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EL MUNDO/NÚMERO 15/SÁBADO 9 DE JUNIO DE 2007 UN RAYO DE SOL Es el momento de la energía solar. La potencia instalada en España se multiplica cada año y un decreto acaba de mejorar las ayudas a la inversión Un pueblo llamado Milagro. Un pequeño pueblo navarro ha hecho realidad el sueño de cambiar el modelo energético actual. Acciona, promotora del proyecto, ha reunido a 753 accionistas para poner en marcha la planta fotovoltaica más productiva del mundo. El huerto solar popular. La Fundación Tierra ha promovido el primer huerto solar popular de España. El tejado del mercado del barrio barcelonés del Carmel se ha cubierto de paneles solares gracias a la inversión de ciudadanos que han aportado 1.000 euros cada uno. España es uno de los países con mayor potencial solar del mundo. Y lo está aprovechando. En el último año la potencia solar fotovoltaica ha crecido un 130% y, según los expertos, lo va a hacer aún más durante 2007. Los proyectos solares se multiplican en nuestra geo- grafía impulsados por un marco regulatorio favorable. España es el segundo productor europeo de esta energía limpia, por detrás de Alemania, que tiene menor radia- ción solar y menos horas de luz a lo largo del año. Algunas empresas españolas están confiando en la energía solar. Acciona ha construido en un pueblo de Na- varra la planta fotovoltaica más productiva del mundo. Abengoa ha sido la primera en poner en funcionamiento comercial una central termosolar de torre y está constru- yendo un complejo solar que doblará en 2013 la produc- ción de la recién desmantelada central nuclear de Zorita. Pero no se trata sólo de grandes empresas. En Barcelo- na, la Fundación Tierra ha hecho realidad en el tejado del mercado del Carmel el primer huerto solar popular de España. Por mil euros se puede participar en este nego- cio que, además de rentable, resulta ecológico. La ener- gía solar se mueve en España. / PÁGINAS 2, 3 Y 4 BOSQUES El bosque más grande de España, en la comarca de Pinares Soria- Burgos, no conoce el fuego desde el siglo XIX. La explotación sostenible de la madera es la clave del éxito. / PÁGINAS 18 Y 19 CIUDADES ¿Cómo serán los núcleos urbanos del futuro? Cada vez existen más iniciativas en el mundo, tanto privadas como públicas, que apuestan por la sostenibilidad. / PÁGINAS 29, 30 Y 31 CIENCIA Cientos de sensores registrarán en cada momento todo lo que ocurra en Doñana. Es el sueño de cualquier investigador: un ecosistema auscultado al completo. / PÁGINAS 10 Y 11 ARTE El número de mariposas va en descenso. Un libro recoge imágenes de casi todas las especies que habitan la Península Ibérica. PÁGINA 25 N A T U R A EL MUNDO LA BANDA ANCHA LLEGA A DOÑANA

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UN RAYODE SOL

Es el momento de la energíasolar. La potencia instalada enEspaña se multiplica cada añoy un decreto acaba de mejorarlas ayudas a la inversión

Un pueblo llamado Milagro. Un pequeño pueblonavarro ha hecho realidad el sueño de cambiar el modeloenergético actual. Acciona, promotora del proyecto, hareunido a 753 accionistas para poner en marcha la plantafotovoltaica más productiva del mundo.

El huerto solar popular. La Fundación Tierra hapromovido el primer huerto solar popular de España. Eltejado del mercado del barrio barcelonés del Carmel seha cubierto de paneles solares gracias a la inversión deciudadanos que han aportado 1.000 euros cada uno.

España es uno de los países con mayor potencial solardel mundo. Y lo está aprovechando. En el último año lapotencia solar fotovoltaica ha crecido un 130% y, segúnlos expertos, lo va a hacer aún más durante 2007.

Los proyectos solares se multiplican en nuestra geo-grafía impulsados por un marco regulatorio favorable.España es el segundo productor europeo de esta energíalimpia, por detrás de Alemania, que tiene menor radia-ción solar y menos horas de luz a lo largo del año.

Algunas empresas españolas están confiando en laenergía solar. Acciona ha construido en un pueblo de Na-varra la planta fotovoltaica más productiva del mundo.Abengoa ha sido la primera en poner en funcionamientocomercial una central termosolar de torre y está constru-yendo un complejo solar que doblará en 2013 la produc-ción de la recién desmantelada central nuclear de Zorita.

Pero no se trata sólo de grandes empresas. En Barcelo-na, la Fundación Tierra ha hecho realidad en el tejado delmercado del Carmel el primer huerto solar popular deEspaña. Por mil euros se puede participar en este nego-cio que, además de rentable, resulta ecológico. La ener-gía solar se mueve en España. / PÁGINAS 2, 3 Y 4

BOSQUES El bosque más grande deEspaña, en la comarca de Pinares Soria-

Burgos, no conoce el fuego desde el sigloXIX. La explotación sostenible de la

madera es la clave del éxito. / PÁGINAS 18 Y 19

CIUDADES ¿Cómo serán los núcleosurbanos del futuro? Cada vez existen

más iniciativas en el mundo, tantoprivadas como públicas, que apuestan

por la sostenibilidad. / PÁGINAS 29, 30 Y 31

CIENCIA Cientos de sensores registraránen cada momento todo lo que ocurra

en Doñana. Es el sueño de cualquierinvestigador: un ecosistema

auscultado al completo. / PÁGINAS 10 Y 11

ARTE

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El número demariposas va endescenso. Un librorecoge imágenes decasi todas lasespecies que habitanla Península Ibérica.

PÁGINA 25

N A T U R AEL MUNDO

LA BANDA ANCHA LLEGA A DOÑANA

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do un sueño para un pueblo llama-do Milagro. Y no todo es cuestiónde grandes compañías. En Barce-lona, la Fundación Tierra ha auna-do a cientos de vecinos para insta-lar una planta solar en el tejado delmercado del Carmel.

No es extraño el desarrollo deplantas de energía solar, tanto fo-tovoltaica como termoeléctrica,dado el enorme potencial que tienenuestro país en lo que a radiaciónsolar se refiere. «Las renovablesdeben jugar un papel muy relevan-te para cambiar el sistema energé-tico por uno más sostenible», diceManuel Blanco, director del áreatermosolar del Centro Nacional deEnergías Renovables (Cener). «Ysin duda España es uno de los paí-ses con mayor potencial», añade.Ahora somos el segundo produc-tor europeo de este tipo de ener-gía, por detrás de Alemania, quetiene una radiación y una cantidadde horas de sol al año muy inferio-res a las de nuestro país.

El cambio climático y la preocu-pación del Gobierno por cumplir elProtocolo de Kioto han favorecidouna legislación propicia para lasenergías renovables. Hace años, laindustria eólica experimentó un

rápido incremento gracias a unmarco tarifario favorable. Ahora leestá llegando el momento dulce ala tecnología solar. La actual nor-mativa garantiza que las empresasdistribuidoras tengan que comprarla electricidad generada con ener-gía solar fotovoltaica a un preciocasi cinco veces mayor que el de lagenerada con tecnologías sucias.Algo necesario, según los exper-tos: «Las tecnologías so-lares no son baratas, poreso no viene mal que ten-gan un cierto apoyo delas Administraciones. Yeso es lo que está pasan-do ahora», asegura AnaRosa Lagunas, directoradel área fotovoltaica delCener.

Según la Asociación deProductores de EnergíasRenovables (APPA), po-dríamos alcanzar antesdel fin de 2008 el objetivode 371 MW instalados deenergía solar fotovoltaica que fija elPlan de Energías Renovables (PER)para 2010. Por ese motivo, desde laasociación reclaman que se aumen-te hasta 2.000 MW el límite paraevitar que, una vez cumplido el ob-

jetivo, los nuevos proyectos solaresno obtengan los beneficios econó-micos de los que goza la solar y losinversores dejen de impulsar estafuente de energía necesaria paracombatir el calentamiento global.

«Ahora ha llegado el momentode correr», asegura Valerio Fer-nández, director de ingeniería deSolúcar R&D. «Hace algunos añosla tecnología no estaba lo suficien-

temente madura y era necesarioseguir investigando, pero ahora,con las ayudas, ya se han empeza-do a manejar costes asequiblesque permiten apostar en firme poresta fuente de energía», dice.

ENERGÍA SOLAR EL GRAN SALTO ADELANTE➔

MIGUEL G. CORRALSanlúcar la Mayor (Sevilla) / Madrid

La energía solar se mueve.Si hace algunos años elboom eólico hizo que nosacostumbrásemos a losmolinos, ahora le llega el

turno a las placas de silicio. A fina-les de 2005 había en España 20,3megavatios (MW) instalados depotencia solar fotovoltaica (57,6MW si contamos aquellas instala-ciones que no están conectadas ala red de distribución). Pues bien,a finales de 2006 ya eran 60,5 MW(118,2 en total), es decir, en tansólo un año esta tecnología ha cre-cido un 130% en nuestro país, se-gún la Asociación de la IndustriaFotovoltaica. Además, la recienteaprobación el pasado mes del RealDecreto que determina el escena-rio legal y económico de las ener-gías renovables ha supuesto unnuevo espaldarazo del Gobierno ala producción solar.

Existen varias tecnologías. Estála fotovoltaica, que produce elec-tricidad directamente. La termo-solar de cilindro parabólico, querefleja la luz del sol para calentarun fluido y que produce electrici-dad mediante una turbina de va-por de agua. Y por último, tam-bién se puede producir electrici-dad con la tecnología que en Sevi-

lla ya han bautizado como El ojode Sauron.

Desde hace poco más de dosmeses, el gigante energético Aben-goa, por medio de Solúcar, su divi-sión solar, tiene en funcionamien-to en Sanlúcar la Mayor (Sevilla)la primera planta comercial deenergía termosolar de torre. Unamoderna tecnología, desarrolladaen España, que concentra la luz enun solo punto a 100 metros de altu-ra mediante multitud de enormesespejos para calentar un circuitode agua y producir electricidad enuna turbina de vapor.

Los cientos de rayos reflejadosen la cima cegadora de la torre yahan traído a la memoria de los lu-gareños una imagen de la películaEl señor de los anillos, basada en lanovela de J. R. R. Tolkien. En Sevi-lla ya se conoce a esta planta comoEl ojo de Sauron.

En el mismo campo de Sanlú-car, Abengoa (Solúcar) está cons-truyendo una plataforma que con-tará en 2013 con 300 MW instala-dos de diferentes tecnologías sola-res, el doble de la potencia que te-nía la recién desmantelada centralnuclear de Zorita. Mientras tanto,en Navarra, Acciona ya ha puestoen marcha la planta solar fotovol-taica que mayor cantidad de ener-gía produce de todo el mundo, to-

EN ESPAÑA SÍHAY ‘PETRÓLEO’

P R I M E R P L A N O

Panorámica de la torre, de 115 metros de altura, de la planta termosolar que tiene instalada Solúcar, la división solar de la empresa andaluza Abengoa, en Sanlúcar la Mayor, Sevilla. / ABENGOA

600

800

1.000

1.200

1.400

1.600

1.800

2.000

2.200Radiaciónglobal (kWh/m2)

R. Estrada / EL MUNDO

RADIACIÓN SOLAR (comparativa España/Alemania)

ESPAÑA ALEMANIA

Potencia instalada

60 MWp(2006)

Potencia instalada

750 MWp(2006)

FUENTE: Institute for Enviroment and Sustainability, Comisión Europea, EPIA, BSW.

Un reciente decreto ministerialha mejorado las ayudas para lacreación de nuevas plantas

Aunque tenemos una radiaciónmayor que Alemania, producimos10 veces menos energía solar

La energía solar vive un ‘boom’ en nuestro país,el que más horas de insolación tiene en Europa.La potencia fotovoltaica ha crecido un 130% en2006 y se prevé que aumente aún más este año

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ENERGÍA SOLAR LAS EMPRESAS PIONERAS➔

P R I M E R P L A N O

IDOIA ARRAIZAMilagro (Navarra)

La tarde es primaveral; soplael cierzo, como en todo pue-blo de la ribera navarra, y ensu soplido viaja un zumbidometálico que procede del

otro lado de un pinar. Los árboles es-coltan un camino irregular, descui-dado, y un cartel que prohíbe arrojarbasuras revela el pasado como verte-dero de este lugar, Monte Alto, el ce-rro que corona Milagro (Navarra).

El paisaje es más parecido al de unplaneta de ciencia-ficción que al desus campos contiguos, salpicados dealmendros en flor. Son 51 hectáreasde terreno en las que se erige un ejér-cito de gigantescas placas azul silicioque brillan al sol como las escamas deun pez. Monte Alto ya no es un verte-dero, es un huerto solar, la más pro-ductiva del Planeta.

El pueblo de Milagro, de 3.000 ha-bitantes, ha obrado un milagro. Lo hahecho en apenas ocho meses. Sólo co-nocido por su fiesta anual de la cerezay por la industria agroalimentaria quenutre el río Aragón, hoy es un nombreligado a la vanguardia mundial de lasenergías limpias que se deja oír en lasdiscusiones sobre el cambio climático

del poderoso G-8, en la BBC y en lastelevisiones japonesas.

No es la planta más grande delmundo ni la que más potencia instala-da alberga; dos plantas construidasrecientemente en Baviera (Alemania)la superan. Sin embargo, sí es la quemás electricidad produce, debido aque Navarra goza de más horas de luzal año que cualquier provincia alema-na. Es capaz de generar en un año laenergía equivalente al consumo de5.000 familias (14 millones de kilova-tios hora). Sus resultados son ex-traordinarios. Con un peculiar zumbi-do, sus placas trabajan como un bos-que de 673.000 árboles haciendo lafotosíntesis, lo que evita la emisión ala atmósfera de 13.454 toneladas deCO2. Y no pertenecen a una sola em-presa, sino a 753 propietarios avispa-dos que han sabido aprovechar elboom de las energías limpias comouna forma rentable de hacer negocio.

Cada uno de ellos ha desembolsa-do entre 52.000 euros (el precio deuna placa de 5kW) y algo más de unmillón (100kW) en esta instalación.Entre todos han arriesgado más de 65millones de euros en un proyecto quesigue la estela de otros acometidos enNavarra a menor escala. Atraídos por

una rentabilidad de entre el 8% y el10%, se han dejado seducir por elmundo de las energías renovables, enel que la comunidad foral es punteraen Europa. Si el objetivo de la UE pa-ra 2020 es que el 20% de la energíaeléctrica proceda de fuentes alternati-vas, Navarra ya ha alcanzado el 60%.

Un negocio con futuroLos primeros en invertir fueronmiembros de Acciona Solar (empresafilial de Acciona Energía y Caja Nava-rra y promotora de la planta) y fami-liares o amigos. Y sólo un 10% son ve-cinos del pueblo. Ahora, demostradaya su rentabilidad, hay lista de esperapara comprar uno de los 864 seguido-res solares. Aunque la vida útil de ca-da panel es de 40 años, los fabricantesgarantizan un 80% de su potencia du-rante los primeros 25 años. Así, los in-versores obtienen un 10% de rendi-miento económico con una amortiza-ción de 10 años. Ellos sólo tienen quepreocuparse por sus beneficios, por-que Acciona Solar mantiene la instala-ción, gestiona la venta de energía aotras compañías y tramita las ayudasoficiales para este tipo de inversión.

«Había visto huertos solares, meempecé a interesar y descubrí que era

un negocio», asegura Jesús Ibáñez,uno de los propietarios. Las ventajaseconómicas, además de las ambienta-les, están claras. «La gente tiene mie-do a estas inversiones porque lo vendemasiado chollo. Creen que tieneque haber una trampa en algún sitio.Pero el único riesgo es que el Gobier-no cambie su legislación y que reduz-ca las subvenciones, lo que sería polí-ticamente incorrecto», afirma. El al-calde, Esteban Garijo (UPN), no ocul-ta que estos beneficios han sido lo queha impulsado a muchos vecinos a in-vertir, pero asegura también que haygente que quiere «apostar por el futu-ro energético».

Los vecinos de Milagro y las princi-pales industrias de la zona han empe-zado ya a consumir energía limpiaprocedente de su propia instalación.Es la séptima que se ha promovido enesta comunidad, ya acostumbrada aver aerogeneradores y placas entre losinvernaderos de verduras y las huer-tas de espárragos que han dado a co-nocer a la Ribera. Pero ninguna otraha generado tanta inversión. Ahorason un ejemplo de política ambientallimpia. Por eso, no quieren quedarseatrás y ya tienen otro proyecto enmente: una planta de biomasa.

UN LUGAR LLAMADO MILAGROAcciona instala en Navarra el huertosolar más productivo del mundo

Imagen del parque solar de Acciona en la localidad navarra de Milagro. / ACCIONA

FUTURO TERMOSOLAR

EL MAYOR PROYECTO

PACTO INDUSTRIAL

FÁBRICA DE SILICIO

LAS ISLAS SOLARES

Iberdrola impulsa la energía termosolar.Iberdrola se ha convertido en la empresa líder en ener-gías renovables gracias a la confianza que la eléctricaha depositado en la eólica durante los últimos años.Ahora, le ha llegado el turno a la solar. Iberdrola ya hacomenzado a construir la planta termosolar de Puerto-llano (50 MW), que es tan sólo la primera de un ambi-cioso proyecto que prevé la construcción de 10 centra-les de este tipo, lo que supondría igualar la producciónde la central nuclear de Garoña. Además, la eléctricaya tiene adjudicados dos proyectos fotovoltaicos de 10MW en Cáceres y de 11,65 en Soria.

En la Comunidad Valenciana. El pueblo alicantino deBeneixama contará a finales de 2007 con la mayor plantasolar fotovoltaica de España, según asegura City Solar, laempresa que desarrolla el proyecto. De momento, ha ins-talado ya ocho de los 20 megavatios (MW) de potenciaque tendrá cuando esté terminada. Aunque aún no superalos 9,5 MW de Milagro (Acciona), la fiebre por tener lamayor planta está empujando a muchos promotores a di-señar centrales cada vez más potentes. En la Península,ya hay proyectos para construir huertos de 20, 50 y hasta62 MW de potencia instalada. Es cierto que aún no tieneel título de la mayor de España, pero sí supera ya la po-tencia de todas las plantas de la Comunidad Valenciana.

Paneles en los tejados. Lostejados de la nueva sede de Tele-fónica en el barrio de Sanchina-rro de Madrid estarán cubiertospor paneles solares fotovoltaicos.La iniciativa de la empresa de te-lecomunicaciones pretende serun ejemplo para las grandescompañías y ya se ha convertidoen la instalación sobre una cu-bierta que más energía de estetipo produce en Europa. Generael 20% de la electricidad que seconsume en el complejo.

La materia prima de los paneles fotovoltaicos. Laempresa Silicio Energía, apoyada por Isofotón, Endesa yla Junta de Andalucía, construirá la primera fábrica es-pañola de lingotes de polisilicio, la materia prima de laque se obtienen las obleas necesarias para fabricar pane-les solares fotovoltaicos. Sólo existen nueve empresas enel mundo que produzcan estos lingotes. La creciente de-manda de esta materia prima, tanto para paneles comopara la industria de la informática, ha provocado un pro-blema de abastecimiento. Éste es uno de los principalesescollos para desarrollar la energía solar fotovoltaica.

Las apuestas de Canarias y Baleares. En Tenerife,una planta solar fotovoltaica promovida por el Cabildoinsular y el Instituto de Tecnologías Renovables pretendealcanzar los 15 MW de potencia instalada durante el ve-rano de 2007. En las islas, las fuentes de energía que per-mitan reducir la casi total dependencia exterior están co-brando una enorme importancia. Por ese motivo, en Ma-llorca, la empresa alemana de tecnología solar Schücoha presentado el proyecto solar fotovoltaico de Porreres,que tendrá 2,5 MW de potencia cuando esté terminado yque será el más grande de Baleares.

JAVI MARTÍNEZ

ITER

La inversión, de 63millones de euros, la hanrealizado 753 inversores

La planta genera cada añola energía equivalente alconsumo de 5.000 familias

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VÍCTOR MONDELOBarcelona

Anda el sufrido mileu-rista como para permi-tirse gastos extraordi-narios que se salgan delprohibitivo alquiler y

del exigente paso por la caja del su-permercado… Pues sí, anda parapermitírselo, al menos cuando enjuego está la lucha contra el cam-bio climático. El ejemplo lo encon-tramos en los 170 asalariados quese han aventurado a invertir prácti-camente uno de sus sueldos en lacreación de la única central foto-voltaica popular de toda España, ladel barcelonés barrio del Carmel.

En la cubierta del mercado deesta barriada funciona desde el pa-sado 12 de mayo la primera plantade producción energética solar denuestro país financiada entera-mente por un grupo de ciudadanosorganizados en cooperativa. Lainiciativa –bautizada como Ola So-lar del Carmel y concebida por laFundación Tierra– parte de la ideade que no es necesario supeditar laconstrucción de una central foto-voltaica al interés inversionista deuna gran corporación.

Y así lo ha demostrado. En algomás de dos meses se ha materiali-zado la creación de una central so-

lar con una capacidad productivade 51.000 kWh/año que ha requeri-do una inversión de 301.000 euros.O lo que es lo mismo, que ha naci-do de la suma de 170 inversionesindividuales de 1.000 euros, en sumayoría, y otras –las menos– de2.000 y 3.000 euros.

Claro que, teniendo en cuentaque la central permanecerá en lacubierta del mercado 25 años, lainversión supone, en realidad,unos 11 céntimos de euro al día.Una irrisoria cantidad que da para

mucho. La producción estimadapermitirá ahorrar 25 toneladas deCO2 en esos 25 años. Es decir, cadainversor de 1.000 euros reducirásu consumo eléctrico un 7% y deja-rá de lanzar 80 Kg. de CO2 a la at-mósfera cada año.

«Ha habido inversores de todaEspaña. Los ciudadanos han en-contrado una manera de lucharcontra el cambio climático a su al-cance, de saciar su ecoansiedad yestoy seguro de que esta iniciativase podría extender», asegura JordiMiralles, biólogo y presidente dela Fundación Tierra. Lo asegura ylo desea porque llega aafirmar que, de aplicarsemasivamente esta inicia-tiva, «casi se estaríacumpliendo el Protocolode Kioto por 11 céntimosal día».

Además de su aporta-ción ecológica, la instala-ción solar del Carmel no deja deser una inversión que reportará be-neficios a los que han contribuido asu creación. La legislación estable-ce que las empresas distribuidorasestán obligadas a comprar toda laenergía producida, con lo que, unavez amortizado el coste de la insta-lación –pasados 10 años–, los in-versores empezarán a recibir bene-

ficios que, finalmente, supondránun 6% de lo invertido.

Beneficiarios con cara y ojos. Elmás joven es Leo. Quizás ahora nosea capaz de valorar su contribu-ción –cumplió un año el 23 deabril–, pero a los 26 será plena-mente consciente. O, al menos, esoesperan sus padres, que aseguranhaber «materializado su opciónpersonal» en su hijo. También unaopción personal es la de Claudia yAdrián. Esta pareja ha encontradoen la Ola Solar la solución que bus-caba hace tiempo. «Habíamos pen-sado en un huerto solar, pero ne-

cesitábamos 50.000 euros y aquí,con 1.000, hemos podido hacerlo».

El contrapunto está en Pilar. Esconsciente del carácter ecológicode la iniciativa pero sostiene que la«razón de peso» que la llevó a in-vertir es «que nadie le daba másrentabilidad». Son diferentes razo-nes para una misma revolución so-lar ciudadana.

ENERGÍA SOLAR LOS CIUDADANOS➔

Un grupo de ‘mileuristas’aúna sus ahorros paraimpulsar la energía solar

¿Es posibleapostar por laenergía solar enmi propia casa?

LA NUEVA LUZDEL MERCADO

P R I M E R P L A N O

Fotografía ‘familiar’ de los accionistas del proyecto solar del mercado del Carmel en Barcelona, junto a los paneles el día de la inauguración. / CHRISTIAN MAURY

entre el 17% que obtendrán lascentrales termoeléctricas y el82% de las fotovoltaicas demás de 100 kWh. Lasmenoresde esa potencia permanecencomo hasta ahora.

�REVISIÓNDespués de 2010. Una vezcumplido el periodocontemplado en el Plan deEnergías Renovables 2005-2010, se revisarán las primas ytarifas en función de laconsecución de objetivos y delos planes de futuro.

�NUEVAS REGLASRevisión del Real Decreto.El Gobierno ha puesto finrecientemente al debate entorno a la normativa queregirá el futuro de lasenergías renovables. Despuésde varios meses de reunionesentre el Ejecutivo y lasasociaciones de productores,el Gobierno ha aprobado elreal decreto definitivo.

�RETROACTIVIDADNo afecta a las anteriores.Finalmente, las plantas solares

acogidas a la anteriornormativa (RD 436/2004) nose verán afectadas por lasvariaciones de la nuevanormativa. Los inversores queapostaron por la solar antes dela revisiónmantendrán lascondiciones bajo las queinvirtieron en sumomento.

�RENTABILIDADEntre un 17% y un 82%. Elnuevo real decreto contemplaun incremento de la tarifaregulada respecto a la delanterior. Este aumento estará

¿CÓMO AFECTA LA NUEVA LEGISLACIÓN A LA ENERGÍA SOLAR?

«Si se aplica esta iniciativa deforma masiva, se cumpliría Kiotopor 11 céntimos de euro al día»

1 ¿Qué diferencia hay entrela tecnología fotovoltaica y

la termosolar? Ambas sirvenpara transformar la energía quenos viene del Sol en electricidadque podamos utilizar en nues-tras casas. Los paneles fotovol-taicos convierten la radiaciónsolar en corriente continua gra-cias a las propiedades físicas delmaterial con el que están hechos(silicio). Es necesario transfor-mar esa energía en corriente al-terna para poder transportarla yusarla en los hogares. Las plan-tas termosolares, en cambio,usan diferentes tecnologías, pe-ro todas ellas reflejan con espe-jos (heliostatos) la luz del sol enun punto en el que se calienta uncircuito que contiene un fluido(aceite o agua). Una vez alcan-zada cierta temperatura se usaese fluido para producir vaporde agua que se introduce en unaturbina de vapor para generarelectricidad.

2 ¿Con qué tecnología sepuede producir electrici-

dad en nuestra vivienda? Lacomplejidad y el gran tamañode las plantas termosolares con-vierten la tecnología en una ex-celente fuente de energía paraproducir a gran escala, pero ha-cen que sea imposible que se ex-tienda en los hogares. La foto-voltaica, en cambio, necesitamuy pocos elementos para ge-nerar electricidad útil. Por eso,es sencillo cubrir el tejado de unedificio de viviendas con pane-les de este tipo para generarelectricidad.

3 ¿Cuánto cuesta cubrir eltejado de mi casa de pane-

les solares? La inversión ne-cesaria para una instalación decuatro kilovatios (kW) de po-tencia, que tendría lugar hastaen una vivienda unifamiliar, esde 26.800 euros. Con esta insta-lación se evitaría la emisión decasi dos toneladas de CO2 a laatmósfera cada año. Los ingre-sos anuales que generaría lainstalación serían de 2.200 eu-ros el primer año con un incre-mento del 1,4% cada año. Ade-más, se obtendría una desgra-vación fiscal del 10%.

4 ¿Existen subvencionespara instalar paneles so-

lares fotovoltaicos? Sí. Lasofrecen tanto las comunidadesautónomas como el Estado. Hayautonomías que dan ayudas afondo perdido para las instala-ciones fotovoltaicas aisladas, esdecir, que no vierten la electrici-dad a la red sino que son utiliza-das por el productor. Para elresto, las ayudas son en formade tarifa, con beneficios de casicinco veces la Tarifa Media deReferencia (0,44 euros por cadakWh). El periodo de amortiza-ción está en torno a 10 años, elresto, hasta los 25 años, es bene-ficio para el inversor. Más infor-mación: www.idae.es

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ERIKA LÓPEZ

La tarea de fijar cuántonos costará al bolsillo elmaltrato al medio am-biente se está llevando acabo desde el Instituto

de Prospectiva Tecnológica (IPTS),un organismo de la Comisión Euro-pea. De aquí saldrá en pocas sema-nas el Estudio P.E.S.E.T.A. (siglasinglesas de Projection of Economicimpacts of climate change in Sec-tors of the European Union basedon boTtom-up Analysis), un docu-mento que arrojará las cifras quepagaremos si no ponemos freno alcambio climático. Realizado gra-cias a imágenes de satélite y a lacompilación de los datos científicosmás recientes, hasta ahora sólocuentan con resultados prelimina-res, aunque son espeluznantes.

El estudio hace proyecciones denueve áreas bioclimáticas conside-rando que a finales del presente si-glo las emisiones de CO2 se dupli-carán o triplicarán con respecto alos niveles preindustriales. Según

las previsiones, el calentamientoglobal hará que el rendimiento delos cultivos en el sur de Europapueda descender en 2070 hasta un22,4% respecto al actual, debido aque el periodo de crecimiento delos cultivos será más corto. En elnorte del continente, en cambio,las plantaciones se beneficiarán un70% del acortamiento de las hela-das. Con todo, «el agrícola es unode los sectores que menos nospreocupa porque tiene una grancapacidad de adaptación», afirmaJuan Carlos Císcar, investigadordel IPTS y coordinador en Españadel informe.

Asegura que serán más impor-tantes las consecuencias sanita-rias. Las olas de calor acarrearánun incremento de la mortalidad du-rante los meses estivales, así comoun mayor número de accidentes re-lacionados con fenómenos meteo-rológicos extremos, como inunda-ciones o tormentas. Este aumentolo cifra la Comisión Europea en86.000 muertos más al año en la

UE, considerando un aumento detres grados de temperatura a partirde 2071. Son datos correspondien-tes al escenario más catastrofista,pero si las medidas que propone laComisión funcionan y el planetasólo se calienta 2,2 grados, el nú-mero de víctimas mortales se acer-cará a 36.000. Además, según el in-forme, ya comienza a quebrarse lafrontera de enfermedades tropica-les como la malaria, que aparece-rán en Europa a medio plazo.

El estudio sitúa asimismo al tu-rismo como un sector en el ojo delhuracán. La zona mediterránea re-legará su atractivo climático en fa-vor de otras zonas, como el MarBáltico. La alteración del clima po-dría hacer que cien millones de tu-ristas cambien sus destinos estiva-les. Para Císcar, «es difícil predecirqué puede ocurrir con los flujos deturismo en los próximos 80-100años», pero vaticina que «los resul-tados preliminares indican que elgrado de atracción climática en ve-rano de la Europa medite-rránea puede disminuir rela-tivamente respecto a la si-tuación presente».

Son evidentes además loscostes billonarios que provocaránlas perturbaciones en la franja lito-ral. Los cálculos del EstudioP.E.S.E.T.A. avanzan que la subidadel nivel del mar puede originarinundaciones cuyos daños alcan-zarían en Europa los 4,4 billones deeuros anuales en 2020 yhasta 9,3 billones de eurosanuales en 2080. El docu-mento señala así la necesi-dad de adoptar medidaspreventivas, como la cons-

trucción de diques o el desplaza-miento de la población costera ha-cia el interior, lo que minimizaríalos daños hasta un total de 2,2 bi-llones de euros anuales.

En paralelo al P.E.S.E.T.A., elIPTS elabora otro informe sobrecuánto costará implementar laspolíticas necesarias para frenar elcambio climático. Se espera queambos estén listos a finales de es-te mes. Para ello trabajan a con-

trarreloj climatólogos, ingenierosy peritos, que hasta ahora sólohan extraído una cifra en positivo:que el cambio climático generará300.000 empleos directos en laUE; la mayoría relacionados conlas energías renovables. «Un datoque no consuela en absoluto anteel panorama paneuropeo que seavecina», enfatiza Císcar.

ÁNGEL DÍAZ

Cuál es la mejor formade combatir el cambioclimático: nuevos im-puestos para castigar aquien contamine o un

mercado de emisiones como elde Kioto? El debate está co-brando una creciente importan-cia en círculos económicos ycientíficos de Estados Unidos –y,por tanto, en todo el mundo–, enun momento en que la mayor po-tencia industrial del planeta seacaba de comprometer ante laUnión Europea a reducir sus emi-siones de gases.

Mientras, la comunidad inter-nacional se prepara ya para lapróxima cumbre de Bali, dondese estudiarán nuevas medidascontra el calentamiento global afinales de este año.

Los expertos, intelectuales ylíderes políticos que abogan porimponer tasas especiales al pe-tróleo y demás productos conta-minantes, con el fin de reducirasí su comercio, están capitanea-dos por el economista de la Uni-versidad de Harvard (EEUU)Gregory Mankiw y agrupados enlo que él mismo ha denominadoel Club Pigou. El nombre es unhomenaje al economista inglésArthur Cecil Pigou, nacido a fi-nales del siglo XIX y primero enproponer tasas especiales paracontrarrestar los efectos negati-vos de ciertas actividades.

La filosofía es simple: si al-guien daña la atmósfera, que noes suya sino de todos, tendrá quepagar por ello a los demás. Evi-dentemente, esto perjudicará elnegocio y, por tanto, reducirá su

volumen, con lo que las emisio-nes de gases serán cada vez me-nores.

«Los impuestos más altos parala gasolina, quizás como parte deun impuesto más amplio para elcarbono, serían la política másdirecta y menos invasiva para en-frentarse a las preocupacionesambientales», según argumentóMankiw en un artículo publicadoel pasado mes de octubre en eldiario estadounidense WallStreet Journal y que ya se ha con-vertido en un pequeño clásico.

En el otro lado, y aunque no setrata de medidas necesariamentecontrarias, se encuentran quie-nes prefieren profundizar en sis-temas de cuota e intercambio deemisiones, a la manera de Kioto.Uno de los principales argumen-tos que usan los defensores deesta clase de medidas es que con-figuran un mercado global, loque parece lógico por tratarse deun problema intrínsecamenteplanetario. Sin embargo, puedeque sea esto mismo lo que espan-te a otros: el gobierno mundial esuna vieja idea que despierta pa-siones enfrentadas.

Por otro lado, una buena partedel aumento de CO2 en la atmós-fera (el equivalente a un cuartodel que producen los combusti-bles fósiles) se debe a la defores-tación de las selvas tropicales,por lo que un mercado interna-cional que fuese capaz de incen-

tivar a los países para que deja-ran de destruir sus bosques po-dría atajar el problema y, de pa-so, contribuir a la conservaciónde parajes irrepetibles. Así loapoyaban recientemente en la re-vista científica Science WilliamChameides, de la asociación En-vironmental Defense, y MichaelOppenheimer, de la Universidadde Princeton (EEUU).

«La ventaja de un sistema ba-sado en el mercado es que proveede un incentivo para la innova-ción, lo que puede traducirse enuna reducción de las emisionesde dióxido de carbono a bajo cos-te. ¿Por qué querríamos excluirde esta competición a cualquiersector de la economía, y muchomenos a uno con tan grande po-tencial», concluían los autores.

E C O N O M Í A

Se plantean las tasas punitivascomo alternativa a Kioto

¿IMPUESTOSCONTRA EL CO2?

Los efectos del cambio globalse cifran en billones de euros

EL CLIMAPASA FACTURA

Primero fue el informe Stern, encargado por elGobierno de Tony Blair. Luego vinieron losmúltiples documentos de la ONU. Las adverten-

cias sobre los inmensos costes económicos quesupondrían tanto los efectos como las mitiga-ciones del cambio climático van en aumento.Los expertos alertan una y otra vez que resulta-ría mucho más económico prevenir que curar.¿Pero cómo conseguirlo? A pocos años del ven-

cimiento del Protocolo de Kioto, en 2012, se in-tensifica el debate sobre el modo de reducir deforma eficaz las emisiones de dióxido de carbo-no. Los impuestos sobre las actividades conta-minantes se alzan, cada vez más, como la mejorde las soluciones.

RAÚL ARIAS

CAMBIO CLIMÁTICO

E L M U N D O / N Ú M E R O 1 5 / NATURA / S Á B A D O 9 / J U N I O 2 0 0 7 N7

E C O N O M Í A

TANA OSHIMA

Cuando se trata de em-prender un nuevo ne-gocio, una primeranorma básica es reali-zar un estudio de viabi-

lidad para despejar incertidum-bres. El cambio climático se pre-senta como una gran oportuni-dad de plantear un nuevo modeloeconómico, pero nadie ha hechoaún un plan de viabilidad.

Así lo explica el catedrático deFísica Aplicada de la Universidadde Alcalá de Henares, AntonioRuiz de Elvira, al que acaban denombrar presidente del ComitéCientífico del Foro Europeo delClima (European Climate Fo-rum). «Nos hemos propuesto es-tudiar una forma suave de que lasociedad financie lo que llama-mos la próxima revolución indus-trial [basada en energías renova-bles]. Es algo que no se ha hechohasta ahora», explica.

El Foro, que reúne mayorita-

riamente a físicos, pero tambiéna algunos economistas y sociólo-gos, intenta aplicar los modelosmatemáticos –utilizados para es-tudiar las tendencias climáticasdel futuro– a otras disciplinas,principalmente a la economía.Esto responde a la propia natura-leza del cambio climático, cuyacomprensión requiere un enfo-que multidisciplinar y transver-sal que lo hace casi único dentrodel ámbito de la investigación.

«Desarrollaremos un esquemade modelos integrados, es decir,climáticos y económicos, aplica-bles a una nueva economía, dis-tinta a la tradicional», continúa elexperto. Según él, la economíatradicional se ha basado errónea-mente en el concepto de equili-brio, algo que no se corresponde,a su entender, con la realidad.«La economía está más bien ba-sada en los conceptos de no equi-librio y de flujos. Hasta ahora secreía que lo que uno pierde, lo

gana otro. Pero la realidad es quesi uno pierde, otros también pue-den perder».

El objetivo es hacer que la ideade sostenibilidad abandone elcampo teórico y pase a la prácti-ca mediante cálculos reales y de-

cisiones políticas queincentiven a los empre-sarios a invertir, porejemplo, en energíasrenovables. El Foro,con sede en el InstitutoPIK de Alemania, en elantiguo edificio dondeestudió el mismísimoAlbert Einstein, ofreceya, dice Ruiz de Elvira–encargado del diseñode ciudades sosteni-

bles–, motivos suficientes paradisolver las resistencias que con-tinúa ofreciendo la sociedad anteel cambio de paradigma que tan-to claman los científicos.

Un grupo de físicosquiere hacer realidadla economía sostenible

CIENTÍFICOS ENMOVIMIENTO

«Estudiamos una forma suavede que la sociedad financie lapróxima ‘revolución industrial’»

El Foro intenta aplicar losmodelos matemáticos de losfísicos a una nueva economía

FORO EUROPEO DEL CLIMA

El físico español Antonio Ruiz de Elvira, miembro del FEC. / JULIÁN JAÉN

www.european-climate-forum.net

El próximo mes de noviembre, laciudad de Valencia acogerá el másimportante de los encuentros quecelebra el Panel Intergubernamen-tal para el Cambio Climático(IPCC), de la ONU, cada cuatroaños. En esta reunión se presentaráel Informe Final de Síntesis quepondrá fin a la serie de documentosque ha venido elaborando este pa-nel de expertos a lo largo de 2007sobre el cambio climático, sus im-pactos y mitigaciones. Será la pri-mera vez que tal cita tenga lugar enuna ciudad española. El Informe Fi-nal servirá a dirigentes y políticosde guía para tomar medidas deadaptación frente a los distintosefectos que se prevén del calenta-miento global. En su elaboraciónparticiparán los casi 2.000 científi-cos colaboradores del IPCC, desdefísicos hasta médicos y economis-tas, a los que se añade la revisión fi-nal por parte de representantes po-líticos de todos los países miembrosde Naciones Unidas. La informa-ción resultante servirá de punto departida para la Conferencia de laONU sobre Cambio Climático quetendrá lugar en Bali en diciembre.

Faltan cincomeses

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E N T R E V I S T A

TANA OSHIMA

Gro Harlem Brundtlandmuestra la autoridadde quien está acostum-brada a tomar decisio-nes importantes. Tras

haber sido dos veces primera mi-nistra de su país, Noruega, acabade ser nombrada enviada especialde la ONU para el cambio climá-tico. Su rostro serio se enciende al

ser preguntada por el desarrollosostenible, aquel concepto claveque ella misma acuñó en 1987,siendo directora de la ComisiónInternacional para el Medio Am-biente y Desarrollo de la ONU, enel ya célebre informe tituladoNuestro futuro común y que aúnparece seguir enorgulleciéndola.PREGUNTA.— ¿Cómo recuerdaaquellos tiempos?RESPUESTA.— Lo que nosotroshicimos fue idear un conceptoamplio de desarrollo. No sólo ha-blamos de medio ambiente; ha-blamos de un patrón de desarro-llo que tenía que ser sostenible.Fue en cierto modo sensacionalque cinco años después del infor-me [Nuestro futuro común] elmundo se encontrara en Río [enla Cumbre de la Tierra, en 1992],tal y como habíamos sugerido, ylas naciones del mundo firmaranla Convención del Clima y la Con-vención de Biodiversidad. Pocagente en 1987 hubiera pensadoque eso sería posible. Aquello fue

signo de un avance importante.Luego tuvimos el Protocolo deMontreal sobre la capa de ozonoy otras soluciones o acuerdos quehan avanzado en la dirección co-rrecta en lo que respecta al medioambiente.P.— ¿Cómo está ahora el desarro-llo sostenible, 20 años después?R.— Si miras al mundo en esesentido amplio, ha tenido sus másy sus menos. Viéndolo hoy, 20años después, ha habido muchasmejoras en numerosos temas am-bientales en el mundo industriali-zado, pero en muchos sentidoslos problemas ecológicos han au-mentado en el mundo en desarro-llo. Por ejemplo, en África haymás desertificación, más erosióndel suelo, la situación del agua seha deteriorado... Está peor quehace 20 años. Así que, realmente,necesitamos un giro en nuestrosesfuerzos.

Médico de formación,Brundtland se alzó, desde susprimeros cargos en la ONU –quela llevarían a ser directora de laOrganización Mundial de la Sa-lud (OMS)–, como una de lasabanderadas de la lucha contra lapobreza. «Fue en lo que nos cen-tramos principalmente. Dijimos:‘Necesitamos superar la pobreza.Tenemos que superar la pobrezapara ser capaces de cuidar el me-dio ambiente’. Porque la gente seve obligada a destruir sus recur-sos naturales con el fin de sobre-vivir», dice con ímpetu.

El mismo día de la entrevistase encuentra en Madrid la prima-tóloga británica Jane Goodall,quien se expresa casi con las mis-mas palabras: «Para salvar alchimpancé y al bosque, hay queayudar a las poblaciones locales,quienes son las que cazan chim-pancés y talan los bosques sólopara sobrevivir».

«El mensaje fue tanto para elNorte como para el Sur: no pode-mos vivir en mundos completa-mente separados, donde los paí-ses pobres tienen que defender-se por sí solos», continúaBrundtland. «Hay que aumentarla colaboración internacional, elapoyo financiero y la transferen-cia de tecnología hacia los paísesen desarrollo, de modo que ellostambién puedan tener un mode-lo de desarrollo sostenible. Yesos recursos tienen que venirdel Norte. Pero si te fijas ahora,puedes entender por qué los paí-ses en desarrollo están diciendo:‘El mundo industrializado no

cumplió sus promesas de 1992’».Ahora, con su nuevo cargo en

la ONU –que llega a pocos añosde que venza el Protocolo de Kio-to, en 2012–, la ex primera minis-tra noruega continúa al frente desu única batalla, la misma que lehizo ser pionera en la lucha con-tra el sida y la malaria en África,desde la OMS, o la que la ha traí-do a Madrid en mayo para asistira unas jornadas sobre cambio cli-mático organizadas por el Clubde Madrid y la Fundación Nacio-nes Unidas. Su nuevo papel es elde dialogar con los dirigentes delmundo para que tomen medidascontra el calentamiento global.P.— Así que ahora se añade elproblema del cambio climático.R.— Nosotros advertimos de ellohace 20 años. Hoy en día no sóloes una advertencia, es una reali-dad. No sólo se trata del huracánKatrina, las inundaciones, todasesas tormentas que la gente havisto, sino también de un au-mento de la temperatura delagua que destruye la base de losrecursos para la agricultura y laspesquerías en los países pobres.Cuando miras el nivel de gasesde efecto invernadero que en-tran en la atmósfera, son hoymás elevados que en 1990. Aun-que muchos países han empeza-do ya a esforzarse y hay menosemisiones por PIB, el PIB ha cre-cido, así que las emisiones sonmayores.

Y nadie mejor que ella paradecirlo: «Si continúa así, es abso-lutamente insostenible. Ahorasabemos que estamos en un pun-to de inflexión. Tiene que habermucha más acción por parte delos países que no están realmen-te contribuyendo, que no sonparte del Protocolo de Kioto, co-mo EEUU, que no ha ratificado,o que más bien se retiró del tra-tado después de haberlo firmadoen los años de Clinton».P.— El Protocolo de Kioto se

centra sólo en reducir las emisio-nes de gases de invernadero.¿Cree necesario un acuerdo ba-sado en el desarrollo sostenible?R.— Sí, el desarrollo sostenibledebe ser la base de un nuevoacuerdo, pero el Protocolo deKioto y la Convención del Climason los instrumentos más impor-tantes que tenemos, los compro-misos ya están ahí. Sólo quecuando surgen las obligacionespara cada país, surgen los desa-cuerdos. Y algunos se echan pa-ra atrás. Un argumento queEEUU ha estado dando es quetambién los países en desarrollo,como China, emiten. Bueno,puesto que China tiene unasemisiones crecientes y es unaparte cada vez mayor del proble-ma, obviamente China, tendráque entrar en el asunto. China, laIndia y Brasil tendrán que for-mar parte de la solución. Tene-mos que intentar convencer adistintos tipos de países sobre

cómo avanzar juntoshacia el futuro.P.— ¿Y cómo conven-cerlos?R.— Bueno, no hay na-da más que el diálogopolítico. Aunque ahoratambién la ciencia nosaporta evidencias. Na-die tiene realmente nin-guna razón para cues-tionar lo que está ocu-rriendo. Esto es nuevo,porque hasta hace unoo dos años todavía po-

días, por razones políticas, utili-zar la duda científica para negarel cambio climático. Pero ahoraya no puedes. La gente no te to-mará en serio si lo haces. Ahorala única cuestión es: ahí estánlas evidencias, el mundo se en-frenta a cambios drásticos y te-nemos que hacer algo. Ya nohay que debatir sobre el cambioclimático en sí porque eso ya es-tá hecho.P.— ¿Cómo ve el escenario de laera post-Kioto?R.— Veinte años después deNuestro futuro común, 2007 va aser crítico. En diciembre se cele-bra la Conferencia de las Partesen Bali [sobre cambio climático],donde se debatirá lo que va aocurrir en 2008 y 2009. Para2010 se tendrá que haber ratifi-cado un nuevo acuerdo. Es nece-sario que se establezcan nuevasnegociaciones y probablementemejorar las bases para que parti-cipen más países.

Durante su estancia en Ma-drid, el ex mandatario chilenoRicardo Lagos, también enviadoespecial de la ONU, y el senadorestadounidense Timothy Worth,actual director de la FundaciónNaciones Unidas, adelantaroncómo debería ser el nuevo acuer-do posterior a Kioto. Según ellos,a las medidas ya existentes debe-rán añadirse la eficiencia ener-gética, la lucha contra la defores-tación y las «energías alternati-vas no contaminantes», y se de-berá impulsar un aumento de latransferencia de tecnología y delos esfuerzos financieros paraasistir a los países en desarrollo.P.— ¿Queda mucho por hacer?R.— Los países ricos deben ha-cer mucho más para ayudar a lospaíses pobres. ¡Deben utilizar losmecanismos de desarrollo lim-pio que están ahí para el mundoen vías de desarrollo y no se es-tán utilizando! Así que sí, tene-mos mucho que hacer.

GRO H. BRUNDTLAND

«El mundo rico nocumplió sus promesascon el mundo pobre»

«El Norte está mejorque hace 20 años, peroÁfrica está mucho peor»

MÉDICOEstudió medicina y laejerció hasta queinició su carrerapolítica en Noruega,donde ha sidoprimera ministra. Suprimer contacto conel medio ambiente lellegó con un altocargo de NacionesUnidas, donde mástarde fue nombradadirectora de la OMS.Actualmente esenviada especial dela ONU para elcambio climático

«China, Brasil y laIndia deberán formarparte de la solución»

«2007 es un año claveen el que se debatiránlos acuerdos post-Kioto»

«Hay que superar lapobreza para cuidarel medio ambiente»

Gro Harlem Brundtland, enviada especial de la ONU para el cambio climático. / CHEMA TEJEDA

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donde parece que todo sigue como siempre.La repetición de los ciclos naturales trans-mite una sensación de estatismo: entra elinvierno, llega la primavera, pasa el verano,vuelve la otoñada; la marisma se inunda ose deseca según la estación; las aves migra-torias que suben desde África o bajan desdeEuropa vuelven a su cita de cada año... Losritmos biológicos hacen sentir la certeza deun tiempo circular.

Hasta los escasos edificios son un paisajeantiguo. El Palacio de Doñana, en la Reser-va Científica del CSIC, no aparenta ser elcentro puntero de investigación que es enrealidad. En las paredes del caserón, las fo-tos de visitantes ilustres, como el rey Alfon-so XIII, escopeta en mano, alternan con lostrofeos de gamo y ciervo cobrados desdeque, en el siglo XV, los nobles propietariosdedicaron el Coto a la caza. Hasta el jardín,que guarda algún bonsai que el ex presiden-te Felipe González cuidaba durante sus es-tancias, alberga recuerdos del pasado.

En Doñana, se podría sucumbir al espe-jismo de que el tiempo está detenido. Perono es así. Junto a los viejos salones y las ma-rismas, la modernidad tecnológica se abrepaso. Los científicos dan los últimos reto-ques al proyecto más ambicioso de estudiode un ecosistema puesto en marcha en Eu-ropa. Como si de un Gran Hermano orwe-lliano se tratara, cientos de sensores auscul-tarán las 24 horas del día los parámetros fí-sicos y biológicos del espacio protegido.

No habrá registro de temperatura, vientoo marea ni actividad de planta o animal queno pueda ser recogido por los aparatos demedida. La mayoría se alimentará por ener-gía solar. Además, una red de telecomuni-caciones sin cable transmitirá los datos has-ta la sede de la Estación Biológica de Doña-na en Sevilla, donde se volcarán en la red.Lo que implicará que, desde cualquier orde-nador, se pueda acceder a lo que pase en elparque. A la vez, cualquier investigadorperdido en la marisma abrirá su portátil y seconectará a internet gracias a la coberturawi-fi que tienen ya más de 70.000 hectáreasdel espacio. El científico tendrá a su alcanceno sólo lo que vean sus ojos, sino también loque estén captando más de 1.200 sensores.

No es ciencia-ficción, sino el sueño decualquier investigador hecho ya casi reali-dad. A finales de mayo, en la Reserva, eldoctor Ramón C. Soriguer, del personal dela Estación Biológica de Doñana, daba losúltimos retoques al sistema, que estarácompleto este mismo otoño.

— «¿Cómo está el nido? ¿Han nacidoya?», pregunta al resto del equipo.

— «Ha nacido uno esta noche, lo puedesver si quieres» , le contesta el ingeniero Al-fonso Osuna. Desde un ordenador portátil,están observando un nido de moritos (Ple-gadis falcinellus) en plena incubación. «Es-tos moritos están en la parcela de la FAO, a11 kilómetros de aquí», aclara Soriguer,mientras explica el funcionamiento.

Las cámaras, alimentadas por energía

solar, filman distintos puntos de la reserva ytransmiten imágenes y sonido bien por fi-bra óptica o por ondas sin hilos. En internet,a través de la página de la estación, los cien-tíficos observan la reproducción de las avessin tener que acercarse a molestarlas. El ca-so del morito es especial, pues está en recu-peración, cuando hace unos años sólo que-daban siete parejas reproductoras. La altadefinición permite, incluso, distinguir losnúmeros de los ejemplares que portan algu-na anilla de identificación.

Gustavo Sánchez, el director técnico deSATEC, la empresa de ingeniería contrata-

da para el proyecto, bromea con el resto decompañeros sobre si estamos ante un«Gran Hermano de la naturaleza». Desdeluego, lo parece. Ahora bien, ¿para qué sir-ve tal despliegue de tecnología ?

Fernando Hiraldo, director de la Esta-ción Biológica de Doñana, lo explica en sudespacho en Sevilla: «En un escenario decambio global, las áreas relativamente vír-genes y protegidas como Doñana tienenque ser laboratorios vivos para profundizaren qué va a pasar al ecosistema. A nadie sele ocurriría montarse en un vehículo sin sa-ber cómo anda, y nosotros estamos en unecosistema llamado Tierra del que no cono-cemos las piezas ni su funcionamiento».

Por ello, añade Hiraldo, «a través del Pro-grama Ingenio 2010 del Ministerio de Edu-cación y Ciencia y con el apoyo de la Juntade Andalucía, el CSIC está instalando unared de sensores remotos que permita obte-ner mucha información del medio físico pe-ro también del medio biológico a un investi-gador que esté estudiando en cualquier si-tio. Nos interesa que las mejores mentesusen esos datos y creen conocimientos bue-nos para la Humanidad y para Doñana». Elproyecto forma parte de la llamada ICTS oInfraestructura Científica y TecnológicaSingular. El Ministerio ha destinado1.800.000 euros a esta figura de la que for-man parte la red tecnológica que se está ins-talando y el propio espacio físico de la Re-serva Científica de Doñana, unas 7.500 hec-táreas del Parque Nacional gestionadas por

Doñana es uno de esos lugares

En un escenario de

cambio global,

Doñana es un

laboratorio vivo para

saber qué va a pasar

El Gran Hermano vigila Doñana

Texto: Pedro Cáceres / Fotos: Juan Carlos Muñoz

C I E N C I A

I N V E S T I G A C I Ó N

Las marismas entran en la era cibernética. En la Reserva Científica de Doñana se está instalando una red de sensoresremotos que medirá decenas de parámetros físicos y biológicos continuamente. Transmitidos por banda ancha, los datosse podrán consultar desde cualquier lugar. Es el sueño de todo investigador. Un ecosistema radiografiado al completo. Elproyecto se llama Infraestructura Científica y Tecnológica Singular y es obra del Ministerio de Educación y del CSIC.

Con el sol sobre el horizonte, las espátulas (’Platalea leucorodia’) se agitan en las ‘pajareras’ de Doñana, añosos alcornoques poblados por colonias de aves de la marisma.

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el CSIC desde los años 60. Hay una veintenade ICTS en España y algunas de ellas son ob-jetos singulares como los buques oceanográ-ficos. La ICTS de Doñana será algo parecido:un laboratorio electrónico y tecnológico so-bre miles de hectáreas de terreno.

Y lo que la tecnología puede hacer por loscientíficos es espectacular. Ramón C. Sori-guer, encargado de desarrollar el sistema,demuestra con su ordenador cómo un sen-sor de movimiento y otro de temperatura,colocados a un animal en un collar, permi-ten saber su localización, su actividad a lolargo del día e incluso cuándo se levanta ose tumba a dormir. Los radares de superfi-cie, los microchips y las cámaras termográ-ficas ayudan a seguir a la mayor colonia eu-ropea de nóctulo gigante (Nyctalus lasiop-terus), un murciélago de gran porte. Inclusose pueden comparar las distintas gráficasde vuelo y averiguar si una hembra está pre-ñada o no. Los sensores de las plantas medi-rán parámetros como el intercambio de oxí-geno y carbono, es decir, la productividadvegetal de la marisma y su capacidad de fi-jar CO2 y evitar el cambio climático.

Instalar el sistema no es fácil. Héctor Ga-rrido, técnico de la Reserva, recuerda cuan-do hace años se colocó una cámara alimen-tada con placa solar que se convirtió en po-sadero de pájaros por ser lo único que sobre-salía del agua. Las deyecciones la dejaroninútil. Por eso, algunos de los modelos quese colocan ahora son los últimos avances oprototipos desarrollados para la ocasión.

En el difícil ambiente de la marisma, si-tuar una sonda para medir la calidad delagua supone horas a caballo. Por ello, losnuevos sensores completarán y aliviarán eltrabajo y también la presión sobre el me-dio. Como afirma Fernando Hiraldo: «Elsistema va a permitir mucha más investiga-ción, mucho más profunda y de más cali-dad. Vamos a tomar mucha información deforma periódica sin que tengamos que es-tar en el campo».

Pero el trabajo habitual no terminará, si-no que se reforzará. En la Reserva trabajaun equipo de seguimiento que ha anotadodesde hace 30 años todo tipo de datos. Ma-nuel Máñez, adscrito al grupo de ornitólo-gos, recuerda que esa acumulación permite«obtener tendencias», algo esencial para es-tudiar la evolución de los ecosistemas. Fer-nando Hiraldo corrobora el valor que tienenesas series temporales completas de datosde Doñana, que también se pondrán a dis-posición en la base de datos de la ICTS, yatribuye el éxito de tenerlas a la «visión» deJosé Antonio Valverde, el mítico creador dela reserva, que allá por los 60 insistía en que«el mejor modo de convencer para la con-servación es hacer buena ciencia».

Hoy en día, los expertos de la EstaciónBiológica de Doñana están entre los científi-cos más citados o con más publicaciones enrevistas de referencia en disciplinas como laBiología de la Conservación, de la que Val-verde fue pionero. La senda de excelenciacontinúa ahora con un salto tecnológico queva a multiplicar el valor de Doñana comocampo de estudio de los ecosistemas.

Los sensores medirán

las mareas, la calidad

del agua, la actividad

de los animales o la

productividad vegetal

C I E N C I A

ARRIBA: Una espátula (‘Platalea leucorodia’) acarrea un trozo de madera al nido, situado en las ‘pajareras’ de Doñana. A partir de ahora, una cámara teledirigidapermitirá observarlas en todo momento a través de internet. ABAJO: Una pareja de moritos (’Plegadis falcinellus’) cuida un pollo nacido en Doñana. SOBRE ESTAS LÍNEAS:Diversos momentos de la instalación de la red de sensores remotos. A la derecha, Ramón Soriguer, junto a una estación de aguas profundas. En el centro, proceso deinstalación de una cámara de alta resolución conectada con fibra ópica a la central. A la izquierda, Hugo Lefranc coloca una nasa tradicional para el conteo de especies.

HÉCTOR GARRIDO

HÉCTOR GARRIDO

E L M U N D O / N Ú M E R O 1 5 / NATURA / S Á B A D O 9 / J U N I O 2 0 0 7 N13

C O N S E R V A C I Ó N

ISAAC VEGA

Colocar cebos envenena-dos es delito. Sin em-bargo, las leyes no hanlogrado evitar que el de-seo de acabar con zo-

rros, perros asilvestrados, aves ra-paces y otros competidores lleve aalgunos a sembrar de veneno elcampo español. Y la cadena tóxicamata cruel e indiscriminadamente.Según las estimaciones deWWF/Adena, en los últimos 15años el veneno ha ocasionado lamuerte de 20.000 rapaces en peli-gro de extinción. Algunas tienenen España sus últimas poblacionesy «las bajas han sido muy superio-res a su efectivos actuales, po-niendo en grave riesgo su recupe-ración», se lamenta Luis Suárez,responsable de Especies de la aso-ciación conservacionista.

La lista de víctimas es tan ex-tensa como nuestro patrimonionatural: 79 águilas imperiales, 17cigüeñas negras, más de 1.200buitres, un millar largo de mila-nos, más de 50 lobos, seis osos,miles de perros y gatos... «El pano-rama es aterrador: los más de3.000 episodios analizados son só-lo la punta de un gigantesco ice-berg, que estimamos en un 3%-15% de la realidad por la dificultadque entraña localizar todos los ca-dáveres en el campo. Sin embar-go, cada víctima es un delito y al-gunas comunidades miran a otra

parte mientras reciben fondos eu-ropeos para conservar a estas es-pecies», afirma Juan Carlos delOlmo, secretario general deWWF/Adena. Las competenciasestán transferidas y Andalucía,Castilla y León, Castilla-La Man-cha y Aragón concentran cerca del80% de los casos, al tiempo queMálaga, Toledo, Huelva y Burgosson las provincias más afectadas.

A pesar de que desde 1989 lautilización de cebos envenenadoses una práctica ilegal y que desdehace una década está tipificada co-mo delito en el artículo 336 del Có-digo Penal, «se han encontrado

más de 9.000 animales envenena-dos y hay poco más de 20 conde-nas», asegura Benigno Varillas, co-ordinador de la Estrategia Nacio-nal contra el Veneno (ENV).

Este documento fue aprobado yconsensuado en 2004 por el Minis-terio de Medio Ambiente y las co-munidades autónomas, pero pocasse han tomado el problema en se-rio y la escasez de vigilancia y san-ciones alimenta el clima de impu-nidad. «Mediante un decreto, Cas-tilla-La Mancha ha aprobado su es-trategia, Andalucía ha desarrolla-do un plan de acción sin rangonormativo y hay un borrador tra-mitándose en Aragón», cuentaCarlos Cano, coordinador del Pro-yecto Veneno de WWF/Adena.Hay que añadir «ciertas accionesdesarrolladas en La Rioja, Balea-res, Cataluña y un principio de in-terés en Galicia», dice Varillas.

Buenos ejemplosQuien busca encuentra y, ademásde encabezar la lista, todos coinci-den en afirmar que Andalucía es lacomunidad más activa. En 2004 pu-so en marcha una patrulla caninade 15 perros adiestrados en Jaén.«Ya han participado en 300 inspec-ciones, detectando cebos envene-nados en el 70%, lo que nos ha per-mitido cerrar unos 40 cotos en losúltimos años», cuenta Miguel Án-gel Simón, director del plan anda-luz. Por su parte, en Lérida, la pa-trulla especializada de agentes ru-rales del Servicio de Medio Am-biente recoge información sobreantecedentes y realiza esperas sis-temáticas. «El año pasado pusierona disposición judicial a siete perso-nas a las que sorprendieron colo-cando cebos envenenados», diceCarlos Cano de WWF/Adena.

Pero según el coordinador de laEstrategia Nacional, Benigno Va-rillas, «son sólo iniciativas paraperseguir el delito, no para preve-nir el problema». En este sentido,añade, «apoyándonos en la nuevaLey de Desarrollo Rural Sosteni-ble, vamos a prevenir el uso de ve-neno promoviendo modelos de ga-nadería compatibles con la biodi-versidad en cinco áreas: dos enLérida y una en Asturias, en Pa-lencia y en Cáceres».

Para Luis Suárez, el repuntedel uso del veneno en el campotiene diversas claves. Por una par-te, el medio agrario se han trans-formado debido a la intensifica-ción, que ha alterado las condicio-nes naturales y ha hecho dismi-nuir, junto a otros factores, las po-blaciones de especies presa, comolas perdices o los conejos. Porotra parte, se ha incrementado laexplotación cinegética industrial,que «ya no es una actividad tradi-cional, sino un gran negocio», opi-

La Real FederaciónEspañola de Caza repudiael empleo de cebos yexpulsa a los infractores

En los últimos 15 añoshan muerto envenenadasunas 20.000 rapaces enpeligro de extinción

na el experto. Finalmente, haymayor accesibilidad al veneno,porque no se usa la estricnina, si-no pesticidas, herbicidas y fungi-cidas de uso agrícola fáciles de ad-quirir sin control en grandes can-tidades en cualquier tienda, expli-ca el especialista de WWF/Adena.

La suma de todos estos factorescrea una situación en la que setiende a resolver los supuestosconflictos de intereses medianteel veneno. Aunque hay más secto-res implicados, algunos gestoresde caza emplean el veneno, o loslazos, para eliminar depredado-res, como el zorro, a los que cul-

pan del descenso de piezas de ca-za. Sin embargo, muchos exper-tos creen que el veneno no solu-ciona problemas, sino que losagrava, al incrementar los dese-quilibrios del medio.

De hecho, muchos cazadores ypropietarios de fincas están indig-nados con las malas prácticas.«Estamos absolutamente en con-tra del uso de cebos envenena-dos», sentencia Andrés Gutiérrez,presidente de la Real FederaciónEspañola de Caza. «Nos persona-mos como acusación particular enalgunos casos y, si el Tribunal de-muestra la culpa el cazador o la

sociedad, son expulsados de la Fe-deración; además, financiamos elteléfono SOS Veneno», añade elpresidente de 780.000 cazadoresfederados. La línea gratuita deSOS Veneno (900 713 182) recibedenuncias desde toda España y esgestionada por la Fundación parala Conservación del Buitre Negro.

Aunque la creación de las fisca-lías provinciales de Medio Ambien-te supone un gran paso, «es ina-ceptable la falta de rigor y forma-ción a la hora de perseguir estosdelitos por parte de ciertos jueces yfiscales», denuncia el secretariogeneral de WWF/Adena.

LUIS PAREJO

DELITOS

Los cebos envenenados matana miles de ejemplares deespecies protegidas cada año

NATURALEZAINTOXICADA

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A C T U A L I D A D

CONSERVACIÓN

Pretenden unir los dos gruposaislados de osos cantábricos

CANDELA MARTÍNEZ

La conservación deloso pardo, el mamí-fero terrestre conmayor riesgo de ex-tinción en España

junto al lince, ha recibido unnuevo empuje para garantizarsu permanencia en la Cordi-llera Cantábrica. La FundaciónBiodiversidad del Ministerio deMedio Ambiente y la Funda-ción Oso Pardo (FOP) acaban

de renovar el convenio de co-laboración que mantienendesde 2003 para vigilar la cazafurtiva (en especial el trampeoilegal con lazos de acero) y ha-cer un seguimiento de la pobla-ción de oseznos.

El proyecto Acciones para larecuperación del oso pardocantábrico, en el que tambiéncolaboran la Fundación Terri-tori i Paisatje y la Viceconseje-

ría de Medio Ambiente delPrincipado, cuenta con un pre-supuesto de 211.000 euros.

Las actuaciones se centran,como en años anteriores, en lavigilancia, la búsqueda y retira-da de lazos de acero, el segui-miento de las poblaciones y laprotección de los cultivos delos daños que ocasionan los ja-balíes. Sin embargo, la nove-dad de 2007 es la puesta enmarcha de un estudio para de-terminar si es posible comuni-car a las dos poblaciones sepa-radas de la cordillera.

En estos momentos existenen la Cordillera Cantábrica dospoblaciones de oso pardo «ge-néticamente incomunicadas yen fase de lenta recuperación»,explica el presidente de la FOP,Guillermo Palomero. Uno delos núcleos de oseznos habitaen la montaña palentina, con-cretamente en Riaño (León) yen los montes limítrofes deCantabria, y cuenta aproxima-damente con 30 osos contabili-zados por la FOP.

La segunda se localiza en lazona suroccidental de Asturias,Alto Sil leonés y Ancares, y enella habitan otros 100 ejempla-res. En esta segunda población«suelen darse entre 10 y 15 na-cimientos de osos cada año y seobserva un mayor movimientode ejemplares, sobre todo cercadel Alto Sil leonés, una zonamuy frecuentada por osas concrías», indica Palomero. Para

estudiar el pasillo que separa alas dos poblaciones, se segui-rán varias fases. «Comenzare-mos por delimitar el corredorinterpoblacional en la vertienteleonesa y analizar los diferen-tes pasillos ecológicos que sepueden establecer. Lo siguien-te será estudiar la calidad deese hábitat para el tránsito y su-pervivencia del oso, así como laidentificación de barreras»,afirma el presidente de la FOP.La información servirá para«elaborar una propuesta sobrelas actuaciones y el presupues-to necesario».

Al mismo tiempo, se man-tendrán las dos patrullas de vi-gilancia de los cotos de caza dela zona, coordinadas por JoséLuis García y Guillermo Palo-mero, ambos de la FOP. Las pa-trullas desarrollan labores delucha contra el furtivismo, se-guimiento y censo de poblacio-nes oseras, vigilancia del hábi-tat y control de actividadesprohibidas. Colaboran tambiénen proyectos de sensibilizacióny educación ambiental.

Otra de las líneas de trabajoconsistirá en colocar 120 siste-mas de electrificación de cerca-dos, también llamados pastoreseléctricos, para evitar el uso ile-gal de lazos y otros trampeosprohibidos que merman las po-blaciones de oseznos. Nuevesociedades de caza de la zona,con las que se han firmado con-venios estos últimos años, se-rán las encargadas de repartirestos pastores eléctricos a ga-naderos y agricultores.

La Fundación Biodiversidad y la Fundación OsoPardo renuevan su acuerdo para proteger elhábitat del mamífero en la Cordillera Cantábrica

Hábitat osero en la Cordillera Cantábrica entre montañas y bosques caducifolios. / FUNDACIÓN OSO PARDO

Patrulla Oso de Cangas del Narcea, financiada en-tre la Fundación Biodiversidad, la Fundació Terri-tori i Paisatge y la Fundación Oso Pardo.

www.fundacionosopardo.orgwww.fundacion-biodiversidad.es

na de las peculiaridades más llamativasdel animal humano es su insólita capaci-dad para imaginar cosas que no existen(o que al menos jamás ha percibido consus cinco sentidos), y pelearse, incluso

hasta la muerte, sobre la verosimilitud desus fantasías. Nunca veremos a dos cangrejos

enzarzados en un acalorado debate sobre la existencia deDios, Alá u otros seres omnipotentes y sobrenaturales. Tam-poco nos toparemos jamás con dos abejas obreras batiendosus alas al discutir sobre la posibilidad de rebelarse contra sureina y construir una colmena perfecta, sin desigualdades, niexplotación, ni jerarquías despóticas. Y aunque comparta-mos el 99% de nuestro ADN con los grandes simios, es alta-mente improbable que nos encontremos alguna vez con unamanada de chimpancés planteándose si después de la muer-te, el alma de un primate viaja al paraíso, desciende al infier-no, o posiblemente se reencarne en una nueva criatura.

Quizás lo que más nos define como especie, y constituyeel gran salto cerebral en la odisea de la evolución, es esa irre-frenable tendencia a especular sobre lo que no conocemos, afabular cuando no tenemos respuestas claras, o a imaginarposibilidades cuando no tenemos pruebas definitivas. La ex-traordinaria imaginación humana es la madre de todosnuestros mitos y religiones, pero también alimenta a la cien-cia y la tecnología: el origen de toda innovación nace de unahipótesis, el momento en el que una criatura pensante seimagina algo que todavía no existe, pero que quizás podríaconvertirse en realidad. Los grandes visionarios de la Histo-ria han sido personajes quijotescos, capaces de concebirmundos futuros en los que los humanos podrían hacer cosasque en su momento parecían absolutamente improbables oinconcebibles, como hablar a través de larguísimas distan-cias, cruzar océanos en máquinas volantes o pasear sobre la

Luna. Ya lo dijo el gran sociólogo alemán Max Weber: «Elhombre nunca hubiera logrado lo posible si no fuera porqueuna y otra vez ha aspirado a alcanzar lo imposible».

Hoy sabemos que nuestros parientes más cercanos, losgrandes simios, tienen ciertas capacidades rudimentariaspara imaginar posibles futuros y concebir estrategias alter-nativas para satisfacer sus necesidades básicas a corto y me-dio plazo (cazando termitas con diferentes técnicas, rom-piendo nueces con diversos instrumentos, etcétera.) Pero só-lo el primate humano ha llevado hasta extremos insospecha-dos lo que los griegos llamaron ou topos, literalmente el «nolugar», es decir, la utopía, la búsqueda del paraíso perfecto,el sueño de un mundo feliz.

Todos estos pensamientos revolotean en el ordenador ce-rebral del animal humano que escribe estas palabras al re-cordar la desaparición (hace ahora dos años) de José Anto-nio Jáuregui, el maestro que inspiró esta columna de NATU-RA dedicada a la reflexión antropológica. Ante la muerte deun ser querido, algunos sapiens que siguen vivos sobre laTierra se preguntan si quizás su espíritu sigue vivo de algunamanera, se entera de algo, es consciente de las alegrías y pe-nas de los que no nos hemos ido todavía. La vida más allá dela tumba es una atrevida hipótesis que se resiste a morir,aunque nuestra racionalidad científica se burle de ella. Almono utópico le cuesta aceptar que después de la muerte só-lo nos espera la nada, y cargado con la esperanza de su cere-bro fabulador, se consuela con el sueño de la inmortalidad.

LOS SUEÑOS DELMONO UTÓPICOPor Pablo Jáuregui

U

EL ANIMAL HUMANO

RICARDO

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A C T U A L I D A D

Los autobuses de Madrid reduciránsus emisiones de gases invernadero

RICARDO FANJUL

La Comunidad de Madridha puesto en marcha sudenominado Plan Azulpara «reducir progresi-vamente las emisiones

de CO2 actuales en 4,5 millonesde toneladas en 2012», como ase-guran desde la Consejería de Me-dio Ambiente. El pasado 17 demayo, el responsable de esteárea, Mariano Zabía, y la conse-jera de Transportes, Elvira Rodrí-guez, firmaron una acuerdo conla empresa Eminox para que losvehículos de transporte públicoregionales disminuyan sus emi-siones de gases de efecto inverna-dero a la atmósfera. Inicialmente,este proyecto piloto, pionero enEspaña, probará los citados fil-tros de partículas en tres vehícu-los interurbanos.

El objetivo inicial de los res-ponsables de Medio Ambiente escomprobar si la instalación de losfiltros sirve para reducir las emi-siones de estos grandes vehícu-los. Tras este periodo de pruebade seis meses con autobuses de laempresa de transportes Blas yCia, ambas Consejerías contaráncon información suficiente para

determinar los valores en que eltransporte público puede contri-buir a la mejora de la calidad deaire que respiran los madrileños.

En un periodo de cinco años,la Comunidad de Madrid esperadisponer de una flota de autobu-ses de transporte público com-pletamente limpia. Tal y comoexplican desde la Consejería deMedio Ambiente, los vehículosya en funcionamiento irán adap-tando los filtros fabricados porEminox.

Posteriormente, según vayansumándose los nuevos vehículosde las distintas empresas queoperan en la región, las condicio-nes establecidas en el Plan Azulles exigirán que ya lleven incor-porados estos dispositivos lim-pios. Así pues, para el año 2012–año, por cierto, en el que venceel Protocolo de Kioto–, la totali-dad de autobuses públicos queopera en esta Comunidad estaráen condiciones de garantizar ungrado de emisiones muy inferiora los niveles actuales.

Este Plan Azul de la Comuni-dad de Madrid, también denomi-nado Estrategia para la mejora dela calidad del aire, incluye otras

medidas destinadas a cumplircon los objetivos de mínima con-taminación acordados en el Pro-tocolo de Kioto. En concreto, des-tacan proyectos de reforestaciónde 15.000 hectáreas de monte enla región, cuya masa verde con-tribuirá notablemente a la absor-ción del denostado CO2 que, ade-más de producir problemas respi-ratorios y alérgicos a la pobla-ción, contribuye a aumentar latemperatura global del planeta.

El Gobierno regional apuestaigualmente por concienciar a losautomovilistas acerca de mode-los de conducción más eficientesen ahorro de energía y, en conse-cuencia, en la reducción de com-bustible quemado. Para ello, tie-ne previsto impartir cerca de30.000 cursos a conductores.

Por último, el Plan Azul haráuna apuesta importante para im-pulsar ayudas económicas y pro-mover la implantación de ener-gías renovables, como la solar ola eólica. Su intención es mejorarla eficiencia energética de tressectores con alto volumen decontaminación, como son el in-dustrial, el residencial y el sectorde los servicios.

Autobuses interurbanos deMadrid, pertenecientes a la empresa de transportesBlas yCia. / EL MUNDO

spaña es un país de inventores. Gentesque le dan vueltas a los problemas y lesbuscan las soluciones. El helicóptero oel submarino son algunas de esas gran-des invenciones que, aunque no recono-

cidas internacionalmente en forma de pa-tente, ahí están para demostrar quiénes fue-

ron los inventores. Quizá tenga que ver con el espíritu algoquijotesco que nos embarga: ir por la vida solucionandoentuertos con más o menos éxito. Tan es así que el popularTBO tuvo durante décadas una página dedicada a invencio-nes imposibles como corresponde a un cómic de aquellosaños. También son inventos españoles el chupa-chups, ydicen que la fregona.

Donde viene arrasando el ingenio español los últimosaños es en el ámbito de las energías renovables. Ahí estánlas investigaciones del profesor Antonio Luque al frente desu Instituto Solar de la Universidad Politécnica de Madrid,quien anda centrado en el espectro solar y en las células deconcentración, mucho más eficientes que las clásicas de si-licio. Desde hace más de 25 años el Centro Solar de Alme-ría no ha cesado en buscar la mejor manera de ordeñar alSol. De tantas investigaciones han surgido empresas comoIsofotón, presentes en numerosos países y proyectos contecnología española a la última. En energía eólica sólo bas-ta decir que España se sitúa en segundo (o tercer) lugar enel mundo en cuanto a potencia instalada y en la tecnologíaque acompaña a estos molinos. La empresa Manuel Torresha puesto en el mercado eficientes aereogeneradores quecompiten con los de manufactura danesa o alemana.

España también es puntera en la desalación de agua demar. La necesidad ha obligado a buscar la manera de pro-porcionar agua potable de la forma más barata a los dos ar-chipiélagos y al Levante. Empresas españolas construyen

hoy día desaladoras en todos los continentes e incluso laque se realiza en Londres.

Como el ingenio hidalgo nunca se detiene, una empresaespañola acaba de patentar un petróleo que es biológico, yademás, renovable. ¿Cómo? Bio Fuel System (BFS) ha en-contrado el modo artificial de lograr en unas horas lo queha ocurrido en cientos de millones de años bajo tierra. Losmicroorganismos que componen el fitoplancton (algas)son los mismos que quedaron sepultados en las convulsio-nes geológicas del planeta. Con el paso del tiempo se fosili-zaron y se convirtieron en petróleo. Su poder energético esdebido a que las algas evolucionaron hasta lograr que la mi-tad de su masa fuera aceite, con el fin de flotar cerca de lasuperficie para captar la luz. Como seres vegetales que son,necesitan del Sol y del carbono para vivir, en el proceso dela fotosíntesis. A las algas se les debe (junto a los bosques)que la atmósfera empezara a tener oxígeno y menos CO2, loque permitió otras formas de vida, incluida la nuestra.

El biólogo Cristian Gomis Catalá ha seleccionado algasque se reproducen mucho y tienen más grasa. Y ha recrea-do el medio marino ideal para estos seres que se multipli-can celularmente cada pocas horas, donde absorben CO2.Viven en cilindros transparentes millones de veces másconcentradas que en el mar; esa sopa de algas es como elpetróleo. Su combustión produce energía que además pre-cisa del CO2 que se emite en un ciclo sin fin... De ahí lo sos-tenible y el gerundio.

INVENTANDO, QUEES GERUNDIOPor Gustavo Catalán Deus

E

INMERSIÓN

G. C.

MENOS HUMOSTRANSPORTE

consuma», explican desde laempresa gasística. El GNV seofrecerá un 22%más baratoque el gasóleo A. Además deponer en marcha una ampliacampaña de divulgación sobrelas ventajas de estecombustible, tanto GasNatural como elAyuntamiento y la Comunidadde Madrid se hancomprometido a favorecer laincorporación de vehículos aGNV dentro de su parquemóvil, así como entre otroscolectivos profesionales detransporte, distribucióncomercial y flotas,pertenecientes a lasdiferentes administracionespúblicas.

La Comunidad y elAyuntamiento de Madrid hanalcanzado recientemente unacuerdo con Gas Natural, dosfirmas de automóviles y lostaxistas madrileños, para quesus vehículos funcionen conmotores de GNV (Gas NaturalVehicular). De esta manera, lacapital se convierte tambiénen pionera en el uso de estecombustible limpio en elsector del taxi.Para alcanzar el objetivoambiental de este acuerdo,las administraciones deberántrabajar en la homologaciónde los vehículos para su usoen el sector público.Vehículos que entrarán en elmercado con este sistema ya

incorporado, de la mano deGeneral Motors y Fiat España,los dos fabricantes quefirmaron el acuerdo. Estasmarcas ofertarán cincomodelos cada una, conatractivas fórmulas decompra, financiación yrecompra de vehículos.De forma paralela sedesarrollará la creación deinfraestructuras para facilitarel repostaje. Para ello, «GasNatural realizará estudiossobre la ubicación desurtidores públicos, aportarámedios técnicos e inversionespara la explotación ymantenimiento de estasinstalaciones y suministraráel gas natural que se

� LOS TAXIS USARÁN GAS NATURAL VEHICULAR

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La visita podría empezar porNavaleno (Soria), un pueblo de1.000 habitantes donde el paro escasi desconocido y que acoge a va-rias empresas dedicadas a la trans-formación de la madera y las setas.Junto a Navaleno se encuentra elmonte de Pinar Grande, que cum-ple un siglo desde que fue someti-do a ordenación forestal por pri-mera vez. Lo que significa que,desde 1907, se sabe cuántos árbo-les hay, qué tamaño tienen, cuálesse van a cortar... y cuándo.

El jefe del Servicio Territorial deMedio Ambiente de Soria, José An-tonio Lucas, lo tiene claro: «En estacomarca, los montes que mejor seconservan son los que más se hancortado». Su frase sonará subversi-va a quienes tengan la idea de quela naturaleza debe permanecersiempre intocada. Pero resultaconvincente cuando se observa elimponente aspecto de bosque ma-duro que tiene Pinar Grande. Nadahace pensar que lleva produciendomadera desde siempre. Sin embar-go, el 15% de todas la talas de Cas-tilla y León salen de esta comarca.Pese a lo cual los árboles no dejande aumentar.

Una de las claves de la buenaconservación de los montes es quelos habitantes son beneficiarios di-rectos. Como explica la alcaldesade Covaleda, Concepción Martí-nez: «La propiedad es de los ayun-tamientos. Los gestiona la Juntade Castilla y León, porque sonmontes de utilidad pública, pero elderecho de explotarlos es de los

vecinos». De modo que, desde ha-ce siglos, «debido a privilegios depoblamiento concedidos por losreyes desde el siglo XIII», cadapersona nacida y residente en unpueblo pinariego tiene derecho asu «suerte de pinos». Realizada latala anual, se reparten los ingre-sos. Según la alcaldesa,«pueden ser ahora unos600 euros por persona,pero en los años 40 su-ponía mucho más y lagente vivía sólo de la ma-dera de un año».

María Pascual, una jo-ven consultora naturalde Navaleno, piensa que«el respeto al monte seinculca en la comarcadesde la infancia. Esnuestro patrimonio, y locuidamos. Si alguien hi-ciera algo malo en él losvecinos se le echaríanencima». «Hay una rela-ción directa, por la cer-canía física al bosque,por los ingresos que ge-nera y por el resto deservicios, como los turís-ticos, que produce. Elmonte forma parte denuestra forma de ser»,concluye María Pascual.

Dada la productividady los valores emocionales ligadosal monte, parece normal que todoslo cuiden. Sin embargo, el interéscomún no lo explica todo. En Gali-cia, donde el año pasado se calci-naron 90.000 hectáreas, la mayo-

ría de los terrenos forestales soncomunales, pero arden. Hay algúnotro secreto. Y José Antonio Lucaslo tiene claro: «La situación idílicade nuestros días se debe a la ges-tión. Antes no era así. En 1868 ar-dieron 7.200 hectáreas de monteen la comarca. Pero no ha vuelto a

ocurrir. ¿Por qué? Fue cuando vi-no la ordenación de montes paracompatibilizar los usos, entre ellosel de los ganaderos, que queríanpastos y no árboles. Ahora hay unarotación de espacio y de tiempo

PEDRO CÁCERESNavaleno (Soria)

Las administraciones pú-blicas españolas se gasta-ron el año pasado en pre-vención y extinción de in-cendios 721 millones de

euros. Sin embargo, esta inversiónno evitó que en 2006 ardieran150.000 hectáreas de terreno fores-tal, superficie equivalente casi a laprovincia de Guipúzcoa. En la Pe-nínsula Ibérica hay fuego cada ve-rano por todos lados. Menos enuno. Porque en esa negra Españade las llamas hay un rincón en elque los incendios suenan a cosa le-jana. Tan lejana como que el últimogran siniestro data del siglo XIX.

Es la comarca de Pinares Soria-Burgos, cuyos montes cubiertos ensu mayoría por pino silvestre (Pi-

nus sylvestris) forman la mayormasa continua arbolada de Espa-ña. Para averiguar cómo es posibleque el mayor bosque del país no ar-da resulta interesante recorrerlo ydescubrir que se trata de un lugarque ha convertido la madera en suprincipal medio de vida.

En la comarca de Pinares Soria-Burgos, el 41% de la población acti-va se dedica al sector de la madera.Unos 4.000 trabajadores faenanpara 700 empresas. Y la actividadha permitido que sea una de las po-cas áreas rurales del interior penin-sular que no perdió población en elsiglo XX. La implicación de los ha-bitantes con el monte, del que ob-tienen beneficios, y las políticas deordenación forestal y gestión delterritorio son la clave del éxito.

La comarca de Pinares Soria-Burgos, un ejemplode buena gestión forestal desde hace más de unsiglo, obtiene la denominación de BosqueModelo, una etiqueta internacional que certificala sostenibilidad de la explotación de la madera

DONDE ELMONTE NO ARDE

B O S Q U E S

Una extensa masa de pinos silvestres (’Pinus sylvestris’) de más de un siglo cubre el terreno cerca de Navaleno (Soria) en la comarca castellana de Pinares Soria-Burgos. / MIGUEL SEGUR

CASTILLA Y LEÓN

BOSQUE MODELOPionero en España. El concepto de Bosque Modelo nacióen Canadá para promover la gestión integral y sostenible delos recursos forestales mediante la participación y el con-senso social. España acaba de entrar en ese club internacio-nal, del que forman parte 43 espacios, con la inclusión delBosque Modelo de Urbión. Cubre 100.000 hectáreas de la co-marca de Pinares, que ya contaban con el certificado PEFC yahora incorporan el nuevo aval. El Bosque Modelo de Urbiónpretende mejorar la gestión forestal y poner en valor los pro-ductos y servicios del bosque y su conservación.

VIVIR CON MADERAPromoción del producto. El proyecto Vivir con Maderaes una iniciativa desarrollada por la patronal europea del sec-tor maderero y liderada en España por la Confederación Es-pañola de Empresarios de la Madera (Confemadera) y diver-sas instituciones públicas y empresariales. Tiene como obje-tivo promocionar el uso de este material en todo tipo de apli-caciones y defender que, si se explota adecuadamente, evitalos incendios, protege la biodiversidad y mitiga el cambio cli-mático. Recientemente, Vivir con Madera ha promocionadola comarca de Pinares como un ejemplo a seguir.

FIJACIÓN DE CO2

Evitar el cambio climático. Los árboles, al crecer, fijan elCO2 atmosférico. Un metro cúbico de madera inmoviliza unatonelada de CO2. El director general de Medio Ambiente dela Junta de Castilla y León, Mariano Torre Antón, explica quelos bosques son «un gran sumidero de carbono». En una ex-plotación sostenible, los árboles que crecen tras la tala siguenfijando carbono, mientras que la madera ya cortada se con-vierte en un almacén de CO2. En Castilla y León se corta cadaaño el 22% del crecimiento anual del bosque, es decir, larenta. El resto se deja en el campo como capital.

Castilla y Léon es la comunidadcon más hectáreas forestalescertificadas como sostenibles

La vinculación de los vecinosy la ordenación del monte sonla clave del éxito de la comarca

Soria

CovaledaVinuesa

El Royo

CidonesEspejón

Vilviestredel Pinar

Parque Sierrade la Cebollera

La Laguna Negra

LA RIOJA

SORIA

0 5

Km.

N-234

N-111CL-11742º

Salas de los Infantes

Navaleno

Cañón del Río Lobos

BURGOS

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que evita los conflictos de intere-ses. Cada uno tiene su aprovecha-miento».

Lucas explica el modo de proce-der en un monte ordenado. «El te-rreno se divide en secciones, quecuentan con media docena decuarteles, que se dividen a su vezen otros tantos tramos y estos enrodales». El rodal, que es la unidadúltima de medida, tiene unas 30 ó40 hectáreas. En Pinar Grande elturno de corta de cada tramo es de100 años, lo que significa que laparte que se explota hoy fue selec-cionada para ello hace un siglo. Ycerca está el área que la sustituirá,de edad similar.

De esta forma, siempre hay unabanico de paisajes, desde el árearecién cortada al bosque maduro,pasando por distintas etapas desucesión del bosque. También estáregulada la explotación de la cazay estudiada la producción de lassetas. Según Lucas, «los montesde 20-40 años son buenos para elníscalo (Lactarius deliciosus) y losmigueles (Boletus edulis) crecenmás en pinares de 60 a 80 años».

Todo parece medido, pero no sehace por sí solo. Cada etapa exigetrabajos y algunos de ellos no sonrentables por sí mismos. Tras latala, puede brotar un denso pinarde 4.000 pies por hectárea. Sucesi-vas tareas de corta y clareo redu-cen los ejemplares y eliminan losárboles enfermos hasta dejar 350por hectárea. La calidad lo agrade-ce. Ésta es la única zona de Espa-ña con una marca o denominaciónde origen de madera, llamada Pi-no Soria-Burgos.

Los valores biológicos no se ol-vidan. Javier María García, jefe dela Unidad de Ordenación y Mejoradel Servicio Territorial de MedioAmbiente de Burgos, explica quelas áreas donde crecen especiessingulares como la Myrica gale,una pequeña planta de las turbe-ras, se protegen especialmente.Tampoco se cortan los «cuartelesde cumbre» y se potencia el creci-miento de otras especies como ro-bles o hayas. Además, añade Lu-cas, en cada sección hay un cuartelque nunca se corta, «como espaciode recreo y de valor paisajístico».

En el Aula Divulgativa del Bos-que El Amogable, junto a Navale-no, José Antonio Lucas ha puestoen marcha un centro interpretati-vo de estas cuestiones. Pero estambién un espacio de capacita-ción forestal y un centro de vigi-lancia ante el fuego que funcionade forma continua.

Mariano Torre Antón, directorgeneral de Medio Ambiente, ex-plica que la Junta de Castilla y Le-ón ha logrado un acuerdo paraque las cuadrillas antiincendiospasen «del régimen agrario al ré-gimen general», con lo que ahoracobran más y trabajan todo el añoy no sólo en verano, como ocurreen muchos lugares de España. Deeste modo, en El Amogable «tie-nen dos equipos de trabajo, el decorta y el de extinción», y dedicangran parte del año a las tareas deprevención y limpieza.

En la tierra de Pinares, el inte-rés común –y el sentido común–lleva décadas haciendo realidad elmito del desarrollo sostenible. Susmontes, que ya contaban con el se-llo PEFC, un certificado interna-cional de buena gestión, están in-tegrados desde el pasado 25 deabril en la Red de Bosques Mode-lo, una categoría nacida de laCumbre de Río 92 en la que sóloestán otros 42 lugares del globo.

MANUEL DARRIBAGondomar (Pontevedra)

La comunidad de mon-tes de Vincios, en elmunicipio pontevedrésde Gondomar, haarrendado tres hectá-

reas de terreno para un proyectoinédito: sustituir los omnipresen-tes eucaliptos australianos porárboles de 21 especies. Dominanlos castaños y los robles, en unintento de conjugar el beneficioeconómico a largo plazo con ladiversidad forestal.

«Dentro de cinco años, todoesto estará cubierto de sombra»,predice con entusiasmo JavierMontalvo, profesor del departa-mento de Ecología Aplicada de laUniversidad de Vigo, mientraspasea entre tocones de eucalip-tos cortados el verano pasado. Elsol acaricia la Serra do Galiñeiro.Montalvo lo imagina filtrándoseentre las ramas de castaños y ro-bles, cerezos y laureles y 21 espe-cies arbóreas de crecimiento len-to y poco inflamables. Todo locontrario que el huésped al quese disponen a desplazar. «El eu-calipto es el enemigo», repite conconvicción el científico. «El éxitode la plantación depende de que

impidamos que rebrote. El euca-lipto es un error histórico en Ga-licia que ha beneficiado sólo a laspapeleras y que le cuesta a la Ad-ministración mucho dinero enprevención de incendios. El mo-delo de gestión es que todo cues-te mucho y que ganen las empre-sas de servicios, que no buscanahorros para los propietarios, si-no gastos: que haya que reponerplantas, que éstas se quemen…»,opina Montalvo.

El vergel que ha diseñado elexperto cubrirátres hectáreas deladera de esta sie-rra pontevedresa,situada a escasoskilómetros de Por-tugal. Al revés delo que sucede en lamayoría de losmontes gallegoscercanos al mar, eleucalipto sólo ocu-pa aquí un 15% delas 670 hectáreasde superficie. Lamayor parte de lasierra es un mono-cultivo, pero de Pi-nus pinaster. «Eleucalipto no nos

GALICIA

Cambian eucaliptos porárboles de 21 especies distintas

PULSO ALMONOCULTIVO

B O S Q U E S

Una becaria marca con pintura eucaliptos para su eliminación experimental en los montes de Vincios. / ANA BELÉN CASALEIRO

gusta», dice José Troncoso, se-cretario de la junta de montes dela parroquia de Vincios. Pocorentable, voraz y combustible: en2005, O Galiñeiro sufrió un in-cendio que arrasó 30 hectáreas.Por eso los comuneros hanarrendado por 30 años la parcelaen la que se verá si el eucaliptopuede ser vencido. «Vamos a serojeadores atentos de esta expe-riencia», dice Troncoso.

La promotora del proyectoREFORGAL es la empresa alba-ceteña Maderas Nobles de la Sie-rra del Segura, que se presentacomo una amalgama de rentabi-lidad y responsabilidad ecológi-ca. Desde su fundación, en 2000,la firma agroforestal ha plantado4.000 nogales en sus fincas deAlcaraz y tiene otros 3.000 en ca-mino. Venden lotes de 10 árbolesa 3.300 euros, los cuidan durante20 años y le reembolsan al inver-sor el 90% de lo obtenido por laventa de la madera. Así han con-seguido hacerse con una cliente-la de 4.000 personas en las que eldeseo de invertir en productosrevalorizables se une a la defen-sa de la biodiversidad y la luchacontra el cambio climático.

Vincios es su primer proyectogallego. El primero que se desa-rrolla en un clima distinto al me-diterráneo y que no está prota-gonizado por nogales. «Va a seruna de las explotaciones foresta-les más equilibradas y bonitasde España», asegura RafaelBlázquez, representante de laempresa para Galicia. «En elmonte hay terreno para todas lasespecies, pero nosotros entende-

mos que se han potenciado de-masiado las especies de creci-miento rápido. Las maderas no-bles crecen despacio, pero a lalarga generan más beneficioseconómicos». Carpintero de pro-fesión, Blázquez cree que la po-sibilidad de vender el eucaliptoen sólo 10 años es un espejismo.«El metro cúbico de eucalipto es-tá a 18 euros en el monte. A ve-ces no les da a las comunidadesni para arreglar los caminos. Elcastaño se cotiza hoy a 500 eu-ros por metro cúbico. Conside-rando una subida anual modera-da del 7%, un castaño que seplante hoy podrá venderse den-tro de 25 años a 2.700 euros elmetro cúbico. Y cada árbol pue-de desarrollar hasta dos metroscúbicos de madera».

El aliado científico del proyec-to de Vincios, Javier Montalvo,ha preparado un menú de biodi-versidad que nunca antes se ha-bía servido en un monte gallego:2.200 castaños, 500 robles y 150cerezos. Y otros 1.250 individuosde 18 especies más.

Las 4.000 plantas se colocaronen febrero, siguiendo unos crite-rios ecológicos que brillan por suausencia en las plantaciones fo-restales industriales. No se rotu-ró el terreno. Apenas se tocó el2%. Los hoyos no se hicieron ali-neados, sino dispersos, y se usóun levantamiento topográfico lo-calizándolos sobre el terreno conGPS. «Estamos imitando a la na-turaleza, ése es el camino», ex-plican los promotores.

Y puesto que la naturalezatampoco los utiliza, los fertilizan-tes inorgánicos están vetados.Para abonar el terreno, retener lahumedad y contener la erosión,se ha utilizado un tupido enca-mado de restos de eucalipto y he-lechos, que en esa zona crecenhasta la altura del pecho. «A par-tir de estas condiciones, actuarála selección natural. Cada árbolcrecerá en la medida en queaproveche mejor sus recursos».

El castaño, la especie domi-nante, está representado por 10variedades híbridas. «Se trata declones diseñados con biotecnolo-gía, resistentes a las plagas», ex-plica Montalvo. «Además los he-mos micorrizado, fijando a lasraíces una solución de hongosque ejercerá una simbiosis con laplanta». Esto permitirá que bro-ten setas comestibles, otra fuentede ingresos.

Este tipo de árbolescrecen lento pero sonmás rentables a la larga

La empresa MaderasNobles del Segurapromueve el proyecto

VARIEDAD VEGETAL

� Diversidad. En la finca piloto, el castaño y elroble albar son las especies principales ysuponen el 75% de los árboles. El cerezosilvestre, el nogal y el serbal (Sorbus aucuparia)cubren otro 8% como especies secundarias. Hayun 17% sembrado con plantas acompañantes,entre las que destacan el acebo, el madroño y elalcornoque. A ellos se unen, en enclavesespecíficos: roble melojo, peral silvestre, arce,sauce, laurel, fresno, aliso, avellano, abedul, loro(Prunus lusitanica) y arraclán.� Seguimiento. Para eliminar los eucaliptos sehan usado cuatro procedimientos: desmochado,trituración total y parcial y aplicación defitocidas. Se busca el método más eficaz paracontrolar una especie que rebrota tenazmente yagota los recursos del terreno.

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A I R E L I B R E

CHANO MONTELONGOChristmas Island (Australia)

Un ambiente enrarecidoe insólito recibe a todoviajero que pone el piepor primera vez enChristmas Island, una

remota isla del Océano Índico queparece nadar en aguas de nadie.Personajes extraños, de aspectopendenciero, forzudos y toscos,con pelos largos y grasientos pare-cen sonreír tras sus espesas barbasdesaliñadas al paso del incómodoturista, apostados estratégicamenteentre humos de cigarros y cascosde cerveza. La escena no sería rarasi la situáramos en una taberna deun puerto perdido en el último con-fín del mundo, donde mercenariosy fugitivos encuentran refugio. Sinembargo, la cosa adopta tintes su-rrealistas cuando el escenario es unpequeño pero moderno aeropuertointernacional australiano... Si la le-jana Christmas Island es famosapor su extraña y peculiar biodiver-sidad y por haberse convertido enun verdadero laboratorio vivientede la Historia Natural, la otra faunaterrestre de la isla bien podría ha-cerle competencia.

Christmas Island –o la Isla Navi-

dad, para nosotros– se localiza enel mapa a 360 km. al sur de la Islade Java (Indonesia). Se trata de lacumbre de una enorme montañasubmarina de carácter volcánicoque se eleva dramáticamente alborde de la conocida como Fosa deJava, el punto más profundo delOcéano Índico, con una cota pordebajo de los 7.400 m.

Aunque la isla fue descubiertaen la Navidad de 1643, no fue hasta1888 cuando el hombre comenzó ahabitarla. Debido a la tardía pre-sencia humana y a la inaccesiblenaturaleza del lugar, un pequeño

pero significativo número de orga-nismos únicos continúa existiendoen este minúsculo rincón del plane-ta. En los círculos científicos,Christmas Island ha empezado aser conocida como las «Galápagosde Australia».

Además de poseer uno de losarrecifes de coral más vírgenes delÍndico –en los últimos años se haconvertido en una de las mecas delbuceo mundial–, este lugar perdidoy solitario de exuberante vegeta-ción selvática es el hogar de variasespecies endémicas de aves, de la-gartos, de la extraña musaraña deChristmas Island (un mamífero in-sectívoro similar a un ratón) y deuna surrealista fauna de cangrejosde tierra, como el azul –blue crab–o el ladrón –robber crab– (el másgrande del planeta). Pero si por al-go es conocida esta isla es por sus150 millones de cangrejos rojos–red crab–, un caso único en elmundo, ya que viven en el interiory se alimentan de flores y frutos.Esta enorme biodiversidad ha he-cho que el Gobierno australianodeclare Parque Nacional al 70% dela isla.

Minas de fosfatoA falta de grandes infraestructuraspara acoger el turismo de masas, laisla debe su progreso social y eco-nómico a una industria que, a prio-ri, podría parecer perjudicial paraconservar la enorme riqueza natu-ral que alberga. Pero la realidad esque la explotación minera de fosfa-to de Christmas se ha convertidoen uno de los mejores ejemplos dedesarrollo sostenible, haciendo unuso racional de los recursos natu-rales de la isla.

La empresa minera ChristmasIsland Phosphates (CIP), hoy pro-piedad de los trabajadores, se haconvertido en el principal provee-dor de fosfato en roca del sur deAsia, produciendo cerca de550.000 toneladas métricas de estemineral cada año que se exportan apaíses como Malasia, Indonesia,Australia, Tailandia o Filipinas.

Tras conseguir superar la cam-paña que el Gobierno australianoemprendió en 1987 para despoblarla isla, la existencia de este fructífe-ro negocio depende del cumpli-miento de los compromisos adqui-ridos para reducir al mínimo el im-pacto ambiental de sus operacio-nes. Paralelamente a la explota-ción minera, CIP desarrolla unaimportante labor medioambiental,repoblando y rehabilitando áreasde selva tropical especialmentesensibles al impacto humano, co-mo aquellas zonas en donde ani-dan los Abbott’s Bobby, una raraave marina que habita sólo en estaisla y que está en peligro de extin-ción. El Programa de Rehabilita-

SITUACIÓN Y CLIMALa isla de Christmas es unpequeño punto en el OcéanoÍndico, a 360 kilómetros deJava y a 2.660 de Perth, enAustralia Occidental. Posee unclima ecuatorial tropical conestaciones húmedas(diciembre a abril) y secas (demayo a noviembre).

CÓMO LLEGARDesde España lo mejor escoger un vuelo a Singapur y,de allí, otro de menos de doshoras de duración a Christmas.La única agencia española queofrece paquetes turísticos aeste destino es Max Viajes(902 36 61 59 ywww.maxviajes.com).

La isla alberga unasurrealista población decangrejos de interior

Los arrecifes de coralson los más vírgenesy saludables del Índico

ción de la Selva Tropical se finan-cia a través de un impuesto que pa-ga la propia empresa minera al Go-bierno Federal de 1,50 dólares portonelada de fosfato que se exporta(unos 825.000 dólares anuales).

Este trabajo se desarrolla conuna planificación apropiada e inte-grando las tareas de extracción enel programa de rehabilitación. Ade-más, la empresa ha designado a ungerente ambiental que dependetécnicamente de la dirección de losParques Nacionales de Australia.Esta figura supervisa, entre otrascosas, que durante la migración

anual de cangrejos rojos –un fenó-meno de fama mundial en el quemás de 150 millones de estos crus-táceos migra en masa del interiorde la isla a las playas– se detenganlos trabajos de extracción y no seutilicen los caminos y carreterasque quedan cubiertas durante unmes por este extraño animal.

Asimismo, en los últimos 15años la empresa minera ha inyecta-do más de 40 millones de dólaresen la economía local –Settlement esla única ciudad de la isla con 1.500habitantes–, es el mayor consumi-dor de electricidad, el más impor-

tante usuario de las instalacionesdel puerto y mantiene el 80% de lascarreteras de la isla.

Pero las minas tienen sus díascontados en Christmas, ya que losrecursos de fosfatos se agotaránpronto. Los habitantes se preparanya para volcarse en el turismo, elúnico sector con futuro en la isla.Los atractivos naturales que ofre-cen la selva tropical, los inmacula-dos arrecifes coralinos y la riquezasociocultural de una población for-mada por malayos, chinos y austra-lianos, son valores suficientes parapensar en un próspero porvenir.

Un ejemplar gigante de ficus trepador en el interior de la isla. / CHANOMONTELONGO

Un cangrejo rojo endémico. / CH. M.

Imagen de los fondos marinos típicos de los arrecifes coralinos, con un mero del coral en primer plano. / CHANOMONTELONGO

DESARROLLO SOSTENIBLE

ENTRE MINASY CANGREJOSLa isla Christmas, un paraíso de biodiversidadconocido por sus increíbles migraciones decangrejos terrestres, trata de compaginar elcuidado del entorno con la actividad industrial

10º 30’

105º 40’

BahíaSmithson

CaboJones

CaboJones

Punta NorthwestDrumsite

0 2N

Km.

Isla Christmas

Australia

Indonesia

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A I R E L I B R E

Los árboles se convierten en destinos turísticos

���COMPROMISO

Ahorro de papel. Paracontribuir a la conservaciónde los árboles, la guía tieneuna edición limitada en papelpero puede descargarselibremente de la páginaweb:www.obrasocialcajamadrid.es

� MONUMENTOS NATURALES

TANA OSHIMA

Puede que lo común entrelos viajeros de carreterasea buscar pequeñospueblos con encantodonde comer y dormir

bien. Aquellos lugares tranquiloscon un rico legado cultural suelenerigirse como los destinos favori-tos de urbanitas con ganas de unaescapada. Pero una nueva inicia-tiva acaba de desvelar otra formade viajar: aquélla que se convierteen la aventura de buscar un árbolsingular. La Guía del viajero. Árbo-les, leyendas vivas (descargable enwww.obrasocialcajamadrid.es)nos ofrece el mapa del tesoro parallegar a nuestra meta sin perder-nos por los caminos a menudoabandonados y recónditos queconducen a los ejemplares de losárboles más singulares de España.Son declarados árboles singularesaquéllos que destacan por su edad–con varios cientos de años–, porsus dimensiones extraordinarias,por su rareza o por su valor histó-rico y cultural.

«Los paisanos no salen de suasombro cuando ven que has veni-do desde tan lejos sólo para ver unárbol», cuenta Ezequiel Martínez,fotógrafo y autor de gran parte delas fotos que ilustran la guía. «Dehecho, muchas veces insisten enque veas tal o cual iglesia antes,porque no pueden entender quesólo estés ahí por un árbol». Lapráctica no es muy común de mo-mento, pero «puede ser de granayuda para la conservación» de lasespecies leñosas, opina SusanaDomínguez, responsable de lostextos. «Eso sí, hay que respetarlas pautas de sostenibilidad quevienen en la guía, como no subirsea los viejos ejemplares, por gran-des que sean», añade. Susana re-cuerda haber visto numerosos ár-

boles ya secos o moribundos,abandonados en tierras deshabita-das. Otros, sin embargo, estabandemasiado expuestos a la activi-dad humana, por lo que los auto-res de la obra decidieron no in-cluirlos como posibles destinos.

El problema de la protección deárboles es un tema candente entre

los conservacionistas. Hasta ahora,la falta de una ley estatal que obli-gue a las comunidades autónomasa proteger sus árboles monumen-tales ha mantenido un vacío, enopinión de los expertos, en el quealgunas regiones tienen normati-

vas al respecto y otras no. Sin em-bargo, el borrador del proyecto dela Ley de Patrimonio Natural y Bio-diversidad, a punto de ser llevado aConsejo de Ministros, contemplapor primera vez un artículo (el33.2) relativo a árboles singulares,los cuales son elevados a la catego-ría de monumentos naturales, por

lo que cada comunidadautónoma estará obli-gada a darle la protec-ción requerida.

Para José ManuelSánchez de Lorenzo-Cáceres, coordinadorde la obra Flora orna-mental española, de 12volúmenes, la protec-ción de los árboles sin-gulares en nuestro país«ha mejorado mucho».«Hemos pasado de la

desidia o abandono a que casi to-das las comunidades autónomastengan ya una legislación al res-pecto. Muchas de ellas están ela-borando catálogos de los ejempla-res dignos de conservación», de-clara el experto.

Tras haberse recorrido más de300.000 kilómetros por el territo-rio español, Ezequiel y Susana noopinan lo mismo. «La gestión delas comunidades autónomas dejamucho que desear. No basta conponer a estos árboles una plaquitay declararlos protegidos. Hay queevitar las plagas, los incendios,cuidarlos y darles el trato adecua-do a su edad y a sus condiciones,podarlos con atención, evitar lapresión humana... Para eso hacefalta dinero, y no se está destinan-do dinero», dice el fotógrafo.

Amantes de árboles, conserva-cionistas y antiguos técnicos delMinisterio de Medio Ambientecoinciden en que es necesaria unaley general del Estado que controlela protección de estas catedralesvivientes, de las que en España secuentan unos 3.500 ejemplares,pertenecientes a un centenar de es-pecies autóctonas: robles, encinas,alcornoques, sabinas, castaños, ti-los, tejos, pinos u olivos, entreotros. En la última década, dicenlos expertos, ha desaparecido el20% de los árboles singulares delpaís, y el 80% restante se encuen-tra gravemente amenazado.

Desarrollar un turismo sosteni-ble y respetuoso en torno a estosejemplares es la idea que proponela guía. «Cuando vas a estos luga-res te das cuenta de que le estásdando un valor a algo que la genteno sabe que lo tiene. El árbol de re-pente cobra importancia», recuer-da Ezequiel. Por su parte, Susanaseñala que, aunque el objetivo finaldel viaje sea visitar un árbol monu-mental, «lo bonito es el camino, yno sólo el destino en sí». La guíaofrece los numerosos atractivos tu-rísticos que rodean a cada uno delos ejemplares seleccionados, des-de los monumentos históricos delos pueblos hasta la gastronomía.

PROYECTO

INTERNET

GUÍA

CRITERIOSLos llamados árbolessingulares destacan por surareza, por su forma pocohabitual, por su avanzadaedad, por su tamaño y porsu valor histórico. Eldiámetro y la altura de cadauno los fija el InventarioForestal Nacional.

EL CASO DEL DRAGOEl célebre drago de Icod delos Vinos es uno de losárboles más valorados yprotegidos de España, hastael punto de que se haconvertido en un motivo devisita turística a la islacanaria de Tenerife.

DATOS PRÁCTICOSLa ‘Guía del viajero. Árboles,leyendas vivas’ incluye,además de abundantesfotografías, información útilpara el visitante, como quéotros atractivos ofrece unadeterminada ruta, quépueblos hay alrededor,cómo llegar, qué comer yuna serie de consejos yrecomendaciones prácticosa la hora de iniciar elrecorrido a pie.

EJEMPLARES SINGULARES

� Tilo de Garcilligeros. ‘Tilia platyphyllos’.Cuenca. 300-500 años.� Higuera de las Doscientas Estacas.‘Ficus carica’. Formentera. 19 m. de copa.� Alcornoque de El Bandolero. ‘Quercussuber’. Peña del Indio, Madrid. 500 años.� Carballo de Cartelos. ‘Quercus robur’.Carballedo, Lugo. 28 m. de diámetro de copa.� Sabina de María. ‘Juniperus thurifera’.Chirivel, Almería. 900-1.000 años de edad.

El pino (’Pinus nigra’) de El Galapán, un ejemplar de pino laricio de 39 metros de altura y 420 años, en Santiago de la Espada, Jaén. / SUSANA DOMÍNGUEZ LERENA

La iniciativa ‘Leyendasvivas’, patrocinada por laObra Social Caja Madrid,pretende catalogar ydifundir todos los árbolessingulares de España. Frutode este proyecto fue el libro‘Árboles, leyendas vivas’, deEzequiel Martínez y SusanaDomínguez. En él serecogían los 100 ejemplaresmás destacables del país.

Una sabina de El Hierro (’Juniperus turbinata ssp canariensis’). / EZEQUIEL MARTÍNEZ

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�LA FAUNA

La hubara. Asumamos que puedentomarnos el pelo con cierta facilidad.Están ahí. Son bastante másabundantes de lo que parece. Perocasi no las veremos. Prácticamentehay que pisarlas para que levantensu raudo aleteo y hacerlo tampocoes frecuente. Son aves de vida a rasde suelo y te roban el placer decontemplarlas convirtiéndose enprodigios del disimulo, laanticipación y, por supuesto, laadaptación a los desiertos ymalpaíses canarios.Aunque esta avutarda tiene eltamaño de nuestros sisones, esdecir, una talla de poco más de 40centímetros de altura, mantienetodas las características de sushermanas mayores. Sus plumasdorsales son plagio de la tierra.Desgarbada y hasta un tantodesvalida por el aspecto, sinembargo, resulta insuperable en loque a sobrevivir se refiere. Losdesiertos construyen, en efecto,algunos de los mejores modelosvitales que se conocen. Las hubarascanarias (Chlamidotis undulatafuerteventurae) son únicas en elmundo. Se trata de una subespecie oraza diferente a la que puebla buenaparte de los desiertos africanos y

algunos países asiáticos. Comevegetales y semillas pero tambiénmuchos invertebrados y a vecesincluso algún reptil. En libertadquedan menos de 500 individuos. Sehan puesto en marcha intentos dereproducción en cautividad.

A I R E L I B R E

Tras el agua, que no cesaun solo instante de ha-cerlo, son los volcaneslos que más rejuvenecenal mundo. No en vano

son capaces de parir nuevas tie-rras, de poner paisajes entera-mente distintos en el lugar que ocu-paban viejos panoramas.

Ciertamente, las entrañas de laTierra, tan encendidas, tienenalumbramientos que agrandan lomirado y empequeñecen al admi-rador. Consiguen, por tanto, un ex-celente resultado. Incluso tras de-cenas de millones de años de apa-gado el esplendor eruptivo. Peroen esta ocasión no vamos a propo-ner un acercamiento a los ancianosy no menos bellos enclaves de ori-gen magmático que tenemos ennuestro espacio vital. Queremosalegrar la mirada con lo más tier-no, más adolescente que tenemospor estos pagos. Un paisaje reciénllegado, pero que en el esplendorde su adolescencia permite com-probar cómo son, siempre, las me-jores intenciones de todo paisaje.

Todo ello sin descuidar un re-cuerdo dedicado a sus ancestros.

Porque los paisajes volcánicos ci-ñen al planeta por sus dos cinturasmenos convencionales: como to-dos recordamos hay países enterosy archipiélagos, como nuestras Ca-narias, que resultan enteramentecriaturas engendradas y alumbra-das por los conos que unieron en-trañas y piel de la Tierra.

En la porción peninsular de Es-paña, la escasez de paisajes volcá-nicos no es suficientemente apre-ciada. Los cuatro botones de mues-tra, sin embargo, reúnen atractivossuficientes como para consolidaruna de las mejores ofertas visualesde las que disfrutar.

Recordemos esas pinceladasque el fuego telúrico nos envió.

Las Columbretes: minúsculo ar-chipiélago castellonense que suelequedar al margen de curiosidades.No así la comarca gerundense deOlot, donde volcanes desmantela-dos se abrochan a algunos de losmejores hayedos. Parte del hoyParque Natural del Cabo de Gatarecuerda sus orígenes magmáti-cos. Súmese la comarca manchegade Campo de Calatrava: en estaenorme porción de Ciudad Real,

las cenizas y lapillis siguen hacien-do feraces a los suelos. Pero sonunas pocas lagunas, que han hechonido en el seno de los conos volcá-nicos –ya casi del todo erosiona-dos–, a las que podemos considerarcomo la aportación más estéticadel volcanismo a nuestros panora-mas. Es más, la arriñonada lagunade la Posadilla o Fuentillejo puedeperfectamente ostentar el título demás bello aguazal de Iberia.

Nos acaparan, sin embargo, lasCanarias. Allí todo son brasas apa-gadas con la excepción de unos po-cos lugares donde el vulcanismo semanifiesta todavía activo. Apartede las últimas erupciones del Tene-guía –en La Palma–, que son de ha-ce 40 años, es Lanzarote la isla con

más paisajes recién llegados. Hacepoco más de dos siglos y medio, al-go más al este, en Lanzarote, seprodujeron lo que muchos hanconsiderado como las erupcionesmasivas más importantes en tiem-pos históricos. Tanto por la dura-ción –hasta seis años seguidos deemisiones, 1730-36– como por elhaber conseguido agrandar consi-derablemente la isla.

Ahora, cuando nos asomamos aesta tierra recién llegada, a menu-do sólo aparecen ante nuestrosojos las formas y los colores del ca-lor telúrico. Pero de inmediato nosllegan ofertas prolijas. Porque setrata de un mundo que aunqueapagado evoca la lucidez de la in-candescencia. Todo sigue cálido

para los ojos. Las tonalidadesabastecen la más rica imaginaciónde los pintores y fotógrafos. Lo de-mostró hasta la saciedad CésarManrique. No hay color, pues, queno aparezca en medio de este pa-norama tan nuevo. Desnudo porsupuesto y por eso la forma semantiene fresca, real. No tan men-tirosa como la que tantas vecesqueda vestida, manchada y men-guada por lo que los humanos leponemos encima. Ir a Lanzaroteañade a los convencionales en-cuentros con las aguas marinas ylas ofertas turísticas, la posibilidad,única, de visitar un lugar donde seestá fundando la vida.

�EL DESTINO

Timanfaya. El Parque Nacional ocupauna porción de unas 5.000 hectáreasen el oeste de la isla canaria deLanzarote. Buena parte del terrenonació, literalmente, con laserupciones del siglo XVIII. Al quedar aloriente del archipiélago estamos en lamejor manifestación de un ambienteclaramente emparentado con elSahara. En consecuencia,subdesértico algo mitigado por lacondición oceánica de estas tierras. Allado de las manifestaciones de laactividad geológica queda sobre todoel alivio de la insobornable tenacidadde lo viviente. La renovación de lavida, en efecto, cuenta con un elencode estímulos difícilmente superable.Porque en esa nada tan bellamentecoloreada que son los campos decenizas, de lavas quietas, de conos yhornitos, ya medra una notable piel depálpitos. Nada menos que 150especies de líquenes, otras 177 deplantas superiores, 120 tipos deanimales invertebrados, 3 mamíferos17 aves diferentes nos permitenreconocer lo que puso el volcanismo adisposición de las ricas novedades conlas que hoy podemos disfrutar. Unpaisaje adolescente que, como nopodía ser menos, está cuajado deproyectos.

DERREDORADOLESCENTENo hay color que no aparezca en medio de estepanorama tan nuevo, un mundo que aunqueapagado evoca la lucidez de la incandescencia

«El arte puede contribuir a que la vida forme parte de una armonía profunda con todo lo creado»–CÉSAR MANRIQUE / (Pintor 1919 – 1992)

Por Joaquín AraújoP A S A J E R O D E L P A I S A J E

Las Canarias no son el único paisaje volcánico español. La espectacularidad geológica del archipiélago hace olvidar otros lugaresdonde las fuerzas telúricas han modelado el paisaje. El naturalista recuerda la serena belleza de otros enclaves volcánicos, comoel Cabo de Gata, las islas Columbretes, la comarca de La Garrotxa y el Campo de Calatrava. Y viaja finalmente hasta Lanzarote

ILUSTRACIONES:ARTUROASENSIO

www.joaquinaraujo.com

�LA FLORA

La tabaiba dulce. La tenaz austeridadde algunas plantas consigue reverdeceresos terrenos recientes y áridos que loscanarios llaman «malpaíses» con elacierto de los que inauguran cualquierrealidad poniéndole nombre y apellidos.Varios cactus y, sobre todo euforbiascomo la tabaiba dulce (Euphorbiabalsamifera), ponen un vivazcontrapunto a la sequía y a las lavasquietas y desnudas. Tiene el aspecto dematorral muy redondeado. Pero comotodas las euforbias, las tabaibas soncapaces de aletargarse por completohacia el verano y otoño con una pérdidacompleta de sus hojas y la detención decasi todas las funciones vitales.

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A R T E

FOTOGRAFÍA

NUESTRASMARIPOSAS,TESOROSDEBIODIVERSIDADEditado por Caja Madrid yEditorial Lunwerg / Autor:Pedro Velasco / 49,50 euros

TANAOSHIMA

No es tarea fácil encontrar un ejemplar deAgriades zullichi, y mucho menos fotogra-fiarlo. Esta mariposa exclusiva de Sierra Ne-vada se deja ver muy pocas veces, y másahora que su número está en clara disminu-

ción. Para Pedro Velasco, autor del libro que recopila fo-tografías de casi todas las especies de mariposas espa-ñolas, capturar este ejemplar con su cámara fue una desus hazañas más inolvidables. «Tienes que ir a SierraNevada justo en el año que sea propicio, entre el 10 o el15 de mayo. Si no, no la puedes ver», relata el veteranofotógrafo, que ha recorrido con su mirada cada paisajedel territorio español, siempre en busca de un insecto,

una flor, un recuerdo de suinfancia.

Siendo apenas un niñodescubrió el universo de losinsectos, un mundo micros-cópico que reclamó su aten-ción «mientras los demás ju-gaban a la pelota», recuerda.«Me gustaba todo lo peque-ño», dice ahora, tras 40 añosde trayectoria por las geo-grafías secretas del planeta.Poco a poco, de la pacienteobservación pasó al minucio-so estudio. Un fotógrafo denaturaleza, dice, no retrata amodelos que posan, sino quetiene que ir en busca de loque quiere conseguir, y paraello tiene que conocer todaslas pistas que le puedan con-ducir a su objeto de deseo.«Si quieres fotografiar a unadeterminada mariposa, tie-nes que saber dónde vive, dequé planta se alimenta, quécondiciones meteorológicaso geográficas necesita ycuándo aparece», explica es-te entomólogo aficionadoque, sin ser científico, haaprendido a desgranar concelo los silenciosos ciclos dela naturaleza.

Y con el mismo afán quetiene por inmortalizar la be-lleza de los insectos, alertade la rápida disminución delos lepidópteros en la Penín-sula. «Los que hoy tenemosmás de 50 años hemos podi-do ver revolotear a las mari-posas en cualquier lugar delcampo. Podías ver hasta2.000 en algunos lugares»,

dice. «Pero las generaciones venideras lo tendrán másdifícil. La naturaleza ya no es tan pura. Hoy, las maripo-sas que ves en una mañana se cuentan con una mano».

La razón no está en los polémicos cazadores de mari-posas y coleccionistas que, como Vladimir Nabokov, hansido en su mayoría estudiosos apasionados. Los lepidóp-teros se han quedado, simplemente, sin campo. El creci-miento de las ciudades y el uso generalizado de insectici-das en los cultivos han dejado a estos importantes polini-

Son cada vez menos. Un librorecoge imágenes de cada una delas especies diurnas, y algunasnocturnas, de la Península Ibérica

LAS ÚLTIMASMARIPOSAS

PEDRO VELASCONació en Madrid en 1951 / Suinterés por los insectos comenzócuando era niño / Estudiópublicidad y se formó en laentomología de formaautodidacta / Fundó el antiguoGrupo Entomológico de Madrid /Combinó su carrera como técnicopublicitario con la investigacióncientífica / Es autor de variosartículos de divulgación / Ha sidoguionista y asesor científico de laserie de documentales televisivos‘Universo Insólito’ / Ha producidomás de 60 exposiciones en todaEspaña / Ha diseñado elinsectario de los parquestemáticos Faunia y Safari Madrid

De arriba abajo y de izquierda aderecha: Oruga de ‘Laothoepopuli’. Una mariposa delmadroño (’Charaxes jasius’) alsalir de su crisálida. Oruga de‘Danaus chrysippus’. Doslicénidos (’Lycaenides idas’) seaparean sobre una hoja. Ejemplarde ‘Iphliclides feisthamelii’, consus alas terminadas en finascolas. Dos elegantes piéridos de

la especie ‘Aporia crataegi’. Unahembra de la célebre mariposanocturna endémica ‘Graellsiaisabelae’. ‘Zygaenaosterodensis’, que avisa de sutoxicidad mediante sus coloresllamativos. Hembra de lamariposa nocturna ‘Eudiapavonia’. Vistoso piérido de laespecie ‘Gonepteryx cleobule’. /PEDRO VELASCO

zadores sin hábitat. Incluso allí donde aún quedan espa-cios naturales, las pistas de esquí y otras intervencioneshumanas amenazan con acabar con ellas.

Si bien por el momento se han perdido pocas especies,lo que ha disminuido es la distribución de cada una deellas, y se espera que el problema se acentúe con el cam-bio climático y el consiguiente desfase de ciclos entre lafloración y el nacimiento de las larvas. «En Sierra Neva-da, si en 1975 había una multitud de colonias de ende-

mismos, hoy sólo quedan dos o tres», advierte Velasco,al tiempo que evoca con nostalgia uno de sus paisajesmás buscados: el Valle de Arán. «Era un prodigio de lasmariposas. Ahora sólo se ve media docena de especies».

«Nuestra obligación es conservarlas para que las futu-ras generaciones puedan también disfrutar de ellas», de-clara el autor del libro; obra que él mismo define como«divulgativa, que aúna la belleza plástica de las maripo-sas y el interés conservacionista».

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Todo empezó con unas fotocopias en DIN-A4 deartículos científicos que estaban escritos por laspropias personas que trabajan aquí y que podíantener un aire de divulgación», recuerda ahoracon humor el geólogo Carlos Martínez Escorza,

hoy director de la nueva publicación de la institución en laque trabaja, el Museo Nacional de Ciencias Naturales(MNCN). «Era un boletín de consumo interno, en blanco ynegro, hasta que conseguimos imprimirlo en color y lagente se animó. Escribían todos los trabajadores delMuseo: no sólo investigadores, sino también bibliotecarios,personal del archivo, expertos en reconstrucción deanimales...». Pero no fue hasta hace unos meses cuandocuajó la idea de abandonar el boletín primigenio y hacerloevolucionar hacia el tabloide.

El Periódico del MNCN, editado por el Consejo Superiorde Investigaciones Científicas (CSIC), retoma la mismafilosofía de ofrecer información «de primera mano»,firmada por los propios expertos, esta vez en un tonomucho más divulgativo. Para Carlos Martínez Escorza, ladivulgación científica es importante hasta el punto de queva estrechamente ligada al desarrollo de un país. «Desdehace tiempo me pregunto si un país tiene buena

divulgación científica porque está desarrollado o si un paísestá desarrollado porque tiene divulgación científica ¿O esuna rueda que tiene que estar en constante movimiento?».

Sea cual sea la respuesta, el afán divulgativo de estenuevo trimestral, que está a punto de cumplir los tresnúmeros, parece satisfacer con eficiencia su objetivo:ofrece información atractiva, actual y rigurosa,acompañada de abundante material gráfico pertenecienteal propio archivo del Museo. «Es una manera de devolverlea la sociedad lo que nos da para que nosotros trabajemos»,añade el director científico. Así, todos los contenidos de larevista pueden ser copiados, distribuidos y exhibidoslibremente siempre que se citen los créditos.

El Periódico del MNCN, con una tirada de 30.000ejemplares, cuenta con todo lo que un rotativo podríadesear: editorial, artículos, entrevistas, reseñas y unaagenda de actividades. El próximo número saldrá laprimera semana de julio y estará disponible en el Museo.Hay posibilidad de suscripción. Más información:www.mncn.csic.es

REVISTA

‘PERIÓDICO DEL MNCN’La nueva publicación divulgativa del MuseoNacional de Ciencias Naturales / Editadopor el CSIC / Gratuito / Trimestral /Disponible en la sede del Museo, en Madrid

El nuevo periódico del Museo Nacional deCiencias Naturales reúne artículosdivulgativos firmados por los investigadores

CIENCIA YEXCELENCIA ENUN TRIMESTRAL

E S C A P A R A T E

Hay que oír hablar a Jane Goodall, la célebreprimatóloga británica, para constatar que losuyo no es sólo el estudio de los chimpancés.Su capacidad de narrar las experienciasvividas, transmitir sus percepciones y describir

los ambientes en los que transcurren las historias laconvierten en una magnífica oradora, cuyo objetivo noparece ser, sin embargo, la persuasión, sino el mero hechode compartir sus vivencias con la misma intensidad conque ella las vivió.

El pasado 22 de mayo, con motivo del Día Mundial de laBiodiversidad, la Fundación Biodiversidad, dependiente delMinisterio de Medio Ambiente, invitó a Jane Goodall amantener, en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, unavideoconferencia en directo con el también prestigioso

biólogo estadounidense Edward O. Wilson. El objetivo eraintercambiar opiniones, en presencia del público, acerca dela biodiversidad.

Los fallos técnicos impidieron que el público españolpudiese conocer el valioso testimonio de Wilson. Pero, acambio, los presentes gozaron de una larga e improvisadaconferencia de la británica que arrancó lágrimas y aplausosapasionados. El tema central fue, cómo no, el chimpancé,pero también las poblaciones locales que conviven con élen el Parque Nacional de Gombe, la situación de lajuventud en los países en desarrollo y emotivas anécdotassobre la proximidad entre el hombre y los primates.

Pocas horas antes, la ministra de Medio Ambiente,Cristina Narbona, presentaba a Jane Goodall ante losmedios de comunicación españoles. De ambos actos salió

reforzada la cooperación española en el ámbito de losprimates, especialmente a través de tres iniciativas: laadhesión de España a la Declaración de Kinshasa para lasupervivencia de los grandes simios; la continuación en2008 del envío de fondos a la Unesco para la protección deorangutanes en el Parque Nacional de Gunung Leuser, enIndonesia; y la financiación y gestión –aún en fase deestudio– de un plan de conservación de gorilas ychimpancés de la ONG Coopera en la RepúblicaDemocrática del Congo.

La visita de Jane Goodall a España obedeció, además, ala inauguración de un centro en Barcelona de su iniciativaRoots & Shoots, una red de concienciación de jóvenes quela primatóloga ha puesto en marcha ya en un centenar depaíses con el propósito de «construir un mundo mejor».

CONFERENCIA

JANE GOODALLEl pasado 22 de mayo se celebró el DíaMundial de la Biodiversidad / La FundaciónBiodiversidad organizó una conferenciamagistral de la primatóloga británica

El Ministerio de Medio Ambiente haceprioritaria la conservación de los grandessimios entre sus proyectos de cooperación

‘LADY CHIMPANCÉ’SOBRECOGE ALPÚBLICO ESPAÑOL

LAS CITAS

CURSOS Y CONVOCATORIAS

Premios a la conservación BBVA. Ya está abiertala convocatoria de los Premios Internacionales a laConservación de la Biodiversidad de la FundaciónBBVA. Los premios van dirigidos a científicos,conservacionistas y divulgadores. La dotacióneconómica es de 500.000 euros, 250.000 euros y80.000 euros, respectivamente. El plazo deentrega se cierra el 12 de julio. Más información:www.fbbva.es

Aguaviva Canarias 2007. El municipio de Arona,en el sur de Tenerife, celebrará desde el 28 de juniohasta el 1 de julio la tercera edición de AguavivaCanarias, un festival dedicado a los océanos quecontará con la presencia de músicos como Macacoo Fito&Fitipaldis y célebres ecologistas comoAlexandra Cousteau, nieta del documentalistafrancés. Además, se ofrecerán proyecciones decortometrajes y actividades de buceo. Másinformación: www.aguavivacanarias.com

Hidrología de cuencas forestales. La Universidadde Salamanca organiza un curso extraordinariosobre los retos científicos y la gestión de lascuencas forestales, en el que distintos especialistasabordarán los problemas de los cambios en los usosdel suelo, el manejo forestal y el cambio climático,entre otros. El curso durará del 2 al 6 de julio. Másinformación: www.usal.es/precurext

Restauración de ríos y riberas. Dar una visiónintegral del río como ecosistema es el objetivo deeste curso que convoca la Universidad de Valladoliddel 2 al 6 de julio. Las plazas son limitadas y la fechade matriculación concluye el 22 de junio. El preciovaría entre 275 y 365 euros. Más información:[email protected] / 979 725 164

La cita de los amantes de los bosques. Barcelonaacogerá el 23 de junio el primer encuentrointernacional de amigos de los árboles. A élasistirán autoridades de la talla de Al Gore yVandana Shiva, quienes discutirán el papel de losbosques frente al cambio climático. Másinformación: www.masarboles.es

Trofeo Tierra de Mujeres. Este premio de laFundación Yves Rocher llega ya a su cuarta edición.Las mujeres con proyectos ambientales podránpresentarse hasta el 30 de septiembre. Másinformación: www.yves-rocher.es

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, conversa con la primatóloga Jane Goodall, en Madrid. / JUANJO MARTÍN

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JAVIER MORALES ORTIZ

La tarea de salvar nues-tras ciudades de la in-sostenibilidad podríaparecer desesperadasi no fuera porque está

ocurriendo ya, asegura el Insti-tuto Worldwatch en su informeanual sobre el estado del pla-neta, La situación del mundo,2007 (Editorial Icaria/Fuhem),

que este año está dedicado a lasciudades. La directora del estu-dio e investigadora de este pres-tigioso centro, Molly O’MearaSheehan, estuvo en Madrid parapresentar el libro, que se publicasimultáneamente en 20 países.O’Meara Sheehan, experta enmedio ambiente urbano, escoautora también de uno de loscapítulos del informe.PREGUNTA.— El siglo XX hasido el del urbanismo sin lími-tes. ¿Será el siglo XXI el del ur-banismo sostenible?

RESPUESTA.— En el siglo XXIvivirá más gente en las ciuda-des. Se prevé que muy pronto,hacia 2008, más de la mitad dela población mundial habite enzonas urbanas. No es la primeravez en la historia que se produceun crecimiento espectacular delas ciudades. En el siglo XIX,durante la Revolución Indus-trial, las ciudades crecieron ver-tiginosamente y aparecieronproblemas ambientales asocia-dos: contaminación, falta deagua, carencia de infraestructu-ras sanitarias… Dickens plasmómuy bien todo este mundo. Elproblema es que la escala decrecimiento que estamos vivien-do hoy no tiene parangón.P.— ¿Ve signos que indiquenque caminamos hacia urbes me-nos contaminantes?R.— Veo razones para ser opti-mista y las señalamos en el in-forme. Cada vez hay más ciuda-des que están incorporando me-didas para reducir las emisionesde gases de efecto invernadero.Por ejemplo, en Rizhao, al nortede China, se ha impulsado el usode la energía solar hasta el pun-to de que el 99% de los hogaresde los barrios céntricos utilizanesta fuente renovable. Esto hapermitido que esta ciudad detres millones de habitantes figu-re entre las 10 primeras en la lis-ta de urbes con el aire más lim-pio de China, un país con gravesproblemas de contaminación.En Barcelona, en 2000, el ayun-tamiento aprobó una norma pa-ra que el 60% de la energía paraagua caliente de los nuevos edi-ficios fuera de origen solar, algopionero. Si queremos frenar elcambio climático es fundamen-tal que las ciudades sean cons-cientes del problema y de queson parte de la solución.P.— Ustedes plantean la necesi-dad de volver a cultivar en lasgrandes ciudades. ¿Pero cómo?R.— Algunas ciudades están

más preparadas para cultivarque otras. Las ciudades africa-nas necesitan contar con la agri-cultura porque para sus habi-tantes es una cuestión de super-vivencia. Desgraciadamente, lasciudades más ricas han dado laespalda a la agricultura, pero nocreo que sea bueno. Si quere-mos reducir las emisiones, con-tar con huertos urbanos es unabuena medida porque gran par-te de estas emisiones dependendel transporte. Por si fuera poco,los alimentos que se cultivan enhuertos cercanos tienen muchomejor sabor (risas).P.— ¿Esta medida no perjudica-ría a la economía de los paísesmás pobres, que dejarían de ex-portar sus productos?R.— El principal problema quetienen estos países son las ba-rreras comerciales, las tarifasarancelarias que se les imponendesde el mundo rico y que lesimpiden exportar en igualdadde condiciones. Lo primero quehabría que hacer es resolver es-ta cuestión. Además, nosotrosno estamos proponiendo que to-dos los alimentos se produzcanlocalmente, entre otras cosasporque hay algunos alimentosque crecen mejor en unas zonasque en otras, y ésos siempre va ahaber que exportarlos.P.— ¿Los impuestos ecológicosson una buena herramienta pa-

ra reducir el consumo en las ciu-dades ricas?R.— Las ciudades pobres tienenproblemas ambientales locales,de falta de infraestructuras, queafectan a su entorno, mientrasque los problemas de las ciuda-des ricas repercuten en todo elmundo. En los países ricos de-bemos reducir nuestro consu-mo. Si hablamos del cambio cli-mático, los políticos debenabanderar una lucha para redu-

cir las emisiones degases de efecto in-vernadero. Le pon-go un ejemplo. Haceun mes, el alcaldede Nueva Yorkanunció un plan quepropone convertiresta ciudad en unlugar más ecológicoy limpio. Para ello,anunció que se ibana implantar tasasque gravan el usodel vehículo priva-do. Ha tomado esta

medida en un momento compli-cado porque hay elecciones a lavista, lo cual le otorga aún másvalor. Ese dinero servirá para fi-nanciar el transporte público yhacerlo eficiente, que es la basede un sistema de transporte sos-tenible.P.— El informe en castellano in-corpora dos capítulos adiciona-les sobre la situación de las ciu-dades españolas. ¿Qué consejoles da a los alcaldes que acabande ser elegidos?R.— En España ha habido undesarrollo urbanístico desmedi-do, con algunos casos de co-rrupción asociados. Pero tam-bién hay mucha creatividad y al-gunos arquitectos destacan porsus propuestas. Hay medidas,como la norma que obliga a ins-talar paneles solares en los nue-vos edificios para el agua calien-te y otros usos, que son pionerasy pueden ser un ejemplo paramuchos países. Por otro lado,puede que en algunos lugareshaya sido un poco arriesgado, opoco conveniente, para los polí-ticos centrar su campaña en lasostenibilidad. Pero en España,siendo uno de los países másvulnerables al cambio climático,creo que debería ser un tema atratar porque tenemos muy po-co tiempo para hacer algo. Losalcaldes deberían tomárselomuy en serio.

MOLLY O’MEARA

«No es bueno que lasgrandes urbes den laespalda a la agricultura»

«La ciudades son unaparte de la solución parael cambio climático»

«Los alcaldes deberíantomarse muy en serio elcalentamiento global»

«Los problemas de lasciudades ricas afectana todo el mundo»

«En 2008, la mitad dela población mundialvivirá en las ciudades»

La investigadora Molly O’Meara el pasado mes de mayo en Madrid. / CARLOS MIRALLES

INVESTIGADORACursó Biología yEstudios Asiáticosen el WilliamsCollege. Posee unmáster en CienciasAmbientales en laUniversidad JohnsHopkins (EEUU).Comenzó ainvestigar paraWorldwatch en1996. Trabaja en elestudio del papel delas ciudades en laresolución de losproblemas delmedio ambiente

VIDA SANAEl futuro de las ciudades se encuentra sobreuna frágil balanza. Desde África hasta Europa yEEUU, pasando por los países emergentes co-mo China, la India o Brasil, los grandes núcleosurbanos se enfrentan a un dilema común: conti-nuar con el crecimiento actual o adoptar un mo-

delo más sostenible. Esta última opción, segúnel último informe del Instituto Worldwatch so-bre la situación del mundo en 2007, es menosminoritaria de lo que parece y distintos países,incluidos los menos desarrollados, están to-mando ya medidas para aliviar a sus grandes

ciudades de la creciente presión humana. EnEspaña, la aplicación del nuevo Código Técnicode la Edificación es un ejemplo de cómo es po-sible encaminarse hacia un futuro más sosteni-ble. En EEUU, distintos alcaldes emprenden suparticular lucha contra el cambio climático.

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JOSÉ LÓPEZ-CÓZAR

Elegir una viviendano es tarea fácil.Hay muchos fac-tores que influ-yen en esta deci-

sión: desde el precio del in-mueble, pasando por lazona donde se encuentraubicado, a las dimensionesde la casa, los acabados, lacalidad de los materiales...Sin embargo, hasta ahorano era posible elegir la fu-tura vivienda en funcióndel consumo de energía, apesar de que calentarla oenfriarla representa granparte del gasto mensual enservicios.

Un nuevo real decretoviene a dar solución a estasituación y va a permitir sa-ber cuál es el gasto energé-tico de la vivienda antes deefectuar la compra. Así seproporciona el derecho decualquier ciudadano a te-ner una información co-rrecta sobre los consumosdel producto que se dispo-ne a adquirir.

El certificado de eficien-cia energética de los edifi-

cios, todavía en fase deaplicación voluntaria hastaque el próximo mes de no-viembre sea de obligadocumplimiento, deberá in-cluir información objetivasobre las característicasenergéticas de los edificios,de forma que el usuariopueda valorar y compararla eficiencia de unos frente

a otros. En opinión de Te-resa Herrera, del departa-mento de Doméstico y Edi-ficios del IDAE (Institutopara la Diversificación yAhorro de Energía), se tra-ta de un paso muy impor-tante. «Un edificio malorientado, o con unos ma-teriales de construccióninadecuados, puede llegara consumir el doble deenergía que otro de alta efi-ciencia». Así pues, median-te esta nueva etiqueta ver-de, se asignará a cada edifi-cio una Clase Energética,que variará desde la claseA, para los más eficientes,a la clase G, para los menoseficientes, tal y como ya sehizo con los electrodomés-ticos en su día.

Elegir la más eficienteLa finalidad de esta inicia-tiva es favorecer el ahorrode energía en el sector dela edificación, un objetivoya contemplado en el Plande Acción 2005-2007 delMinisterio de Industria, Tu-rismo y Comercio y que tu-vo como primera medida laaprobación del Código Téc-nico de la Edificación(CTE). De hecho, el 80% delos edificios construidos apartir de ahora estarán en-cuadrados dentro de las ca-tegorías C o D sólo porcumplir la legislación vi-gente en lo relativo al usode aislamientos y sistemasde energía solar basadosen fuentes renovables,mientras que se espera queel resto de edificios quedenencuadrados en las catego-rías A o B, yendo un pocomás allá de los mínimoscontemplados en el CTE.

«Queremos que los cons-tructores y promotores to-men conciencia de queconstruir de forma eficientees rentable. No en vano ha-blamos de ofrecer la mismacalidad de siempre perocon menos consumo deenergía. Una razón de ven-ta más que interesante»,asegura Teresa Herrera.

El anuncio de la nuevacertificación energética hadespertado el interés de al-gunos de los sectores másdirectamente implicados,en especial el de los arqui-tectos, principales encar-gados de introducir las me-didas de eficiencia energé-tica en los edificios. «Lacertificación energética seva a convertir, sin ningúnlugar a dudas, en un ele-mento diferenciador, comose viene notando de untiempo a esta parte.

La mayoría de los arqui-tectos españoles muestrancada vez más sensibilidadpor los aspectos relaciona-dos con el medio ambiente,integrando medidas de efi-ciencia energética en susnuevos proyectos», señalaAntonio Puerta, director

del despacho de arquitec-tos APL. Y añade: «Ahorahace falta que la sociedad,en su conjunto, tambiénacompañe a este proceso;si no, se convertirá en unpapel más de los miles queya hay que entregar paraobtener la licencia de pri-mera ocupación».

Precisamente, del gradode implicación de la socie-dad en general dependeráel éxito o el fracaso de todoeste proceso que ahora seinicia con la puesta enmarcha de la certificaciónenergética de los edificios.Toda la ciudadanía estállamada a participar en unconsumo más responsablede las viviendas, según seha podido comprobar enSevilla, el único municipioque había desarrollado

una calificación energéticade edificios antes de la en-trada en vigor del nuevoreal decreto, de ámbito na-cional.

«Nuestra experiencia haservido para preparar el ca-mino. Desde 2002 hemoshecho un gran esfuerzo di-vulgador para conseguir unacuerdo social en relaciónal impulso de las energíasrenovables y el ahorro deenergía en la vivienda», de-clara Enrique Belloso, di-rector de la Agencia de laEnergía de Sevilla. El re-sultado son más de 10.000viviendas certificadas bajocriterios de eficiencia.«Ahora el auténtico nudogordiano está en saber quéhacemos con las que ya es-taban construidas anterior-mente», añade Belloso.

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Los nuevosedificiosde clase ALa normativa recién aprobadaobliga a informar a los compradoressobre el consumo energético de losedificios de nueva construcción

La etiqueta ‘verde’asigna a cadaconstrucción unaClase Energética

Sevilla fue pioneraen la certificaciónenergética de losedificios nuevos

Vista del huerto ecológico que hay frente al albergue Delta del Llobregat, en segundo término, situado en Barcelona. / EL MUNDO

Empiezan a quedar atrás los días en los que lamayor medida de concienciación ecológica promovidadesde un establecimiento hotelero era aconsejar a loshuéspedes que usaran las mismas toallas durante todala estancia para contribuir al ahorro de agua. A estanada desdeñable pero insuficiente iniciativa se le uneahora otra presumiblemente más efectiva para laeducación ambiental: la factura ecológica.

En la barcelonesa localidad de El Prat, acaba de inau-gurarse un albergue, el Delta del Llobregat, que hapuesto en marcha un doble sistema de facturación. An-tes de abandonar el establecimiento, los usuarios debe-rán enfrentarse a dos pagos. Uno convencional que se

plasmará en una factura al uso y que les obligará a abo-nar una cantidad determinada de dinero por los servi-cios disfrutados y uno moral, que se refleja en una fac-tura informativa en la que se detallan todos los costesambientales que haya supuesto su estadía (emisión deCO2, gasto de electricidad, agua…) y que pretende con-seguir un consumo responsable a través de la evidencia.

El albergue cuenta con un sofisticado sistema infor-mático que registra automáticamente los consumos decada habitación y hace posible calcular el gasto total dela estancia, así como comparar los valores de los dife-rentes huéspedes.

No obstante, el equipamiento no sólo pretende educara golpe de factura. El propio edificio en el que se incluyecuenta con ingeniosas medidas para reducir el consumoy la contaminación. Además, una pequeña parcela seutilizará para explicar a los escolares las claves del culti-vo ecológico. Ingredientes, todos, para convertir a estecentro en uno de los referentes de la educación ambien-tal a nivel estatal. / Víctor Mondelo. Barcelona.

Un albergue emite a sus clientesla factura ecológica de su estancia

BARCELONA

C ON S T RU C C I Ó N

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CARLOS FRESNEDACorresponsal en Nueva York

Los jilgueros revo-lotean entre las ra-mas de los cere-zos. Los narcisoscompiten con los

tulipanes y con los pensa-mientos. Las tomateras tre-pan al final del camino ser-penteante que recorre estejirón urbano convertido enoasis: esquina de Bowery y

Houston, donde la prima-vera rompe con insultanteesplendor entre el rugido deltráfico.

Hace 34 años, esto no eramás que un solar abandona-do y rebosante de escom-bros. Hasta que un puñadode vecinos, capitaneadospor la artista local LizChristy, decidió okuparlocon sus palas y sus azado-nes. Así echó raíces el pri-mer jardín comunitario delas Green Guerrillas, queaún conserva el nombre desu fundadora y ha sobrevivi-do milagrosamente a la olaespeculadora que recorreManhattan.

«Ese jardín es un tesoroque hemos salvado con elesfuerzo de los vecinos ycon la generosidad de la tie-rra», recuerda SteveFrillmann, cabecilla de lasGuerrillas Verdes. «Hemosperdido 50 jardines comuni-tarios a manos de la fiebreinmobiliaria, pero aún nosquedan unos 600 y son yaparte del patrimonio de to-

dos los neoyorquinos». Losbarrios más castigados porla decadencia urbana de losaños 70 –el East Village,Harlem y el South Bronx–fueron precisamente losque primero echaron las se-millas del Nueva York ver-de. En torno a las GreenGuerrillas se han arracima-do hasta 200 grupos localesque mantienen y cultivanestos insospechados verge-les en la trastienda de losrascacielos.

En algunos de ellos, hansurgido incluso huertos ur-banos y orgánicos donde losvecinos pueden procurarsesu propia cosecha, con elapoyo de asociaciones comoJust Food, pioneros de laagricultura comunitaria. Yeso por no hablar de la trein-tena larga de Green Markets(Mercados Verdes) dondelos neoyorquinos puedencomprarle directamente alos granjeros hasta 30 varie-dades de manzanas, recolec-tadas a menos de 300 kiló-metros de la ciudad.

El alcalde MichaelBloomberg, con su plan pa-ra lavar la imagen de la jun-gla de asfalto, no ha hechosino subirse a un río subte-rráneo que ha terminadoaflorando como un auténti-co géiser. El corazón deManhattan, donde más de lamitad de los vecinos no tie-ne coche, es mucho másverde de lo que parece.

«Digamos que al alcaldeno le queda otra opción»,tercia otro héroe de la ecolo-gía local, Bill Di Paola, alfrente de Time’s Up (Se aca-ba el tiempo). «Pero hastaahora sólo hemos oído pala-bras y hemos visto pocoshechos. Y lo cierto es que alos ecologistas nos persi-guen como si fuéramos sos-pechosos, sobre todo si va-mos en bicicleta».

Más de 100.000 ciclistasrecorren a diario la ciudad,y la cifra aumenta todos losaños el 4%. La explosión depedicabs –taxis en bicicleta–ha sido tal que esta primave-ra han rebasado ya los 450.En vez de allanar el caminoal saludable medio de trans-porte, el Ayuntamientoamenaza con fijar un techopara evitar congestiones detráfico.

«El plan de Bloombergme parece muy necesario,pero antes tiene que haber

un cambio radical de actitudy aceptar que la ciudad espara quien la camina y la pe-dalea, y no sólo para quienconduce», afirma Di Paola.«No basta con crear carri-les-bici para dar la vuelta ala isla: queremos transitar laciudad con todas las garan-tías».

Time’s Up lleva desde

1987 promoviendo la culturade las dos ruedas y convo-cando las multitudinarias«masas críticas» a pedalesque surcan ululando la ciu-dad. Otros grupos, comoTransportation Alternativeso New York City Streets Re-naissance trabajan ya manoa mano con el Ayuntamientoen asuntos tan acuciantescomo la movilidad urbana yla mejora de los espacios pú-blicos.

Aunque los hay que pien-san que el reverdecimientode la ciudad ha de empezarpor los tejados, y en eso an-dan los activistas de Ear-thpledge, con su campañaGreening Gotham. Arranca-ron con un huerto en un sép-timo piso, a la altura de lacalle 38, y rondan ya el me-dio centenar de jardines dealtos vuelos...

«Los tejados verdes cap-tan hasta el 75% del agua delluvia y ayudan a compensarel efecto de isla de calor enlas ciudades», explica LeslieHoffman, arquitecta, jardi-nera e impulsora de la inicia-tiva. «Sirven para mejorar lacalidad del aire y reducen lapresión sobre los sistemasde alcantarillado... Y te danademás la posibilidad decultivar tu huerto biológico».

Los Ayuntamientos deChicago y Seattle han predi-cado con el ejemplo y haninstalado ya sus propias cu-biertas vegetales. La próxi-ma vez que King Kong se en-carame al Empire State, o ala futura Torre de la Liber-tad, tal vez se lleve una sor-presa verde.

www.greenapplemap.orgwww.nyoasis.netwww.greenguerrillas.orgwww.timesup.orgwww.nycstreets.orgwww.greeningotham.org

El alcalde de Nueva York, MichaelBloomberg, ha anunciado su plande 127 medidas para reconvertir lajungla de asfalto en modelomundial de conciencia ecológica yeficiencia energética. La meta esreducir las emisiones de CO2 un30% de aquí a 2030, siguiendo lospasos de más de 200 ciudadesestadounidenses que han decididoir más allá de los acuerdos de Kiotoy que no dejan de presionar al

presidente Bush para que acepte laamenaza del cambio climático.� Transporte. Peaje decongestión a los cochesparticulares (8 dólares) y a loscamiones (21 dólares) que entrenen Manhattan los días laborablesen horas de oficina. Se esperaretirar de las calles el 15% de los815.000 automóviles. Se crearáuna red de más de 1.000kilómetros de rutas para bicicleta.

� Energía. Un impuesto mensualde 2,50 dólares en los recibos de laluz servirá para financiar la puestaal día de las viejas plantaseléctricas y el impulso dealternativas renovables.Bloomberg quiere lograr unareducción del 10% en los 800millones de dólares que se pagantodos los meses por el consumoeléctrico en los edificiosmunicipales.

� Agua. Incentivos para elreciclaje del agua no potable parariego y cisternas. Se pondrán enmarcha 40 planes de calles verdescon sistemas de captación deaguas en los tejados. Losmejillones y los moluscos volveránal estuario del río Hudson paraactuar como depuradorasnaturales.� Parques. Plantar un millón deárboles en la próxima década es

otro de los grandes objetivos delplan. La intención es que cadaneoyorquino tenga un parque amenos de 10 minutos andando.� Construcción. Todas lasnuevas edificaciones deberán serun 20%más eficientes de lorequerido hasta la fecha por lasleyes municipales. Se protegeránlos terrenos no edificables y sehabilitarán solares para liberarespacio.

Nueva York quiereser la más ‘verde’La urbe máscosmopolita deEEUU no sequiere quedaratrás en larevolución verde.Varios gruposurbanosmuestran que laciudad se mueve

URBAN I SMO

En Manhattan, lamitad de los vecinosno se mueve en coche

«Hemos perdido 50jardines comunitariospor la especulación»

A la izquierda, varios vecinos transitan por uno de los carriles bici de Nueva York. A la derecha, una mujer cuida unas flores en el interior de un jardín comunal. / M. RAJMIL

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L E T R A S

CAR TA S V E R D E S

Serafín amaba la montaña por en-cima de todas las cosas.

No siempre fue así, naturalmente. An-tes amó su trabajo de investigador científi-co, a sus amigos, la pintura. También lapasión amorosa en la que creyó de modociego y fiel. Hasta que la propia fuerza dela vida fue aniquilándole, una por una, to-das las vetas a través de las que canalizabasus mejores y más nobles sentimientos.Ahora tan sólo le quedaban sus paseos ca-si diarios hacia la cumbre que dominaba,limpia y orgullosa, el valle del pequeñopueblo en el que vivía. Había otros montesrodeando el valle, pero esa cumbre, la dellado norte, era su preferida. Quizá porquese trataba de la más elevada, tal vez porser la más bella.

Habiéndolo conseguido prácticamentetodo en la vida, o al menos así se lo pareciódurante cierto tiempo, ahora se dabacuenta de que todo lo había perdido. Todoexcepto a sí mismo y la montaña. Su mon-taña amada. Iba a envejecer solo y triste.Lo entendió una mañana, al levantarse ymirar por la ventana en dirección a esa ci-ma nevada. Pensó que se extinguiría ensoledad, y dicha perspectiva le pareciómuy, muy oscura.

Desde hacía más de una década pudorealizar su sueño de dejar los trabajos deinvestigación y dedicarse a pintar, que sinduda era lo que le llenaba el mapa de losdías. Tuvo bastante suerte con su obra.Poder pintar era ya un privilegio. Expo-ner, otro mayor. Vender algunos de esoscuadros, algo que todavía no podía creer.Desde hacía 20 años estuvo preparando loque iba a ser la exposición de su vida, unamuestra delicada a la montaña, a su mon-taña. La arbitrariedad de la existencia secebó en él. Un crítico de arte tildó de cha-puza su obra, sin más, y las cosas empeza-ron a torcerse. Los amigos no estuvierondonde tenían que estar. O él no supo en-contrar su apoyo. Su pasión amorosa, laque aún mantenía en él la sagrada llamadel entusiasmo por todo lo vivo, fue helán-dose como esos alpinistas a los que lamuerte alcanza a gran altitud, sin prisa ysin estridencias, pero de forma irrevoca-ble. Fue él quien dio el paso para acabarcon esa relación, dado que le habían pues-to todos los elementos para hacerlo. Sintió

que ya apenas tenía nada que ver con lacondición humana. Simplemente conser-vaba aspecto de hombre, pero por todo lodemás se sentía por completo ajeno a lomundano. La decepción se había instaladoen su sangre, y para eso ya no era posibleel retorno. Así que habría de actuar digna-mente.

Ahora que absolutamente todo se habíaderrumbado a su alrededor, ahora que in-cluso ya no estaba con él su viejo y buenperro, ahora que ni siquiera le satisfacíapintar mientras oía música, pese a que se-guía haciéndolo de manera mecánica, casicon delatora asepsia, era el momento devisitar cada vez con mayor frecuencia loque él llamaba las altas regiones. Esa sen-da le llamaba, y poco a poco fueron demo-rándose sus estancias en la cima, a vecesde horas que pasaba en un estado de ensi-mismada contemplación, libre de las ata-duras que, en la existencia cotidiana de losseres vivos, van mutilando lo mejor de és-tos sin que se den apenas cuenta. Él sí sehabía dado cuenta, y por ello aceptaba sudestino. Raro era el día en el que, si las

condiciones climáticas lo permitían, nosubía a su montaña. Únicamente arribaera en un sentido pleno del término. Lasensación de hallarse en las altas regionesle compensaba con creces. No fue asímientras le amargó la necesidad de com-partir con alguien toda aquella paz, aque-lla armonía, aquella quietud inundada deverde y gris, de hierba y roca, de cielos sal-vajes que parecían pintados para él. Perotambién esa carencia la superó, o apren-dió a convivir con ella. Dolorosa y tácita-

mente, pero sin emitir una sola queja. Y amenudo, cuando era tanta la amarguraconcentrada en su pecho que esta le costa-ba respirar, pensaba para consolarse queera así como debía sucumbir un artistaenamorado.

En el fondo de su abatido corazón al-bergaba la certeza de que todas las monta-ñas eran la misma montaña. Daba igualque tuvieran 8.000 metros de altitud como600 ó 2.000, como su cumbre querida. Laclave residía en aquello que uno estabadispuesto a ofrecer a la montaña. Serafínse entregaba por entero, hasta el extremode que algunas veces, llegando a la cimapoco después de despuntar el alba, le ha-bía sorprendido la noche en lo alto, pasan-do grandes dificultades para hallar el ca-mino de regreso. Y miedo. Él pertenecía ala montaña porque, de un modo que esca-paba a todo razonamiento lógico, se sentíaun apéndice de la misma. Ella nunca le fa-llaría, como las personas y cuanto éstasrealizan. Como lo que uno hace para seramado, con frecuencia en vano.

Mientras ascendía cambiaba el color dela piedra y la tonalidad de la vegetación. Elaire se espesaba y la sutil palpitación de lovivo iba convirtiéndose en un ritmo ma-quinal y obsesivo que todo lo anegaba.Conforme sus paseos iban ganando alti-tud, se difuminaba lo humano, tierno peroa la vez mediocre un tanto egoísta y cadu-co, y se sentía más cerca de lo divino. Estono era otra cosa que aquello que no puedealterarse, porque siempre permanece, almenos percibido desde el registro senso-rial de las personas. ¿A qué buscar el se-creto del genio que enaltece la creaciónartística, si esto era lo verdaderamente su-blime, y siempre había estado allí? ¿Paraqué esperar nada de ningún amor, de cual-quier sentimiento propio de un humano, sien la montaña había hallado lo que instin-tivamente buscó desde que era un niño, elotro amor? Ese otro amor.

Envejeció más por dentro que en su as-pecto exterior, en el sentido de que su es-píritu declinó tenuemente y sin incomodara nadie. Es más, al hablar con la gente in-cluso sonreía, haciendo gala de una afableelegancia. Hubiese sido necesario leer enel fondo de sus ojos para darse cuenta dela magnitud de cuanto sucedía en su inte-

rior. La metamorfosis en el umbral deltránsito.

Serpenteantes camberas llenas de hele-chos y zarzamoras contemplaban, mudas,su otro tránsito, el terrenal, mientras él lle-vaba fija la mirada en el azul, que allí eramás puro, o en la niebla, más densa y llenade misterios que en el fondo no le importa-ba desentrañar porque conocía, o quizá in-tuía, su esencia, y eso iba ocurriendo enproporción exacta a como ascendía.

Fue una fría mañana de invierno en laque, sorprendentemente, los cielos ama-necieron despejados, como invitándole adejar atrás cuantos vínculos pudiese teneren el pueblo, en la tierra. Subió lento peroinsuflado de una alegría que casi le aboca-ba a gritar, exteriorizando así su alborozo.Esa vez no miró hacia la cumbre.

Sencillamente ascendió.Dejaron de verle en el pueblo.Las gentes del lugar pensaron que ha-

bría vuelto a la ciudad.Al llegar la primavera algunos aldeanos

subieron al monte. Uno de ellos, que cono-cía la ruta a la perfección, se detuvo en se-

co y miró hacia un punto cuando faltabanpocos metros para alcanzar la cima encompañía de otro hombre. Le llamó laatención una roca que se erguía, como do-blada sobre sí misma, y que nunca hastaentonces creía haber visto en esos parajes.

Hubiese jurado que antes no estaba.

Las altas regionesPor Javier García Sánchez

PABLO AMARGO

Poco a poco fueron

demorándose sus

estancias en la cima,

en un estado de

contemplación

Fue una fría mañana

de invierno en la que,

sorprendentemente,

los cielos aparecieron

despejados

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Javier García Sánchez

Es escritor y autor de obras como Falta alma, ElAlpe d’Huez y K2, su última obra recientementepublicada por Planeta.