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Número 115 / 05 de Junio de 2013

MIRANDOAL FUTUROFo

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El Sporting (o quienes lo dirigen) puede engañarse y pensar que aquí no ha pasado nada. Que el tiempo todo lo cura y que este largo verano servirá para que se restañen solas las heridas. Que un par de fichajes, un pequeño descuento en los abo-nos y cuatro palabras bien dichas reactivarán el sportinguismo de cara a la próxima temporada. O, si fuera necesario, un mensaje del tipo “lo siento mucho. Nos hemos equivoca-do. No volverá a ocurrir” dicho con la boca pequeña.

El Sporting (o quienes lo dirigen) puede engañarse minimizando la importancia de las protestas contra la gestión, quedándose con la me-nor estimación de participación de cuantas se manejen y olvidándose de quienes no acuden a manifesta-ciones pero han caído en el asqueo más absoluto y optarán por bajarse del barco.

El Sporting (o quienes lo dirigen) puede engañarse pensando que quienes protestan son un grupo de radicales teledirigidos que respon-

GijónSport - Editorial

El engañabobos

Edita:GijónSport S.L.

Contenidos:David González@DavidGonzalezzz

A. Forcelledo@AForcelledo

Fotografías:Gabino Jovewww.gabinojove.es

Maquetación:El Talajapiz S.L.

Publicidad: Dani Arango

Colaboradores:Marcos MartínMarta Tejerina

Contacto:[email protected]@gijonsport.es

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GijónSport es una publicación digital de caracter semanal y gratituita. Queda expresamente prohibida la reproducción total o parcial de los textos, fotografías y otros elementos sin la expresa autorización.

den a tal o cual interés bastardo, alejado del bien común, o que todos ellos aspiran a tener un puesto en el organigrama, o que quieren vengan-za porque en sus años mozos alguno le quitó una novia.

El Sporting (o quienes lo dirigen) puede engañarse y pensar que lo de esta temporada ha sido mala suerte, que el balón no ha querido entrar o que los jugadores no han corrido lo suficiente, pero que no hay ningún otro problema de fondo, de gestión, de mentalidad, de estructura. Y que el año que viene, seguro, habrá más suerte.

El Sporting puede engañarse, pero lo que no puede es engañar a los demás. Y no hay cosa peor que en-gañarse a uno mismo. Porque ni uno mismo se lo cree.

“El Sporting puede enga-ñarse, pero lo que no puede es engañar a los demás. Y no hay cosa peor que enga-ñarse a uno mismo”

12. Javier CasqueroHablamos con el centro-campista rojiblanco sobre un futuro que podría seguir siendo rojiblanco.

06. Una protesta ejemplarEl último partido en El Mo-linón sirvió de nuevo para evidenciar la ruptura social que vive el Sporting.

31. Rodrigo FáezEl periodista nos cuenta algunos de sus recuerdos y vivencias con Manolo Pre-ciado.

30. MirandésRepasamos la plantilla del próximo rival rojiblanco.

26. #EternoPreciadoEl viernes día 7 de junio Ma-nolo Preciado tendrá por fin su estatua en Gijón.

32. Gijoneses caudalistas Hablamos con tres de los in-tegrantes de la actual planti-lla del Caudal justo antes de jugar la segunda ronda del playoff de ascenso.

NÚMERO 115, 5 DE JUNIO DE 2013

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Especiales

C O N T E N I D O S

Otros temas

Y además...

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El diario de Jorge

GijónSport - El diario de Jorge

Sólo nos quedan unos días para echar el cierre a esta temporada. Ya era hora. Los últimos partidos se están convirtiendo casi en un compromiso, se está dejando mala imagen y cuanto antes acabe todo mucho mejor para todos. Del par-tido del otro día, futbolísticamente poco se puede analizar. Eso sí, sirvió para despedir a varios juga-dores (veremos cuántos) y para cerrar las puertas de El Molinón de un modo un poco decepcionan-te. No recuerdo ver las gradas tan vacías desde hace varios años. La diferencia entre el primer partido ante el Murcia con este último es impresionante.

En verano se deben hacer las cosas bien y lograr que la fantástica unión que hubo en las últimas tempora-das entre la afición y el equipo se vuelva a producir. Seguro que así nos llevaremos muchas más ale-grías. Es básico este aspecto para afrontar con confianza el reto del ascenso.

En lo personal, me hizo muchísima ilusión ver a Alejandro jugar en Gi-jón. Hablé con él nada más acabar

el partido y se le notaba muy con-tento. Para la mayoría era un parti-do más, pero para él era el partido que tenía marcado desde el día que salió el calendario. Lo disfrutó mucho y me alegro. Fue la nota po-sitiva de un fin de semana horrible para mí. Aún podemos luchar por mantenernos tras el más que posi-ble descenso del Guadalajara, pero las cosas no pintan muy bien, de hecho nos dimos por descendidos en Alicante.

El sábado se juega en el coqueto Anduva. Una pena que un viaje atractivo para las peñas, como Miranda del Ebro, llegue en estas circunstancias. Partido de trámite que servirá para celebrar la perma-nencia del equipo burgalés, poco más. Que tengáis buena semana.

Un abrazo

Jorge G. Torre

GijónSport - 08/05/2013 - 07

Una protesta ejemplar

“Sin incidentes”. Era la principal premisa que los convocantes de la manifestación del pasa-do domingo se habían marcado para borrar la sensación agridulce que había dejado la ante-rior protesta, previa al partido frente al Córdo-ba, eclipsada por varios incidentes. Y se cum-plió. Los sportinguistas que, de cuatro y media a siete de la tarde mostraron su descontento desde la calle de Torcuato Fernández Miranda hasta la Puerta de Autoridades de El Molinón, mostraron un comportamiento ejemplar. La protesta fue una muestra de civismo de una afición a la que, en los días anteriores, se le había tildado de violenta.

‘Tu fe nunca decaiga’, UNIPES y Ultra Boys volvieron a ponerse de acuerdo y consiguieron convencer a 600 personas, según la Policía y en torno a 2.500, según los convocantes. En cualquier caso, la manifestación fue más nu-merosa que la celebrada hace tres semanas y todas las anteriores.

La gran novedad y el objeto de discrepancia entre la propia afición fue la petición expresa de no entrar al estadio. Y la propuesta sur-tió efecto: poco más de 8.000 espectadores presenciaron el Sporting-Recreativo. El Molinón registró la entrada más baja en un partido de Liga desde la temporada 2006/2007.

Una vez más, los reproches fueron dirigidos a los mismos. El máximo accionista, José Fernández; el Consejo de Administración, centrado en las figuras del presidente Manuel VegaArango y el director general Alfredo García Amado; Pepín Braña, el presidente de la Fede-ración de Peñas y los veteranos, a los que se les pide mayor protagonismo.

También hubo un momento para la nostalgia, para recordar esa burbuja en la que se man-tuvo el sportinguismo desde 2007 hasta 2011. Espontáneamente, un grupo de aficionados empezó a corear el nombre de Manolo Precia-do, y de manera instintiva, el resto le siguió. Es difícil olvidar el ‘Lololo Manolo Preciado’ que tan buenos recuerdos evoca, y más en una semana especial, en la que el técnico cántabro recibirá el homenaje de una afición que cada vez le echa más en falta.

“La propuesta surtió efecto: poco más de 8.000 espectadores presenciaron el Sporting-Recreativo. El Molinón registró la entrada más baja en un

partido de Liga desde la temporada 2006/2007”

El partido comenzó. Un encuentro carente de tensión, sin nada en juego y en un estadio sin alma. Faltaban 12.000 abonados y el Fondo Joven estaba vacío. Sin la animación de los Ultra Boys, El Molinón parecía un cementerio. Mientras, en el exterior, un grupo de aficiona-dos seguía protestando contra la gestión del Sporting y pidiendo un cambio en el club.

La Policía había advertido que la concentración estaba permitida hasta las siete de la tarde. Cuando se cumplió la hora, los aficionados recogieron sus pancartas y dejaron de cantar, poniendo fin a dos horas y media de protes-ta pacífica. Eso sí, no entraron a El Molinón, simbolizando así el éxodo de una masa social cada vez más distanciada de su Sporting. O lo que queda de él.

Sin público, sin emoción y sin goles. Así se despidió de El Molinón el Sporting que estaba llamado a recuperar la ilusión del sportinguis-mo intentando regresar a la élite. En ningún momento fue candidato, y ni siquiera liberado de la exigencia el equipo fue capaz de estar a la altura. Un Molinón que no parecía El Moli-nón, con las gradas prácticamente desiertas, despidió con algunos pitos y, sobre todo, con indiferencia a un Sporting fracasado.

El partido fue una agonía de principio a fin. Nada se jugaban y a nada jugaron Sporting y Recreativo. No hubo tensión competitiva en ningún momento. El Sporting tuvo más op-ciones de marcar, pero tampoco se hubiera merecido ganar el partido. Era lo de menos. La noticia estaba fuera, y alrededor. En cualquier lugar menos en el campo.

No hubo siquiera oportunidad de ver apenas caras distintas. Álex Menéndez sí volvió a ser titular, demostrando que no tiene nada que envidiar al nivel medio de la plantilla del primer equipo y que no se entiende el ostracismo al que ha sido sometido. Álex Barrera solo dispu-tó unos minutos y Adama Toure ni eso.

El partido podía servir, al menos, para escenifi-car algunas despedidas trascendentes. Óscar Trejo sí se llevó la que parece que habrá sido su última ovación por parte de El Molinón. Mate Bilic solo tuvo ocho minutos para decir adiós a la que ha sido su casa durante tantos años. Ni para eso se aprovechó la oportunidad.

La tristeza se apoderó de El Molinón mientras se echaba el telón de la temporada. La duda es qué se encontrará el sportinguismo cuando vuelva a alzarse.

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GijónSport - En portada

Javier Casquero

Un clásico con futuro

Por David González Fotos: Gabino Jove

Cuando Javier Casquero echa la vista atrás, ve un recorrido largo y satisfactorio. No plagado de títulos, pero sí de éxitos personales y colec-tivos. Un ascenso a Primera, once temporadas consecutivas en la élite, dos finales de Copa, un partido de UEFA histórico contra el Bayern Munich en el que marcó un gol que quedará para siempre en el recuerdo de la afición del Getafe... Capítulos que forman parte de la tra-yectoria de un hombre al que la salud y la for-tuna le han permitido vivirlo todo en el futbol. O casi todo. Aún tiene hambre. Aún le queda gasolina. Quiere otro ascenso. Y lo quiere en Gijón.

Es un clásico de la Liga española. Ya han sido varias las generaciones de niños que le han te-nido en sus cromos. No hay muchos casos de

futbolistas tan longevos en el fútbol actual. Le supera Valerón, algún futbolista del Levante... Rivera, que fue su compañero de habitación en la cantera del Real Madrid, tiene dos años menos que él. “Tengo ilusión. La misma que cuando empecé. Voy a entrenar cada día con el mismo espíritu. Eso es lo que me mantiene vivo”, dice el talaverano. Y ese es su motor profesional. Ese y la confianza en sus propias posibilidades. No le asusta la crítica y entien-de los reparos. Desde el primer momento se mostró comprensivo con quienes se asustaban con su edad. “Es normal. No es muy habitual ver a futbolistas de 37 años. En Getafe ya me conocían y nadie miraba la fecha de nacimien-to. Aquí, al ser nuevo, es normal que se mire.Yo solo pido que se me de la oportunidad de mostrarme en el campo antes de valorarme”.


“Yo solo pido que se me de la oportunidad de mostrarme en el

campo antes de valorarme”


Ha pasado por todos los roles durante su carrera. Estuvo en el lugar del joven que llegaba a un vestuario con el descaro y la imprudencia propias de la edad. Entonces tuvo maestros en el arte de controlar y mantener el buen clima en un vestuario. De eso le dieron un curso acelerado dos compañeros del Sevilla: Pepe Prieto y Pablo Alfaro. “Sabían perfectamente liderar aquel vestua-rio en el que convivíamos jugadores de primer nivel y jóvenes de una de las canteras más productivas del fútbol español. Con el paso del tiempo a mí me tocó ir haciendo esa labor con Reyes o Jesús Navas, que ya empezaban a despuntar. Y no digamos en el Getafe”.

Ha aprendido de sus capitanes y de sus entrenadores. Los ha te-nido de todos los estilos. Laudrup, Caparrós, Manzano, Míchel. Y de cada uno se queda con algo. Manzano le aportó “tranquilidad, confianza y psicología”. Caparrós le hizo “más competitivo, más agresivo, más intenso”. Guarda también un grato recuerdo de su experiencia con Manolo Preciado en el Racing de Santander. “Se me quedará siempre su gran personalidad”, recuerda.

Por eso se ofrece ahora para ser ejemplo y referencia de los jóve-nes que compondrán, se supone que masivamente, el Sporting del futuro inmediato. “Claro que tengo que ser un ejemplo para ellos. Me parece obligado para un jugador en mi situación”. Y por eso se siente capacitado para darles un consejo: “Tienen que va-lorar la oportunidad de estar en un club como este. Aquí lo tienen todo. Tienen que pensar que hay muchísima gente válida que nunca tendrá esa facilidad. Deben aprovecharla”.

No quiere dar lecciones sobre el uso de redes sociales, algo que prefiere ver con cierta distancia. No le son ajenas, pero tampoco se exhibe en ellas. “Hay que ser muy prudente. No hay que olvi-dar nunca lo que representamos Ahora todo se saca de quicio y se alimentan polémicas”. Ejemplos sobran.

La polémica que a él más le marcó, al menos de cara al exterior, tuvo lugar en un campo. Fue aquel partido en el que el madridis-ta Pepe le pateó sin compasión. Entiende las preguntas sobre el asunto, pero mantiene el hermetismo desde el primer día. “Fue un tema desagradable en el que me vi envuelto, pero no quise hacer-me famoso por eso. No hice ningún tipo de declaración sobre el asunto. Es verdad que me presionaron mucho, no me ofrecieron dinero, pero intentaron todo tipo de cosas para que hablara. No quise”. Y de ahí es imposible sacarle.

“De Preciado se me quedará siempre su gran personalidad”


Para Casquero la edad no debe ser nunca un condicionante para un futbolista. Ni por arriba ni por abajo. “Cuando un chico tiene condicio-nes, hay que ponerlo a jugar. El que es bueno, es bueno”. Cree que si ahora no se dan tantos casos de juveniles apareciendo en la élite no es por exceso de celo. “Es que no salen”, afirma.

El talaverano ya ha ido ganando peso en el vestuario. Optó por entrar con sigilo, adaptarse a las circunstancias e ir haciéndose su hueco progresivamente. Se siente bien recibido por sus compañeros.

Tanto ha avanzado que ya ha empezado a im-poner su criterio musical en el vestuario, como hacía en el Getafe. La tradicional música ‘pa-changuera’ y los ritmos latinos que invadían la caseta ahora se alternan con el estilo electróni-co que entusiasma a Casquero. “Hay momen-tos para todo, aunque para antes de un partido hay canciones que motivan más”. También le ha ayudado la tecnología: un altavoz de gran potencia que le da aún más caché como DJ.

Otra de sus aficiones han sido los coches. “Me gustan, aunque tuve mis momentos de más pasión. Tengo un coche deportivo, pero lo he dejado en Madrid. Aquí llamaba demasiado la atención y eso no me gusta”. Casquero es de trato serio, con un punto de discreción más que de timidez. En lo que no se muestra reser-vado es en su forma de vestir. Le gusta cuidar su estilo. “Me dejo mi tiempo y algo de dinero”, dice entre risas.

Su futuro pasa por acabar la temporada y mar-charse a su adorada Ibiza. Pero no caigan en el tópico. En la isla, Javier Casquero busca la paz y la tranquilidad que no ocupa tantos minutos de televisión pero que también aporta. “Es un gran sitio para desconectar, descansar con la familia y reencontrarse con otros compañeros”. Después, le gustaría regresar a Gijón. “Si hay un interés real, no habrá problema”. El dinero no será inconveniente. Casquero se ha mar-cado un reto: subir al Sporting a Primera. Es el próximo desafío. Pero posiblemente no el último. Aún siente gasolina en sus venas.

“Cuando un chico tiene condiciones hay que ponerlo a jugar. El que es

bueno es bueno”


“Si hay un interés real por parte del Sporting, no habrá problema”


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DE PRECIADO

GijónSport - Reportaje

EL HUECODE PRECIADO


Ha pasado un año. 6 de junio de 2012, una fecha que quedará para siempre grabada en la memoria del sportinguismo. La muerte de Ma-nolo Preciado conmocionó al mundo del fútbol y, en Gijón, su repentina marcha supuso un tre-mendo mazazo para la ciudad, en la que dejó un hueco que jamás nadie podrá suplir. Ahora, 365 días después, Manolo vuelve a su casa, regresa al lugar que nunca debió abandonar. El Molinón le espera con los brazos abiertos y miles de personas acudirán al estadio para acompañarle. Él no estará en la banda, ni la afi-ción en las gradas. Será fuera, junto a la alame-da que lleva su nombre. Allí, el entrenador que devolvió la ilusión a una afición desencantada sonreirá una vez más, y será para siempre. Su celebración será la de todos.

El viernes a las 20.00 de la tarde se inaugura la estatua de Manolo Preciado. Tras meses de mucho trabajo y gracias a las miles de dona-ciones de personas que le querían y le quieren, esta iniciativa, surgida de la peña Portal Spor-tinguista, será por fin una realidad. Acudirán representantes de los clubes más importan-tes de su vida: Racing de Santander, Levante,

Ourense, Gimnástica y, por supuesto, Sporting. También el Villarreal, equipo en el que estaba a punto de ser presentado cuando falleció, estará allí. El periodista Rafa Quirós dirigirá un acto que es de todos y para todos y que, en definitiva, servirá para reflejar una vez más lo mucho que significaba Preciado. Se repetirán, seguro, los aplausos que se escucharon hace un año en su inolvidable despedida en El Moli-nón.

Manolo era, ante todo, auténtico. Un hombre sencillo, profundamente llano, de discurso cercano y optimista salpicado con gotas de iro-nía y sarcasmo. Su sinceridad era su principal seña de identidad. No tenía pelos en la lengua, no se callaba una, estaba dispuesto a llegar hasta el final para defender lo que creía justo. Era honesto por encima de todo y siempre tenía una sonrisa, una mirada cómplice, una palabra de aliento cuando quizás era él quien más la necesitaba. La vida fue tremendamente cruel con él, que haciendo alarde de una valen-tía inconmensurable supo convertir cada golpe en enseñanza. Su mayor legado es su propia existencia.

Por Marta Tejerina


Manolo se fue antes de tiempo, tanto del Sporting como de la vida. Bajo su batuta este no era el mejor equipo del mundo, no gana-ba todos los partidos ni peleaba por disputar algo más que la ansiada permanencia. No era el mejor, pero era un equipo. Un Sporting que despertaba el respeto de cualquier rival y se ganaba la simpatía de todo el mundo gracias a la frescura y la sencillez que emanaban de su principal baluarte. Manolo Preciado era mucho más que un entrenador, mucho más que el hombre que hizo posible el regreso a Primera División después de una triste década en el pozo de Segunda. Era “la alegría de este equi-po”, como lo definió el propio Quini en alguna ocasión. Quizás nadie era del todo consciente de la importancia de Preciado para el Sporting hasta que le echaron, primero, y se fue, des-pués.

Con su marcha, Manolo dejó un enorme hue-co en el corazón de muchas personas. Ahora, toda esa gente podrá volver a abrazarle, a posar junto a él para sacarse una foto y reme-morar todos los buenos momentos que regaló a esta afición en los casi seis años que pasó en Gijón. Se quedará para siempre junto a la que fue y será su casa. El tiempo mudará las hojas de los árboles de su alameda, los muros del estadio se harán cada vez más viejos y en su interior se cantarán cientos de goles. La vida seguirá y todos cambiaremos. Todos menos él, que permanecerá allí, con su gesto inalterable, con sus ojos de felicidad y los puños en alto.

Ha pasado un año y pasarán muchos más. Pero su celebración a los pies de El Molinón será eterna, como ya lo es él. Único, irrepetible, inolvidable… Manolo Preciado.


Los burgaleses lograban la pasada jornada la permanencia matemática así que el Sporting tendrá de nuevo un partido intranscendente. Llega la última jornada

de liga en la Segunda División.

El próximo rival:

MIRANDÉS

GijónSport - El rival

PORTERÍAGoitia: veterano con experiencia e indiscutible en su puesto. Muy fiable. Estuvo todo el año muy seguro y se ha revalorizado. Gran campaña.

DEFENSAKoikili: Lateral izquierdo con mucha garra pero que no acabó de ser tan regular como se esperaba. No jugó demasiado. Venía del Athetic.

Iribas: Gran despliegue físico y mucha intensidad en todas las acciones. Lateral derecho. Se intenta incorporar con peligro al ataque pero no es muy preciso con el balón.

Cesar Caneda: Buen central, contundente y bueno en el remate de cabeza. Peligroso en estrategia. Fijo en la zaga. Ex del Cádiz y Alavés

DELANTERAAlain: Rápido, muy trabajador en la presión y luego en ataque siempre busca zonas de remate con mu-cha insistencia. Participa mucho en el juego y a la mínima oportunidad busca el remate. Hizo un buen año y marcó goles que valieron puntos al final de liga.

De Cerio: Muy intenso y muy concentrado durante los noventa minutos. Hábil para aprovecharse de cualquier despiste de la defensa y para generar una ocasión de gol. Mete bien el cuerpo para ganar la posición. Lejos del área baja sus prestaciones.

GijónSport - 08/05/2013 - 34

CENTROCAMPISTASMuneta: Mucha movilidad y buen manejo del balón. Bueno técnicamente y juega siempre con criterio. Peligro en llegadas desde segunda línea.

Pablo Infante: Juega por la izquierda y tiene mucha facilidad para desbordar e ir hacia adentro. Líder del equipo. Lanza el balón parado con peligro. Gran tiro desde lejos. Facilidad para el recorte. Física-mente anda un poco justo.

Luis Morán: El ex del Sporting juega por la banda derecha del equipo de Pouso, de sobra conocido para los aficionados rojiblancos.

Recuerdo aquel día como si fuera ayer. Dicen que todo periodista hace bien su trabajo al incomodar a cualquier protagonista, pero aquel día me sentí jodido. Y no me refiero al año pa-sado, sino hace dos, cuando el Sporting perdió 1-2 contra el Málaga y el Consejo de Administración se reunió un lunes por la tarde en casa de José Fernández para analizar la situación, crítica por entonces, del Sporting en Primera.

A la mañana siguiente Manolo subió a Mareo. Todos pensábamos que era el final de Preciado como entrenador del Sporting, pero no fue así. Sin embargo, a la salida del cántabro de las oficinas, los periodistas que allí estábamos le tuvimos que preguntarle por la situación. Era nuestro deber. Le pregunté si se sentaría en el banquillo en el siguiente compromiso con-tra el Racing de Santander y la respuesta fue: “Claro, todo sigue igual, no voy a hablar más, preguntadles a ellos”. La respuesta fue, perio-dísticamente hablando, buena, pero la mirada me mató.

Aquello fue como apuñalar a un amigo, la verdad. Ése, al menos, fue mi sentimiento. Más

tarde, en conversaciones más privadas, Mano-lo recordaba con gracia aquel episodio y siem-pre vio aquel día como un “amago” de lo que un año más tarde pasaría. Era un aviso que él no quería que se materializara en un despido: “si me echan estaré jodido porque esto no lo volveré a vivir en ningún otro sitio”, me confesó poco después. Para él, el Sporting era mucho más que un club, mucho más que una entidad y mucho más que un sentimiento.

Desde aquí mi recuerdo para él. Manolo era sincero y natural, dos cualidades que añoran los banquillos españoles. Manolo era optimista y afable, dos cualidades que añora toda la so-ciedad en general. Por eso siempre lo guarda-remos en nuestro recuerdo como aquel amigo que todos querríamos tener y ese camino que todos querríamos seguir.

Aquella pregunta

“Manolo era sincero y natural, dos

cualidades que añoran los banquillos

españoles. Manolo era optimista y afable,

dos cualidades que añora la sociedad”

GijónSport - Opinión

Rodrigo FáezPeriodista@javiergiraldo

Gijoneses ‘caudalizados’Pantiga, Noel Alonso y Borja Navarro,

a cuatro partidos de SegundaPor Marcos Martin / Fotos Cristina Valle

El sueño de la mayoría de niños futboleros en Gijón es poder jugar en el Sporting. Cuando se cree en los Reyes Magos y en el ratoncito Pérez, nada parece imposible. Sin embargo, a medida que van añadiéndose velas a la tarta de cumpleaños, los sueños de la infancia se van desvaneciendo, engullidos por otros retos que van surgiendo en el camino.

El que ahora tienen por delante tres gijoneses es, posiblemente, el mayor de su carrera. Noel Alonso, Pablo Pantiga y Borja Navarro han coincidido en Mieres, compartiendo vestuario en un Caudal Deportivo que está rompiendo todos los pronósticos.

Es la demostración de que el trabajo bien hecho acerca lo que, a priori, parece inalcanza-ble. La quimera que suponía hace nueve me-ses un Caudal a cuatro partidos de Segunda División es hoy una realidad. “Internamente, se han hecho las cosas genial. Es uno de los presupuestos más bajos de la categoría, pero la directiva ha acertado con los fichajes, ha cumplido todo lo que ha prometido y la serie-dad del club hace que estemos donde esta-mos” dice Borja convencido, aunque Pantiga le replica: “Lo que marca que un club vaya bien o mal es lo deportivo. Claro que la directiva lo está haciendo bien, pero este año se ha junta-do un buen grupo de futbolistas y por eso se ha hecho una buena temporada”.

Esta semana, L’Hospitalet (campeón del Grupo III de Segunda B) visita el Hermanos Antuña. 90 minutos para seguir disfrutando. “¡Y para trabajar!”, dice Noel Alonso. “Ahora, tenemos

por delante a un rival complicado, y hay que seguir currando. ¿Para qué vamos a parar? Está siendo muy bonito y tenemos la oportuni-dad de que lo sea todavía más”. En eso coin-ciden los tres. Pantiga sabe que estos partidos “son un premio, pero no queremos quedarnos fuera. Hay que disfrutar, pero no podemos perder el norte y quedan, como mínimo, dos partidos en los que hay que seguir compitien-do”. Borja recuerda que “el éxito de la tempo-rada ha sido, entre otras cosas, disfrutar parti-do a partido; pero después de pasar la primera eliminatoria, ahora confiamos más en nosotros mismos… ¿Quién sabe lo que puede ocurrir?”.

Pase lo que pase contra el conjunto barce-lonés, este equipo ya ha hecho historia y ha conseguido que la Asturias futbolística se ‘caudalice’. “Es muy importante no sólo para Mieres, sino para toda la región –dice Panti-ga– porque vamos a Cartagena o a L’Hospitalet representando a Asturias. Además, esto sirve para enganchar a los niños al equipo de su ciudad, que es algo que se estaba perdiendo”.

Noel prefiere no pensar en el hito que está suponiendo esta temporada: “Vamos paso a paso, y esto hace que no nos demos cuenta. Pero ya habrá tiempo para valorarlo todo cuan-do termine la temporada”. Borja piensa igual: “Nadie es consciente. Estamos tan inmersos en la situación, trabajando para ganar, que lo vemos hasta normal. Seguramente, cuando pa-sen los años, la gente se dará cuenta de lo que consiguió aquel Caudal en 2013”.


Noel Alonso:

“Yo siempre pienso en positivo. El fútbol, por suerte o por des-

gracia, cambia mucho”

Borja Navarro:

“Individualmente ha sido un buen año. Colectivamente, sin

duda, el mejor de mi vida”

Pablo Pantiga:

“Lo prioritario era mantener la categoría. La diferencia la ha marcado la buena dinámica”


Los tres han llegado al Hermanos Antuña con diferentes trayectorias. Noel Alonso es un ejemplo de constancia. Llegó a disfrutar de minutos en Segunda División con el Sporting y con el Celta de Vigo, pero también le tocó vivir la Segunda B con Melilla, Palencia o Ponteve-dra. Hizo una prueba en Las Palmas, pero no la superó. No le importó jugar en Tercera División con el Langreo, y ahora recoge sus frutos. “Yo siempre pienso en positivo. El fútbol, por suer-te o por desgracia, cambia mucho. He podido disfrutar de vestuarios de equipos profesio-nales, vivir experiencias como cedido, he sido internacional,… Hubo un momento en el que parecía que iba para abajo, pero yo he traba-jado siempre con la ilusión del primer día, y lo voy a seguir haciendo, sea en Segunda B o en Primera Regional”.

Igual que Noel, Borja Navarro llegó a debutar con el primer equipo del Sporting, pero lo hizo en Primera División. Ambos se entrenaron a las órdenes de Manolo Preciado. “Yo debuté con Ciriaco, pero fue Preciado el que me dio más minutos. Era una temporada complicada por-que me quedé a las puertas de un Europeo con la Selección Sub19 y él apostó por mí. Siempre le estaré muy agradecido”, dice Noel. El delan-tero también le recuerda con cariño: “Era una persona increíble, trataba igual al más veterano que a los que subíamos del filial. Era tal y como la gente le conocía”.

Borja es el más joven de los tres, pero ya sabe lo que es tener que ‘buscarse la vida’. “Cuando salí del Sporting B, me hubiese gustado que las cosas me hubiesen ido mejor, pero de todo se aprende. Este año he querido volver a casa y, salvo por las lesiones, ha sido un buen año individualmente. Colectivamente, sin duda, el mejor de mi vida deportiva”.

Pablo Pantiga cambió este año Luanco por Mieres. Ya había vivido el año pasado la ex-periencia de afrontar, con un recién ascendi-do, el desafío de mantener la categoría. Con el Marino ya consiguió el objetivo, pero esta temporada ha superado cualquier expectativa. “Lo prioritario era mantener la categoría y creo que hasta los últimos 4 ó 5 partidos ni siquie-ra la plantilla se creía que se podía conseguir. Cuando llegué al Caudal, no veía tantas dife-rencias con el Marino de la pasada temporada: son dos clubes muy similares, con poco pre-supuesto y pocas infraestructuras, pero que le sacan un 150% de rendimiento a sus recursos. Al final, la diferencia la ha marcado nuestra buena dinámica”.

Una dinámica que ha llevado al Caudal a una situación que ni al más imaginativo de los soñadores se le hubiese ocurrido: estar entre los ocho equipos que aspiran a jugar la próxi-ma temporada en Segunda División. Pero lo que está haciendo el Caudal no es producto de la imaginación, sino del trabajo. Que se lo pregunten al Cartagena… Y ahora, ¡que pase L’Hospitalet!


@gijonmariners (03/06)

Próximas citas: 22/6 amistoso fin de tem-porada en Portugal. 29/6 Campeonato de España de flag football en A Coruña #FearTheAnchor

Me lo dijo un pajarín...

@pablog_ (03/06)

El Molinón es el campo con mayor asis-tencia de la temporada en 2a: 330.000 espectadores (Mtez Valero 304.000 y Estadio G.Canaria 242.000)

@eterno_preciado (03/06)

Este viernes a las 20:00 es el acto de inau-guración de #EternoPreciado Esperamos que podáis venir todos.

@UNIPES (02d/05)

Gracias a los que habéis estado en la manifestación de hoy, tanto por vuestra presencia como por vuestro comporta-miemto. #porunSportinglibre

Con una nueva edición de GijónSport

y en nuestra web toda la información diaria

www.gijonsport.es

VOLVEMOS EL PRÓXIMO MIÉRCOLES

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