Crisis

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Ya basta de argumentar que la crisis es una oportunidad.

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Ya basta de intelectuales de saln. Ya basta de hacerse el interesante. Y menos en estos tiempos. Por mucho que se diga no ser ms cierto: la palabra "krisis" en griego no significa "oportunidad". Tiene varios significados, entre ellos "separacin", "punto de ruptura". Se utiliza incluso en medicina para referirse al momento en que el paciento est a punto de morir. As que no, seores gurs, no quiere decir oportunidad.Por supuesto, en tiempos de crisis hay oportunidades, como tambin las hay en momentos de bonanza. Pero tal como seala muy acertadamente Ivn Alonso, de oportunidades, adems de haber siempre, las hay buenas y malas. Y ocurre es que en tiempos de bonanza econmica suele haber muchas ms buenas oportunidades que malas, mientras que en tiempos de crisis la cantidad de malas oportunidades supera con creces a las que podramos considerar buenas.La mayor parte de oportunidades para alguien que est, tal como viene a decirnos el trmino "krisis" en griego, al borde de la muerte (o de la quiebra, o de la bancarrota, o de vivir en la miseria) es lanzarse al vaco. No hay lastre, no tenemos nada que perder, as que nos vemos abocados al vaco, a saltar a la piscina sin preguntar si hay agua. Tomamos las oportunidades con menos rigor, con ms riesgo, con ms urgencia. Ser porque el hambre aprieta, porque sabemos que no hacer nada es ceder terreno a la defenestracin, a la muerte, al desahucio, a la quiebra. As que, con las luces apagadas, cuando esa oportunidad todava est ms teida de sombras que de luces y certidumbre, nos entregamos a ella, como si fuera el ltima clavo ardiente que nos quedara por agarrar. No nos queda ms remedio. Si hay que jugrsela a una carta lo haremos. Pero no nos dejemos engaar: en tiempos de crisis las buenas oportunidades escasean y, a menudo, no estn en manos de los que ms estn sufriendo los devastadores efectos del declive econmico.As que dejen de utilizar la falsa etimologa griega para hacerse los interesantes. No soy yo nadie para especular sobre lo que hace falta en tiempos de crisis, pero sin duda lo que no necesitamos es que alguien instalado en el bienestar d lecciones a los necesitados de cul es el camino de baldosas amarillas que les llevar al xito. Porque el xito, en tiempos de crisis, es mucho ms esquivo. Y esa es la nica certeza que tenemos. Sin etimologas. Marc Ambit