Cómo decir que NO - Home El Factor Humano · Cómo decir que NO sin sentirte ... Identificar qué...

11

Transcript of Cómo decir que NO - Home El Factor Humano · Cómo decir que NO sin sentirte ... Identificar qué...

Cómo decir que NO

sin sentirte culpable

Contenido Parte 1. Las 3 causas principales que despiertan el sentimiento de culpabilidad

Parte 2. Estados de ser desde donde decir NO y a qué nos llevan

Parte 3. Prácticas sencillas para reducir el grado de culpabilidad

Parte 4. Guión y ejemplos prácticos de aplicación

Parte 5. Acción

Introducción: La causa principal por la que no nos atrevemos a decir que NO es por:

MIEDO A PERDER el cariño, amor, admiración o reconocimiento de personas

queridas o importantes en nuestras vidas

MIEDO A PERDER el trabajo o el estatus adquirido

En definitiva, ¡¡¡MIEDO A PERDER ALGO!!!

Este miedo, sin embargo, nos lleva a actuar de una manera que a su vez nos impide

GANAR EN CONFIANZA Y SEGURIDAD

GANAR EN CONTROL SOBRE QUÉ HACES CON TU TIEMPO Y CON QUIÉN

GANAR EN AUTENTICIDAD

GANAR EN LIBERTAD

Decir que NO, por lo tanto, tiene la llave para ganar todas estas cosas.

¡¡Vamos a ver cómo hacerlo!!!

Parte 1. Las 3 causas principales que despiertan el sentimiento de culpabilidad

Causa número 1: “El egoísmo” Esta causa está relacionada con la creencia de que decir NO a alguien con el fin de dedicar ese tiempo para una misma es ser una persona egoísta. Y como ser egoísta “es malo” nos sentimos culpables. La reacción en cadena de esta creencia es la siguiente: Si digo que No = Me elijo a mi Si me elijo a mi = Soy una egoísta, o van a pensar que soy una egoísta Si soy una egoísta = Soy una mala persona, o van a pensar que soy una mala persona Y por lo tanto ¡¡me siento culpable!!

Causa número 2: “La incoherencia” Esta causa tiene que ver con la falta de coherencia o integridad entre lo que sentimos, pensamos, decimos y hacemos. De forma que: Si siento una cosa y pienso otra = me siento culpable Si pienso una cosa y digo otra = me siento culpable Si digo una cosa y hago otra = me siento culpable Si digo que voy a hacer algo y no lo hago = me siento culpable

Causa número 3: “Síndrome del superhéroe” Esta causa tiene que ver con imponerse a uno mismo funciones o responsabilidades que están fuera de nuestro control, de nuestra capacidad de actuación o de nuestras habilidades. Por ejemplo: Ver en las noticias que un terremoto a dejado a cientos de personas sin casa, o que hay miles de personas saliendo de su país porque están en guerra y no tienen dónde ir, o ver imágenes de niños malnutridos = ¡me siento culpable por no poder ayudar a todos ellos!

Parte 2. Estados de ser desde donde decir NO y a qué nos llevan

Definiciones: Egoísta: Excesivo aprecio que tiene una persona por sí misma, y que le hace

atender desmedidamente a su propio interés, sin preocuparse del de los demás. -> lleva a la culpabilidad

Otro-ísta: Excesivo aprecio que tiene una persona por los demás, y que le

hace atender desmedidamente los intereses de los demás, sin preocuparse de si misma. -> lleva a la queja y sensación de falta de control

Asertiva: Persona que respeta y atiende sus necesidades y respeta y tiene en

cuenta las necesidades de los demás. -> Lleva al respeto a uno mismo y al respeto de los demás, a la seguridad y a la confianza

Clarificaciones:

Tener en cuenta las necesidades de otra persona no significa que nos hagamos responsables de atenderlas o cubrirlas, pero si de ser conscientes de ellas y de ver qué está en nuestras manos hacer y qué no.

Aunque las necesidades de dos personas en un mismo momento o situación

pueden ser diferentes, ambas necesidades son igual de importantes. Cuando ponemos nuestra necesidad por encima de la del otro, o la del otro

por encima de la nuestra, nos salimos del modo asertivo para entrar en los modos Ego-ista u Otro-ista respectivamente.

Dar prioridad y cubrir nuestras propias necesidades es función de cada uno

de nosotros, de nadie más. Cuando soltamos esta función y no nos encargamos de cubrir nuestras

propias necesidades nos quedamos a la espera de que otros las cubran, llegando incluso a exigir a los demás que lo hagan. Y lo que es peor, si esas otras personas no cubren nuestras necesidades, les culpamos por no hacerlo. No culpes a nadie por lo que es tu función. Entra en el modo asertivo y ¡¡date lo que necesitas!!

¡Sólo podemos dar aquello que tenemos, de ahí que la primera prioridad sea llenarse uno mismo

para después poder dar a los demás!

Parte 3. Prácticas sencillas para reducir el grado de culpabilidad Práctica de la Asertividad: Dedícate los 15 o 30 primeros minutos del día a

ti mismo. No a leer emails o hacer algo para otros. Para ti. Hacer esto tiene un mensaje subliminar: “soy el primero”, “soy importante” y a la vez te permite llenarte por dentro, para después poder dar. Hagas lo que hagas: ¡¡No te dejes para lo último!!

Práctica de la Aceptación: En vez de juzgar a las personas que dicen que no

como “cara duras”, “egoístas” o “jetas”, aprecia lo que ves en ellos: asertividad, claridad, responsabilidad, etc.

Práctica de la Empatía: Si llevas diciendo años que SÍ a algo y ahora quieres

decir que NO, ten en cuenta, y empatiza, con el hecho de que la otra persona va a perder algo que tenía hasta ahora y va a necesitar un tiempo de adaptación. Permítele tener su propia reacción y proceso y no te lo tomes personalmente.

Práctica de la Coherencia: Se coherente entre lo que sientes, piensas, dices y

haces. Y si te observas fuera de integridad, no te castigues por ello, tómalo como una llamada de atención y haz las correcciones necesarias para volver al camino de la integridad y la coherencia.

Práctica del Equilibrio: Al organizar el día, observa si te pones muchas

tareas que hacer. El ser humano necesita tiempo de NO HACER, así que asegúrate que lo incluyes en tu lista de quehaceres al organizar el día. Adapta las tareas a tu ritmo, ¡en vez de tu ritmo a las tareas!

Práctica de la honestidad y valentía: En cualquier situación, se honesto

contigo mismo al responder ¿Qué está en mis manos hacer? y lo que puedas hacer hazlo, lo que no, suéltalo, y concéntrate en lo que sí puedes hacer.

Práctica de la benevolencia y el perdón: En cualquier camino vamos a

encontrar baches, momentos gloriosos y otros no tan gloriosos. Si no has practicado cualquiera de las prácticas anteriores, ¡esta práctica es la clave! Se benevolente, amable, contigo mismo. Date el permiso para cometer errores, perdónate y vuelve al camino que quieres andar.

“No es importante cuántas veces nos salimos del camino deseado. Lo verdaderamente importante es que volvamos a él. Una y otra vez.”

Parte 4. Guión y ejemplos prácticos de aplicación Paso 1: La Situación Describe la situación de forma objetiva y sin juicios __________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________ Paso 2: Apreciar algo de la situación Ej: “gracias por pensar en mí para la cena”, “gracias por la oferta, es muy generosa” __________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________ Paso 3: A que digo SI Identificar el valor, necesidad o límite que quieres poner __________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________ Paso 4: Que SI puedo dar a la otra persona o personas / Contraoferta Identificar qué es lo que si puedo hacer o dar a la otra persona, proponerlo y abrirse a una negociación. Ej: si hoy estoy cansada le propongo vernos otro día __________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________ Paso 5: Mostrarse Si es posible, concreta un momento con la persona o personas implicadas en esta situación para compartir todo lo anterior. Si es algo que ocurre de imprevisto, tómate tu tiempo antes de decir nada para dar los pasos anteriores en tu mente y una vez que lo tengas claro compártelo. Si no lo tienes claro es preferible decir que necesitas pensarlo y que le darás una contestación en un tiempo determinado.

Recuerda: La energía y la valentía que necesitaremos para mostrarnos está en aquello que decimos ¡¡¡SI!!! ¡¡Céntrate en ello!!

Guión: “¡Hola! Gracias por dedicarme este momento. Quiero comentarte algo que me gustaría que supieras sobre mi y que tiene que ver con _________________ (rellena con paso 1)________________________________________________________ Lo primero, gracias por _____________________(rellena con paso 2)_________________________ He estado pensando en ello y para mi es muy importante ________________________________ (rellena con paso 3) _________________________________________________________________________ Por eso voy a decir que no (o que no voy a ir), Sin embargo, podría __________________ (rellena con paso 4) _______________________________ ¿Qué te parece?” ¡Escoge palabras que te sean familiares!

Atención:

Observa si lo que muestras es una excusa o un límite o valor. Si es una excusa, entonces estás todavía sintiéndote culpable y te has salido del modo asertivo.

Ejemplos prácticos de aplicación del guión Ejemplo 1: P1: persona que dice que no P2: persona que hace la petición La situación: P1 Quiere salir a las 17:00h de trabajar para coger un tren rápido de vuelta a casa y tener tiempo para ella por al tarde. Un compañero llega a las 16:50h para pedirle que le ayude con un problema que tiene. Diálogo 1: P2: “¡Hola! Oye tengo un problemilla y quería que le echaras un vistazo para ver que puedo hacer” P1: “Perfecto, me encantará ayudarte. Lo único es que ahora sólo tengo 10 minutos. Dime de qué se trata y si es algo rápido lo miramos ahora. Si no, lo miro mañana nada más llegar, ¿te parece?” P2: “Genial. Ven que te lo enseño” Dialogo 2: P2: “¡Hola! Oye tengo un problemilla y quería que le echaras un vistazo para ver que puedo hacer” P1: “Perfecto, me encantará ayudarte. Lo único es que ahora sólo tengo 10 minutos. Dime de que se trata y si es algo rápido lo miramos ahora. Si no, lo miro mañana nada más llegar, ¿te parece?” P2: “Mañana imposible, necesito hacerlo hoy” P1: “Entiendo. Dime de qué se trata, aunque no te puedo prometer que lo resolvamos en el tiempo que me queda. Pero lo que si es seguro es que te podré dar alguna indicación para que continúes por tu cuenta, o darte el contacto de alguna otra persona o algún otro recurso que te pueda servir.” Nota 1: excepcionalmente coges un tren más tarde para quedarte y ayudar a tu compañero, ¡¡pero esa es la excepción!! Si lo haces siempre, eso es lo que se esperará de ti. Nota 2: En ambos casos P1 dice SI a su tiempo libre, a respetarlo y darle la importancia que merece. Dice SI a tener el control de su tiempo y tomar las riendas de su vida.

Ejemplo 2: P1: persona que dice que no P2: persona que hace la petición La situación: P2 invita a P1 a la celebración de su cumpleaños y P1 no quiere ir porque no conecta con los amigos de P2 y se aburre mucho aunque se lo pasa muy bien con P1. Diálogo 1: P2: “¡Hola! Oye que mi cumple es el sábado y voy a celebrarlo con mis amigos en mi restaurante preferido” P1: “¡¡Qué bien!! ¡Felicidades anticipadas! Muchas gracias por pensar en mi y por la invitación. La verdad es que preferiría si quedáramos un día las dos a tomar algo para celebrarlo y así de paso nos ponemos al día que se que te han pasado muchas cosas últimamente y así me cuentas” P2: “¡Ah! Pues no había pensado en ello. Me parece bien.” P1: “¿Qué te parece la próxima semana quedar a comer?” P2: …….. Diálogo 2: P2: “Hola! Oye que mi cumple es el sábado y voy a celebrarlo con mis amigos en mi restaurante preferido” P1: “¡¡Qué bien!! ¡Felicidades anticipadas! Muchas gracias por pensar en mi y por la invitación. Todavía no he decidido qué hacer el sábado porque hay un par de cosillas que me gustaría hacer durante el fin de semana y no se muy bien cuándo las haré. ¿Te puedo contestar para mañana por la tarde?” P2: “Si, si perfecto. Mañana o pasado está bien. Con que me lo digas para poder reservar en el restaurante..- P1: “Genial, entonces mañana te confirmo si voy o no. De nuevo, gracias por la invitación” Nota 1: Asegúrate que te vuelves a poner en contacto con él o ella en el tiempo que le has dicho para decir SI o NO. Nota 2: En ambos casos P1 dice SI a su tiempo libre, a respetarlo y darle la importancia que merece. Dice SI a tener el control de su tiempo y tomar las riendas de su vida.

Parte 5. Acción

“Si no cambias nada, todo será siendo igual!” Ya sé que es de perogrullo pero aquí es donde todo lo que acabas de leer tiene sentido.

Da el paso: Elige una situación, y aunque te tiemblen todo ¡¡DI QUE NO y SIENTE

ORGULLOSO DE ELLO!!!