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    Cpyih 2009 by Scidd Chin d Psic CnicISSN 0716-6184 (imps) ISSN 0718-4808 (n n)

    teraPIa PSIColgICa2009, V. 27, N 2, 239-246

    Terapia Familiar Breve y Atencin Primaria:

    Un Caso de Trastorno Somatomorfo

    Brief Familiar Therapy in Primary Health Care: A Case of Somatization Disorder

    Nieves Schade1

    Universidad de Concepcin, Chile

    Mark BeyebachUniversidad Ponticia de Salamanca, Espaa

    Patricio TorresUniversidad de Salamanca, Chile

    Anglica GonzlezUniversidad de Concepcin, Chile

    (Rec: 3 de julio 2009 - Acep: 22 de octubre 2009)

    Resumen

    En este artculo se presenta un modelo de Terapia Familiar que puede ser til en la atencin primaria parael tratamiento de pacientes somatomoros o con trastornos somatomoros. El objetivo ue describir un casode trastorno somatomoro y una orma de intervencin a travs de la Terapia Familiar Breve. El Mtodoincluyo la recogida de la historia clnica y aplicacin de la Terapia Familiar Breve por dos proesionales dela salud: psiclogo y mdico de amilia. Los resultados muestran una disminucin de la sintomatologa yrecuperacin de su competencia personal para uncionar autnomamente. Se discute el valor de la aplicacinde la Terapia Familiar Breve o de corta duracin en la atencin de pacientes con trastornos somatomoros yla importancia de usar estrategias que mejoren la resolutividad del sistema.

    Palabras Claves: Atencin primaria, trastorno somatomoro, Terapia Familiar Breve

    Abstract

    This article presents a model o amiliar therapy useul at primary health care or the treatment o patientswith somatization disorder or somatization. The objective is to describe a case o somatization disorder andan intervention orm o Brie Family Therapy. The method included the recollection o clinical history andthe application o Brie Family Therapy by two health proessionals: a psychologist and a amily doctor.The results showed symptomatology reduction and patient autonomy. The use o Brie Family Therapy withsomatization disorder is discussed in primary care and the importance o improving the system resoluty.

    Keywords: Primary care, somatization disorder, brie amiliar therapy

    1 Correspondencia a: [email protected]

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    Introduccin

    En los ltimos aos la sociedad chilena ha experimenta-do importantes cambios, y sus instituciones sociales vivenun acelerado proceso de transormacin. Cambios en m-bitos diversos, tales como el poltico, econmico, tcnicoy losco, los que han generado crisis en los paradigmas

    y en los modelos en uncionamiento (Domnguez, 2001),situacin que no es ajena a la amilia y al sector salud(Martnez, 1998; Rubio, 2001, Romero, 2004).

    En relacin a estos cambios que aectan inevitablementea la amilia, el cuestionamiento es cmo generar interven-ciones en salud que los benecien, sin que esto signiqueaumentar los costos. Los costos son un tema relevante puesse sabe que existe aumento exponencial de los costos de losservicios sanitarios, se calcula que en Chile 9 millones depersonas utilizan el sistema municipal de atencin (APS).Por lo tanto, uno de los desaos para cumplir con las me-tas sanitarias es la utilizacin eciente de los recursos por

    parte de los administradores. La eciencia supone ahorrode medicamentos, menor derivacin a especialistas y a laatencin secundaria (Raa, Ferrer & Bredegal, 2008), juntocon lograr que los pacientes se sientan satisechos con laatencin recibida.

    En el caso especico de las terapias, Labrador,Echubura & Becoa (2000) plantean que en el uturo lasterapias usadas en el sistema sanitario deberan demostrarser ecaces, beneciosas para los pacientes, eectivas ytiles en la prctica habitual, y con menores costos queotras alternativas.

    Actualmente se conocen ms de 350 ormas de hacerterapia. Entre ellas est la denominada terapia amiliar. Pero

    tambin, dentro de la terapia amiliar hay diversos modosde actuacin teraputica muy distintos entre s (Burgaleta,Yaniz & Fernndez, 1999).

    Las terapias amiliares dieren entre s en los unda-mentos tericos y de creencias que conorman sus mode-los, en el contexto teraputico, en el concepto de cambio,en la relacin terapeuta paciente, en la periodicidad y laduracin de las sesiones. Sin embargo, es probable que lamayora coincida en que su orma de intervencin ayudaa lograr cambios beneciosos para el paciente (Beyebach,Rodrguez-Snchez, Arribas de Miguel, Hernndez,Martn & Rodrguez-Morejn, 1997; Burgaleta, Yaniz &

    Fernndez, 1999).Aunque estos cambios pueden ser explicados en un 40%por actores extra-teraputicos, tales como variables delcliente o del ambiente, y en un 15% por un eecto placebo,tal como la esperanza en la terapia, un 15 % se debe a las tc-nicas y otro 30 % a la relacin teraputica (Escudero, 2004).Datos que sitan en un lugar importante a la terapia, ya quesern las tcnicas las que infuyen tanto en la relacin mdicopaciente como en el inicio y mantenimiento del cambio enrelacin a los actores externos (Montes, 2006).

    En el presente trabajo nos enocaremos en un Modelode Terapia Familiar, considerando especialmente el con-texto de la atencin primaria y la importancia del ahorrodel tiempo. Enatizando la comprensin de la atencin delsujeto desde su contexto amiliar, la relacin especcamdico-paciente que implica dar una respuesta oportunaal paciente y que stos resuelvan sus problemas (Minsal,2000; Montes, 2006). Adems, nos centraremos en un tipode paciente, aquellos con trastorno somatomoro. Pacienteshiperrecuentadores de la atencin, que gastan en ex-ceso el tiempo de los mdicos y los recursos econmicos(Florenzano, Fullerton, Acua & Escalona, 2002). Casosrente a los que la Terapia Familiar Breve puede constituirseen un aporte signicativo.

    Terapia Familiar Breve

    La Terapia Familiar Breve (TFB) es una integracin demtodos desarrollados desde 1966 por el Mental Research

    Institute de Palo Alto, Caliornia, denominada TerapiaFamiliar Breve Centrada en Problemas (Fish, Weakland &Segal,1984), y desde 1982 hasta la actualidad por el BrieFamily Therapy Center de Milwaukee, conocida comoTerapia Breve Centrada en Soluciones (De Shazer, 1987,1995, 1999; OHanlon & Weiner-Davis, 1990). Tambindentro de la TFB se incluyen los aportes de Michael White(1984) y de Tom Andersen (1987).

    El modelo se undamenta en la Teora General deSistemas (Von Bertalany, 1975), el Constructivismo(Maturana & Varela, 1990, Watzlawick, 1976), la Teorade la Comunicacin Humana (Watzlawick, 1980) y la

    Ciberntica (Von Foerster, 1990).La TFB apunta principalmente a la reduccin del n-mero de sesiones y/o a un menor tiempo en la duracinde ellas, sin una merma en los resultados. Los principalesargumentos a avor de stas son, desde el punto de vistadel consultante, acortar su padecimiento, logrando lo mspronto posible manejar y resolver su problema. Tambin,reducir el estigma que para muchos signica el asistir aterapia psicolgica y nalmente que signique menorgasto. Desde el punto de vista del terapeuta, el acortar laterapia ayuda a que prontamente pueda obtener resultadosy conseguir que la amilia pueda uncionar autnomamen-te. Finalmente, desde el punto de vista de la gestin de

    recursos, el acortar permite aprovechar mejor los recursosproesionales (De Shazer, 1984; Watzlawick & Nardone,2000; Beyebach, 2006).

    El acortar la terapia no signica que por ello haya unadisminucin de su ecacia, sino por el contrario signicaaumentar la ecacia de la misma, ya que se pretenden al-canzar los mismos resultados teraputicos pero en menortiempo (Beyebach, 2006).

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    La TFB dentro de sus principales premisas postula quelos clientes que acuden a terapia disponen de los recur-sos necesarios para superar sus problemas (OHanlon &Weiner-Davis, 1989), pero que a veces no lo ven. Adems,para encontrar la solucin no hace alta conocer el origeno causas del problema ya que ste se da en la interaccinhumana. Se trata de un enoque no-normativo que pretendeabordar cada amilia desde su unicidad, sin imponer criteriosexternos de normalidad o correccin. Adems, plantea queel cambio es constante y la tarea principal del terapeutaes estimular este cambio en direccin de la solucin delproblema, identicando y ampliando aquello que ya estuncionando (De Shazer, 1995; Watzlawick & Nardone,2000; Beyebach, 2006).

    Para lograr cambios el terapeuta trabaja en base a obje-tivos que los pacientes y los terapeutas han acordado. Estosobjetivos deben ser claros, observables y estar conductual-mente bien denidos. No obstante, se puede trabajar conobjetivos vagos cuando el paciente tenga una visin de la

    realidad que desea alcanzar (Burgaleta, Yaniz, Fernndez,1999). Estos deben ser los menos posibles, alcanzables yque sean controlables por el paciente (Rodrguez- Arias &Venero, 2006). El trabajar por objetivos en lugar del proble-ma contribuye a abreviar la terapia y acilitar la evaluacinde los avances o retrocesos de la misma. Para conseguir esto,en general, se busca que los pacientes realicen algo de unmodo dierente al habitual, que cambien su comportamientointeractivo y/o su interpretacin de tal comportamiento y delas situaciones (Watzlawick & Nardone, 2000). Un cambiopequeo es suciente para que se logre un cambio total delsistema, lo importante es lograr que los pacientes lo puedanver (OHanlon & Weiner-Davis, 1989).

    Para lograr el cambio se parte del supuesto que no esnecesario que asistan todos los miembros de la amilia, yaque con que uno de los miembros cambie es suciente paraque el resto cambie. En general, se trabaja con el que estmotivado por el cambio.

    El proceso teraputico en trminos generales se puederesumir en dos acciones undamentales (Rodrguez-reas& Venero, 2006):a) Hacer ms de lo que unciona. Esto signica rescatar los

    recursos de las personas y los momentos en que las cosasandan bien, partiendo del supuesto que los problemasno siempre o en todo momento estn presentes.

    b) Hacer lo contrario de lo que no unciona. Para elloes importante reconocer los intentos inecaces de laamilia por resolver el problema, lo cual hace que semantenga el problema y por lo tanto se invita a la amiliaa buscar nuevas soluciones, aunque a veces parezcanpoco lgicas, pero resultan tiles para romper el crculovicioso.Desde el punto de vista del ormato teraputico, la te-

    rapia consiste en una serie de sesiones en las que, tras unos45 a 60 minutos de conversacin con el cliente, el terapeuta

    sale a reunirse con el equipo que lo est supervisando oacompaando, para volver despus y dar un mensaje nala los clientes. Este mensaje nal comprende habitualmenteelogios y algunas tareas o sugerencia que debe realizar hastala prxima semana. La periodicidad media de las sesioneses de una a tres semanas, aunque las entrevistas tienden aser ms seguidas al comienzo de la terapia y a espaciarsehacia el nal (Beyebach, et. al, 1997).

    Desde el punto de vista tcnico, la TFB se caracterizapor el uso que los terapeutas hacen de diversos tipos depreguntas, dentro de las cuales estn:a) Los cambios pretratamiento. Gingerich & De Shazer

    (1991) encontraron que si se les pregunta a las amiliaspor cambios que ellos pueden haber hecho antes de venira la consulta, se observa que, eectivamente, algunos loshan hecho.Muchas veces entre la llamada para pedir consulta y

    la primera sesin, las personas notan que las cosas ya pa-

    recen dierentes, qu has notado en tu caso? (OHanlon

    & Weiner-Davis, 1990, pp. 97).b) Las Excepciones. Consiste en buscar inormacin

    acerca de las situaciones en las que por alguna razn,el problema no ocurre.Qu es dierente en las ocasiones en que no pelean,

    no se hace pip.Cmo conseguiste que sucediera?(OHanlon & Weiner-Davis, 1990, pp.123).c) Pregunta Milagro: Pregunta que permite que el paciente

    visualice un uturo sin problemas.La pregunta es la siguiente: Supn que una de estas

    noches, mientras duermes, ocurre un Milagro, y no te ente-

    ras de que ha ocurrido porque ests dormido, y todo lo que

    quieres conseguir al venir a esta consulta se cumple Cmote daras cuenta que el milagro ocurri? (OHanlon &Weiner-Davis, 1990, pp.119).d) Las soluciones intentadas. Pregunta que permite conocer

    cules son las soluciones que los pacientes han puestoen prctica y no han servido para resolver el problema.Es importante que el terapeuta las identique ya que esel camino seguro por donde el terapeuta no se debe ir osugerir las mismas soluciones que hacen que se perpeteel problema.Qu haces cuando..sucede el problema o la queja..?,

    Qu pasa a continuacin?, de qu manera te ayudan los

    dems cuando a ti te pasa? Rodrguez-Arias & Vereno,

    2006, pp76.

    e) Escala. Tcnica que sirve para valorar la gravedad delproblema. Al paciente se le pide que se site en unaescala del 1 al 10, en relacin al problema que pre-senta. Tambin, sirve para denir objetivos pidindoleal paciente que se site en el nmero en el que deseaencontrarse al terminar la terapia. Adems, contribuyea denir tareas, ya que al paciente se le pide que avanceen la escala y para ello se deben realizar determinadas

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    acciones. Finalmente, se ha visto que la escala sirve paraevaluar los avances en terapia.En relacin a con qu tipo de pregunta se recomienda

    comenzar la terapia, se propone iniciar con las preguntasbasadas en la Terapia Centrada en Soluciones como loscambios pretratamiento, pero si las personas responden en

    orma negativa a sta, se sugiere ya sea buscar excepcioneso usar la pregunta del Milagro, aunque los pacientes insistenen contar sus problemas, entonces se propone usar preguntascentradas en los problemas y en las soluciones intentadas.Pero si los pacientes sealan lo mal que estn y les cuestavisualizar una solucin a su problema, se recomienda plan-tear la secuencia pesimista Cmo es que las cosas no estnpeor?, as a ellos se les obliga a pensar en algo positivo, ycon lo que ellos pueden comenzar a trabajar.

    Una alternativa a estas preguntas es trabajar en base alas narrativas, es decir, que los pacientes cuenten su historiade racaso y rustracin en relacin al problema y con elloscrear una historia alternativa que los ayude a construir unanueva narracin para superar las actuales dicultades. Paralograr esto, pueden usar la tcnica de la externalizacin delproblema. Una gua del proceso teraputico se puede veren el Mapa del cambio (Figura 1).

    Terapia Familiar Breve y Trastorno Somatomoro

    Se considera que entre el 38% y el 60% de los pacientes,e incluso ms, inorman sntomas que no presentan una

    patologa orgnica que los explique, sino ms bien su origenpuede estar en actores psicosociales (Florenzano, Fullerton,Acua & Escalona, 2002). En un estudio se encontr que el80% de las visitas a los centros de atencin primaria eranpor mareos, dolores en el pecho o atiga, todos sin unacausa orgnica reconocible (Servan-Schreiber, Randall &

    Tabas, 2000).Cuando estas quejas persisten por ms de seis meses, seengloban bajo la denominacin de trastorno somatomoro, yalcanza una prevalencia del 0,38% al 4,4% en la poblacingeneral, dependiendo del nmero de sntomas requeridospara el diagnstico (Garca Campayo, 2007). En Santiagode Chile se ha encontrado en promedio una prevalenciadel 17,7%, en la atencin primaria, siguiendo los criteriosdel diagnstico CIE-10 (Florenzano, Fullerton, Acua &Escalona, 2002).

    El concepto de somatomoro aparece por primera vezen el DSM-III, pero su validez conceptual es muy discutida

    (Lwe, et. al, 2008). La dicultad que signica determinarsi el grado en el que un sntoma es mdicamente explicabletiene implicancias en la prctica clnica, ya que conllevaque el diagnstico del trastorno somatomoro sea ms bienpor exclusin (Stone, Carson & Sharpe, 2005; Servan-Schreiber, Randall & Tabas, 2000).

    Sin embargo, existe consenso en las caractersticasque deben estar presentes para identicarse un trastornosomatomoro (Rie & Sharpe, 2004, Garca Campayo,Sanz Carrillo & Mortn, 1999), stas son: a) Interpretacin

    Nota: Mapa elaborado en la Universidad de Concepcin de Unidad de Recursos Didcticos. Fondef (D03I1090).

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    alterada de los estmulos provenientes del cuerpo comosignos de enermedades. b) Atencin selectiva o hiper-vigilancia de las sensaciones corporales y siolgicas. c)Incapacidad para tolerar los sntomas corporales desagra-dables. d) Solicitud en orma persistente de un diagnsticoy un tratamiento mdico, a pesar de la conrmacin delos mdicos en el sentido de que no se padece de ningunaenermedad sica grave que produzca los sntomas. e)Consumir medicamentos no indicados y pedir exmenesmdicos innecesarios.

    En el sistema pblico chileno, al igual que en el bri-tnico y el espaol, la puerta de entrada del paciente es laatencin primaria. Pero es justamente aqu donde se creaun ir y venir de este tipo de pacientes entre los especialis-tas mdico-quirrgicos y los mdicos generalistas. Estoprovoca que muchas veces estos pacientes busquen ayudaa travs del uso de medicinas alternativas u otros mediosprivados, evidenciando un racaso del sistema de salud(Garca- Campayo & Sanz Carrillo, 2000).

    Considerando que son pacientes que estn descontentoscon la atencin que se les brinda y que generan un alto costoal sistema, y en atencin a las caractersticas de la TFB, seplante la posibilidad de aplicar y transerir conocimientosdesde sta a proesionales de la atencin primaria.

    El objetivo de este trabajo es presentar un caso de tras-torno somatomoro y describir la orma de intervencin atravs de la TFB, aplicada por un psiclogo y un mdicogeneral.

    Esta aplicacin est basada en una experiencia Espaolaen la que demostraron a travs de un ensayo clnico, con laparticiparon de mdicos de amilia, que la TFB resulta ser

    una alternativa eciente para el tratamiento de pacientescon trastorno somatomoro que asisten a atencin primaria(Real, Rodrguez- Arias, Cogigas, Aparicio & Real, 1996,2000).

    Presentacin de un caso

    Este caso es parte de una investigacin mayor, en la quela TFB ue incorporada como parte de la consejera amiliarpara el tratamiento de los pacientes somatomoros por losequipos de atencin primaria. El caso que se expone ha sidoelegido al azar, y algunos de los datos han sido modicadospor razones ticas.

    Antecedentes del caso

    Mujer de 50 aos, ama de casa, casada. El marido pre-senta una enermedad crnica. Viven del sueldo del maridocomo mecnico automotriz. Tienen tres hijos, un adolescen-te y dos jvenes. El mayor es casado y vive uera del hogar.En general, ella tiene buenas relaciones con sus hijos.

    Se caracteriza por ser una paciente policonsultante, concealeas tensionales, trastornos digestivos uncionales, ta-quicardia, insomnio y cansancio. Por esta causa ha recibidotratamiento medicamentoso y previamente se haban rea-lizado diversos exmenes clnicos con el n de determinarla causa de dichos malestares, pero sin resultado positivo.A pesar de esto, la mujer persiste en su queja, asistiendo alcentro por los menos una vez al mes, durante un perodode 3 aos.

    Primera entrevista

    Esta entrevista la realiza una psicloga, terapeuta (T)con la colaboracin del mdico de amilia (M) que atiendenormalmente a la paciente (P). La mdico de amilia cita ala paciente para ser atendida y la respuesta de la pacienteue muy positiva, especialmente porque iba a participar elmdico que la atiende regularmente Al inicio de la entre-vista la mdico de amilia presenta a la colega psicloga

    indicndole que desean atenderla en conjunto, para asayudarla mejor, pero si ella tiene algn inconveniente seinterrumpir la consulta y puede seguir siendo atendida dela orma habitual. La paciente seala que no tiene problemasy la terapia la dirige principalmente la psicloga.

    M: Buenas tardesT: Qu le trae hoy por aqu?P: Vine porque tengo un dolor aqu en el estmago, pero

    tambin aqu en la cabeza (indica con la mano), en realidadme duele todo, as amanezco todas las maana ya van casitres aos con estos dolores que no se pasan con nada.

    T: S, me han inormado que Ud. ha estado suriendo

    mucho, debe ser muy desagradable levantarse todas lasmaanas con ese dolor. Me gustara hacerle una preguntaqu le gustara conseguir viniendo a esta consulta? o qusera un buen resultado para Ud. de esta conversacin? (lapaciente inicialmente se desconcierta con esta pregunta ydespus de un momento responde)

    P: Lo que a m me gustara conseguir es poder levantar-me sin dolor sico. Adems, lograr relacionarme mejor conmi marido, dejar de ser una especie de mam de l. Dejar depreocuparme tanto por su enermedad y dejar de pensar quesi l muere yo me quedar sola a cargo de mis hijos.

    T: Ud. me dice que le gustara levantarse sin dolor,relacionarse mejor con su marido y dejar de pensar en la

    posibilidad de muerte de su marido por la enermedad quel padece.

    M: En relacin a esto ltimo, me gustara decirle quela enermedad crnica no necesariamente lleva a la muer-te, si est bien cuidado, compensado siolgicamente, sumarido puede vivir muchos aos. Para eso debe cambiarsu estilo de vida y algunos hbitos, pero no se va a morir,tiene marido para rato.

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    P: (La paciente se re). Creo que al prximo control de mimarido voy a venir yo, para que me expliquen bien esto.

    T: De los objetivos que Ud. nos ha dicho, cul de ellosle gustara conseguir primero?

    P: A m lo primero que me gustara conseguir es nolevantarme con estos dolores, pero tambin me interesa

    llevarme mejor con mi marido.T: Explqueme cmo sera amanecer sin dolores.P: Sera levantarme y que no me duela nada, con la

    sensacin de que he descansado.T: En estos das ha ocurrido que se ha levantado bien o

    con menos dolores, con la sensacin de haber descansado?(bsqueda de excepciones).

    P: No seorita, desde hace tres aos que me levantotodos los das igual.

    T: Ha notado alguna dierencias entre los nes desemana y das de la semana o estivos?

    P: Que yo recuerde no.

    M: Antes de estos ltimos 3 aos, cmo era su vidasin estos dolores?P: No me acuerdo mucho, ya que tengo tanto tiempo

    este dolor (buscar excepciones desesperadamente).T: Le voy hacer una pregunta que le parecer extraa,

    pero puede servir para poder ayudarla mejor.Suponga queuna de estas noches, mientras duerme, ocurre un Milagro, y

    no se entera de que ha ocurrido porque est dormida, y todo

    lo que quiere conseguir al venir ac se cumple Cmo se

    dara cuenta que el milagro ocurri? (pregunta milagro).P: Ah! me sentira muy bien (aparece una leve sonrisa

    en el rostro), me levantara descansada, con nimo, con

    deseos de hacer las cosas.T: Quin sera la primera persona en darse cuenta queeste milagro ocurri?

    P: Mi marido, porque en la maana lo atendera mejor,con la cara ms relajada y sonriente, no como ahora.

    T: Que le dira su marido al verla ms animada, demejor cara y atendindolo mejor?

    P: Lo primero que ocurrira es que l se sorprendera ycreo que me dira qu me pas.

    M: y que ms.P: Creo que l al verme distinta, con nimo, me hablara

    ms, ya que ahora casi no conversamos, slo lo atiendo.

    T: De qu hablaran?P: Creo que de los hijos, cmo los podemos ayudar.T: Cmo se sentira Ud. hablando de ese tema y como

    respondera su marido?P: Bien! yo creo que l tambin se sentira mejor.M: Qu ms hara distinto?P: Hara mis cosas, mi marido se ira al taller ms tran-

    quilo y no me preguntara dnde estn sus cosas, ni m diratreme esto o lo otro.

    T y M : .. y qu ms.P: Creo que cuando llegue mi marido me sentira bien,

    estara ms tolerante y por ello lo atendera mejor, quizsle preparara algo rico, pero que no le perjudique su salud,y tratara de conversar con l sobre los hijos.

    T: En una escala de 1 a 7, donde 1 es lo peor, cuando

    ha estado con ms dolores, cansancio, cuando se ha sentidomuy mal, y 7 lo mejor, es decir, se ha sentido sin molestias,descansada, en qu nmero se encuentra ahora (preguntaescala).

    P: En un 2.T: Cmo que no est Ud. (en un 1?).P: Es que todava estamos juntos.T: Nos vamos a retirar un momento y luego nos encon-

    traremos para ayudarla en lo que nos ha contado.Pausa: La psicloga y la mdico se retiran a otra ocina

    y conversan sobre el caso, se ponen de acuerdo sobre elelogio y la tarea.

    T y M: (De vuelta a la consulta con la paciente)Queremos elicitarla por la ortaleza que Ud. tiene, que apesar de los dolores Ud. sigue hacia delante con su amilia.Adems, queremos elicitarla, por el cario y la preocupa-cin que tiene por su amilia, entregando mucho, lo cualmuchas veces la lleva a estar cansada.

    P: S, es verdad.T: Para avanzar en esta escala de aqu a la prxima vez,

    qu estara dispuesta hacer, algo muy pequeo.P: Estara dispuesta a acompaar a mi marido a su

    control mdico.T: Cunto tiempo necesita para hacer esto?, cundo

    desea volver?P: La prxima semana. Hasta pronto.T y M se despiden de la P.

    Segunda y ms entrevistas

    En las siguientes semanas se pregunta por los avancesen la escala y por las tareas que ella misma se impuso. En lasegunda entrevista relata que su dolor ha disminuido consi-derablemente y que hay das que se ha levantado mejor. Parala tercera sesin se le pide que ella vuelva a plantearse suspropias tareas y se le pide que observe todos esos momentosen que se siente mejor, y cmo rente a esto responden los

    hijos y el marido. En la cuarta sesin se evalan los avancesen la escala, se le elicita por sus logros y se insiste en lascosas que ha hecho ella para lograrlo, luego ella vuelve adenir sus prximas tareas. En la sesin quinta y ltima, lapaciente seala que se ubica en un 7, ya que los sntomas handesaparecidos y los objetivos que se haba propuesto los haconseguido. Se le pregunta qu aprendi viniendo ac. Ellaresponde que su estado de nimo depende mucho de ella yque ya no le da tanta importancia a los problemas, sino que

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    hay que buscarle ms bien la solucin que pensar tanto enello y ya no tiene miedo a la enermedad del marido.

    Despus de un ao de la ltima sesin se hace un segui-miento a partir de su historia clnica y se aprecia que ya noasiste al centro de salud por estos sntomas sino a controlesnormales y tampoco registra consumo de medicamentos

    por esta razn.

    Discusin

    En este trabajo se present una orma posible de atendera pacientes con trastornos somatomoros en la atencinprimaria de salud, sin necesidad de derivarlo, ya sea aotros especialistas o a salud mental, ya que estos pacientes,en general, no aceptan que sus problemas sean de origenpsicosocial y por ello no desean ser atendidos en saludmental. Adems, consideran que no se les da respuestaa su dolencia, reiterando que necesitan ms exmenes yque requieren un nuevo diagnstico, con el consiguiente

    costo que esto signica (Garca Campayo, Sanz Carrillo& Mortn, 1999).

    Para realizar esta accin se eligi la Terapia FamiliarBreve, ya que es un modo de hacer terapia que busca lamxima simplicidad, tanto desde el punto de vista tericocomo tcnico. A su vez, esto hace que resulte relativamen-te sencillo integrar en la TFB a otros modelos de terapia(Beyebach et al, 1997) e incluso usarlo como parte deuna consejera amiliar. Adems contiene una estructurasencilla,lo que hace que pueda ser aplicado por otros proe-sionales de la salud. Es una estrategia de intervencin breve,es decir, de corta duracin, que en este caso se desarroll

    en 5 sesiones, lo cual permite entregar una pronta respuestaal paciente, aumentando la satisaccin usuaria (Schade,Gonzlez, Torres y Beyebach, 2009).

    El resultado nal de la terapia ue una disminucin de lasintomatologa, recuperacin de las competencias persona-les de la paciente y un uncionamiento autnomo, inclusodespus de un ao tras la intervencin. Adems, se logrque la paciente no siguiera consumiendo medicamentos nitampoco solicitara ms exmenes complementarios, por locual en este caso hubo ahorro en el gasto sanitario.

    En este caso al igual que en los estudios realizadoscon pacientes con trastornos somatomoros, aplicando laTFB, o algunas estrategias de este modelo como parte de

    la consejera amiliar, en atencin primaria, se produce unareduccin de gastos en salud, que se expresa en el ahorroen medicamentos, exmenes complementarios, consultase inter-consultas (Real, et al, 1996, 2000; Schade, Torres& Beyebach, 2009).

    A pesar que no es posible en estos momentos atribuirlos cambios positivos nicamente a la T F B, el hecho deque haya demostrado ser breve y segura en direccin de un

    cambio positivo, es a nuestro juicio importante, para queen el uturo sea considerada en otras investigaciones quecorroboren su eectividad en el tratamiento de pacientessomatomoros que concurren a la atencin primaria desalud.

    Finalmente, resulta prometedor que los proesionales

    de la atencin primaria puedan integrar herramientas deesta terapia u otras provenientes de las reas psicosocialespara la atencin primaria, logrando brindar una atencinms integral a pacientes cuyos sntomas son sicos perosu origen es psicosocial.

    Por ltimo, es importante destacar el valor que tieneel traspaso de conocimientos y el trabajo en equipo en loscentros de atencin primaria, especialmente para la atencinde este tipo de pacientes, con el n de poder aumentar laresolutividad en la atencin primaria, aunque como ya se hasealado, se requieren investigaciones en esta rea.

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