Energía y Minas 06 v00 · 2019. 6. 1. · ENErGÍa y miNaS, rEViSTa ProFESioNaL, TÉCNiCa y...

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    2008

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    SumarioEDiToriaLTiEmPo DE iNCErTiDumBrE y DiFiCuLTaDES 05

    aCTuaLiDaD TECNoLÓGiCamEDio amBiENTEaLmaCENamiENTo GEoLÓGiCo DE Co2 Como SoLuCiÓN ParCiaL a LaS EmiSioNES DE GaSES aNTroPoGÉNiCoS 06

    SEGuriDaD y SaLuDrESPoNSaBiLiDaD SoCiaL CorPoraTiVa y ComPETiTiViDaD: uNa aPLiCaCiÓN a La SEGuriDaD y SaLuD EN EL TraBaJo 12

    iNVESTiGaCiÓNESTuDio DE NECESiDaDES EN maTEria DE FormaCiÓN EN EL SECTor DE La miNErÍa DE SuPErFiCiE EN aNDaLuCÍa 24

    miNErÍaEGiPTo y La roCa orNamENTaL 32

    aCTuaLiDaD CoLEGiaLCoNSEJo GENEraLNoTiCiaS 36

    CoLEGioSaraGÓN 40CaTaLuÑa y BaLEarES 43CarTaGENa 47GaLiCia 49HuELVa 50LEÓN, PaLENCia, BurGoS y CaNTaBria 54LiNarES 56PriNCiPaDo DE aSTuriaS 58ProViNCia DE CÓrDoBa 61

    aCTuaLiDaD ProFESioNaL

    LaS ProFESioNES CoLEGiaDaS aDViErTEN DEL riESGo DE rEFormar EL SECTor DE ESPaLDaS DE LoS iNTErESES DE LoS CiuDaDaNoS 70La oBLiGaToriEDaD DE LoS ViSaDoS 71maNiFiESTo iNiTE 72

    BoLETÍN iNFormaTiVo DEL iNSTiTuToGEoLÓGiCo y miNEro DE ESPaÑa

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    EDITA:CONSEJO GENERAL DE LOS COLEGIOS OFICIALES DEINGENIEROS TÉCNICOS DE MINASC/ D. ramón de la Cruz, 88, oficina 5 - 28006 madridTlfno.: 91 402 50 25 • Fax: 91 402 50 63www.consejominas.org • [email protected]

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    DIRECTORA DE PUBLICACIÓN• Nuria yagües Pérez

    COLABORADORES• José Luis Leandro rodríguez• Pablo Cienfuegos Suárez• Florentino Fernández Zapico• Beatriz Fernández muñiz• Fº. Javier González márquez• Jacinto López Pérez

    DISEÑO GRÁFICO Y PRODUCCIÓN• Pedro ortega angulo

    Prohibida la reproducción total o parcial del contenido de estarevista sin previa autorización. Los artículos e informacionesfirmadas expresan la opinión de sus autores, con la que ENErGÍay miNaS no se identifica necesariamente.

    D.L. aS-3.629/2004iSSN: 1699-7743

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    rELaCiÓN DE CoLEGioS oFiCiaLES DE iNGENiEroS TÉCNiCoS DE miNaS

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    EDiToriaL:

    TiEmPo DE iNCErTiDumBrEy DiFiCuLTaDES

    Eo, no son buenos tiempos los que se aveci-nan y no nos estamos refiriendo precisamen-te a la situación económica española, queparece depender del color del cristal del ojo con laque se mire, basculando desde la “irremediabledebacle” que vaticinan unos, a “ajustes cíclicos conorigen a miles de kilómetros” que defienden otros.Para casi todos probablemente, como siempre, niuna cosa ni la otra. En cualquier caso, lo que sí esuna realidad cuantificable, es que los ingresos delos Colegios profesionales se están resintiendo enlos últimos meses, como puede imaginarse cual-quiera con sentido común.

    Pero insistimos, y a pesar de su importancia, no esesto sólo por lo que decimos que vienen para nues-tras profesiones tiempos revueltos y por lo tantotambién para nuestros Colegios, sino por algunasotras cuestiones que enumeramos seguidamente.

    La primera, el turbio momento al que se ha llegadotras interminables negociaciones, para la resolucióndefinitiva del futuro título universitario y que permi-tirá ejercer nuestra bonita profesión a los que vie-nen detrás. En esto afortunadamente no estamossolos y desde aquí debemos expresar nuestroapoyo al trabajo que viene desarrollando en estecampo el iNiTE. Está claro que el ministerio deuniversidades no puede, ni debe ignorar la opiniónde decenas de miles de profesionales.

    La segunda cuestión preocupante, es la veladaamenaza lanzada por parte de la Comisión Nacionalde la Competencia relativa a poner en entredicho lafutura obligatoriedad de la colegiación en virtud deuna mal entendida interpretación de la puesta delargo de la Directiva Europea de Servicios.

    No se ha visto disparate más grande en muchosaños. En primer termino por no haber consultado alos propios Colegios conculcando su elementalderecho de opinión y saltándose su carácter deCorporaciones de Derecho Público, que nos da lavigente Constitución Española y además alejándo-se, probablemente por ignorancia, de la realidad de

    la función colegial en España entre otras muchascosas como garantes de la calidad profesional decara a la sociedad, de la continua labor formativade postgrado que se realiza, de la defensa del pro-fesional y del constante auxilio normativo que pres-tamos a la administración del Estado y de las CC.aa. ¿Quién realizaría esas labores?

    Tercera amenaza, y ésta puede considerarse másinterna. La cada vez menor presencia de profesio-nales de nuestra rama minera en las distintas admi-nistraciones públicas. una vez más insistimos enadvertir que carecemos de interlocutores conoce-dores de las distintas técnicas mineras que nosentiendan y, por tanto, nos respeten. Hacen faltaincluso “políticos más mineros” que ayuden desdesus atalayas y que de alguna forma colaboren apaliar el intervencionismo tan atroz a que hasido y continúa estando sometido el ejercicioprofesional relacionado con las explotaciones yproyectos mineros.

    No podemos acabar estas líneas, sin trasladar apesar de todo un mensaje optimista.

    Desde nuestro Consejo, no se deja, ni se dejará detrabajar en pos de conseguir con la ayuda de lasotras ingenierías Técnicas y de la Justicia si fuesenecesario, que sean tenidos en cuenta nuestrosplanteamientos con la futura titulación académica.aún estamos a tiempo.

    Permaneceremos unidos codo con codo con lasotras organizaciones colegiales para la lucha queirremediablemente se mantendrá con la CNC por lahistoria y el prestigio de nuestras instituciones.

    Por último animaremos y estimularemos a nuestroscolegiados para que todos contribuyamos a quemejore nuestra presencia en las administraciones yla Política. En pocas palabras “debemos poner demoda nuestra profesión”. Si no lo hacemos ¿Quiénlo hará? Es un deber y una obligación de todos nos-otros de cara al futuro.•

    José Luis LeandrorodríguezDecano del Colegio deingenieros Técnicos deminas de Huelva, Sevilla,Cádiz, Cáceres, Badajozy Canarias.

    N

  • INTRODUCCIÓN

    La emisión de los gases producidos por la com-bustión de combustibles fósiles causa un paulati-no incremento de la temperatura terrestre. Lamayoría de los estudios de calentamiento globalatribuyen el cambio climático al aumento de laconcentración de Co2 en la atmósfera que secree que afectará de forma adversa a la forma devida en el planeta.

    ante este problema globalizado ha sido precisa laadopción de medidas internacionales para su con-trol, como es el Protocolo de Kyoto, firmado pornumerosos países en diciembre de 1997, entreellos España. En el año 2002, el ParlamentoEspañol aprobó, por unanimidad, la ratificacióndel Protocolo de Kyoto, comprometiéndose a limi-tar el aumento de las emisiones de estos gases.Posteriormente, el ministerio de medio ambientepresentó a la unión Europea el Plan Nacional de asignación de Emisiones, y en el año2005 comenzó a funcionar el denominado

    mercado de emisiones de Gases de Efectoinvernadero (GEi).

    una de las iniciativas tecnológicas que se llevan acabo para evitar la emisión y acumulación dedichos gases es el secuestro del CO2, definidoen el 2002 por las Naciones unidas como “la cap-tura y almacenamiento estable del CO2 emitidopor todos los sistemas energéticos”. El secuestrode Co2 es un proceso que comprende tres líneasprincipales de actividad, que son: i) la captura, ii)el transporte y iii) el almacenamiento del Co2.

    a pesar de la amplia aceptación del Protocolo deKyoto y el compromiso de reducir las emisiones anivel de 1990, sólo unos pocos países han reali-zado un esfuerzo singular para disminuir las emi-siones de Co2 a la atmósfera. El gobierno deEE.uu., a pesar de no haber firmado el Protocolode Kyoto, se ha mostrado particularmente activoen la investigación tanto de sistemas de capturacomo en la mejora de la tecnología de inyeccióny monitorización del Co2 inyectado. Le siguenaustralia, Noruega, reino unido y alemania.Todos estos países realizan grandes inversionesde acuerdo con el objetivo propuesto (figura 1).

    LAS OPCIONES DE ALMACENAMIENTO DE CO2

    Entre las diferentes opciones para evitar la emi-sión de Co2 se barajan diferentes medios: bioló-gicos, en el subsuelo oceánico, geológicos, etc.

    actualmente, la alternativa más aceptada interna-cionalmente para almacenar Co2 es elalmacenamiento Geológico Profundo en diferen-

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    aLmaCENamiENTo GEoLÓGiCoDE Co2 Como SoLuCiÓNParCiaL a LaS EmiSioNESDE GaSES aNTroPoGÉNiCoSuno de los fenómenos más estudiados en los últimos tiempos es el calentamiento global de latierra, y la mayoría de los estudios, apuntan a que el cambio climático se debe al aumento dela concentración de Co2 en la atmósfera. En este artículo, se abordan, concretamente, una delas iniciativas tecnológicas que se llevan a cabo para evitar la emisión y acumulación de dichosgases: el secuestro del Co2.

    Pablo Cienfuegos Suárezingeniero Técnico de minas- Geólogo e ingeniero geólogo.

    Escuela Técnica Superior de ingenieros de minas(universidad de oviedo)

    Figura 1.Localización de

    proyectos desecuestro de Co2actuales o en vías

    de realización(iPCC, 2005).

    mEDio amBiENTE

  • tes tipos de rocas y estructuras geológicas: sis-temas hidrogeológicos profundos con agua sala-da, capas de carbón y pizarras con gas, y yaci-mientos de gas y petróleo abandonados o enrecuperación asistida (Enhance Gas recovery –EGr- y Enhance oil recovery – Eor).

    Se define como almacenamiento de Co2 al hechode inyectar Co2 en unas formaciones geológicassedimentarias porosas y permeables, donde elCo2 estará en fase supercrítica (a profundidadesmayores de 800 m o más), de manera que per-manezca allí confinado de una manera seguradurante un largo periodo de tiempo (cientos amiles de años). El almacenamiento a profundida-des menores de 800 m es considerado poco via-ble, por estar el Co2 en fase gas, y, por tanto,ser poco manejable.

    Es deseable una profundidad de los sondeosentre 800 m y 2.000 m para que el Co2 esté enfase supercrítica, con mayor densidad y, de estemodo, una masa mayor de Co2 tiene más posibi-lidad de ser inyectada en cualquier espacio poro-so. Lo ideal es inyectarlo en forma líquida (fasesupercrítica) a una profundidad del orden de1.000 m donde la presión es superior a 7,4 mPa.Hay un incremento rápido de la densidad del Co2a profundidades entre 500 y 1.000 m debido a latemperatura y presión a esas profundidades, queson próximas al punto crítico de Co2 puro (31ºC,7,4 mPa). a partir de 1.000 m, la densidad per-manece constante.

    Según el iPCC1, el almacenamiento en estructurasgeológicas podría evitar que 2.500 Gt de Co2vayan a la atmósfera. Esto representa entre 1,5 y 8veces las necesidades de los próximos 100 años.

    Los almacenes geológicos por orden de capaci-dad e interés son (figura 2):

    • Formaciones porosas profundas, con agua salada

    • yacimientos de petróleo y gas; y

    • Capas de carbón profundas no minables.

    El origen de la idea del almacenamiento de Co2 enel subsuelo, como método para reducir las emisio-nes de Co2 a la atmósfera mientras se continúenutilizando combustibles fósiles, surgió en EE.uu. yCanadá en los años ‘70 y ‘80. Desde hace décadasse utiliza industrialmente la inyección profunda de

    Figura 3:Capacidad dealmacenamientode Co2 endiferentesalmacenes(EiZ, 2004)

    Figura 2:Diagrama defases del dióxidode carbono

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    mEDio amBiENTE

    1 iPCC.- intergovernmental Panel on Climate Change

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    residuos líquidos peligrosos, el almacenamiento degas y petróleo en acuíferos o yacimientos de gas ypetróleo agotados y salmueras de la explotación deyacimientos de petróleo.

    Evidentemente las opciones más ventajosas eco-nómicamente son aquellas que a la vez que sealmacena Co2 se recuperan hidrocarburos, esdecir, la recuperación secundaria de petróleo–Eor- (Weyburn, Canadá), de gas –EGr- (in-Salah, argelia) o la recuperación asistida de meta-no de capa de carbón –ECBm- (San Juan Basin ó

    appalaches, EE.uu.). En ambos casos con la produc-ción de gas y petróleo se produce una recuperaciónde la inversión más rápida además de la eliminacióndel Co2, pero es una solución limitada a un pequeñonúmero de casos y en volúmenes poco significativos.

    En España, las formaciones porosas salinas y lascapas de carbón son las únicas con posibilidades.

    El instituto Geológico y minero de España en unaevaluación preliminar realizada en 2005, ha cal-culado la capacidad de almacenamiento en 43 Gtde Co2 (supercrítico) en acuíferos salinos y 75 mtde Co2 (gas) en capas de carbón.

    El gran problema en España es el escaso conoci-miento del subsuelo como consecuencia de lapoca exploración de hidrocarburos realizada.Hubo una actividad intensa en los años sesenta,setenta y ochenta cuando se descubrieron losyacimientos en ayoluengo (Burgos), Gaviota(Bermeo), Jaca, amposta, Casablanca y sus saté-lites. La actividad exploratoria prácticamentecesó en la zona continental una vez que se vieronlas escasas posibilidades de los terrenos pretriá-sicos y, desde entonces, se realizan menos dediez sondeos al año.

    CARACTERÍSTICAS DE LAS FORMACIONESPARA EL ALMACENAMIENTO SUBTERRÁNEO

    La búsqueda de un almacén ideal para Co2 debeposeer las siguientes características:

    1) Profundidad: el techo de la formación almacénha de encontrarse a una profundidad suficientepara que el Co2 se encuentre en estado super-crítico (>750-800 m).

    2) Porosidad: los valores adecuados de porosidadson variables, así por ejemplo, en Sleipner(Noruega) oscila entre el 27 y 42%, mientras queen el proyecto de Weyburn, (EE.uu) se encuentraentre el 8 y el 20%.

    3) Permeabilidad: también en este caso existenun amplio rango de valores, por ejemplo entre1.000 y 3.000 mD, en Sleipner, y entre 1 y 50mD, en Weyburn.

    4) Espesor y continuidad lateral: la mayor posible.

    5) Sello: impermeable y con una potencia mínimade 10 m. En el proyecto de Sleipner la permeabi-lidad del sello oscila entre 0.00075 y 0.0015 mD.

    6) Salinidad mayor de 10 g/l para que el agua nosea apta para consumo humano (según la“underground Source of Drinking Water”).

    EL ALMACENAMIENTO EN SISTEMASHIDROGEOLÓGICOS PROFUNDOS

    La inyección en sistemas hidrogeológicos profun-dos (también denominados formaciones permea-bles profundas o bien acuíferos salinos) es unatecnología probada, similar a la utilizada en la explo-

    Figura 5: Potencialregional de almacena-miento Co2 en forma-

    ciones permeablesprofundas con aguasalada (iGmE 2006)

    Figura 4: opcionesde almacenamiento

    geológico viables(iPCC, 2006 y

    Co2 CrC)

    Figura 6:Capacidad de

    almacenamientode Co2 en fasegas (en mt) en

    capas de carbónno minables

    (iGmE, 2004)

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    ración y explotación de hidrocarburos, el almacena-miento de gas o la inyección de salmueras.

    Las formaciones adecuadas para almacenar Co2están en cuencas sedimentarias. Pero no todaslas cuencas sedimentarias son favorables para sualmacenamiento. Las cuencas sedimentarías másidóneas para el almacenamiento deben tener unespesor mínimo de 1.000 m, contener sistemashidrogeológicos con niveles acuíferos con aguade salinidad elevada y formaciones sello adecua-das. a priori son descartables las demasiadosuperficiales o en las que dominen rocas de bajapermeabilidad. Los niveles almacén pueden serdetríticos o carbonatados y deben de tener sobreellos formaciones arcillosas o rocas evaporíticas,como sal o anhidrita, con disposición de estruc-turas simples que actúen como sellos(“caprocks”).

    Existen dos tipos de sistemas hidrogeológicosadecuados para el almacenamiento:

    1. Los sistemas hidrogeológicos cerrados, sepresentan en trampas estratigráficas o estructu-rales en las que el fluido permanece estático y haestado atrapado durante tiempos geológicos. Esla forma más segura de atrapamiento de Co2 ysería un concepto de entrampamiento similar alos yacimientos de petróleo y gas.

    2. Los sistemas hidrogeológicos abiertos, sonsistemas hidrogeológicos profundos conectados

    con la superficie, que tienen niveles acuíferos convelocidad de flujo muy baja (del orden de cm/año)a lo largo de grandes distancias. El Co2 inyecta-do en estos sistemas hidrogeológicos inicialmen-te desplaza el agua de la formación salina2,migra hacia arriba y lateralmente. Como el con-tacto del agua con el Co2 se renueva continua-mente, el Co2 se disuelve en el agua original dela formación rocosa, reaccionando con la rocaalmacén, y el agua con el Co2 disuelto, al sermás densa, produce corrientes de convecciónque facilita el contacto con más agua de forma-ción y con la roca almacén.

    Estos almacenes, que en la naturaleza existen engran número, son los más apropiados, debido aque contienen grandes cantidades de agua consalinidad muy superior al agua dulce que loshacen totalmente inservibles para el consumohumano o regadío. En EE.uu., la agencia deProtección ambiental (EPa) estableció el límiteentre agua potable y no potable en 10 g/l para lasalinidad del agua de formación.

    EL ALMACENAMIENTO ENCAPAS DE CARBÓN

    La recuperación del metano de las capas de car-bón y su extracción desde superficie mediantesondeos se contempla como una fuente alternati-va de energía que disminuye la emisión de gasesde efecto invernadero, subproductos de la com-bustión, a la atmósfera (figura 3). asimismo, evita

    2También denominado en la literatura como “agua de formación”y se define como el agua retenida en los intersticios de una rocasedimentaria en la época en que ésta se formó.

    Figura 7:Esquema deexplotación demetano en capade carbónmediante lainyección de Co2

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    la emisión de metano (GEi) procedente de laexplotación de las minas de carbón, que produceun efecto 21 veces más potente que el Co2.

    Como consecuencia, en varias cuencas carboní-feras del mundo se investiga la inyección de Co2en capas de carbón con recuperación de metano(ECBm)3, de manera que se explota el metanocomo fuente de energía y el Co2 permanece cap-turado, mejorando la recuperación de metanohasta en un 70%, con lo que se consigue una ven-taja desde el punto de vista económico.

    Las ventajas que tiene este tipo de sistema geo-lógico de almacenamiento son las siguientes:

    • Técnicas: amplios conocimientos, identifica-ción y caracterización de las cuencas de car-bón en el mundo.

    • Económicas: mejora de la relacióncoste/beneficio ECBm; menores costes explo-ratorios al estar identificados las capas decarbón en las cuencas carboníferas; menorescostes de las instalaciones al poder emplearparte de las estructuras de las minas de car-bón existentes.

    Las desventajas son las siguientes:

    • Los problemas de inyección de Co2 y la dis-minución de la permeabilidad, característicapropia de los carbones.

    • La menor capacidad de almacenamiento quetienen este tipo de formaciones respecto aotras opciones como en sistemas hidrogeoló-gicos y Eor o EGr.

    En España no existen experiencias de explotaciónde CBm ni, por tanto, de ECBm. Existen cuencascarboníferas como la asturiana que han estado enexplotación durante muchos años y de cuyos car-bones hay un gran conocimiento. El contenido degas metano en el carbón oscila dentro del rangode 5 a 15 m3/t que es similar al contenido en lascapas de carbón explotadas con buenos exitos enlos apalaches (EE.uu.).

    CONCLUSIÓN

    En conclusión, el almacenamiento geológico deCo2 es una técnica que puede ayudar a disminuirla concentración de Co2 en la atmósfera y, portanto, mitigar el cambio climático. La experienciaadquirida a partir de EGr, Eor y ECBm, así comolos proyectos existentes de Sleipner (Noruega),Frio (EE.uu.), in Salah (argelia) y Nagaoka (Japón)

    indican que es posible inyectar y almacenar Co2de manera segura en formaciones geológicasbien caracterizadas.

    muchos científicos y técnicos creen que elsecuestro de Co2 puede jugar un papel clavedurante el tiempo de transición desde las tecno-logías convencionales de producción de electrici-dad y transporte propulsado por gas y petróleohacia las tecnologías donde predominen lasactuales energías alternativas, como solar y eóli-ca, o que usen como vectores energéticos a laelectricidad producida por el hidrógeno y otrasfuentes de energía limpias.•

    3 Enhanced Coalbed methane

    mEDio amBiENTE

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    rESPoNSaBiLiDaD SoCiaLCorPoraTiVa y ComPETiTiViDaD:uNa aPLiCaCiÓN a La SEGuriDaDy SaLuD EN EL TraBaJoEn los últimos años parece detectarse en la ciudadanía un interés por los problemas socialesque se traduce en la preferencia de los consumidores de productos con cuya compra contri-buyan a ayudar a algún colectivo necesitado (Gismera y Vaquero, 2000). Conscientes de ello,las empresas están incorporando diversas prácticas sociales que son empleadas como varia-ble de marketing para atraer y retener consumidores. así, responsabilidad social corporativa,sostenibilidad y excelencia son tres conceptos de creciente actualidad en el ámbito académi-co y empresarial. El objetivo de este artículo va a ser analizar la influencia de esta nueva varia-ble denominada “responsabilidad social corporativa” sobre la competitividad empresarial.

    Florentino Fernández Zapico, ingeniero Técnico de minas. Cuerpo de Técnicosde Prevención del instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo.

    Beatriz Fernández muñiz, Doctora en Ciencias Económicas. Profesoradel Área de organización de empresa de la universidad de oviedo.

    El Libro Verde de la unión Europea “Fomentarun marco europeo para la responsabilidadsocial de las empresas” refleja que lasempresas y organizaciones se encuentran enunos entornos cada vez más complejos, donde asu actividad principal deben añadir nuevas varia-bles: nuevas inquietudes y expectativas de losgrupos de interés, decisiones de inversión condi-cionadas por criterios sociales, preocupaciónsobre el deterioro medioambiental o transparen-cia en las actividades empresariales. Es por elloque la integración de planteamientos económi-cos, sociales y medioambientales se convierte enun elemento estratégico de la gestión de las orga-nizaciones.

    La responsabilidad social de la empresa o res-ponsabilidad social corporativa puede definirsecomo el conjunto de obligaciones y compromi-sos, legales y éticos, nacionales e internaciona-les, con los grupos de interés, que se derivan delos impactos que la actividad y operaciones delas organizaciones producen en el ámbito social,laboral, medioambiental y de los derechos huma-nos (Cuesta y Valor, 2003). así, la gestión de laresponsabilidad social supone el reconocimientoe integración en la gestión y operaciones de laorganización de las preocupaciones sociales,laborales, medioambientales y de respeto a losderechos humanos, que generen políticas, estra-tegias y procedimientos que satisfagan dichaspreocupaciones y configuren sus relaciones con

    sus interlocutores. Este comportamiento respon-sable contribuye a la creación de valor para losparticipantes de la organización. al accionista sele garantiza un uso adecuado de su capital y elcumplimiento de sus intereses; al cliente se leofrece precios competitivos y bienes y serviciosde calidad; a los proveedores se les paga preciosjustos por sus productos o servicios sin abusardel poder de mercado; a los empleados se lesproporciona una remuneración justa y beneficiossociales, formación, seguridad, estabilidad ymotivación. De modo que la responsabilidadsocial mejora la imagen de la empresa, mejora lapercepción de marca, fideliza clientes con el con-siguiente aumento del volumen de ventas.adicionalmente, se convierte en parte de los valo-res de la empresa, mejora el entorno de trabajo yla gestión de los recursos humanos, atrayendo abuenos candidatos, incrementando la lealtad y lamotivación, con el consiguiente aumento de laproductividad. Es por ello que la asunción de laresponsabilidad social conlleva una mejora de losresultados económicos a largo plazo, constitu-yendo un reto para las organizaciones del futuro.Sin embargo, existen escasos trabajos empíricosque relacionen la responsabilidad social con lacompetitividad de la empresa.

    Las áreas de contenido de la responsabilidadsocial se agrupan en dos grandes dimensiones:interna y externa. La dimensión interna se refierea aspectos relacionados con los empleados y con

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  • la gestión de los recursos naturales en la produc-ción, incluye, pues, la gestión de recursos huma-nos, la seguridad y salud en el lugar de trabajo, laadaptación al cambio y la gestión del impactoambiental. Por su parte, la dimensión externahace referencia a las comunidades locales,socios comerciales, proveedores, consumidores,autoridades públicas y oNGs. Este trabajo se cen-tra en el análisis de una variable de la dimensióninterna de la responsabilidad social, la seguridady salud en el trabajo, teniendo en cuenta que unaorganización tiene un comportamiento responsa-ble en esta materia cuando no sólo cumple lasnormas laborales establecidas, sino tambiéncuando busca modos complementarios de pro-mover la seguridad y salud de sus empleados.

    La siniestralidad laboral es una gran preocupa-ción social. En España se producen más de1.800.000 accidentes al año y una media de cua-tro trabajadores al día pierden la vida como con-secuencia del trabajo que realizan. Estas cifrasson indicativas del sufrimiento humano que sub-yace tras la siniestralidad laboral. Pero las conse-cuencias de la siniestralidad no se reducen, exclu-sivamente, a costes humanos, sino que tambiéngeneran consecuencias económicas muy impor-tantes, materializadas en pérdidas de productivi-dad, calidad, deterioro de la imagen de la empre-sa o del clima interno de trabajo. Por tanto, unambiente laboral más adecuado y más motivadorredundará en una mejora de la productividad en eltrabajo y en la creación de una imagen corporati-va más cercana a la sociedad (Gismera yVaquero, 2000). Sin embargo, existe escasa evi-dencia empírica al respecto. Con el objetivo deefectuar una primera aproximación de la inciden-cia de la gestión preventiva en los resultadosempresariales se plantea la realización del pre-sente trabajo, el cual se estructura en dos partes.En primer lugar, se efectúa una revisión teóricade la literatura existente en materia de prevenciónde riesgos con el fin de identificar “buenas prácti-cas” de gestión preventiva de la seguridad y saludlaboral, así como, detectar posibles efectos quelas mismas puedan tener en los resultadosempresariales. En segundo lugar, se contrasta laexistencia de algún tipo de relación entre las prác-ticas preventivas identificadas y los indicadoresde resultados.

    1. LA GESTIÓN DE LA SEGURIDADY SALUD EN EL TRABAJO

    Tradicionalmente, los esfuerzos de seguridad seconsideraban acciones aisladas y se centrabanen aspectos técnicos, dejando de lado los aspec-tos organizativos y humanos. Sin embargo, se

    observa que relativamente pocos accidentes, el10% aproximadamente, son consecuencia decondiciones físicas o mecánicas inseguras(Vredenburgh, 2002). muchos profesionales de laseguridad reconocen que existen otros factoresque influyen significativamente en la generaciónde accidentes (o’Toole, 2002). así, en los últimosaños, se está produciendo un cambio en el énfa-sis de la literatura existente sobre la seguridad.Se está empezando a considerar que los facto-res organizacionales y culturales desempeñan unpapel primordial en la generación de accidentes eincidentes en detrimento de los factores técnicos(reason, 1990).

    Con la finalidad de reducir la siniestralidad esnecesario un nuevo enfoque de la prevención,considerando todo tipo de riesgos existentes enel lugar de trabajo, lo que supone un tratamientoglobal y multidisciplinar, necesitando especialis-tas en las técnicas preventivas generales paraafrontar la diversidad de problemas. El modeloorganizativo que se plantea conduce hacia unaseguridad integrada en el proceso y en todoslos niveles jerárquicos de la empresa donde laseguridad sea considerada inseparable de losprocesos de fabricación y donde las funcionescorrespondientes a la seguridad se transfieran ala línea jerárquica (Cortés, 2000). De esta forma,asumen responsabilidades en tal campo, no sólola alta dirección, sino también, el representantede la dirección, el director financiero, el directorde recursos humanos, la jefatura de servicios,actividades y procesos e incluso los propios tra-bajadores. Esta integración de la prevención entodas las fases del trabajo requiere un cambio cul-tural y permite al trabajador obtener seguridad sintener que pensar en ella y sin advertir que la estállevando a cabo. Este nuevo modelo de gestión secaracteriza, además, por tratarse de una pre-vención participativa basada en los derechosde los trabajadores de información, formación yparticipación en los temas relacionados con suseguridad y de una prevención integral tratan-do de promover acciones que contribuyan a mejo-rar la calidad de vida laboral y la calidad del pro-ceso productivo o del producto acabado.

    Las organizaciones que desean alcanzar criteriosde “excelencia” en materia de seguridad y saluddeben estructurarse y funcionar de manera quepuedan poner en práctica, de forma efectiva, suspolíticas de seguridad y salud. Para ello, se ha decrear una cultura positiva que asegure una par-ticipación y un compromiso a todos los niveles,una comunicación eficaz que motive a los traba-jadores a desarrollar su función con seguridad,una promoción de aptitudes que permita a todos

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    los trabajadores hacer una contribución respon-sable al esfuerzo necesario en materia de seguri-dad y salud y, por último, un liderazgo visible yactivo de la dirección para desarrollar y mantenerel apoyo a una cultura de gestión compartida portodos los componentes de la organización.múltiples sectores están mostrando un crecienteinterés en el concepto de cultura de seguridadcomo medio para reducir los accidentes laboralesy mejorar las condiciones de trabajo (Cooper,2000). No obstante, existe una gran confusión

    alrededor de este concepto como consecuenciade fragmentados y no sistemáticos esfuerzosempíricos (Kennedy y Kirwan, 1995). La Comisiónde Seguridad y Salud del reino unido (HSC,1993), la define como “el producto de valores,actitudes, competencias y pautas de comporta-miento individuales y de grupo que determinan elcompromiso hacia la seguridad, así como el esti-lo y competitividad de los programas de seguri-dad y salud de la organización. Las organizacio-nes con una cultura de seguridad positiva secaracterizan por comunicaciones fundadas en laconfianza mutua, por percepciones compartidassobre la importancia de la seguridad y por la con-fianza en la eficacia de las medidas preventivas”.

    Se han efectuado diversos trabajos empíricoscon el fin de determinar las dimensiones que con-figuran la cultura preventiva. Dedobbeleer yBeland (1998) revisaron varios estudios y argu-mentan que existen dos factores que han sidocorrectamente reproducidos en los mismos.Estos factores son el compromiso de la direccióny la involucración de los trabajadores.adicionalmente, Vredenburgh (2002) destaca laimportancia de otras variables o prácticas de ges-tión, como la formación, la contratación, losincentivos a los trabajadores, la comunicación yfeedback, además de la participación y el apoyodirectivo. Guldenmund (2000) y Flin et al. (2000)incorporan además otra variable fundamental, losprocedimientos y planes de seguridad. En definiti-va, una gestión eficaz de la seguridad y salud hade integrar los elementos recogidos en la Figura

    1. Dichos elementos están interrelacionadosentre sí y deberán estar entrelazados con todo elsistema global de gestión de la organización(Health & Safety Executive, 1994).

    1.1. DESARROLLO DE LA POLÍTICA

    La política representa el compromiso de la orga-nización sobre la conservación y desarrollo de losrecursos físicos y humanos. Para ser eficaz debeser iniciada, desarrollada y apoyada por el más

    alto nivel de la dirección. Estapolítica debe estar alineada conotras políticas de recursos huma-nos que pretendan alcanzar elcompromiso y el bienestar de lostrabajadores. No debe preocupar-se sólo de la prevención de acci-dentes y enfermedades profesio-nales, sino también de la promo-ción de la salud, debido a que lostrabajadores constituyen el activomás importante de la empresa.De esta forma, en ausencia de

    peligros, los trabajadores están interesados einvolucrados en su trabajo y, por consiguiente, seincrementa la satisfacción de los mismos y sereduce el absentismo laboral. además, la políticaha de estar basada en la mejora continua y en elaprendizaje a partir de la experiencia.

    Para gestionar adecuadamente los riesgos esnecesario establecer un clima laboral que garan-tice la participación y contribución de los indivi-duos a todos los niveles de la empresa. Lo quesupone desarrollar una cultura en seguridad ysalud, donde los objetivos en dicha materia seanconsiderados por todos con la misma importan-cia que el resto de objetivos de la empresa, locual sólo se logrará a través del compromiso acti-vo, visible y continuo de la dirección de la empre-sa que se encargará de coordinar todos losesfuerzos. Por lo tanto, en una organización efi-caz, todos los miembros de la misma deben com-partir las percepciones y creencias de la direc-ción sobre la importancia de la seguridad y saludy la necesidad de alcanzar los objetivos de la polí-tica y, para ello, la dirección debe realizar unadeclaración escrita en la que se refleje claramen-te su actitud en materia de prevención. La políticadebe incluir compromisos como el establecimien-to de estrategias para implantarla e integrarla enla actividad general de la organización, el des-arrollo de estructuras organizativas y de una cul-tura que apoye el control de los riesgos y asegu-re la participación de los miembros de la organi-zación, la asignación de recursos y planificaciónadecuada para su implantación y la revisión y exa-

    Elementos clavepara alcanzar el

    éxito en la gestiónde la prevención

    (Figura 1)

    Fuente: Health &Safety Executive

    (1994)

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    men de las actividades preventivas al objeto deaprender de la experiencia.

    1.2. ORGANIZACIÓN DE LASEGURIDAD Y SALUD

    una vez implantado el clima preventivo en laempresa, debe organizarse la forma de llevar acabo la prevención, diseñando y estableciendolas responsabilidades y relaciones en el trabajo enmateria de prevención (Niederleytner et al.,1996). Para la adecuada puesta en marcha deuna política es fundamental la creación de una cul-tura de trabajo seguro y saludable, la cual se pro-mueve mediante el control efectivo dentro de laorganización, la cooperación entre todos los inte-grantes de la empresa, la comunicación fluida portoda la organización y la promoción de compe-tencias de los trabajadores (Heath & SafetyExecutive, 1994). El control representa la base dela cultura preventiva y se consigue asegurando elcompromiso de los trabajadores con unos objeti-vos claros de salud y seguridad. Los directivoshan de dar instrucciones claras y responsabilizar-se de las condiciones de trabajo, poniendo énfa-sis en el esfuerzo colectivo para desarrollar ymantener sistemas de control que eviten los acci-dentes. La cooperación, participación y compro-miso es fundamental en todos los niveles de laempresa para que el número de lesiones y enfer-medades se reduzcan. asimismo, esta participa-ción es una obligación contemplada en la legisla-ción española. a este respecto, la Ley 31/1995en el Capítulo V establece que el empresariodeberá consultar a los trabajadores la adopciónde decisiones relativas a la organización del tra-bajo, a la organización de las actividades de pre-vención y, en general, cualquier acción que puedatener efectos sustanciales sobre la seguridad ysalud de los mismos. asimismo, los trabajadorestienen el derecho a participar en la empresa entodas aquellas cuestiones relacionadas con suseguridad y salud.

    Por otra parte, es fundamental una comunicacióneficaz, considerando tanto la que entra en la orga-nización como la que fluye dentro y la que sale dela misma. La información del exterior resulta degran importancia para los responsables de la ela-boración de la política, de la planificación, de ladefinición de normas de procedimiento y de lamedida, auditoría y revisión de las actuacionesdebido a la necesidad de tener en cuenta las inno-vaciones legales, técnicas o innovaciones en lagestión de la prevención. La comunicación internaque transfiera el significado y propósito de la polí-tica, los valores y creencias de la misma, el com-promiso de la dirección, los procedimientos para

    su implantación, resulta esencial para poner enpráctica la política de seguridad con éxito. Porotra parte, es necesario informar a las autorida-des de los accidentes y enfermedades profesio-nales que se produzcan, lo que supone una salidade información al exterior de la empresa. En últi-mo lugar, todos los trabajadores deben tener lascompetencias necesarias para realizar sus fun-ciones de una forma segura y saludable, asimis-mo, los directivos deben estar informados sobrela legislación vigente y sobre cómo gestionar deuna forma eficaz la seguridad y salud de los tra-bajadores. En ocasiones es necesario asesora-miento profesional en la materia, el cual se puedeobtener bien de consultores externos o Serviciosde Prevención ajenos o bien de consultores inter-nos o Servicios de Prevención Propios.

    1.3. PLANIFICACIÓN DE LA SEGURIDAD Y SALUD

    Para que la gestión de la prevención resulte eficazdebe realizarse una planificación de la puesta enpráctica de las políticas. una planificación ade-cuada ha de partir de una identificación de losriesgos existentes de la empresa que, posterior-mente, serán evaluados siempre que no se hayanpodido eliminar. La planificación de la prevenciónno debe realizarse únicamente con el fin de alcan-zar éxito en la gestión de la prevención, sino quees una obligación recogida en la legislación espa-ñola. a este respecto, la Ley 31/1995 en su artí-culo 15 referente a los principios de la acción pre-ventiva recoge que el empresario deberá “planifi-car la prevención, buscando un conjunto coheren-te que integre en ella la técnica, la organizacióndel trabajo, las condiciones de trabajo, las rela-ciones sociales y la influencia de los factoresambientales en el trabajo”. asimismo, en el artí-culo 16 se establece que “la acción preventiva enla empresa se planificará por el empresario a par-tir de una evaluación inicial de los riesgos para laseguridad y la salud de los trabajadores que seráactualizada cuando cambien las condiciones detrabajo”. La evaluación de riesgos se puede defi-nir como el proceso dirigido a estimar la magni-tud de aquellos riesgos que no hayan podido evi-tarse. a partir de la información proporcionadapor dicha evaluación se decidirá la necesidad ono de tomar medidas preventivas para neutralizartales riesgos, es decir, en función de la magnituddel riesgo se emitirá el correspondiente juicioacerca de si el riesgo analizado resulta tolerable,o por el contrario, deberán adoptarse medidasencaminadas a su eliminación o reducción. Deesta forma, las medidas correctoras aparecencomo el resultado de dicha técnica tendente alcontrol de los riesgos. Estas actuaciones correc-

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    toras han de integrarse en la planificación a tra-vés de su incorporación en un Plan de Prevención.Para la correcta identificación de los riesgos serequiere un total conocimiento de los puestos detrabajo de la empresa y es fundamental la partici-pación de los trabajadores. En síntesis, la planifi-cación pretende establecer un método organiza-do para conseguir un objetivo determinado,estableciendo plazos y medios. De este modo,la planificación de la prevención pretendeimplantar las acciones necesarias para un efi-caz control de los riesgos. a tal objeto, se hade determinar cómo y cuándo hacerla y quiéndebe hacerla, objetivos y metas a conseguir,asignación de prioridades y plazos para losobjetivos y metas, asignación de recursos ymedios, teniendo en cuenta las responsabilida-des definidas y la coordinación necesaria conotros sistemas de gestión propios de la empre-sa, y seguimiento periódico de la consecuciónde objetivos, mediante los canales de informa-ción adecuados e indicadores representativos.

    1.3. MEDICIÓN DE LAS ACTUACIONES

    Para conseguir mejoras en las actividades pre-ventivas y conseguir éxito en la gestión de laseguridad y salud se han de efectuar medicio-nes, contrastando las actuaciones con los pla-nes predeterminados. De este modo, las medi-ciones permiten valorar el grado de implanta-ción y la eficacia de las medidas tomadas conel objeto de identificar las posibles correccio-nes. Por otra parte, el control de las actividadesmuestra el compromiso de la dirección con losobjetivos generales en seguridad y salud yconstituye un elemento fundamental para eldesarrollo de una cultura preventiva. Dicho con-trol se orienta en una doble vertiente: controlarel cumplimiento de los requisitos del sistema degestión y verificar que los resultados obtenidoscumplen el objetivo de evitar o minimizar ries-gos. De este modo, se hacen necesarios dostipos de sistemas de control. Por un lado, senecesita un control activo donde se compruebeel grado de cumplimiento de las normas de pro-cedimiento establecidas y el grado de consecu-ción de los objetivos planteados con el fin demedir el éxito de las medidas preventivas yreforzar los logros positivos. Por otro lado, senecesita un control reactivo con la intención decontrolar los accidentes, enfermedades labora-les e incidentes que se puedan producir en laempresa mediante la identificación, notificacióny registro de los mismos. a partir de los datosregistrados se puede verificar o valorar la ade-cuación de los procedimientos existentes eincluso la del propio sistema de prevención.

    1.4. REVISIÓN Y AUDITORÍA DE LAS ACTUACIONES

    La última etapa en el ciclo de la gestión de la pre-vención en la empresa es auditar y revisar lasactuaciones llevadas a cabo en la materia. Laauditoría y revisión constituyen el “circuito de rea-limentación” necesario para permitir a la empresamantener y desarrollar sus capacidades para lagestión de los riesgos laborales. Las auditoríaspueden ser internas, desarrolladas por personalde la organización independiente de la parte ins-peccionada, o externas. La función principal delas mismas es valorar el nivel de conformidad delos elementos que componen el sistema de ges-tión de la prevención y la eficacia de las accionescorrectoras en caso de no conformidad. La revi-sión supone formular juicios acerca de lo adecua-do de la actuación en materia de prevención ytomar decisiones sobre la naturaleza y momentode llevar a cabo las acciones necesarias paracorregir las deficiencias que se hayan detectado.La eficacia de la revisión depende de las compe-tencias de las personas implicadas en la misma,por lo que deben recibir formación específica enla realización de dichas revisiones. Para comple-mentar la realización de valoraciones internas delos logros alcanzados, se pueden hacer compa-raciones con las actuaciones desarrolladas porotras empresas (“benchmarking”). De esta forma,se pueden comparar los índices de accidentalidadde la empresa con los de otras empresas del sec-tor que utilicen procesos productivos similares ycomparar las técnicas y prácticas de gestión conotras organizaciones de cualquier sector, al obje-to de obtener nuevas ideas sobre la gestión deproblemas similares.

    realizar campañas de seguridad e implantar unsistema de gestión como el descrito requiere eltotal convencimiento de la gerencia, de modo queasuma, financie y obligue a participar a todos losniveles de su organización. En este sentido lasrazones de tipo económico son las más adecua-das para sensibilizar a la alta dirección (Salvado,1991). Por esta razón, a continuación se analizanlas consecuencias de la siniestralidad para laempresa, así como las oportunidades de benefi-cio que genera una adecuada gestión preventiva.

    2 CONSECUENCIAS ECONÓMICAS DE LOSACCIDENTES DE TRABAJO

    Las nuevas técnicas de organización y direcciónde empresas tienen establecido como uno de susobjetivos prioritarios la eliminación de ineficien-cias, tratando de dosificar al máximo las energías

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    y servicios empleados con el fin de lograr lasupervivencia y competitividad de la empresa(Palomo, 1997). Los sistemas de producciónindustrial se gestionan mediante técnicas que difí-cilmente permiten la disfuncionalidad de hombresy equipos, por lo que se ha de proveer a estossistemas de las técnicas y medios necesarios quepermitan la continuidad de los mismos(manzanedo et al., 1996). La creciente compe-tencia conlleva para las empresas la necesidadde reducir costes en el sistema productivo, favo-reciendo el desarrollo de mecanismos para elimi-nar ineficiencias, entre las que se encuentran lascarencias en seguridad, higiene y condiciones detrabajo (Bestratén, 1996). así, pues, el logro de lacompetitividad, objeto clave para la supervivenciade las empresas en una economía abierta, comola que caracteriza a la unión Europea, requiereespecial énfasis en la atención de los recursoshumanos y de las condiciones de trabajo. De estemodo, además de razones éticas y legales, exis-ten fuertes razones económicas para reducir lasiniestralidad en el entorno laboral e implantar unsistema de gestión preventiva como el anterior-mente descrito (Health & Safety Executive, 1994;Niederleytner et al., 1996).

    Los accidentes laborales generan un importantedescenso de la productividad de la empresacomo consecuencia de incrementos en los costesde producción, puesto que suponen pérdidas defactores productivos y deficiencias en su utiliza-ción, al mismo tiempo que se reduce la cantidady calidad de la producción obtenida, dando lugara una pérdida del potencial productivo. No obs-tante, este no es el único efecto que los acciden-tes causan en las empresas, sino que además sedeterioran las relaciones internas de la empresa yprovocan un impacto muy negativo sobre su ima-gen pública. Todo ello supone una pérdida en lacompetitividad de la empresa con la consiguientepérdida de posición en el mercado. asimismo, lle-var a cabo actividades preventivas genera benefi-cios adicionales al mejorar el nivel tecnológico dela empresa y el grado de satisfacción de los tra-bajadores. Las inversiones preventivas puedenoriginar cambios en la naturaleza de la tecnologíade proceso y producción que supongan benefi-cios materializados en ahorros de materiales o deenergía, reduciendo, de esta forma, los costesreales de dicha inversión. La importancia de losavances tecnológicos fue tratada por ashford(1999), según el cual la nueva normativa sobreprevención de riesgos sirve de estímulo para eldesarrollo de una nueva tecnología que permita alas empresas su cumplimiento a menor coste. Sinembargo, este efecto de innovación tecnológicano suele tenerse en cuenta en los cálculos de

    costes y beneficios de la prevención. asimismo,unas condiciones de trabajo inseguras afectannegativamente al mantenimiento de un adecuadoambiente de trabajo. Las relaciones internas sedeterioran dando lugar a un incremento de la con-flictividad (huelgas, sabotajes y atentados), a unapérdida de identificación del trabajador con lospropietarios y la dirección, a un abandono de laorganización por parte del personal y a una difi-cultad de contratación. Todo ello generará un des-censo de la productividad de los trabajadores,pero, además, da lugar a una situación de tensióne incomodidad que supone un riesgo profesionalmás (stress, angustia, depresión). Por último, laaccidentalidad tiene una gran influencia sobre laimagen que tiene la sociedad de una empresa,produciéndose un grave deterioro en las relacio-nes públicas. asimismo, el accidente puede sercausa de retrasos en los plazos de entrega de lospedidos, ocasionando una doble repercusión: porun lado, pérdidas económicas derivadas del retra-so y, por otro, el deterioro de la reputación de lamisma ante sus clientes, que puede traducirse enuna disminución de su cartera de pedidos.

    En suma, la posición en el mercado es muyimportante debido a la existencia de mercadoscompetitivos cada vez más fuertes estando lasempresas obligadas, para mantener su posiciónen el mismo, a atender óptimamente a sudemanda, producir más, con mejor calidad, amejor precio, en plazos más cortos. Todasestas variables están afectadas negativamentepor los accidentes laborales, en consecuencia,si se quiere alcanzar una determinada posiciónen el mercado hay que evitar que se produzcala materialización de los mismos mediante unadecuado y coordinado sistema de gestión dela seguridad y salud laboral.

    3 METODOLOGÍA

    Con el objetivo de evaluar el planteamiento con-ceptual formulado, es decir, ofrecer evidenciaacerca de cómo una buena y eficaz gestión pre-ventiva de riesgos laborales incide de forma posi-tiva en los resultados empresariales, se ha reali-zado un estudio empírico considerando empresasespañolas de los sectores servicios, construccióne industria con un tamaño superior a diez trabaja-dores. Para la recogida de la información se hadiseñado un cuestionario, que habrá de ser cum-plimentado por el responsable de prevención o ensu defecto por el director general. Con el fin decomprobar la viabilidad de la misma, se sometióa la opinión de varios doctores en dirección deempresas, así como, a la opinión de expertos enprevención, en concreto, técnicos superiores en

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    prevención del instituto asturiano de Prevenciónde riesgos Laborales con dilatada experiencia enel tema y entrevistas personales con los respon-sables de prevención de diversas empresas. Elcuestionario definitivo fue remitido vía correo pos-tal, correo electrónico y fax, a las empresasseleccionadas. Como resultado del envío se obtu-vieron un total de 124 encuestas válidas, lo quesupone un índice de respuesta del 10% y un errormuestral del 8,75% para un nivel de confianza del95%.

    El cuestionario incluye, por un lado, variables rela-cionadas con distintas prácticas de gestión pre-ventiva de las empresas, que recogen la impor-tancia concedida por la empresa a los recursoshumanos, la importancia concedida a la preven-ción, la existencia de políticas de prevención, elcompromiso de la dirección, la involucración delos trabajadores, las actividades de formación einformación a los trabajadores, así como las acti-vidades de planificación y control de las actuacio-nes. Para ello, se emplearon 68 ítemes plantea-dos en escala Likert 1-5, solicitando al encuesta-do que valore su grado de acuerdo con cada unade las afirmaciones que se le indican (1 = totaldesacuerdo; 5 = total acuerdo). adicionalmente,se recoge información relativa al grado de satis-facción de la empresa con un conjunto de indica-dores de resultados, tanto relacionados con laseguridad como económicos: daños a los traba-jadores, daños materiales, calidad del producto,productividad, satisfacción de los trabajadores,satisfacción de clientes, reputación, innovación,rentabilidad financiera, crecimiento de las ventas,crecimiento de la cuota de mercado, crecimientode los beneficios y margen de beneficio sobreventas. Las medidas de resultados descritas fue-ron estimadas de forma subjetiva, a través de unaescala Likert de 5 posiciones. Se ha optado poresta alternativa debido a la negativa de las orga-nizaciones a proporcionar datos objetivos deresultados y a la existencia de un buen número deevidencias empíricas en las que se pone de mani-

    fiesto la correlación positivamente significativaentre las estimaciones de resultados objetivas ysubjetivas (Hansen y Wernefelt, 1989).

    Para contrastar el planteamiento formulado eneste trabajo acerca de la relación entre unacorrecta gestión preventiva y los resultadosempresariales, inicialmente se realizó una clasifi-cación de las empresas españolas en función delas prácticas preventivas que éstas desarrollan.En concreto, se identificaron 2 clusters a partirdel criterio de parada1 (Hair et al., 1999) y delanálisis de la varianza2. Los resultados del crite-rio de parada, utilizando el método de Ward, sepueden observar en la Tabla1. La razón de rete-ner dos clusters obedece al fuerte descenso quesufre la variabilidad intra grupo al pasar de la solu-ción de un cluster a la solución de dos clusters.Este descenso es mucho menos apreciable cuan-do se retienen tres clusters en lugar de dos.además, para esta solución los grupos formadoscuentan con un número de miembros muy pareci-do (64, 53), con lo que se evita la aparición degrupos unitarios o demasiado pequeños.adicionalmente, efectuando un análisis de lavarianza para los dos clusters identificados sehan observado diferencias significativas en 66 delas 68 variables consideradas (ver Tabla 2).

    La validez de la agrupación realizada a través delanálisis cluster se puede comprobar mediante unanálisis discriminante, para lo cual se reagrupalos individuos en función de un método externo eindependiente del anteriormente utilizado, esdecir, se trata de clasificar los individuos dentrode grupos previamente definidos. Su finalidad esexplicar la pertenencia de cada caso de la mues-tra a uno u otro grupo, en función de las variablesde su perfil, para comprobar su pertenencia o noal grupo preestablecido, a la vez que se cuantifi-ca el peso de cada una de ellas en la discrimina-ción. Cuanto mayor sea la coincidencia entreambas clasificaciones más validez tendrá la reali-zada a través del cluster. Como variable depen-

    Número declusters a retener

    según el criteriode parada.TABLA 1

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  • Tipología deempresas.TABLA 2

    19

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    diente se toma el grupo de pertenencia de cadaempresa en el análisis cluster y como variablesindependientes las relativas a la gestión preventi-va. El análisis discriminante clasifica correcta-mente, de igual forma que el cluster, el 100% delas empresas, lo que permite concluir que la taxo-nomía generada por el análisis cluster no respon-de a motivos estadísticos.

    Los tipos de empresas se pueden observar en laTabla 2. Para su interpretación basta observar losvalores adoptados por cada variable en los cen-troides de los distintos conglomerados. a esterespecto, conviene señalar que cuanto mayor esun valor, más importante es esa práctica para lasempresas que componen el conglomerado, dadala naturaleza de la escala que mide las valoracio-nes de los distintos ítemes. así, se observa que elgrupo o conglomerado 1 presenta mayor valor entodas las variables significativas, lo que permitesostener que las empresas que integran estecluster se caracterizan por una actitud más posi-tiva, así como, un mayor compromiso hacia laprevención y, en general, por una gestión preven-tiva, más desarrollada en todos sus aspectos.una vez definida la taxonomía de las empresas de

    la muestra se pretende determinar en qué medidael desarrollo de adecuadas prácticas preventivaspermite establecer diferencias en los resultadosempresariales. Para ello se utilizó estadística noparamétrica puesto que se desconoce la distribu-ción de la variable no pudiendo afirmar que seajuste a la normalidad. El contraste no paramétri-co no exige supuestos acerca de la familia de dis-tribuciones a que pertenece la población. En con-creto, se efectuó una prueba de homogeneidadpara observar si las dos muestras provienen de lamisma población mediante el test de mann-Whitney-Wilcoxon, que permite contrastar la hipo-tesis nula H0 de homogeneidad mediante la com-paración de dos muestras independientes, nonecesariamente del mismo tamaño. Este test ana-liza, por tanto, la existencia de diferencias signifi-cativas entre las empresas de los grupos identifi-cados en base a su gestión preventiva y los indi-cadores de resultados previamente expuestos.una desviación significativa de la u indica que H0debe ser rechazada.

    Tabla 3 recoge las medias de los resultados obte-nidos para cada uno de los grupos, así como, elestadístico de u- mann-Whitney y su significativi-

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    SEGuriDaDy SaLuD

    dad. En ella, se puede observar que las empresascon una gestión preventiva más desarrollada, esdecir, las pertenecientes al conglomerado 1obtienen resultados significativamente superioresen la totalidad de variables de rendimiento consi-deradas. Por tanto, este resultado contribuye afundamentar la importancia de la prevención deriesgos laborales como fuente de ventajas com-petitivas.

    4 CONCLUSIONES

    El objetivo del presente trabajo ha sido analizar lainfluencia de una variable de la responsabilidadsocial corporativa sobre la competitividad empre-sarial. En concreto, hemos analizado la relaciónentre una gestión preventiva eficaz, planificada,coordinada, participativa e integrada en la gestiónde la empresa y un conjunto de variables de resul-tados empresariales. Los resultados nos permiteafirmar que lejos de la creencia generalizada deque las inversiones preventivas son un coste adi-cional para las empresas sin oportunidad debeneficio, si éstas son implantadas junto con unaadecuada gestión de la seguridad y salud laboral,pueden tener influencias positivas en los resulta-dos obtenidos por la empresa, de tal forma queno sólo contribuye a evitar el daño en las perso-nas, sino que también puede ayudar al desarrolloeconómico de la empresa, que de no implantarlaspodría perder las oportunidades de beneficio queellas representan.

    El éxito a largo plazo de toda organización depen-de de los conocimientos, habilidades, talento, cre-atividad innovadora y, especialmente, de la moti-

    vación de sus empleados. Es por ello que un com-promiso visible con la mejora de sus condicionesde trabajo, con su desarrollo profesional y con subienestar personal demostrará que realmente seles valora como personas y que se considera sucontribución en la empresa. involucrar a losempleados permitirá obtener ideas, compromisoy lealtad de los mismos, mejorando la eficiencia yeficacia de la organización. La seguridad y saluden el trabajo además de respetar los derechosfundamentales de los trabajadores, se constituyecomo un elemento esencial para el logro de lacalidad de los productos y de los procesos, per-mitiendo alcanzar la llamada excelencia empresa-rial y afianzar la competitividad de la empresa. asíque las empresas españolas, si desean seguirsiendo competitivas, se encuentran en la obliga-ción de reducir costes y eliminar ineficiencias,entre las que se encuentran las carencias deseguridad, higiene y condiciones de trabajo. Eneste sentido, cualquier sistema que permita redu-cir costes será interesante y valioso, incluido unPlan de Prevención integrado en la empresa. Paraalcanzar la calidad total en la empresa deben opti-mizarse los recursos disponibles y la mejor formade optimizarlos es mejorando las condiciones detrabajo y la calidad de vida laboral. Es por ello queesta mejora debe plantearse como uno de losobjetivos de las organizaciones que planifican amedio y largo plazo.

    Por consiguiente, este trabajo ofrece evidenciaempírica de la incidencia positiva de la gestiónpreventiva en los resultados empresariales, cons-tituyendo una fuente de motivación para alentar alas empresas a implantar un sistema de gestión

    Test de u de mann-Whitney.TABLA 3

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    de la prevención de riesgos laborales y adoptarun comportamiento responsable en la materia,pudiendo acogerse a las oportunidades de bene-ficio que representan, provocando, así, el des-arrollo económico de la empresa. indica, portanto, que gestión preventiva y resultados econó-micos no sólo son compatibles sino que puedeconvertirse en una importante fuente de ventajascompetitivas para las empresas.

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    NOTAS

    1 aunque existen diversos criterios de parada, seha optado por contemplar el proporcionado por elpaquete informático SPSS, basado en el análisisde las disminuciones de la variabilidad intra grupoa medida que va aumentando el número de clus-ters en la solución final.

    2 El análisis de la varianza se ha realizado a par-tir de los resultados ofrecidos por el análisis clus-ter no jerárquico en su modalidad de K-medias,que mide si son significativas las diferencias entreclusters respecto a las variables de agrupaciónutilizadas. Pretende minimizar la varianza resi-dual, es decir, la suma de distancias al cuadradodesde los casos a la media del cluster al que vana ser asignados, o lo que es lo mismo, la distan-cia euclídea al cuadrado. •

    SEGuriDaDy SaLuD

  • 1. INTRODUCCIÓN

    El sector de la minería a cielo abierto no es ajeno a lasnuevas tendencias, como por ejemplo son los nuevossistemas de control de producción en fábrica, siste-mas de evaluación de la conformidad para marcadoCE de los áridos, implantación de sistemas de gestiónmedioambiental, sistemas de calidad y por supuestosistemas de gestión de la prevención de riesgos labo-rales, siguiendo los mismos principios generales degestión de la calidad y siendo este un sistema de ges-tión que requiere una formación permanente de todoel personal que interviene en la implantación delmismo en la explotación.

    Parece importante por tanto, subrayar una reflexiónconjunta que puede servir a todos en la mejora de lasactuaciones en materia preventiva: en primer lugar sehace constar que no es suficiente con impartir unoscursos o entregar unas cartillas sobre riesgos, paracumplir con la normativa vigente, además debemosasegurarnos de que esos conocimientos han sidorealmente adquiridos por los trabajadores, y ensegundo lugar tenemos que reflexionar sobre elcoste – calidad – eficacia de las acciones preventivasque están realizando las empresas, las entidades deformación, etc.

    2. OBJETIVO DEL ESTUDIO

    El objetivo principal de dicho estudio es la mejora delconocimiento de las necesidades en materia de for-mación en el ámbito de la minería de superficie enandalucía, y en especial en las materias con influenciaen Prevención de riesgos Laborales.

    Como objetivos específicos, cabe citar:

    • Conocer los niveles de formación con que cuen-tan los trabajadores y los empresarios del sec-tor en relación con sus responsabilidades.

    24

    ESTuDio DE NECESiDaDES ENmaTEria DE FormaCiÓN EN ELSECTor DE La miNErÍa DESuPErFiCiE EN aNDaLuCÍaEl presente artículo pretende, de forma resumida, presentar los resultados del estudio“Necesidades en materia de formación en el sector de la minería de superficie en andalucía”,promovido por la Dirección General de industria, Energía y minas de la Consejería deinnovación, Ciencia y Empresa de la Junta de andalucía, en donde se han analizado 524 cues-tionarios de “trabajadores del sector extractivo a cielo abierto” y 88 de “DirectoresFacultativos”, con el principal objetivo de conocer cuales son las necesidades formativas en elámbito de este sector, tanto de parte de los trabajadores como de los empresarios. Tambiénhan intervenido en el mismo, expertos, técnicos y empresarios, así como instituciones de laadministración, colegios profesionales, etc.

    Los resultados del presente estudio ponen de manifiesto principalmente la necesidad en mate-ria de formación que tienen los trabajadores expuestos a riesgos laborales en sus puestos detrabajo, ya que hasta ahora los datos, para el sector minero, han sido “ciertamente preocu-pantes”, habiendo pasado ya algunos años desde que la Ley de Prevención de riesgosLaborales entrara en vigor, así como necesidades en otras materias formativas, como sonmedioambiente, calidad, etc.

    Fº. Javier González márquez, asesor Técnico - Departamento de minas(Delegación Provincial CiCE – Sevilla)

    iNVESTiGaCiÓN

  • • Profundizar en el conocimiento de las materiasformativas más demandadas en el ámbito deeste sector, tanto de parte de los trabajadorescomo de los empresarios.

    • Crear segmentos en el sector, homogéneos enlo relativo a sus necesidades de formación.

    • analizar los métodos más frecuentementeempleados por parte de los trabajadores delsector, hasta la actualidad, para el acceso a for-mación relacionada con su trabajo y el nivel desatisfacción con ellos.

    • Conocer las posibilidades en materia de hora-rios y metodología con la finalidad de facilitar elacceso a la formación por parte de los trabaja-dores.

    • analizar experiencias y criterios de actuación enrelación con la formación de trabajadores conmandos intermedios del sector.

    • Conocer las previsiones a medio plazo sobreincorporación de nuevas tecnologías en el sec-tor y las necesidades en materia de formaciónque esta puede generar.

    • analizar la incidencia del uso de las nuevas tec-nologías de la información y la comunicación enel ámbito de este sector y las necesidades deformación relacionadas con el fomento del usode estas tecnologías

    3. JUSTIFICACIÓN DEL ESTUDIO

    La Ley 31/1995 de 8 de noviembre sobrePrevención de riesgos Laborales y el reglamentode los Servicios de Prevención (real Decreto39/1997 de 17 de enero), vinieron a delimitar elcuerpo básico de garantías y responsabilidadesen la protección de la salud de las personas en eldesempeño de su trabajo.

    De esta forma, se estableció el marco legislativoen el que los agentes sociales deben desarrollarla labor de protección de los trabajadores a tra-vés de la negociación colectiva y la elaboraciónde sucesivas normas reglamentarias que deter-minen los aspectos más concretos y técnicos delas medidas preventivas.

    Han pasado ya algunos años desde entonces ypuede ser un buen momento para empezar a rea-lizar un balance de la situación en términos deniveles de siniestralidad, salud laboral y grado decumplimiento de los contenidos de la Ley y de losdesarrollos reglamentarios.

    Es cierto que una transformación laboral, social ycultural tan importante como la que se persiguecon estas modificaciones legislativas no puedeofrecer resultados inmediatos, pero sí se debenapuntar tendencias que permitan la evaluación deltrabajo realizado hasta el momento.

    Lógicamente habrá que dedicar mayores esfuer-zos en aquellos sectores de actividad en los queexisten numerosos riesgos laborales y la necesi-dad de aplicación de la Ley es más urgente.

    Este es el caso de las explotaciones mineras acielo abierto, un sector que sufre altos nivelesde siniestralidad laboral y en el que resulta peren-toria la adaptación de los puestos de trabajo a loscontenidos de los desarrollos reglamentarios deri-vados de la Ley de Prevención.

    En la exposición de los motivos que llevaron a pro-mulgar la Ley, encontramos continuas referenciasal “propósito de fomentar una auténtica culturapreventiva”, mediante la promoción de la mejorade la educación en dicha materia”.

    Del mismo, modo, se alude a “la información y laformación de los trabajadores dirigidas a unmejor conocimiento tanto del alcance real de losriesgos derivados del trabajo como de la formade prevenirlos y evitarlos, de manera adaptada alas peculiaridades de cada centro de trabajo, alas características de las personas que en él des-arrollan la prestación laboral y a la actividad con-cretan que realizan”.

    Esta orientación de fondo es la que inspira unestudio como el que se justifica en este docu-mento. Entendiendo que, como se señala en elartículo 12 de la Ley de Prevención, es un princi-pio básico la “participación de empresarios y tra-bajadores a través de las organizaciones empre-sariales y sindicales más representativas” en lamejora de las condiciones de trabajo y la protec-ción de la seguridad y salud de los trabajadores,se pretende determinar las necesidades de for-mación y principalmente en materia de preven-

    25

    iNVESTiGaCiÓN

  • 26

    ción de riesgos laborales que los trabajadores tie-nen en el desarrollo de su labor profesional.

    Pero la Ley va más allá, porque también determi-na responsabilidades. En el artículo 14 se señalaque, sin bien “los trabajadores tienen derecho auna protección eficaz en materia de seguridad ysalud en el trabajo”, el deber de proteger al tra-bajador corre a cargo del empresario a través dediferentes tipos de medidas: evaluación de ries-gos laborales, información, consulta y participa-ción y formación de los trabajadores.

    Por ello, en el artículo 18 se indica que “(...) elempresario adoptará las medidas adecuadaspara que los trabajadores reciban todas las infor-maciones necesarias en relación con los riesgospara la seguridad y la salud de los trabajadoresen el trabajo, tanto aquellos que afecten a laempresa en su conjunto como a cada tipo depuesto de trabajo o función (...).

    y de este modo, “el empresario deberá garantizarque cada trabajador reciba una formación teóricay práctica, suficiente y adecuada, en materia pre-ventiva (...).

    Quizás sea este artículo 19 el más claro al res-pecto, ya que no sólo alude a la formación comoherramienta básica de protección, sino que esbo-za las características de la misma:

    “la formación deberá estar centrada específica-mente en el puesto de trabajo o función de cadatrabajador, adaptarse a la evolución de los ries-gos y a la aparición de otros nuevos y repetirseperiódicamente, si fuera necesario”.

    El artículo 12.8 del real Decreto Legislativo5/2000 de 4 de agosto por el que se apruebael texto refundido de la Ley de infracciones ySanciones en el orden Social, por el que sederoga el artículo 47.8 de la Ley dePrevención de riesgos Laborales, estableceque “El incumplimiento de las obligaciones enmateria de formación e información suficientey adecuada a los trabajadores acerca de losriesgos del puesto de trabajo susceptibles deprovocar daños para la seguridad y salud ysobre las medidas preventivas aplicables”, esuna falta grave.

    En este sentido, una primera fase de evaluación delcumplimiento de la Ley debería centrarse en la basesobre la que construir una verdadera cultura de la pre-vención: el conocimiento real que los trabajadores tie-nen de los riesgos a los que están expuestos, algunosaños ya después de su promulgación.

    Este planteamiento no es gratuito, ya que tantoen ella como en el Plan de Seguridad minera seestablece la obligatoriedad de que cada trabaja-dor reciba una formación teórica y práctica ade-cuada en materia preventiva que considere losriesgos específicos de su trabajo.

    El conocimiento de los objetivos, contenidos ymedidas preventivas a desarrollar no debe serpatrimonio único de administraciones, empresa-rios y delegados de prevención, sino que esimprescindible que los trabajadores dispongan delas nociones suficientes para colaborar activa-mente en la mejora de la acción preventiva.

    Ese es el reto y el primero de los objetivos de unapolítica preventiva realista.

    Por ello, se debe abordar sin más demora unaprimera evaluación de la situación actual alrespecto.

    La consecución de dicho objetivo, permitirá deter-minar si el camino emprendido hasta el momentolleva la orientación adecuada, requiere nuevasmedidas informativas y formativas, mayoresrecursos técnicos y humanos, etc... lo que hacede este estudio una importante herramienta demedición e intervención en la realidad de lasexplotaciones mineras.

    Con independencia a lo que a este respecto digala Ley de Prevención de riesgos Laborales, debe-mos recordar lo que se especifica en el Estatutodel minero con relación a la formación de los tra-bajadores mineros:

    artículo 16. Estatuto del minero.

    Los trabajadores mineros tendrán derecho a unaadecuada formación profesional que se orientaráprioritariamente a:

    • Facilitar la inserción en la vida profesional.

    • Conservar y perfeccionar los conocimientosfacilitando la promoción interna y favoreciendola mejora de la productividad en la empresa y enel conjunto del sector.

    • La promoción de nuevos empleos y la adapta-ción a la evolución tecnológica.

    y después las ins t rucc iones Técn icasComplementarias que desarrollan el reglamentoGeneral de Normas Básicas de Seguridad mineradicen con respecto a las explotaciones a cieloabierto:iNVESTiGaCiÓN

  • 27

    Punto 3. i.T.C. 07.1.01 “Seguridad del personal”.

    “Toda persona que se incorpore como trabajador auna explotación minera a cielo abierto debe ser ins-truida previamente sobre las normas generales deseguridad y las especificas de su puesto de trabajo.”

    En el caso de las explotaciones mineras a cieloabierto, en lo que se refiere a maquinaria utilizaday camiones volquete (dumpers) esta obligación deformación se establece en la i.T.C. 07.1.03”Desarrollo de labores”.

    “El manejo de maquinaria minera móvil sólo podrá serrealizado por operadores mayores de 18 años, quehayan recibido la instrucción necesaria con un períodode prácticas, conozcan las prestaciones, manteni-miento normal y limitaciones de la máquina y seandebidamente autorizados por la autoridad mineracompetente. Estas autorizaciones no tendrán carác-ter general, sino para cada tipo de máquina y deberánser renovadas cada cinco años, y no excluyen la nece-sidad del permiso de conducción que pueda ser exi-gible en su caso.”

    Por último, el punto 5 de la Parte a del anexo delreal Decreto 1389/1997 de 5 de septiembre porel que se aprueban las disposiciones mínimasdestinadas a proteger la seguridad y la salud delos trabajadores en las actividades mineras esta-blece que: “Los trabajadores deberán recibir lainformación, las instrucciones, la formación y elreciclaje necesarios para preservar su seguridady su salud. El empresario deberá asegurarse deque los trabajadores reciban instrucciones com-prensibles, a fin de no comprometer su seguridady salud ni las de los otros trabajadores.”

    2 Realización de estudio mediante encuesta.Metodología

    Se ha realizado el presente estudio mediante lametodología de encuesta, mediante un muestreoestratificado por bloques a nivel de provincias, deactividad productiva y de puestos de trabajo operfiles profesionales, a través del que se anali-zaron las variables objeto del presente estudio yse conocieron las necesidades formativas en estesector productivo.

    El trabajo, partiendo de la base de un conoci-miento previo de los estratos y de las variables aestudiar, realizado en las fases anteriores, se desarrolló en las siguientes fases:

    • Elaboración del cuestionario de la encuesta.

    • Pretest del cuestionario.

    • Corrección del cuestionario.

    • Determinación del número de encuestas nece-sarias.

    • Formación de los encuestadores.

    • realización de entrevistas, en persona ytelefónicas.

    • informatización de cuestionarios de encuesta.

    • análisis estadístico de los datos. (paquete infor-mático, tipo SPSS.)

    4.1. DIMENSIONES DE LA INVESTIGACIÓN Y ANÁLISIS

    4.1.1. Población de estudio

    La población está compuesta por las explota-ciones activas, correspondientes al Sector dela minería de superficie (a cielo abierto), per-tenecientes a todo el territorio de laComunidad autónoma de andalucía. La pobla-ción de explotaciones activas se ha obtenidode la Estadística minera de España elaboradopor el ministerio de industria, Turismo yComercio.

    4.1.2. Tamaño de la muestra

    Se han realizado un total de 612 entrevistas. Deéstas, 88 se han dirigido a técnicos titulados deminas y 524 a trabajadores.

    4.1.3. Procedimiento de muestreo

    La selección de las explotaciones activas seha realizado de forma aleatoria. En cada unade las explotaciones seleccionadas se ha apli-cado, mediante entrevista personal o telefóni-ca, el “cuestionario de técnico facultativo” altécnico titulado de minas y el “cuestionario detrabajador” a todos los trabajadores de lamisma, que de forma voluntaria han queridoparticipar en el presente estudio

    4.1.4. Cuestionarios

    Se han diseñado dos cuestionarios:

    • Cuestionario “Cuestionario de directores facul-tativos y concesionarios”: Dirigido a los directo-res facultativos de las explotaciones.

    • Cuestionario “Cuestionario de trabajador”:Dirigido a cualquier otro trabajador iNVESTiGaCiÓN

  • 28

    De esta manera se puede recoger informaciónsobre:

    • Necesidades formativas percibidas por losdirectores facultativos con respecto a símismos.

    • Necesidades formativas percibidas por losdirectores facultativos con respecto a sus tra-bajadores