Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

160
·=• i . i •tttt ttt t

Transcript of Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Page 1: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

·"C=r'-"-1• i ... i •• tttt ttt

t

Page 2: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Cómo atacar y defenderse en el ajedrez

COLECCIÓN HUMOR, JUEGOS Y PASATIEMPOS

Page 3: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Equipo de expertos 2.100

CÓMO ATACAR Y DEFENDERSE EN EL AJEDREZ

EDITORIAL DE VECCHI, S. A.

Page 4: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

© Edirorial De Vecchi, S. A. 1989 El Código Penal vigemc sanciona a • ... quien inrencionad:amenrc reprodujere, plagiue, dis· tribuyere o comunicare públicamcnrc, en codo o en paree. una obra lircrari� :urísriC2 o cien· rífiC2 o su transformación o una inrerprera· ción o ejecución anís rica fijada en cualquier cipo de soporte o comunicada a rravts de cualquier medio, sin la autorización de los ri· rulares de los correspondicnccs derechos de propiedad inrclccrual o de sus cesionarios. La misma pena se impondrá a quien inrcncio· nadamenre importare, exporrarc o almace­nare ejemplares de dichas obras o produc­ciones sin la referida autorización.• (Arrículo H4 bis, a).

Editorial De Vecchi, S. A.

Balmes, 247. 08006 BARCELONA

Depósiro legal: B. 31.142-1989 ISBN: 84-315·0811-6 Impreso en España por UBERGRAF, S. A. Consrirució, 19. 08014 Barcelona

Page 5: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

In dice

LAS RAÍCES DE LA EXPERIENCIA El ajedrez no es artificio sino creación . . . . . . . . Dimensiones del ataque y de la defensa . . . . . . .

Razón y significado de los signos ajedrecísticos . Iniciales de las piezas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Valor de cada pieza en el índice de ataque y defensa Las siete virtudes esenciales del ajedrecista . . . . .

La condición natural de las piezas . . . . . . . . . . . . La mítica posición inatacable . . . . . . . . . . . . . . . . .

Las cinco condiciones de la alienación más poderosa.

EL PRIMER MOVIMIENTO INFLUYE EN EL ÚLTIMO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

De la apertura arrancan ataque y defensa . . . . . . ¿Apertura de ataque o posicional? . . . . . . . . . . . . Cuántas combinaciones acertadas puede hallar un ju-

gador . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

La primera garantía la aporta el plan de juego . . Las blancas proponen y las negras responden . . . Cuidado con la inspiración y la oportunidad excep-

cional . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

La inarmonía es la primera evidencia de la derrota. La defensa ha de empezar contra la propia equivoca-

ción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

9 9

11 11 13 13 13 14 17 18

20 21 22

22 23 24

25 25

26

5

Page 6: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

La trascendencia de las equivocaciones . . . . . . . . 27 Cómo estudiar la apertura: las tres grandes clases 28 Aperturas de juego abierto . . . . . . . . . . . . . . . . . . 31 Aperturas de juego semiabierto . . . . . . . . . . . . . . . 31 Aperturas de juego cerrado . . . . . . . . . . . . . . . . . . 32 Aperturas de juego abierto . . . . . . . . . . . . . . . . . . 32 El tablero gira sobre su centro . . . . . . . . . . . . . . . 38 El ataque tiene el valor de la oportunidad . . . . . 39 Intento de crear las condiciones del contraataque 40 La formación rígida se vuelve en contra de su autor 42 Ataque y defensa en torno a un peón . . . . . . . . 44 La perfecta preparación de un ataque . . . . . . . . . 45 Abriendo una columna . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 46 Apertura de juego abierto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 48 Amenaza en torno a una clavada . . . . . . . . . . . . . 48 Un alfil a desplazar . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 50 Variante abierta de la Apertura Española . . . . . . 58 Tras crear las condiciones se desata el ataque . . 61 Rechazo de un sacrificio intencionado . . . . . . . . . 63 Recurso inmovilizador . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 63 Preparación de un ataque sobre columnas abiertas 64 Apertura de juego semiabierto: la defensa francesa 64 Protección para los peones centrales . . . . . . . . . . 66 Apuntanto el alfil hacia el máximo objetivo . . . . 68 La necesidad del cambio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 68 Cuidar la potencia de las casillas . . . . . . . . . . . . . 69 La alternativa del contraataque . . . . . . . . . . . . . . . 73 Ante la debilidad de la dama . . . . . . . . . . . . . . . . 75 La defensa fulminante asoma a través de una colum-

na abierta . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7 6 Apertura de juego cerrado: las defensas indias . . 78 Características de la defensa India de Rey . . . . . 77 Características de la defensa Nimzoindia . . . . . . . 80 Características de la defensa Grünfeld . . . . . . . . . 80

6

Page 7: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

TIPOS DE POSICIÓN EN UNA PARTIDA 82 Del ataque a la defensa en movimiento . . . . . . . 82 Las posiciones forzadas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 83 El claro seguimiento de un plan global . . . . . . . . 84 Armonía de método se traduce en juego de altura 85 Oportunidad de la estrategia y la táctica . . . . . . 86 Tiempo, espacio, material . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 89 Tiempo y espacio: los tesoros intangibles . . . . . . 90 Debilidad postrante: tres peones en una columna 9 1 Ataque imparable sobre el rey descubierto . . . . . 9 1 Giro fulminante de la situación . . . . . . . . . . . . . . 92

LA ESTRUCTURA DEFENSN A POR EXCELEN-CIA: EL ENROQUE . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93

La estructura básica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93 Las debilidades del enroque . . . . . . . . . . . . . . . . . 94 Las estructuras alternativas . . . . . . . . . . . . . . . . . . 95 El enroque puede cobijar enemigos . . . . . . . . . . . 96 Cuando la protección se vuelve cárcel . . . . . . . . . 96 Cuando la ventana se vuelve boquete . . . . . . . . . 97 Más inseguridad en la fortaleza . o • o o o o • o o o o o o 98 Una avenida a través de la muralla . o o o o o • o o o o 99 La combinación es la base del ataque contra el enro-

que o o o o o o o o o o o o o • • o . o o o . o o o o o o o o o o o . o . 101 Más sobre la realidad del enroque o • • o o • o • • o o o 101 Combinación contra otras estructuras o o • o • o • o o • 104 Apertura de columna para canalizar ataque 108

PLANTEAMIENTOS DE LA DEFENSA Y EL ATAQUE o o o o o o o o o o o o o o o o o o o o o o o o o o o o o o 1 10

Las cuatro medidas elementales o o o o o o • o o o o o o • 1 10 El desarrollo . o o o • o o o • o o • o o • o o o • • o o o o o o o o • • 1 12 El centro . o o o o o o o o o o o • • o • o o o • o • • • o • • • o • • • • 1 15 Para contener el ataque de los peones . . o o o o o o 1 18

7

Page 8: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Liberación intencionada del centro . . . . . . . . . . . .

Peón sobrecargado amenaza derrumbe general

EL CENTRO ES VITAL, PERO TAMBIÉN VOL-CÁNICO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . .

Cinco normas defensivas contra la celada . . . . . .

Q ' b1' 1' 'n ue es una com nac o . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Tras la combinación debe haber una ventaja inme-

diata . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . La posición forzada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

LO ACTIVO Y LO PASIVO EN ATAQUE Y DE-FENSA . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Definición del contraataque . . . . . . . . . . . . . . . . . .

El movimiento intermedio . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Un falso movimiento forzado . . . . . . . . . . . . . . . .

Un movimiento intermedio contra combinación de mate . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Combinación de ataque doble . . . . . . . . . . . . . . . .

El ataque simultáneo casi siempre cobra . . . . . . .

Maniobrando hacia el ataque simultáneo . . . . . . .

La enfilada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

La clavada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . La descubierta . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Los motivos de la combinación: la defensa inade-cuada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

8

122 123

125 125 126

128 129

133 133 135 136

137 137 140 140 141 145 150

153

Page 9: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Las "

ratees de la • •

expertencta

Entre las grandes muestras de nobleza que brinda el juego­arte-ciencia del ajedrez, destaca la de ser esquematizable. Es posible trazar «cartas de navegación» de enorme utili­dad, para evitar las tormentas y las corrientes traicioneras· que en el tablero pueden suscitarse de un escaque a otro. En otras palabras, las experiencias de juego y las conclusio­nes sacadas de cada situación que se verifica durante una partida permiten hacer una lista de todas las parecidas en­tre sí y de formular, entre los casos con características co­munes, juicios del mismo tipo o planes de desarrollo que se basan en los mismos principios.

El ajedrez no es artificio sino creación

Así pues, alguien podría considerar que el ajedrez es con­densable en el esquema elemental que aquí presentamos, y que para convertirse en un buen jugador, sólo será nece­sario practicar, jugar y especializarse en una serie de plan­teamientos de aperturas a utilizar como armas contra cual­quier adversario.

9

Page 10: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Pero, si tal prodigio fuera realizable, haría mucho tiem­po que el ajedrez no podría ofrecer nuevos motivos de in­terés, y cualquier persona o ordenador capaz de esquemati­zar, memorizar o elaborar calculadoramente, sería mvencible sólo por su memoria o experiencia artificial, acumulada a lo largo del tiempo.

Sm embargo, no es así. Naturalmente la práctica, la experiencia y la especialización, son elementos fundamen­tales para que los aficionados lleguen a convertirse en juga­dores de un buen nivel e incluso en maestros, pero para ello es necesario también el razonamiento, la capacidad de análisis, la síntesis y la comparación del propio razonamiento que ha de actuar en conjunción con el del adversario y algunas otras personas con capacidad para hacerlo.

Y el momento más oportuno para descubrir los propios defectos, y para la adquisición de un conocimiento más completo del juego, es precisamente el que sigue a la parti­da, cuando junto al adversario, se intenta analizar las va­riantes que se han preferido no jugar en la partida y se valoran todas las alternativas que se presentaron. Todavía más útil es la búsqueda de los motivos que determinaron el resultado de la partida, así como de los medios emplea­dos para actuar en consonancia con ellos. No se dude de que cada una de estas oportunidades no sólo constituirá un estímulo para una mayor profundización de análisis, tanto durante la partida como en la fase previa a ésta, sino que consolidará un gran caudal de esa experiencia tan luminosa que da lugar a la formación de los maestros.

Naturalmente, la base de este análisis no debe ser el estudio de las consecuencias de cada movimiento, sino la valoración y la verificación global del plan de ataque y de­fensa elegido, así como de las eventuales, aisladas e impon­derables acciones de ataque y defensa a que da lugar el imprevisible curso de la partida.

10

Page 11: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Dimensiones del ataque y la defensa

Dos son las dimensiones del ataque y dos las dimensiones de la defensa. Una es la trascendental, cuyo criterio marca todo el curso del propio juego, y otra es la que resulta del juego del adversario, particularmente cuando éste ha conseguido apoderarse de la iniciativa, en cuyo caso esta dimensión menor cobra una importancia muy considerable, hasta el extremo de poder llegar a desplazar la dimensión del propio plan, anular toda significación para los mecanis­mos del plan general de ataque y hundir en el caos a los de defensa.

Por tal razón hemos creído oportuno centrar la mirada y la atención sobre estos mecanismos, y comprobar los prin­cipios de su funcionamiento en una y otra dimensión, de manera que nos sea posible saber -¡con todo lo que esto implica de positivo para el triunfo!- cuándo nuestro ata­que está teniendo éxito, cuándo nos está llevando a un punto muerto o, peor aún, a una trampa; cuándo hemos perdido la iniciativa, cuándo hemos de pasar del ataque a la defensa y cuándo de la defensa al contraataque.

En fin, deseamos que esta obra cumpla con el objetivo esencial de señalar el momento en que el jugador se halla dentro de la partida en que se ha enfrascado. Tiempo hay de atacar y tiempo llega de defenderse, pero, en lo esen­cial, se busca que el tiempo de la victoria alcance la máxi­ma permanencia para el lector.

Razón y significado de los signos ajedrecísticos

Es mundialmente sabido que la literatura ajedrecística em­plea, internacionalmente, una serie de signos y de notacio­nes hechas en claves específicas cuyo valor explicativo es

1 1

Page 12: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

indispensable conocer, para aprovechar el inmenso caudal de informaciones y registros de carácter histórico y didáctico.

No se trata, ciertamente, de claves complejas; todo lo contrario, pero requiere cierta práctica llegar a leerlos con fluidez. Los signos son relativamente pocos y no ofrecen dificultad alguna. Por cuanto a las claves o sistemas, como el algebraico o alfanumérico, el internacional, el descripti­vo y otros menos conocidos. En esta obra utilizaremos la precisión y la facilidad que ofrece el sistema algebraico, en algunos casos prescindiremos del señalamiento median­te la inicial de la pieza en juego, para indicar únicamente el escaque del que parte y el de destino, señalando con : o con x el hecho de que aquí haya eliminado a una pieza adversaria. Lo importante, según nuestro criterio, ha sido mostrar las partidas de la manera más simple con mi­ras a su rápida reproducción en el tablero del lector. Vea­mos a continuación, pues, los signos más usuales:

12

a.p. X 0-0 0-0-0 ? ! ??

11

? ! ! ? + + d + dsc + +

al paso toma o elimina o come enroque corto enroque largo jugada de dudoso· valor, mala; error jugada acertada jugada deplorable jugada buena jugada espléndida jugada buena sólo en apanenc1a jugada interesante Jaque doble jaque jaque a la descubierta jaque mate igualdad, tablas

Page 13: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Iniciales de las piezas

R Rey D Reina o dama T Torre

A Alfil C Caballo P Peón

Valor de cada pieza en el índice de ataque y defensa

R Rey p Peón 1 A Alfil 3 e Caballo 3 T Torre 5 D Dama 9

Las siete virtudes esenciales del ajedrecista

Las condiciones de mente y espíritu que han caracterizado a los grandes maestros en la historia del ajedrez, demues­tran que su éxito se ha basado en la combinación de siete virtudes, cuyo conjunto parece determinar su potencia aje­drecística y que son, en orden indistinto: visión, intuición, capacidad de cálculo, lógica, sensibilidad, voluntad y domi­nio de la teoría.

La proporción de tales virtudes varía de un maestro a otro. Por ejemplo, la visión, la intuición y el conocimien­to de la teoría fueron más que notables en Alekhine, en tanto que Tarrasch se hizo notar por sus despliegues de lógica. Capablanca, por su parte, brilló por el poder de su capacidad de cálculo, lo mismo que Spielmann y Spassky. También es cierto que a todos ellos les falló alguna vez su dotación de voluntad, afectándose su espíritu combatí-

1.3

Page 14: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

vo debido a diversas causas, como pueden ser el desánimo, la fatiga, etcétera.

La condición natural de las piezas

En base al tipo de acción que ejercen las piezas, las pode­mos dividir en dos grandes grupos: de acción continua y de acción discontinua. Las de acción continua son las que ejercen una acción sobre una o más líneas, ya sean trans­versales, columnas o diagonales. Y de acción discontinua las que ejercen su acción sobre casillas específicas sin te­nerlas en línea recta.

Las piezas de acción continua son el alfil, la torre y la dama. Su acción aumenta al disminuir las piezas del ta­blero. Esto es debido a que la presencia de un gran núme­ro de piezas obstaculiza los movimientos y, además, el gran control sobre las casillas en las que se podrían realizar mo­vimientos, impide la eficacia de la acción, y ello a pesar de que dos de estas piezas (la torre y la dama) tengan un alto valor absoluto (por ello se las llama piezas pesadas, mien­tras que el caballo y el alfil son piezas ligeras).

En definitiva, se puede decir que las piezas de acción continua necesitan, para una mayor eficacia de su acción, la apertura de algunas líneas del tablero (columnas, trans­versales, diagonales) esto es posible solamente moviendo las piezas propias o las del adversario que se encuentra sobre esta línea.

Las piezas de acción discontinua son el caballo y el peón. El caballo actúa siempre sobre un conjunto de casillas

que no están colocadas sobre la misma línea sino en torno a una serie de escaques que alcanza, en razón del salto de un escaque en una dirección y dos escaques en otra, o viceversa, o sea 2 x 1 o 1 x 2 .

14

Page 15: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

La cantidad de casillas sobre las que actúa depende, exclusivamente, de la zona del tablero en que se encuentra y no de la cantidad de piezas presentes. De ello se des­prende la óptima eficacia de la acción del caballo en situa­ciones en que hay muchas piezas sobre el tablero y en las cuales escasean, o están ausentes las líneas abiertas.

Además, su bajo valor absoluto (el caballo es una pieza ligera) le otorga una discreta eficacia en el ataque (una pie­za de valor superior deberá huir ante el ataque del caba­llo), y reduce al mismo tiempo las posibilidades de movi­miento de las piezas enemigas y controla las casillas a las que pueden ir.

El peón, en cambio, es una pieza con movimiento y acciones muy limitadas, pero la presencia inicial de un peón sobre cada columna del tablero determina desde las prime­ras jugadas de la partida, características conformaciones de peones que son conocidas corno cadenas.

Cada cadena, según su función, asume características diferentes. Una cadena de peones que ya hemos visto en la muralla del enroque, desempeña un papel totalmente de­fensivo.

La cadena de peones ejerce un importante papel en el reparto de espacio sobre el tablero, especialmente en la apertura y en el medio juego.

Finalmente, mientras todas las piezas tienen siempre, en el curso de la partida, la misma función de ataque y defensa, los peones asumen funciones muy diferentes. Tie­nen la obligación de correr al otro lado del tablero en don­de serán cambiados por otra pieza. Esto es muy difícil que ocurra en las otras dos fases de la partida.

Vistos ya los diferentes tipos de acciones que las piezas pueden realizar, y trazadas las condiciones más óptimas para que cada una pueda actuar, podernos afirmar, consi­derando también el modo en que se desarrollan las fases

15

Page 16: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

de la partida, que existe una especie de «orden de apari­ción» según el cual las piezas llegan al campo, es decir, se desarrollan de su posición inicial y empiezan su actividad.

Naturalmente, la utilización de una pieza u otra depen­de de la elección del jugador para la realización de su plan de juego. Pero si tenemos en cuenta la mayoría de las par­tidas que aportan una gran experiencia, podemos notar cómo éstas presentan características comunes en este «orden de aparición».

Podemos constatar cómo en las primeras fases de la apertura, las primeras piezas que entran en juego son los peones y los caballos. De hecho, la necesidad de conquis­tar espacio a través de las cadenas de peones, así como de liberar las diagonales y columnas para poder jugar los alfiles y las torres, hace imprescindible el movimiento de los peones. En cambio, los caballos pueden ser utilizados debido a su escaso valor absoluto, y a su acción disconti­nua que en las primeras fases de la partida les permiten maniobrar mejor de lo que lo harían otras piezas. La pre­sencia de todas las piezas (y, por lo tanto, el gran número de casillas controladas) y de grandes cadenas de peones (que limitan sensiblemente el espacio disponible) dificultan los movimientos de las piezas de acción continua.

Casi paralelamente a los caballos entran en juego tam­bién los alfiles que, a pesar de ser pieza de acción conti­nua, pueden desarrollar su papel antes que otras, gracias a la apertura de las diagonales (casi siempre es anterior a la apertura de las columnas, el bastarles a las primeras el avance de peones, mientras que para las segundas, es necesario que el peón colocado sobre la columna desapa­rezca, ya sea porque mata o porque es matado).

La apertura de las columnas permitirá la entrada en juego de piezas pesadas, hecho que caracteriza, casi siem­pre, el fin de la apertura y el inicio del medio juego.

16

Page 17: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Generalmente, al principio, las piezas pesadas empie­zan a· actuar desde atrás del tablero (aprovechando su largo radio de acción), dejando a los peones y a las piezas ligeras la tarea de la lucha en primera línea. El alto valor absoluto de las piezas pesadas, que viene determinado por la «po­tencia» de su acción, las hace al mismo tiempo vulnerables a los ataques de piezas con menor valor absoluto. Sólo cuan­do se determine una discreta apertura del espacio, debido al empequeñecimiento o al fraccionamiento de las. cadenas de peones, las piezas pesadas, que ·en estas nuevas condi­ciones tendrán la posibilidad de moverse con mayor desen­voltura, podrán empezar a presentarse en primera fila.

En el medio juego, las piezas casi siempre manifiestan toda su capacidad táctica. Es en esta fase donde se realiza la mayor liquidaCión de las fuerzas del campo. Combina­ciones o cambios de materiales, determinan la desaparición de la mayor parte de las piezas.

Se llega así a la fase final (siempre que ninguno de los dos jugadores, en las fases anteriores, haya sufrido da­ños considerables que no le permitan alcanzar esta fase), en la cual se verifica la transformación de la función de los peones (que ahora tendrán que dirigirse hacia la 8. a

transversal para ser cambiados por otras piezas y reponer así «tropas frescas») y la activación, como unidad táctica, de los reyes que guardados hasta el momento con la mayor protección posible, pueden ahora salir al campo de batalla, ya que prácticamente han desaparecido los peligros de ata­que en masa.

La mítica posición inatacable

No pocos ajedrecistas desearían encontrar una formación que, a manera de «estación espacial>>, permitiera después

17

Page 18: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

lanzarse a atacar al rey adversario con un máximo de ga­rantías y un mínimo de riesgos. Y siguiendo con esta línea de «ajedrez-ficción», quizá no tenga nada de irreal el crite­rio que manifestara el famoso Scheveninger en el sentido de que por el solo hecho de mover la primera pieza se corre ya un riesgo, pero también se cuenta con una oportu­nidad proporcional. Riesgo y oportunidad que, por supues­to, se encuentran e.n estado embrionario, por decirlo de alguna manera que implique bien claro el hecho de que ambos podrán desarrollarse en la medida en que sean ali­mentados por el error o por el acierto con que el jugador corresponda a cada jugada de su oponente, armonizando (como ya explicamos en otra parte de esta obra), con sus acciones, a fin de poder aprovechar sus limitaciones y es­torbar sus proyecciones.

En fin, el hecho elemental es que todo jugador desearía establecer la posición más segura, más en concordancia con los dos elementos que dan al ajedrez categoría de arte y ciencia: la defensa y el ataque.

Las cinco condiciones de la alineación más poderosa

Y para satisfacer al máximo ese deseo de seguridad, con­vendrá recordar los cálculos que el teórico italiano Adoli­vio Capece hizo sobre la disposición ideal de las piezas para la defensa y el ataque, de manera que ejercieran un férreo control sobre el centro y a la vez dominaran el ma­yor espacio posible, limitando las posibilidades del oponen­te. Resumía su concepto en cinco recomendaciones ele­mentales:

l. Sitúe sus piezas de manera que el adversario deba in­vertir el máximo número de movimientos para conseguir atacarlas.

18

Page 19: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

2. Coloque sus alfiles en los escaques c4 y f4, cuando tenga· las piezas blancas, o en c5 y f5 si juega con las ne­gras, ya que desde estas posiciones tendrán el máximo ran­go de acción.

3 . Enclave sus caballos en los escaques c3 y f3 cuando sean los blancos, o en c6 y f6 cuando sean los negros.

4. Enroque tan pronto como le sea posible, a fin de dar a su rey una situación de seguridad.

5. Comunique cuanto antes a sus torres entre sí.

19

Page 20: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

El primer movimiento influye en el último

Los problemas de ataque y defensa empiezan a plantearse desde el instante mismo de la apertura. Los maestros de todos los tiempos están de acuerdo en que el primer movi­miento repercute en el último con mayor fuerza cuanto más sólido sea el plan y con mayor fidelidad se haya segui­do, aun en los casos en que la partida termine perdiéndose.

Así pues, estos problemas se manifiestan con el plan­teamiento de las primeras cuatro grandes necesidades que enumeraremos líneas más adelante, después de dejar bien claro que lo primero es la ocupación o el control del centro del tablero, con lo cual, de acuerdo con este criterio, debe considerarse un error decidirse por cualquiera de estas jugadas:

l. a2-a4 l. c2-c3 l. d2-d3 l. e2-e3 l. f2-f3 l. h2-h4

Incluso conviene que los principiantes se abstengan de aperturas de seguimiento o aprovechamiento complejo, ta­les como:

20

Page 21: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

l. b2-b3 l . b2-b4 l. f2-f4 l. g2-g3 l. g2-g4

E incluso convendrá añadir a la lista: l. gl-f3, por más que se haya popularizado excesiva­

mente como elemento de seguridad contra un mate fulmi­nante de los que tanto aquejan a los principiantes .

Así pues, lo que aparece más indicado para iniciar la partida es elegir una de cuatro jugadas; dos para el propó­sito de ocupar el centro:

l. d2-d4 l. e2-e4

y dos para la necesidad de controlarlo:

l . c2-c4 l . gl-f3

De la apertura arrancan ataque y defensa

Hemos de considerar que para seguir una estrategia de ata­que, en busca del camino más. corto para fulminar al rey contrario, o bien de hacer una buena colecta de material, lo indicado será abrir con: l. e2-e4.

Pero si el propósito es asegurar la efectividad de la ac­ción realizando un juego eminentemente posicional para re­ducir al máximo las posibilidades de contraataque del opo­nente y mantener la iniciativa a lo largo de la partida, entonces lo recomendable es abrir con: l. d2-d4.

2 1

Page 22: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

¿Apertura de ataque o posicional?

Ahora bien, si no se desea otra cosa que obtener el máxi­mo de seguridad contra los errores iniciales, a fin de empe­zar a salirse de las rutinas más transitadas (y por ello mis­mo más previsibles y peligrosas) lo aconsejable es una de estas dos aperturas:

l. c2-c4 l. gl-f3

Sin embargo, la elección exige por lo menos la defini­ción del tipo de jugador que se pretende ser: a) jugador de ataque; b) jugador posicional.

Pero, mientras se llega a tamaña autodefinición, con todas las implicaciones que conlleva, se recomienda optar por la apertura de

l. e2-e4

También hay que advertir que llegar a ser jugador posi­cional implica cierto grado de madurez ajedrecística. Y sin duda, cuando se ha adquirido también se ha comprobado que desde el principio de la formación es esencial desha­cerse de todo temor y acometer la partida con determina­ción y hambre de experiencia, a fin de desarrollar cuanto antes la capacidad de análisis y la visión que permite anti­cipar el curso del juego cada vez por un margen mayor de jugadas.

Cuántas combinaciones acertadas puede hallar un jugador

Sin duda la pregunta presenta una gran carga de «fantasía materialista», que es la más difícil de eludir, tanto para

22

Page 23: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

el que la concibe como para quien la recibe en forma de interrogante, pues se propone reducir a números precisos algo que está más allá de las posibilidades humanas de cál­culo, aunque nos resistamos también a clasificarlo en la gaveta del azar. El caso es que la pregunta surge y resurge interminablemente, tanteando las posibilidades de que exista un catálogo dé jugadas que en cada turno se le ofrecerían al ajedrecista inseguro con la garantía de estar libres del polvo y la paja del error.

La primera garantía la aporta el plan de juego

«¿Entre cuántos movimientos puedo elegir, según el prome­dio?» Semejante enfoque, por supuesto, lleva ya en sí mis­mo el germen de la inseguridad y el desconcierto, pues, pierde de vista por completo la naturaleza esencial del jue­go: el plan. Un plan que abarca los conceptos de ataque y defensa en seguimiento de un propósito: poner en situación de mate al rey adversario mediante un proceso previsto y desarrollado de acuerdo con las pautas de juego que va planteando el adversar-io en seguimiento de su propio plan.

Por tanto, lo primero es analizar las posibilidades que nuestro juego presenta para que el contrario logre su obje­tivo. Luego es estudiar la forma de frustrar estos propósi­tos y desprender del planteamiento inicial la base del pro­pio plan de ataque. Finalmente, comprobar si en realidad tal plan es viable y corresponde a un esquema válido de contrajuego para complementar adecuadamente las accio­nes del oponente, ya sea neutralizándolas o volviéndolas en su contra a base de inutilizar sus posiciones, clavar sus piezas o dispersarlas y hacerle abrir vías de acceso.

En otras palabras, el primer arte del ajedrez radica en la capacidad para hacer que el propio juego armonice con

23

Page 24: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

el del adversario, haciéndolo fluir en la dirección más con­veniente, ya que es así justamente como se evita el caos y se queda en posición de ejercer la iniciativa o desplegar la defensa más efectiva en el momento más conveniente.

Las blancas proponen y las negras responden

Sin embargo, si seguimos el criterio de los ávidos coleccio­nistas de jugadas y estadísticas, hay que emitir que al prin­cipio del juego tanto las blancas como las negras disponen de, aproximadamente, una veintena de jugadas, con las que, por lo común, las blancas proponen y las negras respon­den. Es decir, suponiendo que la jugada inicial la hicieran ambos adelantando dos escaques sus respectivos peones de rey, tendrían un número muy semejante de jugadas ade­cuadas a su disposición.

Debido a esta realidad es posible componer un amplio repertorio de jugadas, del que será posible elegir la más acertada al comprobar que se halla una situación parecida o con posibilidades de hacer derivar la partida hacia las condiciones deseadas.

Pero, como el número de las combinaciones posibles es incalculable, volvemos a la realidad de que la primera jugada trascendente, consiste en la formación de un buen plan de ataque y defensa (o viceversa) destinado a llevar el juego a las condiciones en que las jugadas archivadas en nuestro repertorio sean viables.

Ahora bien, si nos atenemos a· los promedios, se ha encontrado que cada posición permite únas diez jugadas aceptables a cada jugador. Lo difícil es, no obstante, dar justamente con la jugada necesaria, 1� precisa, de manera que aun cuando el adversario sea también capaz de encon­trar una de las diez que le corresponderían, ésta no sea

24

Page 25: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

tan trascendente como la nuestra. . . para lo cual es indis­pensable que nuestra jugada corresponda con exactitud a la estructura del plan que nos hemos trazado.

Cuidado con la inspiración y la oportunidad excepcional

Lo anterior descalifica a las jugadas nacidas de la inspira­ción del momento, de las que siempre hay que desconfiar, particularmente cuando incita a hacerlas la posibilidad de engullir una dama o un simple peón, ya que, como explica­remos oportunamente en otra parte de esta obra, son rega­los de los que siempre debe desconfiarse.

La inarmonía es la primera evidencia de la derrota

Y es que, como también señalan las estadísticas, las juga­das que implican improvisación no sólo descomponen el esquema general del propio juego, sino que suelen estar motivadas por la astucia del adversario. De hecho, toda jugada que rompa la armonía en que discurre la partida (por «encarnizada» que sea, una buena partida muestra in­variablemente el aura de la armonía de la interacción de blancas y negras), se volverá en contra de quien la ejecutó. Es ley en todas las artes, y el ajedrez no iba a ser la excep­ción, como tampoco lo es la guerra misma, aunque parezca que en ésta todo es válido.

Desdichadamente ha habido y habrá espléndidas juga­das en el entramado de planes muy deficientes . Existen incontables libros que, como colecciones de hechos maravi­llosos -álbumes de milagros les llaman algunos- descri­ben las jugadas con que muchos grandes maestros han trans­formado en victoria lo que parecía una irremisible derrota,

25

Page 26: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

y no porque su plan de juego hubiera sido siempre el de simular errores y hacer caer en una celada al contrario para deslumbrarlo finalmente con el relámpago de un mate in­sospechado (aunque tampoco es demasiado raro el caso), sino porque su genio les permitió encontrar al fin una ren­dija por la cual volver a ver la luz. Esta es la diferencia entre la posesión de un buen plan y la capacidad para des­cubrir las posibilidades inmediatas de una formación dada. Y, como se comprenderá, siempre será más fiable y facti­ble un buen plan que la esperanza de una inspiración final, a menos que ya se haya probado poseer la iluminación del genio, en cuyo caso habrá que repetir que en ajedrez las posibilidades son infinitas y su número es igual al de las po­sibilidades de la mente.

La defensa ha de empezar contra la propia equivocación

Como también es infinito el número de las equivocaciones garrafales contra las que es preciso mantenerse alerta como primerísima medida defensiva, ya que es igualmente cierto que existe un sinnúmero de jugadores astutos que esperan más del error ajeno que de la iniciativa propia, lo cual, a fin de cuentas, no es sino otra más de las formas en que puede enfocarse la táctica ajedrecística, basándose más en la experiencia y en el estudio de jugadas muy represen­tativas, que en la visión, la intuición y la creatividad.

Pero, como bien saben los cazadores de deslices ajedre­císticos, éstos no tienen siempre la misma trascendencia. El error de un principiante, por lo común, es suficiente para decidir la partida en el término de unas cuantas juga­das. Por el contrario, el error de un maestro puede no hacerse evidente, sino hasta después de una larga lucha, cuando los estudiosos lo extraen de entre una montaña de

26

Page 27: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

aciertos y hacen valer las debilidades y las insuficiencias a que dio lugar.

La trascendencia de las equivocaciones

Bien es cierto que de equivocaciones se alimenta la expe­riencia. De hecho el error y no el acierto ha sido el maes­tro de las grandes figuras del ajedrez de todos los tiempos, por lo que no falta razón a quienes sostienen que en el tablero los aciertos pasan, los errores quedan.

Por cuanto a las consecuencias que, en términos gene­rales, se ha calculado que las equivocaciones tienen sobre el resultado final de la partida, dependen de la etapa en que se cometan, y van de lo leve a lo demoledor. Según los grandes maestros, calculando sobre un máximo de 10 puntos tal incidencia y advirtiendo que es de dos a tres puntos mayor cuando no se tiene la iniciativa y se está a la defensiva. Así, los promedios se han establecido como s1gue:

Principio de juego Medio juego Fin de juego

1 a 5 3 a 7 6 a 10

Pero, obviamente, se trata de una apreciación subjeti­va, y deben considerarse también otros factores, como el del número de yerros cometidos, ya que con frecuencia uno induce a otro, a un ajedrecista a jugar una partida que ha perdido desde su inicio, como es el caso de la cita­da por el famoso teórico B. Weinstein, que se planteó con

l. e4 . . . e5 2. Dh5 . . .

27

Page 28: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Aquí la intención del jugador a cargo de las negras fue la de proteger a su peón en f4 con la dama, pero lo que hizo, por ofuscación o atropellamiento fue tomar su rey, por lo que ya no le quedó más remedio que hacerlo jugar, situándolo obligadamente en

2 . . . . Re2

Causando así una descarga que lo fulminó con

3 . D: e5 + +

Por supuesto, no es este tipo de acciones las que hacen pensar en el perfeccionamiento de las técnicas de ataque y defensa, aunque siempre insistiremos en la necesidad de no mover la mano hasta haber inmovilizado los nerviOs y movido el cerebro.

Cómo estudiar la apertura: las tres grandes clases

Pocas situaciones generan tanta inquietud en el jugador de ajedrez como la elección del primer movimiento y de la sucesiva secuencia de movimientos que responden a los re­quisitos fundamentales de la apertura:

l. Coherencia en los movimientos que constituyen la se­cuencia según un plan determinado.

2. Coherencia de los mismos movimientos entre sí.

3 . Adecuación a las necesidades del juego del adversario.

Los diferentes puntos estratégicos nos proporcionan los medios para individualizar los objetivos hacia los que �e

28

Page 29: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

dirigen los planes ya formulados. Los motivos tácticos, acom­pañados del análisis y de un adecuado cálculo, nos ofrecen los medios para establecer el modo de realizar los planes establecidos. El ejercicio y la práctica nos darán con el tiempo la técnica suficiente para conseguir resultados satis­factorios.

A la luz de todo esto, podemos decir que todos los medios para desarrollar correctamente una partida están a disposición del principiante. Hablando de ejercício y prác­tica, y necesariamente de tiempo, no podemos ignorar la experiencia de quien ha jugado antes que nosotros. Los conocimientos de los demás han dado como resultado todo lo que se sabe sobre el juego del ajedrez (incluso este libro no es otra cosa que el resultado de años de práctica). Las reglas que hemos presentado hasta ahora no existían antes de que alguien las descubriera a través de muchas partidas de ajedrez reales, y todos los libros y publicaciones exis­tentes no son otra cosa que una codificación y generaliza­ción de las experiencias y del análisis relativo. Prueba de ello es, el hecho de que no en todas las situaciones que se presentan durante una partida se pueden aplicar las mis­mas reglas. Por ejemplo, al final de una partida es esencial el uso activo del rey, que se convierte en una unidad táctica de relieve, mientras que en el medio juego, y más todavía en la apertura, es aconsejable no utilizarlo como pieza acti­va, ya que correría el riesgo de ser atacado por otras piezas con un aporte táctico superior. Otro ejemplo lo constituye, como ya hemos dicho al hablar de las combinaciones, la presencia de diferentes tácticas en la posición presente en ese momento en el tablero que conlleva la posibilidad de realizar una combinación.

Estudiar la apertura, así como los motivos tácticos o los temas estratégicos, significa atesorar la experiencia con­seguida por los demás.

29

Page 30: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Para que esto se realice de un modo más provechoso, es necesario que este estudio se haga de una manera completa.

Existen muchas publicaciones sobre el ajedrez. Las más divulgadas son las monografías que hacen referencia a de­terminadas aperturas. Existen libros que estudian exclusi­vamente la defensa francesa, la defensa siciliana, otros la de­fensa italiana, la española, etcétera.

También hay monografías más especializadas que des­criben determinadas variantes de cada apertura. Quien quie­ra estudiar las variantes de cada apertura ha de tener, no sólo el tiempo, sino también el dinero suficiente para ad­quirir la documentación necesaria.

Existen también publicaciones menos especializadas pero, más aptas para dar al principiante una información general sobre las aperturas a través del análisis de partidas realizadas por grandes maestros del pasado y del presente, las líneas estratégicas generales que caracterizan la base ini­cial del juego y las aplicaciones de las tácticas en el juego medio y en el final.

Nosotros aconsejamos al principiante dirigirse a este tipo de estudios. El examen sistemático y específico quedará para más tarde, cuando ya las características generales del juego estén bien claras, así como las grandes líneas estraté­gicas de la partida. Si el principiante empezase enseguida con un estudio sistemático correría tres grandes riesgos: podría aburrirse tanto que incluso abandonaría el juego an­tes de empezar a estudiarlo; una vez superado este peligro podría empezar a memorizar un determinado número de variantes sin entender ni su significado ni los motivos que las determinan y por tanto, sin adquirir la capacidad sufi­ciente para escoger las respuestas más idóneas a las situa­ciones que se presenten después, y finalmente, el riesgo más común está determinado por un movimiento imprevís-

30

Page 31: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

to: vuestro contrincante realiza una jugada que no está en ninguno de los libros que materialmente habéis devorado. Si vuestro adversario es un buen observador, y ha aprecia­do una <<novedad teórica» en vosotros (que también haría perder a un jugador de alto nivel), o no conoce la teoría de la apertura de memoria pero, considera que el movi­miento realizado es bueno, os obligará a utilizar vuestra capacidad de análisis y no vuestra memoria: si vuestra ca­pacidad no ha sido cuidadosamente estimulada y acrecen­tada, os encontraréis con serios problemas.

No pretendemos tratar aquí sobre las propiedades de todas las aperturas, sino que nos limitaremos solamente a describir, a través del análisis de algunas partidas y las líneas generales de sus aperturas, un sistema de estudio que pueda ser válido para conseguir un aprendizaje razona­do de las aperturas.

Después será problema del estudiante elegir las apertu­ras que considere mejores, en base al estilo de juego que habrá adquirido con la práctica.

Aperturas de juego abierto

Están caracterizadas por el primer movmuento l. e2-e4, e 7 -e5. Se basan en realizar lo antes posible la apertura de líneas, para conseguir enseguida una posición de ataque.

La lucha por la conquista del centro toma inmediata­mente características tácticas amenazadoras que se mani­fiestan antes de que el desarrollo de todas las fichas sea completo.

Aperturas de juego semiabierto

Están caracterizadas por el primer movimiento de las blan­cas l. e2-e4, al cual las negras no contestan con l. . . . e7-e5 .

.3 1

Page 32: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Mientras que en el juego abierto las negras se limi­tan a elegir el mejor sistema defensivo según determina­das condiciones estratégicas impuestas por las blancas, en el juego semiabierto las negras tienen mayores posibilida­des de contraataque, a pesar de que ello les cueste una menor disponibilidad de espacio en la primera fase de la partida.

Aperturas de juego cerrado

Están caracterizadas porque las blancas hacen cualquier pri­mer movimiento, excepto el de l . e2-e4. Se verifica una lucha por el centro cuyo fin es asegurar a las propias piezas la máxima capacidad de maniobra, al mismo tiempo que se pone al rey en condiciones de máxima seguridad. Las escaramuzas tácticas en estas aperturas, sólo se realizan con un desarrollo ya establecido.

Apertura de juego abierto

APERTURA ITALIANA

Esta apertura se basa en: Ataque directo al punto f7 que constituye el punto más

débil del enfrentamiento inicial de los peones negros, y que es defendido solamente por el rey.

Desarrollo de las piezas menores y avance de los peo­nes centrales para conseguir el inmediato y completo domi­nio en el centro y posiblemente un centro móvil.

Las negras por su parte, además de la defensa de f7, intentan el ataque al peón central e4 de las blancas y por lo tanto proteger el centro .

.32

Page 33: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Los primeros movimientos, que caracterizan esta aper­tura son: l. e4, e5; 2 . Cf3, Cc6; 3 . Ac4, Ac5; 4. Cc3 (con la idea de continuar con 5. d4).

PARTIDA EsTRIN-KLAMANN, LENINGRADO 1951

l. e4, e5; 2 . Cf3, Cc6; 3 . Ac4, Ac5; 4. c3, Cf6; 5 . d4, e:d4; 6. c:d4, Ab4 + ; 7 . Cc3,

Con esta continuación las blancas sacrifican el peón e4 con el fin de organizar peligrosos ataques por el centro y el lado del rey, gracias a la apertura de la columna e.

7 . . . . C:e4;

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Las negras pueden renunciar al sacrificio adoptado en lugar del movimiento del libro, los siguientes:

7. . .. d5; esto puede ocasionar a las negras serios pro-

33

Page 34: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

blemas debido a la acción que las blancas pueden realizar enseguida en la columna e que se abre, mientras que en ella todavía está el rey negro. Por ejemplo: 8. e:d5, C:d5; 9. 0-0, Ae6; 10. Ag5, Ae7;

11 . A:d5, A:d5; 12. C:d5, D:d5; 13. A:e7, C:e7; 14. Te1, f6; 15. De2, Dd7; 16. Tad1, Td8 (si 16 . . . . Rf7; 17 . Dc4 + ,

Cd5; 18. Ce5 + , f:e5; 19. d:e5 con la doble amenaza 20.

e6 + y 20. T:d5); 17. 0c4, Rf8; 18. Db4! c6; 19. d5!

7 . . . . 0-0, las blancas pueden contestar con 8. 0-0 (con la intención de preparar el avance d4-d5 y dar un carácter agresivo a la partida) o con 8. e5, Ce4; 9. 0-0,

A:c3 (no 9 . . . . C:c3 debido a 10. b:c3, A:c3; 1 1 . Cg5!, A:a1;

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

34

Page 35: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

12. Dh5!); 10. b:c3, d5; o también con 8. d5 y el juego se complica después de 8 . . . . C:e4; 9. d:c6, C:c3 7 . . . . A:d; 8. b:c.3, d5 (este último movimiento sirve

para penetrar en el centro de las blancas); 9. e:d5, C:d5; 10. 0-0 y las negras tienen problemas

relacionados con la precoz apertura de la columna e y con la defensa del caballo en d5.

8. 0-0, C:c3.

Las negras pueden hacer el cambio en c3 también con el alfil, de este modo permiten a las blancas realizar el ataque de Moller. 8 . . . . A:c3; 9. d5! (si 9. b:c3, d5! permite a las negras conservar el peón de ventaja siempre y cuando las blancas retiren Ac4; en cambio, si las blancas juegan 10. Aa3, las negras conservarán el peón de ventaja y con­seguirán una mejora en su posición con 10 . . . . d:c4; 1 1 . Te1, Ae6; 12. T:e4, Dd5;), Af6 (el mejor sistema defensi­vo ya que las negras conservan el alfil de diagonal negra y pueden finalizar su desarrollo; 9 . . . . Ca5 expone excesi­vamente todas las piezas negras: las blancas pueden conti­nuar con 10. Ad3!; en cambio 9 . . . . Cd6 presenta una vez más los problemas relacionados con la apertura de la columna y después de 10. d:c6, C:c4;

1 1 . De2 + , De7; 12. D:c4, Aa5; 13 . Ag5 con la intención de 14. Tael. Tampoco 9 . . . . Ce7, con el cual las negras

intentan cerrar la columna e, esto resuelve el problema de las negras, que en este caso se debe a que las blancas se quedan con dos alfiles y pueden, después de 10. b:c3, pre­sionar sobre las casillas negras. Con 9 . . . . Aa5, las negras intentan frenar la posibilidad de las blancas de aprovechar la columna. Así pues, controlan la casilla el, después de 10. d:c6, las blancas pueden realizar ataques tácticos con-

35

Page 36: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

tra f7. Finalmente 9. . . . Ce5 simplifica el juego después de 10. b:c3, C:c4; 1 1 . Dd4, f5!; 12. d:c4, d6, con iguales posibilidades; 10. Te1, Ce7; (a las negras no les interesa jugar enseguida 10 . . . . 0-0 debido al hecho de que des­pués de 1 1 . T:e4 las negras tienen que defender Cc6 y dan a las blancas el tiempo para jugar 12. d6, que crea serios problemas al desarrollo del alfil de diagonal negra de las negras); 1 1 . T:e4, d6 (con el fin de impedir definiti­vamente a las blancas avanzar a d6); 12. Ag5, A:g5; 13 . C:g5, 0-0; 14 . C:h7, R:h7; 15. Dh5, Rg8; 16 . Th4, f5; 17. Dh7 + , Rf7; 18. Th6, Tg8; 19. Te1, Df8; con la idea de 20 . . . . Th8.

9. b:c3, d5; A las negras no les interesa jugar 9. . . . A e 7 debido

a 10. d5, Ca5; 1 1 . d6! con un fuerte ataque de las blancas. Lo mismo se puede decir para 9 . . . . A:c3 debido a 10. Aa3. Sobre esta variante contamos con un análisis realiza­do por Keres: 10 . . . . Ce7 (o 10 . . . . d5; 11 . Ab5, A:a1; 12. Te1 + , Ae6;

13. Da4 O también 10 . . . . d6; 1 1 . Tcl, Aa5; 12. Da4, a6; 13 . Ad5, Ab6; 14. T:c6!, Ad7; 15. Te1 + , Rf8; 16. T:d6!) 11 . Db3, d5; 12. D:c3, d:c4; 13 . Tfe1, Ae6; 14. A:e7, R:e7; 15. d5, D:d5; 16. Tad1, Dc5; 17. Te5, db6; 18. T:e6 + ! 10. c:b4, d:c4; 1 1 . Te1 + , Ce7; 12. Ag5, Las blancas realizan un plan basado en el sacrificio de

una pieza para impedir a las negras hacer un enroque. La

36

Page 37: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

continuación más normal es 12. De2, Ae6; 13. Ag5, Dd7; 14. A:e7, R:e7; 15. Dc2, f6; (las negras previenen la ame­naza 16. Te5 seguida de 17. d5 y facilitan al rey una casi­lla para escapar; las blancas tendrán que seguir presionan­do sí quieren evitar que las negras prosigan con Rf7 y conserven su ventaja material) , 16. Cg5 ! , f:g5; 17. Te5, D:d4; 18 . Tae1,

Tae8; 19. T:e6 + , Rd7; 20. Td1 (no 20. T:e8, T:e8; 21 . Td1, por medio de 21 . . . . Rc8!), D:d1 + ;

21 . D:d1 + , R:e6; 22. Dg4 + dan lugar a un final difí­cil con iguales posibilidades para ambos.

12 . . . . f6; 13 . De2, Ag4; Las blancas atacan con fuerza después de 1.3 . . . . f:g5,

D:c4. 14. Af4, Dd7; Era mejor para las negras continuar 14. . . . Rf7; 15.

D:c4 + , Cd5; y después 16. A:c7?, Tc8! ; 17. A:d8, T:c4; 18. Aa5, b6; y las negras ganan una

pieza. Las blancas tienen que jugar 16. Cd2. 15. D:c4, A:f.3; 16. g:f3, c6; Las blancas ganan piezas después de 16 . . . . 0-0-0;

con 17. A:c7, D:c7; 18. D:c7 + y 19. T:e7. 17. Tacl, Rf8; Las negras no tienen tiempo de mover su caballo a d5.

Después de 17 . . . . Td8; 18. b5, D:d4; 19. De6, Dd7; 20. b:c6 con ventaja para las blancas. 18. b5, c:b5; 19. Db4, a5; 20. Dd6, Td8; 21. Tc7, D:d6; 22. A:d6, Td6; 23. T1; e7; Las negras pueden defenderse con eficacia contra 23.

T7:e7 (amenaza a 24. Te8) con 2.3 . . . . Td8; 24. d5, h5; 25. d6, Rg8; con la idea de 26 . . . . Rh7.

2.3 . . . . h5; 24. Tf7 + , Re8; 25. Tce7 + ,

.37

Page 38: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Rd8; 26. T:b7, Rc8 27. Tfc7 + , Rd8; 28. T:g7, Rc8; 29. T:b5, T:d4; 30. T:a5, Rb8; 3 1 . T5a7, Thd8; 32. a4, h4; 33 . Rg2, Tf4; 34. a5, Tg8; 35. T:g8, R:a7; 36. Tg4 y las negras abandonan.

PARTIDA ScHIFFERS-HARMONIST, FRANKFURT 1887

l. e4, e5 2. Cf3, Cc6 3 . Ac4, Ac5 4. c3, Cf6

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

El tablero gira sobre su centro

Esta continuación constituye la variante clásica de la Aper­tura Italiana: las negras consiguen un eficaz control de las

38

Page 39: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

casillas d5 y e4 contraatacando el centro de las blancas. Pero esto no impide a las blancas avanzar hacia el centro con 5 . d4, ya que de este modo atacarán también al alfil negro en c5. Ahora las negras tienen que cambiar su peón central para que el centro sea más móvil para los peones blancos.

La principal alternativa del 4. 0 movimiento de las ne­gras está constituida por 4 . . . . De7. Otro tipo de continua­ción, aunque no tan buena para las negras es:

4. . . . f5, en el que las blancas consiguen una buena jugada. Af4, d6; 13 . e5, con ventaja de las blancas. Duran­te una partida se pueden aplicar las mismas reglas. Por ejemplo, al final de una partida e 12. Af4, d6; 13. e5, con ventaja posicional de las blancas.

El ataque tiene el valor de la oportunidad

4 . . . . d6; 5 . d4, e:d4; 6. c:d4, Ab4 + (6 . . . . Ab6; 7 . Cc3, Cf6; 8. Ae3, Ag4; 9. Ab3, 0-0; 10. 0-0, Te8; 1 1 . Dd3, con clara superioridad de posición de las blancas que así han llegado al momento oportuno de desarrollar un fuerte ataque por el flanco del rey); 7 . Cc3, Cf6; 8. 0-0, A:c3; 9. bc3, C3e4; 10. Te1, d5; 1 1 . T:e4 + ! , d:e4; 12. Cg5 con la intención de 13. Dh5 con un ataque muy fuerte de las blancas.

5. d4, e:d4; Si 5 . . . Ab6; 6. d:e5, C:e4?; 7. Dd5 y ganan. 6. c:d4. No puede ser 6. e5 debido a 6. . . . d5; 7. Ab5 (si 7 .

e:f6, d:c4; 8. De2 + , Ae6; 9. f:g7, Tg8;), Ce4; 8. c:d4, Ab4 + ; y las negras no tienen un buen contraataque.

6 . . . Ab4 + (véase diagrama).

39

Page 40: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Es la mejor jugada de las negras. Si 6 . . . Ab6; 7. d5, Ce7 (no 7 . . . Ca5 debido a 8 . Ad3 que amenaza 9. b4; después 8 . . . . c5; 9. d6!); 8. e5. Cg4; 9. d6!, c:d6 (si 9 . . . . A:f2 + ; 10 . Re2 mientras que después 9 . . . . C : f2; 10. Db3, C:hl; 1 1 . A:f7 + , Rf8; 12. Ag5 con

.una ventaja de

posición de las blancas); 10. e:d6; Cc6; 11 . Ag5 con clara superioridad de las blancas.

7. Ad2, Para la alternativa 7. cd, ver la partida n. 0 2. 7 . . . A:d2 + . Véase el diagrama 5.

Intento de crear las condiciones del contraataque

Con este movimiento las negras intentan romper el centro blanco y colocar un caballo en d5. Las negras también pue­den jugar 7 . . . C:e4 o 7 . . . d5, pero en ambos casos las blancas tienen la posibilidad de crear complicaciones tácti-

40

Page 41: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

cas basadas en el sacrificio de f7, como se demuestra a continuación:

7 . . . C:e4; 8. A:b4, C:b4; 9. A:f7 + , R:f7; 10. Db3 + , d5; 1 1 . Ce5 + , Re6; 12. D:b4, c5; 13. Da3, c:d4; 14. Cf3, Db6; 15. 0-0, Rf7; 16. Tdl.

7 .. . d5; 8. e:d5, C:d5; 9. A:b4, Cc:B4; 10. Db3, De7 + ; 1 1 . Rfl y las negras no pueden jugar ni 1 1 . . . . Cb6 (debi­do a 12. A:f7 + ) ni 1 1 . . . . c6 (debido a 12. a3).

8. C:d2, d5; Este movimiento de las negras es mejor que 8 . . . . C:e4,

ya que después de 9 . d5, C:d2; 10. D:d2, Ce7; 1 1 . d6, c:d6; 12. 0-0 (o también 12. D:d6) las blancas, a cambio del peón perdido, disponen de una discreta iniciativa.

9. e:d5, C:d5; 10. Db3, Cce7; Parece favorable a las blancas la continuación 10 . . . .

Ae6; 1 1 . D:b7, Ca5; 12. Ab5 + , Rf8; 13 . Da6, c6; 14 . Aa4, Ac8; 15. Dd.3, Cb4; 16 . De3, Aa6; 17. Ce5, Ab5; 18 . . . . Dc3.

1 1 . 0-0, 0-0; 12. Tfel, c6;

4 1

Page 42: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Es aconsejable que las negras conserven su Cd5; en la partida Rossolino-Portisch, 1968, después de 12 . . . Cb6, las blancas consiguieron una posición superior con 13. Ad3, Cc6; 14. Tacl , Rh8; 15 . Abl.

13. a4.

La formación rígida se vuelve en contra de su autor

Con este movimiento, que antecede a una posterior jugada a a5, las blancas intentan impedir a las negras la posibili­dad de utilizar el escaque b6 y aprovechar la rigidez de la formación de los peones negros, las blancas también hu­biesen podido tener otra continuación:

13 . T acl, impide a la dama negra colocarse en e 7 y obliga a las negras a jugar 13. Cb6.

13. Ce4, centraliza el caballo, ya que desde esta posi­ción puede desarrollar un papel más activo.

13. Ce5, que parece amenazar el punto f7, aunque en realidad es muy poco eficaz.

13 . . . Dc7; 14. Tacl ! Las blancas amenazan la doble captura en d4 y si ahora

14 . . . . Ae6; 15. Cg5. 14 . . . . Cf4? Las negras tienen que jugar 14. . . . Df4 para dominar

las casillas en el lado del rey. 15. Cg5 ! , Ceg6; 16. Te8! Se inicia una larga combinación que terminará por ser

vencedora.

42

16. . .. T.e8; 17. A:f7 + , Rh8; Si 17 . . . Rf8; 18. C:h7 + , Re7; 19. Te1 + 18. A:e8, Ce2 + ; 19. Rh1, C:cl; 20. Cf7 + , Tg8; 21. Ch6 + , Rf8; 22. Dg8 + , Re7; 23. A:g6, h:g6;

Page 43: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

24. D:g7 + , Rd8; 25. Df8 + , Rd7; 26. Ce4! En este movimiento se basa toda la combinación inicia-

da en la jugada 16. Las blancas amenazan. 27. Cc5 + + . 26 . . . . Dd8; Si 26 . . . . B6 (o también 26 . . . . Cd.3); 27. Dg7 + , Rd8; 28. Cf7 + , Rd7; 29. Cfd6 + . 27. Dd6 + , Re8; 28. Cf6 + , y las negras abandonan.

PARTIDA TARRASCH - ALEKHINE, BADEN-BADEN 1925

l . e4, e5; 2. Cf.3, Cc6; .3. Ac4, Ac5; 4. c.3, Ab6; 5 . d4, De7;

8

7

6

5

4

.3

2

1

a b e d e f g h

4.3

Page 44: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Ataque y defensa en torno a un peón

En las partidas anteriores hemos podido constatar que las blancas basan su juego en la posición de Ac5 y en el ataque al peón central negro.

La idea de las negras en esta partida es defender, colo­cando la dama en e 7, al peón e5 (la secuencia de movi­miento es la siguiente: 4 . . . . De7; 5. d4, Ab6; el resultado no cambia), con el fin de impedir a las blancas desblo­quear, con ventaja para ellas, el centro y conseguir la mo­vilidad del peón e4. Además, del movimiento De7, las ne­gras tienen la posibilidad de presionar sobre el peón e4 de las blancas gracias a que éstas no pueden desplazar la dama negra de su posición realizando maniobras del tipo Cb1-c3-d5.

Si consideramos la secuencia moderna de estos prime­ros movimientos, las negras pueden ganar un peón: 4 . . . . De7; 5 . d4; e:d4; pero después de 6 . 0-0, las negras tie­nen problemas graves debido a que su retraso en el desa­rrollo no les permite realizar con eficacia un ataque combi­nado de piezas ligeras y dama contra el rey enemigo. Por ejemplo: 6 . . . . d:c3; 7. C:c3, d6; 8. Cd5, Dd7 (si 8 . . . . Dd8; 9 . b4, Ab6; 10. Ab2, con clara ventaja blanca); 9. b4!, C:b4; (si 9 . . . . a:b4; 10. Ab2, Rf8;

11 . C:b4, C:b4; 12. Cg5, Ch6; 13. Dd4, f6; 14. Ce6; si en cambio 9 . . . Ab6; 10. Ab2,

f6; 11 . Db3, Cge7; 12. A:f6); 10. C:b4, A:b4; 1 1 . Cg5, Ch6; 12. Ab2, Rf8 (no 12 . . . 0-0; a través

de 13. dd4, con mate imparable; si en cambio 12 . . . f6; 13 . A:f6, g:f6; 14. Dh5 + Rd8; 15 . Ce6 + o también 15. D:h6); 13. A:g7 + ! R:g7;

14. Dd4 + , Rg8; 15. Df6 y ganan. 6. 0-0. La alternativa más interesante de que disponen las blan-

44

Page 45: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

cas a la jugada del libro, es sacrificar un peón para frenar e incluso bloquear el desarrollo de las negras en el lado de la dama: 6. d5, cd8; 7. a4, a6; 8. d6, D:d6;

9. D:d6, c:d6; 10. Ad5! Ahora las blancas tienen que evitar que las negras cambien su alfil de diagonal oscura y conserven la ventaja material, mientras que las negras han de intentar que sus rivales no consigan apoderarse de b6 (cosa que puede suceder, por ejemplo, después de una continuación de este tipo: 10 . . . . Cf6; 1 1 . Ca3, Ce6;

12. Cc4, Ac7; 1.3 . Ae3, con la intención de 14. Ab6 y 15. a5).

Por otra parte las negras no pueden matar enseguida al alfil en d5 de las blancas porque después de la captura por medio del peón e (e:d5), la presencia de este último en d5 bloquearía definitivamente las posibilidades de de­sarrollo de las negras. Con el fin de concluir el propio desarrollo, las negras tienen que considerar que pueden per­der la ventaja material: 10 . . . Cc6; 11 . Ca3, Ac7; 12. Cc4, Cce7; 1.3. b3! , Cf6; 14. Aa3, Ce:d5; 15 . e:d5, C:d5; 16. 0-0-0!, b5; 17. C:d6 + , A:d6; 18. A:d6, Ab7; 19. C:e5, f6; con iguales posibilidades.

6 . . . . Cf6; 7. Tel. . Las blancas renuncian a avanzar a d5 y a realizar cam­

bios en el centro (d4:e5), así se mantiene la tensión exis­tente entre los peones del centro.

7 . . . d6; 8. a4, a6; 9. h3 .

La perfecta preparación de un ataque

Este movimiento es una preparac10n para la maniobra Cb1-a3:c2 con la que las blancas quieren proteger el caba­llo con el peón central d4 y posteriormente atacar la casilla

45

Page 46: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

e3; para que esto sea posible es necesario un control previo de g4 a fin de evitar el ataque del caballo negro.

9 . . . . 0-0; 10. Ag5. Sólo sirve para que las negras debiliten su enroque. Resúlta mucho más enérgica la continuación 10. Ca.3

(o 10. b4, Rh8; 1 1 . Aa.3, e:d4; 12 . C:d4, C:e4, con posibi­lidades de contraataque; es peligroso para las negras acep­tar en esta variante la oferta del peón blanco del 10 . 0 mo­vimiento con 10 . . . . e:d4; 1 1 . c:d4, C:b4; 12. e5), Rh8; 1 1 . Ad5 (o también 1 1 . Cc2), e:d4; 12. c:d4, Cb4; 1.3. Ag5 y las blancas tienen una posición muy activa.

10 . . . hb; 1 1 . Ae.3, Si 1 1 . Ah4, Rh8, con la idea de 12. . . . g5 (no 1 1 . g5 debido a 12. C:g5, h:g5; 13. A:g5, y las blancas

disponen de peligrosas posibilidades de ataque). 1 1 . . . . Dd8!

Abriendo una columna

El fin de este movimiento es preparar la maniobra e5:d4 seguida de d6-d5 y al mismo tiempo liberar la columna e para colocar Tf8. Esta jugada es coherente con la idea en la que se basa el movimiento 4. . . . De 7 : consolidación del peón central de Jas negras y consiguiente fijación del peón blanco e4, para continuar con la amenaza de liquida­ción del centro blanco.

12. Ad.3, Te8; 1.3. Cbd2, Aa7! Previniendo 14. Cc4. 14. Dc2, e:d4; Las negras empiezan a romper el centro blanco y al

utilizar la acción a distancia de sus piezas, pueden actuar sin ser molestadas gracias a la preventiva inmovilización del centro.

46

Page 47: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

15 . C:d4, Sí 15. c:d4, las negras pueden sacar a las blancas el

alfil de línea blanca con 15 . . . . Cb4, así debilitan el centro blanco: 16. Dc3, C:d3;

17. D:d3, c:e4!; 18. C:e4, Af5; 19. Cfd2, d5; 20. f3, d:e4: 2 1 . f:e4, Ag6; los dos alfiles negros ejercen una fuer­te presión sobre el centro blanco.

15 . . . Ce5; 16. Afl, d5!; 17. TAd1, No puede ser 17. f4 debido a 17 . . . . Cg6; 18. e5, Ch5 ! ;

y las negras ganan un peón. 17 . . . c5; 18. C4b3, Dc7; 19. Af4, Las blancas intentan prepararse para frenar la acción

que las negras están a punto de ejercer en la diagonal b8-h2 que, después de la liquidación del centro, se ha abierto. Era mejor jugar 19. e:d5, C:d5; 20. Cc4, C:c4; 21 . A:c4, C:e4; 22. T:e3, T:e3; 23. f:e3, simplifica la posición, pero las negras siguen con ventaja después de 23 . . . . De 7 (análi­sis de Alekhine).

19. : . . Cf3 + !; 20. C:f3, D:f4; 21 . e:d5?, Af5 ! ; 22. Ad3, Si 22. Dd2, D:a4; 2.3. Ccl, Ac2; 24. T:e8 + , T:e8; 25. Te1, Ce4; 26.

Df4, c4; 27. Cd4, A:d4; 28. c:d4, Db4! (Alekhine). La respuesta al movimiento de las negras impide a las

blancas defender a su rey colocando el alfil de línea blanca en g2, después del sacrificio de las negras en h.3.

22 . . . . A:h3!; 2.3. g:h3, Prácticamente forzada: las negras amenazan 23 . . . . c4;

23 . . . . A:g2; 2.3 . . . . D : a4; y 2.3 . . . . Ag4. 2.3 . . . . D:f.3; 24. T:e8 + ? ! , T:e8; 25. Afl, Te8; 26.

c4, Tg5 + ; 27. Rh2, Cg4 + ; 28. H:g4, T:g4, y las blan­cas abandonan. (No pueden evitar 29 . . . . Th4 + ) .

47

Page 48: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Apertura de juego abierto

APERTURA ESPAÑOLA

Caracterizada por los movimientos l . e4, e5; 2 . Cf.3, Cc6; .3 . Ab5, esta apertura ha sido creada con el fin de atacar indirectamente al peón e5 de las negras (las blancas atacan a las piezas que lo defienden). De todos modos, la amena­za de captura del peón e5 es ficticia, por lo menos en un inmediato desarrollo de juego, ya que después de 4. A:c6, d:c6; 5. C:e5, las negras consiguen de nuevo su peón ju­gando 5 . . . . Dd4!

Amenaza en torno a una clavada

El planteamiento inicial de las blancas se debe considerar en una perspectiva más amplia: la posición de Ab5 es una latente amenaza ya que si las blancas repentinamente de­fienden a su peón e4, entonces el ataque sobre e5 se con­vierte en real. Además, ya que las negras, antes o después, tendrán que desarrollar a su alfil de diagonal oscura y por lo tanto deberán hacer avanzar el peón d (d7-d6), enton­ces, Ab5 enclava a Cc6 sobre el rey, así que a la presión que se realiza en el centro le sigue la amenaza de limita­ción de movimiento de una pieza enemiga.

Posteriormente las blancas intentarán conseguir el con­trol de las casillas d5 y f5 y gracias a ello prepararán un ataque táctico por el flanco del rey. Las negras, por su parte, para contrarrestar los planes de las blancas intenta­rán con la ayuda de la movilidad de sus peones por el lado de la dama, un fuerte contrajuego en este sector. Además, equilibrarán la posición aprovechando la apertura de la co­lumna d, creada por dicho avance para conseguir en esta línea el cambio de las piezas pesadas.

48

Page 49: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

PARTIDA NEUSTADT-MILIUTIN, 6. o CAMPEONATO URSS POR CORRESPONDENCIA, 1963-64

l . e4, e5; 2 . Cf3, Cc6; 3 . Ab5, a6.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Las negras disponen de sistemas defensivos: 3 . . . Cd4; las blancas como respuesta a este movimien­

to, disponen de dos alter-nativas:

a) Capturar el caballo negro con 4. C:d4 y después de 4 . . . . e:d4 la posic�ón del ·peón negro frenará el desarrollo natural de Cb1, p.ero necesitará una continua defensa, por ejemplo: 4. C:d4, e:d4; _5. 0-0, c6; 6. Ac4, Cf6; (esto no preocupa a las negras 7. e5 por 7 . . . d5) 7 . Tel, d6; 8. d3, Ae7; 9. Cd2, 0-0; 10. Cf3! y las blancas tienen una ligera ventaja de posición debido al ataque al peón d4;

b) Retirar el alfil permitiendo a las negras simplificar el juego: 4. Ac4, C:f3; 5. D:f3; Df6; 6. Dg3, d6; 7 . Cc3, c6; 8. 0-0, Ae6!

49

Page 50: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

3 . . . f5 (la variante Jaenisch) : es un interesante sistema de contraataque que conduce a un juego rico en elementos tácticos. Por ejemplo: 4. Cc3, f:e4; 5 . C:e4, d5; 6. C:e5, d:e4; 7. C:c6, Dd5; 8. c4, Dd6; 9. C:a7 + , Ad7; 10. A:d7, D:d7; 1 1 . Dh5 + , g6; 12. De5 + , Rf7; 13. Cb5, c6; 14. Dd4! , De7; 15. Cc3, Cf6; 16. 0-0, Td8; 17. De3, De5!

3 . . . . Cf6; 4. 0-0, C:e4; 5. d4, Ae7; 6. De2 (si 6. d5, Cd6; 7. Aa4, e4!), Cd6; 7. A:c6, b:c6 (no 7 . . . . d:c6 por 8. d:e5, Cf5; 9. Td1, Ad7; 10. Cc3, 0-0; 1 1 . Ce4, con ventaja de las blancas); 8. d:e5, Cb7; 9. Cc3, 0-0 preparando el avance de los peones d y c.

3 . . . . d6 (la variante Steinitz): las negras, en esta línea de juego intentan efectuar una serie de cambios en la aper­tura, consiguiendo una posición simplificada pero sólida; pero ello reduce sensiblemente las posibilidades tácticas y permite a las blancas mantener su iniciativa. Por ejemplo: 4 . d4, Ad7; 5. Cc3, e:d4; 6. C:d4, Cf6, 7. 0-0, Ae7.

Hay otras jugadas que no son muy aconsejables para las negras: 3 . . . . Ac5 no es muy aconsejable ya que Cc6 ya está atacado y la posición que asume el alfil de línea oscura puede hacer más eficaz el avance de los peones cen­trales blancos (c2-c3, y d2-d4), como sucede en la apertura italiana. 3 . . . . Cge 7 impide el desarrollo del alfil de diago­nal oscura de las negras. Finalmente, en contra de los prin­cipios de la apertura va 3 . . . . Df6 (como demuestra 4. Cd, Cge7; 5. d3, y ahora las blancas se sitúan mejor).

Un alfil a desplazar

El movimiento realizado está hecho en función de la pre­paración del avance de los peones negros por el lado de la dama, empuja a las blancas a tomar una decisión acerca del alfil de diagonal clara.

50

Page 51: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

4. Aa4 4 . . . . Cf6.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Las negras podrían jugar 4 . . . . d6, con la llamada va­riante Steinitz retardada: 5 . c3, Ad7; 6. d4, Cf6; 7 . 0-0, Ae7; 8. Cbd2, 0-0; 9. Tel, e:d4; 10. c:d4, Cb4; 11. A:d7, D:d7; 12. Cfl, c5; 13. a3, Cc6; 14. d5, Ce5; 15. C:e5; con posibilidades superiores para las blancas.

Otra alternativa es el sistema Müller: 4 . . . . Ac5; 5. 0-0, Cf6; 6. c3, Aa7; 7 . d4, b5; 8. Ab3, De7; 9. Ad5 ! , e:d4; 10 . Ag5, h6; 11 . A:f6, D:f6; 12. e5, con neta ventaja de posición para las blancas.

El movimiento 4 . . . . f5 hace referencia a la variante Jaenisch, a la cual puede seguir 5. d4, e:d4; 6. e5, Ac5; 7 . 0-0; Cge7; 8. Ab3, d5; 9. e:d6, D:d6; 10. Tel, h6; 1 1 . Cbd2, b5; 12. a4, Ab7; 13. Ab5, a:b5; 14. T:a8, A:a8; 15. Te6, Dd7; 16. De2, d3; 17. c:d3, Rd8; 18. d4!, C:d4; 19. C:d4, A:d4; 20. Cf3, con ventaja blanca.

5 1

Page 52: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Finalmente la variante Leningrado, caracterizada por 4 . . . . b5 está determinada por la intención de las negras de eliminar el «Alfil Español». Por ejemplo: 5. Ab3, Ca5; 6. d4, e:d4; 7. D:d4, C:b3; 8. a:b3, Ce7; 9. 0-0, Cc6; 10. dd5, Ab7; 1 1 . c4, Ae7; 12. Td1, 0-0; 13 . Cd, Ca5; 14. D:d7, C:b3; 15. Tb1, D:d7; 16. T:d7, Ad6 con venta­Ja negra.

5. 0-0.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Las blancas también disponen de otras continuaciones: 5 . De2 (amenaza con matar un peón después de ir a

c6), b5; 6. Ab3, Ac5; 7 . a4, Tb8; 8. a:b5, a:b5; 5. Cd, b5; 6. Ab3, Ae7; 7. 0-0, d6; 8. Cd5, Ab7;

9. C:f6 + , A:f6; 10. Ad5, Dc8; 1 1 . Te1, 0-0; 12. d, Ca5; 13. A:b7, D:b7; con juego muy igualado).

5 . d3 variante Andersen: en ella las blancas tienden a consolidar el centro y a llevar Cb1 en el lado del rey;

52

Page 53: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

d6; 6. c3, g6; 7 . 0-0-0; Ag7; 8. Te1, 0-0; 9. Cbd2, Cd7; 10. Cfl, Cb6; 11 . Ac2, d5; con posición sólida.

5. A:c6, con características similares a las de la varian­te de cambio.

5 . d4, e:d4; 6. 0-0, Ae7 (si 6 . . . C:e4; 7. Te1, d5); con desarrollo típico de la variante abierta (ver partida n. 0 3) 7 . e5, Ce4; 8. C:d4, 0-0; 9. Cf5, 10. A:c6; b:c6; 1 1 . C:e7, D:e7; 12. Tel, con iguales posibilidades.

5 . . . Ae7; 5 . . . Ac5 conduce el sistema Moller (para 5 . . . . C:e4,

que da lugar a una variante abierta. 6. Tel, b5; 7 . Ab3, d6.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

La alternativa más importante al 7. 0 movimiento de las negras es 7. . . . 0-0, como preparación a la variante del gambito (se llama así al sacrificio de un peón en la apertura) que se denomina contraataque Marshall.

53

Page 54: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Las blancas pueden intentar esquivar este ataque con 8. d4 (o 8. a4, Ab7; 9. D : , Ca5; 10. Aa2), al que puede seguir 8 . . . e:d4 (si 8 . . . C:d4; 9. A:f7 + , T:f7; 10. C:e5, Cc6; 1 1 . C:f7, R:f7; 12. e5, Ce8; 13. Dd5 + , Rf8; 14. Te3, y las blancas ganan); 9. e5, Ce8; 10. Ad5, Tb8; 1 1 . A:c6, d:c6; 12. C:d4, Tb6!

He aquí las principales líneas de desarrollo del contra­ataque Marshall:

7 . . . . 0-0; 8. c3, d5; 9. e:d5 y ahora las negras tienen dos posibilidades.

9 . . . . C:d5; 10. C:e5, C:e5; 11 . T:e5, c6; 12. d4, Ad6; 13. Te1, Dh4; 14. g3, Dh3; 15. Ae3, Ag4; 16. Dd3, Tae8; 17. Cd2, Te6; 18. a4, f5; 19. Dfl, Dh5; 20. f4, Tf8; y como se puede ver, la iniciativa de las negras compensa el peón perdido.

9 . . . . e4; 10. d:c6, e:f3; 1 1 . d4, Ad6; 12. Ag5, A:h2 + ; 13. R:h2, Cg4 + ; 14. Rg1, D:g5; 15. D:f3, h5; 16. Ca3!

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

54

Page 55: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

y las blancas conservan su ventaja material, por ejemplo: 16 . . . . Dh4; 17. Dg3; si en cambio 16 . . . . Af5), 17. Te2; mientras si 16 . . . . h4; 17. Te8 o simplemente 17 . Te2.

8. c3, 0-0; 9. h3, Ca5. Véase en el diagrama n. 0 1 1 la p9sición después de 9. . . . Ca5.

Este es el sistema defensivo Chigorin. En él, aparte de los ternas estratégicos en los que se basa y de los que ya hemos hablado al principio de esta lección, se pueden encontrar notables posibilidades tácticas ofensivas y defen­sivas para ambas partes.

Las principales alternativas son: 9 . . . h6 (sistema Srnyslov: las negras consiguen una po­

sición sólida pero ligeramente pasiva; preparan la maniobra Tf8-e8 y Ae 7 -f8 después de evitar que las blancas lleven a su caballo a g5. Así pues, empezarán el contraataque por el centro y el lado de la dama; 10. d4, Te8; y ahora la continuación principal de las blancas es:

1 1 . Ae3, Af8; 12. Cd2, Ab7 (las negras preparan su contraataque en el centro y abandonan el control de f5; la otra alternativa es totalmente opuesta: 12 . . . . Ad7; 13 . Dbl. Tb8; 14. a3, a5; 15. Da2, De7; 16. a4, b4; 17. d5, Cd8; 18. c:b4, T:b4; 19. Cc4, C:e4; 20. C:a5, con ligera ventaja de las blancas) 13. Db1, Dd7; 14. a3, d5; 15. C:e5, C:e5; 16. d:e5, C:e4; con juego muy igualado.

1 1 . Cbd2, Af8; 12. Cfl, Ab7 (menos activa es la conti­nuación 12 . . . . Ad7; 13. Cg3, Ca5; 14. Ac2, c5; 15. b3, Cc6; 16. d5, Ce7; 17. Ae3, g6; 18. Dd2, Rh7; 19. Ch2, Ag7; 20.f4, con mejores posibilidades para las blancas o sí no 14 . . . Cc4; 15. b3, Cb6; 16. Ch2, c5; 17. f4, c:d4; 18. c:d4, Tc8; 19. Cf3, Dc7; 20. Ad3, e:d4; 2 1 . Ab2, y las blancas en este caso están en mejores condiciones); 13 . Cg3, Ca5; 14. Ac2, Cc4; y las blancas pueden conti­nuar con 15. a4, 15. Ad3 o también con 15. b3, pero de todos modos el juego está muy equilibrado.

55

Page 56: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

9. . . . Cb8 (el sistema Breyer: las negras preparan el movimiento del caballo a d7 para defender el peón e5; el alfil de diagonal oscura irá a b 7; las características de este sistema son muy parecidas a las del sistema Smyslov. Pero el defecto de éste, radica en el hecho de que las ne­gras pierden tiempo, haciéndolo entonces inferior al siste­ma Chigorin); 10. d4, Cbd7; 11 . Cbd2, Ab7; 12. Ac2 y las blancas tienen un buen desarrollo, conservando además la iniciativa.

10. Ac2, c5; 11 . d4, Dc7; Las negras confirman el peón e5 y se preparan para

dominar la columna e, próxima a la apertura. 12. Cbd2; La maniobra de las blancas tiende a realizar un domi­

nio total en las casillas d5 y f5, mediante el movimiento del caballo a e3 o a g3 .

Las negras intentarán conseguir un buen control del centro y un fuerte contraataque por el lado de la dama.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

56

Page 57: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

12 . . . . Ae6. Véase en el diagrama n. 0 12 la posición desp�ués de esta jugada.

Esta no es la mejor continuación ya que da a las blan­cas la ocasión para continuar con 13. d5, Ad7; 14. b3!

Las principales líneas de juego consideradas en la teoría hasta ahora son: ·

12 . . . . Cc6; 13. d:c5, d:c5; 14. Cfl, Ae6; 15. Ce3, Tad8; 16. De2, c4; 17 . Cf5, Tfe8; 18. Ag5, Cd7; 19. A:e7, C:e7; 20. Cg5 con una fuerte presión de las blancas en el

lado del rey. 12 . . . . Ab7; 13. a4, c:d4; 14. c:d4, b4; 15. b3, Tac8;

16. Ab1, d5; con iguales posibilidades. 12 . . . . c:d4; 13. c:d4, Ab7; 14. Cfl, Tac8; 15. Ab1, d5; 16. e:d5, e:d4; 17 . Ag5, Tfe8; 18. c:d4, c:d5; 19. A:e7,

T:e7; con juego igualado. 12 . . . . Td8; 13 . Cfl, c:d4; 14. c:d4, d5; 15. C:e5, d:e4;

16. Cg3; con mayores posibilidades para las blancas. 12 . . . . Ad7; 13. Cfl, Tfe8; 14. Ce3, g6; 15. d:e5, d:e5;

16. Ch2, Tad8; 17. Df3, Ae6; 18. Chg4, C:g4; 19. h:g4, Cc4; 20. Cd5, A:d5; 21 . e:d5, Cb6; 22. Td1, con iguales posibilidades.

13. d:e5, d:e5; 14. Cg5, Tad8; 15. C:e6; Era mejor jugar De2, Ac8; 16. Cfl, g6; 17 . Ce3, Ab7;

18. a4! (Altschuler-Miliutin, Campeonato URSS por correspon­

dencia 1963-64). 15 . . . . f:e6; 16. De2, g6; 17 . Cfl, Ch5; 18. g3, c4;

19. Ah6. Si 19. Ce3, Cc6; 20. Cg4, Ac5; 21 . Rg2. Cd4; 22.

c:d4, e:d4; y ahora las blancas han de devolver la pieza jugando 23. Ad3 para frenar el peligroso peón de las negras.

19 . . . . Tf7; 20. Ce3, cc6; 21 . Cg4, Ac5; 22. Ae3, Cd4!;

57

Page 58: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

23. c:d4, e:d4; 24. Ch6 + , Rg7; 25. C:f7, d:e3!; 26. C:d8, e:f2 + , 27. Rhl, D:g3;

A las negras no les iba bien continuar con 27. . . . f:el = D + debido a 28. D:el, D:d8; 29. g4! y las negras ganan un peón, mientras que las blancas han solucionado gran parte de sus problemas y mejorado su posibilidad de éxito. Tampoco puede ser 27 . . . . c:g3 + porque después de 28. Rg2, las negras no pueden jugar 28 . . . . C:e2 debido a 29. C:e6 + .

28. Dfl; de5 ! ; 29. C:e6 + ? Era mejor jugar 29. Rg2 y si ahora 29 . . . . Dg3 + ; 30.

Rhl; si en cambio 29 . . . . Cg3; 30. C36 + , Rh6; 31 . C:c5, C:fl; 32. T:fl.

29 . . . . D:e6; 30. Dg2, De5; Por ahora el peón f2 sirve para defender del ataque

de las negras. 31 . Dg4, Ad6; 32. Rg2, Dh7 + ; 33. Rf3, f:el = D; 34. T:el, Ag3; 35. Te2, Dhl + ; 36. Re3, Del + ; 37. Rf3, Dfl; 38. Re3, Af4 + ; 39. Rd4, Cg3; 40. Th2, Del; 41 . Ddl, D:b2 + ; 42. Rc5, C:e4 + ; 43. a:e4, ae3 + ; 44. Rc6, D:h2; 45. Dd7 + , Rh6; 46. Dg4, De5; 47. Df3, Dc5 + ; 48. Rd7, Ag5; 49. Re6, a5 y las blancas abandonan.

Variante abierta de la Apertura Española

PARTIDA ZAITCHEV-SAvoN, Moscú 1969

l. e4, e5; 2. Cf3, Cc6; 3. Ab5, a6; 4. Aa4, Cf6; 5. 0-0, C:e5;

58

Page 59: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Ésta es la variante abierta. En ella se verifican desarro­llos complejos y muy diferentes entre sí, aunque siempre están enmarcados en las líneas estratégicas de la apertura española.

6. d4, Las blancas se aprovechan de que las negras tienen to­

davía el rey en el centro, para abrir la línea. 6 . . . . b5; No puede ser 6 . . . . d5 debido a 7 . C:e5 (si ahora 7 .

. . . Ad7; 8. C:f7!). Después de 6 . . . . e:d4; 7. Te1, d5; 8. C:d4, Ad6; 9. C:c6, a:h2 + ; 10. Rh1, Dh4; 1 1. T:e4 + , d:e4; 12. Dd8 + , d:d8; 13 . C:d8 + , R:d8; 14. R:h2, Ae6; 15 . Ae3, f5; 16. Cd, Re7; 17. g4, g6; 18 . Rg3 y el final es ventajoso para las blancas.

7. Ab3, d5; No puede ser 7 . . . . e:d4 debido a 8. Tel, d5; 9. cd! 8. D:e5, Ae6; 9. a4 (véase diagrama 13).

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

59

Page 60: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

UN PECULIAR MOVIMIENTO

El movimiento de las blancas no es muy normal. La conti­nuación más frecuente está constituida por la variante clá­sica 9. c3 y por la variante moderna 9. De2.

Después de 9. c3, las negras pueden seguir con las si­guientes líneas de juego.

9 . . . . Ac5; 10. Cbd2, 0-0; 11 . Ac2, y ahora 11 . . . . C:d2; 1 2 . D:d2, f6; 13. e:f6, T:f6; 14. Cd4, C:d4; 15. C:d4, Ab6;

16. a4, Tb8; 17. a:b5, a:b5 18. Dc3, Dd6; 19. Ae3 (Lasker-Rubinstein, San Petersburgo 1914), o sino 11 . . . . f5; 12. Cb3, Aa7; 1 3 . Cfd4, C:d4; 14. C:d4, A:d4; 15. C:d4, f4;

16. f3, Cg3; 17. H:g3, f:g3; 18. Dd3, Af5; 19. D:f5, T:f5; 20. A:f5, Dh4; 21. Ah3, D:d4 + ; 22. Rh1, D:e5; 23. Ad2, D:b2;

24. Af4, d4; 25. A:g3, c5; 26. Tael, d3; 27. Te7, d2; 28. Ae6 + , Rh8; 29. Td7, c4; 30. Td1, Df6! amenazando 31 . . . . c3; también es interesante la continuación 11 . . . . C:f2, que asegura a las negras una prolongada iniciativa: 12. T:f2, f6; 13. e:f6, D:f6; 14. Cfl, A:f2; 15. R:f2, Ce5; 16. Rg1, Tae8; 17. Ae3, C:f3 = ; 18. d:f3, D:f3; 19. g:f3, T:f3; 20. Af2, Ah3; 21 . Cg3, g6.

9. . .. Ae 7, con claros intentos de posición. Por ejem­plo: 10. Cbd2, 0-0; 11 . C:e4; d:e4; 12. A:e6, f:e6; 13. Cd4, Dd5; 14. Db3, Cd8!

9 . . . . Cc5; 10. ac2, Ag4; 11 . Te1, Ae7; 12. Cbd2, d4; 13. Cb3, d3; 14. Ab1, c:b3; 15. a:b3, Af5; 16. Ae3, Dd5; y las negras tienen un juego suficientemente activo.

La principal línea de juego que se verifica después de 9. De2, es la siguiente: 9 . . . . Ae7; 10. Td1, 0-0; 1 1 . c4; 12. A:c4, Dd7; 1 3 . Cc3, C:c3; 14. B:c3, f6; 15. e:f6, 15. e:f6, A:f6; 16. Cg5,

60

Page 61: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

a:g5; 17. A:g5, Tae8; 18. Dd2, d:c4; con juego iguala­do, o si no 10 . . . Ce5; 1 1 . Ae3, C:b3; 12. a:b3, Dc8; 13 . Ag5, Ag4; 14. A:e7, c:e7; 15. b4! y las blancas están en mejores condiciones.

9 . . . . Ca5; 10. a:b5, a:b5; Las blancas tienen ventaja después de 10 . . . . C:b3; 1 1 .

c:b3, a:b5; 12. T:a8, D:a8; 13. Cd4 (Simagin;Taimanov, 194 7); pero la continuación elegida por Hs negras no es coherente con el 9. 0 movimiento.

1 1 . Cd4, Ac5; Las negras sacrifican un peón para poder conseguir una

cierta iniciativa después de 12. C:b5, 0-0; 12. c3 ! Las blancas prefieren conservar su propia posición de

superioridad. 12 . . . Ab6; No puede ser 12 . . . . C:b3 debido a 13. T:a8, D:a8;

14. D:b3 y las negras no pueden hacer el enroque por la amenaza de 15. f3.

13. Ac2, Cc4; 14. T:a8, D:a8; 15. f3.

Tras crear las condiciones se desata el ataque

Las blancas gracias a su superioridad de peones en el cen­tro y a la acción de sus piezas en el lado del rey, están a punto de realizar su ataque, pues aprovechan la disper­sión de las piezas negras y de la imposibilidad de las negras de hacer el enroque.

15 . . . . Cc5, 16. f4, Ce4; Las blancas amenazan 17. b3, Ca5; 18. b4. 17. b3, Ca5; 18. f5, Ac8; 19. Dg4, Rf8; Si 19 . . . . g6; 20. e6, g:fe; 21 . Dg7, Tf8; 22. Ah6,

Ac5; 23. b4 y ganan.

61

Page 62: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

20. A:e4, d:e4; 21 . Aa3 + , b4; 22. A:b4 + , c5; 23. A:a5, D:a5; 24. Ce6 + ! A:e6; 25. f:e6, c4 + ; 26. Rh1, D:e5; 27. e:f7, Re7; 28. Tf5, De6; 39. D:g7 y las negras abandonan.

PARTIDA LASKER-CAPABLANCA, SAN PETERSBURGO 1914

l. e4, e5; 2. Cf3, Cc6; 3. Ab5, a6; 4. A:c6;

La idea de esta variante está basada en el hecho de que al final las blancas, que disponen de ventaja en el lado del rey, están favorecidas, mientras que a las negras se las puede frenar fácilmente. Pero las negras se quedan con la pareja de alfiles y como en el enfrentamiento éstas no tienen puntos particularmente débiles, les será posible rea­lizar un eficaz contraataque en el lado de la dama.

4 . . . . d:c4;

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

62

Page 63: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Favorece la iniciativa de las blancas la continuación 4. b:c6; 5. d4, e:d4; 6. D:d4. 5. d4 (véase el diagrama n. 0 14). Las principales alternativas de este movimiento son: 5. Cc3, f6; 6. d4; 7. D:d4, e:d4; 8. C:d4, A:d6; 9.

Ae3, Ce7; 10. 0-0-0, 0-0; 1 1 . Cb3, Cg6; y las negras tienen una posición satisfactoria.

Rechazo de un sacrificio intencionado

5. 0-0, Ag4; (si 5 . f6; 6. d4, Ag4; 7. d:e5, D:d1; 8 . T:d1, F:e5; 9. Td3, Ad6; 10. Cbd2, Cf6; 11 . cc4, C:e4; 12. cc:e5, A:f3; 13. C. F3, 0-0; 14. ae3, b4; con iguales posi­bilidades, lo siguiente conduce a una situación compleja: 5 . . . . dd6; 6. d4, e:d4; 7. C:d4, Ad7; 8. cc3, 0-0-0; 9. Ae3, Ch6; 10. h3, g5!?; 11 . Dh5, g4;) 6. h3, h5 ! ; 7. d3 (las blancas no pueden aceptar el sacrificio debido a la apertura de la columna h en su enroque) Df6; 8. Ae3, A:f3; 9. D:f3, D:f3; 10. g:f3, Ad6; con iguales posibilidades.

5 . . . . e:d4; 6. D:d4, D:d4; 7. C:d4, Ad6; El mejor planteamiento defensivo es 7 . . . . Ad7?; 8.

Ae3, 0-0-0; 9. Cd2, Ce7; 10. 0-0-0, Te8. 8. cc3, Ce7; 9. 0-0, 0-0; 10. f4, Te8; las negras ame­

nazan 1 1 . . . . Ac5; 12. ae3, Cd5! 11 . Cb3, f6; 12. f5.

Recurso inmovilizador

Este movimiento, que a primera vista no parece muy bue­no debido a la casilla débil e5, tiene como compensación la posibilidad de reducir sensiblemente la movilidad de las piezas negras y además fijar la casilla débil e6 (que es más importante que e5 ya que se encuentra en pleno campo adversario).

63

Page 64: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

12 . . . . b6; 13. Af4, Ab7? Las negras tenían que jugar 13 . . . . A:f4; 14. T:f4, c5;

15. Tdl, Ab7; 16. Tf2, Tac8; consiguiendo buenas posibi­lidades de contraataque.

14. A:d6, c:d6, 15. Cd4, Tad8; 16. Ce6, Td7; 17. Tadl, Cc8;

. Las negras hubiesen tenido que continuar con 17 . . . c5 para cambiar el alfil con Cc.3: 18. Cd5 (de lo contrario las negras juegan 18 . . . . d5), A:d5; 19. e:d5, b5 (y sucesi­vamente realizarán la maniobra Ce7, c8, b6, c4, e5).

18. Tf2, b5; 19. Tfd2, Tde7; 20. b4, Rf7; 21 . a3, aa8; 22. Rf2, Ta7; 23. g4.

Preparación de un ataque sobre columnas abiertas

Las blancas no pierden tiempo y se dan prisá para abrir las columnas g y h para atacar por el lado del rey.

23 . . . . h6; 24. Td3, a5; 25. h4, a:b4; 26. a:b4, Tae7; Las negras no deberían haber abierto la columna a para

después cederla. . · 28. Rf.3, Tg8.; 28. Rf4, g6; 29. Tg3, g5 + ; 30. Rf.3,

Cb6; 31 . h:g5, h:g5; 32. Th3! No puede ser 32. T:d6 debido a 32 . . . . Cc4; 33. Tdl,

Ce5 + ; 34. Rg2, Ta7; con contraataque. . 32 . . . . Td7; 33. Rg3, Re8; 34. Tdh1, Ab7; 35. e5!,

d:e5; 36. Ce4, Cd5; 37. C6c5, Ac8; 38. C:d7, A:d7; 39. Th7, Tf8; 40. Tal, Rd9; 41. Ta8 + , Ac8; 42. Cc5, y las negras abandonan.

Apertura de juego semiabierto: la defensa francesa

Se distingue por los primeros movimientos l . e4, e6; 2. d4, d5. Tiene como característica peculiar una sólida es-

64

Page 65: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

tructura de las negras en el lado del rey y una mayor flui­dez en ·el lado de la dama, que le permite contraatacar de un modo bastante eficaz en el momento oportuno. Pero, para ello, las negras están obligadas a sacrificar las posibili­dades de desarrollo del alfil de diagonal c8-h3 por parte del peón negro de e6, de este modo permite a las blancas realizar un buen intento de ataque en el lado del rey.

Al movimiento 2 . . . . d5, las blancas pueden contestar haciendo avanzar el peón e4 atacado y defendiéndolo en e4 de varias maneras o cambiándolo con el peón d5.

PARTIDA SPASSKY-KORTSCHNOI, FINAL DEL ToRNEo DE LOS CANDIDATOS, 1977

l. d4, e6; 2. e4, d5; 3. e5,

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

65

Page 66: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Con el avance inmediato, las blancas ganan enseguida un espacio en el lado del rey, de este modo se ponen las bases para un ataque en este sector.

3 . . . . c5. Véase el diagrama n. 0 15. Con este movimiento, las negras empiezan a atacar el

centro blanco en d4 a fin de aislar el peón en e5 de los demás, debilitándolo.

La principal alternativa a este movimiento es 3 . . . . b6, con la intención de cambiar rápidamente el alfil de diago­nal clara (4 . . . . Aa6). Pero ello frena en parte las posibili­dades de juego de las negras en el lado de la dama debido al cierre de la diagonal d8-a5.

Protección para los peones centrales

Veamos los desarrollos de esta línea de juego: 3 . . . . b6; 4. c3.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

66

Page 67: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

. . . Dd7; (no 4 . . . . Aa6 a través de 5. A:a6, C:a6; 6. Da4 + ) 5. a4!, á5; 6. f4, h5; 7 . Cd2, C37; 8. Cdf3, Aa6; 9. A:ae, C:a6; 10. Ae3, Cf5; 1 1 . af2, Ae7; 12. Ce2, 0-0; o tam­bién 12 . . . . g6, con juego equilibrado.

Con este movimiento las blancas protegen los peones centrales.

Las principales líneas de juego alternativas son: 4. d:c5, Cc6; 5. Cf3, A:c5; 6. Ad3, f6, 7 . De2, f:e5;

8. C:e5, Cf6; y las negras desarrollan un juego muy satis­factorio gracias a la desaparición del centro blanco.

4. Cf3, c:d4; 5 . Ad3, cc6; 6. 0-0, f6; 7 . Ab5 (si 7 . Af4, g5; con la idea de 8 . . . . g4), Ad7; 8. A:c6, b:c6; 9. D:d4, Db6, y también en este caso las negras se sitúan bien.

4. Dg4, c:d4; 5. Cf3, Cc6; 6. Ad3, C37; 7 . 0-0, Cg6;

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

67

Page 68: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8. Te1, Dc7; 9. Dg3, Ac5; 10. h4, Rf8; 1 1 . h5, Cg37; 12. h6, g6; 13. a3, a5; 14. Ag5, Cg8; 15. Cbd2, con ven­taja blanca.

4 . . . . cc6; Cf.3, Ad7. Véase diagrama 17 .

Apuntando el alfil hacia el máximo objetivo

Esta jugada constituye la preparación para la activación del alfil de diagonal clara a fin de llevarlo a b5 tras colocar la dama en b6.

La principal línea de juego para las negras es en cam­bio, 5 . . . . Db6; con las siguientes posibilidades de desarrollo:

6. a3, c4; 7 . Cbd2, Ca5; 8. Ae2, Ad7; 9 . 0-0, Cge7; 10. Cg5, h6; 1 1 . Ch.3, 0-0-0; 12. Cf4, g6; 13 . Tab1, con un juego que ofrece iguales posibilidades para ambos.

6. Ad.3, c:d4; 7. c:d4, Ad7; 8. 0-0, C:d4, 9. C:d4, D:d4; 10. Cc.3, a6; (si 10 . . . D:e5; 11 . Te1 con la idea de 12. Cb5);

11 . De2, Tc8; 12. Rh1, Ac5; 13. Ag5, h6; 14. Ad2, Ce7; 15. Tacl, Dh4; 16. f4, Cf5; 17. A:f5, e:f5; 18. b4, Aa7; (si 18 . . . . A:b4?; 19. C:d5, A:d2; 20. T:c8 + , A:c8; 21 . Cc7 + y ganan) 19. C:d5, 0-0; con equilibrio.

6. Ae2, Cge7; 7. b.3, c:d4; 8. c:d4, Cf5; 9. Ab2, Ab4 + ; 10. Rfl, y las negras tienen buenas posibilidades para

el avance f7-f6. 6. Ae2, Cge7; 7 . Ca.3, c:d4.

La necesidad del cambio

Normalmente las negras no tienen que realizar un cambio en el centro tan pronto, pero en ese caso sirve para prepa­rar la siguiente maniobra basada en la debilidad del centro blanco.

68

Page 69: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8. c:d4, Cf5; 9. Cc2, Cb4; 10. Ce3. Si 10. C:b4, A:b4; 11 . Ad2, Db6; y las negras pueden

cambiar su alfil de diagonal clara llevándolo a b5. 10 . . . . C:e3; 1 1 . f:e3. En esta posición hay posibilidades para ambos: las blan­

cas pueden desarrollar un fuerte ataque en el lado del rey gracias a la apertura de la columna f y a la estabilización de su centro; en cambio, las negras pueden desarrollar una buena iniciativa en el lado de la dama, domina la columna e y tiene la posibilidad de pasar a través de las casillas blancas después de haber cambiado los alfiles de diagonal clara.

1 1 . . . . Ae7; 12. a3, Cc6; 13 . b4, a6; 14. Tbl, Ca7; 15. a4, Cc6; 16. Ad2, a5; 17. b5, Cb4.

Las blancas han evitado el cambio de los alfiles de dia­gonal clara, pero las negras disponen de la casilla débil b4.

18. 0-0, 0-0; 19. Del, Rh8; Las negras podían jugar 19 . . . . f5; 20. Dg3, Ae8; con

la idea de 21 . . . . Ah5. 20. Dg3, f6;

Cuidar la potencia de las casillas

También en este caso era mejor jugar 20 . . . . f5, porgue las negras no pueden matar a e5, de lo contrario esta casi­lla se convertiría en débil ocupada por un caballo (después de . . . f5:e5; Cf3:e5).

21 . Tbcl. La intención de las blancas es jugar 22. e:f6 seguido

de 23. Dc7. 21 . . . . f5; 22. h4, Tc8; 23. h5. Era mejor 23. Dh3 seguido de 24. g4 para conseguir

la apertura de la columna g, sobre la cual las blancas hu­biesen podido colocar perfectamente y sin problemas las torres después de mover el rey.

69

Page 70: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

23 . . . . T:cl; 24. T:cl, Ca2; 25. Tal, Cb4; 26. Dh3, Ae8; 27. Rf2, Db6; 28. g4, g5; 29. h:g6, e.p., A:g6;

30. g5, f4; Las negras sacrifican un peón para activar su alfil de

diagonal clara. 31 . e:f4, Cc2; 43. Tdl, Ae4; No puede ser 32 . . . . C:d4 debido a 33. Ae3. 33 . Ae3, Las blancas podrían defender indirectamente y de un

modo más activo el peón d4, jugando 33. Acl, A:f3; 34. A:f3, C:d4; 35. Ae3, Ac5; 36. g6 y ganan.

33 . . . . C:e3; 34. R:e3, Dc7; 35. g6, Si 35. D:e6, Aa3; amenazando 36 . . . . Dc3. 35 . . . . A:g6; 36. D:e6, Aa3; 38. D:d5, Acl + ; 38. Rf2,

A:f4; 39. Dc4, Dg7; 40. Tgl, Dh6; 41 . Dc3 y abandonan sin esperar la respuesta de su adversario.

Después de 41 . . . . Ad2; 42. Da3, Ae4; las blancas no pueden detener la amenaza 43 . . . . Dh4 + y el consiguiente mate en pocas jugadas.

PARTIDA ALEKHINE-FAHRNI, MANNHEIM 1914

l. e4, e6; 2. d4, d5; 3. Cc3. Véase diagrama n. 0 18. Una de las formas en que las blancas pueden defender

al peón e4, es ésta precisamente. Otra, sería la variante Tarrasch, con el movimiento 3 . Cd2. He aquí las principa­les líneas de desarrollo:

3 . . . . Cc6 (defensa moderna); 4. Cgf3, Cf6; 5. e5, Cd7; 6. Cb3, Ae7; 7. Ab5, a5; 8. a4, Ca7;

9. Ae2, b6; 10. h4, h6; 1 1 . c3, c5; 12. Ae3, Cc6; 13. Ab5, Dc7; 14. Cbd2, Aa6 con ligera ventaja blanca.

3 . . . . Cf6 (defensa cerrada); 4. e5, Cfd7; .5 . Ad3 (es interesante también la continuación 5. f4, c5; 6. c3, Cc6; 7. Cdf3, Db6; 8. g3!, c:d4; 9 . c:d4, Ab4 + ; 10. Rf32!)

70

Page 71: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

c5; 6. c3, Cc6; 7 . Ce2, Db6; 8. Cf3, c:d4; 9. c:d4, Ab4 + ; 10. Ad2, A:d2 + ; 11 . D:d2, Db4; 12. Tcl, D:d2; 13. R:d2. Para este planteamiento de las negras es preferible 9 . . . f6; 10. e:f6, C:f6; 1 1 . 0-0, A:d3.

3 . . . . c5 (defensa abierta); 4. e:d5, e:d5; 5. Ab5 + , Cc6; 6. Cgf3, Ad6; 7.0-0, Cge7; 8. d:c5, A:c5; 9. Cb3, Ab6; 10. Ae3,

0-0 o 10 . . . . A:e3; 1 1 . A:c6 + , b:c6; 12. f:e3, 0-0; 13. Dd2, Dd6; 14. Dc3, a5; y la ventaja de las blancas es mínima. Iguales posibilidades se crean en la ,:o;)tinua-ción 9 . . . . Ad6; 10. Cbd4, 0-0; 11 . b3, Ag4; 12. Ab2, Db6.

3 . . . . Cf6. Otras continuaciones son: 3 . . . . d:e4; 4. C:e4, Cf6; 5. C:f6 + , g:f6; (a las negras

no les conviene continuar con 5 . . . . D:f6 a través de 6. Cf3, h6; 7 . Ad3, c5; 8. Ae3, con ventaja de las blancas) 6. Cf3, b6; 7 . Af4, Ab7; 8. Ac4, c6; 9. De2, Ad6; 10.

71

Page 72: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Ag3, De7; 1 1. 0-0-0, Cd7; con una posición preferible para las blancas.

3 . . . . Ab4; con este movimiento las negras clavan al caballo y preparan su ofensiva para el lado de la dama por medio del avance del peón c.

Las blancas dirigen todas sus fuerzas hacia el lado del rey. A continuación veremos los principales desarrollos de esta variante:

4 . a3, A:c3; 5. B:c3, d:e4; 6. Dg4, Cf6; 7. D:g7, Tg8; 8. Dh6, c5; 9 . Ce2, Tg6; 10. De3, Cc6; 1 1 . d:c5, Da! y las negras se sitúan en

mejores condiciones.

72

4. Ad3, c5; 5 . e:d5, D:d5; 6. Ad2, A:c3; 7. A:c3, c:d4; 8. A:d4, D:g2; 9. Df3, D:f3; 10. C:f3, f6; y a pesar de que las blancas tengan una

Page 73: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

mejor posición, las negras están en condiciones muy estables. 4. Ad2, d:e4; 5. Dg4, D:d4; 6. 0-0-0, f5; 7. Dg3, Ad6; 8. Af4, A:f4; 9. D:f4, dc5; y las blancas consiguen una

compensación por el sacrificio de sus peones, gracias al ata­que y a la ventaja en el desarrollo.

4. e5, c5; 5. a3, A:c3; 6. b:c3, Ce7; 7. Dg4 (si 7. Cf3, Da5; 8. Ad2, c4; 9. Ae2, Cbc6; 10. 0-0 con un juego muy complejo) Dc7; 8. D:g7, Tg8; 9. D:h7, c:d4, 10. Rd1, Cbc6; 1 1 . Cf3, d:c3; 12. Cg5,

Tf8· ' .

(o 12 . . . . C:e5; 13. Af4, Db6; 14 . A:e5, T:g5; 15 . h4, Tg8;

16. Re1, Ad7) 13 . f4, Ad7; con iguales posibilidades. 4. Ag5, Ae7;

La alternativa del contraataque

Es interesante la alternativa 4 . . . . Ab4 (contraataque Mac Cutcheon) 5 . e5, h5; 5. Ad2, A:c3; 7 . b:c3, ce5; 8. Dg4 y ahora las negras tienen que continuar con 8 . . . Rf8 o con 8 . . . . g6, y de esta manera crean un juego muy comple­jo para ambos jugadores.

5 . e5, Cd7; 6. h4, A:g5; Según Alekhine es mejor la continuación 6. . . . c5; 7.

Cb5, f6; si en cambio las blancas juegan 7 . A:e7, R:e7. 7. h:g5, D:g5; 8. Ch3, De7; Si 8 . . . . Dh6; 9. g3 seguido de 10. Ag2 con buena

posición para las blancas. 9. Cf4, Cf8; Si 9 . . . . A6; 10. Dg4, g6; 1 1 . 0-0-0, Cb6; 12. Ad3,

y las blancas pueden situarse mejor; si en cambio 9 . . . . g6; 10. Ad3, Cf8; 1 1 . Cf:d5, e:d5, C:d5 con un fuerte ataque.

73

Page 74: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

10. Dg4, f5; El único movimiento que responde eficazmente a las

amenazas 1 1 . D:g7 y 1 1 . C:d5. 1 1 . e:f6 e.p., g:f6; 12. 0-0-0, c6; 13. Te1, Rd8; 14. Th6, e5; 15. Dh4, Cbd7; 16. Ad3, e4; 17 . Dg3! Amenazando 18. C:d5. 1 7 . . . . Df7; Si 17 . . . . Dd6, 18. a:e4, d:e4; 19. T:e4 seguido de 20. Dg7. 18. A:e4, d:e4; 19. C.e4, Tg8; Si 19 . . . . D:a2; 20. C:f6, C:f6; 2 1 . Dg7. 20. Da3, Dg7; Si 20 . . . . De7; 21 . Da5 + , b6; 22. Dc3 con fuerte ataque. 21 . Cd6, Cb6; 22. Cd8, Df7; 23. Dd6 + , y mate en dos movimientos.

PARTIDA KovAcs-KoRTSCHNOI, SARAJEVO 1969

En esta partida las blancas han elegido la variante de cam­bio. Con ella desaparecen las tensiones existentes en el cen­tro, así se facilita notablemente el desarrollo de ambos ju­gadores con el resultado casi automático de una posición extremadamente equilibrada, a la cual se llega a través de desarrollos normalmente faltos de motivos tácticos. El prin­cipal efecto negativo de esta variante es que en la práctica las blancas renuncian a la ventaja del primer movimiento. Esta partida representa un buen ejemplo de cómo las ne­gras pueden aprovechar limpiamente la sumisión de las blan­cas en la apertura.

74

l. e4, e6; 2. d4, d5; 3. e:d5, 3 . . . . e:d5; 4. Ad3,

Page 75: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Con esta continuación las blancas se reservan las .posi­bilidades de desarrollar Cgl a e2 (aparte de af3).

4 . . . . Cc6 Las negras, aprovechando que el peón d4 está tempo­

ralmente indefenso, intentan tomar la iniciativa. 5. c3, Las negras tienen la posibilidad de continuar de dife­

rentes maneras: 5. Cf3, Ag4; 6. c3, Ad6; 7. 0-0, Cge7; 8. Tel, Dd7;

con la intención de hacer un enroque largo y provocar que los peones ataquen por el lado del rey. Respecto � esta variante es preferible 5 . Ce2.

5 . . . . Ad6; 6. Df3,

Ante la debilidad de la dama . . .

Después de 6 . Ce2, las negras pueden continuar con 6 . . . . Dh4, de este modo impiden a 7. Af4, con ún juego activo de las negras: después de 6. Cf3, Cge7; con la idea de 7 . . . . Af5.

6 . . . . Cce7; Este movimíento es más activo que 6 . . . . Ae6, ya que

permite a las negras desarrollar Cg8 a f6 y aprovechar la posición arriesgada de la dama. blanca con movimientos como Ac8-g4 o también Ce7-g6-h4, contribuyendo a incremen­tar la acción de ataque de las . negras por el lado del rey.

7. Af4, Era mejor para las blancas la continuaci.ón 7 . Ce2, y

si 7 . . . . Cf6; entonces 8. Ag5. Si en cambio, 7. Ag5, h6; 8. Ah4, Ae6; con la idea de ,9 . . . . Dd7, y 10 . . . . 0-0-0.

7 . . . . Cf6; 8. h3, Para evitar 8 . . . . Ag4; pero era mejor 8. Ce2, Ag4; 9.

75

Page 76: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Dg3, A:e2; 10. A:e2, A:f4; 1 1 . D:f4, 0-0; con ligera ven­taja de las negras.

8 . . . . A:f4; 9. D:f4, 0-0; 10. Ce2, Cg6; 1 1 . Dh2.

La defensa fulminante asoma a través de una columna abierta

Si 1 1 . A:g6, f:g6; y la columna f abierta permite a las negras buenas perspectivas de ataque por el lado del rey. Las blancas hubiesen tenido que jugar 1 1 . Del para no dejar a su dama fuera de juego.

1 1 . . . . Te8; 12. 0-0, Af5; 13. A:f5, T: e2; 14. b3, De7; 15 . Ad3,

Ahora las blancas tienen graves problemas de desarro­llo ya que no disponen de casillas para Cbl.

15 . . . . Tb2; 16. Dg3, Te8; 17. Dg5, La maniobra que las blancas intentan realizar demues­

tra lo muy necesario que hubiese sido jugar 1 1 . Del. Aho­ra ya no tienen tiempo para salvarse ya que las negras han entrado en su campo.

17 . . . . Ce4; 18. Del, T:f2; 19. T:f2, C:f2 ; 20. R:f2, Df6 + ; 21 . Rg1, Cf4; 22. Afl, Te2; 23. Cd2, C:h3;

24. Rh2, Cf4; 25. Rg3, Cd3; Las blancas abandonaron seguidamente después de ju­

gar 26. Ce4. Además, no pueden detener la amenaza 26 . . . . Df4 +

seguido de 27. . . . Cf2 = , si no ceden también la dama.

Apertura de juego cerrado: las defensas indias

De concepción hipermoderna, las defensas indias se basan en que las negras desarrollan un alfil en fianchetto después

76

Page 77: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

de colocar Cg8 en f6. Las negras no ocupan inmediatamen­te el centro sino que intentan desmantelar el centro blanco a través del avance de los peones laterales.

Las principales defensas indias son:

India de Rey. India de Dama. India de Nírnzowitsch (o Nirnzoindia). defensa Grünfeld.

A continuación expondremos el fundamento de cada una de estas aperturas, así corno una partida que muestre la aplicación de estas ideas, dejando a cada quien la tarea de realizar un profundo análisis de cada apertura del modo descrito en las anteriores lecciones. A tal fin, sugerirnos recurrir a la ayuda de libros especializados o, meJor si es posible, de un interlocutor competente.

Características de la defensa India de Rey

Se caracteriza por el desarrollo del alfil de línea negra de las negras en fianchetto en el lado del rey y por la defensa del centro a través del avance d7-d6. Con este plantea­miento, las negras intentan ejercer una fuerte presión so­bre el peón d4 de las blancas, y utilizan también el avance e 7 -e5 o e 7 -c5. Las blancas intentarán oponerse a estos pla­nes de las negras para utilizar su centro ahora ya bastante fuerte.

En el momento en que el peón d4 de las blancas se vea obligado a avanzar, el centro se estabilizará y las ne­gras quedarán libres de las amenazas sobre su desarrollo debidas al centro blanco.

77

Page 78: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Las jugadas que determinan este planteamiento son: l. d4, Cf6; 2. c4, g6; .3. Cc.3, Ag7; 4. e4, d6, o .3. g3, Ag7; 4. Ag2.

PARTIDA PEROSIAM-GLIGORIC, YUGOSLAVIA 1970

l. c4, g6; 2. Cf.3, Ag7; 3 . d4, Cf6; 4. Cc3, 0-0; 5. e4, d6; 6. Ae2, e5.

78

·8

7

6

5

4

.3

2

1

a b e d e f g h

7. 0-0, Cc6; 8. d5, Ce7; 9. b4, Ch5; 10. Cd2, Cf4; 1 1 . a4, f5; 12. Af.3, g5; 1.3. e:f5, C:f5; 14. g3, Cd4!; 15. g:f4, C:f3 + ; 16. D:f3, g4; 17. Dhl, e_:f4; 18. Ab2, Af5; 19. Tfel , f3; 20. Cde4, Dh4; 2 1 . h3, Ae5; 22. Te3, g:h3; 23. D:f.3, Ag4; 24. Dhl, h2 + ; 25. Rg2, Dh5; 26. Cd2, Ad4�;

Page 79: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

27. Del, Tae8; 28. Cce4, A:b2; 29. · Tg3, Ae5; 30. Tla3, Rh8; 3 1 . Rhl, Tg8; 32. Dfl, A:g3; 33 . T:g3, T:e4; y las blancas abandonan.

Características de la defensa India de Dama

Está caracterizada por los siguientes movimientos: l. d4, Cf6; 2. c4, e6; 3 . Cf3, b6; y se basa en el apro­

vechamiento parcial de la debilidad de la casilla e4 después del movimiento l. d4.

Con tal fin, las negras desarrollan a su alfil de línea oscura en fianchetto y si es posible, evitarán el avance d7-d5, que dará una debilidad a e5 análoga a la de e4.

Es muy importante en este planteamiento que las blan­cas hayan jugado Cf3 para que no puedan contrarrestar los planes de las negras con el avance e2-e4 defendido por el previo avance del peón f3.

PARTIDA RoMANISHIN-NnmciC, Socm 1982

l. d4, Cf6; 2, Cf3, e6; 3 . g3, b6; 4. Ag2, Ab7; 5. c4, Ab4; 6. Ad2, A:d2; 7. D:d2, 0-0; 8. 0-0, Cc6; 9. Cc3, Ca5; 10. Dd3, d5; 1 1 . c:d5, e:d5; 12. Cd2, c5; 13 . d:c5, b:c5; 14. Ca4, c4; 15. Da3, Te8; 16. e3, Tb8; 17. Tfdl, Ac6; 18. Cc3, Db6; 19. Cf3, Db4; 20. Cd4; D:a3; 2 1 . b:a3, Tb2; 22. Tabl, Tab8; 23 . T:b2, T:b2; 24. C:c6, C:c6; 25. C:d5, Ce5!; 26. h3, Rf8; 27. Cb4, c3; 28. f4, Cc4;

79

Page 80: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

29. Td8 + , Re7; 30. Cc6 + , Re6; 3 1 . Cd4 + , Re7; 32. Cc6 + , Re6; 33 . Cd4 + , y empate.

Características de la defensa Nimzoindia

Tiene su origen en un tema estratégico que intenta opo­nerse, con una acción conjunta de piezas y peones en el centro, al avance del peón e2 a e4, y que se basa en la clavadura de Cd. Este sistema está determinado por los movimientos. l. d4, Cf6; 2 . c4, e6; 3 . Cd, Ab4.

También en este caso las negras retrasan el avance d7-d5 o si es posible, lo impiden completamente.

PARTIDA ENTRE KERES Y TAIMANov, Moscú 1955

l. d4, Cf6; 2. c4, e6; 3. Cd, Ab4; 4. Cf3, b6; 5. Ag5, Ab7; 6. e3, h6; 7. Ah4, g5; 8. Ag3, Ce4; 9. Dc2, A:d + ; 10. b:d, d6; 1 1 . Ad3, f5; 12. d5, e:d5, 13. c:d5; A:d5; 14. Cd4, Cd7; 15. f3, C:g3; 16. Cd4, Cd7; 15. f3, C:g3; 16. h:g3, Df6; 17. A:f5, 0-0-0; 18. Da4!, a5; 19. Rf2, h5; 20. Tab1, h4; 2 1 . e4, Ab7; 22. g:h4, g:h4; 23. Ce6, Ce5; 24. Dd4, Tdg8; 25. C:c7 + , Rb8; 26. D:b6, Cd3 + ; 27. Rfl, Cb4; 28. T:b4, A:b4; 29. Cb5, y las negras abandonan.

Características de la defensa Grünfeld

Este planteamiento se consigue después de los siguientes movimientos: l. d4, Cf6; 2 . c4, g6; 3 . Cd, d5; y se consi­dera derivación directa de la defensa India de Rey.

Los principios estratégicos en que se basa son: en el caso de que las blancas cambien a d5 (c:d5) para realizar

80

Page 81: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

el avance e2-e4, la dama negra en d8 y el alfil de diagonal oscura de las negras en fianchetto, pueden desarrollar una notable actividad presionando fuertemente sobre las casi­llas centrales con el fin de limitar sensiblemente la eficacia del centro blanco. Si, en cambio, las blancas no hacen nada para eliminar el peón negro en d5, entonces las negras pue­den elegir según el caso, entre la apertura de la columna e con el avance e 7 -c5 y la de la columna d, o si no defen­der al peón d5 con c7-c6, pasando de este modo a un es­quema típico de la · defensa eslava del gambito de dama. El avance d7-d5 de las negras están a punto de ir a e4 protegidas por Cc.3. Después de que las blancas han hecho el cambio (c:d5), las negras vuelven a empezar con el caba­llo (C:d5).

pARTIDA GELLER -SMYSLOV, TORNEO DE CANDIDATOS, Moscú 1965

l. d4, Cf6; 2. c4, g6; 3. Cc.3, d5; 4. c:d5, C:d5; 5. e4, C:c3; 6. b:d, Af7; 7. Ac4, c5; 8. Ce2, 0-0; 9. 0-0, Cc6; 10. Ae3, Dc7; 1 1 . Tcl, Td8; 12. f4, e6; 13 . Rh1, b6; 14 . f5!, Ca5; 15. Ad3, e:f5; 16. e:f5, Ab7; 17. Dd2, Te8; 18. Cg3, Dc6; 19. Tf2, Tad8; 20. Ah6, Ah8; 21. Df4, Td7; 22. Ce4, c4; 23. Ac2, Tde7; 24. Tcfl, T:e4; 25. f:g6, f6; 26. Dg5, Dd7; 27. Rg1, Ag7; 28. T:f6, Tg4; 29. g:h7 + , Rh8; 30. A:g7 + , D:g7; 3 1 . D:g4! y las negras abandonan.

81

Page 82: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Tipos de en una

. . , postcton partida

Como ya hemos indicado, para formular un plan de ataque no podemos prescindir de la situación presente en el table­ro. De ésta el jugador tiene que obtener los elementos base para la actuación de su plan. Se puede afirmar que la posi­ción a partir de la cual se formula un plan contiene indica­ciones acerca de los objetivos que se quieren conseguir y las varias modalidades para obtenerlos.

No siempre resulta fácil formular planes con caracterís­ticas netas y modalidades de desarrollo elementales, ya que las posiciones que presentan en el curso de una partida son casi siempre complejas y difícilmente interpretables.

Del ataque a la defensa en un movimiento

Cada vez que ejecutamos un movimiento desde una posi­ción cualquiera en el tablero, el panorama general cambia y puede asumir exigencias diferentes a las de la posición anterior al movimiento. Ello determina la necesidad de ve­rificar el plan a la luz de la nueva situación que se presenta

82

Page 83: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

después del movuruento, para comprobar entonces si es posible continuar por el mismo camino, o si es necesario formular · un nuevo plan basado en las características que la nueva posición presenta.

Las posiciones forzadas

En el curso de una partida, la presencia de determinadas tácticas permite individualizar, después de un profundo aná­lisis, algunas posiciones particulares que hemos indicado como posiciones /orzantes y en las cuales es posible actuar con una combinación. También dijimos que no es posible dar lugar a alguna combinación sin tener una táctica con­creta; su presencia nos lleva necesariamente a una posición forzada y a la consiguiente combinación.

Podemos ahora definir como posiciones no forzadas to­das las posiciones en las que no es posible provocar una combinación. No olvidemos que por definición, las co�bi­naciones tienen que tener como finalidad una ventaja acti­va; por lo tanto, para determinar una combinación, no es suficiente la ejecución de un movimiento forzado y de una sucesiva secuencia forzada de movimientos. Mientras que la elección del movimiento en las posiciones (que constitu­ye el inicio de la actuación del plan) está determinado por la táctica vista, en las otras posiciones los criterios de elec­ción del movimiento serán otros. En las posiciones forza­das es necesario actuar con el .plan. A diferencia de lo que sucede en las posiciones forzantes, el objetivo no podrá tener características definidas de modo preciso. En las po­siciones forzadas el plan formulado tiene como objetivo la obtención· de una ventaja concreta, mientras que, en his otras, el plan tiende a la obtención de una posición consi­derada ventajosa.

83

Page 84: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Aclaremos este concepto observando, por ejemplo, este inicio de partida: l. e4, e6; 2. d4, d5; 3 . e5.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

En claro seguimiento de un plan global

El último movimiento de las blancas, a pesar de responder al hecho de que las negras, con su 2 . 0 movimiento, han atacado al peón e4, no es una respuesta forzada: las blan­cas hubiesen podido defender a su peón de otra manera (por ejemplo: 3 . Cd, o 3 . Cd2, o también 3. e:d4).

El movimiento elegido por las blancas responde a las exigencias del plan formulado para la fase inicial de la par­tida: alcanzar una posición en la que el centro del tablero quede bloqueado y donde las blancas dispongan de cierta ventaja de espacio para maniobrar con sus piezas en el lado derecho del tablero {ala del rey) .

Ciertamente, no se puede decir que ello constituya una ventaja objetiva para las blancas, ya que de lo contrario

84

Page 85: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

deberíamos deducir que las negras, que no han sido obliga­das a jugar de tal modo, sino que lo han hecho por su propia voluntad, han cometido algunos errores. En cam­bio, también las jugadas de las negras están determinadas por un plan: preparar la acción de sus piezas en el lado izquierdo del tablero (ala de la dama) y amenazar con abrir el centro, atacando los peones d4 y e5 de las blancas con el avance de los peones en las columnas e y f.

Armonía de método se traduce en juego de altura

De todo lo visto se puede afirmar que ambos jugadores, por motivos diferentes, han querido alcanzar la misma po­sición y que cada uno de ellos considera que la posición alcanzada le aportará alguna ventaja. De otro modo, no se explicaría por qué han hecho tales jugadas.

En este punto cabe preguntarse cómo es posible que ambos jugadores quieran alcanzar una misma posición ya que cada uno, desde el inicio de la partida, debería obte­ner una situación que fuera máximamente favorable para sí y máximamente desfavorable para el adversario.

La respuesta se encuentra en la valoración subjetiva que cada uno hace de la posición obtenida, que es el resultado del balance de los elementos positivos y los negativos. El objetivo de un plan nacido de una posición no forzada se vale de criterios de valoración subjetivos, mientras que los de un plan originado en una posición forzada tienen que ser taxativamente objetivos. Por lo tanto, la capacidad de aprovechamiento de las armas tácticas de las que cada ju­gador dispone será mayor a la hora de decidir cuál de las dos estrategias es mejor. De hecho, las posiciones no for- . zantes necesitan un trato que no es totalmente táctico (sí lo era el de las posiciones forzadas), pero sí estratégico.

85

Page 86: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Oportunidad de la estrategia y la táctica

Mientras que la táctica es el arte de aprovechar la capaci­dad de realización del plan (momento de la combinación en que las piezas realizan un plan gracias a su acción, re­presenta la actuación más clara), la estrategia en cambio, es el arte de visualizar los objetivos y formular los planes individualizando y realizando los preparativos necesarios.

Así pues, se puede afirmar que en la formulación del plan, la existencia de dos momentos: un momento estratégi­co en el que se determinan las líneas generales del juego y al que están subordinadas todas las maniobras, incluidas las tácticas; y un momento táctico, en el que se establecen las modalidades de actuación de aquellas maniobras nece­sarias para la realización de la estrategia elegida.

La siguiente partida constituye un ejemplo de cómo las maniobras tácticas, a pesar de no presentarse en forma de. combinación, están siempre subordinadas a un plan estra­tégico general que, en último término, confiere a todo el desarrollo de la partida una innegable y apreciable cohe­rencia.

PARTIDA ScHLECHTER-}OHN, BARMEN 1905

l. d4, d5; 2. c4, e6; 3 . Cc3, f5; 4. Cf3, c6; 5 . Af4, Ad6; 6. e3! El juego de las blancas está claramente dirigido ha­cia el aprovechamiento de la debilidad que las negras pre­sentan en sus casillas. Las blancas controlan totalmente la casilla e5 y si las negras jugasen 6. . . . A: f4, después 7. e:f4 el peón negro en e6 estaría en condiciones extremada­mente peligrosas, ya que las torres blancas lo podrían ata­car y .además ejercerían una notable presión, obligando a las .negras a defender este peón (nunca lo podrían defender con otros· peones).

86

Page 87: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

6 . . . Cf6; 7. Ad3, Dc7; 8. g3, 0-0; 9. 0-0, Ce4; 10. Db.3, Rh8; 1 1 . Tacl, A:f4 (véase diagrama n. 0 22).

Las negras realizan este cambio totalmente desfavora­ble para ellas desde un punto de vista de posición, debido a la amenaza de las blancas 12. c:d5 seguido de 1.3. Cb5.

12. e: f4, Df7; 1.3. Ce5, De7; 14. A:e4.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

La continuación táctica adoptada por las blancas les per­mite eliminar la doble fila de peones en la columna f. Las blancas también podrían haber continuado con 14. f3, cap­turando al caballo negro y empezando su acción en la co­lumna e.

14 · . . . f:e4; 15. f3, e:f3; 16. Tce1, Dc7. Las blancas amenazan con 17. c:d5, c:d5; 18. C:d5 y las negras no han podido salvarse con 18 . . . . e:d5 debido a 19. Cg6 + .

17. Da.3, Rg8; 18. T:f.3, Ca6; 19. b.3, Dd1;

87

Page 88: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

20. c5, Cc7; 21 . Db2, Ad2; 22. Dc2, De7; 23. Tefl, Tae8; 24. g4, Ac8; 25. Th3. Con este movimiento las blancas obligan a las negras

a debilitarse, 25 . . . . g6; 26. b4. Gracias a su superioridad de posición, las blancas pueden atacar en dos frentes. Des­pués las circunstancias que aparezcan en el juego determi­narán la elección de la maniobra de ruptura por el lugar más apropiado.

26 . . . . Df6; 27. Thf3, Te7; 28. a4, a6; 29. Cdl; las blancas están prepar'ando la siguiente maniobra: Cdl-e3; g4-g5; Ce3-g4; para poder llevar después el caballo a h6 o a f6 aprovechando de este modo el insuficiente control que las negras ejercen sobre sus casillas.

29 . . . . Tg7; 30. Ce3, De7; 31 . g5, Ad7; 32. C3g4, Ae8; 33. Ch6 + , Rh8; 34. De2, Dd8; 35. Ceg4, Ad7; 36. De5.

La casilla e5 permite a las piezas blancas penetrar en las posiciones de las negras.

36 . . . . Ce8; 37. Th3, Dc7; 38. Cf6, D:e5; 39. f:e5, Ce7; 40. Thf3, c:f6; 41 . T:f6, T:f6; 42. e:f6, Te8; 43. Cf7 + , Rg8; 44. Ce5, Td8; 45. Rg2, Rf8; 46. h4, Ae8; 47. Rf3, Af7; 48. Rf4, Re8; 49. Tbl, Rf8; 50. b5 y las negras

abandonan. De hecho, después de 50 . . . . a:b5; 51 . a:b5, Ae8; 52.

b:c6, A:c6; 53 . C:c6, b:c6; 54. Re5, la posición de las negras es insostenible.

Como ya se ha visto, a pesar de no haberse realizado ninguna combinación en el curso de la partida, las armas tácticas de las blancas les han permitido realizar el plan estratégico que se habían propuesto: aprovechamiento de las casillas negras no controladas y penetración a través de éstas, en las estructuras defensivas de las negras, con la consiguiente ruptura de la cadena de peones de estas últimas.

88

Page 89: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Tiempo, espacto, material

En una posición forzante formulamos un plan de juego ba­sado en los aspectos tácticos que la posición presenta.

Una posición no forzada en cambio, tiene que intentar constituir una situación ventajosa.

Hemos dicho que, en la formulación del plan que nace de una posición no forzante, los objetivos se resienten de una componente subjetiva de valoración. No obstante, cada plan intentará obtener una ventaja lo más consistente posible.

La ventaja más concreta que se puede conseguir en el curso de una partida es la ventaja material que, si ninguno de los dos jugadores comete errores triviales (como por ejem­plo, olvidarse de defender una pieza atacada), será única­mente el resultado de una combinación. También existen las llamadas ventajas de posición: a la consecución de una de éstas estará dirigido el plan estratégico formulado en una posición no forzada. Observemos la siguiente partida:

PARTIDA VELIMINOVIC-DONNER, HAUGUE 1966

l. e4, e5; 2. Cf3 , Cc6; 3. d4, e:d4; 4. c3. Las blancas sacrifican un peón para poder alejar del

centro al peón cercano al rey de las negras, abrir sus piezas con ahorro de tiempo y desplegar velozmente algunas lí­neas para beneficio de su dama y torres.

4 . . . . d3 ; Las negras n6 admiten el peón sacrificado por las blan­

cas e intentan continuar con una línea de juego que consi­deran menos favorable para las blancas de lo que había ocurrido después de 4 . . . . d:c3.

5. A:d3, d6; 6. h3.

89

Page 90: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Con el fin de evitar que el alfil negro vaya a g4; 6. Cf3; 7. 0-0, Ae7; 8. C4, 0-0; 9. Cd2, Te8; 10. f4!,

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Tit·mpo y espacio: los tesoros intangibles

Si observamos la posición se puede apreciar cómo las blan­cas han cambiado su ventaja de tiempo, originada en la salida por el tipo de apertura jugada, en una ventaja de espacio: los peones e4 y f4 controlan con eficacia un nota­ble número de casillas centrales restringiendo sensiblemen­te las posibilidades de movimiento de las negras. Además, las piezas blancas, gracias al control central realizado por los peones, disponen de un mayor espacio de maniobra, mientras que las piezas negras están obligadas a operar en ámbitos más restringidos. Es una prueba de ello Af8-e 7. 0-0, Tf8-e8, Ae7-f8, que las negras tienen que realizar para permitir a su torre actuar sobre la única columna abierta (la columna e).

90

Page 91: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

10 . . . . Af8; 11 . Dc2, g6; El último movimiento de las negras tiene la finalidad

de prevenir posibles sorpresas en la diagonal b 1-h 7, aparte 9e facilitar al alfil la diagonal negra una nueva vía de ac­ción sobre su diagonal a1-h8.

12. C2f3, Cd7; Una última prueba de la disminución del espacio en

que las negras tienen que hacer sus maniobras. 13 . Ac4;

Debilidad postran te: tres peones en una columna

Con esta táctica (que tiende a atacar el punto f7) las blan­cas impiden a las negras jugar 13. . . . Cc5; de todos modos habrían podido proseguir con 13. Ae3, ya que después de 13 . . . . Cc5, la continuación 14. C:c6, b:c6; 15. A:c5, d:c5; habría originado en las negras la gran debilidad que sup· >­

nen tres peones sobre una misma columna. 13 . . . . Cb6; 14. Ad:, Cb8; Las negras con esta última jugada, amenazan con ganar

una pieza con 15 . . . . c5 ya sea después de 16. Ce2 como después de 16. Cb3, 16 . . . . c4.

15. f5;

Ataque imparable sobre el rey descubierto

Con este movimiento neutralizan la amenaza de las negras. Ahora si 15 . . . . c5, las blancas continúan con 16. f:g6, h:g6; 17. e5, c:d4; 18. A:g6 y las blancas, gracias al gran número de piezas que puederi utilizar para atacar al rey negro, puesto al descubierto, tienen un ataque seguro. Ello también les está permitido porque las piezas de las negras están blo­queadas en el lado de la dama.

9 1

Page 92: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

15 . . . . C8d7; 16. f:g6, f:g6; Después de 16 . . . . h:g6, las blancas continúan con 17.

Cg5 y después 17 . . . . Ce5; 18. Df2 y 19. Dh4. 17. Ag5, Cf6; Las negras no pueden jugar 1 7. . . . A e 7 ya que seguiría

18. Ce6. 18. Db3 + y las negras abandonan.

Giro fulminante de la situación

Las blancas están a punto de convertir su ventaja de espa­cio en ventaja material, paso decisivo para decidir la suerte de la partida: 18 . . . . Rh8, las blancas continúan con 19. Ce5!! (una descubierta que amenaza 2 (tenaza: 20. A:fd6 + y 20. Cf7 + ), mientras que si 18 . . . . Rg7; 19. e5, d:e5; 20. C:e5, T:e5; 2 1 . a:f6 + y las blancas ganan.

En esta partida se ha evidenciado bien el paso gradual de la forma de ventaja más ligera (la ventaja de la apertura) a la forma más consistente (la ventaja material) a través de un progresivo aumento de la ventaja de espacio. Es ex­tremadamente improbable, si el juego se realiza correcta­mente, que el modo de conseguir una ventaja sea diferente del ya visto en el ejemplo y además, al acrecentarse la ven­taja inicial hasta la conclusiva, es el resultado del perfecto aprovechamiento de la mayor acción que las piezas del ju­gador con ventaja han conseguido obtener con respecto a las de su adversario (debida primero a la ventaja de tiempo y después a la de espacio).

El aprovechamiento de esta ventaja deriva directamen­te de saber aplicar cada vez, la estrategia adecuada.

92

Page 93: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

La estructura por excelencia:

defensiva el enroque

El enroque es la estructura defensiva clásica. Está consti­tuida por una muralla de peones, que por lo común son tres, los mismos que limitan un pasillo (la primera trans­versal en el caso de las negras) en donde se encasilla el rey que tiene que ser defendido. A menudo este pasillo es cerrado por la torre que se encuentra al lado del rey.

Su objetivo esencial es el de impedir ataques directos al rey por parte de piezas que ejercen su acción a lo largo de las líneas (alfil, dama, torre) y hacer más difícil a las piezas del enroque el ataque al caballo.

Las características de la estructura del enroque no de­penden del tipo de enroque, que puede ser corto (enroque por el lado del rey) o largo (enroque por el lado de la dama), sino de la disposición de la muralla de peones y de la pre­sencia de la torre en el pasillo.

La estructura básica

Ante todo, analicemos la estructura de enroque que tienen los peones de la muralla en las respectivas casillas y la to-

93

Page 94: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

rre en el pasillo al lado del rey. Los peones de la muralla, además de cóntener todos los ataques dirigidos al rey a través de las columnas y las diagonales, controlan las casi­llas inmediatas a·la muralla haciéndolas intransitables para las piezas adversarias. Además, la torre controla todo el pasillo.

Finalmente, el rey es la base de todas las piezas de la estructura.

Las debilidades del enroque

La primera gran debilidad, verdadero talón de Aquiles, se halla en el peón lateral. De hecho, éste solamente está de­fendido por .el rey y no puede ser defendido por otros com­ponentes de la estructura sin modificar la estructura mis­ma. Esto no su�ede con el peón central ni con el intermedio, ya que pueden ser defendidos por el rey y la torre sin por ello modificar las características de la �structura.

, Le siguen en orden de importancia -en el renglón de peligro- el pasillo y la torre que lo defiende. Puede pare­cer extraño el hecho de que el punto en que el defensor. parece más fuerte, sea precisamente el más débil. Y es que el bajo valor absoluto de los peones los convierte en . casi invulnerables -salvo combinaciones arrasadoras- a los ata­ques de piezas cuyo valor es superior debido a la desventa­ja material que podría suponer. Es más fácil atacar a la torre, ya que su alto valor absoluto la hace vulnerable a los ataques de muchas piezas: torres, alfiles, caballos, peones.

De todos modos, la estructura de base resulta más sóli­da que las otras. Esta solidez tiene como c9ntrapartida la falta de movilidad del rey. En consecuencia, si por un lado esta estructura es muy sólida, por el otro puede suponer una trampa mortal para el rey.

94

Page 95: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Las estructuras alternativas

Las estructuras de enroque que no tienen todos los peones en las casillas de origen, ofrecen al rey mayor espacio pero menor seguridad. Esta menor seguridad se origina por ejer­cer los peones un menor control sobre las casillas cercanas a la muralla. Como consecuencia, se ofrece a las fichas con­trarias, una mayor transitabilidad por estas casillas. En el diagrama n. 0 24 y siguientes se muestran algunos ejemplos de las consecuencias de un menor control.

En el ejemplo que describe el primer diagrama de la siguiente serie, se representa el caso más trágico: un jaque mate debido a la falta total de control sobre dos de las casillas inmediatas al enroque y determinado por el avance del peón intermedio.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

95

Page 96: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

El enroque puede cobijar enemigos

El ejemplo siguiente muestra cómo el deficiente control de la casilla situada delante del peón intermedio, determi­nado por el avance del peón lateral, puede permitir por una simple clavada del peón central, colocar cualquier pie­za al abrigo del enroque.

En el diagrama se observan claramente otras consecuen­cias de la falta de solidez en la muralla.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Cuando la protección se vuelve cárcel

El ejemplo siguiente muestra cómo la falta del peón central en la casilla de origen puede ser la causa de una posterior limitación de las posibilidades de movimiento del rey.

96

Page 97: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Cuando la ventana se vuelve boquete

El siguiente diagrama demuestra que la falta de cualquiera de los peones permite a las piezas contrarias amenazar di­rectamente al rey.

97

Page 98: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Más inseguridad en la fortaleza

Una menor estabilidad de toda la estructura debido a pun­tos de ruptura.

Observemos el ejemplo del diagrama n. 0 28.

98

Page 99: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Una avenida a través de la muralla

Aquí se muestra muy esquemáticamente una situación que determinará la ruptura de la muralla: el peón lateral ha avanzado una casilla y es atacado por un peón contrario. El cambio que se producirá entre peones, supondrá la de­saparición de la muralla defensiva y la apertura de la línea sobre el rey. Ahora las piezas podrán atacar al rey, que se ha quedado indefenso.

El punto de ruptura es, en este ejemplo, la casilla g4 y por ella las negras empiezan a destruir la muralla.

Para evitar el debilitamiento de la muralla de peones, será necesario recurrir a otras piezas. En los dos diagramas siguientes se representan algunos ejemplos de este tipo de «uso auxiliar».

99

Page 100: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

100

8

7

6

5

4

3

2

1

8

]

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

a b e d e f g h

Page 101: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

En el primero de los dos anteriores ejemplos, el alfil domina las dos casillas inmediatas a la muralla y que no están protegidas por ningún peón, aunque de todos modos siguen siendo transitables para las piezas adversarias de igual o menor valor absoluto que el alfil. Además, la persistencia de los puntos de ruptura nos demuestra cómo esta estruc­tura es más débil que la estructura base.

En el ejemplo inmediato anterior un caballo controla el punto de ruptura g4, y lo hace aún más inaccesible a las piezas contrarias . De todos modos, se puede constatar que, en casos de este tipo, la defensa es más «cara»: en la estructura de base, eran suficientes 3 peones y una to­rre, mientras que en las otras son necesarias más fuerzas que de este modo se relevan de otras funciones.

La combinación es la base del ataque contra el enroque

Las combinaciones tienen como objetivo primordial el peón lateral y el pasillo. Esto no quiere decir que los otros com­ponentes de la estructura estén exentos de correr el peligro de una combinación, sino que es mucho más fácil atacar un punto débil de una roca fuerte que un punto sólido. El diagrama n. 0 3 1 nos muestra una combinación basada en el ataque al peón lateral del enroque.

Más sobre la realidad del enroque

ASALTO DESPIADADO: LA DAMA O EL MATE

En el ejemplo señalado en el diagrama, tomado de la parti­da sostenida por Dalkó y Négyesy en Budapest, en 1963, las blancas juegan l. A:h 7, R:h 7 (las blancas ganan des

101

Page 102: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

pués del l. . . . Rh8, y continúan con 2. Cg5, f6; 3 . Dh3 etcétera); 2 . Cg5 + . Ahora el rey negro ya no puede volver al pasillo porque las blancas, después de 2 . . . . . Rg8, conti­nuarían con 3 . Dh3, obligando a las negras a ceder a su dama por el caballo blanco, única opción de que disponen las negras para parar el jaque mate.

2 . . . . Rg6; 3 . Dh3. Las blancas amenazan con hacer jaque mate al rey negro con 4. Dh7 + + . El único modo que tienen las negras para salvarse es 3 . . . . D:g5; 4. A:g5, R:g5. Así, las negras han conseguido tres piezas a cambio de la dama, aunque la situación, extremadamente peligrosa no da posibilidades al rey de salvarse: 5. f4 + , Rg6 (si 5 . . . . C:f4, las blancas ganan fácilmente con 6. Dg3 etcéte­ra); 6. g4 y el mate es inevitable.

La combinación representada en el siguiente diagrama, n. 0 32 es un ejemplo de ataque en el pasillo.

102

Page 103: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

SocAvAMIENTO Y ATAQUE

Las blancas juegan l . D:f8 + con un recurso de socava­miento sobre las defensas de las negras en el pasillo. l. . . . R:f8 (forzada); 2. Aa3 + que sirve para desviar al rey del control sobre la casilla e8, lo que aprovechan las blan­cas para completar su ataque en el pasillo, 2 . . . . Rg8; 3 . Te8 + + .

Hemos dicho que a pesar de que los dos puntos consi­derados son los más débiles, también los otros puntos que forman parte de la estructura de base, pueden ser atacados.

El ejemplo que sigue a continuación es una combina­ción entre el ataque del pasillo y el socav.amiento del peón intermedio.

103

Page 104: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Las blancas juegan l. Cf6 + y las negras tienen que matar moviendo de su columna al peón intermedio de la muralla del enroque. l. . . . g:f6; (si l. . . . Rh8; 2. D:f8 + + ) 2. e:f6 y las negras no pueden parar al mismo tiempo la doble amenaza de las blancas: 3. Dg3 + y 3. D:f8 + .

Combinación contra otras estructuras

Según lo dicho acerca de las debilidades que presentan las estructuras del enroque diferentes a las de base, podemos clasificar los tipos de combinación contra esta estructura fundamentalmente en tres.

Demolición de la muralla a través de los puntos de rup­tura: la eliminación de los peones que constituyen la mura­lla deja totalmente al descubierto al rey y lo exponen a los ataques de las piezas enemigas.

104

Page 105: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Veamos dos ejemplos de aplicación de este tipo de com­binación en la partida jugada por Fischer y Miagmasuren en Sousse, en 196 7 .

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

En este primer ejemplo los puntos de ruptura utiliza­dos son los originales por el movimiento de peón interme­dio de la muralla:

l. D:h7 + ! , R:h7; 2. h:g6 + , R:g6 (si 2 . . . . Rg8; 3 . Th8 = /) 3 . Ae4 = /.

En el siguiente ejemplo en cambio, la demolición se realiza aprovechando el punto de ruptura determinado por el movimiento del peón lateral.

Se trata de un �omento de la partida jugada por Man­shini y Detchov en Sao Paulo, en 1962.

l. A:h6, g:h6; 2. Tg3 + , Rh8 (si 2 . . . . Cg6; 3. A:g6, f:g6; 4. D:g6 y gana); 3 . Ce5 y las negras no pueden evitar que el caballo blanco vaya a f7.

105

Page 106: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

ATAQUES A LAS LÍNEAS ABIERTAS

Un desplazamiento de los peones de la muralla diferente de la estructura de base, abre agujeros a lo largv de las diagonales y las columnas. Las piezas enemigas, si actúan a través de estas líneas pueden atacar directamente al rey.

En el siguiente ejemplo, el ataque se realiza aprove­chando una diagonal.

l. D:h7 + ! R:h7 (forzada); 2. Th3 + , Rg8; 3 . Th8 + + . Como se ha visto, la combinación ha sido posible gra­

cias a la acción del alfil blanco que controlaba las casillas g7 y h8, detrás de la muralla.

106

Page 107: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

a b e d e f g h

107

Page 108: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Apertura de columna para canalizar ataque

He aquí un ejemplo de ataque realizado gracias a la apertu­ra de una columna. Véase el diagrama n. 0 3 7 correspon­diente al encuentro de Henneberger y Bernstein, en Zu­rich en 1934.

l. Ag7 + !, T:g7; 2. Tc8 + , Tg8; 3. Dg4 y el mate es inevitable.

INDEFENSIÓN DE LA FALANGE

Transitabilidad de las casillas situadas al lado de la mura­lla: el menor control ejercido por los peones de la muralla colocados de modo diferente a la estructura base, permite a las piezas contrarias acercarse más a la muralla y actuar más directamente. He aquí un ejemplo (véase diagrama n .0 38).

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

108

Page 109: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

l. Dg7 + , R:g7; 2. Cf5 + , Rg8; 3 . Ch6 = /. El caballo blanco consigue dar jaque mate gracias a la falta de control sobre la casilla h6.

fiLTRACIÓN MORTÍFERA

Concluyamos con un ejemplo en el que se aprovecha la transitabilidad de la casilla situada antes del peón interme­dio, (en el caso específico sustituido por un alfil) determi­nada por el avance del peón lateral (véase diagrama n. 0 39).

l. Dg6! Con esta jugada las blancas amenazan a 2 . Cf6 + ; si ahora las negras juegan l . . . . f:g6, las blancas hacen jaque mate con 2 . Cf6 + + . En cambio, después de l . . . . A:d5; 2. A:d5, De7 (para proteger al peón f7 atacan tres veces), las blancas ganan con 3 . T:f7, T:f7; 4. Tfl.

8

7

6

5 • 1/AMI.>,

4

3

2

1

0,. f}1/AII� a b e d e f g h

109

Page 110: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Planteamientos de la defensa y el ataque

Los problemas de ataque y defensa empiezan a plantearse desde el instante mismo de la apertura. Se manifiestan con el planteamiento de las primeras necesidades:

Las cuatro medidas elementales

Fortificación del centro; fortificación del rey; bloqueo de la falange de peones adversarios; poner dique a columnas y diagonales abiertas.

De estas medidas se derivan condiciones que a su vez plantean amenazas y requerimientos tácticos imprevistos que deberán resolverse sin apartarse de la estructura del plan inicial, concebido de acuerdo con el estilo de juego mostrado por el oponente.

Al llegar al medio juego se hará mayor la incidencia de los problemas, requiriéndose ya una acción más unitaria y, a la vez, simplificada. La diversificación será contrapro-

1 10

Page 111: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

ducente, a menos que el éálculo permita la ubicación de una alternativa para el ataque o la defensa, pero siempre sin afectar la estructura básica.

Sin embargo, no siempre es posible apoderarse y man­tener la iniciativa, con lo cual es muy probable que la es­tructura defensiva quede muy afectada a fuerza de diversi­ficarse los planteamientos y las posibilidades. Es aquí cuando las virtudes del ajedrecista, enumeradas en otra parte de esta obra, han de sublimarse para potenciar al máximo las posibilidades defensivas, dando lugar a las siguientes con­diciones defensivas.

Rapidez para pasar del ataque a la defensa Reconocer que el adversario ha tomado la iniciativa sm pretender negar la evidencia.

Esto, que parece tan simple, suele ser lo más difícil y constituir el germen de la derrota. En otras palabras, la disposición para pasar ágilmente del ataque a la defensa es de importancia capital.

·

Reacondicionamiento del plan de defensa y reagrupamiento de fuerzas Analizar la táctica inmediata que se propone seguir el ad­versario para calcular el máximo posible de los movimien­tos que implica su trayectoria.

Así podrá elaborarse el plan más efectivo de defensa y reagrupar las fuerzas.

Disposición de obstáculos al plan del adversario Aumentar al máximo las necesidades del adversario para la realización de su plan, pero concentrando la carga en uno o dos puntos esenciales, con objeto de hallarse en po­sición de retomar la iniciativa y reanudar el plan de ataque o en la primera oportunidad.

1 1 1

Page 112: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

El desarrollo

Si trazamos sobre el tablero una línea horizontal imagina­ria entre la primera y la quinta transversal, se dividirá el tablero en dos mitades opuestas que se podrá inicialmente considerar como dos «naciones» (una blanca y una negra), cuya frontera es dicha línea. Las tropas que tienen que hacer una invasión tendrán que enfrentarse previamente sobre la línea fronteriza, para hacer así un araque masivo. Se puede uno imaginar lo que sucedería si un ejército, qui­siera invadir un país enemigo, e intentase penetrar cada vez con una patrulla.

El desarrollo es el avance y la distribución de las tropas hacia la línea fronteriza representada por la línea imagina­ria que divide el tablero en dos mitades; una para cada bando, la partida se iniciará cuando ambos se hallan «acuar­telados» en las «líneas· capitales», que son las dos primeras de cada lado.

Así solamente cuando el desarrollo de las tropas sea completo se intentará hacer la invasión, por lo que es ur­gente que esta condición de movilización se realice cuanto antes.

Naturalmente, esto no significa que no podemos sobre­pasar esta línea antes de realizar un determinado número de movimientos, sino simplemente que es muy aconsejable esperar a solidificar las estructuras en la primera fase del juego, a menos que las piezas que penetren en el área opo­nente estén eficazmente protegidas o se ubiquen en zonas que se puedan considerar «tranquilas».

El desarrollo, pues, necesita un determinado número de movimientos y obviamente, como cualquier plan de jue­go, cuanto menor sea el número de jugadas necesarias para realizarlo, menor será el tiempo que el adversario dispon­drá para contrarrestar la inminente invasión.

1 12

Page 113: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Además, como el desarrollo es anterior a la invasión, éste tiene que preocuparse por conseguir el mayor número posible de piezas. Así pues, una regla fundamental, que conviene respetar en lo posible, es evitar mover más de una vez la misma pieza en las primeras jugadas de la partí­da (en las 8-10 primeras). Naturalmente esta regla puede ser transgredida, si ello es necesario, para ganar más venta­ja o para evitar que la gane el otro. Pero una condición de este tipo sólo se puede deber a un plan erróneo. De hecho, la movilización de las tropas hacia la línea fronteri­za, se ha de hacer de modo que éstas se vean obligadas a una rápida retirada: una pieza que en la apertura (se define con este término el inicio de la partida) se mueve varias veces, dificulta la movilización de las otras piezas y por consiguiente, retrasa el desarrollo. Ejemplo de rápido desarrollo por parte de ambos jugadores (partida de los 4 caballos):

l. e4, e5; 2. Cf3, Cc6; 3. Cc3, Cf6; 4. Ab5, Ab4; 5. 0-0, 0-0; 6. d3, d6.

Como se puede comprobar, cada jugador ha movido cada pieza una sola vez y sólo con 6 jugadas ha movilizado ambos caballos, un alfil, está a punto de desarrollar el se­gundo alfil, ha hecho ya el enroque (el enroque, aparte de ser una jugada defensiva es también una jugada de desa­rrollo para la torre) y tiene un peón en el centro y además protegido. Esta posición es perfectamente simétrica y par. Con el próximo movimiento se elimina la apertura e inicia el medio juego: 7. Ag5 realiza una primera amenaza táctica (las blancas amenazan con aprovechar la clavada del Cf6 sobre la dama negra para romper la muralla de peones de enroque negro; la idea es continuar con 8 . Cd5).

En este ejemplo también se puede constatar el mínimo número de movimientos del peón en la apertura: sólo dos

113

Page 114: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

que han servido para abrir las diagonales a lo largo de las cuales se han movido los alfiles.

Los movimientos de peones, en la apertura, más que movimientos de desarrollo, son movimientos que tienen que ayudar al desarrollo del mismo, así facilitan la posibilidad de jugar a otras piezas, si es posible, ocupan zonas impor­tantes del tablero, como por ejemplo el centro, o las con­trolan.

Finalmente, en el ejemplo, ninguna pieza ha estado en peligro y tanto menos como para motivar su retirada. La regla de no mover más veces una misma pieza en la apertu­ra ha sido respetada. Una rápida movilización de las piezas obliga a una respuesta rápida por parte del adversario. Un retraso puede motivar una desventaja de espacio como con­secuencia de la aplicación del segundo tema estratégico de la apertura: la conquista del centro.

114

Page 115: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

El centro

Y a hemos visto que el centro del tablero es una zona en la que las piezas pueden manifestar al máximo su acción. En la primera fase de la partida, el desarrollo de las piezas está relacionado con la lucha por la conquista del centro, que constituye un objetivo estratégico.

Conquistar el centro significa estar cerca de la realiza­ción de la «invasión», pero también limitar extremadamen­te las posibilidades de movimiento del adversario. De he­cho, el jugador acosado, para el movimiento de sus piezas, dispondrá únicamente de difíciles zonas laterales que, debi­do a la proximidad de los márgenes, no permiten maniobrar con tanta agilidad, mientras que el jugador que domina el centro dispone de notables posibilidades de maniobra y de un rápido desplazamiento de un lado a otro del tablero.

Se ha mencionado el hecho de que en la apertura los movimientos del peón no son verdaderas jugadas de desa­rrollo, sino que sirven para ayudar al mismo a conquistar zonas del tablero de fundamental importancia estratégica.

La ocupación del centro por medio de los peones, apar­te de realizar un control eficaz sobre las casillas cercanas del otro lado de la línea fronteriza, constituye también el mejor modo de preparar la centralización de las piezas. De hecho, los peones centrales aportan a las otras piezas la defensa y el apoyo necesario. Como en este ejemplo:

CAsTALDI-TARTAKOWER, EsTocoLMo 1937

l. e4, e5; 2. Cf3, d6; 3. d4. Estos primeros movimientos son los que distinguen a la defensa PhiJidor. Las blancas ocupan el centro (e4 y d4) y liberan inmediatamente las diagonales a través de las cuales pueden mover a sus alfi­les. Las negras en cambio, �ólo defienden al peón central

1 15

Page 116: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

e5 con el peón d6. La intención de las negras es conservar a sus peones en una formación más sólida que la de las blancas. Pero esta mayor solidez la consigue a cambio de una reducción de espacio para sus piezas, facilitando ma­yores posibilidades tácticas para las blancas.

3 . . . . Cf6; 4. Cd, Cbd7; las negras consolidan el pun­to e5 y mantienen bloqueado el centro. Si actuamos de este modo disminuimos las posibilidades de movimiento de sus piezas. De todos modos no podían continuar defen­diendo al peón e5 con 4 . . . . Cc6, porque después 5 . d:e5, d:e5 (o si no 5 . . . . C:e5; 6. C:e5, d:e5, d:e5; 7. D:d8 + , R:d8); 6. D:d8 + , las negras pierden el enroque y dejan a su rey sobre una columna abierta (la columna d), en don­de las blancas pueden rápidamente colocar a sus torres. 5. Ae2, Ae7; 6. 0-0, h6; 7. b3, c6.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

1 16

Page 117: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

La menor posibilidad de movimiento de las negras es evidente: esto es debido al retraso de sus posiciones en el centro con la consiguiente proximidad de las blancas en la línea fronteriza.

8. Ab2, Dc7; 9. Dd2, g5; las negras, debido a la fuerte presión que las blancas ejercen ·en el centro (que está pró­xima a aumentar después de jugar Tal-dl) y la apertura de la columna d, intentan al contrajuego sobre los dos la­dos. Pero les faltará tiempo.

10. Tad1, Cf8? Este último movimiento con el cual las negras intentan

desbloquear sus piezas constituye un grave error ya que el campo de acción que ejercen las blancas en el centro les permite la siguiente maniobra táctica:

11 . d:e5, d:e5; 12. C:e5!, Ae6; si 1 1 . . . . D:e5; 12 . Cd5, Db8 (no 12 . . . . D:c2 por 13 . Cc7 = /); 13. C:f6 + , A:f6 + ; 14. A:f6 y ganan.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

117

Page 118: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

13 . Cb5!, Db8; Si 13 . . . . c:b5; 14. A:b5 + y después de una serie de

cambios en d7, las negras perderían la Th8 debido a la acción de Ab2.

14. Da5. Amenazando 15. Ce 7 + ; 14 . . . . Ad8; 15 . T:d8 + ! , D:d8; 16. Cc7 + y las negras abandonan.

Para contener el ataque de los peones

¿Qué hacer ante el avance de una formación de peones adversarios? Semejantes ataques tienen por objeto acrecen­tar el dominio territorial más allá del centro del tablero, a la vez que apuntalar la acción de las piezas asentadas en puntos de mayor influencia.

Y uno de los errores más comunes es el de permitir que los peones se distribuyan a su gusto, como puede apre­ciarse en el siguiente diagrama 43 que fue recogido duran­te la celebración de un torneo juvenil y que describe el transcurso de una partida que empezó con un bien defini­do plan de las negras para alcanzar tres objetivos primor­diales:

a) Impedir que los peones blancos se afiancen en el centro.

b) Impedir - �11 máximo el movimiento por el centro. e) Potenciar la eficacia del alfil.

EJEMPLO DE LA ACCIÓN INCISIVA DE LOS PEONES

Tras los cinco m�vimientos iniciales se evidenció el propó­sito incisivo r:k las negras, como puede apreciarse, aunque

1 1 8

Page 119: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

al parecer el jugador blanco no lo tomó muy en considera­ción. Después de todo, los eventos de carácter juvenil con­servan mucho de la intención directa, sin subterfugios que caracteriza a los principiantes. Pero, como se verá, no siem­pre es así. . . afortunadamente y para mayor gloria del aje­drez. Y la partida continuó así:

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

5. Dd1-b3 Pd5 x Pc4 6. Db3 x c4 0-0 7 . Pe2-e4 Cb8-a6 8. Afl-e2 Pc7-c5 9. Pd4-d5 e7-e6

10. 0-0 Pe6 x 4 Pd5 1 1 . Pe4 x d5 Dd8-b6 12. a2-a3 Ac8-f5 13. Dc4-h4 Ca6-c7 14. Ae2-c4 Cc7-c8! 15. Cf3-e5 Ce8-d6

1 1 9

Page 120: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

.3

2

1

a b e d e f g h

Como se ve, las negras han logrado su objetivo, aunque debemos reconocer que no han contado con una seria opo­sición.

16. Ac4-a2 Tf8-e8

Aquí, por ejemplo, las blancas se ven privadas de la oportunidad de cambiar la pieza bloqueadora, ya que el segundo caballo viene a ocupar el punto clave.

17. Ce5-c4 Cd6 x Cc4 18. Dh4 x c4 Cf6-e4 19. Acl-e.3 Ta8-c8 20. Aa2-bl Ce4-d6! 21 . Dc4-e2 Ag7-d4 22. gl-hl Af5 X Abl 2.3. Tal x bl Cd6-f5

120

Page 121: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

24. De2-f3 25. Pf2 x e3

Cf5 x e3 Te8 x e3

Al llegar a este punto es ya evidente que las negras verán recompensada su estrategia. Sin embargo, tratándose de una partida de escasa precisión, siempre conviene ver y palpar el resultado final.

26. 27. 28. 29. 30.

Df3 X f7 + fl-f3 Df7 X f3 Df3 X c3 + Tbl-cl

Rg8-h8 Ce3 x f3 Ad4 X c3 Rh8-g8 Tc8-d8

Aquí ya no cabe la menor duda de que la acción de rechazo a que fueron sometidos los peones blancos en el área ·central, ha germinado. La victoria -¡aplastante!- co­rresponderá a las negras en unas cuantas jugadas.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

121

Page 122: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Liberación intencionada del centro

Pero, la recomendación de no permitir que en la etapa ini­cial de la partida el oponente lleve sus peones más allá de la línea central, tampoco es un dogma. Se trata de una ley general, sí, pero digna de todo respeto. Tanto que pue­de sorprenderse al adversario descuidándola y dejándole so­brepasar el límite central para hacerse de un amplio frente de peones en el centro.

No tardará mucho en comprobarse que había una de­moledora intención detrás del aparente descuido, ya que así el centro puede ser acondicionado como receptáculo para un ataque de peso, como podrá apreciarse en el transcurso de la siguiente partida, cimentada sobre la defensa Alekhine.

122

l. e2-e4 Cf6 2 . e4-e5 Cd5

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Page 123: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

3 . d2-d4 d7-d6 4 . ·c2-c4 Cd5-b6 5. f2-f4 d6 X d5 6. f4 x e5 Cc6 7. Ae3 Af5 8. Cc3 e7-e6 9. Cf3 Dd7

10. Ae2 0-0-0 1 1 . 0-0 f7-f6

Peón sobrecargado amenaza derrumbe general

Es evidente el ·propósito de sobrecargar al peón situado en e5. Pero también lo es que con ello no se conseguirá arrebatar las mejores posibilidades de las blancas, como se comprobará tras rebasar el nivel del medio juego.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

123

Page 124: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

12. d4-d5 1.3. e X e5 14. X -b3 15. c4-c5 16. c5-c6!

e X e5 P x e5 Rb8 e x d5

Un simple desprendimiento que significa todo. Un ata­que a plena intención que se traduce, ya inevitablemente, en una considerable ventaja posicional.

124

Page 125: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

El centro es vital, pero también volcánico

Como se ha demostrado, el centro es un área de importan­cia capital, pero puede tener una doble utilidad. No debe cometerse el error de considerar que toda facilidad para su dominio se debe exclusivamente a desprevenimiento del otro. Bien puede suceder que se convierta en zona císmica que eche abajo la solidez del fuerte mejor construido.

Cinco normas defensivas contra la celada

Nada existe que advierta o señale que el adversario prepa­ra una celada, pues, obviamente, de lo contrario no existi­ría este siempre brillante recurso. Sin embargo, esto no significa que no se cuente por lo menos con un entramado de medidas de protección, mismo que los maestros han concentrado en cinco principios fundamentales que deben observarse metódicamente. Son los siguientes:

l . Sitúe a las piezas en posición de acción tan pronto como sea posible. Su capacidad de evolución es la máxima ga­rantía.

125

Page 126: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

2 . Mientras dure la etapa de desarrollo de la partida no debe moverse más de una vez una misma pieza. Esta nor­ma reconoce sólo las excepcio11es que ofrecen una auténti­ca ventaja material o posicional.

3 . Nunca se pongan en acción los alfiles s1 antes no se ha movido al menos un caballo. ·

4 . Dése preferencia a la acción de las piezas y no a la de los peones en la etapa de la apertura, a menos que las condiciones específicas de la partida aconsejen lo contrario.

5 . Asegúrese el dominio de tres o al menos dos escaques centrales.

Por supuesto, no existe sustituto para la agudeza de visión y el sentido del discurrimiento del juego, pues · éste hace sonar un timbre de alarma en la mente del jugador y le induce a analizar todas las derivaciones de ,un movi­miento fuera de lo común, particularmente si implica el descuido o, peor, el sacrificio de una pieza del adversario.

Qué es una c9mbinación

En el cursó de una partida, .. .uno de los dos jugadores puede asumir. un papel activo si -e:·onsigue con su propia iniciativa, condiciqnar el ju.egt) del adversario, cuyo fin es intentar impedir al .Qtr6 la realización de su plan. Por supuesto, puede suceder que a pesar de reali.zar los mejores movi­miéntos, · el jugador pasivo no consiga impedir la realiza­ción del plan de su adversario, y es que, como ya hemos descrito en diversos puntos de esta obra, la iniciativa con-

126

Page 127: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

ducida con equilibrado empuje suele ser el principal ingre­diente de la mayoría de los éxitos ajedrecísticos.

Para mejor ejemplificar esta gran verdad, veamos lo que sucede en la posición del diagrama.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Después del movimiento de las blancas l. Df8 + , las negras tienen que jugar l . . . . T:f8 (si l . . . . Rh7; 2 . Thl + y mate en la sucesiva) que representa la mejor respuesta de que disponen las negras; pero las blancas siguen con 2. Ce7 + , Rh8; (si 2 . . . . Rh7; 3 . Thl + ) ; 3 . Thl + , Ch7; 4. T:h7 + + .

A pesar de que las negras hayan realizado las mejores jugadas, las blancas han conseguido hacer jaque mate. Hay que decir que las jugadas de las negras no sólo eran las mejores, sino además, las únicas que podían jugar; es decir: eran movimientos forzados.

La primera jugada de las blancas (l. Df8 + ) ha provo­cado una serie de movimientos forzados en las negras; pero

127

Page 128: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

observen que también las blanca.s han realizado movimien­tos forzados después de la primera jugada. De hecho, si las blancas, después de l . . . . T:f8, hubiesen hecho otros movimientos o en otro orden, el sacrificio inicial de la dama no hubiese sido compensado y las negras hubiesen obteni­do una ventaja material que les hubiese permitido ganar fácilmente la partida.

Tras la combinación debe haber una ventaja inmediata

La secuencia anterior de movimientos se llama combina­ción. Una condición fundamental de la combinación es que, al finalizar ésta, el jugador «activo» haya conseguido una ventaja concreta, en material, o en el mate del rey contrario.

Por lo tanto, podemos definir la combinación como una secuencia de movimientos forzados que dan como resulta­do una ventaja al jugador que la ha iniciado y que por lo tanto, desarrolla en la combinación un importante pa­pel. Es oportuno aclarar que la ventaja conseguida por el jugador activo después de la combinación puede ser, en relación a la situación anterior, la combinación misma. Un jugador puede hacer una combinación para conseguir una pieza de ventaja, pero también puede hacerla para recupe­rar una ventaja anterior y volver a una situación de igualdad.

LA COMBINACIÓN REQUIERE ELABORACIÓN

Al inicio de la partida no se puede hacer ninguna combina­ción, ya que la misma situación no lo permite. Para que sea posible hacer una combinación será necesaria una pri­mera fase de preparación en la cual, las piezas que darán lugar a la combinación, se colocan en «puntos claves» que dependen de la situación que se crea durante esta fase pre­paratoria.

128

Page 129: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Sólo cuando haya finalizado esta fase y la posición con­seguida permita realizar la combinación, será posible ini­ciarla con el primer movimiento (es el movimiento que pro­voca la secuencia. forzada) que llamaremos movimiento forzado: en la combinación anterior (véase diagrama) el mo­vimiento forzado era l. Df8 + .

LA COMBINACIÓN ES CÉLULA DEL PLAN GENERAL

Así pues, podemos decir que la preparación de una combi­nación constituye el objetivo de la fase preparatoria y que representa la actuación de un plan. Que quede bien claro que no es nada fácil llevar a buen término la fase prepara­toria ya que, el adversario, hará lo posible para que esto no suceda.

La posición forzada

Si consideramos una partida bajo el aspecto de una serie de posiciones (la ejecución de un movimiento a una deter­minada posición hace variar la situación presente en el ta­blero: después de cada movimiento se verifica una nueva posición con características diferentes a las anteriores) po­demos decir que, mientras la fase preparatoria está consti­tuida por la toma de posiciones en las que no es posible o conveniente hacer ningún movimiento forzado, la posi­ción en la que finalmente será posible ejecutarla tendrá necesariamente unas características diferentes de las otras. Así pues, para no dejar escapar el momento adecuado para hacer el movimiento forzado, tendremos que reconocer la posición oportuna. Esto no es posible si sabemos indivi­dualizar las características.

129

Page 130: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Y. la llamada posición forzada es la que permite realizar el movimiento forzado, está caracterizada por la presencia de verdaderas «señales de ataque»: son los llamados moti­vos de ta combinación. Se trata de determinados tipos de ataque que las piezas que desempeñen el papel activo, po­drán ejercer gracias a determinadas condiciones que propi­cian las piezas pasivas.

No obstante, la combinación, por su carácter forzado, debe calcularse con la máxima exactitud en cada variante. De hecho, no es una sola la respuesta que el adversario puede dar a un movimiento forzado.

No CONFUNDIR LA POSICIÓN FORZADA

Es contraproducente una jugada que se realiza sólo por parecer forzada sin haber calculado todas las consecuen­cias. La situación que se verificaría al finalizar, podría ser

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

130

Page 131: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

muy diferente a la esperada. Además la limitación en la posibilidad de respuestas de un movimiento forzado hace extremadamente más fácil el cálculo del desarrollo sucesivo de las posibilidades -aunque conllevan un discreto núme­ro de variaciones-, de lo que pueda suceder en las res­puestas a los movimientos no forzados en posiciones no combinativas. Se puede afirmar que una posición es tanto más forzada cuanto menos sean las posibilidades de elec­ción en la respuesta del jugador pasivo al movimiento for­zado, o las variantes de que dispone en el curso de la secuencia forzada.

PARTIDA ENTRE PELIC y BELOUSTEIN, URSS 1975

Las negras han individualizado los motivos combinativos presentes en la posición y después de haber efectuado sus cálculos, han podido establecer· que la p·osición es forzada ante el papel activo de las negras. Así pues, pueden hacer la jugada l. . . . C:d4 + porque, después de este movimien­to, las blancas tienen que volver a atacar a d4 para no quedarse en desventaja. Si, por ejemplo, jugasen 2 . f4 para poder atacar el mayor número de piezas negras, éstas con­testarían con 2 . . . . D:g3 + , seguido de 3 . . . . Cec6, defen­diendo y conservando su ventaja material. Tampoco sería útil 2. h4 porque después de 2 . . . . Dh6, el movimiento 3 . f4 (a razón de esto las blancas habían jugado antes 2 . h4) no resuelve nada a causa de 3 . . . . Cec6, que permite una vez más a las negras defender su ventaja. Para recupe­rar la desventaja, las blancas tienen dos posibilidades de matar al caballo negro en d4: con la dama o con el alfil. Veamos lo que sucede en cada caso:

a) 2. D:d4; con este movimiento las blancas han igua­lado momentáneamente la desventaja material, ya que des­pués de 2. . . . Cf3 + ! las negras les obligan a defender a

1 3 1

Page 132: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

su rey y a dejar a la dama bajo el ataque del alfil g 7 (des­pués de 3 . A:f3 o 3 . e:f3 las negras continúan con 3 . . . . A:d4 obteniendo así una notable ventaja debido a que las blancas tienen un alfil y un caballo contra la dama negra). El resultado de esta variante es totalmente favorable a las negras.

b) 2 . A:d4; también en este caso la igualdad de las blancas es sólo temporal: 2 . . . . Cd3 + ! Con este movimiento las negras cubren la acción de su alfil g 7 atacando al alfil blanco en d4. Las blancas, que tienen que defender a su rey y no pueden proteger al alfil, tienen que matar al caba­llo negro si no quieren quedarse con una pieza menos (por ejemplo, si 3 . Rfl, A:d4; y después 4. D:d3 o 4. e:d3, las negras ganarían una torre con 4 . . . . A:al). Para ello dispone en este caso de dos variantes:

132

3. D:d3, que le sigue 3 . . . . Del + ; 4. Ddl (las blancas no tienen otra posibilidad de defender a su rey), 4 . . . . D:d + ; 5. R:dl, A:d4; y las blancas para no quedar­se con una torre de menos, preferirán perder un caba­llo: 6. Cc3. 3 . e:d3; también con esta variante las negras obtienen una ventaja con 3 . A:d4; 4. Cd2, A:al; 5 . D:al. Esta vez la ventaja conseguida por las negras es material. Y éste será también el propósito de las blancas. Las negras han calculado muy bien sus movimientos antes de jugar l. . . . C:d4, y ha sido posible, por las limitadas posibilidades de respuesta de las blancas. Respuestas diferentes a las ya vistas habrían dado a las blancas una ventaja superior en calidad material.

Page 133: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Lo en

acttvo ataque

y lo pasivo y defensa

Convendrá analizar aquí algunas características y repercu­siones del papel activo de quien ejerce la combinación y el papel pasivo de quien la recibe. Parece claro, por todo lo dicho en la lección anterior, que la combinación es una forma compleja de ataque. Cuando veamos los motivos de la combinación podremos constatar cómo se manifiestan las varias formas de ataque directo e indirecto que ya he­mos tratado en el capítulo correspondiente. Y a menciona­mos el hecho de que existe un tipo de defensa capaz de invertir los papeles, que obligan al atacante a defenderse y, por lo tanto, a abandonar su papel activo para convertir­se en pasivo, permitiendo al defensor convertirse en acti­vo: se trata del contraataque.

Definición del contraataque

Se ha definido al contraataque como una defensa indirec­ta. Esta definición no se refiere al contraataque que se deriva de las amenazas del adversario, ya que éste repre-

133

Page 134: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

senta en definitiva una fase sucesiva de la defensa, sino al contraataque que se desarrolla simultáneamente al ata­que realizado por el adversario.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Las blancas consideran interesante la posibilidad de ata­car a las negras con l. T:h7; después de este movimiento la amenaza del jaque mate es evidente (las negras no pue­den matar a la dama blanca que ataca al caballo, porque si l. . . . C:e3; 2. Th8 + + ). No es suficiente para las negras defenderse con l. . . . R:h7, ya que después de 2 . Cg5 + , Rg8 (si 2 . . . . Rh6; 3 . Dh3 = /); 3 . Dh3, las negras no pue­den evitar el jaque mate. Tampoco l . . . . C:f6 es suficiente ya que después de 2. e:f6, las negras no pueden impedir la jugada 3 . Cg5 seguida de 4 . Dh3. Por ejemplo, si 2 . . . . R:h 7, las blancas continúan con 3 . Cg5 + , Rh6 (si 3 . . . . Rh8 o 3 . . . . Rg8; 4. Dh3 y el jaque mate es imparable); 4. Ce4 + , Rh7; 5. Dh3 + , Ah6 (si 5 . . . . Rg8; 6. Cg5 y

134

Page 135: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

el jaque mate es imparable); 6. Cg5 + , Rg8; 7 . D:h6 y el jaque mate es inevitable.

A la luz de estas variantes el movimiento forzante juga­do por las blancas (l. T:h7) parecería aportarles la victoria, pero no han tenido en cuenta la posibilidad de contraata­que de las negras: l. . . . Dc2 + ! , 2 . R:c2, C:e3 + ; 3:fe3, R:h7 y las negras consiguen el doble resultado de neutrali­zar el ataque de las blancas y capturar a una torre a cam­bio de un caballo y un peón.

Peor hubiese sido para las blancas si no hubiesen mata­do a la dama negra después de l. . . . Dc2 + ; de hecho, después de 2 . Ra2 (si 2 . Ral).

El movimiento intermedio

Ddl + ; 3 . Ra2, Cb4 + ; 4. Ra3, Cc2 + seguido de 5 . . . . Dal = /), las negras continúan con 2 . . . . Cb4 + ; 3Ra3 (si 3 . Ral, Ddl + ; 4. Del, D:cl = /) Cd.3 + y el jaque mate es inevitable (si 4. Ra4, C:b2 = /; si 4. Ra2, D:b2 = /; si 4. b4, A:b4 + ; 5 . Ra2, D:b2 = /).

Como se ve, el movimiento l. . . . Dc2 + , con el que las negras empiezan su contraataque sin defenderse previa­mente, invierte totalmente las partes y anula la posibilidad de ataque de las blancas. Este movimiento se llama movi­miento intermedio y tiene todas las características de un movimiento forzado. Habiendo dicho que el movimiento forzado es el que ha dado inicio a una combinación, pode­mos concluir diciendo que el contraataque inmediato (que hemos visto arriba) es una especie de contracombinación que, teniendo todas las características típicas de la combi­nación, dará como resultado una ventaja objetiva (ventaja material o jaque mate), anulando al mismo tiempo los efec­tos de la combinación.

135

Page 136: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Un falso movimiento forzado

En el ejemplo visto, el movimiento intermedio se realizaba como reSpuesta inmediata al movimiento forzante. La po­sibilidad de efectuar el movimiento intermedio demuestra que el que se consideraba un movimiento forzante no era tal, ya que había la posibilidad de contestar con un movi­miento diferente del calculado anteriormente. Así pues, el movimiento intermedio denota claramente un error de cál­culo por parte de quien ha realizado lo que se podría lla­mar ahora.movimiento pseudo/orzado. Por ello, en el cálcu­lo que se debe realizar antes de iniciar una combinación, es necesario asegurar que nuestro adversario no disponga de movimientos intermedios como respuesta inmediata al movimiento forzante, ni después de realizado éste. De he­cho, un movimiento intermedio presente en cualquier mo­mento de la combinación, puede anular la eficacia de la misma.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

136

Page 137: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Un movimiento intermedio contra combinación de mate

Tanto las blancas como las negras tienen un enroque parti­cularmente débil. Las casillas negras más débiles en el en­roque están controladas por el alfil blanco en h6; sobre esta base, las blancas intentan realizar jaque mate a través de una combinación: l. T:e5, A:e5; 2. C:d5, T:d5; 3 . Df6!

Las negras consiguen el empate en el jaque realizado después de 3 . T:e5, T:e5; 4. Df6, Dbl + ; 5. Rg2, De4 + ; 6. Rgl, Del + , etcétera. Las blancas amenazan 4. Dg7 + , A:g7; 5. Te8 + , Af8; 6. T:f8 + + . 3 . . . . Del ! ! Con este movimiento intermedio las negras consiguen frenar la com­binación de las blancas. De hecho no es posible para las blancas realizar tal amenaza ya que, después de 4. Dg7 + , A:g7, la torre blanca no puede ser movida desde la prime­ra transversal debido a la acción de la dama negra; sería por lo tanto forzada 5. A:cl; de lo contrario, después de 5. T:cl, las negras ganarían una pieza con 5 . . . . A:h6 que pondría fin al ataque de las blancas. Así pues, si 4. A:cl o también 4. T:cl, las negras continúan con 4 . . . . A:f6 y consiguen parar el jaque mate. En cambio si 4. D:e5, las negras contestarán con 4 . . . . D:h6 consiguiendo, de to­dos modos, una defensa muy satisfactoria.

Combinación de ataque doble

El tipo más simple de combinación está basado en el ata­que doble. Se trata de atacar simultáneamente dos objeti­vos como mínimo, de tal modo que el adversario no pueda defenderse al mismo tiempo.

Esto provocará que se defienda solamente a la pieza más importante, mientras que la otra quedará a merced del atacante. Se pueden distinguir más tipos de ataque doble:

137

Page 138: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

El ataque simultáneo: consiste en la amenaza directa e inmediata de dos piezas enemigas. Los siguientes diagra­mas muestran varios tipos de ataque simultáneo.

138

8

7

6

5

4

3

2

1

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

a b e d e f g h

Page 139: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

a b e d e f g h

139

Page 140: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

El ataque simultáneo casi siempre cobra

Una condición elemental de estas jugadas es la ventaja ma­terial. En el primer caso el diagrama muestra un ejemplo de ataque simultáneo: un peón ataca al mismo tiempo a una torre y a un caballo adversarios. El jugador atacado intentará defender a la pieza de mayor importancia (la to­rre) dejándose matar el caballo a menos que las implicacio­nes de esta elección sean peores y deba optar por perder la pieza mayor.

En el segundo caso, un caballo blanco ataca a la dama y a un alfil negro. Las negras pueden mover a la dama y al mismo tiempo defender al alfil (por ejemplo: l . . . . De5, y después 2. C:e8, D:e8; el cambio de un caballo por un alfil es un cambio muy igualado, ya que no da a las blancas una ventaja material) .

En el tercer caso, un dama blanca ataca a un alfil y al caballo que los defiende. Si las negras tienen la posibili­dad de defender al caballo, el ataque simultáneo de las blancas se neutraliza.

Finalmente, el cuarto caso es, por eficacia, similar al primero: las negras tienen que defender al rey, por lo que pierden forzosamente a la dama (por ejemplo: l. . . . D:d3; 2. f:g3; o l. ... Rf4; 2. T:gl).

Maniobrando hacia el ataque simultáneo

Veamos aquí un ejemplo de combinación basada en el ata­que simultáneo:

Se trata de uno de los medios específicos para hacer caer al adversario en situación de ataque simultáneo, plan­teándole la aparente necesidad de eliminar a una pieza que les acomete sin la menor posibilidad (aparente) de causar

140

Page 141: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

un verdadero problema. En efecto, véase que las blancas, con una clara ventaja material (poseen un caballo y dos peones contra la dama negra), tienen la posibilidad de ata­car al mismo tiempo al rey y a la dama de las negras a través de l. e5 + . Las negras están obligadas a matar al peón (de lo contrario las blancas continúan con 2 . e:d6), pero con esto corren el peligro de que el caballo blanco les haga un ataque simultáneo.

De hecho, si l . . . . D:e5, las blancas juegan 2 . Cg4 + y 3 . C:e5; si en cambio, l. . . . R:e5, las blancas contesta­rían con 2. Cc4 + y 3 . C:d6. En ambos casos, las blancas, ceden un caballo y un peón a cambio de la dama contraria, y obtienen como resultado de la combinación una ventaja material.

La enfilada

La enfilada: es el ataque simultáneo de dos piezas contra­rias en una transversal, una columna o una diagonal, de

141

Page 142: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

tal modo que la pieza atacada directamente resulte ser la de mayor valor.

Al tenerse que mover forzosamente, por resultar impo­sible otro tipo de defensa, deja descubierta la segunda pie­za que también será capturada. Los diagramas siguientes muestran algunos ejemplos de la enfilada.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

142

Page 143: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b c d e f g h

,_d_ ... _ _,_.t..:Ji_�

1--�������--�-----1

a b c d e f g h

143

Page 144: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Aparte del tercer diagrama de la serie, en el cual la pieza que debería quedarse al descubierto (la torre) está defendida (por el alfil) , con lo cual la enfilada no procura ninguna ventaja, en todos los otros casos se muestran pro­ductivas enfiladas.

Un ejemplo de este tipo de combinación, está represen­tado en el siguiente diagrama.

144

Page 145: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Las blancas juegan l . Dh3! Con este movimiento ame­naza 2 . Dh7 + + . Las negras sólo tienen un modo para salvarse del jaque mate: matar a la torre blanca. Por lo tanto juegan l. . . . R:f7 y las blancas ganan con 2 . Dh7 + , Re8; 3 . Dh8 + , Rd7; 4 . D:b8 matan a la dama negra, y pierden su torre.

La clavada

La clavada: se parece mucho a la enfilada. Las dos piezas contrarias son atacadas en secuencia a lo largo de una línea (columna, transversal o diagonal), pero esta vez la pieza atacada directamente es la de menor valor. En la siguiente serie de tres diagramas se muestran algunos ejemplos.

145

Page 146: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

146

8

7

6

5

4

3

2

1

8

7

6

5

4

3

2

1

a b· e d e f g h

a b e d e f g h

Page 147: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

En el primer caso se puede ver a un alfil blanco que clava a una torre negra y que no puede moverse ya que, de lo contrario, descubriría a la dama negra. De todos mo­dos, si las blancas matasen a la torre, perderían, a cambio, sólo un alfil: la ventaja sería la misma.

En el segundo caso, una dama blanca clava a un caba­llo negro con una torre del mismo color. A las blancas no les conviene matar al caballo porque de lo contrario tendrían que ceder su dama. El caballo negro no puede moverse, puesto que las blancas podrían matar gratuita­mente a la torre.

En el tercer caso, una torre blanca ataca a un alfil ne­gro que está totalmente indefenso y que además no se pue­de mover sin descubrir a su rey.

Entre la enfilada y la clavada no hay una distinción formal sino una diferencia sustancial. De hecho, en la enfi-

147

Page 148: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

lada el atacado, para evitar mayores daños, concede rápi­damente al atacante la ventaja que éste quería conseguir con su ataque (el atacado aparta la pieza de mayor valor y pierde la otra). En la clavada en cambio, la pieza de mayor valor queda protegida por la de menor (que es la atacada directamente).

Todo esto origina la inmovilidad de esta última mien­tras sea necesario limitar los daños o por lo menos, prote­ger a la pieza que queda cubierta.

Solamente existe un caso en el que la pieza clavada no se puede mover: cuando la pieza a la que cubre es el rey. Así pues, podemos distinguir: ·

Clavada absoluta: cuando la pieza enclavada no puede moverse porque cubre al rey. Es el tercer caso representa­do por los diagramas señalados.

Clavada relativa: cuando la pieza clavada no cubre al rey sino a otra pieza y por lo tanto sí puede ser movida.

8

7

6

5

4

3

·2

1

a b e d e f g h

148

Page 149: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

En este caso sería necesario valorar si la desventaja mate­rial ser.á compensada por una iniciativa tan fuerte que pue­da suplir suficientemente el desequilibrio en las fuerzas del Juego.

En la página anterior un ejemplo de combinación basa­do en la clavadura absoluta. Véase diagrama.

LA CLAVADA ABSOLUTA

Con el movimiento l. Ac5! las blancas clavan a la dama negra sobre la línea del rey. Ya no sirve la respuesta de las negras l . . . . Ab6, que intentan neutralizar la amenaza de las blancas enclavando al alfil blanco sobre el rey blan­co, ya que las blancas, gracias a la inmovilidad absoluta de la dama negra, pueden jugar 2 . Df4 + y 3 . D:d6.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

149

Page 150: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

LA CLAVADA RELATIVA

El famoso mate de Légal representa, en cambio, el ejemplo más clásico de cómo una pieza en situación de clavada re­lativa no está inmovilizada totalmente sino que puede rea­lizar contraataques. Coloque usted todas las piezas sobre el tablero en la posición inicial y realice la siguiente parti­da: l . e4, e5; 2. Cf3, Cc6; 3 . Ac4, d6; 4. Cc3, Ag4. Vea­mos el diagrama:

Con la última jugada, las negras ha<;en una clavada re­lativa: el caballo f3 está clavado por la dama blanca y que­da aparentemente inmóvil.

5. C:e5 (era mejor jugar antes 5. h3); 5 . . . . A:dl??; 6. A:f7 + , Re7; 7. Cd5 + + . Las negras tendrían que ha­ber continuado con 5. . . . C:d5 quedándose así con una pieza de ventaja; por este motivo las blancas tendrían que haber movido 5 . h3. De hecho, después de 5 . . . . Ah; 6. C:e5 es correcta ya que después de 6 . . . . C:e5 las blancas pueden continuar con 7 . D:h5, C:c4; 7. Db5 + seguido por 8. D:c4 y las blancas consiguen la pieza quedando con la· ventaja de un peón.

La descubierta

Se trata de un ataque doble que relaciona dos piezas ata­cantes:

Una pieza que se mueve y que, por tal movimiento, deja al descubierto otra pieza que podrá, liberada del obs­táculo, atacar a una pieza enemiga. El ataque doble se ve­rifica porque por unl;l parte la pieza movida desarrolla un ataque contra un primer objetivo y al mismo tiempo, la pieza que ha quedado al descubierto realiza otro contra un segundo objetivo valioso.

150

Page 151: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

a b c d e f g h

a b e d e f g h

151

Page 152: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Los diagramas anteriores muestran dos ejemplos de des­cubiertas. En el primer caso, las blancas con l . Tb6 + , descubren la diagonal del alfil y atacan la dama adversaria mientras, al mismo tiempo, atacan al rey con la torre.

En el segundo caso, con l. Ce1 o con l. Cd4, las blan­cas cubren la acción de la dama, dan jaque al rey negro y atacan al mismo tiempo a la dama negra. Veamos un ejemplo de este tipo de combinación, presentado en la par­tida de Wexler y Bazan en Mar del Plata en 1960.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Con el movimiento l. . . . T dl las negras dejan al descu­bierto la acción de su dama que puede atacar así a la dama y a la torre blancas en el . Si ahora 2. D:c6, las negras dan jaque mate con 2 . . . . T:e1 + + , mientras si 2 . T:dl, las negras ganan fácilmente después de 2 . . . . D:f3. Ya no sirve el movimiento de las blancas 2 . D:h3, ya que después de 2 . . . . T:el; 3 . Dfl (forzada), T:fl; 4. R:fl, D:hl, las negras tienen una dama de ventaja.

152

Page 153: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Obsérvese que las blancas no pueden defender la torre el con la dama, ya que ésta está clavada en la casilla g2 (si 2 . De3, Dg2 + + ) . Esto demuestra que no sólo las pie­zas sino también las casillas, pueden ser un objetivo para realizar un ataque doble.

De hecho, algunas casillas pueden tener una importan­cia vital en ciertas jugadas (incluso más que una pieza) para utilizarlas como defensa o interposición.

La dama blanca en f3 se interpone entre la dama negra y la casilla g2, para defender a ésta de la acción de la pnmera.

Los motivos de la combinación: la defensa inadecuada

Otro grupo de combinaciones es el basado en la defensa inadecuada al ataque que se está realizando. A diferencia de lo visto en el doble ataque, que no es más que la aplica­ción del ataque directo, la defensa inadecuada se basa en el ataque indirecto. Así pues, se aconseja al lector repasar, antes de continuar, todo lo visto anteriormente sobre el ataque indirecto.

Contra una defensa deficiente tres son las formas para atacar aprovechando una defensa deficiente.

SOCAVAMIENTO (O ELIMINACIÓN DE LA DEFENSA)

Hemos dicho que cuando una pieza atacada está prótegida por un defensor, entonces un ataque sobre este último cons­tituye un ataque indirecto al primero. El socavamiento no es otra cosa que el ataque indirecto, es decir, el mate del defensor.

Las blancas juegan l. T:d4, eliminan todo tipo de de­fensa sobre la casilla e5, y permiten de ese modo a la torre

153

Page 154: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

blanca en el ir a esa casilla y amenazar al rey negro con jaque mate: l . . . . e:d4 (o también l . . . . T:d4 o l . . . . c:d4); 2. Te5 + , R:g4 (forzada); .3 . h.3 + + (o también .3. f.3 + + ) .

8

7

6

5

4

.3

2

1

a b e d e f g h

LA SOBRECARGA

Si una pieza soporta simultáneamente un número excesivo de defensas cuando tiene que poner en práctica una de ellas es posible que no pueda realizar la otra o las otras. En este caso se dice que la pieza considerada está sobre­cargada.

154

Page 155: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Las torres blancas atacan a dos piezas negras diferentes (la Tb2 ataca al Cb5 y la Te2 ataca al Ae4), ambas protegi­das por una misma pieza (Cd6). Si las blancas obligan a Cd6 a centrar su defensa únicamente sobre una de las dos piezas, entonces la otra quedará indefensa: l. T:b5, C:b5; 2. T:e4 y las blancas han matado un caballo y un alfil negro a cambio de una sola torre.

155

Page 156: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

El diagrama anterior describe un momento de la parti­da que sostuvieron Kocobov y Gureev en la URSS, en 1978, muestra un ejemplo de este tipo de combinación. Como se puede ver, la torre blanca en b 1 tiene la doble función de defender a la dama en b 7 (atacada por la dama negra) y la primera transversal (si las blancas moviesen la torre de la primera transversal jugando, por ejemplo, l . Tb2, las negras podrían hacer rápidamente jaque mate con l. . . . dd1 + + ) .

Las negras pueden aprovecharse de la sobrecarga de la torre blanca y jugar l. . . . T el + ! Si ahora las blancas contestan con 2 . C:cl, las negras hacen jaque mate al rey blanco con 2 . . . . Dd1 + + (el caballo interrumpe la acción de la torre en la transversal) . Si, en cambio, las blancas · juegan 2 . T:cl (única alternativa para matar al caballo si se quiere defender al rey), la dama queda indefensa y pue­de ser capturada con 2 . . . . D:b7.

156

Page 157: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

DESVIACIÓN O ENGANO

Con esta combinación el defensor es llevado a una casilla con el fin de neutralizar su función defensiva.

Veamos dos ejemplos: Partida entre Füster y Balogh, en Debrecen, en 1964.

En el diagrama n. 0 7 3 las negras juegan l. . . . Db2! Con este movimiento se anulan las defensas de las blancas. De hecho, amenazan con jugar 2 . . . . T:al y después 3. T:al, D:al + + . Las blancas no pueden jugar 2 . T:b2 debido al jaque mate en 2 . . . . T:al + , ni tampoco 2 . T:a2 a causa de 2 . . . . D:bl .

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

Además no sirve de nada 2 . De4 (o 2 . Df5) a través de 2 . . . . T:al, mientras que después de 2 . Db7 la torre blanca en b 1 quedaría sobrecargada (2. . . . D: b 7 y las blan­cas no pueden jugar 3 . T:b7 a causa de 3 . . . . T:al (jaque mate). La única posibilidad que les queda a las blancas

157

Page 158: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

para defender su quinta transversal es 2 . Ddl, pero enton­ces ya no le queda escapatoria a f2, por lo que 2 . . . . D:f2 + ; 3 . Rhl, D:g2 + + . La dama blanca ha sido forzosamente «desviada» de su función defensiva de f2.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

En este segundo ejemplo, tomado de la partida sosteni­da por Euwe y Yates, en Kissingen, en 1928, la desviación es una tenaza. Las negras jqegan l. . . . Db6 + (no sir.ve para nada l. . . . Dal + ya que después de 2 . Rf2, las ne­gras tienen que defender f7,. de lo contrario las blancas ganarían con 3 . D:f7 + , etcétera y tienen el tiempo justo para matar al peón negro en c2), 2 . Rfl (forzada; no puede ser 2. Rhl a causa de 2 . . . . Dbl y jaque mate, ni 2. Td4, ya que la dama blanca, tiene que proteger a la torre en d4 e impedir la promoción del peón negro en c2 resultaría sobrecargado; por ejemplo: 2 . . . . D:d4 + ; 3. D:d4, el = D + ; o bien 2 . . . . el = D + ; 3 . D:cl, D:d4 y en ambos casos

158

Page 159: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

las negras ganan una torre; tampoco puede ser 2 . Dd4 de­bido a 2 . . . . el = D + etcétera), 2 . . . . el = D + ; 3 . D:cl y de este modo ha desaparecido la defensa sobre la casilla b5 y las negras ya pueden realizar la tenaza: 3 . . . . Db5 + seguido por la captura de la torre blanca.

A pesar de que se considera como un solo motivo, la desviación se diferencia del engaño por el hecho de que este último se realiza atrayendo al rey adversario a una casilla mortal para él (desviándolo de donde se encuentra y en donde estaría a salvo), mientras que la desviación se realiza con relación a piezas que defienden al rey. La si­guiente combinación es un ejemplo de engaño propiamente dicho.

8

7

6

5

4

3

2

1

a b e d e f g h

159

Page 160: Cómo Ganar en El Ajedrez - Expertos 2100

Cómo ganar en el ajedrez

* ¿Cuándo se ha de poner en práctica la descubierta?

* ¿Qué son las defensas indias?

* ¿Cómo se protegen los peones centrales?

El juego del ajedrez es considerado por muchos como un arte o una ciencia y, por tanto, las estrategias a emplear en el mismo

pueden esquematizarse y trazarse de antemano. Muchas de las experiencias y de las conclusiones que expone

este manual han sido extraídas por sus autores de situaciones reales producidas en partidas verídicas y, sin duda, serán una ayuda valiosísima para el lector interesado.

9 788431 5 08 1 1 1