Cuando comencé a escribir no teniatítulo para escritura. Este fue el títuloque llegó a mi corazón: “La Iglesiadetrás del muro”. Cuando miro las cosasque están pasando dentro de esta grandeorganización que se llama la iglesia, mepregunto ¿por qué será? Miro loscreyentes de hoy día como se toman tanlivianamente el servicio a Dios. Aquelrespeto que se debe tener a la obra deDios, a la casa de Dios, ya no es así.Estamos lejos de lo que Dios quiere queseamos.

Al estudiar la vida de Josué, y susvictorias, me llevan a pensar que cadauno de nosotros es un Josué delante deDios. Cada uno de nosotros tiene lamisma autoridad de parte de Dios, pararealizar grandes hazañas en su nombre.No estamos viendo milagros, y prodigiosen medio de las reuniones o en loslugares donde vamos, porque nos hemosquedado rezagados, en obedecer lasordenes de nuestro Comandante en Jefe,que es Jesucristo. Cuando esas cosassuceden perdemos el entusiasmo por laobra de Dios. El llamado es a laconquista, sin embargo la iglesia se haquedado detrás del muro.

Introducción

Hace unos días estudiamos en la EscuelaDominical, la parte histórica de Josué eIsrael ante los muros de Jericó. Vimoscomo Dios le dio la victoria a aquélpueblo para conquistar una ciudad que ala vista del hombre, y con razón, erainconquistable. Los muros de Jericó eranimpenetrables. Solo el milagro del poderde Dios podía derrumbarlos ante elejército israelí.

Quedé insatisfecha por la manera en quese condujo la enseñanza. Casi todo eltiempo se fue en declaraciones deproblemas personales. En declaración depersecuciones de otros hermanos, a loschismes. Estos comentarios nos enseñanla falta de conocimiento que hay en lascongregaciones.

El pueblo israelí estaba en lospreparativos para ir a la conquista deJericó. Lo primero que hicieron fuerecibir la instrucciones correspondientesde parte de Dios y de sus líderes. No sehizo nada sin que antes su líderconsultara con Dios lo que había quehacer. Debido a su obediencia a lo queDios dijo obtuvieron la victoria.

Mi insatisfacción en la manera deexponer la lección se dio al hecho yamencionado, y que no se le dio el énfasisde que debemos conquistarnos a nosotrospara Dios, y luego, salir conquistar almundo para Dios.

Josué se ocupó de revisar todas lasestrategias necesarias para la batalla, perole dejó el lugar a Dios para que dirigierala guerra, y por eso obtuvieron la victoria.El ejército israelí, permaneció en Gilgaly allí por varios días estuvo recibiendotodas las enseñanzas que eran necesariapara su empresa. La tierra de Canaán lefue prometido por Dios a ellos, peroellos, con la ayuda de Dios, tenían queconquistarla. No era quedarse en Gilgal,esperando un milagro, tenían queavanzar, y echar mano de él.

Cuando leemos esta historia en la Biblia,o alguna otra, a veces decimos, “mehubiese gustado estar allí”. Yo creo queantes hasta de pensar algo así, debemospensar, ¿Cuán en serio estoy tomando aDios? ¿Estoy dispuesto a ser de losconquistadores, o de los que miran por elmuro? ¿Soy lo suficientemente valientepara armarme e ir al frente del arca deDios, o me quedo en el campamento?

En este escrito, hablaremos un pocosobre estas preguntas.

Hace algunos años escribí una reflexiónsobre los que hacen chistes y sobre lospayasos en los altares. Hablaba sobre loscomediantes de los llamados “Stand UpComedy”. Hoy día no solo están los quese destacan en las comedías, tambiénestán “La Divas” y “Los Adonis” en losaltares. Una fachada llena de prendas,bonitos vestidos, bonitos atuendos losmasculinos, pero lejos de la presencia deDios. Se han llenado las iglesias, y losaltares de una gama de “artistas” queestán forzando a Dios a que retire suGloria, como pasó en los tiempos deEzequiel. Muchos son los pastores ylíderes que viven despreocupados porsantidad en la casa de Dios. Si Jesúsviniera otra vez, como entró enJerusalén, lo veríamos despidiendolíderes de los altares, y muchos denosotros seriamos expulsados de lasbancas. ¿Cómo podemos decir quetenemos a Dios en serio, cuando se estáperdiendo la gente dentro de los templos,y nos conformamos con un devocionalmediocre, y con una predicación másfría que la nieve? Falta de reverencia enla casa de Dios, el entra y sale de lagente. En el momento de la oraciónestán hablando unos con otros einterrumpiendo a los que están orando.No se deja ver el verdadero respeto a lapersona de Dios.

¿Cuán en serio estoy tomando aDios?“Yo diría, tú dirás, hasta el tuétano de loshuesos.” Amo a Dios, con todo micorazón, con toda mi mente, con todasmis fuerzas. Claro que sí, Estoy haciendo“toooodo” lo que Dios me dice. Yo voya las reuniones en el templo, ayuno, oro,leo la Biblia. Claro que estoy tomando aDios en serio. El joven rico le dice aJesús, yo he guardado todos losmandamientos desde mi juventud. Amén,que bueno, diría Jesús. Pero le dice: Aúnte falta una cosa: Vende todo lo quetienes, y dalo a los pobres, y tendrástesoro en el cielo, y ven sígueme. (Lc18:22). Se fue triste. Vaya, Jesús, eso nome gustó. ¿Qué me deshaga de miscosas? ¿Qué se las de a los pobres? ¿Enqué cabeza cabe algo así? Eso, si que no.Gracias, por todo. Cuando tomamos aDios en serio, aprendemos aconquistarnos a nosotros mismos. No

nos estamos pavoneando, de que soy elmas que soy. No estamos pendiente a lasriquezas materiales por encima de todo.Cuando tomamos a Dios en serio noestamos buscando títulos grandiosos: Yosoy el apóstol tal, yo soy el reverendo tal,yo soy el pastor tal, soy en evangelistainternacional., Soy el gran maestro deEscuela Bíblica, soy, soy, soy. Cuandotomamos a Dios en serio, procuramosvivir en humildad y en santidad.

Es lamentable ver en los cultos apersonas ministrando en los altares conunas fachas que dan escalofríos, y no porla presencia de Dios, sino por vergüenzaajena, como decimos aquí, al ver comose está tomando los altares para hacershows.

Dios? Esto no se trata de cantar lascanciones de los famosos de la radio.Esto se trata de la obediencia rendida aDios. En esa obediencia a Dios se haceconstar el amor que sentimos por Él ypor toda su creación.

Conozco a un “grupo de adoración” quesolo asisten a la iglesia cuando van acantar o a tomar la dirección en algunaocasión, y siempre llegan tarde. No seven orando en el altar, no se vencompartiendo con los hermanos. Se venriendo solo cuando hay un comediante enel altar, de lo contrario, están con unaexpresión en su rostro, que o estánenojados, o están amargados. ¡Dios mío!No tienen en estima el estudiar la Biblia,nada de ir a un ayuno, o a un culto deoración. Lo que mas me disgusta es elver que el liderato de la iglesia aceptantodo esto para no perder los músicos ylos cantantes de la congregación. Estosson aquellos líderes que no tienenconsideración de la iglesia, ya que lasometen a aceptar lo malo y a rechazar lobueno. Yo pienso que si estas personastuvieran a Dios en serio, serían másresponsables con el talento o ministerioque Dios le ha dado, el cual debe ser paraedificar al pueblo de los santos, y no parasentirse mejor que los demás.

¿Cuán en serio estoy tomando aDios?

Hace unos domingos atrás, mientras miesposo y yo nos dirigíamos al estudio enla mañana, me sentía un poco preocupadaal pensar si la maestra prepararía unabuena clase o no. Hablaba con miesposo, y le decía que tenía que pedirle aDios, trabajara en mi en esa área deldisgusto por estas cosas. Tan prontoentre por la puerta principal al templo,recibí mi examen. Allí estaba la hermanahablando con otra sobre una actividadsocial que se celebraría ese domingo enla noche en la iglesia. Pero lo que másmes disgustó fue que me detuviera parapedirme algo, y me dijo “Millie, antesque te vayas a orar”. Esa expresión fuecomo una gran bofetada para mí, ya queiba con el disgusto de como podría correrla Escuela Dominical. Tan pronto fui alaltar le pedí al Señor que tuviera

misericordia de mí, por sentirme tanmolesta.

La casa de Dios se ha convertido en unacueva de mercaderes. No esta mal que secelebren actividades sociales y que todoscooperemos, pero poner a Dios a un ladopara hacer preparativos para ello, einterrumpir la reunión espiritual parahacer arreglos, eso si que deja mucho quedesear en la cristiandad. Las actividadessociales en las iglesias, están dejando aun lado la verdadera adoración. ¿Quédije? La verdadera adoración. Famososgrupos de adoración, cantan comogorriones, pero nunca reciben laenseñanza de la Palabra. Esos son losadoradores. ¿Sabrán ellos lo que significaadorar a Dios.

que muy pocos los leen antes de serposicionados. Tanto el pastor como eldiácono tiene que saber dirigir la iglesiacon responsabilidad y en santidad. No sepude decir que se está tomando a Dios enserio, cuando faltan estas cosas en lacongregación.

La santidad, ¡qué temita! La santidad y laresponsabilidad cristiana hay queplasmarla desde el altar. Se molestequién se moleste, se vaya quién se vaya,(aunque no es eso lo que queremos), eltema de la santidad no se puedeencajonar. Esto es lo que nos dice sitomamos a Dios en serio o no. Es que sinsantidad nadie verá al Señor. Nadie serásalvo si no vive en santidad. Y laadoración a Dios depende de cuan santosseamos nosotros. No es ser perfectos.Ser santos es separarse de todo el mundode pecado y vivir solo para agradar aDios.

¿Cuán en serio estoy tomando aDios?

En cierta ocasión escuché a un pastorexhortando a los adultos de lacongregación, respaldar a los jóvenes ensus cultos. Es claro que así debe ser. Loque me disgustó y lo vi como un abusoespiritual, es que tales jóvenes no asistenni a sus propios cultos. Estos jóvenes yacon hijos y todo, y siendo los hijos dealgunos de esos adultos. Me preguntoyo, ¿dónde está la visión de esa pastoral?Creo yo debió comenzar exhortando aesos jóvenes que respaldaran sus propioscultos. Que asistieran a la EscuelaBíblica, y también respaldar el culto desus padres. Tal vez lo hizo, pero no seveía la reacción. Personas vacías deDios. Que se tienen a ellos y a losdeleites de la carne antes que a Dios.

También e visto a estos líderes que sepelean por ocupar puestos en la iglesia, ycuando ya están arriba, llegan tarde, sonlos mas que faltan, son los menos queayudan, pero si no los ponen al frente aellos, están siempre con mala cara. Hacealgunos años, y viendo esta mismaactitud en diversos líderes, escribí losiguiente: Es desesperante llegar altemplo, donde supuestamente se reúne lafamilia de Dios, donde supuestamentedebemos encontrar alivio a nuestracarga cotidiana, donde supuestamentenos encontraremos con los hermanos enCristo. Con gente supuestamente llenade amor y que debemos alentarnos losuno a los otros, y en vez de encontrar

alivio lo que encontramos es gente quenos pone cara de enemigos y nos quierenpisotear. Donde encontramos envidias,egoísmo, celos, contiendas, pleitos,disensiones, malos deseos. ¡Qué mal nossentimos! En nuestro corazón está elanhelo de que algún creyente se levantey nos de una palmada en el hombro y loque nos dan es la estocada que nos acabade dañar. Gente protestando porque noles dieron un puesto.

En cierta ocasión estudiábamos sobre elcarácter de Josué como líder. En lalección se mencionada que el líder deberser una persona que contagie a otros.Sentí los flechazos en todo mi ser,cuando comenté de los líderes que llegantarde, que faltan continuamente a loscultos. Un líder así contagia, pero demanera negativa. Mejor es quedarsesentados y que otros sean líderes. Llegantarde, y “con mala cara”, para que nadieles pregunte. No es posible que hayaavivamiento en medio de un pueblodonde los primeros irresponsables son loslíderes. Con razón tenemos en la Biblialos requisitos de pastores y diáconos,pero parece que

extiende su espada para señalarlo comoun “Sir” “un caballero”, de los ejércitosde Jehová, como se designaban loscaballeros, de los reyes en la antigüedad.Josué creyó y recibió esa designación.Ya no estaba mirando desde lejos ypensando que hacer, ahora era un“mosquetero” listo para la conquista.Gedeón creyó al Ángel de Jehová y fueel “mosquetero” que liberó a Israel de laopresión de los madianitas. Moisés fueel “mosquetero” que Dios escogió paraliberar a Israel de la esclavitud en Egipto.Cada uno de ellos en un momento dadomiraron desde el muro, pero ahoraestaban gritando para que el murocayera, y el muro cayó bajo el poder deDios.

El problema no está en mirar desde elmuro, el problema en seguir temblandode miedo y n ver que el Ángel de Jehováte está poniendo una espada en la manopara que salgas a conquistar nacionespara Dios.

Hay muchos creyentes mirando desde elmuro. Cantando “coritos” y como dijeanteriormente cantando las canciones delos “artistas cristianos”, tratando deimitarlos, haciendo dramas, pantomimas,danzas exóticas, y cuanta cosa aparece,esto desde los altares y que para adorar aDios.In eget sapien vitae massa rhoncus lacinia. Nullamat leo nec metus aliquam semper. Phasellustincidunt, ante nec lacinia ultrices, quam mi dictum

¿Soy un conquistador o miro desde elmuro?

Allí estaba el pueblo de Israel marchandoalrededor de Jericó. Los de Jericótemblando de miedo. Veían y oían alejército marchar, oían las trompetas(shofar) sonar, pero no oían palabraalguna. Era algo atemorizante. Lo únicoque podían hacer era confiar en lafortaleza de aquella muralla. Pero Israel,sobre todo Josué confiaba en el que tieneel poder para derribar la muralla.

En medio de las congregaciones haymurallas que conquistar. Hay que buscaresa comunión con Dios, que nos dará elpoder para vencer. He aquí dosalternativas: conquistas, o solo mirasdesde el muro. Si decides ser unconquistador tienes que seguir lasinstrucciones específicas de Dios, y laprimera es “buscar la santidad sin la cualnadie verá al Señor”. Lo primero quedebes hacer para ser un conquistadoreficaz, es tener un encuentro con el Ángelde Jehová. Josué tuvo esa experiencia.Mientras observaba aquellos altos murosy meditaba en posibles estrategias paraasaltarlos, se le acercó un personaje conuna espada en la mano. Puedoimaginarme a Josué tratando dedesenvainar su espada, pero algo no dejóque lo hiciera. Me parece ver a Josué consu mano pegada al asta de su espada,preguntarle a aquél personaje si eraenemigo o amigo. La respuesta que dioel personaje a Josué fue tan contundente,que su reacción fue poner la frente entierra y adorarle. No era amigo, ni mucho

menos enemigo. Se identificó como el“príncipe de los ejércitos de Jehová.”Que alivio para Josué. El guerrero deJehová le dio instrucciones a Josué.Aquel encuentro con el Ángel de Jehová,le demostró a Josué que si Dios esta pornosotros, no hay nada ni nadie que nospueda hacer frente. Asaltaremos losmuros y conquistaremos nuevas tierrapara el reino de Dios, si ponemos laconfianza en Aquél que nos llamó.

Ahora bien, si eres de los que mirandesde el muro, o por los agujeros entrelas piedras, no tienes que hacerabsolutamente nada. Solo quedarte allíesperando la destrucción. Es entoncescuando el creyente solo habla deproblemas, y lo único que hace esquejarse de todo lo que pasa. El que miradesde el muro, no haya propósito enbuscar de Dios. Vive una vida extinta.Se maltrata a sí mismo, y maltrata a losdemás. El que solo mira desde el murove las imposibilidades, el miedo no lepermite ver las victorias que se acercan.El que mira desde el muro, no ve cuandoel Ángel de Jehová extiendeNulla quis nibh. Proin ac pede vel ligula facilisisgravida. Phasellus purus. Etiam sapien. Duis diamurna, iaculis ut, vehicula ac, varius sit amet, mi.Donec id nisl. Aliquam erat volutpat. Integer fringilla.Duis lobortis, quam non volutpat suscipit, magnasem consequat libero, ac hendrerit urna ante id mi.Quisque commodo facilisis tellus. Integer sodaleslorem sed nisl. Morbi consectetuer mauris quis odio.Ut dolor lorem, viverra vitae, viverra eu, euismod

Los perezosos

Dos perezosos descansabanBajo la sombra de un arbusto.

Estaba uno acostado boca arribaY el otro acostado boca abajo.Durante horas permanecieronAllí completamente callados.

De repente, el que estabaBoca arriba acostado

Rompió el silencio y le dijoAl que estaba acostado boca abajo:

“Juan, Juan que tremendo esEl avión que está pasando”.

El que estaba boca abajo acostadoTomó su tiempo y luego le contestó

Con tono de voz cansado:“Pedro, chico, que suerte tienes túDe poder verlo. Eres afortunado.”

Este vago era tan vagoQue pensó no podía ver

El avión que estaba pasando.Así es la pereza, nos hace

Creer que no podemos hacerAquello que está en nuestras manos.

Por: Miguel Antonio Rivera

¿Soy un conquistador, o miro desde elmuro?

¡Los comediantes, ni hablar! Sinembargo, a la hora de salir al campo debatalla a conquistar, de nada les sirve elcorito avivado, la canción melancólicaque están imitando, la pantomimafantasmagórica, las danzas exóticasrimbombantes. Las divas y los adonis seacomodan en sus camerinos y solo unterremoto los saca de allí, paraacomodarse, entonces debajo de unamesa.

El que mira desde el muro, busca elagradarse a si mismo. No quiereensuciarse las manos, no quiere sudar, noquiere despeinarse, no quiere que sumaquillaje se corra, y que no se les dañensus prendas. Llegan a la reunión de losdomingos, y se sientan y no saludan anadie, para no dañar su compostura. Lehuyen a la manifestación del EspírituSanto para no estrujarse la ropa, y nodespeinarse ya que tuvieron que pagaruna gran suma en el salón de belleza. Losque miran desde el muro no invitan a loshermanos a sus casas, para que no vean lamanera tan “mundanal” que llevan en sushogares. Los que miran por el muro,salen corriendo cuando se manifiesta unespíritu demoníaco en medio de lareunión, pues no tienen la autoridad delEspíritu Santo para reprenderlo. Elfanático mira desde el muro, el que juegaestá al otro lado del muro buscando lavictoria.

Nos sentimos atemorizados cuandollegamos al templo y en vez de ver genteque nos ayude, lo que hacen es ponernos“mala cara” y demostrarnos que eldeseo de ellos es que estemos fuera desus contornos. Encontramos personasllenas de prejuicios, que al ver que noestamos de acuerdo con su conducta nosponen a un lado y fruncen el ceño paraque no nos acerquemos a ellos. Aúnentre los lideres encontramos estaconducta, que hace tan difícil creer en loque nos están enseñando con suspalabras. Aunque los líderes se sientanafectados por diversas circunstancias, noconsidero que estén autorizados arechazar a los demás, sino que, a pesarde todas las situaciones deben hacerhasta lo imposible por ministrar conamor, amabilidad y estar siempre a ladisposición del que lo necesite.

¿Quieres ser un conquistador, o teconformas con mirar desde el muro?Tú decides.

que me diste; porque tuyos son, y todo lomío es tuyo, y lo tuyo mío; y he sidoglorificado en ellos.” (Jn 17:9-10).Posteriormente dijo: “Mas no ruegosolamente por éstos, sino también por losque han de creer en mí por la palabra deellos,” (Jn 17:20). Jesús no rogó porbendiciones para aquellos del mundo queno le aceptaron, ni le aceptarán, pero sirogó, por los que le aceptaron, y por los quele aceptarían, por la palabra de estos. Estaoración todavía fluye. Jesús dice, yo teruego Padre, por un cuidado especial paralos que van guiados por el arca, o sea elEspíritu Santo, los que se quedan en elcampamento los dejo bajo tu misericordia.Los que se quedan en el campamento, sonimportantes para Dios, pero Él nos quiere atodos dejándonos guiar por el EspírituSanto, y saliendo a conquistar almas parasu reino. Pablo dice: “¿Cómo, pues,invocarán a aquel en el cual no han creído?¿Y cómo creerán en aquel de quien no hanoído? ¿Y cómo oirán sin haber quien lespredique?

La orden de Dios fue, es y será que se llevea cabo la conquista. Aunque parezca queno hay remedio, Dios tiene todo planeado.Esa conquista tiene que comenzar en losmismos creyentes. Queremos unavivamiento. Se habla de un avivamiento.

Hace unos días escuchaba a un predicador

¿Voy con el Arca del pacto, o mequedo en el campamento?

Las instrucciones fueron claras. Fueronclaras para Josué, el conquistador y parael pueblo que era dirigido por él. Sonclaras para los creyentes,neotestamentarios. El arca del pacto irá alfrente. Detrás todo el pueblo de guerra enpos de la conquista.

Jesús le dijo a sus discípulos, vayan aJerusalén y esperen allí hasta que recibanel poder del Espíritu Santo, y luegolancense a la conquista. ¿Cuál era laconquista, o mas bien, ¿Qué iban aconquistar? Josué, e Israel iban aconquistar la Tierra Prometida. Losdiscípulos fueron enviados a conquistar atodas la naciones. “Por tanto, id, y haceddiscípulos a todas las naciones,bautizándolos en el nombre del Padre, ydel Hijo, y del Espíritu Santo;enseñándoles que guarden todas las cosasque os he mandado...” (Mt 28:19-20-a).

El arca es el símbolo del pacto de Dioscon Israel. El mismo consistía de uncofre que contenía los diezmandamientos, una olla con el maná y lavara de Aarón. Estaba cubierta por unatapa llamada el propiciatorio, fijados aambos extremos del propiciatorioestaban cincelados dos querubinesalados. Se ponía en el lugar santísimodel tabernáculo y representaba el tronode Dios, delante del cual se ponía elsumo sacerdote una vez al año en el díade la expiación para rociar sangre sobreel propiciatorio como expiación por los

pecados involuntarios del pueblodurante el año anterior.

La iglesia neotestamentaria no necesitadel arca del pacto, no necesita de cosastangibles para saber y sentir que lapresencia de Dios está en medio. Jesúsdijo “Pero cuando venga el Espíritu deverdad, él os guará a toda la verdad;...”(Jn 16:13). La presencia de Dios está entodo aquel que ha recibido a Cristo comoSalvador. Él es el arca del pacto. Peroeste es un nuevo pacto que fue ratificadocon la sangre derramada en el Calvario.

El creyente lleno del poder del EspírituSanto no se conforma con quedarse en elcampamento. Tiene que salir a laconquista. Jesús dijo que el EspírituSanto (el arca del pacto antigua),convencerá al mundo de pecado, dejusticia y de juicio.” (Jn 16:8), pero si losconquistadores no se movilizan paradejarlo sentir entre las naciones no haráel efecto para el que fue enviado.

Dios prometió a Josué que ya le habíadado la victoria sobre aquellas naciones aconquistar. En Juan capítulo 17 Jesús oróal Padre, y le dijo: “Yo ruego por ellos;no ruego por el mundo, sino por los

mismos.”

Muchos critican a David, por habersequedado en su casa cuando tenía quesalir a la guerra. Estaba cansado, todosnos cansamos. No había problema entomarse un día libre, ¿a quién no lesgusta unas vacaciones? El día libre deDavid, le trajo agonía para el resto desus días. Mirando desde el muro, vio auna mujer bañando se en la casa vecina,la deseo, la tomó y adulteró. Luegomandó matar al esposo. David sehumilló, Dios lo perdonó, pero recibió laretribución a su extravío.

El que se queda en el campamento,pierde la noción de lo dispuesto por Diospara su vida. Se deleita en el pecado, yluego dice: “Tú no eres quién, para queme juzgues.” La Palabra de Dios tejuzga. ¿Ve el ejemplo de David? Diosenvió a su profeta Natán quién le sacó ala luz el pecado a David, por eso searrepintió. Gracias a Dios que searrepintió, porque hay creyentes que sontan soberbios que persisten en el pecado.Saúl es un buen ejemplo de esoscreyentes, al final fue desechado para noser rey, y terminó suicidándose.

El mundo esta pasando sus últimasetapas. Señales en el cielo, en la tierra.Catástrofes y muertes por todas partes,legalización de los matrimonios entrepersonas del mismo sexo, legalizaciónde las drogas, del incesto, del adulterio.Jesús dice: “ De la higuera aprended laparábola: Cuando ya su rama estátierna, y brotan las hojas, sabéis que elverano está cerca. Así tambiénvosotros, cuando veáis todas estas cosas,conoced que está cerca, a las puertas.De cierto os digo, que no pasará estageneración hasta que todo estoacontezca. El cielo y la tierra pasarán,pero mis palabras no pasarán.” (Mt24:32-35). En cuanto a las cosassociales y morales incorrectas, la iglesiaha salido en manifestaciones para dejarsentir su desaprobación a los gobiernos.Es lamentable ver como no se ha tomadoen cuenta la advertencia de la Palabra deDios. En muchos lugares y tristementetengo que decir en Puerto Rico también,se está prohibiendo que se ore y que semencione a Dios en las escuelas y enlugares públicos, pero se legaliza elmatrimonio homosexual, y que seenseñe a los niños en las escuelas queeso es normal, y se legaliza el uso de la

Adventista , diciendo que la iglesiaadventista esta esperando la lluvia tardía,o sea, el derramamiento del EspírituSanto. Lo que pude entender es que ellosno esperan a Jesús en su segunda venida,sino que se derrame el Espíritu Santo.¡Qué lejos están de la verdad! Loscreyentes neotestamentarios fuimosbautizados con la lluvia tardía desde eldía de Pentecostés. La llenura delEspíritu Santo está a la disposición de laiglesia. El problema está en que muchoscreyentes están huyendo a estamanifestación, y prefieren quedarse en elcampamento. Ellos saben que si le danrienda suelta al Espíritu Santo, sus obrasoscuras saldrán a la luz. Fíjate, que hablode creyentes, porque los del mundo,sabemos que están, no sobre el muro,sino detrás del muro. No quieren niasomarse a ver que está sucediendo en elcampamento. Hay muchos creyentesviviendo en pecado, por eso prefierenquedarse mirando desde el muro, o en elcampamento, pero, ¿seguir el arca?, Nihablar. Hay tanta ceguera espiritual enlas iglesias que en muchos lugares sonestos “creyentes” los que ocupan losmejores asientos en las sinagogas. Es elque preside, es el que canta, el queenseña, Es la mano derecha del pastor.Estos son los “creyentes” que sonintocables. Si se señala su malaconducta, en vez de disciplinarlos a ellos,te disciplinan a ti por decirlo, y luego tedicen: “no juzgues para que no seasjuzgado”.

En cierta ocasión se discutía el tema deljug

juzgar en una Escuela Bíblica.Manifesté, no mi opinión, sino lo quehabía estudiado, y llevé el comentario,de que la Biblia nos dice que los masespirituales pueden señalar al que estáhaciendo mal, para que se tomen lasmedidas necesarias por el bien de lacongregación. Gloria a Dios, minombre fue añadido a la lista de los másbuscados. Recibí una completadesaprobación a lo expuesto, ¿Por qué?Porque no nos gusta que nos señalennuestras faltas. Pero Dios no nos mandaquedarnos mirando desde el muro,mientras la iglesia está descarriándose,nos manda ha hacer lo posible pordetener la avalancha.

El que se queda en el campamento omirando desde el muro, no ama la obrade Dios. No ama la iglesia, no ama a loshermanos. En 2 Ti 3:16 Pablo dice:“Toda la Escritura es inspirada por Dios,y útil para enseñar, para redargüír, paracorregir, para instruir en justicia, a fin deque el hombre de Dios sea perfecto,enteramente preparado para toda buenaobra.” Si tenemos este mandato,entonces no podemos quedarnosobservando desde el muro, las cosasmalas en la iglesia.

El que se queda en el campamento, seentretiene mirando “pajaritos decolores”. No lee la Biblia, pero leerevistas pornográficas, no asiste a loscultos, pero se va de gira en los cruceros,no diezma ni ofrenda, pero va al Mall aal Mall todos los fines de semana. Elque se queda en el campamento, no veuna película de carácter espiritual, peropuede ver las novelas. El que se quedaen el campamento, no pelea por lasalvación de su casa, pero presta su casapara ver la pelea de los boxeadoresfamosos. El que se queda en elcampamento, lo consumen los celosministeriales. Cito lo siguiente:“Cuando alguien se va levantandopoderosamente delante del Señor no lovemos como bendiciones para todos,sino cono una molestia en nuestrocamino. Una de mis peticiones delantedel Señor, es que me de un corazón tal,que ame a todos. Que no haya en miorgullo, ni soberbia, ni envidia, ni celos.Todas estas cosas no solo daña anuestros hermanos, sino que tambiénnos dañan a nosotros mismos.”

hacer lo que le daba la gana, yterminó metiendo al pueblo detrásdel muro. Ahora estaba allítemblando. Pero David apareció.Salió del campamento, saltó delmuro y enfrentó al gigante.

No siempre el más grande, o el maspoderoso gana. No siempre lamayoría tiene la razón. Podránganar según sus fuerzas físicas ysocial u autónoma, pero eso nosignifica que hayan obtenido lavictoria sobre la disposición de Dios,eso nunca. Hace unos años escribí ycito: “Es probable que muchos denosotros al ver que somos tan pocos,nos cohibamos de enfrentarnos a esemundo que nos mete miedo, Sinembargo, como Dios dijo a Elías:“quedan siete mil (númerosimbólico) que no han doblado susrodillas delante de los baales.” Sibuscamos en todo el mundo, somosuna manada pequeña, pero unpueblo grande. Aunque no se cuentela minoría para determinar unaelección, en cuanto a la elección deJehová de llevar un pueblo al cielo,si contamos, contamos más que unagran mayoría, En los casosespirituales, mi amado hermano, lamayoría no tiene la razón; la razónla tiene Jesucristo y su Iglesia. Aúnen elecciones de gobiernoshumanos, podemos ver que muchasveces la minoría gana. Gana alvotar en contra de tal o cualpersona, o votar en contra de tal ocual resolución. Esto ocurre cuandola persona elegida o la resolucióntomada afecta de manera negativaal resto del pueblo. Muchas veceslos pastores, o los líderes se quejande la falta de respaldo que tienen dela congregación, o del ministerio asu cargo. Encuentra que sólo uno odos, les ayudan en tantas tareas querealizar. Hay que darle gloria aDios,

y en los lugares públicos. Se puedehablar de política, de basura inmoral,pero de Dios no. Se puede enseñar a losniños que es normal el matrimonio dedos hombres y de dos mujeres, pero nose le puede enseñar que la familia es lainstitución más preciada de Dios, y laestableció desde Génesis capítulo 1entre hombre, mujer y los hijos. Selegaliza el uso de la marihuana y que demanera medicinal, eso, es una trampadel mismo infierno. ¡Vaya la gente quenos dirige! A lo malo dice bueno y a lobueno dice malo. Lo realmente triste esver parte de la iglesia perdiendo eltiempo preparando festejos yactividades de diversión. No es que nose hagan. Hay que tener un granbalance. David miró a Betzabé y todo seechó a perder. Festejó y luego mató.

El creyente que se queda en elcampamento, deja que el enemigodestruya al pueblo. Eso esta pasandoactualmente. Las tinieblas estánarropando todo y levantándose elinfierno contra la misma iglesia. Losque miran desde el muro y los que sequedan en el campamento, son losprimeros en recibir el embistes.¡Gracias a los conquistadores, que lehacen frente a toda esta maraña deldiablo!

José fue vendido por sus hermanos yllevado a Egipto. Los hermanos sequedaron en el campamento. Josésiguió la dirección de Dios, todavía elarca del pacto no existía, y menos lamanifestación del Espíritu Santo, pero lapresencia de Dios estaba allí, y José losabía. Pasó la prueba, y conquistó.Ahora sus hermanos que miraban desde

el muro, tuvieron que pedirle ayuda.Ellos eran la mayoría, sin embargo noganaron la guerra, la ganó el granconquistador, José.

Aparentemente los gobiernos y mesostengo aún más en el gobierno dePuerto Rico, entienden que han vencido.Ahora está tranquilo en su campamento,y de vez en cuando mira desde el muroy lanza otro ataque, pero allí está elconquistador, el Espíritu Santo,dirigiendo a un gran ejército, que nuncaha perdido una batalla. Este granejército se llama la Iglesia de Jesucristo,una iglesia que no se queda en elcampamento ni mirando desde el muro,sino que ha salido en defensa de la moraldel país, sea el tuyo, o sea el mío.

David le dijo a Goliat: “Tú vienes a mícon espada y lanza y jabalina; mas yovengo a ti en el nombre de Jehová de losejércitos, el Dios de los escuadrones deIsrael, a quien tú has provocado.” (1 S17:45). Goliat parecía ser la mayoría,esto porque el pueblo se quedó en elcampamento, mirando desde las rocas.Allí temblaban de miedo. Habíaanatema en el pueblo. Su líder, Saúlhabía pecado. Muchas veces el pueblose queda entre las cuatro paredes deltemplo, porque el primer cobarde es sulíder, porque ha perdido la visiónespiritual. Su lema, “ellos ganaron”. Esel gobierno, ganó. Saúl entendía quepor ser el “ungido de Jehová”, podíahacerlo que le daba la gana, metió alpueblo detras del muro

Muchos creyentes están orando por un avivamiento,y sin embargo desconocenel verdadero significado y el poder que tiene un avivamiento. Cuando hayavivamiento todo cobra vida. Pablo le dice a Timoteo”...aviva el fuego del donde Dios que está en ti.” 2 Ti 1:6. En mi barrio las personas mayores (viejitos)decían y dicen “escandila el fuego”. Esto lo hacían uniendo los tizones, ysoplando con un cartón sobre el fogón. Otras veces casi metían la cara en elfogón y soplaban con su boca, y así lograban “encandilar” el fuegonuevamente. Para que se avive el fuego del Espíritu Santo en nosotros, notenemos que soplarle, ya el Señor lo hizo por nosotros. Nuestra tarea es creerloy buscar una transformación total en nuestras vida de manera personal, ytambién de manera colectiva con la iglesia. Uniendo los tizones en momentos deadoración tendremos la bendición de que haya un gran avivamiento. Cuandohay avivamiento las almas se salvan. Porque cuando esto sucede el mismoEspíritu Santo se encargará de redargüír y de convencer al mundo de pecado,de justicia y de juicio. El mismo “encandilara” el fuego.

¿Qué es un avivamiento?por esa minoría, que con el respaldoayuda de manera especial a esoslíderes. Una de las cosas que vemoscasi todo el tiempo en las iglesias es,que la congregación no se reúnecompleta en la oración, en los retiros,en las vigilias, y en la búsquedasincera de la presencia de Dios.Todo esto cabe bajo laresponsabilidad de un pequeñogrupo, pero a causa de ese pequeñogrupo se realizan grandes obras, yaque tienen el respaldo de Dios” Unavictoria se obtiene cuando seconquista a un pueblo en el amor deDios.

La verdadera iglesia en Puerto Ricono ha perdido la guerra. David dijo:“Bendito sea Jehová, mi roca, quienadiestra mis manos para la batalla, ymis dedos para la guerra…” (Sal144:1) Es Dios quién nos adiestra,nos da las herramientas, nos dirigehacía esa guerra, y nos da la victoria.Esa guerra que ya la tenemos gana.Millie, ¿cómo va a ser? Si, la tenemosgana, Jesús dice:” No temáis, manadapequeña, porque a vuestro Padre le haplacido daros el reino.” (Lc 12:32, Mt16:18). Esa manada pequeña, elapóstol Pedro la llama “realsacerdocio, una nación santa, unpueblo adquirido por Dios…” (1 P2:9). Los conquistadores semantienen firmes en lo que Dios leordenó. No tienen miedo. Es verdadque la mayoría de la congregaciónpone en poca estima a losconquistadores, pero Dios losenaltece donde quiera que van,dándole la victoria en todos suscaminos.

El apóstol Pablo fue un granconquistador de almas para el reino.Los que se quedaron en elcampamento y los que miraban desdeel muro, querían destruirlo. Él sedefendió y les dijo: “Vosotros sabéiscomo me he comportado entrevosotros todo el tiempo, desde elprimer día que entré en Asia,sirviendo al Señor con toda humildady con lágrimas, y prueba que me hanvenido por las asechanzas de losjudíos; y cómo nada fque fuese últilhe reuhudi de anunciaron

judíos; y cómo nada que fuese útil herehuido de anunciaros y enseñaros,públicamente y por las casas,testificando a Judíos y a gentiles acercadel arrepentimiento para con Dios, y dela fe en nuestro Señor Jesucristo.” (Hch20:18-21). No fue fácil para Pablo estasituación, pues se trataba de su propiopueblo. Estos le pusieron “MALACARA”, ya que no aceptaban ladoctrina que el apóstol les predicada.”

No se trata de que el conquistadorpretenda ser el mejor; se trata de seguirla dirección del Espíritu Santo y ese erael secreto de Pablo. Pero los que sequedaron en el campamento, no podíanentenderlo, porque eran carnales. Es loque pasa hoy día, los carnales, sonatrevidos para levantar su mano contralos conquistadores, pero son unoscobardes cuando se requiere de ellospara salir al campo.

¿Dónde están los conquistadores?¿Dónde esos emprendedores delavivamiento? Observando desde elmuro nada se puede hacer por estasociedad tan indefinida como está. Hayque poner las manos en el arado yaguijonear la yunta de bueyes para quecamine.

Allí estaba Elíseo, en el campamento.Su interés primordial era su finca y los

bueyes. Elías era el conquistador.Cuando pasó donde estaba Elíseo, loinvitó a seguirlo. Elíseo salió delcampamento y se convirtió en un granconquistador. El Espíritu de Dios lollenó de la cabeza a los pies. Dice laEscritura que aún después de muerto,sus huesos continuaban haciendomilagros (2 Re 13:20-21).

En la historia de cada nación siempre sedestacó un conquistador. Unos parabien y otros para mal, pero conquistaronlo anhelado. En Hebreos 11 hay unalista de famosos conquistadores, quedieron su vida por la causa.

Mientras haya creyentes estancados enel campamento o mirando desde elmuro, no habrá victoria completa. Haypastores que dicen que su iglesia estáavivada porque hay mucho brincoteo ymuchas lenguas. Al parecer ellos nosaben lo que es un avivamiento. Lleganalgunas visitas a la iglesia y ya hoy unavivamiento. Se convierte una persona,pero se va una familia completa, ya hayun avivamiento. Sin embargo, esto estalejos de la realidad, de un verdaderoavivamiento.

Un avivamiento se obtiene cuando la iglesia sigue las instruccionesespecíficas del Espíritu Santo. Cuando se lanza a la conquista del suelodonde pisa. Cuando es capaz de quitar las sandalias de sus pies y decirleal Señor: “Heme aquí envíame a mí.” Cuando no tiene miedo de lo quepueda hacer el hombre.

¿Cómo obtener un avivamiento?

Consagrado ¿para qué?¿A que causa consagrado?El que no vive para Dios,El mundo lo ha cautivado.

Consagrado para darTiempo, talento, tesoro,Vivir para dedicarLa vida, los sueños, todo.

Espíritu, alma y cuerpoConsagrados a lo sagrado,La voluntad entregadaAl Cristo resucitado.

El gran dilema del hombreEs responder a un llamado,A qué causa consagrarseA qué causa consagrado.

Autor: Hno. Miguel Antonio RiveraLibro: Échale mano a esto

Consagrado

Habacuc dijo: “Oh Jehová, he oído tupalabra, y temí. Oh Jehová, aviva tuobra en medio de los tiempos, en mediosde los tiempos hazla conocer; en la iraacuérdate de la misericordia.” (Habacuc3:2) El profeta sabia que el pueblo deDios había pecado y que sufriría sujuicio. En esa situación hizo dospeticiones: (1) le pidió a Dios queentrara en su pueblo con una renovadamanifestación de su poder. Habacucsabía que el el pueblo de Dios nosobreviviría si el Señor no intervenía enla vida de ellos con un derramamientode su gracia y de su Espíritu.. Sóloentonces habría verdadera vidaespiritual en ellos. (2) Habacuc pidióque, en tiempos de aflicción y angustiapara el pueblo del Señor, Dios seacordara de ser compasivo. Su pueblono se sostendría sin la misericordia deDios.

El Señor Jesús dijo: “...y por habersemultiplicado la maldad, el amor demuchos se enfriará.” (Mt 24:12). Elfundamento de la iglesia actual se estáestremeciendo y la angustia parece estaren todas partes. Los creyentes de hoytienen que suplicarle al Señor que semanifieste, con su misericordia y supoder de nuevo, a fin de que llegue a supueblo la vida y el avivamiento, y quelas almas se salven. Por eso, hay quesalir del campamento (la zona delconforte).Pablo dice: “No os conforméis a estesiglo, sino transformaos por medio de la

renovación de vuestro entendimiento,para que comprobéis cuál sea la buenavoluntad de Dios, agradable y perfecta.”(Rom 12:2). Para que el creyente sea unconquistador eficaz, tiene que: (1)comprender que el sistema del mundoactual es malo, (2) estar en contra de lasprevalecientes y populares formas delespíritu de este mundo, y proclamar másbien por la causa de Cristo las verdadeseternas y las normas justas de la Palabrade Dios, (3) despreciar lo malo y amarlo justo, y no contaminarse con losvarios tipos de mundanalidad queconstantemente rodean a la iglesia.(Ejemplos: avaricia, egoísmo,conveniencia, ideas humanistas,maniobras políticas por el poder,envidia, odio, venganza, impureza,malas palabras, diversiones impías,vestuarios seductor e inmodesto,inmoralidad, drogas, alcohol, ycompañías mundanas). (4) tener lamente de Cristo mediante la lectura de laPalabra de Dios y la meditación en ella,sometiendo los planes y metas acriterios celestiales y eternos, y no a losde este malvado mundo transitorio.

Mientras el creyente se quede seguro en elcampamento y mirando desde el muro, noexperimentará cambio alguno en su vida,no tendrá un avivamiento y no estarápreparado para conquistar y avivar almaspara Cristo. Así que durante elavivamiento, deben ocurrir dos cosas,renovación y transformación en elcreyente, y salvación de las almas.

Hace casi dos mil años hubo unacontecimiento que marcó el comienzo delgran avivamiento. En aquella predicación,tres mil almas vinieron a Cristo (Hch 2:41-42). Ese solo fue el comienzo, todavía elEspíritu Santo está guiando a losconquistadores a buscar almas, pero, paraello hay que estar avivados. Jesús dijo queun ciego no puede guiar a otro ciego. Unapersona muerta espiritualmente, no puedeconducir a otros al avivamiento. Hay quesalir del campamento, hay que bajar delmuro, para unirse a los conquistadores.

El Señor Jesús dijo a sus discípulos: “A laverdad la mies es mucha, mas los obrerospocos.” (Mt 9:37). Es mucho el trabajo enla obra de Dios, sin embargo, son pocos losconquistadores. Todavía hace falta que seañadan más al gran ejército para asíarrebatar todas las almas posibles al diablo.

Nos encanta hablar u oír hablar de esosconquistadores que menciona la Biblia.También de aquellos que apegados a unsueño conquistaron naciones. Sinembargo, cuando se hace un llamado paraque todos se unan para ir a conquistar,muchos se quedan atrás, temerosos. Diosestá buscando gente valiente. Él mismodijo: “Desde los días de Juan el Bautistahasta ahora, el reino de los cielos sufreviolencia, y los violentos lo arrebatan.”(Mt 11:12). ¿Dónde están esos valientes?¿De frente a la conquista, o mirando desdeel muro? Cuando hablamos de arrebatar,queremos decir quitar por la fuerza. Es asícomo podemos ganar las almas, es asícomo podemos ir al cielo, arrebatando lavictoria, quitándole al enemigo lo que nospertenece. Por eso el mismo Señor Jesús,vendrá en un abrir y cerrar de ojos y learrebatará la iglesia de las manos a estesistema mundial perverso, para llevarnos amorar eternamente con Él. Pero si tequedas mirando desde elmuro, te corres elrieshgo que pase como a Jezabel. (2 Rey10:30-37).Suspendisse sem lorem, ornare non, vestibulum ut,tempor porttitor, est. Quisque convallis aliquet eros.Nunc nec nulla eget urna convallis eleifend. Nullafeugiat eros at augue. Integer feugiat nisi vitae velit.

quedas mirando desde el muro, te corres elriesgo que te pase como a Jezabel. (2 Rey10:30-37).

Jehová derribó el muro de Jericó. Elhombre por si mismo no podía. Ante lapresencia de Dios de nada sirvió talfortaleza. El muro que tú y tu iglesia estánlevantando, o han levantado para mirardesde lejos, está a punto de caer. Podríacaer sobre ti, por lo tanto, es importante, esnecesario, que salgas del campamento, dedetrás del muro y te unas a los valientes.

Hubo un rey llamado David, ¿qué creyenteno ha oído su historia? Tenía un granejército que lo respaldaba hasta la muerte.Cuando salía a conquistar, conquistaban.Rara vez, o diría que nunca perdieron unabatalla. Un ejército poderoso, pero dentrode aquel ejército hubo unos hombres quese distinguieron por su valor, y fueronllamados: “Los valientes de David” (2 Sa23:8-39). Antes que estos hubo otro grupode valientes. Eran 300, su líder Gedeón,los llamados los 300 de Gedeón (Jue 7:7-22). Lo primero que hace falta hoy, sonlíderes de la calle, líderes del campo, delas montañas. Que salgan de los púlpitosy que dirijan al ejército a la conquista.Uno de los problemas que tenemos hoydía, es que a la gente le da vergüenza decirque son cristianos y asistir a la iglesiacristiana. Es por eso que no puede laiglesia quedarse en el campamento omirando desde el muro, hay que avanzarpara conquistar esas almas. Hay muchosque les gusta practicar el pecado, hay queavanzar para conquistar esas almas. Esono puede ser impedimento para ir a laconquista. El trabajo hay que hacerlo.Dios sabe quienes son sus valientes, peroÉl quiere que todo creyente sea un de susvalientes. Todavía caben más.

Hace unos días me contaba un pastor, deuna persona homosexual, que estabarecibiendo consejería bíblica. Segúnaquellos, debido a esta consejería, lapersona perdió su equilibrio mental. “Miratú, que diablo malo.” Ahora estabanhablando de demandar al consejero.“Mira que es tramposo ese diablo.” Aestas situaciones es que la iglesia le hatomado miedo.

Así sucedió al pueblo de Israel cuandoaquellos diez espías trajeron malasnoticias (Núm 13:31-33). Esta noticiatrajo desaliento al pueblo, pero hubo dosde esos espías que estaban decididos apelear y conquistar (Núm 14: 6-10).

Como creyentes de la Palabra de Dios nopodemos dejarnos amedrentar por lasartimañas del diablo. Claro está, si eres delos que te mantienes en el campamento, ode los que miran desde el muro, noimporta el título que tengas, mejor quedatecallado. No intervengas si no estaspreparado(a) espiritualmente, y en laPalabra de Dios. No digo que ese fuera elcaso de aquel consejero. Te aconsejo a ti,si no estas preparado para responder,mejor no hagas nada. Avívate tu primero,y luego aviva a los demás.

Estamos conscientes de que surgenmuchas casas que nos asustan, y nuestrareacción es escondernos. Por ejemploElías, acabó con los profetas de Baal yAsera, nada más y nada menos 850profetas, y él sólito. El secreto, ibadirigido por el arca, la presencia de Dios,el Espíritu Santo estaba sobre el profeta.Luego oró para que lloviera y llovió (1 R18:20-46). Posteriormente Jezabel loatemorizó y se fue huyendo hasta Horeb(19:1-8), y no solo eso, se metió en unacueva (v. 9). Hasta allí lo siguió Jehová yse le manifestó. El fin de Elías y como fuellevado al cielo, todos los conocemos.Elías retrocedió en un momento dado,pero alcanzó la victoria.

Muchos años después, dijo un predicador:“Pero nosotros no somos de los queretroceden para perdición, sino de los quetienen fe para preservación del alma.” (He10:39). El cristiano no puede huir de lascircunstancias tampoco puede hacerlesfrente por sí sólo, necesita la ayuda deDios. Esto trae a mi mente los días de Elí,y la captura del arca por los filisteos. Enaquella batalla por causa del pecado, elpueblo de Israel perdió la guerra. Ellospensaban que, por el hecho de tener allí elarca del pacto sería suficiente para ganar,lo que paso entonces que los filisteos seapoderaron de ella, y el sufrimiento y lavergüenza fue mas grande.

El problema de este pueblo fue quemientras estaban en el campamento,Observaban dese el muro, y la tentación alpecado, sobre todo a los

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DESDE PUERTO RICO CON AMOR Acerca del ministerio: El Ministerio Evangelístico Palabra deReconciliación Inc. Lo componemos elmatrimonio de la hna. Millie Vázquez y el hno.Sergio Esteves, siervos del Señor. Nacimos yvivimos en el pueblo de Caguas, Puerto Rico .Ambos experimentamos un nuevo nacimiento alaceptar a Jesucristo como nuestro salvador y alEspíritu Santo como nuestro guía en el sevicioal Padre Celestial. Nos gusta predicar a Cristo, sea cantado oa través de mensajes y estudios bíblicos.Comenzamos nuestro ministerio visitandohogares, dando cultos al aire libre, visitandohospitales y hasta las cárceles. Jamás nosimaginábamos que Dios nos llamaría apredicarlo a través del sistema computarizado.Un día del año 1994 se nos ocurrió enviar unestudio llamado "Remedio para el Stress" alForum de Christian City en Compuserve y elHno. Sam Rodríguez nos escribió para sabermás de nosotros y darnos aliento. Así tambiénlos Hnos. Arturo e Isaac Jiménez desde la WebCristiana Evangélica desde España. Eso fuepara nosotros la confirmación para seguir delleno en nuestro ministerio evagelístico, tanto através de la computadora, como al aire libre ennuestro país Puerto Rico y en las iglesiasdonde nos invitan a ministrar. Creemos firmemente en el pronto regreso delSeñor Jesucristo a levantar su iglesia.Creemos que esta iglesia debe mantenerselimpia, pura y santa para poder tener eseencuentro con el Señor. Rechazamos todas lasnuevas ideas y doctrinas que se apartan de laverdad y santidad de la Palabra de Dios. “ElSeñor nos advirtió de los falsos profetas”. ElEspíritu Santo (tercera persona de la trinidad)es el que nos guía y dirige a toda verdad.Entendemos que como cristianos tenemos laresponsabilidad de cumplir con la GranComisión que nos dio el Señor de predicar elevangelio a toda criatura. TODA LA GLORIA SEA PARA NUESTRO

Ministerio Evangelístico Palabra de Reconciliación,

Inc.

Observaban desde el muro, y latentación al pecado sobre todo de loslíderes, los dominó. No se estabanpreparando para la conquista, y por esofueron conquistados. Salieron a laguerra llevaron la caja de madera, peroolvidaron la presencia de Dios, la cual sesuponía que estaba en el arca.

La Biblia dice que cuando el arca delpacto fue llevado al campamento delejército israelí, hubo gran algarabía degozo, que a los filisteos losconsternaron, sin embargo, no fue másque eso gritería. Así pasa muchas vecesen la iglesia. Se derrama lamanifestación del Espíritu Santo, sedanza, se habla lenguas, todo el mundoes un guerrero, pero cuando hay quepelear, hay derrota completa, porque lapresencia de Dios, es dejada atrás. Noporque Dios así lo quiera, es porque elpueblo no le pidió que fuera con ellos ala guerra.

No estamos en tiempos de quedarnosobservando desde el muro, o en elcampamento, hay que salir a conquistar,aunque nos cueste la vida, aunque nonos quieran, pero hay que cumplir con loque Dios nos mandó. La iglesia tieneque levantar resistencia a todo lo que seavecina, pero temblando detrás delmuro, no podemos.

El testimonio de cada creyente esimprescindible para luchar contra lashuestes del maligno. Hay que buscar latransformación total de nuestra manerade pensar y nuestra manera de ser. Lapresencia de Dios, esta disponible paracada uno de sus soldados. No habráderrota, si luchamos sabiendo que dondequiera que vayamos, el Espíritu Santo,nos confirmará nuestra victoria, comohizo el Ángel de Jehová a Josué. ElSeñor Jesús dice: “Por cuanto hasguardado la palabra de mi paciencia, yotambién te guardaré de la hora de laprueba que ha de venir sobre el mundoentero, para probar a los que moransobre la tierra. He aquí, yo vengopronto. retén lo que tienes, para queninguno tome tu corona. Al quevenciere, yo lo haré columna en eltemplo de mi Dios, y nunca más saldaráde allí, y escribiré sobre él el nombre demi Dios, y el nombre de la ciudad de miDios, la nueva Jerusalén, la cualdesciende del cielo, de mi Dios, y minombre nuevo. El que tiene oído, oigalo que el Espíritu dice a las iglesias.” (Apoc 3:10-13).

Dios te bendiga.

Hna. Millie VázquezSierva de Jesucristo