LA UTILIZACION DE LOSORDENADORES COMO AYUDA PARALA TOMA DE DECISIONES

Ponencia presentada en el Congreso sobre «Perspectivas de la Divulgación Agraria en elcontexto de la evolución futura de la agricultura», celebrado en Lovaina del 2 al 5 de diciem-bre de 1986.

En gestión, lo importante es tomar decisiones

La toma de decisiones está considerada como elelemento que determina el acto de gestión. El agricul-tor debe ser considerado como un empresario queasume también el papel de director. El debe decidir lamejor manera de utilizar los recursos disponibles paraalcanzar los fines que se ha fijado, aplicando las tecno-logías que conoce. En este contexto, la tecnología que-daría definida como algo que comporta unos datos, unmétodo y un producto.

A menudo, el agricultor desea alcanzar más de unobjetivo, pero todos sus objetivos no son compatibles.Por ejemplo, máximo provecho y mínimo riesgo;tiempo disponible y dimensión; o complejidad de laexplotación. Distintos individuos pueden atribuir prio-ridades diferentes a sus objetivos, según sus valores ynormas habituales. De esta forma, vemos que tomardecisiones no se reduce a un proceso racional mecá-nico, sino que comprende además una parte considera-ble de subjetividad. Por otra parte, la producciónagrícola se caracteriza fundamentalmente por ser unproceso biológico influenciado por factores naturalesdificiles de prever y dominar.

Las condiciones en que los agricultores toman deci-siones están caracterizadas por objetivos personalesmúltiples, dentro de un entorno heterogéneo e inesta-ble. El sistema de ayuda a la toma de decisiones(SAD), que representa la versión de la década actualsobre las decisiones en materia de gestión, es el sistemamás apropiado en la situación descrita anteriormente.

Sistema informatizado de ayuda a la tomade decisiones (SAD)

Los SAD pueden definirse como sistemas informati-zados de acción conjunta, que ayudan a los que debentomar decisiones a utilizar datos y modelos para resol-ver cuestiones y problemas no estructurados. Las carac-terísticas esenciales de los SAD son las siguientes:

• Utilización del ordenador como extensión delcerebro del gestor. Un sistema de interacción hombre-máquina en el que el ser humano sea dueño del pro-ceso de decisión.

• Combinación de los modelos de toma de decisio-nes informatizados y de la apreciación del gestor, fun-dada en informaciones apropiadas para la decisiónfinal. Las informaciones y el modelo se pueden obtener

a partir de fuentes informáticas ya existentes o realiza-das por el propio interesado.

• La toma de decisión es un acto humano quedepende de la personalidad, de los objetivos, del juicioy de la intuición del que debe tomar la decisión. Nose trata de una actividad técnica «instantánea», sinomás bien de un proceso con diversos componentes. Poresto es posible concebir que dos gestores puedan llegara decisiones diferentes, frente a los mismos problemasy en las mismas condiciones.

En la carrera por estar en cabeza, los computadores marcan la dife-rencia.

• El desarrollo de la microinformática ha propor-cionado un medio personal, poderoso y poco caro, deayuda a la toma de decesiones. La feliz unión entreeste instrumento y la calculadora electrónica de bolsilloha creado el entorno ideal para el desarrollo de unestudio de la gestión fundado en los SAD.

Características de los servicios de divulgación

Los servicios de divulgación pueden ser analizadossiguiendo sus diversas funciones o según los tipos deinformación que tratan o proporcionan.

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Las funciones o actividades de todo sistema dedivulgación agrícola están habitualmente clasificadas encuatro categorías:

1. Asesoramiento.2. Suministro de información.3. Enseñanza y formación.4. Puesta a punto de técnicas perfeccionadas.

La importancia de estas cuatro categorías, determi-nada por los recursos asignados a cada una de ellas,puede servir para caracterizar a los diversos sistemas dedivulgación. Estas categorías pueden servir tambiénpara establecer una estrategia relativa a la manera deadaptarse a su entorno, que cambia según van apare-ciendo nuevas posibilidades. Un análisis de este tipofue realizado por el «Electronic Technology TaskForce» del servicio de divulgación norteamericanodurante el año 1985, que ha propuesto una políticadirigida a integrar la tecnología electrónica en el sis-tema de abastecimiento de datos para la divulgación.

Las informaciones obtenidas, tratadas y realizadaspor los servicios de divulgación, pueden clasificarsecomo sigue:

— Descriptivas (fenómeno observado).— Diagnóstico (cuáles son las causas).— Predicción (cuáles serán los efectos).— Recomendación (qué hacer en vista de...).

Estos cuatro puntos interesan a todos los servicios dedivulgación, pero se ofrecen separadamente al cliente,como si se diera por hecho que es capaz de integrarlosél mismo. Por ejemplo, los datos sobre los precios ylas previsiones meteorológicas son puramente informa-tivos, mientras que un folleto de divulgación sobre la

lucha contra los parásitos tiene en realidad carácter deprescripción.

Se están llevando a cabo continuos esfuerzos paraponer a punto unos sistemas informáticos integradoresque combinen los distintos tipos de actividades dedivulgación y los tipos de información. La mayor partede ellos resultan poco cómodos (dificultad de utiliza-ción por el personal de divulgación o dificultad deacceso para los agricultores). Actualmente, se estándedicando fondos considerables para la puesta a puntode sistemas que, como se espera, traigan «la salvación».

Utilización de instrumentos informáticos para latoma de decisiones por los agricultores en Israel

No se trata de hacer aquí un análisis exhaustivo dela utilización del ordenador en la agricultura israelita,sino más bien de dar una visión general, cubriendo loesencial de la información sobre el tema que nosocupa.

La producción agrícola en Israel proviene esencial-mente de dos tipos de organización socioeconómica: elkiboutz, explotación agrícola colectiva, y el moshav,pueblo con explotaciones familiares agrupadas encooperativa. Existen alrededor de 300 kiboutz y másde 400 moshav. Si el kiboutz dispone de unidades dedirección centrales, en el moshav cada agricultor admi-nistra su propia explotación, disponiendo a la par deun organismo de gestión para el conjunto del pueblo(para la cooperativa). En el kiboutz, tanto la propiedadcomo la responsabilidad y los riesgos son compartidospor toda la colectividad de miembros; en el moshav,en cambio, son asumidos por las propias explotacionesfamiliares.

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Por razones históricas, y a causa de diferencias deorganización social, los kiboutz han sido, por lo gene-ral, mejor gestionados, y han llegado más lejos y másrápidamente a la utilización de la informática en Israely están, incluso, más avanzados que los servicios dedivulgación.

Hay nueve centros informáticos regionales que sonpropiedad y están gestionados por los consejos regiona-les que agrupan los kiboutz israelitas. Prácticamentetodos los kiboutz cuentan con material informático, yasean terminales conectadas con las centrales informáti-cas o sus propios microordenadores de múltiple utiliza-ción, independientemente o conectados a la red central.A lo largo de estos dos últimos arios se ha observadouna proliferación de microordenadores utilizados pordiferentes unidades de gestión, que estiman que susnecesidades específicas no quedan satisfechas por elordenador central. Los centros informáticos tambiéntrabajan sobre aplicaciones destinadas principalmente auso interno.

Los kiboutz han puesto en marcha su propio sistemade gestión financiera, que es el más utilizado de sussistemas. El sistema de contabilidad de costes es analí-tico y proporciona informaciones de interés para laexplotación y, en ocasiones, para cada parcela en par-ticular. Estas informaciones se comparan posterior-mente con datos tomados durante el período de vege-tación (clima, estado del suelo, labores culturales, etc.).También es posible conocer los factores que influyenen el rendimiento y en los beneficios. Aparte de otrasnumerosas aplicaciones como, por ejemplo, determina-ción de raciones de forraje, planificación y control deriegos, o como la gestión de los productos lácteos y lasaves de corral.

Los kiboutz han jugado un papel importantísimo enla puesta a punto de la aplicación de modelos biológi-cos para la producción de algodón y de patatas. Enefecto, su contribución decisiva en este aspecto ha sidoreconocida por el grupo de trabajo conjunto USA-Israel, sobre la puesta a punto de divulgación agrícolainformatizada por Israel en 1985 (4).

Los moshav, explotaciones familiares cooperativizadas,utilizan menos el ordenador. Esto puede explicarse enparte por el hecho de que, como explotaciones indivi-duales, les es más dificil reunir el capital necesario parainvertir en material informático de vanguardia. Losorganismos centrales de gestión del pueblo de la mayo-ría de los moshav utilizan programas de financiación ycontabilidad de costos. Puede ser interesante señalarque la estructura fundamental de este sistema ha sidoplanteada e implantada por el Departamento de Ges-tión de las Explotaciones del Servicio de ExtensiónAgraria en los años 70. Ha quedado demostrado quese trataba de una herramienta de trabajo fiable, por loque el sistema ha sido adoptado y perfeccionado porlas sociedades privadas informáticas de los moshav.

Las otras aplicaciones informáticas son el cálculo deraciones de forraje destinadas a las unidades centralesde cría y, recientemente, al control del riego de terre-nos de gran extensión. Algunos agricultores individua-les de los moshav han comenzado a utilizar microor-denadores para el propio trabajo de gestión. En estecaso, las aplicaciones más corrientes han sido dirigidasa la cría de aves de corral y a la producción de flores.En este último caso, los agricultores utilizan también elservicio de videotextos, proporcionado por una empre-sa privada que da información sobre las ventas diariasal exterior de cada empresario agrícola.

El «software» está apoyado en una historia de la decisión.

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Introducción de los ordenadores en los serviciosisraelitas de divulgación

Información general referida al SID

El SID (Servicio de Información y Divulgación)gubernamental del Ministerio de Agricultura cuentacon unos 450 trabajadores, 370 de los cuales son pro-fesionales; se caracteriza por tener un alto grado deespecialización y elevado rango de conocimientos pro-fesionales. No acoge a personas con formación noespecializada. Cada divulgador es especialista en unarama o faceta y, a menudo, incluso de un sectorespecífico.

El SID no se limita a la difusión de conocimientosy del «saber cómo hacer», sino que también trabaja enla puesta a punto y la adaptación de nuevas técnicasagrícolas. El SID tiene, por tanto, dos tipos principalesde actividades: la formación y el reciclaje de los técni-cos. Esta última función puede compararse a la de unaempresa privada industrial en la búsqueda de técnicasy cuya responsabilidad llega hasta el punto deaplicación.

El SID proporciona servicios de consejo o asesora-miento locales para las explotaciones agrarias a tra-vés de diez oficinas regionales. El divulgador especiali-zado local puede encontrar ayuda tecnológica específicaen las centrales, donde se encuentran los especialistasnacionales. Las competencias provinciales participantambién en la preparación de programas y de la polí-tica agrícola nacionales.

Principios de la integración informática en el SID

La utilización de ordenadores por el SID no es unanovedad. En efecto, desde los arios 60, las unidadescentrales de tratamiento de datos han sido utilizadaspara diversas aplicaciones estadísticas y de programa-ción. En nuestros días, el departamento de gestión delas explotaciones del SID ha puesto en marcha el sis-tema de información financiada para cubrir las necesi-dades de los moshav, utilizando la unidad central delMinisterio. En 1977, se desarrollaron las primeras ideasrelativas a la integración del sistema informático en eltema de la organización. El objetivo era disponer deun sistema global con diversos usos, antes de propor-cionar lo que se llamó entonces «un sistema de divul-gación dinámico adaptado al momento actual». Estesistema hubiera consistido en modelos biológicos simu-lados, en bancos de datos referentes al clima, al sueloy otros parámetros para cada grupo de explotaciones;variables económicas, recomendaciones sobre cultivos yotros tipos de programas que permitieran a los divul-gadores y empresarios agrícolas combinar todas lasinformaciones facilitadas para formular recomendacio-nes en unos casos y tomar decisiones óptimas en otros.

En 1980, comprendimos que sabíamos muy pocosobre los medios para llegar a este objetivo y que seríaprácticamente imposible alcanzarlo. Entonces, se pro-

dujo otra situación: los agricultores habían tomado lainiciativa de realizar cosas que, a nuestro entender, seinsertaban en el proyecto del sistema integrado.Tomamos, por tanto, una actitud más pragmática tra-tando de hacer lo que estaba en nuestra mano, lo másrápidamente posible. Pusimos en marcha un conjuntode medidas con vistas a transformar nuestro servicio dedivulgación en una organización basada en la informá-tica. Resumiendo, estas directrices fueron las siguientes:

• Comenzar por colaborar y tener conexión directacon los centros informáticos de los kiboutz. En lugarde comprar nuestros propios ordenadores, hemos com-prado solamente las terminales y las hemos conectadoa sus ordenadores. También hemos participado en laelaboración de su «software», hemos ayudado a formara sus usuarios y hemos empleado una parte del soft-ware dedicándolo a las tareas de divulgación.

• Hacer consciente a la organización de la existen-cia del ordenador. Para empezar, y esto en el marcode una orientación general, hemos organizado cursosbásicos de introducción a la informática, orientados atodo tipo de personas. Seguidamente, se organizarondebates con el personal de todas las unidades regiona-les y de las unidades centrales, reuniones que han dadolugar para sacar a la luz diversas ideas relativas a lasposibilidades del ordenador. De la misma forma,durante sus visitas, los diversos directores de la organi-zación y los jefes de departamento han preguntadosiempre a los agentes de divulgación, ¿qué piensanhacer ustedes con los ordenadores?

• Estudio completo en relación con las necesidadesy demandas reales. En lugar de presentar un plan dedesarrollo general, hemos seleccionado agentes dedivulgación que estaban interesados en este nuevo tra-bajo y en aspectos que pensábamos adecuados pararecibir la tecnología informática. Por tanto, hemoscomenzado por reunir a algunos agentes de divulgacióndispersos, para estudiar dos o tres temas, y ampliandoéstos de ario en ario.

• Evitar la aplicación de la información obtenida auna unidad de organización particular. Las actividades

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relacionadas con los ordenadores se han integrado enel Departamento de Métodos de Divulgación y nohemos contratado ningún especialista ni en informáticani programador.

• Intervención limitada en el desarrollo del soft-ware. Nuestro personal no se ha ocupado de la pro-gramación, sino más bien de constituir la base técnicapor sectores (sujeto-tema). Más adelante, hacia el finalde la puesta en marcha del programa, también se hacontribuido al logro de hacerlo menos frío, incorpo-rando facetas que tuvieran en cuenta los aspectoshumanos.

Experiencia adquirida y problemas que han surgido

Nada más comprar el primer microordenador, en1983, se produjo una gran conmoción. No era extrañoque la División de Gestión Agraria fuera la primeraunidad en contar con su propio sistema informáticoindependiente. Desde entonces, con gran esfuerzo eco-nómico y del personal, todas las oficinas regionales dedivulgación han sido equipadas con un microordena-dor, al menos, al igual que las siguientes unidades dela central: aves de corral, protección fitosanitaria,maquinaria agrícola, regadíos y suelos, y publicacionesrelacionadas con la divulgación. En total, el SID dis-pone de 25 microordenadores que no están, sinembargo, interconectados todavía. En algunos casos,existen organizaciones agrícolas profesionales que hanadquirido ordenadores para ser usados por especialistasque trabajan en sus sectores particulares.

El equipamiento tipo es IBM PC/XT y el instru-mento de trabajo más corriente el Lotus 1-2-3. Las tresposibilidades del Lotus (hoja de cálculo electrónico,base de datos y gráficas) se ajustan perfectamente a lamayoría de las necesidades profesionales del SID.Actualmente utilizamos este instrumento y preparamosla mejora de la calidad de las aplicaciones obtenidas.Los agentes de divulgación han descubierto las ventajasque pueden obtener de sus propios modelos. Comple-tamente implicados en las actividades de actualizacióny de asesoramiento, los agentes de divulgación handescubierto las ventajas que pueden obtener de suspropios modelos. Completamente implicados en lasactividades de actualización y de asesoramiento, losagentes de divulgación no han dejado de utilizar esteinstrumento. Además del Lotus 1-2-3, todos los que lomanejan han contado con programas de tratamiento detextos y, algunos, con conjuntos de programación linealy de análisis estadístico.

El SID se ha alarmado por el hecho de que, acausa del gran esfuerzo y la atención prestada última-mente a la introducción de los microordenadores, lacolaboración de los agricultores con los centros infor-máticos se ha relajado un tanto. La unidad central detratamiento que posee el Ministerio de Agricultura enTelaviv es utilizada por el SID para los análisis admi-nistrativos y estadísticos principalmente.

Principales aplicaciones del ordenador

Entre los departamentos técnicos, la División deGestión Agraria es la que hace más uso de los ordena-dores. Además del uso normal, los especialistas eneconomía han puesto en marcha un sistema informati-zado que sirve para preparar el presupuesto de los cul-tivos, y que es accesible a cualquier usuario interesado.Incluso los divulgadores especializados en la rama agrí-cola utilizan cada vez más dos aplicaciones que tienenun fuerte componente económico: 1) análisis de laespeculación (técnica y económica). y 2) presupuestosde las especulaciones que comportan una opción capazde responder a la pregunta ¿qué pasa si...?

Los especialistas en la cría de ganado han recurrido conregularidad al uso del ordenador para los cálculos referen-tes a las raciones de pienso. Los divulgadores han comen-zado a desarrollar bases de datos para las explotacionescon las que trabajan, tales como productos lácteos yganado bovino (inventario de grupos de determinadosganaderos seleccionados y también sobre produccionesvegetales), inventario de parcelas, variedadesrendi-mientos, etc.

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Algunos divulgadoresdivulgadores han comenzado a realizar unanálisis estadístico de las experiencias y pruebas sobrecultivos (efectuados normalmente por la mayoría de losdivulgadores), directamente con el equipo IBM/PC dela región (utilizando M-STAT). El resto se efectúa enlos servicios centrales, con la ayuda de la unidad cen-tral de programación del Ministerio (principalmentecon la ayuda de SAD).

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Los divulgadores continúan participando activamenteen el lanzamiento y puesta a punto de programasrealizados por profesionales del software (privados opertenecientes a organizaciones agrícolas). La tarea denuestro personal es definir las necesidades y posiblesutilizaciones a poner en práctica y proporcionar cono-cimientos técnicos agrícolas.

Problemas y dilemas

He aquí algunos problemas y disyuntivas a los quenos enfrentamos en la actualidad:

1. Estamos ante una explosión de aplicaciones pre-paradas por los divulgadores, que tenían una formacióny una experiencia limitadas en el campo de los orde-nadores. Es difícil garantizar que todas estas aplicacio-nes sean de calidad suficiente en cuanto a su contenidoy a la posibilidad de utilizar el programa.

2. Demasiada dedicación del tiempo de los divul-gadores al estudio de la utilización de los ordenadoresy a la puesta a punto de sus instrumentos. ¡Algunosdedican hasta el 40 por 100 de su tiempo! (Y estopuede representar una semana de trabajo bastante máslarga que la semana de trabajo anterior al ordenador).No estamos todavía en disposición de asegurar si setrata de un fenómeno que se repetirá o se trata de algopasajero. Podemos predecir, por tanto, que para utilizarlos ordenadores, los divulgadores dedicarán en elfuturo menos tiempo a los trabajos sobre el terreno ycompensarán éstos, es de esperar, con útiles de trabajomás eficaces.

3. Nos enfrentamos frecuentemente con un pro-blema de formación. Cada vez hay más gente quedesea aprender y, simultáneamente, aumenta el númerode materias a impartir. A pesar de que la mayoría delos programas tienen una orientación autodidacta, esti-mamos que, de todas formas, se impone realizar untrabajo de orientación y formación.

¿Dónde nos encontramos?

El enorme arsenal de novedades tecnológicas enelectrónica es citado casi constantemente: videodisco,fibras ópticas, tratamiento numérico de la información,comunicación vía satélite, ordenadores más baratos ymás completos; inteligencia artificial, gigantescos bancosde datos, etc. Es difícil predecir la influencia de todosestos elementos en los servicios de divulgación. Locierto es que hará falta prever grandes inversionesmonetarias y también humanas.

Hay autores que dicen (5) que no hemos digeridotodavía la revolución informática, puesto que «... con-tinuamos trabajando como antes, pero con mejoresmedios. La verdadera evolución tendrá lugar cuandodescubramos los medios para trabajar como jamás lohayamos efectuado anteriormente».

El proceso será largo y el cambio no tendrá lugarde la noche a la mañana. No olvidemos que la reedu-cación es un proceso lento. Hará falta probablementeuna nueva generación de personas formadas para traba-jar en este nuevo entorno, y habiéndolo conocidodesde muy jóvenes.

Parece que en el futuro haremos algo más que aten-der a actividades corrientes y que dedicaremos menostiempo al contacto directo con los agricultores. Pode-mos considerar esta evolución como una ventaja de losmedios electrónicos, que permitirán atender a distanciaa gran cantidad de personas.

Para terminar, volviendo al núcleo del tema «losordenadores como ayuda para la toma de decisiones»,sostenemos que los medios informáticos para la tomade decisiones, tal como los concebimos en el presenteartículo, por más sofisticados que puedan ser, no pasa-rán de ser una ayuda y jamás sustituirán al cerebrohumano.

Dan Marom

Yoseph ElkamaServicio de Divulgación de Israel

4. En cuanto a la puesta a punto del software, ladisposición de uso de las aplicaciones no representabapara nosotros una tarea demasiado ardua, al menos enlo que se refiere a la utilización de estas aplicacionespor el público. No disponemos de conocimientos ni delos recursos necesarios para ello. Entre tanto, mante-nemos nuestro esfuerzo para preparar y mejorar lacalidad de las aplicaciones para el trabajo de nuestrosdivulgadores, en consideración a los agricultores, desti-natarios de su labor.

5. Uno de nuestros principios es estar a la van-guardia de la profesión. No sabemos con certeza cómopodremos entrar de lleno en el campo de los ordena-dores, teniendo en cuenta las restricciones de fondos ylas posibilidades de captar jóvenes expertos cuali-ficados.

EFER' «TÍAS BIBLIOGRAFK

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3. Hars Stephan, B.: «Extension delivery models in the year2000». NCCI Symposium on integrating computers intoextension today and tomorrow, 1985.

4. Encana, Y. (Ed.): «Joint USA-ISRAEL workshop on deve-lopment of computer supported agricultural extension»,1985.

5. Bushby Philip, A.: «Is bloom's taxonomy obselete?Addressing high order skills». NCCI Symposium oncomputers in the animal husbandry classroom, 1985.

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