N ticiasDiocesanas

DIÓCESIS DE ORIHUELA-ALICANTE Año X, N.º 219 24 diciembre 2006 / 7 enero 2007Nos ha nacido un Salvador

2 /DÍA DEL SEÑOR

LA EUCARISTÍA HOYOrdenación General del Misal Romano. 29 J. ANTONIO BERENGUER

Delegado de Liturgia

Liturgia de la Palabra, g

La Secuencia (N 64). Después dela segunda lectura, antes del«Aleluya», en ciertas ocasiones

hay un canto, como un himno, que nosayuda a contemplar el misterio que ce-lebramos, con alabanza a Dios o peti-ción. Se canta estando todos sentados.Las principales son las de el día de Pas-cua y el día de Pentecostés (no en lasMisas de la Vigila), que son las únicasobligatorias. Las demás todas son op-cionales. La de Pascua, que también esopcional los demás días de la Octava,es una contemplación de la Resurrec-ción del Señor; la de Pentecostés es unainvocación al Espíritu Santo para quevenga y realice en nosotros su obrasantificadora.

Los números 62 y 63 nos hablan dela aclamación que precede al Evange-lio.

¿Qué aclamación es? Es el Aleluya yel otro canto. El otro canto es la aclama-ción al Evangelio en tiempo de Cuares-ma. Con esta aclamación la asamblea delos fieles acoge y saluda al Señor que les vaa hablar en el Evangelio y profesa su fe conel canto. Démonos cuenta: al cantar el«Aleluya» o la otra aclamación, acoge-mos al Señor, saludamos al Señor, ha-cemos un acto de fe en que él nos habla

en el Evangelio. «Aleluya» —que al piede la letra significa «alabad aYhavhé»—, se ha convertido en unaaclamación jubilosa al encontrarnos conel Señor resucitado. Sabemos que Jesús,vivo, viene a decirnos su palabra en elEvangelio. Lo acogemos, la saludamos,lo aclamamos.

¿De dónde se toma? Los versículosse toman del Leccionario o del Gradual (enlatín). No se puede, pues, cantar cual-quier otro canto. Estos versículos estánrelacionados con el Evangelio que va-mos a escuchar y nos preparan para eltema del Evangelio. Por ejemplo: El 4.ºDomingo de Adviento de este año (ci-clo C) el Evangelio nos proclama lavisitación de María a Santa Isabel. Ma-ría va encinta. El verso del «Aleluya»son las palabras de respuesta de Maríaal ángel, por las que María concibecomo hombre al Hijo de Dios.

Durante la Cuaresma nunca se diceni se canta «Aleluya». La aclamación,en lugar del «aleluya», es una frase deaclamación a Jesucristo que está en elLeccionario, al final de las lecturas parael tiempo de Cuaresma. Con el versoantes del Evangelio hay una nota queindica la página. Puede escogerse unaentre las que allí se proponen, por ejem-plo: «Gloria a ti, Cristo, Palabra deDios».

¿Cómo se canta? En cuanto a la pos-tura lo cantan todos de pie. En cuanto almodo, Comienza el cantor o el coro ytodos cantan la aclamación, el cantor oel coro cantan el verso, y, si procede, serepite la aclamación.

¿Cuándo se canta una u otra aclama-ción? Fuera de Cuaresma siempre secanta «Aleluya». Si hay aclamación overso antes del Evangelio y no hay «ale-luya» es signo de que estamos en Cua-resma. No debemos, pues, cantar otracosa y omitir el «aleluya», porque esta-mos diciendo que es Cuaresma. En Ad-viento, Navidad, Pascua y Tiempo Or-dinario, incluso en las Misas de Difun-tos, si hacemos la aclamación al Evan-gelio, siempre será «Aleluya».

La otra aclamación se canta en Cua-resma. En Cuaresma no se canta «Ale-luya» ni siquiera en las grandes fiestaso solemnidades. Siempre será otra acla-mación a Cristo, como se indica en elLeccionario, preparándonos para reno-var en la Pascua la palabra que expresael júbilo del encuentro con el Señor re-sucitado: «Aleluya».

Si no se canta se puede omitir. Sepuede cantar sólo el Aleluya o aclama-ción del pueblo sin el versículo. Decirlasin cantar es menos apropiado, aunquese puede hacer, si realmente suena comoaclamación vibrante a modo de un«¡viva!».

Aclamemos de corazón a Jesucristo,saludándolo y acogiéndolo en la procla-mación del Evangelio.

DOMINGO IV ADVIENTO24 de diciembre

Miqueas 5,2-5aHebreos 10,5-10Lucas 1,39-45

NAVIDAD25 de diciembre

Isaías 52,7-10Hebreos 1,1-6Juan 1,1-18

SAGRADA FAMILIA31 de diciembre

Eclesiástico 3,3-7.14-17aColosenses 3,12-21Lucas 2,41-52

SANTA MARÍA, MADREDE DIOS1 de enero

Números 6,22-27Gálatas 4,4-7Lucas 2,16-21

EPIFANÍA DEL SEÑOR6 de enero

Isaías 60,1-6Efesios 3,2-3a.5-6Mateo 2,1-12

BAUTISMO DEL SEÑOR7 de enero

Isaías 42,1-4.6-7Hechos 10,34-38Lucas 3,15-16.21.22

Más difícil es, pensando a lohumano, que Dios se hagahombre que no el hombre se

llame hijo de Dios.Cuando oyes, pues que el Hijo de

Dios es hijo de David y de Abraham,no dudes ya que tú también, hijo queeres de Adán, serás hijo de Dios. No sehumilló él sin motivo hasta el extremotanto si no hubiese querido exaltarnosa nosotros. Él nació según la carne paraque tú nazcas según el espíritu; él na-ció de una mujer para que tú dejes deser simple hijo de la mujer. […] Habernacido por obra del Espíritu Santo eraanticipado anuncio del nacimiento quesupera nuestra naturaleza que él nos ha-bía de dar por gracia del Espíritu San-to.

(SAN JUAN CRISÓSTOMO,Hom. in Mt 2,2)

Lo que fue concebido entonces según la carne de Maríaconcédeselo ahora espiritualmente a tu Iglesia:que una fe, exenta de toda duda, te conciba;

que un alma, libre de la corrupción, te introduzca en el mundo;que siempre nuestro espíritu, a la sombra de la virtud del Altísimo, te contenga.No te alejes jamás de nosotros, sino brota en nosotros.Sé verdaderamente nuestro Enmanuel, Dios con nosotros.Dígnate permanecer en nosotros y combatir por nosotros.

(Oración mozárabe)

/ 3LA VOZ DEL OBISPO

Ojalá llegue pronto el momentoen que podamos repetir ennuestra diócesis la frase que

encabeza estas líneas, con lo que tienede afirmación positiva y de gozo com-partido. Sabemos que se van dandopasos en orden a lograr un objetivo tannoble, pero queda todavía camino porandar… Son de alabar los esfuerzos depersonas e instituciones, esfuerzos quevaloramos y agradecemos. La invita-ción, sin embargo, es a comprometer-nos todos en el empeño.

El Santo Padre Benedicto XVI ha es-crito una carta para la 93.ª Jornada mun-dial del emigrante y el refugiado, a ce-lebrar el próximo 14 de enero en todoel mundo. Precisa en ella que se necesi-ta «sensibilizar a las comunidadeseclesiales y a la opinión pública». Y re-calca las «potencialidades positivas delas familias emigrantes», acerca de lasnecesidades y los problemas que todosadvertimos y que muchos hermanosviven en su propia carne.

Dificultades de toda familiaemigrante

«Son muchas las dificultades queencuentra la familia del emigrante»,afirma con toda contundencia el Papade la palabra y del compromiso:

• penurias, humillaciones, estre-chez…;

• la lejanía entre sus miembros y la tancostosa reunificación de toda la fa-milia;

• el olvido del pasado y de los propiosdeberes a causa de la distancia y lasoledad;

• el difícil desarrollo de la familiaemigrante, si no se le garantiza unaposibilidad real de inserción y par-ticipación.

«Se está fomentando mucho la inte-

La familia emigrante, integradaCarta para la Jornada mundial del emigrante y el refugiado14 de enero de 2007

gración», afirma a renglón seguido:• la Iglesia estimula la ratificación de

leyes internacionales destinadas adefender los derechos de los emi-grantes, los refugiados y sus fami-lias;

• se han abierto centros de escuchapara emigrantes, casas de acogida,oficinas de servicios para las perso-

• los «mecanismos de defensa» adop-tados por la primera generación deemigrantes pueden ser un obstácu-lo para que las segundas generacio-nes se integren mejor;

• ha aumentado el número de muje-res que abandonan su país de ori-gen, con el consiguiente riesgo determinar siendo víctimas del tráficode seres humanos y de la prostitu-ción;

• es preciso llamar la atención sobrelas familias de los refugiados, que seencuentran en peores condiciones y,además, a veces tienen que sufrir laimplicación de mujeres y niños enla explotación sexual.

«Es preciso animar a todo aquel queestá destruido interiormente para querecupere la confianza en sí mismo», si-gue matizando con persuasiónBenedicto XVI. Con mano tendida, ad-vierte: Nos incumbe a todos los creyen-tes el compromiso serio de reconocer losderechos y la dignidad de las familias.Pensemos de modo especial en aque-llos estudiantes que, sobre todo si es-tán casados, sufren la dolorosa ausen-cia del apoyo familiar y corren el riesgode sufrir una crisis de identidad.

La realidad en nuestra diócesisEl compromiso nuestro con los

inmigrantes se define y concreta al co-nocer los datos facilitados por el infor-me del Secretariado Diocesano de Mi-gración. Aunque sólo tengan carácterestimativo, las cifras son elocuentes ala hora de ayudarnos a caer en la cuen-

ta de la magnituddel reto que,como cristianos,se nos plantea.Hay en nuestraprovincia, en esteaño 2006, 68.390extranjeros en si-tuación irregular,lo que significaque, de un totalde 350.746 extran-jeros, uno de cadacinco está en si-tuación irregular.Si nos fijamos enlos extranjeros nocomunitarios, elporcentaje se ele-va al 41%. Ahorabien, si sumamosal número ante-rior los extranje-ros que tienen do-cumentos provi-

sionales para residir legalmente ennuestro país, la cifra aumenta conside-rablemente: 136.305 extranjeros no co-munitarios viven en situación docu-mental irregular o provisional. Por tan-to, sólo uno de cada tres extranjeros no

comunitarios vive en situación docu-mental estable.

«Los datos expuestos, concluye elinforme mencionado, apuntan a la exis-tencia de un importante grupo de ex-tranjeros que están en situación irregu-lar o con permisos provisionales. Noestamos hablando de números, sino depersonas». Ante esta situación, nuestrafe en Jesucristo nos da luz para orien-tar convenientemente, entre otras, lasacciones siguientes:

• la necesidad de legislar políticasmigratorias y de regulación de flu-jos, que no ignoren la realidad deinmigrantes indocumentados que yaestán en nuestro país;

• la importancia de mantener y poten-ciar los servicios de asesoría jurídi-ca en materia de extranjería;

• la conveniencia de realizar campa-ñas informativas entre la poblacióninmigrante para que ejerza su dere-cho a empadronarse y cumpla consu obligación de renovar periódica-mente sus datos:

• la revisión de posibles medidas res-trictivas y trabas burocráticas en al-gunas oficinas censales, contrarias ala norma establecida…

Termino, haciendo memoria de laspalabras que el Santo Padre pronuncióen Valencia, en la Vigilia de clausura delV.º Encuentro Mundial de las Familias.Como familia de hijos de Dios, estamosllamados a «garantizar que las familiasno estén solas… La comunidad eclesialtiene la responsabilidad de ofreceracompañamiento, estímulo y alimentoespiritual que fortalezca la cohesión fa-miliar, sobre todo en las pruebas o mo-mentos críticos» (8-7-2006). No hayduda de que las familias de los emigran-tes atraviesan duras pruebas y que ne-cesitan de más apoyo para vencer su so-ledad y su marginación. Ofrezcamostambién personalmente este apoyo.Cuanto hagamos a cada uno de ellos,se lo hacemos a Jesús. «No hay vínculoalguno de necesidad, recuerda SanAgustín, en el comportamiento recto,porque está la libertad de la caridad».

nas y las familias, así como otras ini-ciativas.

Queda, sin embargo, mucho porhacer, asegura, con honda y sentida pre-ocupación:

“ No hay dudade que lasfamilias de losemigrantesatraviesan duraspruebas y quenecesitan de másapoyo paravencer susoledad y sumarginación.Ofrezcamostambiénpersonalmenteeste apoyo.

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ENSEÑANZA

MISIONES

MARY CARMEN LLÁCER

Coordinadora General de ERE

Cada año al comenzar elcurso surgen entre no-sotros, nuestros ami-

gos y conocidos, preguntas entorno a la clase de religión enla escuela, quizá nos pregunte-mos si es posible una educa-ción integral sin clase de reli-gión, ¿cómo responder?, va-mos a razonar sobre este aspec-to. Tomo como base el docu-mento elaborado por el Conse-jo Interdiocesano para la Edu-cación Católica en Andalucía,«Cuestiones razonadas sobre laclase de Religión» de Baldome-ro Rodríguez Carrasco.

En primer lugar ¿qué enten-demos por «educación inte-gral»? Para que la educaciónsea integral tiene que abarcara todo el hombre, pero ¿cómose valora el «factor religioso»en la estructura de la persona-lidad? Para unos es un factor

personal que da sentido tras-cendente a la existencia; paraotros es sólo un fenómeno so-cial que, ciertamente, condicio-na y afecta al ser personal. Enambos casos, lo religioso debeser objeto de educación, si éstaquiere ser integral.

Según el informe elaboradopor la UNESCO, dirigido porJ. Delors, «La educación encie-

rra un tesoro», se establecencuatro pilares de la educa-ción: Aprender a aprender,aprender a hacer, aprendera vivir juntos y aprender aser. La síntesis de todos es-tos valores estaría en el«aprender a ser», esto es, quela persona se realice como tal,que alcance su propia iden-tidad. Corresponde pues a la

EDUCACIÓN INTEGRAL Y CLASE DE RELIGIÓN

escuela educar y desarrollar ta-les valores de identidad personal.

¿Se puede alcanzar la propiaidentidad si la persona creyenteno recibiera educación en su di-mensión religiosa?, de no recibir-la estaríamos cayendo en la in-coherencia pedagógica de afir-mar una educación al servicio deldesarrollo pleno de la persona yno poner en ejercicio todos losmedios necesarios para hacerlo.

Por tanto, la UNESCO dejamuy claro que la educación inte-gral, que corresponde a la escue-la, tiene como finalidad que elalumno alcance su identidad per-sonal. Esta meta es imposible al-canzar sin una formación en losvalores religiosos que configuranla personalidad del alumno.

Por otra parte en el pre-ámbulo de la LOGSE se habla deuna educación plena que permi-ta conformar al alumno su pro-

pia y esencial identidad. No setrata de una educaciónestándar, sino de una educa-ción personaliza-da.

Desde estas definiciones esimposible que los alumnos asu-man lo religioso como consti-tutivo de su ser, sin una forma-ción religiosa.

En síntesis, no es concebiblehoy desligar de la escuela sufunción de educarintegralmente; es igualmenteinconcebible, entender la edu-cación integral sin un procesode identificación personal, deplanificación de la propia per-sonalidad, y por último, es im-posible alcanzar tales metas, sino se educa la dimensión reli-giosa de la persona, a cuyo finse orienta la formación religio-sa y moral de la escuela.

Juan Pablo II, en el Año In-ternacional del Niño, defi-nió Infancia Misionera

como «una verdadera red desolidaridad humana y espiri-tual entre los niños de los an-tiguos y nuevos continentes».De ahí surge el que, en toda suacción educadora, la InfanciaMisionera se esfuerce por des-pertar y desarrollar la concien-cia misionera de los niños y,simultáneamente, promuevay ofrezca unos cauces parapoderla vivir comprometiday responsablemente, enmar-cándose así en la inquietudgeneral de las Obras Misio-nales Pontificias: «infundiren los católicos desde la in-fancia el sentido verdadera-mente universal y misione-ro» (AG 38).

Es conocido por todos,gracias a los medios de comu-nicación social, la situación dela niñez en nuestro mundo ac-tual. Bastará citar a grandesrasgos el «turismo sexual» conmillares de muchachas y mu-chachos vendidos en todo elmundo, la esclavitud domésti-ca con adolescentes cautivospor sus patronos que se apode-ran de sus pasaportes y les obli-gan a vivir en situaciones de-plorables por un salario míse-ro, millones de niños obligadosa un trabajo inhumano paraque su familia pueda sobrevi-vir, centenares de niños de lacalle inmersos en el mundo de

la droga, multitudes enormesde niños obligados a combatiren un sinfín de guerras tribales,millones de niños y adolescen-tes víctimas del sida… De estarealidad, y porque la sensibili-dad adquiere tintes especialesal tratarse de niños, han brota-do como setas en estos últimosaños multitud de organizacio-nes que, llamando a la solida-

ridad, quieren responder a tangraves problemas y aportar al-guna ayuda para solucionarlos.

La Iglesia ha conocido comonadie a través de los misione-ros y misioneras tan grave yendémica —que no es de aho-ra— lacerante realidad. Haceya más de ciento cincuentaaños, y en medio de no muypropicios momentos socio-po-líticos y religiosos, brotó enFrancia, a través de Mons.Forbin Janson y Paulina Jaricot,la intuición de pedir a la Igle-sia un gesto permanente de sumaternidad y la gran osadía decomprometer a los niños cris-

tianos en unos gestos defraternidad con todos losniños del mundo. Y los ni-ños y adolescentes cristia-nos, desde hace más deciento cincuenta años, sehan tomado en serio esteproblema. De ahí que ellema de Infancia Misione-ra sea «los niños ayudana los niños».

Nunca se sabrá en con-tabilidades humanas cuál

puede ser el número de ni-ños que la Infancia Misione-ra ha movilizado en accionesa favor de sus hermanos enlos territorios de misión. Jus-to es, sin embargo, y por en-cima de todo, resaltar el ca-rácter educativo de estaObra, que ha cincelado laconciencia de millones de ni-ños cristianos, acostumbrán-doles a conocer, respetar,amar y ayudar a otros niños,lejanos e ignorados, comomiembros de una única fami-lia humana, y queridos y sal-vados por un único Dios,Padre de todos.

¿QUÉ ES LA INFANCIA MISIONERA?

JOAQUÍN CARLOS CARLOS

Director del Secretariadode Misiones

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CÁRITAS VOCABULARIO BÁSICO

TONI

ESTEVE

JOSÉ JAIME ESTEVE

ComunicaciónCáritas Diocesana

DIACONÍA (1)

Esta palabra viene del griego y designa laacción de servir. Jesús hizo del serviciouna de las señales del discípulo, al lavar

los pies de los apóstoles (Jn 13; Lc 10,40-45). Yél mismo vino, no para dominar sino para ser-vir (Mc 10,45), llegando hasta despojarse de suspoderes divinos (Flp 2,6) para hacerse cercanoa los hombres y salvarlos.

Benedicto XVI en su encíclica Deus caritasest nos muestra la naturaleza caritativa de eseservicio que nace del mismo Jesús: «La Iglesiaha sido consciente de que esta tarea ha tenidouna importancia constitutiva para ella desdesus comienzos: Los creyentes vivían todos unidosy lo tenían todo en común; vendían sus posesionesy bienes y lo repartían entre todos, según la necesi-dad de cada uno» (Hch 2,44-45). Lucas nos relataesto relacionándolo con una especie de defini-ción de la Iglesia, entre cuyos elementos cons-titutivos enumera la adhesión a la enseñanza delos Apóstoles, a la comunión (koinonia), a la frac-ción del pan y a la oración ( Hch 2, 42). La comu-nión (koinonia), mencionada inicialmente sinespecificar, se concreta después en losversículos antes citados: consiste precisamenteen que los creyentes tienen todo en común yen que, entre ellos, ya no hay diferencia entrericos y pobres (Hch 4,32-37). A decir verdad, amedida que la Iglesia se extendía, resultaba im-posible mantener esta forma radical de comu-nión material. Pero el núcleo central ha perma-necido: «en la comunidad de los creyentes nodebe haber una forma de pobreza en la que seniegue a alguien los bienes necesarios para unavida decorosa» (20).

El Papa nos indica que el ideal de comu-nión material de bienes impedía que en la co-munidad hubiese pobres y añade que «un pasodecisivo en la difícil búsqueda de solucionespara realizar este principio eclesial fundamen-tal se puede ver en la elección de los siete varo-nes, que fue el principio del ministerio diaconal(Hch 6,5-6). En efecto, en la Iglesia de los pri-meros momentos, se había producido una dis-paridad en el suministro cotidiano a las viudasentre la parte de lengua hebrea y la de lenguagriega. Los Apóstoles, a los que estaba enco-mendado sobre todo la oración (Eucaristía yLiturgia) y el servicio de la Palabra, se sintieronexcesivamente cargados con el servicio de lamesa; decidieron, pues, reservar para sí su ofi-cio principal y crear para el otro, también nece-sario en la Iglesia, un grupo de siete personas.Pero este grupo tampoco debía limitarse a unservicio meramente técnico de distribución:debían ser hombres llenos de Espíritu y de sabi-duría ( Hch 6,1-6). Lo cual significa que el ser-vicio social que desempeñaban era absoluta-mente concreto, pero sin duda también espiri-tual al mismo tiempo; por tanto, era un verda-dero oficio espiritual el suyo, que realizaba uncometido esencial de la Iglesia, precisamenteel del amor bien ordenado al prójimo. Con laformación de este grupo de los Siete, la diaconía—el servicio del amor al prójimo ejercidocomunitariamente y de modo orgánico— que-daba ya instaurada en la estructura fundamen-tal de la Iglesia misma» (21).

Estando allí le llegó el tiempo del par-to y dio a luz a su hijo primogénito;lo envolvió en pañales y lo acostó

en un pesebre; porque no encontró sitioen la posada

La Navidad es fiesta entrañable ysignificativa, tanto a nivel de fe comode familia y sociedad. Ofrecemos y es-cuchamos mensajes preciosos, que vie-nen del cielo y brotan de lo más íntimodel corazón. Hay uno que resuena confuerza entre todos: Paz a los hombres,amados por Dios. Y cuando Dios dice pazse entiende plenitud de felicidad y devida. Porque Dios quiere que sus hijosvivan.

Pero no somos ciegos ni podemoscaer en la inconsciencia. Millones dehermanos nuestros, hijos de Dios, nopueden celebrar dignamente el naci-miento del Hijo de Dios. Los llamamospobres, los compadecemos:¡pobres!...

Pero no, son empobrecidos, margina-dos, excluidos del banquete de la crea-ción. No los excluye Dios, sino otroshijos de Dios. El Padre quiere a todos,los hermanos no nos queremos todos.

En el momento de nacer Jesús noencontró casa ni cuna. Después diríaque no tenía dónde reclinar su cabeza. HoyJesús ni siquiera podría nacer en los al-rededores de Belén. Hoy Jesús naceríaen una patera, en uncampo de refugia-dos, en un centro delos sin-techo, en unachabola de barrio,¿quién sabe?, en unaboca de metro o enun caserón abando-nado. Nacería, me-jor, siguen naciendo.¿Cuántos son hoylos que no tienen te-cho ni casa, los queno tienen dónde re-clinar su cabeza nicalentar su corazón?

El nacimiento deJesús anima y alimenta nuestra espe-ranza. Es nuestro punto de apoyo. Si élvino a nosotros y se quedó con noso-tros, si él «siendo rico, por nosotros se hizopobre», si él evangelizó a los pobres yliberó a los cautivos, si él sembró semi-llas de amor y fraternidad, podemosesperar fundadamente que todo pue-da mejorar, podemos esperar, con es-peranza activa, «un cielo nuevo y una tie-rra en los que habite la justicia».

Hay realidades significativas en estesentido. Podemos hablar de tantas per-sonas en nuestra diócesis —el 5 de di-ciembre Día del Voluntariado—, cuyotestimonio callado pero permanente deamor y entrega al servicio de los em-pobrecidos nos sorprende y confirma,

Necesitamos de la solidaridad del pueblo alicantino, porque unas religiosas de nuestra

Diócesis tienen que cambiar la maquinaria nece-saria para su trabajo y vale mucho dinero. Po-dríamos aliviar uno de sus plazos de pago conunos 30.000 euros. Sabemos que es mucho perotambién sabemos que muchos empresarios sesienten aliviados en sus declaraciones de la Ren-ta y otros impuestos con los donativos que dan aCÁRITAS. Nuestras ciudades industriales pue-den responder a esta llamada y también los quetienen menos.

NECESITAMOS TRABAJO

En CÁRITAS DIOCESANA DE ORIHUELA-ALICANTE, en la Avda. de Aguilera núme-

ro 55 de Alicante, funciona una Bolsa de Trabajocon demasiadas peticiones de trabajo para per-sonas que no tienen papeles y pocas ofertas.

Ésta es una llamada a la solidaridad para quelas personas que necesiten una trabajadora o tra-bajador, se dirijan a nosotros con su oferta, conmucho gusto les atenderemos y trataremos defacilitarles inmediatamente a la persona adecua-da. Gracias por escuchar la voz de los que menostienen.

NO ENCONTRÓ SITIO EN LA POSADA…

nos anima a seguir aprendiendo; sonsamaritanos anónimos que muestrancon su vida algunos de los rasgos denuestro Dios, encarnados en Jesús de

Nazaret: sensibilidad y cercanía, com-pasión y misericordia, fidelidad y per-manencia, gratuidad y desinterés, crea-tividad y novedad, constancia en lopequeño y aparentemente inútil, gozoprofundo del corazón y alegría sere-na…, son nuestros VOLUNTARIOS.

Una frase que muy bien puede re-sumir el talante de estos cristianos es:«el regalo más grande que Dios me ha he-cho en la vida es poder servir con amor alos pobres», es de una de nuestras vo-luntarias que, aunque esté jubilada, si-gue acudiendo a Cáritas.

Si no podemos darle un sitio en laposada, sí una sonrisa. ¡Dios ama a estemundo! y por eso la Palabra se hizo car-ne.

L a Asociación deCantautores deAlicante «La Ex-

planada» y Cáritas Dioce-sana Orihuela-Alicantehan aunado esfuerzospara grabar un disco cuyosbeneficios irán destinadosal nuevo centro de recur-sos sociales de CáritasInterparroquial de Elche(Proyecto Cauce).

El disco, que se presen-tará bajo el nombre de«Obras son canciones»,está integrado por nueve temas inéditos compuestos por los miembrosde dicha asociación musical.

El lanzamiento del CD, del que se editarán unas 3.000 copias, estáprevisto para Navidad y se presentará en directo con varios conciertosdurante los meses de diciembre y enero.

Para adquirir el disco o ampliar información: Cáritas Interparroquialde Elche. Tel.: 96 666 72 90 (preguntar por Alberto).

Para mas información sobre la Asociación de Cantautores «La Expla-nada» (mp3, noticias, foro, etc.): www.laexplanadacantautores.com

Obras son Canciones, undisco lleno de solidaridad

Noticias solidarias

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SECRETARIADO DE

INFANCIA Y JUVENTUD

El Papa responde a preguntas de jóvenes (I)

A menudo me pregunto qué ha-ría Jesús si estuviera en mi lugar enuna situación determinada, pero nosiempre logro comprender lo que medice la Biblia. Además, sé que loslibros de la Biblia fueron escritospor hombres diversos, en épocas di-versas y todas muy lejos de mí.¿Cómo puedo reconocer que lo queleo es, en cualquier caso, palabra deDios que interpela mi vida?

Ante todo se debe decir que es pre-ciso leer la sagrada Escritura no

como un libro histórico cualquiera, porejemplo como leemos a Homero, aOvidio o a Horacio. Hay que leerla real-mente como palabra de Dios, es decir,entablando una conversación con Dios.Al inicio hay que orar, hablar con el Se-ñor: «Ábreme la puerta». Es lo que dicecon frecuencia san Agustín en sushomilías: «He llamado a la puerta de laPalabra para encontrar finalmente loque el Señor me quiere decir». Esto meparece muy importante. La Escritura nose lee en un clima académico, sino oran-do y diciendo al Señor: «Ayúdame a en-tender tu palabra, lo que quieres decir-me en esta página». Creo que debemosaprender estos tres elementos: leerla enconversación personal con el Señor;leerla acompañados por maestros quetienen la experiencia de la fe, que hanpenetrado en el sentido de la sagradaEscritura; leerla en la gran compañía dela Iglesia, en cuya liturgia estos aconte-cimientos se hacen siempre presentes denuevo, en la que el Señor nos habla aho-ra a nosotros, de forma que poco a poco

penetramos cada vez más en la sagra-da Escritura, en la que Dios habla real-mente con nosotros hoy.

En su Mensaje para la XXI Jor-nada mundial de la juventud, ustednos dijo que «es urgente que surjauna nueva generación de apóstolesarraigados en la palabra de Cristo».Son palabras tan fuertes y compro-metedoras que casi dan miedo. Cier-tamente, también nosotros quisié-ramos ser nuevos apóstoles, pero¿quiere explicarnos con más detallecuáles son, según usted, los mayo-

res desafíos de nuestro tiempo, ycómo sueña usted que deben ser es-tos nuevos apóstoles? En otras pa-labras, ¿qué espera de nosotros,Santidad?

Todos nos preguntamos qué esperael Señor de nosotros. Me parece que

el gran desafío de nuestro tiempo es elsecularismo, es decir, un modo de viviry presentar el mundo como si Dios noexistiera. Se quiere relegar a Dios a laesfera privada, a un sentimiento, comosi él no fuera una realidad objetiva; yasí cada uno se forja su propio proyec-to de vida. Debemos hacer que Dios esténuevamente presente en nuestras socie-dades. Esta me parece la primera nece-sidad: que Dios esté de nuevo presenteen nuestra vida, que no vivamos comosi fuéramos autónomos, autorizados ainventar lo que son la libertad y la vida.Debemos tomar conciencia de que so-mos criaturas, constatar que Dios nos

ha creado y que seguir su voluntad noes dependencia sino un don de amorque nos da vida.

Por tanto, el primer punto es cono-cer a Dios, conocerlo cada vez más, re-conocer en mi vida que Dios existe yque Dios cuenta para mí.

Hay que hacer presente, ante todo

en nuestra «propia» vida, al Dios vivo,al Dios que no es un desconocido, unDios inventado, un Dios sólo pensado,sino un Dios que se ha manifestado, quese reveló a sí mismo y su rostro. Sóloasí nuestra vida llega a ser verdadera,auténticamente humana; y sólo así tam-bién los criterios del verdadero huma-nismo se hacen presentes en la socie-dad. También aquí, como dije en la pri-mera respuesta, es verdad que no po-demos construir solos esta vida justa yrecta, sino que debemos caminar encompañía de amigos justos y rectos, decompañeros con los que podamos ha-cer la experiencia de que Dios existe yque es hermoso caminar con Dios. Y ca-minar en la gran compañía de la Igle-sia, que nos presenta a lo largo de lossiglos la presencia del Dios que habla,que actúa, que nos acompaña. Por tan-to, podría decir: encontrar a Dios, en-contrar al Dios que se reveló en Jesu-cristo, caminar en compañía de su granfamilia, con nuestros hermanos y her-manas que forman la familia de Dios,esto me parece el contenido esencial deeste apostolado del que he hablado.

Como bien sabéis el pa-sado mes de noviem-bre se celebró en la

Fundación Nta. Sra de las Vir-tudes de Villena el retiro espi-ritual de jóvenes, organizadopor el Secretariado de infanciay juventud de la Diócesis.

Fue un fin de semana ma-ravilloso en el que jóvenes delas cinco zonas tuvimos laoportunidad de hacer «un alto»en nuestras vidas y abrir los oí-dos y el corazón para escucharqué es lo que Jesús quería de-cirnos a cada uno de nosotros.Para ayudarnos a abrir el cora-zón y a escuchar atentos lo que

EJERCICIOS ESPIRITUALES DE JÓVENES

Jesús nos quería decir, conta-mos con la impagable ayuda ycon el vigoroso acompaña-miento de Paco Beltrán, que esel actual Padre espiritual delSeminario de Orihuela, quiennos transmitió el amor queDios nos tiene y que ese amores un regalo inagotable†queDios nos entregó.

En cuanto a las celebracio-nes, aparte de la celebración dela Misa y el rezo de laudes yvísperas, quiero destacar laparticipación de todos los jóve-nes en la procesión de las an-torchas que junto con el rezodel Rosario, se celebra cada pri-

mer sábado de mes en el San-tuario de Nta. Sra. de la Virtu-des de Villena.

En verdad, fue una expe-riencia magnífica, ya que másde treinta jóvenes de todas laszonas de nuestra Diócesis tu-vimos la oportunidad de re-unirnos juntos a rezar, comouna gran familia y a «recargarlas pilas» para poder continuaradelante en nuestro caminohacia Jesús. Una experienciaque cada año se hace más gran-de y que esperamos que elpróximo curso crezca todavíamás.

Jesús

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«En todos y cada uno de estos jó-venes es posible entrever un ansia deliberación, de crecimiento humano, yel deseo, aunque sea implícito, de unmayor conocimiento del misterio deDios.»

A través de juvenil, la comunidad cristiana acompaña a cada joven en el

desarrollo integral de su persona-lidad, según Cristo y en la direc-ción del proyecto que Dios tienepara cada uno. Por tanto toda pas-toral tiene una dimensión vocacio-nal. Entendida de este modo lapastoral de los jóvenes tiene carác-ter «educativo», es decir promue-ve un crecimiento integral de lapersona del joven y su inserciónactiva en un determinado contex-to social y cultural.

La pastoral juvenil no resultavocacional por el hecho de añadirdeterminados temas o aumentaralgunos subrayados, sino por unenfoque general, que crea las con-diciones adecuadas para captar lallamada de Dios y responder a ellacon generosidad.

¿Con qué experiencias y ele-mentos debe abrirse la pastoraljuvenil a la dimensión vocacional,o mejor, convertirse ella misma enpastoral vocacional? Y, en conse-cuencia, ¿qué influjo ha de tenerla componente vocacional insertaen la pastoral juvenil, para que sutrabajo específico pueda ser «coro-namiento» de especial calidad y noalgo sobreañadido?

Para situar bien la cuestión,recordemos brevemente algunospuntos clave de la pastoral juvenilbien orientada para que alcance aanimar un proceso de maduraciónvocacional. Una pastoral que pri-vilegie la atención a la persona: atodas las personas y no sólo a losmejores; con una atención especialpor los adolescentes y jóvenesadultos: dos momentos claves demaduración de una opción voca-cional. Esto significa poner en elcentro de las preocupaciones notanto los programas, el funciona-miento de las estructuras, o el éxi-to de las iniciativas, sino la aten-ción a las personas, a su historia, asus expectativas y sus necesidades;su acogida gratuita, hasta desper-tar en su corazón el gozo de vivir.

Una pastoral que dé la prima-cía a la evangelización: en la quetodo esté orientado a abrir las per-sonas a Cristo y las conduzca a unarelación personal con Él a travésde la oración, de la Palabra deDios, de los sacramentos, de la ex-periencia eclesial, de una vida cris-tiana coherente de servicio gratui-to. En un clima de secularizacióncomo el que vivimos actualmentesólo será evangé-licamente signi-ficativa una pastoral clara y deci-dida, capaz de presentar la fe comoun verdadero camino de humani-za-ción y de felicidad.

Una pastoral que ofrezca a losjóvenes un camino de educacióna la fe unitario y progresivo, en elque se articulen y se refuercenmutuamente los aspectos de cre-cimiento humano, de acción y decompromiso con los momentos demaduración creyente en la oracióny celebración, las experiencias ex-traordinarias y la vida de cada día.

Con una metodología que ayu-de a personalizar la fe y los valo-res del Evangelio; una metodolo-gía que promueva la participaciónactiva de los mismos jóvenes y lacomunicación de vida; una pasto-ral pro-positiva, que facilite y pre-sente a los jóvenes experienciasdina-mizadoras, capaces de susci-tar la pregunta por el sentido yabrirles horizontes para sus vi-das…

ORIENTAR HACIA LAVOCACIÓN

Los jóveneshan de vivir suvida «a laintemperie» enun climaadverso a laexperienciavocacional y defe; por esonecesitanambientescálidos dondepuedan teneruna experienciagozosa de la feque les permitavivirla luego enla intemperie.

“

Una pastoral centrada en lacomunidad: una comunidad quetestimonia y vive su fe con alegríay gran calidad humana, una comu-nidad acogedora y abierta al mun-do juvenil, una comunidad quesuscita comunión y ganas de co-municar la vida y la fe; una pasto-ral que se preocupa de crear am-bientes comunitarios que faciliteny promuevan la apertura a la fe,modelos evangélicos de vida, elgozo de la fe…

Los jóvenes han de vivir suvida «a la intemperie» en un cli-ma adverso a la experiencia voca-cional y de fe; por eso necesitanambientes cálidos donde puedantener una experiencia gozosa de lafe que les permita vivirla luego enla intemperie.

Bajo este lema fueron reunidos el día2 de diciembre cer-

ca de 1.500 niños, con suscatequistas y sacerdotes,en el Colegio Jesús-MaríaCEU de Alicante junto alobispo de la Diócesis D.Rafael Palmero, en la jor-nada de infancia que cadaaño organiza el Secretaria-do de infancia y juventudde la Diócesis en torno alcomienzo del Adviento.

Una jornada entraña-ble para los niños que in-vitaba a reflexionar a losmás pequeños las pala-bras de Jesús a sus discí-pulos: «Vosotros sois misamigos».

Reflexión que conclu-yó con la Liturgia de lapalabra y adoración Eu-carística donde los niñosdelante del Señor dabanGracias y lo adoraban conel canto y la oración, ani-mados por la palabra deD. Rafael que invitó a to-dos los niños a mantenersiempre la amistad conJesús, visitándole en laEucaristía, participandode ella cada domingo vi-viendo con alegría dichaamistad con Jesús que acada uno de ellos les lla-maba por su nombre. Elamigo es la «mitad delalma», comentaba nues-tro Obispo recordando lasPalabras de S. Agustín; esel misterio que llena lavida del cristiano, adultoo niño, el Dios que enCristo ha querido quecada hombre fuera «esamitad del alma» de la Pa-labra hecha carne.

Un ambiente sereno,cordial, festivo han ayu-dado a los niños a sentir-se acogidos y parte de estaIglesia que les ama desin-teresadamente, les sirve yles entrega lo mejor quetiene: a Jesucristo y elevangelio.

En este camino delAdviento, esta jornada hasido un signo de esperan-za, una luz más encendi-da en la corona de Ad-viento, donde los niños,festivos, alegres, creyen-tes han reflejado el rostroque nos anuncia el ad-viento, un Dios que vienea los hombres como Niñoy que a los hombres ha lla-mado amigos.

VOSOTROS SOIS MISAMIGOS

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CRÓNICAS

En dos barrios periféricos deesta Lima inmensa soplanbrisas balsámicas alicanti-

nas.En el sector «Sol de Oro» del

municipio de «Los Olivos» ha re-calado don Victorio Oliver, libera-do de obligaciones episcopales ali-cantinas, a sus 77 años. Vive osten-siblemente integrado y feliz, en unanhelado segundo plano, su cer-canía al pueblo llano peruano. Su«jefe», el párroco del «Buen Pas-tor», Pedro Martínez, que estuvoen Petrer hasta el 88, lleva 18 añosen Perú, en donde se inició en latambién «alicantina» parroquia deCasma/Chimbote. El legado a suparroquia, de momento, de estehiperactivo alicantino: una «pos-ta» (policlínica) de bajo costo; un

colegio con 2.800 alumnos (600becados); una cooperativa de 80trabajadores de la construcción; yun instituto tecnológico. Y su le-gado a la diócesis de Carabayllo,cuya sede es contigua a la parro-quia: la Universidad Sedes Sapien-tiae, de la que es rector el catedrá-tico emérito de Derecho de la Uni-versidad de Alicante, Joaquín Na-varro Valls, y un Centro de Ense-ñanza Ocupacional para jóvenesen situaciones sociales de riesgo.

Obviamente, Pedro Martínez,a quien sus «criaturas» no dejanparar ni un minuto, necesita ayu-da para lo propiamente pastoral.Para estos menesteres están, entreotros, don Victorio y el joven curaalteano Vicente Martínez Agulló,ex de Crevillente y Jijona. Me in-vitan a comer con ellos y con PepeLozano, de Cox, que está fugaz-mente de paso por Lima, quien fuecura durante siete años de las MilViviendas y está ahora en Jimbe,una zona quechua de alta monta-ña.

Cuando regreso a los dos días,invitado a pasar con ellos el fin desemana electoral (municipales yprovinciales), nos encontramoscon que un grupo de colaborado-res de la parroquia ha organizadoa Pedro una cena sorpresa por su50 cumpleaños, cosa que le produ-ce al homenajeado un embarazovisible. Vicente llega tarde a la

Alicante en Limacena, por lo que, asumiendo quese ha excedido en el sermón do-minical, se le recuerda la variantelitúrgica del «lo bueno, si breve...»de Gracián: «El que en siete minu-tos no mueve los corazones, mue-ve los culos». Comemos, charla-mos, reímos y les pongo al día delas cosas de Alicante (aunque enla era Internet, los heraldos ya noson lo que eran). Siguen luego losparlamentos por el medio siglo delpárroco y los cantos peruanos. Elestribillo de uno de ellos: «Ay, FrayMartín de Porres, ¿por qué con-siente, que en la ciudad de Limase tome tanto aguardiente?».

Pero hay un segundo foco ali-cantino en Lima. Éste se encuen-tra en el barrio de «El Agustino»,en el que muchos taxistas se nie-

gan a entrar; aquí fue donde entróen coma de años, del que no sal-dría con vida, el recién llegado je-suita alicantino Pepo Olmos. Eneste barrio marginal se concentrala acción de la ONG alicantina«Comité de Solidaridad con elPerú Pacha Mama». Creada en1989 por la gente de esa ya longevacomuna multicultural que es «LaPeri», en el Barrio Obrero de Ali-cante, cuenta con 85 miembros queaportan cada uno un día de suel-do al mes. Su financiación, hastaalcanzar los 110.000 euros al año,la completan la importación y ven-ta de artesanía de talleres auto-gestionarios peruanos y sendassubvenciones a proyectos delAyuntamiento, la Diputación y laCAM.

La coordinación «in situ» delos proyectos la lleva la alicantinaBelén Romá Romero, afincada enLima desde hace 14 años. Granparte de las ayudas se destina abecas de estudio a jóvenes sin re-cursos y comprometidos social-mente. Pero hay también proyec-tos de otra naturaleza, como, enestos momentos, uno de «educa-ción sanitaria y protección del re-curso agua» y otro sobre «capaci-tación en la gestión del desarrollolocal».

¿Qui va dir que els alacan-tinssom uns menfotistes?

La Plataforma a favor de laReligión en la Escuela —

integrada por los siguientes co-lectivos: Confederación Católi-ca de Padres de familia y pa-dres de alumnos (CONCAPA);Unión Sindical Obrera (USO);Delegación Diocesana de Ense-ñanza; Federación Española deReligiosos de la Enseñanza(FERE); Educación y Gestión(EyG)— quiere hacer público elsiguiente manifiesto:

1. El debate relativo a la pre-sencia de las religiones en laescuela pública es una cuestióneducativa. Rechazamos la ma-nipulación mediática de la queha sido objeto y lamentamos elque se haya utilizado como unaoportuna arma arrojadiza po-lítica. Esta realidad no debequedar a expensas de los vai-venes ideológicos de los distin-tos gobiernos. El pacto de Es-tado, que en materia de educa-ción se está reclamando, debeafectar de un modo especial aesta cuestión y en este sentido,la LOE ha significado una nue-va oportunidad perdida.

2. Queremos clarificar queen ningún momento se ha apo-yado iniciativa alguna basadaen la imposición de una asig-natura de religión confesionalcomo materia obli-gatoria. En toda lahistoria de nuestrademocracia jamásse ha dado esa in-sostenible preten-sión. Un modeloaceptable para laEducación Religio-sa Escolar tendríaque suponer el res-peto de todas lasopciones posibles,a saber: las confe-sionales y la noconfesional. Recha-zamos la posibili-dad de exención alestudio del hechoreligioso, dado que éste debede formar parte del currículode todos los alumnos.

3. Fundamentamos la nece-sidad del estudio del hecho re-ligioso en la escuela esencial-mente desde dos ejes, a saber:la educación integral y la liber-tad religiosa. No creemos po-sible que pueda hablarse deaquélla sin hacer referencia aese aspecto de apertura a latrascendencia presente porcierto, como un común deno-minador, en todas las culturasy en todos los momentos his-tóricos. Por cuanto hace a la li-

tequesis», «adoctrinar», «in-centivar actitudes fundamen-talistas» y otras de índole simi-lar. Las diferencias entre ense-ñanza religiosa escolar y cate-quesis hace mucho tiempo quequedaron salvadas (basta conver las programaciones). Porcuanto se refiere a las otras de-nuncias recordamos que elintegrismo es una actitud quese puede dar en el marco reli-gioso (como una perversión dela religión) pero también en elcivil (bajo la forma de laicismo)y que su mejor caldo de culti-vo es la ignorancia. Por ello,presentamos el estudio de lasreligiones como el mejor antí-doto para cualquier forma defundamentalismo.

7. Dado el momento histó-rico y político que estamos vi-viendo, caracterizado por unesfuerzo de aproximación a losmás significativos logros euro-peos, consideramos importan-te el llamar la atención sobre elhecho de que, con la salvedadde Francia (y no en toda ella),en la mayoría de los países con-siderados «punteros» en Euro-pa, la presencia de las religio-nes en la escuela pública (encondiciones similares a las delas demás materias), se da

como un hechohabitual. Cuandopodamos libe-rarnos definitiva-mente de tópicosbasados en ma-ridajes trasnocha-dos, habremosdado sin duda unimportante pasohacia la moderni-zación y europei-zación de nuestramentalidad. Re-cordemos ade-más que desde elConsejo de Euro-pa se dio la con-signa de «fortale-

cer la enseñanza de las religio-nes».

8. Por último, afirmamossin ambages, que sólo generan-do un verdadero clima de diá-logo en el que todas las vocessean escuchadas desde el res-peto, podrá encontrarse unafeliz solución a este asunto queen no pocas ocasiones ha gene-rado tensiones y enfrenta-mientos dentro y fuera delmundo educativo. Con la pla-taforma, queremos ser un foro,donde todas estas opinionestengan cabida. Está en nuestrasmanos.

MANIFIESTO POR UNA EDUCACIÓN INTEGRAL YPOR LA DIGNIDAD DE LA CLASE DE RELIGIÓN

raria de un tercio del total en la educación secunda-ria obligatoria y la posibilidad de exención de estudiodel hecho religioso. En el marco de ese acto de pro-testa pacífico se leyó un manifiesto que entregamos,junto con nuestras propuestas, a la Subdelegacióndel Gobierno y que queremos hacer público tambiéna través de este medio.

Pablo BalaguerCoordinador de la Plataforma a favor de la Religión en la Escuela

Como ya quedo reseñado en el anterior númerode Noticias Diocesanas, el pasado lunes 27 de

noviembre a las 18h 30m tuvo lugar una concentra-ción frente a la Subdelegación del Gobierno promo-vida desde la Plataforma a favor de la Religión en laEscuela para protestar por la publicación del borra-dor del Real Decreto que determina en qué condicio-nes se impartirá la clase de religión. Destacábamoscomo elementos más preocupantes la reducción ho-

bertad religiosa, recordamos laobligatoriedad del Estado deasistir a los padres y madres ensu derecho de que sus hijos re-ciban una educación religiosade acuerdo con sus conviccio-nes. La protección a la que sehace referencia en la Constitu-ción es dentro del sistema edu-cativo, marco básico de forma-ción del niño/a.

4. Rechazamos por incohe-rentes con el marco constitucio-nal y por no suponer soluciónreal al problema, las propues-tas que quieren diluir y negaren la práctica el carácterevaluable parejo al del resto dematerias. Por contra, subraya-mos que la evaluabilidad (sinmatices) de la asignatura dereligión es imprescindible paraque esta materia pueda ser im-partida con la seriedad y rigu-rosidad académica adecuadas.Afirmaciones como que «la feno es evaluable» suponen en elmejor de los casos un descono-cimiento profundo del currícu-lo de la asignatura de religióny de su papel en la escuela.

5. No entendemos cómo,por un lado, se intenta margi-nar a las asignaturas de religiónrestándoles horas a las ya po-

cas que tiene para impartir susconocimientos, mientras que,al mismo tiempo, se imponecomo obligatoria la asignaturade Educación para la ciudadaníasin haber consensuado sus con-tenidos con los diversosinterlocutores sociales. Estemodelo de asignatura no debe,en ningún caso, proponercomo obligatorio el estudio deelementos morales que puedanentrar en conflicto con los va-lores de la propia persona.

6. Lamentamos las acusa-ciones que se han vertido entérminos tales como «hacer ca-

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SIGNOS DE LOS TIEMPOS

No busques novedad. Disfrutade la suerte que se ofrece. Undeseo devenido en realidad —

después de cartas incumplidas— metransportó a Alicante. Con ilusión de

encuentro y con horas contadas en elreloj de las prisas. Visita merecida y noobligada; sin embargo, dejar la maletay empezar itinerario, para mí nuevo, fuecosa de un periquete, como se dicecoloquialmente por las tierras manche-gas. Había despedido a la familia, meencuentro con mi familia y, de pronto,ante la Sagrada Familia.

Humilde, por más que limpia y no-blemente hermoseada, debía ser la Pa-rroquia de la Sagrada Familia. Todos yafamilia y en familia, el Sr. Obispo —día9 de diciembre— celebra la Santa Misaacompañado del Párroco —D. Alfon-so— y los dos sacerdotes que lo acom-pañan con un seminarista en plan pas-toral. Recordar… siempre recordar losorígenes de la Parroquia, nueva perovieja en los afanes de D. Alfonso y enlas imaginaciones a veces con espinasde convertir unos solares —antigua em-presa de Rabasa— en el edificio senci-llo, aunque coqueto, de la plantaparroquial. Don Rafael —cuyo nombreindica «medicina de Dios»— pondera,alaba, admira el trabajo y deja en el ho-gar de la Sagrada Familia las laborespastorales con el anuncio de la misiónpopular que, ya entrado el año venide-ro, se celebrará en las dos parroquiaspastoreadas por don Alfonso.

Domingo 10. Don Rafael tiene unamanía —bendita manía— que conozco

El pasado día 3 de diciembre se ce-lebró, en Elda, el EncuentroDiocesano de Acción Católica.

Este año, la temática que se desarrollófue «La Iglesia de Orihuela-Alicanteante un tiempo de discernimiento. Prin-cipales retos para el próximo PlanDiocesano». Al Encuentro asistieron mi-litantes de los siete movimientos quehay en la Diócesis (ACGA, Junior,MJAC, FRÁTER, JOC, HOAC y MTC)y algunos consiliarios de los movimien-tos. Consistió en una jornada de convi-vencia y trabajo donde se resumían losprincipales retos que la Acción Católi-ca presentará al Obispo como propues-ta para la elaboración del próximo PlanDiocesano de Pastoral. La jornada ter-minó en la parroquia S. Francisco de Sa-les con la celebración de la Eucaristía.

A MI AIREVisita a las Parroquias «Sagrada Familia» y «San Agustín»

años ha: visitar, charlar, entretenersecon los curas. Esta vez le ha tocado alreferido párroco también de SanAgustín. Si en la Sagrada Familia hastael ágape fue familiar intercambiado en

gran mesa, no redonda sinocuadrada, los manjares quelas señoras, por cierto muybuenas cocineras, habíanpreparado, en este domingola Eucaristía resulta más rui-dosa. ¡Cómo se arrancabanlas y los chavales con el cán-tico litúrgico! No sé si seríanángeles, pero cantabancomo arcángeles con el en-treverado de las voces bajasde los hombres y el sonidocarino de las señoras. Devo-ción a manos extendidas enel padrenuestro y recogi-

miento sobrecogedor en la elevación.Atrás había quedado la historia de loscomienzos y la homilía del Sr. Obispocon el aliento a catequistasy niños de primera comu-nión y la exhortación a pro-seguir el camino del Evan-gelio con el Señor que vie-ne, pero ya ha llegado, paraser cirineo invisible que nossigue paso a paso.

Quedaba un paso —des-pués del frugal agasajo—,un paso, más bien de pasiónque de adviento. La visita dedon Rafael a la madre y her-mana del párroco. Sin co-mentarios. ¡Vaya cuadro!Aficionado que soy a la ad-miración y, si es cruz, alsobrecogimiento, en la retina de losadentros en un instante se plasmó elboceto: un Obispo encaricia, madre im-posibilitada, una hermana incurable.Los demás, como los cuadros deVelázquez, espectadores, mejor, testigossilenciosos de escena emocionante.

Día 11. ¿Para qué habré venido a Ali-cante? Concelebrar a solas. Por testigo,el Padre; por dinamismo, el Espíritu; laofrenda, Cristo. A primera hora. En ca-pilla tan chiquita que no es más grandeque el primitivo portal de Belén. De in-mediato, el Proyecto Hombre. Hombre

se ha de escribir con mayúsculas. Dioshizo el proyecto del Hombre con carac-teres imborrables. Los hombres —queno el Hombre— los han difuminado conunas pinceladas de drogadicción. Ladroga, maldita lepra, que deshace mi-nuto a minuto como vampiro que chu-pa la vida de quien atrapa. El Sr. Obis-po bendijo la residencia —hogar, insta-laciones—– del Proyecto Hombre.¡Cuántas ideas vuelan en el ambiente ycuántas sugerencias cincelan los senti-res profundos! Aun siendo muchas, ex-ternamente parecen más numerosas laspersonalidades que han realzado el actocon su presencia.

Luego, reunión de vicaría con lossacerdotes de Alicante —llamada a lasantidad—, centro, la Eucaristía —per-severancia en oración—. Vine a haceruna visita y hasta me han regalado unretiro espiritual.

Por la tarde, bendición de belenes.Alicante —merece una cita en los ana-

les belenistas— goza de justo prestigiopor su dedicación a la memoria —pre-sencia— del niño de Belén y en Belén.Don Rafael ha bendecido los belenespreciosos de la Sala de Exposiciones dela Diputación.

Cuando se encienden todas las lu-ces y se ahuyentan oscuridades, me ilu-mina un presentimiento: volver a Ali-cante con la Medicina de Dios.

Cleofé Sánchez MontealegreCanónigo-Secretario de la S.I.C.P.

de ToledoProfesor Emérito del Seminario Mayor

ENCUENTRO DIOCESANO DE ACCIÓN CATÓLICA

1. Al comienzo del nuevo año, quiero hacerllegar a los gobernantes y a los responsables delas naciones, así como a todos los hombres ymujeres de buena voluntad, mis deseos de paz.Los dirijo en particular a todos los que están pro-bados por el dolor y el sufrimiento, a los que vi-ven bajo la amenaza de la violencia y la fuerza delas armas o que, agraviados en su dignidad, es-peran en su rescate humano y social. Los dirijo alos niños, que con su inocencia enriquecen debondad y esperanza a la humanidad y, con sudolor, nos impulsan a todos trabajar por la justi-cia y la paz.

Pensando precisamente en los niños, especial-mente en los que tienen su futuro comprometidopor la explotación y la maldad de adultos sin es-crúpulos, he querido que, con ocasión del DíaMundial de la Paz, la atención de todos se centreen el tema: La persona humana, corazón de la paz.En efecto, estoy convencido de que respetando ala persona se promueve la paz, y que construyen-do la paz se ponen las bases para un auténticohumanismo integral. Así es como se prepara unfuturo sereno para las nuevas generaciones.

La persona humana y la paz: don y tarea2. La Sagrada Escritura dice: «Dios creó el

hombre a su imagen; a imagen de Dios lo creó;hombre y mujer los creó» (Gn 1,27). Por haber sidohecho a imagen de Dios, el ser humano tiene la digni-dad de persona; no es solamente algo, sino alguien,capaz de conocerse, de poseerse, de entregarselibremente y de entrar en comunión con otras per-sonas. Al mismo tiempo, por la gracia, está lla-mado a una alianza con su Creador, a ofrecerleuna respuesta de fe y amor que nadie más puededar en su lugar. En esta perspectiva admirable,se comprende la tarea que se ha confiado al serhumano de madurar en su capacidad de amor yde hacer progresar el mundo, renovándolo en lajusticia y en la paz. San Agustín enseña con unaelocuente síntesis: «Dios, que nos ha creado sinnosotros, no ha querido salvarnos sin nosotros.Por tanto, es preciso que todos los seres huma-nos cultiven la conciencia de los dos aspectos, del dony de la tarea.

3. También la paz es al mismo tiempo un don yuna tarea. Si bien es verdad que la paz entre losindividuos y los pueblos, la capacidad de vivirunos con otros, estableciendo relaciones de justi-cia y solidaridad, supone un compromiso perma-nente, también es verdad, y lo es más aún, que lapaz es un don de Dios. En efecto, la paz es una ca-racterística del obrar divino, que se manifiestatanto en la creación de un universo ordenado yarmonioso como en la redención de la humani-dad, que necesita ser rescatada del desorden delpecado. Creación y Redención muestran, pues,la clave de lectura que introduce a la compren-sión del sentido de nuestra existencia sobre la tie-rra. Mi venerado predecesor Juan Pablo II, diri-giéndose a la Asamblea General de las NacionesUnidas el 5 de octubre de 1995, dijo que nosotros«no vivimos en un mundo irracional o sin senti-do [...], hay una lógica moral que ilumina la exis-tencia humana y hace posible el diálogo entre loshombres y entre los pueblos». La «gramática»trascendente, es decir, el conjunto de reglas deactuación individual y de relación entre las per-sonas en justicia y solidaridad, está inscrita en lasconciencias, en las que se refleja el sabio proyectode Dios. Como he querido reafirmar recientemen-te, «creemos que en el origen está el Verbo eter-no, la Razón y no la Irracionalidad». Por tanto, lapaz es también una tarea que a cada uno exigeuna respuesta personal coherente con el plan di-vino. El criterio en el que debe inspirarse dicharespuesta no puede ser otro que el respeto de la«gramática» escrita en el corazón del hombre por sudivino Creador.

DEL MENSAJE DE SU SANTIDADBENEDICTO XVI

PARA LA CELEBRACIÓN DE LAJORNADA MUNDIAL DE LA PAZ

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Cuando hace casi 8 años,tuvimos el primer cur-sillo de laicos (enero

de 2000), ya hicimos un análi-sis compartido de los retos quenos preocupaban en ese mo-mento, y también aportamosalgunas sugerencias que ofre-cíamos al conjunto de la dióce-sis. Por la riqueza de lo queentonces se dijo, parece perti-nente recordar lo que 100 segla-res, 20 sacerdotes y 2 obispospercibieron como PISTAS DEACCIÓN, todos desde la pers-pectiva de los laicos. No hanperdido actualidad. Aquí lasrecogemos.

HACE 8 AÑOS YA DECÍAMOS…Retos y pistas de acción en el primer cursillo de laicos

• Apertura de las parro-quias y sacerdotes a la AcciónCatólica.

• Equilibrio y respeto entrela Acción Católica y el resto delos grupos, desde una com-prensión del ser y el papel decada grupo o asociación.

• Asumir la tarea de coor-dinar y vertebrar la vida y laacción de muchos gruposlaicales, comenzando por elacercamiento e incluso la inte-gración de los grupos disper-sos o no asociados.

• Cursillo monográfico (lai-cos, sacerdotes o ambos a lavez).

f) Sacerdotes:• Han de ser servidores de

la totalidad de la comunidad.• Atento a los carismas de

los laicos, y a la promoción delos mismos, respetando laidentidad de cada grupo o aso-ciación.

• Asumir como tarea elacompañamiento cristiano depersonas y de grupos.

• Procurar una actuaciónconcorde de laicos y sacerdo-tes, sin anular o invadir elprotagonismos o competenciade cada cual, sino fomentandola corresponsabilidad y la par-ticipación.

• Reconocer el compromiso«en el mundo» como ministe-rio eclesial.

g) Formación de loslaicos:

• Ha de ser una prioridad.• Constante e incluso siste-

mática.• Partir de la misma con-

cepción de mundo, Iglesia ylaico que hemos compartido.

• En la línea del documen-to Cristianos Laicos, Iglesia en elMundo.

• No puramente teórica,que una fe-vida, que nazca dela acción y lleve a la acción, ya una presencia pública de loscatólicos desde un discerni-miento.

• Importancia de la forma-ción de formadores.

h) Coordinación:• Superar la dispersión de

los grupos y de sus actuacio-nes, eliminando protagonis-mos a favor de la unidad, des-tacando lo común y afrontan-do juntos los retos comunes.

• Abordar directamente eltema de la evangelización paraactuar acordes en una orienta-ción claramente eclesial.

• Procurar que esta coordi-nación sea de todos los gruposy no se limite al encuentro deldía de Pentecostés.

c) Asociaciones ymovimientos laicales:

• Deben potenciarse.• Las parroquias deben es-

tar abiertos a ellos y darlos aconocer.

• Reconocer el carisma delos distintos grupos, pero tam-bién asegurar su fidelidad a lasclaves que la Iglesia ha indica-do (Cristianos Laicos, Iglesia enel Mundo).

• Las diversas asociacionesy movimientos deben revisarsea la luz de esos principios, ycomprobar si están dando larespuesta que la Iglesia pide.

• Superar la anarquía y

• Caminar hacia unavertebración eclesial de todoslos movimientos y asociacionesen la línea del CLIM, aportan-do la AC su especial carisma yencargo eclesial.

i) Oración:• Actitud y práctica a po-

tenciar desde la convicción deque es el camino del Padre, elestilo de Jesús y la fuerza delEspíritu los que dan fecundi-dad a la tarea de cada cristianoy de toda la Iglesia.

• Oración tanto personalcomo comunitaria. Necesidadde comunidades orantes.

a) Jóvenes:• Grupo prioritario de aten-

ción (peligro de no tener re-cambio generacional).

• Oferta atractiva del evan-gelio.

• Sin pretender organizar lavida de los jóvenes “desde fue-ra”, sino ayudando a que elevangelio crezca “desde los jó-venes”.

b) Familia:• Grupo prioritario de aten-

ción, como grupo social másvalorado por los jóvenes yconstatación de su quiebracomo elemento de transmisiónde la fe.

• Trabajar en su formacióncristiana y en su transforma-ción en Iglesia doméstica.

descoordinación de la multipli-cación de grupos, caminandohacia una simplificación y co-ordinación.

d) Las parroquias:• Han de entrar en un pro-

ceso de renovación misionera.• Acoger la participación

real de los laicos.• Abrirse a los movimien-

tos y asociaciones.• Coordinar los diversos

grupos desde una experienciade comunión eclesial y de ta-rea evangelizadora comparti-da.

e) Acción Católica:• Potenciar el conocimien-

to del proyecto de Acción Ca-tólica renovada, y de sus diver-sos movimientos.

• Fomentar encuentros deoración a diversos niveles(parroquial, diocesano...).

j) CLIM (CristianosLaicos, Iglesia en elMundo):

• Utilizar este documentopara la formación y comuniónde las asociaciones y movi-mientos, y promocionarlo tan-to a nivel parroquial comodiocesano..

• Promover los grupos queestén en sintonía con el CLIM,e impulsar la revisión de todosdesde sus criterios.

k) Cursillo de «Elapostolado de loslaicos»:

• Difundirlo en las parro-quias y Consejos Pastorales losque han participado en él.

• Utilizar en las programa-ciones parroquiales ydiocesana las conclusiones delos dos cursillos (el de los sa-cerdotes en Castalla, y el de loslaicos en La Marina).

• Repetir el mismo cursillopor zonas y arciprestazgos,tanto a nivel de laicos como desacerdotes, como de ambos a lavez.

l) Plan pastoral másdetallado:

• Incluir todas estas pro-

puestas en los futuros planespastorales.

• Concretar estas pistas deactuación de forma que seanoperativas.

• Unificar las diversas su-gerencias en un proyecto, quedé coherencia y evite el riesgode la inflación de propuestas:no quedarnos en los papeles.

• Partir de un análisis pas-toral por vicarías, y de la mis-ma visión de mundo, Iglesia ylaico, apostando por el aposto-lado seglar del CLIM.

• Integrar en este plan lapastoral sacramental, que hade superar su acción puntual yde mera preparación para lossacramentos, enmarcándosedentro de un proyecto global.

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El Cant de la Sibil·laFRANCESCARACIL

Col·lectiu deCristians

Valenciansd’Elx-Baix

Vinalopó

LAICAS Y LAICOS

La Delegación Diocesanade Laicos organiza enenero el cursillo de for-

mación de laicos.Los días 20 y 21 de enero de

2007 va a tener lugar, en el Cen-tro Marista de Guardamar, elcursillo de laicos que, desde elaño 2000, organiza la Delega-ción Diocesana de Laicos. Esteaño es, por tanto, el octavo cur-sillo de laicos.

Durante los últimos añoseste cursillo se ha planteadocomo un espacio de formacióncompartida para laicos de dis-tintos ámbitos: cristianos im-plicados en sus parroquias ymiembros de movimientos yasociaciones seglares. El hiloconductor de estos cursillos hasido la Programación Dioce-sana de Pastoral de cada cursodesde la perspectiva seglar,potenciando el encuentro y laformación.

En sus inicios el cursillotuvo como objetivo potenciarsencillamente al laicado dioce-sano, impulsando una toma deconciencia del ser y de la mi-sión del seglar en la Iglesia, eintentando lanzar el apostola-do seglar, y el doble encuentroentre los diversos movimientosy asociaciones entre sí, y de es-tos con las comunidades parro-quiales. Ya en el curso 1997-1998 en que la ProgramaciónDiocesana de Pastoral hablabade acoger los signos de espe-ranza que Dios hace surgir ennuestra sociedad y en nuestra

Iglesia, de los 12 signos de es-peranza que se proponían paratrabajar a los Grupos 2000, elque más eco encontró fue eloctavo: «El laicado, un gigantedormido que despierta», y donVictorio lo recogió en el En-cuentro Diocesano que com-partimos en Benidorm con unaponencia que tenía este mismotítulo.

Al cabo de siete cursillos yarealizados observamos que seha potenciado una cierta valo-ración de los planes diocesanosy un encuentro entre los diver-sos movimientos, pero lo queha quedado más en la sombraha sido la incidencia en las co-munidades parroquiales, pues-to que en los cursillos de laicosla participación de cristianosenviados desde las parroquiasha sido minúscula: casi todoslos participantes procedían demovimientos o asociaciones.

Percibimos por otra parteque, aunque en las parroquiashay una auténtica participa-ción de los seglares en las ta-reas eclesiales, sin embargoesta participación tiene algunaslagunas significativas:

• No hay una estructura deformación y de cultivo dela espiritualidad de loslaicos, resultando unosseglares con insuficienteformación y vitalidadcristiana: faltan cristianoslaicos de peso.

• No hay conciencia clara yfuerte de la identidad,

dignidad y misión laical.• Son pocos y demasiado

entrados en años.• También está el problema

de la insuficiente coordi-nación de movimientos yasociaciones con las pa-rroquias, unido a la actualdebilidad de muchos deestos grupos.

Dada esta situación la De-legación se ha planteado queademás del cursillo de forma-ción al hilo de la ProgramaciónDiocesana de Pastoral de cadacurso, es necesario otro de ini-ciación para fomentar la iden-tidad y vivencia eclesial de loslaicos, y dado que este cursoestá siendo de «parón» paraformular la próxima Progra-mación Diocesana, hemos de-cidido dedicar el cursillo deeste año para experimentar lapuesta en marcha de este cur-sillo de iniciación. El título vaa ser: «Quién soy. Para qué ta-rea. Qué formación». Dentrodel cursillo dedicaremos unapartado para la formación dellaico, presentando el Itinerariode Formación Cristiana paraAdultos contemplado en el PlanPastoral de la ConferenciaEpiscopal Española 2006-2010.La presentación de este Itine-rario la hará la Delegación deApostolado Seglar de la dióce-sis de Tortosa que hace ya dosaños que lo han puesto en mar-cha como acción diocesana per-sonalmente potenciada por suObispo.

La celebració del Nadalen tot el món cristià hapropiciat manifesta-

cions i rituals diversos, d’acordamb la creativitat que la fe es-timula en les diverses cultures,i amb les diferents situacionshistòriques que l’evangeliil·lumina. Així tenim elsbetlems, l’arbre de Nadal, elcant de les nadales, els aguinal-dos… Hui parlarem d’unacerimònia antigament moltarrelada en les diòcesis de laCorona d’Aragó i en algunesciutats castellanes, com Toledo.Es tracta del Cant de la Sibil·la,una interpretació musical quees feia la Nit de Nadal, justa-ment abans de la Missa de Gall.És un impressionant cantprofètic que tanca l’Adventamb l’anunci de la segonavinguda de Crist al final deltemps, en el dia del Judici Uni-versal, i que es fa justament lanit en què se celebra la vingudaprimera del Salvador.

El caràcter especial d’estacerimònia està en la seuaprotagonitza, la sibil·la, unpersonatge que prové, no de latradició pròpiament cristiana,ni jueva, sinò del món mito-lògic grecoromà. Era una dona,d’edat més bé avançada, que sesuposava tenia el do de predirel futur. Este nom fou aplicat adiverses dones, verges, perso-nes de caràcter aspre i solitàri,en les quals els antics reconei-xien una inspiració divina,procedent d’Apol·lo, i per tant,la capacitat d’emetre oracles.No coneixem molts detalls so-bre elles, però si és cert quegosaren de prestigi social ipolític en el seu entorn. Elsantics textos grecs parlen dediverses sibil·les localitzades almediterrani oriental i centralen els segles anteriors a Crist.

Le sibil·les apareixen tambéen la literatura cristiana delsprimers segles, i en concret lad’Eritrees, a Jònia, a l’Àsia Me-

nor, que segons un antic textgrec, citat per Eusebi deCesarea, i del qual també escriuSant Agustí, va profetitzar alspagans el judici final i l’ad-veniment de Crist. Les pinturesdel sostre de la Capella Sixtina,al Vaticà, mostren Eritrea ialtres sibil·les fent la prediccióde la vinguda del Salvador,junt als profetes de l’AnticTestament, volent dir que desdel món pagà també existienindicis de l’arribada del Mes-sies.

La cerimònia que actual-ment es representa prové delsegle XIII, quan es traduí a lanostra llengua l’antic text engrec, i és una autèntica drama-tització inserida en un contextlitúrgic, una pràctica molt típi-ca de la tradició religiosa valen-ciana. El paper de sibil·la el fanormalment un xiquet, compassa en els papers femeninsdel Misteri d’Elx. L’infant,convenientment vestit, es posa

davant l’altar i entona amb unabellíssima melodia antiga, elsversos terribles: «El jorn deljudici, veuràs qui haurà fetservici. Jesucrist, Rei universal,Home i ver Déu eternal, del celvindrà per a jutjar i a cada unlo just darà».

A les esglésies de Mallorcai a l’Alguer, a Sardenya, se ce-lebra, cada Nadal, este cant. Aalgunes parròquies de lescomarques valencianes de LaSafor i La Ribera s’ha recuperatesta bella tradició, que anti-gament es representava en lesnostres catedrals.

¿LAICAS Y LAICOS OCUPAN SU LUGAR EN LA IGLESIA?

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AGENDA

Suplemento del Boletín Oficial del Obispado de Orihuela-Alicante. Plaza de la Montañeta 7 03001 Alicante. Tel.: 965204909 - 965204910. E-mail redacción: publicaciones@diocesisoa.orgEDITA SERVICIO DE PUBLICACIONES DEL OBISPADO DE ORIHUELA-ALICANTE

Director: Joaquín Rodes Roca. Diseño y maquetación: Rafael Bonet Camarasa. Colaboradores: Mª Ángeles Amorós, Francesc Aracil Pérez, Lucio Arnaiz Alonso, Luiz Aznar Avendaño, Jaume Benaloy Marco, FranciscoBernabé Alfonso, José Antonio Berenguer Cerdá, Ángel Bonavía Albeza, Francisco Calderón Espadas, Joaquín Carlos Carlos, Ildefonso Cases Ballesta, Juan Conejero Tomás, Carmelo Dávila Martínez, Manuel de Maya deGea, José Jaime Esteve, Toni Esteve i Seva, Aurelio Ferrándiz García, Loles Gambín Molina, Ignacio García Andreu, Jesús García Ferrer, José Miguel Hernández Zaragoza, Luis López Hernández, Mª Carmen Llácer, EloyMartín García, Vicente Martínez Martínez, Manuel Martínez Miravete, Miguel Riquelme Pomares.Imprime: Servicio de Impresión de Levante S.A. Dep. Legal: A-578-1997. Tirada: 21.000 ejemplares.

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LA FRASE

ÁNGEL BONAVÍA

Diciembre 2006/enero 2007

✔ 24 Jornada sembradores de estrellas.

✔ 25 Navidad.

✔ 31 Sagrada Familia. Día de la familia y la vida.

✔ 1 Santa María, Madre de Dios. Jornada Mundial de la Paz.

✔ 6 Epifanía. Jornada del IEME. Catequistas nativos.

INTENCIONES DEL PAPA PARA EL MES DE DICIEMBRE

Intención papal general:—Para que Jesucristo, manso y humilde de corazón, mueva a los dirigentes de lasnaciones al uso sabio y responsable del poder.

Intención papal misional:—Para que en el mundo entero los misioneros vivan con gozo y entusiasmo su voca-ción en el seguimiento fiel de Cristo.

Lo cuenta el inolvidableJosé Luis Martín Descal-zo. Un «padre» del de-

sierto, debía cruzar todos losdías un arenal enorme paraconseguir la leña que necesita-ba para el fuego. Por fortunahabía, justo en medio, unafuente que le servía para cal-mar su sed. Un día el monjepensó que debía ofrecer a Diosel sacrificio de no beber agua.Y así lo hizo. Esa noche el mon-je descubrió con gozo que, enel cielo, había aparecido unanueva estrella y se sintió feliz.

Se hizo famoso el monje.Vino un discípulo para apren-der de su sabiduría. Cuandollegó la hora de cruzar aqueldesierto arenal y cargado eldiscípulo con la leña, divisarona lo lejos la fuente con el aguacristalina. El monje no sabíaqué hacer. Si bebía, aquella no-che no se encendería «su» es-

trella. Y si él no lo hacía, el dis-cípulo tampoco y no calmaríala sed. En el último momentobebió el monje y se sació el jo-ven discípulo.

Por la noche, el monje, nose atrevía a mirar al cielo. Muytímidamente, levantó los ojos yvio con asombro que esa nochehabía dos estrella que brillabanintensamente.

Aquel día, entendió el mon-je aquella frase de la Biblia quedice que Dios ama más la mi-sericordia que todos los sacri-ficios. Entendió que Dios noama el esfuerzo por el esfuer-zo, sino que lo que mide es elamor con el que se hacen lascosas. Descubrió que hacer fe-liz al prójimo es más meritorioque todas las privaciones. Supoque uno no debe mortificarsenunca mortificando a los de-más. Vio que en el alma de loshombres se encienden tantas

estrellas como personas ama-mos.

Es tan sencillo como descu-brir que lo único que necesita-mos para vivir es, salvando to-das las distancias, mirar al cie-lo, atender a los demás y no lle-narnos de cosas innecesarias.Que un pequeño viaje al desier-to no nos vendría mal y que,en el peor de los casos, si toda-vía no vemos brillar una nue-va estrella, no tenemos másque dejar la ciudad, salir al des-campado o… acercarnos a Be-lén.

El tiempo es propicio. Laoferta es buena. El viaje cómo-do. ¿Quién se puede negar?Venga… ponga una estrella ensu vida.

Feliz Navidad.

DIEZ REGLAS PARA UNACONVIVENCIA CONYUGAL FELIZ

1. Dar y recibir amor.2. Saber que lo importante es lo pequeño.3. No ser excesivamente susceptible.4. Evitar las discusiones innecesarias.5. Procurar que no salga a relucir la lista de agra-

vios.6. Tener capacidad de reacción.7. Cuidar el lenguaje verbal y no verbal.8. Tener el don de la oportunidad.9. Buscar los campos magnéticos de la pareja

—puntos de atracción recíproca— y cuidarel amor, que consiste en un intercambio derecompensas presentes y futuras.

10. Adquirir habilidades para la comunicación.

(ENRIQUE ROJAS)

www.jeaf.com/samasabe

Página de la parroquia de San San Manuel y San Benito de losPP Agustinos. En ella se puede acceder a diversos materiales so-bre los sacramentos, el rosario, etc.