirigiéndome hacia su Jeep contodalarabiaquemeconsumepordentrohaciendotemblarmicuerpo.

»¿Sabes?,measombraque labodega tengaclientes contigoal frentede lared comercial —le espeto con desprecio cuando accede al interior de suvehículo.

—Y amíme asombra lo solícita que eres con los clientes; si los tratas atodos igual,vasa tenermucho trabajo,Valentina—merebate,arrancandoconrabia.

—Eresunbastardo—masculloconodio.—Tienes toda la razón—mecontestaconfrialdad—.Porcierto,yasehan

hechoclientes,Valentina,nonecesitasiracenarconél.Porsinolosabes,haylímites que es mejor no traspasar o, como te he dicho antes, vas a tenerdemasiadotrabajo.

—Qué hijo de puta eres,Víctor—suelto con desprecio—. Sabes de sobraquenovoyacenarconélporlabodega;además,túereselmenosindicadoparadarconsejosdeesetipo,cuandotetirasalpersonaldelaempresa.

—Escierto,vasacenarconélporquetelotirabascuandoerasunamenor—me replica, ignorando mi alusión a la señorita López Zapatos de tacón demuchosmilímetros.

—Paraelcoche—musito,sintiendolaslágrimasempezaracubrirmisojos.—Has decidido venir conmigo y vas a hacerlo—sentencia, y se aferra al

volanteconfuerza—.¿CuándopensabascontarmelodeNuevaYork?—Ya te he dicho en más de una ocasión que mi vida no te importa —

contestodirigiendomimiradahacialaventanamientrasélacelera.—Tienes razón,pormípuedeshacer loque tedé laputagana—masculla

con rabia—, pero nunca vuelvas a interferir en ninguna demis reuniones.Noeres comercial, Valentina; de hecho, no tienes ningún puesto concreto en labodega,aexcepcióndelde«hijade»,asíquelimítateahacertutrabajoyanoentrometerteeneldelosdemás.

—Puesparasersolamente«hijade»,heconseguidocaptarunacuentamuyimportante;cuandotelleguenlosbeneficios,noolvidesagradecérmelo.

Page 105: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Esosbeneficioshubieranllegadodeigualformasinnecesidaddetuayuda—farfullapegandounfrenazocuandollegaalparking,ymevuelvohaciaél.

—Hoytelohascargadotodo,Víctor.Puedequeyolohicierahacetresañoso puede que lo hiciéramos los dos, quién sabe, pero lo de hoy es todoméritotuyo,enhorabuena—vomitocondesprecioantesdesalirdesucoche.

Cierro dando un sonoro portazo; un portazo a él, a lo que siento y amisrecuerdos,alosquenuncamáslesabrirélapuerta.

Page 106: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO8

Entroenlabodegay,comounaexhalación,medirijoalbaño,donde,encerradaen ese pequeño cubículo, doy rienda suelta a toda la frustración, la rabia, ladecepción y la ira que siento, liberándola en forma de lágrimas, de nuevomaldiciendolaideaquetuvederegresar,maldiciéndoloaélyaestesentimientodepérdidaquemeduelecomosituvierauncuchilloclavadoenelalmaconlafrase «Tú serásmi todo» resonando enmi interior y la canciónTerraTitanicreproduciéndoseenmicabeza,ymeapoyoenlaparedsintiendocómomehundoen elmar helado demis recuerdos tal y como lo hizo ese transatlántico haceaños.

—¿Valentina?—oigolavozdemiamigaalotroladodelapuertaylaabroantes de sentarme en la tapa del inodoro—. ¿Qué ha sucedido, neni? —mepreguntapreocupada,cerrandolapuertayponiéndosedecuclillasparasecarmislágrimas,quenodejandefluir—.Víctor,¿verdad?—meformulayasiento,puessolamentemihermanayellaconocen«mihistoria»conél.

—Esuncapullo,Adri.Enserio,nosabesloquedaríaporpoderquitármelodelacabezadeunavez—masculloconrabia.

—Y,encambio,yosólopuedoenvidiarte—meconfiesa,sorprendiéndome—. ¿Sabes?, puede que yo nunca tenga con nadie lo que tú tienes con él; esacomplicidad, ese conocer hasta la última fibra del otro, ese cariño y esesentimientoquevamásalládetodo…Noquierasquitártelodelacabezayluchaporél.

—Esolodicesporquenosabesloquehahecho…Esunbastardo—susurroresentida.

Page 107: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Un bastardo que posiblemente vaya tan perdido como tú —me dice,sorprendiéndome de nuevo—. Los dos habéis cambiado durante estos años ypuedequeyanoencajéisdelamismamaneraenquelohacíaisantes.PiensaenlaspiezasdelTetris,¿recuerdasesejuego?—mepreguntamientrasyocontinúollorando—.Nituformanilasuyasonlasmismasquelasqueteníaishaceunosaños,pero, si lesdais lavueltao lashacéisgirar, conseguiréisqueencajendenuevo.Hazlo,Valentina,buscaelmodoyluchaporencajardenuevoensuvida.

—Esdifícilhacerlocuandoyosoyuncírculoyél,unrectángulo.—NohaycírculosenelTetris—merebatehaciéndomesonreír—.Hacetres

años te largasteyenesemomentoentendíque lohicieras,peroyanoeresesachica.Hascrecido,neni;demuéstraloy,yapuestos,preséntameaesemorenacoalquehasabrazadoantes.¿Tedascuentadeloinjustaqueeslavida?Tú,adosmanos,yyoviéndolospasar,comoalasmoscas.Enserio,laquedeberíaestarahísentadallorandoamocotendidotendríaqueseryo,notú.

—¿Marcoesel«morenaco»?—lepregunto,sonriendofinalmente.—¡Oh, Dios! ¿Se llamaMarco?Me encanta ese nombre. Dime que va a

volverporaquí,porfavor.—Puesnolosé,peroestanochevoyacenarconél,¿quieresvenirte?—¿Hasquedadoconél?—inquiere,levantándoseyapoyándoseenlapuerta.—Esmiexyhemosquedadopararecordarviejostiempos.—Nomejodas,¿esepedazodetíoestuex?—Metemoquesí.—¿Yporquépuñetasestásllorandositehastiradoaeseportento?¡Virgen

santa! ¿Quémásquieres?—suelta, abriendo la puerta del baño teatralmente yhaciéndomesonreír.

—Venteyloconoces,esuntíomuyguay.—¿Muyguayesloúnicoqueseteocurreparadefinirlo?Vayatela…Porlo

queveo,vassobradadeadjetivos.—Tía,¿quéquieres?Todavíaestoydebajón.—De bajón, dice…De bajón estoy yo viéndote a ti y viéndome amí. Es

italiano,¿verdad?—mepreguntayasiento—.¡AyDios,losabía!Eseacentonofalla… Mamma mia! Molto bene! Buonasera! —prosigue exageradamente,haciéndomereír—.Meencantaelitalianoylositalianos.

—Puesventeacenarylopracticas…elitaliano,digo—matizodivertida,a

Page 108: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

pesardeestapenaquepareceempeñadaennoabandonarme.—Sí,claro,paraserlaservilletaquesecaealsueloyquetodospisoteansin

darsecuenta;no,gracias.—¡Tía,pero¿quédices?!—Laverdad,¿quévoyadecir?Atuladoyosoylaservilleta,ytú,eljarrón

delamesarepletodefloresexóticas.—Adri,eresmonísima;unpelínbajita,peromonísima.—¿Bajita?Perdona,soynormal,túereslaquepareceunpino.—Pero¿vasavenirono?—Quenooooo.¿Quécoñohagoyoahí?—mepreguntasaliendodelbaño.—Puesconocerlo,¿quévasahacer?—replico,siguiéndola.—Paso,neni.Estuexy,viéndoosantes,teaseguroqueyoenesamesasería

menosquelaservilleta.HablamosluegooMartapedirámicuello—mecomentaaloírelsonidodelteléfono,que,insistente,nodejadesonar.

—Oye, gracias por la charlita del baño, tú también eres muy guay —leagradezco,guiñándoleunojo,mientrasellamesacaeldedocorazóncorriendohacialarecepción.

Un pocomás serena tras la conversación conmi amiga, regreso anuestrodespacho,dejandoquesucharlasobrelaspiezasdelTetriscalenenmicabezayenmicorazón,apesardequenotengoniideadecómohacerencajaruncírculoconunrectángulo,pormuchasvecesquegirelaspiezas.

Pasoelrestodelatardeintentandonopensarenloquehasucedidohoy,ensus palabras, en lasmías y en cómo encajar en su vida de nuevo cuando estáclaro que ambos queremos cosas distintas. A las siete, cansada física ymentalmenteysinqueélhayahechoactodepresenciaentodalatarde,cierromiportátil,deseandosalirdeaquídeunavez.

Dandounlargopaseo,medirijoamicasatomandonotamentaldehacermeconuncocheoconunamotocicletacuantoantesparanotenerquedependernideVíctornidemipadreparapodermovermeporaquí.Cuandollegoalcaminoque me llevará hasta su casa pero también a la piscina, lo tomo sin dudarlo,necesitando sumergirme en el agua fría para poder librarme de todo esto quellenamipechohastahacermeperderelequilibrio.

Unavezenlapiscina,medirijoalcasetón,dondemedesprendodetodalaropa, a excepción demis braguitas. Envolviendomi cuerpo con una toalla y,

Page 109: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mientras el sol comienza su lento descenso, llego hasta ella necesitandohundirmeensusheladasaguasparadespejarmimenteymialmadeunavez.Sinpensarlo y soltando la toalla que me cubre, me tiro de cabeza, sintiendo deinmediatocómoelfríomedalabienvenida,envolviendomipielcomosideunacariciagélidasetratara.

Nado como si mi vida dependiera de ello, soltando con cada brazada lafrustración, la decepción, la tristeza y los miles de sentimientos que,entremezclados,meconsumen,conlacanciónTerraTitanicreproduciéndosedenuevoenmicabeza,apesardemisdeseosdeanularladeella,yconcadaestrofallegan nuevos recuerdos, recuerdos que creamos acompañados de esa canciónqueparecíasonarsiemprecuandoestábamosjuntos,comosidelabandasonorade nuestra vida se tratara, o puede que, simplemente, mi mente retuviera losmomentosenlosquesonaba,dándolemásimportanciaquealresto.

***

—Víctor,¿puedoprobarelvino?—lepreguntéunanocheensucasa.—Lo probarás cuando seasmayor—me respondió, agitándolo en su copa

paraseguidamentellevárseloaloslabios.—Peroyoquieroseryamayor—ledijefrunciendoelceño,muycansadade

sersiemprelapequeñadelacasa.—¿Paraquéquieres sermayor con lodivertidoque es serpequeña?—me

planteó,alisándolo.—Porque ser pequeña nomola nada ni es tan divertido, ¿ya no recuerdas

cuandotúloeras?—repliquémolesta.Recuerdoquesumiradaseensombrecióderepenteyquediounlargotrago

desucopa,hastacasivaciarla;recuerdocómoselevantóycómo,duranteunossegundos,estuvetentadadeterminarmesuvino.

—Niseteocurra,pequeñaja—meadvirtió,llegandodenuevohastalamesaconunplatollenodeuvas.

—Noquierouvas—rechacé,molestaporquemehabíapilladoantesdehaberpodidollevaracabomiplan.

—Cierralosojos—mepidió,cogiendounauvadelracimo,yrecuerdoqueen su cocina siempre había uvas del viñedo; negras, duras y dulces—.Venga,ciérralos—insistióyobedecí—.Abrelaboca—meordenó,depositandolauva

Page 110: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

en ella en cuanto obedecí—. No tienes que masticarla, porque, si lo haces,romperás las pepitas y te perderás el sabor de la fruta; simplemente aplasta lauvacontratupaladarconlalenguaydimeaquésabe.Venga,hazmelacatadelauva…

***

Nado con más rapidez, deseando dejar de recordar de una vez; deseandodejardeversusojos,queparecenseguirmealládondevaya;deseandodejardeoír su voz, que parece ser el sonido favorito demi subconsciente, y deseandopoder dejar de sentirme como si estuviera a punto de perder el equilibrio y,cuandonopuedomás,medetengoparadejarmicuerpoflotandosobreelagua,de nuevomaldiciendo la idea que tuve de regresar cuando podía haberme idodirectamenteaNuevaYork.

—Yodetinoharíaeso.—Él,ymedoylavueltaconrapidez,cubriendomispechosconlosbrazos.

—¿Qué haces aquí? —le pregunto con frialdad, sintiéndome de prontodemasiadoexpuesta,yendocomovoyconunassimplesbraguitas.

—Ibaabañarme,peronohetenidocojonesdehacerloviéndotenadarasí—mecontesta,yloobservoconseriedad.

Estásentandoenelbancodepiedra,conelcabellorevuelto,labarbadeunpardedías, losantebrazosapoyadosenlaspiernasyelceñomásfruncidoquenunca.

—En cambio, para insinuar estupideces, no te faltan —le recrimino condureza,olvidandolacharlaquehemantenidoconmiamiga.

—Los ignorantes y los estúpidos podemos ser muy atrevidos —me dicemirándomefijamente,sinmodificarsupostura—,yestáclaroqueyosoyambascosas—prosigue,sosteniéndomelamiradamientrasmicuerposeestremececonella—.Haceaños tedijeque túseríasmi todo,¿lo recuerdas?—mepregunta,levantándose,cogiendo la toalladelsueloyacercándosea laescaleramientrasyonopierdodetalledesuspalabrasnidesusmovimientos—.Estáshelándote,saldeahí—meordenaconautoridadmientras,sindejardecubrirmispechosysinsoltarmedesumirada,empiezoasubirlosescalones—.Pontedeespaldas—me manda con voz cavernosa, y suspiro bajito, obedeciendo, sintiendo cómotodocomienzaavibrardeformadistintaentrenosotrosyempezandoacreerque

Page 111: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

talvez,ysólotalvez,elcírculoyelrectángulosíquepuedanencajardealgunamanera,aunqueyoahoranotenganiideadecómo.

Y,entonces,sientocómolatoallaysusbrazosenvuelvenmicuerpoycierrolosojos,encontrandoelmalditopuntodeequilibrioentreellos.

—Ese día no te mentí, Val—continúa con voz ronca, cerca de mi oreja,estremeciéndomeycontrayendomivientre,retomandolaconversacióndondelahabía dejado, sin soltar mi cuerpo y pegándome al suyo—, porque, inclusocuandonoestabas,continuabassiéndolo,comoahora,aunqueestétancabreadocontigo que sólo sienta deseos de liarme a puñetazos con el primero que seatrevaamirarme…oamirarte—meconfiesafinalmente.

—Muymaduro—mascullo, volviéndome y observando sus labios, que seencuentran a la distancia de un susurro de los míos, con sus brazos todavíarodeandomicuerpoyprovocandomilesdeincendiosquesepropaganalolargodetodamicolumnavertebral.

—Nosabescuánto—merebateconlaironíatiñendosuvoz,sinmoverseuncentímetronihaciéndoloyo tampoco, comosi el equilibriodeunodependieradelotro—.Cuandomeenterédequeregresabas,noestabaaquí—meconfiesaconsumiradaviajandodemisojoshastamis labios,ymemuevo ligeramenteparapegarmeunpoquitomásaél,buscandoelcalorde sucuerpoy…quéseyo…—. De hecho, tenía trabajo para todo el mes, pero lo cancelé porquenecesitabarecuperaresapartedemíqueperdícuandotútefuiste—mecuentay,cuando nuestras miradas se encuentran, siento cómo todo tiembla a nuestroalrededorycómocreamosunaeternidadenunsolosegundo.

—Pues no estás poniendo mucho de tu parte para conseguirlo; más bienparecesempeñadoenlogrartodolocontrario—leindicocuandolosrecuerdosde lo quehaocurridohoy regresany, a regañadientes,me alejode su cuerpo,enfriandoelmío.

—Loséy sientomucho loquehapasado.Soyconscientedequeno teníaningún derecho a nada y, en cambio, me he creído con derecho a todo —mascullamirándomefijamente,ymeabrazoamicuerpoempezandoatemblar,esta vez de unamanera distinta a como lo hacía hace unosmomentos, y meaferroa la toallacon fuerza,comosialhacerlopudieramantenerelequilibrioquesientoapuntodeperderahoraquesupielnoestácercadelamía—.Mehecomportadocomounmaldito imbécil y lo siento, te aseguroquenovolverá a

Page 112: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

suceder—afirma,mesándoseelcabelloymirándomefrustrado—.Disfrutadetucena—añadeantesdedarsemediavueltaydirigirseasuvehículo,dejándometemblandoalbordedelapiscina,abrazadaamicuerpo.

Llego ami casa todavía temblando; puede que sea pormi pelomojado oporque,consuspalabras,temoquesehayadespedidodemíyvayaaalejarsedenuevo,comoyahizoenelpasadoy,conlosánimosporlossuelos,medoyunaduchaycomienzoaarreglarmecuandoloquedeverdaddeseoescorrerhaciasucasaparavolveraserlosquefuimosapesardequeeseVicyesaValdejarondeexistirhacemucho.

Marco pasa a recogerme puntual a las nueve y, durante la cena, consigoanimarmeligeramentemientrasrecordamosviejostiemposyescuchosusplanesde expansión para su cadena hotelera. Tiene pensado abrir un hotel enNuevaYork y de ahí continuar la expansión por el resto de Estados Unidos, hastaconseguir que la cadena de hoteles Briani esté presente en sus principalesciudades.

—EntoncescoincidiremosenNuevaYork,almenosduranteunpardemeses—ledigo,sonriéndole.

—MeparecequeaVíctornolehahechomuchagraciasaberlo.EseVíctoreseldetuinfancia,¿verdad,amore?—mepreguntarecordandolahistoriaquelecontéhaceaños.

—Tienesbuenamemoria—musito,llevándomelacopadevinoaloslabiosmientras una canción, que no reconozco, suena suave en el restaurante, yrecuerdolamúsicaquetantolegustaaVíctorylaquetantoterminógustándomeamí,lamúsicaremember,lademisrecuerdos.

—Cuando se trata de ti, es fácil tenerla —me adula, sonriéndome yconsiguiendoquemecentredenuevo—.¿Quésientesporél,Valentina?

—Lomismoquesentíacuandoteconocí.Pensabaque,conlosañosytierrade por medio, había logrado olvidarlo. Ya sabes, dicen que la distancia es elolvido,peroestáclaroqueesafrasenopuedeaplicarseamí,porque,cuandolohevisto,todoestoquesientoporélharegresadocomosienrealidadnuncasehubiera ido, como si simplemente hubiera estado dormido esperando a serdespertado.

—¿Comoelvinodurantelatrasiega?—Porloqueveo,hasprestadoatención—musitodesviandolamiradahacia

Page 113: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

elmío.—Me parece que no eres la única que siente algo, sólo que él no quiere

aceptarlo—sueltaconseguridad.—Me ha pedido disculpas por lo que ha sucedido durante la comida—le

confieso,empezandoamarearmicena.—Simplemente se ha comportado como un capullo enamorado; no se lo

tengasencuenta,Valentina.Siyofueraél,estaríarabioso.—¿Por qué? —le pregunto confundida, alzando la mirada del plato para

posarlasobrelasuya,oscuracomolanoche.—PorquesabequeenNuevaYorkcoincidiremosyesodebedesermotivo

másquesuficientecomoparaquedeseeliarseapuñetazosconmigo.—Definitivamente,debedeserunpensamientogeneralizadodetíosesode

quererliarseapuñetazosconalguien.—Te lohadicho—measeguraconuna sonrisayobservo sus labios, esos

querecorrieronmicuerpoinfinidaddeveces.—Sóloquehaomitidodecirmeconquién.—Yahorayasabesquiéntieneelhonordeserelreceptordeesospuñosque

nuncallegaránatocarme—meindica,guiñándomeunojo.—Detodasformas,teequivocas.Sinoestáconmigoesporquenoquiere;en

realidad,loquedeseaesliarseapuñetazoscontigoporqueteacostasteconmigosiendounamenor—leconfieso.

—Elúnicoproblemaquehayaquíesqueesamenorerastú,noeraesamujerdeahí—replica,señalándolaconlamirada—,niaquellaotra,sinotú.Éseessuproblema,yahoratúyyovamosaestarjuntosenNuevaYorkyéseessuotroproblema—afirmarotundo.

—Lo que había entre nosotros terminó hace mucho tiempo —musitonegandoconlacabeza—.Notieneporquépreocuparseporeso.

—¿De verdad lo crees? Porque también dicen por ahí que, donde hubofuego,siemprequedanbrasaslistasparaarderencualquierinstante.SiVíctornoestuvieraentrenosotros,amore,estanoche túyyono sólonos limitaríamosacenaryacharlar…ylosabes—sentenciamirándomeconintensidad.

—Peroestá—musitosinsabersitieneonorazón—.Además,estaveznoescomoentonces.

—Losé,peroyosoyunhombrepaciente,yllegaráelmomentoenelqueno

Page 114: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

esté,comonoestuvoentonces,yporellotendráotroproblema.—¿Cuál?—susurrosinpoderalejarmimiradadelasuya.—Yo —me asegura, recostándose en su silla—. No voy a intentar nada

ahora,amore.Teconozcoy séque tienescosasque resolverconél,perocreosaber cómo terminará todo este asunto y, si es como espero, cuando nosencontremosdenuevoenNuevaYork,notedejarémarchartanfácilmente.

—¿Ycómoterminarátodoesto?—planteocomosiMarcotuvieraelpoderdelaclarividencia,haciendoaunladotodolootroquehadicho.

—Contigosolaen laGranManzana.Lovuestrono tienefuturo,Valentina;noporti,sinoporél.

—¿Porquédiceseso?—lepreguntoponiéndomealadefensiva.—Porque, a pesar de que no lo conozco, intuyo que nos parecemos

demasiadoyqueharálomismoquehiceyo.—¿Quéquieresdecir?—inquiero,sinsercapazdeseguirlo.—Si te lo cuento, le estoy dando ventaja, y no soy tan generoso, amore,

entiéndelo.—Siempretanmisterioso,Marco—susurronegandoconlacabeza.—Nosoymisterioso,sólovigilomisintereses—meindicacogiendosucopa

yacercándolaalamía—.PorNuevaYork.—Pornuestraamistad—matizoprudente,pensandoensuspalabras.Marcomedejafinalmenteenmicasaalasdosymediadelamadrugadatras

unanochecargadadeconfesionesydefuturaspromesasqueyoprefieroignorary,unavezasolasenelsilenciodemihabitación,meabandonoenlosbrazosdeMorfeo,demasiadoconfundidaconsuspalabrascomoparaseguirpensando.

A lamañana siguientemedespierto sintiendocómounamala sensación seasientaenlabocademiestómago;puedequeseapor loquesucedióayerconVíctor o porque temo que Marco tenga razón, pero me siento intranquila,incómodaconmigomisma,y,trasvestirmeymaquillarme,medirijoalacocinaesperando encontrarlo allí, sentado en el taburete tomando café, como estosúltimosdías,apesardequealgoenmiinteriormeadviertedequehoynoestará.

Cuando llego, mis sospechas se confirman, pues a los únicos que meencuentrosonamipadreyaCasi,charlandoentreellos.

—Buenosdías—musitosintiendocómoestamalasensaciónconlaquehedespertadoseasientaconmásfuerzaenmiinterior.

Page 115: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Buenosdías,hija.Hoytellevaréyoalabodega—mecomunicamipadre—.FinalmentehemosdecididoadelantarlavendimiaunasemanayVíctorteníacosasquehacer.

—Esverdad,ayerosreunisteisconJoaquínparahablardeeso;conlavisitadeMarcoyAlessandroolvidépreguntarte—digo,intentandoaportarleamivozuntonodespreocupadoyligero,sinsabersi loestoylogrando—.¿Yquées loque tenía que hacer?—le pregunto sentándome en el taburete, observandomiplatodefrutaysintiendoeldolordelaañoranzapesandodentrodemí,comosituvieraunalosaenelcentrodelpecho.

—Ya sabes que, antes de empezar con la vendimia, hay demasiadas cosasquesupervisarymeparecequevamosatenerqueecharleunascuantashorasdemás. Hay que terminar de preparar el campo para dejar la tierra limpia deracimos y hierba, pedir permiso para vendimiar a los del Consejo Regulador,comprobarquetodoenlabodegaestélisto…

—Una fiesta, vamos—lo interrumpo sonriendo, viendo cómo los nervioscomienzana adueñarsede él, comosiemprepor estas fechas—.Comprobar eltiempo,quenollueva,blablablá…

—Ya lo sufrirás cuando trabajes aquí. Por cierto, ¿quieres acompañarmehoy? Tengo que ir a los viñedos de Rodezno—me propone, y niego con lacabeza.

—Quieroterminarconlasllamadasquetengopendientes,peroloquesíquenecesitoesunvehículoconelquepodermoverme.¿Dóndeestáel Jeep?—lepregunto,haciendoreferenciaaltodoterrenodelabodegaquesueloutilizarcadavezqueregreso,intentandosonreíryhaceraunladoestasensaciónagónicaquesientoencallándoseenmiinterior.

—En el taller; se estropeó el otro día y todavía no lo tienen listo —meinformamipadre,dándoleotrosorboasucafé—.Metemoquetenemostodosloscochesocupados,perotuhermanatieneunamotocicletaqueapenasutiliza;dilequetelapresteduranteestosdías,hastaquetengamoselJeeparreglado;nocreoquetenganingúninconveniente.

—Vale,yaselapediré—musitocondesgana,haciendoaunladoelplatodefruta.

—¿Novasacomértela?—inquiereCasi,frunciendoelceñoycruzándosedebrazos.

Page 116: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Casilda, por favor, no empecemos —le pido terminándome el té paraseguidamente coger mi bolso—. Papá, ¿te queda mucho? —le preguntoimpaciente,deseandollegarcuantoantesaldespachoparaverloyquitarmeesamalasensacióndeencimadeunavez.

—En realidad te estaba esperando —me confirma mientras yo siento lamiradaenfurecidadeCasisobremíysalgodisparadadelacocinaantesdequecomience a soltarme todo lo que sin duda está deseando decirme—. Tú y yovamos a tener que hablar sobre el tema de la alimentación—me adviertemipadresubiendoasucoche.

—Papá,nuncasuelotenerhambreporlasmañanasy,pormuchoqueCasiseempeñeenquedesayune,novoyahacerlo.Además,noesalgonuevo,losabéistodosdesobrayestetemaestáempezandoacansarmeya—replico,claramentemolesta,mientrasélconducehacialabodega.

—No esmalo que se preocupen por ti; eso significa que te quieren, no loolvides—meadvierteconseriedad.

—Ya lo sé, papá, pero a vecesme trata como si fuera una cría y, cuandollevasañosviviendosola,alfinaltehartasunpoco.

—Pues,cuandotehartes,piensaenloquesignificaCasientuvida,aversiasídejadehartartedeunavez—mereprende—.Lasnormas,losconsejosyelqueesténpendientesdetubienestaresalgoquedeberíasagradecer,sobretodoviviendolavidaquellevas.

—¿Yquévidallevo,papá?—sueltoponiéndomealadefensiva.—Unaenlaquehacesloquetedalarealganasinconsultarmenadanitener

encuentamiopinión—merespondecondureza.—¿Porquédiceseso?—lepregunto,temiéndomelapeor.—LosabesdesobraysiayernotedijenadafueporrespetoaMarco,asu

socioytambiénati,noporquenomedieracuenta,peroahoraestamossolosyquierosabersivivisteenItaliaconesehombre.

—VivíenItaliaunatemporada,sí—leconfirmo,maldiciendoensilencioaVíctor—.Mi agenciameenvió allí porquecreíaquemi rostro encajaríay fuetodounacierto.

—¿Yporquénomeenteré?—bramaconsuvozllenadematicesinundandocadaunodelosrinconesdeestevehículo.

—Porque pensé que eramejor que no lo supieras—musito bajito, oyendo

Page 117: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

susreprochessinnecesidaddequetengaquedecirlosenvozalta.—Pues te equivocaste—me replica con seriedad, guardandounosminutos

de silencio que yo percibo como interminables—. No voy a preguntarte denuevo si viviste con ese hombre, porque casi prefiero no saberlo—continúaarisco, sinmolestarseenmirarme—,perono te reconozco,no reconozcoamihijaenlajovenquetengosentadaamilado—suelta,ydirijolamiradahacialaventanaguardandosilencio,conscientedequelohedecepcionadodenuevo.

Paso toda la mañana encerrada en el despacho sin salir ni siquiera paratomarme un mísero té, demasiado triste y confundida como para hablar connadie,y,aunqueintentocentrarmeenmilaboryapartartodosestossentimientosque me ahogan, no consigo centrar mi atención en nada de lo que tengopendiente,pues,apesardeloquedigamipadre,sientoquetodoesdemasiadoinjusto y al final, frustrada, me coloco junto a la ventana, donde detengo mimiradaeneliryvenirdelostrabajadoresdelabodega.

«SoyValentinaDomínguez,empecédeceroenunmundollenodetiburonesypirañasy,aunasí,conseguídespuntaryhacermeunnombreenelsectordelamoda.He desfilado enMadrid,Barcelona,Milán y París; he hecho campañasimportantísimasfirmadasporlosprincipalesfotógrafosdelmomentoyahoramemarchoaNuevaYorkparadarelgransalto.Llevoañosviviendosola,llorandocuandountrabajosecaíaenelúltimomomentoygritandodealegríacuandololograbaynunca,jamás,apesardelosobstáculos,meherendidoy,siconesonofuera suficiente, ahora voy a estudiar la carrera de enología además de estartrabajando en la bodega cuando podría estar en una isla paradisíaca con unacaipiriñaen lamanoy,en lugardesentirelapoyode laspersonasquequiero,sólo siento que las decepciono continuamente; primero a mi padre, luego aVíctor y, de nuevo, a mi padre, los únicos hombres a los que quiero deverdad…»,piensosintiendocómoelnudoseformaenmigarganta.

«¿Por qué mierdas tuve que regresar?», me pregunto volviendo la miradahacia sumesa pulcramente ordenada, sintiendo de repente que esemiedo quesentíesanochecomienzaamaterializarsedespacio.

A lahoradelalmuerzo,ycon losánimospor los suelos,me reúnoconmiamigaenlacafetería,apesardequeloúltimoquemeapeteceescomer.

—Oye,¿quéhayexactamenteentreVíctory la señoritaLópez?—inquierocuando laveoacercarsea labarracon sus inconfundibleszapatosde tacónde

Page 118: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

muchoscentímetros.—Había —me corrige Adriana, guiñándome un ojo antes de llevarse la

cucharaalaboca.—¿Había?—repito,sorprendida.—Liquidó ese asunto cuando llegaste—me confirma, y lamiro sin poder

creerlo.—¿Cómo?—¿Cómo?—me imita riendo—.A ver, no es que tuvieran nada serio; en

palabrasdeella«sóloerasexo»,perollegastetúy,sitehevisto,nomeacuerdo.—Ah…—musitosinsaberquédecir—.Detodasmaneras,nocreoquesea

pormí—añado,empezandoamarearlacomidaenmiplato.—Pormíteaseguroquenolahadejado—replicaguasona—.¿Quieresdejar

deponeresacara?¿Quétepasaahora?—QueestoypormandarestapresentaciónalamierdaeirmealCaribe.—¿Al Caribe? Me voy contigo, ¿cuándo hacemos las maletas? —me

pregunta,haciéndomesonreír.—Hoymismosipudiera.—Perovamosaver,almadecántaro,¿sepuedesaberquéhasucedido?—Básicamente,quemipadre,graciasaVíctor,estámosqueadoporqueseha

enteradodequevivíenItaliaysehuelequeestuveconMarco.—Mi abuela ya decía que lasmentiras tienen las patasmuy cortas. Tiene

razón, se lo tenías que haber contado; imagínate que te hubiera sucedidocualquiercosa.

—Vivoporelmundo,Adri,ypuedeocurrirmecualquiercosaencualquiersitio,vivaenItaliaoenMadrid.

—Yalosé,pero,aligualqueestavezsíquelehascontadoquetevasaviviraNuevaYork,conlodeItaliatendríasquehaberhecholomismo.Deverdad,nosécómopudisteocultarlealgoasíteniendoclarocómoestupadre.

—Poresomismo,porqueloconozco,preferínohacerlo.Yasabeslocerradoquepuedellegaraserytemíaquenomelopermitiera,peroesopasóynuncamásleheocultadonada.

—Porqueeresmayordeedadyyanopuedeimpedírtelo,aunquequiera—medicesonriéndome—.Entiendequeestéenfadado,¿túnoloestaríassituhijatehubieraocultadoalgoasí?—meplantea,yguardosilencioconscientedeque,

Page 119: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

denuevo,tienerazón.—¿YaVíctor?¿Lohasvistohoy?—cambiodetema,obligándomeacomer.—¿Nohaidoaldespacho?Quéraro,porquehaestadoporaquí.—¿Deverdad?¿Cuándo?—indago,sorprendida.—Hallegadosobre lasonceysehamarchadohaceapenasunahora—me

confirma,ysientoqueesasensaciónagónicaseintensificaunpoquitomás.—Creoqueestáalejándosedemí—murmuro,dándolevozamistemores.—¿Poniendodistancia?—meformula,entendiéndomeenelacto.—Sí, y no lo entiendo, porque fue él quien me propuso retomar nuestra

amistaddondeladejamos,peroahoraescomosihubieracambiadodeopinión,nosé…

—O simplemente se ha dado cuenta de que tú ya no eres la Val que élrecordaba.

—¿Quéquieresdecir?—lepregunto,arrugandoelceño.—Te lodije ayer: túyano eresquien fuiste, ni él tampoco; a lomejorno

sabecómohacerencajarlaspiezas.Hablaconélybuscalaformadehacerqueencajendenuevo, porque, si no, perderásunapartede ti que luegonopodrásrecuperary,yapuestos,discúlpatecontupadre;élmenosquenadiesemerecequeleoculteslascosas.

—¿Estás estudiando psicología? Porque estoy por pagarte la consulta—ledigointentandobromear.

—Pormí no te cortes, ¿eh?—me replica, sonriendo abiertamente—. Perono, en realidad estoy estudiando la carrera de hostelería y turismo para poderviajarportodoelmundocomohacestú,queestoyhastaelmoñodeverviñedos—comenta, guardando luego silencio durante unos escasos segundos,empezandoasonreír—.¿Sabes?NomeimportaríanadacurrarenalgúnhoteldeBora-BoraodelasMaldivas—medice,guiñándomeunojo,yjuraríaqueacabadevisualizarlo.

Duranteelrestodelacomida,mecuentasusplanesdefuturoyyolehablodelosmíos,deMarcoydemipasadoconély,mientraspasanlosminutos,nosponemos al día de nuestra vida, cortándonos continuamente como hacemossiemprecuandoestamosjuntas.

Cuandoterminamosdealmorzar,medirijoenbuscademipadre,decididaaseguir el consejodemi amigay enmendar las cosas.Lo encuentro en la nave

Page 120: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

donde hacemos la segunda fermentación, la maloláctica, hablando con untrabajador,ymeacercoaéltitubeante.

—Papá…, ¿podemos hablar cuando acabes?—le pregunto, sonriéndole altrabajadoramododesaludo.

—Yahe terminado, ¿quéquieres?—mecontesta empezandocaminar, y losigo.

—Disculparme—musito,provocandoquesedetenga—.Séquenodeberíahaberte ocultado algo así y lo siento, pero en ese momento pensé que era lomejor.

—¿DeverdadpensastequelomejorparatieravivirenItaliaconunhombrequeposiblemente tedobla laedadyhacerloaespaldasde tu familia?—sueltaconaspereza,haciéndomesentirdenuevopequeña.

—Tomé una decisión como continuamente tomo decisiones en mi vida.Papá, temía que no me lo permitieras y no quería negarme algo así —medefiendoantesusilencio.

—Silo temíaseraporquesabíasquenoestabashaciendolocorrecto—merebateconesaseriedadquetantomeimpone.

—No es eso —me quejo, frustrada—. Tú no lo entiendes —prosigointentandohacermeentender—.Túbasastuvidaenlacontinuidad,enelapegoalasraícesyalastradiciones,peroyono,ynoporelloreniegodetodoello.Papá,tienesqueentenderquemividaescompletamentedistintaa la tuyaoa laquetendríasivivieraaquí.

—Sécuálestuvidayloqueteníaquedecirteyatelodijelaúltimavezquehablamos,notengonadamásqueañadiratodoeso;sóloesperonoencontrarmeconmássorpresasdesagradables—medicelacónico,echandoaandar.

—¿Ycuálesmivida?—inquiero,alzandolavoz.—Una vida frívola y de falsedad, en la que muy poca gente dice lo que

realmente piensa; una vida donde se le da más importancia al físico que alinterioryalvalordelaspersonas,ydondetodovale, todo, inclusomentira tufamiliasiconelloconsiguesloquedeseas.Ésaestuvida,lavidaquedefiendesyen laque, según tuspropiaspalabras, eresuna simplepercha—mecontestaantes de darse la vuelta para reanudar su paso, consiguiendo que enmudezcamientras una lágrima se desliza por mi mejilla, una lágrima que seco conimpotencia.

Page 121: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Cabizbajayfrenandomillanto,regresoamidesiertodespacho,donde,unavez a solas, lo dejo fluir finalmente con libertad. «¿De verdad se siente tandecepcionado conmigo cuando yo estoy tan orgullosa de todo lo que helogrado?», me pregunto, percatándome de que, desde que he regresado y aexcepcióndeunos contados instantes, nomehe sentido realmentebienymásvecesdelasquedeberíahemaldecidolaideadehabervuelto.

Cerrandomiportátilyapilando todos lospapelesenun lateralde lamesa,doy por concluidami jornada laboral, a pesar de que todavía es pronto y, sindespedirmedenadie, salgode labodegadirectaamicasa,planteándomemuyseriamentedecepcionarlos a todosdeverdady largarmeaNuevaYorkdeunavez,muycansadacomoestoydetodoesto,peroentoncesllegoalabifurcaciónquemellevaráasucasaylacontemploduranteunosminutos,sintiendocómotirademí,cómoalgoenmiinteriormeimpideseguirmicamino,instándomeadesviarmispasos,porloque,cediendoydejandoqueseamicorazónquienlosguíe,meencaminohaciasucasa,necesitandohablarconélantesdetomarunadecisión.

Page 122: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO9

Cuandollegoasucasa,comprueboquesucochenoestá,ydoyporsentadoqueestará trabajando. «De hecho, yo misma debería estar haciéndolo», piensosintiéndomeculpablederepenteporhabermelargadoantesdehora,«peroalohecho, pecho», me digo rodeando la vivienda hasta llegar al porche trasero,dondemesientoenlosescalones,dispuestaaesperarlo.Apoyandomiespaldaenlacolumnadepiedra,cierrolosojosbuscandoenmiinterioresesentimientoqueme indique qué debo hacer, pues sé que, si me marcho ahora, no solamenteestarédecepcionandoamipadrey,apesardesaberlo,soyincapazdedesearotracosaquenosealargarmecuantoantesdeaquípormuchoquemisubconscientemerepitaque,silohago,estarérindiéndomeyfallándomeinclusoamímisma.

Tras casi una hora de espera, con el trasero dolorido y el sentimiento deimpaciencia creciendo a pasos agigantados en mi interior, cojo el móvildispuesta a husmear en mis redes sociales y desconectar, aunque sea duranteunosminutos,de todoestoquesientoquemesupera,perover lospostdemiscompañerasdisfrutandodesusvacaciones,enelgimnasiomachacándose,yendodefiestaenfiestaocompartiendoimágenesdesusúltimostrabajosnoesquemeayudeprecisamenteaconseguirlo,porloquealfinaldecidodejarlodenuevoenel bolsoyvolver a ser la insociable en laquemehe convertidodesdequehepuestounpieenlosviñedos.

Mesientoensuhamaca,intentocotillearatravésdelasventanasdesucasaymecuestionocomounasmilvecesquépuñetashagoaquíesperándolocuandoestáclaroqueélestáevitándome.

«Debería irme», piensodeteniendomimirada en las interminables filas de

Page 123: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

videsqueseextiendeninquebrantablesfrenteamí,fruto,sinlugaradudas,delatenacidady el trabajodurodemipadre. «Si fuera una chica lista,me largaríaahoramismo sin necesidad de hablar con él—prosigomi discursomental—,peroestáclaroquenolosoy»,afirmo,posandodenuevomimiradaenlatierrafértil cuna de nuestros vinos, sin entender esta necesidad acuciante queexperimento de hablar con él y de verlo, aunque sea por última vez, y, sinpercatarme de ello, mi mente comienza a entremezclar pensamientos yrecuerdos, entretejiéndolos entre sí como lo harían los hilos de un complejotapiz,consiguiendoquemeevadaaesosdíasdemiinfanciaenlosquevivíaenunaburbujadeviñedosydedespreocupaciónpararegresardenuevoalasombradeestaparraquefuetestigodetantascosas…

Elsonidodesutodoterrenoacercándoseponeenalertatodosmissentidosy,conelcorazónempezandoabombearconfuerzaenmiinterior,dirijolamiradahacia el camino por donde se aproxima, sintiendo cómo cada fibra demi serdespierta con ese sonido y cómo todos estos sentimientos que se habíanapaciguado,inclusohastacasidormido,duranteestashorasdeespera,vuelvenala vida y, titubeante pero a la vez firme enmis deseos,me encaminohacia lapartedelanterade lacasa,dondesehadetenido, sin saberquévoyadecirleocómovoyasentirmecuandolotengafrenteamí,siendoconscientedecómomisextremidades se vuelven hiperlaxas amedida quemis pasos se acercan a él ycómomirespiraciónseconvierteenuncaosabsolutocuandoloveodescenderdesuvehículoconmovimientosfluidosyseguros.

—Hola—musitofinalmente,viendolasorpresaylaconfusiónreflejadasensumirada.

—¿Qué haces aquí? —me pregunta, y siento que puedo palpar suincomodidad,comosifueraalgotangible.

—Creíaquenonecesitabaunaexcusaparavenir—musito,recordándolesuspalabras.

—Por supuesto que no la necesitas, lo siento —murmura enterrando losdedosensupeloy,trasunperturbadorylargosilencio,veocómoseacercaalapuerta,queabreparamí—.Pasa,porfavor,notequedesahí—mepidemientrasposolamiradaenesapuertaqueélsujeta.

Caminohaciaélcontodaslasemocionesquellenanmipechoinstaladasestavezenmimirada,unamiradaquelesostengoyenlaquereconozcoesasmismas

Page 124: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

emocionesalojadasenlasuyay,cuandoaccedoalinteriordesuvivienda,sientocómoseasientanenmicorazón,haciendoquelatapesadoyralentizado.

—Vaya, cuánto tiempo sin estar aquí—susurro con la desazón abriéndosepaso,puesdesdeesanochenohabíavueltoaponerunpieenestelugarque,ensudía,fuecomounasegundacasaparamí.

—¿Te apetece tomar algo?—me pregunta, hundiendo los pulgares en losbolsillosdesusvaquerosmientrasyodesvíolamiradahaciaesesofáenelquetantasvecessoñédormidaydespierta.

—No—musito,sintiendoquetodoestomeahoga—.¿Quésucede,Víctor?—lepregunto,volviéndome,uniendomimiradaalasuya.—Noséaloqueterefieres—merespondeconsequedad.—Porsupuestoquelosabes—replico,intentandoindagarensusojos.—Teequivocas,notengoniidea—sereafirma.—Noestoy tan segura—opinobajando lamiradahasta el suelo, yguardo

silencioduranteunossegundosquemepareceneternos—.¿Teestásmarchando?—leplanteo,alzando losojoshastaposarlosen lossuyos,sintiendoque lo

hagoenelcentrodemismiedos.—Estoyaquí—merespondeconlamismasequedadqueantes,cubriendosu

miradaysurostroconunamáscaradeinexpresividad.—Loestabas—objeto—,peroayertefuisteynohasregresado.—Hetenidotrabajo.—Sabes que no me refiero a eso —insisto con obstinación mientras el

silencioseabrepasoentrenosotros, llenandocadaunode los rinconesdeestesalón—.¿Sabes?,meparecequenosoylaúnicaendecepcionaralagente.

—¿Quéquieresdecir?—mepregunta,frunciendoelceño.—Quepuedequeyohayadecepcionadoamipadree inclusopuedeque te

hayadecepcionadoatiyqueporesoestésalejándote,perovosotrostambiénmehabéis decepcionado amí—le digo, vomitando todo lo queme carcome pordentro—.Noregreséacasaparaquemipadremehicierasentircontinuamentemalnitediunanuevaoportunidadparaquetúvolvierasadarmelaespalda;novine aquí para eso, vine para pasar unos días con mi familia y lo único queencuentroalládondemirosonreproches.

—Sientolodetupadre;séqueesculpamíaytepidodisculpasdenuevo—mediceconseriedad.

Page 125: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Ysobreti?¿Túnotienesnadaquedecir?Tranquilo,tienespermisoparaexplayarte…Mipadremehadichotantascosasquepuedoasumirunascuantasmás,perohazloahora,porquemelargomañana.Deverdad,estoymuyhartadetodosvosotros—leespeto,envalentonándomeytomandounadecisiónquehastaestemomento sólohabía sidouna ideade esasque te planteasperoque en elfondodetucorazónsabesquenollevarásacabo.

—¿Cómoquetemarchas?¿Ylapresentacióndelvino?—mepreguntacondureza, clavando su intensa mirada verde sobre la mía, y alzo la barbilla,sosteniéndoselaconorgullo.

—¿Sinceramente? Me importa una mierda —le miento, sintiendo que yomismamedañoconmispropiaspalabras,y,apesardeello,soyincapazdeparar—.Venga,yapuedesdecepcionarteconmigounpocomás…yyaveráscuandoselodigaamipadre,deéstaseguroquemedeshereda—prosigo,sonriendoconironía—. Por suerte, no estaré aquí para verlo ni para escuchar uno de susdiscursitos; de hecho, estaré tan lejos que, aunque el viento sople en midirección,nollegaréaoírsusreproches.

—Deja de decir estupideces, ¿quieres? Sabes que no vas a largarte —sentenciaconseguridad,acercándoseamí.

—Y estás tan seguro porque vas a impedirlo tú, ¿verdad? —siseo entredientes.

—Exacto,túlohasdicho—mecontesta,fulminándomeconlamirada.—Sinotienesnadamásquedecir,melargo.Hastaluego,Víctor,quetevaya

bien y, te lo ruego, haznos un favor y no adelantes más viajes por mí—medespidoarisca,dándomelavueltayyendodirectahaciaesapuertaqueabríentresollozoshaceaños,sinpodercreerquehayadicholoquehedichoy,loqueespeor, que continúe dispuesta amantenerme enmis trece a pesar del nudo quetengoenlagarganta.

—Unapreguntatú,unayo—mepropone,conlavozcargadadeinfinidaddematices,sujetándomeporelbrazoeimpidiendomihuida.

Guardo silencio durante unos segundos sin atreverme a volverme, sinatrevermeamirarlooinclusoamoverme,apesardequeloúnicoquedeseoesecharacorrerparacogerelprimervueloquesalgahaciaNuevaYorkyhuirdetodoesto.

—¿Te he decepcionado? —le pregunto en un susurro, cerrando los ojos,

Page 126: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

dándoletodavíalaespalda,consumanoaferrandomibrazo.—No—meresponderotundo trasunossegundosdesilencioen losquehe

sentidomicorazónsuspendidoalaesperadesurespuesta.—Estás mintiendo —murmuro en un hilo de voz, abriendo los ojos y

dándomelavueltaparahusmearenlossuyos.—Noescierto;elproblemaqueyo tengacon la relaciónquemantuvisteo

mantienes conMarco es un problema exclusivamentemío—me confiesa conseriedad,indagandoenlosmíos,consumanotodavíaenvolviendomipiel.

—Entones,¿aquévinoelnumeritodeayer?—lepreguntosinsoltarmedesumiradaydesuagarre,frunciendoelceño.

—No es tu turno, Val —me recuerda observándolo y lo desfrunzo,conscientedequenopodríasoportarsentirsudedodeslizarsepormipielparaalisarlo—.¿Deverdadestásdispuestaa irte?—meplantea,y sientocómosusdedosseclavanenmipielycómolaañoranzaseabrepasohastacolocarseentreambos.

—Sí—le respondo,decidida ahacerlo—.Mi turno. ¿Teestásmarchando?—lepreguntovolviéndomedeltodohastaquedarfrenteaél,liberándomedesumano.

—Sí, maldita sea, sí que me estoy marchando—masculla hundiendo susmanosensupelo,desviandosumiradadelamía.

—¿Por qué?—le formulo hastiada—. ¿Por lo que sucedió ayer?—añadosintiendocómolaimpotenciaylafrustraciónlleganparaquedarse.

—Noestuturno,Val;nomehagasrecordártelocontinuamente—meindicacondurezayobservosuslabios,sumiradaobstinadaylatensiónqueemanadesu cuerpo—. ¿Te acostaste anoche conMarco?—suelta finalmente, y lomirosorprendida.

—¿¿¿Perdona???—inquierosindarcrédito.—Noestuturnodehacerpreguntas,sinoderesponderlas.—Esapreguntaestáfueradelugar;noteimporta,Víctor.—Yopodríahaberterespondidolomismoalastuyas.Responde—meexige

mientrasguardosilencio,cruzandolosbrazospordebajodemispechos.—No,nolohice.¿Porquéquieressaberlo?¿Deverdadtantote importa la

diferenciadeedad?—La diferencia de edad, en estos momentos, me importa una mierda—

Page 127: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

contestaadusto.—¿Entonces?—Siguesinser tu turno;eligemejor tuspreguntas—siseaentredientes—.

¿Sientesalgoporél?—indaga,acercándosemásamí.—Siemprevoyasentiralgoporél—lecontesto,negándomeairmásallá—.

No sé por qué juego a esto, al final siempre tengo la sensación de que acabocontestando a más preguntas que tú —musito poniendo más distancia entrenosotros—. ¿Por qué estás alejándote?—le preguntomientras él se mantienecallado.

—Porque no debería querer saber nada de lo que te he preguntado—mecontestatrasmeditarsurespuesta.

—Ésanoesunarespuestaválidaylosabes;nopuedesirteporlasramasyloestáshaciendo.Contéstame,Víctor—leexijoestavezyo.

—Porquetúteníasrazónyyoestabaequivocado;esimposiblerecuperarloque perdimos, porque esa Val y ese Vic ya no existen y en su lugar estamosnosotros,dospersonascompletamentedistintas.

—¿Sabescómomesientocontigo?—lepreguntoenunsusurro,centrandomi mirada en la suya y, sin esperar respuesta, prosigo—. Como si siempreestuviera al principio del camino; como si, por mucho que avanzara, nuncallegara al final del mismo… y ya estoy cansada de caminar —le confiesoliberándome de su mirada y dándole la espalda para poder explicarmecorrectamente—.Estoycansadadeversiempreesecaminointerminablefrenteamí,esecaminoenelqueestaveznoelegíestaryenelquemepusistetú,segúntuspalabras,porquequeríasrecuperaresapartedetiqueperdistecuandomefui,pero,encambio,ahorano te importaperderlayyonopuedomás.Poresomevoy,porqueestoycansadadesentirmefueradelugarcuandorealmenteésteesmilugar—concluyo,dándomelavueltaparamirarloalosojos.

—Y, en cambio, no puedes estarmás equivocada de lo que lo estás—merebate con el ceño fruncido y con todo su cuerpo en tensión—, porque esecaminointerminabledelquehablasenrealidadnoexiste.

—¿Quéquieresdecir?—susurrosinentenderlo.—Siesecaminoexistiera,yocontinuaríaviéndotecomounacríaenlugarde

querertenertedesnudadebajodemí—meconfiesa,sorprendiéndome,ylomirosintiendocómotodasestasemocionesquellenanmipechocomienzanaaletear

Page 128: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

confuerzahastaasentarseenmivientre,contrayéndolo—.Joder,Val,¡debodehaberperdidoeljuicio!—mascullafrustrado,agachandolacabezaduranteunosbrevessegundosparacasideinmediatolevantarlayanclarmeasumirada,queenestosmomentosmerecuerdaunmarembravecido—.Queríassaberporquémeestoyalejandodeti,¿verdad?Puesyalosabes,meestoyalejandoporquenodebería sentirme como me siento y porque, cuando pierdes la cabeza y lasensatez, sólo te queda poner un poco de distancia hasta que la recuperes denuevo.

—Peroyopensabaque…—empiezoaexplicarme,apesardequenotengoniideadepordóndeseguir…¿Deverdadhadichoquequieretenermedesnudadebajodeél?¿Enserio?

—¿Qué pensabas? ¿Qué no me sentía atraído por ti? Pues te equivocas,malditasea—merebatecondureza,acercándoselentamenteamí—.Elotrodíaenlapiscinaperdítantolacabezaque,sinohubierallegadotupadre,tehubierafolladoallímismo—declaraconlamiradaylavozardiendo.

—¿Yentonces?¿Aquéestásesperando?Hazlo,Víctor—lepidosintiendocómooleadasdefuegorecorrenmicolumnavertebral,ymeobligoamantenermisbrazosaambosladosdemicuerpoparaqueseaélquiendéestavezelpaso.

—¡Mierda,Val!¡Cállate,nosabesloqueestásdiciendo!—replicaalzandolavoz,apretandolospuñosquetienepegadosasuspiernas,talycomolostengoyo.

—¡Porsupuestoquelosé!Silosdosdeseamoslomismo,noveodóndeestáelproblema—musito,perdiéndomeensusojos.

—El problema está en que hay riesgos que no pienso asumir contigo—masculla,alejándoseunospasosdemí,tomandodistancia.

—¿Dequériesgoshablas?—quierosaber,acortándolaconlosmíos.—Joder,Val, fuistemi niña, la cría que correteaba ami alrededor a todas

horas, lafamiliaquenotuveyalgoasícomolahermanapequeñaquesiempredeseé tener. Te aseguro que no voy a perderte por un puto calentón demediahora.

—¿Porqué?¿Porquecreesquenomegustaráynoquerrévertedenuevo?Tranquilo,teaseguroque,pormuydesastrosoqueseas,continuarésonriéndotecuandotevea—leasegurobromeando,sinsaberdedóndemesalelacapacidadparabromearcuandodentrodemíbullentantossentimientos.

Page 129: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Teaseguroquesifollasconmigovasaquerermás—meindicabravucón,consiguiendoquesonríaconél.

—Cuántafanfarroneríajuntaenunasolafrase—musitosintiendocómotodocomienza a vibrar de forma distinta entre nosotros, cómo todo se vuelvedemasiadoelectrizante,demasiadobrillante,demasiadoresplandeciente…

demasiadotodo…—Val,teestoyhablandoenserio—mediceconvozronca.—¿Sobrelodefollarosobrelodeperderme?—Sobre ambas cosas—apostilla, deslizando la mirada hasta llegar a mis

labios—.Oye,nosoydepiedra,¿vale?Pónmelofácilyveteacasa.—Estáslocosipiensasquevoyahacerlo—susurrodemorandomimiradaen

lossuyos—.Olvídatedelosriesgos,Vic.Notienesniideadeloquesucederásinos acostamos, ni yo tampoco. Vivámoslo y ya lo resolveremos cuandolleguemosaesepunto.

—Tellevodoceañosdeventajaymeconozcodesobra;tegarantizoquesíséquésucederásinosacostamos.

—¿Yquésucederá?Venga,sorpréndeme.—¿Quécreesqueocurrirácuandoundíatedigaqueyanoquieroestarmás

contigo?Has estado tres años evitándomepor lo que sucedió esa noche, ¿quécreesquesucederácuandodecidaquesehaterminado?

—Estás dando por hecho demasiadas cosas y olvidando que me largo aNuevaYork—matizo,másquedecidida a darle la vuelta a la tortilla—.Oye,¿nosetehaocurridopensarquequizáseayoquientedélapatadaenelculoati?Ynoespornada,peroyoatuladosoycomouncaramelitoreciénabiertoytú,unapasaarrugada.Enrealidad,deberíaseryolaqueestuvierasoltándotelacharlita a ti, no al revés, más que nada para que fueras mentalizándote—lemientosonriendo,porque,seamossinceros,dudomuchoquelohaga.

—¿Cómo?—mepregunta,carcajeándoseconganas.—Oye, déjate de dramones que no sabes si sucederán o no y convénceme

para queme quede y, ya puestos, esmérate, porque te aseguro que, si nomegusta,melargomañanamismo—digo,envalentonándome,creyéndomehastayomismaeldiscursitoqueestoysoltándole.

—Estásjugandoconfuego,Val,yvasaquemarte—meadvierteconunsusurrocargadodepromesas.

Page 130: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Puedequeseastúquienlohagaprimero—replico,posandomimiradaensuslabios,sintiendocómomicentrosehumedecedeanticipación.

Conunúltimopaso,eliminalapocadistanciaqueseparanuestroscuerposysientocómotodoestoquellenamipechoaleteaconmásfuerza,cómomipielseeriza y cómomi respiración se vuelve densa e irregularmientrasmantengo lavistaclavadaensuslabios,enesoslabiosquepuedequefinalmenteseanmíos.

Desuslabios,mimiradaviajahastasusojos,dondeseestánlibrandomilesdebatallas,y,temiendoquecambiedeopiniónyseaparte,llevomismanosasucuello,pegándomeunpoquitomásasucuerpo,sintiendosucalorysuenergía.

Inspirando la fragancia de su colonia, que revolotea a nuestro alrededor,acercomislabiosalossuyos,enunrocesuave,unrocequeesunpedirpermisoy a la vez un ruego, pegando mi frente a la suya mientras él se mantieneimpasible,conlospuñostodavíacerradosentornoasucuerpoy,malditasea,séque está buscando dentro de sí mismo la fuerza de voluntad necesaria paraalejarse demí y, antes de que pueda llegar a encontrarla, beso sus labios consuavidad, demorándome en ese beso, ese que tanto he ansiado, probándolos ysaboreándolosalfin.

—Vic,por favor…—musitosindejardebesarlo,necesitandoquese rindadeunavez—…bésame—susurroanclándomeasumiradacuandoabrelosojosconmiruego,permitiéndomevercómoesabatallallegaasupuntomásálgido—,tócame—prosigoconvozentrecortada,cogiendosumanoyllevándolahastauno de mis pechos, sin despegar mi frente de la suya, con nuestros labiosrozándose y nuestros alientos caldeándolos—, tócame—insisto, besándolo denuevo.

—Val…—rugeentredientes.—No,Vic, olvida quiénes fuimos y descubramos quiénes somos ahora—

murmurosindejardebesarlo,conmimanoacunandolasuya,quetodavíarodeamipecho.

Siento cómo desliza su pulgar suavemente pormi pecho hasta llegar amipezón y la respuesta instantánea de éste al endurecerse, y, cuando un suspiroescapa de mi garganta y cierro los ojos, repite el movimiento de su dedo,endureciéndolotodavíamás,ygimo,abriendolosojosenelmomentojustoenelquelabatallahallegadoasufin;ahorasóloquedaenpieelganador,eldeseo…

undeseofiero,calienteyexigente,retenidodurantedemasiadotiempo.

Page 131: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Dejándosellevarporél,llevasuotramanoaminucaparaacercarmirostroal suyoyentreabromis labiospara recibirlo, ansiandosentir el contactode sulengua enredada con la mía y, cuando sucede, cuando nuestras lenguas seencuentran, enloquezco, haciéndolo enloquecer a él mientras ese deseo tomafuerza,creciendofulguranteeimparabledentrodenosotros,comoesebesoquedeformatímidahabíaempezadoyoyqueseha transformadoenunocaliente,exigente y cargado de necesidad, llevándose con él cualquier pensamientocoherenteyarrastrándonosaambosporuncaudaldelavadelquenipodemosniqueremosescapar.

Nosvolcamosenesebesocomosinuestravidadependieradeello,comosiel oxígenono estuviera en el aire, sino en nuestra boca, y como si elmalditopuntodeequilibrioestuvieraenmanosdelotroy,entregemidos,nosbesamosytocamos, deseando explorar esas tierras que hasta ahora habíamos tenidovetadas.

—No puedo parar de tocarte —masculla llevando sus manos a mi pelo,enterrándolasenél,mientrasyobuscosuslabiosdenuevoymepegomásasucuerpo,sintiendosuenormeerecciónynecesitandopegarmeaella.

—No lo hagas, ni se te ocurra detenerte ahora—le exijo entre gemidos,pegandotímidamentemisexoalsuyo,sintiendocómoelmíosehumedeceylatede anticipación mientras nuestros labios no pueden despegarse y sus manossubenpordebajodemicamiseta,haciendosuyamipiel.

—Aunquequisiera,dudoquepudiera—measeguraconvozroncaantesdebesarme con rudeza, y gimo enredandomi lengua con la suya, tirando de supelo,necesitandomás.

—Fóllame,Víctor, ahora, por favor, necesito sentirte—gimo sin despegarmislabiosdelossuyos,sabiendoque,conmiruego,estoyllevándomecualquierápicedeautocontrolquepudieraquedardentrodeél.

Mealzaconrudezaporlacintura,empotrándomecontralapared,haciendoque sienta su potente erección, yme pegomás a ella, frotando finalmentemisexocontraelsuyoyarrancándoleunjadeoqueseunealmíoalsentirnuestrossexosunidos.Conlaurgenciaylanecesidadadueñándosedemí,mesueltodesucuello para llevar mis dedos hasta los botones de su camisa, que empiezo adesabrochar,sacándoladelacinturilladesusvaqueroshastadejarlodesprovistodeella,necesitandosentirsupielcontralamíamientrasél,sosteniéndomecon

Page 132: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

sus caderas, hace lo propio conmi camiseta, liberándome de ella sin dejar debesarme un instante, siendo rudo pero tierno a la vez con sus labios, y gimocontraelloscuandosumanoatrapaunodemispechos,apoderándosedemipielcomosi lepertenecieramientrasyosientomicentropalpitandodedeseohastadolerme.

—Dimequeestásseguradeestoyqueluegonovasaarrepentirte—mepidefrenándose, retirando su mano de mi pecho y llevándola a mi cintura, dondedescansa la otra, acariciando mi piel de la misma manera en que estáacariciándomeconlamirada.

—Nunca he estado más segura de algo como lo estoy de esto —musitorodeandosucuelloconmismanos,yobservocómocierralosojos,pegandosufrentealamía—.Víctor,yanohayvueltaatrás…Déjalo,dejadecuestionarlo—lepidotemiendoqueélsíquepuedaarrepentirsedespués.

—Séquenohayvueltaatrás—afirmaconseriedad,abriéndolos.—Puesdemuéstralo,entonces—loreto,sosteniéndolelamirada.Me baja con cuidado y, cuando mis pies tocan el suelo de nuevo, me

desprendo de mi falda mientras observo cómo el deseo vuelve a arder en sumiradaycómocualquierdudaquepudieraquedardesaparecefinalmente,ymeacercomásaél,necesitandoqueesadudahuyatanlejosque,aunquelabusque,nuncapuedallegaraencontrarla.

Le desabrocho los vaqueros rozando su piel conmis dedos, enlazandomimirada con la suya, y me sorprende cuando sus manos aprisionan las mías,deteniéndome.

—Espera—mepidealejándosedemí,yendohaciasuhabitacióny,durantelosescasossegundosenlosquemimiradalopierdedevista,temoqueesadudasehayaburladodemíytodavíapermanezcaenestesalón.

»Soytodotuyo—meanunciaconvozroncasaliendodesucuarto,dejandoun preservativo sobre la mesa y acercándose de nuevo a mí con esosmovimientossegurosyfluidosquesoninnatosenél.

Memuerdoellabioinferiorcuandocomienzaadesprendersedelosvaquerossin quitarme la mirada de encima, tocándome sin hacerlo, y contengo larespiracióncuandosequeda librede laprenda,puesnunca,nienmismejoressueños,mehubieraatrevidoaimaginaralgoasí.

Loobservoacercarselentamenteamímientrasyollevomisdedosalcierre

Page 133: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

delsujetador,pero,antesdepoderliberarmedeél,aprisionamismanosentrelassuyas.

—Estavezteloquitoyo—meordenaconvozroncay,casitemblando,soytestigodecómo,conunrápidomovimiento,sedeshacedelsostén,dejandomispechoslibresydispuestosparaél,ysuspirobajitocuandosumanoatrapaunodeellos, demorándose en el pezón y humedeciendo mi sexo—. No sabes cómoestoyconteniéndome—musita,ybajolamiradahastalaenormidadquemarcalateladesusslips.

—Estoy deseando que dejes de hacerlo —susurro entre gemidos cuandoentierra uno de sus dedos en la cinturilla elástica de mi tanga, empezando abajarlo. Cuando la prenda cae al suelo, me muevo para hacerla a un lado,quedandocompletamentedesnudaanteél,consusdedosviajandotortuosamentehastamicentroysumiradaancladaenlamía,quelesostengoaduraspenas.

—Estásempapada—rugecontramislabios,paseandodosdesusdedospormis pliegues—. Joder,Val—gime embistiéndome con ellos, arrancándomeungemidotrasotro,ytengoqueaferrarmeasucuellopormiedoaquemefallenlaspiernas.

—Víctorrrr…—susurroconvozentrecortada,moviendomiscaderas—…sííííí… sííííííí…—gimo pegando mi frente a la suya mientras sus labios

acallanmivozysusdedosentranysalendemiinterior,llevándoseconellosmiequilibrioymirazónmientraseldeseomeconsumepordentro.

—Meduelelapolladetenerteasí—rugesindarletreguaaningunodemislabios, y grito cuando el orgasmome sacude de la cabeza a los pies—.Estoydeseando follarte —masculla retirándolos y yendo hacia la mesa a por elpreservativo.

—Nohace faltaque te lopongas, llevopuestounDIU—le indicocuandoconsigohacermeconelcontroldemiraciocinioydemivoz.

—Te aseguro que sí que hace falta—replica llegando de nuevo hastamí,atrapandounodemispezonesentresusdedosyprovocándomeunsuavejadeo.

—¿Por qué?—susurro—.Estoy limpia…—añadomientras susmanos nomedantregua.

—Porquenofollosinoesconcondones—meaclaracondureza,ylomirosorprendida.

—¿Es…estás…tienesalgunaenferme…?

Page 134: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Siaquemeduelalapollaseleconsideraenfermedad,sí,latengo—sueltainterrumpiéndome,yledoylasgraciasmentalmente,porquenoteníaniideadecómo seguir—. Estoy tan sano como tú; simplemente tengo unas normas quenuncarompo—meaclararozandomisexoconsudedo,ydoyunrespingo,puestodavía lo tengo demasiado sensible—. Te aseguro queme duele como hacíatiempoquenomedolía.Joder,Val,teaseguroqueeresmejorqueuncaramelitorecién abierto—me halaga, haciendo círculos en torno a mi clítoris, y gimocerrandolosojos—.Pónmelo—mepideconvozáspera;abrolosojosycojoelpreservativoquemetiende—conlaboca—matizaconunasexysonrisa,yseladevuelvo,casirelamiéndome.

Mearrodillofrenteasumiembro,liberandosupieldelateladesusslips,denuevomaravillándomeporestoqueestoyviviendoy,dejándomellevarportodoloquedeseo,metosuenormidadenmiboca,provocándoleunprofundogemido.

Siento susmanos enmi cabeza, enterradas enmi pelo, y saboreo su sexocomo si en realidad fuera él el caramelo y no yo, demorándome, chupando ysaboreando, anclandomismanosa lapielde su traseroy llevándoloal límite,donde ya estoy yo esperándolo, deseando tanto que siento como si pudieraahogarmeenestemardesentimientosqueestáarrasandoconnuestracordura.

—Para,nena,para—mepidehaciendoquemeretire.—Notehepuestoelcondón,espera—musitodeslizándololentamentedesde

lapuntadesumiembrohasta la raízconmis labios,mirándolodirectamentealos ojos, que tiene nublados por el deseo, y arrancándole un jadeo que seentremezclaconelmío.

—Joder —masculla cogiéndome en volandas y llevándome hasta suhabitación, donde me deposita sobre la cama, para encajarse luego entre mispiernas;sientocómomicentrovibraportenerlojustodondetantasvecesdeseétenerlo—.Creoquenuncahedeseadoalgotanto—meconfiesa,poniendovozaunapartedemispensamientos,consusexorozandolaentradadelmío,ygimosuavemente,moviendomiscaderasensubusca,ansiándoloydeseándolotantoquenotoqueunapartedemísedesagarraporlanecesidad.

Consumiradasosteniendo lamíayerizandomipielpor la intensidadquedesprende,accedeamiinteriordeunempellón,abriendomicarneconposesiónasupaso,hastaquedarcompletamenteencajadoenmiinterior.

—Vicccccccc…—grito alzando las caderas, cerrando de nuevo los ojos,

Page 135: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

sintiendocómomialmaytodaslascélulasdemicuerpovibranporél.—Ábrelos,mírame—meruegaconlavozcargadademilesdematices.Y es entonces, con su mirada sosteniendo la mía y con mi cuerpo dando

cobijoalsuyo,cuandoentiendoqueunrectángulosíquepuedeencajarconuncírculoyquenohaydeseosinalcanzables,porqueyo,enestosmomentos,tengoelmíoenlapalmademimano,flotandoyesperandoalzarelvuelo.

—¿Lista?—mepreguntaapretandolamandíbula,sosteniendoelpesodesucuerpoconsusbrazos.

—Lista—susurrosinpoderliberarmedesuverdemirada.Yconesapalabra,desatoelpoderdeldeseo;undeseooscuroyalavezlleno

de luz que es demasiado atrayente como para poder resistirse; un deseoreprimidodurantedemasiado tiempoyque ahora, que está siendo liberado, escapazdearrasarcon todo loquese lepongapordelantee, impulsadosporél,nosmovemosexigiéndonosmás,buscandonuestroplacerydando todo loquesomos capaces de dar, entregando y recibiendo, gimiendo y absorbiendogemidos, jadeos, gritos y besos, mordiendo, adorando, venerando ynecesitándonos tanto que siento como si nos cegáramos con cada uno denuestrosmovimientos.

Rodando sobre la cama,me coloco sobre él, sintiendo ese fuego que sóloVíctorpuedeprenderardeconvirulenciadentrodemícorriendopormisvenas,yecholacabezahaciaatrás,puesnecesitollenarmispulmonesdelairequeélseestá llevando con sus besos.Con susmanos ancladas enmi trasero, iniciomiviajeparticularhaciaelnúcleodelvolcán,ardiendoporelcaminoconelsonidode suvoz,de susgemidos,de susbesosyde sumiraday, cuandoelorgasmollegafulminante,arrastrándonosaambosconfuerza,sientocómoesedeseoqueestabasuspendidoenlapalmademimanoalzaelvueloymellevaconélhaciaeselugardondetodaslasemocionesquellenanmipechotienensunombre.

Page 136: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO10

—Todavía nohe terminadode convencerte—me indica conun susurro roncocercademioreja,consusexotodavíaencajadoenmiinterior,ysonrío,conlacabezaapoyadaensupecho.

—Eso espero, porque esto ha dejado mucho que desear —mientodescaradamente,alzandolacabezaysonriéndolecomoanteslehabíadichoqueharía.

—Voy a tener que tomármelomás en serio, entonces—replicamordiendosuavementemis labios,y contengoelgemidoqueamenazaconescapardemigargantamientrassusmanossubenpormiespalda,haciendosuyamipielasupaso.

—Desde luego… eres demasiado flojito, Vic, igual es la edad —le digopinchándoloyarrancándoleunacarcajada.

—Tienesmediosegundoparallamaratupadreydecirlequeestanochenoirás ni a cenar ni a dormir a casa—me ordena, haciéndome a un lado paradirigirsealbaño—.No,espera,mejordilequenoirásentodoelfindesemana—rectificaconunaautoridadquemesorprende,¡vengaya!

—¿Cómo?Nopuedohacereso,necesitoropa,micepillodedientes,mi…—protesto,siguiéndolo.

—Val, voy a tenerte desnuda todo el fin de semana; te aseguro que nonecesitas nada de eso—me corta con insolencia, consiguiendo que una tontasonrisasedibujeenmirostro.

—¿Todoelfindesemana?—lepreguntocasirelamiéndome,ymeapoyoenelmarcodelapuertayempiezoadevorarloconlamirada…

Page 137: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

«¡Virgensanta!»—Todoelfindesemana—sereafirma,deslizandosudescaradamiradapor

micuerpo—.Porcierto,esemediosegundoqueteheconcedidoestállegandoasufin,¿deverdadestásseguradequererhablarcon tupadremientras teestoyfollando? —me plantea frunciendo el ceño y, sin molestarme en contestarle,corrohastamibolso,conscientedequeesmuycapazdehacerlo.

Localizomimóvilenelfondodelmismo,dondeantes,desanimada,lohabíadejadoy,ansiosa,lollamo…Untono,dos,tres,cuatro,cinco…

—Venga, papá, cógelo—musito sintiendo cómomi sexo se humedece deanticipaciónymivientresecontraesuavementeanteloquemeesperadenuevo.

…seis,siete,och…—Dime—merespondefinalmente.—¡Papá!Hola,soyyo,Valentina—losaludo,aunqueesobvioquesoyyo—.

Te llamaba para decirte que nome esperes para cenar, bueno, en realidad, entodo el fin de semana—continúo, viéndolo acercarse desnudo, y detengo mimiradaensu torso,en losmúsculosdesusbrazos,ensupelvis,ensu…¡Diosmío de mi vida…!—. He coincidido con una antigua amiga y nos apetecerecordar viejos tiempos —empiezo a contarle, intentando centrarme en mispalabrasmientrasélcontinúaacercándoseamícondecisión,yretrocedounpasoalverelbrillodesumirada.

—¿Y quién es esa amiga?—se interesa mi padre mientras yo empiezo arodearlentamentelamesaconélhaciendolopropio,yvocalizounmudo«no»queseborraconmiresplandecientesonrisamientrasélvocalizaun«sí»queloborratodavíamás.

—Nolaconoces,papá.Esunaamigadelinternado—miento,acelerandomispasos,casicorriendo,alrededordelamesa,conélsiguiéndome.

—Esperoquenoseaporloquehasucedidohoy—mecontesta,yfrenomicarreraaldetectarlapreocupaciónensuvoz.

—No,papá,porsupuestoqueno—leaseguromientrasélmedaalcanceycierro losojosalsentirsupechoenmiespaldaysusmanosadentrarsepormivientre.

—Sé que en ocasiones puedo llegar a ser muy duro contigo o con tuhermana, pero es porque os quiero y deseo lo mejor para vosotras—declaramientras una de las manos de Víctor llega hasta mi pecho y la otra viaja en

Page 138: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

sentidocontrariohaciamicentro,queestáempezandoapalpitardedeseoy,conreticencia,mealejodeélparanosoltarungemidomonumental.

—Losé,papá,yséquemeequivoquéyquenodeberíahaberteocultadoalgoasí,peroteprometoque,desdeentonces,nuncahevueltoamentirte—afirmo,yalsegundomearrepientodehaberlodicho,puesahoramismoestoyhaciéndolo—.Bueno,quierodecir…que loque teníasque saber lohas sabido—matizomientrasobservocómoVíctorseapoyaenlamesa,mirándomeyenarcandounaceja—… Me refiero a que nunca he vuelto a mentirte sobre las cosasimportantes—añado,viendocómosecruzadebrazosyniegaconlacabeza,ybufo suavemente—. ¡Mierda!, ya sabes a lo que me refiero: que desde lo deItaliasiemprehassabidodóndehevivido,¿asísí?—lepregunto,olvidandoqueestoyhablandoconmipadre,viendocómoVíctorsonríepara,casialsegundo,dirigirsehaciasuhabitación.

—Tranquila, hija, lo tengo claro. ¿Sucede algo?—me pregunta mi padreextrañado, y no es que lo culpe precisamente; vamos, que en estosmomentosdebedepensarqueestoyparaquemeencierren.

—No,papá;losiento,esquenosabíacómoexplicarme.—Hija,teheentendidodesdeelprimermomento.Noteenfades¿vale?Creo

que llevo suficientes enfados acumulados para varios días —me pidehaciéndomesonreírconternura—.Eldomingovienetuhermanaconesechicoacomer a casa, ¿por qué no te vienes con tu amiga y así la conocemos?—mepropone,ysonríoporlode«esechico».

—Yateloconfirmaré,¿deacuerdo?—respondo,intentandosalirdelaprietosintenerquecomprometermedemasiado,a lavezquevoyhasta lahabitación,dondeloencuentrosentadoenlacama,conlaespaldaapoyadaenelcabeceroylosbrazoscruzadosalaalturadelpecho.

—Estábien,pásalobien.—Tútambién,papá—musitodeslizandolamiradaporsucuerpo.—¿Y sobre lo del domingo? —insiste de nuevo—. ¿Le digo a Casi que

cuenteconvosotras?—Yateloconfirmarémañana,unbesito—ledigoantesdecolgar—.Sabías

perfectamente a lo que me estaba refiriendo —me defiendo cruzándome debrazos.

—Meencantatuconceptodelasinceridad—merebate,divertido.

Page 139: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Qué querías que le dijera? ¿Que iba a estar todo el fin de semanaacostándome contigo?—suelto enarcando una cejamientras observo cómo selevantaparaponermúsica.

—¿Quécanciónesésta?—mepreguntasincontestarme,yrecuerdonuestrojuegodelascanciones.

—Wordsdon’tcomeeasy—musitofinalmente,cuandooigolaletra—.Soymejorquetúenestejuego—prosigofanfarrona,guiñándoleunojo.

—¿Cantante?—demandaenarcandounacejaypillándome.—Estásdesviandolaconversación—ledigo,negándomeareconocerqueno

tengonipuñeteraidea.—¿Selohubierasdicho?—No—lecontestorotunda.—¿Porqué?—mepregunta,ydetectounpuntodedurezaensuvoz.—Porquenoloentendería.—Sicontinúasconesamalditacostumbrededarporhecholascosas,vasa

tenerquedisculpartemásvecesdelasquetegustaría—mereprendesentándosede nuevo en la cama, tal y como estaba antes—. ¿Por qué crees que no loentendería?—quieresaber,frunciendoelceño.

—Porque ya lo conoces… ¿Cómo crees que reaccionaría si le dijera queestoyacostándomecontigoperoquenoesnadaserio?—lepreguntoconfingidaindiferencia,pues,enrealidad,nohaynadaquedeseemásqueelhechodequelosea—.LlamaaJosé«esechico»,¿cómocreesquetellamaríaati?—añado,frenándomeparanosentarmeahorcajadassobreél—.Tú,susocio,ydoceañosmayorqueyo,beneficiándoseasuhijapequeña; teaseguroquetemblaríanloscimientosdetodoPáganos—sueltointentandobromeary,cuandocomienzaotracanción,sonrío—.Moonlightshadow—prosigo,guiñándoleunojo.

—Es fácil recordar el título cuando aparece en la letra de la canción —comenta,guardandosilencioaloquelehedichoantes.

—Elquepierdesiempre tiendea justificar suderrotadealgunamanera—replicozanjandoeltemayyendohastaelbaño.

Abro el grifo de la ducha y, en cuanto sale caliente, me meto en ellasuspirando suavemente, sintiendomi cuerpo estremecerse cuando su pecho sepegaamiespalda.

—Trescosas—meindicaconseriedad,consus labios rozandomioreja,y

Page 140: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

echo lacabezahaciaatrásparaapoyarlaensuhombro—.Primera, siemprehesido mejor que tú en este juego; no olvides que, si conoces las cancionesremember,es gracias amí… todavía recuerdo cuando te gustabaMelody—seburla divertido, con las manos recordando el camino que habían emprendidoantes—.Segunda, el quemiente siempre acostumbra a justificar susmentiras,incluso a creérselas—prosigue,metiendoundedo enmi centro, consiguiendoque un gemido escape demi garganta—. Tercera, nunca des nada por hecho,porque vas a equivocarte seguro—me aconseja, metiendo un segundo dedo,logrando nublarme la razón y que sea incapaz de rebatirle nada—. Fin de lacharla —me advierte con voz acerada, y noto su erección clavándose en mitrasero—. ¿Puedo empezar a convencerte de unavez?—mepregunta, y gimopegandomiculoasusexo,moviendolascaderasenbuscademiplacer.

Alejasusmanosdemivagina,volviéndomeconrudezahaciaélparacasialsegundo unir sus labios a losmíos, besándome con dureza y lascivia, con sulenguaentrandoenmiboca,explorándolayarrancándomegemidosyjadeosdepuranecesidadmientrassusmanosseanclanamisnalgasyelaguacaeenformadelluviaencimadenuestrascabezas.

—Tócame,Vic—le pido, sintiendo cómo todome da vueltas, y froto conlujuria mi sexo mojado contra el suyo, necesitando sentir sus dedos en miinterior.

—¿Quieresquetetoque?—musitacerrandoelgrifodelagua,poniendounpoco de jabón en la palma de su mano y frotándola con la otra hasta hacerespuma.

Me ancla a sumirada, cargada demiles de emociones, para seguidamentellevar sus manos a mis pechos, donde se demora en ellos, frotándolos yprovocando que mis pezones se pongan duros como piedras; cierro los ojos,apoyándomecontralapared,conelvapordelaguaflotandosuspendidoentornoanosotros.

—ContigomesientocomouncríoeldíadeReyes—declaraenjabonandomicuerpo.Muevolascaderascuandosusmanoslleganamisexoygimoabriendomáslaspiernasmientrassusdedosacaricianmislabios—,comosinuncafueraatenersuficiente,comosieltiempocorrieraenmicontraynopudierajugartodoloquequiero—añadeconvozronca,llevandosudedoamicentro,rodeándoloyretirándolo—.Quiero que te sientas igual que yo,Val—mepide, haciéndome

Page 141: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

vibrarconsupeticiónyloquesusdedosestánprovocandoenmicuerpo.Guardo silencio ante su demanda, negándome a decirle todo lo que siento

pormiedoasureacción,denuevodandoporhecholascosasy,cuandollevalaalcachofadeladuchaamisexo,dirigiendoelchorrodeaguahaciamiclítoris,gimoechandolacabezahaciaatrás.

—No,nena,novasacorrerteahora—meadvierte,retirándoloysaliendodeladucha,instándomeamíahacerlo.

Secami cuerpomientrasyo loobservoen silencio, sintiendocómoelmíoreaccionaalsuyoyasuscuidados,y,cuandomecogeenbrazosparallevarmealacama,todoestoquellenamipecholohaceunpoquitomás.

—¿Quéeshacerelamor,Val?—mepreguntaconvozcavernosa,cubriendomicuerpoconel suyo,y sonrío,puesesapregunta se lahiceyohacemuchosaños,cuandotodavíaloveíaconlosojosdelainocencia.

—Esestarcontigo—musitoenunhilodevoz—.Essentirtuslabiossobrelosmíos—susurrocuandocomienzaabesarme lentamente,y sientocómomeestremezcoanteesebesoquellevatantaspalabrasenvueltasensilencio.

—¿Quémás?—susurra, deslizando sus labios pormi cuello hasta llegar amispechos,dondesedemora.

—Es estremecerme con ellos—gimo, sintiendo cómomi sexo lo reclama,humedeciéndose.

—Sigue o pararé—me amenaza, bajando pormi vientre, y noto cómomisangre se vuelve espesa y cómo mi respiración se acelera con tan sóloimaginármelo entre mis piernas—. Val…—me advierte mientras me arqueo,invitándoloaseguir.

—Esquerermás—consigoarticulardefinitivamenteantesdequeungemidoasolemigargantacuandosuslabioslleganamicentro.

Se demora en él, succionando, chupando y barriendo de arriba abajo,llegando hasta mi clítoris, donde todo lo que siento se multiplica por mil, yentierromisdedosensupelo,deseandotantoquelaspalabrasquedanatascadasenmigargantayensu lugar llegan losgemidos, lossusurrossinsentidoy lasexigenciasensilencio.

—¿Quéeshacerelamor,Val?—mepreguntadenuevoantesdehundirsulengua en mi interior, pero no puedo contestarle y, entre jadeos, muevo lascaderas en busca de ese orgasmo que está empezando a formarse en mis

Page 142: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

entrañas.—Estenertuslabiosenmisexo—musitofinalmente,aferrandolassábanas

con ambas manos—, es derretirme con ellos —prosigo, estrujándolas yretorciéndomedeplacer,sintiendocómocrecedentrodemí—,esnosercapazde pensar—grito cuando el orgasmo llega fulminante, y lo alejo demi sexo,cerrandolaspiernasysintiendoloslatidosdeldeseotodavíaentreellas.

—No, nena, no he terminado contigo —me advierte mirándome conintensidad, abriéndolas de nuevo y llevando su boca ami centro, absorbiendomisfluidosyconsiguiendoquetodomedévueltas.Oigocómomisgemidosseentremezclanentreellosycómo todo sevuelvedemasiado líquido,demasiadocalienteydemasiadotodo,ygimomásfuerte—.Telohedicho,erescomouncarameloquenomecansodechupar—meregala,abriéndolasmás,ymearqueosintiendoqueenloquezco.

—Vicccccc—susurroconsubocabarriéndolo incansableymemuevoconlascivia,sintiendocómoelorgasmocomienzaaformarseotravez.Cogiendosucabezaconlasmanos,lopegomásamisexo—.Vic,tenecesitodentrodemí,fóllameya—gimoenajenadacuandoelorgasmoexplotaenmiinterior.

Conlosúltimosespasmosdelclímax,veocómoseponeelpreservativoysevuelvehaciamíconlamiradaardiendo.

—Bocaabajo—meordena,yobedezcoasuordensintiendocómomicuerposeestremecedeplacer.

Alzamiscaderasy,deunaestocada,sehundeenmiinterior,arrancándomeun gemido que nace de lomás profundo demi alma para desembocar enmigarganta, y muevo las caderas exigiendo y reclamando, sintiéndolo llegar yhundirsepara,alsegundo,retirarse,ygimoygritosinimportarmequiénpuedaoírnos,consusmanosenmiscaderasmoviéndomeasuantojoymarcandounritmodelirantemientras nos descubrimos de nuevo de la formamás primitivaposible.

—¿Quéeshacerelamor?—lepreguntoentregemidos.—Esestardentrodeti—mecontestaentredientes,sindejardebombearcon

movimientossecosycerteros—,esoírtusgemidosysentirtucalor—prosiguemientrasmellevaconellosallímiteygimomásfuerte—,esquetecorrasentremis brazosyhacerlo yo contigo—sentencia enun aullido cuando el orgasmollegafulminanteyviolento—,esdescubrirte—mediceenunsusurro,dejándose

Page 143: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

caersobremiespalda.—Esverteaunteniendolosojoscerrados—musito—,esquetúseasmitodo

—susurroenunhilodevoz,sintiendosucálidoalientoacariciarmimejilla.—No sabes lo que dices, Val—me responde con voz seca, tensándose y

consiguiendoquemetenseyoconél.—¿Porqué?—susurrotemiendohaberdichomásdelacuenta.—Porquetúlohastenidotodo—merespondeenigmático,dándomeunbeso

enlamejillaantesdelevantarseydirigirsealbaño,cerrandolapuertatrasdesíyexcluyéndomeclaramente.

Rodando sobre el colchón hasta quedarme mirando el techo, bufo ensilencio, sin entenderquéproblema tiene enhablarmede supasadocuandoélestuvo presente en el mío. Cuando sale de nuevo, me siento en la cama,frunciendoelceñosinpercatarme.

—Víctor…—musitoamododeadvertencia.—Valentina… —me responde con seriedad, observando mi mueca, y lo

desfrunzomientrasélniegaconlacabeza.—¿Qué has querido decir? —insisto, viendo cómo se pone unos slips,

sintiendocómo,duranteunosmicrosegundos,micapacidadderaciocinioescapafulminantedemimente.

«¡Virgensanta!»—Oye,no ledesmásvueltas,¿quieres?—mepide tosco,poniéndoseunos

vaquerosy,claramentemolesta,medirijoalbaño,cerrandodeunportazo.—Siempre igual —mascullo para mí mientras me aseo—. ¿Por qué es

incapaz de confiar en mí? Que no lo hiciera cuando era pequeña, podríaentenderlo, pero ahora todo ha cambiado—prosigomimachaque abriendo lapuertaconfuerza,esperandoencontrarlotodavíaenlahabitaciónyfrunciendoelceñoalcomprobarquenoestá.

Negándomeapasearmedesnudapor sucasa,mepongounodesusslips yunacamisaacuadrosqueremangoalaalturadeloscodosy,descalza,medirijoensubusca.

Lo encuentro en la cocina y, apoyándome en el marco de la puerta, loobservococinarconlosvaquerospuestosyelbotóndesabrochado.

«¡Madremía!»—Muyguapa—musitamirándomedereojo,sonriendo,sindejardecortarel

Page 144: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

polloatiras.—Hetenidoqueecharmanode tu ropa,yaquenomepermites irapor la

mía—lecontestoconsequedad,apesardequeestáhaciéndosemelabocaagua,porloquedesvíomimiradahaciaelsalón,dondeestáintegradalacocina.

—No quiero discutir contigo, al menos no hoy, ¿vale? —me pide conseriedad.

—¿Por qué no? Si vamos a discutir,mejor hacerlo ahora que dejarlo paraotrodía—mascullo,cruzándomedebrazos.

—Porquetodavíaestoyconvenciéndote—replica,sonriéndome.—Pues teadviertoqueenestosmomentos loestáshaciendo fatal—objeto

con dureza—. ¿Por qué nunca quieres hablarme de tu pasado?—le preguntofrustrada,obligándomeaquelavisióndesuincreíblecuerponomedistraiga.

—¿Puedesponermúsica?—mepidesinresponderme.—Cuandomecontestes—siseo.—¿Qué quieres saber, Val?—inquiere, apoyando una de susmanos en la

encimera,mirándomeconelceñofruncido.—Todo—leindico,encogiéndomedehombros.—Todoesquerersabermucho.—Túlosabestodosobremí—lerebato.—Te equivocas, llevo tres años sin saber nada de ti —me contradice,

reanudandosulaboryponiendoahervirlosfideoschinos.—Tres años son pocos si los comparas con los dieciocho que tenías tú

cuandollegasteaquí—lecontestorindiéndomeyyendohastaél,apoyandomipechoensuespalday rodeandosucinturaconmisbrazos, todavíaasimilandoque estamos juntos ymaravillándomecon todo lo quehevividodurante estasúltimashoras.

—Teaseguroquetustresañoshansidomásinteresantesquemisdieciocho—mediceentredientes,volviéndosehastaquedarfrenteamí.

—Es tu percepción, no la mía—insisto, frunciendo el ceño y, cuando seacercaylobesa,arrastrandosuslabiosporél,sonríodesfrunciéndolo.

—Meengendraron,nací,crecíyteencontré,ahítienesunbuenresumendeesosaños—suelta,sorprendiéndome.

—¿Resumen?Yomásbienlollamaríaunesquema—replicodivertida.—No tengo nada más que añadir. ¿Puedes poner música ahora? —me

Page 145: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

pregunta,dándome laespaldadenuevo,ybufosabiendoquenovoya sacarlemás.

Trasponerundisco,mesientoenelsofáydetectoloscambiosquehahechoenelsalón.Permanezcoensilencio,elmismosilencioquemantieneéldesdelacocina,conlamúsicallenandoloshuecosquedejannuestraspalabras.

—Séquenoloentiendes,Val—intervieneunpocomástarde,sentándoseamilado.Mecogeporlacinturayhacequemesienteahorcajadasencimadeél—,peroesosdieciochoaños,paramí,notienenningunaimportancia—afirma,mientrasacariciamispiernasperezosamente—.Noimportaquiénfui,sinoquiénquise ser cuando conocí a tu padre y más tarde a ti —continúa, alzando sumiradahastaposarlasobrelamía—.Teaseguroquetúfuisteunodelosmotoresdeesecambio;portiestudiémientrastrabajabaymeobliguéasermejor.

—¿Porqué?—musitososteniéndolelamirada;notocómotodoloquesientoporélcrecehastallenartodoslosrinconesdemialma.

—Porquequeríaquetesintierasorgullosademícuandocrecieras;queríaserunreferenteentuvida,comotupadrelofueenlamía,yesoesloquetienequeimportarte,quiensoyahora.

—¿Mi padre conoce tu historia? —indago, prudente, soltándome de sumiradaparaobservarelrecorridodesusdedospormipieldesnuda.

—Sí—mecontestaconsequedad.—Siempreheestadomuyorgullosadeti,Víctor,cuandoerapequeñaymás

tardecuandocrecí—leconfieso,alzandolavistaparaperdermeenelverdedesusojos.

—Cuandocreciste,secomplicótodounpoco—musitaconunatristesonrisay lo imito, recordando esa noche—. ¿Quieres que hablemos de ello? —mepregunta, consiguiendo que los recuerdos lleguen a borbotones, y observo elcentrodelsalón,dondeocurriótodo.

—¿Ytú?—susurrosinatrevermeamirarlo.—¿Sabesloquepienso?—medice,ymevuelvohaciaél—,queesanoche

noshallevadoaésta,atodoestoqueestamosviviendoahora.Sitúnohubierashecholoquehiciste,posiblementeeneseinstantenoestaríasaquísentada.

—Noteentiendo…—Esanochemeabristelosojos,apesardetodoloquetedije—meconfiesa

conseriedad—,ynopudeconciliarelsueñoporquemepusisteunaverdad,que

Page 146: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

yohabíaqueridoignorar,entodalacaray,aunquemeodiabaporello,nopodíadejardeverla,nopodíadejardeverteatiyyanuncapudedejardehacerlo—reconoce,haciéndomeaunladoydirigiéndosehaciaunmuebledelquesacaunacarpetadeunodeloscajones.

Con curiosidad, observo cómo se sienta, frente a mí, en el borde de lapequeñamesa,cómoabrelacarpetaycómoesparcecientosdehojasderevistas,todas ellas pertenecientes a reportajesmíos y entrevistas, algunas de ellas tanantiguasqueyanisiquieralasrecordaba,ylasmirosinpodercreerlo,viendoalaValquefuiyenlaquemeheconvertidoahoraatravésdesusojosydeestosrecortes.

—Paramíhasidomuycomplicadoaceptarloquesentíaporti;dehecho,loheestadonegandohastaelúltimomomento,yalosabes—mecuentamientrasvoyojeándolasunaauna—.Erasmicría,Val,yderepenteteníastetasyunculoquenopodíadejardemirar.¿Tedascuentadecómomesentíesanoche?—mepreguntamientraslomiroensilencioylacancióndeTerraTitaniccomienzaasonar—.Unapartedemí,lajodidaylaqueodio,queríahacertetodoloquetehe hecho hoy, quería cogerte y follarte despacio y luego con fuerza, queríachuparteenterayserelprimeroenhacerlo,perolaotra,laquemeheobligadoatrabajardíaadíadesdequelleguéaquí,meimpedíahacerlo;esmás,mesentíacomo un depravado por estar pensando algo así, por eso te dije todas esasestupidecesyteechedecasa—meconfiesamientrasyoevitosumiradayposolamíaenlapareddeenfrente,consuspalabrastransportándomeaesanoche…

Page 147: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO11

—¿Tequiero?—mepreguntósorprendido,volviéndosehaciamí.Teníamos un juego, de entre los cientos que teníamos, que consistía en

escribirnos mensajes en la piel con el dedo y, puesto que no me gustaba lapelícula que él había escogido, opté por lanzarme de una vez, tras mesesdeseándolo.

Asentíconlacabeza,sintiendocómomicorazóncomenzabaamartillearconfuerza,yleescribíotromensaje,atentaalrecorridodemidedoensubrazo.

—¿Cómo? —inquirió, casi saltando del sofá, cuando le escribí «quieroacostarmecontigo».

—Vaya,pensabaqueibaatenerqueescribírtelovariasveces—ledijeenunsusurro,asombradadequelohubieradescifradotanpronto.

—Estásdecoña,¿no?—No,esunafraselargay…—Nomerefieroaeso.¿Cómoquequieresacostarteconmigo?—soltócasia

vozengrito,ymeencogídehombros,buscandolaspalabrasadecuadasdentrodemicabeza.

—Tequiero—ledijefinalmente,poniendovozalmensajedesubrazo—yquieroquetúseaselprimero.

—Oye,Val,noséquémosca tehapicado,peroesonoesposible…Joder,eresunacría.

—Tengo dieciséis años, no soy ninguna cría —repliqué molesta—, y teaseguro que sé muy bien lo que quiero. Además, te he pillado varias vecesmirándomelospechos—añadí,sosteniéndolelamirada.

Page 148: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Eso no es verdad y lo sabes—farfulló entre dientes,manteniéndomela,conlamandíbulatanapretadaquetemíquefueraarompérsela.

—Porsupuestoqueloes—afirmé;melevantéymeacerquéaél—.¿Quieresverlos?—lepropuse,empezandoadesabrocharmivestido,consumiradafijaenmisdedos.

—No,Val,noquieroverlos,dejadehacereltonto—mepidióentredientes,conlospuñoscerradosalladodesucuerpo.

—Puesno losmires, entonces—lo reté, desprendiéndomecon rapidezdelvestidoydejandomispechos,turgentesyllenos,frenteaél.

—¿Qué haces? ¿Te has vuelto loca? ¡Cúbrete de una vez! —me ordenónervioso,conlamiradafijaenellos.

—No.Mírameydimequemevescomounacríayquenotegusto—susurréquitándomelasbraguitasyquedandocompletamentedesnudafrenteaél.

—Eres una cría. Val, deja de hacer el ridículo, joder —me espeto confrialdad,acercándoseamíycogiendomivestidodelsuelopara,seguidamente,tirármelosobrelospechosparaquelocogiera—.Hazelfavordevestirtedeunaputavez.

No me gustas ni me atraes como mujer; métetelo en la cabeza y nuncavuelvasapensarenmídeesamanera.

—Estásmintiendo—ledijehumillada,sintiendomis lágrimasconvertirmivisiónenalgoborroso.

—Teaseguroqueno.Oye,loquetienesquehaceresdedicarteaestudiaryahaceralgodeprovechocontuvidaenlugardeirdesnudándoteporahícomosifuerasunacualquiera—mascullóentredientesmientrasunalágrimasedeslizabapormimejilla—.Lárgate,noquieroverte…

***

—…Enrealidadestabamásenfadadoconmigoquecontigopornohaberlovisto venir y, sobre todo, por no haberlo sabido gestionar. Por eso, cuando tefuistecorriendo,teseguí,aunqueteníatantomiedodeloquesentíaydeloqueveríaentusojosquealfinaltedejémarchar—mecuentaconlavozcargadadetristeza—,yjustoporesoteevitédurantedías.Luegotúdesaparecisteyyohicepolvo Internet y todas las revistas de moda en las que aparecías —añade,devolviéndome a la realidad mientras yo siento el nudo formándose en mi

Page 149: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

garganta.—Está claro que no supiste gestionarlo y yo te odié durante meses —le

confieso mirándolo fijamente—. Al contrario de lo que insinuaste, nunca mehabía desnudado delante de nadie, ni siquiera había hecho topless… Por esoluché tanto por el reportaje de Cartier, porque quería demostrarte que no eraningunacríayquemuchoshombresibanadesearloquetúhabíasrechazadoy,cuandopudevolverahacerlo,lohicesindudar,apesardelasprohibicionesdemipadre.Teodié,Víctor,yteevitéduranteestosaños—mesincero,sintiendocómolaslágrimasruedansilenciosaspormismejillas—.Mepedistequehicieraalgo de provecho con mi vida y lo hice: me convertí en una de las mejoresmodelos del país—le indicomientras él me coge en volandas yme sienta ahorcajadasencimadeél,sujetándomeporeltraseroconunamanoysecandoconlaotramislágrimas.

—Lo siento, Val. Llevo tres jodidos años sintiéndolo y maldiciendo esanoche,maldiciendocuandoveníadeunviajeymeenterabaporCasiopor tupadredequehabíasestadoaquíymaldiciéndomecontinuamenteporhaberrotoalgoqueformabapartedemí,porhaberteechadodemividacuandotúerasunpilarfundamentaldeella…poresoadelantémiviajeestavez,porquenecesitabarecuperarteyquevolvierasaestarenella.

—Comolacríaquefuiycomolajovenquecontinuabasiguiéndoteatodaspartes…

—PeroesaValyanoestaba—meconfiesaconcariño—;dejastedeestaresanoche,apesardequecontinuamentemeesforzabaporencontrartey,ensulugar,sóloteveíaati,alamujerqueeresahoray,aunasí,seguíanegándomeaquemipartejodidavencieraalasensata.

—Túnotienesningunapartejodida,Víctor.Nosédedóndehassacadoeso—musitorodeandosucuelloconmismanosmientrasélselevantaysesienta,conmigotodavíaaferradaasucintura,enelsofá.

—La tengo, aunque no lamuestre y no la alimente; dentro demí hay dosyoesmuy distintos: el Víctor que fui y que nunca desaparecerá y el que soyahorayquemeempeñoentrabajardíaadía.

—¿Tumejorversión?—murmuroindagandoensumirada.—Algoasí—musita—,yelquemuestroconfacilidadcuandoestoycontigo

—prosigue,besándomesuavemente—.Dimequeyanomeguardas rencorpor

Page 150: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

lo de esa noche—me ruega, con la voz cargada demiles de emociones que,comolacatadeunvino,casisientoquepuedosaborear.

—Yano…—susurrohundiendomisdedosensupelo,necesitándolodeunaformaqueniyomismasécómoexplicar.

Sosteniéndonos la mirada y ansiando sentirnos más de verdad para poderolvidar esa noche y todo lo que nos dijimos, empezamos a desnudarnoslentamenteentrebesosycaricias.

—Prométemequeintentarásolvidarloquetedije—mepidesentándomedenuevoahorcajadassobreél.

—Víctor, eso ya no importa —murmuro, y percibo cómo todos nuestrossentimientos quedan expuestos al otro sin necesidad de ponerles voz, como sinuestra alma estuviera abierta al otro y pudiéramos acceder a ella con totallibertad.

Conelcuerpotemblandoylapielerizadaportodoloqueestoysintiendoyporelmomentoqueestamosviviendo,meentregosinreservas,talycomoestáhaciendoélconmigo,dirigiendosumiembro,estavezsinpreservativo,haciamiinterior, cerrando los ojos al sentir su piel acariciando finalmente la mía, tansuavecomoesesueñoque,comounanube,sientodenuevoflotandoenlapalmade mi mano y, cuando lo tengo encajado en mi interior, abro los ojos,encontrándomeconlossuyos,quemerecuerdanunmarembravecidoyalavezencalma,unmarenelqueestoyseguraquenuncapodríahundirme.

—Val —gime mi nombre mientras comienzo a moverme lentamente,poniéndolesunombrealosmilesdeemocionesquellenanmipecho.

—Viccccc—susurroentregemidos,ymedejoarrastrarportodoloqueestoysintiendo,deseandohacerdeestemomentounaeternidad.

Nosmovemosconunritmolento,pausadoytantiernoquenotocómotodoloquesientoporélmedesborday,entrebesosycaricias,nosdescubrimosdenuevo, descubrimos en quién nos hemos convertido tras todos estos añosalejadoselunodelotro.

—Val…—gimeechandolacabezahaciaatrás,apoyándolaenelrespaldodelsofámientrasyosuboybajoconmovimientoslentosycadenciosos.

—Víctor…—gimoamivez,sintiendomisexoempapadorecibirelsuyo.—Más rápido, nena, no puedomás—masculla entre dientes, posando sus

manosenmiscaderas,alzandolassuyasyobligándomeaseguirleelritmo.

Page 151: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Yentrejadeos,besosymilesdesentimientoscreciendoconfuerzadentrodenosotros,estoquetengosuspendidoenlapalmademimanoalzaelvueloconfuerza,arrastrándonosaambos,creandosinpretenderlounmomentoeterno,unoque permanecerá grabado a fuego en nuestras almas, en ese rinconcito quesiempreperteneceráalotro.

—Consiguesquepierdalacabezacomonuncaanteslahabíaperdido—meconfiesaenunmurmullo.

—¿Lodicesporlodelpreservativo?—planteoconéltodavíaencajadoenmiinterior.

—Entre otras cosas —musita besando mi hombro mientras mantengo lacabezaapoyadaenelsuyo.

—Mehaencantadohacerloasí,Vic—admitoenunsusurro.—Puesnovaavolverasuceder;dehecho,notendríaquehabersucedido—

mascullacondureza,yalzolamiradahastaencontrarmeconlasuya.—¿Tearrepientes?—murmurofrunciendosuavementeelceño.—Nolosé,pero loquesí séesquenovaavolverasuceder—meindica

besándolocondulzura—.Memareas,Val—meconfiesa.—¿Yo?Ahoralaculpaserámía—musitoempezandoasonreír.—Porsupuesto,¿dequién,sino?—replica,levantándomeyllevándomede

lamanohastaelbaño—.Sexosincondónycena fría, ¿necesitasmáspruebasquelodemuestren?—mepregunta,divertido,mientrasnoslimpiamos.

—Perdona, pero aquí eres tú el adulto. ¿No se te ha ocurrido pensar queposiblemente seas tú elquememareeamí?Te recuerdoqueme ibaaNuevaYorky,enlugardeestarhaciendolamaleta,estoydesnudaentucasa—declarosonriendo.

—Perdona, bonita, pero tú ya eres tan adulta como yo. Además, me haspedido que te convenza y eso estoy haciendo —me rebate, mirándome conintensidad, y entonces recuerdo a mi hermana y esa conversación quemantuvimos en el baño sobre el «nenaaaaaa» y lamirada bajabragas y sonríomásabiertamenteantesdedirigirmealsalón.

—¿Porquésonríesasí?—mepreguntasiguiéndomemientrasrecojonuestraropa,queseencuentraesparcidaporelsuelo.

—Pornada.Toma,vísteteonocenaremos—lepido, tendiéndoselaantesumiradadivertida.

Page 152: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Cenamosconcomplicidad,conelvinoquellevaminombre,haciendoaunlado los reproches del pasado, sanados ya ahora y, entre confesiones, le digofinalmentequevoyaestudiarlacarreradeenología.

—¿Enserio?—mepreguntaconunasonrisaresplandecienteenelrostro.—Ytanenserio—musitollevándomelacopaaloslabios.—Pero…¿ytucarrerademodelo?—Micarrerademodeloesmipresente,peroestoserámifuturo—empiezoa

contarle—.¿Sabes?Enrealidad,nuncaquisesermodelo,nicuandomihermanalomencionabameatraía,pero,cuandomemarché,lohiceconlafirmeintencióndedemostrartequenoeraningunacría;pormisnaricesibaademostrartequeeracapazdehaceralgodeprovechoconmividayesaopciónaparecióderepente…

Fuiaunaagencia,lesgustéytodoempezóarodar,asídefácil.—Másmotivos, entonces, paramaldecir esa noche—suelta con lamirada

llenadeemocionesqueestaveznosédescifrar.—Antes has dicho que esa noche nos ha traído a ésta —le recuerdo,

sosteniéndolelamirada.—Pero antes de a esta noche te llevó aMarco y ahora te llevará aNueva

York.—Y,sinnecesidaddeponerlevoz,oigodenuevoelnombredeMarco.—Sabes lo que hay —musito sintiendo cómo mi estómago, hasta ahora

hambriento,secierrayapartoelplato.—Lo sé, y quiero que vivas todo lo que desees vivir y, si esNuevaYork,

puesadelante—medicerecostándoseenlasilla,cruzandolosbrazosalaalturade su pecho—. Es tu vida, Val; vívela como creas que debes vivirla y nopermitasqueniyoninadietefrene.

—¿Sabes?Porunapartequieroconseguirlo,quierollegaraserlamejortopmodel del momento, llevar las alas de Victoria’s Secret y trabajar con losmejoresdiseñadoresy fotógrafosdelmundo,apesardequesoyconscientedequenovaaseruncaminofácil—leconfieso,guardandosilencioduranteunosminutosyvalorandosiseguirhablando—.Sinembargo,luegoestátodoesto,loque siempre quise… y también estás tú —musito con un hilo de voz,anclándomeasumirada—.¿Nuncahasqueridodoscosasdistintasalavez?—planteo.

—Val,estudia,fórmatey,cuandoconsigastodoloquedeseas,regresa—meanima,sincontestaramipregunta.

Page 153: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Hasdicholomismoquemipadre—susurrosintiendoqueestácerrandolapuertadesualma,hastaahoraabiertaparamí.

—Tuveunbuenprofesor.—Dicen que, en ocasiones, el alumno supera al maestro—sentencio con

seriedad,denuevovalorandosiseguirhablando—.Nohasdichonadasobreti.—Porquenohaynadaquedecir—merespondeconsequedad.—Yporque túno tienesparejas,¿verdad?—inquiero, sintiendocómo,con

esa pregunta, todo esto que llena mi pecho, aleteando con vida, empieza aapagarselentamente,comosiperdierafuerzaconcadapalabra.

—Asíes—mecontestatiñendosuvozdedureza,sosteniéndomelamirada.—¿Porqué?—quierosaber,notandocómomicuerposeenfríapocoapoco.—¿Estamosjugando?—Siestuviéramosjugando,nopodríascontestarconunapregunta—matizo,

obligándomeahaceraunladotodoloqueestoysintiendo.—Cierto.—¿Porqué?—insisto.—Porque tengounasnormasquenopienso incumpliryporquenomevan

lascomplicaciones.—Cambiatudiscurso,Víctor,éseyaloheoído.—No tengo otro —se defiende, cubriendo su rostro con esa máscara

inexpresivaqueutilizamásvecesdelasquemegustaría.—Estás mintiendo —afirmo detectándola, consciente de que la utiliza

cuandonecesitaocultarseoprotegersedealgooalguien.—Digamosque, para ciertos aspectos demi vida, eseVíctor jodidopuede

conelotro.—Nocuandoestásconmigo—lerecuerdo.—Noahora,peroalgúndíaloconseguiráynoquierohacertemásdaño—me

confiesa desprendiéndose de ella y apoyando sus antebrazos sobre lamesa—.Oye, tú te lo mereces todo, Val. Te mereces a un tío que esté dispuesto acompartirsuvidacontigoyquequieralomismoquequerrástúenunfuturo,yesehombrenosoyyo.

—¿Cómosabesloquequerrásonodentrodeuntiempo?Hacetresañosestoera impensable para ti y, en cambio, mira dónde estamos ahora; no puedespredecirelfuturo,Víctor,nitúninadie.

Page 154: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Oye,nopuedoevitarsercomosoyytúeresdemasiadoespecialcomoparaestarconmigo.

—Esediscursito estádemasiado trilladoyparece sacadodeunanoveladeesasmalas; deverdad, creíaque tendríasunomejor—mascullo levantándome—.Voyaacostarme—anuncio,sintiendocómoconsuspalabrassecargatodoloquehemosvivido.

Me acuesto en la misma cama en la que tantas cosas he sentido, con laslágrimas empezando a rodar por mis mejillas, echándolo tanto de menos quesientoque,consuausencia,pierdoelequilibrioy,cuandoabrelapuertayveosusiluetarecortadaenella,sientocómolorecuperodenuevoytodoseestabilizaamialrededor.

—Eres mi todo, Val, quédate con eso —me dice acostándose a mi lado,pegandomiespaldaa supechoy rodeandomicinturaconsubrazo—.Séqueestonohasidounabuenaidea,peronomearrepientoniquieroquelohagastútampoco.

—Por supuesto que no me arrepiento —mascullo sintiendo mis mejillasmojadasporlaslágrimas.

—Joder,estásllorando…Mierda,Val—farfulladándomelavuelta,haciendoqueapoyemipechosobreelsuyoymirostrodescansecercadesucorazón—.Oye, siempre voy a querer lomejor para ti y, créeme, no soy la persona quenecesitas.

—Denuevotudiscursoestádemasiadotrillado.¿Quésabrástúloqueeslomejor para mí o a quién necesito a mi lado? —contraataco, secando mislágrimas.

—PorquelomejorparatiesirteaNuevaYorky,sirenunciasaesesueñopormí,tearrepentirás;puedequenoahora,perosíconeltiempo,cuandonecesitescosasqueyonopuedaniquieradarte—measeguraconvencido,yabsorbolososcurosmaticesdesuvoz—.Entoncesnopodrásirteaunquequieras,porquetutren ya habrá pasado y en tu lugar habrá otras chicas más jóvenes que túviviendo lo que tú ya no podrás vivir y, sin duda, vendrán los reproches—sentenciaacariciandomipelo.

—¿Quiénestádandoporhecholascosasahora?—Val,nosetratadedarlascosasporhecho,setratadequetengodoceaños

másque túy loque túestásviviendoovasaviviryo lohevividocientosde

Page 155: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

vecesyyalohedejadoatrás.Nena,vamosadestiempo.—Y cuando llegaste al viñedo y nos hicimos amigos, ¿no íbamos a

destiempo?—replicoenfadada,alejándomedeél,arrimándomeamiladodelacama, de nuevo dándole la espalda—. Entonces era cuando más a destiempoíbamos—murmurofrustrada,enfadadaytriste—.Noteamparesenladiferenciadeedadcuandoesonuncahasidounimpedimentoentrenosotros.

—Val,noquierorelaciones largas,noquierotenerhijosynoquieroquelafelicidaddenadiedependademí—meconfiesaconlavozllenadedemasiadascosasyningunabuena,ymevuelvodespacioparamirarlo.

—¿Cómo?—Loquehasoído—mecontestacondureza,ysientolafuerzadesumirada

apesardeestaraoscuras.—¿Por eso utilizas el preservativo? ¿Porque no quieres tener hijos? —

musito.—Exacto.Noquieroesaresponsabilidad,noquieroquelavidaolafelicidad

de alguien dependa de mí y te aseguro que no es por egoísmo o porirresponsabilidad.

—Eso ya lo sé, te conozco de sobra—susurro sentándome en la cama—,peroVíctor…depequeñamifelicidaderaestarcontigo,dependíadetiynuncateimportó.Además,estoyseguradequeseríasungranpadre…perosicasimecriastetú.¡Dios!,teníasunapacienciainfinitaconmigoyunapartedeloquesoyesgraciasati—leconfiesorecordandoesosdías.

—Y mira dónde estás ahora—me rebate con voz acerada, sentándose éltambién,apoyandosuespaldaenelcabecero—:acostadaenmicama,Val…

—Oye, sí estoy acostada en tu cama es porque yo he querido estarlo—locortoenfadada.

—Escúchame,nosoycomocrees…quemehayaesforzadoporsermejornosignificaqueloseaynovoyatraeraningúncríoalmundoniapermitirquetenieguesalgoasí—mascullalevantándosedelacama,alejándosedemí—.Joder,jamáshabíahabladodeestoconnadie—prosigue,ydetectolafrustraciónensuvoz.

—¿Porqué?—inquiero,levantándometambién,dirigiéndomehaciaél.—Porquenuncahabíapermitidoquenadieseacercaratanto—meconfiesa

tras guardar unos minutos de silencio, mientras yo rodeo su cintura con mis

Page 156: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

brazos—, pero contigo es distinto, porque formas parte de mí —admitevolviéndose, acunandomi rostro entre susmanos—.Cuando eras pequeña noíbamos a destiempo, porque yo retrocedí en mi vida para vivir la tuya y tusdeseoseranfácilesdecumplir,porquesóloqueríasqueteprestaranatencióny,acambio,tedabasatimisma.Enelfondoeraunegoísta,porquesóloqueríaverlaadmiraciónconlaquememirabasosentir tucariño.Quecorrierashaciamícontusbrazosextendidosoqueesperaraspacientementehastaqueyoterminaradetrabajarodeestudiareraloquemeimpulsabaaseguiryquerersermejor,porti, para que continuaras mirándome con esa admiración, pero ahora todo esdistinto,porquehaycosasquenovoyapoderdarte,poresoahorasíquevamosadestiempo—meconfiesa, consiguiendoquemequede sin palabras—,y poreso quiero que temarches aNuevaYork y vivas todo lo que desees vivir sinfrenarte y sin sentirte atada. Oye…—continúa tras guardar unos minutos desilencio—,nosirvedenadaquehagamosplanes,porquelavidayaseencargadehacerlospornosotros,asíqueyaveremosquésucede,¿vale?

—Dicemipadreque,paraabrazarel futuro,hayquerespetarelpasado—musito volviendomi rostro para alejarlo de susmanos—, pero en tu caso yodiría que, para abrazar el futuro, hay que sanar el pasado. Tú no quiereshablarmedeélyloacepto,peroestáclaroqueesepasadocontinúaabiertoparatiyeselquenoteestápermitiendoavanzar—añadososteniéndolelamirada—.¿Quieres que el Víctor jodido desaparezca? Pues soluciona lo que tengas quesolucionaryreconcíliateconquienfuiste;sóloentoncespodrástomardecisionesimportantes—musitollevandomismanosasurostro,acunándoloyoestavez—.Hazlo,Vic,porque,sinolohaces,serástúelquenopodrácogereltrendelquemehablabasantesyentoncessíquenohabrámarchaatrás.

—¿Cuándotehasvueltotanlista?—mepreguntaevitandocontestarme.—Supongoquetuveunbuenmaestro—susurroacariciandosurostro.—Y,enocasiones,elalumnosuperaalmaestro—merecuerdaconvozronca

ysonrío,viéndoloatravésdelassombrasysintiendosualmadenuevoabiertaparamí—.Estoymuyorgullosodeti,Val.

—Yyodeti.«Ytequieromásqueamivida»,ledigoenelsilenciodemimirada.—Vamos a acostarnos, creoquepor hoyyamehasmareado suficiente—

murmuraaferrandomimano.Mellevadenuevohastalacamaypegamicuerpo

Page 157: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

alsuyo,yentoncescierrolosojos,dejándomemecerportodolovivido.

Page 158: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO12

Eloloracafésecuelaa travésdemis fosasnasales,haciéndomecosquillas,yentreabro los ojos para ver la luz entrar suave a través de las cortinas de suhabitación.Abrazolaalmohadaydetengomimiradaenesepuntodelaventanaenelqueayermeconfesótantascosas,sintiendocómoesosmilesdeemocionesque llenanmi pecho semantienen suspendidas en él, sin llegar a aletear confuerza pero tampoco apagándose como las percibí anoche, y de nuevo mepregunto qué sucedería durante esos dieciocho años que paramí son todo unmisterio.

Sintiendoquelanecesidadporverloyporestarconélcrececonintensidadenmiinterior,meafanoenasearmey,otravezconsucamisaacuadrosyunodesusslipspuestos,medirijoensubusca.Estásentadoenunodelostaburetes,trasla barra de la cocina, vestido con unos vaqueros y una camiseta que se ciñedemasiadobienasucuerpo,leyendoconcentradoelperiódicoconuncaféenlamano. Observo su ceño fruncido, sus dedos rodeando el asa de la taza, surespiraciónpausada,esaquefuemicancióndecunaanoche,ysonríoapoyadaenelmarcodelapuerta.

—Buenos días—musito, y sonrío un poquitomás cuando alza sumiradahastaposarlasobrelamía.

—Buenos días —me contesta deslizándola lentamente por mi cuerpo,provocandopequeñasllamaradasasupaso.

—Hubieraestadobienquemehubiesespermitidoiracasaapormiscosas—susurroacercándomeaél,quememiraconunasonrisallenadepromesas.

—¿Yparaquéibasahacereso,conlosexyqueestásvestidaconmiropa?

Page 159: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—mepreguntamientrasmeencajoentresuspiernas,rodeandosucuelloconmisbrazos—,ytodavíamássinella—añadeparamorderluegodulcementemilabioinferior,consiguiendoquetodosestossentimientosqueestánsuspendidosenmipecho comiencen a cobrar vida—.Gracias por escucharme anoche, Val—medice,estavezconseriedad.

—Graciasportodolodeayer,Vic…—murmurorozandomislabiosconlossuyos—.Piensaenloquetedije—murmurofinalmente.

—Medijistemuchascosas,nena—meindica,divertido.—Sabes perfectamente a lo que me refiero—le rebato, anclándome a su

mirada.—Yalosé—aceptaconvozronca;hundesusdedosenmipeloymepega

más a su cuerpo, dándome un dulce beso que logra que todo tiemble a mialrededor,zanjandountemaque,demomento,decidonovolveraretomar—.Tehepreparadoeldesayuno—meseñala,separándomeligeramentedeélcuandonuestrobesocomienzaatornarsedemasiadolascivo.

—Vaya,yyopensandoque ibasa llevarmea lacama—musitohaciéndoleunamueca, todavía fascinadapor estarviviendo todoestoypor elVíctorqueestoydescubriendo.

—Acabasde salirdeella—mediceocultandouna sonrisa—.Come—meordenaconautoridad.

—Quéaburrido…EstásempezandoaparecertedemasiadoaCasi—contestobromeando.

—Noescierto,paraparecermeaCasitendríaqueirconunvestidodeflores—replicaguiñándomeunojo,ypiensoquehastaconunvestidodefloresseríaeltíomássexydelplaneta.

—Y hablar cogiendo carrerilla —agrego siguiéndole el juego, sindespegarmedesucuerpo,yentoncesmepercatodequehayunateterasobrelaencimera—. Vaya, menuda sorpresa, pero si me has preparado el té que megusta…Creoquevoyabuscarteunvestidodeflores—sentencio,arrancándoleunacarcajada.

—Conmiel yunpocode fruta.Pasodehacerte tostadasyque las tires alcubodelabasuracuandonotevea—merecuerdaconunasonrisaqueconsiguelicuarmishuesos.

—Muylisto—susurrohundiendomisdedosensupelo,sintiéndolosuavey

Page 160: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

densoentreellos,comotantasvecesimaginéquesería,negándomeamovermedeentresuspiernas,quesujetanmicuerpoconfuerza—.Meencantócompartireltenedorcontigo—leconfiesorozandosuslabiosconlosmíos,sintiendocómosurespiraciónseacelera.

—¿Sólo te encantó?Porqueamíme lapusistemuydura; encima llevabasesevestidoceñidoquetehubiesearrancadosihubierapodido—admiteconvozoscura,sosteniéndomelamirada.

—¿Telapusedura?—lepreguntoprovocándolo,sintiéndolaenormeatravésdelateladesupantalón—.¿Cómoahora?—susurromientrasllevomimanoaellaypresionoligeramente;notosureacciónalinstante.

—Comosiempre,parezcounputoadolescentecuandoestoyatulado;sólopiensoenfollartetodoeltiempo—meconfiesaaprisionandomipielpordebajodelaropa.

—Ya somos dos, entonces —reconozco; hundo mi lengua en su boca, ynuestrosgemidoscomienzanaentremezclarse.

—Joder, Val —gime y me coge con fuerza haciendo que me siente ahorcajadassobresuenormidad.

—Alamierdaeldesayuno—jadeo,frotándomesobresuerección,cuandodeprontooigodefondoelsonidodemimóvil.

—Teestánllamando—meindicaconsusmanosenmitrasero,moviéndomesobresusexomientraselteléfonosuenaconinsistencia.

—Pasodeél—declaroentregemidos,peroentoncesrecuerdoquenopuedopasar,porquepuedenserdelaagencia,ymaldigoensilencio—.Mierda,tengoquecogerlo—mascullofinalmente,separándomedeél.

—Puto teléfono—oigo como maldice mientras corro hacia la habitación,rogandoensilencioquenomehayasalidoningún trabajourgentey tengaquemarcharmeahora,perono,esmihermanaylodescuelgoconfastidio.

—Rapidito,quemecogesenunmalmomento—sueltoamododesaludo.—Quésimpáticatehaslevantadohoy,¿no?—mepregunta,molesta—.Yyo

queibaainvitarteacomer…—Losiento,esquemehaspilladoocupada—medisculpo,sintiéndomede

repentemalpormicontestación.—¿Yquéestabashaciendo?Porque,queyosepa,estásdevacaciones.—Vacaciones las que tienes o tendrás tú; te recuerdo que yo estoy

Page 161: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

preparandounapresentación.—Hoyessábado—merebate.—Noimporta,soyunachicaaplicada.—Yyopensandoqueestabasconunaamiga…«Ups.Pillada.»—Yloestoy.Porcierto,mehadichopapáquemañanavasacomeracasa

con«esechico»—ledigodesviandolaconversación.—Sabes que no acabo de caerme de un árbol, ¿verdad? —me suelta

divertida,ybufo.—Oye,¿podemoshablarmañana?—¿ConpapáyCasidelante?Genial,pormínohayproblema,porfinJosé

dejarádeserelúnico«chico»delamesa—mepica,carcajeándoseconganas.—Quécabronaeres—ledigoriendofinalmente.—Cabrona tú, que nome cuentas las cosas. Estás con él, ¿verdad?—me

planteaconcomplicidad.—Sí,ytúhassidomuyoportuna—musitosentándomeenlacama.— ¡¿Y cuándo pensabas contármelo?! ¡Me hasmaltratado durante años y,

cuando por fin te lo tiras, vas y te callas! ¡¿Será posible?! —me grita conindignación.

—Oye,escomplicado…Mañanahablamos,¿vale?—Entonces,¿nocomesconmigo?—insistepuñetera.—No,novoyacomercontigo—niego,sindejardesonreír.—¿Yalehasentregadolasbragasenofrenda?—inquiere,haciendoquemi

sonrisaseensanchemuchísimomás.—Másomenos—lecontestoentrerisas—.Oye,¿cómolohassabido?—Porquesoyunachicalistayavispada.—Sí,claro,loquetúdigas.Enserio,venga,¿cómolohassabido?—Porque estoy en casa, he venido a buscarte para sacarte de paseo y

desayunar juntas, además de cotillear contigo y arreglar las injusticias delmundo… Ya sabes, esas cosas que suelen hacer las hermanas cuando llevanmucho tiempo sin verse y, cuando Casime ha contado que ayer no viniste adormiryqueentodoelfindesemananotienesintencióndeasomarelpicoporaquí,meloheolido.Luegoyahasidocoserycantar;eresmuymalamintiendo,¿losabías?

Page 162: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Puespapáselohatragado.—Yocreoquepapáhallegadoaunpuntoenelquehadecididotragárselo

todoparanollevarsemásdisgustosconnosotras.MellamóayerparacontarmelodeItaliaysabersiyolosabía—meconfiesa,estavezconseriedad.

—¿Yquéledijiste?—¿Qué querías que le dijera? Pues la verdad, suavizándola e intentando

quitarlehierroalasunto;noquieromatarlodeundisgusto.—Pues, si no quieres hacerlo, cásate con «ese chico» de una vez; contigo

tampocoesqueestémuyfino—objeto.—Pero lomío lo tienemás asumido que lo tuyo.Además, tú siempreme

ganasporgoleadaconeltema«disgustos».—Menudohonor.Oye,¿ycómoselotomó?—indagopreocupada.—Mejordeloquepensaba,laverdad,perodaleunrespiro,tía.—Miraquiénfueahablar,laqueconvivecon«esechico».—Y dale con el temita. ¡Dios! ¡Pero qué pesaditos sois todos! —replica

resoplando—.Oye,yaséqueestarásemocionadaytodoeso,perotenemosquequedar antes de que te largues. ¿Crees que serás capaz de separarte de él unahoraparacomer,cenar,almorzaroloqueseacontuqueridahermana?

—Lointentaré,perohoyno—aclarorecordandodóndeestabaantesdequemi«queridahermana»nosinterrumpiera.

—Losuponía.Quéansiosa,hija—medicecarcajeándose—.¿Ytuamigaytúvenísmañanaacomeracasa?

—Quégraciosilla—le contesto, viendo la puerta abierta tirar demí—.Laverdadesquenomeapetecenadair.

—Miraqueeresdesapegadaypocofamiliar—mecontesta,puñetera.—Entiéndelo,hermanita,tengoqueprepararlapresentación.—Seguroqueeseso—comenta,descojonándosedenuevo.—Yahablaremos,¿vale?,queestoymuyocupada.—Capulla—respondeantesdequelecuelgue.Sonriendo,encaminodenuevomispasoshacialacocinayhaciaél.—Era Alana—le cuento, encajándome otra vez entre sus piernas—. ¿Lo

retomamosdondelohabíamosdejado?—sugiero,empezandoabesarlo.—¿Vescomomemareas?—mepreguntasincorresponderamibeso.—Meencantamarearte—musitosindarmeporvencida.

Page 163: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Yamímeencantaque lohagas, perohe recuperado la cordurayvas adesayunar—meaclara,separándomedesucuerpo.

—¿Enserio?—sueltodecepcionada.—Y tan en serio—se reafirma, levantándose y yendo hasta la encimera,

dondecogelateteraylafrutaqueluegoponesobrelabarra,frenteamí—.¿Unatúyunayo?—mepropone,guiñándomeunojo.

—¿Unnuevojuego?—lepreguntoempezandoasonreír,excitándomeporeltonoquehautilizado.

—Sí, pero esta vez vamos a tomarla de una forma distinta a como latomamos en tu casa —me informa, con la mirada ardiendo, contrayendo mivientreconfuerza—.Tienesquecogerlapiezadefrutademibocayyo,delatuya—meexplica,ycasigimocontansóloimaginarlo.

—Ahítenemospocafruta—leseñalo,conlarespiraciónconvertidayaenuncaos,arrancándoleunacarcajadasexy,ronca,oscuraydenuevosexy.

Enmudezcocuandoloveopincharuntrozodeperayllevárseloalabocay,sentadaeneltaburete,desdemiladodelabarra,inclinoligeramentemicuerpoparaacercarmeaélhastaunirmislabiosconlossuyos,metiendolalenguaensubocapararobarleelpedazodefruta.Gimocuandoconsulengualaretiraydenuevolabuscoymelallevoconotrogemidocolándoseatravésdemigarganta.

—Creoqueacabodedescubrirlamaneradeabrirteelapetito—anunciaconuna seriedad que lleva implícita la palabra «sexo» mientras yo mastico conrapidez.

—Esoparece—musito,pinchandountrozodemanzanayllevándomeloalabocacuandoyanoquedanrastrosdelapera.

Sintiendo mi sexo humedecerse, observo cómo inclina su cuerpo paraacercarse al mío, cómo atrapa mi cuello con una de sus manos para, casi alsegundo,estrellarsuslabioscontralosmíos,haciéndoseconelpedazodefrutaconunmovimientofluidodesulengua.

—Vaya—susurroadmiradamientrasélmasticadivertido.—¿Quépensabas,nena?—mepreguntapinchandootrotrozoyllevándoselo

alaboca,ysindilaciónalgunapegomislabiosalossuyos.Hundo mi lengua en su boca, inclinándome un poco más sobre la barra,

intentandohacermeconlafruta,perosulenguaesmásrápidaquelamíaymicuerpoesdébily,alfinal,terminogimiendo,olvidandomiobjetivo.

Page 164: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Punto para mí —me dice, alejándose de mi cuerpo, empezando amasticarlo.

—Ah,pero¿quevaporpuntos?—planteosorprendida.—Sitardasmásdelacuentaenhacerteconelpremio,leotorgaselpuntoal

otro.—Entonces voy a tener que marearte para poder remontar —le indico

humedeciendomilabioinferiorconlalengua,atrapandosuatenciónalinstante.—Creoqueacabodedemostrartequeyotambiénpuedomarearte;dehecho,

ha sido realmente fácil lograrlo—comenta socarrón, y lomiro haciéndome laofendida.

Sin dilación, pincho sobre otro trozode fruta queme llevo a la bocay, alsegundo, tengo sus labios contra los míos, besándolos y lamiéndolos conlascivia,ygimocerrandolosojos,sintiendomisexocontrayéndosey,cuandosulenguaentrafinalmenteenmiboca,reaccionohaciendoaunladoeltrozoparaalejarlo de la suya, soltando una carcajada cuando se hace con él con unmovimientorápido.

—Está claro que soy mejor que tú también en esto —afirma bravucón,pinchandosobreotraporcióndefruta.

Lentamentemeacercoasuslabios,besándolos,saboreándoloseinstándoleaabrirlosconmilenguay,cuandoaccedoasuboca,meolvidoapropósitodelafruta,demorándomeenlasuya,queseenredaconlamíamientras,apoyandomismanosenlabarra,meacercomásasucuerpo,queardecomoelmío,y,cuandoungemidoescapadesugarganta,mehagoconeltrozo.

—Meparecequeestavezelpuntoesparamí—musitoapartandoaunladoelplatode frutaparaempezara reptarpor labarrahastaquedar sentadasobreella, con su cuerpo encajado entremis piernas—. Estabas demasiado lejos—susurroenroscandomismanosentornoasucuelloyempezandoabesarlo.

—Y tú llevas demasiada ropa para este juego —musita, comenzando adesabrocharmelacamisamientrasyoloayudoadeshacersedesucamisetaentebesosygemidos.

—Tetocaati—lerecuerdo,consusmanosentornoamitrasero,pegandomisexoal suyo,duroyenorme,mientrasél se llevaotropedazode frutaa laboca.

Casirelamiéndome,acercomislabiosalossuyosconmilenguaaccediendo

Page 165: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

asubocamientrasunadesusmanos iniciaunrecorridoascendenteyardientepormispiernashastallegaramihúmedocentroalavezquenosbesamosconlujuriaylasciviay,cuandomehagoconlaporcióndefruta,sudedoseabrepasoenmiinteriorcondecisión.

—Pasodejugarmás,paratielpremio—mascullomasticandoconrapidez,rodeandosucinturaconmispiernas,gimiendoyechandolacabezahaciaatrásala vez que su boca se adueña de uno demis pechos, con su dedo entrando ysaliendodemiinterior,friccionandomiclítorisasupasoyllevándomedirectaalorgasmomásfulminanteyrápidoquehetenidonunca.

—Túeresmipremio—murmurallevandosubocaamisexo,barriéndolodearribaabajo.

—Diosmío,Víctor—gimo,moviendo las caderaspor inercia, reclamandootroorgasmo,ycuandollegaconviolencia,gritomásfuerte,sintiendocómomicuerposeconvulsiona.

—Voy a follarte muy fuerte, Val —me advierte; se desprende de susvaquerosysecolocaunpreservativoconrapidez.

Antes de que pueda llegar a contestarle, ancla sus manos en mis nalgas,hundiéndose con fuerza en mi interior, arrasando con cualquier pensamientocoherente que pudiera tener para sólo poder respirar mientras él bombea conenergía,entrandoysaliendoconmovimientossecosycerteros,ygimo,gritoeintento llenar mis pulmones de aire mientras él me mueve a su antojo,consiguiendoquemivista senublecuandoelorgasmo llegadenuevo, con suaullidollegandodistorsionadoamisoídos.

—Necesitoagua—musitocomopuedo,sintiendolagargantacompletamenteseca.

Sale de mi interior y noto cómo hasta la última célula de mi cuerpo loreclama, pero estoy demasiado sedienta para escucharlas y, cuando acerca elvasodeaguaamislabios,labeboansiosa.

—Nopiensovolveracomerfrutaenmividasinoesasí—ledigomuchomásrepuesta,guiñándoleunojomientraséldejaelvasoenlaencimerasindejardemirarme.

—No hemos terminado; te dije que iba a tenerte desnuda todo el fin desemana y voy a cumplirlo —me recuerda, cogiéndome en volandas yllevándomehastasuhabitación,paradejarmeallísobrelacama—.¿Lista?

Page 166: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Lista—afirmo,viendoelbrillodesumiradacrecerhastainundarconsuluzhastaelúltimorincóndeestaestancia.

Tal y como me ha prometido, nos pasamos toda la mañana en la cama,descubriéndonos,hablandoenocasionesybesándonosyllevándonosallímiteenotras, creando una burbuja en la que sólo estamos nosotros y todas estasemociones que, multiplicadas por mil, llenan nuestro pecho mientras vamoscreando nuevos recuerdos que se suman a los que creamos hace años,convirtiendoestoquesentimosenalgodemasiadograndecomoparapoderserignorado.

—Vamosatenerquecomeralgo—medicedivertidomientrasyocierrolosojos.

—Noquieromovermedeaquí—murmuro sintiendomicuerpodemasiadorelajadocomoparaponerloenmovimiento.

—¿No te apetece salir un rato? Podríamos ir a comer a algún sitio—mepropone,acariciandomiespalda.

—¿Conturopa?No,gracias.—Tieneslimpialatuya—meinforma,yalzolamiradahastaposarlasobrela

suya.—¿Mehaslavadolaropa?¿Cuándo?—preguntoextrañada.—Suelolevantarmemuytemprano—mecuentasonriendo.—Erestodounchollo,Vic:cocinasbien,eresapañadoencasayenlacama

te sales… Prométeme que, si alguna vez cambias de opinión, vendrás abuscarmeaNuevaYork—lepidotiñendomisúltimaspalabrasdetristeza.

—Ereslaúnicamujerconlaquequerríaintentarlo—afirmaconseriedad.—Siquisierasintentarlo,claro—musitoretomando,sinpretenderlo,untema

quehabíacerrado.—Val…—Lo siento, de verdad, me había prometido no volver a hablar de ello,

pero…—Tranquila, no pasa nada—me interrumpe, besando luego mi cabeza, y

cierro los ojos, con mi mejilla apoyada sobre su pecho y los latidos de sucorazónreconfortandoelmío.

Elsonidodesumóvilnossobresaltay,sindetenermeapensarenmisactos,melevantoparacogerloyacercárselo,peromedetengoensecocuandoveoel

Page 167: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

nombre de la señorita López en la pantalla y, endureciendo el gesto, se loentrego.

—Me parece que te reclaman —mascullo con los celos empezando anublarmelarazón.

Cogiendosucamisa,quehehechomía,salgodelahabitacióncubriendomicuerpoconella,negándomeaoírloquetengaquedecirle,tanenfadada,celosayfuriosa que, si pudiera, esta vez sería yo la que se liaría a puñetazos con elprimeroqueosaramirarme…omirarlo.

Salgo al porche necesitando calmarme y recuperar un poco el control y lacordura que noto que estoy perdiendo y, llenando mis pulmones de aire, mesientoenelúltimoescalón.

—Cuando renuncias a ciertas cosas en la vida, tienes en contraprestaciónotrasbiendistintas—mediceconseriedad,sentándoseamilado.

—Nohedichonada—mascullomanteniendolavistafijaenlosviñedosqueseextiendenfrenteanosotros.

—Pero lo piensas y, conociéndote, me tienes acojonado —me confiesamedio sonriendo—. Val, mírame —me pide sujetando mi barbilla entre susdedos, obligándome a girar la cara hasta unir mi mirada a la suya—. Estoycontigo,¿vale?

—Y,entonces,¿quéquería?—sueltocondureza.—¿Túquécreesquequería?—mepreguntaconseriedad.—Genial—farfullo entre dientes, dirigiendo de nuevo lamirada al frente,

sintiendocómotodoserevuelvedentrodemídetansóloimaginarlosjuntos.—Val, estoy contigo ahora, ¿vale?—se reafirma de nuevo—, y no voy a

acostarmeconotramujermientrasestemosjuntos.—¿Ycuándomevaya?Entonces,¿quéharás?—Esamismapreguntapodríahacértelayoati,¿noteparece?—replicacon

severidadestavezy,denuevo,oigoelnombredeMarcosinnecesidaddequelohayapronunciado.

—Teaseguroquenovoyaacostarmeconelprimeroquesemepongaatiro,siesoesaloqueterefieres—contestoenfadada,deseandodecirletantascosasquealfinaloptoporcallarmeyentrarenlacasa,puesnecesitoponerunpocodedistanciaconélycontodoestoquesientoquemeahoga.

—Val —me llama alzando la voz, siguiéndome y cerrando la puerta del

Page 168: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

porcheconunsonoroportazo.—Oye,séquenotengorazón,quenodeberíaestarenfadadaymuchomenos

celosa, pero no puedo evitarlo, ¿de acuerdo? Yo tampoco soy de piedra—leconfieso,bajandoeltonohastaterminarenunsusurro.

—Pues entonces ya sabes cómome siento yo cada vez que pienso que enNuevaYorkvasaencontrarteconeseitaliano—admite,apretandolamandíbula.

—¡Notienesderechoasentirteasí!—lerebatofrustrada,alzandolavoz.—¡Por supuesto que tengo derecho!—me grita—.Val, por favor…—me

pideestavezenunsusurro,yese«porfavor»encierrademasiadascosas—.Sóloquierolomejorparati.

—¿Y si lo mejor para mí eres tú? —le pregunto con un hilo de voz,empezando a temblar, viendo verdaderas tormentas en sumirada—. ¿Y simemarchoycometolamayorequivocacióndemivida?—leplanteo,sacandofueratodosmismiedos.

—Quedarteseríalamayorequivocacióndetuvida—sentenciatajante;alzolamiradaaltechoysientoquelaslágrimasempiezanafluir—.Nohasdejadodellorar desdeque estas aquí, ¿deverdadpiensasque estar conmigo es lomejorparati?—mepreguntaahoracondulzura,llegandohastamíparaabrazarme.

—Silloroesdeimpotencia,porqueestásciegoynoquieresdartecuenta—mascullocabreada,negándomeacorresponderasuabrazo.

—Eresmitodo,Val;quédateconeso.—Mientes. Si fuera tu todo, no me dejarías ir ni te acostarías con otras

mujeres cuando yo no estuviera; si fuera tu todo, lucharías contra esa partejodida tuya hasta hacerla desaparecer. No vuelvas a decirme que soy tu todocuandonoesverdad—leexijo,zafándomedesuabrazoyencerrándomeenelbaño;estaveznomesigue,dándomeelespacioquenecesitooquizádándoseelsuyo.

Salgomediahoradespués,trashaberlloradoverdaderascataratasderabiayfrustración,y,trasbuscarloporlacasa,loencuentrosentadoenelporche,enelmismoescalónenelqueestábamosantesy,porlaposturadesucuerpo,percibolamismafrustraciónquesientoyo.Sindecirnada,mecolocoasulado.

—Tequiero,Val—meconfiesa con lavozcargadademilesdematicesy,sorprendida,mevuelvohaciaélsintiendocómotodotiemblaanuestroalrededor—.Te quise como se quiere a una hermana pequeña a la que eres incapaz de

Page 169: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

negarlenada,ytequieroahoradeunamaneraquenoséexplicar,deunamaneraque va más allá de cualquier palabra… —añade, guardando a continuaciónsilencio, llevandosumiradahacia losviñedos—.Ayermedijisteque tusueñoera convertirte en la mejor top model del momento, ¿de verdad crees quepermitiríaque renunciarasa tu sueñopormí?—mepregunta seco,yentoncesrecuerdolaconversaciónquemantuveconMarcoysientocómotodotiemblaunpoco más—. Dices que no tengo derecho a estar celoso de ese italiano —mascullaentredientes, levantándose,yendohastaelprimerescalónydándomelaespalda—,yyotedigoqueteequivocas—siseaapretandolospuños—.Eresmía,Val, lofuistedesdequeteencontréllorandoenelviñedo,peroquesientaqueloeresnosignificaqueloseasrealmente,porquetúnoeresdenadie,sólodetimisma—declara,volviéndose,ycaptocómolatormentasedesencadenaensumirada—.Nome digas que no tengo derecho a sentirme celoso cuando estoyrenunciando a lo quemás quiero y posiblemente entregándoselo en bandeja aotrotío,ynomeculpesporintentarllenarhuecoscuandotúnoestésporquesóloestaré haciendo eso, tratando de llenar un puto hueco que en realidad nuncallegaráacubrirse—masculla;segiradenuevoyempiezaaalejarseendirecciónalosviñedos.Contemplocómosemarchasiendoincapazderebatirlenadanidemoverme mientras siento cómo pierdo el equilibrio y las lágrimas llegan denuevo,amargasycargadasdefrustración.

Page 170: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO13

Lloro abrazada a mis piernas, con la cabeza oculta entre ellas, hecha uncompleto lío,puesunapartedemí sabeque tiene razónyquemi lugar ahoraestáenNuevaYork,mientrasqueotra,laquedavozalosdeseosdemicorazón,rebate cada una de ellas, puesmi lugar está con él, en esta casa y estudiandoenologíaentreviñedos,noduranteloscastingsolosdesfiles.

—Mi lugar siempre estará donde esté el tuyo—musito enunhilo de voz,dejando que esos deseos tomen el control de mis palabras y, secando mislágrimas,contemplolosviñedospordondeélhadesaparecido,levantándomeydirigiéndomehaciaallíacontinuación.

Siento la tierracalienteporel solacariciar laplantademispies, sus rayosabrazarmicuerpoymialmaguiarmispasosy,cuandoloveodepie,dándomela espalda y rodeado de vides, me acerco a él, dejándome llevar por lo quesiento.

—Yo también te quiero—musito, consiguiendo que se dé la vuelta. Veocómoposasumiradasobrelamíaydescubrolatormentaensupuntomásálgido—. Te quise como se quiere a un hermano mayor y te quiero ahora de unamaneradifícildeexplicar—continúo,pegándomeaél,enlazandomismanosentornoasucuelloyacariciandosupielmientraslassuyaspermanecenestáticasaambosladosdesucuerpo—.Siempretehequerido;inclusocuandomefuiyteodiaba,unapartedemícontinuabaqueriéndote.Notementícuandotedijequeduranteestosañosevitéencontrarmecontigoporquenosoportabaverte,perosíomitídecirtequetambiénlohacíaporqueteníamiedodeenfrentarmeatodoloquesabíaquecontinuabasintiendoporti—susurroenterrandomismanosensu

Page 171: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

pelo,consumiradasosteniendolamía—.Noséquédebohacer,perotengounasemana para decidirlo y desde luego que será una decisión mía, no tuya. Sidecidoquedarme,seráporqueloquetengoaquípesamásqueloqueencontraréoviviréenNuevaYorky,siporelcontrariodecidomarcharme,seráporquemissueñosde convertirme en topmodel pesaránmás que todo esto—le digo conseriedad—,ydecidaloquedecida,túnotendrásnadaqueobjetar,porqueesmivida,Víctor,y,simeequivocooacierto,serácosamía,nuncatuya.

—Val…—No, Víctor —lo interrumpo antes de que pueda rebatirme nada—. Tú

vivesyhasvividotuvidacomomejorhascreído,déjameamíhacerlomismo;noquierasdecidirpormí,porquesóloyoséloquequieroyloquesiento…Oye,¿porquénovivimosestasemanacomosiestuviéramosalprincipiodeunlargocamino?

—Porquehayunaintersección—replicaconvozgrave.—Perono la estamosviendo—replicoconvencida,provocandoque sonría

—.Tequiero,Vic—musitoacercandomislabiosalossuyos,deseandocalmarlatormentadesumiradamientrasélsemantieneensilencio,ysonríoconmislabiospegadosalossuyos.

—¿Porquésonríes?—mepreguntaserio,sincorresponderamibeso.—Porqueyanovasadecirmemásvecesquemequieres—afirmoconuna

tristesonrisa—,porquecreesque, si lohaces,querréquedarme,¿verdad?—lepreguntonegandoconlacabeza.

—Chicalista—musitaconvozronca,atrapandomimiradaconlasuya.—Tuveunbuenmaestro—prosigo,sosteniéndosela.—Y, en ocasiones, el alumno supera al maestro—susurra con sus manos

apresandomipielpordebajodelacamisa—.Sabesloquesiento,Val.—Puedequequieraoírlomuchasveces.—Ypuedequeyoquieraquemehagascaso—merebate.—¿Vamosavolveradiscutir?—planteoarrugándolelanarizyseparándome

ligeramentedeél.—No,novamosahacerlo,nosvamosacomer—medice,dándomeuntoque

enlanarizconsudedoíndice,sonriéndomefinalmenteytendiéndomesumano,queaferroconfuerza,enlazandosusdedosconlosmíos,conlosviñedoscomoúnicostestigosmudosdenuestropacto.

Page 172: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Caminamos sin soltarnos a través de las filas de vides y lo estudio ensilencio, demorándome en su perfil, en su ceño ligeramente fruncido, en lasarruguitas que se forman alrededor de sus ojos, en su nariz recta, en su barbarecortada,ensuslabiosperfectamentedefinidosyenlafuerzaqueemanadeélsin que sea consciente de ello, y siento que todo esto que llena mi pecho seexpandeunpoquitomásmientrasreconozcoalVíctorquevidepequeña,alqueempecé a ver hace unos años y al que descubrí ayer, y en ninguno de ellosconsigo encontrar a eseVíctor «jodido» del que habla, pero opto por callar ydejarreposartodoestoquesiento,sabiendoqueladecisiónquetomecambiarámividay,quizá,lasuyatambiénparasiempre.

Tras arreglarnos, nos dirigimos aHaro a comer y, cuando suenaBedsareburning,suboelvolumen,sonriendoabiertamente.

—Me encanta esta canción —exclamo alzando la voz para hacerme oír,consiguiendoqueélsonríaconmigo.

—Losé—mediceguiñándomeunojo,subiendomáselvolumenmientrasmerecuestoenelasientosindejardesonreír,viendolosviñedospasarvelocesatravésdelaventana,yempiezoacantarlaavozengritoy,cuandoélseuneamí,lomiroembelesada,sintiendocómotodosevuelvemásbrillanteymásllenodevidaanuestroalrededor,reteniendoestemomentoenmimemoria,que,sinsaberporqué,sientoperfecto.

Llegamos al restaurante yme sorprende cuandome coge de lamano «enpúblico»,porloquemironuestrasmanosenlazadas.

—¿Temolesta?—mepreguntaobservándolaséltambiénmientraselmaîtrellegahastadondeestamosnosotrosynos indicaque lo sigamos.Durante esosminutos, guardo silencio intentando poner un poco de orden a todo esto queestoy sintiendo—. Contéstame—me ordena con seriedad una vez estamos asolas.

—Meencantaquemecojasdelamanoymeencantaríadejarlebienclarodeuna vez a la señorita López Zapatos de muchos centímetros que no estásdisponibleyque,comovuelvaallamarte,vaatenerunserioproblemaconmigo—suelto,arrancándoleunasonrisaqueno le llegaa losojos—.Pero túereselsociodemipadreynoquieroempezaradarexplicacionescuandonotengoniideadeloquevaasuceder.Túnoquieresvolveradecirmequemequiereshastaquenotomeunadecisiónyyonoquierohacerpúblicoalgoquenoleincumbea

Page 173: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

nadiehastaquelahayatomado…Dimequeloentiendes—concluyo,intentandoindagarensumirada.

—¿LlamasasíaCova?—mesueltadivertido.—Cova…—mascullohaciendounamueca,percatándomedequenomeha

respondido—.Tienesuertedequenolallamedeotraforma.—Val…Esbuenachicayhacebiensutrabajo.—¿Quétrabajo?¿Eldelaoficinaoeltuyo?—replicoconsarcasmo.—Val…—mediceamododeadvertencia.—Vale, lo siento, me he pasado, perdona —me disculpo avergonzada,

conscientedequemehepasadonounpueblo,sinomuchos.—Oye,nodeberíasestarcelosadeCovanidenadie; te lohedicho,nunca

ningunamujersehaacercadotantoamícomotú.—¿Yhahabidomuchasmujeres?—inquieroenunsusurro,sinpoderfrenar

milengua.—¿Yesoquéimportanciatiene?—meformulaarrugandoelceño.—Nolosé;curiosidad,supongo—musitoencogiéndomedehombros.Yamevale,debodedisfrutartorturándome,porquevetetúasaberparaqué

lechesnecesitosaberyoeso.—¿Has estado tú con muchos hombres? —contraataca, apoyando sus

antebrazossobrelamesayclavandosuintensamiradaverdesobrelamía.—Dependedeloqueentiendaspormuchos,yyohepreguntadoprimero—le

contestoguardandosilenciocuandoelcamarerollegaconlascartas.—¿Quéesparatimuchos?—cuestiona,ojeándola.—Nolosé…¿másdediez?—¿Te has acostado con más de diez tíos? —farfulla con voz acerada,

levantandosumirada,oscurecidaahora,delacarta.—¿Y qué si lo hubiera hecho? —replico poniéndome a la defensiva,

frunciendoelceñoydesfrunciéndolocuandoposasumiradasobreél—.No,nolohehecho—admitofinalmente—.¿Ytú?

—No llevo la cuenta de las mujeres con las que me acuesto. De todasformas,mivida es distinta a la tuya; te lohedicho antes, cuando renuncias aciertascosas,obtienesotrasacambio.

—Sexo,sexoymássexo,¿verdad?Osea,quetúsíquepuedesacostarteconmás de diez tías, pero yo no. Eres un pelín machista, ¿no te parece? —le

Page 174: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

recrimino.—No es eso, Val, y lo sabes —me dice con seriedad—. Contesta, ¿con

cuántostíostehasacostado?—insistesinresponderamipregunta.—Concuatro;seguroqueconmuchosmenosquetú.—Noescierto,porqueyonomeacuestocontíos—rebatesocarrón,ysonrío

finalmente,poniendo losojosenblanco—.Marco,yo…¿yquiénes fueron losotros dos? —indaga con curiosidad, y de nuevo callamos cuando llega elcamareroparatomarnosnota.

—Unmodeloyunfotógrafo—leconfiesoalfincuandoestamosdenuevoasolas.

—¿Yeraispareja?—No —musito sonriendo, y sonriendo un poquito más cuando, con la

mirada,meinstaaseguir—.Novasaentenderlo—añadofinalmente,negandoconlacabeza.

—Pruebaaexplicármelo—insisteconseriedad.—Hayvecesquelalíneadeloqueescorrectoonosedesdibujahastallegar

adesaparecer…Posasconpocaropa,fingesquetegustatucompañeroporqueesloquetereclamaelfotógrafooinclusotienesqueseducirloaélporqueesloque te pide…Aveces, si no haymucha gente alrededor, se crea un ambientemuyíntimoy,sinotienescompromisosyluegote invitaacenar,sabesloquehayyentumanoestáaceptarloono.

—Ytúaceptaste.—Unavezconelmodeloyvariasconelfotógrafo,yporquemegustaban.Si

los hubiera conocido en una fiesta, tambiénme hubiera acostado con ellos; laúnicadiferenciaesquelosconocícurrando.Ciro,elfotógrafo—leaclaro—,esun tío conmuchísimo talento ymuchas veces es él quien te seduce a ti—leexplico, mordiéndome la lengua al ver su expresión—. Tú mismo te hasacostadocon la señoritaLópezyesa líneasehadesdibujadounpoco tambiénparati—medefiendo,aunquesinsaberniporquéestoyhaciéndolo.

—Laúnicadiferenciaesqueyotrabajoconlaropapuesta.—Y yo también, no olvides que mi trabajo es ser la percha de los

diseñadores —le recuerdo, sintiendo cómo el ambiente se vuelve tenso derepente.

—Yposarconpocaropaparafotógrafosquetepidenquelosseduzcascon

Page 175: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

lamirada—puntualizaentredientes.—Sí,yavecestambiénmepidenquelessonríaconlamirada,sinmostrar

los dientes, siendo sensual, niña y agresiva a la vez, además de un poquitoprovocativa…pruebaahaceresacara—lepidointentandoaligerarelambiente,quesientoquesepuedecortarconuncuchillo.

—Niidea.Estutrabajo,Val,noelmío—mecontestaconfastidio.—Yahoratehascabreado—musitososteniéndolelamirada.—Joder…Perdona—seexcusaenterrandosusdedosenelpelo—.Supongo

quenomegustaimaginarteconpocaropaseduciendoanadie.—Esmitrabajo,Víctor,ynosiempremepideneso.Dehecho,hayvecesque

tengoqueponercarademalaleche…Dependedelacampañaydeloquetengaquevender—susurro—.Oye,sitemolesta,notecontarénadademiprofesión,peroduranteestosdíasnoquieromalosrolloscontigo,¿vale?

—Noeseso…Losiento—medicerodeandomimanocon lasuya—.Porsupuestoquequieroquemelocuentes,aunquemecabreeynotengarazónparahacerlo.

—Nodeberíascabrearte,porquenuncanadiesehaacercadotantoamícomotú—leconfieso,haciendomíassuspalabras.

—¿NisiquieraMarco?—Ni siquiera Marco—afirmo, reconociendo los miles de emociones que

aleteanenmipechobrillarensumirada—.Mira,estáclaroquehayaspectosdemividaquetehacensentirincómodoyquehaypartesdelatuyaqueamímemolestan, pero es nuestra vida y la que hemos elegido y vamos a tener querespetarlas—musito con seriedad—, pero podemos hacerlas a un lado, fingirquenoestánahíyvivirestasemanasiendosólonosotros.¿Quémedices?¿Nosolvidamos de los fotógrafos y de las señoritas López hasta el día de lapresentación?

—¿Estufechatope?—mepregunta,alejandosumanodelamía.—Sitengoqueirme,nopuedoalargarlomás…Deboirmedosdíasdespués.Dehecho,estoycruzandolosdedosparaquenomellamemibookerdurante

estosdías—lecuentomientraselcamareroponefrenteanosotroslosplatosconlacomida.

—¿Ysiempretienesqueestardisponible?—inquiereconseriedad.—Siemprey, sivoyaNuevaYork,voya tenerqueestarlo lasveinticuatro

Page 176: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

horasdeldía;esunrequisitoquemehandejadoclaroyqueheaceptado.—¿Lasveinticuatrohoras?—suelta,asombrado.—Lasveinticuatrohoras—leconfirmo,sonriendo—.Serunamodeloenla

GranManzananosepareceennadaaserloenEspañauenotrospaíses;allíestubookerelqueteordenaqueestésavailabletodoeltiempoyeséstequienpuederescindir tucontrato la segundavezque rechaces ir aver auncliente, aunquealegues estar ocupada; simplemente no puedes salirte de la cadena de trabajo,porque,silohaces,dejasdefacturaryesoesalgoquenopuedespermitirtesinoquieresquelaagenciarompatucontrato.

—¿Yquiereseso?¿Quieresvivirasí?¿Sinvidapropia?—Séquedeentradapuedeparecerduro,yloes,peroteaseguroqueresulta

unmundofascinante,Víctor.Siconsigosobrevivirenesemardetiburonessinpermitirquemecoman,puedollegaralacrestadelaolayestoyseguradeque,desde allí arriba, todo tiene que vibrar de forma distinta y ser mucho másbrillante—lecuentoconlaemocióntiñendomispalabras.

—Séquepuedesconseguirlo,Val.Sólotepidoquenopierdaselequilibriocuandolleguesaesacrestadelaola—meaconseja,sinsaberqueeseequilibriodel que me habla sólo lo tengo cuando estoy cerca de él y, durante unossegundos, siento que navego sin rumbo, sin saber cuál esmi puerto seguro nicuálessonmisdeseos.

Elsonidodesumóvilmesacademispensamientosysuspirosuavemente,deslizandomimiradaporellocal,deseandoquenoseaotramujer.

—¡Hola, Pedro! ¿Qué tal estás?—oigo que dice cuando descuelga, y mevuelvoconrapidezparamirarlo.

—¿Mipadre?—vocalizoensilencio,yasientemientrasescuchaloqueestádiciéndole.

—Por supuesto, cuenta conmigo; ya me perdí una barbacoa y no voy aperdermeotra—acepta sonriendo, y abro losojos comoplatos. ¡Vengaya!—.¿Val irá con una amiga? —le pregunta sonriendo todavía más, supongo quecuando mi padre se lo comenta—. Perfecto, así la conoceré yo también —prosigue,y ledoyunapatadapordebajode lamesa—.Graciaspor invitarme,nosvemosmañana—sedespideantesdecolgar.

—¿Tú estás tonto? Sabes de sobra que no hay ninguna amiga y, porsupuesto,quenovoyair—leaseguromientrasélmemiradivertido,empezando

Page 177: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

acomer.—Porsupuestoquevasair—merebate,convencido.—Oye,creíaqueíbamosaestartodoelfindesemanaentucasa—mascullo

molesta.—Val,novamosadarleplantónatupadrelosdos.—Parecequeelhijoseastú—lerecrimino.—Enmuchosaspectos,hasidomipadre—afirma,ylomirodeseandoque

continúehablándomedeél.—¿Aqué te refieres?—pregunto cuando calla, intentando indagar en esos

dieciochoaños.—Anada.Venga,empiezaacomer—mepide,cerrándoseenbanda.—¿Te das cuenta de que nuestras conversaciones pueden llegar a sermuy

frustrantes?—Estás olvidando que has sido tú la que me ha propuesto que hagamos

nuestravidaaunladoparavivirestasemanasiendosólonosotros.—Ytúescuchassóloloquequieresescuchar;estáclaroquemereferíaatus

mujeres—ledigoexasperada.—Val,yonotengomujeres—mecontestacondescendiente,conunamedia

sonrisa.—¡Yasabesloquequierodecir!—mascullo,cruzándomedebrazos.—Val, hay parcelas de mi vida que prefiero no compartir con nadie, ni

siquieracontigo;creíaqueestabaclaro.—Pero¿porqué?—inquiero,frustrada.—Porqueesmidecisiónyvasa tenerque respetarla comoyo respetaré la

tuya—merebateconseriedad.—¿Yquépretendesque ledigaamipadrecuandomepresente sola?—le

pregunto,tragándometodoloquesientoyloquelediríasipudiera,retomandola conversación que estábamos manteniendo antes sobre la barbacoa con mipadre.

—Estoysegurodequeseteocurriráalgo—seburla,guiñándomeunojo,ylomiroconseriedad.

—Seguro que sí —farfullo finalmente, empezando a marear la comida,sintiendoquetodoestoquellenamipechoquedadenuevosuspendidoenél.

—Val…—Alzolamiradahastaposarlasobrelasuya—.Sabestodoloque

Page 178: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

tienesquesaberymeconocesmásquenadie,¿notevaleconeso?—meplantea,y asiento finalmente, cansada de estas conversaciones que no nos llevan aningúnsitio.

Y,aunquenoscuesta,alfinalconseguimoseliminarlatensiónquepareceircaminando silenciosa a nuestro lado, lista en cualquier momento parainterponerseentreambos.

—¿Quieresqueveamosunapelícula?—mepreguntacuandollegamosasucasa,ylomiroempezandoasonreír.

—¿Una película? ¿En serio?—le formulo acercándome a él sin dejar desonreír.

—Sí,enserio—meresponde,mirándomedivertido.—Laverdadesquenomeapetecemucho—musitoempezandoaquitarmela

camiseta—.¿Yati?—¿Vasamarearme?—Esoestoyintentando—susurrocomenzandoadesabrocharlosbotonesde

sucamisa, llevandomis labiosa supechoyprovocandoqueun suave suspiroescapedeentresuslabios—,¿loestoyconsiguiendo?

—Sabes de sobra que sí —afirma con voz ronca, estrellando sus labioscontralosmíosyhundiendosulenguaenmiboca,quelarecibegustosa.

Mepegoasucuerposintiendoelsuyo,deseandosentirsualmaabierta,talycomo la sentí ayer, y dejando que sea la mía la que le muestre el camino,guiándolo entre besos, gemidos y silencios cargados de palabras, permitiendoqueseasucuerpoelquemantengaenequilibrioalmíoydeseandoecharelfrenode mano para poder detener el tiempo, que corre demasiado rápido cuandoestamos juntos,ansiandoatesorarenmicorazóncada instante,cadasensación,cadaemoción,cadasuspiro,cadarisa,cadajuegoycadatodo,queconéltomaunsignificadoespecial.

***

—¿Qué he escrito?—le pregunto mientras yacemos en la cama, con misdedosdibujandotodoloquesientoporél.

—No lo sé—memiente sonriendo—, escríbelo otra vez—me pide, y denuevotrazosobresubrazolafrase«tequiero»—.Continúosintenerloclaro—memiente otra vez, con una sonrisa socarrona, y me incorporo hasta quedar

Page 179: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

sentada—. ¿Te huevo?—insiste cuando lo escribo nuevamente, mientras unatontasonrisaseperfilaenmirostroy,acercandomislabiosasubrazo,loescriboconlalengua,delineandounhúmedotrazoporsupielyviendocómoseleerizaycómosumiradasellenademilesdeemociones.

Yduranteunafraccióndesegundo,sientocómomialmatiembla,puespornadadelmundoquieroperderestaintimidadquenadatienequeverconelsexoyestacomplicidadqueesimposibledeexplicar.

—Val…—musita, placándome con su cuerpo, y lo miro percibiendo quetodoestoquesientoyquebrillaensumiradanosenvuelveconfuerza,con lafuerzadelossentimientosquesondeverdadyconlafuerzadelquererapesardetodo.

De la cama pasamos a la bañera, donde, sumergidos en ella, hablamos detodoydenada,ydondelossilencios,enocasiones,seinterponendensosentrenosotroshastaqueunodelosdoslorompeytodovuelveafluirconnormalidad.

—Hoy voy a preparar yo la cena —le propongo, guiñándole un ojo ysaliendodelagua.

—¿Sabescocinar?—Por supuesto.Aunque nome guste, se supone que tengo que cuidarmi

dieta,asíquenotuvemásremedioqueaprender.Además,desdequehepuestounpieenestacasa,parezcounaseñoritinga,dejandoquelohagastútodo—leindico,sonriéndoleconcomplicidad.

—Eresmiinvitada,noquerrásquetepongaalimpiarelpolvo—mecontestaserio.

—¿Sólosoytuinvitada?—lepreguntoenvolviendomicuerpoconlatoallaysentándomeenelbordedelabañera.

—Sabes de sobra que eres mucho más —contesta, anclándome con sumirada.

—Me alegro, porque eso de «invitada» suena a despedida —puntualizo,haciéndoleunamueca.

—Bueno,esunaopciónqueestáahí—replicaconsequedad.—Peroquenocontemplamosdemomento, ¿verdad?—planteo, indagando

ensumirada,quesemantieneinexpresiva.—Verdad. Venga, vamos a ver qué sabes hacer —me contesta sonriendo

finalmente,levantándoseycogiendolatoallaqueletiendo.

Page 180: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Deberíasirdesnudotodoeldía—sueltocuandocubresucinturaconella,provocandoquemantengalasonrisaensurostro—,estásdemasiadobuenoparairvestido—añado,arrancándoleunacarcajadayacercándomeaél.

—Tútambiénestásmuybuenayjustoporesotequierovestida—meindica,y lomiro extrañada, sin entenderlo—.Nena, si fueras desnuda por casa, seríaincapazdepensarenotracosaquenofueraenfollartecontinuamente.

—Yalohaces,nohemosdejadodehacerlo—lerectifico,mordiendosulabioinferioryempezandoaencenderme.

—Medijistequeteconvencierayesoestoyhaciendo—meaclaraconlavozcargadademilesdematices,correspondiendoamibeso.

—Parecequetelodijehaceunaeternidady,encambio,fueayer…—musitoperdiéndomeensumirada,embravecidaahora—.Ayerqueríamarcharmeyhoynoséquéhacer—leconfiesoenunhilodevoz.

—Tienes una semana para decidirlo; piénsalo bien, Val, porque luego nohabrámarchaatrás.Tu trabajorequiere juventud, laque tú tienesahora,yeso,cuandosepierde,noregresaparadarteesaoportunidadqueperdiste.

—Ya lo sé—susurropegandomi frentea la suya—.Ojalá todo fueramásfácil.

—Estanfácilcomoirte—measeguraconvencido.—Paramínoloes—lerebatomolesta.—Esoesporquenomehacescaso.—Exacto, y porque serámi decisión, no la tuya—sentencio, saliendo del

bañoseguidaporél.—Estástonta—mededicamediosonriendo.—Yyopensandoqueeraunachicalista—lerecuerdo,enarcandounaceja,

volviéndomeparamirarloantesdeponermedenuevosucamisa.—Queenocasionesdejadeserlo—contraataca,enfundándosesusvaqueros.—Bueno,estupercepción,nolamía—replico,levantandoelmentón,antes

desalirdesuhabitacióndirectaalacocina.—Y,mi chica lista, ¿qué va a hacer para cenar?—me pregunta socarrón,

sentándoseenunodelostaburetesdelabarra.Lomirocomiéndomeloconlosojos;sólollevalosvaquerospuestosyestá

milvecesuffff.—Puesnosé…Averquétienesporaquí—ledigoabriendoelfrigoríficoy

Page 181: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

husmeando en él—. ¿Te apetece algo en concreto? —le pregunto dándomemediavueltaparamirarlo.

—Sí, tú, todoel tiempo—me regala, acompañandoel comentarioconunasonrisalobuna—,perocenaréloquetúquieras.

—Bueno…luegopodemoscenarnosdenuevo—lepropongo,guiñándoleunojo.

—Me gusta esa idea —musita, devorándome los labios con la mirada yarrancándomeunaluminosasonrisa.

Ydenuevo sientoque la intimidadnos envuelve, quenos entendemos sinnecesidaddeutilizar laspalabras, que todo fluye comoel aguadeun ríoque,cuando nace, encuentra su camino sin que nadie tenga que mostrárselo y,mientraspreparo la cenaymás tarde ladegustamos, entiendoqueuna sonrisapuede encerrar mil frases distintas, que un silencio puede mover un mundoenterodesentimientos,queunroceintencionadopuedeconseguirquetupielseericeytuinteriorardayqueunamiradapuedelograrquetupechosehincheconmilesde emociones, porque eso es la intimidad…Es abrirte ypermitir que elotroseabra,esmostrartetalycomoeressinnecesidaddecubrirteconnada,esentregarteycogeramanosllenasyesentonarlamismamelodía,esaquesuenaúnicamentecuandoestáislosdosjuntosyquenadie,aexcepcióndevosotros,escapazdeescuchar,porquesólovosotrossoiscapacesdereconocerlosespacios,lossilenciosy los tonosaltosy losbajos,porqueesamelodíaes lacancióndevuestravidaydevuestrosrecuerdos.

Page 182: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO14

—Mevoyyoantes,¿vale?—lepreguntomientrasacabodevestirme—.Asímedatiempoacambiarme—añadoposandomimiradaenlassábanasrevueltasquelocubrendecinturaparaabajo.

—Yyoquecreíaquellegaríamosjuntosdelamano—medicesocarrón,sinperderseningunodemismovimientos.

—Yo también creía que íbamos a pasar todo el domingo en tu camay, encambio, vamos a comer con mi familia —protesto, haciéndole una mueca,mientras él hace a un lado la sábana que lo cubre y se levanta con unmovimientofluidoquecasiconsiguequesemedetengaelcorazón—.Mevoyonosaldrénuncadeaquí—farfullo,obligándomeaponermeenmarchaysalirdeldormitorio.

—Espera—me ordena con voz ronca, atrapandomi brazo con sumano ypegándomeasucuerpo,paracasialsegundoestrellarsuslabioscontralosmíos,consiguiendo que mi cabeza comience a nublarse—. Voy a echar mucho demenospodertocarte.

—Y yo poder besarte —musito enterrando mis dedos en su pelo, con larespiraciónconvertidayaenuncaos.

—Tenerte sólo para mí —prosigue, mordiendo mi labio, enterrando susdedosenmipelo.

—Tenertesóloparamí—murmuroperdiéndomeensumirada.—Quitartelaropa…—Ysentirtupielrozandolamía…—susurroterminandolafraseporél.—Hundirmedentrodeti—gimecontramislabios.

Page 183: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Sentirtedentrodemí—gimocontralossuyos.—Joder,Val—siseacontramiboca—.¿Siemprevaaserasí?¿Nuncavamos

atenersuficiente?—Nunca…—murmuroentregemidos,intensificandoelbeso.—Quiero que me marees mucho cuando acabemos de comer. Ve

inventándoteunabuenaexcusaparaquepodamoslargarnoslosdos—mepide,llevándomehastalapared,dondemeaprisionaconsucuerpo.

—¿Meestásincitandoamentir?—inquierosindejardebesarlo,sintiendosupotenteerección.

—Sí,joder,esoopoderfollarteentucasacuandonopuedamás.—Creoquemejormiento, sólo faltaríaquenospillaraCasiomipadre—

sueltosonriendocontrasuslabios.—Noséquéseríapeor—prosigue,sonriendoconmigo.—Tengoqueirme—medespido,empezandoaalejarmedeél,echándolode

menoscuandotodavíalotengofrenteamí.—Vamos, te acompañohasta lapuerta—meseñala, cogiendomimano,y,

cuandoestamosfrenteaella,nossonreímosconcomplicidad—.Teveoennada.Sincontestarle,salgodesucasaconunasonrisaresplandecienteenelrostro,

sonrisaquenoborroen ladistanciaquehaydesdesuviviendahasta lamíay,cuandoaccedoalacocina,porlapuertatrasera,meencuentroaCasitrajinandoentrefogonesyamihermanaayudándola.

—Buenosdíasssss—lassaludo,obligándomeanosonreírtanto.—Dimejorbuenosmediodías—merectificaAlana,guiñándomeunojocon

complicidad—.Québienteveo,hermanita.—Gracias, tú tampoco estás nada mal —le indico acercándome a ellas

sonriendofinalmentedeorejaaoreja.—Hola,hija.¿Quétalhaidoesefindesemana?—inquiereCasisindejarde

prepararloqueseaqueestéhaciendo.—Québienhuele,Casi.¿Estáshaciendonatillas?—lepregunto inspirando

eloloravainillayacanelaqueimpregnatodalaestancia.—Sí.Todavía te gustan, ¿verdad?, porque, comome sueltes que ya no las

comesporqueengordanoporquehandejadodegustarte, te juroquemerindocontigo—medicevolviéndoseparamirarme.

—Sí,todavíamegustanyvoyacomermeunaodos,asíquehazdesobra—

Page 184: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

lecontesto,intentandoarreglarlodelosúltimosdesayunos.—Sitecomesdosnatillas,memarcounajota—bromea,haciéndomereír—.

¿Ytuamiga?¿Cómonohavenido?—planteavolviendoasulabor.—Eso, ¿por qué no ha venido tu amiga? —me chincha mi hermana, sin

poderdejardesonreír.—Su abuela se ha puesto enferma—miento, intentando ponerme seria—.

Nadagrave,peroqueríaestarconella—continúo,encogiéndomedehombros,esforzándomeporserlomásconvincenteposible.

—Quémaja,¿no?—comentaAlanaconpuñeteríay,aprovechandoqueCasinonosestámirando,ledoyunpisotón.

—¿Tú no vendrías a verme si me pusiera enferma? —le preguntodescargandotodomipesoensupie,provocandoquemedéuncodazoamododerespuesta—.¡Ahhhhh!

—¿Quéhacéis?—nosriñeCasi—.Dosminutosjuntasyyaestáispeleandocomocuandoeraiscrías.

—Tía,quecasimelasrompes—protestollevandomismanosalascostillas.—Sínoseteharotootracosaestefindesemana,novanarompérsetelas

costillasporuncodazodenada.—Peromiraqueeresidiota—ledigosonriendofinalmente.—¿Sepuedesaberdequéhabláis?—Denada,Casi.Voyacambiarme.—¡Espera, que te acompaño!—propone mi hermana, siguiéndome, y me

vuelvoparahacerleunamueca—.Quierosaberlotodo.

—Nopiensocontártelotodo—lecontestoentrerisas,llegandohastamihabitación.

—¿Porqué?—Puesporqueno,porquehaycosasquesonnuestrasyyaestá.—Está bien, los fluidos y los gemidos los dejamos fuera —acepta,

arrancándomeunacarcajada,mientrasmedesprendodemiropaymedirijoamiarmario.

Me visto sin dejar de parlotear con ella, con la felicidad vibrando a mialrededor,esaqueavecessientesquepuedestocar,comoesedeseoenformadenubequepercibesflotandoenlapalmadetumanoyqueenocasionesrozatu

Page 185: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

piel,produciéndotecosquillas.—Siempreoshabéisquerido;deunaformauotra,esesentimientosiempre

ha estado ahí, y esto era algo que iba a terminar sucediendo en cuanto él loaceptara.

—Ya,peronoestanfácil,Alana.SesuponequemevoyaNuevaYork—ledigoomitiendotodoloqueélmecontósobresímismo.

—Pero ¿tú quieres ir?—Yde nuevo esa pregunta y el sentirme entre dosaguas…

—Nolosé.Simevoy,lopierdo,ysimequedo,pierdounapartedemí.—¿Ynopuedesirteyestarconél?—No…Noquierequemesientaatada,entreotrascosas.—Ya…¿Yquéteaconsejaél?—Quememarche.—MuypropiodeVíctor.—¿Quéhago?—lepidoconsejo,sentándomeasulado,enmicama.—Loquetepidaelcorazón;escúchalo,piensaencómoseríatuvidasinél

enNuevaYork y luego imagínala aquí junto a Víctor, haciendo a un lado tusueñodeconvertirteentopmodel.Ladecisiónquemásteduelaseráelcaminoquenodeberástomar.

—¿Ysimeduelenambas?—formuloenunhilodevoz.—Entoncesesquenoestásescuchándolobien.Eliminaelruidodetuinterior

ycéntratesóloeneso.Silohacesbien,habráunadecisiónquetedolerámásquelaotra—argumentaconseriedad—.Paramítampocofuefácilmarcharmedelaempresa cuandomi carrera estaba yendo tan bien, y te aseguro que no habíanada que me aterrorizara más que empezar por mi cuenta, pero me asustabamuchomásacomodarmeyarrepentirmemástarde;nolohagas,nohagasnadadeloquepuedasarrepentirteenunfuturo—meaconsejaconcariño.

—Mi cabeza me dice que me marche—musito sintiendo cómo, con mispalabras,mialmatrastabilla—,peromicorazónmepidequemequede.

—Esunadecisión tuya,Valentina, sólo túpuedes saber aquién tienesqueescuchar—afirma—.Venga, acaba de arreglarte, se está haciendo tarde—meapremia,levantándose,dándomeunbesoysaliendodemicuarto.

Me maquillo pensando en las palabras de mi hermana mientras laimpaciencia se cuela entremis pensamientos, reptandopor ellos hasta hacerse

Page 186: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

con el control de mi mente, consiguiendo que el ansia por verlo me impidapensarenotracosaquenoseaenélyentodoloquehemosvividojuntosy,conesos recuerdos, llegan muchos más… Su mirada siendo un lago de aguasplácidas o un océano embravecido; sus manos recorriendo mi cuerpo,descubriéndoloyhaciéndolovibrar;suslabiosdevorandolosmíos;misgemidosylossuyos…Él,Víctor,elúnicohombrequehasidomitodoyhamultiplicadopormiltodasestasemocionesquellenanmipechoyquellevansunombre.

Una vez lista, y con cada fibra de mi ser palpitando por él, salgo de mihabitaciónsindejardepreguntarmesiyahabrállegado,acelerandomispasosycasibajandolosescalonesdedosendosparapodercomprobarlocuantoantesy,cuandoaccedoalpatio trasero,aquienprimeroveoesamipadre,haciéndosecargo de la barbacoa ayudado por José y por… él, y siento que elmundo sedetiene durante la escasa fracción de segundo en la que nuestras miradas seencuentran. Lleva los vaqueros rasgados que tantome gustan y un suéter grisclarodelmismocolorquemivestido,ysientoquetodaslascélulasdemicuerpovibranunpoquitomás,cómoloscoloressevuelvenmásintensos,másbrillantes,yquetodoestoquellenamipechoalzaelvueloconfuerza.

—Comonodejesdemíraloasí,papávaadarsecuenta—meadvierteAlana,tendiéndomeunacopadevinoqueacepto.

—Nopuedoevitarlo—musito,llevandolacopaamislabios.—¡Valentina,hija!¡Notequedesahíplantadayvenadarmeunbeso!—me

pidemipadreconsudelantalde«Soyelcocinerosexydelafamilia»puesto.Obedeciendoasupetición,meacercoaellossintiendosumiradaclavadaen

micuerpo,casidesnudándomeconella,y,ruborizándomeporlaintensidadquedesprende,meobligoacentrarmeenmiprogenitor.

—Hola,papá—susurroenunhilodevoz,dándoleunbeso.—¿Ytuamiga?¿Alfinalnohapodidovenir?—No,suabuelasehapuestoenferma—contestoviendodereojocómouna

mediasonrisaseperfilaenelrostrodeVíctor—.Hola,cuñado.¿Quétalestás?—Muybien,cuñada.Ahítengomiguitarra,aversiluegotearrancasconun

bailecitodelostuyos.—Bueno, todo es ponerse, ¿no?—le digo sintiendo cómomi cuerpo arde

con virulencia cuandomimirada se encuentra con la suya—.Hola,Víctor—saludofinalmente,sintiendoquesucuerpoatraeelmíoymivientresecontrae

Page 187: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

conrotundidad.—Hola,Valentina.¿Amínovasadarmedosbesos?—mepreguntaconvoz

ronca, consiguiendo que esto que llenami pecho semultiplique pormil hastacasiimpedirmerespirar.

—Claro—susurro acercándome a él, rozando sumejilla conmis labios ysintiendocómosumanoseposaenmicintura,aprisionandomipielconfuerza,provocandoquemirespiracióncomienceaacelerarseymicentrosehumedezca.

Sientoqueelcalorarrasaconcualquierpensamientocoherentequepudieratener cuando, connuestrasmiradas atrapadas,depositoun segundobesoen suotra mejilla y, durante una décima de segundo, con nuestros cuerpos casipegados,inspirolafraganciadesucolonia,queperciboaleteandocercademisfosasnasales,reteniéndolaenmispulmones,consumanotodavíaaferrandomicintura.Vaciándoloslentamenteyconreticencia,meseparodesucuerpocuandoloqueelmíomereclamaesjustolocontrario.

—¿Osapeteceunpocodejamón?—nosproponeJosé,completamenteajenoaloqueestamossintiendo.

—No,gracias—murmurosinpoderalejarmimiradadelasuya.—Ven,hermanita,siéntateconmigo—mepideAlana,cogiéndomedelbrazo

—.Tía,cortaosunpoquitoohastalosárbolesdelpatiovanadarsecuentadeloquehayentrevosotros.

—¿Tantosehanotado?—LlegasadarledosbesosaJosécomoseloshasdadoaélymeolvidode

queeresmihermanaparadarteunpardesopaposbiendados.—¿Enserio?—murmuromuertadevergüenza.—Ytanenserio.Oye,mejormantentealejadadeélotevaacaerunmarrón

encimapeorqueeldelapresentaciónesaqueestáspreparando.—¿Unmarrónpeorqueése?Déjamequelodude.—Perdona, pero como papá se entere de que os estáis acostando, le va a

pedirexplicaciones,ynoporquenolegustequeestéisjuntos,sinoporque,conesetema,esmásantiguoqueelandar,asíque,sinotenéisclaroloquequeréis,mejor disimulad un poquito y no osmetáis en fregaos o, cuandomenos os loesperéis,leestaráreclamandoquelepidatumano.

—ComoaJosécontigo,¿verdad?—lepreguntosonriendo,consiguiendoquepongalosojosenblanco.

Page 188: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Dequéhabláis?Ay,quégustoquedevezencuandotehaganlacomida.Por mí podríamos comer carne así todos los días—nos interrumpe Casi,

sentándoseenunextremodelamesa,dejandosobreellaunabotelladegaseosa.—Casi,noirásamezclarnuestrovinocongaseosa,¿verdad?—lepregunto

empezandoasonreír.—¡Pedro!—lediceavozengrito—,mepregunta tuhijasivoyamezclar

vuestrovinocongaseosa,¿lecontestastúpormíoyalohagoyo?—¡Hija,tedoypermisoparaquecometashomicidio!Tútranquila,queaquí

nadievaaverniaoírnada—bromeamipadreconsuvozarrón.—Casilda,¿todavíahacesesascosas?Creíaqueduranteestosañoshabrías

entradoenrazón.Además,cuandoprobamosmivinofuistecapazdebebértelosinella,¿quéhapasadodesdeentonces?—leplanteoteatralmente,provocandolacarcajadademihermana.

—Hija, que nome acostumbro…,que pormucho que tú digas que sabe apimienta rosay todas esas cosasquedijiste, yonopuedoconél, paramí estáfuerte. ¿Qué queréis que os diga? Matadme si os apetece, pero no vais aconseguir que me guste. El blanco, bueno; el rosado, bien, pero el tinto mepuede,nomegusta.

—Eso que haces es sacrilegio, lo sabes, ¿verdad?—insisto, viendo cómollenasucopadevinoymástardeañadegaseosa.

—¿Y tú sabes que simezclas unvinobueno congaseosa estámuchomásricoquesilomezclasconunvinocualquiera?

—Mematas, Casi—suelto dramáticamente, sintiendo sumirada sobremicuerpoy,dereojo,enlazomisojosconlossuyos,apesardequeahorallevalasgafasdesolpuestas.

—¿Temato?PuesesperaaquetecuenteloquelehicealaFinaelotrodíaen el supermercado. ¿Te acuerdas de Fina, la madre deMaría, esa chica queestudiabaconmiSandra?—mepregunta,consiguiendoquevuelvaacentrarme.

—Claro, ¿qué le has hecho? —me intereso, temiéndome lo peor yempezandoasonreírdeantemano.

—Ellaesmuyamigamía,yasabesquesuhijaesíntimademiSandrayquemi Tomás, en paz descanse, trabajó con su marido durante años. Pues nada,estabayoenlacoladelsupermercadoyellasalíadeély,justoenelmomentoenel que lo hacía, empezó a sonar la alarma y, sin poder callarme, grité: «¡A la

Page 189: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ladrona!, ¡a la ladrona!». Si hubieras visto a la gente y al de seguridad correrparaverquiéneraylorojaquesepusolapobrediciendoquenohabíacogidonada, casimemuero, pero, escucha, que yo lo dije toda seria, como si no laconocieraenabsoluto.

—Casi,¿cómolehicisteeso?—lepreguntaAlana,descojonándose.—Porqueesunaguasonaylaúltimavezquelavi lepreguntéporsuvida,

porquehacíamuchoquenocoincidíamos,ylamuyhijadesumadremedijoquehabíaestadoenlacárcel;todomentira,porsupuesto…Asíque,cuandosonólaalarma,nopudecallarme.Todavíahayvecesqueestoycocinando,meacuerdoyempiezoareírmeyosola—noscuenta,provocandonuestrasrisas.

—¿De qué os reís? —nos pregunta Víctor, sentándose a mi lado ycontrayendomivientrealinstante.

—Cuéntaselo,Casi—lepido,sintiendocómomivoztiemblaytodovibraanuestro alrededor de forma distinta mientras Casilda comienza a relatarlo denuevo y, cuando suelta una carcajada sexy, oscura, ronca y de nuevo sexy, lomiroembelesada.

—Siesqueesolepasapormeterseconmigo.¡Miraquedecirmequehabíaestadoenlacárcel!—exclama.

—Un poco más y la metes luego tú—comento, observando de reojo laspiernasdeVíctoryfrenandomiavanceantesdenopoderdetenerme.

—No, mujer, que la Fina es una mujer legal que no se llevaría nada sinhaberlopagadoantes,perolasrisasquemeechévalentodoelorodelmundo—comenta,llenandodenuevosucopadevinoygaseosamientrasmipadrelamiracomosiestuvieracometiendoundañoirreparable.

—Ypensarquehaymásgentedelaquecreemoshaciendoesoconnuestrovino—musita con su vozarrón dejando la bandeja de carne sobre lamesa—.Tanto esfuerzo, tantos muestreos, tanta inversión, para que luego vengan losinsensatosestosylomezclencongaseosa.

—¡YdalePericoaltorno!¿Queréisdejarmebebertranquila?—replicaCasi,dándoleunlargotragomientrastodoslamiramosy,cuandosientoelrocedelapiernadeVíctorjuntoalamía,lapegounpoquitomás,aprovechandoquenadienosestáprestandoatención.

Sintiendo cómo el calor asciende por mis piernas hasta detenerse en micentro,veoquemipadresesientaencabezandolamesa,conCasifrenteaél,con

Page 190: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

JoséasuizquierdayVíctorasuderechay,sinpoderfrenarmeyaprovechandoquenadiepuedevernos,rozoconlayemademisdedossupiernaenunrecorridolentoyardientequehumedecemisexoytensasucuerpo.

—Venga,todoelmundoacomer—nosordenaCasi,felizdelavida—.Ay,Señor,conquépoquitounaesfeliz.Mesaleundíabuenoymehacenlacomiday estoy como si me hubiera tocado la lotería, que, por cierto, no os lo habíadicho,peromiSandrasehaechadonovio,lomaloesqueselohabuscadoguiriydentrodenadamelaveoviviendoenEscociaypeleándoseconélporveraquiénlesientamejorlafalda—noscuenta,arrancándonosotracarcajada.

—Casi,nosellamafalda,sellamakilt—matizamihermana.—Yanoshasalidoladiseñadoradelacasa.Escúchame,¿esunafaldaono?

Puesyaestá—sentenciarotunda.—Pues, cuando vayas, no se te ocurra mezclar el whisky con agua —le

recomiendaJosé,sonriendo.—¡Andaqueno!Nopuedoconelvino,mebeberéesoquesabeacolonia.Además,queaestasedadesunayatienederechoahacerloqueledélagana.¿Quédicestú,Pedro?—Que se jodan los escoceses. Si cometes sacrilegio con mi vino, puedes

cometerloconsuwhisky—afirmaalzandosucopa—.Por la familiaypor lostiemposvenideros—proponecomobrindis,guiñándonosunojoamihermanayamí,ysonríoalzandomicopa.

—Porti,papá—musitomirándoloconcariño.Comemosescuchando las anécdotasdeCasi, las charlasdemipadrey los

planesdeJoséydemihermana,amenizadosconnuestramúsicadefondo,esamúsicaquesuenaenformaderocesocasionales,demiradasfurtivas,demediassonrisasydemomentossuspendidosenunsuspiro;esamúsicaquesólonosotrossomoscapacesdeoír,consupiernaderechaymipiernaizquierdatanpegadasque es imposible que el aire se cuele entre ellas y con el calor creciendo yardiendo en nuestro vientre, donde tira con fuerza hasta robarnos el aliento y,cuandoterminamosdecomer,estoytantensayexcitadaquenopuedomás.

—Voy a llevar estos platos a la cocina—susurro levantándome, deseandoalejarmeunpoquitodeélparapoderenfriarmicuerpo.

—Espera,queteayudo—seofrecesolícito,levantándoseéltambién.—Entiemposdetuabuelo,esonohubierasucedido—empiezaanarrarmi

Page 191: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

padre—.Recuerdocuandoyoentréencasadetuabuela,laprimeravezquefuiacomer…

Comoheoídomuchasvecesesahistoria,sindemora,medirijoa lacocinaconélpisándomelostalones.

—Estoydeseandofollarteconesevestidopuesto—mesusurraaloído,trasdejar losplatosen laencimera,pegandosupechoamiespaldaymicuerpoalmármoldelaisla.

—Estoy deseando que me folles, Víctor —murmuro cerrando los ojos,alzandomitraseroparafrotarmecontrasuenormeerección.

—Nosécómohepodidocontrolarmecuandotehevistollegarconélpuesto;temarcatodoelcuerpo…Val,escomosifuerasdesnuda.

—Noesverdad—medefiendoenunhilodevoz,apoyandomismanosenelmármol—.Apártate,Víctor,puedeentraralguien—musitocasigimiendo.

—Yamímeduelelapolladeverte—mediceconvozrasposa,posandosusmanosenmiscaderas,pegándomeasuerección.Gimosuavemente,echandolacabezahaciaatráshastaposarlasobresuhombro.

—Viccc… —gimo bajito mientras una de sus manos se adentra por mivientre,bajandoporél,conmisexolatiendodeanticipación.

—Suerte que esos tiempos han cambiado—oímos la voz de Casi, y nosseparamosderepente,comosinuestroscuerposserepelieran.

—Casi,¿dóndeguardaselté?Ibaaprepararmeuno,peronoloencuentro—lepreguntohurgandoentrelosarmariosconmanostemblorosas.

—Deja,yatelohagoyo.Víctor,sacalasnatillasytú,ayúdalo;enmicocinanadiemetelasmanosdondenotienequemeterlas.

Ysonríoconesode«meterlasmanos»,porquellegaatardarunosminutosmásyestoyseguradequesumanosehubierametidoentremispiernasy,coneserecuerdo,micentrosecontraedenuevodepurodeseo.

—¿Dónde tienes las natillas, Casi? —le pregunta Víctor, y percibo lafrustraciónensuvoz.

—¡Enlanevera!¿Dóndevanaestar?Hombres,sonincapacesdeencontraraguaenelmar…MiTomáseraigual,loteníafrenteasusnaricesynoloveía—mecuentamientrasmecolocofrenteaVíctorparasacarlasnatillas,rozandoapropósitomitraseroconsucuerpoahoraquetengoaCasidándonoslaespalda.

—Pásameesabandeja—lepido,percibiendoelfuegodesumirada.

Page 192: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Sintiendo todo cargarse de electricidad a nuestro alrededor, coloco lasnatillasenellay, casi temblandoy seguidaporél,medirijodenuevoalpatiotrasero, cuando me sorprende al cogerme la bandeja con decisión paradepositarlaenelmuebledelpasilloyllevarmecondoszancadashastaelbaño.

—Vic,¿quéhac…?—empiezoapreguntar,peroenmudezcocuandosubocaseadueñadelamíaconrudezaysulenguasehundeenellahastaarrancarmeungemidoyconseguirquetodoempieceadarmevueltas.

—Chist,nodigasnada.Dosminutos,porfavor,damedosputosminutos—murmuraasaltandomibocadenuevo,cogiéndomeporlascaderasyalzándomeconfuerza,haciendoquemisexosefrotecontraelsuyo.

Gemidos ahogados, sexos friccionándose, besos húmedos, ardientes ylascivos, manos buscando la piel por debajo de la ropa como un sedientobuscaríaunoasiseneldesierto,pasiónycalor,mordiscoscalmadosconbesosylanecesidadarrasándolotodo.

—Vic, tenemos que parar —musito sin dejar de besarlo, enterrando misdedosensupeloypegandomislabiosalossuyos.

—Ya lo sé, joder,peronopuedo—masculla impulsandosuscaderashaciadelante,yloimitosintiendomisfluidosmojarmiropainterior.

—Para, para, por favor, no puedomás—le ruego, obligándome a quemebaje—.Es peor empezar si no podemos terminar—susurro sintiendomi sexoempapadopalpitandodedeseo.

—Pues terminemos—masculla con lamirada tan oscurecida por el deseoquemeimpresiona.

—Sabes quenopodemoshacer eso, pero te prometoque luego en tu casavoy a marearte mucho —le digo respirando con dificultad, con la gargantacompletamente seca, saliendo del baño antes de que me haga cambiar deopinión.

Conelcorazónlatiendodesbocadoenmipecho,compruebomireflejoenelespejoovaladodelpasillo,siendoconscientedequehastaunciegopodríadarsecuenta de que estoy al borde del orgasmo y, aferrando la bandeja con fuerza,inspiroprofundamenteunpardeveces,intentandoquemirostrodejedemostrarloquenodeseohacerpúblico.

Llego al patio, donde todos continúan charlando completamente ajenos atodo,ydoygraciasmentalmente,y,sintiendomispiernashiperlaxas,depositola

Page 193: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

bandejasobrelamesaconlamiradademihermanapuestasobremí.Cuandolaveosonreírylevantarambascejas,bufosuavemente,negandoconlacabeza.

—¿YVíctor?—mepreguntaCasi,cargadaconotrabandejadondellevaelcafé,lastacitasymité.

—No lo sé, lo han llamado por teléfono—le digo yendo hasta mi sitio,percatándomedequeestoymintiendoporélyquepuedequeluegosemeveaelplumeroy,cuandoloveollegar,rezoparaquenadielepregunteporesallamada.

Por suerte,mi padre ha tomado el control de la conversacióny nadie dicenada.

—Oye,Víctor, ¿y cómo va esa amistad tuya con tu amiga?—le preguntaCasimientrassirveloscafés—.Podríashaberlainvitadoacomer.

—Tengomuchasamigas,Casi—lerespondeconvozneutra.—Bueno,túyameentiendes,esaamigaespecialquetienes.—Sí,hija,comotúcon«estechico»,quesoismuymodernostodosvosotros—rematamipadre,yclavomimiradaenelté.—¡Casiiiiii!¿Paraunavezqueteníamoslacomidaenpazeranecesarioque

sacarasesetemita?—lepreguntaAlanadramáticamente.—¡Ay,hija!Sial finalnosabréquépuedodeciryquéno;yosólo lodigo

porque,sisonamigos,podríahaberlainvitado.—Yanosomosamigos,Casi;nodeesaforma—sentenciacontonoseco.—Unospendones sois todos—le suelta, sorprendiéndomeyarrancándome

unacarcajada—.Túríete,ríete,quetodossoisiguales,pendones,quesoisunospendones.Pedro,túhablasdetusuegro,perosihubierasconocidoamipadre…

¡Ay,sihubierasconocidoamipadre!¡Sombraleshacíaatodos!¡Loqueyotediga!MiTomásnorozóelbordedemifaldahastaquenonoscasamos,buenoera.

—Estoschicoscambiandeparejacomoquiencambiadecamisa.Yonolosentiendo,Casi…Miramihija, conviviendoconeste chico,y laotra,mejor lodejamosestar—ledicecomosinoestuviéramosdelante.

—Sí,serálomejor,asítendremoslafiestaenpaz—remataCasi,ylamirosindarcrédito.Desdeluegoqueestamujereselcolmo.

—Ay,Señor,danospaciencia—exclamaAlanadramáticamente,clamandoalcielo.

—Pacienciaeslaquetengoyo—mascullamipadre.

Page 194: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Oye,Pedro,¿estátodolistoparaempezarmañanaconlavendimia?—lepreguntaVíctorcambiandodetemaapropósito.

—¡Mira!¡Loquenosfaltaba!¡Lavendimia!Yahedormidosuficiente—nosdiceCasi,ylamirodivertida.

—TuTomásseganóelcielocontigobienganado,¿eh?Diosmíolaquelecayóalpobre—ledigo,arrancándolesunacarcajadaatodos.

—Mira,niña,¡notepasesquetedoyunsopapo!—meamenazaenbroma,haciéndomereír.

—¡Casi,peroesquetienesparatodos!—medefiendoentrerisas.—Paratitambiéntengo,parati;notecreasquelaCasinosedacuentadelas

cosas…Quemehagalatontanosignificaquelosea,queaquíunavalemásporloquecallaquepor loquehabla—mesuelta,consiguiendoqueenmudezcaydejedereírme.

—¿Quieres que vaya mañana a los viñedos de Rodezno? —le preguntaVíctor a mi padre, desviando de nuevo la conversación y, gracias, gracias,graciassssssss,porqueyaestabaempezandoatemermelopeor.Cualquierdíamelacargo,enserio.

—Nohacefalta.Quédateenéstosyenlabodegay,sisurgealgo,mellamas—lecontestamipadre,centrándoseeneltemadelavendimia,tensándosecomosiempre ocurre desde que empieza hasta que termina, mientras una ideacomienzaamaterializarseenmicabeza.

—Estuve hablando con Ricardo el viernes, le dije que… —oigo que lecomentaVíctory,sinpercatarme,mequedomirándoloembelesada.

—¿Tú no eras la que iba a comerse dos natillas? —me pregunta Casiponiendouna frenteamí—.Puesempieza,porque loqueestásmirandonoescomestible.—Y,deverdad, juropor lomássagradoquesipudiera laahogaríaahoramismoensuvasodevinoygaseosa.

Mecomonouna,sinodos,talycomolehabíaprometido,cuidándomemuymucho de volver a quedarme mirándolo embobada, no sea que a mi queridaCasilda se le suelte la lenguaycomiencea largarmásde lacuenta,y, cuandoJosé se arranca con la guitarra, siento su impaciencia empezar a crecer de lamismaformaenqueestácreciendolamía.

—Me marcho —anuncia finalmente mirando su reloj, poniendo elcronómetroacero,ysonríodiscretamentesabiendoporquéestáhaciéndolo.

Page 195: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Tevasya?—lepreguntamipadre,encendiéndoseunpuro.—Sí,hequedadoyyallegotarde.Graciasporlacomida,Pedro,lohepasado

muybien.Mañanapasaré a por ti,Val, estate lista a las nueve—medice contononeutro,sinmolestarseenmirarme,ymirodereojoaCasi,rogandoatodoslosdiosesparaquenoabralaboca.

—¿Nolepedisteatuhermanalamotocicleta?—mepreguntaella,ybufo…¡mierdadedioses!—No,nolleguéahacerlo—replicoobservandocómosemarchaydeseando

largarmeconél.—¿Queríasmimotocicleta?—meplanteaAlana, sinentendernada,con la

músicadeJosédefondo.—Sí,peroyanomehacefalta.—Venga,cuñada,arráncateabailar.—Uff,calla,quelasdosnatillasmeestánpasandofactura.—Niquetehubierascomidodostoros.—¡Casi,¿novasadejarmeestar?!—sueltodramáticamente.—¡Perosinohedichonada!—Además,¿noerastúlaquehabíadichoquesimelascomíatearrancarías

con una jota? Pues venga, ya estás tardando, que aquí una ha cumplido—lerecuerdosonriendo.

—Mira ésta, que tendré yo muchos problemas en arrancarme a bailar.Mírameyaprende—medicemientrasmihermanasesumaaellaentrerisas.

—Hija,siéntateamilado—mepidemipadre,sonriéndome.—Dime,papá—ledigo,sentándomeenlasillaquehastahacenadaocupaba

él.—¿Cómovaesapresentación?Mehaspilladomuyliadoestosdíasycasino

teheprestadoatención.—Notepreocupes,tengoaVicparacualquierdudaquepuedasurgirme.De

hecho, había pensado que, como la tengo casi acabada, durante esta semanapodría ir con él para empaparme un poco de todo esto. Si voy a estudiarenología,másme vale empezar a enterarme bien—le propongo, poniendo enmarchalaideaquehetenidoantesybuscandounaliadoenmipadreporsiélseniega.

—LohasvueltoallamarVic…Porloqueveo,esecalientaplatosfuncionaa

Page 196: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

laperfección—comentasonriéndome.—Yesperoquenodejedefuncionar—ledigo,sonriéndoleyotambién.—Mealegraverosasídebienotravez,yquetúquierasconocerelnegocio

mehaceelhombremásfelizdelmundo—afirmaconesavozcargadademilesde matices que me recuerda una buena copa de vino tinto, con cuerpo yequilibrado.

Acercandomisillaa lasuya,apoyolacabezaensuhombro,sintiendoqueestemomento,asumanera,tambiénesperfecto.

Page 197: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO15

Miro discretamente la hora enmi reloj, comprobando que han pasadomás deveinte minutos desde que se ha marchado. Siento cómo la impaciencia y laurgenciatirancadavezdemíconmásfuerzaycómoelcalordemivientrevacreciendohastallenarsedeundeseovorazydemoledoralimaginarmeloquemeesperacuandollegueasucasay,sinpoderfrenarmemás,finalmentemelevanto.

—Papá,memarcho.Hequedadoconunasamigasyyallegotarde—farfulloatropelladamente, sintiendo lamirada deCasi clavada enmi rostro, y lamirorogándoleensilencioqueporunavezensuvidanodiganada.

—Puesentoncesvasatenerqueirte,odioalagenteimpuntual—intervienemihermana,echándomeuncable.

—Peroestanochedormirásyaencasa,¿verdad?—mepreguntamipadre,mirándomeconseriedad.

—Sí,claro,porsupuesto.—¿Yacenarvendrás?Mujer,pordejártelapreparadaono;yasabescómo

odiotirarlacomida—mediceCasi,sonriéndome.—Ace-cenar…loquese-sedicece-cenar…ehhh…puesssss…creoqueno-

no—le contesto entre tartamudeos, sintiendo que me sonrojo por momentosmientras mi hermana me mira negando con la cabeza y yo siento deseos deabrirmelamíaacabezazos.¡Seráposible!¡Alfinalseráverdadquesoypésimamintiendo!

—Venga, hermanita, lárgate de una vez, que te están esperando.—Y casisientodeseosdecorrer.

—Eso, eso, vete con tusamigas—remataCasi, dándole especial énfasis a

Page 198: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

esas últimas palabras, mirándome con esa cara de sabionda que pone cuandosabealgoquedesconoceelresto.

—Bueno,pueseso…,quenosvemosluego—mascullofinalmente,dándomelavuelta.

Respiroprofundamentecuandosalgodemicasay,casiechandoacorrer,medirijohacialasuya,sintiendomivientrecontraersesuavementedeanticipaciónamedida que voy acercándome a ella y, cuando la tengo frente a mí, suspirobajito, sintiendo que todo comienza a vibrar de forma distinta, como siemprecuando estamos juntos. Con el deseo tirando demí, la bordeo hasta llegar alporchetrasero,dondeséquelapuertaestaráabierta,y,cuandolaabroynuestrasmiradasseencuentran,sientoquemicorazónsedetiene.

Estáapoyadoenlamesa,conlosbrazoscruzadosalaalturadelpechoylamiradaclavadaenelsueloy,cuandolaalza,posándolasobrelamía,reconozcoverdaderastormentasenella.

—Treintaycincominutos—selimitaadecirmeconvozáspera,deteniendosu cronómetro y acercándose amí con un andar lento y cadencioso—.Desdeluegoque sabescómo llevarmeal límite—prosigue, anclándomea sumirada,sinpermitirmequemeliberedeella.

—Nopodíairmecuandotehasidotú,hubieseresultadodemasiadoevidente—musitoconmipechosubiendoybajandoconrapidez.

—Tócame la polla—meordena cogiendomimanoy poniéndola sobre suenormidad—. Esto es lo único evidente —masculla dándome la vuelta conrapidezyposandomismanossobrelamesa—.Sólopiensoenfollarte,Val…

Llevo treinta y cinco putos minutos imaginándolo sin parar —sisea,levantándomelafaldaalaalturadelascaderasydeshaciéndosedemitangaconun movimiento rudo—. Treinta y cinco putos minutos imaginando cómo mesentiría cuandome hundiera dentro de ti—continúa, pasando su dedo pormisexo resbaladizoyarrancándomeungemidocuandomedaunapalmadaeneltrasero, y lo alzo sintiendo mi sexo palpitar—. Vas a gemir, y mucho—meadvierte,pegandomipechoalamesa,conmimejillaapoyadaenella—.Levantamáselculo—exige,yobedezcoaferrandolosbordesdelamesa,sintiendomispiernas empezar a fallarme mientras oigo cómo rompe el envoltorio delpreservativo.

Mepenetraconunmovimientosecoycertero, insertándosehastaelfondo,

Page 199: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

arrancándome un gemido placentero que alargo cuando de otro empellónadquieremásprofundidad,yalzoel traserocomomehapedido,sintiendoquetodomedavueltas.

—Val… —masculla posando sus manos en mis caderas, empezando amoversedentrodemí.

Dos,tres,cuatro,cinco…diez…Mepenetraaunritmovertiginosomientrasyo sólo puedo gemir y aferrarme a la mesa con fuerza mientras sus manossujetan mis caderas moviéndome a su antojo, y grito sintiendo que me estállevandoallímite,deseandomás,exigiendomásyanhelandoquenuncapare.

—Viccccc —gimo tan descontrolada como está él, sintiendo mis fluidosfacilitarlelaentrada.

—Novuelvasaponerteestevestidosinovoyapoderfollartecuandoquiera—siseaentredientes,mientrasconunadesusmanospresionayfrotamiclítoris,llevándomemásallímitedeloqueyaestoy.

—Si luego vas a follarme así, pienso ponérmelo todos los días—replico,entremezclandogemidos conpalabrasy sintiendocómoelorgasmoempieza aarderenmiinteriory,cuandoestalla,surugidoseentremezclaconmigrito—.Diosmío…—musitosintiendomicuerpodesmadejadodebajodelsuyo.

—Haces que pierda la cabeza—me confiesa en un susurro, con su pechoapoyadoenmiespaldaymismanosaferrandolamesa—.Tehubierafolladoentucasa.

—Y Casi nos hubiera pillado —le digo sonriendo y cerrando los ojos,sintiéndolollenartodomiinteriorydeseandoquenosalgadeél.

—Casiyanoshapillado—merebateconseriedad—.Aesamujernoseleescapanada,joder—exclama,saliendodemí,ysueltounquejido.

—Quiero más, Víctor —le digo en un susurro, buscando su mirada ysintiendocómomisexoreaccionaamipetición.

—¿Quieres más?—me pregunta con voz ronca, dándome la vuelta hastadejarmefrenteaél—.Deputamadre,porquenoheterminadocontigo—afirmadeshaciéndosedemivestidoydemi sujetador—.Eres comoun caramelodelquenuncatengosuficientey,créeme,nomehaceniputagraciasentirmeasí.

—Yo tampoco tengonunca suficiente de ti, pero nome importa—le digocon descaro, deshaciéndome de su preservativo, que dejo en el suelo, ysentándome sobre la mesa, dejando mi sexo abierto para él—. Sin condón,

Page 200: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Víctor;estavezsinél—leordeno,deseandosentirlopielconpiel.—Val…—mediceamododeadvertencia.—Porfavor…—lepidocogiendosumiembroyguiándolohastalaentrada

demisexoy,cuandolosientorozándolo,gimocerrandolosojos,metiéndomelodentro,pocoapoco,consupielacariciandolamíaasupaso.Cuandolotengocompletamenteencajado,enroscomispiernasen tornoa su trasero,pegándolomásamíylearrancoungemidoqueseentremezclaconelmío—.Llevotodalacomida imaginandoesto…Vic…,quiero sentirtede todas las formasposibles,por favor…—murmuro buscando sus labios—… por favor…—Y ese «porfavor»encierratantastantascosas…

—Nena—susurrasoltandounsuavegemidocuandolosencuentro.Me alza con cuidado por el culo y, formando un único cuerpo, llegamos

hasta el sofá, donde, a horcajadas sobre él, empiezo amoverme con lentitud,subiendo y bajando, sintiendo mi piel erizarse por la emoción cuando, connuestrosbesos,nosdecimostodoloquesentimos,cuandonuestrasmanoscreanmundosenterosdesensacionesycuandoelsexoseconvierteenmuchomásquedoscuerposfriccionándose,seconvierteenpuraemoción.

***

—¿Sabes lo que es hacer el amor, Víctor? —le pregunto en un susurrocuandoloslatidosdemicorazónsenormalizanymirespiracióndejadeseruncaos,conéltodavíaencajadoenmiinterior.

—¿Quées?—inquierefrunciendoligeramenteelceño,enlazandosumiradaconlamía.

—Esesto,essernosotros—musitopasandomidedoporélparaalisarlo—.Es estarmojada todo el tiempo, es quemi piel ymi cuerpo reaccionen a unamiradatuya—prosigo,hundiéndomeenlatormentadesumirada—.Essentirteyquerermástodoeltiempo.Esverteyreconocerme,yesponerletunombreatodasestasemocionesquellenanmipecho.

—Memareas,Val—susurraconseriedad,negandoconlacabeza.—Y tú me mareas más. Te quiero, Víctor; aunque tú no me lo digas, te

quiero;aunquedecidairmeoquedarme,tequiero;paseloquepase,tequiero,ynoquieroqueolvidemosestosdías…nunca.

—Nuncavoyahacerlo,Val,ytútienesquerecordarloquetedije,siempre,

Page 201: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

decidasloquedecidas,hagaloquehaga,nuncaolvidesloquesientoporti.—Noloharé—murmuroapoyándomedenuevoensupecho,consusmanos

rodeandomicintura—.No tealejes,Víctor—lepidode repente, tensándome,puesnosédedóndehasalidoeso.

—¿Cómo? ¿Por qué dices eso? —me pregunta, tensando su cuerpo éltambién.

—No lo sé, pero de pronto he temido que lo hicieras.No lo hagas, no tealejes—musitosintiendoelfríoatenazarmicuerpo.

—Notemonteshistoriasraras,Val.Sólotehepedidoquerecuerdesloquesientoporti.

Y a pesar de sus palabras, siento cómo el temor a perderlo empieza aasentarseenmipechoparaempezaraenfriarlo.

—Y no vamos a volver a hacerlo sin condón—me advierte, y sé que hasonreídosinnisiquieramirarlo—.Yamehasmareadodosvecesynohabráunatercera.

—La culpa es de este sofá—le digo sonriendo también, a pesar de estasensaciónquesehaasentadoenunrincóndemipecho, latiendodeunaformadistintaacomolohacemicorazón.

—Seguro—contestaentrerisas,cogiéndomeenbrazospara llevarmehastala ducha, donde entre besos nos enjabonamosmutuamente, encendiéndonos ycalmándonos con nuestros cuerpos y nuestros labios y, cuando conseguimosllegardenuevoalsofá,lomiro,guiñándoleunojo.

—Niseteocurra—medicedivertido.—Nohedichonada—replicocarcajeándome.—Por si acaso—me indica cogiendomispiernasy colocándolas sobre las

suyas, empezando a acariciarlas, mientras yo me recuesto, relajándome ycerrandolosojos—.Mehagustadoloquehasdichoantes…

—¿Elqué?—preguntosinabrirlos,sintiendoelrecorridodelayemadesusdedospormipiel.

—Yalosabes…Loquehasdichoantessobreloqueeshacerelamorparati—meaclara,y sonrío sinabrir losojos, sabiendodeantemanoquenoañadiránadamás.

—Te echaré de menos esta noche —le digo abriéndolos finalmente yencontrándomeconsumiradacargadademilesdeemociones.

Page 202: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Yotambién,meheacostumbradodemasiadoa ti—meconfiesaconunasonrisa.

—Por suerte, en el trabajo vamos a estar todo el día juntos—le anuncio,guiñándoleunojo,sonriendocuandofrunceelceño—.Tienesantetiatusombra—ledeclarobromeando,sorprendiéndomealvercómosurostroseensombrecepormomentos—. ¿Sucede algo,Víctor? ¿Por qué haces esa cara?—inquiero,preocupada,acercándomeaél.

—Pornada.Mehasrecordadoaunapersona…Déjalo,notieneimportancia—medicerecomponiéndoseconrapidezo,almenos,fingiendohacerlo,yniegocon la cabeza, consciente de que esos dieciocho años acaban de colarse en elsalón.

—Y no vas a contarme a quién te he recordado, ¿verdad?—le preguntosentándomedenuevodondeestaba,peroalejandomispiernasdelassuyas.

—Chica lista—suelta guiñándome un ojo, cogiéndolas y colocándolas denuevo sobre las suyas—. ¿Por qué has dicho eso?—me plantea sonriendo, apesar de la tristeza que llena su mirada, y lo observo sintiendo cómo esosdieciochoañospesanmásquetodaunavida.

—Por nada —respondo sin saber cómo sentirme, pues por una parte memolestamuchísimoquenoquierahablarmedesupasadoy,porotra,sólodeseoreconfortarloparaqueolvidetodoesoquelepesatanto.

—Val…, no empecemos. Venga, dime por qué lo has dicho —demandamientrasyomepreguntodenuevoquésucederíaensuvidaparaquenisiquieramipadrequierahablarmedeello—.Sólotúyyo,¿recuerdas?—insiste,estavezconseriedad.

—Tienesrazón, losiento—musitosoltandotodoelairedegolpe—.Habíapensadoque,sitengoquedecidirentrequedarmeomarcharme,necesitotodalainformaciónposible.Ya sé loque es sermodeloy supongoquedebo añadirlemássacrificio, teniendoencuentaqueestaréenNuevaYork,perono tengoniideadeloqueestrabajaraquí.

—Porsupuestoquelosabes,Val;tehascriadoenlabodega—merebate.—Exacto,túlohasdicho.Lohevistodesdefuerayahoraquieroverlodesde

dentro.—¿Yquétienesenmente,exactamente?—indagafijandosuatenciónenmí.—Ya te lo he dicho, voy a convertirme en tu…—Y, antes de terminar la

Page 203: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

frase, callo pormiedo a recordarle a esa persona—.Quiero ir contigo a todaspartes,hablarconlosclientes,conlosproveedores,enterarmedequévatodoeserollodelacontabilidadysaberlosprosyloscontrassiquierodecidirbien—leexplico,estavezseria.

—¿Todoeldíajuntos?Esopuedesermuyarriesgado,ymássiteponesesevestido —suelta con voz ronca, omitiendo hacer comentario alguno sobre elprincipio de mi frase, alzando las cejas y dirigiendo su mirada hacia lamencionadaprenda,queseencuentrasobrelasilla,pues,denuevo,llevopuestasucamisa.

—Me gusta el riesgo, y más si es contigo—le contesto incorporándome,sentándome a horcajadas sobre él y hundiendo mis dedos en su pelo—.Muéstramecómoseríamividasimequedaraaquí.

—Menosdivertidadeloqueseríasitefueras.—Parecequeestésdeseandoquelohaga—replico,molesta.—Ytúparecequeestésdeseandonohacerlocuandotienesunmundoentero

ahífuerapordescubrir.Tienesdiecinueveaños,Val.¿Cómoestásdudando?—mepregunta,frunciendoelceño.

—Porque a lo mejor quiero descubrir ese mundo contigo —le digo,alisándoselo,paraposteriormentelevantarmeyponerunpocodemúsica,viendodereojocómoechalacabezahaciaatrás,apoyándolaenelrespaldodelsofá—,yserámidecisión,Víctor, asíquedejadeponeresacara, ¿quieres?—lepidomientrasempiezaasonarEverybreathyoutake,deThePolice.

—¿Porquénomeescuchascuandotehablo?—mepreguntaexasperado.—Porquenomeinteresa,¿tevalecomorespuesta?—lecontestoguiñándole

unojo.—No,nomevale—replicaconseriedad.—Bueno,estuproblema,entodocaso—lerebato,sentándomedenuevoen

el sofá—.Hepensadovarias cosaspara la presentación; si dejasdeponer esacaradeagrio,telascuento—leanuncio,consiguiendoquesonríafinalmente.

Ysentadoseneste sofáquehaconseguidoquese salteunade susnormasdosveces, ledetallo loque tengoenmentemientrasélmeescuchaguardandosilencio en ocasiones, matizamis ideas en otras o aporta su granito de arenadándome nuevas ideas y, sin darnos cuenta, enlazamos un tema con otromientras las agujas del reloj avanzan silenciosas más rápido de lo que nos

Page 204: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

gustaría.—Voy a tener que irme, ya es tarde—musito llevando la caja de la pizza

hastalacocina.—Noquieroquetevayas,Val—refunfuñaserio,mirandoalfrentemientras

yomedeshagodesucamisaymepongodenuevomivestido.—Niyo,peroescasi launadelamadrugadayencasahayciertasnormas

que debo acatarmientras viva allí, y ya estoy incumpliendo una de ellas—leexplico acercándome a él—. ¿Vendrás mañana a recogerme? —le preguntomelosa, observando su ceño fruncido—. Vic, ¿qué sucede? —inquieroponiéndome en cuclillas frente a él y alisándolo con mi dedo—. Y deja defruncirlo,¿quieres?—lepidomientrasélmemiraserio.

—Vamos, te acompaño; no quiero que vayas sola —dice huraño,levantándose,ylomirosinentendernada.

Lo sigo al exterior del porche, donde se ha detenido, y me acerco a élintentandoeliminarestasensaciónextrañaquehallegadoparainterponerseentrenosotros.

—Sabesquenopuedoquedarme—susurro condulzura.Rodeo su espaldaconmis brazos y apoyomi mejilla en ella, aspirando su fragancia, que llegaentremezclada con el olor de la noche cargado de humedad, tierra y frutamadura.

—Yalosé—mascullaentredientes,cogiendounademismanos,queaferraconfuerza,comositemieraquefueraaescaparme,yechamosaandar.

Hacemos el recorrido hasta mi casa en silencio; él sumido en suspensamientosyyodeseandopagaruncéntimoounmillónporellos.

—Hastamañana—musitoantesdellegaralfinaldelcamino,deteniéndomeeintentandoindagarensumirada,quederepenteestancerradacomoesanoche.

—Hasta mañana —me contesta con parquedad, y algo dentro de mí meadviertedequealgosemeestáescapando.

—¿Esporquenoquieresqueestétodoeldíacontigo?Siesporeso,dímeloyme iré con mi padre, pero no voy a quedarme encerrada todo el día en eldespacho cuando la presentación ya está casi lista —le suelto a bocajarro,comenzandoacabrearmeconél.

—Porsupuestoqueno,nodigastonterías—mascullaentredientes.—Entonces,¿quémierdastepasa?—lepregunto,cruzándomedebrazos.

Page 205: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Déjalo, no intentes entenderme cuando ni siquiera yo soy capaz dehacerlo…Oye,nosvemosmañana,¿vale?—mediceconunasonrisaquenolellega a los ojos, dándome un toque en la nariz con su dedo antes de darse lavueltaydesaparecerentrelassombrasdelanochesindarmeunbeso.

Lo miro sintiendo cómo eso que tengo en el pecho, latiendo a un ritmodistintojuntoamicorazón,ocupaunpoquitomásdeespacio.

Esa noche duermo intranquila, puede que sea porque durante dos nochesseguidaslohehechoconélpegadoamicuerpoobienporqueesasensacióndequealgosemeescapaseniegaadesaparecerdeltodo,pero,cuandodespierto,lohagosintiendoqueestoyigualomáscansadaqueantesdeacostarme.

Puestoquehoycomienzalavendimiayvamosatenerqueiralosviñedos,mevistoconunosvaquerosyunacamisa,evitandoponermelostaconesparanorepetirlaexperienciaquevivícuandofuiconMarcoy,trasatarmipeloenunacola alta y maquillarme ligeramente, bajo a la cocina, donde lo encuentrotomándoseuncafé,sentadoeneltaburetequeyahahechosuyo.

—Buenosdías—losaludoconsequedad,ysonríoaCasicuandosevuelveparamirarmeextrañada.

—¿No has dormido bien? —me pregunta ésta preocupada, fijando suatenciónenmí.

—¿Porquénohabríadehacerlo?—leformuloconelmismotonosecoqueheutilizadoantes,sintiendocómomicabreocrecepormomentos.

—Uyyyyyy,me parece que la cosa hoy está calentita. ¿Tienes tú algo quever?—lepreguntaaVíctorde improviso,sorprendiéndoloysorprendiéndome;desdeluego,estamujereselcolmodeladiscreción.

—Puesnotengoniidea,¿tengoyoalgoquever?—metrasladalapreguntacon seriedad y los miro negando con la cabeza, cogiendo mi taza de té yllevándomela a los labios— De puta madre, empezamos bien —mascullaimitándomeyllevándoselasuyaaloslabios,ylomiroachinandolosojos.

—Esodigoyo,yesoquees sóloelprincipio, luegoyani tecuento—nosdice, y ambos lamiramos deseandomatarla—.Creo que aquí sobra una y esCasildaMartínezdelaNuez.Hija,ahítieneslafruta,porsilaquieres.

Sindecirestabocaesmía,cojoelplatoylollevohastalanevera.«Parafrutaestamos»,piensoenfadada,recordandolasúltimasvecesquelacomimosjuntosyseguradequehoynoseráunodeesosdías.

Page 206: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Nosvamos?—lepregunto,cruzándomedebrazos.Lo veo inspirar profundamente y soltar todo el aire de golpe para, sin

contestarme, dirigir sus pasos hacia la puerta; lo sigo en silencio hasta eltodoterreno, sintiendo la frustración instalarse en mi pecho hasta coparlo porcompleto.

—No pienso arrancar hasta que me digas qué coño te pasa —me dicecerrandodeunportazo.

—Losabesdesobra—siseodandootroportazoyotambién.—Oye,Val,olvidalodeanoche,¿vale?Séquetetengohechaunlío,peroyo

tambiénloestoyyayernosupegestionarlo.—¿Elquénosupistegestionar?Víctor,esque…¡joder!—legritofrustrada

—. Me pierdo contigo; parece que estamos bien, pero de repente ya no loestamos. Te tengo al ciento por ciento, pero de pronto estás sólo al diez porciento, y no entiendo esos giros ni esos silencios que de pronto están ahí,llenandohuecosquenodeberíanestar.

—¿Yno se tehaocurridopensarqueposiblementeyo tambiénquieradoscosasdistintas?—brama,ysientolafrustraciónquedesprendensuspalabras.

—¿No quieres estar conmigo? —musito en un susurro, sintiendo que elequilibrioempiezaafallarme.

—Déjaloestar—siseaentredientes,contodosucuerpoentensión.—No,nomepidasquelodejeestarcuandotienequeverconmigo.—¡Estásolvidandoloquetedije!—¡Mehasdichomuchascosas,Víctor!—¡Hayunaquenuncadeberías olvidar!—me recrimina, alzando la vozy

dándoleunmanotazoalvolante—.¡Joder,Val!Yatedijeayerquenointentarasentenderme —me recuerda frustrado mientras yo dirijo mi mirada hacia laventanaynotoquelagargantaempiezaadolerme.

—¿Cómotesentiríassiyotepidieraeso?—musitoenunhilodevoz.—Lo siento —se disculpa mientras yo mantengo la vista clavada en la

ventana.—¿Quésientes,exactamente?—lepregunto,temiendoquevayaadejarme.—Demasiadas cosas—musita enigmático, y arranca el coche; aprieto los

labios,negándomeallorar.El trayecto a la bodega lo hacemos en silencio, yo esforzándome por

Page 207: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mantenerlaslágrimasarayayél…niidea.—¿Quieres pasar el día conmigo o con tu padre?—me pregunta cuando

llegamosalparking,cubriendosuvozysurostroconesamáscara inexpresivaqueutilizacuandoquiereocultarseoprotegersedealgo.

—¿Quéquieres tú?—musitososteniéndole lamirada,deseandoverenellaalgoqueme indiquequé sienteodesea, con todosmis sentidospuestos en surespuesta.

—Quelopasesconmigo—afirmarotundo—,apesardequeavecespuedaestaraldiezporcientooquemissilenciosllenenhuecosquedeberíanllenarmispalabras—añadeconseriedad,yasientoensilenciosaliendodelcoche.

Sintiendolagargantatodavíacerradaynegándomeaderramarunapuñeteralágrima,medirijoalinteriordeledificioseguidaporély,cuandopasofrentealatienda, saludo a mi amiga, que está hablando con unos clientes, con unmovimiento de cabeza sin detener mis pasos, directa a nuestro despacho,pensandoqueparecequefuehaceunaeternidadcuandomeencerréllorandoenelbañoyellameaconsejóque intentaraencajaruncírculoconun rectángulo,unaeternidadresumidaenunfindesemanarepletodedemasiadosmiles…

«Miles de emociones,miles de gemidos,miles de besos,miles de roces…milesde silencios…»,piensounavez llegamos al ascensor, sintiendo cómoeldolordegargantabajahastamipecho,dondeseasientay,cuandocruzolapuertadeldespacho,medirijo amimesa,dondedejomis cosas, sin saberquédecir,haceroinclusosentir.

—Ven—mepideconvoz ronca, cogiéndomedelbrazoypegándomea supecho,abrazándomeconfuerza—.Losiento,Val—medicey,denuevo,tengolasensacióndequehayalgoquesemeescapa,perooptoporguardarsilencio—.Dialgo,porfavor—meruegaindagandoenmimirada.

—Notengonadaquedecir—musitorehuyéndola.—Nomelocreo,túsiempretienesalgoquedecir—replicaconunasonrisa

quenolellegaalosojos.—Esta vez no—susurro, sintiéndome tan perdida que las palabras se me

escapancomosiestuvieranenvueltasenalgoresbaladizoyfueranimposiblesdeatrapar.

—Mírame—mepide,peronolohago,puestemohacerloydesmoronarme—.Val…nena…—insiste—,mírame—meruega,yfinalmenteunomimirada

Page 208: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

vidriosa a la suya, donde esa máscara que la cubría ha desaparecido,permitiéndome observar las batallas que en ella están librándose. Dejándomellevar,unomislabiosalossuyos.

Lo beso lentamente, sin prisas, demorándome en cada sensación, en cadasuspiro, en cadaemoción,necesitandocrearunaeternidadquenos envuelvaynos proteja incluso de nosotrosmismos; necesitando convertir mis palabras ytodo loquesientoenalgoquepueda traspasarcualquier resistenciaquepuedatener;necesitandosentirdenuevosualmaabiertaparamíyqueesasensaciónextraña, que se instaló anoche entre nosotros, desaparezca con este beso quelleva envuelto todo lo que soy y lo que siento.Cuando susmanos acunanmirostro, siento cómo una lágrima escapa furtiva demis ojos, como lo haría unpreso que no puede más y corre libre campo a través intentando abrazar esefuturoquetienefrenteaél…comotratamosdehacernosotros,quequeremossercuandotodavíanosomos,cuandolascadenasdesupasadotodavíaaprisionansutobillocomoloharíanunosgrilletesocuandomifuturoesunabifurcaciónquepuedellevarnosacualquiersitio.

—Val…porfavor—mepidedenuevocuandomeseparodeél,dándolelaespaldamientrassientoqueelrestodemislágrimassiguenaesalágrimafurtiva,mojandomismejillas.

—Supongoquehaycosasqueyotampocosécómogestionar; losiento,noquería llorar—musito dándome media vuelta para mirarlo, encogiéndome dehombros,mientrasélseacercaamíotravez.

—Túno tienesque sentirnada;estás llorandoporculpamía, en todocasosoyyoquiendeberíadisculparse.

—Nohemosempezadomuybieneldía—comentointentandosonreír.—Y eso que es sólo el principio—me dice recordándome las palabras de

Casiconunasonrisayhaciéndomesonreíramí—.Séqueanochelacosanofuemuybienyquenohemosempezadobieneldía,peropodemosarreglarlo—meproponesecandomislágrimas—.¿Empezamosdenuevo?

—Siempre empezamos de nuevo en esta oficina —replico buscando sumirada,asintiendoconlacabeza—.Buenosdías,Víctor.

—Buenosdías,Valentina—merespondeconlamiradaconvertidaestavezenunlagodeaguasplácidas.

—Qué raro seme hace queme llames así—le confieso hundiéndome en

Page 209: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ellas—. Val, nena… pero Valentina, te queda muy formal—murmuro mediosonriendo.

—En el fondo soy un tío formal, aunque no lo parezca —me rebatesonriendoéltambién—.¿Estásmejor?—mepreguntaapoyandosufrentecontralamíaysientocómolaintimidad,esaquenadatienequeverconelsexo,llegaparaenvolvernosycargarsedeunplumazoesasensaciónextrañaquenoquierovolverasentir.

—¿Ytú?—planteoamivez,llevandomismanosasucuelloyamicasa.—Sólocuandotúloestés—mecontestaconsualientoacariciandoelmío,y

mepegounpoquitomásasucuerpo,queesmirefugio,consusmanosrodeandomicintura.

—Entonces supongo que ya estás mejor —susurro percibiendo que elequilibrioregresayqueesanubequesientoflotandoenlapalmademimanosevuelvedenuevoblancaysuave.

—¿Listaparaempezarconlavendimia?—mepreguntapegándomemásasucuerpo.

—Lista—leconfirmoconunaresplandecientesonrisa.—Puesvamosentonces—declara,dándomeluegounbesoqueconsigueque

elsuelotiemblebajomispies.

Page 210: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO16

Con la complicidad recuperada, nosdirigimoshacia losviñedos, donde,desdeprimerahoradelamañana,estáncomenzandoavendimiar,yasuladoregresoami infancia, a esos días de principios de otoño, cuandomi principal diversiónconsistíaencorretearporlasfilasdevidesmientraslosoperarios,capazo,tijerasycorqueteenmano,trabajabanincansablesbajolosrayosdelsol.

—Recuérdalesquenodebencogerlosracimosrotos,losquetengantierraolosqueesténenelsuelo—oigocómolediceconseriedadaManolo,elcapataz,mientrasa lo lejosveoaSanti, el ingenieroagrónomode labodega,hablandocon alguien que no conozco, posiblemente del Consejo Regulador—. Si venalgúnracimoconpodredumbre,quelodescartenenelacto,asícomotodoslosque estén faltos de maduración —prosigue mirando al cielo, y lo imitosuspirando,recordandoelcontrolquesellevadeltiempodurantelavendimia—.No quiero trasvases innecesarios, del cajón directo al camión—continúa conautoridad—.Necesitoque lasuvas lleguensin roturasyenterasa labodegay,porsupuesto,sinaplastar,¿estáclaro?

—Víctor,macho,relájateunpoco,anda,quenosomosnuevosenesto—lerespondeManolo,tanrelajadocomosiestuvieratumbadoalbordedelapiscina—.Llevounacuadrillaquesabeloquesehace,asíquenotepreocupestanto,¿quieres?

—No me importa, recuérdalo todas las veces que sea necesario; que eltrabajoaquísehagabienesfundamentalparatodoloquevendrádespués.

—Valentina,maja,dilequelotenemosclaro,aversiteescuchaatimásqueamí—mepide,haciéndomesonreír—.Quesí,macho,quesí,que lo tenemos

Page 211: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

controlado.—¿Cuántotiempocreesquetardaréis?—lepreguntafrunciendoelceño.—Una semana más o menos, dos a lo sumo, y porque llevo una buena

cuadrillademozos.—¿Quiéncontrolalavendimiadelosotrosviñedos?—A Pepe lo tengo al frente de los de Labastida y, a Manuel, en los de

Rodezno—leinforma,yveoqueasienteconlacabeza.—Llámameparacualquiercosaquesurja—lepide,dándoselavueltapara

empezaraalejarse,ylosigo.—¿Si quiero un besito también te llamo?—replica guasón y, me vuelvo

haciaVíctorparamirarlo.La sonrisa que está empezando a formarse en su rostro, las arruguitas en

tornoasusojosquelaacompañan,esamiradatanclaracapazdeconseguirqueel cieloquehoynosda cobijo la envidiey el sonidode suvoz llenandocadapartedemíconsiguenque todoestoque llenamipechoaleteeconunpoquitomásdefuerzaysonríoyotambién,sinperdermeningunodesusgestos.

—¿Yavamos con los besitos,machoman?—se la devuelve, con una voztremendamente sexy, provocando que una carcajada escape demi garganta y,cuandomesonríeamí,provocamuchascosasmás.

—Eres irresistible, macho, no puedo evitarlo —le contesta el otro,siguiéndolelacorrienteantesdedarselavueltayproseguirconsutrabajo.

—Gabriel,elhermanodeManolo,eramuyamigomío—lecuentocuandoreanudamosnuestrocaminohacialoscamionesdondeestáncargándoselasuvas,mientrasVíctornopierdedetalledetodoloqueaconteceanuestroalrededor—.Él estudiaba en el colegioquehabía cerquita demi internadoymuchasvecescoincidíamos cuando salíamospor ahí.Recuerdoque…—perodejodehablarcuandosedetienefrenteauncapazoy,encuclillas,procedea«casi»analizarlosracimos que hay en él, completamente ajeno a lo que estoy explicándole,mirandolasuvascomosifueranahablarleencualquierinstante.

Yentoncesmepercatodequenoestoyaloquetengoqueestar,puesniestoypreocupadaporeltiempo,nitensa,nienningúnmomentosemehapasadoporlamentehacerloqueestáhaciendoél.

—¿Está todo bien? —le pregunto, obligándome a centrarme de una vez,agachándome también para estudiar los racimos de uva e intentando ver lo

Page 212: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mismoqueestéviendoél,pero,sinceramente,sólosoycapazdeverracimosdeuva,sinmás.

—Mepreocupaba un poco que nos hubiéramos adelantado en vendimiar apesardelosresultadosdelosmuestreos,perolasuvasestánenelpuntojustodemaduración. Fíjate, está perfecta —me dice cogiendo una uva, quitándole lapulpaysacandolaspepitas—.Negras,comodebenestar.

—Ylapielyanoestá tanáspera,yanoestanbruta—musitocogiendoyootra,rascándolaconeldedoparaquitarlelascapasynotandocómolosdedossemequedanpegadosporelazúcary, talycomomeenseñóahacercuandoerapequeña,cojootrauvaparallevármelaalabocayaplastarlaconlalenguacontraelpaladar—.Estáperfecta—confirmo sintiendo sudulzura expandirsepormiboca.

—Tebesaríaahoramismosipudiera—mesueltaconseriedad,mirándomeintensamente—. Estás preciosa, Val —susurra sólo para mí mientras lo mirofascinada.

—Tútampocoestásnadamal—leindico,sonriéndoletontamente.—¿A pesar de ser una pasa arrugada? —me pregunta socarrón,

recordándomemispalabrasylevantándose.—Oungranreserva,tododependedecómosemire—matizo,imitándolo.—Hombre, gracias, la cosa va mejorando entonces —comenta riendo,

reanudandoelcamino,para,seguidamenteendurecersugesto.—¿Sabesunrecuerdoquetengoasociadoaldelavendimia?—lepregunto

siguiéndolo.—¿Cuál?—meformulafrunciendoelceño.—Eldelapreocupación—leindico,alisándoselocondulzura—.Primerola

demipadrey,mástarde, la tuya—continúo,perdiéndomeensumirada—.Laépoca más bonita del año para mí, vosotros la vivís en un estado de tensióncontinua.

—Paramítambiénloes,apesardequesueneunpococontradictorio.Supongoque lavendimiaescomoeseexamenfinalalque temesno llegar

preparadodespués de todoun año trabajando; hacer bien ese exameny, sobretodo, en elmomento idóneo es lo que, supongo, nos lleva a preocuparnos enexceso.

—Yluegoestánlosdimesydiretes.Seguroqueenestosmomentosestamos

Page 213: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

enbocade todos losviticultoresporestarvendimiando losprimeros—ledigoconunamediasonrisa,observandocómonuestrospiessehundenligeramenteenlatierrasecadejandohuellasque,mientrasotrosnolaspisen,seránunapruebaclaradequehoyestamoscaminandojuntosenlamismadirección.

—Seguro—mediceajenoamispensamientos,sindejardeobservarlotodo—,peroesomeimportadoscojones.

—Dimequéves,Víctor—lepidocentrandomiatenciónenél—.Dimequébuscas o qué esperas encontrar cuando lo miras todo tan detenidamente —inquierodeseandoaprendertodoloquepuedaduranteestasemanamientrasnosacercamoshasta los camiones refrigerados, donde losoperarios están llegandoconloscestosdeuva.

—Tienes que prestar atención a todo lo que te rodea,Val.Observar cómocortanlosracimos,quenollenenelcajónenexcesoparaevitarelaplastamientodelauvayquesecumplatodoloquelehedichoaManolo.Queelracimonollevetierrapegadaaélesesencialparaevitarenloposibleimpurezastalescomopolvo,sarmientosoinsectos—mecuentasinperderdetalledenada—.Todoesimportanteenelprocesodecreacióndeunvinoyelviajecomienzaaquí,enelcampo.Estamosenmanosdel tiempo,sobre todoahora,porque,si llueve,nosjode, pero si hace demasiado sol, también nos jode, así que supongo que esnormal estar un poco tensos y preocupados durante esta semana—me aclaraobservando cómo van llegando camiones y se marchan otros—. Venga,regresemosalabodega—mepropone,echandoaandarhaciasuvehículo.

—¿Sabes? Puede que yo me criara aquí, pero tú creciste viviéndolo deverdad.Paramí,estoeracomouncuadroqueadornabamivida,mientrasquetú,en cambio, fuiste quienutilizó los pinceles para pintarlo, quien semanchó lasmanos de pintura mientras las mías permanecían limpias —le explico conadmiración, una vez que estamos en su coche—.Para ti, estemundono tienesecretosy,porelcontrario,paramíestodounsecreto.

—Un secreto fácil de desentrañar si estás dispuesta a hacerlo—me animaconunamediasonrisa—.Puedequenoayudarasapintaresecuadro,Val,perocreciste viéndolo; lo llevas dentro y, en realidad, no es cierto que no temancharas las manos, recuerda que, cuando tu abuelo vivía y se unía a losoperariosparavendimiar,túlohacíasconél—añade,yconsuvozvuelvoaversusmanosgrandesycallosascortandolosracimosdeuvaconcuidado,vuelvoa

Page 214: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ver esos ojos quememiraban como si yo fuera lomásgrandedel universoyvuelvoaveresasonrisaquesiempreteníalistaparamí—.Además,erescapazdehacerlacatadeunvinomejorquemuchagentequellevaañosenestesector—meindicaarrancando,devolviéndomealarealidad.

—La primera cata que hice fue contigo —contesto, recostándome en miasiento,todavíaconlaimagendemiabueloacompañándome—.¿Larecuerdas?

—¿La cata de la uva? —me pregunta, entendiéndome en el acto, y mevuelvoparamirarlo,sonriendoabiertamentecuandoveoquelohaceél.

—Exacto, y siempre que como uvas la rememoro, como antes cuando heprobadolauvaenelcampo—leconfieso.

—Yotambiénlaherecordado—medicevolviéndoseparamirarme—,sóloqueahorayanoteníaaunaniñafrenteamíintentandorobarmeelvino.Joder,sillegoadescuidarmeuninstante,telobebes—meindicamientrasconducehacialabodegayempiezaasonarPresenceoflove,deTheAlarm,ysonríounpoquitomásalreconocerla.

—Sí, y me jodiste el plan —prosigo, arrancándole una carcajada—. Laverdad es que comer fruta contigo siempre es una experiencia —agrego,guiñándoleunojo—.Presenceoflove—señaloconchulería.

—Demasiadofácil—replicacondescendiente,negandoconlacabeza.—¿Fáciloquesimplementesoybuena?Puedeinclusoqueseamejorquetú

—lopincho,sabiendoquevaasaltar.—¿Con las canciones remember?Lo siento, nena, pero, pormucho que te

esfuerces, siempre te superaré—objeta fanfarrón,haciéndomesonreír—.Vertecrecersíquefueunaexperiencia,Val—medice,poniéndoseserioderepente—.Túme enseñastemás cosas de las que yo podré enseñarte nunca, y continúashaciéndoloahora.

—No estoy de acuerdo —le rebato, pues sin duda, si soy quien soy, esgraciasaél—.Además,graciasa ticonozcolascancionesremember—musitocon dulzura, llevando mi mano hasta su cuello, que rodeo, acariciándoselomientras él, amodo de respuesta, lleva sumano ami pierna, para acariciarlatambién,sindejardeconducir—.Ytodavíatienesmuchascosasqueenseñarme;sivoyaestudiarenología,quierosaberlotodosobreestemundillo.Siesposible,quieroserlasabiondadelaclase.

—Deesonotengolamenorduda,comotambiénséqueseráslamásguapa

Page 215: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

detodas—meadulaconcariño,consiguiendoqueunatontasonrisaseperfileenmi rostro—.Oye…sidecides irte…¿cómo loharás?¿Podrásasistir aclaseyestarlasveinticuatrohorasdisponible?

—Yaquisiera.Tendráqueseron-line,porquepresencialescasiimposible.Tendré tutores que resolverán las dudas que pueda tener y cogeré pocas

asignaturasparapoderirsacándolaspocoapoco.—¿Ycuándoestudiarás?—Se pierde mucho tiempo durante los castings y los desfiles, así que

aprovecharé esas horas muertas para estudiar. Supongo que, cuando quiereshacer algo de verdad, lo haces; buscas la forma de conseguirlo y, si no laencuentras,puestelainventas.Séquelamodanoesmifuturoyquellegaráunmomentoenelqueserédemasiadomayor,opuedeinclusoqueundíamecansedevivirsiemprecorriendo,yparaentoncesquieroteneralgoaloqueaferrarme;noquierovermeundíasintrabajoysinsaberquéhacer—leexplicomientrasestacionaelvehículoenelparkingdelabodega.

—Decidasloquedecidas,nuncaaparquestusestudiosysácateesacarrera.Nuncadejesdeformarte,apesardelavidaqueestésllevando—meaconseja

antesdesalirdelJeep,ylohagoyotambién,recordandocuandoélcompaginabalossuyosconel trabajoen labodegay,con lacompañíadeesosrecuerdos, losigo hacia el patio de vendimia, donde están llegando los camiones—. Comosabes,cuandolasuvaslleganalabodega,secogenvariosracimosdedistintascajasparaaplastarlosysacarelmosto;conelrefractómetroseanalizaelazúcary,conelFOSS,losdemásparámetrosantesdellevarloscajonesalascámarasfrigoríficas,dondelasdejamosrefrigerandoacuatrogradosduranteveinticuatrohoras para evitar su oxidación, la salida del mosto y preservar el color y losaromasalmáximo—medetallamientrasobservoelproceso, esequehevistocientos de veces y que escucharía de su voz cientos de vecesmás—.Pasadasesas veinticuatro horas, se repiten los mismos análisis y, dependiendo de losresultados,sevalorayseseparalauvaendistintastinasenfuncióndesucalidad—prosiguesuexplicación,queinterrumpecuandosuenasumóvil—.Tengoquecontestar—mediceyasiento—.Dime,Gonzalo…no,nohepodidoconectarmehoytodavía.¿Cómohaidolaapertura?—lepreguntaconseriedady,aunqueséque no debería escuchar, lo hago hasta el punto de casi quedarme embobadamirándolo—.Joder,elDowJonesestornudaynosotroscogemoslaputagripe…

Page 216: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

No,novendasaún.Esperaunpocomás,aversirecupera…Yalosé,peronopuede mantenerse en ese nivel mucho más y en algún momento tendrá queremontar; además, si vendo ahora, palmomucha pasta—afirma frunciendo elceño,ylomiromásfijamente—.Vale,tío;mantenmealtanto.

—Teheoídosinquerer—ledigoalzandoambascejas.—¿Sinquererevitarlo?—replica,sonriéndome.—Bueno, más o menos. ¿Pierdes mucha pasta? —inquiero, siendo la

indiscreciónhechamujer.—Mucha—meindicaempezandoaandar,ylosigo.—¿Y no estás preocupado?—le pregunto, incrementando el ritmo demis

pasoshastacolocarmeasulado.—Noprecisamente.—¿No?¿Deverdad?—leformulo,extrañada—.Porqueteaseguroque,siyo

perdieramuchodinero,estaríaquesemellevaríanlosdemonios.—Poresosoymejorquetúentodoslosjuegos—merebateconinsolencia,

consiguiendoquesonría.—Peroyonopierdopastaytúsí—replico,arrugándolelanariz.—Cierto, pero tampoco la ganas—matiza, dándole un toque con su dedo,

comoacostumbraahacer.—Muy listo—acepto, sonriendo un poquitomás—. Explícame de qué va

todoeserollo—lepido,deseandosabertodoloqueformepartedesuvida.—A ver…—empieza a decir sin dejar de caminar—. ¿Sabes lo que es la

bolsa?—mepregunta,yniegoconlacabeza—.¿ElIbex35?—prosigue,yyocontinúonegandoconella—.¿Lasacciones…?

—Sóloséloquesonlasacciones,peropocomás—reconozco.—Puesesasaccionesoscilanalalzaoalabaja,dependiendodelasnoticias.Sisalecualquiernoticiaencualquierpartedelplanetaqueafecte,porloque

sea, a sus intereses, las acciones de esa empresa pueden subir o bajar y, enconsecuencia,valermásomenosdinero;básicamente,comprascuandoestánalabajayvendescuandoestánalalza.

—¿Yahorapierdesdineroporquehanbajado?—Exacto.Estoesmuyvolátil.Piensaunacosa:sisaleunanoticianegativa

paralabanca,todaslasaccionesqueesténrelacionadasconellasevanairalamierda, y al contrario si es positiva, y a todo eso súmale que el noventa por

Page 217: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ciento de la bolsa se rige por EstadosUnidos; si ellos suben, nosotros vamosdetrás,ysiellosbajan,nosotroscaemosenpicado.Elsecretoestáenmantenerla calma y pensar que todo lo que baja sube, igual que luego puede volver abajar.

—¿Yporesotienescuatroordenadoresentumesa?—Exacto—mecontesta,guiñándomeunojo.—¿Yenseriotegustaeso?¿Quetudineroestéenmanosdelmundoydelas

noticiasquepuedansurgir?—Meencanta, y no está enmanosdelmundo, está enmismanos: soyyo

quiendecide y asume los riesgos—me rectifica, sonriéndome con esa sonrisatansexyqueescapazdeconseguirquesemelicuenloshuesos.

—Pues ahora estás perdiendo pasta—le recuerdo, sonriéndole yo tambiénmientrasllegamosaldespacho.

—Tiendesaolvidarlascosasquetedigo—meindicasocarrón,sentándoseasumesa,ylomiroalzandoambascejas—.Recuerdaquetodoloquebaja,sube,en todos los sentidos—prosigue divertido, guiñándome un ojo y haciéndomesonreír un poquito más—. Val, he ganado una fortuna y también he perdidomuchodinero,perosonriesgosqueasumoyquecontroloenciertamanera.

—Nocreoquemegustaraesemundo—sentencioconvencida.—Por eso tú eresmodelo y yo no—replica, centrando su atención en las

pantallasdesusordenadores—.Ponteatrabajar.—Perdona,peronohedejadodehacerlodesdequehe llegado—le rebato

encendiendomiportátil.—¿Hashabladoconlosdemarketingsobreelvídeoquetedije?—inquiere

sinmolestarseenmirarme.—Sí;teníanunohecho,¿quieresverlo?—Luego —me contesta distraído, y me levanto para ver de qué va en

realidadtodoeso.Con la naturalidad que te da el compartir tu cuerpo y tu intimidad con

alguien, llegohastadondeestáély,sinpensármelodosveces,mesientoensuregazo,arrugandoelceñoencuantomimiradaseposaenelprimerordenador.

—¿Deverdadteaclarascontodoesto?—planteo,viendolapantallallenadecifras,unasrojasyotrasazules,quenodejandecambiar.

—Estás viendo el Ibex35 a tiempo real—meaclara, rodeandomi cintura

Page 218: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

consusbrazos—.Esascifrasdeahíson los índices internacionales—continúa—. El Dow Jones es el índice norteamericano; el AEX, el de Ámsterdam; elCAC40, el deParís; elDAX,eldeAlemania; elEuroStoxx50, el índicedereferencia de la Eurozona, el Euronext 100 es el paneuropeo… y tienes queseguirlos todos,porque, cuandouno sedesploma, significaquealgo sucede,ypara esto tengo este ordenador, para seguir las noticias sin perder de vista losvaloresylosíndices—mecuenta,ylomiroflipandoencolorines.¿Enserio?—.Estas cifras de ahí son los valores que sigo; fíjate cómo se actualizancontinuamente.Esimportanteconocerlaacción,sabercuáleselvalormáximoalquehallegadoycuálessumínimo,paraconocercuálessurecorrido.

—¿Y el tercer ordenador? —le pregunto sintiendo el calor de su cuerpoenvolviendoelmío.

—Pararealizarlasórdenesdecompraydeventa—contestaconvozronca,ysientocómotodocomienzaavibrardeformadistinta.

—Y,elcuarto,paralabodega,¿verdad?—Verdad—merespondeconsumanoacariciandomipierna.—Eresuncerebrito—sueltoconadmiración,volviéndomeparamirarlo.—¿Túcrees?—dicedivertido.—Sinduda,uncerebritoqueestáparacomérseloenterito—musitorozando

mislabioscontralossuyos,recordandolasmuchasvecesqueenelpasadodeseéhacerestoynopude.

—Val…,novasamarearme—measeguraconvozronca,sonriendocontramislabios.

—¿Estásseguro?—murmuromoviéndomesobresuspiernasparasentarmeahorcajadas sobre ellas—. Vic… —susurro enterrando mis dedos en su pelo,recibiendocomocontestaciónungemidoylareaccióninstantáneadesusexo.

—Nena…—mascullallevandosusmanosamitraseroypegándomecontrasudureza,ymemuevobuscandolafriccióndenuestrossexos—…para,Val—mepide con voz aúnmás ronca—, para…En serio, para…No está la puertacerradaconllave…Puedeentraralguien.

Ysindilaciónymoviéndomeconrapidez,melevantoparacorrerhaciaellaycerrarelpestillo.

—Problema resuelto.Cincominutos,Víctor, ¿pueden esperar las acciones,losmercadosylavendimiacincominutos?Luegoprometonovolverarozarte

Page 219: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

hastaque terminemos—lo tiento,yendohaciaél empezandoadesabrocharmelos vaqueros mientras su mirada se oscurece en una milésima de segundo,cargándosedeundeseoprimitivoydemilesdepromesasqueseinstalanenmivientre,asentándoseytirandodeél—.Medebesunareconciliaciónentodaregladespués de lo de anoche—le reclamo desprendiéndome de ellos sin dejar demirarlo.

—¿Ycreesqueconcincominutostendremossuficiente?—mepreguntasinperder detalle de cadaunodemismovimientos—.Una reconciliación en todaregla requiere mucha más dedicación; me limitas con tan poco tiempo—meindicaconseriedad.

—Ya lo sé, pero esto será algo así como una tirita; luego vas a tener queesmerarte —replico, empezando a desabrochar mi camisa hasta dejarlacompletamente abierta mientras el brillo de su mirada va cambiando,creciendo…,desbordándose.

Conteniendo la respiración, soy testigo de cómo hace a un lado todos losportátilespara,seguidamente,cogermeenvolandasydepositarmesobrelamesa,dejandomispiernasabiertasfrenteaél,ylomirosintiendoquemirespiraciónseacelerahastaconvertirseenuncaosabsoluto.

—Incluso para poner una tirita, cinco minutos es insuficiente —susurrahaciendoaunladolatelademitanga,yemitounsuspirobajito.

Conunmovimientorápido,su lenguabarremisexoy,conceleridad, llevomimanohastamislabiosparaamortiguarelgemidoquesehacoladorápidoyfugazpormigarganta.

—Noquierooírte—meordena con autoridad, sentado en su silla conmispiernasabiertasfrenteaél,yjuroqueestemomentoesunodelosmássexisquehevividohastaahoraconél.

Asientoensilencio,conmisexopalpitandodeanticipaciónyelfuegoyeldeseo entremezclándose y empezando a correr con virulencia por mis venasmientrasélsedeshacedemitangapara,casialsegundo,inclinarsurostrohastallegar de nuevo a mi sexo, que atrapa con sus labios, chupando, lamiendo ysuccionando, con susmanos en torno ami trasero, pegándome a su boca conposesión,yrecuestomiespaldasobresumesa,incapazdemantenermesentada,necesitandoy reclamandomás conmis caderas, que semueven sobre subocamientrasélsedaunbanqueteentodareglaconmisexo.

Page 220: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Gemidossilenciadosporlapalmademimano,suspirosqueretumbanenlasparedes de su despacho, papeles cayendo al suelo y el orgasmo formándosecalientedentrodemíconlaayudadesulenguaysuslabiosy,cuandoexplotaenmi interior, siento cómo se adueña de cada fibra demi sermientras suelto unlargogemidoimposibledeacallar.

—Joderrrrr…—farfullo entre gemidos, arqueándome y sujetándome a lamesaentreespasmos.

—Tehedichoquenoquierooírte—meadvierte con lamirada en llamas,levantándose, desabrochando sus vaqueros y colocándose un preservativo conceleridad.

Y, antes dequepueda contestarle,mepenetradeuna estocadaydenuevollevomismanosamiboca.

—La putamadre—masculla anclando las suyas ami cintura, pegándomemás a él y bombeando dentro de mí con movimientos rápidos y secos queconsiguenquetodomedévueltas.

Gimodenuevocontralapalmademimanomientrassumiradamemantieneatadaaéldelamismaformaenqueestánhaciendosusmanosconmicuerpo,ylodejohacer,casienloqueciendoconloqueestáhaciéndomesentir,necesitandogritar,chillarysacarfueratodoestoqueestáahogándome,peromuerdolapieldemimanoparanohacerlo.

—Consigues que pierda la cabeza, Val—sisea entre dientes, sin dejar debombear,ymuevomiscaderas reclamandomásprofundidad,más intensidadymásdetodo,apesardequeestamosapuntodecargarnoslamesa.

—¡Más!¡Mássssss!—susurroentrejadeos,llevandomismanosalbordedelamesa,necesitandollenarmispulmonesdelairequeélestállevándose.

—¿Quieresmás?—rugeenunsusurrosindejardemoverse,cogiendomiscaderasypegándomeconfuerzayrudezaasusexo,consiguiendoqueestavezsea yo la que pierda la cabeza y gima con fuerza cuando el orgasmo llega denuevo,fulminante.

—Dios mío… —musito mirando al techo cuando se desploma sobre micuerpo,sintiendoloslatidosdesucorazónbombeandofuriosocontrasupecho,yloabrazo,enroscandomislargaspiernasalrededordesucintura.

—Quieres acabar conmigo, ¿verdad?—me pregunta cuando sus latidos senormalizan,empezandoasalirdemiinterior.

Page 221: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Losiento.Habíaolvidadoqueyanoestásparamuchostrotes;aestepasocualquier día te cargarás la cadera—le digo socarrona, observando cómo sequitaelpreservativo,yletiendounpañuelodesechable.

—Muygraciosa—merespondesorprendiéndomeallimpiarmeélamí,ylomiroembelesada—.¿Creesqueesatiritadurarápuestahastaqueterminemosdetrabajar?

—Intentaré mantenerla en su sitio —afirmo cogiendo otro pañuelo paralimpiarloestavezyoaély,denuevo,mesorprendecuandomedaunbesotantiernoydulcequesientocómoseexpandeportodomicuerpohastallegaralaplantademispies.

—Vístete —me ordena con una sonrisa canalla—. Ya está bien deholgazanear,señorita,yporsupuestotienesprohibidovolveramarearme.

—Sabesqueenelfondoteencantaquelohaga—replicolevantándomedelamesapara empezar aponerme la ropa—.Duranteunmomentohe temidoquenoslacargáramos—leconfiesosonriendo,viendolospapelesesparcidosporelsueloycomenzandoarecogerlos.

—Comonodejesdemarearme,algúndía loharemos—meresponde,y lomirocautivada,deseandonodejardehacerlojamás.

Elrestodeldíatrabajamoscodoconcodosintomarnosundescansoexceptopara ir a comer y,mientras el sol realiza su ascensoymás tarde su descenso,nosotrosacabamosdematizarlapresentación,vamosjuntosalosviñedospara,posteriormente, regresar a la bodega y, de ahí, de nuevo al despacho. Juntosasistimos a varias reuniones y, todas las veces que lo llama Gonzalo, intentadetallarmecómofuncionatodoeserollodelabolsa,apesardequelosnúmerosy yo nos llevamos pésimamente. Mientras lo observo trabajar, hablar porteléfonooatiendoasusexplicaciones,descubroaunnuevoVíctor,alVíctordesangrefríacuandosetratadelmundodelasfinanzas,alapasionadoqueamalatierrayloqueéstanosofreceporencimadetodoyalpacientecuandosetratademí,yconesedescubrimiento,miadmiraciónporélsemultiplicapormil,porquemultiplicarpordos,pordiezoporcienesinsuficientecuandosetratadeVíctorydetodoloqueprovocaenmí.

—Nopuedomás,Vic,¿tequedamucho?—ledigorecostándomeenmisilla,viendoatravésdelaventanacómoestáempezandoaoscurecer—.Sonmásdelasocho—musitocerrandolosojos.

Page 222: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Estás cansada?—me pregunta con dulzura desde la suya y asiento sinabrirlos.

—Mucho,empiezoahacermeunaideadeloqueescurraraquí.—¿Yquéesmásduro,estoosermodelo?—Sermodelo—lerespondoabriendolosojosysonriéndole.—Mentirosa—merebate,recostándoseensusilla.—Eldíaquequieras,teconviertesenmodeloylocompruebasportimismo.—No,gracias;pasodeesosrollos.—Puestúseríasunbuenmodelo—afirmomientrasveocómoselevantay

llega hasta mi sitio, para seguidamente apoyarse en la mesa, y lo miroembelesadaguardandosilencio.

—Todavía te debo una reconciliación en toda regla y tú tienes queexplicarmequiéneseseGabriel—mesuelta,sorprendiéndome.

—Pensabaquenomeestabasescuchando—susurro,sorprendida.—Soy hombre, pero, aun así, soy capaz de hacer varias cosas a la vez—

replica socarrón—. Val, yo siempre te escucho —añade mirándome con unamezclademilcosasdistintasquesacudenmi interior—.Tengodospropuestaspara ti—prosigue, cruzándose de brazos, y lo miro expectante empezando asonreír.

—¿Laprimera…?—indagosinpoderdejardepensarqueeseltíomássexyquehevistonunca.

—Llenar la bañera de mi casa, meternos dentro, quitar la tirita, cenarcualquiercosayvolveraponerotra—meindicaconvozronca,provocandoquemivientresecontraiga.

—Puesyapuedeserbuena lasegundaopción—musitoguiñándoleunojo,casirelamiéndome.

—Bueno,básicamenteeslaprimeraperoyendoprimeroacenarfuera.—Todavíanotengohambreyestatiritallevahoraspuesta,creoqueyaestá

paracambiar—sueltohaciendounamueca.—Y,sinduda,parahacerloesmejormojarlapreviamente—medice,yveo

elbrillodesumirada.—Hayunapartedemíqueyaestámojada—leconfiesosintiendoque,con

mispalabras,mirespiraciónseacelera.—Creoqueestáclaroconquéopciónnosquedamos—mascullaalejándose

Page 223: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

demíhaciasumesa—.Cierra tuordenador,nos largamos—meordena,yconceleridadhagoloquemepide.

Page 224: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO17

Llegamos a su casa casi en tiempo récord, con el deseo tirando de nosotros,quemándonoslapielytambiénelalma,y,mientraspreparolabañera,élllamaalrestauranteparapedirlacena.Cuandoentraenelbaño,loobservoensilencio,imaginandocómoseríamividasieligieraesto,sienlugardeiraNuevaYorkoptara por quedarme aquí… Trabajaríamos juntos, supongo que discutiríamosparamástardereconciliarnos,nospondríamostiritasqueluegoquitaríamosparareemplazarlasporotras,nosbañaríamosjuntoscomovamosahacerahora,nosinventaríamosnuevosjuegosojugaríamosalosqueyahemosinventado,alisaríasuceñocuandolofruncieraysonreiríacuandoélhicieralomismoconelmíoytendría la vida que siempre soñé tener cuando ser modelo no entraba en misplanes…cuandomisplanessóloteníanunnombre,queeraelsuyo.

—¿En qué estás pensando?—me pregunta sentado a mi lado, y lo mirosorprendidapues, ensimismadacomoestaba,nomehabíapercatadodeque lohabíahecho.

—¿Cómo?—musito,volviendoalarealidaddeestebaño.—Dímelo tú. Estabas ausente mirando esa pared, aunque juraría que ni

siquieraestabashaciéndolo.¿Dóndetehabíasido,Val?—Aningún sitio, simplemente estaba pensando que te faltan unas cuantas

velas; con esta luz, este baño parece muy frío —miento, guardando misreflexionesparamí,puesséque, si lascompartoconél,volveremosadiscutirsobreloquedeboonodebohacerconmivida.

—Seguro… —me responde con una incipiente sonrisa—. No vas acontármelo,¿verdad?—inquiere,estavezconseriedad.

Page 225: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Acabodehacerlo, te faltanvelas—afirmocon rotundidad, llevandomisdedosalaguaparacomprobarlatemperaturaysoltandounsuspiroplacentero—.Estoy deseando meterme en ella —susurro, sintiendo mi cuerpo agarrotadodespuésdetodoeldíatrabajandosinparar.

—¿Y, entonces, a qué estás esperando para desnudarte? —me señalaatrapandomimiradaconlasuya,ymehundoenelladelamismaformaenquemicuerpoansíahundirseenelaguadeesabañera,deseandoquenuncadejedemirarme así, deseando que nuestras palabras no dejen huecos que puedan serllenados por silencios pesados y que esta nube, que continúa flotando en lapalmademimano, haciéndomecosquillas, semantenga suavey esponjosa enella,deseandotantascosasquetemoestarsiendodemasiadoegoístayquenosecumplan—.Cuando regrese, te quiero desnuda—me ordena con voz rasposa,devolviéndomedenuevoalarealidad,yasientoensilencio,sintiendocómoeldeseoseinstalaenmivientreparaeliminartodosmistemores.

Medesnudoconlaurgenciatirandodemíy,cuandomesumerjoenelagua,suspirosuavemente,cerrandolosojosynotandoquetodoslosmúsculosdemicuerposerelajanalinstante.

—Podría pasarme horas y horasmirándote—oigo queme dice, y abro loojos,viéndolo sentadoenelbordede labañera,dondeantes estabayo—.Ahítienestusvelas—meindicaconvozneutra,señalándolasconunmovimientodelacabeza,yabrounpoquitomáslosojosalreconocerlas.

—¿Esasvelasson…?—lepregunto,sentándomeysonriéndolecondulzura—.Todavíalastienes…—musitomientrasélmemiraconlamismadulzuraconlaqueyoestoysonriéndole.

—Siempreesconvenientetenervelasencasaporsisevalaluz—sueltaconunasexysonrisa,levantándoseydesprendiéndosedelacamisa,ydenuevomerecuestoenlabañera,disfrutandodelasvistas.

—Seguroqueesporeso—musitodemorándomeensupechoyencadapartedesucuerpoquevaquedandoaldescubierto—.Cierralaluz—lepidounavezqueestádesnudo.

—Sicierrolaluz,novoyapodervertebien—meindicaguiñándomeunojo,bajando la intensidad de la misma, y lo observo sabiendo que los miles deemocionesquellenanmipechollevansunombre—.Recuéstatesobremipecho—me pide entrando en la bañera, y hago lo queme dice, apoyándome en su

Page 226: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

cuerpoysuspirandoconsuavidad,denuevoimaginandomividaconél—.Estáspensando en cómo sería nuestra vida si te quedaras, ¿verdad?—me preguntaleyendomimente,ycierrolosojosymialma.

—No—lemiento, negándome a romper estemomento perfecto—.Estabapensando que eres un encanto por guardar las velas—prosigo, abriendo misojos, rememorando ese día—. ¿Lo recuerdas? Eran velas artesanales y yo nollevabadinero.

—Yvalíanuncojón,¡comoparatirarlas!—comenta,haciéndomesonreír.—Nolashastiradoporquesontuyas,recuerdaqueluegotelasregalé—le

digobuscandosumirada.—Teequivocas,no las tiréporque,aunquenuncamásvolvíaencenderlas,

me recordaban a ti y a todo lo que vivimos juntos—me explica posando sumanoenmibarbilla,paravolvermirostromáshaciaél,buscandomislabios,ysiento cómomi cuerpo se estremececonesebeso—.Te fuistey rompiste contodo,Val,peroesdifícilhacerlocuandotequedasytodoloquevesterecuerdaauna persona—me confiesa, y creo que, esta vez, es él quien se hunde enmimirada, y dirijo la mía al frente, huyendo de ella y de todo lo que estoysintiendo, recostándome otra vez en su pecho, con sus brazos envolviendomicuerpo—.Durantecasiunañofuiincapazdeescucharmúsicaremember—merevela,consuslabiosrozandomioreja,provocandoquemipielseerice.

—Yo nunca más volví a escucharla—le confieso con seriedad, temiendoque,connuestrasconfesiones,nosadentremosenaguasdemasiadopantanosasquenosimpidansalirdeellas—,hastaqueregreséyvolvíahacerlocontigo…—añadomientras él guarda silencioy lo imito, rememorando esosdías—.Noquiero volver a hablar más de ese tema, ¿vale?—le pido, temiendo que estesilencio se vuelva pesado y llene huecos que no le corresponden—. Ahoraestamosaquí;centrémonossóloenesoyenquitarestatiritaqueestáempezandoamolestarme—añado,moviéndomeysentándomeahorcajadassobreél.

Lo beso deseando sentirlo cerca, deseando crear un universo entero desentimientos en torno a nosotros, en el que los temores y las sensacionesextrañas no tengan cabida, y lo consigo o lo conseguimos, pues sus besoscorrespondenalosmíosmientrassucuerposedejaguiarporelmío,opuedequeseaalrevés,pero¿quémásdaquiénguíeaquién,cuandoloúnicoimportanteesno extraviarse?, ¿cuando lo único importante es entonar nuestra canción? Esa

Page 227: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

queestácompuestaporsusurros,miradas,gemidosybesosintercaladosencadauna de sus estrofas, esa que sólo nosotros conocemos y somos capaces detararear,esaquesólonosotrossomoscapacesdeescuchar…

***

—¿Sabesloquemásodio?—lepreguntollevándomelacopadevinoaloslabios,consucamisapuesta,aunqueseríamáscorrectodecirya«mi»camisa.

—¿Nohaberte terminadolacena?—planteasocarrón,viendolassobrasenmiplato.

—¡Ja! Muy gracioso —le digo, sonriendo abiertamente—. Has pedidodemasiadacomida;eraimposibleacabársela.

—Yolohehecho—merebatesindejardemirarme.—Túeresunpozosinfondo;enserio,megustaríasaberdóndetelometes.—Buena genética, supongo —me indica con una media sonrisa—. ¿Qué

decías?¿Quéesloquemásodias?—¿Deverdadnolosabes?—inquieroconseriedad,sosteniéndolelamirada.—Tenerqueirteacasa—meindicaconlamismaseriedadconlaqueyole

heformuladolapregunta,sinpermitirquemesueltedesumirada,yasientoconlacabeza.

Y, entonces, recuerdo que nuestra discusión de ayer empezó justo en estepunto,cuandoteníaqueirme.

—Bueno, pero eso tiene fácil solución: dile a tu padre que estás conmigo,que estamos follando sinparar yque casimejor si te instalas enmi casaparapoder marearme todo lo que quieras —suelta, y no sé si está bromeando ohablandoenserio.

—Nosabeslaquetecaeríasihicieraeso—musitonegandoconlacabeza.—Créeme, lo sé de sobra; llevo tiempo viendo a José soportarlo

estoicamente.—Benditapacienciatieneelpobre.—Osimplementequiereatuhermana—merebate,denuevoconseriedad.—Ya…—susurroevitandosumirada,sinsabermuybienquédeciranteeso

—.Tengoqueirme—murmurofinalmente,buscandolasuyadenuevo,sinsaberquévoyaencontrarmeenella.

—No quiero que lo hagas —afirma mientras observo la oscuridad que

Page 228: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

desprende,comosienellaestuvieranencerradasmilesdenochessinluna.—Niyo,pero loprefierocientosdevecesa tenerquesoportarotrodesus

discursitos—leindicoenunsusurro,levantándomeparaquitarlamesa.—Déjalo,Val,ya lo recojo todoyo luego—mepidemientrasexperimento

esasensaciónextrañaqueempiezaahaceractodepresencia.—Oye,noquierovivirlodeayerotravez,noquieromássensacionesraras

ni silencios incómodos—afirmo deseando eliminarla antes de que se instaleentre nosotros, yendo hacia él y sentándome sobre sus piernas—. No lorepitamos,¿vale?—lepidohurgandoensumirada.

—¿Quiénhadichoquevayamosarepetirlo?—replicaconsequedad—.Queyonoquieraquetemarchesnosignificaquenodebashacerlo,y lodeayer teaseguroquenovaavolverasuceder,almenosnopormiparte—sentencia,ypercibocómolaoscuridaddesumiradadesaparecelentamenteconlosrayosdelalunallena.

—Vale—susurroapoyandomifrenteenlasuya,consusbrazosrodeandomicintura—.Voyacambiarme—leinformo,levantándomeconreticencia.

Delamanoyenuncómodosilencio,recorremosestecaminoquepodríamoshacerconlosojoscerradossiquisiéramos;estecaminodetierra,piedrecillasyhojassecasquenosviocrecer,cambiaryconvertirnosenquienessomosahora,yenelquetantasytantasvecesdejamosnuestrashuellasmarcadasenélmientraslorecorríamos.

—Buenas noches, Val —me dice rodeando mi cintura con sus brazos,pegándomeasucuerpocuandollegamosalfinaldelmismo.

—Buenas noches, Vic —musito rozando mis labios con los suyos,enterrandomisdedosensupelo,tirandodeélyprofundizandoenelbeso.

—Nosvemosmañana—susurraconvozronca,aprisionandomipielconsusmanos,haciéndolasuyacomocadavezqueestamosjuntos.

—Nosvemosmañana—repito sinpoderalejarme,mientrasélmuerdecondulzuramilabioinferioryyomepegounpoquitomásasucuerpo.

—Echarédemenostusronquidos—meconfiesaconunaincipientesonrisa;lomiroflipadayseechaareír.

—Perdona,peroyonoronco—lerebato,muriéndomedevergüenza.—Síquelohaces—measeguradivertido—,ysonlosronquidosmásdulces

queheoídojamás.

Page 229: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Venga ya… Te estás quedando conmigo —mascullo preguntándome siseráverdad,puesnuncanadiemelohabíadicho.

—Te aseguro que no. Además, te quedas como enganchada a mitad delronquido, alargándolo —me cuenta carcajeándose y, no sé por qué, pero nopuedodejardesonreír.

—Hasta quenomepresentes pruebas fiables de ello, nopienso creerte—objeto haciéndome la ofendida, separándome de él—, y, si fuera cierto, quetengomisdudas,tequedassinellosestanocheporquemisronquidosyyonosvamos —concluyo caminando de espalda para no perderme ninguno de susgestos.

—Dejalaventanadetuhabitaciónabiertayroncaunpocomásfuerteparaque pueda oírlos desde lamía—me dice, guiñándome un ojo, guardando lasmanos en sus bolsillos, sin permitir queme suelte de sumirada, mientras yosientocómolaburbujaquenosunesealargaunpoquitomásamedidaquemealejodeél,comosifueraelásticaeincapazderomperse.

—Mepondréunaltavoz—sigosubroma,sonriendomuymuytontamente,sin dejar de caminar de espaldas, haciendo que suelte una carcajadatremendamentesexy—.Buenasnoches,Vic—susurrosóloparaél.

—Buenasnoches,Val—sedespide antesdedarse la vuelta ydejar que laoscuridad de la noche envuelva su cuerpo, llevándose con él una parte de esaburbujaque,hastahacenada,nosenvolvíaaambos,manteniéndonosunidos.

Y,aunquedudomuyseriamentequeseaverdadesodequeronco,esanoche,talycomomehapedido,duermoconlaventanaabierta.

*

Despiertoconlaprimeraalarmademimóvil,sintiendocómotodoestoquellenamipechodespiertaconsurecuerdo,aleteandoconfuerzacontansólopensarquevoyaverlodenuevoy,llenadeenergíaeimpaciencia,melevantodelacamadispuestaaarreglarmeentiemporécord.

Unavezlistay,casicorriendo,medirijoalacocinay,cuandopongounpieenella,frenoenseco,petrificada.Estásentadoensutabureteysin,percatarmede ello, deslizomimirada por su cuerpo, contrayendo elmío y llenándolo decalor, de un calor abrasador que proviene del fuego que su mera presencia

Page 230: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

prendeenmisentrañas,unoqueseenredaenmivientrehastallegaramipecho,donde se asienta mientras yo soy incapaz de alejar mi mirada de su cuerpo,demorándome,duranteunossegundosqueyosientoeternos,encadadetalle;ensuspantaloneschinoscolorbeige,ensusuéterazulmarinoremangadoalaalturadeloscodos,encómolaropaseajustaasuanatomía,ensupelotodavíamojadoporladuchayensuceñofruncidomientrasojeaelmóvil,llevándoselatazadecaféaloslabios.

Durante una mínima fracción de segundo, imagino el tacto de su peloenredadoentremisdedos,espeso,rizado,húmedoysuave;lasensacióndesusmanosenvolviendomicuerpo;sucalor,sufuerzaytodoloqueconunroceescapazdeprovocar enmi cuerpo, y sientoque ese calor asentado enmipechosubehastamirostro.

—Buenosdías—me saludaCasi convoz cantarina y, con el sonidode suvoz,reacciono,volviéndomehaciaella—.Anda,perosierescapazdemoverte;yacreíaquetehabíasconvertidoenunaestatuadesal—prosigue,machacona,mientrasélsedamediavuelta.

Y,cuandonuestrasmiradasseencuentran,sientocómomicorazónsedetienehastaquedarsuspendidoenmediodeunlatido.

—Buenosdías—musitofinalmente,sinapartarmedesumirada.—Buenos días—me responde, sosteniéndomela, con voz ronca, y percibo

cómounsuspirobajitoescapademislabios.ConscientedequemiqueridaCasildanoestáperdiéndosedetalledeninguno

denuestrosgestos,meobligoaecharaandardeunavez,sintiendo,derepente,queVíctor y yo nos hemos convertido en el desenlace de una serie que la hatenidoenvilodurantevariastemporadasseguidas.

—Hoylacosalatenemosmássuavequeayer,¿eh,pareja?—nospreguntaentresusurros,apoyandosusantebrazosenlaisla,mirándonosconcomplicidadyguiñándonosunojo—.Quélejosmequedaamítodoesto,nimeacuerdoya—añade,ylamirointentandonosonreír.

—Nosédequémeestáshablando,Casilda—lemientomientrascontemploelplatodefrutaquetengofrenteamíyalavezquemirodereojoaVíctor,quemeobservaconunasonrisacanallaquetiraparaatrás.

—Claro que sí,maja, lo que tú digas…—masculla, chasqueando luego lalengua—.Anda que… aquí tienes tu té. Espero que estés alimentándote bien;

Page 231: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

comoyanocomesnicenasaquí,puesnohayquientecontrole.—Tranquila,queestoycomiendo—afirmodándoleunsorboalainfusión.—Eso espero, y, tú, ojito con lo que haces —le advierte a Víctor,

sorprendiéndolo.«Vayatela.»—¿Quéquieresquehaga,Casi?—lepreguntaésteserio,llevándoselataza

decaféaloslabios.—Túyasabesaloquemerefiero.Hala,osdejo,quetengofaenaquehacer,

y tú —me dice esta vez a mí—, ojito tú también —me advierte, y la mirodivertidamientrasmipadreentraenlacocina.

—¡Hola, papá! Pensaba que ya estarías en la bodega—lo saludo con unasonrisa.

—Hoymipaseoacaballosehaalargadounpocomásdeloprevisto—mecuenta acercándose amí para darme un beso—.ATrueno lo tienes nervioso,hija.

—Esverdad…Sólolohemontadounavezdesdequehellegado,¿nolohashechotú?—lepregunto,tomandonotamentaldehacerlo.

—Bueno,nolohabrásmontado,perohashechootrascosas,¿verdad,hija?—intervieneCasi,interrumpiéndonos,ylamirodeseandomatarlay,enelfondo,dandograciasporquenohayadicho«montandootrascosas».Vamos,quellegaahacerloylaahogoenlapiscina.

—Por supuesto, ha preparado una presentación y está trabajando en labodega—saleenmidefensaVíctor,mirándolaconunaseriedadquemeimpone.

—Miraelotroquéprontohasaltado—nosdiceconesasonrisadesabiondaqueenestosmomentosaborrezco.Vamos,queamiCasinolaachantaniVíctorninadie.

—Conmigonocorre tantocomo legusta—comentamipadre, llenandosutaza de café, retomando el tema del caballo y pasando de lo que estamosdiciendo y, entonces, las palabras de mi hermana cobran un poquito más desentido,puesmetemoquelomíoconVíctoresunsecretoavocesquemipadrehaoptadoporignorarparanollevarsemásdisgustos.

—Y con ella tampoco va a hacerlo —matiza Víctor, arisco, y lo mirofrunciendo el ceño—. No es negociable, Val. Si ese día te hubieses caído, tehubieras roto el cuello —me amonesta con sequedad, clavando su potente

Page 232: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

miradaverdesobre lamía,y recuerdomi locacarrera,conscientedeque tienerazón.

—Nuncasuelocorrertanto—medefiendo.—Puesnolohagas—meordenamipadreconautoridad—.Unacosaesque

vayasrápidoyotrabiendistintaquetepongasenpeligro.—Vale, lo pillo, nada de carreras suicidas—les digo, deseando zanjar el

temadeunavez—.Sihoynoacabamosmuytarde,losacaréacorrerunrato—lecomentoamipadre.

—¿A qué hora terminasteis ayer?Me fui a Rodezno y luego ya me vinedirectoacasa.

—Bastantetarde—puntualizaVíctorpormí—.Porcierto,necesitoreunirmecontigo, ¿a qué hora te vendría bien? —le pregunta, cambiando de tema,supongoqueparaevitartenerquedarexplicaciones.

—TellamoencuantolleguedeLabastida—lecontestaantesdellevarselatazaaloslabios.

—¿Cómovan por allí?—se interesaVíctor, y de nuevo pienso en que noestoyaloquetengoqueestar,puesnisemehapasadoporlamentepreguntarlenadadelavendimiaamipadre.

—Amuybuenritmo;sonunabuenacuadrillaquesabeloquesehace.—Conéstostambiénvabien,ayer…—lecomentamientrasmimóvilvibra

ydesconectodeellosparacentrarmeenelmensajequeacabadellegarme.Es una fotografía mía a tamaño gigante en plena Gran Vía deMadrid, y

sonrío muy muy abiertamente, sin poder alejar mis ojos de la pantalla delteléfono.

—¿Y esa sonrisa?—inquiere Casi, cómo no… Si es que, si no pregunta,revienta.

—Nada,unaamigamehaenviadoesta foto—lecuento,mostrándosela—.SoylaimagendeD’Elkann,unaimportantefirmadediseño,paralatemporadadeotoñoeinvierno,yésteeselpósterqueapareceensufachada,enplenaGranVíadeMadrid—leindicoconelorgullollenandocadafibrademiser.

—¿Puedoverla?—mepreguntaVíctor, interesándose,ydetectolamáscaraconlaquehacubiertosuvozysumirada.

—Claro —musito tendiéndole el teléfono, intentando descifrar sus gestosmientraséllaobservacondetenimiento.

Page 233: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

En ella aparezco caminandopor un sendero de hojas secas conun vestidonegroceñidodelacolecciónProntoModay,derepente,unaideasecruzapormimenteydejodeprestarleatención.

—Papá, ¿nunca has pensado en alquilar la casita de invitados para hacerreportajes de moda? Esta finca es enorme, ¿te imaginas los reportajes quepodríanhacerseenella?Conloscaballos,losviñedos,losolivos…¡Madremía!Pero ¿cómo no lo hemos pensado antes?—les pregunto emocionándome pormomentos, captando lamirada de todos, yme fijo en la de Víctor, de nuevodesprovistadeesamáscara.

—No es mala idea, Pedro. Te sacarías un dinero extra y encimapromocionaríaslabodega—ledice,ycasijuraríaquepuedooírlosengranajesdesucabezaponiéndoseenfuncionamiento.

—La verdad es que esa casita está desaprovechada, me gusta la idea —secundamipadre.

—Yamí,ymássivienenmodelosfamosas,queaquíunaestámuyhartadeversólocampo.Suertequesiemprehayalguienquemedistrae;yaosdigoyoqueestacocina,aveces,esmejorqueelmejorprogramadecotilleos—empiezaadecirnosaVíctoryamí,ylamiroachinandolosojos,temiéndomelopeor—.¡Curro!¡Fuerademicocina!¡Pedro!¿Hasdejadotúentraralperro?—riñeamipadrecontodosugenio,yendohastaelanimalparasacarlodecasamientrasyoestoyporbeatificarlo.

—Mehehechomuyamigadeladiseñadoradelacasa,MaríaEugeniadelaRúa—empiezo a contarles ami padre y aVíctor, deseando cambiar de temacuantoantes—.Siosparecebien,podríainvitarlaalapresentacióndelvinoparaquevieraelentorno—prosigomientrasmicabezasecentradeunavezyvaunpelínmásallá—.Además,tambiénpodríainvitaraunpardeamigosfotógrafosparaquepuedantenernosencuentaparafuturostrabajos—añadoentusiasmada,pasandodeCasi,quecontinúaintentandocogeraCurroparasacarlofueradelavivienda.

—Hecho, entonces. Invítalos y vamos a poner esa idea en marcha, a verdóndenoslleva—intervienemipadre,sonriendo,cuandoCurro secuelaentrelas piernas de Casi, silbando para que el animal se acerque a él, y sonríoabiertamentealoírlamaldecirenarameo.

—Vámonos —me indica Víctor, levantándose mientras Casi y mi padre

Page 234: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

inicianunadiscusiónsobresilosanimalestienenonotienenqueentrarencasa.Losigoensilencio,demorandomimiradaensucuerpoyencadaunodesus

movimientos y sus gestos—. Estás muy guapa en esa fotografía —me dice,cuandoaccedoasucoche,posandosuincreíblemiradaverdesobremí.

—Gracias. La verdad es que fue una sesiónmuy chula y desde el primermomentohubomuybuenrollocontodoelequipo—lecuentomientrasarranca,ysientocómolaintimidadnosenvuelve.

—Te gusta esemundo, ¿verdad?—me pregunta tomando la carretera quenosllevaráalosviñedos,contodasuatencióncentradaenella.

—Sí, es como vivir cientos de vidas en una sola. Recuerdo que hice unasesióndefotosenParís,frentealatorreEiffel,paralarevistaVogue;llevabaunvestidodeDiorymientrasmevestían…

—¿Te visten? —suelta con estupefacción, volviéndose durante unossegundosparamirarme.

—Siempre. Piensa que esos vestidos son obras de arte que cuestanverdaderasfortunas;bienseaenunshootingoenundesfile,siemprenosvisten.RecuerdoqueJune,laestilista,medecía:«Porloquemásquieras,Valentina,nilo roces»—le explico sonriendo, evadiéndome a ese día, recostándome en elasiento—.Es increíble…Llevaresosvestidos, las joyas,que temaquilleny tepeinen, y verte, casi irreconocible, en entornos de ensueño. Es como vivir unsueñoyeslapartebonitadeestemundo;luego,comoentodoslosmundos,hayinframundosquedevezencuandoasomanparahacerleunpoquitodesombra.

—Ya…—medicecomoúnicarespuesta.—¿Qué?—lepreguntosonriendo,volviéndomehaciaél.—Nada —contesta, centrando toda su atención en la calzada, guardando

silencio—.Hastenidounagranideay,sifunciona,podríamosvaloraresacasitatambién para eventos y pequeñas celebraciones familiares, como bodas,comunionesobautizos—añade,cambiandodetema.

—Elentornoesmuybonitoyperfectoparacualquiercelebración—musitodeslizandomimiradaporlaventana.

—¿Tantocomoesos lugaresdeensueño?—mepregunta sin imprimirleunápicedeemociónasuvoz.

—Más—leaseguroconvencida,volviéndomeparamirarlo—,porqueesmicasa y aquí te encontré y me encontraste —matizo sonriéndole con dulzura,

Page 235: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

deseando dibujarmimisma sonrisa en su rostro, pero sin llegar a lograrlo—.Siempreparecequelonuestrotengamenosvalorqueloqueencontramosfuera,pero no tiene por qué ser así y esta finca es un claro ejemplo —afirmo,guardandosilencioluegoduranteunosminutos—.Sialgúndíamecasara,noloharíaenParísoenunaplayaparadisíacadecualquierislaperdida;loharíaaquí,enlastierrasdemifamilia.

—¿Y en qué parte, exactamente?—indaga con curiosidad, obviando deciralgomássobreloprimeroquelehedicho.

—Eneljardíndelacasa,conlacordillerafrenteanosotrosyrodeadosporlosviñedosquemevieroncrecer—detallo,observandocadaunodesusgestos—.Seríaalatardecery,bajolaencina,haríaunenormecorazónenelsueloconpétalos de rosa blancos y, dentro de ese corazón, le entregaría el mío a esapersona —musito evitando decir que me gustaría que esa persona fuera él;Víctor guarda silencio y lo hago yo también—. ¿Y tú? ¿Dónde te casarías sialgúndíadecidierashacerlo?—lepreguntofinalmentealsentirelsilenciollegardenso y sigiloso como lo haría la niebla, intentando romperlo antes de que sevuelvatanespesoquenosimpidavernos.

—Esedíanovaallegar,Val;nohacefaltaniquememolesteenimaginarlo—merespondeconsequedad.

—¡Bah! Qué tontería, qué sabrás tú lo que querrás o no en un futuro, ycállateynoempiecesahablarmedeeseVíctorjodidoqueentodosestosañosnoha hecho acto de presencia, al menos estando yo delante —le ordeno confirmeza,y,antesdequepuedarebatirmenada,prosigo—.¿Ycómovalabolsaytodo ese rollo?—le preguntomientras él estaciona el todoterreno frente a losviñedos.

—¿Intentando cambiar de tema? —suelta con una incipiente sonrisa,volviéndoseparamirarme.

—Másomenos,yporquemeinteresasabersitodavíapierdespasta,másquenadaporsi tengoquehacerteunpréstamo,yasabes—leindicoguiñándoleunojo, consiguiendo que sonría finalmente antes de salir del coche, y lo imitosaliendoyotambién.

—Nocreoqueestavezhagafalta—comentaconvozsexy,yahorasonríoyo, sabiendo que le he ganado por goleada al silencio denso y pesado que,durante unos segundos, he sentido amenazante—. Por cierto, ¿cómo va esa

Page 236: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

tirita?¿Voyatenerquereemplazártela?—mepeguntaconvozrasposamientrasencaminamosnuestrospasoshacialosviñedos.

—¿Intentando cambiar de tema tú ahora? —musito mirándolo de reojomientrassientocómotodocambiaanuestroalrededor,vibrandoyllenándosedeunaluzdistinta.

—Másomenos,yporquemeinteresasabersitodavíalallevasbienpuestaotengo que cambiártela —me indica haciendo suyas parte de mis palabras,guiñándome un ojo, consiguiendo que una sonrisa resplandeciente iluminemirostro.

—Estáparacambiardesdequehevistoelplatodefrutaenlacocina—sueltodivertida,haciendoquesonríaconmigo—,asíqueesperoquenotardesmuchoenhacerlo—añadomientrascaminamosatravésdelasfilasdevidesy,cuandovemosaManoloacercarseanosotros,guardamossilencio.

—Buenosdías—nossaluda—.Antesdequepreguntesnada,vatodobien—se anticipa a Víctor, y sonrío inspirando la fragancia de la fruta maduraentremezclada con la de la tierra y la de los recuerdos que llegan con ella,sonriendounpoquitomáscuandoimaginolacantidaddefrutaquehayaquíylobienquepodríamospasarlo.

—Vanabuen ritmo, entonces—oigoque le dicemientrasme acerco algomás a él, necesitando sentir su proximidad y, cuando nuestros meñiques serozan, demoro el momento, sintiendo su piel acariciando la mía mientras élcontinúahablandoconManoloyesaburbujaquenosenvolvióanoche regresapara envolvernos de nuevo—… Llámame si necesitas algo —se despidefinalmente,trascasidiezminutosdecharlaenlosqueyosólohesidocapazdecentrarmeenloquesupiel,suvozysucuerpoprovocanenelmío.

—No te preocupes, macho; esto lo tenemos controlado —afirma conseguridad.

—Hasta luego,Manolo—me despido yo también, deseando llegar cuantoantes al despacho para tenerlo exclusivamente para mí—. Me despistas —leconfiesocuandoempezamosacaminarynadiepuedeoírnos—.Sesuponequedebería haber prestado atención a lo que estabais hablandoy, en cambio, sólopodía pensar en la cantidad de fruta que hay aquí, en rozar tus dedos o enpegarmeunpocomásatucuerpo—musitomirándolodereojo,viéndolosonreírysonriendoconél,mientrasvamosdejandolasfilasdevidesanuestrasespaldas

Page 237: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ylosoperarioscontinúanconsulabor.—Tú también lo haces, aunque no te des cuenta—murmura sólo paramí

mientras, intentandodisimular loqueme temoque esobvio, desvío lamiradahasta posarla sobre las vides, contemplando cómo los trabajadores cortan losracimosylosdepositanenloscajones,sintiendocómosusdedosrozandenuevolosmíos—.Estoydeseandollegaraldespacho—mediceconvozrasposa,ymevuelvoparamirarlo,detectandoelfuegoardiendoensumirada.

—Yyo…Haydemasiadagenteanuestroalrededortodoeltiempo—susurrosólo para él, sin detener mis pasos. Y, dejándonos llevar por todo lo quesentimos,nosacercamosunpoquitomás,rozandodenuevonuestrosmeñiquesenunafugazcaricia.

—Necesitobesarte,Vic—murmuromientrasmironuestrospiescaminandoalunísono,hundiéndoseenlatierrasecaporelsolydejandosushuellasenella.

—Yyonecesitofollartedesdequehasentradoenlaputacocina—mascullacon la voz cargada de deseo, enlazando sumeñique con elmío con fuerza ydeterminación.

—HoyteníamoshastaaCurroenella—digobuscandosumirada,sintiendoeldeseotirarconmásfuerzademí,hastacortarmelarespiración.

—Esunamierdaestodetenerqueescondernos;parecemosadolescentes,Val—farfulla sin dejar de avanzar, alejando su mano de la mía y, durante unossegundos,sientoquehaempezadolacuentaatrásparaloquetengaqueser,puessólonosquedancuatrodíaspara lapresentacióny, entonces, tendréquehabertomadounadecisión.

—Ya lo sé—musitomientras llegamos a su coche y, sin decir nadamás,accedoaél;sumóvilempiezaasonar.Gonzalo.

Page 238: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO18

El camino hacia la bodega lo hacemos con él hablando por teléfono conGonzalo,atravésdelmanoslibres,sobrelaapertura,losvaloresytodoeserolloque,pormuchoqueseesfuerceenexplicarme,amísemeescapa,posiblementeporquenimegustanimeinteresalomásmínimoy,mientrasabsorbocadaunode losmaticesdesuvozyobservohastaelúltimodesusmovimientos,sientocómo la impaciencia y el deseo por tenerlo paramí sola crece pormomentoshastadominarcadaunadelasfibrasdemisery,cuandoestacionaenelparking,suspiro bajito antes de bajar del vehículomientras él continúa absorto en losíndices,ylasnoticiasquesacudenalmundoy,porende,alosmercados.

Estaveznoloespero,total,estátanconcentradoconversandoconGonzaloque posiblemente, si un meteorito arrasara el planeta, ni se enteraría ycontinuaría hablando con ese hombre, medio agonizando, sobre lasconsecuencias de ese impacto y de cómo losmercados, y en especial elDowJones, o como sea que se llame ese puñetero índice, se verían afectados y,bufandoydirigiendomispasoshaciaelinteriordelabodega,mepreguntosieltal Gonzalo sólo lo tiene a él como cliente, porque ni los políticos en plenacampañaelectoralhablantantocomoellosdos…¡Pesados!

—Buenosdías,Adri—saludoamiamigacuandollegoalatienda.—Buenos díasssss—me contesta sonriéndome con picardía—.Me parece

queelbastardohadejadode serlo, ¿oestoyequivocada?—mepregunta entresusurros,guiñándomeunojo.

—Supongoquehemosencontradolaformadehacerencajarelcírculoconelrectángulo —suelto sonriendo abiertamente, viéndolo entrar y sonriendo un

Page 239: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

poquitomás.—Vaya caradepánfila haces—musitanegando con la cabezamientras su

teléfonocomienzaasonaryponelosojosenblanco—.Quierosaberlotodo—meindicaantesdeatenderlallamada.

—¿Yahasterminado?—lepreguntoenunsusurrocuandollegaamilado,ynotocómo,denuevo,todovibradeformadistintaentrenosotros.

—Sí.Sientoquesehayaalargadotantolallamada—sedisculpaposandosumirada,duranteunosescasoseintensossegundos,sobremislabios,ysientoquelaelectricidadempiezaachisporrotearentornoanuestroscuerpos.

—Víctor,¿tevabienquenosreunamosahora?—lepreguntamipadreconsuvozarrónllenandotodalatiendaycargándosedeunplumazolaelectricidadytodaslaspromesasquehabíaensumirada.

Y, como si el mundo se hubiera aliado en nuestra contra para que nopudiéramosestarasolasenningúnmomento,enlazamoslareuniónconmipadreconladeunpardeproveedorespara,mástarde,reunirnosconlosdelcateringy,deahí,aunavisitaguiadaporlabodegaylosviñedosconunclientepotencial,visitaqueterminaconunacomida,ofcourse,y,cuandollegamosdenuevoalatiendaysuenaotravezsuteléfono,sientodeseosdegritarlealuniversoenteroquenosdejeenpazalmenosdurantecincominutos.

—Teesperoeneldespacho—leindicoconsequedad,sinsabersimehaoídoono,mientrasdescuelgaysaludadenuevoaGonsado,comoloherebautizado,porlodepesado,vamos,porqueandaquenollegaaserplastaeltío.

Llegoaldespachoenfadadacontodosyenespecialconesehombrequehoypareceno tenerotracosaquehacerque llamarlopor teléfonoa todashoras,y,bufandoy regodeándomeenmi frustración, llamoaMaríaEugenia.Otra cosaque teníaquehaberhechoyque, entre tantashistorias,nohabíapodidohacertodavía.

—¿MaríaEugenia?¡Holaaaaaa!¿Quétal?SoyValentina—lasaludocuandodescuelga—. ¿Tienes un momento? —le planteo, pues sé lo liada que vasiempre.

—Justoahoramismoacabodesalirdeunareunión,¿quieresuncafé?—mepregunta,ysonrío,empezandoarelajarme.

—Ese café me pilla un poco lejos, estoy en La Rioja —le cuentorecostándomeenlasilla,haciendoaunladomienfado.

Page 240: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Haciendo algún shooting? —se interesa mientras percibo de fondo lamáquinaexpendedoradecafé.

—Desdeaquípuedoolerlo—comentohaciendounamueca.—¡Esverdad!Habíaolvidadoquetútomasté—prosigue,dándoleénfasisa

laúltimapalabra,burlándoseclaramentedemí—.Nosécómopuedesfuncionarsincafé; amíme loquitasymehundesen lamiseriamásabsoluta. ¡Espera!,miento, para eso ya tengo aMaurice, ¡qué reuniónme ha dado el hijo de sumadre!Cualquierdíamelocargo;enserio,nopuedoconesehombre.

—¿Maurice…elodiosoMaurice?—indago,recordandounodelosdíasquefuiaD’Elkannycoincidíconél—.PuesMauriceestácañón.

—¿Cañón?Paracañones,losdelColorado.Esetíodisfrutaamargándomelavida, lo que yo te diga. Si es que lo odio con todas mis fuerzas—exclama,haciéndomereír—.Porcierto,¿túnoteibasalaGranManzana?

—Sí, y en cambio he terminado rodeada de uvas—le cuento, y sonrío alpercatarmedelopresentequetengolafrutaenmividadesdehaceunosdías—.Oye,¿tienesalgoquehacerestefindesemana,apartedeodiaraMaurice?

—¿Porqué?¿Vasainvitarmeacomeruvas?—Mejor, voy a invitarte a beberlas —la rectifico, sonriendo más

abiertamente—. ¿Recuerdas cuando te expliqué que mi familia tenía unabodega?

—Sí,claro—mecontestamientraslaimaginobebiéndoseelcaféymirandoporencimadesusgafasdepasta.

—Pues el sábado será la presentación de un nuevo vino que llevará minombreymegustaría invitarosaPilar,aDanteya ti.Dimequevendréis,porfavorrrr…Tengoganasdeveros,sobretodoati;tienesquecontarmequéteestáhaciendo el odioso Maurice —le pido recordando lo bien que lo pasamoshaciendo el shooting—, y no hace falta ni que busques hotel, porque puedesalojarte en la casita de invitados de la finca. ¿Quéme dices? ¿Fin de semanabucólico,bebiendovinoyalejadadelodiosoMauriceofindesemanacaóticoenMadridcorriendoelriesgodetropezarteconél?

—Yo,contaldeestaralejadadeesetipo,mevoyhastalaConchinchinasihacefalta.

—¿Dónde?—lepreguntosoltandounacarcajada.—¡Al quinto boceto! ¡Oh, my Diorrrr! ¡Qué joven eres, hija!—Ahora la

Page 241: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

imaginohaciendoalgúnaspavientoconlasmanos.—Entonces,¿vasavenirono?—insisto.—Simeinvitasavinoyprometesescucharmisdesvaríos,haréunesfuerzoe

iré—aceptay,sinverla,séqueestásonriendo.—Prometo invitarte amuchovino, escuchar tus desvaríos ymostrarte esta

fincaquevaaenamorartetantocomoamísitúmeprometes,acambio,que,sitegusta,latendrásencuentaparafuturosshootings—lesueltoabocajarro.

—¿Cómo?—Imaginatusdiseñosenunentornodeolivos,videsyárbolescentenarios…Imagínalos rodeados de naturaleza pura y dura —le digo, empezando a

entusiasmarme—.Imaginatusvestidosenloaltodeunacolinaconloscaballoscorriendo libres campo a través. Esta finca es un lugar excepcional yprivilegiadoparahacerreportajesynunca,hastahoy,lohabíamospensado—lecuento,yaoficialmente entusiasmada, incorporándomey casi viendo loque leestoynarrando—.Imaginasedas,blondasytulesfusionándoseconlosmilesdetonalidadesdelverdede losárboles,delmarrónde la tierraydelmoradocasinegro de las uvas.MaríaEugenia, saldrían unos reportajes increíbles y quieroquesólotúyunaspocaspersonasseáislasprimerasenverlo.

—¡¡¡Oh, my Diorrrr!!! Quieres matarme, ¿verdad? —declaradramáticamente.

—Másbienquierollevartealcieloenlatierra—replicoentrerisas—.¿Quémedices?¿Tereservounahabitaciónenlacasitadeinvitados?

—Hija,delaformaenlaquemelohasvendido,averquiéntedicequeno.Además,quiénsabe,igualdeestefindesemanabucólicohastamesaleuna

colecciónen tonos tierra,burdeosyverdes.Envíame ladirección,ya tienes laprimera habitación reservada —me asegura, haciendo que mi sonrisa seensancheenmirostro.

—¡Genial!¡Vaaserunfindesemanaincreíble!¡Nosvemoselsábado!—ledigofelizantesdecolgar.

Tras hablar con María Eugenia, llamo a Pilar y más tarde a Dante, elfotógrafoquesuelehacerlosreportajesdeD’Elkann,sinqueVíctorhagaactodepresenciaenningúninstantey,trasconfirmarlaasistenciadetodosysindejardepreguntarmedóndeestará, llamoaCiro,unode losmejoresfotógrafoscon losquehetrabajadoyconelquetuveunrolletehacetiempo.

Page 242: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¡Hombre, pero si es mi modelo favorita! —me saluda zalamero,haciéndomesonreír.

—Sí,claro,seguroqueesoselodicesatodas—lerebato,recostándomeenlasilla.

—Teequivocas,ricura,estosólotelodigoati.—Amíyaunascienmás—replico,soltandounacarcajada—.Andaqueno

sabesquedarbienninada,menudaboquitadepiñóntienes—prosigo,riendo—.Y, ¿sabesuna cosa?, quequiero tuboquita depiñón el sábado conmigo, dimequelotieneslibre—lepido,tamborileandolosdedosencimadelamesa.

—Tengounacena,pero,portuboquitadepiñón,laanulosihacefalta—merespondeutilizandoesetonosexyqueempleacuandoestáenplenasesiónyconlaqueconsiguequetodascaigamosrendidasasuspies.

—¿Aunquetengasqueconducirvariashoras?—añadoenarcandounaceja.—¿Puedesabersedóndecoñoestás?—mepreguntamedioriendo.—EnLaRioja—leanuncio,recostándomeenlasilla.—¡Sí,hombre!¿Enserio?¿Yquéhacesahí?—Prepararlapresentacióndemivino—anuncioconorgullo.—Vengaya…meestásvacilando.—Pues no, te estoy hablando muy en serio —contesto, empezando a

contárselotodoantesuestupefacción—.¿Quémedices?¿Teheconvencido?—le pregunto al finalizar mi relato, sonriendo y sabiendo de antemano surespuesta,puesaCirolejuntasenlamismafrasevino,caballosycampoytelohasmetidoenelbolsillodelamismaformaenqueélnosmeteanosotrasenelsuyoconsuvoz,susmiradasysusfrasecitas.

—Ricura,sabesquesoyincapazdenegartenada—contestaconvozmelosa,y lo imagino en el centro de su estudio, trasteando con su cámara, con susvaqueroscaídos,sucamisetademangacorta,susojosdeunazulimposibleysupelorubiorevuelto.

—Yalosé,y túsabesqueestoydeseandoverte;hacemilañosquenonosvemos —musito dirigiendo mi mirada hacia la ventana, viendo cómo el solcomienzasulentodescenso.

—Esoesporque,desdequetehasconvertidoenunamodelofamosa,yanotejuntasconlospobres.

—¿Ytúereselpobre?—planteo,divertida.

Page 243: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Mientrastengaquecurrar,loseré.—Y el día que dejes de serlo, ¿me invitarás a tu isla? —le pregunto,

sonriendo.—¿Lorecuerdas?—exclama,soltandodeinmediatounacarcajada.—Comoparanohacerlo;vivirencualquierislagriegaesunsueñodifícilde

olvidar.—Bebiendochampagne,rodeadodeamigosy…—Demodelosdepiernasinterminables—concluyolafraseporél.—Túentraríasenambascategorías—meindicaenunsusurro,conesavoz

rasposaquemerecuerdaaalgocalienteydulce.—Demuéstralo cuando ese sueño se haga realidad—le digo sin dejar de

sonreír,completamenterelajada—.Porcierto,tambiénvendráMaríaEugenia,ladiseñadora de D’Elkann, Pilar, la responsable de Publicidad y Marketing,ademásdeDante,¿loconoces?Eselfotógrafoquesueletrabajarconellos.

—Claro, es muy colega mío, y María Eugenia tiene un morbazo que loflipas;sóloporestarcercadeesamujer,iríaderodillashastaesafincatuya.

—Novasavenirafollar,vasaveniraunapresentaciónyaverelentorno.Céntrate,¿quieres?—lepido,lamardecontenta.—Estoy centrado, ricura, pero una cosa no quita la otra. Puedo ir a la

presentación, ver el entorno y luego podemos pasarlo todos muy bien… yasabes, yo te chupo, tú me chupas, ella me chupa —suelta socarrón,arrancándomeunacarcajada.

—Nosigas,porfavor;yasécómoseconjugaelverbochupar.—Tú y yo nos divertíamos mucho conjugándolo, ¿lo recuerdas? Y si le

sumamosaMaríaEugenia, ladiversiónpuededarmuchode sí—me indicaysonrío,¡quégolfoes!

—No, gracias, no me van las mujeres y, aunque me fueran, no creo queMaríaEugeniafueramitipo.

—Bueno, pues recordemos viejos tiempos, entonces, ¿qué me dices? Unacamagigante, tú, yoymuchovinoparamojarnosmutuamente—proponeconvozrasposa,ydenuevomerecuerdaaalgodulce,calienteytentador.

—La respuesta sería un sí rotundo si estuviera libre, pero no lo estoy. Losiento, ricura,perovasa tenerquebuscarteaotracon laquemojarteycon laqueconjugarverbos—ledigosindejardesonreír,percatándomedecuánto lo

Page 244: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

echodemenos.—¿Nomedirásquetehasechadonovio?Malhecho,ricura;estásdemasiado

buenacomoparaserdeunsolotío—mereplicaconinsolencia.—Noesminovio,peromegustamuchoy, sobre loúltimoquehasdicho,

pasoderesponderte—digodivertida.—Eslapuraverdad,poresoyonuncaestoyconunasolatía,seríaunapena

privaros de mi cuerpo y de lo que soy capaz de provocar en el vuestro —continúa, consiguiendo que suelte una carcajada que alargo durante unossegundos.

—Estoyseguradequeloscientosdetíasquepasanportucamateagradecenelsacrificio.

—Sabesquemicamasiempreestarádisponibleparati—insistedenuevo.—Tucamaestádisponibleparatodas;no,gracias.Además,yahepasadopor

ella varias veces y no quiero ser egoísta —contesto, disfrutando de nuestraconversación—.Y,hablandodecamas,¿tereservolamásgrandedelacasitadeinvitados?Lodigopor si decides sacrificarte y seguir compartiendo tu cuerpouna vez hayas cumplido como es debido conmigo—añado, arrancándole estavezyounacarcajada.

—Sabesqueesodecumplircontigohasonadoasexo,¿verdad?—Esoesporquetieneslamentesuciaysólopiensaseneso—afirmoentre

risas—.Además,sabesdesobraaloquemerefiero.—¿Yaquéterefieres,ricura?—mepreguntaconvozrasposa.—Yalosabes,excursiónporlafincaduranteeldíaypresentacióndemivino

porlanoche,todomuypuroycasto.—Quéaburridatehasvuelto.—Oposiblementeprefieraconjugarverbosconotrotío—lerebato.—Sabesqueesohadolido,¿verdad?—Yatehedichoquenoquieroseregoístayprefieroqueseanotrasmujeres

lasquedisfrutendeti.—Pues,enesecaso,soloirésimepermitessacarteunpardefotosparami

álbumparticular—mepicaconvozronca.—Nien tusqueridas islasgriegas serías capazde librartede tucámara, es

comounaextensiónmásdetucuerpo—musitomediosonriendo—.Sabesquemeencantaposarparati,peroestavezvaatenerqueservestida;yahetenido

Page 245: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

suficientes charlitas conmipadredurante estosdíasy, créeme,nomeapetecerepetirlaexperiencia.

—LasfotosquetehiceparaCartierfueronlahostia,hazelfavordedecirleatupadrequenoseatancarcaoselodiréyoporti.

—Niseteocurra—leprohíbo,incorporándome—,yniseteocurratampocodecirlequefuistetúquienlashizo;esetemacasimejorsiloobviamos.

—¿Y,entonces,quiénledigoquesoy?,¿eldelgas?—No,hombre.Conqueledigasqueeresfotógrafoesmásquesuficiente,no

esprecisodarmásinformacióndelaestrictamentenecesaria.—Nopodemosfollar,nopuedofotografiartedesnuda…¡joder,quécoñazo!

Almenos resérvame lahabitaciónqueestémáscercade ladeMaríaEugenia;nuncasesabe,igualnecesitaquealguienlesubalacremalleradelvestido…

—Oqueselabaje—matizo,divertida.—Todoesposible.Nosvemoselsábado,ricura.—Hasta el sábado, amore—me despido, sonriendo abiertamente antes de

colgar.—¿Conquiénhablabas?—oigo lavozaceradadeVíctorymevuelvocon

rapidez.Estáapoyadoenlapuerta,conelrostrocubiertoporesamáscarainexpresiva

con la que se cubremás veces de las quemegustaría, y lomiro sorprendida,preguntándomedesdecuándoestáahíyquéesloquehaoídoexactamente.

—ConCiro—leindicoprudente,viendocómoechaaandarhastallegaramimesa,dondeseapoyaenella,mientrasyonopierdodetalledeningunodesusmovimientos—.Nosabíaqueestabasaquí.

—¿Ciroeselfotógrafoconelqueteacostaste?—mepregunta,recordandoloqueleconté,yasiento.

—Sí,yunbuenamigoahora—puntualizo,intentandohurgarensumiraday,cuandoladirigehacialaventana,huyendodelamía,melevantoymeacercoaél.

—Oye, ¿qué pasa? —musito, sintiéndome perdida de repente, evitandotocarlo, rozarlo siquiera, abrazándome amímisma cuando noto esa sensaciónextrañallegarparainterponerseentreambos.

—Nada—me responde con sequedad, negando con la cabeza, bajando sumiradahastaclavarlaenelsueloycruzandolosbrazosalaalturadesupecho,

Page 246: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

deprontodemasiadolejosmí.—Oye…¿Temolestaquelohayainvitado?—indago,deseandoquelevante

lamiradaypodamosencontrarnos—.Mírame,Víctor—lepidoenunsusurro.—Puedes invitar a quien quieras —sentencia con frialdad, alzándola

finalmente,yniegoconlacabezacuandonoveonadaenella.—Sóloesunamigo, ademásdeunode los fotógrafosmás influyentesque

conozco—leaclaro,dejandocaermisbrazos.—Val, te lo he dicho, puedes invitar a quien quieras, no tienes por qué

justificarte—insistearisco.—¿Y,entonces,porquéparecequeestéscabreado?—leplanteoenunhilo

devoz,observandocómocogeaireylosueltadegolpe.—Noestoycabreado…Losiento,nena,hoyhasidoundíacomplicado—

meindica,llevandosusdedosalpuentedesunarizypresionando.—Oye, paramí tambiénha sido complicado.Llevodeseando estar a solas

contigo desde que he puesto un pie en la cocina y, en cambio, he tenido quecompartirteconmifamilia,conGonzalo,conclientesyconproveedores,ynohe dicho nada al respecto porque sé que, aunque me moleste, estamostrabajando,ytú…túmeoyeshablarconuntíoqueformapartedemicurroyasaberquéestápasandopor tucabeza—lerecrimino,con ladecepción tiñendocada una de mis palabras—. Si no te ha molestado que invite a Ciro, ¿quésucede?—añadosobrepasada,contemplandosurostroinexpresivo—.Víctor,noquierodiscutircontigonijugaraacertijos,nodespuésdeundíatanlargoydehaberte echado tantodemenos—añado, abriéndolemi almaparamostrarle elcamino de regreso a la suya—. Dime qué te ha molestado e intentaré norepetirlo,peroyaestábien.

—Val, tú no has hecho nada, sonmierdasmías que tengo que aprender agestionar—medice,desprendiéndosede lamáscaraquehastaahoracubría sumirada y permitiendo que vea las mil y una tormentas que estándesencadenándose en ella—. Oye, déjalo, ¿vale? —me pide, enterrando losdedosensupelo,incorporándoseyechandoaandarhaciasumesa—.Vámonosacasa;estardeyestoycansado.

—No —le digo rotunda, consiguiendo que se dé la vuelta, y enlazo mimiradacon lasuya—.Novoyamovermedeaquíhastaquenomecuentesdequémierdas hablas, porque, no sé tú, pero amíme jodemuchísimo ir así de

Page 247: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

perdida—replico,envalentonándome.—Sobre todocuandohas rechazado sexomojadoconotro tío—me rebate

condureza.—Entonces,¿vaporahíeltema?Temolestaquelohayainvitadoporqueme

acostéconél…Genial…—mascullonegandoconlacabeza—.Dimeunacosa,¿voy a tener que cabrearme yo también cada vez que hables con la señoritaLópez?—leespeto,fulminándoloconlamiradaysintiendocómolafrustraciónseconvierteenuncalorrabioso.

—Nodigas tonterías, por supuesto que no va por ahí el tema; sólo estabahaciendounapequeñapuntualización—merebateconseveridad.

—Pues métete tus pequeñas puntualizaciones por donde te quepan —mascullo furiosa mientras el silencio llega denso y espeso como lo haría lanieblaenlamadrugada,engulléndolotodoensulentoavance.

—Joder… Tienes razón, eso sobraba. Lo siento… otra vez—se disculpa,apoyando lasmanos en sumesa y agachando la cabeza para, casi al segundo,alzarlayposarsumiradasobrelamía,ycaptolaoscuridadquedesprende,comosidenuevohubieradentrodeellamilesdenochessinluna.

—Y,apartedeesapuntualización,¿quéesloquesientes,exactamente?—lepreguntoaferrándomeaella.

—Oye,déjalo,noledesmásvueltas,¿deacuerdo?—prosigue,soltandotodoel aire de golpe, incorporándose para empezar a acercarse de nuevo a mí—.Val…Noséquémesucedecontigo,perosiempreterminoperdiendolacabeza,parabienoparamal,yestáclaroqueestavezhasidoparamal.Supongoquenoereslaúnicaendarporhecholascosas.¿Empezamosdenuevo?—mepideconvozronca,buscandomimirada,ysoyyoquienestavezrehúyelasuya—.Val…

—insiste,ymegiroparaenfrentarlo.—Estamos aquí, ¿no? Siempre es aquí donde empezamos de nuevo —le

indiconegandoconlacabeza,sintiendoeldolorlatiendoenmigarganta,comosideunsegundolatidodemicorazónsetratara,sóloqueéstedueleyestrangula.

—Cierto—mediceenun susurro, acariciandomimejillaenun roce lentoquealiviaesedolorlatente—.Sientonohabersidocapazdeencontrarnuestroscincominutos—musitacondulzura.

—SupongoqueGonzalohatenidopartedeculpa.¿Esehombrenotienevidapropia o qué le pasa? ¿Se puede saber cuántas veces te ha llamado hoy?—le

Page 248: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

recrimino,apesardesaberquenodeberíahacerlo,puesesas llamadasformanpartedesutrabajo.

—Esehombrevigilamisinteresescomosifueranlossuyos—meseñalaconseriedad.

—Pueshacecincominutosquenotellama—matizoentredientes,sinpodercallarme.

—Porquelabolsayahacerrado—meaclaraconunamediasonrisa.—¡Vaya! Menuda suerte la nuestra, vamos a poder hablar sin que nos

interrumpaacadasegundo—insisto,machacona.—Hoy los mercados han estado muy volátiles—me informa como única

explicación—,ygraciasaesasllamadasherecuperadopartedeloqueperdía.—Pues qué bien, al menos ha servido para algo y ya no voy a tener que

hacerte un préstamo —mascullo con ironía, dirigiendo mi mirada hacia laventana.

—¿Quiénestáenfadadaahora?—mepreguntacondulzura,ysueltotodoelaire de golpe, percatándome de pronto de que ese enfado había estado ahí,hirviendoafuegolento,durantetodoeldíasinqueyomehubieradadocuentadeello.

—Supongo que yo también lo siento —musito finalmente, clavando mimiradaenelsuelo.

—¿Qué sientes, exactamente? —me pregunta alzando mi barbilla,obligándomeamirarlo.

—¿Nome lodices túyquieresque lohagayo?—replicoperdiéndomeenella,viendocómounamediasonrisasedibujaensurostro.

—No estaría demás saberlo, para no repetirlo—me indica con ternura, yniego con la cabeza, sabiendo que si sustituyo la palabra «mierdas» por la de«sentimientos», yo tengo miles de ellos que, como él, tampoco sé cómogestionar, sobre todo cuando esa bifurcación está cada vez más cerca—. Venaquí —susurra estrellándome contra su cuerpo, abrazándome con fuerzamientrasyosigoviéndolaenmiimaginación,tanrealcomosilatuvierafrenteamí—.Yotambién teheechadodemenos—meconfiesa,pegandosus labiosamifrente,ycierrolosojos,sabiendoque,apesardequeningunodelosdoshadicho realmente lo que siente, al menos hemos sido capaces de encontrar elcaminoderegreso…demomento.

Page 249: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme
Page 250: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO19

—¿Nos vamos? —me pregunta, separándome ligeramente de su cuerpo paraenlazarsumiradaconlamía,ypegomifrentecontrasupecho.

—Quería sacar aTrueno a correr—musito recordando las palabras demipadre, apoyando laspalmasdemismanosen su torso—,peroesoahora es loúltimo que me apetece—susurro aspirando su fragancia mientras sus manosacaricianmipelo.

—Novoyaconformarmeestavezconponerunatirita,Val—merespondeconseriedad,yalzolamiradahastaencontrarmeconlasuya—.Cuandotetengadesnudaentremisbrazos,noquieroprisas,asíquevamosasacaraesecaballoacorrerparaluegopodercorrernosnosotrosyconjugarmuchosverbosjuntos—merespondeconvozrasposa,contrayendomivientre.

—¿Nuncatehandichoquenoestábienescucharconversacionesajenas?—murmurosintiendocómoeldeseoconviertemicentroenalgolíquidoycaliente.

—¿Ynuncatehandichoquenosiemprehagolocorrecto?—merebate,conelfuegoinstaladoenlamirada.

—No,peroyameestoydandocuenta—lecontesto,demorándomeenella.—Séquenodeberíahaberteescuchado,Val,perosupongoqueyotampoco

hequeridoevitarlo—prosigue,haciéndomesonreír,puesesomismofueloqueyo le contesté la primera vez que escuché una de sus conversaciones conGonsado—.Vamos,seestáhaciendotardeparatodoloquetengoenmente.

—¿Ytienesmuchascosasenmente?—Cuandotienestodoeldíafrenteatiuncarameloynopuedesacercartea

él,sólopuedeshacerusodetuimaginación,yteaseguroquelamíahaestado

Page 251: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

muy activa hoy y he imaginado miles de formas posibles de desenvolverlo,chuparlo y lamerlo, así que vamos a sacar a ese caballo, porque luego quierocomprobarsisabe tanbiencomorecuerdo—meresponde,ysientocómo,consus palabras, mi corazón se instala en mi sexo, consiguiendo que lata deanticipación.

—Pasemos de Trueno, Vic —le propongo, devorándolo con la miradamientrasélempiezaacogersuscosas.

—Teconozcoy,sipasamosahora, luego tendrás remordimientosyquerrássacarloacorrerenplenanoche.Y,créeme,yaessuficientementeagobiantevertemontarloduranteeldíacomoparasumarleelagravantedequeseadenocheyqueapenasseveanada.

—¿Te agobias cuando monto a caballo? —le pregunto, sorprendida,recogiendolasmías.

—Val, eres una inconsciente. No sé si lo haces a propósito o no, pero escomo si no vieras el peligro que conlleva montar como tú lo haces —meresponde,abriendolapuertadeldespachoparaseguidamentesalirporella.

—Ni que lomontara haciendo el pino—le rebatomolesta. Lo sigo ymepercatodequeyanoquedacasinadiecurrando.

—No necesitas montarlo haciendo el pino para ponerte en peligro; corresdemasiado,Val—insistemientrascruzamoslatienda,desiertaya,yobservosuperfecto perfil —, y si te cayeras… Joder, déjalo, monta al puto caballo ylarguémonosamicasa—masculladirigiéndosehaciaelparking.

—Aunquenolocreas,sémuybienloquemehago; llevomontandodesdequeeraunacríayporsupuestoquesoyconscientedelpeligro,encasodequelohubiera,claroestá,peronolohay,Vic.Voycampoatravésynotengoquesaltarningúnobstáculoninadapuedeinterponerseenmicamino,asíquenoteagobiestanto,¿vale?—replicounavezestamosenelcoche,mientrasélarrancaysaledelparkingdelabodega,tomandoelcaminoquenosllevaráalascaballerizas.

—Novasa convencerme,Val,y, comosea incapazde seguirte, te aseguroqueluegovasaarrepentirte—afirmaconsequedad.

—Seguroquesí,loquetúdigas—sueltoconchulería.—Sí,loqueyodiga,porquetegarantizoque,sicorrescomounalocaahora,

luego no dejaré que lo hagas, ¿lo tienes claro? —masculla con dureza,estacionandofrentealascuadras.

Page 252: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Vengaya—musitoflipadamientrasél,evitandocontestarme,seapeadeltodoterreno—. Oye, Vic, no te pases…No pienso correr como haces tú, quepareceque,enlugardegalopar,vasaltrote.ParaesoTruenoyatieneamipadre—leaclaro.

—Notepasestú,Val.Yahetenidoeldíasuficientementejodido,créeme.Nonecesito ponerle la guinda yendo al hospital —masculla entre dientes,encaminandosuspasoshaciaLinda.

—¿Enserio?—inquierohaciendounamueca—.¿TienesintencióndesacaraLinda?EnesecasoyapuedoecharmeunacabezaditamientrasmontoaTrueno.

—No seas exagerada—me riñe con una incipiente sonrisa, empezando aensillarlamientrasyohagolopropioconmicaballo.

—Oye,midíatambiénhasidojodidoy,montarcomomontastú,meponedelos nervios y te aseguro que lo joderá un pocomás, así que, o la aprietas unpoquitoparaqueestireesaslindaspiernasquetieneopuedequeseayolaquenodeje que tú lo hagas, ya me entiendes… —le indico, guiñándole un ojo yevitandosermásexplícita,pueselmozodecuadrasandarevoloteandoporaquí—.Vamosaestirar las tuyas,precioso.¿Quédices?,¿tienesganasdeunbuengalope?Seguroquesí—habloconelanimal,recibiendocomocontestaciónsusrelinchosmientrasVíctorevitacontestarme,peronoporquenotenganadaquedecir, eso seguro—. ¿Listo? —le pregunto una vez lo tengo ensillado,subiéndome a su lomo y saliendo de las cuadras, viendo de reojo cómo, conmovimientosfluidos,élmontaaLinda;ladulce,tranquilaylentaLinda.

—Espérame en la salida—me ordena con autoridad, y sé que todas esascosasquetienequedecirestánquemándoleenlapuntadelalengua.

Llegoaliniciodelcaminonotandosumiradaenmiespalday,antesdequepueda decirme nada, espoleo a Trueno para iniciar esa loca carrera que sesuponíaquedebía evitar, riendocuando looigo llamarmey sintiendocómo laadrenalina corre por mis venas, de la misma forma en que estamos haciendonosotros,llevándoseconellaelenfado,lafrustración,elcansancioylosmilesdesentimientos o «mierdas» que han asolado mi cuerpo durante todo el día y,aunqueposiblementeluegomearrepienta,enestosmomentosesloquenecesito.

Espoleo al caballo para correr un poquito más campo a través, con lacordillera Cantábrica, los viñedos y la tierra como únicos testigos mudos denuestra «pequeña locura», llevando al límite al animal, que responde a mis

Page 253: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

exigenciascomoloharíauncaballodecarreras.—¡Soooooooo, Trueno! Tranquilo campeón… ¡Sooooo! —le digo

aminorando lamarcha hasta detenerlo por completo en lo alto de una colina,viendoelsol,convertidoahoraenunaenormeboladefuegonaranja, tomarelsuelo y besarlo suavemente en su lento descenso, como espero hacer yomástardeconél…cuandoselepaseelenfado,claroestá.

Sonrío inspirando profundamente la paz que sólo aquí puedo respirar; esapaz que huele a tierra, a fruta madura, a flores silvestres, a limpio y arecuerdos…

Recuerdosdemi infancia,cuandomiabuelomeenseñabaamontary,mástarde,cuandolohacíamosjuntos;recuerdosdesusrisasysuorgullo,puesnuncajamásme regañópormontar como lohagoahora…poreso,posiblemente,nodejodehacerlo,yrecuerdosdemijuventud,cuandoélyanoestabaamiladoydurante un tiempo preferímontar sola para sentirlo junto amí. «Recuerdos…Esosquevanconnosotrosvayamosdondevayamos,esosquetienenlamagiadellevarnos a revivir momentos especiales y esos que tienen el poder de seguiremocionándonos a pesar del tiempo pasado, los únicos capaces de ponerte elnudo en la garganta con una imagen o una visión fugaz, y esos que abrazo amenudoparaverdenuevoamiabuelooamimadre,aunqueaellamecuesteunpocomásytengaquerecurriralasfotografíasparapoderhacerlo»,piensocontristezamientrassientoellatirdelatierrabajomispies,estatierraque,aligualquemisrecuerdos,formapartedemíydemiesencia,y,enmiimaginación,veodenuevoesabifurcaciónquememantendráunidaaestastierrasomealejaráporcompletodeellasy,porende,deél.

Amparada por el sosiego que sólo encuentro rodeada de naturaleza, hurgoentremisdeseos,necesitandosaberquévozescuchar,silademicabezaolademi corazón, pero ¿qué sentido tiene escuchar la voz de la cabeza cuando elcorazón es el órgano que bombea nuestra sangre, dirigiéndola a cada uno denuestrosórganos?¿Cuandoeselquenosdalavidayelquemarcaelritmodenuestros sentimientos con cada uno de sus latidos, acelerándolos odeteniéndolos? No nos duele la cabeza cuando algo nos afecta, nos duele elcorazónytambiénelalma,porqueellasealojajuntoaél,vibrandoalritmodesus latidos, y sólo ella sabe qué dirección tomar, como lo sabe la sangre quecorre por nuestras venas, la dirección que menos duele… porque renunciar a

Page 254: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

algosiempreduele,perodueleunpoquitomenosdeloquedoleríasirenunciaraalúnicohombrequehasidocapazdeconseguirquemicorazónsedetengaconunamiradaolataenloquecidoconotra.

—¡Vaaaaal!—oigo su rugido a lo lejos, yme vuelvo paramirarlo, con latranquilidad que sólo sientes cuando, en tu interior, sabes que has tomado ladecisióncorrecta.

Sinpermitirque la furiade sumirada,que inclusoa lo lejos soycapazdedetectar,meamilanelomásmínimo,paseolamíaporsucuerpo;susbrazosentensión,susmanosaferrandocondecisiónlasriendasdelanimal,suspiernasentornoasucuerpoysujerseypegándoseasupechoporelviento.Suspirobajito,sintiendoque todoestoque llenamipecho lo llenaunpoquitomás, aleteandoconfuerza,comosidemariposasdebrillantescoloressetratara.

—Soooooo,caballo,sooooooo—mascullaentredientes,deteniendoaLindaami lado,y lesonríoalzandoelmentón,sabiendoquequieroesto,apesardequehoynohayamossidocapacesdeencontrarnuestroscincominutos,apesarde que lleve todavía la tirita puesta desde ayer y que esté casi a punto dedespegarse, a pesar de que hayamos discutido durante los pocosminutos quehemosestadosolosyapesardequevayamosadiscutirdenuevo,quieroesto,apesardetodo,estoesloquequiero.

—Porfinhasllegado.Unpocomásymeduermoesperándote—sueltoconinsolenciamientrasélmefulminaconlamirada—.Nitemolestes,Víctor.Siteagobias, te quedas en casa, pero no pienso renunciar a esto—añado, y sientocómomicorazónymialmaseensanchanhasta llenar todomicuerpo,porquenuncaenmividahabíadichoalgomáscierto.Novoyarenunciaraesto,amicasa,amilugar…yaél.

—Pero ¿a ti qué te pasa? ¿Se te va la cabeza? ¡Val, no puedes correr así,joder! ¿Qué hubiera sucedido si Trueno se hubiera asustado por cualquiermotivo?¿Sabesdóndehubierasidoaparar?—bramamuymuycabreado,ycasijuraría que hasta asustado, y lo miro enterneciéndome con su reaccióndesmesurada,obligándomeanodemostrarlecuántoloquiero.

—Como no se asuste de un árbol… ¿Quieres dejar de agobiarte? Oye, lonecesitaba, ¿vale? Si quieres, lo entiendes y, si no, es tu problema—le digodeseandodejarclaramiposturamientrasélcogeunadelasriendasdemicaballoymeacercaalsuyo.

Page 255: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Tú eres la que va a tener el problema cuando lleguemos a casa—merebate con la voz cargada de miles de matices, contrayendo mi vientre y mipecho,puesesode«acasa»esloqueesperooírmillonesdevecesmás.

—Si yo nome corro, tú tampoco vas a hacerlo.Me parece que no soy laúnicaquevaatenerunproblema—replico,demorandomimiradaensuslabios,sintiendo cómo todo se vuelve electrizante a nuestro alrededor—. ¿Recuerdascuando tedije loque eraparamíhacer el amor contigo?—lepregunto enunsuspiro,connuestraspiernasrozándoseynuestracanciónempezandoasonar—,¿lo recuerdas?—susurroaferrándomea sumirada,queardeconmispalabras,diluyendoconellassuenfado,y,conelrecuerdodeesaconversación,llegaesaburbujaespecialparaenvolvernos,comoyahizoanoche,elástica,comoelamorqueescapazdeadaptarseacualquiercircunstancia,eirrompiblecomoloesalgoqueesdeverdadyque,pormuchoqueteesfuercesporquebrarlo,escapazdeadoptarmilformasdistintasantesdequelleguesaconseguirlo.

—Es ser nosotros —declara, sosteniéndome la mirada, consiguiendo quetododejedeexistirparamí.

—Esestarmojadatodoeltiempo—musitosintiendocómosucuerpoatraeelmío.

—Es que tu piel y tu cuerpo reaccionen a una mirada mía—prosigue, ysientocómomivelloseerizaporlaemoción.

—Es sentirte y querer más todo el tiempo —murmuro viendo cómo sumiradasecargadelosmilesdeemocionesquellenanmipecho,comosiéstassehubieran duplicado y hubiesen volado hasta sumirada para alojarse en ella ypermitirmeverlas.

—Esverteyreconocerme—meindica,conlaemocióncopandocadaunadesuspalabras.

—Yesponerle tunombrea todasestasemocionesque llenanmipecho—confieso, permitiendo que todo lo que siento por él aflore con las mías,entretejiéndose entre sí como lo harían los hilos de un delicado bordado queprecisa de horas de trabajo hasta quedar perfecto—. Lo has recordado…—musitosonriendo,conscientedequenuncahabráunmomentomásperfectoqueéste.

—Cómoolvidarlo,cuandonohayunadefiniciónmejor—mecontestaenunsusurro.

Page 256: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Pues quiero eso ahora, te quiero dentro de mí, Víctor; quiero que metoques y tocarte, quiero sentirte y queme sientas, y quiero que todo esto quellenamipechocontinúellevandotunombre—lepidoatrapandosumirada—,yno quiero discutir más, porque hacer el amor también es eso, es aceptar lasdecisiones del otro y convertir las palabras en besos, gemidos y suspiros—musito en un hilo de voz, percatándome de que tengo sus labios a escasoscentímetros de losmíos y que hemos ido acercándonos lentamente hasta casipegarnuestroscuerpos.

—¿Quémeestáshaciendo,Val?—susurrasoltandounadelasriendasparallevarsumanoamicuelloyacercarmirostroalsuyohastaquenuestroslabiosquedanaladistanciadeunbrevesuspiro.

—Lomismoquetúamí,Vic;sólopiensoentocarteybesarte,yodiocuandonopuedohacerlo—masculloantesdequesubocaseadueñedelamía.

Yenloaltodeestacolinayporprimeravezenunlugarpúblico,hacemoselamorconunbeso,puesconunbesomicentrosemoja,conunbesomipielseerizaymicuerporeacciona,conunbesosientocómosualmaleabrelapuertaalamía,conunbesoloveoymereconozco,yconunbesotodoestoquellenamipechoalzaelvuelo,dejandolaesteladesunombreasupaso.

Con la burbuja que hemos creado envolviendo nuestros cuerpos,emprendemoselcaminoderegresoalascaballerizassindejardemirarnosydesonreírnos,corriendoenocasionesydisminuyendolavelocidadenotrasy,entrecarreras,risasymediassonrisas,oigodenuevocómosuenanuestracanción,esaa la quevamos añadiendo estrofas amedidaquevamos cogiéndole el ritmo anuestrahistoria.

Trasdejaraloscaballos,nosdirigimosasucasaconlaurgenciatirandodenosotrosy,encuantoponemosunpieenella,subocaseapoderadelamíaconansiaydesesperaciónycorrespondoasubesoconlanecesidaddehaberansiadoalgodurantehorasyhoras.Sindespegarnuestrasbocas,mellevahastalapared,dondemeapoyaenellaydondesulenguaconquistalamíaconrudeza,conlamisma necesidad que siento yo e incluso con un poquito más, mientrasempezamos a desnudarnos, necesitando tocarnos y sentirnos, piel con piel,fundiéndoseyardiendo.

—Estás empapada—musita con voz ronca cuando pasea su dedo por micentro,ygimocerrandolosojos.

Page 257: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Porti…por tiestoymojadatodoel tiempo—gimobajito—,ypor timipielymicuerporeaccionan—declarocuandosupechorozaelmíoysudedotrazacírculosentornoamiclítoris.

—Ypor ti quieromás todo el tiempo—prosigue con el deseomás locoyprimitivoabriéndosepasoentrenosotros—.Joder,vasavolvermeloco,Val—meabruma,llevándomehastalamesadelsalón,consusmanosapoderándosedemispechosynuestrosbesosabsorbiendonuestrosgemidos.

—Viccccc—gimoincapazdedecirotracosaquenoseasunombre.—Deespaldas,nena—meordena,haciendoquemerecuesteenella,yme

aferroalosbordes,sintiendoquemicentroempiezaapalpitardedeseo.Siento sus manos deslizarse desde mis caderas hasta mis piernas y su

respiración caldearmi trasero y, cuando lo alzo y su lengua barremi sexo, loalzounpoquitomás,gimiendoconfuerza.

—Joder—farfullo,abriendo laspiernaspara facilitarle laentradaaunodesusdedos.

—Podríapasarmelavidaenteraviendotuculo,chupándoteyfollándotesinparar—rugeenunsusurroqueretumbaenmisoídos.

Y durante unos segundos, valoro pedirle que lo haga, pero antes de quepuedallegarahacerlo,esmigemidoelquehablapormí.

—Hoy sí que quiero oírte, hoy quiero oírte gritar mientras te follo—meordena con autoridad, yme aferro con fuerza a los bordes de lamesa, con larespiraciónconvertidayaenuncaos.

Sientosudedodeslizarsepormivagina,dearribaabajo,sin llegara tomarprofundidad,empapándoseconmisfluidosy,cuandomedaunasuavepalmadacontraelclítoris,gimofuerte,sintiendocómomicuerposesacudededeseo.

—¿Tehagustado?—mepreguntadándomeunasegundapalmada, suaveycontrolada,ygritocuandomicentrovibraconella.

—Sííííí—jadeoaferradaalamesa.—¿Podrías correrte así? —me pregunta, dándome una tercera palmada,

empapándoselamanoconmisfluidos—,¿oasí?—continúa,barriendomisexocon su lengua, empezando a succionar con ella, y muevo las caderas,enloqueciendo.

—Víctor,nopuedomás—leimploromientrassuslabiossuccionanlosmíosparacasialsegundodarmeotrapalmada,denuevosuaveycontrolada,enpleno

Page 258: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

clítoris, que me lleva directa al cielo—. Dios míoooooooo, másssss, Viccccc,mássssss…

—Más,¿qué?—Másdetodo,másdeti—gritosincontrol—.¡¡¡¡Mástodoeltiempo!!!!—

chilloenajenada.Yconotrapalmadaqueescalmadaconsuslabios,mecorroviolentamente,

abriendolaspiernas,aferrandolosbordesdelamesaenérgicamente.—¿Quieresmás?—inquiere.Yo sólo puedo concentrarme en respirar, mientras capto cómo rasga el

envoltoriodelpreservativo.—Contigosiemprequieromás—musitoenungemido,alavezquesientola

pieldesusexorozarlamía,yalzomásmitraseroparafacilitarleelacceso.Suavance,lentoycontrolado,abriendomicarneasupaso,erizamipiel,y

gimo cerrando los ojos, deseando que sea rudo. Cuando se ensarta hasta elfondo,gimoconfuerza.

—Llevodeseandoestodurantetodoelputodía—rugeenmiespalda,ygimocuandocomienzaabombearconbrío.

Dentro, fuera, dentro, fuera…más fuerte,más rápido,más delirante y, enmitad de nuestra locura, siento cómo conectamos, cómo nuestros cuerpos seentiendensinnecesidaddetenerqueutilizarlaspalabras,cómonuestrosgestosygemidos le indican al otro el camino a seguir y, sobre todo, siento cómoencajamos,apesardequeensudíayodudédequeuncírculopudieraencajarconunrectángulo.

***

—Creoqueestatiritaquemehaspuestoesmuchomásresistentequelaotra—sueltoguasona,trashaberpasadoporladuchaydenuevoporlacama.

—Detodasformas,mañanavoyatenerquecomprobarlo,noquieroquesetecaiga—replica divertido, acariciandomi espaldamientras, recostada sobre supecho,memantengocallada,escuchandoloslatidosdesucorazón,esequelatealunísonoconelmío,valorandosidecirlequeyahetomadounadecisiónyquevoyaquedarme—.¿Quéestápasandoporesacabecitatuya?—indagatrasunosminutos de silencio mientras acaricio su pecho, inspirando el olor de sufragancia,esaquehueleaVíctoryajabón.

Page 259: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Siselodijeraahora,evitaríaestacuentaatrásquenodejodeoír,comolasmanecillasdeunrelojquemarcansulentoavance,pero,sinsaberporqué,algodentro de mí me impide hacerlo; una sensación extraña que me obliga amantenerestacuentaatrásquecadavezmeacercamásalabifurcación,apesardequeyaséquemicaminoserárectoynotendréquetomarla.

—¿Val? ¿Qué estás pensando?—insiste mientras hurgo dentro de mí, sinsaber de dónde viene este malestar repentino que he sentido cuando me heplanteadodecírselo.

—Nada realmente, supongo que necesitaba esto, estar a solas contigo, sinteléfonos,sintrabajodepormedioysindiscusiones…Siendosólonosotros…

—Siemprepodemosencontrarestosmomentos,Val.—Pero, para encontrarlos, no quiero tener que discutir contigo por nada.

Sólo quiero que estos días sean especiales; intentémoslo, ¿vale? —le pidoalzando la cabeza, encontrándome con su mirada, que abraza la mía sinnecesidaddetenerqueutilizarunosbrazosparapoderhacerlo.

—Yotampocoquierodiscutirmáscontigo.—Puesnolohagamos,yprométemequeestosdíasseráninolvidables—le

ruegoreptandoporsucuerpohastatenersuslabiosaescasoscentímetrosdelosmíos.

—Te lo prometo; te prometo que estos días serán tan especiales einolvidablescomoloerestú—declaraantesdeatraparmislabiosconlossuyosenunbesoqueerizamipielymialmayqueinsufladevidatodoestoquesientollenandomipecho.

Page 260: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO20

Juntos cumplimos nuestra promesa, convirtiendo cadamomento, cada sonrisa,cadaroceycadabesoenalgoespecialeinolvidable;juntosañadimosestrofasanuestra canción y párrafos a esa definición que en su día yo hice de hacer elamor;juntossoportamosestoicamenteaCasiysusindirectas,queenocasionessonmásdirectas de lo quenos gustaría, y sobrellevamos sus «mierdas»y esasensación extraña que a veces atenaza mi garganta, y lo hacemos juntos,permitiendo que un beso, un apretón de manos, un cómodo silencio o unasonrisacargadadeconfianzasupla laspalabrasque,enocasiones,esmejornopronunciar.

Juntos llenamos nuestras vidas de besos escondidos tras las barricas, dededos entrelazados cuando creemos que nadie puede vernos y de momentosardientesyapasionadoscuandoestamossegurosdequeasíesy,díaadía,nosesforzamosporencontraresoscincominutosparaquemepongaesa tiritaa laque mi cuerpo se ha acostumbrado y que reclama cuando siente que estádespegándose.Juntosseguimosjugandoanuestrosjuegoseinventandootros,ylohacemossiemprejuntos,puesesalgoinconcebiblequenoloestemos.

Es sábado y, todavía tumbada sobre mi cama, observo el sol empezar adespuntarenelhorizontey,derepente,sientoesasensaciónextrañatumbadaami lado,mirándomedereojo,comoesperandoel instanteadecuadopara llenarmipecho,yreniegodeella,apartándolaaunlado,denuevopreguntándomequéhaceaquíyquéesesoaloquemialmatemeparatenerlatanpresente.

Obligándome a dejar de pensar en ella, me dirijo hacia la ventana, desdedonde diviso su casa, y, al segundo, siento cómo la calidez llena mi pecho,

Page 261: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

caldeándolo, al recordar todo lo que estoy viviendo a su lado, y sonrío alimaginarungruesoálbumdefotosenelquelasprimeraspáginasestánrepletasde imágenes nuestras de estos días y de cientos de hojasmás en blanco a laesperadequeañadamosnuevasimágenesqueiremospegandoamedidaquelasvivamos,porqueestoeselprincipiodelálbumdemivida,esaqueesperovivirjuntoaél.

Me visto con unos pantalones de cintura alta, una camisa y unas botas demonta,anudandounpañueloamicuelloyatandomilargamelenaenunacoladecaballo,y,trasmaquillarmeligeramenteycogerunachaquetaporsirefresca,medirijoalacocina,dondemeencuentroconCasi,cómono.

—Buenos días, Casilda—la saludo sonriendo, sentándome en el taburete,mientrasellaponeahervirelaguaparamité.

—Buenosdías.Hoynosfaltaelotro,¿dóndelotenemos?—¿ElotroesVíctor?—lepreguntosinpoderfrenarlatontasonrisaquese

haadueñadodemirostrohastatomarporcompletoelcontrol.—Quiénvaaser,sino,¡perosíparecetusombra!Quéhartura,deverdad.Debe de ser la edad, pero, si mi Tomas, que en paz descanse, estuviera

todavíaconvidaysepegaraamíasí, juropor todos losviñedosdeesta fincaqueharíalasmaletasymemarcharíabienlejos—afirmaconaplomo—.Conlobienqueestáunayendoalasuyaydejandoquecorraelaire,que,porcierto,convosotrosnocorremucho,¿eh,maja?Pilinguis,quesois todasunaspilinguis…Tu hermana,mi Sandra y tú, porque vete tú a saber qué hacemi niña con elescocésesecuandoestánasolas.

—Puesbeberwhisky,¿quévanahacer?—leindicoentrerisas.—Conmipadretendríaisquehaberostopado,¡lastres!,yellosigual,note

creas.—Pero¡quédices,Casi!—exclamo,soltandounacarcajada.—Como tupadre se entere, yaverás…Loqueyo te diga, lo de Joséy tu

hermanaseráunceroa la izquierdacomparadoa loque tendréisqueaguantarvosotrosdos—medicedejandoeltéfrenteamí,ylamirodivertida.

—Casi, no sé de quéme estás hablando—declaro, a pesar de que es tanevidentequemesientohastaridículadiciéndoselo.

—¡Andaqueno!De sobra lo sabes.Loqueyonome explico es cómo tupadre,conlointeligentequees,nosehadadocuenta,aunque,pensándolobien,

Page 262: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

igualconlodetuhermanayJoséyatienesuficienteyprefierehacerseeltontoconlotuyo.Loqueyotediga…¡Siesquemataréisadisgustosalpobrehombrecualquierdía!

—Peromira que eres exagerada,Casilda.De todas formas, gracias aDiosquelostiemposhancambiadoyahoranohacefaltaquecorratantoelairecomoenlostuyos—ledigo,guiñándoleunojo.

—Sinvergüenza, que eres una sinvergüenza —replica con ese tonito tansuyo.

—Pues gracias a esta sinvergüenza, hoy comerás con una diseñadora deprestigioyconunpardefotógrafosbrutales.Siquieres,puedopedirlesque tehaganunpardefotos.

—Esperoquevestida—sueltacongenio.—Bueno, es una opción, pero también podrías posar desnuda—contesto,

másquenadaparapincharla,puesniportodoslosviñedosdeestafincaimaginoamiCasildaposandoencuerosy,aunasí,prosigo—.SivieraselreportajequeCirolehizoaunamujerdetuedad,lepediríasderodillasquetelohiciera…,elreportaje,claro—matizomientrasellamemiraconlosojosapuntodesalirsedelas órbitas, y tengo que frenarme muchísimo para no emitir una tremendacarcajada.

—Seréyocomovosotras,¡pilinguis!,queamísólomehavistodesnudamiTomásyparatúdecontar.Además,aestasedadesyconestoscolgajos,yanohacefaltaquemeveanadiemás,niyomisma,queavecesmemiroenelespejoymedoycadasustoquenoveas,conlobuenaqueestabayodejoven,todotiesoyensusitio,nocomoahora.Hacerseviejaesunamierda,loqueyotediga,hija.

—Noseasmalhablada,Casilda,aversitengoquelavartelabocaconjabón.—Miraquién fueahablar.Tantocolegiodepagoparanada, siesqueesta

juventud está perdida—masculla sin dejar de moverse por la cocina con suvestidodeflores—.Porcierto,todavíanomehasdichodóndetenemosalotro.

—¿Porqué?¿Acasoloechasdemenos?—lepregunto,guiñándoleunojo.—No tanto como tú —contraataca, apoyándose en el mármol de la isla,

mirándomeconesasonrisitadesabiondatansuyaqueenocasionesaborrezcoyquehoy,vete túasaberporqué,mehacegracia—.Andaquemenudasonrisapones cuando lo tienes cerca, comomi Sandra; debe de ser la edad…Luego,cuandopasenlosañosyloveas,pensarás:«Yaestáaquíotravezelpesadoeste»

Page 263: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—comenta,ysueltounacarcajadaconlacaraquehapuesto.—PobreTomás,siesqueelpobreseganóelcielocontigo,loqueyotediga.—Y tú te estás ganando una buena torta, lo que te diga yo también—me

replica,ymeríoconganasconmiCasildaMartínezdelaNuez.—Me largo, no sea que se te vaya lamano yme la sueltes de verdad—

anuncio,deseandollegarcuantoantesasucasa.—¿Túves comoyo tenía razón? ¿Adóndevas? ¡Venga, di! ¿Adóndevas

contantaprisa?—mepregunta,ytengoqueobligarmeadejardesonreírdeunavez.

—Alabodega;porsilohasolvidado,hoyeslapresentación,asíquenoseastanmalpensada,porquemevoyatrabajar.

—Sí, claro…a trabajar, dice, anda que… Iba a decirte que ya quisiera yotrabajar como tú, pero, pensándolo bien, mejor déjalo, no quiero más trabajoextra, tú ya me entiendes, que a estas edades una lo tiene eso ya lleno detelarañasyprefierolimpiarlacocinaatenerquelimpiartuberías.

—¡Casilda!—exclamoriendoconganas.¡Lamato,enserio!—¡Hala! ¡Tira, corre!—me apremia, chasqueando luego la lengua, y, sin

dejardereír,abandonolaestancia.Feliz y con una resplandeciente sonrisa dibujada en el rostro, recorro el

caminoquemellevaráhastasucasa,sintiendocómolosmilesdeemocionesquellenanmi pecho alzan el vuelo arrasando con todo, incluso con esa sensaciónextrañaquehoyocupabapartedemicamay,cuandollegoalporchetraserodesucasa,aceleromispasos,deseandoverlocuantoantes.

—¡Hola!—losaludocuandoabrolapuertayloveosentadoenelsofá,conunapequeñacajademaderaasuspies—.¿Quéhaces?—inquierollegandohastaélparadarleunbeso,queélintensificahastahacerquetodomedévueltas.

—Besarte, eso hago—musita con voz rasposa, cogiéndome y sentándomesobresuregazo.

—Meencantaquelohagas—susurrohundiéndomeensumiradayllevandomismanoshastasucuello,queacariciocondulzura—.Tienescaradecansado—musito frunciendo levemente el ceño, pasandomis dedos por susmarcadasojeras, como si, con ese gesto, pudiera borrarlas,mientras él pasa uno de lossuyospormiceñoparaalisarlo,ysonrío,casiderretidaentresusbrazos.

—Nohedormidomuybien,puedequeseaporquenotehaspuestoelaltavoz

Page 264: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

y tus ronquidos no han llegado hasta mi ventana —me chincha, divertido,sosteniéndomelamirada.

—Muygracioso—replicosintiendocómotodoloquesientoporélcreceunpoquito más—. ¿Y qué estabas haciendo antes de besarme? —le preguntodeslizandomimiradadesurostroysucuerpohastallegaralacajaquetenemosa nuestros pies—. ¿Son fotografías mías? —añado, levantándome yarrodillándomefrenteaella,cogiendounpequeñomontoncito.

—Muchosañosjuntos,supongo—mediceamododeexplicacióny,sonríoempezandoaojearlas.

—Recuerdoquetegustabahacermefotos,peronuncaimaginéquetuvierastantas—susurro.

Enunadeellasestoyconlascoletasquesolíallevar,arrugándolelanariz;enotraaparezcosentadaenelsuelodelporche,pintando,conlaluzanaranjadadelatardecerdefondo;tambiénsalgoenunabañándomeenlapiscinaenundíadeverano; en otra, juntos, sonriéndole a la cámara, con la chimenea encendida,haciendotortitasensucocina…

—Enestaestabaenfadadacontigo—lecuento,cogiéndolaymostrándosela.—Tehabíaprometidoque ese finde semana te llevaría al ciney tuveque

quedarmeencasaestudiando.—Y en lugar de decirme que me fuera para poder estudiar tranquilo,

aguantastemiberrinchehastaquesemepasóyterminéviendootrapelisentadaenestesofámientrastúestudiabasenlabarradelacocina.

—Perdí la cuenta de los cafés que bebí ese fin de semana —me cuentasonriendo,evadiéndoseaesedíayllevándomeconéldelamano.

—Ysacasteundiezy,paracelebrarlo,cumplistetupromesa—recuerdoconorgullo.

—Yvimosesapelículadeprincesitasqueerauncompletocoñazo—medicesonriendo conmigo, y siento cómo la ternura que desprende su mirada llegahastamipechoparaasentarseenél.

—TúqueríasqueviéramoslanuevadeSuperman—lerecrimino,haciéndoleunamueca.

—Todavíahoypiensoquetehubieragustado—measeguraconvencido.—Lodudo,nuncamehangustadoesaspelículasdesuperhéroes—replico,

arrugándolelanariz.

Page 265: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Hicistelomismoesedíacuandotepropuseverla—meindica,dándoleuntoque con su dedo, haciéndome sonreír, sintiendo cómo esa burbuja elásticaempiezaaenvolvernos.

—¿Paraquéestabasmirandoestasfotografías?—Porquehabíapensadodecorarlasbarricasconalgunasdeellas,colocarlas

junto a las botellas de vino que pondremos amodo de decoración. Éste es tuvino,secreópensandoentiyencómoeres,yquémejorformadepresentarloqueacompañándoloconlasfotografíasdelaniñay,mástarde,delamujerqueloinspiraron—meexplica,ylomirosintiendocómotodoloquesientoporélsedesbordadentrodemí.

—Megusta la idea—afirmosentadaenel suelo,observándolas juntoaél,quesehacolocadoamilado,conlaespaldaapoyadaenelsofá.

Una a una voy viendo pasar mi vida y también la suya a través de esosinstantes que él inmortalizó con su cámara, y con cada fotografía llega unrecuerdo,unaemociónounsentimientoquecreíaolvidado.

—Recuerdoesedía—comentoacariciandonuestrorostroenlaimagenconlayemadelosdedos—.Erajueves…¿Teacuerdasdelascenasdelosjuevesenverano? —le pregunto, sonriendo al pensar en ellas—. Todos los juevescenábamosjuntos,pasaraloquepasase—susurroenunhilodevozmientasélguarda silencio—. Recuerdo que estaba muerta de hambre y ese día túterminaste muy tarde de trabajar, así que, mientras te duchabas, decidísorprendertehaciendoyolacena.

—Siemprefuistemuyapañada—diceconcariño.—Demasiado,casitequemélacocinaesedía,¿teacuerdas?—Comoparaolvidarlo—contesta,acariciandomirostroconsumirada.—Menudosustomellevé—murmuroconnuestrasmiradasenlazadas.—Nosllevamos—merectifica—.Cuandoteviconlasarténardiendo,casi

medaunataque;creoquenuncahepasadotantomiedo.—Recuerdoque,cuandoapagasteelfuego,meabrazastemuyfuerteynome

reñiste—ledigobajito—;nisiquierase locontasteamipadreoaCasi…fuenuestrosecreto.

—Yencimapedimospizzaparacenarparaquenollorarasmás—rememoramientrasdetengomimiradaenlosojosenrojecidosdelaniñaquefui.

—Ynoshicimosestafotoporquetodohabíaterminadobienylaprincesano

Page 266: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

sehabíaquemado—musitorecordandolodulcequefue—.Erasgenial,Vic,yfuistelomejorquepodíasucederme—afirmoconseriedad.

—Te equivocas, Val: tú fuiste lo mejor que pudo sucederme a mí —mecontestaconvozlúgubre,guardandosilencioduranteunosminutos.

—Recuerdo el olor a chamuscado que hacía—añado, necesitando romperese silencio antes de que se siente a nuestro lado, llenando huecos que no lecorresponden.

—No sé de quién sería la culpa —prosigue con una media sonrisadibujándose en su rostro y dibujándola en el mío, como si de un reflejo setratara.

—Yadepequeñamequedóclaroquelacocinanoeralamío.¿Cuántosañostendríaaquí?

—Once—measeguraconvencido—.Lorecuerdoperfectamente;dehecho,creoquenuncapodréolvidaresedía.

—Ni yo, te lo aseguro —susurro observando otra fotografía ytransportándomeconellaenesteparticularviajedelosrecuerdos.

Sentadosenelsuelodesusalón,connuestrasespaldasrecostadasenelsofáy nuestros cuerpos rozándose, vemos quiénes fuimos antes de convertirnos enquienessomosahora,demorándonosenfotografíasque,porloquesea,tienenunsignificado especial para alguno de los dos, comentándolas en ocasiones,sonriendo en otras o guardando silencio cuando no hay nada que decir osimplementecuandoelsilencioeslamejoropción,y,enmediodeesesilenciooesas sonrisas,me pregunto si no sentirá curiosidad por saber qué decisión hetomado,por saber sime iréomequedaré,y justo eso,quenohabledel temasumadoaesetemorquehabitadentrodemíyquemeimpidecontárselo,esloúnicoqueempañamomentoscomoésteocomo losquehemosvividoduranteestosdías.

—¿A qué hora llegarán tus amigos?—me pregunta clavando su limpia eimpresionantemiradaverdesobremí.

—Hansalidomuy tempranodeMadrid, asíque supongoqueenunpardehorasestaránaquí—lecomunico,guardando las fotografíasen lacaja—.¿Meacompañaráscuandolesmuestrelafincaylosviñedos?

—Si quieres que lo haga, claro—acepta con seriedad y,moviéndome,mesientoahorcajadassobresucuerpo,deseandoqueesaseriedadsedesvanezca.

Page 267: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Por supuesto que quiero —musito pegando mi frente a la suya—. Tequieroconmigotodoeltiempo.¿Quémedices?,¿podrássoportarlo?

—Haréunesfuerzo—sueltasocarrón—,pero,si tenemosqueestar todoeldía juntos, vas a tener que acompañarme antes a la bodega para poner estasfotos.

—Venga,porsertú,haréunesfuerzo—leindico,mordiendosulabio.—Val… vamos justos de tiempo —murmura anclando sus manos en mi

cintura,ysientoquemivientresecontraeymipielardeconsucontacto.—Siemprequieromáscuandoestoycontigo—susurroempezandoabesarlo

y, cuando corresponde a mi beso, me muevo suavemente, frotando mi sexocontraelsuyo.

—Yyo,joder—mascullaprofundizandoenelbeso,llevandosusmanosamitrasero, pegándome a su enormidad—. Val, tenemosmucho trabajo por hacerantesdequelleguentusamigos—merecuerdaalejandosuslabiosdelosmíos,consusmanossubiendopormiespalda—,peroestanochevasasermía,durantehorasloserás,ytejuroqueesonovaapoderevitarlonadie—meprometeconlavozcargadadeunadesesperaciónquemesorprende.

—Y tú serásmío—musito…«Ésta y todas las noches serásmío», piensopara mí, sosteniéndole la mirada—. Te quiero, Víctor —susurro finalmente,dejandofluirlaspalabrasquemequemanenlagarganta.

—Vamos,sehacetarde—meapremiaconunasonrisaquenolellegaalosojos,ayudándomealevantarme,ysuspirobajito,puesséquenovaadecírmelo

—.Val…—prosigueunavezdepie,atrapandomimiradaconlasuya,yese«Val»encierratantastantascosasqueniyomismaséquédecir.

—Vamos—susurroal fin,evitandosumiradaydesviándolahaciaesacajallenaderecuerdos,ypiensoenelálbumquehecreadoenmiimaginación,eseálbumquecomienzaconelrecuerdodeestosdías—.¿Lasseleccionamosallí?

—lepregunto,deseandocambiardetema.—Tengoclaraslasquevoyaponer,¿telasmuestroy,sialgunanotegusta,

la cambiamos?—mepropone cogiendo la caja, que deja sobre lamesa, ymeacercoaella,colocándomeasulado.

Observo cómo va haciéndose con un montón de fotos y, cuando me lastiende, las ojeo sabiendoqueha elegidonuestrosmejoresmomentosyque, alcontrario de lo que pensaba, el álbum de mis recuerdos debería empezar por

Page 268: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

estasfotografíasynoporlasdeestosdías,puesestasfotosmuestranelcaminoquerecorrimosantesdellegaralpuntoenelqueestamosahora.

—Me gustan todas, no hace falta ni quitar ni añadir —susurrodevolviéndolas—.Estafotomeencanta,¿meladejarásparaquemesaqueunacopia?—le pregunto,mirando el retrato en el que ambos estamos riendo conganasconlosviñedosdefondo.

—Esa foto nos la saco Casi, ¿te acuerdas?—inquiere mientras yo sonríofinalmente, deshaciéndome de la sensación extraña que había empezado aasentarseenmipecho.

—Nosdijoqueestábamosidiotaslosdos.—Eso es porque ella nunca ha tenido ningún ataque de risa—me cuenta

sonriendoconañoranza.—Quéfácileratodoentonces,¿verdad?Nospasábamoseldíariendo.—Tuedaddelpavofuemuydivertida—afirma,guiñándomeunojo.—Creoquemipadrenoestaríamuydeacuerdocontigo—replicosonriendo,

negandoconlacabeza.—Todavía recuerdo las caras que ponías de no poder con tu vida, tus

arranques demal genio y cómo hacías un drama de cualquier chorrada—mecuentasocarrón.

—Hombre,notepases,quetampocofueparatanto—lerebato,cruzándomedebrazos,haciéndomelaofendida.

—¿Cómo que no?Menudo numerito lemontaste a tu padre cuando no tepermitióirteesefindesemanacontupandilla—sueltaconunamediasonrisay,sinque tengaquedecirmenadamás, séperfectamenteaqué finde semanaserefiere.

—Porqueibantodasmenosyo—remato,ysonrío,puesesosdíasmehartéderepetiresafrase.

—Y todos —añade, enarcando una ceja—. Tenías catorce años reciéncumplidos,Val;yotampocotehubieradejadoir.

—Soisunoscarcas,tantomipadrecomotú.Menudofindesemanameperdí—me quejo recordando cómomis amigas estuvieron restregándomelo durantesemanasysemanas.

—Val, luego tuviste cientos de fines de semana como ése —prosigue,guardandolacaja.

Page 269: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—No, porque en ninguno de ellos volvió a estar Álex —le rebato,recordándolo.

—Ese Álex era un imbécil —me rebate esta vez él a mí, metiendo lasfotografíasquehaelegidoensumochilaydirigiéndosehacialapuerta.Losigosonriendo, demorándome en ese trasero que para sí quisieran muchos de losmodelosconlosquetrabajo.

—Era el tío bueno del pueblo y de los alrededores —le recuerdo parapincharlo.

—Puesel tíobuenodelpuebloydelosalrededoressehaquedadobajitoyfondón;créeme,tupadretehizounfavor—afirma,sonriendoyencaminándosehaciasuvehículo.

—Ah,¿sí?¿Deverdad?Haceañosquenoloveo.—Deverdad—measegura,subiendoasucoche,yloimito—.Nena,túeres

demasiada mujer para ese tío; ya con catorce años lo eras —suelta,sorprendiéndome—,asíquedejade torturartecon loque teperdisteesefindesemana,porquetegarantizoquenoteperdistenada.

—Esoes algoquenunca sabré—ledigoguiñándoleunojo, negándomeadarlelarazón,sonriendocuandooigolamúsicaqueestásonandoenlaradio—.¡Meencantanesacanciónyesapeli!¿Teacuerdascuandolavimosjuntos?

—Título—meordena.— What a feeling —le aseguro convencida, haciendo a un lado la

conversaciónqueestábamosmanteniendo.—Cantante—prosigue,yobservosuperfilysuceñolevementefruncido.—¡Mierda!¡Mehaspillado!Nolorecuerdo—reconozcotrasvariosminutos

enlosquemeheestrujadomuchomuchísimoelcerebroyélhaidosonriendoamedidaqueesosminutostrascurrían.

—IreneCara—meindicacomosifueraalgoobvio.—Dasunpoquitodeasco,¿no?¿Quépasa,quetelassabestodas?—Simplemente soy mejor que tú, y no sólo en este juego —prosigue

volviéndose,guiñándomeunojoymatándome.—Yaquisieras—ledigocuandoconsigoresucitar—.Aloque íbamos:ese

fin de semana fue uno de esos traumas intrascendentes que te suceden en laadolescencia y que arrastras de por vida; ya sabes, esas cosas guais que tusamigasnodejandemencionarcadavezqueosjuntáis,apesardelosañosque

Page 270: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

hayanpasado.—Esoesporquetusamigassonidiotasylohacenparajoderte.Yasabes,hay

cosas «guais» que posiblemente no lo hubieran sido tanto si hubierais estadotodasenesemomento,peroque,alfaltaruna,seconviertenenlomás«guay»cadavezqueesapersonaestápresente—señalaconvencidomientrasmantengolasonrisaquesehainstaladoenmirostroenelmomentoenelqueloheoídodecir«guais».

—Puedequetengasrazón,pero,apesardeello,esefindesemanasiempreestarápresenteenmivida.¿Túnohastenidonuncauntraumachorra?

—No,Val…,nuncatuveesetipodetraumas—mecontestatrasguardarunosminutosdesilencioenlosque,ynoséporqué,hecreídoqueibaaconfesarmealgoy,porloquesea,enelúltimomomentohadesistidodehacerlo.

—Suerte la tuya —le indico finalmente, sintiendo esa sensación extrañademasiadopresentederepente.

—Sitúlodices—contestaconsequedad,ylomiropreguntándomedenuevoqué sucedería en su vida durante sus primeros dieciocho años—. Oye, habíapensadoque, antesdehacer lavisitaguiadapor labodega,podríamos ir a losviñedosyhacerunacataallímismo,¿quéteparece?—mepreguntacambiandode tema, supongo que a propósito, para evitar que pueda preguntarle algoincómodo.

—Me gusta la idea—le contesto ausente, con ese runrún machacándomemientrasobservocómolashojasde lasvidescomienzana teñirsedeesecolorrojointensoquetantoadoroyquesonelpreludiodelotoño.

Cuando llegamos a la bodega, nos dirigimos a una de las salas de crianzadonderealizaremos lapresentacióne inspiroeloloravinoyamadera,quevaasociadoalálbumdemisrecuerdos,juntoconeldelasfloresque,discretasyenpuntosestratégicos,seencuentranyacolocadasparaestanochey,duranteunossegundos,demoromimiradaenlasvigasdemaderadeltecho,enlasparedesdepiedra,enlasbarricasapiladas,repletasdenuestrovinoyquellevanimpresasenellas el nombre de la bodega, Hermanos Domínguez, junto con las barricasvacías, colocadas amododemesa, con lasbotellasdemivinoya listas sobreellas,alaesperadeserdescorchadas.

—Québienhaquedadotodo,¿verdad?—comentoobservandoelrincónquehemoshabilitadoparahacerlapresentación,deseandoquesalgabienyquetanto

Page 271: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

trabajohayavalidolapena,nerviosaderepente.—Saldrá bien —me dice con confianza, como si hubiera leído mis

pensamientos—. Val, quiero que disfrutes de esta noche y que la hagas tanespecialcomohashechoestosdías.Nopermitasquelosnerviosenturbienestemomentocomohacenlossedimentosconelvino;trasiégalosyelimínalosparaquetodobrilleparati—mediceconcariño.

—Nohesidoyolaúnicaenhacerestosdíasespeciales,creoquetútambiénhas tenidomucho que ver en ello—comento en un susurro, viendo cómomipadreaccedealasalay,dejandoesetema,mevuelvoparasaludarlo—.¡Hola,papá!¿Tegustacómohaquedado?—inquieroyendohaciaélparadarleunpardebesos.

—Mucho.Hashechounbuentrabajo,hija.—Bueno,Víctorme ha ayudado—le indico sonriendo, consciente de que

estoesméritodelosdos.—Ni caso, Pedro, esto es todo obra suya —replica Vic con orgullo,

empezandoacolocarmisfotografíasporlasaladecrianzajuntoalasbotellasdevinoquenosedescorcharányquehemospuestoamododedecoración,ymedirijohaciaélparacogerunascuantasyayudarlo.

—¿Esas fotografías son tuyas, Valentina?—me preguntami padre, yendohastaunadeellas,sonriendoalcogerunaenlaqueaparezcoconmiabuelo.

—LasteníaVíctorensucasa—ledigoamododeexplicación,viendocómomipadrelamiraconlaemociónreflejadaensusojos.

—Tuabuelo estaba loco contigo, eras suojitoderecho—mecuenta, ymeacercoaélparaobservarla.

—Aquí todavía tenía elojo irritado…¿Teacuerdascuandocasi se lo sacóconunarama?—lepreguntosonriendomientrasmirolafotografía—.Siemprellevabalacarallenadearañazos.

—Tuabueloeraunhombredecampo.—Recuerdoqueunavezmehiceuncorteymelodesinfectóconelaguade

unaacequia—leexplicoriendo—.Asaberloquecontendríaesaagua—añado,rememorandoesedía.

—De todo, no lo dudes, pero te curó, ¿es cierto o no? —me preguntadivertidomientrasVíctorguardasilencio,limitándoseaserunmeroespectadordeestemomento,conesamediasonrisaqueavecesestodounmisterioparamí.

Page 272: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Y tanto que me curó. Si la industria farmacéutica hubiese tenido quedependerdeél,sehubieraidoalaquiebra—leaseguroconvencida,cogiendolafoto,queluegoacaricioconternura.

Miabuelo,esehombrequesiempreteníaunasonrisaguardadaparamí,esehombre que memiraba y me hacía sentir que yo era su universo entero, esehombrequemeenseñótantasytantascosasyquefuecomounsegundopadreparamí.

—Recuerdo cuandome enseñó a ir en bici.Estábamos en el caminode laentradaalafinca;yopedaleabayélcorríaconmigo,sujetándolapordetrás.Meacuerdodequenodejabadepedirlequenomesoltarayélmecontestabaquenoibaahacerlomientrascorríatrasdemíy,cuandodetuvelabicicletaymevolví,lo vi a lo lejos—les narro posandomimirada en el hombre queme observasonriendo a través de la fotografía, ese hombre que también fue parte de miuniverso—. Me soltó cuando estuvo seguro de que ya no iba a caerme yrecuerdosucarayloorgullosoqueestaba—musitorecordandoesedíacomosiacabaradevivirlo.

—Siempreestuvomuyorgullosodetiydetuhermana.—Y nos lo decía continuamente, y eso tampoco he podido olvidarlo —

afirmoconunasonrisa,apesardelnudoquetengoenlagarganta,sintiendolamiradadeVíctorfijaenmí—.Vamosadarnosprisaonoterminaremos—digocolocando con cuidado la fotografía al lado de un jarrón lleno de azucenasblancas, mirándola con cariño por última vez antes de alejarme de ella paraseguir distribuyendomis recuerdos por esta sala de crianza repleta demuchosmás.

Page 273: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO21

—Estánenlapuertadelafinca—leanuncioaVíctorcuandorecibounmensajedeMaríaEugeniahaciéndomelosaber.

—Justoatiempo—medicerecorriendoconsumiradalasala,paraobservarelresultadofinal—.Megustacómohaquedado—añadeconseriedad.

—Yamí:sencillo,eleganteyconelvinocomoprotagonista.—Bueno,esoesdiscutible;tútambiénestásmuypresenteaquí—merebate

conesamediasonrisaqueencierramilesdepalabrasnodichas.—Ya… pero hoy la estrella indiscutible es él —le digo con el orgullo

copandomispalabras—.Vamos,noquierohacerlosesperar.Siento cómo roza sus dedos con los míos y, puesto que ahora estamos a

solas, entrelazo mi meñique con el suyo, algo que se ha convertido en unacostumbre, al igual que esamirada y esamedia sonrisa que llegan cuando lohacemos, y, en cuanto ponemos un pie fuera de la sala de crianza, separamosnuestrosdedosytomamosunpocodedistanciaelunodelotro.

Juntos esperamos a María Eugenia, a Pilar y a Dante en la puerta de labodegay,encuantolosveodescenderdelvehículo,sientoqueunapartedemimundo desciende con ellos. Sonriendo ampliamente, me acerco hasta dondeestán,seguida,unospasospordetrás,porVíctor.

—Bienvenidos a vuestra casa—exclamo feliz,mirándolos y sonriendo unpoquitomás.

María Eugenia tan María Eugenia, con sus gafas de pasta, su melenapelirroja cayendo leonina por su espalda y tan elegante como siempre con suvestidoceñido,alaalturadelasrodillas,encolorgristopo,yconsustaconazos

Page 274: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

que, seguro, van a convertirse en su peor pesadilla cuando vayamos a losviñedos.

Dante,consupelonegrosueltoalaalturadeloshombros,sumiradaoscuracomounanochecerradayvestidoconunospantalonesazulesyunsuéterclaroquemarca cada parte de su cuerpo, dándole sentido a la palabra «peligro» entodasuextensión.

YluegoPilar,coneseaspectotanprofesionalyalavezcercanoqueparecenir juntosde lamanocuandose tratadeellay laúnicavestidaapropiadamente,puesllevaunossimplesvaqueros,conunasbotasdemontaparecidasalasmíasyunafinachaqueta.

—MaríaEugenia, espero que hayas traído unamaleta bien grande, porquevestida así novas a poder venir a los viñedos—ledigodivertida, dándole unabrazo.

—Notepreocupesporeso,quehatraídodosmaletas;llevaropasuficientecomoparaquedarseunmesenteroaquí—intervienePilarmientasobservocómoellalamirasonriendoporencimadesusgafasdepasta.

—Me declaro culpable de exceso de equipaje en segundo grado—sueltasonriendo,posandosumiradaenVíctoryabriendolosojosdesmesuradamente—. ¡Oh,myDiorrrr!—musitapara síy, antesdequeyopuedadecirnada, seanticipaamí—.Hola,yosoyMaríaEugenia,¿y túeres?—lepreguntayendohaciaél,siendotan…tanMaríaEugenia,puesnuncaheconocidoaunamujerque tenga el don de parecer sutil cuando en realidad está siendo claramentedescarada.

—Víctor Álvarez, encantado —le responde Vic, intentando no sonreír,mientrasellaledadosbesosyyosaludoaPilaryDante.

—Meparecequehaempezado la cazadel zorro—mediceDantealoído,mirándola,conesavozfuerteyoscuraquedamássentidotodavíaalapalabra«peligro».

—¿TerefieresaMaríaEugenia?—Aquién,sino.Meparecequeyalehaechadoelojoasupresa—añade,y

mevuelvoparaobservarlayotambién.Está hablando con Víctor como si lo conociera de toda la vida y la miro

sonriendo,¡vayatela!—Pues espero que te equivoques, porque no está libre —le indico

Page 275: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

encogiéndome de hombros, sin molestarme en aclararle nada más, para darleseguidamentedosbesosaPilar—.¡Hola,guapísima!¿Quétalhaidoeseviaje?

—Muybien;laverdadesquesehahechocortoyestelugaresunapasada,meencanta.

—Puestodavíanohasvistonada.Esperaadescubrirlosviñedosylabodega—le comento, viendo cómo estaciona otro coche en el parking, y sonrío conganasalverquesetratadeCiro.

—¡Hombre!¡Perosíesmicolega!Pensabaqueestecabrónnollegaríahastalanoche—sueltaDanteconunasonrisa,ylomiroenarcandounaceja.

—¿Yeso?—Porque llegóanochede Ibiza.Nohabrádormidounaputamierda—nos

informa mientras todos nos volvemos hacia la puerta del vehículo, que estáabriéndose,paraverlodescender.

Llevaelpelomásrubioyrevueltodelohabitualysumirada,unadelasmásazules que he visto en mi vida, está oculta por sus inseparables Ray-Ban,supongo que para que no veamos las ojeras que tiene. Lentamente, deslizo lamiradaporsucamisetaarrugada,quesindudahavistomejorestiempos,yporsusvaquerosdesgastados.SiDanteeslapersonificacióndelapalabra«peligro»,Ciroloesdelaspalabras«sexo»y«desenfreno»,yhoymásquenunca.

—Buenosdías—nossaludaconsequedad,acercándoseanosotros,cargadoconunamochilacomoúnicoequipaje,ylomiropensandoenMaríaEugeniayensusdosmaletas.

—Buenosdías,macho.Menudasjuergastehaspegadoestosdías—lediceDantedándolelamano,ypiensoencuántotalentohayenesasdosmanosunidasy qué hombres más distintos entre sí, pues si Dante es un tío centrado,cuadriculadoenocasiones, serioen todasy tanprofesionalqueaveces tedanganas de gritar, Ciro es todo lo contrario, pues con él puedes irte de farra yterminar en su estudio o empezar haciendo un shooting y terminar yendo deparranda.

—Putavida,hoynopuedoconella,macho—lecontestaantesdedarse lavuelta para mirarme, y le sonrío—. Ricura, esto sólo lo hago por ti; llega apedírmelootratíaylamandoalamierda—mededicaconesetonodevozque,denuevo,merecuerdaaalgocalienteytentador.

—Yaveráscomonotearrepientesdehabervenido,aunqueestéshechouna

Page 276: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

piltrafilla ahora—replico, yendo hacia él para darle dos besos y terminandoentre susbrazoscuandoposasumanoenmicinturaymeabraza sin soltar sumochila.

Y entre sus brazos, aspiro su olor a limpio entremezclado con el de losrecuerdos y el de la intimidad que sólo sientes con ciertas personas que hantocadotualmadeciertaforma.

—Eso espero, ricura —contesta hundiendo su barbilla en mi cuello,recordándomeaunniñopequeñoenbuscadeconsuelo,ysientoquelaternurameembarga,puesCiro tambiénescapazdeprovocarteese sentimientoy, conreticencias,meseparodeélantesdequeVíctorpuedapensarloquenoes.

—Chicos, os presento a Ciro —les digo, observándolo de reojo ypercatándome que de nuevo ha cubierto su rostro con esa máscara deinexpresividadquetantoaborrezcoyquemeimpideveratravésdesumiraday,sinsaberporqué,mepongoenalerta—.Ciro,élesVíctor,sociodelabodega;María Eugenia, diseñadora de D’Elkann, y Pilar, responsable de Publicidad yMarketingdelamismacompañía.

—¡Hola,tío!Bonitolugarparacurrar—lediceCiroaVíctorconsimpatía,acercándoseaélytendiéndolelamano,yesperoexpectantesureacción.

—Síqueloes,bienvenido—lerespondeconvozneutra,comosiderepentenohubieraningúnsentimientoensuinterior.

—MaríaEugenia,yateníaganasdeconocerte—lasaluda,volviéndosehaciaella,mientrasésta lomiradearribaabajo,yno sé si lohaceporqueCiroestámuybuenooporquevavestidocomosiacabaradelevantarsetrasunanochedeborrachera,queesloquehahechofijo.

—Lo mismo digo, me gusta tu trabajo —le indica finalmente tras suescrutinio,mientrasCirodeslizasumiradapor todoelcuerpodeladiseñadorasinelmenordisimulo,talycomohahechoellaconél.

—Cuandoquieras,podemoshacerlo juntos—lesueltaconese tonodevozque emplea cuando quiere algo, y lo miro enarcando una ceja, esperando lareaccióndeMaríaEugenia.

—ConDanteestoyservida,graciasdetodasmaneras—lerespondeéstasininmutarse lomásmínimo,y sonríoobservándolos.Ella, tanelegante,y él, tandesaliñado,¡menudaparejaharían!

—¿Segura?Porqueyo tengomi cámara lista para ti—insiste, y no sé por

Page 277: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

quéasociolapalabra«cámara»asusexo.Dios,debodeestarmaldelacabeza.—Joder,tío,yesoquenopuedescontuvida—lesueltaDante,socarrón,y

sonríofrenandounacarcajada,percatándomedequenosoylaúnicaquesehaidoporloscerrosdeÚbeda.

—Haymujeres que debería ser obligación fotografiar, yMaríaEugenia esunadeellas—afirmasinmolestarseenmirarnos,consuatenciónpuestaenella,que lo mira con esa altivez que emplea en ocasiones cuando quiere ponerdistancia.

Cirolollevaclaro.—Yyocreyendoquetereferíasamí—ledigosonriendoyconsiguiendoque

sevuelva.—Ati tehe fotografiadomuchasveces, ricura,y sabesquemiestudio,mi

cámaray, sobre todo,yoestamosdisponiblespara ti siempreque lodesees—replicaconinsolenciay,alsegundo,miroaVíctor,quesemantieneimpasible,comosinadadeestofueraconél,comosiestuvieraaldiezporcientootuvieracosasmás importantesen lacabezaen lasquepensar,y lomiro frunciendoelceño.

—¿Estamostodos?—mepreguntaPilar,sacándomedemispensamientos.—Sí,yaestamostodos.VamosalacasitaparaquedejéiselequipajeyMaría

Eugeniapuedacambiarse—lesdigosonriendo,metemoquedeformaforzada—. Seguidnos, ¿vale? Ymientras ellos suben cada uno a su vehículo, yomedirijoaldeVíctor.

—Dimequenotesucedenadayquenoestáspensandonadararito—lepidounavezqueestamosasolasmientrasélledaalcontacto,evitandomimirada.

—Y cuando dices rarito, ¿a qué te refieres, exactamente?—me preguntafrunciendoelceño.

—Dímelotú,perosientoqueestásausente,alotuyo…Yoquésé,aldiezporciento—leintentoaclarar,frunciendoelceñoyotambién.

—Supongoqueavecessoyunpocoasocial—mascullasaliendodelparking.—¿Ypodríashacerelesfuerzodeserunpoquitomássociable,aunquesea

sólohoy,pormí?—Por ti, ricura, hago lo que haga falta —me responde con una media

sonrisa,desprovistoestavezdeesamáscaradeindiferencia,imitandoaCiro,ysonríoconalivio.

Page 278: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Quétehanparecido?—Noacostumbroaprejuzgaralagente—merespondeconvozneutra.—Bueno,unaprimeraimpresiónsíquetehabrásllevado—insisto,deseando

sabersuopinión.—¿Quieres saber lo que pienso de todos o sólo de Ciro?—me pregunta,

volviéndoseunsegundoparamirarme.—Detodos,evidentemente.—Parecen buena gente—me dice al fin mientras yo llevo mi mano a su

pierna,necesitandosentirsucontactoysucercanía.—Lo son y, aunque oigas a Ciro llamarme «ricura» o veas que se toma

algunalicenciaconmigo,sóloesunbuenamigo—sentencio,deseandodejarlascosasclaras,másquenadaparaevitardiscusionesabsurdas—.Además,porsino te has dado cuenta, a quien quiere tirarse es a María Eugenia —añadodivertida.

—Val,notienesquedarmeexplicaciones—merespondeconsequedad.—Oye,sifueraalrevés,amísíquemegustaríaquemelasdieras,asíque

permíteme que yo también lo haga—replicomientras él estaciona frente a lacasita de invitados—.Dante te caerámuy bien, ya verás; esmuy como tú—añadoantesdesalirdeltodoterreno,deseandoquesesientacómodoconellos.

—¿Intentandoquehagaamigos?—mepreguntaleyéndomeelpensamiento,ysonríoenlazandomimiradaconlasuya.

—Más bien intentando que este día sea tan especial como los que hemosvivido.

—Lo será, Val; no te preocupes por eso, ¿de acuerdo? —declaraacariciándomeconlamirada.

—Vale —musito relajándome, viendo el Jeep descapotable, que estabaestropeadocuandollegué,estacionadoenunlateraldelpequeñoparking.

—¿Lohastraídotú?—inquierosorprendida,puesnomehabíadichonada.—Sí,loherecogidoestamañanaparaquepodamosirdirectosalosviñedos

sintenerquepasardenuevoporlabodega—meexplicaconunamediasonrisa,guiñándome un ojo—. Vamos, ricura, nos están esperando —prosigue, y lesonríounpoquitomás,sabiendoquelotengodenuevoalcientoporciento.

Entre Víctor y yo les enseñamos la casita de invitados ante sus miradasasombradas, y no es paramenos, pues esta villa es enorme y cada habitación

Page 279: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

disponedeunbañopropio,ademásdeunsalónyunacocinaequipadacontodolonecesario.

—¿Ydicesquealquiláisestavilla?—mepreguntaMaríaEugeniasindejardeadmirarla,unavezcambiada,yobservosulook,admirándolo,talycomoestáhaciendoellaconlacasa.

Llevaunospantalonesbeigeconunacamisablanca,botinesplanosmarronesyunacazadoraestampadaqueestáconsiguiendoquemisojoshaganchiribitas.

—Así es. Esta villa es suficientemente grande como para alojar a todo unequipo. Imagínate qué fotografías saldrían de aquí; tierra y cielo fundiéndose,extensos terrenos salpicados de encinas, viñedos y olivos, la cordilleraCantábricafrenteatodoesto,unabodegacentenariayunacuadraconcaballosdepuraraza.

—Me estás poniendo de los nervios, Valentina—me dice Dante con esamiradaapasionadayesavozcontenidaqueutilizacuandotrabaja.

—Yestodavuestrasilaqueréis.—¿Yelalquileresmuycaro?—intervienePilarmientrasCirosesientaenel

sofá,comosielasuntonofueraconél,ylomirofrunciendoelceño.«Joder,éstenollegaalanoche»,piensomientrasveocómorecuestalacabezaenelrespaldo.

Vamos,quecomosuelteunronquido,melocargo.—Yahablaremosdepreciosmásadelante,ahoravamosamostraros loque

Valentinatanbienhadescrito—contestaVíctor,anticipándoseamí,ysonríoalreconoceralVíctorqueponesualmaentodoloquehace.

—Ciro, ¿te vienes o prefieres quedarte echando una cabezadita? —lepreguntoguasona.

—Mejornopreguntes, ricura,uoirás loquenodeseas—merespondeconvoz rasposa, mesándose el cabello antes de levantarse y echar a andar hacianosotros,ycreoquetodaslasmujeresaquípresentes,entrelasquemeincluyo,lomiramosunpoquitomásde loqueesdebido,puesesamezclade ternuraysexoqueproyectaesmuydifícildeignorar.

—Estás hecho un desastre —le dice María Eugenia, casi riñéndolo,mirándoloporencimadesusgafasdepasta.

—Cierto,¿quieresayudarmetúasolucionarlo?Simedesvistesyjuegasunpoquito conmigo, luego dejaré queme vistas y hasta que elijas mi ropa—lerespondeconinsolencia.

Page 280: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Acasotienesseisaños?—replicaésta,haciéndolefrentemientrasCiroseacerca a ella más de lo recomendable y María Eugenia mantiene el tipo sinretrocederuncentímetro.Oléporella,quéovariostienelatía.

—Teaseguroqueloscríosdeseisañosnojueganamisjuegos,perotúsíquepodríasjugar,¿quémedices?

—Que eres un crío, eso es lo que digo—le responde alzando el mentónmientras todosguardamos silencio, expectantes—,y,paraque te enteres, amímevanloshombresdeverdad,nolosniñatosinsolentesamediohacer—añadeconlamismainsolenciaqueestáempleandoCiroconella.

—Ricura, te aseguro que con este niñato insolente a medio hacer te lopasarías en grande. Vamos, ¿juegas o no? —le pregunta ante la miradadesorbitadadetodos.Vengaya…¿Enserio?

—Joder,estopareceeliniciodeunapeliporno,¿nossentamos?—proponeDante,metiendosusmanosenlosbolsillosmientrasPilarsueltaunacarcajadaalaquemeuno.

—Nocreoquehagafalta,pero,Valentina,cariño,haznosunfavorybuscauncochecitoounbalónparacuandoelniñosenosaburra,másquenadaparaque no nos dé el viajecito y semantenga entretenido—me dice socarrona, yobservolasonrisadeCiro.Diosmío,MaríaEugenianosabeloqueleespera.

—Necesitas que te den un par de lecciones, ricura, tienes la lenguademasiadoafilada—lereplicaconunaseriedadqueamímeresultamuysexyyalavezdivertida,puescreoqueeslaprimeravezqueunamujerseleresisteylo llamacrío insolenteamediohacer;deverdad,voyahacerle laolaaMaríaEugeniacuandonadiemevea.

—¿Yvasadármelastú?Perosiacabasdesalirdelcolegioy,otracosa,nomellamo«ricura»,mellamoMaríaEugenia.

—Poresomismo,porqueacabode salirdel colegio, tengo tantasganasdejugar,ricura,yteaseguroquesoyincansable—suelta,yestoyapuntodeañadirqueescierto,perooptoporsersensata,callarmeynoecharmásleñaalfuego.

—Valentina, maja, huyo de Madrid para no encontrarme con el odiosoMaurice y me topo con esta pequeña tortura —me dice con voz afectada,echando a andar hacia la puerta, ignorando aCiro, que lamira como si fueraalgocomestibleapuntodederretirse.

—Losiento,nosabíaqueestapequeñatorturaibaasertaninsistente;serála

Page 281: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

resaca—comentodivertida,advirtiendoaCiroconlamirada.—Vamos, se está haciendo tarde y queremos mostraros muchas cosas—

intervieneVíctorsiguiendoaMaríaEugenia,queyahallegadoalapuerta.AVíctorlosiguenDanteyPilary,cuandoCirollegaamialtura,posouna

manoensupecho,deteniendosuavance.—Asínovasatirártela,para—loreprendoconseriedad.—Perosinoheempezado,ricura—merebatefeliz,pasandopormilado,y

losigo.—Enserio,dejadehacereso;noquieroquesesientaincómoda,noolvides

queesmiinvitada—insistomientrasélpasademí,yendodirectoalJeep,ybufoponiendolosojosenblanco.

«Dios,porfavor,siexistes,hazquesefreneunpoquito»,ruegoensilencio,empezandoaseguirlo.

Llegoal todoterrenoyveoqueMaríaEugenia seha sentado escudadaporDanteyPilaryrespiroaliviada,colocándomealladodeVíctor.

—¿Listosparadisfrutardelpaisaje?—lespreguntoemocionada.—Listos.Venga,arranca,queestoydeseandovertodoesoquenoshasdicho

—me responde Pilar, y de reojo observo cómo Ciro recuesta la cabeza en elrespaldodelcoche.

—Abrelosojos,Ciro,nohasvenidoaecharcabezadas.—Lostengoabiertos—memienteconunasonrisadibujándoseensurostro.—Déjaloqueduermaunratito,anda,noseaqueleentrelatonteríayledé

pordecirmásestupidecesdelasqueyahadicho—comentaMaríaEugenia,sinmolestarseenmirarlo.

—Meechasdemenos,¿eh,ricura?Unosminutossindecirtenadayyaestásreclamándome—replicaconvozrasposa,comosiestuvieraapuntodedormirsey,aunasí,fueraincapazdecerrarelpico.

—Yaquisieras—mascullaella,ysonríosinvolverme,viendodereojocómoVíctortambiénlohace.

Duranteelcaminohacialosviñedos,leshablodelosiniciosdelabodega,decómomisantepasadosvendíannuestrasuvasalosfrancesescuandolafiloxeraafectó sus viñedos, destrozándoles la producción, y de cómo, añosmás tarde,primero mi abuelo y posteriormente mi padre, ampliaron el negocio familiar,reformándolo hasta convertirlo en lo que es ahora, mientras ellos prestan

Page 282: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

atenciónenocasionesopreguntanenotras.—¡Hemos llegado! —anuncio entusiasmada, apeándome del vehículo,

seguidadetodos.—Elpaisajeesespectaculartodoelrato,tienessuertedeviviraquí,tío—le

diceDanteaVíctor,adentrándonosenlosviñedos.—Elmundodelvinoesapasionanteyempiezaaquí, en la tierra—afirma,

cogiendo un puñado de ésta—. Ella es la que nos lo da todo o nos lo quita;estamos a merced del tiempo, siempre vigilando la uva para vendimiar en elmomento justo…—continúa mientras Ciro comienza a fotografiarlo todo, aligualqueestáhaciendoDante,ydenuevopiensoenlodistintosquesonyenlasimágenesqueestáncaptandoconsuscámaras,dignasdeadmirarseguro.

Con las explicaciones deVíctor entremezcladas con lasmías, iniciamos elrecorrido por los viñedos mientras los operarios continúan con su labor. Loscamionesvienenyvanyel solcomienzaaganaralturaeneste infinitoalquellamamoscielo.Mientrasescuchocómolesexplicaquevamosahacerunacata,aquímismo,piensoenloquesucederáestanoche,cuandoalfinestemossolos,cuandonohayaropadepormedio,cuandotengamosloslabiosenrojecidosdetantobesarnosyelcuerposaciado,cuandopuedadecirlequevoyahacerdeestoy de él mi vida entera, y, aunque continúo sintiendo esa sensación extrañacaminando unos pasos por detrás de los míos, la ignoro, obligándome a novolvermeparamirarla,centrándomeenloqueestoyviviendoahora.

—Vamosa la casitadeaperos—nospropone, sorprendiéndome,y lomirofrunciendoligeramenteelceño.

—¿Cómo?—inquiero, desfrunciéndolo en cuanto posa sumirada sobre él,consiguiendoqueunasonrisasedibujeenmirostro.

—Tú sígueme —me dice como única respuesta, y tengo que frenarmemucho,muchísimo,paranotirarmeasucuello.

Concomplicidad,nosdirigimoshaciaellay,encuantodivisoalolejos,bajolaparra,unamesaconsumanteldelinoblancorodeadadeseissillas,vuelvomimiradahaciaélcon losmilesdeemocionesque llenanmipecho instaladasenella.

—Eresincreíble—susurrosóloparanosotros,connuestrosdedosrozándoseynuestrosmeñiquesansiandoenlazarse—.Pensabaqueharíamos lacataenelremolquedel Jeep—musito sintiendocómo sehinchamipechoymi corazón

Page 283: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

lateúnicayexclusivamenteporél.—Quépoco elegante eres—mecontesta en un susurro, burlándose demí,

mientras oigo de fondo la conversación que estánmanteniendoDante, Pilar yMaríaEugenia,quecaminanunospasospordetrásdenosotrosy,cuandomirohaciaellosporencimademihombro,veoqueCiroseha retrasadounpocoyestásacándonosunafotografíadeespaldas.

—Hasllevadoeltodoterrenoalacasita,haspreparadoesto…¿cuándolohashecho?—indago,dirigiendodenuevomimiradaalfrente,inspirandoelolordelatierraytomandonotamentaldepedirleaCirounacopiadeesafoto,mientrasrozomibrazoconelsuyo,sintiendocómosucuerpotiradelmíoconfuerza.

—Hemadrugado—mecontestacomoúnicaexplicación.—Qué maravilla, si parece que estemos dentro de un lienzo —exclama

María Eugenia una vez llegamos a la casita de aperos, admirando todo elentorno.

—Ni siquiera Monet sería capaz de captar tanta belleza junta —musitoorgullosa, contemplando los viñedos, que se extienden interminables frente anosotros, con las miles de tonalidades del rojo empezando a robarleprotagonismoalverde;elcieloazul,completamente libredenubes; laparra,atravésde lacualse filtranalgunos rayosdesolybajo laquemiabuelo tantasvecessesentóenbuscadeunpocodesombradurantelosmesesdeverano;lamesademadera,conelmantelde linoblanco, rodeadadesillas, invitándoteatomarasientoydisfrutardeloquelavidateofrece,yelintensooloratierrayfrutamaduraenvolviéndote…

—¿Y esto es una casita de aperos? —nos pregunta Pilar divertida,sacándome de mi ensoñación—. Pues te aseguro que yo podría vivirperfectamenteenella.

—Los aperos están en la parte trasera—le aclaro sonriendo, sintiendo losrayosdelsolacariciandomiespalda—.Estacasitaestádestinadaalusodelostrabajadoresysólotieneunapequeñacocina,unsaloncitoyunbaño—prosigo.

—Y era aquí donde venías de jovencita con los novietes, ¿verdad? —intervieneMaríaEugenia,guiñándomeunojo—.Venga,confiésalo.

—Uyyy,quéva,ni siquiera lopensé—leaseguro,omitiendodecirquemiatenciónestabapuestaenotra«casita».

—Seguro—mecontestaconunamediasonrisa,negandoconlacabeza.

Page 284: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Venconmigo—meordenaVicconvozronca,ylosigosindudarlo.Entroenlacasitaseguidaporély,encuantocierralapuertaamisespaldas,

me vuelvo para buscar su boca, como el sediento reclama el agua o como elhambriento exige comida y, cuando nuestros labios se encuentran y nuestraslenguas se unen,mepego a su cuerpo con lascivia, reclamandomi aguaymicomida,reclamándoloaél.

—Siempre estamos rodeados de demasiada gente —protesta sin dejar debesarme, llevando su mano a mi cuello, pegándome a él y besándome condesesperación.

—Ya lo sé —jadeo contra su boca, llevando mis manos al suyo ynecesitándolotantoque,sipudiera,mefundiríaenél.

—Nos están esperando —musita arrinconándome contra la pared yalzándomeporlacintura,haciendoquerodeelasuyaconmispiernas.

—Pues que esperen —gimo frotándome contra su sexo, arrancándole ungemidomientrasimpulsasuscaderashaciadelante.

—Val, nena… —murmura con voz entrecortada, besándome con rudeza,aprisionandomipielpordebajodelaropayencendiendocientosdefuegosenmiinterior.

—Vicccc—susurroentrejadeos,ahogándomeconminecesidad,sindejardemoverme.

Nos besamos con hambre, hambre del otro, hambre de más, hambre queexigetocar,sentir,lamerymorder…Hambrequenosesacia,queteencogeelestómago y acaricia tu alma; hambre que duele y calma, hambre que ruge ygime,hambre…

—Víctor,tenemosqueparar—musito,odiándomeportenerquedecirlo,sindejardebesarlouninstante.

—Un segundo, nena, dame un segundo—me pide desesperado, pegandomás su cuerpo al mío, como si quisiera fundirse esta vez él en mí—. Estanoche…

estanochevasasertodamía.—Ytú,mío—susurrosintiendocómoesaburbujaelásticaeirrompiblellega

paraenvolvernuestroscuerpos,queseresistenaalejarseelunodelotroyquesereclamanconposesión.

—Vamos —murmura bajándome y, cuando mis pies tocan el suelo, su

Page 285: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

cuerposepegaunpoquitomásalmíoybuscosumiradaconlamía—.Tienesque prometerme una cosa —me pide, esta vez con seriedad, con su pechosubiendoybajandoalritmodelmío,mientraslosrayosdelsolsefiltransuavesatravésdelasvenecianasdemaderaquecubrenlasventanas,rompiendoconsusrayoslaoscuridaddelinteriordelacasita.

—¿Qué quieres que te prometa? —pregunto sintiendo los latidos de micorazónlatiracompasadosjuntoalossuyos.

—Quenuncaolvidarás loque tedije—solicitaconuna intensidadquemesorprende.

—¿Porquéinsistessiempreconlomismo?Novoyaolvidarlo,Vic,dejadepedírmelo—leruego,y,aunqueunapartedemícreequelohaceporquepiensaquevoyamarcharme,otra,ladelaintuición,laquecaptalascosasqueanuestraparteconsciente se leescapan, seponeenalertayde sumano,aferradaaellaconfuerza,llegaesasensaciónextrañaparacolocarseamilado,apoyándoseenlapareddelamismaformaenqueestoyyo,alaesperadeasentarseenmipecho—.Oye…—musitoacunandosurostroentremismanos,buscandodesesperadaesaspalabrasque, resbaladizas,parecenquererescapardemí,haciendoqueelsilenciolleneloshuecosquedeberíanllenarellas,esaspalabrasquedeberíandarvozamis temoresyamismiedosyque,poralgunarazón,noconsigoatraparparapoderverbalizar.

—¿Qué? —inquiere finalmente, frunciendo el ceño, mientras yo memantengoensilencio.

—Nada…Vamosasacarlascosas,estaránechándonosdemenos—contestobajitoalejándomedeél,sindejardepreguntarmequéseráesoquemialmateme.

Abro las venecianas de una de las ventanas,manteniéndome en silencio ypermitiendo que los rayos del sol entren a raudales ahora que no encuentranimpedimentosasupaso.

—¿Val, qué pasa? ¿Qué ibas a decirme?—me interroga cogiéndome delbrazoyhaciendoquemedélavuelta.

—Nada, tonterías, supongo —respondo evitando su mirada, volviéndomehacia la encimera donde están las copas, el vino y unos platos cubiertos conpapel film—. ¿Qué has traído?—le pregunto soltándome, yendo hacia ellos,mientrasélnomequitalosojosdeencima—.Queso,picosyjamón…Hummm,québuenotodo—añado,intentandosonreíryocultaresostemores,seguroque

Page 286: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

absurdos,quehanllegadoparafastidiarmeeldía.—¿Estásbien?—insiste,acercándoseamí.—Claroquesí,¿ytú?—inquieroatrapandosumiradaconlamía.—Por supuesto—me contesta rotundo y, a pesar de su seguridad, sé que

amboshemosmentido.—Genial entonces; vamos —declaro cogiendo los platos y dirigiéndome

hacialapuertaseguidaporél.

Page 287: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO22

Salgo de la casita huyendo de esa sensación extraña que hoy parece quereracompañarmeatodaspartesapesardenohabersidoinvitada,deseandodejarladentroycerrar lapuertacon llaveparaquenopueda seguirmemásy, cuandoposo la mirada en los viñedos, en mis amigos, e inspiro la fragancia de misrecuerdos, creo que lo consigo, dejándola encerrada entre esas cuatro paredesmientrasyoabrazoelmomento,negándomeaproyectarlamásmínimasombraenundíatansoleadocomoéste.

—Yaestamosaquí—anunciosonriendoa todos,dejandosobrelamesalosplatosconjamónyqueso.

—¿Osayudamos?—seofrecePilar,solícita,mientrasVíctordejalascopas.—Nohacefalta,yaestácasitodo—leindicoentrandodenuevoenlacasita

paracogerelvino,negándomeamirarhaciaesapareddondeanteshesentidoesasensaciónextraña,comosi fueraalgopalpableovisiblequepudieraversimedieramediavuelta.

—¿Haces tú los honores?—le pregunto aVíctor, tendiéndole el vino y elsacacorchos,obligándomeamanteneresecielolibredenubes.

—Claro—merespondecogiéndoloy,cuandoenlazomimiradaconlasuya,veocientosdeellas,oscureciéndolo.

—Alniñono lepongáisvino,que todavíano tiene la edadapropiadaparabeber—bromeaMaría Eugenia, y me giro para mirarla, enarcando una ceja,mientrasCiroseacercaaella,consuandarlentoycadencioso,acompañadodeunasonrisallenadepeligro.

—Ricura, no puedo estar prestándote atención todo el rato; contrólate

Page 288: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

¿quieres?—lepidepegándoseasuespalda,apoyandolabarbillaensuhombro,consus labios rozandoel lóbulode suoreja,ymeolvidode las sombrasparasimplementesentircómo,derepente,todoarde,tierraincluida.

—Es increíble que, sin beber vino, éste te haya subido a la cabeza —lerespondeconaltivez,alejándosedeélymirándoloporencimadesusgafasdepasta.

—Yotedirédóndetengoconcentradotodoelvino—replicainsolentey,denuevo,ynoséporqué,vuelvoapensarensusexo…Ay,Diosmíooooo,debodeestarmaldelacabeza,seguro.

—Mejor ahórratelo—le respondemientras Pilarmemira flipando y yo ledevuelvoelgesto,flipandounpoquitomás.

—¿Vamosahacerunacatadetuvino?—meplanteaDantealverminombreenlabotellamientrasVíctorcomienzaaservirlo.

—Asíes.Vaisatenerelhonordeserlosprimerosenprobarlo—lesanunciocogiendounadelascopas,queluegoletiendoaCiro.

—Toma, ricura, cuidado a ver dónde se te concentra —digo sin podercallarme, consiguiendo que todos suelten una carcajada, exceptuando aMaríaEugenia,quelomiraconcaradenopoderconélmientrasDanteinmortalizaelmomentoconsucámara.

—¿Quierescompartirloconmigo?¿Oprefieresbeberlodemiboca?—sueltavacilón.

—Valentina,cariño,¿voyatenerquesoportarestodurantetodoeldía?—mepreguntaMaríaEugeniapasandodeélycogiendolacopaqueletiendo.

—Metemoquesí—contesto,guiñándoleunojo.—Entoncesvoyanecesitarunabotella enteraparamí sola; sobrianocreo

que pueda aguantarlo —nos dice dramáticamente, haciéndonos reír, mientrasCirosecolocaasulado.

—Si vas a beber, mejor hazlo conmigo, ricura, para que pueda cogertecuando no puedas tenerte en pie —le propone con ese tono de voz que terecuerdairremediablementeaalgocalienteyresbaladizo.

—Déjalo,antesprefieroabrirmelacabezaencanalapermitirquemecojasenbrazos—replicaalzandolabarbilla,yveolamediasonrisadeVíctor.

—PorValentina,porsuvinoyporestastierrasqueestoysegurodequevanasertestigodecientosdereportajes—proponeelbrindisDante,alzandosucopa.

Page 289: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Yalzo lamíasabiendoqueensucámarayaestágestándoseelprimerodeellos,elquedarácomienzoaloquetengaquevenirmientrasmilesdeproyectosseformanenmicabeza,enlazándoseunosconotrosyconlosqueesperodaraconocerestemaravillosolugarqueestanespecialparamícomolofueparamiabueloy,ensilencio,meprometoquevolcarétodosmisesfuerzoseilusionesenllevarlosacabo.

—¿Alguna vez habéis hecho una cata?—quiere saberVíctor, captando laatencióndetodos.

—Yosólo séalzar la copapara llevármelaa los labios—le respondeCirocon esa sonrisa de niño malcriado con la que a mí, personalmente, me tieneganada.

—Síesqueeresuncrío—loriñedenuevoMaríaEugenia.—Ytúestásmuytensa;relájate,ricura—lecontestaguiñándoleunojo.—Déjameenpaz—mascullaésta,alejándosedeél.Entre Víctor y yo les explicamos cómo hacer una cata, recuperando esa

complicidad que habíamos perdido dentro de la casita y, a la sombra de estaparra, cadaunodibujamosnuestro propio lienzo, añadiéndole trazos demás omenos color, intensidad y luz, dependiendo de las emociones que dominen elpincel.

—¿Porquénocogentodoslosracimos?—seinteresaPilar,mientrasvamosdecaminoalJeep,observandolafrutaquehaquedadoenlavid.

—Porque no podemos cogerla toda—le aclaro observándola yo también,recordandolasexplicacionesdeVíctor,demipadreydemiabuelo—.Aquítodoestá controladopor elConsejoRegulador de laDenominación deOrigen y esésteelquenosmarcaqueenunahectáreadeviñedosólopodemos tenerentredos mil quinientas y tres mil trescientas cepas, la anchura entre las calles, ladistancia entre cepas, la poda y la producción de la hectárea. No podemospasarnosyporesotodaestafrutahaquedadosinrecoger.

—Y ahora no lo veis porque hemos pasado el arado para dejar el campolimpio para vendimiar, pero, si hubierais venido en agosto, habríais visto elmontónderacimosquehabíatiradosenelsuelo,ysiemprelosmásgrandes—lescuentaVíctor.

—¿Yporqué?—inquiereDante,extrañado.—Porqueelracimomásgrandeesalquelevaacostarmásmadurar;sobre

Page 290: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

todo tiramos losque todavíaestánverdes—leexplica sindejardecaminar—.Pensad una cosa: si dejamos más racimos, tendremos más producción, peroposiblementetendremosdoskilosdeuvaverde,yloquenecesitamosesunkilodeuvamadura.Porunladononospasamosenproduccióny,porotro, lacepanos da una uva demayor calidad—les indicamientras llegamos hasta dondehemosestacionadoelvehículo.

—Hebebidodemasiadovino—sequejaMaríaEugenia,unavezestamoseneltodoterreno,caminoalabodega.

—Ricura, sólo tehasbebidodoscopas—le recuerdaCiroaloídoconvozronca.

—Tú nome hables. ¿Y qué haces sentado ami lado?—le pregunta entredientes,apoyandolacabezaenelrespaldo.

—Perdona,ricura,perohassidotúlaquesehasentadoamivera—matizaCiro,sonriendoconinsolenciamientrasmirodereojoaVíctor,sonriéndoleconcomplicidad.

—Seguro que sí… ¡Ohmy,Diorrr! ¡Todome da vueltas! Soy una pésimacatadoradevino.

—¿Quieressentarteenmiregazo?Prometocogertefuerteynosoltarte—leproponeCiro,yniegoconlacabezasindejardesonreír,encendiendolaradio.

Está sonando The one, de Kodaline, y escucho la letra reconociendo missentimientosenella,guardandosilenciomientrasellosprosiguensudiscusión.

DanteyVíctorcontinúanhablandosobrelavendimiayPilarsemantieneenun segundo plano, supongo que sumida en sus pensamientos como estoyhaciendoyo.

—Hemos llegado —les anuncio cuando aparcamos en el parking de labodega—. Como estamos en plena vendimia, vais a tener suerte y poder vercómofuncionatodoestemundillo—añadoantesdebajardelvehículo.

—¿Teayudo, ricura?—lepreguntaCiroaMaríaEugenia,apeándoseantesqueellaytendiéndolelamano,queéstamirarecelosaporencimadesusgafasdepasta.

—MaríaEugenia,sinoteimporta—mascullaconvozafectada,cogiéndolafinalmenteparabajardelJeep.

—María Eugenia… —repite Ciro con voz rasposa, sorprendiéndola alcogerlaporlacinturaparapegarlaasucuerpo,ylomirotanomássorprendida

Page 291: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

queella…Vayatela—.Megustatunombre,aunquequizáresulteunpocolargocuandotengaprisa—musitarozandosucuelloconlanariz,subiendolentamentehastallegarallóbulodesuoreja—,perosupongoque,entonces,mepermitirásqueloacorteoquetellamedeotraforma—prosigue,liberándoladerepente,ysueltoelaireque,sindarmecuenta,habíaestadoconteniendo.

—Sigue soñando, pequeñín—le dice tras unos ardientes segundos que nodeberían haber estado ahí presentesmientrasCiro pasa insolente frente a ella,conesosandareslentosyalavezsegurosdequiensabequevaaobtenerloquedesea—. Oye, Valentina, ¿no tendrás por casualidad un bozal para el niño?Porqueestáempezandoaponermedelosnervios.

—¿Necesitas una cuerda también? —bromeo divertida, echando a andarhacialabodega,conellaamilado.

—Puesnoesmala idea,pero¿quélepasa?¡Sipodríasersumadre!—nospreguntaaPilaryamí.

—No te dejes engañar por su aspecto aniñado —le aclaro, volviéndomehaciaella—.¿Cuántosañostienestú?

—Treinta y ocho, y él ¿cuántos tendrá?, ¿diecinueve… veinte?—inquiereconcuriosidad.

—Unospoquitosmás;veintisiete,paraserexactos—detallo—.Nopodríassersumadreaunquequisieras.

—No importa, tengo once años más que él —farfulla gesticulando conambosbrazos,comodescartandolaidea.

—Pero¿teloestásplanteando?—indagosonriendo.—¡Por supuestoqueno!—me respondecon labocapequeña,haciéndome

sonreírunpocomás.—Puesno sabes loque tepierdes—leaseguro,viendoqueVíctor,Ciroy

Danteentranenlabodega.—¿Ycómo lo sabes? ¿Acaso te has acostado con él?—se asombraMaría

Eugenia,deteniéndoseenseco.—Sí,yteaseguroquelopasaríasmuybienconél—afirmomientrasellame

mira con ese interés que mostramos las mujeres cuando alguien nos gusta, apesardequedigamostodolocontrario.

—Déjalo. Puede que no sea tan joven como creía, pero, aun así, esdemasiadocríoparamí.Amímevanmásloshombreshechosyderechoscomo

Page 292: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Víctor.—Ladiferenciadeedadnodeberíaserunproblemasi tegusta—lerebate

Pilar,empezandoaandarmientrasyomemuerdolalenguayambaslaseguimos.—¡Que no me gusta! Pero si me saca de quicio —nos asegura, y estoy

convencidadequehoydebedesereldíadelasmentiras,apesardequetaldíanoexistaenelcalendario.

—Loquetúdigas,ricura—sueltoconpuñeteríaentrandoenlatienda,dondeellosnosestánesperando—.¿Empezamosconelrecorrido?—lesdigofeliz—.Bueno,comopodéisver,éstaeslatiendaytambiénlarecepcióndelabodega—empiezo mi explicación, deteniéndola cuando veo salir a mi amiga Adri dedetrás de ella, cargada con un número considerable de carpetas—. Y ella esAdriana,unadenuestrassufridastelefonistasyunadelasencargadasderealizarlas visitas guiadas —añado, haciendo que se vuelva, y la miro sonriendomientrasellamehaceunamueca.

Llevaelpelonegrorecogidoenunacoletadeshecha,lasgafasdepastadelmismocolorquesupeloyeluniformedelabodega,consistenteenunpantalóndepinzasnegroajuegoconlaamericanayunacamisetablanca,ypiensoqueescomoelperfume,pequeñitaeintensa.

—¿Te ayudo?—le pregunta Dante acercándose a ella, y capto la cara deestupefaccióndemiamigamientrasélseacercaaella.

—Nohacefalta,tranquilo…Puedoyosola…Graciasdetodasformas—leresponderuborizándoseyechandoaandar.

—¿Quierescomerconnosotros,Adri?—lepropongoderepente,dejándomellevarporunimpulso.

—Nopuedo,perogracias—mecontestasinmirarme,casiechandoacorrer.«Cobarde»,lededicomentalmente.—¿Seguimos? —inquiere Víctor, con cientos de preguntas en su mirada

mientras yo sonrío con ganas, sabiendo de sobra que no tiene ni idea de pordóndevanlostiros.

«Hombres»,piensodivertidamientrasllegamosalpatiodevendimia,dondelosoperariosestántrabajando,yveocómo,insitu,analizanlosparámetrosdelauvaantesdellevarlaaenfriar.

—Enfriamos la uva a cuatro grados durante veinticuatro horas y, una vezatemperada, colocamos los cajones en esta cinta transportadora; ésta,

Page 293: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

automáticamente,losgolpea,consiguiendoquelauvacaigaenestamáquinaalaquellamamosdespalilladora;eslaencargadadesepararelraspóndelfruto,ylohace con un movimiento pendular, para no romper el grano —comienza aexplicarlesVíctormientras losoperarios continúan con su laborymis amigosobservanelproceso—.Unavezseparado,lauvapasaráaestasegundamáquina,que es una mesa de selección óptica, donde el escáner vertical realizará laseleccióndelgrano.

—Previamentemarcamosenelordenadorlosparámetrosquehadecumplirlauva,comoeltamaño,elcolorylaforma,ytodoslosgranosquenoencajenconesosparámetrosserándesechadosconungolpedeaire,asíqueelcientoporcientodelauvaqueentraenbodegaesexactamentecomoqueremosquesea—intervengoantelamiradaasombradadetodosylasonrisadeVíctor,queseunealamía—.Estamáquinavaacincomilkilosporhora,yosgarantizoquetodosestamos profundamente enamorados de ella —añado, arrancándoles unacarcajada.

—La uva seleccionada cae a uno de estos contenedores, llamadosOVI—tomaelrelevoVíctor.

—Objetovoladoridentificado—matizo,guiñándolesunojoyconsiguiendoqueríandenuevo.

—Porestosraíleslosubimosarribay,porgravedad,lauvacaedirectamenteen cada uno de los depósitos donde se realiza la primera fermentación, laalcohólica, además de la operación del remontado…—les cuentamientras yome evado, durante unos segundos, para simplemente contemplarlo a él, paraobservarsusgestos,atesorarlacadenciadesuvozydemorarmeenlaintensidadde su mirada, esa que aparece cuando algo lo apasiona, como ahora o comocuandoestamosjuntos—.Unavezhechalafermentaciónalcohólica,llevamoselvino a una segunda sala —continúa, dirigiéndose a ella, bajando un piso,mientras todos lo seguimos—; aquí realizaremos la segunda fermentación, lamaloláctica,yseharáenestosdepósitosdetamañomásreducidoydemaneranatural gracias a unas bacterias que hay vivas en el vino. Ellas serán las quetransformarán el ácido málico en láctico, consiguiendo que el vino sea mássuaveenboca,másfácildebeber,máselegante.

—Estafermentaciónesunpocomáslargaquelaanterioryvieneadurarunmesoinclusoalargarseunpardesemanasmás,dependiendodelvino—detallo,

Page 294: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

acercándomeaél,necesitandosentirsuproximidad.—Exacto —prosigue Víctor, moviéndose ligeramente para aproximarse

tambiénamí—,yunavezterminadaescuandoponemoselvinoenlasbarricas,paracomenzarconelperíododeenvejecimiento.

—El Consejo Regulador nos exige dos cosas. La primera, que todas lasbarricasdebenestar elaboradasen roble,noespecifica cuál, y la segunda,quetodas deben tener lamisma capacidad, doscientos veinticinco litros cada una,unastrescientasbotellasaproximadamente—aclaromientrasVíctoryyo,casialavez,reanudamoselpaso,ylesonríodiscretamente—.Vamosapasaralapartegrandedelcalao,donde tenemoscasinuevemilbarricasenvejeciendovinodediferentestiposyañadas.

Proseguimos el recorrido añadiendo a nuestras explicaciones miradascómplicesquesólonosotrossomoscapacesdedescifrar,sonrisasqueencierranunsinfíndepalabrasyrocesquehablandelhambrequesentimoselunoporelotro,añadiendoestrofas,comovenimoshaciendodesdehacedías,aesacanciónqueestamoscreandojuntos,mientrasqueCiroyMaríaEugeniacontinúanconese tirayaflojaquepuede terminar llenandodenotassupartituraparticular,yDante, disimuladamente, busca a una pequeñamorena con gafas para crear lasuyapropia,ysonrío, intuyendoqueeste findesemana traeráconsigomásdeunacanción.

—¿Y hacéis vosotros vuestras propias barricas?—nos pregunta Pilar coninterés,unavezquellegamosalatonelería.

—Asíes…—lecontestaVíctor,repitiendoacontinuaciónlaexplicaciónqueen su día ya les hicimos aMarco yAlessandro,mientras yo inspiro el olor amadera que aquí se respira y su voz resuena entre estas paredes de lamismaformaenqueresuenaenmicorazón.

Cuando llegamos de nuevo a la tienda, Adri ya no está y suspiro bajito,decepcionada,puesesperabaencontrarlayhacerlecambiardeopinióny,cuandomirohaciaDante,medoycuentadequenosoy laúnicaqueesperabahallarlaaquí.

Encasa,frentealapuerta,nosesperanmipadreyCasi,queparalaocasiónsehavestidoconunafaldarectaazulmarinoyunablusablanca,y lamirodearribaabajocuandomeapeodelvehículo.

—Casilda,peroquéelegantetehaspuesto—ledigobajito,sonriendoantes

Page 295: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

deprocederconlaspresentaciones.—¿Voybien?Quería ir eleganteparacomercon ladiseñadoraesta famosa

—me dice atusándose la falda, y la miro con cariño mientrasMaría Eugeniallegahastadondeestamosnosotras.

—Creoquevoyaquedarmeaviviraquí—nosdiceadmirandolafachada—.¿Notendrásunahabitaciónlibreparamí?Ay,hija,québonitoestodoesto.

—Te lo dije, y nos falta ir todavía a las caballerizas. Por cierto, ¿sabéismontar?—lespregunto.

—En mi vida me he subido encima de un caballo, me dan un miedohorroroso —nos confirma María Eugenia a la vez que veo el brillo quedesprende la mirada de Ciro, y sonrío para mí, pues sé que es un jinetebuenísimoeimaginoloqueestarápensando.

—Puedesmontarconalguienquesísepahacerlo—leproponemipadreconsimpatía,poniéndoseloenbandejaaCiroysonríodisimuladamente.

—Enesecaso…Bueno,yaveremos—nosdicegesticulandoconlasmanos.—¡Yomeapunto!—exclamaDante.—Puesyovoycontigo,queamítambiénmedanmiedo—intervienePilar,

poniéndoselomásenbandejaaCirotodavía,ymeríofinalmente.—Genial, yo monto sola y Víctor también —matizo antes de que María

Eugenia se pegue ami chico—.Ciro, tú sabesmontar, ¿verdad?—añado, sinpodercallarme.

—Porfavor,vaasentarmemallacomida,losé—exclamaMaríaEugenia,adivinandopordóndevanlostirosymirándomemal.

—Esimposiblequelesientemalhabiéndolapreparadoyo—intervieneCasi,sinsaberpordóndevan.

—Señora,créame,vaasentarmecomountiro—insistemirandodereojoaCiro, que la mira con una sonrisa que, si yo fuera ella, temería—. ¿Puedoquedarmeconustedencasacuandoellossevayanamontar?

—Deesonada,MaríaEugenia;novaleescaquearse—apuntaPilar,puñetera.—¿Yporquénovoyapoderhacerlo?Estaseñorapareceencantadoraynos

hahecholacomida,¡quémenosquepasarunratoconella!«¿Encantadora,miCasilda?Cómo se nota que no la conoce», pienso para

mí,frenándomemuymuchoparanosoltarunacarcajada.—Papá, Casi, os presento a Dante y a Ciro —empiezo con las

Page 296: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

presentaciones, con toda la seriedad que me es posible, dado el momento—,ambosfotógrafos;aPilar,responsabledePublicidadyMarketingdeD’Elkann,lafirmadelacualsoyimagen,yaMaríaEugenia,ladiseñadoradelacasa.

—Bienvenidostodos.YosoyPedroyestáisenvuestracasa.—YyosoyCasildaytrabajoaquí.—Ymandamásquetodosnosotros,escomolaseñoradelacasa—afirmo,

sinpodercallarme.—Verdad tenía que ser, ¡anda, tira pa dentro! Vamos a almorzar, que se

enfría la comida—me ordena con ese genio tan suyo que saca a la mínimaocasión—.Por favor, pasen—les dice con finura al resto, haciéndome reír—.¿Sepuedesaberdequéteríes?—mepreguntadándomeunacolleja.

—¡Auuuuuuuu!¡Casiiiii!—mequejosindejardereírme.—Anda,tira,quecontentametienes—añadeyendohacialacocina,ylasigo

entrerisas.Comemosenunambientedistendido,amenizadoconlasexplicacionesdemi

padre, que se explaya cuando tiene la mesa llena, y con los comentarioschistosos de Casi, que se viene arriba enmomentos como éste y con los queconsiguearrancarmásdeunacarcajadaatodosellos,sobretodocuandosacaesavenacómicatansuya.

—Ay,Casi, qué graciosa eres.Yome quedo aquí contigo; vosotros idos amontar a esos caballos si queréis—intervieneMaríaEugenia, anticipándose anosotros,traselcaféylalargasobremesa.

—Ricura, no irás a decirme que me tienes miedo —la pica Ciro,consiguiendoquelamesaenplenoenmudezca.

—¿Ati?Porfavor,loquehayqueoír—leresponde,negandoconlacabeza.—Puesdemuéstralo,entonces—insisteéste.—Telopasarásbien,MaríaEugenia,yteaseguroquelamejorformadever

estafincaesalomosdeuncaballo.—Pedro,esqueamíesascosasnomevan.Yosoyunamujerdeasfaltoy,si

medas a elegir, prefiero subirme aunos taconesque aun animal de ésos.Deverdad,nosabescómomeimponen—insiste,intentandozafarsedelasunto.

—Ricura,hayotrascosasalasquesubirtequedeberíanimponertemásqueuncaballo—replicaCiro,vacilón,conesavozcalienteyresbaladizaquetellevaapensarirremediablementeensexo.

Page 297: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¡Miraéstepordóndenoshasalido!Siesqueestajuventudestáperdida—saltaCasi,cazándolaalvuelo.

—Somostodosunospilinguis,nopodemosevitarlo—ledigoenunataquederisa.

—Ya hablaremos tú y yo cuando tu padre no esté delante—me contesta,consiguiendoquemeríaconmásganas,apesardesaberqueestoymetiéndomeenproblemas.

—Casilda, lo que tengas que decir, dilo delante de mí —contraviene mipadre,provocandoqueelataquederisasemepaseenelacto.

—Pedro,déjalo,hombre,quenoquieromatarteantesdehorayencimaconundisgusto—lerespondeconesasonrisadesabiondatansuya.

—Paradisgustos,elquesellevacadavezquemezclaselvinocongaseosa—intervieneVíctor.

—Mira,yahasalidoelotro,¡eldefensor!,asítevoyallamaryoati.Anda,calla,que tienesdequécallar—leordenaconese tonode«chitóno lo sueltotodo».

—¿Estascomidassonsiempreasí?PorqueMaríaEugenianosé,peroyomevengoaquíavivir—comentaPilar.

—Uyyyy,¡ilusa!TúnosabescómoesmiCasildacuandocogeconfianza.—Una santa, eso es loque soy,que cuandomemuerayme reúna conmi

Tomás,queenpazdescanse,vanabeatificarme.—SantaCasildavalgomásporloquecalloqueporloquehablo,tellamarán,

yaverás—replicoconguasa.—Túbúrlate,maja,queeldíaquemedéporsoltarlotodo,veráslaquelío

—medicecomosinadamientrasmipadrenosmirafrunciendoelceño.—Papá, no le hagas caso. Eso demezclar el vino con la gaseosa la tiene

trastornada.—Seguroquees eso.Como tedéunguantazo,verás tú lo trastornadaque

estoy—merebateconesasonrisitaquemeponemala.—Vamos,seestáhaciendotarde—noscortaVíctor,ymenosmal,porqueun

pocomásysoyyolaqueterminaconfesando—.¿Teapuntas,Pedro?—Por supuesto —acepta, levantándose—. No hay nada como una buena

carreraporestastierras—nosdicecondespreocupación,ysuspiroaliviada.—Pedro,yovoycontigo—lediceMaríaEugenia.

Page 298: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Lo siento, pero yo monto solo —rechaza mi padre y, de nuevo, mereafirmoenlaideadequeestáhaciéndoseeltontoconlomíoconVíctor.

«Vamos,quesihacaptadolodeMaríaEugeniayCiroentanpocotiempo,es imposible que no haya captado lo nuestro», reflexionomientras veo cómoCiroledicealgoymipadresonríeconcomplicidad…Hombres…

Hacemoselcaminohastalascuadrasdandounpaseoy,guardandosilencio,observoamisamigos.Dante,conesaseguridadyesamirada intensa, siemprelistoyatentoparacaptarcualquierhazde luzdignode ser fotografiado;Pilar,tan cercana y accesible, capaz de adaptarse a cualquier situación, Ciro… tanCiro,tancrío,tanencantador,tanhombre,tansexy,tancombinaciónexplosivacapazdeprovocarqueletiemblenlaspiernasinclusoaunamujercomoMaríaEugenia,tanseguradesímisma,apesardequeloniegue.

—Hemosllegado—lesanuncio,entrandoenlascuadras.—Genial,hallegadolahorademimuerte.—Ydeturesurrección—leindicasocarrónCiro,haciéndomereír.—Quesepáisqueosodioatodosporhacermemontarconestecrío—suelta

dramáticamente—. Oye, por tu bien espero que sepas manejar bien a esteanimal,nomeapetecenada rompermeelcuello—añadeconseriedad—. ¡Oh,myDiorrrrr!¡Nopuedocreermequevayaafiarmedeuncríoquetodavíadebede jugar con los cochecitos! —Se queja teatralmente, haciéndonos reírdisimuladamente a todos mientras vamos ensillando las monturas—. ¿Seguroquenohas confundido los caballosdebalancín con losdeverdad?Porqueyotodavía tengounavidapordelante, ¡tengoque ser ladiseñadoradeDior! ¡Nopuedomorirtanpronto!—insiste,cansina.

—¡Suficiente!—le ordena Ciro, esta vez con seriedad, cogiéndola por lacinturaypegándolaasucuerpo,lograndoqueenmudezcaenelacto—.Dejadellamarme crío o te aseguro que te arrepentirás muchísimo —la advierte, eimaginoquesusalientosestaránfusionándosede locercaqueestánelunodelotro—.Novasaromperteelcuelloniamorir,asíqueyaestábien—siseaentredientes—.Sube—leordena,alejándosedeellamientrasMaríaEugeniadeslizasumiradadeCiroalcaballo,queenestosmomentosdebeparecerleelEverest.

—¿Ycómopretendesquelohaga?—lepreguntaconelmiedoinstaladoenlavoz,sindejardemiraralcuadrúpedo—.Oye,mira,deverdad,estascosasnovan conmigo; de hecho, los animales no van conmigo y, desde luego, éste es

Page 299: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

demasiado grande para mí. Venga, hasta luego —se despide de nosotros,echandoaandar—.Ahíosquedáis,vosotros,loscaballosy…

—¡Qué trabajo vas a darme, joder! —masculla Ciro yendo tras ella ycogiéndolaporlacinturapordetrás,pegandolaespaldadeMaríaEugeniaasupecho,alzándolayechandoaandardenuevohacianosotros.

—¡Que me sueltes! Pero ¿qué haces? ¡No pienso subir encima de esedinosaurio!

—¡Quierescallarte!—leordenamientrasyoterminodecolocarleelcabezalaTrueno,fingiendonopercatarmedenada,aligualqueestánhaciendotodos,ysinquitarles losojosdeencima,al igualqueelresto—.Escúchame,ricura:novasacaerte,novasaromperteelcuelloynovasamorirnivaasucedertenada.

Aunqueno locreas,haceañosquedejédemontar a caballosbalancinesyempecéamontaralosdeverdad,asíquerelájate¿quieres?Nielcaballoniyovamosacomerte—leasegura,ymirodereojoaMaríaEugenia,queloestudiasinsabersicreerlooecharacorrercomosinohubieraunmañana—.Venga,ponel pie izquierdo aquí—le señala Ciro con voz calmada, intentando infundirleconfianza—,apóyateenmíysube;esfácil,yaverás.¿Confíasenmí?

—No—lecontestasindudarlouninstante.—Oye,¿nuncatehandichoqueavecesesmejormentir?Venga,empecemos

denuevo.¿Confíasenmí?—¿Sí?—Respuesta correcta. Vamos, pon tu pie izquierdo aquí, apóyate en mi

hombroy¡arriba!—ledicemientrasellasequedamedioacostadaalomosdelcaballo yCiro pone lamano en su trasero para que acabe de subir—.Venga,pasalaotrapierna—lepidesinalejarsumanodesusnalgas.

—Quita tu mano de mi culo, ¡ya! —le grita, haciendo lo que le pide yquedandofinalmentesentada—,¡Ohhhhhhhh,Diorrrrr,quéaltoestáesto!¡Creoque tengo vértigo! —chilla exageradamente mientras Ciro, con una fluidezasombrosa,montaalcaballo,colocándosedetrásdeella.

—Chist,tranquila,¿vale?Apóyateenmipecho;novasacaerte,recuérdalo—le indicamientrasVíctorme guiña un ojo y yo le sonrío disimuladamente,observandodereojocómoMaríaEugeniaapoyasuespaldaenCiroycomoésterodea su cintura conunode susbrazos, pegándola a él sinque ella oponga lamásmínimaresistencia.

Page 300: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Unadedos,oestámuymuertademiedo,queesposible,yCiroessumejoropción o se ha cansado de hacerse la dura y, dadas las circunstancias, hadecididoaprovecharseunpoquito,queesmásposibletodavía.

—¿Estáis listos, chicos?—les pregunto observando aDante y a Pilar, quevan juntos pero que, a diferencia de Ciro y María Eugenia, es Pilar quien,sentada tras él, rodea la cintura de Dante con sus brazos—. ¿Papá? ¿Listo tútambién?

—Listo—meindicaalomosdeLinda.—Val,novassola,recuérdalo—meadvierteVíctor,yséaloqueserefiere.—Estábien—ledigosuspirando—.Hoynostocapaseíto,Trueno—farfullo

conladesilusióninstaladaenmivoz—.Losiento,chico,yacorreremosotrodía.Unoaunovamossaliendodelascaballerizasy,cuandollegamosalprincipio

delcamino,oigolavozdeCiroamisespaldas.—Ricura… estás tensa. Joder, relájate… Escúchame, coge las riendas

conmigo—le propone, y giro la cabeza paramirarlos—. Tienes que sentir labocadelcaballoentusmanos—lediceconvozsuave,cercadelaoreja,yveocómoellasetensa,perodeformadistinta,deesaformaenlaquenostensamoslas mujeres cuando nuestro vientre se contrae y nuestra sangre se vuelvedemasiado espesa—. Si dejas las riendas así, no la sientes, pero si tensas unpoquito, sin tirar, sí lohaces. ¿Lanotas? ¿Sientes subocaen tusmanos?—lepreguntaconvozáspera,acariciandoconsualientosucuello.

—Sí—lecontesta finalmente,ymedoycuentadequesehanevadidoporcompletodenosotros;dehecho,creoqueninosrecuerdan.

—Si tirasmás, así—prosigue Ciro, consiguiendo que el animal retrocedaunospasos—,éliráhaciaatrásy,siquieresgirarhacialaderecha,deberáshacerunpocodepresiónentupieizquierdo,llevandolariendaderechahaciati.¿Vescómogira?Esfácil,ricura.Estoesintuitivo,comoelsexo;déjateiryelanimaliracontigo—añadeconvozsexyycaliente,ylomiroenarcandounaceja.

—¿Nosvamos?—preguntaVíctor,ymevuelvoparamirarlo,echándolodemenosyenvidiandoaMaríaEugeniayCiropornotenerqueocultarloqueseaqueestéempezandoentreellos.

—Vamos —secunda Dante mientras Pilar va fuertemente cogida de sucintura.

YalomosdeTrueno,piensoenquédistintopuedeser todocuandonohay

Page 301: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

sentimientos de por medio. Dante y Pilar son sólo amigos y en ocasionescompañeros de curro; entre ellos no hay tensiones de ningún tipo, no saltanchispas,ninada lateasualrededor.Pilarpuedeaferrarsea lacinturadeDantesinquelatierraarday,encambio,CiroyMaríaEugeniasontodolocontrario;apesardeque ella lo llame«crío»ydigaqueno le interesa lomásmínimo, lociertoesquecasipuedosentirlaelectricidadquelosenvuelvechisporroteandoasualrededor.Dehecho,creoque,situvierapoderesdesuperhéroe,podríaverelvello erizado de los brazos deMaría Eugenia cada vez que Ciro le habla tancercadelcuello,podríaoírloslatidosaceleradosdesucorazónypodríasentirsurespiración desordenada. Si tuviera poderes de superhéroe, podría saber loexcitadaqueestáylofrustradaquesesienteporsentirseasí…peronolostengo,asíquesólopuedointuirlo.

—Me están poniendo malo, joder —me confiesa Víctor en un susurro,mirándolos de reojo, mientras encabezamos la comitiva, con mi padrecerrándola.

—¿Porqué?—planteosonriendo,volviéndomeparamirarlos.Ciro está rodeandocon susbrazos aMaríaEugeniamientras ésta tiene las

manosrodeandolasdeCiro,yséaloqueserefiereantesdequemeconteste.—Porque daría lo que fuera por tenerte así —masculla, mirándome con

intensidad,consiguiendoquemivientresecontraiga.—Y yo —musito mordiéndome el labio inferior—. Estoy deseando que

llegue la noche para poder sentarme encima de ti —le digo percibiendo micentrovolverselíquidoycaliente.

—Estarásencimaydebajodemí, te loaseguro;voya tenertede todas lasformasposibles—farfullaconlamiradaardiendo.

—Cállate—susurrosintiendoeldeseorasgarmepordentro.Al trote, vamos recorriendo las tierras de mi familia ante la mirada

asombradadetodosyelorgullodemipadreyelmíocreciendoconellas.Elairepuro, cargado de la fragancia de la tierra, de las flores silvestres y de lanaturaleza,eseconjuntodeoloresimposibledeimitarniporelmejorperfumistadel mundo; los viñedos adueñándose de todo el paisaje, como un marinterminableyondulantedecolorverdesalpicadoderojo,amarilloynegroque,al abrigo de la inmensa cordillera Cantábrica, ven el paso de los años y elcambio generacionalmientras ellos semantienen inquebrantables dándonos lo

Page 302: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mejordeellosmismos,lauva…,einspiroprofundamenteelsilencioqueaquíserespira, rotoúnicamenteporel sonidodealgún tractorcargadoovacíodeellaque llegaosemarcha,ysonríofelizmientrasmimentevaunpasitomásallá,imaginando a una modelo a lomos de Linda con Dante fotografiándola, paraseguir viéndola sobre lo alto de la colina, rodeada de olivos, con un vestidoverdesalpicadode flores,visualizandosu faldaondeandoalviento,esevientoquellevaconéllamismafraganciaquehoynosacompaña,lafraganciademistierrasydemisrecuerdos.

ElgritosorprendidodeMaríaEugeniamesacademiensoñacióny,sinpoderreaccionar,veocómopasanpormiladoemprendiendolalocacarreraquetantoanhelo,ymiroaVíctorsinsaberquéhacer.

—¡Detenedaesteanimal!—laoigoyaalolejosy,cuandovoyairtrasellos,Víctormedetienenegandoconlacabeza.

—Cirosabeloquesehace—measeguraconunamediasonrisa.—Ya, pero ¿y si se pierden? —inquiero mientras él me mira con

condescendencia.—¿NosetehaocurridopensarquealomejoresloqueCirobusca?—me

preguntamientrasPilaryDantesecolocananuestrolado.—¿Losseguimos?—nosformulaDante.—¿Querríasquetesiguiéramossifuerasél?—nossorprendemipadrecon

su vozarrón llegando hasta donde estamos nosotros—.Chico listo—prosigue,chasqueandolalengua,pasandopordelantedenosotrosparaencabezar,estavezél,lacomitiva.

—MaríaEugeniavaamatarlocuandodetengaalcaballo—nosaseguraPilar,divertida.

—Ono…¿Quién sabe?—replico sonriendo, encogiéndomede hombros einiciandoeltrote,envidiándolosdenuevo.

Hacemos el resto del recorrido entre bromas, imaginando qué estaránhaciendo,y,cuandollegamosalascuadras,ellostodavíanolohanhecho.

—¿Yahora?—lepreguntoaVíctor,quellevaunratopensativo.—Val, es imposible perderse aquí, porque en algún momento das con el

caminoprincipalquetellevaalacasa,asíquevayamosaella,yavendrán—mecontesta con seguridad bajando de su caballo, y lo imito a pesar de lopreocupadaqueestoyempezandoaestar.

Page 303: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Os ha gustado la finca? —les pregunto a Dante y Pilar finalmente,necesitandohablarparadejardeangustiarme.

—Mehaencantadotodoycreoqueesunlugarperfectoparahacershootingsy reportajesdemoda—mecontestaPilar,bajandodelcaballoayudadapormipadre.

—Coincidototalmente.Además,queríapedirtepermisopara,mañanaporlamañana,saliradarunpaseoconelcaballo.Hevistounpardelugaresquemegustaríafotografiarconlaluzdelamanecer—mepideDante,bajandoestavezél,acariciandoalanimal.

—Por supuesto, estás en tu casa, pero ten en cuenta que esta noche teacostarás bastante tarde, ¿podrás levantarte tan temprano? —le preguntoempezandoadesensillaraTrueno.

—Estoy acostumbrado a dormir poco—responde desensillando al suyo, ycaptosudestreza.

—Yosalgo todas lasmañanasamontar.Siquieres,podemos ir juntosy temuestrounpocomáslafinca—seofrecemipadre.

—Cojonudo,¿aquéhorasalimos,entonces?—¿Alassieteymediateparecepronto?—Amínomedespiertes—sueltaPilar,divertida,enelmismomomentoen

el que entranCiro yMaríaEugenia en la cuadra ymedoymedia vuelta paramirarlos.

ElrostroarreboladodeellaylamediasonrisadeCiromeconfirmanque,almenos,nohandiscutido,ylosmiroenarcandounaceja.

—¿Quétallacarrera?—lespreguntointentandonosonreír.—Bien—noscontesta,escueta,ella.—¿Sólo bien, ricura? Venga, reconócelo, estás deseando repetir —añade

Ciro con ese tono de voz sexy que suele emplear a menudo—, conmigo—matiza,yveoelruborcubrirlapielaterciopeladadeMaríaEugenia.

—No te pases, que no ha sido para tanto—le responde girando la cabezaparamirarlo,ymepreguntosielpaseohabráquedadoenunsimplepaseo.

—Vamos, ricura, échate enmis brazos—le dice socarrón una vez que hadesmontadomientrasMaríaEugenialomiraintentandoponermalacara,sinquelesalga.

—Eso,échateensusbrazos—secundaPilar,burlona,haciéndomesonreíry

Page 304: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

queDantesuelteunacarcajada.—Quéremedio—masculla,soltándosedelasriendasypermitiendoquelos

brazosdeCiroenvuelvansucuerpoylatierraarda.«Uffff…quépeligrotienenestosdos»,piensoobservándolos—.Yaestoyenelsuelo,¿quieressoltarme?—agregaconmenosfirmezadelaquedebería.

—La verdad es que estoy muy bien así —la rebate Ciro con voz ronca,pegándolamásasucuerpo,consiguiendoquemesonrojehastayo,ymevuelvohaciaVíctor,quetienesumiradapuestaenmí.

—Pues yo no, ¡quita!—le responde, recuperando la cordura, dándole unmanotazo y alejándose de él—. Valentina, maja, no más paseítos a caballo,¿quieres?Apartirdeahora,sipuedeser,quieromantenerlospiesenelsuelo—meindicaantesdegirarsobresustalonesparadirigirsealasalidaconlaespaldabienrecta.

—Creíaquehabíaestadobienelpaseo—replicoacelerandomispasosparallegarasualtura,ávidadeinformaciónyseguidadePilar,másávidadeloqueestoyyo.

—Yhaestadobien,peromeniegoavolverarepetirlo—measeguradándoselavuelta,mirándomeporencimadesusgafasdepasta—.Losanimalesnosonlomío.

—¿YCiro?—intervienePilar,yendoalgrano.—Ciro,¿qué?—leformulacomosinolosupieradesobra,acelerandomás

suspasos,comosiquisieradejarnosatrás.—Túsabrás,¿notienesnadaquecontarnos?Nosé…Hasestadoasolascon

élunbuenrato—insisto,yéndomeporlasramas.—Quesihahabidobeso,vamos.Esesoloquequierespreguntarle,¿no?—

indagaPilarentresusurrosparaevitarquenosoigan.—¡Por supuesto que no! ¿Qué tontería es ésa? Sólo hemos corrido como

unoslocos…alprincipio.—¿Yenelmedio,duranteoalfinal?—lepreguntoconcuriosidadmientras

ellaniegaconlacabeza.—Esun crío, pero esun crío encantador cuandodejadehacer el tonto—

mascullamolesta—,demasiado,supongo…,peronohasucedidonada, inclusohasidoexcesivamentecorrecto.

—¿Ytemolesta?—inquierePilar,divertida.

Page 305: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Hubieraspreferidoquetehubierabesadootehubieraarrancadolaropaencimadelcaballo?—añadodandoriendasueltaamiimaginación.

—¿Queréiscallaros?—farfullaentredientes.—Esquenosmorimosdecuriosidad—ledicePilar,sonriendoabiertamente

—.Venga,contesta.—No sé lo quehubiera preferido, peroha sido tandirecto todo el día que

luegomehasorprendido,¡yoquésé!—Querías que te besara —afirmo, guiñándole un ojo—. Oye, que no te

culpo,esamezcladecríoyhombreessumamenteatrayente.—Yocreoquesonsusojos,sondemasiadoazules—nosdicePilar.—Osuslabiosocuandoenarcalascejasytemediosonríe—prosigoyo—,

esimposibledecirlequeno.—Oesaternuraquevaconélyesetonosexyqueempleacuandohabla—

matizaPilar.—Olosbrazosquetiene,sonpuromúsculo—prosigueMaríaEugeniacon

fastidio, y lamiro sonriendomuymuy abiertamente—.De todas formas, ¿porquéestamoshablandoasídeél?Aunqueno loparezca,nome interesa lomásmínimo.

—Tienesrazón,noloparece—sueltoburlona.—La culpa es vuestra por obligarme amontar con él. Si hubieramontado

conVíctor, no estaríamos hablando deCiro. ¿Sabéis lo quemásmemolesta?Quenuncamehangustadoloshombresmásjóvenesqueyo.

—Pero,entonces,tegusta—sentenciosonriendo.—¡No!—measegurarotunda.—¡Perosiacabasdedecirlo!—aseveraPilar,descojonándose.—Nohe dicho eso, he dicho que nuncame han gustado los hombresmás

jóvenes que yo. A mí me gustan los maduritos interesantes, las tabletas dechocolateprefieroqueseancomestibles.

—Ciroesmuycomestible—legarantizoconpuñetería.—Túyameentiendes,quecrujancuandoleshinqueeldiente,ydejemosel

temita, ¿queréis? —pide cuando llegamos a casa—. La próxima vez quepropongáispaseítosacaballo,mequedoconCasi—concluyeconfastidio.

—Seguro—matiza Pilar sólo paramí, haciéndome sonreír, deteniéndonosfrentealJeepmientrasesperamosaquelleguenellos.

Page 306: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Tras despedirnos de mi padre, subimos al vehículo y, durante el trayectohastalacasita,todosomitimoshacercualquiertipodecomentario.Ensilencio,losmirodereojoaambos,sentadosenextremosopuestos,absortosenelpaisajequesevislumbraatravésdelaventana.

—Pasaremos a recogeros sobre las nueve y media, ¿vale?—les preguntoapartandoaunladoaMaríaEugeniayaCiroparapermitirquelosnervios,elanheloyeldeseoseabranpasoenmiinterior.

—Genial,nosvemosluego—contestaPilarportodos,yobservoaCiro,conesa pose de pasota que emplea a veces, y aMaría Eugenia, que lo mira confastidio.

—¡Hasta luego, chicos! —me despido antes de que Víctor arranque,alejándonosdeellos.

Page 307: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO23

—Porfinsolos—musitosonriéndole,recostándomeenelasientoysintiendoesaburbujaelásticallegarparaenvolvernos.

—Joderconesosdos—merespondeconfastidio.—PormuchoqueMaríaEugeniadigaquenolevanloscríos,vaaterminar

locaporCiro—leaseguro,convencida.—¿Cuántosañossellevan?—mepreguntaconinterés.—Once.—Túyyonosllevamosdoce—merecuerdaconseriedad.—La diferencia es que para mí no es un problema y para ella, sí —le

remarcomientrasélguardasilencio,ytensasumandíbula—.Noquieroiracasatodavía,tenemostiempoyteheechadomuchodemenos—ledigo,necesitandoqueserelajeysonría.

—No tenemos tanto tiempo y yo debo terminar de preparar unas cuantascosas—me responde con la atención fija en la calzada—. Nos vemos luego,¿vale?

—¿Quieresqueteacompañe?—lepregunto,anhelandoestarconél.—Nohacefalta—measegurasinmirarme.—¿Estásintentandolibrartedemí?—sueltoconunamediasonrisa.—Porsupuestoqueno—merespondefrunciendoelceño—.Deboterminar

unascosas,Val,yprefieroestarsolo.—Para el coche—leordeno,y sevuelve conmilesde interrogantes en su

miradaantesdedetenerloalbordedelcamino.—¿Quésucede?—inquiere,sorprendido.

Page 308: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Sincontestarlenidarleopciónareaccionar,memuevodentrodelvehículo,sentándomeahorcajadassobresuspiernas,atrapandosuslabiosconlosmíosysilenciandocualquierpalabraenformadequejaquepudieraescapardeellos.

Durante unos instantes, siento como si estuviera intentando atrapar el aireconmismanosocomosimeempeñaraenreteneralgoquenohanacidoparaestarenjauladoy,conesa revelación, sientoqueestosmilesdeemocionesquellenanmipechopierdenunpocodevida.

—Val,puedevernosalguien—medicerodeandomicinturaconsusbrazosy,nosésiesporeltonodesuvoz,porsusgestosoporsumirada,perosientoque no está del todo conmigo… como si estuviera empezando a cerrar unapuertaquehastaahorasehabíamantenidoabierta.

—He tomado una decisión —le anuncio atropelladamente, necesitandolibrarmedeunavezdetodoesto;deestasensaciónextrañaydeestostemoresquenoentiendo.

—Noquierosaberlo—meindicaconseriedad.—¿Por qué? ¿No sientes curiosidad? ¿Noquieres saber simequedoome

marcho?—inquierosorprendida.—No,noquierosaberlo;almenos,nohoy—measegura,rotundo.—Pero…—Val…, no…Hoy no—insiste con durezamientras lomiro sin entender

nada.—Creesquevamosadiscutir,¿verdad?,poresonoquieresquetelodiga—

aseveroconvozqueda,sosteniéndolelamirada.—Simplementequieroquehoyseainolvidable.Eslapresentacióndetuvino

ysólodeberíasereso—mecontestaacunandomirostroentresusmanos—.Yahablaremossobreesadecisión tuyamañana—añadeconunsusurroroncoqueencierrademasiadossentimientosquenosédescifrar.

—Alomejortegustaloquevasaoír—insisto,intentandosonreírmientrassientoelcalordesusmanostraspasarmipiel.

—Yalomejorno,ynoquieroquenadaloestropee.Val,necesitoqueestanocheseainolvidable.—reiteraconseriedad,retirandosusmanosdemirostro,enfriándolo al alejar la calidez de él—. Nos dimos un plazo, ¿lo recuerdas?Mantengámoslo.

—Estábien—musitoperdiéndomeensumirada,acercándomelentamentea

Page 309: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

sus labios, que beso con dulzura, demorándome en ellos, con sus manosadueñándosedemipielpordebajodelacamiseta.

—Eresconscientedequeestamosalavistadetodoelmundo,¿verdad?—me pregunta con una media sonrisa, y siento cómo, poco a poco, regresaconmigo.

—Yalosé,ylaculpaestuyapornoquererllevarmeatucasa.—Estanoche…Teprometoque esta noche—masculla buscando losmíos

conrudeza,atrapándolosydiluyendomismiedosconellos,abriendoesapuertadeparenpar.

Y entro en ella con decisión, aferrándome a ese beso con desesperación,enredandomilenguaconlasuya,moviéndomesobresusexo,quesientoenormea travésde la ropaque impidequenuestrapiel se toque,quenos sintamos,y,duranteunossegundos,perciboqueéltienelosmismostemoresqueyo,inclusopuedequealgunomás,pueshayalgoensuformadebesarmeodetocarmequemerecuerdaesanecesidadqueyosientodemantenerelpuñocerradoparaquenoescapeelairequeapresoentremisdedos.

—Vic…—gimofrotándomecontrasusexo,hundiendomisdedosensupeloysintiendonuestrocuerpoardercuandoimpulsasuscaderashaciadelante.

—Joder,para…,para…—mascullaalejandosuslabiosdelosmíos,pegandosufrentealamía.

—¿Podríascambiarmelatirita,sabes?—lepreguntoconmipechosubiendoybajandoconrapidez,yveocómoalzasuintensamiradaverdeesmeraldahastaclavarlaenlamía.

—Puedohacerlo estanoche,muchasveces.En serio,Val, tengo cosasquehacer.Vamos,tellevaréacasa.

—Eresuncoñazo,Víctor—ledigohaciéndoleunmohínantesdesentarmedenuevoenmiasiento.

—Yalosé—acepta,guiñándomeunojo,antesdearrancar.Cuando me deja en casa y tras saludar a Casi, que está trasteando en la

cocina,me dirijo ami habitación y, de ahí, al baño, para empezar a llenar labañera,puesnecesitoestarasolasconmispensamientos.Mesumerjoenelaguacaliente,dejandoquemicuerposerelaje,cerrandolosojosyllenandomimundoconlossuyos,consusbesosyconsussonrisas,y,aunqueunapartedemímeadviertedequehayalgoquesemeestáescapando,laignoro,delamismaforma

Page 310: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

en que ignoro esa sensación extraña que parece empeñada en seguirme, parasimplemente centrarme en lo que hemos vivido hoy, en nuestros besos en lacasitadeaperos,enlasmiradasfurtivasquenoshemosdedicadoyenlosrocesycariciasquehemosbuscadoaescondidasdemiradasajenas,aferrándomeaesosgestosque tambiénocupanel lugarde laspalabrasyaesaspromesasquenoshemos hecho para esta noche, cuando todo haya finalizado, cuando podamosponernosunaomástiritasycuandoledigafinalmentequevoyaquedarme.

Sólocuandoelaguaseenfríasalgodeellay,unavezpeinadaymaquillada,y con una toalla envolviendo mi cuerpo, me dirijo hacia mi habitación paraempezaravestirme.

—¿Estásvisible,hermanita?—oigolavozdemihermanaalotroladodelapuerta.

—Claro, pasa—le digo frente al armario, dándome media vuelta cuandopercibo el pomo girar—. ¡Vayaaaaa! ¡Pero qué guapaaaaaa! —exclamo,admirándola,cuandogirafelizsobresímisma.

Llevaunvestidoverde,condetallesbordadosengranateyrosatantoenelcuellocomoenloshombros,ademásdeunaespectacularaberturaredondaenlaespalda,yestá,sencillamente,preciosa.

—¿Tegusta?—mepreguntaacercándoseamímientrasyosólosoycapazdepensarqueelcolordelosojosdeVíctoresmásbonitoqueeldeestevestido.

—Mucho,¿lohasdiseñadotú?—inquiero,dándoleunabrazo.—Másqueeso,lohemosconfeccionadoPepayyoeneltaller.Eselprimer

vestidoquehacemos—medescubreconlaemocióninstaladaensumirada.—¿QuiénesPepa?—Unacosedoraquehecontratadoparaecharmeunamano;nosabesloque

mehacostadoencontrarla.—¡Pueshavalidolapena,porqueelresultadoesespectacular!—ledigocon

admiración,sintiéndomemuyorgullosadeella.—Gracias;noimaginabaunamejorocasiónqueéstaparaestrenarunvestido

demiprimeracolección.¿Ytú?Pensabaqueyaestaríaslista.—Bueno,estoycasilista,sólomefaltavestirme.—Me gusta tu recogido y cómo te has maquillado. Estás muy guapa,

Valentina—me halaga, sonriéndome con cariño, admirándome esta vez ella amí.

Page 311: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Somoscomolanocheyeldía,¿verdad?Tú,rubiayconojosazules,yyo,morenayconojososcuros.

—Tú,altacomounpino,yyo,pequeñitacomounbonsái.¿Estásseguradequenonosadoptaron?—mepreguntaburlona.

—Avecestengomisdudas—contestosocarrona,cogiendomivestido.—¿Sabesdeloqueyonotengoningunaduda?—mepregunta,ayudándome

aponérmelo.—¿Dequé?—Dequelasdosvamosatriunfarenelmundodelamoda;yo,diseñando,y

tú, desfilando—afirma con seguridad, paralizándome con sus palabras—.LashermanasDomínguezseremosunreferenteenlaaltacostura,yaverás.Atiseterifaran los grandes diseñadores, entre los queme encontraré, y tú te harás derogarcontodosellosexceptoconmigo—prosiguesoñadora,haciendoquemedélavueltaparaempezaraabrocharmelospequeñosbotonesdelvestido,ymedoycuenta de que Víctor tenía razón y de que esta noche sólo debe ser lapresentacióndemivinoyquesurecuerdonodebeestarasociadoaningúnotro.

—¿Te gusta mi vestido? —inquiero cambiando de tema a propósito,volviéndome para ver mi espalda cubierta únicamente por un tul granate quequedapegadoaellacomounasegundapiel.

—EsundiseñodeMaríaEugenia,¿verdad?—indagaconfascinación—.Delcolordelvino,ceñido,femenino,eleganteysexy;llevasumarcayesperfectoparaestaocasión.

—Sí, es suyo, pertenece a la colección Dreams —le confirmo,demorándome,duranteunossegundos,enlaimagenquemedevuelveelespejo—. Tendrías que haber venido a comer hoy —le recrimino encarándola ycruzándomedebrazos—.PuedesaprendermuchodeMaríaEugeniayhoyeraelmomentoperfecto.

—Yalosé,peromehasidoimposiblellegaratiempo.—¿Ycómohaido?—lepregunto,haciendoreferenciaasuviajeaMadrid.—Laverdadesqueempezardeceroestásientomásdurodeloquepensaba,

ymás cuandovivía tanbien trabajandoenKroma, sin asumir riesgoalgunoydedicándome exclusivamente al diseño. Esto es tan distinto…Todo tiene quepasarpormí.Problemasqueanteserandeotrosahorasonmíos,ymuchosdeellosnisiquieratienenqueverconlamodaoeldiseño.

Page 312: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Losiniciossiempresoncomplicados—musitorecordandolosmíos.—Sobretodocuandosientesquetehasmetidoenlabocadellobo.—¿Tearrepientes?—No.Puedesonarunpocolocooalomejoresquesoyunakamikaze,pero

estoesloquequiero,apesardetodosloscontras—afirmahaciendounamueca—. Sólo espero que, esta bola enorme que no deja de rodar cuesta abajocreciendosinparar,enalgúnmomentosedetengaynomellevepordelante;nosabes lohartitaqueestoyde los impuestos, la financiación, lasnormativas, lasaltas,lasbajasylasmilyunahistoriasque,portubien,nonecesitassaber.

—Necesitasayuda—ledigoaldetectarelagobioensuvoz.—Ya lo sé y estoy en ello, créeme.Demomento he buscado una asesoría

paraqueme lleve todoel temade la fiscalidad,ynosabeselpesoquemehequitadodeencima.¿Ytú?¿Yahastomadounadecisión?Voytanagobiadaconlo mío que apenas hemos podido hablar; somos unas hermanas horribles —comentahaciendounmohín.

—Quéva…Sóloestamosunpelínliaditas—lacorrijo,sonriendo—,peroyalosolucionaremos,notepreocupes—prosigo,sabiendoquevamosatenertodoeltiempodelmundoparaestarjuntas—.Vamos,hermanita,creoqueestántodosesperándonos—ledigofeliz,apesardesentiresasensaciónextrañacaminandoamilado,inclusomirándomedereojo.

Salgodelahabitaciónseguidaporellay,alsegundo,oigolavozdeVíctorprocedente de la entrada y siento cómomi corazón se sacude en mi interior,empezandoalatirúnicamenteporél.

—No me has contestado —insiste Alana cuando nos dirigimos hacia laescalera.

—Mañanatelocuento;noseasimpaciente—ledigoacelerandomispasos,puesnecesitoverlocuantoantes.

Y,cuandollegoalúltimotramodeescalerayalzolamirada,sientoquemicorazónsedetiene,duranteunamilésimadesegundo,amediolatido.Llevauntraje negro con una camisa blanca y una pajarita negra, y está sencillamenteperfecto.

—Hola —musito sintiendo mi centro volverse líquido cuando su miradarecorremicuerpodisimuladamente.

—Buenas noches —me responden José y él mientras me aferro a la

Page 313: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

barandillaconfuerzaparaeliminarlapocadistanciaquenossepara.—¡Quéhijasmásguapastengo!—exclamamipadreconorgullomientrasyo

ledoydosbesosamicuñado,ansiandoelmomentodeacercarmeaél.—Puesdeeso justamenteestábamoshablando,papá,dequenoparecemos

hermanas. ¿Estás seguro de que somos hijas tuyas?—le pregunta Alana condespreocupaciónmientrasmeacercoaél,sosteniéndolelamiraday,cuandoposasumanoenmicintura,sientocomoestavezlatierraardepornosotros.

—Deesonotengaslamenorduda.Tuhermanaesuncalcodetuabuelo,ytú,detumadre—lerespondemipadre,mientrasacercomislabiosalamejillade Víctor para darle un beso, llenando mis pulmones con su fragancia yalargando,duranteunossegundos,esebeso,alavezquesientocómosumanoejerceunpocomásdepresiónsobremipiel,contrayendomivientre.

—Tuabuelo,de joven,parecíaunartistadecine—nosdiceCasimientrasnosotros creamos un mundo hecho a nuestra medida, lejos de éste—. Quéhombremásguapo…Llamabalaatenciónalládondeiba,loqueyoosdiga—añademientras, con reticencia,me alejo de él, sintiendo sumirada fija enmicuerpo.

—Inclusodemayor loera—lesdigovolviéndomehaciaellos,necesitandohablarparaenfriartodoestoquebulledentrodemí.

—Ytúeressuversiónmejorada,peroenmujer—measeguramipadreconorgullo—ytú,ladetumadre…Cadavezquetemiro,laveoaella—continúa,consiguiendoqueAlanaseemocione.

—Venga,papá,cállateoterminaremostodosllorando—lepidemientraslamirocontristeza,puesyoapenaslarecuerdo.

—Se hace tarde, ¿nos vamos? —me pregunta Víctor, y detecto laimpaciencia en suvoz—.Tenemosque ir a recoger a los amigosdeVal—lesaclara.

—Sí,vámonos—musitohaciendoaunladoesatristezateñidadeañoranzaquesehabíainstaladoenmicorazónparadirigirmehacialapuerta,seguidaporél—.Nosvemosenlabodega—lesdigoamododedespedida.

Camino hacia su Jeep percibiendo sus pasos en mi espalda, sintiendo sumirada clavada en mi cuerpo y el deseo reptar por mi columna vertebral y,cuando las luces de los intermitentes se encienden, iluminando mis piernas,accedoalvehículosindemora.

Page 314: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Estásimpresionante—meregalaconvozrasposacuandocierralapuerta,ymevuelvoparaadmirarsurostroenvueltoporlassombras.

—No más que tú. Creo que nunca te había visto con traje y pajarita —murmurodeteniendomimiradaensuslabios,sintiendoqueeldeseoardeenmiinterior,quemándome.

—Estoydeseandobesarte,Val.Sólopuedopensarenquitarteesevestido—susurraclavandosumiradaenlosmíos.

—Y yo, en tenerte desnudo dentro de mí —suelto en un hilo de voz,sintiendomicentropalpitardedeseo—.Estedíaestásiendodemasiadolargo.

—Ya lo sé—masculla dándole al contacto y, cuando empieza a sonar lamúsica,dejándomellevarporunimpulso,cambiolaopcióndeUSBaradioyalsegundo oigo las voces deMalú y Alejandro Sanz llenando cada uno de losrinconesdelinteriordelcoche.

—Me encanta Malú y esta canción es una pasada —comento prestandoatenciónysintiendoquemipielseerizaalreconocernosalosdosenlaletra.

—Eresunaromántica—merecriminaconcariño.—Lodicescomosifueraalgomalo—lerecriminoestavezyo.—Noesqueseamalo,peroteciegaaveces.—Simplementemegustaquetualmalehagacompañíaalamía—ledigo,

parafraseandoalacanción—.¿Haspodidoacabardehacertodoloquequeríashacer?—lepregunto,detectandosuceñolevementefruncido.

—Sí—merespondeescueto,frunciéndolomás,yloimitosinpercatarmedeello.

—¿Yquéera?—Poca cosa, tenía cosas pendientes de resolver en el despacho —me

respondeconlaatencióncentradaenlaconducción.—Ya —musito volviendo mi rostro hacia las luces de la casita, que se

vislumbrancadavezmáscerca,guardandosilencioduranteunosinstantesparaescuchar esta canción, que estoy segura de que escucharé cientos de veces—.Tengoganasdequepase lapresentación—leconfiesocon sinceridad, cuandoestacionafrentealacasa.

—En cambio, yo detendría el tiempo si pudiera —me rebate,sorprendiéndome.

—¿Porqué?

Page 315: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Porque no quiero que llegue mañana —afirma, sorprendiéndome denuevo,saliendodelcocheydandounportazoquesilenciamispreguntas.

Salgodelvehículoyotambién,intentandodarlealcanceantesdequeseabrala puerta y ya no podamos hablar, pero esmás rápido que yo y, antes de quepuedallegaraconseguirlo,veocómoDantelaabreysuspirobajitocerrandomipuño,imaginandoelaireretenidoenél.

Saludo a todos mis amigos con ese «No quiero que llegue mañana»resonando en mi cabeza, martilleando con fuerza y martirizándome sin pararmientrasellos,duranteeltrayectohacialabodegayajenosatodo,disfrutandelanoche como debería estar haciendo yo y, cuando llegamos a la sala, cojo subrazoparaalejarlodetodos.

—Estásdandolascosasporhecho,alomejormidecisióntegusta—ledigosindejardesonreíralosinvitados.

—¿Tú crees?—me pregunta con una sonrisa que no le llega a los ojos,cogiendodoscopasdevinocuandouncamareropasapornuestrolado—.Venga,te invito—prosigue, guiñándome un ojo—Es que no te entiendo…Yo en tulugarquerríasaberloynohubierapodidoesperar—mascullocogiendolacopaquemetiende.

—Perotúnoeresyo—merebate,estavezconseriedad.—Esoestáclaro—farfulloconfastidio.—Val,apárcalo todo,¿vale?Hazlopormí.Hazaun ladoesadecisiónque

hastomadoyviveestemomentocomosinohubieranadaquedecidir;hazqueestanocheseatanespecialquenuncapodamosolvidarla.

—¿Quéestásintentandodecirme,Víctor?—lepreguntoconunhilodevoz,sintiendomivelloerizarse,ynoprecisamenteporelfrío.

—Simplemente que quiero que te diviertas. Ahí están tus amigos —merecuerda,refiriéndoseaMaríaEugenia,Pilar,DanteyCiro—,quienesvivenlomismoque tú,yestasalaestárepletadegenteque tequiereoformapartedelmundodel vino.Vive estemomentoydisfrútalo, porquehas trabajadomuchocomoparaquererquepaserápido—meaconsejaconcariñomientrasveoamipadrecharlarconunosyotros.

—Está bien, pero tienes que prometerme que luego serás tú quien la hagaespecial—ledigososteniéndolelamirada.

—Te lo prometo; te prometo que esta noche sólo seremos nosotros—me

Page 316: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

contesta con voz ronca y, no sé por qué, mi mente retiene «esta noche» porencimadelrestodelaspalabras.

Cumpliendoconloprometido,meobligoadivertirmey,aunquealprincipiosientoqueesalgoforzado,alfinalacabohaciéndolodeverdad,puedequeporculpaograciasalvinoosimplementeporquenoeratandifícillograrlo.

—Hombre,alfinllegas—ledigoaAdricuandolaveoaparecer—.¿Dóndeestabas,Cenicienta?—añadotendiéndoleunacopadevino.

—Esperando al hada madrina para que me pusiera guapa—me respondeguasona,siguiéndomelabroma.

—Puesvas a tenerquepresentármela, porque estásmonísima—lahalago,mirándoladearribaabajo.Llevaunmononegroconunpronunciadoescoteylamelenaoscurasuelta,yestáimponente—.Porcierto,sinorecuerdomal,ahoraescuandodebesirasaludaralpríncipe.

—Aquínohayningúnpríncipe—mereplica, llevándose lacopadevinoaloslabios.

—Tienes razón, tiene más pinta de demonio que de príncipe —bromeomirandoaDantedereojo.

—Joder,tía,¿quiénes?—mepregunta,dándolelaespaldaapropósito.—Tudemonio—lerespondomediosonriendo—.¿Porquénohasvenidoa

comerconnosotros?Tantoquejartedequetuabuelatienemásvidasocialquetúy,cuandoteproponenunplanazoconunpedazodetío,teechasatrás.

—Nena,queamíesetíomeimponedemasiado.—Venga ya… —le digo siendo testigo de cómo empieza a acercarse a

nosotrasycarraspeo—.Vienehaciaaquí—leadviertoantesdellevarmelacopaaloslabios,viendocómomiamigasetensaconmispalabras.

—Valentina—comienzaadecir,ycaptocómoelrostrodeAdrise tiñedelmismocolorrojointensoquelashojasdelosviñedos.

—Tengoque irme—medice, sorprendiéndome,peroDanteesmuchomásrápidoqueellay,cogiendosubrazo,detienesuhuida.

—Nosinquenospresentenantes—leindicaconvozprofunda,yloanalizo.Va vestido todo de negro, como ella, con unos pantalones de pinzas y un

suéterfino;llevaelpelosuelto,alaalturadeloshombros,ytodoenéldestilalapalabra«peligro»…Nomeextrañaquemiamigaestédeseandoecharacorrer.

—Dante,tepresentoaAdriana.—Hagoloshonores,paraveracontinuación

Page 317: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

cómomiamigasevuelvelentamentehastaencontrarseconsumiraday,siesofueraposible,diríaqueinclusoelsuelohatemblado.

—Encantadodeconocerte,Adriana—lasaludaconvozrasposaylamirada,tanoscuracomolademiamiga,clavadaenlasuya.

—Igualmente—leresponde,ysientocómolosplanetascolisionan.—Buenasnochesa todos—oigoamipadrehaciéndoseconelmicroyme

vuelvohaciaélpara,alsegundo,buscaraVíctorconlamirada.Estáhablandoconunhombrequenoconozcoy,duranteunossegundos,me

demoro en su cuerpo y en sus gestos; está relajado, disfrutando de laconversaciónqueestámanteniendo,y,cuandoloveosonreír,sonríoyotambién,oyendodefondolavozdemipadre.

DejándomellevarytrasexcusarmeconDanteyAdri,medirijohaciadondeestáél,necesitandoestara su lado, rozar sumanocon lamíay,aunquesueneegoísta,serladueñadesuatención,desumiradaydesussonrisas.

—…lauvaeseliniciodeunagranlaboryelprincipiodeunritocentenarioen el que ponemos nuestra alma, nuestro corazón, nuestras manos y nuestrasesperanzas.—Percibo la voz demi padre llena dematices; unosmatices que,comosiempre,merecuerdanunacopadevinotinto,retumbarentrelasparedesde esta salamientras yo voy sorteando a la gente—.La uva es lo quemuevenuestra vida, la que da continuidad a nuestro legado y la que perdura cuandonosotrosabandonamosestemundo.Lascepassonlasqueseaferranalatierra,arraigándose en ella, cogiendo profundidad, algo que no podemos hacernosotros,yenellascomienzaelviaje—prosiguemientrasllegofinalmentehastadonde está Víctor, que me sonríe cómplice, llevándome con él a nuestrouniverso,esequesólonosotrossomoscapacesdehabitaryenelquenodejadesonar nuestra canción y, devolviéndole la sonrisa y rozando mi mano con lasuya,megirohaciamipadre—…yhoy, rodeadode todosvosotros, esosqueformáispartedenuestrapequeñagranfamilia,quierodarlelabienvenidaalfrutodeesauvaqueundíacreció,maduróyfuevendimiadaconelcariñoquesólopuedesdarcuandoamasloquehaces.Estanochequierodarlelabienvenidaalvino que lleva el nombre demi hija pequeña,ValentinaDomínguez; un caldoclásico,tradicionalyalavezfrescoyactual,comoesella,congarrayelegante,envolventeyarmonioso,criadoconcariñoypacienciadentrodebarricasnuevasderoble;barricashechasenestabodegayquealbergancientosderecuerdos.

Page 318: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Recuerdos del amor a la viña, a la bodega y a la continuidad. Esta nochequiero darle la bienvenida a un vino en el que hemos volcado todos nuestrosconocimientos y nuestras vivencias basadas en el amor que profesamos a estearte,porqueelvinoesarte,espasión,esamor,esdesveloyesdedicarletuvidaentera,sinprisasyconcariño,yasí,sinprisasyconmuchocariño,hanacidoestecaldo,fuentedenuestroorgullo—dicelocalizándomeysonriéndome,ylohago yo también, con mi meñique enlazado con el de Víctor y la emociónllegandoparaquedarse—.Alzadvuestrascopasybrindadconmigopormihijaypor el vino que lleva su nombre. ¡Por Valentina Domínguez! —exclama mipadre,consiguiendoquemimiradasetorneborrosaporculpadelaslágrimasy,cuandoVíctorposasumanoenmiespalda,instándomeairconmipadre,echoaandarhaciaesehombrequeloestodoparamí.

Mefundoenunabrazoconélconlosaplausosdefondoy,cuandometiendeelmicrófono,locojocomoquiencogeelrelevo.

—Pocomástengoqueañadiralaspalabrasdemipadre;éleselexperto,ynosóloenelartedehacervino,sinoeneldeexpresartodoloquesienteporél,yesbastantedifíciligualarsucapacidaddeoratoria—intervengo,volviéndomeparamirarlo—,pero teprometoquealgúndía se intercambiarán lospapelesyseré yo quien alzará la copa con el vino que llevará tu nombre —anunciomientrasélmemiraconorgullo—,yseráunvinollenodematices,comotú,enelquepondrémialmaymicorazónhastaquelogrereflejareltuyo,esecorazónque ha latido toda su vida por estas tierras, como hizo el del abuelo y el denuestrosantepasados.Gracias,papá,porsermipadreyporestevinoquedicetantodeloquesientespormí.

»Brindemosporél,pormipadre,yportodosaquellosqueyanoestánentrenosotrosperocuyorecuerdolateenestastierras—finalizomidiscurso,alzandolacopayañadiendounafotoaeseálbumqueestoycreandoenmicorazón.

Page 319: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO24

Yyo,quequeríaquelapresentaciónpasararápidamente,medescubrodeseandojustolocontrario,pues,sipudiera,detendríaelrelojahoramismoparaexprimiryviviralmáximoestemomento…Ésteenelqueestántodoslosquetienenqueestar:él,mifamilia,misamigosytodoslosclientes,proveedoresyviticultoresqueformanpartedenuestropequeñomundo,enestanochequeeselcomienzode todo lo que espero vivir y en la que suena nuestra canción por encimadelmurmullodelasvoces,porencimadelsonidodelcristalcuandoalguienproponeunbrindisyenlaquenuestraspromesaslecierranlapuertaentodaslasnaricesaesasensaciónextrañaquenoseatreveaentrarenestasala.

—Qué fin de semanamás ideal—me diceMaría Eugenia—.Muchísimasgracias por invitarnos y hacernos partícipes de este momento —prosigue,llevándoselacopadevinoaloslabios—.Porcierto,nosésitelohedichoantes,peroestevinoestábuenísimo—añademientrasCirolamiracasicomiéndoselaconlamirada.

—Sobretupiel,seguroquesabríamuchomejor—sueltaésteconinsolencia,consiguiendoqueseatragante.

—Dejadebeber,estásempezandoadecir tonterías—lerebateconfastidiocuandoconsiguefrenarsuataquedetos,mientrasélseacercalentamenteaellaylosmirosinpoderdespegarlosojosdeellos.

—Déjameprobarlo—creoqueledicealoído,yenarcoambascejasmirandoaVíctor,quemeobservaconunamediasonrisacargadadepromesas.

—¿Queréisquesalgamosfuera?Aquíempiezaahacercalor—lespropongo,deseandoqueelairerefresquemicuerpo,queestáempezandoaarder.

Page 320: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Yosí,vamos—mediceAdri,cogiéndomedelbrazomientraselrestonossigue.

—¿Quétepasa?—lepreguntoenunsusurro.—Nolosé,peroparecequeestétontaperdidacuandoestoyconDante.Por

tuvino,novuelvasadejarmeasolasconél.—Sinoosdejoasolas,novaapodermetertemano—replicodivertida.—¿Yquiéntehadichoquequieraquememetamanosisólodeseolargarme

corriendocuandoloveo?—mediceenunsusurromientrassalimosalexterioryveoloscientosdelucecitasque,juntoalasestrellas,decoranelfirmamento.

—Perocreíaquetegustaba—lecontestoconfusa,sentándomeenunodelossillonesquehemospuestoeneljardínmientraslamúsica,suave,llegahastamisoídos.

—Ymegusta—reconoce,sentándoseamilado,y,cuandoDantesesientafrenteaella,callosinentendernada.

Uno a uno, van tomando asiento, y de nuevo observo a Ciro y a MaríaEugenia,sentadosunofrentealotro.

—Sonríeme,pelirroja—lepidecogiendosucámara.—¿Cuándo la has cogido? —le planteo sorprendida, a la vez que María

Eugeniatuerceelgesto.—Nena, mi cámara va siempre conmigo—me responde con voz sexy—.

Venga,pelirroja,dedícameunadetussonrisas.—Déjameenpaz—mascullaésta,cruzándosedebrazos,evitandosumirada.—No puedo, ricura, eres demasiado sexy —replica empezando a

fotografiarlamientrasellasecubrelacaraconlasmanos.—Oye, vete a jugar por ahí, ¿quieres? Valentina, ¿los niños no deberían

acostarseantes?—mepregunta,arrancandounacarcajadageneralizada.—Sólo iré a acostarme si vienes conmigo —insiste, levantándose y

guiñándoleunojo,pasando frenteaellaconesosandarespasotas—.Miradme—nospideenfocándonoseinmortalizandoelmomento—.Ricura,fíjatecómosehace: Valentina, muéstrale a mi pelirroja cómo ha de mirarme y cómo ha deseducirme—mepide,acercándoseamímientrasellalomirasindarcrédito.

—¿Seducirte? Sí, claro, espérate sentado —masculla ésta, haciéndomesonreír.

—Sabesque loestásdeseando—insisteCiro,enfocándomeconsucámara

Page 321: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—. Mírame —me ordena con esa voz caliente y ronca que emplea cuandotrabaja,llevándomeconélaesemundoenelquetanbiennosmanejamosambos—,así,preciosa…damemás,hazquequieraprobartuslabios—añademientrasyovoydándoleloquevapidiéndomealavezquetodosguardansilencio—.Tequiero intensa, dulce y sexy—prosigue—. Impresionante; eres impresionante,nena.

—Pero¿atiquétepasa,quetienesparatodas?—lepreguntaMaríaEugeniacon fastidio, consiguiendo que suelte una carcajada y regrese con ellos a estejardín.

—¿Estás celosa, ricura? —suelta con insolencia volviéndose hacia ella,enfocándolaconlacámara.

—Yaquisieras—mascullamientrasobservoaVíctor,conlamiradaperdidaenlagentequellegayseva.

—Mírame, cómeme con los ojos —le pide con descaro, enfocándola denuevo.

—María Eugenia, arréale un guantazo —propone Pilar, divertida,recostándoseensubutacón.

—Loquevaacomerseessucámara—lerespondesonriendo—.Veteajugarporahí,anda;déjameenpaz.

—Ytú,¿quieresintentarlo?—lepreguntaDanteaAdri.—¡¿Yo?! —exclama poniéndose roja como un tomate y tensándose de

repente.—Sí,tú,¿tegustaríaintentarlo?—Sois unos coñazos, ¿no podéis dejarnos tranquilas? —interviene María

Eugenia,cogiendountrozodequeso.—¿Quieres venir a jugar conmigo, ricura?—le preguntaCiro yendohacia

ella.—Déjalo;yonosoymodelo,paraesotienesaValentina—lerespondeAdri

aDante,yjuroquenodoyabastoobservándolosatodos.—NoquierofotografiaraValentina,quierofotografiarteati—afirmaDante

conseriedad,consuvozoscuraycavernosaresonandoenlanochemientrasyodetengomimiradaenVíctor.

Tiene los antebrazos apoyados en sus piernas, los dedos de las manosentrelazadasylamiradapuestaalfrente,completamenteajenoaestemomento,

Page 322: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ymepreguntoquéestarápensando.—Nomegustaquemefotografíen—ledicemiamigaconapuromientrasyo

nopuedoalejarmimiradadeél.—¿Por qué?—indaga a la vez que me levanto para sentarme al lado de

Víctor, deseandoque regrese connosotros, yDante aprovechaparaocuparmilugarenelsofá—.Venundíaamiestudioyposaparamí—lepideclavandosuimpresionante mirada en ella, y me vuelvo para ser testigo del apuro de miamiga.

—Aprovéchate,Adri…TeaseguroquemásdeunamodelomataríaparaqueDante le propusiera eso —le comento intentando echarle un cable y,disimuladamente,empiezoaescribirleaVíctorunmensajeenlapiernaconunodemisdedos,jugandoaesejuegoquesólonosotrospodemosjugar.

«Tequiero»,leescriboenmayúsculasy,encuantoempiezoaescribir,séqueharegresadoamilado.

—Yteloagradezco,peronosabríahacerlo,deverdad,ynoquierohacerteperderel tiempo—rechazaAdridenuevo,yempiezoacontar, seguradeque,antesdequelleguea tres,habrádichoquetienequeirse:uno…—.Tengoqueirme.

«Cobarde»,piensoparamí.—¿Tevas ya?—le preguntaDante frunciendo el ceño, y lamiro negando

conlacabeza.—Hasidoundíalargoyestoycansada—seexcusa,levantándose.—¿Quieresquetellevemosacasa?—inquierosinpoderentenderla.—Tranquila,hevenidoconmicoche.—Vamosentonces, teacompañoalparking—seofreceDante,ylehagola

ola,almenosnoserinde.—Nohacefalta,conozcoelcamino.—Porsupuestoqueloconoces,monina,trabajasaquí,peromolaqueuntío

guapo quiera acompañarte, ¿no? —suelto sin poder callarme, deseandozarandearla.

—Yahablaremos tú y yo—sisea entre dientes, y le sonríohaciéndole unamueca.

—Vamos—proponeDante posando sumano en la espalda desnuda demiamiga, y sonrío un poquitomásmientras ella se ponemuymuy tensa…Dios

Page 323: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mío,siparecenuevaenesto.—Eresunamalapécora—mededicaMaríaEugeniacuandodesaparecende

nuestrocampodevisión.—¿Quieresqueseamalapécoratambiéncontigo?—replico,guiñándoleun

ojo.—No, si no quieres que yo solita me vaya directa a la hoguera —me

respondecómicamentemientrasVíctor comienzaa teclear algoen sumóvily,cuandosuenaelmío,lomiroansiosa.

¿Nosquedamucho?

Loleointentandonosonreírmientrastecleolarespuesta.

Noestábienquemevayalaprimera.

CompruebocómotuerceelgestoydejaelmóvilsobrelamesaconfastidiomientrasDanteregresahastadondeestamosnosotros.

—¿Cómohaido?—meintereso,sonriéndole.—Niputaidea.¿Quélepasa?—Alomejornolegustasyestá intentandodarte largassiendoeducada—

intervieneMaríaEugenia,pinchándolo.—Oalomejorlegustasperoleimponesunhuevo—lerebatePilar,dando

enelclavo,mientrasélsevuelveparamirarmecomosiyotuvieralarespuestaatodassuspreguntas.

—Mi boca está sellada; soy su amiga y lo que me cuenta es secreto desumario.

—¿Crees que le impongo?—indaga, haciendo caso omiso a lo que le hedichomientrasveocómoVíctorcogesumóvilyselevanta.

—Ahora vengo —comenta antes de dirigirse al interior de la bodega ysuspirobajito,conscientedequeestáempezandoahartarse.

—¿Yporquédasporválidaesaopciónynolamía?—intervienedenuevoMaríaEugenia,mirándoloporencimadesusgafasdepasta—.Alomejornolegustan los tíos que van de intensos por la vida—insiste mientras él la miraenarcandounaceja.

—¿Yovoydeintensoporlavida?¿Quétonteríaesésa,MaríaEugenia?

Page 324: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Deintenso,detíoduro,de…¡Bah!,yasabesloquequierodecir—farfullagesticulandoconlasmanosmientrasyomelevantoparairabuscaraVíctor.

—Ahoravengo,chicos—musitoantesdealejarmedeellos.Loencuentroenlatienda,charlandoconlaseñoritaLópezZapatosdetacón

demuchoscentímetros,ylosmirofulminándolosaambosconlamirada…«Vaya,aéstanolahabíavisto»,medigosintiendocómoloscelosseabren

paso,amargoscomolabilis,y,sinpoderfrenarmispasos,medirijohaciaellos.—Hola. ¿Todobien, señoritaLópez? ¿Estádisfrutandode la presentación?

—lepreguntoconunafalsasonrisa.—Muybien.Mehagustadomuchosudiscurso,señoritaDomínguez—me

responde,siendotanfalsacomoloestoysiendoyo.—Mealegra—leindico,cruzándomedebrazos,sosteniéndolelamirada.—Nosvemos,Víctor—sedespidefinalmentedeélmientrasno lequito la

miradadeencima.—Muysimpática—merecrimina,cruzándoseéltambiéndebrazos.—Losé;cuandoquiero,nohayquiénmegane.¿Ytú?¿Loestabaspasando

bien?—Tantoomásquetú—merebatecondureza.—¿Aquévieneesto?—musitosóloparanosotros.—Nolosé,túdirás,tehascomidoaCiroconlamiraday…¿cómoera?¡Ah,

sí!, quiero probar tus labios, eso era… lo había olvidado —masculla,chasqueandoluegolalengua.

—Realmenteera«Hazquequieraprobar tus labios»y,paraqueteenteres,esoes lonormalentrefotógrafoymodelo,exceptoconDante;éstese limitaadecirte«Mírame,sonríeme,vuélvete»ypocomás,peroelrestodelosfotógrafossuelenserasí.¿Quétepasa?EstoespartedemitrabajoyesalgohabitualentreCiro y yo cuando estamos juntos. ¿Acasono te has dado cuenta de queno sedespegadesucámara?

—Podríadecirtelomismoyoati,¿noteparece?Alfinyalcabo,Covaessólouna compañerade trabajo—replica entredientes, acercándose amiorejaparanohacerpartícipesalosinvitadosqueentranysalen.

Lomirofulminándoloy,girandosobremistalones,medirijohacianuestrodespachoseguidaporél.Sólocuandooigocerrarselapuertaamisespaldasmegiroparahacerlefrente.

Page 325: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Unacompañerade trabajocon laque teacostabas—le rebato, sintiendomienfadocrecer.

—Mira quién fue a hablar: tú te acostabas con Ciro —me contesta,acercándoseamí.

—Ciroseacuestacontodas;dehecho,ahoraquieretirarseaMaríaEugenia,¿oacasonotehasdadocuenta?

—Deloquemedoycuentaesdequellevotodoeldíacontusamigosy,unmomento que me he detenido a hablar con una amiga mía, ha sido más quesuficienteparaquesacarastusuñas.

—Nadietehaobligadoapasareldíaconnosotros—ledigoconunhilodevoz,sinpodercreerqueestemosdiscutiendo.

—Escierto,hesidoyoquienhaqueridohacerloparaestarcontigo,peronoesjustoquetecabreescuandomeveashablarconunaamiga.

—Vaya…puessíqueladefiendes—musitososteniéndolelamirada—,perono olvides que esa amiga está deseando acostarse contigo —añado con ladecepcióninstaladaenmimiradayenmivoz—.¿Sabesqué?Hablaconquienquierasypasatutiempoconquientedélagana—masculloalejándomedeél,sintiendoeldolorpalpitándomeenlagarganta.

—Espera—mepidecogiéndomeporunbrazo,deteniendomiavance.—Déjameenpaz—leespetorabiosa,soltándome.—No,joder,espera—insiste,cogiéndomedenuevo,obligándomeaqueme

dé lavueltay abrazándomecon fuerza—.Lo siento,nena; supongoque tengodemasiadas cosas en la cabeza —se disculpa mientras mantengo mis brazospegadosamicuerpo,negándomeaabrazarlo.

—Lastienesporquequieres—mascullodemalasmaneras,separándomedeél,observandocómoentierralosdedosensupelo.

—NoquierodiscutircontigoniporCovanipornadie;dimequenovamosahacerlo—mepideclavandosuintensamiradaverdesobrelamía.

—Porque esta noche es la presentación de mi vino y sólo ha de ser eso,¿verdad?—lepreguntonegandoconlacabeza,empezandoahartarme.

—Exacto.Hazlopormí,necesitoqueseaasí—meindicaconlafrustraciónllenandosuvoz.

—Pero¿porqué?—inquierosinentendernada.—Porquetelopidoyo.¿Notevaleconeso?—mepreguntaacariciándome

Page 326: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

consuvoz,yasientofinalmentemientrassusbrazosenvuelvenmicuerpo,yestavezcorrespondoasuabrazo—.Vamos,noestábiendejaralosinvitadostantotiemposolos—añade,besandomifrente.

Salimos del despacho hacia la terraza y, por el camino, me presenta aclientes,proveedoresyviticultoresasociadosanuestrabodega,amigossuyosycompañerosycolegasdemipadrey,pocoapoco,mientrascharlamosconunosyconotrosynuestrosrocesysonrisasvanintensificándose,vamosrecuperandola complicidad perdida, haciendo a un lado ese pequeño enfado que nos hamantenidoenfrentados,mientraslanochepasayyolepresentoamihermanaaMaríaEugeniaymicuñadosearrancaatocarlaguitarra.

Bajoelmantodeestrellasqueestanoche iluminael firmamento,vuelvoaescucharesacanciónqueesnuestra,esaqueerizamipielmientrasmiálbumderecuerdosvallenándosedeimágenesnuestras,imágenesdemipadreydeCasi,quesehanunidoanuestropequeñogrupo;deAlanahablandoentusiasmadaconMaríaEugeniasobrecoleccionesyproyectosdefuturo;deDante,PilaryVíctor,quehanencontradoenelvinosupuntoencomún;deCiro, siempre listoparainmortalizar el momento con su cámara, de la misma forma en que estoyhaciendoyoconmimenteymialma…yes,duranteestashoras,cuandoconsigounirelmundodelamodaconeldelvino,mimundoapartirdeahora,apesardequeéltodavíanoquierasaberlo.

Finalmente, a altas horas de la madrugada, damos por finalizada estapresentaciónque surgió en el patiodemi casa, estapresentaciónquevolvió aunirnos,aunquedeformadistinta,yquehacambiadoelrumbodemividaparasiempre;estapresentaciónquehasidosóloeso,comoélqueríaquefuera,yque,paranosotros,todavíanohaterminado.

—¿Desayunamos juntosmañana?—les pregunto amis amigos frente a lacasitadeinvitados,antesdedespedirnosdeellos.

—Yomásbiendiríadentrodeunashoras—matizaDante.—¿Temandamosunmensajecuandoestemoslistos?—dicePilar,yasiento

feliz.—Hastamañana, chicos. Ha sido una noche increíble—se despideMaría

EugeniaantesdeentrarenlacasitaseguidaporCiro,quelamiraconesamediasonrisaque,deserella,temería.

—Nosvemos—sedespideVíctor antesdearrancar—.¿Estáscansada?—

Page 327: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mepreguntacuandodejamoslacasitaanuestrasespaldas,volviéndosehaciamí.—No.¿Ytú?—leplanteomientrasconducehaciasucasa.—Tampoco—afirmaconvozronca,yobservosuincipientesonrisa,esaque

estácargadademilesdepromesas.

Page 328: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO25

—Por fin solos —musito buscando sus labios cuando llegamos a su casa,sacándolelacamisadelacinturilladelospantalonesconelansiadominándomeporcompleto.

—Val… Creo que deberíamos hablar antes —susurra cerrando los ojos,durante el segundo que dura un latido, mientras mis dedos desabrochan sucamisa.

—Noquierohablarahora,sóloquieroquemetoques—lepidososteniéndolelamiradacuando seencuentra con lamía, rozando sus labioscon losmíos—.Anteserastúelquenoqueríasaberlo,yahorasoyyolaquenoquieredecírtelo—leanunciodesabrochandosuspantalones—.Todavíanohaamanecido,Víctor,todavíaeslapresentación,todavíanoesmañana…Tócame—leexijocogiendosu mano y llevándola hasta mi pecho, tal y como hice la primera vez queestuvimos juntos—.Tócame—insisto con voz entrecortada, viendo sumiradacargarsedemilesdeemociones,recordándomeunmarembravecido.

—Val…—mascullamientrasacunosumanoconlamía,uniendomislabiosa lossuyosysilenciandocualquierpalabra, sintiendoquehemos retrocedidoanuestraprimeranoche—.Val…deverdad,esmejorq…

—Chist,nodigasnada—murmurocontrasus labios,sintiendoque,consureticencia, esa sensación extraña se ha colado en la casa—. Todavía es denoche…—insisto—. Tócame, bésame…Ya hablaremos cuando amanezca…,cuandoseamañana—musitopegandomifrentealasuya,respirandoelairequesecuelaentrenuestroslabiosmientrassumanoseliberadelamía,bajandohastamicintura,dondeseancladuranteunossegundos.

Page 329: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Vuélvete—meordenatrasguardarunossegundosdesilencioyobedezco,sintiendo mi cuerpo temblar de mil formas distintas mientras él empieza adesabrocharmivestidoy,cuandocaealsuelo,mevuelvodenuevohaciaél.

—Hagamosdeloquequedadeestanochelomásespecialdehoy;mañanayahablaremosydiscutiremostodoloquequieras,peronoahora,cuandotodavíanohaamanecido.

—Novamosadiscutir,Val—mediceconvozqueda,mirándomefijamente.—Cállate,nodigasnada—lepidodesprendiéndomedelsujetadordeencaje,

dejandomispechoslibresdesujeciones,listosparaél—.¿Voyatenerqueseguirsuplicándotequemetoques?—lepreguntohundiendomisdedosenlacinturillademitangamientrassumiradasetornaintensaysusexoreaccionaanteloqueestoymostrándole—.Víctor,cogeyhaz todo loquequierasconmigo;noseascuidadoso, chúpame, fóllame y haz que pierda la cabeza—añadomientras élalargasumanohastaposarlaenmicinturaparaacercarmeaél.

—Yosíquepierdolacabezacuantomehablasasí—susurraconvozroncaantes de estrellar sus labios contra los míos y llevarme hasta ese infiernopersonalenelqueparecequesehasumido.

Nosbesamosentregemidos, sinpoderdespegarnuestros cuerpos, quehantomadovidapropiayquesebuscancomosifueranpartedeunsoloente,comosinecesitaransentirseparaseguirviviendoy,cuandometumbasobrelacama,abro laspiernas, deseandoquehaga todo loque lehepedido,ygimoy jadeocuando su boca se desliza desde mi cuello hasta mis pechos, que chupa condedicaciónmientrasmicentrolateporélysehumedece,unpocomás,cuandosubocabajapormiombligohastallegaramiabertura.

—Porfavor…—gimoempezandoaenloquecermientrassuslabiosrecorrenmicentroysulenguabarremisexodearribaabajo.

Memuevosobreellos,abriendomás laspiernas,exigiéndoleyreclamandoloquedeseo,sinimportarmenada,mientrassientocómomiclítorisvibraytodose torna líquido y caliente, enloqueciendo y perdiendo la cabeza como le hepedido.

—Notecorrastodavía—meordenaatrapandomisplieguesconsuslabios,succionándolos y soltándolos para darle pequeños toques ami clítoris con sulenguaparavolverarepetirlaoperación.

Sientoque todomedavueltas a lavezqueentierromisdedosen supelo,

Page 330: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

pegándolomásamisexo,arqueándomeyalzandolascaderas.—Nosésivoyapoder,Víctor—musitoentregemidos.—Espera un poco —me pide chupándome con ansia, arrancándome un

gemidodetrásdeotroyconsiguiendoqueolvidehastacómorespirary,cuandoelorgasmollegasinavisar,duro,fulminanteyviolento,grito,sorprendidaporsuintensidad.

—Me toca —musito incorporándome, tumbándolo sobre la cama ynecesitandoquepierdalacabezadelamismaformaenquelaheperdidoyo.

Abrazo su sexo con mis labios, sintiendo cómo el mío reacciona y,lentamente,iniciomidulcetortura,chupandoylamiendo,insertándolohastaelfondodemigargantapara sacarloyvolver ameterlo a lavezqueunode susdedosseinsertaenmihúmedaaberturay,alunísono,nosfollamos,yoconmislabiosyélconsudedo,metiendoysacando,hastaelfondo,dándonostantoqueperdemoslarazóny,cuandonoscorremos,nosmiramosconlalocurainstaladaen la mirada, esa locura que te lleva a exigir, a dar y a sentir y que eliminacualquierpensamientoracionaldetumente.

Nosfollamosconrudezaydesesperación,comosifuéramosacontrarrelojynecesitáramoscogeramanosllenastodoloquepudiéramosdelotroantesdequeelsoldéporfinalizadalanochey,entrebesos,mordiscosygemidos,tomamosydamosynosvolvemosincansables,posiblementeporquetememosloquevienedespués o porque simplemente nos hemos echado demasiado de menos y nopodemosparar.Delacamapasamosaladuchaydenuevoalacamamientraslos silencios son sustituidos por besos…Besos dulces, besos exigentes, besosrudos, besos que alargamos mientras nuestras manos cogen y dan y nuestrasalmas,simplemente,buscanloqueessuyo,alotro.

Despierto cuando el sol acaricia mi rostro y entreabro los ojos despacio,sonriendoalrecordarloquevivimosanoche,recordandocómoenloquecimosycómonosdijimossinpalabrasydemilformasdistintascuántonosqueríamosy,trasasearmemínimamenteytrasponermesucamisaacuadros,esaquehicemíalaprimeranoche,medirijoensubusca.

Está sentado en el sofá, ya vestido, y me sorprende su postura; estáencorvado,conlacabezagachaylosantebrazosapoyadosensuspiernas.

—Víctor… ¿estás bien?—musito preocupada, arrodillándome frente a él,consiguiendoquealcesumirada,llenadetormentas,hastaposarlasobrelamía

Page 331: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—.¿Hasucedidoalgo?—lepregunto, sintiendocómomicorazóncomienzaalatirdeuna formadistinta,mientras élvacía suspulmones, recostándoseenelrespaldodelsofá.

—Tenemosquehablar—mediceconvozqueda,evitandomimirada.—Ya lo sé—susurro sentándomea su lado, subiendo laspiernas al sofáy

abrazándolas, observando los rayos del sol entrar a raudales en el salón yechandodemenoslaoscuridaddelanoche.

—¿Quéhasdecidido?—mepreguntaapoyandodenuevosusantebrazosensuspiernas,conlamiradafijaenlapareddeenfrente,ypercibosuceñofruncidoylatensióndesucuerpo.

—En esa pared empezó todo —musito admirando su perfil—. Vine paradespedirme de ti y porque necesitaba hablar contigo antes de marcharme yterminamos follando como posesos… como anoche… y como espero hacertodaslasnoches—musitoenunhilodevoz—.Voyaquedarme,Víctor;aunqueno lo entiendas, aunque pienses que me estoy equivocando y que soy unaromántica,voyaquedarme—insistomientrasveoquecierralosojosyagachalacabeza.

—Teestásequivocando—merebate,abriéndolosyvolviéndoseparaclavarsu mirada, de repente ausente y carente de vida, en mi rostro, y lo mirofrunciendo levementeelceño—.Quieresvivirunavidaqueno tecorrespondetodavía —prosigue, levantándose y yendo hacia la pared, donde apoya unamano, como si su cuerpo fuera el puntal que la mantuviera en pie—. Te vianoche, te observé mientras Ciro te fotografiaba… Ése es tu mundo, Val, lamodayposarfrenteaunacámaraestumundo,yquieresrenunciaraélpormí.

Hassidoelrostrodelañoyportadademuchísimasrevistas,yestásdispuestaarenunciara todo,aNuevaYorkyaunfuturoprometedorpormí.¿Notedascuenta de que luego no podrás recuperar nada de eso y que tu tren no tieneparadaenestaestación?,¿nocomprendesqueestásforzándola?

—¿Y túquieresolvidartede todo eso?—replico, levantándomedel sofáyyendohaciaél—.Sihicedeesemimundofuepor ti,porqueme rechazasteyquise mostrarte lo que te perdías, pero todo ha cambiado; ya no tengo quedemostrarte nada y tú eres lo único que quiero, eres lo único que he queridosiempre. Esmi decisión, Víctor, deja de rebatirla, ¿quieres?Mi tren ya se hadetenidoyporsupuestoquehabíaunaparadaenestaestación…Estoyenella,tú

Page 332: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

eresmiparada—ledigoconternura,mientrascompruebocómosealejademí,dándomelaespalda,ysuspirobajito,conscientedequevamosadiscutirlargoytendidosobreesto.

—Estás olvidando que yo también tengo que tomar mi decisión—suelta,sorprendiéndome.

—¿Dequédecisiónhablas?—lepreguntosinentendernada.—Dequenovoyapermitirque renuncies a tuvidapormí,noquieroese

peso recayendo sobremi espalda—afirma con dureza, dándose la vuelta paraenfrentarme—.Seterminó,Valentina.Puedesquedarteenlosviñedos,adelante;si quieres hacer de este mundo tu mundo, hazlo, pero sin mí —me indicamientrassientocómoesasensaciónextrañasemuevelentamentehastaentrarenmicuerpo,ocupandounespacioquenolecorresponde.

—Teequivocas,noestoyrenunciandoamimundoporti,simplementeestoytomandoelcaminoquemenosduele,yteaseguroqueningúnpesohaderecaersobre tu espalda, en todo caso lo hará sobre lamía—le explico, necesitandoretenerlo conmigo—.Víctor, te quiero y túme quieres amí,me lo dijiste—musitoacercándomeaél,acunandosurostroentremismanos—.Olvídatedeesefuturoquepareceimportartemásatiqueamíyvivamosloquehemosvividoestosdíassinocultarnosdenadie—lepidomientrasveocómosurostrosecubreconesamáscaradeindiferenciaquetantotemo—.Víctor…porfavor—susurrosintiendo que mi corazón deja de latir para ser sustituido por esa sensaciónextraña que ha tomado el control de mi cuerpo—. Te quiero más que a mímisma, como nunca he querido a nadie… Por favor, mírame —le suplico,empezandoaverlo todoborrosocuandoalgodentrodemímeadviertedequeestadiscusiónvaasermáscortadeloquecreía—.Oye,siésefueramimundo,¿no crees que lo hubiera echado demenos durante estos días? ¿No crees quedeberíaestardeseandovolver?Y,encambio,noloheextrañadoenabsoluto.

Durante estos días no he sentido nada cuando he visto los post de miscompañeras en Instagram;me ha dado igual que aparecieran en la portada decualquier revista, que estuvieran haciendo un shooting o realizando algúndesfile; nome ha importado porque yo estaba donde quería estar, aquí, enmicasa,ycontigo—ledigointentandoretenerelaireentremisdedos.

—Oye,seacabó;nolopongasmásdifícil,¿vale?Siestoesloquequieres,quédate,puedeshacerlo…Tú lohasdicho,es tucasa,pero, si lohaces,vasa

Page 333: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

tener que aceptar que esto se ha terminado y que somos libres de vernos conquien queramos —declara con frialdad, alejando su rostro de mis manos, ysientocómomipielsequejaycómogrita,anhelandosucontacto.

—No lo dices en serio, no puedes estar diciéndolo en serio —murmuroempezando a llorar—.Sé lo que hemosvivido estos días y sé lo que vivimosayer…Séquemequieresyqueestásmintiendoparaquememarche,peronovoyahacerlo;voyaquedarme,Víctor.

—Hazlo,ereslibredehacerlo,terepitoqueestásentucasa—merespondegélido,ylomirosinreconocerlomientrasélsedirigeaunahabitacióndelaquesaleconunamaleta.

—¿Quéhaces?—susurroabrazandomicuerpo,quehaempezadoatemblarderepente.

—Me voy de viaje. Sabes que adelanté mi vuelta cuando supe queregresabas, pero tengo trabajo que aparqué, así como un viaje personalpendiente. Tu padre ya lo sabe, ayer hablé de esto con él—me indica sin unápicedesentimientoenlavoz,ynotocómotodaslasemocionesquellenanmipechoconsunombreempiezanaperderfuerza,aapagarselentamente…comosi,consuspalabras,fueramatándolas,unaauna.

—¿Cuándo hablaste con él? ¿Cuando te fuiste porque tenías cosas quehacer? —le pregunto, sintiendo que estoy viviendo una pesadilla, una quedesaparecerá cuando amanezcadeverdad, porque seguroque estoy soñandoyquetodavíaesdenoche,seguroquetodavíaestoydurmiendo…

—Asíes—meconfirma,evitandomimirada.—Pero todavía no sabías cuál iba a ser mi decisión—le rebato, con mis

lágrimasrodandolibrespormismejillas.—Tienesrazón,nolosabía,perosísabíacuálibaaserlamíayqueésteera

elúnicofinalposibleparanosotros,porque,tantositeibasaNuevaYorkcomositequedabas,yoibaamarcharme.Lohesabidodesdeelprimermomento—me confirma con frialdad, mientras la canción que estábamos creando juntosempiezaasilenciarse.

—Y, aun así, anoche te acostaste conmigo —musito abrazándome confuerza.

—Ypasé todoeldíay toda la semanacontigo, sí,porqueunapartedemíesperabaquetomarasladecisióncorrectaynotenerquemostrartealcabrónque

Page 334: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

soyenrealidad,peronolohashechoyéstesoyyo,untíoqueescapazdefollarconuna tíasabiendoquevaadejarla.DijistequenuncahabíasvistoalVíctorjodido, pues déjame que me presente —suelta con cinismo, tendiéndome lamanoquemirosinver—,encantadodeconocerte.

—Noesverdad…—susurrosindespegarlasmanosdemicuerpo—,noeresningúncabrónyestáshaciendotodoestoporquecreesquelomejorparamíesquemevaya, porque te crees con el deber de velar pormí, perono es así, nisiquiera cuando era pequeña era así—le digo, empezando a llorar—. Víctor,sólo yo sé los zapatos que calzo, con cuálesme siento cómoda para caminardurantehorasyhorasyconcuálesno;noquierasdecidirpormí,noquierasquecalceunoszapatosquetienendemasiadotacón.

—Nodecidoporti,decidopormí;túpuedeshacerloquequieras—contestacon indiferencia,gélido,cogiendosumaleta,y sóloentonces sueltomicuerpoparaaferrarsuequipajeeimpedirsuhuida.

—¡Noooo!No, por favor,Víctor, no te vayas, no te vayas, por favor—leruegodesesperada—.Notevasair,porfavor,tequiero.

—Sueltalamaleta,¡yaestábien!—megrita,cogiéndola—.Cierralapuertacuando temarches—medice condurezay, temblando, observo cómo sale decasa.

Losigoconpasostemblorosos,descalza,vestidaúnicamenteconsucamisa,sintiendoquelatierratiembla,viéndolotodoborrosoy,cuandosubealcocheyarrancaelmotor,sientoqueesesueñoqueteníaflotandoenlapalmademimanose evapora, diluyéndose entre mis dedos… muerto… y cómo esa sensaciónextraña toma definitivamente el poder de mi cuerpo hasta anular mi corazónmientrasveosuvehículoempezaraalejarse.

Me desmorono frente a su casa, sintiendo cómo mi alma abandona micuerpo,corriendotraslasuya,volandoentreencinasyviñedosporestastierrasque sonmi casa y también la suya, por estas tierras testigo de tantas cosas, yentierro mis dedos en ella cuando un sollozo desgarrador escapa de migarganta…Sinpodercreerlo,sinpodercreerquesehayamarchado,sinpodercreerqueestohayaterminado,sinpodercreerquenoestéaquí,sintiendoquemimundoenmudeceycómonuestracancióndejadesonary,ensulugar, llegaelsilencio,elmásabsolutoyaterradordelossilencios.

Dicenqueelalmapesaveintiúngramosy,siescierto,cuandomelevantodel

Page 335: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

suelomi cuerpo debe de pesar esos gramos demenos, porque ella no vuelve,perdida como está buscando la suya, y, cuando entro en su casa, lo hagosintiendoque soyotra, una que ya nopuede llorar ni sentirmientras esa cosaextraña lata de formamecánica enmi interior, como si de un reloj a pilas setratara,y,trasvestirmeconmiropaydejarsucamisatiradaenelsuelo,dondeélmehadejadoamí,salgodesucasaparanovolveraentrar,sabiendoquetodavíatengo un largo día por delante, uno en el que tendré que desayunar con misamigos fingiendo que todavía tengo corazón, fingiendo que mi sangre correcaliente pormis venasynohelada comoel aguadeunglaciar, fingiendoquetodoestábienyquetodoestoquellenabamipechocontinúaaleteandollenodevida y no ha muerto con este frío paralizante que agarrota mis músculos,aparentandounafelicidadquehaescapadocorriendotrasmialmaytrasél,sinsaber qué sucederá con mi vida a partir de ahora y sin que me importedemasiado,paraquéengañarnos…

Page 336: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO26

VíctorNuncahellorado;bueno,paraserexactos,puedequelohicieracuandoera

un crío y no sabía hablar, cuando llorar era la única forma que tenía deexpresarme,e, inclusoentonces,creoque llegóunmomentoenelquedejédehacerloy, siendoese crío, se forjó elhombreque soyahora,unhombreduro,uno que empezó su vida de una forma bastante jodida y que gracias a otroconsiguióenmendarla,unhombrequesiendo jovencayórendidoa lospiesdeunaniñitadeseisañosquelomiróatravésdelaslágrimasporprimeravezyquehavueltoahacerloahora,convertidaentodaunamujer,porúltimavez.

—Joder —mascullo con el dolor y la rabia entrelazándose entre sí,deteniendoelvehículoalfinaldellargocaminoflanqueadoporviñedosyolivos,viendolacasonaalolejosalzarsesobreellos,a travésdelespejoretrovisor—.Joder—sueltodenuevoenunquejidoquebrotademigarganta,apoyandomifrentecontraelvolante,aferrándoloconfuerzamientrassusojosysuspalabrasse clavan en mi pecho hasta cortarme la respiración—. Joder… Joder…¡¡¡Joder!!!

—gritoentredientes,dándoleunpuñetazoalvolante.Lloroensilencio,aferrandodenuevoelvolanteconfuerzahastaponermis

nudillosblancos,conscientedequeacabodeperderlaparasiempre;quenunca,enmijodidavida,volveréavivirloquehevividoestasemanaconellayque,posiblemente,selaestaréponiendoenbandejaalputoitaliano.Conelrecuerdodeesehombre,sientocómolarabiameinvadehastaahogarmey,sóloentonces,yporprimeravezenaños,oigolavozdeeseVíctorjodido,esequevivejuntoal

Page 337: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

otroycuyaspalabrashe silenciadoabasedemuchoesfuerzo.Oigosusgritosenfurecidos,cegadocomoestáporlaira;oigocómomeordenaquedélavueltayregreséjuntoaella;oigosusmaldicionesycómomeexige,locoderabia,queaceptesudecisión.

«Siellahadecididoquedarse,yonodeberíaopinarnada…»,piensoalzandomimiradahastaposarlaenlacordilleraquesealzafrenteamí,mediocubiertapor las nubes… «Si ella ha decidido quedarse conmigo, ¿quién soy yo paraimpedirlooparadecidirsufuturo?»,mepreguntoponiendoelcocheenmarcha,decididoadar lavueltay regresar juntoaella,pero,enelúltimomomento,yacallandoesavoz,aceleroysalgodeeste lugara todavelocidadparapermitirquelohagaellatambién,parapermitirquevivaloquetengaquevivir.

Conduzco durante horas, temiendo detenerme, temiendo flaquear ycuestionarmi decisión, obligándome amantenerme firme en ella de lamismaformaenquemantengolosojosabiertosapesardelocansadoqueestoy.«Joder,debodeestarfuncionandoporinercia»,medigorecordandoestaúltimanoche;bueno,enrealidadtodaslasnochesdeestajodidaeincreíblesemanaenlasqueapenas he podido pegar ojo y, con la vista fija en la carretera, pienso en esasnoches,cuandoellaseibayyomequedabaalprincipiodelcamino,ocultoentrelas sombras, viendo cómo entraba en su casa; en esas noches en las que nodejaba de preguntarme cómo iba a ser capaz de dejarla ir, cuando, en laoscuridaddemihabitaciónodel salón, fantaseabacon la ideadenohacerloeimaginaba nuestra vida juntos, trabajando en la bodega tal y como estábamoshaciendo, sin tener que despedirnos por la noche, sin tener que ocultarnos denadieycómo, tras fantasearconesavida idílica,volvíaamimaldita realidad,esaenlaquenadadeesoeraposible.

Suspiroconfuerzaconlosrecuerdosatizándomeyaferroconmásfuerzaelvolante,apretandolamandíbulahastacasipartírmelaporlamitad,recordando…

Recordando su sonrisa cuando entraba en la cocina por las mañanas;recordandocómoalisabamiceñofruncidoycómolohacíayoconelsuyo,susbesos,sucuerpoencajadoenelmío,nuestroscincominutosycómoleponíaesatirita…

Recordandocómoduranteeldíahacíaaunladotodoloquesabíaqueibaaocurrirpara,simplemente,engañarmeamímismoyvivirloqueestabansiendolosdíasmásmaravillososdemivida,unosdíasquehanfinalizadoyquenunca

Page 338: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

volverán, y con esa afirmación siento cómo algo se desgarra en mi interior,doliéndomemuchomásdeloquemedolióaquellavezquesefue.«Malditasea,he tenido la felicidad caminando a mi lado y la he dejado ir», concluyo condolor, consciente de que he renunciado a lomás importante e increíble demivida.

No me detengo a descansar en ningún momento y, a base de fuerza devoluntad,cruzolafronteradeAndorra,esaquemellevaráamicasa,aesacasaquenuncasentímíadeverdadyquemásbienfueunafanfarronada,unquererdemostrarleatodoelmundoqueesedelincuentehabíaconseguidoloqueellos,con sus perfectas, correctas y ordenadas vidas, nunca conseguirían. Fue unquerer abofetear con la palma de mi mano, pero sin rozar su rostro, a todosaquellos quememiraban por encima de su hombro, dándome por perdido; atodosaquellosque, cuandoerapequeño, lesdecíana sushijosqueno jugaranconmigo,yfueunquererdemostrarleamimadrequeeramejordeloqueellacreía,pero tambiénfuedemostrarmeamímismoquepodía lograr todo loquemepropusiera.

Salgo de Sant Julià de Lòria con los recuerdos demi infancia abriéndosepasomientraselsolcomienzaacaeryotrorecuerdo,elsuyo,sesientaamilado.Ella, vestida conmi camisa, esa que le quedabamuchomejor que amí; ella,llorandoyaferrandomimaletaparaimpedirmimarcha;ellaysuspalabras;ella,esa niña quememiraba con admiración y queme dio su amor incondicionalcuando ni siquiera mi entorno fue capaz de dármelo; ella, esa cría que medemostróquehabíaotroVíctordentrodemí…;ella,esamujerquevaatriunfaren el mundo de la moda. Ella, Val… la única mujer con la que lo hubieraintentadositodohubierasidodistinto.

—Suficiente—mascullocondurezamientrascojoeldesvíoquemellevaráaOrdino—.Suficiente—merepito,advirtiéndomeloamímismo,observandoestepaisajequenosólotraeconsigomalosrecuerdosdemiinfancia.

Deseandopoderevadirmedeellos,enciendo la radiosinperderdevista lacalzaday,cuandooigolacanciónqueestásonando,metenso…Esacanciónfuela que sonaba anoche cuando fuimos a recoger a sus amigos a la casita deinvitados.

«Me encantaMalú—dijo sin reconocerla, prestando atención a la letra—.Quépasadadecanción—prosiguió,ynotocómoestoquesientodesgarradoen

Page 339: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

miinteriorsedesgarratodavíamáshastadejarloencarnevivamientrasescucholaletradelacanción.

«Seterminó»,masculloparamí,cambiandolaopciónderadioaUSB,pero,cuando empieza a sonar Terra Titanic, es mucho peor, porque todas estascancionestambiénsonsuyasytraenconsigoinfinidadderecuerdosmás,porloque, tragando con dificultad, apago el aparato de música, sabedor de que elsilencioesmimejoropción.

AtraviesoOrdino sinmolestarme enmirar a la gente que cruza la calle ocamina por la acera, sin molestarme en comprobar si reconozco el rostro dealguien o alguien me reconoce a mí, simplemente necesitando llegar cuantoantesaeselugarquesesuponequeesmicasay,cuandosalgodelapoblación,suspiroconalivio.

Nomegustalagentedeestepueblo,opuedequeloquenomegustesealoque veo en susmiradas, pues, a pesar de que conduzco un Jeep que vale unafortuna omi casa es una fanfarronada de las grandes, en el fondo, continúanviendoalcríoyaladolescentequefui.

—Quesevayanalamierda—exclamoentredientes,tomandoeldesvíoquemealejarádetodosellosyquemellevaráamicasa,miremansodepazenestosmomentos.

Conduzco por un sendero estrecho y serpenteante, subiendo por estamontañaquees,enrealidad,micasa,puesensuscaminosyensussilencioseradondedeverdadmeencontraba,dondeelVíctorjodidoqueeraaojosdetodosdesaparecíapara, simplemente, convertirmeen ese chavalque sólo ansiabaunpoco de cariño, en ese chaval que hubiera sido un crío ejemplar si alguien sehubieramolestadoenmirarloyenprestarleunpocodeatención,esechavalqueundíaseperdióenlamontañayquenadiefueabuscarporlasencillarazóndequenoloecharonenfalta…,nisiquieraella,mimadre.

«Ese día convertí la montaña en mi casa; a los riachuelos, en misconfidentes, y a las piedras, raíces, helechos y plantas del camino, en miscompañerasdeviaje—rememoromientrasrecuerdoalniñoquefui—.Esequecreció como crece lamala hierba al borde del camino y que, aun así, esmásresistentequelasrosasquesoncuidadasconcariñoyesmero»,medigomientrasdivisolacasaalolejosysientocómoelalivioseinstalaenmiinterior.Alejadadel resto, alejada del bullicio del pueblo, de lasmiradas reprobadoras, de los

Page 340: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

cuchicheosyde lagenteque sóloveía enmí loquequeríaver, esta casa estárodeada de todo lo que necesito: nada, sólo naturaleza y silencio, ese silencioquetantoansíoahora.

Aparcoenlaentrada,sinmolestarmeenguardarelcocheenelgaraje,puesmetemoquevoyatenerqueregresaralpuebloaporcomida.Bajodelvehículoinspirando el frío que aquí se respira, llenandomis pulmones de este aire queformapartedemíydemisvivencias,viendolanieblaempezaracolarseentrelasramasdelosárbolesysintiendolatranquilidadempezandoaasentarseenmiinterior, poniendo una tirit… y antes de terminar de pensar en esa palabra, lasustituyoporvendaje,sobreesabrechaquelateenmiinterior,sabiendoquevoyatenerquereacondicionarmimenteysustituirmuchísimascosasymuchísimaspalabras para que ella no se cuele en mis recuerdos, como esta niebla que,sinuosa,reptaporlamontaña.

Endureciendo el gesto, saco mi equipaje del maletero para entrar en estelugarquealguienconstruyóparaalojaraunafamiliaynoaúnicapersona.

Haciendoaunladoesospensamientos,suboporelascensorhastallegaralaprimeraplantay,cuandoabrolapuertayenciendolasluces,lacalidezqueaquíserespirameenvuelve;desdeluegoqueeltíoqueideolacasitayladecorótuvobuengusto:parquetenelsuelo,paredesdepiedra,chimenea,mullidossillones,cocina integrada en el salón, ventanales enormes, despacho, gimnasio, cuatrohabitaciones y cinco cuartos de baño… «Joder, puedo mear cada día en unodistinto»,piensoconlaamarguraabriéndosepaso,yendohacialascortinas,quedescorro para permitir que la tenue luz del atardecer ilumine este salón que,comoyo,noesperaanadie.

Memuevodeformamecánicapor lavivienda, revisándolo todoapesardeque,mensualmente,pagoaunamujerparaquevengaalimpiarycompruebequetodoestábien,y,mientrasvoydehabitaciónenhabitación,meconviertoeneseVíctorquedejéatráscuando,condieciséisaños,mefuideaquí;eneseVíctorquenopermitequenadaleafecteyquepuedefuncionarperfectamentesinquelossentimientosformenpartedesuvida,ylomástristeylamentabledetodoesqueaprendíaserasícuandoerasimplementeunchiquillo,unenanoquecrecióviendo cómo las madres «normales» corrían hacia sus hijos cuando éstosllorabanosecaíanalsuelo,quelosconsolabanconbesosopalabrasdecariñohastaquedejabandehacerloyqueloscogíandelamanoparairacasa.

Page 341: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Yo aprendí a levantarme solo, aprendí a dejar de llorar porque sabía quenadieibaaveniraconsolarmeyaprendíaendurecerelgestoyfingirquenomehabía hecho daño para no ver lasmiradas de pena de esasmadres.Aprendí aregresar solo a casa, y con esa lección empecé a despreciar a todos esos quereclamabanbrazosybesos;aprendíahacermefuerteyavalermepormímismo,yaprendíadesdeñaraesamujerquememirabacomosiyo fuera lacausadetodossusmalesyproblemas,quelofui…,yameencarguéyodespuésdeeso.

Permito que esos recuerdos regresen a mi vida igual que no permito queotros lo hagan, supongo que porque me viene bien recordar mi pasado paramantenerarayamipresente.Recordarquiénfuiparanocreermeloquenosoyya loqueno tengoderecho…Putavida…Haypersonasquevienenaellaparavivirlayexprimirlaamanosllenasyotrasqueestánaquíporunjodidoerrordeldestino o por una jugarreta de las malas, y supongo que yo soy esa segundaopción.

«Llegué aquí por error, por un polvo mal echado, y con mi presencia lecambiélavidaaesamujerquedicesermimadre,primeroinvoluntariamenteyluegocontodalavoluntaddelmundo,yahora…ahorasimplementemeocupode ella, posiblemente porque no soy tan duro comopensaba o porqueValmecambió.»Con ese último pensamiento,me tenso, obligándome a hacerla a unlado de nuevo, obligándome a olvidar, aunque sea durante unas semanas, esaparte de mi vida que no ha sido un error, esa que viví intentando ser mejorpersonay en la quenació elVíctor quedebería haber sidodesdeque abrí losojosaestemundositodohubierasidodistinto,medigocolocandomiropaenelarmarioyrememorandolascientosdevecesque,depequeña,letendímimano,la cogí en brazos y le di losmiles de besos en la frente que amí nuncamedieron.

ConValmereconcilié,enlamedidadeloposible,sipuededefinirsedeesaforma, conmividay conmigomismo,ypor ella yporPedroquise sermejorpersona,porelsimplehechodequesemolestaronenmirarmeyverquiéneraenrealidadoquiénpodíallegaraser.

«Posiblemente no debería haber comprado esta casa», piensoreacondicionandomispensamientos, cerrándole lapuerta a esos recuerdosquenotienencabidaahoramismoenmicabeza.DeberíahabercompradounacasaenlasMaldivasoencualquierplayaparadisíacayborrarestelugardelmapade

Page 342: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mivida,pero,poralgunarazónqueescapaamicomprensión,nopudehacerlo…Puedequefueraporqueestelugarmegustademasiadooporque,apesarde

todoyenalgunosmomentosdemivida,fuifelizaquí,oquizáporqueesbuenosaberyrecordarcómoempezasteparasabercómonoquieresterminar.«Puedeque sea eso, quién sabe…», me digo yendo hasta la cocina, donde esperoencontrarlaalacenallenadecomidadesobreoenlatadaytenerqueahorrarmeelviajecitoalpueblo,perocompruebocondisgustoqueestámásvacíadeloqueestáestacasa.

—Deputamadre—masculloparamí,endureciendoelgesto, frunciendoelceñoparadesfruncirloenelactocuandoellasecueladenuevoenmisrecuerdosparaalisarlo.

Dejomichaquetaenlapartetraseradeltodoterrenoy,trasdarlealcontacto,inicioelcaminoderegresoaOrdino,obligándomeanopensarennada.

¡Suficiente está trabajando mi mente desde que he llegado aquí, joder!Mientrasdesciendoporelsenderoyluegoporlasinuosacarretera,contemplolanaturalezaque,imponente,sealzaaambosladosdeella,dándoleunrespiroamicabeza,queseempeñaenreproducirmilesderecuerdossinquenadieselopida.

«Maldita sea, estoy desentrenado en el jodido arte de no pensar», merecriminobajandoelcristaldelaventanaapesardequehaceunfríodecojonesy permitiendo que ese frío se instale a mi lado mientras inhalo el olorinconfundibleaverdeyanaturalezaquesólopuedesrespiraraquí.Cuandoveolas plantaciones de tabaco, medio sonrío al rememorar la primera vez que elSombra y yo nos fumamos un cigarro inspirando otro tipo de aire. ¡Joder!,todavía teníamos edad para estar jugando a los cochecitos y ya estábamosdándolealamalavida…«PutoSombra,quemeseguíaatodaspartes»,piensosonriendo por primera vez desde hace horas y borrando la sonrisa al recordarcuando ellame dijo que iba a convertirse en lamía. Cuando llego al pueblo,involuntariamente, y retomando una antigua costumbre, endurezco el gesto yfrunzoelceño,cubriéndome,apesardequeyano lonecesito,conesedisfrazquememantieneasalvodetodosy,dentrodemí,sientopenaporesecríoquetuvoquehacerseconélcuandolosúnicosdisfracesdesuvidateníanquehabersidolosdeSupermanolosdecualquiersuperhéroe.

«¿Mehascompradoundisfraz,Vic?»,mepreguntóconsuvocecillainfantil,mirándome como si yo fuera ese superhéroe que nunca fui, con esos ojazos

Page 343: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

pardosquemeteníanhechizado,rememoromientrasestacionoelJeepfrentealpequeñosupermercado,clavandolamiradaen lasmontañasque tengofrenteamísinverlasrealmente,perdiéndomeenmisrecuerdos,enesosrecuerdosque,pormuchoquemeempeñe,parecenimposiblesdefrenar.

«Claro.Un disfraz de princesa parami princesa favorita», le respondí conunaenormesonrisa,dándoleuntoqueasupequeñanarizconmidedomientrasellamemirabaarrugándolayhaciendoquesonrieraunpocomás.

«Joder,meencantacuandohaceeso»,piensosoltandounpequeñosuspiro,bajandomimirada hasta posarla enmis piernas, abriendo voluntariamente lascompuertasamisrecuerdos,esosquelleganaborbotonesparajodermevivo.

«¡Essúper!¡Meencanta,Vic!»,exclamó,lanzándoseamisbrazossinsoltarsudisfraz.

Recuerdo que la abracé con fuerzamientras ellame echaba al suelo entrerisas, esas risas inocentes que eran mi sonido favorito, esas risas que mereconfortabanyquedabansentidoamivida.

«Novoyaquitármelonuncay,apartirdeahora,vasa tenerque llamarmeprincesaVal»,soltólevantándosedelsuelomientraslamirabaconadoración.

YestuvellamándolaprincesaValdurantetodoelverano.—Suficiente—mascullo, apretando la mandíbula con fuerza, saliendo del

vehículoydejando,apropósito,michaquetaenelasiento trasero,necesitandoquemicabezasecentreenalgoquenoseaellayentodoloquevivíasulado—.Putofrío—siseomientrascruzolaacerayentrocomounabalaenelpequeñosupermercado,captandoalinstantelamiradadedoñaVicenta,ladueñayunadeesasmadresquepreferíanquesushijosnojugaranconmigo—.Buenastardes—farfullocondureza,mirándolaconlafrialdadinstaladaenmimirada.

—Anda, ¡qué sorpresa, Víctor! No sabía que estabas en el pueblo —mecontesta siendo tan alcahueta como siempre y, sinmolestarme en contestarle,cojo un carrito para perderme por uno de los pasillos, sintiendo cómo lanecesidaddesalirdeaquícuantoantesseinstalaenmiinterior,tirandodemí.

Llenoelcarritodecomidaenvasadaalvacío,enlatadaydesobrey,unavezquetengotodoloquenecesito,medijoalacajaregistradora,sabedordequemeesperaunpequeñointerrogatorio.

—Tumadreestarácontentadetenerteporaquí—mecomentacomosinada,empezando a pasar los artículosmientras yo guardo silencio y ella estudiami

Page 344: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ropa.«Nivendiendotodoloquetieneaquípodríapagarlaropaquellevo»,pienso

alzando la mirada, siendo el Víctor que acostumbraba a ser y negándome amostrarlequiénsoyenrealidad;total,¿paraqué?

—¿SabesquemiJoaquínsehizomédico?—mepreguntaorgullosacomounpavoreal,comosimeimportaraunaputamierda—,ynounmédicocualquiera,no:escardiólogo.

Yapesardequenosoportoaestamujernia«suJoaquín»,sientoqueunapartedemilatecondolor,comocuandoeracrío,puesnuncanadiesesintiótanorgullosodemínihablócontantaadmiracióndemipersona…«Bueno,sí,huboalguien…: ella», me rectifico involuntariamente antes de volver a cerrar esacompuertaquedebetenerlacerradurarota.

—NorecuerdoasuJoaquín—lemientoconinsolencia.¡Queleden!—Perositienetuedad,ibaisjuntosalcolegio—insiste,clavandosumirada

enmirostro,yselasostengoantesdeempezarallenarlabolsaconlacomida.—¿Deverdad?Puesniidea,señora;yasabequenoparabamuchoporallí.¿Puededecirmequéledebo?—lepreguntoarisco.—¿Y tú en qué trabajas? —indaga con una falsa sonrisa—. Porque no

llegasteaterminarlosestudios,¿verdad?—serecreaconmalicia.—Entre usted y yo, suelo ir atracando los supermercados de gente

chismosa…Yasabe,loqueacostumbrabaahacerdejoven,peromejorado;perohoy,yporserusted,voyapagarloquemellevo.Otrodía,igualmelopiensomejor y le saco la pistola—suelto sin poder callarme, ante su escandalizadamirada.«Quetefollen»,sueltomentalmentecondureza,abriendomicartera—.Dígameloqueledeboomelargosinpagar,yasabequeenesonohayquienmegane.

—Cuarentayseiseuros—responde,blancacomolacera—.Yadecíayoque,pormuybienvestidoquefueras,nohabíascambiadoenabsoluto.

—Ya sabe, señora: la cabra tira al monte —mascullo tirando los billetessobre lacinta—,peronodiráqueno tienechismesdesobraparaunasemana.Quédeseconelcambio,asíyalotieneacuentaparacuandovengaaatracarsusupermercado —replico antes de salir y, cuando pongo un pie fuera delestablecimiento,sientocómolarabiacaminaamilado.

«Cabrona», pienso llegando de nuevo hasta mi coche, maldiciéndome en

Page 345: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

silenciopornohaber sabidocallarmeyhabercaídodenuevo. Joder,yosolitomehepuestoenbocadetodoelpueblo.

—De puta madre —siseo entre dientes y, cuando paso frente a la pleta,dondevivemimadre,acelerounpocomásparasalircuantoantesdeaquí.

Conduzco sin rumbo, con la ventanilla bajada a pesar del frío que hace,viendolanieblareptarsinuosamenteatravésdelosárboles,silenciosamente,sinquenadiepueda frenar su avancey, cuandoveo el desvíodePal, lo tomo sindudarlo,necesitandosubirbienalto,hasta laspistasdeesquí,paraalejarmedetodosypoderrodearmedelsilencioydeestefríoque,alcontrarioqueatodoelmundo,amíparecereconfortarme.

Subo por la carretera con la noche abriéndose paso, con el precipicioescarpado a un ladoy lamontaña al otro, obligándome amantener esa puertacerradayponertodamiatenciónenlaconducción,esperandoqueningúnciervose cruce en mi camino y, mientras conduzco, siento cómo la ira se diluyelentamente y cómo la calma llega con su ausencia. «Joder, soy imbécil—medigoapretandoelvolante—.¿Porqué,enlugardemostrarquiénsoyahora,meempeñoenseguirmostrandoa lapersonaqueesperanver?»,merecriminosinentenderquémesucedeconlagentedeestepueblo,queparecesacarlopeordemí.Cuandollegoalaestacióndeesquí,todavíaenreformas,detengoelJeepenla explanada, llegando hasta el borde del aparcamiento, ese borde en el quetantasvecesmesentédecrío.Recuerdoquepodíapasarmetodoundíafueradecasasinquesucedieranada,sinquenadiemeregañaraporhabermeescaqueadode las clases o por haber llegado tarde… Maldita sea, lo que hubiera dadoporque mi madre me hubiera castigado o me hubiera dado una torta para,seguidamente,abrazarmecomohacíalamadredelSombraconél.

«Pero¿túdequévas?¡Quenovoyahacercarreracontigo!¿Dóndetehabíasmetido, sinvergüenza? ¡Que eres un sinvergüenza!—lo reñíamientras le dabavariaspalmadaseneltrasero—.Vasamatarmedeundisgusto,pero¿túsabeslopreocupadaque estaba?No sabía si estabasbieno tehabía sucedidoalgo», ledecía abrazándolo con fuerza mientras yo me limitaba a ser un simpleespectador,unespectadorenlasombraquesólopuedeimaginarloquedebedesentirelprotagonista.

Rememoro esos días de mi infancia mientras el frío rodea mi ropa hastacolarsepormipielyclavolamiradaenlasmilesdelucesdelospueblos,enesas

Page 346: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

lucesquepodrían serun reflejode las estrellasdel cielo en la tierra,mientraspermito que esos recuerdos continúen abriéndose paso, viendo a ese niño quefui,esequeraramentellevabaropadesutallaporquesiempreutilizabalaropaque, las buenas madres, le daban a la mía, vieja y desgastada. Recuerdo quetodosmis pantalones llevaban parches en las rodillas y que, cuando se caían,simplementelosllevabaagujereadosporquenisemolestabaenponérmelos.

Recuerdollegaracasay,siteníalasuertedequemimadrehubiesellegado,encontrarmeconlacenahecha,pero,sihabíadobladoturno,merecibíalacasavacíayoscura.

Crecí como no debería crecer nunca un niño, con las necesidades básicascubiertasperoconmilesdecarenciasafectivasy,cuandolleguéalosviñedosylaencontréllorando,mevireflejadoenella,sóloqueellamesonrióyaferrólamanoque le tendíamientrasqueyome limitéaendurecerelgestoydarles laespalda a todos, anticipándome al rechazo que sabía que iba a venir yposiblementeequivocándome.

Endurezcoelgestodenuevo,conscientedequeesedisfrazconelquesolíavestirmemealejódelagentequeposiblementemehubieratendidosumanosiyo,comoella,lohubierapermitido;sienlugardemirarloscondurezaydesdén,les hubiera sonreído; si no los hubiera rechazado antes de que ellos merechazasenamí,comohehechohaceapenasunahoraenelsupermercado…«Yesosóloesculpamía»,pienso tragandocondificultad, sabiendoqueesapartejodidamíasiemprevaaestarahí,jodiéndolasinparar,sinpermitirquelaotrasemuestre.Conesepensamiento,recuerdoesafabulaquemecontóPedrocuandolleguéasucasa…

***

—Mira,hijo,todostenemosdentrodenosotrosdoslobosencontinuapelea:unlobonegrollenodeirayderabiaqueluchacontratodosincansablementeycuya alma, negra como una noche cerrada, está dominada por la tristeza, laautocompasión, el resentimiento, la superioridad y el ego, entremuchos otrossentimientos negativos, y otro lobo blanco, con un alma tan resplandecientecomo el mismo sol, uno que está lleno de paz, de amor, de serenidad, degenerosidad,dehumildad,deesperanzaydefe.Amboslobostratandedominartu corazón—medijomientras caminábamospor la bodegayyo lo escuchaba

Page 347: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

sintiendo su aullido retumbando dentro demí, recordando esa noche—, pero,comoen todas laspeleas, sólounopodráalzarsecon lavictoria. ¿Quiéncreesque lo conseguirá y dominará al otro?, ¿el negro o el blanco?—me preguntódeteniéndose, fijandosumiradaen lamíaycon todasuatenciónpuestaenmirespuesta.

—Elnegro—lerespondíconseguridad.—¿Porquépiensaseso?—replicóconseriedad.—No lo sé, he respondido sin pensar—mentí, pues lo sabía de sobra.Yo

elegíallobonegro,alúnicoquetuvefrenteamíyalquereconocíencuantomimiradaseposósobrelasuya.

—Teequivocas,ganaráelloboquetúalimentes—mecontradijo,yrecuerdoquesentícomosimedieranunpuñetazoenplenopecho—.Sitúalimentaslossentimientosnegativosdetuinterior,alimentarásallobonegroyvencerá,pero,si,porelcontrario,alimentaslospositivos,seráelblancoelvencedoryentoncestodocambiarápara ti—prosiguió, reanudandoelpaso,dirigiéndosealexteriormientrasyoguardabasilencio,dejandoquesuspalabrashicieranmellaenmí—.Séporquéhascreídoqueganaríaelnegro—mesoltóenigmático,consumiradafijaenlosviñedos.Recuerdoquemevolvíhaciaélcontemor,conesetemorquesientes cuando crees que has mostrado más de lo que deberías—. Tú hasalimentado al lobo negro hasta ahora, ¿verdad? Has menospreciado tanto alblanco que ha desaparecido, y has permitido que ese lobo negro tome fuerzadentrode tihastadominarteporcompleto—measegurósinmirarmemientrasyo tragabasalivacondificultad,planteándomesiese loboblancohabíaestadodentrodemí algunavez—,pero, si tequedas aquí,vas a tenerquecambiaryempezar a alimentar al otro lobo… Oye, sé que eres un buen muchacho, lointuyo,yporesonohe llamadoa lapolicía,peromehasrobadoyvasa tenerque pagar tu deuda —rememoro volviendo al presente de repente, comodespertandodeunaensoñación,preguntándomecómohesidocapazdeevadirmetanto.

A partir de ese momento empecé a alimentar al lobo blanco, rememoroevadiéndomedenuevo,comoarrastradoporalgúntipodefuerzaquemellevairremediablementehastamisrecuerdos.EmpecéaquererganarmelaadmiracióndePedroya imitarloparasermejorpersona…porély tambiénporella,y loconseguí, o, almenos, eso creo, y, no sin esfuerzo, logré que ese lobo blanco

Page 348: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

tomara fuerza frentealotro.«Conseguíqueesos sentimientosqueyonosabíaquealbergabaenmiinteriorllenaranmipecho»,piensohaciendomíasufrase,ytambiénaprendía serquiensoyahora,y lohicepor imitación,comoeseniñoque abre sus ojos almundo por primera vez e imita todo lo que ve. Imité suforma de trabajar, de hablar e incluso sus modales, hasta convertirme en elhombrequesoyenlaactualidad.

Alalimentaralloboblanco,aprendíaanteponerlosinteresesdelotrofrentealosmíospropiossiesoeralocorrecto;aprendíatendermimanoyasonreírsintemor a que no me devolvieran la sonrisa, y lo aprendí mientras ella crecía,mientras la observaba y, junto a su padre, se convertía en mi otro ejemplo aseguirconsuinocenciayconsuformadeverelmundo,rememorocondolor,conesedolorquehaidoconmigodesdequemerendíypermitíquemisdeseosseinterpusieranaloqueyosabíaqueeralocorrecto;esedoloryesadecepciónconmigo mismo que se han entremezclado con el amor inmenso, la pasióndesbordanteycontodoloquehevividojuntoaelladuranteestassemanas.Dossemanasenlasqueesosdosloboshanluchadoconferocidaddentrodemí,sobretodoestaúltima,enlaqueesaluchaseharecrudecidoyenlaquehanclavadosus colmillos en el otro, en la que los zarpazos han dejado su huellaensangrentada en la piel del contrincante y su piel abierta en carne viva, unaluchaenlaqueelblancosehaalzadocomoclarovencedoryqueahoramiraalnegro, acurrucado en un rincón, manteniendo sus piernas temblorosas en pie,mostrandosuscolmillosapesardeldolorlacerantequesienteensuinterior…

«Elmismodolorquesientoyo»,reflexionobajandomimiradahastaclavarlaenelsuelo.

Conreticenciaysólocuandosientomicuerpoempezaraentumecerseporelfrío, doy media vuelta para dirigirme hacia mi coche, consciente de que esalucha no ha terminado y que el lobo negro se recuperarámucho antes que elblancoy,cuandoesoocurra,quiénsabeloquesucederá.

Page 349: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO27

Obligándome a dejar de pensar, conduzco amparado por la oscuridad y elsilenciodelanoche,imaginandoaesosdoslobossentadosamilado,mirándoseconferocidad,mostrandosuscolmillos,perotandébilesque,demomento,sonincapacesderetomarlalucha,mientrasunapartedemí,bastanteimportanteyatenerencuenta,sólodeseaqueelnegroataquey,porprimeravezenaños,venzaalblanco.

Llego ami casa agotado en todos los sentidos y, tras guardar la comida ydarme una larga ducha, me acuesto sin cenar, deseando perderme en esaoscuridadquesóloencuentroenmissueños.

Despiertocuandotodavíanohaamanecidoy,traspicotearalgoenlacocina,me visto con mi equipo de BMX, necesitando que todos mis sentidos sevuelquenenalgoquenoseaestaansiavivademontarmeenelJeep,apretarelaceleradorconfuerzaynosoltarlohastallegaraLaRiojayaella.

CojomibicicletarecordandolaprimeravezquehiceBMXjuntoalSombray el Rata. Nos pasamos casi dos meses robando por todas las tiendas de lacomarcahastaquenoshicimosconunosequipajesquevalíanuncojónymediodel otro y, con una media sonrisa, rememoro las hostias que nos dábamos ycómo terminábamos en el refugio dándole a la botella. ¡Joder, cuántas veceshicimos bici cross conmedio pedo encima…! Lo que no sé es cómo no nospartimos el cuello, pienso con dolor mientras bajo la visera de mi casco,recordandoalRataycómonosconocimos.Menudaspiezaséramos…

***

Page 350: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¡Eh! Vosotros dos, los listillos de turno —nos increpó con chuleríamientraselSombrayyonosalejábamosatodaprisadelatiendacondosparesdeguantesescondidosbajolaropa.

—¿Nos hablas a nosotros? —le pregunté dándome la vuelta, más quedispuestoaliarmeapuñetazosconélsihacíafalta.Vamos,quegallitoallísólohabía uno y era yo, qué cojones, rememoro iniciando el descenso por lamontaña.

—Sí, listillo. Aquí, para que te enteres, sólo birlo yo, así que ya estásdándomeesosguantesquehasmangado.

—Estásquetelocrees—soltécarcajeándomeymeacerquéaél.

***

Menudashostiasnosdimosesedía,medigosonriendocontristezamientrassorteo obstáculos y me obligo a ir por rutas jodidas, recordando cómo esashostiasterminaronenrespetoy,mástarde,enamistad.NosconvertimoslostresenuñaycarneynosdenominamosanosotrosmismosLaSantísimaTrinidad.

YsiendoLaSantísimaTrinidad,crecimosyendoporcaminos tan tortuososcomo los que yo estoy tomando ahora mismo; caminos que nos llevaron atropezarnosconelalcohol,lasdrogasy,enmásdeunaocasión,apasarlanocheenelcalabozo;caminosconlosqueconseguí,finalmente,captarlaatencióndemimadre.

Meobligo a centrarmi atención en la ruta que he escogido, sorteando losobstáculos que voy encontrando a mi paso, con todo mi cuerpo en tensión,silenciandolavozquemegritaquemodifiqueladirecciónymedirijahaciaelrefugio, voz que ignoromientras aferro con fuerza el manillar y continúomidescenso.Sólo cuandonopuedomás,y con todos losmúsculosdemi cuerpoquejándose, inicio el regreso a casa, sintiendoque lo he defraudadoy que, dealguna forma, me he defraudado a mí también, imaginándolo sentado en esapiedrasonriéndomeyllamándomegallina.

—Estoy desentrenado, joder —mascullo cerrándome en banda, cuandodivisolacasaalolejos,haciendounúltimoesfuerzoporllegar.

—Estabaapuntodelargarmeydarporleyendaurbanaesechismequeandacirculandoporelpueblo—oigoquealguiendiceamisespaldascuandollegoalapuertadelgaraje.

Page 351: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Mevuelvolentamente,alzandolavisera,suciaporelbarro,paracerciorarmede que no estoy soñando, sintiendo mi corazón detenido a la espera decomprobar que no estoy teniendo alucinaciones y, cuando mi mirada seencuentraconlasuya,sonríoporprimeravezdesdequehepuestounpieaquí,yconesasonrisamicorazónreiniciasuslatidos.

—¿Yquédicenesoschismes?Nadabueno,seguro—contestoobservandosusonrisacanalla,viendodereojolaalargadasombradelafelicidad,esaquecreíaquehabíadejadoenlosviñedos.

—ViniendodeunodelosmiembrosdeLaSantísimaTrinidad,loraroseríaque dijeran algo bueno—me contesta acercándose a mí mientras yo hago lopropio—. Cabronazo hijo puta —me saluda, dándome un abrazo al que meaferroconfuerza—.Mecagoenlahostia,¡esverdadquehasvuelto!

—Esoparece—musitoobligándomeamantenermissentimientosaraya—.¿Y tú? Joder,macho, cuántos años sin verte—ledigo estudiando su rostro—.¿Cómoestás,Sombra?

—Hombre,simecomparocontigoycon tucasoplón,estoypara irapedirlimosna,pero,simecomparoconeltíoquefui,ahoraestoydeputísimamadre.

—Nosabescómomealegraoíreso.Coño,venaquí—lepidoabrazándolodenuevo,recordandolaspalabrasdeVal…

«¿Quieres que elVíctor jodido desaparezca? Pues soluciona lo que tengasque solucionar y reconcíliate con quien fuiste; sólo entonces podrás tomardecisionesimportantes…»

Yconesaspalabrasresonandoenmicabezayconmiamigo,esequefuemisombra hasta que acepté llevarlo conmigo, entre mis brazos, decido hacerlo,decidosanarmipasadocomointuyoquehahechoélconelsuyo,pormíyporestosdoslobosque,heridos,yacenenmiinterior.

—¿Vas a invitarme a entrar de una vez o temes que te quite algo?—mepregunta,soltándosedemiabrazo.

—Qué hijo puta, ya te cuidarás mucho de tocar algo —replico riendo,sintiendointactotodoelafectoquesentíporélenelpasado—.Venga,vamos,teinvitoamicasoplón—añadoabriendolapuertadelgarajeparaguardarlabici.

—Lahostia,tugarajeesmásgrandequetodamicasa—exclamaguardandosusmanosenlosbolsillos.

—Puesesperaasubir,tevasacagarenlospantalones—comentocogiendo

Page 352: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

elascensor,incapazdesubirporlaescalera,doloridocomoestoy.—Y no sabes qué a gusto voy a quedarme con esa cagada —contesta

dándome un puñetazo cariñoso, para seguidamente ponerse serio—. Oye,macho,nohaynadiequesemerezcamásquetúestacasaoconducirelpedazodecochequellevas,¿meoyes?

—Gracias, tío —le agradezco, reconociendo el afecto sincero en suspalabras, consciente de que en estos momentos estoy con una de las pocaspersonasquemeconocendeverdad—.Vamos,entraenmicabañita.

—Madre mía, macho, con tu cabañita —suelta observándolo todo conadmiración.

—¿Tienesprisa?—inquiero,frenándomeparanoabrazarlodenuevo.«Joderconmigo,meestoyconvirtiendoenlaprincesitadelcuento.»—¿Porquélopreguntas?—Porqueibaaducharme,acomeralgoyatirarmeenelsofá,¿teapuntasal

plano tienes a alguien esperando?—indago, a pesar deque lomás seguro esque,comoyo,notengaanadieesperando.

—Tengoadospersonasesperándome,perolasllamaréymequedaréconlapersonaquefuemihermanodurantemuchosaños—contesta,emocionándome.

—¿Tienespareja?—leplanteosinpoderocultarmisorpresa.—Mujerehijo.Quién lohubieradicho,¿verdad?—anunciaconelorgullo

copandosuspalabras.—¡Nojodas!,¿deverdad?—Lárgateaducharte,tío,apestas,joder;luegoyanospondremosaldía.—Quéfinolis tehasvuelto—lerespondosonriendomientrasunosaullidos

lleganhastamisoídosyme tenso…Mierda, tanto airepurodebedehabermetrastornado.

—Hayunloboenormemerodeandoporlazonadesdehacedías;ándateconcuidado,tío—meadviertemientrassientoamislobosdespertarconeseaullido.

—Lotendré.Voyaducharme.Tienescervezasenlaneveraycomidadeesaprefabricada para aburrir. Venga, haz algo de provecho y prepara algo paracomer—ledigoantesdelargarme.

«Joder,sehacasadoytieneuncrío»,piensoconamargura,desprendiéndomedelaropa,metiéndomebajoelchorrodelaguacalienteyviendocómoelvaporcomienzaaempañarelenormeventanalquetengofrenteamímostrándomeuna

Page 353: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

panorámica impresionante de las montañas y, de repente, imagino a ese lobomerodeandoporellas,negrocomolabrea…Yolatuveaellaytuveunapequeñamuestrade loquepodríahaber sidomividasinohubiera renunciado,pero lohice,renuncié,renunciéavivirloúnicoquedeseabavivirylohiceescuchandoelaullidodeese loboblancoquevinoenformadevozhumana, lavozdeeseVíctor que apareció cuando llegué a Páganos y conocí a Pedro; esa voz queescuchécuando,enelfondo,sóloqueríaescucharlaotra;esaqueveníaguiadapor otro aullido, uno largo y sostenido, uno cuyo dueño tenía el pelaje negrocomolanocheyqueahorayaceacurrucadoenunrincón,reponiéndosede loszarpazos y de las heridas de otro lobo, uno que me mira mostrándome suscolmillosyquesemantieneenalerta,apesardequeyanopuedemás.

Unavezlistoysintiéndomeligeramentemejorahoraquemehedesprendidodevariascapasdebarro,medirijoalsalón,dondeencuentrolamesapuestayeloloracomidainundándolotodo.

—Vaya, vaya…Por lo que veo te has convertido en toda una amita de sucasa—sueltosocarrón,yendohacialamesaparacogerunapatatafrita,alavezqueoigolosrugidosdemiestómagoprovenientesestavezdelhambrequetengoynodealgúnlobo—.Joder,apenashecomidodesdequehellegadoaquí—mequejodecaminoalanevera.

—Eso es porque te falta una mujercita como Dios manda—me contestaguiñándomeunojoyenviándomeunbeso,haciéndomesonreír.

—Yasabesloquepiensosobreeso—ledigocogiendounacerveza—.¿Túnoquieres?—lepregunto,viendosuvasodeagua.

—Hace mucho que dejé de querer —me indica, cogiendo la fuente decomidamientrasnosdirigimosalamesa.

Derepenteydenuevoarrastradoporesafuerza,recuerdoaCasiyesedíaencasadePedro…

Recuerdoelolor a carnea labrasacomosi tuviera labarbacoa justoamilado; recuerdo el pálpito de mi polla cuando ella apareció con ese vestidoajustado que marcaba todas sus formas; recuerdo esa comida, las pullas deCasilda,elsabordesuvinoenmibocayeldesubocaenmilengua;recuerdoquecasimelafolléenelbaño,elansiaportocarla,porhundirmimiembroensuinterioryporliberarmedetodoloquesentíaatadodentrodemí…Lorememorosintiendocómomisexoreaccionayeseloboqueyaceacurrucadoenmiinterior

Page 354: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

abrelosojos,delmismocolorquelosmíos,paraclavarlosenelcentrodemispupilas antes de soltar un aullido prolongado y lastimero. Antes de seguirrecordando, me obligo a reaccionar, posandomimirada en la comida que hapreparado mi amigo, alejando el olor a humo y a carne de mis recuerdos,forzándome a hacer a un lado ese patio y centrarme en el salón de mi casa,reacondicionandomimenteparaquelosviñedosdesaparezcandeellaysólolospinos, que se vislumbran a través del ventanal, ocupen mi presente y mispensamientos,obligándomeadejardeverlaportodaspartes.

—¿Estás bien, macho?—me pregunta el Sombra, y alzo la mirada hastaposarlasobrelasuya,conlaimagendeesedíatodavíademasiadopresente.

—Claro—lemiento,dándoleunlargotragoamicervezaacontinuación—.Ytú,¿desdecuándobebesagua?

—Desdequetuvequeelegirentrepalmarlaoseguirjodiendo.—Y,porsupuesto,elegisteseguirjodiendo—sueltosonriendo—.¿Sabes?Te

tengoaquí, ami lado,y siento como si nohubierapasadoel tiempo,pero, enrealidad, sí lo ha hecho. ¿Cuánto hacía que no nos veíamos? —le preguntomientrasélsesirveunpocodecomidaymetiendelafuenteparaqueyohagalomismo.

—Quinceaños—afirmasindudarlo.—Joder,macho,cómopasaeltiempo—masculloempezandoaservirme—.

Cuéntamequésucediócuandomelarguéyporquéhasdichoesodequecasilapalmaste—lepidomirandosurostromarcadoporeltiempoylamalavida.

—Mejodisteis,elRataytú—merecriminasinunápicederencorenlavoz,quitándomeelapetitoderepente—.Medejasteissolo,tío—prosigue,yconsuspalabrasviajohastaesedía…

***

—Melargo,Sombra—leanunciéapretandolamandíbulatrasenterrartodaslascosasdelRatabajoelenormepinoquesealzabajuntoanuestrorefugio.

—Todavíaespronto,tío.¿Quévasahacerencasa?Además,¿nocreesquedeberíamosrezaroalgoasí?—mepreguntó,observandolacruzdemaderaqueyohabíaclavadoenelsuelo,hechacondosramas,yquesiemprenosrecordaríadóndeyacíaunapartedenuestroamigo.

—ElRataselimpiaríaelculoconnuestrosrezos—mascullétragándomelas

Page 355: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

lágrimas,sintiendotantodolorenmiinteriorqueapenasmesalíalavoz.—Yalosé—respondióacercándosehastalacruzysentándosefrenteaella

—.Quécapullohassido,Rata.Dijistequenoibaapodercontigoymírate,hijoputa…Miraquelargarteahora,cuandonossalíatancojonudamentebienelplan.

Elplan,pensécondolor,eseplanconelquenosestábamosconvirtiendoenunosladronesaempezaratenerencuentaconapenasdieciséisaños.

—Elplansehaterminado—sentenciémetiendomismanosenlosbolsillos—.Sombra,mírame—lepedí,sintiendoelmundoparalizarsecuandomisojosseencontraronconlossuyos—.Nomelargoamicasa,melargodemicasa—maticé,viendoalinstantecómosurostrosedescomponía.

—¿Qué dices, tío?—mepreguntó, levantándose del suelo para casi correrhaciamí.

—Seacabó,macho.Élhamuertoyyonoquieropalmarlaaquí.Quierovermundo,descubrirquéhaymásalládeestospinosydeesteputopueblo.

—Puesme voy contigo, paso de quedarme aquí sin vosotros—soltó,másquedispuestoaseguirmealládondeyofuera,comosiemprehabíahechodesdequeéramosunoscríos.

—Mevoysolo,Sombra—repliqué,sintiendoeldolorazotarmeelpecho,yrecuerdoque, conmispalabras, clavémispies en el suelo con fuerzaparanocaerderodillas.

—Deesonada,tío.Sitútelargas,yomelargocontigo—afirmóconvencido—.Soytusombra,macho,¿lorecuerdas?Túmepusisteelmote;nopuedes

irtesintusombra,esimposible—insistió.—Sombra,tútienesunafamiliaquetequiere.Piensaentumadre,capullo;

nopuedeshacerleesoy,además,eresmenordeedad,nopuedesirte.—Nitútampoco,tútambiéneresmenor—merecordó.—Amimadrenoleimportaráquemeesfume;alcontrario,creoqueseráun

alivioparaella—rebatí,sintiendootroazoteenelpecho.—Pues espera dos años y nos largamos juntos —me pidió, intentando

convencerme.—Dosañosesdemasiadotiempoparamí;measfixio,tío,necesitolargarme.Esteúltimoaño,conlodelRata,hasidomuyduro,ylasituaciónenmicasa

yconmimadreesmuyjodida,demasiado.Necesitoirme,entiéndelo.—¿Yquéharéyosintiysinél?Nopodéisdejarmelosdos,sobretodotú.

Page 356: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Víctor,erescomomihermano,¿quédigomihermano?,erescomounbrazomío…Joder,nopuedesirte;hazlopormí,colega.

—Sombra,estaramiladonotebeneficia.Malditasea,piensaenelplan,pormicabezasólorondanmalasideasytútienesunaoportunidadquenielRataniyotendremosnunca.Éllahapalmadoyyoterminaréhaciéndolocuandounodemisplanessalgamal.Aprovechatuvida,tío.Tuspadresquierenqueestudiesytienenpelasparaquepuedashacerlo;hazlopormíyporelRata,conviérteteenuntíodecojonesydalesunahostiaatodoslosdeestepueblo.

—Capullo,pero¿quédices?¿Cuántasrayastehasesnifado?—mepreguntó,empezandoacabrearse.

—Ninguna, ni tampoco he bebido, antes de que lomenciones—le aclaré,dirigiendomimiradahacialacruz,imaginandoamiamigosentadoenunadelaspiedrassituadasjuntoaella,observándonos—.Tío,mehasseguidoduranteañosyhasmalgastadotuvidahaciéndolo.¡Mierda!,élhamuerto,perotúno,ytieneslaoportunidaddevivirpornosotros,tieneslaoportunidaddeconvertirteenuntío de provecho; hazlo—le pedí con voz contenida, volviéndome hacia él ysorprendiéndomealversuslágrimasrodarporsusmejillas—.Vengaya,macho,nomeseasniñita—ledijemientraslasmíassalíanaborbotonespormisojos.

—Niñitatú,cabrón,queestásllorandotambién—replicó,abrazándomeconfuerza.

Y abrazados, frente a la tumba del Rata, lloramos como creo que nuncahabíamoshecho.

—La Santísima Trinidad no puede desaparecer—comentó separándose demí,secandosuslágrimasconsucamiseta—.Esalgosagrado,colega.

—Yahadesaparecido,tío;hadesaparecidoconél—leindiqué,secandolasmíasconelpuñodemicamiseta—.PutocánceryputoRata,quedijistequenopodríacontigo—soltécondureza,cabreadoconelmundoenteroyconeseDiosdelquemimadrehablabatantoyquesehabíallevadoamiamigo,aesecabrónqueeramifamiliajuntoalSombra.

—Notevayas,tío,nomedejessolo—mepidió,recordándomealcríoquefue,yconesaspalabrasregresoamipresente,alpresentedeestesalón,deestacervezaydeestacomidaprefabricada.

***

Page 357: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Losiento,tío,pero,simehubieraquedadoaquí,hubiesesidoelsiguienteenestirarlapata—sentencioanclandomimiradaalasuya—.Largarmefuelamejordecisióndemivida.

—Ylapeorparalamía—merebate,haciendoaunladosuplatodecomida,quenohatocado—.Notehacesunaideadecómomesentícuandotefuiste;sinelRataysinti,mesentíhuérfano.Noencajabaenningúnladoylosestudiosnoeranlomío.

—¿Yquéhiciste?—lepregunto,arrugandoelceño.—Seguirelplan,perosolo,y,alfinal,cuandocumplílamayoríadeedadyla

situación en mi casa se había convertido en algo insostenible, me largué yotambién.Queríavermundocomotúymedijeque,si teníaunpocodesuerte,incluso podría encontrarte, pero ni te encontré ni vi mundo, más bien me loesniféymelobebíenterohastaque,hechomierda,mispadresmerecogieronymellevaronauncentrodedesintoxicaciónenelqueestuvevariosaños.Joder,quéputavidaleshedado…Peronoserindieron,tío,ygraciasaellosaquíestoy,dandoguerratodavía—mecuentaconorgullomientrassoyincapazdearticularpalabra—.EnesecentroconocíaRaquel,unadelaspsicólogasquemetrataban,ygraciasaellasalídeesemaldito túnelyporella,pornuestrohijoypormispadresmemantengosobrioylimpio.

—Joder,Sombra…pero¿cómollegasteaesepunto?—inquiero,sintiendoeldolorestrangularlabocademiestómago.

—Porqueeravulnerablea lasdrogas;eso loaprendí tarde,yaenelcentro.Lo peligroso no son las drogas, sino la vulnerabilidad que cada uno tenemosfrenteaellas.Yoloeramucho,ylleguéaunpuntoenelquenopodíaparar;letendíunpulsoaladrogayalabebidaquecasiperdí,ytejuropormividaquenuncamásloharé.Seterminó,tío;seterminóhaceañosyahoratienesfrenteatiauntiposanoobsesionadoenquesuhijonovivaloqueyoviví.

—Caíste en la droga pormi culpa—le digo sintiendo los remordimientosazotarmeelpecho—.Fuiyoelquepillóporprimeravez,notú.

—Caíporquequisecaer—replicaconfirmeza—.Dejadeculparteportodo.Joder,macho,enesonohascambiadoenabsoluto,siemprecargandoconel

pesodetodaslasconsecuencias—mereprocha,yalzolamiradahastaposarlaenlasuya—.Podíahaberdichoqueno;yomeconocía,sabíaqueelviciomeibayque ibaagustarmeyquerríamás,comoconel tabacoo labebida.Losabíay,

Page 358: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

aunasí, laprobéyseguímetiéndomerayas, inclusocuando túoelRatanoosmetíaisninguna.Pintémuchasmásquevosotrosdos juntosyeso fuedecisiónmía, no tuya—añade, apoyando sus antebrazos en lamesa, sosteniéndome lamiradaeintentandoconvencerme—.Mírate,tío…tienesunacasaquevaleunafortuna,uncochequeyoniensueñospodrépagarmenuncaymantienesalahijadeputadetumadre,yloconseguistesaliendodeaquí,cuandotealejastedetodaestabasuraydemí.¿Quiéncreesqueperjudicabaaquién?¿Porquénopiensasquequizáfuiyoquientejodiólavida?

—Nodigasestupideces,Sombra;yonacíjodido.—Y, a pesar de eso, sobreviviste.Yo nací sin estar jodido yme jodí solo.

Oye,hazteunfavorymiraaltíoqueveoyo.CuidastealRatacasimásquesupropiamadre,loacompañasteatodaslassesionesdequimio,loobligasteasalirdecasaparaquenosecomieralacabezay,sinohubiesesidoporquenote lopermitían,tehubierasacostadoasuladoporlanoche;esmás,estoysegurodequelehubierasdadotuvidasihubiesespodido—afirma,ylomirosintiendoeldolor atravesar mi pecho—. Ese día me obligaste a que le diera mi manomientras tú le sujetabas la otra yme obligaste a hacer algo que, de no haberhecho,mehubierarecriminadotodalavida.FuimosLaSantísimaTrinidadhastaquecerrósusojosy,silofuimos,fueporti—añade,ysientoquemigargantasecierra.

—Eraloqueteníamosquehacer,teníamosqueestarasuladohastaelfinal.—Y luego se te ocurrió enterrar su ropa y todas sus cosas en el refugio y

fuiste tú quien hizo la cruz, ¿lo recuerdas?—me preguntamientras pierdo lavista en el paisaje que aparece a través de la ventana, rememorando aquellostiemposdenuevo…

Page 359: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO28

Me recuerdo sentado en el suelo; recuerdo cómo la humedad de la tierratraspasaba mi ropa hasta mojarla; recuerdo la rabia, la impotencia, ladesesperaciónyloperdidoysoloquemesentíamientras,llorando,uníalasdosmaderashastahacerconellaslaseñaldelacruz;recuerdolasganasqueteníadedarleunahostiaatodoelmundoycómometemblabanlasmanosmientrasuníaesasdosmaderas.

—¿Vasaverlo?—lepregunto,haciendoaunladoyotambiénlacomida,tanfríacomomialma.

—Todos los 14de cadames.Esedía tengounahora reservadapara él; esalgoquesabemifamiliayquerespeta.¿Túhasido?

—No. No he podido ir todavía, y no porque no haya tenido tiempo—leconfieso—.Noestoylistoparavolverallí—mascullocondolor.

—¿Quieresquevayamosjuntos?—Si no te importa, prefiero ir solo, al menos la primera vez —musito

dándoleunlargotragoamicerveza,sintiendocómopasacondificultadpormigarganta—.¿Todavíaestáelrefugio?

—Ytantoqueestá;fueloprimeroquecompréconmisprimerosahorros—medice,sorprendiéndome.

—¿Hascompradoelrefugio?Creíaquenoestabaalaventa.—Y no lo estaba, pero ya me conoces, puedo ser peor que una mosca

cojonera y, total, el señor Inocencio lo tenía abandonado; éramos nosotros losquelomanteníamosenpie,asíque,alfinal,cedióymelovendió.Menudapastamecostólaputacasitadeloscojones—meindica,sonriéndome.

Page 360: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Eresenorme, tío.Yonuncahubierapensadoencomprarlo—ledigoconadmiración,puesnisiquierahesidocapazdevolveraeselugarentodosestosaños.

—Fueunaformadereconciliarmeconmipasado;enlugarderobar,compré.Fueloprimeroquehicelegalenmivida—suelta,haciéndomesonreírconsu

comentario.—Tehubieraayudadodehaberlosabido,ynomerefierosóloa lacompra

delrefugio,lotienesclaro,¿verdad?—Porsupuesto,tío,pero¿sabesqué?,quemevinobienhacerlosolo.Centrarmeen tenerunobjetivoclaromesirvióparamantenermelimpio.Y

tú,¿qué?¿Quéhasidodetuvida?Joder,esincreíblequenonoshayamosvistoenquinceañoscuandoéramosinseparables.

—Supongo que la muerte del Rata lo cambió todo—digo, levantándomepara coger otro botellín de cerveza—. Oye, ¿te importa que beba? No lo hepensadohastaahora—ledigo,frenándome.

—Teaseguroque,cuandoregresasdelinfierno,enloúltimoquepiensasesenvolver—mecontestaconunatristesonrisa—.Nisiquierabebocerveza0,0pormiedoaquemarmelaplantadelospies.

—¿Sabes? Creo que yo hubiera terminado como tú o peor si no hubieseconocido a Pedro —le explico, dándome media vuelta sin llegar a coger elbotellín.

—¿QuiénesPedro?—mepregunta,alzandounacejaalvercómollenomivasode agua—.Sigues siendoelmismoVíctorde siempre,maldita sea—meindicaconorgullo,ysonríonegandoconlacabeza—.Aunquetemuerasporunaputacerveza,nolacogerás,¿verdad?

—Pedro fueelúnicohombreconelquenuestroplan falló—leempiezoacontar, sonriéndole,haciendoaun ladoel temadelaguay recostándomeen lasilla—.Cuandome larguéde aquí, no sabía a dónde ir, no tenía dineroymispertenenciascabíanenunamochila,ydurantedosañosmedediquéamalviviryavermundo…

—Telargastesindespedirte—merecrimina.—Lasdespedidassonunaputamierda.Sivasairte,tevasypunto.¿Dequé

sirvepasarlomalyalargaralgoquevaaterminarsucediendodetodasmaneras?—leplanteoendureciendoelgesto,recordándoladerodillasenelsuelocon

Page 361: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

elrostroanegadoporlaslágrimas.«Joder, no tenía que haber mirado por el espejo retrovisor», me riño,

evadiéndome de nuevo, recordando cómo estuve a punto de frenar en seco ycorrerhaciaella,sintiendocómoesedolorlacerantequeparecenoquererremitirseincrementahastaahogarme.

—¿Enseriolopreguntas,macho?Tú,túquemeobligasteacogersumanoyestar ahí hasta el último momento, deberías saber lo importante que es unadespedida—merebatecondureza,sorprendiéndome—.Siyonohubieraestadoahí,asulado,¿cómocreesquemehubiesesentidodespués?Aunqueseaduro,teaseguroqueunúltimoabrazoounaúltimasonrisaquepuedasrecordarsiempreseránmejorquelanada,quefueloqueyoencontrécuandofuiatucasa.Fuisteuncabrón,tío,ydurantemesesestuvecabreadocontigo.

—Losiento—medisculpo,sintiendocómoeselátigonodejadeazotarmipecho—.Supongoque teníamiedodeesadespedida—leconfieso finalmente,trasunosminutosdesilencio—.Tútambiénerasmibrazoy,sinelRata,laúnicapersonaalaquequería;teníamiedodeverteynosercapazdeirmey,créeme,necesitabahacerlo—leexplico,llevándomeelvasoaloslabiosytragandotodoel dolor que siento, arrastrándolo con el agua, recordando lo duro que fui conellajustoporesemiedo.Miedoanosercapazdemarcharme,aldolorqueestabasintiendo,aloquevendríadespuéscuandoellanoestuvieraconmigoymiedoarenunciaralaúnicapersonaquequeríamásqueamivida.

—Oye,¿estásbien,macho?—mepreguntaalvermirostroensombrecido.—Claro—masculloapretandolamandíbula,recomponiéndolo.—¡Yunamierda!Puedequehayanpasadoquinceaños,peroereselmismo

Víctorquerecuerdoy,cuandoaprietaslamandíbulaasí,esporquealgotepasa.Venga, suéltalo, colega. Yo te he contado mis mierdas y ha llegado el

momentodequemecuentestúlastuyas.—¿CómotesentiríassituvierasquerenunciaraRaquel?Sellamaasí,¿no?—Nuncarenunciaríaaella—measeguraconfirmeza—.Aunqueelmundo

fuera a acabar, pormi vida te juro que terminaría con nosotros cogidos de lamano.Nuncaenmividarenunciaríaaella.

—¿Ysiparaellafueramejorquelohicieras?¿Tampocorenunciarías?—Esosólosucedeenlosculebronesquevemimadre.Mira, tío,siquieres

estar, estás; buscas la forma, pero te aseguro que, si quieres de verdad, no

Page 362: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

renuncias. No me vengas con mariconadas. Yo era un puto drogadictoalcoholizado y ella, la psicóloga del centro, ¿crees que lomejor para ella eraestarconmigo?Porsupuestoqueno,peroesonomefrenó.

—Lotienestúmásclaroqueyo—ledigo,anclándomealasillaparanoiraporlaputabotelladewhisky.

—Ya te he dicho que, cuando regresas del infierno, ves las cosas con otraperspectiva.¿Aquiénhasrenunciadosipuedesaberse?

—Amisbrazos,amispiernasytodomiyoentero;alaúnicamujerconlaque,dehaberestadodispuesto,lohubieraintentando.

—Quéestupidezmásgrande.¿Yporquélohashecho?—PorqueellaesmodeloyteníalaoportunidaddelargarseaNuevaYork.Iba

a renunciar a su vida entera por mí, ¿en serio le hubieses permitido eso aRaquel?¿Hubieraspodidovivirconeso?

—¿YporquénotehaslargadoconellaaNuevaYork?—mepreguntacomosinada—.Sideverdadlaquieres,¿porquélahasdejadoir?

—Porqueeslomejorparalosdos—musito,sintiendocómoeselobonegroempiezaarecuperarlasfuerzas.

—Esono te lo crees ni tú—me rebate, totalmente convencido—.Búscateotraexcusa,macho,porqueésanomeconvence—añade,haciendoquerecuerdeesanochequeledijequenoqueríatenerparejanihijosysuscontestaciones,tanparecidas a las del Sombra, y busco en mi interior una explicación que merecuerdeamímismoporquélahedejadoir.

—Supongoqueporquelavicreceryporque,enelfondo,siemprepenséquelonuestronodeberíahaberempezadoyqueellasemerecíaalgomejorqueyo.

—¿Algomejorquetú?Puesyapuedebuscar,capullo;igualconunpocodesuerteencuentraalgoqueseteparezca.

—Tienediecinueveaños,tío,esunacríatodavía.Joder,nosllevamosdoce.—¿Y?¿Dóndeestáelproblema?Porqueyonoloveo.—¿Me lo preguntas en serio?Tiene toda la vida por delante, apenas tiene

unospocosañosmásdelosqueyoteníacuandomelarguédeaquí,yquieroquevivasuvidasintenerquerenunciaranada;yasabesqueesodetenerparejaycríosnoesparamíynovoyapermitirqueellasenieguealgoasí.

—Acabasdedecirqueporellalointentarías.—Siquisieraintentarlo—matizo—,quenoquiero.Joder…Nisiquierasélo

Page 363: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

quequiero…Mividanohasidofácilytengodemasiadasmierdasdentrodemí;no quiero arrastrarla conmigo —replico, y guardo silencio unos instantes,pensando—,noquieroarruinarsuvidacomoarruiné lademimadre—añado,poniéndolevozalverdaderoproblemaconelquehecrecido.

—Tumadresearruinólavidaellasolayfuetanhijadeputaqueteculpóatide sus errores. Demasiado bien le saliste para lo que recibiste en casa ydemasiadobienteportasconellaahora;nomedigasquetienesmierdascuandola única que las supura es ella. Escúchame, macho: si quieres a esa chica,tendrías que ir a por ella y dejarte de historias. Si ella quiere renunciar, esproblema suyo, como el mío fue esnifarme el mundo entero, y, si no quiererenunciar,puesveteconellaydejadesertanjodidamenteestúpidoypensarqueno tienes derecho a nada —sentencia con dureza, guardando luego silencioduranteunossegundosmientrasyomesientocomoesecríoquefui—.Eseso,¿verdad?Crees que no tienes derecho y que nomereces estar con una tía asíporque ese puto sentimiento de inferioridad sigue ahí. Joder, macho, si nosupieraqueteníatodaslasdeperder,tedaríaunabuenahostiaahoramismo—sueltarecostándoseensusilla.

—Por supuesto que no es eso—niego, recostándome en lamía, retándoloconlamirada.

—Escierto,noessóloeso…Quieresquesehagamodeloporquetumadrenopudoserlo,porquefollósinunputocondónysequedópreñadadeti.Quieresque sehagamodeloparaqueviva loquecreesqueno lepermitistevivir a tumadre¿voybien,verdad,capullo?—mepregunta,consiguiendoqueenmudezcay sienta cómo esos latigazos se incrementan hasta hacerme sangrar—. A vercuándoteenteras,colega:túnolearruinastelavidaatumadre,fueellalaquetelaarruinóaticonsuamargura,consuindiferenciayconsurencor,pero¿sabesunacosa?,sinollegóasermodelofueporque,enelfondo,nolodeseabaconsuficiente fuerza, y eso te lo digo yo, yo, que viví en una puta caldera delinfierno,quemándometodoslosdías;yo,untíoquevivíaparaesnifarcocayporel que nadie daba un céntimo; ¡¡yo!!—me dice, poniendo sumano sobre sucorazón—,untíoqueconsiguiósalirdeesaputacaldera,primeroponiendounpiefueradeella,luegoelotroy,finalmente,echandoaandar.YosolodejéatráseseputofuegoymeaferréaRaquelyamividaporquequeríahacerlo;siellahubieraqueridoserlo,lohubiesesidoynohabríaterminadolimpiandoculosen

Page 364: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

elhospitalosirviendomesasenelbar.Nodejesquesuspalabras teafectenymiraquiéneres,miraloquehasconseguidoycréeteconderechoatodo,porquelotienes,¿meoyes?Siquieresaesachica,veaporellayolvídatedetodosesosreprochesquetumadrepusodentrodeti.

—Lamadrequeteparió,alfinalseráverdadquequiensejuntaconuncojoterminacojoymedio.Joder,macho,comotumujersedescuide,tehacesconsupuesto—replico,intentandonopensardemasiadoensuspalabras.

—Hedadodepleno,¿noesasí?—Larealidadesmuchomássimple—reconozcocruzando losbrazosbajo

mipecho—:SinoheidoaNuevaYorkniheluchadoporellahasidoporquenohequerido;ellatienetodasuvidapordelanteylamíayaestávivida;noquieroserunputolastreparaellanitampocoprivarladenada.

—¿Puedesdecirmedequévasaprivarla?—De lo que tú has formado, de una familia; yo no la quiero, no quiero

mierdasdeésas;noquieroquelafelicidaddenadietengaquepasarpormíysí,puedequemimadretengaunapartedeculpa,peroyaestáhechoynosirvedenadaculparla.Siyosoyasíesporquealomejortampocoheluchadoporserdeotra formaenesesentido,yyaestá,nohaymás.Follamos,nosquisimosyseterminó;ellaselargaráaNuevaYorkyseconvertiráenlatopmodelquedeseaser y, cuando regrese, dentrodeunos añosy con todos sus sueños cumplidos,esperoquepodamosmirarnosalosojosysonreírnos…Noesperomás;conquenomeodie,tengomásquesuficiente.

—Menudabasuraacabasdesoltarme.Esonotelocreesnitú,colega,peroadelante,nohaymásciegoqueelquenoquierever,quemelodiganamí.Tútehascontadoesahistoriayhastatelahascreído,yniyoninadieseremoscapacesdeconvencertedelocontrario;sóloesperoque,dentrodeunosaños,cuandoellaregreseylamiresalosojos,nosientasquelajodiste.

—Teaseguroquenovoyasentireso—afirmo,sintiendolamiradadellobonegroclavadaenmialma.

—Deputamadre;estuvida,colega,vívelacomogustes—medicealzandosuvasodeaguayhaciendocomosibrindaraconmigo—.¿Ypuedosabercómose llama ella? Si es una modelo conocida, igual sé quién es —me plantea,llevándoseelvasoaloslabios.

—Valentina Domínguez —musito, oyendo un aullido largo y sostenido

Page 365: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

proveniente del exterior, el mismo aullido que oigo yo proveniente de miinterior.

—¿Valentina Domínguez? ¿Has dicho Valentina Domínguez? ¿La delanunciodeCartier?¿Laqueposabaconunperroylasjoyas?—inquieresindarcrédito,yaprietolamandíbula,¡putoanuncio!—.Nomejodas,macho…Tengomitallerempapeladoconlasfotosdeesereportaje.

—Puesyaestásquitándolas,colega—siseoentredientes,sintiendolarabiaarderdentrodemí,unarabiaposesivaydañina—,otelasquitaréyomismo—leadviertocondureza.

—¡Yunaputamierda!Túlahasdejadoyesasfotossonpúblicas,asíque,siquieres conservar tus manos intactas, dejarás esas fotos donde están —mereprendeconseriedad—.¿Cómohaspodidodejaraesatía?¿Estásimbéciloquétepasa?Joder,esunamuñeca.

—Deja de hablar de ella así —mascullo levantándome y yendo hacia lachimeneaparaprenderlefuegoa la leñaque,apiladaenella,seencuentra listaparaarder—.Ellafueminiña—musitosinserconscientedequeheempezadoahablar, de cuclillas frente a este fuego que está empezando a tomar fuerza—.Cuando llegué a los viñedos, tenía seis años… Figúrate si era pequeña queestabaescondidadebajodeunavid, llorandoporquesumadrehabíamuerto,ypensé«unproblemamenosparati»,peronoselodijeyletendímimano,esaquetantasvecesdeseéquemeofrecieranamíy,apartirdeesemomento,fueminiñayconellavivíesaniñezsencillaysinproblemasquenosotrosnovivimos.

Joder,eracomomihermanapequeña.—Yesahermanapequeñacreció,ydequémanera.—Y te aseguro que no estaba preparado para eso. Joder, de repente tenía

tetas y un culo que no podía dejar demirar, yme di asco, tío—le confieso,sentándomeenelsofáfrentealachimenea,conlavistaclavadaenlasllamas—.Durante tres años estuvo fuera de casa y perdimos el contacto —le cuento,evitando los detalles que son sólo nuestros—, pero, cuando volvió, necesitérecuperaresapartedemíquehabíaperdidocuandosemarchó.

—Necesitabasrecuperartusbrazos,tuspiernasytodotuyoentero,¿verdad?—inquieredandoenelclavo.

—Creíaquepodríamosvolver a ser amigosy recuperar esoqueperdimos,pero es difícil recuperar algo que ya no está ahí—mascullo, negando con la

Page 366: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

cabeza—,cuando la amistadyel cariño sehan trasformadoenalgo tan fuertequeinclusoescapazdepasarporencimadeti.

—Ytelafollaste—mecortadenuevo.—Ymeenamorédeellacomounputocabrón—admito,volviéndomepara

mirarlo.—Y aun así la has dejado ir como has dejado de beber cerveza o, como

ahora,estásevitandoiraporelwhisky,apesardetenerlosnudillosblancosdetantoapretarlos,porquecreesqueeslomejorparamí—mediceconafecto—,porque crees que, si bebes, querré beber contigo…Pero ¿sabes una cosa?, notienesniputaideadenada.Déjamedecirteque,aunquetebebieraslasreservasde todoOrdino y lo hicieras frente amí, yo no querría probar ni unamalditagota, porque he vivido cosas que afortunadamente tú nunca vivirás en toda tuvida.Eresunimbécil,tío—meespetaconseriedad.

—Yaloséy,aunasí,nopuedodejardeserlo—farfullo,dirigiendolamiradaotravezhaciaelfuego.

—Pues que te aproveche, joder—suelta—, pero ten clara una cosa: vas aarrepentirte, porque te aseguro que una tía como ella no estarámucho tiemposolayenNuevaYorkconoceráacientosdetíosmásquedispuestosa…bueno,yasabes—medice,yaprietomásmispuños,recordandoalitaliano.

—Yalosé—lerepito,apretandolamandíbula.—Y, aun así, novas ahacernada.Oye, déjameque tehagaunapregunta:

¿quésucederásiellaeligemal?¿Ysi,entretodoslostíosqueconoceenNuevaYork, elige al tío equivocado?, ¿al tío egoísta que sólo piensa en él? Tú hasrenunciadoaellaporquequieresque lo tenga todo,peroesonoesgarantíadeque vaya a tenerlo—me señala con seriedad, mientras que yo mantengo mimiradaclavadaenlasllamasyeseaullidonodejaderesonarenmicabezayenmicorazón—,perocontigosíquelohubieratenido,pormuchoquedigasytedigas, contigo lo hubiese tenido todo…como lo tuveyoo lo tuvo elRata; túfuistelomejorquepodíahabernossucedidoaambosynilosupisteentoncesnilosabesahora.

—Dejaeltema,tío;estamosgastandodemasiadasalivaenalgoqueyaestádecidido.Sécuálesmi futuro, lo tracéhaceañoscuandoconocíaPedroynohayvueltaatrás.

—Otravezesehombre,¿puedesdecirmequiéncoñoes?

Page 367: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Supadreyelhombrequecambiómivida.—Joder,macho.Lotuyohasidounculebrónentodaregla.—Mividaempezóallí,Sombra,enesosviñedos—rememoro,evadiéndome

aesosdías—,cuandonuestroplanfalló…—Quécapullos,macho.Losdosllevandoacabounplanqueteníaqueserde

tres,¿recuerdascuandoloideamosenelrefugio?Menudascabecitaspensantes—sueltariendo.

—Sitodoeseingenioqueteníamoslohubiéramosaplicadoenlosestudios,hubiésemossidolosmejoresdelaclase.

—Enelcasodequehubiéramossabidocuáleranuestraclase—merecuerdadivertido—.Madremía,macho,¡menudaspiezaséramos!

—Elorgullodelpueblo,sinlugaradudas—matizosonriendo.—Yque lo digas, tío; lo que no sé es cómonopusieron el nombre deLa

SantísimaTrinidadaalgunadesuscalles—añadecarcajeándose.—Porque nadie hubiera querido pasar o vivir en ella—prosigo, riéndome

conél.—Joder, ¡qué tiempos! ¡Cuánto ha llovido desde entonces! —musita

mirándome con cariño—. Entonces, ¿te salió mal el plan? —me pregunta,retomando la conversación—. Era imposible que te saliera bien faltándotenosotros,pero¿sabesqué?,queyolomodifiquéyllegóasalirmecojonudo—mecuentasonriéndomeconorgullo.

—Oye, no te creas, que durante un tiempo me salió bien, yo también lomodifiquéyhastalomejoréyesedíanadafalló,todosaliócomoteníaquesaliryconseguílargarmeeinclusogastarmeeldinero.Malditasea,estabamuertodehambreymiropaymiszapatosdabanpena…—comentorecordandoesesuéterderayasyesosvaquerosqueteníanmásvidaqueyo—,peromeencontró…¿telopuedescreer?Tejuroquenuncanadiesehabíafijadotantoenmíyéllohizo;me reconoció por la calle aun estando en otro pueblo—le cuento, dejándomearrastrarporlacorrientedemisrecuerdos…

***

—…Séqueeresunbuenmuchacho,lointuyo,yporesonohellamadoalapolicía, perome has robado y vas a tener que pagar tu deuda—me dijo conseriedadcuandomellevóalosviñedos.

Page 368: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Ycómovoyahacerlo?Yamehegastadotodosudinero,señor.—Poresoestásaquí;éstaesmicasaytambiénminegocio,ytúvastrabajar

paramí.Cobrarás un salario por tu trabajo y, cuando consigas, legalmente, eldineroquemehasrobado,melodevolverás—meexplicómientrasyolomirabasindarcrédito.

—Pero¿dequétrabajarésinoséhacernada?—Nadie te ha enseñado a robar, ¿verdad?, y mira qué bien lo haces;

imagínatesialguienteenseñaatrabajar.—¿Va a enseñarme a trabajar?—le pregunté tan asombrado que recuerdo

queeraincapazdereaccionar.—Exacto,chico.Vasatrabajarparamíenlabodegayadevolvermehastael

últimocéntimoquemehasrobado—afirmó,sonriéndomeconafabilidad.—¿Ynotemequelerobeotravez?—Porlacuentaquetetrae,noloharásy,¿sabesunacosa?,estoysegurode

que dentro de unos añosme sentirémuy orgulloso de esta decisión que estoytomando.BienvenidoalasbodegasDomínguez…

***

—Me lo dijo casi vaticinando mi futuro—musito volviéndome hacia miamigo trascontárselo—,yyano salídeallí.Enesabodegameconvertí enelVíctorquesoyahora,empezandodesdeabajo,aprendiendodeunosydeotrosyascendiendopocoapoco.Creoque toqué todos lospuestosposibleshastaquemeconvertí en sociode la empresa.Pasédevivir en la calle a tenerunacasaparamísolocuandoPedroseenteródelascondicionesenlasquevivía;pasédenotenerestudiosatenerdoscarrerasydenotenerfamiliaateneruna,lasuya,unaquemerecibióconlosbrazosabiertos.Sisoyquiensoyesporél—afirmoconlaemocióncopandomispalabras—.Siélnomehubierareconocidoesedíapor la calle, hubiese continuado robando y si, en lugar de acogerme y darmetrabajo,mehubiesedenunciadoa lapolicía,hubiera terminadoen lacárcel—explico,perdiéndomeenmispensamientos—.¿Sabesloimportantequeesqueconfíenenti?,¿queteveandeverdadyqueteprestenatención?Elhechodequeélconfiaraenmí fue suficientealicientecomoparaqueyoquisiera sermejor,paraquequisieracambiarydejaratráslaúnicavidaqueconocía.

»Me esforcé por ganarme su aprobación y así fue siempre y, cuantasmás

Page 369: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

cosasconseguía,cuantamásaprobaciónycariñoveíaensumirada,másqueríaver.ConélaprendíavivirotravidaygraciasaesedíaconocíaVal,yconellaaprendí a ser mejor. A ellos les debo quien soy ahora. Pedro financió misestudioscuandoyotodavíanopodíapagarlosymediounavidaentera,siendoelpadre que nunca tuve. Te juro que, aunque viviera mil vidas, nunca podríapagarleloquehizopormíesedía—lecuento,tragandocondificultad.

—Puestuvistesuerte,tío—medicemientrasyomeaferroaesosaños.—Con ellos supe lo que era formar parte de una familia; que Pedro se

preocupara pormis estudios, pormi trabajo o pormi vida fue un regalo quenuncanadiemehabíahecho,yunregaloquehecuidadoduranteaños.Daríamividaporellos,Sombra,portodos,inclusoporCasi—leconfiesoconunasonrisa—,ypor esodejoque semarche, aunque se equivoquede tíoo aunque tomedecisionesquenomegusten,comoladeposardesnuda,porqueséquesufuturoeslamodaynoyo,almenosnodemomento.

—Quéestupidez,macho,peronovoyarebatírtelo.Túverás,estuvidaylasuya.Pormipartepuedeposardesnudatodaslasvecesquequiera,todavíatengounaparedenteralistaparallenarladefotossuyas.

—Quécapulloeres—replicosintiendolamiradadellobonegroclavadaenmialma.

—No veas cómo se curra con esas vistas—me responde guasónmientrasmantengolamiradaenelfuego.

—¿Ydequécurras?—Hemontadomipropionegocio,¿telopuedescreer?Yesperaaoíresto:

Joaquinitoesunodemisclientes,¿lorecuerdas?—¿ElhijodedoñaVicenta,ladelsúper?—indago,volviéndomehaciaél.—El mismo; menudas putadas le hacíamos de pequeños —me dice

recostándoseenelsofá.—Era un imbécil, como sumadre—mascullo, recordando lo que sucedió

ayer.—Ahoraesunbuentíoynuestroshijosestudianjuntos.Joder,tendríasque

habervistolacaraquepusocuandomevioentrarconmiDídacaclase;creoquerecordóenuninstantetodaslasmarranadasquelehicimosytemióquemihijolehicieralomismoalsuyo.

—¿LohasllamadoDídac?—pregunto,sintiendocómomedueleelpecho.

Page 370: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Quería llamarloRataVíctor, peroRaquel nome dejó; ya sabes,macho,cosasdemujeres—bromea,consiguiendoquesonría,apesardeestapresiónquesientoenelpecho—.AlfinalaceptóquelepusieraDídac.

—Quégrandeeres,Sombra.—Nunca lo llamábamos por su nombre, siempre era Rata, pero era su

nombrealfinyalcaboyahoraeseldemihijo.—¿Cuántosañostiene?—Vaacumplirseis—medicey,conesenúmero, recuerdoa laniñitaque

fue;susojosytodoloqueveíaenellos;sumanita,siemprelistaparacogerlamía; su sonrisa, amplia y feliz… y aprieto con más fuerza mis manos, hastahacercrujirmishuesos.

—Québuenaedad—susurrosinpoderdejarderecordarla.—Eslomejorquehehecho, tío.Hasdichoqueporellaquisistesermejor,

comoyoconDídac.Noquierofallarle,macho.Quieroquesesientaorgullosodesupadre,pero,sobre todo,quieroqueviva loquenosotrosnovivimos;quieroqueestudie,queseaunbuenchavaly,evidentemente,quenosemetaenlíos.

—Tumadretambiénqueríatodoeso—matizoconunamediasonrisa.—Pero le salí torcido; suertequeal final,muyal final, logréenmendarmi

vida. Joder, le hice pasar las de Caín y ahora tengo mucho curro intentandocompensarladetodoslosdisgustos.

—Darleunnietoesunabuenaformadehacerlo—murmuropensandoenmimadreyenlodistintoqueestodoentrenosotros.

—MecaséconRaquiporella—mecuentamientrasyopiensoenlamujerqueme trajo almundo—.Nosotros pasábamos de esasmierdas, pero paramimadre era importante, así quenos casamoshasta por la Iglesia; aRaqui no leimportóyyosóloquieroquemimadresesientaorgullosademí.

—Seguroqueloestá—murmuro,envidiándolo.—¿Ylatuya?¿Latuyaloestá?—Vas a tener que ir a preguntárselo a ella si quieres saberlo—mascullo

clavando de nuevo la mirada en el fuego, sintiendo esa parte de mi almacongelada.

—¿Hasidoaverla?—No—niegoendureciendoelrostro.—Peroteocupasdeella—insistemiamigo.

Page 371: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Está solaynomuybiende salud.No soy tancabróncomoparadejarladesamparada.

—Ella te dejo desamparado a ti durante toda tu vida —me recuerda, ydetectoelrencorensuvoz.

—Poresoyonovoyahacerlo—mascullo,volviéndomehaciaél—,porquesécómomesentí.

—Noteníasquehaberlecompradoesacasa,teníasquehaberladejadoenlasuya. Joder, todavía recuerdo el puto frío que hacía allí en invierno; nunca sepreocupódeti.

—Noselahecomprado,sólolepagoelalquiler,ytampocofuetanmalo—musitointentandoquitarlehierroalasunto.

—No,quéva…siteparece,podíahabersidopeor.—Bueno,podíahabermemaltratado.—La indiferencia es una forma de maltrato, por si no te has enterado.

¿Sabes?Recordarteatiyatumadremehahechosermejorpadre;nosabeslasveces

queledigoamiDídacqueloquieroyquepuedecontarconmigoparaloqueseayquieroqueesemensajelellegueyquenuncadudedequemetieneasulado.

—Tienesuertedetenertecomopadre—afirmo,sonriendo.—Tienesqueveniracasa;quieroqueloconozcasyqueconozcasaRaqui,

quevengasamitaller…—Untaller,¿dequé?—lepregunto,admirandoalhombrequetengofrentea

mí.—Soymecánicoy,aunquequedemaldecirlo,soyelmejormecánicode la

zona.—¡¿Nojodas,macho?!—No,no, sin joder—me responde riendo—,yesecoche tuyoesminena

hechamotor—meindicasindejardehacerlo—.Aversitengosuerteymedejasmeterlemano.

—Cuando quieras, es toda tuya, pero nome la dejes preñada, que nomeapetececargarconunmocoso.

—Tranquilo que usaremos protección —suelta guasón—. ¿Cómo hemosestadotantosañossinvernos?Nisiquierameenterécuandocomprasteestacasa.

—Noregreséaquíduranteaños,primerodeambulandoporelmundoymás

Page 372: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

tardeviviendoen losviñedos,dondeempezótododeverdad.Estoeraparamíalgoasícomoterritorioprohibido,unlugarquemerecordabademasiadascosasque prefería olvidar—musito, guardando luego silencio durante unosminutos—.Esfácildejarsellevarporlacorriente;olvidarresultafácilsinoteaferrasyyo lo hice, olvidé todo esto durante años, pero supongo que, aunque te dejesllevar, las raícesperduranyaquíestaban lasmías—prosigomi relato—,yundía, no sé ni cuándo, empecé a recordar lo bueno…, a ti, al Rata, nuestrasaventuras,ynodolía,deprontonomedolíaaquídentro—leindicollevandomipuñoamipecho—,yempecéaechardemenostodoesto;nociertascosas,perosíotras,yundía,estandodeviaje,medesviédemirutayregresé.Laideainicialera pasar sin detenerme, sin bajarme del coche, pero lo hice, no en nuestropueblo, pero sí en otros, inclusome tomé una cerveza en el bar de Pablo enArinsal. Me reconoció, macho—exclamo sonriendo, recordando esa tarde—.Estuvimoshablandodurantehorasy,alfinal,comohabíaanochecido,cogíunahabitaciónenunhotelymequedédurantevariosdíasy,aunqueloquemenosmeapetecíaerapisarOrdino,teníatantasganasdesaberdetiquelohice.

Recuerdoquemeabriótumadreymedijoqueestabasfuera.Joder,macho,teníasquehabervistocómomemiró,comosimimerapresenciafueramotivodeproblemas,yyanoquisepreguntarmás.

—¿Cuándofueeso?Nuncamelocontó—mediceconseriedad.—Hacetresaños—musito,recordandoesaépoca.Ellasehabíamarchadoy

suausenciamepesabaymedolíamásquecualquiercosa,másquelamiradadelamadredelSombra,másqueelrecelodequienmereconocíaporlacalleymásque todo junto—. Vi esta casa; estaba a la venta y era lo que siempre habíaqueridotenercuandoerapequeño,cuandoregresabaalamía,pequeña,oscurayfría.Recuerdoque,cuandoeldelainmobiliariamelamostró,sólopodíapensarque tenía que sermía, por ese crío que fui y por todas las veces quevi casascomoéstaenvidiandoasuspropietarios:grande,luminosa,concalefacción…

—Lode lacalefacciónesunpunto importante—mecorta,guiñándomeunojo.

—Joder,quemelodiganamí—lerespondosonriendocontristeza—.Estacasaestabaalejadadetodosyrodeadadenaturaleza,comonuestrorefugio.Nolodudé;fueunadeesascosasquehacessinreflexionar,dejándotellevarporunimpulso, y la compré —musito sin dejar de recordar—. Iba a pasar sin

Page 373: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

detenermeyacabécomprandounacasa—concluyosonriendo.—¿Ytedanpuntazosasímuyamenudo?Porquenoquieronipensarloque

valdráestacasita.—Porsuerte,no,peroéstefueunodeesospuntazosquemerecenlapena.—Y,aunasí,novienesmuchoporaquí.—No…Desde que la compré, creo que es la tercera vez que lo hago—

reconozco; me levanto para echar otro tronco de leña a la chimenea, puesnecesito moverme—. ¿Sabes?, puede que no venga mucho por aquí, pero esbuenosaberquetienesunlugaralqueregresarcuandonecesitasalejartedetodo.

—¿Comoahora?—Sí,comoahora—susurroobservandolaleñaarder.—¿YcuándohasdichoquesemarchaaNuevaYork?—No lo he dicho—mascullo levantándome, sintiendo ese dolor lacerante

palpitar dentro demí—.No lo sé, ni siquiera sé si se irá. Quién sabe lo queestarápensandoohaciendoahora—añadoconvozqueda,perdiendomimiradaenelamplioventanalatravésdelcualsólosedivisanpinosyabetos.

—¿Y si no se va? —prosigue mientras yo aprieto la mandíbula,preguntándomeexactamentelomismo.

—Tienequehacerlo—afirmoyendohacia lacocina—.Oye¿teapeteceuncafé?—lepreguntomirandode reojo lanevera,necesitandounacervezaounputowhisky.

—¿Estás cambiándome de tema, macho?—inquiere mientras enciendo lacafetera.

—Estoy preguntándote si quieres un café; responde —le ordeno conseriedad,obligándomeadejardeverlaportodaspartes.Joder,ellanisiquierahaestadoaquíy,encambio,estátanpresentecomosiacabaradesalirporlapuerta.

—¡Qué cabrón! Venga, hazme un café —me responde, levantándose ydirigiéndose también a la cocina—. Oye, ¿y por qué trasladaste a tu madre?Tenías que haberla dejado en esa casa oscura y fría —suelta con el rencorcolándose a través de sus palabras, sentándose en uno de los taburetes de labarra.

—Cuandofuiatucasaabuscarte, laviporlacalle;ellanomevio…—lecuento mientras voy preparando los cafés, necesitando centrarme en algo,cerrandolascompuertasdelosrecuerdosquellevansunombreparaabrirotras,

Page 374: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

las que llevan el nombre demimadre grabado en ellas—.La seguí hasta quellegóacasa.Nomepreguntesporquélohice,peroelcasoesquelohiceytejuroquetodoseremoviódentrodemí…Verlaquehabíasidomicasayverlaaellafuesuficientecomopararetrocedereneltiempoyvolverasentirmecomoeseputocríoquefui,esequenoesperabanadayqueloesperabatodo,sóloqueyanoeraesecríoy,aunquesabíaquenadapodíacambiar,noaesasalturas,yosíquepodíahacerloylohice;hiceloqueellanuncahizopormí,mepreocupéporella.

—Yporesolealquilasteunacasa.—Ybusquéaunamujerparaquecuidaradeella.Yonovoyahacerlo,no

voya cuidar aunapersonaqueni siquiera semolestó enmirarmecuandoerapequeño,pero tampocovoyapermitir queviva como lo estabahaciendo. ¿Lahas visto? Joder, macho, ella era tan bonita que, verla así, tan envejecida,encorvadayconesaropavieja,mesuperó.

—Laamargurahapodidoconella.¡Quépenadevida,tío!—Séquenosemerecenada,peroesmimadre—ledigo,dejandouncafé

frenteaél—.Yovivodeputamadre,mírame…¿Cómoibaadejarlaenesacasacuandotodavíatengoelfríodentrodemí?

—Creoquehacíamásfríoallíqueenlacalle—comentamientrasrecuerdolo helada que estaba la cama en invierno y cómo me dormía muchas vecestiritando—.¿Ledijistealgocuandolaviste?

—Notengonadaquedecirle—masculloconsequedad,dándoleunsorboalcafé, sintiendo cómo el líquido se desliza caliente y con dificultad por migarganta, pues, a pesar de todo, algo dentro de mí sigue necesitando quemequieracomoquierenlasmadres,aunqueesoesalgoquenopiensoconfesarleanadie,nisiquieraalSombra.

—Eldelainmobiliariasefrotaríalasmanoscontigo,macho;learreglasteelmes.

—Ya te digo. Y tú, ¿dónde estabas? —le pregunto, necesitando dejar dehablaryderecordartodasestasmierdasque,comoesefrío,senieganaalejarsedemí.

—RaquiyyoestuvimosviviendoenEspañadurantevariosaños;dehecho,Dídac nació enBarcelona, y no regresamos aquí hasta hace dos años, cuandoabrieronunafilialdelcentrodedesintoxicación,dondeellatrabaja,enAndorra.

Page 375: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Entoncespidióel trasladoyyoabrími taller. ¡Ni te imaginas laalegríaque ledimosamimadre!Telohedichoantes,siquieresestar,estás,nohaymás,yyoestaría en cualquier parte delmundo donde estuviera ella—me dicemientrasguardo silencioyoigo ese aullido largoy sostenidoqueprovienedel exterior,perotambiéndemiinterior.

—¿Lo has visto?—indago dirigiendomimirada hacia el enorme ventanalquetengofrenteamísinverlorealmente,necesitandocambiardetemaparaqueelnudoquetengoenlagargantayquehabajadohastaasentarseenlabocademiestómago,paraestrangularlo,dejedehacerlocontantafuerzay,sobretodo,paradejardesentirestedolorlacerantequeseniegaaremitir.

Page 376: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO29

«¿Todavía estará en los viñedos o estará haciendo la maleta?», me preguntorecordandoesanochequellegóamicasadecididaahacerla,elmiedoquesentí,esequeteparaliza,quenublaturazónyqueteacojonaportodoloquetehacesentir, esemiedo queme llevó a sujetarla del brazo y frenar su avance, y esemiedoquedesaparecióposteriormentecuando todo loquesentíaporella llegóparanublarmelarazón,perodeotraforma.

—Yono,peroteaseguroquetienetodosmisrespetos,macho—merespondemi amigo, sacándome demis recuerdos—.Ve con cuidado, tío; esta casa estádemasiadoapartadadetodo—meaconsejamientrasyolaveoportodaspartes,la furia de sumirada, esa que se clavó en lamíamientrasme retaba con suspalabrasy laque sediluyócuando ledijequenomehabíadecepcionado; susojos,esosque,durantepequeñasdécimasdesegundo,mehacíancreerquesíqueeraposible,cuandonuestrosmeñiquesseenlazaban,cuandonuestrassonrisasseencontraban y cuando nuestras miradas quedaban conectadas durante esasínfimas pero perfectas décimas de segundo… Esas que conseguían que todopensamiento racional desapareciera demimente para simplemente creer…—.Tienesquevenirmañanaa cenar a casa;quieroqueconozcasami chavaly aRaqui.NotedigoacomerporquemiDídaclohaceenelcolegio,Raqui,enelcentro,yyoencasademimadre;nosdispersamosunpocoparael almuerzo,pero luego nos unimos como si tuviéramos un imán —me dice bromeando,sacándomedemispensamientosmientrasmiromismanos,esasqueaferraronsupielyesasqueahoramereclaman justoeso—.Además, tienesqueveniramitallerytenemosquesalirconlasbicis.Joder,tenemosquinceañosquerecuperar

Page 377: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—prosigue mientras intento alejarla de mis pensamientos sin llegar aconseguirlo, sin dejar de verla de rodillas en el suelo con mi camisa puesta,llorandodesconsoladamente.«¡Joder!»,masculloparamímientraséldicealgoquemicerebronollegaaretener,demasiadoocupadocomoestáenabrirmelascostillas en canal para dejar todas estas mierdas más a la vista que nunca—.¿Quémedices,macho?

—Claro,tío,meencantaríaconoceratufamilia—acepto,sintiendocómolasúltimaspalabrasduelendemasiado.

—Deputamadre.Oye,tengoqueirme,estáhaciéndosetarde—meanuncia,levantándose.

—Y es hora de juntarse, ¿no? —le pregunto, sintiendo mi gargantacontraersehastacerrarseporcompleto.

—Tú también podrías juntarte si dejaras de ser tan capullo y de estar tanciego.¿Notedascuentadequetepasaslavidalargándoteytomandodecisionesqueno te corresponden?—me suelta, sorprendiéndome—.Te largaste de aquícuando el Rata murió y no me permitiste acompañarte porque creíste que lomejor para mí era que me alejara de ti, y ahora has vuelto a hacerlo, te hasalejadodeesachicaporquecreesqueeslomejorparaella.Quéhijodeputaeres—merecriminamientrasyosoyincapazderebatirlenada—.¿Porquétienesquedecidirtúporlosdemás?—añadecondureza,consiguiendoqueoigasuvoz…

«…Yserámidecisión,Víctor,asíquedejadeponeresacara,¿quieres?»,me pidió mientras empezaba a sonar Every breath you take, de The Police,recuerdooyéndolaenmimente,oyendosuvozylacanciónquesilencianlavozdemiamigo.

«¿Por qué no me escuchas cuando te hablo?», le pregunté exasperado,sabiendoquelomejorparaellaeraquesealejarademíyvivieratodoesoque,cuandonadadeestohabíaempezado,deseabavivir.

«Porquenomeinteresa,¿tevalecomorespuesta?»,replicó,guiñándomeunojo.

«No,nomevale»,lerespondíconseriedad,conscientedeque,sinotomabaladecisiónqueyoconsiderabacorrecta,latomaríayoporella.

«Bueno,estuproblema,entodocaso»,merebatió,sentándosedenuevoenelsofá,enesesofáenelquerompídosvecesunademisnormasmássagradasyenesesofáenelquetoquéelcieloconlasmanos.

Page 378: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—…¿Porquénodejasdealejardetuladoalagentequetequiere?—insisteelSombra,devolviéndomea la realidad,y lomirosintiendoque todavíaestoyallíconella—.Yomehubieraidocontigoytejuroquemehubieraidomilvecesmejordeloquemefue,¿ysabesporquélosé?Porquetúcuidabasdemímuchomejor de lo que yo lo hacía de mí mismo y porque sé que no me hubieraspermitidocaereneseputoinfiernoenelquecaí—measeguraconseriedad—.Convertirme en tu sombra fue lo mejor que podía sucederme y ni lo supisteentoncesni lo sabes ahora.Yodecidí ir contigocomoelladecidió renunciar aNuevaYork,peronuestrasdecisionesnoteimportaron—meespetamientrasmemantengo en silencio, incapaz de encontrar la voz ante sus palabras—. Sóloesperoqueaellalevayamejordeloquemefueamíyquenocaigaeninfiernosdelosquenopuedasalir—añade,consiguiendoqueesemiedoparalizantequesentíesanocheregrese.

—Porsupuestoquenolohará—musito,sintiendocómoelfríodelexteriortraspasa las paredes de esta casa para instalarse enmi interior, en ese interiordondemismiedosestánmásexpuestosquenuncayenelquemiheridalateencarneviva.

—Esperoqueno teequivoques,macho.Enfin, túsabrás loquehaces.Melargo; te esperomañanapor la tarde enmi taller—añadepasando frente amímientras siento cómo el frío se funde con mis miedos hasta apresarme lagarganta,estrangulándomeconsusgélidasyhuesudasmanoshastacortarmelarespiración.

—¡Espera!Tellevoacasa—lepropongocuandoconsigolibrarmedeellas,yendo hacia la escalera, sintiéndolas enroscándose en mi interior, como esaniebladensaquereptasinuosaporelbosque,engulléndolotodoasupaso.

—Niquefueratunenita—sueltasonriendoyaenlapuerta,mientrasyomeobligoarespirarconnormalidadyaaparentarunaserenidadquenosientonidelejos.

—No,perotúlohasdicho,estacasaestámuyapartadayhayunputolobomerodeandoporella;noquieroque tesucedanada—replico llegandohastaél—.Oye…sobreloquehasdichoantes,yo…yo…yonuncaloviasí,nuncatehubieradejadosolosihubiesesabido loque ibasavivir—declarofinalmente,guardandosilencioduranteunossegundosparabuscar laspalabrasapropiadas,esasquemedijetantasvecesamímismo—.Túteníasunafamiliaquetequería

Page 379: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

yyosiempremevicomounamalainfluenciaparati.Joder,inclusoahora,conlosañosquehanpasado,tumadrecontinúaviéndomeasí.

—Eso es porque no has permitido que te conozca; nadie en este puebloconocealVíctordeverdad,sóloyo,peropuedeshacerquecambiendeopinión,puedesmostrarles quién eres en realidad.Hazlo,macho, te hará bien.—Ydenuevosuspalabrasmellevanaella,comoesetroncoque,flotandosobreelrío,arrastradoporlacorriente,llegacontinuamentealmismolugar…

«Dicemipadreque,paraabrazarelfuturo,hayquerespetarelpasado—medijo alejando su rostro de mis manos—, pero en tu caso yo diría que, paraabrazar el futuro, hay que sanar el pasado.Túno quieres hablarmede él y loacepto,peroestáclaroqueesepasadocontinúaabiertoparatiyeselquenoteestá permitiendo avanzar—prosiguió, sosteniéndome la mirada, con sus ojospardosllegandohastamiinterior,esequesóloseestremeceporella—.¿QuieresqueelVíctorjodidodesaparezca?Puessolucionaloquetengasquesolucionaryreconcíliateconquienfuiste,sóloentoncespodrástomardecisionesimportantes—merecomendóenunsusurro,llevandosusmanoshastamirostro,acunándolocomoyohabíahechoconelsuyo—.Hazlo,Vic,porque,sinolohaces,serástúel quenopodrá coger el trendel quemehablabas antes y entonces sí quenohabrámarchaatrás.»

—Novoyaquedarmetantotiempo—mascullosintiendoesefríoacunandomis heridas, helándolas poco a poco, tan distinto al calor que desprendían susmanosyqueeracapazdeadueñarsedelfríodemiinterior.

—Tútelopierdes,colega,perohazmeunfavorynodesaparezcasmásdemivida;tequieroenella,comoloestuvistehaceaños,yquieroquemichavalymimujer teveancomopartedenuestra familia—añade,mirándomea losojosyemocionándomeconsuspalabras.

—Tútambiéneresmiotrobrazo, tío;porcojonesvoyaformarpartedetufamilia —le garantizo, con la garganta cerrada por la emoción—. Ven aquí,capullo—masculloabrazándolocon fuerza, talycomohice laúltimavezqueestuvimosjuntosenelrefugio,frenteaesacruzquealbergabalaspertenenciasdenuestrootrobrazo.

—Como me llores, voy a meterme mucho contigo, niñita —me suelta,haciéndomesonreír,recordandoquelollaméasíaqueldía.

—Niñita, tú, capullo, que lloraste antes que yo—replico, obligándome a

Page 380: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mantener a raya todo esto que me supera—. Vamos, machoman, no hagasesperaratufamilia—ledigo,separándomeyaccediendoalgarajeseguidoporél—.Toma—añado,volviéndomeparatirarlelasllavesdelvehículo,quecogealvuelo.

—¿Enserio?—mepregunta,asombrado.—Enserio—lecontestoconuna sonrisa—,pero, como lo roceso lepase

algo,tecortolaspelotas—bromeo.Abrolapuertadelgarajeysientocómoesemismofríoquealbergoenmiinteriormedaunapuñaladaentodoelpecho—.Puto frío…Venga, sácalo—lepido, notando cómomivello se eriza.Medoymediavueltaysonríoalveramiamigomirarelcochecomosisetrataradeunaobradearte.

—Nena,eresperfecta,¿telodiceestecabronazoalgunavez?—lepreguntaalcapó,dándoleunbesoyacariciándolo—.Joder,eresunputosueño,ytúyyovamosapasarlomuybienjuntos.

—No me lo puedo creer —farfullo divertido, observando cómo rodea eltodoterreno,mirándoloconadoraciónantesdesubirseaélysacarlodelgaraje.

—¿Oyeselmotor?Joder,estoesmúsicacelestialparamisoídos—exclamacuando me acomodo en el asiento del copiloto y mi mirada se pierde en lasmontañas,enesasmontañasenlasqueeseloboreclamaobuscaalgo.

—Vamos—mascullo, recordando las muchísimas veces que ella se sentójusto en estemismo asiento y, enmi interior, veo cómoel lobonegrohace elprimerintentoporlevantarse.

El trayectohastaelpueblolohacemosconversandosobreelJeep,sobresumotor y sus características. Bueno, en realidad es mi amigo quien lo hace,mientras que yo me mantengo en silencio, interviniendo esporádicamente y,cuando llegamosaOrdino, instintivamente frunzoel ceñoymecubroconesedisfrazqueescomounasegundapielparamí.

—Mira,éseesmitaller—meindicaseñalándomeconeldedounbajoconuncartelluminosoquerezaReparacionesLaSantísimaTrinidad.

—No me jodas, macho. ¿Lo has llamado La Santísima Trinidad? —lepreguntodescojonándomeconganas,creoqueporprimeravezdesdehacedías.

—Nohabíaunmejornombrequeése—measegurasonriendo,conesacaradesinvergüenzaquetodavíaconserva,apesardelpasodelosaños.

—Y,porloqueveo,elnombrenohasidosuficienteimpedimentocomopara

Page 381: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

queJoaquinitotellevesuvehículo.—Su coche es una nenita tan apetecible como ésta y que está locamente

enamoradademí;llegatodarevolucionadaynoveaslosuavequesaletraspasarpormismanos—medice,guiñándomeunojo.

—Capullo—mascullosindejardesonreír.—Hemosllegado—anuncia,estacionandofrenteaunedificiodetresplantas

—.Sube,tío,quieroquelosconozcasahora.—¿Seguro?IgualaRaquelnoleapetecerecibirvisitasaestashoras,yaes

tarde—contesto,derepentenerviosoporconocerasufamilia.—¿Visitas?Nomejodas, tío, túnoeresningunavisita.Venga,bajadeuna

putavez—meordena,apeándosedelvehículo,ylosigo—.Noestucasoplón,peroesmicasaymuchomásdeloque,duranteunosaños,penséquetendría.

Adelante —me pide abriéndome la puerta y haciéndose a un lado paracederme el paso, y accedo a esta vivienda con el corazón hecho un puño,sabiendoque,enapenasunosmíserosminutos,voyadarmedefrentecontodolo que, en el fondo, sé que quiero tener y no tendré—, segundo piso —meinforma mientras subo por la estrecha escalera sumido en mis pensamientos,retrocediendoconellosaesanochedehacedemasiadosaños…

***

Estaballegandotardeacasa,pero¡quémásdaba!,ellanoibaadecirmenaday,total,laslucesestabanapagadas,asíquenisiquieraibaaenterarse.Recuerdoel frío que hacía en la calle, a pesar de estar todavía en septiembre, y cómoescondímismanos en lasmangas de ese suéter raídoquehabía vistomejorestiempos.Recuerdoqueabrílapuertacreyendoqueestaríasoloycómomequedeparalizadocuando,alencenderlaluzdelsalón,laencontréllorandosentadaenel sofá, en ese sofá que también había visto mejores tiempos. Recuerdo quefruncíelceñooquizáyaloteníafruncidoylofruncíunpocomás…Teníaonceaños.

—¿Estásbien?—lepregunté,acercándomeaella.—¿Creesqueestoybien?—meformuló,alzandosumiradaanegadaporlas

lágrimasyclavándolaenlamíamientrasmequedabaplantadofrenteaella.Finalmente,sinsaberquédecir,neguéconlacabeza.»Exacto, ¿y sabes quién tiene la culpa de que no esté bien? —replicó

Page 382: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mientrasyoeraincapazdeabrirlabocaparacontestar—.Tú,tútieneslaculpa.PortuculpaestoyaquícuandopodríahabermeidoaMadrid;portuculpatuvequerenunciaramissueñosyquedarmeenestacasademalamuerte;portuculpavivoancladaenestepueblo,asfixiadaporestasmontañas,yportuculpaestoysirviendomesascuandomisueñoerasermodelo.Tupadreytúmearruinasteislajuventud,vosotrososllevasteismialegríaymisganasdevivir,yporvuestraculpaestoyaquícuandomividateníaquehabersidootra…—mesoltómientrasmelimitabaasentirquemedolíalagargantaytambiénmuymuyadentro,enunpuntoqueno conseguía localizar, perodondedolíamucho—.Qué fácil es serhombre…Túloserás,túseráscomotupadre,teacostarásconquienquerrásynotendrásqueasumirresponsabilidadesdeningúntipo,porqueyaloharánellasporti.Túmehashechoodiarsermadre,asíqueno,noestoybien,ytútieneslaculpa…Vete,noquieroverte—meespetó,dirigiendolamiradadenuevohacialaventana,dondesóloseveíasureflejo.

Peronomefuiamihabitación,sinoquevolvíasaliralacalle;nisiquieramepidióqueentraradenuevo,demasiadosumidaensudolorcomoparapensarenelmíoyen loquesuspalabrashabíanprovocadoenmí.Esedía,cononceputos años, me prometí a mí mismo que nunca tendría hijos y que nunca lafelicidaddenadiepasaríapormí…

***Todoestolorememoromientrasllegoalsegundopiso,recordandoelfríoquesentíenesepuntodondetantomedolía,esefríoquenadateníaqueverconelquehacíaenmicasaoenlacalle,esequenohacíatemblarmicuerpo,peroquemehacíatemblarpordentro.Esanoche,mientrasmemanteníadepieenlaacera,temblandoyconlospuñosapretados,oíunaullido,unaullidolargoysostenidoprovenientedelamontaña,ydirigímispasoshaciaél…

—Aquíes—meanunciamiamigocuando llegoal segundopiso,mientrasyo cierro las compuertas a mis recuerdos, pero no a mi dolor, ese dolor degargantaquebajahastaasentarseenelpecho,eneselugarquedecríosentíaqueestabamuymuydentroyqueeraincapazdelocalizar—.¡Raqui!¡Tuhombrehallegado!¡Dídac!¡Venadarleunabrazoatupadre!—exclamaencuantoabrelapuerta,mientrasqueyolosientotanlatentecomoesanoche—.Vamos,macho,pasa,no tequedesahíparado—me indicaaccediendoa lavivienda,y lo sigocubriendomirostroconesamáscaradeindiferenciaqueformapartedemídesde

Page 383: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

hacetantosaños,queniyomismosoycapazderecordarcuándofuelaprimeravezquemelapuse.

—¡Papá,papá!—gritaunavocecilla,yveocómo,cual flecha,uncríosaledisparadodeunahabitaciónpara,literalmente,tirarsealosbrazosdemiamigo.

Recuerdo que ella hacía igual, venía corriendo y se tiraba en mis brazos,sabiendo que losmíos la sostendrían; lo rememoromientras observo cómo elSombraloalzaparallenarlodebesos,yendurezcoelgesto,sintiendoquetododueledemasiado,evocandodenuevoalniñoquefui,esequeyadesdepequeñoaprendió a mantenerse en un segundo plano mientras observaba cómo susamigosrecibíanlosbesos,elcariñoolaatencióndesuspadres…«Suficiente»,medigo,ymeobligoadejarderecordarquiénfuiparasimplementecentrarmeenquiénsoyahora,perocentrarmeenesomellevaapensarenellay,malditasea,noséquéespeor.

—Hola, amor, ¿Qué tal el dí…?—le pregunta unamujer saliendo de esamismahabitación,ydoyporhechoqueesRaqui,quesedetienealvermejuntoal Sombra—.Hola, a ti no te conozco—me saluda con simpatíamientrasmiamigolamirasonriendo.

—¿Sabesqué,papá?HoyMateolehapegadoaMarcenelpatioyyolohedefendido, pero me han castigado por haberle pegado, pero estabadefendiéndolo,papá—sejustificaelchiquillosindejardeparlotear,intentandollamarlaatencióndemiamigo,quesólotieneojosparasumujery,denuevo,sientoquetodomedueledemasiado.

—Hola,cielo—lerespondeél,ylomiroasombrado.«¿Cielo?,joder,puessíquehacambiadoelcolega»,piensomientrasveocómoellaseacercaparadarleunbeso—.Nena,tepresentoamiotrobrazo.

—Entonces,túeresVíctor—measeguraconvencida,mirándomeconcariñoysorprendiéndometodavíamás.

—¿Cómolosabes?—PorquePolmehahabladomuchísimode ti, tantoquecasi sientoque te

conozco. Yo soy Raquel—me dice, acercándose a mí para darme un par debesos—.Te quedas a cenar, ¿verdad?—me pregunta sonriendo, y observo sumirada, limpia y tranquila, esa mirada que sólo aparece cuando sientes querealmenteestásencasay,cuandodigo«casa»,nomerefieroalascuatroparedesquetecobijan,sinoalagentequetehacesentirenella.

Page 384: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—No,hoy,no…,mañana—contestounpocoincómodo.—Puedesquedartehoy,mañanaytodoslosdíasqueestésaquí—interviene

miamigo.—¿Quién es este señor, papá?—le pregunta el pequeño, aferrándose a su

mano,ylomiroconcariño.¡Joder,essucopia!—Es tu tíoVíctor; es el hermanodepapá—le anuncia elSombra, y noto

cómolagargantasemecierraunpocomás,¡joder!—Papá,túnotieneshermanos—lerebateelniño,convencido.—Y,eso,¿quiénlohadicho?—inquieresumadre,poniéndoseencuclillas

para estar a la misma altura visual que su hijo, y contemplo la escenasintiéndome completamente desbordado ante un cariño que no esperabaencontrarcuandodecidíregresaraquí.

—Laabuela;ellasiemprediceque lehubieragustado tenermáshijos—lecuentaconaplomo,ysonríosinpercatarme.

—Haydostiposdefamilia,Dídac:lafamiliaquetetocaylaquetúeliges.Estamos unidos por la sangre con la familia que nos ha tocado y, por el

corazón, con laqueelegimos.TupadreeligióaVíctor comohermanocuandotendríamásomenos tuedad;poresoes suhermano,porqueseeligieron—leexplicamientrasyoinspiroprofundamente,abriendodenuevoesascompuertasque,poralgunaextrañarazónquedesconozco,noconsiguencerrarsedel todo.Yotambiénloelegíaél,yalRata,ymástardeaPedro,aAlana,aCasiy…aella,amisbrazos,amispiernasyamiyoentero.

—¿La familia puede elegirse?—le plantea el niño mientras endurezco elgesto, obligándome amantener las putas lágrimas a raya, dejándome arrastrarporlacorrientedemisrecuerdos,esaquecorretanrápidacomolasaguasdeunrío.

***

—¿Sabes una cosa? Creo que elegí almejor padre delmundo—me dijo,convencida,mientrassalíamosdelabodega,trashabernosdespedidodeél.

—¿Cómo?—lepreguntésinentendernada.—Adriyyoestamosleyendounlibrodondedicequeesnuestraalmalaque

escogeasuspadresylavidaquevaavivirantesdenacer.—Nodeberíascreertodoloquelees—mascullécondesgana.

Page 385: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Y no lo hago, pero esto sí que me lo creo. Además, me siento bienleyéndolo—meconfesóconseriedad—;porlodemimadre,¿sabes?Escomositodotuvieraunpocomásdesentido—meaclaró,consiguiendoquemesintieramalderepente.

—¿Desde cuándo las niñas de quince años leen esas cosas? ¿No deberíaisestar leyendo sobre tíos buenos y todo eso?—solté bromeando, arrancándoleunasonrisaysonriendofinalmenteconella.

—Víctor…,dejédeserunaniñahacetiempo.Abrelosojos,¿quieres?—mepidió,mirándomedeesaformaquemehacíasentirincómodo—.Y,paraqueteenteres, hay jóvenes, que no niñas, a las que nos gusta leer de todo—añadióarrugándomelanariz,llevándoselaincomodidadconesegestoqueeratansuyo.

—Eresunaniña,loquierasono,yteaseguroquetúnoelegistenada,tetocóy punto. Tuviste suerte, no hay más —le rebatí, retomando el tema sinpretenderlo,recordandolaespeciedebromapesadaquemetocóamí.

—Estásmuyequivocado,Vic.Nadasucedealazar.Sitúestásaquíahoraesporqueelegiste,siendoalma,lavidaqueibasavivir,apesardetodolomalo—measeguróconvencida,pasandopordelantedemí.

—Y dale… Pues sí que te ha dado fuerte, ¿no? —solté exasperado,siguiéndolaycabreándomepormomentos—.Oye,Val,hazteunfavorydejadeleeresaschorradas.

¡Yunamierdahabíaelegidoyovivirvoluntariamenteloqueviví!—Nosonchorradas; loque tienesquehaceresdesprendertede todosesos

prejuicios que te ciegan—me contradijo, con ese tonito de marisabidilla queempleabadesdequehabíaentradoenlaadolescencia.

—Teaseguroquenadieensusanojuicioelegiríaunavidajodida.Yomismono hubiera elegidomi vida si hubiese tenido opción. Te lo repito: nadie eligenada;hayquiennaceconuna flor enel culoyhayquiennace jodido,nohaymás.

—Ytú,¿cómohasnacido?¿Conlaflorenelculoojodido?—mepreguntódeteniéndose,cruzándosedebrazosyfrunciendoelceño.

—Nodigaspalabrotas—lareñí,desfrunciéndoseloconmipulgar.—Tú la has dicho primero —replicó, frunciéndolo de nuevo, y recuerdo

cómolamiréenarcandoambascejasycómolodesfruncióconunasonrisa.—Yosoymayor—maticéguiñándoleunojo,yechéaandardenuevohacia

Page 386: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mivehículo.—Yyo—me indicó, siguiéndome—;yo también lo soy, aunqueno tedes

cuenta…«Joder, ¿cómo puedo recordarlo con tanta exactitud?», me pregunto,

demorándomeenlaimagenquemisrecuerdostraenconsigo…Losrayosdesoldefinalesdela tardeincidiendosuavessobresumelenaoscurayarrancándolereflejos rojizos; sus labios carnosos dibujando una mueca y sus ojos pardosllenosdemotasdoradas,comosidediminutasestrellassetrataran,mirándomeconunamezcladefastidioydisgusto…

***

—Porsupuesto,hijo,yestanomásdeverdadquelaotra—lediceRaquelconcariño,sacándomedemiensoñaciónconsuspalabrasmientrasmiamigomeindicaconlamiradaquelosigahastaelsalón,yobedezcosintiendoquetodavíaestoyallíconella.

—Laspelasestánamariconándote,colega—comenta,yguardomismanosenlosbolsillosdelospantalones,sinsaberquéhacerconellas—.¿Estásbien,macho?

—Claro; por si no lo recuerdas, aquí la única niñita eres tú —contesto,obligándomeasonreíryahaceraunladotodosestosrecuerdosqueloúnicoquehacenesjodermevivo.

—Loque tú digas, pero no soy yo el que está a punto de derrumbarse—replica con una mezcla de preocupación y cariño—. Quédate a cenar connosotros,hoy,mañanaytodoslosdíasqueestésaquí—insistedenuevo.

—¿Quieresquemeacuestetambiénconvosotros?—lepregunto,intentandobromear.

—Tan capullo como siempre, en eso las pelas no te han cambiado enabsoluto—medice,dándomeunpuñetazocariñoso.

—Ahoraenserio,noquieromolestar,tío.Esvuestromomentodejuntarosynoquieroestardemás.

—¿Qué imbecilidadesésa?Túnuncahasestadodemásenmividayporsupuestoquenomolestas.Venga,siéntatedeunavezydejadehacertederogar.

Micríotienequeconocerteyconunanochenovaatenerbastante—replica,sentándoseenunadelassillasquerodeanlamesa,yobservoelfuegocrepitando

Page 387: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

en la chimenea, los juguetes esparcidos por el suelo, el sofá sobre el quedescansa unamanta y lasmuchas fotografías que decoran el pequeño salón ysientoqueestoyenunhogardeverdad.«Unoenelquenohacefríoyenelqueserespiracariño,unoenelquesiempreencontraráslaslucesencendidascuandoregreses»,piensoacomodándomeasulado.

—Tuhijotienemuchasuertedeviviraquíydetenertecomopadre—afirmo,sintiendotodasmiscarenciasmáslatentesquenunca—.¿Sabes?Puedequemicasaseauncasoplón,peronuncatendránadadeesto.

—¿Aquéterefieres?—mepreguntasinentendermemientrasDídacaccedealsalónyveocómoelniñosesubeasuspiernasymiamigorodeasupequeñocuerpoconambasmanos.

—AélyaRaqui.Enmicasanuncahabrájuguetesfrentealachimenea,nitampocofotografías,niseránuncaunverdaderohogar—sentencioconseriedad.

—Peroesoseráporculpatuya,portomardecisionesquenotecorrespondenyporalejartedelagentequetequiere.Pruebaanohacerlo,macho,igualhastate sorprendes y un día te encuentras tropezando con un cochecito o con unapelota—mereplica,sonriendoymirandoasuhijo,quelesonríeconlamismacaradepillueloqueteníaélyquetodavíaconserva,apesardelpasodelosaños—,o inclusoconunejércitodePlaymobilen laducha—prosigue,haciéndolecosquillasmientrasélempiezaaretorcerse,muertodelarisa,entresusbrazos.

—¡Papáááá,para,para!—lepide,carcajeándose.—¿Quepare?¡Deesonada,colega! ¡Hoy,mientrasmeduchaba,he tenido

quecombatirconcientosdeindiosyvasapagarporello!—ledicedisfrutandodelmomentoyabriendo,denuevo,lascompuertasdemisrecuerdos…

***

—¡Vic,nomehagascosquillas,por favor,para…para!—mepidióconsuvocecillainfantilysusmejillastodavíamojadasporlaslágrimas.

—¡Nopuedoparar,mismanosnomehacencaso!—ledijebromeando,alavezquecontinuabahaciéndolemás,necesitandoque,sihabíaunaslágrimasquemojaransurostro,fueranlasdelarisaynolasdelllanto.

—¡Para,para!—merogóentrerisas,retorciéndoseentremisbrazos.Teníaochoañosyhabíavenidoamicasahechaunmardelágrimasporque

había discutido con su hermana por unas muñecas. Recuerdo mi sonrisa

Page 388: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

condescendientemientras ella, llorandomás por la rabia que por la pena,mecontaba loquehabíasucedidocomosi fueraunaverdadera tragedia.Recuerdocómosecabreóconmigoporestarsonriendoycómolequitéelenfadoyeliminésuslágrimasconmismanos…«Esasmanosqueañosdespuésprovocaronotrascosasensucuerpo,enesecuerpoque fuecomounaobsesiónparamícuandoempezóacambiar»,rememoro,evadiéndomedetodoydetodos…

***

—Comonoregresespronto,voyaempezarahacertecosquillasatitambién—mediceelSombra,dándomeuncodazoydevolviéndomealpresente.

—¿Cómo? —le pregunto, llevando mi mirada a mis manos, esas quereclamanexigentesloquefuesuyo.

—¿Dóndeestabas,colega?—planteaconseriedad.—A tu lado, ¿no lo veías, papá?—interviene el crío sin entenderlo, y le

sonríoviendoamiamigoenél.—¿Y tienesun ejércitodePlaymobil?—inquiero, recordandoque siempre

quise tener clicks de Playmobil de pequeño, sobre todo el fuerte con indios ysoldados.

—Tieneelfuerte—sueltamiamigo,leyéndomelospensamientos.—Nomejod…Perdón,¿nomedigas?¿Tieneselfuerte?—Sí,ycuandopapáyyojugamosalasguerras,siempregananlosindios.—Losindiossonlostuyos,¿verdad?—lepreguntosonriendo.—Y los soldados, los míos—matiza mi amigo, guiñándome un ojo—, y

siemprelapalman,macho;debodeserelpeorcomandantedelahistoria.—Esoesporquenohasjugadoconmigo—leindicoalniño,cruzándomede

brazos—.Tupadreesunapresafácil,pero,silideroyoelejércitodesoldados,tusindiosnotienennadaquehacer—prosigo,retándoloyviendoelbrilloensumiradayenlademiamigo.

—¿Quétejuegas?—meretaelenano,zafándosedelosbrazosdelSombraymirándomeconesadeterminaciónquevitantasvecesensumirada.

—Loque quieras—contesto aceptando el reto, sabiendo de antemanoquevoyaperder.

—¡Espera,quevoyatraerlo!¡Ayúdame,papá!—lepidecogiendosumano,tirandodeélyhaciéndomesonreír.

Page 389: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Nosabesloquehashecho,colega.Teaseguroqueyanotevaadejarviviren paz —exclama riendo, dejándose arrastrar por su hijo como yo me dejoarrastrar,más veces de las que debería, por los recuerdos y, antes de quemeatrapen de nuevo, cierro esa compuerta con determinación, obligando a mimenteaquedarseaquí, eneste salón, e inspiro,duranteunos segundos, lapazque aquí se respira, viendo, a través de la ventana, lasmontañas alzarse a lolejos,sintiendoelcalorenvolvermicuerposinllegaraadentrarseenél,dondeelfríocampaasusanchas.

—Tuvequeconstruirelfuertesobreestachapademaderaparanotenerqueestar montándolo y desmontándolo todo el tiempo —me cuenta mi amigollegando cargado con ella y depositándola sobre la alfombra—. ¿Recuerdascuando de pequeños fantaseábamos con la idea de tenerlo? —me preguntamientrasyomedirijohaciadondeestánellos,sentándomeenelsuelo,sobrelaalfombra,sonriendocontristezaalrecordarlo.

—Ytanto…Aver,chaval,¿dóndeestánmissoldados,quenolosveo?—lepreguntomientrasélllegacargadoconellos.

—Losteníaenladucha—mecuenta,dejándolosenelsuelo.—Pobres, los teníasmedioahogados,asíestásdándoleventajaa los indios

—ledigomientrasélmesonríecomosonríenloscríos,sinartificionidobleces.—Losindiossonlosmejoresysoncapacesdelucharinclusoenelagua—

meindicasentándoseenelsuelo,llevándomeconélasuinfancia.Y durante casi una hora, jugamos juntos mientras mi amigo se suma a

nosotros en ocasiones o se retira en otras y es, durante esta hora, cuandomeolvidode todopara simplemente conocer a este pillínque seha empeñado encargarseatodosmissoldadosmientrasyointentoofrecerresistencia.

—¡Tematé!¡Matéalúltimo!¡Losindioshanganado!¡Eah,eah,eah,eh!—entonaimitandoalosindiosportodoelsalónmientrasyosonríoalverlo.

—¿Muerto?—mepreguntamiamigo,tendiéndomeunacerveza.—Yenterrado.Hanganado los indios,macho—ledigo, cogiéndola—.¿Y

esto?Creíaquenobebías.—Queyonobebanosignificaquetúnopuedashacerlo.Heidoalatienda

quehayabajoacomprártelas;séquetemoríasporunchutedealcoholenvenadesdeestatardeynoquieroquetengasunaexcusaparanovolvermañana—mecuentay,denuevo,sientocómotodoestomesobrepasa.

Page 390: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—No tenías por qué hacerlo, pero gracias. Joder, no sabía que era tanevidente—ledigovaciandomispulmonesdegolpey levantándomedel suelomientrasRaquelllegaconlafuentedelacena.

—Esperoquetegustelacarneasada—comentasonriéndome.—Tienelaneveraylaalacenaarebosardecomidaprefabricada;nocreoque

tepongapegas,cielo—intervienemiamigopormí.—Estáperfecto,Raquel.Gracias.—Joder,quéfinolistehasvuelto,macho—seburla,haciéndomesonreír.—Víctor,siéntateaquíamilado—mepideelenano,ymepongodondesu

manitameseñala.—Finolis, ¿yo? Todavía estoy en shock desde que te he oído llamar a tu

mujer«cielo»—replicoriendo—,ynoespornada,Raquel,peroesqueésteerauncafreydelosgrandes.

—Lo imagino; ya me ha contado vuestras batallitas con el Rata —mecontestasonriendoyempezandoaservirlacena.

—Nosotros vamos al refugio de excursión y en verano nos quedamos adormir allí; es un sitiomuy guay, ¿verdad?—mepreguntaDídac,mirándomeconcomplicidad—.YpapávaunavezalmesparahablarconelRata,peroesedía no puedo ir con él —continúa mientras me limito a mirarlo sonriendo,incapazdedecirnada—.¿Tútambiénvas?

—No, todavíanohepodido,pero loharé—le respondo,prometiéndomeamímismonoirmedeaquísinhaberidoantesaverlo.

—Y,cuandotúvayas,¿podréacompañarte?—Algúndíaysituspadresquieren—lecontesto,intentandozafarme.—¿Podréir?Porfavor,porfavor,porfavor—lespidesuplicante.«Joder, si fuerami crío ymemirara así, no podría negarle nada», pienso,

bloqueandosurecuerdoantesdequellegue.—Cuando el lobo semarche, iremos; ahora no—le dice con seriedadmi

amigo.—Y, entonces, si no se marcha nunca, ¿no podremos ir? —le pregunta

haciendounmohín,enfadadoderepente.—Claroquesemarchará,hijo.Eselobosóloestádepasoy,cuandolohaga,

iremosdeexcursiónalrefugio—intervieneRaquel,sonriendo,mientrasyomiroal Sombra con la duda reflejada enmimirada, pues no es la primera vez que

Page 391: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

algúnloborondalasmontañas.—Lohanfotografiadoconlascámarasdefototrampeoyesenorme,tío;no

quierovermefrenteaélconmicrío.—¿Algunavezhasvistotúunlobo?—meplanteaelniño.—No,perosíheoídosuaullido—lemiento.—Joder, no veas cómo se oyen desde su casa—le explicami amigo a su

mujer.—Tienesunacasamuybonita,Víctor.Polyyopasamosunavezfrenteaella

ymeencantó.—Yesoquenolahasvistopordentro,cielo.Silohicieras,alucinarías.—¡Yoquieroverla!¡Yquierooírelaullidodellobo!—suelta,emocionado,

elpequeño—.¡Porfavor,Víctor!¿¿Puedo,puedo,puedo??—Pormí,nohayproblema.Siqueréis,podéisvenirmañanaacenaracasa.Noprometounacenatanricacomoésta,peroalgoharéquenoseacomida

prefabricada—propongosonriendo.—¿Puedollevarelfuerteparaquejuguemos?—Enmicasanohayjuguetes,asíquevasatenerquecogertealgo,colega,si

noquieresaburrirte.—¿Seguro,Víctor?—inquiereRaquel—.Noquieroquetesientasobligado.—Claroqueestáseguro,cielo;encasocontrario,nolohubieradicho.¿Ves,

macho?Antesdeloquepensabasvasatenerjuguetestiradosporelsuelo—seburlasonriendo,haciéndomesonreíramí.

Pasamos el resto de la cena rememorando viejos tiempos, recordandoquiénesfuimosantesdeconvertirnosenquienessomosahora,omitiendo,claroestá,ciertosdetallesqueelenanononecesitasaberyeliminando,pocoapoco,esosquinceañosenlosquehemosrecorridocaminosdistintos,unosqueacabandeencontrarsepara,espero,novolverasepararse.

—Memarchoya—lesdigoconDídacsentadosobremispiernas.—¿Yaaaaaa?Yoquieroquejuguemosotravezconelfuerte.—Perosies tarde,¿noestáscansado?—lepreguntosonriéndole,sintiendo

cómoestecríoestáganándometalycomomeganósupadrehaceaños.—No,noloestoy.—Puesdeberías,porqueyaestardeyvasaacostarte—lecomunicaRaquel,

revolviendosucabelloconcariño.

Page 392: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Mañana te prometo que jugaremos, ¿vale?Pero lo que no te aseguro esqueganesestavez.Además,mehedadocuentadeque tienesmás indiosquesoldadosyesoesjugarconventaja,chaval.

—Los otros soldados se rompieron —me cuenta con seriedad, como siestuviéramostratandountemadeEstado.

—Losindioslescortaronlacabeza—matizamiamigo,haciéndomesonreír.—¿Y no pediste refuerzos, macho? ¿Qué clase de comandante eres?—le

preguntoconfingidaseriedad.—Unopésimo,poresosiempregananlosindios—mecontestaburlón.—Vamosatenerqueponerremedioaeso.Venga,colega,acompáñameala

puerta—lepidohaciendoquese levante, tendiéndoleunamano,queaferra,y,duranteunossegundos,observonuestrasmanosunidas.

—Me gusta que seas mi tío —me regala, sorprendiéndome, mientras meacompañahastalapuerta,seguidospormiamigoyporRaquel.

—Yamíserlo.Meparecequetúyyovamosajugarmuchoconesefuerte.—¡Qué guay!—exclama con una resplandeciente sonrisa,mientras yome

agachoparaponermeasualtura.—Buenasnoches,colega;nosvemosmañana—medespidosonriendo.—Mola que me llames «colega», como los mayores —me dice,

devolviéndomelasonrisa—.Choca,colega—prosigue,tendiéndomesumanita,quemiroconunaenormesonrisacargadadedemasiadascosas,esasquebajanportugargantacerrándolayasentándoseentupecho.

—El tío Víctormola, hijo, ya te lo decía tu padre—intervienemi amigomientrasme levanto para darle un abrazo—, y está amariconándose—añade,consiguiendoqueesasonrisanodesaparezcademirostro.

—Qué capullo eres,macho—mascullo separándome de él—.Gracias portodo,Raquel; la cena estababuenísimayme lohepasadomuybien—añado,dándoleunpardebesos—.Osesperomañanaencasa,venidcuandoqueráis.

—Peroantestienesqueveniramitaller—merecuerdaelSombra—.¿Aquéhorateespero?

—No lo sé, supongo que por la tarde —contesto saliendo de su casa ysintiendoelfríodelrellanorecibirmeconlosbrazosabiertos—.Buenasnoches—musito cerrándome la chaqueta mientras a mi espalda oigo sus «buenasnoches».

Page 393: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme
Page 394: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO30

Salgo a la calle, desierta ahora, con cientos de sentimientos contradictoriosbullendodentrodemímientraslaspalabrasdemiamigoresuenanenmicabezay,obligándomeahacerlasaunladojuntocontodoestoquenomedejaenpaz,accedoalvehículo.

Recorro las calles del pueblo rompiendo el silencio en el que se hallanenvueltasconelsonidodelmotordemiJeep,esequeesmúsicacelestialparamiamigo, siendoplenamente consciente de que estoy alejándomede la direcciónquedeberíatomarpararegresaramicasayque,encambio,meestoydirigiendoaunaalaquepormibiennodeberíaniacercarme.«Dehecho,deberíaolvidarhasta el nombre de esa pleta», me digo mientras conduzco hacia ella, paraalejarme de pronto y repetir el mismo recorrido de nuevo mientras intentoignorar esta necesidad acuciante que siento, esa queme hace sentir incómodoconmigomismomientrasprocuroacallarsuvoz,laquemeaconsejabasanarmipasadoparapoderabrazarmi futuro…«Pero¿quénecesidad tengodehacerlocuandomi futuro ya está trazado y no hay nada que abrazar?», me preguntodandounvolantazoparasalirdeestepuebloenelquemiamigohaencontradosu lugarmientras yo continúo buscando el mío sumido en lamás destructivaautocompasión.

Conduzco a través de la noche cerrada instándome a nopensar ennaday,cuando llego al camino serpenteante que me llevará hasta mi casa, bajo laventanilladelvehículoparainspirarelfríoqueaquíserespira,esequehueleapinos, a monte y a tierra húmeda, ese que viene cargado de gotas de aguasuspendidasenelaireyqueseadentraen tu interiorconcada inspiraciónque

Page 395: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

haces,paraenredarseentuspulmonesdelamismaformaquehacelanieblaconlasramasde losárbolesycontodoloqueencuentraasupaso;esefríoqueteengulleyconelquemesientotanensintonía,posiblementeporqueesunreflejodelmismoqueanidaenmiinterioroporquefueesefríoelqueesanochemediocobijo. Instintivamente, aguzoel oídoparaoír ese aullidoquemi almapareceesperar,esequeoíesanocheyalquemedirigísinmiedo,ysientocómotodoestoquellenamipecho,enesepuntojustoenelqueeldolorseasientaunavezbajaporlagarganta,seagitaconeserecuerdo…

«Nohabíanadieenlacalle,nisiquierapasabancochesporella,yapretémispuñosconfuerzasintiendocómoel fríoseenroscabapormispiernasmientrasdentro de mí hacía mucho calor y mi cuerpo temblaba con él», rememorodeteniendoelvehículofrenteamicasa,bajandodeélysintiendoesemismofríoquesentíesanocheenroscándosedenuevoporellas…

«Te odio, te odio, te odio», repetí en un gruñido casi ininteligible con lospuñostancerradosqueclavémisuñasenmipielmientraseseaullidollegabaamis oídos de nuevo, ese aullido que parecía llamarme y, sin dudarlo, entré denuevoenelrellanodelaviviendaparacogermibicicleta.

Pedaleéhacialasmontañassintiendocómoesefríomegolpeabaelrostroylo cortaba con supunta afilada, esaque tenía formade lágrimasy cuyo saborsaladosentíaenmigarganta,cerradaahora,pordondetodoesto,quedolíatanto,bajabatodoelratohastallegaraeselugardondedolíatodavíamás,yapretéelmanillar con ambas manos mientras no dejaba de pedalear y las luces de lascasaspasabanvelocespormilado.

«Teodio, teodio, teodio», repetídenuevoapretandolamandíbula,con larabia tomandolaformadelfuego,peronounfuegoquecaldeabalasentrañas,sinounoquelasenfriabatodavíamás;unfuegoquecongelabayardíaalavezyquemeimpulsabaaseguirpedaleandomientraseseaullidolargoysostenidomeindicabaelcaminoqueseguir…

Rememorotodoesoregresandoalpresenteconesemismoaullidoydirijolamirada hacia la montaña, engullida por la oscuridad ahora, donde ese lobomerodea de nuevo, llamándome, y siento cómo esa necesidad que sentí esanocheapareceotravezparatirardemímientrasesosdoslobosqueyacenenmiinterior seunenaeseaullidoque resuenapor todaspartes,yaprietodenuevomispuños,comohiceesanoche,clavandomisuñasenlaspalmasdemismanos

Page 396: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ymispiesenelsuelo,frenándomeparanocorrerhaciaél.Agotadomentalmente,accedodenuevoamitodoterrenoparaguardarloen

elgarajedelacasa,conesanecesidadtodavíalatiendodentrodemíyconesallamaqueesanochesentíavivándoseotravez,comolascenizasdeunahogueraque, con el viento, prendendenuevo. Ignorándola,medirijo hacia la escaleraquemellevaráalavivienda,esaqueestandiferentealademiamigo.Entroyenciendolasluces,esasquenuncaestabanencendidasenmicasaparanogastarluz. Llego al salón, donde todavía está la mesa puesta con los restos de lacomida. Y donde no hay juguetes esparcidos por el suelo ni fotografíasinmortalizandomomentosfelices;dondenohaymanitasqueaferrarnibatallasentreindiosysoldadosquelibrar,yempiezoaretirarlosplatosparaponerlosenellavavajillas.

«¿Qué estará haciendo?—me pregunto deteniéndome en mi labor—. ¿Sehabráidoosehabráquedado?Joder,hagaloquehaga,seguroquemeodia»,mefustigo intentando no oír la voz de mi amigo… «Si quieres estar, estás»… yfracasandoestrepitosamente.¿Ysimeheequivocado?Estáclaroqueéltampocoera la mejor opción para Raquel en ese momento, pero, viéndolos ahora, nohabíamejoropciónpara ambos.«¿Ysinuestramejoropción somosnosotros?¿Y si realmente había una parada y era yo el que no la veía?», me preguntoclavando mi mirada en el suelo y oyendo en mi interior el rugido del loboblanco, ese que, fatigado por el esfuerzo, intenta amedrentar al negro, queempieza a levantarse.Ese lobonegro cuyamirada tengoclavada en esepuntojustodemiinteriordondetantomedolíadecríoydondecontinúadoliéndomeahora.

Retirotododelsalóny,trasdejarlacocinalimpia,medirijoalbaño,dondeme desprendo de la ropa para seguidamentemeterme bajo el chorro del aguacaliente, intentandocalmardemasiadascosasquesenieganadejardeagitarsedentro demí, sintiendo ese frío expandirse por todomi ser con la fuerza delfuego mientras mis recuerdos se cuelan entre ellos, como intentando robarseprotagonismoentreellosy,alaimagendelafamiliademiamigojuntoalfuego,llega lasuyafrentea losviñedos,susonrisaysucuerpo,esequesepegabaalmío como si quisiera fundirse conmi piel y que conseguía que ese frío, quesiempreestabaahí,sedisolvieraconlachispaqueellaprendíaenmí,esachispaqueencendíaverdaderashoguerasyquesíquequemabaycaldeaba,esaquete

Page 397: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

hacíasentirbienyenpazyqueyodejéatráscuandodecidíposiblementeloquenome correspondía decidir, reflexionomientrasmimente vuela a sus pechos,redondosyllenos,queencajabanperfectamenteenlaspalmasdemismanos,ensus pezones, duros y sonrosados, en su piel, tersa y suave que era comoterciopeloyensusexo,siempremojadoparamí.

—Joder…—mascullollevandomimanoamipolla,rodeándolaycerrandolosojos,recordandolaprimeravezquesuslabioslaenvolvieron,lacalidezdesuboca,suhumedadysulenguachupándomelayponiéndomeladura,comosemeestáponiendoahora.

Gimo empezando a masturbarme, recordando cómo me la follaba,recordandoel sabordesusexo, recordandosuspechosysuculo, susgemidosentrelazadosconlosmíos,cómoseretorcíacuandolachupaba,ycómogritabacuandollegabaalorgasmoy,conelrecuerdodesucuerpoencajadoenelmío,mecorroyotambiénentregruñidos.

—Deputamadre—mascullocerrandolosojos,apoyándomeenlapareddeladucha,conelaguacayendotodavíaencascadasobremicabeza,tanfrustradoconmigomismoquesipudierameliaríaagolpesconlajodidamampara.

Salgodeladuchasintiendomicuerporelajadoperomiinteriormásagitadode lo que ya estaba antes y, tras secarme y ponerme unos slips,me tiro en lacama,deseandodormirmecuantoantesparadejardesentirtodasestásmierdasquetengodentrodemí.

Me despierto cuando no ha amanecido todavía, y siento cómo lasmismasmierdasconlasquemeacostéanochedespiertanconmigo.Frunciendoelceñoyendureciendo el gesto, me dirijo al baño para asearme.Mientras me lavo losdientes, observo, a través del espejo, la ducha donde ayer me masturbé y,mientras clavomimirada en ella, siento cómo llegan los recuerdos de nuevo,esosquenomepermitenolvidaryque seasientanenmipechoparamirardereojo a la incomodidad que se ha instalado en la boca de mi estómago,sacudiéndolo y revolviéndolo, y que, de la mano, le guiñan un ojo aldesasosiego, ese que sientes cuando sabes que tienes demasiadas cosaspendientesderesolveryquevasretrasandoporquecreesnoestarpreparadoparaafrontarlas.

Me visto con lo primero que encuentro en el armario y, una vez listo,medirijoalacocina,dondemepreparouncafébiencargado,unoquemetomode

Page 398: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

pie junto a la ventana, contemplando cómoel amanecer le coge el relevo a lanocheycómo ladensanieblaparecehaberengullidoelpuebloconsusgarrasimplacables,mientrasqueyo,aquíarriba,permanezcoasalvodeella.

Alprimercafélesigueelsegundoyasentadoalamesadelsalón;pasodeiral despacho con las pedazo de vistas que tengo aquí y, con mi ordenadorencendido,medispongoaverlaaperturadelabolsamientrassuvozsecuelaatravésdemisresistenciasparallenarmipechoconmilesdeemocionesquemeahoganyhacenquecuestionecontinuamentemidecisión,esaquetomécuandoellatomólasuya…

***

—¿Y el tercer ordenador? —me preguntó mientras yo sentía cómo todocambiaba a nuestro alrededor con ella sentada en mi regazo y mi pollaempezandoacrecerconelrocedesutrasero.

—Pararealizarlasórdenesdecompraydeventa—lerespondíconeldeseohaciendoestragosdentrodemí.

—Y,elcuarto,paralabodega,¿verdad?—Verdad—contesté empezando a acariciarle la pierna, con esa ansia viva

quemequemabapordentrocomenzandoatomarelcontroldemismanos.—Eresuncerebrito—medijoconadmiración,volviéndoseparamirarme,y

lamirédivertido.—¿Túcrees?—Sinduda,uncerebritoqueestáparacomérseloenterito—musitó,rozando

suslabioscontralosmíos.—Val…novasamarearme—leaseguré,apesardequeenelfondoesoera

justoloqueesperabaquehiciera.—¿Estásseguro?—murmurómoviéndosesobremispiernasparasentarsea

horcajadassobreellasmientrasyosentíacómomipollapresionabalacremallerademispantalones,reclamandosupiel—.Vic…—susurróenterrandosusdedosenmi pelo y gemí, decidido a dejar de oponer resistencia. ¡Qué coño!, estabadeseandofollármela,comosiemprecuandolateníacercademí.

—Nena… —mascullé llevando mis manos a su trasero, que apresé conposesión,pegandosusexocontramipolla,quereaccionóalinstanteasuroce…

Page 399: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

***

Esedíalepuselaprimeratiritasobrelamesademidespacho,esamesaquecasi nos cargamos, rememoro sintiendo como latigazos todo estoque llenamipecho,y,tambiénesedía,meenamorémásdeella,siesqueeraposiblequererlamásde lo queya la quería,medigo con lamirada clavada enmiportátil, sinverlorealmente,conmipollatanduracomoentonces.

Frustrado, entierromisdedos enmipelo, con los codos apoyados sobre lamesa,negándomeenredondoamasturbarmedenuevopensandoenella.«Joder,quememataraapajasconquinceañoseranormal,peroahora,aestasedades,me niego»,me recrimino con disgusto, mirando la hora en el ordenador. Lasnueve. «Gon no tardará en llamar»,me digo, y, al segundo, su llamada ymisalvación.Joder,unosminutosmásacordándomedeellaymetemoquehubieraterminadoenelbaño.

—Buenos días,Gonzalo—lo saludo, obligándome a hacer a un lado todoestoquesiento.

—Buenos días, señor Álvarez. Espero que haya pasado un buen fin desemana.

—Cojonudo—lerespondo,sintiendocómolaamargurasemeatragantaenla garganta—. ¿Qué coño está pasando? —mascullo centrándome al fin,detectandocómo,concadaactualización,losindicadoresdelosbancospierdenvalor.

—Eso iba a decirle, señor. ¿Ha visto hoy las noticias? —me preguntamientrasmaldigoporlobajo.«Justoenesoestabapensandohaceunsegundo»,prosigoparamíconironía.

—No,no las hevisto; estoy fueradeviaje—le aclaro frunciendo el ceño,viendocómoelrojocomienzaadominartodalapantalla.

—Ha salido una noticia muy desfavorable para la banca: el TribunalSupremoha dictaminado que deberán ser los bancos y no los clientes los quetenganquehacersecargodelImpuestodeActosJurídicosDocumentadosdelashipotecas.

Señor, leaseguroqueestosevaa ira tomarporculo rapidito; leaconsejoqueliquidetodaslasposicionescuantoantesosevaaquedarpilladoentodas—me recomienda mientras mis dedos vuelan por el teclado en busca de

Page 400: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

información, sin dejar demaldecir por lo bajo, pues varios de los valores quetengocompradossondeentidadesbancarias.

—Vende, liquídalo todo y ya recompraremosmás adelante. Joder, ¿se hanparadoapensarenlaspérdidasmillonariasquevaaacarrearesaresolución?

—Ni idea, pero esto se está yendo a la mierda. Voy a ir vendiéndole amercadoy,cuandolastengatodasliquidadas,leenviaréuninformepormail.

—Me cago en la hostia—mascullo entre dientes—. Llámame cuando lashayasliquidadotodas.

—Descuide, en unos minutos tendrá ese correo —me asegura, eficiente,antesdecolgar.

—Joder,putosbancosyputoSupremo—masculloparamí,levantándomeydirigiéndomealamplioventanal,desdedondecompruebocómolanieblasehadisueltoporcompleto,liberandoalpueblodesusdensasgarras,y,denuevo,suvoz… esa voz que se cuela con facilidad en mi mente, a pesar de tener lascompuertas cerradas con doble cerradura; esa voz que nome abandona y quetrae consigo su sonrisa, sus ojos y esa chispa, que, aun sin estar presente, escapazdeprendermicuerpo…

«¿Yenseriotegustaeso?¿Quetudineroestéenmanosdelmundoydelasnoticias que puedan surgir?», rememoro, dejándome arrastrar por ella, por esavozqueesmicantodesirenayqueoigoconclaridadatravésdemisrecuerdos.

«Me encanta, y no está enmanos delmundo, está enmismanos: soy yoquiendecideyasumelosriesgos»,lematicé,sonriéndole.

«Puesahoraestásperdiendopasta»,meindicóconinsolenciamientrasyomeobligabaamantenerlasmanosquietas.«Tiendesaolvidarlascosasquetedigo—le indiqué socarrón, sentándome en mi mesa—. Recuerda que todo lo quebaja,sube,en todos lossentidos»,proseguídivertido,guiñándoleunojoyconmibraguetaempezandoacobrarvida…

Joder, siempre me sentía igual cuando estaba con ella, como si fuera unadolescentehormonadoqueacabadedescubrirloqueeselsexoyestádeseandorepetir,medigometiendomismanosenlosbolsillosdelospantalones,sintiendoesanecesidadyesaansiavivaportocarlaquemeconsumíapordentrohacerlodenuevo,sintiendocómomipielreclamalasuyaycómotodoestoquellenamipechogritasunombre.

El sonido del portátil indicándome la entrada de un correo electrónicome

Page 401: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

saca demis pensamientos y, con celeridad,medirijo a él para observar a quépreciosehanvendidolasacciones.Duranteunosminutos,calculolaspérdidasque esa resolución me ha ocasionado, «unas pérdidas que voy a recuperardobladas cuando las recompre»,medigoobservando lapantalla, viendocómolosauguriosdeGonsecumplenylosvaloressevanalamierdapormomentos.

—Dime,Gonzalo—losaludocuandomellamaotravez.—Vendidas, señor Álvarez; ya le he enviado el mail —me confirma,

eficiente.—Losé, loestoyviendo—masculloobservando lapantalla—.Quieroque

memantengasal tantodecualquiernoticiaquepuedasurgir;dudomuchoqueesaresoluciónseaceptesinmásporpartedelosbancos.

—Eso téngalo por seguro;me juego el cuello a que alguien descolgará elteléfonoparadarlesuntoque.

—Exacto,nocreoquevayanaquedarsedebrazoscruzadosconlaspérdidasmillonariasquevanatenery,siestosedalavuelta,quierosaberlocuantoantesparaentrardenuevo.

Hablamos durante casi media hora y, cuando cuelgo, siento cómo esedesasosiego sigue ahí, tan presente como estaba cuando he abierto los ojos, ycómoesanecesidadporsaberdeellacrececoncadaminutoquepasa.Alfinal,cansadodesentirmeasí,merindoaldeseoquemeestáimpidiendorespirarconnormalidad, anhelandoponer fin a esa dudaque, comounagota de agua, queincesante cae sobre el mismo sitio, termina erosionando la piedra yresquebrajandoladeterminaciónmásférrea.

Cojoelmóvildenuevo,sintiendocómoelcorazónmegolpeaelpechoconfuerza,mientrasmepreguntoaquiénllamaryquédecirodecirleenelcasodeque me lo coja ella. Siento que el lobo blanco ruge rabioso dentro de mí,mostrándome sus colmillos, y que el negro me mira fijamente. «Joder, sóloquiero saber si se ha ido o si se ha quedado, sólo eso»,me digomarcando elteléfono de la bodega y la extensión demi despacho.Mientras el teléfono datono,yantesdequealguienpuedacogerlo,cuelgoconmanostemblorosasparaempezaradeambularporelsalón.

Pero¿quéestoyhaciendo?Toméunadecisión,unaquemecostónochesynochesdedesvelo,yenestemomento,trasveralSombra,laestoycuestionandocuandonodeberíahacerlo.«Suvidanoestáenlosviñedos,noahora»,medigo

Page 402: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

recordando lo que tantas veces me dije en la oscuridad de la nochemientrasaprietolospuñosentornoamicuerpo.«Yoladejéymemarchéparaqueellatambiénsemarcharay,silallamooseenteradequelahellamado,todoestonoservirádenada»,merecriminomentalmente, saliendodel salónparadirigirmehaciamihabitación,necesitandomovermeycentrarmiatenciónenalgoquenoseaellayenloquedeseorealmente.

Sustituyomiszapatosporunasbotasdemontañayelsuéterfinoquellevoporunomásgrueso,ymeobligoadejardecuestionarmedecisionesqueyaestántomadas y a que las palabras del Sombra y lo que viví en su casa anoche nocalenenmímásdeloquedeberían.Trascogerunachaqueta,salgodemicasadirectoalasmontañas,decididoaenfrentaresosmiedosquetengoasentadosenmiinteriormientras,alolejos,oigoeseaullidolargoysostenidoquedespiertademasiadascosasdentrodemí.

Page 403: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO31

Sientocómoelfríoseenroscapormispiernasencuantopongounpiefueradela casa, reptando por ellas como si de una serpiente se tratara, una que,balanceandosucabezaylapartesuperiordesucuerpohaciadelanteyhacialoslados, dejara un rastro de humedad a su paso. Cerrando mi chaqueta yrecrudeciendo el gesto, llevo lamirada hacia el camino ascendente que tengofrente amí, ese queme llevará al refugio y a darme de frente con todosmistemores,esosquetienenelrostrodemiamigoytambiénlaformadeunlobo;esos temores que formaron al hombre que soy en la actualidad y que estánesperándome pacientes y ocultos entre las sombras de los árboles y las hojasrugosas de los helechos; esos que, duros como las piedras del monte,endurecieronmialmacuandotansóloeraunniño.

Clavandolasuñasenlaspalmasdemismanos,aprietolospuñosconfuerza,como solía hacer entonces, sintiendoque todo esto que tengodentro demí seagitanerviosoalaesperadeloquesucederámientrasmispiesvandejandosuhuellaenlatierrahúmeda,yelfríoquehasubidopormispiernasseenroscaenmiinterior,abriendolacompuertaamisrecuerdosyaesanoche,esaenlaquepermitíqueellobonegroseasentaraenmiinterioryenlaquemeprometíamímismoqueibaaarrepentirsedeverdaddehabermetraídoalmundo…

***

Dejé la bicicleta apoyada contra el tronco de un árbol al principio delcamino…Hacíamuchofríoynohabíamásluzqueladelosrayosplateadosdela luna. Ésta era tan grande que parecía una pelota gigante, pensé alzandomi

Page 404: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

rostrodesconsoladohaciaellamientrassentíalasmanosentumecidasporelfrío.Estirélasmangasdelsuéterparaguardarlasdentrodeél,cerrándolasconfuerzay manteniendo la tela apresada entre mis puños mientras la rabia me hacíatemblarpordentroylaslágrimaspugnabanporsalir,peronoibaadejarlas,medije, obligándome a mantenerlas presas en mis ojos. No iba a llorar, yo nolloraba,yonoeraningunaniñita,mereñíechandoaandarsinsaberhaciadóndeiba realmenteni por qué estaba subiendo lamontaña.Puedeque, en el fondo,quisiera que me sucediera algo para que mi madre me mirara y me prestaraatencióndeunavezopuedequequisieraterminarcontodoydesaparecerdeestemundoque,comolasraícesqueescapabandelatierra,nodejabadehacermelazancadilla.

Yo no tenía que haber nacido, ¿para qué lo hice?,me pregunté, apretandoambos puños enérgicamente. Nadie me esperaba entonces ni a nadie leimportaríaquemefuera;alcontrario,seríaunalivioparaella,penséconrabia.

«Bueno,puedequeelSombrasílolamente…»,medijesintiendocómotodoesoqueteníadentromedolíacadavezmásyaceleréelpaso,dirigiéndomehaciaese aullido queme llamaba, como reclamándome, con la firmeza que te da larabiayqueconsiguequeelmiedoseesfume,haciéndoteserimprudente.

Con determinación, con los puños cerrados y, en ocasiones, con lamiradavidriosa por culpa de las lágrimas, sorteé piedras, raíces y pequeños hilos deagua que, a su manera, intentaban frenar mi avance mientras su voz y suspalabrasmequemabanpordentro,provocandoquetuvieramásfrío…

Rememoro retomando el caminoque seguí esa nocheyqueme llevaría alrefugioquehicemíoymástardedelostres…

***

Tal y como hice en esa ocasión y en las muchas veces que recorríposteriormenteestesendero,sorteopiedras,hilosdeaguaquellevanconsigoelrecuerdodeesanoche,asícomoraícesque,traicioneras,huyendelatierracomosituvieranotraopciónquenofueravivirenterradasenella,comoyo,queayerhuideestesenderocomosifueraestasraícesytuvieraotraopciónquenofuerarecorrerlo.Sumidoenmispensamientos,veocómo,derepente,unrayodesolsecuela fugaz a través de las ramas de los árboles, sorteando la frondosidad delbosque, para darme de lleno en el rostro, y alzo la mirada hacia al cielo,

Page 405: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

entrecerrandolosojosysintiendocómoeserayodesolseadentraenmiinterior,dondeelfríocampaasusanchasentremisentrañas,paramitigarloyaliviarloala vez que una parte de mí intenta mostrarme algo que en mi parálisis soyincapazdever.

El aullido del lobo me saca de mi ensoñación, recrudeciendo el frío queformaparte demí, ése con el quehe aprendido a convivir yque, en contadasocasiones,sobretodocuandoestabaconella,olvidabaquealbergaba,yfrunzoelceñoabrazándolo,obligándomeaproseguirmicaminoyadejaratráseserayodesolque,duranteunossegundos,lohavencidoconunafacilidadpasmosa.

Sientoquemipielseerizaporlaemociónencuantollegoalpequeñoclarodondeestáelrefugioy,conelcorazóndetenido,caminoconpiernastemblorosashaciaesacruzbajolacual,enrealidad,noestáenterradomiamigo,perodondeestamostodosnosotros,esoscríosquefuimosyque,entrelágrimas,retenidasenocasiones y dejándolas fluir en otras, enterraron todo lo que era suyo, esaspertenenciasquelodefiníancomopuededefinirteunceñofruncido,unamediasonrisaoungestoqueessólotuyo…Sucascoysusguantes,suúltimacajetilladetabaco,esacamisetaquetantolegustabayquesumadrenosdio,elcasetedemúsicarememberqueescuchábamossinpararylafotografíadelostresjuntos,LaSantísimaTrinidad,entreotrascosas,rememorosentándomeenlapiedraquese encuentra frente a la cruzdemadera; esaque, sorprendentemente, continúasiendo lamismaqueyohice,yalargounamanoparaacariciarsu texturaysurugosidad, recordandocómome temblaban lasmanosycómollorabamientrasuníaambasramas.

—Hola, tío.No sé si debería hablarte aquí o en el cementerio donde estásenterrado;nisiquierasésideberíahablartedespuésdelaputadaquenoshicistelargándotetanpronto—mearrancoahablar,imaginándolosentadoamilado—.¿Sabes?Mecabreémuchocontigo,chaval;bueno,enrealidadestabacabreadocon todos, ya me conoces—añado en un murmullo—. Tu muerte lo cambiótodo;tellevasteunapartedenosotrosqueeraimposiblereemplazarysólopudepensar en huir, como si al hacerlo fuera a dolermemenos tu ausencia…Y lohice,huiy la jodí conelSombra…—prosigo, sintiendocómomigarganta secierraporeldolor—.Ayerestuveconél;nosabesquéputavida llevócuandonosfuimos,macho,oigualsíquelosabes,porquehasestadoanuestroladotodoel tiempo, como dijiste que harías, o puede que te largaras al mundo de los

Page 406: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

espíritusodondeseaquetelargascuandolapalmasyahoraestéhablandosolocomosisemefueralacabeza—continúo,observandoelmusgoque,creciendoenlasombra,intentaadueñarsedelatierra—,pero,yaqueestoyaquí,ytejuroquenohasidofácil,voyapensarqueestásamilado,enestelugarquefuetannuestro y que, por si no lo sabes, ahora es del Sombra—musito, para luegoguardar silencio durante unosminutos—.Sé que ayer hui comouna nenaza yquenohevenidomuchoporaquí;bueno,enrealidadnohevenidonada,peropiensomuchoenti.Dehecho,creoquenohahabidounsolodíaenquenolohayahecho,asíquesupongoqueesomeconcedeunaespeciedebula…Joder,ojalápudieravertedenuevo,aunquefueraduranteunospocosminutos,ysabersi estás bien, si te tratan como temereces allí arriba y si eres feliz—le digosintiendocómolosojossemellenande lágrimas—.Venga,búrlate,cabrón—añado, secándolas—.Al final será verdad eso que dice el Sombra de quemeestoyamariconando…Élvienemuchoaverte,asíquesupongoquesabrásqueha sido padre. Joder con el enano, es como él cuando era crío, pero con ladiferenciadequeesamigodelhijodeJoaquinitoynolehacelasputadasquelehacíaelSombraasupadre,lasrecuerdas,¿verdad?¡Comoparanohacerlo!—musito perdiéndome en los recuerdos de esos días—. ¿Recuerdas cuandomataste esa rata y se la pusiste en lamochila?, ¿te acuerdas del susto que lediste?Esedíateganasteelmoteyyanovolvimosallamarteportunombre—rememorooyendoalolejoselaullidodellobo,ysientoquemipielseeriza—.¿Sehapaseadomuchoeseloboporaquí?—lepregunto,obligándomeaseguirhablando—.Looigodesdemicasaytambiéndentrodemí;atipuedodecírtelo,porque dudo que vayas a contárselo a nadie y porque no vas a podermeterteconmigoaunquequieras.Losiento,macho,gajesdehaberlapalmado—prosigo,percibiendo cómo ese aullido retumba entre las montañas y enmi interior—.Menudos elementos estábamos hechos; no sé quién se llevaba la palma en elhonordeserlomás,peroyocambié,comotambiénlohizoelSombra;cadaunoasuritmoysegúnloscaprichosdelavida,perolohicimos,sobretodoél.Éllohahechobien;sóloconquetedigaquesellevabienconJoaquinito…

Imagínate… Y yo… yo sé que tengo cosas pendientes que resolver parapoderhacerlomejor.¿Sabes?,penséquenuncamásvolveríaporaquí,quenuncamáspisaríaeste lugaryquejamásmeplantearía loqueestoyplanteándome,ymiraquéputaeslavidaquemecompréunacasayahoraestoyplanteándomelo

Page 407: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

todo.»Oye,estodehablarsoloesunamierda,macho,podríashaceralgoparaque

supieraquealmenosmeestásescuchando;nosé…,rompeunaramadeunárbolo haz que la puerta del refugio se abra…, o no, mejor déjalo, creo que meacojonaría y saldría por patas de aquí —suelto sonriendo, levantándome yobservandoelrefugioquetengofrenteamí—.Québienlopasábamosaquí…

Aquídejábamosdeserlosmacarrasquetodoelmundoseñalabaconeldedopara ser solamente nosotros… Qué buenos recuerdos, tío —continúoacercándome a la casa, donde el sol, como una espada, clava sus rayos en elsuelosinquehayanadaqueseloimpidaysientocómosucalidezmeenvuelveycalmaese fríoyesedesasosiegoqueparece irconmigoalládondeyovaya—.Undía,cuandoeseloboselargue,vendremostodosaverte:elSombra,sumujerRaquel,elenanoyyo…¿Teconfiesounacosa?Esedíamegustaríavenirconellaypresentártela—lecuento,oyendoelcrujidodeunaramaprovenientedelasombra,pordondeelmusgocampaasusanchas,y,denuevo,sientoquemipielseerizamientrasmemantengoenelcentrodelclaro,dondeelsolparecebrillarmás que antes—.No sabes quién es ella…—prosigo, haciendo a un lado esasensaciónyyendodenuevohaciadondeestáenterrado loquerepresentaamiamigo,manteniéndometodoeltiempoalamparodelsol—.EllaesVal,lamujerporlaquedejédeserquieneraparaserquiensoyahora;porelladejédeoíraese lobodelque tehablabaantesparaoíraotro,unoalquenuncahabíaoídohastaentonces.Sí,búrlate,cabrón;venga,ríete—ledigoimaginandosusonrisaytodoloquemediríasipudierasobreeltemadeloslobos—.¡Ah,no!¡Quenopuedes! Si es que no me hiciste caso, macho; ya te dije que no la palmarasporque ibas a perderte muchas cosas, pero tú, como siempre, no meescuchaste…Ahoraenserio,séquesuenaunpocoloco,perodesdeesanochehe tenido sus ojos clavados aquí dentro—le indico llevando la palma de unamano ami pecho—y lo que yo sentía era comoun reflejo de lo que él teníadentro…¿RecuerdascuandoquisisteapodarmeLobo?—lepreguntovolviendomimiradahaciaesazonaoscuradondesé,deantemano,quehacefrío—.¿Sabesporquénotedejé?Porquenomegustóloqueviesanocheensusojosniloquemehacíasentiraquídentro…Esefríoquenuncallegaadesaparecerdeltodo—murmuro, sintiéndolo dentro demí—; por eso nunca te respondía cuandomellamabasporesemote…Suertequealfinaltecansaste—musitoescuchandosu

Page 408: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

voz, esa que me llega, tan clara como el agua de un río, a través de misrecuerdos,viendoloshoyuelosqueseleformabanenlasmejillascuandosonreíay esa mirada llena de vida que fue apagándose poco a poco—. Te echo demenos,Rata—susurro, alzando lamiradahacia el cielo—,perovolveremos avernos,algúndía,yentoncespodrásmeterteconmigotodoloquequierassobretodaestamierdadeloslobosquetehecontado,pero,mientrastanto,vasatenerquejoderte.Memarcho,tío;tengoquereclutarunejércitoysolucionarunademis mierdas —me despido observando cómo los rayos del sol empiezan afiltrarseatravésdelasramasdelosárboles,parailuminaresazonaoscuraque,hastahaceunosminutos, semanteníadominadapor lassombras—.Vigilamispasos,colega,ynopermitasqueeselobo,quenodejademerodearporaquí,losfrene.Mañanavendréavertedenuevoytecontarésiheganadolabatallacontralosindiosysihaservidodealgoiraverla—lecuentoendureciendoelgesto—.Sí,voyairaveramimadre.Valmeaconsejóquesanaramipasadoy,paraeso,tengoquehacerlo—leexplicomientrasoigodenuevoeseaullido,eseaullidolargoysostenidoqueresuenaenmiinteriordelamismaformaenqueresuenaentrelasmontañas,esequehacevibrarmiscostillascomosideunascuerdasdeguitarrasetratarayquellevaconélunamiradaduraycargadaderencorydeodio,unamiradaalaqueledoylaespaldamientrascompruebocómoelsolseadueñaporcompletodelasombra,anulándoladeltodo—.Nosvemosmañana,tío; no olvides lo que te he pedido—susurro contemplando los árboles que,unidosporsusramas,dancobijoalasombra,esaenlaquevoyaadentrarme.

Con todosmis sentidos enalerta, recorro este sendero,quepodría recorrerconlosojoscerradossiquisiera,viendocómolosrayosdesolguíanmispasosengullendo la penumbra con su luz, esa luz que se filtra por todas partes,consiguiendoqueloscoloresbrillenmásyqueesefrío,queenlasombraescasipalpable,semitigueconsucalor.

Y, aunque esto nunca lo reconoceré en voz alta, suspiro de puro aliviocuando llego al final del camino mientras a mis oídos llega un aullido, unodiferentealquehabíaoídohastaahora,unoquehacequemi interiorvibredeforma distinta, y vuelvomi mirada extrañada hacia las montañas y hacia esesendero que he recorrido hace apenas unosminutos y que, inexplicablemente,estállenodeluz.

El sonidodemimóvilme sacademis pensamientos y, sin poder alejar la

Page 409: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

miradadeesaluz,leoquiénmellama:Gon.—Dime,Gonzalo,¿cómovatodo?—Desplomándose a la carrera; como esto continúe así, será difícil que las

entidadesrecuperentodoloqueestánperdiendo…—meexplicamientrasyomeevadoduranteunossegundosparafijarmeenesaluzqueparecebrotardelsuelohastaunirse con los rayosdel sol que se filtran a travésde la frondosidaddelbosque.

—Vamosaesperaraverquésucedey,encuantosepasalgo,mellamas.Hoynoestaréconectadoynecesitosabercómovareaccionandoelmercado.

—Señor,leaconsejoquerevisesuteléfono;lohellamadocomodiezveces,peronodaba tononi indicabaque estuviera fuerade cobertura—mecomentaprudente—. Intente estar disponible, porque, si sale cualquier noticia y estorepunta,necesitopoderhablarconusted.

—¿Mehasllamado?—inquiero,asombrado.—Así es, señor, y era como si llamara al vacío—me indica bromeando,

mientrasyosientoquemiinteriorsehiela.—Revisaré el teléfono. Hasta luego, Gonzalo —musito colgando y

comprobandoacontinuaciónquenotengoningunallamadaperdidayquenohaentradoningúnmensajedesdequehesalidodecasa—.Quéraro—susurroparamí,frunciendoelceño.

Reinicioel teléfonodecaminoalgaraje,con la firme intenciónde,hoysí,dirigirme a ese lugar al que anoche estuve tentado a ir cuandomemarché decasademiamigo.

Conduzco hacia el pueblo obligándome a no pensar demasiado en esa luzqueiluminabaelclaroyquemástardehaguiadomispasos;esaluzquesehafiltrado por mantos tupidos de ramas y que ha llegado hasta lugares donde,posiblemente, nunca había perpetrado; esa luz que hoy ha vencido cualquierresistenciaquese interpusieraensucaminoparaguiarelmíoy,deesa forma,protegermispasos,esosquehedadoconelcorazónenunpuño.

FrunzoelceñoyendurezcoelgestoencuantollegoalaentradadeOrdino,cubriéndomeconesedisfrazconelqueayerolvidécubrirmecuandolleguéconelSombray,recordandosuspalabras,medesprendodeél,desfrunciendoelceñoysuavizandomirostro,anulandotodolonegativoquesientocuandoestoyaquíypermitiendoquequiensoyahoradomineaquienfui,sintiéndome,derepente,

Page 410: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

desnudo y demasiado expuesto. Aferrando el volante con fuerza, me dirijoprimeroalacasadondemecrie,aeselugarenelquecrecíyalquemeprometínoregresarjamáscuandomelarguedeaquí,esequeheevitadoatodacostalaspocasvecesquehepisadoestepueblodesdeentonces.

Detengomivehículofrentealafachada,retrocediendoaesosprimerosañosdemi vida, esos en los que todavía ansiaba queme sonriera o queme dijeraalguna palabra de cariño, «esos años en los que buscaba su mano cuandocaminábamospor la acera…», rememoroviéndonos a través de los recuerdos,esosquesiempreestánahí,fluyendocomoelaguadeunríoreciénnacidoque,como si de hilos de plata se tratara, sortea piedras y se filtra por donde nisiquieraelaireescapazdepasarhastaencontrarsucamino…Y,comoesaagua,queenocasionescaeamododediminutacascadaporlapareddelamontañay,enotras,atraviesasenderos,medejoarrastrarporellayporsucorriente,yporesosrecuerdosquemellevanasentirdenuevolafuerzaconlaquesosteníamimano, tan fuerteque,aveces, inclusomehacíadaño,yvuelvoacorrer tiradoporella,porquecaminabatandeprisaquemiscortaspiernasnopodíanseguirlahasta que un día me solté del agarre para nunca más volver a buscarla…,recuerdosintiendocómoesepunto,dondemedolíadepequeño,lateenquistadopor ese dolor, y cómo, conmis recuerdos, vuelvo a ser ese chiquillo que unanochesalióporesapuertaparadirigirsealasmontañas.Esecríoque,cononceaños,pasólanocheenellassinquenadiefueraabuscarloyque,cuandoregresó,yanoeraelmismo,puede inclusoqueyano lofueraantesmientrassedirigíahacia ellas, reflexiono sintiendo cómo todo lo negro que hay dentro demí sevuelvemásdañinoymásfríoconmisrecuerdos.«Peroyoyanosoyesecrío—medigo,reacondicionandomimente—;esopasóynotieneningúnsentidoquecontinúemachacándome con esos recuerdos. Las cosas suceden, posiblementeporalgo,ysonellaslasquenoshacencambiar,paramejoroparapeor»,piensomientras deslizo mi mirada por la fachada. Yo he cambiado y quiero seguirhaciéndolo;pormí,noporella,porqueelrencorsólodañaaquienlosiente.«Yopodríamorirahogadoporélymimadreniseenteraría,asíqueprefierosalirdeesas aguas negras y frías, como saliómi amigo del infierno, y, como hizo él,sacaréprimerounapiernayluegolaotrayavanzaré,hastaqueeselagonegroyprofundo esté tan lejos demí que no puedamojarmásmis pies»,me animo,arrancando e incorporándome a la circulación para ir a su actual casa, sin dar

Page 411: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

estúpidosrodeoscomohiceayerysindudar,dandoesepasoqueséquenecesitodar.

Estaciono fuera de la pleta donde vive mi madre, y, dando un paseo, meadentroenella,enestelugarqueescomounpueblodentrodeotroydondeyo,sinceramente,meahogaríasituvieraquevivir.Piensoenellorecordandocómodecríomimadresequedabamirándoladesdefueraycómo,aveces,entrabaenellaparadevorarconsumiradalasfachadasdepiedraconsustejadosdepizarra,la leña ordenada en la entrada de cada vivienda y los troncos que, comomaceteros naturales, estaban repletos de flores de múltiples colores, como loestánahora,aparentemente inmunesalpasodel tiempo,medigodeslizando lavistahaciaeljardíndeunadelascasasydemorándomeenelcolumpiomoradoque han colgado de las ramas de un abeto. Sin saber por qué, aparece enmimenteDídacymeplanteoqueposiblemente legustaría tenerun columpio asíparacuandosecansaradelucharconlosindiosylossoldados.

«Vaya… esto sí que es una sorpresa, por primera vez no me heautocompadecidodemipasado»,medigo,sintiéndomeinexplicablementebienyechandoaandardenuevohaciasucasa.

Apesardequetengollave,nolautilizoypulsoeltimbre,sintiendocómomivientre se retuerce y cómo, esa herida que late encallada, supura demasiadascosasalasqueprefieronoponernombre.

—Hola,madre—lasaludoconvozneutraencuantoabrelapuerta,viendolasorpresareflejadaensumirada—.¿Puedopasar?

—¡Qué pregunta! Eres tú quien paga esta casa, por supuesto que puedespasar—respondeconsequedad,haciéndoseaunladoparafacilitarmeelpaso,ycon apenas unas pocas palabras siento el mismo deseo de zarandearla quecuandoerajoven.

—Esperoqueestébienyvivaagusto—le indicohablándoledeustedporprimeravez…Puedequeporque estámayor o porquehanpasado tantos añosque me siento más lejos de ella de lo que ya me sentía entonces, reflexionomientraslacalidezdelacasamedalabienvenidaquenomehadadoella,y,ensilencio,observo lamesacamillaque se encuentra junto a laventanaa laqueestádirigiéndose.

—No me falta de nada, muchas gracias —contesta con el rictus tenso,sentándoseenunadelasbutacasquelarodean.

Page 412: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Y lamujerque la cuida?¿Dóndeestá?—lepregunto, tomandoasientofrenteaella,apesardequenomehainvitadoahacerlo.

—Teníaqueiracomprar—meexplicaconparquedad,apretandoloslabioshastaconvertirlosenunafinalínea,yobservosurostrodesmejorado,esequelaamargurahavestidodearrugas,ysusojostristes,esosqueposiblementealgúndíabrillaroncargadosdesueños.

—Sepreguntaráquéhagoaquídespuésdetantotiemposinvernos,¿verdad?—inquiero,mirándoladirectamentealosojos,mientrasellacubresurostro

conlamismamáscaradeindiferenciaconlaquecubríyoelmíoduranteaños,posiblemente por imitación o porque, sencillamente, lo llevaba dentro y sóloteníaqueaprenderasacarlo—.Estoyaquíporquequierohacerleunapreguntao,yapuestos,varias,yporqueheidoguardandodemasiadaspalabrasdentrodemíy ha llegado el momento de sacarlas —prosigo mientras ella me sostiene lamiradaconaltivez,apesardelasituaciónenlaqueseencuentra.

—¿Quéquieressaber?—meespetacondureza.—¿Porquénomedioenadopcióncuandonací?¿Porquésequedóconmigo

omehizoamíquedarmeconustedcuandoestáclaroquenomequería?¿Porquénosarruinólavida,madre?Esanochemeechólaculpadealgoqueyonoelegí;nofuiyoquieneligiónacernifuiyoquieneligióquedarseconusted,nipor supuesto nunca quise arruinarle la vida, pero usted sí que lo hizo, y, alhacerlo, me privó de saber lo que era tener una madre, lo que era crecersintiéndomequeridoyprotegidoy,sobretodo,loqueeratenerunafamilia—lerecrimino, sintiendo cómo esa herida supurante empieza a cerrarse con mispalabras, esas que prácticamente estoy vomitando—. Yo encontré esa familiacuandomefuideaquí,unafamiliaquemeacogióconlosbrazosabiertosyqueme dio todo el cariño y el amor que usted nuncame dio. Qué pena de vida,madre.Quépenaquenoshayaprivadodealgoquenuncapodremosrecuperaryquépenaquenisiquieraahoraseacapazdedarsecuenta.Estásola;mírese.Nisiquierasusprimastienencontactoconustedporquehaidoalejándosedetodoelmundoconsuamargura.¿Porqué,madre?,dígamelo—lepidosinrencor,conlapenallenandocadaunodelosrinconesdeestesalón.

—¿Ya has terminado?, ¿o tienes más cosas que echarme en cara? —meformuladesprendiéndosedeesamáscaraquecubríasurostroparapermitirquesusojosbrillencon la irayelodioque,pordesgracia,es tan familiarparamí

Page 413: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mientrasmelimitoaobservarlaensilencio,recordandoalamujerquefue—.Notedienadopciónporquetuabuelonomelopermitió;fueélquienmeobligóaquedarmecontigoparapurgarmipecado,unpecadoqueconsistióenacostarmecon un hombre que me llevó a la cama con sus palabras galantes y quedesapareciócuandoledijequetellevabaenmivientre;unpecadoquemecostólavida,porqueyomorí cuando túnaciste—vomita conelodioacompañandosuspalabras—.Mividaterminóesedíay,tienesrazón,notequiero,nitampocote quise entonces, pero te cuidaba cuando enfermabas, llenaba la nevera y tevestía,yesoesmuchomásdeloquehizoesehombre,alquellamarías«padre»sisehubieraquedado,porti,asíquenovengasaecharmenadaencara,porqueno tienes derecho. Con tu dinero, sí, ese que tienes, nunca podrás pagar mirenuncia y las veces que tuve que agachar la cabeza cuandome llamaban delcolegio para decirme que no ibas a clase, o cuando tenía que ir al calabozo asacartedeélporque tehabíasmetidodenuevoen líoscon losdelincuentesdetus amigotes; pormuchodinero que tengas ahora y pormuybien vestido quevayas, nunca podrás pagar la mala vida que me diste, así que ahórrate tuspreguntas,porquenuncatendráslarespuestaqueesperas.

—Noesperonadadeusted,madre,haceañosquedejédehacerlo—replicoconfrialdadlevantándome,puesnecesitomoverme—.¿Sabeunacosa?Noteníani ideade loqueibaasucedercuandonosviéramosdenuevo,sólosentíaquedebíavolveraverla,aunquefueraporúltimavez,parapodercerraresapuertademi pasado que se empeñaba en permanecer abierta, como si hubiera unaesperanza que desaparecería si la cerraba definitivamente —le cuento,volviéndome para mirarla—, y hoy voy a poder cerrar esa puerta sinremordimientosy,aunquenolocrea,sinrencor,suficienterencortieneustedporlosdos.Sialgúndíaencuentradentrodeustedunapizcadeamorhaciamí,aquítienemiteléfono—ledigodejandomitarjetasobrelamesa,sabiendoqueunaparte demí siempre va a necesitarlo—. Nunca podremos recuperar el tiempoperdido, pero al menos podremos conocernos de nuevo y puede que ustedencuentreunafamiliaenlamía,porqueacabodedarmecuentadequenodeseootracosaquetenerloquenuncatuvemientrasvivíaconusted,unafamilia,unaalaquedarletodoloqueustednuncaquisoqueledierayunaalaquepuedatenderlemimanosintemoraquemehagadaño—leindicoapesardequedudoquealgunavezcojaesatarjetaparaponerseencontactoconmigo—.Sientosile

Page 414: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

arruinélavida,leaseguroquenofuemiintenciónalprincipio,cuandosóloerauncrío,perosíquelofuecuandocrecí;supongoqueintentéllamarsuatenciónde la peor forma posible, así que lo siento—prosigo, dirigiéndome hacia lapuerta, mientras ella permanece sentada en su butacón, con el mismo rencordominandosumirada—.Quelevayabien,madre;ojaláalgúndíaencuentreesapaz que tanto necesita aunque no lo sepa—me despido antes de salir por lapuertaydesuvida.

Page 415: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO32

Sientocómoelsolmedadellenoenelrostroencuantopongounpiefueradesucasa, como esas dos manos que acunan tus mejillas para consolarte y que teacaricianconsutacto,eliminandoconsucalorelfríoquelasenvuelve,ycierrolapuertadesuviviendadelamismamaneraenquelecierrohoylapuertaamiinfanciayamijuventud,conesaheridasanadaapesardeloquehasucedidoahídentro,pues,aunqueellanohayacambiado,yosílohehechoyesoesloúnicoque me importa, al menos por ahora. Saber que, de verdad y al fin, el loboblancoestávenciendoalnegroyque los rayosdelsol soncapacesde filtrarseinclusoatravésdelrencormástupido.

Dejándomellevarportodoloqueestoysintiendo,cojomimóvilparallamarasucasa,aceptandoquemeequivoquéyquenomecorrespondíaamídecidirnada, entendiendo que esa frase que me repetí hasta la saciedad, a modo demantra,sólosirvióparaconvencermeamímismodealgoque,enelfondo,nomecorrespondíadecidir amí,pues,pormuchoquepienseque su futuroes lamoda,vivirenNuevaYorkycogertodoloquelavidatengaqueofrecerle,nosirve de nada si ella piensa todo lo contrario. Además, ¿quién soy yo pararebatirle nada, aunque crea que se equivoca?, porque, ¡qué coño!, no seequivocarámásde loquemeequivoquéyo.Yo,quemeequivoquéal intentarllamarlaatencióndemimadredelapeorformaposible.Yo,quemeequivoquéal no esperar dos años al Sombra para que viniera conmigo y que continuéequivocándomedurantelosañosposterioresamihuidaconeltipodevidaquellevé… Pero, equivocándome, me convertí en el tipo que soy ahora, comodeberá hacer ella, asumiendo sus errores como he asumido yo los míos y

Page 416: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

entendiendoque, aunque luegonohayavueltaatrás, siemprehabráuncaminofrenteaellay frentea todosnosotrosquenosofreceráotro tipodecosasydevivencias,nimejoresnipeores,simplementedistintas,conlasquepodremosserfelicessisabemoscómo,reflexionorecordandoamimadremientraselteléfonoempiezaadartono.

—¿Sí?¿Dígame?—oigolavozdeCasilday,conella,mimentesevacíaymicorazónsesacudeenmiinterior.

—Casi, soy Víctor—la saludo intentandomantener los nervios a raya—.¿EstáValentinaencasa?

—Lo siento, hijo, pero me temo que llegas tarde, se ha marchado ya.¿Queríasalgo?

—Pero…¿sehamarchadoalabodega?—insisto,sinimportarmesidetectamisnerviosomidesesperación.

—¿A la bodega? ¡A qué santo! Se ha marchado a Nueva York. Bueno,primeroseibaaMadridy,deahí,yacogíaelvuelo,¿nolosabías?Claro,quesois tan modernos que igual ni os contáis las cosas —añade como si nadamientrassientocómomipechosevacíadelamismaformaenquesehavaciadomimenteparaempezararesquebrajarse.Pero¿quécojonesesperabadespuésdeloqueledije?—.Oye,hijo,¿estásahí?

—Sí,claro…Estoyaquí,essóloquenorecordabaqueseibahoy.—No se ha ido hoy, se fue ayer. ¡Menuda cabeza tienes! Oye, majo, me

pillas atareada, ¿te importa si hablamos en otromomento?Que no es que noquierahablarcontigo,peroesquesemequemalacomida.

—Espera,Casi,pero¿estababien?—Por supuesto que estaba bien. Se ha ido aNuevaYork, ¡no querrás que

esté llorando!Con ellame tenía que haber ido yo en lugar de quedarme aquícocinando, limpiandoyviendo sólomontañas,videsy tierra.En fin,hijo,queme quedo sin almuerzo… Hala, ya hablamos —se despide, colgándome ydejándomepasmadoenmediodelaacera.

Sehaido…Sehamarchado…Ibaaquedarseperosehamarchadoy,¡quécoño!, ¡porsupuestoqueseha ido!«Yhahechobien…hahecho loque teníaquehacer»,medigoempezandoacaminarsinrumboalguno,sinveralagenteque se cruza conmigo por la calle y sintiendo el vacío llenar mi pecho,asentándoseeneselugarindefinidoquehastaahoradominabaelfríoyqueme

Page 417: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

temo que siempre estará ahí a partir de este instante. «Ha hecho bienmarchándose», me repito procurando convencerme de ello, como tantísimasveces intenté convencerme en el salón demi casa y, tal y como sucedía esasnoches, oigo esa advertencia, esa que te llega en forma de intuición y que nosabesdedóndeprocede,esaquelesusurraatucorazónqueestásequivocadoyque desechas, como si de algomaterial se tratara, como si pudieras tirarla alcubo de la basura y seguir con lo tuyo como si nada, porque no quieresescucharlao,simplemente,porquenoteinteresahacerlo.

Deambulo sin rumbo durante… ni lo sé, hasta que al final, y sin sabertampococómo, llegohastadondeestáaparcadomi Jeep.Apoyando lasmanossobre el capó, alzo lamirada hacia lasmontañas, hacia esemonte donde estáenterrado parte de quien fue mi amigo, ese al que hoy le he dicho que megustaría presentársela. Sonrío con la tristeza instalada enmi rostro, pues dudomucho de que llegue ese día, y es justo en este momento cuando me doyrealmentecuentadelalcancedemisdecisiones.

«Capullo, pensabasque iba a estar disponible para ti todo el tiempo—merecriminoamímismo,agachandolacabezaconlasmanostodavíaapoyadasenelcocheylosbrazostensos,que,comoestacas,sostienenmicuerpo—.Creíasque iba a continuar ahí, esperándote, a pesar de lo que le dijiste.Qué capulloeres,macho»,medigoconlamiradafijaenelcapósinverloenrealidad.

—Hice lo que tenía que hacer y ella ha hecho lo correcto—musito en unsusurro ininteligible, aferrándome a esas palabras—, y le irá bien—vaticinoalzando lamirada hasta posarla de nuevo en lasmontañas—.Nos irá bien—prosigo,obligándomeamoverme—.Seterminaronlaslamentaciones,tío;tienesun ejército que reclutar—medigo amímismo, esta vez envoz alta, unavezdentrodeltodoterreno.

Y, por primera vez desde que salí de La Rioja, enciendo el equipo paraescucharmúsica remember, esamúsica que elRatame descubrió y que yo ledescubrí a ella, abrazando la vida que he decidido vivir, una en la que ya nocabendisfraces,ni lamentacionesni tampocoel rencoryen laquenuncamásvolverémi vista atrás,me prometomientras conduzco dirección aAndorra laVellaparahacermeconeseejércitodesoldadosyconesecolumpioconelqueespero sorprender aDídac,porque¿aquiénno legusta columpiarsee intentartocar el cielo con los pies?, me pregunto sonriendo y borrandomi sonrisa al

Page 418: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

recordaresasaguasnegrasquenuncavolveránamojarlosmíos.Puede que la haya perdido y que nunca forme esa familia que hoy,

sorprendentemente, he ansiado formar, pero formaré parte de otras, de la dePedro y también de la de mi amigo, y, aunque puede que nunca tenga hijos,tendré sobrinos a los quequerer ymalcriar.Con ese pensamiento haciéndomesentir bien, estaciono en un parking para dirigirme sin demora a la calleprincipal, ahora peatonal, donde localizo una juguetería y me hago con unpequeñobatallóndesoldadosyunospocosindios,ademásdevariascaravanasydiligenciasconbandidos,laminadelOesteyelcolumpioqueposiblementeseamásuncaprichomíoquesuyo,sacandoalniñoquehaydentrodemíyqueestanochevaapasárseloengrandeconsunuevosobrino.

MefrenoparanollevarmetodoelestanddePlaymobilentero,ymedirijoalsupermercado, donde compro comida de verdad, no como la que tengo enmicasa, además de zumos para mi amigo y, una vez satisfecho con misadquisiciones,hagoelcaminodevuelta,sabiendoquetengounalargatardepordelantesiquierosorprenderamicolegadeseisaños.

Dedico la tarde a colocar el columpio en uno de los muchos abetos querodeanmicasa,ademásdemontaresepequeñoejércitodesoldadosalrededordelaminadelOeste,mientras,porunlateral,lleganlasdiligenciasylascaravanas,«a punto de ser asaltadas por los indios», pienso sonriendo, poniendo miimaginaciónafuncionar,alavezque,afuegolento,vaguisándoseelsolomillodeternera,recetadeCasi,quecenaremosestanochemientraslaleñaardeenlachimenea,caldeandoestesalónymiinterior.

Más tardede loque teníaplaneado,perocon la cena listay losPlaymobilesperandoaentrarenbatalla,medirijodenuevohaciaelpuebloparavisitareltaller de mi amigo. Estaciono frente a él, frente a La Santísima Trinidad, y,sonriendo y guardando mis manos en los bolsillos de la cazadora pararesguardarlasdelfríoacojonantequehace,accedoaél,borrandomisonrisaenelactocuandolaveoportodaspartes,porque,¡joder!,nohayniunaputapared,almenosqueyodetecte,quese libredesus fotografías.Mequedoclavadoen laentrada del local, sintiendo cómo el vacío que llena mi pecho se sacude confuerza,conelanhelo,eldeseoy lasmilesdeemocionesqueunasoladeestasfotografíasescapazdeproyectarenmiinteriorretumbandoenél,comoeseecoqueresuenaentrelasmontañasmultiplicandotuvozpormilpararecordartelo

Page 419: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

jodido que estás y lo que has perdido y, con ese eco resonando enmi vacío,clavo lamiradaenel suelo, incapazdever sus fotos, susojos, susonrisaysucuerpo,esequeelmíoreclamaagritos.

Dándome media vuelta, salgo del taller, quedándome en la acera. «Putanenaza estoy hecho… joder. ¿Cómo había olvidado que estaban estasfotografías?»,meriño,mesándomeelcabello.

—¿A dónde vas, colega? ¿Así es cómo ves tú las cosas? ¿Entrando ysaliendoal segundo? Joder, ti…—me recriminaelSombra llegandohastamí,enmudeciendoalvermirostro—.Oye,¿estásbien?—inquiere,alarmado.

—Dameunsegundo,macho—musito,llevandomimiradaalfrente.—Nome jodas, tío, nome jodasque es por las fotos. ¡Mierda!Lo siento,

colega,nosabíaqueibasaponerteasí—sedisculpa,conlapreocupacióndesuvozllegandohastasumirada.

—Dame un segundo, déjame que me haga a la idea —mascullo,maldiciéndomepormireacción.

—¡Quécoño!¡Espera!¡Dameunsegundoylasquito!—¡No!Nohacefalta—lepido,volviéndomeparadetenerlo.«Malditasea,ellaesmodeloy,comolevayanbienlascosas,quenolodudo,

voyaverlaportodaspartes—medigointentandoacallartodoesoquecontinúaretumbandoenelvacíodemipecho—,asíqueyapuedoirhaciéndomealaideadeunaputavez.»

—¡Joder!¡Espera,Sombra!¡Nolasquites!—grito,entrandodenuevoatodaprisa—.Tío,déjalascolgadas,noséquémehapasado.

—Oye,túayernobebistepormí,asíquepermítemequelasquiteporti.—Sí que lo hice—le rebato, sintiendo el vacío demi pecho hacersemás

profundoymáshueco.—Claro,cuandotepuselacervezaentodalacara,peroantes,entucasa,te

contuvisteparanohacerloyyohemetido lapataaldejarlaspuestas—insiste,empezandoadescolgarlas.

—Para,tío,telodigoenserio.Tengointencióndepisarmuchasvecesestepuebloapartirdeahoraynopuedesestarquitándolascadavezquevenga.

Déjalas,porfavor;sólotengoqueaprenderaverlassinquemeafecte.—Pormuylistoqueseas,quenolodudo,nuncaaprenderásaquealgonote

afecteoteduela,sobretodocuandolotienesmetidomuyadentro,ymeparece

Page 420: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

quetú,aestatía,latienesmetidademasiadoadentro.—Yalosé,peronomequedaotra,esooquedarmeenmicasaparasiempre

—replico, obligándome a sonreír—. Venga, macho, enséñame este taller—lepido,empeñándomeennodetenermimiradaenestasfotografíasquedevoréenelpasado.

Conlaadmiracióninstaladaenmisojos,visitoeltallerdemiamigo,esequetienehastaunaseccióndechapaypintura,yélmemuestrahastaelmásmínimodetalle,coneseentusiasmoquerecuerdoyquenohamermadoenabsolutoconelpasodelosaños.

—Pedazodetaller,tío.Teaseguroque,sivivieramáscerca,micocheseríaunadetusnenitas—sueltosonriendo.

—Joder, ¡y cómo gemiría! De aquí salen todas afinadas y con ganas demarcha—meindicaguasón—.Miraquiénestáentrando—medicesonriendo,conlamiradafijaenlapuerta,haciadondedirijoyolamía.

—¿Quiénes?—lepreguntoalveralhombrequeseacercaanosotros.Llevaunapobladabarba,gafasdemonturademetaly,porlaropaqueviste,

estáclaroqueesuntíoconpasta.—¿No lo reconoces?—inquiere,metiendo lasmanos en sus bolsillos con

despreocupación.—Puesno,pero,comoesperesmuchoparadecírmelo,antesllegaráaquíque

meenteraré—confiesoenunmurmullo,puescasilotenemosdelante.—¡Hombre,Joaquín!Yapensabaquetehabíasolvidadodetuchica.«Nome jodas… ¿Joaquín es Joaquinito?»,me pregunto husmeando en su

rostroybuscandoalgoqueme recuerdea ese crío alque lehicimos todas lasputadashabidasyporhaber.

—Esoquisieras.Hedoblado turnoynohepodidopasarmeantes.¿Yaestálistaotodavíalatienesenbragas?—replicaguasón,ycambioelpesodeunpieaotro,sintiéndomeincómodoconmipasado,segurodeque,sihadobladoturno,es el Joaquinito cardiólogo, hijo de doña Vicenta, y también el blanco denuestrasjugarretas.¡Deputamadre,estoesloquesellamadartedenaricescontupasado!

—Tu nena está deseando quedarse en bragas cuando entra en este taller,macho, pero me he comportado y la tienes lista desde ayer. Joder, que todoshacéis igual… Me hacéis ir de culo y luego no os pasáis a por vuestras

Page 421: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

preciosidades.—Joder,Pol,perosivengodirectodelhospital.Heperdidolacuentadelas

operacionesalasqueheasistido.—Sí, claro, lo que tú digas. Por cierto, ¿recuerdas a Víctor? ¿El otro

miembrodeLaSantísimaTrinidad?Puesaquílotienes—leanunciapasandosubrazopormiespalda,rodeándolayapretándomeasucuerpo.

—Yluegosoyyoelqueestáamariconándose,¡suéltame,macho!—lepidosonriendo—. Encantado de verte, Joaquini… Joaquín —rectifico a tiempo,tendiéndolelamano,queesperoqueacepte.

—¡Hombre,elotropieza!—meresponde,aceptándolaconfirmeza.—Siento lo capullo que fui contigo —confieso con una sonrisa de

arrepentimientoenmirostro,sintiendoladeterminaciónqueemanadesumano,esadeterminaciónquetantolefaltódeniño.

—Tranquilo,éramossólounoscríos—mecontesta,sonriendoconafabilidad—,peropor tubienesperoquenocaigasenfermoy tengasquepasarpormismanos, porque, como te tenga en una mesa de operaciones, igual me da porrompertelascostillas—añade,sorprendiéndomeyarrancándomeunacarcajada.

—Coño,tío, lotendréencuenta—lerespondo,guardándomelasmanosenlosbolsillosdenuevo.

—Mecontómimadrequefuistealsupermercado.—Sí, y no estuve muy fino; pídele disculpas de mi parte —me excuso,

maldiciéndomepordentro.—Notepreocupes;mimadreaveceshablamásdelacuenta.—¿Sóloaveces?—intercedeelSombrasincortarseunpelo—.Tumadre,

contodosmisrespetos,siemprehablamásdelacuenta.Venga,machoman,venquetemuestrelosatisfechaquetehedejadoatunena—lepidepasandofrenteanosotrosconladespreocupaciónguiandosuspasoshaciaunPorscheCayenne.

«Joder,puessíquedasermédico»,piensosiguiéndolos.—¿Eséstatunenita,Joaquín?—indagomirandoelcocheconadmiración—.

Hostia,quéputapasadadevehículo.—Loes,yuncaprichoquecasimecostóeldivorciocon laparienta—me

confiesasonriendo.—¿Yeso?—planteo,sorprendido.Y, como si en el pasado no le hubiera hecho todas las putadas que seme

Page 422: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

pasabanporlamenteyfuéramosamigosdesdesiempre,mecuentaelpedazodebroncaquetuvoconsuesposacuandoselocompró,yyolehablodemividaenLaRioja,paraterminarconversandosobrecoches,motoresyprestaciones.

—Oye,tíos,noespornada,perotengoquecerrar—intervieneelSombra,ymepercatodequelostrabajadoresdeltallercomienzanaabandonarsuspuestos.

—Joder, nome había dado cuenta de la hora que era.Venga, dime qué tedebo—leindicaJoaquín—.Mealegrahabertevistoysaberquetevantanbienlascosas.Aversicoincidimosotrodíaynostomamosjuntosunascervezas—me propone, y detecto la sinceridad de sus palabras, esas palabras que no sedicenpordecir,sinoconlasganasdequedeverdadocurra.

—Pues,comonoseamañana,macho,lotenemoscomplicado.—¿Yesoporqué?,¿telargasya?—Pasadomañana.Tengomuchotrabajoesperándomeynopuedoretrasarlo

más.—Puesqueseamañana,entonces.¿Teapuntas,Pol?—Perotendráquesercuandocierreel taller,queaquíunotienequecurrar

paralevantarelpaís.—Comosilosotrosnolohiciéramos—lerebateJoaquín,sonriendo.—Sí,peroyonoconduzcounCayenneounJeepcomohaceéste…Cabrones, que sois muy cabrones los dos —suelta sonriendo—. Venga,

capullo,pasaporelpisitoque tengo ladolorosaesperándote.Aver siconsigosangrartelosuficientecomoparapodercomprarmeunanenitacomolasvuestras—añade,dirigiéndoseaundespacho,ylomirosonriendoconganas.

—Toma, aquí tienesmi número, llámamemañana—me indica Joaquín, ycojolatarjetaquemetiende,admirandoaltíoquetengofrenteamí.

—Descuida, y ten cuidado con éste y no dejes que te exprimamás de lacuenta. Mala hierba nunca muere—le digo divertido, yendo con él hacia eldespachodelSombra.

—Tranquilo, tengo las espaldas cubiertas. Sabe que tengo al personal delhospitalamenazadoyque,comosepaseunpelo, laspasarácanutascuandosepongaenfermo—comentabromeando,haciendoquesonríadenuevoconganas—.Nosvemos,macho—medice,tendiéndomeestavezélsumano,unamanoque acepto sintiendo cómo todo se remueve dentro de mí al recordar lasmuchísimas veces que en el pasado no tendí la mía por miedo a que la

Page 423: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

rechazaranynoaceptélasquemeofrecíanpormiedoaquesintieranlástimademí,percatándomedecuántasvecesmeequivoquéconlagentequemerodeaba.

—Hasta luego. Oye, Sombra, me largo, tío. Venid cuando queráis —medespidomientrasJoaquínaccedealdespacho.

Salgo deLaSantísimaTrinidad y posteriormente del pueblo sintiendo quevoydandopasosquenuncacreídaryque,conellos,voysanandoheridasquenuncapenséquesanarían.

Meduchoencuantollegoamicasa,ansiandounmomentofrentealfuegoconunacopadevinoymiportátilantesdequelleguemiamigoconsufamilia,necesitando leer todo lo que pueda sobre esta sentencia que me ha llevado aperdermuchapastay,unavezfrentealasllamas,vestidoconropacómodayconuna copa de vino, de su vino, entre mis manos, me empapo de todas lasreaccionesynoticiasquehansurgidofrenteaestevarapaloquehasacudidolosmercadosyquecontinuaráhaciéndolocomo la cosanocambieydelque,porsupuesto,esperoresarcirmeconlarecompradeacciones.

El sonido demimóvilme saca del estado de concentración en el quemehabíasumidoysientocómounligerotemblorseadueñademismanoscuandoleoelnombredePedroenlapantalla.

—Buenas noches, Pedro —lo saludo en cuanto descuelgo, intentandoaportarleamivozesaserenidadquenosientonidelejos.

—Buenasnoches,hijo.¿Quétaltodoporahí?—mepregunta,yconsuvozmisnerviosempiezanacalmarse.

—Bien.Mejordeloquepensaba,laverdad.—Pero¿siguesenOrdino?—Sí,sigoaquí,peroyaporpocotiempo—lecomento,sintiendolapuntade

laañoranzaarañarmiinterior.—¿Y me has hecho caso y has ido a ver a tu madre? —indaga, con la

preocupacióntiñendosuspalabras.—Sí,heidohoy—leconfirmo,agitandoelvinodemicopayviendocómo

laslágrimas,delcolordelauva,vandejandosuhuellaenelcristal,amododeunrecordatoriodesupaso.

—¿Y cómo ha ido? —me pregunta con interés y, de fondo y, gracias alsilencioenelqueambosnoshallamosenvueltos,oigoelchasquidodelmechero.

—No deberías fumar —le recrimino con cariño, levantándome para

Page 424: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

dirigirmealventanalquetengofrenteamí.—Tonterías,nohaynadaenestemundo,sobretodoaestasedades,comoun

puroyunabuenacopadevinofrenteal fuego,y,ahora,déjatedechorradasydimecómohaido.

—Comosiempretedijequeiría,conmimadrenohaynadaquehacer.Ellavive encerrada en su mundo, donde no hay espacio para mí. Si no lo hubocuandoerauncrío,¿cómoibaahaberloahora?

—Vaya,cuántolosiento.—Yotambién…Puedequenuncatengamosunarelaciónnormaldemadree

hijo,peroalmenoshesidocapazdeiraverlaydepedirledisculpasportodoloquehiceenelpasadoyeso,créeme,esungranpasoparamí.

—Cuando pedimos disculpas, aligeramos nuestra carga —afirma conseriedad—.¿Yellatehapedidodisculpasati?

—No te disculpas con alguien cuando no sientes que le has fallado —respondocongravedad—.Ellanotieneesesentimientodepérdidaquetengoyo,alcontrario—musito,vaciandomispulmonesdegolpeparavolvera llenarlos—.Joder,paramíesmuycomplicadoponermeensulugar,aunqueseasóloparaentenderla,porquedudomuchoquepudierasentireserechazohaciaunhijomío,por muchos planes de futuro que se cargara, así que he decidido dejar deautocompadecermeyseguirconmivida.

—Loshijos,esperadosono,noscambiáislavida.Llegáisyderepentetodocomienza a girar a vuestro alrededor, para bien o paramal. En el caso de tumadre fue para mal, y en el mío y en el de mi mujer, para bien. Alana yValentina fueron nuestros tesoros y más tarde, cuando crecieron, misquebraderosdecabeza—meconfiesa,másparaélqueparamí—.Alanapareceque empieza a encauzar su vida; por cierto, no sé si lo sabrás, pero al fin hadecididocasarseconJosé,asíquesupongoquehallegadoelmomentodedejardellamarlo«esechico»parallamarlo«yerno»—meindicaconsornamientrasyoloescuchosinpodermoverme,completamenteatentoasuspalabras—,perounasemeencauzaylaotrasememarcha—añadeconvozlúgubre,yesasimplefraseessuficienteparaquetodomicuerpogritedeañoranza—.Pensabaque,siretomabasuamistadcontigoyseinvolucrabaenlabodega,desecharíaesaideadeirseaNuevaYork;poresoinsistíparaqueprepararalapresentacióncontigo—prosiguemientras yo no puedo hablar ymuchomenos pensar—, y durante

Page 425: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

esta última semana, cuandoos veía tan bien juntos, creía quemehabía salidoconlamíayque,alfinal,decidiríaquedarse,peroestáclaroquemeequivoqué.

Con la edad debo de estar perdiendo facultades—añade con voz ausente,másparaélqueparamí,mientrasmisnerviosmesacudenpordentro—.Víctor,me damiedo que pierda la cabeza en esa ciudad y que la línea de lo que escorrectoydeloquenoloesseledesdibujetantoquepuedallegareldíaenquesea incapaz de verla—me explica, haciéndome recordar ese día cuando ellamismautilizócasilaspalabrasqueahoraestáutilizandosupadre.

—Esonoocurrirá,Pedro—ledigo,dejandolacopadevinosobrelamesayapretandolamandíbula.

—¿Cómoestástanseguro?—mepregunta,ydetectoelmiedoensuvoz.—Porque tu hija es una mujer inteligente —afirmo con seriedad, con la

certezadeque,comoesoocurra,soycapazdeiraNuevaYorkabuscarlaparatraerladevuelta,ynoporquemelopidaPedro—.Confíaenella;loharábien,yaverás—lepidoaferrándomeamispropiaspalabras,deseandoqueseaasíyque no tenga que maldecir el día en que tomé una decisión que no mecorrespondíatomar.

—Eso espero… Eso espero… —musita, sumido en sus pensamientos—.¿Cuándovolverás?—inquiere,y,conociéndolo,séqueestácambiandodetemaporqueelotrolointranquilizademasiado.

—DejévariosasuntospendientesenSegoviayluegotengoqueiraToledo;supongo que en un par de semanas a lo sumo. Oye, ¿puedo hacerte unapregunta?

—Porsupuesto.¿Quéquieressaber?«Malditasea,quéquierosaber,dice…Todo,joder,quierosaberlotodo.»—Nada, déjalo —respondo, y oigo el timbre de la puerta—. Tengo que

dejarte,Pedro.Hanllegadomisinvitados.—Deacuerdo.Pásalobien,hijo.—Lo haré, y tú deja de preocuparte —le pido yendo hasta el interfono,

viendoalSombra,aRaquelylacabecitadelenanoatravésdelapantalla.—Un poco difícil eso que me pides. Vamos hablando—declara antes de

colgarmientrasyomedirijohacialaescalera.«Coño,¿cómonovaapreocuparse?—mepreguntobajandolosescalonesa

toda prisa—. Si yo mismo lo voy a estar haciendo continuamente», me digo

Page 426: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

antesdeabrirlapuerta,obligándomeahaceraunladomistemores,o,almenos,nopermitirquelavozdemismiedosseoigaporencimadelademiamigoyladesufamilia.

—¡Quépasa,tío!Tantocasoplónparatenerquebajartúcadavezaabrirlapuerta,puesvayamierda,macho—sueltasonriendo.

—Pero mira que eres capullo —replico dándole un abrazo para,seguidamente,darleunpardebesosaRaquel—.Oye,colega,¿hascrecidodesdeayer?—le pregunto a Dídac frunciendo el ceñomientras él memira con esasonrisatraviesaqueesuncalcoaladesupadre.

—Voyasermásaltoquetú—meaclaraconvencido,haciéndomesonreíramíconganas.

—Bueno,pero,mientrasllegaesemomento,podrásdivertirteconunacosaquetengoparati—lecuento,guiñándoleunojo.

—¿Paramí?¿Mehascompradoalgo?¿Elqué,elqué,elqué?¡Venga,di!—me apremia impaciente mientras yo aferro su manita para llevarlo hasta elcolumpio.

—¿Sabesloqueocurre?Queyonosabíaqueteníaunsobrinoytodosestosañosno tehe compradonadapor tu cumpleaños,ni losReyesMagosniPapáNoelhanpasadopormi casaparadejarte regalos, así queayer, cuando lleguéaquí, tuve que hablar con ellos seriamente—le explico mientras llegamos alenorme abeto del que cuelga el columpio—y, bueno,mehandado esto juntoconsusdisculpas—leindicomientrasélabrelosojoscomoplatos.

—¿Esecolumpioesparamí?—mepreguntasorprendido,sindejardeaferrarmimano.

—Meparecequesí,pero,porsiacaso,veacomprobarsiponetunombreenlabase—lepidomientrasélcorrehaciaallí.

—¿Desde cuándo eres capaz de hablar con los ReyesMagos y con PapáNoel,macho?—mepreguntamiamigoconsorna.

—Lo pone, lo pone, ¡pone Dídac! —nos confirma dando saltos mientrasRaquelseacercaaélparaayudarloacolumpiarse.

—Ya sabes, tío, hay clases y clases, y yo tengo comunicación directa conellos,nocomotú,quefuncionarásabasedecartas—replicosocarrón.

—Quéhijodeputaeres—mededica,dándomeunligeropuñetazo.—Dídac,luegodejasatupadrecolumpiarse,queestáponiéndoseceloso—

Page 427: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ledigoalzandolavozparaqueelniñomeoiga.—Másfuerte,mamá—lechillapasandodemí.—Cógetebien—lepideRaquelmientrasélalzasuspiececitoshaciaelcielo,

casi sumido en la noche, tal y como imaginéqueharía, queriendo tocarlo conellos.

—Luegotelollevasacasaparaquepuedacolumpiarsetodoloquequiera.—Joder,puescomonolocuelguedelalámpara,lotengojodido,chaval.—Esverdad…Puesdéjaloaquíylotraesacolumpiarsesiemprequequiera.—Gracias,tío…noteníasporqué.—Porsupuestoqueteníaporqué:esmisobrinoyelúnicoquevoyatener

comonotedéporreproducirtemás—comentobromeando,mirandoalcríoconcariño—,yestonoesnadaparaloquehayarriba.¿Habéistraídoelfuerte?

—¿Lehascompradoalgomás?—planteaalzandoambascejas.—Digamosquelossoldadosjugabancondesventaja,demasiadascabelleras

rojasparatanpocainfantería;simplementeheigualadolasfuerzas.—Joder,puesvaaflipar.—Esoespero.Joder,macho,quéfrío—mequejo,estremeciéndome.—Hayunascosasllamadaschaquetas,porsinolosabes.—¿Nomedigas?—lepreguntoguardandoluegounosinstantesdesilencio

—.Heidoaveramimadre,antesdepasarportutaller—leconfieso,viendolaniebla empezar a reptar por los árboles—.Oye,Dídac, hace frío y es casi denoche, ¿por qué no entramos?—le propongo al niño mientras mi amigo meobservaexpectante.

—¡No! ¡Quiero columpiarme más! —me grita, haciendo una mueca defastidio.

—Hijo, ¡que hace un frío que pela! —interviene, quejosa, Raquel,haciéndomesonreír.

—¡Oyeeee!¿SabesquelosReyesMagosyPapáNoelhandejadomáscosasparatiahíarriba?—suelto,captandosuatenciónalinstante—.Perovamos,quesinoquieresverlas,puedesseguircolumpiándote—añado,sabiendoqueacabodeconseguirmiobjetivo.

—¡Paraelcolumpio,mamá!—legritaasumadre,frenándoloconsuspies.—¡Espera, espera! ¡Deja de hacer eso! —le ordena Raquel, frenando

finalmenteelcolumpio.

Page 428: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Y veo cómo, con una velocidad asombrosa, se baja de él para llegarcorriendohastadondeestamossupadreyyo.

—¡Venga, Víctor, vamos! —me demanda aferrando mi mano de nuevo,tirandodeellaparallevarmealapuertademicasa,conesailusióntremendayesaansiaquetedesbordayquesólosientescuandoeresuncrío.

—Si no has traído el fuerte, no hay regalos, colega —le digo riéndome,dejándomellevarporél.

—¡Lohemostraído!¡¿Verdad,papá?!¡Bájalodelcoche!—lepidemientrasllegamosalapuertayaccedemosalavivienda.

—Entonces, sígueme, colega —le propongo, dejándome contagiar por suentusiasmoysubiendolaescaleraconrapidez,conélpisándomelostalones—.Meparecequenolovasatenertanfácilparaganarestavez—comentoviendocómosusojosseabrendeparenparanteelpequeñoejércitoquetengomontadofrentealachimenea.

—¡Halaaaa!¿Todoestoesparamí?—Tienesseisaños,chaval,ymuchosregalosatrasados,asíqueconestocreo

queestamosenpaz—ledigomientrasRaquelyelSombraaccedenalsalón.—¡Víctor!¡Noteníasporqué!—mediceella,sonriéndomeconcariño.—Has dicho lo mismo que éste. Joder, parecéis el eco del otro—replico

bromeando, llegando hasta el chiquillo mientras mi amigo deposita el fuertefrentealaminadelOeste.

—Desdeluegoque,cuandotedaporcomprar,lohacesalogrande,macho—mediceenunsusurroparaquenolooigaelpequeño.

—¡Cómo mola, Víctor! —exclama Dídac con la mirada brillando deemoción,sentándoseenelsuelosintocarnadatodavía.

—Estos soldados están esperando indicaciones mías para cargarse a tusindios, ¿estás listo para entrar en combate?—le pregunto, sentándome en elsuelo—. Sombra, ¿tú con quién vas, con tu enano o conmigo?—le planteo,incluyéndoloeneljuego.

—Conmienano,chaval.Vasamorderelpolvo,colega,vepreparándote.—Cojonudo, así tumujer sevieneconmigo—ledigoguiñándoleunojoa

Raquel—,yosaseguro,perdedores,queRaquelyyovamosacargarnosatodosvuestrosindios.

—¡Estásquetelocrees!—mediceDídacmientrasellasesientaamilado.

Page 429: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Colega,notenéisnadaquehacer.Porsinolosabes,lasmujeressiemprevanunpasopordelantedenosotros,asíqueidasumiendovuestraderrota.

—¡Nunca!—chillaDídac,consiguiendoquesuelteunacarcajada.—¡Batallónnnnn!¡Alataque!—gritoempezandoajugar,convirtiéndomeen

elmáscríodetodos.Y durante casi una hora jugamos todos con los Playmobil, sacando a los

niños que tenemos dentro de nosotros y, cuando el enano y el Sombra seproclamanvencedores,metiroalsuelofingiendomimuerte.

—Los indios iban a ganar, Víctor, ¿qué te creías?—me pregunta Dídac,sentándose sobremibarriga—. ¡Perdedor, perdedor, perdedorrrrrr!—canturreay, sin poder contenerme, empiezo a hacerle cosquillas, como le hacía a ellacuandoerapequeña,consusrisasllegandotransportadasporeltorrentedemisrecuerdosparaentremezclarseconlasdelniño,llenandomivacíodelecodesuscarcajadasydesussúplicasparaqueparara.

Durante la cena entremezclamos un tema con otro y, cuando llegamos alcafé,conDídacjugandoestavezsolofrentealachimenea,elSombraabordaesetemaqueanteshabíadejadoamedias.

—Raquel conoce todo nuestro pasado, recuerda que fue una de mispsicólogasenelcentroy,pordefecto,conoceeltuyo,asíquecuéntanosquehapasadocontumadre—medice,tandirectocomolorecordaba.

—NolehagascasoaPol;queyoconozcaaspectosdetupasadonosignificaque tú te sientas cómodohablandode él conmigo.Mimarido aveces tiene lamismasensibilidadqueunapiedra—comentasonriéndoleconcariño.

—No te preocupes, Raquel, tampoco hay mucho que contar —respondo,inspirando profundamente para soltar todo el aire de golpe—. Ella no hacambiado y continúa pensando que demasiado hizo atendiéndome cuando erapequeñoyqueloquedeberíaesestarleagradecidoenlugardeecharlelascosasencara.

—Hijaputa…Llévala avivirdenuevoa la casuchademalamuerte en laquetecriaste.Tejuro,cariño,quelassábanasdesucamaestabanhúmedasdelputofríoquehacíaenesacasa—lecuentaconrabia.

—Noquierohablarmásdelpasado,Sombra,nitampocoquierolamentarmemásporloquepudetenerynotuve.Hoymehedadocuentadequeyotambiénfallémuchoyquefuimuycapulloconlaspersonasquemerodeaban.

Page 430: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Hablaenplural,chaval,queyoibaatulado—mecortaconseriedad.—Joder,cuandohededucidoqueeltíoqueteníafrenteamíeraJoaquinito,

todaslasputadasquelehicimosenelpasadomehandadounahostiaenplenacara.Macho, teníamotivos de sobra para rechazarmimano ymandarme a lamierday,encambio,hemosquedadoparatomarunascervezasmañana—sueltoconadmiración.

—Esunbuentíoynuncamehaechadonadaencara;paraél,elpasadoestáolvidado.

—Ahí voy, lo pasado, pasado está, y a cada uno le toca vivir una cosadistinta.

Amímetocóesto,perograciasaloquevivítoméladecisióndelargarmedeaquíypudeconoceraPedroyaVal;sóloporeso,valiólapena.

—Sólo las personas que aceptan su pasado y son capaces de reconciliarsecon él pueden sentirse bien consigomismasy seguir con suvida—intervieneRaquelconvozsuave—.Lasquecontinuamenterevivenlomalo,entranenunbucledeautodestruccióndelqueesdifícilsalir,porque,alrevivirlonegativo,loalimentasynopermitesquenuncamueranidesaparezcadetuvida—prosiguemientraslaescuchoensilencio—.Tumadre,porloquemecontóPol,reviveesepasadocontinuamenteyensumenteadornaloquepudosersindarsecuentadeque no tenía por qué suceder. Víctor, los hijos no nos frenan, sino que nosimpulsanasermejores.Situmadresefrenóporti,¿quiéntedicequenohubieraencontradootrosimpedimentosensucaminoquelahubieranfrenadoigual?—mepreguntaconseriedad,ysoyincapazderebatirlenada—.Laspersonasquevivensuvidadesdeelladodelvictimismoprefierensereso,víctimas,porqueesmucho más fácil culpar a los demás de sus fracasos antes de reconocer suspropioserroresolimitaciones.Esunapenaquetumadrevivalavidaquevive,porqueno es feliz y, en realidad, es unavíctimade símisma; sólopor eso esdignadelástima.

—¿Lástima?¡Yunaputamierda!—lerebateelSombracondureza.—Esasí,tío.Ellasehacreídosudiscursoynosaledeahíniescapazdever

másallá;lomaloesquenoshaprivadoalunodelotro.—¿Quédiscursoniquéochocuartos?Esunacabronaypunto—siseaenvoz

bajaparaqueDídacnolooiga.—Mira,Víctor,creoqueesbastanteimprobablequetumadrecambie,pero

Page 431: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

tampocoesimposible,asíquesiguecontuviday,sialgúndíatellama,tenporseguroqueestarádandounpasoenormeparaellaentodoslossentidos.

—Losé—musitoviendocómoDídacllegahastaRaquelparasentarseensuregazoycerrarlosojosconunpequeñoejércitoentresusmanos.

—Es tarde, deberíamos irnos—lediceRaquel alSombra, acariciando concariñolacabezadelcrío.

—Sí, vámonos, porque, aunque nos quedáramos toda la noche, noconseguiríaishacermecambiardeopinión—mascullalevantándose.

—Vamos, tío, te ayudo a cargar todo esto en el coche —le indicolevantándomeyotambién,haciendoaunladoeltemademimadredelamismaformaqueanteshehechoconmistemores.

Ayudoamiamigoaguardarlotodoensuvehículoy,cuandosevan,yunavezasolasdenuevoenelsalóndemicasa,oigoelaullidodellobo,eseaullidolargoysostenidoqueparecereclamarmetalycomohizoesanochecuandoteníaonce años, pero, a diferencia de entonces, no acudo a su llamada, sino quepermanezcofrentea lacalidezdelfuego.Adiferenciadeentonces,nopedaleoconrabiahacialasmontañas,sinoquepermanezcoalabrigodeellasdentrodemicasa,esaque,duranteunashoras,halatidocomolateunverdaderohogary,adiferenciadeentonces,nosientoesarabiaquehervíadentrodemí,comolalavadeunvolcánquehelabade tantoquequemaba, reflexiono, recordandoal críoqueesanochesesintiódesbordadoportodo,quelloródurantehorassoloenelrefugio y que continúa encogiéndome el corazón por la pena, a pesar de mipromesadenovolverarevivirtodoesoquemedominódepequeño.

Page 432: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO33

Despiertoalamanecery,comovienesiendohabitual,miprimerpensamientoesparaella;ellaysusonrisa,ellaylaformaenqueteníademarearme,ellaysucuerpo, ella y sus besos, ella… «Ella, la que tengo pegada en mi alma sinnecesidaddeutilizar tiritas»,medigo levantándomefinalmente,paradirigirmealbañoconmicuerpogruñendodenecesidadynegándomeaaliviarlo.

Unavez listo,mevoya la cocinaapormiprimer caféy, taly comohiceayer, enciendomi portátil para ver la apertura de la bolsa y hablar con Gon,anhelandollenarmividadenormalidadyrutinaparaolvidarmedeValydeestevacío en el que resuena todo lo que vivimos y que me oprime el pechoreclamandovivirlodenuevo.

—…Yonoentraríatodavía,señor,estotienevisosdeseguirbajando—meaconsejatrascasimediahoradecharlamientraslooigodefondo,comoesavozquelellegaatucerebroperoqueéstenollegaaprocesardeltodo.

«Joder,céntrate,capullo»,meexijo,clavandomimiradaenlapantalla.—Cierto, no es elmomento de entrar todavía.Vamos a esperar a ver qué

sucede;mantenmeinformado—lepidofinalmente.—Descuide,señor—mediceantesdecolgar.Melevantosintiendolaintranquilidadcolarseenmiinteriorparaestrujarmi

estómagoyacelerarmicorazón.«¿Quémesucede?¿Porquémesientoasí?»,mepregunto yendohacia el amplio ventanal, desde donde contemplo cómo labrumadelamanecercomienzaadisolverseconlosrayosdelsol,sintiendocómolamontañatirademí,comotantasveceshizoenelpasado.

Dejándome arrastrar por esa necesidad,medirijo haciami habitación para

Page 433: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ponermeropaycalzadomásapropiados,puesnecesitovolveralrefugio,aunqueseaparadespedirmedemiamigo,apesardequealgo,puedequeseaelsilencioquehoysientomásmudoquenunca,meadviertedequenolohaga,poniendoenalertatodosmissentidosyacelerandotodavíamásmicorazón.

Maldiciéndomeporestarsintiéndomeasí,yunavezlisto,salgodemicasaobligándomeaacallardeunavezesavozqueintentaadvertirmedealgoquenoconsigoescuchar.Cuandollegoalprincipiodelcamino,inspiroprofundamenteel frío que parece emanar de lamontaña; ese frío queme recuerda un alientoheladoemergiendodelatierra,sobretodoenlaszonasmásfrondosas,dondeelsol no es bien recibido y donde la sombra, la humedad y el musgo parecendominaresasparcelasdemonteconmanoimplacable,y,duranteunossegundos,recuerdocómo,hastahaceunosdías,mesentíaensintoníaconesefrío,cuandoahora es el queme insta a acelerarmis pasos y a no detenerme.Evitando laszonasdominadaspor la sombrao cruzándolas conmás rapidezde lahabitual,inicio el ascenso hacia el refugio con la sensación de ser observado todo eltiempo,comosidosparesdeojossiguieransilenciososmiavance,clavándoseenmiespaldayponiendotodomicuerpoenalerta,ysientocómounsudorfríose desliza por mi espalda y cómo mi piel se eriza mientras voy sorteandoárboles,raícesypiedras.

Aunquenuncaloreconoceréenvozalta,suspirodepuroaliviocuandollegoal claro, donde el sol clava implacable sus rayos sobre la tierra y donde lasombraseescondetemerosabajolosárboleshastadesaparecerporelsenderoy,porDios,casijuraríaquesoycapazdeveresefríoreptandoporelsuelo,comosideunmantodefinanieblasetratara,avanzandoyenroscándoseentrelasraícesqueintentanescapardela tierrayqueespera,paciente,elmomentodecolarseentretuspiernasparaempezaraascenderporellas.Conesepensamientosientocómoun escalofrío recorremi cuerpo, pues hace años lo hizo conmigo, subiópormispiernasyseasentóenmipecho,dondeencontróelhogarqueyoledi.

Doyun respingocuando lashojasquedescansabanenel suelosealzanderepente hacia el cielo con el viento, como si una escoba invisible las hubierabarrido con fuerza hacia arriba para hacerlas volar, y, con todomi cuerpo entensiónyunsudorheladocubriendomipiel,dirijo lamiradahaciaelsendero,dondeesemantodenieblasehavueltomásdensoypordondeestáapareciendoun lobo tan negro como la brea. Unomimirada a la suya, a esamirada que

Page 434: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

inexplicablementevihaceveinteaños,yconella retrocedoaesanocheya loquesucediójustoaquí,enesteclaroalaluzdelaluna…

***

Salí del sendero, estrecho y ascendente, hasta llegar a un pequeño clarodondepodíaverlalunaredondaybrillantesinquelasramasdelosárbolesmeimpidieran observarla y, todavía temblando, me adentré en él con la rabiaardiendodentrodemipiel,unarabiadistintaalaquehabíaexperimentadohastaentonces,una rabiaquemecegaba,yapreté lospuñoscon fuerzamientrasungruñidollegabahastamisoídos.Mevolvílentamente,casiacámaralenta,hastaencontrarmeconunosojossimilaresalosmíos,unosquememirabanfijamenteyquebrillabanatravésdelanoche…Losojosdeunlobonegroque,gruñendo,memostrabasuscolmillosafiladosmientras,amenazante,seacercabadespacioamí,ymevolvídeltodohaciaél,sinmiedo,condesesperaciónyresolución,conlas palabras de mi madre resonando en mi cabeza y el fuego que habíanprovocado quemándome por dentro, en ese punto indefinido que no sabíalocalizar pero que sentía muy muy adentro, y le mostré mis dientes con laslágrimasquemandomismejillas,conlospuñosapretadosyelcuerpotemblando;temblandoderabia,deenfado,detristezaydemuchascosasmásalasquenosabíaponernombre,peroquemedolíanmucho,yavancéhaciaél,deseandoquemehicieradañoohacérseloyo.

—¿Quémiras?¿Quéquieres?¿Porquémellamabas?—rugí,temblando—.¡Venga! ¡Estoy aquí! ¡¡¡Dime!!! ¿¡Qué quieres?! —grite a pleno pulmón,llorando,clavandomimiradaborrosaenlasuya—.¡¡¡Laodioyodioestaraquí,odiohabernacidoyjuroquevaaarrepentirsedeloquehadicho!!!—vociferéfuerademí,mientrasquealolejos,yresonandoentrelasmontañas,llegabaelsonido de un aullido, uno que no era el que había estado oyendo hasta esemomento, uno que era más largo y que sonaba de forma distinta, y dirigí lamiradahaciaeseotrosonidoque,sorprendentemente,parecíacalmarlarabiayel dolor que brotaban de ese punto indefinido de mi interior para, casi alsegundo,volveraposarlasobreellobonegro.

Pero éste ya no estaba y, en su lugar, estabami promesa, esa que todavíapodíaoírretumbandoenmipechoyentreestasmontañasquemedabanabrigo;esa promesa que cumplí durante años y de la que ayer me redimí al pedirle

Page 435: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

perdónamimadre.

***

—Y yo que pensaba que los lobos vivían sólo unos pocos años—musitoobservando sus ojos, esos que vi esa noche y que nunca he podido olvidar,porqueeran losmíos—y,encambio, te tengoaquídelante,sóloqueeresmásgrandedeloquerecordaba,yescurioso,porquesupongoquedeberíadeseralrevés—leindicomientrasélmerodealentamente,haciendocírculosentornoamí, siempre moviéndose al amparo de la sombra, mientras que yo,instintivamente,memuevoporlapartedelclaro,dondeelsolesmáspotenteydonde,inexplicablemente,mesientoasalvo—.Notetengomiedo;notelotuvecononceaños,asíque imagínatecon treintayuno—musitoapretandoambospuñosentornoamicuerpo,talycomohiceesanoche,ybuscodentrodemíesarabia helada que me quemaba por dentro y que, sorprendentemente, ya noencuentro—. Sé que estás enfadado conmigo porque he ido anulándote —ledigo,hablandoymoviéndomeconél,siemprealamparodelsol—,porquemeocupodemimadreyporquemehearrepentidodehabercumplidoesapromesa—prosigo,mirándoloa losojosysintiendosu fuerzaoscuraydañina—,pero,sobre todo, estás enfadado conmigoporque la hedejado ir y porquenovoy alucharporella,aunquedeesonoteculpo.Créeme,yotambiénestoycabreadoconmigo,peroyaestáhechoynovoyahacernadaalrespecto—continúoy,conesaúltimafrase,clavasumiradaenmipechoyporDiosjuroquelahesentidohastaenmisentrañas,comolasentíesanoche,cuandomedolíatantopordentro—. Tú no eres el lobo que han fotografiado las cámaras de fototrampeo; dehecho,puedequenisiquieraseasreal—suelto,apesardequelotengofrenteamí,gruñéndomeamenazante,destilando lamisma iray rabiaqueenelpasadosentítantasvecesenmiinterioryquetraíanconsigoesefríoqueformabapartedemí,esequehesentidoenelsenderoyque,ahora,sientomásmortalyheladoque nunca traspasar su piel para intentar colarse entre los rayos del sol, esosrayosque,comoayer,vuelvenabrillardeunaformadistinta,comosibrotarandelsueloparallenarlotododeluz.

Clavolamiradaenlatierra,olvidándomemomentáneamentedellobo,paraagacharme y tocar el suelo, que quema como si un fuego invisible estuvieraprendiendolatierra,ymiroallobo,quesemantienealasombra,dondeelsuelo,

Page 436: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

sinnecesidaddetocarlo,séqueestáfrío.—Temes quemarte las patas, ¿verdad? Cobarde, eres un cobarde —lo

increpocondureza,clavandomimiradaenlasuya—.Mispiessemojaronconel agua de tu negrura durante años y, aun así, no los aparté ni tampoco tuvemiedo…No como tú, que permaneces oculto en la sombra—sigo, retándolo,observandoelodiodesumirada,unodioqueenlugardeacallarmemeinstaacontinuar hablandomientras siento la fuerza que emana del suelo traspasar lapieldemimanoparacorrerpormisvenashastallegaramipecho,aeselugardemi interior donde, hace apenas una hora, retumbaba el vacío más absoluto ydonde,duranteaños,anidóelfríoqueamparalanegruraytodoloqueéstatraeconsigo.

Me incorporo cuando oigo el sonido de otro gruñido ami espalda y, tal ycomohiceesanoche,mevuelvocasiacámaralenta,reconociendoesegruñido,apesardequehacíaañosquenolooía,esegruñidoquesonabadeformadistintayquehizoqueellobonegrodespareciera,yentoncesloveo,alloboblanco,eseque muestra una herida en un costado y que no flaquea, a pesar del dolorlacerante que está sintiendo, que es el mismo dolor que siento yo con suausencia. Sin poder alejarmimirada de él, lo observo adentrarse en el claro,dondeestoyyoydondeelsolahorabrillahastacegarme,mientrasellosseretanentregruñidos,comotantasveceshanhechoenmiinterior,ymereconozcoenellosyensumirada;reconozcoalVíctorquefuisiendouncríoyaljovenjodidoenelquemeconvertíguiadoporellobonegroy,mástarde,alhombrequesoyahora,cuandodecidíescuchar,alentadoporPedro,alloboblanco.

—Yanohay lugarpara ti—ledigoal lobonegromientras sientoel suavepelajedelblancorozarmimano.Sindetenermeapensarenmisactos,posomimano sobre su cabeza, hundiendo la palma en la suavidad de su pelaje,observando, atónito, cómo su color blanco níveo empieza a llenarse demechones que abarcan desde el tono más claro del gris al más oscuro.Lentamente y casi conteniendo la respiración, deslizo la mano por su lomo,modificando,conmitrayectoria,eltonoblanco,puroybrillantedesupelohastaconvertirloenuncolorgrisclaroconhebrasoscuras.

Tiño su pelo con mis miedos, con mis defectos y con mis inseguridades,borrandolaperfeccióndelcolorblancoconmisimperfeccionesgrises,mientraselanimalpermaneceestáticoamilado,consumiradaclavadaenmisojos…

Page 437: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Una mirada que siento en mi pecho y en todo mi ser y que cierra migarganta,puessoyconscientedeque,pormuylocoqueseatodoesto,esteloborepresenta a quien soy ahora: un hombre que está intentando redimirse de suserrores,quenoesperfectoperoquetratadesermejorpersonaapesardeque,aveces, no lo consiga; un hombre que se equivocarámiles de veces, pero quesabrárectificarmilesdevecesmás,porque,alfinal,enestoconsisteelartedevivir,enequivocarseyenaprender,aceptandoquenadaesblancoonegroyqueelgrisesunbuencolor.

Sinpoderarticularpalabrayconelsaborsaladodemislágrimasatascadoenmigarganta,contemplocómoelanimalempiezaaretirarse,nosinantesrozarmipiernacon lacabeza,comoese roceque tedaelconsueloquenopuededarteuna palabra, mientras la luz que nos rodea comienza a cambiar y a volversemenos brillante ymás natural, y la tierra, que hasta ahora caldeabamis pies,comienzaaperdertemperatura.Alargoelmomentomoviéndomeconellobo,sinsepararmimanodesulomo,necesitandoseguirsintiéndomecomomesientoy,cuandosevuelveyclavasumiradaenlamía,retrocedoenel tiempo,comosisusojossehubieranconvertidodeprontoenunaventanaamipasadoy,ancladoaellos,veoalniñoquefuialprincipiodetodo,cuandoellobonegrotodavíanodominabamiinteriorylepermitíaalblancomanifestarse.Veolosbesosqueledaba amimadre, a pesar de que ella se pusiera rígida; veo cómo la seguía atodaspartes, apesardeque ellaparecíano reparar enmí, y cómobuscaba sumano tendiéndole lamía. Sí, tuve al lobo blanco enmi interior, sólo quemerendíyloaparté,pocoapocoalprincipioydeunmanotazorabiosoalfinaly,aunasí,fuicapazdeoírsuaullidoesanocheapesardehabermereconocidoenellobonegro,ydenuevo,conlarapidezdeunrayoyatravésdesusojos,veoalniñoquelloródurantehorassentadoenelsuelodeunacasaviejaabrazadoasuspiernas, esa casa que se convirtió más tarde en su refugio. Esa noche todocambióparamíyhoyhavueltoahacerlo,enelmismolugar,peroalaluzdelsol.

—Espera…No te vayas—le pido en un susurro, volviendo a la realidadcuandomeliberadesumiradayempiezaamoverse—.CuidadeVal,porfavor—musitoy,conmipetición,segiradenuevohaciamíparaunirsumiradaalamía, y capto el brillo que desprende, elmismo que cubría la tierra hace unosinstantes.

Page 438: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Yconesebrilloinstaladoensumirada,sealejadefinitivamentedemiladohastadesaparecerporcompletodemicampodevisión,dejandoenmiinteriorlaconfianzay la seguridaddeque todo irábien,«dequenos irábien»,medigobuscandoallobonegroconlamirada,sinencontrarlo.

Conpiernas temblorosasy sin saber exactamente loque acabade suceder,medirijohacia la tumbade los recuerdosdemiamigoparaarrodillarmeenelsuelo,dondelatierratodavíaquema.Ansiandosentirdenuevoesecalorenmipiel y enmi interior, apoyomismanos en ella, cerrando los ojos y sintiendocómo el calor corre de nuevo por mis venas hasta llenar mi interior,reconfortándomecomoloharíanlasllamasdeunahoguera,trayendoconsigolaimagendeValjuntoconunacerteza,ladequealgúndíaellayyovolveremosaencontrarnosyque,llegadoesedía,nomecorresponderáamídecidiroelegir,lecorresponderáaella.

—Y aceptaré su decisión, sea cual sea —musito abriendo los ojos,clavándolos en la cruz de madera que yo mismo clavé en la tierra hacedemasiadosaños.

Elsonidodelmóvilempiezaasonardentrodelbolsillodemichaquetaymesaca de mi ensoñación; lo descuelgo al leer el nombre de mi amigo en lapantalla.

—Dime,Sombra,¿quépasa?—Al fin te localizo, macho. Llevo más de media hora intentando hablar

contigo,peroeracomosinohubieranadaalotro ladode la línea. Joder, ¡quémalrollo,colega!—medicemientrassonríoparamí,guardandosilencio.

—Venga ya, te habrás equivocado marcando —le indico finalmente condespreocupación.

—¡Yunamierda!Tejuroqueeramuyraro,tío.Heidohastatucasaparaversi estabas bien—insistemientrasme siento en el suelo, sobre esta tierra quealberga las cosas demi otro amigo, alzando lamirada hacia el cielo, ese queahorasólobrillaconlosrayosdelsol,mientraselSombrahablayyosientolaluz que ha proyectado el lobo blanco todavía llenando mi pecho—… HequedadoconJoaquína lassieteparaqueoshagáisunpardebirrasy luego tevendrása casaa cenar; tengoal enanoentusiasmadocontigoynopuedomás,colega… —prosigue mientras siento mi garganta cerrada por miles deemociones a las que no sé poner nombre—… y ve organizándote la agenda,

Page 439: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

macho,porquesucumpleañosesdentrodedosmesesyvoyapreferirlamuertea tener que soportar sus quejas como el tío Víctor no venga —me indicamientrassonríoconsuspalabras,percatándomedeque,cuandoabrestusbrazosytucorazón,lavidasedespliegafrenteaticomosideunaprimaverasetrataray,aunquemirelaciónconValahoraestéenplenoinvierno,puedequellegueeldía, si ellaquiere, enqueese inviernodépasoalveranoy, entonces, la traeréaquíylepresentaréamiotrafamilia:alSombra,aDídacyaRaquel,lehablarédelRataypuedeinclusoquelepresenteamimadre…Quiénsabeloqueharésillegaesedía;demomentomeconformoconvivirmivida,perodeverdad,comodebería haber vivido desde el principio… Ya veremos lo que sucede másadelante.

Page 440: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO34

Valentina

Domingo,tresdíasantes,LaRioja

Recorroelsenderoquemellevaráhastamicasasintiendomicerebroymiinterior embotado, como si estuviera en estado de shock,pues soy incapaz depensar,delloraroderevivirloqueacabadesucedery,cuandollegoalapiscina,medetengo frente a ella sintiendocómoesa sensaciónextraña se expandeportodomicuerpoconcadalatidodemicorazón,esequehoylatedeformadistinta,piensosintiendocómounasolalágrimarecorremimejilla,rasgándolaasupaso,comolapuntadeuncuchilloafiladoquedejauncortefinosobreunpapel.Sinsecarlaydejandoesereguerodeaguasaladamojandomipiel,vuelvolamanopara observar mi palma, esa donde, hasta hace nada, mi sueño flotabahaciéndomecosquillas, rememorosintiendomigargantacerrarsecadavezmáshasta impedirme respirar con normalidadmientras nos veo por todas partes yoigoesacanciónquesólonosotrospodíamosescuchar,esaqueeranuestrayqueíbamoscreandoanuestramedida.

Reanudo el paso sintiendo que todo mi dolor comienza a despertar y loacunoparaqueduermadenuevo,comoestabaantes,puesprefieromilveceslasensacióndeanestesiaaldolorinsoportablequeestoyempezandoasentiryquemetemoqueescomolapuntadeuniceberg.

—Ahorano,notederrumbes…Ahorano, tranquila, tranquila, tranquila—me repitoamímismaenun susurro tan suavequeni el airequeme rodeaescapazdecaptar.

Page 441: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Abrolapuertademicasa,escabulléndomerápidamentehaciamihabitaciónsindejarderepetírmeloy,unavezenella,medesprendodelaropa,quedejoconcuidado sobre la cama, para dirigirme posteriormente a la ducha, donde meaferroaesaspalabrascomoharíaunnáufragoconunatablademaderaoconunsalvavidas,puessonesoahora,misalvavidasylasquemeimpediránahogarmecontodomidolor.

—¡Al fin llegas, petarda! Tardas un poco más y te juro que hubiera sidocapaz de ir a casa de Víctor a buscarte —oigo la voz entusiasmada de mihermana al otro lado de la mampara y, extrañada, entreabro la puerta paramirarla.

—¿Yporquéhabríasdehacereso?—lepreguntoconseriedad.—¡¡¡Porquevoyacasarme!!!¡¡¡Josémelopidióanoche!!!—¿Enseriooooooo?—sueltosonriendo,olvidandoduranteunmicrosegundo

misdramas—.¡Mealegromuchísimoporlosdos!—Estoy tan feliz que siento que voy a explotar en cualquiermomento—

exclamaconunasonrisaresplandecienteenelrostro.Y,aferrándomemásquenuncaaesemantraquellevoentonandodesdeque

he entrado enmi casa,me obligo a darle la espalda a todo lo que siento parasonreíryfingirqueestoytanfelizcomoella.

—Si vas a explotar, por favor, que sea fuera de este baño y, ya puestos,tambiéndemihabitación;nomeapetecenadaqueme lopongas todoperdidocontusrestossanguinolentos—bromeo,conlagargantacerradaporlacongoja,sintiendomipechooprimidopor el dolor, a pesar demis intentosde acunarloparasilenciarlo.

—¡Quéasco,tía!¡Mehashechoquelovisualice!—replica,estremeciéndoseexageradamente,ymeobligoa sonreíryaarrugarle lanarizcomoharía simividanosehubieraidoalamierda—.¡Yquiereshacerelfavordelasalirdeladuchadeunavez!¡Venga,queestoyesperandounsuperabrazodemidamadehonor!—prosigueentusiasmada,tendiéndomeunatoalla.

—¿Voy a ser tu dama de honor? —le pregunto con fingido entusiasmomientrasmeaferroalapuertadelamamparaconmásfuerzadelaquedebería.

—¡Porsupuesto!¿Quécreías?¡Venga!¿Quieressalirdeunavez?—Yavoy…Niducharse tranquilapuedeuna—farfullocerrandoelgrifoy

cogiendo la toalla queme tiende, para secarmi cuerpo con rapidez—. ¡Anda,

Page 442: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ven! ¡Felicidades, hermanita, me alegromuchísimo por ti y por José! ¡Al findejarádeser«esechico»paraserelflamanteyerno!—añado,abrazándolaconfuerza,mientrasellaemanafelicidadportodoslosporosdesupielyyosientomiinteriorcadavezmáscarentedevida.

Aferrándomeaesteabrazo,cierroduranteunossegundoslosojos,esosquemeescuecenperoquenosehumedecen,buscandoensusbrazoselconsueloquenopediréconmivozmientrasmiinteriorseresquebrajaconsuausencia,comoesahojasecaquecaedelárbolyquealguienpisapordescuido,produciéndolecientosdegrietas.

Yosoyesahojasecaahora,unahojapordondenocorrelasavianilavidayqueelvientobarreráymoveráasuantojo,perosiemprecercadelsuelo…Puedequelahagavolarduranteunossegundos,peroparadejarlacaerdenuevo,comoharéyo, pues estoy seguradequenuncamásvolveré a tocar el cielo conmismanos,porquemicieloestabaenlassuyasymiequilibrioymifelicidadensucuerpo,ensumiradayentodosuser;porqueélsíqueeramitodoyahora…

ahora… «Tranquila, no llores; venga, no llores, tranquila, no puedesarruinarle el día», me animo tragando con dificultad y fracasandoestrepitosamente cuando un par de enormes lagrimones surcanmi rostro y lassecodisimuladamente.

—¿Quétepasa?¿Porquélloras?—mepreguntacondulzura.—Porque estoy muy feliz por ti y porque vas a convertirte en una

responsablemujercitacasada—miento,coneldolordándomeunpuñetazotrasotroenelpecho,mientrasotropardelagrimonesfluyenconrapidezdemisojos,temiendoquenoselopermita.

—Tíaaaa,nollores;nolloroyoyvasymellorastú.Ven,boba—medice,dándomeotroabrazo.

«No llores, no llores, no llores; para ya, piensa en otra cosa»,me ordenomentalmentemientrasmeaferroasuabrazo.

—Vale, paro, ya está; es que nome lo esperaba—le digo, obligándome asonreír,liberándomedesusbrazos,esosquemetemoqueestabaaferrandocondemasiadafuerza—.Oye,¿ycuándotelohapedido?Porqueayernodijistenada—lepreguntosindejardesonreír,secandomislágrimas.

—Anoche,cuandonosmarchamosdelafiesta,fuimosadarunpaseoy,alaluzdelaluna,melopidió…fuetannnnnnnromántico,ytejuroquenuncahabía

Page 443: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

queridocasarme,pero,cuandomelopusoeneldedo,sentíquenoqueríaotracosa—mecuentamostrándomesumano,dondebrillaunpedazodeanillo.

—¡Halaaaa…québonito!—exclamo,cogiéndolayacariciandola joyaconmipulgar.

Y, con ese gesto, recuerdo la primera vez que estuvimos juntos, cuando élacariciómipechoconsupulgar,comoestoyhaciendoyoahoraconelbrillante,ysientocómotododentrodemísecierra,contrayéndoseyahogándome.Inspiroprofundamente, notando cómo me duelen los pulmones con mi inspiración,comosi tuvieranunagrietaquepalpitaradedolorcadavezque losobligaraaexpandirseocontraerse.

—¿Verdad que sí?No puedo dejar demirarlo—comentamientras yo, sindejardesonreír,medirijodenuevohaciamihabitación.

—¿Ypapáqué tehadicho?Estarácontento,¿no?—lepregunto,dándomemediavueltaparamirarla.

—Todavía no lo sabe; queríamos decírselo durante el desayuno —meconfirma llegandohasta la cama, donde se sienta, sin dejar demirar el anillo,completamenteensimismada.

—¿Habéis dormido aquí finalmente?—inquiero, empezando a ponerme laropainterior.

—Claro.Sabíamosque,conlatonteríadetuvinito,lacosasenosiríadelasmanosypreferimoshacernocheaquí.

—Osea,quetelopidióborracho—lapincho,riéndomemientraspordentrotodomeduelecadavezmás,comosituvieraelesternónrotoyseresintieraconmisrisasoconloslatidosdemicorazón.

—Quéidiotaeres.Josénuncaseemborracha;sólobebimosunpocomásdelacuenta,peroesoestodo—sejustifica,dejandodemirarfinalmenteelanillo.

—Sí,claro…queibaborracho,tía—ledigo,obligándomeareír,esquivandoel cojín queme ha lanzado—, y deja de hacer eso o no acabaré de vestirmenunca—lepido,esquivandootro.

—¡Pues deja de decir que iba borracho porque no es verdad! ¡Que teconozco y ya te veo diciéndolo por todas partes, y a la gente creyéndote!¡Promételo! ¡Promete que no lo dirás! —me exige cogiendo otro, lista paralanzármelo.

—¡Vale,loprometo,pesada!¡Ydéjamevestirme!—leruego,sacandounos

Page 444: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

vaquerosdelarmario.—¿Y tus amigos? —inquiere cogiendo los cojines que se encuentran

esparcidosporelsueloparadejarlosenlacamadenuevo—.¿Ytú?Todavíanomehasdichoquévasahacer—meplantea,paralizándomeconsupregunta.

—Todavíanolosé—respondoconseriedad,sintenerquefingirnada—.Ibaaquedarme,peronosé,necesitopensarlo—musito,empezandoavestirme.

—¿YVíctorquédice?¿Continúacreyendoqueesmejorquetemarches?—meplantea,ysientocómoelicebergqueanteshabíavisualizadoenmicabezaseacercaunpocomásamí,listoparapartirmeendosencuantorocemicuerpo,yme apoyo en la pared, aunque sin percatarme de mi gesto—. ¿Estás bien,Valentina?—mepreguntamihermana,corriendohaciamí,mientrassientocómomi interiorse resquebrajasin remedio,comoesahojaque,mediorota,alguienpisadenuevo,rompiéndolaunpocomás.

—Sí, es que me he mareado—le miento, incorporándome, con ese dolorlacerantequesientoenmispulmones,cadavezquerespiro,expandirseportodomipecho,eneselugardondemilesdeemocionesbrillabanconsunombreyqueahorayanoestán…«Noestán…Noestá…Sehaido…Nollores,nollores,nollores», me repito—, pero ya estoy bien, tranquila —afirmo, obligándome asonreírotravez.

—Tía,mehasasustado—meindica,mirándomeconpreocupación.—Puesnoteasustes,porqueestoybien—lemientoconvozfirme—.Ayer

apenascenédebidoalosnerviosymehabráentradolaflojera.—Bueno, ¿y qué dice Víctor? —insiste mi hermana mientras yo siento

deseosdegritar.—Lomismo,quedeboirme.Dehecho,élsehaido.Teníatrabajopendiente

ynopodíaretrasarlomás—leexplicocomosinada,yendohaciaelbañoparaterminardearreglarme.

—Pero¿regresará?—mepregunta,preocupada,siguiéndome.—Claro,tía;yasabesqueélviajacontinuamenteynopodíaalargarlomás,

peroporsupuestoque,cuandotermine,volverá—lerespondosinsabersiseráasíono.

—¿Ytúestarásaquíotehabrásmarchadoya?—inquiere,dandoenelclavo,ytragosalivacondificultad.

—Nolosé,Alana.Tía,déjalo,noquieroagobiarteniagobiarme;yaveremos

Page 445: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

quédecido.Venga,vamosadesayunar,quepasodequemedéotraflojera.Además,estoydeseandoverlacaraquehacepapáconlanoticia—ledigo

sonriendoabiertamente,saliendodemihabitación.—¿Ytusamigosnovienenadesayunar?—mepregunta,dándomealcance.—Nomehanenviadoningúnmensaje todavía,asíquesupongoquedeben

de estar durmiendo.De todas formas, en la casita hay café, té, fruta, tostadas,mantequilla,mermeladaynosécuántascosasmásquemedijoCasiquehabíallevado.

—ConCasialfrente,cualquierapasahambre;leshabrállenadolaneverayladespensaconcomida—añaderisueña.

—¿Lodudas acaso?—le pregunto, sintiendo cómo las últimas palabras semequedanatascadasenlagargantacuandollegamosalacocinaymimiradaseposaeneltaburetevacíoenelqueélsolíasentarse.

Conesavisión,notocómoesabrechaquetengoabiertaenlospulmonesseabremásalrecordarcómonoscomíamoslafrutaantesdecomernosanosotros,susonrisa,lasarruguitasqueseleformabanentornoalosojos,susmanos,esasque me sujetaban con fuerza, como las ramas sujetan a las hojas…, pienso,tragandocondificultad.

—¡Tía, muévete! ¿Qué haces ahí parada? —me atosiga Alana mientrasmantengomispiesclavadosenelsuelo.

—¡Eso, hija!, que parece que hayas visto a un muerto —suelta Casi,mirándomeconperspicacia—.¿Estásbien?—mepreguntadejandoelplatodefruta sobre labarray, si antesenmihabitaciónhabía sentidodeseosdegritar,ahorasólosientodeseosdecorrer.Correrlejosdeestacocinaydelosrecuerdosquelatenenella;correrlejosdeestosviñedosylasvivenciasquesufraganciayla tierra traerán consigo; correr lejosde su casa, de lamíayde todo estoquehace que esta herida que siento en mi interior se abra cada vez más. Correr,correr,correrynodetenermehastaquelosrecuerdos,cansadosdeseguirme,serindan y me permitan detenerme a mí también—. ¿Y puede saberse dóndetenemosalotro,quetodavíanohavenido?—añadeCasimientrasyomeobligoaempezaracaminaryacontinuarfingiendo.

«Nollores,nollores,nollores»,meordeno,inspirandoprofundamente.—Se ha marchado hoy, tenía trabajo pendiente —suelto con aplomo,

sentándomefinalmenteenmitaburete.

Page 446: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—¿Habláis de Víctor? —nos pregunta mi padre, accediendo a la cocina,consiguiendo que todas las células de mi ser se vuelquen en su voz y noprecisamenteporsusmatices.

—Sí,Casipreguntabaporél—musito,sintiendocómoesacosaextrañaquelateenellugarqueocupabaantesmicorazónempiezaalatirconfiereza.

—Sehatomadounosdíaslibres,quefaltalehacíanalpobre,yluegoteníatrabajoenSegoviaymástardeenToledo—nosexplicacogiendoelcaféqueletiendeCasimientrasyosientolamiradademihermanasobremí.

—¿Cuándo se ha tomadoVíctor unos días libres en plena vendimia?—leplanteamihermanaamipadre,sentándoseamilado,enesetaburetequeélsolíaocupar,ydenuevoloveoenmisrecuerdosydenuevotododuelemuchomás.

—Élno tienequehacer la vendimia—le recuerdo conmás seriedadde laquepretendíamientrasobservodereojocómoJoséentraenlacocinaysecolocaalladodemihermana.

Los miro en silencio, su sonrisa cómplice y esos gestos que hablan deintimidad…Nolade lacama,sino ladeconocerseybuscarse,comonosotroscuandonos sonreíamoscuandonadienosveíaocuandoenlazábamosnuestrosmeñiquescuandonuestrapielnopodíamás,rememorocondolormientrasAlanasonríefeliz,comoelladice,apuntodeexplotar,ydenuevomeobligoaalejarlodemimente.

—Papá,Casilda…Joséyyotenemosunacosaquecontaros…—empiezaadecirmihermana,aferrandoconfuerzalamanodesuahoraprometido,ymirosusmanos entrelazadas para posteriormentemirar, disimuladamente, lasmías,sintiendolaañoranzagritandoenmipiel,reclamandoloque,duranteuntiempo,creyóerróneamentequeerasuyo—…Asíque…¡¡¡Vamosacasarnos!!!¡Papá,quevasateneryerno!—finalizamientrasyosientocómootralágrimasurcamimejillaylasecodisimuladamente.

—¡Hombre! ¡Ya era hora! ¡Qué buena noticia! —exclama mi padre conorgullo,yendohaciaAlanaparaabrazarlamientrasyopermanezcosentadaenmitaburete, evadiéndome de esta cocina para volar a su lado y, durante unospreciados y breves segundos, nos veo en la ducha, en la cama o en cualquierparteyvuelvoasentiresahambrequemeconsumíapordentrocuandoélestabacerca;vuelvoaoírsuvoz,susrisas,yvuelvoasentirsumanorozandomipiel…—. ¡Ven aquí, yerno, que te dé un abrazo!—me llega de fondo la voz demi

Page 447: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

padre y, con ella, despierto de mi ensoñación sintiendo cómo el dolor degarganta baja hasta llegar ami pecho, a ese lugar dondemiles de emocionesllevabansunombreyqueahorasientovacío.

«Nollores,no llores.Olvídateya,no lopiensesmás,para…»,meadviertomientrassientoqueheperdidounapartedemímismaimposibledereemplazar,como sime hubieran amputado una pierna y tuviera que aprender a andar sinella.

—¿Ycuándooscasaréis?—lepreguntaCasimientrasmeobligoasonreíryaprestaratención.

—Dentrodeunañooañoymedio.Nolosabemostodavía,peroqueremosque sea aquí, papá, en el jardín —le comunica mi hermana, haciéndomeretrocederenmisrecuerdos…

***

—Sialgúndíamecasara,noloharíaenParísoenunaplayaparadisíacadecualquier isla perdida; lo haría aquí, en las tierras de mi familia —le dijemientrasnosdirigíamoshacialosviñedos.

—¿Y en qué parte, exactamente? —me preguntó con la vista fija en lacarretera.

—Eneljardíndelacasa,conlacordillerafrenteanosotrosyrodeadosporlosviñedosquemevieroncrecer.Seríaalatardecery,bajo laencina,haríaunenormecorazónenelsueloconpétalosderosablancosy,dentrodeesecorazón,le entregaría el mío a esa persona —le indiqué, deseando que él fuera esapersona.

***

«Yahoramihermanasecasaráenesemismolugarmientrasqueyotendréque sonreír y fingir que todo está bien, como estoy haciendo ahora», piensosintiendo que los ojos empiezan a humedecérseme y cómo esa sensación dequererecharacorrerseincrementaporsegundos.

—No imagino un lugar mejor para casarte, hija. Aquí, en tu casa, en lastierras que te vieron crecer y donde están tus raíces —comenta mi padre,cerrandomigargantayutilizandopartedelaspalabrasqueutilicéyoesedía,y

Page 448: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

clavolamiradaenelmármolde la isla…«Nollores,nollores,nollores»,meexijo,fracasandoestrepitosamentecuandonotootralágrimaescabullirsedemisojosparaestrellarseenelmármoldelaencimerasinnecesidadderozarmipiel,comosideunagotadelluviasetratara.

—¿Y a ti que te sucede, hija? —me pregunta Casi, mirándome conpreocupación.

—Que estoy muy feliz por ella y me ha dado por ponerme en plansensiblero.

Siestoyasíporquetecasas,noquieroniimaginarcuandomedigasquevasahacerme tía; ese día ya puedo hacerme con un buen arsenal de pañuelos—lehabloamihermana,obligándomeabromearmientrasellaseacercaamíparaabrazarme.

—Ven,boba,loquetienesquehaceresdejardelloraryponeresacabecitaafuncionar,quenecesitoquemeayudesconlospreparativosdelaboda.

—PuesenNuevaYorklovasatenercomplicado,hija.Lomejorseráquetequedesaquíenlabodega—proponemipadrey,consurecomendación,sientootratandadepuñetazosenelpecho.

«¿Qué voy a hacer ahora? Ahora que se ha ido, ahora que no estamosjuntos…¿Ycuandovuelva?¿Quéharéentonces?¿Cómovoyapodermirarlooestar cerca de él con todo esto que siento golpeándome continuamente elpecho?»,mepreguntoconeldolordominandotodomicuerpo.

—Papá,déjala,¿quieres?—lepideAlana—.Nolehagascaso,hermanita,laplanificaremos por teléfono o por Skype; será algo así como un trabajo adistancia—meechauncable,sonriéndomefelizmientrasmimóvilcomienzaasonaryleoelnombredeMaríaEugeniaenlapantalla.

—Buenosdías,MaríaEugenia—la saludo sonriendo, guiñándole unojo amihermana—.¿Quétalhabéisdescansado?

—Fenomenal.Estefindesemanahasidotannnnnideal…Loúnicomalohasidotenerqueaguantaralniño,túyameentiendes;alasiguiente,mejorinvitasólo a adultos—medice, y ensanchounpocomásmi sonrisamientras sientocómopordentrovoyresquebrajándome…«Nollores,nollores,para…Céntrateenloqueteestádiciendo,nollores…»,meordenoconvozfirmeenmicabeza.

—Vengaya,sielniñoesunencantoylosabes—replico,obligándomeanopensarennadamientrasoigodefondocómomipadrehablaconsunuevoyerno

Page 449: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

yconmihermana.—¿Un encanto? Sí, claro—masculla y, sin verla, sé que estará haciendo

algunamuecadefastidio.—Pelirroja,estásfrustrada,ricura.Esotepasapornojugarconmigoanoche

—me llega la voz deCiro al otro lado de la línea yme obligo amantener lasonrisaenmirostro.

—¿Tedascuentadeloquetengoqueaguantar?—sueltacondramatismo.—Te quejas por vicio, María Eugenia —le contesto, levantándome del

tabureteparairhacialapuertaacristaladadelacocina,desdedondepuedoverlosviñedosextenderse interminablesfrenteamí.Filasyfilasdevidesquemerecuerdan un mar verde y ondulante, como lo eran sus ojos, unos ojos quepodían brillar embravecidos en ocasiones y serenos en otras…, rememoro derepente y, con ese recuerdo, llega otro puñetazo en todomi pecho—. ¿Estáislistos?—lepregunto,obligándomeasobreponerme.

—Todavíano,perosupongoqueenmediahoraloestaremos.Alfinalhemosdesayunadoaquí,lacocinateníacomidaparasurtiraveinteoatreintapersonasy,¡ay,hija!,quégustazodesayunarconestasvistas.

—Habéisdesayunadoenlaterrazaacristalada,¿verdad?—Estacasitayestelugarsonunsueño.Teaseguroqueharemosmásdeun

reportaje aquí—me comunica y, aunque debería estar feliz con lo que estoyoyendo,sólopuedosonreírynisiquierasésiloestoyconsiguiendorealmente.

—Me alegro de que te haya gustado. Paso a recogeros en media horaentonces,¿vale?

—Perfecto, nos vemos en nada—se despide antes de colgar y lo hago yotambién,pensandoqueyamequedamenosparapoderestarsola.

—Chist…—oigoamiespaldaymevuelvo,encontrándomeconCasi,quemehaceungestoconlacabezaparaquelasiga.

—Casi,tengoqueirme,meestánesperando—ledigointentandozafarme.—Yyonecesitoquemeayudes.Venga,tira,quevanasersólounosminutos

—me exige saliendo de la cocina, mientrasmi padrememira divertido y yohagounamuecaantesdeseguirla.

«¿Yahoraquéquerrá estámujer?»,mepreguntomientrasveoque sube laescalerahastallegaramihabitación.

—¿Qué tienes que hacer aquí que necesitas que te ayude? —inquiero

Page 450: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

extrañada,cerrandolapuerta.—Siéntate a mi lado, ¿quieres?—me pide, sentándose en el borde de la

cama,dándolesuavestoquecitosconsumanoalacolchaparaindicarmedóndehedeponerme.

—Casi,enserio,tengoqueterminardearreglarme…Meestánesperando.¿Quépasa?—lepreguntosinhacerlecaso,cruzando losbrazospordebajo

demipecho,temiendoloquetengaquedecirme.—Quetesientes—meordenaconautoridad,yobedezcofinalmente,aunque

aregañadientes—.Mira,hija,tumadre,pordesgracia,noestáaquíparasentarsedondeestoyyo; tupadreesunhombremuy inteligente,pero,aveces,onoseenteradelascosasoprefierenoenterarse,ytuhermanaestátancontentaahoramismoquenovemásalládesufelicidad,perolaCasitieneunpardeojosalosquenoselesescapanada,¿meentiendes?

—Puesnomucho, laverdad—lemiento,puesséperfectamentedequévatodoesto—.Casi,noséquéesperasquetediga.

—Mira, hija, ya está bien. Tú sólo has llorado cuatro veces en tu vida, almenosdelantedemí:cuandomuriótumadre,cuandomuriótuabuelo,unosdíasantes demarcharte aMadrid…y ahora.Túno estabas llorandode emociónyalegríaportuhermana,túestabasllorandoporél,¿noescierto?

—¡Casi! Pero ¿qué dices?—le pregunto intentando sonreír—. ¡Claro queno!¿Dedóndetehassacadoeso?

—Mira cómo has sabido a quiénme refería sin necesidad de decírtelo—señala,mirándomeconesacaradesabiondaquemepuede.

—Porque sólo hay una persona que se ha ido y esVíctor—le rebato confingidadespreocupación,poniendolosojosenblancoapesardelnudoquetengoenlagarganta,oprimiéndola.

—ElmismoVíctorqueayernoseseparabadetiniapalazos.—Estábamos trabajando, Casi. Te recuerdo que era la presentación y

teníamosquecontrolarquetodosalierabien.—¡Sí,claro!Yaqueldíaenlacocinacuandolefaltabanmanosparatocartey

tú le dejabas hacer, ¿también estabais trabajando? —replica, haciéndomeenmudecer—.Mira,nomevengasconmilongas,queosviesedíay todos losquehanvenidodespués;además,queblancoyenbotella:élsevaytúvengaallorarcomounaplañidera.

Page 451: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Joder,Casi,noseteescapaniuna—lerecrimino,rindiéndomefinalmenteyclavandolamiradaenelsuelo.

—Si es que lo habéis hecho fatal para que no me enterara, hija. ¡En micocina!,nimásnimenos,comosinohubieraotrolugarenlacasaparametersemano—medicecogiendolasmíasconcariñomientrassientocómoeseicebergseacercalentamenteamísinquehayanadaquepuedafrenarsuavance—.¿Quéhasucedido?—mepreguntapreocupada—,ynomedigasquenada.

—Queélyanoquiereestarconmigo—musitosintiendocómomicorazónsecontraeconesaspalabrasycómodosenormeslagrimonesemborronanmivisión—.Mehadejadoysehamarchadodeviaje,esoesloquehasucedido.

—Pero¿porquéhabéisdiscutido?—Nohemosdiscutido,Casi,ni siquieramehadadoopciónahacerlo—le

aclaro,yempiezoanarrarleloocurridosindejardellorarenningúninstante—.Ha estado conmigo toda la semana sabiendo que lo nuestro no tenía ningúnfuturoporqueomemarchabayoomedejabaél—susurrocuando finalizomirelato,sintiendoquetodomedueledemasiado.

—Mira,hija,noséquéestarápasandoporsucabeza,peroloconozcodesdeque llego aquí siendo un pillastre. Entonces nome fiaba un pelo de él, te loaseguro,yrecuerdoqueledecíaatupadrequecualquierdíanosquitaríahastalos dientes, pero me equivoqué… y tanto que me equivoqué… como estáshaciendotúahoraalcreersuspalabras.

—¿Yquéquieresquecrea,Casi?—inquierocondesesperación.—Lomismoquecreoyo:quetequieretantoqueprefieredejarteiraanclarte

aquícondiecinueveaños.FíatedetuCasi,quelosabetodo—declaramientrasyosólopuedollorar—.¿DeverdadhubierasrenunciadoairaNuevaYorkporél?—mepreguntamientrasmeabraza,yapoyomicabezaensupechosintiendocómo todosmisórganos lloran su ausencia, como simi cuerpo fuera esahojasecaquehanpisadovariospieshastacasiromperla.

—Sí—susurroenunhilodevoz—,porsupuestoquesí.—Y con lo cabezona que eres o te soltaba esa tanda dementiras o no te

hubieraslargadonunca—sueltaconcariño—.Siesqueestoseteníaquehabervistovenir,siemprejuntosatodashorasyatodaspartesdesdequeerasunacría.

Ya verás como tu padre se entere —prosigue mientras siento cómo eseiceberg llega para partirme en dos y ahogarme en las aguas gélidas de mi

Page 452: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

desesperación, comoesacanción,TerraTitanic,esaqueparecía sonar siemprecuandoestábamosjuntos,rememoroabrazándomeaCasildaconfuerza.

—¿Quéhagoahora,Casi?—Tienes diecinueve años y una vida entera por delante. No hagas lo que

hiceyoynotecasesniteatesanadietanpronto.Veteaesaciudadaserloquequieresser,quepara lootrosiemprehabrá tiempo—meaconsejamientrasmeincorporo y ella me tiende un pañuelo—. Te aseguro que las cepas no van aecharpatasyasalircorriendodeaquí,yqueestacasaylabodegaseguiránaquídurantemásañosdelosqueestaremostúyyo.

—¿Yél?¿Éltambiénestará?—lepreguntoconmilesdeemocionestiñendomivoz.

—¿Tú sabes lo que decía mi madre? Que cada cassoleta te la seuatapadoreta —suelta, consiguiendo que me olvide de mi drama durante unossegundos.

—¿Se puede saber qué has dicho? —le pregunto, sonándome luego confuerza.

—Mi madre era valenciana y, muchas veces, hablaba con nosotros envalenciano,apesardelasquejasdemipadre,porquenoseenterabadenadaydecíaque loexcluíamos—meexplicaconunasonrisacargadadeañoranza—.Cuánto tiempo sin hablar en valenciano—musitamás para sí que paramí—.Másomenos,loquetehedichosignificaque,hagasloquehagas,vayasdondevayas, si él es para ti, lo será, así que no dramatices y vete. ¡Quémanera deanclarnos a los sitios cuando hay unmundo entero por pisar! Parece que, enlugardetenerpies,tengamosraíces;siempreenelmismositio.

—Siteoyerapapá,teloexplicaríabienexplicado,teloaseguro.—Tupadreesmásantiguoquelascepasdeesteviñedo—merebateconuna

sonrisa, haciéndome sonreír a mí también—. Mira, hija: aunque se hayaequivocadoenlasformas,entodas,porqueaéseseloexplicarébienexplicadocuandovenga,hahec…

—¡Ni se te ocurra decirle nada, Casi!—la interrumpo alzando la voz sinpretenderlo.

—Tútranquila,quedeloquemehascontadonosoltaréniprenda,peroéseyyotenemosunaconversaciónpendiente,¡hombre,silatenemos!Nomequedaréconlasganas,no,no,no…Teloaseguro,yatinoteriñoahoraporquesólote

Page 453: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

falto yo, que, si no, verías tú, si es que sois unas pilinguis todas—me dicenegando con la cabeza—, pero ahora escúchame bien… Aunque se hayaequivocado,¡¡¡entodo!!!,hahecholocorrectodejándote.

—¡Casi,pero¿cómopuedesdecireso?!—lepreguntoenfadada.—Porquesoycepaviejayestoycansadadevervendimias, idasyvenidas,

poresotelodigo,ydejadellorardeunavez,quetusamigossedaráncuentayaverquélescuentas,miraquéojosmásirritadostienes.

—Túnoloentiendes,Casi…Yosóloquieroestarconél,medaigualNuevaYorkynomeimportaríaanclarmeaunsitiosiesconVíctor—insisto,unpocomolestaconellaporquenomeentiendayestéanimándomeamarcharme.

—¡YdalePericoaltorno!Ay,Señor,quémalaeslajuventuddehoyendíayquécieguitasestáiscuandoosempecináisenalgo.Nomeextrañaqueelotrotehayadicho tantasestupideces juntas. ¡Hala!, ¡levantadeahíyvea lavarteesacara!—memandaconesegeniotansuyo.

—Casi,noledigasamipadrenadadeesto—lepidosecandomislágrimas,quenodejandefluir.

—Mejorvamosacallarnosyadejarestacharlitaenestahabitación,porque,comotupadreseenteredequeteheanimadoairteaesaciudad,meponeaararlatierraderodillasyconlosdientes—suelta,haciéndomesonreírdenuevo.

—YaVíctortampoco;prohibido,Casi—leadvierto,temiéndomelopeor.—¡Ahhhhhh,no!¡Esosíquenoteloprometo!ComoquemellamoCasilda

MartínezdelaNuezqueaéseseloexplicoyobienexplicado.Vamos,quesinose lo digo, reviento —replica, cerrándose con brío la chaquetilla que llevapuesta.

—Casi,queno,porfavor,hazlopormí,deverdad—leruegocogiendosusmanos—.Déjaloestar…Sicuandoregresanomehemarchado,yameapañaréyoconél,ysinoestoy,mejornoremuevaseltema;hazmecaso.

—¡Ya veremos! Y tú, alegra esa cara, que por un hombre no se acaba elmundo—me recrimina antes de salir demi cuarto—.Hombres, sólo nos danquebraderos de cabeza y disgustos. Si es que no hay nada en esta vida comoestarsola,sinrendirlecuentasanadie…—laoigorefunfuñarescalerasabajo.

Page 454: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO35

Tras cerrar lapuertademihabitación,medirijo albañopara lavarme la cara,sorprendiéndome cuando, frente al espejo, veo mis ojos casi inyectados ensangre.

—Qué bien —murmuro. Me siento en el taburete y los cierro para querecuperen su blanco natural, mientras dejo que las palabras de Casi vayancalandoenmí.

«Pero ¿quémás da lo que haya dichoCasi? ¿Quémás da que en realidadVíctormehayamentidoporquemequiere?¿Quémásdaquelohayahechopormí?—piensocerrando lospuños sobremispiernas—.¿Quémásda todo si alfinalestoysinél?¿Deboestarleagradecidaacaso?¿Seagradeceeldolor?,¿laausencia?, ¿la sensación de amputación? Aunque sea por tu bien, no, no seagradece.No, si tú no lo has pedido ni lo deseas…No, no se agradece»,medigo,sintiendocómolaslágrimassedeslizanpormismejillas.

—¿Porquénomehasdejadoequivocarme?—musitolevantándome,yendohacialapequeñaventanadesdelaquesedivisalacordillera.

«Esonoesquerer,esoesquererimponeruncriterioounaideaquepuedesertanequivocadacomo la tuya—reflexionosecandomis lágrimas—.Suficiente,suficiente, no llores más», me riño cerrando los ojos de nuevo, inspirandoprofundamenteparasoltartodoelairedegolpe.

Obligándomeaponerlamenteenblanco,mesientodenuevoeneltaburete,centrándomeenmicuerpoyencómomispulmonessellenanconmiinspiraciónysevacíanconmiespiración,eliminandotodoelruidodemimente,esamentetraicioneraybulliciosaqueseempeñaentraérmelodevueltacontinuamente…

Page 455: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Susojos,susonrisayesacanciónquesólonosotrospodíamosoírcuandonosrozábamos,cuandoenlazábamosnuestrosmeñiquesocuandomeponíaesatiritaen cinco minutos que siempre eran muchos más y, de nuevo, noto cómomeresquebrajoigualqueesahojasecaquesólopuedearrastrarseporelsueloalaesperadequeelviento,caprichoso,seapiadedeellaparaelevarlahaciaelcieloduranteunossegundosparadejarlacaerotravez.

—Suficiente—musitoabriendo losojosdegolpe—, te estánesperando—me reprendo, levantándome, mirando mi rostro en el espejo y descubriendocómoelcolorblancodemisojoscomienzaadominar,pocoapoco,alrojo,elcolorde ladesesperación—.Suficiente, ya estábien—me recrimino, saliendodelbañoydemihabitación.

Endureciendomi rostro, cojo las llaves del Jeep, que se encuentran en elmuebledelaentrada,paradirigirmehacialacasitadeinvitadosy,unavezenél,enciendolaradioparaescucharmúsica,ynomúsicaremember,sino lamúsicaquesuenaahora,esaconlaquevivirémipresenteytambiénmivida,esaquenotraerá ningún recuerdo con sus letras, me digo abriendo la ventanilla delvehículoparapermitirqueelvientodelnorte,esequeprocededelCantábrico,sesienteamilado,dondeantessesentabaesasensaciónextrañaqueahoralateenmi interior mientras en la radio suenaLeavea light on, de TomWalker, unacanciónquenollevaningúnrecuerdoasociadoaellaperocuyaletramellevaarecordar cientos de ellos… «Tonta, todo va a recordarte a él —me recuerdotragando con dificultad—, todo, incluso las miles de emociones que ahoraduermenentupechoyqueyanopuedessentiraleteandoentuinterior.»

Me obligo a dibujar una sonrisa en mi rostro en cuanto detengo eltodoterrenofrentealacasitadeinvitadosy,conellainstaladaenmicara,llamoalapuerta,queabreDante.

—¡Buenosdías!—losaludoaccediendoalavivienda,dondeyaestántodoslistos—. ¿Lleváis mucho rato esperando? Perdonad, se me ha hecho un pocotarde—medisculpo,pueslaconversaciónconCasiymimomentoenelbañosehanalargadounpocomásdeloprevisto.

—No te preocupes; la verdad es que nos da un poco de lástima tener queirnos—medicePilar.

—Bueno,esoespositivoysiemprepodéisvolver—lesdigo, sonriendo—.¿Vamos?—lespregunto,viendoaCiromirardivertidoaMaríaEugenia,yme

Page 456: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

preguntoquélehabráhechoestavez.—Vamos, estoy deseando perder de vista al crío este—masculla ella con

fastidio,corroborandomissospechas.—Ricura,perosisabesdesobraquevasaecharmedemenos—replicacon

sumochilacolgandodelhombroycogiendolasdosmaletasdeMaríaEugenia.—¿Quéhaces?¡Suéltalas!—leexigeésta,intentandohacerseconellas.—Estoy practicando, ricura. Ya sabes ese dicho: «Si ves a un hombre

cargado,nolepreguntessiestácasado».—¡Oh,myDiorrrrr! ¡Nopienso casarme contigo, nunca! ¡Sólome faltaría

eso!—sueltaclaramentehorrorizada,haciéndonosreír.—¿Qué nos apostamos? —nos reta Ciro a todos, pasando de ella y

sorprendiéndonosconsupregunta.—¿Lodicesenserio?—leformulaDante,divertido.—Joder,ytanto—lerespondeéstesinsoltarlasmaletas.—Vais aperder comoapostéis a favorde esa estupidez—afirma, rotunda,

MaríaEugenia,haciéndoseconunadeellasdeunfuertetirón.—Quinientospavosaquetecasasconella—apuestaDanteconseguridad.—¡Quinientosaqueno! ¡¡¡Nopiensocasarmeconél!!!—casigritaMaría

Eugenia.—Enunosañoslatengoanillada—nosdiceCiroconarrogancia.—¿Anillada?¡Niquefueraunavacaouncaballoquetuvieranquemarcar!

¡Qué horror! ¡No pienso dejar que hagas eso! ¡Vas a perder, Dante, te loadvierto,yvasapagarme!

—Cien a que te casas con él—apuestaPilar, consiguiendoque suelte unacarcajada.

—Pero ¿estáis tontos o es que os sobra el dinero acaso? ¡Que no piensocasarme, ymenos con él! ¿Cómo tengoquedeciros quenomevan los críos?¡Valentina, como apuestes a favor de esta estupidez, te arrepentirás! —meadvierte,mirándomeporencimadesusgafasdepasta.

—Hoynoestoypara apuestas, te lo aseguro,pero también te aseguroque,cuando aCiro se lemete algo en la cabeza, no para hasta conseguirlo.Voy areírme mucho, María Eugenia, como dentro de unos años te vea felizmenteanillada—le advierto, incidiendo en la última palabra,mientras ellamemirahorrorizada.

Page 457: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Antesmetiroporunpuente—masculla—.¡Ysueltalamaleta!,¿quieres?—lepide,enfadada.—Como desees—le responde Ciro, soltándola y permitiendo que ella se

hagaconambas—,peroahora, ricura,novasapoderapartarme—susurraconvoz ronca, acercándose a su cuerpomás de la cuentamientras ella aferra lasmaletas con ambas manos como si le fuera la vida en ello o éstas tuvieranpiernasycorrieraelriesgodequedarsesinellas.

Sinpoderalejarmimiradadeellos,soytestigodecómo,antesdequeMaríaEugeniapuedarebatirlenada, lacogede lanucaparapegarsubocaa lasuya,consiguiendo que enmudezca y enmudezcamos, y, conteniendo la respiración,veo cómo sus labios se adueñan de los suyos y cómo todo arde intensamenteduranteunosescasossegundos.

—¡Imbécil!Pero¿atiquétepasa?¡Quenomebeses!—legrita,dándoleunempujónparalibrarsedeél,pero,digaloquediga,hayalgociertoyquetodoshemos visto, y es que, durante unos segundos, su piel le ha quemado hastahacerlaarder.

—Unos años,MaríaEugenia, sólo unos años, recuérdalo—sentenciaCiroconseriedad,mirándoladirectamentea losojosyconsiguiendoque,denuevo,todoardaconesapromesa.

—EnunosañosestarétrabajandoenDiorenParís,¡noanillada!¿Teenteras?—le espeta más enfadada de lo que la había visto nunca, y sonrío sin

percatarmedeello.—Loque tú digas, ricura.Vámonos,Valentina—mepide pasando pormi

lado,conlaarroganciadominandosuvozyesosandarespasotasquevanconélatodaspartes.

—Deja de sonreír, ¿quieres?—me ordena entre dientesMaría Eugenia alpasar frente amí, mientras que Dante y Pilar, a su espalda, me devuelven lasonrisa.

—Perdón—medisculposindejardehacerloy,entonces,mepercatodequeesposiblesonreírylloraralavez,vivirymorir…Sí,así,todoalavez,porquees fácil dejarse llevar por la vida y aparentar una felicidad que no se siente,porquefingirnormalidad,sonreír,caminarybromear,essencillo…eignorareldolor también lo es, aunquepor dentro te desgarre. «Es fácil seguir si quiereshacerlo»,piensocerrandolapuertadelacasita,consurecuerdocaminandoami

Page 458: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

lado, como lo hacía esa sensación extraña, pero, a diferencia de antes, no loignoronimemolesta,sinoqueloaceptoeinclusoletiendounamano,porqueloprefieromilvecesanosentirlocercademí.

—¿YVíctor?—mepreguntaDantemientrasconduzcocaminoalabodega.—Ha tenido que salir de viaje a primera hora, perome ha pedido queme

despidiesedetodosvosotros—mientoconfingidadespreocupación,ydenuevomedoycuentadelofácilqueesfingirquetodoestábiencuandoloúnicoquedeseoesacurrucarmeenlacamayllorar,llorarhastasecarme,llorarhastaquenoquedeunasolalágrimaenmiinterior,llorarhastaquedejededolermedeunavez.

—Qué pena, me hubiera gustado despedirme de él —me dice mientrascontinúosimulandoquetodoestábien—.Cuandotengamoslasfotografíasquesacamosayer,oslasenviaremosporduplicadoaladireccióndelabodega,paraquelastengáislosdos—meindica,mientrasyo,consuspalabras,visualizoenmimenteesahojasecayarota,puesestoyseguradequeasímesentirécuandoveaesasfotos.

«Nolasverás—medigoconseguridad—;nolasverás,nomientrasteduelatanto»,meprometoamímisma,volviéndomeparasonreírledenuevo,fingiendounafelicidadquesehaescapadocorriendotrasélestamañana.

—Genial, estoy deseando verlas—lemiento sin dejar de sonreírmientraspordentrosientocómoesaheridaquelateenmiinterior,enunaparteindefinidaque soy incapaz de localizar, se abre un pocomás—.Hemos llegado.Chicos,finaldeltrayecto—lesindico,deteniendoelvehículoenelparkingdelabodega,dondeestánaparcadoslossuyos.

—Quépenameda irme…Yoquieroquedarme aquí,Valentina—exclamaPilar,apeándosedelJeep—.¿Notendréisporcasualidadunpuestovacanteenlabodega?NomeapetecenadavolveraMadrid.

—Creoqueno,pero,siquieres,teavisaréencuantohayauno—lerespondo,guiñándoleunojo.

—Notepreocupes,Pilar,quevamosavenirmuyamenudo,yserásinniños—intervieneMaríaEugenia,bajándosedeltodoterrenoconunestilazoqueparamíquisiera.

«Si es que es todoglamour y todo lo contrario aCiro», piensomirándolodivertida,consucamisetaarrugadaysucabellorubiodespeinado.

Page 459: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Tienesrazón,ricura, losniñoslosdejaremosparamásadelante,quetúyyo tenemos que jugar mucho antes de tenerlos —replica con insolencia,empezandoasacarelequipajedelmaleteroconlaayudadeDante.

—Nimehables—lerespondeéstaconfastidio,haciendounamueca.—¿Medasunbesitodedespedida?—lepreguntabravucón, llegandohasta

ella.—Piérdete, ¿quieres?—le exige dándole la espalda para alejarse de él, y

Cirodenuevolasorprendeynossorprendealaferrarlaporlacintura,comohizoayerenlascaballerizas.

—Contigomeperderíahastaenelinfierno—declaraconvozronca,rozandosuoreja con sus labios y pegando su pecho a la espalda deMaríaEugenia—.Unosaños,ricura;sólounosaños,recuérdalo.

—Quemesueltes,niñato—mascullaposandosusmanossobre lasdeCiroparalibrarsedesuabrazo.

Sinmolestarseencontestarle,yconunmovimientofluido,sehaceconellas,dándolelavueltahastadejarsuspechoscasipegados,atrapandolaatencióndetodos.

DurantelosescasossegundosenlosquelamiradadeCiroseanclaenladeMaríaEugenia,sientocómodenuevolatierraardeconfuerza.

—Nosvemos,ricura—musitaconvozroncaantesdeliberarladesuagarre.Sueltotodoelairequehabíaestadoconteniendoenmispulmonesesperando

esebesoquecreíaqueibaadarle,yqueestoyseguradequetambiénesperabaMaríaEugenia,ysonriócuandollegahastamí.

—Llámame—medicecomosinada,rodeandomicinturaconsusbrazosyescondiendo su rostro en la base demi cuello, siendo tan Ciro, tan niño, tanirresistible…tantierno.

—Vale.Conduceconcuidado—susurro,sintiendolaagradablesensacióndeloconocidoydeloquerido.

—Tienequeanillarla;porlacuentaqueletrae,irádespacio—bromeaDante,guardandolasmaletasensucochemientrasPilarsueltaunacarcajadayMaríaEugeniabufaconfastidio.

—Nopiensoresponderte,Dante,perovepreparandoesedinero,porquevasaperderlo —le responde con frialdad, alzando su rostro mientras Ciro sonríeabiertamente,conesasonrisatraviesaqueencierratantaspromesas.

Page 460: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Yanosveremos—sedespideantesdeentrarensuvehículo.Lo veo arrancar y salir del parking y, aunque estoy deseando quedarme a

solas, lovoyaechardemenos…«Losvoyaechardemenosa todos»,piensomientrasvoydespidiéndomedeDante,MaríaEugeniayPilar.

—Hasta pronto, chicos—les digo sonriendo, diciendo adiós con la manomientrassuvehículosaletambiéndelparking.

Abrazando mi cuerpo con ambos brazos, veo cómo su coche vaconvirtiéndose en un simple puntito hasta llegar a desaparecer por el largocaminoymevuelvoduranteunossegundoshaciasurecuerdo,esequecaminajunto a mí y que se detiene cuando yo lo hago, y noto la sensación deamputación incrementarse, pues él no está sólo ami lado enmi imaginación,tambiénestaráentodaspartes;estaráaquí,enelparking;estaráensudespacho,en la bodega, en el campo y en mi casa; estará en las comidas y en lascelebracionesfamiliares,ytendréqueverloycontinuarfingiendoquetodoestábien,queestoybienyquenoloechodemenos; tendréqueaprenderasonreírmientrasmi piel reclama la suya y posiblemente tendré que ver a la señoritaLópezsonreírletambiénconsupielreclamandolomismoquereclamalamíaytendréquefingir,fingiratodashoras…«Fingirqueyanomeimporta,fingirqueherehechomivida,fingirqueyanomedueleyaprenderavivirsinél,conélamilado,yno,novoyapoderhacereso»,medigo,sintiendomigargantacerradaporenésimavez.

Cediendo aun impulsoy, anhelandohuir de esta sensaciónde amputaciónque me persigue, cojo el Jeep para dirigirme al castillo de San Vicente deSonsierra,eselugaralquetantofuienelpasadocuandonecesitabapensaryalqueahoranecesito regresar,quizáporquenecesitover lavidadesde loaltodesus muros o porque necesito que ese silencio envuelto en el pasado que allíresuenameindiqueelcaminoqueseguir…«elquemenosduele»,aunqueamí,ahora,meduelantodosporigual.

Conduzco, sin música esta vez, a través de mares y mares de viñedossalpicadosderojo,negroyamarillomientras lasnubesempiezancubriralsol,bajando lentamente del cielo para adueñarse de la cordillera y borrarla demicampo de visión, como una goma de borrar que desdibuja las formas hastaeliminarlasporcompleto.

Estacionoenelpueblo,a lospiesdelcastillo,sorprendiéndomecuandome

Page 461: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

apeodelvehículoalcomprobarcómohabajadolatemperaturaenapenasmediahora.

—Quéfrío—musitoparamí,poniéndomelachaquetaconceleridad,conlapielerizada.

Guardandomismanos en los bolsillos, inicio el ascenso hacia la fortalezapor las calles del pueblo, éstas que permanecen desiertas y envueltas en elsilenciomásabsoluto,eimaginoalagenteensuscasas,resguardándosedeestefríoquehallegadosinavisar;imaginolosbraserosolaschimeneasencendidas,a unamujer haciendo punto o leyendo al abrigo del fuego.Yo podría ser esamujerperfectamente.Yopodríaserfelizaquí,enestepueblooenelmío,enmicasa o en la suya, conmi espalda apoyada en el sofá o apoyada en su pecho,leyendo un libro o leyendo su cuerpo, al abrigo del fuego de la chimenea oquemándomeconelqueélprendieraenmicuerpo.Sí,yopodríaserfelizaquí,ytendría un perro que ladraría cuando nos viera llegar tras un largo día en labodega,descorcharíamosunabotelladevinoy…«Ynada,déjalo—meordeno,inspirandoeloloraleñaprovenientedealgunachimenea,esaquealguiensíhaencendido—, déjalo —me repito, oyendo el ladrido de un perro, ese quetampocoeselmío—,déjalo—insisto—,déjalo…,déjalodeunavez»,mepido,obligándomeacentrarmiatenciónenelcamino,pues,ahoraquehesalidodelpueblo,elsueloesalgoescabrosoytemohacermedaño.

—Déjalo,déjalo…Nolopienses—musitoparamí,viendolaspiedrasylatierradelcaminoemborronarse,comosilagomadeborrarquehadesdibujadolacordillerahubieraempezadoaborrarconmis lágrimaselsenderodepiedrasytierra.

Accedoa la zonaamurallada sintiendomi interiorgritary reclamar loquequiere y, acallando ese grito, me dirijo al muro y a los contrafuertes quecontienenlaterrazaentornoalaiglesiadeSantaMaríalaMayor.Yallí,desdelo alto, con la Torre Mayor guardando mis espaldas y la iglesia dándomeamparo, contemplo el paisaje que se despliega frente a mí, sintiendo el fríoempezar a reptar entre mis piernas, estremeciéndome e inquietándome, y memuevo instintivamente, como huyendo de él, mientras clavo la mirada en elhorizonteyelcielo,cubiertodenubesahora.

«¿Qué hago? —me pregunto con la desesperación copando mi interior,sintiendocómoelfríollegadenuevoparaenvolvermicuerpo—.¿Memarchoy

Page 462: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

meolvidodetodo?—meplanteo,secandomislágrimasconunpañueloqueestáyamásmojadoqueseco,yendohacialosescalonesdelaiglesiaparasentarmeyresguardarme de este frío que, implacable, parece seguir mi rastro—, ¿o mequedo?¿Quéhacescuandonosabesquéhacer?»,mepreguntomirandoalcielo,implorandounarespuesta.

Y aquí, en este lugar que vio miles de batallas librarse, libro yo la míapropia; una en la que no hay sangre, pero en la que hay lágrimas, lágrimasamargasquebienpodríanserrojas;unabatallaenlaquenohayespadas,peroenlaqueyosientoelfilodeunadeellasclavadaenmipecho;unabatallaenlaquenohaymuertes,peroenlaquemueroyo,porqueaveceseldolornosdesangrahastamatarnos…porque,¿quénosquedacuandonosquedamossinalma?Nada,nonosquedanada…Sólo el vacío, eseque sientoyo enmipecho. ¿Quénosquedacuandonosamputanunapierna?Elrecuerdo…,elrecuerdodeloqueerapoder caminar y correr. ¿Qué nos queda cuando nos amputan el corazón? Lamuerte…,esaquenonecesitallevarsetuvidayqueesmuchopeor,porquenosabescómovivirla,porque,cuandohascaminado,hascorridoyhassentido,nosabes cómo no hacerlo y te enfadas y lloras de rabia, de impotencia y deañoranzaporquenoquiereseso,porquenoquieresaprenderacaminarconunapiernaortopédica,porquenoquieresquetucorazónlatadeformamecánicasinritmoniemociónyporquequieres loquehas tenido, loquieres, loquieres, loquieres…Loquieresaél,yquierestualma,tupiernaytucorazón.

Me aferro a mis piernas llorando desconsoladamente mientras el frío vacongelandomicuerpo,pocoapoco,sinprisasyconesaseguridadqueledaelsaber que va a conseguirlo, como la noche que va venciendo al día, consegundos, con minutos y con horas, segura de su triunfo y, durante esossegundos,esosminutosyesashoras,llorodesangrándome,resistiéndomeaesadecisiónqueesecorazónmecánicoquelatedentrodemíhatomadoya…

resistiéndomealamuerteyrindiéndome,cansada,finalmenteaella.—Se terminó —sentencio secando mis lágrimas, levantándome y yendo

hacia el muro y posandomismanos en él, mientras veo cómo las nubes hanvencidoporcompletoalsol,cubriéndoloconsudensidad,percatándomedequeelfrío,esedelqueheintentadohuirantes,sehaadueñadoporcompletodemipechosinquemehayadadocuentadecuándolohahecho.

Yesentonces,enestepequeñorincóndeLaRioja,conlasnubescubriendo

Page 463: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

elsoly lasmilesdeemocionesquevibrabanconsunombrecongeladasenmipecho,cuandodecidomarcharme;cuandodecidoaprenderarespirar,aunquemeduela concada inhalación; cuandodecidoaprender a caminar, aunque sea conunapiernaortopédica,ycuandodecidoseguirmicamino,dándolelaespaldaasurecuerdo.

Page 464: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

CAPÍTULO36

Accedoamicasaporlapuertatraseradelacocina,poniéndomeaprueba,y,encuantopongounpieenella,sientoelfríorecrudecersedentrodemíymeaferroa él, posando mi mirada en el taburete, ese en el que él solía sentarse,negándome su recuerdo y negándole a esas emociones que vibraban con sunombrerevivir,manteniéndolascongeladasdentrodemí.

—Hola,Casi—lasaludoyendohaciaellaparasentarmeeneltabureteenelquesolíasentarmeyo,viendosurecuerdo,ahoradifuso,caminaramilado,yledoy la espalda, retirandomimano, esa que le he tendido estamañana cuandocreía,erróneamente,queeramejortenersurecuerdoquenotenernada.

—Hola, hija. ¿Estás mejor?—me pregunta preocupada, apoyándose en elmármoldelaisla.

—Sí, loestoy—ledigoconseguridad,guardando luegounossegundosdesilencio—.Memarcho,Casi.Teníasrazón, tengodiecinueveañosyunmundoenteroporpisar…yvoyahacerlo,voyapisarlo.

—¡Bien dicho!, písalo por ti y pormí—me pide, cogiendomismanos—,pero con cabeza, que no tenga que arrepentirme de la charlita que hemosmantenidotúyyoestamañana.

—Tranquila,Casi,quenovoyahacerningunatontería.—Más te vale, porque, como la hagas, soy capaz de colgar el delantal y

plantarme en la ciudad esa para darte un par de collejas bien dadas —meadvierteconesebríotansuyo.

—Oye,Casi,siélllamaraporteléfonootepreguntarapormí,nuncaledigasquehelloradoninadadeloquetehecontado,¿vale?Noloriñasyhazcomosi

Page 465: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

nosupierasnada,comositodoestuvierabien.—Pero¿estátodobien?,¿túestásbien?—Puedequenoloestéahora,peroloestaré,Casi,yél,digastúloquedigas,

nosemerece sabernadademí,nibuenonimalo,nada—sentencio,dándomecuentadequesoyincapazdepronunciarsunombre.

—Mira,hija,yatehedichoantesquenoséquéesloquepasaporsucabezayquesehaequivocadoenlasformas,perosoycepaviejayséreconocercuándounhombreestáenamorado.Noletengasencuentasuspalabrasysíelsacrificioque,sinquemelohayatenidoquedecir,séquehahecho.

—Ha fallado ya dos veces en sus formas. Te aseguro que no habrá unaterceravez,ynomehablesdesacrificios,Casi,porquenadielehapedidoquelohaga.

En serio, noquiero sabernadade él ynoquieroque intercedas, nunca.Sillamaoalgúndíatepreguntapormí,dilequeestoyfelizyencantadadelavidaporirmeaNuevaYork.

—Oye, hija, no es buenomentirse ni tampocomentir, porque, si lo haces,puedesnegarteelserfelizdeverdad.

—¿Quéquieresdecir,Casi?Pensabaquequeríasqueme fuera—le rebatoconseriedad,sinentenderla.

—Yquieroquetevayas,peronoquemientas.—Él ha estadomintiéndome durante una semana entera.Nome hables de

mentircuandoélmehamentidocontinuamente—le respondoconunaacritudquemesorprende—.Puedequeahoranoseafelizyquemecuesteserlo,peroloeraantesdeveniraquíyloserédenuevo,asíque,enteoría,noestoymintiendo.

—Comoquieras,hija.¿Tengoquedecírtelosimellamaomepregunta?—No, no quiero saber nada, pero sí que te llamaré cuando quiera venir a

visitaros para no coincidir con él —le explico, sintiendo cómo los miles deemocionesquepermanecencongeladasenmipechoseagrietanconmipetición,esaqueesunecodeotraquehiceenmipasado.

—Coincidirásconélenlabodadetuhermana—mecomentaprudente.—En esa boda habrá mucha gente y él será uno más —replico,

recrudeciendoelgesto—.Voyahacerlamaleta.—¿Teayudo?—No hace falta, tampoco hay tanto que meter en ella —le indico,

Page 466: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

levantándomedeltaburete—.¿Ypapá?¿Estáenlosviñedos?—Desde primera hora—me contesta, con la preocupación instalada en su

miradayensuvoz.—Luegoiréabuscarlo—lecomunico,antesdesalirdelacocina,estavezya

sola,sinsurecuerdocaminandoamilado.Loprimeroquehagoencuantollegoamicuartoesponermúsica,denuevo

poniéndomeaprueba,yparalizándomecuandoempiezaasonarI’llnever loveagain,deLadyGaga.

—Joder…—musitosentándomeenelbordedelacama,escuchandolaletrayreconociéndomeenella…Yotampocoquierosentirotroroce,ni iniciarotrofuego,nitampocoquieroconocerotrobeso…Noquieroregalarlemicorazónaotroextraño…—,mierda—mascullosintiendounalágrimatraicionerarodarpormimejilla,liberándosedelaférreaprisiónenlaquelasheencerrado.

Aprietoambospuñosypongounadoblecerraduraenesaprisiónimaginariacuando,denuevo,mereconozcoensusletras,porqueyotampocodejaréentrarlaluzdelsolnicreoquevuelvaaamar;almenos,nodemomento.

—Suficiente, se acabó… Ya está bien —farfullo quitando la música ycogiendoelmóvilpara llamaraAlana—.Hermanita,¿ya tehasbajadodeesanubedefelicidadotodavíasiguesflotandoenella?—lepreguntoponiéndomelosauricularesyguardandomimóvilenelbolsillodemisvaqueros.

—¿Yaquieresquemebaje,conlobienquesevetododesdeaquíarriba?—replicafeliz—.Venga,subeconmigo,quetehagounhuecoamilado.

—No,gracias,prefierotocarelsueloconmispies;esmásseguro,créeme—le contesto con sequedad—. Por cierto,memarcho—le anuncio, abriendo lamaletayempezandoametercosasenella.

—Temarchas,¿adónde?,¿aNuevaYork?—indaga,sorprendida.—Bueno, primero aMadrid, pues tengo que recoger mis cosas y arreglar

unos cuantos asuntos, pero, en unos días, sí, a Nueva York —le indico,obligándomeamanteneresefríoquesientoinstaladoenmipechoyconelqueempiezoasentirmetanbien.

—¿YVíctor?—Se terminó, Alana.—Y, con esa frase, siento cómo esas emociones se

agrietandeltodo.—¿Cómoqueseterminó?¿Cuándosehaterminadoquenomeenterado?—

Page 467: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

mepregunta,alarmada.—Bueno,teestásenterandoahora—ledigosinganasdeempezararelatarlo

tododenuevo.—Estamañananosehabíaterminado…¿Osí,ynohasqueridocontármelo?

¡Mierda!¡Eresunaidiota!¿Poresollorabas?¡Quéhostiavoyadarte!—Tía,estabastanfelizquenohequeridoestropearteelmomento,peroestoy

bien,tranquila.Yahellorado,yamehedichotodoloqueteníaquedecirmeynomeapetecehablarmásdeltema,¿vale?

—No,novale. ¿Cómohaspodidono contármelo?—me recrimina, casi albordedelllanto.

—Como llores, te cuelgo —suelto sonriendo con tristeza—. Tía, no memonteseldramatúahora,quesuficientedramónhetenidoyohoy.Enserio,másdíascomoésteylapalmo—añado,intentandobromear.

—Peroesque…¡Joder!Mamánoestá,apapánoselohascontadoseguroyte lo has comido sola. ¿Por qué? Soy tu hermana y se supone que esas cosastienesquecontármelasparaquelloremosjuntas.

—Con lo feliz que estabas, tontina, ¿crees que iba a permitir te pusieras allorar?Además,nomelohecomidosola.Casimehadejadosuhombroparaquelloraraunratito.

—Maldita sea, soy una hermana mayor horrible—me dice empezando allorarellaestavez.

—Ereslamejorhermanamayorquepodríatenerydejadellorarocuelgo,deverdad.

—Pero¿quéhapasado?—Alana,tía,nomeapetecehablarotravezsobreeso.Quédateconqueestoy

bien y con quememarcho, ¿de acuerdo?Algún día, cuando vengas aNuevaYork,telocontarétodo,peroahorano.

—Sólo sime prometes que nuncamás harás eso; no importa que yo estéfeliz, Valentina, tienes que prometerme que vas a contarme lo que te suceda,¿vale?

—Vale, pesada —musito apoyando mi frente en el cristal de la ventana,contemplando este paisaje que lleva en suspensión en el aire los miles derecuerdosdelosquequierohuir…«oretener»,piensocondolor.

—¿Cuándo te vas? —me plantea mientras observo el ir y venir de los

Page 468: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

tractoresrompiendoelsilencioenelquedormitalatierra.—Mañana. ¿Vendrás a darme un beso de despedida? —le pregunto,

alejándomedelaventanaparaseguirconmilabor.—Qué tonta.Dile aCasique Joséyyo iremosa cenar a casa.Aunqueno

hablemosdeeso,quieroestarcontigoydarteunsuperabrazodehermanamayor.—De acuerdo… Te veo en un rato; hasta luego, hermanita—me despido

antesdecolgar.Acabodehacermimaletay,abrazandoelfríoenelquesehallacongelado

mi interior, tan en consonancia con el que hace hoy, me dirijo hacia lascaballerizasparasacaraTruenoytambiénparadespedirmedeesteterruñoquetardaréenverdenuevo.«Noempieces»,meadviertoconseriedad,conesavozfríaquedominaalaotra,lavozdelacalidez.

—Hola,bonito—ledigoalanimal,querelinchaalverme—.Hevenidoparadespedirme—musitorozandomimejillaconlasuya,conmismanosacunandosu rostro—. Voy a echarte mucho de menos; lo sabes, ¿verdad? —prosigo,permitiendoquelacalidezqueemanadelcuerpodelcaballocaldeemiinteriordurante unos instantes—. Creo que esta vez tardaremos en vernos—susurroabrazando su cuello, sintiendo su crin haciéndome cosquillas en la nariz ymojándolaconmislágrimas—.Teecharédemenosyecharédemenostodoesto—declaro en un susurro, quitándole la doble cerradura a la prisión en la quemantengoencarceladasmis lágrimas—.Estoyunpocotontahoyy todomedaganasdellorar—ledigoseparándomedeélysecándolasconmismanos,paraempezaraensillarlo—.¿Teapeteceestirarlaspiernas,precioso?—lepregunto,obligándome a sonreír mientras él relincha a modo de respuesta—. Lo sabía;vamos,entonces—leindicomontándoloypermitiendo,duranteunsegundo,quesurecuerdosematerialiceamilado,oyéndoloincluso…

***

—…comosea incapazdeseguirte, teaseguroque luegovasaarrepentirte—meadvirtióconsequedad.

—Seguroquesí,loquetúdigas.—Sí,loqueyodiga,porquetegarantizoque,sicorrescomounalocaahora,

luegonodejaréquelohagas,¿lotienesclaro?

Page 469: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

***

«Joder… Suficiente… Suficiente… ¡¡¡Suficiente!!!», me ordeno aferrandolas riendas con fuerza, saliendo de las caballerizas y poniendo no una doblecerraduraamislágrimas,sinounatriple,iniciandoeltroteporestosterruñosquesabentantodemíydeloquesientoporqueenellosdejémarcadasmishuellas…

«junto a las suyas», me recuerda prudente esa parte de mí que no seencuentracongelada,almenos,notodavía.

Yprimeroaltroteymástardealgalope,corriendocomo,posiblemente,nodebería hacerlo, recorro estas tierras que forman parte demí y demi esencia,despidiéndomedeellas,deestosviñedosydeesteterruñoquerepresentatodoloquequieroytodoloqueañorarécuandoestétanlejos…«Todo…todo…»,medigosabiendoqueesetodollevatambiénsunombreimpreso.

Inspirandoprofundamenteeintentandograbarenmimemoriahastaelúltimodetalle,cabalgoporellas,siemprealamparodelacordilleraCantábrica,dejandomicasaylabodegaamisespaldas,mientrasestemarverdesalpicadodelnegrode lasuvasquenohansidovendimiadas,delamarilloydel rojosangrede lashojas,nuncaterminay,conelrojosangre,recuerdomidolorylaslágrimasquehederramadoenelcastillomientrassusojossecuelanatravésdelverdedelashojas, esasque se resistenal rojodeldoloro al amarillode la rendición, esoscoloresalosqueyohedadoamparoenmipechoycorromásrápido,huyendodeloqueestostonosrepresentan,desuvoz,esaqueresuenaportodaspartes,desusojos,esosqueparecenperseguirme,ydetodoestoquemedueletanto,sinllegaraconseguirlo,sintiendocómomipechoseencogeeneselugardondelateesacosamecánicallamadacorazón.

Aminorolavelocidadencuantoveoalolejoslostractoresyelcochedemipadre,y,denuevoaltrote,llegohastaél.

—¡Hola,papá!—losaludobajándomedelcaballosinsoltar sus riendas—.¿Damosunpaseooestásmuyocupado?—lepregunto, intentandoquemivozsuenelomásdespreocupadayligeraposible.

—Paratinuncaestoyocupado,hija.¿Quésucede?—inquiere,yabsorbolosmilesdematicesde suvoz, esosqueme recuerdanuna copadevino tinto, alaromademaderadelasbarricas,aestatierrayalasabiduríaquevienedadaconlosaños.

Page 470: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

—Me marcho mañana, papá —musito, observando cómo su rostro seensombrecepocoapoco.

—Vaya… y yo que pensaba que al final decidirías quedarte —me dicemientrasechamosaandar,yperciboelnerviosismodelanimal.

—Chist, tranquilo,Trueno—le dedico, deteniéndome unos segundos paraacariciarloyparatranquilizarmeyotambién,puesmipadrenoeraelúnicoquepensabaquemequedaría…,yotambiénlohice.

»Me marcho, pero vendré a verte, como hago siempre, te lo prometo—añadoenlazandomimiradaconlasuya—.Además,sonsólounosaños,papá;ennadametendrásaquídenuevo.

—Unos años…—repite con voz ausente, posando sumirada en estemarverde ondulante—.Quién sabe lo que sucederá en unos años…Puede que tegustetantoquenoquierasregresar.

—O puede que no me guste nada y regrese enseguida —le rebato,obligándomea sonreír—.No sé loque sucederá,papá,pero séqueésta esmicasayellugaralqueesperovolveralgúndía.

—Ojalálohagasmásprontoquetarde—medicesonriéndomecontristeza,y lo hago yo también, como si mi rostro fuera el espejo en el que se estáreflejando el suyo—. Sólo te pido que no olvides lo que hablamos para quenuncatengasqueagacharlacabezay,sobretodo,cuídatemucho,hija—añade,abrazándomeconfuerzamientrasyomepierdoensusbrazos,enlosbrazosdeestehombrequerepresentamiseguridad,mihogarytodoloquequiero.

—Loharé,papá…Tevoyaechardemenos—murmuroenunhilodevoz.—Yotambién.Meparecequemeheacostumbradodemasiadoatenerteotra

vezporaquí—meindicaconvozroncamientrasyohagoverdaderosesfuerzosparanollorar—.VeremosaquiénintentacebarCasiahora—suelta,intentandobromear.

—Puesati,¿aquién,sino?—lepreguntomirándoloconcariño,recordandode repente que he olvidado decirle que preparara cena para Alana y José—.¡Mierda! ¡Espera, papá!—le digo atropelladamente, buscandomimóvil en lachaquetaparallamarla.

Ymientras lo hago y posteriormente realizo esa llamada, veo a mi padrehacersecon las riendasdeTrueno.«Mipadre,esehombrequesemantieneensilencio, tal y como hacíami abuelo, observando, escuchando e interviniendo

Page 471: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

solamentecuandocreequedebehacerlo;esehombrefielalastradiciones,alafamiliay la tierra, tandistintoamíya lavez tanparecido»,piensosonriendomientrasélacaricialacabezadelanimalyyonotocómotodoloquesientoporélmedesborda.

—¡Yaestá!Mensajedado.Ufff,llegoaolvidarloyCasiescapazdepedirmicuello—comento,aferrándomeasubrazomientrasreanudamoselpaso.

—Casi hace comida para todo un regimiento; te aseguro que, aunque lohubierasolvidado,hubiesesobradoseguro.

—Porcierto…Estaráscontento,¿no?Alfinvasateneryernoyyanovasapoderllamarlo«esechico»—bromeo.

—Yaerahora,contentometeníanesosdos—sueltaconunamediasonrisa,guardandosilencioduranteunosminutos—.Quieropedirteunfavor,Valentina—añadeconseriedad,captandomiatenciónalinstante—.Apoyaatuhermanacontodoestodelaboda;organizarla,buscarelvestido,lasflores,ladecoraciónytodoesosoncosasquesehacenconunamadreylavuestranoestá…Yonoentiendodeesascosasy,simepideopinión,posiblementeelegiréelvestidomásfeodetodos,asíque,teloruego,ocupatúellugardetumadreparaqueAlananosesientasola.Yosiemprehequeridoquesecasara,sabesquenomegustabaque viviera así, pero, ahora que va a hacerlo, no quiero que las ausencias lepesendemasiado.

—Notepreocupes,papá—ledigosintiendocómoelnudoseformaenmigarganta al intentar recordar a mi madre sin llegar a conseguirlo del todo—.Alana es diseñadora y estoy segura de que ellamisma se diseñará su vestido,pero,aunasí,estaréasulado,aunqueseaporSkype,yledarémiopiniónlapidaono—leaseguroalavezquedamosmediavueltapararegresaralviñedo—,yundía,cuandovengaaveros,tellevaremoslasdosaelegirtutrajedepadrino.

Notepreocupesporeso,papá,porquenovoyadejarlasolaniatitampoco—afirmo,aferrándomemásasubrazo.

—Gracias, hija. Yo sé que Casi, a veces, ha ocupado el lugar de vuestramadre,comoharácontuhermanaendeterminadosaspectosdelabodaocomohahechohoycontigo—comenta,sorprendiéndome—.Supongoqueavecesmepierdoconesascosasvuestrasyladejohaceraella,peroquierosabersiestásbieny,ahoraqueestásmástranquila,saberporquéllorabasantes.

—Vaya,papá…Nosabíaquetehabíasdadocuenta—confiesomientrasél

Page 472: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

esbozaunamagodesonrisa.—Claroquemedoycuenta,perosoytorpeconciertostemasyséqueellaos

ayudarámásdeloqueharíayo.—Noerestorpe,papá.Ytranquilo,estoybien.Supongoqueestamañanase

mehanjuntadodemasiadascosas.—¿LlorabasporVíctor?—mepregunta,prudente.—PorVíctor,por tenerquemarcharmeyporque,aveces,noséquéhede

hacer…Nosé,papá,sontantascosasqueniyomismameentiendoenocasiones—musito,procurandonometermeentierraspantanosas.

—Tienesquehacerloquetedicteelcorazón,siempre,aunqueteduela—meaconseja,mirándomeconcariño.

—A veces no es tan fácil—murmuro, sintiendo cómo la garganta se mecierraycómoeldolor,esequehoysehaadueñadodemicuerpo,lateencalladoenélal recordarquedecidíseguir losdictadosdemicorazónyqueéldecidióseguirlossuyos,dejándome.

—Claroquenoesfácil,hija,peroesloqueteharáfelizconeltiempo.¿Quétediceeltuyo?¿Lohasescuchadodeverdad?

«Quemequede…,medicequemequede…apesardetodo.»—Que me marche —contesto, mintiéndole y mintiéndome a mí misma,

haciendoaunladolaspalabrasdeCasi.—Pues, entonces, hazlo.Vete y sé feliz,Valentina, porque sólo tienes una

vidaynodebesdesaprovecharla.Undíatodohabrápasado,tendrásmiedadytepreguntaráscómohasllegadoaella,cómohasucedidotodotanrápidoquenotehasdadonicuentay,entonces, tearrepentirásdeeseviajequequeríashaceryquenohicisteporqueteníastrabajo;tearrepentirásdeesosjuegosdelosquenoparticipasteporqueteníasunareunión,ytearrepentirásdetodasesascosasqueensudíacreístequenoeranimportantesyqueenesemomento,yatardeparavivirlas,verásqueeranlasmásimportantesdetodas—susurramásparaélqueparamímientrassientoesaheridademiinteriorabrirseunpocomás.

Guardo silencioante suspalabras,pues temoempezar ahablarynopoderparar, temo liberar una lágrima y empezar a liberarlas todas y temo pensar yempezar a cuestionármelo todo… Temo tantas cosas que prefiero callar ypermitirqueelfríocampeasusanchaspormipechoaqueestasemocionesquedormitan congeladas en él despierten para demostrarme lo muerta que estoy

Page 473: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

ahora.—Lo haré, papá, intentaré ser feliz —musito finalmente, con el dolor

incrementándoseenmiinterior,puesséquemifelicidad,medigaloquemedigaa mí misma, no está en Nueva York—. Oye, papá… sobre lo que has dichoantes,quieroquesepasquehassidoelmejorpadrequeAlanayyopodríamoshaber tenido. Sé que a veces estabas trabajando o reunido, pero siempre teencontrábamos cuando te buscábamos, como ahora, así que no te recriminesnada, porque, gracias a esas reuniones o a tus horas de trabajo, nunca nos hafaltado de nada. Te quiero, papá, y ojalá no me faltes nunca —concluyo,abrazándoloconfuerza.

—Gracias,hija,pordecírmelo—meagradece,conteniendolaemoción—.Esbuenosaberlo—añade,acariciándomeconsumirada.

—Yyaestábien,queyahelloradosuficienteporhoy—leindicotratandodesonreírsinquellegueasalirmedeltodo—.Novengastardeacasa,¿vale?

—Vale—asiente,sonriéndomeéltambién.—Vamos,bonito,venconmigo—ledigoaTrueno,cogiendolasriendasque

metiendemipadre.Tomoelcaminoderegresoalascaballerizasintentandonopasarporsucasa,

intentando no pensar en nada y, sobre todo, intentando no sentir… Intentandosumergirmeenunestadodeparálisisenelquenohayadudas,nohayaañoranzaynohayasentimientosqueduelan,aferrándomeaeseinviernoenelquesehallasumidomiinterioryenelquetododormitaenposiciónfetal.

Unavezencasa,medoyunalargaducha,obligandoamimenteyaloqueseaquelatedentrodemíacontinuareneseestadodeinmovilidadenelquemesientoasalvo.Cuandoestoylista,medirijoalacocinaparaecharleunamanoaCasi.

Yesallí,entreconversacionesbanales,dondelacalma,esaquehoymehaesquivado, llega discretamente para empezar a asentarse por encima de misdudasymidolor.

—¡Hombre, los futuros esposos!—exclamaCasi en cuanto ve llegar amihermanayaJosé.

—Buenas nochessssss —canturrea Alana, viniendo directa hacia mí paradarmeunenormeabrazo.

—Vasadesmontarlacomocontinúesabrazándolaasíconloflacaqueestála

Page 474: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

niñaesta—sentenciaCasi,cruzándosedebrazosmientraslamirosonriendo—.Chist,escúchametúamí:comonomecomasenlaciudadesa,soycapazde…

—Colgareldelantalyplantarteenellaparacantarmelascuarenta,¿verdadqueibasadecireso,CasildaMartínezdelaNuez?—ledigo,cortándola.

—Yparadarteunpardecollejasporsinvergüenza—sentencia, intentandonosonreír.

—Casi, si es que eres muy pesada con la comida —añado, tratando dezafarmedelabrazodemihermana—.¡Tía,suéltameya!

—Noquiero,idiota,queestásidiota—replicamihermanasinsoltarme.—¡Hombre,perosiesmifuturoyernoymihija!—saludamipadrealentrar

enlacocina—.Sialfinalrecordaréiselcaminoacasaytodo—añadesocarrón.—¡Mira,José,yanotehallamado«esechico»!—recalcamihermana,feliz,

liberándomefinalmente.—Buenasnoches,suegro—losaludaJosé,sonriendo.—Ahoravamosa llamarte«santapaciencia»,quete lohasganado,cuñado

—lededico,sirviéndomeunacopadevino.—¡Ay,callatúahora!Sólofaltaquepapádejedellamarlo«esechico»para

quetúempiecesallamarlo«santapaciencia»—mascullaAlana,haciéndoseconmicopadevino.

—¡Oyeeeee!—mequejo,mirándolamal.—¡Sírveteotra!—merebateconunasonrisa.Y así, entre sonrisas, secretos del alma confesados a media voz, pullas

cariñosas y rodeada de toda mi familia, doy por finalizadas estasminivacaciones:unasquenohansidoparanadacomoesperabayquemehancambiadoa todos losnivelesposibles, no sé si parabienoparamal, supongoqueesolosabréconeltiempo,comosabrésiélteníarazónymifuturoestabaenNuevaYorkosilateníayoymifuturoestabaaquí.Demomento,loúnicoqueséesquememarcho.¿Quésucederá?Niidea;deloúnicoqueestoyseguraesdequelavidayaseencargarádemostrármelo.

Continuará…

Page 475: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

AGRADECIMIENTOS

A veces, cuando me encierro en mi despacho para escribir y evadirme delmundo,sientoremordimientosporquenosólomeaíslodelentorno,sinotambiéndemifamilia;dejodeiraalgunospartidosdefútboldemihijoodirectamentenovoyaninguno,dejodecompartirsusplanesydejodepasartiempoconlosquemásquiero,porquenecesitoescribir…yescontradictorio,porque,cuandocierrolapuertademidespacho,mesientofelizperoalaveztriste,puesséquetodoesoquemeestoyperdiendonovolveráyyanopodrérecuperarlo,peroesmidecisiónysupongoquenovalenlaslamentaciones.

Asíque,miprimer«gracias»,esparaellos,paramifamilia…Mi marido, ese gran hombre que siempre está ahí, a mi lado, listo para

sostenermelamanooparasoltarlacuandosabequenecesitovolarsola,elquemejor me entiende y al que no puedo querer más, aunque a veces olvidedecírselo.Sabesque,siestoyaquí,esgraciasati.Tequiero.

Amishijos,misamorcitos;graciasporentenderqueosescatimetiempo,quenojuegueconvosotrostantocomoosgustaríay,endefinitiva,porcomprendercosas, que, por vuestra edad, no tendríais por qué entender. Sólo quiero quesepáisqueosquieromásqueamivida.

Y a mis padres, mil gracias por vuestro apoyo incondicional y por estarsiempre listos para ayudarme cada vez que lo necesito. Os quiero, aunquetampocooslodigatantocomodebería.

Además, quiero agradecérselo a todas esas personas que, sin ser familia,tambiénestánahí,listasparaecharseunasrisasconmigooparaayudarmecadavezquegritosocorro…

Page 476: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Tiaré Pearl, mi sevillana del alma; gracias por estar siempre disponible,inclusoenlosmomentosdelicados.Graciasporcompartirtuarteconmigoyporesasportadasmágicasquesoncomolapuertaqueabremishistorias.

MiscompañerasyamigasIrisT.HernándezyGarcíadeSaura;milgraciasporsermisconsejerasymisamigas.

MischicasSilvia,Montse,Emma,PatriyAroa;graciasporvuestraamistadyportantascosas.Osquiero.

Y,cómono,milgraciastambiénatodasesaspersonasquehanhechoposiblequeestanovelaseaunpoquitomásreal.

GraciasaRaquelA.L.,deBodegasRamónBilbao,porinvitarmeaconoceresagranbodega.Meencantóhacerlacataenramayesavisitaguiadadelaquetantoaprendí.

A Cristina E. y a Jessica, de Bodegas Muga. Mil gracias por vuestraamabilidad,porlavisitaguiadayporvuestrasexplicaciones;esedíaaprendíunpoquitomás sobre el arte dehacer vinoydisfrutémuchísimo conociendounabodegaqueestanfamiliarcomolaqueyohecreadoenminovela.

YungraciasenormeaSamuelyaEsther,delasbodegasLaRiojaAlta,porinvitarme a vuestra bodega Torre de Oña, en Páganos. Gracias por hacermesentir comoen casa, porvuestras explicaciones inclusodespués a travésdee-mail y por permitirme que vuestra bodega sea el hogar y la bodega de mispersonajes.

Cuandorecorríesecaminoylleguéalavivienda,rodeadadeviñedos,ymástardea labodega, fuecomosihubieraviajadoaese lugarquemi imaginaciónhabíaideadosinnisiquierahaberestadopreviamenteenél.Viloqueyohabíaescrito sin haberlo visto antes y fue tan mágico como lo sería si me hubieraadentradoenminovela.

Porsupuesto,graciasamieditora,EstherEscoriza,porseguirconfiandoenmí,porescucharmeyporsusvaliososconsejos.

Yatodasvosotras,mischicas,lasqueesperáismisnovelasconansiaolasque las descubrís un día por casualidad y les dais una oportunidad. ¡¡Gracias,gracias,gracias!!

EsperoquelahistoriadeVíctoryValentinaosgustetantocomoamí.

Page 477: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Biografía

Misestudiosymitrabajopocotienenqueverconelmundodelasletras.Soycontable, por lo que me paso el día rodeada de números y peleándome conclientes y proveedores.A pesar de que siempreme ha gustado leer y escribir,nuncamelohabíaplanteadocomoopciónlaboral,hastaquellegóElijoelegir,unanovelaqueescribíparamí,sinesperarnada,conlaquetoquéelcieloconlasmanosyconlaquedescubrímigranpasión.

Dichapasiónme llevóaabrirmialma,a soñardespiertaya sentirdeunaformaquenocreíaposible,porquenohaynadamásmaravillosoque inventaruna historia de la nada y dar vida a unos personajes que pueden llegar ainstalarseentucorazónparanoabandonartejamás.

Encontrarásmásinformaciónsobremíymiobraen:

<https://www.facebook.com/profile.php?id=100009698947240&fref=nf>.

Page 478: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Referenciasdelascanciones

Thesea,Copyright: ©2018HAEVNMusic,underexclusivelicensetoWarnerMusicBeneluxB.V.,interpretadaporHaevn.(N.delae.)Diamonds,Copyright:2010HardRainLondon,interpretadaporHardRainLondon.(N.de

lae.)

TerraTitanic,Copyright: ©1999WEARECORDS/WARNERMUSICGERMANY,interpretadaporPeterSchilling.(N.delae.)Yoey,Copyright:©2010CapitolRecords,LLC,interpretadaporConcreteBlonde.(N.delae.)

Wordsdon’tcomeeasy,Copyright: ©2010Universal,interpretadaporF.R.David.(N.delae.)

Moonligthshadow,Copyright: ©ThisCompilation2012MercuryRecordsLimited©2012,MercuryRecordsLimited,interpretadaporMikeOlfield.(N.

delae.)

Bedsareburning,Copyright: 1987MidnightOilEntsPtyLtd.,interpretadaporMidnightOil.(N.delae.)

Everybreathyoutake,Copyright: ThisCompilation1992A&MRecordsLtd.©1992A&MRecordsLtd.,interpretadaporThePolice.(N.delae.)

Presenceoflove,Copyright: ©RockHouserewindrecords,interpretadaporTheAlarm.(N.delae.)

Whatafeeling,Copyright: 2010EssentialMediaGroupLLC,interpretadaporIreneCara.(N.delae.)

Theone,Copyright: 2017SonyMusicEntertainmentUKLimited,interpretadaporKodaline.(N.delae.)

Lluevealegría,Copyright: 2018SonyMusicEntertainmentEspaña,S.L.,interpretadaporMalúyAlejandroSanz.(N.delae.)

Leavealighton,Copyright: 2017RelentlessRecordsunderexclusivelicencetoSonyMusicEntertainmentUKLimited,interpretadaporTomWalker.(N.de

Page 479: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

lae.)

I’llneverloveagain,Copyright: ThisCompilation2018InterscopeRecords©2018InterscopeRecords,interpretadaporLadyGaga.(N.delae.)

Page 480: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

Milesdeemocionescontunombre

AnaForner

Diseñodelacubierta:ZafiroEdiciones/ÁreaEditorialGrupoPlaneta,apartirdelaideaoriginaldeTiaréPearl

©delaimagendelacubierta:Shutterstock

©delaimagendelinterior:ArchivodelabodegaTorredeOña,S.A.pertenecientealgrupobodegueroLaRiojaAlta,S.A.

©Fotografíadelaautora:Archivodelaautora

©AnaForner,2019

©EditorialPlaneta,S.A.,2019

Av.Diagonal,662-664,08034Barcelona(España)

www.edicioneszafiro.com

www.planetadelibros.com

Lospersonajes,eventosysucesospresentadosenestaobrasonficticios.Cualquiersemejanzaconpersonasvivasodesaparecidasespuracoincidencia.

Primeraedicióndelibroelectrónico(epub):juniode2019

ISBN:978-84-08-21093-1(epub)

Conversiónalibroelectrónico:RealizaciónPlaneta

Page 481: Miles de emociones con tu nombre · 2019-06-18 · brillar intensamente cuando alguien enciende esa luz en tu mirada. Aquí dejé de ser una niña vivaracha con coletas para convertirme

¡Encuentraaquítupróximalectura!

¡¡Síguenosenredessociales!!