cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina...

52

Transcript of cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina...

Page 1: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles
Page 2: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

Niñas trabajadoras del hogar San Juan de Miraflores – Lima, Perú

Todos los nombres de las niñas y demás personas de su entorno han sido cambiados por otros.

Page 3: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

2

© Asociación Grupo de trabajo Redes (AGTR) Dirección postal: Las dalias 251 – 403. Lima 18. Perú. Teléfono: 051 - 1 - 445 1469 [email protected] www.gruporedes.org

Texto: Aldo Valencia Piñan Edición: Blanca Figueroa Galup Dibujos: Benicio Vicente Kou Producción gráfica: duArtes Teléfono 2472788 Hecho el Depósito Legal N° 1501042004-9315 Primera edición: 2,000 ejemplares Diciembre 2004

Page 4: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

3

Presentación Muchas personas e instituciones están de acuerdo en que debe erradicarse el trabajo infantil doméstico, que en el Perú las y los menores de 14 años no deben realizar estas tareas en hogares ajenos. Asimismo, que las y los adolescentes de 15 a 17 años deben dedicarse a este trabajo sólo si sus derechos humanos y laborales son respetados. De la experiencia que se relata en CUANDO SEA GRANDE... nos ha quedado -una vez más- esta importante lección: apoyar a las niñas trabajadoras del hogar demanda muchos recursos. En este caso, especialmente el aporte de trabajo voluntario ha sido esencial. Los 25 domingos programados para la ejecución de la actividad de apoyo a niñas trabajadoras del hogar del distrito de San Juan de Miraflores han concluido. Sin un apoyo mínimo para su movilidad y para la promotora que las acompañaba, las 66 niñas entre los 7 y 17 años (el grupo más numeroso entre los 12 y los 14 años) no tienen cómo llegar a La Casa de Panchita. Los logros quedan ensombrecidos por un incierto futuro. Sin embargo, recordemos que si todos Hacemos algo ¡YA! desde nuestro cargo o función -como propone la campaña permanente de nuestra asociación- se podrá ir avanzando poco a poco hacia una sociedad donde niñas y niños gocen de todos sus derechos. Nuestro agradecimiento: A cada una de las niñas trabajadoras del hogar que participaron de las actividades,

porque nos han permitido aprender mejor cómo debemos apoyarlas. A la señora Susana Reyes Limaymanta, nuestra promotora en el distrito de San

Juan de Miraflores, porque nos enseñó que el liderazgo efectivo, más allá de un nivel alto de escolaridad, se basa en la generosidad, en el afecto, en la constancia.

A José Carlos Bendezú Párraga, jovencito recién egresado de educación secundaria y promotor voluntario en este proyecto, porque nos ha demostrado que ayudar a las niñas y comprender lo que significa trabajar en servicio doméstico, lo ha hecho madurar como ser humano.

Page 5: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

4

A Dora Quispe Peceros y a Gladis Huayhua Acuta, estudiantes y trabajadoras del hogar, promotoras voluntarias en este proyecto, porque han demostrado una gran solidaridad hacia las más pequeñas dedicando su día libre para atenderlas.

A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles Otsu y Susy Vilcapoma Inga. Todas ellas estudiantes de 4° año de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Federico Villarreal, promotoras voluntarias que cumplieron con alegría, cariño y responsabilidad todas las tareas encomendadas.

A Aldo Valencia Piñan, estudiante de 5° año de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Federico Villarreal, porque realizó el trabajo voluntario de coordinar este proyecto, convocó y formó un equipo de trabajo de ocho voluntarios, elaboró el informe narrativo final y el texto del presente libro.

A Leena - Maija Leeve y Veera Blomster, integrantes de KEPA - Servicio de Voluntariado de Finlandia, por su inteligente y tierna dedicación a las niñas.

A las y los voluntarios de Cross Cultural Solutions (CCS) y a otros más, porque nos apoyaron con habilidad y entusiasmo en las clases de inglés y/o en los talleres.

A las y los integrantes del equipo de trabajo de La Casa de Panchita, que colaboraron en el reforzamiento escolar, las clases de computación, talleres, así como en las salidas culturales y recreativas.

Al Centro Cultural de España en Lima y las organizaciones que brindaron a las niñas la posibilidad de asistir al teatro y a otras actividades fuera de La Casa de Panchita.

A Save the Children – Reino Unido por la donación de US $1,500.00 dólares que permitió contratar un ómnibus para que las niñas pudieran llegar a La Casa de Panchita y regresar a San Juan de Miraflores, pagar parcialmente su almuerzo, ofrecer una pequeña remuneración a la señora Susana y cubrir algunos otros gastos.

A las organizaciones que han sostenido a La Casa de Panchita este año, sin cuyo aporte financiero hubiera sido imposible llevar a cabo estas actividades: Naisten Kehitysapu – UNIONI (Finlandia), Terre des Hommes (Suiza), The Global Fund for Women (USA), Ayuntamiento de Fraga (España), Wege zur einen Welt (Alemania), Les amis du tiers monde (Francia).

A Naisten Kehitysapu – UNIONI (Finlandia) gracias a cuyo apoyo ha sido posible la impresión de este libro.

Asociación Grupo de Trabajo Redes Lima, diciembre 2004.

Page 6: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

5

Índice INTRODUCCIÓN Capítulo I LAS NIÑAS Y SU ENTORNO 1.1. Pamplona Alta 1.2. Situación familiar 1.3. Su actividad laboral 1.4. El colegio Capítulo II LAS NIÑAS Y LA CASA DE PANCHITA 2.1. La Casa de Panchita 2.2. La promotora local 2.3. El equipo de trabajo 2.4. Planificación del apoyo 2.5. Desarrollo de las actividades Capítulo III LAS NIÑAS Y SUS LOGROS 3.1. Incremento en su autoestima 3.2. Mejor socialización entre pares 3.3. Mayor rendimiento escolar 3.4. Acceso a computación e inglés básicos 3.5. Participación en actividades formativas y lúdicas 3.6. Conocimiento de normas legales

Page 7: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

6

Page 8: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

7

Introducción En la ciudad de Lima la delgada línea que separa lo público de lo privado es quebrada con frecuencia: estamos rodeados por la sobre exposición y consumo de la privacidad ajena. A pesar de ello, a las miles de niñas que “trabajan en casa”, “ayudan” a su madrina o vecina por la comida del día y/o por algunos útiles escolares, y/o por una pequeña propina, pareciera que nadie las ve. El trabajo infantil doméstico continúa siendo invisible1. Se esconde en los censos y encuestas nacionales; es proyectado con mucha dificultad por los estudios especializados en el tema. La Organización Internacional del Trabajo/ Programa para la Erradicación del Trabajo Infantil (OIT/IPEC) califica de “prácticamente imposible” un conocimiento exacto de la cifra de niñas y niños que trabajan en el servicio doméstico2. Las razones de esta invisibilidad son varias: no son declaradas en los censos como trabajadoras del hogar, en parte porque los empleadores no las declaran como tales; ellas no reconocen que laboran en servicio doméstico3; la aplicación de criterios para delimitar el trabajo infantil doméstico es ambiguo4; es una práctica tradicional tolerada e incluso considerada beneficiosa por muchas familias. Además, la subordinación es mayor y más compleja mientras son más pequeñas: los empleadores son sus jefes, sus

1 N o s o m o s i n v i s i b l e s . Res u l t ad os d e c o nsu l t a a t r a b a j ad o re s i n f an t i l e s do m és t i cos ( T I D) y e x t r a b a j ad o r es i n f a n t i l es d om és t i c os (E X T I D ) en Pe rú ( c i u da des de L i m a , Ca ja m arca y P uc a l l p a ) . As oc iac i ó n G ru po d e T ra ba jo R ed es . L i m a . 2 0 04 . 2 D e t r á s de p ue r t as c e r ra das : t r ab a j o i n f a n t i l d o més t i co . O f i c i n a R eg io na l p a r a Am ér i c a L a t i n a y E l C a r i b e . O I T / I PE C. 20 04 . 3 F i gu e r o a , B l a nc a . R ef l ex i on es e n t o rn o a l a m e t o do log í a d e i nv es t i g ac ió n p a r a un a e v a lu ac i ón ráp i da s o b re l os n i ñ os y n i ñ as t r ab a ja do r es d o més t i c os e n C os t a R i c a , R e p úb l i c a D om i n i c a na , E l S a l v a do r , Gu a t em a la , H o nd u r as , N i c a r ag ua y Pa na m á . E N : Me m o r ia : S em i n a r i o Su b r eg i on a l Me to d o l o g ías de I nv es t i gac ió n en T r ab a j o I n fa n t i l D o m é s t i c o . O I T / I PE C. S a n J o s é , C o s t a R i c a . 2 0 0 1 . 4 L a re l ac i ón e n t re e l T ra ba j o I n f a n t i l Do m és t i c o y l os C o nv e n i os 1 3 8 y 1 82 . Of i c i na R e g io na l p a ra A m ér i c a L a t i na y E l C a r i b e . O I T / I PE C. 19 99 .

Page 9: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

8

mayores, sus tutores, dueños de casa, más grandes… lo que descarta la posibilidad de denuncia de las mismas niñas5. Sin embargo, si comparamos el panorama de información disponible con el de hace cuatro o cinco años, vemos que actualmente existe una gama más extensa de material publicado sobre la situación de las y los trabajadores infantiles domésticos, que se suma a los numerosos estudios sobre el trabajo doméstico en general, sobre todo de mujeres adultas. Los diversos estudios proporcionan un perfil6 de los trabajadores infantiles domésticos: generalmente son mujeres entre los 5 y 17 años, que proceden de familias rurales pobres y numerosas; presentan altos índices de abandono, repetición de año por haber sido desaprobadas y atraso escolar; sufren casi sin excepción diversos tipos de explotación y la mayoría de sus derechos fundamentales son vulnerados. En el mundo son más de 246 millones los niñas/os que trabajan7. En el Perú serían 1’987,165, según proyecciones para el 20018. El trabajo infantil doméstico ocupa el tercer lugar entre las actividades desempeñadas por este segmento de la población económicamente activa9. Obtener información detallada y confiable es apenas una parte -la primera- del total de acciones realizadas. Otra, es la difusión de los resultados de dichos estudios para sensibilizar a la opinión pública. Una tercera, la formulación de recomendaciones que incidan en las políticas públicas. Finalmente, las intervenciones pertinentes que conduzcan por un lado a prevenir el enrolamiento o lograr el retiro de quienes no tienen edad para trabajar en servicio doméstico (menores de 14 año), y para mejorar la situación laboral de las/os adolescentes (de 14 a 17 años). En CUANDO SEA GRANDE… se narra una experiencia de atención a niñas trabajadoras del hogar durante 25 domingos, en los meses de mayo a noviembre 2004 en La Casa de Panchita. Se muestra una estrategia para abordar un problema que persiste en el siglo XXI: la explotación en el trabajo infantil doméstico10.

5 B l a c k , Ma g g i e . Ma n ua l de I nc i d enc i a . Lo s t r a ba ja d o r es i n f a n t i l e s do m és t i cos : Cóm o e nc on t ra r u n a v o z . A n t i -S l a ve r y I n t e rn a t i o na l . 20 02 . 6 M á s i n f o r mac i ó n s o b r e es t e p e r f i l en : Pe rú , I nv i s i b l e y s i n de rec h os : A p rox i mac ió n a l p e r f i l d e l t r ab a j o i n f an t i l d omé s t i c o . OI T / I PE C. 20 0 2 ; K ane , J u ne . ¿ Ay ud a n t es o es c lav os ? C o m pr en d e r e l t r ab a jo i n f a n t i l do m és t i c o y c óm o i n t e r v e n i r . O I T . 2 00 4 ; Lo s n i ños i nv i s i b l e . O I T / IP EC, I E . 2 0 03 ; A l a r c ón , W a l t e r . Ni ñas y a do l esce n te s t r ab a j ad o r as d e l h og a r en e l P e rú : u na a p r ox im ac ió n c ua n t i t a t i v a . I n f a nc ia y d e s a r r o l l o 20 00 ; Es p i nos a , Ad r i a n a . ¿ H as t a c u án do s i n ed uc ac ió n? : T ra ba jo i n f a n t i l d o més t i c o e n h og a r es a j en os en e l Pe r ú . S a ve Th e Ch i l d r en U K . B og o t á , 2 00 1 . N o s o m o s i n v i s i b l e s … Op. C i t . 7L o s N i ñ o s I n v i s i b l e s . O p . C i t . 8 E n c u e s t a Nac i o n a l d e Hog a re s 20 01 . B a s e d e d a t o s . I n s t i t u t o N ac io na l d e Es t ad í s t i c a e I n f o r má t i c a ( I NE I ) . L i m a , 2 0 0 2 . 9 A l a r c ó n , W a l t e r . O p c i t . 10 “ S e t r a t a de e xp l o t ac i ó n e c o nó m ic a c ua n do e l n i ñ o d e be t r a ba j a r d u ra n t e ho ra r i os p r o l on ga dos s i n d i s p on e r de t i e m po l i b r e y r ec i b e u n s a la r i o ba jo o n i ng un a re m un e r ac ió n . ( …) s e l os s om e t e a d u r as c on d i c i o nes d e t r a ba jo y a r ea l i z a r t a re as pe l i g r os as ( …)

Page 10: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

9

A los agradecimientos expresados por la Asociación Grupo de Trabajo Redes, deseo agregar los siguientes: A Christian Guzmán Mazuelos, bachiller en psicología de la Universidad Nacional

Federico Villarreal, por su apoyo en la selección de la bibliografía. A Alfredo Escobar Zapata, bachiller en psicología de la Universidad Peruana

Cayetano Heredia, por sus comentarios y sugerencias al borrador final. A Lucero Papa Burgos y familia, por su apoyo durante el proceso de elaboración del

texto. Aldo Valencia Piñan Lima, diciembre 2004.

I n va r i ab le m en t e , s e l es n i ega n l os de r ec ho s qu e , c o mo n iñ os , l es c on c e de e l d e r ec ho i n t e r nac io n a l , i n c l u i do e l d e r ec ho a j u ga r , a l a s a lu d y a es t a r a s a l vo de l a bus o y e l ac o s o s e xu a l , a v i s i t a r a s u f a m i l i a o s e r v i s i t a d os po r e l l a , a r e un i r s e c o n a m ig os , a u n a l o j a m i en t o d i g n o y a l a p r o t ec c i ón c on t r a e l m a l t r a t o f í s i c o y m e n t a l ” . Ka ne , J un e O p . C i t .

Page 11: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

10

Page 12: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

11

Capítulo I

LAS NIÑAS Y SU ENTORNO

Page 13: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

12

Page 14: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

13

1 Pamplona Alta San Juan de Miraflores fue reconocido como distrito en 1965. Se ubica en el llamado “cono sur” de Lima, aproximadamente a una hora y media del centro de la ciudad, si es que se utiliza una moderna pista llamada Salvador Allende. Es el quinto en población del país: se estima en 367,128 el número de sus habitantes. Presenta serios problemas como la pobreza y la delincuencia11. Una de sus ocho zonas es la de Pamplona, que empezó a poblarse en 1963. Las construcciones edificadas en la parte inferior pertenecen a Pamplona Baja; las que suben hacia la parte superior de los cerros, a Pamplona Alta. Ambas zonas están conformadas por diversos asentamientos humanos. Pamplona Alta, es la parte menos desarrollada del distrito y colinda con una zona residencial de clase media, separada de ella por un muro conocido como el “muro de la vergüenza”12. Según las estadísticas del INEI (1993) Pamplona Alta cuenta con 86,032 habitantes. Su actividad predominante se encuentra en el sector servicios y comercio, principalmente informal. Aunque no siempre adecuados, tiene servicios educativos y de salud, tanto del Estado como de particulares. Hay poco acceso a servicios culturales y recreativos. Es considerada una zona peligrosa por la presencia de pandillas y delincuencia común. Las niñas perciben las dificultades de vivir en esta zona.

Mi mamá me da permiso para ir (a una fiesta), pero con alguien; puede ser mi primo, sola no creo que me deje porque es muy peligroso. La otra vez se pelearon unos pandilleros. (Yanina, nacida en Ayacucho, 14 años, 3° de educación secundaria)

11 W o l f , F re da . R es p e t a r a l os p ad res , ma es t ros y o t r os t r a ba ja do r es , a y u da a qu e l o s n i ños ap re nd a n E N : C h a ng e mak e rs . ne t J ou rn a l . S e p t e m be r 2 0 01 . UR L : h t t p : / / www. c han g em ak e rs . ne t / j o u r na l / 01s ep te m be r / wo l f _esp . c f m 12 As í s e h ac e : Oc h o e mp re n d i m i en t os ex i t os os l i d e r ad os p o r m u je res . R e d d e E d uc ac ió n P o pu la r E n t r e M u j e r es d e A mé r i ca La t i na y e l Ca r i b e ( R EPE M ) . Mo n t e v i de o . 20 02 .

Page 15: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

14

Un día estaba yendo (al mercado) con mi hermana y él me pasó la voz. Yo le dije ‘hola’. Mi hermana se molestó conmigo y me dijo que ya no le hablara porque era un chico drogadicto. Desde allí ya no le hablo. (Agustina, nacida en Lima, 13 años, 4° de educación secundaria)

Por donde vivo es muy peligroso y feo, hay gente ‘maleada’13. Mira, yo vivo en un lugar en que al costado hay un sitio donde los chicos entran y se drogan. Una vez me llamaron, me dijeron que ‘haga hora’14 con ellos. Tienen más o menos 19 años, yo no les hago caso pero insisten bastante. Mi amigo, a veces, cuando me ve que me están molestando, viene y me llama, me saca. Él sí se habla con ellos, los conoce, así que no quiere que ‘pare’15 con ellos. (Gracia, nacida en Ayacucho, 14 años, 2° de educación secundaria)

Es escasa la oferta de servicios culturales o de entretenimiento, menos aún para niñas y adolescentes. Las posibilidades del uso de tiempo libre se limitan a las costumbres que tienen los adultos, tal como lo expresa la madre de una de las niñas:

Acá la cosa es así, igual todas las semanas. Sábado: pollada; viernes: pollada; domingo: fútbol en la canchita y pollada. Toda la plata se les va en tomar y tomar. Desde las 10 de la mañana ya están tomando. (Mamá de Moira, de 7 años)

Por otro lado, hay algunas características propias de las comunidades rurales16, que subsisten en pobladores como los de Pamplona, que constituyen factores de protección para las niñas trabajadoras del hogar.

En mi barrio a mí me ayudan bastante, son bien solidarios. Eso es lo único que me gusta mucho. (Marita, nacida en Ayacucho, 14 años, 2° de educación secundaria)

13 Ma l ea do : p ued e s e r un d e l i nc ue n te , d r o ga d i c to , pa n d i l l e r o . 14 Hace r h o r a : ma ta r e l t i e m po , pas a r t i em po j u n t os 15 Pa ra r : a nd a r , s e r a m i go de . 16 L os p ad res de l as n i ñas e ra n p ro v i n c i an os , p e r o l a m a yo r í a d e l as n i ña s ha b í an n ac id o e n L i m a .

Page 16: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

15

Desde que mi mamá está enferma, mi vecino ha dejado que hagamos pollada17 en su casa. No nos cobra, y es mejor hacerlo en su casa porque está más cerca de la avenida. El vecino, su paisano es de mi papá. (Gracia, nacida en Ayacucho, 14 años, 2° de educación secundaria)

El área geográfica donde se ubicó a las niñas es de aproximadamente 5 km2. Para efectuar su trabajo, la promotora local se desplazó a pie, casi diariamente el primer mes, y por lo menos cuatro veces por semana durante los meses siguientes. El total de niñas que asistió a La Casa de Panchita fue 66.

2 Situación Familiar Los trabajos que ejercían los padres/ madres de las niñas eran los siguientes: obrero de construcción, vendedores de alimentos o de abarrotes (en tienda, puesto de mercado o como ambulantes). Otras ocupaciones eran: transportista, enfermera, vendedora de cosméticos de puerta en puerta y músico. El trabajo en servicio doméstico constituía la quinta parte del total de ocupaciones en las que laboraban los hombres y generalmente era un trabajo cama afuera, de limpieza y/o jardinería. En cambio, la mayoría de madres eran trabajadoras del hogar que hacían limpieza, lavado y cocina. Dos tercios de los tutores, principalmente tías y abuelas, trabajaban también en servicio doméstico. Pocas veces la familia pasaba el tiempo junta, debido a las obligaciones laborales, la asistencia de las niñas al colegio, y la falta de dinero. En muchos casos la familia compraba la comida en un comedor popular o en el centro educativo, lo que no significaba que los consumieran en el hogar18.

Mi hermano come en el comedor del colegio y mi mamá en el comedor popular. Ella trabaja recogiendo desmonte desde las 8 de la mañana hasta las 5 de la tarde. Los días que no tengo clase le llevo agua para que tome. No vivo con mi papá. No viene ni a

17 C oc i na r p o l l o c on pa pas y ve n d e r l o po r p r es as d e ¼ a l os ve c i nos . 18 S e r v i c i o s oc ia l en l os d i s t r i t o s de b a j os i ng r es os , q ue o f r ec e a l i me n t os p re pa ra dos a u n p r ec i o mu y ba jo .

Page 17: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

16

vernos porque parece que tiene otra mujer, pero quisiera verlo. Quiero ayudar a mi mamá. (Viviana, nacida en Lima, 12 años, 1° de educación secundaria) A pasear no podemos salir, porque no hay dinero ¿No ve que mi hija la menor a veces se antoja de cosas y no le puedo comprar? (Mamá de Fresia, de 10 años)

En cierto número de viviendas habitaba más de un grupo familiar o había parientes alojados.

¿Con qué carro llego a Lurigancho?19 (¿Por qué?) Por nada; es que mi tío salió de Lurigancho; vive con nosotros. Antes lo iba mi mamá a visitar. Mi otro tío sigue en Lurigancho. Mi papá dice que (mi tío) se va a ir cuando consiga mujer y tenga su casa. Todo el día está en la casa. Mis tíos son buenos, ayudan a mi mamá a cargar agua. (Esmeralda, nacida en Lima, 9 años, 2° de educación primaria) Desde muy chiquita me pegaba. Desde (que yo tenía) cinco años me pegaba. Desde que se murió mi abuelita. Cuando vivía con mi abuelita, no me pegaba. (Marina, nacida en Huancavelica, 15 años, 2° de educación secundaria)

Del total de 66 niñas, 35 (53%) vivían sólo con uno de sus progenitores, principalmente la madre (trabajadora del hogar a tiempo completo o por horas) y con al menos tres hermanos. 19 (29%) vivían con el padre y la madre, siendo la segunda la que actuaba más como jefe del hogar. Se repetía mucho la figura del padre que mantenía un compromiso con otra/as mujer/es y/o que había abandonado el hogar más de una vez. 12 (18%) vivían con otra persona que ejercía el rol de tutor.

El papá tiene otro compromiso; a veces viene de visita. A veces no trae plata, seguro, pues, que tendrá sus gastos para sus (otros) hijos, también. La otra mujer se metió con él sabiendo que estaba conmigo, por eso yo ya no quiero nada. Así no se puede estar. (Mamá de Fresia, de 10 años)

19 L u r i g a nch o es e l n om b re de l a c á r c e l d e va r o nes , ub i ca d a en e l d i s t r i t o Sa n Ju an d e L u r i ga nc h o .

Page 18: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

17

Mi papá tomaba mucho, por eso a mí y a mi hermana -con la que vivo- nos iba muy mal, así que yo me peguntaba cómo sería si hago mi vida aparte. Así que me casé, pero me vine a vivir a Lima. Me trajeron las hermanas de mi esposo, pero aquí me dieron la espalda. Luego conocí al papá de mis otros hijos. Con él me llevaba mal; cuando tuve mi primera hija, se fue. Años después regresó y tuve a la Socorro, pero otra vez se fue y sin firmarla. Cinco años más tarde volvió y cuando quedé embarazada otra vez, me dejó, y sin firmarlo. Mientras estábamos decía que iba a firmar a Socorro, pero cuando se fue, luego resultó diciendo que no era su hija. Nos llevábamos mal, siempre peleábamos. Ya no volvería con él, la gente me decía que lo deje. Mi cuarto hijo fue por cesárea y él no pagó nada. Y encima cuando se enteró me vino a decir que ‘¿por qué te has dejado cortar la panza? ¡Ya no sirves para nada!’ (Mamá de Socorro, de 11 años)

Cinco de las niñas eran huérfanas. Ellas mostraban las mayores señales de maltrato y abuso, incluso si estaban a cargo de un familiar cercano.

Yo una vez fui al cementerio a ver a mi papá, con mis hermanos. Cuando el murió nos vinimos mis hermanos y yo de la sierra. Yo era muy chiquita, mi mamá estaba con él acá. Antes la extrañaba, pero ya no. Ella vive con otro señor y yo vivo con mi tío, mi hermana y mis hermanos. Yo donde mi tío limpio todo: el piso, la casa; atiendo la tienda. Por eso siempre estoy muy cansada. (Verónica, Nacida en Lima, 12 años, 6° de educación primaria)

En algunos casos los padres maltrataban a la niña. El castigo físico era referido como una manera de fomentar un buen comportamiento. En algunos casos, el maltrato se expresaba de otras formas; por ejemplo, no dejando dinero para la comida.

En mi casa me pegan. Cualquier cosa que le pase a mi hermanito y llore, yo tengo la culpa, ‘todo tiene la culpa Sol’. El otro día me pegó (mi papá) y me dejó roncha20, todo rojito. (Sol, nacida en Lima, 14 años, 1° de educación secundaria)

20 Ronc ha : m a rca s r o j as e n l a p i e l .

Page 19: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

18

A mí me pegan a veces. Mi mamá, porque mi papá no me toca (no me pega). Mi mamá se fue la semana pasada a Ayacucho y mi papá no se apareció por la casa por cuatro días, y en la noche que iba a venir mi mamá, recién llegó a mi casa; lo peor es que no nos dejó para la comida. Estábamos de hambre. (Gracia, nacida en Ayacucho, 14 años, 2° de educación secundaria)

A veces el maltrato era justificado por las propias niñas y adolescentes, que lo consideraban tolerable y hasta positivo, por los errores que hubiesen cometido.

Mi papá me castiga con la correa y con sus manos, me jala el cabello. No le contesto. Él es mi papá; si me pega es con una razón. Él lo hace para que no me malogre, para no ser una chica de la calle21. Además, yo a veces ‘me paso’22, además. (Zaira, nacida en Lima, 17 años, 4° de educación secundaria)

En algunos casos, el maltrato había sido un factor para abandonar la casa de sus padres y el lugar de origen.

Sí, me pegaba (mi mamá, en mi tierra) cuando… cuando no quería pasear a los niños, me pegaban; cuando quería pasear en la lluvia, me pegaban… con palo o con piedra. Todo. Casi todos los días me pegaba. No sé ¿por qué será? Cuando me pegaba, yo dije ‘me voy pero no voy a regresar nunca’. A veces fui a lo de mi tía, pero mi papá me encontraba. Mi papá no sabía que mi mamá me pegaba... En cambio acá mi tía me ayuda. Servicios nomás lavo. Lavo las ropas y plancho. Limpio. En el día voy al colegio a la 1:30 y regreso 7 de la noche. A veces, nomás, me canso mucho. Sábado, (me canso) más. Voy a vender golosinas, caramelos, con mi tía. Hasta las 11, 12, 1 de la noche... Y allí barro, lavo la ropa... Aquí en Surco, nomás, vendo. (Marina, nacida en Huancavelica, 15 años, 2° de educación secundaria)

Aunque unos cuantos padres no parecían preocuparse mucho por su niña, en la gran mayoría de casos, se contaba con la preocupación y cuidado de al menos uno de ellos.

21 Ch i c a d e l a c a l l e : a d o l esce n te q ue e j e r ce l a p r os t i t uc i ó n . 22 Me p a s o : m e c om p o r t o ma l .

Page 20: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

19

Yo les digo a mis papás para venir (a LCP) y ellos me dicen ‘anda, ¿quién te agarra?’. No me preguntan qué hago aquí. A veces, nomás, preguntan. No me dicen nada si llego sucia. (Lucía, nacida en Lima, 11 años, 6° de educación primaria) Yo, señorita, no le puedo ayudar en las tareas (escolares) porque no sé, y su papá no es de ayudarles. Pero yo no quiero que trabaje ¡está muy chiquita! La vecina me decía que la mande para que cuide a su hijo, también, y que ella le iba a ayudar a hacer sus tareas. Así que ella fue, pero sólo una semana. Yo no quiero que vaya, ya. Como sea, yo le voy a ayudar. Está muy chiquita para trabajar más. (Mamá de Fresia, de 10 años) Aprovecho las noticias (de los medios de comunicación) para explicarles un poco de las cosas. Yo no sé tanto, pero espero que ellos aprendan. (Papá de Margarita, de 17 años) Mi mamá me enseña inglés; con ella hago mi tarea. Mi mamá sabe más inglés que la profesora, más inglés que tú (que la promotora). (Moria, nacida en Lima, 7 años, 1° de educación primaria)

3 Su actividad laboral La mayoría de los empleadores de las niñas eran vecinos o familiares cercanos23. Esto es, de las 66 niñas:

23 C a be ac la ra r l o s i g u i en t e : “ E l t r a ba j o do m és t i c o r ea l i z a do p o r n i ñ os y n i ñ as d en t ro de s u p r op ia f am i l i a es t á , e n p r i nc i p i o , f ue ra de l a l c anc e de l as n o r m as de l a O I T . ” He m os c ons id e r ad o c o m o “ de n t r o de s u p r o p i a f am i l i a ” a q u i ene s v i ve n e n e l h og a r . Es dec i r , c u i da r a l a h i j a d e l a he r man a m a yo r q ue n o v i ve e n c as a , du ra n t e t odo e l d í a , o t o da l a m a ña n a , en p e r j u i c i o d e s u as i s t e nc i a a c l as es , no p ue de c ons i de ra r se c om o ac t i v i dad es p r op ias de ap re n d i z a j e e n e l h o ga r . L a r e l a c i ón en t re e l T r ab a jo I n f a n t i l Dom és t i co y l os Co nv en ios 13 8 y 18 2 . O I T / I P E C. 1 9 9 9 . O p . C i t .

Page 21: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

20

32 (49%) trabajaban para un familiar: 19 (29%) para una hermana/o que vivían en otra casa y 13 (20%) para un tío/a.

31 (47%) trabajaban para empleadores no parientes: 19 (29%) para un vecino/a; 7 (11%) para una madrina; 5 (8%) para empleadores cuya vivienda se encontraba en otro barrio.

3 (5%) en este periodo se encontraban realizando sólo quehaceres en su casa. Todas las niñas habían sido o eran trabajadoras del hogar, aunque inicialmente no se reconocieran como tales. Ellas decían que “apoyaban nomás”, o que “ayudaban un poco con sus cosas”, refiriéndose a una hermana, tía, madrina, cuñada, etc.

Ella no ha trabajado ni trabaja ahora, sólo ayuda a su hermana (que vive con su esposo en otra casa) y ella le regala ropa, propina, cosas así. Cuando necesita cosas para el colegio, le pide. (Mamá de Juana, 11 años)

De las 66 niñas, su tarea principal fue descrita de esta manera: 32 (49%) cuidar a un bebé; 15 (23%) hacer ‘todo servicio’24; 10 (15%) limpieza; en cuanto a las 9 niñas restantes, 3 atendían a una persona anciana, 3 lavaban la ropa. Aparte quedan las 3 niñas que en esa época sólo apoyaban en su hogar. Las mayores realizaban más tareas. Esto se observó en 23 niñas: 11 (48%) ayudaban a vender en el mercado y 6 (26%) vendían en una tienda; 3 (13%) lavaban ropa. En los últimos tres casos: una hacía ‘todo servicio’, otra cuidaba a una abuela y la otra limpiaba un comedor popular. Se observó que la tarea principal variaba de acuerdo a la edad. Las más pequeñas solían cuidar bebés y limpiar la casa. Al ir creciendo, la mayoría continuaba cuidando bebés pero aumentaba el número de niñas que hacía ‘todo servicio’. Las mayores se dedicaban a ‘todo servicio’ como actividad principal, más que a cuidar bebés.

Antes sólo le cuidaba (a su bebe). Ahora (la vecina) me dice que le lave los servicios, que puedo limpiar la casa. (Sheila, nacida en Lima, 13 años, 6° de educación primaria)

24 T o d o s e r v i c i o : l i m p i eza , l a vad o y p l anc h ado , coc in a .

Page 22: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

21

También cambiaban las condiciones laborales, según iban creciendo. Por ejemplo: pasar de trabajar cama afuera (dormir en casa de sus padres) a cama adentro (dormir en casa de los empleadores).

Gisela desde hace un año trabaja cuidando a una señora de 72 años, en la misma casa donde yo trabajo. La llama de cariño ‘madrina’, e incluso a veces llega a decirle ‘mamá’. Eso le gusta a la señora, porque ella no tiene hijos y quiere mucho a la niña... La señora le da propina. No hay un sueldo fijo pero le compra ropa. A ella le gustaría que Gisela esté con ella todo el día y me lo pidió. He aceptado porque necesito la plata. Ahora que llegan las vacaciones Gisela podrá quedarse cama adentro donde la señora; eso es mejor. (Mamá de Gisela, de 11 años)

Generalmente las niñas trabajaban por un plato de comida, útiles escolares (como un cuaderno), o por propinas eventuales de hasta S/. 5.00 nuevos soles (aproximadamente US $1.50 dólares) como máximo.

Ayudo a mi tía a vender comida, que traemos para los trabajadores a Barranco. No me paga, pero me da desayuno y almuerzo... Luego bajamos a su casa y hay que lavar todo, los cubiertos, los tapers25. Allí, nomás, yo la ayudo. ¡Pobrecita mi tía! Ya llega cansada. Su casa limpiamos, a veces, también. Una vez le lavé su ropa y ahí sí me dio propina. (Viviana, nacida en Lima, 12 años, 1° de educación secundaria) Tengo seis hermanos. Mi madre murió cuando yo tenía 6 años. Vivo con mi padre y mis cuatro hermanos. Mi padre trabaja sólo los domingos. Es vigilante y los demás días está en casa o hace sus ‘cachuelos’26. Ayudo a mi tía en las mañanas a cocinar, limpiar y otras cosas. Me da propina de S/.2 soles, S/.5 soles, pero no todos los días. (Sol, nacida en Lima, 16 años, 5° de educación secundaria)

A pesar de los deseos de los padres de un mejor futuro para sus hijas, muchas se encontraban ejerciendo la misma ocupación que ellos: el servicio doméstico.

25 T ap e rs : c a j as d e p l ás t i co que se usa n pa ra gu a r da r co m ida . 26 C ac h ue lo : t r ab a jo e ve n t ua l .

Page 23: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

22

Yo quiero que estudie, que trabaje cuando sea grande; pero luego, si no hay plata, tiene que trabajar. (Mamá de Fresia, de 10 años) A veces cuida a los hijos de la vecina y le dan una propina. Prefiere cuidar a los hijos de otros porque ellos le dan algo. Va a limpiar también. Su profesor le dijo que quería que le cuide a su hijo, cama adentro, y que él le daba clases en su casa. Pero mejor no, porque se iba a descuidar del colegio. Pero ahora que ya se vienen vacaciones; podría ser. Sí, cama adentro es mejor. (Mamá de Socorro, de 11 años) Tal vez el próximo año siga trabajando allí y así se asegura el trabajo. (Mamá de Gisela, de 11 años)

Las niñas podían haber estado ayudando a vender en un puesto de mercado o en una tienda, o limpiando la casa, o lavando cantidades enormes de ropa sucia que otros habían previamente encargado a una vecina/empleadora. Esto es, muchas veces realizaban tareas diversas antes de ir a la escuela.

4 El Colegio De las 66 niñas, 61 (92%) asistían a la escuela; 3 (5%) habían terminado su educación secundaria; sólo 2 (3%) habían abandonado los estudios; ambas debido a que salieron embarazadas y no recibieron el apoyo u orientación de familiares ni del mismo colegio.

…Ya me dio vergüenza, ya. Ya no quería ir. Una profesora me decía que estudie, que estudie, pero los demás comentaban feo, o no decían nada. Yo quería trabajar, además. Su papá (del bebe) decía que lo iba a reconocer, que le iba a dar todo. Mi mamá me dijo que ya me vaya con él, que sea mujer. (Clara, nacida en Lima, 17 años, 1° de educación secundaria)

Page 24: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

23

Con mi bebé ya todo es diferente. ¡Ya qué voy a estudiar, ya! Aunque yo quisiera seguir (estudiando). Eso voy a hacer, pero después. (Miranda, nacida en Apurímac, 17 años, 3° de educación secundaria)

De las 61 estudiantes, 53 (80%) estudia en colegios cercanos. El resto estudian en centros educativos fuera de la zona e incluso del distrito. Esto se debe muchas veces a que la madre también es trabajadora del hogar y la matricula cerca de su lugar de trabajo para poder recogerla al terminar las clases. Si descartamos a las 3 (5%) que concluyeron su educación secundaria, 49 (74%) se encuentra estudiando en un año adecuado a su edad27, mientras que 14 (21%) -incluyendo a las dos que desertaron de la escuela- presentan retraso escolar. Lo que quedó claro fue que a mayor edad de la niña, son más las obligaciones; por tanto, es mayor el riesgo de atrasarse en los estudios.

Antes sí podía hacer mis tareas, un poco más. Como ahora las puedo hacer acá (en La Casa de Panchita) las tengo que traer... en la semana no puedo (¿por qué?) porque tengo que hacer mis cosas, atender a mi hermanita, luego me voy donde mi vecina a limpiar… (Julia, nacida en Lima, 13 años, 1° de educación secundaria)

El colegio es reconocido por las niñas, especialmente por las mayores, como el medio para alcanzar una mejor situación en el futuro.

Tenía que venir (a Lima) y estudiar. En mi pueblo no hay (educación) secundaria. Pero mis padres no querían que estudie. Vine sola aquí, a estudiar. Me dijeron ‘¿Por qué no vas a ayudar? ¿Para qué vas a estudiar?’ Pero me vine. Todo lo que quiero es terminar mi colegio y luego estudiar algo. (Marina, nacida en Huancavelica, 15 años, 2° de educación secundaria) Yo sé que no puedo estudiar todo lo que quiero, pero por lo menos tenía que terminar mi colegio bien. Eso era lo primero y ya lo hice ¡ya! (Margarita, nacida en Lima, 17 años, educación secundaria completa)

27 S eg ú n e l r eg la m en t o de l a N u e va L e y d e E d uc ac ió n ( Ley 2 8 0 4 4 ) l a eda d de i n g r es o a l a e s c u e l a “ e s f l e x i b l e e n c u a n t o a l a e d a d . . . E l i n g r e s o a l n i ve l d e e d u c a c i ó n p r i ma r i a d e l n i ño o n i ña , se ha rá no r ma lm e n t e a l os 6 a ños de e da d ” . T o ma nd o d i c ha e da d co mo l a e d ad b as e p a ra e l i n i c i o d e l o s es t u d i os , he m os c ons i de ra d o c om o ad ec u a do u n re t r as o n o m a yo r d e d os a ñ os .

Page 25: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

24

Los horarios de la jornada de trabajo hacen que les sea difícil estudiar. La gran mayoría de las niñas del grupo (por no decir todas) asiste en el turno de la tarde de Educación Básica Regular, o en el horario de 6pm a 10pm, de Educación de Adultos.

Voy al colegio desde las 12 hasta las 6 (de la tarde). En las mañanas hago mis cosas: barro, lavo, y luego voy a la casa de mi vecina y también limpio. Cuido al hijo de mi vecina, que tiene un año. Yo sé cocinar, pero en mi casa cocina mi hermano. Luego tengo que hacer mis tareas, pero ya tengo mucho sueño. (Fresia, nacida en Lima, 10 años, 4° de educación primaria) Trabaja de lunes a viernes de 7 de la mañana hasta el medio día. Luego se va al colegio. Saliendo de allí debe irse a su casa para cuidarla de 6 y media hasta que llegue alguien. (Mamá de Gisela, de 11 años) En el colegio dictan muy rápido, no siempre entiendo, a veces. Como soy de provincia me da miedo preguntar y sólo copio todo lo que puedo. (Marina, nacida en Huancavelica, 15 años, 2° de educación secundaria)

Siempre está presente el deseo de continuar estudiando, luego de terminada su educación secundaria. Aunque juegan con la posibilidad de que el padre o la madre puedan apoyarlas, en realidad se dan cuenta de que dependerá casi enteramente de su esfuerzo: de que puedan continuar trabajando y estudiando.

Estaba estudiando computación y después mecanografía, pero tuve que dejarlo porque no tenía dinero. Ahora quiero estudiar turismo y hotelería, pero es muy caro. (Margarita, nacida en Lima, 17 años, educación secundaria completa) Quiero estudiar más para poder ingresar a la universidad. No puedo contar con mi familia porque no confío. Con mi familia sólo trabajaría. (Marina, nacida en Huancavelica, 15 años, 2° de educación secundaria)

Page 26: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

25

Trabajar y estudiar, y fijarme las horas para poder estudiar lo que quiero. Sí cuento con mis familiares, porque ellos me dicen que yo decida lo que a mí me gusta, pero no me pueden ayudar económicamente. (Úrsula, nacida en Lima, 16 años, 4° educación secundaria) Dice mi papá que me va a ayudar a estudiar algo… mientras no tenga enamorado o novio, porque si salgo embarazada… ¡que me olvide de la ayuda que me pueda dar! (Pina, nacida en Lima, 11 años, 6° de educación primaria)

Le dan mucha importancia a las calificaciones escolares, pero sobre todo por temor a la reacción de sus padres:

Sí, mi mamá se enteró que saqué rojo28. Yo le avisé dos días antes, así, con miedo. Yo dije ‘ahorita me grita y me pega’, pero cuando le estaba contando me dijo ‘¡Ah! ¿sí?’. Nada más. (Gracia, nacida en Ayacucho, 14 años, 2° de educación secundaria)

El colegio es percibido en muchas ocasiones como un espacio que les puede evitar, al menos por unas horas, sus obligaciones en el servicio doméstico.

Yo prefiero quedarme (en el colegio) haciendo todas mis tareas. Me gusta cuando mi mamá no puede recogerme, y ya no vamos donde mi tía (a trabajar). (Gisela, nacida en Lima, 11 años, 6° de educación primaria)

28 R o j o : c a l i f i c ac i ó n d esa p r o ba to r i a .

Page 27: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

26

Page 28: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

27

Capítulo II

LAS NIÑAS Y LA CASA DE PANCHITA

Page 29: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

28

Page 30: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

29

1 La Casa de Panchita La Casa de Panchita está ubicada en el céntrico distrito de Lince, en la ciudad de Lima. Fue creada respondiendo a una necesidad expresada por las propias trabajadoras del hogar, a raíz de la publicación de la historieta “Panchita”. Allí se relata la vida de una jovencita provinciana que lucha por tener una vida mejor, trabajando en servicio doméstico y estudiando29. Las trabajadoras del hogar que leyeron la historieta reaccionaron diciendo: “Panchita debería tener una casa”30. Ese mismo año, en un espacio de 35mts2, se inauguró La Casa de Panchita (LCP). Desde este espacio se realiza la difusión y defensa de derechos de las trabajadoras del hogar, con énfasis en las menores de 18 años. Actualmente se cuenta con una casa alquilada de unos 240mts2 que resulta ya insuficiente para el número de trabajadoras del hogar que acuden todos los domingos del año. Las trabajadoras del hogar pueden llegar a LCP cuando lo desean y quedarse las horas que quieran. La mayoría de las actividades son gratuitas (incluyendo el reforzamiento escolar, las clases de inglés, colocación de empleo, orientación en problemas laborales y emocionales, y contacto con sus familias en las zonas rurales). Otras actividades son ofrecidas a muy bajo costo (como clases de computación, almuerzo y transporte para excursiones). Contar con el local, mobiliario y computadoras, así como con un equipo de trabajo y la oferta de servicios diversos, fue un factor clave para el éxito de las actividades con las niñas TH de Pamplona. Ellas encontraron en LCP un espacio acogedor en el que podían tanto desarrollar sus tareas de colegio como realizar actividades formativas y lúdicas. El abordaje de los derechos laborales (incluso el aceptar reconocerse como trabajadoras del hogar) se efectuaba en los momentos oportunos31.

29 Pa nch i t a . As oc iac i ó n G ru po d e T ra ba jo R ed es . L i m a , 1 9 98 . 30 L a Casa de P a nch i t a . S i t i o W eb de l a A s oc iac i ó n G ru p o d e T r ab a jo R ed es . U R L : h t t p : / / www. g r up o re des . o r g / l ac dp . h t m 31 I b i d .

Page 31: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

30

(LCP) es muy bonita. Me enseñan para hacer mi tarea. Hay profesores que enseñan y me tratan bien y me dan muchos consejos. (Mariana, nacida en Lima, 10 años, 5° de educación primaria) Me siento bien cuando vengo a La Casa de Panchita, porque me siento en una casa bonita. (Patricia, nacida en Lima, 14 años, 3° de educación secundaria) Me gusta mucho (LCP) porque nos ayudan a hacer nuestras tareas y, además, hay muchos amigos con quien jugar. (Viviana, nacida en Lima, 12 años, 1° de educación secundaria)

Acudir a La Casa de Panchita era visto por las niñas como un premio. Los padres condicionaron muchas veces el permiso a que hubieran terminado sus tareas escolares y/o con “portarse bien”.

No vine (la semana pasada) porque mi papá es un ‘chinchoso’32, no me deja venir. Me gritó porque saqué malas notas en el colegio. Todo el tiempo me grita. Ya no me deja venir. (Alicia, nacida en Lima, 14 años, 2° de educación secundaria) Los sábados hace algunas tareas y el domingo va a La Casa de Panchita. No le gusta faltar y se siente mal cuando no va; esto sólo pasa cuando ocurre una emergencia. (Mamá de Gisela, de 11 años) La mamá de Estrella no la deja venir porque se porta mal; ella siempre le contesta33. (Nancy, nacida en Lima, 12 años, 5° de educación primaria)

El agrado que sentían al estar en La Casa de Panchita, se nota en estas inocentes palabras:

Yo no me quiero ir. ¿Me puedo quedar aquí, señorita? ¿No tienen cuartos? Yo puedo trabajar.

32 C h i n c h o s o : f a s t i d i o s o . 33 Con t es ta r : r esp o nd e r de m a la m a ne ra ( e n e s te c on t e x t o )

Page 32: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

31

(Elena, nacida en Lima, 10 años, 2° de educación primaria)

2 La promotora local A comienzos del 2004 AGTR debía seleccionar a cuatro ex trabajadoras del hogar que vivieran en distritos bajos ingresos y alejados del centro de Lima34, para ser formadas como promotoras para la difusión y defensa de los derechos de las trabajadoras del hogar en sus zonas.35 Se eligió a promotoras para los distritos de Comas, Villa El Salvador, Ate - Vitarte y Ventanilla. Se trataba de mujeres con educación secundaria completa y estudios universitarios o técnicos incompletos. Susana Reyes Limaymanta, pobladora del distrito de San Juan de Miraflores, ex trabajadora del hogar y ex dirigente nacional de la Federación de Mujeres Organizadas en Comedores Populares Autogestionarios y Afines de Lima (FEMOCPAAL), era una de las postulantes para ser promotora. Ella no resultó elegida porque con su 2° de educación primaria no pudo alcanzar los logros de las otras concursantes durante el mes de capacitación que sirvió para afinar el proceso de selección. A pesar de haber sido rechazada como promotora para ese proyecto, Susana empezó a ir los domingos a La Casa de Panchita con algunas niñas trabajadoras del hogar (TH) de Pamplona, tantas como podían caber en un taxi. Su constancia y dedicación, así como el entusiasmo de las niñas, hizo que nuestra asociación solicitara algún apoyo en dinero a Save the Children (Reino Unido) para algunos gastos mínimos. La señora Susana se comprometió a convocar y traer a LCP a treinta niñas TH, del distrito de San Juan de Miraflores. Las niñas debían comprometerse a dar S/.1.00 nuevo sol (aproximadamente US $0.30 dólar) para el pago parcial de su almuerzo. El resto de gastos de las actividades, durante 25 domingos, sería un aporte de nuestra ONG. Susana recorrió a pie los cerros de Pamplona Alta y sus alrededores, para identificar, contactar y motivar a las niñas. El gozar de un reconocido liderazgo en la zona y su habilidad para convencer y negociar con los empleadores (en la mayoría de los casos familiares y vecinos de las niñas), le permitió obtener éxito en su tarea.

34 S i t ua dos e n l os l l a ma dos “ con os ” d e L i ma . 35 P ro ye c t o : C u id a do y d e f ens a d e d e r ec h os d e l as t r a ba jad o ras de l h oga r , f i n anc ia d o p o r C o r da id ( Ho la nd a ) .

Page 33: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

32

En más de una ocasión se vio enfrentada a familiares y vecinos, cuando negociaba con ellos la necesidad de que las niñas tuviesen oportunidades -por ejemplo, ir a La Casa de Panchita- además de simplemente “ayudar o trabajar en casa”36. La señora Susana demostró tener las cualidades necesarias para una promotora local:

• Conocimiento cabal de la zona, para ubicar a las niñas trabajadoras del hogar. • Liderazgo afirmado su la comunidad, que le facilitaba tocar las puertas de los

vecinos así como obtener apoyo de los servicios del lugar. • Experiencia de trabajo en servicio doméstico, que le permitía comprender la

realidad de las niñas y establecer una mejor relación con familiares, tutores y empleadores.

• Capacidad de negociación, para ofrecer el acceso a las actividades en La Casa de Panchita desde una perspectiva costo – beneficio (¿Qué gana mi hija si asiste a LCP?)

• Capacidad para desplazarse por las mejores rutas, indispensable porque en muchos casos debía recoger y regresar a las niñas de sus hogares o empleos.

3 El equipo de trabajo En La Casa de Panchita se organizó dentro del equipo de trabajo de la asociación, un grupo de promotores voluntarios al que se llamó: equipo de las niñas de Pamplona. Este equipo fue responsable de planificar, ejecutar y evaluar las actividades que se realizaron con las niñas. Un estudiante de psicología del último año, con más de un año de experiencia colaborando con LCP se ofreció como responsable. Para desempeñar su tarea contó con la orientación de la coordinadora de La Casa de Panchita (ex trabajadora del hogar) y de la presidenta del consejo directivo (psicóloga y educadora). El responsable convocó a cinco estudiantes de psicología de su misma universidad, teniendo en cuenta lo siguiente: interés en el área de psicología social y comunitaria; motivación para trabajar con niñas trabajadoras del hogar; disponibilidad de tiempo los domingos. Se invitó a dos trabajadoras del hogar que estudiaban computación en LCP, que habían mostrado interés, responsabilidad y aptitudes para ayudar en el aprendizaje a otras TH.

36 A yu d a r o t r a b a j a r e n c as a es l a ma ne r a c o m o s e re f i e r en a l t r ab a jo e n s e r v i c i o d o més t i c o .

Page 34: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

33

Se unió al equipo un jovencito que acababa de egresar de educación secundaria, cuya madre (trabajadora del hogar) es la responsable de la biblioteca de LCP. Él señaló su deseo de “ayudar en algo”. Así, se reunió un grupo de 9 voluntarios: 1 estudiante de psicología del último año, el responsable, de 24 años; 5 estudiantes de psicología en penúltimo año, mujeres entre los 19 y los 21 años; 2 trabajadoras del hogar, usuarias de LCP, de 20 y 21 años; 1 egresado de educación secundaria, de 18 años. El equipo de trabajo reunía estas características:

• Sensibilidad hacia la problemática de las niñas TH. • Dinamismo, paciencia y muchísimo buen humor. • Tolerancia a la frustración. • Capacidad para trabajar en equipo.

La simple interacción con las niñas constituyó una estrategia en sí misma, valorada por las niñas.

A mí me gusta La Casa de Panchita porque me tratan muy bien, me dan muchos consejos. (Norma, nacida en Lima, 12 años, 6° de educación primaria) Las profesoras37 son muy divertidas, nos cuidan muy bien y nos ayudan, siempre están. (Justina, nacida en Lima, 10 años, 5° de educación primaria)

Se estableció, inevitablemente, vínculos afectivos con las/os promotores; la despedida al término de la experiencia fue muy emotiva.

Lo que siempre me ha gustado es estar al lado de todos ustedes. Me gustó ir al teatro y al museo, pero más bonito era porque íbamos con ustedes. Me divertí mucho. (Patricia, nacida en Lima, 14 años, 3° de educación secundaria)

37 A un qu e e n La C as a de P an c h i t a s e t r a t a d e q ue t od as l as p e rs on as s e l l a me n p o r s u n o mb r e , l as n i ñ as s o l í a n l l am a r “ p r o f es o r as ” a l as vo lu n t a r i as ; e ra l a im a ge n c o n l a q u e e l l a s s e s en t í an m ás c óm o das .

Page 35: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

34

4 Planificación del apoyo Inscripción Cada niña llenó la Ficha de Inscripción de LCP en la que se consigna el nombre, lugar y fecha de nacimiento, escolaridad, nombre y dirección de un miembro de su familia y de la empleadora. Luego se le pidió que dibujase una persona y que escribiese una historia sobre la figura dibujaba. Mientras tanto, la promotora que sería la responsable directa de la niña, le preguntaba acerca de las tareas domésticas que realizaba, para quién y desde cuándo, lo que recibía a cambio; asimismo, la composición de su familia y el tipo de trabajo de sus padres. La información recogida se compartía con la promotora local, para realizar ajustes y/o ampliar los datos. La promotora voluntaria escribía un perfil inicial de cada niña. Actividades Se planificó la participación de las niñas en talleres formativos diversos, clases de computación e inglés, juegos de mesa recreativos y educativos, cine en video, juegos al aire libre, asistencia a espectáculos culturales, y almuerzos en compañía de las demás usuarias de LCP. Durante el desarrollo de las diversas actividades las/os promotores debían fomentar lo siguiente: creación, compresión y respeto de reglas de grupo; mejora de la comunicación entre ellas y como grupo; relaciones horizontales; equidad de género; atención a sus problemas emocionales; énfasis en el cumplimiento de las metas que se hubieran propuesto. Se establecieron reuniones de coordinación e intercambio entre promotores para establecer los reajustes. En ellas se trataba lo siguiente: informe de actividades por domingo; informe sobre los cambios observados en cada niña; anotación de testimonios; fotografías de las actividades. También se realizaron visitas a las familias y se habló con algunos docentes a fin de conocer sus opiniones y percepción de los cambios en las niñas. Así se conoció mejor la situación en el hogar y en su trabajo. Por otro lado, la mejora en las calificaciones escolares, en su aspecto personal y en el conocimiento de sus derechos -medidos con una prueba- fueron datos cuantitativos, tomados en cuenta en la evaluación final. Para el mejor aprovechamiento de las actividades, y debido a las necesidades específicas de cada edad, se formaron tres grupos: grupo A: de 7 a 11 años; grupo B: de 12 a 14 años; grupo C: de 15 a 17 años

Page 36: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

35

5 Desarrollo de las actividades Identificación, contacto y aceptación La promotora local, en la mayoría de casos, debió visitar repetidas veces a padres y tutores, ya sea para superar la desconfianza de que fuesen a una organización

10:40am Llegada de las niñas

Bienvenida, asistencia, inscripción de n e as niñas dinámica de entrada

Grupo A 11:00am

• Taller • Tareas

Dib j j

Grupo B 11:00am

• Taller • Tareas

J d M

Grupo C 11:00am

• Taller • Charlas Grupales

T

1:00pm Almuerzo

2:00pm • Tareas

2:00pm • Clase de

2:00pm

• Inglés • Tareas

2:40pm • Clase de

2:40pm

• Inglés • Juegos • Salida al parque 3:20pm

• Juegos / tareas3:20pm

• Clase de

4:00pm • Películas • Salidas al teatro / museos festivales etc.

5:30 Partida de las niñas

Page 37: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

36

desconocida para ellos o para que pudieran convencerse del valor de las actividades propuestas. Hasta la penúltima semana (segunda de octubre) Susana siguió empeñada en esta tarea. Identificaba y contactaba más niñas. Contactó cerca de 90 familias, lo que significó un total de 103 niñas. De ellas, 72 fueron a La Casa de Panchita y 66 de ellas se inscribieron. Entre las razones por las que 6 no fueron inscritas, tenemos: tenía 18 o más años; era la hermanita menor no TH, de una niña que sí se inscribió, la enviaban de su casa para que su hermana “la cuide”.

No voy a poder venir, mi tía dice que venga con mi prima, que es mi responsabilidad cuidarla aunque sea domingo. (Patricia, nacida en Lima, 14 años, 3° de educación secundaria)

Algunas de ellas continuaron asistiendo a pesar de no estar inscritas para estas actividades. Las pequeñas con la condición expresa que permitieran que sus hermanas mayores realizaran sus actividades, sin que tuviesen que estar preocupadas por cuidarlas38. En cuanto a las TH de 18 años o mayores, participaron de los servicios que brinda LCP pero pagaron su transporte para las salidas y el costo total del almuerzo. El transporte La promotora local contrató un pequeño vehículo, casi sin ventanas. Luego un microbús, con capacidad para 18 pasajeros, pero resultó muy pequeño. A finales del segundo mes se contrató un ómnibus, con más asientos pero a mayor costo.

Era bien gracioso, nos metíamos todas en el asiento del fondo, ¡como 6 entrábamos! (en un asiento para 4). Con la ‘combi’39 celeste es mejor. (Lucía, nacida en Lima, 11 años, 6° de educación primaria)

La inscripción La inscripción la realizaba regularmente los/as voluntarios/as convocados para esta actividad. También apoyaron en la inscripción otras/os integrantes del equipo de trabajo de La Casa de Panchita, principalmente los días que llegaban muchas niñas por primera vez (“nuevas”).

38 L os p ad res o t u t o res d e es t as n i ñ as c ond i c i o na ro n a qu e s us h i j as TH f u es e n a LC P a c o mp a ña das p o r l a h e rm ana pe qu eñ a , o p o r l a n i ñ i t a a su ca rg o e n e l c en t ro de t r ab a jo . P o r l o t a n to , en n ues t ra O NG se de b ió t a mb i én a te nd e r a es tas n i ñas , a l o l a r go de l d í a , c on e l ap o yo de n ues t ras p rom o t o ras y vo l un t a r i as /os . 39 C om b i : m i c ro bú s .

Page 38: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

37

Los talleres Generalmente cada taller duraba dos horas; la mayoría de los insumos necesarios fueron un aporte de nuestra ONG. Generalmente los talleres se desarrollaron en los ambientes de La Casa de Panchita, aunque algunos se realizaron al aire libre, en un parque cercano. Los talleres fueron conducidos por integrantes del equipo de trabajo de LCP y del equipo de trabajo de las niñas, por voluntarios extranjeros, por funcionarios del MIMDES40 (en este caso en el local del INABIF41).

¡Yo no sabía que así había, Finlandia! Yo quiero ir después, cuando ya sea mayor. (Moria, nacida en Lima, 7 años, 1° de educación primaria)

A pesar del reducido tamaño de La Casa de Panchita42 se llegaron a realizar hasta cuatro talleres en simultáneo.

Voy a aprender a cocinar eso que hizo la señorita (voluntaria de USA); lo malo es que no sé veía muy bien (lo que preparaba) ¡muy chiquita era la cocina!… (Socorro, nacida en Lima, 11 años, 6° de educación primaria)

En algunas ocasiones, las niñas se incorporaban a talleres programados para las usuarias regulares de LCP. Sin embargo, muchos talleres se organizaron específicamente para las niñas de Pamplona; había algunos abiertos para todas y otros por grupos de edad, en consideración a la temática y la dificultad del taller.

¡Yo quiero hacer títeres otra vez! Mi mamá no me creía que hice títeres de medias. Dice que me va a dejar hacer de nuevo, pero que no malogre tanto. (Esmeralda, nacida en Lima, 9 años, 2° de educación primaria) Yo la otra vez también vi un video en el colegio, era de Defensa Civil. No siempre veo videos... Estuvo bien bonito, cuando se veía la barriga por dentro; en el colegio cuando hablan de eso (sexualidad) todos se ríen. Lo bueno es que… después te pregunto ¿ya? (Marina, nacida en Huancavelica, 15 años, 2° de educación secundaria)

40 M in i s t e r i o de l a M u je r y Des a r r o l l o Soc i a l , qu e e fec t u ó l a i n v i t ac i ón . 41 I ns t i t u t o Nac io n a l de A po yo a l B i en es t a r Fa m i l i a r . 42 AG T R t i e ne l a u rg en t e n ec es i d ad d e m ud a rs e a un l oc a l m ás g r an de y a d ec u ad o , p e ro no c ue n t a c o n e l d i ne ro . És t a es s u p r i nc i p a l l i m i t ac i ó n p a r a m e jo ra r y a mp l i a r l a c a l i d ad de l a a t e nc i ón pa r a l a d i f us i ón y d e f e ns a de d e r ec h os d e l as t r a ba ja do ra s de l h og a r y l a p r es t ac i ó n de d i ve r s os s e r v i c i os

Page 39: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

38

Reforzamiento escolar Esta actividad tenía básicamente dos aspectos: el repaso de temas explicados del colegio y el desarrollo de sus tareas escolares. Las niñas planteaban los temas que deseaban repasar. Se quería que identificaran sin presiones sus necesidades de aprendizaje y que de manera voluntaria aprovecharan los recursos que ofrece LCP. No se quería que asociasen la visita a La Casa de Panchita como una extensión de las actividades del colegio. Así, ellas se acercaban a los profesores y promotores diciendo “me puedes explicar…”, usualmente mientras hacían sus tareas escolares.

Yo no la entiendo a la señorita (maestra, en el colegio); acá, sí. Me explican poco a poco y eso sí se entiende.” (Eugenia, nacida en Lima, 10 años, 5° de educación primaria)

El apoyo en la realización de las tareas escolares si tenía cierto orden. Al llegar, luego de la bienvenida, cada promotor/a responsable de su grupo de niñas identificaba con ellas la cantidad y el tipo de tareas que tenían pendientes, para que planificasen el momento de hacerlas durante el día, en los espacios separados para tal fin. Los espacios para esta actividad eran, dependiendo siempre del grupo: si no había taller, durante la mañana hasta antes del almuerzo; si había taller: después de almuerzo, entre las clases de inglés y computación y antes de la película. Si había demasiadas tareas, se podía cancelar la clase de inglés o la película. Nunca se cancelaba por hacer tareas la clase de computación, el taller, o las salidas.

Ya me he recuperado en matemática, ya. Ahora he hecho mis asignaciones, ¡con el profesor es facilito! Lo malo es que a veces siempre está ocupado43. (Gracia, nacida en Ayacucho, 14 años, 2° de educación secundaria)

Al principio la mayoría de niñas decía no tener tareas, pero luego de las primeras semanas reconocieron las ventajas de hacer sus tareas escolares con profesores, libros y otros materiales educativos a su disposición. Así, esta actividad fue la que más tiempo y dedicación consumió. Aunque se les apoyó muchísimo en la realización de sus tareas, fue difícil establecer una cantidad de tiempo, que variaba por niña y grupo, y con relación al ritmo del calendario escolar. Los últimos domingos bajó mucho el número de tareas a resolver; las niñas decían que preferían hacerlas en casa para 43 E n a l gu nas é po c as , es pec ia lm e n t e de e xá m e nes , l as d em a nd as d e a ten c i ón su pe ra ba n a l a p os ib i l i d a d d e a t e nc i ón qu e p u d i es e n b r i nd a r l os c ua t r o d oc e n t es c o n q u e c on t a ba La Cas a de Pa nch i t a .

Page 40: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

39

“aprovechar el día”. A otras, los padres no las dejaban ir a La Casa de Panchita si no habían terminado sus tareas escolares, ya que esta salida era considerada un premio.

Aquí sí puedo hacer todas mis tareas. En mi casa no siempre se puede. Mi mamá me quiere ayudar. Acá hay libros también, pues. Yo a veces quiero hacer toda mi tarea antes de venir para no hacer acá, para jugar. A veces, así hago. (Gisela, nacida en Lima, 11 años, 6° de educación primaria) Yo le digo que si quiere ir, tiene que terminar toda su tarea y estudiar, sino no. No, pues. Se lo tiene que ganar. (Mamá de Socorro, de 11)

Apoyar a las niñas con sus tareas escolares era un trabajo de estimulación constante. Se incidió en la necesidad de que fuesen ellas mismas las que buscasen las respuestas a sus asignaciones.

Siempre te pido para que lo dibujes (a la promotora). Yo no sé dibujar, ¡tú nunca dibujas! Ahora voy a pegar nomás ¿sacan copias (fotostáticas) acá? (Julia, nacida en Lima, 13 años, 1° de secundaria)

A través de la realización de sus tareas, las niñas se integraron con las TH mayores y otras promotoras de LCP (tanto profesionales como trabajadoras del hogar), porque compartían con ellas el espacio, la atención de los profesores, y los materiales de trabajo. También se convirtió en el mejor momento para que la promotora responsable de cada niña, pudiera conversar con ella sobre sus inquietudes, problemas y deseos.

Yo no sabía que Juanita (TH promotora de La Casa de Panchita) habla quechua; ahora voy a decirle que haga conmigo las tareas. (Marina, nacida en Huancavelica, 15 años, 2° de educación secundaria)

Page 41: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

40

Computación e inglés Cada grupo de edad recibió, entre las 2:00pm y las 4:00pm, veinte clases de computación de 40 minutos, y dos clases de 30 minutos, lo que nos da un total acumulado de sesenta clases de 40 minutos y seis de 30 minutos. En la clase de inglés se tocaba una canción conocida (pedida por las mismas participantes con anticipación). Se distribuía la letra en inglés y castellano, se practicaba la pronunciación y se traducía poco a poco, se explicaban las palabras y un poco de la gramática, para finalmente cantarla en grupo. Las mayores (grupo C) asistían a esa clase pero debían salir antes de que finalizara (su duración es de 3 horas), lo que generaba incomodidad en las niñas y las demás estudiantes. Las niñas entre 12 y 14 años interrumpían la clase de inglés, debido al inicio de su clase de cómputo, lo que también generaba desorden; este grupo hacía sus tareas del curso de inglés con el apoyo individual de voluntarios de CCS y otros. Para las más pequeñas se organizó una clase de inglés especial de una hora de duración; se practicaba vocabulario básico, juegos y canciones infantiles. Juegos Todo el tiempo estuvo presente el juego. Para inyectar ánimo, a partir del tercer mes empezábamos el día con un juego en grupo. Todos los tiempos libres se convertían en hora de jugar, todos los espacios libres en área de juegos. Gran porcentaje de los talleres se hacían “como jugando”, es decir, con una metodología lúdica y distendida. Igual ocurría en las clases de inglés y en las de computación: el juego como vehículo para el aprendizaje.

A mí no me gustaba cuando hacíamos los juegos así, recién llegando, pero luego me di cuenta que era porque estábamos medias dormidas; así nos despertábamos. Me gustó más (el juego) ‘la papa se quema’. (Gracia, nacida en Ayacucho, 14 años, 2° de educación secundaria)

“Juegos” se refería a una serie de acciones determinadas, independientes de las otras actividades. Se pensó y se utilizó el jugar y aprender nuevos juegos como estrategia para lograr los cambios esperados. Así, se desarrollaron fundamentalmente dos tipos de juegos: de mesa, en espacios cerrados; de movimiento, en espacios abiertos. A través de ambos tipos de juegos buscamos: estimular la coordinación sensorio motriz; fomentar la cooperación y la competitividad; facilitar la creación y el respeto a reglas establecidas por el grupo; reforzar aspectos como memoria, atención, lógica y otros; aprender de las relaciones, conflictos e intereses que se reflejaban en sus juegos.

Page 42: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

41

Las niñas descubrieron muchos juegos de mesa en La Casa de Panchita. Ellas descifraban o inventaban sus reglas. Fue una de las actividades que más las absorbió, en todas las edades; la demanda de juegos hizo que fuese necesario comprar más. Los juegos al aire libre en los parques cercanos -incluyendo el Mariscal Castilla, que es como un pequeño bosque- fortalecieron los lazos de confianza entre los tres grupos de niñas y sus promotoras. Como en estas salidas a veces se ensuciaban la ropa y eso causaba que las niñas tuvieran problemas en su casa, se insistió en que fuesen a la LCP con una ropa con la que pudieran jugar en el suelo.

Yo siempre he preferido salir a jugar afuera. Deberíamos jugar voley también, ¡otras cosas! Aunque los juegos que nos han enseñado también están bonitos. La vez pasada yo hice ese de las figuras en educación física. (Emilia, nacida en Lima, 10 años, 5° de educación primaria)

Los juegos al aire libre resultaron imprescindibles para el equilibrio entre la exuberante energía de las niñas y la falta de espacio en La Casa de Panchita, con un número cada vez mayor de trabajadoras del hogar. Salidas culturales y recreativas Para las salidas, inicialmente se utilizó transporte público o taxis, pero no resultaba práctico ni en tiempo ni en dinero. Posteriormente se contrató al mismo ómnibus que hacía la movilidad desde Pamplona, que brindaba tranquilidad y seguridad por un precio razonable. La visita a diversos teatros, museos, edificios importantes y plazas principales de la ciudad, ampliaron el panorama de actividades, enriqueciendo sus oportunidades de uso del tiempo libre. El mayor conocimiento de Lima y sus recursos les daba seguridad en sí mismas, contribuyendo a su autonomía. Además, se trataba de algunos aprendizajes que podían replicarse entre pares y al interior de su medio familiar.

No me gusta pintar porque se necesita mucha paciencia, pero me gusta lo que han pintado estos niños del museo. (Esmeralda, nacida en Lima, 9 años, 2° de educación primaria) Ahora ya sé como ir a ese teatro de España. ¿Cómo se llama? Centro de España (Centro Cultural de España), para ir gratis con mis hermanitos”. (Margarita, nacida en Lima, 17 años, educación secundaria completa)

Page 43: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

42

Cuando vimos el museo todito, arriba y abajo, con las señoritas vestidas de amarillo, y luego vimos que bailaban marinera, y a los niños que pintaban, y luego los patos también... (Socorro, nacida en Lima, 11 años, 6° de educación primaria)

En total se realizaron 14 salidas: 6 de ellas al teatro, 2 a exposiciones de arte y fotografía, 2 a talleres organizados por otra institución, 2 a lugares al aire libre, 1 a un museo y 1 al Parque de Las Leyendas. Ésta última salida se realizó el domingo número 26, y fue como un premio a la regularidad de su asistencia y por haber aprendido los derechos de la trabajadora del hogar. Ése fue el último encuentro.

Page 44: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

43

Capítulo III

LAS NIÑAS Y SUS LOGROS El número de niñas que se ha considerado para detectar cambios se ha reducido de 66 a 24 (36%), que es el número de niñas que tuvo al menos 10 (40%) de asistencias de los 25 domingos programados.

Page 45: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

44

Page 46: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

45

1 Incremento en su autoestima El incremento de su autoestima se observó a través de sus actitudes, de la manera cómo expresaban sus opiniones, de su comportamiento hacia los demás y por el cuidado de sí mismas. Por ejemplo, al principio más de la mitad de las niñas no llegaba especialmente aseada; esto cambió a la mitad del proceso, más o menos, debido a la motivación de las promotoras que les transmitían normas de higiene y arreglo personal, así como de limpieza y conservación de la ropa, sin que tuvieran depender de las otras personas de su casa.

(A la promotora) ¿Cómo te haces esa cola? ¿Con qué? ¿Te vas al peluquero? Yo quiero tener mi cabello así, lavarme con re-acondicionador y champú. (Elena, nacida en Lima, 10 años, 2° de educación primaria) Mira, señorita, ¡ya lo lavé mi casaca roja! (Esmeralda, nacida en Lima, 9 años, 2° de educación primaria)

En los primeros domingos, muchas de las niñas no querían salir en fotografías; había adolescentes que habían perdido sus dientes y no querían sonreír. Otras veces, sencillamente se tapaban la cara, diciendo “¡qué vergüenza!”. La cámara digital ayudó mucho porque se les enseñaba la foto en la pantalla y las niñas decían “a ver, de nuevo, tómame” hasta que quedaban con la imagen que les gustaba más. Los últimos domingos ellas mismas pedían ser retratadas.

La próxima (vez) voy a venir con una blusa ¿ya? Y me tomas (una foto) por allá, por las plantitas, por allá. (Marina, nacida en Huancavelica, 15 años, 2° de educación secundaria) Y todas esas fotos que me tomas van a salir ¿no? (Gracia, nacida en Ayacucho, 14 años, 2° de educación secundaria)

Al principio, se desanimaban fácilmente ante cualquier reto que presentase dificultad. En el último mes, ya se animaron a armar rompecabezas de muchas piezas, que antes evitaban: los empezaban por la mañana y los iban avanzando entre actividad y actividad. Casi siempre se les unían otras trabajadoras del hogar y promotoras,

Page 47: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

46

convirtiéndose en una actividad integradora. Además, encontraron en sí mismas la necesidad de completar los rompecabezas, a diferencia de los primeros días, cuando dejaban estas y otras tareas sin concluir. Cuando empezaban un rompecabezas grande, las voluntarias tenían la indicación de colaborar para armarlo, para que no se desanimaran. Reforzaban el concepto sobre sí mismas el establecer relaciones de amistad en un ambiente agradable, fuera del colegio y de su barrio. Esta seguridad les daba a la vez más herramientas para desarrollar la seguridad en sí mismas.

Yo en mi colegio no tenía amigos. Miedo me daba. ‘Se burlarán’ (en LCP), yo pensaba, por cómo hablo. Pero acá me ayudan mucho y por eso me siento bien. Además, ya tengo amigas. Yo no sabía que Margarita va a mi colegio, también; ahora con ella me hablo. (Marina, nacida en Huancavelica, 15 años, 2° de educación secundaria) En la reunión última del colegio, la profesora me dijo que Gisela ha mejorado no sólo con respecto a sus notas, sino que la participación en clase es cada vez más fluida y espontánea: ‘ahora opina y se esmera por hacer bien sus trabajos’. En casa se nota cuando hace sus tareas, el interés que tiene por la escuela, que ya lo estaba como perdiendo. (Mamá de Gisela, de 11 años)

Las relaciones democráticas y cálidas con los voluntarios extranjeros fueron muy importantes. Al jugar con ellas y hablarles sobre su cultura y costumbres, ampliaron su visión del mundo y colaboraron a que se sintieran aceptadas.

Yo les cuento a todos que Veera (voluntaria finlandesa) era mi profesora de inglés, pero cuando vieron la foto no me creían. (Pina, nacida en Lima, 11 años, 6° de educación primaria)

El aprendizaje de diversos conocimientos y habilidades, así como resaltar el valor real de aprender para ser mejor, les dio nuevas y mejores perspectivas sobre sus posibilidades para el futuro; asimismo, el saber sus derechos.

Me enseñan muchas cosas importantes, a valorar muchas oportunidades. En el colegio me ha ido bien. Aquí me enseñan inglés, computación y mis demás tareas. (Vilma, nacida en Lima, 13 años, 2° de educación secundaria)

Page 48: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

47

…porque aprendes lo que te enseñan sobre las trabajadoras del hogar y hacemos respetarnos. (Gisela, nacida en Lima, 11 años, 6° de educación primaria)

Sin embargo, había aspectos del entorno que jugaban en contra del aprendizaje de modelos positivos para auto-valorarse.

Todos los hombres para eso nomás me querían, pues. Yo siempre le dije que ‘no’, hasta que el me dijo ‘si a ti no te van a querer, igual, ¿no te has visto?’ Pero, igual, ya no quise nada con él. No sé, a veces me dan ganas de buscarlo”. (Zaira, nacida en Lima, 17 años, 5° de educación secundaria)

2 Mejor socialización entre pares Las niñas no establecían canales de comunicación adecuados: se gritaban y/o se arrebataban las cosas. Tendían a buscar su satisfacción inmediata como fuera aunque estaban acostumbradas a la represión. La estrategia fue proponer modelos de comunicación a través de actividades e ignorar las conductas negativas. Por ejemplo; al principio tenían muchos problemas para pedir los juegos, para compartirlos y para devolverlos ordenadamente. Sin embargo, su deseo de aprender a jugar nos ofreció la oportunidad de mejorar esta situación. Aunque hasta el final continuaron siendo descuidadas para guardar los juegos, mejoraron muchísimo en la forma de pedirlos, y también asumieron que era necesario compartir. En el juego al aire libre se promovió la correcta comunicación entre pares mediante la exploración, la práctica y la interiorización de reglas para los juegos físicos y para algunos deportes.

Otra observación de la maestra es que Gisela presenta más comunicación tanto dentro como fuera de la clase, comparte sus cosas, es más gentil, tolerante y sociable con sus compañeros. Ha dejado de verse con muchas de sus amigas de por su casa, vecinitas, pues. Ahora conversa más con sus amigas del colegio durante la semana, y yo prefiero eso. (Mamá de Gisela, de 11 años)

Page 49: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

48

Durante el repaso de la Ley de los Trabajadores del Hogar, Emilia no quería participar, no se integraba mucho al grupo, pero desde que se resolvió la pregunta que hizo sobre la compensación por tiempo de servicios de su mamá, participa más. (Margarita, nacida en Lima, 17 años, educación secundaria completa) Hoy unos niños se acercaron en el parque, unos niños que no son de La Casa de Panchita, y preguntaron si podían jugar con nosotras. Al comienzo nos dio mucha vergüenza, no les hacíamos caso. Pero luego, ya, les dijimos que ya. (Mariana, nacida en Lima, 10 años, 5° de educación primaria)

3 Mayor rendimiento escolar En este aspecto se dieron los resultados más alentadores. 20 de las 24 niñas mejoraron sus calificaciones con respecto al año 2003. Según sus padres y maestros también había cambiado su actitud hacia la escuela. En La Casa de Panchita estos cambios se evidenciaron en lo siguiente:

• Planteaban la búsqueda de información, según su tarea escolar. • Consultaban enciclopedias, diccionarios, y otros textos, para ubicar los datos

que necesitaban. • Organizaban su espacio de trabajo. • Mostraban interés por los temas desarrollado, más allá del cumplimiento de la

tarea. • Empezaron a redactar sus ideas con más lógica. • Respetaron la regla de que los promotores no harían sus tareas escolares por

ellas.

Las últimas semanas mejoraron, sobretodo con respecto a la computación. En el colegio le enseñan pero no aprendía bien; en cambio, ahora sabe más de eso. Sus notas no bajan de A, aunque el primer bimestre trajo puro AD. El bimestre pasado bajó en unos cursos y subió en otros. Se ha vuelto muy responsable con lo que hace en el colegio. Le gusta hacer sus cosas sola. Nunca la ayudamos en sus tareas, a no ser que sean muy difíciles y le pida ayuda a su hermano. Aprende muy rápido. Allá donde va (LCP) le enseñan

Page 50: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

49

muchas cosas nuevas para ella y ella está bien contenta con eso; le gusta aprender cosas nuevas. (Mamá de Magdalena, nacida en Lima, 11 años, 6° de primaria) Lo mejor que le ha pasado es ir a esa casita (LCP). El año pasado ¡puro rojo tenía! Este año ha estado mucho mejor, hasta ha ido a concursar para matemática, representando al colegio. Nunca había estado tan bien. ¡Parece mentira! Lo único era que alguien le guíe en sus tareas, pues. Yo no puedo nada. ¿Qué será? Ojalá a mi hijo también lo pudiera mandar. (Mamá de Socorro, de 11 años)

Los profesores de uno de los colegios donde estudiaban las niñas, se pusieron en contacto con la señora Susana, porque la diferencia entre ellas y las otras estudiantes era evidente. “Me han felicitado, pero yo no soy, pues. Es La Casa de Panchita; así le dije.”

4 Acceso a computación e inglés básicos Aprendieron sobre la computadora, sus usos, a controlar el entorno del Windows, a utilizar el mouse y el teclado. Algunas que ya tenían algunos conocimientos y práctica de computación; con ellas se trabajó el entorno y accesorios de Windows, ejercicios de Word y obtuvieron su cuenta de correo electrónico; aprendieron también a buscar en Internet y grabar su búsqueda. Las menores empezaron a visitar sitios Web educativos y recreativos; ellas

navegaron constantemente en el sitio Web de Educared. Las del grupo intermedio aprendieron a buscar en Internet páginas similares. En las

últimas clases se generalizó la lectura en la pantalla de información, historias, cuentos y leyendas. También se hizo origami siguiendo instrucciones de sitios Web.

Las mayores profundizaron en el uso del correo, búsqueda en Internet avanzada y ejercicios de Word avanzados. Visitaron sitios Web relacionados con los temas de sus tareas escolares.

Ahora yo quisiera enseñarle a mi mamá; que ella también tenga un correo de Internet. (Esmeralda, nacida en Lima, 9 años, 2° de educación primaria)

Page 51: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

CUANDO SEA GRANDE...

50

En sí misma, la idea de enseñar inglés no estaba pensada necesariamente para obtener notas aprobatorias en el colegio. Priorizaba, en cambio, el beneficio recibido del diálogo e interacción de las niñas con voluntarios de diferentes países. Se aprendieron las partes del cuerpo y nombres de frutas, formas de saludar, lugares de la casa, nombres de animales y frases simples. Se asimiló un repertorio básico de palabras y expresiones en este idioma.

5 Participación en actividades formativas y lúdicas En total se realizaron 35 talleres entre los tres grupos de edad. Talleres sobre derechos de las TH (6), y sobre deberes (1). Talleres de teatro (3), donde hicieron mucha improvisación y comunicación. Talleres sobre la vida en países lejanos o ciudades al interior del país (4): Finlandia,

Francia, Ayacucho, Iquitos. Taller de quechua Talleres sobre cuentos por regiones (3): del Perú, de Venezuela, de Colombia. Talleres de cocina (3) elaboración del knish, comida típica judía, de panqueques

estilo americano, y de bombones de chocolate. Talleres de cuidado y desarrollo personal (4): higiene personal; sobre autoestima;

uno sobre como ubicarse en la ciudad y usar una guía de calles; uno sobre los cambios en la adolescencia y la pubertad.

Talleres de manualidades: pulseras con hilos (3), pintura sobre piedras, aretes con alambre, construcción de títeres con medias y cartón en el que improvisaron una presentación grupal, elaboración de carteras con paja (3), modelado en arcilla, pintura en grupo (2): uno con pintura vegetal y otro de técnica mixta.

Los productos de los talleres los llevaban las niñas a su casa, casi siempre.

Ahora que puedo hacer cerámica le voy a hacer algo a mi papá. Creo que le voy a hacer algo y se lo voy a regalar. A él siempre le ha gustado la cerámica. El era artesano allá. Acá no. No se puede, no pagan (el precio justo), pues. Hace tiempo que no le veo hacer. Casi siempre regresa bien cansado, de trabajar. (Margarita, nacida en Lima, 17 años, educación secundaria completa) ¡Ella los ha hecho a los promotores de cerámica! Ja, ja, ja. (Nancy, nacida en Lima, 12 años, 5° de educación primaria)

Page 52: cuando sea grande[1] - ILOwhite.lim.ilo.org/ipec/boletin/documentos/cuando_sea_grande.pdf · A Gina Chávez Alegre, Julissa Solórzano Castro, Luzmila Suárez Loayza, Sumiko Puelles

51

Debemos terminar las carteras, yo no pude aprender a cerrar; muy poquito crochés habían. (Socorro, nacida en Lima, 11 años, 6° de educación primaria)

6 Conocimiento de normas legales Se aplicó una prueba de entrada para evaluar su conocimiento de la Ley 27986, Ley de los Trabajadores del Hogar y del Código del Niño y del Adolescente (en lo que se refiere al trabajo en servicio doméstico). En una prueba de salida, se halló lo siguiente, con relación a las 24 niñas: 20 (83%) sabía que la edad mínima para trabajar en servicio doméstico era de 14

años. 21 (88%) sabía que el contrato podía ser verbal. 22 (92%) sabía el número de horas de la jornada laboral de un/a TH adulto. 12 (50%) sabía el número de horas de la jornada laboral de un/a TH de 15 a 17

años. 17 (71%) el número de horas de la jornada laboral de un/a TH de 14 años. 20 (83%) sabía que un/a TH tiene derecho a la educación. 11 (46%) sabía que todos los feriados son no laborables para un/a TH. 6 (25%) sabía que había que dar un aviso previo de 15 días, al dejar un trabajo. 12 (50%) sabía que correspondían dos gratificaciones al año. 23 (96%) sabía que correspondían 15 días de vacaciones anuales.

En respuesta a una pregunta abierta sobre qué deberes y derechos conocían, cada niña pudo nombrar un deber y tres derechos. Tuvieron más menciones: a una remuneración, a buen trato y a comida.

¿Todos esos derechos son posibles? ¿Es posible? Debería ser. Yo voy a ser abogada. Yo voy a defender mis derechos de trabajadora del hogar, al menos, CUANDO SEA GRANDE. (Gisela, nacida en Lima, 11 años, 6° de educación primaria)