El Pensamiento Del Che Sobre La Moral y La Tica Del Funcionario Pblico

EL PENSAMIENTO DEL CHESOBRE LA MORAL Y LA TICADEL FUNCIONARIO PBLICO

Conferencia ofrecida por el doctor Orlando Borrego

en el auditorio del Ministerio del Poder Popular

para Economa y Finanzas

Invitado por la Asociacin Civil de Trabajadores

del Ministerio para Economa y Finanzas

ASOCIMEF, presidida por la seora Miriam Dummett

Ministerio del Poder Popular para Economa y Finanzas

Oficina de Comunicaciones y Relaciones Pblicas

Coordinacin de Publicaciones

Av. Urdaneta esquina de Carmelitas edificio sede Ministerio del Poder Popular

para Economa y Finanzas, piso 3, ala este.

www.mppf.gob.ve

REPBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELAMinisterio del Poder Popular para Economa y Finanzas

Al Rodrguez AraqueMinistro del Poder Popular para Economa y Finanzas

Vivian AlvaradoDirectora General de la Secretara del Despacho

Vladimir MirDirector Asistente del Despacho

Alejandro AndradeViceministro de Gestin Financiera

Yeny Figueredo FriasViceministra de Regulacin y Control

Gustavo HernndezViceministro de Financiamiento para el Desarrollo Endgeno

Nelly TrujilloDirectora General de Comunicaciones y Relaciones Pblicas

Arnaldo TavoCoordinador de Publicaciones

Daily Romero ArzolayDiseo y Diagramacin

Agosto 2009

Depsito legal

lf 66320093202620

Directorio

Cuadernos Punto de Vista tiene por objetivo publicardiscursos, presentaciones, ponencias, investigaciones, forosy estudios, entre otros materiales, elaborados por elMinisterio del Poder Popular para Economa y Finanzaso sus dependencias adscritas, como un aporte alacrecentamiento del acervo cultural del pas.

El pensamiento del Che sobre la moral y la tica del funcionario pblico

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ndice

Presentacin 11

Ejercicio revolucionario 26

Permanente superacin 29

Lo fundamental de la moral y tica del Che 37

Comunicacin interpersonal: 39tica y moral revolucionaria

El chisme mina a las instituciones 40

La ostentacin en el cargo pblico 43El carro devuelto

Lealtad y apego a la verdad 45

A los yanquis ni un tantito as! 47

Ciclo de preguntas y respuestas 48

EL PENSAMIENTO DEL CHE SOBRE LA MORAL Y LA TICA DEL FUNCIONARIO PBLICO


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Presentacin

Compaeros y compaeras.

Honorable seor Orlando Borrego Daz, economistay asesor de la Ctedra Che Guevara de la Universidad deLa Habana, Repblica de Cuba. Rosalba Aristimuo, vicemi-nistra de Regulacin y Control del Ministerio del PoderPopular para Economa y Finanzas. Directores generales ydirectores de lnea. Empleados en general.

Como todos los mircoles, continuamos con estascharlas. Se trata de reflexionar sobre distintos temas quetienen que ver no solamente con la actitud frente al trabajo,sino tambin con los principios que nos sirven de gua ennuestra existencia.

Hoy tenemos como invitado al doctor Borregoautor de tres libros y de varios artculos donde se toca eltema econmicos sobre la vida del Comandante ErnestoChe Guevara, hombre con una vasta experiencia en elesfuerzo por construir un nuevo tipo de sociedad, esfuerzoque comparti con el Che (el hombre de carne y hueso,quien con su conducta traz un rumbo verdaderamenteejemplar para todos nuestros pueblos).

Por haber compartido esperanzas, luchas, angustias,esfuerzos, y tambin logros, junto al Che, el doctor Borregopudo conocer directamente tanto el pensamiento como laconducta ante la vida y la manera de hacer las cosas deaquel hombre, cuyos principios rectores fueron el amor yel trabajo.

El economista Borrego Daz colabora con la Oficinadel Programa Martiano y es asesor del Ministro de

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Transporte de Cuba, se encuentras con nosotros parahablarnos de su experiencia y para contarnos acerca delpensamiento del Che y su visin sobre la tica de quienesasumen responsabilidades en la administracin de los asun-tos pblicos y de la colectividad humana. Sin ms prembu-lo les dejo al doctor Orlando Borrego, compaero y amigode la hermana Cuba.

Miriam Dummet de RodrguezPresidenta de la Asociacin de Damas

del Ministerio del Poder Popular para Economa y Finanzas


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EL PENSAMIENTO DEL CHE SOBRE LA MORALY LA TICA DEL FUNCIONARIO PBLICO

Caracas, 24 de septiembre de 2008

Buenos das para todos

Un saludo a la doctora Rosalba Aristimuo, viceministra deRegulacin y Control del Ministerio del Poder Popular paraEconoma y Finanzas.

Saludos a la querida compaera Miriam Dummet, presiden-ta de la Asociacin de Damas del Ministerio del PoderPopular para Economa y Finanzas.

Queridos compaeros y compaeras:

El Ministro de Economa y Finanzas, el compaeroAl Rodrguez, entraable amigo, me solicit que viniera aeste encuentro con ustedes para hablarles de un tema sobreel cual acordamos el siguiente ttulo: El Pensamiento delChe sobre la Moral y la tica del Funcionario Pblico.

Muchos autores han escrito sobre la Administracin Pblicaen trminos tcnicos, y, sobre todo, se cuenta con el acervode los pensadores clsicos acerca de la AdministracinPblica en el mundo capitalista. Pero ac hablaremos sobrelas ideas de alguien que nos leg una valiosa experienciaprctica como ejemplo de estadista en un pas que seesfuerza por construir una sociedad socialista. Se trata delPensamiento del Che sobre la Moral y tica del FuncionarioPblico.

Con el permiso de los presentes debo hacer algunasaclaratorias previas. Yo prefera no darle categora deconferencia a este encuentro fraternal con ustedes, ya que

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cuando se habla de conferencia muchas personas piensanque se trata de una exposicin de alto rigor acadmico, yconsidero que para preparar una conferencia que tratesobre el pensamiento del Che, la moral y la tica del funcio-nario pblico, se requiere de suficiente tiempo paraelaborarla con el rigor necesario.

En Argentina, hace como cuatro aos, impart una conferen-cia sobre este tema. Pero, ahora no tena la menor idea deque me vera compulsado a dictar esta conferencia cuandoslo dispona de 48 horas para prepararla, y yo, en tonode broma, le deca a Al, bueno, me han hecho otraemboscada. Ustedes saben que Al Rodrguez fueguerrillero?

Al fue guerrillero y me hizo una primera emboscada en LaHabana, el ao pasado, se la voy a contar. l escribi unlibro excelente, les recomiendo que se lo lean, su ttulo es:Servir al Pueblo. Esa obra la public hace unos aos yluego la actualiz al calor de la Revolucin Bolivariana enuna segunda edicin que fue presentada en La Habana elao pasado.

Un buen da Al Rodrguez me llam a mi despacho, y medijo: Podemos vernos unos minutos. Sal enseguida parasu oficina en la embajada de Venezuela en Cuba y me dijo:Tengo que presentar el libro Servir al Pueblo, en su segun-da edicin, en el Memorial Jos Mart un lugar muysolemne que hay en La Habana y un compaerovenezolano me prometi presentarlo y acaba de informar-me que no puede venir; necesito que t me presentes el libropasado maana. Es decir, una fraternal emboscadaguerrillera, a rengln seguido puso el libro en mis manos ylisto. Ustedes saben lo que es presentar un libro conapenas 24 horas de anticipacin!. Pero cumpl la misin,


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Saben por qu? Pues por disciplina guerrillera. Tenemoscierta relacin en esos menesteres. Acept el reto y estuvetoda una noche leyndome y disfrutando el libro que tienems de 300 pginas.

Les confieso que pas la noche completa sin dormir.Logramos la presentacin, no s cmo qued realmente,por lo menos a l le gust. Ahora, me hizo igual, me dijo:puede ser que tengas poco tiempo. Con el agravante queno traje algunos documentos que necesitaba para prepararla exposicin. Pero con igual disciplina guerrillera anocheprepar la estructura de las ideas, que quiero expresarle austedes en el da de hoy, y adems lo hago con muchogusto y el mayor entusiasmo; primero por tratarse de untema que considero de suma importancia y segundo, portratarse de este colectivo del Ministerio de Economa yFinanzas, del que es Ministro en estos momentos, nuestrolegendario, histrico y entraable compaero, AlRodrguez, a quien admiro como dirigente y ejemplarrevolucionario dentro de la Revolucin Bolivariana.

As que me tienen ustedes a su disposicin, trabajadores delMinisterio de Economa y Finanzas.

Como ustedes podrn observar ya cargo con el peso devarios aos como funcionario pblico que ha pasado porvarios cargos dentro de la Revolucin Cubana. O sea, quepodemos afirmar que en cierta medida nos hemos converti-do en burcratas ortodoxos, pero eso s, tambin perennesenemigos del burocratismo. No importa ser un burcrataortodoxo siempre y cuando mantengamos una luchapermanente y a muerte contra el burocratismo y otros malesque a veces abundan en la funcin pblica. Les confiesoque me encuentro entre los que hemos luchado casi 50 aoscontra los males que surgen en la Administracin Pblica.

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Nosotros llevamos 50 aos rumbo al socialismo, porque nocrean que hemos logrado llegar al socialismo, la gentedice: Cuba Socialista y somos socialistas. A m me encan-ta la frase salvadora que Chvez descubri rumbo alsocialismo, porque yo, por lo menos en Cuba, digo queestamos todava rumbo al socialismo y que nos falta muchopor consolidar totalmente nuestro objetivo socialista.

Igual que algunos presumidos, no s si ustedes los han ododecir, yo soy comunista, y yo me ro. Hace poco uncompaero, que fue nombrado en un nuevo cargo lleg ami oficina y me dijo: He asumido esta tarea porque yo soycomunista. Y le dije Desde cundo eres comunista? Yonunca te conoca como eso, dime, qu es eso? Porque sercomunista es una cosa muy seria, atrevida.

Bueno, yo dira que ser un buen socialista, ser un revolucio-nario consecuente, ya es algo bien difcil de alcanzar,entonces, vamos a aspirar a ser verdaderos socialistas overdaderos revolucionarios, me parece ms consecuente.Comunista yo conozco pocos. Uno puede ser militantesocialista yo soy militante y fundador del PartidoComunista de Cuba, pero no soy comunista todava mefalta mucho, y ac los militantes del PSUV, militantes, perono quiere decir que todava hayan alcanzado la categorade socialistas.

Al Che Guevara yo s lo consideraba un comunista, no esque fuera un hombre absolutamente perfecto era un serhumano igual a cualquier otro, pero tena una serie decualidades como ningn otro; tuve el privilegio de conocer-lo muy de cerca. Yo creo que alguien que se haga elpropsito de ser como el Che puede alcanzar ese estadio:ser realmente superior en trminos sociales, en trminoshumanos. Bueno, hablando un poquito de esta feliz embos-


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cada, quiero darles algunos antecedentes del porqu estoyaqu y de otros temas que se relacionan con el tema de laConferencia. No quiero hablar de m pero, fatalmente, ydesde el punto de vista histrico, tengo que relacionaralgunos hechos en los que, estuve involucrado por trabajarbajo las rdenes del Che.

Pertenec a la Columna 8 Ciro Redondo bajo las rdenesdel Comandante Guevara, por eso deca que en esesentido Al y yo ramos colegas.

Cuando Fidel ataca el Cuartel Moncada se convierte en ellder ms admirado por todos los jvenes en Cuba yespecialmente por todos los estudiantes.

Yo era estudiante, y los estudiantes en Cuba, histricamen-te, han llevado una lucha bastante larga contra la opresin,la tirana y todas las injusticias. En mi pueblo, en laProvincia de Holgun, me incorpor a la lucha revoluciona-ria y cuando Fidel llega a Cuba, cuando el desembarco delGranma, y empieza a luchar en la Sierra Maestra, inmedia-tamente mi sueo era subir a la Sierra Maestra pero noprecisamente en la columna del Che, aunque ya l se habaempezado a convertir en un personaje famoso por suvalenta personal y otras cualidades de mando.

Haba un segundo guerrillero, muy joven, que lleg a ser,incluso, subordinado del Che Guevara, yo no s si ustedeshan odo hablar de l, se llamaba Camilo Cienfuegos. Paranosotros los estudiantes la figura ms atractiva, despus deFidel en la Sierra Maestra, era Camilo Cienfuegos; porqu? Porque ya se conoca del legendario Camilo elvaliente, el artista de la guerrilla, el ms audaz, el queinventaba operaciones guerrilleras extraordinarias, y,adems, el Camilo de la sonrisa en los labios y de toda la

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serie de caractersticas personales: simptico, cubano, muycriollo; todos queramos ir con Camilo. De tal manera quecuando las condiciones en la ciudad se pusieron muyconflictivas, yo perteneca a un grupo de accin y lasituacin se me puso muy difcil, tena que subir a lamontaa, ya muy avanzada la campaa guerrillera,entonces mi decisin era incorporarme a la tropa de CamiloCienfuegos.

Cuando se me posibilita la comunicacin para incorporar-me a la guerrilla me dicen los compaeros dirigentes delmovimiento que haran la conexin, que no poda ir conCamilo porque ya estaba en la avanzada para las provin-cias occidentales y rodeado por el Ejrcito enemigo, quetena que ir con el Che Guevara.

Y yo dije: Con el argentino no voy. La versin que tena-mos en la ciudad, en mi pueblo, era que el Che se caracte-rizaba por ser muy culto, y ese hecho me haca tener temor.Yo apenas cursaba bachillerato, estudiaba contabilidad enuna escuela de comercio, y dije: Qu va, con ese hombretan culto yo no me incorporo a la guerrilla. Segundo, queera muy exigente. Tercero, que era sumamente austero yque no admita ningn tipo de desliz, desde el punto devista tico, y yo dije: uff! Qu va. Pero nosotros tambinramos muy disciplinados en el movimiento revolucionario yme dijeron: Mira, pues tienes que ir, no hay opcin, conCamilo vas despus. Est bien, pues, con el Che. Y allme fui con el Che.

Cuando llegu a la montaa despus de una larga camina-ta, los pies en bastante mal estado, y en horas de la noche,me recibe un compaero guerrillero que despus seconvirti en mi gran amigo, muri combatiendo en Boliviacon el Che, Olo Pantoja, un capitn del Ejrcito Rebelde


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me atendi, y yo de lo ms contento, y me dijo: Dentro deunos minutos llega aqu el Comandante Guevara, al lugardonde estbamos, una casita de campo muy pequea en lamontaa. A los pocos minutos sentimos un Jeep, comocamioneta pequea, del que se bajaron dos personajes:uno ms o menos bien vestido o decentemente vestido, conuna gorrita de esas tipo rusa (chapka, como se les llama),ms o menos presentable, con su uniforme del ejrcito rebel-de; y otro muy mal vestido y desarreglado, con una chaque-ta de vinilo, Cada uno con una estrella en la frente lo nicoque tenan era una estrellita, nada ms, dije: los dos soncomandantes, el Comandante Che Guevara es este, el queestaba bien vestido. Se sientan a la mesa y veo que el otrose dirige al mal vestido y le llama Che. Digo, ay!, Y estees el Che? Estaba sentado a mi lado y me lo presenta OloPantoja, que tambin estaba a la mesa, dice: MireComandante, aqu el compaero Orlando Borrego queacaba de incorporarse a la guerrilla, es de Holgun.

Fjense qu encuentro ms casual, pero ms particular. Sedirige hacia m y me pregunta:

Y t, qu haces en la ciudad, all en Holgun. Yo, estudiante.Ah!, ustedes los estudiantitos son bastantes malos

combatientes.

Ese fue el saludo del Che dirigindose a m, y aquello mepuso arrecho (bravo), como dicen ustedes. Yo tengo undefecto desde muchacho que lo he tratado de superar almximo creo que lo he superado en un 80%, pero mefalta el 20%, y no s si de aqu a que muera o bienanciano lo supere y es que cuando me tratan duro respon-do; porque si yo me quedo callado despus me siento muymal y eso me hace dao para la salud, me estreso, me sube

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la presin arterial. Cuando se es as resulta mejor contestar,y sueltas lo que tienes dentro porque si no, te mueres. Losmdicos me han dicho que soy hipertenso. Recomiendo alque tenga problema de tensin arterial que no se contenga,suelte lo que piense, si se traga las cosas, le da el infartodel miocardio. Entonces le conteste al Che rpidamente.

Oiga Comandante Esa es una forma de recibir aun compaero aqu en la montaa? Eso de que el estudian-te no es buen combatiente, prubelo, demustrelo, pero nome ataque.

Cambi de rostro, y me dijo: No te enojes, no te enojes

Pero ah no par la cosa. Se tranquiliza aquello y comieronalgo que haban servido, por cierto, muy malo, casi no sepoda comer. Los dos comandantes empezaron a conversary a or noticias del Gobierno de la tirana en una radio. Yocontinuaba all casi ignorado. Yo tena un vicio muy malo,que ya lo he dejado recientemente, y es que desde quetena 15 aos fumaba cigarrillos norteamericanos, la marcaera Lucky Strike, no s si todava existe. Trabajaba en unalmacn y cuando venan los vendedores me dejabansiempre un paquete de diez cajetillas de regalo, porque yoles pagaba la factura, y aprend a fumar el dichoso cigarri-llo norteamericano, que todava me gusta muchsimo.

Yo me haba llevado para la montaa cuatro paquetes pen-sando: All no hay cigarrillos norteamericanos. Saqu unoy lo encend delante del Che que al sentir el humito me dijo:

Ayayay! Estudiante, burguesito, y fumando ciga-rros americanos. All fue la otra andanada. Lo mir y ledije:

Si me gustan mucho esos cigarrillos y adems sonbuensimos. Saben la respuesta?:


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Bueno, la verdad es que los obreros americanosproducen cosas buenas. As me dijo.

Y ah termin el encuentro ese con el Che.

Voy a saltar ms adelante. Despus del triunfo y de lasrelaciones ms amplias con l, para que vean una caracte-rstica dentro de la moral y tica de este hombre. Cuandoya era Ministro, cuando regresaba de un viaje al exteriorpor esa poca en los aviones repartan, a modo depropaganda, unas cajitas de cigarrillos. Los ms viejos aquse acordarn que traan cinco cigarrillos dentro, normal-mente eran Kent norteamericanos el Che llegaba de regre-so al Ministerio y me deca: Vaya, para que satisfagas tusgustos burgueses, me traa los cigarrillos de regalo. Porqueas era el Che, tambin humano, afectuoso.

Ese fue el encuentro con el Che en la Sierra Maestra.Termin la guerra, no voy a hacer historia porque me demo-ro mucho. Da la casualidad que por haberle dicho que yosaba contabilidad (antes de irme para La Sierra habaterminado prcticamente la contabilidad profesional en unaescuela de comercio, no universitaria, pero tena un poco deexperiencia), cuando llegamos al Regimiento de La Cabaaen la Habana, haba que sustituir a un general de la tiranaque era el jefe econmico del regimiento en aquel tiempo;un buen da me llama y me dice: Oye Borrego, me handicho que tu sabes contabilidad, le dije, un poco,Comandante, yo he trabajado un poco en esa actividad.Me informa: Maana vas a sustituir al General tal y haztecargo de la Junta Econmica de La Cabaa. Y al dasiguiente fui a ocupar la jefatura de la Junta EconmicaMilitar del Regimiento de La Cabaa. Por ah aparece esaetapa, en el currculum que se ley cuando me presentaronaqu.

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As empez mi vida de trabajo con el Che Guevara comofuncionario, vamos a llamarle como funcionario pblico. EnLa Cabaa, como un militar, yo llevaba toda la parteeconmica-financiera y todos los negocios de las tiendas yotras instalaciones del Regimiento. Aquel regimiento erauno de los ms grandes de Cuba. All haba ms de tres milsoldados. Haba restaurantes, almacenes, tiendas, club deoficiales, etc. Todo eso tena que manejarlo, y all empiezoa conocer al Che de verdad, a diario, como funcionariopblico, dira yo, como administrador, el Che al frente deuna actividad econmica importante. Aqu conozco unrasgo interesante que demuestra las caractersticas de estehombre y cmo yo empiezo a percibir sus valores, su moral,su tica, su forma de dirigir.

Yo no s si a ustedes les agrada que segn avance en estaexposicin les narre algunas ancdotas, ya que un temacomo este sin ejemplos concretos no se puede explicar conobjetividad. Los aburrira con una explicacin terica sobremoral y tica. Hay tericos que explican esta materia muybien, y a lo mejor no tiene ninguna moral y ninguna tica,y pueden hablar mucho de eso. El Che, en la prctica,como funcionario pblico s fue consecuente con sus ideas,con lo que estudiaba y con lo que exiga como deber de unfuncionario pblico.

Todos los pagos que se hacan en el regimiento de LaCabaa se hacan con cheques de firma mancomunada;firmaba el Che, con su rasgo ese de Che; y al lado firma-ba el jefe de la Junta Econmica. Todava conservo unpaquete de cheques pagados de recuerdo. Nosotrosheredamos muchas deudas por pagar del ejrcito anterior.Ese era un regimiento que compraba mucho y tenamos quepagar las deudas anteriores al triunfo de la revolucin.


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La tica y moral de la Revolucin Cubana tiene raceshistricas importantsimas, no slo de la lucha en la SierraMaestra, sino tambin de la lucha histrica de Cuba. Desdelas guerras de Independencia hay referentes muy importan-tes. Venezuela tambin tiene races importantes de moral ytica. En los libros que me he ledo sobre Simn Bolvarestn presentes una moral y una tica bolivariana. Y hayque hablar de Simn Rodrguez, entre otros precursores dela moral y la tica de este pas. Conozco algunos pasesque no tienen prceres, porque histricamente no sepropici o porque no lo tuvieron por determinadas razoneshistricas.

Si recorremos Amrica Latina, observamos que enArgentina est un San Martn, en Uruguay un Jos GervasioArtigas, en Mxico un Benito Jurez y un Emiliano Zapata,los nicaragenses tienen un Sandino. En Cuba, una isla quefue muy disputada, fue la ltima nacin en obtener suindependencia de los espaoles, stos la tenan como unpreciado enclave. La lucha fue muy dura en Cuba; tenemosa Jos Mart (ejemplo de moral y tica), a un Maceo (elGeneral que ha pasado a la historia como el Titn deBronce), a un Mximo Gmez (dominicano, fue el jefe delEjrcito Libertador), y hay otra lista larga de hombres ymujeres excepcionales en cuanto a moral y tica revolucio-naria. Por algo Fidel, cuando el asalto al Cuartel Moncada,en el juicio que le hicieron, en su autodefensa declar queel autor intelectual de aquel asalto era Jos Mart.

En la Sierra Maestra haba una gran influencia de todasesas races, y el Che era alguien que defendi esa posicintica y moral. Cuando tomamos La Cabaa esa influenciatambin lleg ah, Por qu? Porque venamos de una luchamuy seria en contra de un gobierno corrupto, la corrupcinadministrativa era generalizada en aquel gobierno despti-

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co. Y en La Cabaa se gastaba mucho dinero para mante-ner aquel regimiento.

En aquel regimiento heredamos muchas deudas del gobier-no anterior y tambin deudas de la guerra revolucionariaque tambin haba que cancelar, como se dice enVenezuela. Pues se dio un caso con uno de nuestrosacreedores que paso a contarles:

Un buen da lleg un comerciante a mi oficina, era alguiena quien le debamos como 40 mil dlares, y l, al parecer,pens: Llegaron los guerrilleros, y stos no me van apagar. Inmediatamente se me apost en la oficina, no salade all pidindome que le pagara su cuenta con urgencia.Y no se pagaba una cuenta del Ejrcito de la tirana sinrealizar una minuciosa revisin.

Tena la experiencia de haber trabajado con un importantecomerciante gallego, que fue mi primer jefe, que revisabatodo al detalle. Yo no pagaba una factura a menos queestuviera bien revisada: Y all en La Cabaa les deca a lossubalternos: Aqu se paga solamente lo que est realmentebien justificado, no podemos cancelar una cuenta injustifica-da, no sea que vengan algunos a aprovecharse del triunforevolucionario para presentar cuentas falsas.

Me demor un mes o dos para pagarle. En un momentolleg aquel comerciante, y me pidi una entrevista, sabenqu hizo? Me ofreci 20% de descuento, de regalo, si yo lepagaba la cuenta. Yo que en aquella etapa reaccionabams como campesino que otra cosa, bot al comerciante deall, lo insult y le dije: Venga maana a buscar su chequepara pagarle, pero no quiero verlo ms aqu. Nadie vienea sobornarme. Usted cree que yo soy un bandido como losde antes que reciban comisiones y se robaban el dinero del


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pueblo?. Pero fjense qu cosa curiosa, le cuento al Che loque me haba sucedido con el comerciante: a este tipo loinsult y lo bot, y l me miraba, se rea, y yo me pregun-taba por qu se reir?. Y me dice: bueno, la verdad quehas dado una buena muestra de austeridad y de moralrevolucionaria, pero tambin es verdad que como comer-ciante eres la ruina. Y le dije: Cmo? Me respondi: sifueras un empresario capitalista te arruinaras en nada, yle contest: Por qu?. Porque le has regalado el 20% dela factura a ese bandido, a ese que te quera sobornar. Yqu?, le respond, entonces me contest: no es que loaceptaras para ti, no, porque ya te hubiera metido preso,pero lo hubieses descontado para la Revolucin y laReforma Agraria, as que como comerciante eres muymalo, me dijo. Fjense que moral y tica pero tambin quetalento administrativo. Ya hoy, si algn comerciante meofrece un descuento importante, se lo acepto para ingresar-lo inmediatamente al presupuesto del Estado, que pertene-ce al pueblo, pero no para echrmelo en el bolsillo.

Ah comenc a observar las primeras muestras de lo que esexpresin en la prctica de honradez administrativa, perotambin de inteligencia para manejar las cosas. Despus elChe continu su carrera administrativa al frente de impor-tantes cargos en el Estado Cubano, como Presidente en elBanco Nacional y Ministro de Industrias y en esos lugarescontinu practicando sus principios de moral y ticaadministrativa.

Cuando Fidel decidi designar al Che como Presidente delBanco Nacional expres lo siguiente: y el Che fue allprecisamente a fortalecer nuestro esfuerzo para defendernuestra economa y defender nuestras reservas el Che,para que nadie se llame a engao, el Che no est ah parahacer ninguna barbaridad. El Che est ah igual que

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cuando lo mandamos a Las Villas a evitar que pasaran lastropas enemigas hacia Oriente, lo he mandado al BancoNacional a impedir que se vayan las divisas, y para que elparque que tenemos de divisas, pues se invierta correcta-mente

O sea, un organismo como el Banco Nacional de Cubarequera que se nombrara al frente del mismo a un compa-ero con la moral y la tica del Che Guevara.

Ejercicio revolucionario

La Moral y tica revolucionaria no puede darse en un ejr-cito parasitario, deca el Che. Al mes de estar el Regimientode La Cabaa, me dijo: Esto era un ejrcito de parsitos,el ejrcito de Batista. Vivan a costa de gastar el dinero delpueblo, del presupuesto del Estado, de maltratar al pueblo,pero no de producir nada. Tenemos que tratar de produciraqu todo lo que podamos. Ve pensando que produccionespodemos organizar para no depender totalmente del presu-puesto estatal. Bscate expertos que te expliquen lo que seconsume aqu, en La Cabaa, que adems es un regimien-to que gasta mucho, analiza qu podemos producirnosotros de ahora en adelante para no ser unos parsitos,de ah surgieron un conjunto pequeas fbricas militares.

La primera que instalamos fue una fbrica de productosenlatados de conservas de frutas a la que le pusimos pornombre La Cabaa Libre, que incluso como tena exceden-tes de produccin se comercializaban fuera del regimiento.Igualmente, montamos una fbrica de tabacos (habanos),otra de embutidos, hasta una carnicera, y as empezamosa ahorrar recursos para el Estado, porque la tica y la moralde un funcionario es tambin ser austero en el gastopblico, nos deca el Che. Por ejemplo, aqu en Venezuela,


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si el Ministerio de Infraestructura, que maneja el transportede este pas y otras cosas ms, va a importar todos losautomviles, los transportes de carga de Venezuela, laspiezas de repuestos, los neumticos y no se le ocurre quehay que sustituir importaciones, que tiene que producir todolo que pueda aqu, ms nunca este pas se desarrolla, ni lasociedad tendr beneficios, es decir, que: para hablar demoral y tica hay que hablar tambin de sentido de ahorro,de racionalidad, de beneficios para la sociedad, nosinsista el Che.

A los seis meses de estar en La Cabaa se cre elDepartamento de Industrializacin de Cuba. El Che, quehaba dado un viaje a Japn, cuando regres reuni atodos los oficiales de su columna y nos dijo: me acaban denombrar director del Departamento de Industrializacin ytengo que irme para hacer el programa de desarrollo indus-trial de Cuba. A todos nos dio una gran tristeza; se losconfieso aqu entre amigos. Varios, incluso, nos disgusta-mos: Por qu nos llevan al Che, a nuestro jefe, para laindustrializacin de Cuba? Lgicamente era producto de lamiopa poltica que tenamos en aquella poca, miopa ofalta de experiencia revolucionaria.

Luego comprendimos que aquella fue una de las decisionesms inteligentes tomadas por Fidel; la de designar al Chepara dirigir el programa de desarrollo industrial del pas.Era el hombre para eso por su iniciativa y talento, por lamentalidad econmica que tena, porque le gustaba el temade la industrializacin. El Che, por iniciativa propia, habainstalado varias panaderas en la Sierra Maestra para queel pan fuera producido por la misma guerrilla. Tambinmont talleres de reparacin de armas, una fbrica decalzado, etc. La Cabaa hered esa idea de la SierraMaestra, y all desarrollamos aquellas fbricas. De ah que

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Fidel se dio cuenta y decidi que el Che fuera a ocuparaquel cargo al frente de la industria.

Fue en aquella reunin con sus oficiales que el Che sedirige a m me dice: oye Borrego, quieres irte conmigo aesa aventura de la industrializacin?. Le contest: buenocomandante, soy un soldado de la Revolucin, voy dondeusted me ordene. Me contest: bueno maana presntateen mi casa para hablar de la industrializacin de Cuba. Fuiy empezamos a hablar de la presumida industrializacindel pas, digo presumida porque ramos l y yo solamente,no haba nadie ms para abordar la tarea, no exista unorganismo, ni gente preparada. Desayunamos y salimos desu casa, ubicada cerca del Aeropuerto de La Habana, enRancho Boyeros, y nos embarcamos en su pequeo auto,otro referente de su tica y moral, su auto era uno de losms modestos de todos porque no aceptaba uno lujoso,deca que eso era ofender al pueblo, y andaba en uno muymodesto rumbo al edificio donde actualmente se encuentrael Ministerio de las Fuerzas Armadas en la Habana, frentea la Plaza de la Revolucin. All nos asignaron un piso parael Departamento de Industrializacin. No haba nada ms,slo ramos el Che, sus escoltas, su seora que nos ayuda-ba como secretaria y otro compaero ms y el que leshabla. Eso era todo con lo que contbamos para desarro-llar el proyecto de la industrializacin de Cuba; y adems,todos nosotros, los colaboradores del Che, absolutamenteignorantes de cmo hacer aquello.

As empezamos, l era el jefe y yo el administrador, a lospocos das ramos cinco o seis buscamos algunos compa-eros ms, secretarias, muchachos del ejercito rebelde quetenan alguna preparacin y nadie ms. Luego l pidi unoseconomistas de Chile que nos ayudaron mucho a elaborarun pequeo programa de desarrollo industrial. Y all


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comienza otra etapa que considero que puede resultar muyinteresante para todos los que se encuentran en esta sala,especialmente para los ms jvenes que no conocieron y nohan ledo sobre la vida y obra del Che.

Permanente superacin

Otro referente de la moral y tica del Che, que a m por lomenos me parece sumamente importante y lo tengo siempreen mi memoria, es la necesidad de la superacin permanen-te, de estudiar sistemticamente. Un funcionario que no sesupere, que no estudie, aunque ya tenga un ttulo universita-rio, se estanca rpidamente. En un mundo globalizadocomo el de hoy, en medio de un proceso de cambioconstante en todas las ramas del saber, la actualizacin sehace imprescindible para cualquier profesional. Y si se tratade alguien que ocupa un cargo de direccin pues msimportante, ya que sin la asimilacin de nuevos conocimien-tos, el ms inteligente de los cuadros se retrasa en muy cortotiempo.

He aqu otro gran ejemplo del Che. Tena el hbito de lasuperacin permanente como un problema de principios, noconceba que sus colaboradores y dems compaeros ycompaeras con responsabilidades en la Revolucin nomantuvieran una superacin sistemtica. El Che cont conla ventaja de vivir y educarse en la Argentina, un pas conun alto nivel cultural. Adems proceda de una familia cultay con ideas de avanzada. Sus padres, especialmente sumadre, prest una especial atencin a su educacin desdemuy temprana edad. La educacin recibida germin enterreno frtil ya que desde nio el Che dio muestras de clarainteligencia y excelentes cualidades humanas. Se conoce desu valenta personal desde la niez y de su gran sensibili-

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dad, cualidades estas que desarroll durante su adolescen-cia y a lo largo de toda su vida.

En cuanto a la superacin personal recordamos al Chedesde los tiempos tempranos de la Sierra Maestra y luegoen los distintos cargos que desempe en nuestro pasdespus del triunfo de la Revolucin, en constante ejerciciode estudio en distintas materias. Consideraba que en elsocialismo era doblemente importante el estudio constante,por tratarse de un sistema cuya base cientfica requeraconocimientos superiores.

El capitalismo, con su ley del valor y su economa demercado, trae aparejado el automatismo irracional, la faltade anlisis acerca de los efectos negativos de las decisioneseconmicas y de la funcin pblica en las distintas socieda-des. Nadie puede negar en la actualidad el carcter depre-dador del capitalismo y de su sistema de produccin. Losefectos negativos de este sistema sobre la naturaleza hansido demostrados en los ms diversos foros cientficos anivel mundial. Dentro de la moral y tica en el pensamientodel Che podemos observar su preocupacin por el desarro-llo cientfico en la economa socialista. Fue el precursor enla creacin y desarrollo de los principales centros deinvestigacin en Cuba. Entre ellos les puedo mencionar alInstituto de Recursos Minerales, el de la Industria Qumica,el Instituto de Investigacin de derivados de la caa deazcar y otros.

Cuando llegamos al Departamento de Industrializacin,casi dos aos antes de crearse el Ministerio de Industrias,el Che se impuso un plan intensivo de estudios en el cualnos involucr a todos nosotros, sus ms cercanos colabora-dores. En esa poca todava no se hablaba de socialismo.Hay que tener en cuenta que la declaracin del carcter


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socialista de la Revolucin cubana se proclam en 1961,despus de la primera derrota del imperialismo en AmricaLatina cuando el ataque mercenario a Playa Girn. A partirde ese momento estbamos convencidos de que nuestralucha futura sera una constante batalla contra el imperialis-mo norteamericano. Se impona una nueva tica parasanear el pas y acabar con el robo, la corrupcin y eldelito en la funcin pblica y en todos los sectores de lavida social del pas. El Che fue un abanderado de esabatalla y un ejemplo a seguir como modelo de funcionariopblico.

En febrero del ao 61 se cre el Ministerio de Industrias deCuba. El nmero de industrias nacionalizadas y el impetuo-so plan de desarrollo industrial que se fue conformandoreclamaban la creacin del nuevo organismo, ya que enaquel momento contbamos con muchas industrias naciona-lizadas, entre ellas la industria azucarera que tena ms de170 centrales azucareros y diversas destileras. Fue cuandoel Che asumi el cargo de Ministro. Para que tengan unaidea de la magnitud y complejidad de aquel Ministeriobaste decir que estaba constituido por lo que hoy son cincoministerios.

Aqu se inici una nueva etapa intensiva de estudios. El Cheme encarg la tarea de buscar un profesor que nos impar-tiera un curso de administracin pblica. Planteaba quetenamos que aprender a dirigir en las nuevas condicionespara poder cumplir las responsabilidades que nos habanasignado. El profesor en cuestin lo buscamos dentro de lasgrandes empresas capitalistas que habamos nacionaliza-do. As apareci un compaero que se llamaba VladimiroReboredo que trabajaba como jefe de organizacin de laempresa petrolera Shell, empresa inglesa como ustedesconocen. Era un reconocido profesional, de gran honesti-

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dad y buena disposicin hacia la Revolucin, porque hayque tener en cuenta que haba muchos ingenieros de esasgrandes compaas que no queran saber nada de laRevolucin, eran unos verdaderos esculidos como ustedeslo llaman en Venezuela.

Entonces, traje a Reboredo, se lo present al Che quien ledijo que quera que impartiera un programa de prepara-cin para los principales directivos del Ministerio, concreta-mente en la materia de Administracin Pblica.

Y ocurri una cosa curiosa en relacin con la tica del Che.Aquel profesor puso determinadas condiciones para impar-tir el curso. Yo me dije: Esto se ech a perder, como stele empiece a pedir al Che muchos recursos y exigenciaspara dar el curso no se va a dar, lo va a negar, Pero resul-t lo contrario. El Che le respondi: dgame, qu necesi-ta?. Dice: bueno, en primer lugar necesito un local parael curso en buenas condiciones, con aire acondicionado,buena instalacin, sonido, grabacin, buena alimentacin,que se brinde una buena merienda a mitad de las clases.Y dije: aqu se par el curso, no va a admitir nada de eso.El Che observndolo, fjense lo que es tambin una perso-na con mente abierta y con cultura, le dijo: Buenoprofesor, seleccione usted el lugar y sugiramelo, maana opasado me dice. Me fui con Reboredo para revisar lugaressaben qu seleccion? Un saln de conferencias en elHotel Riviera de La Habana, uno de los mejores hoteles dela capital, con todas las condiciones para impartir lasclases. Nosotros de lo ms contentos porque bamos acomer bien all, cosa que no nos permitamos precisamenteen nuestro austero Ministerio.

El profesor le present el proyecto al Che y el argentinoacept cien por ciento, le dijo que s y adems fue uno de


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sus ms aplicados alumnos; despus le dije: Che no leparece muy caro todo eso? Y l me dijo: No seas tonto,t no te das cuenta que esa es una magnifica inversin queestamos haciendo? La mejor inversin es preparar a lagente, si no le creamos condiciones al profesor se disgustao se va o no tiene buen nimo para las clases; tenemos quegastarlo Borrego qu vamos a hacer? Y ese era el Cheaustero, el que no gastaba un centavo innecesario, perofjense qu inteligencia, l deca: hay gastos que esnecesario hacer, que estn bien justificados y con laracionalidad adecuada. Bueno, aprendimos mucho deaquel profesor porque comenz a darnos clases empezan-do por los clsicos desde Taylor y Fayol, despus MaxWeber y varios ms. Por supuesto, l profesor no habaestudiado a Marx, aunque no era ignorante, saba algo deeconoma poltica, pero nos ayud tremendamente, y asempezamos.

Cuando terminamos ese seminario dijo, bueno, ahoravamos a estudiar qu es la administracin prctica delcapitalismo, porque hasta ese momento habamos estudia-do la teora. Ah empezamos a aprender que del capitalis-mo no se puede tomar nada para el socialismo, en lo quea contenido, leyes y conceptos se refiere, pero existenmuchos instrumentos prcticos que s hay que aprenderlos yque no contaminan, que son adelantos de la humanidad. Yesto que les estoy diciendo son palabras del Che: Seoresno le vamos a tomar miedo a unas tcnicas de administra-cin que son modernas y eficientes. Es como si se letuviera miedo a una computadora IBM porque es america-na, cuidado!, que es de las mejores, o a una HewlettPackard u otra como la Dell. Porque es capitalista, no! Hayque tratar de que el socialismo la fabrique tan buena osuperior a una computadora de esas. Ahora el PresidenteChvez ha anunciado que van a empezar a importar

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tecnologas para producir computadoras en Venezuela,pero para eso hace falta esfuerzo, sacrificio, estudio,producir con la calidad mxima, con la tica y la moralsocialista, porque un peligro que se le presenta a un pasque ha optado por una sociedad rumbo al socialismosaben lo que es? Que la gente se acostumbra al paterna-lismo socialista, y cuidado con eso! Que a nosotros nos hahecho mucho dao.

Les voy a sealar un ejemplo: el Presidente Chvez estimpulsando el plan de construccin de viviendas para dotarde una vida feliz a numerosas familias. Ahora bien, si esaspersonas no las cuidan adecuadamente y dejan que se lesderrumben para que le construyan otras a los cinco aos-cuando una vivienda bien construida, bien cuidada, conmantenimiento, puede durar veinte, treinta o cincuenta yms aos- el pap Estado no puede estar dispuesto paradarle a todo el mundo lo que quiera, sin cuidarlo como esdebido. Por otro lado les garantiza la educacin gratuita alos nios y les proporciona medicinas. Claro, esos sonvalores del socialismo, pero hay que acostumbrarse a queeso se hace con ms produccin y con la mayor eficienciadel pueblo tambin, no con descanso y comodidad, nimucho menos reduciendo la jornada de trabajo. Esa erauna batalla permanente del Che: Luchar contra esos maloshbitos que no corresponden a una sociedad socialista.

Para desarrollarse hace falta mucho de sacrificio, porque lahistoria de la humanidad nos dice que ningn pas delmundo se ha desarrolla sin esfuerzos. Y eso es tambinmoral y tica dentro de la sociedad. Aunque en el capitalis-mo haba poca moral y tica. Hay que ver lo que fueInglaterra, fue horrible el sacrificio de la clase obrera enaquel pas. Y hasta de los nios, que con slo 10 aoscumplan jornadas de 10 y hasta 12 horas de trabajo en


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las fbricas. Un pueblo al que se debe estudiar para ver suesfuerzo y su trabajo, es el pueblo norteamericano, eso hayque reconocrselo, que despus invadieron a Mxico y seconvirtieron en colonizadores e invasores, es otra cosa pero,en su gnesis, cuando los Estados Unidos era colonia ingle-sa y sufra una feroz explotacin capitalista, se sacrifictremendamente. Por aquella poca surgi un hombre comoAbraham Lincoln que luch por la independencia de esepas y por el inicio de su industrializacin, lo que ocasionuna enorme lucha con grandes sacrificios, esfuerzos y traba-jo. Bueno, nosotros analizamos junto al Che todo ese proce-so, sobre todo en los tiempos en que iniciamos los primerospasos en la planificacin socialista. Y adems estudiamosla economa del socialismo en los pases atrasados como laURSS, otros de Europa que eran bien atrasados y se estudiel mismo proceso en la Repblica Popular China.

En cuanto a la parte terica del desarrollo del capitalismoconservo un recuerdo -quizs uno de los ms valiosos rela-cionado con el Che- se trata de un obsequio que medejara cuando se march al Congo en abril de 1965. Eserecuerdo consisti en los tres tomos de El Capital deCarlos Marx, edicin del Fondo de Cultura Econmica deMxico, textos por donde l estudiaba en los seminariosque desarrollamos juntos. Me los dej encima de su bur enel Ministerio de Industrias cuando se march para El Congo,con una dedicatoria, que deca al inicio: Borrego, esta esla fuente. Aqu aprendimos todos juntos, a tropezones,buscando lo que todava es una intuicin apenas.Interesantsimo para hablar de lo que es moral y tica, delo que es el socialismo.

Fjense lo que les deca al principio, que en el socialismohay que estudiar mucho y que el Che era un ejemplo en talsentido. Para ms informacin puedo decirles que el Che

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haba escrito un diccionario filosfico a los 17 aos ydespus adquiri todo el dominio de que hemos habladoen economa poltica y filosofa con mayor rigor cientfico,y estudi las matemticas hasta el ms alto nivel en esamateria, tanto que su profesor cubano al final de su cursode matemticas superiores le dijo: Mira Che, ya no tepuedo ensear ms, ya yo llegu hasta aqu porque te heensaado todo lo que saba, y el Che entonces le contes-t: Bueno acompame ahora a estudiar investigacin deoperaciones. Y luego, cuando termin esa materia, impar-ti un curso de investigacin de operaciones a los compa-eros allegados del Ministerio... En suma, que esto nosdemuestra que un funcionario pblico que no tengaclaridad sobre la importancia del estudio y la superacin,es nulo. Tampoco se trata de convertirse en un sabio, nipensar que se es sabio porque estudie muchas cosas. Estoltimo, se lo recuerdo siempre a los jvenes.

Conozco a muchos jvenes en Cuba que son el verdaderofuturo de la revolucin. Hay algunos viejos conservadoresque dicen: Que va, esta juventud est perdida, y yo lesdigo: Pero y t qu fuiste? Acaso no fuiste joven? Lamayora de nosotros tenamos 20 aos cuando conocimosal Che all en la montaa, y despus cuando tenamos 22aos ya habamos asumido altas responsabilidades en larevolucin. Ahora hay viejitos en Cuba que dicen quealguien de 30 aos es demasiado joven para nombrarlo enun cargo de direccin de cierto nivel, cuando un hombre omujer a esa edad es una persona madura. Un error dentrodel socialismo sera creer que una persona de 30 aos esdemasiado joven. Hay que darle responsabilidad a losjvenes, algunos son brillantes y si tienen un ttulo universi-tario mejor. Lo vital es el estudio y la superacin permanen-te. Fidel tena 33 aos al triunfo de la revolucin, el Chetena 29 y Camilo Cienfuegos 27 aos.


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Lo fundamental de la moral y tica del Che

Lo bsico en la moral y tica del Che era el esfuerzo y laconciencia puesta en funcin del cumplimiento del debersocial en el trabajo. En tal sentido el Che era muy exigente.Les pondr un ejemplo: tenamos un Consejo de Direccinque empezaba los lunes a las ocho de la maana; el Cheestableci un compromiso que era ley en el Ministerio: Elque no llegara a las ocho en punto de la maana alConsejo de Direccin le permita cinco minutos extras paraque entrara, despus se cerraba la puerta y no entrabanadie, fuera viceministro o quien fuera, el tiempo es muyvalioso y hay que ahorrarlo, deca. No admita un Consejode Direccin de ms de cuatro horas. Como mdico que eraafirmaba que la curva de eficiencia despus de dos o treshoras de reuniones y de discusiones empieza a bajar y secomienza a divagar, y que haba que aprovechar la eficien-cia en horas de la maana. Esas reuniones de siete, ocho ynueve horas girando sobre lo mismo desgastan mucho, porlo tanto era intransigente en ese sentido.

Les voy a contar otra ancdota. Haba un viceministro delChe de nombre Jess Surez Gayol, un combatienteestudiantil de una valenta personal tremenda, talentoso,brillante, estudiante de arquitectura que fue golpeado ytorturado cuando la tirana. Cuando el Che regres delCongo, Sarez Gayol ocupaba el cargo de viceministro enla Industria azucarera y me lo pidi para llevrselo paraBolivia y le dije: A este es el primero que van a matar enBolivia, y el Che me dijo: No hables palabras de malagero. Cmo vas a decir que lo van a matar en Bolivia?y le respond: Lo van a matar por su audacia, por suvalenta combativa y porque es un poco distrado.Efectivamente, cuando estaba combatiendo en Bolivia,

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disparando al descubierto, sac la cabeza por arriba de unarbusto y lo mataron. Fue el primer muerto en Bolivia y elnico cadver que no hemos podido recuperar, lamentable-mente, segn parece la erosin de la montaa desaparecisu cadver.

Surez Gayol era un viceministro que trabajaba intensa-mente sala todas las semanas a recorrer todas lasfbricas y centrales azucareros y llegaba a las reunionesagotado. Un lunes lleg al aeropuerto, vena de las provin-cias orientales, y tom el auto a toda velocidad para llegaral Consejo de Direccin a las ocho en punto. Tom laavenida de Boyeros a toda velocidad y un polica detrnsito, un motociclista, le dijo que se parara pero l siguia toda velocidad; el polica le orden que se detuviera, lcontinu a toda velocidad, el polica lo persigui y se leatraves adelante por lo que se tuvo que parar. El polica legrit: irresponsable. Imagnense a un capitn del EjrcitoRebelde, cuando escuch al polica decirle irresponsable yvio que lo iba a demorar, le propin un golpe que lo dejtendido en el pavimento. Se mont en el auto y sigui atoda velocidad, entr corriendo al Consejo de Direccin;eran las ocho y cinco, y dirigindose al Che le dijo:Comandante perdone que acabo de llegar un poco tarde,pero es que el avin se demor, vena corriendo, era tarde,y un polica se atraves y tuve que darle un piazo.Comandante, por favor, cuando termine el Consejo quieroque usted me ayude para no tener un conflicto con lapolica, entonces el Che le respondi: Bueno, deja esahistoria y sintate a trabajar que me vas a demorar elConsejo, y lo del piazo del polica tendrs t que arreglar-lo con el Ministerio del Interior. Les pongo ese ejemplo, noexagero ni crean que lo sobredimensiono.

Las ancdotas que les he contado son absolutamente


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ciertas, el Che no admita jams una mentira, era otra desus cualidades y de su tica y moral administrativa Laverdad por encima de todo. Estamos hablando del Consejode Direccin, de la responsabilidad y el esfuerzo en eltrabajo, de la disciplina que exiga el Che y que es tan vitale importante en un funcionario.

Otro rasgo del Che era su modestia personal. Era unhombre muy modesto, no andaba haciendo alarde decargo ni nada, hasta su vestimenta era expresin de modes-tia, su uniforme del Ejrcito Rebelde no era un uniforme deoficial, l usaba el uniforme de soldado, y lo nico que lodistingua como comandante era su boina con su estrella enla frente. Solamente se vesta con un uniforme de oficialcuando iba al exterior o asista a un acto muy protocolar.No es que tuviera mal gusto, tena muy buen gusto hastapara evaluar el diseo de cualquier producto industrial,pero no haca alarde de su posicin ni del cargo queostentaba.

Comunicacin interpersonal: tica y moral revolucionaria

Otro rasgo de tica y moral revolucionaria era la comunica-cin interpersonal con todos sus subordinados o cualquierotra persona. Conocen ustedes a algunos funcionariosrobticos? Se encierran en su oficina cuando llegan en lamaana, con su aire acondicionado. Hay algunos enajena-dos con el ordenador, con la computadora y si usted lossaluda ni siquiera levantan la cabeza, son funcionarios tanrobticos que a veces robotizan a las secretarias: Ustedllega a algunas oficinas y saluda Buenos das seorita,buenos das compaera, y no los atienden, a m me pasen La Habana con una secretaria.

Una vez fui citado por un alto funcionario y cuando llegu

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a su oficina salud tres veces a su secretaria: Buenos dascompaera, buenos das, y nada. Me fui para mi oficina,a la media hora me llam el funcionario.

Borrego despus de viejo te has puestoimpuntual?

Por qu?, pregunt.Te estoy esperando hace una hora.No compaero, estuve media hora antes para la

entrevista, como disciplinado que soy, pero el robot suyo nome dej pasar.

Qu ests hablando? Te has vuelto loco despusde viejo?

No, es que usted tiene un robot fuera de suoficina! No sabe qu es un robot?

De qu ests hablando?De la secretaria, la salud tres veces y no me

contest y me fui.Cundo puedes venir?Si usted quiere voy para all ahora mismo.

Sal muy rpido y cuando llegu y le pas a la secretariapor el lado me mir con una cara bastante agresiva. Bueno,pasan esas cosas. Hay que tener moral y tica, hay quetenerle respeto al empleado, al pueblo que va a un organis-mo pblico a que lo atiendan y no lo hacen pasar o lohacen esperar en una fila por horas. Seores, hay que darleacceso a la gente, atencin al pueblo Para qu existentodos los ministerios si no estn en funcin de la sociedad?Imagnense ustedes que no existiera la sociedad Qu harala burocracia estatal?

El chisme mina a las instituciones

Saben que haca el Che una o dos veces a la semana,cuando llegaba al Ministerio? Suba piso por piso y saluda-


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ba a los empleados, hablaba con ellos para ver cmoestaba el ambiente de trabajo; cuando llegaba al piso diezdonde estaba su oficina, llamaba a los viceministros ydirectores, para sealarles lo que haba observado en surecorrido por las oficinas.

Una vez encontr a un empleado con los pies puestos sobrela mesa de trabajo leyendo el peridico, a las diez de lamaana, Se puede admitir que un tipo se pase leyendo elperidico completo a esa hora? Imagnense en Venezuelapara leerse todos los peridicos se necesita un da comple-to, cuando aqu hay algunos peridicos que con tantosanuncios parecen libros. l no admita eso, tampoco ladiscusin en voz alta en una oficina o la gente hablando dela ltima pelcula o de cmo finaliz la carrera de caballoso de la pelota, eso no se admita en el Ministerio deIndustrias.

Saben lo que es el chisme de pasillo? Ac tambin sedice as? Eso lo logr erradicar en el Ministerio porque esoen Cuba, todava es una mala hierba que se corta y retoanuevamente. Eso le indignaba mucho. l deca que eso eslo que ms minaba las relaciones humanas y prohibiterminantemente que nadie viniera a darle una queja deotro compaero sin haberlo discutido con esa personaprimero.

Yo tuve un incidente que ms nunca se me ha olvidado.Cuando estaba de viceministro una vez viaj al exterior ydej a un sustituto a quien crea el ms eficiente, que enverdad lo era en trminos administrativos, pero era un pocoprepotente sobre todo con los subordinados. Cuando llegudel viaje me encontr un infierno, todos los subordinadosme dijeron que haban pasado 15 das terribles porque estehombre se les haba encarnado, como se dice en Cuba, y

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me dieron mil quejas. Fui a ver al Che para comentarle delviaje y adems para pedirle la sustitucin de aquel hombre:

Me lo saca de mi rea o me voy del viceministe-rio, renuncio al cargo, le dije. se no trabaja msconmigo porque es un prepotente y un aprovechado,despus que lo he dejado con confianza me hizo esto y lohe comprobado.

Ya discutiste con el compaero en detalle todoeso, me pregunt?

No voy a discutir nada.Ah pues! Te ests yendo de aqu ahora mismo,

que lo voy a mandar a buscar a l y a ti para juntarlos, yle vas a decir delante de m todo lo que t me has dicho.

Est bien, pues, se las digo.Mand a buscar al hombre, me lo puso enfrente y le

dijo: Mira, Borrego ha venido a verme porque estaba

en el exterior, te dej a ti de sustituto, yo lo aprob y hashecho esto y lo otro es verdad o es mentira?

El hombre se puso plido y empez a tartamudear, secomprob todo, adems el Che agreg: Y adems me estpidiendo la renuncia si no te quito o te traslado de ah. Elhombre acept todo, entonces le expres: Bueno, maanaests sustituido de ah y vas descendido del cargo, y lotraslad para otra rea hasta que erradicara sus deficien-cias. Aquello fue una enseanza para m, no andarledando quejas al Jefe sin haberla discutido con el compae-ro o compaera primero, porque eso mina cualquierorganizacin. Otro ejemplo de la moral y tica impuestapor el Che Guevara como funcionario pblico en un cargode alta direccin.

Estoy terminando de escribir un libro en el que he dedicado


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casi un captulo al problema del chisme. Hay un autormexicano, Fernando Buen Abad Domnguez, bastanteconocido en Venezuela, es un cientfico en las comunicacio-nes, que en uno de sus libros dedica un captulo a esteaspecto y dice que el chisme destruye las organizaciones yms si pertenece al Estado.

La ostentacin en el cargo pblico: El carro devuelto

Les contar una ltima ancdota antes de pasar al ciclo depreguntas. A m me gustaban los automviles y me gustantodava. Cuando era viceministro yo tena un carro bastan-te malo, era un Pontiac norteamericano. Cuando senacionaliza una de las fbricas de cigarrillos, la msgrande que haba en la Habana, nombramos como sudirector a un viejo combatiente. Ese compaero un da mellama y me dice:

Borrego, como a ti te gustan tanto los automviles y loscuidas tanto, aqu el hijo del dueo de la fbrica que aca-bamos de nacionalizar ha dejado un Jaguar nuevo, depaquete, que a m no me sirve para la fbrica ni se lopuedo asignar a nadie. Te lo cambio por el Pontiac que lopuedo utilizar aqu para el trabajo y te doy el Jaguar.

Tremelo para ac rpido. Le dije.

Me trajo el Pontiac y yo al otro da andaba en mi podero-sa mquina. Me recuerdo que lo prob en la autopista deLa Habana a Varadero y lo mont a 180 kilmetros porhora. Un auto de potencia. A los tres das coincido con elChe y estaciono mi carro al lado del auto de l, un modes-to Chevrolet. Se baja y camina hacia m, pero as con unafuria. Voy a repetir exactamente sus palabras, aunqueresultan bastante vulgares, pero la historia tambin tiene

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que recoger las vulgaridades para hacerla objetiva. Avanzahacia el auto mo con agresividad y me grita:

Chulo, Chulo! Por qu me ofende? , le pregunto. Porque eres un chulo. Por qu t andas en ese

auto? De dnde lo has sacado?, y entonces comprendel error cometido.

Bueno, ese auto es de la fbrica de cigarros, esafbrica que se nacionaliz, que all no lo utiliza nadie. Eladministrador me llam que no lo puede utilizar y yo se locambi por el Pontiac.

Tienes una hora para devolverlo, me grit. S, s, ya est bien, le respond.

A la hora, por supuesto, ya haba devuelto el auto porqueel administrador que me hizo el cambio se neg a devolver-me mi Pontiac, con el argumento de que ya lo habaasignado a otro compaero y no se lo poda retirar. As queestuve una semana sin auto. Otros compaeros me llevabany traan al trabajo. Y volviendo sobre el Che humano, a lasemana me llama y me pregunta: Oye, ya entendiste bienlo del auto? Le dije: S. Me dice: Bueno, yo confo en ti,vete a ver al Ministro del Transporte que tiene una ordenma para que te entreguen un auto igualito al mo. Y medieron un auto, igual al de l, que por cierto ahora seconserva en un museo. S, estos son recuerdos que siempreque los repito me emocionan. Tanto, que un sobrino delChe, que es mdico clnico, me dijo en una ocasin en laArgentina: Un da te va a dar un infarto, porque te emocio-nas mucho cuando narras esas ancdotas de Ernesto.

Al auto que me entreg el Che, lo pint de rojo claritoarriba y pastel abajo y entonces me deca: Verdad queest bonito el auto? Y un da me lo pidi prestado para ir aPinar del Ro: y me dijo: Me lo prestas?, es verdad que


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est mejor que el mo. Y era cierto, porque estaba mejorcuidado. En fin, que esta fue otra enseanza del Che, quedemuestra que hasta en esos detalles es necesario cuidar elcumplimiento de la tica y la moral en la funcin pblica.

Lealtad y apego a la verdad

Un funcionario tiene que ser leal. No puede ser que unfuncionario que est aqu con el Ministro Al Rodrguez y envez de hablar con l cualquier irregularidad empiece a difa-marlo despus que lo ha colocado en un cargo de confian-za o que a costa de eso tome facultades apropindose derecursos, eso es deslealtad adems de ser un delito.

Con los jefes hay que ser leales pero no adulones o lame-botas, el Che no admita a los lamebotas No losadmita! Se poda discutir con l y decirle: Comandanteusted est equivocado y l se callaba, discuta o aceptabala crtica. Soportaba cualquier sealamiento con un granespritu autocrtico, porque cuando se demostraba queestaba equivocado, con una modestia tremenda, lo admita.Nunca acept que se dijera que el Ministerio de Industriasera el mejor, y ya estaba reconocido en Cuba, por todo elmundo, que era el ms eficiente y un modelo de institucin,l siempre nos deca: Cuidado con decir eso! Lo ms quenosotros podemos aceptar es que este ministerio es elmenos malo de Cuba. Fjense, no es lo mismo decir elmenos malo que decir el mejor.

El apego a la verdad. Eso viene desde su niez, la honra-dez, decir la verdad. A veces uno piensa, cuando estudia lahistoria del Che, que ese apego a la verdad a veces le costmucho. Lanse el Diario de motocicleta del Che. En Per,hubo un seor, un socilogo, Hugo Pesse, que los ayudmucho cuando llegaron a aquel pas, a l y a su amigo

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Alberto Granados. En una ocasin el doctor Pesse les dice,ms o menos:

Bueno, quiero que me den su opinin sobre ellibro que escrib y que les obsequi recientemente.

Le haba dado un libro al Che y a Granados paraque se lo leyeran, se trataba de un estudio sobre la medici-na social. Granados le respondi:

Bueno doctor, el libro es magnfico, lo he ledo conmucho inters. Y el Che, escuchando aquellos elogios desu amigo.

Luego dirigindose al Che: -Bueno, Ernesto, y usted me pudiera dar suopinin?El Che se haca el sordo y no contestaba.

Ernesto, yo le suplico que me d su opinin dellibro, insisti Pesse.

Bueno doctor Pesse, sinceramente su libro es muymalo. Lamento que un hombre con conocimiento cientficocomo usted no haya hecho la menor referencia, porejemplo, a la explotacin existente en el Per y a la historiade miseria que hay aqu.

Granados cuenta su gran enojo con el Che, lleg adecirle:

Oye, eres un hijo de p... Cmo le vas a decir esoa ese hombre, con lo que nos ayud?

Y el Che le respondi: Yo no quera darle mi opinin, no te diste cuenta

que yo no quera hablar. Como voy a engaar a esehombre, a decirle una mentira; su libro no sirve para nada.

Ese era el Che y sigui sindolo siempre, cueste lo quecueste, la verdad por delante. Y le exiga a sus colaborado-res que lo hiciera tambin.


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A los yanquis ni un tantito as!

En resumen, siempre he dicho que el Che con su voluntad ycualidades excepcionales se hizo un proyecto de perfeccinhumana y segn mi opinin lo logr, a costa de sacrificio,a costa de moral y tica revolucionaria. l nos dej un lega-do que yo creo que es de un extraordinario valor para lahumanidad y para las nuevas generaciones revolucionarias.Un legado, quizs mayor que el de Guerrillero Heroico. lmismo deca que el artista de la guerrilla era Camilo.

Lo ms grandioso que nos leg el Che fueron sus cualida-des ejemplares, sus ideas revolucionarias, sus aportestericos a la causa del socialismo, sus enseanzas comodirigente socialista, las verdades que sealara sobre laprctica del socialismo y que nada tenan que ver con lospostulados marxistas originales. De una especial significa-cin fue la valenta personal con que defendi sus ideas.

Por eso Fidel, en ocasin de la muerte del Che, una de lascosas que expres fue Si me preguntaran como quiero quesean nuestros hijos, respondera que queremos que seancomo el Che, y por eso la consigna de nuestros niospioneros en Cuba es seremos como el Che

Cmo veo al Che hoy? Bueno, despus de muerto enBolivia mucha gente me ha hecho esa pregunta y siemprehe respondido que lo vera con su gran talento, estudiandosiempre, profundizando en la teora revolucionaria y enotras ramas del conocimiento, lo vera en la actualidad allado de Chvez, ayudando con su experiencia a la granobra bolivariana, junto a Evo Morales ofreciendo todos susconocimientos para el desarrollo del pas donde ofrend suvida generosa, y en Cuba halndonos las orejas cada vezque cometemos una falla, junto a Ral Castro, su entraable

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compaero de luchas, para continuar exitosamente la granobra edificada por Fidel, su maestro ejemplar. Y lo verarepitiendo su frase lapidaria contra los enemigos desiempre: A los yanquis, ni un tantito as!

Ciclo de preguntas y respuestas

Qu se entiende por burcrata ortodoxo?

Digo que soy un burcrata ortodoxo y defensor al mximode la burocracia, pero enemigo a muerte del burocratismo,porque hay una confusin con eso. El burcrata es alguienimprescindible en la funcin pblica, incluso en una socie-dad que marcha rumbo al socialismo. Deca un Ministro deeconoma nuestro, de los primeros aos, Regino Botti, que:Nosotros los burcratas somos casi imprescindibles en elsocialismo y que haba que cuidar a la burocracia.

Y es cierto, la burocracia es importante y necesaria, loperverso es que el burcrata caiga vctima del burocratis-mo, ese individuo que se encierra en su despacho, el rob-tico que no atiende a nadie y que cae despus en lacorrupcin, porque lo ms fcil para corromperse es eseaislamiento total de la sociedad y de la realidad. El Cheescribi varios trabajos contra el burocratismo.

Por qu en la funcin pblica existe tanta decadenciade lo tico y lo moral y cada da esto ltimo se percibemenos en la sociedad?

Nosotros hemos aprendido con Fidel a no dar recetas anuestros amigos de otros pases. Lo ms que hacemos es


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hablar de nuestras experiencias en Cuba, con nuestroslogros y nuestros errores.

Tampoco se puede ser un extremista cuando hablamos demoral y tica. Creo que no es nada inmoral que un funcio-nario pblico de determinada categora, nivel, especialidady conocimientos tenga un sueldo digno, un ingreso digno yalgunas prestaciones totalmente justas.

Cuando discutimos la estructura del Ministerio de Industriala primera discusin fue la de un proyecto que nos demortiempo realizarlo. Cuando le presentamos al Che la nminade los funcionarios observ los sueldos de los directores yviceministros y dijo: Estos sueldos estn muy bajos. Hayque hacer una plantilla nueva y presentarla al Ministerio delTrabajo para aumentarle los sueldos a esos compaeros ycompaeras. Fjense, un hombre tan austero que no habaaceptado que se le pusiera el sueldo de ministro ni lo cobrnunca porque deca que no haca falta ms y que l tenaque ser el ejemplo, manteniendo su sueldo de Comandante.Y discutimos el porqu de los sueldos y deca: No quieroladrones aqu en este ministerio y un sueldo decente paraun funcionario es necesario para que no se vea compulsa-do por razones de falta de ingresos adecuados y decentesa justificar una apropiacin ilegal de los bienes del Estado,porque si lo hace la primera vez, luego lo hace la segunday ya se convirti en un ladrn y hay que llevarlo a prisin.Esta era su concepcin de la moral y tica a aplicar.

En aquella poca un Ministro ganaba unos 600 pesos,segn la escala salarial aprobada para ese cargo. Pero elChe sigui ganando unos 400 pesos, que era el sueldo deComandante del Ejrcito Rebelde, y en aquella poca con400 se cubran los gastos familiares, con austeridad pero secubran.

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Tambin la estructura salarial hay que ir adecundola entrminos del comportamiento del nivel de vida necesario enuna sociedad que marcha rumbo al socialismo.

Desgraciadamente, nosotros desde el derrumbe socialistadel ao 1989 no hemos tenido posibilidades de mejorar elnivel de vida como deseamos y es necesario, somos una islasitiada por el imperialismo norteamericano con su bloqueocada vez ms agresivo, pero all no se muere nadie dehambre, nadie se queda sin escuela y sin salud pblicaasegurada. Vivimos con carencias, es cierto, pero digna-mente, y seguros de alcanzar un futuro mejor, pero con latica y la moral del Che.

Muchas Gracias


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El Pensamiento Del Che Sobre La Moral y La Tica Del Funcionario Pblico

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