Especial 50 aniversario Invernaderos

80
La Voz de Almería que cambiaron Almería 50 años PUBLICACIÓN CONMEMORATIVA DEL 50 ANIVERSARIO DEL PRIMER INVERNADERO

description

Revista especial 50 años Invernaderos en Almería

Transcript of Especial 50 aniversario Invernaderos

Page 1: Especial 50 aniversario Invernaderos

LaVoz de Almería

que cambiaron Almería50 años

PUBLICACIÓN CONMEMORATIVA DEL 50 ANIVERSARIO DEL PRIMER INVERNADERO

Page 2: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 3: Especial 50 aniversario Invernaderos

a 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

ue cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiara 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años q Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50

aron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almer mbiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Almería 50 años que cambiaron Al

que cambiaron Almería50 años

TRES GENERACIONES DE LA FAMILIA FELICES EN SU INVERNADERO DE LA CAÑADAFOTO: JUAN SÁNCHEZ

Page 4: Especial 50 aniversario Invernaderos

que cambiaron Almería50 años

Presidente:José Luis Martínez

Consejero delegado:Juan Fernández-Aguilar

Director:Pedro M. de la Cruz

Subdirectora:Antonia Sánchez Villanueva

Coordinación: Jacinto Castillo Milán

Maquetación y diseño:Rogelio Montes, Francisco Silvente, Francisco Tijeras, María Padilla y Alicia Mallol

Fotografía: Archivo de La Voz de Almería, archivo deCajamar, Hemeroteca de la DiputaciónProvincial y colecciones particulares

Empresa editora: La Voz de Almería, S.L.U.

Publicidad: CM2000

Impresión:Gráficas Piquer

Distribución: Distribuidora Almeriense, S.L.

SumarioIntroducción Pedro M. de la Cruz

Paisaje con figuras Francisco Fuentes, Bernabé Aguilar, JoséNache, Gabriel Barranco, Antonio Estévez,Antonio y María, Cajamar, UAL y municipios

Puntos de vista

Revolución social y económica Sánchez Picón

El milagro de la arena Tico Medina

IngenioManolo León

Bajo un manto blanco David Uclés

Protagonista en primera planaJacinto Castillo

El otro giganteAntonio Fernández

ReflexionesJuan Gabriel López

Invernadero del futuro

03

6

32

37

44

48

50

57

62

66

69Foto de portada: Juan Sánchez. Agradecimientos a Onofre, Josefina y a Juan Becerra

Page 5: Especial 50 aniversario Invernaderos

Pedro Manuel de la Cruz D I R E C T O R D E L A V O Z

años de trabajo e inteligencia en movimiento

50La Historia de la Almería que cambió su historia comenzó con aquellos pioneros quecreyeron que cultivar la arena no era una locura, que intuyeron que convertir el agua

salada en dulce no era una quimera

En aquellos atardeceres en los que erafácil cruzarse en el Paseo con HenryFonda, coincidir con Claudia Cardina-le en la Puerta de Purchena o tomarun café con Clint Easwood de vecino

de mesa en uno de los bares del Parque, el jovenBernardo Bertolucci perfilaba los últimos deta-

lles del guión de “Hasta que llegó su hora”. Y fueen aquella habitación del hotel Aguadulce cuan-do quizá se le ocurrió atribuir al personaje con elque comienza la historia la locura de “cultivar laarena” y elegir para el poblado que quería levan-tar el medio del desierto el nombre de “SweetWater”. El guionista que años más tarde dirigió

películas míticas como “El último tango en Paris”,“Novecento” o “El último emperador” nunca dijodónde había cogido la referencia de aquel pione-ro que cultivaba la arena ni por qué eligió el nom-bre de Aguadulce para su imaginario poblado,pero una mirada al entorno que él veía desde suventana nos lo descubre.

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 03

Page 6: Especial 50 aniversario Invernaderos

Porque la historia de la agricultura alme-riense, la Historia de la Almería que cambió suhistoria, comenzó con aquellos pioneros que cre-yeron que cultivar la arena no era una locura, queintuyeron que convertir el agua salada en dulceno era una quimera.

Ha pasado medio siglo desde entonces y eltiempo, tan efímero cuando se vive intensamen-te, todavía no propicia que valoremos en su di-mensión verdadera lo que aquellos pioneros cur-tidos de sol y rastrojeras fueron capaces de levan-tar. Harán falta otras cinco décadas para que laaventura entonces iniciada sea valorada con laperspectiva precisa que aporta su relato.

Las revoluciones siempre fueron un díade fuego y cincuenta años de humo; una circuns-tancia histórica que nos impide valorar como re-volucionaria la conversión de aquel desierto de1963 en un bosque de casi cuarenta mil hectáreascincuenta años después.

Medio siglo en la historia de un territoriomilenario no va más allá de un paréntesis; el es-pacio de tiempo recorrido entre un pasado delque sólo quedan los recuerdos y un futuro del quesólo se espera incertidumbre. Pero a veces estamonotonía histórica se rompe y la dinámica de laeconomía, de la demografía, de la cultura, de lavida al cabo, se intensifica con un viento tan arro-llador que el rumbo cambia y la playa en la queaparecemos no es la que estaba dibujada en elmapa de navegación.

Hace cincuenta años el viento cambió. Pa-samos de ser una provincia condenada a cultivarel esparto y la pobreza, a ser un territorio en elque todo estaba por descubrir. Aquella tierracondenada a la maldición bíblica de la sal y la se-quía abandonó la crueldad hostil de su impro-ductividad para convertirse en un mar de plásti-co bajo el que se cobija la agricultura más moder-na de Europa. Miles de años de agricultura tradi-cional veían rota su dinámica y ya nada iba sercomo antes.

Almería ha pasado de exportar hombres ymujeres asediados por la miseria a llevar hasta lacocina de millones de hogares europeos sus hor-talizas. Los hijos de los conquistados por las fá-bricas de Francia y Alemania son ahora los con-quistadores de su alimentación.

Un cambio tan radical sólo ha sido posiblepor la conjunción de factores tan importantessiempre y en cualquier actividad humana comoel trabajo, la constancia, la inteligencia y la inno-vación. Sin esas cuatro cualidades la agriculturaalmeriense no podía haber llegado a ser, con or-gullo pero sin soberbia, la mejor del mundo.

Un liderazgo que no puede reducirse a lageografía matemática ascendente de su volumende producción, de la cuantía de su facturación ode la calidad colosal de sus productos. Esos datosson importantes, pero los datos, por sí solos, noson nada. Lo importante, lo que los hace posibleses el talento y el esfuerzo que los ha ido produ-ciendo, día a día, en los últimos cincuenta años.

Sin la inteligencia en movimiento- ¿Quéotra cosa si no es la combinación de trabajo e in-novación?- el sector agrícola almeriense no po-dría haber celebrado este cincuentenario. Una fe-cha que no debe ser valorada como una meta dellegada, sino como un punto de partida. El mila-gro almeriense no es otro que la capacidad de

04 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Page 7: Especial 50 aniversario Invernaderos

nuestros agricultores para comprender que igualque una planta crece día a día, ellos también de-bían crecer en conocimiento y en innovación conella. Esa armonía es la que ha propiciado la con-versión del mayor desierto de Europa en su ma-yor despensa.

Pero el tiempo no se detiene y si es muchoel camino recorrido, todavía es mayor el que que-da por recorrer.

_Aún por recorrerLa explosión demográfica y los hábitos alimenta-rios son ya los grandes aliados del futuro. Cadavez somos más los seres humanos que poblamosel planeta. Si en los años 60 los habitantes que po-blaban la tierra no llegaban a los cuatro mil millo-nes, cincuenta años después ya superamos la ci-fra de siete mil. Si el consumo de frutas y hostali-zas fue considerado históricamente un refugiopara quienes no podían acceder a otro tipo de ali-mentación, hoy se han convertido en una medici-na que mejora la calidad de vida y amplía los añospara vivirla.

Tenemos asentado nuestro sistema pro-ductivo en bases sólidas pero no hay que olvidarque esa consistencia hay que cuidarla, como laplanta que tratamos con mimo bajo el invernade-ro, día a día. El libro de la agricultura almeriensetiene sus mejores capítulos por escribir.

Pero a veces a bueno detenerse un instan-te en el camino, volver la vista atrás y contemplarla senda que nos ha llevado donde estamos peroque nunca más volveremos a pisar. Respirar hon-do por la satisfacción de lo conseguido pero, so-bre todo, para tomar fuerzas para el camino queaún queda por recorrer.

Aquel loco que cultivaba la arena y aquelpoblado sabían en la ficción del cinematógrafoque había llegado su hora. Los agricultores alme-rienses saben que la hora les llega cada amanecercuando su trabajo y su inteligencia se ponen enmovimiento.

Hace cincuenta años elviento cambió. Pasamosde ser una provincia con-denada a cultivar el es-parto y la pobreza, a serun territorio en el que to-do estaba por descubrir

“El agua comienza a recorrer las tierras deAguadulce, antes de que comenzara la era delos invernaderos.

Almería es sinónimo de innovación.Dos fotos con cincuenta años de di-ferencia hablan por si solas.

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 05

Page 8: Especial 50 aniversario Invernaderos

06 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

PAISAJE CON FIGMedio siglo es tiempo suficiente para contemplar el tiempo y el espacio con un mínimo deperspectiva. El invernadero almeriense pasó de ser una alternativa de cultivo a convertir-se en paisaje . Pero, ese paisaje tiene sus figuras que han sido y son quienes le dan vida

Al primer golpe de vista parece comosi todo siempre hubiese estado ahí,como si el paisaje que ha generadoel invernadero no tuviese edad co-nocida. Medio siglo es mucho tiem-

po ya como para detenerse cualquier día a sope-sar la poderosa trascendencia de esta inefableconstrucción que cambió la historia y la geogra-

fía económica, la horticultura y la demografía.Unos cambios decisivos que han tenido comomejor consecuencia en esta tierra el abandonodefinitivo de la resignación, esa virtud obligadapara tantas generaciones de almerienses. Paratantas décadas salpicadas de éxitos incomple-tos y amargos declives .

Todo el esfuerzo, toda la ilusión, todos lossueños que han sustentado este apasionante via-je rumbo al futuro, que arrancó en 1963, han fruc-tificado por sí solos. Pero, esa sería una visión in-

completa que sólo tendría objeto convertida encifras y datos para explicar la evolución tecnoló-gica. Hay que pensar también en el tiempo y, so-bre todo, en las personas.

Dicen que el tiempo da y quita la razón yel tiempo ha venido a poner en su sitio los traba-jos y las esperanzas de un puñado de hombres ymujeres que hace medio siglo pensaron que latierra y el cielo -tan poco generosos-, no teníanla última palabra. Hombres y mujeres que con-servaron las lecciones más valiosas de sus mayo-

J. CASTILLO

FranciscoFuentes

José Nache

BernabéAguilar

GabrielBarranco

AntonioEstévez

Page 9: Especial 50 aniversario Invernaderos

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 07

GURASEl verdadero milagrosurge sin que seanconscientes quienes lopropician. Así sucedióen estos campos porobra de un puñado dehombres y mujeres, quehoy merecen el recono-cimiento de todos.

res y les añadieron las gotas precisas de va-lentía e inquietud como para embarcarse enesta extraña nave de plástico y alambres queiba a poner rumbo al futuro sin moverse desu sitio.

Estos hombres y mujeres, a los que sesumaron entidades con capacidad para in-fluir en el cambio de signo, fueron quieneshicieron el milagro sin saberlo, como sucedecon los milagros auténticos. No tuvieronnunca la sensación de ser héroes de epopeyaalguna ni conservan en sus casas medallerosrepletos de condecoraciones.

Sin embargo, parece razonable pen-sar que medio siglo es tiempo suficiente co-mo para ofrecerles un poco de gratitud enforma de reconocimiento. Un reconocimien-to que debe quedar escrito para siempre.

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

El tiempo acabó dandola razón a un puñadode hombres y mujeresque conservaron lo másvalioso de sus mayoresy lo mezclaron con lainquietud por lo nuevopara cambiar definiti-vamente la historia.

A veces, la prisa de locotidiano induce a pen-sar que ese descomunalmosaico que constitu-yen los invernaderosalmerienses ha estadosiempre ahí, pero de-trás de ellos hay nom-bres y apellidos.

Antonioy María

Cajamar

UAL

Municipios

Page 10: Especial 50 aniversario Invernaderos

El primer invernaderoFrancisco Fuentes

En la parcela número 24 que gestionaba Francisco Fuentes Sánchez, conocido comoPaco ‘El piloto’, surgió todo. En este terreno se levantó el primer invernadero de la

provincia de Almería, que en su origen contó con una extensión de 500 metros

Francisco Fuentes Sánchez (1922-1973),más conocido como Paco 'El piloto', re-presenta a la perfección el ejemplo delhombre que se ha hecho a sí mismo,que con ingenio y trabajo ha superado

las adversidades y los retos que la vida le ha pues-to en el camino.

Antes de dedicarse por completo a la agri-cultura en su parcela, desempeñó otros trabajos.Fue pescador en los barcos del Puerto de Roque-tas, después trabajó en la huerta de las salinas yestuvo con José Ojeda en 'La Ventilla', donde porel día trabajaba la tierra y por la noche la regaba.

En este periodo ya se había casado conMaría López Viciana, que siempre permaneció asu lado y apoyó en todo a su marido. Tuvierontres hijos.

Paco, al que todavía no se le conocía como'El piloto' sino como 'El viejo' por haber heredadoel apodo de su padre, decidió participar en unode los programas que en 1956 impulsaba el Insti-tuto de Reforma y Desarrollo Agrario (IRYDA). Leconcedieron una parcela en El Parador, la núme-ro 24, y aquí nació su sobrenombre definitivo de'El piloto' ya que en sus nuevas tierras se desarro-llarían diferentes pruebas para obtener el mayorrendimiento a los cultivos, es decir, se trataba deuna parcela piloto y entonces, pues como Paco 'Elpiloto' quedó bautizado.

Primero hicieron siembras de experimen-tación que no terminaron de funcionar como seesperaba: algodón, espárragos, maíz, garbanzos,fresa, claveles y más de doscientas variedades dejudías. En una de esas muchas pruebas hicieronunos túneles de cabilla de unos cuarenta centí-metros de altura (similar al actual cultivo de lafresa), y se dieron cuenta que las plantas crecíanmejor. El IRYDA abandonó el proyecto de la par-cela piloto al considerar que habían fracasado ensu intento. Entonces Paco se quedó la finca pormás de 700.000 pesetas de la época que tuvo quepagar a plazos. El lote incluía la parcela, la vivien-da, una vaca, una yegua con carro para transpor-tar los frutos, cerdos, doce gallinas y dos parejasde conejos.

Y a partir de aquí Paco empieza a experi-mentar, junto con los ingenieros agrónomos Ber-nabé Aguilar Luque y Leandro Pérez de los Co-bos, con plásticos que utilizaban para cubrir los

cultivos con el propósito de optimizar las cose-chas. El primer intento se lo llevó el viento. En-tonces perfeccionaron la aplicación de esta idea.Colocó el plástico en medio de dos tejidos dealambre sobre una estructura de hierro mejor fi-jadas al suelo. A la tercera fue la vencida. Ocurrióen 1963 con un terreno de cultivo bajo plástico de500 metros donde sembró judía, pimientos y to-mate. Esa cosecha le valió para saldar su deudacon el IRYDA sobre el invernadero anteriormentecitado de 500 metros, e instalar otros 1.000 me-tros más de invernadero.

Un sobrino se sumó a su proyecto y co-menzaron a hacer invernaderos para otros agri-cultores a partir de 1964. Entre los meses de junioa septiembre construían invernaderos y el resto

del año producían en sus fincas. Roquetas, Vícar,La Rábita, Níjar, La Mojonera, Campo de Dalías...,veían cómo crecía la idea del invernadero. Le re-comendaron patentar el proceso pero, como re-cuerda su hijo José Domingo, “mi padre no quisoaprovecharse de la gente del campo que eran fa-milias humildes que querían prosperar trabajan-do”. Paco 'El piloto' falleció el 2 de abril de 1973con 51 años. No pudo ver cómo algunas de susaportaciones propiciaron que Almería, la zonamás árida de Europa, se convirtió en la despensadel Viejo Continente y en una de las vanguardiasagrícolas más importantes del mundo. A veces lagenialidad nace de ideas sencillas que solo unoselegidos son capaces de vislumbrar, Paco 'El pilo-to' fue uno de estos privilegiados.

J.G.GARCÍA

Retrato de Francisco Fuentes Sánchez, cono-cido popularmente en el mundo de la agri-cultura como Paco ‘El piloto’ por gestionaruna de las primeras fincas experimentalesdel campo almeriense.

En esta fotografía Paco ‘El piloto’, de es-paldas, trabaja en la perforación de unángulo de hierro que después utilizaríanen la instalación de la estructura de uninvernadero.

María López Viciana,esposa de Paco ‘El pilo-to’, siempre permane-ció a su lado apoyán-dolo en todo.

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

08 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Page 11: Especial 50 aniversario Invernaderos

El ingeniero del campoBernabé Aguilar

Su aportación fue crucial para el desarrollo de la agricultura almeriense con dos in-novaciones que trajeron consigo una gran revolución: el enarenado y el invernadero.

Ostentó el cargo de Jefe Provincial del Instituto de Reforma y Desarrollo Agrario

Bernabé Aguilar Luque (1927-2009) esuna de esas personas desconocidaspara la mayoría pero sin cuya aporta-ción la agricultura almeriense seríadiferente, o tal vez ni existiría en los

términos en que la conocemos.Se doctoró como Ingeniero Agrónomo en

Madrid y, como describió José María Verdejo Lu-cas para una publicación del Instituto de Estu-dios Almerienses: “Su primer destino fue en laDelegación Provincial del Instituto Nacional deColonización (INC) de Almería donde se incorpo-ró en marzo de 1956. En esta Delegación, bajo ladirección de Leandro Pérez de los Cobos y junto aJuan Cuadrado Martínez se le encargó la explota-ción de las zonas de “interés nacional “ de la pro-vincia: Campo de Dalías, Campo de Níjar, El Sal-tador de Huércal-Overa y el Higueral de Tíjola”.

Junto con sus compañeros Pérez de losCobos y Cuadrado Martínez desarrollan solucio-

nes que se tornarían imprescindibles para el éxi-to de cosechas en parcelas baldías hasta enton-ces. La primera de estas aplicaciones fue el culti-vo enarenado que posibilitó sembrar todo tipo deproductos hortofrutícolas.

Y en este progreso cualitativo BernabéAguilar aportaría su principal contribución aldesarrollo del campo almeriense: el cultivo bajoplástico, el germen del actual invernadero de laprovincia de Almería.

El primer invernadero en tierras alme-rienses se instaló en una parcela piloto, la núme-ro 24, que gestionaba Francisco Fuentes Sánchez,conocido precisamente como Paco 'El piloto', enel entorno de Roquetas de Mar. Ese fue el primerinvernadero de Almería y de aquello se cumplencincuenta años en 2013, una fecha clave que re-sulta necesario conmemorar y reivindicar.

Este adelanto técnico conocido como in-vernadero tipo 'Almería', supuso la máxima opti-mización de los recursos naturales de la provin-cia como el sol, y las temperaturas templadas ycálidas en comparación con otras regiones, so-

bre todo en épocas difíciles para sacar partido ala tierra como el invierno. El éxito del inverna-dero alcanzó tal magnitud que en un tiempo ca-si récord el Instituto Nacional de Colonizaciónempezó a expandir este sistema de cultivo in-tensivo por pueblos de la provincia, especial-mente en la zona del Poniente, con condicionesfavorables para los colonos que gestionaban lasnuevas parcelas.

Bernabé Aguilar continuó durante toda sucarrera vinculado a la agricultura almeriense. In-vestigó las técnicas agrícolas aplicadas en otrospaíses con un alto grado de investigación agrícolacomo Holanda o Israel. Ostentó el cargo de JefeProvincial del Instituto de Reforma y DesarrolloAgrario (IRYDA) hasta que se jubiló en 1990. Secasó con Purificación Arigo en 1960 y tuvierondos hijos, Isabel y Bernabé.

Bernabé Aguilar Luque posibilitó con laejecución de sus ideas que miles de familias ha-yan prosperado gracias a la agricultura y que enla actualidad Almería se erija en la despensa deEuropa.

JUAN GABRIEL GARCÍA

ESPECIAL 50 AÑOS DE INVERNADERO I 09

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

El entonces príncipe de España, Don JuanCarlos, visitó en 1964 el Campo de Dalías.Bernabé Aguilar aparece al lado del hoy Reyde España con el brazo derecho levantado.

Dos imágenes de la visita del entonces minis-tro de Agricultura de UCD José Luis Álvarez aAlmería, a principios de los 80. En la de arribaBernabé señala un mapa, y en la inferior visi-tan un invernadero.

Page 12: Especial 50 aniversario Invernaderos

Un testigo privilegiado del progresoJosé Nache

Heredó la cultura del campo de sus padres y sus abuelos. Vivió el esplendor del parraly cómo paulatinamente el cultivo bajo plástico empezó a ocupar el espacio que deja-

ba la uva. En la actualidad preside el Club de la Tercera Edad de Tarambana

José Nache Sánchez nació en Pampanicoen 1945, cuando este núcleo pertenecíaal término municipal de Dalías. Susabuelos y sus padres también eran agri-cultores, así que el destino de José esta-

ba claro desde sus orígenes.Desde muy pequeño empezó en la agri-

cultura ayudando a la familia. Salía del colegio ypor la tarde echaba una mano a sus padres y em-pezaba a descubrir poco a poco los secretos deun mundo que pronto se convertiría en el centrode su universo. A partir de los 13 años su implica-ción en la agricultura fue creciendo hasta ocu-par la mayor parte de su tiempo.

Recuerda José la época del parral, y de có-mo paulatinamente la uva, la misma que habíallevado el nombre de Almería y sus pueblos portodos los rincones del mundo, cada vez era me-

nos rentable. Esta situación obligó a los agricul-tores a probar con otros productos y buscar solu-ciones ante esta crisis del campo. El tomate y losguisantes, entre otros productos, empezaron aocupar el espacio que dejaba la uva.

Y entonces empezaron a instalarse losprimeros adelantos técnicos que en los años se-senta provocaron el despegue o, mejor dicho, laconsolidación de la agricultura almeriense: elenarenado y el cultivo bajo plástico o invernade-ro. José recuerda que un vecino puso el primerinvernadero en este punto del Poniente y que apartir de 1966 y 1967 en adelante todos los agri-cultores apostaron por este sistema que le saca-ba el máximo partido a cada parcela. FranciscoGarcía se llamaba el agricultor que apostó por elinvernadero en esta zona de Almería.

José recuerda que con el plástico se con-seguía multiplicar por dos cada cosecha y seempleaba menos tiempo en obtener mejores re-sultados. En este contexto la variedad de culti-

vos se amplió y además de tomates se sembra-ban judías y pimientos consiguiendo muy bue-nos números.

Y como sucedió en otros puntos de la pro-vincia, se formaron cuadrillas de trabajo de has-ta doce hombres, en una de ellas participó José,que se dedicaban a instalar invernaderos al tiem-po que trabajaban en sus parcelas.

José se casó con Isabel Rodríguez Carriónen 1969 y tienen dos hijos. La familia estableciósu residencia en Tarambana. José se jubiló hacetres años pero sigue siendo agricultor. Actual-mente desempeña la presidencia del Club de laTercera Edad de Tarambana donde organizanactividades con la excusa de pasar un buen ratocon los amigos.

Contempla con orgullo el enorme cambioque ha experimentado la provincia gracias a laagricultura. Él ha sido una de esas personas anó-nimas que han contribuido de forma decisiva ala prosperidad de Almería.

J.G.G.

Trabajo en equipo. En esta foto José es el queaparece a la derecha, el que lleva el ‘mancaje’.Esta imagen evidencia lo mucho que haavanzado la agricultura desde el punto devista técnico en todo este tiempo.

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

10 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Una imagen muy elocuente y entrañable deltrabajo en el campo almeriense. José es elque está subido en los mulos que tiran delcarro que se utilizaba para transportar losproductos.

José Nache Sánchez en una imagen reciente.Aunque está jubilado sigue con mucho inte-rés el día a día del campo. En Tarambanapreside el Club de la Tercera Edad donde or-ganizan muchas actividades.

Page 13: Especial 50 aniversario Invernaderos

El guardián del aguaGabriel Barranco

Durante casi toda su vida ha trabajado como relojero de aguas en Matagorda y LosBaños de Guardias Viejas. Siempre se ha preocupado por que se le sacase el máximopartido a cada gota de agua. Preside la Comunidad de Regantes La Unión de Todos

Hoy día nos parece increíble pero en laEspaña de los años cuarenta era nor-mal que los niños se implicasen des-de muy pronto en el trabajo familiar.Eso le ocurrió a Gabriel Barranco

Ramos, nacido en 1943, que con apenas cinco añosse encargaba de llevar la mula al pozo para cargaragua y transportarla hasta la zona de cultivo pararegar a cántaros las posturas de los tomates.

Desde su infancia Gabriel ha estado vincu-lado a la agricultura y ha mantenido una relaciónmuy particular con el agua y su máximo aprove-chamiento.

Su familia gestionó una finca en la zona deLos Molinos, pero aquel intento no salió bien. Trasesta experiencia pasaron a trabajar a jornal. En es-te contexto Gabriel Barranco empieza a trabajar enla gestión de los pozos para el regadío de las tierraspero apenas se trata de una relación efímera que seve interrumpida por la obligación que tiene Gabrielde hacer la mili. Antes en Matagorda y GuardiasViejas se buscaron nuevas fuentes de agua como el

pozo de La Aurora, del Porvenir, después el de Nue-va Esperanza que, como recuerda Gabriel, empezóa dar vida a Guardias Viejas con un agua de mejorcalidad a lo que había que añadir la utilización denuevos sistemas técnicos como motores eléctricosque mejoraron la distribución del agua con el con-secuente beneficio para los cultivos. A partir de1963 Gabriel empieza a trabajar de forma estableen un pozo en la zona del Toril y Los Bergantes, en-tre Balerma y Matagorda, y en 1967 entró como re-lojero en el pozo de Los Remedios.

El término relojero de agua describe la fun-ción del responsable de distribuir y controlar elagua para riego en una comunidad o grupo de agri-cultores, de tal modo que cada regante reciba lacantidad exacta de líquido que tiene contratado. Eltiempo para regar del que dispone cada agricultorse mide por horas, y por este motivo es indispensa-ble el reloj para medir el tiempo, de ahí relojero deaguas. Hubo un momento en el que Gabriel llegó allevar hasta seis pozos a la vez durante varios años,los de la zona de Matagorda y Los Baños de Guar-dias Viejas.

Merece la pena detenernos en los nombresde los pozos: Porvenir, Nueva Esperanza, Reme-

dios..., huelga decir que pueblos enteros deposita-ban su futuro en las posibilidades que les ofrecíacada pozo, cada gota de agua para prosperar.

A finales de 1976 empezaron a bajar los cau-dales y los pozos se quedaron a la mitad. En 1981compraron un pozo a IRYDA, y en 1983 la comuni-dad hizo otro pozo más, ya que en Matagorda y LosBaños de Guardias Viejas era imposible abastecertodas las tierras. En 1989 dejó de ser relojero y des-de 1994 Gabriel es presidente de la Comunidad deRegantes La Unión de Todos. Se jubiló en 2008. Es-tá casado con Dolores Ruiz Fernández desde 1974 ytienen cuatro hijos.

Recuerda Gabriel que al principio eran rea-cios a instalar invernaderos, pero pronto se dieroncuenta que con este nuevo sistema la rentabilidadse disparaba. No duda en afirmar que si en la actua-lidad se cultivase en la calle sería una ruina para elsector. Gabriel mira atrás y se siente muy orgullosode Matagorda y Guardias Viejas, a los que, afirmaemocionado, tiene mucho que agradecer. Así esGabriel, un hombre tranquilo que ha custodiado elagua como el más grande de los tesoros, para quecada gota que cayese sobre la tierra fuese paraafianzar el futuro de miles de familias.

JUAN GABRIEL GARCÍA

ESPECIAL 50 AÑOS DE INVERNADERO I 11

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

Gabriel Barranco se sientemuy orgulloso de Matagorda yGuardias Viejas.

Page 14: Especial 50 aniversario Invernaderos

La importancia de la comercializaciónAntonio Estévez

Su vida laboral ha transcurrido en el campo de la comercialización y la exportación.Se inició con la uva y ha visto cómo otros productos han ganado protagonismo hasta

que el nombre de Almería se ha convertido en sinónimo de máxima calidad

Este almeriense nacido en Berja en 1937representa a una parte fundamental dela cadena de distribución de la produc-ción agrícola, es decir, los eslabonesque unen la cosecha del agricultor con

el consumidor final.Antonio Estévez Criado vivió los últimos

años de esplendor de la uva de Almería. Empezótrabajando muy joven en una de las empresas líde-res del sector de la comercialización: F. Enciso Al-coba y Compañía, de Berja. Fue la primera que lle-vó la uva de la provincia a lugares tan inaccesiblesen aquel tiempo como el Extremo Oriente- (India,Federación de Malasia, Indonesia, Hong Kong..)-, yen África(Senegal, Kenya...).

Dentro de esta misma empresa pasó a otrodepartamento, la consignación de buques en Fleta-mentos de Berja SL, empresa ligada al grupo de F.Enciso Alcoba, donde permaneció hasta 1971.

Ese año Antonio tomó una difícil deci-sión, dejó la que había sido su casa hasta ese mo-mento y se marchó a la zona de El Ejido, a Alma-cenes Antonio Verde. En esta empresa y en estanueva etapa crea Huvercon S.A., empresa dentrode este grupo dedicada a la exportación. En esteperiodo la uva había quedado casi relegada al ol-vido y los productos más demandados de Alme-ría eran los del Campo de Dalías, fundamental-mente: tomate, pepino, pimientos, berenjena,sandía, melón...

En este contexto Antonio establece los con-tactos necesarios para abrir una nueva vía de co-mercialización para Almería: el mercado de Fin-landia. Y de ahí se inician relaciones con Alemania,Bélgica, Holanda..., las hortalizas almerienses con-quistan Europa.

Y llegó el momento en el que Antonio quisoemprender un proyecto personal donde desarro-llar toda la experiencia adquirida durante tantosaños. En 1984 creó Samal S.A, una empresa de ser-vicios de intermediación de comercio entre el pro-veedor y el destinatario. Antonio se jubiló en 2005pero Samal S.A., continúa con su actividad, está apunto de cumplir treinta años, y la dirige su hijoPablo. Antonio se casó en 1968 con Maravillas Joyay tienen cuatro hijos.

Coincidiendo con el cincuenta aniversariodel primer invernadero en Almería, Antonio refle-

xiona sobre los avatares del campo que ha vivido enprimera persona. Mira con nostalgia el tiempo dela uva, siente cierta impotencia porque no se hu-biese seguido investigando en otras variedades co-mo sí hicieron en la vecina Murcia.

Y también se muestra autocrítico con elpresente. Antonio cree que la agricultura alme-riense debería apostar más por la diversificaciónde sus productos para conquistar nuevos merca-dos y que habría que luchar por aumentar la pro-ducción por metro cuadrado. Señala que el reto ac-tual del sector en Almería pasa por evitar lo queocurrió con la uva, innovar, y que se equilibre el

costo de cada cosecha con los precios de venta yaque los márgenes de beneficio han disminuido enlos últimos años.

Y a este experimentado exportador no lecabe ninguna duda que Almería tiene una deudamuy importante con el agricultor. Almería y susproductos se conocen en toda Europa, y esto se haconseguido gracias a esas personas anónimas quehan convertido la árida Almería en un vergel. Elnombre de Almería se asocia a la máxima calidadcuando se habla de agricultura. Personas comoAntonio han sido los mejores embajadores de laagricultura almeriense en el mundo.

J.G.GARCÍA

Aunque está jubilado, Antonio Esté-vez sigue con mucho interés la ac-tualidad del campo y comparte suexperiencia con sus hijos.

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

12 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Page 15: Especial 50 aniversario Invernaderos

En busca de un sueñoAntonio y MaríaAntonio López y María Mercedes Soto fueron una de las primeras familias de colonos deCampohermoso. Han vivido todas las etapas por las que ha pasado la agricultura en laprovincia de Almería como el enarenado y la consolidación del cultivo bajo plástico

Antonio López (1931) y María MercedesSoto (1941) constituyen un magníficoejemplo de sacrificio y superación.Su historia guarda similitud con la demiles de almerienses que con tesón y

mucho esfuerzo consiguieron sacar a su familiaadelante, y en un determinado momento de nues-tra historia reciente contribuyeron de forma deci-siva a la prosperidad de la provincia de Almería.

Antonio y María Mercedes fijaron su resi-dencia como matrimonio a finales de los años cin-cuenta en el Puente del Río, una pedanía abderi-tana. Antonio era de Adra y su mujer de Berja y eneste punto establecieron su primer hogar. Anto-nio trabajaba en la construcción, era maestro al-bañil, y las cosas no les iban mal teniendo encuenta el siempre difícil contexto socioeconómi-co de la España de aquel tiempo.

Pudieron ahorrar unas pesetas y nació An-tonio, el primero de sus cuatro hijos (después lle-garían Manuel, Paqui y María del Mar). Pero Anto-nio padre no se conformaba del todo con esa esta-

bilidad. Tenía espíritu aventurero y decidió cam-biar el ladrillo por el arado, y una casa con luz yagua corriente – las máximas comodidades a lasque podía aspirar una vivienda en aquella época-por un barracón sin esos 'lujos' en medio del Cam-po de Níjar.

María Mercedes y Antonio se convirtieronen una de las primeras familias de colonos deCampohermoso y en agricultores pioneros de lazona. El matrimonió llegó a Níjar porque decidiósumarse a uno de los programas que las adminis-traciones de entonces llevaron a cabo con la refor-ma agraria.

Se lanzaron a la aventura y al principio, se-gún cuenta su segundo hijo, Manuel López, que yanació en Níjar, “lo pasaron muy mal, se gastarontodo el dinero que con mucho esfuerzo habíanconseguido ahorrar porque las primeras cose-chas no salían adelante y hubo algunos momen-tos en los que pensaron dejar el sueño que los lle-vó hasta allí”. De hecho, como recuerda Manuel,muchas familias que emprendieron la misma em-presa abandonaron y emigraron a Barcelona.

Y entonces se obró el milagro del campoalmeriense que se puede resumir en cuatro hitos,

tres materializados y uno que está por llegar. Elprimer punto de inflexión en los cultivos de Anto-nio y María fue el enarenado. Este sistema, queconsiste en colocar una capa de arena en el suelo,revolucionó la agricultura y a partir de entonceslas tierras de este matrimonio emprendedor co-menzaron a ser rentables. Se consolidó el proyec-to. Y llegó el segundo hito: el cultivo bajo plásticocon riego por goteo, trajo consigo la segunda revo-lución agrícola almeriense. Esta nueva técnica fa-voreció que se pudiese cultivar en invierno paracomercializar en Europa y el resto de España.

El tercer gran acontecimiento en estaaventura fue la comercialización por parte de em-presas almerienses, ya que en los primeros añoslos productos de la provincia los comercializabanempresas de Murcia o Valencia. El cuarto hito esel que todavía no se ha producido: la unificaciónde la oferta, un objetivo deseado por todo el sectorpero que aún no se ha materializado.

Antonio y María creyeron en un sueño ypelearon con todas sus fuerzas hasta que lo hicie-ron realidad. Los capítulos más brillantes de lashistorias de los pueblos están escritos por aventu-reros como ellos.

J.G.G.

Antonio y María Mercedes hace unos años. Arriba, terceropor la izquierda, en la primera comisión de festejos deCampohermoso y debajo una foto más actual de la familia.

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 13

Page 16: Especial 50 aniversario Invernaderos

14 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

OrígenescomunesCAJAMAR

La Caja rural fue desde su nacimiento en 1963 una entidad comprometida e identifi-cada desde el primer día con las demandas y las necesidades del campo almeriense.

Su evolución no puede entenderse sin el desarrollo de la agricultura provincial.

Los orígenes de Cajamar Caja Rural enAlmería se remontan al año 1963. Ca-sualidad o no, el mismo año que seinstalaba el primer invernadero que-daba constituida la entonces Caja

Rural Provincial de Almería. Una innovacióntecnológica y una iniciativa financiera que hanmarcado el desarrollo económico y el progreso

social de nuestra provincia, sustentando el nue-vo modelo agrícola protagonizado por los agri-cultores, cooperativas y empresas auxiliares.Dos hechos que, de la mano, han contribuidodecisivamente al crecimiento de la economía ya la mejora del nivel de vida de los almerienses.

Comprometida e identificada desde elprimer día con las demandas y necesidades delcampo almeriense, la Caja Rural se convirtiópronto en el instrumento financiero propio delsector agrario de esta provincia, contribuyendo

decisivamente a su modernización y transfor-mación. De tal manera consiguió vertebrarseen su realidad económica y social, que hoy no sepuede analizar el desarrollo que ha vivido laagricultura almeriense sin tener en cuenta elpapel desempeñado por la cooperativa de crédi-to que nació a su servicio. De la misma formaque la evolución de Cajamar Caja Rural no pue-de analizarse sin tener presente su origen so-cial y su vinculación al sector agrario. Su objeti-vo principal ha sido y es hacer cómplice al

LA VOZ

Page 17: Especial 50 aniversario Invernaderos

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 15

Los principios de Caja-mar Caja Rural han es-tado siempre encami-nados a dotar a la so-ciedad de un instru-mento útil para atenderlas necesidades finan-cieras de las familias ylas empresas

cliente de su actuación, transmitir a la socie-dad que la caja es para todos, y justificar suactividad, que con el tiempo ha superado elobjeto inicial por el que nació. Así, de acuer-do con sus principios de tradición cooperati-vista, y frente a otras facetas de la actividadfinanciera, Cajamar trata de dotar a la socie-dad de un instrumento útil que cubra las ne-cesidades financieras de las familias y de lasempresas, dando prioridad a las relacioneshumanas y al trabajo de las personas.

Cincuenta años después, nuestrocampo se ha convertido en una referencianacional e internacional por sus innovacio-nes y la calidad de sus productos, mientrasque la hoy Cajamar Caja Rural es la primeracooperativa de crédito española y se ha situa-do entre las primeras entidades financierasde nuestro país.

Durante este tiempo se han tenidoque superar muchas dificultades, incom-prensiones y malos augurios, herederas engran parte de una histórica inercia derrotis-ta arraigada en determinados ámbitos socia-les. Pero tanto el campo almeriense comoCajamar han demostrado su fortaleza y ca-pacidad de actuación, superando no solo lassituaciones adversas que se han presentadosino poniendo de manifiesto el alcance de suiniciativa y constante espíritu de supera-ción.

Cajamar Caja Rural es la pri-mera cooperativa de créditoespañola y una de las, situadaentre las entidades financierasmás importantes.

Juan del Águila Molina (Almería, 1930) fue elfundador de la Caja Rural. Actualmente es pre-sidente emérito de Cajamar, después de unadilatadísima trayectoria al frente de la entidadcooperativa de crédito.

Page 18: Especial 50 aniversario Invernaderos

16 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

La aportacióndefinitiva de laUAL

La Universidad de Almería ha mantenido siempre una relación cercanacon el sector agroalimentario ofreciendo soluciones a travé de I+D en ám-

bitos como producción vegetal, ingeniería, genética, economía, logística,organización de empresas , calidad y seguridad alimentaria

La idea de Paco ‘El Piloto’, el agricultor aquien hace ahora 50 años se le ocurrióalgo tan simple y a la par tan brillantecomo cubrir con plásticos una planta-ción, cambió para siempre el devenir

de una provincia que, hasta entonces, solo habíasido ejemplo de pobreza y desolación. A él le si-guieron después otros emprendedores y en tornoa esa emergente industria surgió más adelante to-do un universo de investigaciones, realizadas enel ámbito de la Universidad de Almería, que hanlogrado situar a la agricultura intensiva de estaprovincia a la vanguardia a nivel mundial.

La Universidad de Almería ha apostadosiempre por entablar una relación cercana con elsector agroalimentario para hacer realidad susnecesidades de I+D en áreas como la producciónvegetal, ingeniería, genética, económica, organi-zación de empresas, logística, calidad y seguridadalimentaria. El Vicerrectorado de Investigaciónque dirige Javier de las Nieves trabaja intensa-mente en esa línea, que ya definió en el año 2008el Consejo Social de la UAL cuando aprobó el “Do-cumento orientativo sobre la estrategia y el des-arrollo de la Universidad de Almería en el contex-to socio económico almeriense”. Este informe es-tablecía la conveniencia de insistir en una Univer-sidad especializada en muy pocos sectoresformativos y de I+D+i coincidentes con sectoresestratégicos a nivel provincial, fundamentalmen-te el agroalimentario.

Por señalar solo algunas de las investiga-ciones más representativas, la UAL ha trabajado,por ejemplo, en la mejora de las estructuras de losinvernaderos. Esta ha sido una de las labores delgrupo de investigación “Tecnología de la Produc-

ción Agraria en Zonas Semiáridas” –integrado porlos profesores José Antonio Salinas, José PérezAlonso, Julián Sánchez-Hermosilla López, ÁngelJ. Callejón Ferre y Ángel Carreño Ortega-, que, en-tre otros proyectos, ha diseñado un nuevo proce-dimiento constructivo para los invernaderos tipomultitúnel, en los que el montaje de la estructurade cubierta se realiza en el suelo en vez de en altu-ra o un sistema de líneas de vida para instalar enla cubierta de los invernaderos ‘tipo Almería’, pa-ra que los operarios que trabajen en altura pue-dan anclarse y trabajar sin riesgo a caídas.

Otro grupo de investigación, el “IngenieríaRural”, lleva por su parte casi dos décadas traba-jando para hacer más competitivos a los agriculto-res y a la industria auxiliar de Almería a través deldesarrollo de técnicas de cultivo más respetuosascon el medio ambiente, el diseño de invernaderos,la gestión del agua, el control climático y la incor-poración de energías renovables, como explica suinvestigador principal, el profesor Diego Valera.Este grupo de investigación ha desarrollado técni-cas en la frontera del conocimiento para hacersostenible al invernadero Almería, como la ane-mometría sónica triaxial y la termografía, que sehan utilizado para la mejora del acondicionamien-to climático, especialmente de los sistemas de ven-tilación, y de la propia estructura. Gracias a lasmejoras desarrolladas, a la evolución continua, y alesfuerzo conjunto de los agricultores e investiga-dores, el invernadero tipo Almería sigue gozandodespués de 50 años de una excelente salud.

Una buena salud que certifican tambiénlos productos que se cultivan bajo plástico y a laque ha contribuido, sin duda alguna, algunas delas investigaciones desarrolladas por el Área deProducción Vegetal de la UAL, que dirige el cate-drático Juan José Tello, cuya aportación principalha sido el desarrollo del injerto en plantas hortí-

LA VOZ

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

Page 19: Especial 50 aniversario Invernaderos

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 17

El capital humano esuno de las aportacionesmás valiosas de la Uni-versidad de Almería alprincipal sector produc-tivo de la provincia

injertada, destacando nuevos sistemas de poda enlos tipos cherry. En la actualidad, se están consi-guiendo los primeros frutos en la evaluación depatrones de pimiento por su resistencia a patóge-nos de suelo.

Igualmente, han sido fundamentales lasaportaciones del Departamento de Biología y Geo-logía de la UAL, con el catedrático de EntomologíaTomás Cabello a la cabeza. Se han realizado im-portantes contribuciones en el desarrollo del con-trol biológico de plagas, tanto desde el punto devista formativo, como por la labor de investiga-ción desarrollada sobre el tema, mediante lapuesta a punto de nuevas especies autóctonas decontrol biológico. Todo ello ha hecho posible ladenominada ‘revolución verde’ en los cultivoshortícolas en invernaderos de Almería, que ha su-puesto la drástica reducción o, inclusive en algu-nos cultivos, la eliminación de la utilización deplaguicidas de síntesis.

Otro área, el de Química Analítica de laUAL, trabaja desde hace 30 años en métodos deanálisis para el control de residuos de plaguicidasen frutas y hortalizas. Ello ha supuesto que estazona del sudeste español se encuentre a la van-guardia de los avances en métodos y nuevos equi-pos de análisis.

Los investigadores de la UAL del grupo“Química Analítica de Contaminantes”, cuya res-ponsable es la profesora Antonia Garrido Frenich,han participado de manera relevante en la crea-ción, y en muchos casos en la gestión, de laborato-rios para el control de residuos de plaguicidas. Es-te es el caso de los laboratorios de Coexpal, Cuam,Sica y LAB, entre otros; destacando que el labora-torio Cuam fue el segundo laboratorio acreditadoen éste ámbito a nivel nacional. La creación de la-boratorios especializados en Almería, iniciada enla segunda mitad de los años 80, vino a resolver eldéficit existente en el control de calidad de los pro-ductos hortofrutícolas, que hasta entonces única-mente se hacía en destino. Desde entonces, dichos

laboratorios han analizado cientos de miles demuestras y han hecho una notable aportacióncontrolando la seguridad alimentaria de los pro-ductos hortofrutícolas de la provincia de Almería.

Pero además de en estos campos, en laUAL se han desarrollado investigaciones relacio-nadas con otros, como la robótica y mecánicaaplicada a los invernaderos. Es el caso del grupode investigación “Automática, Robótica y Meca-trónica” dirigido por el profesor Manuel Beren-guel, que lleva trabajando desde 1995 en la aplica-ción de las técnicas de modelado y automatiza-ción de los procesos de producción bajo inverna-dero. Destacan, por ejemplo, las aportaciones quese han hecho en el control del crecimiento de cul-tivos al regular las variables climáticas y de ferti-rrigación, y en otro campo fundamental: el des-arrollo de los primeros robots que se han utiliza-do en Almería para la realización de tareas en losinvernaderos como pulverización o transporte.Parte de esa tecnología ha sido transferida a dis-tintas empresas que, en la actualidad, ya la estáncomercializando.

Por otra parte, y con el fin de mejorar lacompetitividad del sector agrario a través de la in-vestigación, innovación y transferencia de tecno-logía hacia los productores agrícolas, nació en2004 el Centro de Innovación y Tecnología Funda-ción Finca Experimental UAL-ANECOOP, que co-ordina las actividades de investigación y experi-mentación de ANECOOP y de la Universidad de Al-mería que se desarrollan en la finca experimental.Allí se ha estudiado, por ejemplo, la evolución de lacalidad del producto hortofrutícolas en post-cose-cha bajo condiciones de transporte de larga dis-tancia; el empleo de bioestimulantes y fitofortifi-cantes con el objetivo de obtener productos hortí-colas más limpios o el análisis de nuevos sistemasde protección empleados en invernaderos y res-puesta de la planta a diversos modos de procederen el control climático, por citar algunos. Desde2008, la Fundación Finca Experimental UAL-ANE-COOP es Agente Andaluz del Conocimiento en sumodalidad de Centro de Innovación y Tecnología.

También es importante resaltar el trabajoque se hace desde la Cátedra Cajamar de Econo-mía y Agroalimentación, creada en 2009 y que es-tá jugando un papel decisivo en la proyección delos estudios de agronomía, y también en la for-mación y asesoramiento de técnicos. En el ámbi-to de la Cátedra, se ha celebrado por cuarto añoconsecutivo el Curso de Especialista en Horticul-tura protegida, con una fuerte presencia dealumnos internacionales procedentes de 23 paí-ses. La Cátedra también está desarrollando unaintensa actividad investigadora con la puesta enmarcha de varios proyectos de investigación en-focados a resolver problemas reales del sectoragroalimentario de Almería.

A lo largo de estos veinte años, la Universi-dad de Almería ha aportado al desarrollo del tejidoagroalimentario de esta provincia elementos degran valor, el principal de ellos, el capital humanoformado en sus aulas y laboratorios. Pero tambiénuna intensa actividad investigadora que ha confi-gurado a la UAL como una universidad innovadoracon una alta especialización en todas las áreas re-lacionadas con la agricultura. Su rector, Pedro Mo-lina, insiste en el irrenunciable compromiso queesta institución ha tenido siempre con el desarro-llo de la provincia, 50 años después de que se pu-siera en pie el primer invernadero.

colas. Investigaciones de este grupo ayudaron a laplantación de cultivos de sandías injertadas sobrehíbridos de calabaza, ofreciendo al mercado nue-vas posibilidades de consumo de esta fruta y per-mitiendo al agricultor producir sin problemas an-te patógenos como la fusariosis vascular que afec-ta a este cultivo. También se han aportado distin-tos métodos de manejo en planta de tomate

Page 20: Especial 50 aniversario Invernaderos

18 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Roquetas de Mar, el vecino mayor de ElEjido, La Mojonera o Vícar, es conoci-da a nivel internacional por su turis-mo y menos por su agricultura. Pare-ce que sus más de dos mil hectáreas

de invernadero quedan lejos de las extensionesde sus municipios hermanos. Sin embargo, mu-chos de los agricultores que trabajan fincas fueradel término municipal son de Roquetas y vivenen Roquetas. También sus familiares, los que co-menzaron a cultivar la tierra, fueron los prime-ros en poblar un municipio que en estos cincuen-ta años ha pasado de siete mil habitantes a los ca-si 100.000 actuales.

Hablar por tanto del Poniente no es forza-do cuando se comprueba que el trabajo se hacejuntos, entre los vecinos de todos los municipiosque forman la comarca. En Roquetas, su exten-sión hace difícil todos los cálculos. Las Marinas,

El Solanillo, El Parador, Los Cortijos de Marín...¿cuántos de los vecinos viven de la tierra? El cen-so cuenta con alrededor de mil quinientos profe-sionales. La superficie es también difícil de cal-cular. Muchas zonas que en el Plan General figu-ran como urbanas, son todavía tierra bajo plásti-co. Pasear o circular de un núcleo urbano a otroes descubrir que la agricultura es motor del mu-nicipio. Y las distancias entre barrios se acortancuando uno se aventura a cruzar de los aparta-mentos turísticos al campo invernado. El Ayunta-miento, consciente del atractivo de esta otra Ro-quetas, ha puesto en marcha un proyecto paraponer en valor toda la zona rural.

Por eso, más que los datos de superficie oproducción, es el amanecer en los distintos ba-rrios, las familias que salen con las primeras lu-ces hacia sus fincas o hacia las cooperativas y al-macenes, el reflejo de la importancia que el sec-tor tiene en la localidad. Las historias de los veci-nos de siempre, de sus familias, comienzansiempre con la agricultura. También es ejemplo

su carácter acogedor, de convivencia, forjado porla llegada de tantas personas que ven en Roque-tas un pueblo donde crecer, donde todo tipo deculturas son propias.

Roquetas puede presumir de que el pri-mer invernadero de Almería se ubicó en su em-blemática playa de La Romanilla. Su historia, tande la mano de la tierra, es la historia de un pueblotrabajador que no descansa en aprender. Tam-bién su escuela agraria, la EFA Campomar, es uncentro de formación clave para toda la comarca.Nació poco después de la agricultura intensiva,hace 40 años, con la finalidad de que los hijos deagricultores pudieran seguir formándose. Losprofesores acudían a las familias, a convencerlesde que una o dos semanas al mes, los más jóvenespudieran compaginar la ayuda a sus padres conel estudio. Y así, formación y trabajo componenuna sociedad que se vuelca con sus pueblos veci-nos y con los trabajadores que llegan de fuera, in-cluso de otros países, para encontrar en Roquetasel futuro que aquí es ya presente.

LA VOZ

Clave en el desarrollo agrícolaRoquetas

El municipio puede presumir de que el primer invernadero de la provincia se ubicó precisamente en su emblemática playa de La Romanilla

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

Page 21: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 22: Especial 50 aniversario Invernaderos

20 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Hablar de la importancia del inver-nadero en el municipio de La Mojo-nera es hablar del acontecimientomás importante de su historia. Enun municipio tan joven, enclavado

en el centro geográfico mismo del Poniente de Al-mería es algo innegable que el comienzo de laagricultura intensiva en invernadero supuso unauténtico punto de inflexión. El despertar de unnuevo sector económico supuso la llegada de po-blación y del establecimiento de las infraestruc-turas esenciales sobre las que se empezaría aconstruir el municipio que es hoy.

La Mojonera pasó de tener una agricultu-ra de subsistencia de secano con escasas vivien-das diseminadas a ser un núcleo de poblaciónque fue creciendo al abrigo del nuevo modo de vi-da. El municipio experimentó una implantaciónde un nuevo sistema agrario igual a la que expe-rimentaron los municipios vecinos pero en LaMojonera además supuso la posibilidad de cons-tituirse en un municipio independiente con

grandes perspectivas de crecimiento. Esto se ma-terializó de forma oficial con la segregación deFelix en 1984. El crecimiento de La Mojonera des-de el comienzo de la agricultura bajo plástico hasido enorme. Se pasó de unos cientos de vecinosa la ciudad de 10000 habitantes de hoy en día. Laagricultura bajo plástico supuso la llegada de po-bladores, la llegada de un modo de vida prósperoy también la llegada de una industria auxiliar quetambién ha tenido en La Mojonera una extraordi-nario arraigo. La ubicación geográfica en el cen-tro mismo de la comarca del Poniente ha supues-to un aliciente para la implantación de empresasjunto al fomento por parte de la administraciónlocal y de los promotores privados de zonas in-dustriales, que a su vez han creado un nuevo polode prosperidad.

El invernadero tipo parral que se constru-yó por primera vez en Almería fue una genialidea del ingeniero agrónomo Bernabé Aguilar Lu-que que fue el primero en usar un parral con unalámina de plástico en medio y otro tejido encima.Una idea que supuso la transformación más im-portante del siglo XX en Almería. Sobre esta ideaoriginal destaca el gran trabajo de los agriculto-

res, grandes protagonistas de este proceso, quehan mejorado este tipo de estructura mediante elmodo de ensayo y error que ha dado como frutoel diseño actual de invernadero que es el más ex-tendido, demostrando ser el más rentable.

Los agricultores desde el primer momen-to se adaptaron al nuevo modelo agrícola, opta-ron con valentía por emprender (en el sentido es-tricto de la palabra) y arriesgaron lo que tenían ylo que no por una apuesta que en aquel momentodebió parecer muy atrevida. Esa apertura de mi-ras hacia los cambios ha sido una constante enlos agricultores, que una y otra vez se han suma-do y han impulsado los importantísimos avancesque han hecho de la agricultura de Almería unreferente a nivel mundial.

Hablar de invernadero es hablar de LaMojonera. El municipio que conocemos hoy; mo-derno y próspero no sería como es si no fuera porla agricultura intensiva bajo plástico. En pocoslugares el invernadero ha tenido una trascenden-cia tan grande para el municipio. La Mojoneraque es hoy está fuertemente unida a un modo devida que ha traído, que trae y que deberá traerprosperidad a sus habitantes.

LA VOZ

La importancia del invernaderoLa Mojonera

Los invernaderos marcaron la razón de ser de este municipio, que se convirtió en lugar deconcentración de población y actividad económica

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

Page 23: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 24: Especial 50 aniversario Invernaderos

22 I 50 AÑOS DE INVERNADERO

Rompe récords. Níjar es uno de losmunicipios más extensos de España,el que cuenta con más monumentosdeclarados Bien de Interés Culturalen toda Andalucía y el más admirado

por su Parque Natural, que lo define. Pero es ade-más uno de los que presentan una mayor superfi-cie de cultivo. Y de hecho, es esta actividad la cul-pable de que pozos, cortijos y norias componganla memoria patrimonial del municipio y un con-junto histórico que, unido a su belleza natural, leconfiere un valor singular.

Con alrededor de 6.000 hectáreas y un protago-nismo más que especial del tomate, Níjar es unode los principales polos de producción europeosen este producto. Hoy día, hablar de tomate en elconcierto hortofrutícola europeo es imposiblesin mencionar en plano destacado al municipio

nijareño, que en las dos últimas décadas ha expe-rimentado un desarrollo agrícola prácticamentesin precedentes.

El tomate de Níjar, en una extensa gama de va-riedades, desde el tomate suelto hasta el ramo,pasando por el pera, los tomates asurcados tipoRaf o el cherry, se ha hecho un hueco importanteen el mercado europeo, hasta el punto de que essobradamente reconocido su sabor y su calidad.Un logro del que son directamente responsablesdiversos agentes, como el geográfico, la climato-logía y las características físicas de la tierra decultivo y el agua, pero sobre todo el buen hacer delos agricultores, generaciones de profesionalesdedicados a obtener el mejor resultados de susplantas de tomate.

Además, de la mano de Expo Levante, Níjar haconseguido situar en su término municipal lamás extensa y relevante feria hortofrutícola diri-gida al agricultor. En el año 2014, Expo Levantevolverá a abrir sus puertas en el Centro de Expo-

siciones y Congresos de Campohermoso, tras elabrumador éxito de su edición 2012. La Feria,bianual en cuanto a su periodicidad, ha sabidoenganchar al tejido productivo y a la industria au-xiliar almeriense, así como a las empresas de co-mercialización. En 2014, volverá Expo Levantecon nuevos retos y con el mismo objetivo, que noes otro que convertirse en la gran exposición delsector agrícola nijarense.

Níjar, referente de la agricultura ecológica bajoplástico a nivel nacional e internacional, con susmás de mil hectáreas dedicadas a esta forma decultivo, ha conseguido ser una de las zonas espa-ñolas que más productos de este tipo exporta, apaíses europeos principalmente. Níjar ha sabidomirar al futuro dando un paso atrás, volviendo ala producción más artesana y tradicional, paraofrecer la calidad que demandan los mercadosextranjeros y ha sabido dirigir sus avances tecno-lógicos hacia una agricultura ecológica que ya estodo un referente mundial.

LA VOZ

El tomate es protagonista absolutoNíjarCon alrededor de seis mil hectáreas, el municipio es reconocido en el mercado europeo por

sus variedades desde el tomate suelto hasta el ramo, el pera, asurcado o cherry

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

Page 25: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 26: Especial 50 aniversario Invernaderos

24 I 50 AÑOS DE INVERNADERO

Almería tiene, sin duda, un prestigiomundial como líder en la producciónde hortalizas. La Marca Almería es unreferente de calidad, innovación e in-vestigación en un sector muy compe-

titivo donde las exigencias cada vez son mayores, loque nos obliga a estar permanentemente en guar-dia para ir ganando mercados.

Para la ciudad de Almería la agriculturatambién es capital, no en vano somos el tercer mu-nicipio de la provincia en extensión agraria, concerca de 3.000 hectáreas de invernaderos, con alre-dedor de 1.400 explotaciones agrarias que emple-an directamente a unas 6.000 personas, a las quehay que añadir el empleo indirecto de la industriaauxiliar, cooperativas, empresas de plásticos, semi-lleros, etc…

Aquí se encuentran asentadas las principa-les cooperativas y empresas agrícolas, con un pro-ducto estrella, el tomate, consumido en medio

mundo. Somos la cuna del tomate Raf más auténti-co y con más ‘pedrigrí’, un lujo para los paladaresmás exigentes.

La agricultura es un factor dinamizador denuestra economía gracias a un sistema productivoy comercial que ha contribuido, sin duda, junto a lalarga tradición productora y comercializadora quetiene esta tierra, a situar a Almería como una de lasprincipales zonas exportadoras de frutas y hortali-zas. “Ello nos obliga a todos a hacer permanentesesfuerzos para mimar y proteger a un sector estra-tégico que está amortiguando el impacto de la cri-sis en nuestra provincia”, afirma el alcalde, Luis Ro-gelio Rodríguez-Comendador.

Desde el Ayuntamiento de Almería, comoinstitución más cercana a los ciudadanos, hacemostodos los esfuerzos que están en nuestra mano pa-ra cuidar la agricultura, siempre en permanentecontacto con el sector. Hemos elaborado un Plande Higiene Rural para garantizar la limpieza de laszonas productivas agrícolas y un adecuado trata-miento de los residuos agrícolas; hemos diseñadoun Plan de Mejora de Caminos Rurales para el ade-

cuado transporte de los productos agrarios, conmás de cien kilómetros mejorados, gestionamoslas notificaciones y reclamaciones de los agriculto-res, las licencias para construcción de invernade-ros, balsas, almacenes, etc…, y también hemospuesto en marcha un Plan de Señalización de laszonas rurales.

Además, acudimos a las principales feriasagrícolas para respaldar a nuestros agricultores y,en coordinación con las cooperativas, alhóndigas,almacenes y empresas auxiliares, hemos organiza-do ya dos Congresos de Agricultura y hemos lleva-do a cabo el I Plan de Consumo de Frutas y Hortali-zas para hacer ver a los más jóvenes la importanciaque tiene para el organismo el consumo de estasvariedades.

La agricultura es el motor socio-económicode la capital y las miles de familias que cada díaacuden al invernadero son las que han hecho posi-ble el llamado ‘milagro almeriense’. Su compromi-so es nuestro compromiso y desde el Ayuntamien-to continuaremos apoyando al sector que un día hi-zo posible que cambiara la historia de Almería.

LA VOZ

Referente de calidad e innovaciónAlmería

El sector agrícola en el municipio de Almería da trabajo directo a unas 6.000 personas yacoge a las principales cooperativas y empresas agrícolas

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

Page 27: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 28: Especial 50 aniversario Invernaderos

26 I ESPECIAL 50 AÑOS DE INVERNADERO

Un manto blanco, donde la luz del solse refleja como en ningún otro lugarde la tierra. Por lo menos así lo veíaPedro Duque desde el espacio. Perolo que no decía el astronauta es que,

si se levantara ese manto, si se retirara el plásticodel mar en tierra, El Ejido sería uno de los muni-cipios con más espacio verde. El asombro que despierta esta inmensidad in-

vernada es unánime entre los visitantes. Quizálos vecinos y los trabajadores que llegan de otromunicipios pierden la consciencia entre su labordiaria de la singularidad de lo que les rodea. Sinduda, una explotación de la tierra única, que ya seexporta a países de climas similares como Méxi-co o Colombia. Pero El Ejido y sus compañeras,Vícar, La Mojonera, Níjar, Roquetas.., son el refe-rente al otro lado del océano.

Los datos hablan aunque casi enfrían esta reali-dad. De las 24.000 hectáreas que comprende elmunicipio ejidense, 18.518 son de suelo rústico,con 14.292 de regadío. A explotaciones bajo plás-tico corresponden 12.905 hectáreas. En El Ejidohay 54.366 personas ocupadas de las que 23.977trabajan en los invernaderos, de las cuales 7.002son titulares de explotación. En resumen, un44.1% de la población ocupada de El Ejido trabajaen invernaderos. Al sector agrícola se dedican también más de

6.260 personas en los almacenes, lo que arrojaun saldo de 30.242 trabajadores y autónomos. Lamayor parte de las grandes empresas almerien-ses se concentran en la comarca de Poniente y,especialmente, en El Ejido, perteneciendo en sumayoría al sector de la producción y comerciali-zación de frutas y hortalizas. En total, de las 90“grandes” de la provincia, 24 son ejidenses, y deellas, 18 son del sector hortofrutícola. Anualmen-te, el agricultor de El Ejido recibe por sus produc-

tos -1.200.000 Tm- casi 612 millones de euros.Las Cooperativas de comercialización (9), socie-dades agrarias de transformación (24), y socieda-des mercantiles (31) transforman más productodel que produce el campo ejidense, ya que explo-taciones de términos municipales colindantesacuden a estos centros, siendo 2.121.060 las tone-ladas las que pasan por El Ejido. Este producto comercializado alcanzó un valor

de 1.275 millones. Al mercado nacional se trans-porta un 35 % de este tonelaje y el 65% se destinaa la exportación. Se calcula que para esta mer-cancía se utilizan 108.000 portes anuales desdeEl Ejido, en el que se emplean directamente 800personas por las 288 empresas censadas. Y si las cifras asombran, el día a día del munici-

pio fascina. Cada pieza del enorme engranaje esun nudo del inmeso tapiz blanco que lo cubre,que esconde debajo su intenso color verde. Cin-cuenta años después del primer invernadero, ElEjido es sin duda la referencia mundial.

R. ALZUGARAY

El sorprendente municipio verdeEl Ejido

Ya lo decía el astronauta Pedro Duque: desde el espacio se aprecian dos construccioneshumanas, la muralla China y el ‘mar de plástico’ de El Ejido

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

Page 29: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 30: Especial 50 aniversario Invernaderos

Berja es uno de los municipios ubicadosen la comarca del Poniente, situado alnorte de esta en el macizo montañosode Sierra de Gador. No difiere del restode municipios del Poniente, ya que su

motor económico es la agricultura intensiva ycuenta con una población de cerca de 25.000 habi-tantes. Pero antes de la agricultura intensiva bajoplástico, Berja era conocida por su minería. En elúltimo tercio del siglo XIX con la decadencia delsector minero, surgió una nueva fuente de riquezaque cambió la fisonomía de la vega virgitana, con la

llegada de los parrales de la uva de mesa -la famosauva del barco- que gracias a su resistencia, se expor-taba al extranjero, almacenada en barriles, desde elpuerto de Almería. Este fue el principal cultivo de laagricultura virgitana hasta los años ochenta del pa-sado siglo, cuando se abandonó para implantar losinvernaderos, que hoy en día son el primer pilareconómico del municipio.

En Berja también se producen hierbas aro-máticas como ajedrea, albahaca, apio aromático, ca-ñasanta, cebollino o cilantro.

_Cultivo de la tierraEl cultivo de la tierra ha sido la forma de vida deprácticamente toda la provincia. En el siglo pasadofueron muchas las comarcas que vivieron épocas debonanza económica gracias al parral, el olivo, los al-mendros o el cereal. Hoy día, las tierras del interiorse han reconvertido adaptándose a nuevas formasde cultivo, como la agricultura ecológica o cambian-do los frutos secos por las viñas. En otras zonas, lastierras han sido adquiridas o repobladas por la Jun-ta de Andalucía para dotar de vegetación a una pro-vincia que erróneamente se conoce como árida.

28 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

BERJA, de los parralesa la agricultura bajoplástico

Hasta los años 80, ytras la decadencia de laminería, la vega virgita-na se hizo famosa porsus parrales de uva demesa (uva del barco)

La agricultura intensiva también seha convertido en el principal motoreconómico del municipio de Dalías,tras la decadencia de la uva de Oha-nes, un cultivo que fue todo un ejem-

plo y que sirvió para paliar la crisis de la mine-ría. A día de hoy, los principales productos hor-tícolas de Dalías son el pimiento, el calabacín,la berenjena. Los tradicionales como los gui-santes y los tirabeques están teniendo ahora unmayor tirón, ya que requieren de una menor in-versión.

Dalías cuenta con unas 400 hectáreas decultivo bajo plástico. Estos cultivos normal-mente se adelantan a otras poblaciones de lacomarca, debido a la mayor altitud en la que seencuentra el municipio y a la consiguiente dife-rencia climática con el resto del Poniente Al-meriense. La siembra se suele avanzar a junio yla cosecha comienza a realizarse en septiem-

bre. Además, el municipio de Dalías tiene unascaracterísticas muy favorables para el desarro-llo de cultivo ecológico, al que ya se han adapta-do muchos agricultores del municipio. Así mis-mo se practica, como en el resto del Poniente,la lucha integrada.

El concejal de Agricultura de Dalías, Jor-ge Gutiérrez, no duda en decir que “la gran ma-yoría de las familias del municipio viven de laagricultura” y considera que “ahora más quenunca han vuelto a cultivar la tierra”.

El consistorio también trabaja en la me-jora de caminos rurales. Este año se van a asfal-tar nueve kilómetros, que se unen a los tres queya se arreglaron el pasado año. Además, se hapuesto en marcha un punto de recogida selecti-va de residuos agrícolas para mantener el cam-po de Dalías mucho más limpio, así como poderofrecer a los agricultores dalienses un serviciocercano, accesible y gratuito.

DALÍAS, una apuestapor lo ecológico y lalucha integrada

Page 31: Especial 50 aniversario Invernaderos

64 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

La historia de la agricultura de Adrase remonta a los cultivos de caña deazúcar, la remolacha y la patata. Si-tuado a pie de costa, el municipio deAdra posee 1.700 hectáreas de inver-

nadero. Es uno de los municipios de la provin-cia con mayor tradición en agricultura y es ac-tualmente su principal motor económico, juntocon el sector pesquero. La historia agrícola deAdra se remonta a los cultivos de caña de azú-car, la remolacha y la patata. En el presente, laagricultura bajo plástico se reparte por la Vegade la Habana, la zona de Guainos, el Toril, VentaNueva y las Albuferas.

El cultivo más tradicional en este muni-cipio es el pimiento -en sus variedades de lamu-yo, california, italiano-, la berenjena, el calaba-cín, el tomate y en primavera, el melón y la san-día. El concejal de Agricultura de Adra, Francis-co López recuerda que “el productor de Adra es

un agricultor innovador que ha implantado lalucha integrada, la lucha con depredadores na-turales”. Sin embargo, en los últimos tiemposhan tenido que desplazarse hasta otros munici-pios para poder ampliar sus explotacionesagrarias. “De ahí que estemos pidiendo que sepueda disponer de terreno en Adra para quenuestros productores puedan continuar culti-vando aquí”, explica López.

_Industria auxiliarAlrededor de la agricultura intensiva se ha des-arrollado este municipio la industria auxiliar,almacenes, cooperativas de suministro, de plás-ticos y de fitosanitarios, entre otras.

En los últimos diez años el consistoriode Adra ha arreglado más de 50 kilómetros decaminos rurales, facilitando así a los agriculto-res el acceso a sus explotaciones.

La agricultura y el sectorpesquero van de la mano enel municipio de ADRA

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 29

Page 32: Especial 50 aniversario Invernaderos

30 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

QMEDIO SIGLO DE INVERNADEROS RECONOCIMIENTOS

La agricultura intensiva se encuentra en unmomento dulce y está en el punto de mirade inversores y empresarios, según el con-sistorio. La agricultura es la columna ver-tebral de la economía de Vícar y el verda-

dero motor del crecimiento del pueblo. Un ochentapor ciento de la población vicaria vive directa o indi-rectamente de la agricultura y de las industrias auxi-liares creadas en torno a la producción de frutas yhortalizas. El concejal de Agricultura de Vícar, JoséRomera observa que “la agricultura del municipio seencuentra en un momento dulce y se ha situado en elpunto de mira de los planes de expansión de inverso-res y empresarios, que ven en nuestro campo impor-tantes posibilidades de negocio”.

Sin embargo, aún quedan cosas por hacer. Se-gún Romera “vamos a seguir trabajando codo con co-do con nuestros agricultores en la modernización ymejora de nuestra red de caminos agrícolas, siemprecon coste cero para el agricultor”. Igualmente estre-

cha va a continuar siendo la colaboración con la Jun-ta de Andalucía en la limpieza de ramblas y cauces.Otro de los principales caballos de batalla es la reco-gida de residuos vegetales para lo que se trabajarácon las organizaciones profesionales del campo y lasorganizaciones agrarias.

El Ayuntamiento actualmente está acondi-cionando y asfaltando, dentro de la segunda fase delPlan Encamina2 de la Consejería de Agricultura,Pesca y Desarrollo Rural, siete caminos: Puebla Nor-te, Lanjarón, Montenegro, El Médico Norte, La Balsa,Antonio Mora y Felix, para un total de 2,5 kilómetrosde longitud.

Además, el consistorio ha promocionado laimplantación de empresas comercializadoras y deindustria auxiliar, lo que ha traído hasta el municipioun buen número de empresas punteras del sector,generando riqueza y desarrollo para el pueblo, crean-do empleo y por tanto abriendo nuevas expectativasde futuro para numerosas familias vicarias.

El ochenta por cientode la población vicariavive de la agricultura

Page 33: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 34: Especial 50 aniversario Invernaderos

32 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Angels BarcelóDirectora de Hora 25 de la Cadena SER

La conocida periodista, directora y presen-tadora del programa líder de informaciónnocturna de la radio en España, Hora 25 enla Cadena SER, se ha convertido en los últi-mos años en una experta en diferentesasuntos de la realidad almeriense. Y es queAngels Barceló tiene orígenes en la provin-cia, uno de sus abuelos era de Berja.

El acercamiento de Angels Barceló ala agricultura de la provincia y al inverna-dero se produjo el 6 de junio de 2011 cuan-do el equipo de Hora 25 se desplazó hastaAlmería para realizar un programa espe-cial sobre la 'crisis del pepino' desatada enAlemania.

Se atacó gratuitamente a la agricul-tura española, y en concreto a la almerien-se, y el equipo capitaneado por Barcelóquiso contrastar las informaciones y darvoz al sector agrícola. En aquella ocasión

Barceló y su equipo pudieron conocer deprimera mano el complejo, tecnificado ymoderno universo que rodea al invernade-ro. Barceló recuerda que “para mí fue alu-cinante conocer en profundidad la agricul-tura almeriense y cómo funciona un inver-nadero. Es algo que si no vienes y no cono-ces, no eres consciente de cómo se trabajatécnica y científicamente”. Y añade la di-rectora de Hora 25 que “la gente cree queesto solamente consiste en plantar y reco-ger pero no es así. Hay un trabajo detrás eninvestigación muy interesante”.

Recientemente Angels Barceló havuelto a Almería con un programa especialde Hora 25, esta vez para analizar otro delos fenómenos que hacen a la provincia unlugar singular, para analizar su relacióncon el cine a raíz del rodaje de 'Exodus', lasuperproducción dirigida por Ridley Scott.

PUNTOS DE VISTA

“Fue alucinante conoceren profundidad el campoalmeriense”.

Lola Gómez Ferrón Gerente de Clisol Turismo Agrícola

¿Se puede convertir el invernadero en unobjeto de interés turístico? Esta preguntatiene una respuesta afirmativa gracias altrabajo de Lola Gómez Ferrón como geren-te de Clisol Turismo Agrícola, una empresaque nos ha enseñado que detrás de los cul-tivos bajo plástico se esconde un universosingular, enormemente atractivo paracualquier visitante que quiera conocer laprovincia de Almería lejos de los tópicos.

Gómez Ferrón defiende con orgulloy todas sus fuerzas la agricultura intensivade la provincia de Almería y con sus pro-yectos lleva a cabo importantes estrategiasde divulgación para acercar a todo tipo depúblico las bondades y secretos de los in-vernaderos. Gómez Ferrón opina que na-die se podía imaginar hace cincuenta añosque la agricultura supusiese “un desarrollotan radical para Almería en lo económico,

social y cultural con tanto futuro”, y añadeque “es un sector dinámico y una de lasagriculturas más redistributivas de la ri-queza en el mundo”.

Gómez Ferrón argumenta su tesis ysostiene que la agricultura almeriense “noes especulativa, se trabaja para vivir. La ha-cen pequeñas empresas y pequeños agri-cultores y gran parte de la industria auxi-liar la desarrollan pymes”. Y vuelve a insis-tir en la idea de futuro ya que en los inver-naderos almerienses se producen losproductos que constituyen la base de ladieta mediterránea tan beneficiosa para lasalud y de ahí “el enorme potencial denuestra agricultura”. Para Gómez Ferrónlos retos inmediatos de la agricultura pa-san por “optimizar el uso de los recursos yque medioambientalmente cada vez seamás sostenible”.

“Es una de las agriculturasmás redistributivas de lariqueza en el mundo”.

Page 35: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 36: Especial 50 aniversario Invernaderos

Ginés Morata

Biólogo

El primer contacto que el prestigioso cien-tífico almeriense Ginés Morata mantuvocon la agricultura fue cuando hizo la mili,en 1968, gracias a un compañero proce-dente de Dalías. Una anécdota sobre Al-mería que Morata, Premio Príncipe de As-turias de las Ciencias en 2007 y destacadoinvestigador en la biología del desarrollo,guarda con mucho cariño sobre su tierra.

Reconoce que no le gusta el cambioque han provocado los invernaderos en elpaisaje de Almería, pero admite que se tra-te de un razonable peaje en pos “del cam-bio tan radical que ha supuesto para la si-tuación económica de la provincia y suenorme rendimiento social”.

Recuerda Morata que Almería enlos años sesenta era una tierra muy pobreque solamente se conocía “por su relacióncon el esparto y la uva, nada más”, y que

gracias a la agricultura “ha experimentadoun giro muy beneficioso para la economíaprovincial”.

Afirma Morata que el campo alme-riense debe hacer frente a varios retos im-portantes como el cuidado de los acuíferosy los aspectos colaterales que tienen quever con el desarrollo de esta industria. “Hasido una bendición para Almería y los al-merienses y espero que pueda seguir asíporque me consta que nos están imitandoen otros muchos lugares”, señala el inves-tigador.

Ginés Morata reconoce sentirsemuy orgulloso cuando viaja por el mundoy en países como Reino Unido, Francia oItalia ve, por ejemplo, tomates de Almeríay que esa denominación de origen se inter-preta como un signo inequívoco de máxi-ma calidad.

PUNTOS DE VISTA

“Ha sido una bendiciónpara Almería y losalmerienses”.

Ana Ruiz

Empresaria agrícola y bloguera de cocina

Esta almeriense conocida por algunos desus blogs como 'Cocina con Ana', nació en losaños sesenta, una época de cambio para Al-mería en el paisaje, la cultura y la sociedad.Ana Ruiz describe este periodo como uncambio drástico ejemplificado en “la llegadadel cultivo en invernadero, que en aquellosaños se extendía por los secanos yermos ylos convertía en oasis de crecimiento y de fu-turo. Almería se transformaba, crecía, soña-ba y los que aquí vivíamos nos sentíamospartícipes y protagonistas de una transfor-mación muy importante, de un cambio his-tórico e insólito en España”.

Ruiz detalla este cambio de una for-ma muy elocuente: “De los pueblos de las Al-pujarras llegaron familias con sueños de fu-turo y la población aumentó. Los olivos y losalmendros desaparecieron, el paisaje colorocre se fue convirtiendo en blanco brillante,

y un océano de plástico cubrió la tierra yer-ma y la convirtió en oasis, y bajo el plásticocrecía un vergel tanto natural como econó-mico. Poco a poco, llegaron gentes venidasde otras provincias y países, y paulatina-mente, la sociedad también se transformó,nos acostumbramos a la convivencia conotras culturas, a la mezcla de razas y entretodos, el cultivo en invernadero ha sido y si-gue siendo el motor de nuestra economía”.

Como bloguera de cocina y empresa-ria agrícola Ruiz conoce a la perfección losentresijos del campo y afirma que “a nivel decocina, nuestros productos son espectacula-res, no hay otra palabra para definirlos, sucalidad no tiene precio y el consumo de hor-talizas debería fomentarse en los hogares.Os animo a consumir verdura, a cocinar sa-no y disfrutar de los sabores y colores de lanaturaleza”.

“El invernadero trajoun cambio histórico einsólito para España”.

34 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Page 37: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 38: Especial 50 aniversario Invernaderos

Carlos Pérez Siquier Fotógrafo

Probablemente no quede un solo rincón enla provincia de Almería que no haya sido re-tratado por el objetivo de la cámara de Car-los Pérez Siquier, Premio Nacional de Foto-grafía y artista clave en la vanguardia de es-te arte en España. El fenómeno de los inver-naderos y la evolución de la agricultura enAlmería también han protagonizado algu-nos de sus trabajos.

Se define como un hombre de ima-gen y “no de palabra”, pero su valoración so-bre el impacto visual del cultivo bajo plásti-co nos otorga una perspectiva diferente. Pé-rez Siquier reconoce que muy pronto los in-vernaderos llamaron su atención al explicarque “desde la Sierra de Gádor contemplabalos primeros invernaderos cuando El Ejidono se conocía como el mar de plástico quees hoy. Cuando el sol reverberaba en el plás-tico, ese reflejo que despedía se asemejaba a

un lago en medio del desierto porque enton-ces El Ejido era muy árido”.

Más tarde Pérez Siquier pudo pro-fundizar en estas sensaciones porque hizoun calendario para una empresa de plásti-co que se distribuyó a nivel nacional. Ahípudo jugar y experimentar con las angula-ciones de los invernaderos, las líneas y cur-vas de cada instalación, los contraluces y,en definitiva, lo que el plástico le sugería.Afirma que “el plástico tiene mucha perso-nalidad estética”.

Los invernaderos protagonizan elenésimo contraste visual que ofrece el pai-saje de la provincia de Almería, una visiónúnica en todo el mundo que ha llamado laatención de otros fotógrafos y muchos pin-tores que han puesto de relieve la plastici-dad, nunca mejor dicho, de este tipo decultivos.

PUNTOS DE VISTA

“El plástico tienemucha personalidadestética”.

Paquillo Fernández Atleta y empresario

El varias veces campeón del mundo, de Eu-ropa y subcampeón olímpico de los 20 kmmarcha está vinculado desde hace muchosaños a Almería. Paquillo Fernández es deGuadix pero en la actualidad -está retira-do de la alta competición- y por sus nego-cios relacionados con el deporte, gestionala cadena de tiendas Run 04 especializadaen running, vive a medio camino entre suciudad natal y Almería.

Paquillo conoce muy bien la pro-vincia y la importancia que la agriculturaha tenido en su prosperidad. Y qué decirdel papel que los productos del campo al-meriense tienen en la dieta de cualquierdeportista, son imprescindibles para op-timizar el rendimiento físico al más altonivel y también indispensables en unaalimentación equilibrada. Por todo esto

afirma con rotundidad que los inverna-deros han contribuido “a la evolucióneconómica y social de toda la provincia”,y añade que “la calidad de sus hortalizases conocida en todo el mundo y sinónimode máxima excelencia. Hay que seguirdando a conocer las virtudes de una bue-na alimentación”.

Paquillo Fernández ha viajado portodo el mundo para participar en lascompeticiones que le han encumbradocomo uno de los mejores corredores delos 20 km marcha de los últimos años.Cuenta que cuando estaba en el extranje-ro le gustaba preguntar por la proceden-cia de las hortalizas que consumía y, se-gún relata el campeón, “muchas de esasveces me decían que venían de España,de Almería o de El Ejido”.

“La calidad de las hortalizas se conoceen todo el mundo”.

36 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Page 39: Especial 50 aniversario Invernaderos

Agricultores de Roquetascontruyendo un inverna-dero en las primeras eta-pas de la historia de laagricultura moderna enAlmería.

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 37

supo que se había desencadenado un milagro

Nadie Desde el espacio llaman la atención los invernaderos de Almería;

esa zona blanca, con una superficie de 100.000 campos de fútbol. En1963 no se tuvo conciencia de que comenzaba una nueva etapa en lahistoria de Almería. Una auténtica revolución económica y social

Andrés Sánchez Picón C AT E D R Á T I C O D E H I S T O R I A E C O N Ó M I C A D E L A U A L

Page 40: Especial 50 aniversario Invernaderos

38 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Esa inmensa llanura estéril. Sobreuna cabalgadura exhausta, CharlesDidier se arrastraba en aquel incle-mente estío de 1836, acompañadopor un guía y dos carabineros, a tra-

vés de ese "campo de fuego" que aparecía en losmapas bautizado como Campo de Dalías. El pe-riodista, literato y diplomático suizo recorríaeste inhóspito rincón de la Península atraído,como otros muchos, por el fulgor del plomoarrancado a gran escala desde hacia más de unadécada de las entrañas de la sierra de Gádor. Endirección a la capital de la nueva provincia deAlmería, algunas chatas chimeneas de las rús-ticas fundiciones aparecían de lejos en lejos "yel humo negro que se escapa de ellas ensucia elazul brillante del cielo" -anotaría el viajero ensu cuaderno.

La impresión que le producía esa inmen-sa llanura estéril, quemada por un verdaderosol de los trópicos, era tan deprimente que lafrescura de las vegas de Dalías y Berja se habíaevaporado con rapidez. Pocas horas antes, el jo-ven suizo, de apenas 28 años, había quedadodeslumbrado por el desenfado de unas mujerescampesinas que, ataviadas con refajo a media

pierna, le habían ofrecido higos y uvas. Peroahora, la bajada hasta el Campo le estaba pare-ciendo un descenso a los infiernos. Tras recu-perar las fuerzas en la única venta del Campo,los cuatro hombres y sus monturas reanudarí-an la marcha. Cerca de Roquetas la proximidaddel mar supuso una breve tregua en el ardorosorecorrido; pero pronto enfilarían el salvaje sen-dero del Cañarete ("un sitio horroroso, terrible;unos peñones desnudos, descarnados...") paraganar, por fin, la ciudad de Almería cuando yacaía la noche. Poco antes habían podido disfru-tar de una espléndida vista de la bahía.

Eran muy pocos los viajeros de aqueltiempo que se salían de las rutas más trilladaspara volverse hacia el rincón suroriental de lapenínsula. Los que se atrevieron nos han dejadoparecidas sensaciones a las del viajero suizo.Así fue el caso del británico Samuel Edward Co-ock, quien en 1830 cruzó, camino de Adra, esameseta baldía que era el Campo de Dalías. O so-bre todo debo mencionar el testimonio de Ri-chard Ford en 1833; el vástago de una familiaacomodada de la gentry inglesa que, alzado so-bre un brioso corcel entre las recuas de mulasque travesaban el Campo, en el constante tra-

siego del mineral a los boliches, pudo adivinarque estas "tristes llanuras arenosas del Campode Dalías, podrían irrigarse fácilmente".

Estos prototuristas románticos, respon-sables de la literatura de viajes que configuraríapoderosamente la imagen pintoresca de Espa-ña, extraerían de su recorrido almeriense argu-mentos con los que apuntalar esa visión de unpaís prisionero del oscurantismo y la tradición.

Si viniera un marciano Pedro Duque ul-tima sus preparativos para el regreso desde laISS (Estación Espacial Internacional) el 27 deoctubre de 2003. Han pasado 170 años desdeque Didier, Ford y Coock recorrieran un incle-mente Campo de Dalías. Antes de iniciar el re-greso el astronauta español se aísla duranteunos minutos en el módulo para mirar de nue-vo por la ventana la Tierra, en una sucesión ver-tiginosa de auroras y crepúsculos. Acaba de verlos incendios que están devastando California;pero espera un rato hasta que uno de los girosde la Estación Espacial le permiten ver los in-vernaderos de Almería. Tras su aterrizaje enKazajistán el viajero del espacio respondería lomismo en cuantas ocasiones le preguntaronpor las obras humanas visibles desde allí arri-

Page 41: Especial 50 aniversario Invernaderos

Roquetas de Mar, a principio de los se-senta, ya con el influjo de los nuevosasentamientos del INC .

Agricultor en un invernaderode los años setenta.

Los viajeros como Sa-muel Edward Coock oRichard Ford recorrie-ron el campo de Dalíasy son los responsablesde la imagen pintorescade España

Pedro Duque: “la mura-lla China no se ve perollama la atención la zo-na de invernaderos deAlmería; esa zona blan-ca de 100.000 campos defútbol

“50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 39

Page 42: Especial 50 aniversario Invernaderos

ba: "la Muralla China no se ve, se ven las pirámi-des si te fijas mucho porque están en el desier-to. Pero lo que más llama la atención es la zonade invernaderos de Almería; esa zona blanca,con una superficie de 100.000 campos de fút-bol, es lo más llamativo. Si viniera un marciano,le llamaría la atención".

_Nadie cortó la cintaUna transformación territorial tan rotunda hasido el escenario de una revolución económicaespectacular. Se trata de uno de los grandes éxi-tos en la historia económica española del sigloXX. Mi amigo David Uclés ha aportado recien-temente un fino análisis de los datos funda-mentales de lo que con frecuencia ha sido califi-cado como un verdadero milagro económico.

Por mi parte solo quiero llamar la aten-ción sobre los motivos de la efemérides queconmemoramos: los 50 años del primer inver-nadero. La memoria colectiva suele necesitarde hitos singulares en los que apoyarse. Cifrasredondas en torno a las que congregarnos parala rememoración y hacer balance. La construc-ción de un relato coherente de lo que ha pasadoen la provincia de Almería en el último mediosiglo busca sostenerse en las muletas de la con-memoración; pero, sin embargo, y sin ánimo deadoptar el papel de aguafiestas, me parece queen este caso no es tan sencillo.

Las concentraciones industriales surgi-das en torno a las factorías de automóviles le-vantadas por General Motors en Zaragoza y por

Ford Motors en Valencia, sí tienen una indiscu-tible partida de bautismo: 1982 y 1976, respecti-vamente. En sendas jornadas de esos años losdirectivos de las dos multinacionales recibie-ron en las flamantes instalaciones al rey de Es-paña para el acto de inauguración oficial.

Sin embargo, en el caso del modelo dedesarrollo agrícola almeriense ¿cuál es el añocero? Hoy celebramos el medio siglo del primerinvernadero; pero ¿se tuvo conciencia en aque-llos primeros ensayos de estar inaugurandouna nueva etapa en el desarrollo de la provin-cia? ¿Por qué no situamos nuestro minuto unoen las primeras actuaciones del Instituto Nacio-nal de Colonización hacia 1943? ¿Y por qué noen aquellas inversiones privadas para electrifi-car y abrir los primeros pozos en los años 1920?¿Y por qué no en los balbuceos de la primeracolonización agraria del Campo de Dalías, allá afinales del XIX, cuando las plantaciones de pa-rras, ligadas a nuestra primera agricultura co-mercial, comienzan a extenderse? Se me ocu-rren hasta una docena de sucesos que podríandisputarse el galardón de ser identificados co-mo el momento fundacional del modelo de des-arrollo almeriense.

La historia económica y social nos diceque, por lo general, las grandes transformacio-nes vienen de la mano de pequeños cambiosacumulativos: la inercia histórica es más pode-rosa que los grandes eventos, aunque la evolu-ción (la histórica y la biológica) pueda encontra-se interrumpida (pautada) por cataclismos oconvulsiones. Así, nuestro modelo de desarro-

40 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

¿Se tuvo conciencia enaquellos primeros ensa-yos de estar inauguran-do una nueva etapa enel desarrollo de la pro-vincia?

“Las grandes transfor-maciones vienen de lamano de pequeños cam-bios acumulativos: lainercia histórica es máspoderosa que los gran-des eventos

Los enarenados fueron el primer pasopara sacarle partido a una llanura hostilque nuca había regalado nada.

Page 43: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 44: Especial 50 aniversario Invernaderos

llo tiene hondas raíces. Desde la tradición de uncampesinado de la montaña mediterránea(aquel que estudiara en su magnífico libroChristian Mignon) que en los años 60 bajó de lamontaña a colonizar el Campo y en el que la ex-plotación familiar ha sido la unidad productivadominante. Desde los precedentes de las dife-rentes agriculturas comerciales que han jalona-do su territorio en el último medio milenio.Desde la acumulación de destrezas asociadas aluso del regadío y a la pronta explotación de losrecursos acuíferos del subsuelo. Desde la fun-dación de las primeras empresas comercializa-doras, ya fueran lonjas, alhóndigas o cooperati-vas. Etcétera, etcétera. Un éxito económico, entérminos de producción y empleo, sostenido enuna multitud de iniciativas que, interconecta-

das, han generado un proceso de desarrollo sin-gular. Y es que a diferencia del crecimiento in-ducido por las factorías automovilísticas de Za-ragoza y Valencia, en el que las decisiones secentralizan en el staff directivo de dos compa-ñías multinacionales, el modelo de desarrollode Almería es un modelo endógeno, no impor-tado, en el que un conjunto de factores comple-jos han permitido la aclimatación de un racimode innovaciones en un medio social e institu-cional fértil. Por eso es más resistente a la crisisque otros sectores (actúa con un elevado gradode resiliencia, diríamos en términos ecológi-cos). Por eso, también, no resulta tan evidentelocalizar sus hitos conmemorativos, y por eso,además, no resulta un modelo de desarrollo fá-cil de exportar.

El invernadero ha experimentado unproceso de modernización sin paran-gón en el tejido económico almeriense.

42 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

El modelo de desarrollode Almeróa, es endóge-no. Un conjunto de fac-tores complejos han per-mitido la aclimataciónde un racimo de innova-ciones en un medio so-cial e institucional fértil

Page 45: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 46: Especial 50 aniversario Invernaderos

...de la arenaEl milagro

‘El milagro de la arena’ es un artículo del gran periodista Tico Medina, que refleja con sugenuina maestría sensaciones y personajes de la agricultura almeriense de los sesenta. Su

capacidad para describir la fibra humana y la impronta del paisaje resulta imprescindible

Tico Medina P E R I O D I S TA

ilustración recogida en el artículo sobre losenarenados que se incluye en la publica-ción ‘Almería al sol’ de Tico Medina.

44 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Page 47: Especial 50 aniversario Invernaderos

Hace ya algunos años, cuando aúncabalgaba sobre Almería, sobre sucaliente piel, el caballo y el fantas-ma del hambre y la desolación, vi-no de La Rábida (pequeño pueblo

minero de la costa granadina, casas chatas, are-nas negras) un hombre agricultor, dispuesto aplantar su árbol entre las piedras y los lagartos.

No se conoce su nombre, pero bien es ver-dad que dentro de muy poco tiempo habrá nece-sidad de conocerlo, porque aquel labrador, quevenía huido de sus tierras kilómetros más allá,hacia Motril), descubriría para los almeriensesalgo más importante que un pozo de petróleo, al-go más definitivo que una rica veta de oro: el pande los pobres.

Vino el hombres desde el pueblo dondehabía nacido porque las tierras habían subido deprecio en su meridiano. Trajo con él su cama, susartén y sus hijos. Compró una casita frente almar, por cuatro perras gordas, tendió un colchónde maíz seco sobre la colchoneta de matrimonioy educó a sus hijos en en caliente sol de estas cos-tas. Luego aró la tierra, que no daba más que pie-dras y alacranes; tendió en lo alto de la piel remo-vida una fresca capa de estiércol humano, ani-mal, y traio en su triste borriquillo desde la playacercana, arena limpia todavía con finas caracolesV caballitos. Las gentes que vivían iunto a él en elpáramo siguieron el chorreo largo del agua quederrabaman los serones de pleita verde del borri-co y sonrieron con incrédula tranquilidad.

No podía aquel labriego de otra latituddescubrir en su tierra, esquilmada, en su propiatierra, tísica y desierta, el fruto que ellos anda-ban buscando de padres a hijos desde tiempo in-memorial.

La arena del mar se tendió sobre el estiér-col la tierra removida. Cambió el paisaje. Día trasdía el hombre limpiaba grano a grano su parcela.La mimó con cariño paternal. Al anochecer sesentaba a la puerta de su casita y escuchaba «elcrecer de la planta baJo sus pies».

Había sembrado tomates, melones y uvas.Sus vecinos, como él, esperaban también a lapuerta de sus casas, sentados en las sillas deanea, bajo el parral muerto, con el sombrero depaia hasta los ojos.—El de La Rábida está esperando que nazca lahortaliza, y no es tiempo todavía. Pero la bendi-ción de Dios cayó sobre la pequeña parcela exqui-sita. Y, en su consecuencia, sobre la triste tierratoda de Almería. Porque para enero, cuando losfríos soplaban en la llanura, cuando el Levante yel Poniente se encrespan y traen un blanco fríoen el viento marinero y serrano, cuando hay quematar el cerdo en el zaguán y encender con leñala chimenea de la cocina, el hombre de La Rábida,desnudo de medio cuerpo arriba, rodeado de sushijos, sin sombrero, con los ojos llenos de lágri-mas, recogía los más hermosos y estallantes to-mates, los más gordos y dulces melones y veíacrecer lentamente, espléndidamente, el verdemilagro de su primer parralillo.

La voz corrió como el relámpago de uno aotro sitio de la estepa. El milagro retumbó en lomás alto de la sierra como un trueno, y bajó des-bocado hasta las últimas casas del cabo de Gata.Las gentes más diversas fueron casi en peregri-nación a este trozo redimido de la tierra de Al-mería. Besaron, imagino, las manos del labra-

dor, acariciaron a sus hijos y fueron a nadar unrato en el mar, descubriendo en las arenas lle-nas de estrellitas doradas el rico venero delagua, que tanto necesitaban. Esa es la historiadel hombre de La Rábida.

Desde Agua.dulce hasta los campos de Da-lias, pasando por Roquetas de Mar, hoy se antici-pa va la primavera en Almería todos los años.

Las tierras han subido de costo. Lo queantes iba ganando poco a poco, por una miseria,la charca dramática de las salinas, vale hoy unafortuna, peseta sobre peseta. Y miren por dóndeel hombre debe agradecer a la hormiga el descu-brimiento bendito. También la leyenda se re-monta a primeros de siglo (hay contratos de ena-renado fechados en A1- buñol hace más de cin-cuenta años), cunr.uu un labrador se tumbó a es-perar la lluvia a la vera de su huerto, reseco, desandías. «Estaba yo descansando de cara a la tie-rra, cuando vi que las hormigas hacían su aguje-ro iunto a una de mis plantas. Hurgaron en elsuelo y arrojaron al hacer su galería, como ellashacen, la tierra hacia atrás. Era un equipo muylaborioso. La tierra que sacaban estaba cerca, amuy pocos metros. A veces la marea llegaba has-ta las primeras calabazas de mi huerto. Y descu-brí que la planta donde caía la arena que sacabanlas hormigas crecía más que las otras, y mientrasunas me daban una triste cosecha, ésta dejabahacer un fruto espléndido y dulcísimo... Lo pen-sé bien. Acarreé algunas cargas de arena de pla-ya a mi pedazo, v el milagro se consumó muypronto. Aquel año tuve la más guapa cosecha delpartido iudicial.

Ante los ojos del periodista desfila ahoramismo la pradera de Roquetas. Un nuevo pueblose ha levantado donde antes solo existía la desola-ción. En el viejo nido de escorpiones hay ahoracasas blancas, fuentes rumorosas; en los gabine-tes se descubren radios de dos ondas, y en los co-rrales, junto a la yunta de mulos, está la motoci-cleta del labrador.—Con limoneros que solo tienen cuatro años devida sacamos cincuenta kilogramos de cosecha.Lo que antes se necesitaba en ocho por lo menos,—Esta tierra, señor, solo criaba «saladillos», unasplantas pobres, que no servían ni peura las ca-bras. Esto eran también tierras palúdicas, que yase han salvado, gracias a Dios. Trabajaban unosmuchachos, bajo el sol, entre los cañaverales.—Primero, el «labreo». Se ara. Se hace im surcoprofundo con el arado de vertedera, de cerca decuarenta centímetros. Después se limpia de pie-dras totalmente. Se planifica. Hay que dejarlo to-do como la palma de la mano. Cuatro centíme-tros, luego, de abono orgánico. Diez centímetros,después, de arena de playa, si lo que se ha de sem-brar es hortaliza, y veinte si es para plantío. Seplanta en octubre. Se recoge la primera cosechaen enero. La habichuela se siembra en enero y serecoge a mediados de marzo.—Yo he vendido abichuelas a treinta y cinco pese-tas el kilogramo con frío y calefacción en las ca-sas. Se las llevan rápidamente a Francia y a Gine-bra. Las enviamos por camiones a Perpiñán, y deallí irradia a media Europa. La arena absorbe elcalor del día y lo mantiene toda la noche. Impidela evaporación del terreno. No hace costra a lapiel de la tierra. Lava toda la sal del páramo. Endos años lo deja completamente limpio.—Ya nos anticipamos en un mes a nuestro propio

“La voz corrió como elrelámpago de uno a otrositio de la estepa. El mi-lagro retumbó en lo másalto de la sierra comoun trueno, y bajó desbo-cado hasta las últimascasas del cabo de Gata.”

“Un nuevo pueblo se halevantado donde antessolo existía la desola-ción. En el viejo nido deescorpiones hay ahoracasas blancas, fuentesrumorosas; en los gabi-netes se descubren radiosde dos ondas, y en los co-rrales, junto a la yuntade mulos, está la motoci-cleta del labrador.”

“Vino el hombres desdeel pueblo donde habíanacido porque las tie-rras habían subido deprecio en su meridiano.Trajo con él su cama, susartén y sus hijos.”

...”La arena del mar setendió sobre el estiércolla tierra removida.Cambió el paisaje. Díatras día el hombre lim-piaba grano a grano suparcela. La mimó concariño paternal.”

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 45

Page 48: Especial 50 aniversario Invernaderos

terreno. Y, desde luego, en tres o cuatroa las-más buenas cosechas del norte. Continúanroncando los camiones de arena. Zumban losmotores de los pozos de agua. Ya se han redimidomás de trescienta hectáreas «de saíerío». Avm sepueden arreglar otras mil quinientas.—Aquí no es difícil comer pepino el día de la Vir-gen de los Dolores. Roquetas de Mar tiene dos es-pléndidas cafeterías, un gran bar, un pueblo nue-vo. La gente vive bien y aprende a sonreír. «Losbancales parecen jardines japoneses». Cin-cuenta o sesenta camiones diarios, en la tempo-rada, salen para distintos puntos de la geografíaeuropea cargados de hortalizas. Esta tierra hacrecido en población. De dos mil habitanteshan subido a diez mil, como poco. Tres aldeasnuevas donde antes vivían las lagartijas.—De no tener nada hemos subido en pocotiempo, en muy pocos años, a poner en juegomás de cincuenta millones de pesetas anuales.En la venta de Pepe Negocios unas mujeres tra-bajan en la uva. El vientecillo menea el talle del-gado de las cañas de maíz, que protegen el ban-cal. Los hombres, que doblan su espina dorsalsobre la tierra con la pala y el rastrillo en la ma-no, llevan reloj de pulsera.—Un camión de arena, con unos tres metros

cúbicos, vale solo el transporte. La arena es detodos. Y el acarreo solo cuesta unos treinta du-ros por camión. El procedimiento de labrantíatambién es hermoso. El propietario de la tierratrabaja al tercio. De tres partes, una es para elarrendatario. Los gastos, todos del amo. La are-na puede vivir fresca, impresionante, pura, sinperder ni una sola de sus propiedades, durantemás de diez años..., aunque es convenientecambiarla parcialmente cada dos o tres prima-veras. El coche se pone en marcha de nuevo.Unos niños juegan en la plaza mayor del Para-dor de la Asunción. El cine tiene la fina arqui-tectura de un plano de Miguel Fisac. Cosenunas mujeres a la puerta de sus casas. El bar tie-ne una hermosa nevera eléctrica española, conzumos frescos de naranjas y limones de Alme-ría. Y esa enorme calabaza, que mantiene sucordon umbilical públicamente hundido en laarena del mar, estando tan lejos como está elrompiente de las olas, me trae el eco románticodel cuento de la Cenicienta. Porque tambiénellos han tocado con la varita mágica de su tra-bajo la dura corteza de este fruto, inmenso decarne anaranjada, y han sabido convertirla enla carroza dorada de un delicioso y espléndidocuento de hadas...

Portada del libro que recopila losartículos de Tico Medina sobreAlmería

Tico Medina en el puerto pes-quero de Almería, junto a Enri-que Verdugo, el fotógrafo de ‘Al-mería al sol’. Esta foto ilustra lacontraportada de esta entraña-ble selección de artículos.

El factor humano es esencial enel excelenta artículo de Tico Medina.

46 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Page 49: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 50: Especial 50 aniversario Invernaderos

48 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Ese primitivo pedregalde Dalías, ese Desiertodel Sinaí como lo des-cribió Brenan, empezó arepartirse por hetáreasentre familias como enla conquista del Oeste

El boca a boca comenzóa correr por el campo,por los poblados de co-lonización y la parcelade Paco el Piloto se con-virtió en lugar de pere-grinación

Todo ese cráter de polietileno que se vedesde el espacio, todo esa bruma deplásticos de los Campos de Dalías y deNíjar que ha dado el resuello a esta tierrade menestrales, todo ese imperio de la

hortaliza que ha hecho medio ricos a los oriundosde esta provincia, toda esa nomenclatura se debe alfogonazo de ingenio de un hombre (como Pasteur yla penicilina), de un ingeniero cordobés que se leocurrió cubrir con plástico un pequeño huerto demedio kilómetro cuadrado hace ahora justo mediosiglo de eso, 1963, el año que asesinaron a Kennedy.Bernabé Aguilar Luque fue ese técnico de Puen-

te Genil que llegó a Almería en 1956 a trabajar conel ingeniero jefe Leandro Pérez de los Cobos y conJuan Cuadrado Martínez, en la delegación delInstituto Nacional de Colonización.Un Decreto de 1941, en plena miseria autárqui-

ca, había declarado de Interés Nacional la zonadel Campo de Dalías, Níjar, El Saltador y Tíjola ya él se le encargó la explotación de esas zonas paradesarrollar nuevas tierras de promisión para loscolonos. Años antes, el Instituto había empezadoa actuar en la zona de Aguadulce, con la contruc-ción del primer pozo junto a la Venta Vitorino ycon la compra de fincas como la de Molina de So-ria. A partir de esa fecha se inició un proceso decolonización que duró varios años.Ese primitivo pedregal de Dalías, ese Desierto

del Sinaí, como lo describió Brenan, empezó a re-partirse por hectáreas entre familias de alpuja-rreños, como si de la conquista del Oeste ameri-cano se tratara. Fue entonces cuando se extendióel bendito enarenado, una técnica de cultivo tí-pica del Sureste que retrasaba la evaporación ymultiplicaba la productividad de la planta. Tuvomucho que ver entonces en este desarrollo el tra-bajo del agricultor Juan Sánchez Romera. Fue

una mañana de finales del verano cuando el in-geniero Bernabé y el perito José Lillo se levanta-ron con ganas de cambiar el mundo. Se decidie-ron, mientras desayunaban fuerte, a experimen-tar con lo que habían leído en una publicacióntécnica, un modelo de manta para cultivos quehabían puesto en práctica tomateros canarios.Se fueron a hablar con Paco Fuentes, el de la fincaPiloto, en la barriada roquetera de San Francisco,y éste, amigo también, como Colón, de aventurasindianas, se puso a hacer, con la supervisión deBernabé, una estructura prometeica de cañas,alambres y plásticos, que se vino abajo con el vien-to a las primeras de cambio. Aquel ‘invento’ noiba a ser un camino de rosas, pero se había plan-tado la semilla, el germen de toda una revoluciónindustrial con sello almeriense.El modelo definitivo de abrigo aplicado por el

Instituto Nacional de Colonización fue el del tipoparral , que aprovechaba la tipología del cultivode la uva de mesa con una altura suficiente paracultivar hortalizas con poco más de dos metros.Se conseguía con ello una mayor temperatura

y triplicar la producción con respecto al cultivoal aire libre. Se invirtieron 35.000 pesetas en eseprimer invernadero, santo y seña de lo que vinodespués, y las primeras cosechas de tomates y ju-días aportaron unas 60.000 pesetas de la épocaen la alhóndiga de Rogelio Vargas.A partir de entonces, el boca a boca empezó a

correr por el Campo de Dalías, por los pobladosde colonización, por las ventas donde los agricul-tores bebían vino. Se desató una auténtica fiebrecodiciosa tras saberse los rentos que había obte-nido El Pilotocon su abrigo de plástico. La parcelade Paco se convirtió, sin exagerar, en lugar de pe-regrinación de campesinos de la zona para com-probar las ventajas del plástico. Los agricultores

Un fogonazo cambió la historia dela provincia

IngenioUna mañana de verano se levantó el ingeniero Bernabécon ganas de cambiar el mundo. Mientras desayunaba

contó sus planes a Paco y se puso en marcha el Milagro

Manuel León González P E R I O D I S TA

Page 51: Especial 50 aniversario Invernaderos

Inauguración de la Alhóndigade El Parador, en Roquetas, en1960, una de las primeras.

comenzaron a solicitar ayudas para la construc-ción de estructuras a través del Instituto o de laincipiente Caja Rural, con intereses entonces al10%, cuando los empleados llevaban los contratosdel crédito en las aguaderas. El enarenado, el plástico, unidos al minifundio

familiar creado con la colonización convirtieronel desierto en un vergel. Hasta entonces, Almeríacumplía con el cliché de la pobreza endémica re-tratada por Goytisolo, Las Hurdes andaluzas: unacapital inmovilista, ajena ya a la prosperidad dela uva y la minería, rodeada de enormes erialesen los que la falta de agua e industria condenabaa la población a emigrar a Suiza, a Alemania o alcinturón industrial de Barcelona. Era Almería laúltima provincia española en renta per cápita,con tasas de analfabetismo del 15%.El éxito de los invernaderos trajo desde los 70

nuevos inmigrantes que se endeudadon hasta lascejas para adquirir tierras o trabajaron como asa-lariados. El plástico se extendió has las 28.000hectáreas actuales en un proceso de efervescen-cias sin precedentes, con la incorporación al Mer-cado Común, hasta acuñar términos repetidosen los telediarios de la transición como ‘milagroalmeriense’ o ‘la huerta de Europa’.El Ejido, Roquetas, Adra, Vícar, La Mojonera,

Níjar, La Vega de Almería, Cuevas, Pulpí se hanconvertido hoy en la mayor ‘fábrica de hortalizas’de Europa con una producción que supera lostres millones de toneladas y los 2.300 millonesde euros facturado, el 70% en mercados extran-jeros y con manos recolectoras procedentes de150 nacionalidades diferentes. Si Brenan levan-tara la cabeza, si Pedro Antonio de Alarcón re-sucitara, si Goytisolo se diera otra vuelta por aquíno darían crédito. Solo en 50 años, Almería hacambiado más su faz que en veinte siglos.

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 49

Cosecha dehabichuelasen La Reser-va de Roque-tas en 1963,el año que seinició el des-pegue delplástico.

Construcción de casasdel Instituto Nacionalde Colonización, el ger-men de las nuevas fa-milias agricultoras.

Page 52: Especial 50 aniversario Invernaderos

bajo un manto blancoMedio siglo

Numerosos cambios han afectado a Almería durante estos cin-cuenta años, a través de revoluciones de carácter territorial,

económico y social

Muchos han sido los cambios acon-tecidos en el medio siglo que hatranscurrido desde aquel primerinvernadero casi mitológico quese construyó en la provincia de Al-

mería. Incluso el nacimiento del que esto escribe.El tiempo tiene la facultad de atragantarse en algu-nos momentos concretos de aburrimiento o enfer-medad, y luego transcurir a la velocidad de la luz,resbalándose por entre los dedos y dando al trastecon todos nuestros esfuerzos por pararlo. En 50

años y en apenas unos pocos kilómetros de llanuralitoral, han ocurrido transformaciones de alcanceplanetario (hemos señalado a los astronautas dón-de se encuentra la despensa de Europa), han naci-do dos generaciones nuevas, se han multiplicadolos idiomas, colores y sabores de la gente, se ha re-vertido localmente el cambio climático, se ha plan-tado un vergel donde antes estaba el desierto de Si-naí, puntos suspensivos.

Muchos puntos suspensivos, pues la Histo-ria se escribe a base de sumar pequeñas historias

50 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

individuales, las de los miles de personas que hancompartido un tiempo y un espacio. Y en este tiem-po de medio siglo, y en este espacio al sureste de Es-paña, han confluido multitud de pequeñas histo-rias: las de los ingenieros del Instituto Nacional deColonización, la de los primeros colonos y sus fa-milias, las de los que vinieron de todo el mundo alabrarse un futuro bajo el sol de nuestros inverna-deros, las de los miles de técnicos, comerciantes,profesionales, funcionarios y hasta la de los políti-cos que han participado en el desarrollo de esta

David Uclés E C O N O M I S TA

Page 53: Especial 50 aniversario Invernaderos

“... la Historia se escribea base de sumar peque-ñas historias individua-les, las de los miles depersonas que han com-partido un tiempo y unespacio”

“...han confluido multi-tud de pequeñas histo-rias: las de los ingenierosdel Instituto Nacional deColonización, la de losprimeros colonos y susfamilias, las de los quevinieron de todo el mun-do a labrarse un futuro...”

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 51

verdadera revolución territorial y social vivida porAlmería. Una revolución que se ha fraguado debajode los plásticos de los invernaderos y en sus alrede-dores y que ha sacado literalmente a la provincia dela más absoluta miseria.

_InnovaciónEsta redención se ha producido a una velocidadde vértigo. En 1955 la renta del almeriense me-dio apenas superaba el 55 % de la del españolpromedio (que aún tendría que enfrentarse alPlan de Estabilización de 1959). Ni siquiera lasprovincias gallegas estaban por debajo de Alme-ría, que ostentaba el poco favorable título de serla más pobre de España.

A mediados de la década de 2000 nuestrarenta suponía el 95 % de la española, y habíamos lo-grado situarnos como la provincia más rica de An-dalucía en términos de renta y estábamos en la lospuestos intermedios de la clasificación nacional.

Y eso se había logrado, pásmense, sin haberpasado por el interregno de la industrialización, si-no merced al desarrollo de la agricultura, un sectoral que se le suelen asociar los conceptos de margi-nalidad, atraso, tradición y pobreza. Y todo eso sehabía logrado, vuelvan a pasmarse, en uno de losterritorios más secos de la Península Ibérica, ha-ciendo del agua escasa un uso absolutamente ex-quisito. Hoy, cuando alguien piensa en la agricultu-ra de Almería lo hace en términos de innovación,eficiencia, riqueza y tecnología.

Obviamente, toda historia tiene luces ysombras. Almería ha sido una especie de matrazde laboratorio en el que se han puesto a prueba

una y otra vez su capacidad de resistencia antelas presiones. Y las ha habido de todo tipo, desdelas provenientes de retos tecnológicos, hasta lasde origen social, pasando por las relacionadascon la competencia en los mercados internacio-nales o las regulatorias.

El camino ha sido muy largo y no se trataaquí de escribir una historia del proceso. La pre-tensión es más sencilla. A veces, para darse cuentade la profundidad de los cambios, basta con mirarunos cuantos ejemplos. En nuestro caso tambiénlos hay muy numerosos, pero nos conformaremoscon unos pocos. Obviamente no están todos losque son, pero son todos los que están.

El primer cambio significativo que comen-taremos es el protagonizado por la demografía y sudistribución por el territorio.

Otro cambio muy significativo es precisa-mente el acontecido con el propio territorio, que hapasado de un color tierra casi indiferenciado a unblanco que refleja los rayos solares, mantiene latemperatura elevada en el interior y encierra unauténtico vergel de más de 29.000 hectáreas.

Haremos también referencia a algunas delas magnitudes económicas, las cuales están de-trás de muchos de los efectos de esta RevoluciónTransparente. Finalmente, comentaremos algu-nos de los cambios sociales más importantes, re-lacionados con la formación y el denominado ca-pital humano.

_Revolución demográficaHasta que el Instituto Nacional de Colonizaciónno inició su actividad en la provincia, el Poniente,

entonces conocido como Campo de Dalías, era unerial: Brenan lo comparaba con el desierto del Si-naí en su “Al sur de Granada”.

Sin embargo, la Revolución Transparenteque se inició en la zona de Roquetas de Mar, irra-diando primero a todo el Poniente y luego hacia Le-vante de la capital, dio lugar a nuevos núcleos tandensamente poblados como El Ejido o La Mojone-ra. Núcleos que terminaron convirtiéndose en mu-nicipios independientes en la década de los 80.

A mediados de siglo, la distribución de lapoblación en Almería había comenzado a cambiar,evolucionando desde una situación de concentra-ción en el interior (heredada de la situación defrontera que tuvo la provincia hasta prácticamenteel siglo XVIII) hasta un reparto equilibrado entreinterior y litoral.

Sin embargo, la segunda mitad del siglo XXsupuso un vuelco en el modelo poblacional, conuna concentración de más del 80% de la poblaciónen los municipios costeros, los mismos sobre losque se han desarrollado la agricultura invernada, elturismo y el auge y caída de la construcción. Contodo, aunque todas las zonas agrícolas han tenidoun crecimiento demográfico muy elevado, ha sidola de Poniente la que ha presentado un comporta-miento más arrollador, al crecer un 559,6 % entre1960 y el momento actual.

_Razones de la inmigraciónOtro de los cambios registrados en la poblaciónha sido el claro envejecimiento de la misma. Labase de la pirámide provincial se ha estrechado,mientras que las edades centrales (sobre todo) y

Page 54: Especial 50 aniversario Invernaderos

las más avanzadas ganan peso. Esto ha sido asíporque el impulso demográfico ha provenido dela inmigración en mucha menor medida que dela natalidad.

Los migrantes que han recabado en Al-mería lo han sido por dos tipos de razones, unade carácter residencial, proveniente principal-mente de los países tradicionalmente emisoresde turismo hacia Almería (la Europa de mayorpoder adquisitivo), y otra de carácter económi-co, mucho más numerosa, y con origen princi-pal en países de África y Latinoamérica con me-nores niveles de vida.

El destino Almería tenía para los inmi-grantes un indudable atractivo (al menos en lasfases iniciales del proceso). La agricultura de laprovincia era un fuerte demandante de trabajode baja cualificación (peones de campo), situa-do dentro de las fronteras europeas por lo quese constituía para muchos como la puerta deentrada al continente. Inicialmente, la migra-ción tuvo un carácter fuertemente masculino,aunque éste se suavizó en los últimos años mer-ced a los procesos de reagrupamiento familiar.

_La revolución del territorioHace unos pocos años, la ONU incluyó al Campode Dalías en el listado de lugares del planetamás transformados por la mano del hombre.Efectivamente, la simple comparación de lasdos imágenes que prosiguen dejan claros loscambios acontecidos en el paisaje, que se ha te-ñido de blanco. Desafortunadamente, el plásti-co agrícola refleja una parte de la radiación so-lar que recibe, aportando ese tono blanco quetiene, y al que contribuye en determinados mo-mentos de la campaña el blanqueo de los mis-mos para bajar la temperatura dentro del inver-nadero.

Y decimos que es una desgracia, porquelo que nos muestra la foto del satélite es ahorauna gran mancha blanca donde antes habíaparcelas agrícolas al aire libre, por lo que lo quea la retina le impresiona es el cambio del verdeal blanco. Sin embargo, bajo esa capa blanca, loque hay es más verde que la cobertura originaldel suelo.

Pero ahí no quedan los cambios, el ma-yor poblamiento ha extendido también el suelourbano en toda la provincia y en el Poniente enparticular, así como de unos espacios para víasde comunicaciones que antes eran menores yde menor capacidad. La A7, que sustituyó a lavieja Carretera Nacional 340 como eje de comu-nicación litoral Este-Oeste, soslayó las poblacio-nes, rodeándolas y duplicó la capacidad aña-diendo un carril más en cada sentido. El resul-tado ha sido que en muchos tramos, la nuevacarretera ha tenido que surcar terrenos muyaccidentados, abriendo nuevos túneles y edifi-cando enormes viaductos para salvar las com-plejidades del terreno.

Por otro lado, y como ya se ha comenta-do más arriba, han surgido nuevos municipiosy asentamientos de población. El ejemplo para-digmático es el municipio de El Ejido, que hasta1982 pertenecía al municipio de Dalías.

La Mojonera se segregó de Felix en 1984.Pero en Nijar, florecieron núcleos de poblacióncomo Campohermoso o San Isidro, impulsadospor el desarrollo de la agricultura de invernade-

ros en este municipio. Tal vez interese mencio-nar aquí que mientras en las zonas de inverna-dero, nacían nuevos municipios, en las zonasdel interior, sucedía el fenómeno contrario,motivado por el descenso de los habitantes.

_La revolución económicaA estas alturas, no se le escapa a nadie que latransformación económica de la provincia deAlmería ha tenido su lanzadera en la agricultu-ra de invernadero. La clave de este desarrolloha sido explicado ya en numerosas ocasiones, ylos factores que se han mencionado normal-mente han sido de carácter circunstancial.

Se refieren normalmente a las condicio-nes espacio temporales en los que surgió el fe-nómeno. Estos son el clima, la puesta en funcio-namiento de los pozos de colonización, el des-cubrimiento del enarenado, la disponibilidadde mano de obra y los bajos requerimientos decapital para la compra de una tierra hasta en-tonces prácticamente improductiva y el accesoa los mercados europeos. Es obvio que estos fac-tores influyeron en el nacimiento y posteriordesarrollo del modelo productivo almeriense.

52 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

“A estas alturas, no se le es-capa a nadie que la trans-formación económica de laprovincia de Almería ha te-nido su lanzadera en laagricultura de invernadero.”

“...han surgido nuevos mu-nicipios y asentamientos depoblación. El ejemplo para-digmático es el municipiode El Ejido, que hasta 1982pertenecía al municipio deDalías.”

Page 55: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 56: Especial 50 aniversario Invernaderos

¿Por qué la revolución transparenteha durado 50 años y parece dispuesta a durar mucho más?

La combinación demanda-distancia. En torno al 70% de la producción de los invernaderos almerien-ses se exporta, en su mayoría, a países europeos,relativamente cercanos. Esto es así porque la natu-raleza perecedera de los productos no permite de-masiado tiempo de transporte (lo que implica queno es viable enviar desde cualquier lugar del mun-do a costes razonables), y porque la demanda es losuficientemente estable como para que este proce-so no sufra demasiados vaivenes.

La base social. A diferencia de otros modelos dedesarrollo acaecidos en laprovincia, el desarrolloagrícola ha estado en ma-nos de multitud de peque-ñas explotaciones familia-res. Esto ha contribuido apermitir una mayor distri-bución de los beneficios (almenos, más equilibrada).Asimismo, la gran cantidadde agricultores ha posibili-tado la existencia de un cli-ma de competencia-coope-ración muy interesante enel que las innovaciones na-cen, se perfeccionan y seadoptan con enorme celeri-dad con el fin último de noperder competitividad.

Las demandas inducidas.Tanto el gran número deagricultores como la propianaturaleza de estas explota-ciones generan una elevadademanda de bienes y servi-cios auxiliares, lo que ter-minó dando origen a un dis-trito agroindustrial, o a un

sistema productivo local que, entre otras ventajas,tiene la de dotar al sistema de mayor resistencia yresiliencia. En cualquier caso, los resultados sonlos ya conocidos. Almería pasó de ser la provinciamás pobre de España del año 1955 a estar en tornoa la media nacional a finales de la pasada década.El proceso también permitió que la provincia deAlmería fuera poco a poco aumentando su pesoen otros sectores y que el proceso de desindus-trialización fuera menos intenso de lo que podríahaber sido de faltar la demanda creada por la elsector agrario.

Algunos de los factores que podrían contribuir a la explicación pueden ser:

54 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

La revolución social. Finalmente, debemos con-siderar las transformaciones que ha sufrido la so-ciedad almeriense. Posiblemente, los dos cambiosmás radicales hayan sido la gran diversidad adqui-rida y el aumento del nivel educativo medio. Sobreel primero ya se ha comentado más arriba, pero locierto es que apenas nos hemos detenido en unpar de cifras. Por mucho que nos parezca elevadoel porcentaje del casi 20 % de población extranje-ra en Almería, lo verdaderamente sorprendenteha sido la intensidad del proceso (se ha producidoen apenas dos décadas) y la gran diversidad de na-

“Posiblemente, los doscambios más radicalesoperados en Almeríahayan sido la gran di-versidad adquirida y elaumento del nivel edu-cativo medio”

“Almería pasó de serla provincia más po-bre de España en elaño 1955 a situarse entorno a la media na-cional a finales de lapasada década”

“El gran número de agri-cultores generan una ele-vada demanda de bienesy servicios auxiliares, loque ha contribuido alnacimiento de un distri-to agroindustrial.”

“El desarrollo agrícolaha estado en manos demultitud de pequeñasexplotaciones familia-res, contribuyendo auna mayor distribuciónde los beneficios.”

Page 57: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 58: Especial 50 aniversario Invernaderos

cionalidades que aquí se han dado cita. Esto ha su-puesto mutar desde una sociedad muy tradicio-nal y uniforme a otra muy diversa y, por defini-ción, más abierta a las novedades. Las ciento cin-cuenta y dos nacionalidades que están presentesen Almería son un hito sin precedentes en la his-toria reciente de esta provincia.

Formación. La otra gran revolución ha sido la dela formación. La Almería del primer invernaderoaún tenía unas tasa de analfabetismo de más del 15% de la población de dieciséis y más años. La dehoy tiene una tasa del 2,8 %, mientras que la mayo-res de 16 con estudios universitarios es superior al15 %. Esto pone de manifiesto que una parte im-portante de las ganancias de renta no se han mal-gastado, sino que han ido a parar a la mejora delmás fundamental de los capitales: las personas.

Las cientocincuenta ydos nacionalidades pre-sentes en Almería sonun hito sin precedentesen la historia reciente deesta provincia

56 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Page 59: Especial 50 aniversario Invernaderos

de primera planaProtagonista

Más allá de sistemas políticos y modas; de estilos periodísticos y técnicas de impresión,el invernadero con todos sus precedentes y sus consecuencias más poderosas ha sido pro-

tagonista de primera plana en La Voz de Almería. Ambos, el invernadero y el periódico,han hecho un camino juntos que ha cambiado la historia de Almería definitivamente

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 57

Jacinto Castillo C O O R D I N A D O R D E A G R I C U LT U R A 2 0 0 0

Page 60: Especial 50 aniversario Invernaderos

58 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Algo que mostrar.Los príncipesDon Juan Carlos y Doña Sofía visitabanjuntos por primera vez Almería en junio de1964 y los logros conseguidos por el INCdestacaban en el programa ofrecido a tanegregios visitantes. El primer invernaderoparece que no figuró en la agenda...

Desde que las realizaciones del Ins-tituto Nacional de Colonización sefueron materializando en la pro-vincia de Almería, la prensa decontenido agrícola comienza a ga-

nar terreo a las páginas de La Voz de Almería.El agua y los nuevos pueblos surgidos comouna alternativa a la emigración parecían unbuen argumento para las autoridades de en-tonces y esta provincia tampoco ofrecía muchomás. Los fogonazos del cine o el incipiente tu-rismo eran casi los únicos argumentos infor-mativos que sacaban a esta provincia de la mo-notonía oficialista y del extenso calendario delas festividades religiosas. Sólo la “bomba dePalomares” en 1966 sacudió esa placidez nor-malidad tan almeriense con el célebre “baño deFraga”. Entre tanto, las imágenes de esos pobla-dos blancos, que tenían algo de decorado de pe-lícula castiza, se iban poblando con algunos de

los héroes anónimos que más adelante prota-gonizarían el llamado “milagro almeriense”.Pero, de momento, las visitas de los jerarcas delINC, de Sindicatos o, incluso de ministros deturno.

Aunque muy pronto se convertirían enpersonas muy queridas en España, la verdad esque la visita de Juan Carlos de Borbón y Sofíade Grecia a los nuevos poblados de coloniza-ción del Campo de Dalías y de Níjar en 1964, de-bió despertar algunas preguntas que aún no te-nían una contestación clara. El cronista no sedetuvo, naturalmente, en esas cuestiones, y secentró en la jovencísima y atractiva pareja a laque se le presentó esa nueva generación de al-merienses que parecían ser capaces de conver-tir el desierto en jardín y la miseria en esperan-za. Las sonrisas de la inocencia y el rictus reve-rencioso de la autoridad estaban cada vez máscerca de dar paso a otra realidad, pero nadiepodía percibirlo entonces. En una finca de Ro-quetas, una idea novedosa estaba fructificandoen clave de futuro....

“Bodas de plata”.La agriculturaemergente de Almería también tuvo susmomentos de gloria en los fastos que cele-braron los primeros 25 años desde el fin dela Guerra Civil, como recogía la portada deLa Voz. Aquellos nuevos agricultores pare-cían encarnar los nuevos tiempos.

A penas dos líneas.En octubre de1964, el ministro de Agricultura Cirilo Cá-novas visitó los pueblos del INC: todo pare-cía convenir a la autocomplacencia oficial.Sin embargo, el cronista sólo le dedica doslíneas al primer invernadero, porque la co-mitiva casi pasó de largo en su recorrido.

Crece la prensa agrícola,pero el primer invernaderopasa de puntillas J.C.

28 DE JUNIO DE 1964 31 DE OCTUBRE DE 1964 21 DE ABRIL DE 1966

No todo eran fastos...La agricultu-ra almeriense, renacida y en plena compe-tencia con la emigración no sólo deparabaactos de “afirmación nacional”. El ingenie-ro jefe del INC en Almería, Leandro Pérezde Cobos transmitía gracias a La Voz las in-teresantes aportaciones del enarenado.

Page 61: Especial 50 aniversario Invernaderos

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 59

Cifras y proyectos.La década de lossetenta arrancó ya con las cifras del campocomo motivo para presumir de progreso.De futuro. El invernadero todavía era unafoto secundaria que iba ganando espaciojunto al enarenado. La información agríco-la se hacía un poco más técnica...

Europa-Almería-Europa.El In-vernadero comienza a situar a Almería enEuropa. Las semillas que vienen de paísescentroeuropeos germinan en los inverna-deros almerienses y generan un productoque hacen el viaje de vuelta. Almería esta-ba abriéndose un lugar el mapa.

Primeras reivindicaciones.Losvientos de la transición abrían otra posibi-lidad más en el tratamiento de los proble-mas del campo: la reivindicación. La pren-sa local se hacía eco del déficit de atenciónque el “milagro almeriense” generaba enlos poderes públicos

23 DE NOVIEMBRE DE 1971 28 DE abril DE 1974 19 DE DICIEMBRE DE 1976

Un hecho sucedido en octubre de1973 iba a desencadenar el lanza-miento definitivo del invernade-ro. Las dramáticas inundacionesque asolaron amplias zonas de la

provincia de Almería y de las vecinas Murcia yGranada, se cebaron con especial dureza enAdra. Las ayudas económicas a los agricultoresdamnificados orientaron las miras hacia el in-vernadero, ese extraño artilugio que ya estabadando resultados interesantes en el Campo deDalías. La prensa local se multiplicó para con-tar el alcance de aquella catástrofe que, sin em-bargo, propició el despegue de los cultivos pro-tegidos, con el impulso del crédito oficial y conla ayuda de aquella joven entonces Caja Rural.

Seguramente, el interés por fomentar elmercado en origen, protagonizado por la em-presa pública Mercorsa, también influyó en lasexpectativas que se abrían al campo almerien-

se. La Voz ofrecía en septiembre de 1972 un am-plio reportaje antecediendo la creación deMercalmería, dando justa importancia a la no-ticia. Pero la Transición iba a operar un cambioque casi se solapa con el primer gran hito de laevolución del invernadero en Almería. La Vozrecogía las inquietudes de un sector que se sen-tía olvidado, pese a sus credenciales económi-cas: 8.000 millones de pesetas de entonces ensu facturación bruta. Además, otras zonas agrí-colas de España parecían disputar el valor aña-dido y las prioridades de la política agraria alcampo almeriense. Por eso, las páginas de laprensa decana de Almería comenzaron a ha-blar del trato que recibían nuestros productospor parte de las comercializadoras valencianaso de las supuestas malas artes del sector cana-rio dedicado a los pepinos.

Ya en 1977, un primer artículo bastanteamplio y riguroso hablaba en las páginas de LaVoz de un concepto rompedor: la lucha biológi-ca contra la mosca blanca, una “guerra” quepermaneció casi latente tres décadas.

Logros económicos, lasinundaciones del 73 y lareivindicativa TransiciónJ.C.

Las Palmerillas, casi a punto.El8 de febrero de 1976 La Voz daba noticia delproyecto que estaba desarrollando la CajaRural para hacer realidad una finca expe-rimental en Las Palmerillas, un nombreprácticamente desconocido para la mayo-ría de lectores de entonces....

Page 62: Especial 50 aniversario Invernaderos

La “movida” de los ochenta no tuvoparalelismo en el campo almerien-se. Mientras los modernos se entre-gaban a revisar antiguas moderni-dades, los agricultores apretaban los

dientes para estar a al altura de la imparableevolución de todo lo que les rodeaba. La fronte-ra de Francia, que pocos años atrás había quecruzar para ver películas sin censura, se con-virtió en un muro de odio de parte de los agri-cultores franceses, que convirtieron el volcadode tomates en un espectáculo televisivo a dia-rio. Pero Europa abría sus puertas a España ycomenzaba el debate para sopesar pérdidas yganancias de aquella nueva situación.

Los convulsos ochenta trajeron al cam-po almeriense situaciones tan peculiares comola acusación a los tomates de Roquetas de serlos causantes de aquel nefasto síndrome tóxicoque produjo el aceite de colza desnaturalizado.

También fue la década de la creación de gran-des empreas, como Eurosur, la mayor de Euro-pa en su momento. O Frusol, que conoció unlargo recorrido y que contaría con la presenciadel entonces consejero de Agricultura Manau-te para su inauguración oficial. También fue ladécada de la crisis de Tierras de Almería y todala turbulencia generada en torno a su nombre,protagonista de muchas portadas de La Voz.

Entre tanto, la superficie invernada se-guía creciendo. Los agricultores trataban deadaptarse a las nuevas reglas del juego que ve-nían de Europa y a las directrices de la Ley Ge-neral de Cooperativas que entraba en las cortesen 1983, muy poco conocida aún entre los agri-cultores almerienses. Por eso, comenzó a ha-cerse cada vez más frecuente el anuncio de se-minarios y jornadas para dar a conocer las no-vedades legislativas y los avances en materia dehorticultura, especialmente coincidiendo conlas sucesivas ediciones de Expo Agro, una feriacuya celebración siempre tuvo encima la espa-da de Damocles de su continuidad.

Europa, la Expo, lasnuevas reglas dejuego y...el éxitoJ.C.

Investigación imprescindible.La pujanza de la agricultura intensiva de-mandaba ya no sólo el esfuerzo investiga-dor de las empresas privadas sino tambiénla iniciativa del sector público. La FIAPA,en la sede de La Mojonera (actualmente, elcentro IFAPA) asumía este papel.

60 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

La segunda Expo Agro.El inverna-dero almeriense daba de sí para organizarun certamen que quería ser el reflejo de loque estaba sucediendo en el campo. La so-ciedad almeriense tenía a partir de esemomento una cita anual con la agricultu-ra, aunque a cierta dstancia.

Europa, Europa.Una de las conse-cuencias más importantes de la Transi-ción política fue la integración de Españaen la Comunidad Económica Europea. Elinvernadero almeriense iba a producir sushortalizas y sus frutas para que se comer-cializaran como quería Europa.

Evolución constante.Un incre-mento en la producción del sector horto-frutícola fue siempre motivo suficiente pa-ra una portada de La Voz. En aquella déca-da se fue convirtiendo en argumento in-formativo recurrente para ocupar lasprimeras planas. Por suerte.

17 DE FEBRERO DE 1982 15 DE MAYO DE 1984 13 DE DICIEMBRE DE 1986

Page 63: Especial 50 aniversario Invernaderos

J.C.

Al borde cumplir medio siglo, la agri-cultura almeriense ya representaun modelo genuino de producción ycomercialización que goza de unaacusada madurez. Sin esa cualidad,

hubiese sido imposible alcanzar las cifras mare-antes con las que aparece periódicamente en lasportadas de La Voz. Ni tampoco, superar con éxi-to algunas crisis como la sucedida hace dosaños, tras la alarma desatada en Alemania. An-tes de eso, la generalización del control biológicoy la producción integrada dejó en la historia eco-nómica y social de Almería una página que nodebe ser olvidada.

Todavía quedan miles de portadas queescribir con el invernadero y la agricultura al-meriense como protagonistas. Portadas que, aveces, serán preocupantes, pero siempre en me-nor número que las prometedoras, porque eléxito es un rasgo genético del campo almeriense.

La madurezde un modelo,en portada

Otro record.Periódicamente, la agri-cultura almeriense superaba sus propiosregistros. Con esa tendencia arrancó unadécada que iba a ser decisiva en la historiade esta agricultura de la que ya se presu-mía en todo el mundo. El “milagro” ya eraun reguero de cifras existosas.

Vecinos mal avenidos.Los agricul-tores franceses no soportaban bien lacompetencia de los productos almerien-ses. El invernadero generaba mejores hor-talizas, a mejor precio y en épocas del añocada vez más extensas. El problema conestos vecinos mal avenidos llegó lejos.

Imparable.Los noventa enfilaban lasúltimas hojas de su calendario mirando alo más alto de las estadísticas. Crecía la su-perficie invernada y todo el sector parecíaconjurado a ganar terreno en mercados enEuropa y más allá de sus fronteras. Los Es-tados Unidos eran el objetivo.

31 DE JULIO DE 1991 27 DE MAYO DE 1997 1 DE DICIEMBRE DE 1998

El límite de los 2.000 millones.costó trabajo, pero se consiguió. El sectorsuperó los dos mil millones de euros defacturación en 2007 y puso proa a otras ci-fras redondas. El precio, que es el nudogordiano para el campo, es la clave. Perotambién parece ser la solución...

La crisis que unió a todos .Losefectos de la crisis del E. coli significaronpara muchos la evidencia de las debilida-des del sector, pero la reacción de todos,incluida la prensa decana, y la posteriorsuperación del problema fueron un ejem-plo de firmeza. Y un motivo de orgullo.

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 61

La actualidad del siglo XXI

Page 64: Especial 50 aniversario Invernaderos

Semilleros, envases y em-balajes, semillas, agroquí-micas, construcción de in-vernaderos, plásticos, fer-tirrigación o serviciosavanzados constituyenhoy una fuerza de choque

Si es cierto y patente que la agriculturaintensiva almeriense ha protagoniza-do no una sino varias ‘revolucionesverdes’ a lo largo de sus cincuentaaños de historia, no lo es menos que

la industria auxiliar se ha posicionado firme-mente como uno de los sectores emergentes dela provincia, hasta el punto de ser consideradaa estas alturas por numerosos estudiosos y ana-listas como la gran baza para el futuro económi-co almeriense.

La evolución de la agroindustria ha se-guido su propio camino, aunque casi siemprecoincidente con la que presenta la propia agri-cultura bajo plástico a la que nutre y a la queproporciona soluciones ante los problemas deldía a día. En las primeras dos décadas del ‘mila-gro almeriense’ más del 90 por ciento de los in-sumos necesarios para poner en marcha la pro-ducción llegaban desde el exterior.

Este hecho no es sólo un problema eco-nómico o de dependencia, era también un fac-tor de dificultad puesto que no siempre las se-millas o las estructuras desarrolladas para cul-tivos situados en otras zonas del mundo cubrí-

an con las exigencias y las condiciones que sepresentaban en la provincia.

Sin embargo a partir de los años ochen-ta, cuando la incorporación de ‘facto’ de Españaa la Comunidad Económica Europea fue el mo-tor de un crecimiento exponencial de la pro-ducción y de las exportaciones de las hortalizasalmerienses hacia los mercados comunitarios,muchas de las multinacionales que duranteaños habían vendido en Almería sus semillas osus productos fitosanitarios decidieron implan-tar aquí centros de investigación y de desarrollode variedades mejor adaptadas al clima, los sue-los y las condiciones de cultivo.

_Germen industrialParalelamente empezaron a nacer empresasautóctonas que supusieron una firme apuestapor producir en Almería lo que requería la agri-cultura almeriense. Ese camino fue el germende lo que hoy es una industria poderosa que re-úne, según los cálculos que realiza el propiosector, a no menos de 300 empresas de la in-dustria auxiliar, un segmento de actividad eco-

El otro gigante de la agriculturaalmeriense

INDUSTRIAAUXILIAR

Muchas de las multinacionales que durante años habíanvendido en Almería sus semillas o sus fitosanitarios im-

plantaron aquí centros de investigación y de desarrollo

Antonio Fernández R E D A C T O R J E F E D E L A V O Z D E A L M E R Í A

Las sociedades que tra-bajan al lado de la agri-cultura factura más del30 por ciento en los mer-cados exteriores traspa-sando fronteras cadavez más lejanas

62 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Page 65: Especial 50 aniversario Invernaderos

La evolución tecnológica de los culti-vos bajo plástico ha ido a la par del for-talecmiento de la industria auxiliar.

nómica que alcanza a estas alturas un nivel defacturación que se calcula en torno a los 1.200millones de euros.

El nivel de desarrollo adquirido por estasempresas, y la fuerte apuesta por la investiga-ción y la innovación, las ha llevado a abordaruna nueva fase y se han abierto definitivamentelas puertas a la internacionalización. Hoy elconjunto de sociedades que trabajan al lado dela agricultura factura más del 30 por ciento enlos mercados exteriores y las fronteras que vancayendo son cada vez más lejanas. De esta for-ma se ha conseguido algo impensable hace tresdécadas, que las empresas almerienses de la in-dustria auxiliar compitan con éxito con lasgrandes multinacionales de origen europeo,norteamericano o israelita, abordando merca-dos que abarcan los cinco continentes, o al me-nos cuatro de ellos porque Australia aún quedalejos de los objetivos de la mayoría de ellas.

_TecnovaEn la mejora de la posición competitiva ha juga-do un papel importante la Fundación para lasTecnologías Agrarias de la Provincia de Alme-ría, Tecnova, una institución creada inicial-mente por una veintena de empresas que hoyagrupa a más de 120 de ellas, y que representa lafortaleza de un sector en permanente evolu-ción. Semilleros, envases y embalajes, semillas,agroquímicas, construcción de invernaderos,plásticos, riego y sistemas de fertirrigación oservicios avanzados constituyen hoy una fuerzade choque con capacidad para competir en bue-na parte de los mercados mundiales.

El mundo de las semillas y delo semilleros ofre-ce uno de los ámbitos más poderosos de la in-dustria auxiliar.

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 63

Page 66: Especial 50 aniversario Invernaderos

La evolución última de la agriculturaintensiva almeriense, la enésima revoluciónverde del sector hortofrutícola, ha supuestoun cambio sustancial en la forma de producir.Los riesgos, sobradamente conocidos, del usode plaguicidas y, en general, de agroquímicos,han empujado a los agricultores a la adopción,en muy poco tiempo, de la producción integra-da, el uso de las técnicas de control biológicode las plagas y, en último extremo, la produc-ción ecológica.

En esa evolución han estado acompa-ñados permanentemente por las empresas dela industria auxiliar que se han mostrado per-fectamente capacitadas para dar las respues-tas adecuadas a cualquier demanda llegadadesde los invernaderos. El resultado es que enla actualidad empresas almerienses comoAgrobío, Velsam y un largo etcétera proponensoluciones a medida cuando surge cualquiertipo de problema en los cultivos.

Sin duda las herramientas que los agri-cultores tenían en sus manos hace cincuentaaños apenas se parecen a estas alturas con lassoluciones que la industria auxiliar ha ido po-niendo a su disposición. Quizá una de lascuestiones de mayor trascendencia es que setrata de una simbiosis casi perfecta porque laindustria no habría tenido jamás en la provin-cia un desarrollo tan espectacular sin el acica-te de atender a los agricultores, y estos últi-mos no habrían encontrado respuestas taneficaces sin el desarrollo paralelo de la indus-tria auxiliar.

La polinización con abejorros y la utilizaciónde insectos auxiliares ha experimentado enlos últimos tiempos un avance espectacular.

64 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Page 67: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 68: Especial 50 aniversario Invernaderos

sobre 50 años de historiaReflexiones

El IFAPA se creó el 17 de abril de 1979. Su sede fue la Escuela de Capaci-tación Agraria ubicada en el actual término de La Mojonera, en terrenos

que entonces pertenecían aL término de Felix

JOSÉ GABRIEL LÓPEZ SEGURA DIRECTOR DEL CENTRO DEL IFAPA DE LA MOJONERA

Cuando se cumplen cincuenta años dela construcción del primer inverna-dero en Almería, el de FranciscoFuentes, Paco “El Piloto”, en la parce-la piloto nº 24 de Roquetas de Mar,

merece la pena hacer una breve parada en el fre-nético desarrollo de nuestra horticultura intensi-va y reflexionar sobre nuestro pasado y el mo-mento actual. En este artículo quiero referirme atres hitos históricos en el sector de la I+D+F denuestros cultivos de invernadero.

Lo que comenzó en la segunda mitad delpasado siglo como un ensayo para permitir culti-var zonas áridas y salinas, nuestros entrañablesenarenados, se convirtió rápidamente en un focode atracción de nuevas tecnologías, en principioforáneas, que contribuyeron a un espectacularincremento de las producciones: materiales decubierta, nuevas variedades adaptadas a la inten-sificación de cultivo, diseño y climatización de in-vernaderos, tecnologías de riego y fertilización,protección de cultivos,…

Dos entidades iniciaron casi simultánea-mente una labor propia de experimentación,transferencia e investigación de los nuevos des-arrollos tecnológicos ligados a nuestros inverna-deros: los actuales Centros de “Las Palmerillas”,Estación Experimental de la Fundación Cajamar,hace ahora 37 años, y el IFAPA, que se inició comoEstación de Investigación sobre Cultivos Hortíco-las Intensivos, por Orden Ministerial de 17 deabril de 1979, ubicada en la Escuela de Capacita-ción Agraria de Felix, actual T.M. de La Mojonera.

66 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Page 69: Especial 50 aniversario Invernaderos

La foto aérea de os invernaderos del Ponienteconstituye muestra el ingente terreno, físico yteórico, para el I+D de la agricultura almeriense

Hace más de 30 años quese trabaja en los centrosdel IFAPA y Las Palmeri-llas, con líneas y equiposde trabajo complementa-rios y coordinados

La producción de I+D enhorticultura se consolidaentre 2005 y 2006, coinci-diendo con el pleno apo-yo de la Junta y del Go-bierno Central

Desde hace más de treinta años se estádesarrollando esta labor de investigación, des-arrollo y transferencia en los dos centros, IFAPAy Las Palmerillas, con líneas y equipos de traba-jos complementarios y coordinados, procuran-do no duplicar esfuerzos. En los distintos forosinternacionales realizados en los últimos añosha quedado patente el puesto de vanguardia quese ha conseguido gracias a esta actuación con-junta.

La producción de I+D en horticultura deinvernadero en Almería se va incrementandodesde entonces y se puede considerar que llegaa una situación de consolidación hacia los años2005-2006, coincidiendo con la época de plenoapoyo económico e institucional de la Junta deAndalucía y otros Organismos de la Administra-ción Central a todas las iniciativas del sector,importantes incentivos a la creación de Empre-sas de Base Tecnológica y la presencia de losGrupos de Investigación de la UAL. Esta épocacoincide con la mayor especialización de la EX-POAGRO y la celebración en nuestra provinciade varios eventos científicos internacionales de

En 2006, el IFAPA organizó un im-porta te simposium internacionalque convirtió a Almería en “capi-tal mundial del invernadero”.

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 67

Page 70: Especial 50 aniversario Invernaderos

68 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

primera línea, destacando el Simposio Interna-cional sobre Climatización de Invernaderos.

En Almería desarrollaban su actividaden ese momento varios de los Centros encua-drados en la Red de Espacios Tecnológicos deAndalucía (RETA), relacionados con la horticul-tura intensiva y su industria auxiliar: TECNO-VA, Fundación UAL-ANECOOP, FIAPA, COEX-PHAL, financiados en parte con subvencionespúblicas.

En el año 2006, la mayor parte de los ac-tores: sector productivo, comercializadores, ex-portadores, industria auxiliar, instituciones,entidades financieras y administraciones, apos-taron por el PITA y el futuro Centro Tecnológicode primer nivel ligado a él como pilar funda-mental del nuevo avance que tenía que dar obli-gatoriamente la horticultura intensiva en nues-tra provincia, para convertirnos en productoresy exportadores de tecnología a todo el ámbitomediterráneo y a otras zonas en todo el mundocon un sector agrícola similar al nuestro.

Junto con esta estrategia a corto plazo,basada en coordinar toda la demanda y ofertade I+D relacionada con la agricultura y su in-dustria auxiliar a nivel provincial en una es-tructura única, localizada en el Parque Tecnoló-gico, con el indudable incremento en la eficaciay en la racionalización del uso de los recursos,se determinaron las nuevas líneas de desarrollode tecnología a nivel internacional en las cualesAlmería debe situarse en una posición de lide-razgo y que complementarían a las que se esta-ban trabajando en ese momento.

Junto a la estrategia a corto plaza, carac-terizada por el trabajo intenso, Almeríatiene por delante ambiciosos proyectospara liderar la agricultura del futuro.

Page 71: Especial 50 aniversario Invernaderos

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 69

del futuroEL INVERNADERO

Los centros de investigación de Almería se afanan en encontrar los invernaderosmás novedosos y rentables. Las diferentes técnicas pasan por la manipulación ro-

botizada hasta la utilización de la nanotecnología para los plásticos de cubierta ola biomasa para la producción de energía

Invernadero desarrollado en el Centro Experimen-tal de Las Palmerillas dentro del proyecto CENITMEDIODÍA.

Page 72: Especial 50 aniversario Invernaderos

70 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

En el futuro próximo, la estructura,los materiales de cubierta y los equi-pamientos de clima y control del in-vernadero deben de ser desarrolla-dos para reducir la dependencia del

petróleo, con un uso mayor de recursos natura-les y minimizando el uso de productos quími-cos. Esta es la apuesta de los expertos en inves-tigación agrícola. Y ahí es por donde se dirigenlas principales investigaciones que se estándesarrollando sobre el futuro de los invernade-ros. Proyectos nacionales como CENIT MedioDía y europeos como Euphoros o Spicy, dondeparticipa la Fundación Cajamar, dirigen sus ob-jetivos en este sentido.

Precisamente, el primer invernadero ro-botizado y sostenible ha nacido enmarcado enel proyecto CENIT Medio Día. Este proyectocuenta entre sus novedades con una nueva es-tructura de invernadero, que maximiza la en-trada de radiación en invierno y mejora la reco-gida de condensación y ventilación. Tiene, ade-más, un sistema de movimiento de bandejas decultivo que permite desplazar las plantas consus frutos a una zona de manipulación aumen-tando la densidad de plantación y multiplican-do los resultados de productividad.

Asimismo, está en fase de prueba la líneade manipulación robotizada en el propio inver-nadero que posibilita confeccionar empaqueta-dos combinados de diversos cultivos listos para

M.C. CEREZUELA

Invernadero experimental de la Universidad de Al-mería. El centro de experimentación BITAL venidorealizando una serie de valiosas aportaciones quevan a ser decisivas en el futuro de la agricultura.

Page 73: Especial 50 aniversario Invernaderos

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 71

Almería ha mostrado unagran flexibilidad para adap-tarse a las nuevas demandasde los consumidores: produc-tos de alta calidad, saluda-bles, seguros y producidoscon mínimo impacto am-biental, que su agricultura

su distribución. En la línea de sostenibilidad, elproyecto afronta con éxito los resultados de unsistema de tratamiento de agua, tanto de desali-nizadora como de depuradora, para aporte alinvernadero. Con este dispositivo se podrá utili-zar tanto agua de mar como depurar el aguautilizada en el cultivo para su reutilización.

_Fundación CajamarEl espacio elegido para las pruebas, montaje yaplicaciones de este revolucionario cambio hasido la Estación Experimental de la FundaciónCajamar. Además, participan en el proyecto fir-mas líderes en sus sectores como Repsol, Accio-na Instalaciones, Acciona Agua, Ulma Agrícola,Ulma Handling Systems, Ulma CYE, Ingeteam,Agrobío, Biomiva y Grupo AN.

Pero este no es el único estudio que seestá realizando sobre el futuro de los inverna-deros. Desde que la agricultura intensiva se im-plantara en Almería la evolución que ha experi-mentado ha sido significativa. “Almería ha mos-trado una gran flexibilidad para adaptarse a lasnuevas demandas de los consumidores: pro-ductos de alta calidad, saludables, seguros yproducidos con mínimo impacto ambiental,que ha sido clave en el éxito de esta agricultura”,explica Juan Carlos López, de la división delServicio Técnico Negocio Agroalimentario de laEstación Experimental ‘Las Palmerillas’.

Las nuevas apuestas pasan por el uso efi-ciente del agua, la mejora de los sistemas de re-frigeración en el invernadero, la búsqueda de

El primer invernadero robo-tizado y sostenible nació en-marcado en el proyecto CE-NIT Medio Día, en la Esta-ción Experimental de LasPalmerillas de la fundaciónCajamar

Page 74: Especial 50 aniversario Invernaderos

En el futuro, no es des-cabellado pensar en cu-brir los consumos ener-géticos del invernaderosin recurrir al uso decombustibles fósiles.

Una mayor implemen-tación tecnológica, noredunda en una mayorproductividad comer-cial. Es necesario apun-tar al cultivo.

Robot clasificador de productosinstalado dentro del propio in-vernadero

otras fuentes de energía alternativas a la ener-gía fósil, el desarrollo de materiales anti goteo yanti polvo para la cubierta que permita aumen-tar la radiación en el invernadero y reducir losproblemas de enfermedades.

_Centro de investigación BITALEl centro de investigación BITAL de la Universi-dad de Almería también realiza estudios sobrecómo serán los invernaderos del futuro. Sus in-vestigaciones concluyen que la gestión de culti-vos realizada bajo la mayor implementacióntecnológica, no redunda directamente en unamayor productividad comercial y en un supe-rior rendimiento en términos generales. Poreso, los estudios se centran en el cultivo y es latecnología la que se adapta a él. “Es imprescin-dible establecer el nivel tecnológico que hace acada cultivo más rentable”, apunta el directorde BITAL, Diego L. Valera. La especializacióntambién juega un papel importante.

_NanotecnologíaEn cuanto a los materiales de cubierta, desdeIFAPA ‘La Mojonera’ apuntan que la revoluciónpuede venir de la mano de la nanotecnología,que va a permitir producir filmes plásticos másduraderos, materiales autolimpiables, con foto-selectividad puntual y termosensibles. Por otrolado, en cuanto al consumo de energía en el in-vernadero, el investigador de Tecnologías de In-vernaderos de este centro, Esteban José Baeza,

72 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

Page 75: Especial 50 aniversario Invernaderos

apunta que “en el futuro, no es descabelladopensar en cubrir los consumos energéticos delinvernadero sin recurrir al uso de combusti-bles fósiles, si no con fuentes renovables”. Eneste sentido, apunta el investigador hacia elpapel que puede jugar la biomasa: “Máxime sitenemos en cuenta la biomasa residual que pro-ducen los invernaderos de Almería y que no ne-cesariamente debe tener un uso final destinadoexclusivamente al compostaje”.

Pero la biomasa no es la única opción. Laenergía solar de concentración, mediante usode concentrados cilindro-parabólicos o la geo-termia para climatizar viviendas también pue-den ser alternativas a considerar en los inver-naderos.

El invernadero del futuro está siendo concebido ya,asumiendo todos los retos a los que se enfrenta laagricultura almeriense actual. Los mismo que va asuperar con toda seguridad.

En cuanto a los materia-les de cubierta la revolu-ción puede venir de lamano de la nanotecnolo-gía, que va a permitirproducir plásticos máseficientes, más duraderosy autolimpiables

50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA I 73

Page 76: Especial 50 aniversario Invernaderos

74 I 50 AÑOS QUE CAMBIARON ALMERÍA

y un futuro para todosTres generaciones

Miradas, silencios, palabras, escenas, frutos. El campo almeriense no se ha dejadoatrás algo tan esencial como el sentido de la familia y de la trasmisión de conoci-

mientos y de valores. Por eso puede con todo

En la imagen superior, una familia de parralerosen una estampa tradicional del campo almerien-se de mediados del siglo XX. Abajo, un modernoinvernadero cuya propietaria, Cristina Martín,enseña a los más pequeños las primeras leccio-nes de esta apasionante materia que es la agri-cultura intensiva. (Gentileza de Óscar Morelli).

Page 77: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 78: Especial 50 aniversario Invernaderos

LaVoz de Almería

Page 79: Especial 50 aniversario Invernaderos
Page 80: Especial 50 aniversario Invernaderos