Amigos de Anantapur

“Para erradicar la pobreza se necesitan muchas manos , yo sólo tengo dos.” (Vicente Ferrer)

In tocables En la India, la sociedad está organizada en torno a un rígido sistema de castas ligado a la religión hindú. Cada casta ocupa un lugar determinado dentro de la estructura social. Se trata de un sistema jerarquizado y perpetuado desde hace siglos. Aunque oficialmente la Constitución india prohíbe la discriminación por razón de casta desde 1950, en la práctica el cambio es lento. La Fundación trabaja para mejorar las condiciones de vida de las comunidades más desfavorecidas: los dálits o intocables Se les considera sin casta. Históricamente se les ha condenado a realizar los trabajos más serviles y humillantes de la sociedad. En la India rural, los dálits constituyen una comunidad marginada: su trabajo como jornaleros, escasamente remunerado e irregular, impide su acceso a unas condiciones de vida dignas.

Cuando la organización comenzó su trabajo en Anantapur en 1969, empezó repartiendo sacos de trigo a los desheredados y ha acabado revolucionando el concepto de ayuda humanitaria, sacando de la absoluta miseria a más de dos millones de personas y levantando en medio del secarral más desolado de la India una comunidad que, poco a poco y con todas las dificultades, sale adelante y prospera. Gracias a la ayuda de miles de voluntarios, los intocables de Andhra Pradesh han recuperado su dignidad y tienen acceso a trabajo, casa, sanidad y formación.

Niños intocables en el cole Mujeres intocables de Siddacherla Dálits campesinos

Amigos de Anantapur

“Ninguna acción buena se pierde en este mundo. En algún lugar quedará para siempre.” (Vicente Ferrer)

In significante

No somos ricos... ¿o sí lo somos? Todo depende del punto de vista... Ninguno de nosotros tiene mucho dinero, pero todos juntos tenemos lo suficiente como para cambiar de manera

radical la vida de alguien. Con vuestra contribución mínima de 50 € anuales, que en la India tiene un valor mucho mayor, podremos, por ejemplo, construir una casa familiar para una persona discapacitada, que en Andhra Pradesh cuesta 1.800 euros, una pequeña parte de lo que valdría en Alemania o España. Las personas que no disfrutan de una casa construida por la Fundación suelen vivir en chozas insalubres y dormir en el mismo suelo de barro, que en la época del monzón está embarrado. Además, como las chozas no tienen cimientos, las serpientes son un verdadero peligro. Una casa de la Fundación, que mide en total unos 40 metros cuadrados (repartidos entre cocina, salón y porche) ofrece muchas comodidades, pero eso no es todo. La Fundación Vicente Ferrer (FVF) pone las casas SIEMPRE a nombre de la persona más débil, o sea a nombre de la mujer o de la persona discapacitada. Para esa persona, equivale a un "seguro de vida". A menudo, las personas discapacitadas o las mujeres son maltratadas o se mueren “misteriosamente” en un accidente, porque para sus familiares suponen una carga y maldición. Sin embargo, si esta persona tiene una casa a su nombre, goza de una mejor consideración social y la familia se hace cargo de ella... Por ello, la casa que construyamos es mucho más que una casa... ¡puede salvar una vida!

In transparente

Campañas de donación hay muchas. Son tantas, que no sabemos dónde empezar o simplemente desconfiamos, y finalmente nos quedamos con los brazos cruzados. Además, lo normal es que nunca sepamos qué pasa con nuestra donación... En la FVF, con solo 1.800 euros podemos construir una vivienda familiar. Un proyecto concreto para una familia concreta. El importe incluye la gestión de todos los materiales, la mano de obra, el transporte y los gastos administrativos. Las familias beneficiarias de las nuevas viviendas –que suelen ser dálits– deben cooperar de forma directa en la construcción, para dar máximo valor a su futura casa. Durante la construcción, la Fundación nos mantiene informados del estado de la construcción, y finalmente la casa es inaugurada con una placa conmemorativa a nuestro nombre (“Amigos de Anantapur”). Recibiremos fotos de la casa y de sus nuevos dueños, y además, cada uno de vosotros podrá viajar a Anantapur y ver con sus propios ojos la nueva vivienda construida gracias a nuestra colaboración. ¿Conocéis alguna forma de donación más eficaz y transparente que ésta?

Una choza insalubre, a la izquierda falta toda la pared Construcción de 2 viviendas Una casa construida por la Fundación

Amigos de Anantapur

“Sin una buena acción, todo estaría vacío, incluso el corazón.” (Vicente Ferrer)

Im posible

¿No es posible cambiar el mundo? Sí lo es... Personas tan peculiares como Vicente Ferrer han dado prueba de ello. Desde su llegada a Andhra Pradesh –después del desierto de Rajastán la segunda zona más seca de la India–, la Fundación ha sacado de la pobreza a más de 2 millones y medio de personas mediante un desarrollo sostenible, es decir, agricultura de conservación, microcréditos, suministro de agua, asistencia sanitaria y educación. Mediante donaciones, en su mayor parte en forma de apadrinamiento (tienen unos 150.000 niños apadrinados), emplea a casi 2.400 personas, gestiona seis hospitales, uno especializado en enfermos de SIDA y más de mil escuelas, entre ellas una para niños ciegos, una para sordos, una para niños con síndrome de down y otra para niños con minusvalías de todo tipo. Eso no habría sido posible sin la buena voluntad y el idealismo de miles de personas que se hicieron donantes o colaboradores de la Fundación. ¿Te unes a nosotros? ¿Y conoces a alguien más que tenga interés en colaborar? Si tan sólo tuvieras un familiar o amigo que también quisiera ayudar, ya seríamos el doble de personas... Por favor, reenvía esta circular al máximo de personas que puedas... juntos convertiremos el mundo en un lugar mejor.

¿En qué consiste nuestro proyecto y qué debes hacer? Os presentaré un nuevo proyecto a principios de cada año y os pediré una donación anual mínima de 50 € (4,20 € al mes). Para el año 2014, me gustaría presentaros mi primer proyecto: Maremma, una mujer invidente de 55 años, que vive en el pueblo de P. Kothapalli. La conocí en una reunión con personas discapacitadas, y me fijé en ella porque me pareció una persona sumamente triste. Cuando hablé con ella, me contó que vivía con su padre ya muy mayor. Su día a día consiste en preparar la comida y dormir, porque no tiene más ocupaciones. Sus tres hermanos, según ella, en el pasado la trataron muy mal y no quiere volver a vivir nunca más con ellos. El padre, a su vez, poseía unas tierras y las repartió entre sus 3 hijos varones, sin pensar en su hija discapacitada. Visitamos juntos su choza y pude convencerme de que viven en unas condiciones pésimas. El gobierno indio le paga una pensión de discapacitad de 6 € al mes, lo cual apenas le da para comer. Los hermanos de momento contribuyen con comida y ropa, pero uno de ellos es el dueño de la choza y ya ha anunciado que cuando muera el padre, la venderá (este es el resultado del análisis de situación realizado por la Fundación).

Niños dálits Invitada a una fiesta Niños con parálisis cerebral

Amigos de Anantapur

“La pobreza no está sólo para entenderla, sino también para solucionarla.” (Vicente Ferrer)

Es decir, cuando su padre muera, Maremma estará en la calle y totalmente desprotegida. Los hermanos respetan al padre, pero no a su hermana, que no tiene valor alguno por sus tres condiciones: ser mujer, intocable y discapacitada. Dado que Maremma ya es mayor como mujer india y además no tiene hijos, no entra en consideración para el proyecto de construcción

de viviendas. Y éste es precisamente mi proyecto para 2014: vamos a construir una casa para discapacitados de unos 40 m2 para ella y su padre, que constará de cocina, sala de estar, baño y porche. Esta casa le dará dignidad, nuevas ganas de vivir, más respeto en el pueblo, una perspectiva para el futuro, comodidad y seguridad frente a sus hermanos.

Te pido ingreses tu donación a la siguiente cuenta bancaria antes del 15 de marzo de 2014: Entidad bancaria: Cajamar Titular: Sandra Dorina Egnolff Transferencias nacionales: Cajamar, Nº de cuenta: 3058/0990/21/2709183767 Transferencias internacionales: Cajamar, IBAN ES8730580990212709183767, BIC-SWIFT: CCRIES2A

En el concepto, debes indicar tu nombre y las siglas FVF, p.ej: Sara Alonso - FVF

También los hijos de mis amigos están invitados a contribuir. En función del importe de su paga mensual, pueden hacerlo con una donación de entre 5 y 10 euros anuales. Me parece una

buena manera de educarles en valores. Y por supuesto estáis todos libres de pensar en más personas interesadas en el proyecto y buscar más donantes.

¿Qué obtienes a cambio?

Antes de nada, obtendrás la inmensa satisfacción de haber ayudado a una persona que necesita urgentemente ayuda humanitaria. Aparte de ello, será una manera de que compartamos un proyecto común y tengamos una razón para estar en contacto. Te mantendré informado durante todo el año tanto de los progresos de nuestro proyecto como de los nuevos logros de la Fundación Vicente Ferrer (FVF). Cuando la vivienda esté terminada, se inaugurará y llevará una placa conmemorativa a nombre de los “Amigos de Anantapur”, que somos todos nosotros.

Maremma Típica choza Maremma de 55 años con su padre