L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la...

40
L’Alcúdia Cristiana DEL TERCER MIL·LENNI REVISTA PARROQUIAL D’INFORMACIÓ i REFLEXIÓ Març 2008 Núm. 26

Transcript of L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la...

Page 1: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia CristianaD E L T E R C E R M I L · L E N N I

REVISTA PARROQUIAL D’INFORMACIÓ i REFLEXIÓ Març 2008 Núm. 26

Page 2: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

Revista Parroquial

La Semana Santa es el momento cumbre de la vida litúrgica de la Iglesia.

La fe cristiana se basa en los acontecimientos que celebramos estos días, ocurridos en la persona de Jesús de Nazaret, que son su pasión, muerte y resurrección.

El Señor Jesús dejó muy pocas indicaciones litúrgicas a sus discípulos, si acaso sólo una: “Haced esto en memoria mía”. Y la verdad es que la Comunidad no necesitó mucho más.

Desde un principio la Iglesia ha hecho memoria de la entrega del Señor por todos nosotros. Y así,

cada vez que la Comunidad Cristiana celebra los últimos momentos de la vida de Jesús, su Entrada en Jerusalén, la Última Cena con sus discípulos, su Pasión, Crucifixión y su gloriosa Resurrección, estamos actualizando el misterio central de nuestra fe.

Un camino de dolor y de muerte, en el que la meta no es el sepulcro sino la resurrección.

Fue, entonces una lección de vida para sus discípulos, y lo continúa siendo hoy, para todos los que intentamos seguir sus pasos.

Semana Santa

Portada y contraportada: Ostensorio de Juan de Juanes: Ecce Homo y Dolorosa, que ha sido expuesto en la Luz de las Imágenes de Xàtiva.Foto: E. Alós.

SumariPag.

• Semana Santa- Recuerdos de muerte y resurrecciónde Norberto Alcover ...................................................... 1

• Acontecimientos históricos de la Iglesia- Apariciones de Lourdes .............................................11- Ave Maria ...............................................................15

• La Parròquia de St. Andreu Apòstol, Comunitat Viva

- Escola de Pares .........................................................17- El encuentro de Taizé en Ginebra .............................18

• Notícies Breus- Notícies Breus ..........................................................20

• La Parròquia Organitza- Fes un lloc a l’agenda! ...............................................21

• Conciencia Solidaria- Ayuda a la Iglesia Necesitada ....................................23- Kenia cuenta con nuestra solidaridad .........................24

• Articles de Reflexió- Enseñanzas de la naturaleza .....................................29- Textos para pensar ....................................................30

• Fills de l’Alcúdia- D. Ricardo Abel .......................................................33

Page 3: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 1

Semana Santa

Recuerdos de muerte y resurrecciónDE NORBERTO ALCOVER. EDICIONES SAN PABLO

14 de Nisán. Jueves santo, mañana y tardeComencé aquel día tan crucial para mí pa-

seando en paz por el Monte de los Olivos, mientras mis discípulos se marchaban a la ciudad santa para comprar algunas cosas necesarias.

Noté que Pedro tenía una espada y que char-laba con Santiago, siempre tan amante de las exage-raciones. Pero no se me ocurrió entonces que pudie-ra llegar a utilizarla: más tarde lo comprobaría con espanto. Nunca la violencia es buena consejera,...

El joven Juan estaba retirado en un rincón. Siempre tan solo. Puede que rezando.

Al caer la tarde nos encaminamos a casa de un buen amigo, cuya casa era mi casa y sus salas mis salas, porque en una de ellas había mandado a mis discípulos que prepararan la Pascua. Pedro y Juan hicieron la gestión.

Estaban todos, ellos y ellas, unos mayores y otros más jóvenes, sentados sobre cojines mullidos y en torno a una mesa amplia donde estaban colocados los manjares de la cena santa, todos me mira-ban con una mezcla de curiosidad y de temor. Temor por mí, por-que sabían que aquella cena era de despedida. Y temor por ellos, pues conocían que, una vez golpeado yo, les gol-pearían a ellos.

Yo, por mi parte, estaba emocionado como un esposo que se separa de la esposa, como un amante de sus amigos, como un hermano mayor de sus hermanos más pequeños. Y es que, inmediatamente antes de la Pascua, sabía yo mismo que había llegado la hora de pasar de este mundo al Padre y sentía que, habiendo amado muchísimo a los míos, que estaban allí, los iba a amar hasta el extremo. Y en este mismo momento, percibí como un fogonazo cuanto Judas

iba a hacer, mientras mojaba pan en la salsa de la fuente a la vez que yo lo hacía, pero yo me adelanté y le entregué mi trozo de pan mojado en salsa. Juan me preguntó y yo respondí sobre la traición. Pedro quería impedirlo pero yo le dije que impedirlo sería interferir en la voluntad del Padre sobre mi persona.

Judas salió y se hizo un silencio como de siete mares. Fue un instante terrible. El instante de la traición. El instante de la resolución. Todo empujaba, jadeante, hacia el martirio. Y yo lo sabía en mi interior porque comenzaba a escuchar una voz misteriosa que jamás se apagaría aquella noche. La voz del Cristo de Dios abriéndose camino en mí con una fuerza omnipotente. Mi propia voz. Mi propio misterio. Yo.

Y sucedió algo inesperado, completamen-te inesperado para mí. Inmediatamente después de salir Judas, comenzaron todo ellos a discutir sobre quién era el mayor del grupo, como si comenzaran a discutir sobre quién me sucedería al frente de los

elegidos. Aquello me llenó de tristeza y casi de santa ira, pero me contuve. Y tomando una toalla les fui lavan-do los pies a todos, in-clinándome ante ellos, uno por uno. Pedro intentó rechazarme, y le dije, en tono admo-nitorio, que si no le lavaba los pies también a él, no estaría conmi-go en el futuro. En un

momento, quedó exhausto.Todos estaban desolados ante mi gesto, pues

comprendieron por qué acababa de hacerlo, tras su tremenda discusión sobre el poderío.

Aquellos hombres contemplaban al Maestro y al Señor echado a sus pies, arrojado ante sus cuer-pos estirados de puro nerviosismo, lavándoselos con una humildad infinita. Cuando me levanté, les dije

Les ofrecemos el resumen de algunos capítulos de este libro, como invitación a una lectura más amplia del mismo.Es Jesús el que habla en primera persona, como si se tratara de un diario íntimo,

sobre sus sentimientos y pensamientos en sus días definitivos

Page 4: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 20082

con voz poderosa que era necesario entender lo que acababa de hacer con ellos. Con cada uno de ellos. Porque si los poderosos tratan a sus esclavos como tales, yo les trataba como superiores en el reino de Dios. Y añadí que de ahora en adelante, cuanto me habían visto hacer a mí con cada uno de ellos, lo hi-cieran entre ellos mismos.

Mantenía la serenidad pero mi cuerpo acusa-ba el cansancio por tantísima emoción. Los miré y, nuevamente como en el monte de los panes y de los peces con la muchedumbre, sentí lástima por todos ellos, porque me parecían ovejas que van a perder al pastor.

Tras el lavatorio de los pies, les entregué mi único mandamiento absolutamente nuevo, el man-damiento que ha caracterizado a mis seguidores cris-tianos a lo largo de la historia, el mandamiento del amor fraterno como yo les había amado. Recuerdo perfectamente las palabras: «Este es mi mandamiento, que os améis unos a otros como yo os he amado, porque en esto co-nocerán que sois mis discípulos».

Tras un rato de silencio y mientras llegábamos al final de la cena, tomé un pan ácimo en mis manos de hombre y de Dios, lo partí, lo bendije y se lo entregué dicien-do que ese pan era mi cuerpo y que ese cuerpo, hecho pan, sería entregado para salvación de todos. Algo más tarde hice lo mismo con una copa de vino, mezclado con agua según la tradición judía, mientras decía que esa copa era la nueva alianza en mi sangre, que sería derramada por ellos y por todos para salvación de todo pecado. Y acabé mandándoles que siguieran haciendo lo mismo en conmemoración mía, como recuerdo de todos los tiempos pasados juntos, tiempos, sobre todo y como podrían comprobar, de muerte y de resurrección.

Comieron y bebieron con avidez, pero sin captar cuanto sucedía en aquella sala perdida en el mundo del momento. Ni tan siquiera Juan captó la trascendencia de esa comida y de esa bebida.

Mi preocupación era la unidad desde la diver-sidad, porque conocía el corazón humano, sus afanes de protagonismo, su instinto de poder y hasta la per-manente inquietud humana en sospechar del otro y de sus actitudes.

Por esta razón, entoné la gran oración al Padre, que no pretendía que fuera solamente por ellos, antes bien por todos los que iban a venir en la Iglesia.

Lleno de Espíritu y de sus impulsos espiritua-les, le dije al Padre que había llegado la hora, mi pro-pia hora, la hora de la tiniebla y también la hora de la luminosidad más intensa, porque cuanto sucedería solamente sería cumplimiento de su voluntad, pero yo conocía adecuadamente a quienes me perseguían y estaban preparando mi muerte.

Pedro estaba anonadado porque apenas in-tuía de qué estaba hablando el Maestro y el Señor. Me miraba y miraba a los demás como si intentara adquirir algún tipo de confirmación de cuanto iba escuchando, y acabó por fijar sus ojos en Juan quien, en ocasiones, mantenía el rostro entre sus manos y dejaba escapar alguna que otra lágrima.

Juan era el único que podía entender lo que yo estaba proclamando ante el grupo, o mejor, tal vez no lo entendía racionalmente pero sí era capaz de comprenderlo, llevado por su cariño hacia mi per-

sona. Los servidores iban de acá para allá, también nerviosos ante la actitud tensa del ambiente.

Pero faltaba algo por decir, y tenía que decír-selo para que no cayeran en la tentación de la deses-peranza y tampoco en la ilusión de la frivolidad, las dos grandes amenazas de todo creyente.

Me levanté y, alzando los brazos, recé al Padre para que les tuviera bajo su protección permanente, de la misma manera que me había protegido a mí en todas las ocasiones. Le dije que el mundo los odiaría como me había odiado a mí, y es que ni yo ni ellos pertenecíamos al mundo, antes bien éramos sus an-tagonistas radicales. No le rogaba que los sacara del mundo, antes bien que los protegiera del espíritu del mal.

Conságralos en la verdad, le dije al Padre casi al final, y recalqué esta petición una y otra vez, con-

Semana Santa

Page 5: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3

ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la verdad y la vida.

Y Juan repetía en voz baja mis palabras, tan buen discípulo como siempre había sido.

¿Cómo no acordarme de todos los que ven-drían más tarde? Le dije al Padre que no sólo pedía por aquellos que estaban allí sino por todos los que les siguieran más tarde y que fueran uno como yo lo era con el Padre.

Acabé la oración al Padre con unas palabras llenas de afecto y que deseo transmitiros en este mo-mento con absoluta fiabilidad para que las acojáis en vuestro corazón: «Padre justo, aunque el mundo no te haya reconocido, yo te reconocí y también estos reconocieron que tú me enviaste. Yo te he revelado a ellos y seguiré revelándote, para que el amor que tú nos tuviste esté con ellos y también Yo esté con ellos».

Después, volví a sentar-me y permanecí en silencio lar-go rato. Ellos también. Al cabo, decidí marchar al Monte de los Olivos para esperar cuanto estaba a punto de suceder a la traición de Judas, que sin lugar a dudas ocurriría muy pronto. Era preciso prepararse en ora-ción para este momento absolu-tamente crucial. Como más tar-de les diría a mis discípulos en el Monte mismo, hay que velar y hay que orar para no caer en la terrible tentación de la huida.

14 de Nisán. Jueves santo, al anochecer.El camino fue rápido por la premura de la si-

tuación y porque no quería que me siguiera mucha gente, solamente los doce y alguno más. María, mi Madre se quedaba en Jerusalén con sus amigas, Ma-ría Magdalena y María la de Cleofás, y algunos dis-cípulos fieles que todavía no habían huido.

Los doce me seguían a duras penas, inquie-tos por saber qué pensaba hacer en el Monte de los Olivos, al que tanta afición había demostrado ya an-tes. Llegué a él y me dirigí a una finca amiga lla-mada Getsemaní, perfectamente conocida de todos los que me seguían, tras anteriores reuniones en la

misma. Por cierto, Judas conocía aquel lugar como todos los demás, y pensé, en un momento dado, que podía ser peligroso quedarme allí, pero deseché tal pensamiento.

Llegados al Huerto de Getsemaní, tomé a Pe-dro, Santiago el Zebedeo y Juan para que me acom-pañaran, como ya hicieran tantas otras veces en mis grandes empeños. A los demás, les dije que me mar-chaba a orar porque también ellos tenían que orar para no caer en tentación, y me miraban perplejos porque seguían sin saber exactamente adónde iba y qué me iba a suceder.

Pedro, Santiago el Zebedeo y Juan me siguie-ron casi automáticamente y llenos de estupor, pero los tres estaban acostumbrados a vivir situaciones límite conmigo. Avancé unos pasos hasta dar con

una zona tranquila y comenzó a invadirme una tristeza inde-cible y un espanto interior que me dominaba por completo. Solamente se me ocurrió decir-les que velaran conmigo porque mi alma estaba abatida hasta la muerte.

Allí tirado sobre el suelo, mientras invocaba al Padre que, si era posible, tanto dolor pasara para mí, pero que si no lo era se hiciera su voluntad y no la mía, lloraba y me desesperaba hasta entrar en agonía y sudar gru-mos de sangre que caían hasta el suelo, como en un auténtico delirio. Nunca y ni tan siquiera en la cruz he sufrido tanto, por-que no era dolor físico, del que

puedes llegar a evadirte, sino que se trataba de una dolencia moral, la incapacidad para hacer frente a lo que misteriosamente se me venía encima y que yo intuía pero no sabía a ciencia cierta de qué se trata-ba. Todo lo ponía en manos del Padre y al momento deseaba marchar de allí y tampoco lo hacía, y todas estas cosas me sumían en un desconcierto infinito.

Sudaba, lloraba, convulso y aterrorizado, has-ta caer de bruces en el suelo previamente mojado con mi propia sangre y sudor. Parecía un desecho de los hombres y de Dios también.

Y para colmo, ellos, Pedro, Santiago el Zebe-deo y Juan, dormían a pierna suelta, como si nada sucediera, completamente olvidados del Maestro y

Semana Santa

Page 6: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 20084

del Señor. Cuando los vi por tres veces, les animé a orar porque el espíritu está pronto pero la carne es muy débil. Ellos no supieron que responderme, so-lamente me miraban. Al cabo me levanté del suelo, completamente exhausto pero dispuesto a afrntar lo que fuera. Les zarandeé y anuncié de manera termi-nante que la hora había llegado por fin, que el Hijo del hombre iba a ser entregado en manos de los pe-cadores y quien me iba a entregar estaba, ya, cerca. Estaban aterrados. Incluso Pedro, tan frágil a pesar de sus bravuconadas.

Llegó un pelotón de soldados y un grupo de gente. Judas me entregó con un beso, le llamé amigo para tratar de emocionarle, quise salvar a mis ami-gos. Pedro rajó la oreja de uno de los lacayos, pero al fin me agarraron tras haber dicho en voz alta que esta era la hora de las tinieblas, como más tarde es-cribiría Juan, mi joven discípulo. Y por vez primera, pasé a estar en manos de mis enemigos, o mejor, de los enviados por mis enemigos, como inmediata-mente conocería.

Siempre hay alguien que se pone a las órde-nes de los poderosos, siempre, porque quieren ganar un dinero y porque desean ganarse su benevolencia, una de las mayores desgracias de la humanidad. Pila-to lo supo más tarde. Arrastrándome, como si fuera un asesino, me llevaron a casa de Anás y de Caifás, el primero era yerno del segundo, que era sumo pon-tífice aquel año. Me interrogaron, me escupieron y quisieron poner a prueba nada menos que mi propia identidad, tratándome como a un perro asqueroso que solamente merece desprecio y burla. Y arguye-ron algunas afirmaciones mías relativas a mi victoria sobre la muerte, para convertirme en blasfemo con-tra el Templo y el Dios del Templo. Y acabaron por declararme reo de muerte entre la algarabía de los presentes.

Pero la suerte estaba echada, y yo permanecía entregado a mi suerte con la mezcla de sensaciones que ya había sentido en el Huerto de los Olivos: terror, humillación y hartura. ¿Por qué yo, precisa-mente yo, que solamente quería cumplir la voluntad del Padre? No es nada fácil descubrir la providencia de Dios cuando estás sumergido en la tristeza y en el la desolación.

15 de Nisán. Viernes santoEra de noche ya, y yo estaba entre la solda-

desca de los jefes judíos, que me injuriaba y escupía

como si fuera un asesino. Incluso me pusieron un velo sobre la cabeza y me preguntaban quién era el que me había golpeado, tanta era su poca compren-sión de cuanto estaba pasando.

Llegados aquí, comienzo a relatar una de las situaciones más dolorosas de todas estas horas, horas de humillación y de quebranto más espantoso.

Nunca podréis comprender esta aguda sen-sación de engaño, de terrible engaño de la vida y hasta de Dios, mi Padre. Juan, que tenía amistades en casa del Pontífice, consiguió que Pedro entrara en el atrio, cerca de donde yo había sido golpeado. Entonces, mientras me trasladaban, algunas criadas le preguntaron si me conocía, y él dijo que no. Pero lo peor es que al relacionar nuestros acentos gali-leos, llegó a gritar: ¡No conozco a ese hombre! Y yo casi caí al escucharlo. Casi caí al suelo. Mi amigo, el amigo al que en su momento yo había entregado la responsabilidad del grupo, el valiente Pedro, pero también el frágil Pedro, decía que no me conocía en absoluto, como si jamás nos hubiéramos encontra-do en el camino de la vida. Qué tremenda lección para mí, siempre compasivo y misericordioso, qué tremenda lección para mí. Pero recordé que yo mis-mo había dicho que era preciso perdonar al pecador setenta veces siete, y perdoné, aun a pesar de mi or-gullo, tan herido.

Entonces, miré a Pedro, con todo el amor del mundo. Y Pedro, que a su vez me estaba mirando, rompió a llorar y, tras salir del atrio como alma que lleva el diablo, lloró amargamente, a gritos incluso. Todo pasó como una exhalación. Pero mi corazón, comenzó a sangrar tras esa traición del amigo. Fra-gilidad de Pedro. Fragilidad humana.

La noche avanzaba entre delirios de la solda-desca y de parte del pueblo que husmeaba sangre, como siempre. Y cuando amanecía, me llevaron de nuevo ante los ancianos de Israel, los sumos sacerdo-tes, los escribas y demás mandamases judíos, todos ellos miembros del Sanedrín, buscando algún moti-vo final para encausarme y eliminarme.

Estaban hartos de mis respuestas anteriores y, además, comenzaban a temer ser incapaces de demostrar mi pretendida culpabilidad, no fuera a venirse abajo todo el plan en días tan señalados en Jerusalén, con gente de todos los lugares para cele-brar la pascua judía. Y por fin, la cuestión mesiánica se puso sobre el tapete: me preguntaron si yo era el Mesías y les respondí que ellos mismos lo estaban diciendo, con lo que acabaron por gritar que ya no

Semana Santa

Page 7: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 5

necesitaban de otro testimonio.Todos ellos vociferaban de alegría ante lo su-

cedido, pero sabían que la última decisión no esta-ba en sus manos, ya que dependían de Roma. Por esta razón, jefes y multitud decidieron llevarme ante Poncio Pilato, gobernador romano: él debería escu-charles y tomar la decisión definitiva. De esta mane-ra, comenzaron una serie de entrevistas entre Pilato y yo mismo, que me demostraron hasta qué punto el poder y el miedo al poder era capaz de determinar las pasiones humanas, hasta hacernos proceder con-tra nuestra propia conciencia. No he podido olvidar aquellas conversaciones, su rostro compungido y ate-morizado pero también orgulloso y capaz de lavarse las manos ante lo que estaba permitiendo, como si la pureza de las manos solucionara algo. Poncio Pilato era una buena persona, entre tanto encanallamien-to, pero el César estaba por encima de él y su cargo dependía de! César. Por ese cargo, Pilato cedió y me llevó hasta la muerte.

Seguía amaneciendo, y me llevaron desde casa de Caifás al Pretorio. Ellos no entraron en el Pretorio para no contaminarse, tiene gracia, puesto que deseaban comer la pascua. Pilato mismo salió afuera para preguntarles qué acusación presentaban sobre mí. Unos y otros intentaron quitarse la res-ponsabilidad de la decisión, pero los judíos conocían perfectamente la legislación y sabían que solamen-te el gobernador podía tomar cartas definitivas en la condena concreta. Cuando Pilato insistió en que adujeran causas, dijeron entre gritos de ira y de odio que yo estaba amotinando a la gente, que prohibía dar tributo al César y que decía ser el Mesías y rey. Entonces Pilato se quedó pensativo ante tales acu-saciones, sobre todo la tercera, y, contemplando mi paciencia y serenidad, estaba desconcertado sobre mi verdadera personalidad.

Por otra parte, día sí y día no, aparecían per-sonajes en la vida judía que pretendían ser el mesías, pero siempre se trataba de algún embaucador pa-labrero o, por el contrario, de cualquier extremista exagerado y bravucón que acababa por crear proble-mas de orden público. Sin embargo, yo era diferen-te. En silencio, me limitaba a mirarle a los ojos para escrutar sus respuestas, pero sin decir palabra, como si la cosa no fuera conmigo. Sucio, zarrapastroso y sanguinolento, carecía del aspecto de alguien peli-groso para este hombre absolutamente poderoso en Jerusalén. Al cabo, me llamó y entramos ambos en una de las habitaciones de la casa.

“¿Eres tú el rey de los judíos?”. También esta-ba Herodes por en medio, lo que complicaba todavía más la cuestión, si bien a Pilato no le hubiera preocu-pado que mi pequeña persona le creara problemas al despreciable personaje de la corte judía quien, tiem-po atrás, había asesinado a mi primo Juan Bautista. Yo le respondí que mi reino no era de este mundo, porque si lo fuera, mis tropas actuarían en conse-cuencia, y yo carecía de todo ejército. Pero ante la insistencia del gobernador, me decidí a desvelarle lo que tan ocultamente había conservado hasta ese mo-mento: era él quien decía que yo era rey, y era cierto que para tal cosa yo había venido a este mundo, para dar testimonio de la verdad, de mi verdad, hasta el

punto de que todo el que es de la verdad debía de escuchar mi voz.

Me escuchaba tenso, muy tenso, pues a medi-da que hablaba caía en la cuenta de que estaba ante un caso fuera de lo normal, sobre todo por la tran-quilidad con que yo me comportaba y respondía. Pero de pronto, hizo un gesto con la mano, como alzándola en parábola, y pronunció una frase del todo cínica: “¿Y qué es la verdad?”, musitó. Siem-pre el mismo problema, el problema de la verdad y de la mentira, el problema de buscar la verdad o de preferir la mentira. Entonces, el gobernador volvió a sacarme afuera y dijo que no encontraba motivo de

Semana Santa

Page 8: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 20086

culpa en mi declaración, pero ellos insistieron en que amotinaba al pueblo y predicaba la rebelión por toda Judea, habiendo comenzado por Galilea. Y siendo Galilea jurisdicción de Herodes, vio la solución más fácil y les dijo que me llevaran ante el monarca. Los políticos siempre igual: ven la verdad pero evitan y se quitan de encima la responsabilidad. Caí en la cuenta perfectamente de que Pilato quería salvarme pero también de que no sería capaz de hacerlo. Tenía miedo.

Estaba muy cansado. Este ir y venir de allí para allá, como si me hubie-ra convertido en una bestia a la que se obliga a caminar sin sosiego, me tenía aterido de frío y harto de cuantos me ro-deaban. No siempre es posible mantener la conciencia pura y dura de lo que realmente te sucede y del sentido que en-cierra, porque comienzas a es-tar solamente preocupado por sobrevivir entre tantas difi-cultades y solamente rodeado de adversarios inhumanos. El espíritu está pronto, les había dicho yo a mis amigos, pero la carne es débil, y es cierto, es absolutamente cierto.

En definitiva, esta rea-lidad tan elemental es la que conocen perfectamente los torturadores de todos los tiempos: llega un momento en que pierdes la misma capacidad de respuesta a la adversidad y eres capaz de entregarte a quienes te machacan. En estos mo-mentos, yo mismo comenzaba a experimentar tal pérdida. Y es que, además, me repugnaba presentar-me ante un tipo como Herodes, del que se conocían en Jerusalén todas las vergüenzas posibles, sobre todo en el terreno de las perversiones.

Me preguntó muchas cosas pero yo me mantu-ve en silencio, en completo silencio. Ni una palabra salió de mi boca para responder a aquel personaje, tan vanal como toda su corte que le rodeaba. Harto ya Herodes, mandó que me pusieran una vestidura blanca, como de loco, y me remitieran de nuevo a Pilato. Parece que Pilato y Herodes reorganizaron un tanto una amistad maltrecha tras ese cruce de pri-sionero, que eso era yo. Si bien el gobernador jamás llegó a sentir admiración o interés personal por el

monarca, tratándose solamente de relaciones estric-tamente políticas. Una vez más.

Cuando estuve de nuevo ante Pilato, todo se desarrollo con inusitada rapidez, como en una narra-ción vibrante. Propuso que eligieran entre mi perso-na y la de un bandido muy peligroso, de nombre Ba-rrabás, y ellos prefirieron a Barrabás. Después, ante los gritos de ¡crucifícalo, crucifícalo!, Pilato decidió mover su compasión ordenando que me coronaran de espinas y me pusieran un manto grana, como de falso rey, y me presentó a la muchedumbre, pero no

les bastó e insistieron en su griterío.

Tras una breve con-versación conmigo sobre mi realeza, que era su auténtica obsesión, y ante mi insisten-cia en que era verdad, volvió a presentarme a la multitud, mientras escuchaba las voces de los judíos que decían que si me soltaba no sería amigo del César, porque todo el que se hace rey se declara contra el César.

Llegados aquí, Pilato saltó de un escalofrío, por-que todo era soportable por salvarme de la cruz, menos su relación con César, el om-nipotente de Roma. Por esta

razón, y con un rictus de decepción propia en su rostro, se lavó las manos en público mientras decía que era inocente de la sangre de tal justo, a lo que el populacho respondió que mi sangre cayera sobre ellos y sobre sus hijos, en un gesto de atroz suicidio moral y religioso. Después, me entregó en manos de la multitud para que me crucificaran.

Era tremendo constatar que el plan de Dios, se abría camino precisamente en el dolor, en la hu-millación y en el abandono, como si el Padre pre-tendiera convertirme en el nuevo Siervo de Yavé, del que ya había escrito la Escritura antigua. Mis discí-pulos esperaban a un mesías político y social. Mis enemigos acusaban a un posible competidor político y social, con aspiraciones religiosas para colmo. Pero yo era otra cosa, alguien completamente distinto.

Pilato no supo a qué atenerse ante mi realeza, que rompía sus esquemas recortadamente gober-nantes. Herodes tan siquiera me hizo maldito caso y

Semana Santa

Page 9: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 7

nunca llegó a tener alguna idea concreta de mi per-sona. Nadie, ni uno solo entendió ni por asomo de qué iba la cosa, con quién se enfrentaba, lo que po-día conseguir si me aceptaba. Porque yo nunca quise sufrir, nunca. Yo quería solamente ser fiel al Padre y su plan de salvación y de liberación, y el sufrimien-to se me vino encima, y hasta qué punto, sin poder evitarlo. Y yo me limité a encajarlo desde la filia-ción más radical. En ocasiones, se ha convertido mi obediencia en hiriente masoquismo. Yo siempre fui libre, completamente libre, absolutamente libre. Y en esa libertad, radicó hacerme salvador y liberador. En esa libertad.

15 de Nisan. Viernes santo, tardeSerían las doce cuando unos soldados carga-

ron la cruz sobre mis espaldas. Comenzó el camino del Calvario, adonde me llevaban para la tor-tura definitiva, según escuché a un centurión que daba órdenes junto a mí.

Avanzamos algo, el Pretorio Iba quedan-do atrás, y yo apenas podía con el peso del madero enorme. Tro-pezaba una y otra vez y el dolor era intenso, casi insoportable. Entonces, los mismos soldados en-contraron a un hombre de Cirene que pasaba por allí y venía del campo, se llamaba Simón y era padre de Alejandro y Rufo. Sin más, le obligaron a cargar con la cruz detrás de mí, quien con las manos esposadas avanzaba a duras pe-nas. Nunca podré pagarle al tal Simón aquella ben-dita ayuda, mucho más relevante de la que él mismo pensara; aunque fuera por obligación, estuvo a mi lado.

Así, tras caerme en varias ocasiones y obligar a que el mismo Simón también tropezara, llegué al monte de la calavera, llamado Calvario. Del todo ex-hausto, sangrante, humillado y acabado. Me hubiera sido imposible seguir más tiempo. Me dejé caer al suelo, junto a la cruz, y me clavaron en ella, junto a dos ladrones que también iban a ejecutar, muy

diferentes entre sí, uno soberbio hasta la raíz, que se perdió, pero el otro humilde como pocos había encontrado en la vida y al que me llevé conmigo al paraíso del Padre, tras rogármelo.

Los golpes de los martillos hicieron que los clavos fueran clavándose lentamente en mis carnes, destrozando nervios y músculos, hasta que, levanta-do en alto, como la serpiente, pude contemplar aquel abigarrado conjunto desde la cruz enhiesta. Los sol-dados, los judíos, María mi Madre, María Magdale-na, María la de Cleofás, Juan tan joven, Nicodemo y José de Arimatea, además de algunas personas des-conocidas. Sentí sed y me dieron vinagre.

Me moría, y viendo a María mi Madre tan desconsolada y huérfana de apoyo futuro, se la en-tregué a Juan, pero, inmediatamente, viendo a Juan tan desolado y no menos huérfano, se lo entregué a María, de tal manera que desde entonces vivieron

los dos juntos en casa del discípulo amado. En el colmo del dolor, gri-té al Padre por qué me había abandonado, supe que todo estaba consu-mado, absolutamente todo, y con un grito le dije al mismo Padre que en sus manos encomen-daba mi espíritu. Des-pués morí, inclinando la cabeza sobre el pecho ensangrentado. No me rompieron las piernas, como hicieron con los dos compañeros de do-

lor, sino que un soldado con una lanza me traspasó el costado, hasta el corazón, del que salió sangre y agua, el todo del todo de mi destrozada persona. Sin

que quedara algo de mí mismo en mí mismo. De tal manera que, como escribiría el mis-mo Juan, se cumplía la Escritura de Zacarías: “Verán al que traspasa-ron”.

Aquel niño naci-do de María, custodia-do por José con tanto amor, que había procla-

Semana Santa

Page 10: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 20088

mado la misericordia de Dios sobre los pecadores, curando enfermos y resucitado muertos como signos de su propia salvación, colgaba ahora de una cruz, de unos maderos cruzados, en la cumbre de un monte-cillo a las afueras de la ciudad santa, como un rene-gado y un traidor a la causa del Mesías. En el colmo de la paradoja, en aquella cruz y en aquellas carnes,

se estaba gestando la salvación del mundo entero. Este era el misterio entre los misterios. El misterio de la cruz que no cuadra con el razonamiento hu-mano.

Ahora venía la última de las humillaciones, la sepultura. En el sepulcro la Palabra estaría completa-mente callada y silenciada, el Camino estaría comple-tamente colapsado, la Verdad estaría completamen-te oscurecida y la Vida estaría completamente muerta para to-dos. Qué gran misterio el de la sepultura. Qué anonadamien-to más terrible para el Hijo de Dios. Quien lo había sido todo de todo, aho-ra era nada de nada. La sepul-tura como con-sumación de la cruz.

Al cabo de un tiempo, José de Arimatea, hom-bre rico, noble senador y varón justo y bueno que esperaba el reino de Dios y que no había secunda-do el plan de los judíos, pidió permiso a Pilato para descolgar mi cuerpo de la cruz, alegando que al ser

parasceve, es decir, el día anterior al sábado pascual, se haría imposible hacerlo más tarde. El centurión le entregó mi cuerpo. Y, en compañía de Nicode-mo, bajaron el cuerpo de la cruz, y lo envolverlo en una sábana limpia, que el mismo José había compra-do, como era costumbre enterrar entre los judíos. Y arrimaron una gran piedra a la entrada del sepulcro, a manera de losa para cerrarlo, y se retiraron.

El sábado se acercaba, porque todas estas ce-remonias habían llevado largo tiempo. Con las otras mujeres, especialmente María Magdalena, siempre tan fiel, José de Arimatea y Nicodemo, junto a otros desconocidos, retornaron a Jerusalén. La aventura había acabado. La muerte se había convertido en dominante del Jesús Cristo.

Soldados romanos, enviados por Pilato a pe-tición de los judíos, custodiaban mi sepultura. Ellos aseguraron la losa del sepulcro para evitar sorpresas. Y la cuestión quedó zanjada en vísperas de la Pas-cua.

15 de Nisán. Viernes santo noche.Serían las siete de la tarde del viernes cuando

mi cuerpo fue depositado en el sepulcro. Al pasar por el misterio de la muerte, fui aco-

gido por el Padre como el Viviente para siempre y, en ese mismo instante, me abrí a cuantos habían muerto con anterioridad, lo que vosotros confesáis como «bajó a los infiernos». Toda la humanidad y toda la creación fue redimida. Y la creación entera saltaba de gozo ante su salvación eterna.

En fin, la misma muerte dejó de ser destino para convertirse en camino.

16 de Nisán. Sábado santoNadie de mi entorno creyó en que el templo

de mi persona sería rehabilitado en pocas horas, tras pasar por el escándalo de la cruz.

El Maestro estaba muerto y solamente se le podía llorar y orar al Padre por Él. Y esto es lo que hacían mis discípulos, reunidos como el pequeño re-baño del que yo les había hablado, siempre en torno a los apóstoles y también a María Madre.

Pasaban las horas. En Jerusalén, se celebraba la Pascua. Y mis enemigos celebraban también mi desastre. El Templo permanecía en pie, y yo había sido derrotado. Herodes se paseaba ebrio por pala-cio. Pilato era el único que, entre las celebraciones

Semana Santa

Page 11: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 9

pascuales que él pensaba del todo vacías, hablaba con su mujer sobre mi persona y sobre lo que pudo ha-ber hecho pero no hizo. Y el pueblo rezaba y gritaba como si tal cosa. Ese pueblo al que siempre se aca-ba por conquistar con promesas y estupideces. Así son las cosas. Jesús el Nazareno era puro recuerdo. Alguien que había pasado por sus vidas como una exhalación, llena de promesas incumplidas.

Algunos de mis propios discípulos participa-ban de esta convicción, como lo demostraría Cleofás y su compañero, camino de Emaús, a quienes más tarde me acercaría para ayudarles en su tristeza y desesperación. Pero en este clima, el Padre preten-día que pasaran ellos mismos por un proceso seme-jante al mío, en el que la fe fuera puesta a prueba. Al fin, cayó la noche del sábado sobre Jerusalén.

17 de Nisán. Domingo santo.Día de la Resurrección

En la madrugada del domingo, un grupo de discípulas llegó al sepulcro para ungirme con per-fumes que habían comprado. Era una maravilla contemplarlas cómo se acercaban y cómo quedaron completamente sorprendidas cuando, tras comprobar que la losa del sepulcro estaba corrida, no supieron qué hacer, y solamente a María Magdalena se le ocu-rrió acudir a donde estaba Pedro y Juan para decirles que habían corrido la puerta del sepulcro y no sabían dónde habrían puesto al Señor.

Así pues, fueron las mismas mu-jeres que estuvieron al pie de la cruz, quienes tuvieron y dieron la primicia de mi resurrección, para humillación de los hombres, tan valientes de boca y tan par-cos de hechos. Cuántas veces he pensado sobre su valor, ellas que supieron estar junto al suplicio moral y descubrieron la tumba vacía, mientras los hombres esta-ban ausentes.

Una vez que conocieron lo sucedido, un Pe-dro acelerado y un Juan incandescente corrieron al sepulcro para comprobar de qué se trataba. Juan co-rría más por su juventud, pero dejó pasar a Pedro, quien entró antes en el sepulcro. Allí, esparcidos, encontraron los lienzos y el sudario que había es-tado sobre mi cabeza perfectamente plegado en lu-gar aparte. Vieron y creyeron. Después, se volvieron

al lugar donde estaban los demás para contarles lo que habían comprobado. Las mujeres tenían razón, pero se preguntaban unos a otros qué habría sido del cuerpo de su Señor. Y temían todavía más, no fuera que lo hubieren profanado los guardias o los mismos judíos.

Pero una vez que había anunciado al grupo de discípulos mi resurrección, tomé la decisión de ma-nifestarme a quien más me había demostrado querer, salvo mi Madre María, a aquella mujer poseída por el espíritu de la carne, María Magdalena.

Ella estaba junto al sepulcro llorando, deses-perada por mi ausencia. Alguien le preguntó que por qué lloraba y ella respondió: “Porque se han lleva-do a mi Señor y no sé dónde lo han puesto”. Me acerqué yo mismo sin que cayera en la cuenta, y al volverse, me vio pero me confundió con el jardinero. Yo le pregunté por qué lloraba y a quién buscaba, porque se la notaba inquieta, y ella, con unas pala-bras precipitadas, me respondió que si yo me había llevado el cuerpo, le dijera dónde lo había puesto y que entonces ella lo cogería. Yo le dije, mirándola a los ojos:“María”, sin más, y ella me dijo, sin más también:”Maestro”, y se me echó a los pies, agarrán-

dome las vestiduras con una pasión casi exacerbada, como si no quisiera soltarme más.

Me aparté y ella se marchó a toda prisa, con-mocionada por lo sucedido y experimentado. Hasta que alcanzó a los discípulos y discípulas que estaban afligidos y lloraban y les gritó que había visto al Se-ñor y que le había mandado decirles esto y esto. Pero ellos, al escucharla, de nuevo comenzaron a dudar.

Una vez más, mi resurrección les sometía a la humillante prueba de que una mujer supiera más que

Semana Santa

Page 12: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200810

los hombres, lo que nunca se había visto. Parecían haberse olvidado de que María mi Madre también estaba con ellos y con ellas y de que era la que más sabía de todo, si bien se mantuviera en silencio.

Al atardecer del mismo día, mientras tenían las puertas de la casa cerradas por temor a los judíos, entré en el recinto, donde estaban reunidos mis discípulos y les dije: “La paz esté con vosotros, soy yo, no temáis”. Ellos se quedaron del todo sobresaltados y despavori-dos ante mi presencia, completamente inesperada en aquel momento y en aquel lugar, lleno hasta ese ins-tante de palabras dubitantes. Pienso que alguno creyó que era un fantasma o algo semejante. Tantas veces los hombres creeréis que soy otra cosa que yo mismo porque no sabéis mirarme en el de-venir cotidiano de la vida.

Pero en fin, eché una mirada compasiva y son-riente al grupo, a quienes tanto que-ría porque eran los míos, y los de siempre, pobres hombres descon-certados por el misterio de la cruz y de la sepultu-ra, como los de Emaús, y les pregunté por qué estaban tumbados y a qué venían esas contradicciones en sus espíritus al pensar en mí.

Y para demostrarles que era el mismo de an-tes, extendí mis manos y levanté la túnica de mis pies y hasta la retiré de mi torso para que pudieran ver las huellas de la Pasión cruenta en mi propio cuerpo, cicatrices inevitables. Les enseñé que era necesario palparme para acabar con la tentación de creerme un espíritu extraño y no el Señor Jesús con el que habían convivido.

Inmediatamente, me acerqué todavía más a ellos para reanimarles su falta de fe en quienes me habían visto ya resucitado, y les pregunté, como prueba definitiva de la realidad, si tenían algo que comer porque tenía apetito. Ellos entonces me ofre-cieron pescado y miel, y al acabar de comer les invité a acompañarme con lo que restaba.

Después les recordé cómo todo lo sucedido formaba parte del testamento antiguo, y les ayudé interiormente a que comprendieran mejor lo escrito sobre el Mesías y Salvador en los textos sagrados, lo que escucharon con los ojos consternados.

Volví a entregarles la paz, mi señal de identidad definitiva, e hice descender sobre ellos el Espíritu que había prometido en la Última Cena, con estas pala-bras: “Recibid el Espíritu Santo, a quienes perdonéis los pecados, perdonados les quedan, y a quienes no, perdonados no les quedan”. Sobrecogidos por tales palabras y por la situación creada, me fui.

Este día lo acabé con mi Madre María. Cuan-do llegué, estaba sentada en silencio, como si espe-

rara mi vista. Nos besamos y me dijo que intuía que las cosas no deberían concluir así.

Pasé la no-che en casa de María Madre, con algunos discípulos custodiándola. A solas en mi habi-tación, pensaba en tantas cosas pasa-das juntos, desde Nazaret hasta la sepultura. Cómo mecía mi cuna.

Cómo me acunó todavía con mayor fervor en la casa de Belén. Cómo vivimos la aventura de Egipto. Cómo jugaba con ella en mi adolescencia, mientras José me iniciaba en la Escritura según la voluntad del rabino de la sinagoga. Cómo hablábamos en mi juventud sobre lo divino y lo humano. El dolor que sintió cuando mi marcha, que le anuncié una no-che a solas. Y tantos momentos durante los meses de proclamación de la Palabra, que era yo mismo, y tantos consejos como fuera capaz de darme desde la experiencia del embarazo, que tanto une al hijo con la madre hasta crear entre ambos una connivencia sensitiva.

Pensaba en todo esto con una alegría enor-me y una paz infinita por haberle podido participar la gloria de mi propia resurrección. Fue una noche muy especial. Mi primera noche tras retornar huma-namente de la muerte a la vida.

Semana Santa

Page 13: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 11

LA ELEGIDA DE DIOS

“Alégrate llena de gracia, el Señor está contigo” (Lc 1, 28).

Es difícil en nuestros días no haber oído hablar de todo lo que aconteció en Lourdes a una joven muchacha de nombre Bernadette Soubirous Casterot. Nacía el 7 de enero de 1844, era la mayor de varios hermanos. Vivían en un viejo molino húmedo y miserable que fue debilitando su salud. Era el otoño de 1855 cuando el cólera invadió Europa, Bernadette es atacada por esta epidemia que le dejara un asma persistente.

«En aquellos días se puso María en cami-no, y fue de prisa a la montaña, a una ciudad de Judá» (Lc 1, 39).

El 11 de febrero de 1858 algo trascendental haría cambiar y marcaría no solo la vida de Berna-dette si no la de muchas mujeres y hombres de fe. Lourdes se convierte en esa nueva ciudad de Judá.

Era un día gris y lluvioso. Ber-nardette, contaba con 14 años y había salido hacia el rió Gave junto a su her-mana y una amiga que iban en busca de leña y Bernardette se encontró con el “fuego” del milagro y de la gracia: la aparición de una Señora blanca y resplandeciente, a quien ella llama “Aqueró”, a quien vería, a quien rezaría y con quien hablaría en 18 ocasiones. Estos acontecimientos marcarían para siempre su vida.

Es jueves 25 de marzo (XVIª Aparición), cuando por fin la visión revela su nombre. Bernardette cuenta: “Levantó los ojos hacia el cielo, juntando en signo de oración las manos que tenía abiertas y tendidas hacia el sue-lo, y me dijo: QUE SOY ERA INMACULADA COUNCEPCIOU”.

Fue repitiendo aquellas palabras que no en-tendía por el camino para que no se le olvidaran y así poder transmitirlas al párroco que tantas veces le

había insistido en el nombre de la aparición.Unos años antes el 8 de diciembre de 1854

Pío IX había declarado dogma de fe la Inmaculada Concepción de María, que por una gracia singular de Dios, María fue preservada de todo pecado desde su concepción.

“...declaramos, proclamamos y definimos que la doctrina que sostiene que la beatísima Virgen María fue preservada inmune de toda mancha de la culpa original en el primer instante de su concepción por singular gracia y privilegio de Dios omnipotente, en atención a los méritos de Cristo Jesús Salvador del género humano, está revelada por Dios y debe ser por tanto firme y constantemente creída por todos los fie-les...” (Pío IX, Bula Ineffabilis Deus, 8 de diciembre de 1854)

¡Bienaventurada la que ha creído que se cumplirán las cosas que se le han dicho de parte del Señor! (Lc1, 45)

Tras las apariciones, en julio de 1866, comenzó su noviciado en la Comunidad de Hijas de la Caridad de Nevers y el 22 de septiembre de 1878 pronunció sus votos.

Un día llegó a visitarla un obispo que iba camino de Roma. Bernadette escribe una carta al Santo Padre para que le enviara una bendición. El Obis-po llevó la carta a Roma y al regresar de la Santa Sede este Obispo le trajo una especial bendición del Papa y un crucifijo de plata que le enviaba de re-galo, era el 15 de abril de 1879. Al día

siguiente, el 16 de abril de 1879, con apenas 35 años, murió.

“Mi alma glorifica al Señor, y mi Espíritu se regocija en Dios mi Salvador, porque ha mi-rado la humildad de su sierva, por eso todas las generaciones me llamarán bienaventurada” (Lc1, 46-48)

Acontecimientos históricos de la Iglesia

Apariciones de Lourdes150 aniversario

Page 14: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200812

LAS APARICIONES

“Una mujer vestida de sol, la luna por pe-destal, coronado con doce estrellas“ (Ap 12, 1).

“Si no lo veo no lo creo” es una expresión que desde los tiempos del apostol, Santo Tomás, ha recogido la expresión humana (Jn 20, 24-29). Necesito ver para creer, necesito tocar para aceptar, necesito probar para saber, necesito tener certezas para avanzar. La dinámica del evangelio es otra: “dichosos los que creen sin haber vis-to”. Creo, Señor, pero aumen-ta mi fe.

Algo similar ocurre en tiempo de las apariciones, la gente empieza a seguir a Ber-nadette, quieren ver y escuchar, desconfían al igual que el pá-rroco de Lourdes, al igual que aquellos que se burlan. Contra todo pronóstico esta niña frá-gil y débil se mantiene firme, a pesar de ser tentada ella vence toda tentación.

En las apariciones que tuvieron lugar entre el 11 de febrero al 16 de julio, se escucharon las si-guientes palabras de María a Bernadette: “oración y penitencia”, “rezad por la conversión de los pecado-res”, “ve a beber y lávate en la fuente”, “que yo soy era la Inmaculada Concepción”, “que se venga aquí en procesión y se construya una Iglesia” y “no pro-meto haceros felices en este mundo sino en el otro”.

Y estas palabras irán transformando el corazón de la gente. No es necesario ver y tocar si se vive con la fe y con la esperanza de resucitar con Cristo a una nueva vida, esa nueva Pascua donde la muerte se confesara servidora de la vida.

En María se cumple la promesa de salvación que Dios hizo a todos los hombres, y es en ella don-de todo hombre puede ver resplandecer la gloria de Dios.

Andábamos perdidos y María sale a nuestro encuentro para rescatarnos de la oscuridad.

La vida pública de Jesús se inicia con un mila-gro producido por la intercesión de María: la boda de Caná. Desde entonces María, sigue intercedien-do por cada uno de nosotros. Que mejor milagro que la oportunidad que se nos ofrece constantemente del

perdón, nos invita a terminar con nuestras infidelidades, con nuestros pecados, nos anima a la conversión, quiere que rom-pamos con nuestro pasado que seamos también criaturas nue-vas de Dios.

La oración se hace presente desde el primer momento, Bernadette reza el rosario con la Señora, y esta le pide: ¡Penitencia! …reiteradamente. Ruega a Dios por los pecadores. Lourdes es un lugar para reconciliarse con Dios, desde nuestra sinceridad Dios nos escucha y perdona. Esto nos lleva a una nueva vida con Cristo, recibir las aguas de Lourdes es reforzar las aguas del bautismo es entrar a la Iglesia

-en comunión con Cristo entramos en comunión con la Iglesia-, ser miembros en plenitud del cuerpo vivo de Cristo que es la Iglesia, donde se participa y se viven los sacramentos, donde se comparte, donde se vibra, donde se ama. La IGLESIA es nuestra casa donde nos sentamos en torno a una misma mesa para compartir el pan y vino de salvación al mismo Cristo que se hace presente en medio de nosotros.

Es impresionante participar del ofrecimiento de Cristo a los hombres, de Cristo que se hace Euca-ristía por los hombres, el Cristo que se entrega para liberarnos de nuestros pecados, el que se humilla y carga con el peso de la cruz, de tu cruz, de nuestra cruz.

La Procesión Eucarística de la tarde nos lleva a reflexionar sobre Cristo crucificado. En Lourdes los enfermos son los privilegiados Dios quiere hacer visible en ellos el rostro de Cristo resucitado, su son-

Acontecimientos históricos de la Iglesia

Page 15: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 13

risa, su serenidad, su esperanza ¡te hacen pensar!

En cada uno de nosotros se realiza un pequeño prodigio quizás no tan impactantes como el paralí-tico que empieza a caminar, o del ciego que vuelve a ver, o del que recobra el habla o el oído, o del que supera una enfermedad terminal, en Lourdes uno vuelve a descubrirse a sí mismo, a oír y escuchar el latido del corazón, a ver desde la fe.

Lourdes es un milagro constante, desde el mi-lagro del silencio, el milagro de la comprensión, el milagro de la esperanza, el milagro de la perseve-rancia, el milagro de la paciencia, el milagro de la confianza, el milagro del entendimiento, el milagro del arrepentimiento, el milagro del amor, María en cada momento de nuestros días intercede por ti ahí, aquí y en todo lugar.

En Lourdes se realiza el milagro permanente de la oración, el milagro prodigioso de la peniten-cia, el milagro inmenso de la intercesión de María, el milagro multitudinario de la peregrinación, el mila-gro espléndido de sentirnos parte, miembros de una misma IGLESIA UNIVERSAL.

DE UN GESTO NACE LA HOSPITALIDAD

Desde el primer momento la Virgen quiere que se acuda en procesión, y ese primer grupo de gente que seguía a la niña hasta la Gruta de Massa-bielle fue incrementándose de centenares pasaron a miles y hoy se cuentan por millones, de todas partes del mundo acuden a este lugar para alcanzar la gra-

cia, el encuentro con María.

Bernadette lleva a la gruta una vela encendida, así nacerá la costumbre de llevar velas para encen-derlas ante la Gruta siendo el inicio de la procesión de las antorchas, esos miles de velas forman una es-tela de luz que en su recorrido nos lleva a meditar y reflexionar con el rezo de los misterios del Santo Rosario y buscar repuesta en nuestro interior desde el recogimiento: ¿como es mi vida?, ¿cómo es mi fe?,

¿qué estoy haciendo por mi prójimo?, …

La Hospitalidad de Lourdes en Fran-cia comenzó en 1880, cuando el Vizconde de Roissy de Sales encontrándose en la es-tación acudió en ayuda de un enfermo que descendía de un tren con dificultad. El en-fermo necesitaba de alguien que empujara su carrito hacía la gruta y el vizconde se ofreció amablemente a acompañarle, fue su gesto fundador que motivado únicamente por amor contagio a otras personas. Du-rante el trayecto se encontraron con dos hombres que volvían de una boda, los dos le ayudaron a empujar el carrito hacía la

gruta. La Hospitalidad había nacido, y aquellos fundadores se dijeron: “Haremos como los caba-lleros hospitalarios de San Juan, por los enfermos de Jerusalén”.

Atendiendo a las peticiones de la Virgen, es a partir del año 1910, cuando se promueven las pri-meras peregrinaciones a Lourdes con enfermos des-de Valencia, organizadas por la Congregación de la Virgen de Lourdes que tenía su sede en la Iglesia de Santa Catalina. Anteriormente en varias ocasio-nes Valencia se había unido a Barcelona, culminan-do con una gran peregrinación nacional organizada desde Valencia en 1887.

En el año 1927 se crea la Hospitalidad valen-ciana de Ntra. Sra. de Lourdes, adscrita a la Hospi-talidad Francesa. Además de la tradicional peregri-nación a Lourdes con enfermos, en cuatro ocasiones lo hicieron a Roma en la etapa de 1927-1936. La guerra civil interrumpió su actividad, hasta que en el año 1954 se reiniciaron de nuevo las peregrina-ciones, siempre a finales de junio y promovidas por antiguos hospitalarios.

Acontecimientos históricos de la Iglesia

Page 16: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200814

L’ALCÚDIA:

UNA COMUNIDAD QUE SE ENTREGA

Es en 1991 cuando se organiza desde la Hos-pitalidad una peregrinación especial para jóvenes durante el mes de octubre (del 8 al 13) además de la ya tradicional de junio, estas se realizarían duran-te ocho años. La semilla daría sus frutos y l’Alcúdia hoy cuenta con un importante grupo de hospitala-rios que año a año participan de la peregrinación de la Hospitalidad Valenciana con enfermos.

En años anteriores gente de l’Alcúdia había par-ticipado a titulo individual en las peregrinaciones con enfermos, también Don Arturo que durante algunos años y desde 1987 organizó para jóvenes peregrinacio-nes parroquiales y varios grupos pudimos disfrutar y conocer lo que es Lourdes vivido desde la fe.

De ese grupo de jóvenes saldrán los que mo-tivados por el amor a María harían posible que l’Alcúdia participara de esas peregrinaciones de la Hospitalidad. A nuestro favor es poder contar con la “Mare de Déu de l’Oreto” que enciende nuestra de-voción mariana, l’Alcúdia conoce a su madre, sabe de su amor, de su entrega, de su dedicación hacía “tots els alcudians” y es por eso que para nosotros es más fácil entender Lourdes.

Es Cristo quien para indicar el sentido de su Pasión, y consecuentemente de su vida, lavó los pies de los discípulos. Es el mismo Cristo quien dijo: “Lo que hicisteis con uno de estos mis humildes her-manos, conmigo lo hicísteis.”

El hospitalario voluntariamente adquiere un compromiso con y para el enfermo, todos somos necesarios: desde el que se inscribe en transporte para acompañar a los que tienen limitada su movi-lidad para desplazarse y participar de los distintos actos, empujando y arrastrando el típico carrito de Lourdes o la silla de ruedas; del que está en sala, pendiente del aseo personal, de levantar y acostar, ayudando a vestir y desvestir al enfermo y de que se tome la medicación correspondiente, de que todo esté limpio y en orden en las habitaciones; del que en el comedor ayuda a distribuir el alimento, a dar de comer. Del que presta el servicio en piscinas, prepa-rando y tranquilizando a todos los que se disponen a recibir las aguas, acompañándoles en la oración y pidiendo la intercesión de la Virgen para que se les conceda la gracia que desean alcanzar. También es importante participar y asistir a los distintos actos organizados como peregrinos.

Todos te dan su mejor sonrisa y con ella su agradecimiento, te miran y esa simple mirada es su-ficiente para comprender que todas esas cosas sen-cillas que nacen de la humildad, son un regalo del amor, el Hijo del hombre no ha venido a ser ser-vido sino a servir (Mt 20, 28).

ESTAMOS DE CELEBRACIÓNEste año 2008 es un año especial por doble

motivo, la Hospitalidad celebra su 75 peregrinación (a realizar del 26 al 31 de junio) y por la celebración del 150 aniversario de las apariciones.

“¿Quieres hacerme el favor de venir aquí du-rante quince días?”, “Vaya a decir a los sacerdotes que se construya aquí una capilla y que se venga en

Acontecimientos históricos de la Iglesia

Peregrinación de Jóvenes con la Hospitalidad Octubre de 1991

Page 17: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 15

procesión”, “Yo soy la Inmaculada Concepción”. Es-tas pocas palabras bastaron para que Lourdes en la actualidad sea un punto de encuentro de todos los continentes donde vivir con fuerza y nacer a una fe renovada, estas pocas palabras son para la humani-dad una puerta abierta al cielo, una puerta a la espe-ranza.

“La conmemoración del 150 aniversario del día en que María Santísima, revelando a Bernadette Soubirous que era la Inmaculada Concepción, quiso que se erigiese y venerase en Massabielle, cerca de

Lourdes, un santuario que evoca la serie innumera-ble de prodigios, mediante los que la vida sobrena-tural de las almas y la salud de los cuerpos se han beneficiado de la bondad omnipotente de Dios”.

“Para que de esta conmemoración se deriven frutos crecientes de santidad renovada el sumo pon-tífice Benedicto XVI ha establecido la concesión de la indulgencia plenaria” a los fieles según las condi-ciones habituales (arrepentimiento, confesión de los pecados, comunión y oración por las intenciones del Papa).

Que sea también este nuestro momento de oración, nuestro Lourdes particular y compartamos el rezo del AVE MARIA:

Dios te salve, María; llena eres de gracia; el Señor es contigo: bendita tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.

Santa María, Madre de Dios, ruega por todos

aquellos que desde una habitación de un hospital esperan recuperarse y regresar a casa, por los enfermos para que Cristo les de salud.

Santa María, Madre de Dios, ruega por el que no puede ver, por el que no puede oír y hablar, por el que no puede andar y tiene que valerse de una silla de ruedas, por el que tiene que permanecer postrado en una cama, que Cristo de consuelo a todos los que en silencio sufren.

Santa María, Madre de Dios, ruega por todos los jóvenes para que sepan encontrar el verdadero camino que los libere, a descubrir al Cristo del amor.

Santa María, Madre de Dios, ruega por todos los padres que esperan especialmente durante el fin de semana el regreso de sus hijos, que Cristo les traiga la

paz del que se siente protegido y acompañado.Santa María, Madre de Dios, ruega por

todos nuestros hermanos que vienen de otros países y continentes, ante Cristo todos somos iguales.

Santa María, Madre de Dios, ruega por todos los que viven en la desesperación del que no encuentra trabajo, del pobre, en ellos Cristo quiere ser servido

Santa María, Madre de Dios, ruega por todos los que sufren los maltratos tanto físicos como sicológicos, que el Dios de justicia les de fortaleza y valentía para denunciar toda violencia y abuso.

Santa María, Madre de Dios, ruega por todos aquellos que nos insultan, que nos desprecian, que nos ridiculizan y burlan, que el Cristo de la fe nos mantenga firmes en nuestro credo.

Santa María, Madre de Dios, ruega por nuestra comunidad, por nuestros sacerdotes, por la Iglesia, el cuerpo vivo de Cristo.

Santa María, Madre de Dios, ruega por todos los que ya partieron de este mundo, acógelos y hazlos participar eternamente de la gloria con Cristo, tu Hijo y Dios nuestro.

... ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén

Acontecimientos históricos de la Iglesia

Page 18: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200816

Lourdes no es solamente un lugar de peregrinación.

Lourdes está en peregrinación porque forma parte de la IGLESIA y la IGLESIA está en marcha, en peregrinación. Es por lo que durante este año jubilar se realizan doce misiones una por cada mes:

Doce misiones para nuestro tiempo

1. La Iglesia en misión con los voluntarios,para el servicio de los demás.2. La Iglesia en misión con María.3. La Iglesia en misión entre los jóvenes.4. La Iglesia en misión para la unidad de loscristianos.5. La Iglesia en misión para llamar a la conversión.6. La Iglesia en misión para los enfermos.7. La Iglesia en misión para los discapacitados.8. La Iglesia en misión entre las naciones.9. La Iglesia en misión por la paz.10. La Iglesia en misión, alimentada por laEucaristía.11. La Iglesia en misión para el encuentrointerreligioso.12. La Iglesia en misión para los marginados.

Lourdes debe responder, por tanto a las llamadas que el Espíritu Santo dirige a la Iglesia de nuestro tiempo.

CAMINO DEL JUBILEO El Camino del Jubileo se compone de cua-

tro etapas:

1. La iglesia parroquial, donde se conserva la pila bautismal en que fue bautizada Bernardita, 2. El Calabozo, donde vivía la familia Soubirous 3. La puerta San Miguel, los arcos y la Gruta.4. El Oratorio del hospital, donde Bernardita hizo la Primera comunión, entre la 17ª y la 18ª aparición.

El Papa Benedicto XVI ha tenido la bondad de otorgar un favor especial al Camino del Jubileo: “la indulgencia plenaria”, con las siguientes condi-ciones:

1. Confesarse, 2. Comulgar, 3. Rezar por las intenciones del Papa 4. En cada etapa del Camino, «detenerse du-

rante un tiempo conveniente, recogiéndose en fer-vorosa meditación y concluir ese tiempo rezando:

- el Padrenuestro.- el Credo.- la oración del Jubileo, u otra oraciónmariana.

Pascual Crespo Arcón

Acontecimientos históricos de la Iglesia

En cada etapa, se les entregará una pegatina con la que podrán completar su in-signia y conservar un recuerdo del camino realizado.

Page 19: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 17

Aquest escrit està fet amb molta il·lusió, però, la veritat, és que amb una miqueta de por, per si de cas no sabem transmetre-vos totes les coses que volem dir-vos mitjançant aquest article.

Fa molts anys que, com que a ser pares no ens ensenya ningú i, de vegades amb la bona voluntat no hi ha prou, la parròquia va fer l’esforç per posar al nostre abast unes sessions agrupades per cursos anomenats “ESCOLA DE PARES” de la qual formem part des de fa ja un grapat d’anys. Han passat molts conferenciants per aquestos cursos i és curiós com tots coincideixen en la mateixa cosa: La família és el nucli de la societat i la felicitat dels nostres fills depén en gran manera de com es desenvolupe la seua relació familiar, així ens ho recorda el nostre pontífex “Benet XVI” en el gran encontre de les famílies celebrat a València quan ens deia: “La familia fundada en el matrimonio (i un dels seus més importants fruits, els FILLS) una institución fundamental, es la célula vital, base de la sociedad y esto interesa a los creyentes y a los no creyentes”. Així mateix recordem també com el nostre benvolgut “Joan Pau II” mostrava un interés especial dient-nos: La FAMILIA es una realidad que todos los estados deben tener en máxima consideración, porque el futuro de la humanidad pasa por ella”.

Han sigut moltes sessions que no han pretés,

en cap moment, donar-nos cap lliçó, ni molt menys jutjar-nos: han tractat d’assessorar-nos i ajudar-nos en eixa tasca tan bonica però, al mateix temps, complicada i carregada de responsabilitat com és l’educació d’allò més gran que DÉU ens ha donat: els Nostres fills. Tot i que tots estem d’acord amb açò, posem-nos les piles i fem eixe xicotet esforç que suposa, després de sopar, acudir al Centre Parroquial a agafar eixa força, eixe ànim, a assabentar-nos que tot el que fem no està malament.

S’han tractat molts temes, el curs passat totes les sessions estigueren dedicades al matrimoni, base fonamental de la família: va ser d’allò més enriquidor, va despertar en nosaltres sentiments que moltes vegades s’han adormit. El present curs ha estat dedicat a la preadolescència, etapa dels nostres fills ni més ni menys important en l’educació dels xiquets, fills i joves; deixant ben clar en casa qui es l’autoritat sense imposar, com hem d’educar sense adoctrinar servilment davant la societat i, com no, els hem pogut preparar per a no caure en eixe maleït món de la droga i, sobretot, a respectar i voler els altres. Açò és una xicoteta mostra d’uns cursos

que ens han ajudat a no resignar-nos fàcilment, a comprometre’ns en el desenvolupament i educació dels nostres FILLS en la Fe i en la societat d’avui. “Perquè ells ho valen”.

Per concloure donem les gràcies a Don Paco

per portar endavant aquesta llavor i l’animem a continuar-la, val la pena!; als responsables del curs, a les persones que els imparteixen, per la seu dedicació i simpatia, i als nostres companys de classe que, amb les seues experiències, enriqueixen més si cap aquestes reunions. Fins sempre.

Juan i Chelo. 28-01-2008

Escola de ParesLa Parròquia de St. Andreu Apòstol, Comunitat Viva

Page 20: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200818

La decisión de ir al Encuentro europeo de Taizé en Ginebra este fin de año pasado no fue pre-cipitada. Era un acontecimiento que me atraía, lle-vaba varios años yendo a oraciones estilo Taizé en el colegio El Pilar de Valencia y con varios amigos que habían asistido a estos encuentros que habían veni-do de ellos mejorando las expectativas con las que se habían ido. La información que tenía eran los pro-gramas de los encuentros, y me abrumaba estar cua-tro días en un clima que invitaba a la reconciliación de los cristianos y al de uno mismo con Cristo.

Sólo conocía la faceta de Taizé en cuanto a sus oracio-nes, desconocía esa llamada a la recon-ciliación y al ecume-nismo. Lo que sabía de ecumenismo eran los rescoldos de la semana de la paz en los tiempos del cole, cuando nos hablaban en las clases de reli-gión de las religiones monoteístas y de la subdivi-sión que había en cada una de ellas. Con los años, estos conocimientos se ampliaron con el estudio de los primeros tiempos de las comunidades cristianas, de la Reforma y la Contrarreforma.

Me impresionó el papel de la Iglesia en la fundación de la Europa Cristiana, en el descubri-miento de las tierras; y la vocación que siempre han tenido de llevar el mensaje de Cristo al mundo en-tero. He de decir que este año, conocí un sentido distinto de la palabra “ecuménico”: universal, que se extiende a todo el orbe. También Ginebra era una ciudad mayoritariamente protestante donde se fra-guó gran parte de la Reforma, y la minoría católica estaba formada por inmigrantes españoles, italianos o franceses. Ese crisol de costumbres fue claramen-te enriquecedor al saber que todos perseguimos a un mismo Dios.

De ahí mi nueva visión del ecumenismo. De hecho el Hermano Roger, fundador de la comuni-dad de Taizé, partió en 1940 de Ginebra con el ob-jetivo de que la reconciliación de los cristianos nos llevara a ser fermento de paz en la humanidad.

No obstante, no podemos dejar que este men-saje que hemos escuchado a lo largo del encuentro, se quede en simple “buenísimo” o en una declara-ción de intenciones que nos sirva para aliviar nues-tra conciencia. Hay que pasar a la fase de la acción. Pero, ¿cómo?. La respuesta está en la oración, y en

la misión que Dios dispone para cada uno a la hora de llevar su mensaje. No hay que obviar sin embargo, la situación que vive la vieja Europa que se ha converti-do en una sociedad aneste-siada, adormecida.

Donde prima el yo frente a la colectividad so-cial, se aparta a Dios de nuestra vida, y se potencian

nuevos dioses: los deseos del hombre materializa-dos a través del dinero. La tendencia de una vida sin Dios, se ha convertido actualmente en la acep-tación del todo vale. Una sociedad dirigida por el relativismo moral al que tanto alude Benedicto XVI, que no reconoce las raíces que se han exten-dido a todo el globo.

Ante esta situación desconcertante, escuchas un impulso interior que te dice que algo se puede hacer. Pero para ello deberás desprenderte de to-dos los ruidos y todas las luces que inundan tu vida, deberás cerrar los ojos y dejar que Él te hable. Lle-garás a la conclusión de que para “amar al prójimo como a ti mismo”, deberás quitarte todos aquellos prejuicios que tienes sobre los demás y saber que tu compañero de al lado no es más que otro hijo de Dios buscando su camino en esta vida. Este es el ambiente que predomina el estilo Taizé, vengas

La Parròquia de St. Andreu Apòstol, Comunitat Viva

El encuentro de Taizé en Ginebra

Page 21: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 19

de donde vengas y tengas las creencias que tengas; siéntate, esconde tu cabeza entre tus brazos y deja que los cantos meditativos te lleven a escuchar el mensaje de un Cristo más presente que nunca en tu interior.

¿Qué misterio hace que año tras año alrede-dor de 40000 jóvenes venidos de todo el mundo, principalmente del Este de Europa se sienten a re-

flexionar, paren el ritmo frenético que inunda sus vidas y se planteen qué poder hacer en su día día para mejorar el mundo ayudados de Cristo? Es fácil deducir que a esas opulentas navidades occidentales, a las macrofiestas de fin de año, les falte algo que de sentido a muchas de nuestras vidas. Puede ser que les falte un ideal, una misión de vida, un conoci-miento de que sólo somos instrumentos del Señor para labrar su reino, que sólo pasa por las manos de cada uno el cambiar la situación actual.

El estilo sobrio de las celebraciones invitan a uno a mirar en su interior, a decir qué de maravilloso tenemos cada uno de nosotros que podamos ofrecer a los demás para hacer la vida de los otros mejor. Se trata de desprenderse de toda cuestión material que no sea estrictamente necesaria, para poder mover-

nos con facilidad en estas sociedades tan ligadas a las cuestiones terrenales.

De hecho, los encuentros se engloban en una “peregrinación de confianza sobre la Tierra”. Vas a vivir durante días a casas de gentes que no conoces de nada pero que por el simple hecho de ser par-tícipe de un sentimiento común de hermandad, te abren las puertas de sus casas, de sus vidas y te ayu-

dan a ver que sólo con la confianza en la Providen-cia se puede llegar a los sitios. Es asombroso cómo las familias se desviven para que estés a gusto en sus casas, cómo comparten sus miserias y sus alegrías, cómo dan lo que no tienen.

Lo más reconfortante de estos encuentros, exceptuando la paz espiritual con la que te renue-vas, es la conciencia de que la acción diaria de llevar el mensaje de Cristo, es algo que hacemos muchos jóvenes y que eso vale realmente la pena.

Juan Pablo II decía que “Taizé es una fuente de la que se bebe”, bebamos pues.

Teresa Boils

La Parròquia de St. Andreu Apòstol, Comunitat Viva

Page 22: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200820

+ El diumenge dia 30 de desembre, Solemni-tat de la Sagrada Família, a les 11’30 del matí tingué lloc la celebració de la Missa a en acció de gràcies, amb els matrimonis que han celebrat les Bodes d’Or i d’Argent. En esta celebració participaren especial-ment 29 matrimonis que al llarg de l’any 2006 havien celebrat el vint-i-cinc ani-versari del seu casament, i 15 parelles que havien fet les bodes d’or del seu ma-trimoni.

+ El passat any 2007, se celebraren a la nostra Parròquia 109 batejos, 57 confirmacions, 28 matri-monis, i 102 funerals.

+ Com és ja una tra-dició a la nostra Parròquia, els dies 4, 5 i 6 de gener, celebràrem les QUARANTA HORES.

+ Coincidint amb la festivitat del Baptisme del Senyor, que se celebrà el diumenge dia 13 de gener, 4 xiquets reberen el sagrament del Bateig, en la Missa de les 11’30 del matí.

+ El 17 de gener, festivitat de Sant Antoni Abat, en l’Ermita plena de gent, a les 10 del matí, ce-lebràrem la aMissa en acció de gràcies a Sant Antoni, amb la tradicional Benedicció del Pa.

+ El dissabte dia 19 i el diumenge dia 20, en les celebracions de l’eucaristia, commemoràrem el 756 aniversari de la Fundació de la Parròquia.

+ El diumenge dia 20, després de la festa de Sant Antoni Abat, i a la porta de l’Ermita, tingué lloc la tradicional Benedicció d’animals.

+ Seguint la programació de la catequesi de Confirmació, els divendres dia 25, els joves de 2n curs, gaudiren de la visita guiada al nostre Temple parroquial.

+ En les dues misses del dissabte dia 2 de febrer,

celebràrem la festa de la Candelària, amb la benedic-ció de candeles. Començàrem la Missa encenent les candeles dins l’església, i a continuació amb la oració i benedicció de les candeles.

+ Més prompte que altres anys, enguany el dia 6 de febrer, començà la Quaresma. I com és tradi-ció, començàrem amb la imposició de la cendra en les misses d’eixe dia.

+ I amb la Quaresma, tots els divendres, a les 4 de la vesprada, hem cele-brat el exercici del Viacru-cis al Calvari Parroquial.

+ Un any més, el di-

vendres dia 8 de febrer tin-gué lloc el tradicional Sopar de la Fam a la Sala Jucais de l’Alcúdia. En la venda dels tiquets s’arreplegaren 1.745 euros, en la rifa 1.000 euros, que units als 1.900,29 euros de les col·lectes del cap de setmana, s’han lliurat a l’Organització Mans Uni-

des un total de 4.645,29 euros.

+ A més, enguany hem volgut unir-nos a les necessitats dels habitats de Kenya, i hem enviat 6.000 euros, de les aportacions al compte de la Caixa Rural Caritas Ajuda a damnificats.

+ El dilluns dia 11 de febrer, festivitat de la Mare de Déu de Lourdes, i Dia del Malalt, un grup de 172 malalts i persones majors, participaren en la celebració de l’Eucaristia, de les 5 de la vesprada, en la que tingué lloc també la Celebració Comunitària del Sagrament de la Unció dels Malalts.

+ Seguint el programa de restauracions de la nostra Parròquia, s’està procedint a la restauració de les portes de fusta del cancell del temple parroquial.

Notícies Breus

Page 23: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 21

MES DE MARÇ

DIUMENGE DE RAMS.A les 9 del matí, Missa.A les 11 del matí, BENEDICCIÓ DE PALMES I RAMS al Calvari Parroquial, i processó fins al tem-ple, on se celebrarà l’Eucaristia.

CONFESSIONSDilluns, dimarts i dimecres, de 6 a 8 de la vesprada. El Dijous Sant no hi haurà confessions.

DIJOUS SANTA les 5, i a les 7 de la vesprada: MISSA DEL SOPAR DEL SENYOR.A les 11 de la nit, Solemne Hora Santa.

DIVENDRES SANTA les 6’30 del matí, VIACRUCIS al Calvari Parro-quial.Vetla davant del Santíssim:A les 10 del matí: Grup “Santa Bàrbara”.A les 11 del matí: Grup “Amics del Corpus”.A les 12 del matí: Grups d’oració “Santa Clara” i “Santa Llúcia”.A la 1 del migdia: Jóvens de Confirmació, educadors Júniors, catequistes jóvens i demés jóvens de la Pa-rròquia.A les 2 de la vesprada: Grup “Sant Josep” i Adoració Nocturna.A les 3 de la vesprada: Grup “Santa Teresa” i Adora-ció Nocturna.A les 6 de la vesprada, CELEBRACIÓ DE LA PAS-SIÓ DEL SENYOR. La col·lecta d’este dia serà per a l’Església Mare de Jerusalem.A les 9’45 de la nit: PROCESSÓ DEL SANT SO-TERRAR DEL SENYOR.

DISSABTE SANTA les 11 de la nit, SOLEMNE VIGÍLIA PAS-QUAL.

DIUMENGE DE PASQUAA les 9 del matí, Missa.A les 10’30 del matí, PROCESSÓ DEL SANT EN-CONTRE i MISSA SOLEMNE DE PASQUA.

Dilluns 31 de març,FESTIVITAT DE SANT VICENT FERRER, missa a les 8’30 del matí i a les 8 de la vesprada.

Amb el canvi de l’hora de l’últim cap de setmana de març, canvia també l’horari de misses que afecta sols a les misses dels dissabtes, que seran a les 6 i a les 8’30 de la vesprada. La resta de dies seguirà igual fins a juliol.

MES D’ABRIL

Divendres 11 d’abril, a les 8 de la vesprada: Ce-lebració del SAGRAMENT DE LA CONFIRMA-CIÓ.

Diumenge 13, a las 6’30 de la vesprada, Celebració Comunitària del SAGRAMENT DEL BAPTIS-ME.

Dilluns 14, vigília de l’ADORACIÓ NOCTUR-NA.

MES DE MAIG

Diumenge 4,SOLEMNITAT DE L’ASCENSIÓ DEL SEN-YOR. Després de la missa de les 9 del matí, BENEDIC-CIÓ DELS TERMES.Primer torn de COMUNIONS, en la Missa de les 11’30 del matí.

Dissabte 10, les 8’30 de la vesprada, VIGÍLIA DE PENTECOSTÉS.

Diumenge 11,SOLEMNITAT DE PENTECOSTÉS. Segon torn de COMUNIONS, en la missa de les 11’30 del matí. A las 6’30 de la vesprada Celebració Comunitària del Sagrament del Baptisme.

Dilluns 12, vigília de l’ADORACIÓ NOCTUR-NA.

La Parròquia Organitza

Fes un lloc a l’agenda! SETMANA SANTA

Page 24: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200822

Diumenge 18, SOLEMNITAT DE LA SANTÍS-SIMA TRINITAT. Tercer torn de COMUNIONS, en la missa de les 11’30 del matí.

Diumenge 25SOLEMNITAT DEL CORPUS CHRISTI.Dia Nacional de Caritat. A les 7 de la vesprada Missa i a continuació Solemne Processó.

Divendres 30,SOLEMNITAT DEL SAGRAT COR DE JESÚS.

MES DE JUNY

Del 2 al 6 de Juny,CURSET PREMATRIMONIAL.

Diumenge 8, a las 6’30 de la vesprada. Celebració Comunitària del Sagrament del Baptisme.

Dilluns 9,ADORACIÓ NOCTURNA.

Divendres 13, Festa de SANT ANTONI DE PÀ-DUA.

Dimarts 24, festa de SANT JOAN BAPTISTA.

Diumenge 29, festa de SANT PERE I SANT PAU.

MES DE JULIOL

Canvia l’horari de les Misses dels diumenges i fes-tius, a les 9 del matí i a les 8 de la vesprada.

Dijous 10, festa de SANT CRISTÒFOL.

Diumenge 13, a las 6’30 de la vesprada, Celebració Comunitària del Sagrament del Baptisme. Dimecres 16, festa de la MARE DE DÉU DEL CARME.

Divendres 25, festa de SANT JAUME APÒS-TOL.

La Parròquia Organitza

Imatge de Sant Cristòfolrecentment restaurada.

Imatge de Sant Joan Baptista,recentment restaurada.

MES D’AGOST Divendres 15, festa de l’ASSUMPCIÓ DE LA MARE DE DÉU.

Dissabte 16, festa de SANT ROC.

Dissabte 30, festa de SANTA ROSA.

Page 25: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 23

“Quisiera decirles que se dejen iluminar por la bon-dad de la Santísima Virgen y aprendan de la ternura de su amor por su hijo Jesús”. Así empezaba Benedicto XVI su discurso ante una delegación de Ayuda a la Iglesia Necesitada.

‘AIN’ es una asociación que depende de la San-ta Sede. Fue fundada en 1947 por el Padre Werenfreid van Straaten, monje holandés, conocido mundialmen-te por el cariñoso nombre de Padre Tocino por la in-mensa cantidad de tocino que repartió a los refugia-dos de la II Guerra Mun-dial en Europa Central.

Su finalidad es eminentemente pastoral: a través de la oración, la información y el apoyo económico, asisten a los cristianos perseguidos, necesitados, así como a los refugiados, víctimas de guerra y de catástrofes naturales, sin distinción de raza o religión.

Hemos podido hablar con el responsable del de-partamento de comunicación de AIN ESPAÑA, Javier Fariñas, y nos ha facilitado mucha información sobre la actividad de la asociación, su historia y los datos más importantes. Además, nos ha enviado una entrevista realizada a la presidenta en España, Maria del Pilar Gutiérrez Corada, en la que se sincera y habla sobre cuestiones relacionadas con la ayuda humanitaria que va acompañada, como es el caso de AIN, de ayuda es-piritual y cristiana.

A la pregunta por qué debemos ayudar a la Igle-sia de tercer mundo, ella responde con una frase de la primera Carta a los Corintios, en la que San Pablo de-cía: “Si un miembro sufre, todos los demás sufren con él”. Añade que es “necesaria nuestra oración y nuestro aporte material”.

Hasta ahora parece que estamos hablando de una de las muchas ONG’s que existen en el mundo, pero Maria Pilar nos aclara que AIN “es una asocia-ción de la Iglesia Católica que depende directamente de la Santa Sede, en concreto de la Sagrada Congre-gación del Clero”.

Asimismo, deja claro que ayudan a los que ayu-dan, es decir, a la Iglesia que está y vive con y como los más pobres. Pero aunque la ayuda es esencialmen-te pastoral, nunca olvidan una frase de su fundador, quien dijo que no le gustaba predicar “a estómagos vacíos”. Es por ese motivo que tampoco olvidan las necesidades humanas.

El último proyecto de la asociación, “Con los cris-tianos de Bosnia”, pretende reconstruir parroquias, reha-

bilitar conventos y escuelas, además de proporcionar ayuda a los misioneros, ca-tequistas y sacerdotes que viven y dedican su vida a lu-char por sus feligreses, que aunque son pocos, aseguran que son “muy activos”.

Ayuda a la Iglesia Necesitada pretende ser en todo momento transparen-te en su gestión, transmitir confianza, y la certeza de

que todo donativo llegará a las manos de nuestros her-manos, en definitiva, a las manos de Cristo.

Después de que en 2003 falleciera el Padre fun-dador, AIN continúa y, día tras día intenta responder a las necesidades de la Iglesia que sufre. El año pasado se aprobaron 6.000 proyectos en más de 130 países del mundo.

Nuestra Parroquia, en las Navidades de 2006 colaboró por primera vez en la campaña “Ayuda a los cristianos de Irak” y este año pasado con la mencionada campaña “Con los cristianos de Bosnia”, por ello hemos recibido una carta en la que nos agradecen todo el apo-yo recibido y nos piden que nunca olvidemos la labor de dar a conocer su obra a nuestras familias y amigos.

Porque en definitiva, todos somos hijos de un mismo Padre, y como dice el lema de la asociación, nosotros “SOMOS SU ESPERANZA”.

Nuria Moreno Amat

Tfno.- 902 636 737 Correo electrónico: [email protected] Nº cta. Banco Santander 0049-2674-59-2814342966

Conciencia Solidaria

Ayuda a la Iglesia Necesitada“SOMOS SU ESPERANZA”

Page 26: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200824

DATOS HISTÓRICO-GEOGRÁFICOSGeografía: Kenia es

un país situado en el este de África. Su capital es Nairo-bi.

La superficie total de Kenia es de 582.650 km², y cuenta con 536 km de costa en el Océano Índico. El cli-ma es tropical en la costa y árido en el interior.

El Monte Kenia, que da nombre al país, se encuentra en el centro del terri-torio, al norte de Nairobi, y es la cumbre más alta del país y la segunda de África, tras el Kilimanjaro. Este último está también parcialmente en Kenia, si bien su cumbre más alta se encuentra en su totalidad en el te-rritorio de Tanzania.

Demografía: En el año 2007, Kenia tenía una población de 36.913.721 habitantes. La esperanza de vida es de 55 años. El promedio de hijos por mujer es de 4,82. El 85,1% de la población está alfabetizada.

Kenia es un país de gran diversidad étnica, en total 40 etnias diferentes. La tensión entre ellas ha sido una de las principales fuentes de conflictos en el país. Los grupos étnicos son éstos: kĩkũyũ 22% (tribu del Presidente Kibaki), luhya 14%, luo 13% (tribu del líder de la oposición, Odinga), kalenjin 15%, kamba 11%, kisii 6%, meru 6%, otros grupos africanos 12%, no africanos (asiáticos, europeos y árabes) 1%.

Grupos religiosos: protestantes 38%, católicos romanos 28%, musulmanes 6%, religiones tradicionales 22%. Otras religiones inclu-yen el hinduismo, el jainismo y la fe bahá’í.

Economía: El turismo es la principal fuente de ingresos, aunque tiene la indus-tria más diversificada de África Oriental. Entre los cultivos (30% del PIB), destacan el café y el té. El principal puerto del país es Mombasa. La Unión Europea es el princi-pal socio comercial de Kenia.

Historia: La historia colonial de Ke-nia comienza con el establecimiento de un protectorado alemán sobre las posesiones

costeras del sultán de Zanzíbar en 1885, seguido por la llegada de la Compañía Británica de África Oriental en 1888. La incipiente rivalidad imperial terminó cuando Alemania otorgó sus posesiones costeras a Gran Bre-taña en 1890, a condición de que ésta respetase su do-minio sobre sus recientemente adquiridas posesiones en la actual Tanzania.

A partir de octubre de 1952 y hasta diciembre de 1959, Kenia se mantuvo bajo un estado de emer-gencia surgido de una rebelión en contra del domi-nio británico. A pesar de las esperanzas británicas de otorgar el mando de la nación a un grupo de líderes africanos “moderados”, fue la Kenya African National Union (KANU, Unión Nacional Africana de Kenia) de Jomo Kenyatta la fuerza política que formó el pri-mer gobierno tras la independencia de Kenia el 12 de diciembre de 1963.

Tras la muerte de Kenyatta en 1978, Moi lo sucedió en la presidencia pero, en 1982, prohibió los partidos de la oposición y declaró un régimen de par-tido único. Las presiones internacionales llevaron al restablecimiento de una democracia multipartidista en 1991. Moi ganó las elecciones presidenciales de 1992 y 1997. En el año 2002, Moi no se podía presentar debido a la limitación de mandatos establecida por la constitución. Mwai Kibaki del PNU (Partido de Uni-dad Nacional) ganó las elecciones, convirtiéndose así en el tercer presidente de Kenia.

LAS HERMANAS FRANCISCANAS EN KENIA

Las Hermanas Franciscanas de la Inmaculada están en Kenia desde el año 2000, es ésta una misión

Conciencia Solidaria

Kenia cuenta con nuestra solidaridad“

Page 27: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 25

conjunta de las Franciscanas de Valencia y de la In-dia. En Kenia hay tres Comunidades, una en Nairobi, donde está la casa de formación de las novicias y donde atienden las necesidades urgentes del gran suburbio de Kibera. En la actualidad hay dos Hermanas españolas y 11 novicias nativas.

Más al oeste, en la diócesis de Eldoret y en ple-na colaboración con su Obispo, Monseñor Cornelius, tienen dos comunidades en el pueblecito de Kapsabet, 4 franciscanas de la India y una española atienden una guardería infantil, una escuela mixta de primaria, y dos

escuelas de secundaria, una de chicos y otra de chicas. Son escuelas parroquiales con internado. Los alumnos pagan su escolarización; pero muchos de ellos son ni-ños de la calle, que no tienen padres y son acogidos por las Franciscanas quienes becan sus estudios y manu-tención con las ayudas que reciben de España.

En Kapsabet residen también las postulantes nativas, y disponen de un Dispensario médico y de una maternidad, que están haciendo una considerable labor en la zona, especialmente con las mujeres. Además, para poder acceder a los lugares más recónditos, utilizan un todo-terreno, que es una clínica móvil, que se despla-

za a veinte lugares más a p a r t a d o s , atendiendo los estragos causados por las diferentes enfermeda-des tropicales y por el sida.

EL DESENCADENANTE DELCONFLICTO

Mientras nosotros celebrábamos las fiestas na-videñas, en Kenia el ambiente se caldeaba en vísperas de las elecciones. Las encuestas previas situaban en ca-beza al líder de la oposición, Raila Odinga, de 62 años, de etnia luo, frente a Kibaki, de 76 años, en el poder desde el 30 de diciembre de 2002 y de etnia kikuyu.

Mwai Kibaki Raila Odinga

El 27 de diciembre de 2007 se celebraron las elecciones. El escrutinio resultaba excesivamente len-to. A la mañana siguiente, la Comisión Electoral de Kenia, hizo públicos los resultados de 116 de los 120 distritos y se anunciaba la ventaja de Odinga sobre Kibaki, esto más los resultados parciales extraoficiales ofrecidos por la televisión, llevaron al líder de la oposi-ción a proclamarse vencedor de los comicios, a falta de conocer los datos definitivos.

Horas después, los resultados definitivos otor-garon el triunfo a su contrincante, Mwai Kibaki. No obstante, la Unión Europea declaró sus dudas de la fia-bilidad del escrutinio. Inmediatamente los derrotados (luos) seguidores de Odinga salen a las calles, armados con palos, machetes y piedras; creen que ha habido fraude en el recuento de votos. Empieza la oleada de violencia: palizas, incendios, bloqueo de caminos, sa-queos y asesinatos.

LA TRAGEDIA SE INSTALA EN KENIADesde que la violencia estallara en Kenia, el

que era considerado vecino o compañero de trabajo, se convertía en enemigo, si era de la tribu contraria. Casi medio millón de personas fueron obligadas a abandonar sus hogares, siendo sus chozas incendiadas, por estar en una zona considerada feudo de la etnia contraria. Los desplazados se ocultaron en el bosque, en los países vecinos, en iglesias, o levantando campos de refugiados.

Conciencia Solidaria

Page 28: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200826

Algunos optaron por refugiarse en las iglesias, con suerte diversa, ya que 50 kikuyus murieron entre las llamas al ser incendiado ese templo protestante.

La violencia se adueñó del país y la policía tenía orden de cargar, matando incluso a los manifestantes desarmados.

El pueblo de Kenia estaba siendo destruido de-bido al deseo de poder y a la rivalidad de las etnias. Los que más están sufriendo son los pobres, porque, si tenían poco, ahora se han quedado sin nada. Kibera, el barrio de chabolas más grande del mundo, ha sido uno de los escenarios de los enfrentamientos tribales más fuertes.

Han sido arrasadas casas, propiedades, grandes almacenes, camiones, autobuses de transporte público, coches y se han destruido puentes. Las grandes y pe-queñas empresas despidieron a sus trabajadores. Los muertos ya pasaban del millar.

SIGNOS DE ESPERANZA1.- El principal artífice del diálogo entre Kibaki

y Odinga ha sido el ex secretario general de la ONU, Kofi Annan, que está actuando de mediador en la cri-sis y proponiendo y buscando cauces de paz y de re-conciliación.

El 15 de febrero, la prensa anunciaba los acuer-dos firmados por Kibaki y Odinga, gracias a la media-ción de Kofi Annan:

• Creación de una comisión independiente para investigar lo sucedido en las pasadas elecciones y ten-drá entre 3 y 6 meses para averiguar si se cometieron irregularidades. Esta comisión deberá mejorar el siste-

ma electoral.• Se creará una Comisión de la Verdad, de la

Justicia y de la Reconciliación con el fin de lograr la unidad nacional.

• Llevarán a cabo una reforma de las leyes eco-nómicas, políticas y criminales.

Después de momentos de estancamiento en las negociaciones, se llegó el 28 de febrero a un acuerdo que deberá zanjar por completo la crisis, se trata de la formación de un gobierno de unidad nacional en el que sus respectivos partidos ocuparán un número de-terminado de carteras en función de su representación parlamentaria. Además han accedido a la creación del puesto de primer ministro que ostentará Odinga.

2.- La actuación valiente de personas compro-metidas, como es el caso de Monseñor Cornelius, Obispo de Eldoret. A principios de año, el obispo instaba al Gobierno de Kenia para que se preocupara de que las carreteras de Eldoret volvieran a ser trasita-bles. Cerca de cien personas habían sido asesinadas en su diócesis y sus habitantes tenían miedo de enterrar a sus muertos. El obispo apeló a los dirigentes políticos para que «encuentren una solución duradera a la crisis que asola a Kenia». También pidió apoyo al Vaticano, a la institución Ayuda a la Iglesia Necesitada. El 15 de febrero, aparecía este comentario en blogs.perio-distadigital.com/enclavedeafrica que ensalzaba la talla humana de este obispo que, siendo de etnia luo, ha sal-

vado la vida de 10.000 kikuyus, arriesgando el tipo y mostrando con hechos que la Iglesia es acogedora y contraria a todo tipo de violencia:

En estos días la prensa de Kenia resaltaba el papel jugado por Cor-nelius Korir, obispo de Eldoret, que acogió en el recinto de su catedral a 10.000 personas que deci-

dieron acogerse a la relativa protección de un recinto sagra-do, en este caso la catedral de Eldoret. Este obispo tuvo que resistir la presión de ciertos grupos que querían que echara de aquel lugar a los que se habían refugiado allí... él no cedió porque sabía que los entregaría a una muerte segura. Como si fuera una versión moderna de “La lista de Schindler”,

Conciencia Solidaria

Page 29: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 27

mucha gente sabe que posiblemente fue su firmeza a la hora de proteger a los que se habían refugiado en su iglesia lo que hizo que ese grupo “pudiera contarlo”. Muchos otros, por desgracia, no tuvieron tal suerte.

3.- Los misioneros que siguen allí compar-tiendo el dolor y la desgracia, arrimando el hombro y jugándose la vida. Es cierto que la enseñanza se ha paralizado, que las clases no se han vuelto a reanudar, pero, en sus casas, las franciscanas han dado cobijo a muchos niños abandonados; la clínica móvil sale a ha-cer su recorrido siempre que es posible; las hermanas atienden a todos los que continuamente llaman a sus puertas y salen a compartir y calmar el dolor y el sufri-miento de los más pobres; se sienten desbordadas por tantas necesidades urgentes y constatan que la única forma de proveerse de alimentos, calzado y ropa es comprándolos en los mercados clandestinos, ya que las tiendas habituales han sido destrozadas, los campos incendiados y los contenedores de ayuda humanitaria están bloqueados.

4.- La implicación solidaria. Las Hermanas Franciscanas de la Inmaculada hicieron una llamada a la solidaridad a los colegios, a las parroquias, a la socie-dad a través de la prensa…Nuestra Parroquia la hizo extensiva a toda la feligresía, de modo que al tiempo que se hacía la Campaña de Manos Unidas, se abría de nuevo la cuenta de Cáritas Ayuda a los Damnificados para Kenia, destinándose estas aportaciones al Obispo de Eldoret y a las Franciscanas de la Inmaculada de Kenia.

La respuesta fue extraordinaria; la Cena del Hambre contó con la presencia de 300 personas que vi-sionaron un documental sobre la tragedia de Kenia. En la rifa se vendieron mil números para el sorteo. Entre la cena, rifa y colecta de las misas se recaudaron 4600 euros para Manos Unidas. En la cuenta de la Caixa Ru-ral se ingresaron 6000 euros, de los cuales 2000 fueron una aportación de Cáritas Parroquial. El lunes 11 de febrero se hizo la transferencia bancaria a la cuenta de las Hermanas Franciscanas. En esa misma semana, el Párroco recibía esta carta a través del correo electróni-co escrita por la Hna. María Rosa, desde Nairobi:

Estimado Don Paco Tomás Almiñana y feligreses to-dos de la Parroquia de San Andrés Apóstol:

Con enorme alegría, en nombre de las hermanas

franciscanas que trabajamos en Kenia, y de las jóvenes na-tivas en formación, me dirijo a todos vosotros/as al haber tenido conocimiento de vuestra cercanía ante la situación que está pasando el pueblo de Kenia. No tengo palabras, me habéis emocionado. GRACIAS, MIL GRACIAS. Vosotros nos habéis asegurado que al otro lado del planeta unas ma-nos amigas se alargan para abrazarnos con su apoyo y nos hacen sentir que no estamos solas.

Muy queridos her-manos y amigos, os digo que Kenia está pasando por un momento difícil, Kenia no es lo que era antes del 27 de Diciembre, día en que tuvo lugar las elecciones al gobier-no. De la noche a la maña-na todo había cambiado y se volcaba hacia la tragedia y la enemistad. Se hablaba de corrupción en las urnas, ma-

nipulación, deseo de poder…y como consecuencia, la tragedia: vandalismo, saqueos, incendios, violaciones…miedo, huida…; el país en medio de la barbarie caía en un profundo silencio; la gente se escondía ya sea encerrada en sus casas o en el interior de los bosques. Algo terrible. Los amigos se convertían en ene-migos matando y quemando las casas de sus amigos con los que habían jugado y hasta ido a la escuela juntos… y todo porque eran de diferente tribu. Se han destruido y quemado edificios, tiendas, grandes negocios…camiones, autobuses, coches…campos cultivados…ha muerto mucha gente encerrada y carbonizada en sus casas… Y no se han contentado con matar si no hasta dejar la persona hecha pedazos.

Hay cientos de casos que claman al cielo. Personas que delante de ellas asesinaban a 3, 4, 8 y hasta 11 miem-bros de la familia como el caso de un hombre de 60 años que vio como mataban a sus 8 hijos y a sus dos mujeres…dramá-ticas historias que no tienen fin. Perdonad que os diga todo esto pero es que ¡ha sido tanto!

Y como resultado han muerto un alto número de personas y más de medio millón de desplazados en diferentes campos de refugiados; se habla de los refugiados de Kenia en su misma tierra. Algunos huyeron a Uganda, otros a Tan-zania….Hoy da pena ver en la situación en se encuentran y ya no podrán volver al mismo sitio porque no los aceptan y solo lo podrán hacer al lugar de sus antepasados (a su tribu) cuando a lo mejor ni nacieron allí si no vivieron, desde donde escaparon, hace más de 50 años.

Conciencia Solidaria

Page 30: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200828

Y en estas circunstancias se han producido un gran nú-mero de abusos sexuales. Y muchos niños quedaron sin padres y esto, unido a la enorme cantidad de niños huérfanos que ya los había debido a la enfermedad del sida ahora la situación se hace más grande y la urgencia es todavía más urgente. Ne-cesitan una casa, un hogar donde encuentren cariño….de lo contrario acabaran en la mendicidad o en la prostitución, es-pecialmente las niñas. Y precisamente nuestro sueño desde hace varios años era proporcionar-les dónde pudieran lavarse, comer, crecer, recibir una educación y ser mañana libe-radores de sí mismos y de su pueblo; pero hasta el momen-to presente no fue realidad por no tener posibilidades econó-micas. Nos encontramos junto a varios suburbios y vemos con dolor niños que deambulan buscando un mendrugo. Jun-to a nuestra casa tenemos un templo Hindú y cada domingo dan un plato de comida a unos 400 niños/as. Nosotras colaboramos con ellos a la hora de ser-vir y vemos que desde las 7 de la mañana hay a la puerta una gran cantidad de niños esperando que lleguen las 9. ¡Cuánta hambre deben de pasar durante toda la semana!

Las otras dos comuni-dades que tenemos en la zona rural, hoy lugar de gran con-flicto, ofrecen el servicio a las madres embarazadas y se atienden otras muchas enfer-medades tropicales; se trata de zonas del interior donde no llegan en absoluto facilidades médicas. Las hermanas, me-diante clínica móvil atienden infinidad de casos en puebleci-tos completamente aislados y en el interior. En este momento de inseguridad se arriesgaron y tuvieron el percance de ser atacadas pero, gracias a Dios, no les pasó nada.

En el momento actual, el gobierno, con la mediación de Kofi Annan, está viendo la forma de solucionar el conflicto, pero mientras tanto siguen zonas de violencia…el miedo se ha apoderado de la gente…y la inseguridad se hace palpable y está presente el temor de que la situación se haga más grande.

Estamos con el pueblo sufriente de Kenia, nos sentimos inmensamente solidarias de su dolor y ahora podemos deciros

que estáis con nosotros, que habéis entrado en nuestro corazón y en el corazón del pueblo de Kenia, que sufre y sangra. Por-que ya sois parte de esta familia.

Sabemos que nada podemos hacer sin el apoyo de unas manos generosas pues todos somos necesarios en la construcción de un mundo mejor. Nos admira toda la labor que estáis ha-ciendo al abrir las puertas de vuestro corazón en favor de la

solidaridad.

Vuestro apoyo es grande-mente acogido y sobre todo muy agradecido.

Quedamos con el gozo de sa-ber que nuestras manos están entre-lazadas, que las distancias no cuen-tan y que juntos podemos hacer que surja el perdón, la paz y la alegría en el corazón del ser humano.

Desde aquí os recordamos y de nuevo os agradecemos. ¡GRACIAS!

Un fraternal y cariñoso abrazo en nombre de las her-manas.

La Parroquia respondió de inmediato con otra carta dirigida a Kenia, y en las misas del fin de semana del 16 y 17 de febrero se leyeron unos fragmentos de la que habíamos recibido. La cuenta de la Parroquia para ayudar a Kenia seguía abierta. Aún falta mucho camino por recorrer, y si los acuerdos políticos se afianzaran, la reconstrucción del país sería lenta y necesitaría de mu-chos sacrificios y un enorme respaldo solidario.

Es de admirar la labor de los misioneros que se juegan la vida sin otro objetivo que trabajar por la dig-nidad de la persona y ser así testigos del Evangelio, de un Dios que se hizo hombre para compartir el dolor humano y darle un mensaje de vida y de esperanza.

Desde aquí, desde “ese otro lado del planeta”, y en respuesta a la carta de las Franciscanas, decimos que rezamos por Kenia y que valoramos su entrega, su arriesgada dedicación. L’Alcúdia es un pueblo sensible y solidario, que responde siempre generosamente cuando se llama a las puertas de su corazón.

Carmen González Comenge

Conciencia Solidaria

Page 31: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 29

Articles de Reflexió

I. PACIENCIA, PACIENCIA, PACIENCIA

Es la traducción de esta caligrafía del gran maestro Sun Haiyun, que también podemos tradu-cir como “aguante, aguante, aguante”.

Vivimos envueltos por la prisa, nos pasamos la vida bus-cando un momento más tran-quilo para contestar una carta o uno de esos correos electró-nicos con sabor epistolar; de-jamos para otro momento el hacer esa llamada que sabemos que debemos hacer, no encon-tramos tiempo para sentarnos simplemente a leer...

En el trabajo se busca la rapidez, la eficacia, y se vive diariamente la presión de producir más, de vender más, de conseguir más, de tener más información… y paradójicamente la persona se siente cada vez menos libre, menos persona, con menos ganas de trabajar, con menos interés por la gente de alrededor…

Estamos acostumbrados a la rapidez, nos parece normal que con sólo apretar un botón se encienda una luz, que al echar una moneda en una máquina, nos aparezca un café; nos parece normal estar asistiendo por televisión a lo que está suce-diendo a muchos kilómetros de nuestra casa; nos resulta ya normal escribir un mensaje y recibir una

respuesta inmediata, localizar con el móvil a una persona en cualquier parte…

La era de lo instantáneo cosecha sus triun-fos. La velocidad es ahora un valor en alza. En casa podemos cocinar con menos tiempo. Los ordena-dores son cada vez más rápidos. Muchos coches vienen de fábrica con unas insospechadas posibili-dades de velocidad… que, curiosamente, si se res-petan los límites marcados por la ley, nunca se van a poder comprobar.

Y sin embargo, si echamos una mirada a la naturaleza, nos daremos cuenta de que se mantie-nen ritmos precisos, determinados desde antiguo y que funcionan. Los días siguen siendo de 24 horas, el flujo de las mareas sigue marcando ritmos bioló-gicos, el compás de las estaciones se sucede según las latitudes. La semilla cae en la tierra, se pudre y luego aparece un nuevo tallo; la gallina pone sus huevos y espera el nacimiento de sus polluelos. Y en el caso de los seres humanos, que nos creemos tan avanzados por nuestros inventos, tenemos que reconocer que el progreso no ha acortado el tiem-po necesario para la gestación de una nueva vida. Y hoy como hace miles de años, se repite la espera de esa vida que podemos, eso sí, ver incluso desde el seno materno, pero cuyo proceso no podemos acelerar.

La sociedad rural, forjada y surgida del con-tacto directo con la naturaleza, es depositaria de grandes valores de los que mucho tenemos que aprender. La actitud del labrador que espera pa-

Iniciamos con este artículo una serie de reflexiones sobre la Naturaleza, maravi-lloso libro de texto citado continuamente por Jesús en sus parábolas. Enseñanzas que a fuerza de oirlas en el Evangelio una y otra vez se nos pueden haber desgastado.

Nuestro objetivo es ayudarnos a ver, a descubrir a Dios presente en las mani-festaciones de la vida diaria. Quizás lo que aprendieron nuestros mayores trabajando la tierra y mirando al cielo, lo que para ellos resultaba natural, para nosotros, que no vivimos tan en contacto con la tierra, se haya difuminado. Quizás necesitemos apren-der a ver y a escuchar a la naturaleza que nos rodea y a través de la cual Dios también nos habla.

Enseñanzas de la naturaleza

Page 32: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200830

cientemente la semilla nos invita a esperar lo me-jor de cada persona que nos rodea. La impotencia del labrador que ve destruida su cosecha por una helada nos devuelve a nuestra limitación de seres que formamos parte de la gran naturaleza pero, de la que no somos los dueños.

Quizás estos tiempos, en que tanto habla-mos de ecología, sean la ocasión propicia para mi-rar más de cerca a la naturaleza. Es el gran libro de texto que Dios nos regala y desde el que también nos habla. Mirando a la naturaleza podremos ir descubriendo una sabiduría de vida que nos ayu-dará a ser más felices. Si la miramos y la imitamos quizás tengamos mayor capacidad de aguante. Si aprendemos a estar serenos en la tormenta, sere-mos capaces de disfrutar mejor del sol; si en medio de la noche somos capaces de esperar a que ama-

nezca, iremos adquiriendo ese temple de madurez y sentido común de las personas pacíficas que irra-dian serenidad y confianza en la vida.

Nuestra es la responsabilidad de aprender y vivir estos valores para que en esta sociedad sea-mos sal al estilo del Evangelio y seamos capaces de dar sabor.

No existen atajos ni soluciones inmediatas. La paciencia, el aguante, la capacidad de esperar son los ingredientes imprescindibles. Un buen guiso requiere su tiempo. ¿A que sí?

Edelmira Amat AlapontL’ Alcúdia, 1 febrero 2008

Articles de Reflexió

Page 33: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 31

Articles de Reflexió

LA ALEGRÍA DE SERVIR

Sirve la luna,sirve el viento,sirve el surco.Donde haya un árbol que plantar, plántalo tú.Donde haya un esfuerzo que todos esquivan,acéptalo tú. Sé tú el que apartó la piedra del camino,el odio de los corazones,las dificultades del problema. Hay la alegría de ser sano, y la de ser justo.Pero hay, sobre todo, la hermosa,la inmensa alegría de servir. (...) No sólo se hace mérito con los grandes trabajos.Hay pequeños servicios:adornar una mesa, ordenar unos libros,peinar a una niña...El servir no es una tarea de seres inferiores.Dios, que es el fruto y la luz, sirve.Y tiene los ojos fijos en nuestras manos,y nos pregunta cada día:¿serviste hoy?

ARRIESGARSE A VIVIR

Reír, es arriesgarse a parecer un tonto. Llorar, es arriesgarse a parecer un sentimental. Hacer algo por alguien, es arriesgarse a involucrarse. Expresar sentimientos, es arriesgarse a mostrar tu verdadero yo. Exponer tus ideas y tus sueños, es arriesgarse a perderlos. Amar, es arriesgarse a no ser correspondido. Vivir, es arriesgarse a morir. Esperar, es arriesgarse a la desesperanza. Lanzarte, es arriesgarse a fallar. Pero los riesgos deber ser tomados, porque el peligro más grande en la vida es no arriesgarse nada. La persona que no arriesga, no hace, ni tiene nada. Se pueden evitar sufrimientos y preocupaciones, pero simplemente no puede aprender, sentir, cambiar, crecer, amar y vivir...

SÓLO UNA PERSONA QUE SE ARRIESGA ES LIBRE.

Textos para pensar

Gabriela Mistral

Page 34: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200832

Articles de Reflexió

FÁCIL Y DIFÍCIL

Fácil es ocupar un lugar en la agenda telefónica. Difícil es ocupar el corazón de alguien... Fácil es herir a quien nos ama. Difícil es curar esa herida... Fácil es dictar reglas. Difícil es seguirlas... Fácil es soñar todas las noches. Difícil es luchar por un sueño. Fácil es exhibir la victoria. Difícil es asumir la derrota con dignidad... Fácil es admirar una luna llena. Difícil es ver su otra cara... Fácil es saber que estas rodeado por personas queridas.Difícil es saber eso y sentirte solo... Fácil es tropezar con una piedra. Difícil es levantarte... Fácil es disfrutar la vida todos los días. Difícil es darle el verdadero valor...

Fácil es orar todas las noches. Difícil es encontrar a Dios en las cosas pequeñas...

Fácil es prometerle a alguien algo. Difícil es cumplirle esa promesa... Fácil es decir que amamos. Difícil es demostrarlo todos los días... Fácil es criticar a los demás. Difícil es mejorar uno mismo... Fácil es cometer errores. Difícil es aprender de ellos... Fácil es llorar por el amor perdido. Difícil es cuidarlo para no perderlo... Fácil es pensar en mejorar. Difícil es dejar de pensarlo y solamente hacerlo...

EL RUIDO DE LA CARROZA

Cierta mañana, mi padre me invitó a dar un paseo por el bosque y acepté con placer. Él se detuvo en una curva y después de un pequeño silencio me preguntó:

- Además del cantar de los pájaros, ¿escuchas alguna cosa más? Agudicé mis oídos y algunos segundos des-pués respondí: - Estoy escuchando el ruido de una carroza. - Eso es -dijo mi padre-. Es una carroza vacía. - ¿Cómo sabes que es una carroza vacía, si aún no la vemos?

- Es muy fácil saber cuando una ca-rroza está vacía, por causa del ruido. Cuanto mas vacía la carroza, mayor es el ruido que hace.

Me convertí en adulto y hasta hoy cuando veo a una persona ha-

blando demasiado, interrumpiendo la conversación de todo el mundo, inoportuna, presumiendo de lo que tiene (y lo más seguro es que no tiene nada), de sentirse prepotente y haciendo de menos a la gente, tengo la impresión de oír la voz de mi padre diciendo: “Cuanto más vacía está la carroza, mayor es el rui-do que hace”.

Page 35: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 33

Fills de l’Alcúdia

Quiero comenzar dando gracias a D. Francis-co, por la invitación que me hace al pedir que haga una pequeña referencia a mi faceta de sacerdote e hijo de L´Alcúdia, pero a la vez me gustaría que fuera un saludo para todos aquellos que leerán estas notas, para testimoniarles de algún modo que aunque no aparezcan sus nombres, forman parte de esta rápida historia. Muchos ya no están entre nosotros, pero si lo están en el mismo relato y también los recuerdo.

¿Qué le evoca oír la palabra l´Alcúdia?Tal como debió ocurrirles a otros contertu-

lios, es como rebobinar la película de tu vida. Y de esto ya hace muchos años. Nací un 27 de Marzo del año 1940. Pueden imaginar aquel momento los que ahora ya son “mayores”. Conservo muchos detalles que parece que bullen cuando se tocan estos temas, pero en lo referente a la pregunta, sí hay una especie de orgullo sano de ser alcudiano, y “en mi pueblo” que haya una parroquia tan monumental. Siempre para mi ha sido un referente en lo que más tarde se-ría lo que podría llamar mi vocación. Hay un recuer-do que no se me olvida. Las hileras del catecismo de primera comunión, en las que debatía con mis com-pañeros ante las preguntas de D. Francisco Alamar ( que para mi siempre ha sido el Cura de mi pueblo ). Aún recuerdo con quien hice pareja en la primera comunión.

Como podéis imaginar son mis primeros pa-sos de algo que ni yo siquiera podía sospechar, pues era un chico más de muchas familias de aquella épo-ca posterior - con todas sus consecuencias - de una guerra.

¿Qué representa la Parroquia de San Andrés para usted?, ¿Y la devoción de la Mare de Deu de l´Oreto?.

Nací en una familia “normal”, sin distincio-nes como se suele hacer ahora de una inclinación hacia una parte u otra. No hubo nunca política en mi casa. Sí conservo el tono de lo que ahora podría llamar una familia sencilla y buena, pensando en mis padres. De unos padres muy trabajadores, y con mu-cho interés por los hijos. Sí recuerdo a las hermanas de la Doctrina Cristiana, que labraron sin yo pensar-

lo algo que nacería poco a poco. Y no olvido a una de las hermanas, Sor María Dolores, que era como una madraza para los niños.

La Virgen de l’Oreto, creo que era lo mismo que ahora es para todos los alcudianos, incluso me atrevería salvando la notoriedad fría de este tiempo que vivimos, que es un norte al que todos sin excep-ción se mira en muchos momentos de la vida.. Siem-pre están las excepciones que produce “el tiempo”, pero ni siquiera las excluiría estas.

De cara a mi vocación, diré que nunca fui “monaguillo”. Y no me arrepiento de ello. Fui un chico más del colegio de D. Arturo Martínez Sintes. Y esto, con todo lo que conlleva, hasta que mi padre comenzó a enseñarme su oficio. Aquí he de decir sin-tetizando aquello “de fuí cocinero antes que fraile”. Era carpintero antes de ser cura. En aquel momento tenía un buen amigo que influyó en alguna manera para que yo un día le insinuara a mi padre el deseo de ir al seminario. Seguramente los planes de mi padre no coincidían con los míos y me invitó a cambiar de pensamientos. Yo no era mucho “de Iglesia” aunque sí se “cocía” algo por dentro. Conocía por circuns-tancias un poco largas de contar a D. Hilario Bou, a Luis Boix, a D. Alfredo, (el fill de D. Octavio), y David Abellán, mi amigo, que ya era seminarista.

Sin sospecharlo, un día mi padre se acercó a mi -estaba lijando un marco de una puerta- y me preguntó si aún quería ir al Seminario. Sin pensar le dije que sí. Si me permiten un cierto humor, diría ahora que debí pensarlo un poco más , pues menuda historia se avecinaba. Salió mi padre del trabajo y aquella misma tarde quedo todo a punto para pre-pararme en la Academia Almi, que había entonces, para el ingreso en el Seminario.

El resto es toda mi vida del Seminario. Mu-chos compañeros a lo largo de doce años, y yo ya tenía los dieciséis. Lo pasé bien, hasta el final que terminé con una úlcera de estómago. Aquello diría que fue la última prueba. Estuve el último año de teología en casa. Aunque periódicamente conectaba con el Seminario, uno de los profesores del tribunal

D. Ricardo Abel

Page 36: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200834

de la reválida de teología no aceptaba la falta a clases y me suspendió. Estaba en el aire mi ordenación, ya que tenía de Junio a Septiembre que aprobar. Pueden imaginar el verano de aquel año. Me ordené el 21 de septiembre con los pocos compañeros que quedaban entonces por D. José Mª García Lahiguera que aca-baba de llegar a Valencia. Éramos solamente trein-ta, de unos 225, que hubiéramos sido si no hubieran abandonado todos los que entramos y los que se fue-ron añadiendo a lo largo de toda la carrera.

Hoy somos pocos, algunos han fallecido y estoy muy orgulloso de tener los condiscípulos que tengo, pues nos sentimos muy arropados los unos con los otros. Además, fuimos un curso, digamos muy especial pues diría que no éramos “lo tradicional”. Buenos elemen-tos todos. Hoy hay varios profesores, un Cardenal, un Obispo ,un Vicario Episco-pal y unos pocos pastores de almas. Y yo soy el mayor de edad de todos.

¿Dónde ha ejercido su ministerio?

Comenzaría diciendo que esto de tener “voca-ción”, no es lo que se imagi-na la mayoría de las personas; en nuestro caso, creo que hay una fuerte inclinación en un principio, pero que a la lar-ga de los años, se acepta algo que la vocación oficial te impone. Es vocación -dije-ron alguna vez- si quieres, si puedes y si el Obis-po de acepta. Si falla alguna de estas condiciones, no tienes vocación. Y es verdad. Pero después ya en el ejercicio del ministerio, aunque eres al principio un “novato”, comienzan a salir las deficiencias del ser humano, que se notan con el paso de los años. Entonces es cuando te estás haciendo Sacerdote de verdad.

A mi desde siempre, me han calificado de “manitas”, en muchos aspectos de la vida, y desde el Seminario. Al principio esto te excluye en algún

modo de los “intelectuales”, pero es algo que si está en tus genes y tienes la suerte de desarrollarlo es de una ayuda inmensa para ser pastor. Y he oído en muchas ocasiones que algunos sacerdotes echan de menos un poco de habilidades que les hubieran fa-vorecido en su ministerio.

Ejercer el ministerio en distintas parroquias te ayuda acrecer de manera insospechada. Y siendo dócil a la vocación vas creciendo sin que cueste demasiado. Estoy agradecido a la gente que he encontrado en todos los sitios. Conservo muchos amigos. He de decir que siempre al principio he tenido verdaderas dificultades,

pero he tenido la calma para ir rompiendo moldes que no pensaba que lo conseguiría, y hasta ahora si puedo decir que lo he conseguido con creces. Y esto se ve con muchas com-pensaciones cuando ya has de-jado la Parroquia y te destinan a otra. Fui coadjutor de San Cristobal de Picasent, -donde ahora es párroco D. Hilario Bou-, durante seis años. Pasé a San Miguel Jalance y San José de Cofrentes, durante seis años más. Aquí puedo de-cir que fui muy feliz en todos los aspectos.

Aunque ya comencé en Picasent en mis primeros pinitos del pirograbado, en Jalance desarrollé todo lo que después será perfeccionado en

la Parroquia del Salvador de Cocentaina. Aquí ya me he sentido plenamente como sacerdote y gracias a los contestanos con los que tuve que luchar encarnizada-mente al principio, pero a los que estoy inmensamente agradecido, cuando ya salí hacia Alcúdia de Crespins. Allí con los contestanos me encontré unos feligreses de tradición religiosa pero que me propuse bajarles del pedestal; aunque en su favor diré que San Pablo cambió cuando cayó del caballo, y si la comparación puede ser presuntuosa, ahora los mismos contestanos me lo demuestran con su cariño repetidamente. Se, y saben, que no nos olvidamos. Fueron quince años con una buena lección para ellos y para mi.

Fills de l’Alcúdia

Page 37: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 35

Fills de l’Alcúdia

En L’Alcúdia de Crespins, mi Parroquia de San Onfre, será, según idea del actual arzobispo, mi última etapa. Con las conocidas dificultades de siempre, pero que ya a los diez años en esta Parro-quia me siento con que de nuevo he logrado cambiar algunas cosas, a pesar de que siempre que eres “el nuevo Cura” se le mira con recelo pero que a la larga se acepta buenamente.

Yo diría desde mi experiencia que no hay que ser un lince. Simplemente a medida que va corrien-do el tiempo, ir asumiendo una realidad que está ahí, dejar que te vean responsable siempre , sin miedo a nada, que vean que intentas vivir lo que predicas, que estás dispuesto siempre para quien te busca, que no te inmiscuyes cuando no te importa, que pro-cures tener la ideas claras y contrastadas, que estés siempre dispuesto a aprender. Que aceptes también que puedes equivocarte y que sepas sin complicacio-nes disculparte. Que no dejes nunca de desarrollar los dones que Dios nos da a cada uno, y que nunca te creas mejor que nadie, pues siempre estarán los hipercríticos que no te aceptarán y tratarán de minar tu compromiso con Dios y con la Iglesia. Y que no vivas pendiente de “tu pueblo”, sino que seas uno más entre los feligreses que el Obispo te encarga que cuides. Tu familia siempre la tendrás, pero eres res-ponsable de una familia mucho más amplia, y ellos sí saben cuando les quieres.

¿Qué actitud es la que más admira y le ha dejado huella en su vida?

Después de lo dicho, creo que quedaré la mar de bien, si digo que la actitud del Papa actual. No es que me haya embebido de lo que él tiene escrito, pero si me gusta algo que se refleja en él. Aunque ahora parece que le están viendo más inte-ligente, que lo sea como es sin la propaganda. Que diga lo que cree que es la verdad y de una manera que todos lo entiendan. Que a parte de las forma-lidades normales, que no trate de ser un divo, pues esto los demás lo ven. Y que se deje llevar de lo que Dios le ira trazando en el tiempo de vida que le de , sin que demuestre dejar su historia para la posteri-dad.

Yo he tenido la ocasión y el interés de estar once veces en Tierra Santa, he recorrido todo lo que llamamos El Mundo de la Biblia, desde el río Tigris

hasta Abu Simbel en Egipto. No fui un sobresaliente en Sagrada Escritura,, pero sí conozco mucho que no se estudia en el seminario. Todo este mundo me ha proporcionado la base que yo siempre esperaba como sacerdote. Ahí se tengo una buena huella.

¿Qué es lo que valora más para que una Pa-rroquia funcione bien?

Tengo que generalizar un poco, pues aunque los valencianos todos somos valencianos, cada lugar, como solemos decir, es un mundo. Aún contando con las dificultades de cada momento, lugar, costumbre y tradiciones, que con el tiempo el Cura pueda decir que está contento y que la mayoría de los feligreses puedan decir también lo mismo del Cura, esto será la mejor señal de que todo funciona.

¿ Podría indicarnos rasgos diferenciadores de las Parroquias en las que ha estado? ¿Lo que cada comunidad le ha aportado como sacerdote y como persona?

Respondo las dos a la vez: en Picasent me di cuenta de lo que es un pueblo extra-radio de una ca-pital, mucha gente que está “dentro” y muchos que se quedan “fuera” siempre. Los de dentro no permi-ten que muevas nada y los de fuera les importa un rábano. Y lo segundo lo que es ser coadjutor de una Parroquia donde el Párroco está demasiado años en ella.

En Jalance y Cofrentes, aunque cercanos son distintos, Jalance es más acojedor y muy familiar. Un cura nuevo puede ser feliz si sabe adaptarse a un pueblo con tradiciones un poco distintas del resto de la provincia, es la parte castellana de Valencia. Cofrentes, quizá por el dinero que recibe de la cen-tral nuclear puede sentirse más pudiente, pero toda aquella zona son lo que llamamos pueblos peque-ños y en esa expresión describimos una idiosincra-sia distinta.

Cocentaina, cuando yo llegué, mi impresión primera es que era un pueblo grande, con dos pa-rroquias y dos conventos, y con los “lios”, própios -(con cariño)- de estos pueblos. Muy convencidos de lo propio y con ánimos de estabilidad. Para mi fue un reto, pero creo que dejé buena semilla , y muchos amigos buenos que continúan, algunos quedan como “mi familia” de verdad. Estoy orgulloso de ello.

Page 38: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

L’Alcúdia Cristiana. Març 200836

Alcúdia de Crespins , es el permanente recuer-do de que nací en la otra Alcúdia. Noto un defecto demasiado acentuado que les hace daño, y es una di-visión política. Y sin embargo estoy convencido que en los dos bandos hay gente muy buena. Hay un “no se qué”, que me recuerda a los palestinos e israelíes. ¿Qué consideráis que se puede hacer....?. Sin embar-go, a parte de los reticentes... creo que estoy en el

centro, pues unos dicen que soy de derechas y otros de izquierdas..... creo que ahí está la equivocación en mi parroquia.

¿Podría decirnos alguna actitud religiosa propia de la Comunidad Parroquial de l´Alcúdia?

Con los años que falto de l´Alcúdia no me atrevo a destacar nada a no ser, como en mis recuer-dos, lo que es para mi pueblo la Mare de Deu de L´Oreto. Y el aparente “todos a una”, de empuje que se ve en el pueblo, que ha crecido de una manera formidable.

¿Cómo ve a la juventud de hoy? ¿Y su rela-ción con la Iglesia?

Como en otras preguntas, si generalizo tendré que decir que fatal. Pero si se me permite una ob-servación desde fuera, calculando que todos navegan por el mismo río de la vida, creo que vuelve a repe-tirse algo que en el terreno de la vivencia religiosa he observado en todas las Parroquias. La mayoría de los feligreses aún no han salido de la ignorancia

de lo que es la Palabra de Dios. Los mayores echan de menos los conocidos y ya desaparecidos “sermo-nes de campañillas” de otros tiempos. No les agrada demasiado conocer lo que ha avanzado el estudio de la Escritura en todas sus ramas. Y una mayoría de curas aún se les oyen frases que parecen fosilizadas de otros tiempos. Y lo malo no sólo es esto, sino que hay muy poca juventud que se interese por llegar a

conocer algo que considero impres-cindible para crecer en un mundo de tanta especialidad y competencia cuando ahora precisamente un joven puede tener el mundo dentro de casa sólo con el mundo de Internet. Lo que hará que sean muy interesados en desbrozar las dificultades que les irán saliendo en la vida, pero igual de ignorantes para dar sentido verdade-ro a lo que es haber nacido en este dichoso mundo.

Es aquello que alguna vez se oye a los de mi edad y un poco más mayores.: “después de la guerra no se podía comer y ahora que podemos comer no debemos hacerlo”, antes había que correr para conseguir co-

mer algo , ahora hay que correr para rebajar lo que se ha comido. Son esas cosas de la vida que uno no llega a entender.

¿Que les diría a los lectores de nuestra revista?

Primero que sean benevolentes conmigo, pues creo que he sido un poco largo. Después reite-rar mi saludo del principio, y si le he recordado a al-guien su tiempo me doy por satisfecho. Después, so-bre todo los más mayores, que sigan recordando que Dios aún nos da un poco de tiempo. Aprovéchenlo al máximo que aún hay algo que aprender, siempre queda algo. Den gracias a Dios de todo, de lo bueno y de lo aparentemente malo, habrá servido de cre-cimiento si se encajó bien. ……Me marché podría decir, desde 1956, pero l’Alcúdia sigue siendo mi pueblo.

Ricardo: Párroco de San Onofrede l´Alcúdia de Crespins

Fills de l’Alcúdia

Page 39: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la

Images del Diumenge de Rams de 2007

Page 40: L’Alcúdia Cristiana · 2018-12-24 · L’Alcúdia Cristiana. Març 2008 3 ságralos en la verdad, conságralos en la verdad, con-ságralos en la verdad, siendo Yo el camino, la