DESARROLLAN PROYECTO PARA RESCATAR LOS MANGLARES DE TUMBES ANTE EL FENÓMENO EL NIÑO

Con el apoyo financiero del gobierno de Canadá, un equipo multidisciplinario de científicos viene trabajando en la elaboración de un proyecto que está dirigido a preservar el ecosistema de los manglares en la región Tumbes, ante los efectos del fenómeno de El Niño, se informó.

Ken Takahashi, jefe del Área de Variabilidad y Cambio Climático del Instituto Geofísico del Perú (IGP), explicó que este proyecto ha sido enfocado con miras a enfrentar las eventualidades del fenómeno climático de El Niño, sobre todo en la región Tumbes, por ser la zona más afectada.

Indicó que los manglares son afectados por la crecida de los ríos, el aumento del nivel del mar, las lluvias, las altas temperaturas y todo tipo de efecto climático que afecta el ecosistema en esta región norteña.

"Hay gente que vive de la explotación de los recursos que se generan en los manglares, y justamente el cambio climático y el fenómeno de El Niño podría afectar todo el ecosistema", anotó.

Destacó en tal sentido, la participación de distintos organismo como el Instituto del Mar del Perú (Imarpe), el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Sernanp), el Ministerio del Ambiente (Minam) y varias universidades.

Reconoció que aún falta mucha información para elaborar un plan que ayude a enfrentar de manera efectiva los efectos del cambio climático y que requiere de una investigación científica que no se hace en el Perú.

Tras adelantar que dicho proyecto estaría listo a fines del presente año, Takahashi remarcó la necesidad de impulsar un cambio de mentalidad entre la población acerca de la manera de comportarse para proteger su medio ambiente.

"Nosotros nos centramos en temas de pronóstico en conjunto con el comité ENFEN que está haciendo permanentemente la evaluación ya que este fenómeno está ocurriendo en el Pacífico y en la atmósfera en general", subrayó.

Sostuvo sin embargo, que depende de los ministerios, gobiernos regionales y diversas instituciones del Estado aprovechar la información técnica y probabilística que brinda el IGP.

LOS MANGLARES Y EL FENÓMENO DEL NIÑO

Por:

Argumanis Sancho-Dávila, Gustavo

LOS MANGLARES

Un mangle es una designación que se le hace a un grupo de especies de árboles y arbustos que poseen adaptaciones que les permite colonizar terrenos anegados y sujetos a intrusiones de agua salada. Su reproducción consiste en semillas, aunque también pueden reproducirse por propagación vegetativa. Los mangles prosperan en aguas cálidas, entre los trópicos de Cáncer y Capricornio.

Los manglares se extienden a lo largo de la costa del Pacífica de América, desde Punta Lobos, Baja California (30º15’N), hasta la Punta Malpedo, Tumbes (3º48’ S) en Perú. Las dos áreas de mayor desarrollo del manglar se encuentran asociadas a la actividad geodinámica del Río Guayas y del Río Tumbes. El Delta del Río Guayas es dominado por la fuerza de la marea dando origen a numerosas

islas alargadas y paralelas al flujo de la corriente donde se establecen los manglares. El Delta del río Tumbes, en cambio, se caracteriza por estar sujeto a altos niveles de energía del oleaje.

Los manglares son ecosistemas complejos que sustentan diversas comunidades de flora y fauna y que tiene un valor económico y social directo e indirecto. El recurso hidrobiológico representa el mayor valor económico directo del ecosistema de los Manglares de Tumbes; diversas especies de moluscos y crustáceos habitan en esta zona, cuya importancia económica es notable, y estas especies son sometidas a gran presión de extracción. Grandes empresas langostineras se han asentado en esta zona para aprovechar y explotar este recurso.

Como vuelo forestal, el manglar tumbesino tiene escaso aprovechamiento debido principalmente a su bajo volumen maderable disponible. Tan sólo se obtiene de él postes para construcción de los diques de las pozas langostineras y para algún otro uso local.

EL FENÓMENO DEL NIÑO

Es considerado un fenómeno oceánico controlado por la atmósfera, cuyos efectos más conspicuos son las excesivas precipitaciones y la elevación de la temperatura superficial del mar. Se presenta en función de varias irregularidades transitorias que ocasionan un cambio total del sistema físico, químico y biótico, y se localiza principalmente en la costa occidental del Sudamérica, al sur de la línea ecuatorial.

El Niño da lugar a:

Alteraciones del clima (más calor y más lluvias) y del ambiente oceánico (mayor temperatura, menor salinidad, disminución del afloramiento y de la renovación de nutrientes.)

Efectos biológicos, sobre todo en la corriente peruana (detrimento de la productividad y alteración en las poblaciones de flora y fauna marina)

Efectos socio-económicos (las intensas lluvias en el norte causan desbordes de los rios, los cuales destruyen viviendas o las dejan inhabitables)

Es bien sabido que el fenómeno del Niño tiene el potencial de ser altamente destructivo para la economía y desarrollo del norte del país. Fenómenos del Niño de los años 1983 y 1997 son ejemplos claros que como nos afecta directamente este fenómeno.

COMO SE INTERRELACIONAN LOS MANGLARES Y EL FENÓMENO DEL NIÑO

Los manglares son afectados cada vez que ocurre un fenómeno de El Niño. Cuando este fenómeno ocurre, se originan lluvias intensas, y el desborde del río Tumbes. Estas dos situaciones provocan daños a las zonas agrícolas, deterioro de equipos de empresas langostineras y muerte por asfixia de muchos rodales de mangle.

La destrucción del ecosistema de los Manglares de Tumbes perjudica la economía tumbesina, privándola de los recursos hidrobiológicos que de ahí se extraen; especialmente los del mar y cuya reproducción está inevitablemente asociada al manglar (langostinos y moluscos específicamente). La productividad del ecosistema marino aledaño está subordinada a la productividad primaria del manglar, vía flujo de energía que se exporta en forma de nutrientes a los ecosistemas del entorno. Por ello con la pérdida de este manglar se alterarían los ecosistemas que dependen del mismo en cuanto a la obtención de energía. La empresas aledañas al manglar verían afectadas su producción, sea para bien (como es en el caso de las conchas de abanico), como para mal (en el caso de los langostinos)

Cambios ocurridos durante el fenómeno de El Niño fueron principalmente el avenamiento de los cursos de agua y la variación de la salinidad y sustrato por anegamiento de los rodales de manglar.

En el fenómeno del Niño de 1983, por ejemplo, las lluvias intensas causaron el desborde del río Tumbes, el cual se desvió de su cauce e inundó sus riveras, destruyendo viviendas, langostineras y campos. Gran parte del bosque murió, ya sea por la fuerza del agua que destruyó gran parte de las raíces o por el shock osmótico ocasionado por la gran presencia de agua dulce.

Las especies nativas de los manglares también se verían manglares, y con ellas también las empresas acuícolas que dependen de éstas. Por ejemplo, la concha de abanico alcanzó grandes densidades. En cambio, otras especies como cangrejos y langostinos manifestaron gran mortandad.

http://www.seminarioanual.cies.org.pe/2014/files/doc/3.%2020141105_CIES_Manglares.pdf

http://www.met.igp.gob.pe/proyectos/manglares/InformeFinalManglaresIGP.pdf

http://www.met.igp.gob.pe/publicaciones/Divulgacion_PPR_El_Nino_IGP_201507.pdf