Cuadernos de A · 2020. 4. 22. · de la Mar, don Juan de Austria participó en la guerra de las...

A y a l aA y a l aC u a d e r n o s d e

ISSN 1576-2068 Dep. Legal M-10186-2000 Número 79 Julio-Septiembre 2019

REVISTA DE LA FEDERACIÓN ESPAÑOLA DE GENEALOGÍA Y HERÁLDICAY CIENCIAS HISTÓRICAS

Cuadernos de Ayala 79 - JUL/2019 [2]

Es bien conocida la institu-ción, varias veces centenaria, delMuy Noble, Antiguo e Ilustre Solarde Valdeosera, sito en la riojanasierra de los Cameros. El que, co-mo corresponde a una institucióndel Antiguo Régimen, se ha venidorigiendo hasta ahora por unas nor-mas tradicionales, basadas en laantigua legislación nobiliaria que,obvio es decirlo, concedían a loshombres una preferencia sobre las mujeres –porqueentonces se consideraban más valiosos aquellos ele-mentos mejor capacitados, por su fortaleza física, pa-ra hacer la guerra y para ocuparse de las tareas agrí-colas-. En todo caso, aunque no igualitarias, aquellasnormas sociales han pervivido en algunos ámbitosmás bien folclóricos –como lo es hoy, en muy granmedida, el nobiliario-, del mismo modo que el día deSanta Águeda las mujeres mandan en muchos pue-blos de España –sin que eso se considere desigualita-rio, por cierto-.

En tal contexto, algunas mujeres que se tie-nen por descendientes consanguíneas del Solar deValdeosera –doña María del Valle Mayoral Rivera, do-ña María del Pilar Sáenz Navajas, doña Marta y doñaLucía Fernández de Tejada y Aguado, doña RocíoBeltrán Onofre, doña Blanca Heredia Cabrero, doñaLuigina Heredia Spinoglio y doña Sofía Heredia Cam-pos-, han querido acabar con esa tradición secularhasta ahora respetada. Para ello, han solicitado su re-cibimiento en el Solar, y ante la negativa de este, hanrecabado la intervención de doña María José MartínArgudo, magistrada-juez del Juzgado de Primera Ins-tancia nº 3 de Logroño y su partido. Y en ese puntotambién han contado con la sorprendente colabora-ción de la actual directiva del propio Solar de Valdeo-sera ¡que se ha allanado a la demanda!.

La sentencia dictada el 13 de junio de 2019por dicha magistrada –que, según nos informan, el ve-rano antecedente a la presentación de la demandahabía visitado “in corpore” el Solar, en compañía devarias de las señoras y de varios de los señores invo-

lucrados-, ha venido a poner fin ala centenaria historia del Solar deValdeosera como entidad de tradi-ción nobiliaria.

Porque, seamos claros, es-ta es la nueva realidad en sus es-trictos términos nobílicos: el Solarde Valdeosera ya no puede consi-derarse una entidad de tradiciónnobiliaria, ni desde luego pueden

sus integrantes preciarse de ser hijodalgos o hijadal-gas, porque ya no lo serían solo por ser tales divise-ros, conforme al antiguo Derecho nobiliario –hoy, lasleyes vigentes no toleran otra institución nobiliaria quela Excma. Diputación Permanente y Consejo de laGrandeza de España y Títulos del Reino; ni tampocoadmiten siquiera la existencia de hidalgos e hidalgas-.

En cuanto a los fundamentos jurídicos, nos lla-ma la atención que la magistrada Martín Argudo hayacreído que las leyes de igualdad vigente pueden apli-carse a una asociación absolutamente privada. ¿Sig-nifica esto que también cree que todos los varonespueden y deben ser admitidos en aquellas numerosasasociaciones privadas reservadas a las mujeres yprohibidas a los ciudadanos varones?. Que las hay, ybien notorias. Por otra parte, condena en las costasjudiciales al Solar, a pesar de que este se ha allanado¿Y cómo es que la directiva del Solar lo consiente?.Todo esto resulta muy extraño.

En todo caso, los causantes de todo este la-mentable enredo no han sido las demandantes –quehan ejercido lo que han creído sus derechos, aunquesea a costa de liquidar la tradición de la institución enla que se integran-, ni siquiera la magistrada-juez sen-tenciadora –por parcial que algunos pueda parecer-,sino la junta de gobierno del Solar de Valdeosera, queda la impresión de que se ha puesto claramente enconnivencia con las señoras demandantes para aca-bar con sus propias tradiciones y para incumplir suspropias ordenanzas de 1579. Hasta el punto de queva a obligar a todos los diviseros al pago de las costasjudiciales.

Dr. Marqués de la Floresta

EDITORIAL

NUESTRA PORTADARetratos de los Reyes nuestros Señores y Real Familia, que honrraron esta ciudad de Barcelona en elmes de octubre de 1802... están perfilados en los blancos de este robusto y vigoroso árbol, en que sesimboliza la Monarquía Española... (grabado por José Coromina, según dibujo de Buenaventura

Planella, col. Vizconde de Ayala, Segovia)

UNA SENTENCIA QUE ACABA CON LA TRADICIÓNNOBILIARIA DEL SOLAR DE VALDEOSERA

Rezando por el al-ma de mi señor don Juande Austria, en la catedralde Namur, donde estánsus entrañas, hará ya másde treinta años, recordéuna medalla que ví en laHermandad de MarinerosVoluntarios de la Cruzada,donde acudía con ciertafrecuencia a su coqueto ybarato restaurante en laCal le Mayor de Madrid,por degustar una merluzaque jamás defraudaba. Lamedalla en cuestión con-memoraba el IV Centena-rio de la batalla de Lepan-to y quedé prendado, yaque reproducía el contornodel perf i l de uno de mispersonajes históricos favo-ritos. Pronto me olvidé delasunto hasta que reciente-mente, luego de publicaruna foto de la medalla enmi Facebook , un amigome preguntó qué corpora-ción otorga la dicha distin-ción. No supe contestarle.

Conviene recordar quelas entrañas de don Juan es-tán en Namur por voluntadde Alejandro Farnesio quiendispuso que se retirara el co-razón al cadáver y lo deposi-tasen en una urna para quefuese guardado en la cate-dral de Namur. Cuando se hi-zo la nueva catedral el cora-zón del príncipe fue depo-sitado tras el altar mayor, ba-jo su lápida original, la quemandara hacer Farnesio. El

cuerpo del héroe, troceadoen tres partes, fue trasla-dado a España para repo-sar en el panteón de Infan-tes del Monasterio delEscorial. La batalla que llenó de glo-

ria al príncipe y a las armasespañolas, se libró el 7 deoctubre de 1571 en el golfode Lepanto, donde los turcosse habían refugiado. Las ga-leras bajo el mando directode don Juan se situaban enla parte central de la forma-ción.La actuación de don Juan

de Austria fue decisiva parala victoria de la Liga Santa(formada por la MonarquíaHispánica, los Estados Ponti-ficios, la República de Vene-cia, la Orden de Malta, la Re-pública de Génova y el Du-cado de Saboya) por su re-suelta búsqueda de la victo-ria y su valentía personal en

este tipo de batallas, mezcla denaval y terrestre pues una vezabordadas las naves se lucha-ba cuerpo a cuerpo. Era donJuan un joven arrojado y va-liente hasta la temeridad. Su le-gítima ambición por ser recono-cido como hijo del Rey DonCarlos le impulsaba a demos-trar un coraje fuera de lo co-mún. Para la Sublime Puerta,Lepanto significó la pérdida desu armada, siendo la peor de-rrota sufrida por el sultán des-de la batalla de Angora (1402),y una amenaza inmediata deinvasión de sus territorios. Para


DE RE PREMIAL

LA MEDALLA DE LEPANTOpor el Dr. D. José María de Montells y Galán, del Colegio Heráldico de España y de las Indias

Retrato y armas del Seremo. SeñorDon Juan de Austria


España y las repúblicas italianas, alejó el peligroque representaba el turco en el MediterráneoOccidental. Además, se produjo una gananciainmediata en forma de botín, obteniéndose unimpresionante número de galeras. Con ellas, laflota española se hizo la más poderosa del Me-diterráneo, si bienno pudo explotaresa ventaja debidoa la escasez de re-meros. En efecto,don Juan de Aus-tria liberó a los cris-tianos que rema-ban en las gale-ras turcas (se cal-cula que eran unos15.000) y, además,a los galeotes delas galeras espa-ñolas que actuaronlealmente en elcombate. Comoconsecuencia desus éxitos bélicosen 1572, una dele-gación de albane-ses ofreció a donJuan el trono delpaís de las águilas.Lo consultó con suhermano Don Feli-pe II, quien le indi-có que declinase laoferta, pero que si-guiera mantenien-do relaciones amistosas con quienes tan gentil-mente le habían ofrecido la corona del paísbalcánico, por aquellas calendas sometido al yu-go otomano. No puedo ocultar que tengo anti-gua simpatía por Albania, quizá porque una fá-bula familiar nos hace descendientes deSkanderberg, su caudillo medieval.

La mas grande ocasión que vieron los si-glos, en el decir del más grande escritor en len-gua española de todos los tiempos no fue la úni-ca batalla que ganase don Juan de Austria. Hijoilegítimo de Carlos I y de doña Bárbara deBlomberg, nació en Ratisbona en 1545 y fallecióen las cercanías de Namur en 1578. Nombrado

por su hermano Don Felipe II, capitán generalde la Mar, don Juan de Austria participó en laguerra de las Alpujarras contra los sublevadosmoriscos como comandante supremo de lasfuerzas del Rey. Después de Lepanto, la cam-paña de Túnez, que a punto estuvo de convertir-

le en rey de aquelpaís norteafricano,y más tarde Italia,para recalar final-mente en los Paí-ses Bajos. En Flan-des, una fall idaoperación de he-morroides y el de-bil i tamiento cau-sado por el t i fusacabaron con suvida. Repaso labiografía de un gi-gante en unas líne-as. No gusto de im-portunar al lectorcon una multitud dedatos archisabidos.

No veo queen ningún sitio sediga que don Juan,como yo, se aficio-nó a la degustaciónde las sardinas co-cinadas a la vene-ciana, esto es enun escabeche concebolla, un toquedulce de pasas y

piñones, algo de vino blanco y vinagre. Eso ten-go yo en común con el héroe, mi querencia porla sardina. Ahora que la quimioterapia me man-tiene postrado y alopécico, y no puedo catar elpescado azul, echo de menos la manduca de lasardina y me veo, barbado y optimista, con miestoque en el cinto, compartiendo, en la cubiertade una galera de la Serenísima, un sarde en sa-or por nombrarlas a la manera italiana, con elmismísimo don Juan, como buenos y antiguoscamaradas. Un general de Don Felipe II y un al-férez de Don Juan Carlos I haciéndose compa-ñía. No está nada mal.

Lápida sepulcral del Serenísimo Señor Don Juan de Austria

en la catedral de Namur


Pensando que la medalla era discernidapor alguna asociación o institución privada, cualno sería mi sorpresa cuando me topo con unadisposición oficial que autorizaba a lo jefes y ofi-ciales de la Armada que la tuviesen concedida allevar la distinción sobre el uniforme. Y al poco,descubro el siguiente decreto de creación:

MINISTERIO DE MARINADecreto 269/1971, de 11 de febrero, de creaciónde la Medalla conme-morativa IV Centenariode la Batalla de Lepan-to.El Decreto número dosmil novecientos veintio-cho/mil novecientos se-tenta, de ocho de octu-bre, otorgó carácteroficial y nacional a laconmemoración del IVCentenario de la Bata-lla de Lepanto, y, paradar mayor realce y so-lemnidad a los actosque hayan de celebrar-se con este motivo, seha estimado oportunocrear una medalla con-memorativa de la efe-méride.

En su virtud, apropuesta del Ministe-rio de Marina y previadeliberación del Conse-jo de Ministros en sureunión del día cincode febrero de mil nove-cientos setenta y uno,

DISPONGO:Artículo primero: se crea la Medalla conmemo-rativa del IV Centenario de la Batalla de Lepan-to.Artículo segundo: la Medalla en treinta y cincomilímetros de módulo, en oro y bronce, llevaráen el anverso el busto de Don Juan de Austria,idéntico al de la acuñada en mil quinientos se-tenta y uno, y al reverso la leyenda: “IV Cente-nario de la Batalla de Lepanto MCMLXXI”. Pen-

derá de una cinta azul celeste flanqueada de ro-jo y blanco.Artículo tercero: la Medalla de Oro se otorgará aSu Excelencia el Jefe del Estado, a su AltezaReal el Príncipe de España, y a la actual Mar-quesa de Santa Cruz, como descendiente delAlmirante más destacado de aquella jornada.Artículo cuarto: la Medalla de Bronce se otorga-rá por el Vicepresidente del Gobierno, directa-

mente o a propuestade la Junta Ejecutivade la conmemoracióndel IV Centenario de laBatalla de Lepanto.Así lo dispongo por elpresente Decreto, dadoen Madrid a once defebrero de mil nove-cientos setenta y uno.Su Excelencia el Jefedel Estado: FRANCIS-CO FRANCO.El Ministro de Mari-na,ADOLFO BATURO-NE COLOMBO

Por cierto, el decre-to no dice que el blan-co y el rojo de la cintason una alusión a loscolores de la Casa deAustria. Para mí, tengoque el Gobierno delGeneralísimo quiso,con la creación de lamedalla, rendir home-naje a un gran soldadode la Historia de Espa-

ña y recordar, al mismo tiempo, una victoria sal-vadora. En la época de la medalla del IV Cente-nario de Lepanto, no se grabaron muchasdistinciones conmemorativas, que yo recuerdeen 1966, la de la Semana Naval de Barcelona, yen 1968, la de la Semana Naval de Santander.

Pienso que se debería retomar esta cos-tumbre premial. Yo creo que cualquier recom-pensa que enaltezca nuestro pasado es algopositivo para una sociedad que ha perdido susseñas de identidad y va olvidando sus referen-

Medalla conmemorativa del IV Centenario de Lepanto:ordenanza y miniatura

cesión, le informé del asunto y barrunté su dis-gusto. Entre entendidos, se dice que el Estadosiempre es más exigente que cualquier entidadprivada, pese a que en ocasiones no acierte.

Mi amigo concluyó que nadie le concede-ría la medalla en cuestión y entristeció de pron-to.

Un caprichoso contumaz, como se pue-de deducir de tanta insistencia.

tes. Ya me gustaría a mí, que en la actualidadse acuñase una medalla conmemorativa de labatalla de las Navas de Tolosa, pero no pareceque se vaya a hacer, por si acaso se ofendierannuestros vecinos del norte de África.

Así que al amigo que quería saber quiéndiscernía la distinción, y me persiguió con suspreguntas hasta dejarme exhausto, con el pro-pósito (que le conozco bien) de solicitar su con-


(+34) 670 826 300 - [email protected]

J o s é M i g u e lP e c o s

Antiguo Maestro Mayor

de

Cejalvo

La medalla conmemorativa de la Batalla de Lepanto, grabada y acuñada por Giovanni Meloni en 1571,cuyo anverso se reutilizó en otras dos medallas de las campañas posteriores del príncipe,

y también sirvió de inspiración a la medalla española creada en 1971

Don Carlos I, ya Empera-dor del Sacro Imperio Ro-mano Germánico. Asíocurrió con dos expertosnavegantes, Fernão deMagallães (Oporto,1480-Mactán 1521) y elbachiller y cosmógrafoRui Falero (Covilhã,1455-Sevilla 1523) quese le presentaron paraexponerle su idea de queera posible llegar hastalas Indias –entonces nose sabía que las Occi-dentales eran las Améri-cas, y que las Orientalesestaban en el sur deAsia-, navegando haciaponiente, en vez de llegara ellas por la vía de Áfri-ca. Una ruta alternativa

que se conside-raba que podríaser más corta,más sencilla ymás ventajosaque la conocida yusada por losportugueses.

En todocaso se trataría –y así fue-, no deuna expedicióncolonizadora o deconquista, sinode una expedi-ción de explora-ción y dirigida

con preferencia a los fines comerciales y mer-cantiles.

Descubiertas lasIndias Occidentales porCristóbal Colón en 1492,la Corona castellana ini-ció un proceso de con-quista, colonización y ci-vilización de Américaque, un cuarto de siglodespués, apenas estabaen sus comienzos –el im-perio azteca, germen dela Nueva España, seríaconquistada solo enaquel 1519-. Naturalmen-te, los vecinos portugue-ses, que habían abiertomuchos decenios antesla navegación de las In-dias Orientales por la víade África, no veían conbuenos ojos las activida-des de los castellanos,que podían poneren peligro su mo-nopolio del valio-sísimo tráfico dela especiería.

En tal con-texto, y tal y co-mo le había ocu-rrido con Colónpocos años an-tes, las desave-nencias del mo-narca lusitanocon algunos desus capitanes yexploradores, fuecausa de que al-gunos de ellos pasasen al servicio del Rey deCastilla, que entonces no era otro que el joven


Retrato del Rey Don Carlos I, maestre de las ördenes de CAlatrava,Santiago y Alcántara, por Bernard van Orley

Abajo, el mapa de la travesía alrededor del mundoen sus dos etapas de Magallanes y de Elcano

CABALLEROS DE LAS ÓRDENES MILITARESEN LA PRIMERA CIRCUNNAVEGACIÓN DEL ORBE

(1519-1522)por el Dr. D. Alfonso de Ceballos-Escalera y Gila, Vizconde de Ayala

DE RE CABALLERESCA

De todo ello resultó la firma de unas ca-pitulaciones entre el monarca y sus nuevos va-sallos, firmadas en Valladolid el 22 de marzo de1518, entre cuyas cláusu-las se incluyeron para es-tos la veintena parte delas tierras descubiertas, yel título de adelantados ygobernadores de ellas,por juro de heredad. Amás de dos encomiendasde la Orden de Santiagopara Magallanes y Fale-ro, con una renta de125.000 maravedís anua-les sobre las de la Casade la Contratación sevilla-na. Y ambos entraron enposesión de los hábitos ylas encomiendas santia-guistas de inmediato.

La noticia de esteproyecto causó indigna-ción en Lisboa: ambosnavegantes fueron consi-derados traidores, e in-cluso el monarca portu-gués, Manuel I elAfortunado, pensó endarles muerte, y desde luego aprestó una flotapara que persiguiera y capturase la de Magalla-nes, frustrando le expedición castellana. De he-cho, la flota portuguesa llegó en su persecuciónhasta la desembocadura del río de la Plata, pe-ro no la alcanzó.

Como es sabido, gracias a los escritosdel italiano Pigafetta, del griego Francisco Alboy del propio Elcano, el caso es que la flota ex-pedicionaria al mando del comendador santia-guista Magallanes –, con 239 hombres a bordode cinco buques –las naos Trinidad, Victoria,San Antonio, Concepción y Santiago-, levó an-clas y zarpó desde Sevilla el 10 de agosto de1519, y desde Sanlúcar de Barrameda el 20 deseptiembre siguiente. El comendador Falero nose embarcó, a más de tener mala salud, por-que no quiso el Rey a dos portugueses al man-do.

Iba también a bordo, en calidad de so-

bresaliente o entretenido otro caballero arma-do: Antonio Pigafetta (c.1480-c.1534), italianooriginario de la ciudad veneciana de Vicenza, y

caballero de Rodas, esdecir de la Orden de SanJuan de Jerusalén, en-tonces establecida en laisla de Rodas –que losturcos conquistaron en1522, causando el pasode los sanjuanistas a laisla de Malta-. Pigafetta,con experiencia en geo-grafía y cartografía al ser-vicio de le república ve-neciana, fue uno de loscronistas de la expedi-ción, escribiendo su fa-mosa Relación del primerviaje alrededor del mun-do, en la que se muestramuy devoto de Magalla-nes y muy poco de Elca-no, al que no citó en sucrónica ni tan siquierauna vez, a pesar de quefue el causante del éxito–y, sobre todo, quien lesalvó la vida a Pigafetta-.Tras el tornaviaje, el ca-

ballero Pigafetta se halló en Valladolid para in-formar al Rey, pero desde allí pasó a Portugal,y en Lisboa informó de todo el viaje a Manuel I.Después viajó a Francia, en donde le recibió laReina, madre de Francisco I. Más tarde, entre1523 y 1524, viajó por las cortes de Mantua yVenecia, y se presentó a su gran maestre san-juanista.

Nada diremos, por conocido, de la derro-ta de la flota expedicionaria castellana a las Ca-narias y Cabo Verde, la travesía del Atlánticohasta la costa brasileña y el río de la Plata, elcruce del peligrosísimo estrecho entre el Atlán-tico y el Pacífico –desde entonces nombradoestrecho de Magallanes-, y la larga travesía porlas islas del Pacífico hasta las Marianas y lasFilipinas, para desde allí llegar a las Molucas,Timor, Java y Sumatra, las islas y costas de laanhelada especiería, a las que arribaron ya enel otoño de 1521. Mientras tanto, la flota expe-


Retrato de un caballero de San Juan, al que algu-nos han identificado como Antonio Pigafetta

(óleo de Girolamo da Carpi en elNiedersächsisches Landesmuseum de Hannover


dicionaria ya había perdi-do tres de las naves quepartieron desde España:la Santiago había naufra-gado en la Patagonia; laSan Antonio se había su-blevado en el estrecho yretornó a Sevilla; y laConcepción había sidoabandonada y quemadaen las Filipinas-.

La muerte de Ma-gallanes en la isla filipinade Mactán, combatiendoa los nativos, el 27 deabril de 1521, puso alfrente de lo que quedabade la flota expedicionariaa Juan Sebastián de El-cano, un experimentadomarino guipuzcoano, aquien sin duda alguna sedebe el éxito de toda laexpedición, es decir eltornaviaje navegandodesde el sur de Asia ha-cia el oriente, es decirpor la vía de África. Allíse separaron las dos na-ves restantes: Elcano,contraviniendo las órde-nes del Rey, se dirigió através del vasto océanoÍndico hacia el Cabo delas Tormentas, hoy llama-do de Buena Esperanza,al sur del continente afri-cano, para desde allí,bordeando la costa, vol-ver hasta la Península –mientras que la nao Tri-nidad, que estaba en muy mal estado, intentóvolver por el mismo camino, navegando haciael este, pero fue capturada por los portuguesesen las Molucas-.

El tornaviaje de Elcano, siete largos me-ses, no fue nada fácil, no solo por el desconoci-miento del vasto océano Índico, sino por el peli-gro del cabo de las Tormentas, y por laamenaza de los portugueses, que controlabancon sus fuertes y factorías toda la costa africa-

na. Así, cuando llegaron ala isla de Cabo Verde, losportugueses intentarontomar la nao, y hubieronde largar velas a toda pri-sa, dejando en tierra atrece de los hombres, yevolucionar con destrezapara evitar la persecuciónde los buques portugue-ses que los perseguían.

Finalmente, la naoVictoria arribó a Sanlúcarde Barrameda el sábado6 de septiembre de 1522y echó el ancla en Sevillael lunes 8, llevando a bor-do una riquísima carga deespecias –cuyo preciobastó para sufragar todoel viaje-, y a los dieciochosupervivientes, la mayorparte de ellos desnutridosy enfermos de escorbuto.

Merece la pena re-cordar sus nombres, puesnos dan una idea precisade las respectivas natura-lezas: Juan Sebastián deElcano, vasco de Gueta-ria, capitán; Francisco Al-bo, griego de Axio , piloto;Miguel de Rodas, griegode Rodas, piloto; Juan deAcurio, vasco de Bermeo,piloto; Antonio Lombardo(se trata de Pigafetta), ita-liano de Vicenza, sobre-saliente; Martín de Judici-

bus, italiano de Savona, marino; Hernando deBustamante, extremeño de Mérida, cirujano ybarbero; Nicolás el Griego, de Nauplia, marine-ro; Miguel Sánchez de Rodas, griego de Ro-das, marinero; Antonio Hernández Colmenero,de Ayamonte, marinero; Francisco Rodríguez,portugués de Sevilla, marinero; Juan Rodrí-guez, de Huelva, marinero; Diego Carmena,gallego de Bayona, marinero; Hans, alemán deAquisgrán, artillero; Juan de Arratia, vasco deBilbao, grumete; Vasco Gómez Gallego el por-

Retrato figurado de Fernando de Magallanes,comendador santiaguista

Abajo, un soberbio retrato figurado deJuan Sebastián de Elcano(óleo de Ignacio Zuloaga)


tugués, de Bayona, grumete; Juan de Santan-drés, o de Santander, montañés de Cueto, gru-mete; y Juan de Zubileta, vasco de Baracaldo,paje.

Pero, aunque másfamosos, no fueron esosdieciocho los únicos su-pervivientes de la tre-menda expedición. Losdoce hombres de la Vic-toria retenidos como pri-sioneros en Cabo Verde,que regresaron algunassemanas más tarde a Se-villa por la vía de Lisboa,fueron Martín Méndez,secretario de la flota; Pe-dro de Tolosa, despense-ro; Richard de Norman-die, carpintero; Roldán deArgote, artillero; maestrePedro, supernumerario;Juan Martín, supernume-rario; Simón de Burgos,preboste; Felipe Rodas,marinero; Gómez Hernández, marinero; Boca-cio Alonso, marinero; Pedro de Chindurza, ma-rinero; y Vasquito, grumete. Y los cinco supervi-vientes de la Trinidad, que habían emprendidouna ruta de regreso distinta desde las Molucas,también completaron la vuelta al mundo comoprisioneros de los portugueses, aunque no re-gresaron a España hasta 1525 o 1526: Gonza-lo Gómez de Espinosa, alguacil mayor de la flo-ta; Leone Pancaldo, italiano, piloto; JuanRodríguez el sordo, marinero; Ginés de Mafra,marinero; y Hans Vargue, alemán, artillero.

A partir del inicio de la expedición, los dí-as de sus protagonistas fueron breves: Maga-llanes murió en 1521, Elcano en 1526, y Piga-fetta en 1534. Solo el bachiller y comendadorFalero les sobrevivió algunos años más. Pues,furioso tras haber sido apartado de la expedi-ción, retornó a Portugal, en donde fue apresa-do, siendo libertado solo a instancia de las au-toridades castellanas –recordemos queMagallanes y Falero, al recibir el EstandarteReal en Triana, en 1519, prestaron juramento ypleito homenaje a la persona del Rey de Casti-lla, por lo que ya eran castellanos a todos los

efectos-. Desde entonces se estableció en Se-villa, a la colación e Santa María, e instó elmando de alguna otra expedición a Indias, que

no le fue confiada. Hacia1523 perdió la razón yquedó bajo la curaduríade su hermano Francis-co, y más tarde de la desu esposa Eva Alfonso; yen la capital hispalensefalleció, enajenado, en1543.

Nos llama la aten-ción, aun siendo como essabido este autor declara-damente portuguesista,que las actuales autorida-des portuguesas hayanreivindicado últimamentecomo portuguesa la ges-ta de la primera circunna-vegación del orbe, por elhecho de ser de origenportugués Magallanes:quien sin embargo fue ta-

chado de traidor por su soberano y sus coetá-neos. Siendo por el contrario lo más cierto, quela Corona portuguesa hizo todo lo que estuvoen su mano para evitar y frustrar aquella expe-dición.

En todo caso, lo que me interesa ahoraes destacar el hecho de que en la concepción ylos preparativos de la expedición tuvieron partedecisiva dos comendadores de la Orden deSantiago –Magallanes y Falero-; que buenaparte de la travesía se hizo al mando de unode esos comendadores santiaguistas –Magalla-nes-; y que a bordo viajó, y después relató todoel viaje, un caballero de la Orden de San Juan–Pigafetta-. Sin olvidar que el propio Elcano as-piró a vestir también el hábito santiaguista, sinobtenerlo, según afirman varios autores.

Creo que la historia y el papel de los ca-balleros de las Órdenes Militares en los descu-brimientos y las conquistas americanas y filipi-nas está aún por hacer, y me gustaría quesirvan estas líneas de acicate para que otrosautores más capacitados aborden esos asun-tos.

Desembarco en Sevilla de los supervivientes de laexpedición, en un bellísimo óleo de ElíasSalaverría (Museo Naval de Madrid)

Don Carlos Lemaur y Burriel fue nacidoen Montmirel, en la Champagne francesa, el 1º deenero de 1724, y murió en Madrid el 25 denoviembre de 1785 en su domicilio de la calle Silva12 -Antonio Meij ide supone que se suicidó,malinterpretando que en su partida de defuncióndice que murió sin testar ni poder recibir los santossacramentos, lo que únicamente acreditauna muerte súbita-. Fue enterrado en laiglesia parroquial de San Martin. Hijode Charles Antoine de Lemaur y deMarianne de Burriel, había llegadoa España en 1750, llamado pordon Zenón de Somodevil la yBengoechea, el gran Marqués dela Ensenada, por indicación delembajador español en París, donFrancisco Pignatelli.

Ingresó en el Cuerpo deIngenieros en la clase de ingenieroordinario y con el grado de capitán.En 1752 fue nombrado ingeniero jefedel Canal de Castilla. En 1754redactó una Relación históricadel proyecto de los Canales deCastilla y de la ejecución del deCampos hasta hoy. Al añosiguiente fue destinado a Galicia para ocuparse dela revisión del sistema defensivo de los puertos ycostas. Trabajó en el puerto y en las baterías deCorcubión, encargándosele el proyecto del caminoreal de Castilla a Galicia. En 1757 se incorporó a laReal Sociedad Militar de Matemáticas de Madrid,en la que elaboró un Tratado de Dinámica. En 1762escribió un Discurso sobre la astronomía ,elaborado con ocasión del eclipse de sol del añoanterior, y escribió también un tratado sobre laconstrucción y sobre mecánica. En 1764 diseñó lacapilla mayor de la catedral de Lugo, trabajó en elpuerto de Las Cascas, en La Coruña, y descubrió ydescribió la vía romana de Astorga a Bergidum. Alaño siguiente presentó un plan para la colonizaciónde los juncales de la ría de Betanzos. Participó enlas deliberaciones de la Real Academia deAgricultura de Galicia, en la que presentó discursossobre el cultivo de los montes y el aprovecha-miento de la turba descubierta en Orzén. En 1767trazó los planos del Seminario (palacio de Rajoy),hoy Ayuntamiento de Santiago de Compostela, y

dirigió los trabajos en el camino real desde Astorgahacia Lugo y La Coruña. Entre 1771 y 1785 trabajóen el camino de Antequera a Málaga, y en elcamino real a Andalucía por Jaén, poniendo enservicio 65 kilómetros de ruta. Realizó informessobre el Canal de Murcia y trabajó en las obras dela ciudadela de Pamplona. Ingresó en la Real

Sociedad Económica Matritense de Amigosdel País en diciembre de 1776, parti-

cipando como juez de máquinas,herramientas y nuevas invenciones.

Fue comisionado para el examende proyectos sobre escuelas yfábricas que se remitieron a laclase de Artes y Oficios. En losúltimos años de su vida se dedicóal proyecto del Canal navegabledesde el río Guadarrama alocéano, pasando por Madrid y

Sierra Morena, con un total de 771kilómetros, y 800 metros de

desnivel. En el proyecto le ayudaronsus cuatro hijos.

Se casó con doña Juana dela Muraire y Colart, nacida enBarcelona y muerta en Madrid el7 de abril de 1787, ya viuda;

siendo hija de los señores Charles de la Muraire yde Anne de Colart. Y fueron padres de seis hijos:

1) Don Carlos Benito Raimundo Lemaur de laMuraire, nacido en Corcubión (La Coruña) el 23 demarzo de 1756, y muerto en Madrid el 10 denoviembre de 1825. Fue mariscal de campo de losReales Ejércitos, combatiendo en Menorca,Gibraltar, Orán, Portugal y guerra de la Inde-pendencia. Se casó en Madrid el 13 de octubre de1794 con doña Micaela de Hita y Hervás. Padresde:

A) Doña Francisca de Lemaur y de Hita.2) Don Manuel Victor Ramón de Lemaur de laMuraire, nacido en Barcelona el 23 de diciembrede 1759 y muerto en Olivenza, Badajoz, el 19 demayo de 1811. Se casó con doña María Luisa deLlordella y Lana, nacida en Barcelona el 3 dediciembre de 1780 y muerta en Barcelona el 31 demarzo de 1803, enterrada en el cementerio deNuestra Señora del Carmen, hija de don RamónLlordel y Torrebruna y de doña María Gertrudis de


DON CARLOS LEMAUR Y SU DESCENDENCIApor Dª Astrid Antuña y Lloréns, de la Académie Internationale d’Héraldique

DE RE PREMIAL

Retrato de don Carlos Lemaurpor Francisco de Goya

Lana y Piferrer. Padres de:

A) Doña María GertrudisLemaur y Llordella ,nacida en Barcelona el 9de diciembre de 1802 ymuerta en Barcelona el16 de febrero de 1868.Casada con don Juan deMolíns y Cabanyes ,nacido en Barcelona el 22de agosto de 1793 ymuerto en Ceuta el 10 dediciembre de 1859, en-terrado en el cementeriode Santa Catalina, hijo dedon Pablo de Molíns deCayla y de doña Gertrudisde Cabanyes de Rovira.Teniente de Arti l lería,residió en Mahón un año, trasladándosedespués a Cataluña. Luchó en la guerracarlista de los siete años. Padres de:

a) Don Emilio de Molins y Lemaur,nacido en Mahón, Menorca el 3 defebrero de 1824 y muerto en Madridel 27 de marzo de 1889. Ingresócomo cadete del Colegio de Artilleríade Madrid y Segovia el 1º de octubrede 1837. El 25 de enero de 1843ascendió a teniente y fue destinadoal 1er Regimiento a pie. Obtuvo lacruz de la Orden Militar de SanFernando de 1ª clase por su brillantecomportamiento en el sit io deGerona, formando parte de ladivisión del general Prim. En 1843prestó sus servicios en el 1erDepartamento y su Brigada deMontaña. En 1847 pasó con subatería a Palma de Mallorca, dondeejerció de ayudante y secretario delcomandante general de las islasBaleares. El 16 de febrero de 1848pasó al Real Colegio de Artillería deSegovia y el 18 de marzo de 1850ascendió a capitán y mandó la 2ªbatería de la Brigada de Cadetes.Entre octubre de 1857 y agosto de1858 estuvo destinado comoinspector de la Fábrica de Pólvorasde Manresa. En enero de 1860 se lenombró comandante, y en abril de1863, coronel. El 23 de enero de1878 fue ascendido a mariscal de

campo. En 1883 fue nombradosegundo cabo de la CapitaníaGeneral de Filipinas, director dela Sociedad Económica deAmigos del País y presidente dela Junta encargada de llevar acabo la defensa de Manila. En1889 se le designó comosegundo cabo de la CapitaníaGeneral de Aragón y gobernadormilitar de Zaragoza. También fueacadémico de la Real de BellasArtes de San Fernando y vocalde la Comisión de Monumentoshistóricos y artísticos de laProvincia de Segovia.

b) Don Federico de Molíns yLemaur, nacido en Barcelona el19 de mayo de 1829 y muerto en

Málaga el 10 de mayo de 1898. Secasó en la parroquial del EspírituSanto de La Habana el 22 de juliode 1857 con su prima doñaGabriela Ángela Santa Cruz yFranchi-Alfaro, hija de don Fran-cisco Javier Beltrán de Santa Cruz yCastilla y de su primera mujer, doñaÁngela Franchi-Alfaro y Lemaur.

c) Don Elviro de Molíns y Lemaur,nacido en Barcelona el 17 de oc-tubre de 1833 y muerto en la en-tonces reunificada y española SantoDomingo (actual República Domi-nicana), el 26 de junio de 1863.

d) Don Arturo de Molíns y Lemaur,nacido en Madrid el 7 de abril de1840 y muerto en Barcelona el 1 deenero de 1887. Se casó con doñaCarlota de Sentmenat y Sáenz deRamírez , nacida en Palma deMallorca, islas Baleares, el 10 denoviembre de 1846, hija de donPedro Carlos de Sentmenat y deRiquer, VII Marqués de Castell-dosríus, y de doña Manuela Sáenzde Ramírez y Socies. Padres de:

a’) Don Carlos de Molins yde Sentmenat, nacido enBarcelona el 15 de agosto de1870 y muerto en Barcelonael 2 de septiembre de 1936.Se casó con doña ConsueloMas de Roda y Borrás ,


Capitán de Ingenieros coetáneo

Madrid el 14 de agosto de 1928.Su bastón de mando, conempuñadura de oro y susarmerías, se conserva en elMuseo Mil i tar de Canarias(inventario 27.141).

f) Doña Adelaida de Molíns yLemaur.g) Doña Carolina de Molíns yLemaur.h) Doña Cecilia de Molíns yLemaur.i) Doña Concepción de Molíns yLemaur.j) Doña Elisa de Molíns yLemaur.k) Doña Otilia de Molíns yLemaur.

l) Doña Palmira de Molíns yLemaur.

3) Don Félix Ramón Manuel Lemaur de laMuraire, nacido en Bembibre del Bierzo (León) el30 de agosto de 1767 y muerto en La Habana el 22de junio de 1841. Fue también ingeniero militar. Secasó (fue primer marido) en la parroquia deGuadalupe de La Habana el 22 de junio de 1825con doña María Mercedes de Urrutia y Escanés,bautizada en La Habana, parroquia del SantoÁngel, el 5 de marzo de 1801, y muerta en LaHabana el 15 de marzo de 1867.

4) Don Francisco Ángel Lemaur de la Muraire,nacido en Bembibre (León) en 1769 y muerto en LaHabana el 13 de febrero de 1857. Fue mariscal decampo de los Reales Ejércitos, directorsubinspector del Real Cuerpo de Ingenieros,gobernador político y militar de las Cuatro Villas enla isla de Cuba, gran cruz laureada de la Real yMilitar Orden de San Fernando por su valor comovirrey interino de la Nueva España, gobernador dela plaza de Veracruz y defensor de la fortaleza deSan Juan de Ulúa en dicho puerto (1822-1825),gran cruz de la Real y Militar Orden de SanHermenegildo. Se casó en la catedral de LaHabana el 20 de febrero de 1813, con su sobrinadoña Juana María de la Cinta Ramona Marinade Franchi-Alfaro y Lemaur(1), nacida en la villade La Orotava el 5 de febrero de 1787 y muerta enLa Habana el 26 de enero de 1765; hija de donFrancisco Tomás Franchi-Alfaro y Franchi-Alfaro yde doña Isidora Lemaur y de la Muraire. Padres de:

nacida enBarcelona el2 de octubredel 1872 ymuerta allí el20 de dici-embre de1965. Padresde:

a’‘) Don Car-los de Mo-líns de Mas,nacido enBarcelona en1898 ymuerto al díasiguiente.

b’‘) DoñaConsuelo deMolíns deMas, nacida en Barcelona en1900 y muerta en Barcelonaen 1904.

c’‘) Doña Gloria de Molínsde Mas, nacida en Barcelonaen 1899 y muerta enBarcelona en 1902.

d’‘) Don Juan José deMolíns y de Mas, nacido enBarcelona en 1903 y muertoen Barcelona en 1922.

e’‘) Don Pedro de Molíns yde Mas, nacido en Barcelonaen 1908 y muerto enBarcelona en 1990.

f’‘) Don Carlos de Molíns yde Mas, nacido en Barcelonaen 1910 y muerto en Madriden 1985.

g’‘) Don Luis de Molíns y deMas, nacido en Barcelona en1913 y muerto en Barcelonaen 1996.

b’) Doña Concepción deMolíns y de Sentmenat,nacida en Manila el 8 dediciembre de 1883.

e) Don Wenceslao de Molíns yLemaur , teniente general delEjército, nacido en Barcelona el 25de septiembre de 1843 y muerto en


Oficial superior de Ingenierosdurante el reinado carolino

(ambos ya mencio-nados antes).

C) Don FranciscoTomás de Franchi-Alfaro y Lemaur, na-cido en La Habana en1791 y muerto allí el

23 de agosto de 1820, susrestos fueron depositados

en la parroquial de Guadalupe. Casado enLa Habana el 25 de abril de 1815 con doñaMariana Joaquina Cepero y Cepero,nacida en 1798 y muerta en 1870, hija dedon Francisco Cepero López Arcos y dedoña María Cayetana Cepero y Cepero.Padres de:

a) Doña María Luisa Franchi-Alfaro y Cepero, nacida en LaHabana en 1816. Se casó en laparroquial del Espíritu Santo de laHabana el 26 de noviembre de 1836con don Juan de Herrera Dávila deAlvear , teniente de Caballeríadestinado de La Habana, hijo de donJuan Herrera Dávila y de doñaRudesinda de Alvear FernándezLara.

b) Don Francisco Tomás deFranchi-Alfaro y Cepero, nacido enLa Habana el 9 de marzo de 1817 ymuerto en La Habana el 24 deagosto de 1874, sus restos fuerondepositados en la parroquial deGuadalupe. Fue caballero maes-trante de la Real de Ronda. Se casóen la parroquia de Guadalupe de LaHabana el 24 de diciembre de 1845con doña María de los ÁngelesSotolongo y Zayas-Bazán, nacido en1822, hija de don Antonio Sotolongoy Ramírez de Estenoz y de doñaMaría Teresa de Zayas-Bazán yPedros. Padres de:

a’) Doña Teresa de Franchi-Alfaro Sotolongo y Zayas-Bazán.b’) Don Francisco Tomásde Franchi-Alfaro Soto-longo y Zayas-Bazán, na-cido en 1846. Casado en ElCerro, La Habana, el 25 denoviembre de 1871, condoña María Catalina Na-

A) Doña Ma-nuela FeliciaLemaur Fran-ch i -A l f a ro .Casada condon AntonioAguilera yTamayo.B)Don FranciscoJosé Lemaur y Franchi-Alfaro. Casadocon doña Joaquina Antonia Santa Cruz yVelasco, muerta en Madrid el 16 de enerode 1910, hija de don Venancio de SantaCruz y Castilla y de doña Joaquina Velasco.Padres de:

a) Doña Rosa María Lemaur ySanta Cruz , casada con donAntonio de Zayas.

5) Doña Isidora Lemaur de la Muraire, nacida enAstorga (León) en 1762 y muerta en La Habana en1825. Se casó en Madrid, en la iglesia de SanMartín, el 19 de abril de 1786 con don Franciscode Franchi-Alfaro y Franchi-Alfaro, III Marquésde la Real Proclamación, nacido en La Habana el30 de noviembre de 1761, testó allí el 27 defebrero de 1824 ante José Salinas, y muerto en LaHabana el 16 de julio de 1828; enterrado en lacatedral de La Habana. Hijo de doña Juana deFranchi-Alfaro y Justiniani-Ossorio, nacida en LaHabana el 20 de diciembre de 1743 y de don JoséFrancisco de Franchi-Alfaro y Molina(2), nacido enLa Orotava en 1733. Residió en La Orotava,después fue a Cuba y allí fue regidor del Ayun-tamiento de La Habana. Caballero maestrante dela Real de Ronda. Padres de:

A) Doña Juana María de la Cinta RamonaMarina de Franchi-Alfaro y Lemaur (yamencionada antes).

B) Doña Ángela María de la CintaFranchi-Alfaro y Lemaur, nacida en la villade la Orotava el 3 de noviembre de 1788.Se casó en la catedral de San Cristóbal deLa Habana el 2 de octubre de 1828 condon Francisco Javier Beltrán de SantaCruz y Castilla, maestrante de la RealMaestranza de Ronda, hijo de don AgustínAntonio Beltrán de Santa Cruz y Castilla, yde doña Josefa Simona Castilla y Quijano.Padres de:

a) Doña Gabriela Ángela SantaCruz y Franchi-Alfaro. Casada condon Federico de Molins y Lemaur


El Palacio de Rajoy, en Santiago de Compostela

varro y Zuaznávar, nacidaen 1851, hija de don RafaelNavarro García y de doñaCatalina Zuaznávar y Bas-terrechea. Padres de:

a’‘) Don Franciscode Franchi-Alfaro yNavarro, nacido enLa Habana el 23 denoviembre de 1884.Casado con doñaGraciela Maraglianoy Miquel, hija de donArístides MaraglianoFumero y de doñaEloísa Miquel Villar.

b’‘) Don Arcadio deFranchi-Alfaro y Na-varro.c’ ‘) Don Rafael deFranchi-Alfaro yNavarro. Casó condoña Amelia Labor-de y Codezo, hija dedon Alfredo Laborde yPerera y de doñaAmelia Codezo Vina-geras. Padres de:

a’‘ ’) DoñaAmelia Fran-chi-Alfaro yLaborde.

c’) Don Antonio deF r a n c h i - A l f a r oSotolongo y Zayas-Bazán, nacido en LaHabana en 1847. Secasó en la parroquia

de Guadalupe de LaHabana el 12 de abrilde 1873 con doñaMaría ConcepciónVinageras y Poncede León, hija de donFrancisco Vinagerasy Morales, y de doñaTeresa Ponce de Le-ón y Heredero.

d’) Don Leopoldo deF r a n c h i - A l f a r oSotolongo y Zayas-Bazán, nacido en1851. Casado en laparroquia de Gua-dalupe de La Habanael 30 de abril de 1875con doña MatildePonce de León yMacías, hija de donJosé Eustaquio Pon-ce de León y Ma-chado y de doña Ma-ría Josefa MacíasBeitia.

e’) Don Alejandro deF r a n c h i - A l f a r oSotolongo y Zayas-Bazán, nacido en1857 y muerto en1860.

D) Doña María Josefa Franchi-Alfaro y Lemaur, nacido en LaHabana el 18 de marzo de 1793 ymuerta en Guadalupe el 29 de juliode 1841. Casada en la catedral deSan Cristóbal de La Habana, el 26de enero de 1820, con don Joaquín


El Alto del Manzanaldibujado por William Bradford en 1809

Roque Jacinto Beltrán de SantaCruz y Castilla Cabeza de Vaca,nacido en 1788 y muerto en LaHabana el 5 de junio de 1833, hijode don Agustín Antonio Beltrán deSanta Cruz y Castilla, y de doñaJosefa Simona Castilla y Quijano.Padres de:

a) Doña Isidora de SantaCruz y Franchi-Alfaro, na-cida en La Habana el 31 deoctubre de 1820 y muerta enLa Habana el 24 de agostode 1887. Casada en La Ha-bana el 29 de diciembre de1843 con don Pedro Fer-nando de Morales y Ar-menteros.b) Don Joaquín FranciscoBeltrán de Santa Cruz yFranchi-Alfaro, nacido enLa Habana el 4 de marzo de1827. Se casó en Palmillas(Matanzas, Cuba) el 16 dejunio de 1851 con su primahermana doña María Teresade Beltrán de Santa Cruz yFigueras, V Condesa deSan Juan de Jaruco, IIICondesa de Santa Cruz deMopox , nacida en SantaAna, (Matanzas, Cuba) el 9de octubre de 1831 y muertaen La Habana el 3 de febrerode 1895. Hija de don Fran-cisco Javier de Santa Cruz yMontalvo, IV Conde de SanJuan de Jaruco, II Condes deSanta Cruz de Mopox y de

su segunda mujer, doñaMaría del Car-men deFigueras y Mora. Padres de:

a’) Doña Teresa deSanta Cruz y SantaCruz, muerta en LaHabana en 1891.

b‘) Doña María deSanta Cruz y SantaCruz . Casada condon Abdón Trémolsy Amat.c’) Don JoaquínBeltrán de SantaCruz y Santa Cruz,nacido en Palmillas(Matanzas, Cuba) el4 de mayo de 1852.Casado en La Haba-na el 23 de marzo de1882 con doña Maríade las Mercedes dela Cova y de losSantos, hija de donFrancisco de Paulade la Cova y Soto-longo, y de doña Ma-ría de los Dolores delos Santos y Díaz.

d’) Don Jorge Eu-genio Beltrán deSanta Cruz y SantaCruz, nacido en 1857y muerto en 1914. Secasó con doña Espe-ranza Mallén y delPrado Sotomayor yGonzález, nacida en


Compuertas del Canal de Castilla

Casado en La Ha-bana el 2 de di-ciembre de 1915 condoña María del Carmen Goicoechea yDurañona, nacida enSomorrostro (Vizcaya), hija de don Fermín Goicoechea y Peiret y de doña Mercedes Durañona y Otamendi. Padres de:

a’‘ ’) Don Pedro deSanta Cruz y Goicoechea.b’‘’) Don FranciscoJavier de Santa Cruzy Goicoechea, VIIConde de San Juande Jaruco, V Condede Santa Cruz deMopox , nacido en1917 y muerto en1976.

c’‘’) Don Joaquín deSanta Cruz y Goicoechea, VII Conde deSan Juan de Jaruco,VI Conde de SantaCruz de Mopox, nacido en 1918.

d’‘’) Doña María delas Mercedes deSanta Cruz y Goicoechea . Casadacon don N. Echevarría . Padres dedon Pedro

La Habana el 7 dediciembre de 1866,hija de don FelicianoMallén y Sotomayor,y de doña María Jo-sefa Amalia del Pradoy González deOsorio. Padres de:

a’‘) Don Fran-ciscoJavier Beltrán deSanta Cruz y Mallén,VI Conde de SanJuan de Jaruco,Conde de SantaCruz de Mopox,Grande de España,historiador y genealogista, presidente dehonor del InstitutoCubano de Genealogía y Heráldica,miembro de la RealAcademia de la Historia y de las Academias de la Historia deCuba, Venezuela,Ecuador y RepúblicaDominicana, consejero del Tribunal Supremo y del Colegiode Armas de CostaRica, delegado paraCuba de la SoberanaOrden de San Juande Jerusalén, nacidoen La Habana el 7 deagosto de 1889 ymuerto en La Habanaen agosto de 1954.


Vista del Canal de Castilla

Estados Unidos desde 1845. Es elpadre de la Patria cubana , yfomentaba la independencia deCuba desde Nueva York. Casadocon doña María Ignacia Soriano yPérez-Abreu, hija d don e PedroIgnacio Soriano y Casanova, y dedoña María Josefa Pérez y de laCruz. Padres de:

a) Don Francisco deFranchi-Alfaro y Soriano,muerto en La Habana el 5 demarzo de 1864.

b) Don Antonio de Franchi-Alfaro y Soriano, nacido enLa Habana el 22 de febrerode 1838. Casado en laparroquia de Guadalupe deLa Habana el 21 de no-viembre de 1866 con suprima doña Rosa MaríaPuig y Franchi-Alfaro, hijade don Manuel Puig y Amigó,y de doña Rosa de Franchi-Alfaro y Vargas. Padres de:

a’) Doña AmeliaFranchi-Alfaro yPuig.b’) Doña MaríaManuela Franchi-Alfaro y Puig. Ca-sada con don AníbalHerrera y Luis, na-cido en Güira deMelena (Cuba), mé-dico, hi jo de donAníbal Herrera y dedoña Josefa de Luis.Padres de:

a’‘) Doña Antonia MaríaHerrera yFranchi -A l -faro (quecontinúa másadelante).

c’) Don Rogelio deFranchi-Alfaro yPuig. Casado condoña Isabel Re-gueira y Custadoy,hija de don Francisco

Echevarría de SantaCruz, Conde deSanta Cruz deMopox ; y donFrancisco JavierEchevarría de SantaCruz, IX Conde deSan Juan de Jaruco.b’ ‘) Don EugenioJoaquín de SantaCruz y Mallén,nacido en La Habanael 19 de noviembrede 1896 y muerto el 6de diciembresiguiente.

c) Doña María Josefa deSanta Cruz y Franchi-Alfaro. Casada en LaHabana el 30 de abri l de1853 con don MiguelAntonio de Céspedes yBarrero, nacido en SanSalvador de Bayamo (Cuba).

E) Doña Isidora Franchi-Alfaro yLemaur, nacida en 1795 y muertaen 1863. Casóse en la catedral deLa Habana el 17 de enero de 1821,con su primo don Tomás Domingode Sotolongo y Franchi-Alfaro,subteniente del Regimiento deMilicias de esa plaza, hijo de donTomás Domingo de Sotolongo yGonzález de Carvajal, y de doñaMariana de Franchi-Alfaro y Franchi-Alfaro.

F) Don Antonio de Franchi-Alfaroy Lemaur, nacido en La Habana en1803 y muerto en Nueva York en1866. El 9 de agosto de 1816ingresó como cadete en el ColegioMilitar de Segovia. Estudió luego enla Real Pontificia Universidad deSan Jerónimo de La Habana y en laUniversidad de Alcalá, y fueabogado de los Reales Consejos,humanista, matemático, catedráticode griego en la Universidad de laHabana, impartió clases en elColumbia College de Nueva York.Fue acusado por el f iscal de laComisión Militar por el delito detraición, y permaneció exiliado en



Regueira y Borrás, yde doña Isabel Custadoy Peñalver. Pa-dres de:

a’‘) Doña JosefaFranchi-Alfaro yRegueira.b’ ‘) Don RogelioFranchi-Alfaro y Regueira.c’ ‘) Don José An-tonio Franchi-Alfaroy Regueira, nacidoen La Habana el 26de septiembre de1897. Se casó con suprima doña AntoniaMaría Herrera y Franchi-Alfaro, hi ja dedon Aníbal Herrera yLuis, y de doña MaríaManuela de Franchi-Alfaro y Puig. Padresde:

a’‘ ’) Don José An-tonio Franchi-AlfaroHerrera.b’ ‘ ’) Don IgnacioFranchi-Alfaro He-rrera.c’‘’) Don FernandoFranchi-Alfaro He-rrera.d’) Don LucianoFranchi-Alfaro yPuig. Se casó condoña Emilia MaríaCharún. Padres de:a’‘ ’) Doña RosaFranchi-Alfaro y Charún.b’ ‘ ’) Doña VirginiaFranchi-Alfaro y Charún.c’ ‘ ’) Doña HildaFranchi-Alfaro y Charún.d’ ‘ ’) Doña MaríaFranchi-Alfaro y Charún.

e’ ‘ ’) Don EmilioFranchi-Alfaro y Charún.f ’ ‘ ’) Don LucianoFranchi-Alfaro y Charún.g’‘’) Don Noel Franchi-Alfaro y Charún.

G) Don José María deFranchi-Alfaro y Lemaur,muerto en La Habana el 22de noviembre de 1832.Soltero.

6) Doña Antonia Josefa Pascuala Lemaur de laMuraire, nacida en La Coruña el 17 de enero de1765.

N O T A S1) Familia noble española que vivió en la isla deCuba durante el periodo de la Capitanía Generalde Cuba. La familia Franchi provenía de una delas veintiocho de la nobleza de Génova, figurandosus miembros en el Libro d’Oro. En el siglo XVllegaron a Cádiz, en el XVI pasaron a las islasCanarias y en el XVIII a la de Cuba.

2) Hijo de don Francisco Tomás de Franchi-Alfaro yPonte, II Marqués de la Real Proclamación (pordisposición testamentaria de su concuñado donGonzalo Recio de Oquendo y Hoces, fallecido sinsucesión), capitán del Ejército, comandante delBaluarte de San Pablo durante el sitio de la plazapor los ingleses, en 1762.

Retrato figurado dedon Carlos Lemaur

y Burriel


DOCUMENTA

Dos interesantes fotografías del banquete del Instituto Internacional de Genealogía yHeráldica, que tuvo lugar en Madrid el 5 de marzo de 1955. Entre los asistentes,

los Infantes Don Fernando y Don Luis de Baviera, el Marqués de Villarreal de Álava,don Luis Coronel de Palma, don Vicente de Cadenas, don Luis Larios,

el Marqués de Siete Iglesias, fray Justo Pérez de Urbel...


Mi padre, segundogénitode los Marqueses de Mirandade Ebro, fue bautizado enMadrid en el otoño de 1923,con el nombre de Antonio–infrecuente en mi familia-, porque le tuvo en la pilaun tío abuelo suyo: donAntonio González Echarte,célebre ingeniero a quiense deben muchas obras deimportancia, y sobre todo ladel Metropolitano Alfonso XIIIde Madrid, inaugurado precisa-mente por el monarca delmismo nombre el 19 deoctubre de 1919, va a ha-cer ahora un siglo. Y tannotable efemérides me mueve a recordar aquísu egregia figura como bien se merece. Loharé apoyándome en los recuerdos familia-res, en la biografía que le dedicó Magín Coe-llo en el año 2000, y en la reciente semblanzade Fernando Sáenz Ridruejo en el DiccionarioBiográfico Español de la Real Academia de laHistoria.

Don Antonio Mario Echarte –los apelli-dos fueron cambiando a lo largo de su vida-,vino al mundo en el Madrid isabelino, el 19 denoviembre de 1864 en la calle de Preciados23. Pero lo hizo en unas circunstancias fami-liares incómodas, ya que fue hijo natural de lahabanera doña Dolores Echarte y Balmaseda,entonces soltera. Le tuvo en la pila bautismalun convecino del mismo edificio: don Mario dela Escosura y Morrogh, quien, según la cons-tante tradición familiar, era el padre de la cria-tura neonata. Político y financiero, entre 1841y 1864 fue sucesivamente secretario de los

Gobiernos Civiles de Alicante yde Valencia, y gobernador civil

de las provincias de Lugo,Murcia, Oviedo, Granada,Cádiz y Sevilla; despuésfue ordenador general depagos del Ministerio deFomento, director generalde Correos, y directivo delBanco de Madrid y del

Banco de Economías. Ade-más, era vástago de una ilus-

tre familia, con grandes relacio-nes y parentesco en la sociedad y

en la política. Más tarde,ya casada su madre en1894 con don GonzaloGonzález Jiménez –viudo

de doña Josefa Capra de Rivera-, este señorle reconoció como su hijo, aun sin serlo. Entodo caso, esta circunstancia familiar, queconllevaba complicaciones administrativas ysociales en la España de la época, debió deinfluir en el carácter de don Félix, haciéndolereservado, discreto, y dueño de una gran mo-destia.

Hacia 1875, madre e hijos –ya habíanacido Manuel- se instalaron en la casa de lacalle Goya en su cruce con la de Serrano. De-bió de estudiar en el célebre Real Colegio deSan Antón (Escuelas Pías), lugar habitual deformación de las élites nobiliarias y burguesasde Madrid. Y en 1884 logró ingresar en la Es-cuela de Ingenieros de Caminos, sita enton-ces en la calle del Turco (hoy de Prim), en laque cursó sus estudios con regularidad y dela que salió con el título de ingeniero en lapromoción de 1889. Tras hacer sus prácticasen la División de los Ferrocarriles del Norte,

DE RE BIOGRAFICA

EL INGENIERO DON ANTONIO GONZÁLEZ ECHARTE(1864-1942)

EN EL CENTENARIO DEL METRO DE MADRIDpor el Dr. Marqués de la Floresta, de la Real Academia de la Mar

Don Antonio González Echartehacia 1890


ingresó al fin en el Cuerpo de Ingenieros deCaminos, Canales y Puertos estatal, como in-geniero de segunda clase y destino en Ciu-dad Real. Tres años des-pués, en1892, pasó a laJefatura de Obras Públi-cas de Guadalajara, yamás cerca de Madrid.

Y es que ya paraentonces se había pues-to en relaciones con laseñorita doña MaríaCristina Álvarez de Sola,con la que se casó enMadrid el 4 de mayo de1893. Ella era hija –natu-ral- del célebre arquitectodon Lorenzo Álvarez Ca-pra (1848-1901), autorde la iglesia de la Palo-ma, de la vieja plaza detoros mudéjar, y del ma-nicomio de Ciempozue-los, a más de numerariode la Real de San Fernando. Y por cierto her-mana de mi bisabuela doña Blanca Álvarezde Sola, casada en 1894 con don Rafael deCeballos-Escalera y Meléndez de Ayones, IIMarqués de Miranda de Ebro –ambos apadri-naron a los contrayentes-: de ahí el parentes-co de tío abuelo a sobrino nieto que unió a mipadre el VII Vizconde de Ayala con su padrinoel ingeniero cuya trayectoria vital glosamos.Tengo que decir también que el hijo mayor deese matrimonio, mi abuelo paterno don Rafaelde Ceballos-Escalera y Álvarez de Sola, IIIMarqués de Miranda de Ebro y VI Vizcondede Ayala, a más de coronel de Artillería fue undistinguido ingeniero industrial que trabajó du-rante muchos años en Mengemor S.A. a lasombra de su tío materno don Antonio Gonzá-lez Echarte, al que respetaba e incluso adora-ba: tengo por seguro de que por eso le pidióque fuera el padrino de mi padre, y a este lepusieron su nombre.

Don Antonio y doña Cristina, ya casa-dos, pusieron casa en Madrid, calle de Serra-no 17, en la que nacerían sus seis hijos, ape-

llidados González Echarte Sola o GonzálezSola, y llamados respectivamente María Cris-tina (1894-d.1955), María Dolores (1895-

1985), Antonio (1897-1933), José (1902-1973),Juan Manuel (1908) yMaría del Perpetuo So-corro (1909-1991).

Mientras tanto,prosiguió la carrera pro-fesional del ingeniero,que se había ido intere-sando por la electricidad,una especialización in-frecuente pero muy ne-cesaria en la España dela época, sobre cuyosmisterios fue publicandodiversos artículos en laRevista de Obras Públi-cas. En 1896, Echartefue nombrado vocal dela Junta Consultiva delCuerpo y retornó por fin

a Madrid. Y muy poco después conoció aquien sería, a más de amigo, el gran patroci-nador de muchos de sus proyectos: don Joa-quín de Arteaga y Echagüe, entonces Mar-qués de Santillana y más tarde Duque delInfantado (1870-1947). Un aristócrata atípico,por cuanto fue sobre todo un notable empren-dedor y empresario, que supo mover inclusoal joven Rey Don Alfonso XIII en muchas desus iniciativas. Santillana conoció a Echarteen 1897, y enseguida se entendieron bien: elDuque encargó luego al ingeniero una plantahidráulica de producción eléctrica, y las líneasnecesarias para trasladar esa energía hastaMadrid. Y González Echarte, asociado a suscolegas Carlos Mendoza y Miguel Otamendi,planificó -en contra de la opinión, bastanteunánime- de otros colegas y de los políticos-,la canalización y embalse de los ríos Manza-nares y Guadarrama en la zona de ColmenarViejo, hasta formar el hoy llamado embalse deSantillana –en realidad, el actual data delFranquismo, el primitivo se halla sumergidoen ese-, del que se obtendrían 15.000 voltios

Don Antonio González Echartehacia 1905


de potencia eléctrica, y más caudal de aguapara Madrid, a más de sanear la zona, y todocon una inversión de siete millones de pese-tas, a cargo de la Hidráulica Santillana socie-dad anónima –de la que Echarte quedó comoconsejero y gerente desde 1905-.

El gran éxito empresarial de lacompañía Hidráulica Santillana, que no ven-día luz a los particulares, teniendo por clienteúnico al Real Palacio madrileño, hizo de donAntonio el gran especialista en obras hidráuli-cas y eléctricas de la España de comienzosde siglo.

Y fuepor entonces,1 9 0 1 - 1 9 0 3 ,cuando el in-geniero dió aluz otro de susgrandes pro-yectos: la fun-dación de laprimera com-pañía consul-tora y de ser-vicios deingeniería queha existido enEspaña, y quealcanzó granéxito y famadurante el rei-nado alfonsinoy el periodorepubl icano:Mengemor s.a., nombre acróstico de los ape-llidos de los tres socios fundadores CarlosMendoza Sáenz de Argandoña, Antonio Gon-zález Echarte y Alfredo Moreno Osorio. Lacompañía ofrecía sus servicios técnicos desaneamiento, traída de aguas y electrificacióna las administraciones públicas, ministerios,diputaciones y ayuntamientos, y se centró enlas obras hidráulicas en Madrid y Andalucía,sobre los ríos Guadalimar, Jándula y Guadal-quivir. Mengemor llegó a ser una de las gran-des compañías de producción de energíaeléctrica, sobre todo en Andalucía. Pero des-

pués de la guerra civil tuvo dificultades econó-micas debido a varios años de pertinaz se-quía, que le hizo difícil cubrir la demanda desus clientes; razón por la que terminó fusio-nándose en 1951 por la Compañía Sevillanade Electricidad –la cual pasó a unirse en 1996a la entonces estatal Endesa-.

Con tal compañía acometerán Echartey sus socios muchos proyectos hidráulicos delMarqués de Santillana, y de otros promotorescomo los Condes de Serramagna y de Orgaz.Así los pantanos y saltos del Algar, el Vado delas Ollas, río Guadalimar, río Jándula, en Al-

mería, en Ol-vera, en De-nia, enMengíbar (Ja-én), en todo elrío Guadalqui-vir, en la cana-lización del ríoManzanares,etcétera... Eincluso diseñóun túnel sus-pendido bajoel estrecho deGibraltar, paracomunicar Eu-ropa con elnorte de África– e n t o n c e sprotectoradoe s p a ñ o l - .También parti-

cipó en los proyectos del Marqués de Urquijoy sus socios en la Hidroeléctrica Española, ysu salto del Bolarque (Guadalajara).

Y, mientras tanto, intervino en los tra-bajos legislativos regulatorios de la energíaeléctrica, y visitó las fábricas de electricidadsuizas en 1901. Mayor trascendencia tuvo suviaje, con Otamendi, a los Estados Unidos deAmérica en 1904, cruzando el Atlántico a bor-do del lujoso Deutschland, como delegadosespañoles al Congreso Internacional de Elec-tricidad reunido en St. Louis, en donde simul-táneamente tuvo lugar la Gran Exposición

La torre neogótica y la presa del viejo embalse de Santillanaen Manzanares el Real (Madrid)


Universal. Un viaje de dos meses recorriendoNueva York, Boston, Montreal, el Niágara, De-troit, Chicago, San Luis, Indianápolis, Colum-bia, Washington, Baltimore y Filadelfia.

Fue nombrado en 1908 profesor deElectrotecnia de la Escuela de Ingenieros deCaminos, permitiéndosele compaginar su ac-tividad al servicio del Estado con la particularde los negocios de Mengemor s.a. y de Santi-llana –siempre que no interviniese en los trá-mites administrativos de dichos negocios-. Allíserá docente hasta 1913, en que pasó desti-nado a la Comisión de los Ferrocarriles Pire-naicos.

En 1912viajó a Fran-cia, a Inglate-rra y a Suizapara investigary adquirir co-noc im ien tossobre los avances de la apli-cación de laenergía eléctri-ca. Y de eseviaje, sobre to-do de sus es-tancias en Londres y en Pa-rís, surgirá laidea de cons-truir un ferro-carril eléctricosubterráneo en Madrid. Cuyo anteproyecto re-dactó entonces.

Entre 1913 y 1915 desarrolló Echarteel proyecto del Metropolitano Alfonso XIII, através de Mengemor s.a., y en 1917 lo publi-có, junto a sus socios Mendoza y Otamendi,en la Revista de Obras Públicas. Ya para en-tonces contaban con el capital necesario, enbuena parte aportado por el propio monarca.Las obras de la Línea 1 se iniciaron ensegui-da, avanzaron a buen ritmo, y por fin en la tar-de del 19 de octubre de 1919 se inauguró elMetro de Madrid por el Rey, al que acompa-ñaron todas las autoridades y fuerzas vivas

de la capital, a más de González Echarte,Mendoza y Otamendi. Aún más importante:fue Echarte el creador de una revolucionariaseguridad social para todos los trabajadoresdel Metro... que, agradecidos, le salvaron lavida y le protegieron, a él y a otros de los so-cios fundadores, durante la guerra civil.

En 1919, Echarte solicitó la reincorpo-ración al Cuerpo, y se le asignó el proyectodel nuevo ferrocarril de Madrid a Algeciras. Yformó parte de la comisión encargada de re-dactar un plan y una normativa de la Red Na-cional de Distribución Eléctrica, causa de in-

n u m e r a b l e scontroversias.Por fin, la lle-gada al poderdel general Pri-mo de Rivera,permitió quellegasen a tér-mino muchosde los viejosproyectos dedon Antonio.Por entonces,siempre aso-ciado al Duquedel Infantado,participó con laCompañía In-mobiliaria Me-tropolitana enla urbanizacióndel barrio de

Tetuán de las Victoria –por eso tienen allí ca-lles a su nombre, tanto don Antonio como suhijo homónimo y su sobrino Rafael Ceballos-Escalera-.

Justamente cuando se produjo el golpede Estado republicano de abril de 1931, donAntonio alcanzaba la edad de jubilación en suCuerpo, en el que ostentaba ya la categoríade consejero inspector general de ingenierosde caminos, canales y puertos. Y en 1936abandonó la dirección de la Hidráulica Santi-llana. Las turbulencias de aquel periodo repu-blicano, y buena parte de la guerra civil que le

Una estación del madrileño Metropolitano Añlfonso XIIIpoco después de su inauguración en 1919


siguió, las pasó don Antonio González Echar-te en su casa de Madrid, calle de Serrano 49esquina a la de Lista, actual de Ortega y Gas-set. Amenazada su vida y la de su familia porlas milicias frente-populistas –a pesarde que era un libe-ral regeneracionis-ta, ni de derechasni de izquierdas-,pudo en 1938 salirde España por Va-lencia, bajo la pro-tección del embaja-dor de Panamá,pasando a estable-cerse en San Juande Luz hasta queconcluyó la contien-da. Inmediatamenteregresó don Anto-nio a Madrid, pararetomar su labor di-rectiva en el Metroy ocuparse en la re-construcción de losestragos causadospor la guerra enmuchos lugares.

Los años ha-bían ido pasando, yla familia creciendo.En 1924 su hija Ma-ría Dolores se casó con el médico don Pablode Sala. En 1927, su hijo José celebró su ma-trimonio con doña María Victoria Contreras yCeballos, Marquesa de Torrelavega. En 1934su hija mayor Cristina se casó con don Anto-nio Larios. En 1935 lo hizo su hija pequeña,Socorro, con el médico burgalés don Francis-co Martín Rodríguez, II Conde de Martín Mo-reno. Y Juan Manuel, el más alegre de sus hi-jos, se emparejó con la cupletista Lola GarcíaNaranjo, con la que acabaría casándose.Pronto llegaron los nietos, seis. Y también al-gunas desgracias, como el suicido en 1933de su hijo mayor, Antonio. Alegrías y desgra-cias que se acompasaban en el hotelito con

jardín que se ha hecho construir en Mirafloresde la Sierra, bonito edificio que aún existe.

Precisamente al regresar de aquel refu-gio tranquilo, a últi-ma hora de la tardedel domingo 21 dejunio de 1942, sedesplomó mientrasse descalzaba ensu habitación de sucasa de Serrano49, alcanzándolesúbitamente lamuerte.

De aquellacabeza habían sur-gido durante mediosiglo tantas ideas ytantos proyectos, yalgunos de estoscambiaron notable-mente –a mejor-las vidas cotidianasde sus coetáneosen muchos lugaresde toda España, eincluso las de loshijos y los nietos yhasta los biznietosde estos.

N O T A SLa más completa biografía del personaje es lade Magín COELLO, El Fantasma del Metro deMadrid, Excmo. y muy olvidado Sr. Don Anto-nio González Echarte (Madrid, 2000). Tam-bién es útil la semblanza de Fernando SÁEZNRIDRUEJO en el Diccionario Biográfico Espa-ñol (Real Academia de la Historia).Sobre la Compañía Anónima Mengemor, de-be consultarse el artículo de Antonio MiguelBERNAL, “Ingenieros-empresarios en el de-sarrollo del sector eléctrico español: Menge-mor, 1904-1951”, en la Revista de Historia In-dustrial, 3 (1993), págs. 93-126.

Don Antonio González Echarteartífice del Metro de Madriden un retrato fechado en 1924(col. Vizconde de Ayala, Segovia)


REVISTA DE LIBROS


Igor Sosa Mayor, EL NOBLEATRIBULADO. NOBLEZA Y TE-OLOGÍA MORAL EN LA CASTI-LLA MODERNA (1550-1650).Madrid, Marcial Pons, 2018.ISBN 978-84-166622-5-8. 462páginas. Un interesante estudiosobre las dimensiones moralesque, a la luz de la teología moralimperante, condicionaban las de-cisiones de los nobles castella-nos de aquel periodo, respectode su trayectoria vital, su hacien-da y la administración de sus se-ñoríos. Una materia, la de la con-ciencia nobiliaria y su fuerointerno, muy poco tratado por lahistoriografía nobiliarista, y queSosa aborda desde una fuenteinsólita y muy poco conocida: lade los pareceres teológicos emiti-dos a instancia de parte. Lo hacea lo largo de siete capítulos y unepílogo, titulados Teología moral:conciencia, duda y probabilismo;Nobles, confesores y confesión;Pareceres teológicos: formas,emisores, transmisión; Los reco-vecos morales de la hacienda no-biliaria: deudas, salarios y limos-nas; Oficios públicos, beneficioseclesiásticos y conciencia del se-ñor; Confesionalización de losseñoríos: pecados públicos, fue-ros y conciencia del señor; Teo-logía moral, señores, vasallos yconciencia del señor; y El nobleatribulado: el universo moral deun grupo en transición. Estudionovedoso e interesante, y tam-bién bien escrito (MF).

Vicenta María Márquez de la Pla-ta Ferrándiz, Marquesa de CasaReal, DAMAS ILUSTRES EN LAHISTORIA DE ESPAÑA. Madrid,Casiopea, 2018. ISBN 978-84-949354-0-4. El libro recoge lasbiografías de cincuenta mujeresque han intervenido, de un modou otro, en la historia de España.Mujeres que se esforzaron en serellas mismas y desarrollar suscapacidades en un mundo dehombres, en una época en lasque solo se las reconocía comoindividuos en el ámbito del hogar,como esposas, madres y educa-doras. Un libro de historia, unacrónica en clave femenina, conmedio centenar de damas queinspiraron con sus logros y suprotagonismo en un mundo hostildominado por el hombre. Entreellas encontramos escritoras,dramaturgas, pintoras, mecenas,monjas, místicas, aventureras,soldados, almirantes, pensadorasy damas ilustradas, precursorasdel feminismo hodierno (LCE).Yvan Loskoutoff, HÉRALDIQUEET PAPAUTÉ, Presses universi-taires de Rouen et du Havre,2019. ISBN 979-10-24013183.280 páginas con ilustraciones. LaIglesia adoptó pronto la moda deluso de escudos de armas, sobretodo a partir del pontificado deBonifacio VIII(1294-1303), y enesta obra se estudia su difusióndurante la Edad Media, tanto enRoma como en Avignon, comoen Rodas, y también las conce-siones armeras concedias por lospontífices para añadir la tiara ylas llaves. Y se continua durantela época del Renacimiento, através de los documentos del Ar-chivo Secreto Vaticano, con bel-los ejemplares de concesionesotorgadas por los sucesivospontífices, desde Sixto IV (1471-1484) a Sixto V (1585-1590). Cu-riosamente, el autor maneja tam-bién como fuentes los panfletossatíricos luteranos y protestantes,

a veces muy escatológicos. lasarquitecturas efímeras durante laprocesión inaugural del pontifica-do, la possessio, hasta los fune-rales papales. Obra ciertamentenovedosa e importante (MF).Ana Isabel Fernández Salvadory Concepción Ferrero Maeso,PLEITOS DE HIDALGUÍA QUESE CONSERVAN EN EL AR-CHIVO DE LA REAL CHANCI-LLERÍA DE VALLADOLID. EX-TRACTOS DE LOS EXPE-DIENTES. SIGLO XVI. REINA-DO DE CARLOS I, primera par-te (1517-1542), Madrid, Hidal-guía, 2018; y también ClaraAlmagro Vidal y José Luis Fer-nández Valdivieso, PLEITOS DEHIDALGUÍA QUE SE CONSER-VAN EN EL ARCHIVO DE LAREAL CHANCILLERÍA DE GRANADA. EXTRACTOS DE LOSEXPEDIENTES. SIGLO XVI.REINADO DE CARLOS I, se-gunda parte (1537-1556), Ma-drid, Hidalguía, 2019. Dos nue-vas entregas de la utilísima ymagna obra sobre los procesosde hidalguía en nuestros dosmás altos tribunales de la Casti-lla moderna -las Reales Chanci-llerías de Valladolid y de Grana-da-, iniciada en vida del lloradodon Vicente de Cadenas, secre-tario general que fue de la bene-mérita Asociación de Hidalgos.Una obra extensa, a cuyo mane-jo no contribuye precisamente elfraccionamiento por reinados, ni

REVISTA DE LIBROS


menos aún el fraccionamientopor periodos arbitrarios dentro decada reinado, ni mucho menos elfraccionamiento en varios volú-menes de cada uno de esos pe-riodos: un fallo de concepto parauna obra de referencia. Por otraparte, que el director de la obra,alto cargo de la Asociación, seautopresente como autor de lamisma –cuando es sabido que eltrabajo de campo lo hacen otrosempleados por la Asociación, aveces con subvenciones públi-cas-, no dice bien del prestigioacadémico que algunos de susamigos le atribuyen (FdeA).Juan Carlos Elorza Guinea, AR-MAS REALES EN LA PROVIN-CIA DE BURGOS (de Isabel Ide Castila a Isabel II de Espa-ña). Madrid, Hidalguía, 2019.ISBN 978-84-948410-1-9. 204páginas. El autor, doctor en His-toria y en Arqueología Cristiana,ha localizado en la actual provin-cia de Burgos hasta cien labrasepigráficas con las armerías delos sucesivos Reyes de España–desde Isabel I la Católica hastaIsabel II-, y las ha descrito y estu-diado por su orden cronológico -por los respectivos reinados-. Untrabajo meritorio, que ha mereci-do el VII Premio Hidalgos de Es-paña sobre Heráldia, Genealogíay Nobiliaria (MF).Roberto Vanucci, L’ARALDICANELLA CHIESA CATTOLICAALLA LUCE DELLA LEGISLA-ZIONE CANONICA. ORIGINI,

USI, LEGISLAZIONE. GammaroEdizioni, 2018. ISBN 978-88-994153-5-8. 348 páginas. Un es-tudio actualizado de las normas ylos usos heráldicos en la IglesiaCatólica, desde el siglo XIII a laactualidad, incluyendo no solo alclero, sino también a las órdenese instituciones religiosas. Primervolumen impreso de los variosestudios que el Dr. Vanucci hadedicado al tema, está distribuidoen seis capítulos, respectivamen-te dedicados a a Heráldica y susgeneralidades; el uso de sellos yemblemas heráldicos en la Igle-sia; las leyes heráldicas en la le-gislación canónica; los símbolose insignias de la jerarquía ecle-siástica; la adquisición y la pérdi-da de los símbolos e insigniaseclesiásticas; y las aplicacionesheráldicas de la jerarquía. Variosapéndices documentales y legis-lativos, y una extensa bibliogra-fía, completan la obra, por demásinteresante (MF).VV.AA., LA NOBLEZA EN LA LI-TERATURA DEL SIGLO DEORO. Sevilla, Real Maestranzade Caballería de Sevilla, 2019.ISBN978-84-943766-8-6. 172 pá-ginas, con ilustraciones en blan-co y negro. El volumen recogelos textos de las conferencias delciclo sobre La Nobleza en la lite-ratura del Siglo de Oro, coordina-do por el catedrático D. RamónMaría Serrera y organizado por laReal Maestranza sevillana y laFundación Cultural de la Nobleza

Española. Que son las de JeanCanavaggio, La nobleza en elQuijote; Pedro M. Piñero Ramí-rez, La nobleza en el romancerodurante el Siglo de Oro; y Roge-lio Reyes Cano, La nobleza en elteatro español del Siglo de Oro.Es un volumen tan cuidado comointeresante (MF).Enrique Ucieda y Somoza, VAS-CO PILLADO DE LUACES, DE-FENSOR DE LA CORUÑA. SUDESCENDENCIA CON SUS CA-SAS HISTÓRICAS. LA Coruña2017 (edición del autor). 212 pá-ginas, con numerosas ilustracio-nes a todo color. Un interesanteestudio de historia familiar, debi-do a la pluma de un autor experi-mentado y ya reconocido por lacalidad de sus escritos, alto fun-cionario del Estado. Vasco Pilla-do de Luaces fue un hidalgo gal-lego que defendió La Coruña delataque inglés de 1589 y que ob-tuvo algunos nombramientos ycargos, y que debió fallecer en1599. Su hijo fundó mayorazgoen 1625 -al que se agregaronmás tarde otros vínculos-. Uciedaestudia acuciosamente su trayec-toria vital, y sus genealogíasascendente y descendente -has-ta don Luis Espada y Guntín, mi-nistro de Don Alfonso XIII, y losSomoza, los Tovar y los Blanco-Rajoy-, haciendo especial men-ción de las casas y familias quese fueron uniendo a la troncal.Un trabajo acucioso y bien docu-mentado (MF).

REVISTA DE LIBROS

PRO PHALARIS, 19 (2019/1). In-cluye las aportaciones de HumbertoNuno de OLIVEIRA, IconographicMemoirs: Rose Bonheur, Aka MarieRosalie Bonheur (1822-1889); Hum-berto Nuno de OLIVEIRA y Dirk HU-BRICH, Portuguese distinguishedwith the highest decorations of theGerman Democratic Republic; ÉricMaria TRIPNAUX-MONIN, The “mili-tary badge” of the order of Christ, aFrench invention?.ARMORIA, 8 (mayo 2019). Con lostextos de Armand de FLUVIÀ ES-CORSA, Els Meus Vendrell: de Lliçàde Vall a Sentmenat; Beatriz LÓPEZy Jordi MESTRES, La rama gijone-sa del linaje maliayés De la Meana.Parte III: genealogía descendentedel progenitor del linaje, GutierreFernández de la Meana; Nùria RAS-PALL ROVIROSA, Els Rovirosad’Olèrdola, Sant Pere Molanta, Mojai Vilafranca del Penedès; LeticiaDARNA GALOBART, La heráldicaen las sepulturas de la iglesia de laMerced; Pere F. PUIGDERRAJOLSJARQUE, Monestir de Sant Jeronide la Murtra: heràldica i inscripcions;Ramón BARTOLÍ SALA, Els Seguerde Torroella de Montgrí; Santiago deLLOBET MASACHS, Actes positiusde noblesa a Catalunya: els paresde 12 fills vius; Manuel GÜELL y Pa-blo SÁRRAGA, Els Vila de Vespella;y Els Llegat, noblesa pretesa.THE COURT HISTORIAN, 23(2018), dedicado a The SpanishHabsburg Court during the Reign ofCarlos II (1665–1700), integra lostrabajos de Silvia Z. MITCHELL,The Spanish Habsburg Court duringthe Reign of Carlos II (1665–1700),y también Women and ChildrenFirst: Court Ceremonial during Car-

los II’s Minority, 1665-1675; KoldoTRÁPAGA MONCHET, Members ofDon Juan’s Household and the Poli-tics of Carlos II’s Court during theEarly Years of his Minority (1665–1669); Ezequiel BORGOGNONI,The Royal Household of Marie-Louise of Orleans, 1679-1689: TheStruggle over Executive Offices; yLuis RIBOT, Carlos II: A Reign underRevision.NOBILTÀ, 150-151 (mayo-agosto2019). Con un editorial titulado Sololo Stato può tutelare le eredità incor-poree delle Famiglie Storiche, y lostextos de Vincenzo ALFANO, Il Con-te di Caserta fra genealogia ematemática, un caso di studio.Quanti antenati aveva davvero?; yNiccolò GUASCONI DI VILLAME-NA, L’identità nazionale napoletanae l’avento di Carlo di Borbone.LA GACETILLA DE HIDALGOS,558 (primavera 2019). RafaelPORTELL PASAMONTE, Doña Ma-ría Diega Desmaissieres y Sevillano,IV Duquesa de Sevillano; y LuisVALERO DE BERNA BÉ, MAR-QUÉS DE CASA REAL, Heráldica yNobleza de Sicilia.TOLETUM, 2018/3. La Real Acade-mia de Bellas Artes y CienciasHistóricas de Toledo nos trae textosde Miguel Ángel GÓMEZ VOZME-DIANO, Los orígenes del señorío deTorrijos y la creación del estado delas nueve villas; y Julio LONGO-BARDO CARRILLO, Breve sem-blanza de la vida y obra de Alonsode Covarrubias.MEDIEVALISMO, 29 (2019). Con elartículo de Vicent GARCÍA EDO,Los orígenes de la Casa de Urrea:Linaje y patrimonio en los reinos deAragón y Valencia (siglos XII-XIII).CHRONICA NOVA, 42 (2016). Larevista de historia moderna de laUniversidad de Granada nos pre-senta las colaboraciones de Este-fanía FERRER DEL RÍO, El primerenterramiento del I Marqués delCenete, Rodrigo Díaz de Vivar yMendoza, en el Convento de la San-tísima Trinidad de Valencia; MaríaAmparo LÓPEZ ARANDIA, En tierrade señores. Los Ponce de León y elcondado de Bailén en la Edad Mo-

derna; y y María José PÉREZ ÁL-VAREZ, Caridad y proyección socialde la nobleza en la edad moderna:el hospital de la Piedad de Be-navente.IL MONDO DEL CAVALIERE, 74(abril-junio 2019). Dedica su editoriala Le Associazione rievocativi di or-ganismo estinti, al que siguen lostextos de Tommaso CHERUBINI,L’Ordine del Moreto e l’Accademiadi San Luca; Alessandro SCAN-DOLA, L’Ordine di Danilo I e la RealCasa del Montenegro; y MariaLoredana PINOTTI, La Real Maes-tranza de Caballería de La Habana.REALES SITIOS, 204 (2015). Conel artículo de Matilde MIQUELJUAN, Reliquias sagradas y enter-ramientos regios: la capilla de laSanta Cruz de la catedral de Toledo.ARMAS Y CUERPOS, 142 (2019).Con el texto de Antonio MANZANOLAHOZ, El escudo de España:¿dónde está Extremadura?.BANDERAS, 152 (septiembre2019). Entre los trabajos incluidosen este número,los titulados Las ór-denes militares medievales; La ban-dera del ejército libertador del Perú;La Paleta del rey Narmer; y Lasbanderas del fuerte de Buenos Airesde 1835 a 1852.CUADERNOS JOVELLANISTAS,13 (2019). De su contenido desta-camos los artículos de José MaríaLÓPEZ DE ZUAZO ALGAR, Jove-llanos y el monasterio de monjassantiaguistas de Sancti Spiritus deSalamanca; y Lara PLÁ MONTERO,Isabel de Farnesio y los límites delpoder en la monarquía hispánica delsiglo XVIII: la transgresión de unareina consorte.

REVISTA DE REVISTAS


NOMBRAMIENTOS ENEL COLLEGE OF ARMSBRITÁNICO

Por cartas patentesdel 12 de junio de 2019,la Reina Isabel II hanombrado su persevanteRouge Dragon a AdamSimon Tuck (master en

Artes y en Diseño Gráfico), en la plaza que estabavacante desde la promoción de Clive EdwinAlexander Cheesman al oficio de heraldo Richmonden 2010. Y el 5 de julio siguiente, la Reina Isabel IIha designado como su heraldo Windsor a JohnMichael Allen-Petrie, hasta ahora persevante RougeCroix, en la vacante por la jubilación de WilliamGeorge Hunt.

90 AÑOS DEL INSTITUTO PORTUGUÉS DEHERÁLDICA

El 1º de julio de 2019, en el palacio lisboetade los Condes de Óbidos, se ha celebrado la sesiónconmemorativa de los primeros 90 años desde lafundación del Instituto Português de Heráldica, a laque asistieron representaciones de la Academia deCencias, la Asociación de los Arqueólogos Por-tuguesas, la Sección de Genealogía, Heráldica yFalerística de la Sociedade de Geografía de Lisboa,la Asociación Portuguesa de Genealogía, y laAcademia Portuguesa de Ex-Libris. Entre los ilus-tres participantes, vimos allí a nuestros buenos ami-gos el Prof. Dr. D. Antonio de Sousa Lara, D.Lourenço Correia de Matos, Dr. D. Victor Escuderode Campos, el arquitecto D. Segismundo RamiresPinto, la Dra. Dª Ana Cristina Martins, el ingenieroD. António Mattos e Silva, el mayor D. Sérgio AvelarDuarte y D. Rui Amaral Leitão. Reciba el Institutonuestro homenaje de gratitud, de amistad y de ad-miración por su larga y fructífera vida cultural.

LOS MAESTRANTES DECASTILLA ASISTEN ALPALIO DE SIENA

El Palio de Siena esuna carrera de caballosque tiene lugar en la cén-trica plaza del Campo yque enfrenta a los barrios(contrade) de la ciudad deSiena dos veces al año: el2 de julio, el Palio deProvenzano, en honor dela Virgen homónima; y el16 de agosto, el Palio dela Asunción. Una dele-gación de la Maestranza

de Caballería de Castilla presidida por el Conde deGiraldeli, ha sido invitada a presenciar el Palio deProvenzano desde el magnífico balcón de PalacioChigi Zondadari, huéspedes de los Marqueses Mis-ciattelli, herederos del más hermoso palacio de lahistórica plaza. Al finalizar la carrera, se sirvió unacena en los espléndidos salones, bajo la miradasevera del Papa Alejandro VII Chigi, en un busto re-alizado por Gianlorenzo Bernini. Este año, el Paliode Provenzano lo ha ganado la contrada de la Ji-rafa.

LA ASAMBLEA NACIONALDE LA REPÚBLICA DELECUADOR CONDECORAAL DOCTOR VIZCONDE DEAYALALa Asamblea Nacional de laRepública del Ecuador, enatención a la notable trayecto-ria del Dr. Alfonso de Cebal-los-Escalera y Gila, caracteri-zada por su amplia dispo-sición de servicio y trabajo,que ha proyectado una impor-tante carrera en la academia

y ha profundizado en estudios temáticos sobre rela-ciones internacionales, geopolítica, historia y dere-cho, transmitiendo sus con ocimientos y determi-nantes aportes con sapiencia y visión, parafortalecer los procesos de cambio que precisa la so-ciedad, ponderando sus aptitudes y auténtica vo-cación de servicio en función del bien común, haacordado, con decreto legislativo del 12 de marzode 2019, otorgarle y distinguirle con la Condeco-ración de la Asamblea Nacional de la República delEcuador Dr. Vicente Rocafuerte. Vaya nuestra en-horabuena a nuestro Director por esta presea.

GENTES DE BIEN



ENTREGA DEL XVI PREMIO ALMIRANTE CE-BALLOS EN SANTANDER

El martes 2 de julio, durante un actosolemne celebrado en Santander, en el salón de ac-tos de la Fundación Botín, que ha presidido por elDr. Alfonso de Ceballos-Escalera y Gila, Vizcondede Ayala, se ha entregado el XVI Premio AlmiranteDiego Gutiérrez de Ceballos al capitán de fragatade la Armada y capitán de la Marina Mercante donLuis Jar Torre, reputado historiador naval. Asistieronrepresentaciones del Gobierno de Cantabria y delAyuntamiento de Santander, el delegado del Minis-terio de Defensa, el comandante naval de San-tander, y representantes de la Real Academia de laMar, de la Real Liga Naval Española, del Real ClubMarítimo de Santander, del Real Club de Regatasde Santander, de las Federaciones náuticas deCantabria, y otras muchas personas. El PremioAlmirante Diego Gutiérrez de Ceballos, Señor deEscalante y de la Valdáliga, fue creado en el sépti-mo centenario de su exaltación al cargo y oficio deAlmirante Mayor de la Mar por el Rey Don Fernan-do IV Castilla y León -corriendo el año de 1303-. Locreó uno de los más conspicuos representantes dela centenaria Casa de Ceballos, el séptimo Viz-conde de Ayala, fallecido en 2010. Bien sabido esque fueron los de Ceballos uno de los linajes másimportantes y poderosos de Castilla y de la Mon-taña en la época bajomedieval. Este premio tienecomo finalidad principal la de distinguir y galardonaranualmente la excelencia en los estudios científicosde Historia naval y marítima, en la persona de susautores y realizadores: es un reconocimiento a lasmás relevantes aportaciones al campo historiográfi-co, y tiene una neta vocación ejemplarizante, comotambién ha de ser ejemplar la persona y la obra delos premiados. El jurado, siempre presidido porquien ostenta el título de Vizconde de Ayala, estuvoformado en esta ocasión por cuatro de los anteri-

ores galardonados: donFernando Gomarín, presi-dente de la FundaciónCentro de Documenta-ciónEtnográfica de Cantabria;el doctor don FélixMartínez Llorente, cate-drático de la Universidadde Valladolid; el capitán denavío don José MaríaBlanco Núñez; el doctordon Gerardo García-Castrillo Riesgo, eminente biól-ogo y director del Museo Marítimo del Cantábrico; yel doctor don Jesús Angel Solórzano Telechea, pro-fesor de la Universidad de Cantabria. Durante elsolemne acto, que fue amenizado por los sones deun dúo de trompetas y un órgano, tomaron sucesi-vamente la palabra don Fernando Mirapéix Eguíluz,del Real Club Marítimo de Santander y presidentede la Federación de Vela de Cantabria, que glosólos estatutos del Premio y mencionó a cada uno delos anteriores catorce galardonados; don FernandoGomarín, en representación de la Real AcademiaEspañola de la Mar, que hizo la laudatio del nuevogalardonado, reconocido como uno de los más rele-vantes y reputados historiadores de los naufragios yla catástrofes marítimas, con una obra publicadamuy extensa y una intensa actividad investigadora ydivulgativa; y el doctor Vizconde de Ayala. Despuésde la entrega del diploma acreditativo y del trofeode bronce anejo -que reproduce la piedra sepulcralarmoriada de una de las tumbas medievales ce-ballescas-, tomó la palabra el capitán de fragata JarTorre, quien hizo profesión de sus valores y princip-ios profesionales, y agradeció con sentidas y ele-gantes palabras el premio recibido. Tras la solemneceremonia, concluida con los acordes de la MarchaReal que sonó en los instrumentos de los músicos,se sirvió un concurrido almuerzo de homenaje algalardonado en los cercanos salones de la Bodegadel Riojano, ofrecido por el Vizconde de Ayala, rep-resentante de la Casa de Ceballos.

GENTES DE BIEN


PRESENTACIÓN DE “EL ESTADO DE DERECHOEN EL MUNDO HISPÁNICO”, EN EL TRIBUNALCONSTITUCIONAL

El 19 de septiembre de 2019, en el TribunalConstitucional, se ha desarrollado la solemnidad dela presentación oficial en España del libro El estadode Derecho en el Mundo Hispánico, editado por elTribunal Constitucional de Chile y del que es coordi-nador el Dr. D. José Manuel Cerda Costabal, profe-sor de Historia Medieval y director del Centro deEstudios Medievales chileno. Se trata del segundovolumen editado por la Alta Magistratura chilena,bajo la dirección del profesor Cerda Costabal, den-tro de la Colección de Textos Universales. La publi-cación, fruto de la encomiable y loable iniciativa delMinistro Sr. Aróstica, presidente del Tribunal Consti-tucional de Chile, reconocido y confeso entusiastade la historia y el derecho hispano, constituye unalegato y fundamentado estudio acerca de lasraíces medievales del Estado de Derecho constitu-cional. La obra reivindica la tradición jurídica de lasEspañas, como paradigma histórico de sujeción delpoder al Derecho, a través de las aportaciones decinco reconocidos investigadores: el profesor Dr. D.Andrés von Teuber, quien aborda Las bases clási-co-latinas en el pensamiento político de Isidoro de

Sevilla; del Dr. D. Félix Martínez Llorente –el únicoprofesor español participante-, con Los fueros co-mo manifestación de un “Estado de Derecho” for-malista en los reinos hispánicos medievales; del Dr.José Manuel Cerda, con Consejo y consentimiento.La monarquía y el origen de las Cortes; del Dr. D.Eduardo Andrades, acerca de La Monarquía His-pánica y el Estado de Derecho en Indias; y, final-mente, la aportación del Dr. D. Julio Alvear, con eltítulo Constitución histórica y constitucionalismomoderno en la Monarquía hispánica. Se cierra el ál-bum con un completo y orientativo apéndice docu-mental. La obra se encuentra a disposición delpúblico en general, en copia digital, en el siguienteenlace de internet: https://www.tribunalconstitu-cional.cl/estudios/otros-documentos.

NUEVA DIPUTACIÓN DELA DIVISA DE LA PISCINA

En su reunión anual,celebrada el 17 de agostoen la Basílica de Peci

Cuadernos de A · 2020. 4. 22. · de la Mar, don Juan de Austria participó en la guerra de las...

Documents

Transcript of Cuadernos de A · 2020. 4. 22. · de la Mar, don Juan de Austria participó en la guerra de las...