cu^nvo oe^TABACO AMARILLO

TIPO YIRGINIA

JOSE LUIS GUZMAN PEREZBENITO MUÑOZ MUÑOZAgentes de Extensibn Agraria

MINISTERIO DE AGRICULTURA, PESCA Y ALIMENTACION

CULTIVO DEL TABACO AMARILLO,TIPO VIRGINIA O «FLUE-CURED»

El tabaco conocido bajo la denominación de tabaco ama-rillo, tipo Virginia, tipo «D», o«flue-cured» , representaporcentajes próximos al 42 por 100 de la producción mundial,cifrada en unos 5,5 millones de toneladas métricas, empleán-dose fundamentalmente como materia prima para la elabora-ción de cigarrillos rubios.

En España, la producción de tabaco está actualmente regu-lada por un organismo oficial, por lo que para iniciar su cul-tivo es preceptivo obtener la correspondiente autorización.

EVOLUCION Y PERSPECTIVAS

La producción española de tabacos «flue-cured», inferior alas 90 toneladas métricas hasta el año 1978, ha experimentadodurante los últimos años un auge espectacular. Actualmente laproducción es de unas 3.500 toneladas métricas anuales.

Diversas circunstancias han contribuido a esta rápida expan-sión, pudiendo reseñarse, entre otras, las siguientes:

- Evolución del gusto del fumador hacia el cigarrillo ru-bio de tipo americano, en cuya composición intervienen am-plios porcentajes de tabaco «flue-cured» (45 a 50 por 100).

- Desviación del consumo hacia nuevas marcas de cigarri-llos con bajo contenido en nicotina y alquitrán.

- Intentos de reducción de los costes de producción, conperspectivas muy favorables para el tabaco tipo Virginia porsus posibilidades de mecanización.

- España es deficitaria en la producción de tabaco; ocupael séptimo lugar entre todos los países importadores.

La previsible entrada de España en la Comunidad Econó-mica Europea, gran importadora de este tipo de tabaco, abre

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un futuro esperanzador para este cultivo, ligado principalmen-te a las posibilidades de obtener tabacos amarillos de altacalidad.

ORIGEN Y DESCRIPCION

El tabaco es una planta originaria de América. Fue intro-ducida en España a principios del siglo XVI, desde donde sedistribuyó rápidamente al resto de Europa.

En el siglo XVII el tabaco era conocido universalmente,influyendo en su rapidísima expansión las propiedades cura-tivas que se le atribuían.

El tabaco amarillo, al igual que la mayoría de los tabacoscultivados, pertenece a la familia de las solanáceas. Su nom-bre botánico es Nicotiana tabacum, tipo Virgínica.

Es una planta anual, de tipo arbustivo, con tallos rígidosy porte elevado (de 1,80 a 2,20 metros). Las hojas son muynumerosas (entre 20 y 30), lanceoladas y alternas. Las flores,en corimbo, presentan colores variables, son hermafroditas ytienen cinco estambres. Cuenta con una raiz pivotante con nu-merosas raíces adventicias.

El ciclo de cultivo dura, normalmente, de 100 a I20 días.La planta se cultiva fundamentalmente para el aprovecha-

miento de sus hojas por la industria manufacturera del tabaco.

EXIGENCIAS DEL CULTIVO

Clima

El clima ejerce una influencia trascendental sobre la pro-ducción y calidad del tabaco «flue-cured». Es frecuente aso-ciar el rendimiento económico del cultivo a las condicionesclimatológicas de la zona productora.

Para alcanzar un buen desarrollo vegetativo, el tabaco pre-cisa temperaturas diurnas próximas a los 28 ó 30° C. Lasbajas temperaturas paralizan el crecimiento, impidiendo conse-

Fig. I.-Plantas de la varie-dad Foglia D'Oro.

guir un adecuado grado de madurez de la hoja. Las oscila-ciones de temperatura originan los llamados «cortes de savia»,que se traducen en un amarilleo deficiente del tabaco cu-rado y, en consecuencia, en una mala calidad.

Es una planta que requiere gran luminosidad.

Suelos

Necesita suelos sueltos, con proporción elevada de arena(60 a 80 por 100) y con bajo contenido en arcilla (10 a 16por 100). Los suelos más indicados para su cultivo son los detextura franco arenosa o arenosa franca. Los suelos arenosospueden resultar adecuados para su cultivo, siempre y cuandose regule correctamente su humedad y fertilidad.

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Prefiere suelos con pH ligeramente ácido (5,8 a 6,5) ybajo contenido en materia orgánica.

Agua

Las propiedades físicas y químicas del tabaco pueden variarnotablemente en función del equilibrio hídrico del cultivo. Eltabaco que ha vegetado en condiciones adecuadas de humedadtiene mayor porcentaje de azúcares que el desarrollado coninsuficiente humedad. Así mismo, presenta mejores propieda-des físicas (color, elasticidad, poder de llenado, etc.).

El tabaco es muy sensible a la calidad del agua de riego.Esta deberá tener un contenido en sales muy bajo y, en cual-quier caso, menos de 35 partes por millón de cloro.

Fig. 2.-Las condiciones climatológicas limitan el aprovechamiento del cultivo. Apré-ciese los daños por bajas temperaturas en las hojas del último piso foliar.

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LUGAR EN LA ALTERNATIVA

Es sumamente frecuente que el tabaco « flue-cured» sea elúnico cultivo que integra la alternativa. Generalmente la par-cela elegida inicialmente para el cultivo de este tipo de tabacose reserva indefinidamente a esta actividad.

Caso de preverse una rotación de cultivos, el tabacodebe ser cabeza de alternativa, debiéndose estudiar especial-mente las aportaciones y residuos nitrogenados del cultivo quele precede. No es aconsejable que vaya detrás de un cultivode leguminosas, ni realizar, antes de iniciar el mismo, abona-dos orgánicos.

El establecimiento de una segunda cosecha en el mismoaño (coliflor, lechuga, etc.), posible técnicamente, no es fre-cuente.

VARIEDADES

Entre las variedades más importantes de este tipo de tabacodestacan las siguientes:

FOGLIA D'ORO (Hoja de oro).-Es la variedad más cul-tivada, representando más del 75 por 100 de las plantacionesespañolas de tabaco tipo Virginia. Se recomienda a los nuevoscultivadores de tabaco «flue-cured». Es de procedencia italianay tiene buen amarilleo y rusticidad.

Es sensible a nematodos y a la bacteriosis conocida como«fuego salvaje». Tolera el «moho azul». Tiene de 26 a 30 ho-jas y es de tipo androestéril.

SPEIGHT-G-28.-Variedad de procedencia americana concierta resistencia a nematodos. No alcanza los rendimientos yla calidad de Foglia d'oro y es más tardía que ésta.

COKER 347.-Es un hibrido de Coker 319 y Coker 258,de procedencia americana. Tiene baja tendencia a producirrebrotes axilares y a dar un número elevado de hojas. Pre-senta aceptable resistencia a fusariosis, es sensible al «mohoazul» y tiene escasa resistencia a nematodos.

Es de ciclo bastante más largo que las anteriores, cons-

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tituyendo esta limitación una de las causas que han impedidoel aumento de las plantaciones con la variedad Coker 347.

Otras variedades cultivadas, aunque en muy pequeñas pro-porciones son: Coker 319, Coker 258, Coker 411, Virginia115, C6 B, etc.

Es interesante reseñar que la producción de hibridos deprimera generación (F,), muy utilizados en otros cultivos, noha dado resultados satisfactorios en el tabaco, no aprecián-dose en la descendencia ventajas que compensen la costosapolinización manual y, en general, la carestía del proceso deobtención de estos híbridos.

SEM I LLEROS

Las plantas de tabaco se obtienen en semilleros, que debentener unas dimensiones minimas de 150 metros cuadrados porhectárea a trasplantar, siendo muy recomendable la desinfec-ción de sus suelos con productos de amplio espectro. La densi-dad de siembra será de 6 gramos de semilla por cada 100 me-tros cuadrados de semillero. El periodo de germinación de lasemilla suele ser de 15 días. El sistema de protección puedeser muy variado, dando excelentes resultados los semillerosbajo plástico perforado, así como los cubiertos con gasa,polietileno o polipropileno. La duración de la fase de obten-ción de plantas en semillero suele ser de sesenta a noventadias dependiendo del tipo de cubierta adoptado.

Las plantas idóneas para el trasplante tienen de 12 a 15 cmde altura, tallo de unos 6 mm de diámetro y deben estarprovistas de un adecuado desarrollo radicular.

En todo momento se prestará especial atención a la defensafitosanitaria del semillero.

CULTIVO EN TERRENO DE ASIENTO

Para iniciar el cultivo con garantías de éxito son precisasuna serie de operaciones previas al trasplante.

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Labores preparatorias

Dado que la raíz tiene poco poder penetrante, es precisoesmerarse en las labores preparatorias, dirigidas a obtener unsuelo suelto, perfectamente mullido y exento de malas hierbas.Estos objetivos se ven favorecidos por el hecho de que lastierras destinadas al cultivo son, generalmente, de tipo are-noso.

La naturaleza de las labores y el número de las mismasdependen de cada caso concreto. Si el trasplante se va a rea-lizar con trasplantadora, las labores preparatorias irán dirigi-das a dejar el suelo nivelado. Si por el contrario, se va aefectuar un trasplante manual, con riego por gravedad, serápreciso completar las labores de preparación del suelo con lasde alomar y cortar la tierra, dando así mismo un riego antesde la plantación.

Fig. 3.-El tabaco «flue-cured» prefiere suelos sueltos y permeables.

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Fig. 4.-Las labores mecanizadas entre lineas se complementan con escardas ma-nuales.

En el caso frecuente de cultivo sobre rastrojo de tabacotambién «flue-cured», con dotación de riego por aspersión yplantación manual, se efectúan las siguientes labores:

- Arrancar, trocear y e^nterrar los restos del cultivo ante-rior en octubre o noviembre.

- Alzar con vertedera en primavera.- De dos a tres gradeos.- Señalizar los surcos con cultivador de patillas.- Riego anterior a la plantación con dosis baja de agua.- Plantación.- Riego posterior a la plantación, también con dosis ba-

ja de agua.

TRATAMIENTO NEMATICIDA DE SUELOS

Los nematodos constituyen uno de los enemigos más peli-grosos para el cultivo del tabaco «flue-cured», estando repre-sentados por diversas especies de los géneros Meloidogyne,Pratylenchus y Tylenchorhynchus.

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Fig. 5.-El riego por aspersión es muy recomendable para el cultivo del trabaco«flue-cured».

En la mayoría de las explotaciones no se aplican métodosindirectos de lucha como la rotación de cosechas, por lo quese debe recurrir a la lucha química. Entre los productos utili-zables figuran:

- Dicloropropano-dicloropropeno (D.D.), utilizable en do-sis de 400 a 700 litros por hectárea.

- Dicloropropeno (Telone), bastante similar al anterior.- Fenamifos (Nemacur), nematicida sistémico aplicable

inmediatamente antes de la plantación e incluso después deltrasplante mediante tratamiento en pulverización foliar.

Otros productos aplicables son Dazomet (Basamid), Eto-profos (Mocap), Isotiocianato de metilo + DD (Ditrapex), etc.

En todos los casos se deben respetar las dosis e instruc-ciones recomendadas por la casa suministradora.

La realización del tratamiento puede hacerse en bandas,en tratamiento total o en tratamiento a los rodales donde semanifiesten los ataques.

TRATAMIENTO CONTRA GUSANOS DEL SUELO

Caso de no realizarse desinfección de suelos es aconsejablerealizar tratamientos preventivos contra gusanos del suelo.

Fig. 6.-Lesiones en el siste-ma radicular causadas por ne-

matodos.

Fig. 7.-El contraste con unaraíz sana es evidente.

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Entre los productos recomendables se encuentran:- Clorpirifos (Dursban), Metilclorpirifos (Rendan), Acefato

(Orthene), Carbofurano (Curaterr), Diazinón, Lindano, Fo-xim, etc., todos ellos para tratamientos antes de la plantación.

- Triclorfon (Dipterex), Carbaril, etc., usados en cebodespués del trasplante.

- Decametrin (Decis), Clorpirifos (Dursban), etc., a usaren pulverización después del trasplante.

Como en el caso de los nematicidas, se deben respetarlas indicaciones para su uso dadas por las firmas comercialescorrespondientes.

HERBICIDAS

Generalmente los herbicidas se emplean como complementode las labores de cultivo. En el tabaco amarillo no está muygeneralizada la aplicación de herbicidas, posiblemente comoconsecuencia del elevado número de binas y aporcados quese realizan. También es notorio el mayor o menor parón ve-getativo que producen, que suele manifestarse, generalmente,a las dos o tres semanas del trasplante. Este parón, en nume-rosas ocasiones, se atribuye erróneamente al frío.

En el cultivo del tabaco se suelen aplicar, entre otros, lossiguientes herbicidas:

- Trifluralina (Treflan), herbicida de uso muy extendido.Se utiliza antes del trasplante, a dosis comprendida entre 1 y1,5 litros por hectárea. Este herbicida se degrada lentamenteen suelos arenosos, pudiendo llegar en caso de repetición delcultivo a concentraciones tóxicas.

- Penoxalina (Stomp), utilizable en dosis de 3 a 3,5 li-tros por hectárea.

- Metobromuron (Patoran), aplicable tanto antes comodespués del trasplante.

Otros productos utilizables en la lucha química contra lasmalas hierbas del tabaco son: Isopropalina (Paarlan), Benflu-ralina (Quilan), Pebulato (Tillam), etc.

El tratamiento con cualquiera de los productos citados pue-de hacerse en bandas o a todo el terreno.

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FERTILIZACION

El gran desarrollo foliar del tabaco, con producción deunos 14.000 kilos de hojas verdes por hectárea, da idea dela importante cantidad de elementos nutritivos demandadospor el cultivo.

En la fertilización del tabaco « flue-cured» deberán tenerseen cuenta, entre otras, las siguientes recomendaciones:

Fertilización con fósfor^ y potasio. -Un exceso de abona-do en fósforo y potasio no daña ni la calidad ni la produc-ción del tabaco, por lo que se aplicarán abonados suficientespara evitar la aparición de carencias.

Una aportación de 60 a 80 unidades fertilizantes de fósforoy de 100 a 120 de potasio son, generalmente, suficientespara cubrir la demanda de estos elementos.

Por los efectos nocivos del cloro, se debe prescindir delos abonos que aporten este elemento. La potasa, por tanto,se aplicará bajo forma de sulfato potásico.

Fig. S.-Aspecto de la plantación a las cuatro semanas del trasplante. En esta fasese eliminan los riegos a efectos de que profundice el sistema radicular.

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Fertilización con nitrógeno. -El nitrógeno favorece el desa-rrollo foliar del tabaco. Un exceso del mismo retrasa la ma-durez de la planta, a la vez que aumenta el contenido en nico-tina, dando lugar a hojas fuertes y gruesas. Esto se traduceen una mala calidad del tabaco curado, con aparición de tona-lidades marrones y verdosas, que deprecian el producto final.

Para establecer la fertilización óptima con nitrógeno es im-portantísimo tener en cuenta las posibles reservas del suelo, lasaportaciones a cultivos precedentes y el poder de nitrificacióndel suelo. Conociendo los extremos antes mencionados, yaprovechando la experiencia de años anteriores, se estableceráel abonado nitrogenado preciso, con dosis que, en general,variarán entre 0 y 60 unidades de nitrógeno por hectárea. Deellas, las primeras 20 ó 30 unidades pueden aportarse con elabonado de fondo y el resto dos o tres semanas despuésdel trasplante. Nunca se incorporará nitrógeno una vez pasa-das cuatro semanas de éste.

En general, entre nuestros agricultores, son más frecuenteslos problemas ocasionados por exceso de nitrógeno que porcarencia del mismo.

La aportación de los elementos fertilizantes puede realizarsepor medio de abonos simples o complejos. Es muy frecuenteabonar este cultivo con 1.000 kilos por hectárea de abonocomplejo 4-8-12 (S), fórmula que puede resultar adecuada,pero que en algunos casos origina problemas por exceso de ni-trógeno. Así mismo, es también frecuente aportar el fósforoy el potasio mediante abonos simples (unos 600 kilos por hec-tárea de superfosfato del 18 por 100 y 250 kilos por hectá-rea de sulfato potásico), añadiendo posteriormente el nitróge-no, sólo si se manifiesta carencia delatada por amarilleamientode las plantas o parón vegetativo de éstas, y siempre antesde pasadas cuatro semanas del trasplante.

Las plantas de tabaco necesitan cantidades importantes decalcio, magnesio y boro. Si se manifiesta con claridad lacarencia de alguno de estos elementos, se procederá a aportar-lo mediante la adición de los correctores especificos.

El abonado de fondo puede incorporarse antes de la plan-tación, al realizar una de las labores preparatorias, simultánea-

Fig. 9.-EI trasplante mecanizado se realiza sobre terreno en Ilano, exigiendo riegooor asner^icín.

Fig. 10.-Aspecto del irasplante mecaniiado. Apréciese la textura arenosa del suelo.

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mente con el trasplante o bien seis u ocho dias después deéste recurriendo en este último caso al abonado localizado.

TRASPLANTE

El trasplante es una práctica habitual en este cultivo, yaque la siembra directa se ha realizado en España únicamenteen ensayos aislados.

Las fechas más usuales para la realización del trasplantevienen determinadas por las condiciones climáticas. En Extre-madura, región que produce casi la totalidad del tabaco«flue-cured» español, las fechas más indicadas son del 5 al30 de mayo. En una misma parcela se debe realizar el tras-plante en el menor tiempo posible, al objeto de conseguir unagran uniformidad en la maduración.

El trasplante puede realizarse de forma manual o mecáni-camente, mediante máquina trasplantadora.

En el trasplante manual, con riego a pie, se sigue el sis-tema tradicionalmente utilizado en los tabacos tipo Burley,es decir, una vez efectuado el riego anterior al trasplante secoloca la planta en una de las caras del caballón, a la mismaaltura alcanzada por el agua, auxiliándose de un plantadortipo cónico.

La planta se debe enterrar dos o tres centímetros másprofunda de lo que estuvo en el semillero, favoreciendo deesta forma el arraigo. Así mismo, se procurará que no se do-ble la raíz.

En las explotaciones de cierta superficie, se recurre normal-mente al empleo de máquinas trasplantadoras de 2 ó 4 lineas.La alimentación de estas máquinas se realiza mediante un ope-rario por línea, el cual, sentado en el bastidor correspondiente,nutre la cadena de alimentación.

Los rendimientos medios de estas máquinas trasplantadorasson de 3.000 a 6.000 plantas por hora.

Las características óptimas de las plantas a trasplantar seindicaron en el apartado correspondiente a semilleros. Hay quedescartar las ahiladas, las achaparradas o las envejecidas en elsemillero; estas últimas son propensas a una floración precoz.

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DENSIDAD DE PLANTACION

Los marcos más frecuentes son de 1,10 ó 1,20 metros entrelíneas y 0,45 ó 0,55 metros entre plantas.

En la provincia de Badajoz es frecuente la plantación enlineas pareadas, a marco de 0,55 ó 0,60 metros entre las líneasmás próximas y 1,10 ó 1,20 metros entre las más alejadas.

Con estos marcos, y teniendo en cuenta las necesarias ca-lles de servicio (aproximadamente, el 12 por 100 de la super-ficie), resultan densidades de 12.000 a 18.000 plantas porhectárea. En ambos supuestos, y con producción media de 22hojas por planta, se obtienen densidades reales comprendidasentre 264.000 y 374.000 hojas por hectárea, cifra que se consi-dera idónea.

La densidad de plantación repercute sobre las característi-cas del tabaco amarillo obtenido. Densidades altas dan tabacoscon bajo contenido en nicotina y buenas propiedades fisicas.Densidades bajas inducen a elevados porcentajes de nicotina yfuerte aroma.

CUIDADOS CULTURALES

Riegos

El tabaco amarillo es una planta muy exigente en cuanto adosificación, distribución y turnos de riego.

El primer riego, posiblemente el más importante, es el quese realiza inmediatamente antes del trasplante. A este riego lesigue, a los ocho o diez dias, el denominado riego de «arrai-gue», al que sigue inmediatamente después la reposición demarras. Posteriormente, y hasta que el tabaco alcance unos40 ó 50 cm de altura, deben reducirse los riegos, con el ob-jetivo de que profundice su sistema radicular. A partir deaquí, y hasta el momento de iniciarse la floración, sobrevieneun periodo de crecimiento rápido de la planta, durante el cualaumenta sensiblemente las necesidades de agua. Estas nece-sidades son máximas hacia la octava semana después deltrasplante.

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A partir de la floración disminuyen nuevamente las nece-sidades de agua.

A1 iniciarse la recolección se reducirán tanto el número deriegos como las dotaciones y caudal de los mismos.

El número de riegos dependerá de las condiciones climá-ticas, a la vez que de la textura del suelo. En general, turnosde cinco a siete días son suficientes para mantener húmeda labase de la raíz. En los suelos arcillosos los riegos serán másabundantes y menos frecuentes que en los arenosos.

EI número total de riegos suele ser de 10 a 14 por año.El caudal de cada riego en suelos ligeros será de unos

150 a 250 metros cúbicos por hectárea y de 250 a 300 en lossuelos más fuertes. Estas dotaciones son suficientes parahumedecer los primeros 30 ó 35 centímetros del suelo, que esla zona donde se localizan las raices absorbentes.

El abuso en los riegos origina plantas grandes, de hojasdelgadas, con aspecto normal, pero con tacto plastificado ynula calidad industrial.

EI sistema más recomendable para el riego del tabaco ama-rillo es el riego por aspersión, en cualquiera de sus modali-dades.

Labores de cultivo

Como todas las solanáceas, el tabaco es muy exigente enlabores, siendo su finalidad inmediata el airear el terreno, fa-cilitar el desarrollo radicular, eliminar la competencia de malashierbas y aporcar el cultivo, favoreciendo la emisión de raicesadventicias. Además, en caso de riego por gravedad, las labo-res de cultivo irán dirigidas a preparar los surcos para riegoa pie.

Para realizar estas labores se pueden utilizar diversos tiposde aperos, dependiendo su naturaleza del estado del terreno,del desarrollo vegetativo del cultivo, de la humedad delsuelo, etc.

El cultivo del tabaco «flue-cured» admite un elevado gradode mecanización, que se traduce en un importante ahorro demano de obra.

Fig. 11.-Plantas de la variedad Speight- Fig. 12.-Momento óptimo de efectuarG-28 al inicio de la floración. el despunte.

DESPUNTE

Esta operación consiste en suprimir el ramillete floral dela planta a efectos de favorecer su desarrollo foliar, pudiendohacerse en época variable.

Si la precocidad y desarrollo vegetativo son normales, eldespunte debe hacerse cuando el 50 ó el 60 por 100 de lasflores empiezan a abrir (50 a 60 días después del trasplante),respetándose un número de 20 a 22 hojas por planta.

Las plantas con desarrollo tardío se despuntarán prontoy bajo. Si la plantación tiene gran vigor y precocidad sedespuntará alto.

La operación de despunte^ suele realizarse manualmente obien mediante unas tijeras especiales que llevan acoplado undepósito desde el que se aporta simultáneamente un productoquímico encargado de control;ar los rebrotes.

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El despunte, junto a un adecuado control de los rebrotes,origina un importante aumento en la producción y calidad deltabaco obtenido, originando a la vez un mayor desarrolloradicular y un apreciable retraso en la maduración de lasplantas.

CONTROL DE LOS REBROTES

A1 desarrollarse el ramillete floral de la planta, y sobretodo, al despuntar ésta, se activa el crecimiento y evoluciónde las yemas latentes del tallo de la planta, dando lugar ala formación de brotes axilares. Si estos rebrotes no son con-trolados absorberán una parte importante de las reservasnutritivas de la planta, siendo por ello, muy recomendablesu eliminación.

La supresión manual de estos brotes (hijos, toños, etc.),se denomina «deshijado», y constituía una operación tradicio-nal que era preciso efectuar en dos o tres fases, ya que losrebrotes surgen escalonadamente.

Actualmente el engorroso deshijado manual ha sido .susti-tuido por un control químico de los rebrotes realizado me-diante productos inhibidores. Estos productos pueden serempleados antes o después del despunte, desde el estado debotón floral hasta el inicio de la floración.

Productos para el control de los rebrotes

Existe una amplia gama de productos químicos con accióninhibidora de los rebrotes, que se pueden agrupar en los si-guientes tipos:

Inhibidores de contacto.-Son productos quimicos, general-mente, alcoholes grasos, que destruyen o queman los rebrotesaxilares de pequeño desarrollo (inferior a tres centímetros).Para garantizar un adecuado control, el producto debe exten-derse a lo largo de todo el tallo, impregnando las yemasaxilares.

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Inhibidores sistémicos.--Son productos hormonales que,absorbidos por la planta, frenan la división celular, no afec-tando al crecimiento de las mismas, respetando, por tanto, lashojas que han completado su desarrollo (20 cm de longitud).

En los tabacos «flue-cured», y como consecuencia de queel período que va desde el despunte hasta el final de la re-colección es mucho más largo que en otros tipos de tabacoque se recolectan por plantas, es importante lograr un adecua-do control de los rebrotes.

Como norma práctica para lograr un buen control de losrebrotes, se recomienda el siguiente tratamiento:

- Cuando aparece el botón floral o bien en el momentodel despunte, aplicar un producto de contacto, cerciorándosede que las yemas axilares quedan impregnadas. A los sietedías del tratamiento anterior se aplica un producto sistémico.

Entre los principales productos inhibidores de brotes estánlos alcoholes grasos, utilizables a dosis del 3,5 por 100 deproducto comercial, la butralina, que debe emplearse al 2 por100 de producto comercial, la penoxalina, usada en dosis del1 por 100 del producto comercializado y la hidracida maleica,de la que se aplicarán de 8 a 10 litros por hectárea.

RECOLECCION Y CURADO

Por sus especiales caracteristicas, los tabacos «flue-cured»deben recolectarse en avanzado grado de madurez, motivo porel que se realiza, generalmente, la recolección por hojas y pi-sos foliares.

En condiciones normales, el ritmo de maduración de laplanta es de 3 a 4 hojas cada siete o diez días.

En Extremadura el período de recolección suele iniciarse enlos últimos dias de julio, prolongándose hasta mediados deoctubre.

Una vez recolectada la hoja de la planta, generalmente deforma manual, se procede al transporte de la misma a lossecaderos.

El sistema de curado más generalizado es el de curado enmasa, realizado en atmósfera artificial.

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La duración normal del proceso de curado, para cada unade las diferentes hornadas, es de unas 120 a 140 horas.

PRODUCCION

La producción de tabacos «flue-cured» está condicionadapor numerosos factores de orden técnico y climatológico. Noobstante, se puede considerar que en condiciones medias debeobtenerse una producción unitaria de 12.000 a 14.000 kilosde hojas verdes por hectárea. Si se considera un rendimientoen el secadero del 15 al 17 por 100, se obtendrán produccio-nes comerciales comprendidas entre 1.800 y 2.300 kilos porhectárea.

DEFENSA FITOSANITARIA

El tabaco «flue-cured», como todas las plantas cultivadas,es atacado por un gran número de plagas y enfermedades,que pueden afectarle tanto en el semillero como en la fase decultivo en el terreno de asiento. El cuadro 1(páginas cen-trales), recoge las plagas y enfermedades más importantes,los productos quimicos recomendados para su control y al-gunas indicaciones de interés relativas a cada plaga, enferme-dad o a sus tratamientos.

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